Legislatura XXVIII - Año II - Período Ordinario - Fecha 19191201 - Número de Diario 69

(L28A2P1oN069F19191201.xml)Núm. Diario:69

ENCABEZADO

MÉXICO, LUNES 1o DE DICIEMBRE DE 1919

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

AÑO II. - PERIODO ORDINARIO XXVIII LEGISLATURA TOMO III. - NÚMERO 69

SESIÓN

DE LA

CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 1o

DE DICIEMBRE DE 1919

SUMARIO

1.- Se abre la sesión. Lectura y aprobación del acta de la anterior.

2.- Oficio por el que la legislatura de Sinaloa comunica que hace suya en todas sus partes la iniciativa presentada por el C. diputado Valadez Ramírez, por la que se reforma el último párrafo del artículo 108 constitucional; recibo y a la 2a. Comisión de Puntos Constitucionales que tiene antecedentes.

3.- Los CC. Miguel Palacios Macedo y Manuel Gudiño presentan una iniciativa con el fin de que el Presupuesto de Egresos para 1920, figure una partida a favor del "Congreso Local Estudiantil"; por hacerla suya los CC. diputados Saucedo y Siurob, pasa a la Comisión de Presupuestos y Cuenta; imprímase.

4.- Segunda lectura a la iniciativa que adiciona la Ley de Organización de los Tribunales Federales, en lo relativo a los requisitos necesarios para ser actuario u oficial mayor, presentada por el C. diputado Castillo Torre; admitida a discusión, pasa a la 2a. Comisión de Justicia.

5.- Voto particular presentado por C. diputado Velázquez López, miembro de las comisiones unidas de Instrucción Pública y 2a. de Hacienda, sobre el proyecto de ley relativo a que la instrucción pública en el Distrito y Territorios Federales quede a cargo directo del Ejecutivo de la Unión; imprímase y agréguese a su expediente.

6.- Dictamen de las comisiones unidas 1a. de justicia y 1a. de Puntos Constitucionales sobre el proyecto de ley que establece la forma de suplir en sus faltas temporales a los magistrados del Territorio de la Baja California; primera lectura.

7.- Segunda lectura al dictamen que presentan las comisiones unidas 2a. de Justicia y 1a. de Puntos Constitucionales, sobre el proyecto de ley que el que se reforman los artículos 12 y 14 de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Fuero Común para el Distrito y Territorios Federales, que devolvió modificado la Cámara de Senadores; imprímase y a discusión el primer día hábil.

8.- Segunda lectura al dictamen de la 1a. Comisión de Hacienda sobre el proyecto de ley que concede una pensión de $1.200.00 anuales a las señoritas Rosa y Josefa Alcocer; a discusión el primer día hábil.

9.- Segunda lectura al dictamen que presentan las comisiones unidas 1a. y 2a. de Instrucción Pública y 2a. de Hacienda, relativo al proyecto de ley por el que se adiciona la Ley Orgánica de Secretarías de Estado, con la creación del Departamento de Educación Pública; a discusión el primer día hábil.

10.- Se concede licencia a los CC. diputados Carriedo Méndez, Aguilar Antonio, Tamez y Vázquez.

11.- Continúa la discusión del Proyecto de Presupuesto de Egresos para 1920, ramo sexto. Aprobación de la partida 5017. Se reservan para su votación las 5001, 5003 y 5132. Aprobación de las partidas 5001 a 5248 que constituyen la sección XXIX, excepto la 5017. A discusión la sección XXX, que comprende las partidas de la 5249 a la 5282, incluyendo las partidas 5253 bis y 5257 bis; son apartadas para impugnarse las 5250, 5261, 5272, 5281 y 5282 y se votan y aprueban las restantes. A discusión la 5250 es aprobada. A discusión la 5261, es retirada. Se reservan para su votación las 5272, 5281 y 5282. La Comisión presenta reformada la 5261 y se reserva para su votación. Son aprobadas la 5261, 5272, 5281 y 5282. Aprobación de las secciones XXXI y XXXII. A discusión las secciones XXXIII, XXXIV, XXXV, XXXVI, XXXVII, XXXVIII y XXXIX. Son apartadas, por objetarlas, las XXXV Y XXXVI y la partida 5561 de la XXXVIII; aprobación de las secciones XXXIII y XXXIV. Discusión y aprobación de la sección XXXV. Discusión y aprobación de la sección XXXVI. A discusión la sección XXXVII; se levanta la sesión.

DEBATE

Presidencia del

C. CÉSPEDES ELISEO L.

(Asistencia de 128 ciudadanos diputados.)

El C. presidente, a las 4.26 p. m.: Se abre la sesión.

- El C. secretario García Ruiz, leyendo:

"Acta de la sesión celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el Día veintinueve de noviembre de mil novecientos diez y nueve,

"Presidencia del C. Agustín Franco.

"En la ciudad de México, a las cuatro y treinta de la tarde del sábado veintinueve de noviembre de mil novecientos diez y nueve, con asistencia de veintiséis ciudadanos diputados, se abrió la sesión.

"Sin debate se aprobó el acta de la sesión celebrada el día anterior, y se dio cuenta con estos documentos.

"Oficio en que la H. Cámara de Senadores participa que el próximo lunes primero de diciembre se constituirá en Gran Jurado para conocer de la acusación presentada en contra del exgobernador del Estado de Querétaro, C. Ernesto Perusquía.- De enterado.

- El C. Siurob usó de la palabra para hacer apreciaciones acerca del sentido en que la Comisión respectiva de aquella Cámara dictamino en el asunto y continuóse dando cuenta:

"Circular fechada en Villahermosa, Tabasco, en que los CC. Calzada y H. Chapuz comunican que los CC. Federico Martínez de Escobar y Juan Antonio Mateos fueron electos presidente y vicepresidente, respectivamente, de la Mesa Directiva de la Legislatura local.- Recibo, y al Archivo.

"Oficio del ciudadano presidente de las Comisiones Unidas 1a de Instrucción Pública y 2a. de Hacienda, en que pide se designe otra comisión que, unida a aquéllas, dictamine sobre el proyecto de ley por el que se establece que el ramo de Instrucción Pública quede bajo la dirección y administración del Ejecutivo, en virtud de que dichas comisiones no han podido ponerse de acuerdo sobre el particular.- Para el efecto indicado se agrega la 2a. Comisión de Instrucción Pública a las comisiones unidas dictaminadoras.

"Proyecto que presenta el C. diputado Castillo Torre, tendiente a que se adicione la Ley Orgánica de los Tribunales Federales, en el sentido de que para ser actuario u oficial mayor de la Suprema Corte de Justicia, Tribunales de Circuito y Juzgados de Distrito, se requiere ser notario o abogado con título oficial.- De primera lectura.

"Iniciativa de los CC. diputados Esparza, Silva Jesús, Espinosa y Elenes, Gutiérrez Antonio y ocho ciudadanos diputados más, con objeto de que se modifique el artículo 16 del decreto de 27 de junio de 1919 sobre propiedad minera, y se le adicione un artículo.- A las comisiones unidas 2a. de Minas y 1a. de Hacienda, e imprímase.

"Proyecto de Ley de los CC. Castillo Torre, Lanz Galera y nueve ciudadanos diputados más, con el fin de que se conceda una pensión de trescientos pesos mensuales a la señora doña Luz Mayora viuda de don Justo Sierra.- A la 1a. Comisión de Hacienda.

"Proyecto del C. diputado Fernández Martínez y hecho suyo para los efectos reglamentarios por los CC. diputados Velásquez Juan y Lanz Galera, que tiene por objeto adicionar el Presupuesto de Egresos de 1920, con una partida de $3,600.00, que se destinarán al pago de pensiones de los alumnos de la Academia Nacional de Bellas Artes.- A la Comisión de Presupuestos y Cuenta.

"Dictamen de la 1a. Comisión de Hacienda que consulta un proyecto de decreto por el que se concede una pensión de mil doscientos pesos anuales a las señoritas Josefa y Rosa Alcocer, nietas de don Vidal Alcocer.- De primera lectura.

"Solicitud del C. diputado Castillo Torre, relativa a que se le conceda licencia por veinte días con goce de dietas. Se aprobó sin discusión, previa dispensa de trámites.

"Con las formalidades de costumbre, se procedió a la elección de presidente y vicepresidentes para el próximo mes de diciembre. El escrutinio arrojó este resultado: Para presidente: C. Francisco R. Serrano, noventa y tres votos; C. José Gaitán, ochenta y cuatro votos. Para vicepresidentes: C. Luis G. Gámiz noventa y dos votos; C. Eliseo L. Céspedes, ochenta y ocho votos; C. Gustavo Padrés, ochenta y siete votos; C. Pablo Silva, ochenta y dos votos; Isauro Castillo Garrido, dos votos, y un voto cada uno de los CC. De la Torre y Amezola.

"Atento el resultado de la votación, la presidencia por conducto de la Secretaría, declaró que es presidente de esta H. Cámara para el próximo mes de diciembre, el C. diputado Francisco R. Serrano, y vicepresidentes, los CC. Luis G. Gámiz y Eliseo L. Céspedes.

"En seguida dióse cuenta con el dictamen de las comisiones unidas 1a. y 2a. de Instrucción Pública y 2a. de Hacienda referente al proyecto de la Ley Orgánica de las Secretarías de Estado, creando el Departamento de Educación Pública.- Primera lectura, e imprímase.

"La Mesa trató de poner a discusión el dictamen de las comisiones unidas 1a. de Puntos Constitucionales y 1a. de Gobernación, que consulta un proyecto de ley por el que se deroga el decreto preconstitucional que prohibe las corridas de toros en el Distrito Federal. Los CC. Espinosa Luis y Baledón Gil se opusieron al trámite de la Mesa, pidiendo se continuara la discusión de los presupuestos. La presidencia sostuvo su trámite, apoyándose en que se le había presentado una petición firmada por la mayoría de esta Cámara, a fin de que se discutiese el asunto, y en el artículo 107 reglamentario; pero luego opto por consultar a la Cámara, en votación nominal, si se discutía o no en esta sesión el dictamen. El C. Espinosa Luis reclamó el quórum y a la Secretaría pasó lista, comprobándose la presencia de ciento treinta y ocho ciudadanos diputados. El referido C. Espinosa Luis insistió en que se tratara el asunto, por no estar comprendido en la orden del día; el C. García de Alba apoyó el trámite de la Mesa y acto continuo se recogió votación nominal para resolver si se aprobaba. Votaron por la afirmativa ochenta y tres ciudadanos diputados y por la negativa treinta y siete.

"En la vista de la falta de quórum, se levantó la sesión, siendo las seis y treinta de la tarde."

Está a discusión el acta.

¿No hay quien haga uso de la palabra? En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, se servirán ponerse de pie. Aprobada.

El C. secretario Aguilar: Se va a dar cuenta con los asuntos en cartera:

"La legislatura del Estado de Sinaloa comunica por medio de su oficio número 1,923, fechado el día 19 de noviembre, que hace suyas en todas sus partes la iniciativa de reforma al último párrafo del artículo 108 de la Constitución, formulada por el C. diputado Antonio Valadez Ramírez, y que apela al patriotismo de los ciudadanos diputados

y senadores al Congreso de la Unión para que antes de que se cierre el actual periodo de sesiones , sea votada favorablemente la reforma de que se trata" - Recibo, y a la 2a. Comisión de Puntos Constitucionales que tiene antecedentes .

(El citado oficio está concebido en los siguientes términos:)

"Congreso del Estado Libre y Soberano de Sinaloa.- Estados Unidos Mexicanos.- (Número 1923, de Diputados del Congreso de la Unión.- México, D. F. Esta H. Legislatura tuvo bien aprobar en sesión de hoy, por unanimidad de votos de los ciudadanos diputados presentes, el siguiente acuerdo que contiene la iniciativa presentada por el C. diputado Andrés Magallón, representante del 11 distrito electoral, que a la letra dice:

"Primero. Con la facultad que para iniciar leyes ante el Congreso de la Unión concede a las legislaturas de los Estados el artículo 71, inciso III de la Constitución General de la República, dígase a la H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, que esta H. Legislatura aprueba en todas sus partes el proyecto de reforma del último párrafo del artículo 108 de nuestra Carta Magna, en los propios términos en que fue presentado por su propio autor, el C. diputado Antonio Valadez Ramírez y que a la letra dice:

"El ciudadano presidente de la República, durante el tiempo de su encargo, sólo podrá ser acusado por los delitos de traición de la patria, violación expresa de la Constitución, ataque a la libertad electoral y delitos graves del orden común."

"Segundo. Se apela el patriotismo de los ciudadanos diputados y senadores al Congreso de la Unión para que antes de que se cierre el actual período de sesiones del Congreso General, sea votada favorablemente la reforma de que se hace mérito."

La parte expositiva de la iniciativa de referencia dice como sigue:

"El C. diputado Antonio Valadez Ramírez, abarcando como perfecta clarividencia el momento histórico que vivimos y tratando de resolver uno de los más importantes problemas políticos que hoy por hoy tiene preocupado al pueblo mexicano, presentó a la consideración de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, en compañía de otros diez y seis ciudadanos representantes, en sesión del día 9 de octubre último, un proyecto de ley que fue turnado a la 2a. Comisión de puntos Constitucionales, en el que se propone la reforma del último párrafo del artículo 108 de la constitución General de la República, el cual proyecto dice textualmente como sigue:

"El artículo 108 de la novísima Constitución de 17 (correspondiente al 103 de la 1857, reformado el 13 de noviembre de 1874), es el artículo fundamental del artículo IV, que trata de la responsabilidad de los funcionarios públicos y preceptúa en su último párrafo que: "El presidente de la República, durante el tiempo de su encargo, sólo podrá ser acusado por traición a la patria y delitos graves del orden común."

El artículo 103 de la Constitución de 57 expresaba que el presidente de la República podría ser acusado, además de los delitos que señala la Constitución de Querétaro, por "violación expresa de la Constitución y ataques a la libertad electoral."

El artículo 108 de la actual Constitución fue aprobado tal cual lo presentara a la consideración de la Asamblea, el ciudadano Primer Jefe del Ejército Constitucionalista, y si no hubiera sido por las objeciones formuladas sobre el particular por los CC. constituyentes Céspedes, Pintado Sánchez y Pastrana Jaimes, pugnando éste último por que se tomara en cuenta una adición que propusiera de las comisiones, tal vez pasara inadvertida, porque con una festinación verdaderamente increíble, dada la transcendencia del asunto, se aprobó el artículo mencionado, y solamente los CC. Lizardi y Ugarte se sirvieron hacer algunas pequeñas aclaraciones en pro, y tan pequeñas, que resultan seguramente inaceptables.

Sostuvieron estos señores representantes, que dicho artículo tiende a evitar intromisiones de un poder sobre otro; que ninguno de los tres poderes es soberano con relación a los otros; que en caso de violaciones a la Constitución, habría un segundo responsable: el secretario de Estado que subscribiese disposiciones o decretos con el presidente; "que un presidente honrado no le dirá a un secretario de Estado que obre, si es en el ramo de Justicia," etc., etc. Como se ve, los argumentos aducidos por la Comisión, resultan deleznables en absoluto, pues ella misma se encarga de demostrar que no se rompe el equilibrio por el hecho de que el Poder Legislativo puede enjuiciar al presidente de la República, supuesto que dejaron abierta la puerta para hacerlo por traición a la patria y delitos graves del orden común. La ingeniosa declaración del C. Ugarte, de que los presidentes de la Unión , por honradez no deberán hacer esto o lo otro, porque sería indecoroso o inconveniente, resulta tan pueril, que no merece ni comentarios. En la práctica vemos, con claridad meridiana, que se le suprime al artículo relativo de la de 57, precisamente aquello que realmente constituye un arma contra los gobernantes inmorales, cuando éstos no tengan escrúpulo en violar la Constitución y en burlar la libre comisión del voto, atacando así, en su base misma, la soberanía del pueblo de la República. Estos delitos sí son fáciles de evidenciar, pudiéndose castigar al alto mandatario que falte a la confianza nacional.

Mas parece que en el Constituyente de Querétaro, los CC. Lizardi y Ugarte, encontrando plausibles los deseos del entonces Primer Jefe, expresados en su proyecto de Constitución, propugnaron para hacer irresponsables a los futuros presidentes de la República, dejando abierta la puerta a las dictaduras, que los constituyentes del 57 intentaron debelar.

Se hizo valer también, en apoyo del artículo 108, que los artículos 92 y 93 salvan al país de posibles atentados por parte del encargado del Poder Ejecutivo; pero la verdad es que la sola lectura de estos preceptos da una idea completa de la imposibilidad de que tales actos se eviten.

El hecho de que 51 ciudadanos diputados votaron en contra del artículo 108, no obstante la estrecha

discusión suscitada, en una prueba irrefragable de que, si no se festina la votación, ampliándose debidamente el debate, el Congreso hubiera resuelto el problema más en consonancia con los interés nacionales .

Según los artículos 104 y 105 de la Constitución de 57, reformados con motivo de la creación del Senado , se necesitaba solamente el voto de la mayoría absoluta de los representantes de ambas Cámaras, en su caso, para declarar culpable al acusado, y según los artículos 109 y 111 de la flamante Constitución, para condenar al presidente de la República por los delitos del orden común, se requiere: Primero: que por mayoría absoluta de los votos de la Cámara popular se declare que ha lugar a acusar ante el Senado, y que ese alto cuerpo, a su vez, declare la culpabilidad, por el voto de las dos terceras partes del número total de sus miembros. De manera que para llegar a este último resultado, es indispensable que voten en sentido acusatorio, un número de representantes que generalmente es el que corresponde a la existencia ordinaria; puede verse por las listas respectivas.

Así pues, los constituyentes del 17 no sólo limitaron la responsabilidad durante el tiempo del encargo, a sólo dos casos: traición a la patria y delitos graves del orden común; sino que hicieron más difícil su inmediato castigo, porque en la Cámara de Senadores, por regla general, el Ejecutivo de la Unión ejerce una influencia favorable a sus intereses, tanto por la tendencia conservadora que generalmente distingue a aquel alto cuerpo, cuanto por el reducido número de representantes que lo integran.

De lo antes dicho resulta: que el presidente de la República puede violar en muchos casos, impunemente, la Constitución General de la República, e igualmente, con la misma responsabilidad, defraudar la voluntad soberana del pueblo, expresada en los comicios; porque si bien es cierto que podrá ser encausado una vez que deje su alta investidura, esto sucederá cuando los hechos consumados hayan producido incalculables males al país.

Urge, pues, ciudadanos diputados que el artículo 108 de la actual Constitución, sea objeto de una importante reforma, volviendo en lo conducente al precepto creado por los constituyentes de 57. Las luchas civiles que tanta sangre y tantas riquezas han costado a nuestra patria, no deben ser estériles. El presidente de la República debe responder a las violaciones a la Constitución y de sus posibles ataques a la libertad electoral.

"El Ejecutivo de la Unión no debe temer acusaciones ante la Representación Nacional, que ellas servirán de oportunidad para la defensa ante la opinión pública. Además, ya han quedado expresados los requisitos constitucionales, verdaderamente infranqueables, para que se declare culpable al acusado, requisitos que hacen posible, de toda imposibilidad, una declaratoria originada de la pasión política.

Por lo expuesto y con fundamento en el artículo 135 de la Constitución General de la República, me permito presentar a la consideración de esta H. Asamblea, el siguiente proyecto de reformar al último párrafo del artículo 108 de la Constitución vigente:

"El ciudadano presidente de la República, durante el tiempo de su encargo, sólo podrá ser acusado por los delitos de traición a la patria; violación expresa de la Constitución, ataque a la libertad electoral y delitos graves del orden Común."

Hasta aquí la iniciativa del C. diputado Valadez Ramírez. Efectivamente, tal como se asienta en el cuerpo de la parte expositiva del citado proyecto, el artículo 108 de nuestra Carta Magna fue discutido y votado con gran festinación; y según puede verse en el Diario de los Debates del Congreso Constituyente de Querétaro, número 67, página 554, el citado artículo 108 fue aprobado por 101 votos de la afirmativa contra 51 de la negativa, entre los cuales figura el del subscripto, que concurrió a aquella histórica Asamblea con la representación del 2o. distrito electoral de este Estado. La parte relativa de dicha sesión, se reseña de la manera siguiente:

"El mismo ciudadano secretario: Se van a votar los artículos 30 y del 108 al 114. La presidencia, por conducto de la Secretaría, manifiesta que se permite votar en contra de determinados artículos.

- (Se procedió a la votación.)- El mismo ciudadano secretario: Resultado de la votación: Todos los artículos han sido aprobados por unanimidad, excepto el 108, en que hubo 101 votos por la afirmativa y 51 por la negativa, y el 109, que fue votado por 85 ciudadanos diputados por la afirmativa y 69 por la negativa.- Contra los artículos 108 y 109 votaron los CC. diputados Aguirre Crisóforo, Alonzo Romero, Alvarez, Ancona Albertos, Avilés Uriel, de la Barrera, Betancourt, Bojórquez, Bolaños V., Cano, Cañete, Cedano, Céspedes, Dávalos Ornelas, Espinosa, Fernández Martínez, García Emiliano C., González, González Galindo, Gracidas, Guerrero, Guillén, Herrera Manuel, Hidalgo, Ibarra, Ilizaliturri, López Guerra, Magallón, Manjarrez, Márquez Rafael, Mayorga, Mercado, Monzón, Moreno, Bruno, Navarro, Pastrana Jaimes, Pintado Sánchez, Ramírez G., Rocio, Rivera Cabrera, Robledo, Roel, Rojano, Rosales, Ross, Ruiz José P., Ruiz Leopoldo, Tepatl, Truchuelo y Victoria." Dada la seriedad de las razones que sirven de fundamento al proyecto de reforma del citado artículo 108 constitucional. el subscripto diputado se permite someter a la consideración de la H. Asamblea, con dispensa de todos los trámites reglamentarios, la aprobación de los siguientes puntos:... Lo que tenemos el honor de comunicar a ustedes, a fin de que se dignen dar cuenta con este documento a es H. Cámara para los efectos correspondientes.

"Reiteramos a ustedes las seguridades de nuestra consideración distinguida.

"Constitución y Reformas.- Culiacán, Rosales, noviembre 19 de 1919.-A. Magallón, D. P.- P. L. Gavica, D. S.- Rosendo Olea, D. S.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"Los CC. Miguel Palacios Macedo y Manuel Gudiño, presidente y secretario general de la Federación de Estudiantes del Distrito Federal, presentan una iniciativa con el fin de que el Presupuesto de Egresos del año próximo figure una partida de $12,000.00 a favor del Congreso Local Estudiantil.

"Hacen suya esta iniciativa y piden que se imprima, los CC. diputados Saucedo y Siurob."- Imprimase y a la Comisión de Presupuestos y Cuenta.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"H. Asamblea:

"La Ley de Organización de los Tribunales Federales de 2 de noviembre de 1917, en sus artículos 5, 15 y 21, establece que requisito necesario para ser oficial mayor y actuario de la Suprema Corte de Justicia, tribunales de Circuito y juzgados de Distrito, poseer título de abogado expedido por autoridad competente.

"Si tenemos en cuenta que la función propia de los actuarios consiste en dar fe de todos los decretos, autos y sentencias que dicten los tribunales y que deben ser notificados a los recurrentes, y si recordamos que desde las Leyes de Partida la fe pública fue concedida por le soberano a los notarios, no encontramos razón alguna por la cual los aspirantes con título de notarios no puedan desempeñar al referido puesto de actuario de la Suprema Corte de Justicia, tribunales de Circuito y juzgados de Distrito. Y menos se comprende la exclusión que la ley vigente hace de los notarios para desempeñar tales puestos, teniendo presente que la Ley del Notariado de 25 de octubre de 1905, actualmente vigente, en su artículo 24 faculta a los aspirantes que hayan recibido ya su patente requisitada y no estén adscriptos a una Notaría, a ejercer como abogados y a desempeñar los empleos judiciales para los cuales la ley exige la calidad del abogado, notario y escribano público.

"De acuerdo con esta ley, que no está derogada, los notarios con título de aspirantes deben ser considerados al igual que los abogados con título para el desempeño de funciones de actuarios o escribanos de diligencias u oficial mayor, en cualquiera de los tribunales de la Federación, y no es lógico ni justo incapacitarlos para ocupar en la Administración de Justicia puestos a los que están preparados por su estudio y competencia.

"Así pues, con fundamento en la fracción II del artículo 72 de la Constitución, y por las razones antes expresadas, propongo a la H. Asamblea que la Ley de Organización de los Tribunales Federales de 2 de noviembre de 1917, sea adicionada en los términos siguientes:

"Para ser actuario u oficial mayor de la Suprema Corte de Justicia, tribunales de Circuito y juzgados de Distrito, se requiere ser notario o abogado con título oficial."

"Salón de Sesiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, 28 de noviembre de 1919.- José Castillo Torre."

En votación Económica se pregunta si se admite a discusión. Los que estén por la afirmativa, se servirán ponerse de pie. Se admite a discusión.

Pasa a la 2a. Comisión de Justicia.

- El mismo C. secretario leyendo:

"El C. diputado Alejandro Velásquez López presenta voto particular como miembro de las comisiones unidas de Instrucción Pública y 2a. de Hacienda, sobre el proyecto de ley relativo a que la instrucción pública en el Distrito Federal quede a cargo del Ejecutivo de la Unión."- Imprímase, y agréguese a su expediente.

(El documento de referencia está concebido en los siguientes términos:)

VOTO PARTICULAR

del C. diputado Alejandro Velásquez López.

H. Asamblea:

A las comisiones unidas 1a. de Instrucción Pública y 2a. de Hacienda fue turnado, con fecha 6 del corriente mes, el proyecto de ley presentado ante esta H. Asamblea por el C. diputado profesor Francisco César Morales, relativo a que la instrucción pública que hasta hoy ha dependido de los honorables ayuntamientos y del Gobierno del Distrito, quede definitivamente a cargo directo del Ejecutivo de la Unión. Como el subscripto ha diferido por completo de la opinión de la mayoría de ambas comisiones, por separado se permite formular el voto particular que somete a vuestra ilustrada consideración.

La "Liga de Profesores de la ciudad de México", con este mismo fin, se dirigió a la Comisión Permanente de la actual Legislatura, manifestando, con fecha 13 del corriente año, que, en asamblea plena, acordó dirigirse a esta H. Cámara de Diputados para pedir se promoviera la reforma de la Ley Orgánica del Distrito Federal, en el sentido de que las escuelas primarias, elementales, superiores, nocturnas y jardines de niños, sean sostenidos y atendidos desde todos puntos de vista por el Ejecutivo Federal.

La propia "Liga de Profesores" se dirige nuevamente a esta Representación Nacional, con fecha 28 de agosto último, reiterando la petición primeramente presentada. En este escrito, los señores profesores se extienden en algunas consideraciones que, por encontrarse sintetizadas en el proyecto de ley que presenta el referido C. diputado César Morales, el subscripto se permite hacer referencia a los considerados que contiene dicho proyecto de ley, que no son sino la consecuencia inmediata de las peticiones del profesorado del Distrito Federal.

Para mayor claridad e inteligencia de las opiniones asentadas por el subscripto en este asunto, me referiré en concreto a cada uno de los principales fundamentos que apoyan el proyecto y que enumero previo resumen y síntesis de los considerados.

I. Que es preciso eximir a los ayuntamientos de erogaciones considerables, como la instrucción pública, para que sirva de base al funcionamiento adecuado de la autonomía de los municipios;

II. Que los ayuntamientos no puedan ni medianamente satisfacer dichos gastos, como se ve por las escuelas clausuradas en todo el Distrito Federal;

III. Que por la situación económica de los municipios, éstos no satisfacen las exigencias que demanda la instrucción pública;

IV. Que las fluctuaciones de los ingresos entorpecen los pagos, traen la intranquilidad de los maestros y la deficiencia de las escuelas;

V. Que debe haber un completo acuerdo entre las funciones técnicas y administrativas, por lo que, faltando a los municipios la preparación necesaria, se cree que interpretarán indebidamente la Ley Orgánica de Educación Pública y problemas conexos;

VI. Que por la frecuente remoción de los ayuntamientos, éstos no pueden adquirir la experiencia necesaria para esta clase de asuntos ni aceptar responsabilidades en la enseñanza, que debe ser de carácter nacional;

VII. Que por estar los ayuntamientos incapacitados técnica y económicamente, el gobierno federal, que es el más alto poder representativo de la nación, debe atender a la educación primaria;

VIII. Que para vivificar y unificar el alma mexicana, al gobierno federal sólo compete a la educación pública;

IX. Que la revolución y su gobierno han tenido como alto postulado la difusión de la educación popular y que los ayuntamientos, por falta de recursos, no pueden realizar esta aspiración;

X. Que es necesario que la educación esté desligada de la política, y que esto no acontece con los ayuntamientos y sí con el gobierno federal;

XI. Que la renovación de los ayuntamientos traerá la renovación del personal docente;

XII. Que la enseñanza primaria es obligatoria y, por lo tanto, el Estado se haya obligado a impartirla, con preferencia a cualquier otra atención. En concepto del subscripto y previo sucinto estudio de este hecho, su opinión es contraria al dictamen de las comisiones, porque considera que no es condición esencial ni precisa eximir a los ayuntamientos de cargas que demandan erogaciones considerables, para poder asegurar una subsistencia económica conveniente, que sirva de base al funcionamiento adecuado de la vida autónoma de los municipios.

Los fuertes gastos públicos que pueda tener un ayuntamiento - lo cual depende de la importancia de su población -, no es precisamente en contra de la autonomía municipal. Esta autonomía no se sostiene ni se asegura con la disminución de los gastos públicos o municipales, porque sería tanto como aceptar que todos aquellos ayuntamientos que cuentan con pocos ingresos, sean los más autónomos.

No he podido hacer mío este considerado "exabrupto", por encontrarse contra las doctrinas económicas que prueban que la libertad política se funda en la libertad económica. Este hecho social se desprende de la práctica y se observa en la experiencia.

La síntesis de las aspiraciones sociales se ha concretado a procurar para los individuos una igualdad política, primero, y una igualdad económica después, para asegurar la autonomía individual de las personas. La tendencia constante de los distintos órganos de un poder público es, asegurar su independencia y estabilidad por medio de la fuerza económica. Los pueblos mismos ofrecen ejemplos innumerables de independencia y autonomía internacionales, mediante la seguridad de su vida económica, fuerte y respetable. Para asegurar el funcionamiento autónomo de los cuerpos edilicios, en concepto del proponente, como se dice, debe eximírseles de esas cargas onerosas como el ramo de la Educación Pública. De esta manera se coliga que todos los ayuntamientos de la República deben excusarse de la administración de la instrucción pública y de las otras atenciones esencialmente municipales que exigen fuertes desembolsos, pues débese tener presente que la educación pública es el número de habitantes de cada uno de los municipios, como los gastos públicos de las atenciones sociales.

Si, como la educación es carga onerosa y debe quitársele a los ayuntamientos, debemos convenir en que lo son también otros muchos ramos, la policía municipal, obras públicas y el mismo personal de los ayuntamientos, que cuestan mucho más que el servicio de la instrucción, llegando a la conclusión de que los ayuntamientos serían cuerpos sencillamente aparatosos, desligados de las obligaciones que las leyes y la práctica de otros países imponen a los ayuntamientos. ¿Qué objeto tendría, en consecuencia, toda institución municipal?

El manejo de los servicios públicos que, en concepto del proponente, no excedieran de tal o cual cantidad.

Contra los ayuntamientos del Distrito Federal se encona una verdad aparente por el autor del proyecto de ley, que consiste en afirmar que no pueden ni medianamente satisfacer la Educación Primaria. El subscripto ha recibido informes de que el número de educandos es, con significante diferencia, el mismo que se atendía en años pasados. El número de escuelas, mejor dicho, edificios destinados a escuelas ha disminuido, pero no así el número de escolares.

Razones de higiene y razones económicas obligaron al ayuntamiento de la capital a clausurar edificios y extender el número de matriculados en las escuelas últimamente reorganizadas. Nada absolutamente puede perjudicar a la enseñanza el aumento de niños atendidos con todas las exigencias modernas de la pedagogía, de la higiene, etc., pues lo aprueban, por ejemplo, las grandes universidades norteamericanas que arrojan considerable número de educandos, alcanzando algunas hasta cifras imaginables. Esto puede presentar puntos de oposición para quienes piensan con el ideal de que "la educación será perfecta cuando cada alumno tenga un maestro."

Si en parte es una verdad que los ayuntamientos no han podido llenar todas las exigencias de la Educación Pública, esto no se debe a una pretendida incompetencia, sino a la falta de recursos o ingresos municipales.

El mal señalado se remedia fácilmente con la promulgación de una Ley Orgánica Municipal que deslinde definitivamente las atribuciones y fuentes de ingresos que deben corresponder a la Federación y al Municipio, con las obligaciones que competen a éste exclusivamente.

Se tiene conocimiento de que los ayuntamientos del Distrito Federal pueden sobradamente atender a los gastos de la educación pública, con aumento o apertura de nueve edificios destinados a escuelas primarias, con sólo que la Cámara de Diputados expida la Ley Orgánica de Municipios, concediéndoles el impuesto predial, que corresponde a ellos exclusivamente.

Debemos de llamar poderosamente la atención de

la H. Asamblea sobre el hecho de que toda censura contra los ayuntamientos gira alrededor de la falta de pago del profesorado. Todos los argumentos esgrimidos y que no tienen relación con la cuestión económica, son inconsistentes y se formulan por ostentación o inferioridad de razonamientos, ocultando el fácil remedio a la solución de este problema, que consiste en el mayor número de ingresos para los ayuntamientos.

En el proyecto se oculta la verdad de los hechos y se acude al manifiesto lanzado por los presidentes municipales del Distrito Federal, de 29 de agosto último, por el que dicen no poder continuar cubriendo los sueldos del profesorado y verse obligado a clausurar algunos establecimientos de educación primaria, por falta de recursos municipales.

La censura contra los ayuntamientos ha sido altamente injusta, y el proponente se olvida de las razones expuestas por los presidentes municipales. Para corroborar esta afirmación, me permito entresacar los fundamentos que apoyaron la decisión de los ayuntamientos del Distrito Federal:

I. En el año de 1917 y cuando los ayuntamientos. funcionando todavía con el carácter de provisionales, no contaban, como no cuentan aún los constitucionales, con todos los recursos propios para atender a los servicios públicos que tienen a su cargo, el gobierno ordenó a los ayuntamientos que recibieran el ramo de Instrucción Pública que las correspondía, pero sin asignar a esta corporación una nueva y mayor fuente de entradas. La imposibilidad material de los municipios para atender este ramo, hizo que el gobierno federal siguiera expresando los gastos de la Instrucción Pública, aunque cargándolos a la cuenta de los ayuntamientos.

II. Al revelarse el Gobierno de la obligación de pagar el profesorado y arrojar toda la carga sobre los municipios, bastante apurados en su situación económica, no les asignó nuevas fuentes de arbitrios, ni siquiera se les aumentó el porcentaje que se les ha enseñado de lo que totalmente les corresponde.

Las demás consideraciones que contiene este manifiesto, en el fondo se reducen a poner de relieve la obstinación del gobierno federal contra los ayuntamientos, negándoles toda clase de recursos mayores para atender a los gastos públicos. Ni los municipios, ni el gobierno federal (no obstante las facultades extraordinarias de que goza) han procurado solucionar este conflicto de tan graves consecuencias para la sociedad y para los señores profesores. El interés social ha sido visto con suma indiferencia y se han puesto en juego toda clase de maquinaciones de esta Cámara y fuera de ella, en el seno del gobierno y fuera de él, para hacer aparecer ante la opinión pública la sinrazón de la existencia del municipio libre.

Termina el manifiesto con las siguientes cláusulas de importancia:

"Tales han sido los acontecimientos que han orillado a los ayuntamientos a la actual situación. De ello se desprende nuestra irresponsabilidad, así como de las siguientes consideraciones capitales que expondremos en breves palabras:

"I. La contribución predial corresponde íntegramente a los municipios, porque aquella la producen bienes inmuebles de la pertenencia exclusiva de las municipalidades. Sin embargo, a los ayuntamientos sólo se les da el cuarenta por ciento de esa contribución, y el sesenta por ciento restante lo recibe el Gobierno del Distrito quien no sostiene, absolutamente, ninguno de los servicios municipales.

"II. El Gobierno del Distrito no es de elección popular, sino una dependencia económica del Ejecutivo Federal. En consecuencia, el Gobierno federal que percibe además otro sesenta por ciento de contribución netamente federal, debe sostener con esta contribución a su departamento llamado Gobierno federal.

"III. Solamente cobrando los ayuntamientos su contribución predial, íntegra, podrán proporcionar a los contribuyentes y a las municipalidades en general los servicios de luz, agua. escuelas, policía, sanidad y todos los demás que los habitantes tienen derecho a exigir, ya que para eso pagan sus contribuciones."

Como se ve, los presidentes municipales dan la franca resolución de este problema.

Con relación al segundo punto del proyecto, tengo que referirme en lo particular a la ciudad de México, pues el subscripto, por la carencia de tiempo para dictaminar, no ha podido acercarse a todas las municipalidades recabando datos sobre la clausura de las escuelas y conocer las que se sostienen en la actualidad, aunque es muy reducido número a las que existían anteriormente.

Insistentemente se asegura que en la capital han sido clausuradas gran número de escuelas, aconteciendo el que miles de alumnos se encuentren sin enseñanza.

Esto no es una verdad. Efectivamente, se han cerrado algunos establecimientos escolares, pero los alumnos de esos planteles se han refundido en otros, cuyos edificios son más espaciosos y atendidos con mayor personal en unos, y en otros con el mismo. El número de alumnos que concurrían a las escuelas establecidas antes de la huelga de profesores, es casi igual a la que concurre hoy, y la diferencia sólo consiste en un corto número, como se prueba con la relación que más adelante me permito hacer.

La asistencia de alumnos a las escuelas primarias elementales y superiores, hasta el 30 de abril del corriente año, es como sigue:

Escuelas elementales:

Niños, 14,349. Niñas, 15,957.

Escuelas Superiores:

Niños, 2,038. Niñas, 2,505.

La existencia de alumnos desde el 30 de abril al 31 de agosto del corriente año, es como sigue:

Escuelas Elementales:

Niños, 12,664. Niñas, 13,049.

Escuelas superiores:

Niños, 2,055. Niños, 2,419.

Además, en las propias escuelas superiores que actualmente se sostienen, reciben instrucción elemental en número de:

Niños, 1,572. Niñas, 1,657.

Por lo tanto, reciben, actualmente, la educación elemental en escuelas elementales y superiores:

Niños, 14,236. Niñas, 14,706.

Existe una diferencia entre el número de alumnos

que concurrían antes del 30 de abril, o sea antes de la huelga de profesores, y el número de alumnos que hoy concurren:

Niños, 113. Niñas, 1,251.

En las escuelas superiores hay una diferencia por iguales fechas de:

Niños, 23. Niñas, 86.

Con estos 23 niños más, aumentó el número anterior. Como se servirá ver la H. Asamblea, la diferencia es sumamente corta y no obstante las condiciones económicas del municipio de la ciudad de México, sostiene casi el mismo número de educandos que en las épocas anteriores, las que se han tomado como punto de crítica y comparación.

Por el conocimiento de estos datos estadísticos, el subscripto encuentra poco fundados los ataques que se lanzan contra el municipio por la clausura de las escuelas, creyéndose por esto que el número de alumnos ha disminuido tan considerablemente que se hace aparecer con afirmaciones alarmantes como un mal social.

Si con los arbitrios con que cuenta actualmente el municipio de México puede frente a los gastos que demanda la educación de este número de alumnos, es incuestionable que cuando esta Cámara vote favorablemente el proyecto de Ley Orgánica Municipal que se redactará en breve por las comisiones 1a. de Puntos Constitucionales y 2a. de Hacienda, el Ayuntamiento no tan sólo abrirá más edificios destinados a escuelas primarias, sino que podrá cumplir absolutamente con todas las exigencias de la higiene y la pedagogía, aumentando hasta donde sea posible el exiguo sueldo del profesorado.

Por el cierre de algunas escuelas, el ayuntamiento de México se ha evitado el gasto de importantes sumas, como se ve en seguida:

Para rentas de edificios escolares: Escuelas Elementales $ 17,342.00 Escuelas Superiores " 5,585.00 Jardines de niños " 2,445.00 --------------- Total por mes $ 25,372.00 o sea anualmente: $264,464.00.

Según el presupuesto municipal que debería regir del 1o. de mayo al 31 de diciembre de este año, se destinaba por la renta y reparación de los edificios escolares, la suma de $320,000.00, habiendo de aquel gasto a éste una diferencia de ........ $25,536.00. Debe tenerse en cuenta que en la suma presupuestada entraban gastos de reparación, y lo que hoy se destina es exclusivamente para rentas de los edificios.

La reducción del personal que se encuentra debidamente justificada por la penuria municipal, es como sigue:

Según dicho presupuesto, había 130 directores de escuelas elementales; hoy se sostienen 85.

Directoras de kindergardens, 11; hoy se sostienen 12. Hubo 1,010 ayudantes de escuelas elementales como sueldo que fluctuaba entre $3.56 y $2.25; hoy se sostienen 595, con sueldo general de $3.00, más 85 practicantes de escuelas primarias elementales de los cuales 10, con sueldo de $3.00, y 75 con sueldo de $2.50.

Educadoras se empleaban más o menos 80, y hoy se sostienen 42.

Acompañantes de piano se sostenían 11; hoy 10, además de 12 nuevos practicantes de kindergardens.

Las escuelas nocturnas han desaparecido totalmente y esto se debe a que el Ayuntamiento juzga que no es una cuestión municipal, sino puramente social, correspondiendo, en consecuencia, al Gobierno Federal.

Queda, pues, demostrado que el Ayuntamiento de México, si no responde totalmente a las exigencias de la educación pública que le está encomendada, cuando menos no amerita el que por la sola circunstancia de retardar sus pagos, se le despoje de un derecho y se le excluya de una obligación esencialmente municipal: "La instrucción primaria obligatoria". Es necesario considerar que las causas son puramente económicas, y que para esto bastará tan sólo que se decreten los arbitrios que le sean suficientes y que le correspondan esencialmente.

El tercer punto es correlativo de los ingresos que deban disfrutar los ayuntamientos.

El cuarto punto no tiene razón de ser, y si esto fuera un hecho general, como se hace aparecer por las palabras del proyecto, debemos convenir que las fluctuaciones sufridas en los ingresos federales son más considerables, y esto sería bastante para afirmar que se entorpecería el pago de los empleados públicos, y la deficiencia del servicio administrativo federal.

Los ingresos municipales fluctúan en condiciones de poca diferenciación y es un hecho innegable que no debe tenerse esta aseveración, supuesto que cualquier parte del Estado, llámese entidad federativa o municipio, tiende a aumentar sus ingresos porque las atenciones sociales están en proporción directa al adelanto de los pueblos. Los gastos públicos serán cada día mayores a medida que lo pidan las exigencias sociales. Las fluctuaciones de los ingresos no son en manera alguna la causa de una mala administración, supuesto que éstos deben ser constantemente equilibrados. Es claro que la fluctuación viene a ser perjudicial a los municipios, cuando a éstos no se les faculte o den los recursos necesarios.

Es innegable que debe existir un perfecto acuerdo entre la función técnica escolar y la administrativa, como se afirma en el quinto punto del proyecto, deduciéndose de esto que al faltar a los municipios la preparación científica necesaria, no podrán desarrollar los problemas conexos con la Educación Pública. Este es uno de los razonamientos exabrupto que se aducen en contra de las corporaciones edilicias. Es claro que si en principio se niega todo, nada bueno puede esperarse de los municipios.

Todos estos errores sobre el espíritu administrativo y funcionamiento de un ayuntamiento libre, se deben por simples apreciaciones de carácter personal anticipadas a toda experiencia y a toda práctica. Se cree in - populi que los regidores o el presidente de la Comisión de Instrucción Pública municipal, son las personas que directamente vienen a solucionar e implantar los problemas escolares. Juzgando las cosas de esta manera, es innegable que

la cuestión técnica y administrativa de la enseñanza, sería el más grande de los fracasos, supuesto que generalmente los regidores pueden llevar a esas comisiones a los menos capacitados.

La constitución actual del municipio libre en México, y sobre todo, la división de los trabajos, la dirección de los mismos, y el funcionamiento administrativo, sufren trascendentales irregularidades. Todo se debe a la falta de la Ley Orgánica Municipal.

Para una institución completamente nueva y que no tiene más leyes para su régimen que los principios constitucionales, reglas que no pueden orientar la administración y el funcionamiento adecuado de los ayuntamientos, no pueden servir para la organización completa, y de ahí la urgente necesidad de deslindar las atribuciones que le competen; por lo tanto, no queda más recurso de orientación que recurrir a los países que nos presentan ejemplos prácticos y acondicionados a nuestro medio y posibilidad.

No ataco la verdad de la falta de preparación amplia de los señores regidores en materia educacional, pero me permito señalar que las atribuciones en materia de educación pública, no corresponden a la contante vigilancia y dirección personal de los municipios. Conforme a la organización de un municipio libre, toda ciudad tiene un Consejo Escolar, compuesto de personas competentes y reputadas, de carácter inamovible, excepto en los casos que determinan las leyes, como la incapacidad, mala conducta, etc.

En los Estados Unidos, por ejemplo, "el Consejo Escolar tiene atribuciones de naturaleza tal, que lo hacen sobremanera importante. El período de servicio de los miembros es de tres años y cada año se renueva la tercera parte de ellos; por consiguiente, su número tiene que se múltiple de tres. La lentitud con que se renuevan los miembros de dicho Consejo garantiza que la mayor parte de ellos estén familiarizados con los deberes de su encargo. El consejo Escolar tiene la obligación de visitar todas las escuelas públicas mensualmente cuando menos y de rendir al municipio un informe anual. Debe decir que textos han de adoptarse, las mejoras que deben introducirse, proponer el aumento o disminución del personal, etc."

De esta manera los regidores incompetentes, como se dice que aquí lo son siempre, están sujetos en todo a los informes de un Consejo competente de pedagogos, que la Ley Orgánica debe asegurar contra todas maquinaciones políticas que pudieran presentarse . El funcionamiento independiente del Consejo asegura la marcha regular de la enseñanza pública. La resolución de estos problemas, parece irónico al decirlo, depende sólo de la buena voluntad de los hombres y de las leyes que les restrinjan sus actos en beneficio de la sociedad.

El sexto punto se encuentra relacionado con el anterior, es decir, que los ayuntamientos, por la constante remoción no pueden adquirir la experiencia necesaria, ni aceptar responsabilidades. Queda demostrado que con el Consejo Escolar la instrucción pública de los municipios ni sufrirá errores ni entorpecimientos, pasando la responsabilidad a las personas que formen los consejos escolares.

Séptimo razonamiento: Señalados los medios de que por los medios de porque los ayuntamientos no se encuentran incapacitados ni técnica ni económicamente y siendo obligación inmediata de los municipios el sostenimiento de la instrucción primaria obligatoria, no pueden aceptarse que el gobierno federal, así sea el más alto Poder representativo de la nación, como se clasifica en el proyecto, se haga cargo de la educación pública, que función inherente a todo municipio.

La conquista revolucionaria del municipio libre, aprovechando la circunstancia favorable de este conflicto, debe realizarse definitivamente, organizándose el municipio de modo amplio por el Poder Legislativo.

Constitucionalmente, el Ejecutivo no está obligado a sostener la instrucción primaria, sino que es atribución directa de los ayuntamientos. El proyecto de ley, aparte su inconstitucionalidad, no está con las modalidades del municipio libre. Si es cierto que la enseñanza es cuestión de carácter nacional, en su conjunto, en su administración y sostenimiento pertenece constitucionalmente a los municipios de la República.

Las tendencias constantes de la doctrina centralista, que cuenta con no pocos adeptos, hacen esfuerzos por matar el principio incontrarrestable da la división del trabajo que se impone cada día más en que aumenten las poblaciones de los países; el adelanto en la industria; el comercio; la agricultura y el progreso de las sociedades que exigen de los gobiernos o del Estado la atención debida de la cosa pública.

Con el proyecto de ley que se presenta no se federaliza la instrucción, como se hace aparecer, sino se centraliza y se pretende imprimirle a la educación nacional, el sello de los poderes ejecutivos, desastrosos cuando tienen a su dirección los problemas de la conciencia nacional y aquellos que se resuelven según las condiciones de cada región, el adelanto intelectual de las mismas, y tantas otras causas que deben satisfacerse conociéndolas directamente.

En la época del general Díaz, si es cierto que existió el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, con todos sus errores y sus extensísimas atribuciones, nada consiguió respecto a la vivificación y unificación del alma mexicana. Los estados decretaban los programas de educación pública; ejercían su vigilancia y dirigían su administración. ¿Por qué se reconoció la conveniencia de este sistema educativo? Porque era imposible que el Ejecutivo de la Unión desarrollar la labor educacional que a todos los Estados les estaba encomendada. Y era un atentado que el centro se inmiscuyera en los asuntos educativos de un Estado. Hoy mismo se consideraría como un atropello, y es necesario que así se tome, la intromisión de los Estados y del gobierno federal en las cuestiones de la escuela municipal.

Octavo razonamiento: Este razonamiento que pide que el gobierno federal se haga cargo de la instrucción pública para que vivifique y unifique el alma nacional, es puramente artificioso.

En el fondo parece un razonamiento filosófico indiscutible; pero las comisiones se preguntan: ¿qué medios prácticos puede tener el Ejecutivo para

unificar y revivir el alma nacional? Este es problema que depende de la educación y de los programas de enseñanza. La historia, el amor a sus héroes, el conocimiento del país, sus tradiciones, sus costumbres, el apego a sus hombres de ciencia y artistas, el amor a sus instituciones republicanas, la emancipación económica, el ejercicio de la libertad, la instrucción cívica, la celebración de sus fiestas patrias, la confianza de que se imparta la justicia las virtudes de los funcionarios públicos, la difusión de su lenguaje, etc., esto es lo que constituye el amor a la patria, la unificación de la raza, la preparación del alma nacional. ¿Y a quién está encomendado, si no a los mentores de enseñanza y en la ejemplicidad de los maestros?

El municipio, siendo el gobierno más inmediato del pueblo, el gobierno del pueblo mismo, es a la institución a quien está encomendado tan alto ideal.

Que los ayuntamientos, se dice en otro punto, por la falta de recursos no pueden realizar el postulado de la revolución, la difusión de la educación popular.

Como se nota, todos los argumentos giran alrededor de la cuestión económica. Urge pues, que a los ayuntamientos se les den los ingresos necesarios. Décimo punto: que la enseñanza debe estar desligada de la política y que esto acontece estando a cargo del gobierno federal y no de los ayuntamientos.

Yo no me esforzaré en demostrar la falsedad de esta aseveración, supuesto que es tan evidente que el gobierno federal es esencialmente de funciones políticas y los ayuntamientos de funciones administrativas.

Que la renovación de los ayuntamientos traerá consigo el cambio de personal.

Con motivo de la solicitud de las señoritas profesoras del Distrito Federal, sometida a vuestra consideración, pidiendo que sus sueldos fueran igualados a los de los señores profesores, fundándose en la fracción VII del artículo 123 constitucional, la Comisión de Instrucción Pública, considerando que los empleados públicos no podrían considerarse dentro del artículo 123, dictaminó en sentido adverso, habiéndose rechazado dicho dictamen. Este presidente asentado por la H. Cámara de Diputados, viene a definir que asistirán al profesorado de toda la República los derechos del artículo 123 y, en consecuencia, los ayuntamientos no podrán remover arbitrariamente en contraposición de la fracción XXII del dicho artículo 123, además de los derechos de inmovilidad, que asegurará, sin duda alguna, la Ley Orgánica Municipal, a los mentores de la niñez.

Estos temores se fundan en un hecho puramente accidental, como lo fue la huelga de los profesores del Distrito Federal.

Por último, se dice en el proyecto de ley, que la enseñanza primaria es obligación del Estado.

Basta recordar que por el Estado se entiende no tan sólo el gobierno federal, sino también los municipales, para demostrar que el Estado, por conducto de uno de sus órganos, el municipio, cumple con la obligación social.

Queda. pues, por determinar, si las escuelas nocturnas y kindergardens son parte de la instrucción obligatoria que compete a los ayuntamientos.

En cuanto a la instrucción superior, o sea que el 5o. y el 6o. años bien se sabe que no es el de la competencia de los municipios, sino tampoco del gobierno federal.

Las escuelas nocturnas se toman como problema puramente social, y en cuanto a los kindergardens, como preparación inmediata para la educación primaria.

En mi concepto, las escuelas nocturnas, por estar destinadas a varones y a mujeres mayores de edad que trabajan y contribuyen a los gastos públicos de la municipalidad donde radican, así como por que en dichas escuelas se imparte enseñanza de programas primarios y no cultura superior, e igualmente en los kindergardens; soy de opinión por que se considera de la competencia de los municipios.

Como la instrucción superior no es obligatoria para el municipio ni el gobierno federal, se permite opinar que ésta es facultad potestativa del Ejecutivo de la Unión.

Por todo lo que antecede, el subscripto se permite someter a vuestra consideración el siguiente

PROYECTO DE LEY:

Artículo 1o. Queda a cargo de los ayuntamientos del Distrito y Territorios Federales, la instrucción primaria obligatoria, los kindergardens y las escuelas nocturnas para obreros.

Artículo 2o. El Ejecutivo de la Unión, de acuerdo con los ayuntamientos, decretará desde luego, entretanto se promulga la Ley Orgánica Municipal. los ingresos suficientes para cubrir los gastos destinados a la enseñanza.

Artículo 3o. Se considera facultad potestativa del Ejecutivo de la Unión, establecer y sostener las escuelas de enseñanza superior.

TRANSITORIO:

La presente ley principiará a surtir sus efectos a partir de la fecha de su aprobación.

Salón de Sesiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, 28 de noviembre de 1919.-A. Velázquez López.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"Las comisiones unidas 1a. de justicia y 1a. de Puntos Constitucionales presentan su dictamen sobre el proyecto de ley que establece la forma de suplir en sus faltas temporales a los magistrados del Territorio de la Baja California."- De primera lectura.

(El citado dictamen está redactado en los siguientes términos:)

"Comisiones unidas 1a. de Justicia y 1a. de Puntos Constitucionales.

"H. Asamblea:

"A las comisiones unidas que subscriben, fue turnada la iniciativa de adición a la Ley de Organización de Tribunales del Fuero Común del Distrito Federal y Territorios, presentada por la diputación del

el Territorio de Baja California, relativa a la forma en que deben suplirse las faltas temporales de los magistrados de aquel Territorio.

"Estas comisiones, aun cuando estiman que están vigentes los artículos 186, inciso VI, y 184, inciso VIII, de la anterior Ley de Organización Judicial del Distrito y Territorios Federales, de conformidad con lo que consigna el artículo 15 transitorio de la actual ley, creen que debe aceptarse la mencionada adición teniendo en cuenta que conforme a la ley vigente ya no hay los magistrados suplentes de que habla la anterior.

"Por lo expuesto, los subscritos hacen suya la adición propuesta y se permiten someter a la aprobación de vuestra soberanía el siguiente proyecto de ley:

"Único. Los magistrados del Territorio de la Baja California, en sus faltas temporales, así como cuando estuvieron impedidos en algún negocio, serán suplidos por el juez de Primera Instancia de sus respectivas jurisdicciones en el orden de su proximidad.

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, 26 de noviembre de 1919.- J. Gaitán.- Ramón Blancarte.- Enrique Suárez.- Francisco Araujo."- Primera lectura.

- El mismo C. Secretario, leyendo:

"Segunda lectura del dictamen que presentan las comisiones unidas 2a. de Justicia y 1a. de Puntos Constitucionales sobre el proyecto de ley que por el que se reforman los artículos 12 y 14 de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Fuero Común, que devolvió modificado el Senado."- Imprímase, y a discusión el primer día hábil.

(El citado dictamen está concebido en los siguientes términos):

Comisiones unidas 2a. de Justicia y 1a. de Puntos Constitucionales.

H. Asamblea:

"A las comisiones unidas 2a. de Justicia y 1a. de Puntos Constitucionales, fue turnado el proyecto de ley que reforma los artículos 12 y 14 de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Fuero Común para el Distrito Federal y Territorios, que el Senado tuvo a bien enviarnos para los efectos constitucionales.

La H. Cámara colegisladora introdujo la reforma del artículo 84 de la expresada ley, que en efecto tiene relación con los artículos que se reforman y que con anterioridad esta H Asamblea había aprobado.

Por lo expuesto, los subscriptos, haciendo suyos los razonamientos que en la Cámara colegisladora se produjeron en pro de las modificaciones que la misma aceptó que se hiciera al proyecto primitivo, tiene el honor de someter a la aprobación de la Asamblea el siguiente proyecto de ley:

Artículo único. Se reforma la Ley Orgánica de Tribunales de Fuero Común en el Distrito y Territorios Federales, como sigue:

Artículo 12. El Territorio de la Baja California se divide, para los mismos efectos, en tres distritos: Norte, Centro y Sur, comprendidos:

I. El distrito Norte desde la línea divisora entre la República y los Estados Unidos del Norte hasta los límites septentrionales de la municipalidad de Mulegé;

II. El del Centro, desde el de los expresados límites de la municipalidad de Mulegé, hasta una línea tirada de San Juan del Golfo de Cortés a Santa Elena, en la costa del Pacífico, que pasará por los puentes de Sauzal, Cerritos Buenos Aires y Las Cruces, en la municipalidad de La Paz; pero quedando estos ranchos fuera de la jurisdicción del distrito;

III. El del Sur, que se formará de la parte meridional de la península, no comprendida en el del Centro.

El distrito Norte de la Baja California se compondrá de cuatro partidos judiciales:

I. El de Mexicali, que comprenderá la municipalidad de su mismo nombre;

II. El de Ensenada de Todos Santos, que comprenderá esta municipalidad;

III. El de Tijuana, que comprenderá la municipalidad de su propia denominación, y

IV. El de Tecate, que comprenderá la municipalidad de igual nombre. Los distritos Centro y Sur formarán cada uno un partido judicial.

Artículo 14. Las cabeceras de los partidos judiciales del Distrito Federal, serán respectivamente:

México, Tacubaya, Tlalpan y Xochimilco.

En el distrito norte de la Baja California, serán cabeceras de los partidos judiciales las poblaciones de su respectiva denominación; en el de centro será Mulegé y en el sur, La Paz.

En el Territorio de Quintana Roo, la cabecera del partido judicial será la población de Payo Obispo.

Artículo 84. En el Territorio de la Baja California habrá dos tribunales superiores unitarios, residiendo uno en la ciudad de La Paz, y tendrá jurisdicción en los distritos Centro y Sur. El otro residirá en la ciudad de Mexicali, y tendrá jurisdicción en todo el distrito del Norte.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, 27 de noviembre de 1919.- R. Martínez del Río.- Enrique Parra.- C. García.- Enrique Suárez.- Ramón Blancarte.

El mismo C. secretario, leyendo:

"Está de segunda lectura el dictamen que presenta la 1a. Comisión de Hacienda, respecto al proyecto de decreto por el que se concede una pensión de $1,200.00 anuales a las señoritas Josefa y Rosa Alcocer, nietas de don Vidal Alcocer."- A discusión el primer día hábil.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"Esta de segunda lectura el dictamen que presentan las comisiones 1a. y 2a. de Instrucción Pública y 2a. de Hacienda, relativo al proyecto de ley por el que se adiciona la Ley Orgánica de

Secretarías de Estado, creando el Departamento de Educación Pública."- A suprimir discusión el primer día hábil.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"H. Asamblea:

"El suscrito, diputado en ejercicio por el XV distrito electoral del Estado de Michoacán, ante vuestra soberanía expone:

"Que teniendo necesidad de trasladarse al arreglo de asuntos de verdadero interés relacionados con su distrito y que requieren su presencia, solicita le sea concedida, con dispensa de todo trámite, una licencia hasta por quince días con goce de dietas, en la inteligencia de que es la primera vez que solicito licencia para separarse de esta H. Asamblea.

"México, 1o. de diciembre de 1919.- P. Carriedo Méndez.

En votación económica se pregunta si se le dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Se dispensan los trámites.- Está a discusión.

¿No hay quien haga uso de la palabra? En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Aprobada.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"CC. secretarios de la H. Cámara de Diputados.

"El representante que subscribe, atentamente ruega a ustedes se sirvan dar cuenta a la Honorable Cámara con la solicitud que hacen de que se le sean concedidos quince días de licencia con goce de dietas, pues necesita con urgencia atender personalmente un asunto particular.

"Para la solicitud pide dispensa de todo tramite.

"Protesta a ustedes las seguridades de su muy distinguida y atenta consideración "México, diciembre primero de mil novecientos diez y nueve.- "Antonio Aguilar". En votación económica se pregunta si se le dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Se le dispensan los trámites. Está a discusión.

¿No hay quien solicite uso de la palabra?

En votación económica se consulta a la Asamblea si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Se concede la licencia.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"H. Asamblea:

"Con el objeto de atender a asuntos particulares de carácter íntimo, atentamente suplico a vuestra soberanía se sirva concederme licencia por quince días, con goce de dietas, la cual principiará a contarse desde el día en que así lo avise a la secretaría; en el concepto de que, en el actual período, solamente he faltado a una sesión, y esto con el permiso correspondiente de la H. Presidencia.

"Suplico dispensa de tramites y protesto a ustedes las seguridades de mi atenta consideración.

"México, D. F., 1o de diciembre de 1919.- Carlos E. Tamez."

En Votación económica se pregunta si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Se dispensan los tramites. Está a discusión.

¿No hay quien solicite el uso de la palabra? En votación económica se consulta si se concede la licencia. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Se concede la licencia.

- El mismo C. secretario, leyendo:

Honorable Asamblea:

"La inmediata atención que requieren asuntos relacionados con la representación que tengo, me obligan a estar separado, si se me concede permiso, de esta H. Cámara.

"En tal virtud, con dispensa de trámites, ocurro a vuestra soberanía solicitando licencia por veinte días con goce de dietas para ausentarme de esta capital.

"Por tanto, a ustedes suplico se sirvan concederme la licencia en los términos que solicito.

"México, a 1o. de diciembre de 1919.- Genaro V. Vázquez.

En votación económica se pregunta si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Se dispensan los trámites. Está a discusión.

¿No hay quien solicite el uso de la palabra? En votación económica se consulta a la Asamblea si se concede la licencia. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Se concede la licencia.

- El mismo C. secretario: Se va a proceder a recoger la votación nominal de la partida 5,017, que dice:

"Oficina de Correspondencia:

"5017. Once mecanógrafos, a $3.00 diarios cada uno."

El C. Secretario García Ruiz: por la afirmativa

Esta partida quedo pendiente en la sesión del sábado por falta de quórum. (Se recogió la votación.)

- El mismo C. secretario: Votaron por la negativa 37 ciudadanos diputados.

El C. secretario García Ruiz: Votaron por la afirmativa 108 ciudadanos diputados. En consecuencia, ha sido aprobada la partida 5017.

(Votaron por la afirmativa, los CC. diputados Aguilar Antonio, Aguilar Pablo, Alarcón, Alcocer, Anda de, Angeles Jenaro, Avellaneda, Balderas Márquez, Baledón Gil, Barragán, Barrera de la, Blancarte, Bouquet, Cabrera, Cancino, Cárdenas Emilio, Carriedo Méndez, Carrión, Casas Alatriste, Castillo David, Castro Alfonso, Castro Roberto, Céspedes, Cordero, Cornejo, Cravioto Gallardo,

Crespo Díaz González, Díaz Infante, Esparza Fernández Ledesma, Fierro, Flores, Frías, Fuentes Barragán, Gaytán, García Adolfo G., García Carlos, García Emiliano C., García José Guadalupe, García Pablo, García Ruiz, Gómez Cosme D., Guerra, Gutiérrez de Velasco, Gutiérrez Orantes, Hernández Eulogio , Hernández Loyola, Huerta, Lanz Galera, León, Limón Uriarte, Lomelí, Macías Juan E., Macías Rubalcaba, Madrid, Mancisidor, Márquez Galindo, Martín del Campo, Méndez Arturo, Méndez Benjamín, Méndez Fortunato, Mercado, Morales Francisco César, Morales Hesse, Morales Sánchez, Navarro, Ocampo, O'Fárrill, Padrés, Palacios Moreno, Pastrana Jaimes, Paz, Peña, Pérez Carbajal, Pérez Vela, Quiroga, Rivera Castillo, Rodríguez de la Fuente, Rodríguez Matías, Rodríguez Sabino, Rojas Rafael, Romero Cepeda, Ruiz H., Ruiz Martínez, Saldaña, Sánchez Margarito, Segovia, Silva Pablo, Solórzano, Soto José M., Soto Peimbert, Soto Rosendo A., Sotres y Olaco, Suárez Enrique, Tamez, Urdanivia, Uzeta, Valdés, Valladares, Vásquez, Velásquez Juan, Verástegui Franco, Vilchis, Villaseñor Mejía, Villela y Zerecero Total, 108 votos.

Votaron por la negativa los CC. diputados Aguilera, Alejandre, Altamirano, Amezola, Arriaga, Bravo Carlos, Breña, Castilleja, Chablé, Espinoza Bávara, Espinosa Luis, Fernández Miguel B., Ferrel, Franco, Galindo Aurelio F., García Antonio M., García Norberto, Gómez Gildardo, Guerrero, Gutiérrez Antonio, Jiménez, Liekens, Méndez Pánfilo, Mota, Ortega, Pastor, Pérez Vargas, Ríos Landeros, Rosas, Sánchez Salazar, Saucedo, Silva Jesús, Vadillo, Valadez Ramírez, Valverde, Villaseñor Salvador y Zincúnegui Tercero. Total, 37 votos.)

- El mismo C. secretario: Están a discusión las partidas 5001 y 5003 separadas por el C. Velásquez López. (Voces: ¡No está!) Las partidas dicen así:

"Secretaría:

"5001. Un secretario, $50.00 diarios.

"Secretaría particular:

"5003. Un secretario particular, $20.00 diarios."

No encontrándose en el salón el C. Velásquez López, se reservan para su votación.

- El mismo C. secretario: Está a discusión la partida 5132 que dice: "Servicios especiales:

"5132. Para remunerar a los administradores principales del timbre, conforme a la Tarifa, así como a los empleados de los Estados y Municipios por la recaudación de la contribución federal, y para cualquier otra clase de emolumentos que deban satisfacerse por concepto de los impuestos del Timbre, $1.050,000.00 anuales."

No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para su votación.

- El mismo C. secretario: Se va a recoger la votación nominal de todas las partidas desde la 5001 hasta la 5248 que comprenden la sección XXIX.

El C. secretario Castillo: Por la negativa.

El C. secretario García Ruiz: Por la afirmativa.

(Se procedió a recoger la votación.)

El C. secretario Castillo: Votaron por la negativa 4 ciudadanos diputados.

El C. secretario Aguilar: Votaron por la afirmativa 148 ciudadanos diputados. En consecuencia, han sido aprobadas las partidas de la sección XXIX del ramo sexto, que no fueron objetadas.

(Votaron por la afirmativa los CC. diputados Aguilar Antonio, Aguilar Pablo, Aguilera, Alarcón, Alcocer, Altamirano, Anda de, Angeles Jenaro, Araujo Emilio, Araujo Francisco, Arriaga, Avellaneda, Balderas Márquez Baledón Gil, Barrera, Berumen, Blancarte, Bouquet, Bravo Carlos, Breceda, Breña, Cabrera, Cancino, Cárdenas Emilio, Carrión, Casas Alatriste, Castilleja, Castillo David, Castillo Garrido, Castro Alfonso, Castro Roberto, Céspedes, Cordero, Cornejo, Cravioto Gallardo, Crespo, Chablé, Díaz González, Díaz Infante, Esparza, Espinoza, Bávara, Fernández Ledesma, Fernández Miguel B., Ferrel, Fierro, Flores, Franco, Frías, Fuentes Barragán, Gaitán, Galindo Aurelio F., Galindo Carlos, Gámiz, García Adolfo G., García Antonio M., García Carlos, García José Guadalupe, García Norberto, García Pablo, García Ruiz, Gómez Cosme D., Gómez Guiraldo, Gonzáles Galindo, González Marciano, Guerra, Guerrero, Gutiérrez Antonio, Gutiérrez Atanasio, Gutiérrez de Velasco, Hernández Elogio, Hernández Loyola, Lanz Galera, Lazcano Carrasco, León, Liekens, Limón Uriarte, Lomelí López, Emiliano Z., Macías Juan E., Macías Rubalcaba, Hernández Loyola, Huerta, Lanz Emiliano Z., Macías Juan E.., Macias Rubalcaba, Madrid, Márquez Galindo Martín del Campo, Martínez Ignacio E., Méndez Arturo, Méndez Benjamín, Méndez Fortunato, Méndez Pánfilo, Mendoza, Mercado, Morales Francisco César, Morales Hesse, Morales Sánchez, Mota, Navarro, Ocampo, O'Fárrill, Ortega, Ortiz, Padrés, Parra, Pastor, Pastrana Jaimes, Paz, Peña, Pérez Carbajal, Pérez Vargas, Pérez Vela, Quiroga, Ríos Landeros, Rivera Castillo,, Rodríguez de la Fuente, Rodríguez Matías, Rodríguez Sabino, Rojas Rafael, Romero Zepeda, Rosas, Ruiz H., Ruiz Martínez, Saldaña Sánchez Margarito, Sánchez Salazar, Segovia, Silva Jesús, Silva Pablo, Solórzano, Soto José., Soto Rosendo A., Sotres y Olaco, Suárez Enrique, Tamez, Tello, Urdanivia, Uzeta, Vadillo, Valadez Ramírez, Valdés, Valverde, Valladares, Velásquez Juan, Verástegui, Franco, Vilchis, Villaseñor Mejía, Villaseñor Salvador, Villela Zavala, Dionisio y Zerecero. Total, 148 votos.

Votaron por la negativa los CC. diputados Alejandre, Amezola, Saucedo y Zincúnegui Tercero. Total, 4 votos.)

- El mismo C. secretario: Está a discusión la sección XXX del ramo sexto, que comprende las partidas 5249 a 5282 correspondiente a la Tesorería General de la Nación.

Los ciudadanos diputados que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse. (Voces: ¡Toros! ¡Toros!)

Han sido separadas las partidas 5,250 y 5,261 por el C. Villaseñor Salvador; las partidas 5,272, 5,281 y 5,282 por el C. Siurob.

Los ciudadanos diputados que deseen separar otras partidas para impugnarlas, sírvanse pasar a inscribirse.

Se va a proceder a recoger la votación nominal de las partidas no objetadas de la sección XXX.

El C. secretario Castillo: Por la afirmativa.

El C. Flores: Por la negativa. (Se recogió la votación.)

- El mismo C. diputado: Votaron por la negativa 2 ciudadanos diputados.

El C. secretario García Ruiz: Por la afirmativa 140 ciudadanos diputados. En consecuencia, han sido aprobadas las partidas no objetadas.

(Votaron por la afirmativa los CC. diputados Aguilar Antonio, Aguilar Pablo Aguilera, Alarcón, Alcocer, Amezola, Anda de, Angeles Jenaro, Araujo Francisco, Arriaga, Avellaneda, Balderas Márquez, Baledón Gil, Barrera de la, Blancarte, Bravo Carlos, Breña, Cabrera, Camarena, Cancino, Cárdenas Emilio, Carrión, Castilleja, Castillo David, Castillo Garrido, Cervantes Olivera, Céspedes, Cordero, Cravioto Gallardo, Crespo, Chablé Díaz González, Díaz Infante, Esparza, Espinosa Bávara, Espinosa Luis, Espinosa y Elenes, Fernández Ledesma, Fernández Miguel B., Ferrel, Fierro, Flores, Franco, Frías Fuentes Barragán, Galindo Aurelio F., Galindo Carlos, Gámez Gustavo, Gámiz Luis G., García Adolfo G., García Antonio M., García Carlos, García José Guadalupe, García Norberto, García Pablo, García Ruiz, Garza, Gómez Cosme D., Gómez Gildardo, Gónzalez Marciano, Guerra, Guerrero, Gutiérrez Antonio, Gutiérrez Atanasio, Gutiérrez de Velasco, Hernández Eulogio, Hernández Jerónimo, Huerta, Lanz Galera, Lazcano Carrasco, León, Limón Uriarte, López Emiliano Z., Macías Juan E., Macías Rubalcaba, Madrid, Márquez Galindo, Martín del Campo, Martín del Río, Méndez Arturo, Méndez Benjamin, Mendez Fortunato, Mendez Pánfilo, Mendoza, Mercado, Morales Francisco, Morales Hesse, Sánchez, Mota, Navarro, Ocampo, O'Fárril, Ortega, Ortiz, Padrés, Parra, Pastrana Jaimes, Paz, Peña, Pérez Carbajal, Pérez Vargas, Pérez Vela, Ríos Rafael L. de los, Rodríguez Alfredo, Rodríguez de la Fuente, Rodríguez Matías, Rojas Rafael, Rosas, Ruiz H. José María, Ruiz Martínez, Saldaña, Sánchez Margarito, Sánchez Salazar, Segovia, Silva Jesús, Silva Pablo, Solórzano, Soto José M., Soto Peimbert, Soto Rosendo A., Sotres y Olaco, Suárez Enrique, Tamez, Tello, Trigo, Urdanivia, Uzeta, Vadillo, Valadez Ramírez, Valdés, Valverde, Valladares, Vásquez, Velásquez Juan, Verástegui Franco, Vilchis, Villaseñor Mejía, Villaseñor Salvador, Villela y Zavala Dionisio. Total. 140 votos.

Votaron por la negativa los CC. diputados Alejandre y Zincúnegui Tercero. Total, 2 votos.)

- El mismo C. secretario: Está a discusión la partida 5,250. que dice:

"Tesorería General de la Nación: 5,250. Un contador, $20.00 diarios,"

Esta partida fue separada por el C. Villaseñor Salvador.

El C. presidente: Tiene la palabra el C. Villaseñor.

El C. Villaseñor Salvador: Señores diputados: Tal vez la rapidez con que la comisión de presupuestos ha trabajado para rendir sus dictámenes, haya sido el motivo por el cual la partida, 5,250. que se refiere al contador de la Tesorería General de la Nación, no se considera en el aumento propuesto para los empleados de la sección de caja de esa Tesorería. Creo que el señor contador es muy justo que por ser el segundo de esa oficina tan importante, se le asigne un sueldo un poco mayor que el de $20.00, pues esta cantidad es también la que se asigna al cajero de la misma Tesorería, y siempre en toda oficina, el contador de ella es superior en categoría al cajero. Además, cuando el tesorero general de la Nación falta por enfermedad o cualquier otra causa, es substituído por el contador. Por lo tanto, estimo que no es mucho proponer un aumento al sueldo de éste, por ejemplo de $2.00 o $3.00. Así es que suplico a la H. Comisión que, si no tiene inconveniente, tome en cuenta mis razones, a fin de que se sirva solicitar permiso para retirar esta partida y la modifique en la forma que he expresado.

El C. presidente: Tiene la palabra la Comisión.

El C. Gutiérrez de Velasco: H. Asamblea: El contador de que se trata, en efecto tiene aquí un emolumento de $20.00 diarios, que es el mismo que la Comisión asigna para el cajero; y como el contador siempre está considerado de categoría superior a la del cajero, no sería por ningún concepto conveniente que quedara con el mismo sueldo. Por consiguiente, la Comisión sí cree de justicia que se aumente una pequeña cantidad al contador, tanto para significar el que es de superior graduación al cajero, cuanto para que pueda cubrir también la fianza, pues el contador tiene que dar una fianza, por la misma cantidad que la tiene el tesorero, mientras que la fianza que da el cajero es inferior a la que da el contador; por consiguiente, la Comisión no tiene inconveniente en asignarle una cantidad, por ejemplo, de $1.00 diario más.

- El mismo C. secretario: En vista de que la Comisión accede a los deseos del C. Villaseñor, se pregunta a la Asamblea, en votación económica, si permite a la mencionada Comisión retirar la partida a discusión. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. No hay mayoría de pie. No se retira.

En vista de no haber más oradores para discutir la partida 5,250, se pregunta a la Asamblea, en votación económica, si se considera suficientemente discutida. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Suficientemente discutida.

En votación económica se pregunta a la Asamblea si ha lugar a votar. Los que estén por la afirmativa sírvanse ponerse de pie.

Ha lugar a votar.

Por la afirmativa.

El C. secretario Castillo: Por la negativa. (Se recogió la votación.)

- El mismo C. secretario: Votaron por la negativa 6 ciudadanos diputados.

El C. secretario García Ruiz: Votaron por la afirmativa 140 ciudadanos diputados; en consecuencia, ha sido aprobada la partida 5,250.

(Votaron por la afirmativa los CC. diputados Aguilar Antonio, Aguilar Pablo, Aguilera, Alarcón, Alcocer, Altamirano, Amezola, Anda de, Angeles

Jenaro Araujo Francisco, Avellaneda, Balderas Márquez, Baledón Gil, Barragán, Barrera de la, Blancarte, Bravo Carlos, Bravo Lucas, Breña, Cabrera, Camarena, Cancino, Cárdenas Emilio, Carrión, Castilleja, Castillo David, Castillo Garrido, Castro Roberto, Cervantes Olivera, Céspedes, Colina de la, Cordero, Cravioto Gallardo, Crespo, Chablé, Díaz González, Díaz Infante, Espinoza Bávara, Espinosa Luis, Espinosa y Elenes., Fernández Ledesma, Fernández Miguel B., Fierro, Flores, Franco, Frías, Galindo Aurelio F., Gámiz Luis G., García Adolfo G., García Antonio M., García Carlos, García Emiliano C., García José Guadalupe, García Norberto, García Pablo, García Ruiz, Garza, Gómez Gildardo, González Marciano, Guerrero, Gutiérrez Antonio, Gutiérrez Atanacio, Gutiérrez de Velasco, Gutiérrez Orantes, Hernández Eulogio, Hernández Jerónimo, Jiménez, Lanz Galera, Lara, Lazcano Carrasco, León, Limón Uriarte, López Emiliano Z., Macías Juan E., Macías Rubalcaba, Madrid, Malpica, Márquez Galindo, Martín del Campo, Martínez del Río, Martínez Ignacio E., Méndez Arturo, Méndez Benjamín, Méndez Fortunato, Méndez Pánfilo, Mendoza, Mercado, Morales Francisco César, Morales Hesse, Morales Sánchez, Mota, Navarro, Ocampo, O'Fárril, Ortega, Padrés, Parra, Paz, Peña, Pérez Carbajal, Pérez Vargas, Pérez Vela, Ríos Landeros, Rivera Castillo, Rodríguez Alfredo, Rodríguez Herminio s., Rodríguez Matías, Rojas Rafael, Romero Cepeda, Rosas, Ruiz H. José María, Ruiz Martínez, Sánchez Margarito, Sánchez Salazar, Saucedo, Silva Jesús, Silva Pablo, Solórzano, Soto José M., Soto Peimbert, Sotres y Olaco, Suárez Enrique, Tamez, Tello, Toro, Urdanivia, Uzeta, Vadillo, Valadez Ramírez, Valdés, Valverde, Valladares, Vásquez, Velásquez Juan, Verástegui Franco, Vilchis, Villalobos, Villaseñor Mejía, Villela y Zavala Dionisio. Total, 140 votos.

Votaron por la negativa los CC. diputados Alejandre, Lomelí, Mancisidor, Ríos Rafael L. de los, Soto Rosendo A, Y Villaseñor Salvador. Total, 6 Votos.)

- El mismo C. secretario: A discusión la partida 5,261, separada por el C. Villaseñor Salvador. Dice así "5,261. Cinco oficiales primeros, a $8.00 diarios."

El C. presidente: Tiene la palabra el C. Villaseñor Salvador.

El C. Villaseñor Salvador: Señores diputados: Cualquiera que conozca de la parte administrativa del gobierno, nota desde luego, al recibir estos proyectos de presupuestos, un desacuerdo completo entre unos y otros ramos, por lo que respecta a sueldos; así, mientras en una Secretaría del Estado un jefe de sección gana $15.00 ó $20.00, en otra gana $10.00 ó 12.00. Es verdaderamente penoso que no se haya seguido una labor uniforme para formar los presupuestos y ojalá que sí se siga para lo sucesivo, ya que por hoy no sería posible, tanto más que quizá no llegue a realizarse la idea del señor Martínez del Río, de que no habrá Presupuesto para el año entrante; pero con el fin de que los presupuestos venideros tengan alguna uniformidad, desearía hacer una modesta observación, sintiendo que no se encuentre aquí en este momento el ciudadano ministro Cabrera, porque a nadie mejor que a el compete oírla, ya que, como jefe de las finanzas, es quien dirige la formación de los presupuestos. Estos, es obvio de tiempo y dificultades, podrían hacerse en esta forma: llamar "Direcciones" a todas aquellas dependencias de las secretarías de Estado que, por su independencia económica o por su independencia hasta de edificios, ameritan serlo, como, por ejemplo, la Dirección de Correos, la Dirección de Telégrafos, y así por el estilo, poniendo a cada uno de los directores el mismo sueldo; podría llamarse "Departamentos" únicamente a aquellas oficinas de carácter técnico donde forzosamente se requiere que esté al frente de ellas un profesionista, ya sea ingeniero, doctor o abogado; llamar únicamente "secciones" a las oficinas netamente de carácter administrativo del gobierno, por ejemplo: sección de Oficialía de Partes, sección de Archivo, sección de Administración, etcétera, y a todos los jefes de estas secciones asignarles un sueldo uniforme Despúes, el personal subsecuente, como oficiales primeros, segundos, terceros, etcétera, deberían tener el mismo sueldo, no que sucede que hay oficiales primeros en una Secretaría de Estado que disfrutan de $10.00, otros $8.50, otros $8.00, y así sucesivamente. En aquellas oficinas donde no se requieran los servicios de los oficiales primeros, sino oficiales segundos, terceros o cuartos; pero mi tendencia es que, en lo sucesivo, todos los empleados de igual categoría de las Secretarías de Estado, tengan los mismos sueldos. Los taquígrafos, por ejemplo, dividirlos en clases: taquígrafos de primera, de segunda, de tercera y de cuarta, con sueldos idénticos; lo mismo respecto de los mecanógrafos, para ir unificando el Presupuesto: mecanógrafos de primera, con $5.00; de segunda, con $4.00, y de tercera, con $3.00, por ejemplo.

He apartado únicamente esta partida 5,261, que se refiere a cinco oficiales primeros de la Tesorería General de la Nación, para hacer estas explicaciones, pues aquí precisamente estos señores oficiales primeros tienen $8.00, y en algunas partidas ya que habéis votado, los oficiales primeros de otras secretarías o de otras dependencias, tienen $8.50. Yo entiendo, señores, que debemos unificarlos, y más que por el aumento de $0.50 para estos cinco ciudadanos de la partida 5,261, he venido a esta tribuna por creer de justicia hacerlo así y además, por exponer aquí mi opinión encontrándose presente el señor secretario de las finanzas, por si cree conveniente tomarla en consideración para el día de mañana, en que tal vez pudiera ser de utilidad.

El C. Gutiérrez de Velasco: Pido la palabra.

- El C. presidente Tiene la palabra la Comisión.

El C. Gutiérrez de Velasco: Honorable Asamblea: La partida 5,261, separada por el compañero Villaseñor, asigna un sueldo de $8.00 diarios a los oficiales primeros de la sección de la Tesorería, que son cinco. En las demás secretarías, todos estos oficiales primeros tienen el mismo sueldo; pero hay que tener en cuenta que los oficiales de la Tesorería tienen que dar fianza cuya prima al año les importa no menos de $180.00 a $200.00; por consiguiente, sí cree la Comisión conveniente que se les

suba aunque sea esa corta cantidad de $0.50. Por esa misma razón la Comisión pide permiso a la Asamblea para retirar esta partida y asignar los $0.50 a que se refiere el ". Villaseñor.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano secretario de Hacienda.

El C. secretario de Hacienda y Crédito Público: He escuchado las observaciones hechas por el ciudadano Diputado Villaseñor, y la opinión expresada por la Comisión, de parte de la Secretaría de Hacienda no sólo no había objeción a que se elevara el sueldo de estos empleados, sino que existe otra razón más, que debo expresar: en las secciones de la Tesorería de que se trata, no existe el puesto de subjefe; de manera que es mucha la diferencia de sueldo entre el jefe de sección que gana $15.00 y los oficiales primeros, quienes desempeñan ocasionalmente el puesto del jefe de sección, y que tienen asignados $8.00. El sueldo que propiamente correspondería a empleados de esta categoría, a mi parecer, sería de $10.00. De suerte que, por parte de la Secretaria de Hacienda, no existe inconveniente para que se le permita a la Comisión retirar esta partida y presentarla modificada.

El C. secretario García Ruiz: En votación económica se consulta a la Asamblea si permite a la Comisión retirar la partida 5261. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Sí se permite.

- El mismo C. secretario: A discusión la partida 5272, separada por el C. Siurob. Dice así: "Tesorería General de la Nación. Gastos diversos. 5272. Para adquisición de muebles, máquinas de escribir, útiles de escritorio, gastos menores y de oficio, a $2,000.00 mensuales, asignación anual, $24.000.00"

El C. presidente: Tiene la palabra el C. Siurob. (Voces: ¡No está!)

- El mismo C. secretario: No encontrándose en el salón el C. Siurob, se reserva esta partida para su votación.

- El mismo C. secretario: Estando en las mismas condiciones, es decir, separadas por el C. Siurob las partidas 5281 y 5282, se reservan para su votación.

- El mismo C. secretario: La Comisión presenta la partida 5261 modificada, a decir: "Cinco oficiales primeros, a $10.00 diarios", en lugar de $8.00. Esta a discusión.

Los ciudadanos diputados que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse.

No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para su votación. - El mismo C. secretario: Se va a recoger la votación nominal de las partidas 5261, 5272, 5281 y 5282.

Por la afirmativa.

El C. secretario castillo: Por la negativa. (Se procedió a recoger la votación.)

- El mismo C. secretario: Votaron por la negativa 2 ciudadanos diputados.

El C. secretario García Ruiz: Votaron por la afirmativa 129 ciudadanos diputados. En consecuencia, han sido aprobadas las partidas objetadas de la sección XXX.

(Votaron por la afirmativa los CC. diputados Aguilar Pablo, Aguilera, Alarcón, Alcocer, Amezola, Anda de, Andrade, Angeles Jenaro, Avellaneda, Balderas Márquez Baledón Gil, Bandera y Mata, Blancarte, Bravo Carlos, Bravo Lucas, Breña, Camera, Cancino, Cárdenas Emilio, Carrión, Castillo David, Castro Roberto, Cervantes Olivera, Céspedes Eliseo, Colina de la, Cravioto Gallardo, Crespo, Chablé, Díaz Infante, Esparza, Espinoza Bávara, Fernández Miguel B., Ferrel, Flores, Franco, Frías, Fuentes Barragán, Gaitán, Galindo Aurelio F., Gámez Gustavo, Gámiz Luis G., García Adolfo G., García Antonio M., García Carlos, García Emiliano C., García José Guadalupe, García Norberto, García Pablo, García Ruiz, Garza, Gómez Gildardo, González Marciano, Guerrero, Gutiérrez Antonio, Gutiérrez Atanasio, Gutiérrez de Velasco, Hernández Eulogio, Hernández Jerónimo, Huerta, Jiménez, Lara, Lazcano Carrasco, Liekens, Limón Uriarte, Lomelí, López Emiliano Z., Macías Rubalcaba, Madrid, Malpica, Mancisidor, Martínez del Río, Méndez Arturo, Méndez Benjamín, Méndez Fortunato, Méndez Pánfilo, Mendoza , Meza, Morales Francisco César, Morales Hesse, Morales Sánchez, Navarro Ocampo, O'Farrill, Ortega, Padrés, Parra, Pastor, Peña, Pérez Carbajal, Pérez Vargas, Pérez Vela, Quiroga, Ríos Landeros, Ríos Rafael l., de los, Rivera castillo, Rodríguez Herminio S., Rodríguez, Sabino, Rojas Rafael, Romero Cepeda, Rosas, Ruiz H. José María, Ruiz Martínez Sánchez Margarito, Saucedo, Silva Jesús, Silva Pablo, Sólorzano, Soto Peimbert, Soto Rosendo A., Sotres y Olaco, Tamez, Tello, Toro, Trigo, Uzeta, Valadez Ramírez, Valdés Valverde, Vásquez Genaro V., Velásquez Juan, Verástegui Franco, Vilchis, Villalobos, Villaseñor Mejía, Villaseñor Salvador y Villela. Total, 129 votos.

Votaron por la negativa los CC. diputados Espinoza Luis y Sánchez Salazar, Total, 2 Votos.)

- El mismo C. secretario: A discusión las secciones XXXI Y XXXII, que comprenden respectivamente las partidas 5283 a 5395 y 5306 a 5370.

Los ciudadanos que deseen apartar alguna de dichas partidas, sírvase pasar a inscribirse.

El C. secretario Aguilar: Fueron separadas las partidas 5,305, 5,367, 5,368 y 5,370 por el C. Siurob.

Tiene la palabra en contra de la partida 5,305 el C. Siurob. (Voces: ¡No está!) No encontrándose en el salón y encontrándose las demás partidas en el mismo caso que ésta, se reservan para su votación.

Se va a proceder a recoger la votación de la sección XXXI y de la XXXII del ramo sexto.

El C. Morales Francisco César: Por la negativa.

El C. secretario Castillo: Por la afirmativa. (Se procedió a recoger la votación.)

El C. Morales Francisco César: Votaron por la negativa 2 ciudadanos diputados.

- El mismo C. secretario: Votaron por la afirmativa 128 ciudadanos diputados; en consecuencia, han sido aprobadas las secciones XXXI y XXXII del Presupuesto de Egresos de la Secretaría de Hacienda.

(Votaron por la afirmativa los CC. diputados Aguilar Pablo, Alarcón, Alcocer, Alvarez del Castillo, Amezola, Anda de, Angeles Jenaro, Araujo Francisco, Arrioja Isunza, Avellaneda, Balderas Márquez, Baledón Gil, Bandera y Mata, Barrera de la, Blancarte, Bravo Carlos, Bravo Lucas, Breña, Cabrera, Camarena, Cárdenas Emilio, Carrión Castillo David, Castro Roberto, Cervantes Olivera, Céspedes, Colina de la, Cravioto Gallardo, Crespo, Chablé, Díaz Infante, Esparza, Espinoza Bávara, Fernández Miguel B., Ferrel, Flores, Franco, Frías, Gaitán, Galindo Aurelio F., Galindo Carlos, Gámez Gustavo, Gámiz Luis G., García Adolfo G., García Antonio M., García Carlos., García Emiliano C., García José Guadalupe, García Norberto. García Pablo, García Ruiz, Garza, Gil, Gómez Cosme D., Gómez Gildardo, González Marciano, Guerrero, Gutiérrez Antonio, Gutiérrez Atanasio, Gutiérrez de Velasco, Hernández Eulogio, Hernández Jerónimo, Huerta, Lazcano Carrasco, León, Limón Uriarte, López Emiliano Z., Macías Juan E., Macías Rubalcaba, Madrid, Mancisidor, Márquez Galindo, Martínez del Río, Martínez Ignacio E., Méndez Arturo, Méndez Benjamin, Méndez Fortunato, Méndez Pánfilo, Mendoza, Meza, Morales Francisco César, Morales Hesse, Morales Sánchez Mota, Navarro, Ocampo, O'Farrill, Ortega, Padrés, Parra, Pastor, Pérez Carbajal, Pérez Vargas, Pérez Vela, Ríos Landeros, Ríos Rafael L. de los, Rodríguez Matías, Rodríguez Sabino, Rojas Rafael, Romero Cepeda, Rosas, Ruiz H. José María, Ruiz Martínez, Sánchez Margarito, Sánchez Salazar, Saucedo, Silva Jesús, Silva Pablo, Sólorzano, Soto José M., Soto Peimbert, Sotres y Olaco, Tamez, Tello, Toro, Uzeta, Valadez Ramírez, Valdés, Valverde, Vásquez, Velásquez Juan, Verástegui Franco, Vilchis, Villalobos, Villaseñor Mejía, Villaseñor Salvador, Villela y Zavala Dionisio. Total, 128 Votos. Votaron por la negativa los CC. diputados Alejandre y Espinosa Luis. Total, 2 votos.)

- El mismo C. secretario: Están a discusión las secciones XXXIII, XXXIV, XXXV, XXXVI, XXXVII, XXXVIII, XXXIX, que comprenden, respectivamente, las siguientes partidas: 5,371, a 5,460, 5,461, á 5,491, 5,492 á 5,525, 5,526, á 5,541, 5,542 a 5,559, 5,560 a 5,574 y 5,575 a 5,582.

Los ciudadanos que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse.

Han sido apartadas las secciones íntegras XXXV y XXXVI por el C. Alejandre Pascual. Si algún otro ciudadano diputado desea apartar algunas, sírvase pasar a inscribirse.

Ha sido apartada por el C. Villaseñor Mejía la partida 5,561, de la sección XXXVIII.

En vista de que no han sido objetadas las secciones XXXIII y XXXIV por ningún ciudadano diputado, se procede desde luego a su votación nominal.

El C. secretario García Ruiz: Por la negativa.

El C. Flores Manuel H: Por la afirmativa. (Se recogió la votación.)

- El mismo C. secretario: Votaron por la negativa 2 ciudadanos diputados.

El C. Flores Manuel H: Votaron por la afirmativa 137 ciudadanos diputados; en consecuencia, han sido aprobadas las secciones XXXIII y XXXIV del ramo de Hacienda.

(Votaron por la afirmativa los CC. diputados Aguilar Pablo, Aguilera, Aguirre León, Alarcón, Alcocer, Alvarez del Castillo, Amezola, Anda de, Andrade, Angeles Jenaro, Araujo Francisco, Arriaga, Avellaneda, Balderas Márquez, Baledón Gil, Bandera y Mata, Barrera de la, Blancarte, Bouquet, Bravo Carlos, Breña, Cabrera, Camarena, Cárdenas Emilio, Carriedo Méndez, Carrión, Castilleja, Castillo David, Castro Roberto, Cervantes Olivera, Céspedes, Colina de la, Cornejo, Cravioto Gallardo, Crespo, Chablé, Díaz Infante, Esparza, Espinoza Bávara, Ferrel, Flores, Franco, Frías, Gaitán, Galindo Aurelio F., Galindo Carlos, Gámez Gustavo, Gámiz Luis G., García Adolfo G., García Antonio M., García Carlos, García Emiliano C., García José Guadalupe, García Norberto, García Norberto, García Pablo, García Ruiz, Garza, Gómez Cosme D., Gómez Gildardo, González Jesús N., González Marciano, Guerrero, Gutiérrez Antonio, Gutiérrez Atanasio, Gutiérrez de Velasco, Hernández Eulogio, Hernández Jerónimo, Huerta, Lanz Galera, Lara, Lazcano Carrasco, León, Liekens, Limón Uriarte, Lomelí, López Emiliano Z., Macías Juan E., Macías Rubalcaba, Madrid, Mancisidor, Márquez Galindo, Martínez del Río, Martínez Ignacio E., Méndez Benjamín, Méndez Fortunato, Mendoza, Mercado, Meza, Morales Francisco César, Morales Sánchez, Mota, Navarro, Ocampo, O'Farrill, Olivé, Ortega, Padrés, Parra, Pastor, Pérez Carbajal, Pérez Vargas, Pérez Vela, Quiroga, Ríos Landeros, Ríos Rafael L. de los Rivera Castillo, Rodríguez Matías, Rodríguez Sabino, Rojas Rafael, Romero Cepeda, Ruiz H. José María, Ruiz Martínez, Sánchez Margarito, Sánchez Salazar, Saucedo, Silva Jesús, Silva Pablo, Sólorzano, Soto José M., Soto Peimbert, Sotres y Olaco, Tamez, Tello, Toro, Uzeta, Valadez Ramírez, Valdés, Valverde, Vásquez, Velásquez Juan, Verástegui Franco, Vilchis, Villalobos, Villaseñor Mejia, Villaseñor Salvador y Villela. Total, 137 votos.

Votaron por la negativa los CC. diputados Alejandre y Espinosa Luis. Total 2 votos.)

El C. García Ruiz: Está a discusión la sección XXXV, separada en su totalidad por el C. Alejandre. Esta sección consta de las partidas 5,492 a 5,525.

El C. presidente: Tiene la palabra el C. Alejandre.

El C. Alejandre: Señores diputados: Una de las razones que tuve yo para no firmar este dictamen, siendo miembro de la Comisión, es precisamente porque no se hizo ningún estudio, ni tuvimos alguna reunión donde pudiéramos hacer algunas objeciones de peso. He estado algunas veces en la Secretaría de Industria y Comercio, y esta Secretaría sostiene la misma tesis que yo sostengo: que toda esta dependencia es enteramente innecesaria, que siendo dependencias del Ejecutivo, Tanto la Secretaría de Hacienda como la Secretaría de Industria y Comercio, es ilógico que existan dos oficinas para dar los mismos informes. La Secretaría de Industria

y Comercio tiene a su cargo todas estas oficinas y hay allí empleados técnicos, hay ingenieros que tienen conocimiento mucho más amplios que los que tienen los empleados de la Secretaría de Hacienda.

La Secretaría de Industria y Comercio sostiene que únicamente dos o tres inspectores fiscales que dependieran de la misma Secretaría de Industria y Comercio serán suficientes para rendirles todos los informes que necesitara la Secretaría de Hacienda. Por otra parte, algunas veces ciertos negocios o asuntos que tiene la secretaría de Industria y Comercio no los puede cumplir, porque los agentes fiscales que únicamente obedecen instrucciones de la Secretaría de Hacienda, muchas veces están en pugna, y ni la Secretaría de Hacienda ni la Secretaría de Industria y Comercio reciben estos informes verídicos, exactos, sobre algún asunto de petróleo que se relaciona con estos lugares.

Aquí tienen ustedes una inspección en Tampico que depende de la Secretaría de Hacienda, en el ramo sexto, y en Industria y Comercio tienen ustedes otra sección que también se encuentra en el mismo lugar. Tienen ustedes aquí en Hacienda otro departamento que se encuentra en Tuxpan y acá otro que se encuentra también en Tuxpan, y en cambio ahí en Minatitlán los asuntos que se relacionan con Hacienda los hacen en Coatzacoalcos; esto último sería únicamente cuestión de que estos empleados dependientes de la Secretaría de Industria y Comercio fueran a Minatitlán o a Coatzacualcos o a los lugares donde tiene que hacer estas labores la Secretaría de Hacienda, y entonces tendríamos una economía bastante importante. Yo creo que no se necesita ningún otro argumento; en la conciencia de ustedes, de algunos que aunque no hayan sido oficinistas tengan un criterio aunque sea estrecho, está el comprender la importancia y lo beneficioso que sería suprimir uno de estos departamentos que existen en la Secretaría de Hacienda y en la Secretaría de Industria y Comercio. Si las dos son dependencias del Ejecutivo. Es ilógico que siendo dos oficinas dependientes del mismo amo, tengan distinto personal. Yo creo, señores diputados, que las objeciones que yo Hago son de importancia; puedo asegurarles que ya en otra ocasión he tratado esto, pero como siempre prevalece la opinión del señor secretario de Hacienda, resulta que la Secretaría de Comercio no puede llevar a cabo esto que, en mi concepto, es de mucha importancia y podría hacerse alguna económia en los presupuestos. Por consiguiente, yo espero que ustedes, pensando y viendo cuerdamente en este asunto lo rechacen, para que únicamente agreguemos dos o tres empleados que siendo fiscales dependan de la Secretaría de Industria y Comercio, los cuales mandarán todos los informes que necesita la Secretaría de Hacienda y que serán suficientes haciendo con esto una economía de mucha importancia en los presupuestos del Erario.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Secretario de Hacienda.

El C. secretario de Hacienda y Crédito Público: Señores diputados: Mucho me temo que no Hayáis fijado bien la atención en la objeción expresada por el C. Alejandre. (Voces: ¡No se oye!)

Decía yo que temo mucho que la Cámara no haya fijado su atención en las objeciones expresadas por el diputado Alejandre. Estas objeciones son en substancia puesto que hay determinados empleados dependientes de la Secretaría de Industria y Comercio que tienen funciones relacionadas con la producción del petróleo, sería lógico que Hacienda no tuviera empleados relacionados con la percepción fiscal del impuesto, sino que las dos cosas se unieran y, por consiguiente se suprima toda la parte relativa a los gastos de recaudación del impuesto del petróleo. La objeción parece de importancia; sólo me permito por vía de información a la Cámara, expresar que las funciones de los inspectores fiscales del petróleo son, en primer lugar, totalmente distintas de las funciones de los inspectores técnicos del petróleo, supuesto que los inspectores encargados por la Secretaría de Industria y Comercio de vigilancia de producción del petróleo, tienen sus funciones principalmente en los terrenos petrolíferos, pozos en perforación, construcción de oleoductos y, en general, todo aquello que se refiere a la vigilancia técnica de la producción del petróleo dentro de terrenos petrolíferos, apertura de pozos, construcción de oleoductos, tanques, etc. Las funciones de los agentes fiscales de Hacienda consisten en vigilar la salida y embarque del petróleo; por consiguiente, cuál es el petróleo que se ha producido con destino a exportación, qué cantidad se ha cargado y, por consiguiente, cuál es deben ser, qué densidad, qué temperatura, etc., tomar todas las medidas, allegar todos los datos suficientes para saber qué cantidad y de qué calidad es el petróleo que se ha sacado y, por consiguiente, qué tanto es lo que debe ser de impuestos. Podría no venderse un solo barril de petróleo y, sin embargo, las funciones de inspector de Industria y Comercio tendrían que estar enteramente llenas y los inspectores tendrían que estar enteramente ocupados. Si por un momento suponemos que ya no se perforan nuevos pozos, ni se hacen nuevos denuncios, podrían suprimirse todos los inspectores de Industria y Comercio y, sin embargo, estarían muy ocupados los inspectores de Hacienda. Los inspectores de Hacienda tienen por función medir, tomar temperaturas, calcular volúmenes, dar salida a los barcos y, en general, vigilar de todo a todo la salida del petróleo; puede haber, por ejemplo, una compañía que tenga terrenos petrolíferos, pozos en perforación, o pozos perforados y que, sin embargo, no esté vendiendo petróleo; esa compañía nada tendría que ver con los agentes fiscales de Hacienda. Así pues, las funciones de esos empleados son totalmente distintas no tienen ninguna relación; pero hay un argumento que debo también contestar; se me dirá: podrían los inspectores técnicos de Industria encargarse también de la fiscalización. Técnicamente diría yo que tampoco es posible, porque las funciones de los inspectores están en el terreno, en los pozos, en los oleoductos, mientras que las funciones fiscales están en el tanque de depósito y en las estaciones de bombeo, porque es indispensable que allí se ejerza la vigilancia. Más aún: contestando a las objeciones del señor diputado Alejandre, le manifiesto que desde hace cerca de veinte siglos es ya un axioma que el que sirve a dos amos con alguno

queda mal, y ya está sabido que funcionarios o empleados que dependen de dos secretarías generalmente no cumplen con ninguna de las dos; que es necesario, por consiguiente, especializar las funciones y hacer depender a los inspectores de cada Secretaría de donde tengan que desempeñar sus funciones. Si el señor diputado Alejandre y los señores diputados leen la sección LXXXI del Presupuesto de Egresos del ramo décimo de Industria y Comercio, verán que la misma constitución del Departamento de Petróleo está indicando que se trata de la vigilancia de los productos petrolíferos y de los pozos y no propiamente de la producción y embarque del combustible; que es cierto que hay agencias en Tampico, en Tuxpan y en Minatitlán, como hay agencias fiscales en Tampico, en Tuxpan y en Minatitlán, es la verdad, supuesto que son las tres regiones en donde se produce y al mismo tiempo en donde se exporta el petróleo; pero la coincidencia de lugares no significa que sea la coincidencia de funciones.

Si por otra parte, nos fijamos que el ramo que se encuentra a discusión, es decir, la sección XXXV se refiere a los inspectores fiscales de petróleo, se verá que el total de los gastos devengados es comparativamente insignificante en comparación de los ingresos obtenidos. De todos los impuestos que se cobran por la Federación es probablemente el impuesto del petróleo, el más barato en su recaudación. Recientemente, como dije en otra ocasión a la Cámara, hemos transformado el sistema suprimiendo el empleo de timbres y en la actualidad la comprobación del petróleo, su calidad, su cantidad, densidad, etc., y el cálculo, por consiguiente, de lo que debe causar de impuestos, es hecho todo exclusivamente por este cuerpo de empleados que se llaman inspectores fiscales del petróleo. Para un ingreso de, aproximadamente, $14.000,000.00 en el año, que obtuvimos el petróleo, el gasto de recaudación de un poco más de $200,000.00, es bastante insignificante.

Así pues, resumiendo la contestación a las argumentaciones del diputado Alejandre, manifiesto que siendo totalmente distintas las funciones de los inspectores de la Secretaría de Industria y Comercio de las funciones de los inspectores fiscales de Hacienda, se hace necesario encomendar a distinto personal, pues no debe encomendarse a la misma Secretaría por razones de disciplina y de vigilancia. Así como ha dicho el C. Alejandre que en otra ocasión debido a falta de acuerdo entre una y otra Secretaría, no ha podido lograrse esta unión, le manifiesto que no es debido a una falta de acuerdo, sino que es convicción de la Secretaría de Industria y Comercio de que ella no es llamada a desempeñar estas funciones y que, por consiguiente, ella no podrá vigilar y no sería posible que un mismo hombre, dependiendo al mismo tiempo de la Secretaría de Industria y Comercio de la Secretaría de Hacienda, acate órdenes procedentes de distintas oficinas. Así pues, tengo el honor de informar a la Cámara sobre estos puntos para que se juzgue que se trata de algo que no por descuido subsiste ni por falta de economía, sino que por necesidad tiene que subsistir en esta forma.

El C. presidente: Tiene la palabra el C. Alejandre.

El C. Alejandre: Señores diputados: Últimamente me encontré un librito y en él venían unas declaraciones de un señor Robertson que se encontraba en México con el objeto de procurar que se hiciera efectiva, y que se pagara la deuda inglesa a algunos bonos que se habían emitido aquí, y según declaraciones del ministro Arrangoiz, de aquella época sostenía que era imposible pagarse los réditos de la deuda inglesa porque el Presupuesto de Ingresos era de $7.000,000.00 y el Presupuesto de Egresos de $12.000,000.00; por consiguiente, desde el año de 1850, hasta la fecha, siempre nos encontramos con el mismo dilema ¿Cómo es posible - y el señor ministro de hacienda lo sabe perfectamente - que un empleado, dándole Ordenes terminantes y expresas, no pueda rendir fácilmente un informe? ¿Esto no se podría hacer? Si desde aquel entonces probablemente se hubiera fijado la Secretaría de Hacienda, y paulatinamente hubiera venido haciendo algunas economías, es indudablemente que ya hubiéramos llegado a nivelar el presupuesto, pero en estas condiciones y argumentando de esta manera, yo creo que nunca se van a poder nivelar los presupuestos.

Me permito hacer una interpelación al señor García Ruiz, que por muchos años ha trabajado en el ferrocarril, para que informe, aquí a la Asamblea, si no es verdad que algunos departamentos que trabajan siempre en la línea, algunas veces dirigen ciertos reportes a determinado número de jefes y todos tienen instrucciones de obedecer a aquellos jefes. Suplico atentamente al señor García Ruiz tenga la bondad de informar esto. (Murmullos.)

El C. presidente: Tiene la palabra el C. García Ruiz.

El C. García Ruiz: Es verdad lo que dice el C. Alejandre.

El C. Alejandre, continuando: En el ferrocarril existe el superintendente de transportes, superintendente de división y algunos otros jefes de departamento, y hay algunos empleados que tienen la obligación de mandar cinco o seis reportes, porque son tantos reportes como se necesitan para las distintas oficinas. Si se quiere se pudiera hacer lo mismo. Yo creo que esto de sostener que es imposible porque dependiendo los agentes de la Secretaría de Industria y Comercio no obedecerían a Hacienda, es inaceptable. Además, he tomado algunos informes de la Secretaría de Hacienda y me han dicho que los agentes fiscales dependieran de Industria y Comercio, esto aun facilitará más las labores; por otra parte, los agentes fiscales de hacienda que, como acaba de decir el señor Cabrera, algunas veces deben ser técnicos, porque tienen que conocer la densidad del petróleo, y por otras circunstancias, no tienen esos conocimientos tan amplios como los tienen los empleados de Industria y Comercio, quienes por regla general sí tienen amplios conocimientos sobre el ramo.

Únicamente vine a hacer estas aclaraciones para que quedara, si no en la conciencia de los diputados todos, cuando menos en algunos de ellos, lo que propongo es lógico y justo y que debía aceptarse, sabiendo que pocas veces se puede hacer algo efectivo, ya que cuando se mandan los presupuestos quince o veinte días antes de terminar el

periodo, creo que es lógico tratar algo referente a esto.

El C. secretario García Ruiz: No habiendo más oradores inscriptos, se pregunta a la Asamblea si considera suficientemente discutida esta sección. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Se considera suficientemente discutida. En la misma forma de votación, se pregunta si ha lugar a votarla. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Ha lugar a votar.

Se procede a la votación nominal.

Por la negativa.

El C. Flores Manuel: Por la afirmativa. (Se procedió a recoger la Votación.)

- El mismo C. secretario: Votó por la negativa 1 ciudadano diputado.

El C. Flores Manuel H: Votaron por la afirmativa 125 ciudadanos diputados; en consecuencia, ha sido aprobada la sección XXXV del Presupuesto de Hacienda. (Votaron por la afirmativa los siguientes CC. diputados: Aguilar Antonio, Aguilera, Aguirre León, Alvarez del Castillo, Anda de, Andrade, Angeles Jenaro, Araujo Francisco, Arriaga, Arrioja, Isunza, Avellaneda, Balderas Márquez, Baledón Gil, Bandera y Mata, Barragán, Blancarte, Bouquet, Bravo Carlos, Bravo Lucas, Breña, Cabrera, Camarena, Cárdenas Emilio, Carriedo Méndez, Castillo, Castillo Garrido, Castro Roberto, Cervantes Olivera, Céspedes, Colina de la, Cornejo, Crespo, Chablé, Díaz Infante, Esparza, Espinosa Bávara, Fernández, Ferrel, Flores, Franco, Frías, Gaitán, Galindo Aurelio F., Galindo Carlos, Gámiz, García Adolfo G., García Antonio M., García Carlos, José Guadalupe, García Norberto, García Pablo, García Ruiz, Garza, Gil, Gómez Gildardo, González Jesús., González Marciano, Guerrero, Gutiérrez Antonio, Gutiérrez Atanasio, Gutiérrez de Velasco, Hernández Eulogio, Hernández Jerónimo, Huerta, Lanz Galera, Lazcano Carrasco, León, Liekens, Limón Uriarte, Lomelí, López, Macías Rubalcaba, Madrid, Mancisidor, Márquez Galindo, Martínez, Méndez Arturo, Benjamin, Méndez, Mendoza, Mercado, Morales, Morales Hesse, Morales Sánchez, Mota, Navarro, Ocampo, O'Fárrill, Ortega, Ortiz, Padrés, Pastor, Peña, Pérez Vargas, Pérez Vela, Quiroga, Ríos Landeros, Rodríguez Herminio S., Rodríguez Matías, Sabino, Rojas Rafael, Romero Cepeda, Ruiz H. José María, Ruiz Martín, Sánchez Margarito, Schulz y Alvarez, Silva Jesús, Sólorzano, Soto Peimbert, Soto Rosendo A., Sotres y Olaco, Tamez, Tello, Uzeta, Valadez Ramírez, Valdés, Valverde, Velásquez, Verástegui Franco, Vilchis, Villalobos, Villaseñor, Villela y Zavala Dionisio. Total, 125 votos.

Votó por la negativa el C. diputado Alejandre. Total, 1 Voto.)

- El mismo C. diputado: A discusión la sección XXXVI, separada en su totalidad por el C. Alejandre y que comprende las partidas 5526 a 5541.

El C. presidente: Tiene la palabra el C. Alejandre.

El C. Alejandre: Señores diputados: Quiero hacer un último esfuerzo para ver si llega al convencimiento de ustedes la necesidad que hay de suprimir la Agencia Financiera en Nueva York (Voces: ¡No! ¡No!) La naturaleza no da saltos, hay cosas que se hacen con decretos y hay cosas que se hacen con dinero. Tengan ustedes la seguridad de que esta agencia solamente existe para ciertas canonjías especiales con quienes se tiene compromiso. La Agencia Financiera en Nueva York no sirve para nada. Lo digo porque yo he estado allá y lo he visto palpablemente y yo sé en la forma en que funciona aquella oficina y sé que simplemente un aparato decorativo para que se diga que México tiene agencia financiera. Hay casas muy importantes en Nueva York, de mexicanos, y de extranjeros, que desempeñarían este papel más airosamente, que harían un papel más efectivo y tendríamos una representación más digna. Hay muchos individuos que no conocen de finanzas ni de nada, ni siquiera están relacionados con el comercio de Nueva York y van de agentes financieros; son hombres desconocidos, y de México los mandan de agentes financieros a un país extraño donde se necesitan amplísimos conocimientos, donde se necesita conocer el mercado, y siempre hace un papel muy triste el representante de México que se manda a un país donde él no conoce nada. Yo aseguro a ustedes que si desechan en su totalidad estos renglones y únicamente se aprueba un gasto de unos 20,000 dólares para pensionar una casa de Nueva York, sea mexicana o alguna otra, desempeñará con eficacia su cometido y tendremos una representación más digna; algún asunto que se trate será un verdadero financiero el que lo resuelva, será un experto, un conocedor de la plaza y los datos que reciba el Gobierno serán efectivos. ¿Quién no recuerda cuando se encontraba de agente financiero en Nueva York, en la época del señor Madero, el señor don Heriberto Barrón? (Siseos) ¿Ustedes creen que tienen algunos conocimientos ese caballero? Pues si ustedes estudian el caso, verán que ésta es la gente que va, con quienes el gobierno tiene compromisos y que de alguna manera los quitan de acá para que al fin nos pongan en ridículo en otro país. Yo, por consiguiente, creo y tengo la firme convicción, la convicción íntima porque lo sé, porque lo he palpado, que si se pensiona a alguna casa extranjera o nacional - hay casas de importancia en Nueva York - y se le da una subvención de unos 20,000 dólares, desempeñará con toda eficacia, Hará un papel muy importante y realmente servirá, cosa que en la actualidad, en la forma y en la manera en que está instituida, no sirve ni desempeña las funciones para que ha sido creada.

El C. presidente: Tiene la palabra en pro el C. Soto Peimbert.

El C. Soto Peimbert: Señores compañeros: Toda la peroración del ciudadano diputado Pascual Alejandre no ha venido a demostrar sino que los agentes financieros sucesivos que ha tenido México en Nueva York, no son los adecuados para desempeñar ese cargo; pero desde el momento en que él ha aseverado desde esta tribuna que si las funciones de agente financiero se confiriesen a comerciantes mexicanos radicados en Nueva York, saldrían airosos de su cometido, significa el hecho de que él

reconoce la necesidad de la agencia financiera. En consecuencia, si el propio impugnador de la partida dedicada al sostenimiento de la Agencia Financiera en Nueva York reconoce la necesidad de que ella exista, nada ha dicho para que esta partida sea suprimida del Presupuesto; lo único que ha hecho es impugnar a quienes han desempeñado ese cargo. No hay, pues, para qué hacer un debate sobre este asunto, dado que el propio impugnador reconoce la necesidad de esa oficina.

El C. presidente: Tiene la palabra para informar el ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público.

El C. secretario de Hacienda y Crédito Público: Señores diputados: La Secretaría de Hacienda ha venido dispuesta durante toda esta discusión, más que a todo, a proporcionar todos los datos y todas las informaciones para que puedan entenderse las razones de la mayor parte de las partidas, y muy especialmente las objetadas. No importa que una objeción, como la presentada por el señor diputado Alejandre no sea escuchada con la suficiente atención; tiene interés la Secretaría de Hacienda en que se conozcan especialmente los motivos de las partidas presentadas y, a ese efecto, acoge con todo gusto la oportunidad que me presenta el diputado Alejandre, de hacer explicaciones.

La Secretaría de Hacienda necesita una agencia financiera en Nueva York, por dos motivos: Como subtesorería recaudadora y distribuidora de fondos y como centro propiamente financiero para guardar lo que yo llamaría el contacto financiero con lo que en este momento es el verdadero centro financiero del mundo: Nueva York. Como subtesorería, la Secretaría de Hacienda maneja por conducto de la Agencia Financiera de México en Nueva York, toda la suma de ingresos, no solamente en lo que necesitamos pagar en el extranjero, sino en lo que se nos paga en giros o en moneda extranjera y que, por consiguiente, necesitamos situar allá. El gobierno, desde las épocas anteriores, y especialmente de 1914 para acá, ha venido teniendo necesidad de mantener siempre en Nueva York una agencia, que yo llamaría subtesorería recaudadora y pagadora. Sabe el señor diputado Alejandre que una gran proporción, en muchos casos hasta el 75 y 80 por ciento de los ingresos aduanales de ciertos puertos y de ciertas aduanas fronterizas, se cobran en giros sobre Nueva York, que es necesario concentrar y hacer efectivos endosándolos a nuestro agente financiero, y sabe el señor diputado Alejandre que una gran cantidad de gastos, sobre todo por compras de artículos que nos son indispensables, hemos tenido que hacerlos por conducto siempre de nuestra agencia financiera. Es cierto que cualquier comerciante radicado en Estados Unidos no solamente haría este servicio por 20,000 ó 30,000 dólares, sino que nos pagaría con todo gusto 500,000 dólares por el derecho de llamarse el agente financiero de México. Es verdad; pero también es verdad que no serían los intereses del país y especialmente los intereses financieros de México, los que tendría por delante y a la vista cualquiera a quien encargáramos de nuestras finanzas. Es cierto que en México hubo una época en que las jefaturas de Hacienda eran enteramente inútiles, porque el "Banco Nacional" hacía el servicio de concentración de fondos y, por consiguiente, había una institución que tenía, además del derecho de ganar un tanto por ciento en las situaciones, el privilegio de ser el representante del Gobierno con todas las ventajas que ese privilegio traía; pero no todos los puestos que pueden desempeñarse, así, gratuitamente y hasta pagando por desempeñarlos, deben encomendarse a cualquiera persona.

No voy a hacer la defensa del señor doctor Caturegli, quien ha estado encargado durante bastante tiempo de la Agencia Financiera de México; pero en honor de la verdad, es una persona recta, honorable, estrictamente honrada en el manejo de fondos y de cuya gestión no nos mostramos descontentos. Podrá no haber sido, si quiere el señor Alejandre, el agente financiero de grandes vuelos que requiriéramos para llevar a cabo determinada política financiera iniciada en México; pero también es cierto que las condiciones de guerra en que se encontró el mundo, no nos han permitido desarrollar todo el programa que debiera haber quedado a cargo de la Agencia Financiera de México en Nueva York. En tiempos del general Díaz y en tiempos del señor Madero, se continuó la persistencia de la Agencia Financiera de México en Londres, oficina que, por lo vasto de sus atribuciones, era un verdadero Ministro de Hacienda del exterior. La Agencia Financiera de México en Londres fue indispensable mientras Londres fue lo que llamaríamos capital financiera del mundo. En la actualidad, sin discutir si Nueva York o Londres es la capital financiera del mundo, lo cierto es que el 90 por ciento de nuestras relaciones comerciales están con Estados Unidos y, por consiguiente, para nosotros es Nueva York el verdadero centro de trabajo. Es la Agencia Financiera de México en Nueva York la que maneja nuestro fondos; es la Agencia Financiera de México en Nueva York la que concentra el pago, y es la Agencia Financiera de México en Nueva York la que nos proporciona todas las informaciones a nuestro sistema moderno de recaudación de impuestos ad valorem, y es esta agencia la que nos proporciona diariamente todas las informaciones indispensables para conocer el estado del mercado mundial, por ejemplo, de metales.

La agencia financiera tiene funciones que podría tener todavía mucho más amplias cuando pudiéramos comenzar el servicio de nuestra deuda, cuando comenzáramos nuestros arreglos económicos para la modificación de nuestra Deuda Pública, y si no ha sido posible que esta agencia tenga todas esas funciones, es porque, prácticamente, nuestro Gobierno no ha podido hacerlo; pero cuando volviéramos a cierta normalidad, la Agencia Financiera de México en Nueva York sería de mucho mayor importancia que lo que fue la Agencia Financiera de México en Londres. Así pues, si pensamos únicamente para el año entrante, nos reducimos a un Presupuesto modestísimo; llamo bastante modesto el que se presenta a la consideración de los señores diputados y que, como verán, importa apenas la cantidad de $100,000.00, cantidad que todavía se encuentra reducida con respecto a lo que gastamos el año pasado; pero cuando tenga que funcionar la agencia financiera no solamente como una subtesorería, que es como funciona hoy, sino también como

verdadera agencia financiera, el Presupuesto de esta agencia tendrá que ser mucho más elevado, y puede creerme el señor Alejandre: Lo que gustamos en la agencia financiera es comparativamente muy poco para la cantidad de dinero que manejamos.

No me esperaba esa objeción y no tengo en este momento a la mano los datos acerca del movimiento de fondos de la agencia financiera; pero puedo manifestarle que, comparativamente con la Tesorería General y las jefaturas de Hacienda que manejan, correspondientemente, fondos, el Presupuesto de la agencia financiera es bien modesto, bien pequeño; pero todavía, suponiendo que fuese mucho más elevado, repito lo que decía hace un momento: No digamos por 20,000 dólares, hasta nos pagarían por llamarse agentes financieros del Gobierno, más aún: Repetidas ocasiones hemos tenido proposiciones de casas bancarias de verdadera respetabilidad en Estados Unidos, que quisieran encargarse del manejo de nuestros fondos y que de paso nos traerían una especie de prestigio moral, de que estaban manejados nuestros fondos por tal o cual casa; no mencionaré nombres, pero al mismo tiempo comprendamos que el punto de vista de cualquiera negociación, cualquiera casa bancaria que se encargara del manejo de fondos en el extranjero, no sería el punto de vista estrictamente mexicano que necesitamos para este efecto el que tendría en cuenta; créanme, pues, los señores diputados, que cuando tenemos establecida una agencia financiera en Estados Unidos, no es para mandar gentes que nos estorben aquí, supuesto que ni siquiera hemos tenido grandes cambios en la administración de la agencia financiera. En la actualidad, el nuevo agente financiero, que aún no ha tomado posesión de su empleo, es una persona conocida en México, y el actual agente financiero, que va precisamente a Londres para contribuir a la consolidación y levantamiento de la agencia financiera que allá teníamos establecida, es una persona que tampoco ni siquiera necesitaba de este empleo para poder subsistir, supuesto que tiene su profesión; por el contrario, es difícil encontrar un empleado de esta categoría y con las condiciones que se requieren, y es difícil principalmente porque no podemos echar mano de personas de gran capacidad y de gran experiencia en los negocios de México, que quieran resignarse a ir a Nueva York a ganar 25 dólares diarios, o sean $50.00, que en cualquiera otra parte y dadas las condiciones de vida, sobre todo, que ahora reinan en Estados Unidos, podrían considerarse como verdaderamente mezquinos. Así pues, por cuanto a la cuantía es bien modesta; por cuanto a la necesidad de la agencia, podéis creer que es necesaria.

El C. secretario García Ruiz: No habiendo más oradores inscriptos, en votación económica se pregunta si se considera suficientemente discutida. Los que estén por la afirmativa, se servirán ponerse de pie. Suficientemente discutida. En votación económica se pregunta a la Asamblea si ha lugar a votar esta sección. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

Sí ha lugar a votar.

Se procede a la votación nominal.

El C. Flores Manuel H.: Por la afirmativa.

El C. secretario García Ruiz: Por la negativa. (Se procedió a recoger la votación.)

- El mismo C. secretario: Votó por la negativa 1 ciudadano diputado.

El C. Flores Manuel H.: Votaron por la afirmativa 126 ciudadanos diputados. (Votaron por la afirmativa los CC. diputados Aguilera, Aguirre León, Alarcón, Alvarez del Castillo, Anda de, Andrade, Angeles Carlos L., Angeles Jenaro, Araujo Francisco, Arriaga, Arrioja Isunza, Balderas Márquez, Baledón Gil, Barragán, Blancarte, Bouquet, Bravo Carlos, Bravo Lucas, Breña, Cabrera, Camarena, Cárdenas Emilio, Carriedo Méndez, Castilleja, Castillo David, Castillo Garrido, Castro Roberto, Cervantes Oilivera, Céspedes, Colina de la, Cornejo, Chablé, Díaz Infante, Esparza Cuauhtémoc, Espinosa y Elenes, Fernández Miguel B., Flores, Franco, Frías, Galindo Carlos, Gámiz, García Carlos, García José Guadalupe, García Norberto, García Pablo, Garza, Gómez Gildardo, González Jesús N., González Marciano, Guerrero Antonio, Gutiérrez Antonio, Gutiérrez Atanasio, Gutiérrez de Velasco, Hernández Eulogio, Hernández Jerónimo, Huerta, Lanz Galera, Lazcano Carrasco, León, Liekens, Limón Uriarte, Lomelí, López Emiliano Z., Macías Juan E., Madrid, Mancisidor, Márquez Galindo, Martínez Ignacio E., Méndez Arturo, Méndez Benjamín, Mercado, Morales Francisco César, Morales Hesse, Morales Sánchez, Mota, Navarro, Ocampo, O'Fárrill, Olivé, Ortega, Ortiz, Padrés, Palacios Moreno, Pastor, Pastrana Jaimes, Pérez Carbajal, Pérez Vargas, Pérez Vela, Quiroga, Ríos Landeros, Rodríguez Herminio S., Rodríguez Matías, Rodríguez Sabino, Rojas Rafael R., Romero Cepeda, Ruiz H., Ruiz Martínez, Saldaña, Sánchez Margarito, Sánchez Salazar, Schulz y Alvarez, Silva Jesús, Silva Pablo, Solórzano, Soto José M., Soto Peimbert, Soto Rosendo A., Sotres y Olaco, Tamez, Tello, Toro, Urdanivia, Uzeta, Valadez Ramírez, Valdés, Valverde, Valladares, Velásquez Juan, Verástegui Franco, Vilchis, Villalobos, Villaseñor Mejía, Villaseñor Salvador y Zavala Dionisio. Total, 125 votos.

Votó por la negativa el C. diputado Alejandre, Total, 1 voto.)

El C. secretario García Ruiz: En consecuencia, ha sido aprobada la sección XXXVI.

- El mismo C. secretario: A discusión la sección XXXVII del ramo de Hacienda, que comprende las partidas 5542 a 5559.

Los ciudadanos diputados que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse.

No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para su votación.

- El mismo C. secretario: A discusión las secciones XXXVIII y XXXIX.

El C. Espinosa Luis: Moción de orden, señor presidente.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Espinosa.

El C. Espinosa Luis: Me extraña sobremanera que estando yo anotado para impugnar todas las partidas de estos gastos extraordinarios, se haya reservado para su votación la sección XXXVII.

El C. presidente: La Presidencia manifiesta al ciudadano diputado Espinosa, que no está anotado su nombre para impugnar ninguna de las partidas que comprende la sección XXXVII de este ramo; que el ciudadano Siurob es el único que ha separado dos partidas de esta sección, y que a todos consta que el ciudadano Siurob no está en el salón.

El C. Espinosa Luis: Pido la palabra. Para suplicar a su señoría que rectifique, o que se fije, porque yo recuerdo que mi nombre fue escrito con lápiz rojo desde hace dos o tres días.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Espinosa.

El C. Espinosa Luis: Honorable Asamblea: Había emplazado al ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público para cuando se tratase de la discusión de las distintas partidas que componen la sección XXXVII o sean los gastos generales de Hacienda. Ha llegado el momento de hacer un examen lo más minucioso que me sea posible para demostrar a vuestra soberanía que todas y cada una de las partidas mencionadas son exageradas en grado superlativo, según mi humildísimo criterio. Pero antes de entrar en materia necesito que el ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público se digne contestar algunas interpelaciones que servirán, o, más bien dicho, que me son indispensables para hacer luz en mi cerebro tan deficiente y tan obscuro. (Voces: ¡Bien!)

Empiezo por suplicarle que tenga la bondad de decirme si en la partida amparada en el proyecto de presupuestos del Ejecutivo con el número 5544 que se refiere a "reparaciones ligeras y guarda de edificios" no están comprendidas también las partidas 5504, 5515 y 5525, es decir, si el dinero, si los $500,000.00 que se piden para adquisición de edificios, para reparaciones de edificios, en dos partidas globales de la fracción XXXVIII, no son, también para amparar el gasto de las partidas a que antes me he referido. Suplico al ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público tenga la bondad de contestar.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano secretario de Hacienda.

El C. secretario de Hacienda y Crédito Público: No me había dado cuenta de que estaba hablando el señor diputado Espinosa. ¿Tiene la bondad de repetir su interpelación?

El C. Espinosa Luis: Honorable Asamblea: El ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público, usando de ese procedimiento que tampoco ahora quiere calificar, de una manera muy poco cortés y haciendo también muy poco honor al alto puesto que desempeña, para desvirtuar hasta donde le sea posible la pregunta que acabo de hacerle, ha manifestado que no se había fijado en que este humildísimo representante es el que tiene el uso de la palabra y que, por lo tanto, no estaba en condiciones de contestar. Lamento que el ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público, que ha venido a esta Asamblea precisamente a darse cuenta de lo que en ella se está tratando, se desatienda por completo y haga uso de estas salidas de mal tono; pero ya que el ciudadano secretario de Hacienda se muestra tan poco caballero, (Siseos.) yo lo obligaré en esta ocasión a que cambie de actitud y a que haga honor a su representación de defensor de los intereses del Ejecutivo. Cuando en ocasión solemne el ciudadano Cabrera, usando giros destemplados y palabras poco airosas, calificó de cortesana a esta Asamblea...

El C. Méndez Benjamín, interrumpiendo: ¡No es cierto!

El C. Espinosa Luis, continuando: Yo le llamé al terreno del honor, más bien dicho, de la decencia, y le exigí que retirase aquella palabra ofensiva para todos y cada uno de los ciudadanos representantes.

El ciudadano Benjamín Méndez, no teniendo más méritos ni aptitudes superiores para ser un magnífico incondicional, cuantas veces se viene aquí a atacar cualquiera iniciativa del ejecutivo se repone de su impotencia intelectual haciendo interrupciones como la que en estos momentos me hace. El ciudadano compañero Méndez es de los menos capacitados para ello, ya que no en una sino en numerosas ocasiones ha manifestado que en ese cuerpo tan joven palpita el alma de un anciano. Es triste verdaderamente que representantes tan jóvenes que debieran levantar aquí el pendón de los altos ideales vengan a ser los paladines del más agudo servilismo.

Como el ciudadano secretario de Hacienda no oyó mi pregunta, me permitiré molestarlo, repitiéndosela; es la siguiente: En las partidas 5,504, 5,515 y 5,525 del proyecto de Presupuesto enviado por el Ejecutivo, aparece una cantidad "para reparación de edificios" y en la partida de gastos generales de Hacienda, amparada por el número 5544, aparece también una partida por $100,000.00 para reparaciones ligeras y guarda de edificios, terrenos, localidades, etc. Suplico al ciudadano secretario de Hacienda tenga a bien decirme en qué consiste la diferencia de gastos en unas y otras partidas.

El C. secretario de Hacienda y Crédito Público: Pido la palabra para informar en su oportunidad.

El C. Espinosa Luis, continuando: Como el ciudadano Cabrera ha pedido permiso a la Presidencia para informar en su oportunidad, yo también pido permiso a la Asamblea para tratar este asunto en su oportunidad. (Voces: Bien!)

El C. presidente: Si el ciudadano secretario de Hacienda cree que es oportuno su informe, tiene la palabra para ello.

El C. secretario de Hacienda y Crédito Público: Señores diputados: Un secretario encargado del Despacho de una de las oficinas del Ejecutivo, tiene, al venir a la Cámara, dos funciones: La de informar y la de combatir. En su función de informante puede hacerlo, ya sea de motu propio, ya sea requerido por alguno de los individuos de la Cámara, y esta función informativa es enteramente extraña a la función de debate. Deseo hacer con toda precisión esta diferencia entre la función informativa y la función combativa, porque no es justo que se pretenda que el secretario que tiene el derecho de inscribirse en el debate para luchar

contra las opiniones que en contra de sus ideas se expresen, se vea coartado en su libertad de expresión hasta el grado de que no pueda ni siquiera usar del mismo lenguaje que el diputado que lo combate, y que creo tiene el absoluto derecho de usar. Ni tampoco es justo que el secretario de Estado se vea obligado por una especie de etiqueta especial inventada por alguno de los miembros del Parlamento, que consiste en que su función informativa ha de correr parejas con el procedimiento intelectual que un diputado siga, para que combata.

No sé si me explico, pero aplicando el caso concreto al señor diputado Espinosa, a quien procuré tratar con la mayor amabilidad y corrección, digo que con mucha frecuencia me he visto en el caso de que no digamos no hiciera caso de mis observaciones, de que no digamos que ni siquiera se fijara en lo que yo decía, sino que habiéndolo dicho y habiéndose escrito en el Diario de Debates, no haya sabido lo que yo he dicho.

Acaba de decir el diputado Espinosa, repitiendo sus palabras del viernes, que en ocasión solemne el que habla llamó a la Cámara una prostituta. Yo no apelaría más que al concepto general que todavía guardo en opinión de los señores diputados de mi respeto a la Asamblea, y estoy cierto de que por unanimidad sería yo absuelto de este cargo; pero suplicaría yo al diputado Espinosa recorriera el Diario de los Debates del día en que este incidente ocurrió para que vea que absolutamente no hay la más mínima alusión, ni siquiera alusión torpe, pero ni siquiera la intención de faltar al respeto en esa forma a la Cámara. Y si, pues, el diputado Espinosa, tratándose de un asunto que tanto le escoció - que hasta reclamó, según él dice -, no se acuerda de lo que dije, no se fijó en lo que dije, ¿No es justo, que estando ocupado en buscar los antecedentes del asunto, no hubiera yo podido fijar la atención en las interesantes interpelaciones del señor diputado Espinosa?

Así pues, presento mis excusas al diputado Espinosa por no haberle oído su interpelación, primeramente; y paso en seguida a manifestar que voy a informar a este respecto, porque lo considero de interés general para la Cámara, como estoy dispuesto a informar acerca de cualquier otro punto que se presente; pero debo hacer nuevamente la distinción entre los informes que se piden al secretario de Estado, porque se creen de interés, y los informes que se piden al secretario de Estado, como una especie de alternativa en el juego de cartas en que uno tira la suya y espera que el otro juegue, para así después poder combatir. ¿Las objeciones que tiene el diputado Espinosa contra el Presupuesto de Hacienda son o dejan de ser fundamentales, porque las conteste un minuto o cinco minutos antes el secretario de Estado? Porque si realmente son serias o son de importancia, deben expresarse con toda claridad, y el secretario de Estado tendrá ocasión de contestarlas. ¿Son esas objeciones meramente un pretexto para medir sus armas con el secretario de Estado? En buena hora, y agradezco la ocasión que se me presenta de brindarle esta oportunidad al diputado Espinosa. Pero seamos francos y no pongamos de pretexto la opinión de la Cámara para un torneo de oratoria.

Pasado este paréntesis inicial, paso a manifestarle al señor diputado Espinosa que en efecto, en los presupuestos anteriores había una partida de. . . $200,000.00 destinada a reparaciones de edificios propiamente nacionales, y edificios que, aunque no fueran nacionales, estuvieran destinados a ciertos servicios públicos; que en el Presupuesto actual, en vez de poner una partida de $200,000.00 se puso una partida de 100,000.00, destinados a reparaciones ligeras de edificios nacionales, y se suprimieron los otros $100,000.00 que se encuentran, en substancia, distribuídos entre las partidas 5504, 5515 y 5525, sumando en total aproximadamente. . . . . $30.000.00, que se destinan también a reparaciones de determinados edificios que están especialmente anexos a determinados servicios, efectos a determinados servicios. Así pues, en efecto, la partida general antigua de $200,000.00 ha sido quebrada en cuatro partidas; una de $100.000.00, una de $9,000.00, otra de $9,000.00 y otra de $ 9, 000.00, es decir, $130,000.00; de manera que hay prácticamente un ahorro de $70.000.00. Entre las notas que traía, hechas para esta objeción del diputado Espinosa, se encontraba ya escrita y expresada esta misma idea. Dice la nota a la partida 5544:

"Para arrendamientos, reparaciones ligeras y guarda de edificios, terrenos, localidades, y útiles del ramo de la Hacienda, así como para los servicios de agua, luz, fuerza y calefacción de los edificios y oficinas del propio ramo, cuando esos gastos no estén autorizados en otras partidas... $100,000.00.

"...Asigna en el presente año $200,000.00, que fueron suficientes para las atenciones.

"El en proyecto se hace figurar únicamente la cantidad de $100,000.00, atendiendo a que en los presupuestos de jefaturas y aduanas se fijan asignaciones de $17,000.00 y $50,000.00, respectivamente, para agua, luz, calefacción, etc."

Hecha esta explicación, naturalmente sin otro objeto que el informativo, espero ya en el orden deliberativo las objeciones que presente el señor diputado Espinosa para poder contestarlas en su oportunidad, entendiéndose que he informado en uso de la facultad de información.

A mi vez, me permito suplicar al diputado Espinosa se sirva traer a la vista el Diario de los Debates y leer o hacer leer las palabras en que el que habla haya injuriado a la Cámara comparándola con una prostituta; y deseo esas palabras, porque, si son ciertas, no tendré absolutamente ningún empacho en venir a presentar mis excusas a la Cámara y a retirarlas hasta en su última sílaba; pero si no es verdad lo que dice el C. diputado Espinosa, llamaré la atención sobre que siempre para hacer un cargo de esta naturaleza es indispensable siquiera leer las palabras que se hayan dicho. No se concibe que el más tremendo impugnador del ramo de Hacienda, el que va a venir a descargar sus terribles golpes de maza sobre la secretaría y especialmente sobre la partida de gastos generales, venga hacerlo y le ocurra en esta materia lo mismo que le ha ocurrido en otras materias, es decir, que no haya puesto su atención debidamente en lo que va a objetar.

Así pues, por bien del Presupuesto de Hacieda que tengo el deber de defender, deseo que las objeciones del señor diputado Espinosa sean fundadas

y serias y que no ocurra con ellas lo que con algunas otras especies soltadas a volar así con ligereza. Así pues, hago mi interpelación al diputado Espinosa para que nos muestre las frases en que he insultado a la Cámara.

El C. presidente: Tiene la palabra el C. Espinosa.

El C. Espinosa Luis: Contestando a su señoría el ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público, y con el Diario de los Debates en la mano voy a obsequiar los deseos, dando lectura a la parte relativa....

El C. Méndez Benjamín, interrumpiendo: ¿Que la lea la Secretaría. (Voces: ¡Que la lea la Secretaría!)

El C. Espinosa Luis, continuando: ¿Y si no me da la gana? (Murmullos y risas.) H. Asamblea: El C. Méndez, que se esforza... (Voces: ¡Esfuerza! ¡Esfuerza!) De las dos maneras se dice: Esfuerza o esforza. (Voces: ¡No!) Sí señores. Yo no voy a dar aquí una cátedra de gramática; pero los que entiendan algo de lenguaje, sabrán que es permitido decirlo de las dos maneras; pero, obsequiando los deseos de mi impugnador, no tengo inconveniente en decir "esfuerza." El compañero Méndez, que se esfuerza en excitar mis nervios y en provocarme para que tenga para él frases candentes que no quisiera dirigirle, dice que debe ser la Secretaría la que lea esta parte del Diario de los Debates, que porque no se me creería si yo diese lectura a estas líneas. El compañero Méndez, que sí hay voces que parece ser un desequilibrado, porque da muestras de inconsciencia, se permite la majadería de creer que un hombre que ha dejado aquí rastros indelebles de honradez, pueda siquiera tener el bajo pensamiento que él me atribuye. (Aplausos en las galerías.) No es el defensor de Felipe Pescador el indicado para venir a exigirme demostración de honradez. Mi honradez como ciudadano y como representante está muy por encima de todas las maledicencias y de todas las sospechas de un Benjamín Méndez. Es pues, ciudadanos representantes, que por esta razón no permitiré que sea la Secretaría quien en estos momentos lea estas lineas. Después si la Asamblea lo quiere, con el derecho que tiene puede pedir a la Presidencia que sea la Secretaría quien las lea; pero por este momento y ejercitando un derecho legítimo, y nada más por no acceder a la pretensión vana y tonta de Benjamín Méndez, seré yo el que tenga el gusto de leer estas líneas. (Risas y aplausos en las galerías.) La parte relativa dice así:

"Decía ayer el señor diputado García Ruiz: "Acabamos de escuchar un disco de fonógrafo bien grabado." -Habla el ciudadano secretario de Hacienda -. "Ojalá que lo que oyéramos aquí fuese simplemente un disco de fonógrafo bien grabado que transmitiera fielmente las opiniones de la Comisión, o las opiniones de la oposición, o las opiniones de los ministeriales, o las opiniones del Gobierno; la desgracia es que no es ni siquiera un disco de fonógrafo, ni siquiera un mal perico, sino que es sencillamente una ramera que a la luz del día siguiente sale a desparramar a la calle todas las procacidades que ha oído tras de la puerta!...

"- El C. Ferrel: ¡Porque está representando al Ejecutivo! (Campanilla.)

"- El C. secretario de Hacienda: Recuerdo que estoy representando al Ejecutivo y precisamente por eso abandono ese terreno y comienzo mi peroración, ya que en estos momentos se presenta el C. diputado Siurob. Yo interrogo al C. diputado Siurob para que me diga cuántas veces ha estado en Yucatán...." Pero antes de esto y con toda intención me he guardado leer la parte que a mí corresponde. Dice así:

"- El C. Espinosa: ¡Moción de orden! Para suplicar a la Presidencia, de la manera más atenta, que exija al ciudadano secretario de Hacienda guarde el respeto que se merece esta Asamblea y retire esas palabras. (Aplausos.)"

Como ustedes ven de lo que acabo de leer, no hice la moción de orden porque el ciudadano secretario de Hacienda se estuviera refiriendo a un diputado ni mucho menos al diputado Siurob, como se ha querido dar a entender aquí, porque el C. Siurob no estaba en esos momentos en la Cámara; de ninguna manera, pues, estas frases pudieron haber sido dirigidas a ese representante: Fueron dirigidas a la Asamblea, y así es como lo dí a entender con la protesta que formulé en esos instantes. Queda obsequiado, por lo tanto, el C. Cabrera a este respecto. Procuraré, hasta donde me sea posible, alejarme de todas estas pequeñeces; crea el ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público, que al hacerle interrogaciones que me son indispensables para aclarar algunos puntos de este presupuesto, no lo haré nunca con el propósito de tener elementos con qué contender con él; puede estar seguro que jamás he tenido la vanidad que ayer me atribuía, de provocarlo a contender en la tribuna, ya que yo no tengo motivos para creerme honrado de justar con un ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público, y la razón es muy sencilla, ciudadanos representantes: Si estuviésemos en igualdad de circunstancias, si el ciudadano secretario de Hacienda por sí solo tuviese una representación mayor de la que yo tengo en esta Asamblea, podría creer que siendo él un superior mío en este terreno, sería para mí una satisfacción muy grande, no la de provocarlo, sino la de que él me concediese el honor de contender conmigo; pero, ciudadanos representantes, todos vosotros tenéis ya un criterio bien definido a este respecto: Un secretario de Estado, así sea el secretario de Hacienda y Crédito Público, o el ciudadano secretario de Gobernación o algún otro secretario de algún Departamento, no tiene más que una representación, alta por cierto: La de empleado de toda la confianza y de mucha significación del ciudadano presidente de la República. Y esto, ¿Por qué, ciudadanos representantes? Porque los ciudadanos secretarios de Estado son irresponsables ante la ley. Los secretarios de Estado no son más que los empleados encargados de despachar todos los asuntos que competen a sus ramos, y naturalmente que, sin jactancia ninguna, yo, como representante legítimo de 60,000.00 habitantes de la República, me siento con una investidura muy superior a la de un secretario de Estado, así sea éste el C. Luis Cabrera, ministro de Hacienda y Crédito Público. No son, pues, impulsos de vanidad femenina los que me hacen dirigirle estas interpelaciones que, confieso sinceramente, me repugnan. Son aclaraciones

indispensables para que yo sepa sobre qué base debo levantar mis argumentaciones.

¿Cómo voy a hablar de la partida 5542 del proyecto de Presupuestos enviado por el Ejecutivo, que ampara la cantidad de $200,000.00 por concepto de gastos extraordinarios, cuando por un lado encuentro en el Presupuesto vigente una cantidad de. . . $100,000.00 para estos gastos extraordinarios; cuando en el dictamen de la Comisión encuentro consignado el hecho de que el Ejecutivo gastó por este concepto durante el año en curso la cantidad de $400,000.00? Es natural, ciudadanos representantes, que yo pida estas aclaraciones a quien debe darlas y no inspirado, como pudiera creerlo el ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público, en un vanidoso deseo de exhibicionismo o para buscar argumentos y tener otros para combatir con él. ¿Cómo voy, por ejemplo, a tratar la partida 5544, que se refiere a gastos por arrendamiento de edificios, cuando hay partidas anteriores, y no una, sino varias, que tratan de lo mismo? ¿Cómo voy a tratar de las otras partidas que siguen si me encuentro con las mismas dificultades? Pero hay más, ciudadanos representantes: Yo quise, capciosamente - lo confieso -, que el ciudadano secretario de Hacienda, antes que ninguna otra pregunta, contestase a la que le hice, y tuvo la bondad de contestar hace un instante, porque él mismo, de una manera concisa, ha declarado que las partidas 5504, 5515 y 5525 concurren a las mismas finalidades de la partida 5544, esto es, todas esas partidas amparan cantidades para arrendamientos, reparaciones ligeras y guarda de edificios, terrenos, localidades y útiles del ramo de Hacienda, y esto último, además de lo expresado, así como para los servicios de agua, luz, fuerza y calefacción de los edificios del propio ramo, cuando esos gastos no estén autorizados por otras partidas. Pero, como antes dije, queda demostrado que las cantidades amparadas por esas partidas vienen únicamente a sumarse con la cantidad de $100,000.00 comparada con la partida 5544. Con esto se viene a demostrar un hecho innegable: Que el ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público pudo muy bien haber sumado esos $60,000.00 que amparan esas partidas dispersas, a los $100,000.00 que ampara la partida 5544 y de esta manera diáfanamente, claramente tendríamos en esta partida de gastos generales de Hacienda por concepto de arrendamiento, la suma de $170,000.00. Pero es claro, ciudadanos representantes, el ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público es un hombre versadísimo en estos achaques de fabricar presupuestos y debe haber pensado: Es natural que si yo pongo $200,000.00 para arrendamiento de edificios, a los ciudadanos representantes les va a parecer demasiado y van a echar abajo la partida; es más fácil triunfar diluyendo esos $200,000.00 en distintas partida. Eso es lo que yo discuto, ciudadanos representantes, de la exposición que trae el proyecto de Presupuesto presentado a vuestra consideración por el ciudadano secretario de Hacienda y Crédito Público.

Como no quiero cansar vuestra atención, porque ya es la hora reglamentaria, suplico a la Presidencia que tenga a bien disponer que se consulte a la Asamblea si va a seguir debatiendo esta noche o si se suspende la sesión para continuarla mañana; yo probablemente tengo que hablar durante una hora. (Voces: ¡Huy! ¡Huy!) Así pues, suplico a la Presidencia que tenga la bondad de consultar a la Asamblea si continúa la sesión. (Aplausos de las galerías.)

El C. secretario García Ruiz: Habiendo transcurrido el tiempo reglamentario, en votación económica se pregunta a la Asamblea si se prorroga la sesión.

Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie.

No se prorroga la sesión. (Aplausos. y voces: ¡Orden del día!) Mientras no guarden orden los señores diputados, no se puede leer la orden del día. (Voces: ¡Toros! ¡Toros!)

- El C. presidente, leyendo:

"A las 11 a. m.: Proyecto de reforma a los artículos 12 y 14 de la Ley Orgánica del Fuero Común. Proyectos de decreto facultando a los CC. C. Careaga y Eulalio Román, para aceptar el cargo de cónsul. Proyecto de decreto relativo a la derogación del que prohibe la corrida de toros.

"A las 4 p. m.: Presupuestos de Egresos de la Secretaría de Hacienda, de la Administración de Justicia del Fuero Común y de la Secretaría de Gobernación."

Se levanta la sesión y se cita para mañana a las 11 a. m. (8. p. m.)