Legislatura XXIX - Año I - Período Extraordinario - Fecha 19210216 - Número de Diario 7

(L29A1P1eN007F19210216.xml)Núm. Diario:7

ENCABEZADO

MÉXICO, MIÉRCOLES 16 DE FEBRERO DE 1921

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

AÑO I.- PERIODO EXTRAORDINARIO XXIX LEGISLATURA TOMO II.- NUMERO 7

SESIÓN DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 16 DE FEBRERO DE 1921

SUMARIO

1.- Se abre la sesión. Lectura y aprobación del acta de la anterior.

2.- Se da cuenta con los asuntos en cartera, concediéndose licencia al C. diputado Carrillo Puerto Felipe.

3.- La Asamblea concede permiso para retirar la moción suspensiva del Ejecutivo de la Unión, hecha suya por varios ciudadanos diputados, acerca de la discusión del dictamen referente al proyecto de ley por el que se adiciona el artículo 28 constitucional. Igualmente se permite que sea retirada la iniciativa de referencia. Usa de la palabra para hechos el C. diputado Espinosa Luis.

4.- A discusión en lo general el dictamen de la 2a. Comisión de Puntos Constitucionales que consulta el proyecto de ley que reforma el artículo 108 de la Constitución general, se levanta la sesión por falta de quórum".

DEBATE

Presidencia del C. CIENFUEGOS Y CAMUS ADOLFO

(Asistencia de 131 ciudadanos diputados.)

El C. presidente, a las 4.43 p. m.: Se abre la sesión.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Acta de la sesión celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el día catorce de febrero de mil novecientos veintiuno.- Período extraordinario.

"Presidencia del C. Francisco Trejo.

"En la ciudad de México, a las cuatro y cincuenta de la tarde del lunes catorce de febrero de mil novecientos veintiuno, se abrió la sesión, con asistencia de ciento treinta y cinco ciudadanos diputados.

"El C. secretario Valadez Ramírez leyó el acta de la sesión celebrada el día diez del mes actual, que se aprobó sin debate, y dio cuenta con los siguientes documentos:

"Solicitudes de los CC. Socorro García, Candelario Garza, Ogarrio Meixueiro y Altamirano, a fin de que se les conceda licencias, con goce de dietas, hasta por quince días al primero, por diez días al segundo, hasta por dos meses al tercero y hasta por veinte días al último.

"En votaciones económicas se aprobaron sin discusión, previa dispensa de trámites.

"Dictamen de las comisiones unidas primera de Crédito Público, primera de Hacienda y primera de Puntos Constitucionales, tendente a que, por medio de una adición al artículo 28 constitucional, se posponga la creación del Banco Único de Emisión, y que concluye con un punto resolutivo, que dice no es de aceptarse la adición de que se trata y que, en consecuencia, se proceda a la discusión de la ley que establezca el régimen bancario en la República. - Imprímase, y a discusión el primer día hábil.

"La Presidencia, a moción del C. Siurob, informó que no se había recibido ninguna nota del Ejecutivo retirando la iniciativa a que se refiere el anterior dictamen.

"El C. Luis Espinosa, en moción de orden, pidió se consultara a la Asamblea si se dispensaban los trámites, y con este motivo, la Presidencia hizo aclaraciones.

"El C. Jesús Z. Moreno solicitó informes de la Presidencia, que ésta proporcionó, sobre si el proyecto del Ejecutivo estaba firmado por el secretario de Estado correspondiente.

"El C. Siurob propuso que se suspendiera la discusión del dictamen y que se interpelara al secretario de Hacienda acerca de si el Ejecutivo retiraría su iniciativa. El ciudadano presidente hizo observar que no cabía moción suspensiva, toda vez que aún no se entraba al debate.

"Dictamen de la segunda Comisión de Puntos Constitucionales, referente a dos iniciativas, una subscripta por varios diputados a la XXVIII Legislatura y la otra por el actual presidente de la República, que tienen por objeto reformar la última parte del artículo 108 de la Constitución general de la República que establece las causas por las que pueden exigirse responsabilidades al encargado del Poder Ejecutivo federal durante el período de su encargo. - Primera lectura, e imprímase.

"La Cámara acordó dispensar la segunda lectura a este dictamen para que se discuta el primer día hábil.

"Encontrándose enfermo el C. diputado Juan Zubaran Capmany, la Presidencia comisionó, para que le hicieran una visita, a los CC. Manero y Pérez Gasga.

"El ciudadano presidente manifestó que al día siguiente se repartirán a los ciudadanos diputados, impresos, los dictámenes con que se había dado cuenta en esta sesión, a fin de que se discutieran el próximo miércoles diez y seis, y levantó la sesión, siendo las cinco y media de la tarde y citando para aquel día."

Está a discusión el acta. ¿No hay quien pida la palabra? En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobada.

- El mismo C. secretario: Se va a dar cuenta con los asuntos en cartera.

Telegrama procedente de "Villahermosa, Tab., 14 de febrero de 1921.

"Secretario de la H. Cámara Nacional:

"Teniendo necesidad de ausentarme de esa metrópoli por asuntos especiales de mi Estado natal, suplico a esa H. Cámara me conceda licencia por el término del resto de este mes para volver a hacerme cargo de mi curul, con goce de sueldo, pues por razones especiales no podré concurrir sino cuando haya barco que salga de Progreso hasta Veracruz. Afectuosamente. Salúdolo.- Felipe Carrillo."

En votación económica se consulta si se dispensan los trámites.

El C. Borrego: ¿Qué el interesado solicita dispensa de trámites?

- El mismo C. secretario: La Secretaría informa al compañero Borrego, que siempre se consulta la dispensa de trámites cuando se trata de solicitudes de licencia. Ya se ha sentado este precedente.

El C. Borrego: Es una práctica que no está apegada al Reglamento.

- El mismo C. secretario: Efectivamente.

- El. C. Borrego: Si en la solicitud no se pide dispensa de trámites, como en el caso presente, debe pasarse a la Comisión respectiva.

- El. C. Casas Alatriste: Pido la dispensa de trámites.

- El mismo C. secretario: En votación económica se pregunta si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie, en la inteligencia de que se necesitan las dos terceras partes de los diputados presentes. Se dispensan los trámites. Está a discusión.

El C. Alessio Robles Vito: Pido la palabra para rogar atentamente a su señoría se sirva ordenar a la Secretaría dé nueva lectura a la petición del ciudadano diputado Carrillo, en virtud de que muchos no se dieron cuenta, entre ellos, yo.

- El mismo C. secretario, leyendo:

Telegrama procedente de "Villahermosa, Tab., 14 de febrero de 1921.

"Secretario de la H. Cámara Nacional:

"Teniendo necesidad de ausentarme de esa metrópoli por asuntos especiales de mi Estado natal, suplico a esa H. Cámara me conceda licencia por el término del resto de este mes para volver a hacerme cargo de mi curul, con goce de sueldo, pues por razones especiales, no podré concurrir sino cuando haya barco que salga de Progreso hasta Veracruz. Afectuosamente. Salúdolo.- Felipe Carrillo."

El C. Alessio Robles Vito: Pido la palabra para rogar a la Presidencia ordene a la Secretaría informe a la Asamblea cuántas licencias ha disfrutado el ciudadano Carrillo y si han sido con goce de sueldo.

- El mismo C. Secretario: La Secretaría informa al ciudadano Alessio Robles y a la honorable Asamblea, que el ciudadano Carrillo ha disfrutado de una licencia de dos meses, con goce de dietas.

El C. Alessio Robles Vito: Pido la palabra en contra.

El C. presidente: Tiene la palabra en contra el ciudadano Alessio Robles.

El C. Alessio Robles Vito: Aquí, por compañerismo, en casi todos los casos, hemos concedido el disfrute de licencias con goce de dietas; pero en este caso yo pedí la palabra para oponerme con todas mis fuerzas a que se conceda esta licencia con goce de dietas, porque el ciudadano Carrillo casi no ha estado en esta Asamblea, no se ha visto su labor parlamentaria; lo mandó el Estado de Yucatán para que representara aquí sus intereses y no para que anduviera viajando. En consecuencia, yo pido que no se conceda esta licencia y que, en caso de que este señor Carrillo no se presente en los diez días que marca el Reglamento, se llame a su suplente.

El C. Mijares : Pido la palabra.

- EL C. presidente: ¿En pro?

El C. Mijares: En pro.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Mijares: Honorable Asamblea: Yo lamento que el compañero Vito Alessio Robles se levante para acordarse de los compromisos que tiene Felipe Carrillo Puerto con el pueblo de Yucatán que lo trajo a esta Asamblea; yo lamento que el compañero Vito Alessio Robles, cuando un socialista, cuando un luchador que sostiene los principios del proletariado, pide una licencia, así sea corta o larga, haga un gesto de desesperación; y lamento que el compañero Vito Alessio Robles, que tan puntual es a las citas, no se haya levantado para acordarse de uno de los grandes miembros del Pélece, Juan Zubaran Capmany, que jamás ha asistido a esta Asamblea y que siempre anda a caza de concesiones; lamento que el compañero Vito Alessio Robles, que sabe que detrás de él, que detrás de él..... (Risas.) es decir, que detrás de Felipe Carrillo está la voluntad soberana de un pueblo, no se acuerde de pedir a su hermano, don Miguel Alessio Robles que venga a cumplir aquí con los sagrados deberes que tiene para con el pueblo socialista de Saltillo, puesto que lo ha traído un partido netamente socialista; lamento que cuando un socialista se atreva a pedir licencia, haya un liberal que se dice nato, que publica y anda a caza de opiniones de un tal Querido Moheno, se levante para acordarse de los deberes que tiene para con la Asamblea un representativo netamente socialista, y yo no creo que la Asamblea vaya a hacerse eco de las palabras del compañero Vito Alessio Robles, porque no es justo, señores, acordarnos de los compromisos que tenga un individuo, porque es un representante del pueblo, porque pertenezca a la radical extrema izquierda de la Cámara; no es justo, repito, que queramos usar aquí la ley del embudo, porque sabemos que si ha habido quórum

en esta Asamblea, sobre todo en pasadas sesiones, en el período de sesiones ordinarias, ha sido por los miembros independientes del centro y de las derechas y por el bloque socialista; jamás ha sido integrado el quórum por los elementos peleceanos, y que si procuraron que hubiera quórum, fue para traer aquí a sus amigos para poder ganar la Comisión Permanente, en donde creemos que sí se debieron haber preocupado porque hubiera habido una representación genuina de la Representación Nacional. Por esto, compañeros, espero que ustedes no hagan caso de las palabras del señor Alessio Robles y que concedan esa licencia; pero que se marque un hasta aquí a esas licencias y que se diga que ha llegado el momento de hacer esas cosas; que se marque un hasta aquí, y que de hoy en adelante para las licencias de todos en general, se tomen precauciones, y que aquellos que no vengan a cumplir con su deber, sean multados y se les quiten sus dietas. Si vamos a seguir el camino que nos marca el señor Vito Alessio Robles, tengan ustedes la seguridad que la mayoría de los que pertenecen al Partido Liberal Constitucionalista dentro de la Cámara de Diputados, no están en sus curules y que deben ser ocupadas ya por sus suplentes, que quizás vengan a hacer mejor labor que la que ellos están haciendo.

El C. Alessio Robles Vito: Pido la palabra, señor presidente.

El C. presidente: Tiene la palabra.

El C. Alessio Robles Vito: Pido, antes que nada, que la Secretaría se sirva dar lectura a los artículos reglamentarios sobre licencias.

El C. prosecretario Castrejón: ¿A cuáles?

El C. Alessio Robles Vito: Artículo 51 del Reglamento.

El C. secretario Valadez Ramírez: Artículo 50.

- EL C. Alessio Robles Vito: Artículos 49, 50 y 51.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Artículo 49. El senador o diputado que por indisposición u otro grave motivo no pudiese asistir a la sesión o continuar en ella, lo avisará al presidente por medio de un oficio o de palabra; pero si la ausencia durase más de tres días, lo participará a la Cámara para obtener la licencia necesaria.

"Artículo 50. Sólo se concederán licencias por causas graves, y cuando más, a la cuarta parte de la totalidad de los miembros que deban componer la Cámara "

Artículo 51. No podrán concederse licencias con goce de dietas por más de dos meses."

El C. Alessio Robles Vito: Pido a la Presidencia con toda atención, se sirva mandar que se informe a la Asamblea si el ciudadano Carrillo ha concurrido a las sesiones a partir del día 7 del corriente, y si ha dado el aviso correspondiente o ha pedido la licencia respectiva.

El C. secretario Valadez Ramírez: La Secretaría informa que el ciudadano Felipe Carrillo Puerto concurrió a las sesiones celebradas los días siete y ocho; a partir del día 14 se le concedió una licencia de tres días.

El C. Alessio Robles Vito: La prensa ha dado cuenta de que antes del día catorce el ciudadano Carrillo salió de esta ciudad, en un viaje a Campeche y Yucatán, acompañando al ciudadano ministro de Gobernación, general don Plutarco Elías Calles. Aquí la nación nos ha mandado para que la representemos; nuestros distritos nos han mandado aquí para que defendamos celosamente sus intereses y no para que andemos continuamente en viajes de gira Yo pido que se aplique estrictamente el Reglamento al ciudadano Carrillo y pido también, como lo ha indicado el compañero Mijares, que se aplique al ciudadano Miguel Alessio Robles y al ciudadano Juan Zubaran Capmany. (Aplausos.) Ya es necesario que acabemos con todas estas componendas. El señor Carrillo Puerto, que no ha hablado ni una sola vez en la Cámara; el señor Carrillo, a quien se le concedieron en el período pasado dos meses de licencia y luego, con el pretexto de que no podía hacer el viaje de regreso en tiempo oportuno, se tomó tres, no debe de concedérsele esta licencia y, en caso de que pase el tiempo reglamentario, que se llame a su suplente, y los mismo debe hacerse con el ciudadano Alessio Robles y con el ciudadano Juan Zubaran Capmany

- EL C. presidente: Tiene la palabra en pro el ciudadano Castrejón.

El C. Castrejón: Ciudadanos diputados: Sólo por compañerismo vengo a pedir la palabra en pro de que se conceda la licencia al compañero Carrillo Puerto. Yo, señores, y quizá el compañero Alessio Robles sea el primero en decirlo, cuando él fue presidente, era yo de los que más excitaban a que se cumpliera estrictamente con el Reglamento y se les pagara a aquellos que vinieran y no se pagara a los diputados que se andaban paseando o en asuntos políticos. Yo no sé por qué ahora se quiere aplicar al compañero Carrillo Puerto un criterio, cuando se ha seguido otro por la Asamblea en todo el período que llevamos de legislación. Yo preguntaría al compañero Alessio Robles por qué no llamó la atención antes sobre estos asuntos de faltas de los señores diputados, pongamos por caso, cuando el señor Rafael Lara no ha venido nunca aquí; lo mismo preguntaría respecto de José María Sánchez; la misma pregunta haríale respecto de infinidad de diputados que día a día han faltado aquí a las sesiones y que, todavía más - la Asamblea es testigo de ello -: se han suspendido todas ellas por falta de quórum; principiábamos las sesiones, y al terminar el período pasado, el período ordinario, comenzábamos con una asistencia de 126 ciudadanos diputados, es decir, el mínimum que marca el Reglamento, y nunca acabamos una sesión sino declarando: "Se suspende la sesión por falta de quórum." ¿Eso qué quiere decir? Sencillamente, que desde un principio no se aplicó la ley y es necesario que se mida a todos con el mismo rasero. (Risas.) Si eso es así, ¿por qué estamos discutiendo estas cosas? Por lo demás, yo desearía que esta fuera la última ocasión (Voces: ¡Ah! ¡Ah!) en que se tratara un asunto de esta naturaleza y que de hoy en adelante, parejo, se les quiten las dietas a los que no vengan.

El C. secretario Valadez Ramírez: No habiendo más oradores inscriptos, en votación económica se consulta si el asunto está suficientemente discutido. Los que estén por la afirmativa se servirán ponerse de pie. Suficientemente discutido. En votación económica se consulta si se concede

la licencia. Los que estén por la afirmativa se servirán ponerse de pie. (Voces: ¡No! ¡No! ¡Sí! ¡Sí! No hay mayoría.) No hay mayoría. (Voces: ¡Sí hay!)

El C. Castrejón: La mayoría es visible.

El C. secretario Valadez Ramírez: Ahora sí hay mayoría de pie.

El C. Moreno Jesús Z: Reclamo la votación.

El C. Alessio Robles Vito: Pido votación nominal.

El C. secretario Valadez Ramírez: Se hace saber al ciudadano Alessio Robles que no procede la votación nominal, sino únicamente reclamar la votación, a fin de que se verifique el recuento.

El C. Moreno Jesús Z: Yo ya la he reclamado.

El C. secretario Valadez Ramírez: La Presidencia ha tenido a bien designar a los ciudadanos León Luis y Castrejón, para que cuenten....

El C. León Luis: Yo soy parte interesada.

El C. Castrejón: Yo también soy parte interesada.

El C. Manjarrez: Conforme al Reglamento, debe nombrarse a uno de los que estén parados, y a otro de los que estén sentados, para que cuenten a los que están de pie y viceversa.

El C. secretario Valadez Ramírez: La Secretaría hace saber al ciudadano Manjarrez que deben nombrarse dos de los que están parados y dos de los que están sentados. Por acuerdo de la Presidencia se designa a los ciudadanos Prieto Laurenz y Manjarrez para que cuenten a los que estén de pie y a los ciudadanos Moreno Jesús Z. y Alessio Robles para que cuentes a los que están sentados. A fin de que los comisionados puedan cumplir con su cometido, los que estén por que se conceda la licencia, servirán ponerse de pie.

El C. Manjarrez: Suplico a los que estén parados que no se sienten.

El C. secretario Valadez Ramírez: Los ciudadanos diputados comisionados para hacer el recuento, informan que hay 79 ciudadanos de pie y 61 sentados; en consecuencia, se concede la licencia. (Aplausos.)

- El mismo C. secretario leyendo:

"Poder Ejecutivo Federal.- Estados Unidos Mexicanos.- México.- Secretaría de Gobernación.- Departamento Consultivo.- Número 159.

"A los ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados.- Presente.

"Por acuerdo del ciudadano presidente de la República, ruego a ustedes se sirvan dar cuenta a la H. Cámara de Diputados, con una moción suspensiva por el término de quince días, respecto...."

El C. Gandarilla: Moción de orden. Pido a su señoría me ilustre sobre qué era lo que se había leído y por qué se retiró o qué sucedió. Se comenzó a leer la iniciativa el Ejecutivo y quiero que se me diga qué se va a leer ahora.

El C. presidente: Me permito informar a su señoría que por cuestión de orden se procede a poner a discusión el asunto a que se contrae la moción a que se empezaba a dar lectura.

El C. secretario Valadez Ramírez: Estando a discusión el dictamen de las comisiones unidas 1a. de Crédito Público, 1a. de Hacienda y 1a. de Puntos Constitucionales, sobre la iniciativa de ley que adiciona el artículo 28 de la Constitución general enviada por el Ejecutivo de la Unión, se va a dar cuenta con una moción suspensiva.

"Poder Ejecutivo Federal.- Estados Unidos Mexicanos.- México.- Secretaría de Gobernación.- Departamento Consultivo.- Número 159.

"A los ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados.- Presente.

"Por acuerdo del ciudadano presidente de la República, ruego a ustedes se sirvan dar cuenta a la H. Cámara de Diputados, con una moción suspensiva por el término de quince días, respecto a la discusión del proyecto de ley que adiciona el artículo 28 de la Constitución general, y que les fue remitida por esta Secretaría con oficio 1,002, de fecha 9 del mes en curso, a fin de que el Ejecutivo pueda, durante dicho término, completar los datos que en su concepto ilustran el criterio de esa H. Cámara, al discutir un asunto de tanta importancia y que afecta a la marcha económica de la República.

"Reitero a ustedes las seguridades de mi distinguida y atenta consideración.

"Sufragio Efectivo.- No Reelección.- México, D. F., a 15 de febrero de 1921. - P. A. del secretario, el subsecretario.- J. I. Lugo.

"Hacemos nuestra esta moción suspensiva para los efectos reglamentarios.- Jesús Z. Moreno.- Doctor A. E. Vidales.- F. Ramírez Luque.- Licenciado Pablo H. Sánchez. - Carlos Gómez."

El C. Moreno Jesús Z: Pido la palabra.

El C. secretario Valadez Ramírez: ¿Para fundarla?

El C. Moreno: Para una aclaración.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Moreno: Señores representantes: (Voces: ¡Tribuna! ¡Tribuna!) Es muy breve.

El C. secretario Valadez Ramírez: Artículo 108 reglamentario.

- El C. Borrego. Moción de orden.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Borrego: En toda moción suspensiva, ciudadano presidente, el autor de ella la funda, y si hay alguna otra persona que quiera, la impugna y luego se pregunta si se toma en consideración.

El C. presidente: Precisamente en virtud de que había solicitado la palabra el señor Jesús Z. Moreno, ya se ha hecho la advertencia a el personalmente para que no se sienta herido, y se le da la palabra al señor subsecretario de Gobernación, que es el autor de esta proposición.

El C. Moreno Jesús Z: Pido la palabra para una aclaración.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Artículo 107. Ninguna discusión se podrá suspender sino por estas causas: ... quinta, por proposición suspensiva que presente alguno o algunos de los miembros de la Cámara y que está apruebe.

"Artículo 108. En este último caso, se leerá la proposición, y sin otro requisito que oír a su autor, si la quisiera fundar, y a algún impugnador, si lo hubiere, se preguntará a la Cámara si se toma en consideración inmediatamente. En caso afirmativo, se discutirá y votará en el acto, pudiendo

hablar al efecto tres individuos en pro y tres en contra; pero si la resolución de la Cámara fuese negativa, la proposición se tendrá por desechada."

El C. Castillo Francisco: Moción de orden.

El C. presidente: En tal concepto, tiene la palabra el ciudadano licenciado Lugo, subsecretario de Gobernación.

El C. Manero: Pido la palabra para interpelar al ciudadano subsecretario de Gobernación, si él lo permite.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Manero para interpelar el señor subsecretario de Gobernación.

El C. Manero: Señor subsecretario: Ha llegado a mi conocimiento por algunos compañeros, que obra en poder de usted un oficio del Ejecutivo, diciendo que retira la ley respecto de la instalación de ocho bancos de emisión; si esto es exacto, considero ociosa la discusión de la moción suspensiva. Ruego atentamente a su señoría se sirva informar a la Cámara sobre el particular

El C. subsecretario de Gobernación: Señores diputados: Contestando la interpelación del señor diputado Manero, categóricamente respondo que es verdad. Ciertamente, a juicio del Ejecutivo, parece conveniente solicitar el permiso de esta honorable Asamblea para retirar su proyecto de ley que adiciona el artículo 28 de la Constitución de la República, si por vuestra resolución se declara que no ha lugar a suspenderse la discusión del referido proyecto de ley. Abundando en el mismo criterio del señor diputado Manero, me adhiero a su iniciativa, y autorizado por el Ejecutivo de la Unión, solicito el permiso para retirar esa iniciativa, dejando como constancia de esta autorización un oficio que traía a esta honorable Asamblea, para que se sirviera dar cuenta con tal solicitud. En tales términos, muy atentamente y con el respeto debido, suplico a vuestras señorías se sirvan acordar de conformidad esta solicitud. (Aplausos.)

El C. secretario Valadez Ramírez: En votación económica se consulta si se permite retirar la moción suspensiva que ha sido presentada. Los que estén por la afirmativa sírvanse ponerse de pie. Sí se permite.

Presidencia del C. TREJO FRANCISCO

- El mismo C. secretario leyendo:

"Poder Ejecutivo Federal.- México.- Estados Unidos Mexicanos.- Secretaría de Gobernación.- Departamento Consultivo.- Número 161.

"Ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados.- Presente.

"El ciudadano presidente de la República, en oficio fecha de ayer, tuvo a bien promover el aplazamiento por sólo quince días, de la discusión referente al proyecto de ley enviado por el Ejecutivo federal, en que se consulta la adición al artículo 28 de nuestra Constitución Política, y para hacer esta moción suspensiva tuvo en cuenta que, dentro de aquel breve término, le sería dable presentar todos los datos y antecedentes que él estima necesarios y conducentes para ilustrar el criterio de esa H, Cámara en la discusión y resolución de un problema de tan vital importancia para el restablecimiento del crédito nacional, y de fecundos resultados para la marcha segura y tranquila de la administración pública; pero, no habiendo merecido dicha moción suspensiva la aprobación de esa H. Cámara de Diputados, y estimando al mismo ciudadano presidente de la República que - sin tener a la vista aquellos elementos de convicción - resulta por ahora innecesaria la discusión de aquella iniciativa de reforma constitucional, me encarga hacer saber a ustedes que se ve el caso de retirarla, a cuyo efecto, en nombre del ciudadano presidente de la República, pido respetuosamente que se tenga por retirada dicha iniciativa, sin que esto afecte en manera alguna el programa de los negocios comprendidos en la convocatoria a sesiones extraordinarias.

"Rogando a ustedes sean servidos de dar cuenta de esta nota a la misma H. Cámara, me es grato protestarles las seguridades de mi más atenta consideración.

"Sufragio Efectivo. No Reelección.- México, D. F., febrero 16 de 1921.- Por A. del secretario, el subsecretario, J. I. Lugo."

Trámite: De enterado.

El C. Casas Alatriste: Reclamo el trámite. Tiene que pedirse permiso a la Cámara. Reclamo el trámite.

El C. presidente: Tiene la usted la palabra.

El C. Casas Alatriste: El Ejecutivo retira, por medio de ese oficio, el proyecto de ley que envió a la Cámara, y en mi concepto, debe preguntársele a la Cámara si accede a que se retire este proyecto de ley que está ya a discusión. Lo que se acaba de aceptar no fue el proyecto, sino la moción suspensiva que el mismo Ejecutivo había presentado.

El C. presidente: Se va adicionar el trámite en el sentido: de enterado, y accédase a lo que pide el Ejecutivo, (Voces: ¡No! ¡No!) preguntando previamente a la Asamblea.

El C. Casas Alatriste: Para una moción de orden.

El C. secretario Valadez Ramírez: En votación económica se consulta a la Asamblea si se permite retirar el proyecto de ley.

El C. Espinosa Luis: Pido la palabra.

El C. Casas Alatriste: ¡Moción de orden! En mi concepto, tiene primero que ponerse a discusión la solicitud del Ejecutivo y correr lo trámites: ponerse a discusión y ver si hay oradores que se inscriban en pro o en contra para ver qué resolución cae a dicha solicitud.

- El mismo C. secretario: Precisamente por esto que expresa el ciudadano Casas Alatriste, la Presidencia había tenido a bien dar el trámite para que fuera objeto de discusión, y el ciudadano Casas Alatriste se opuso a ello. (Risas.)

Por acuerdo de la Presidencia, en votación económica se consulta a la Cámara si se permite devolver el...

El C. Castillo Francisco: Pido la palabra.

El C. presidente: ¿Con qué objeto?

El C. Castillo Francisco: Con el objeto de informarme si al retirarse el proyecto (Voces: ¡No! ¡No!) se hará con el objeto de, es decir, si al retirarse la ley se hace con el objeto de presentar... (Voces: ¡No es eso! ¡No es eso! Risas.) un nuevo

proyecto de acuerdo con el dictamen de las comisiones, o si esto se hace con el fin de aplazar, es decir, si se hace para obtener lo que se pretendía con la moción suspensiva. (Siseos.)

El C. presidente: El oficio que la Secretaría de Gobernación entregó pidiendo que se retire el proyecto de ley sobre la creación de ocho bancos, no modifica en nada la convocatoria a sesiones extraordinarias; únicamente implica retirar el proyecto de ley en lo que se refiere a las adiciones al artículo 28 y puede la Cámara ocuparse de discutir la ley de Organización de las Instituciones Bancarias.

El C. Castillo Francisco: Pido la palabra. ¿El objeto es, como ha dicho el señor subsecretario al informar, que estaba de acuerdo con el dictamen de las comisiones y, por consiguiente, si se retira, qué objeto tiene retirarlo? ¿No presentarlo? (Risas.)

El C. presidente: El objeto del trámite es a virtud de la reclamación hecha por el ciudadano Casas Alatriste, de contestar al Ejecutivo en el sentido de que la Asamblea ha aprobado devolver el proyecto.

El C. Espinosa Luis: ¡Moción de orden!

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Espinosa Luis: Estamos perdiendo miserablemente el tiempo. El asunto es muy sencillo: aquí no cabe más que después de haberse dado lectura al documento, que la Secretaría diga que está a discusión. Claro está que nadie va a oponerse a que sea retirada esta solicitud, no habrá, pues, discusión y una vez retirada esa solicitud, entrará a debate el proyecto sobre el establecimiento del Banco Único, que ya existe formulado por las comisiones respectivas desde la Legislatura pasada.

El C. presidente: La Presidencia insiste en preguntar si se consiente en que se devuelva, en los términos en que lo solicita el Ejecutivo, el proyecto de ley.

El C. Casas Alatriste: ¡Moción de orden!

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Casas Alatriste: Me permito insistir respetuosamente a su señoría que no puede hacerse a la Asamblea la pregunta que vuestra señoría insinúa, antes de ponerse a discusión la solicitud del Ejecutivo y que, en consecuencia, antes de hacer esta consulta a la Asamblea se debe poner a discusión.

El C. presidente: Para obviar tiempo se va a pone a discusión. (Voces: ¡No para obviar tiempo, sino porque es reglamentario!)

El C. Manrique: Pido la palabra. Moción de orden.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Manrique: Señores diputados: Creo poder, con mi aclaración, evitar dificultades y que se resuelva el asunto. Una solicitud del Ejecutivo no puede ser motivo de discusión en la Cámara; una solicitud, un oficio del Ejecutivo, debe pasar acto continuo a comisiones, y es el dictamen de la Comisión de Gobernación el que podemos discutir, no el oficio mismo del Ejecutivo. La Comisión de Gobernación decidirá si es de concederse o no el retiro del proyecto.

El C. secretario Valadez Ramírez: Está a discusión el trámite dictado por la Presidencia.

- EL C. Lara César A: Pido la palabra.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Lara César A: Para obviar tiempo, yo sí solicitaré muy respetuosamente de la honorable Asamblea, que dispense los trámites a esa solicitud del Ejecutivo. Yo pido la dispensa de trámites. (Murmullos. Desorden.) Para acabar mi aclaración, señor presidente. Como parece que no se me ha entendido, digo: que la dispensa de trámites mía es para que no pase a Comisión, sino que se resuelva el asunto inmediatamente.

El C. secretario Valadez Ramírez: Habiendo hecho suya la solicitud del Ejecutivo el ciudadano Lara y pidiendo dispensa de trámites, en votación económica se consulta si se dispensan. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Se dispensan los trámites. Está a discusión.

- El C. presidente; Tiene la palabra para una aclaración, el ciudadano Manero.

El C. Manero: Realmente, señores diputados, no hay motivo para hablar en esta ocasión ni en pro ni en contra, supuesto que está unánime la opinión de la Asamblea, aceptando con beneplácito la idea del Ejecutivo retirando la ley que había sido recibida tan poco gratamente en esta Asamblea; de manera que mis palabras no deben ser sino de loa para el Ejecutivo, porque, efectivamente, nos está dando una prueba de respeto a la Representación Nacional, y al pensamiento que en Representación Nacional germina al optar inmediatamente por retirar este proyecto tan luego como ha visto que las comisiones se pronunciaban en contra del mencionado proyecto. Creo, pues, que el país entrará en una era de verdadera paz y prosperidad si el Ejecutivo sigue asumiendo constantemente esta actitud respetuosa, que seguramente le será siempre correspondida por el Legislativo. Así es, señores diputados, que espero estaremos todos absolutamente anuentes a que el Ejecutivo retire esta ley de los ocho bancos de emisión, para que, en cumplimiento de la segunda parte de la misma fracción de la convocatoria a sesiones extraordinarias, comencemos a discutir la ley que habrá de normar las instituciones de crédito en el país.

El C. secretario Valadez Ramírez: No habiendo más oradores, en votación económica se consulta si se permite retirar la ley, como lo solicita el Ejecutivo. Los que estén por la afirmativa, se servirán ponerse de pie. Sí se permite.

El C. Espinosa Luis: Pido la palabra para rectificar un hecho, relacionado con el asunto que acaba de tratarse.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Espinosa: Ciudadanos representantes: Quiero aprovechar esta oportunidad para rectificar un hecho que, en mi concepto, es de bastante importancia para la vida parlamentaria de esta XXIX Legislatura. Hace unos cuantos días apenas, señalaba como responsable de ciertos actos del Ejecutivo de la República, a la Comisión legislativa del mismo presidente de la República. El hecho de que la iniciativa que acaba de rechazar vuestra soberanía haya sido tan mal recibida por esta Asamblea, viene a comprobar de manera absoluta la aseveración que hice respecto a esta Comisión hace unos cuantos días. Y no puede ser de otro modo, ciudadanos representantes; lo esencial en este caso es, como dice un refrán muy vulgar y muy viejo: "saber matar el gallo a tiempo", y no puedo menos

que felicitar calurosa y entusiastamente a esta Asamblea, porque ha matado el gallo a tiempo. Desde luego, señores, esta Comisión legislativa, que no es otra cosa que una cueva de los cuarenta reaccionarios, (Risas.) debe seguir una orientación honrada, y lo que está haciendo no es honrado ni es político, ni es patriótico, como lo voy a demostrar en este instante. Esta Comisión quiso venir a sorprender la buena fe de esta Asamblea con este proyecto, con esta iniciativa que, torpe y malévolamente, llama adición de reformas a la Constitución; y no, señores, todos vosotros sabéis muy bien que esta iniciativa no puede ser, en manera alguna, una adición a la Constitución Política del país. Este documento no es más que una reforma verdaderamente constitucional, y para que esta reforma pudiera cristalizarse en hechos, era necesario que primero la aprobaran las dos Cámaras, después la mayoría de las legislaturas de los Estados; de acuerdo también con el precepto constitucional y solamente entonces, oídlo bien, hubiera podido establecerse la pluralidad de bancos que el Ejecutivo solicita; pero el proyecto da a entender que se aplaza la creación del Banco Único y se instituyen desde luego los seis y ocho bancos de emisión a que se refiere la iniciativa, y fijaos que en este hermoso monumento, que en este monumento piramidal de la Comisión legislativa de la Presidencia de la República, se encierran absurdos hasta de redacción y también de fondo, como el que va a oír vuestra soberanía. El artículo 4o. dice:

"Los bancos serán exclusivamente de emisión, y podrán llevar a cabo las operaciones que autorice la concesión respectiva."

¿En qué quedamos? ¿Son absolutamente, exclusivamente de emisión? No, señores, porque a renglón seguido dice que "también podrán llevar acabo todas las operaciones que autorice la concesión respectiva." ¿Se ha visto, señores representantes, absurdo, disparate más grande que éste? Esto es verdaderamente monstruoso y parece mentira que este proyecto haya sido resuelto, si no es que parido (Risas.) por todos esos señores que gozan de reputación de buenos abogados que, como ya lo dijo muy bien Lind, por desgracia en México el tipo general del abogado es la clase peor de la sociedad de México. (Risas. Aplausos.) Claro, señores representantes, que he dicho con toda conciencia que es el tipo general; desde luego convengo en que honrosas, y muy honrosas excepciones. (Risas. Voces: ¡Ah! ¡Ah! ¡Nombres! ¡Nombres!) Desde luego, señores, creo que el palo se le ha dado en la cabeza a esa Comisión. Está muy lejos de mí la idea de considerar responsable al presidente de la República en lo personal, ni mucho menos al secretario de Hacienda y Crédito Público, de este aborto legislativo. Yo hago recaer toda la responsabilidad sobre esta Comisión, puesto que el proyecto tiene fecha ocho o nueve de este mes y esta famosa Comisión tiene más de un mes de estar trabajando, como consta a toda la Asamblea.

- El C. prosecretario Castrejón, leyendo:

"Dictamen de la 2a. Comisión de Puntos Constitucionales, que consulta un proyecto de ley por el que se reforma el artículo 108 de la Constitución general:

"Señor:

"Pasó al estudio de la subscripta Comisión 2a. de Puntos Constitucionales, el expediente formado con las iniciativas presentadas ante vuestra soberanía para reformar la última parte del artículo 108 de la Constitución general de la República, que fija como únicas causas para poder exigir responsabilidades al encargado del Poder Ejecutivo federal, durante el período de su encargo, el delito de traición a la patria y los delitos graves del orden Común.

"Dichas iniciativas son dos: una presentada por el C. Antonio Valadez Ramírez y subscripta por otros varios diputados de la XXVIII Legislatura federal, y la otra firmada por el actual presidente de la República.

"La primera, que hicieron suya las legislaturas de los Estados de Sonora, Sinaloa y Zacatecas, consiste en que el encargado del Poder Ejecutivo de la nación pueda ser acusado en el período de sus funciones, no sólo por traición a la patria y delitos graves del orden Común, sino también por ataques a la libertad electoral y por violación expresa de la Constitución. Es decir: por las mismas causas por que era enjuiciable, conforme al artículo 103 de la Constitución de 1857.

"Aunque muy digna de encomio, por significar para su autor el laudable empeño de mejorar las instituciones nacionales, la Comisión se ha visto en el caso de no aceptarla sino en principio, porque de aprobarla al pie de la letra, dada la generalidad de los términos "ataques a la libertad electoral" y "violación expresa de la Constitución", se prestarían tales conceptos a diversidad de interpretaciones, que aprovecharían indistintamente los partidarios del Ejecutivo y los enemigos de él, para hacer escándalo en las Cámaras, haciéndose nugatoria la responsabilidad de los presidentes, por no fijarse con precisión las causas de su enjuiciamiento.

"La segunda iniciativa, esto es, la presentada por el C. Alvaro Obregón, que hicieron suya los actuales representantes del Distrito Federal, consiste en agregar a las causas de responsabilidad exigibles al presidente de la República, durante sus funciones, que ya señala la Constitución vigente, las que se expresan y analizan a continuación:

"a) Por atentar contra la existencia o el libre funcionamiento del Congreso de la Unión, de cualquiera de sus Cámaras o de las Suprema Corte de Justicia; o por violar el fuero constitucional de los miembros de esas corporaciones."

"La Comisión ha estimado necesario que quede incluida entre los cuerpos colegiados que se mencionan, la Comisión Permanente del Congreso, por ser la representante legal del Congreso de la Unión en los recesos de él; y máxime, cuando se sabe que, conforme a las reformas aprobadas últimamente por esta H. Asamblea, la Comisión Permanente ha sido facultada para convocar a sesiones extraordinarias al Poder Legislativo o a una sola de las Cámaras, facultad cuyo ejercicio pudiera impedir el encargado del Poder Ejecutivo, si no fuera posible enjuiciarlo por ataques al libre funcionamiento de dicha Comisión.

"b) Por atentar contra la libertad del sufragio, violando la de emisión del voto de los electores o ejerciendo presión material para que el voto se verifique en determinado sentido."

"La amplitud de los conceptos contenidos en esta causal de enjuiciamiento, es reveladora de la conciencia democrática del actual presidente de la República, y por ello merece nuestro aplauso; pero juzgamos que tal amplitud es peligrosa para la estabilidad de nuestras instituciones relativos al Poder Ejecutivo, y resolvimos modificarla en el sentido de que le podrá acusar cuando dicte medidas o emplee procedimientos encaminados a coartar la libertad del voto o a que el resultado de la votación se altere de cualquier modo, pues el presidente sólo podrá cometer los delitos que se prevén en este inciso, moviendo la máquina administrativa por medio de órdenes y otros procedimientos, y no de un modo personal y directo, como parece inferirse de los términos de la iniciativa.

"Además, estimamos indispensable catalogar en este inciso el caso en que se impida o se trate de impedir que las elecciones de poderes locales o federales no se verifiquen en las fechas que marquen las leyes respectivas.

"c) Por atentar contra la soberanía interior de los Estados, interviniendo en la elección de los funcionarios legales o impidiéndoles el ejercicio de sus funciones legales."

"En virtud de que en la causa anterior ya se trató de que no intervendrá el presidente de la República en la elección de los poderes de los Estados, debe suprimirse en ésta oración gramatical "interviniendo en la elección de los de los funcionarios legales"; y como en la última frase se dice que puede atentarse contra la soberanía, impidiendo a los funcionarios de los Estados el ejercicio de sus funciones legales, la Comisión, deseosa de que sólo se procese al presidente de la República por causas que sean verdaderamente perjudiciales a nuestras fundamentales instituciones, se permite consultar que, en tratándose de ataques a la soberanía de los Estados, sólo se considere como causa de enjuiciamiento, el hecho de impedir el funcionamiento legal de uno de los poderes de los Estados, porque tal atentado sí es de consecuencias gravísimas para el orden constitucional y administrativo de dichas entidades.

"d) Por malversar los fondos públicos, ordenando o autorizando erogaciones no comprendidas en las leyes de Presupuestos o en disposiciones legales especiales

"e) Por celebrar con gobiernos extranjeros pactos, convenios o acuerdos y ponerlos en ejecución sin la previa aprobación del Senado."

"f) Por no promulgar las leyes que expida el Congreso de la Unión, en el caso de la fracción (c) del artículo 72 constitucional."

"Estas tres causales, en concepto de la Comisión, no necesitan explicación ni modificación alguna.

"g) Los secretarios de Estado serán también enjuiciables en el tiempo de su encargo, por la sanción que presten a los actos delictuosos del presidente, señalados en los incisos anteriores.

"Los mismos secretarios serán en general enjuiciables, durante el ejercicio de sus funciones, por la sanción que le presten a los actos delictuosos del presidente, no comprendidos en los propios incisos que anteceden."

"Estas dos partes de la iniciativa deben suprimirse por ser redundantes, pues, conforme al párrafo primero del artículo que se trata de reformar, los secretarios del Despacho, durante sus funciones, pueden ser procesados por los delitos comunes que cometan y por los delitos, faltas u omisiones oficiales en que incurran, entre los cuales quedan comprendidos los que cometan juntamente con el presidente, aun cuando por ellos no puede enjuiciarse al encargado del Poder Ejecutivo.

"La Comisión, haciendo un estudio de los deberes constitucionales del presidente de la República, y de la trascendencia que pudiera tener para el país la falta de cumplimiento de ellos, cree necesario aumentar las causales que honrada y concienzudamente propone el C. Obregón, con las siguientes:

"Por permitir, sin previa autorización del Senado, el paso de tropas extranjeras por el territorio nacional o que escuadras de otras potencias se estacionen por más de un mes en aguas mexicanas.

"Por ausentarse del territorio nacional o cambiar la residencia de uno o más de los Supremos Poderes de la Federación, sin permiso del Congreso.

"Por declarar la guerra, en nombre de los Estados Unidos Mexicanos, sin que previamente haya expedido la ley respectiva el Congreso de la Unión.

"La gran importancia de estas prevenciones, excusa a los subscriptos de explicar a la H. Asamblea los fundamentos que tuvieron para consultar su aprobación.

"Por las razones expuestas, nos permitimos proponer el siguiente proyecto de reformas constitucionales:

"Artículo único. Se reforma el último párrafo del artículo 108 de nuestra Carta fundamental, en los términos siguientes:

"El presidente de la República, durante el período de su encargo, podrá ser acusado:

"a) Por traición a la patria.

"b) Por delitos graves del orden Común.

"c) Por atentar contra la existencia o el libre funcionamiento del Congreso de la Unión, de la Comisión Permanente, de cualquiera de las dos Cámaras o de la Suprema Corte de Justicia; o por violar el fuero constitucional de esas corporaciones.

"d) Por atentar contra la libertad del sufragio, dictando medidas o empleando procedimientos tendentes a impedir que se verifiquen las elecciones de poderes locales o federales en las fechas señaladas por las leyes; a que los votos de los electores se emitan en determinado sentido, o a cambiar total o parcialmente el resultado legal de la votación.

"e) Por atentar contra la soberanía de los Estados, impidiendo el funcionamiento legal de alguno de sus poderes.

"f) Por malversar los fondos públicos, ordenando o autorizando erogaciones no comprendidas en las leyes de Presupuestos, o en disposiciones legales especiales.

"g) Por no promulgar las leyes que expida el Congreso de la Unión, en el caso del inciso (c) del artículo 72.

"h) Por celebrar con gobiernos extranjeros

pactos, convenios o acuerdos, si los pone en ejecución sin la previa aprobación del Senado.

"i) Por ausentarse del territorio nacional o cambiar la residencia de uno o más de los Supremos Poderes de la Federación, sin previo permiso del Congreso.

"j) Por permitir, sin previa aprobación del Senado, el paso de tropas extranjeras por el territorio nacional, o que escuadras de otras potencias se estacionen por más de un mes en aguas mexicanas.

"k) Por declarar la guerra, en nombre de los Estados Unidos Mexicanos, sin que previamente haya expedido la ley respectiva el Congreso de la Unión."

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. - México, D. F., a 14 de febrero de 1921.- M. F. Ortega.- Leopoldo Estrada."

Está a discusión en lo general. Los ciudadanos que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse.

El C. Siurob: Pido la palabra, señor presidente, para suplicar a su señoría que invite a la Comisión a fundar su dictamen.

El C. presidente: Se invita a algún miembro de la Comisión que pase a fundar su dictamen.

El C. Ortega Miguel F., de la Comisión: Ciudadanos representantes: Me permitiré explicar cuál fue el criterio general que siguió la Comisión presidida por mí, para rendir este dictamen, sin que mi explicación pueda interpretarse en el sentido de que quiera ofender de algún modo la ilustración de esta honorable Asamblea.

El criterio que siguió la Comisión fue éste, señores representantes: Dentro de un régimen representativo y efectivo como el que tenemos en México, es natural, es evidente, que los representantes del poder, los encargados del poder no vienen a ser sino mandatarios de la sociedad, y siendo mandatarios, claro está que están en la obligación de ejercer sus funciones dentro de las facultades que el mandante les ha conferido. En esta forma las cláusulas del mandato están en la Constitución general y en las leyes federales que se derivan de la misma Constitución. ¿Cuáles serán las responsabilidades en que deben incurrir los mandatarios cuando violan la confianza depositada en ellos por la sociedad, o cuando dejan de cumplir debidamente sus deberes, porque no quieren o porque no pueden cumplirlos? Tres son las sanciones que hay para que los funcionarios públicos cumplan debidamente con sus deberes; esos tres procedimientos son la responsabilidad penal que debe exigirse al funcionario, la responsabilidad civil que debe exigirse a los funcionarios y, por último, la responsabilidad política en que incurre el funcionario. La responsabilidad penal debe exigírsele ante los tribunales del orden Común, ya que dentro de los regímenes republicanos la separación de poderes, constitucionalmente hablando, es absoluta. La responsabilidad civil del funcionario consiste en que indemnizará, bien a la sociedad por el perjuicio que le haya causado en sus intereses, bien al ciudadano a quien haya perjudicado también en sus intereses. Para eso están también los tribunales del orden Común. Pero en cuanto a la responsabilidad política, ¿en qué debe consistir esa responsabilidad política? ¿Qué fundamentos tiene esa responsabilidad política? ¿Cuál es el objeto de ella y cuál es su extensión? Tres son los problemas que deben resolverse para conocer perfectamente esto de la responsabilidad política. La responsabilidad política, señores, tiene por fundamento, por esencia, lo que ya había dicho antes: el derecho que tiene la sociedad al nombrar a un mandatario para exigirle que sepa cumplir con los deberes que tiene. Ese es el fundamento de la responsabilidad política. ¿Cuál es el objeto de la responsabilidad política? porque es lo que debemos estudiar aquí en esta Representación Nacional. El objeto exclusivo de la responsabilidad política es suspender al funcionario en sus funciones, o destituirlo de una vez de esas funciones, porque es un funcionario criminal, porque es un funcionario remiso en el cumplimiento de sus obligaciones, o porque es un funcionario que no da la medida para desempeñar las funciones sociales que le están encomendadas. Así es, pues, que el objeto único de la responsabilidad política aquí y en cualquier parte del mundo, es destituir al funcionario público o suspenderlo cuando menos en sus funciones. Pues bien; esa responsabilidad política deberá existir para todos aquellos actos del Ejecutivo que traspasaren la escala de acción que constitucionalmente le está marcada con cualquier otro acto o cualquier otro delito del orden Común que cometiere el funcionario público; pero como tenemos, por otra parte, el interés social, el interés de la nación que se inclina hacia la estabilidad de los gobiernos, porque no es posible que estén cambiándose día a día los presidentes de la República, ni mes a mes, serían trastornos sociales: vemos la efervescencia política con las elecciones de presidente de la República, con las elecciones de diputados, con las elecciones de cualquier mandatario; no es posible, pues, que todos los días la sociedad estuviera soportando estos trastornos políticos y trastornos sociales; luego hay dos intereses marcados, y muy grandes: uno en el sentido de que todos los funcionarios públicos respondan de todos los delitos, de todas sus omisiones; otro en que la sociedad está interesada también, en que los funcionarios públicos no se estén cambiando de un día para otro. ¿Cómo entonces cohonestar estos dos intereses encontrados? La Comisión estimó que el mejor criterio que podía seguirse era este solo: señalar como causa de enjuiciamiento del presidente de la República durante el período de sus funciones aquellos hechos, aquellos atentados que perpetrara el presidente de la República y que trajeran como consecuencia el desquiciamiento constitucional o la disolución social; es decir, sólo poder acusar al presidente de la República y exigirle la responsabilidad política, que es la única que podemos exigir, por aquellas razones verdaderamente fundamentales que existen en nuestra Constitución, y que de caer esas razones por atentados del Ejecutivo, vendría la disolución social o cuando menos un trastorno político de gran trascendencia. Este fue el criterio que la Comisión tuvo para hacer reformas a la iniciativa presentada por el ciudadano Obregón en el sentido de modificar su iniciativa o agregarle otras causas de responsabilidad. Esta mañana leía yo en un diario de la capital de la República, un artículo en que se critica el dictamen de la Comisión,

porque dice que vamos a constituirnos nosotros en verdaderos tiranos respecto del presidente de la República, y que el Ejecutivo no podrá funcionar si se le puede enjuiciar por las causas que nosotros señalamos; el editorial me parece sano en su intención, pero me parece muy poco meditado en sus pensamientos. Es verdad que sería peligroso que por cualquier causa de las que nosotros señalamos, pudiera destituirse desde luego al presidente de la República en el ejercicio de sus funciones; pero es que olvida el autor de ese editorial que la responsabilidad política del presidente de la República por cualquiera de las causas que nosotros hemos señalado, no se le va a exigir de un día para otro. La parte acusadora en un juicio político tiene que ser la Cámara de Diputados; claro está que si viene una acusación o una delación contra el presidente de la República, la Cámara de Diputados no va a oír todas esas delaciones ni va a abrigar todas esas acusaciones; tendrá que estudiar el fundamento de la acusación, la trascendencia de esa acusación y el momento oportuno de presentarla o no presentarla. Si se tratara de una acusación ante juez del orden Común, estaba bien, habría peligro; pero aquí la parte acusadora es la Cámara de Diputados, un cuerpo colegiado esencialmente político que está en la obligación, cuando menos, de conocer el momento oportuno de presentar una acusación. Otra razón más a favor de lo que yo digo es esta: el Jurado de Sentencia no es tampoco un tribunal del orden Común no es una sola persona; el Jurado de Sentencia es la Cámara de Senadores, que oirá la acusación de la Cámara de Diputados y después de que ya pasado los fundamentos de ella, resolverá si ha lugar o no ha lugar a que se exija la responsabilidad política al funcionario, y hay que tener en cuenta que ese Jurado de Sentencia tiene que absolver o condenar por el voto de las dos terceras partes del total de sus miembros. Vemos cómo, pues, en el procedimiento mismo que tiene que seguirse para exigir las responsabilidades políticas del presidente, hay una traba, hay un contrapeso constitucional que no permitirá lo que el editorial del periódico sostiene: que todos los días estemos acusando al presidente de la República y exigiéndole responsabilidades o destituyéndolo de su puesto. Se pensó también por parte de la Comisión otro ataque que pudiera hacerse a esta manifestación clara que ha de estamparse en la Constitución general de la República, como causa de enjuiciamiento del presidente, y claro está que hay diferencia de criterios en el sentido de que esto no es posible llevarlo a cabo, y dicen con alguna razón:

"Tan no es posible, que en México nunca se ha dado el caso de enjuiciar a ningún presidente de la República". Ciertamente, señores compañeros; pero es que el presidente de la República en tiempo de don Porfirio Díaz, era intocable; es que entonces los representantes del pueblo, como malamente se llamaban, no eran tales representantes, sino personas escogidas por el señor don Porfirio Díaz de los más acercados a su Gabinete o a sus amigos; y esas eran unos paniaguados que sólo venían aquí a la Cámara a hacer lo que el Ejecutivo les decía. Pero ahora que el valor civil de cada uno de nosotros ha subido muchos puntos; ahora que ya los ciudadanos, especialmente nosotros que nos hemos metido en política, hemos aprendido a tener valor civil, hemos aprendido a tener valor para enfrentarnos con cualquier mandatario estamos aprendiendo, ¿por qué, señores, no hemos de poder un día lanzar una acusación contra el presidente de la República y sostener esa acusación ante el Senado en caso de que las causas del enjuiciamiento que se propongan sean verdaderamente fundadas? Se me dirá también.: no es posibles exigir responsabilidad dentro del funcionamiento que la Constitución da al Senado; el Senado, se dice, es reaccionario siempre, el Senado es el contrapeso que tiene la Cámara de Diputados, el obstáculo mayor que tiene la Cámara de Diputados para poder orientar sus funciones y llevarlas a cabo en el menor tiempo posible. Hay mucho de verdad en eso, señores, y en todas las Cámaras altas del mundo se encontrará lo mismo; pero claro está que cuando la causa por la que se enjuicia al presidente de la República sea verdaderamente trascendental, sea grave, el Senado, con todo y su reaccionarismo de abolengo, yo os garantizo que haría todo por sentenciar y condenar al presidente de la República; pero no hagamos el juicio aquí en la Cámara de Diputados constituyéndonos nosotros en Jurado de Sentencia, por que entonces sí por las pasiones políticas que siempre existen nosotros, que muchas veces de un arroz hacemos una montaña, no estaríamos capacitados para ser un tribunal; estaríamos capacitados, y lo estamos, para ser un Jurado de Acusación. Expuestos ya los fundamentos que tuvo la Comisión para hacer las modificaciones que contiene su dictamen, estoy dispuesto, como es mi obligación, a contestar cualquiera de las interpelaciones que los señores representantes tengan a bien hacerme. (Aplausos.)

El C. presidente: Tiene la palabra en contra el ciudadano Serrano Hermosillo, en lo general.

El C. Serrano Hermosillo: Señores diputados: Al llegar a esta tribuna, he sentido mi ánimo sobrecogido de cierto temor, temor nacido por el respeto que me merece esta honorable Asamblea. Soy el primero en reconocer el patriotismo y la buena fe con que ha obrado la Comisión, pero también soy el primero en reconocer que la Comisión no ha sabido interpretar realmente los sentimientos del pueblo mexicano. (Voces: ¡No se oye!) Lo siento, señores; no puedo hablar más recio. Bien comprendo, señores, que la Comisión, como he dicho antes, ha obrado en una forma altamente patriótica, pero los anhelos de la revolución, los anhelos del pueblo mexicano exigen algo más, queremos algo efectivo, algo práctico, no utopías. Procuraré ser muy breve, porque sé que oradores competentes vienen también a tratar de este mismo asunto, y como sé que al establecerse el régimen parlamentario será un motivo de regocijo en el distrito que tengo la honra de representar ante este honorable Congreso, cumpliendo así con un deber vengo a hablar en favor de ello. Me diréis que estoy en favor de algo que no está incluido en la convocatoria, pero al hacerlo, lo hago con el deseo de que este mismo punto se trate más tarde. El deber, como he dicho antes, es el que me ha traído aquí, el sentimiento del deber que, como ha dicho don Joaquín Baranda, es superior a cualquier otro sentimiento, y tengo la obligación de venir a hacer presentes los

ideales del distrito que tengo la honra de representar. Si vosotros por el momento desecháis este proyecto y esperáis oportunidad para dar cabida a la proposición mía, habréis dado un acuerdo que ate las manos de los que más tarde quieran convertirse en tiranos, (Voces: ¿No se oye!) Debemos sentirnos satisfechos de que el presidente haya procurado él mismo restringirse esas facultades saliéndose de los viejos moldes en que sus antecesores habían logrado guardar todos aquellos medios de poder. Si vosotros dais un voto aprobatorio a mi iniciativa, el proyecto que os he esbozado antes, haréis con ello que las campanas de antiguas dictaduras toquen a muerto y que las campanas de la revolución toquen a gloria. (Murmullos.)

El C. presidente: tiene la palabra en contra el ciudadano Espinosa.

El C. Espinosa Luis: Ciudadano representantes: Vengo a oponerme a la aprobación del dictamen que se discute y a abogar por la implantación inmediata del sistema parlamentario, ya que este sistema es una de las promesas más legítimas de la revolución. Probaré hasta la evidencia que la implantación del régimen parlamentario en estos momentos está dentro del espíritu de la fracción IX del decreto de convocatoria a sesiones extraordinarias. Para ir con método, señores representantes, necesito primer atacar el dictamen y luego sostener en tesis general la conveniencia del régimen parlamentario. Desde luego ciudadanos representantes, debemos hacer un poco de historia acerca del artículo 108 constitucional. Este artículo en la Constitución de 57 hace responsable al Ejecutivo de la Unión y consigna que puede ser acusado por traición a la patria, por violaciones a la Constitución general de la República y por delitos graves del orden Común. En el Constituyente de Querétaro este artículo fue reformado no obedeciendo a intereses generales, no obedeciendo a intereses altos, sino a intereses mezquinos y a intereses personales. El grupo que giró alrededor del proyecto de reformas del ciudadano Venustiano Carranza, el grupo incondicional que a todo trance quiso hacer imperar este proyecto de reformas, el grupo listo y práctico en asuntos de derecho constitucional que sirvió de instrumento, que sirvió de máquina a Carranza para cristalizar sus mezquinas ambiciones, quitó a este artículo la parte consciente en el encausamiento del Ejecutivo por violaciones a la Constitución general de la República. Ya hemos visto, ciudadanos representantes, cuáles han sido los amargos frutos de esta innovación constitucional. El ciudadano Venustiano Carranza, que en los albores de la revolución, y casi hasta en su triunfo por medio de las armas, es decir, casi hasta cuando la fuerza representada por medio de las armas se impuso, Venustiano Carranza se exhibió ante la faz del mundo como un jefe que acaudillaba un movimiento verdaderamente revolucionario, como un hombre más o menos demócrata; pero cuando Venustiano Carranza, de jefe de un movimiento genuinamente revolucionario se transformó por la voluntad del voto del pueblo en presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, Carranza dejó por los suelos su bandera de revolucionario y enarboló de manera franca la bandera negra de la reacción. Y entonces, señores, por virtud de la inviolabilidad de que estaba investido el presidente de la República, en virtud de la inmunidad cometió toda clase de atropellos a la Constitución Política que él mismo había prohijado y que al escalar el alto puesto de presidente había jurado cumplir y hacer cumplir. Pero en virtud de este artículo, señores, Venustiano Carranza llegó hasta los atentados más grandes, hasta las violaciones sin nombre, y así fue como vimos que no tuvo empacho ninguno, ya que no había atrás de sus actos sanción que lo condenara para dar verdaderos golpes de Estado a este Parlamento. Venustiano Carranza se negó, más bien dicho, prohibió que se pagase a los diputados las dietas que les correspondían conforme a un precepto constitucional y esto, ciudadanos representantes, se llama golpe de Estado. Venustiano Carranza se negó a promulgar varios decretos sin tener derecho al veto, dando también con esto un verdadero golpe de Estado al Poder Legislativo. Es natural, señores, que a través de esta corta, pero dura experiencia, el ciudadano Alvaro Obregón pensara desde cuando era candidato a la Presidencia de la República, en la conveniencia de reformar este artículo constitucional; pero desgraciadamente, ciudadanos representantes, la forma en que el dictamen está presentado no responde a las necesidades del Gobierno del pueblo mexicano. Las reformas que presenta la Comisión son un verdadero peligro, porque en lugar de armonizar, en lugar de conciliar los intereses del elemento Ejecutivo con el elemento Legislativo, no hace más que enfrentarlos y ponerlos en condiciones de tener fricciones casi diarias. Fueron más atinados, en mi humildísimo concepto, los legisladores del 57 cuando envolvieron toda esta larga enumeración que nos hace la Comisión actual, en un solo concepto cuando decían que el Ejecutivo podría también ser acusado por violaciones a la Constitución; y efectivamente, ciudadanos diputados, todas las enumeraciones contenidas en el dictamen, caben perfectamente bien dentro de este concepto, y en cambio, se tiene la ventaja de que por no existir precisamente esta enumeración, no se despierta el deseo en aquellos oposicionistas sistemáticos de venir a pedir que se acuse al Ejecutivo casi todos los días, porque casi todos los días se ha violado y probablemente se seguirá violando la Constitución. No me refiero a que esta Constitución se esté violando precisamente ahora. Yo tengo un punto de vista lejano, casi quisiera que este punto de vista fuera eterno, para juzgar y para dictar las reformas constitucionales. Yo no considero, ciudadanos representantes, que las reformas a la Constitución las hacemos nada más para obedecer a tales o cuales caprichos o para satisfacer tales, o cuales necesidades del momento. No señores, yo entiendo que las reformas a la Constitución se hacen, deben hacerse, para satisfacer determinados anhelos nacionales que deben ser verdaderos, que deben ser eternos. Es demás, ciudadanos representantes, que os haga perder el tiempo con la enumeración de todas las reformas a este artículo, pero sí.... (Campanilla.)

El C. presidente, interrumpiendo: Siendo visible que no hay quórum.

El C. Espinosa Luis, interrumpiendo: Y yo sostengo que sí hay.

- El C. presidente, continuando.., conforme al artículo 107 reglamentario, se suspende la sesión.

El C. Espinosa: No, señor; en ese caso pido que se pase lista .

(Se principia a pasar lista.)

El C. Espinosa Luis: Señor presidente: convencido de que no hay quórum, retiro mi petición.

El C. presidente, a las 6.30 p. m.: Se levanta la sesión y se cita para mañana a las cuatro de la tarde para continuar la discusión de este dictamen.