Legislatura XXXII - Año I - Período Ordinario - Fecha 19261125 - Número de Diario 35

(L32A1P1oN035F19261125.xml)Núm. Diario:35

ENCABEZADO

MÉXICO, JUEVES 25 DE NOVIEMBRE DE 1926

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921.

AÑO I. - PERÍODO ORDINARIO XXXII LEGISLATURA TOMO I. - NÚMERO 35

SESIÓN DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 25 DE NOVIEMBRE DE 1926

SUMARIO

1. - Abierta la sesión, es leída y aprobada el acta de la anterior.

2. - Cartera. Memorial hecho suyo por varios ciudadanos diputados, en que el señor Clarence W. Lothrop, representante de la Southern Sierras Power of México, S. A., solicita la aprobación del contrato que celebró con el Consejo Municipal. de Mexicali, B. C., para proporcionar luz y fuerza eléctricas; a la 1a. Comisión de Comunicaciones.

3. - Se discute y aprueba, en lo general y en lo particular, el proyecto de ley que reglamenta al artículo 130 de la Constitución General de la República; pasa al Senado. Son aprobadas dos proposiciones: una para que se edite un folleto con los discursos de la sesión de hoy y documentos relativos, y otra para que se excite a la prensa capitalina, a fin de que publique en lugar preferente la fotografía de la circular de los Caballeros de Colón de Estados Unidos. Se nombra una comisión al efecto. Se levanta la sesión.

DEBATE

Presidencia del C. BENITO JUÁREZ OCHOA

(Asistencia de 193 ciudadanos diputados).

El C. presidente, a la 17.25: Se abre la sesión.

- El C. secretario Cerisola, leyendo:

"Acta de la sesión celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el día veinticuatro de noviembre de mil novecientos veintiséis. "Presidencia del C. Benito Juárez Ochoa.

"En la ciudad de México, a las diez y siete horas y veinticinco minutos del miércoles veinticuatro de noviembre de mil novecientos veintiséis, se abrió la sesión con asistencia de ciento setenta y dos ciudadanos diputados.

"Aprobada el acta de la sesión que tuvo lugar el día diez y siete de los corrientes, se dio cuenta con la cartera:

"Telegrama de Hermosillo, Sonora, en que el C. Carlos B. Maldonado pide se le prorrogue por veinte días la licencia, con goce de dietas, de que ha venido haciendo uso.

"Telegrama de igual procedencia, en que hace solicitud análoga, por quince días, el C. Arturo C. Ortega.

"Con dispensa de trámites y sin debate se acordaron de conformidad las dos peticiones anteriores.

"Solicitud del C. Margarito Gómez, relativa a que se le conceda un mes de licencia, con goce de dietas.

"También se aprobó sin discusión, previa dispensa de trámites.

"Esquela en que el presidente de la Cámara de Senadores participa el fallecimiento del C. Enrique Henshaw. Senador propietario por el Estado de San Luis Potosí. - De enterado con sentimiento.

"Oficio del Senado, con el que devuelve, reformado, el proyecto de ley que crea la condecoración.

"Segunda Invasión Norteamericana", para los defensores del puerto de Veracruz en 1914. - Recibo, y a la 2a. Comisión de Guerra.

"Oficio de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en que comunica que el 19 de este mes clausuró el primer período de sesiones de su cuarto año de ejercicio. - De enterado.

"Oficio del procurador general de la República, con el que envía copia de las diligencias que se practicaron con motivo de los asesinatos de los hermanos López, de Misantla, Veracruz. - Recibo, y a sus antecedentes.

"Circular de la XXXI Legislatura de Chiapas, comunicando que el 31 de octubre se declaró legítimamente instalada. - De enterado.

"Circular de la misma Legislatura, en que avisa que con fecha 1o. de noviembre inauguró su primer período de sesiones ordinarias. - De enterado.

"Telegrama de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, en que la Legislatura de ese Estado propone al C. licenciado Elías Monges López para candidato a magistrado de la Suprema Corte. - Recibo, y resérvese para el Congreso General.

"Circular de la Legislatura del Estado de Hidalgo, participando que el 15 de noviembre cerró el segundo período ordinario de sesiones de su segundo año de ejercicio, dejando integrada su Diputación Permanente. - De enterado.

"Oficio del Congreso de Jalisco, en que manifiesta que se ha dirigido al Senado con el fin de que al aprobar las reformas de los artículos 82 y 83 constitucionales aumente a seis años el período

del presidente de la República. - Recibo, y a su expediente.

"Oficio del Congreso de San Luis Potosí, en que participa que eligió presidente y vicepresidente de su Mesa Directiva, para el período que termina el 15 de diciembre. - De enterado.

"Circular de la Legislatura de Sinaloa, en que dice que ha designado como candidato a magistrado de la Suprema Corte al C. Licenciado Benito Guerra Leal. Recibo, y resérvese para el Congreso General.

"Circular del Congreso de Sonora, en que transcribe, su acuerdo por el que apoya y secunda las reformas a los artículos 82 y 83 de la Constitución. - De enterado, y a su expediente.

"Telegrama de Villahermosa, Tabasco, por medio del cual el Congreso de ese Estado reconsidera su acuerdo sobre candidato a ministro de la Suprema Corte, y propone para ese cargo al C. licenciado Elías Monges López. - Recibo, y resérvese para el Congreso General.

"Oficio de la Legislatura de Zacatecas, en que propone al C. licenciado Carlos Echeverría como candidato a magistrado de la Suprema Corte. - Recibo, y resérvese para el Congreso General.

"Dos circulares que se refieren a una licencia concedida al gobernador constitucional de Campeche y a la entrega que hizo éste del Poder Ejecutivo al C. Domingo Pérez Méndez, designado para substituirlo. - De enterado.

"Telegrama de Culiacán, Sinaloa, en que el gobernador interino de ese Estado participa que la Legislatura del mismo aprobó la Ley sobre categorías políticas, y que en breve presentará al mismo Cuerpo los proyectos de Ley Agraria, de Aguas y Desmancomunación del Estado. - De enterado.

"Memorial de la Unión Cooperativa de Caldereros y Mecánicos Navales de Veracruz, en que solicita el apoyo de esta Cámara para conseguir la abolición de las fianzas desproporcionadas que actualmente se les exigen. - Transcríbase al Ejecutivo.

"Escrito por medio del cual la señora Jesús Araiza viuda de Banderas solicita que la pensión de que disfruta se expida a favor de sus hijas, las señoritas. Antonia, Laura Luisa y María. - A la 1a. Comisión de Peticiones.

"Sin discusión fueron aprobados un dictamen de la 1a. Comisión de Peticiones, cuatro de la 2a. de Puntos Constitucionales y uno de las comisiones unidas 2a. de Puntos Constitucionales y 1a. de Gobernación, en que, respectivamente, se propone:

"Que se turne a la Comisión de Marina la solicitud de pensión de la viuda, hermana e hijas del extinto comodoro de la Armada Nacional, C. Alejandro Cerisola;

"que se deseche, por improcedente, la iniciativa de adición al artículo 11 constitucional, presentada por el Ayuntamiento de Santa Ana, Sonora, al que se comunicará esta determinación;

"que pase a la Comisión de Puntos Constitucionales en turno el proyecto de adición al referido artículo, enviado por el Ayuntamiento de Oputo, Sonora;

"que se diga al C. Leandro Cuevas, residente en Texas, E. U. A., en contestación a su ocurso relativo, que en virtud de no existir precepto constitucional que establezca la pérdida de la ciudadanía mexicana por ausencia del territorio nacional, se ha mandado archivar su solicitud;

"que se rechacen las reformas a las fracciones I y II del artículo 20 de la Constitución, propuestas por el C. licenciado Angel E. Trías, transcribiendo a éste el dictamen respectivo, y

"que no se acepte el proyecto de adición a la fracción XXI del artículo 73 de la Constitución general, propuesto por el Ejecutivo de la Unión el 5 de marzo de 1921.

"Asimismo se aprobaron, sin debate, tres dictámenes de la 1a. Comisión de Hacienda, uno de la 2a. de Hacienda, uno de la 3a. de Guerra, uno de la 2a. Agraria y uno de la Comisión de Presupuestos y Cuenta, en que, respectivamente, se propone, por las razones que se indican, se archiven las iniciativas referentes a derechos de tráfico por patentes de navegación, al impuesto federal sobre el pago de créditos hipotecarios, creado por decreto de 30 de agosto de 1918; a las reformas del artículo 252 de la Ley de la Renta Federal del Timbre, y al establecimiento de un impuesto al consumo de luz y fuerza eléctricas; el expediente formado con el contrato entre el Ejecutivo de la Unión y el señor Werner Kaemerer para establecer un servicio de navegación aéreo en la República; los tres expedientes que comprenden el proyecto del diputado a la XXX Legislatura, C. Emilio Gandarilla, y la solicitud de la Legislatura de Sonora, referentes a la deuda agraria de los Estados, y el expediente que trata de la iniciativa sobre reformas a la Tarifa de Pesca y Buceo en Aguas de Jurisdicción Federal.

"Dos dictámenes de la 2a. Comisión de Puntos Constitucionales que terminan con proyectos de decreto por medio de los cuales se concede permiso a los CC. Eduardo Hay y Joaquín Pardo Dufoo, al primero para aceptar y usar la condecoración de Gran Oficial de la Orden Nacional Boliviana "Cóndor de los Andes", que le otorgó el Gobierno de Bolivia, y al segundo para aceptar y usar la condecoración "Homenaje", que le confirió el Gobierno español.

"Estos dictámenes estaban de primera lectura; se les dispensó la segunda y se pusieron a debate; no lo hubo y en un solo acto fueron aprobados por unanimidad de ciento cincuenta y un vetos y pasaron al Senado para los efectos constitucionales.

"Dictamen de la 1a. Comisión de Gobernación, acerca de la iniciativa que envió el Ejecutivo de la Unión para determinar el número máximo de ministros de los cultos en el Distrito y Territorios de la Federación. - Primera lectura, e imprímase.

"Dictamen de la misma comisión, que se refiere a la iniciativa del propio Ejecutivo sobre reglamentación del artículo 130 de la Constitución General de la República. - Primera lectura, e imprímase.

"A las diez y ocho horas y cuarenta minutos se levantó la sesión".

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobada.

- El C. secretario Romo, leyendo:

"El Congreso del Estado de Durango propone como candidato a magistrado a la Suprema Corte de Justicia de la Nación al C. licenciado Elías Monges López". - Recibo, y resérvese para el Congreso General.

Telegrama procedente de: "Mérida, Yuc., 24 de noviembre de 1926.

"Secretario Cámara de Diputados.

"Refiérome suyo del 16. Legislatura de Yucatán acordó proponer al licenciado Arturo Cisneros Canto para cubrir vacante Suprema Corte de Justicia. Hase girando comunicación ese sentido, por correo. Afectuosamente. - El presidente de la Comisión Permanente, doctor Armando Escalante G." - Recibo, y resérvese para el Congreso General.

"El C. Carlos Riva Palacio comunica que, con fecha 18 de noviembre, volvió a encargarse del puesto de gobernador constitucional del Estado de México". - De enterado.

"El señor Clarence W. Lothrop solicita se apruebe el contrato celebrado entre la Southern Sierras Power of México, S. A., que representa, y el Consejo Municipal de Mexicali, Baja California, para proporcionar al público servicios de luz, calefacción y fuerza. Hace suya esta solicitud el C. José María Tapia, diputado por el Distrito Norte de Baja California". - A la 1a. Comisión de Comunicaciones.

(La solicitud de referencia dice:)

Ciudadanos secretarios de la Cámara de Diputados. - Ciudad.

Clarence W. Lothrop, hábil para obligarme, accidentalmente en esta ciudad con residencia en el Hotel Regis, ante ese honorable Cuerpo, respetuosamente expongo:

Soy representante, con poder general amplísimo, de la Southern Sierras Power of México, sociedad anónima constituída de acuerdo con las leyes mexicanas en escritura número 3735, extendida en la Notaría número 1 de la ciudad de Mexicali, Baja California, el día 7 de abril de 1925, e inscrita en el Registro de Comercio de la propia ciudad, el 13 del mismo abril; y justifico mi personería con el primer testimonio, que exhibo debidamente registrado y legalizado, de la escritura pública número 277, volumen VII, otorgada ante el notario don Roberto Rosado Domínguez, en la ciudad de Mexicali, el 25 de septiembre último.

La compañía que represento celebró con el Consejo Municipal de Mexicali, el día 21 de octubre de 1925, un convenio por el que se comprometió a establecer y desarrollar en el municipio, una empresa para proporcionar al público servicio de luz, calefacción y fuerza. El contrato, aprobado, se remitió al Gobierno del Distrito Norte, el cual a su vez lo envió a esa honorable Cámara de Diputados, en su cumplimiento del artículo 67 de la Ley de Organización del Distrito y Territorios Federales, que textualmente dice:

"Artículo 67. - Los Ayuntamientos no podrán contraer deudas, ni otorgar concesiones, ni celebrar contratos obligatorios por más de dos años, si no es con la autorización expresa del Congreso de la Unión".

Llegando el asunto a esa honorable Cámara, fue apoyado por varios diputados, en atención a los beneficios públicos que recibiría el Distrito Norte; pasado a la comisión correspondiente, ésta expresó que el contrato debía de hacerse constar en escritura pública, y mientras de que se cumplía con este requisito, concluyó el período de sesiones el 31 de diciembre de 1925.

Con autorización especial, el señor don Federico Palacios, presidente del Consejo Municipal de Mexicali, compareció ante el notario don Roberto Rosado Domínguez, justamente con el representante de la compañía, y ambos celebraron en escritura pública el convenio, llevando aquélla el número 27, volumen II, y como fecha, el 26 de diciembre de 1925. Esta escritura contiene exactamente el convenio celebrado con anterioridad, y en su cláusula vigesimaquinta dice:

"El término para la duración del presente contrato se fija en cincuenta años. A ese fin y de acuerdo con el artículo 67 de la Ley de Organización del Distrito y Territorios, se remitirá el presente contrato para su aprobación, al Congreso de la Unión."

Exhibo, debidamente legalizado, el primer testimonio de la escritura que contiene el contrato. También presento un duplicado del oficio de remisión del Gobierno del Distrito Norte.

Sólo falta, para que surta sus efectos el convenio, la aprobación del Congreso de la Unión, de acuerdo con el citado artículo 67.

Debo hacer notar que mi representado operará principalmente fuera de lo que es población o el fundo legal de Mexicali, o ea en el resto del municipio; que las tarifas que figuran en el contrato son las más bajas que pueden obtenerse en la región, para el público; y que hasta ahora ese público ha estado pagando de buen grado conforme a ella.

En tal virtud, muy atentamente solicito:

I. Se digne la honorable Cámara de Diputados dar su aprobación al contrato celebrado que consta en el testimonio a que antes hice referencia.

II. Pasarlo en su oportunidad, para su aprobación, al Senado.

III. En atención al tiempo transcurrido, dispensarle los trámites y pasarlo luego a la comisión que dictamine.

IV. Tenerme como apoderado de la Southern Sierras Power of México, S. A., para todos los efectos legales, y disponer se me devuelva el testimonio del poder, dejando del mismo copia o razón en el expediente.

Protesto mi respetuosa consideración.

México, D. F., a veintidós de noviembre de mil novecientos veintiséis. - C. W. Lothrop.

Como diputado único del Distrito Norte de la Baja California, hago mío este pedimento, y, en atención a que el asunto ya ha sido estudiado, pues sólo por un requisito de forma quedó pendiente, a que el contrato ha pasado por la revisión del Ayuntamiento de Mexicali y del Gobierno del Distrito Norte, y a la premura del tiempo, pues el servicio urge y el convenio debe ser aprobado por el Senado; con fundamento en el artículo 58 del Reglamento, pido sea pasado luego a la Comisión dictaminadora correspondiente, dispensándosele, en su caso, los trámites de rigor.

México, 22 de noviembre de 1926. - Diputado José M. Tapia.

Nos adherimos a lo expuesto por el diputado Tapia: Gonzalo N. Santos. - Melchor Ortega. - José F. Gutiérrez. - L. Zincúnegui Tercero.

- El mismo C. secretario: Está a discusión en lo general el proyecto de Ley Reglamentaria del Artículo 130 de la Constitución General de la República.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Cerisola.

El C. Cerisola: Compañeros diputados: Para que un precepto legal llene el objeto para el que fue dictado, es indispensable que se cumpla; y como la mayoría de las leyes - por no decir la totalidad de ellas - establecen restricciones, limitan la libertad individual de obrar en bien de la colectividad, los individuos afectados por ellas, aquellos cuya libertad queda restringida, o bien tratan de burlar la ley, o bien se niegan abiertamente a acatarla. Para hacer, pues, que se cumpla, es indispensable establecer castigos, establecer penas para unos y otros. Por eso ahora que está a discusión en lo general este proyecto de ley del Ejecutivo, vengo a hablar en pro de la reglamentación del artículo 130, porque esta reglamentación, este proyecto, aclara los conceptos, completa el artículo y, sobre todo, establece las sanciones en que incurren los que se nieguen a acatarlo.

Hace cerca de dos lustros que nuestra Constitución de Querétaro fue promulgada, y hasta ahora nadie ha acatado este artículo por falta de sanciones. La falta de estas sanciones, ha sido la causa de la altanera rebeldía que el alto Clero católico apostólico romano, en México ha demostrado públicamente en contra de él; y ha sido también la causa de los antipatrióticos procedimientos de que está valiéndose, tratando de echar por tierra éste y otros artículos de la misma Constitución.

Cuando se trató en esta honorable Cámara sobre el memorial presentado por el Episcopado Mexicano solicitando algunas reformas constitucionales, dije desde esta tribuna que el Clero católico, apostólico, romano, que había actuado en el país, eminentemente egoísta, por conservar el poder y sus riquezas, había cometido toda clase de actos reprobables, desde el asesinato proditorio, hasta la traición a la patria; y creo haberlo demostrado con hechos históricos, casi, podría decir, con la historia mexicana en la mano. La conducta pasada del Clero me la explicaba entonces fácilmente, porque el alto Clero católico, apostólico, romano, que había actuado en el país en aquella época, estaba formado en su casi totalidad por extranjeros, por españoles que aunque ,mucho tenían que agradecer a México, se olvidaban de esto, buscando sólo saciar su ambición; y el bajo Clero, el Clero humilde, por sumisión, por respeto, por servilismo para el superior, debido a la educación que recibía y aún recibe, por desgracia, acataba ciegamente las disposiciones de sus superiores. La conducta pasada, pues, es perfectamente explicable; pero ahora que tanto como el bajo Clero están exclusivamente formados por mexicanos nacidos en el país, creados aquí, crecidos aquí, educados la mayor parte de ellos aquí, donde han vivido toda su vida, ¿cómo explicar los antipatrióticos procedimientos que están siguiendo tanto dentro como fuera del país? ¿Cómo explicar la verdadera traición a la patria que están cometiendo? Y esta pregunta no la dirijo sólo al alto Clero, sino al Clero humilde, a los católicos todos del país. Estoy seguro de que muchos de ellos me están escuchando valiéndose de este maravillosos descubrimiento que nos permite trasmitir los sonidos a enormes distancias. Ojalá que mi voz, y más que la mía, que nada vale, la muy autorizada de los compañeros que me van a seguir en el uso de la palabra, fuera escuchada desde le palacio más suntuoso hasta la choza más humilde, porque vamos a mostrar cuál es la conducta que el Clero está siguiendo, y vamos a demostrar la veracidad de nuestras palabras con documentos fehacientes, con datos irrefutables, y estoy seguro de que entre los católicos mexicanos - muchos de ellos mexicanos y muy patriotas - condenarán, indignados, estos procedimientos y maldecirán la conducta seguida por su Clero. (Aplausos).

Valiéndose del Clero católico, apostólico, romano y de los Caballeros de Colón, están haciendo una campaña infame en contra de México. A pesar de las declaraciones engañosas que el Episcopado Mexicano ha publicado en volantitos que todos hemos recibido, en los que mañosamente asienta que condena el Episcopado los medios violentos, todos sabemos que en algunas regiones del centro del país han aparecido pequeños grupos armados que al grito de ¡Viva Cristo Rey! ¡Muera el Gobierno!, se han rebelado, instigados siempre, y algunas veces directamente encabezados por los curas lugareños o por connotados Caballeros de Colón regionales. Sé que el compañero Gonzalo N. Santos está bien documentado sobre este particular y será él quien demuestre esta verdad citando casos concretos. Me limitaré yo, pues, a señalar esta labor seguida dentro del país, que, aunque perversa, es la menos peligrosa, porque los infelices que en pequeñísimo número y engañados miserablemente se han lanzado en esta aventura, están ya pagando caro su error porque están siendo perseguidos tenazmente por las fuerzas federales. Diré sólo la labor desarrollada en el extranjero por el Clero, para que se vea cuán inmunda es.

Aquí traigo un periódico, un magazine católico americano, el órgano oficial de los Caballeros de

Colón americanos, que se llama "Columbia", número correspondiente a noviembre de 1926, es decir, a este mes, en el que, desde su portada hasta la última página, se nos llena de vituperios y de infamias, de calumnias de las más bajas y más viles, como lo voy a demostrar.

En la portada del periódico figuran dos caballeros medievales cubiertos de armaduras desde los cascos de sus caballos hasta sus cabezas, empuñando con una mano el escudo de los Caballeros de Colón y llevando en sus banderas inscritas estas palabras: "Libertad y Justicia"; y abajo la leyenda calumniosa escrita con grandes caracteres rojos que dice: "El Peligro Rojo de México". El primer artículo de este magazine escrito en mitad de la plana, rodeado por un marco negro, y para resaltar más, con letras de manuscrito dice así: "Vuestro deber, vuestro privilegio, vuestra oportunidad."

"El Supremo Consejo, en su mitin anual reunido el 5 de agosto en Filadelfia, determinó emprender una implacable campaña para la extirpación de las ideas del Soviet en este continente y para aliviar los males que han traído las intolerables condiciones que prevalecen hoy en México.

"Para ese objeto se aprobó que un millón de dólares que será conocido como el fondo mexicano de los Caballeros de Colón, fuera colectado desde luego.

"Se os apremia a contribuir en esta moderna cruzada contra los enemigos de la cristiandad, contra los opositores a la libertad política y religiosa.

"Para ensanchar el poder de esta gran obra, invita a los no católicos y a los que no sean miembros de la orden, a subscribirla. Se os pide ayuda en cualquiera forma que podáis para alentar las subscripciones voluntarias de todos los que están anhelantes en ayudar en esta gran causa.

"Todos los cheques y giros deben ser pagaderos al fondo mexicano de los Caballeros de Colón y dirigidos a William J. McGinley, supremo secretario, New Haven, Connecticut. El Gran Caballero tiene toda la información de la campaña.

"Los Caballeros de Colón han sido reconocidos en dondequiera como los generosos campeones de la justicia y de la libertad.

"Ahora la cristiandad del mundo está en peligro.

"Y ahora otra vez, los Caballeros de Colón se adelantan a batirlo. Con la ayuda de Dios y la vuestra. probarán ser dignos de su pasado."

Como se ve por esta excitativa, por esta invitación a la formación del infame fondo, el clero católico, apostólico, romano y los Caballeros de Colón norteamericanos, tratan de hacer creer que nuestro actual Gobierno es el portaestandarte de las ideas comunistas. Y lo pintan como tal, porque esas ideas comunistas, que nosotros consideramos inadecuadas, inaplicables e injustas para la época actual, mal comprendidas por los americanos, les causan verdadero terror, y es natural que un país eminentemente capitalista trate de defenderse de ellas. Explotando, pues, el horror que estas ideas inspiran, nuestros enemigos - El clero católico y los Caballeros de Colón -, tratan de hacernos aparecer, a nuestro Gobierno y a todos los revolucionarios, como los comunistas más furiosos, para aumentar el odio de nuestros "primos" hacia nosotros y para que todos ellos contribuyan no solamente con sus fondos, sino por cuantos medios puedan para desbaratar la mentada amenaza que dizque existe para ellos aquí en México. La maniobra es Hábil pero no puede ser ni más perversa ni más calumniosa. ¿Podría el Episcopado católico, apostólico, romano, de México demostrar que no ha tomado participación en esta infamia? Seguramente que no, y lo voy a probar. (Aplausos).

A este Supremo Consejo del mitin anual de los Caballeros de Colón que tuvo verificativo el 5 de agosto en Filadelfia, asistieron, por desgracia, y para vergüenza de ellos, algunos Caballeros de Colón mexicanos. El clero católico, apostólico, romano de México tuvo allí sus representantes, y él fue el que dio la idea; pero en este mismo artículo, en su tercer párrafo, asoma - como decimos aquí -, la cola del gato, que viene a darnos la razón a los que hemos asegurado que el clero católico mexicano intenta, aunque locamente, apoderarse nuevamente de la situación política del país. Dice el tercer párrafo textualmente: "Se le urge a usted para contribuir en esta moderna cruzada contra los enemigos de la cristiandad, contra los opositores de la libertad política y religiosa". ¿Qué tendrían que ver los Caballeros de Colón americanos si no hubieran sido invitados a ello, en la política nacional? Seguramente que nada, y hasta se me figura que han de sentir el más profundo desprecio por los traidores que han ido a solicitar su ayuda, ayuda que ellos les prestan por la parte que les conviene. ¡Quien, sí tiene que ver evidentemente con la política nacional es el Episcopado Mexicano! Ya veremos en este mismo periódico un artículo firmado por un inmundo traidor que en mala hora nació en México, cómo se ocupa exclusivamente de política, calumniando vilmente a los tres Poderes de la Unión y al pueblo mexicano. Este artículo fue inspirado por el clero, como lo voy a demostrar; pero antes permítaseme que traduzca la carta que el Supremo Caballero de Colón dirige al pueblo norteamericano, y permítaseme que la traduzca para probar que este señor, por muy supremo que se nombre, no deja de ser más que un vil calumniador y un mentiroso vulgar. (Aplausos).

Dice la carta de este "Supremo" que se llama Jaime A. Flaherty: "Los católicos deben se leales a su Iglesia. Los Caballeros de Colón deben ser leales a su Orden. En nuestra campaña para impedir el desarrollo del volchevismo en este continente, osamos esperar el apoyo de todos los hombres que aman la libertad y desprecian la tiranía. Y en ello no estuvimos desacertados. Las contribuciones para el Fondo Mexicano han venido tanto de los de abajo como de los de arriba, de los Caballeros de Colón, como de los que no pertenecen a la Orden, de los católicos como de los no católicos. Las últimas semanas han sido, según creo, las más satisfactorias de mi vida. Nadie podría leer las cartas que he recibido y abrigar la menor huella de pesimismo.

"Sus expresiones de simple lealtad y profunda fe conmoverían al más indiferente. Quisiera disponer de espacio para reproducirlas aquí, como imponente

record de aprobación en nuestro trabajo por México.

"Recibí, por ejemplo, una carta de un jefe de familia de seis miembros. Este no era Caballero de Colón. Había leído las persecuciones en México; se dio cuenta de que los enemigos de la cristiandad estaban preparados para dar un golpe contra la libertad personal y religiosa. Se había percatado de que en el complot del bolchevismo no hay lugar para la vida de familia, ni hay respeto para la santidad del hogar, no hay piedad para el débil, no hay compasión para el pobre. Envió una contribución, según creo, mayor de la que le era dable, y la carta con que la acompañó contenía un mensaje de aliento y de aprobación. Dijo: "he aquí lo poco que puedo hacer, siento no poder hacer más". Eso, hermanos míos, es el espíritu que ha prevalecido en los centenares de cartas que han llegado a mi escritorio. Con semejante aliento, evidencia de la aprobación y ayuda populares, nuestra campaña no puede menos de triunfar. Nuestro fin inmediato es reunir un fondo de un millón de dólares. Pero necesitamos más de lo que el dinero es; necesitamos leal cooperación. El fondo mexicano debe estar formando de centenares de miles de pequeñas contribuciones. Debe representar centenares de miles de pequeños sacrificios. Debe ser más, de lo que todo ese dinero representa, debe ser un vivo, vibrante fuetazo salido del idealismo de muchos corazones. El constante crecimiento del fondo, indica que el objeto de nuestra campaña merece una inmensa simpatía. Nadie puede decir con verdad, que el problema de México no le interesa. Este asunto concierne a todos, sea que esté con el régimen rojo o que reconozca su horror presente y su amenaza futura. No puede haber acuerdo entre lo que es evidentemente justo y lo que es evidentemente injusto, entre lo que es falso y lo que es verdadero. El objeto de fondo mexicano es conseguir medios para el esparcimiento de la luz.

"El bolchevismo es un hongo que florece en la obscuridad. Traído a la luz, muere. Nos hemos impuesto la tarea de exponerlo a la luz, rasgando su manto de mentiras y falsas promesas. Al llevar a cabo esta campaña en justicia esperar la ayuda de todos aquellos que temen ver la plaga de Rusia desarrollarse en nuestra propia tierra."

Aquí voy a hacer un alto en la traducción, porque no puedo prescindir de comentar lo anterior. No me voy a ocupar de destruir la inmunda y perversa calumnia de que seamos bolcheviques, porque ya dije, al comentar al excitativa, que no lo somos, y porque esto todo el mundo lo sabe; voy a ocuparme nada más de la mentira, de la perfidia y la infamia que encierra lo anterior. La mentira consiste en decir que esta infame campaña ha tenido eco en los Estados Unidos, que ha tenido una gran acogida; y digo que es mentira, porque el mismo firmante de la carta nos asegura que ellos desean que el fondo sea formado por centenares de miles de pequeñas contribuciones, por centenares de miles de pequeños esfuerzos, que sean el fuetazo - dice - de sus idealismos, o qué sé yo. Y claro está que si la contribución libre, les hubiera dado resultado, no hubieran tenido por qué cambiar de táctica y exigir después, como han exigido, una contribución forzosa para cada uno de los Caballeros de Colón, de dólar y medio, como veremos más adelante. Quiere decir que habiendo fracasado absolutamente después de dos meses de seguir esta táctica, habiendo encontrado todas las puertas cerradas y los oídos cerrados, recurrieron a exigir de los Caballeros de Colón un dólar y medio por cada uno de ellos, calculando que son setecientos mil, para conseguir un millón de dólares. Luego está probado el fracaso de esta excitativa. La infamia, la perfidia de esto, consiste en ocultar a qué destinan el fondo. Dicen, con toda maña, que lo quieren, que lo destinan para evitar la invasión del bolchevismo a su tierra y los medios de que van a valer son "el esparcimiento de la luz", con lo cual este señor no dice nada de esos perversos medios, para no alarmar a sus ingenuos compatriotas. Nosotros, menos ingenuos que los norteamericanos, sabemos que son capaces de todo y que suspiran hasta por la intervención armada; pero que, mañosos como todos los directores del clericalismo, no enseñan su juego y no dicen de qué medios se van a valer, porque no están seguros de obtener los que ellos desearían conseguir para lograr su fin.

Vamos a ver nosotros ahora, examinando estos documentos, este mismo periódico, cuáles son los medios de que se han valido y que este señor Flaherty llama "el esparcimiento de la luz". El primer paso que dieron fue entrevistar al secretario de Estado Mr. Kellogg, cuyos sentimientos respecto a México son conocidos, y después de visitar al señor Kellogg, entrevistaron al presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, para solicitar de él que el reconocimiento del Gobierno mexicano fuera retirado puesto que, según ellos, todos los males que tratan de remediar son debidos a este reconocimiento; y pidieron también que el embargo decretado, y hoy en vigor, el embargo de armas en Estados Unidos, fuera levantado. Si hubieran conseguido este primer "esparcimiento de luz", seguramente que hubieran pedido, para "esparcirla mejor "el reconocimiento de la beligerancia de la primera facción de traidores que se hubiera presentado; y si esto no les daba el resultado apetecido, o sea el derrocamiento de nuestro patriótico Gobierno, hubieran solicitado la "iluminación completa de México" con una intervención americana armada, y quizá hasta la anexión de nuestro país. Pero deben saber esos canallas Caballeros de Colón americanos, que para que eso se les lograra necesitaba no existir ni un solo verdadero mexicano con vida. (Aplausos).

Si la elocuencia de los hechos no nos hablara tan claramente, me resistiría a creer que esta obra ha sido iniciada por el Clero católico mexicano y, por desgracia, por algunos Caballeros de Colón mexicanos. Aun viéndolo, me parece mentira. Sigue el señor Soberano Flaherty, o Supremo, diciendo lo que sigue: "Lo que le falta al Gobierno mexicano, entre otras cosas, es el valor de poner claramente ante el mundo, sus planes

para un Estado comunista. Habla de una "Constitución" convenientemente hecha supersagrada. Habla de "soberanía" aquí y "soberanía" allá; pero el desgraciado pueblo que vive dentro de las fronteras de México, no está engañado. Sentado en sus hogares e iglesias saqueadas, sabe hasta dónde llega la protección del Gobierno de Calles".

Aquí hago otro alto porque tampoco puedo prescindir de preguntar a los católicos mexicanos, a ellos que, por intrigas y calumnias del Clero, juzgan a nuestro gran presidente Calles como su enemigo, si ellos permitirían que se nos calumniara en esa forma, y yo, seguro de interpretar los sentimientos de muchos de ellos, digo que no lo permitirían; porque este ente que firma la carta, con estas calumnias los ofende a ellos mismos, puesto que los pinta como eunucos incapaces de defender la santidad de su hogar; y debe saber ese menguado que no hay un solo mexicano que no estuviera dispuesto a derramar hasta la última gota de su sangre antes de permitir a ningún Gobierno que violara sus hogares y los saqueara. (Aplausos).

Quizá me exalté demasiado; no puede evitarlo, fue el grito de la sangre. Y sigue su carta con el mismo sistema de calumnias y de infamias calumniando y atacando al general Calles, al pueblo mexicano, y termina con esta mentira y este sarcasmo: "El fondo mexicano ha tenido un excelente arranque. Tenemos todavía un largo camino que recorrer, pero no pido más, que el glorioso record de las semanas pasadas se repita en las semanas que viene. Nunca hubo una causa ni más grande ni más noble. Contestamos al llamado clara y prontamente".

Y yo pregunto al Episcopado mexicano si también para él esta causa inmunda, infame y traidora es la causa más noble y más grande que haya jamás existido. Todo el periódico, todo el panfleto, todo esta inmundicia, desde el principio hasta el fin, está llena de calumnias, calumnias y calumnias. Viene un segundo artículo que se llama "Calles y sus amigos", y no lo voy a traducir íntegro, porque sería cansar la atención que con tanta benevolencia me ha presentado esta Asamblea. En este artículo calumnioso, como siempre, es atacar al general Calles, al Partido Laborista Mexicano, a la Crom y hasta a algunos miembros de la "Federation of Labor". Viene después el artículo escrito por el inmundo traidor, indigno de ser mexicano, que se oculta tras un seudónimo tan bajo como su propia alma. En este artículo se calumnia y se insulta a los tres Poderes de la nación y al pueblo mexicano. Al Poder Judicial lo ponen, calumniándolo, como no digan dueñas; a las Cámaras Legislativas lo que menos les dicen es que están formadas por salvajes y analfabetos que no sabemos ni leer, que no representamos nada ni a nadie, porque antes, hablando de elecciones, dice que en el país no hay elecciones ni las ha habido, porque las casillas electorales están rodeadas por tropas o por gentes armadas por el Gobierno, que no dejan acercarse a nadie, y el desgraciado que osa acercarse es vilmente asesinado; que por eso nuestras elecciones muchas veces resultan unánimes. Esto demuestra la conexión que hay entre el Clero mexicano y los señores Caballeros de Colón norteamericanos; y digo que lo demuestra, porque esto está de acuerdo perfectamente con unas hojitas, con unos papelitos que están pegando en las puertas de las habitaciones, que dicen que la Cámara no representa nada ni nadie. Y yo pregunto al señor Mora y del Río: si nosotros no representamos al pueblo mexicano, ¿por qué nos dirigió su memorial pidiendo las reformas constitucionales? (Aplausos). La maniobra de esto consiste en hacer creer en los Estados Unidos de Norteamérica que nuestras leyes no merecen ningún respeto, puesto que están dictadas por individuos que además de ser inmorales, no representan a nada ni a nadie. Seguramente que este artículo de este traidor no hubiera aparecido si nosotros hubiéramos tenido la candidez y la falta de patriotismo de aceptar las sugestiones hechas por el Episcopado mexicano en su memorial. Se ve, pues, la relación íntima que hay y se ve, también, la no interrumpida campaña que está siguiendo. No lo firma no tiene el valor de firmarlo; firman con un seudónimo. Inmediatamente después de este artículo infame y calumnioso, que indigna y que hasta a la Secretaría de Educación insulta, diciendo que ha publicado y repartido profusamente en las escuelas un folleto para el control de la natalidad o sea para la esterilidad artificial, lo que es la calumnia más burda y más infame que pueda hacerse; después de ese artículo, repito, que produce todo el asco, que debe producir hasta para los mismos norteamericanos el autor, viene otro, escrito por el señor arzobispo Kelly, en que se dice cuál es la verdadera riqueza de la Iglesia en México, y en que se pinta a la Iglesia apostólica, romana, de México, como miserable, como en la última miseria. Yo le podría contestar al señor arzobispo Kelly que en primer lugar nosotros sabemos bien a que atenernos sobre ese particular, y en segundo lugar, que si la Iglesia estuviera en la miseria, no existiría esta campaña del Clero. Dentro de un marco negro aparece otro artículo calumnioso, como todos, que se llama "Calles amigo del pobre". Aquí pintan al general Calles como el enemigo más furioso de los pobres y dicen, para terminar, este chiste: "Para quitar a la pobreza, mata al pobre". Si estos individuos fueran dignos de que se les contestara, habría que decirles que la sólida, la irrefutable elocuencia de los hechos, ha demostrado al pobre, que lo quiere el general Calles. Allí están los ejidos restituídos dentro de la ley o donados a los pueblos; allí está el Banco Refaccionario Agrícola, institución creada exclusivamente para refaccionar a los pequeños campesinos; allí están las Escuelas Granjas, institución única en el mundo, para difundir los conocimientos científicos y prácticos para sacar de la tierra el máximo de su rendimiento; allí están las cooperativas agrícolas, cooperativas de campesinos, en las que el general Calles ha buscado el desarrollo del sentimiento de cooperación, de solidaridad, del cumplimiento del deber del campesinos más humilde; sociedades cooperativas que libren al pobre campesino de la explotación inicua de los usureros que les prestaban, recogiendo las cosechas a vil precio; allí está, en fin, toda la enorme obra desarrollada

por el general Calles, y al decir esto les protesto a ustedes, bajo mi palabra de honor, que no existe en mi ánimo ni el más remoto asomo de adulación, porque yo nunca he sabido ni aprendido jamás a adular a nadie; lo digo porque creo que ha llegado el momento de decir toda la verdad en contra de las infamias de los Caballeros de Colón y del Clero mexicano en el extranjero. (Aplausos). ¿Para qué repetirles a ustedes que todos los editoriales, desde el primero hasta el último, están en contra del pueblo mexicano, explotado los mismos calumniosos tópicos, de que somos la avanzada de Rusia, de que el bolchevismo queremos llevarlo a Estados Unidos, etcétera? Todas las calumnias de siempre. Compendiando, resumiendo la serie de infamias de este periódico, hay este anuncio en grandes caracteres: "¿Usted sabe por qué las elecciones en México son frecuentemente unánimes? ¿Qué se le espera a un legislador que se opone a Calles? ¿Cuál es en realidad la riqueza de la Iglesia en México? ¿Quiénes son los íntimos y consejeros de Calles?" (Porque antes dice que los consejeros del general Calles son bolcheviques que han venido aquí). "¿Cómo demuestra el general Calles su amor al pobre? Los hechos acerca de México están publicados en el "Columbia". Encontrará usted cada mes, en artículos auténticos y claramente escritos, la verdad acerca del complot de Calles para traer el bolchevismo al continente americano. Subscríbase usted hoy mismo, así como sus amigos y todos los que teman la aproximación a su puerta de la plaga que hizo de Rusia una tierra de ruina, de sufrimiento, de crimen y de hambre".. Y aquí otro anuncio excitando nuevamente a la colecta voluntaria del fondo, del infame fondo de un millón de dólares, y dice así: "Si usted viviera en México, usted no podría ir a misa los domingos. Los bárbaros han saqueado y cerrado las iglesias.

"Sus hijos no podrían disfrutar de las ventajas de las escuelas parroquiales. Los bárbaros han convertido las escuelas en cuarteles.

"Usted no podría tener una posición que le permitiera alimentar y vestir a su familia. Los bárbaros han decretado para los católicos la pobreza, el hambre y la muerte.

"Usted no podría votar. Los bárbaros han hecho de las elecciones una farsa y del Gobierno una parodia.

"El pueblo mexicano daría cualquier cosa por la libertad de que usted goza. ¿No dará usted lo que pueda, poco o mucho, para el Fondo Mexicano de un millón de dólares, que se está colectando por los Caballeros de Colón para su campaña contra los rufianes bolcheviques que azotan a México?

"Todos los cheques y giros deben ser pagaderos al Fondo Mexicano de los Caballeros de Colón y dirigidos a William J. McGinley, Supremo Secretario, New Haven, Conn."

Y por último, la comprobación de todo lo dicho; la comprobación de todos los pasos que han dado para el "esparcimiento de la luz". Aquí está una acta de un mitin especial celebrado el 5 de septiembre, en la cual dicen que los acuerdos tomados en el mitin anual del 5 de agosto, fueron los siguientes, pero antes, "El supremo caballero anunció que el propósito de convocar a sesión especial de la Directiva, fue para considerar los asuntos que se relacionan con la resolución de la situación mexicana adoptada para el Supremo Consejo, en su sesión anual celebrada en Filadelfia el 5 de agosto de 1926.

"El supremo caballero dijo que en agosto 6 habían sido mandadas copias de las resoluciones adoptadas por el Supremo Consejo, al presidente y al secretario de Estado, y que en la misma fecha había sido dirigido un telegrama al presidente solicitando una entrevista con él, con el propósito de discutir la situación mexicana. el supremo caballero y el supremo tesorero entrevistaron al secretario de Estado Kellogg en agosto 13 y el 26, y el supremo tesorero tuvo otra entrevista con él en agosto 24. En septiembre 1o., el supremo caballero y el supremo secretario y el supremo abogado - aquí todos son supremos -, (Risas.) el supremo director y el supremo secretario fueron recibidos por el presidente en el Palacio del Ejecutivo en Paul Smith, y estuvieron con él más de una hora en conferencia. El presidente manifestó un gran interés en el esfuerzo que está siendo llevado a cabo por los Caballeros de Colón para ilustrar al pueblo de América respecto de las condiciones en que se halla México.

"Las actitud de los Caballeros de Colón con respecto a la situación mexicana, fue expresada en la resolución adoptada por el Supremo Consejo en Filadelfia en agosto 5. Especificó y enumeró las condiciones que existen en México, y apuntó alguna de las razones de su existencia y continuidad."

Esto es oficial, esta es la acta de los Caballeros de Colón en su sesión especial del 5 de septiembre. Los católicos de México no pueden negar la autenticidad de esto y esta es la infame labor. Pero no pudiendo conseguir el fondo por subscripción voluntaria, he aquí un anuncio que dice: "En la reunión regular de cada cuatro meses de la Suprema Mesa Directiva, reunida en Grand Rapids, Michigan, el 9 de octubre, fue aprobado que una cuota especial de dólar y medio fuera exigida a cada miembro de la Orden, desde el 1o. de noviembre de 1926, con el propósito de crear un fondo que será usado, llevando un trabajo de bienestar en conexión con la situación mexicana". Se ve, pues, que han fracasado rotundamente. Por supuesto que el hecho de que hayan fracasado no amengua, no aminora en lo más mínimo la traición cometida por algunos mexicanos y por el Clero católico, apostólico de México. Fracasaron redondamente a pesar de esta campaña de infamia.

Aquí traigo el "World", el periódico de más circulación, el periódico más caracterizado de los Estados Unidos, que trae este editorial que es muy significativo para nosotros los mexicanos. Dice así: "La paja en el ojo de México."

"Dos diarios de la ciudad de México, "El Universal" y "Excélsior", simultáneamente, publicaron una protesta en contra de la campaña de difamación, la cual dicen hace en contra de México parte de la prensa americana. Efectivamente la hace, pero esa parte es muy pequeña y sin importancia y habla también en forma difamatoria de la ambiciosa

Inglaterra, de la ingrata Francia y de la militarista Alemania y así sucesivamente. Pero los mexicanos no deben sentirse disgustados por esto. Nosotros creemos poder asegurarles que la mayoría de los americanos inteligentes comprenden los siguientes hechos: Primero. Hay cierto grado de violencia en México, pero hay también una gran cantidad de linchamientos, asesinatos en montón y bandidaje en los Estados Unidos. Herring no está en México. Oímos hablar del pulque, de sus peligros y de sus males, pero México, por otra parte no tiene bootleggers, hijackers, beergansters y toda la pandilla. (Estos son títulos graciosos que les dan a los contrabandistas de licores).

"Oímos ocasionalmente de los escándalos políticos de México, pero míster Fall, Daugherty y Forbes, los gobernadores McCrain, Len Samll, coronel Frank Smith y otros, son ciudadanos de los Estados Unidos, no de México.

"México ha ido despacio para dar fin al problema del peonaje y tiene, efectivamente, una campaña contra el Yaqui, pero no tuvo esa sangrientísima guerra civil que nosotros tuvimos para abolir la esclavitud, y su tratamiento para el indio es una blanca azucena al lado de nuestro record indio. (Aplausos.) En resumen: los americanos inteligentes piensan más en la viga de nuestro propio ojo nacional que en la paja del de México.

"Ha habido tiempo en que el esfuerzo de las publicaciones amarillistas e individuos interesados han llevado una campaña que trataba de perjudicar a México y fue alarmante; pero ya no estamos en ese tiempo, la rápida desaparición de la ligera excitación a propósito de la confiscación de tierras y la persecución religiosa muestran que estamos muy contentos en no meternos más que en nuestros propios negocios."

Esto lo dice el "World", que es el periódico más importante de los Estados Unidos. Ven, pues, los católicos, apostólicos, romanos, mexicanos, que están trazados e iniciados dos caminos: uno, por el Clero apostólico romano, que lleva a la abyección ante el fuerte del Norte, a la traición a la patria; el otro, seguido por la revolución, que nos lleva a la redención del indio, al levantamiento del nivel intelectual y moral del pueblo mexicano; a la liberación económica del proletariado; al aumento de la riqueza nacional por medio de las obras de irrigación que harán producir más nuestra tierra; en una palabra: al engrandecimiento de México, a la creación de un México respetable y fuerte. Los revolucionarios estamos con este segundo camino. Para que decidan por cuál de los dos optan, tienen la palabra los católicos, romanos, mexicanos. (Aplausos estruendosos).

El C. presidente: Habiendo hablado un orador en pro y no habiendo ninguno en contra, se concede la palabra al ciudadano Gilberto Fabila en pro.

El C. Fabila: Ciudadanos diputados: Realmente después de la tremenda requisito del compañero Cerisola en contra de la infame conducta del Clero mexicano y de los Caballeros de Colón y de muchos católicos mexicanos, no cabe venir a decir una palabra más respecto de esa labor de traición a la patria. Vengo a referirme a la ley a debate, al proyecto de ley a debate y solamente desde un punto de vista que creo que le falta a este proyecto de ley, que le falta, repito, pero que yo acepto esa deficiencia en vista de que los revolucionarios no debemos extremar de primer intento nuestra acción, ni precipitar los procedimientos que en un futuro tendremos que desarrollar a fin de consolidar más firmemente nuestras conquistas en contra del fanatismo y en contra del clericalismo. Digo que defectuoso este proyecto de ley, porque solamente atiende a obtener la sumisión del Clero mexicano y a arrancarles nuevas posibilidades de que es Clero se adueñe una vez más de la situación política y del poder económico por el que siempre ha ambicionado en México. Es defectuoso ese proyecto de ley, porque en realidad deberíamos haberlo presentado en el sentido de moralizar, de corregir a ese infame Clero católico mexicano. Si está en la cartera de esta Cámara desde hacer muchos años la reglamentación del ejercicio profesional en otros ramos diferentes al de la clerigalla, ¿por qué, pues, en esta ley que en cierto modo tiende a reglamentar ese ejercicio, no tocamos la llaga del ejercicio de los curas, de los frailes, cuando todos y cada uno de nosotros quizá tengamos en nuestros distritos problemas, o más que problemas casos de inmoralidad asquerosa, infamias incalificables cometidas al amparo o bajo la vestidura de una sotana o de un título de cualquiera organización religiosa? Yo, en mi distrito, tengo o tuve hasta hace poco tiempo tres casos de curas que seguramente colocados al nivel de cualquier profesional, caerían bajo la sanción de las penas más duras que la ley pueda imponer, porque en esta ley no ponemos sanción para que los curas que violen niñas, para que los curas que ejerzan el préstamo y la usara, para que los curas que validos de su ministerio obtengan herencias engañando a los moribundos, queden descalificados para el ejercicio de su profesión. ¿Por qué en esta ley que tiende a reglamentar el ejercicio profesional de los curas, no ponemos una autorización para que los presidentes municipales, en vista de la comprobación de un delito cometido por estos individuos, les reiteren el permiso para el ejercicio de su ministerio? En ese punto considero que la ley a debate es defectuosa, porque deberíamos imponerles las sanciones del caso para retirarlos del ejercicio cuando hubieran cometido alguna falta a la moral o a las leyes.

El C. Zincúnegui Tercero: Para una interpretación, con permiso del orador. ¿Cree el compañero Fabila que los hechos a que se refiere no caen bajo la sanción del Código Penal como delitos del orden común?

El C. Fabila: El compañero Zincúnegui Tercero está en lo justo y yo lo sabía de antemano; pero el compañero Zincúnegui Tercero representa un distrito de Michoacán que está por excelencia dominado por el Clero, y si yo fuera interpelando al compañero Zincúnegui y a los demás diputados por el Estado de Michoacán respecto a cuántas veces los curas que han cometido innumerables delitos del orden común y del orden moral, etcétera, en Michoacán, han sido castigados, estoy seguro que el compañero Zincúnegui y la diputación entera me dirían que por excepción se habían aplicado las sanciones de los Códigos comunes.

El C. Zincúnegui Tercero: ¿Me permite contestarle

compañero? El hecho, compañero Fabila, de que la ley no se aplique en determinados casos, no quiere decir que la ley no subsista. En estos momentos usted está tratando de que la Cámara legisle sobre algo que se legisló, es decir, que en materia penal está perfectamente establecido dentro del Código Penal: que los delitos del orden común tienen ya una sanción determinada, y sería una superabundancia legislativa que nosotros viniéramos a decir que los sacerdotes incurrían en una responsabilidad especial, siendo así que no hacen sino incurrir en delitos del orden común.

El C. Fabila: En este caso, como en otros muchos, compañero Zincúnegui, ambas partes tenemos razón. Yo creo tenerla, porque en todo caso el punto que yo vengo a denunciar como faltante en el proyecto de ley a debate es éste, que tal vez no he puntualizado perfectamente: que las autoridades municipales, que son las que en realidad van a dar el permiso para el ejercicio del ministerio sacerdotal de los curas, tengan también la facultad de retirarles ese permiso cuando estos individuos hayan cometido un delito del orden moral o del orden penal, porque a pesar de esta ley que va a poner bajo la jurisdicción de los presidentes municipales y de los gobernadores el ejercicio del sacerdocio, a pesar de esta ley, repito, los curas seguirán violando niñas, los curas seguirán robando herencias, los curas seguirán ejerciendo el préstamo con usura y esto no está previsto por los códigos, y si está previsto no ha sido castigado. De cualquier manera, aun después de que esta ley entre en vigor, en tres municipios de mi distrito quedarán protegidos el arzobispo de la jurisdicción de mi distrito, quedarán protegidos aquellos tres individuos que se han cansado de disfrutar las primicias de las doncellas. (Risas). De manera, compañeros, como decía al principio y concretando el objeto de mi presencia en esta tribuna, yo vengo a decir que el proyecto de ley que habremos de aprobar en esta vez es demasiado benévolo, que le falta algo, pero que estoy de acuerdo en que por lo pronto le falta algo y ojalá que próximos períodos legislativos o en próximas legislaturas complementamos esta ley, facultando a las autoridades municipales para que puedan retirar el permiso del ejercicio sacerdotal a aquellos pillos sinvergüenzas que están protegidos por una sotana y por los arzobispos de México. (Aplausos).

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Soto y Gama.

El C. Días Soto y Gama: Compañeros: El señor diputado Fabila se ha fatigado inútilmente, porque es imposible querer dar interés a un debate en lo general sobre la reglamentación del artículo 130, cuando esta reglamentación se reduce a una sanción del Código Penal sobre los preceptos de detalle del artículo 130. Además, el compañero Fabila nos propone algo inadmisible, es decir, leyes especiales. Antes tenían los clérigos fuero y ahora quiere ponerlos fuera de las leyes generales. Tan absurda es una cosa como otra; tanto se peca por exceso como por defecto; la manera que le compañero se fatigó inútilmente. Yo creo que aquí lo que debemos hacer es indagar un poco más a fondo, escudriñar un poco a fondo, en lo graves hechos que reveló en esta tribuna el compañero Cerisola. Debemos entrar a fondo en el debate sobre las connivencias de los reaccionarios americanos con la reacción de México, este es el punto toral en este debate, ver si hay traición a la patria o algo que se le parezca; sobre esto debe versar el debate, máxime cuando a manos de un grupo de compañeros Gonzalo Santos ha llegado a un valiosísimo documento sobre el que pedimos la atención de esta Asamblea y la atención de la prensa metropolitana; es un documento cuya autenticidad va a poner en duda y a negar rotundamente los interesados, pero ese documento tiene todos los caracteres de autenticidad, lo ponemos, original, a disposición de la prensa. El compañero Santos lo tiene en su poder; yo ruego al compañero Santos entregue a la prensa las copias fotográficas que al efecto hemos sacado, con objeto de ver si es posible que la prensa, cumpliendo con su deber, lo publique en primera plana. La exposición que vamos a hacer alrededor de este documento convencerá a la prensa de México, estoy absolutamente seguro, de la importancia del documento. Yo ruego también al compañero Santos haga que la prensa se entere y pase su vista sobre el documento original, aparte de las copias, porque no queremos hacer nosotros una obra de suplantación o de mentira, porque no queremos seguir los procedimientos del Clero que eternamente ha sido de hipocresía y de mendacidad. Es obra seria; protestamos que el documento nos ha llegado por buen conducto, por un católico escandalizado, por un católico escandalizado de la trama, de la conspiración que se estaba formando en el país vecino, en los Estados Unidos, contra la soberanía e integridad de México, el cual, en un rasgo de sincero patriotismo, entregó el documento a los diputados que él creyó más interesados en este asunto. Voy a leer la copia de esta circular y después entraré en comentarios, o más bien intercalaré los comentarios dentro de la lectura. Yo ruego la atención de esta Asamblea porque ya no se trata de la vulgaridad de discutir y aprobar la reglamentación del artículo 130, no podemos hacer otra cosa, a no ser que queramos violar la protesta que hemos hecho en esta Asamblea de cumplir y hacer cumplir la Constitución en sus diversos artículos. Esto es algo distinto, es un aspecto muy grave de la cuestión, que tiene puntos de contacto con el asunto internacional. Voy a leer el documento, que es de la mayor importancia auténtico. El documento dice: "Caballeros de Colón, Consejo de Loyola". Este nombre de Loyola es evocativo, evoca a uno de los hombres más funestos de la historia, a San Ignacio de Loyola. "628 Bedford Avenue, Brooklyn. - New York - Comité del Fondo de Auxilios de México. - John A. Reagau. - Presidente. Y viene al circular: "Estimado señor y hermano",. - entre comillas - "A los Caballeros de Colón de México, les extendemos nuestra simpatía y afecto fraternales". Se cierra las comillas. "Así habló al unísono el Consejo Supremo de la Orden en la junta anual, celebrado el 5 de agosto en la ciudad de Filadelfia."

Luego los Caballeros de Colón de México estuvieron presentes en la junta de Philadelphia; luego ellos son cómplices de todos los que ustedes van a ver en este documento.

El C. Santos: Para una interrogación. ¿Qué usted no recuerda que un paisano nuestro, por desgracia, compañero Soto, estuvo allá en Filadelfia en esa junta de traidores, y que el Gobierno de la República le ha prohibido que venga al país?

El C. Díaz Soto y Gama: Tiene usted mucha razón. (Voces: ¡Nombres!) Hoyo o del Hoyo, probablemente es el apellido potosino. Todos recordamos que el Gobierno Mexicano al enterarse, por medio de sus agentes, de la gravedad de los asuntos tratados en esa junta, prohibió la entrega al país de los Caballeros de Colón mexicanos que hubieran asistido a la junta anual de Philadelphia. Tenemos, pues un punto comprobado de los que buscaba el compañero Cerisola; con la acuciosidad necesaria, puesto que es delicado el asunto, no debemos tocarlo literariamente sino paso a paso. Los Caballeros de Colón de México, por lo menos en la persona de sus representantes en Philadelphia, son cómplices de los Caballeros de Colón norteamericanos. Después buscaremos en esta ocasión, y los compañeros me ayudarán a ello, la complicidad de uno o conjuntamente del conglomerado de los Caballeros de Colón, orden mundial, con el Clero de México, "Más aún, como una prueba de nuestra simpatía hacia nuestros hermanos, Caballeros de Colón en México y de nuestra determinación de llevar a cabo una inexorable campaña con el fin de hacer terminar los males que ha causado la intolerable situación que reina en ese infortunado país,... " Aquí preciso otro comentario: no se trata, como se dice en los periódicos de una campaña educacional o cultural contra México; no, se trata de una campaña militar, de una campaña de intervención, de una campaña política, puesto que se trata de una campaña inexorable con el fin de hacer terminar los males que ha causado la intolerable situación que reina en México; esto es, una intervención, un acto filibusterismo. Esto demuestra la existencia de una expedición filibustera encabezada por los Caballeros de Colón, y ustedes van a ver esto cada vez más claro en la lectura de la circular. En vista de esto - dice el Consejo - :

".....el Consejo Supremo, por voto unánime, autorizó a la Suprema Junta de Directores a exigir contribución de los miembros hasta la suma de un millón de dólares, y el Supremo Caballero fue autorizado para dar los pasos necesarios con el objeto de llevar a cabo esta solemne declaración del Consejo Supremo.

"De acuerdo con la orden arriba expresada, se ha acordado que se empiece inmediatamente a colectar el fondo de un millón; que es preferible obtener contribuciones voluntarias de nuestros miembros a imponerles una contribución más tarde, por medio de la Junta Directiva, y que deben recibirse subscripciones no solamente de los miembros, sino de los extraños a la Orden - y aquí viene otra declaración importante - , pues consideramos que todos los católicos desean apoyar cualquier empresa de los Caballeros de Colón, para beneficio de aquellos que son de la misma fe en México". Ya es un indicio de que todos los católicos, siguiendo la intención de los Caballeros de Colón, deben colaborar en la obra. Para lograr esto, se empezará inmediatamente una campaña con el fin de recaudar el fondo mexicano de los Caballeros de Colón. La semana que empieza el 19 de septiembre ha sido designada como la fecha final de la campaña. A cada jurisdicción de la Orden fuera de México le ha sido fijada una cuota basada en el número de sus miembros."

Basta esta fecha para que los compañeros se fijen en que la amenaza sobre México no ha cedido con la derrota de los pequeños grupos dispersos que baten actualmente las fuerzas federales y que se han levantado antes de septiembre, de los grupos a que se refirió el compañero, sin que hay una campaña más a fondo que es la que va a empezar con los fondos que se recauden hasta el 19 de septiembre. Fíjense ustedes en que esto coincidirá con la campaña antireeleccionista, toda vez que se va a valer los reaccionarios del pretexto de la no reelección para tener una bandera. Yo hago esta explicación a los compañeros que de buena fe tomen esta bandera torpemente, sin comprender que se unen al enemigo, y esto se los digo sin el ánimo de herirlos, porque no los creo ligados con los Caballeros de Colón. Digo que los Caballeros de Colón se van a aprovechar de esta bandera.

"La cuota de nuestro Consejo es de un mil cien pesos, o sea de uno cincuenta aproximadamente, por miembro. Queda usted en libertad de aceptar subscripciones de los que sean miembros. Estoy seguro que procederá usted inmediatamente y evitará el que se exija una contribución forzosa a los miembros".

"Si se toma en cuenta que hay más de veinte millones de católicos en los diversos países en donde hay Consejos de la Orden, fuera de México; y que la pequeña suma de cinco centavos por cada uno, llegaría a más de un millón de dólares, el obtener esta suma no presenta dificultades, si cada miembro y cada Consejo cumplen con su parte. Confío que esta petición subscribirá nuestra cuota".

Como ustedes ven, buscan la connivencia de veinte millones de católicos. No es, pues, sólo la responsabilidad de los Caballeros de Colón, la que está aquí en cuestión. "Este llamado de acción se lleva a efecto al terminar el año del Consejo. Por lo tanto, tiene usted la oportunidad de señalar la nueva administración de los asuntos del Consejo, por un hecho significativo la subscripción de este fondo para mejorar la situación intolerable de ese infeliz país al Sur del Río Grande".

Aquí viene una serie de comentarios o de declaraciones todos insidiosos, todos pérfidos que hay que subrayar. "Allá en México, santos hombres y mujeres que han dedicado sus vidas al servicio de Dios, son insultados, envilecidos, presos y expatriados, asaltados y aun asesinados. Allí el Gobierno bolchevique en el Poder quiere destruir la iglesia y borrar el último vestigio de la santa fe". Va aumentando el tono, el diapasón del cinismo, como ustedes van a ver. "Allí las medidas opresivas que con tal fin se ha adaptado impiden que el santo sacrificio de la misa se consume o que se administren los sacramentos". ¿No es audacia esto? Todos saben, todos han visto que se trata de una huelga de los servicios de los cuales, decretada por los mismos interesados

¿cómo hablan, pues, de que se les impide? "Allí, el pertenecer a los Caballeros de Colón significa perder el empleo". ¡Habrá mayor cinismo! Es todo lo contrario, es todo lo contrario: hay oficinas en las cuales el ser Caballero de Colón es tener las puertas abiertas. (Aplausos. Voces: ¡Haciendo! ¡Pani!) La Secretaría de Hacienda ha sido señalada en este sentido con índice de fuego por el compañero Altamirano, y parece que en este momento lo es por toda la Cámara. "Allí los divinos derechos de vida, libertad, y el derecho de ser feliz, son brutalmente arrebatados a los católicos".

El derecho de ser feliz! "Allí no existe libertad de conciencia". Aquí viene algo muy insidioso: "Allí todo esto y más se hace en nombre de la ley y amparándose en los fusiles proporcionados por el Gobierno americano a los revolucionarios que ahora controlan el Gobierno y el pueblo de México."

Aquí asoma esta tendencia, la de preocupar, la de impresionar al Gobierno americano para que haga causa común con ellos, con sus tendencias. Y luego viene esto: "Esto, bajo la Constitución, cuyos artículos nunca fueron sometidos al pueblo o adoptados por éste y la cual es únicamente un código adaptado por los líderes de la revolución para constituir en México una agencia del Gobierno Soviet".

¿No es esto igual a la inculpación que hace a nuestro Gobierno ese esbirro de Norteamérica que se llama Adolfo Díaz? ¿No son exactamente las mismas palabras de que México es una agencia del soviet? ¿No está ligada a una sola campaña? ¿No hay campaña de ocasión, aprovechando las dificultades internacionales de momento de México, para provocar dificultades a México? Yo ahondaré este punto y creo que los compañeros me ayudarán. "Puede usted fácilmente comprender que todo esto necesita una acción inmediata". Aquí viene lo más grave de la circular. No es literatura, no se trata de propaganda de prensa, es algo más hondo y más serio. "Inmediatamente tome el sobre adjunto, vea que está dirigido al secretario de finanzas de este Consejo, incluya en el mismo $1.50 o cuantos dólares le dicten sus sentimientos, cierre el sobre y échelo en el buzón más al momento".

Aquí viene lo mejor de la circular, lo más grave también. "Vea hacia el Río Grande y piense para sí mismo. "Señor bolchevique" - quieren decir, señor general Calles - , "los Caballeros de Colón han aceptado su reto y viene respaldados por un millón de dólares. Y están en pie 800.000 de ellos que lucharán hasta que usted y su llamada Constitución mueran".

¡Un millón de dólares! Y están en pie ochocientos mil de ellos... (Risas. Voces: ¡Huy, qué miedo!) Favor de oír serenamente el asunto. Están en pie ochocientos mil de ellos que lucharán "hasta que usted y su llamada Constitución muera". (Siseos). Esta puede tomarse de dos modos, o en forma risible, como lo ha tomado la Cámara, o en una forma seria. Yo no creo que sea esto digno absolutamente de ser tomado de un modo exclusivo bajo el aspecto de la risa; lo sería si no hubiera dificultades internacionales en este momento con los Estados Unidos; lo sería sino viéramos que todos los incidentes que surgen son aprovechados contra México en este instante; lo sería si no viéramos la perfidia de los clericales para hacerse aliados de la plutocracia y si no viéramos todos los síntomas que están demostrando que los Caballeros de Colón y los clericales de México no están solos en esta lucha contra la Soberanía de México, contra la integridad de su Constitución. Existe un bloqueo financiero muy serio, un boycot financiero cada vez más marcado, se habla de que Bancos americanos han ordenado el retiro de sus depósitos. Se nos amenaza con una acción internacional del primero de enero en adelante. De tal manera que no es esto cosa de tomarse precisamente como cosa de risa, sino estudiarla a fondo; hay que estudiarla muy a fondo y tomarla muy a pecho, porque nuestra situación no es precisamente la de un baño de rosas. Yo quiero estudiar esto con calma y con todo el cuidado y la delicadeza que merece un asunto que se relaciona con lo internacional y preguntar a ustedes si no debemos alarmarnos de que una propaganda de esta naturaleza se permita en los Estados Unidos, en donde tan escrupuloso son cuando se trata de una llamada o pretendida expedición de México sobre Nicaragua. Yo quisiera que estudiáramos esto desde este punto de vista: Si en México una institución cualquiera, como los Caballeros de Colón, o de mayor o menor impotencia que esa, que estuviera haciendo una colecta para invadir México a Estados Unidos o preparar una expedición filibustera contra Estados Unidos para destruir las instituciones de Estados Unidos, para lograr que perezca la Constitución de Estados Unidos, como aquí se dice, ¿qué harían los americanos y qué haría la Cancillería americana? Ven ustedes que se asalta en Cuernavaca a un individuo más o menos rico y se forma el gran escándalo; ven ustedes que no se nos permite ni siquiera tener rebeldes que vienen huyendo de la tiranía de los países sudamericanos; basta que existan aquí refugiados, para que surjan suspicacias y sospechas y declaraciones de que México apoya expediciones militares contra Nicaragua.

De manera que la situación es esta: nosotros podemos, parodiando a Mr. Kellogg, hacer nuestro pequeño resumen de la situación: él hacer de la situación mexicanoamericano a su modo y nosotros también, más menos, en esta forma: los Estados Unidos, porque son fuertes, todo lo pueden y tienen todos los derechos; a ellos todo les es permitido; derecho de dar albazos internacionales todos los días, intervenir en todos los demás países del continente, intrigar en todos los demás países del continente, sostener a todos los tiranos del continente si así les viene en gran; intervenir en todos los gobiernos, linchar a los mexicanos, sacrificar la vida de mexicanos a cada instante, no hacer justicia cuando se trata de castigar a asesinos de mexicanos. Pero, en cambio, ¿a México qué le permite el Derecho Internacional, quiero saberlo, el Derecho Internacional, el derecho del más fuerte? El derecho de ad nomine leo, porque me llamo león, porque me toca la parte de león, por eso tengo

todos los derechos y ninguna obligación. Se nos llama por los Estados unidos a que seamos buenos vecinos y vamos a ser buenos vecinos y debemos serlo; ¿pero esa vecindad en qué se va a basar? ¿En derechos para una de las partes y en sólo obligaciones para la otra? Yo quiero que la Asamblea se fije, saliendo de este estado de hilaridad y frivolidad en que se ha colocado, se fije en la seriedad del caso: no estamos jugando con un asunto superficial, estamos sencillamente enfrentándonos con la situación internacional. Las últimas notas del Gobierno americano revelan que el Gobierno americano parece que se quiere abrogar el derecho de invertir en la legislación mexicana y en la formación de su jurisprudencia, en los fallos de nuestra tribuna, en la manera de aplicar nuestras leyes. Estamos discutiendo aquí la Ley del Petróleo, y hoy sabemos, por confesión del mismo Washington, y ante eso se permite el Gobierno de Washington mandar memorias o un memorial o memorándum al Gobierno de México, dictándole en qué se debe resolver la legislación petrolera. ¿Esto no es serio? ¿No merece la atención de la Representación Nacional? Yo creo que sí. ¿Y esto se puede ligar con esta actividad de los Caballeros de Colón cuando las fechas coinciden? ¿Tendrá algo de particular que los Caballeros de Colón, que el Clero norteamericano estuviera de acuerdo con las compañías petroleras para ejercer presión sobre míster Coolidge? Yo pregunto, es la pregunta que debemos hacernos: míster Coolidge, el puritano, el hombre que se caracteriza, según se dice, por una doctrina moral, recta y estricta, el hombre que profesa honda y sinceramente la religión cristiana, hombre que llega en sus ritualidades hasta a bendecir el pan antes de comer, el hombre modelo de puritanismo, ese hombre sucumbirá al fin por la tentadora, por la tontera supina de míster Kellogg, que en todos estos asuntos se está exhibiendo como un verdadero tonto, como un tonto de solemnidad, porque no va un yerro, sino montones de yerros los que están cometiendo en Derecho Internacional? ¿Por la tontera de Kellogg, por la presión de las compañías petroleras o por las intrigas de los Caballeros de Colón, insidiosas, míster Coolidge, el hombre probo, sucumbirá al fin ante esa presión? Estas son preguntas que debemos hacernos, ¿y no debemos nosotros tomar acción en este momento para preguntar al Gobierno de los Estados Unidos por qué permite, por qué tolera la formación, la preparación de una expedición filibustera con un millón de dólares, porque ustedes fíjense que no se dice que este millón de dólares va a ser dedicado a propagandas, va a ser dedicado a una campaña inexorable para hacer terminar los males, y luego viene una amenaza completa: "Los Caballeros de Colón han aceptado su reto y vienen respaldados por un millón de dólares. Y están en pie ochocientos mil de ellos, que lucharán hasta que usted y su llamada Constitución mueran."

Esto quiere decir que se quiere poner en juego toda clase de medios, inclusive la intervención - cosa que no carece de antecedentes en nuestra historia -, para destruir la Constitución. Yo creo en que este punto - yo quiero que ustedes me digan, quizá, lo exagero, quiero que me digan si lo exagero, pero es necesario estudiar la cuestión con seriedad-, yo creo que en este punto hay un paralelismo jocundo en la actuación del Clero mexicano el año de 60, y la actuación del Clero Mexicano en estos momentos. La diferencia es muy sencilla: en el año de 60, el Clero mexicano ocurrió a Francia, porque Francia era la que acababa de vencer en Crimea, en Magenta, en Solferino; hoy acude a Estados Unidos, porque los Estados Unidos son los fuertes y por eso el Congreso Eucarístico, preparación de esta campaña, no se celebró en Roma ni se celebró en Francia, sino en Estados Unidos, cosa insólita; y como allí no se podía profanar tan abiertamente un sacramento que dice la Iglesia que para ella es tan respetable, haciendo acción política, la acción política la confió la Iglesia a la milicia laica, a los Caballeros de Colón. Esa es la respuesta que doy a mi conciencia y al compañero Cerisola: los Caballeros de Colón están de acuerdo evidentemente con el Clero oficial: ¿quién ignora que los Caballeros de Colón, en la Catedral, en la Basílica de Guadalupe, en las Iglesias, forman bóvedas de acero cruzando su espadines, o no sé cómo se llamen, para que por debajo pasen los directores de la Orden? ¿Quién no sabe que esas farsas se han efectuado en las Iglesias como parte del ritual católico? ¿o qué, los Caballeros de Colón son herejes? ¿Qué, los Caballeros de Colón están fuera de la Iglesia, obran contra las órdenes de Iglesia, o reciben sus órdenes? ¿La disciplina de la Iglesia se ha roto? Si no se ha roto, debe declarar herejes a los que no obedecen o respaldan sus actos; pero es manifiesta la complicidad. A mí me mandaron unas hojas en ese sentido; probablemente me las mandaron aquí a la Cámara algunos católicos; una hoja, por cierto de mi tierra, en ese sentido, y aquí ven ustedes que al Clero de México lo apoya el Clero de Francia: "La Confederación Nacional Católica de Francia nos envía frases de aliento en una extensa carta dirigida a los arzobispos, obispos, sacerdotes y fieles de México."

Otra nota: "Los obispos católicos americanos alaban a los mexicanos."

En el "New York Times" aparece la siguiente noticia:

"Washington, septiembre 15. - Los obispos católicos de los Estados Unidos, en su asamblea anual, celebrada hoy aquí, dirigieron un mensaje de simpatía a los arzobispos, obispos, sacerdotes y fieles de México, prediciendo que la Iglesia ganaría en la lucha con el Gobierno mexicano."

Luego no es la cosa para ser tomada a la risa. La Asamblea fue solemne. El mensaje de simpatía dice así - voy a leer lo más importante -:

"A los arzobispos, obispos, sacerdotes y fieles de México:

"En estos días de vuestras duras pruebas y persecuciones, nosotros, los obispos de los Estados Unidos de América, reunidos en conferencia, enviamos nuestros saludos de simpatía y afecto a vosotros, queridos hermanos, obispos de los Estados Unidos Mexicanos y a vuestro heroico pueblo.

"Nosotros, nuestro Clero y fieles, estamos observando con entusiasmo y entera simpatía a vuestro combate magnífico en contra de un Gobierno tiránico. Aplaudimos vuestra sabiduría, moderación

y firmeza y nos llena de admiración la calma, el valor y la resistencia del pueblo mexicano.

"Estáis demostrando al mundo entero el verdadero espíritu de los mártires, listo para soportar todo por la causa de Cristo. Os estáis manifestando también los verdaderos campeones en México, de la libertad religiosa y civil. Estáis resistiendo sin temor a la fuerza armada en defensa de los derechos inalienables del hombre.

"El combate puede ser largo; puede dar muchos mártires a la Iglesia y a la humanidad. Terminará únicamente con la victoria de la libertad y de la justicia."

Siempre hablando de triunfo, no de tregua.

"El pueblo mexicano, que tanto ha sufrido y que ama la paz, que por tanto tiempo ha sido víctima del militarismo brutal, surgirá de esta prueba como una nación más fuerte y más pura, con una legislación fundada en los verdaderos principios de justicia y libertad, y con un Gobierno que respete honradamente los derechos del pueblo."

¿Después de esto podrá dudarse que la conspiración, el complot clerical va derechamente contra las instituciones que nos rigen? Se trata de destruir esta Constitución que llaman ellos soviética; se trata de destruir una Constitución avanzada; la misma lucha que hubo contra la Constitución de 57 se emprende hoy mundialmente por la iglesia y todas sus milicias -una de las cuales es la Caballería de Colón - contra la Constitución de 1917. Los procedimientos varían; la intervención del año de 62 fue militar; la intervención de ahora empieza por ser financiera; el boycot financiero sobre México existe, está planteado; De notas últimas del Gobierno americano tienden en realidad a lo mismo: la amenaza para el primero de enero. Y en estas condiciones, ¿no es preciso ahondar un poco el debate? Yo creo que sí. De manera que la Asamblea me va a permitir que insista. Yo quisiera que se precisara ante el mundo entero que las relaciones que los Estados Unidos llevan con México no son relaciones de igualdad ni de solidaridad. Yo quisiera que se viera la injusticia con que proceden los Estados Unidos, yo quisiera que se notara, yo quisiera que se subrayara, yo quisiera que se recalcara la teoría del general Obregón; son pueblos fuertes que no entienden más que de la fuerza. Y nosotros debemos hacer resaltar por un lado nuestra justicia, la conciencia de la razón que nos asiste, y por otro lado nuestra absoluta y firme resolución de morir todos como buenos en la batalla, antes de permitir que la soberanía de México sea juguete de un pueblo. (Aplausos estruendosos). Yo creo que es el momento de precisar a los Estados Unidos que el México de 1926 no es el México de 1847. (Aplausos). Yo quiero que los Estados Unidos sepan que en México ni siquiera los católicos serán traidores en esta vez. (Aplausos). Serán traidores los altos dignatarios de la Iglesia, allá encerrados en sus casas, metidos debajo de la cama o debajo de su sotana; (Aplausos.) pero los católicos de México, los que creen y aceptan la verdad de esta circular que les ponemos a la vista o aquellos que se pongan en el supuesto de una invasión, los católicos de México, yo lo digo altamente, sinceramente, los católicos de México formarán un solo grupo con nosotros los revolucionarios cuando se trate por la fuerza de querer implantar aquí en México un régimen de retroceso de querer destruir en México por la fuerza de las bayonetas, de las ametralladoras y de los acorazados yanquis, las leyes que el país ama y que el país se ha dado a sí mismo. (Aplausos estruendosos). Poco más: la misma prensa de México, que en otras ocasiones no respaldara la acción del Gobierno, en este caso, hay que decirlo con verdad, en este caso ha sabido respaldar la acción del Gobierno. Los editoriales de "Excélsior" y de "El Universal", hay que decirlo con verdad, han sido muy patriotas, han respaldado la acción del Gobierno, y yo estoy seguro de que darán hoy la prueba definitiva, de que no vacilan entre ser traidores a la patria o denunciar a los traidores a la patria; y la prueba que debe dar la prensa metropolitana, y estoy seguro de que la dará, y así debe pedirlo la Cámara en cuerpo, la Cámara oficialmente, la prueba que deben dar es que publiquen original la circular en primera plana, en cliché fotográfico, en el centro y en la primera plana de sus periódicos, el día de mañana. (Aplausos). Yo pido que en la Secretaría de la Cámara de Diputados quede a disposición de todos los habitantes de la ciudad de México y de todos los habitantes de la República el original de la circular, para que allí vayan a verlo los católicos y se desengañen, y los Caballeros de Colón de México que no estén en el complot o en la traición de sus representantes que fueron a Filadelfia, puedan comparar el original, la formación tipográfica de la circular, con otras circulares, para que vean que no estamos haciendo obra de mistificación ni de engaño. Yo quiero que se haga esto, porque la situación internacional así lo exige y porque los pueblos débiles no tienen más que dos armas: su justicia y su dignidad, o dicho de otro modo, sus pantalones. (Aplausos nutridos y voces: ¡Bravo, Soto y Gama!) No es este un vano alarde, porque los Estados Unidos pueden absolutamente estar seguros de que detrás de México está todo Centroamérica y todo Sudamérica, desde Colombia hasta Chile y Argentina. (Aplausos nutridos). Ya entrando en un terreno de meditación y de calma, los Estados Unidos deben comprender que son torpes, que son tontos al provocar a México, porque comprometa su política en todo el continente, inclusive su política comercial, que es lo que más tiene que dolerles. Porque es claro que su política de fuerza, su política de atropellos, su política de albazos ha lastimado ya a los pueblos débiles, como dice Obregón; indigna a todo Centroamérica, amontona la desconfianza en toda Sudamérica, y si quieren controlar comercial y políticamente Centro y Sudamérica, lo primero que tienen que hacer es respetar a México, porque México es el centinela avanzado de las libertades de la raza indolatina. (Aplausos nutridos). Señores, para concluir, yo quiero que la Cámara, como un sólo hombre, se levante en representación del pueblo mexicano a sostener la política digna, la política viril, la política entera, la política macho del presidente de la República. (Aplausos ruidosos y prolongados.

Voces: ¡Viva Calles! ¡Viva Obregón! Los diputados se ponen de pie).

Y después de esto, compañeros, para que no se nos diga que provocamos, sino que nos defendemos, debo decir con toda serenidad: Los mexicanos queremos ser buenos vecinos de los norteamericanos, pero queremos reciprocidad; queremos tener obligaciones, pero tener también derechos; queremos cumplir con nuestras obligaciones de derecho internacional, pero queremos también que aquel pueblo fuerte que debería ser nuestro hermano y que lo será alguna vez, cumpla también con sus obligaciones de derecho internacional, y una de esas obligaciones es cumplir con sus propias leyes de neutralidad impidiendo, haciendo cesar esta campaña de filbusterismo que hemos denunciado ante la nación y el mundo entero. Me retiro de esta tribuna diciendo que no queremos destemplanzas, exageraciones de lenguajes, que estamos a la defensa, que no atacaremos, que nos defenderemos; que queremos ser dignos, justicieros y respaldar también las palabras de nuestro Gobierno: México está dispuesto a cumplir todos sus compromisos internacionales, pero exige de los pueblos fuertes cumplan también los compromisos que tienen y que deben cumplir con los pueblos débiles. (Aplausos nutridos).

El C. presidente: Tiene la palabra en pro el ciudadano Gonzalo N. Santos. (Aplausos).

El C. Santos: Compañeros: Efectivamente el momento es serio, pero al mal tiempo buena cara. Ya los compañeros Cerisola y Soto y Gama se han ocupado ampliamente de demostrar que en el extranjero, en los Estados Unidos, más claramente, se hace labor de traición a la patria por algunos malos mexicanos. Esto lo vine a decir a esta tribuna de la revolución hace algunos meses, cuando regresé de un viaje al Norte, y esto lo han venido a comprobar esos documentos, que seguramente publicará la prensa nacional, y eso lo han venido a comprobar también los periódicos intervencionistas de los Estados Unidos, que ha venido a leer aquí el compañero Cerisola. Está ampliamente comprobado, pero como en aquel entonces tanto en ciertos periódicos de segunda y tercera clase, como por medio de anónimos, se me invitó de parte de la reacción de nuestro país a que comprobase con documentos los cargos que vine a hacerle aquí al Clero, cuando la celada que le tendieron al glorioso general Obregón en Vícam, ahora traigo aquí más que documentos, más que pruebas traigo partes, pedazos de sus hechos, traigo las propias banderas que ha enarbolado en pro de la reacción. Voy a empezar, compañeros de la revolución, por pedir a la Secretaría que lea este oficio, para que se vea que son datos oficiales del Supremo Gobierno de la nación, lo que aquí voy a leer.

El C. secretario Romo: Al margen: "Estados Unidos Mexicanos. - Presidencia de la República. - Estado Mayor. - Número 3,119.

"Al C. Diputado Gonzalo N. Santos, presidente de la Alianza de Partidos de la República. - Presente.

"Por orden del señor presidente, y de conformidad con la solicitud que usted le envió, me permito adjuntarle el Boletín de este Estado Mayor, conteniendo todos los datos relativos a los motines organizados por el Clero católico en diversos Estados de la República, en los meses de agosto, septiembre, octubre y noviembre del presente año.

"Reitero a ustedes las seguridades de mi atenta consideración y aprecio.

"Sufragio Efectivo. No Reelección. - Palacio Nacional, 18 de noviembre de 1926.

- El general brigadier, jefe del E. M. Presidencial, José Alvarez."

El C. Santos: Voy a leer los partes oficiales de cada motín, de cada levantamiento, instigados todos por el Clero, y al final los vamos a comprobar.

"Boletín del Estado Mayor Presidencial, conteniendo todos los datos relativos a los motines organizados por el Clero católico, en los diversos Estados de la República, en los meses de agosto, septiembre, octubre y noviembre de 1926.

"La Presidencia de la República tuvo oportuno aviso de que los elementos clericales preparaban una serie de motines en toda la República. En los días transcurridos del mes de agosto a la fecha se han verificado algunos de carácter completamente clerical, encabezados, la mayor parte de ellos, por connotados Caballeros de Colón y aun por sacerdotes católicos, en los siguientes Estados: Michoacán, Guanajuato, Zacatecas, Jalisco, Guerrero, Durango, Oaxaca y Veracruz, con los resultados y proporciones que a continuación se detallan:

"Estado de Michoacán: El día 4 de agosto, una chusma de fanáticos, azuzados por los curas, de la localidad, hizo fuego sobre una escolta que llegó al pueblo de Sahuayo, de dicho Estado, agrediendo a dichas fuerzas desde las alturas del templo, en los momentos que los soldados paseaban sus caballos. Fuerzas federales a las órdenes del general Tranquilino Mendoza, procedentes de Zamora, marcharon inmediatamente sobre Sahuayo, habiendo huído los curas con el grupo que los seguía, consumando la hazaña de fusilar a cuatro gendarmes. Esta gavilla quedó completamente dispersa por las fuerzas federales en menos de ocho días."

No sé qué mandamiento de la Ley de Dios cumplirían estos señores con este acto, en el pueblo de Sahuayo.

El C. Zincúnegui Tercero: "No matarás."

El C. Santos: ¡No matarás a la buena, compañero! (Risas).

"El día 29 de septiembre se recibieron informes telegráficos, de que a las cinco de la mañana fue atacado el pueblo de La Piedad, Mich., por un grupo de individuos al grito de "Viva Cristo Rey", encabezado por el clerical Carlos Alvarado, quien reunió un grupo de cincuenta hombres, aproximadamente, que fueron rechazados, haciéndoseles un muerto. Se ordenó inmediatamente la movilización del general Tranquilino Mendoza, jefe de aquel sector, de Zamora, a La Piedad, quien se dedicó a hacer enérgica persecución contra la gavilla, y aunque ésta procuro esquivar todo contacto, las fuerzas federales lograron darle alcance en el rancho de "El Chilar", haciéndole catorce muertos y recogiéndole catorce caballos y doce carabinas. El día 1o. de octubre fueron nuevamente batidos los rebeldes en la sierra de Los Ocotes, y dejaron once muertos más. El Caballero de Colón

Carlos Alvarado, que mandaba esta chusma, huyó al extranjero; a las partidas dispersos se les hicieron cuatro muertos más, y el resto se presentó a las fuerzas federales, informando al general Mendoza que habían sido engañados por los curas y deseaban volver a sus hogares.

"El Gobierno no concedió ninguna importancia militar a este grupo, lo desarmó y permitió a sus componentes volver a sus trabajos.

"Por último, un nuevo intento de sublevación se verificó el día 20 de septiembre, cerca de la estación Chapultepec, entre Morelia y Pátzcuaro, en donde una turba de clericales, aproximadamente treinta o cuarenta individuos, encabezados por los Caballeros de Colón, José Vargas y Pedro García, de la misma localidad azuzados por los curas de aquel lugar, y al grito de "Viva Cristo Rey", pretendieron encabezar un nuevo movimiento, habiendo sido exterminado en menos de veinticuatro horas por las fuerzas federales y pasados por las armas, en Pátzcuaro, los cabecillas José Vargas y Pedro García, antes mencionados.

"El Estado de Michoacán se encuentra actualmente libre de fanáticos armados y la labor del jefe de las operaciones militares y las fuerzas a sus órdenes ha sido completamente satisfactoria. En la diversas escaramuzas y combates habidos para exterminar estas gavillas, sólo tuvo que lamentarse la muerte de un oficial y dos soldados del Gobierno.

"Estado de Guanajuato: El día 4 de agosto, una turba salvaje de clericales, azuzados por el cura Diego Ramírez, del pueblo de Acámbaro, de este Estado, asesinó a los ingenieros Violante y Almeida, que estaban comisionados por el Gobierno para impedir que aquel pueblo fuera inundado por las aguas del río Lerma. El jefe de las operaciones militares mandó pasar por las armas a cuatro de los asesinos. Los curas que dirigieron este atentado huyeron, ignorándose su paradero."

Este fue un hecho muy escandaloso, compañeros, la República entera se dio cuenta de él. Se trató de dos ingenieros que, como dice el parte oficial rendido al señor presidente de la República, iban a salvar a aquel pueblo de las inundaciones del río Lerma, y porque llevaban polainas, el cura no los creyó católicos, azuzó a la turba para que los asesinara, y los asesinaron.

"El día 29 de septiembre, el presidente de los Caballeros de Colón en Pénjamo, Gto., Luis Navarro, y otros clericales, como Pedro Herrera, elementos pertenecientes a la Liga de la Defensa Religiosa, encabezaron un motín, aprovechándose de la ausencia de las fuerzas federales en aquel lugar; incendiaron el Palacio Municipal, y, al grito de "Viva Cristo Rey", mataron a dos gendarmes, declarándose en abierta rebelión contra el Gobierno, con un contingente que llegó a sumar más de quinientos hombres, la mayor parte de chusma desarmadas; que, gritando vivas a la religión, se apoderaron del pueblo. El jefe de las operaciones militares con doscientos hombres, llegó a Pénjamo, y en menos de media hora de tiroteo dispersó este grupo, que huyó, presentándose después a las autoridades la mayor parte de los que les formaban, indicando que habían sido engañados por los curas.

Se les permitió regresar a sus trabajos, por no darse importancia alguna a este movimiento.

"El Gobernador del Estado de Guanajuato, en mensaje dirigido al señor presidente de la República, informó que, según sus noticias, este acto de rebelión fue tramado por elementos de la Liga de la Defensa Religiosa. A este grupo sólo se le hicieron ocho muertos en la persecución que se emprendió por haberse dispersado completamente, siendo los primeros en abandonar a su gente los líderes de los Caballeros de Colón, que huyeron.

"El día 19 de octubre, el jefe de las operaciones militares en el mismo Estado informa tener noticias de haber aparecido por Acámbaro un pequeño grupo de clericales, pretendiendo rebelarse contra el Gobierno. Habiéndose ordenado al general Genovevo Rivas que, con fuerzas a sus órdenes, persiguiera esta partida, que había sido organizada en el rancho de San Diego, distrito de Acámbaro, al mando de Cecilio García Zamudio. Fuerzas del Estado de Guanajuato, y últimamente del Estado de Michoacán, a cuya jurisdicción paso al distrito de Acámbaro, batieron este grupo, alcazándolos con fecha 14 del referido mes y haciéndoles cuatro bajas, entre ellas la del cabecilla Apolonio García. Se les recogieron cinco armas, una bandera tricolor con la imagen de la Virgen de Guadalupe. Batiosé después al pequeño grupo de dispersos que quedaba, capitaneando por Pedro Gutiérrez, y resultó muerto el referido cabecilla. Con fecha 16 del mes indicado fueron batidos de nuevo por el mayor Pedro López, del 62 regimiento, haciéndoles tres muertos y recogiéndoles un máuser. El mayor Petronilo Silva los alcanzó el día 17, haciéndoles un muerto. El jefe de las operaciones militares en Michoacán comunica, con fecha 9 de noviembre, haber exterminado a la gavilla referida, fusilando a García Zamudio, que la encabezaba, rindiéndose incondicionalmente Felipe Juárez y tres individuos más, que era el resto que quedaba de esta gavilla, completamente exterminada.

"El día 27 de octubre informó el jefe de las operaciones militares en el Estado de Guanajuato que el general Rodolfo Gallegos, que se encontraba desde hacía más de un año retirado del servicio en un rancho de su propiedad cercano a Celaya, se había levantado en armas contra el Gobierno al grito de "Viva Cristo rey", con un grupo que se calculaba en más de doscientos hombres. Inmediatamente se movilizaron fuerzas de las jefaturas de operaciones de Guanajuato, Querétaro y San Luis Potosí, habiendo sido batido el grupo rebelde, el día 30 del referido mes, por el general Anacleto López, jefe de las operaciones militares en el Estado de Querétaro, quien alcanzó al núcleo principal de la gavilla que mandaba personalmente el general Gallegos, en un punto denominado Cerro Alto, haciéndole siete bajas y cinco prisioneros, que fueron pasados por las armas, recogiéndoseles cincuenta caballos ensillados, veinte armas, quinientos treinta cartuchos, un estandarte con una guadalupana y numerosos distintivos con la inscripción de "viva Cristo rey". Se les recogieron también novecientos ochenta pesos ochenta y cuatro centavos en timbres de documentos que se habían robado en una de la plazas que asaltaron. Este núcleo quedó completamente disperso y el general Gallegos salió

acompañado del cura que lo sedujo y otro individuo más, quedando ocultos en las rancherías. Ese mismo día el general Genovevo Rivas batió otra facción de la gavilla de Gallegos en la sierra de Alcocer, habiéndole hecho siete bajas entre ellas la de Dolores Ramírez, que los encabezaba, recogiéndoles once caballos y cuatro máuseres. Los campesinos de la región por donde merodeó el general Gallegos, han cooperado con el Gobierno, descubriendo a los dispersos y logrando la aprehensión de Francisco Cervantes y tres individuos más, que fueron entregados a las autoridades militares. El jefe de las operaciones en San Luis Potosí, general de brigada Saturnino Cedillo, cooperó eficazmente con sus fuerzas a la batida de este grupo informando que todos los núcleos de esta gente han quedado diseminados, que los componentes se han dirigido a varios jefes federales, solicitando su perdón por haber sido engañados por los curas católicos.

"En todo el Estado de Guanajuato sólo quedan actualmente escondidos en las rancherías; el general Gallegos, el cura que lo acompañó y un individuo Osorino, que figura como segundo de Gallegos y que ha solicitado ya el perdón del Gobierno.

"Estado de Zacatecas: El cura M. Ibarra, de Huejuquilla, Jal., perteneciente a la jurisdicción del Estado de Zacatecas, se sublevó contra el Gobierno tomando posiciones y atrincherándose en la iglesia, habiendo marchado el general Eulogio Ortiz- este general Ortiz las gasta, compañeros; en poco tiempo dejó pacificado el Estado de Zacatecas - jefe de las operaciones militares en el Estado de Zacatecas, a batir este núcleo. El cura rebelde y los que lo acompañaban no cambiaron más que unos cuantos tiros con las fuerzas federales y huyeron a ocultarse, quedando el pequeño núcleo capitaneado por Rafael y Manuel Campos y Benjamín Díaz con seis hombres más, pretendiendo ocultarse en la sierra. El coronel Ruiz, jefe del 79 regimiento, batió este grupo en Momax, haciéndole tres muertos. En Chalchihuites, se les recogieron tres heridos. El jefe de las operaciones militares en el Estado de Zacatecas, después de tomar posesión de Huejuquilla, explicó al pueblo la situación y todos regresaron a su hogares, manifestando indignación contra el cura Ibarra, que los indujo a la rebelión. Así quedó exterminada esta gavilla, debido a la labor intensa del jefe de las operaciones militares de Zacatecas y Aguascalientes, quedando aquella región completamente libre de grupos fanáticos.

"Estado de Jalisco: Un grupo de fanáticos se amotinó frente al templo del Santuario, de Guadalajara, agrediendo al general Lorenzo Muñoz, jefe de la guarnición de dicha plaza, que accidentalmente pasaba por este lugar. Al tener conocimiento de tal motín el jefe de las operaciones militares, mandó fuerzas federales para que restablecieran el orden, siendo aprehendidos trescientos noventa individuos que se refugiaron en la iglesia, recogiéndoles gran número de cuchillos y pistolas viejas, y el resultado de este motín fue: dos oficiales y dos soldados muertos, así como cuatro fanáticos muertos y cuatro heridos.

"En Tototlán, Jal., el cura Francisco Vizcarra y los paisanos Juan Murillo y Paulino Rubalcava, se amotinaron, cometiendo asesinatos y depredaciones. El jefe de las operaciones ordenó su persecución, y el resultado fue el de costumbre: se ocultaron los curas y sacristanes, ignorándose su paradero en la actualidad.

"Un acto de salvajismo, que revela la cobardía con que han venido procediendo las chusmas de los fanáticos, tuvo lugar el día siete de noviembre en la ciudad de San Juan de los Lagos, Jal., en que un grupo de fanáticos, instigados por el cura del lugar y al grito de "viva Cristo Rey", asesinaron al teniente Marcos Cuello y a su asistente, que fueron a aquel lugar a cobrar un giro telegráfico de haberes para la tropa. Las fuerzas federales movilizadas por el jefe de las operaciones del Estado de Jalisco restablecieron el orden, haciéndoles cuatro bajas y obligándolos a cubrir la cantidad robada de los haberes, de acuerdo con las autoridades civiles del lugar. Esta chusma se disgregó, siendo imposible encontrar a los curas instigadores del motín, que se habían ocultado.

"En el Estado de Jalisco no existe ya ninguna partida de fanáticos armados.

"Estado de Guerrero: En el pueblo de Chilapa, residencia del obispo de Guerrero y único lugar del Estado en que los clericales tienen alguna influencia, tuvo lugar el día 26 de septiembre un motín encabezado por Antonio Vargas, Maclovio Ariza y Jesús López, con una partida de ciento ochenta hombres, incendiando las oficinas públicas y dando en libertad a la prisión al grito de "viva Cristo Rey", con las banderas y distintivos que han recibido de los grupos que los dirigen; después de algunos combates quedó esta partida completamente exterminada. Los campesinos cooperaron con las fuerzas federales, haciendo al enemigo quince muertos, entre ellos Antonio Vargas y Maclovio Ariza trece prisioneros más que fueron pasados por las armas; con lo que quedó completamente exterminada la gavilla.

"En el propio Estado quedan como único grupo rebeldes el que encabezan los hermanos Vidales en lo más alejado de la costa y a quienes se les hace una activa persecución. Este grupo no cuenta actualmente más que con veinticinco o treinta hombres y su única acción es la de esquivar el contacto con fuerzas federales, ocultándose en lo más intrincado de las serranías. El grupo de los Vidales no ha tomado aún carácter clerical definido, pretendiendo tomar como bandera la persecución y muerte de los españoles residentes en aquel Estado.

"Estado de Durango: El dos de octubre, el jefe de las operaciones militares en el Estado comunica que en el pueblo de Santiago Bayacora había tenido lugar un movimiento encabezado por el Caballero de Colón Tirso Gurrola y una chusma compuesta de más o menos cien hombres, que se remontaron a una sierra inmediata. El jefe de las operaciones militares en el Estado, general de brigada Enrique León, salió inmediatamente con fuerzas del 26 batallón y 76 regimiento, al lugar de los acontecimientos, teniendo contacto con el enemigo, a quien se le hicieron diez muertos. Por otra parte del Gobierno resultó herido el general Domingo G. Martínez; un sargento segundo y tres soldados, muertos. El 19 fueron batidos por el coronel Fermín Núñez, en la hacienda

de Capulín, haciéndoles dos muertos y dos prisioneros y recogiéndoles una carabina. El día 21 fueron batidos nuevamente, muriendo el rebelde Pedro Mora. El general Ismael Lares, que con un grupo de quince hombres salió a expedicionar por la sierra de Durango, fue sorprendido en una emboscada, quedando muerto en el campo; por este motivo, el jefe de las operaciones militares salió nuevamente a perseguir a los rebeldes, habiendo tomado contacto el día primero de noviembre con este grupo, en Arroyo del Agua, haciéndoles dos muertos y quitándoles seis carabinas, sesenta caballos. diez acémilas, treinta burros, cuarenta cabezas de ganado que se habían robado, setenta monturas y algunas provisiones de boca. Todos los muertos del enemigo llevaban escapularios imágenes y la leyenda ordenada por los Caballeros de Colón, quedando con esta acción completamente dispersada la gavilla de Tirso Gurrola, quien según informa el jefe de las operaciones militares, ha huído, ignorándose su paradero.

"En el Estado de Durango, se continúa persiguiendo a los dispersos de Gurrola, únicos que quedan en la República, teniendo la seguridad de que en breves días quedarán completamente exterminados.

"Estado de Oaxaca: El nueve de octubre, en el pueblo de Huajuapan de León, de dicho Estado, lugar de residencia de uno de los obispos, en el que la influencia clerical se dejó sentir con más intensidad, tuvo lugar un motín encabezado por José Salazar, Santiago López, Jesús Salazar y otros, al grito de "viva Cristo Rey". Las jefaturas de operaciones de Oaxaca y Puebla movilizaron oportunamente sus contingentes y en término de quince días esta chusma quedó completamente aniquilada. Estuvo azuzada por el cura de Tezoatla, quien huyó al sentir la proximidad de las fuerzas federales, siendo aprehendido únicamente un hermano de él, con cuatrocientos pesos, que el referido cura destinaba para ayudar a la revolución.

"El general Matías Ramos dio alcance a los bandoleros en San Sebastián, haciéndoles una baja en esta acción y comunicando que estos rebeldes sólo hacen un total de sesenta hombres. Con fecha 20, el mismo general Ramos informa que el resto de la gavilla se dispersó al darle alcance en Tindú. El día 22 comunicó el jefe de las operaciones que la gavilla se encuentra totalmente dispersa, habiendo recogido los cabellos y monturas abandonadas.

"El jefe de las operaciones militares en el Estado de Puebla, que también cooperó en esta persecución, manifiesta que el último grupo, compuesto de ocho hombres mandados por Ismael Guzmán, se internó en la sierra de Huautla. El movimiento rebelde de Huajuapan terminó sin haber llegado a tener importancia alguna.

"En el Estado de Oaxaca no hay actualmente ninguna gavilla de fanáticos, el pueblo en general no respondió a este intento subversivo y el Gobierno tiene conocimiento de que sólo quedan en aquella Entidad los rumores acostumbrados. El grupo de felicistas encabezados por Fernando González y sus hijos, se dedican desde su escondite a propalar noticias alarmantes de que próximamente, iniciarán un movimiento felicista. De realizarse este movimiento, duraría menos que el clerical, por estar estos individuos más desprestigiados aún que los fanáticos, que ya se han dispersado". Cabe recordar que este señor Fernando González, de quien se habla aquí, es hijo de aquel presidente "níqueles".

"Estado de Veracruz: La última hazaña de salvajismo, realizada con las mismas características de cobardía de las milicias de los Caballeros de Colón, tuvo lugar el día catorce del mes de noviembre en la estación de Banderilla, del Estado de Veracruz, donde un pequeño destacamento del 45 regimiento fue sorprendido por un grupo de fanáticos que asesinaron al comandante del destacamento y a seis individuos de tropa que lo formaban. El jefe de las operaciones militares en el Estado ordenó inmediatamente la persecución de esta gavilla clerical, habiéndolos batido el teniente coronel Lozano, quien los dispersó completamente, recogiéndoles: trece armas que habían robado al destacamento, cien cartuchos y una bandera tricolor con una virgen de Guadalupe que tiene en el centro una inscripción que dice: "Viva la reina de México, abajo la revolución y la libertad". Es el único núcleo de fanáticos que hay en el Estado de Veracruz y que está siendo activamente perseguido, con la seguridad de que para fines de esta semana habrá sido completamente exterminado.

"En estos ocho Estados de la República únicamente se han registrado motines clericales; en los veinte Estados restantes, en los Territorios de la Baja California, Quintana Roo y Distrito Federal, nadie ha tomado en serio la propaganda subversiva de los elementos clericales, rindiendo las jefaturas de operaciones militares partes diarios sin novedad, a este respecto.

"Palacio Nacional de México, a los 18 días del mes de noviembre de 1926.- El general brigadier jefe del Estado Mayor Presidencial, José Alvarez".

Ya se ve, pues, compañeros, que sí es verdad que han pretendido hacer una revolución, que han fracasado porque no saben hacer revolución; eso que nos lo pregunten a nosotros, nosotros sí les podríamos dar clase de revolución. Si nosotros estuviésemos como ellos, descontentos, y esto no es instigarlos; pero si nosotros nos quejásemos, no entregaríamos, seguramente, los caballos y hasta los burros al día siguiente del levantamiento. Aquí están las pruebas de que hablábamos, aquí están las banderas que han dejado cobardemente en las primeras de cambio; aquí está la de que habla el jefe de las operaciones en el Estado de Veracruz, en donde dice: "Abajo la libertad, abajo la revolución". (Muestra las banderas). Estas son pruebas, compañeros de la revolución. Es verdad, como dijo Soto y Gama, que el momento es serio, pero no importa que sea serio, en más serios conflictos se ha visto la revolución y se ha visto la patria, y la justicia y la revolución han sabido salir avantes. La reacción acostumbra comprar espadas, pero con tan mala suerte en la actualidad, que las encuentra, si no medallas, vírgenes, como la de Félix Díaz. Ya no hay las espadas de Miramón

y de Mejía, que, aunque traidores y reaccionarios, eran bravos y eran soldados; ya no las encontrarán, ahora compran la espada de Gallegos, que ni regalada la recibiríamos los hombres de la revolución, que ni regalada la recibirían Calles y Obregón. Gallegos, como dice el parte oficial, estaba en un rancho que los reaccionarios de Guanajuato le habían regalado porque estuvo contra el agrarismo en aquel Estado. Y a los pocos tiroteos también dejó su bandera este individuo. Está más bien escrita que la de Veracruz, es decir, con mejor letra; está con la mano de los curas; la virgen un poco menos morena, un poco más bien pintada. (Voces: ¡Está triste la virgen!) La corona hasta parece de oro, compañeros. (Risas. Voces: ¡Está llorando la virgen!) Estas son pruebas, repito, reaccionarios de México; estas son pruebas, revolucionarios del país. (Aplausos). Las denunciamos hace algún tiempo. Yo vine aquí justamente indignado cuando llegué de Norteamérica a denunciar ciertos hechos relacionados con todo esto: vine porque acababa de llegar de un viaje a Estado Unidos y porque sentía dentro de mí que era verdad lo que venía a decir; sentía que la reacción de México, que las altas clases sociales de México siguen siendo traidoras. Yo entiendo, no en una forma general, como cree el compañero Soto y Gama -ojalá y así fuera, que todos los católicos al ver el peligro se agruparon a nosotros -, pero sí creo algo, tengo algo de fe, creo que la historia se puede volver a repetir, que estos señores, viéndose perdidos, buscarán... pues si o un príncipe, porque ya no son estos tiempos para eso, sí un testaferro, un instrumento, un Fernando González o un machete mal afilado de los de la revolución, que fácilmente podrían comprar, una espada sin prestigio, sin gloria - porque podrían hacerlo -, y en vista de su fracaso, de otro fracaso más; en vista de su importancia, recurrir al extranjero y pretender traernos una nueva intervención; pero yo creo que el católico que no es fanático, que no es Caballero de Colón, que no desciende de los traidores del 57 y del 62, sí ofrecerá su espada a la República, a la revolución; sí creo que algunos católicos civiles no mancharán a sus hijos ni a sus descendientes con una traición a la patria; pero nosotros, compañero Soto y Gama, así como el pararrayos de todas las cóleras y de todas las calumnias y de todas las infamias de la reacción, también en los momentos de peligro debemos bastarnos nosotros mismos para conducir el buque de la República en los mayores momentos de peligro. La revolución se hace solidaria de la obra de Obregón y de la de Calles también y los revolucionarios mexicanos estaremos con estos hombres en cualquier momento para combatir el peligro, venga de fuera o venga de dentro. (Aplausos). Ya pasaron los tiempos -y si no han pasado, deben pasar - de charlatanería y de patriotería. Los revolucionarios, por medio de la experiencia y por los dolores que hemos sufrido en la lucha, sabemos que debemos hablar de verdades y realidades y atenernos a la verdad; no debemos excitar a nuestras masas sin motivo; nosotros no pensamos así, pero sepa la reacción mexicana, que si cree por un momento que nosotros vamos a retroceder en estas leyes que México se ha dado con su propio derecho, porque el momento es delicado, se equivoca. Pueden venir todas las tempestades, puede venir todo lo que se quiera, natural y sobrenatural, y esas leyes quedarán escritas, no en la Constitución, sino en el corazón de los mexicanos para toda la vida. (Aplausos). No es el momento todavía de tomar una acción directa sobre los elementos que se prestan como traidores a la patria; pero yo ya lo dije la otra vez, compañeros: si el caso llega, si desgraciadamente estos elementos clericales dirigidos, si por el viejo chocho ese que actúa de arzobispado, por sus consejeros; si llega un momento de estos para la patria por culpa de ellos, nosotros - repito lo que dije aquella vez - iremos nuevamente a batirnos a los campos de la lucha; volvemos a los campos de la guerra. No lo deseamos, pero llegado el caso, antes de irnos, a los que nos azuzan aquí en México, aquí en la capital y en las capitales de los Estados, con esos vamos a empezar. (Aplausos). Que no crean que es fácil tirar la piedra y esconder la mano. Nosotros vamos a sufrir mucho vamos a combatir y a sufrir dolores; pero ellos, que creen que van a esperar ver la cargada para hacerse hasta revolucionarios - porque estos señores cuando ganamos salen a echarnos flores desde los balcones aquí en México -, entonces no nos van a echar flores porque van a quedar sus jardines en estado conveniente (Risas. Aplausos). Compañeros: yo me hago solidarios de lo que aquí propuso Coto y Gama; en nombre de la Alianza de Partidos Socialistas de la República, pido a sus miembros y como revolucionario, como diputado y como mexicanos a los compañeros laboristas también, que se adhieran a esa proposición, de que la Cámara tome el acuerdo oficial de que se publique en la prensa nacional ese documento, que prueba que sí están instigando a una rebelión malos elementos mexicanos sostenidos por determinados elementos del extranjeros. Y para terminar, compañeros, quiero que pensando en los hombres de ayer que supieron dar su vida y supieron sacrificarse, cuyos nombres están grabados aquí, que pensando un momento en ellos nos hagamos siquiera dignos de su ejemplo. ¡Saludos compañeros de la revolución! (Aplausos).

El C. presidente: Tiene la palabra en pro el ciudadano Alfredo Romo. (Aplausos).

El C. Romo: Compañeros:

Únicamente quiero presentar a la consideración de la Asamblea una iniciativa consecuente con las ideas que de un modo rápido y somero voy a permitirme exponer ante ustedes.

Hace algún tiempo, cuando se trató por primera vez en esta tribuna de la cuestión religiosa en México, se pronunciaron algunos discursos, que aun en el ánimo de compañeros revolucionarios, parecieron intemperantes, parecieron fuera de tono y fuera de lugar. Desgraciadamente, los acontecimientos han venido a justificar aquellas palabras que se convirtieron en proféticas; se dijo entonces que la situación, que el conflicto creado por los intereses clericales en la nación era un conflicto serio, y ahora veis cómo el tiempo viene a demostrar que no sólo es serio, sino que puede aun tomar los caracteres de lo trágico, si los revolucionarios, contestando de una vez por todas al inmenso anhelo que se deja sentir en el pueblo, de sacudir de una vez definitivamente, al lacra clerical que lo

corroe, no viene a poner enérgico remedio. Necesitamos desarrollar todos los revolucionarios, además de una labor intelectual, una verdadera labor de acción, una labor rotunda, una labor contundente que demuestre de una vez por todas a los enemigos emboscados, a los enemigos, tanto de la revolución como de la nación, que aún quedan corazones mexicanos que saben entender cuál es su deber en este momento histórico.

Soto y Gama señalaba la deficiencia que hay en nuestras filas al no hacer la suficiente propaganda escrita los líderes de la revolución, ni de sus ideas, ni de sus doctrinas, ni de las modalidades del conflicto que el Clero nos está creando. Vengo a proponer que la Cámara de Diputado edite, por su cuenta un folleto con los debates de este día, con las pruebas que se han presentado en esta tribuna para que esta folleto sea profusamente repartido en todo el país, pues es de urgente necesidad que la juventud estudiantil de toda la nación, que los corazones jóvenes se enteren perfectamente de en dónde está el enemigo y en dónde está palpitando, continuamente, el alma de la revolución, a la que indudablemente irán a defender con todo su entusiasmo. Es preciso una acción enérgica, es preciso que vayamos hasta el fin, es preciso que nos demos cuenta de que si la reacción no puede hacer nada dentro del país, porque su ofensiva es ridícula, porque el boycot que se concreta a dejar de asistir a los cines, a dejar de comer platillos caros es una cosa ridícula que raya precisamente en las fronteras de lo cursi, sí, en cambio por medio de las intriga de los elementos capitalistas extranjeros está orillando al país a una situación difícil. Es necesario que reconozcamos que la situación es seria, sin que la palabra seria sea sinónimo de una situación angustiosa para nosotros, porque no deben creer los reaccionarios de México que nuestra situación es angustiosa y deben estar seguros, y el tiempo los podrá convencer, como nos ha podido convencer a nosotros de algunas deficiencias que hay en nuestra lucha, el tiempo nos podrá convencer muy pronto de que el león aún no despierta; pero que cuando despierte sabrá perfectamente acabar con sus enemigos. (Aplausos). Me permito, haciendo un paréntesis en este debate, sujetar a la consideración de los compañeros de Cámara la proposición a que acabo de hacer mención: Que se publique, que por cuenta de la Cámara de Diputados, un folleto en el que consten los debates de este día y aun que se invite a los representantes populares que tengan pruebas de la acción clerical de sus distritos, a que las aporten para la publicación en este mismo folleto, a efecto de que sirvan de ilustración a la verdadera opinión pública nacional. (Aplausos ruidosos).

El C. secretario Cerisola: Por orden de la Presidencia se pregunta a la Asamblea si toma en consideración la proposición del diputado Romo. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. (Voces: ¡Sí! ¡Sí!) Se toman en consideración. Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobada.

El C. presidente: Tiene la palabra en pro el ciudadano José F. Gutiérrez. (Aplausos).

El C. Gutiérrez José F.: Señores diputados:

Hemos oído en esta tarde el discurso sensato, el discurso maravilloso con que el compañero Soto y Gama ha venido a platear el asunto religioso desde esta tribuna; hemos oído las pruebas que ha venido a presentar el compañero Santos para demostrar de una vez por todas que la reacción mexicana, que los Caballeros de Colón están en connivencia con el Clero mexicano, fraguando una intervención en nuestro país aprovechándose de las circunstancias del momento. Hemos oído datos precisos acerca de esta trama y de toda esta intriga que malos elementos, que hijos espúrios del país están desarrollando en el extranjero en contra de la estabilidad de los principios de la revolución y de nuestro Gobierno. Acabo de regresar de un viaje por Estado Unidos y he podido comprobar de una manera fehaciente todos estos cargos que aquí se han hecho. ¿Pero por qué otra cosa podríamos aportar de mayor contingente para los esclarecimientos de estos hechos, cuando los elementos de la Confederación Regional Obrera Mexicana y del Partido Laborista Mexicano en controversias públicas han sustentado su criterio poniendo de manifiesto los datos que obran en nuestro poder para comprobar la traición que se está realizando por parte de los Caballeros de Colón y del Clero mexicano en contra de las instituciones del país? Y venimos en esta ocasión, brevemente, puesto que ya se ha analizado la situación de una manera precisa y clara por el compañero Soto y Gama, venimos en está ocasión, como en otras muchas, a decir a los compañeros de la revolución, al compañero Santos, al compañero Soto y Gama, a los compañeros de esta Cámara, que qué otra cosa podrían hacer los miembros o el Partido Laborista Mexicano y de la Confederación Regional Obrera Mexicana que venir a protestar una vez más por estas intrigas que desarrollan los reaccionarios de todo el país en contra de los principios de la revolución; y qué por otra cosa, también, si no venir a poner de manifiesto de una vez por todas lo que ya hemos aprobado en nuestra VII Magna Convección de la Confederación Regional Obrera Mexicana, que secundamos en todas y cada una de sus partes la actitud del Gobierno de la República que representa el general Calles, porque estamos convencidos de que él satisface ampliamente los postulados de la revolución, y las necesidades del país y que estamos con él, lo mismo que hemos sabido estar en las filas de la revolución en los momentos críticos en que la reacción ha empuñado su estandarte para lanzar a los campos de batalla al pueblo, tratando de ahogar en la sangre de ese mismo pueblo los principios emanados de la revolución y que se encuentran firmemente estampados, con caracteres indelebles, en nuestra Carta Fundamental? (Aplausos). Estamos, pues, en nuestro puesto; seguiremos alerta velando por el cumplimiento exacto de los principios de la revolución, y si los reaccionarios del país, juntamente con los reaccionarios de Estados Unidos trataran de llevar la país a una revolución o a una guerra para satisfacer las ambiciones mezquinas del Clero mexicano, allí estarían los obreros pertenecientes a la Confederación como un solo hombre, allí estarían también los miembros del Partido Laborista Mexicano y por ende, se encontrarían haciendo causa

común con todos los revolucionarios de esta Cámara los miembros del Bloque Laborista que se encuentran defendiendo los principios de la revolución, ya sea en el campo de la idea, ya sea en la cátedra y si se hace necesario, como en otras ocasiones, también sabrán embrazar el fusil para ir en defensa del país, para ir en defensa del Gobierno, para ir en defensa del pueblo a quien se trata de arrestar a una guerra en provecho exclusivo de la reacción; allí estaremos nosotros con ustedes y esperamos que si la suerte nos depara ese momento trágico, habremos de juntar verdaderamente las filas del elemento revolucionario para levantar en alto el pendón de la República y salvarlo del naufragio a que quieren arrastarlo los elementos enemigos del pueblo y del Gobierno. (Aplausos).

- El C. secretario Cerisola, leyendo:

"H. Asamblea:

"Los subscritos, diputados en ejercicio, pedimos respetuosamente a esta H. Cámara se sirva aprobar el siguiente acuerdo económico:

"Diríjase oficialmente, en nombre de esta Cámara de Diputados, atento oficio a los diarios metropolitanos, excitándolos para que, dando una prueba más de su interés por los asuntos que afectan a nuestra nacionalidad, publiquen en lugar preferente de sus ediciones y en forma de cliché la copia fotográfica de la circular de los Caballeros de Colón de Estados Unidos, con que se ha dado cuenta en esta Asamblea.

"Salón de sesiones.- México, noviembre 26 de 1926.- Gonzalo N. Santos.- Melchor Ortega.- A. Díaz Soto y Gama.- A. Cerisola.- Alcides Caparroso.- Arnulfo Portales.- Daniel R. Gutiérrez.- Fernando Moctezuma.- Alberto Oviedo Mota.- A. Muratalla Torres.- Manuel Avilés.- José María Sánchez Pineda.- David Orozco.- A. Campillo Seyde.- Francisco J. Silva.- Ramón C. Mora.- F. J. González".

Se consulta a la Asamblea, en votación económica, si se toma en consideración. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Se toma en consideración. Está a discusión. No habiendo quien la impugne, en votación económica se consulta si se aprueba. Aprobada.

No habiendo inscritos más oradores, se procede a recoger la votación nominal en lo general.

El C. secretario Romo: Por la afirmativa.

El C. secretario Cerisola: Por la negativa. (Votación).

El C. secretario Romo: Votaron por la afirmativa 163 ciudadanos diputados. En consecuencia, ha quedado aprobado en lo general el proyecto de ley. No habiendo oradores inscritos en lo particular se procede a recoger la votación. Por la afirmativa.

El C. secretario Cerisola: Por la negativa. (Votación).

El C. secretario Romo: Votaron por la afirmativa 148 ciudadanos diputados. En consecuencia, ha quedado aprobado, en lo particular, el proyecto de ley reglamentaria del artículo 130 de la Constitución federal. Pasa al Senado, para los efectos constitucionales. (Aplausos).

El C. secretario Cerisola: La Presidencia nombra en comisión para que se acerquen a la prensa, exhibiendo las pruebas rendidas por los ciudadanos diputados Santos y Díaz Soto y Gama, a los ciudadanos Zincúnegui Tercero Leopoldo, Aguilar Valentín y Rincón Juan, siendo portadores del oficio que la Cámara le dirige.

El C. secretario Romo: La Presidencia se ha servido designar en comisión para llevar al Senado de la República el proyecto de ley reglamentaria del artículo 130 constitucional, a los ciudadanos Moctezuma Fernando, Gutiérrez Teódulo, Caparroso Alcides, Santana, Zincúnegui Tercero y secretario Cerisola. (Aplausos).

El C. presidente, a las 20.22: Se levanta la sesión y se cita para mañana a las 16.