Legislatura XXXIII - Año II - Período Ordinario - Fecha 19291029 - Número de Diario 23

(L33A2P1oN023F19291029.xml)Núm. Diario:23

ENCABEZADO

MÉXICO, MARTES 29 DE OCTUBRE DE 1929

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921.

AÑO II.- PERIODO ORDINARIO XXXIII LEGISLATURA TOMO V.- NÚMERO 23

SESIÓN

DE LA

CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA

29 DE OCTUBRE DE 1929

SUMARIO

1.- Se abre la sesión. Lectura del acta de la anterior.

2.- El C. diputado Camarena Leopoldo E. hace uso de la palabra para hecho y termina presentando una proposición para que se llame al ciudadano Secretario de Agricultura y Fomento a informar respecto al caso de los ejidatarios de Mixquiahuala, Hgo. Dispensados los trámites, se aprueba la proposición. Se nombra una comisión para participar al ciudadano secretario de Agricultura el acuerdo anterior.

3.- Se concede licencia al C. diputado Bolaños Cacho Demetrio.

4.- El senado de la República devuelve, por extemporáneos, los expedientes formados con la iniciativa del Ejecutivo para expedir la Ley de Organización Municipal del Distrito y Territorios Federales y el que se refiere al proyecto de Ley para elecciones municipales del Distrito y Territorios Federales. Recibo, y a las Comisiones de Gobernación en turno.

5.- Dictamen de las Comisiones Unidas Especial de Trabajo y 2a. de Puntos Constitucionales sobre los Capítulos III, IV, V, VI, Y VIII del proyecto de Código Federal de Trabajo. A discusión, en lo particular, el artículo 20. Varios ciudadanos diputados impugnan el trámite. La Mesa hace una aclaración y la Asamblea resuelve desechar el trámite dictado por la Presidencia. En consecuencia, se pone a discusión en lo general el dictamen de las Comisiones. Se suspende la discusión para recibir al ciudadano secretario de Agricultura y Fomento.

6.- Informa el ciudadano Secretario de Agricultura acerca del caso de los ejidatarios de Mixquiahuala, Hgo. La Presidencia da las gracias al ciudadano Secretario, quien se retira acompañado de la comisión nombrada al efecto.

7.-A consulta de la Presidencia sobre si continuaba la discusión del Código de Trabajo, la Asamblea resolvió negativamente.

8.-E. C. diputado Camarena vuelve a hacer uso de la palabra y presentó una proposición para que se nombre una comisión que se acerque al ciudadano Presidente de la República y le suplique, en forma atenta que en todo caso se respeten los títulos de propiedad que se expiden a los ejidatarios, de acuerdo con la Ley de Patrimonio Ejidal. Se dispensan los trámites a esta proposición y se aprueba, nombrándose la comisión. El. C. Santos Gonzalo N. hace algunas aclaraciones respecto al debate que suscitó el caso de Mixquiahuala, Hgo. Se levanta la sesión.

DEBATE

Presidencia del

C. ESTEBAN GARCÍA DE ALBA

(Asistencia de 145 ciudadanos diputados.)

El C. presidente (a las 18.15 horas): Se abre la sesión.

- El C. secretario Santoyo (leyendo):

"Acta de la sesión celebrada por la H. Cámara de Diputados del XXXIII Congreso de la Unión, el día veintiocho de octubre de mil novecientos veintinueve.

"Presidencia del C. Esteban García de Alba.

"En la ciudad de México, a las diez y siete horas y cincuenta y seis minutos del lunes veintiocho de octubre de mil novecientos veintinueve, con asistencia de ciento cuarenta y dos ciudadanos diputados, se abrió la sesión.

"Se aprobó el acta de la anterior, que tuvo lugar el día veinticinco del mes en curso.

"Cartera:

"Solicitud del C. diputado Pedro Solís Cámara a fin de que con dispensa de trámites se le conceda una licencia por un mes, con goce de dietas.

"Dispensados los trámites, se puso a discusión, y sin ella se aprobó en votación económica.

"El C. Francisco Anguiano, en mensaje fechado en Tepic, Nayarit, participa que previas las formalidades de ley, se hizo cargo del Poder Ejecutivo de ese Estado.- De enterado.

"El C. Antonio García González hace una rectificación relacionada con el acuerdo de esta Cámara en virtud del cual declaróse que perdió su carácter de diputado solicitando se agregue a sus antecedentes.- Agréguese a sus antecedentes.

"Dictamen de la 1a. Comisión de Hacienda que contiene un proyecto de decreto por el que se autoriza al Ejecutivo Federal para que otorgue su aprobación a fin de que del fondo destinado a la industrialización del henequén sea tomada la suma de doscientos setenta y cuatro mil cuatrocientos setenta y nueve pesos dieciséis centavos para aplicarla a compensación parcial del adeudo de cuatrocientos veintisiete mil pesos a favor de la Cooperativa "Henequeneros de Yucatán". reconoce la Cooperativa "Henequeneros de Campeche, S. C. de R.L.".- Segunda lectura y a discusión el primer día hábil.

"Dictamen de las Comisiones Unidas Especial de Trabajo y 2a. de Puntos Constitucionales, sobre los capítulos III a IX, inclusive, del Proyecto de Código

Federal de Trabajo que envió el Ejecutivo, y en el cual suprimen las Comisiones el capítulo relativo al contrato de equipo. En esa virtud, las Comisiones presentan los capítulos III, IV, V, VI, VII y VIII del mencionado Proyecto de Código Federal de Trabajo.

"La Mesa resolvió que este dictamen entré a discusión en la sesión siguiente.

"Dictamen de la 1a. Comisión de Hacienda sobre la iniciativa del Ejecutivo, que termina con un proyecto de decreto que se refiere al Presupuesto de Egresos en vigor y por el que se reducen diversas partidas de los Ramos I, II, IV, VI, VII, VIII, IX, X, XII, XV y XVII, por valor de quince millones cuatrocientos setenta y dos mil doscientos noventa y ocho pesos veintidós centavos, se cancelan algunas partidas correspondientes a los Ramos IV, V, VII, IX X, XII y XV, por valor de trescientos diez y ocho mil novecientos doce pesos, y se amplían otras partidas de los Ramos II, VI, VII y IX, por valor de once millones ciento cuarenta y dos mil trescientos cuarenta pesos dos centavos, así como se adiciona el mencionado Presupuesto de Egresos con partidas correspondientes a a los Ramos VI y VII, por valor de cuatro millones seiscientos cuarenta y ocho mil ochocientos setenta pesos veinte centavos.

"Dictamen de la 1a. Comisión de Hacienda, relativo a la iniciativa del Ejecutivo, que afecta el Presupuesto de Egresos en vigor, y que termina con un proyecto de decreto en virtud del cual se reducen partidas por la cantidad de veinticuatro mil trescientos seis pesos cincuenta centavos; se cancelan algunas partidas por valor de trece mil quinientos dos pesos cincuenta centavos, y se amplían otras partidas por valor de ciento treinta y nueve mil setecientos pesos, todas ellas correspondientes al Presupuesto de Egresos del Gobierno del Distrito Sur de la Baja California.

"Dictamen de la 1a. Comisión de Hacienda, sobre la iniciativa enviada por el ciudadano Presidente de la República, que termina con un proyecto de decreto por el que se reducen partidas correspondientes a los Ramos II,III,V,VI,VII,IX,X,XI,XII, XIII, XIV y XVI, por la cantidad de cuatro millones novecientos sesenta y dos mil doscientos diez y seis pesos cuarenta y ocho centavos; se cancelan, por valor de un millón doscientos treinta dos mil doscientos siete pesos cincuenta centavos, partidas que corresponden a los Ramos VI, VIII,IX,XII y XIII y se amplían partidas por la suma de cuatro millones doscientos ochenta y cinco mil ciento dos pesos once centavos, comprendidas en los Ramos III, IV,V, VII, VIII, IX,X,XI,XII,XIII,XIV y XVI; se adiciona con partidas correspondientes a los Ramos II, V, VI, VII, VIII, IX, XI, XII y XIII, y en la suma de dos millones ochocientos nueve mil trescientos veintiún pesos ochenta centavos, del Presupuesto de Egresos en vigor, y se reforma el texto de diversas partidas comprendidas en los Ramos IV, VII y IX del mismo Presupuesto.

"Dictamen de la 1a. Comisión de Hacienda, sobre la iniciativa del Ejecutivo, que concluye con un proyecto de decreto en virtud del cual se modifica la partida 9120819, se cancelan los números 9360139 y 9360143 por valor de doscientos veinte mil pesos y se adicionan los números 9360142 y 9340943 con un monto igual a la cancelación, todas ellas del Ramo IX del Presupuesto de Egresos vigente.

"A estos cuatro dictámenes se le dispensó la segunda lectura y puestos a discusión, sucesivamente no hubo quien usara de la palabra y se aprobaron, en lo general ,por unanimidad de ciento cuarenta y cuatro votos.

"A discusión en lo particular, el C. Salinas ,miembro de las Comisiones, proporcionó un informe a petición del C. Guilermo Rodríguez; éste respondió a una interpretación del C. Sánchez Lira; el C. Mijares hizo aclaraciones y los proyectos fueron aprobados, en lo particular, en un solo acto, por unanimidad de ciento cuarenta y cuatro votos. Pasan al Ejecutivo para sus efectos constitucionales.

"A las 19 horas y 8 minutos se levantó la sesión y se citó para el día siguiente, a las 16 horas." Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobada.

El C. Camarena Leopoldo E.: Pido la palabra para informar acerca de la comisión que esta Cámara se sirvió conferirme.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Camarena.

El C. Camarena Leopoldo E.: Señores diputados: El viernes de la semana pasada tuve ocasión de tratar un asunto que yo considero verdaderamente grave. Lo consulté con algunos de los compañeros de esta Honorable Cámara y me dijeron lo siguiente: que de ser cierto lo que yo les aseguraba, consideraban monstruoso el procedimiento. Y fue entonces cuando por consentimiento de ustedes, por consentimiento de la Cámara, se nombró una comisión para que se acercara al secretario de Agricultura y Fomento con el fin de pedirle informes y garantías para el pueblo de Mixquiahuala del Estado de Hidalgo.

La vez pasada traté este asunto superficialmente, se puede decir, y ahora vengo con todos mis papeles y con todos mis datos con el fin de que ustedes se den cuenta de que no se trata de un asunto de poca monta, ni de poca importancia, sino que es un asunto grave para los intereses de la Revolución y que en el caso de que la Comisión Nacional Agraria, que en el caso de que la Secretaría de Agricultura y Fomento llegue a consumar este atentado que ya denuncié ante la Soberanía de ustedes, sentará un precedente funesto para los interesados de la Revolución, en tal forma que los ejidatarios todos del país ya no tendrán absolutamente ninguna seguridad.

Se ha venido diciendo en todos los tonos, en estos últimos tiempos, que el problema agrario ha creado una gran inseguridad en la República; y esto es cierto, esto es verdad, porque nadie sabe todavía a qué atenerse. Llevamos quince años de estar aplicando la Ley Agraria y todavía no hacemos una definición de este asunto y la inseguridad está prendida en todos los espíritus y la producción no es como debería ser en la República. Y si a esta inseguridad se agrega todavía otros puntos de inseguridad dentro de nosotros mismos, dentro de las

leyes que ha creado la Revolución, es claro, señores, que llegaremos al desastre más grande. Para que ustedes se den cuenta de los términos angustiosos de estos quinientos cincuenta y cuatro ejidatarios del pueblo de Meixquiahuala -y no por vanidad personal, porque las vanidades para mi hace mucho tiempo que pasaron a la historia, sino únicamente para que se den cuenta de los términos angustiosos en que me escriben estos ejidatarios -, voy a rogar al señor Secretario con permiso de la Presidencia, tenga la bondad de leer esta carta para que ustedes, repito, se den cuanta de este asunto que, como dije desde un principio, considero verdaderamente grave.

- El C. secretario Santoyo,( leyendo):

"Manuel Mera.

"Calle de Mina, No. 5.

"Zumpango, Méx.

"Zumpango, Méx., 20 de octubre de 1929.

"Señor diputado, profesor Leopoldo E. Camarena .-Cámara de Diputados,- México, D. F. "Mi siempre querido profesor:

"Hoy tengo el gusto de saludarlo por medio de la presente, esperando se encuentre bien cual son mis deseos, después de ello me tomo la libertad en nombre de mis compañeros y mirando el celo que tiene usted por las gentes del campo a quien ha consagrado usted sus esfuerzos siempre y en toda época, un escrito que ponemos en mano de usted así como un padrón y una lista que encontrará. Por el mismo escrito se fijará usted de lo que pretenden hecernos y en junta que tuvimos acordamos poner en manos de usted nuestra suerte, a efecto de que gestione usted este caso incalificable de parte del ciudadano Secretario de Agricultura que usted sabe no son más que venganza ruines de nuestros enemigos.

La falta de fondos me imposibilita para poner en manos de usted personalmente nuestra petición, pero la amistad que nos ha dispensado hará que cubra nuestra falta por lo que anteriormente manifiesto."

"C. diputado al Congreso Federal, profesor Leopoldo E. Camarena.- Cámara de Diputados del Congreso Federal.- México, D. F.

"Para conocimiento de usted y deseando que se sirva impartimos su ayuda en beneficio del proletariado de este pueblo, nos permitimos con todo respeto, manifestar a ustedes lo siguiente: que desde el día 10 de enero de 1915, el pueblo de Mixquiahuala de Juárez, del distrito de Actopan, del Estado de Hidalgo, recibió tierras para ponerlas en cultivo, de orden del extinto general Emiliano Zapata, habiendo sido para hacer dicha entrega comisionado el C. general Palafox. Estas tierras fueron tomadas de la ex - hacienda de Ulapa, de la sucesión de don Manuel Iturbe. Los campesinos nos dedicamos a desmontar más de 4,000 (cuatro mil hectáreas) de terreno que pusimos en cultivo. A gestiones que hicieron los dueños, comprobamos con los títulos del pueblo que éste había sido despojado de sus tierras y estuvimos luchando con el hacendado durante seis años.

"En 1921 el ciudadano Presidente Provisional de la República, en esa época C. Adolfo de la Huerta, nos dio la posesión definitiva de nuestras tierras, habiéndose procedido a hacerse un reparto, reparto que, como consta en planos, no llenó las necesidades del pueblo verdaderamente necesitado, sino que hubo acaparamiento del ejido por algunos individuos. El pueblo gestionó el reparto equitativo y logramos el que se nos diera cuatro hectáreas a cada parcelario y el ejido quedó dividido en 1,468 jefes de familia , cuyo padrón adjuntamos, habiendo un sobrante de 113 parcelas, reparto que fue hecho por ingenieros de la H. Comisión Nacional Agraria.

"Al terminar dicho reparto, suplicamos a la Secretaría del ramo se nos diera nuestro título de Patrimonio Parcelario Ejidal conforme a la Ley de Tierras y Constitución de Patrimonios Parcelario Ejidal que modificara la de 19 de diciembre de 1925 y fueron dados a cada ejidatario su título el 27 de noviembre de 1927 por propios ingenieros de la misma Comisión Nacional Agraria, figurando entre ellos el ciudadano gobernador del Estado, señor ingeniero Bartolomé Vargas Lugo.

"Hoy, con pretexto de que la situación de los que nos hemos dedicado a trabajar y cuidar nuestro trabajo ha cambiado en algo nuestra situación económica, el ciudadano secretario de Agricultura, ingeniero Marte R. Gómez, ha dado orden que seamos despojados de nuestra parcela, 552 ejidatarios cuya lista adjuntamos, por lo que con todo respeto pedimos a usted, ciudadano diputado, lo haga del conocimiento de la Representación Nacional, para que a consideración de ese Alto Cuerpo no seamos despojados de nuestras parcelas. Así es que en catorce años que tenemos de explotar nuestras parcelas, que son tierras de primera, segunda y tercera clase, que se riegan con aguas del desagüe del Valle de México, que por sus propias materias orgánicas que tiene esta misma agua hace que nuestro sembrados sean fecundos, podríamos permanecer en las mismas condiciones? ¡Qué, los títulos que poseemos son nulos cuando las firmas que los calzan dice que son en nombre del ciudadano Presidente de la República, ya no tienen ninguna validez? Los campesinos de Mixquiahuala protestamos por este hecho contraviniendo la Ley Agraria que la Revolución creó y que tanta sangre ha costado a la patria, por lo que nuevamente pedimos a usted, ciudadano diputado, con todo respeto, se presente una comisión ante el ciudadano Presidente de la República, pues no dudamos, señor diputado que en ese Alto Cuerpo representativo existen grandes revolucionarios que podrán comprender que sólo se trata de una injusticia, puesto que son maniobras de la misma reacción con quien hemos luchado y que hoy tratan de saciar sus ambiciones. Nosotros no dudamos que en ese transcurso de tiempo hayan crecido jóvenes que necesiten de parcelas, pero en tal caso existen grandes extensiones de terreno no terratenientes que pueden ser efectadas y que lindan con nuestro ejido y que a continuación mencionamos: rancho de Veracruz, rancho de los Duraznos, rancho del Xamú, hacienda de Dos Cerritos y otras propiedades que sería largo enumerar.

"Por todo lo expuesto y en nombre de la justicia que nos asiste, los 552 ejidatarios a quienes tratan de despojar y quitar el pan de sus familias

e hijos, le protestamos a usted nuestros respetos.

"Mixquiahuala de Juárez, 18 de octubre de 1929.

-Manuel Mera."

El C. Camarena: Como ustedes ven, señores diputados, se trata de un asunto sumamente serio, porque hoy es Mixquiahuala, del Estado de Hidalgo; mañana puede ser Guanajuato; después puede ser Guerrero; después puede ser Veracruz o Chiapas por cualquier otro Estado de la República, y vendrán a decirnos la misma cosa. ¡Y cuándo - pregunto yo - tendrán seguridad los campesinos de la República para trabajar en paz sus tierras y para explotarlas? El diputado Juan Ramón Valdés, de Durango, que hace un momento salió, me decía que él puede sostener también en presencia de ustedes que está sucediendo algo análogo en el Estado de Durango. Cuando él llegue aquí, estoy seguro de que si lo interpelo, me contestará en sentido afirmativo y me dirá cuál es el caso de su Estado. Con respecto del atentado que se trata de cometer, traigo aquí también el aviso que el ingeniero de la Comisión Nacional Agraria fijó en Mixquiahuala, citando a los ejidatarios para un nuevo reparto. Aquí traigo el aviso. Dice así:

"A fin de que aleguen los, derechos que crean tener para ser considerados en el nuevo reparto ejidal, sírvase presentarse, a la mayor brevedad posible, en el Comisariado Ejidal de este lugar, ante el ciudadano ingeniero Luis Herrera , todos los días hábiles, de 12 a 1 p.m., y 5 a 7 p.m. los individuos que a continuación se expresan."

El C. Camarena, (continúa): Estos quinientos cincuenta y cuatro ejidatarios diputados, tienen su título de propiedad exactamente igual a este que exhibo ante ustedes; es el título que se les expidió de acuerdo con la Ley del Patrimonio Ejidal, se puede decir que en presencia,, con autorización y en presencia del señor general Calles. Hasta se dio este caso en Mixquiahuala: que a las señoras no se les quería comprender en este reparto y entonces fue una comisión, estando el general Calles en Mixquiahuala, para suplicarle ahí mismo general Calles que tuviera la bondad de considerarlas en este reparto y entonces el general Calles ordenó que a las señoras, que a las mujeres viudas, por ejemplo o que tuvieran que sostener a su familia, se les dieran cuatro hectáreas, dos, o una, de acuerdo con sus necesidades. De manera que este reparto se hizo enteramente de acuerdo con los postulados de la Revolución , con la Ley del Patrimonio Ejidal y con autorización del propio señor general Calles, a quien de ninguna manera se puede tachar de falto de revolucionarísmo.

Ahora bien señores, esta Honorable Cámara se sirvió autorizarnos para que fuéramos a ver al señor ingeniero Marte R. Gómez, secretario de Agricultura, y esta mañana estuvimos en su presencia para manifestarle que la Cámara toma interés, un interés muy justo, muy justificable en este asunto, porque ve que los intereses generales de los ejidatarios de la República peligran. Y entonces el señor ingeniero Marte R. Gómez nos dijo: "que se hará el nuevo reparto", porque yo dudaba todavía de si él había ordenado que se hiciera este reparto y entonces él me aseguró que se hará el reparto. Yo le pregunté que cuál era el informe que podía dar a ustedes respecto de este asunto tan grave, y me contestó que este informe podía reducirse a unas cuantas palabras, que son éstas; que el reparto, el nuevo reparto en Mixquiahuala, se hará bajo su responsabilidad, porque él siempre responde de sus actos...(Murmullos. Siseos). A eso le argumenté...

El C. Romandía Ferreira: ¡Me permite usted una interpelación?

El C. Camarena: Con todo gusto.

El C. Romandía Ferreira: Yo creo, señores diputados que este asunto hay que tratarlo con la mayor serenidad. (Voces: ¡No se oye!) Es una interpelación que el orador me permitió. ¡El ingeniero Marte R. Gómez le dijo a usted únicamente que el reparto se haría bajo su responsabilidad, y no agregó razón ninguna a eso?

El C. Camarena: ¡ No! Iba yo a terminar, iba yo a concluir. Si la información quedara así, sería malévola de mi parte, y no acostumbro esa clase de informaciones. Hablo de este asunto con toda honradez porque me duele la situación del pueblo de Mixquiahuala, y sé que si se despoja a esas pobres gentes, se siente un procedente funesto para los intereses de la Revolución. (Aplausos.) Pero he de ser honrado para decir las cosas tal como son. El ingeniero Marte R. Gómez me dijo que se haría, un nuevo reparto bajo su responsabilidad, porque él acostumbra responder de sus actos. Entonces yo le dije que si a pesar de estos títulos de propiedad que considero definitivos se haría el nuevo reparto; a lo cual me contestó que esos títulos son de origen vicioso y que hay irregularidades en el ejido y que, en consecuencia, él corregía esas irregularidades. (Voces: ¡No puede!) Ahora, señores diputados, quiero decir a ustedes una cosa con toda sinceridad. No deseo llegar al fondo de este asunto ...(Voces: ¡LLega!) No deseo todavía llegar al fondo de este asunto. (Voces: ¡Llega! ¡Sí! ¡LLega!) porque tiene un fondo político sucio y porque yo quiero cuidarle las espaldas el señor presidente de la República.(Voces: ¡Dí la verdad!) Voy allá. Creo que la solución tendrá que ser satisfactoria a este asunto. El presidente de la República es amigo nuestro; el señor presidente de la República es revolucionario, y eso nadie lo duda....

El C. Romandía Ferreira: También lo es el ingeniero Marte R. Gómez.

El C. Cámarena: Vuelve a decir que quiero cuidar los espaldas del señor presidente de la República y que no quiero llegar al fondo sucio que tiene este negocio.(Voces: ¡Que salga!) Pero no se crea, señores diputados, que yo no deseo llegar a ese fondo por servilismo. En público se ha dicho, en repetidas ocasiones, que esta Cámara es de serviles; vengo a protestar enérgicamente contra esa voz de la calle: no lo somos. Lo que sucede es que todos somos amigos del señor presidente de la República; pero que no se nos tome por serviles. Cuando el actual presidente de la República llegó a la Secretaría de Gobernación, nosotros sentimos un entusiasmo muy legítimo por el triunfo del señor licenciado Portes Gil; cuando llegó a la

Presidencia de la República, sentimos una íntima satisfacción, porque veíamos llegar al compañero y al amigo, al portaestandartes de la Revolución; y por eso, porque hemos secundado en sus actos al Presidente de la República, se ha dicho en público. Ha dicho la voz de la calle, que nosotros somos serviles. Yo estoy completamente seguro, señores, de que lo único que ha sucedido aquí es que somos amigos del señor presidente de la República. Pero bien, si ustedes quieren que llegue al fondo del asunto, yo llegaré al fondo del asunto....(Voces: ¡Sí! ¡Muy bien!) Este asunto, señores diputados, es de baja política; aquí se trata de intereses políticos: los ejidatarios a quienes se pretende despojar de sus parcelas partidarias de Parres. Y conste que yo no fui partidario de Parres ni tampoco partidario de Vargas Lugo; conste que yo me mantuve alejado de la política local y que jamás he llegado a enturbiar al ambiente de mi Estado, sino hasta estos instantes en que el espíritu de ustedes me llama colectivamente, en que el espíritu colectivo de ustedes me llama ha hacer una declaración terminante respecto de este asunto. La figura fatídica de Matías Rodríguez es la que está ocasionando estos graves trastornos en mi Estado, señores. (Una voz: ¡Todavía?) Todavía. ¡Porqué? Porque Matías Rodrígues sigue siendo gobernador del Estado de Hidalgo, porque gobierna detrás de Vargas Lugo, porque Vargas Lugo no es libre para Gobernar en el Estado de Hidalgo y él sigue metiendo la mano. Debo decir a ustedes esto, y aquí está un diputado amigo de Matías Rodríguez, el licenciado Herrera, que con toda seguridad podrá contestar a esta pregunta que le voy o hacer: ¿en las elecciones a favor de Matías Rodríguez no fue Mixquiahuala uno de los principales reductos de su candidatura? Y estos hombres o quienes está tirando actualmente ¿no fueron los que derramaron su sangre por la candidatura de Matías Rodríguez y hoy ese hombre , que es un verdadero canalla que se ha manejado muy mal con los que fueron sus amigos, es el que está metiendo la mano para despojar a estos hombres sus parcelas? Yo quiero que el señor Herrera me diga, sin orillarlo a que llegue al segundo punto, si no fue Mixquiahuala el principal reducto de Matías Rodríguez.

El C. Herrera Fernando: No me consta nada.

El C. Camarena: Creía yo que era honrado el señor diputado; pero aquí está el diputado Sánchez que me puede contestar esta pregunta; le suplico que me conteste.

El C. Sánchez Ernesto P.: Con permiso de la Presidencia. Efectivamente, compañeros, efectivamente es verdad. Yo sí tengo conocimiento absolutamente de que cuando los Azuara estaban dominando en el Estado de Hidalgo, el candidato Matías Rodríguez ni siquiera se asomaba a la ciudad de Pachuca...,

El C. Camarena: ¡ Por supuesto!

- El C. Sánchez Ernesto P.:... se cobijaba siempre en terrenos comprendidos dentro de la jurisdicción de la municipalidad de Mixquiahuala, municipio que últimamente, en la campaña política que se sostuvo defendiendo al doctor Parres, vio caer también por docenas a sus partidarios y a mujeres dentro de sus hogares. Y seguramente que esta actitud criminal de Matías Rodríguez para que se les despoje de sus parcelas, va a ir seguida de lo que ya hemos visto otras veces, va ir seguida del incendio en los hogares de los que no son sumisos ni incondicionales del mismo Matías Rodríguez.

El C. Camarena: Pues bien, señores diputados, allí está el fondo sucio de esa política. Detrás de la cuestión social, a la cual quise atenerme honradamente -puedo darles mi palabra de caballero, mi fe de caballero, de que no quise entrar a esta parte política, sino tratar el asunto desde un punto de vista revolucionario y social -, detrás de esto está la política sucia siempre. Y yo vengo después de esto a presentar a ustedes ya el problema con toda claridad: se trata de una ruín venganza política; se trata de que estos hombres, que han sido dignos y altivos, que han permanecido en sus puestos, en contra de los cuales están ahora los intereses políticos de Matías Rodríguez que pretende para escarnecer a mi pobre Estado de Hidalgo, volver al próximo Gobierno y ser senador en el próximo período; se trata, señores, como decía yo, de una ruín venganza política. A estos pobres ejidatarios de Mixquiahuala, que han cultivado sus tierras durante catorce largos años con grandes sacrificios, perdiendo a muchos de los suyos, se trata de despojarlos porque no fueron partidarios de Vargas Lugo, cuya candidatura fue protegida por Matías Rodríguez.

Ahora yo quiero plantear la cuestión, y en esto sí pido la ayuda de los abogados de esta Cámara -se los pido muy atentamente - para que me digan si es posible, si puede hacerse un nuevo reparto ejidal teniéndose ya un título de posesión expedido conforme a la Ley del Patrimonio Ejidal. (Voces: ¡No! ¡No!) Señores nos dice el ingeniero Gómez que hay irregularidades. Yo quiero llegar hasta el grado de que haya irregularidades. Tengo aquí el padrón y puedo ponerlo en manos de cualquiera de ustedes, para que vean que no hay ningún ejidatario, de los mil ochocientos y pico, a quien se le haya dado más de cuatro hectáreas de tierra y, sin embargo, este es exactamente igual al que está en la Comisión Nacional Agraria. Pero yo quiero llegar hasta a admitir que se hayan cometido algunas irregularidades, que existan algunas irregularidades. ¿Qué estas irregularidades autorizan, señores diputados, a la Secretaría de Agricultura, autorizan a la Comisión Nacional Agraria para un nuevo reparto, que viene a ser un precedente funesto para los intereses de la Revolución? (Voces: ¡No!) Pues bien, yo vengo con una nueva súplica ante la Soberanía de esta Honorable Cámara: Deseo, en nombre de los pobres ejidatarios de Mixquiahuala, en nombre de esos abnegados campesinos, que se llame, que la Cámara llame al señor Secretario de Agricultura y Fomento para que venga a informar acerca de esas irregularidades y para que venga a decirnos por qué y en qué se funda para hacer un nuevo reparto ejidal en ese pueblo, por una parte; y por otra, pido atentamente a ustedes, con todo encarecimiento, que la Cámara se dirija al señor Presidente de la República, cuyo espíritu revolucionario conocemos ampliamente, que se dirija a él pidiéndole en forma atenta que suspenda, que

mande, que ordene suspender todo procedimiento en el ejido de Mixquiahuala mientras tanto informa el secretario de Agricultura y la Cámara toma una orientación en este asunto, que es de vida o de muerte para los intereses de los ejidatarios todos de la República. (Aplausos).

- El C. Secretario Santoyo, (leyendo):

"Honorable Asamblea:

"554 ejidatarios del pueblo de Mixquiahuala de Juárez en el Estado de Hidalgo, cada quien con su título de propiedad firmado por el ciudadano Presidente de la República, conforme a la novísima Ley del Patrimonio Ejidal, están a punto de ser despojados de las tierras que producen el pan indispensable para ellos y para sus hijos, en virtud de un acuerdo reciente.

"Como este despojo constituye un ataque gravísimo a los principios de la Revolución y, de efectuarse, dejaría en la miseria a un considerable número de familias y, por añadidura, constituiría un funesto precedente para todos los ejidatarios del país que de hoy en adelante en ninguna forma podrían sentirse asegurados para el laboreo de sus tierras y, finalmente, la realización de tan formidable atentado haría frustráneos los principios más nobles de la Revolución Mexicana, principios por los cuales hemos venido luchando denodadamente; en mi calidad de representante por el Estado de Hidalgo, vengo a pedir a Vuestra Soberanía, que con dispensa de todo trámite, se apruebe la siguiente proposición:

"Única. Llámese al ciudadano Secretario de Agricultura y Fomento para que informe acerca del despojo que se pretende efectuar en Mixquiahuala, quitando sus tierras a 554 ejidatarios con título de propiedad conforme a la Ley de Patrimonio Ejidal.

"Salón de Sesiones de la H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, D. F., a 23 de octubre de 1929.- Leopoldo E. Camarena, diputado por el 2o. distrito electoral del Estado de Hidalgo."

Se pregunta a la Asamblea, en votación económica, si se dispensan los trámites a esta proposición. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Dispensados. Está a discusión.

El C. Romandía Ferreira: En contra.

El C. Balboa: En pro.

El C. presidente: Se abre la inscripción de oradores. Tiene la palabra en contra el ciudadano Romandía Ferreira.

El C. Romandía Ferreira: He pedido la palabra en contra, señores diputados, no porque crea que la venida de Marte R. Gómez aquí perjudicaría su actitud revolucionaria, sino porque tengo la firme convicción de que este asunto es casi una pompa de jabón. En estas condiciones, si después de discutido este asunto se aprueba la venida del ciudadano Secretario de Agricultura y Fomento a esta Cámara, casi me alegraría, porque estoy seguro de que después que oigan ustedes las frases del ingeniero Marte R. Gómez, darán su debido valor a lo que se ha dicho en esta tribuna en contra de él. A mí absolutamente no me importa, porque casi no conozco la personalidad del señor Matías Rodríguez; tocará, pues, a los diputados del Estado de Hidalgo que le sean adictos hacer su defensa; no tengo yo por qué hacer la defensa de este señor, porque, ya dije, no lo conozco y mal podría opinar sobre una persona a quien no conozco; pero a quien sí conozco y cuya personalidad me es completamente, ampliamente conocida, en su aspecto revolucionario, es al ingeniero Marte R. Gómez. Y cuando se ha planteado el problema aquí, tocando ya eso que nosotros siempre hemos llamado pleitos personales de política local, entre si fue Matías Rodríguez o fueron los Azuara o Bartolomé Vargas Lugo, compañero nuestro, también revolucionario, también agrarista, quien ha hecho tal o cual actividad en el municipio a que se refiere el compañero Camarena, yo sí quiero hacer aquí una declaración que puede comprobarse con números. Ustedes saben mi casi adoración para el general Obregón, de modo que no necesito absolutamente hablar de su actividad revolucionaria; yo lo he puesto por encima de todos mis afectos. Ustedes saben perfectamente bien que ya está muerto y en estas condiciones creo que no es por halagarlo. Otra cosa tengo que decir: ustedes saben perfectamente bien cuál es el concepto que todos los revolucionarios del país tienen del general Plutarco Elías Calles. En estas condiciones voy a hacer una afirmación que quizá sorprenda a ustedes, porque no han parado mientes en este asunto. Si Luis León con todo acierto pudo afirmar en la campaña que se está llevando a efecto, que hacer política revolucionaria es compartir su firma con la del general Calles, dando tres millones de hectáreas a los proletarios del país, a los campesinos del país, Marte R. Gómez puede hacer la afirmación de que su firma, con la de Portes Gil, ha repartido más hectáreas todavía que Obregón y que Calles. Los números pueden comprobarlo. (Voces: ¡Pruebas!) Puedo presentarlas, no las traigo en la mano. (Voces: ¡Ah! ¡Ah!) Un momento. En esta tribuna se podrán decir todas las cosas; cuando salen del anonimato las cosas, no podrán ser tomadas en cuenta. Aquí en esta tribuna se podrán venir a afirmar muchas cosas, pero yo sí afirmo esto: que si el general Obregón repartió muchas hectáreas de tierra y que si el general Calles también repartió, cumpliendo el programa revolucionario, muchas hectáreas de tierra, Marte R. Gómez y Emilio Portes Gil también han cumplido ese programa de la Revolución, y si lo han cumplido resulta verdaderamente infantil venirles a hacer cargos de que pretenden despojar a unos campesinos de sus tierras, más cuando allí mismo se apunta la razón consistente en que está permitido, como lo sabe el compañero Camarena, en la misma Ley de Restitución y Dotación de Ejidos, dotar de tierras, cuando haya necesidad, a los elementos jóvenes que están creciendo, a la juventud a la que nunca debe cerrársele el paso, a esa juventud a la que Porfirio Díaz le cerró el paso y por eso cayó; cuando la juventud campesina pida tierras, hay que dárselas por encima de todo. Eso es lo que está ocurriendo allí... (Protestas. Desorden) Un momento, señores. (Sigue el desorden) Luego que acaben seguiré. (Voces: ¡Mata a los viejos agraristas!) Continúo.

El C. Camarena: Me admira que un abogado argumente así.

El C. Romandía Ferreira (continúo): Cuando por la acción del tiempo desaparecen de un ejido

los elementos viejos, entonces son substituídos por los nuevos y hay necesidad de hacer un reparto... (Voces: ¡No! ¡No!)

El C. Camarena: ¡Qué barbaridad!

El C. Romandía Ferreira: No voy a tocar esa cuestión para no seguir agitando un poco la alegría de los compañeros diputados; simplemente quiero señalarles que aquí apareció el peine y el peine consiste en esto: el antiguo pleito entre los parristas y los señores de Vargas Lugo; ese es todo el problema que a nosotros no nos importa. La prueba evidente de que es eso, es que la mayoría del tiempo que estuvo el compañero Camarena en la tribuna, la ocupó exclusivamente en lanzar ataques a Matías Rodríguez y a Vargas Lugo, lo que a nosotros no nos importa. Dijo el compañero Camarena que iba a descubrir algo sucio, y se oyó por allá, en el anonimato, una voz que decía: "que venga lo sucio". Ya esperaba que se dijera que hay una firma de Marte R. Gómez ordenando que contra viento y marea, contra la Ley y la Revolución se repartieran esas tierras; pero resultó que lo sucio era esto: que afirmó Camarena, y lo desmintió Herrera, que allí, en el ejido ese famoso, era donde no tenía partidarios el señor Vargas Lugo.

El C. Camarena: Dijo Herrera que no sabía.

El C. Romandía Ferreira: ¡Bueno! Que no sabía, que no le constaba. (Voces: ¡Ya bájate! Golpes en los pupitres.) Déjenme terminar. Pueden pasar a la tribuna a alegar lo que quieran. Vuelvo a insistir... (Voces: ¡No!) Ya voy a terminar. Vuelvo a insistir en que Marte R. Gómez puede alegar mayor revolucionarismo o igual revolucionarismo, cuando menos, que cualquiera de los elementos de esta Cámara. (Voces: ¡No!) Aquí se trata de una maniobra infantil y torpe que quiero destruir. Si la Cámara acuerda que el secretario de Agricultura y Fomento venga a informar,... (Voces: ¡Que venga!) pues que venga, porque entonces probaremos, con números, que el Gobierno de Portes Gil no tiene necesidad de... (Voces: ¡No se trata de eso!) se probará que Marte R. Gómez ha repartido más tierras que los gobiernos anteriores y que sólo se trata de una maniobra política sin ninguna importancia. Se probará, cuando venga Marte R. Gómez, que su revolucionarismo, que algunos, ¿cómo llamaré yo?... (Una voz: ¡Llámalo como quieras! Risas.) Quiero decir que el epíteto que les aplicara no habría de dañarlos. Pues bien, aquí algunos infantiles han tratado de poner en duda el revolucionarismo de Marte R.Gómez, (Siseos) pero eso no tiene fundamento.

El C. Balboa: Compañeros diputados: En mi concepto, los cargos que se han enderezado en contra del secretario de Agricultura son fuertes y hay necesidad de llamarlo para que venga a responder de esos cargos a esta Cámara. Yo tengo para mí, señores, que Marte R. Gómez es uno de los revolucionarios más convencidos, de los más radicales; pero cuando se pone en tela de juicio su actuación como secretario de Agricultura, cuando las palabras vertidas por el compañero Camarena han despertado en el seno de esta Asamblea suspicacias y murmuraciones en contra del proceder de Marte R. Gómez, creo, señores, que es justo y necesario que se le llame inmediatamente ante esta tribuna a responder de esos cargos. Yo tengo noticia de que a la conferencia a que asistiera el compañero Camarena también estuvo presente el compañero Crisóforo Ibañez, y le suplicaría que con toda sinceridad y con toda franqueza viniera a exponer a esta tribuna la impresión que haya obtenido de esa entrevista. En resumen, señores, me adhiero a la proposición de que se llame inmediatamente al señor ingeniero Marte R. Gómez. (Aplausos).

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano cortina.

El C. Cortina: Señores diputados: Seguramente voy a disgustar a algunos de los compañeros de Cámara que desean justificar la actitud del señor secretario de Agricultura; pero como aquí nosotros tenemos la obligación de defender los intereses del pueblo, sobre la personalidad del señor secretario de Agricultura están los intereses del pueblo. Yo no quiero discutir si el señor secretario es revolucionario o no es revolucionario, si ha congestionado a los campesinos de tierras o no; lo que yo quiero es que se vea si tiene fuerza legal este título.

El C. Camarena: Esa es la cuestión.

El C. Cortina: Eso es lo que se necesita saber, señores. Aquí yo creo que lo más práctico es que se puntualicen derechos, porque efectivamente, como decía el compañero Camarena, se sienta un precedente funestísimo cuando a criterio de un señor secretario de Agricultura se quita la tierra y a criterio del señor licenciado Romandía Ferreira se les da a los chicos, porque sobre los chicos nadie. (Aplausos. Risas).

Aprovecho la oportunidad para comentar algo respecto de lo cual todavía necesitamos una explicación.

Hace cosa de tres meses vi en la prensa de la capital que, por acuerdo del señor secretario de Agricultura y Fomento, dejaban de despacharse las dotaciones ejidales en el Estado de Morelos, porque ya estaban satisfechas las necesidades de los campesinos de ese Estado; y algo que me ha pasmado, señores, que habían ordenado que fuera la Comisión Nacional Agraria a despachar de una santa y buena vez todas las peticiones que hasta esa fecha se hubiesen formulado. A poco días veo que ya quedó resuelto el problema en Morelos, esto es, que los campesinos de Morelos están en un edén: todos tienen sus tierras y todos viven felices. Que pasen a Veracruz, señores, y que en Veracruz también se despacharán todas las dotaciones que se hayan pedido, porque es necesario resolver el problema en Veracruz. Y yo pregunto, señores, ¿las necesidades vienen todas juntas? ¿Es necesario fijar una fecha para que los campesinos aspiren a una parcela de tierra? No, señores; sobre esto es necesario también explicación, porque a esta paso va a empezarse a despojar a los campesinos que ya han creado la pequeña propiedad, para dar las tierras a los privilegiados que ninguna necesidad tienen de ellas. No quiero discutir si se trata de politiquería local, esto es muy aparte; pero si tenemos la obligación de inquirir a qué obedecen estas disposiciones.

El C. Santos Alonso: Es verdaderamente extraño que el inteligente compañero y fino amigo mío, señor Romandía Ferreira, se oponga a que venga el secretario de Agricultura y Fomento a esta Cámara, si se está estudiando un negocio relativo a su Secretaría y de trascendencia como éste, máxime que el artículo 93 constitucional obliga a los secretarios de Estado a venir, si la Cámara lo acuerda. Romandía, sin embargo, no quiere que lo llamen, aunque se le ha atacado; en cambio, yo que soy amigo del ingeniero Gómez, si deseo que venga, porque se le ha atacado, y precisamente por eso, para que delante de él hablen y se digan las anomalías que se dice existen, a fin de que él se defienda y nosotros juzguemos si tiene razón el compañero Camarena o no. Respecto a lo que dijo el compañero Romandía Ferreira, malamente, pretendiendo justificar a la Secretaría de Agricultura y Fomento con una ley ideada por él y que posiblemente irá a poner en la próxima ley agraria, o sea que cuando los niños crezcan, se les quiten las tierras a los viejos (Risas), eso no es defensa. Romandía dijo que cuando los niños crezcan, se les quite a los viejos. Ni se han muerto éstos, ni existe ese artículo en la Ley, ni lo invocó nadie, ni humanamente quien tenga algún criterio podrá poner ese artículo. Posiblemente fue una argucia en su defensa, pero una mala argucia. Así es que yo opino y pido que sí se llame al señor Secretario de Agricultura y tanto los que se crean enemigos como los amigos, tenemos la obligación de llamarlo para que venga a justificarse aquí a la Cámara. (Aplausos).

El C. Balboa: Yo invité al compañero Crisóforo Ibáñez a que subiera a la tribuna para que diera con toda honradez la impresión que obtuvo de esa entrevista. Yo le suplico me haga favor de contestarme.

El C. Crisóforo Ibáñez: Señores diputados:...

(Voces: ¡Un cuento!) Yo no contaré más que lo que oí. Se acercó el señor Camarena, y yo lo acompañaba, al señor Ministro...

El C. Abarca Pérez: ¡Secretario!

El C. Crisóforo Ibáñez: El señor Secretario dijo, entre otras cosas, que él tenía conocimiento de que al hacerse el repartimiento de las parcelas por dos veces, en la última había habido poca equidad porque, según los informes que él tenía, en una ánfora había malas parcelas y en la otra buenas parcelas; que a los amigos se les daba de las buenas parcelas y a los enemigos de las malas parcelas.

El C. Balderas: ¡Esa es la justicia mexicana!

El C. Ibáñez Crisóforo: El señor profesor Camarena le dijo que estos informes tenían origen en un odio profundo y en una división que había en el ejido; que los que imputaban esta idea eran individuos que nunca habían peleado por el ejido; que los que habían peleado por el ejido eran los que ahora andaban fuera de su lugar por persecuciones políticas. El señor Secretario dijo que se sabía que eran objeto de persecuciones y que para ellos había ya pedido garantías al señor Presidente y había pedido un piquete... (Voces: ¿A dónde? Risas). Pues como se llame en milicia, había pedido... pues un escuadrón... (Risas y aplausos), con el objeto de que dieran garantías a los que estaban lejos de sus casas. Que él había ofrecido un empleado de la propia Secretaría que los fuera a llevar a sus hogares, pero ni con las fuerzas, ni con el empleado de la Secretaría han querido ir, porque cuando han llegado vuelve la serie de asesinatos sobre ellos. Nos dijo que él había escrito al señor Vargas Lugo y que éste le había ofrecido tratar la cuestión con serenidad y dar garantías. Entonces le replicó el señor Camarena diciéndole que ni con las garantías del señor Presidente, ni con las garantías de la Secretaría de Agricultura, ni con las garantías del señor Vargas Lugo habían podido llegar a sus hogares aquellos hombres; que, en consecuencia, si el nuevo reparto se hacía sin que ellos estuvieran presentes, se quedarían sin sus parcelas. Entonces el señor Ministro dijo...

El C. Abarca Pérez: ¡Secretario! (Risas).

El C. Ibáñez Crisóforo: El señor Secretario dijo que se les tendría en cuenta a la hora de hacer el nuevo repartimiento. El señor Camarena volvió a replicar diciendo que el caso era sumamente grave, porque la estabilidad de los ejidos se perdía; que los títulos tenían ya la condición de definitivos; que la posesión y la tenencia de la cosa tiende a borrar los vicios de origen, y que hay una necesidad nacional en conservar estables las posesiones de los ejidos y más cuando tienen la condición de definitivos. A lo que el ingeniero Gómez replicó, que él respondía de sus actos. Eso es más o menos lo que el señor Ministro dijo....

El C. Abarca Pérez: ¡Secretario! (Risas).

El C. Ibáñez: O Ministro. (Risas). Si hice bien la síntesis, bien está; yo no he tenido dolo al venir a informar aquí y he procurado producirme con absoluta serenidad. (Voces: ¡A votar! ¡A votar!)

El C. secretario Santoyo: Por orden de la Presidencia se pregunta a la Asamblea si se considera el asunto suficientemente discutido. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Suficientemente discutido. En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobado. La Presidencia designa la siguiente comisión para que se sirva pasar a invitar al ciudadano Secretario de Agricultura y Fomento para que venga a esta Representación Nacional: Eduardo Cortina, Nemesio Vargas y Antonio León.

El C. Camarena: Pido la palabra. Suplico a la Presidencia tenga la amabilidad de que se lea la otra proposición que tengo allí.

El C. Cortina: Suplico al señor Presidente se me exima de esa comisión, y que se nombre otra persona en mi lugar.

El C. secretario Santoyo: Se substituye al ciudadano Cortina con el ciudadano Alfonso Romandía Ferreira. (Aplausos).

El C. Romandía Ferreira: Yo soy amigo de mis amigos en todas las épocas: cuando el sol sube y cuando el sol baja.

- El C. secretario Santoyo (leyendo):

"Honorable Asamblea:

"Teniendo necesidad urgente de atender asuntos graves de familia que requieren mi personal

atención en la capital del Estado de Oaxaca y en el distrito de Tuxtepec, Oax., solicito de Vuestra Soberanía que, con dispensa de trámites, se me conceda una licencia sin goce de dietas, renunciable, por treienta días, a partir del 1o. de noviembre próximo.

"México, D. F., 29 de octubre de 1929.- Diputado propietario por el 10 distrito electoral de Oaxaca, Demetrio Bolaños Cacho."

Se pregunta si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Dispensados. Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobada.

- El mismo C. Secretario (Leyendo):

"Cámara de Senadores del Congreso de la Unión.

"Ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados.- Presente.

"Esta H. Cámara, en sesión celebrada el 23 de los corrientes, aprobó el siguiente punto de acuerdo:

"Único. Devuélvase a la H. Cámara de Diputados, por extemporáneo, el expediente formado con la iniciativa presentada por el Ejecutivo de la Unión y por la cual solicita se le autorice para expedir la Ley de Organización Municipal del Distrito y Territorios Federales.

"Al comunicarlo a ustedes nos es grato remitir el expediente de que se trata en once fojas útiles.

"Reiteramos a ustedes las seguridades de nuestra atenta y distinguida consideración.

"México D.F., a 26 de octubre de 1929.- J.G.Abascal, S. S.- H. Margalli, S. S."- Recibo y a la Comisión de Gobernación en turno.

"Estados Unidos Mexicanos.

"Cámara de Senadores del Congreso de la Unión.

-México.

"Ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados.- Presente.

"Esta H. Cámara, en sesión celebrada el 23 de los corrientes, probó el siguiente punto de acuerdo:

"Único Devuélvase a la H. Cámara de Diputados por extemporáneo, el expediente formado con el proyecto de ley para elecciones municipales del Distrito y Territorios Federales, enviado por la propia Cámara.

"Al comunicarlo a ustedes, no es grato remitir el expediente de que se trata en 108 fojas útiles.

"Reiteramos a ustedes las seguridades de nuestra atenta y distinguida consideración.

"México D. F., a 26 de octubre de 1929.- J.G.Abascal, S. S.- H Margalli, S. S."- Recibo, y a la Comisión de Gobernación en turno.

El C. Secretario Santoyo: Principia la discusión del dictamen rendido por las Comisiones Unidas, Especial de Trabajo y 2a. de Puntos Constitucionales, relativo a los capítulos III, IV, V, VI,VII, VIII y IX del Código de Trabajo. Está a discusión el artículo 20 del dictamen, que dice:....

El C. Bautista, (interrumpiendo): Pido la Palabra en contra del trámite.

El C. Presidente: Tiene la palabra el ciudadano

El C. Bautista: Señores diputados: Yo quiero hacer una atenta súplica a la Comisión Dictaminadora o a las Comisiones Dictaminadoras de Trabajo y Puntos Constitucionales que sigan el dictamen, relativa a que la discusión de este dictamen se divida en dos partes: la primera que sea en lo general, y la segunda, ya entrando a discutir cada uno de los artículos que forman parte del dictamen. La Comisión, con un propósito laudable, quiso que cuanto antes la Cámara de Diputados principiara a tratar lo relativo al Código de Trabajo, y esta circunstancia estableció una modalidad en el sistema seguido hasta ahora en la discusión y aprobación de las Leyes. El primer dictamen presentado por la Comisión decía en su parte resolutiva que era de aprobarse el Código de Trabajo. Posteriormente pidió autorización para retirar algunos artículos o capítulos con el objeto presentarlos reformados; pero es el caso, señores diputados, que el dictamen actual, y sin que en el dictamen primitivo hubiera existido el criterio expreso de las Comisiones que abarcan en conjunto los capítulos, principalmente viene a establecer modalidades, repito, el dictamen actual a discusión, relativas a la suspensión de un capítulo del proyecto del Ejecutivo y a modificaciones substanciales de fondo en los demás artículos motivo de este dictamen. Así pues, en vista de la importancia del asunto, yo suplico a la Asamblea, y muy especialmente a las Comisiones Dictaminadoras, se sirvan aceptar que en esta discusión primero se pueda tratar el punto generalmente, para entrar después a discutir cada uno de los artículos.

El C. presidente: Como lo propuesto por el ciudadano !Bautista implica una modificación al trámite de la Presidencia, me veo en la necesidad de aclarar y justificar este trámite. Las Comisiones pidieron que se aprobará en lo general el proyecto de la Ley de Trabajo que envió al Ejecutivo, y esta Cámara lo aprobó en lo general. Posteriormente presentaron las Comisiones un ocurso a esta Cámara solicitando autorización para presentar por separado capítulos de la Ley de Trabajo, del proyecto del Ejecutivo que había sido aprobado en lo general, y esta Asamblea concedió ese permiso a las Comisiones. El Reglamento de Debates es claro sobre este particular. Aprobada una ley en lo general, deberá discutirse artículo por artículo en lo particular. Si está aprobado en lo general el proyecto que envió el Ejecutivo, procede discutir en lo particular cada uno de los artículos de ese proyecto, modificados por las Comisiones, previo el permiso que concedió la Asamblea. Así es que la Presidencia mantiene su trámite en el sentido en que lo dió a conocer la Secretaría.

El C. Sánchez Lira: Pido la palabra, señor presidente, para una aclaración.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Sánchez Lira: La Cámara aprobó, no el proyecto enviado por el Ejecutivo, en general, sino aprobó un concepto, que era el siguiente: es de expedirse un Código Federal de Trabajo. De modo que yo creo que el doctor Bautista está en lo justo. Desde el momento que la parte de la Ley de Trabajo que vamos a discutir es medular, es lo que viene formando la esencia de la codificación del trabajo, en nada se menoscaba el prestigio, en nada se menoscaba el interés que pudiera suscitar la discusión de artículo por artículo si antes se hace en lo general, de los capítulos presentados por la Comisión, tanto más que la Comisión reforma el proyecto enviado por el Ejecutivo totalmente. No sólo, sino que retira algunos capítulos que nosotros estimamos trascendentalísmos para los trabajadores. Así es que yo ruego a la Asamblea, en nombre de la serenidad que la ha caracterizado para tratar y estudiar este asunto tan importante para el país, que aprueba la moción del compañero Bautista. Una ocasión dijo el compañero Melchor Ortega, cuando yo presentaba una moción suspensiva que sobre el Reglamento está la voluntad soberana de la Cámara. Si la voluntad soberana de la Cámara aprueba que se discuta en lo general, nosotros no vamos de prisa para expedir una Ley festinadamente, sino que, al contrario, debemos reconcentrarnos en el estudio y procurar que corresponda a las necesidades sociales de la República.

El C. secretario Santoyo: Por orden de la Presidencia se va ha dar lectura la parte final del dictamen de las Comisiones, rendido en fecha 25 de septiembre de 1929. Dice así:

"En vista de las consideraciones anteriores, venimos a solicitar de Vuestra Soberanía que, con dispensa de todo trámite, esta H. Cámara se sirva votar que es de aprobarse en lo general el Proyecto del Código Federal de Trabajo presentado por el Ejecutivo.

"En votación económica se pregunta si se dispensan los trámites al dictamen de la Comisiones. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Dispensados. Esta a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, se procede a recoger la votación nominal.

"Fue aprobado el dictamen por unanimidad de 148 votos."

El trámite, fechado el 25 de septiembre del corriente año, dice así: "Se le dispensan todos los trámites; a discusión; aprobado por unanimidad de 148 votos." (Murmullos).

El C. Balboa: Pido la palabra.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Balboa, en contra del trámite.

El C. Balboa: Compañeros diputados: Por más que se trata de un trámite dado con fecha anterior en mi concepto la proposición del compañero Bautista es muy de tomarse en cuenta. Si ustedes analizan el dictamen emitido por las Comisiones, encuentran que dentro de él está el estudio de los capítulos III, IV, V, VI, VII, VIII y IX, y dentro de este dictamen, por más que se abarquen todos esos capítulos, se suprime de una sola plumada una de las modalidades de contratos que se fijan en el proyecto a discusión, que es el Contrato-ley, y dentro de la exposición de motivos que la Comisión hace de este dictamen, para nada se ocupa de esos artículos, que son varios, y que entran dentro del capítulo del Contrato colectivo. Yo me permitiría preguntar a la Comisión ¿Por qué motivo ha omitido en su dictamen el tratar ese punto que es también de importancia, como la tienen los demás contratos que se fijan en el proyecto de la Ley de Trabajo? Yo me permito preguntar esto, hacer esta pregunta al compañero Romero Courtade.

El C. Romero Courtade: Como es ajeno el asunto que pregunta a la materia que se está tratando, me reservo para contestar en su oportunidad.

El C. Balboa: En mi concepto no se trata de materia ajena, sino de estudiar este dictamen que abarca todos los capítulos, en los cuales está comprendido este contrato de trabajo, y yo quiero que la Comisión manifieste a la Asamblea por qué motivo no se ocupó, en la exposición de motivos, de este Contrato-ley. En mi concepto, señores, era obligación de la Comisión, si no aceptaba el Contrato-ley, hacer constar en la exposición de motivos los razonamientos que tiene para no ponerlo; y si considera que debe reservar su discusión para después, haber hecho también una exposición de motivos en este punto. Por eso considero que el compañero Bautista tiene razón, ya que, de aprobarse artículo por artículo, tácitamente estamos pasando por una derogación que ese contrato que todavía la Cámara no ha discutido.

El C. Molina Constantino: Señores diputados: En efecto, el acuerdo que ha aprobado esta honorable Representación Nacional, en el sentido de que el Proyecto de Código Federal de Trabajo, en lo general, ha sido hecho suyo por esta Representación en mi concepto no se opine a que, al entrar a la discusión de los distintos capítulos, que no artículos, capítulos que informan este Código, se abra una oportuna, una amplia discusión sobre doctrina y sobre técnica jurídica, necesaria mas que nada para que conste en el DIARIO DE LOS DEBATES y sea para el futuro una fuente de información a la que habrán de apelar los que interpreten la Ley.

El C. Sánchez Lira: Sí, está bien.

El C. Molina, (continuando): Probablemente, y no probablemente, sino que están de acuerdo en ello todos los juristas en materia de trabajo, en ninguna institución creada por las legislaciones de trabajo se marca de una manera más categórica, más definida, más radical, la tendencia socialista que informe una ley, como el contrato de trabajo, al grado de que podemos concluir sobre la bondad, sobre la capacidad de una ley para transformar el medio social, para dirigirlo, encauzarlo y mejorarlo, podemos concluir digo, sobre estas cualidades de una ley, con sólo analizar el Contrato de trabajo que en esa ley se acepte y se estipule.

Yo creo, compañeros, que al pasar de lo general a lo particular, no debemos dar un salto y hacer tabla rasa de los capítulos del Código. Hemos aprobado ciertamente un Código de trabajo en lo general; y ahora, lo particular, ¿que es? Lo particular son los distintos capítulos de ese Código General de Trabajo. (Voces: ¡De ese proyecto!) Sobre todo, como ya dijo el compañero Balboa, en este dictamen se involucran, se trata al mismo tiempo una serie de capítulos. Yo creo que la Asamblea

debe demostrar su verdadero interés para dar una ley que beneficie a la colectividad, dejando a un lado las prisas que debe haber y entrando de lleno a una discusión doctrinaria sobre la institución más seria que puede existir en cualquiera legislación de trabajo, y que es el contrato de trabajo. (Aplausos. Voces: ¡Muy bien!)

El C. secretario Santoyo: Se pregunta a la Asamblea si se aprueba el trámite consistente en que se proceda a discutir el proyecto en lo particular. (Voces: ¡Sí! ¡Sí! ¡No! ¡no!)

El C. Bautista: Pido la palabra para hacer una aclaración.

El C. secretario Santoyo: Se suplica atentamente a los ciudadanos que boten porque subsista el trámite de la presidencia, se sirvan ponerse de pie. No se aprueba el trámite de la Presidencia. En consecuencia se pone a discusión, en lo general, el dictamen presentado por las comisiones de Trabajo y Puntos Constitucionales unidas.

El C. presidente: Tiene la palabra en contra el ciudadano diputado Gonzalo Bautista.

El C. Bautista: Seguramente que en la exposición que vamos hacer en contra del dictamen de la Comisión, no hay de nuestra parte el propósito de censurar o de considerar mala una labor tan meritoria por parte de las Comisiones. Somos los primeros en reconocer que los encargados de dictaminar sobre el proyecto que el Ejecutivo envió a esta Cámara han puesto todo el cuidado necesario para que la ley que va ha normar las relaciones entre patronos y trabajadores, sea lo más bien hecha posible. Desde luego, es de felicitarse a la Comisión por haber elevado el Contrato colectivo, que estaba en el proyecto con características de normativo, a la categoría de un verdadero Contrato de ejecución.

La costumbre creada por la fuerza sindical de nuestro país, ha hecho del Contrato colectivo -producto del esfuerzo de nuestros trabajadores - la norma constante que trata de resolver los conflictos entre trabajadores y patrones y de evitar que estos conflictos se puedan seguir presentando. No podía la Comisión, integrada por elementos revolucionarios, pasar inadvertido el hecho, pasar inadvertida la costumbre que ha existido en México, de que los Contratos colectivos, lejos de ser exclusivamente normativos, son esencialmente ejecutivos; pero no podemos nosotros aceptar la supresión que ha hecho la Comisión, del Contrato de equipo.

El Contrato de equipo, que es una modalidad de la contratación, es uno de los contratos que se van estableciendo con más lentitud entre los que existen, en una forma verdaderamente restringida, y en nuestro país quizá únicamente un caso pueda citarse, y es el de la Cooperativa de Alijadores del Puerto de Tampico.

El C. Romero Courtade: ¿Cooperativa?

El C. Bautista: En los países europeos el Contrato de equipo, que recibe el nombre de Contrato cooperativo, también es muy restringido y reduciendo; pero para llegar a comprender la importancia que tiene el Contrato de equipo, forzoso es que nosotros nos empeñemos, dentro de la escasa preparación que tenemos sobre la materia, para explicar a la Asamblea lo que puede significar de progreso en la evolución económica del mundo la creación del Contrato de equipo. La asociación, que es una de las leyes naturales más universales, ha sufrido una verdadera evolución al correr de los años, y desde el carácter instintivo que adquiere en la organización económica, en el concepto de la organización económica de la familia, pasando de este carácter instintivo al carácter de coercitivo en la esclavitud, menos coercitivo en la servidumbre y posteriormente en la Edad Media -cuando vinieron las organizaciones de los maestros y enfrente de ellas, por defensa de sus intereses económicos, hubo la necesidad de crear las organizaciones de los compañeros -, la asociación, decía yo, al través del tiempo, trajo por consecuencia natural y evolutiva la creación del Contrato clásico colectivo, aceptado por la organización capitalista; contrato en donde las relaciones del patrón y del trabajador se refieren única y exclusivamente a la producción. El contrato no es perfecto, no se refiere a las tres características económicas que son la dirección, la producción y el reparto; pero, posteriormente, la organización cooperativa de los trabajadores ha establecido una nueva forma de contratación, que estaba representada en el proyecto del Ejecutivo por el Contrato de equipo. En este contrato, de una manera clara en la exposición de motivos lo hace el ciudadano Presidente de la República, y si nos asomamos siquiera de una manera incidental a algún Tratado de Economía Política, comprendemos que el contrato de equipo tiene por objeto elevar la categoría del trabajador, crea su mayor independencia, estableciendo relaciones no solamente en la producción, si no en lo que se refiere a la dirección y al reparto.

Esta circunstancia del progreso que vino a determinar el Contrato de equipo, es lo que nos lleva a nosotros a suplicar a la Asamblea y especialmente a la Comisión que no sea eliminado de la Ley de Trabajo que vamos a aprobar.

Otro de los puntos que para nosotros es de importancia, está comprendido en el artículo 33 que ha sido rudamente combatido por el grupo patronal del país, tratando de establecer o pretendiendo crear en la conciencia de los representantes populares que lo indefinido de los contratos es ruinoso para la industria, motejando el precepto a que me estoy refiriendo, de prohijar un contrato perpetuo.

No puede concebirse, leyendo el capítulo relativo a la suspensión del contrato y a la terminación del mismo, no puede concebirse, repito, la idea de que el contrato pueda ser perpetuo. El Artículo 33 tiene por objeto, en la forma como lo presenta redactado el Ejecutivo, garantizar al trabajador la posibilidad de trabajar de una manera permanente, excepción hecha, naturalmente, de las causas que establece la Ley en que debe suspenderse la vigencia de los contratos y en que estos deben terminar.

Por otra parte, el artículo 22 del proyecto establece lo siguiente:

"Artículo 22. El contrato de trabajo sólo obligará a prestar el servicio convenido por el término previamente estipulado, sin poder exceder de un año en perjuicio del trabajador."

Salvados, pues, los intereses del trabajador por lo que se estipula en el artículo 22, resulta inútil, quizá perjudicial para los intereses mismos del trabajador, establecer que solamente podrá prorrogarse el contrato cuando exista la materia del trabajo y de las crisis que lo determinaron.

Como la Asamblea había aprobado con anterioridad que fuera llamado el ministro (Voces: ¡Secretario! ¡Secretario! Risas). de Agricultura y Fomento, para que informe a la Asamblea respecto al caso presentado por el diputado Camarena, y el Señor Secretario se encuentra ya en el recinto, suspendo mi argumentación para continuarla en la primera oportunidad.

El C. secretario Santoyo: Encontrándose a las Agricultura y Fomento, que fue llamado por esta Asamblea, por orden de la Presidencia se suspende la discusión del Código de Trabajo. (Penetra al salón el aludido funcionario, acompañado por la comisión designada para llamarlo).

El C. Presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Camarena.

El C. Camarena: Ciudadano Secretario de Agricultura y Fomento: Acabo de presentar ante esta Honorable Asamblea una proposición encaminada a llamarlo a usted, con el fin de que se sirva informar algo acerca de lo que está sucediendo en el ejido de Mixquiahuala, del Estado de Hidalgo. Esta mañana tuve ocasión de hablar con usted, en lo personal, y he repetido aquí ante la Asamblea, con toda fidelidad, las palabras que usted pronunció en mi presencia cuando yo le pregunté cuál era el informe que podría dar a esta Cámara. Usted me contestó que se haría el nuevo reparto bajo su responsabilidad, bajo la responsabilidad de la Secretaría, y que ese nuevo reparto obedecía a irregularidades que se cometieron en el último reparto. Como este asunto la Asamblea lo ha considerado de gravedad, puesto que estima que si caen por un acuerdo de la Secretaría de Agricultura los títulos de propiedad definitiva que ya tienen los ejidatarios, tuerto o derecho, en cualquiera forma que se hayan extendido, pero en forma de resolución definitiva a favor de los campesinos; la Asamblea ha considerado de gravedad este asunto, porque lo que ahora se hace en Mixquiahuala, mañana se puede hacer en cualquier otra parte de la República y los campesinos no tendrán absolutamente ninguna seguridad en sus tierras y en sus propiedades. Yo quiero, a nombre de los campesinos, a nombre de los campesinos de la República, en estos momentos, y muy particularmente a nombre de los campesinos de Mixquiahuala, que ven cernirse sobre ellos un positivo peligro, un verdadero peligro, quiero rogar a usted, señor Secretario, tenga la bondad de contestarme, en concreto, estos tres puntos que traigo formulados por escrito, para no equivocarme en alguna palabra:

Primero: ¿Tiene el ciudadano Presidente de la República facultad para modificar o variar una resolución definitiva que, como la palabra lo está diciendo, tiene carácter de definitiva? Si usted, señor Secretario, acepta que sí la tiene, sírvase decirme cuál es la disposición legal que lo autoriza. Si no la tiene, ¿por qué trata de variar una resolución definitiva?

Segundo: Dígame si las resoluciones definitivas de la Secretaría de Agricultura y de cualquiera otra Secretaría, tratándose no sólo de asuntos agrarios, sino de aguas, etc., no pueden ser modificadas por la propia Secretaría, por que tienen el mismo valor que una sentencia judicial definitiva; pues si las Secretarías pudieran estar modificando incesantemente sus resoluciones, no habría estabilidad en nada, porque si hoy dicen que sí, mañana pueden decir que no y pasado mañana otra vez que sí; y este criterio, o sea que las autoridades administrativas no pueden variar por sí y ante sí sus resoluciones, ha sido o no aceptado por la Secretaría de Agricultura? Estas son las preguntas que me permito formular a usted, ciudadano Secretario de Agricultura, a nombre de los campesinos de la República. (Aplausos).

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Secretario de Agricultura.

El C. secretario de Agricultura: Señores diputados: Me satisface mucho venir a informar ante ustedes de un modo directo sobre este caso de Mixquiahuala, porque así podré producir ante el Pleno de la H. Cámara de Diputados, ampliándolos, los razonamientos que formule esta mañana ante el señor Camarena y el señor diputado Crisóforo Ibáñez. Deseo concretarme a tratar el punto particular desde el punto de vista administrativo de la Secretaría de Agricultura y Fomento, consignando que todos nuestros actos han estado apegados a lo que disponen leyes que han sido votadas por esta misma Cámara de Diputados.

El señor Cámarena con el señor diputado Ibáñez fue esta mañana para decirme que en alguna sesión anterior se había aprobado que una comisión de esta Cámara me entrevistara con objeto de pedirme informe sobre los motivos que había tenido la Secretaría de Agricultura y Fomento para ordenar una rectificación en la aplicación de la Ley del Patrimonio de Familia en el ejido de Mexquiahuala. Había estado ausente de la capital de la República y no tuve conocimiento, ni siquiera por la prensa, de que este asunto hubiera sido tratado en la Cámara de Diputados; pero inmediatamente di los informes que tuve a mano sin hacer ninguna alusión que indicara o permitiera imaginar siquiera, que yo deseaba en cualquiera forma sustraerme al deseo de esta H. Cámara para pedirme informes. Quiero consignar, pues, que yo informé con el mayor gusto y que hoy vengo a hacerlo con mayor satisfacción, por que espero que los informes que yo personalmente produzca sean más perceptibles, más claros y más convincentes.

Lamento mucho, al mismo tiempo, que asuntos de esta naturaleza apasionen o sean motivo de deliberación en la Cámara de Diputados, porque el simple hecho de que se traigan a esta tribuna, indica deseo de sacar la cuestión agraria del plano técnico y social en que queremos ponerla, para traerla a un terreno de deliberación política, evidentemente perjudicial para la clase campesina y para la resolución orgánica del problema agrario.

Digo esto, porque aún en el caso de que la Comisión Nacional Agraria o la Secretaria de

Agricultura y Fomento hubieran producido una resolución que tuviera las características de ilegal, las leyes marcan claramente que hay tribunales judiciales encargados de revisar las disposiciones irregulares o ilegales. Y entonces abría sido un juez de Distrito, por la vía de amparo, o la Suprema Corte de Justicia, o un tribunal federal, el que habría calificado de irregular nuestra gestión y el que nos habría ordenado reponer el procedimiento. Y habría sido entonces una autoridad judicial la que habría intervenido, dando toda la fuerza de ley y de acuerdo escrito a su resolución, y no un señor diputado que se abroga la representación de los campesinos de la República cuando se ha presentado hoy por primera vez en la Secretaría de Agricultura y Fomento, y nunca en toda mi gestión estuvo a gestionar un ejido, una dotación ni nada que fuera favorable a los pueblos. (Aplausos.)

El caso de Mexquiahuala me voy a permitir explicarlo de un modo pormenorizado ante ustedes, pero creo que en esta tribuna hubo con anterioridad alusiones de carácter general a la política agraria que ha seguido el actual Gobierno, y creo que es ésta una buena oportunidad para explicarla ante ustedes, para decir en unas cuantas palabras en qué consiste. Nosotros no hemos hecho ningún descubrimiento en materia agraria ni podíamos hacerlo después de catorce años que tienen de vigencia las leyes agrarias; nos hemos concretado, pues, a cumplir las leyes agrarias y a cumplirlas con toda la eficacia de que hemos sido capaces -y esta última palabra permítanme ustedes que la subraye porque la siento y porque los hechos la comprueban -. La labor agraria de los gobiernos revolucionarios está numéricamente traducida en las siguientes cifras: en 1916 se dictó una resolución presidencial; en 1917,55; en 1918,69; en 1919, 86; en 1920, 120; en 1921, 169; en 1922, 82; en 1923, 199; en 1924, 291; en 1925, 447; en 1926, 362; en 1927, 470; en 1928, 364.

Como ven ustedes, durante todo el período preconstitucional se trabajó con indudable lentitud; era el período de formación de la legislación agraria, era el período de integración de la jurisprudencia agraria, y ni la Comisión Nacional Agraria tenía la experiencia necesaria para poder resolver con eficacia, ni el ambiente social que estaba formado alrededor de la cuestión agraria permitía que ésta marchara con rapidez. Los jueces de Distrito amparaban con mucha frecuencia, la Suprema Corte confirmaba amparos definitivos o suspensiones y esto determinaba embarazos innumerables en la resolución de la cuestión agraria. Ya en la época del general Obregón, de 1921 en adelante, se notó una mayor eficacia, una mayor rapidez y eso le permitió al general Obregón dictar en su período 700 resoluciones presidenciales. Esa eficacia se incrementó durante la gestión del general Calles, durante cuya administración pudo dictar 1,600 resoluciones, en términos aproximados. Sin embargo, todos ustedes recuerdan que en el pasado período de sesiones ordinarias discutimos todavía con acaloramiento la situación creada por la Suprema Corte de Justicia con su jurisprudencia en materia agraria, que, sólo esta nueva Corte vino a sentar. Y ha sido sólo en esta última gestión administrativa del Gobierno provisional cuando la Comisión Nacional Agraria ha podido trabajar sin obstáculos de ninguna naturaleza y cuando, por lo mismo, se ha capacitado para desarrollar una labor de cuya eficacia, numéricamente, puedo vanagloriarme de decir que no tiene precedente.

En efecto, hasta el último acuerdo presidencial se habían dictado 812 resoluciones presidenciales, es decir, en aproximadamente 11 meses, se han dictado más resoluciones de ejidos que las que se dictaron en los cuatro años del general Obregón, y aproximadamente el doble de las que se dictaron en el año en que el general Calles dictó mayor número de resoluciones. Ustedes comprenden, pues, que no es en el terreno de la falta de radicalismo donde puede hacérsele ninguna observación al Gobierno provisional. Se han abordado absolutamente todos los casos difíciles que podían abordarse. Todos los pueblos que han solicitado ejidos han recibido atención del Gobierno, y el hecho de que en algunos Estados se haya declarado que ya no hay expedientes por resolver, no implica cobardía ni falta de deseo para atenderlos, sino sencillamente que ya no hay qué atender. En el Estado de Morelos se hizo una revisión conforme al censo: se revisó pueblo por pueblo; se dio un plazo extraordinario; no hay absolutamente ningún pueblo que haya dejado de recibir ejidos; en muchos casos no sólo ejidos, sino ampliación; se tramitaron, pues, los expedientes de dotación y los expedientes de ampliación y al no haber ningún expediente pendiente de resolución, se disolvió la Comisión Local Agraria, porque es inútil tener una burocracia ociosa cuando puede utilizarse para fines provechosos.

Ha circulado la versión de que hay una presión exterior para que en Morelos no se resuelvan expedientes. Esa versión es absolutamente equivocada. No hay ningún terrateniente extranjero capaz de detener la obra agraria del Estado de Morelos, y el que ha sido aludido alguna vez, no tiene una pulgada de terreno en el Estado de Morelos, como no sea una casa de recreo. Ahora voy a entrar al caso de Mixquiahuala que tanto interesa al señor diputado Camarena: El ejido de Mixquiahuala fue en la República un ejido modelo. Tenían terrenos dominados por el sistema Requema de irrigación, había un mercado próximo, había tierras de relativa buena calidad - por lo menos había en gran parte tierras de buena calidad -, otras pedregosas, con el tepetate muy cerca de la superficie; había la posibilidad de sembrar alfalfa, trigo, cebada, había un grupo de agricultores laboriosos que deseaban trabajar. Desgraciadamente el reparto original hecho en forma provisional por el Comité Administrativo, fue absolutamente irregular. Era la época en que no existía todavía la Ley del Patrimonio de Familia; los repartos parciales se hacían, no con sujeción a planos, sino con sujeción a aparcelamientos empíricos decretados por los Comités Administrativos, y los Comités Administrativos con mucha frecuencia reservaban para sí la parte del león. El comité de Mixquiahuala reservó para sí la parte del león y entonces hubo un grupo numeroso de ejidatarios que protestaron por este reparto, que lo consideraron inconveniente para sus intereses y que pidieron

su modificación. Ese grupo de ejidatarios descontentos que reclamaban un reparto equitativo, estaba encabezado por un señor que se llama Manuel Mera. En este señor encarnó en un momento el deseo de reivindicación de los agricultores que veían un reparto desigual en las parcelas, y como la justicia atrae siempre mayorías, su causa se impuso y entonces la Comisión Nacional Agraria ordenó que se hiciera la aplicación de la Ley del Patrimonio de Familia en el ejido de Mixquiahuala. El control lo adquirió desde ese momento el mismo señor Manuel Mera y el reparto se hizo bajo su cuidado, sólo que el señor Mera, olvidándose de los propósitos igualitarios que lo habían animado originalmente, quiso ser lo que había sido el Comité Administrativo, y entonces él fue el que tuvo más parcelas de las que legalmente le correspondían. Entonces ya no fueron los enemigos de Mera, sino Mera el que se convirtió en el cacique de Mixquiahuala. Si ustedes quieren hacer una investigación, pueden ocurrir al Banco de Crédito Agrícola para que vean los créditos que ha recibido Mera y para que ustedes resuelvan, teniendo en cuenta el importe de esos créditos, si un ejidatario puede alcanzar créditos como los que ha obtenido Mera. Si ustedes resuelven, hablando en la región, o si ustedes quieren nombrar una comisión, pueden investigar si es exacto que ese señor es acaparador de cebada, si no compra cosechas a tiempo, si no se ha convertido en un cacique local. La consecuencia fue naturalmente que se enfrentara a Mera un grupo descontento semejante al que él mismo había encabezado. Ahora bien, hubo una complicación política que, aunque es penoso, es indispensable consignarla: el grupo de Mera, en las pasadas elecciones para Gobernador del Estado, fue partidario del doctor Parres; el grupo "antimerista" fue partidario de Matías Rodríguez y de Vargas Lugo. La pasión política enconó a los dos grupos y desencadenó una serie de persecuciones, de matanzas y de asesinatos que positivamente han asolado a la región; la cosa más lamentable, la más penosa que ustedes puedan imaginarse. Pasan las elecciones, pasa la pasión política, se reconoce el triunfo del gobernador Vargas Lugo, y entonces la Comisión Nacional Agraria, en su papel absolutamente político, se presenta en Mixquiahuala y dice: "Desde este momento han cesado los rencores políticos; el Gobernador del Estado es Vargas Lugo; pero aquí hay un grupo que es enemigo de él y a ese grupo nosotros le vamos a dar garantías. Suponemos nosotros, Comisión Nacional Agraria, que el grupo de amigos de Vargas Lugo le dará garantías el Gobierno del Estado; al grupo enemigo se las vamos a dar nosotros". Entonces, después de cambiar impresiones con el Gobernador del Estado de una forma privada, acepta él que un empleado de la Comisión Nacional Agraria se presente al ejido de Mixquiahuala y tome el control de ese ejido; pero estoy hablando ante una Asamblea de políticos y creo que no se dudará si yo afirmo que las enemistades más enconadas son las de las autoridades más pequeñas. Cuando un gobernador perdona, un presidente municipal es implacable; cuando un diputado hace las paces, un delegado municipal se siente todavía con ánimos de fusilar. (Voces ¡Cierto!) Las autoridades inferiores de Mixquiahuala no aceptan el plan de cordialidad propuesto por el Gobierno Federal y que las autoridades locales acogen de buen grado, y entonces yo me dirijo el señor Presidente de la República exponiéndole el caso, en un memorándum que suplico al señor secretario que lea junto conmigo para que certifique que es la expresión de la verdad; voy a suplicarle que me permita leerlo y él certificará si la fecha es correcta. (Voces: ¡No se duda!) Es para el señor Camarena la observación.

El C. Camarena: Tampoco para mí es necesario.

- El C. Gómez Marte R., secretario de Agricultura:

"Memorándum.

"México, D. F., a 18 de julio de 1929.

"Al ciudadano Presidente de la República, Palacio Nacional.

"Para arreglar definitivamente el ejido de Mixquiahuala, nuestro representante, ingeniero Miguel López Angel, no ha podido tener la autoridad necesaria, porque el grupo que controlan las autoridades políticas se siente respaldado por tales autoridades y se indisciplina frecuentemente en contra de dicho representante, que no tiene elementos de autoridad suficientes para hacerse respetar.

"Como además el ejido de Mixquiahuala necesita una intervención absolutamente técnica y desligada de preponderancias políticas, urge que el ingeniero López Angel termine sus labores a satisfacción, y por ello me permito solicitar de usted que un destacamento federal se instale en Mixquiahuala, pero precisamente a las órdenes de nuestro representante Miguel López Angel, y sin más misión que respaldar a éste en las disposiciones que habrá de dictar para reorganizar el ejido de Mixquiahuala, colocando a todos los ejidatarios sin distinción de credo político y con exclusión de los consiguientes rencores que han venido dividiendo a los grupos ejidales de Mixquiahuala."

Como ustedes ven, el memorándum se refiere al ingeniero López Angel que había sido comisionado con anticipación, es decir, este asunto fue principiado a tratar por la Secretaría de Agricultura inmediatamente después de las elecciones del Estado de Hidalgo. Como resultado de este memorándum, el señor Presidente de la República -aquí está la copia del mensaje - se dirige al Jefe de las Operaciones Militares y le dice:

"Sírvase comisionar destacamento federal que se traslade al pueblo de Mixquiahuala y se ponga precisamente a las órdenes del ingeniero Miguel López Angel, representante de la Comisión Nacional Agraria, quien tiene por misión reorganizar el ejido de Mixquiahuala y poner término a las divisiones que existen actualmente entre los ejidatarios.

"Transcríbole sus efectos. Atentamente.- Marte R. Gómez, Secretario de Agricultura y Fomento."

Este mensaje fue transcrito por mí al ingeniero Miguel López Angel.

Con anticipación, el mismo 1o. de julio, me había dirigido el señor Presidente de la República en términos parecidos, diciéndole:

"Ciudadano Presidente de la República.- Palacio Nacional.- Ciudad.

"Dificultades en Mixquiahuala, Hgo., de las que tiene usted antecedentes, han continuado. Comisionado nuestro no ha gozado de la autoridad necesaria para impedir ciertas irregularidades. Jefe Operaciones Militares acaba anunciarme que para dar garantías a campesinos partidarios de Mera, pondrá destacamento en Mixquiahuala, pero considero que dicho destacamento no dará efectivas garantías si no está debidamente orientado. Suplícole, por lo mismo, servirse ordenar a Jefe de Operaciones Hidalgo que destacamento póngase a las órdenes del ingeniero Miguel López Angel. Muy respetuosamente.- Marte R. Gómez, Secretario de Agricultura y Fomento."

El señor Presidente de la República contesta de conformidad. Ven ustedes, pues, que la Secretaría de Agricultura y Fomento y la Comisión Nacional Agraria no tienen más preocupación que la de dar garantías de trabajo al grupo político enemistado con las autoridades locales, pero que al terminar la campaña política no tenía razón para seguir distanciado. Ahora bien, al llegar nuestro representante se encuentra con irregularidades mayores que las que él suponía; se encuentra con que el grupo de Mera tiene numerosas parcelas acaparadas y se encuentra con que el descontento del grupo antimerista no es exclusivamente político sino también de carácter económico y social, es decir, que los amigos de las autoridades de Hidalgo ven en Mera no sólo un enemigo político, sino un acaparador de parcelas ejidales, y entonces la única manera de deshacer esta irregularidad es revisar la Ley de Aplicación del Patrimonio de Familia, es decir, corregir las irregularidades que habían ocurrido, y aquí interviene el aspecto puramente técnico legal de la Comisión Nacional Agraria. La Ley de Patrimonio de Familia, aprobada por esta Cámara, establece en su artículo 23 los siguiente:

"Artículo 23. En los casos en que, hecho el reparto de tierras resultare notoria mala división de parcelas ejidales, sea por extensión o por razón de adjudicaciones indebidas y omisiones respecto del padrón, la junta general de ejidatarios podrá, si así lo acordare, modificar las adjudicaciones hechas, siempre que no haya pasado un año a partir de la aprobación, por la propia junta general, del proyecto de división y adjudicación."

El C. Camarena, (interrumpiendo): Tiene tres años ya.

- El C. Secretario de Agricultura y Fomento:

No, señor; ahora le voy a demostrar que no.

El C. presidente: (Campanilla). La Presidencia suplica al ciudadano diputado Camarena que no interrumpa al orador.

El C. Secretario de Agricultura y Fomento: Deje usted que me interrumpa, porque puedo demostrarle inmediatamente que está equivocado. Está usted equivocado. Le voy a demostrar que no tiene un año. Dice el artículo:

"La Junta general de Ejidatarios podrá, si así lo acordare, modificar las adjudicaciones hechas, siempre que no haya pasado un año a partir de la aprobación, por la propia junta general, del proyecto de división y adjudicación."

No es verdad que la Ley de Patrimonio de Familia se haya aplicado en Mixquiahuala hace tres años. Ustedes comprenden que yo no puedo venir debidamente documentado desde el momento en que hace diez minutos que se presentó la comisión a llamarme; pero en el expediente de correspondencia sobre Mixquiahuala que existe en la Secretaría, aparece un telegrama del señor Manuel Mera, firmado en noviembre de 1927, en el cual se le dice al doctor José G. Parres. El telegrama está aquí original.

"Los ejidatarios de Mixquiahuala dan a usted los agradecimientos más cumplidos, tanto a usted como a sus dignos colaboradores, con motivo de haber recibido nuestros títulos de propiedad y no teniendo con qué pagar tan grande servicio, sólo deseamos que la Patria os recompense.

"Protestamos a usted nuestros respetos.

"Por los ejidatarios, el Comisario Ejidal Presidente, Manuel Mera."

En noviembre de 1927. Ahora bien, el fraccionamiento de Mixquiahuala fue objetado dentro del año que marca la ley. Aquí está un informe del entonces oficial mayor de la Comisión Nacional Agraria, original. Se le pidió que dijera por qué había tantas quejas de los ejidatarios de Mixquiahuala con motivo de la aplicación de la Ley del Patrimonio de Familia, y él dice esto:

"Me permito informar a usted, con motivo de la aclaración que verbalmente se sirvió pedirme sobre la causa por la cual aparecen tan variables las superficies de las parcelas del pueblo de Mixquiahuala, del Estado de Hidalgo, lo siguiente:

"Al saber el pueblo que se iba a fraccionar el ejido en partes iguales, fueron a entrevistar a usted para pedirle que se les respetaran las superficies de sus repetidas parcelas, en vista de que sufrirían grandes trastornos económicos por tener que cambiar todo el sistema de riego, toda vez que cada parcela tiene sus canales naturales para ser regada. Habiendo accedido esa Superioridad a esta petición, se ordenó al ingeniero encargado del fraccionamiento de este pueblo que respetara el fraccionamiento que había sido hecho por unos ingenieros que pagó el mismo pueblo.

"Al investigar la equidad del fraccionamiento se llegó a la conclusión de que un gran número de mujeres aparecían como ejidatarios y en cambio había cerca de cien hombres que carecían de tierra, en vista de lo cual se ordenó al ingeniero que rebajara a la mitad las superficies de las parcelas poseídas por las mujeres para poder darles tierras a los hombres que carecían de ella. Además, se llegó al conocimiento de que el reparto había sido hecho de acuerdo con las necesidades de cada familia, dándoles a los jefes que tenían familia que sostener hasta 4 hectáreas de tierra laborable y a las mujeres y solteros hasta 2 hectáreas y es por esto por lo que aparecen más de ochenta mujeres con parcelas de 1 hectárea de superficie, en vista de la orden que se le dio al ingeniero y de que ya se habló anteriormente.

"En cuanto a las parcelas que llegan a una superficie de 6 hectáreas y que aparecen como terrenos de riego, hay que hacer la aclaración de que aun cuando la superficie es irrigable tiene gran cantidad de tepetate a flor de tierra, completamente impropio para el cultivo, siendo tan sólo cultivables unas 3 o 4 hectáreas.

"Hay que tener en consideración que este fue uno de los primeros pueblos en que se aplicó la Ley de Patrimonio y que por temor a un fracaso que hubiera resonado a todos los pueblos circunvecinos, tuvo que accederse a las pretensiones de los ejidatarios.

"Atentamente.- Sufragio Efectivo. No Reelección. -México, D. F., a 2 de diciembre de 1927.- El oficial mayor de la Comisión Nacional Agraria."

Vean ustedes, pues... (Voces: ¡Fecha!) El informe tiene fecha: 2 de diciembre de 1927. Vean ustedes que en el ejido se hicieron parcelas de seis hectáreas, de cuatro hectáreas, de dos hectáreas y de una hectárea. Los ejidatarios de seis hectáreas han quedado muy conformes, pero no aquellos a quienes sólo tocó una hectárea; y como la ley establece que los repartos deben hacerse con equidad, que las parcelas deben tener la misma superficie o el mismo valor aproximado, ha sido procedente la queja presentada por los ejidatarios de Mexquiahuala y la Comisión Nacional Agraria, en los términos del artículo 23 de la Ley, la ha tomado en consideración. ¿Qué ha hecho la Comisión Nacional Agraria en este caso? Ha comisionado al jefe del Departamento de Fraccionamientos para que se traslade a Mixquiahuala y haga una revisión aplicando con absoluta equidad la Ley de Patrimonio de Familia, para que diga: aquí hay un ejido con esta superficie; aquí hay tantos ejidatarios; este ejido lo voy a fraccionar en la forma que marca dicha Ley y a cada ejidatario le voy a entregar su parcela. ¿Hay razón para protestar por estas disposiciones? No, señores. Los protestantes serán una minoría constituida por los que tienen parcelas excedidas, es decir, un grupo de pequeños caciques ejidales que quieren conservar las numerosas parcelas que ahora explotan y que no están conforme con una nueva repartición hecha de acuerdo con la Ley, lo cual daría a cada ejidatario una parcela. En cambio, la Comisión Nacional Agraria comprende perfectamente bien que las rencillas de Mixquiahuala no acabarán mientras allá exista una situación de privilegio, dentro de la cual haya ejidatarios en situación ventajosa, respecto de ejidatarios que están en situación desventajosa; es decir, Mixquiahuala se reorganizará económicamente cuando cada ejidatario tenga su parcela y cuando no haya ningún ejidatario que tenga más parcelas, o una parcela superior en superficie a la que tenga otro. Por tanto, yo puedo asegurar ante ustedes que estas protestas no tendrían razón de ser si no hubiera un móvil interesado, si no hubiera un propósito mezquino de impedir que se aplique con equidad la Ley de Patrimonio de Familia....

El C. Camarena: ¡¡No es verdad!!

El C. secretario de Agricultura y Fomento: Si no hubiera un propósito deliberado de impedir que se aplique la Ley....

El C. Camarena: ¡¡No hay ese propósito!!

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

Así es que quienes me han traído a esta Cámara, no lo han hecho deseosos de que se cumpla con la Ley, sino de dar un escándalo.... - El C. Camarena: ¡¡No, señor!!

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:... de significarse políticamente e impedir que se cumpla con la Ley....

El C. Camarena: ¡¡No, señor!!

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

¿Por qué no acudieron a los tribunales, que es donde deben ventilarse estos asuntos? No me habrían traído a la Cámara; habrían ido al Juzgado de Distrito a pedir un amparo. Ahora bien, si hubieran pedido amparo, lo hubieran perdido porque no hubieran tenido razón. En cambio aquí han conseguido su objeto: han llenado columnas en el DIARIO DE LOS DEBATES, algunas también en los periódicos y han dado que hacer al "Diario Oficial" y a la Cámara de Diputados. Eso es todo. (Aplausos).

El C. Camarena: Pido la palabra.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Camarena.

El C. Camarena: Señores diputados: Yo me alegro infinitamente de que el señor Secretario de Agricultura y Fomento haya venido a presentarse en esta tribuna con una virulencia que nadie ha empleado en contra de él. Y me alegro infinitamente, porque quiere decir que he puesto el dedo en la llaga, porque quiere decir que, efectivamente, estoy defendiendo a los ejidatarios de la República, y voy a demostrarlo. En primer lugar, ustedes se habrán fijado perfectamente en que el señor Secretario de Agricultura y Fomento no contestó ninguna de mis dos preguntas y yo debo comenzar por esto, por formularle nuevamente mis preguntas. Yo le ruego al señor Secretario que tenga la bondad de contestarme en concreto mis preguntas.

El C. Secretario de Agricultura y Fomento: Para eso pido la palabra. No quiero interrumpirlo; quiero pedirle que me permita hablar.

El C. Camarena: Yo permito que usted me interrumpa también.

El C. Secretario de Agricultura y Fomento: La explicación se la dí. Lamento mucho que no la recuerde.

El C. Camarena: Me dispensa el señor Secretario. Mi primera pregunta es ésta: ¿Tiene el Presidente de la República facultad para modificar o para variar una resolución definitiva que, como la palabra lo está diciendo, tiene carácter de definitiva? Si usted, señor Secretario, acepta que sí la tiene, ¿cuál es la disposición legal que lo autoriza? Si no la tiene, ¿por qué habrá de variar una resolución definitiva?

El C. Secretario de Agricultura y Fomento: Le voy a contestar. No se trata de eso; nadie pretende modificar una resolución presidencial; la resolución presidencial fue la que dotó de ejidos al pueblo de Mixquiahuala y esa no se pretende modificar. Así es que lamento mucho que tenga que explicarle el mecanismo de la aplicación de las leyes agrarias, y es el siguiente: el pueblo solicita ejidos, el gobernador del Estado resuelve, la Comisión Nacional Agraria revisa, el Presidente de la República dicta su resolución definitiva, ésta

va y se ejecuta; pero cuando el ejido se entrega en definitiva, no se hace una adjudicación individual entre los ejidatarios. Esta no es materia de resolución presidencial, es aplicación de esta ley, que se llama Ley del Patrimonio Parcelario Ejidal. (Aplausos). Ahora bien.

El C. Camarena: Esos aplausos no tienen razón de ser. Ustedes se van a arrepentir después.

El C. Secretario de Agricultura y Fomento: Nosotros hemos aplicado esa ley, ese artículo 23 de la Ley de Patrimonio de Familia; no hemos modificado ninguna resolución, no hemos desconocido la aplicación de la Ley de Patrimonio de Familia en los términos de ese artículo de la ley que ustedes aprobaron y que firmaron el general Plutarco Elías Calles como Presidente de la República, Luis L. León, como Secretario de Agricultura y Fomento y el coronel Adalberto Tejeda como Secretario de Gobernación. Hemos cumplido esa ley y en caso de que su aplicación resulte indebida, lo que usted debe hacer, señor Camarena, en su calidad de diputado, es proponer una modificación a la ley.

El C. Camarena: Voy a permitirme hacerle, a propósito de esa pregunta, otra. Si al dar posesión de tierras a determinado número de individuos en un pueblo, resulta después que se descubren irregularidades en cada una de las posesiones ¿la Secretaría de Agricultura y Fomento está capacitada para arrancarles sus tierras a los ejidatarios? Deseo que usted me conteste.

El C. Secretario de Agricultura y Fomento: Sí le voy a contestar, haciendo al mismo tiempo una explicación complementaria. En primer lugar, el que resuelve sobre la aplicación de la Ley de Patrimonio de Familia, es el pueblo, es la Junta General de vecinos, los ingenieros de la Comisión Nacional Agraria van a un pueblo, levantan los planos; dicen: aquí hay tantos ejidatarios y tantas parcelas; vamos a hacer la adjudicación. Pero la aprobación no la da la Comisión Nacional Agraria, sino la Asamblea General del pueblo. Después de que la Asamblea General del pueblo aprueba, pasa el asunto a la Comisión Nacional Agraria y si ésta encuentra que la aplicación estuvo ajustada a la ley, ratifica. Ahora bien, cuando dentro del año de esa aprobación se descubren irregularidades, la ley dice que pueden hacerse observaciones. La ley debe haber tenido en cuenta probablemente que el hombre no es infalible; debe haber tenido en cuenta que la pasión de un momento, que la equivocación transitoria puede comprometer una cosa de modo permanente, y entonces ha tomado un margen de prudencia, el plazo de un año, durante el cual se pueden observar los defectos de la aplicación de la ley. El artículo 23 dice lo que ya he expresado, o sea que dentro de ese año pueden dictarse modificaciones. En este caso se pidieron, la Comisión las encontró justificadas y en cumplimiento de la ley ordenó que se revisara el fraccionamiento; pero esto no va a quedar a nuestro arbitrio; no va a ser Marte R. Gómez, Secretario de Agricultura y Fomento, quien diga: "hágase esto"; no va a ser palabra de rey; no se trata del magister dixit; sino que después de que nosotros trabajemos, el pueblo se va a reunir en Asamblea General y si las personas que usted representa tienen mayoría, ellas rechazarán lo que hacemos nosotros; pero como no tienen mayoría no podrán rechazarlo, porque son nada más Mera y un grupo de gentes que tienen más de una parcela, que tienen una porción reducida en el ejido. Y no es justo que enfrente de quienes sólo tienen parcelas de dos y de cuatro hectáreas, haya quienes tengan parcelas de seis, de doce y hasta de cien hectáreas, por acumulación, como ha sido en este caso particular.

El C. Camarena: Como yo deseo salvar mi responsabilidad en este caso y el señor Secretario de Agricultura ha dirigido sus ataques en contra mía, diciendo que lo único que yo he procurado es un escándalo político con el fin de adquirir notoriedad, yo vengo a asegurar a ustedes en una forma categórica y en una forma definitiva -y al primero que lo aseguro es al señor Secretario de Agricultura - que nunca he tenido ese móvil en mi conducta y que en esta ocasión no he venido aquí más que a defender, es decir, creyendo, con la intención de defender a los ejidatarios del país. Por eso es que yo no mezclé el asunto político, señor ingeniero Gómez; la Cámara, como a todos los compañeros les consta, fue la que me instó de una manera imperativa a que yo entrara a tratar este asunto desde el punto de vista político. Pero a usted mismo le consta, y si no a usted, les consta a todos los diputados, que yo no me he mezclado en asuntos políticos en el Estado de Hidalgo y que no he buscado la oportunidad de adquirir notoriedad. De manera que me ha traído un propósito sano y le ruego a usted lo crea así. Por lo demás no creo, señores diputados, que se trate aquí de una rectificación como decía el señor Secretario de Agricultura, sino de un nuevo reparto. Y entonces si la ley, como dice él, autoriza a los mismos ejidatarios para hacer un nuevo reparto, yo pregunto: ¿cuál es la garantía que tienen los ejidatarios, que tienen los campesinos?

El C. Orozco: Pedir una reforma a la ley.

El C. Camarena: Yo pregunto: ¿cuál es la garantía de estabilidad que tienen los campesinos, si dentro de la misma ley se puede hacer un nuevo reparto?

El C. secretario de Agricultura y Fomento: Sólo dentro de un año; si no se hace dentro de un año, ya no se hizo.

El C. Camarena: El argumento del señor ingeniero Gómez respecto de la fecha en que se hizo este reparto, es un argumento especioso, porque aquí está la fecha de los títulos de propiedad, y dice: "21 de enero de 1927". Y una instancia de cualquier modo se puede forjar.

El C. secretario de Agricultura y Fomento: ¡En la administración anterior a la mía!

El C. Camarena: Pero si desde aquella época, señor, se hizo el reparto, desde enero de 1927, es decir, si estos campesinos tienen ya tres años con sus títulos de propiedad ¿por qué ahora se viene removiendo este asunto? Es muy sospechoso, da lugar a suspicacias fundadas hasta cierto punto, de por qué ahora se viene haciendo esto. El ingeniero Gómez dice que porque hay una rivalidad en el pueblo. Efectivamente la hay, la conozco....,

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

¿Cree usted que esa rivalidad no hubiera sido más grave en época de elecciones?

El C. Camarena: Y fue tan grave que muchos murieron.

El C. secretario de Agricultura y Fomento: Si nosotros, con la aplicación de la Ley de Patrimonio de Familia agregamos una complicación de orden social y político ¿no agravamos la situación? ¿No hubiera sido imprudente de nuestra parte echar más leña en la hoguera?

El C. Camarena: En época electoral, no.

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

¿Hubiera sido prudente?

El C. Camarena: ¿Pero por qué la Comisión no lo hizo inmediatamente? ¿Por qué se trata ahora, tres años después? En efecto, existen partidos en Mixquiahuala; pero el ingeniero Gómez ha venido a hacer una hermosísima declaración que seguramente pasó inadvertida para los que no conocen la política del Estado de Hidalgo, pero que para nosotros, los de allá, no pasó inadvertida. El dijo que los contrarios de Mera fueron partidarios de Matías Rodríguez y de Vargas Lugo. ¿Y quién era Matías Rodríguez? El gobernador del Estado. Luego entonces estaban completamente unidos los dos, y ese es el problema que ahora, como no fueron partidarios de Matías Rodríguez, ahora éste anda intrigando en contra de ellos para despojarlos de sus parcelas. Ese es el verdadero fondo del asunto. (Aplausos).

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

Voy a insistir en un punto porque es de interés. En uno de los telegramas que leí, aparece que la Secretaría de Agricultura y Fomento pidió fuerzas federales para dar garantías a los partidarios de Mera. Quiero que se me cite un solo caso de partidarios de Mera o de enemigos de Matías Rodríguez que por esa condición hayan perdido sus parcelas, en cualquier ejido del Estado de Hidalgo. Quiero que se me cite un solo caso.

El C. Camarena: En Tepetitlán, señor, hay el caso de treinta y tantos ejidatarios y le presentaré sus nombres, el nombre de ellos, con sus posesiones definitivas.

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

¡Qué va usted a presentar!

El C. Sánchez Ernesto: ¡Y en Chicabazco!

El C. Camarena: En Tepetitlán, del Estado de Hidalgo, treinta y tantos ejidatarios; en el pueblo de Tlamalapa, en Chicabazco y en otros lugares.

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

¡Ustedes dos faltan a la verdad!

El C. Camarena: Estoy seguro de que no falto a la verdad. No vengo aquí como mistificador, tenga usted la plena seguridad de que por mis antecedentes no soy ni puedo serlo.

El C. secretario de Agricultura y Fomento: No los conozco.

El C. Camarena: Usted tiene la costumbre de contestar que no conoce nada; pero cuando hace cargos debiera conocer la historia de un hombre honrado. No soy mistificador, soy un hombre honrado que vengo a defender aquí a los campesinos; nada más. (Aplausos).

Ahora, otro argumento del señor ingeniero Gómez: que hay allí parcelas de doce y de seis hectáreas. Señores, yo traigo aquí el padrón y lo pongo, como dije la primera vez que subí a esta tribuna, a disposición de todos ustedes y podría ir alguno si quisiera a la Comisión Nacional Agraria para que comparara este padrón y se convenciera de que es igual al que existe allí, y les puedo leer a ustedes en cualquiera página de este padrón: cuatro hectáreas, tres, una, dos hectáreas.

El C. secretario de Agricultura: De cuatro, de dos, de una; no todas son de la misma superficie, y no todos tienen sólo una.

El C. Camarena: Yo expliqué hace un momento, señores, que cuando el señor general Calles fue allá -y creo que en este punto no me va a desmentir nuevamente el señor ingeniero Gómez, porque tendría yo otra contestación categórica para él - cuando fue el general Calles a Mixquiahuala para convencerse él personalmente de la situación, ¡qué mejor garantía que la personalidad revolucionaria del general Calles, señores, qué mejor garantía y él estuvo allí personalmente, y cuando se dijo que las mujeres no debían tener parcela, entonces fue una comisión a ver personalmente al señor general Calles para suplicarle que se les dieran parcelas y él autorizó que a cada una de aquellas mujeres, siempre y cuando fueran viudas o tuvieran que sostener familia, se les diera una parcela: a la que tenía de cuatro, dos; a la que tenía de dos, de una. Fue con autorización del presidente de la República, señor general Calles, cuyo espíritu revolucionario no se puede desmentir en ninguna forma, y fue con autorización de él como se repartieron esos ejidos. Por eso encuentra usted aquí esa diferencia de números. El señor ingeniero Gómez está equivocado. Fíjese que yo lo trato con decencia, señor. (Risas) Está equivocado el ingeniero Gómez cuando dice que hay parcelas de seis y de doce hectáreas, y no encuentran ustedes una sola aquí...

El C. secretario de Agricultura: Hay gentes que tienen hasta cien.

El C. Camarena: Y eso de las cien, es muy fácil decir que fulano de tal ha acaparado parcelas. ¿Saben ustedes en que consiste el acaparamiento de Mera? A él le tocó una parcela de cuatro hectáreas y luego el pueblo reunido en masa, por los sacrificios de este hombre, por sus gestiones acordó darle otra parcela, otra nada más: ese es el acaparador de Mixquiahuala. ¿Ahora, saben ustedes quienes son los individuos a quienes trata de favorecer la Secretaría de Agricultura y Fomento? Precisamente a los reaccionarios, a los enemigos, a los que salieron corriendo del pueblo ante el empuje de los revolucionarios...

El C. Sánchez Lira: ¡Una interpelación! ¿Tiene usted la bondad de decirme... (Voces: ¡No! ¡No!)... quién firma la carta? (Voces: ¡No! ¡No!).

El C. Camarena: Yo sí la permito. (Voces: ¡No! ¡No!) Bueno. Entonces voy a terminar, porque no quiero hacer largo este asunto y sólo deseo dejar en el ánimo de ustedes, con absoluta honradez, la situación difícil en que se encuentran aquellos campesinos y deseo recordarles nuevamente que mañana o pasado los campesinos de las regiones de ustedes, pueden estar en las mismas circunstancias, que en este caso, yo tampoco vengo a atacar a este señor por sus antecedentes revolucionarios. Yo sí

los reconozco, señor ingeniero Marte R. Gómez, pero en este caso está usted equivocado, y vea usted que soy noble para juzgarlo. Como le dije en la mañana cuando se trataba de trámites agrarios, expresé esto: señor, yo reconozco que usted es un hombre versado en asuntos agrarios, porque leí últimamente.....

El C Camarena: He leído últimamente el interesantísimo libro publicado acerca de la repartición de ejidos en el Estado de Tamaulipas y he visto la participación que usted tuvo en este reparto de ejidos. Y cuando se trate este asunto y cuando se vuelva a tratar, siempre he de salvar la personalidad del señor licenciado Portes Gil como una personalidad perfectamente definida en asuntos revolucionarios, a quien reconozco en su actuación como diputado, como gobernador y como presidente de la República. Pero yo decía a usted en la mañana, con toda ingenuidad, y es que usted no ha llegado a conocerme, señor ingeniero Gómez, decía a usted: soy un agrarista de corazón; yo sé que usted es muy conocedor en esta materia, porque he visto el interesante -esto lo digo aquí - folleto publicado con motivo de las obras agrarias que se llevaron a cabo en el estado de Tamaulipas, cuando el actual presidente era gobernador de ese Estado y vi la participación decidida e interesantísima que tuvo usted en ese movimiento y yo le confesé hoy en la mañana que no soy versado en estas cuestiones, y le dije: usted es un hombre autorizado. Y de la misma manera vengo a decirlo ahora que no me son dudosos sus antecedentes. Usted no me conoce a mí, y se explica, por que usted en la posición elevada en que está no puede conocer a un diputado proletario, humilde; pero yo sí lo conozco a usted y conozco, repito, sus antecedentes revolucionarios. Yo no vengo a negar su personalidad revolucionaria, pero lo que creo es que en este caso está usted equivocado y creo que con buena fe acaso, dije mal esta palabra, seguramente que con buena fe está usted favoreciendo los intereses de un bando en Mexquiahuala; pero esos intereses tenga usted la plena seguridad de que son intereses de los reaccionarios, los revolucionarios están desterrados. El señor ingeniero Gómez viene a decirles que vayan allá; pero, señores, si no se pueden presentar allí esos infelices, si están desterrados en número de tres o cuatrocientos en el pueblo de Zumpango, donde han tenido que recurrir a la protección del coronel Gómez para poder vivir allí, ¿cómo se van a presentar a deducir sus derechos ante esa Comisión?

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

¿Me permite usted una aclaración?

El C. Camarena: Con todo gusto.

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

Agradezco mucho al diputado Camarena el tono en que está hablando y le hago una explicación: en la mañana, cuando estuvo a verme , una de las cosas que dijo cuando yo le presentaba estos telegramas, fue: "no puedo creerle a usted."

El C. Camarena: Perdóneme no dije eso.

El C. Secretario de Agricultura: Más o menos.

El C. Camarena: ¡Lástima que no había taquígrafos!

- El C. Secretario de Agricultura y Fomento:

Más o menos eso indicaba. Yo naturalmente repliqué que si no tenía fe en mis palabras, juzgaba inútil seguir hablando. Creí que el tono era este; agradezco mucho que el tono sea ahora de estimación y cordialidad; yo no tengo por qué apartarme de él y en el mismo le voy a contestar.

¿Cree usted que para mí habría sido difícil, como secretario de Agricultura y Fomento, solidarizarme con las autoridades del Estado del Hidalgo y no mover el asunto de Mixquiahuala?

El C. Camarena: Usted ha dicho por qué: porque consideraba peligroso el momento.

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

¿Usted cree que si hubiera querido solidarizarme con las autoridades de Mexquiahuala, habría tenido alguna dificultad?

El C. Camarena: En su carácter de secretario no habría tenido usted ninguna; por eso me extraña que hasta ahora se trate el caso.

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

¿Usted cree que si no hubiera intervenido la Comisión Nacional Agraria o la Secretaría de Agricultura y Fomento, no hubiera quedado únicamente el grupo exclusivamente amigo de las autoridades de Mexquiahuala? El C. Camarena: Evidentemente, pero todavía no se ve el resultado.

El C. Secretario de Agricultura y Fomento: ¿Usted cree entonces, que cuando le digo al presidente de la República en un telegrama:

"Dificultades en Mexquiahuala, Hgo., de las que tiene usted antecedentes, han continuado. Comisionado nuestro no ha gozado de la autoridad necesaria para impedir ciertas irregularidades. Jefe operaciones militares acaba anunciarme que para dar garantías a campesinos partidarios de Mera, pondrá destacamento en Mexquiahuala, pero considero que dicho destacamento no dará efectivas garantías si no está debidamente orientado. Suplícole, por lo mismo, servirse ordenar a jefe de operaciones Hidalgo que destacamento póngase a las órdenes del ingeniero Miguel López Angel.

"Muy respetuosamente, Marte R. Gómez, secretario de Agricultura y Fomento." ¿Usted cree que cuando me dirijo a esos términos quiero dar protección a esos campesinos, o no?

El C. Camarena: Le voy a contestar con un dicho.

El C. secretario de Agricultura y Fomento: Precisamente mi actuación, desde las elecciones, está significando que soy el campeón de los amigos de Mera, es decir, que soy, aunque se sonría usted, el que quiere llevar a esos hombres a sus ejidos, consiguiendo que las autoridades locales pongan término a la división perjudicial para unos y otros y para todo el pueblo. Porque para mí hubiera sido muy sencillo dejar las cosas como están: Mera fuera de Mexquiahuala, sus amigos fuera. Así sus parcelas habrían sido ocupados por los amigos de las autoridades y no habríamos tenido aplicación de la Ley de Patrimonio de Familia y tampoco habría parcelas en favor de los amigos de Mera. Así es que toda mi actuación ha sido precisamente la de poner la autoridad federal de la Comisión Nacional Agraria en frente de la autoridad municipal que ha sido enemiga de los amigos de Mera.

El C. Camarena: Contesto con un refrán ranchero. Del dicho al hecho hay mucho trecho. Y podría agregar, y esto no lo digo por agriar el debate, sino solamente para que los diputados se den cuenta de cómo creo lealmente que está la situación de Mexquiahuala y en general la del Estado de Hidalgo. El señor ingeniero Gómez dijo en esta tribuna que los contrarios de Mena fueron partidarios de Matías Rodríguez y del ingeniero Vargas Lugo; y yo diría que fueron partidarios también del ingeniero Marte R. Gómez. (Aplausos).

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Santos.

El C. Santos Gonzalo N.: Compañeros diputados: Yo no sé si en verdad tenga en fondo algo de razón el compañero Camarena, porque desconozco el principio de esta discusión; pero como esta tribuna está precisamente para que cuando uno tiene determinada opinión la venga a expresar, por eso es que he venido aquí ahora. Respecto al asunto de Mexquiahuala, que no conozco a fondo, si lo conozco a grandes rasgos; el ingeniero Luis L.León, antecesor del ingeniero Marte R. Gómez, tiene la impresión de que en aquel medio agrarista, en aquel medio de campesinos ha surgido un cacique, un cacique que yo no me voy a ocupar de atacar, pero sí debo señalar porque no es un misterio que la Diputación de San Luis es netamente agrarista y nosotros tenemos la obligación de defender a los agraristas, pero no a los caciques, no a sus explotadores.

El C. Cortina: El precedente que se sienta con eso es funesto.

El C. Santos: No sé a qué precedente se refiere usted; pero yo estoy exponiendo mi criterio. Cada compañero está en igualdad de condiciones que yo. Yo no vengo tampoco a atacar al compañero Camarena, porque no tengo motivos para ello, pero vengo a exponer mi criterio porque si él dice, y dice la verdad, que viene aquí porque es una obligación de él, también es mi obligación y la de todos mis compañeros exponer su criterio aquí, a menos que se tenga muy poco valor civil. (Aplausos). La diputación de San Luis es exclusivamente agrarista; lo ha comprobado en algunas ocasiones. Nadie podrá dudar de que el jefe de esa diputación, que es el general Saturnino Cedillo, es agrarista y creo que no necesita vistos buenos. (Aplausos). Y aquí, compañeros, entre estos diputados -esta no es figura retórica - entre estos diputados que hay aquí de San Luis, los hay agraristas con la mano, los hay agraristas que de aquí se van a su parcela a trabajar; allí está el compañero Tapia, que está ausente; el compañero Marciano Salazar, agrarista de "de veras",... (Voces: De veras) De veras, sí, pero no de Vera. (Risas). Así pues, compañeros, yo creo que el compañero Camarena y algunos otros compañeros de Hidalgo traen móviles políticos aquí... (Voces: ¿No!) Yo lo creo.

El C. Camarena: ¿En verdad, no!

El C. Santos: Perdone que yo lo crea, no es una ofensa, ni es un delito que un diputado venga aquí con asuntos políticos. El compañero Cortina me dice que hay aquí un gran fondo político.

El C. Camarena: Pero de atrás y de otras gentes.

El C. Santos: Cuentas claras y chocolate espeso; puesto que ya vino aquí el compañero Camarena a hablarnos de refranes. ¿De qué se trata? ¿De un asunto exclusivamente agrarista?

El C. Camarena: Exclusivamente agrarista y revolucionario.

El C. Santos González N.: ¿A qué vienen entonces esas virulencias y esos recrudecimientos y esa falta de respeto a un compañero nuestro, muy estimado, como lo es el ingeniero Marte R. Gómez? (Aplausos). Mientras más confianza le tengamos, más obligados estamos con él.

El C. Camarena: Una interpelación. Debo decir con todo afecto al diputado Santos, que no ha habido virulencias por mi parte; que la virulencia fue del señor secretario de Agricultura contra mí, como le consta a toda la Asamblea, por una parte; por otra, quiero hacer esta aclaración interesante: si yo entré a la cuestión política, fue porque la Asamblea me requirió insistentemente para que entrara a ese terreno, pero yo no tenía interés, ni lo tengo.

El C. Santos Gonzalo N.: Desconozco eso.

El C. Camarena: Porque el señor diputado Santos desconoce esa situación, se la expongo con todo afecto. Digo que la Asamblea fue la que me requirió insistentemente para que yo entrara al terreno político. (Voces: ¡Pero no de asuntos sucios!) Hablé de un bajo fondo, de un fondo sucio, y entonces la Asamblea me requirió para que hablara sobre eso.

El C. Santos Gonzalo N.: Muy bien. Seguramente que la Asamblea, cuando se denuncian cosas tenebrosas, quiere aclararlas y yo también.

El C. Camarena: Pero el diputado Santos sabe perfectamente que no me mezclé en la lucha política de Hidalgo ni he hecho política. Reto a cualquier compañero, principalmente a algún enemigo, que no sé que lo tenga, para que me diga en qué forma me he inmiscuido en la política del Estado de Hidalgo desde la lucha electoral en que contendieron el doctor Parres y el ingeniero Vargas Lugo. Si tengo algún enemigo, insospechado para mí, que se sirva decirme lo que pregunto.

El C. Romandía Ferreira: ¡Sí se ha inmiscuido!

El C. Camarena (continuando): Esa es una afirmación a priori y sin fundamento que fácilmente puede hacerse, y nada más. Estoy haciendo una aclaración al diputado Santos, quien viene aquí con palabras de afecto y en esa misma forma le contesto. No hay móviles políticos, se lo garantizo por mi fe de caballero.

El C. Santos Gonzalo N.: Perfectamente bien. ¿Cuánto mejor que no haya móviles políticos! Pero necesitamos hacer algunas aclaraciones. Les decía con el derecho que tengo de que se me crea, como yo creo al compañero Camarena, que el ingeniero Luis León, con quien ustedes saben estamos en íntimo y diario contacto por nuestras labores de partido, me explicaba, me contaba algo del asunto de este pueblo, y me decía que el señor a quien aquí han hecho referencia, había acaparado, compraba las cosechas al tiempo y que era un hombre de amplísimo crédito en los bancos de estas fechas.

De modo que en este caso no debemos hacernos instrumentos de asuntos políticos y mucho menos encabezados por hombres de esta naturaleza. Si el asunto es puramente social, puramente agrario, pues no hay necesidad de llegar a alguna alteración; que se discuta con serenidad y que veamos en el Secretario de Agricultura más que al diputado y al ministro, al camarada y no a un alto personaje. El compañero Gómez efectivamente en la actualidad es un alto personaje político; ¿pero no llegó aquí a ser diputado como todos nosotros, sujeto a los peligros de un global? (Risas). Yo creo que no hay por qué verlo con gemelos, compañeros, lo podemos ver así de tú a tú: ¿Cómo te va, Marte?

Así pues, compañeros, yo creo en la buena fe de Camarena, pero insisto en que no sé de dónde ni cómo, pero aquí sí hay política local y será muy lamentable que se mezcle con asuntos agrarios y que vayamos a aparecer, por ejemplo, los diputados de San Luis enemigos de los agraristas.

Así pues, camaradas, yo ruego a todos ustedes que este asunto se debata en el terreno esencialmente agrario, en el terreno puramente social y que se haga abstracción de Matías Rodríguez, del doctor Parres y de todos esos políticos que ya pasaron y que si en el Estado de Hidalgo están procurando echar al olvido, nosotros con mucha más razón deberíamos darlos por terminados. (Aplausos).

El C. secretario Santoyo: Por disposición del ciudadano Presidente, se nombre la misma comisión que se sirvió invitar al ciudadano Secretario de Agricultura y Fomento para que tenga la bondad de acompañarlo nuevamente.

El C. Cortina: Pido la palabra para permitirme suplicar al señor Secretario de Agricultura que me haga favor de contestarme algo sobre esto, porque tengo una duda; soy diputado pueblerino y nosotros no entendemos. (Aplausos). La Ley de Seguro Familiar que nos acaba de leer (Voces: ¿Del Patrimonio!) Patrimonio Familiar quiere decir el seguro de la familia. (Aplausos). Dice, según nos hizo favor de leer el señor Secretario de Agricultura, que hasta un año después se puede hacer una modificación, si los agraciados lo estiman pertinente; y este título tiene tres años en poder de los agraciados. Además, suplico al señor secretario tenga la amabilidad de leer lo que dice este título en el reverso.

- El C. secretario Santoyo:

"Limitaciones a las cuales deberá sujetarse el usufructuario de la parcela a que el presente título se refiere:

"1o. Los derechos de la parcela son inalienables, por lo tanto, no podrá ser enajenada o hipotecada, ni aun a pretexto de ser temporal la operación o no implicar enajenación absoluta de sus derechos.

"2o. No podrá darse en arrendamiento o aparcería aun cuando se trate de vecinos del mismo pueblo, o bien desprenderse del disfrute de la parcela a título gratuito u oneroso.

"3o. En caso de fallecimiento del usufructuario, los derechos sobre la parcela serán transferidos a la persona que haya designado como sucesor, quien acepta la obligación de seguir sosteniendo al resto de la familia.

"4o. En caso de no haber mayores de 18 años entre los herederos, ni tutor legal que los represente, las Comisiones Ejidales administrarán la parcela, atendiendo a la subsistencia de aquéllos.

"5o. En caso de que no haya herederos al uso de la parcela, ésta pasará provisionalmente a depender de los Comisarios Ejidales, quienes en junta general de ejidatarios designarán nuevo usufructuario.

"6o. Todos los miembros de la familia del usufructuario que vivan con él, y mientras no se separen de ella por matrimonio u otra causa, gozarán de los derechos de habitación y disfrute personal de los productos de la parcela ejidal.

"7o. Todas las cuestiones que se susciten entre los usufructuarios respecto a posesión o disfrute de las parcelas ejidales, serán resueltas por los Comisarios Ejidales, y en caso de inconformidad con la resolución dictada por éstos, pedirán la intervención de los inspectores de Vigilancia. Si tampoco quedaren conformes con la decisión de los inspectores, ocurrirán a la Junta General de vecinos, la cual resolverá en definitiva oyendo previamente al representante de la Comisión Nacional Agraria.

"8o. La falta de cultivo de la parcela durante más de un año sin causa plenamente justificada, el tratar de enajenarla, hipotecarla o bien darla en aparcería o arrendamiento, dará lugar a nueva adjudicación de la parcela."

El C. Cortina: Como ven ustedes, señores diputados, esta posesión no solamente es legal, sino que a mi juicio es sagrada. Ya ven ustedes que se hace la especificación de que pasará de unos miembros de la familia a otros y que solamente ellos son los capacitados para tomar un acuerdo en el sentido de que se revise eso. De manera, señores, que si el Gobierno pretende satisfacer las justas aspiraciones de los que no tienen tierras, muy bien, felicito al Gobierno; pero yo no quiero -y creo que ustedes estarán de acuerdo conmigo - que se haga una injusticia para corregir un mal. Aquí cabe, vuelvo a decir, que el Gobierno Federal, para satisfacer las necesidades, compre las tierras y se las dé a quienes las necesiten. Hasta ese grado se puede llegar. Pero estos títulos son sagrados y sigo sosteniendo lo que dije hace un instante: se sentaría un funestísimo antecedente si a juicio de un secretario de Agricultura se modifican estas posesiones, y yo soy el primero en felicitar al Gobierno que ha tenido la atingencia de satisfacer las necesidades de esos campesinos. Por mi parte no puede haber sospecha de que yo tenga miras políticas; yo no conozco ni como está aquello, lo único que defiendo es el precedente que se sentaría si se modificara esto, porque les repito a ustedes, ni la Ley del Patrimonio Familiar da facultades para esta modificación . ¿Por qué? Porque dice: un año después, y este título tiene tres años. Por eso yo le suplico al señor secretario que, si como nos lo ha expresado, su deseo es darle a cada quien lo que le corresponde, ponga toda su muy buena voluntad a efecto de que sea respetada esta posesión y el Gobierno, si es posible, adquiera

tierras para satisfacer las necesidades de otros campesinos (Aplausos.)

El C. secretario de Agricultura y Fomento: Si el diputado Cortina me lo permite, le voy a contestar desde aquí. No se trata de dar tierras a nuevos ejidatarios, compañero Cortina. Hemos estado en un tono ya de refrán y camaradería y le diré también un refrán: mas sabe el loco en su casa que el cuerdo en la ajena. Actualmente, aunque sea de una manera temporal, mi casa es la Secretaría de Agricultura y tengo casi la obligación de conocerla mejor que ustedes. El ejido de Mixquiahuala -haremos otro poco de historia - fue de los primeros en que se aplicó la Ley del Patrimonio Familiar. La Ley del Patrimonio Familiar, como ustedes recordarán, fue estudiada por el ingeniero Luis León y sostenida ante la Cámara de Diputados durante el gobierno del señor general Calles; por una ley perfectamente estudiada y que, además, ha correspondido absolutamente a las necesidades del país, no puede aplicarse desde el primer día con toda eficacia. Y este ejido de Mixquiahuala, que fue uno de los primeros en que se aplicó, tuvo que purgar el aprendizaje. Una de esas cosas fue que los títulos se pusieron con una fecha que no corresponde con la fecha en que se hizo la entrega... (Murmullos. Voces: ¡Eso es imposible!)

El C. Camarena: ¡Eso es imposible!

El C. secretario de Agricultura y Fomento (continuando): Yo no tengo la culpa de que se haya hecho así. Allí está el telegrama original del señor Mera en que dice la fecha en que se recibieron los títulos. El señor Mera mandó un telegrama de felicitación que está aquí original y que puede usted leer. Después pone aquí un oficio que dice:

"Confirmación de telegrama" . Si quiere usted leerlo tenga la bondad. - El C. secretario Santoyo:

"Confirmación de telegrama.

"C. doctor José G. Parres, subsecretario de Agricultura y Fomento.- Secretaría de Agricultura y Fomento.- México, D. F. "Los ejidatarios de Mexquiahuala dan a usted los agradecimientos más cumplidos, tanto a usted como a sus dignos colaboradores, con motivo de haber recibido nuestros títulos de propiedad y no teniendo con qué pagar tan grande servicio, sólo deseamos que la Patria os recompense.

"Protestamos a usted nuestros respetos.

"Por los ejidatarios.- El Comisario Ejidal Presidente, Manuel Mera." - El C. secretario de Agricultura y Fomento: Diga usted la fecha, si tiene la bondad.

El C. secretario Santoyo: Tiene puesto un sello de la Secretaría que dice: "Recibido diciembre 3 de 1927."

El C. secretario de Agricultura y Fomento: Entonces la fecha la tiene el telegrama original.

El C. secretario Santoyo: El telegrama tiene fecha 29 de noviembre de 1927.

El C. secretario de Agricultura y Fomento: Y la revisión se pidió antes del año. Allí está el informe.

El C. Camarena: ¿De manera que basta con la petición?

- El C. secretario de Agricultura y Fomento:

Dentro del término de un año.

El C. Camarena: No dudo de su honorabilidad, pero se pudo formular después. No hay ningún antecedente legal para destruir estos títulos.

El C. secretario de Agricultura y Fomento: Pero se trata de un cacique.

El C. Romandía Ferreira: Se trata de un cacique.

El C. Camarena: Usted no conoce esa situación.

El C. Romandía Ferreira: Ni usted tampoco.

El C. Camarena: Yo sí la conozco. ¡Pero, hombre, cómo no, si yo he vivido allí!

El C. secretario de Agricultura y Fomento: Al compañero Cortina le voy a hacer una explicación. Como ve, la fecha de entrega fue en noviembre de 1927. Inmediatamente hubo protestas. La Ley dice en el artículo 23 que de haber irregularidades puede procederse a la revisión. Se pidió, en efecto. Aquí hay un informe del oficial mayor de la Comisión Agraria.

El C. Cortina: Compañeros: Como acaban ustedes de oír, el señor Secretario de Agricultura y Fomento hace una explicación: que el deseo de los agraciados era que se hiciera la modificación desde 1927, pero que por causas contrarias a la Secretaría no se hizo, porque vino después la lucha política. De manera que sigue sosteniendo Cortina que tiene fuerza legal este título, y estos títulos deben conservarse. Este es el juicio del diputado Cortina y espero que la Asamblea esté de acuerdo con que tiene fuerza legal esto (Voces: ¡Muy bien!), suplicándole al señor Secretario que así lo considere.

El C. Camarena: Pido la palabra para formular una proposición concreta, porque me parece que hemos de llegar a una conclusión. Yo creo que la opinión está formada ya en esta Asamblea y deseo formular una proposición concreta.

El C Mijares: ¿Me permite usted la palabra?

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Mijares.

El C. Mijares: Señores compañeros: La proposición del compañero Camarena fue en el sentido de llamar al señor Secretario de Agricultura con el objeto de que hiciese aquí una amplia explicación respecto a la situación de los ejidos en Mixquiahuala. Ya el señor Secretario de Agricultura ha hablado ampliamente sobre el particular; ya sabemos cuál es el criterio de la Secretaría de Agricultura. La Secretaría de Agricultura, dentro de la ley, seguirá tramitando este asunto. Yo creo que otra cosa más no podemos pedirle ya al señor Secretario; creo que ha terminado ya su misión. Respecto al acuerdo a que nosotros lleguemos sobre este asunto, será cuestión de tratarlo en sesión de Bloque, con objeto de no hacerlo sobre la rodilla y yo invito a que reserven su opinión sobre el particular los compañeros que estén interesados en esta cuestión. Yo creo que en este momento no podemos llegar aquí a ninguna conclusión, sino que debemos tratarlo en la Asamblea con más serenidad. ¿A qué conclusión podemos llegar? ¿Decirle que estamos en contra y que no aprobamos las gestiones de la misma Secretaría, cuando no, hemos estudiado el asunto a fondo, cuando es una cuestión técnica? Yo he pedido la palabra, compañeros, con el objeto de suplicar a los interesados en este asunto

que se reserven y lo lleven a sesión de Bloque o a sesión de Cámara y allí se estudie detenidamente, y se forme una opinión, pero después que el ciudadano Secretario de Agricultura se haya retirado, porque no es cuestión ya de estar discutiendo aquí con el señor Secretario de Agricultura y ya sabemos cual es su criterio sobre el particular.

El C. presidente: La Presidencia da las gracias al ciudadano Secretario de Agricultura y Fomento por haberse servido ocurrir al llamado de esta Asamblea. - El C. secretario Santoyo: Por orden de la Presidencia se designa a la misma comisión que invitó al ciudadano Secretario de Agricultura y Fomento para que viniera a este recinto, a fin de que se sirva acompañarlo a su salida. (Se retiró el ciudadano Secretario de Agricultura y Fomento. Aplausos y siseos).

El C secretario Santoyo: Se reanuda la discusión de la Ley de Trabajo. (Voces: ¡No! ¡No!).

El C. Camarena: Pido la palabra. Moción de orden. Voy a hacer una proposición breve en el sentido de la discusión.

El C. secretario Santoyo: Por orden de la Presidencia se consulta a la Asamblea se sirva decir si se continúa la discusión de la Ley del Trabajo.

El C. Camarena: Antes de que se continúe esa discusión, pido la palabra, porque de otra manera no llegaríamos a ninguna conclusión.

El C. secretario Santoyo: La Presidencia ordenó que se suspendiera la discusión del Código de Trabajo a efecto de llamar al señor Secretario de Agricultura y Fomento y atender sus explicaciones. Habiéndose retirado, la misma Presidencia pregunta, por conducto de la Secretaría, si se continúa o no discutiendo el Código de Trabajo. (Voces: ¡Sí! ¡Sí! ¡No! ¡No!).

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Camarena. (Aplausos).

El C. Camarena: He pedido la palabra. (Voces: ¡Que hable!)

El C. Camarena (continuando): Sólo para formular una proposición en términos brevísimos. Deseo que se llegue a una conclusión en el sentido de la discusión, porque de otra manera esta discusión que me parece que ha sido trascendentalísima, no nos llevaría a ningún término. Yo vengo a proponer ante la consideración de ustedes que se nombre una comisión para que se acerque al ciudadano Presidente de la República pidiéndole con todo encarecimiento que se respeten siempre los títulos de propiedad que se les den a los ejidatarios conforme a la Ley de Patrimonio Ejidal. Esta es mi proposición.(Voces: ¡Sí!).

El C. secretario Santoyo: (leyendo):

"H. Asamblea:

"En vista de que el ciudadano Secretario de Agricultura informó a la comisión designada por esta H. Cámara, que el nuevo reparto ejidal se llevará a cabo en el pueblo de Mixquiahuala del Estado de Hidalgo, bajo la responsabilidad del mismo, a pesar de que los ejidatarios están amparados por un título de propiedad conforme a la Ley de Patrimonio Parcelario Ejidal, alegando que existen algunas irregularidades; constituyendo el acto en cuestión un precedente funesto para el problema agrario de la República y un atentado a los intereses sagrados revolucionarios, con todo acatamiento vengo a pedir ante Vuestra Soberanía que con dispensa de todo trámite sea aprobada la siguiente proposición:

"Única. Nómbrese una comisión para que se acerque al ciudadano Presidente de la República y le suplique en forma atenta ordene que en todo caso se respeten los títulos de propiedad que se expiden a los ejidatarios, de acuerdo con la Ley de Patrimonio Ejidal.

"Salón de Sesiones de la H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, D. F., a 29 de octubre de 1929.- Leopoldo E. Camarena, diputado por el 2o. distrito electoral de Hidalgo."

El C. Romandía Ferreira: Señor Presidente, reclamo el quórum. No hay quórum en la Asamblea.

(Voces: ¿Por qué no lo reclamaste antes? Desorden).

El C. Santos Gonzalo N.: Pido la palabra para hacer algunas aclaraciones que se requieren. Yo quiero aclarar a la Asamblea que algunas de las muestras de aparente hostilidad para el compañero Gómez, yo estoy seguro de que no eran para el compañero Gómez, sino que eran para alguno de sus defensores. (Voces: ¡Es cierto!)

Estoy seguro, compañeros de que en esta Asamblea no hay ni tantito veneno para un colaborador del licenciado Portes Gil, como lo es el ingeniero Marte R. Gómez. Estoy absolutamente seguro de que el error grande, el error grave, ha sido de ciertos ciudadanos que se han constituido en defensores del ingeniero Gómez, quienes si me defienden a mí, hacen que me saque la Asamblea. (Aplausos. Voces: ¡Bravo!) Esta Asamblea no viene a cumplir antojos de nadie. Sí hay quórum. (Aplausos).

El C. Romandía Ferreira: Yo defiendo a mis amigos, aquí y en donde quiera.

El C. secretario Santoyo: Está a discusión la proposición leída. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobada. Se nombra la siguiente comisión: Gonzalo N. Santos, Leopoldo E. Camarena, Eduardo Cortina, Santos Alonso, Wenceslao Labra y secretario Santoyo. Continúa la discusión del Código de Trabajo. (Voces: ¡No! ¡No!)

El C. Orozco David: Pido que se pase a sesión secreta.

El C. presidente: Se pasa a sesión secreta.