Legislatura XLIII - Año I - Período Ordinario - Fecha 19551012 - Número de Diario 18

(L43A1P1oN018F19551012.xml)Núm. Diario:18

ENCABEZADO

MÉXICO D. F., MIÉRCOLES 12 DE OCTUBRE DE 1955

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921.

AÑO I. - PERÍODO ORDINARIO XLIII LEGISLATURA TOMO I. -NÚMERO 18

SESIÓN EXTRAORDINARIA

DE LA

CÁMARA DE DIPUTADOS

CELEBRADA EL DÍA 12

DE OCTUBRE DE 1955

SUMARIO

SUMARIO

1.- Se abre la sesión. Oficio del Senado avisando que designó orador para esta sesión al C. senador, licenciado Antonio Mediz Bolio.

2.- Hacen uso de la palabra para referirse a la fecha histórica que hoy se conmemora los CC. senador, licenciado Antonio Mediz Bolio y diputado Mario Colín Sánchez.

3.- Se lee y aprueba el acta de la presente sesión, levantándose ésta.

DEBATE

Presidencia del

C. RAÚL BOLAÑOS CACHO

(Asistencia de 120 ciudadanos diputados).

El C. Presidente (a las 12.45 horas): se abre la sesión.

- El C. secretario Morales Cruz José Ignacio (leyendo):

"Estados Unidos Mexicanos.- Cámara de Senadores.- México, D. F.

"C. licenciado Raúl Bolaños Cacho, Presidente de la H. Cámara de Diputados al Congreso de la Unión.- Presente.

"Tenemos el honor de comunicar a usted en contestación de su atenta invitación fechada el día 8 del actual, que esta H. Cámara en sesión celebrada hoy tuvo a bien designar orador al C. licenciado y senador Antonio Mediz Bolio, para la sesión solemne que tendrá lugar el día de mañana en esa H. Cámara, en ocasión del Día de las Américas.

"Reiteramos a usted las seguridades de nuestra atenta y distinguida consideración.

"México, D. F., a 11 de octubre de 1955.-J. Rodolfo Suárez, S. S.- Salvador G. Govea, S. S."- De enterado.

El C. Presidente: Tiene la palabra el C. senador Antonio Mediz de Bolio.

- El C. Senador Mediz Bolio Antonio.

"Señor Presidente de la H. Cámara de Diputados. Señores diputados: honrados con la alta representación del Senado de la República venimos a acompañar a ustedes en la solemne conmemoración de este día en que se cambiaron, ensanchándose, los destinos del mundo antiguo para crear un mundo nuevo, en el que pudiera continuar la Humanidad su evolución indetenible hacia adelante.

"Una extraordinaria mujer había escuchado la voz de un visionario y había creído en su genio y en su predestinación. Cuando el pendón morado de Castilla se izaba sobre las torres bermejas de la Alhambra y las banderas verdes del Profeta iban a esconder en los desiertos africanos su grandeza vencida, después de siete siglos de epopeyas, las tres frágiles navecillas de Colón salían al misterio del "Mar Tenebroso", en la más grande aventura de los siglos. Toda esta portentosa empresa que germina en el campamento de Isabel frente a Granada y se consuma cuando Rodrigo de Triana grita: "¡Tierra!" desde el mástil de La Pinta, se realiza no con el exiguo dinero de los armadores ni con la codicia de los usureros, ni con el simple afán de dominio de la época, sino gracias a esa arrolladora virtud de la fe, que ha sido siempre el motor invencible de todas las victorias humanas. Por la fe se descubre y se conquista la América, por la fe el gran Padre Cuauhtemotzin sostiene en su ciudad sitiada, el honor de su pueblo y no la entrega sino hecha escombros al poderoso invasor, y por la fe puede, todavía, como un trágico semidiós, sonreír en el tormento, venciendo para siempre a sus vencedores. Por la fe, el Padre Hidalgo con unos cuantos siervos manumitidos, a la espalda inicia la jornada gloriosa de la Independencia; por la fe, el Padre Morelos rompe el sitio de Cuautla y abre el camino a la redención social de las muchedumbres oprimidas, por la fe, Bolívar y San Martín y Sucre y Santander libertan a la América del Sur; por la fe, el inmenso indio Juárez da una tremenda lección a Europa y a todo el Universo y salva para siempre a México, y por la fe, reforma y liberta las conciencias; y por la fe la Revolución Mexicana ha podido crear, sobre sangre, sudor y lágrimas, este México de ahora, libre,

unificado, fuerte, seguro de sí mismo, lleno de orgullo de su pasado, de la dignidad de su presente y de la radiante esperanza de una vida mejor en el futuro. (Aplausos)

"El descubrimiento de América con sus consecuencias de la Conquista y de la dominación europea en el que se llamó desde entonces y, sin duda, equivocadamente el "Nuevo Mundo", es el indicio de la formación de una raza nueva y de una nueva cultura, sobre los restos de las magnificentes civilizaciones indias que, obedeciendo a la ineludible ley que rige el nacimiento, el desarrollo y el esplendor y la decadencia de las sociedades humanas habían cumplido su misión sobre la tierra y se resignaban a su doliente crepúsculo. Ya los profetas mayas habían dicho: "Se fueron porque sabían en ellos mismos la medida de su tiempo. Toda luna, todo año, todo viento camina y pasa también. Toda sangre, después de su fuerza, llegara al lugar de su reposo".

-"Después de las tremendas crisis de las conquistas castellanas que someten, pero no destruyen a la raza vencidas, comienza una corriente cada vez más caudalosa de sangre europea que va transfundiéndose en la sangre indígena, para la gestación de la nueva raza americana, tal vez la que en los días de su gloria de maestro, llamó José Vasconcelos la "raza cósmica". Es el mestizaje americano, el que en un largo proceso de formación está constituyendo la legítima raza de nuestra América. Y esa es la Raza cuyo advenimiento debemos celebrar en este día, en que conmemoramos en todo el Continente la hazaña inmortal del Gran Almirante del Océano.

"Con la excepción de algún pueblo americano, como los Estados Unidos, en que por razón étnica natural fueron los principales pobladores hombres de razas célticas, sajonas y germánicas, y de la República Argentina, que en el siglo XIX recibe cuantiosa inmigración italiana entre otros variados contingentes europeos, y sin duda del Brasil, de sangre portuguesa, las naciones de América se nutren, crecen y se funden en el caudal de la sangre española.

"Es importante notar que los pobladores de nuestros países, los elementos del coloniaje que se mezclan rápidamente con los grandes núcleos nativos, proceden del auténtico pueblo español. Los que vienen primero en la tropa de los conquistadores y después en las crecientes inmigraciones de la Colonia, no son títulos de Castilla, ni próceres, ni aristócratas, son carne y nervio del bajo pueblo español; son labradores de Extremadura, que huyen de las tierras de "pan llevar"; son apacentadores de cerdos, como Pizarro; pastores de ovejas sin rebaños; son tejedores de Cataluña; huertanos de Valencia, pescadores de Málaga, marinos vascos, cortijeros de Andalucía, pequeños comerciantes de Asturias, recios campesinos gallegos y oficiales de artesanías y maestros de oficios de todas partes de España. De esta gran masa de gente ruda, fuerte, generosa, decidida, ambiciosa y valiente, en contacto y ayuntamiento con la inmensa población india, poseedora de una noble finura de espíritu, de una melancólica dignidad y de una honda, silenciosa y sensible inteligencia se va integrando nuestra estirpe americana. De la España materna recibimos magníficos dones, entre los cuales es el mayor la soberana lengua que hablamos con orgullo y con propio rigor y modalidades propias, con lo que se hace más firme y entrañablemente nuestra. Y recibimos también, en nuestra herencia materna, las grandes virtudes que los españoles recibieron a su vez de los árabes y que son esencialmente las leyes de la caballería, es decir, el culto del honor, el sagrado de la hospitalidad, el galante respeto a la mujer, la fidelidad a la palabra, la generosidad para el vencido, el valor hasta la heroicidad, la pasión para el amor, la libertad y la aventura, el rendimiento a la grandeza y la confianza en el destino. Todo ello se lo debemos al grande y magnífico pueblo español, al que sabía y ha sabido siempre sufrir su dolor y transmutarlo en rebeldía, redimir su pobreza en el trabajo, creer y crear, resistir y vencer. Ese pueblo fue el que formó América, nuestra América. Los duques, los marqueses, los condes, los caballeros de Santiago, venían de Virreyes y los segundones de casa nobles, que no se resignaban a ser clérigos, venían a pedir encomiendas. Los demás venían a trabajar. Y no es posible olvidar tampoco a otros hijos del pueblo, los humildes predicadores, fundadores y maestros franciscanos que con la dulce palabra del Evangelio de Cristo, fueron verdaderos civilizadores, consoladores y defensores de los indios.

"América es hoy todo el Hemisferio Occidental. Un panamericanismo que al ir conquistando confianza a fuerza de buena voluntad y de leal cooperación -como acabamos de sentirlo nosotros en la fraternal conducta de los Estados Unidos, en nuestros desastres de Tampico y Chetumal- acabará por crear una unión indestructible entre todos nuestros pueblos. Si la Raza de América hiciera un examen de conciencia, acaso tendríamos que ignorar que haya algún país de nuestra sangre en que todavía suceda, como Rubén Darío decía hace medio siglo, en su lírica lamentación a Cristóforo Colombo que "Cristo vaya por las calles flaco y enclenque" y "Barrabás tenga esclavos y charreteras". Pero ese mal recuerdo fugaz desaparece cuando pensamos con ufanía que en América nacieron Lincoln y Franklin D. Roosevelt y Sarmiento, Rodó, Martí, Justo Sierra, Benito Juárez y Antonio Caso; y en América cantaron Walt Whitman, Salvador Díaz Mirón, Rubén Darío, José Santos Chocano y Andrés Eloy Blanco. Y cabe recordar también que las limpias espadas y la sangre joven de América ayudaron a la vieja Europa a defender la libertad y la democracia. (Aplausos.)

"Nuestro homenaje mexicano en este día, proclamada ya la gloria del descubridor insigne, sea especial y fervientemente para el grande y magnífico pueblo español, a quien debemos la esencia vital de nuestra raza, y con el que estamos cada vez más estrechamente unidos, en la claridad del espíritu, en la fortaleza para el dolor, y en el ardiente, invencible y omnipotente amor por la libertad, como la más alta razón de la existencia humana. "Y al mismo tiempo, llevemos la mano a nuestro corazón y sintamos emocionados el latido de la gloriosa sangre de nuestros maravillosos abuelos

indios, los grandes señores de la tierra en que nacimos, los dueños del sagrado misterio de un mundo de belleza y de sabiduría que apenas podemos presentir, pero que vive en lo profundo de la raíz de nuestra vida y que invisiblemente nos sostiene, nos ilumina y nos conforta.

"Sepamos ser dignos hijos de esas dos ilustres prosapias y sea la Raza nuestra la que traiga al mundo la fraternidad entre todos los hombres y conquista para el atormentado mundo de ahora el anunciado Reino de la Justicia, de la Libertad y del Amor". (Aplausos)

El C. Presidente: Tiene la palabra el C. diputado Mario Colín Sánchez.

El C. Colín Sánchez Mario: Señores senadores. Señores diputados: principiaremos por agradecer al Senado de la República la participación de él con el discurso del ilustre senador don Antonio Mediz Bolio.

En este día, en los 21 países de América se está celebrando el acontecimiento del día 12 de octubre de 1492, en que un Nuevo Mundo nace para la cultura, para la concordia y para la grandeza humana. Este día tributamos homenaje a nuestra estirpe. Nada nuevo venimos a decir aquí, como no sea renovar nuestra fe en los destinos de América. Colón, el autor de la hazaña que conmovió al mundo, que revolucionó las ideas y cuya obra alcanza proporciones extraordinarias que todavía hoy en día recordamos y seguiremos recordando en todas las latitudes de América, como el anuncio del nacimiento de una nueva raza, de nueva aportación para la civilización universal.

Aquel poeta, soñador, hombre contradictor de su propia personalidad, que lo mismo conjugaba en sí sus afanes de fenicio como comerciante y como ambicioso de oro, también encontramos en él una personalidad de idealista, de soñador que se lanza a los mares en busca de aventuras. Es en el contacto de los navegantes portugueses donde prende alas a su espíritu aventurero y se lanza a cruzar los mares en busca de una nueva ruta para llegar de Occidente a Oriente.

El año de 1492 es de gran importancia para España. Tres acontecimientos marcan a España tres siglos de grandeza: es en 1492 cuando se da a conocer la obra de Francisco de Rojas, "La Celestina", una de las obras más importantes de la Literatura; es también en 1492 cuando España logra rescatar a Granada de las manos de los moros, unificándose así quedando integrada; pero ha de ser en 1492 el galardón mayor para España, el ¡Descubrimiento de América. Sin la aportación del pueblo español no hubiese sido posible el descubrimiento de América. A ella se debe su apoyo generoso, a ella se debe la ayuda técnica y la ayuda moral de la Reina Isabel, quien hizo posible la aventura del descubrimiento de América que es una de las epopeyas humanas más grandes que el hombre puede admirar.

Esta epopeya tuvo como escenario magnífico dos mares: el mar Mediterráneo y el mar Caribe, que según el decir de Germán Arciniega, son como dos magníficos espejos, uno retrata los tiempos pasados y otro los tiempos del porvenir.

Las consecuencias inmediatas del descubrimiento de América, fueron muchas: desde luego una nueva percepción geográfica se tiene del Universo. Las ideas de Tolomeo quedan destruidas; el intercambio comercial se intensifica; la plata circula en el Viejo Continente con la explotación que se hizo de las minas americanas; el eje comercial y político que constituía el Mediterráneo, sedé su lugar al Océano Atlántico. La llegada de los exploradores Grijalva, Hernández de Córdova y Cortes, anuncian la conquista del Nuevo Mundo.

Se establece el choque de dos civilizaciones, las civilizaciones aborígenes y la civilización hispánica. De ese choque de las dos corrientes surge el mestizaje, surge México, surgen las nacionalidades de América. Ha sido discutido tradicionalmente por indigenistas y por hispanistas las corrientes de la raza; pero nosotros consideramos que la tesis del mestizaje supera a todas estas corrientes polémicas dignas de discutirse por los especialistas; nosotros consideramos que el mestizaje es un hecho real. La grandeza de nuestros antecesores en su pasado, está bien reflexionar en ella, pero no nos va a importar a nosotros hombres de 1955, estarnos cobijando bajo su grandeza y sus conquistas. Nosotros veneramos y admiramos y rendimos desde esta tribuna del pueblo, homenaje al héroe Cuauhtémoc, homenaje al poeta Netzahualcóyotl, representante de su raza; pero no podemos dejar de admirar, también la obra de los españoles, obra de que es testigo todo el país, que fueron dejando por todos los caminos de México parte de su vida espiritual, parte de su vida material.

América tiene grandes vinculaciones: nos une a todos los hermanos, países de este Continente, la lengua, nos une la sangre, nos unen también las mismas ideas, las mismas esperanzas de los hombres y las mismas esperanzas de nuestros héroes. Es ocasión propicia y magnífica ésta para rendir tributo y homenaje a los libertadores de América: a San Martín, a Sucre, a Bolívar, a Morazán, a Hidalgo, a Morelos, a O'Higgins, a Juárez, a todos estos hombres que tuvieron por patria el Continente y por estirpe a toda la gente de habla española. Las aspiraciones de todos los países de América son las mismas; estamos aspirando por un mundo en que los hombres sean iguales, en que la miseria, la ignorancia y la injusticia sean proscritas para siempre.

(Aplausos)

México, país enemigo tradicionalmente de las dictaduras, país hogar de los refugiados políticos que vienen aquí perseguidos por los hombres, por los ideales que sustentan; México, tiene también como el resto de los países hispanoamericanos, el ideal de concordia universal, el deseo de igualdad de los hombres, las metas de justicia, de libertad y tenemos como norma fundamental de nuestra vida cívica y política, dos temas esenciales: la democracia y la libertad, que están comprendidas en nuestra Constitución, símbolo y bandera, antorcha y guía de la Revolución Mexicana. (Aplausos)

El C. secretario Morales Cruz José Ignacio: Se va a dar lectura al acta de esta sesión:

"Acta de la sesión extraordinaria celebrada por la H. Cámara de Diputados del XLIII Congreso de la Unión, el día doce de octubre de mil novecientos cincuenta y cinco, con motivo del Día de la Raza.

"Presidencia del C. Raúl Bolaños Cacho.

"En la ciudad de México a las doce y cuarenta y cinco minutos del miércoles doce de octubre de mil novecientos cincuenta y cinco, se abre la sesión con asistencia de ciento veinte ciudadanos diputados, según comprueba previamente la Secretaría en la lista que pasó.

"Concurren a esta sesión los CC. senadores y altos funcionarios invitados para este acto.

"Se da cuenta con un oficio del Senado, avisando que designó orador para esta sesión, en representación de aquella Cámara, al C. senador, licenciado Antonio Mediz Bolio.

"Hacen uso de la palabra, para referirse a la fecha histórica que hoy se conmemora, los ciudadanos senador, licenciado Antonio Mediz Bolio y diputado, licenciado Mario Colín Sánchez.

"Se lee la presente acta".

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga el uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobada.

El C. Presidente (a las 13.10 horas): la cuadragésima tercera Legislatura agradece la presencia de los ciudadanos senadores de la República en este recinto, así como la del señor licenciado Santos Guajardo, Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Se levanta la sesión extraordinaria y se cita a los ciudadanos diputados para el próximo viernes a las doce horas en este recinto.

TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA Y

"DIARIO DE LOS DEBATES"