Legislatura XLVI - Año III - Período Ordinario - Fecha 19661125 - Número de Diario 27

(L46A3P1oN027F19661125.xml)Núm. Diario:27

ENCABEZADO

MÉXICO, D. F., VIERNES 25 DE NOVIEMBRE DE 1966

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921.

AÑO III.- PERÍODO ORDINARIO XLVI LEGISLATURA TOMO I.- NÚMERO 27 BIS

SESIÓN SOLEMNE

DE LA

H. CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 25

DE NOVIEMBRE DE 1966

SUMARIO

I. Se abre la sesión solemne, que tiene por objeto dar cumplimento al decreto aprobado por el H. Congreso de la Unión, que ordena se inscriba con letras de oro, en los muros de esta H. Cámara el nombre de Francisco Villa. La Presidencia informa de las personas invitadas a este acto, que se encuentran presentes y a quienes da una cordial bienvenida. Se da lectura al decreto respectivo

II. Se designa comisión que acompañen al C. diputado Alfonso Martínez Domínguez, Presidente de la Comisión de gobernación que emitió el dictamen, a develar la inscripción de referencia. Se devela la inscripción. Hacen uso de la palabra, a nombre de la Cámara de Senadores, el C. Senador Raúl Bolaños Cacho, y por la Cámara de Diputados los CC. diputados Ricardo Covarrubias Chacón y Tulio Hernández Gómez. Se rinde homenaje a varios ciudadanos mexicanos haciendo mención de sus nombres y a los soldados de la Revolución Mexicana

III. Se lee y aprueba el acta de la presente sesión, levantándose ésta

DEBATE

Presidencia del

C. LUIS DANTON RODRÍGUEZ

(Asistencia de 172 ciudadanos diputados.)

I

- El C. Presidente (a las 13:55 horas): Se abre la sesión solemne para dar cumplimiento al decreto aprobado por el Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, por el cual se ordena la inscripción del nombre de Francisco Villa en los muros de la Cámara.

Están presentes en el salón de sesiones muy distinguidos grupos de senadores de la República, que concurren a este acto, en representación de la honorable Colegisladora y por invitación expresa de esta Cámara. A los señores senadores les damos nuestra más cordial bienvenida. (Aplausos).

Han sido invitados también los señores Gobernadores del Estado de Durango y del Estado de Chihuahua. (Aplausos.) También los destacados Jefes de los ejércitos de la Revolución, de sus diversas facciones, veteranos de nuestra Revolución, a quienes hemos invitado, con la gran satisfacción de darles la oportunidad de presenciar este acto. (Aplausos.)

Están presentes también los familiares del señor general Francisco villa (Aplausos), y los representantes de los diversos organismos políticos y sociales del país.

Se ordena a la Secretaría dé lectura al decreto aprobado por el Congreso de la Unión.

- El C. secretario Gámiz Fernández, Everardo:

"Poder Ejecutivo.

Secretaría de Gobernación.

Decreto. Para que se inscriba con letras de oro en los muros del salón de sesiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, el nombre del general Francisco Villa. (Aplausos.)

Al margen un sello con el Escudo Nacional que dice:

"Estados Unidos Mexicanos.- Presidencia de la República.

Gustavo Díaz Ordaz, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, a sus habitantes, sabed:

Que el H. Congreso de la Unión se ha servido dirigirme el siguiente decreto:

El Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, decreta:

Artículo Único. Inscríbase con letras de oro en los muros del salón de sesiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, el nombre del general Francisco Villa.

México, D. F., a 18 de noviembre de 1966.- Luis Dantón Rodríguez, D. P.- Manuel Bernardo Aguirre, S. P.- Everardo Gámiz Fernández, D. F.- Mario C. Olivera, S. S.- Rúbricas."

En cumplimiento de los dispuesto por la fracción I, del artículo 89 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y para su debida publicación y observancia, expido el presente decreto en la residencia del Poder Ejecutivo Federal, en la ciudad de México, Distrito Federal a los diecinueve días del mes de noviembre de mil novecientos sesenta y seis.- Gustavo Díaz Ordaz.- Rúbrica.- El Secretario de Gobernación, Luis Echeverría.- Rúbrica." (Aplausos nutridos.)

II

El C. Presidente: Antes de designar la comisión que habrá de develar las letras de oro, inscritas en los muros de esta cámara, queremos hacer especial mención de la presencia del hombre que ha hecho posible, para las actuales y futuras generaciones, el conocimiento de la vida y de la obra del general Francisco Villa; me refiero al discutido escritor mexicano, académico y gran intelectual de nuestro país, Martín Luis Guzmán. (Aplausos prolongados, de pie un gran número de los asistentes.)

Se designa en comisión para develar el nombre de Francisco Villa, a los ciudadanos diputados Francisco Luna Kan, Braulio Meraz Nevárez, José Martínez Alvídrez, Ma. Guadalupe Urzúa Flores y Everardo Gámiz Fernández, y al frente de esta comisión se designa al ciudadano Presidente de la Comisión de Gobernación, quien tuvo a su cargo el dictamen de esta iniciativa, el ciudadano diputado Alfonso Martínez Domínguez. (Aplausos.)

(El C. diputado Alfonso Martínez Domínguez, acompañado de la comisión designada al respecto, sube al estrado donde se encuentra la inscripción con el nombre del general Francisco Villa, cubierta, y procede a su develación, produciéndose a continuación una prolongada y cerrada ovación, puestos de pie todos los presentes y oyéndose gritos de ¡Viva Villa! entre los asistentes a las galerías. Terminado el acto de la develación, todos pasan a ocupar sus respectivos lugares.)

El C. Presidente: Para hablar, en nombre del Senado de la República, se concede el uso de la palabra al ciudadano senador Raúl Bolaños Cacho.

El C. Bolaños Cacho, Raúl: Ciudadano licenciado Luis Dantón Rodríguez, Presidente de la Cámara de Diputados; ciudadanos diputados y senadores del pueblo de México; distinguidos descendientes del general Francisco Villa; representantes de las diferentes dependencias federales; ciudadanía de México aquí reunida; distinguidos periodistas de México:

El Senado de la República me ha hecho el honor de traer mi voz y mi pensamiento con ustedes, ciudadanos diputados del pueblo de México, para estar presente en este homenaje en que se consolida la decisión del Poder Legislativo, de colocar la figura marcial del Centauro del Norte, Francisco Villa (aplausos), que ha de pasar indiscutiblemente en la historia de este alto cuerpo como uno de los capítulos legislativos más discutidos pero más justos para honrar a quien sirvió a la Revolución Mexicana y que hacía falta su nombre en este muro de gloria en que la gratitud nacional ha colocado a todos los hombres que le han hecho sus Revoluciones a México, a esos hombres que hicieron la Revolución de Independencia, a los que hicieron la Revolución de Reforma y a los que hicieron la Revolución Mexicana.

Ya lo decía Justo Sierra, y si él hubiera sobrevivido a la Revolución Mexicana, diría: "Son tres grandes impulsos ascencionales, porque México es hijo de tres grandes Revoluciones." Por ello, pues, es para nosotros un honor estar en esta ceremonia en que la gratitud nacional, la comprensión histórica de una generación actual de legisladores ha develado hace unos momentos las trece letras de oro que forman el nombre del general Francisco Villa. (Aplausos.)

Víctor Hugo, el distinguido y brillante escritor francés, aquel que estuvo con Benito Juárez como la forma más alta de estar con los revolucionarios de aquel entonces, cuando la patria sufría la bota invasora de Napoleón III, el enano, como se le decía al comparársele con la majestad del Gran Corzo, Napoleón el Grande.

Y así como los volcanes, en sus erupciones por sus cráteres brotan rocas ardiendo, así las revoluciones hacen brotar hombres verdaderos.

Fue así como la conmoción que sacudiera a todo México, la Revolución Mexicana, viera la historia brotar, cual si fuera un torrente arrollador de lava ardiendo, la figura de Francisco Villa (aplausos), torrente arrollador que todo lo incendiaba y abrasaba a su paso en el ideal del pueblo; brazo alto de la venganza del pueblo, el general Villa, formador de la gleba, desde abajo, emana, forma ese torbellino de lava.

Por eso podría aplicársele lo que decía el bardo mexicano: "que el solo nombre de Francisco Villa parecía tentar la piel hirsuta del rayo".(Aplausos.)

Francisco Villa fue un hombre dotado de un gran vigor, de naturaleza de claros reflejos y de vivos instintos, de una inteligencia natural; las persecuciones que sufrió, el ser perseguido, le dieron una clara experiencia en el carácter del hombre; lo forjaron en el yunque de la adversidad. Y estas condiciones intrínsecas de su carácter fueron las que le dieron la experiencia que aportó a la Revolución Mexicana.

Francisco Villa fue siempre él, un hombre honrado. Se ha dicho "el bandido de villa", como sinónimo de salteador. Este gran guerrillero, que manejó millones de pesos, y que podía haber acumulado una fortuna fantástica, es más, él fabricó billetes de los llamados "bilimbiques", a millones, y podía haberlos tenido. Todo este dinero él lo empleó en las campañas y en el mantenimiento de la División del Norte.

Y cuando Francisco Villa pacta con Adolfo de la Huerta, no tiene un centavo, y hay que regalarle la Hacienda de Canutillo. Y hay que darle dinero para que él pueda labrar estas tierras. Villa, al manejar tantos millones de dinero no pudo más que adquirir una modesta propiedad en Chihuahua, y un pedazo de tierra, donde él fuera sepultado junto a sus dignos generales. (Aplausos.)

No tuvo necesidad de ser culto; no tuvo necesidad de ser ideólogo; no tuvo necesidad de tener una gran cultura militar, o si se quiere decir, ninguna cultura militar. No era él de los ideólogos, pero sentía a la Revolución Mexicana en el corazón, en el valor de sostenerla a ella.

Muchas veces hay que entender que la patria y las revoluciones no sólo se viven en el pensamiento de los cultos, sino también se viven en el corazón de los hombres. Porque, el ser humano, más afluencia de sangre recibe en el corazón para el calor de sus sentimientos, donde deben vivir las ideas. En una fría y abstracta forma de pensar y de llamarle, porque no era culto, pero sentía a la Revolución Mexicana.

Sin comprender las revoluciones, tienen el sentido de todas, y la armonía de los hombres de corazón valiente, como de los hombres de talento, que guían su ideología.

Fue Francisco Villa un hombre leal; fue leal a la figura limpia de ese apóstol Francisco I. Madero. (Aplausos.) Es decir, al hombre que dio

México su despertar político. Porque, como apuntaba un escritor: "en el paisaje de México adormecido, en el paisaje político de México, se veían tan naturales las reelecciones de Porfirio Díaz, con la misma naturalidad que se veía, en el paisaje, el Popocatépetl y el Ixtacíuatl".

Es Francisco I. Madero el que despierta esta gran patria de su letargo de treinta años, y es la razón de fundamentar sus institucionalismos. Francisco Villa, quiérase o no se quiera, también fue leal a Venustiano Carranza. La lealtad que nadie le puede discutir; la lealtad que es la más hermosa de las virtudes de un hombre, o si se quiere, como decía Gracián: "La fuente de todas las virtudes", puesto que un héroe, sólo es un hombre que entrega su vida por lealtad a su patria. Y Francisco Villa fue leal a Francisco I. Madero. (Aplausos.)

Las hojas de los meses del año de 1914 caen y Francisco Villa está al lado del Jefe del Constitucionalismo Venustiano Carranza y en 18 meses logran caer Tierra Blanca, Torreón, San Pedro de las Colonias, Paredón y Zacatecas, extirpando el brazo armado del villismo los nidos de las víboras y de los aliados espurios de Victoriano Huerta, el asesino de Francisco I. Madero y de Pino Suárez y se debe a Villa extirpar el huertismo y haber definitivamente quitado este cáncer de la Revolución Mexicana. (Aplausos.)

Las cualidades del guerrillero, hoy vuelve a salir Villa para ganar la posición de la juventud eterna de la historia y sus escritores brillantes como Martín Luis Guzmán, escritores también, como de mi pueblo el general Federico Cervantes, conservaron la llama votiva de permanecer latente el pensamiento de Francisco Villa que hoy se consagra por este alto pueblo.

Claro, estas cosas es natural que la figura de Villa sea combatida, porque Villa era en sí un combatiente y es discutido como todo lo que vale, porque lo que alcanza la unanimidad, lo que alcanza la mayoría. Muchas veces ésta nunca puede alcanzarse y es patrimonio de ningún revolucionario mexicano, la unanimidad sino la mayoría.

Las fuerzas contrarias jamás se unificarán, tienen que estar cruzadas en esos campos de la historia. Francia, la generosa Francia, la que enseñó al mundo a hacer revoluciones en los tiempos modernos, confrontó también este problema, de que se exigía una depuración en las filas de la revolución, una depuración moral exigiéndole al revolucionario que tuviera conducta equilátera, sin contradicciones, sin desvíos, con una línea recta. algo así como que el revolucionario mexicano tuviera la conducta de un Francisco de Asís, y ante esa discusión que tenía que hacer años el parlamento francés, como la tuvo en sesiones pasadas el parlamento mexicano, se alzó la voz de un hombre brillante, valiente y patriota apodado por su gran integridad y llamado el tigre George Clemensau y él dijo, una revolución que se depuró con estas mojigaterías y con estas condiciones, es una revolución que se debilita, la revolución se defiende en bloque, dijo él y es natural si hacemos mental consideración; el hecho físico de una revolución es la asociación de hombres que concurren, hombres de diferentes orígenes, de diferentes integridades, de diferente valores, de diferente evolución mental y cultural y con todo ello se hace el triunfo, se toma la Bastilla, se toma el lugar del oprobio, se defiende la bandera y después de que ellos han formado el triunfo no pueden ser eliminados de la historia, no pueden ser eliminados del honor, porque todo este conjunto fue el que inclino la balanza de la historia para hacer el triunfo de toda esa humanidad.

Por eso debemos entender que la Revolución Mexicana debe defender a todos sus hombres en bloque y en forma granítica y que pertenecen a la Revolución Mexicana todos los que hayan alineado en ella, todos los que hayan entregado su inteligencia, su esfuerzo, su sangre y su vida, porque la Revolución Mexicana debe ser única e indivisible por México y para México. (Aplausos.)

La patria hoy en 1966, está integrada física y espiritualmente. No vamos nosotros a dejar de entregar a la juventud, a las próximas generaciones, a la próxima ciudadanía, pedazos de Revolución Mexicana y fracciones de la Revolución Mexicana. Vamos a entregar una revolución única e íntegra para el futuro y el devenir de México. (Aplausos.)

¡Sanguinario Villa!, pronuncian muchas personas, ¿Qué revolución no tiene sangre, de las hechas en el mundo? Las revoluciones son devoradoras de hombres, de sangre. Por que alguien ya afirmaba que los derechos del pueblo no se conquistan con lágrimas, sino con sangre, y la Revolución tiene...(aplausos) todas ellas tienen ese caudal de sangre. Por eso un escritor decía que las mejores páginas de los libros patrios y de las historias de los países están hechas y son páginas escritas con sangre, porque son páginas de dolor, de dolor de parto, de volver a brotar en un país una nueva idea y una nueva bandera para su beneficio.

Por ello quiero yo invitar a todos los revolucionarios de México a que las encendidas hogueras de 1910, las hogueras encendidas de las diferencias, de las pasiones, se apaguen en bien de la unidad de esta patria querida. Esta sesión solemne que ha de pasar a la historia no sólo consagra el enaltecimiento a las virtudes de Francisco Villa, es un principio positivo de unidad revolucionaria y hay que extenderlo este gran principio, debe fomentarse por la unidad de los revolucionarios. No acaso en el almuerzo que dieran miles de ciudadanos que tomaron las armas en diferentes episodios de la Revolución al ciudadano Gustavo Díaz Ordaz, Presidente de la República, la voz autorizada de un recto militar, Baltazar Leyva Mancilla, señaló que le ofrecerían su unidad y esta unidad vino a ser refrendada en este sitio y en esta tribuna por el señor General de División Juan Barragán, nada menos que uno de los más limpios y distinguidos soldados de México y uno de los más leales servidores en la vida y en la muerte de la memoria augusta de Venustiano Carranza. (Aplausos.)

La patria esta hecha, no la tenemos a pedazos. Mantengámos la más viva antorcha y el más vivo fuego de los inicios de este siglo por la unidad de la Revolución; la unidad de la Revolución es la unidad de México. Puede ser que muchos discrepen, que muchos contradigan este acto y que sigan contradiciendo la memoria de Francisco Villa. (Aplausos.) Para ellos, para este grupo de hombres que no están de acuerdo ni en la unidad de la Revolución, ni en justificar la virtud enumerada de un soldado de México.

Debemos pensar, que el próximo monumento, que la gratitud del pueblo dedique al Centauro del Norte sea este monumento, como las cúpulas que consagran el arte colonial en mi Estado de Oaxaca, en la cual termina la cúpula con una cruz dispuesta a todos los perdones; pero junto tiene un pararrayos, dispuesto a todas las tempestades. (Aplausos.)

El C. Presidente: Para hablar en nombre de la Cámara de Diputados, se ha designado a los diputados Ricardo Covarrubias y Hernández Gómez.

Tiene la palabra el diputado Ricardo Covarrubias.

- El C. Covarrubias, Ricardo:

"Señor Presidente:

Ciudadanos Diputados a la Cuadragésima sexta Legislatura del Congreso de la Unión:

Respetables invitados:

Finalizaba 1914, año de dramáticos y decisivos acontecimientos para la patria. Las fuerzas armadas del pueblo habían aniquilado al ejército de Victoriano Huerta y el propio usurpador había emprendido lo que sería la ruta definitiva de su exilio. Cierto día la Ciudad de México, en la que ocasionalmente me hallaba, se sacudió con una noticia: Francisco Villa se aprestaba a hacer su entrada a la capital.

¡Quién era y de dónde procedía aquel personaje cuyo solo nombre infundía temor en unos, alegría en otros y expectación en los demás? Envuelto ya en la leyenda, en alas de la fantasía de un pueblo imaginativo que exageraba sus virtudes y sus defectos, con el ímpetu y la fuerza arrasadora de un huracán, el guerrillero venía auroleado de sus grandes victorias en Tierra Blanca, Paredón, Torreón y Zacatecas, luchas de las que la gente se hacía lenguas y en torno a las cuales se tejían las más vividas versiones de intrepidez y de heroísmo.

Al Correr el tiempo pude explicarme los sentimientos disímbolos que Villa había provocado con su presencia. Quienes se espantaban con la sola mención de su nombre eran aquellos que, habiendo disfrutado de la molicie del porfirismo, no concebían que un hombre surgido de las capas más obscuras del pueblo, hubiera hecho lo suyo para trastocar aquel mundo de placidez y privilegio que las viejas clases creyeron intocado y eterno. Quienes se alegraban con su llegada eran los parias, los pobres, los humildes, aquellos que veían en él al símbolo vengador de todos los agravios contra el pueblo. Quienes simplemente manteníanse espectantes eran los que formaban la masa que tenía del combatiente a fuerza de las especies contradictorias que sobre él circulaban, una imagen nebulosa e informe.

Recuerdo perfectamente la mañana en que Villa entró a la capital acompañado de Emiliano Zapata, con uniforme militar de color azul que no era ni el típico del porfirismo, ni el que más tarde adoptaría el ejército de la Revolución. Su aspecto físico era imponente. Aunque muchos no lo admiraban, creo que no hubo nadie que dejara de impresionarse con su presencia y su reciedumbre. Su sola presencia evocaba de golpe las grandes batallas de la Revolución. La fuerza irresistible de su mirada y su gesto retador traducían a la imaginación popular batallas trepidantes como las de Torreón y Zacatecas. (Aplausos.)

Durante los días que estuvo en la capital su nombre volaba de boca en boca. Se le hizo protagonista de los episodios más singulares, lo mismo aquellos en que aparecía como hombre implacable y temerario, como en otros del más hondo sentimentalismo.

No obstante mi juventud pude percatarme desde entonces que algo extraordinario había en ese hombre, cuando después de uno de sus típicos arrebatados, reales o exagerados por la fantasía, recorría los barrios pobres para recoger niños indigentes y enviarlos a la escuela de Artes y Oficios de Chihuahua, e incluso para mandarlos a estudiar a los Estados Unidos. Nació en mi mente una interrogación que llegó a hacerse torturante: ¿Podía ser Villa el hombre que pintaba la leyenda negra, cuando con una devoción paternal se preocupaba por arrancar de la ignorancia y el desamparo a aquellos pequeñuelos?

Mi actuación posterior en la lucha revolucionaria permitió explicarme aquella personalidad extraordinaria y compleja. Villa era la encarnación pura del pueblo humilde y escarnecido; de su resentimiento; de su ira; de sus anhelos y sus esperanzas. Había sido el brazo armado de la Revolución, el más vigoroso e implacable, el más recio y temido, el más audaz y demoledor. El ejército Huertista, que no era, ni con mucho, el ejército frágil de que algunos hablan, pudo ser destruido gracias al carácter y a la impetuosidad de un hombre como Villa. Cualquier otro Jefe Revolucionario, sin esos atributos, se hubiese estrellado ante un ejército que con todo y su carácter pretoriano tenía cuadros técnicos preparados y armamentos y municiones en gran cantidad.

Soy un hombre de la vieja generación revolucionaria, de una generación que está por periclitar físicamente. Viví la Revolución en sus horas más cruentas y dramáticas, en el instante febril en que toda la energía, el nervio y la pasión del pueblo se pusieron en tensión para levantarse como olas embravecidas. Creo interpretar el sentir de todos los viejos luchadores, al expresar en este momento solemne que no hubiéramos llegado al fin de nuestra vida política, con la conciencia tranquila, sino se nos otorga la oportunidad, como hoy se nos ofrece, de que nuestros brazos, ya cansados, hayan cargado el ataúd simbólico de Francisco Villa hasta el sitio de honor en que hoy lo coloca la Representación Nacional al grabar su nombre en los muros de este recinto histórico. (Aplausos nutridos.)

Que sean mis palabras, por lo tanto, el homenaje de un viejo revolucionario al caudillo que supo abrir paso a la Revolución con su arrojo inigualable y con un vivo sentido de adhesión a la causa de los humildes.

Conocí a Villa. Hoy más que nunca puedo explicarme que en las circunstancias en que actúo, cuando los hombres de la Revolución oscilaban entre el triunfo y el cadalso, o sea entre la gloria y el olvido, tenían que hacer lo que el hizo.

¿Podía considerarse indiferente a la vida quien la cuidaba con tanto celo como él? Porque me consta que no hubo caudillo de la Revolución que hubiera organizado en su ejército una brigada sanitaria como la suya, al cuidado de los doctores Luis de la Garza Cárdenas y Andrés Villarreal, compuesta de varios trenes y con un numeroso personal médico, y hasta con mesas de operación e instrumental quirúrgico que hubiera envidiado el mejor hospital de México y sé también que a Villa lo enardecían por igual las vicisitudes de la batalla, que la traición de sus amigos o el descuido de los médicos en cuyas manos se ponía la suerte de los heridos en campaña.

Visto el hombre a la distancia, como puedo contemplarlo yo ahora y valoradas en su magnitud las condiciones de la lucha política y revolucionaria de su tiempo, podemos dejar sentada esta conclusión: las facciones en que se dividió la Revolución tuvieron un mismo origen: el pueblo; un mismo ideal; la justicia social; una misma meta: transformar el orden social en beneficio de la nación.

Estos principios superiores los identifica y los une por encima de las cuestiones secundarias que en su tiempo los dividieron.

Es también un acto de justicia, en esta ocasión solemne, rendir tributo de admiración a los hombres que, al lado de Francisco Villa, libraron las grandes batallas de la Revolución: Toribio Ortega, Maclovio Herrera, Rosalío Hernández, Trinidad Rodríguez, José Rodríguez, Tomás Urbina, Calixto Contreras, Orestes Pereyra, Severiano Ceniceros, Manuel Chao, José García, Felipe Ángeles, José Isabel Robles, Dionisio Triana, Herón González, Maclovio Sánchez, Martiniano Servín y tantos otros como Raúl Madero, Nicolás Fernández y Ernesto Ríos que sobreviven como testimonio elocuente de la gloriosa división del Norte.

Que estas mis palabras sean el testimonio de la vieja generación revolucionaria, la generación que se va, de satisfacción y reconocimiento por la justicia que esta Cuadragesimosexta Legislatura le ha hecho al hombre que con su violencia abrasadora, pero siempre justiciera, abrió militarmente el camino del triunfo a la Revolución.

La vieja generación de revolucionarios al consagrar el nombre de Villa en el recinto de la Representación Nacional, saluda también en el Presidente Díaz Ordaz a la generación actual que, como estafeta, enarbola la bandera de la Revolución." (Ovación.)

El C. Presidente: Hemos escuchado a don Ricardo Covarrubias, luchador infatigable por las causas sociales de nuestro país, veterano en muchas lides políticas; cuatro veces diputado al Congreso de la Unión y cuya limpia trayectoria constituye el mejor respaldo de sus palabras. (Aplausos.)

Tiene la palabra el señor diputado Tulio Hernández Gómez.

El C. Hernández Gómez, Tulio: Señor Presidente; ciudadanos diputados; ciudadanos senadores; invitados a esta sesión solemne:

"El acto que hoy celebramos refleja el sentimiento del pueblo y su clamor para reivindicar a uno de sus hijos más discutidos, valerosos y grandes. Rendir homenaje a Francisco Villa, es exaltar sin distingos, a todos los hombres que pusieron en marcha a la Revolución de 1910 y ofrecer un firme testimonio de lealtad a las aspiraciones del pueblo mexicano. La Representación Nacional cumple así un acto justiciero que es resultado de la opinión del pueblo, pues tanto en ésta, como en la Cámara de Senadores, hubo un plebiscito de la Nación Mexicana.

Nunca ha sido justo concebir a los héroes como personajes aislados, sin vínculos con un ambiente geográfico, humano e histórico.

El héroe es, siempre, un representativo, un jefe, un guía. Es una expresión condensada, o concentrada, por así decirlo, del genio de un pueblo o de una corriente colectiva.

En la Revolución Mexicana, la figura de Francisco Villa no es la de un solitario, sino la de un aglutinador de voluntades, la de un organizador de guerrillas y de ejércitos, la de un capitán que combatió, no sólo para si mismo, sino para una inmensa multitud de hermanos y compatriotas suyos.

Y porque supo hacer todo eso con intensidad humana y fervor popular excepcionales, colocamos su nombre en estos muros. (Aplausos.)

El culto a los héroes no es vano pasatiempo. Recordar lo pasado, depurarlo, extraerle la savia de sus experiencias, contribuye vigorosamente a enriquecer la vida nueva, la que está brotando en nuestros días, como anticipo presuroso del porvenir.

Apenas cabe imaginar a un pueblo despreocupado de su historia, ya que, según sabemos, aquellos que no la tenían escrita, la simbolizaban en sus monumentos, o se la trasmitían a sí mismo, envuelta en los velos de la leyenda, como una tradición oral.

La historia tiene, por tanto, un propósito vital e inmediato que rebasa con mucho la pura curiosidad de los eruditos, o la fantasía de quienes quisieran convertir el pasado del hombre en una complaciente ficción.

México, pueblo antiguo y nuevo a la vez, tiene que empeñarse en descubrir, reconstruir y profundizar su propia historia, pues en ella encontrará un caudal inagotable de inspiración y de enseñanzas para guiarse por los nuevos caminos de su existencia.

Los miembros de la actual Legislatura Federal no inventamos la exaltación de Villa. Lo que hemos hecho es, nada más, reconocer con entereza, en la plenitud de la justicia histórica, lo que ya el pueblo de México había dictaminado tiempo antes. (Aplausos.)

Hemos traído a los muros de la Cámara de Diputados uno de los nombres que los mexicanos repiten con más apasionada simpatía, con más emoción y con más orgullo. Poco significan, ante un reconocimiento popular de esa magnitud, las disquisiciones que se apartan del curso fundamental de los acontecimientos históricos. Las grandes figuras de la vida de una nación no están a merced de la piqueta de los buscadores de fallas y defectos que siempre acompañan a la naturaleza humana. Villa es grande, más en sus aciertos que en sus yerros y estampamos su nombre en estos muros, no en aras de una historia gazmoña y detallista, sino en cumplimiento de un mandato popular, como representantes que somos del pueblo y de la nación.

Alienta, sobre todo, ver cómo en torno a la memoria de un auténtico caudillo del pueblo, saben guardar una respetuosa actitud los sobrevivientes de las luchas armadas revolucionarias, cualquiera que haya sido la facción o el bando en que militaron. Y que los revolucionarios saben bien que la Revolución Mexicana nunca ha tenido las características de un estrecho movimiento de un sólo partido o de una sola clase, sino que, desde sus inicios y en sus mejores momentos se ha desarrollado como un movimiento de amplitud nacional, en el que han participado, con sus diferentes tendencias, las grandes mayorías populares. De esa diversidad son también exponentes los caudillos de la Revolución -todos ellos- y si se quiere tener un cuadro de conjunto de la historia nacional en este siglo, hay que comprenderla incluyendo las diferencias faccionales o de grupo, en toda su amplitud.

Por ello, porque no es hora de dogmatizar sobre el pasado inmediato, sino de entenderlo en su rica complejidad, es preciso darle a Villa el sitio que

merece junto a sus grandes compañeros de armas, algunos de los cuales también fueron sus contendientes. Es decir: al lado de Madero, de Zapata, de Carranza y Obregón. Otra cosa sería, simplemente, sectarismo antihistórico. (Aplausos.)

El Primer Mandatario de la Nación, ciudadano Gustavo Díaz Ordaz, ha dicho: 'Todos pusieron lo mejor de su ser, todos dejaron valiosa y perdurable huella. Aunque en ocasiones aparecen contradictorios, la distancia de los años nos revela las raíces profundas que los unía al mismo común destino y los hizo irse complementando.' (Aplausos.)

Villa fue dolor acumulado del pueblo. Fue rebelión incontenible contra injusticias y privilegios intransigentes. Fue violencia que abrió nuevos rumbos a la Nación.

Y porque la Revolución Mexicana, hoy mismo, en 1966, no ha olvidado ni quiere olvidar sus orígenes, ni reniega de sus tradiciones, ni ve cerrado el camino de las transformaciones en las que se ha empeñado, por eso, con toda decisión, recuerda y levanta la figura del gran capitán que con sus armas y su voluntad indómita golpeó sin piedad a los ejércitos de la dictadura y de la contrarrevolución.

Porque la Revolución Mexicana no puede ni quiere avergonzarse de su pasado, tampoco desea vivir sólo del pasado. Por el contrario, desea encadenar el pasado, en lo que tiene de vivo y válido, a un presente en que, de acuerdo con las nuevas circunstancias del mundo y de México, debe continuar sin desmayos ni apostasías la gran tarea de construir en esta tierra una patria cada día más libre, respetada y generosa para con su pueblo.

Es verdad, por otra parte, que las luchas históricas de México no han sido ni pueden ser ajenas a las inquietudes de la humanidad ni a las corrientes universales del pensamiento. Pero también es verdad que nuestro país ha venido aportando, hace ya mucho tiempo a la causa del progreso de los pueblos, el sentido claro de su voz, los rasgos singulares de su existencia y los valores genuinos de su cultura.

No es casual por eso que Villa sea, al mismo tiempo que una gran figura nacional, un personaje de carácter universal. ¿Por qué los pueblos del mundo lo conocen, a él que casi no salió del territorio de la Patria? Porque fue apasionadamente fiel a su propia tierra y a su pueblo. Al calar en la tragedia de México, se convirtió también en un prototipo de caudillo popular. (Aplausos.)

Nadie en el mundo de hoy, y menos las nuevas generaciones, puede vivir en su provincia aislada. Los jóvenes aspiramos no sólo a ser patriotas de nuestra nación, sino también buenos ciudadanos del mundo; de un mundo que queremos menos injusto, más generoso, en el que haya paz al amparo de la justicia. Pero toda la buena historia nos enseña que la gran aventura de cualquier hombre, en el arte, en la ciencia, en la política o en la lucha armada misma, tiene que vincularse primordialmente con la tierra donde se nace, que nos comunica el primer aliento y nos puede dar las más altas enseñanzas.

La vida del revolucionario Francisco Villa fue un ejemplo de fusión prodigiosa de su sentido nacional con la dimensión humana de sus cualidades de guerrillero y general de ejércitos del pueblo. Repetimos, él no importó y tampoco exportó revoluciones. (Aplausos.)

Recordar a Villa como lo hacemos, a él que fue un combatiente, es recordar a los hombres y a las hazañas que hicieron posible la estabilidad de que hemos disfrutado. Porque nuestra historia nos enseña que la estabilidad y la paz sólo se lograron con la destrucción de un sistema injusto. Hubo una violencia justiciera que fue indispensable para abrir los caminos de una paz dinámica y fecunda.

La paz que heredamos las nuevas generaciones es un patrimonio vital; debemos fortalecerla para realizarnos plenamente en la justicia y la libertad. Esa paz permite al pueblo mexicano consagrar sus esfuerzos a la lucha por mejorar sus instituciones democráticas, por elevar sus niveles de vida y por consolidar la independencia de la Patria.

Hablamos de una revolución pacífica y creemos en ella, pero no se olvide que este concepto consta de dos palabras y que la práctica, la vida de nuestra sociedad debe ajustarse a ellas en toda la medida de las posibilidades nacionales, es decir, debe ser pacífica, pero no puede dejar de ser revolución.

Para mantener la estabilidad y la paz del país debe fortalecerse el orden revolucionario, deben llevarse adelante, sin desmayos, las reformas administrativas, económicas y políticas que sigan transformando al país, a imagen de la Constitución, es decir, a imagen de la Revolución Mexicana. Nuestra Constitución no es un documento muerto, estático ni formal, y sus preceptos enmarcan y propician todos los esfuerzos del pueblo en favor de su progreso.

Villa y su generación cumplieron con honor su tarea. (Aplausos.)

La tarea de las generaciones de hoy es mantener vigente a la Revolución Mexicana., enriquecer sus postulados, ampliar sus objetivos y depurar los métodos y las prácticas que nos permitan elevar a nuestro pueblo y engrandecer a nuestra Patria.

Fortalecer a la Revolución en la vida real, en la vida diaria, es fortalecer a la Nación.

La unidad de las fuerzas de la Revolución en torno a objetivos precisos de justicia social es la base más sólida para la unidad nacional, que debe abarcar a todos los mexicanos patriotas por encima de diferencias de ideología, de clase o de partido.

Vemos por eso con satisfacción cómo en derredor de un gran luchador, de su memoria, que hoy evocamos, hoy precisamente en que se cumple un aniversario más de una de las batallas más asombrosas y extraordinarias que conquistó con su genio, con su valor y con su esfuerzo, hoy, en el aniversario de la batalla de Tierra Blanca.

Y digo que hoy se unen con respeto representativos de todas las corrientes que actuaron y actúan en el proceso de la Revolución Mexicana. Señalamos además el hecho significativo de que en esta sesión, en que se cumple el acuerdo del Congreso de la Unión respecto de la personalidad histórica de Francisco Villa, los diputados del Partido Acción Nacional han mantenido una actitud respetuosa, congruente con el acatamiento que se debe a las determinaciones legitimas del Poder Legislativo. Ya antes esta Cámara de Diputados ha dado prueba de que es posible la convivencia respetuosa de los mexicanos de Partidos distintos a pesar de sus discrepancias.

Las nuevas generaciones de México recogemos las lecciones de la historia y las experiencias, positivas o negativas, de quienes nos antecedieron. Las

recogemos pensando sobre todo en la necesidad de afrontar con entereza los grandes problemas que todavía aquejan a nuestro pueblo. Las recojemos para seguir trabajando por un México respetado en un mundo de paz.

Con emoción recibimos el legado de quienes como Villa forjaron el triunfo de la Revolución, de quienes contribuyeron a ese triunfo con su pensamiento; de quienes formularon sus principios y sus programas, de quienes los han aplicado y de quienes los llevan adelante adecuándolos a las nuevas condiciones del país y del mundo.

Hoy, al estampar el nombre de Francisco Villa en estos muros, la Revolución Mexicana reafirma su profundo sentido popular." (Ovación.)

III

El C. secretario Gámiz Fernández, Everardo: Antes de terminar esta significativa ceremonia. la Cámara de Diputados de la XLVI Legislatura, rinde homenaje a los siguientes ciudadanos mexicanos: general Eduardo Andalón Pérez (aplausos), general Eulogio Salazar Villegas (aplausos), general Isidro Fragoso Palacios (aplausos), general Juan Barragán (aplausos), general Marciano González (aplausos),coronel Jáuregui, que fue quien se fugó con Villa (aplausos), general Nicolás Fernández, jefe de los Dorados (aplausos), coronel Manuel L. Reyes, presidente de Acción Cívica Mexicanista "Gral. Francisco Villa" (aplausos), Aurora Urzúa, secretaria Particular del Presidente Madero (aplausos), general Eladio Contreras (aplausos), general José Vargas (aplausos), general Raúl Madero (aplausos), don Luis Aguirre Benavides, secretario particular del general Villa, a quien se otorgó la Medalla Altamirano (aplausos), licenciado Adrián Aguirre Benavides, general villista (aplausos), y a todos los soldados de la Revolución Mexicana presentes y ausentes (aplausos).

IV

- El mismo C. Secretario: Se va a dar lectura al acta de la presente sesión solemne.

"Acta de la Sesión solemne, celebrada por la cámara de Diputados del XLVI Congreso de la Unión el día veinticinco de noviembre de mil novecientos sesenta y seis.

Presidencia del C. Luis Dantón Rodríguez.

En la ciudad de México, a las trece horas y cincuenta y cinco minutos del viernes veinticinco de noviembre de mil novecientos sesenta y seis, se abre la sesión solemne, con asistencia de ciento setenta y dos ciudadanos legisladores, misma registrada en la sesión pública que acaba de celebrarse.

La presidencia manifiesta a la Asamblea que el objeto de la sesión es el de dar cumplimiento al decreto aprobado por el H. Congreso de la Unión, que ordena se inscriba con letras de oro, en los muros de la H. Cámara de Diputados, el nombre del general Francisco Villa. A nombre de la propia Cámara de Diputados saluda a los invitados y da instrucciones a la secretaría para que dé lectura al decreto relativo, publicado en el 'Diario Oficial' de la Federación, el día 23 de los corrientes.

A continuación se designa a los CC. diputados Francisco Luna Kan, Braulio Meraz Nevárez, José Martínez Alvídrez, Ma. Guadalupe Urzúa Flores y Everardo Gámiz Fernández, para que acompañen al C. diputado Alfonso Martínez Domínguez, presidente de la Comisión de Gobernación que emitió el dictamen, a develar la inscripción de referencia.

Terminado el acto de develación hacen uso de la palabra, a nombre de la H. Cámara de Senadores, el C. Raúl Bolaños Cacho, y, por la H. Cámara de Diputados, los CC. Ricardo covarrubias Chacón y Tulio Hernández Gómez.

Finalmente, la Representación Nacional de la XLVI Legislatura, haciendo mención de sus nombres, rinde homenaje a los siguientes mexicanos: general Eduardo Andalón Pérez, general Eulogio Salazar Villegas, general Isidoro Fragoso Palacios, general Juan Barragán Rodríguez, general Marciano González Villarreal, coronel Jáuregui, general Nicolás Fernández, coronel Manuel L. Reyes, Aurora Urzúa, general Eladio Contreras, general José Vargas, general Raúl Madero, don Luis Aguirre Benavides, general y licenciado Adrían Aguirre Benavides, y a todos los soldados de la Revolución Mexicana, presentes y ausentes.

A las quince horas y quince minutos se levanta la sesión solemne y se cita a sesión pública para el martes veintinueve del presente, a las once horas."

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba, los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobada.

- El C. Presidente (a las 15:17 horas) : Se levanta la sesión y se cita para el próximo martes 29, a las once horas.

SESIÓN

DE LA

H. CAMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DIA 25

DE NOVIEMBRE DE 1966

SUMARIO

I. Se abre la sesión. Lectura de la Orden del Día. Lectura y aprobación del acta de la sesión anterior.

II. El C. Diputado Juan Moisés Calleja García hace uso de la palabra para referirse a la reciente huelga de los trabajadores de la Compañía Mexicana de Aviación, y termina expresando, a nombre del sector obrero, su reconocimiento al C. Presidente de la República, licenciado Gustavo Díaz Ordaz, por su actitud obrerista y el respeto al derecho de huelga.

III. Invitación de la Dirección General de Acción Social del Departamento del Distrito Federal, a la ceremonia conmemorativa del LV Aniversario de la promulgación del Plan de Ayala, el día 28 del actual, ante la estatua del general Emiliano Zapata, en la Calzada de Tlalpan. se designa comisión.

IV. Invitaciones de las Legislaturas de los Estados de Veracruz y Nayarit a los actos de la lectura de los informes de los respectivos CC. Gobernadores Constitucionales, los días 30 del actual y 1º de diciembre, en Jalapa, Ver. y Tepic, Nay., respectivamente. Se designan comisiones.

V. Invitación de los CC. Gobernadores Constitucionales de los Estados de Tlaxcala, a la lectura del IV Informe de Gobierno, el día 1º de diciembre próximo, y de Querétaro, al L. Aniversario de la instalación del Congreso Constituyente de Querétaro, que se efectuará en aquella ciudad el día 1º del año en curso. se designan las respectivas comisiones.

VI. Primera lectura a dos dictámenes, con proyecto de decreto, que conceden permiso a los CC. Paula Alegría Garza y Sergio Ruiz Garza, para que puedan, respectivamente, aceptar y usar la condecoración que les fue conferida por el Gobierno de Dinamarca, y desempeñar el cargo de Cónsul Honorario de la República del Brasil, en Tampico, Tamps.

VII. Segunda lectura al dictamen, con proyecto de decreto, que concede jubilación al C. Víctor Fuentes Morales, empleado de esta H. Cámara de Diputados. Se reserva para su votación nominal.

VIII. Segunda lectura al dictamen, con proyecto de decreto, que fija la zona exclusiva de pesca de la nación, a iniciativa del C. Presidente de la República. Se aprueba este proyecto y el anterior que fue reservado. Pasan al H. Senado de la República para los efectos constitucionales.

IX. Segunda lectura al dictamen, con proyecto de decreto, que reforma la Ley General de Bienes Nacionales, a iniciativa de los CC. diputados miembros del PAN. En la discusión en lo general hacen uso de la palabra, para hacer consideraciones, los CC. diputados Jorge Garabito Martínez, Augusto Gómez Villanueva, por las Comisiones dictaminadoras y para una aclaración Garabito Martínez. Se aprueba el proyecto de decreto en lo general y en lo particular . Pasa al H. Senado de la República para los efectos constitucionales. Se levanta la sesión pública y se pasa a sesión solemne.

DEBATE

Presidencia del

C. LUIS DANTÓN RODRÍGUEZ

(Asistencia de 172 ciudadanos diputados.)

I

El C. Presidente (a las 12.40 horas): se abre la sesión.

- El C. Secretario Molina Reyes, Guillermo:

"Cámara de Diputados.

Tercer Periodo Ordinario de Sesiones.

Orden del Día.

25 de noviembre de 1966.

Lectura del acta de la sesión anterior.

Invitación de la Dirección de la Dirección General de Acción Social, del Departamento del Distrito Federal a la ceremonia que en conmemoración del L. Aniversario

de la promulgación del Plan de Ayala tendrá efecto el lunes 28 del actual.

Invitación de la Legislatura del Estado Libre y Soberano de Veracruz, a la sesión solemne que tendrá verificativo el día 30 del actual, y en la cual rendirá , el Gobierno de la entidad, el IV Informe de su gestión administrativa.

El C. Julián Gascón Mercado, Gobernador del Estado de Nayarit, invita a esta Cámara al acto que habrá de celebrarse el 1º de diciembre, y en el cual ante el Congreso del Estado, rendirá el Informe de labores correspondiente al III Periodo de su Gobierno.

Invitación del C. Gobernador del Estado de Tlaxcala a la ceremonia en la cual rendirá el Informe de su gestión administrativa, y la cual tendrá verificativo el próximo 1º de diciembre.

Invitación del Gobierno del Estado de Querétaro a la ceremonia con la cual se celebrará en aquella entidad el L. Aniversario de la instalación del Congreso Constituyente de Querétaro el próximo 1º de diciembre.

Dictámenes de primera lectura:

De la Segunda Comisión de Puntos Constitucionales con proyecto de decreto que concede permiso a Paula Alegría Garza para aceptar la condecoración que le confirió el Gobierno de Dinamarca.

De la Comisión del Servicio Consular y Doplomático concediendo permiso a Sergio Ruiz Garza para desempeñar el cargo de Cónsul Honorario de Brasil.

Dictámenes a discusión:

De la segunda Comisión de Hacienda concediendo jubilación a Víctor Fuentes Morales, empleado de esta Cámara.

De las Comisiones Unidas de la Industria y estudios Legislativos el emitido en relación con la iniciativa del Ejecutivo Federal que fija la zona exclusiva de pesca de la nación.

De las Comisiones Unidas de Bienes y Recursos Nacionales y de Estudios Legislativos, con proyecto de decreto que reforma la Ley General de Bienes Nacionales, a iniciativa de los diputados miembros del Partido Acción Nacional."

Acta de la Sesión efectuada por la H. Cámara de Diputados del XLVI Congreso de la Unión, el día veinticuatro de noviembre de mil novecientos sesenta y seis.

Presidencia del C. Luis Dantón Rodríguez.

En la ciudad de México, a las once horas y treinta minutos del jueves veinticuatro de noviembre de mil novecientos sesenta y seis, se abre la sesión con asistencia de ciento cuarenta y seis ciudadanos legisladores, según declara la Secretaría una vez que pasa lista de presente.

Lectura de la Orden del Día.

Con una aclaración del C. diputado Luis G. Olliqui, en votación económica, se aprueba el Acta del a sesión anterior, celebrada el día veintidós de los corrientes.

Se da cuenta con los asuntos en cartera:

La C. Eloísa Angelina Pereyra Sánchez, solicita pensión de gracia por los servicios que prestó a la Revolución su padre, el C. coronel Gabriel Pereyra. Recibo y a la Comisión de la Defensa Nacional en turno.

La Presidencia anuncia la visita que hará a la H. Cámara de Diputados el Excelentísimo Señor Heinrich Lübke, Presidente de la República Federal de Alemania, y designa en comisión, para que le introduzcan al Salón, a los CC. diputados Heberto J: Malo Paulín, Serafín Iglesias, Fabio Espinosa Granados, Tomás Algaba Gómez, Humberto Morales Corrales, Fidelia Sánchez de Mendiburu y Pedro Reyes Velázquez.

Momento después llega el señor Presidente, de la República Federal Alemana y el C. Presidente

Luis Dantón Rodríguez , le da la bienvenida y expresa, a nombre de la Cámara de Diputados, fervientes votos por salud y prosperidad del pueblo alemán.

A continuación el señor Heinrich Lübke dirige un mensaje a la representación nacional.

Para contestar los conceptos del distinguido visitante hace uso de la palabra, a nombre de la H. Cámara de Diputados, el C. Leopoldo González Sáenz, palabras que la intérprete oficial traduce al idioma alemán.

La misma comisión que introdujo al señor Presidente de la República Federal Alemana le acompaña al reiterarse del Salón.

Se continúa con el desahogo de la Orden del Día.

El C. diputado Adolfo Rodríguez Ortiz da lectura a la iniciativa suscrita por varios ciudadanos diputados miembros del Partido Revolucionario Institucional, que tiene por objeto reformar el artículo 300 de la Ley Federal del Trabajo. A las Comisiones Unidas de Trabajo en turno y de Estudios Legislativos e imprímase.

La Segunda Comisión de Hacienda suscribe un dictamen con proyecto de decreto que conduce jubilación voluntaria de mil doscientos quince pesos cincuenta y cinco centavos mensuales, al C. Víctor Fuentes Morales, trabajador de esta H. Cámara de Diputados, por los servicios que durante más de veinticinco años ha prestado al Poder Legislativo. Primera lectura.

Proyecto de Decreto presentado por las Comisiones Unidas de Industria y de Estudios Legislativos, que fija la zona exclusiva de pesca de la nación, a iniciativa del C. Presidente de la República,. Primera lectura.

Dictamen con proyecto de decreto suscrito por las Comisiones Unidas de Bienes y Recursos Nacionales y de Estudios Legislativos, que reforma la Ley General de Bienes Nacionales, a iniciativa de los CC. diputados miembros del Partido Acción Nacional. Primera lectura.

La Comisión del Servicio Consular y Diplomático presenta un dictamen con proyecto de decreto que autoriza al C. Vicente Roque Sedano para que pueda aceptar y desempeñar el cargo de Cónsul Honorario de Noruega, en Veracruz, Ver. Segunda lectura.

A discusión sin que motive debate, se reserva para su votación nominal.

Dictámenes con proyectos de decreto suscritos por las Comisiones Primera y Segunda de Hacienda, en virtud de los cuales se conceden jubilaciones voluntarias por los años de servicios prestados a la Federación a los siguientes empleados del Poder Legislativo: Margarita Mendoza de Márquez, jefe de sección administrativa, dos mil trescientos pesos veintiún centavos, por más de veinte años. Manuela Alanís Parra, Clasificador de la Biblioteca, mil quinientos ochenta y tres pesos setenta y un centavos, por

más de veinticinco año. Emma Gámez Navarro, subjefe de oficina, mil novecientos setenta y ocho pesos cinco centavos, por más de veinte años. Rosendo Salazar Alamo, jefe de sección técnica especializada, tres mil cuarenta y seis pesos ochenta y seis centavos, por más de treinta años, Juvenal Hernández Teruel, taquígrafo especial, dos mil seiscientos treinta y un pesos veinte centavos, por más de veinticinco años; y Carmen Muñoz Olivier Romero, jefe de departamento de Comisiones Permanentes, cuatro mil setecientos trece pesos, por más de treinta años. Segunda lectura.

A discusión, sucesivamente, no habiendo quien haga uso de la palabra, en votación nominal se aprueban estos proyectos de decreto, y el anteriormente reservado, por unanimidad de ciento cuarenta y seis votos. Pasan al Senado para sus efectos constitucionales.

El C. diputado Juan Barragán Rodríguez hace uso de la palabra para proponer que los discursos pronunciados por el Presidente de la República Federal de Alemania y por el C. diputado Leopoldo González Sáenz sean enviados, con atento oficio, al Parlamento de Alemania Occidental.

La Asamblea en votación económica aprueba la proposición.

La presidencia comunica a la Asamblea que el día de mañana se celebrará una sesión solemne para dar cumplimiento con el Decreto aprobado por el H. Congreso de la Unión, en el que se ordena la inscripción del nombre del general Francisco Villa en los muros de la H. Cámara de Diputados, y designa para que, a nombre de la propia Cámara, hagan uso de la palabra en dicha sesión, a los CC. diputados Ricardo Covarrubias Chacón y Tulio Hernández Gómez.

A las trece horas y treinta y cinco minutos se levanta la sesión y se cita para el viernes veinticinco del actual, a las once horas. "

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobado.

II

El C. Calleja García, Juan Moisés: Pido la palabra, señor Presidente, para hechos.

El C. Presidente: Tiene la palabra el señor diputado Calleja García, para los hechos.

El C. Calleja García, Juan Moisés: "Señor presidente, señoras y señores diputados: Abordamos esta tribuna nacional para comentar un suceso que tiene importancia relevante para los trabajadores del país. Hace días, la Compañía Mexicana de Aviación fue afectada por una huelga, declarada por sus servidores de tierra en uso del derecho que les otorga la Constitución del país, en su artículo 123. Sería impropio comentar a ustedes los antecedentes del conflicto: basta para los efectos de esta intervención señalar que la suspensión de labores ocurrió después de que se agotó la función conciliatoria de las autoridades laborales.

Al estallar la huelga hubo la firme creencia de que la empresa sería intervenida para que los servicios de transportación no subsistieran interrumpidos, pues en casos anteriores la reanudación fue posible con la ayuda de los trabajadores, sin desconocer que a pesar de que la huelga formalmente continuaba, de hecho, ella quedó al margen del concepto jurídico y real que la propia Constitución le asigna.

Gustavo Díaz Ordaz, como candidato a la Presidencia de la República y como primer Magistrado de la Nación, a expresado su cabal respeto a la Ley Suprema; en materia obrera, concretamente a dicho que no cesará en el esfuerzo para que cada mexicano tenga acceso al trabajo remunerativo, para que garantizado por nuestra Constitución, conforme a ella, pueda sindicalizarse y ejercer la suprema arma del trabajador que es la huelga.

De este concepto, que en la conformación ideológica revolucionaria del señor Presidente jamás ha sido expresión sin correspondencia; que es en el cual la Autoridad Jurisdiccional Federal del Trabajo tiene su norma y orientación para respetar el derecho de huelga, logrando las más de las veces a través de su función conciliatoria las prestaciones justas para los trabajadores o dejando, frente a la intransigencia o arrogancia patronal, que la suspensión de labores adquiera su cabal plenitud, fue la fuente del criterio para que no se interviniera a la Compañía Mexicana de Aviación y así, la huelga declarada en su contra, adquiriera toda la plenitud que debe tener como instrumento de los trabajadores para alcanzar sus legitimas reivindicaciones.

Y qué mejor juicio de un gobernante que el que pueden realizar los gobernados; qué mejor expresión de soberanía popular que una valoración de esta naturaleza, en la cual, ajenos a todo halago, se concurra ante la representación nacional y a nombre de los trabajadores se diga, enfáticamente, que el Presidente de México cumple con la palabra dada, con la promesa ofrecida; que esta gobernando con la Constitución y conforme a ella; uno de los derechos más preciados para los obreros, es la huelga, se ha cumplido fielmente, en toda su plenitud y con el más amplio respeto.

Por esta razón, quedar callados frente a la actitud presidencial que se ha exteriorizado, significaría falta de reconocimiento a las grandes virtudes ciudadanas del hombre que hoy en día es el guía de México, en donde la clase laboral encuentra delineado su porvenir dentro del claro concepto de la justicia social, que es la entraña misma de la Revolución Mexicana." (Aplausos)

III

- El C. Secretario. Molina Reyes, Guillermo:

"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos .- Poder Ejecutivo Federal .- México, D. F .- Departamento del Distrito Federal.

Al C. diputado Luis Dantón Rodríguez, presidente la H. Cámara de Diputados. Allende y Donceles.- presente.

La Dirección General de Acción Social, del Departamento del Distrito Federal, invita a usted a la Guardia de Honor que tendrá lugar el lunes 28 del actual, a las 11 horas, con motivo de la conmemoración del LV Aniversario de la Promulgación del Plan de Ayala, que precisó ideológicamente el Movimiento Agrario de México, acaudillado por el general de división Emiliano Zapata. Se llevará a cabo

bajo la estatua que lo evoca en la Glorieta de Huipulco, Calzada de Tlalpan, de esta capital.

Además de reiterar a usted nuestra atenta súplica para contar con su presencia en este acto me permito rogarle tenga a bien dictar sus respetables instrucciones a quien corresponda con objeto de que una comisión que represente a esa H. Cámara de Diputados, asista a la Guardia de referencia y haga el deposito de una ofrenda floral.

Reitero a usted mi atenta y distinguida consideración.

Sufragio Efectivo. No Reelección .- El Director General, licenciado Jesús Salazar Toledano."

Se designa en comisión a los siguientes CC. diputados. Juan Moisés Calleja García, Hilda Anderson Nevárez y Everardo Gámiz Fernández.

IV

- El mismo C. Secretario:

"Escudo Nacional .- Estados Unidos Mexicanos .- Poder Legislativo .- Estado Libre y Soberano de Veracruz. Llave.

La Honorable Cuadragesimoséptima Legislatura del Estado Libre y Soberano de Veracruz .- Llave, se complace en invitar a usted a la Sesión Solemne que se efectuará el próximo día 30 del mes en curso a las 11 horas en el Teatro del Estado de esta ciudad, declarado Recinto Oficial, y en la que el ciudadano licenciado Fernando López Arias, Gobernador Constitucional del Estado dará lectura a su cuarto Informe Administrativo.

Jalapa, Ver., noviembre de 1966."

Se designa en comisión a los siguientes diputados: Braulio Meraz Nevárez. Ángel Lagarda Palomares, Celia Gallardo González, Hilda Anderson Nevárez, María Guadalupe Urzúa Flores, Jorge Huerta Pérez, Luis H. Ducoing, Domingo García López, Alberto Alvarado Arámburu Carlos Pérez Cámara, Manuel Gurría Ordóñez y la diputación de Veracruz.

"Escudo Nacional .- Estados Unidos Mexicanos .- Poder Legislativo .- Estado de Nayarit.

La H. XLV Legislatura del Estado Libre y Soberano de Nayarit, se honra en invitar a usted (es) a la Sesión Solemne que celebrará el día 1º. de diciembre próximo a las 11 horas en el Teatro Cine "Amado Nervo", declarado Recinto Oficial y en la que el C. Dr. Julián Gascón Mercado gobernador Constitucional de la Entidad, rendirá el Informe correspondiente al Tercer Año de su Gestión Administrativa.

Atentamente.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

Tepic, Nay., noviembre de 1966 .- Alejandro López Díaz, D. P .- J. Ramón Lomelí Belloso, P. S. Manuel Gradilla Muñoz, S. S."

Se designa en comisión, en representación de esta Cámara a los siguientes diputados: Domingo Franco Sánchez, Francisco Luna Kan, Eugenio Cárdenas Andrade y Marina Núñez Guzmán.

V

- El mismo C. Secretario:

"Noviembre 12 de 1966.

C. Dip. Lic. Luis Dantón Rodríguez, Presidente de la H. Cámara de Diputados. - Presente.

En forma atenta me permito informar a usted que el próximo 1º. de diciembre, a las 11 horas, en el Teatro Xicoténcatl de esta Ciudad, rendiré a pueblo de Tlaxcala mi IV Informe de Gobierno a través de la XLV Legislatura Local.

Será un honor muy significativo para el pueblo de Tlaxcala y para su servidor contar con su amable presencia, por lo que me permito formular a usted cordial invitación para que nos acompañe en el acto mencionado.

Por la atención que se sirva dispensar a esta atenta invitación y en espera que nos confirme su asistencia le anticipo mis agradecimientos más cumplidos y me reitero como su amigo y servidor, licenciado Anselmo Cervantes H."

Se designa en comisión para asistir en representación de esta Cámara, a los siguientes diputados: Serafín Iglesias, Raúl Alvarez Gutiérrez, Tulio Hernández Gómez y Luis Granillo Astorga.

"Querétaro, Qro., 23 de noviembre de 1966.

C. Dip. Luis Dantón Rodríguez, Presidente de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, México, D. F.

Por su digno conducto, el gobierno del Estado se permite invitar a los miembros de la H. Cámara de Diputados para que asista a la Ceremonia que se celebrará el L Aniversario del la Instalación del Congreso Constituyente de Querétaro, ceremonia que tendrá verificativo en el Teatro de la República de esta ciudad, a las 12.00 horas del día 1º. de diciembre próximo y que será presidida por el señor Lic. Luis Echeverría, Secretario de Gobernación y representante del señor Presidente de la República.

Agradezco de antemano la atención que esa H. Cámara tenga a bien dispensar a esta invitación y me es grato protestar a usted las seguridades de mi distinguida consideración.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

El Gobernador Constitucional, ingeniero Manuel González Cosío. - El Secretario de Gobernación licenciado José Arana Morán."

Se designa en comisión para asistir en representación de esta Cámara, a los siguientes diputados: Vicente Fuentes Díaz, Fabio Espinosa Granados, Arturo Domínguez Paulín y Arturo Guerrero Ortiz.

VI

- El mismo C. Secretario:

"Segunda Comisión de Puntos Constitucionales.

Honorable Asamblea:

En oficio fechado el 17 del presente, la Secretaría de Gobernación transcribe otro de Relaciones Exteriores por el que se solicita el permiso constitucional necesario para que la C. Paula Alegría Garza, Embajadora de México, pueda aceptar y usar la Condecoración de la Orden de Dannebrog, que en el grado de Gran Cruz le confirió el Gobierno de Dinamarca.

En sesión efectuada por esta Cámara el día 22 de los corrientes, fue turnado a la Comisión que se suscribe para su dictamen, el expediente relativo a esta solicitud.

En virtud de que la solicitante se ajusta a lo establecido por el artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en su fracción III del apartado B) y, condicionado este permiso a que el hecho de aceptar la condecoración que se le confiere, no amerita para la ciudadana mexicana peticionaria, sujeción de ninguna especie al gobierno otorgante, nos permitimos someter a la consideración de esta Honorable Asamblea, el siguiente proyecto de decreto:

Artículo Único. Se concede permiso a la C. Paula Alegría Garza, Embajadora de México, para que, sin perder la ciudadanía mexicana, pueda usar y aceptar la Condecoración de la Orden de Dannebrog, que en el grado de Gran Cruz le confirió el Gobierno de Dinamarca.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 24 de noviembre de 1966. - Manuel Zárate Aquino. - Vicente Lombardo Toledano. - Fluvio Vista Altamirano. - Miguel Osorio Marbán."

Trámite: Primera lectura.

"Comisión del Servicio Consular y Diplomático.

Honorable Asamblea:

El C. Sergio Garza, en escrito fechado el 4 de octubre próximo pasado, solicita el permiso constitucional necesario para aceptar y desempeñar el cargo de cónsul honorario del Brasil en el Puerto de Tampico, Tamps.

Esta Cámara de Diputados, en sesión celebrada el 22 del actual acordó turnar en la suscrita Comisión del Servicio Consular y Diplomática para su estudio y dictamen el expediente relativo a dicha solicitud.

Considerando que el peticionario satisface el requisito que exige la fracción II del apartado B) del artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, esta Comisión se permite someter al ilustrado criterio de vuestra soberanía, el siguiente proyecto de decreto:

Artículo Único. Se concede permiso al C. Sergio Ruiz Garza para que, sin perder la ciudadanía mexicana pueda aceptar y desempeñar el cargo de cónsul honorario del Brasil en el Puerto de Tampico, Tamps.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 24 de noviembre de 1966. - Martha Andrade de Del Rosal. - Miguel Estrada Iturbide. - Domingo Camarena López. - José Muro Saldívar. - Fabio Espinosa Granados. - Augusto Gómez Villanueva."

Trámite; Primera lectura

VII

- El C. secretario Gámiz Fernández, Everardo:

"Segunda Comisión de Hacienda.

Honorable Asamblea:

Para su estudio y dictamen fue turnado, a la Segunda Comisión de Hacienda que suscribe la solicitud presentada por el C. Víctor Fuentes Morales, maestro carpintero en la Contaduría Mayor de Hacienda, de la H. Cámara de Diputados para que se le conceda jubilación voluntaria por servicios prestados al Poder Legislativo durante más de 25 años.

El solicitante funda su petición en lo que dispone el artículo 4º transitorio del decreto que incorpora a los Funcionarios y Empleados del Poder Legislativo Federal al régimen de la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores al Servicio del Estado, presentando los siguientes documentos.

1. Certificación del C. Oficial Mayor de la Cámara de diputados, en la que consta que presta sus servicios en esta dependencia, desde el 1º de enero de 1941 hasta la fecha.

2. Certificación del director general de Administración, en la que consta que actualmente devenga un sueldo mensual de $2,723.32 (dos mil setecientos veintitrés pesos 32/100), como maestro carpintero de la Contaduría Mayor de Hacienda, de la Cámara de Diputados.

Por lo anteriormente expuesto, la comisión que suscribe estima que el interesado cumple con todos los requisitos que exige el artículo 3º fracción II de la Ley de Jubilaciones para los Funcionarios y Empleados del Poder Legislativo y 4º transitorio del decreto que abrogó la primeramente mencionada y se permite someter a la consideración de esa H. Asamblea, el siguiente Proyecto de Decreto:

Artículo Único. De conformidad con lo que dispone el artículo 4º transitorio del decreto que incorpora a los Funcionarios del Poder Legislativo Federal al régimen de la Ley del Instituto de Seguridad y de Servicios Sociales de los Trabajadores al Servicio del Estado, se concede al C. Víctor Fuentes Morales, maestro carpintero en la Contaduría Mayor de Hacienda, de la H. Cámara de Diputados, jubilación voluntaria de $1,815.55 (mil ochocientos quince pesos 55/100) mensuales, equivalente a las dos terceras partes del sueldo y compensaciones que actualmente disfruta, por servicios que durante más de 25 años ha prestado al Poder Legislativo. Esta jubilación le será pagada íntegramente por la Tesorería General de la Federación como lo dispone el propio artículo 4º.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión .- México, D. F., a 23 de noviembre de 1966 .- Enrique Bautista Adame .- Humberto Velasco Avilés .- Arturo López Portillo .- Alejandro Carrillo .- Ramón Zentella Asencio."

Segunda lectura. Esta a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra se reserva para su votación nominal.

VIII

- El mismo C. Secretario:

"Comisiones Unidas de Industria y de Estudios Legislativos.

Honorable Asamblea:

A las comisiones que suscribe fue turnado, para su estudio y dictamen, la iniciativa del Ejecutivo de la Unión para dictar una ley que fije la zona exclusiva de pesca de la nación.

El proyecto relativo contiene las siguientes normas:

1. Fija la jurisdicción exclusiva de México para fines de pesca en una zona de doce millas marinas (22,224 metros).

2. Determina que el régimen legal para la explotación de los recursos del mar, aplicable en dicha zona será el mismo que rige dentro del mar territorial.

3. Precisa que estas disposiciones no modifican en forma alguna las que fijan actualmente la anchura del mar territorial.

4. Crea un régimen especial, transitorio, para quienes tradicionalmente han explotado recursos vivos del mar dentro de las tres primeras millas exteriores al mar territorial, con las siguientes modalidades:

a) Durante un año (en caso de aprobarse la Ley sería el de 1967) podrán continuar dicha explotación sin condiciones especiales.

b) Durante los cinco años siguientes (1968 a 1972) sólo podrán hacerlo sujetándose a las condiciones y términos que establezca el Ejecutivo Federal.

c) A partir de 1973 la zona de doce millas, sería exclusiva de México, para fines de pesca.

Después de analizar cuidadosamente las normas y fundamentos de la iniciativa, estas comisiones han llegado a las siguientes conclusiones:

1. La fijación de una zona exclusiva de pesca es una medida necesaria para la adecuada protección y mejor aprovechamiento de los recursos vivos del mar. En efecto, como lo señala la iniciativa, dichos recursos, por abundantes que sean, no son inagotables y su explotación irracional los expone al peligro de ser dañados y exterminados. Así pues, la conservación de esta riqueza que, en el caso de México tiene la mayor importancia considerando que sus litorales tienen una extensión aproximada de 10,000 kilómetros, implica la necesidad ineludible de establecer restricciones a la libertad internacional de pesca. De este modo, la nación, por medio de reglamentación y vigilancia correspondientes, garantizará la conveniente conservación y el incremento de su riqueza pesquera, reservándolo para sí en forma exclusiva.

2. La anchura de doce millas es la máxima que se puede fijar, de acuerdo con las normas y prácticas internacionales. Sin embargo esa extensión asegura para México los recursos marítimos en una área de más de 51,000 kilómetros cuadrados. Cabe aclarar que la anchura señalada, incluye, desde luego, el mar territorial.

3. Esta ley, en caso de ser aprobada, sería concordante con el derecho internacional vigente, por lo que tendría plena eficacia jurídica y práctica. Como es sabido, de acuerdo con el artículo 38 del Estatuto de la Corte Internacional de Justicia (1, inciso B) la principal fuente del Derecho Internacional, después de los tratados, es la costumbre, originada en las prácticas generalmente aceptadas. Ahora bien, en la segunda Conferencia de las Naciones Unidas sobre el derecho del mar, celebrada en 1960, se manifestó un consenso unánime acerca del derecho de los Estados a fijar una zona exclusiva de pesca hasta doce millas y, posteriormente, numerosos países han concertado tratados o dictado leyes, haciendo efectivo ese derecho. Entre los primeros, merece citarse la Convención Europea sobre Pesquerías. concertada en Londres en 1963 y 1964, y respecto a los segundos, es muy ilustrativo el caso reciente de los Estados Unidos de Norteamérica.

4. La norma que dispone que el régimen legal aplicable para la pesca en la zona exclusiva debe ser el mismo que rige dentro del mar territorial, es congruente con el principio admitido durante el evento internacional citado. Así aparece de los términos empleados en las propuestas relativas, que expresaban que el Estado ribereño debe tener "los mismos derechos de pesca y explotación de los recursos vivos del mar, que en su mar territorial".

5. La prevención referente a que las disposiciones sobre zona exclusiva de pesca en nada modifican las establecidas en materia del mar territorial, es a todas luces pertinente, a efecto de evitar confusiones. En realidad, la regulación legal de cada una de estas figuras jurídicas debe hacerse separadamente, ya que el derecho a una zona de jurisdicción exclusiva para fines de pesca es solo un elemento de la Soberanía que se ejerce sobre el mar territorial; dicha Soberanía involucra a aquél derecho, pero éste puede ejercer de manera autónoma cuando su ámbito de aplicación tenga, como en el caso, una extensión mayor que la del mar territorial. Por lo demás, como se afirma con toda precisión en la iniciativa del Ejecutivo Federal, el establecimiento de esta zona en ninguna forma menoscaba el derecho de México para legislar, en lo futuro, sobre otros aspectos del dominio marítimo de la nación.

6. Respecto del régimen especial para quienes han venido explotando los recursos vivos dentro de la zona que ahora se declara exclusiva de México y cuya actividad ha sido tradicionalmente consentida, cabe subrayar que, siendo una modalidad necesaria, tendrá una aplicación temporal limitada. Su finalidad es evitar conflictos, reclamaciones y litigios que pudieran entorpecer la plena vigencia de la Ley.

Por lo expuesto, estas Comisiones se permiten someter a la consideración de la Honorable Asamblea el siguiente proyecto de ley sobre la Zona Exclusiva de Pesca de la nación.

Artículo 1º Los Estados Unidos Mexicanos fijan su jurisdicción exclusiva para fines de pesca en una zona cuya anchura es de doce millas marinas (22,224 metros) contadas a partir de la línea de base desde la cual se mide la anchura del mar territorial.

Artículo 2º El régimen legal de la explotación de los recursos vivos del mar, dentro del mar territorial, se extiende a toda la zona de pesca exclusiva de la nación a que se refiere el artículo anterior.

artículo 3º Nada de lo dispuesto en la presente Ley modifica en forma alguna las disposiciones legales que fijan la anchura del mar territorial.

Transitorios.

Primero. Esta Ley entrará en vigor quince días después de su publicación en el 'Diario Oficial' de la Federación.

Segundo. Se derogan las disposiciones anteriores en lo que se oponga a esta Ley.

Tercero. El Ejecutivo Federal fijará las condiciones y términos en que se podrá autorizar a los nacionales de países que hayan explotado tradicionalmente recursos vivos del mar; dentro de la zona de tres millas marinas exterior al mar territorial a que continúen sus actividades durante un plazo que no excederá de cinco años, contados a partir del 1º de enero de 1968. Durante 1967, los nacionales de tales países podrán continuar dichas actividades sin ninguna condición especial.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión .- México, D. F., a 24 de noviembre de 1966 .- Comisión de Industrias:

Jorge Avila Blancas .- Guillermo Morales Blumenkron .- Rosendo Taracena Alpuín .- José Chiquillo Juárez .- J. Jesús Orta Guerrero .- Estudios Legislativos Sección Asuntos Generales: Francisco Luna Kan .- Fernando González Piñón .- Raúl Alvarez Gutiérrez .- Gonzalo Pastrana Castro .- José Rodríguez Alvarez .- José Torres Márquez."

Esta a discusión el proyecto de decreto en lo general. No habiendo quien haga uso de la palabra se reserva para su votación nominal.

Está a discusión el proyecto de decreto en lo particular. No habiendo quien haga uso de la palabra, se va a proceder a recoger la votación nominal en ambos sentidos, de ese decreto y del antes reservado. Por la afirmativa.

El C. secretario Calleja García, Juan Moisés: Por la negativa.

(Votación.)

El C. secretario Gámiz Fernández, Everardo: ¿Falta algún ciudadano diputado de votar por la afirmativa?

El C. secretario Calleja García, Juan Moisés: Falta algún ciudadano diputado de votar por la negativa?

Se va a proceder a recoger la votación de la Mesa.

(Votación.)

El C. secretario Gámiz Fernández Everardo: Fueron aprobados los proyectos de decreto por unanimidad de 172 votos. Pasan al Senado para sus efectos constitucionales.

IX

- El C. secretario Molina Reyes, Guillermo:

"Comisiones Unidas de Bienes y Recursos Nacionales y Estudios Legislativos.

Honorable Asamblea:

A las Comisiones que suscriben fue turnada la iniciativa presentada por los diputados miembros del Partido Acción Nacional, para reformar el artículo 17 de la ley General de Bienes Nacionales, la cual contiene dos proposiciones:

a) Ampliar doce millas náuticas la extensión del mar territorial.

b) Introducir en dicho precepto, las reglas aprobadas en la Convención sobre el mar territorial y zona contigua que adoptan el sistema de líneas de base rectas para medir la anchura del mar territorial.

Respecto del primer asunto, los autores de la iniciativa reproducen los argumentos que tradicionalmente han sostenido los representantes de México en reuniones internacionales con el propósito de obtener reconocimiento al derecho de los Estados a fijar la extensión de su mar territorial hasta un límite máximo de doce millas.

Hacen importantes consideraciones en relación con las Convenciones suscritas en la primera Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar.

Agregan que, México debe establecer en su derecho interno la norma que consagre su dominio sobre esa extensión de doce millas, a fin de estar en condiciones de proteger sus recursos pesqueros.

Estas Comisiones consideran que la tesis mexicana sobre la anchura del mar territorial es la correcta, aunque reconocen que este asunto ha sido muy controvertido, a tal punto que en las dos Conferencias de las Naciones Unidas celebradas en Ginebra los años 1958 y 1960, ninguna de las propuestas presentadas llegó a obtener la mayoría necesaria para erigirse en norma escrita de Derecho Internacional.

México ha sostenido que existe una norma de carácter consuetudinario y de contenido variable, conforme a la cual los Estados pueden fijar la extensión de su mar territorialmente tres millas como mínimo y doce millas como máximo. La iniciativa que nos ocupa es, pues, congruente con la tesis tradicional de México.

Sin embargo, en un asunto tan complejo conviene examinar no sólo la validez del derecho que se invoca, sino la oportunidad en que se trata de hacerlo efectivo y las consecuencias que ello tendría en el campo de la realidad.

En la actualidad, el artículo 17 de la Ley General de Bienes Nacionales fija la extensión del mar territorial en nueve millas marinas, que es, según la mayoría de los antecedentes invocados por los mismos autores de la iniciativa, la anchura que señala nuestra tradición histórica.

El mismo precepto y el artículo 24 de la Convención sobre el Mar Territorial y Zona Contigua, consigna el derecho del Estado Mexicano a tomar, en una área de tres millas adyacentes al mar territorial, medidas de fiscalización para evitar infracciones a sus leyes de policía aduanera, fiscal, de inmigración y sanitaria.

El derecho de México a declarar una zona de doce millas bajo su jurisdicción exclusiva para fines de pesca, en opinión de las Comisiones puede tener eficacia práctica inmediata y ya está planteada esta cuestión en diversas provenientes del Ejecutivo de la Unión.

Por todo ello, es conveniente meditar si una declaración sobre mar territorial, extendiéndolo hasta doce millas, lejos de propiciar el eficaz ejercicio de los derechos de la nación, pueda llegar a obstaculizar otros avances que, dadas las circunstancias prevalecientes en el ámbito internacional, son los aconsejables.

Así pues, estas Comisiones reconocen que los fines que persigue la iniciativa que nos ocupa son del todo plausibles, las Comisiones declaran su absoluta solidaridad con la posición que México ha venido adoptando en torno a la cuestión del mar territorial en las diversas reuniones y conferencias celebradas hasta la fecha: sostienen que nuestro país debe seguir luchando en los foros internacionales por hacer prevalecer su tesis en esta materia, que es la justa; hacer notar que existe, departe de los países de América Latina, coincidencia substancial con la posición de México, según se evidenció por la declaración que produjo el Consejo Interamericano de Jurisconsultos en julio de 1965; pero, por razones de oportunidad, consideran que, por el momento, no es el caso de modificar nuestra legislación sobre el particular.

En relación con la segunda proposición contenida en esta iniciativa, estas Comisiones opinan que está plenamente justificada. En efecto, como lo afirman los proponentes, la Primera Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, reunida en Ginebra el año de 1958, aprobó la Convención sobre el Mar Territorial y Zona contigua, la cual fue aprobada por la Cámara de Senadores del Congreso de los Estados Unidos Mexicanos el 17 de diciembre de 1965.

En consecuencia, las normas que tienen sus artículos tercero y cuarto, sobre el sistema de líneas de base rectas para medir la anchura del mar territorial, son para México derecho positivo, atento a lo dispuesto en el artículo 133 de la Constitución de la República.

Por tanto, incorporar dichas normas al artículo 17 de la Ley General de Bienes Nacionales, es actualizar este precepto, Así pues, las Comisiones están conformes con esta parte de la iniciativa.

En virtud de lo expuesto, estas Comisiones se permiten someter a la consideración de esta Honorable Asamblea el siguiente proyecto de decreto:

Artículo primero. Se adiciona la fracción II del artículo 17. de la Ley General de Bienes Nacionales, para quedar como sigue:

Artículo 17. Son bienes de uso común:

I...................................................................

II. El mar territorial. Este comprende las aguas marginales hasta la distancia de nueve millas marinas (16.688 metros), contadas de línea de la marea más baja en la costa firme, en las riberas de las islas que forman parte del territorio nacional, en los esteros que se comunican con el mar permanente o intermitente y en los ríos que desembocan en el mar.

En los lugares en que la costa tenga profundas aberturas y escotaduras o en las que haya una franja de islas a lo largo de la misma, situadas en su proximidad inmediata, se tomará como base la línea recta trazada desde sus puntos más adentrados en el mar. Estas líneas se trazarán hacia las elevaciones que emerjan en bajamar, cuando sobre ellas existan faros o instalaciones que permanezcan constantemente sobre el nivel del agua, o cuando tales elevaciones estén total o parcialmente a una distancia de la costa firme o de una isla, que no exceda de la anchura del mar territorial. Las instalaciones permanentes más adentradas en el mar que forman parte íntegramente del sistema portuario, se consideran como parte de la costa para los efectos de la delimitación del mar territorial.

En la aguas adyacentes al mar territorial, hasta la distancia que fijen las leyes especiales, la Federación podrá tomar las medidas de policía o para su defensa que estime oportunas.

Artículo segundo. Se reforma la fracción III del artículo 17 de la Ley General de Bienes Nacionales, para quedar como sigue:

III. Las aguas interiores o sea aquellas situadas en el interior de la línea de base del mar territorial. Quedan comprendidas, dentro de las interiores, las bahías y escotaduras cuyos puntos naturales de entrada no excedan de veinticuatro millas en bajamar, desde los cuales se trazará la línea recta que sirva de base normal para medir la anchura del mar territorial. Cuando la distancia entre las líneas de bajamar de los puntos naturales de entrada de una bahía, exceda de veinticuatro millas, se trazará dentro de la bahía una línea de base recta de veinticuatro millas, de manera que encierre la mayor superficie de agua que sea posible.

Artículo Tercero. Las actuales fracciones III y siguientes del artículo 17 de la Ley General de Bienes Nacionales quedan en vigor con los números IV a XIV inclusive.

Transitorio:

Primero. Estas reformas entrarán en vigor el día de su publicación en el "Diario Oficial".

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.

México, D. F., a 24 de noviembre de 1966 .- Comisiones Unidas de Bienes y Recursos Nacionales:

Raúl Padilla Gutiérrez .- Antonio Vázquez Pérez .- Joaquín Salgado Medrano .- Jorge de la Vega Domínguez - Gonzalo Martínez Corbalá. - José Dolores García Aguilar .- Estudios Legislativos Sección Asuntos Generales: Francisco Luna Kan .- Fernando González Piñón .- Raúl Alvarez Gutiérrez .- Gonzalo Pastrana Castro .- José Rodríguez Alvarez .- Jesús Torres Márquez."

Segunda lectura. Está a discusión en lo general.

- El C. Presidente se abre el registro de oradores.

El C. Garabito Martínez , Jorge: Pido la palabra, señor Presidente.

El C. Presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Jorge Garabito.

El C. Garabito Martínez, Jorge: Señor Presidente, señoras y señores diputados: Hace unos momentos fue aprobada por esta Cámara la Ley relativa a la zona de pesca. Son tan evidentes los fundamentos de esa ley, que guardamos la íntima convicción que será aprobada por el Senado y promulgada por el Ejecutivo de manera tal que ya podemos hablar de nuestra zona de pesca. Intimamente relacionado con este asunto se encuentra el dictamen que ha sido puesto a la consideración de ustedes en relación con el mar territorial, mediante la iniciativa que pusimos los diputados de Acción Nacional.

Nos ha causado profunda satisfacción el que las Comisiones que consideraron nuestra iniciativa hayan aceptado en su integridad los fundamentos que nosotros esgrimimos y que sólo por consideraciones de oportunidad no se acepte la primera parte de nuestra proposición o sea lo relativo a la anchura del mar territorial, y así se acepte, en cambio, en su totalidad, con las modificaciones que nosotros gustosamente aceptamos, relativa a la forma de medir la anchura del mar territorial. Discutimos ampliamente en las Comisiones nuestra proposición y hemos aceptado, para aprobarlo, el dictamen que ha sido presentado en estos momentos. Quiero, sin embargo, hacer muy breves consideraciones sobre las razones que nos indujeron a aceptar el dictamen, no obstante las modificaciones que se introducen a nuestra proposición.

Tanto en el proyecto del Ejecutivo sobre la zona de pesca como en las consideraciones del dictamen, se habla como una de las razones que fundan la consideración de oportunidad para no modificar en estos momentos la anchura del mar territorial, el que la proposición de México en las convenciones internacionales para que se admita en un tratado internacional la anchura de 12 millas marinas para el mar territorial ha sido rechazada en repetidas ocasiones, no debe entenderse como condición para que México pueda ampliar su mar territorial el de que esta proposición de México sea aceptada en un tratado internacional. La interpretación jurídica de esta proposición debe entenderse muy claramente a la luz del Derecho Internacional. En el Derecho Internacional cada vez tiene menos importancia la discusión entre el Derecho natural y el Derecho positivo. A partir de Victoria se ha estimado como procedente la doctrina del Derecho de Gentes; el Derecho Internacional es el Derecho de Gentes, el Derecho Aceptado, un aspecto totalmente nuevo hasta antes de Victoria. Esta

doctrina de Victoria fue aceptada por Francisco Suárez y, posteriormente, por Hugo Grocio, que son los internacionalistas de mayor fama en México. Incluso Kelsen, el autor de Derecho de más renombre que sostiene el derecho positivo, al hablar del Derecho Internacional, establece, como lo mencionan las Comisiones, que el Derecho Internacional se funda, en primer lugar, en los tratados; en segundo lugar, en las costumbres; y en tercer lugar, los principios generales de Derecho; y en cuarto lugar, la jurisprudencia, o sean las decisiones de las cortes internacionales.

En consecuencia, el Derecho Internacional es, por una parte, Derecho Escrito y, por otra parte, Derecho Consuetudinario. Por lo que respecta a la anchura del mar territorial, el incidente Panamá - Estados Unidos nos habla muy claramente de cuál es el alcance de esto. En 1958 se celebró en Ginebra la primera convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho Mar. A fines de 1958 las Naciones Unidas convocaron para una segunda conferencia sobre el Derecho del Mar. Posteriormente, en diciembre de 1958, Panamá modificó la anchura de su mar territorial a 12 millas marinas. Los Estados Unidos protestaron y se dirigieron a Panamá, diciéndole: "No tienes derecho a ampliar la zona de tu mar territorial y tienes que esperarte a que se celebre una segunda conferencia sobre este asunto a ver si nos ponemos de acuerdo. Y por lo que respecta a la anchura de tu mar territorial me reservo los derechos que pueda tener sobre la zona que tú ampliaste". Ante esta situación Panamá contesto, diciendo: "No tengo por qué esperar una convención internacional y de acuerdo con el Derecho Internacional puedo ampliar la zona de mi mar territorial y no creo que los Estados Unidos tengan ningún derecho que reservarse sobre la zona del mar territorial que Panamá está ampliando, y si los Estados Unidos pretenden apoyarse en razón de fuerzas, Panamá se apoya en el Derecho Internacional y en los tribunales internacionales". Esto sucedió en el mes de enero de 1959 y pocos días después México se produjo definitiva y claramente en favor de Panamá en un comunicado que, sin mencionar el caso, dijo textual y claramente: "Existe una norma de Derecho Consuetudinario que permite a las naciones ribereñas modificar la anchura de su mar territorial dentro de los límites de 3 a 12 millas". En consecuencia, Panamá estaba en lo justo.

La posición de México es muy importante. México ha asumido un papel muy brillante en materia de Derecho Internacional y concretamente en materia de Derecho del Mar. El derecho del Mar actualmente tiene como fundamentos lo que en los círculos diplomáticos y jurídicos se conoce como los principios de México sobre el Derecho del Mar. Estos principios de México son fundamentalmente dos: primero, la vieja doctrina de las 3 millas carece de validez actual; segundo, los Estados ribereños son los únicos autorizados para fijar la extensión de su mar territorial dentro de límites razonables.

México desde un principio, rechazó la validez pretendida de la doctrina de las 3 millas. Durante el siglo pasado y la primera parte del presente, cuando estaba en todo su apogeo la susodicha doctrina de las 3 millas, México celebró 13 tratados internacionales en los que las potencias extranjeras reconocían a México medidas muy superiores a las 3 millas. En 6 de estos tratados se reconocía a - México 9 millas marinas, o sean 16,668 metros. En los otros 6 tratados se reconocía a México 20 kilómetros, o sean 20 mil metros, algo menos de 11 millas marinas.

En Ginebra, en 1958, encabezadas por México, un gran número de naciones pretendía que se reconociera un límite razonable a la anchura del mar territorial. En los extremos estaban, por un lado, las grandes potencias marítimas que se negaban a reconocer una anchura superior a 3 millas. En otro lado se encontraba un grupo de países latinoamericanos que exigían una extensión de 200 millas marinas. México pretendía hacer ver a las grandes potencias que las 3 millas ya no eran prácticas, eran obsoletas, que no tenían validez ninguna. Al mismo tiempo, pretendía hacer ver a los países latinoamericanos que pusieran los pies sobre la tierra en la actualidad, que 200 millas marinas, como soberanía del mar, era algo ilusorio que no iba a poder tener éxito. La posición de México era muy firme.

Ciertamente, fue rechazada la proposición, presentada por México, para que se reconociera el límite de 12 millas, pero lo que México pretendía era cambiar una norma de Derecho Consuetudinario a una norma de derecho escrito.

Estados Unidos presentó una proposición que más o menos se contenía en los siguientes términos: Que no se modifique la anchura del mar territorial, que se amplíe un poco la zona de pesca; pero que a los países que han venido pescando en las zonas de pesca de los países ribereños se les reconozca por tiempo indefinido sus derechos a seguir pescando.

Esta proposición de los Estados Unidos fue motivo de críticas muy severas, por parte del representante de México; el hecho de que ahora en nuestro Derecho Interno, y a proposición del Ejecutivo, estemos aprobando no modificar la zona de nuestro mar territorial, ampliar la zona de pesca y reconocer a los países que han venido efectuando pesca en esa zona, no por tiempo indefinido, sino por tiempo perfectamente definido, y de acuerdo con las limitaciones que se van a imponer, significa evidentemente una generosa concesión de México hacia la posición de los Estados Unidos.

Por otra parte, México ha venido trabajando en el ámbito internacional con los países latinoamericanos, para celebrar un convenio regional en estos mismos términos.

La posición de México, es, pues, muy generosa, significa un gesto de amistad y de buena voluntad que esperamos sea conveniente, así lo entenderemos nosotros y por esta razón no insistimos en nuestra proposición inicial de que en este momento se amplíe en el mar territorial. Concedemos que es una cosa de oportunidad y que el Ejecutivo tiene más datos que nosotros para determinar esa oportunidad.

Esperamos, y deseamos que pronto se encuentre esa oportunidad, para que México pueda ampliar la zona de su mar territorial hasta 12 millas, para que México pueda entonces, arrojar al manto de su soberanía protectora a todo el mar que nos corresponde. Muchas gracias. (Aplausos.)

El C. presidente: Tiene la palabra el diputado Augusto Gómez Villanueva.

El C. Gómez Villanueva, Augusto: Señor Presidente. Honorable Asamblea: Después de haber escuchado el dictamen formulado por las Comisiones Unidas de Bienes y Recursos Nacionales y de Estudios Legislativos, en relación con la iniciativa

presentada por los diputados miembros del Partido de Acción Nacional, para reformar el artículo 17 de la Ley General de Bienes Nacionales, la diputación mayoritaria cree pertinente abundar en las consideraciones expresadas en el dictamen.

Deseo señalar, en primer término que la tesis suscrita por el Partido Acción Nacional, esta sustentada en la posición reiterada que los gobiernos de la Revolución han mantenido vigorosamente en las diversas reuniones internacionales sobre derechos del mar.

Si bien es cierto que esta tesis ha tenido una aceptación abierta por parte de numerosos países en el seno de las diversas reuniones internacionales, ésta no ha llegado a constituirse en norma de Derecho Internacional Inscrito, sino, como lo expresa el dictamen, existe como norma consuetudinaria de contenido variable.

Como acertadamente se expuso en la Corte Internacional de Justicia en un fallo de 1951, la delimitación de las zonas marítimas y por ende del mar territorial, tiene no solamente un aspecto interno sino también un aspecto internacional, porque si bien es cierto que el acto de delimitación propiamente tal es necesariamente un acto unilateral ya que el estado ribereño es el único que tiene competencia para realizarlo, en cambio, la validez de la delimitación respecto de los terceros estados, depende del derecho internacional.

El dictamen deja claramente establecido que el hecho de no aprobar la proposición de los diputados de Acción Nacional, que tiende simplemente a modificar la legislación vigente en materia de bienes nacionales, no significa de manera alguna una posición incongruente con la doctrina sustentada por los representantes de nuestro país en las Conferencias Internacionales sobre Derechos del Mar, sino consideramos que no es el momento de variar el procedimiento que nuestro país ha venido siguiendo, que consiste en incorporar paulatinamente al dominio de la nación los distintos elementos que concurren a la integración del mar territorial.

Esto significa que no se está renunciando de ninguna manera a un derecho, sino reservándose la facultad de darle su plena validez jurídica cuando lo crea conveniente. Prueba de ello lo constituye la iniciativa de ley que fija la zona exclusiva de pesca de la nación, que fuera suscrita por el C: Gustavo Díaz Ordaz, Presidente de la República, y aprobada hoy por esta Honorable Cámara de Diputados.

Por otra parte, estamos seguros de que el Gobierno de la República continuará sosteniendo esta postura en forma invariable en los Foros Internacionales.

México ha afirmado que la delimitación del mar territorial depende en parte del derecho interno y en parte del internacional. Así está expresamente establecido en el artículo 27 de la Constitución. Por tanto, no basta tener un derecho, sino que hay que buscar la ocasión propicia para alcanzar su eficacia.

Estas son las razones de oportunidad a las que se refiere el dictamen.

La experiencia nos ha demostrado, y no tenemos por qué desdeñarla, que no sólo importa qué tan valiosa sea la norma jurídica sino su eficacia traducida en resultados prácticos.

Como afirma Alonso García Robles, "será preciso que desde ahora se ponga fin a toda amenaza o uso de la fuerza en relación con estas cuestiones, y que los gobiernos se esfuercen, mediante intercambios de puntos de vista y negociaciones preliminares de carácter bilateral o regional, en preparar debidamente el terreno para la eventual adopción de una fórmula general de derecho que corresponda a la práctica internacional de nuestros días y que pueda dar lugar a reivindicaciones, las aspiraciones y los intereses legítimos del estado ribereño."

En relación con el procedimiento que debe seguirse para fijar la línea de base desde la zona que se mida la anchura del mar territorial y zona contigua, es necesario recordar que aquí también el Partido Acción Nacional suscribe y propone una Convención, ratificada ya por el Senado, cuya inclusión en el artículo 17 de la Ley General de Bienes Nacionales, sólo tiende, legítimamente, a actualizar esta ley, como lo afirma el dictamen de las Comisiones que pedimos sea aprobado.

El señor diputado de Acción Nacional ha hecho también una afirmación un tanto temeraria, en el sentido de que expresa que nuestro país, en esta ocasión y si la Cámara aprobara este dictamen, asume una actitud generosa en relación con el país vecino del Norte.

Consideramos que los fundamentos del dictamen son lo suficientemente claros, y a mayor abundancia creo que es importante establecer que la implantación en este sentido de una norma de derecho interno, por ser unilateral, nos conduciría necesariamente al uso de actos de fuerza que a su vez llevarían a conflictos de carácter internacional. Tradicionalmente la postura internacional de México se ha caracterizado por hacer velar la razón del Derecho por el Derecho mismo, y no por el uso de la fuerza.

Por todas las anteriores consideraciones, señores diputados, pido a ustedes que sea aprobado el dictamen que ha emitido la Comisión Dictaminadora. Y, finalmente, hacer una consideración: la postura internacional de México en esta materia como en tantas otras, no sólo ha sido reconocida y adoptada por otras naciones. Ahora también recibe el reconocimiento de los diputados del Partido Acción Nacional. Muchas gracias. (Aplausos.)

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Miguel Covián Pérez.

El C: Covián Pérez, Miguel: Señor Presidente, señoras y señores diputados: Unas cuantas palabras para precisar hechos, abundando en lo que ya ha afirmado el diputado Augusto Gómez Villanueva.

La iniciativa del Ejecutivo Federal tendiente a fijar una zona exclusiva de pesca en favor de la nación mexicana, ha sido aprobada por unanimidad en esta Asamblea. Este avance, indudable en el dominio de la nación sobre los recursos vivos del mar, de ninguna manera representa una concesión a la posición de los Estados Unidos de Norteamérica, ni de ningún otro país. Es una decisión tomada por esta Cámara de Diputados, aprobando una iniciativa del Ejecutivo Federal, plenamente congruente con las tradicionales posiciones de México en esta materia.

Cabe recordar, para esclarecer esta cuestión, que en las conferencias sobre derechos del mar, la proposición relativa a fijar en seis millas el mar territorial,

y seis millas más con derechos exclusivos de pesca, no provino de los Estados Unidos; fue una proposición anglocanadiense.

Por su parte, México sostuvo una proposición también coincidente en lo relativo a los derechos que los Estados ribereños tienen para fijar, hasta un límite de doce millas, su zona exclusiva de pesca. Todas las votaciones coincidieron en lo relativo a la zona exclusiva de pesca. Y las discrepancias ocurrieron tan sólo en lo relativo al mar territorial.

Si esta cuestión no llego a regirse en norma de Derecho Internacional, norma escrita de Derecho Internacional, se debió no a discrepancias en materia de los derechos sobre zona de pesca, sino a discrepancias en materia de los derechos de soberanía sobre el mar territorial.

Por ello es que en el dictamen las Comisiones han precisado que respecto de los derechos sobre la zona exclusiva de pesca, hay un consenso unánime universal.

Cabe recordar también que la reunión celebrada en el año de 1965 en Río de Janeiro, por el Comité Jurídico Interamericano, se produjo una declaración en la que también se sostienen los derechos de los Estados ribereños para fijar hasta un límite de doce millas su zona exclusiva de pesca. Y esta proposición partió, precisamente, del delegado mexicano Alfonso García Robles. Por consecuencia, insisto, no implica esta cuestión concesión alguna a ningún país, ni los Estados Unidos ni ningún otro, que haya discrepado sobre estas cuestiones con la posición tradicional de México, sino que todo ello es congruente plenamente con la patriótica y tradicional postura que México ha adoptado en distintas reuniones internacionales. (Aplausos.)

El C. Garabito Martínez, Jorge: Pido la palabra, señor Presidente.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Garabito.

El C. Garabito Martínez, Jorge: Señor Presidente, señores diputados: Quiero hacer una aclaración muy importante, porque se mal interpretó una de mis expresiones. Yo no hablé de concesión a los Estados Unidos en el sentido en que lo interpretó el diputado Covián; cuando hable yo de concesión y de generosidad, hacía referencia únicamente a un acto de acercamiento hacia tesis sostenidas por puntos diferentes. México bien pudo, bien puede declarar su zona de pesca exclusiva sin fijar ningún término para los países que han venido pescando en sus aguas. Esto es facilitar las cosas, el dar un plazo, el buscar el arreglo no obstante que su derecho es muy claro.

Esto nadie puede discutirlo, es un acto de generosidad de México.

El C. Presidente: Habiéndose procedido a la aclaración de las palabras antes dichas por el diputado Garabito, se ordena a la Secretaría pregunte a la Asamblea si está suficientemente discutido el punto.

El C. secretario Molina Reyes, Guillermo: Por instrucciones de la Presidencia, la Secretaría pregunta si se considera suficientemente discutido. Se va a proceder a su votación nominal en lo general.

Por la afirmativa.

El C. secretario Gámiz Fernández, Everardo: Por la negativa.

(Votación.)

El C. secretario Molina Reyes, Guillermo: ¿ Falta algún ciudadano diputado de votar por la afirmativa ?

El C. secretario Gámiz Fernández, Everardo: ¿ Falta algún ciudadano de votar por la negativa ?

Se va a proceder a recoger la votación de la Mesa.

(Votación.)

El C. secretario Molina Reyes, Guillermo: Fue aprobado el proyecto en lo general por 174 votos. Esta a discusión en lo particular.

No habiendo quien haga uso de la palabra, se va a proceder a recoger la votación nominal en lo particular. Por la afirmativa.

El C. secretario Gámiz Fernández, Everardo: Por la negativa.

(Votación.)

El C. secretario Molina Reyes, Guillermo: ¿ Falta algún ciudadano diputado de votar por la afirmativa ?

El C. secretario Gámiz Fernández, Everardo: ¿ Falta algún ciudadano diputado de votar por la negativa ?

Se va a proceder a recoger la votación de la Mesa.

(Votación.)

El C. secretario Molina Reyes, Guillermo: fue aprobado el proyecto de decreto en lo particular por unanimidad de 174 votos. Pasa al Senado para los efectos constitucionales del propio decreto.

El C. secretario Gámiz Fernández, Everardo: Señor Presidente, la Secretaría informa que se han agotado los asuntos de la Orden del Día de la Sesión Pública.

El C. Presidente (alas 13.55 horas): Se levanta la sesión ordinaria y se pasa a sesión solemne.

TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA Y

"DIARIO DE LOS DEBATES"