Legislatura XLVIII - Año I - Período Extraordinario - Fecha 19710128 - Número de Diario 9

(L48A1P1eN009F19710128.xml)Núm. Diario:9

ENCABEZADO

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

XLVIII LEGISLATURA

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921.

AÑO I México, D.F., Jueves 28 de Enero de 1971. TOMO I. - NUMERO 9

PERÍODO EXTRAORDINARIO

SUMARIO

Orden del Día

Se abre la sesión. Lectura del Orden del Día

Acta

Lectura y aprobación del acta de la sesión anterior

DICTÁMENES DE PRIMERA LECTURA

Ley Electoral Municipal del Territorio de la Baja California Sur

Dictamen de la Comisiones Unidas Primera de Gobernación, Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional, con proyecto de Ley Electoral Municipal del Territorio de la Baja California Sur. Primera lectura

Comparecencia del C. Secretario de Salubridad y Asistencia

Encontrándose a las puertas del recinto el C. doctor Jorge Jiménez Cantú, Secretario de Salubridad y Asistencia, la Presidencia designa una comisión que lo introduzca al salón. A continuación hace uso de la palabra el C. doctor Jorge Jiménez Cantú, para expresar los alcances y propósitos de la Iniciativa de Reformas a la base 4a. de la fracción XVI del artículo 73 constitucional enviada por el C. licenciado Luis Echeverría Alvarez, Presidente de la República. En seguida los CC. diputados Rafael Argüelles Sánchez, Juan Manuel López Sanabria, Maximiliano León Murillo, Salvador Hernández Vela, Francisco Navarro Veloz, Roberto Flores Granados, Juan Barragán Rodríguez, Felipe Cerecedo López, Luis Velázquez Jaacks, Diamantina Reyes Esparza, Hiram Escudero Alvarez, Roberto Avila González, Emilia Dorado Baltazar, Jaime Pineda Salgado, Guillermo Islas Olguín y Raymundo Flores Bernal, Previa solicitud que hacen a la Presidencia, por conducto de los CC. Secretarios, formulan al C. Secretario de Salubridad y Asistencia, diversas preguntas, relativas a la misma Iniciativa, a las que da debida respuesta. Se considera suficientemente ilustrada la Asamblea. La Presidencia, en nombre de la Cámara de Diputados, expresa al señor Presidente de la República su reconocimiento por la autorización que dio para que el C. Secretario de Salubridad y Asistencia, comparecencia ante esta Representación Nacional. Igualmente expresa su complacencia al C. doctor Jorge Jiménez Cantú, por las amplias consideraciones expuestas acerca de la Iniciativa, motivo de su presencia. La misma Comisión que introdujo al Alto Funcionario, lo acompaña a retirarse del salón

Reformas a los Artículos 74 y 79 Constitucionales

Dictamen de las Comisiones Unidas Primera de Gobernación, Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional, con proyectos de Decreto, que reforma los artículos 74 y 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Primera lectura

Orden del Día

Lectura del Orden del Día para la próxima sesión. Se levanta la sesión

DEBATE

PRESIDENCIA DEL C. ARNULFO VILLASEÑOR SAAVEDRA

(Asistencia de 179 ciudadanos diputados.)

- El C. Presidente (a las 12:00 horas): Se abre la sesión.

ORDEN DEL DÍA

- El C. secretario Altamirano Marín, Ignacio:

"Primer Período Extraordinario de Sesiones de la XLVIII Legislatura al Congreso de la Unión.

Orden del Día

28 de enero de 1971.

Lectura del acta de la sesión anterior.

Dictámenes de Primera Lectura

De las Comisiones Unidas Primera de Gobernación, Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional con Proyecto de Ley Electoral Municipal del Territorio de Baja California Sur.

De las Comisiones Unidas Primera de Gobernación, Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional con proyecto de Decreto que reforma los artículos 74 y 79 constitucionales.

A las 12:30 horas, independientemente de que el desahogo de los asuntos del Orden del Día continúen en forma posterior, se recibirá al C. Secretario de Salubridad y Asistencia Pública, cuyo motivo de comparecencia obra en antecedentes."

ACTA

- El mismo C. Secretario:

"Acta de la sesión efectuada por la Cámara de diputados del H. XLVIII Congreso de la Unión, el día veintisiete de enero de mil novecientos setenta y uno.

Presidencia del C. Arnulfo Villaseñor Saavedra.

En la ciudad de México, a las doce horas y veinte minutos del miércoles veintisiete de enero de mil novecientos setenta y uno, se abre la sesión con asistencia de ciento setenta y cinco ciudadanos diputados, según declara la Secretaría después de pasar lista.

Lectura del Orden del Día.

Sin que motive debate se aprueba el acta de la sesión anterior efectuada el día veintiséis del presente.

Se da cuenta de los documentos en cartera.

Minuta proyecto de Decreto enviada por la H. Colegisladora, que crea la Medalla de la Lealtad, Recibo, y a la Comisión de Gobernación en turno e imprímase.

Las Comisiones unidades Segunda de Gobernación, Segunda de Justicia y de Estudios Legislativos, Sección Penal, presentan un dictamen con proyecto de Ley que establece las Normas Mínimas sobre Readaptación Social de Sentenciados. Segunda lectura.

A discusión en lo general.

Los CC. diputados Hiram Escudero Alvarez, Jesús Luján Gutiérrez y Rafael Rodríguez Barrera, hacen uso de la palabra para hacer diversas consideraciones acerca del dictamen a que se acaba de dar lectura.

Suficientemente discutido.

En votación nominal, se aprueba el proyecto de Ley en lo general, por unanimidad de ciento setenta y seis votos.

A discusión en lo particular, sin ella, en votación nominal se aprueba el proyecto de Ley en lo particular por unanimidad de ciento ochenta y dos votos.

Aprobado el proyecto de Ley tanto en lo general como en lo particular, pasa al Senado para sus efectos Constitucionales.

Las Comisiones unidas Primera de Gobernación, Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional, suscriben un dictamen con proyecto de Ley Orgánica del Territorio de Baja California Sur. Segunda lectura.

La Secretaría da lectura al voto particular presentado por el C. diputado Juan Landerreche Obregón, relativo al dictamen anterior.

A discusión en lo general el dictamen.

Para hacer diversas consideraciones en pro del dictamen hace uso de la palabra el C. diputado Francisco Hernández Juárez; previa autorización de la Asamblea el C. diputado Vicepresidente Guillermo Ruiz Vázquez, hace uso de la palabra para hacer diversas consideraciones sobre el particular; el C. diputado Rafael Castillo Castro, para hablar en pro del dictamen.

Suficientemente discutido.

En votación nominal, se aprueba el proyecto de Ley en lo general por unanimidad de ciento ochenta y cinco votos.

A discusión en lo particular.

A discusión los artículos 13, 14 y 91.

El C. diputado José Melgarejo Gómez, hace uso de la palabra para presentar adiciones a los artículos 13, 14 y 91; para hablar en pro de los artículos impugnados, habla el C. diputado Rafael Castillo Castro.

En votación económica se desechan las adiciones.

Se consideran suficientemente discutidos los artículos 13, 14 y 91 y se reservan para su votación nominal en conjunto.

La Presidencia decreta un receso.

A las dieciséis horas y cuarenta y cinco minutos se reanuda la sesión.

A discusión los artículos 16, 20, 22, 24, 56, 60, 73 y 49.

El C. diputado Mayo Arturo Bravo Hernández, hace uso de la palabra para presentar adiciones a los artículos anteriormente mencionados; para hablar en pro de los mismos, habla el C. diputado Rafael Castillo Castro.

En votación económica se desechan las adiciones propuestas y en igual votación se consideran suficientemente discutidos los artículos impugnados. Se reservan para su votación nominal en conjunto.

A discusión el artículo 34, la fracción 2a. del artículo 51, la fracción 10a. del artículo 69, los artículos 82, 85 y 87.

Para impugnarlos hace uso de la palabra el C. diputado Miguel López González; para

hablar en pro, el C. diputado Rafael Castillo Castro.

Suficientemente discutidos, se reservan para su votación nominal en conjunto.

A discusión los artículos 25, 30, 80, 39, 67 y 68.

El C. diputado Miguel Hernández Labastida, hace uso de la palabra para presentar adiciones; para hablar en pro, habla el C. diputado Rafael Castillo Castro.

En votación económica se desechan las adiciones propuestas y en igual votación se consideran suficientemente discutidos los artículos impugnados. Se reservan para su votación nominal en conjunto.

A discusión los Artículos 20, 27, 76, 55, 57 y 74.

El C. diputado Guillermo Baeza Somellera, hace uso de la palabra para presentar adiciones; para hablar en pro, el C, diputado Rafael Castillo Castro; los CC. diputados Santiago Roel García y Cuauhtémoc Santa Ana declinan el uso de la palabra.

Se considera suficientemente discutidos los artículos impugnados y las adiciones se desechan.

En votación nominal se aprueban todos los artículos impugnados por ciento cuarenta y dos votos en pro y quince en contra.

Los artículos no impugnados se aprueban por unanimidad de ciento cincuenta y siete votos.

Aprobado el proyecto de Ley tanto en lo general como en lo particular, pasa al Senado para sus efectos constitucionales.

Las comisiones unidas de Salubridad y de Estudios Legislativos, Sección Asuntos Generales, emiten un dictamen con proyecto de Decreto por el que se reforma y adicionan los artículos 193, 217 y 296 del Código Sanitario de los Estados Unidos Mexicanos. Segunda lectura.

A discusión en lo general con las modificaciones hechas por las Comisiones Dictaminadoras.

Sin que motive debate, en votación nominal se aprueba el proyecto de Decreto en lo general por unanimidad de ciento cincuenta y ocho votos.

A discusión en lo particular, sin ella, en votación nominal se aprueba el proyecto de Decreto en lo particular por unanimidad de ciento cincuenta y ocho votos.

Aprobado tanto en lo general como en lo particular, pasa al Senado para sus efectos constitucionales.

Lectura del Orden del Día para la próxima sesión.

A las dieciocho horas y treinta y cinco minutos se levanta la sesión y se cita para la que tendrá lugar mañana jueves veintiocho de los corrientes, a las diez horas y treinta minutos,"

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobada.

DICTÁMENES DE PRIMERA LECTURA

Ley Electoral Municipal de Territorio de Baja California Sur

- La C. secretaria Anderson Nevárez, Hilda:

"Comisiones Unidas Primera de Gobernación, Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional.

Honorable Asamblea:

A las Comisiones Unidas de primera de Gobernación, Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional fue turnada para su estudio y dictamen, por acuerdo de vuestra soberanía, la Iniciativa de Ley Electoral Municipal del Territorio de la Baja California Sur, que con fundamento en el artículo 71 constitucional, envió a esta Cámara el 28 de diciembre pasado, el C. Presidente de la República.

En la sesión correspondiente al día 19 de enero, la Secretaría de la Cámara de Diputados dio cuenta a la Asamblea de la Iniciativa de referencia. A proposición de un grupo de CC. diputados, el Presidente de este Cuerpo Colegiado acordó que, con fundamento en lo que dispone el artículo 93 de la Constitución General de la República, se citara al C. Secretario de Gobernación para comparecer en este recinto, a efecto de que ilustrara a la Asamblea sobre las motivaciones de la Iniciativa de Ley materia de este dictamen, así como de otras directamente relacionadas con sus atribuciones.

El C. Presidente de la República, en respetuosa correspondencia, autorizó la comparecencia del C. Secretario de Gobernación, la que se llevó a cabo el 21 de enero, habiendo proporcionado dicho alto funcionario una amplia explicación sobre la Iniciativa de que se trata y contestado las cuestiones que, sobre el particular, desearon formularle los CC. diputados, lo que obra asentado en el Diario de los Debates correspondientes a esa fecha.

A estas Comisiones Unidas les fue sumamente valiosa la información proporcionada por el C. Secretario de Gobernación y, además, realizaron un amplio análisis de los términos de la iniciativa enunciada.

Ahora bien, esta Cámara, en su sesión efectuada en esta fecha, discutió y aprobó el Proyecto de Ley Orgánica del Territorio de la Baja California Sur, presentando a la Asamblea por estas mismas Comisiones que suscriben, como consecuencia del estudio que llevaron a cabo de la Iniciativa que sobre la materia mencionada envió el Ejecutivo de la Unión. En el documento aludido se propone, entre otras cosas, el restablecimiento del Municipio Libre, a cargo de elección popular directa, en dicha circunscripción territorial.

La Iniciativa de Ley Electoral Municipal del Territorio de la Baja California Sur, es el instrumento jurídico indispensable conforme al

cual se prescriben la forma y términos en que el proceso electoral municipal se llevará a cabo.

Las Comisiones que suscriben llegaron a la conclusión de que esta última Iniciativa enviada por el Ejecutivo Federal, se ajusta a los requerimientos de todo proceso eleccionario, garantizando ampliamente el ejercicio del sufragio y la participación de los partidos políticos, fortaleciendo así la democracia en el Territorio de la Baja California Sur.

Como lo establece la propia Exposición de Motivos, se ha tomado como modelo la Ley Electoral Federal, en virtud de la bondad de sus preceptos y de la eficacia de sus disposiciones, ampliamente comprobadas por todos los mexicanos en la práctica de sus derechos políticos.

A juicio de estas Comisiones, esta Iniciativa Constituye el instrumento jurídico adecuado para regular la preparación, desarrollo y vigilancia del proceso electoral municipal en el Territorio de la Baja California Sur.

Por lo expuesto, y por las razones asentadas en la Exposición de Motivos, que estas Comisiones hacen suyas, nos permitimos proponer a la Honorable Asamblea el siguiente:

PROYECTO DE LEY ELECTORAL MUNICIPAL DEL TERRITORIO DE LA BAJA CALIFORNIA SUR

CAPITULO I

De la renovación de los ayuntamientos

Artículo 1o. La presente Ley rige la preparación, desarrollo y vigilancia del proceso electoral en las elecciones ordinarias y extraordinarias de los Ayuntamientos del Territorio de la Baja California Sur.

Artículo 2o. Las elecciones ordinarias se verificarán cada tres años, el segundo domingo del mes de noviembre del año a que correspondan.

Artículo 3o. Las elecciones extraordinarias se sujetarán igualmente a esta ley, salvo lo que disponga la convocatoria respectiva, la que, en caso de nulidad de elecciones declarada por la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, se expedirá dentro del término de cuarenta y cinco días siguientes a dicha declaración. La convocatoria no podrá restringir los derechos de los partidos políticos ni alterar los procedimientos y formalidades que establece esta propia Ley.

Artículo 4o. Las elecciones extraordinarias serán convocadas por el H. Congreso de la Unión, o en su caso, por la Comisión Permanente y se verificarán en la fecha que señale la convocatoria correspondiente.

Artículo 5o. La Comisión Electoral del Territorio, tomando en cuenta la fecha señalada en la convocatoria para elecciones extraordinarias, modificará los términos que la Ley señala a las diferentes etapas del proceso electoral. También podrá ampliar los plazos que señala esta Ley tratándose de elecciones ordinarias, cuando a su juicio haya imposibilidad material de realizar, dentro de ellos, los actos para los que se establecen. La Comisión publicará oportunamente en el Periódico Oficial del Territorio los acuerdos respectivos.

CAPITULO II

De los organismos electorales

Artículo 6o. Los organismos que tienen a su cargo la preparación, el desarrollo y la vigilancia del proceso electoral, son los siguientes:

I. Comisión Electoral del territorio;

II. Comités Electorales Municipales;

III. Delegados Electorales Municipales;

IV. Delegación del Registro Nacional de Electores en el Territorio; y

V. Mesas Directivas de Casillas.

Artículo 7o. La Comisión Electoral de Territorio se renovará cada tres años, residirá en la ciudad de La Paz y se integrará con los siguientes comisionados: el Presidente que será el Secretario General de Gobierno del Territorio de la Baja California Sur, el Diputado Federal electo por el Territorio, el Delegado del Registro Nacional de Electores, y dos designados de común acuerdo por los Partidos Políticos nacionales a que se refiere el artículo 25 de esta Ley. En el caso de que no hubiere acuerdo por parte de los partidos políticos respecto a los comisionados, el Presidente, el Diputado y el Delegado, los nombrarán de entre los partidos más importantes por la solidez de su plataforma ideológica y por el número de sus afiliados. Por cada miembro propietarios habrá un suplente. Las decisiones se tomarán por mayoría de votos y en caso de empate, el Presidente tendrá voto de calidad.

Fungirá como Secretario de la Comisión, un Notario Público.

Los Partidos Políticos que participen en las elecciones y no tengan comisionados, designarán un representante al seno de la Comisión, que participará en las deliberaciones, sin voto.

Artículo 8o. La Comisión, así integrada, iniciará sus labores el 1o. de julio del año de la elección.

Artículo 9o. Para ser miembro de la Comisión Electoral del Territorio, se deberán reunir los siguientes requisitos:

I. Ser mexicano por nacimiento y ciudadano en pleno ejercicio de sus derechos;

II. Tener 25 años cumplidos al día del nombramiento;

III. Poseer conocimientos bastantes para el buen ejercicio de sus funciones;

IV. Ser de reconocida probidad; y

V. No pertenecer al estado eclesiástico, ni ser ministro de algún culto.

Artículo 10. Los Comités Electorales Municipales se renovarán cada tres años, instalándose el 1o. de agosto del año de la elección; residirán en las cabeceras de los Municipios y se integrarán en la siguiente forma: un Presidente, un Secretario y un Vocal, designados por la Comisión Electoral del Territorio. Cada uno de los Partidos Políticos a que se refiere

el artículo 25 podrán acreditar ante los Comités Electorales Municipales un representante propietario y un suplente. Los representantes podrán intervenir sin voto en las deliberaciones de los Comités.

Artículo 11. Para ser miembro de los Comités Electorales Municipales, se deberán reunir los siguientes requisitos:

I. Ser mexicano por nacimiento y ciudadano en pleno ejercicio de sus derechos;

II. Ser sudcaliforniano con vecindad en el Territorio de seis meses anteriores a la fecha del nombramiento;

III. Tener 25 años cumplidos al día del nombramiento;

IV. No desempeñar, a excepción de los docentes, ningún cargo o empleo público;

V. Poseer conocimientos bastantes para el buen ejercicio de sus funciones;

VI. Ser de reconocida probidad; y

VII. No pertenecer al estado eclesiástico, ni ser ministro de algún culto.

Artículo 12. Los Comités Electorales Municipales, designarán un Delegado en cada una de las Delegaciones en que se divide el municipio correspondiente.

Artículo 13. Para ser Delegado Electoral Municipal, se deberán reunir los requisitos que establece el artículo 11 de esta Ley.

Artículo 14. Para las elecciones municipales el padrón electoral será formulado por la Delegación del Registro Nacional de Electores en el Territorio , que residirá en la ciudad de La Paz y que tendrá oficinas en cada Cabecera Municipal. Para los efectos de las mencionadas elecciones el Registro dependerá de la Comisión Electoral del Territorio.

Artículo 15. Las mesas directivas de casillas se instalarán en cada sección electoral y se integrará por ciudadanos de la localidad con los cargos de Presidente, Secretario y Escrutadores. Los Comités Electorales Municipales convocarán a los representantes de los Partidos Políticos que participen en las elecciones a fin de que, de común acuerdo propongan a las personas que ocuparán los distintos cargos de la Mesa Directiva de Casilla, designándose un suplente para cada una de ellas.

Si no hubiere acuerdo, los Comités Electorales Municipales harán las designaciones correspondientes.

Cada uno de los Partidos Políticos y de las plantillas formadas para integrar Ayuntamientos, que participen en las elecciones podrá designar un representante para cada casilla electoral, que serán registrados ante el Comité Electoral Municipal.

CAPITULO III

De las atribuciones de los organismos electorales

Artículo 16. Son facultades y obligaciones de la Comisión Electoral del Territorio:

I. Expedir los reglamentos que regulen su propio funcionamiento, el de los Comités Electorales Municipales, de las Delegaciones Electorales Municipales y del Registro Nacional de Electores en el Territorio;

II. Resolver los conflictos de competencia que pudieran suscitarse entre los demás organismos electorales;

III. Resolver las inconformidades que presenten los Partidos Políticos en cuanto a la integración y designación de los demás organismos electorales;

IV. Resolver las consultas que le formulen los ciudadanos, los partidos políticos y los organismos electorales respecto a la aplicación de esta Ley;

V. Registrar los nombramientos de los representantes de las plantillas y de los partidos políticos ante los Comités Electorales Municipales;

VI. Señalar las fechas y plazos que no estén previstos en esta Ley respecto de los distintos actos del proceso electoral;

VII. Dirigir y vigilar la organización y el funcionamiento de la Delegación del Registro Nacional de Electores en el Territorio y aprobar el proyecto de secciones electorales que le presente;

VIII. Intervenir en la preparación y desarrollo del proceso electoral y vigilar el eficaz funcionamiento de los demás organismos electorales;

IX. Registrar las constancias expedidas por los Comités Electorales Municipales respecto de los resultados obtenidos en las votaciones, dando cuenta de las mismas al Gobernador del Territorio, y remitir la documentación relativa, a la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, para los efectos del artículo 52 de esta Ley; y

X. Los demás que le confieran las leyes.

Artículo 17. Son facultades y obligaciones de los Comités Electorales Municipales:

I. Intervenir en la preparación y desarrollo del proceso electoral conforme a esta Ley;

II. Publicar las listas nominales de electores en la cabecera y en las Delegaciones de su correspondiente jurisdicción;

III. Registrar las planillas de candidatos a Presidentes Municipales, Síndicos y Regidores e informar a la Comisión Electoral del Territorio;

IV. Designar a los ciudadanos que deban integrar las Mesas Directivas de Casillas Electorales en su correspondiente jurisdicción;

V. Hacer el cómputo de los votos emitidos;

VI. Formular la declaratoria respectiva en favor de la planilla que hayan obtenido mayoría de votos, expidiendo las constancias correspondientes;

VII. Informar de los resultados de las elecciones y remitir la documentación relativa a la Comisión Electoral del Territorio para los efectos de la fracción IX del artículo 16 de esta Ley; y

VIII. Los demás que les confieran las leyes.

Artículo 18. Son facultades y obligaciones de los Delegados Electorales Municipales:

I. Coadyuvar con la Delegación del Registro Nacional de Electores en el Territorio en la

formulación del proyecto de Secciones Electorales;

II. Intervenir en la preparación y vigilancia del proceso electoral;

III. Mantener constantemente informado del desarrollo del proceso electoral a su correspondiente Comité Electoral Municipal;

IV. Remitir la documentación relativa a las elecciones, a su correspondiente Comité Electoral Municipal, dentro de los tres días siguientes a la fecha de la elección; y

V. Las demás que les señalen los Reglamentos de los organismos electorales del Territorio.

Artículo 19. Son facultades y obligaciones de la Delegación del Registro de Electores en el Territorio:

I. Mantener al corriente el registro de los ciudadanos;

II. Formar las listas de los electores y proporcionárselas a los demás organismos electorales, y cuando así lo soliciten, a los Partidos Políticos en los términos que determine la Comisión Electoral del Territorio;

III. Formular el proyecto de Secciones Electorales y someterlo para su revisión y en su caso, aprobación de la Comisión Electoral del Territorio; y

IV. Las demás que le señalen los reglamentos de los organismos electorales del Territorio.

CAPITULO IV

Del derecho del voto

Artículo 20. Son electores los mexicanos mayores de 18 años, con residencia en el territorio no menor de seis meses, que estén en el goce de sus derechos políticos y que se hayan inscrito en la Delegación del Registro Nacional de Electores.

Artículo 21. Son obligaciones de todo elector:

I. Votar en la casilla electoral de su domicilio, entendido que solamente en ésta tendrá validez su voto, salvo las excepciones que señala la ley; y

II. Desempeñar los cargos electorales y velar por la pureza del sufragio.

Los cargos electorales no son renunciables y sólo podrá admitirse excusa para desempeñarlos cuando se funde en causas graves, calificadas por el organismo que hubiere hecho la designación.

Artículo 22. No podrán votar:

I. Los que carezcan de credencial de elector;

II. Los ciudadanos que estén sujetos a interdicción judicial;

III. Los asilados en establecimientos para toxicómanos o enfermos mentales;

IV. Los que estén sujetos a un proceso criminal por delito que merezca pena corporal, a partir de la fecha del auto de formal prisión;

V. Los que se encuentren extinguiendo una pena corporal impuesta por sentencia judicial;

VI. Los prófugos de la justicia, desde que se dicte la orden de aprehensión hasta que prescriba la acción penal; y

VII. Los condenados, por sentencia ejecutoria, a la pena de suspensión del voto.

CAPITULO V

De los candidatos y su registro

Artículo 23. Son elegibles para los cargos de Presidente Municipal, Síndico y Regidores, propietarios y suplentes, los ciudadanos que reúnan los requisitos a que se refiere la Ley Orgánica del Territorio de la Baja California Sur.

Artículo 24. El día primero de octubre del año de la elección, los Comités Electorales Municipales publicarán en los estrados de las cabeceras Municipales, Delegaciones y en el Periódico Oficial del Territorio, los avisos de quedar abierto el registro de planillas municipales. El registro quedará abierto hasta el día 7 de octubre, inclusive.

dentro del plazo anterior, los partidos podrán substituir a uno o a varios miembros de la planilla que ya hubieren registrado. Vencido éste, los partidos podrán solicitar ante la Comisión Electoral del Territorio, la cancelación del registro de uno o varios miembros de la planilla, pero sólo podrán sustituirlos por otros a causas de fallecimiento, inhabilitación o incapacidad.

Artículo 25. Las planillas serán registradas ante los Comités Electorales Municipales. Solamente podrán registrar planillas municipales los Partidos Políticos Nacionales registrados en la Secretaría de Gobernación que tengan establecidos Comités Locales en el Territorio. En el registro se anotarán, en su orden: nombres y apellidos, edad, estado civil, domicilio y lugar de nacimiento, el puesto para el cual se les postula en la planilla, el Partido Político que la sostiene y el color o combinación de colores, más el emblema en su caso, que el Partido o Partidos que la postule, usarán en las elecciones. Por cada candidato a Presidente Municipal, Síndico y Regidores, se postulará un suplente. De la solicitud de registro se enviará copia a la Comisión Electoral del Territorio.

Cada Partido deberá señalar el color o la combinación de colores que se usará en las boletas electorales.

Cuando el Comité Electoral Municipal niegue el registro de una planilla, el Partido que la haya solicitado dentro de las 24 horas siguientes en que se le notifique tal negativa, se inconformará ante el propio Comité y remitirá copia sellada del recibo de tal inconformidad a la Comisión Electoral del Territorio, a fin que ésta, supletoriamente, tenga por presentada en tiempo la solicitud de registro y resuelva en definitiva.

Artículo 26. A las planillas registradas se les dará la debida publicidad para conocimiento de los ciudadanos del Municipio.

Artículo 27. Dentro de las veinticuatro horas siguientes al registro de una o más planillas, los Comités Electorales Municipales lo comunicarán a la Comisión Electoral del Territorio.

Artículo 28. Las Controversias, quejas, inconformidades o dudas que se susciten con motivo del registro de planillas se plantearán ante el propio Comité, quien las enviará a la Comisión

Electoral del Territorio, que resolverá en definitiva.

Artículo 29. El segundo domingo de octubre del año de la elección, el Comité Electoral Municipal mandará publicar en los estrados de las cabeceras Municipales, de las Delegaciones y en el Periódico Oficial del Territorio, avisos sobre el número de casillas que se instalarán y la ubicación de cada una de ellas, así como los nombres de los ciudadanos designados como presidente, secretario y escrutadores propietarios y suplentes, de cada una de ellas. Las casillas de cada municipio se enumerarán progresivamente.

No podrán señalarse para la instalación de casillas las casas habitadas por funcionarios o empleados públicos, federales, territoriales o municipales, ni las fábricas, haciendas o fincas del campo que disten menos de cuatro kilómetros de alguna cabecera de municipio o del poblado que constituya la sección inmediata, pues en tal caso se señalará un local dentro de aquélla o de éstas.

En caso de que las fábricas, haciendas o fincas de campo distaren más de cuatro kilómetros de la cabecera del municipio o de la sección inmediata, no podrá señalarse para la instalación la casa o dependencia de la fábrica, hacienda o finca, sino cualquier otro sitio que permita el libre acceso a los electores. Los locales que señalen para instalar las casillas serán lo suficientemente amplios para colocar en ellas todo lo necesario para el fácil cumplimiento de las operaciones electorales.

Artículo 30. Las boletas electorales se harán conforme al modelo que apruebe la Comisión Electoral del Territorio, contendrán los nombres y apellidos de los integrantes de las planillas, los respectivos colores registrados, el puesto y el orden en la planilla y las indicaciones generales relativas al Municipio y Secciones Electorales, y llevarán impresas las firmas del Presidente y del Secretario de la Comisión Electoral del Territorio. Las boletas contendrán un círculo para cada planilla de candidatos propietario y suplente postulados por un partido, de tal manera que no se requiera más que la emisión de un solo voto, para comprender la totalidad de la planilla.

CAPITULO VI

De la elección

Artículo 31. A las 8 horas del segundo domingo del mes de noviembre, los ciudadanos nombrados miembros propietarios de las Mesas Directivas de Casillas Electorales, procederán a la instalación de ellas, en presencia de los representantes de los Partidos Políticos y de los representantes de las planillas que concurran.

Artículo 32. En el caso de que la casilla no se instale oportunamente, el Delegado Electoral Municipal la instalará con los ciudadanos que reúnan los requisitos que establece esta Ley.

Artículo 33. Instalada la Casilla, se levantará el acta correspondiente con los siguientes datos:

a) El lugar, la fecha y la hora en que se inicie el acto de instalación;

b) Los nombres completos de los funcionamientos que intervengan;

c) La constancia de que obran en poder de la casilla la documentación y los útiles necesarios para la elección;

d) La certificación de que abrieron las ánforas en presencia de los funcionarios y electores asistentes, comprobándose que se encontraban vacías; y

e) La breve relación de los incidentes suscitados, si los hubiere, con motivo de la instalación y la hora en que tal instalación quedó hecha.

Del acta de instalación, firmada por todos los funcionarios que en ella hayan intervenido, se harán tres copias para el Comité Municipal y las necesarias para integrar los expedientes electorales y expedir a los funcionarios de la casilla y a los representantes acreditados de partidos y planillas, presentes en el acto de la instalación, cuando lo soliciten.

Artículo 34. Instalada la casilla, los componentes de ésta no podrán retirarse hasta que la casilla sea clausurada, salvo causas de fuerza mayor y con el consentimiento de la mayoría de los integrantes y siempre que sea posible su substitución.

Artículo 35. La votación se recibirá en la forma siguiente:

I. Los electores votarán en el orden en que se presenten, debiendo previamente cumplirse con los requisitos siguientes:

1o. El elector exhibirá la credencial permanente que le haya expedido el Registro Nacional de Electores.

2o. El elector deberá identificarse debidamente antes de votar, por medio de licencia de manejo, credencial o documentos diversos a satisfacción de la Mesa, o bien mediante el cotejo de la firma que conste en la credencial de elector con la firma de quien pretenda votar, y que escribirá en papel separado, sin tener a la vista la credencial, en presencia de la Mesa y antes de recibir la boleta de votación. También podrán ser identificados los electores por el conocimiento personal que de ellos tengan los miembros de la Mesa, o por cualquier otro medio idóneo. En ningún caso servirán para identificar al elector, credenciales o documentos expedidos por partidos o grupos políticos.

3o. El Presidente de la casilla se cerciorará de que el nombre del ciudadano anotado en la credencial figure en la lista de electores de la sección a que corresponde la casilla.

De esta regla sólo se exceptúan los ciudadanos que teniendo su credencial estén comprendidos en los siguientes casos:

a) Que se encuentren fuera de su domicilio el día de la elección pero dentro del municipio, lo cual deben acreditar debidamente a juicio del Presidente de la casilla. La identificación de estos votantes solamente podrá hacerse mediante

documento diverso de la credencial electoral, que no haya sido expedido por partido o grupos políticos, a satisfacción unánime de los integrantes de la Mesa y de los representantes de los partidos.

b) Que el elector sea militar en servicio activo, en cuyo caso podrá votar en la casilla más próxima al lugar en que desempeñe su servicio el día de la elección.

La oficialidad, las clases, la tropa, las policías y las gendarmerías, deberán presentarse individualmente a votar, sin armas, y no votarán bajo mando o vigilancia de superior alguno, a fin de garantizar la libertad del voto de los militares y de la policía.

c) Que se trate de integrantes de la casilla o representantes de un partido o de una planilla, en cuyo caso podrán votar en la misma casilla en que actúen, anotándose esta circunstancia en el acta de clausura.

Exhibida la credencial conforme a las reglas anteriores, el presidente de la casilla entregará al elector la boleta para la votación.

II. El elector, de manera secreta, marcará en la boleta con una cruz, el color o la combinación de colores de la planilla por la que vota o escribirá en el lugar correspondiente el nombre de su candidato si éste no está registrado.

Si el elector es ciego o se encuentra impedido, podrá acompañarse de un guía o sostén para que, en su lugar haga la operación del voto. Acto continuo, el elector personalmente, o él y su ayudante, en su caso, introducirán la boleta en el ánfora. De la misma manera procederá el individuo que no sabiendo leer ni escribir manifiesta a la Mesa que desea votar por alguna persona distinta de los integrantes de las planillas registradas. En el acta se harán constar estas circunstancias, y

III. El Secretario de la casilla anotará en la lista nominal de electores respectiva, poniendo la palabra "votó" a continuación del nombre de cada elector que haya depositado su voto, y el presidente le devolverá su credencial, con idéntica anotación y fecha.

Artículo 36. Los Ciudadanos que extravíen su credencial de elector, para poder votar deberán obtener oportunamente un duplicado de la misma en la oficina correspondiente del Registro Nacional de Electores.

Artículo 37. La votación podrá recogerse por medio de máquinas, siempre que se llenen los requisitos siguientes:

I. Que puedan colocarse en ligar visible de la máquina el disco de color que sirva de distintivo al partido y los nombres de las planillas propuestas:

II. Que la máquina automáticamente marque el número total de votantes y los votos que cada planilla obtenga;

III. Que permita a los ciudadanos inscribir los nombres de las planillas cuando voten por alguna no registrada;

IV. Que el registro total señalado por la máquina sea visible lo mismo que las sumas parciales de los votos obtenidos por cada planilla; y

V. Que se conserve el secreto del voto.

Artículo 38. El Presidente de la casilla tendrá la responsabilidad de mantener el orden durante la elección con el auxilio de la fuerza pública, si lo creyera conveniente. No permitirá el acceso a la casilla a personas armadas o en estado de ebriedad, que hagan propaganda o que en alguno forma pretendan coaccionar a los votantes. Tampoco admitirá en la casilla a quienes no sean funcionarios de ésta, representantes acreditados de partidos o de planillas, notarios en ejercicio de sus funciones, o electores, cuidando de que éstos no sean en número mayor del que pueda atender el personal de la casilla para asegurar la libertad y el secreto del voto. Cuidará también, de que se conserve el orden en el exterior inmediato a la casilla y de que no se impida o se obstaculice el acceso de los electores a ésta. El propio Presidente decidirá, desde luego y bajo su responsabilidad, las cuestiones que en la casilla se susciten.

Artículo 39. Ninguna persona que porte armas aun cuando sea militar, podrá ejercer el derecho del voto. El Presidente de la Mesa no entregará las boletas respectivas al elector que se presente armado, aun cuando figure en la lista nominal de electores y ordenará se anote esta circunstancia junto al nombre del elector. Igualmente mandará retirar de la casilla a todos los individuos que estén armados, sean o no electores, consignando sus nombres y el hecho en el acta de la votación, y si los infractores no se retiran, los mandará detener por medio de la policía, debiendo consignarlos por desobediencia a su autoridad.

Artículo 40. En el caso de que alguna o lagunas personas traten de intervenir en la elección por medio de la fuerza y se presenten en una casilla portando armas, el Presidente de la Mesa suspenderá la votación, y con auxilio de la fuerza pública, hará restablecer el orden consignando a los responsables.

Artículo 41. El Secretario de la casilla deberá recibir las protestas que le sean presentadas por escrito por los electores, los funcionarios de la casilla o los representantes acreditados de partidos o de planillas y devolver firmadas las copias. Tomará nota de los incidentes que en la casilla ocurran y que puedan alterar la votación o su sentido.

Artículo 42. A las 5 de la tarde, o antes si ya hubieren votado todos los electores inscritos en el padrón, se cerrará la votación; pero si a la hora dicha hubiere electores presentes que no hayan votado, se continuará recibiendo la votación hasta que hayan votado todos los electores presentes de la sección.

Artículo 43. Cerrada la votación, se levantará el acta respectiva haciendo constar en ella la hora en que comenzó a recibirse, los incidentes relacionados con la misma, las protestas presentadas y la hora y circunstancias en que la votación haya concluido. Del acta respectiva se harán y distribuirán copias en los términos del artículo 33.

Artículo 44. Una ver cerrada la votación, se procederá en el siguiente orden:

I. Se numerarán las boletas sobrantes, inutilizándolas por medio de dos rayas diagonales con tinta;

II. Se llenarán los esqueletos que para la documentación del acto hay aprobado la Comisión Electoral del Territorio, consignando los números con cifras y con letra, y firmando los miembros de la Mesa y los representantes de partidos políticos y de candidatos allí presentes;

III. Se reunirán en un solo expediente, los documentos siguientes:

a) Nombramiento del presidente de la casilla;

b) Un tanto de la lista nominal de electores, y

c) Un tanto de los modelos anteriormente mencionados;

IV. Se procederá a abrir el ánfora que contenga los votos, comprobando si el número de boletas depositadas en el ánfora corresponden al número de electores que emitieron su voto, para lo cual uno de los escrutadores sacará una por una las boletas mencionadas contándolas en voz alta y el otro escrutador, al mismo tiempo, sumará en la lista nominal de electores el número de ciudadanos que hubieren votado, consignándose en el acta el resultado de estas operaciones;

V. Al terminar de sacar las boletas de las ánforas se mostrará a todos los presentes que están vacías;

VI. El primer escrutador leerá en voz alta la planilla en favor de la cual se hubiere votado, lo que comprobará el otro escrutador; y el secretario irá formando, al mismo tiempo, las listas de escrutinio, con cuyos resultados hará el cómputo general de los votos emitidos, y

VII. Terminando el escrutinio, se levantará el acta final en la que se harán constar el cómputo general y sucintamente todos los incidentes ocurridos durante él, y los demás por menores que señala la Ley. Tres tantos del acta los enviará el secretario bajo su responsabilidad, al Comité Electoral Municipal.

Artículo 45. Para hacer la computación de votos se seguirán las siguientes reglas:

I. Se computarán los votos emitidos por planillas, contándose un voto por cada círculo cruzado.

II. Si se cruza más de un círculo se anulará el voto, salvo si todos los partidos postulan la misma planilla, en cuyo caso el voto contará en lo personal para los integrantes de la misma.

Las boletas serán numeradas por orden progresivo y se llevará un registro de las anuladas especificándose su causa.

Artículo 46. Se agregarán a los documentos enumerados en la fracción III del artículo 44, las boletas que contengan los votos emitidos, las anuladas y las sobrantes; un ejemplar de los escrutinios y del cómputo general de votos y otro del acta final.

Todos estos documentos se pondrán en paquete bien cerrado sobre cuya envoltura, para mayor garantía, firmarán los miembros de la Mesa.

Los representantes de partidos y de planillas, podrán firmar, si así lo desearen.

El paquete quedará en poder del presidente de la Mesa, quien bajo su responsabilidad lo hará llegar, antes del siguiente domingo, al Comité Electoral Municipal, o al Delegado Municipal Electoral en su caso. Las copias de tal documentación quedarán en poder del presidente de la Mesa.

Artículo 47. Los representantes de los partidos políticos y de las planillas tendrán derecho a que se les entregue copia certificada del resultado del escrutinio. Dichas copias deberán extenderse a los solicitantes después de levantada el acta, y no causarán impuesto alguno.

Artículo 48. El Secretario de la Mesa tiene obligación de dar entrada a las protestas de los integrantes de las planillas y de los representantes de éstas y de los partidos políticos, acreditados ante la casilla, que presenten debidamente registrado su nombramiento.

Artículo 49. Concluidas las labores de las casillas, los representantes de los partidos o de las planillas podrán exigir todas las garantías necesarias para la debida seguridad de los documentos electorales.

Los integrantes de las planillas o sus representantes tendrán derecho a que se les expida copia de todas las actas levantadas en casillas, comités municipales y Comisión electoral con motivo del proceso electoral.

Artículo 50. Dentro de los tres días siguientes al de la elección, los Delegados Electorales procederán en los términos de la fracción VII del artículo 17 de esta Ley, y remitirán la documentación al Comité municipal correspondiente.

Artículo 51. El domingo siguiente a las elecciones, los Comités Electorales Municipales harán el cómputo de los votos emitidos, levantarán las actas correspondientes, expedirán las declaratorias respectivas en favor de la planilla que haya obtenido mayoría de votos y remitirán toda la documentación a la Comisión Electoral del Territorio con un informe detallado sobre los resultados de las elecciones. La Comisión Electoral del Territorio una vez registradas las constancias de mayoría de votos, enviará la documentación relativa a la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, rindiendo un informe de ello al Gobernador del Territorio.

Artículo 52. Dentro de los primeros quince días del mes de diciembre la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, erigida en Colegio Electoral, calificará las elecciones y resolverá sobre la validez o nulidad de las mismas y, en su caso declarará electos para los distintos cargos de los ayuntamientos a los ciudadanos que hayan obtenido mayoría de votos. Su resolución será definitiva e inatacable.

Artículo 53. Los Ayuntamientos rendirán la protesta de Ley ante el Gobernador del Territorio o sus representantes y las Autoridades Municipales salientes, y se declararán legítimamente instalados para iniciar su período ordinario a partir del primero de enero del año siguiente al de las elecciones.

CAPITULO VII

De la nulidad de las elecciones

Artículo 54. La votación recibida en una casilla electoral será nula:

I. Cuando se haya instalado la casilla electoral en distinto lugar al señalado y en condiciones diferentes a las establecidas por esta ley;

II. Cuando haya mediado cohecho, soborno o presión de alguna autoridad para obtener la votación en favor de determinada planilla;

III. Cuando se haya ejercido violencia sobre los electores en las casillas electorales por alguna autoridad o particular con el mismo objeto que indica la fracción anterior, y

IV. Por haber mediado error o dolo en la computación de los votos.

Artículo 55. Una elección será nula:

I. Por ser la planilla inelegible en virtud de carecer de los requisitos establecidos por la ley;

II. Cuando por medio de cohecho, soborno, presión o violencia sobre los electores se haya obtenido la mayoría de votos de la elección, y

III. Cuando se hayan cometido graves irregularidades en la preparación y desarrollo de toda la elección.

Artículo 56. Todo ciudadano sudcaliforniano, vecino de un Municipio tiene derecho a reclamar ante la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión la nulidad de la elección.

Artículo 57. Los partidos políticos y sus candidatos tienen igualmente el derecho consignado en el artículo anterior.

Artículo 58. La reclamación de la nulidad podrá interponerse en tanto que la elección contra la cual va dirigida, no haya sido calificada por la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.

Estas reclamaciones no estarán sujetas a formalidad alguna y no causarán ningún impuesto.

CAPITULO VIII

De las sanciones

Artículo 59. Se impondrá multa de diez a trescientos pesos o prisión de tres días a seis meses, o ambas sanciones, a juicio del juez, y suspensión de derechos políticos por un año:

I. Al que, sin causa justificada, se abstenga de inscribirse en el padrón electoral que le corresponda, de votar en las elecciones a que se refiere esta ley o se niegue a desempeñar las funciones electorales que se le encomienden;

II. Al que manifieste datos falsos para el registro de votantes o intente registrarse más de una vez;

III. Al que el día de la elección haga propaganda política en favor de alguna planilla o partido que la sostenga, en las casillas electorales o en cualquier otro lugar que diste menos de doscientos metros de la misma;

IV. A toda persona, sea o no elector, que se presente a una casilla electoral portando armas;

V. Al que ejercite una acción de nulidad de la votación en una casilla o de una elección con manifiesta temeridad o mala fe, y

VI. A los notarios públicos o a quienes desempeñen sus funciones por ministerio de la ley que, sin causa justificada, se nieguen a dar fe de los actos en que sea necesaria o posible su intervención de acuerdo con las disposiciones de esta ley.

Artículo 60. Se impondrá prisión de un mes a un año y suspensión de derechos políticos de dos a seis años, o ambas, a juicio del juez:

I. Al que por cualquier medio impida que otro se inscriba en el padrón electoral, vote en las elecciones o desempeñe las funciones electorales que se le encomienden. Si se empleare la violencia física, tumulto o motín, se duplicará la pena;

II. Al que ilícitamente obtenga la inscripción o la cancelación de un nombre en el padrón electoral;

III. Al que vote dos veces en la misma o en distinta casilla o suplante a otro en tal operación electoral;

IV. Al que teniendo bajo su autoridad o dependencia económica electores, pretenda obligarlos o los obligue a votar por determinada planilla;

V. Al que falsifique, altere, sustraiga o destruya en cualquier forma las credenciales para votantes;

VI. Al que en una elección compre o venda un voto o presente una boleta falsa, y

VII. A los funcionarios encargados del Registro Civil que omitan informar a la Delegación del Registro Nacional de Electores o a las autoridades electorales sobre las defunciones de que tengan conocimiento, así como aquellos casos en que, por mayoría de edad o matrimonio, las personas reúnan los requisitos y edad necesarios para ser considerados como electores.

Artículo 61. Cualquier otra irregularidad que se presente en el proceso electoral, se estará a los dispuesto en la parte conducente de la Ley Electoral Federal.

CAPITULO IX

Disposiciones generales

Artículo 62. Las autoridades federales, locales y municipales, están obligadas a proporcionar a la Comisión Electoral del Territorio y a sus dependencias, los informes y las certificaciones que les sean solicitados en relación con el proceso electoral.

Artículo 63. Todos los organismos electorales podrán designar los auxiliares que juzguen necesarios para el mejor desempeño de sus labores, señalándoles expresamente sus funciones.

Artículo 64. Las fuerzas armadas de la Federación, del Territorio y de los Municipios, deberán prestar el auxilio que la Comisión Electoral del Territorio y los demás organismos y funcionarios electorales requieran, conforme a esta ley, para asegurar el orden y garantizar el proceso electoral.

Artículo 65. En todo lo no previsto por esta Ley, se estará a lo dispuesto en lo conducente por la Ley Electoral Federal.

TRANSITORIO Artículo único. La presente Ley entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Federación. Sala de Sesiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., 27 de enero de 1971. - 1a. Gobernación: Octavio Sentíes G. - Luis H. Ducoing Gamba. - Rodolfo Sánchez Cruz. - Juan Moisés Calleja García. - 1a. Puntos Constitucionales: Octavio Sentíes G. - Luis H. Ducoing Gamba. - Ignacio González Rebolledo. - Alejandro Peraza Uribe. - Estudios Legislativos: Santiago Roel García, Presidente. - J. Carlos Osorio Aguilar, Secretario. - Sección Constitucional: Luis H. Ducoing Gamba. - Moisés Ochoa Campos. - Francisco Ortiz Mendoza.

- Trámite: Primera lectura.

COMPARECENCIA DEL C. SECRETARIO DE SALUBRIDAD Y ASISTENCIA

El C. Presidente: Esta Presidencia se permite interrumpir el Orden del Día en cumplimiento del Acuerdo de esta honorable Cámara de Diputados, que tomó en la sesión del día 19 del presente mes para recibir en esta fecha al ciudadano Secretario de Salubridad y Asistencia, doctor Jorge Jiménez Cantú. Por tanto, conforme a lo dispuesto por el artículo 196 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General, se designan en comisión para introducir al ciudadano Secretario de Salubridad y Asistencia a este Salón, a los siguientes ciudadanos diputados: Octavio Sentíes Gómez, Jorge Cruickshank García, Juan Landerreche Obregón, Juan Barragán Rodríguez, José Rivas Guzmán y Román Ferrat Solá.

(La Comisión cumple su cometido.)

(Aplausos.)

En sesión efectuada el día 19 del presente mes, con motivo de la presentación de la Iniciativa de Decreto para adicionar la base 4a, de la fracción XVI, del artículo 73, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, enviada a esta Cámara de Diputados por el ciudadano presidente de la República, fue aprobada una proposición en la que se solicitó la comparecencia del ciudadano Secretario de Salubridad y Asistencia, con el propósito de que tenga a bien ilustrar a esta Representación Nacional, acerca de los motivos y alcances de la iniciativa antes mencionada y que fue formalmente comunicada al Poder Ejecutivo Federal.

Previo el Acuerdo favorable del ciudadano Presidente de la República recaído a la solicitud antes mencionada, es como ahora comparece ante esta honorable Cámara de Diputados, el ciudadano Secretario de Salubridad y Asistencia. En consecuencia tiene la palabra el ciudadano doctor Jorge Jiménez Cantú, Secretario de Salubridad y Asistencia.

- El C. Secretario de Salubridad y Asistencia, doctor Jorge Jiménez, Cantú:

"Señor Presidente del Congreso de la Unión, Honorable Cámara de Diputados de la Cuadragésima Octava Legislatura:

Comparezco ante esta Honorable Cámara para informar, con fundamento en el artículo 93 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, acerca del alcance y los propósitos de la iniciativa de adiciones a la base 4a. de la fracción XVI del artículo 73 constitucional, que presentó a la consideración de vuestra soberanía el señor Presidente de la República, con cuya autorización tengo el honor de estar presente en este recinto legislativo.

La salud individual y colectiva es una de la máximas aspiraciones del progreso y de justicia.

La salud se conserva, se fortalece y se mejora en la medida que el hombre responde al contenido de su propia naturaleza y alcanza un estado de equilibrio dinámico en la totalidad de sus funciones vitales.

En la esfera mental: el pleno ejercicio de sus facultades directoras lo proyectan y al mismo tiempo lo identifican como ente social; como ser ineludiblemente productivo, dotado de capacidad creadora; con ingenio para transformar las condiciones ambientales en su edificación y su provecho.

El hombre debe hallarse espiritualmente sano para poder convivir en paz con sus semejantes; dotado de compresión para reflexionar en que los fenómenos profundos de su emoción y de sus deseos, de sus anhelos y de sus esperanzas; de sus alegrías y sus tristezas, son de la misma índole que aquellos que se debaten en el alma de su prójimo y que por ello, el existir reclama la plena identificación de sentimientos, de impulsos y acciones conciliadoras y libres para descubrir nuevos horizontes vitales en que se alcance un mayor número de satisfactores comunes y se reduzcan al menor número las dolencias colectivas.

En el orden físico, la salud de los hombres y de los pueblos, se identifican con el poder para resistir a las agresiones del ambiente; con la capacidad de adaptación y a la vez con el poder para desarrollar las actividades necesarias a fin de transformar las condiciones circundantes en factores de crecimiento y de fortalecimiento orgánico.

El hombre es, por esencia, dominador de las circunstancias agresivas de su ambiente y la salud le permite salir victorioso en su lucha consuetudinaria.

La vida es auténtica cuando esta, llena de satisfacciones y capaz de alcanzar objetivos trascendentes.

La vida es precaria cuando no trasciende y se limita, por falta de vigor, a un desarrollo meramente vegetativo en que los ideales y objetivos sólo se alcanzan en la imaginación porque una realidad concreta y dura distorsiona las posibilidades de un desarrollo pleno.

Todos los pueblos trabajan y luchan por su bienestar. El bienestar, se logra con el trabajo y con el auxilio de la ciencia y de la técnica; con el conocimiento, la cultura y la sabia aplicación, en el ejercicio, de disciplinas económicas, técnicas y jurídicas.

El conocimiento de la realidad y de nuestra evolución histórica, el análisis y valoración de los fenómenos actuales y de su proyección futura, son indispensables para poder realizar la obra conjunta que el progreso reclama.

El hombre es poseedor de instrumentos cada vez más poderosos que utiliza para dominar a una naturaleza hostil, pero, a la vez el desarrollo de la técnica y de sus industrias lo han ido alejando de su naturaleza, y sus instrumentos de dominio, parece, como si se volvieran en su contra, al surgir una creciente amenaza como producto de sus propias obras.

El crecimiento de la sociedad industrial, en los grandes centros urbanos del mundo, aprisiona grandes conglomerados humanos, lo que les hace la vida más complicada y, en cierta forma más difícil para que respondan a los requerimientos esenciales, que le confieren sentido y consistencia a nuestra especie.

Los agentes vitales, como son el agua y el aire, se convierten en vehículos de sustancias peligrosas para la integridad y la salud del individuo.

La contaminación del aire, del agua y de la tierra es el costo elevado y amenazante de la civilización actual. Constituye preocupación universal conocer las causas, las consecuencias, los peligros y la forma de evitarlas.

La negligencia o el descuido es causado por actitudes irresponsables que no encuadran con la ética y la buena política de los gobiernos.

No prever equivale a dejar de actuar. No actuar con oportunidad y con acierto es propia actitud pasiva y punible.

La política de un gobierno sabio y progresista exige el análisis fino de los problemas y el planteamiento claro y valiente de las soluciones que preparen la acción inmediata, profunda y bien dirigida.

Estas son las características del actual Régimen del señor Presidente Luis Echeverría.

La autenticidad del Régimen se traduce por la serena y enérgica aceptación del compromiso de servir al pueblo, por la abierta comprensión de todos los problemas que constituyen el complejo social en desarrollo acelerado y por la necesidad imperiosa de aprovechar la totalidad de los recursos en un concierto organizado de acción donde cada quien cumpla con un elevado deber para consigo mismo y para con la colectividad entera a que pertenece. Sólo así, es comprensible la solidaridad impregnada de espíritu revolucionario.

Por esta razón ha querido el señor Presidente de la República que se amplíen las facultades del consejo de Salubridad General, para dictar normas que coadyuven a un mejoramiento de la salud colectiva y eviten agresiones y deterioros que en lo futuro pueden alcanzar trastornos masivos de consecuencias desastrosas.

La paulatina contaminación del aire, de las aguas y de las tierras ya no es un tema de especulación científica, sino de exigente atención gubernamental y de la sociedad por entero.

El Congreso Constituyente de 1971 creó un organismo superior con facultades para dictar las normas pertinentes de acuerdo con el medio y su época, para preservar la salud y para impedir el envenenamiento y la degeneración de la especie. Su concepción fue clara y visionaria de circunstancias futuras.

Entonces no se producían los fenómenos que hoy tenemos la oportunidad de corroborar todos los días. Entonces no hubiera sido fácilmente comprensible en nuestro medio considerar los peligros de la contaminación atmosférica que ya se sufría en otros países lentamente industrializados.

Ahora, no hablar de ello y no preocuparse por abordar el tema, sería intolerable. Limitar las facultades del Gobierno de la República para legislar en la materia sería incomprensible.

No se trata de exagerar la magnitud de un fenómeno para generar alarma o especular con un sensacionalismo de moda. Se trata de encarar frontalmente un problema, estudiarlo a fondo y convocar a todos los organismos estatales y de la iniciativa privada con capacidad para intervenir en el estudio o comprometidos en el mismo problema, para estructurar una política de acción.

A ningún organismo le corresponde actuar con exclusividad. La responsabilidad compete a todos, a unos con mayor intensidad que a otros, pero la responsabilidad es plena.

El Gobierno del licenciado Luis Echeverría tiene la certeza de poder actuar y la obligación que ello implica.

La Ciudad de México y su Área Metropolitana comprenden la quinta parte de la población de la República: diez millones de habitantes que no han llegado al límite de su desarrollo y que tienen derecho a ser protegidos por una política de salud pública.

689,000 vehículos automotores o sea la cuarta parte del total que existen en la República, circulan en ésta zona contribuyendo a la contaminación ambiental, pero siendo a la vez indispensables al flujo vital del gran conglomerado urbano.

Miles de industrias se concentran en el área metropolitana de la ciudad de México. Pocas son las industrias sin humos y polvos y sin emisiones contaminantes del agua.

Cientos de industrias y de establecimientos de diversa índole contribuyen a la contaminación del aire y de las aguas.

Muy pocas empresas, en forma espontánea, se han preocupado por abatir los índices de esa contaminación; pero numerosos dirigentes y Consejos están convencidos de que deben participar pronta, eficazmente y de buena voluntad, inspirados en sentidos humanos y patrióticos, en la lucha contra la contaminación.

Bastará mencionar algunos datos registrados para ilustrar la importancia del fenómeno que nos ocupa:

Para los servicios y artículos de consumo que demanda el crecimiento de energía que, básicamente, se obtiene con más de un 90% del producto de combustiones, las que, en grado y en cantidad diversa, contaminan el aire, ya por el combustible utilizado, ya por el aparato de combustión o por su operación.

Se colectan diariamente ocho mil toneladas de basura que se disponen en basureros a cielo abierto y que aveces se quema. Estas fogatas contribuyen al problema.

El 87% de los automóviles consumen gasolina: el resto usa diesel y otros combustibles. Los aviones y las locomotoras contribuyen asimismo a la polución atmosférica.

Se distribuyen en el Valle de México diariamente 14,000 metros cúbicos de energéticos líquidos derivados del petróleo, sin contar el gas. Por el consumo de 7,600 metros cúbicos de gasolinas y 1,000 metros cúbicos de combustible diesel, se lanzan estimativamente al aire del Valle de México por los escapes de los vehículos que circulan, 3,750 toneladas de contaminantes al día entre los que tenemos:

Monóxido de carbono 3.400 toneladas

Hidrocarburos 250 toneladas

Óxidos de nitrógeno 65 toneladas

Partículas 24 toneladas

Ácidos orgánico s 7 toneladas

Aldehídos 4 toneladas

además del producto del quemado de 2,000 litros de tetraetilo de plomo, que se adiciona a las gasolinas.

Las industrias contribuyen básicamente emitiendo hidrocarburos, óxidos de azufre y nitrógeno, partículas, y demás contaminantes. No se cuantifican aquí los polvos inertes de las fábricas de cemento, que son muy considerables.

Las tolvaneras son el producto de movimientos de aire que ponen en suspensión y arrastran partículas diversas, principalmente el polvo, de sitios secos o erosionados de los que abundan en el Valle.

Las concentraciones altas de algunos contaminantes causan el incremento de los índices de mortalidad y morbilidad en individuos con enfermedades cardíacas o respiratorias. Se encuentran personas afectadas por alergias, conjuntivitis, bronquitis y traqueitis en zonas donde la contaminación del aire es sostenida. En individuos susceptibles se origina una reducción en la resistencia a las enfermedades y algunos padecimientos preexistentes se agravan con la contaminación del aire.

En la Secretaría de Salubridad y Asistencia, desde 1967 se desarrolla un programa para estudiar la contaminación atmosférica, con bases en un convenio suscrito por la Organización Panamericana de la Salud y el Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos; al efecto, la Dirección de Higiene del Ambiente opera 11 Estaciones de muestreo continuo de indicadores de la contaminación en el Valle de México y ha proporcionado adiestramiento y equipo para que se operen estaciones en Ciudad Juárez, en Guadalajara y en Monterrey. Las estaciones forman parte de una red multinacional de muestreo normalizado de la contaminación del aire.

Los resultados obtenidos señalan en ocasiones cifras peligrosamente altas de algunos contaminantes, lo que ha obligado a meditar sobre la urgencia de establecer un programa adecuado de control.

Creemos que no será menester forzar a nadie para comprender y responder a lo que se manifiesta tan ostensiblemente y que el pueblo con justicia reclama.

En el intercambio de ideas y opiniones sinceras y cordiales se percibe la buena disposición de todos. La espera no es pasiva, se reciben iniciativas, estudios y se revisan experiencias y documentos de otros países que han alcanzado más que nosotros en la búsqueda de soluciones y aplicación de métodos de alta tecnología.

Esto nos permite considerar que no partiremos de cero, sino que nuestro avance tendrá como punto de partida las metas alcanzadas hasta la fecha.

Ampliar la facultad del Ejecutivo, concretamente del Consejo de Salubridad General, que depende en forma directa del señor Presidente de la República, para normar la política de una acción más adecuada a nuestro tiempo y nuestros recursos, constituye una garantía más de que el fenómeno que nos ocupa será abordado con la máxima dedicación.

Los organismos de estado actuarán sinérgicamente con nuestros Institutos de Investigación Tecnológica y con la propia iniciativa privada que congrega especialistas muy bien calificados en todas las ramas de las ciencias.

El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, de creación reciente, habrá de participar en primer plano, en virtud de la índole de sus objetivos y premisas.

Es indispensable señalar que el problema de la contaminación ambiental es particularmente grave en la Capital de la República, pero no exclusivo de ésta. Emerge en otras ciudades y la contaminación de las aguas se evidencia en ríos, lagos y terrenos de cultivo, produciendo alteraciones ecológicas que sorprenden y preocupan a nuestros campesinos, a nuestros hombres de ciencia y a las autoridades.

Esto determina meditar en una política preventiva de control, de mejoramiento y en su caso, de restauración de las condiciones del ambiente para volver al equilibrio necesario.

Es menester procurar las mejores condiciones del medio para que los organismos se desarrollen y permitan que el hombre disfrute plenamente del esfuerzo de su trabajo y que los recursos naturales de que dispone respondan a sus esperanzas. Por todo esto se consigna la necesidad de legislar en materia de prevención y control de la contaminación ambiental, de acuerdo con el desarrollo demográfico y la trayectoria ascendente de nuestro país.

La vida y la salud de la sociedad urbana y rural, su bienestar físico y mental, son condiciones indispensables para generar progreso verdadero. La calidad del aire, del agua y de la tierra, la conservación de suelos, son factores determinantes para la proliferación de la flora y de la fauna como bienes de disfrute y seguridad de otros órdenes productivos que se manifiestan en beneficios comunitarios. No podrá tolerarse que intereses circunscritos a grupos particulares o minorías perjudiquen intereses mayoritarios o pongan en peligro recursos que pertenecen a la Nación.

En todo caso, es menester que el estudio y la información, originen programas educativos que

preparen y orienten, para poder aplicar los mejores procedimientos preventivos. Conviene subrayar la importancia de la tesis que el señor Presidente de la República viene sosteniendo relativa a la necesaria descentralización industrial hacia nuevas zonas estratégicamente situadas, de acuerdo con una planeación razonable, para hacer posible el desarrollo de constelaciones de fábricas afines, destinadas a impulsar nuevos núcleos y polos de desarrollo que evitarán el cada vez más complicado funcionamiento vial urbano y las aglomeraciones sin servicios con las deficiencias sanitarias y problemas sociales que traen aparejados.

El fenómeno de la contaminación ambiental, como consecuencia indirecta del importante desarrollo económico de México, constituye desde el punto de vista de la salud pública un motivo de justificada preocupación, y es por ello que el Ejecutivo ha considerado inaplazable el proponer reformas a nuestra legislación vigente y dictar disposiciones administrativas cuyo propósito fundamental es permitir legalmente una acción sistemática y debidamente planeada para prevenir y abatir la contaminación ambiental, sin detrimento del desarrollo económico del país, incluyendo su creciente y necesaria industrialización.

Sólo una acción sistemática y coordinada que comprenda a los diversos niveles administrativos y se complemente con la colaboración decidida de toda la población podría alcanzar los resultados que se pretenden. Pero, para ello, se ha considerado indispensable establecer las bases legales necesarias.

Así la Administración Pública podrá actuar con la flexibilidad, amplitud y energía, que requiera la solución del problema sin apartarse en su acción de las normas legales y del régimen de derecho en que vivimos.

La legislación vigente en la materia, es, a la fecha, dispersa e insuficiente, aun cuando ha permitido a las autoridades sanitarias adoptar diversas medidas administrativas cuyos resultados pueden considerarse benéficos. En verdad la magnitud actual del problema hace imperativa su revisión para actualizar y sistematizar las normas jurídicas en este campo.

La iniciativa que ahora se encuentra a consideración de esta honorable Cámara, tiene como propósito otorgar en forma expresa al Consejo de Salubridad General la facultad de poner en vigor medidas para prevenir y combatir la contaminación ambiental, destacando esta atribución, por su importancia, en la misma forma en la que el histórico Congreso Constituyente de 1917 lo hizo con la Campaña contra el alcoholismo y la venta de sustancias que envenenan al individuo y degeneran la raza.

Ciertamente, la base 1a. de la fracción XVI da al Consejo la atribución de dictar disposiciones generales de carácter reglamentario en todo el país, entre las cuales podrán incluirse aquellas destinadas a prevenir o reducir la contaminación ambiental. Pero por una parte, las interpretaciones sobre los alcances de esta base 1a. han sido muy diversos, teniendo algunos de ellos un carácter restrictivo, que no aprobamos, y, por la otra, la jerarquía de las disposiciones a que se refiere la base 4a. es mayor al equipararlos indirectamente, en diversas ocasiones, a las normas contenidas en las leyes.

Desde luego que el propósito de la iniciativa no es de ninguna manera el de interferir con las amplias facultades legislativas que corresponden en materia de salubridad general al Honorable Congreso de la Unión. Se pretende, solamente, sentar las bases para que en los recesos de este Cuerpo Legislativo, el Consejo, que es de una dependencia directa del Ejecutivo Federal, pueda, si la urgencia y la gravedad del caso así lo amerita, tomar las medidas pertinentes, que serán después revisadas por el propio Congreso. Parece conveniente señalar que la experiencia histórica nos demuestra que las facultades excepcionales que otorgó el Constituyente a las autoridades sanitarias, han sido ejercidas con prudencia y moderación, sin ocasionar ningún desajuste institucional.

Es preciso aclarar que la adición a la base 4a. no constituye la única medida legislativa o reglamentaria que se estima necesaria para el aspecto legal de la Campaña tendiente a prevenir y reducir la contaminación ambiental. Se encuentra en estudio un anteproyecto de Código Sanitario, que, en su oportunidad, si así lo tiene a bien el señor Presidente de la República, será elevado a la consideración de Vuestra Soberanía; en ese cuerpo legal se dará la amplitud necesaria al problema que nos ocupa; de la misma manera, el Consejo de Salubridad General podría adoptar y proponer las disposiciones pertinentes para actualizar las normas jurídicas en este campo.

El Consejo es un órgano de alto nivel técnico y administrativo y de una larga y valiosa tradición histórica. Sus tareas deben estar perfectamente integradas a las de todas las autoridades que colaboran en el programa de promoción de la salud pública. No solamente la Secretaría de Salubridad y Asistencia y sus Servicios Coordinados a nivel estatal y de territorios, participan activamente en estas labores, sino que también diversos organismos descentralizados aportan su colaboración en esta magna tarea. También debemos considerar el esfuerzo de los particulares como valiosa colaboración a este plan de largo alcance, en materia de salubridad.

Señores diputados:

El honor que me ha conferido el señor Presidente al invitarme a compartir la responsabilidad del Ejecutivo y que se relaciona con la salud de nuestro pueblo me estimula y me obliga a responder a tan elevada tarea en la coordinación de los recursos físicos, administrativos y fundamentalmente humanos que se congregan en la responsabilidad común que se nos confiere. México cuenta con talentos sobresalientes, hombres de ciencia cuya preparación y conocimientos están a la altura de los de cualquier país más rico y evolucionado. Tenemos fe en estos magníficos hombres de ciencia y de trabajadores esforzados impregnados de amor a México, como lo demuestra la fecunda trayectoria de sus existencias.

Sabemos sobradamente que nuestros trabajadores de la ciudad y del campo tienen características semejantes y hondo sentido de la solidaridad necesaria, para hacer de nuestro país la patria que ambicionamos todos.

El señor Presidente de la República nos comunica el mayor estímulo con su ejemplo y con su dedicación plena a la tarea de proyectar, como él lo desea, el futuro promisorio para las nuevas generaciones que habrán de vivir en un mundo más limpio, más seguro, más productivo, con mayor justicia y más feliz.

Agradezco a ustedes, señores diputados, al Congreso de la Unión, la oportunidad que me han brindado para convivir estos momentos en relación fraternal y respetuosa con la elevada representación que ustedes ostentan.

Nuestra modesta contribución al análisis de un tema de nuestra época, refrenda el contenido democrático de esta Asamblea en que cada día se hacen más claros los reflejos de la doctrina que sirvió de inspiración a los constituyentes de 1917 y que tuvo su origen en los anhelos de justicia social y en la entraña misma se la Revolución Mexicana. (Aplausos.)

El C. Presidente: Esta Presidencia informa que por conducto de la Secretaría, varios ciudadanos diputados han manifestado su deseo de formular algunas preguntas al ciudadano Secretario de Salubridad y Asistencia y a cuyos nombres a continuación se va a dar lectura:

"Ciudadanos diputados que han solicitado hacer uso de la palabra, para formular preguntas al ciudadano Secretario de Salubridad y Asistencia:

Enrique Díaz Nava, Rafael Argüelles Sánchez, Juan Manuel López Sanabria, Maximiliano León Murillo, Salvador Hernández Vela, Francisco Navarro Veloz, Roberto Flores Granados, general Juan Barragán Rodríguez, Felipe Cerecedo López, Luis Velázquez Jaacks, Diamantina Reyes Esparza, Hiram Escudero Alvarez, Roberto Avila González, Emilia Dorado Baltazar, Jaime Pineda Salgado, Guillermo Islas Olguín, y Raymundo Flores Bernal.

DIALOGO DEL C. SECRETARIO DE

SALUBRIDAD Y ASISTENCIA, SEÑOR

DOCTOR JORGE JIMÉNEZ CANTÚ, CON LOS

CC. DIPUTADOS DE LA XLVIII

LEGISLATURA.

El C. Presidente: En consecuencia, tiene la palabra el diputado Enrique Díaz Nava.

El C. Díaz Nava, Enrique: (Miembro del Partido Revolucionario Institucional y diputado por el quinto distrito electoral del Estado de México).

Señor doctor Jorge Jiménez Cantú, Secretario de Salubridad y Asistencia Pública: La exposición que usted tan gentilmente acaba de hacernos sobre las motivaciones de la iniciativa enviada por el Presidente de la República para que se adicione la base cuarta de la fracción XVI del artículo 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, será de gran utilidad a las comisiones dictaminadoras y a la asamblea en general. Su amplia explicación y exposición de motivos son suficientemente ilustrativas sobre el particular. No obstante yo quisiera formular a usted la siguiente pregunta: El excesivo número de vehículos que circulan en nuestras principales ciudades, sobre todo en esta capital, y las concentraciones extraordinarias de esos vehículos aunadas a lo angosto de las calles, ¿harían pensar en la necesidad de alguna reforma urbanística, para disminuir los peligros del smog?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Señor diputado don Enrique Díaz Nava: Considero de sumo interés su pregunta. Debo decirle que no se inicia aquí un período de preocupación por el problema que a usted planteo. Esta preocupación ha tenido antecedentes en los regímenes anteriores. A todos nos consta que la ciudad de México, en su desarrollo, ha cambiado; ha cambiado mucho en relación con aquella ciudad que conocimos cuando éramos pequeños. Se han planeado nuevos sistemas viales, que todos conocemos y que, si bien es cierto que cada día son más insuficientes, esto no quiere decir que sean buenos o dejen de ser buenos. Pueden ser mejores y los gobiernos se preocupan por desarrollar una red más amplia, más eficaz y más eficiente. Nuestra ciudad y en general el área metropolitana tiene dos clases de crecimiento: un crecimiento exógeno, radial; un crecimiento hacia afuera y un crecimiento interior, un crecimiento endógeno. Por lo que se refiere al crecimiento radial, da la impresión el fenómeno de ser más fácil en su desarrollo y así hemos visto cómo han proliferado núcleos de población de alta y baja densidad; y endógenamente también hemos tenido oportunidad de ver cómo han desaparecido casi por entero barriadas que han dado lugar a nuevos núcleos de población, en áreas ampliamente planeadas; áreas de servicios públicos y comerciales, además de jardines, parques, pequeños pulmones y lugares de recreo que permiten a los habitantes, en estos nuevos núcleos urbanos, vivir en condiciones mucho mejores a como habitan todavía en el centro de nuestra ciudad diversos conglomerados, núcleos de población hacinados allí. Indudablemente que el problema lo deben resolver las autoridades del Distrito Federal, pero es también preocupación del gobierno federal proyectar el desarrollo de las ciudades futuras, de las ciudades satélites, de las ciudades paralelas, algunas dentro y fuera del Valle de México.

Así es que contesto su pregunta, señor diputado Enrique Díaz Nava, diciéndole que sí constituye una preocupación constante y que se trata de una planeación vigente en marcha, la procuración de espacios abiertos, la adopción de nuevas técnicas en el tránsito de los vehículos, con el objeto de que no irrumpan en los lugares más agobiados por masas mayores que las que actualmente conocemos. Efectivamente, señor diputado don Enrique Díaz Nava, este plan de desarrollo, este plan de transformación hacia adentro y hacia afuera de nuestra ciudad, está en marcha. (Aplausos.)

El C. Díaz Nava, Enrique: Muchas gracias señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Rafael Argüelles Sánchez.

El C. Argüelles Sánchez, Rafael: (Rafael Argüelles Sánchez, diputado por el distrito decimosexto del Distrito Federal, perteneciente al Partido Revolucionario Institucional).

Señor Secretario: Nos hemos acostumbrado en los últimos años a escuchar una palabra que no figuraba en el vocabulario de nuestros padres, esmog. Aunque hemos entendido plenamente su clara e interesante exposición, ¿quisiera usted, sin embargo, ser tan amable de darnos mayor información sobre los elementos del llamado esmog y de la forma en que dañan la salud de los habitantes de las grandes ciudades?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto trataré de contestar a la pregunta que me hace el señor diputado Rafael Argüelles Sánchez. Esta palabra esmog, es una palabra compuesta por las voces smoke (humo) y fog (niebla). Esta palabra tiene particularmente su expresión característica en países que no disfrutan de la atmósfera y del cielo limpio de nuestro México, concretamente del Valle de México, un tanto contaminado, un tanto opaco, pero todavía muy bello. La niebla, por ejemplo, de Londres, constituye un factor muy importante en la integración de este complejo que le llaman esmog. Los humos de todas clases, los polvos inertes son ingredientes de este complejo de perturbación de las condiciones atmosféricas, las condiciones del aire. Contestando a su pregunta en relación con los principales factores de carácter tóxico, de carácter agresivo del esmog, se mencionan, en primer lugar, los humos o los gases que desprenden los vehículos automotores. Esta es la mayor fuente de contaminación ambiental. De éstos hay motores de gas que queman gasolina, otros que queman diesel. Y la referencia fundamental radica en el hecho de que los combustibles, por regla general, no son combustibles muy puros; hay algunos que tienen mayor cantidad de impurezas que otros. La combustión cuando es perfecta prácticamente no es contaminante; se arrojan por los escapes cantidades pequeñisimas, mínimas, de monóxido de carbono y fundamentalmente, de bióxido de carbono.

Todos sabemos que en el substratum de una combustión, cuando ésta es perfecta, interviene el oxígeno, y, como producto de esa combustión, emana el bióxido de carbono que, en sí, no es tóxico. Cuando la combustión no es completa, a 2,240 metros, que es la altura de la ciudad de México, tenemos en proporción menos cantidad de oxígeno que al nivel del mar. Esta deficiencia de oxígeno, en las cámaras de combustiones, determina que la combustión sea imperfecta y, consecuentemente, las emanaciones de los escapes sean más ricas en monóxido de carbono. Este es uno de los gases mayormente contaminantes aquí, en nuestro medio, particularmente en el primer cuadro de la ciudad, donde - como nos decía el señor diputado Díaz Nava - las calles son angostas, los vehículos circulan a velocidades muy bajas, frecuentemente se paran los motores, hay sobrecalentamientos y las combustiones, por ende, son imperfectas.

Así aumenta considerablemente la densidad, la proporción de monóxido de carbono. Existen otros productos deletéreos derivados de combustiones imperfectas en hidrocarburos; fundamentalmente, entre ellas, se menciona una substancia que se le ha querido dar un factor, o una preponderancia en la producción de cáncer, que es el benzopireno, que también existe en concentraciones mayores o menores, de acuerdo con la intensidad misma de la combustión. Por otra parte, entre los factores intoxicantes peligrosos se mencionan los óxidos de azufre. Estos no existen cuando el combustible es un combustible muy puro. Cuando los combustibles tienen gran cantidad de impurezas, entonces aquéllos abundan, pero no solamente ésta es la fuente. En algunas metalúrgicas, particularmente donde se beneficia el cobre, puede haber desprendimientos de óxidos, de bióxido, de trióxido de azufre en cantidades importantes. En aquellos lugares donde la niebla abunda, ésta equivale a un aerosol. La forman vesículas pequeñisimas, que oscilan entre media micra y veinte micras; cuando es de tamaño mayor a la vesícula, entonces, por la acción de la gravedad, cae, se sedimenta. Si es demasiado pequeña, la vesícula permanece en el aire, flotando, y si en esa misma atmósfera se encuentra - pongamos por caso - el trióxido de azufre, el mismo se pone en contacto con la vesícula pequeñisima de humedad y, por acciones químicas, eléctricas, por la acción de la luz inclusive y de otros factores, puede producirse ácido sulfúrico. Podemos imaginar lo peligroso que resulta el fenómeno, si se trata de personas especialmente débiles o enfermas, predispuestas a padecimientos particularmente cardiorrespiratorias, de bajas defensas.

El hecho de que respiren en una atmósfera contaminada por un ácido de tanta agresividad las daña gravemente. Parece que éste es el fenómeno que explica el gran desastre que ocurrió hace algunos años, en el Valle del Mos, en Bélgica, y la catástrofe que sobrevino en Londres, tengo entendido que allá por el invierno de 1958. Independientemente de estos contaminantes que, pudiéramos decir, son los más peligrosos, existen otros que siendo molestos, no llegan a alcanzar un grado de peligrosidad tan alto. Me refiero a los aldehídos, como asimismo a las acroleínas, que son sustancias mucho muy irritantes, particularmente de las mucosas y las conjuntivas. Existen otros contaminantes que son muy molestos, por sus olores fétidos, extraordinariamente desagradables, como ocurre con los que se desprenden de algunas fábricas de papel, en cantidades aun pequeñas, pero suficientes para contaminar el ambiente o producir esa molestia, como son los mercaptanos. Se mencionan, entre otros, el ozono, indicando que, a una mayor contaminación ambiental, es mayor la

cantidad de ozono. El monóxido de nitrógeno aparece también cuando las combustiones son muy abundantes, aun cuando sean perfectas. En resumen, señor diputado, éstas son algunas de las principales sustancias que contaminan el ambiente, además, obviamente, de los polvos inertes, como ya lo mencionábamos en el texto de nuestro escrito, como son partículas de polvo, partículas de cemento, de asbesto, etc. Ojalá que haya podido contestar su pregunta convenientemente. (Aplausos.)

El C. Argüelles Sánchez, Rafael: Muy atinada su respuesta, señor Secretario. Muchas gracias.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Juan Manuel López Sanabria.

El C. López Sanabria, Juan Manuel: (Diputado por el segundo distrito de Guanajuato, con cabecera en León; miembro del Partido Acción Nacional): Señor doctor Jiménez Cantú: los médicos especializados en alergia conocemos parcialmente el problema de la contaminación ambiental, ni siquiera en forma concreta. Estoy seguro, señor Secretario, que su presencia aquí servirá para que todos los señores diputados tengamos un conocimiento cabal, actualizado, sobre este grave problema de la contaminación ambiental y que, a través de la prensa nacional, también los particulares, todos los ciudadanos de México, se den cuenta del problema y ayuden y colaboren con las autoridades federales a resolverlo. Ya usted nos ha hablado, señor Secretario, de los daños orgánicos que acarrea la contaminación ambiental. Quisiera yo preguntarle si existen daños síquicos, derivados de esta misma contaminación ambiental y, también, derivados de la agitación de la vida moderna, que tiene relación con los conglomerados humanos de México, sobre todo en las grandes poblaciones. Usted también

nos ha hablado del Distrito Federal, que es la región que tiene el mayor problema. Quisiéramos saber qué otras poblaciones de la República también se encuentran en relación parecida con el Distrito Federal, y si ya el gobierno federal y los gobiernos estatales, o algunos particulares, organizan actualmente campañas para combatir la contaminación, y también, debido a que en el actual sexenio se pretende llevar ese combate como programa gubernamental, en qué forma pueden los particulares colaborar con la Secretaría a su muy digno cargo, con los demás organismos federales, a combatirlo.

El C. doctor Jorge Jiménez Cantú: Son muy interesantes todas sus preguntas, señor diputado Juan Manuel López Sanabria. Vamos a tratar de responderlas, en la forma más sucinta. En primer lugar, por lo que se refiere a las alergias, indudablemente que el esmog, que la contaminación ambiental no es el factor determinante y único de las mismas. La alergia constituye un síndrome complejo y obedece a muchos factores. Los alérgenos son múltiples. En las atmósferas más limpias, en los lugares más serenos, en los lugares de aire más puro, pueden presentarse alergias por diversas causas.

El asma, entre ellas, puede ser provocada, como todos ustedes saben, por el polen de muchas plantas. Por otra parte, la contaminación ambiental en las ciudades parece que es un factor coadyuvante para que se manifiesten las alergias con mayor facilidad; fundamentalmente: el asma y las alergias del aparato respiratorio. En relación con lo que usted me pregunta, si la contaminación del ambiente puede tener una repercusión síquica, le digo que determinadas substancias tóxicas actúan sobre el sistema nervioso, o afectan la contractilidad muscular. En ocasiones, no se sabe si el origen es una agresión contra el músculo o los centros nerviosos o a las vías de la conducción. Lo que sí se sabe es que motiva, frecuentemente, un estado de lasitud, agotamiento o quizá de una irritabilidad especial. En ello no solamente concurren los factores deletéreos y tóxicos, sino, como a todos seguramente nos sucede muy frecuentemente, participa también el ruido. Cabría añadirlo a los factores contaminantes del ambiente actual. Podríamos considerarlo también como un elemento constitutivo de la contaminación y a nadie escapa el hecho de que este tipo de contaminación ruidosa altera nuestras condiciones síquicas. Por lo que se refiere a su pregunta relativa a si hay otras ciudades donde ya se aprecie este fenómeno y se le mida, con el fin de calcular su peligrosidad, respondo afirmativamente. Ejemplos: Guadalajara y Monterrey. También los lugares donde hay refinerías.

En Poza Rica, como todos nosotros sabemos, en cierta ocasión se produjo un escape de ácido sulfhídrico que tuvo consecuencias lamentables. Y sí, le digo, contestando otra de sus preguntas, que ésta es una preocupación no solamente del Gobierno Federal, como en el caso, sino que es una preocupación de los gobiernos locales. Hemos dialogado con autoridades comprometidas en este problema y, contestando otra de sus preguntas, le diré que ellas, juntamente con al iniciativa privada, concurren a la solución de este problema y a evitar que se agrave. Ojalá haya contestado suficientemente su pregunta, señor diputado. (Aplausos.)

El C. López Sanabria, Juan Manuel: Estoy muy agradecido por su respuesta, señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Maximiliano León Murillo.

El C. León Murillo, Maximiliano: (Maximiliano León Murillo, diputado por el 14o. distrito del Distrito Federal, miembro del Partido Popular Socialista):

Señor Secretario: Permítame usted que abuse de su amabilidad y le formule dos cuestiones. La primera: ¿Está usted informado de que fue la reforma del 12 de noviembre de 1908 la que otorgó a la Federación la facultad de intervenir en materia de salubridad, ya que en la Constitución del 57 no existió originalmente esa facultad? Tenemos entendido que hay algunas omisiones constitucionales en relación con las actividades de la Secretaría de Salubridad y Asistencia. ¿No cree usted que es oportuno realizar todos los pasos necesarios para establecer la

constitucionalidad de esta Secretaría tan importante, para preservar la salud del pueblo? La segunda señor Secretario: La iniciativa que el señor Presidente de la República ha enviado al Congreso para adicionar la base IV de la fracción VI del artículo 73 constitucional, deriva de su preocupación por prevenir las enfermedades y por proteger la salud pública. La diputación del Partido Popular socialista quiere plantear a usted una preocupación.

Nosotros creemos que el criterio para atender los problemas de la salud de nuestro pueblo ha variado notablemente. Cuando el Constituyente estableció las normas respecto al Consejo de Salubridad General, se hablaba de epidemias, de invasión de enfermedades exóticas, pero a los padecimientos de nuestro pueblo se les consideraba males comunes. ¿No cree usted que es tiempo de reformar el contenido del artículo 73, a efecto de que, en función del desarrollo alcanzado por nuestro país, se legisle sobre las enfermedades endémicas, ya que éstas merman más vidas y degeneran a nuestros compatriotas?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto contesto al señor diputado Maximiliano León Murillo. Por lo que se refiere a su primera pregunta, acerca de la constitucionalidad de la Secretaría de Salubridad y Asistencia, consideramos que sería perfectamente aceptable que se consignara ya con el nombre que tiene, Secretaría de Salubridad y Asistencia. Sabemos que las funciones que realiza están contenidas en los propósitos mismos de nuestra Revolución, de nuestra Carta Magna. Efectivamente, el problema de la salubridad constituyó uno de los planteamientos en el orden social, a la altura de los grandes temas nacionales. A la salubridad, como consta en el artículo que actualmente se debate y en el artículo 123 constitucional, se le da un interés tan grande como puede ser el que se pretendió otorgar a la educación, a la Reforma Agraria y a la cuestión obrera. Se ha insistido ampliamente en ello: más aún, en algunos artículos, particularmente en aquel en que se dice que a los obreros se les debe proporcionar habitación suficiente, cómoda, higiénica, nos indica la previsión, la acción visionaria de los constituyentes al abarcar todo el ámbito de fenómenos que hemos visto en el desarrollo, en ocasiones magnífico, en nuestro medio. No sabemos si en un momento fuera necesario y conveniente compilar todos estos propósitos delineados ya en forma clara, animados de un gran espíritu de patriotismo y de sentido social; si fuera menester que se compilaran en una Secretaría que podría llevar el nombre de la Secretaría de la Salud Nacional. No veo, pues, ningún inconveniente; lo digo como opinión personal, para que, dentro del texto de la Constitución Política se mencione el nombre de la Secretaría de Salubridad y Asistencia, que ahí no figura, pese a que ya esta dependencia existe como función y existe como acción, fundamentalmente impregnada del sentido revolucionario de los constituyentes. Por lo que se refiere a la legislación más amplia - en relación con su segunda pregunta, señor diputado -, sobre enfermedades que se pudieran considerar endémicas o privativas de nuestro medio, podemos decir que eso ya está prácticamente configurado dentro de nuestro Código Sanitario, el cual cuenta con normas para el mejoramiento de la salud pública. por lo que toca a los padecimientos que podemos considerar azotes de nuestro medio o que lo fueron. Está, por ejemplo, el paludismo. Como ustedes recuerdan, en 1956 se inició la campaña antipalúdica. Entonces había aproximadamente dos millones y medio de palúdicos y morían 25 mil al año. Se estimaban las pérdidas en unos 600 millones de pesos al año. La extensión de la zona palúdica, en México, es aproximadamente del 56 al 58% del territorio nacional. Había en las áreas palúdicas, más intensamente atacadas entonces, alrededor de 13 millones y medio de habitantes. Actualmente, en esas mismas áreas, hay alrededor de 25 millones de habitantes. Si en 1956 se registraron 2 millones y medio de palúdicos y 25 mil muertos, catorce años después, gracias a una campaña extraordinaria - modelo en su género -, como es la que han realizado los gobiernos de la Revolución en su lucha contra el paludismo, los casos registrados de paludismo fueron, en 1970, 57 mil y 0 defunciones. Esto nos indica que nuestra legislación, nuestros preceptos, nuestro Código, que está un poco anticuado, es cierto, que está en proceso de revisión, ha sido, empero, eficaz; que nuestras autoridades sanitarias han sido eficientes también, y lo propio, aunque no en grado tal, desde luego, podemos decir en relación con la campaña contra la tuberculosis, contra las enfermedades venéreas. No somos tan optimistas ni podemos hablar en una forma tan entusiasta, cuando se trata de las enfermedades de origen hídrico. Por una parte, sí hemos avanzado bastante; pero por culpa de aquellas favorecidas por la contaminación de los alimentos, las enfermedades que facilita el manejo antihigiénico de alimentos; las enfermedades que dependen de la contaminación fecalígena de las manos sucias, muchos mexicanos padecen trastornos: más de 9 millones de mexicanos están parasitados de amibas. El 5% aproximadamente, de las autopsias efectuadas en los hospitales se deben a muertes producidas por este agente biológico agresivo y, particularmente, por el absceso hepático de origen amibiano. Sí creo, señor diputado, que el Código Sanitario que se revisa, en la amplitud de sus capítulos abordará con toda precisión, con todo acierto, el problema que a usted tanto preocupa. (Aplausos.)

El C. León Murillo, Maximiliano: Muchas gracias señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Salvador Hernández Vela.

El C. Hernández Vela, Salvador: Salvador Hernández Vela (Diputado por el 4o. Distrito de Coahuila, con cabecera en Piedras

Negras y miembro del Partido Revolucionario Institucional): Señor Secretario: La salud del pueblo mexicano debe constituir el objetivo primario de toda institución de salud pública. Yo me permito preguntar, ¿en qué forma podrían nuestras tres grandes instituciones de la sanidad nacional, que son: la Secretaría de Salubridad y Asistencia, el Instituto Mexicano del Seguro Social y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de Trabajadores del Estado, coordinar su esfuerzo para lograr mejores resultados?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Muy estimado señor general y diputado Salvador Hernández Vela; efectivamente, existe una coordinación entre la Secretaría de Salubridad y Asistencia, el Instituto Mexicano del Seguro Social y el ISSSTE. Esta coordinación está establecida al través de una comisión que se llama Comisión Mixta Coordinadora de Actividades en Salud Pública, Asistencia y Seguridad Social. Esta comisión ha sido recientemente integrada, hace unos días. Consideramos, como usted lo menciona, que son intereses comunes los que perseguimos. Se persigue y se pretende evitar la enfermedad, curar al enfermo, rehabilitar al inválido, pero, ante todo, prevenir. Indudablemente que cada una de estas dependencias tiene su presupuesto, su personal, sus instalaciones, sus instrumentos de acción, pero todo conduce al mismo fin. Por ello se estableció el criterio de que debían uniformarse los procedimientos, revisarse las tesis, los programas de acción, porque, tratándose de los enfermos, no podemos decir que haya enfermos de primera y enfermos de segunda; tampoco podríamos decir que puede haber una terapéutica para el pobre y otra terapéutica para el rico. (Aplausos.) El enfermo que requiere tratamiento, lo requiere tanto si es pobre como si es rico; pero lo que importa es que el tratamiento sea eficaz y punto.

Consecuentemente con ello, se integraron una serie de grupos de trabajo entre las tres instituciones, con el objeto de que atendieran a la solución de problemas que, en particular y en conjunto, a todos nos preocupan.

Concretamente, se integran grupos de trabajo, por profesionistas idóneos muy distinguidos, muy conocedores de la materia, con el objeto de que lleguen a conclusiones que recomienden un cuadro básico nacional de medicamentos, que tendrá por objeto determinar las normas de calidad y los precios razonables, también para las tres instituciones. En el mismo orden de ideas se integra otro grupo de trabajo, para estudiar el cuadro básico en materia de instrumental y de equipo. Otro grupo más, para estudiar y evaluar procedimientos administrativos de productividad de las mismas instituciones. Ya que las tres instituciones construyen hospitales y unidades médicas se estima que es lógico y conveniente que se unifiquen los procedimientos en materia de construcción, y por ello participan también, ingenieros, médicos y arquitectos para que se establezca en nuestra época, de acuerdo con nuestros recursos, los procedimientos que expresen la tónica y el espíritu y la tesis que presente México en materia de construcciones hospitalarias. Por otra parte, han sido invitadas estas instituciones para que contribuyan, porque tienen elementos de los más altamente calificados, con la campaña nacional en contra de la tuberculosis, con la campaña nacional en contra del cáncer.

Estos grupos mixtos trabajaron en instalaciones exprofesó y continúan con el auxilio y la supervisión de las tres instituciones. Se nombrará entre las tres a un coordinador general que vigilará permanentemente el desarrollo y el curso de sus responsabilidades.

El C. Hernández Vela, Salvador: Muy interesante su exposición, señor ministro, y le agradezco infinito.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Francisco Navarro Veloz.

El C. Navarro Veloz, Francisco: Francisco Navarro Veloz (Diputado federal por el 3er. Distrito del Estado de Durango, miembro del Partido Revolucionario Institucional): Volviendo una vez más al smog, que vicia tanto el ambiente de la ciudad, quisiera, señor Secretario, que tuviera usted la gentileza de dar respuesta a la siguente pregunta: ¿La acción de Salubridad persigue solamente combatir el smog o también alcanza a otro tipo de contaminación? - El C. doctor Jorge Jiménez Cantú: Con mucho gusto, señor diputado Navarro

Veloz, voy a contestar a su pregunta. Desde luego que la contaminación ambiental no es exclusivamente del aire: es del ambiente, en general, y uno de los factores del ambiente es la atmósfera; pero otro muy importante, es el agua de los ríos y de los lagos. Estos son fuentes de riqueza, son fuentes de utilización, unas veces porque en ellos existe el producto que se desea cosechar, la pesca, digamos, y otra porque se aprovecha el agua para regar terrenos. Cuando las substancias tóxicas de las factorías se vierten, en concentración muy elevada, se trastorna el equilibrio ecológico de ríos y de lagos y así se perturban y alteran las economías, particularmente la de nuestros campesinos que viven en estas zonas. Parte de sus ingresos derivan de los aprovechamientos de los ríos y de los lagos. Sin embargo, el hecho de que las substancias tóxicas se derramen en ríos, determina que, en la medida en que corre el agua, se vayan diluyendo y vayan siendo cada vez menos agresivas, en función de su más pequeña concentración. Sin embargo, no sucede así con substancias que, en sí mismas, no son agresivamente tóxicas, como los detergentes. Los detergentes se utilizan cada vez en mayor cantidad. Los que actualmente se fabrican son indestructibles. Como usted sabe, señor diputado, el detergente actúa sobre la tensión superficial y, por ello, es un disolvente magnífico de las grasas. Pero estos detergentes son ávidamente absorbidos, juntamente con el agua, por las plantas, y pudiéramos decir que las purgan, las alteran, las distorsionan en su complejo bioquímico, las enferman y matan. Consecuentemente,

el problema que causan los detergentes constituye una preocupación y una preocupación cada vez más grande, porque es una substancia que no se destruye, no la destruye un agente físico, y lo que pudiéramos desear es que fueran agentes biológicos los que la desintegran, como ocurre con muchas de las substancias tóxicas que son destruidas por microorganismos o transformadas. De ahí que se plantee el problema, y, juntamente con el problema, se apunten algunas soluciones que, afortunadamente, no solamente las autoridades, sino también la iniciativa privada, están interesadas en lograr.

Se han empezado a estudiar algunos derivados de la querosina, que tiene un amortiguador usado en los detergentes. Este derivado sí es biodestructible, es decir, se tendría la misma acción del detergente, nada más que con la posibilidad de su desintegración y, obviamente, se le quitaría el efecto nocivo que produce. Algunos hombres de ciencia de la CONCAMIN, recientemente, platicando con un servidor de usted, me decían que están no solamente preocupados, sino interesados, alentados por resolver este problema; no solamente a base de estos derivados de la querosina, sino a base de grasas vegetales, inclusive de la copra, que podría tener una amplitud mayor en la elaboración de detergentes y una acción semejante a la de los jabones, pero más enérgica, con el objeto de que, posteriormente, y ahora sí ya con una pauta, se dicten normas administrativas pertinentes, para evitar el uso de detergentes indestructibles. Por el momento, no tenemos la solución categórica, definitiva: pero ya se apunta y, tratando de contestar a su pregunta, le digo a usted que no solamente es la contaminación de la atmósfera la que preocupa, sino todas aquellas substancias tóxicas que pueden ser agresivas para los animales, para la gente, para las plantas. Ojalá haya contestado a su pregunta convenientemente. (Aplausos.)

El C. Navarro Veloz, Francisco: Muy interesante su explicación, señor Secretario. Muchas gracias por su atención.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Roberto Flores Granados.

El C. Flores Granados, Roberto: (Diputado por el 21 Distrito del Distrito Federal, miembro del Partido Acción Nacional): Señor Secretario: Permítame formularle la siguiente pregunta: Es conocido el dato de que en las ciudades la contaminación del ambiente se provoca de manera muy considerable por el tránsito de los vehículos de combustión interna. Se tienen informaciones de que, en algunos países, el gobierno está obteniendo la colaboración de la industria automotriz para que las unidades de transporte tengan dispositivos adecuados, para purificar los residuos de combustión. ¿Podría usted decirnos si en México ya hay alguna actividad práctica en este particular? ¿Podría usted decirnos, también, si es factible aliviar esta situación, introduciendo cambios en los tipos de combustibles que usen los vehículos, y si PEMEX está realizando o tiene algún programa para hacer investigaciones y tomar medidas al respecto?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto contesto, señor diputado don Roberto Flores Granados. Debo decir a usted que, efectivamente, las modificaciones que se requieren para que las combustiones de los vehículos, particularmente aquí, en la ciudad de México, sean más perfectas, obligan a una modificación de los diseños de combustión. La industria automotriz mundial está preocupada por este fenómeno, y en algunos de los nuevos diseños de automóviles vendrán incluidas partes ineludibles ya en el mecanismo de los vehículos, que permitan mejorar la combustión.

Independientemente de esto, en muchos países, en los Estados Unidos, en Francia, en Inglaterra, en el Japón, se estudian y ya se han puesto también en práctica una serie de aparatos inyectores de oxígeno, de aire sencillamente, para reforzar la cantidad del comburente necesario para que la combustión sea más perfecta. Y ésta es preocupación general de la industria automotriz, es preocupación especial y también general de nuestros gobiernos, es preocupación también de nuestros industriales, a los que, repito y lo digo porque me satisface, los siento animados de la mejor buena fe para colaborar en la solución de este problema. Y, por otra parte, sabemos que también hay estudios muy prolijos al respecto, en relación con no solamente la purificación o algunas modificaciones en el cambio del combustible, sino la creación de ciertos motores, que es un problema de ingeniería y a la vez un problema de índole económica y de índole social muy complejo. Me refiero a los motores sin el tipo de combustible que actualmente son privativos en todo el mundo. No sabemos en qué momento sea substituido el motor de combustión interna por un motor eficaz eléctrico o por un motor con propulsión motivada por algún reactor atómico; no lo sabemos, pero sí sabemos que están en proceso de estudio en el mundo entero. Y, finalmente, tratando de contestar a su pregunta, le digo, le contesto afirmativamente, que sí, que Petróleos Mexicanos no solamente se ha interesado, sino que ya lleva un largo tramo recorrido en el estudio, tanto para mejorar la calidad de sus combustibles, como para contribuir a la solución del problema de los contaminantes atmosféricos. Ojalá haya contestado suficientemente su pregunta. (Aplausos.)

El C. Flores Granados, Roberto: Muy amable, señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Juan Barragán.

El C. Barragán, Juan: (Diputado por el primer distrito del Distrito Federal y miembro del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana). Ante todo, señor Secretario, teniendo en cuenta mi carácter de veterano de la Revolución, siempre tengo interés de investigar de alguna manera los antecedentes de ideología revolucionaria de algunos funcionarios de gobierno. En este caso, compañeros diputados y

diputadas, el doctor Jiménez Cantú es de extracción y de ideología revolucionaria, como descendiente de un auténtico hombre de la Revolución y la Revolución Constitucionalista que facturó don Venustiano Carranza, de quien fue su médico y acompaño al Presidente Carranza hasta Los Aljibes en mayo de 1920. Ahora bien, la pregunta es ésta, señor Secretario: Hay una cuestión que me parece muy simple, pero sobre la cual me gustaría que redundara por su gran importancia. La descentralización industrial que usted ha mencionado frenará indudablemente el desarrollo del área metropolitana de la ciudad de México. ¿Esto beneficiará, señor Secretario, el programa de descontaminación ambiental? Esa es la pregunta.

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto, señor general, voy a tratar de responder a su pregunta. Efectivamente, se impone la descentralización no solamente industrial, sino la descetralización urbana del área metropolitana en la ciudad de México. Hemos crecido probablemente, sin un plan determinado. No creo, en lo personal, que en una forma caótica y anárquica, como frecuentemente se dice, sino obligados por las circunstancias; en una forma de crecimiento obligado, que no obedeció a un plan previo, pero que sí obedeció a factores de orden lógico indudable, como es el establecimiento de áreas industriales que constituyen focos de atracción para obreros y servicios. Se dice que por cada obrero que trabaja en una factoría hay alrededor de cinco trabajadores en los servicios.

Consecuentemente con ello, pensamos que sí han proliferado a lo largo de nuestras vías de comunicación, a lo largo de las vías férreas y de las carreteras fundamentales, independientemente de sus áreas de abastecimiento en materia prima, pero sí muy próximas a sus mercados y su abastecimiento, llamémosle de sus recursos humanos, que son los obreros y que son los servicios. Pero nuestra ciudad ha crecido en forma de retículas sin solución de continuidad, en una red continua, abrumadora. Frecuentemente, incluso, echándose sobre las áreas verdes. Al señor diputado don Enrique Díaz Nava le decíamos que la carencia de las áreas verdes - que él hacía mención - constituye un pecado de una urbanización moderna, de no dejar pulmones, de no dejar áreas verdes, de no dejar centros cívicos, centros deportivos, recreativos. Pero aún así esta red continua, no daría solución al fenómeno; simple y sencillamente cubriría una área muy grande, muy compleja, con hacinamientos humanos en zonas muy peligrosamente desprovistas de servicios, con acuíferos no inagotables, o, cuando menos, insuficientes, y esto obliga no a pensar, sino ya a actuar para que la descentralización industrial, por una parte, permita el desarrollo de otras áreas que tienen mano de obra, que tienen terrenos, que tienen recursos, que cuentan con agua en abundancia, pero que no se desarrollan y que claman y que piden y que demandan el establecimiento de una industria o de muchas, en un conjunto coordinado, en donde encontrarán mano de obra que puede ser capacitada, habilitada, suficientemente para que sean obreros calificados o bien trabajadores en los servicios conexos o imprescindibles. Estos núcleos industriales, obviamente, motivarán el desarrollo de núcleos urbanos próximos que evitan lo que es observado todos los días y por todos ustedes: ese tránsito obligado de trabajadores cuya factoría, por ejemplo, está en Ecatepec y que viven en Xochimilco o en Tlalpan y que, pese a las condiciones y a la agilidad de los procedimientos de transportación más modernos, de todas maneras gastan gran parte de sus energías en una transportación agotadora y, además, económicamente onerosa. Consecuentemente se piensa en la descentralización urbana debe armonizarse con una descentralización industrial, con el objeto de propiciar factores de autosuficiencia en servicios, en recursos, en trabajo, en elementos de cultura, de preparación, de integración orgánica en esos núcleos que no van a frenar el desarrollo de la ciudad de México. La ciudad de México va a desarrollarse, como ya decíamos, internamente también, endógenamente; pero en un plan de consolidación social, económica, cultural, salubre que, naturalmente, permita que la ciudad de México, su área metropolitana se consolide más fácilmente.

Esa es la razón, a mi juicio, señor general, de la descentralización urbana y de la descentralización industrial, que coadyuvarán en su beneficio, al desarrollo y a la consolidación de todo el complejo de factores de nuestra área metropolitana. (Aplausos.)

El C. Barragán Rodríguez, Juan: Muy interesante su respuesta, señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Felipe Cerecedo López.

El C. Cerecedo López, Felipe: (Miembro del Partido Popular Socialista, diputado por el segundo distrito de Veracruz): Señor Secretario, voy a permitirme formularle dos preguntas muy sucintas; pero que llevan en sí la preocupación no sólo de mi partido, sino del pueblo mexicano. La primera es la siguiente: México es miembro de la Organización Mundial de la Salud, desde el 22 de julio de 1946. Usted sabe que al constituirse este organismo se expresó que la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de enfermedad o invalidez. Por otra parte, también los principios de la OMS establecen que la posición del mejor estado de salud que se puede alcanzar constituye uno de los derechos fundamentales de todo ser humano, cualquiera que sea su raza, religión, opiniones políticas y condiciones económicas y sociales. Asimismo, se establece por la OMS que los gobiernos tienen la responsabilidad de la salud de sus pueblos, y no pueden hacer frente a sus responsabilidades, sino tomando las medidas sanitarias y sociales apropiadas. Quisiéramos preguntar a usted, en esta etapa de nuestro desarrollo social, en la que se ha dejado atrás, en parte, la etapa de la caridad, la beneficencia y la asistencia, ¿en qué forma nuestro gobierno lleva a cabo los principios de la Organización Mundial de la Salud en nuestro

país? La pregunta es la siguiente: ¿qué medidas inmediatas se van a tomar, tanto por su Secretaría como por otros organismos del Estado, para combatir la contaminación ambiental y evitar que se siga alterando el equilibrio ecológico, al contaminarse el agua, el aire y la tierra, que como lo dice la iniciativa, representa un riesgo para la salud y el bienestar del pueblo, y daños para la fauna y la flora?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto, señor diputado Felipe Cerecedo López, voy a tratar de contestar a sus preguntas y si usted me lo permite, principiaré contestando la segunda que usted formuló.

Decíamos en el texto de nuestro escrito que el problema y el estudio de la contaminación ambiental y de sus soluciones no es una función privada de una entidad, de una secretaría, de un grupo de trabajo del gobierno federal o del gobierno de la ciudad de México, sino que en este estudio estamos comprometidos todos, y entre los comprometidos están ignorados, están ignorantes y están gentes que saben mucho. Estas personas, estos grupos, estas instituciones que saben mucho, que ya tienen adelantado bastante el estudio, con base en las experiencias de otros países y en el estudio con base en las experiencias que ya se tienen, aquí, en la misma ciudad de México, plantearán soluciones técnicas, pertinentes, oportunas, adecuadas a nuestro tiempo y a nuestros recursos, con el objeto de que sirvan de base al Ejecutivo, sirvan de base a ustedes, legisladores, para legislar en la materia, y las autoridades administrativas para dirigir y dar las normas conducentes a que este fenómeno se ataque a fondo y suficientemente. Tratando de contestar a su primera pregunta, que me parece de extraordinario interés, le debo decir a usted hay una tesis que me atrevo a llamar Tesis del Gobierno del licenciado Luis Echeverría, y que se refiere a que el abordamiento del problema de la salud nos corresponde, claro a los que somos médicos: a la Secretaría de Salubridad y Asistencia, específicamente; al ISSSTE, al Seguro Social, a todos los que en alguna u otra forma tienen que ver con problemas de salud, salud vegetal, salud animal, salud humana. Todos forman un concierto, porque todos son organismos vivos y hay interdependencia entre la sanidad vegetal, la sanidad animal y salubridad humana; hay interdependencia; en eso estamos comprometidos todos; pero las autoridades, a fin de cuentas, no somos sino una minoría directora y que pretende ser rectora de programas. Pero los factores en el desarrollo de ese programa tienen que ser todos, y ante todo, el pueblo. La acción de la salubridad no corresponde privativamente a un grupo, a una Secretaría; corresponde a todos. De aquí que la parte fundamental de la actividad que pretende el señor Presidente desarrollar durante este sexenio, consiste en convocar a la totalidad de los habitantes de nuestra República, para que se impregnen de un verdadero espíritu revolucionario de la salud.

Como decíamos hace un momento, dentro de los cánones que sirvieron de base y de sustentación para concebir el concepto de justicia social, figura el de luchar contra de la insalubridad, en contra de la miseria y en contra de la ignorancia. Hemos adelantado mucho, pero en contra de la insalubridad es mucho más lo que tenemos que adelantar que lo que hemos logrado. Por ello se impone, es indispensable crear una conciencia de salud y de servicio social voluntario.

Así como hablamos de conciencia cívica, así como hablamos de conciencia revolucionaria, de conciencia patriótica, de conciencia religiosa, de conciencia política, tenemos que enfatizar y que requerir que todo el pueblo no solamente hable, sino que desarrolle una verdadera conciencia de la salud y del servicio social voluntario. ¿Qué quiere decir eso de conciencia de la salud? Una persona que se lava las manos antes de comer, demuestra que ya tiene conciencia de la salud. La que se lava las manos después de haber ido al sanitario, tiene conciencia de la salud. Aquella que sabe manejar con limpieza los alimentos y que sabe que algunos hay que someterlos a la acción del calor, tiene conciencia de la salud. Aquella persona que ya no soporta andar parasitada, tiene conciencia de la salud. Quien se lava la boca todos los días, tiene conciencia de la salud. Los que evitan la promiscuidad de gente y de animales, los que ya separan la vida dentro de su casa, por humilde que sea, la alcoba donde duermen los padres, del lugar donde duermen los niños, las niñas, ya tiene conciencia de la salud. Quien se ha acostumbrado a vivir con limpieza y a no soportar la agresión permanente de las moscas en su contra y en perjuicio de sus alimentos, a desechar la basura, a tratarla, a enterrarla, o a incinerarla, en el último caso; a tener, en fin, limpia su habitación, el frente de su casa, de su banqueta, a blanquear la fachada de su casa, tiene conciencia de la salud. Los que se acostumbran y tienen la capacidad para adornar su casa, para darle los elementos de una estética necesaria; a plantar árboles, a contribuir que la atmósfera sea más diáfana, más amable, más limpia, tienen conciencia de la salud. Y no hay un solo pueblo en la República, por humilde que sea, una ranchería, donde no se encuentren algunas de tales personas, aunque sean muy pocas. Lo que se pretende, pues, es congregarlas en un haz de voluntades de servicio social voluntario, para que extiendan los que ellos ya tienen a sus semejantes, a sus vecinos. Hablamos de extensión agrícola y de extensión veterinaria, ¿qué de raro tiene que hablemos de extensión de la higiene humana, cuando son millones de gentes las que ya tienen esta conciencia y que lo único que necesitamos es hacerla extensiva, en una forma entusiasta, patriótica, completa? Por ello se pretende que, a nivel estatal - y qué bueno que en esta asamblea me dirija a los ciudadanos diputados, representantes del pueblo -, se pretende que se integren comités de salud y de servicios sociales voluntarios, a nivel estatal, a nivel municipal, en cada pueblo, en cada villa, en cada ranchería. Cada sector contará con un comité de sector y en cada manzana, si es posible (y creemos que sí es posible, porque hemos tenido oportunidad de verlo, de observarlo, de promoverlo y de corroborar sus magníficos rendimientos), habrá un comité de

manzana. En cada ejido, un comité de salud y servicio social. Ya las autoridades de la Secretaría de la Defensa Nacional, por instrucciones del señor Presidente, están viendo la necesidad de modificar y de cambiar la estructura de los programas del Servicio Militar Nacional, para que nuestros jóvenes conscriptos constituyan núcleos activos, dinámicos y eficaces, en favor de la reforestación, en favor de trabajos de orden social. En cada escuela habrá igualmente un comité de salud y de servicio social voluntario, con arraigo en el alma y en el espíritu de los niños; pues si es muy bueno que aprendan a leer, a escribir, a sumar y a restar y multiplicar, es excelente que asimismo tengan los mejores hábitos higiénicos. Por ello pensamos que toda nuestra juventud debe participar en estas tareas. Hoy en la mañana, un grupo de jóvenes universitarios - 37 pasantes de la Escuela de Medicina de Torreón - saludaron al señor Presidente, que es su padrino de generación, y le dijeron que estaban enterados del programa a desarrollar que tiene el Gobierno Federal en las llamadas zonas áridas, que comprenden más del 36% de la extensión territorial, entre las que se encuentra su Estado; y le vinieron a decir que habían oído que se iban a organizar grupos de pasantes de medicina y de otras facultades para que fueran y penetraran en el desierto, en una acción de trabajo y de edificación, y no solamente en el orden de salubridad, sino en otros órdenes culturales y sociales. Que habían oído que se les llamaba los médicos del desierto, y que se requerían hombres recios, patriotas y de buena voluntad. Le dijeron: "Señor Presidente, aquí estamos los 37 pasantes de medicina." Tenemos el gusto y el honor de que también estén presentes aquí, en esta sala en que nos vinieron a saludar. (Aplausos prolongados.) Ellos van en su calidad de médicos y de promotores de la salud. Ellos van a tratar de integrar y de organizar este sistema piramidal en la zona del desierto que les corresponda, para estructurar su comité a nivel municipal, a nivel popular o nivel de ejido o a nivel de escuela. Nuestros magníficos soldados, nuestros oficiales y clases, nuestros jefes. Baste, nada más para no cansarlos, mencionarles un ejemplo. Veinticinco destacamentos en la sierra de Durango trabajan activamente no solamente para destruir plantíos de amapola, sino trabajan activamente, habilitados como enfermeros, vacunando, dando orientaciones higiénicas. Esta es una acción magnífica que realiza nuestro ejército. Y nuestro ejército, indudablemente, también será uno de los elementos, juntamente con la conscripción, junto con nuestros universitarios, con nuestros muchachos egresados de las escuelas técnicas, con nuestros maestros, con ustedes, señores diputados, con presidentes municipales, gobernadores de los Estados, con iniciativa privada, para integrar ese cuerpo poderosísimo, esa estructura piramidal que pretenda crear esa conciencia de salud y de servicio social voluntario que tanto necesitamos. (Aplausos.)

El C. Cerecedo López, Felipe: Muchas gracias. señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Luis Velázquez Jaacks.

El C. Velázquez Jaacks, Luis: (Diputado por el 14 distrito electoral del Distrito Federal, miembro del Partido Revolucionario Institucional): Señor Secretario: Recuerdo que alguna publicación extranjera refirió hace algunos días que la ciudad de México se asfixia dramáticamente por la polución.

Ahora bien, ¿podría usted decirme qué grado de veracidad tiene esa información?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto, señor diputado Luis Velázquez Jaacks, y en una forma muy rápida, voy a contestar a su pregunta. Es una exageración, señor diputado. Efectivamente, tenemos índices de contaminación grandes, a determinadas horas del día, y particularmente aquí, en el primer cuadro de la ciudad. Otras partes, otras zonas de la ciudad de México, tienen una contaminación mucho menor. Los vientos dominantes no son los mismos en la Villa de Guadalupe, en Gustavo A. Madero, en Tlalpan, que en Coyoacán, que en Azcapotzalco, o que en Ixtapalapa. Hay vientos dominantes, hay brisa de montaña, por ejemplo, en San Angel, en Tlalpan, en Coyoacán en las noches, esta brisa de montaña es suave, muy limpia, que no la tienen en el centro de la ciudad. Algo tienen allá, los que viven pegados a la sierra de Guadalupe, de tal manera que nunca han padecido los índices tan alarmantes como para poder decir que nos estamos asfixiando. Sí le puedo decir, señor diputado, que es motivo de preocupación general este fenómeno, este problema, pero no nos estamos asfixiando. (Aplausos.)

El C. Velázquez Jaacks, Luis: Muchas gracias.

El C. Presidente: Tiene la palabra la diputada Diamantina Reyes Esparza.

- La C. Reyes Esparza, Diamantina: (diputada por el 2o. distrito de Chihuahua, miembro del Partido Revolucionario Institucional):

Señor Secretario: Todos sabemos que la Secretaría a su digno cargo tiene la función de proteger la salud del mexicano. Deseo saber, si es usted tan amable en decirme, ¿ qué otro programa de importancia, aparte de la descontaminación ambiental, existe específicamente para proteger la salud de nuestros compatriotas a todo lo largo de la República?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto contesto su pregunta, señorita diputada Diamantina Reyes Esparza. Realmente lo que dijera sería un corolario de lo que hace un momento expresé en relación con la acción masiva organizada del pueblo de México, para generar esta conciencia de salud y para integrar esos comités de salud y de servicio social voluntario.

Le debo decir a usted que, por lo que se refiere a las autoridades, concretamente a nuestra Secretaría, al Instituto Mexicano del Seguro Social y al ISSSTE, con esa acción conjunta a la que aludíamos hace un momento, está el interés de intensificar las campañas antipalúdicas, la campaña antituberculosa, la

lucha contra el cáncer, las campañas antivenéreas, las campañas contra el pinto, contra el bocio, contra la oncocercosis, que no ha desaparecido, independientemente de una estructuración que creemos vaya a tener un sentido y un programa muy especial y muy importante, que es la acción en contra de la amibiasis, la acción en contra de la contaminación del agua y de los alimentos. En este sentido, el programa de introducción de agua potable a los pueblos es muy importante. El régimen anterior, logró, si mal no recuerdo, alrededor de tres mil obras de introducción de agua potable en pueblos, entre 500 y 2,500 habitantes. Aún hay alrededor de 6 mil poblaciones, entre 500 y 2,500 habitantes, que carecen de agua potable.

Hay el interés de llegar en este sexenio a la totalidad de esos 6 mil pueblos. Sin embargo, no debemos ser excesivamente optimistas, porque hay 83,000 localidades en nuestra patria que tienen una población menor de mil habitantes, y probablemente más de 50 mil que tienen menos de 500 habitantes. Muchas de ellas dispersas, mal agrupadas, con servicios muy difíciles, muy costosos, a veces imposibles de proporcionar, sin embargo muchas de ellas, bien agrupadas, con fuentes próximas, seguramente podrán ser atendidas aunque fuera en forma de alivio, con el trabajo organizado por los mismos interesados. Requerirían brigadas de trabajo, que proporcionaran la dirección técnica adecuada y quizá algo de materiales, porque resultan proporcionalmente costosas estas obras en donde hay muy pocos habitantes, y la obra que llaman los ingenieros "la obra de cabeza", está muy distante, por lo que se antoja grande el gasto para un núcleo tan pequeño de población.

Nosotros pensamos que nunca es onerosa una obra si puede resolver un problema de salud, que nunca debemos considerar excesivo el gasto para salvarle la vida a un semejante. Pero, aun así, debemos ser realistas en nuestra concepción actual, y saber que nuestros recursos no son ilimitados. Contestando a su pregunta, señorita diputada, digo que las acciones en todas las campañas, la coordinación en todos los organismos y la acción que se refiere al saneamiento ambiental, particularmente a la dotación de agua potable, y de obras de alcantarillado, constituyen uno de los mayores anhelos y una de nuestras máximas obligaciones. (Aplausos.)

- La C. Reyes Esparza, Diamantina: Muchas gracias, señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene la palabra el C. diputado Hiram Escudero Alvarez.

El C. Escudero Alvarez, Hiram: Hiram Escudero Alvarez (miembro del Partido Acción Nacional, diputado por el segundo distrito del Distrito Federal): Señor Secretario: El consumo de drogas no se limita a los estupefacientes, ya que es frecuente el uso vicioso de barbitúricos, estimulantes síquicos neurodepresores y otros. Además, es frecuente el empleo, con fines tóxicos, de productos industriales, como el thinner y los cementos adhesivos. ¿Podría decirnos, señor secretario, en cuanto a los medicamentos, qué posibilidades tiene la Secretaría a su muy digno cargo de vigilar, en forma eficaz, su consumo y, en cuanto a los productos señalados anteriormente, si sería posible adoptar la práctica seguida por otros países y agregar a dichos productos industriales elementos que provoquen intolerancia orgánica aguda e inmediata o algún otro medio semejante que evite su uso para fines tóxicos?

Asimismo, señor doctor: ¿podría decirnos si existe algún problema de la Secretaría de Salubridad y Asistencia para prevenir el alcoholismo y para procurar la readaptación de quienes lo padecen?

El C. doctor Jorge Jiménez Cantú: Con mucho gusto voy a tratar de contestar a sus preguntas, estimado señor diputado Hiram Escudero Alvarez. Sería prolijo y cansado; además, quizá no tuviera yo la preparación suficiente para abordar el tema en toda su amplitud; sin embargo, debo decirle a usted, señor diputado, que el problema de la drogadicción en México existe. Este problema es un problema de honda preocupación universal, pero afortunadamente, en nuestros medios, su índice es relativamente muy bajo, comparado con los de otros países. Esto no constituye un elemento de consuelo, sino de orientación exclusivamente, y lo acabo de decir en función porcentual. En encuestas realizadas con muchachos estudiantes, aquí, en esta ciudad, donde se le considera la ciudad más impregnada de esta dolencia, se han obtenido índices que no son alarmantes. Sí nos alarma el hecho de que hay drogadictos. Sí nos alarma el hecho no de que haya muchos, sino de que los haya. Creo que ni uno solo de nuestros jóvenes se debe perder, ni uno solo. Si estuviéramos reunidos aquí, en esta hermosa asamblea, con el propósito de salvar de esa desviación vital a uno solo de nuestros jóvenes, se justificaría plenamente esta reunión. Pero no es uno, son muchos; pero, insisto, no es una forma alarmante. ¿Qué medidas se van a tomar? Desde luego, México pertenece a la Organización Mundial de la Salud. En este momento, en la ciudad de Viena, y hasta la primera quincena del próximo mes, se seguirá desarrollando una asamblea, una convención de plenipotenciarios para estudiar lo relativo al protocolo internacional para el manejo de las substancias psicotrópicas.

Creemos que de ahí surgirán muchas líneas de conducta a seguir. Nuestro país, miembro de ese organismo internacional, adoptará las medidas que se crean más pertinentes al caso. Usted ha mencionado y lo ha mencionado muy bien, que no solamente son determinadas substancias, existentes en nuestra farmacopea, que se venden en las farmacias, las que inducen a dependencia de quienes la toman. Efectivamente, el thinner, el cemento, la gasolina inclusive, han podido ser motivo para que haya alguna dependencia, algún acostumbramiento. Nos alienta este hecho, señor diputado: contrariamente a lo que se pudiera decir, nuestra juventud, la

juventud de México, la juventud universitaria, la juventud del politécnico, la juventud en general que estudia, es una juventud muy sana y muy buena. Excelente juventud es la nuestra. Lo decimos no por un eufemismo que nos motive la circunstancia de encontrarnos aquí, en esta sala, mucho menos por un optimismo carente de base. Lo digo porque creo conocer un poco de este problema; creo conocer un poco a los jóvenes. Sé que son magníficos, pero ese hecho que nos alienta, ese hecho que nos está diciendo que esta juventud no se dejará contaminar y no se dejará vencer, no evita que aceptemos que hay ya un núcleo de juventud que se considera vencida, y que debemos actuar. Pero ¿Cómo debemos actuar? ¿A través de medias reglamentarias, de medidas represivas? Claro que hay que reglamentar y que adoptar medidas represivas, pero en contra del traficante; en contra de eso que se llama la subcultura de la drogadicción, en la cual está precisamente el ambiente contaminado. Al drogadicto debemos considerarlo, particularmente si es joven, como una víctima y no como un perverso que atender, que tenemos que salvar, que abrirle los brazos y comprenderlo y orientarlo. Ya muchos de los jóvenes y compañeros a salvo lo están haciendo ellos, y los maestros y todos nosotros. Perseguir, sí, al traficante, al contrabandista, el chantajista, sí, y castigarlo, duramente. Pero comprender, salvar y auxiliar al joven. No todos los fármacos pueden ser catalogados, en el caso de que tengan una acción sobre el psiquismo, como perjudiciales y que deban ser destruidos y que deban ser perseguidos quienes los expenden o llegar a un rigorismo excesivo. Los sicofármacos, y particularmente los sicofármacos tranquilizantes, han sido una conquista, una adquisición inapreciable de la psiquiatría contemporánea. Las antiguas salas de hospitales, de nosocomios de enfermos mentales, que estaban atestadas de enfermos agitados, actualmente ya no se ven, y no se ven por la introducción y por el sabio manejo de esos sicofármacos. Hay muchas substancias que no tienen aplicación en terapéutica; digamos, la mariguana, de uso cada vez más extensivo, o los derivados del peyote. Tampoco tienen aplicación en farmacología el ácido lisérgico y sus derivados.

Entonces aquí sí hay materia de una legislación y de una restricción especial; pero para aquellos productos que no se expenden en las farmacias, sino que en cualquier estanquillo o en cualquier tlapalería los pueden adquirir, allí tiene que dirigirse la acción - y perdonen ustedes que insista tanto -, la acción de todos, una acción dinámica, educadora, ejemplificadora, particularmente de los padres de familia, y de los mayores, y de todos nosotros y de los maestros, y de los guardianes del orden público, y de todo el mundo, porque ésta es una acción fundamentalmente de buen ejemplo, de gran cordialidad, de comprensión y de amor, más que de una acción policiaca, (Aplausos.)

El C. Escudero Alvarez, Hiram: Muchas gracias, señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene el uso de la palabra el diputado Roberto Avila González.

El C. Avila González, Roberto; Roberto Avila González (diputado por el décimo primer distrito de Veracruz, miembro del Partido Revolucionario Institucional): Señor Secretario: ¿Es posible, desde el punto de vista técnico, abatir la contaminación ambiental, o las medidas que se tomen en este aspecto servirán solamente para evitar su aumento?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto, señor diputado Roberto Avila, voy a tratar de contestarle. Se pretenden las dos cosas, señor diputado. Desde luego, afirmativamente contesto su primera pregunta. Sí es posible y de eso se trata precisamente: abatir los índices de contaminación actual, mediante ingenios y dispositivos en los vehículos automotores, en las fábricas, mediante el tratamiento de las basuras. Usted sabe que las basuras frecuentemente se tienden a cielo abierto y sirven a las fogatas que contaminan el ambiente. Parece ser preferible enterrar las basuras como lo ha venido desarrollando desde hace tiempo, la Secretaría de Salubridad y Asistencia, en varios lugares de la República. Se llama relleno sanitario, es parte de la ingeniería sanitaria, es muy eficaz, y además, le confiere organicidad al terreno, para que después puedan desarrollarse ahí árboles o materia vegetal. Entonces, sí en primer lugar, se trata de abatir esos índices de contaminación y se va a lograr ese abatimiento, Y, por otro lado, ya lo hemos mencionado, el hecho de una política de descentralización, particularmente de industrias con chimenea, que puedan ir a lugares donde haya menos concentración y donde pueda haber más difusión de los contaminantes. Se trata de abatir, ciertamente, la contaminación actual, y de evitar la contaminación futura. (Aplausos.)

El C. Avila González,. Roberto: Muchas gracias, señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene la palabra la diputada Emilia Dorado Baltazar.

- La C. Dorado Baltazar, Emilia: Emilia Dorado Baltazar (diputada por el tercer distrito del Estado de Jalisco; miembro del Partido Popular Socialista):

Abusando de su amabilidad, señor Secretario, quiero hacerle dos preguntas.

Usted sabe que las condiciones de la gran mayoría de los hospitales civiles del país son deplorables: ¿Hay algún plan del Gobierno para su regeneración? Por otra parte, a lo largo del territorio nacional hay grandes y pequeños edificios abandonados, que fueron construidos para hospitales urbanos o rurales que no prestan ningún servicio, a pesar de que significaron grandes erogaciones económicas de nuestro pueblo. ¿Se han tomado algunas medidas para que no haya edificios hospitalarios desocupados? Por último, señor secretario, una de las preocupaciones que han tenido los gobiernos progresistas de nuestro país ha sido la de promover la salud física y mental de nuestro pueblo, hasta

convertirla en un derecho amparado por nuestras leyes. Todos estamos enterados del progreso que se ha alcanzado, en las últimas décadas, en la preservación de la salud física. Sin embargo, en el caso concreto del cuidado de la salud mental, creemos que las medidas dictadas han sido hasta ahora insuficientes.

Por ejemplo, la intensa y sistemática campaña que se hace a través de la televisión y la radio, exaltando las cualidades de las bebidas alcohólicas y las distintas marcas de cigarros. En este aspecto, las empresas dedicadas a estos negocios gastan cientos de millones de pesos al año en publicidad, que va en detrimento de la salud mental de la niñez y de la juventud. Así también, el abuso que se hace de la presentación de programas en los que se exalta la violencia y las prácticas inmorales, ¿qué medidas ha pensado dictar en su política general la Secretaría de Salubridad a su cargo, en este aspecto? Porque hay un verdadero clamor de protesta contra esta propaganda, que está en gran parte contribuyendo poderosamente a la desintegración de la vida familiar. ¿No cree usted que sería positivo que, dentro de las leyes respectivas, se estableciera la prohibición definitiva de la transmisión de este tipo de programas?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto, señora profesora y diputada Emilia Dorado Baltazar, voy a tratar de responder a sus preguntas. El problema que señala usted, de higiene mental, es un problema tan importante y en ocasiones mayor que el de la higiene física, en virtud de que las imágenes que tengamos nosotros o que podemos formarnos del mundo que nos circunda, del actual y del futuro, serán la fase previa para que se conviertan en hechos y en realizaciones, sean positivas o negativas. Creemos que la revisión que se está haciendo al código Sanitario, que va a tener capítulos con una renovación de principios ajustados a las necesidades de nuestra época, de muestro medio, de nuestro México, enuncian varios de los puntos que usted ha mencionado; pero no es única responsabilidad privativa de un Código Sanitario expresarlo, o de una Secretaría de Estado, sino son varios los organismos los que ya intervienen, por instrucciones del señor Presidente de la República, en el abordamiento del tema que a usted la preocupa muy justificadamente y a todos los que estamos aquí, en igual forma. Por lo que se refiere a la acción de la Secretaría para que no existan hospitales desocupados, ya hemos mencionado que nuestra coordinación con el Instituto Mexicano del Seguro Social y con el ISSSTE habrá de permitir que, en ocasiones, se usen conjuntamente instalaciones que pueden servir a las tres instituciones, y si es de una, subrogarla a la otra, y si es de otra, las otras dos también podrán tener subrogación en estos edificios con instalaciones adecuadas, lo cual permitirá que no sea un gasto inútil el que se haya hecho y no responda a sus objetivos y a sus propósitos fundamentales. Ciertamente, lo que usted menciona, la carencia de presupuesto, de elementos de trabajo en muchos de los hospitales civiles, es un problema con el cual nos estamos enfrentando. No podemos desconocer, no podemos dejar de decir, que todavía somos pobres. Estamos tratando de superarnos en todos los órdenes. En lo único que no somos pobres es en iniciativa ni en falta de entusiasmo ni de patriotismo, pero en muchos otros aspectos seguimos siendo un pueblo pobre, con escasos recursos económicos. En la medida de lo posible, el gobierno de la República y los gobiernos de los Estados suman sus esfuerzos para poder habilitar a estas instituciones, a estos hospitales civiles, a estos centros de salud mal o insuficientemente dotados. Piensa el señor Presidente de la República que antes de proliferar, consolidemos lo que ya tenemos; que lo que tengamos lo hagamos funcionar bien; que sirva, que cumpla con sus objetivos. Tiene usted razón en lo que nos ha mencionado. Existen deficiencias, y el gobierno federal, los gobiernos estatales y la iniciativa privada también se están esforzando por aliviar en lo que se puede. (Aplausos.)

- La C. Dorado Baltazar, Emilia: Muchas gracias, señor Secretario.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Jaime Pineda Salgado.

El C. Pineda Salgado, Jaime: Jaime Pineda Salgado (diputado por el 2o distrito de Guerrero, miembro del Partido Revolucionario Institucional): Señor Secretario: Indudablemente que su grata presencia en este recinto parlamentario será de vital importancia para la representación nacional, al recibir de usted las explicaciones convenientes y relativas a su delicada responsabilidad, al aclararnos las pequeñas o grandes dudas que los diputados tengamos frente a los múltiples problemas de salubridad, los que han sido constante preocupación del pueblo y gobierno de México. Por ser de palpitante actualidad el grave problema del esmog o polución ambiental, deseo me haga el honor y el favor de contestarme la siguiente pregunta: ¿Que gravedad real, en el momento actual, en el campo y en las zonas desérticas del país, y qué programa existe para combatir esta gravedad si la hay?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto le contesto, señor diputado don Jaime Pineda Salgado. Creo que en las preguntas y respuestas anteriores, más o menos se satisface lo que usted me pregunta en este momento. Ya decíamos que la contaminación en la ciudad de México es real y que llega a tener índices muy importantes a determinadas horas del día y en determinados sectores de la ciudad; que este problema de la contaminación ya emerge en otras poblaciones industrializadas, particularmente en la ciudad de Monterrey, que no es privativo de la ciudad de México, es privativo también o es un fenómeno que se aprecia en las ciudades aledañas y que están dentro del Estado de México; que existe contaminación en algunos lugares, ríos y lagos por desechos industriales tóxicos, y que al respecto no solamente será la legislación en

materia federal la que dé la pauta definitiva, sino que será el concurso de todas las autoridades y las legislaciones locales incluso, la acción de carácter municipal y local la que permita disminuir estos índices de contaminación. Por lo que se refiere a las zonas desérticas, habíamos ya mencionado que es preocupación del señor Presidente de la República atender esa extensión territorial tan vasta. Son once Estados de la República, como tengo entendido que ya lo habíamos dicho, los que participan en este programa de atención a nuestras gentes, a nuestros compatriotas del desierto, a los que se les llevará no solamente la atención médica y acción preventiva, educación higiénica indispensable, de acuerdo con las circunstancias y los recursos, sino que se tratará de armas todo un aparato de desarrollo económico social y cultural de estas áreas (Aplausos.)

El C. Pineda Salgado, Jaime: Le agradezco infinitamente su amable contestación, señor Secretario doctor Jiménez.

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Gracias a usted, señor.

El C. Presidente: Tiene la palabra el C. diputado Guillermo Islas Olguín.

El C. Islas Olguín, Guillermo: Guillermo Islas Olguín (diputado por Azcapotzalco, Distrito Federal, miembro del Partido Acción Nacional; Señor Secretario, todos sabemos que uno de los medios contra el esmog es la existencia de extensas zonas arboladas y otro el de depósitos de agua, suficientemente grandes, como para producir una cantidad considerable de humedad en el ambiente. ¿No cree usted que entre las medidas que se puedan tomar para cambiar este problema, en el Valle de México, está la de establecer un cinturón de zonas verdes, alrededor de la metrópoli, creando nuevos parques nacionales y protegiendo y ampliando los ya existentes y, además, tratando de volver a llenar las partes de los lagos de Texcoco y Chalco, que aún no han sido ocupadas por nuevas colonias, con lo cual se remediaría no sólo el problema que nos ocupa, sino también se les proporcionaría a los habitantes de Ciudad Netzahualcóyotl nuevas fuentes de ingreso y lugares de esparcimiento?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Con mucho gusto, señor diputado don Guillermo Islas Olguín: voy a tratar de responder a su pregunta. En primer término, sabemos que el Valle de México padece una grave desforestación, que hay terrenos erosionados. Ya la política del Gobierno Federal, del actual y de los anteriores, tendió a ir resolviendo ese problema. Yo recuerdo que, hace muchos años, las Lomas de Santa Fe y las Lomas de Chapultepec, eran unos lomeríos áridos, totalmente áridos; no había un árbol. Cuando tenía uno el deseo, el gusto y siempre la satisfacción de ir a excursionar al Desierto de los Leones, empleaba un tranvía que salía de Tacubaya de la plaza de Cartagena y llegaba a la Venta, y ese tren eléctrico iba dando vueltas por lomas donde no había un solo árbol. Empezaba el bosque precisamente en la Venta y de ahí se iniciaban las excursiones por bosques maravillosos, que todavía los tenemos, y muy buenos. Lo mismo ocurría por otros rumbos y otros lomeríos de la ciudad. Ahora, en las Lomas de Chapultepec, Lomas Altas, ya sin interrupción, vamos por un bosque continuo, donde son miles de hectáreas reforestadas por el gobierno federal, a base de trabajo y a base de eucaliptos y de casuarinas. Recuerdo también que, hace muchos años, caminábamos por terrenos pantanosos y desprovistos de árboles, casi en su totalidad, y que a veces estos terrenos pantanosos se convertían en lago. Íbamos de un pueblo, que se llama San Juan de Aragón, al Peñón de los Baños. No había un árbol. Los gobiernos de la Revolución lograron forestar esa zona; ese bosque de Aragón, varias veces mayor que el Bosque de Chapultepec es una adquisición reciente en el vaso mismo de Texcoco. Podríamos multiplicar los ejemplos: la acción ha sido positiva. Creemos que la acción debe ser mayor, y ahora debe ser mayor porque somos más y la podemos lograr. Seguramente estará usted enterado de un proyecto que se llama Plan Texcoco. Se debe al doctor Nabor Carrillo, que en paz descanse, independientemente de que otros técnicos hayan contribuido a este estudio. Consiste, sencillamente, en convertir el desecado Lago de Texcoco en un verdadero vergel; pero no eliminando el lago, sino todo lo contrario, cambiando el agua salada de un vaso de evaporación que permita el hundimiento del jaboncillo y que, mediante una sobre - elevación de un bordeo perimetral de 5 ó 6 lagos, puedan escurrir el agua de lluvia, que es agua dulce, a estos lagos que, independientemente de ser reservorios de agua limpia, podrán, por trayecto recurrente, servir para irrigar terrenos aledaños y las áreas que quedan desprovistas de agua. (Aplausos.)

El C. Islas Olguín, Guillermo: Sí, señor Secretario, muchísimas gracias.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Raymundo Flores Bernal.

El C. Flores Bernal, Raymundo: Raymundo Flores Bernal (miembro del Partido Revolucionario Institucional, diputado por el primer distrito de Veracruz):

Señor Secretario: su exposición ha sido clara, amplia; resulta ilustrativa, oportuna. Sus respuestas han abarcado muy diversos aspectos, los más interesantes, a mi juicio, de este asunto, y queda satisfecha la inquietud positiva de quiense nos ocuparemos de estudiar, dictaminar y, en su caso, aprobar esta iniciativa. No obstante, acogiéndome a su gentileza, quiero formularle una última pregunta. En la exposición de motivos de la iniciativa, para que se adicione la base 4a de la fracción XVI del artículo 73 de la Constitución, y que es concretamente la que motiva su presencia en esta Cámara, se establece que Ejecutivo Federal promoverá diversas disposiciones de carácter legislativo y medidas administrativas para prevenir las enfermedades, en materia de salud pública para evitar los efectos nocivos de las substancias polutantes o, en general, de los contaminantes ambientales. Mi pregunta es la siguiente: ¿En qué medidas administrativas, concretamente, se ha pensado?

El C. Secretario de Salubridad y Asistencia: Muy interesante su pregunta, señor diputado Raymundo Flores Bernal, voy a tratar de contestarla.

Efectivamente, no necesitamos esperar a que los organismos técnicos estudien y lleguen a conclusiones que no sabemos para cuándo las podemos tener y si esas conclusiones esas recomendaciones puedan ser aplicables de inmediato, en virtud de ser recursos que están a la mano. Hemos mencionado que se producen miles de toneladas de basura, que se quema; pues ya es una medida pronta, inmediata, evitar esta incineración, transformarla por un relleno sanitario. Tenemos una gran cantidad de hornos de tabiqueras, que usan la basura, incluso el estiércol para quemar su tabique. Las medidas serán precisamente, que cambien el combustible por otro. Seguramente se tomarán también medidas en la circulación de vehículos, aun sin aditamentos específicos, especiales, que puedan traer ya en lo futuro para que circulen menos en el lugar más contaminado y puedan dejar libre el tránsito a otros vehículos más pequeños, de mayor velocidad, de más perfecta combustión. En resumen, señor diputado, le contesto diciéndole que unas medidas administrativas serán a más largo plazo y otras medidas serán de acción inmediata. (Aplausos.)

El C. Flores Bernal, Raymundo: Muchas gracias, señor secretario.

- El C. Secretario de Salubridad y Asistencia:

Agradezco a ustedes, señores diputados, este diálogo tan constructivo que hemos sostenido. Confío en que los informes que he proporcionado en relación con la iniciativa de decreto que adiciona la base 4a. de la fracción XVI del Artículo 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, enviada por el C. Presidente de la República, contribuirá a normar el recto criterio de esta honorable asamblea, y a subrayar la preocupación y el interés que todos los mexicanos tenemos por combatir el creciente problema para la salud pública que representa la contaminación ambiental.

El C. Presidente: En nombre de la Cámara de Diputados de la XLVIII Legislatura del H. Congreso de la Unión, me permito expresar el reconocimiento de este cuerpo legislativo al ciudadano Presidente de la República, por haber autorizado la comparecencia del ciudadano Secretario de Salubridad y Asistencia ante esta representación nacional, en los términos y circunstancias previstos en el artículo 93 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, para ilustrar en relación a la iniciativa enviada por el propio Ejecutivo, antes mencionado. A usted, señor doctor Jorge Jiménez Cantú, le pedimos aceptar nuestra complacencia por las amplias consideraciones que ha ten ido a bien de hacernos, en cuanto a esa iniciativa, las mismas consideraciones que han satisfecho plenamente a esta asamblea legislativa.

El C. Presidente: Se ruega a la Comisión designada para introducir al ciudadano doctor Jorge Jiménez Cantú a este Salón, lo acompañe para cuando estime pertinente retirarse.

(La Comisión cumple con su cometido.)

- El mismo C. Presidente: Se ruega a la Secretaría continúe con los asuntos del Orden del Día.

REFORMAS A LOS ARTÍCULOS 74 Y 79 CONSTITUCIONALES

- El C. secretario Altamirano Marín, Ignacio:

"Comisiones Unidas Primera de Gobernación. Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional.

Honorable Asamblea:

A las Comisiones Unidas Primera de Gobernación, Primera Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional, fue turnada, para su estudio y dictamen, la Iniciativa de Adiciones a los artículos 74 y 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, enviada a esta Cámara por el Ejecutivo Federal, con fundamento en lo que dispone el artículo 71, fracción I, del mismo Ordenamiento.

La Constitución de 1917 contiene la estructura jurídica fundamental que rige la vida de los mexicanos, y las instituciones por ella establecidas han permitido un sano desarrollo nacional, en el que se conjugan el orden derivado del estado de derecho en que vivimos y la libertad propia de nuestra idiosincrasia.

El desarrollo democrático de México ha dado un importante paso hacia adelante con la Iniciativa de Ley Orgánica del Territorio de la Baja California Sur, que el C. Presidente de la República envió a esta Cámara y que la misma aprobó en sesión pasada. En esta Iniciativa se restablece en dicha circunscripción el Municipio a cargo de un Ayuntamiento de elección popular directa, en consonancia con lo dispuesto por la Base 2a. de la fracción VI del artículo 73 de la Constitución General de la República. Asimismo la Secretaría de la Cámara dio cuenta a esta H. Asamblea de la Iniciativa de Ley Electoral Municipal del Territorio de la Baja California Sur, enviada también por el Ejecutivo de la Unión, y que constituye la disposición legislativa que prescribe la forma y los términos del proceso electoral.

Ahora bien, en todo proceso eleccionario, se requiere de un organismo que califique su legitimidad y que haga la declaratoria correspondiente sobre la persona o personas que hubieren obtenido mayoría de votos para los cargos en cuestión. Por lo que se refiere a los Ayuntamientos de los Estados que forman parte del Pacto Federal, el órgano que ejerce estas funciones es el Congreso Local. En el caso de los Territorios, no se podría otorgar esta facultad a dicho organismo, por carecer de él. Pero por mandato constitucional, es el Congreso de la Unión el órgano que legisla en todo lo relativo al Distrito y Territorios

Federales, En esta virtud, es lógico que la calificación de las elecciones municipales se remita al Poder Legislativo de la Federación.

Como lo señala la propia Iniciativa, se ha propuesto que sea facultad exclusiva de la Cámara de Diputados erigirse en Colegio Electoral, para ejercer las atribuciones que la Ley respectiva le señala en materia de elecciones de los Ayuntamientos del Territorio, porque siendo estos órganos que realizan funciones políticas y administrativas similares a la del Poder Ejecutivo Federal, es a esta Cámara a quien corresponde la facultad de erigirse en Colegio Electoral para calificar la elección del Titular del Poder Ejecutivo de la Federación. A mayor abundamiento, es aquí donde los Territorios están representados a través de un diputado, cada uno de ellos.

El proyecto de Ley Orgánica del Territorio de la Baja California Sur, aprobado por esta Cámara, confiere a la misma, la facultad de destituir o suspender a uno o todos los miembros de los Ayuntamientos del Territorio, por las causas que en el mismo Proyecto se señalan. Por lo tanto, es menester adicionar el artículo 74 de la Constitución General de la República, que se refiere a las facultades exclusivas de esta Cámara de Diputados, con la facultad enunciada.

Esta misma atribución se considera, pero con carácter provisional, a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, en los períodos de receso, a fin de que sea la Cámara, en su oportunidad, la que tome la determinación definitiva.

Por lo expuesto, y por las razones aducidas en la Exposición de Motivos de la Iniciativa de que se trata, que estas Comisiones Unidas hacen suyas, nos permitimos proponer a la consideración de esta H. Asamblea el siguiente proyecto de Decreto que adiciona los artículos 74 y 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Artículo 74. Son facultades exclusivas de la Cámara de Diputados:

I. Erigirse en Colegio Electoral para ejercer las atribuciones que la Ley le señala respecto a la elección de Presidente de la República. Dicha facultad se ejercerá también respecto de las elecciones de Ayuntamientos en los Territorios, pudiendo suspender y destituir, en su caso, a los miembros de dichos Ayuntamientos y designar sustitutos o juntas municipales, en los términos de las leyes respectivas.

II. .....

III. .....

IV. .....

V. .....

VI. .....

VII. .....

VIII. .....

Artículo 79. La Comisión Permanente, además de las atribuciones que expresamente le confiere esta Constitución, tendrá las siguientes:

I. .....

II. .....

III. .....

IV. .....

V. .....

VI. .....

VII. .....

VIII. Suspender provisionalmente a los miembros de los Ayuntamientos de los Territorios y designar sustitutos o juntas municipales, en su caso, en los términos de las leyes respectivas.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- México, D. F., a 27 de enero de 1971. Gobernación Primera: Octavio Sentíes Gómez.- Luis H. Ducoing Gamba.- Rodolfo Sánchez Cruz.- Juan Moisés Calleja García. Primera Puntos Constitucionales: Octavio Sentíes Gómez .-

Cuauhtémoc Santa Ana.- Luis H. Ducoing Gamba.- Ignacio González Rebolledo.- Alejandro Peraza Uribe. Estudios Legislativos: Presidente, Santiago Roel García.- Secretario, J. Carlos Osorio Aguilar. Sección Constitucional: Luis H. Ducoing Gamba.- Moisés Ochoa Campos.- Francisco Ortiz Mendoza."

- Trámite: Primera lectura.

- El mismo C. Secretario: Señor Presidente agotados los asuntos en cartera se va a dar lectura al Orden del Día de la próxima sesión.

ORDEN DEL DÍA

- EL mismo C. Secretario:

"Primer Período Extraordinario de Sesiones de la XLVIII Legislatura al Congreso de la Unión.

Orden del Día

Lectura del acta de la sesión anterior.

Dictámenes a discusión

De las Comisiones Unidas Primera de Gobernación, Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional con Proyecto de Ley Electoral Municipal del Territorio de Baja California Sur. De las Comisiones Unidas Primera de Gobernación, Primera de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Sección Constitucional con proyecto de Decreto que reforma los artículos 74 y 79 constitucionales."

- El C. Presidente (a las 15:40 horas): Se levanta la sesión, y se cita para la que tendrá lugar mañana 29 de enero, a las 11:00 horas.

TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA Y "DIARIO DE LOS DEBATES"