Legislatura XLVIII - Año II - Período Ordinario - Fecha 19711007 - Número de Diario 13

(L48A2P1oN013F19711007.xml)Núm. Diario:13

ENCABEZADO

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

XLVIII LEGISLATURA

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos. el 21 de septiembre de 1921.

AÑO II México, D. F., Jueves 7 de Octubre de 1971 TOMO II. - NÚM. 13

SUMARIO

Orden del Día

Se abre la sesión. Lectura del Orden del Día

Acta

Lectura y aprobación del Acta de la sesión anterior

Comunicaciones

De las Legislaturas de los estados de Chihuahua y Querétaro, relativas a la apertura y clausura de períodos de sesiones y designación de Mesas Directivas. De enterado.

Invitaciones

Del Departamento del Distrito Federal, al acto que tendrá lugar el día 10 de los corrientes, con motivo del CXLVII aniversario de la Fundación de la República. De designa comisión.

Del Departamento del Distrito Federal, a la ceremonia que, en ocasión del CDLXXIX aniversario del Descubrimiento de América, se llevará a cabo el día 12 del actual. Se designa Comisión

Informes de Labores

Para los efectos del artículo 93 constitucional, el C. licenciado Emilio O. Rabasa, Secretario de Relaciones Exteriores, envía el Informe de Labores desarrolladas por la Dependencia a su cargo, durante un año. Resérvese en el Archivo para consulta de los ciudadanos diputados y córrase traslado a la H. Cámara de Senadores.

DICTAMEN DE PRIMERA LECTURA

Condecoración

Dictamen de la Segunda Comisión de Puntos Constitucionales, con proyecto de Decreto, que concede al C. Rómulo O'Farrill permiso para que pueda aceptar y usar la condecoración que le confirió el Gobierno de la República de China. Primera Lectura.

Comentarios a la Intervención del Presidente Echeverría ante la Organización de las Naciones Unidas

Para destacar la importancia que entraña la intervención del C. licenciado Luis Echeverría Alvarez, Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, ante la Organización de las Naciones Unidas, el pasado martes 5 de los corrientes, hacen uso de la palabra los CC. Marcos Manuel Suárez Ruiz, Juan Landerreche Obregón, Román Ferrat Solá, Juan Moisés Calleja García, Manuel Stephens García y Celso Delgado Ramírez. Se levanta la sesión.

DEBATE

PRESIDENCIA DEL C. RAMIRO ROBLEDO TREVIÑO

(Asistencia de 155 ciudadanos diputados.)

- El C. Presidente (a las 11:55 horas): Se abre la sesión.

ORDEN DEL DÍA

- El C. secretario Herrerías Montoya, Ignacio F.:

"Cámara de Diputados.

Segundo Período Ordinario de Sesiones. XLVIII Legislatura. Orden del Día

7 de octubre de 1971.

Lectura del acta de la sesión anterior. Circulares de las Legislaturas de los Estados de Chihuahua y Querétaro.

El Departamento del Distrito Federal invita a las ceremonias que se efectuarán con motivo del 47 aniversario de la Fundación de la República y el 479 aniversario del Descubrimiento de América, los días 10 y 12 del actual, respectivamente.

El C. Secretario de Relaciones Exteriores, en cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 93 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, presenta el informe de las actividades desarrolladas por la Secretaría a su cargo, del 1o. de septiembre de 1970 al 31 de agosto de 1971.

Dictamen de primera lectura

Uno de la Segunda Comisión de Puntos Constitucionales con proyecto de Decreto por el que se concede al C. Rómulo O'Farrill el permiso constitucional necesario para aceptar y usar la condecoración que le confirió el Gobierno de la República de China.

Comentarios respecto a la intervención del ciudadano Presidente de la República, ante la Organización de las Naciones Unidas, el pasado martes 5 del presente mes."

ACTA

- El mismo. C. Secretario:

"Acta de la sesión de la Cámara de Diputados del H. XLVIII Congreso de la Unión, celebrada el día cinco de octubre de mil novecientos setenta y uno. Presidencia del C. Ramiro Robledo Treviño.

En la cuidad de México, a las doce horas del martes cinco de octubre de mil novecientos setenta y uno, se abre la sesión con asistencia de ciento sesenta y dos ciudadanos diputados, según declara la Secretaría después de pasar lista.

Lectura del Orden del Día.

Sin que motive debate se aprueba el acta de la sesión anterior, celebrada el día treinta de septiembre próximo pasado.

Se da cuenta de los documentos en cartera:

Informe que presentan los CC. diputados Secretarios, de conformidad con la fracción V del artículo 25 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General, que expresa el número de expedientes tramitados por las Comisiones Permanente y Especiales de la Cámara de Diputados durante el mes de septiembre. Insértese en el Diario de los Debates.

El C. doctor José F. Rivas Guzmán solicita licencia para separarse de sus funciones como diputado federal por el Primer Distrito Electoral del Estado de Colima, por haber sido nombrado Director General de Acción Cultural y Social del Departamento del Distrito Federal. Recibo, y a la Comisión de Puntos Constitucionales en turno.

La H. Cámara de Senadores invita a la sesión solemne que tendrá lugar el día 7 del presente, para conmemorar el 58 aniversario del sacrificio del senador y doctor Belisario Domínguez e imponer la Medalla de Honor del Senado de la República al doctor Jaime Torres Bodet.

Para asistir a ese acto con la representación de esta Cámara se designa en comisión a los CC. diputados José Casahonda Castillo, Alejandro Ríos Espinosa, José Ernesto Díaz López y María Guadalupe Urzúa Flores.

Oficio de la H. Colegisladora, por el que se comunica la elección de Presidente y Vicepresidentes de su Directiva para el presente mes. De enterado.

La Legislatura del Estado de Aguascalientes participa la apertura del primer período ordinario de sesiones, correspondientes al primer año de ejercicio y la integración de su Mesa Directiva. De enterado.

El C. doctor Jorge Jiménez Cantú, Secretario de Salubridad y Asistencia, envía el informe de labores a que se refiere el artículo 93 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, correspondiente al período comprendido de septiembre de 1970 al 31 de agosto de 1971. Recibo, y resérvese en el Archivo para consulta de los CC. diputados y córrase traslado a la H. Cámara de Senadores.

Oficio de la Secretaría de Gobernación transcribiendo otro de la de Relaciones Exteriores, por el que se solicita el permiso constitucional necesario para que el C. Rómulo O'Farrill pueda aceptar y usar una condecoración que le confirió el gobierno de la República de China. Recibo, y a la Comisión de Puntos Constitucionales en turno.

Dictamen con proyecto de Decreto, suscrito por la Segunda Comisión de Puntos Constitucionales, por el que se concede permiso al C. Francisco Aguirre Jiménez para aceptar y usar la condecoración en el Orden al Mérito que en el grado de 'Comendador' le confirió el gobierno de la República Italiana. Segunda lectura.

A discusión, sin ella, en votación nominal, se aprueba el proyecto de Decreto por unanimidad de ciento sesenta y ocho votos, pasa al Senado para sus efectos constitucionales.

El C. diputado Jaime Pineda Salgado hace uso de la palabra para hacer la presentación del informe de la Comisión de Artesanías, integrada por los CC. diputados Alejandro Peraza Uribe, Jaime Pineda Salgado, Ignacio Gálvez Rocha, Maximiliano León Murillo, Agapito Hernández y Antonio Hernández Ornelas; que en virtud de los trabajos desarrollados, se amplió durante las etapas tercera y cuarta con la inclusión de los CC. diputados Fernando Castillo Castillo.

Abdón Ortiz Cruz, María de los Ángeles Grant Munive, José Estefan Acar, Fernando Cueto Fernández, Ernesto Velasco Lafarga y Miguel Hernández Labastida.

La C. diputada María de los Ángeles Grant Munive, en nombre de la Comisión, da lectura al informe de los trabajos realizados en las giras efectuadas durante el receso en los Estados de Michoacán, Tlaxcala, Guerrero y de México.

El C. diputado Ignacio Gálvez Rocha expone las conclusiones de la misma comisión como resultados de sus diálogos, visitas y observaciones a los diferentes grupos artesanales.

Para hacer diversas consideraciones relativas al informe al que se acaba de dar lectura hacen uso de la palabra los CC. diputados Maximiliano León Murillo y Alejandro Peraza Uribe.

En conmemoración de la expedición del Plan de San Luis y como homenaje a esta fecha cívica, hace uso de la palabra el C., diputado Tarsicio González Gutiérrez.

Para hacer algunas consideraciones sobre este acontecimiento histórico hacen uso de la palabra los CC. diputados Guillermo Ruiz Vázquez y Humberto Hiriart Urdanivia.

A las catorce horas y treinta minutos se levanta la sesión y se pasa a sesión secreta."

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa , sírvanse manifestarlo. Aprobada.

COMUNICACIONES

- El C. secretario Espinosa Pablos, Marcos Antonio:

"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Poder Legislativo.

Chihuahua, Chih., 15 de septiembre de 1971.

CC. diputados secretarios de la H. Cámara de Diputados al Congreso de la

Unión. México, D. F.

Nos permitimos hacer de su conocimiento que con esta fecha, quedó legítimamente constituida e inaugura su primer período ordinario de sesiones correspondiente a al primer año de su ejercicio constitucional, la Quincuagésima H. Legislatura de esta Entidad, quedando integrada su mesa directiva en la siguiente forma:

Presidente, C. ingeniero Santiago Nieto Sandoval; vicepresidente, C J. Refugio Rodríguez; primer secretario, C. profesor Humberto Martínez Delgado; segundo secretario, C, Carlos Franco Peña; primer prosecretario, C. Alfonso Estrada Erives; segundo prosecretario, C. Leonel de la Rosa Carrera.

Reiteramos a usted(es) las seguridades de nuestra consideración atenta y distinguida.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

Profesor Humberto Martínez D., D. S. - Carlos Franco Peña. D. S."

- Trámite: De enterado.

- El C. secretario Herrerías Montoya, Ignacio:

"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Estado de Querétaro Arteaga. - Poder Legislativo.

Querétaro, Qro., 14 de septiembre de 1971.

C. Presidente de la H. Cámara de Diputados. México, D. F.

La Diputación Permanente de la Cuadragésima Tercera Legislatura Constitucional del Estado de Querétaro Arteaga, en cumplimiento de lo ordenado en el artículo 68 de la Constitución Política Local, clausuró hoy las labores correspondientes al Segundo Receso del Primer Año de Ejercicio Legal de aquélla.

Lo que comunicamos a usted(es) para su conocimiento y efectos legales consiguientes.

Atentamente.

Licenciado. José Luis Gallegos Pérez, D. S. - Profesora, Mercedes Camacho C., D. S. -

Trámite: De enterado.

- El C. secretario Espinosa Pablos, Marco Antonio:

"Escudo nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Estado de Querétaro Arteaga. - Poder Legislativo.

Querétaro, Qro., 16 de septiembre de 1971.

C. Presidente de la Honorable Cámara de Diputados.

México, D. F.

La Cuadragésima Tercera Legislatura Constitucional del Estado de Querétaro Arteaga, con apoyo en el artículo 42 de la Constitución Política Local, en su sesión efectuada hoy, se declaró legítimamente instalada para funcionar durante el Primer Período Ordinario de Sesiones, correspondiente al segundo año de su ejercicio legal.

La Mesa Directiva quedó integrada en la siguiente forma:

Presidente, diputado licenciado José Luis Gallegos Pérez; Secretario, diputado Antonio Borja Rivera; Secretario, diputado J. Jesús Rocha Pedraza.

Lo comunicamos a usted(es) para su conocimiento y efectos legales consiguientes.

Atentamente.

Antonio Borja Rivera, D. S. - J. Jesús Rocha Pedraza, D. S."

- Trámite: De enterado.

INVITACIONES

- El C. secretario Herrerías Montoya, Ignacio F.:

"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos Poder Ejecutivo Federal. - México, D. F. - Departamento del Distrito Federal.

México. D. F., a 1o. de octubre de 1971.

C. diputado y licenciado Ramiro Robledo Treviño.

Presidente de la H. Cámara de Diputados. Donceles y Allende. Presente.

El Departamento del Distrito Federal, por conducto de esta Dirección, invita a usted al acto que tendrá lugar el domingo 10 del actual a las 10.00 horas, con motivo de la conmemoración del CXLVII aniversario de la fundación de la República, ante la estatua del Benemérito General Vicente Guerrero, en el jardín de San Fernando de esta capital.

Al mismo tiempo, me permito rogarle tenga a bien dictar sus respetables instrucciones, con objeto de que una comisión que represente a esa H. Cámara de Diputados a su digno cargo, asista al acto de referencia y haga el depósito de una ofrenda floral.

Reitero a usted mi atenta y distinguida consideración.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

El Director General, doctor José Rivas Guzmán."

- El C. Presidente: Para asistir a este acto en representación de la Cámara de Diputados, se designan en comisión a los siguientes ciudadanos diputados:

Antonio Melgar Aranda, Luis Tudón Hurtado y Salvador Esquer Apodaca.

- El C. secretario Espinosa Pablos, Marco Antonio:

"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Poder Ejecutivo Federal. - México, D. F. - Departamento del Distrito Federal.

México, D. F, a 4 de octubre de 1971.

C. diputado y licenciado Ramiro Robledo Treviño. Presidente de la H. Cámara de Diputados. Donceles y Allende. Presente.

El Departamento del Distrito Federal, por conducto de esta Dirección, invita a usted al acto que tendrá lugar el martes 12 del actual, a las 10.00 horas, con motivo del CDLXXIX Aniversario del Descubrimiento de América, frente a la estatua de Cristóbal Colón, sita en el Paseo de la Reforma de esta capital. Al mismo tiempo, me permito rogarle tenga a bien dictar sus respetables instrucciones, con objeto de que una comisión que represente a esa H Cámara de Diputados a su digno cargo, asista al acto de referencia y haga el depósito de una ofrenda floral.

Reitero a usted mi atenta y distinguida consideración.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

El Director General, Dr. José Rivas Guzmán."

- El C. Presidente: Para asistir a este acto en representación de esta Cámara, se designan en comisión a los siguientes ciudadanos diputados: Raúl Gómez Pedroso, Jorge Carlos González y Juan Pablo Cortés Cruz.

INFORME DE LABORES

- El C. secretario Herrerías montoya, Ignacio F.:

"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Poder Ejecutivo Federal. - México, D. F. - Secretaría de Relaciones Exteriores.

Tlatelolco, D. F., a 20 de septiembre de 1971.

CC. Secretarios de la H. Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. Ciudad.

En cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 93 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, tengo el honor de presentar por conducto de ustedes al H. Congreso de la Unión, adjunto, el informe de las actividades desarrolladas por la Secretaría de Relaciones Exteriores del 1o de septiembre de 1970 al 31 de agosto de 1971.

Me es grato reiterar a ustedes las seguridades de mi distinguida consideración.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

Ç El secretario, Emilio O. Rabasa."

- Trámite: Recibo, y resérvese en el Archivo para consulta de los ciudadanos diputados y córrase traslado a la H. Cámara de Senadores.

DICTAMEN DE PRIMER LECTURA

Condecoración

- El C. secretario Espinosa Pablos, Marco Antonio:

Segunda Comisión de Puntos Constitucionales.

Honorable Asamblea:

En oficio fechado el 29 de septiembre próximo pasado, la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la de Gobernación, solicita el permiso Constitucional necesario para que el C. Rómulo O'Farrill, Presidente de la empresa periodística "Publicaciones Herrerías, S. A.". pueda aceptar y usar la condecoración de a Orden de la Estrella Brillante que, en el grado de Gran Cordón, le confirió el gobierno de la República de China.

En sesión efectuada por la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión el 5 del actual, se turnó a la Primera Comisión que suscribe, para su estudio y dictamen, el expediente, relativo a esta solicitud.

Considerando:

a) Que el peticionario ha acreditado su nacionalidad mexicana con la copia certificada del acta de nacimiento relativa;

b) Que al solicitante le ha sido conferida la distinción respectiva, tomando en consideración la labor desarrollada para estrechar los lazos de amistad entre los dos países;

c) Que la solicitud se ajusta a lo establecido por la fracción III del apartado B) del artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; y

Como el C. Rómulo O'Farrill al recibir la condecoración señalada no queda sujeto de manera alguna al gobierno otorgante, esta Comisión se permite proponer a la consideración de esta honorable Asamblea, el siguiente proyecto de Decreto:

Artículo único. Se concede permiso al C. Rómulo O'Farrill para que, sin perder la ciudadanía mexicana, pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden de la Estrella Brillante que, en el grado de Gran Cordón, le confirió el gobierno de la República de China.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. México, D. F., a 6 de octubre de 1971. -

Máximo Contreras Camacho. - Santiago Roel García. - Rafael Rodríguez Barrera. - Alfredo V. Bonfil Pinto. - Francisco Ortiz Mendoza. - Juan Landerreche Obregón."

- Trámite: Primera lectura.

COMENTARIOS A LA INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE ECHEVERRÍA ANTE LA ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS

- El C. Presidente: Me permito informar a la honorable Asamblea que han solicitado a esta Presidencia el uso de la palabra para comentar la reciente intervención del señor Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado

Luis Echeverría Álvarez ante la Organización de las Naciones Unidas, los siguientes ciudadanos diputados: Marcos Manuel Suárez Ruiz, Juan Landerreche Obregón, Juan Moisés Calleja García Román Ferrat Solá, Manuel Stephens García y Celso Delgado Ramírez.

- El mismo C. Presidente: Se concede el uso de la palabra, al ciudadano diputado Marcos Manuel Suárez Ruiz,y se le invita a pasar a la tribuna.

- El C. Suárez Ruiz, Marcos Manuel: señor Presidente, señores y señoras. Antier un mexicano habló al mundo, desde ese Foro Universal que es la Organización de las Naciones Unidas.

El mundo escuchó la vigorosa expresión del pensamiento de ese mexicano que con inconformidad creadora reclama para el hombre el logro del pleno desarrollo de sus propias potencialidades en pacífica convivencia.

El mundo percibió la autenticidad de ese mexicano de nuestro tiempo, consecuente en su retórica y acción, con su pretérito y su devenir, con su realidad y sus aspiraciones.

La voz que resonó, no fue solamente la del mexicano consecuente con su pasado que llevó el reflejo de su añeja tradición y cultura; también fue la voz de los milenarios mayas y los hacendosos toltecas; los místicos teotihuacanos y los orgullosos aztecas. Allí estuvo el rey poeta Netzahualcoyotl y el altivo y gallardo Cuahtémoc. Resonó la energía libertaria del padre de la patria. Miguel Hidalgo; se manifestó la certera visión del siervo de la nación y legislador de América. José María Morelos y Pavón y se sintió la perseverancia del aguerrido consumidor de la Independencia, Vicente Guerrero. (Aplausos.)

Presente estuvo esa insigne generación de los hombres de la Reforma que con su integridad y honestidad sin tacha, hicieron posible el logro de dos grandes definiciones de un preclaro mexicano: descorrer el velo del oscurantismo y restaurar la República y la soberanía nacional: el hombre; Benito Juárez, Benemérito de las Américas. (Aplausos.)

Ese mexicano de hoy habló con la voz del apóstol de la democracia. Francisco I Madero: con la de aquel hombre celoso de nuestra soberanía, el constitucionalista Venustiano Carranza; se apreció la pasión y sinceridad de Villa y la intransigencia de Zapata: el institucionalismo de Calles y el nacionalismo de Cárdenas.

Esa voz llevó la voluntad de un pueblo constituido por una nación que surgió de un largo proceso histórico en el que se lograron reunir provechosamente las grandes culturas de su pasado prehispánico con el impulso del pensamiento y de la acción occidentales: de un pueblo que en el tránsito de tiempos y espacios diversos, ha podido conformar una identidad nacional definida de un grupo humano que luchó contra la dependencia colonial, contra las presiones que vulneraban su desarrollo, para alcanzar en un arduo proceso evolutivo una calidad social respetada en el mundo: la nacionalidad mexicana. (Aplausos.)

¿Qué sólo un mexicano habló en las Naciones Unidas? No, hablamos todos los mexicanos sinceros, auténticos, patriotas, nacionalistas. Los de ayer que nos legaron la patria que disfrutamos; los de hoy que estamos empeñados en construir una patria más justa, magnánima y generosa: los del mañana que ya tienen el derecho a recibir un mundo libre de angustias y amenazas.

México, en la voz del Primer Magistrado, exige el advenimiento de un nuevo orden en el desarrollo económico de los pueblos, sobre bases igualitarias; ese nuevo orden sólo puede alcanzarse con sinceridad, autenticidad, generosidad de todos los participantes.

Que los hombres de gobierno sean fieles intérpretes de las auténticas y legítimas aspiraciones de sus gobernados y no tan sólo de grupos de intereses especiales que siendo minorías pretenden mantener y aun ampliar sus fueros y privilegios frente a las grandes mayorías que aún claman por libertad de autodeterminación, por una igualdad de derechos y oportunidades, por una fraternidad nacional y universal, por una democracia genuina, interna y externa.

México, con dignidad y entusiasmo ha sido copartícipe del planteamiento, análisis y búsqueda de soluciones a problemas que aquejan a las naciones del mundo.

Siempre ha sido respetuoso y escrupuloso en el cumplimiento cabal de las obligaciones contraídas.

Ha permanecido consciente de que la solidaridad humana es el único recurso para lograr la convivencia pacífica.

Hemos sostenido que la organización de las Naciones Unidas debe ser el foro donde se debatan todas las ideas, donde se concilien todos los intereses, donde se arbitren todas las discrepancias, donde se resuelvan pacíficamente todos los conflictos.

Nos hemos pronunciado porque todos los hombres del mundo sin prejuicios ni discriminaciones en absoluta igualdad de circunstancias sean libres y que sus naciones correlativamente sean independientes y soberanas.

Hemos participado, cooperado y acrecentado nuestra labor con los diversos organismos que integran las Naciones Unidas ya sean regionales o especiales para asuntos específicos.

La presencia de nuestro Jefe de Estado en la Asamblea General de las Naciones Unidas, ratifica la fe de los mexicanos en que la razón y el derecho son los instrumentos principales para la armonía y la convivencia; enriquece los principios de justicia social y refuerza la causa de las grandes mayorías que aspiran a escapar de la angustia y la zozobra.

México se pronunció por el ingreso de la República Popular China basado en el principio de Universidad de la ONU. Señala los instrumentos para la solución pacífica del conflicto del Medio Oriente donde existe el peligro inminente de una conflagración.

Llama a las conciencias y a la solidaridad con los millones de seres humanos que sufren como los actuales refugiados pakistanos en la India.

Bajo el principio de la proscripción del uso de la fuerza, insiste en el desarme cooperando, por todos los medios, para lograrlo y ejemplificando su compromiso con el tratado de Tlatelolco.

Su interés en la cooperación internacional lo muestra con la decidida participación en las conferencias sobre el medio humano y los derechos del mar.

El tradicional concepto del colonialismo ya va quedando atrás aunque aun existen comunidades de hombres que permanecen sojuzgados, solidariamente deseamos su próxima independencia.

El neocolonialismo cultural. Económico y Tecnológico es ahora una forma sutil de dominación y su práctica es un acto deliberado y consciente que viola y vulnera la soberanía de los pueblos.

La actual crisis económica mundial revela el desajuste de las estructuras vigentes y la ineficacia de sus organismos reguladores. En esta etapa de transición la filosofía del cambio debe ser trasladada a este campo.

Es opinión generalizada que en la transformación de las estructuras económicas es necesario abandonar los esquemas de dominación donde el costo del bienestar lo pagan los más pobres.

Las barreras arancelarias sólo tiene justificación en un país en vías de desarrollo para proteger una industrialización incipiente.

Para cualquier otro que las levante le son contraproducentes.

Elementos esencial de las relaciones de amistad y comercio es la reciprocidad, las decisiones unilaterales, máxime si son violatorias de convenios celebrados, perjudican la permanencia de éstas.

El lastimoso contraste entre la opulencia de unos y la pobreza de otros, la explotación del hombre, la exacción de sus riquezas naturales, el deliberado desprecio a sus opiniones, lesionan la dignidad del ser humano. La paciencia de los pueblos no es inagotable.

Afortunadamente aún tenemos la esperanza de que triunfen la comprensión y los principios de justicia.

Si hubo una aceptación general de ese mensaje ante la ONU fue porque aunque entre sus miembros pudieran existir divergencias, las tesis expuestas en aquella sesión los llevaron a identificarse con una aspiración que les es común: el entendimiento recíproco con justicia y equidad.

El mensaje fue acogido porque es también parte del programa de las Naciones: porque lo sintieron como propio y porque advirtieron en su contenido la sinceridad que nos coloca en un plano de comprensión y porque se habló el mismo lenguaje con el que nos entendemos todos los países latinoamericanos y mediante el cual hemos trascendido al ámbito de las naciones hermanas. La acogida que se le otorgó al mensaje de México revela la aspiración del mundo por alcanzar una auténtica independencia y política y económica y por robustecer. hasta sus dimensiones internacionales, sus sistemas de vida para que todos los pueblos puedan escuchar y ser escuchados, como única forma de alcanzar la democracia completa.

La solidaridad brindada a México fortalece la responsabilidad de nuestro país . A esa solidaridad se une, en lo interior, la plena identidad que los mexicanos advertimos en nuestro vocero internacional; reconocerlo así, es hacer patente la sólida unidad de los mexicanos que alentara al Primer Magistrado para seguir rompiendo moldes caducos, variando estructuras, estableciendo nuevos cauces de progresos, seguro de que en el diario trabajo nacional, el pueblo está a su lado. (Aplausos.)

Al brindar este unánime respaldo, tenemos presente que en su manifestación exterior, el ciudadano Presidente es consecuente también con el sentido que imprime a su gobierno en lo anterior.

México lucha y se esfuerza denodadamente por superar sus carencias, algunas seculares: y como cualquier otro país, encuentra tropiezos y obstáculos dentro y fuera de sus fronteras que hay que vencer.

Y en su constante empeño por trazar mejores derroteros, el Presidente de la República dialoga en todo momento y en todo lugar; desde la célula primaria de una sociedad que es el hombre, siguiente con la familia, la comunidad, las instituciones, los países hermanos y en una solución de continuidad hasta en la ONU; el organismo supranacional por excelencia.

De todo esto tenemos conciencia los mexicanos; por eso, a su retorno al territorio nacional, retorno que realiza por la provincia donde radican muchos de nuestros grandes problemas, la representación popular declara que así como en sus actos cotidianos en el solar nativo, en el foro de las Naciones

Unidas y ante el mundo, Luis Echeverría señaló nuestro camino. (Aplausos.) El de una república independiente y revolucionaria que urge transitemos con enérgica dignidad.

Que todo mexicano de buena fue tome su puesto, con decisión sin reservas, por convicción, sólidamente unidos con el Presidente Echeverría para que, como él lo hace cotidianamente, con responsabilidad, entrega, vigor, imaginación audacia, todos hagamos de México, en el concierto de las naciones, la nación más justa y más respetada." (Aplausos.)

- El C. Presidente: tiene la palabra el C. diputado Juan Landerreche Obregón, y se le invita pasar a la tribuna.

- El C. Landerreche Obregón, Juan: Señor Presidente: señoras y señores diputados:

"Honorable Asamblea:

La presencia de México en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, la presencia del Presidente de la República en la más alta tribuna internacional, es un acontecimiento que merece ser destacado por el pueblo de nuestro país, independientemente de diferencias de criterio o de posiciones políticas. La actitud internacional de México, siempre firme en favor de los pueblos débiles, de la

autodeterminación, de la no intervención en los asuntos nacionales internos y de apoyo decidido a los países en desarrollo, para que puedan superar sus niveles económicos sociales, culturales y políticos, es justa y merece nuestro apoyo.

Compartimos la fe en la Organización de las Naciones Unidas, en las posibilidades de su acción presente y futura, en la eficacia real de sus realizaciones que, a pesar de que son modestas todavía y sufren frecuentes quebrantos y retrocesos, constituyen un adelanto positivo en la tarea gigantesca de someter al orden jurídico y a la democracia internacional genuina a todos los países y en especial a los que concentran la fuerza económica y militar y están acostumbrados a usarlas en su beneficio. La única forma de dar vigencia a las instituciones, es tener fe en ellas y luchar con fe por su realización; a pesar de obstáculos que parecían insalvables, gracias a esta fe y a esta lucha la historia muestra cómo se han superado y pasado al olvido personajes, países y situaciones que aparentemente eran inconmovibles.

Estamos de acuerdo en que no puede desconocerse por más tiempo la realidad y la importancia internacional de la República Popular China y que ha llegado la hora de darle acceso a la ONU: pero consideramos que en este caso no son sólo los principios de la integridad territorial y de la soberanía individuales los que deben tomarse en cuenta, sino también la no intervención en el conflicto interno de un pueblo que indudablemente se ha dividido y que a través de décadas ha formado dos países distintos claramente identificados con población, territorio y gobierno diversos y que, independientemente de su respectiva posición política y de la denominación que se les dé, no puede ignorarse de una plumada por el reconocimiento que ahora se haga de uno la situación creada por el reconocimiento reiterado por decenios que antes se hizo del otro.

Apreciamos plenamente el valor de la paz y de la supresión de la violencia como valores fundamentales de la convivencia humana: pero consideramos que la paz sin la justicia es palabra vacía y que los valores del espíritu deben estar y reconocerse antes de la mera seguridad material.

Los hombres y los pueblos nunca han dudado en abandonar su tranquilidad y en poner en riesgo no sólo sus posesiones sino también sus vidas para enfrentarse a la opresión y a la injusticia: y gracias a ello ha sido posible lograr genuinos adelantos en la vida social, tanto en lo material como en lo moral. En buena hora que se suprima la violencia y se logre la paz siempre que sea en función del orden jurídico de la solidaridad humana y de la justicia y no simplemente por la imposición de la voluntad de los poderosos en perjuicio de los derechos de los débiles.

Aplaudimos el ingreso de tantas nuevas naciones a la comunidad de los pueblos libres, que han hecho aumentar substancialmente el número de miembros de las Naciones Unidas y apoyamos con entusiasmo la exigencia de que el reconocimiento de una soberanía política debe completarse en la posibilidad de que participe en forma real, efectiva y decorosa de los beneficios económicos, sociales y morales de que disfrutan otros pueblos.

La justicia internacional que invocamos exige que se corrijan los desequilibrios, los abusos, las carencias a que ha dado lugar un mundo organizado por los pueblos fuertes en su propio beneficio, sin tomar en cuenta o tomando en cuenta en forma secundaria y parcial, la dignidad y los legítimos intereses de los demás países.

Aplaudimos sin reservas el alegato del Presidente de México en la ONU en favor de los pueblos débiles y del deber de solidaridad internacional para ayudar a su desarrollo y a la elevación de sus niveles materiales y culturales.

También estamos plenamente de acuerdo con el anhelo de la integración latinoamericana que exigen y propician la unidad de historia, de tradiciones, de lengua, de cultura y de religión y tan sólo recordamos que también une a nuestros pueblos el mestizaje étnico y cultural que les dio origen y que nos hace latinoamericanos porque somos iberoamericanos. Por todo ello, deben reforzarse los instrumentos que, como la ALALC, tienden a fortalecer esa unidad.

Apoyamos en forma decidida la demanda de que los Estados Unidos supriman el gravamen del 10% sobre las importaciones de los países en desarrollo. Si bien todos los países tienen derecho a defender su propia economía, los países fuertes deben tener en cuenta las repercusiones que sus actos y sus propios errores pueden tener y han tenido en los que son débiles y que, por ser más numerosos, constituyen al fin y al cabo una base fundamental de la economía general.

Por tanto, además de las obvias razones de solidaridad internacional, también por consideraciones económicas que a la larga se imponen en forma definitiva, deben evitar perjuicios a esos pueblos débiles y ayudarlos.

Ciertamente la historia se forma de avances y retrocesos, de victorias y derrotas, y a pesar de ello siempre se logran al fin y al cabo avances irreversibles; y ciertamente también la comunidad internacional debe fundarse en la democracia política y económica entre las naciones, que respete sus derechos fundamentales, independientemente de su categoría. Pero esa democracia internacional debe fundarse a su vez en la genuina democracia interna, sin la cual aquélla no puede existir. Democracia interna que también debe ser política y económica, que no pueden existir realmente la una sin la otra, sin que ambas sean prácticas y efectivas.

En lo interno como en lo internacional.

Acción Nacional tiene fe en las instituciones y lucha por ellas a pesar de los obstáculos que se les oponen, que aquí como allá son graves y difíciles de superar. Tenemos conciencia de que se logran avances, pero también de que es mucho de lo que falta por alcanzar. Por nuestra parte seguiremos en la lucha y hacemos votos

por que logre y no se detenga, sino por el contrario se cumpla la realización de esas instituciones." (Aplausos.)

- El C. Presidente: Tiene la palabra el C. diputado Román Ferrat Solá y se le invita pasar a la tribuna.

- El C. Ferrat Solá, Román:

"Señor Presidente: honorable Asamblea:

Nosotros, los pueblos de las Naciones Unidas, resueltos a preservar la paz a las generaciones venideras del flagelo de la guerra que han infligido a la humanidad sufrimientos indecibles; los pueblos decididos a reafirmar la fe en los derechos fundamentales del hombre, en la dignidad y el valor de la persona humana, en la igualdad de derechos de hombres y mujeres y de las Naciones grandes y pequeñas; las Naciones dispuestas a crear condiciones bajo las cuales puedan mantenerse la justicia y el respeto a las obligaciones emanadas de los tratados y de otras fuentes del derecho internacional: nosotros, los pueblos de las Naciones Unidas, resueltos a promover el progreso social y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto más amplio de libertad, las Naciones que deseamos practicar la tolerancia, convivir en paz como buenos vecinos y a unir nuestras fuerzas para el mantenimiento de la paz y la seguridad internacional; aquellos quienes queremos asegurar, mediante la aceptación de principios y la adopción de métodos, para no usar la fuerza armada sino en servicio del interés común, y para promover el progreso social y económico de todos los pueblos; nosotros, los pueblos de las Naciones Unidas, hemos decidido aunar nuestros esfuerzos para realizar estos designios. En junio de 1945, con estas palabras, quedó sellada la voluntad de cincuenta y un Estados, en la Carta de las Naciones Unidas.

Entre los propósitos y principios de este documento resaltan el de mantener la paz y la seguridad internacionales, suprimir actos de agresión u otros quebrantamiento de la paz: y el de lograr, por medios pacíficos y conforme a los principios de la justicia y el derecho internacional , el arreglo de controversias o situaciones internacionales que se susciten entre las naciones miembros.

En el artículo segundo de la Carta de San Francisco se establece que la Organización de las Naciones Unidas estará integrada por las Naciones libres y soberanas; por lo que cualquier restricción a este principio violaría la soberanía externa de sus miembros, la cual supone la igualdad jurídica y política de todos los Estados.

De los anterior se desprende la importancia capital que tiene para el derecho internacional un concepto universal de soberanía.

Distinguidos tratadistas de la ciencia política han expuesto que cuando una comunidad, integrada sociológicamente, decide organizarse, crea el derecho, quien a su vez da vida al Estado como persona moral; es decir, el pueblo se otorga a sí mismo una estructura Jurídico - Política en una Constitución, la cual deberá acatarse a través de la unidad política de mando que reside esencialmente en el poder público.

Si la voluntad popular es soberana, tiene también el derecho a autodeterminarse y, por lo tanto, a evitar la ingerencia de algún poder extraño al de la Nación, sea éste interno o externo, en los asuntos domésticos.

El Estado, pues, no esta sujeto a ninguna potestad extraña a la propia comunidad Nacional.

Señores diputados: hace sólo dos días que en el Recinto de la Organización de las Naciones Unidas, se escucharon las anteriores tesis, resumidas en las siguientes palabras:

"Un avance trascendental para realizar el principio de universalidad, será dar la bienvenida durante el actual período de sesiones, a los representantes de la Nación que alberga en su territorio una cuarta parte de la población del mundo; la República Popular de China, y su consecuente ingreso al sitio que le corresponde en el Consejo de Seguridad.

Al mismo tiempo, será necesario reconocer que la soberanía y la integridad territorial de la Nación de China, son jurídicamente indivisibles."

Quien las expresó, llevaba la voluntad y el cariño del pueblo mexicano; el señor Presidente de la República, licenciado Luis Echeverría. (Aplausos.)

Dentro de un panorama sombrío, México se congratula de este trascendental acontecimiento, porque es un signo alentador que hace esperar una era de paz y tranquilidad en todo el orbe, pues creemos que las diferencias ideológicas y económicas entre las naciones del mundo, pueden ser dirimidas mediante el diálogo, la buena voluntad y el derecho.

El Presidente Echeverría ha sido portavoz, no sólo de las aspiraciones nacionales, sino de todas las naciones amantes de la paz, de la libertad y de la cooperación internacional.

Una vez más somos congruentes con nuestra historia, ya que si Morelos fue el primer defensor de la autodeterminación, Juárez, en el apotegma que preside este alto recinto, postuló el respeto irrestricto al derecho de los pueblos y de los individuos; ahora nuestro señor Presidente reafirma una vez más con postura vertical dichos principios." (Aplausos.)

- El C. Presidente: Tiene la palabra el C. diputado Juan Moisés Calleja y se le invita pasar a la tribuna.

- El C. Moisés Calleja, Juan:

"Señor Presidente, ciudadanos diputados:

La libertad, la independencia, el respeto entre los hombres y entre las Naciones, son principios inherentes a la idiosincrasia mexicana. Son parte de la conciencia individual y colectiva del mexicano, que en cualquier etapa de su historia le ha servido para que en la dirección o en el anonimato luche cuando es necesario a fin de que permanezcan incólumes, intocables, tales principios; para que tengan absoluta vigencia.

En la valorativa nacional, esa determinación es la que ha servido de guía, de rectora en todos nuestros actos y para que en los momentos de crisis, de dudas, de congojas o de derrumbamientos en otras latitudes, México obtenga,

como lo tiene, la consideración de un país que está en contra de las injusticias, de cualquier intromisión que pueda afectar aun en lo insignificante la dignidad nacional; que impugna sin titubeos las agresiones de los fuertes y para ello sirvan de ejemplo Etiopía y España y que en todos los foros levante su voz autorizada, por cuanto que la razón le asiste, para demostrar que jamás podrá construirse un mundo mejor, más digno, en el que sobresalgan los valores humanos cuando prevalezca el capricho del arbitrario, el egoísmo en los propósitos y la imposición ante el débil, si así le es dable, de los intereses del poderoso. Cuando persista la ley de la selva.

En este universo convulso, de tantas tendencias contradictorias en las que a nombre de la libertad, la libertad se sacrifica, sobrevive aun la esperanza de que, lo que los hombres que inteligentemente han construido, que las instituciones y principios que han creado para contrarrestar lo que ha sido consecuencia de la sin razón, de la soberanía, de la brutalidad o de la inconciencia, se impongan en las relaciones de las Naciones, independientemente de su calificación de grandes o de pequeñas. Todas están formadas por hombres negros, blancos, morenos y de otro tono, que al margen de sus creencias, grados de civilización, de abundancia o restricciones constituyen la humanidad que en su destino, felicidad, en su ascenso, en su auténtico perfeccionamiento ha tomado la determinación de liquidar o enfrentarse exhaustivamente en contra de todos aquellos que vistos sus particulares intereses pretenden que subsistan sistemas, métodos o formas ya en desuso que únicamente en la historia han servido para que los imperios caven sus tumbas y se ahonden las diferencias entre quienes, con acopio de la razón y de la justicia, tuvieron la oportunidad de entenderse.

México desde ayer, ahora y siempre, pero más en el presente, ama la libertad, lucha sin descanso para que predomine todo lo que es dable a fin de que en el ámbito de las relaciones entre los hombres y entre las naciones se imponga la comprensión y el entendimiento; para que no sólo en esa convivencia el grande hable cuando le conviene en nombre de la solidaridad y de la cooperación internacionales mas en las crisis, en sus desajustes pretenda y quiera que impere su voluntad egoísta sin interesarle el atropello o el daño que cause.

La voz más autorizada de la mexicanidad ha expuesto ante el juicio de las Naciones Unidas, que en ningún país o grupo de países, por poderosos que sean, pueden arrogarse la conducción exclusiva de los asuntos mundiales, ni menos aun la tutela de las demás naciones, porque en refrendo a ello procede indicar que para todos, personas o países, existen normas de conducta que en su cumplimiento garantiza la paz y elimina la anarquía. Muchas de ellas representan el holocausto de millones de vidas que se perdieron con la esperanza de lograr un mundo mejor al que no tuvieron acceso. Representa el legado de una existencia más digna que dieron a la posteridad y que ésta debe siempre defender. La declaración de las Naciones Unidas, las cartas de San Francisco, del Atlántico, no son palabras más ni palabras menos, simples enunciados, constituyen principios de observancia obligatoria en el concierto internacional a fin de que los grandes puedan ser más grandes permitiendo a los países pequeños, débiles, en desarrollo resolver sin trabas, con un trato equitativo y un entendimiento sensato sus propios problemas. Haciendo que éstos se fortalezcan a fin de eliminar en todos los ámbitos del planeta los nexos de servidumbre y las expresiones del coloniaje. Conforme a ellos nadie tiene el privilegio de oponerse, tal y como lo ha reclamado el Presidente de México, a una era económica social y política igualitaria. A que encaucemos por senderos pacíficos las justas aspiraciones a la libertad, la salud, la alimentación, la vivienda, la educación y el pleno empleo.

Inspirarse, quien marca los destinos de la patria, en nuestros más preciados héroes, en modo alguno constituyen simples referencias históricas; ello implica una cabal identificación con su ideario y conducta que ha servido para adquirir independencia política, para defenderla en las invasiones que hemos sufrido, para transformar los caducos sistemas de explotación y servidumbre y para que en la hora presente, luche inquebrantablemente con el propósito de que se consume la independencia económica haciendo posible en lo interior, el desarrollo integral del país con justicia social y en lo externo, el siempre respeto a su dignidad como nación que contribuye a la solidaridad o comprensión internacional conforme a los principios de democracia y libertad. Quien se ha ajustado a la intuición genial del que dio con marcado amor a la justicia los sentimientos de la nación mexicana; el que es acorde con el alma y acción de quien proclamó que la patria era primero y se ha confundido cabalmente con el que en la proyección de su inigualada figura dejó la regla sabia de la convivencia humana, como también lo está con los que establecieron las bases de la prosperidad nacional con auténtica justicia social, tenía que concurrir y así lo hizo la conciencia mundial para exponer el pensamiento e ideario de México: reclamar con vehemencia lo que nos es debido, el derecho que tienen todos los que viven desde el Río Bravo hasta el Suchiate para disfrutar de una existencia más digna y más humana, tanto más que en la esfera interna de su responsabilidad no ha dejado la prosperidad nacional al desprendimiento gracioso de los que tienen o han construido su mejor presente con anticipación. No se ha reconcentrado en la comodidad de un gabinete; sino a partir del momento que asume la responsabilidad del país, ha trastocado las formas, los caducos sistemas; con inusitado vigor se ha enfrentado a todos los problemas. Busca y programa adecuadas soluciones; reclama de los que se han beneficiado al amparo de nuestra tranquilidad social y del sacrificio de las clases populares, a quienes piden mayor desprendimiento para liquidar antiguas dolencias; promueve de inmediato mayor protección para quienes hacen producir la tierra; genera

mejores oportunidades para la juventud que estudia y en sus inquietudes propicia el diálogo para que con mexicanidad se responsabilice del presente y del futuro. Y cuando en su dinámica gubernamental, que es la de la Revolución Mexicana, el país prosigue y marcha hacia nuestra definitiva descolonización económica surge en el panorama internacional una determinación que lleva aparejada la de vulnerar los intereses de la comunidad mexicana. El gravamen del diez por ciento ad - valorem a las importaciones norteamericanas es coincidente con esa posibilidad.

Ante el peligro, en la lucha contra el tiempo, dentro de la contextura de gran patriota, de defensor y creyente de la democracia internacional, el señor Presidente se trasladó a la sede de la Organización de las Naciones Unidas y ante todos, frente a los que por su sola estancia en esa institución del razonar universal los califica como hombres honestos hacia los principios que reclaman y con todo el respaldo de su pueblo ha expuesto que corremos el peligro de que en la búsqueda de nuevos equilibrios prevalezcan intereses parciales, de visión limitada, sobre una previsora voluntad de cooperación.

La voz de México, la de Juárez, la de Luis Echeverría ha dicho: el único medio para evitarlo es el de la razón y este es su foro; es el de la verdad y ésta debe ser la tribuna.

Nuestro país, en el ámbito de la comunidad de las naciones reincide en su invariable conducta de considerar la inteligencia como el atributo humano para que los hombres puedan con la razón, el derecho, el común respeto resolver sus problemas y construir un mundo en que nadie se convierta en destructor de su vecino y a la postre de sí mismo, pues hoy estamos tan cerca los unos a los otros que la miseria se contagia, la pobreza se extiende y la inconformidad ha sido la madre de los grandes conflictos. La incomprensión de hoy, es deterioro en el mañana.

El Presidente de México ha cumplido con nosotros y con los postulados en que se apoya la convivencia universal. La clase trabajadora que como pueblo en un escaño de esta honorable Cámara representamos, le expresa su más amplio reconocimiento; pero el respaldo, el homenaje más rendido hacia él, no se constriñe a una satisfacción personal expuesta con escogidas palabras. Los trabajadores tienen cabal conciencia de que la República vive horas difíciles en las que se demanda la comprensión de todos incluyendo los que, hasta ahora, han pretendido resolver lo suyo sin importarles los demás. Debe fortalecerse la unidad nacional: el apoyo absoluto al Primer Magistrado de la nación expresado en que, quienes al amparo de nuestra paz social y desarrollo económico han acaparado riquezas que las inviertan y justamente las distribuyan. se acabó la época de las grandes utilidades personales y de los disfrutes superfluos. De las vanidades vacuas, la de los comerciantes voraces.

Frente al desempleo que ya se confronta, nuevas fábricas, producción más barata, mejor elaborada, mayores satisfactores, apertura de mercados especialmente con otros países que como nosotros reclaman y luchan por mejores condiciones de vida. Empresarios y trabajadores debemos pugnar por fabricar lo que aun importamos. Al funcionario venal que permite el contrabando, al mercader que lo fomenta deben ser proscritos. Si aún no producimos el objeto vistoso, confortable que deseamos, hasta no lograrlo hay que excluirlo. Se acabaron para los mexicanos los artefactos, las bebidas, los bienes que provengan de la incomprensión internacional. Fue más grande Roma en la austeridad de la República que en la magnificiencia del Imperio.

Quien adquiera de fuera lo que ya producimos y lo que aún no generamos resta ocupación a las manos mexicanas. Ayer fijamos las bases para nuestro cabal desarrollo; hoy en el obstáculo procedemos a superarlo, debemos vencer todas las determinaciones que entorpezcan las metas que nos hemos fijado. Cualquier sacrificio que se requiera, prestos hemos de estar para realizarlo. Más que fomentar divergencias que nos separen y que a otras latitudes del mundo confunden, con la ideología de la Revolución Mexicana, la juventud que estudia, el intelectual que crea, el trabajador que produce o el industrial progresista que sanamente invierte deben llevar a donde se necesita la luz de su inteligencia, la experiencia de su vida, la capacidad de que dispongan para enseñar, elevar y proteger a quien tanto lo necesita.

Los pasos agigantados de Luis Echeverría son el ejemplo para que violentemos nuestro andar a fin de que consumemos lo que aún no falta por realizar. No estamos solos. Los hombres sensatos del orbe están con nosotros y nosotros con el señor Presidente. El mejor homenaje hacia él, por lo que ha hecho y en ello, sobresalientemente por su voz y pensamiento en la tribuna del mundo, desde este lugar que es el más destacado porque es el del pueblo de México, surge el compromiso de que con la misma fe que puso el señor Presidente en la ONU los trabajadores y su pueblo la tienen el él; fe que es promesa de sacrificio, voluntad de superación, enfrentamiento a las incompreciones, aumento en el paso y presencia en donde se requiere. Es contestación al reto y creencia como él mismo lo ha dicho, en el hombre y su destino porque en la eliminación de las injusticias, de las discriminaciones económicas y políticas, en el trato justo, en la observancia de las normas del convivir humano; en el respeto al derecho ajeno está el mejor destino de la patria nuestra. (Aplausos.)

- El C. Presidente: Se concede la palabra al C. diputado Manuel Stephens García y se le invita pasar a la tribuna.

- E. C. Stephens García, Manuel: Señor Presidente, compañeros diputados: Desde hace varias décadas la política internacional de nuestro país se ha caracterizado por ser activa y defensora de los principios de autodeterminación y de no intervención. Esta política, que le ha dado reconocido prestigio internacional a nuestro país, ha contribuido positivamente en los foros internacionales con su opinión, con su voz a resolver a aportar sus ideas en torno a los debates que se han hecho

alrededor de la paz, del desarme, de la liquidación del colonialismo y neocolonialismo y se decide por la coexistencia pacífica y las relaciones amistosas y constructivas con todos los pueblos de la tierra, independientemente de su régimen social y político. Esta conducta de México ha sido su mejor escudo en el proceso revolucionario, que se enfoca hacia el progreso económico y político con independencia del extranjero.

El discurso pronunciado por el Presidente de México, el licenciado Luis Echeverría Alvarez, ante las Naciones Unidas, el pasado día 5 del presente mes, responde legítimamente a esta renovada actitud y está inspirada en las mejores tradiciones del pueblo mexicano. La posición de México y del Jefe del Gobierno, ha provocado el respaldo y la simpatía de los pueblos coloniales y semicoloniales, particularmente los de América Latina.

En medio de la tensión internacional que vive la humanidad, la solidaridad de los pueblos subdesarrollados y desarrollados en cuanto se refiere a una política que los emanacipe de las metrópolis que los han oprimido es fundamental y determinante, porque esta solidaridad se transforma en una arma mucho más poderosa que todas las armas que puedan contar los ejércitos porque cuando los pueblos se deciden a rechazar cualquier política de agresión y de saqueo, que se ejerce contra sus intereses, no hay poder que pueda detenerlos.

La presencia del Presidente de México en las Naciones Unidas era necesaria para que los pueblos del mundo conocieran directamente las opiniones nuestras respecto a los problemas del orden nacional e internacional que están dañando seriamente la vida de nuestro país. El Presidente reafirmó que los principios rectores, invariables de nuestra política internacional, son la proscripción del uso de la fuerza, la solución pacífica de las controversias, la no intervención, la igualdad jurídica de los Estados y la libre autodeterminación de los pueblos.

En estos renglones, el Presidente se ocupa del perfil que define la verdadera personalidad de México, perfil que se debe sin duda alguna a las luchas que el pueblo mexicano ha desarrollado a lo largo de su historia en las cuales ha vertido heróicamente su sangre, sobre todo en sus tres revoluciones: la de Independencia, la de Reforma y la lucha armada y social de 1910, tres revoluciones que han tenido como denominador común defender la Independencia Nacional y trazar nuestro destino sin ingerencias extrañas.

Singulariza, además, el espíritu pacífico del pueblo mexicano, en cuanto se refiere a que éste ha sido solidario en las causas más elevadas de la humanidad, como son la lucha por la paz mundial.

El Partido Popular Socialista aplaude aquellos párrafos del discurso que se refiere a la condena que hace del colonialismo, porque la eterna lucha de nuestro pueblo ha sido precisamente en contra de la ingerencia de gobiernos extranjeros en diferentes épocas de la vida nuestra. Ayer se levantó en lucha contra el coloniaje impuesto por la Corona española; después contra el Imperio de Napoleón el Pequeño; y actualmente nuestro pueblo y sus capas progresistas enfocan su lucha en contra del imperialismo internacional, particularmente el imperialismo norteamericano.

El Presidente Echeverría, en su discurso ante la ONU, hace justicia a todas aquellas fuerzas progresistas y revolucionarias que como nuestro partido siempre lucharon y demandaron porque la República Popular China pasara a formar parte de las Naciones Unidas.

Este hecho, apegado a los postulados esenciales de nuestra Revolución, de ninguna manera debe tomarse como que el pueblo mexicano coincide con la posición política e ideológica internacional que jefatura Mao Tse Tung.

La tesis de las dos Chinas nada tiene que ver con la esencia de nuestra Revolución; es una tesis reaccionaria y que provocaría grave antecedente de seguirse aceptando en la propia Organización de las Naciones Unidas.

Creemos, esperamos que en un futuro no lejano nuestro país también extienda sus relaciones a otras naciones, a otros países con los cuales todavía no enlaza sus lazos culturales y comerciales, esto sin duda alguna elevaría todavía más el prestigio internacional de nuestro país. Cuando el Presidente aboga por los graves problemas del Medio Oriente, conforme la resolución del Congreso de Seguridad de las Naciones Unidas tomada en noviembre de 1967, a efecto de que se restituyan los territorios indebidamente ocupados por Israel a los países árabes, entendemos y estamos seguros que reconoce la justicia que asiste a estos pueblos que luchan por su liberación nacional, a los pueblos árabes que han sentido el fragor de la lucha y de la guerra desencadenada por Israel y orientada por el sionismo internacional que no viene siendo otra cosa sino una nueva máscara del imperialismo internacional. Con toda energía se levanto la voz de México alentando a los pueblos latinoamericanos a luchar por la descolonización económica y establecer nuevas relaciones de trato sobre la base de la dignidad y el respeto mutuo para desterrar los nexos de servidumbre y permitir que los pueblos se desarrollen con toda su potencialidad creadora. Este aspecto es sumamente importante y lo aprovechamos para insistir que ha sido el imperialismo particularmente, y vuelvo a insistir en esto, el norteamericano, el que ha saqueado nuestros recursos y ha provocado guerras mundiales y regionales tan sucias y tan injustas como la que ha impuesto al pueblo y a la República de Vietnam. La lucha entonces, contra el coloniaje económico y político debe ser la lucha contra el imperialismo. El Presidente Echeverría fue categórico al denunciar que el 10% ad - valorem a las exportaciones norteamericanas vulnera los intereses de México y de todas las naciones en desarrollo: no solamente afecta profundamente el desarrollo económico de las naciones latinoamericanas sino particularmente afecta los intereses de la clase trabajadora de nuestros países. Esta denuncia ha exhibido la ineficacia de aquellas tesis que manejadas por representantes de la iniciativa privada y uno que otro funcionario,

sostenían que la crisis del sistema monetario internacional, que la crisis del dólar, no afectaría a nuestro país. El Presidente Echeverría se pronunció contra la guerra armamentista, la carrera armamentista, y en esta posición, sin duda alguna, también le asiste la razón, porque las gigantescas cantidades de dinero que hoy se canalizan para fines bélicos, deben invertirse en el bienestar de nuestros pueblos y en el progreso de la ciencia y de la cultura. Ese importante discurso del Presidente de México, es congruente con la situación del país, de América Latina y de los países hemisféricos. Si se examina la situación de América Latina, podemos concluir que independientemente de que los gobiernos mantengan o no las formas constitucionales, la lucha se divide en dos campos: el de la independencia nacional, del progreso social y la vigencia de las libertades democráticas por una parte, y la del campo de la opresión y el sometimiento de los países a los dictados de las oligarquías, ligadas a los monopolios extranjeros. El aunamiento de estas fuerzas opuestas, que abarca a todas las clases sociales, es claro que no puede conducir, históricamente, a crisis de la explotación y de la guerra, sino que la correlación de las fuerzas corresponde a los patriotas y a los revolucionarios. Todos los pueblos se convencen, cada día más, que el gobierno norteamericano, que la política norteamericana, que los monopolios en los cuales se sustenta, se encuentran padeciendo una enfermedad incurable. Ese sistema sólo puede ofrecer desempleo, inseguridad para el porvenir, mayores exacciones, encarecimiento de la vida, crisis económicas y financieras, militarismo y guerra. Nuestro pueblo, el pueblo de México, ha escogido y trazado su propio camino. Es evidente que las fuerzas progresistas y revolucionarias están dispuestas a acelerar la marcha de la revolución liberadora de nuestro país. El camino que trazó la Revolución Mexicana es el único que debemos seguir para alcanzar la auténtica independencia nacional y el progreso social. A una política de coloniaje económica, respondamos con una política apoyada en nuestros propios recursos, prosiguiendo la política de nacionalización de nuestros recursos básico, de los servicios públicos y expropiar los monopolios extranjeros que están descapitalizando todos los días a nuestro país. Porque, como dijera certeramente el maestro Vicente Lombardo Toledano, nacionalizar es descolonizar.

Nosotros postulamos que los pueblos latinoamericanos como el Presidente Echeverría lo ha señalado, deben unirse en torno a la lucha por la independencia económica y social, y también, como ya la experiencia lo ha demostrado; que para descolonizar deben proceder al rescate de su propia economía y al reforzamiento de la unidad activa y solidaria con todos los demás pueblos de nuestro continente.

El Presidente Echeverría, ha sido, un certero y firme exponente del pensamiento y decisión de los latinoamericanos y particularmente de los mexicanos en su discurso ante las Naciones Unidas. A este respecto y desde esta tribuna, debemos expresar que las fuerzas revolucionarias, están en la dirección de vigorizar la lucha para llevar la Revolución Mexicana hasta sus últimas consecuencias, y establecer una sociedad justa en la que no existan minorías privilegiadas y mayorías miserables.

Por estas y otras razones de no menor importancia, el Partido Popular Socialista declara: "Que el Presidente Echeverría, es merecedor del calor y la solidaridad de todo el pueblo mexicanos. Muchas gracias. (Aplausos.)

- El C. Presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Celso Delgado Ramírez y se le invita pasar a la tribuna.

- El C. Delgado Ramírez, Celso: Señor Presidente, compañeros diputados.

En esta asamblea, aún se percibe el entusiasmo solidario con el que en sesión pasada, con dispensa de trámites, se aprobó la solicitud de salir al extranjero; presentada al Congreso de la Unión, por el Presidente de la República.

Hay en ese próximo antecedente, una secuencia coherente y progresista: La decisión unánime de respaldo a la solicitud de referencia y el refrendo al responsable constitucional de la Política internacional de México, con motivo de la comparecencia del Presidente Echeverría ante la XXVI Asamblea General de las Naciones Unidas y que encontraron en su mensaje, ese mensaje vivo a los pueblos de todo el mundo, la respuesta exacta al pensar y al sentir de todos los mexicanos.

De la opinión popular un espíritu joven ha recogido conclusiones que identifican a todos los mexicanos, que Luis Echeverría es el portavoz de la protesta nacional; que México no es una isla; que las circunstancias internacionales infligen en una u otra forma en las condiciones interiores de todos los países; que nada de lo humano es para los mexicanos ajeno. Que somos un pueblo cincelado en la lucha incesante por conquistar día a día su carácter independiente, tanto en lo político como en lo económico, que la autodeterminación de las naciones es para los mexicanos lo que la libertad para los individuos. Que una paz armada preside el clima de nuestro tiempo y la agresión económica se hace más sutil y está presente; que la convivencia internacional se ha distorsionado en la medida en que la fuerza económica, política o militar de un reducido número de países predomina entre las relaciones de los Estados; que ninguna medida que se tome en lo interno está exenta de efectos en lo externo y que graves crisis políticas y económicas registradas recientemente entre estados soberanos han cuestionado hasta sus bases tradicionales instrumentos de cooperación y han convertido en letra muerta compromisos trascendentes para la humanidad.

El equilibrio del miedo no debe ser la pauta que rija las relaciones entre las naciones, es injusto que así pensaran los mexicanos que los países pobres subsidien los graves problemas que en lo interno registren por su natural devenir los países altamente desarrollados.

La Organización de las Naciones Unidas nació para preservar a la humanidad de los peligros de la guerra; el fracaso de la sociedad

de naciones y las experiencias dolorosas de la Segunda Guerra Mundial, crearon situaciones tales que la organización internacional fue y es una respuesta histórica a las disposiciones entre los estados. El triunfo de la historia al cual México es leal con la experiencia entre los Estados.

El rumbo de la historia, al cual México es leal con la experiencia de su comportamiento heroico ante los atentados de que hemos sido víctima en nuestra vida independiente, señaló, merced al quehacer revolucionario de los pueblos de Asia, África y América Latina la tumba del colonialismo político.

En los últimos veinticinco años, los países pioneros de la Organización de Naciones Unidas, han visto crecer con dignidad a nuevos Estados soberanos antes sometidos a la tutela política del colonialismo interior. La Organización de Naciones Unidas, foro democrático de la humanidad, es y debe seguir siendo el mismo criterio que prevalece en los pueblos amantes de la democracia de todo el mundo.

El reconocimiento internacional y la participación de un pueblo en el seno de la Organización de las Naciones Unidas, no puede estar limitado por la opinión de quienes supeditan los elevados intereses de la sociedad internacional, a los derivados de una estrategia de política interna. La soberanía, lo ha proclamado el Presidente Echeverría en la tribuna de las Naciones Unidas, la soberanía y la representación de los pueblos tiene un carácter invisible para todos los pueblos del mundo.

La República Popular China merece, por el carácter universal y democrático de la Organización de las Naciones Unidas, participar dentro del escenario que los pueblos mantienen para custodiar la paz, buscar soluciones pacíficas a las controversia entre los Estados, salvaguardar los derechos humanos y el carácter soberano y de igualdad jurídica, política y económica de todas las naciones del mundo. México rechaza, por voz del Presidente, en el quehacer interno nacional y en el quehacer internacional, las desigualdades económicas entre los hombres como entre las naciones. (Aplausos.)

Ni aceptamos ingerencias en lo interno, derivadas de lo exterior, ni patrocinamos ni aplaudimos el vicio tutelar derivado de políticas imperialistas en perjuicio de los países subdesarrollados. Para nosotros, la independencia nacional es lesionada no sólo cuando se atenta contra el pueblo mexicano en los intereses de los cuales es el único responsable, sino también cuando la libertad de cualquier pueblo, ubicado en cualquier punto geográfico del mundo esté siendo lesionado y violentado su derecho a autodeterminarse tanto en lo político como en lo económico.

México considera que la cooperación internacional no debe ser una forma velada de conculcar la autonomía de las naciones pobres; que la cooperación la entendemos los mexicanos como una elevada expresión de la convivencia internacional.

La riqueza de quienes ahora ocupan estadios económicos superiores es en gran medida el producto de la miseria de los 77 suscriptores de la Carta de Argel. El respeto a los hombres en las naciones es la base de la convivencia política y el pago justo de los productos comerciales y materias primas, debe ser la columna de la equidad internacional. La institución jurídica que se ha construido en lo interno por la lucha denodada de los pueblos, debe encontrar en el presente la respuesta exacta en el ámbito internacional.

Luis Echeverría en la tribuna de la Organización de las Naciones Unidas ha sido coherente con el sentir y pensar de los mexicanos. Señores diputados., los mexicanos hemos vibrado al impulso de la palabra de Luis Echeverría, el histórico legado de quienes forjaron el carácter nacional revolucionario de nuestro pueblo está presente en el justiciero mensaje de Luis Echeverría a los pueblos de todo el mundo un enérgico rechazo a toda expresión de poder en las relaciones entre los estados, es ahora motivo de nacional satisfacción. El reclamo por una paz duradera basada en el respeto a la independencia y libertad de los pueblos y los hombres de Asia, África y América Latina con vigor humanista fue pronunciado por el Presidente Echeverría. El cambio social en nuestro tiempo y la correspondiente transformación económica que los pueblos exigen, debe reflejarse en el seno de la Organización de las Naciones Unidas.

EL hambre y las enfermedades, poderosos enemigos de la humanidad, que reclaman para su liquidación la desaparición de oprobiosas actitudes colonialistas y neo - colonialistas, reclama también la participación de los esfuerzos de todos los hombres, de todas las naciones. En nuestro tiempo, la reflexión y la opinión en igualdad de circunstancias de todos los pueblos, no debe ser ensombrecida por intereses de grupos financieros internacionales. Con Juárez, Echeverría ha informado y ha reclamado la razón del derecho como forma de sustituir el derecho de la fuerza, porque no es humano ni equitativo, atentar contra el desarrollo democrático de los pueblos que heroicamente constituyen en el presente el futuro promisorio de sus hijos. Señores diputados. en un mundo en el que nada es y todo está siendo en el que lo único permanente es la actitud de cambio.

Los mexicanos y su líder Luis Echeverría, comprendemos que la realidad, que la rebeldía y la inconformidad contra la intervención exterior y la injusticia económica interior, constituyen una actitud vital que compromete históricamente a una nueva generación, la voz de una generación que se formó en la construcción del México revolucionario, en las Instituciones educativas formadas y creadas por el pueblo, y en la lucha democrática por el perfeccionamiento de nuestras Instituciones nacionales, esa generación que creció al vigor constante de una voluntad de construir un México más justo y próspero para todos los mexicanos, que creció mientras fracasaba la Sociedad de Naciones y los campos de Europa y Asia se cubrían de sangre por el ataque

nazifascista; que vió nacer en 1945 a la Organización de las Naciones Unidas; que ha contemplado con inflamado acento diversas crisis internacionales que han derivado en conflictos armados regionales en virtud del incumplimiento de normas de convivencia previamente acordada: esa generación que ha visto nacer con vigor democrático a nuevos jóvenes países se elevó desde la tribuna de las Naciones Unidas, con claridad y energía, para que, con rigor doctrinario, marcara el rumbo de nuestro tiempo al señalar el advenimiento de una era económico, social y político igualatoria, justa en lo interior y justa en lo exterior, en la palabra de Echeverría que rememoró en la memorable sesión de las Naciones Unidas, el carácter conductor que Cuauhtémoc reclamó para México en el advenimiento de una nación que ya presentía; que Juárez defendió con su pueblo en momentos definitivos para la Nación Mexicana, y que en la Constitución del 17 se consolidan en una unidad militante y combativa de los mexicanos en torno de su Presidente y del líder de nuestro tiempo: Luis Echeverría. (Aplausos.)

La experiencia las tareas y las exigencias emanadas de la línea histórica del pueblo de México en el desempeño heroico de su vida independiente, contenidas en la Constitución de 1917 y que señalan las esencias de una República democrática comprometida en un proceso de cambio y transformación social que dictan los postulados de nuestra revolución nacional, han sido trasladados con idéntica emoción al ámbito internacional como una cuota de aportación de la experiencia revolucionaria de México a los pueblos hermanos de todo el mundo. Graves problemas en el presente laceran la conciencia universal y son motivos de preocupación de los pueblos y banderas de luchas juveniles, Luis Echeverría ha recogido y levantado con dignidad las banderas del pueblo y de los jóvenes en el concierto internacional, con él como guía, la unidad de México latente, presente, sin abatir banderas, es la hora de cerrar el camino al colonialismo y al neocolonialismo; luchas por la justicia y el proceso democrático en lo interno al lado de Echeverría y agitar con denuedo las exigencias de la humanidad con una paz justa, libre de las amenazas del hambre y de la guerra. El Presidente Echeverría ha demandado democracia internacional porque está investido y fortalecido por la historia decisión del pueblo que para sí y con esfuerzos heroico, ha modelado un sistema democrático representativo y popular que se nutre en el diálogo diario y se fortalece en la búsqueda incesante del perfeccionamiento de las instituciones revolucionarias y en el trabajo denodado por hacer realidad los principios reivindicatorios de la revolución nacional. Una jornada más de trabajo en el que hacer cotidiano del Presidente Echeverría, se ha llevado a cabo, iniciada en el exterior, en el seno de Naciones Unidas cumpliendo cabalmente con el sentir de los mexicanos, se ha continuado a su regreso al país, coherente el carácter internacional con la decisión interna de transformar al país, se ha continuado, repito, en el territorio nacional haciendo efectivo y reales los postulados de la Revolución de México, al llegar a México y celebrar el aniversario de la entrega de tierras en la comarca lagunera y entregar Echeverría a los compromisos de México un latifundio más que estaba en manos de extranjeros. Ese es México en lo interno y Echeverría ha proclamado para satisfacción nacional lo que es México en lo externo. Paz, convivencia pacífica, independencia en lo político y en lo económico. (Aplausos.)

- El C. secretario Herrería Montoya, Ignacio F.: Agotados los asuntos del Orden del Día.

- El C. Presidente (a las 13:45 horas): Se levanta la sesión y se cita para la que tendrá lugar el martes 12 de los corrientes, a las 11 horas, en la que se tratarán los asuntos con que la Secretaría dará cuenta.

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"DIARIO DE LOS DEBATES"