Legislatura LV - Año III - Período Ordinario - Fecha 19931122 - Número de Diario 10

(L55A3P1oN010F19931122.xml)Núm. Diario: 10

ENCABEZADO

LV LEGISLATURA

PODER LEGISLATIVO FEDERAL

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

Correspondiente al Primer Período del Tercer Año de Ejercicio

PRESIDENTE DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

Diputado Hugo Andrés Araujo de la Torre

PALACIO LEGISLATIVO

DIRECTOR DEL DIARIO DE LOS DEBATES

Héctor de Antuñano y Lora

AÑO III México, D.F., lunes 22 de noviembre de 1993 No. 10

SUMARIO

SUMARIO

ASISTENCIA

ORDEN DEL DÍA

ACTA DE LA SESIÓN ANTERIOR

ACUERDO DE PRACTICA PARLAMENTARIA

POSICIÓN PARTIDISTA

Para expresarla, hacen uso de la palabra los diputados:

Juan Gualberto Campor Vega

RECESO

Adolfo Alfonso Kunz Bolaños

Tomás Correa Ayala

Gilberto Rincón Gallardo y Meltis

José Antonio Gómez Urquiza de la Macorra

Angel Aceves Saucedo

El doctor Pedro Aspe Armella, Secretario de Hacienda y Crédito Público, hace uso de la palabra

PRIMER TURNO DE PREGUNTAS Y RESPUESTAS

Desde sus respectivas curules, interrogan al Secretario de Hacienda y Crédito Público, los diputados:

Gabriela Guerrero Oliveros

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público.

Gonzalo Cedillo Valdez

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público.

José de Jesús Berrospe Díaz

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público.

Liliana Flores Benavides

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público.

Frauzi Hadam Amad

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público

Jorge Vinicio Mejía Tobías

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público

SEGUNDO TURNO

María Clara Mejía Guajardo

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público

Francisco Dorantes Gutiérrez

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público

Luisa Alvarez Cervantes

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público

Luis Raúl Alvarez Garín

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público

Alfredo Lujambio Rafols

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público

Jesús Molina Lozano

Respuesta del Secretario de Hacienda y Crédito Público

CONSIDERACIONES FINALES

Hacen uso de la palabra los diputados:

Jorge Tovar Montañez

Servando Antonio Hernández Camacho

Félix Bautista Macías

Alejandro de Jesús Encinas Rodríguez

Alberto Miguel Martínez Mireles

Jorge Flores Solano

Hacen uso de la palabra el Secretario de Hacienda y Crédito Público, para hacer un resumen de su comparecencia.

AGRADECIMIENTO

El Presidente hace uso de la palabra.

ORDEN DEL DÍA

De la próxima sesión. Se levanta la sesión.

DEBATE

Presidencia del diputado

Hugo Andrés Araujo de la Torre

ASISTENCIA

El Presidente:

Ruego a la Secretaría haga del conocimiento de esta Presidencia el resultado del cómputo de asistencia del registro de firmas de los diputados, para conocer si existe el quórum reglamentario.

La secretaria Martha Maldonado Zepeda:

Se informa a la Presidencia que existen registrados previamente 331 diputados, por lo tanto hay quórum.

APERTURA

El Presidente (a las 11.20 horas):

Compañeros diputados, se abre la sesión.

ORDEN DEL DÍA

La secretaria Martha Maldonado Zepeda:

«Primer Período de Sesiones Ordinarias. Tercer Año. LV Legislatura.

Orden del día

22 de noviembre de 1993.

Lectura del acta de la sesión anterior.

Comparecencia del doctor Pedro Aspe Armella, secretario de Hacienda y Crédito Público.»

ACTA DE LA SESIÓN ANTERIOR

El Presidente:

En virtud de que se entregaron copias del acta de la sesión anterior a los coordinadores de los grupos parlamentarios, consulte la Secretaría a la Asamblea si se le dispensa la lectura.

La secretaria Martha Maldonado Zepeda:

Por instrucciones de la Presidencia, en votación económica se pregunta a la Asamblea si se le dispensa la lectura.

Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo...

Los que estén por la negativa, sírvanse manifestarlo... Se dispensa la lectura, señor Presidente.

«Acta de la sesión de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, celebrada el día dieciocho de noviembre de mil novecientos noventa y tres, correspondiente al Primer Período de Sesiones Ordinarias del Tercer Año de Ejercicio de la Quincuagésima Quinta Legislatura.

Presidencia del diputado Miguel Osorio Marbán

En la capital de los Estados Unidos Mexicanos, siendo las once horas con cuarenta y cinco minutos del día dieciocho de noviembre de mil novecientos noventa y tres, con una asistencia de doscientos noventa y cinco diputados, el Presidente declara abierta la sesión.

La Secretaría da lectura al orden del día y la Asamblea dispensa la del acta de la sesión anterior, misma que sin discusión se aprueba en sus términos en votación económica.

Una invitación del Departamento del Distrito Federal, al acto cívico conmemorativo del septuagésimo primer aniversario luctuoso de Ricardo Flores Magón. Se designa comisión para representar a la Cámara de Diputados.

Se da cuenta con los oficios con los que se remiten los informes de labores de las secretarías de Hacienda y Crédito Público, de Comunicaciones y Transportes, de Marina, de la Reforma Agraria, de Trabajo y Previsión Social y de la Contraloría General de la Federación, correspondientes al período mil novecientos noventa y dos y mil novecientos noventa y tres. Se turnan a las comisiones correspondientes.

Una minuta del Senado de la República, con proyecto de decreto con el que se concede el permiso constitucional necesario para que la ciudadana Andrea Martínez de Haas, pueda prestar sus servicios en la Embajada Británica en México. Se turna a la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales.

Para continuar con el orden del día se da primera lectura a un dictamen de la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, con proyecto de decreto que concede el permiso constitucional necesario para que el ciudadano Ricardo

Franco Guzmán, pueda aceptar la condecoración que le confiere el Gobierno de la República de Venezuela.

Para comentar el avance en el proceso de ratificación del Tratado de Libre Comercio entre México, Canadá y los Estados Unidos de América, hacen uso de la palabra los diputados Juan Campos Vega, del Partido Popular Socialista; Adolfo Kunz Bolaños, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; Demetrio Santiago Torres, del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional; Jorge Calderón Salazar, del Partido de la Revolución Democrática; Luis Felipe Bravo Mena, del Partido Acción Nacional y Javier Garduño Pérez, del Partido Revolucionario Institucional.

Comentan el proceso electoral en el Estado de México, los diputados Alejandro Luévano Pérez, del Partido de la Revolución Democrática; Pablo Casas Jaime, del Partido Revolucionario Institucional y Juan Hernández Mercado, del Partido de la Revolución Democrática.

Para comentar la situación de la cartera vencida de agricultores del grupo denominado El Barzón, en el Estado de Zacatecas, hacen uso de la palabra los diputados Enrique Rico Arzate, del Partido de la Revolución Democrática, en dos ocasiones; Eulogio Bonilla Robles y José Olvera Acevedo, ambos del Partido Revolucionario Institucional.

Para exponer sus opiniones sobre problemas políticos que afectan a la comunidad de Santa Catalina Juquila, Oaxaca, hacen uso de la palabra los diputados Salomón Jara Cruz, del Partido de la Revolución Democrática, en dos ocasiones y Armando Palacios García, del Partido Revolucionario Institucional, también en dos ocasiones.

El Presidente concede el uso de la palabra al diputado Daniel Avila Aranda, del Partido Acción Nacional, quien denuncia lo que llamó hechos irregulares en el Estado de Yucatán.

Agotados los asuntos en cartera y no habiendo nadie más que haga uso de la palabra, la Secretaría da lectura al orden del día de la próxima sesión y el Presidente clausura la de hoy a las catorce horas con cuarenta y ocho minutos, citando para la que tendrá lugar el próximo lunes veintidós de noviembre a las diez horas.»

El Presidente:

Ruego a la Secretaría poner a consideración de la Asamblea el acta de la sesión anterior y si algún diputado desea hacer alguna observación a la misma, sírvase manifestarlo.

La secretaria Martha Maldonado Zepeda:

Está a consideración de la Asamblea el acta de la sesión anterior. ¿Hay algún diputado que desee hacer observaciones a la misma?

Se consulta a la Asamblea en votación económica si se aprueba.

Los diputados que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo...

Los diputados que estén por la negativa, sírvanse manifestarlo... Aprobada el acta, señor Presidente.

ACUERDO DE PRACTICA PARLAMENTARIA

El Presidente:

Proceda la Secretaría a dar lectura al Acuerdo de Práctica Parlamentaria, para desahogar la comparecencia del Secretario de Hacienda y Crédito Público, aprobado por la Asamblea el 11 de noviembre de 1993.

La secretaria María Cristina Hermosillo Ramírez:

«Acuerdo de practica parlamentaria para la presentación y comparecencia del Secretario de Hacienda y Crédito Público en relación con las iniciativas de leyes de ingresos y los proyectos de Presupuesto de Egresos de la Federación y para el Departamento del Distrito Federal, así como del decreto que reforma, adiciona y deroga diversas disposiciones fiscales.

Los coordinadores de los grupos parlamentarios representados en la Cámara de Diputados de la LV Legislatura del honorable Congreso de la Unión, con el objeto de regular el trámite de la presentación en la Cámara de Diputados de las iniciativas de leyes de Ingresos de la Federación y del Departamento del Distrito Federal; de diversas disposiciones fiscales; de los proyectos de Presupuesto de Egresos de la Federación y del Departamento del Distrito Federal; así como de la comparecencia del secretario de Hacienda y Crédito Público en sesión plenaria de la Cámara, de acuerdo a lo previsto por los artículos 74, fracción IV, segundo párrafo

y 93, segundo párrafo, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, suscribimos el siguiente

ACUERDO

Primero. La Cámara, en sesión del día 15 del presente mes, dará entrada a las iniciativas de ley de Ingresos de la Federación y del Departamento del Distrito Federal y del decreto que reforma diversas disposiciones fiscales para impulsar el crecimiento, la estabilidad y el empleo, así como a los proyectos de Presupuesto de Egresos de la Federación y del Departamento del Distrito Federal.

Segundo. A la citada sesión asistirá el Secretario de Hacienda y Crédito Público, a fin de dar cuenta de las iniciativas arriba mencionadas, exponiendo sus motivos y explicando su contenido.

Tercero. Durante la presentación que se celebre en la sesión del día 15 del actual, sólo tendrá lugar la intervención del Secretario de Hacienda y Crédito Público; por lo tanto, no habrá lugar a otras intervenciones por parte de los diputados.

Cuarto. El día 22 del actual, en sesión pública, comparecerá ante la asamblea el Secretario de Hacienda y Crédito Público, con el objeto de explicar en detalle la Ley de Ingresos y el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio fiscal de 1994, así como el decreto que reforma diversas disposiciones fiscales para impulsar el crecimiento, la estabilidad y el empleo. Esta sesión se sujetará a lo que se establece en el procedimiento siguiente:

a) Hará uso de la palabra un orador de cada grupo parlamentario con objeto de fijar la posición de su partido frente a las iniciativas mencionadas, en el orden siguiente:

Partido Popular Socialista; Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional; Partido de la Revolución Democrática; Partido Acción Nacional; Partido Revolucionario Institucional.

b) Las intervenciones de los diputados tendrán una duración máxima de 15 minutos cada una.

c) Durante las intervenciones a que se refiere el inciso anterior, el Secretario compareciente permanecerá en el sitio que se le haya destinado en el Salón del Pleno.

d) El Secretario compareciente tendrá opción de hacer uso de la palabra hasta por un máximo de 30 minutos al finalizar la intervención de todos los oradores de los grupos parlamentarios.

e) A continuación habrá dos turnos de intervenciones para preguntas y respuestas. Las preguntas deberán formularse en un tiempo no mayor de cinco minutos y las respuestas no podrán tener un tiempo mayor de 10 minutos. Estos turnos de preguntas y respuestas se sujetará al orden siguiente:

Primera ronda:

Partido Popular Socialista; Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional; Partido de la Revolución Democrática; Partido Acción Nacional; Partido Revolucionario Institucional.

Segunda ronda:

Partido Popular Socialista; Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional; Partido de la Revolución Democrática; Partido Acción Nacional; Partido Revolucionario Institucional.

f) Alrededor de las 15.00 horas se decretará un receso de 60 minutos.

g) En obvio de tiempo, durante la etapa de preguntas y respuestas el Secretario compareciente permanecerá en el estrado de la Secretaría de la Mesa Directiva y en su respuesta final podrá hacer una breve recapitulación relativa a su comparecencia.

h) En el curso de la comparecencia no habrá lugar a ninguna otra intervención diferente a las aquí acordadas.

Al término de las sesiones de preguntas y respuestas, los partidos políticos podrán, si así lo desean, intervenir por última ocasión, hasta por cinco minutos. La intervención de referencia será, en su caso, en el mismo orden que la sesión de preguntas y al final el Secretario compareciente tendrá la misma opción hasta por 10 minutos.

Quinto. Las sesiones a las que acuda el Secretario de Hacienda y Crédito Público serán transmitidas en directo por radio y televisión en cobertura nacional y en particular aquella en la que los partidos políticos fijen sus posiciones y formulen sus interrogantes.

México, Distrito Federal, a 9 de noviembre de 1993. Diputados Partido Revolucionario Institucional, María de los Angeles Moreno Uriegas;

Partido Acción Nacional, Diego Fernández de Cevallos; Partido de la Revolución Democrática, Ricardo Valero; Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional, Alberto Carrillo Armenta; Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, Adolfo Kunz Bolaños; Partido Popular Socialista, Cuauhtémoc Amezcua Dromundo.»

POSICIÓN PARTIDISTA

El Presidente:

Estando presente en este salón de sesiones el señor Secretario de Hacienda y Crédito Público, doctor Pedro Aspe Armella, de conformidad con los artículos 93 y 74, fracción IV, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 53 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, comparece el doctor Pedro Aspe Armella, Secretario de Hacienda y Crédito Público, para ampliar la información contenida en la Exposición de Motivos de la Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal de 1994 y Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal de 1994.

Para dar cumplimiento a los incisos a y b del Punto de Acuerdo de Práctica Parlamentaria para el desahogo de esta comparecencia, harán uso de la palabra los siguientes diputados: Juan Campos Vega, por el Partido Popular Socialista; Adolfo Kunz Bolaños, por el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; Tomás Correa Ayala, por el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional; Gilberto Rincón Gallardo, por el Partido de la Revolución Democrática; José Antonio Gómez Urquiza de la Macorra, por el Partido de Acción Nacional; Angel Aceves Saucedo, por el Partido Revolucionario Institucional. En consecuencia, tiene la palabra el diputado Juan Campos Vega, del Partido Popular Socialista.

El diputado Juan Gualberto Campos Vega:

Con su permiso, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados, doctor Pedro Aspe Armella, secretario de Hacienda y Crédito Público. Esta será la última ocasión en que esta LV Legislatura de la Cámara de Diputados tenga la posibilidad de intercambiar con usted puntos de vista en torno a la política económica del Gobierno. Creo que como usted mismo ha señalado, esta es una magnífica oportunidad para hacer un balance no solamente de los logros que ustedes consideran importantes de su política, sino en general de los resultados de la política económica del Gobierno.

Por ello yo quisiera iniciar mi intervención señalando que el PPS ha señalado desde hace muchos años, y hoy lo reitera, que el desarrollo progresivo de nuestro país estriba fundamentalmente en resolver el problema de la distribución de la riqueza en favor de la mayoría y no de la minoría. Yo quisiera también aprovechar...

El Presidente:

Permítame señor diputado, ruego a la Asamblea guardar compostura y escuchar con atención al orador, continúe señor orador.

El diputado Juan Gualberto Campos Vega:

Muchas gracias señor Presidente. Yo quisiera también en esta ocasión recordar una frase del licenciado Carlos Salinas de Gortari, pronunciada en esta Cámara el 1o. de diciembre de 1988, cuando señaló que el bienestar de cada familia tendrá que ser la prosperidad, la medida de la prosperidad de la nación, que el gran propósito de equidad es que todos eleven su nivel de vida pero los que menos tienen deben beneficiarse más y los que más han alcanzado, menos.

Cotejando estos dos argumentos, el que ha esgrimido de manera sistemática el PPS y el expresado por el Presidente de la República, pudiera parecer que coincidimos plenamente en los propósitos, sin embargo ambos coincidimos y así lo hemos expresado públicamente, que lo que vale en estos temas no son los pronunciamientos sino los hechos, los resultados de la política económica y en este breve tiempo que tenemos para expresar nuestra posición, yo quisiera referirme a tres cuestiones que creo son medulares del proyecto neoliberal.

Ustedes aseveran que los grandes éxitos podemos resumirlos en la disminución de la inflación, en el crecimiento sostenido de la economía y en que ahora por los mecanismos de renegociación de la deuda externa transferimos menos recursos al exterior. No está por demás compañeros diputados, señor Secretario, reiterar en esta tribuna que el PPS está consciente de que la disminución de la inflación es algo positivo para la economía de nuestro país, pero también hemos señalado y en eso discrepamos, que al

pueblo de México hasta el momento sólo se le estén dando dos opciones; pobreza y miseria con inflación o pobreza y miseria sin inflación, porque el grave costo social de la política económica es evidente en la vida del país y este Gobierno no ha logrado revertir este proceso de manera tal que los trabajadores incrementen su participación de la riqueza creada.

Precisamente cuando se suscribió la última fase del pacto, el propio Presidente de la República afirmó, que con estas medidas que se implementan para 1994, los trabajadores de salario mínimo podrán recuperar lo perdido en los últimos tres años, esto lleva dos cuestiones que yo quisiera recalcar; primero, que es verídica la afirmación que hemos hecho y que usted comparte, en el sentido de que los salarios mínimos han perdido poder adquisitivo en los últimos años aunque ustedes señalen que ha crecido el porcentaje de los trabajadores que lo obtienen, y en segundo lugar, que haya un reconocimiento explícito a que el gobierno actual no podrá en este sexenio hacer que se recupere lo perdido por esos salarios en el propio sexenio, sino solamente lo de los últimos tres años.

Hay otros datos que ustedes expresan como el que se refiere a la disminución de la pobreza extrema. Según un estudio conjunto del INEGI y la CEPAL, que la verdad y dicho con todo respeto, nosotros no creemos que sean reales y creo que ese criterio lo comparten otras fuerzas políticas diferentes a la del Gobierno; pero aún aceptando que la pobreza extrema y la pobreza hayan decrecido de 1989 a 1992, con los mismos datos que ustedes nos proporcionan podemos expresar claramente, contundentemente, que ahora hay más pobres y mexicanos en situación de pobreza extrema que en 1984.

Es decir, que el balance de esos dos gobiernos de corte neoliberal es contrario a los intereses de la mayoría de los mexicanos; pero ¿ por qué no podemos creer nosotros en los datos del INEGI?, porque son situaciones contradictorias. Por un lado nos dicen, "la economía creció el 1.1%", ¿ó se espera que crezca el 1.1% en 1993?

Se reconoce que en los tres primeros trimestres del año, se ha incrementado el desempleo. Hay un reconocimiento de que los salarios no han podido incrementar substancialmente el ingreso de los trabajadores, su poder adquisitivo; hay un reconocimiento de que la distribución del ingreso es cada vez más injusta, y nosotros preguntamos: si la economía no creció, si los salarios no subieron, si bajo el empleo, ¿cómo es posible que haya menos pobreza y menos mexicanos en situación de pobreza extrema?

Y en este sentido, en el aspecto relativo al crecimiento de la economía, creo que una de las enseñanzas que debemos tener, es que ahora por las características de la orientación de la planta productiva, México es más susceptible de resentir los efectos negativos que se dan en las economías más desarrolladas, y yo quisiera recordar que el año pasado nosotros señalábamos que lo que se había alcanzado en torno al crecimiento económico no eran aspectos para hechar las campanas al vuelo; que además había una tendencia decreciente respecto del crecimiento de la economía, y que creo que por los datos que usted mismo nos proporcionó al dar lectura al documento de criterios de política económica, podemos aseverar que este problema que enfrenta la economía neoliberal en todo el mundo, tiene ya sus efectos negativos en nuestro país porque por primera vez el crecimiento económico en este sexenio será menor al crecimiento de la población, lo cual nos indica que no se está cumpliendo el propósito inicial de tener un crecimiento moderado pero constante en la vida económica.

Y hoy se insiste en señalar que, bueno, la economía de algunos países empieza a mostrar signos de recuperación, como Reino Unido, los propios Estados Unidos y que eso creará condiciones más favorables para nuestra economía por lo que se espera el próximo año crezca a un promedio del 3%.

Pero es realmente preocupante que no se haya logrado este propósito que es una de las cosas señaladas por el gobierno como positivas y que se habría de mantener en este sexenio.

Por lo que se refiere al problema de la transferencia de recursos al exterior, es verdad que el monto de éstos, por lo que se refiere a la deuda pública ha decrecido en torno comparativamente al producto interno bruto, y también creo que en este sentido nadie está en contra de que esto suceda, pero podríamos señalar que esa deuda ya la hemos pagado varias veces, que ha sido un mecanismo de saqueo de nuestra economía y que vamos a seguir pagando durante muchos años todavía intereses y capital de ese endeudamiento externo.

Pero lo que sí valdría la pena recapitular es que la economía de México en su conjunto sí se está endeudando más, que en conjunto la deuda pública y privada en este momento es superior a la que se tenía cuando se inició este sexenio, que ha crecido enormemente el monto de la inversión extranjera en nuestro país y esto que ustedes lo señalan como un logro, que ha crecido

41 punto y fracción más de lo programado por ustedes, a nosotros nos preocupa, no solamente por el destino de esta inversión extranjera que en gran medida es de cartera, sino en general porque el capital extranjero venga en forma directa o indirecta, jamás ha sido un elemento que se preocupe por promover el desarrollo económico independiente de un país. Vienen aquí, y lo hemos dicho en otras ocasiones, porque encuentran condiciones favorables para su inversión, mejores que las que tienen en su país de origen o en otros países, que aquí van a obtener ganancias importantes, mejores que las que tendrían en otros lugares del mundo.

Y también nos llama la atención que debido a las medidas de desregulación que se han aprobado por esta Cámara a propuesta de ustedes, ahora el capital extranjero también participe en valores gubernamentales como el Cetes.

Entonces en conjunto vemos que hay una mayor presencia del capital externo en la vida de México, sea a través de deuda, sea a través de Inversión en cartera o productiva, sea a través de compra de valores gubernamentales.

Esto por el momento, efectivamente, hace que la transferencia de recursos al exterior sea menor de la que se está recibiendo en este momento, pero nosotros nos preguntaríamos cuánto va a durar esta situación, qué va a suceder en el futuro inmediato cuando empiece a decrecer el monto de la inversión extranjera en la economía de nuestro país, cuando el capital extranjero empiece a repatriar a su país de origen las ganancias y los intereses obtenidos del esfuerzo realizado por los mexicanos.

Nosotros pensamos que éste es un camino sumamente peligroso porque está haciendo más dependiente a México en muchos aspectos de la economía internacional, particularmente de la economía norteamericana. Estamos haciéndonos dependientes desde el punto de vista económico, desde el punto de vista comercial y también desde el punto de vista tecnológico, porque en este rubro, a pesar de algunos avances, no hemos logrado incrementar el monto de lo destinado al desarrollo científico y tecnológico que nos permita pensar que en un futuro inmediato, nuestra industria va a desarrollarse con el capital propio, con la tecnología propia, con los recursos creados por los mexicanos porque éstos van a ser apropiados por los que intervienen desde, el extranjero en la vida económica del país.

Como siempre, señor secretario, compañeras y compañeros diputados, estos elementos de juicio, estas concepciones que nosotros tenemos, son las que nos llevan a ratificar una vez más nuestra oposición a esta política económica. Esta política económica, a juicio del Partido Popular Socialista, hace a México más dependiente del exterior y más pobre a su pueblo. Muchas gracias.

El Presidente:

Tiene la palabra el compañero diputado Adolfo Kunz Bolaños, por el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana.

El diputado Adolfo Alfonso Kunz Bolaños:

Con su venia señor Presidente; señoras y señores diputados: señor Secretario Pedro Aspe:

Hace ocho días escuchamos aquí....

RECESO

El Presidente (a las 11.50 horas):

Señor diputado, esta Presidencia, en base a nuestro Reglamento y facultades del Presidente, decreta un receso de media hora, a fin de convocar al orden a los señores manifestantes.

(A las 14.25 horas) Se reanuda la sesión.

Compañeras y compañeros, esta Presidencia, con fundamento en el artículo 21 fracción VI del Reglamento, tiene a bien disponer que continuemos con el orden establecido de oradores de todas las fracciones parlamentarias, escuchemos la intervención del Secretario don Pedro Aspe, y luego hagamos un receso de 30 minutos, tal como lo habíamos acordado.

Tiene la palabra el diputado Adolfo Kunz Bolaños, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana.

El diputado Adolfo Alfonso Kunz Bolaños:

Con su venia señor Presidente; compañeras y compañeros diputados; señor doctor Pedro Aspe, Secretario de Hacienda y Crédito Público:

Hace ocho días tuvimos la oportunidad de escuchar aquí los criterios generales de la política

económica del gobierno, principalmente en relación con el paquete de iniciativas de carácter fiscal. En esa exposición, se ponía especial énfasis en las metas alcanzadas y principalmente en la estabilidad actual de las normas fiscales y en la baja de los impuestos.

En este punto nos complace recordar que muchas de las medidas que se adoptaron, coinciden con nuestros puntos de vista. Habíamos señalado hace ya un par de años lo costoso del IVA; coincidimos con el gobierno en que era necesario bajar este impuesto, señalamos también que las tasas resultaban muy altas para los niveles más bajos de salarios, y en esto también hubo coincidencia.

Señalamos la diferencia de tasas para empresas en los niveles más altos, y ahora la iniciativa contempla un 34% que nos iguala con nuestros socios de Estados Unidos.

El año pasado mostramos aquí la complejidad y cantidad de resoluciones en materia fiscal, y este año bajó a 6% únicamente. Estamos satisfechos con que se tome en cuenta las opiniones de los partidos de oposición, pero consideramos que la parte más importante de este informe, fue el énfasis que se puso en la separación, aunque sea formal diríamos algunos, entre el poder político y el poder económico.

La evaluación que realizó doctor, hace énfasis en los logros alcanzados en materia de inflación, de crecimiento económico y de deuda externa entre otros. Hasta aquí creo que cualquier impugnación sería de matiz, ya que es un hecho que en materia de política económica se alcanzaron logros importantes, sobre todo en materia de inflación, si analizamos las medidas adoptadas en otros países como Argentina, Brasil o Israel.

Es indudable que en este aspecto se ha logrado una estabilización y esperemos que se logre una consolidación.

El costo social lo discutiríamos, pero creo que entraríamos en algo muy difícil de precisar, y creo que también sería válido señalar que buena parte de este costo social no es producto de las políticas económicas actuales, sino más bien producto de las políticas populistas anteriores.

Pero hay cuestiones que nos preocupan, y quisiera yo tratarlas con un poco más de detalle. No, no creo que debamos meternos a discusiones teóricas de carácter general sobre la política. Creo que la mayoría de los mexicanos estamos más preocupados por las cuestiones prácticas.

De hecho, para la gran mayoría de nosotros los planteamientos teóricos están a una distancia muy lejana. La cantidad de la información que se requiere y la complejidad de los planteamientos hace que sea muy difícil de entender, pero sí entendemos lo que tenemos que hacer cada día o lo que tenemos que pagar cada día.

Por eso los integrantes de la fracción parlamentaria del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, quisiéramos que cuando usted haga uso de la palabra, nos planteara su posición en estos dos paquetes de temas, uno de carácter constitucional y otros de carácter eminentemente práctico.

A nivel constitucional sabemos, lo hemos visto, que existe ya bastante disciplina fiscal, que se ha incrementado el número de contribuyentes y que se han logrado convenios con los estados para no duplicar los gravámenes o no exagerar los gravámenes.

Tendría yo aquí alguna objeción en cuanto a materia inmobiliaria, pero creo que ha hablado mucho sobre eso. Nos interesan tres aspectos en materia constitucional:

1. Su opinión sobre la posibilidad de establecer un tope a los impuestos en la Constitución.

Tenemos protegidos muchos derechos constitucionalmente, pero nuestra obligación de contribuir a los gastos del estado es bastante general y no señala con precisión hasta dónde estamos obligados a contribuir. Nos gustaría oír su opinión sobre este posible límite constitucional a los impuestos.

2. Existe en la Constitución una separación de qué tipo de impuestos corresponden a los estados y cuáles corresponden a la federación.

Nosotros pensamos que sería mucho mejor establecer a nivel constitucional, con precisión, cuáles queden ser los impuestos locales y cuáles los federales, porque, usando algún otro nombre o buscando algún recoveco, se da el caso de que haya gravámenes que repercuten sobre la misma fuente. O sea, no importa cuál sea el mecanismo y no importa cómo se calcule, pero al final de cuentas es el mismo sujeto el que los paga.

Quisiéramos ver su opinión sobre esto, oír sí sería conveniente fijar estos límites.

Y el tercer punto a nivel constitucional, creo que en cierta medida ya se atacó con la autonomía del Banco de México. Pero se refiere a ese otro impuesto que se llama, inflación. O sea, según sus conocimientos; ¿es suficiente la autonomía del Banco de México para mantener una sana política monetaria o requerimos de algunos mecanismos más que impidan que se dispare nuevamente la inflación con toda la secuencia que ha tenido?

En cuanto a cuestiones ya de nivel más práctico, es un hecho que se va a aprobar el Tratado de Libre Comercio, y nos preocupan muchos aspectos. Señalábamos anteriormente en tribuna los aspectos procesales, que pueden ser realmente un problema para la actividad económica de México; señalamos también los aspectos culturales.

Aquí nos interesaría tratar la relación que existe entre la política fiscal y la eficiencia de las empresas, que permita realmente competir. Y habría aquí algunos puntos que quisiéramos escuchar.

Se ha hablado, desde luego, que hubo una simplificación ya de los criterios de la Secretaría y una estabilidad en el sistema tributario. Incluso la mayor parte de las iniciativas que ahora conocemos tienden a disminuir los impuestos; pero a mediano plazo, ¿esta estabilidad se podrá conservar? Desgraciadamente ya hay todo un hábito de estar cambiando en un sentido y en otro.

Como método del Gobierno actual, los últimos años ha habido mayor estabilidad y notablemente más éste que el pasado, o sea, con veintitantas circulares contra seis, creo que es importante. Pero creo que ninguna actividad económica puede ser eficiente si no tiene un conocimiento de las reglas del juego a que está sujeta.

Hay otro problema, un segundo problema, actualmente existen una serie de disposiciones para buscar la mayor seguridad y buscar que no se evadan los impuestos, pero buena parte de estas medidas quedan a cargo del contribuyente, controles de cheques, copias, fotocopias, registros, etcétera.

¿Existe algún estudio, algún planteamiento para que la vigilancia se logre a través de otros mecanismos y no gravando al contribuyente con mayores actividades?

Número tres, hemos señalado los rangos altos y bajos de la tarifa; el alto ya se igualó, aunque desde luego algunos pensamos que los impuestos son de primer mundo, pero los servicios no son de primer mundo. El bajo también tuvo un ajuste en la iniciativa actual; pero los rangos medios siguen siendo poco competitivos y muy gravosos, para la mayoría, bueno, para todos los que tienen que pagarlos.

¿Qué efectos tendría ir actualizando esto en la captación; o sea, qué tan importante sería aquí el ingreso proveniente, digamos, de honorarios o de productos del trabajo, en comparación con el de las empresas?

Dos puntos más, por último, siguen existiendo muchos trámites, han disminuido, no todos son de Hacienda, además, existen muchas otras dependencias. Pero consideramos que debe haber una estrategia global de todo el Gobierno, para disminuir los permisos, los avisos, el papeleo, todos los trámites, porque muchos pequeños empresarios se pasan más tiempo llenando hojitas de colores que trabajando en lo que es su negocio.

Y el último punto, volveremos sobre el tema en las preguntas, pero es de su competencia el INEGI. Nosotros pensamos que hay muchísima información disponible, pero que no se está elaborando con la oportunidad debida. No es una crítica al INEGI, vi el censo de población y realmente es un alarde de técnica; pero hay muchos sectores de la actividad económica, y citaría yo, no porque sea de mi interés especial, que sí lo es, sino por ser la actividad económica que más recursos utiliza, que es la inmobiliaria, hay situaciones como la que vivimos actualmente en la ciudad de México, de una sobreoferta de espacios de oficina, que se traduce en un desperdicio de recursos económicos.

¿Qué posibilidades, sobre todo en este tipo de mercado, se genere información, se genere estadísticas inmediata y confiable, que permita conocer cual es la situación? Creo que en un mercado que se va a volver sumamente competitivo debemos contar con las mismas armas con que cuentan nuestros socios comerciales. ¡Y vaya que ellos cuentan con una gran cantidad de información estadística muy oportuna!

Estos son aspectos del área impositiva quizá demasiado prácticos, pero que le preocupan más a la gente común y corriente que está más interesada en resolver los problemas diarios de su actividad. Muchas gracias.

El Presidente:

Muchas gracias diputado Kunz.

Esta Presidencia exhorta a todos los oradores que hagamos un esfuerzo de sujetarnos a los tiempos establecidos. Tiene la palabra por el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional, el diputado Tomás Correa Ayala.

El diputado Tomás Correa Ayala:

Con su permiso señor Presidente; señor Secretario Pedro Aspe Armella, señoras y señores diputados.

En los tiempos presucesorios son propicios para el informe hipérbole. Las apologías y las descalificaciones sumarias están a la orden del día, todo es blanco o negro, según los intereses políticos o partidarios, el debate en estas condiciones es difícil.

Señor Secretario, no sabemos cuál será su destino inmediato; si la casa arbolada, el escritorio del investigador, una vista cercana a Bellas Artes o su misma oficina en Palacio Nacional. Eso le corresponde a su partido y sobre todo al pueblo de México, cuando menos así debe de ser.

Sin duda en este día su destino interfiere con el debate, hace demasiado ruido en la comunicación. Las tentaciones de la polémica que sólo pretende aniquilar al enemigo con las armas de la guerra y la retórica serán mayores a las deba te responsable.

A nosotros, señor Secretario, nos interesa fijar posiciones claras, nos interesa debatir, porque más allá de su destino personal o de nuestros intereses políticos, está la estabilidad económica del país y la calidad de vida de los mexicanos, así lo distinguimos nosotros.

En los últimos seis años hemos asistido a transformaciones importantes en la economía nacional, después de la crisis más grave de la posguerra que durante todo el sexenio anterior implicó hiperinflación, caída de más del 40% de los salarios reales, descapitalización y desindustrialización, transferencia neta de recursos al exterior. En 1987 y 1988 se inició un nuevo modo de gobernar en México, un nuevo modelo de gobernar, no sólo un nuevo estilo personal o de política económica, es la economía en donde se capta más puntualmente y con mayor grado de desarrollo, pero abarca muchas esferas sociales, políticas, culturales y hasta de mentalidades.

Señor Secretario:

Aceptamos el desafío implícito en el Quinto Informe de Gobierno y en los Criterios Generales de Política Económica para 1994, debatir con usted las características y los alcances de la estrategia económica de ese nuevo modelo de gobierno. Nos interesa destacar racionalidad y sus posibilidades, pero también algo que ustedes pocas veces hacen; señalar sus límites y contradicciones; no es negando la realidad como se hace política.

En 1998, los problemas económicos saltaban a la vista, la economía, para nuestra fortuna, no era asunto de economistas o financieros, sino de los ciudadanos, de los obreros y campesinos, de las amas de casa, todos sabían las prioridades; estabilizar la economía, reactivar el crecimiento sobre bases sólidas, modernizar la planta productiva y los servicios y por sobre todas las cosas, mejorar el nivel de vida de la población.

Todos sabían también algunas líneas de acción: enfrentar el problema de la deuda a manera de reducir su monto histórico y las transferencias al exterior, recuperar el presupuesto para gastos sociales y de infraestructura, reorientar la inversión a los sectores productivos, así como fomentar el ahorro interno.

En economía como en todo, no hay caminos únicos, a pesar de lo que los gobiernos digan, siempre hay alternativas. En el sexenio anterior se dijo que la austeridad era la única opción, que de otra manera las cosas empeorarían; pero todos sabemos que la política económica de entonces aceleró el círculo perverso entre tasas de inflación de interés y de cambio. La crisis de 1982 1988 fue también una crisis de política económica.

En 1988, se podía acudir a soluciones ortodoxas, muchos lo pedían así, sea de lado monetarista, ofertista o intervencionista. El programa de choque con fuertes restricciones a la demanda, era el favorito de los organismos internacionales y de algunos niños de Chicago nacidos en México. Otros, por supuesto, recitaban mecánicamente la mezcla keynesiano estructuralista; pero la política económica del nuevo Gobierno vinculó la crisis inflacionaria, productiva, social y de expectativas a otro factor: el agotamiento del intervencionismo.

El intervencionismo estatal va más allá de la economía, es un modelo de Gobierno exitoso en diversas latitudes, así lo fue en México, al menos desde la Revolución. Toda la estructura jurídico económico, política y administrativa del Estado mexicano ha sido intervencionista, desde el control

de las masas hasta la regulación monetaria, la producción, la distribución y el consumo.

El intervencionismo no es el Estado de bienestar, en México, sólo los optimistas creen que en México hubo un estado de bienestar, y esta en crisis. Esta en crisis el intervencionismo que se le parece, pero que no es lo mismo.

No haremos aquí el análisis de la crisis del intervencionismo, se conocen muy bien sus líneas generales como son: el sobreendeudamiento, déficit público inmanejable, inflaciones crecientes, burocratismo, ineficiencias productivas.

La crisis de 1988 en el fondo se ubicó como crisis del intervencionismo estatal, por eso, la nueva estrategia gubernamental gira en torno a la reforma del Estado. Por supuesto no se trata de abandonar la rectoría estatal, ni de dejar a las libres fuerzas del mercado la evolución económica y social, sino de reformular las funciones y los medios de acción estatal. Algunos han dicho que se trata de optimizar el Gobierno, de más Gobierno con menos Estado.

La reforma del Estado es el verdadero eje estratégico de la política económica actual; articula la estabilización económica con la reforma estructural y la modernización productiva; sus líneas generales se expresan en reforma fiscal, reforma presupuestal, desincorporación de empresas paraestatales, liberación comercial, reestructuración financiera, regulación y supervisión de los procesos económicos.

Hoy, después de cinco años, ya conocemos los avances en estos procesos; nosotros los hemos reconocido aquí en varias ocasiones, pero también hemos advertido sus dificultades y repercusiones indeseables. Sabemos por ejemplo, que la fiscalidad es diferente; que las finanzas públicas están sanas y fuimos los primeros en señalar la profunda reforma presupuestal en marcha; percibimos los cambios en las modalidades de regulación financiera y comercial y los vinculamos con nuevas formas de rectoría del Estado. No hemos estado ciegos para reconocer las nuevas realidades. Las realidades con las que el pueblo tiene que luchar y enfrentarse diariamente, porque para nosotros, para un partido de oposición, se trata de reconocer las condiciones en que se desenvuelve la lucha social y no de estar obsedidos en la nostalgia de tiempos que no volverán.

Señor Secretario; en nuestro partido hemos reconocido el nuevo modelo de Gobierno que sustituye al intervencionismo; hemos dicho incluso que se abre una nueva época en el modo de gobernar en México, sería absurdo negarlo. Algunas veces lo hemos acompañado; en otras no. Pero no lo relacionamos con una victoria cultural de las fuerzas de la derecha, como ellos mismos se empeñan en declararlo.

La crítica al intervencionismo tiene muchas fuentes; no nada más la liberal. Si ésta parece triunfar, es porque más que una doctrina o una teoría o un modo de Gobierno, el liberalismo es una crítica, es una resistencia al estado omnipresente y hoy, parecen triunfar los liberalismos de todo tipo. Es porque acentúan la crítica al gobierno excesivo, no porque la funden o la expliquen, mucho menos cuando la encuentran en formulaciones de principios de siglo.

Sólo los arrogantes proclaman victorias culturales propias. Sólo los que ignoran la heterogeneidad crítica del intervencionismo, pueden suponer que su resistencia es la única. Pero nosotros sabemos que afortunadamente también desde la izquierda, se lanzaron voces contra el Gobierno excesivo, del tipo democrático o totalitario en la economía y en la política. Nosotros sabemos que si algo triunfó, no fue la supuesta doctrina de unos cuantos, sino las resistencias de la población a ser gobernada en todos los ámbitos de su vida; es la resistencia al Gobierno excesivo la que triunfó, no las supuestas doctrinas de la derecha liberal. Los resultados de la estrategia económica están a la vista.

Disminuyó la deuda histórica y la transferencia al exterior, aunque sigue siendo muy alto el monto total. La inflación se redujo a un dígito en el presente año; se recuperó la senda del crecimiento. El gasto social es más del 50% del Presupuesto de Egresos. La inversión privada crece a tasas importantes; el comercio exterior se ha diversificado y depende menos del petróleo; los salarios han iniciado una recuperación lenta de su poder adquisitivo, aunque los mínimos no; las finanzas públicas están sanas y la deuda interna se ha reestructurado. Existe un nuevo marco normativo e institucional del desarrollo económico. A pesar del manejo siempre parcial de las estadísticas económicas, las cifras están ahí...

El Presidente:

Compañero diputado Correa Ayala; le ruego respetuosamente concluya, por su tiempo.

El diputado Tomás Correa Ayala:

Señor Presidente; yo le voy a pedir a usted me dé el tiempo suficiente para terminar mi intervención.

A pesar del manejo siempre parcial de las estadísticas económicas, las cifras están ahí. Son realidades indiscutibles, sólo los necios podrían negarlas. Estos resultados son, como lo dijimos hace tiempo, los activos del Gobierno, sus mejores razones para señalar las bondades de la estrategia.

Sin embargo, la realidad es más compleja, hay lados oscuros o cuando menos claroscuros. El balance, señor secretario, también debe incluirlos para facilitar la discusión, los enumeramos brevemente:

Primero. El crecimiento ha sido menor al esperado, las estimaciones del Plan Nacional de Desarrollo están muy por encima de las cifras registradas en los últimos años.

Segundo. Los salarios mínimos han seguido cayendo en términos reales, el argumento de que son cada vez menos los trabajadores que lo reciben, no exime la responsabilidad del Gobierno de reestablecerlos; más aún, si son los sectores más desprotegidos de la población y sirven de base para segmentos aún más castigados, por ejemplo: pensionados y jubilados.

Tercero. El déficit comercial es excesivo; no es tan sólo su monto y la presión sobre reservas y tipo de cambio, sino su financiamiento que depende de factores especulativos, sobre todo en el mercado de dinero, en particular, del papel comercial.

Cuarto. Las tasas de interés activas son casi inflexibles a la baja, lo que ha desatado procesos de descapitalización y transferencias de activos productivos a los grupos bancarios y financieros.

Estos también son hechos, señor Secretario. Seguramente podrán interpretarse de diversas maneras y ser magnificados o soslayados, pero existen y para muchos mexicanos, son problemas importantes.

Por otra parte, la estrategia ha tenido otras repercusiones innegables...

El Presidente:

Compañero diputado Correa Ayala; esta Presidencia le recuerda que hay un acuerdo parlamentario que todos en la Asamblea sancionamos. Por eso respetuosamente solicitamos concluya su intervención.

El diputado Tomás Correa Ayala:

Señor Presidente; respetuosamente le pido a usted y a mis compañeros diputados, si me permite continuar con mi exposición, porque 15 minutos no son suficientes para hacer un análisis de la situación que estamos analizando.

Por lo tanto, señor Presidente, señores diputados, les pido a ustedes respetuosamente se me permita continuar con mi intervención, porque me parece que este acuerdo...

El Presidente:

Continúe para que concluya, diputado.

El diputado Tomás Correa Ayala:

Gracias, señor Presidente.

Propició una transferencia de activos productivos públicos a manos privadas, generando un proceso importante de concentración de la riqueza. Estuvimos de acuerdo en la utilización del fondo de contingencia, pues permitió para la reforma presupuestal y la disminución del peso de la deuda. Pero no podemos aceptar que las empresas públicas generen fortunas personales insultantes.

¡Se ha conformado un nuevo poder económico, muy ligado al poder político; un poder político económico que no existía en la historia de México! Antes podrían distinguirse, hoy ya no. La ligazón entre ambos figura un nuevo bloque de poder en donde el aparato del Estado y las organizaciones patronales tienden a identificarse visiblemente. Este es un riesgo, incluso para la misma estrategia.

No puede aceptarse cambiar del intervencionismo estatal al intervencionismo de las élites económicas.

Profundizó la vulnerabilidad de la economía mexicana y las presiones especulativas y expectativas del exterior. Los acontecimientos del día del famoso debate son más ilustrativos que muchas palabras. Puede decirse que los problemas y las repercusiones son accidentes que están causados por factores externos o por el escaso desarrollo de la competencia en México.

En consecuencia, solo basta abrir los mercados para disminuir la concentración de la riqueza,

por las altas tasas de interés o acelerar el crecimiento. Por supuesto que en alguna medida es cierto, pero no es toda la verdad. La concentración de la riqueza y la vulnerabilidad externa de la economía son parte de la misma estrategia.

Discutamos ahora el desenvolvimiento económico de 1993 y la política económica para 1994.

En este año se delinean muy claramente los calurosos de la política gubernamental. Por una parte, la consecución del dígito inflacionario no debe soslayarse. Pero por otra el crecimiento del producto no alcanza siquiera la dinámica demográfica.

La explicación oficial de esto es problemática, no tanto por su fondo, sino por las causas que esconde, por las razones que soslaya. La explicación que aparece en el Quinto Informe y en los criterios, así como en su presentación de hace una semana, reside en que las dificultades del crecimiento, la desaceleración económica es hasta cierto punto natural por los procesos de reconversión productiva.

Que las modificaciones en la planta y en los proceso de trabajo todavía no se reflejan en la producción, en pocas palabras. Que el lento crecimiento del producto interno bruto es un reflejo de la transición microeconómica en el país. Como descripción general, vale; como explicación, es insuficiente.

Todos sabemos que la crisis de acumulación, y aquí permítanme recobrar el análisis marxista, que para estas cosas funciona mejor, empiezan a superarse cuando se modifican las condiciones de valorización. Esto es, cuando la generación y aportación de plusvalor permite incrementos sustantivos a las tasas de ganancia promedio.

En México, como se ha demostrado en diferentes ocasiones, la crisis de los 80 más que una crisis financiera fue la expresión profunda de los límites de un patrón de acumulación. Por tanto, cualquier superación de la crisis pasa por la depuración de las trabas de plusvalor relativo, esto se expresa con meridiana claridad en la necesidad de incrementar la productividad de todas las modalidades del capital y en todas sus funciones.

Por eso decíamos, señor Secretario, que la descripción suya vale, más allá de su marco teórico de referencia, pero como explicación de los acontecimientos es insuficiente, deja de lado lo importante que nos permite vislumbrar alternativas distintas de política económica.

La explicación del lento crecimiento del producto interno bruto es insuficiente por tres razones:

Primero. El proceso de disminución del crecimiento inició por lo menos en el segundo trimestre de 1991, la tasa del crecimiento del producto interno bruto ha venido decayendo, 4.4% en 1990, 3.6%, 2.6% y ahora 1.1% para 1993. Pero además es el resultado de una generalización de resultados negativos en los últimos tres o cuatro trimestres en la mayoría de las actividades industriales, y en la disminución consecutiva del crecimiento en seis de los nueve grandes sectores del producto interno bruto. La desaceleración se ha extendido y se ha profundizado en muchas ramas, los números negativos ya llevan más de tres trimestres.

Segundo. Los componentes de la demanda agregada muestran una evolución preocupante, sobre todo en el consumo y la inversión. El consumo disminuyó, el más importante, el privado, lo hace después de una tasa promedio anual del 5%; ¿qué significa esto?, la reducción del mercado interno, causado entre otras cosas por la política salarial, pero también por el encarecimiento del crédito, significa que el crecimiento del consumo de años anteriores estuvo financiado por créditos que en 1993 llegaron al límite con el crecimiento de las carteras vencidas.

Por el lado de la inversión su evolución es más preocupante aún, con el año de menor crecimiento, 2% en comparación con el 20% el año anterior y tasas superiores al 10% los años precedentes. No hay crecimiento en el consumo y en la inversión es muy pequeño, ¿una crisis de expectativa acaso o un límite financiero del desarrollo, una barrera monetaria y crediticia al crecimiento?

Tercero. La explicación es insuficiente además porque soslaya el papel del superávit fiscal en la evolución del producto. Pareciera que durante tres años prácticamente no hubo superávit fiscal ni sus secuelas en la restricción crediticia o en la retracción de la inversión pública.

Hace dos años nuestro partido comprendió muy bien el significado de finanzas públicas superavitarias. Dijimos entonces que era una herramienta útil en la política antiinflacionaria. Señalamos que su utilidad...

El Presidente:

Compañero diputado, le invitamos a que concluya.

El diputado Tomás Correa Ayala:

Estoy por concluir señor Presidente.

...El año pasado nuestra advertencia subió de tono, ya se veían los efectos positivos en la inflación y negativo en el crecimiento, sobre todo después del segundo trimestre. Hoy comprobamos que teníamos razón, el superávit sirvió de ancla inflacionaria pero también productiva, la inflación creció menos pero también el producto; la política funcionó pero a costa del crecimiento, sería peligroso no reconocerlo así, sólo falta que nuestra preocupación sobre la inflación institucional se cumpla, para que lo ganado con el superávit se pierda con el crecimiento futuro.

Señor Secretario, hay que sacar conclusiones en el significado profundo de lento crecimiento del producto interno bruto, estamos de acuerdo, el país se encuentra en una profunda reconversión productiva, pero su explicación es insuficiente, soslaya el papel de la reforma del Estado en la depuración de las condiciones de valorización.

Por las respuestas que tenga y sus comentarios a esta intervención, agradezco de antemano que me hayan podido facilitar un poco más el uso de esta tribuna para terminar mi intervención. Muchas gracias.

El Presidente:

Tiene la palabra el compañero diputado Gilberto Rincón Gallardo, por el Partido de la Revolución Democrática.

Esta Presidencia exhorta a los oradores, que nos sujetemos al Acuerdo Parlamentario.

El diputado Gilberto Rincón Gallardo y Meltis:

Señor Presidente; señores legisladores, secretario de Hacienda, Pedro Aspe.

Al iniciarse el sexto año fiscal de la administración, pese al triunfalismo fiscal, las ilusiones sobre los verdaderos alcances de la estrategia económica que ha sido practicada por el Gobierno, se han disipado; en su lugar ha quedado a la vista de todos el extremo nivel de subordinación al extranjero en que ha sido colocada la economía mexicana y en lo social el carácter altamente excluyente del modelo.

La economía mexicana, no sólo no está creciendo a las tasas mayores del 5% anual que fueron ofrecidas por su Gobierno en el Plan Nacional de Desarrollo para los dos últimos años del sexenio, sino que con el desempeño del 1.1% del PIB que nos ha informado se registrará este 1993, ha vuelto al camino del retroceso del ingreso por habitante pero en un contexto de una distribución mucho más desigual. No se logra superar el comportamiento de, pare, siga, pare, ni consolidar la meta de crecer en forma sostenida que se ha buscado explícitamente desde el principio de la actual administración y también desde el inicio del pasado Gobierno.

En esta materia los hechos parecen indicar que ese propósito está lejos de ser consolidado, 1993 será el tercer año consecutivo en que la economía mexicana se desacelere, además tenemos que los más altos ritmos de crecimiento logrados desde 1988 no igualan siquiera a los más bajos niveles de comportamiento mostrados por la economía mexicana entre 1955 a 1982.

Por otro lado, usted mismo señor Secretario, nos ha informado que sectores como la agricultura, la minería y las manufacturas se encuentran en franca recesión, si bien otras ramas experimentan un crecimiento, en resumen, se mantiene un comportamiento desigual de nuestra economía. La recesión que hoy sufrimos, a diferencia de las de años pasados, no es resultado de una abrupta caída de los precios internacionales del petróleo o del alza extraordinaria de las tasas de interés en los mercados internacionales de capital, tampoco es la consecuencia de una recesión en las economías con las que más comerciamos; en efecto, los precios internacionales de la mezcla mexicana del petróleo, si bien no son altos, tampoco se ubican en niveles lejanos respecto a los de años pasados.

Por otra parte, los costos que paga la deuda externa mexicana son los más reducidos desde que se inició la crisis de insolvencia en 1982, esto paradojicamente se debe al descenso de la tasa libor en el mercado que es la que rige los intereses de la mayor parte de la deuda mexicana y no a los efectos de la renegociación realizada en 1989 y 1990.

De hecho en este momento la renegociación de los bonos a la par, en vez de significar un abaratamiento de nuestra deuda, está produciendo su encarecimiento, por ello ni nuestra economía ni las finanzas públicas se pueden beneficiar en mayor medida de la favorable circunstancia del mercado financiero internacional, debido a la inconveniente negociación realizada que hoy obliga a que el tramo de la deuda mexicana titulada en bonos a la par, esté pagando tasas fijas del 6.25%, casi el doble que la tasa libor, hoy en niveles apenas mayores al 3%.

Respecto a la situación de la economía norteamericana, ésta registra su segundo año de recuperación y mantiene baja su inflación, por ello ha sido posible seguir expandiendo las exportaciones mexicanas.

La difícil situación económica que hoy sufrimos, es entonces resultado del sobre ajuste tipícamente neoliberal aplicado por su Gobierno. Es producto directo de la acelerada apertura económica y de la política del superávit sostenida desde los dos años pasados si se incluyen los ingresos de la venta de las paraestatales a pesar de la desaceleración.

Y es resultado también de los excesivos márgenes de ganancia con los que la Secretaría de Hacienda y el Banco de México están permitiendo operar a los bancos privatizados, los cuales obtienen un amplio diferencial entre sus tasas activas y pasivas y han incrementado sus cobros de los servicios bancarios, con lo cual frenan a la inversión productiva, al consumo privado y a la economía n su conjunto.

Si bien le permite a los banqueros rápidas tasas de retorno de los recursos invertidos en la compra de las instituciones bancarias.

El grupo parlamentario del PRD, sostuvo que para los dos presupuestos anteriores se mantuvieran finanzas equilibradas y no un superávit, pero ha tenido que llegar el año de elecciones presidenciales para que el Gobierno se decida a suprimir el superávit de las finanzas públicas. En horabuena, aunque la decisión es tardía y ha resultado costosa para el país y ha sido motivada principalmente por la preocupación electoral del Gobierno; sin embargo, repetimos, enhorabuena.

Al parecer 1993 será el primero de 20 años en el cual la inflación que se acelere, que se alcance, será inferior a un dígito. Ese es sin duda un logro importante, pero que requiere ser ubicado en su verdadero alcance para no sobreestimar la solidez de ese logro. Se produce en el contexto de una economía creciendo a tasas inferiores a las de la población y de ramas enteras de la economía en franca recesión; además se produce apoyado en niveles salariales y legales que violan los preceptos de la Constitución en su artículo 123 y colocan a los ingresos de los trabajadores en niveles de ficción, pues no permiten que ellos y sus familias cubran sus necesidades básicas e incluso les obliga a dedicarse al chambismo, requiriendo, los trabajadores o sus parientes, desempeñar otras actividades económicas adicionales a su empleo principal para poder completar el gasto.

No hay nada más ajeno a la productividad, al compromiso con la competitividad o a la verdadera solidaridad social, que este esquema de desinflación, sustentado en la pobreza de los trabajadores.

En lo que se refiere al empleo, todos los indicadores oficiales reportan un crecimiento de la desocupación durante 1993. Por otro lado, parece evidente que el tipo real de cambio del peso con el dólar, se encuentra en el límite de su equilibrio.

El grupo parlamentario del PRD, propone a los compañeros legisladores y a usted, señor Secretario, los siguientes criterios para que se pueda evaluar con realismo la solidez del éxito de la lucha contra el fenómeno inflacionario. Esta, la lucha contra la inflación, se habrá consolidado cuando los bajos niveles inflacionarios se alcancen en el contexto de una economía que crezca a las tasas promedio de las décadas 60 y 70; se produzcan asociados a niveles salariales adecuados y no a los actuales de miseria, y se sustente en un peso correctamente valuado frente al dólar. Tales son las condiciones en las que se podrá hablar de un real éxito de la política antiinflacionaria, no menos.

En lo que se refiere a la desigualdad social y a la pobreza en el país, sostenemos que éstas alcanzan niveles sin precedentes en la era moderna de la nación.

En la evaluación de este tema discrepamos ampliamente del manejo desinformador que se ha dado a este crítico problema, con, por ejemplo, los resultados de estudios como el elaborado conjuntamente por el INEGI y la CEPAL, dado a una amplia publicidad y que se cita en la página 24 de los Criterios Generales.

El trabajo ha ignorado la metodología para evaluar los niveles de pobreza en otros estudios del propio Gobierno, como fue el caso del combate a la pobreza del Pronasol. Los resultados presentados en el estudio citado, objetivamente evaluados, aceptándolos para el análisis sin conceder que describan la realidad con precisión, nos pintan de cualquier manera un cuadro verdaderamente dramático.

En 1992, uno de cada ocho mexicanos vivía en familias en las cuales el total de los ingresos familiares no eran suficientes para adquirir ni siquiera la canasta alimentaria mínima básica, es decir, el informe nos da cuenta de que uno de cada ocho mexicanos, aun dedicando la totalidad de sus ingresos familiares a la alimentación

y prescindiendo de cualquier cantidad de otros gastos destinados a aspectos tan importantes como la vivienda, el vestido, la salud, la educación, el transporte, y ¿por qué no?, el esparcimiento, aun dedicando el 100% de sus magros recursos a la alimentación, no alcanzaban a comprar los alimentos mínimos para no sufrir desnutrición.

Por otro lado, en el manejo de estos resultados se ha pretendido definir como hogares intermedios a las familias que reúnen ingresos cuyo monto total alcanza apenas para adquirir entre una y dos canastas básicas alimentarias. A nosotros nos ha parecido que este manejo de los resultados es insostenible desde cualquier punto de vista metodológico. Familias que ganan, reuniendo todos sus ingresos, apenas el equivalente a entre una y dos canastas básicas alimentarias, no pueden ser clasificadas, sino como pobres, e incluso probablemente también sufren niveles de desnutrición, de falta de atención a aspectos básicos de la salud, de falta de posibilidades elementales de educación, de carencias habitacionales importantes.

Más aún, al grupo parlamentario del PRD le parece que con un criterio verdaderamente objetivo, también las familias con ingresos equivalentes al valor de tres canastas alimentarias básicas, deben ser clasificados como pobres y no como de ingresos superiores a los intermedios que se propone en el documento referido.

Además es muy difícil aceptar la tesis de que se ha reducido la pobreza en el país, cuando el producto por habitante está seis puntos porcentuales deprimido respecto a su máximo en 1981, pero mucho más desigualmente distribuido que entonces, como lo muestran claramente las encuestas de ingresos y gastos de los hogares de las familias, cuando el gasto real por habitante destinado al desarrollo rural, aun después del aumento propuesto para este 1994, se mantendrá en menos de la mitad del de 1981, y el destinado a la pesca muestra un deterioro de más del 90% respecto a 1982.

Es difícil de aceptar cuando los empleos industriales se reducen respecto al nivel de hace una década, y los salarios mínimos han sido prácticamente eliminados del mercado, por el incomprensible e ilegal trato que han recibido de la comisión tripartita encargada de fijarlos, en la cual el Gobierno ha empujado para nuevos deterioros reales a lo largo de los primeros cinco años del sexenio, y nuevamente, sólo ante la realidad de un año electoral, el Ejecutivo ahora nos propone algunas tímidas políticas de recuperación, ligadas a las expectativas de la inflación, pero no necesariamente a su comportamiento real, a los futuros aumentos de la productividad en forma diferenciada, pero no a los pasados incrementos de la productividad que han sido importantes, pero no beneficiaron a los trabajadores, así como un nuevo mecanismo de financiamiento fiscal de los incrementos salariales que subsidia a los empresarios con dineros públicos, para que estos entreguen recursos fiscales en favor de los salarios.

La discusión de las iniciativas de Presupuesto de Egresos de la Federación y de la Ley de Ingresos, correspondientes a 1994, se da en el contexto de la reciente aprobación del Tratado de Libre Comercio por el Congreso norteamericano, y el mismo día en que será aprobado en el Senado mexicano, sin que las justificadas voces de oposición en este cuerpo dignamente representadas, vayan a permitir una verdadera reflexión y análisis del contenido del tratado, y me nos alguna crítica o enmienda sustantiva que evite el sesgo antipatriótico con el que se ha negociado.

El Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que en rigor debiera llamarse Tratado de Libre Comercio e Inversión de América del Norte, ha sido puesto en práctica por México unilateral e inequitativamente desde hace ya 11 años, y ha hecho concesiones de consideración al extranjero, que lesionan la posibilidad de que el Estado mexicano siga ejerciendo la rectoría social y el desarrollo que ordena el artículo 25 de la Constitución.

Es increíble, por citar uno de los varios ejemplos de la negociación antipatriótica que se encuentran en el TLC, que se haya signado el artículo 1106, en el cual el Gobierno mexicano cede toda posibilidad de imponer requisitos de desempeño a la inversión extranjera que arribe al país en el futuro, mientras que el Gobierno de Canadá se excluyó del nocivo efecto de ese artículo, preservando en el anexo uno del tomo dos del texto del tratado, página 172 y 173, su capacidad de orientar las inversiones extranjeras en beneficio de este país, y de imponerle requisitos a las inversiones extranjeras.

El verbo utilizado por la reserva canadiense, ha sido el de imponer a la inversión extranjera determinados comportamientos para beneficio de ese país, y México ha renunciado a esta posibilidad, igualando en la práctica los derechos económicos de los extranjeros norteamericanos y canadienses a los derechos económicos de los mexicanos más favorecidos.

En lo que se refiere a aspectos importantes de la política de gasto, el grupo parlamentario del PRD observa que se ha reiterado la práctica de retener importantes porciones del gasto público fuera de las regulaciones que deberían de ejercitarse, de acuerdo con las leyes presupuestarias vigentes. Tenemos por ejemplo, los 20 mil 765 millones de pesos que se asignan a la rama 00023, no sectorizable y que representan casi una quinta parte del presupuesto total designado en el artículo 2o. de la iniciativa de decreto, aprobatorio del Presupuesto de Egresos de la Federación que hoy discutimos.

Nos hemos opuesto en el pasado a esta innecesaria forma de clasificación de los recursos presupuestarios, que dejan en la indefinición el uso futuro de recursos y bajo una alta discrecionalidad del Ejecutivo. ¿Cuál es el motivo para persistir en el renglón de recursos no asignados a ningún sector? Nosotros pensamos que no existe ninguna razón realmente válida.

Por otro lado, nuevamente se deja a discreción del Ejecutivo el fondo de los 8 mil 809 millones de pesos asignados al ramo 00026, Solidaridad y Desarrollo Regional, al no venir definidos con programas y subprogramas, como lo ordena la Ley de Programación y Presupuesto y Cuenta Pública.

Respecto a los montos del gasto a lo ya dicho, debe añadirse que los recursos destinados a algunas paraestatales estratégicas, son verdaderamente insuficientes, tanto en el nivel histórico como en la propuesta de presupuesto para 1994.

A Pemex se le pretenden asignar recursos que en 1994 representan un nuevo retroceso, como proporción del PIB. Al inicio de la década pasada, ascendían a más de seis puntos porcentuales, y a más de tres puntos porcentuales al inicio de la actual administración.

Para 1994 se programan recursos que representan apenas dos puntos porcentuales del PIB.

A Ferrocarriles Nacionales se le asignan recursos reales casi 12% menores que en 1993.

Las consideraciones aquí vertidas fundamentan nuestra discrepancia con la estrategia económica desplegada por el Gobierno. Por ello el grupo parlamentario del PRD está pugnando por una serie de modificaciones a las iniciativas de Presupuesto de Egresos, la Ley de Ingresos, la Política Salarial y la de Deuda Externa, algunas de las cuales expongo enseguida a usted, señor secretario, con la solicitud atenta de conocer en esta ocasión sus consideraciones sobre las mismas.

Proponemos la reforma al Presupuesto de Egresos de la Federación, en el siguiente sentido:

Primero. Deben crearse un par de nuevos renglones presupuestales destinados a los siguientes propósitos: a un fondo de becas para los trabajadores que resulten despedidos durante el próximo año de las empresas industriales y de servicios mexicanas por la reconversión tecnológica, el cambio de giro de la negociación o simplemente el cierre como resultado de la entrada en vigor del TLC.

Las becas incluirán un ingreso seguro durante seis meses para los despedidos, y un curso de capacitación en actividades de alta productividad para su adaptación al contexto económico que generará el TLC.

Un fondo adicional para apoyar con suficiencia la reconversión tecnológica y/o administrativa de las empresas mexicanas medianas y pequeñas, que en el futuro inmediato deberán enfrentar importantes cambios en vista de la apertura que significa el TLC.

El monto de estos fondos ascendería a 2 mil millones de nuevos pesos, los cuales serían financiados:

1. Reduciendo en 1 mil 500 millones de nuevos pesos el presupuesto planteado para el ramo 00023 derogaciones no sectorizables.

2. Reduciendo en 500 millones de nuevos pesos el presupuesto de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, cuyo presupuesto propuesto por el titular del Ejecutivo, asciende a 5 mil 135 millones de pesos, y es semejante a los presupuestos sumados de la secretarías de Trabajo y Previsión Social, Reforma Agraria, Pesca, Marina, Desarrollo Social y Turismo.

3. Proponemos un aumento de 1 mil millones de nuevos pesos a los fondos de pensiones y jubilaciones del IMSS y del ISSSTE, y de 1 mil millones de nuevos pesos destinados por mitades a Ferrocarriles Nacionales y a Petróleos Mexicanos, todo ello con cargo al ramo 00023 de fondos no sectorizables. En lo que se refiere a la deuda externa pública, proponemos iniciar una nueva renegociación con objeto de lograr que las tasas fijas de los bonos

a la par funcionen como techo máximo a pagar, pero no como piso, de manera que México se pueda beneficiar de las tasas más bajas del mercado, cuando éstas desciendan del nivel de 6.25%, como ocurre ahora.

Una negociación de la deuda pública externa, contratada por los organismos financieros internacionales, como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, y con los gobiernos acreedores para obtener reducciones del saldo de la deuda y el establecimiento de un techo máximo a las tasas de interés.

Tal renegociación repercutirá en ahorros al pago de intereses a la deuda pública...

El Presidente:

Compañero diputado, le solicitamos respetuosamente que concluya, y le pedimos a la Asamblea que guarde orden.

El diputado Gilberto Rincón Gallardo y Meltis:

Concluyo en un momento.

Tal renegociación repercutirá en ahorro al pago de intereses a la deuda pública, que serán orientados a otros renglones prioritarios del gasto.

En lo que se refiere a los salarios mínimos, además de ser fijados conforme a la inflación esperada, como ustedes proponen, proponemos, se añadirán dos ajustes semestrales, en caso de que la inflación realmente ocurrida sea superior a la esperada.

Los incrementos a los mínimos incluirán un aumento real del 10% adicional a cuenta de los incrementos no pagados a la productividad de los años pasados.

Y, por último, en lo que se refiere a los salarios universitarios, se incorporen al presupuesto los recursos necesarios, para que se inicie un programa de recuperación real de los ingresos de los trabajadores administrativos y académicos, de las escuelas e instituciones de educación media y superior.

Agradezco de antemano sus comentarios, ciudadano Pedro Aspe.

El Presidente:

Muchas gracias, compañero diputado Gilberto Rincón Gallardo.

Tiene la palabra el diputado José Antonio Gómez Urquiza de la Macorra, del Partido Acción Nacional.

El diputado José Antonio Gómez Urquiza de la Macorra:

Señor Presidente; señor secretario de Hacienda, doctor Pedro Aspe; compañeras y compañeros diputados: Mil novecientos noventa y cuatro, año de cambios, año electoral, año en el que muchos mexicanos buscarán la nueva esperanza; un nuevo comienzo.

Mil novecientos noventa y cuatro, último año de Gobierno e inicio del próximo, año en el que el régimen y el sistema se juegan el todo por el todo a costa de lo que sea.

Desde 1929, la economía nacional ha sido instrumentada con propósitos de dominio político. Los hombres del partido oficial, que hoy ensalzan las privatizaciones, ayer hacían lo mismo con las estatizaciones masivas.

Hoy postulan un modelo liberalizado y abierto al comercio internacional, pero no hace mucho tiempo eran fervientes defensores del nacionalismo revolucionario.

Del mismo partido salieron teorías económicas tan disímbolas como el socialismo dentro de la Constitución de Cárdenas y López Mateos; el capitalismo nacionalista, de Alemán y Díaz Ordaz; el desarrollo estabilizador, de Ortiz Mena; el desarrollo compartido, de Echeverría; el aprender a vivir con la inflación, y la administración de la abundancia de López Portillo; el centro progresista, de De la Madrid, y el liberalismo social, del salinismo.

La única lógica que une a esta colección, a veces de disímbolas tendencias, es una: mantener en el poder al grupo que oprime a la nación. Y sus frutos son amargos para la mayoría de los mexicanos: pobreza, ignorancia, insalubridad, destrucción del medio ambiente.

Después de 64 años de manipulación política de la economía nacional, existe un rezago gravísimo en algunos pilares, sobre los que debe sustentarse el desarrollo económico del país.

El Gobierno económico que el Gobierno ha adoptado, no asume el desarrollo económico

como un proceso fundamentalmente humano. El problema no reside en algunas de las técnicas utilizadas, sino en el tipo de opciones que privilegian los pesos y centavos, por encima de las personas humanas y las angustias de las familias mexicanas.

Se han tomado medidas sólo en el aspecto macroeconómico, sin fortalecer lo microeconómico, lo que ha provocado el mejoramiento sólo de unos pocos y no el de la mayoría.

Es verdad que la gran empresa está muy bien, pero los micro, pequeños y medianos negocios han sucumbido o encaran ya el riesgo del cierre.

Estas empresas, que son el soporte y fundamento del futuro de muchos, yo diría muchísimos mexicanos, se han visto casi aplastadas por las medidas que a nivel macroeconómico ha tomado el Gobierno. La baja en ventas por la recesión económica se ha agravado con el bajísimo apoyo en créditos que la nueva banca privatizada les ha otorgado, cuando han tenido acceso a él ha sido caro y lleno de trabas y requisitos, y en un consecuente círculo vicioso muchas de ellas han caído en la enorme hoy cartera vencida. Son loables los esfuerzos de Nacional Financiera por bajar sus tasas de interés e impulsar la proliferación de créditos para estas micro y pequeñas empresas, pero para muchas de ellas se aplica el dicho popular que reza, "muerto el niño tapado el pozo".

El sacrificio ha sido desigual. Tenemos un Gobierno rico, 13 supermillonarios y una sociedad cada vez más pobre. El Gobierno pone énfasis en el éxito de haber logrado superávit fiscal ya por dos años; sin embargo, no reconoce que lo alcanzó gracias al sacrificio de los trabajadores y de los pequeños y medianos empresarios. Padecemos tiranía fiscal, se agobia a los contribuyentes con pesadas responsabilidades fiscales, las leyes son complejas.

Existe un deterioro constante y creciente del poder adquisitivo del trabajador, especialmente el de más bajos recursos. El salario mínimo, desde que se instrumentó el PECE, a la fecha ha perdido 40% de capacidad de compra. Ahora se propone para aliviar a este sufrido sector de ingresos bajos una fórmula novedosa, ingeniosa y surrealista, de otorgar un aumento a los salarios vía el crédito fiscal. Es curioso darnos cuenta que en vísperas del proceso electoral los trabajadores dependientes con salarios de hasta dos veces el salario mínimo general recibirán, no de sus empleadores, sino del fisco o léase del Gobierno, un aumento a sus ingresos.

Resulta positivo observar que por fin se ha preocupado el Gobierno por estos trabajadores y que les restituya en parte lo que por su sacrificio han perdido, pero esperamos que estas medidas no sean tan sólo por un populismo electorero.

La pobreza en México es resultado de una larga situación estructural de injusticia, en la que se destacan tres causales: la excesiva manipulación política de la economía, el sesgo en las políticas de desarrollo urbano y la concentración social y regional del ingreso. La política económica del Gobierno ha generado una mayor marginación e inequidad social, principalmente en el campo.

Los mecanismos de distribución han sido puestos al servicio del clientelismo electoral, provocando así un acceso desigual a los mismos. Políticas populistas han buscado paliar situaciones de pobreza extrema de manera tendenciosa e incompleta, su principal objetivo no ha sido liberar a los pobres de la miseria ni siquiera reducir estructuralmente dichos niveles, sino tan sólo apaciguar irritaciones y comprar votos de núcleos de población políticamente inestables.

Las principales necesidades: nutrición, salud, educación, vivienda, se proveen de manera parcial, por lo que sus efectos finales sobre los individuos y la sociedad resultan mínimos o nulos. El Pronasol es la representación misma de una estrategia de este tipo.

Parece una cruzada personal con connotaciones eminentemente políticas y electorales. Lejos de ser un programa de combate a la pobreza, se muestra como la institucionalización del neopopulismo, además el Pronasol ha trastocado el esquema fiscal, por haber invadido áreas de competencia regional por un manejo centralizado desde el Gobierno Federal.

El desarrollo regional es muy dispar entre estados y municipios. Mientras unas cuantas demarcaciones del país presentan una gran actividad económica, amplias zonas sufren un insuficiente desarrollo, desempleo creciente y carencias importantes. El reparto fiscal, a través de la coordinación fiscal, ha estado tan centralizado y bajo que ha sido un yugo a los gobiernos estatales y estos, a su vez, hacia los municipales, convirtiéndose por la dependencia del erario federal a través de participaciones, en uno de los elementos más poderosos de control político.

Es importante que se incrementen aún más las participaciones a las entidades federativas, sobre todo ahora que éstas tendrán que afrontar el pago de las nóminas magisteriales; el incremento

del 1% que se establece en la iniciativa es aún insuficiente.

En síntesis, la realidad que vivimos la gran mayoría de los mexicanos, como resultado del modelo que se ha aplicado en los últimos ocho años, se aleja del tono triunfalista que se festina.

Señor Secretario: La política económica para 1994 debe restituir el poder adquisitivo de todos los mexicanos; debe dar oxígeno a la micro y pequeña empresa para que puedan afrontar los retos por venir; debe descentralizar el gasto y hacer participes en mucho mayor medida a estados y municipios. En forma importantísima, como último punto, debe eliminar de tajo todo aquello que usa el partido oficial en favor del control político y en favor de sus candidatos Muchas gracias.

El Presidente:

Muchas gracias, señor diputado.

Tiene la palabra el compañero diputado Angel Aceves Saucedo, del Partido Revolucionario Institucional.

El diputado Angel Aceves Saucedo:

Con su venia, señor Presidente; honorable Asamblea:

La responsabilidad que hoy nos incumbe, es la de analizar con juicio propio, ponderar con independencia y hacer viable y provechosa la relación de respeto y de confianza básica entre los diputados y el Poder Ejecutivo.

La autonomía no nace de la confrontación estéril, sino del convencimiento y las tareas comunes. En este recinto estamos para dialogar y construir, para intentar hacer más ligera la carga de los mexicanos, resolver sus demandas más sentidas y contribuir al engrandecimiento de la patria. No estamos para llenar con piedras la ruta hacia el desarrollo, y por eso no deben distraernos las voces llenas de protestas, pero ayunas de propuestas.

La fracción parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional, por mi conducto, apoya razonada y comprometidamente la propuesta de política económica y social contenida en las iniciativas que analizamos porque recoge los avances de los últimos años y los proyecta hacia el futuro en el que habrán de consolidarse la estabilización y la recuperación de la economía.

El optimismo en el futuro de México se sustenta en su fortaleza interna, producto de las enormes transformaciones tanto a nivel macroeconómico como en el firme tránsito hacia una verdadera revolución microeconómica.

A partir de 1989, la política económica ha estado fundamentada en dos estrategias básicas. En primer lugar, las políticas fiscal y monetaria han tenido el objetivo de alcanzar la estabilidad económica.

Esto es, eliminar los desequilibrios existentes en las cuentas económicas al inicio de la actual administración. En segundo lugar, la política del cambio estructural ha consistido en la reestructuración y modernización del marco regulatorio de la economía. Ambas estrategias fueron utilizadas para eliminar los obstáculos que se interponían a la creación de las bases de un crecimiento sostenible y con estabilidad de precios, siempre con el objetivo superior de elevar el bienestar de la población. Así entendemos la rectoría.

La fracción parlamentaria priísta está convencida de la congruencia y perseverancia en el manejo de la política económica. Ciertamente, no ha habido desviaciones en la estrategia, en aras de resultados espectaculares en el corto plazo, pero de duración limitada.

Los priístas tenemos la convicción de que los objetivos de la política económica para 1994 expresados por el Ejecutivo Federal, son congruentes con lo realizado en los últimos cinco años y marcan la pauta para seguir transitan do hacia el cumplimiento de la misión fundamental del Estado: acrecentar el bienestar de la sociedad mexicana.

Por ello, hacemos nuestro el objetivo de consolidar los logros obtenidos en el combate a la inflación, fijando como meta un crecimiento en los precios de 5% para 1994.

En la búsqueda permanente de la estabilidad debe destacarse el decisivo papel que jugará el Banco de México, al que mediante la reforma constitucional correspondiente, se le ha conferido autonomía y el mandato expreso de procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda. Se institucionaliza así, la lucha contra la inflación.

Coincidimos con el Ejecutivo Federal en el propósito de promover una sólida reactivación de la economía por la vía de incrementos en la inversión, en la productividad, la recuperación de

los salarios reales y un aumento en las tasas de crecimiento del consumo popular.

Es plausible también, elevar los montos de recursos presupuestales destinados a los sectores prioritarios, para acceder a niveles superiores de bienestar social, así como profundizar en las reformas estructurales que hagan posible incrementar la eficiencia del aparato productivo para mejorar nuestras posibilidades de competir verdaderamente en el ámbito internacional.

Es punto relevante la propuesta presupuestal de equilibrar las finanzas públicas: ni superávit ni déficit. Dicha proposición permite mantener las acciones para que el crecimiento económico se dé en un entorno de estabilidad general de los precios y de las tasas de interés.

Si bien es cierto que en 1993 el crecimiento del Producto Interno Bruto, se vio aminorado debido al propio proceso de modernización de la economía ¡por razones internas que no negamos. Pero también por condiciones internacionales recesivas, la meta de establecer una expansión del 3% del producto para 1994 con un crecimiento, esto es actuando, del lado de la oferta y de la demanda agregadas, se aprecia como factible, en virtud de las medidas que en el pasado reciente ha aplicado el Ejecutivo Federal, y su continuidad expresada en la propuesta presupuestal para el próximo ejercicio fiscal.

La política tributaria del presente régimen ha hecho posible un sistema fiscal ciertamente más competitivo, eficiente, equitativo y justo. Se ha ejercido un mayor control y propiciado un mejor cumplimiento de las obligaciones impositivas reduciendo la evasión y la elusión, aumentando la base gravable y lográndose por ello, incrementos en la recaudación, a pesar de la eliminación de un buen número de impuestos y de una reducción sustancial en las tasas.

Los niveles de recaudación, así conseguidos, hacen posible que para 1994 se propongan reducciones significativas en algunas tasas impositivas que aumenten el poder adquisitivo de los trabajadores de menores ingresos y que estimulen la actividad empresarial en los términos acordados para la etapa vigente del Pacto para la Estabilidad, la Competitividad y el Empleo, en la cual también se incluyen disminuciones en los precios y tarifas de algunos de los bienes y servicios que proporciona el sector público.

Al referirnos al pacto, queremos enfatizar a la concertación como piedra angular de la estrategia económica y social del país. En efecto, la búsqueda de consensos para hacer concurrentes los esfuerzos de los sectores productivos y del Gobierno, ha permitido dar mayor efectividad a las acciones emprendidas. Volver explícitos los costos y esfuerzos requeridos para el ajuste y abrir un foro permanente de discusión y seguimiento de la estrategia económica para todos los sectores participantes.

Por otra parte, resulta satisfactorio que en el proyecto de presupuesto de egresos se propongan incrementos reales sustanciales en las partidas presupuestales para el gasto social, el cual crecerá 10.5%. Entre sus componentes destacan el aumento real del 32.8% en el gasto de desarrollo rural; de 14.4% en educación; 8.1% en salud y seguridad social; 8% en desarrollo urbano, ecología y agua potable, y el 5.4% para el Programa Nacional de Solidaridad.

Por su vital importancia, debe subrayarse el incremento en los apoyos que el Gobierno Federal destinará al agro mexicano vía Procampo.

Por otra parte, especial mención merece el incremento propuesto en la inversión pública, con lo que el Estado intensifica su función de proveedor de infraestructura básica.

La reforma presupuestal también establece condiciones propicias para una reducción en los desequilibrios nacionales. Por ello encontramos congruente y conveniente la propuesta de incrementar las participaciones que la Federación otorga a los estados y municipios y sobre su recaudación, así como la incorporación a la Ley de Coordinación Fiscal de un fondo adicional que enfatiza el apoyo a la hacienda municipal. Esto es, quien quiera verlo así, lo tiene que hacer; se avanza en el federalismo económico.

En materia de deuda pública, la estrategia que propone el Ejecutivo tiene como objetivos básicos la disminución de su saldo histórico como porcentaje del producto interno bruto, el mejoramiento de su perfil financiero y la ampliación de los periodos de vencimiento, lo cual permitirá como principal objetivo, liberar recursos para destinarlos al gasto social. Al respecto es significativo que a diferencia de hace cinco años en que por cada peso que se pagaba de intereses se destinaban sólo 36 centavos al gasto social, para 1994 se presupuesta que por cada peso de intereses, se destinen cuatro al gasto social.

Por otra parte y considerando que el sector público contará con un equilibrio en sus finanzas, estimamos adecuada la solicitud de autorización por parte del Ejecutivo de un endeudamiento

externo neto por cinco mil millones de dólares y estos recursos serán contratados principalmente por la banca de desarrollo, para ser canalizados a la actividad productiva de las pequeñas y medianas empresas manejadas por grandes empresarios.

En resumen, el programa económico para 1994 que se propone en los Criterios Generales de Política Económica, la iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación y el proyecto de Presupuesto de Egresos, incluye una serie de medidas fiscales que en la actualidad, en cualquier país del mundo serían difíciles de cumplir: equilibrio presupuestal, reducción de impuestos y precios de bienes y servicios públicos, aumento del gasto social y reducción del saldo de la deuda pública como porcentaje del producto.

Honorable Asamblea: se avanza en lo económico y lo hacemos enriqueciendo el tejido social. Se actúa en varios frentes y dentro de un marco de paz social y de libertad. Lo recorrido prueba, sin lugar a dudas, que sabemos lo que queremos, lo que es posible hacer y como hacerlo. El camino no ha sido fácil y persisten obstáculos y desafíos, pero lo realizado hasta ahora nos muestra lo mucho que somos capaces de hacer.

No nos queda duda: ¡México sigue adelante y lo hace con claridad en el rumbo y a paso firme! Unidos en un entorno cada vez más plural en lo político y en lo ideológico, y esto es venturoso; y bajo la conducción lúcida y patriótica del Presidente Carlos Salinas de Gortari habremos de lograr una patria mejor para los mexicanos de hoy y para las generaciones por venir. Muchas gracias.

El Presidente:

Muchas gracias, señor diputado Angel Aceves Saucedo.

En términos del acuerdo de práctica parlamentaria, suscrito por los coordinadores de las seis fracciones parlamentarias, esta Presidencia concede la palabra al Doctor Pedro Aspe Armella, para referirse, en una sola intervención, a los puntos de vista y opiniones de los diputados de los seis grupos parlamentarios.

Esta Presidencia informa al señor Secretario que dispone de un tiempo máximo de 30 minutos para referirse a los planteamientos de los señores diputados.

Se solicita al señor Secretario pase a la tribuna.

Tiene la palabra el Doctor Pedro Aspe Armella, Secretario de Hacienda y Crédito Público.

El Doctor Pedro Aspe Armella:

Muchas gracias, señor Presidente.

Señor Presidente; señoras y señores diputados:

Tal como lo señala el Acuerdo de Práctica Parlamentaria, cada uno de los grupos parlamentarios representados ante esta soberanía ha fijado las distintas posiciones de su partido con respecto a la política económica en general y específicamente respecto a las iniciativas y a los proyectos de leyes de Ingreso y de Presupuesto enviados por el Ejecutivo federal a esta soberanía.

He escuchado con profundo interés todas ellas. En uso de mi tiempo quisiera dividir mi participación en dos partes: en la primera, comentaré en forma general los planteamientos en los que hay las grandes coincidencias y las grandes diferencias en este debate, y en la segunda, y en la medida en que el tiempo me lo permita, trataré de contestar algunas de las preguntas específicas de los distintos diputados.

Quisiera enfatizar que acudo a esta comparecencia, cumpliendo estrictamente lo que señala el artículo 74, fracción IV, de nuestra Constitución. Por consiguiente me ceñiré a lo que ella señala, que es que el Secretario de Hacienda se presenta ante esta soberanía para dar cuenta de las iniciativas de Ingresos y Egresos de la Federación para el año de 1994.

A lo largo de los últimos años, en los que he tenido el enorme privilegio de mantener un intercambio de ideas con los integrantes de esta LV Legislatura, encontramos, y así lo señalábamos el año pasado, bastantes coincidencias y yo diría muchas, muchas más, que en el pasado distante.

En primer lugar, todos, todos y cada uno de los diputados aquí presentes que hicieron uso de la palabra, estuvieron de acuerdo en que la disminución de la inflación no es nada más un objetivo económico importante, sino también un objetivo social fundamental. No era así en el pasado distante.

En segundo, todos los diputados hablaron de la necesidad de acelerar el crecimiento.

En tercero, todos y cada uno de ellos hablaron de la recuperación del poder adquisitivo de los salarios.

En cuarto, todo mundo estuvo de acuerdo en que hay que avanzar en la erradicación de la pobreza.

Es decir, nos une el que todos estamos aquí con un fin último que es el de mejorar e incrementar el nivel de vida y el bienestar de nuestros compatriotas.

Creo que esta mayor coincidencia es fundamental para la nación.

A lo largo de estos años también hemos encontrado que empezamos a tener un mucho mayor acuerdo, no nada más en los fines, sino también en los medios para alcanzarlos.

Encuentro, con enorme satisfacción, que todas las fracciones parlamentarias coincidan en que un déficit fiscal acaba por perjudicar más a quien se pretendía beneficiar. No era así en el pasado distante.

También creo que es muy importante el que todas las fracciones parlamentarias coincidan que hay que ser prudente en el manejo de los instrumentos de la política económica, que grandes cambios en los instrumentos lo único que pueden provocar es la ruptura de aquello que se pretendían arreglar.

¿Dónde están las diferencias a nivel general? La principal diferencia que percibo ahora, repito, con gran diferencia del pasado, es respecto al análisis de la mezcla de instrumentos que podemos utilizar para lograr varios objetivos a la vez. Y yo creo que esto es natural, normal, porque no hay una mezcla única, no hay una verdad absoluta respecto a qué combinación de instrumentos sea precisamente el adecuado y decir: éste es el único camino y cualquiera que se aparte de este camino está mal; no lo hay, es demasiado complejo para decir que ésta es la única combinación de políticas adecuadas.

Creo que también hemos avanzado mucho en que la palabra estabilización ha dejado de ser para algunos una grosería y creo que prácticamente todas las fracciones hablan de la necesidad de tener una economía estable. Yo quisiera enfatizar, no todos comparten conmigo, que en verdad si bien es cierto que hay costos en la estabilización, debemos de compararlos con los costos de la desestabilización y veremos que no hay ninguna, ninguna situación más dañina para el bienestar que una inflación alta, una inflación desbocada, una inflación fuera de control.

Creo que también todos los diputados, todas las fracciones, incluyendo a Angel Aceves, de mi partido, enfatizaron que había que volver a crecer más rápidamente y que los resultados de 1993 si bien en términos de inflación fueron prácticamente los pronosticados, si bien continúa la recuperación de los salarios reales contractuales, hay dos puntos que yo podría sacar de crítica en común denominador, que son los siguientes: uno, todo mundo ha dicho que el salario mínimo continúa deteriorándose, y dos, todo mundo ha dicho que hay que revertir esta desaceleración de la economía.

Quizá en esta primera parte empiece por comentar estas dos, porque creo que los objetivos nos deben de unir y no separar, y creo que aquí quizá los medios no sean, precisamente no tengamos un acuerdo total en los medios, pero sí en los fines y creo que también en los instrumentos. Voy a comenzar por el del salario mínimo, el deterioro del salario mínimo en términos reales.

Hace un año yo comenté dos cuestiones respecto a los salarios, comenté que los salarios contractuales, el poder adquisitivo de los mismos había venido subiendo, habían estado al alza en cada uno de los años de este gobierno; que los salarios contractuales, el poder adquisitivo de los salarios contractuales en promedio en 1989, eran superiores a los de 1988, en 1990 a los de 1989, en 1991 a 1992 y quisiera insistir otra vez en ello. Este año de 1993 con desaceleración y todo, vuelven a crecer los salarios contractuales en su poder adquisitivo por quinto año consecutivo. Y alguien me decía, y con razón, es cierto, las estadísticas eso dicen pero hay que decir toda la verdad y la vuelvo a repetir sobre una base muy baja cuyo piso fue el año de 1988, es cierto, pero comenté, el salario mínimo continuaba deteriorándose.

¿Qué propone el Presidente Salinas para corregir esta tremenda disminución del salario mínimo, que repito lo comenté el año pasado?, y que salvo en el año de 1981 si uno quita el año de 1981 realmente la caída no viene de 1982 para acá viene de 1976. Cuando uno hace un análisis minucioso, serio, profesional, no hay duda que así es; se proponen básicamente tres cuestiones: la primera es hacer un cambio fundamental en la manera en que se fijan los salarios mínimos en nuestra economía y para esto distinguir, separar dos componentes muy claros: el primero, ¿cuál es la inflación esperada y dar por adelantado este incremento sobre la inflación esperada, es decir, el 1o. de enero dar lo que se espera de inflación esperada para el año, y en segundo lugar, esto obviamente no lo recupera, los salarios reales, simplemente los mantiene, porque

si la inflación esperada es del 5% y efectivamente el año que entra, como esperamos, tenemos una inflación del 5%, eso quiere decir que el poder adquisitivo del salario quedaría ahí donde estaba el 1o. de enero.

Pero hay un segundo componente, que quisiera si me permiten explicar, y es que debe de haber una segunda retribución además de la inflación esperada, en la determinación de los salarios mínimos anuales que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos gobernada en forma tripartita, deberá analizar, y esto lo empezará a hacer la próxima semana, y es que se debe de dar un incremento por encima de la inflación esperada, con base en la productividad global de la economía, a los avances en la productividad de la economía del factor trabajo.

¿Cómo se puede calcular eso? Es un problema complicado, la única manera de hacerlo es tener varios supuestos, lo reconozco, utilizar las cuentas nacionales y con estos supuestos armar aproximadamente cuánto crece la productividad de la mano de obra en la economía, y quisiera aquí enfatizar algo que ya varios de los diputados, Gilberto Rincón Gallardo o Angel Aceves, lo comentaron, y es que como tenemos un comportamiento muy desigual sectorialmente en nuestra economía, la productividad global, el avance en la productividad global va a ser una media ponderada de sectores que crecen muy rápido su productividad y sectores, reconozcámoslo de entrada, donde está estancada o inclusive como en ciertas ramas del sector agropecuario, donde retrocede.

Este sería el segundo pago que es global sobre la economía, pero señores diputados, cuando hay unanimidad de todas las fracciones, como la ha habido en este tema de los salarios mínimos, créanme que en el Ejecutivo nos preocupamos mucho por ver cómo podríamos resolver esto, si bien estructuralmente con estos dos pagos se podría iniciar la recuperación del poder adquisitivo del salario mínimo real, también es cierto que había sido tal su deterioro, que necesitábamos encontrar una forma que fuera rápida para iniciar su recuperación y aquí es donde precisamente se propone a la consideración de esta soberanía el dar un incremento con costo al fisco, como alguien dijo, sí, efectivamente, absolutamente con costo al fisco, para recuperar más rápido el poder adquisitivo del salario mínimo y aquí lo que se propone específicamente es lo siguiente:

El artículo 80 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta, tenía en el fondo una iniquidad, una iniquidad que decía el artículo respectivo, decía "todos los asalariados podrán tomar un crédito fiscal equivalente al 10% del salario mínimo elevado al año, (yo, como asalariado, lo tomo cada año cuando hago mi declaración de impuestos, seguramente ustedes también; pero decía la Ley), pero nunca podrá ser el acreditamiento superior al impuesto pagado", y lo que en el fondo se está proponiendo a esta soberanía es eliminar esta última parte del párrafo.

¿Por qué?, si alguien tiene... gana 10 ó 15 , ó 20, ó seis, o lo que sea, número de salarios mínimos, ¿por qué sí puede tomar un acreditamiento fiscal completo y por qué si yo gano uno o uno y medio veces el salario mínimo no puedo gozar de lo mismo que gozan, lo mismo en términos absolutos, de este 10% del salario mínimo elevado al año, del que está en tres, cuatro, cinco ó seis?

Y ésta es la corrección que se propone y se propone por cierto, bajo finanzas públicas equilibradas, sin populismo, financiando estos incrementos para que sean sostenidos, con recursos reales que podemos tener gracias a la reforma presupuestal y a la reforma fiscal realizada en los últimos años.

En resumen, ¿qué es lo que se propone para reactivar el poder adquisitivo del salario mínimo?, tres posiciones. Primero, dos en cuanto a la mecánica de fijación, inflación esperada; segundo, incremento en términos reales con base en lo que crezca la productividad global del factor trabajo en nuestra economía, esta es la primera parte. Y en la segunda, una desgravación fiscal que elimine el pago de impuestos en un salario mínimo ya no se pagaba, pero va hasta dos salarios mínimos, que ya no se paguen impuestos y no solamente eso, sino que se permita un acreditamiento a un salario mínimo, uno y medio y hasta dos, como lo teníamos el resto de los asalariados en la parte alta de la tarifa.

Es esto lo que está a su consideración, señores diputados y de esta magnitud cuantitativa es: dando números, 5% en la parte de inflación esperada; el incremento en la productividad global de la economía, habrá que determinarla, se está determinando por parte de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, pero la cifra debe andar alrededor, cifras más, cifras menos, entre el 1% y el 2.5%, pongamos el dos por sacar un número para que las cuentas me salgan fácil, son 5% y 2%, 7%, y un acreditamiento a nivel salario mínimo para un trabajador que en promedio tiene los beneficios que ya tienen en realidad los 13% que ganan salario mínimo y que cotizan

al IMSS, de alrededor del 9.52% ¿Cuánto es esta multiplicación con interés compuesto?, 17%. Por fin se inicia la recuperación del poder adquisitivo del salario mínimo.

Todos, todos, estábamos de acuerdo con esto; es un monto significativo dada la inflación esperada, podemos diferir de la mecánica y debió haber sido un poco más rápido en esto, pero en general creo que es algo que debemos estar todos, todos de acuerdo.

En la segunda parte, todos queremos reactivar la economía pero, como dice el dicho, queremos una recuperación con adjetivos. Más vale paso que dure que trote que canse.

Reactivar la economía por un trimestre o por un semestre, les decía yo y lo creo es muy fácil, recuperar la economía sobre bases sólidas y permanentes, toma mucho, mucho esfuerzo. ¿Cuál es la idea aquí? Para proponer una política correcta para reactivar la economía tenemos que partir de un diagnóstico razonablemente bueno sobre el año 1993.

Se dan muchas razones en el documento de criterios que ustedes conocen y estoy seguro que han estudiado y han estudiado con interés, pero son básicamente dos, las más importantes creo yo, las internas y las externas, que también cuentan. En las internas, yo creo que la más importante es que la necesidad de reestructuración del aparato productivo fue mayor de lo que previmos. Yo por lo menos esta parte, lo tengo que reconocer, que las necesidades de reestructuración del aparato productivo han sido superiores a las previstas.

Déjenme darles un ejemplo nada más. Piensen ustedes en la enorme inversión privada que ha habido en los últimos años, piensen ustedes 1989, 1990, 1991 y 1992. El año de 1992 tasas de inversión del sector privado como nunca habíamos visto en nuestro país, como ustedes saben, del 20% en términos reales, jamás vistas en nuestro país.

Si uno toma la serie del producto, deberíamos estar ya viendo mayores crecimientos del producto, y sin embargo, es cierto, no los estamos viendo, y que como comenté yo hace ocho días cuando estuve ante esta soberanía, inclusive el sector privado previendo un crecimiento este año del 1.9, 2% todo mundo, y salimos nosotros en que el pronóstico que hemos hecho con los mejores cálculos posibles desde 1.1, es decir, una desaceleración mayor que la que el resto de la sociedad creía.

¿Por qué se ha roto esta relación tan clara entre inversión, tasas de crecimiento de la inversión y tasas de crecimiento del PIB? Yo creo, sinceramente lo creo, que lo que nos ha pasado es algo que les va a pasar de una manera mucho mayor a los países de Europa Central y de Europa del Este, y es que al pasar de una economía cerrada, de una economía protegida por años, por décadas, a una economía abierta, nos damos cuenta que muchísimo del acervo de capital existente, el número de máquinas y la calidad de las mismas, no sirve en una economía abierta. Entonces que muchísimo de la inversión que vemos, no es inversión neta, sino que realmente está sustituyendo equipo que hay que tirar por una tremenda obsolescencia en términos de calidad y productividad.

Piensen ustedes en el sector textil. En el sector textil mientras la economía estaba cerrada, una cantidad de telares de los años 20 y 30 funcionaban muy bien, el consumidor no tenía para dónde hacerse, tenía que comprar estas telas porque no había posibilidades de competencia, pero el momento en que se abre la economía, a pesar de que tenga un arancel, las telas producidas en México no llegan al nivel de calidad de otras que provienen de otras partes del mundo y entonces los industriales en estas ramas lo que han tenido que hacer es desechar muchísimos de los telares y del capital existente y sustituirlo, y por eso vemos en los últimos tres años, más inversión que nunca en la industria textil, sin embargo la producción no viene creciendo tanto, ¿por qué?, porque no son adiciones netas de capital sino muchísimo de ello es un verdadero reemplazamiento del capital existente.

Hay una segunda razón, una segunda razón que tiene que ver con expectativas. Como ustedes saben, las tasas de interés venían cayendo muy rápidamente y sin embargo detuvieron su caída, y esto tiene que ver muchísimo con expectativas y con expectativas tienen que ver eventos internos y externos muy importantes como fueron, uno, la propia privatización de la banca; dos, la propia apertura a mayor competencia de los intermediarios financieros, teníamos 18 bancos comerciales, afortunadamente hoy tenemos 29, próximamente autorizaremos cinco, seis, siete más productores nacionales y esperemos que el 1o. de enero podamos, una vez que se ratifique el Tratado de Libre Comercio, autorizar la entrada de unos 20 ó 25 bancos extranjeros más, para poner enorme presión de competencia a la intermediación financiera, pero hay que reconocerlo que hemos tenido un problema de tasas de interés reales, es cierto, a la baja, pero es cierto, no con la velocidad que hubiéramos querido todos.

Y hay también un problema muy importante de reestructuración de los contratos laborales, que tenían muchísimas cláusulas que eran totalmente adecuadas en una economía cerrada, pero en una economía abierta y con la globalización que observamos en los mercados internacionales, hay que sustituir aquellas cláusulas que inhiben o que impiden el avance en productividad, y esto es particularmente relevante hacia adelante, porque los salarios contractuales también tendrán dos componentes que serán la inflación esperada más el incremento en la productividad, no a nivel de empresa, a nivel de planta y a nivel de departamento.

¿Cómo reactivar? Hace un año, ante esta Soberanía se me preguntó por parte de un diputado del Frente, del diputado Demetrio Hernández, que si creía yo o no en tener un superávit fiscal permanente. Fue una de las poquísimas preguntas que fue única, o sea que ahí sí no tiene uno más que contestar, porque no preguntó muchas, nada mas preguntó ésa. Y dije lo siguiente: México no debe de tener un superávit fiscal permanente; lo que se requiere es lograr llegar a una inflación cercana a la de nuestros socios comerciales, y una vez que estemos cerca de ello, debemos de tener finanzas públicas equilibradas y eventualmente añadí, como lo teníamos en los años 50 y 60, un déficit moderado del 1%, 1.5% del PIB, que es perfectamente compatible con el crecimiento acelerado, si la economía ya está estabilizada. Eso fue lo que dije hace un año, y lo sigo creyendo.

El primer punto es que estamos con una inflación del 7.7%, yendo clarísimamente hacia una inflación del 5%. Este año el Índice Nacional de Precios al Productor va a llegar al 5.4% en todo el año y el año que entra al 3%, y éste es un indicador adelantado de lo que viene en el índice al consumidor. Este año vamos a tener el índice de precios al productor más bajo desde que tenemos esta estadística.

Entonces, si ya estamos llegado a la inflación internacional, realmente sí podemos, sí podemos plantearnos el irnos a las finanzas públicas equilibradas, como lo está planteando a su consideración el presidente Salinas, sin déficit, sin superávit, y esto utilizarlo de una manera bastante práctica, ecléctica dirían algunos, que es aproximadamente la mitad en medidas que impulsen oferta agregada y la mitad en medidas que impulsen la demanda agregada.

¿Cuáles son las medidas que impulsan la oferta agregada? Básicamente las desgravaciones fiscales y las desgravaciones arancelarias, y aquellas que impulsan la demanda agregada, básicamente Procampo y las desgravaciones salariales y el incremento en el gasto social. Así está repartido.

Bien, si esto es puntos importantes de acuerdos, si esto es donde tenemos puntos importantes de acuerdo, y que toda la dirección del gasto social, no hubo nadie, ningún diputado que no estuviera de acuerdo en poner más a educación, más a salud, más a infraestructura básica, y el que tengamos por primera vez en el sexenio un crecimiento de la inversión pública del 10% en términos reales, que es muy importante para poder consolidar tanto infraestructura básica como la parte de energéticos.

Quisiera entonces ver por último, cuáles serían los puntos de diferencia, cuáles serían los puntos donde no tenemos acuerdo y que quizás muchos de ellos los podamos resolver con más información, yo escuchándolos a ustedes, ustedes dándome la oportunidad a mi de debatir con ustedes, y por eso paso a la parte concreta de las intervenciones de cada uno de ustedes, pero como aquí hay un reloj que marca un minuto, yo quisiera pedirle al Presidente si me podría dar un poco más de tiempo, porque he contestado a nivel de tesis, pero interrogantes particulares de los diputados no he tenido tiempo para hacerlo señor Presidente.

El Presidente:

Adelante, señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Gracias. Voy a tratar de irme lo más rápidamente posible.

Primero el diputado Juan Campos Vega, del PPS, me da mucho gusto como él dijo, que la inflación la vea él que ahora sí se está abatiendo, y qué ¡qué bueno!, y dijo que sin embargo veía algunos problemas importantes. Dijo que veía tres importantes: el primero, le preocupaba al diputado el que tengamos el salario mínimo cayendo; esto estoy de acuerdo y lo estamos revirtiendo, y dijo que no vayamos a estar dentro de un año diciendo que la economía no creció en 3% por razones externas.

Yo creo que el ciclo externo, señor diputado Campos, ya está dando la vuelta; no creo ni espero mucho de él, porque es una recuperación muy frágil, pero ciertamente no nos sucederá

lo que sucedió este año, que el Fondo Monetario Internacional se encarga de hacer los pronósticos de las economías industrializadas, hizo cuatro pronósticos a lo largo del año, y en los cuatro los bajó un punto cada vez, de manera que del 4.6% que pronosticó, su último pronóstico es 0.6% para el mundo industrializado. En cada pronóstico fue bajando un punto.

No creo que suceda esto en esta ocasión. Creo también que en particular las economías con las que comerciamos nosotros, Estados Unidos de manera relevante, trae una recuperación que si bien no es nada espectacular, se ve bastante más firme.

Le preocupaba muchísimo al diputado Campos que buena parte de la inversión extranjera sea en cartera, sea en acciones.

Yo, yo no comparto esta preocupación, diputado, a mí la que me preocupa es la que viene al mercado de dinero. Esa sí me preocupa un poco más; si quiere usted puedo comentarlo después por qué, pero déjeme decirle por qué la que viene al mercado de valores no me preocupa mucho:

Primero. Es inversión y no deuda, es capital y no deuda; capitaliza a las empresas, no las endeuda. Esto yo creo que es importantísimo. Primer punto.

Van por capital y no por deuda; es decir, tiene unos socios y no acreedores. Buena diferencia. Primera.

Segundo. La inmensa mayoría de las empresas mexicanas están haciendo colocaciones al exterior siguiendo el modelo que inauguramos nosotros cuando me tocó presidir el Consejo de Administración de Teléfonos de México. Lo que hicimos fue la primera colocación, como usted sabe, internacional, con unas acciones que llamamos acciones "L", acciones de voto limitado. ¿Qué quiere decir esto? Que los que compran las acciones de las empresas, tienen derechos corporativos en el sentido patrimonial pero no en el sentido de control corporativo.

Yo creo que esto es muy bueno. Lo que se tiene es que van justamente como socios a esperar un rendimiento en dividendos de la empresa, una cuestión patrimonial, pero no corporativa. No tiene asiento en los consejos y no pueden tener cambio en la administración, etcétera.

Por supuesto, no autorizamos porcentajes mayoritarios de acciones "L", tenemos una serie de reglas, inclusive la Comisión Nacional de Valores los ha metido. No hay un problema de control en propiedad importante.

Y tercero. El mercado de valores, diputado Campos, tiene un estabilizador automático estupendo. Cuando la gente se pone nerviosa y se quiere salir no sale porque los precios se deprimen inmediatamente, y es cierto, quería salir a un precio equis, pero cuando todo mundo quiere salir se deprecia el mercado, bajan los precios 15 ó 20% y no sale. Tiene un estabilizador automático enorme, no así el mercado de dinero.

Quisiera otro comentario más al diputado Campos. Dice el diputado Campos que le preocupa que tengamos una cuenta corriente tan alta que hay que financiar.

Esto es una discusión que ya hemos tenido en otras ocasiones. ¿Por qué tenemos un déficit en cuenta corriente alto? Tenemos un déficit en cuenta corriente alto, y eso tenemos que salir a financiarlo, o tenemos grandes entradas de capital hacia México, y por eso tenemos un déficit en cuenta corriente y no hay un problema de financiamiento, o, lo que es de otra manera, en el momento en que dejen entrar capitales, se corrige automáticamente el problema del déficit en cuenta corriente.

Esta es una discusión muy de fondo, muy importante, pero lo único que yo quisiera decirle, diputado Campos, y en eso usted va a estar de acuerdo conmigo, es que un país como el nuestro que tiene mucha gente y poco capital, necesita ser importador de capitales y no exportador de capital. Bien, el exportador de capitales es el que tiene superávit en cuenta corriente, y el importador de capitales es el que tiene déficit en cuenta corriente.

Vea usted, diputado Campos, lo que hizo Japón después de la guerra. En los años 50 y 60 tuvo déficit crónicos en cuenta corriente durante casi 20 años; después pasó, al principio de los 70, a equilibrio, y después, al principio de los 80, a ser un exportador de capitales, es decir, a tener superávit en cuenta corriente. Es exactamente lo que debe de tener México. ¿Por qué? tenemos un país con mucha mano de obra y poco capital, necesitamos jalar capital del exterior; tener un déficit de cuenta corriente durante varios años; eventualmente, mientras la economía se va modernizando, cuando se moderniza, etcétera, debemos de ir a equilibrio y, eventualmente, ojalá que así lo puedan ver nuestros hijos pronto, tendremos en el país un superávit en cuenta corriente y seríamos exportadores de capital; pero

no ser exportadores de capitales en este momento de nuestro desarrollo.

No podemos darnos el lujo, como país, como sociedad, de ser exportadores de capital.

El diputado Adolfo Kunz Bolaños hizo varios comentarios. Igual nos dijo el diputado Kunz, cosa de la cual me dio mucho gusto oír, que él reconocía los avances en la estabilización e hizo más bien algunos comentarios muy puntuales y algunos sobre reflexiones constitucionales, que yo no sé si yo sea la persona adecuada para dar mi opinión, pero lo intentaré, diputado Kunz.

La primera. Dijo usted que estaba propuesta ante esta soberanía la reducción del impuesto sobre la renta para personas morales, para empresas, del 35% al 34%. Es correcto.

Y dijo usted: "Qué bueno, porque se va a igualar a la tasa de Estados Unidos". Eso es una verdad a medias.

La tasa federal del impuesto sobre la renta en los Estados Unidos, efectivamente, es 34%. Pero les recuerdo a los señores diputados que nuestros socios comerciales, Estados Unidos y Canadá, tienen tasas del impuesto sobre la renta a nivel local, primer punto de diferencia, con lo cual su tasa del impuesto sobre la renta conjunta de la empresa no le importa si se lo paga al Estado o se lo paga a la Federación, tiene una carga fiscal, en promedio es del 40% en los Estados Unidos y del 41% en Canadá.

Segundo punto. Le recuerdo al diputado Kunz que en México no tenemos doble tributación. Si las utilidades de la empresa ya pagaron impuestos, si se distribuyeron o no y se reinvierten o no, al fisco no le preocupa. En los Estados Unidos y en Canadá hay un impuesto si se deciden distribuir dividendos del 20%. Por tanto, la tasa efectiva es 40% al incluir impuestos federales y locales, más el 20% que con interés compuesto es aproximadamente como el 64%, es 1.40 por 1.20, es 68%. Esa es la tasa compuesta del impuesto sobre la renta de los países al norte de nosotros.

Tercer punto. Cuestiones prácticas en materias constitucionales, nos dijo el diputado Kunz. Dijo que si yo creía que debería de haber un tope a los impuestos en la Constitución.

Sinceramente, creo que no, diputado Kunz. Es una camisa de fuerza demasiado fuerte. Se podría discutir, y yo creo que es bien discutible, yo podría hacer algún caso a favor, en el caso de que los déficits fiscales no pudieran llegar de tanto a tanto. Pero poner límites a las tasas del impuesto sobre la renta realmente me parece excesivo y peligroso; el mundo cambia y las circunstancias pueden ser distintas en un momento para la estabilización; hay veces que se tiene que ir uno en corto plazo a tasas más altas. Yo no llegaría a recomendar eso.

Pero, diputado Kunz, para su tranquilidad y la mía, afortunadamente ya está por aprobarse por el Constituyente Permanente la reforma de autonomía del Banco de México, y eso nos ayuda muchísimo. ¿Por qué? Porque si un Gobierno vuelve a tener un déficit del 15, 20%, como tuvimos por desgracia en el pasado, el Banco Central, autónomo e independiente, podrá negarse ante las autoridades el financiar esos déficits, con lo cual las autoridades tendrán que salir al mercado de dinero a colocar deuda, a tasas, me imagino, con un déficit de este tamaño, estratosféricas, hasta que la economía no lo pueda hacer y se fuerce a tomar responsabilidad fiscal otra vez sobre las finanzas públicas.

Y entonces la autonomía y la independencia del Banco de México va precisamente a poner un tope indirecto sobre los límites del financiamiento, pero no un límite cuantitativo único, de que no podamos tener, como eventualmente se podrá tener, un déficit del 1%, 1.5%, con la economía totalmente estabilizada y creciendo, no veo por qué no.

Cuarto. El hablaba de poner límites a la doble tributación, ¿que cuál era mi opinión sobre esto? Yo creo que ya la Constitución establece una división de los impuestos entre Federación, estados y Municipios, y el artículo 73 constitucional nos dice cuales impuestos solamente puede cobrar la Federación, como el caso de energía eléctrica, petróleo, por dar algunos. O el caso del artículo 131, que fija la política comercial como ámbito exclusivo de la Federación, en mi entender, con enorme talento y visión.

También los artículos 117 y 118 constitucionales fijan cuales no pueden ser fijados por los estados, en general, todo lo que sean alcabalas y todo lo que sean impedimentos al libre tránsito de personas.

Asimismo se dan en el artículo 115 los impuestos que están reservados a los municipios que es lo de propiedad inmobiliaria y sobre servicios públicos a su cargo.

Hay áreas grises, decía el diputado Kunz, es cierto, las hay y es muy atinado su comentario, y para eso tenemos en la Ley de Coordinación Fiscal un cuerpo que recibe quejas de los contribuyentes, cuando creen que la Federación o los estados han invadido ámbitos de exclusividad de los otros. Le quiero comentar que ha habido cinco casos en los últimos 12 meses y en los cinco los contribuyentes, en nuestra opinión, tenían razón y han sido revertidos esos impuestos locales.

Por último, el diputado Kunz checó lo que me prometió que iba a checar hace un año, de que no hubiera muchas circulares misceláneas para que la Secretaría de Hacienda, luego a través de circulares no anduviera legislando. Diputado Kunz, efectivamente, usted las checó, yo también, y me sirvió mucho su comentario, porque también ahí dentro de la Secretaría hay fuerzas que les encanta sacar muchas circulares, y afortunadamente solamente fueron cinco. No tengo un solo amparo en contra de ninguna, y de las cinco el 80% de las cosas que aparecen en las circulares tenían que ser propias disposiciones de esta soberanía. Por ejemplo, tenemos que listar a quienes la Secretaría de Hacienda le otorga la deducción de impuestos, en el caso de instituciones de beneficencia social, ya no damos a ciegas, tenemos que sacar cuáles son, nombre y apellido o giro, etcétera, de esas instituciones de beneficencia, eso explica prácticamente el 40% por lo menos del número de páginas. Así que diputado Kunz, en lugar de molestarme le agradezco el que usted me haya dicho esto, le aseguro que lo vi con mucho cuidado.

Por último, dijo el diputado Kunz: "ojalá que el INEGI entre a cuestiones de más oportunidad", y dijo él, lo dijo en otras palabras, pero así lo entendí, dijo: si tenemos que ser competitivos, si entramos al Tratado de Libre Comercio, también la generación de información estadística tiene que ser de clase mundial, tiene que ser competitiva internacionalmente e hizo un comentario muy concreto.

Vi que Carlos Jarque estaba por ahí, vi que tomó nota; él tiene autonomía técnica, como ustedes saben, pero me dijo lo siguiente: que en la encuesta nacional de hogares, diputado Kunz, que se lleva a cabo mensualmente, la llamada ENEHO, Encuesta Nacional de Empleo Urbano, que se lleva a cabo en treinta y cuatro ciudades, se están por primera vez cuantificando cuáles son los predios vacíos y sin uso en las zonas urbanas contenidas en dicha encuesta y que van a complementar la estadística del mercado inmobiliario en México. Eso lo dijo Carlos Jarque, él me mandó un papelito que después le doy, diputado Kunz, porque estoy seguro que Carlos Jarque, dos meses dice aquí, tendrá la información que usted requiere.

Paso a hacer unos comentarios al diputado Tomás Correa Ayala. Dice el diputado Correa, hizo una explicación muy interesante, de si hay crisis del Estado o crisis del intervencionismo del Estado. Y dijo dos cosas interesantes, dijo: una, yo creo que la calidad de intervención es importantísima, yo coincido con él, no toda intervención es mala, pero hay veces que la calidad de intervención es tan mala, que precisamente uno cree que puede ser problema de intervención cuando es problema de la manera, de la forma como se instrumenta, y yo coincido con esa tesis.

Y segundo, dijo el diputado: los salarios mínimos siguen cayendo; yo le contesté, el crecimiento podrá ser mayor, creo que la he contestado. Dijo él que el déficit comercial es excesivo, sí, es muy importante, pero está dando la vuelta, diputado Correa.

Déjeme comentarle algunos datos. Recuerden ustedes el déficit en cuenta corriente llegó a ser de 7% del PIB, creo que el documento de criterios lo señala 6.8%, para este año será mucho menor y para el año que entra creemos que también va a estar menor. Va a estar bajando rápidamente del 6.8% al 6%, al 5%, y ojalá que nos quedemos en un déficit en cuenta corriente, diría yo, menor, aunque déficit, por las razones que ya mencioné. Lo importante aquí, diputado, es que se está dando la vuelta. Déjeme platicarle qué pasó en los datos que sacó el INEGI el viernes, yo estaba preparando esta comparecencia el domingo fuera de la ciudad, y vi el boletín de prensa del INEGI que salió el viernes por la noche.

Las exportaciones no petroleras, en agosto, crecieron 20% y las importaciones crecieron 3%, y las importaciones de bienes de consumo por primera vez en 40 meses, son negativas; están creciendo nuevas exportaciones ocho veces más rápido que las de nuestros socios comerciales, y un dato impresionante, en el mes de agosto las exportaciones no petroleras fueron el 86% de las totales, quiere decir que las petroleras únicamente fueron el 14%. En verdad se está despetrolizando la economía; ahora sí, a tasas realmente aceptables.

Quisiera comentar dos puntos del diputado Correa, de fondo. El primero, otra vez sobre las tasas de interés, el qué estamos haciendo ¿Qué está haciendo usted, señor Secretario para eso?

Y después, un tema sobre concentración. Voy sobre el primero, la tasa de interés.

La banca comercial, es cierto que tiene márgenes altos, pero esos márgenes hay que ponderar con toda prudencia, ver por qué son altos. En lo primero es que hay un porcentaje de cartera vencida muy importante, entonces muy distinto el margen exante que el margen después de ocurrido el evento, primer punto.

Segundo. Los márgenes, aunque altos, vienen en descenso en los últimos ocho meses, en descenso continuo.

Tercero. Lo que la Secretaría de Hacienda puede y debe hacer y está haciendo, son dos cosas: primero, para los sectores más frágiles, los sectores que tienen menos solidez financiera como podría ser la pequeña y mediana empresa, el campo, que no tienen acceso a otros fondos, utilizar a la banca de desarrollo para dar crédito en segundo piso y forzar a la banca comercial vía mecanismos de mercado a dar mayor crédito a la pequeña y mediana empresa. Un ejemplo, el que anunció el Presidente de la República el viernes. Los márgenes de intermediación de Nacional Financiera son CPC + 6, CPC, ustedes recuerdan, perdón las siglas, el Costo Promedio de Captación y sobre eso se pone un margen de seis puntos.

El Co sto Promedio de Captación era 22% en enero y está en 15% en la última semana y bajando, o sea, viene bajando del 22% al 15%, no hay duda que está bajando; pero esos seis puntos, es cierto, que son muy importantes. ¿Qué se propuso? Se propuso que Nacional Financiera que ha dado mucho más crédito y tiene mucho menos personal, es decir, su productividad ha crecido tremendamente gracias a una labor realmente espléndida de su directiva, entonces lo que se propuso es que Nafin bajara un punto su intermediación, y lo podíamos hacer, pero no le íbamos a bajar nada más en forma unilateral. Lo que hicimos, yo personalmente me senté con la Asociación Mexicana de Bancos y les dijimos: muy bien, nosotros hemos podido hacer ahorros del 1% del margen, estamos dispuestos a hacerlo si ustedes bajan otro tanto, y es así como se juntan los dos puntos de baja intermediación; la intermediación era seis puntos, se bajó en 33%, se bajó del 6% al 4%. Yo creo que esto a futuro es precisamente lo que necesitamos.

Segundo. Muchos más bancos. Había siete, ayer autorizamos dos más. Se autorizaron 80 nuevas arrendadoras, 50 nuevas de factoraje, nuevas sociedades hipotecarias, nuevas sociedades financieras de objeto limitado, nuevas cajas de ahorro etcétera. Y lo estamos haciendo porque la competencia va a poner una presión muy adecuada sobre los márgenes.

Y, por último, uniones de crédito. En nuestro país había 190 uniones de crédito cuando tomó posesión el presidente Salinas. La semana pasada, el viernes que hubo una reunión con ellos, me dieron el último dato, 397; 400 uniones de crédito, el doble, ¿por qué?, porque la unión de crédito toma el crédito en bloque, como en agua en bloque y lo distribuye entre sus agremiados. Yo creo que aquí, diputado Correa, está un área dónde tenemos que avanzar mucho más.

Tenemos que hacer lo que se hace en algunos países que han tenido enorme éxito, no con empresas grandes, sino con empresas medianas y pequeñas. Italia, el 50% de las exportaciones italianas son de empresas que tienen menos de 10 empleados y exportan el doble que nosotros.

Entonces se puede. ¿Cómo lo hicieron los italianos? A través de una figura que llaman consorci, agrupaciones entre pequeños y medianos. ¿Por qué son importantes las uniones de crédito?, porque precisamente la unión hace la fuerza. Si nosotros podemos juntar a las 350 familias que hacen chamarras en Choxtla en Puebla, y en lugar de que cada uno vaya a pedir el crédito al Banco y que dé muy caro etcétera, y lo logramos conformar en una unión de crédito y las 350 ó 200 y tantas familias de Choxtla piden el crédito en común y se reparten y son solidarias, ésta es la manera. Hemos hecho 200 nuevas uniones de crédito.

Yo creo que aquí el papel de los diputados es enorme, enorme en ayudarnos, porque ustedes están en contacto con muchas agrupaciones. Tanto en la Secretaría de Hacienda como en la Comisión Nacional Bancaria, estaremos a sus órdenes para promover más de estos arreglos en los cuales las uniones de crédito empiezan por tener el crédito consolidado. Pero, ¿saben lo que hicieron por ejemplo aquí en el camino a Toluca, en Atenco? En Atenco se producen también zapatos como en León, ha proliferado la creación de zapatos. Pero no trabajaban juntos, ahora, hicieron una unión de crédito y tienen compras consolidadas. ¿Saben a qué precio pudieron comprar el cuero las 230 familias en conjunto?, 17% menor. Ahí están los márgenes, se conserva la individualidad, la parte humana, la parte agradable, creativa, de inventiva de una empresa mediana y pequeña, flexible, pero se tiene la escala de compras consolidadas.

Creo en verdad que las uniones de crédito, es precisamente lo que pueden hacer y ese es el papel de Nacional Financiera, del Banco Nacional de Comercio Exterior, del Banco Nacional de Comercio Interior, hacia allá vamos.

Un último comentario al diputado Correa. Decía el diputado que en las privatizaciones él, nota muchísima concentración. Y diputado Correa, hemos vendido... digamos en el fondo de contingencia quitando los intereses, para hacer las cuentas claras, son 66 billones de pesos viejos, 66 mil millones de nuevos pesos, eso en dólares dividido entre tres, da 22 mil millones de dólares. Eso es más o menos lo que se ha vendido de bienes públicos.

De esos 22, 18 de los 22 están compuestos por dos grupos de instituciones, por Telmex y por los bancos. Entonces, si estamos hablando que ahí está el 80%, ¿por qué no me refiero a esos dos, que explican el 80% de los ingresos?

Bien. Piensen en los bancos. La banca antes de haber sido estatizada, tenía 8 mil accionistas; hoy en día sin contar los fondos de inversiones y los fondos de pensiones, tiene 136 mil, de 8 mil a 138 mil. Si tomamos los fondos de pensiones de los propios trabajadores que tienen acciones de las propias empresas, llegamos ya casi a 172 mil. Y si tomamos los fondos de inversión, sabemos que hay 1 millón 100 mil personas que tienen inversiones accionarias en las empresas. Este es un primer caso.

El segundo caso, en el caso de Telmex, el accionista individual más grande es el sindicato que tiene 4.4% de acciones, más algunas otras que ha ido comprando con dividendos. Ahí están 42 mil acciones.

En el caso de los tenedores del grupo CARSO, en lo individual tengo entendido que el más grande, tenemos la información por ley, en la Comisión Nacional de Valores, es 12.5%. Sí hay un problema; sí, sí lo hay. Pero se está atacando precisamente por la dispersión a que están obligadas las colocaciones de estas empresas y la necesidad de que sean empresas públicas, en el sentido de que estén inscritos en los mercados de valores.

Quisiera pasar a los comentarios de don Gilberto Rincón Gallardo, del PRD. Hizo varios comentarios, decía don Gilberto: "Bueno, no se están cumpliendo los pronósticos del Plan Nacional de Desarrollo. Sí en inflación pero no en crecimiento". Y esto es correcto, sin embargo, diputado Rincón Gallardo, déjeme calificar esto.

El crecimiento que se está proponiendo del 3% para el año que entra, es un crecimiento promedio porque los cálculos del PIB, perdón que me ponga muy técnico en esto, que se calcula es enero, febrero, marzo, se va tomando toda la actividad económica en el año y se compara con los mismos meses del año anterior.

Si el pronóstico del 3% es correcto, la economía debe estar creciendo aproximadamente al 4.5%, al 4.8% entre el tercer y el cuarto trimestre, porque vamos a empezar con un crecimiento en el primer trimestre, posiblemente del 1% no más. Entonces entramos a un período de aceleración en el cual hacia el final de la administración creemos que vamos a estar prácticamente en el límite de crecimiento de alrededor del 5 ó 6%.

Un segundo comentario sobre el servicio de la deuda, don Gilberto. Hay dos errores en lo que usted dijo, dos cosas que no son exactas y es normal, no quiero parecer en lo más mínimo excesivo, en esto, porque en los mercados financieros uno puede hacer muy fácilmente estos problemas. Déjeme comentarle:

Primero. Don Gilberto nos decía que donde tenemos tasa fija en la renovación de la deuda, que como ustedes recordarán está al 6.25%, es decir, estamos pagando mucho más porque la tasa de interés está al 3%. ¡No! don Gilberto. La tasa de interés está al 3% a la vista, pero estamos hablando de bonos de 30 años. Y pedí, mientras hablaban los demás diputados, que si me podían dar cómo estaba la tasa de interés al día de hoy en los Bonos del Tesoro de los Estados Unidos a 30 años. Curiosamente está a 6.26% el día de hoy; 6.26% a tasa de 30 años. Entonces no está al 3%, está al 6.26%, o sea, estamos pagando exactamente como paga el tesoro americano, que eso es dos puntos abajo.

Ayer Pemex, Petróleos Mexicanos, hizo la mejor colocación que ha hecho en términos de rentabilidad para México. Lo colocó 200 puntos arriba de tres, o sea a 825. Y nadie le presta a uno, digamos, la tasa más baja del mercado es la del tesoro estadounidense. Entonces no estamos pagando en los bonos de tasa fija más de lo que está en el mercado; primer punto. Pero podría ser que esa tasa siguiera bajando y podríamos caer en lo que dice don Gilberto. Si esa tasa sigue bajando y vamos a suponer que estaba al 8% y ya está al 6.26%, vamos a suponer que llegara al 7%, y uno diría: ¡Ah caray! Qué tipo de negociación se hizo que si estamos en lugar de 6.26% al 5% y nosotros pagando al 6.25%, estaríamos pagando de más.

Don Gilberto: déjeme explicarle cómo se hizo la negociación, la cual es, igual que en la vida; en lo financiero, ¿cuál es la regla de oro? Es: diversifica, nunca pongas todos los huevos en la misma canasta.

Lo que hicimos fue poner 40% con tasa fija; 40% de tasa flexible y 10% en dinero..., no, perdón, 45% en la primera; 45% en la segunda y 10% en dinero nuevo. Muy bien. Estaba justamente balanceada entre bonos a la par y bonos de tasa fija y de tasa flexible.

¿Por qué esto fue muy bueno? Fue muy bueno en el pasado, porque cuando la tasa de interés estuvo muy alta, la tasa fija era maravilla, porque estábamos con la tasa flexible; matamos dos pájaros de un tiro. Primero, 35% de descuento y luego se cayó la tasa, pues, ¡maravilla!, era flexible y sacamos 35, muy bien. Pero esto es para 30 años, don Gilberto.

Nadie nos garantiza que eso que estamos viendo en el mercado internacional va a seguir. A la mejor en tres o cuatro años lo que ocurre en el frente financiero internacional es lo contrario, y se vuelven a subir las tasas de interés. Cuando se suban las tasas de interés en el año seis o siete, la gente dirá: "Pero qué barbaridad; se están subiendo. ¿Cómo es posible que hayamos tenido tasas flexibles? Deberíamos de tener todo en tasa fija".

Como en 30 años, don Gilberto, nadie sabe y ciertamente el que habla no sabe si las tasas de interés van a ser al alza o a la baja, lo que hicimos fue: diversifica, la mitad en tasa fija y la mitad en tasa flexible. Bien.

Comentó lo de los intermediarios financieros, lo de los márgenes, que he comentado lo que estamos haciendo con Nacional Financiera y ojalá que podamos avanzar más para tener márgenes más bajos.

Y luego tocó un tema muy importante, que dijo don Gilberto algo de mucho fondo. Dijo: "Es cierto que la inflación está muy baja; es cierto que se ha tenido éxito en eso, pero la verdadera prueba de la inflación muy baja es, cuando se tenga una inflación muy baja y simultáneamente la economía crezca mucho, y se recuperen los salarios reales". Y dijo de pasadita: "¡Como en los 60". ¡Me encantó la frase! Lo creo totalmente. Esa es la prueba y yo coincido con usted.

Ahorita tenemos una inflación que va cayendo, pero vamos a tener que tener la verdadera prueba; es cuando tengamos lo que fueron capaces de hacer la generación de nuestros abuelos en los 50: crecer al 7% con 4% de inflación anual y con una duplicación de los salarios reales. Es cierto, se empiezan a ver mejor los 60, de como se veían hace algunos años.

Por último, hay un problema de técnica presupuestal, don Gilberto, sobre el ramo 23, que aquí sí me quisiera ir muy despacio. Es un poco árido, pero yo sí quisiera detenerme porque hizo usted algunas propuestas muy concretas, unas críticas muy fuertes que yo creo que son injustificadas al ramo 23.

Primero que nada, el ramo 23, ¿qué es? Lo que tenemos es, en cada uno de los tomos que les entregamos a la consideración de ustedes, dos tipos de presentación. Una presentación donde lo hacemos por ramos. Está el ramo de Hacienda, el ramo de Gobernación, el ramo de Agricultura, y están todas las secretarías. Y hay un ramo que es el ramo 23, donde se ponen todos, básicamente, lo que más explica ese ramo es el paquete salarial, es decir los incrementos salariales probables que la Secretaría de Hacienda guarda en la Tesorería de la Federación y va girando sobre ellos conforme van avanzando las negociaciones con el sindicato de Pemex, en el caso de los petroleros; de CFE, de los maestros, del Colegio de Bachilleres, etcétera.

Bien, entonces no es un ramo, don Gilberto, donde tengamos ahí cosas para hacer lo que queramos. Porque don Gilberto proponía: "Por qué no le ponemos más dinero a Pemex, le ponemos más dinero a ferrocarriles y carguémoslo contra el ramo 23".

No, don Gilberto. Si hacemos eso, no tendrían incremento los maestros, no tendrían incremento las universidades, no tendría incremento nadie, porque el ramo 23 es de técnica presupuestal. Ahí es donde tenemos todos los incrementos salariales. Primer punto.

En la segunda presentación del presupuesto, lo que hacemos es hacer una serie de supuestos de cómo creemos que van a venir cada una de las negociaciones y lo distribuimos, y es la presentación que ustedes conocen de desarrollo rural, desarrollo urbano, desarrollo social y el rubro de administración.

Entonces los señores diputados tienen las dos presentaciones: la de por ramos, donde está el ramo 23, y donde ya desglosamos todo y la tienen.

Entonces, don Gilberto, el ramo 23 son las reservas para el incremento salarial que van a tener los profesores, los magistrados, los diputados,

los senadores. No podemos sacar del ramo 23 esto.

¿Qué otro tema tenemos en el ramo 23? Ustedes recordarán que el año pasado distintos diputados me dijeron "que teníamos muchas partidas centralizadas en el ramo 23, además del paquete salarial; que por favor lo fuéramos bajando". Y se nos dio una instrucción a través del dictamen de la Comisión de Hacienda y de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados.

Bien. Es exactamente lo que hicimos. Si usted se da cuenta, diputado, el ramo 23 es mucho menor que el del año pasado, en términos relativos, y le voy a decir por qué:

Primero. La inflación es menor y entonces los incrementos salariales son menores. Si la inflación fuera del 100% y los incrementos salariales fueran del 100%, en el ramo 23 tendríamos que tener lo mismo que tiene cada uno de los salarios del ramo.

Bien. Pero en segundo lugar, diputado, tenemos ahí, hicimos un esfuerzo enorme por asignar a las distintas entidades sus presupuestos y le voy a dar dos ejemplos:

Teníamos ahí los censos. El programa censos estaba en el ramo 23. Ya no está ahí, aparece en el ramo del INEGI, que es sectorial. Por cuestión administrativa se ve en el rubro de Hacienda. Entonces ya descargamos por eso.

Teníamos el subsidio del trigo; ya no lo tenemos. Hemos hecho una depuración enorme en eso.

Nos dijo el diputado Rincón Gallardo, hizo dos comentarios interesantes, dijo: "A mí me gustaría tener un fondo de becas para los trabajadores, para la reconversión", dijo, "y me gustaría tener 2, 000 millones de nuevos pesos para la reestructuración de pequeñas y medianas empresas". Y creo que esto es muy importante. Ya olvidemos de que estaba a cargo del ramo 23, que no se puede, pero vayamos a la propuesta en la parte constructiva de la propuesta.

Diputado Rincón Gallardo: en el presupuesto que está a su consideración están ambas cosas. Hay un fondo de becas, que es el Programa de la Secretaría del Trabajo y del Banco Mundial, donde necesitamos meter más y más recursos para la capacitación de los trabajadores desplazados y de los nuevos entrantes a la fuerza de trabajo, y esto es una partida muy importante. Y a mí me gustaría tener la oportunidad, si usted me lo permite, que se lo podamos explicar en comisiones con todo detalle.

Es una cantidad un poco mayor de la que usted propuso, pero simplemente le puedo enseñar. Tenemos en el presupuesto, tiene un costo total de alrededor de 541 millones de nuevos pesos para el programa 19931996 y están a su consideración todas las partidas para este año de 1994, de las cuales son 167 millones de nuevos pesos, de los cuales 46 son recursos fiscales y 120 son crédito externo y estamos elevándolo por supuesto en términos reales con respecto al año pasado.

Por último, quisiera comentar algunas cuestiones del otro rubro, que pedía usted que se aumentara el gasto, que la reestructuración de pequeñas y medianas empresas. Nacional Financiera para el año que entra tiene cerca de 30 millones de nuevos pesos de financiamiento para reestructuración de pasivos y de activos de las empresas medianas y pequeñas. Ojalá que en las comisiones pudieran ustedes ver con todo cuidado esto de Nacional Financiera, pequeña y mediana empresa y reestructuraciones, y por supuesto los directores tanto de Nafinsa, como del Banco Nacional de Comercio Interior, como de Bancomex, están a sus órdenes; si quieren ustedes citarlos, encantados, que vengan y que expliquen sus programas.

Quisiera pasar ahora a hacer unos comentarios respecto a la intervención de José Antonio Gómez Urquiza.

El Presidente:

Señor Secretario, con todo respeto. Pido a la Secretaría consulte a la Asamblea si autoriza que se amplíe el tiempo del señor Secretario de Hacienda, en virtud de la importancia del tema que está tocando, para ser respetuosos con la mecánica parlamentaria.

El secretario Rogelio Villarreal Garza:

Por instrucciones de la Presidencia se consulta a la Asamblea si se amplía el plazo de tiempo para el uso de tan importantes temas que tiene a cargo el secretario de Hacienda.

En votación económica se pregunta.

Los que estén por la afirmativa...

Los que estén por la negativa... Aprobado, señor Presidente.

El Presidente:

Continúe señor Secretario, por favor.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Gracias, señor Presidente.

Quisiera ir con los comentarios de detalle de José Antonio Gómez Urquiza, los generales creo que los he comentado, y quisiera hacer tres comentarios.

Primero. No creo diputado Gómez Urquiza, que sea totalmente correcta la aseveración de que la empresa grande está bien y la empresa pequeña está mal. Hay empresas grandes con problemas, hay empresas grandes sin problemas; hay empresas medianas con y sin problemas, igual las pequeñas, no hay una correlación por tamaño de empresa y grado de los problemas.

Segundo. Decía usted, el crecimiento del crédito, es cierto, en los programas de Nacional Financiera, y decía usted que una propuesta populista, dijo usted, ese fue el término que usó, la desgravación salarial. No lo creo y no lo creo porque en primer lugar vamos a recordar cómo está la tarifa de renta; el que el trabajador que gane un salario mínimo va a tener una desgravación del 9.5% en promedio; de uno a dos salarios mínimos se pagaba impuestos y ya no se va a pagar impuestos, esto fue una propuesta prácticamente unánime de todas las fracciones; tercero, en dos salarios mínimos se pagaba 2.5% de impuesto, se va a pagar cero, es decir, exactamente ahí el acreditamiento va a ser igual al impuesto y de dos a 3.9 salarios va a haber menores cargas fiscales.

¿Por qué no es populista? No es populista porque no requiere de impresión de billetes o de impresión de deuda, porque tenemos un presupuesto balanceado. Entonces, no es una cuestión de voluntarismo decir si es o no, sino aquí está, está balanceado, cuesta, cuesta muchos recursos sí, pero precisamente como resultado de la reforma fiscal éste se puede dar.

Tercero. Nos dice el diputado Gómez Urquiza, que no se negocia con los gobiernos locales el Programa Nacional de Solidaridad. No, no es correcto, no es correcto. Aquí tengo copias de algunos convenios de desarrollo social, curiosamente me pasaron los de Chihuahua, Baja California Norte y los de Guanajuato, pero están convenidos los niveles del Programa Nacional de Solidaridad entre los gobiernos de los estados, y la Federación, inclusive en algunos hay cambios muy importantes, usted lo conoce, diputado Gómez Urquiza, donde uno de estos tres no quiso hacer un programa, sino que quiso hacer otro y se hizo el cambio, entonces se concertan con los niveles locales, este es un primer comentario.

El segundo comentario diputado, yo creo que tiene usted mucha razón, y también el diputado Correa lo había dicho, entre más nos podamos concentrar en gastar mejor, más que gastar más, más importante va a ser la dedicación y la productividad que tengamos de este estudio de las finanzas públicas. Yo creo que en el pasado lo que nos sucedió, es que teníamos tales niveles de gasto y gastábamos tanto en cuestiones verdaderamente absurdas como gastar ustedes ya saben mi opinión al respecto, billón y medio por año para producir planchón, pérdidas brutales, mantener líneas aéreas desastrosas, pero una vez que se ha avanzado en esto, yo creo que lo más importante va a ser concentrarnos en cómo gastar mejor, mucho más que si gastar más o menos.

En este año se presenta mayor gasto social, qué bueno, creo que es importante, pero creo que es igualmente importante y gastar lo mejor porque uno puede decir, bueno, se va a dedicar 10% más a gasto social y no necesariamente eso es bueno per se, porque puede ser que se dedique en un programa que realmente no le llegue a la gente. Entonces creo que ambas cosas son importantes, gastar menor en intereses, sí, gastar menos en cosas, sí, gastar más en gente, sí, pero también gastar mejor lo que tenemos, el dinero del pueblo que tenemos, la responsabilidad de administrar, y aquí el diputado del Frente y usted, por distintas vías decían que lo que es muy importante es acercar más el gasto público hacia los usuarios, yo cada vez me convenzo que eso es cierto, cada vez me convenzo más en el trabajo cotidiano, en estos seis años y medio como Secretario, cada vez lo veo más y más que hay que tratar de descentralizar el gasto público y aquí yo nada más quisiera decirle una cosa, si uno toma en cuenta la federalización de la educación, más el crecimiento en términos reales que han crecido las participaciones a lo largo de la administración del presidente Salinas y han crecido en 18% en términos reales más la federalización de la educación, ya casi tenemos el 38% de los ingresos participables manejados por las entidades federativas y esto no era así en el pasado, usted lo sabe, era menos de la mitad.

Yo creo que precisamente esta tendencia es buena, que es conservar normatividad central, porque somos una nación que si bien hay matices regionales y hay riqueza cultural regional, tiene que haber también valores de identidad nacional y acercar mucho más el gasto a los usuarios, porque así tenemos mucha mayor contraloría

social, tenemos mucho menos dispendio y mucho menos desviaciones.

Por último, quisiera también comentarle al diputado Gómez Urquiza que en términos de equidad sobre la tarifa de renta, creo que avanzamos mucho diputado, porque repito, la Ley actual, el artículo 80 del impuesto sobre la renta tiene una iniquidad que tenemos que reconocer, yo soy el primero que quiero hacerlo, y es que permite que se acredite el 10% del salario mínimo elevado al año a los que tienen altos ingresos, a los que tienen bajos, no. Yo creo que ustedes tienen la enorme posibilidad ahora de poner a votación esto, de corregir esta iniquidad en el impuesto sobre la renta y darle más a quien menos tiene.

Para terminar señor Presidente, y aquí termino, quisiera comentar tres temas que tocó el diputado Angel Aceves; el primero, ¿cómo se va a llevar a cabo la recuperación salarial en los salarios contractuales? Uno, ya se ha tenido a lo largo del sexenio, si bien sobre una base muy baja de 1988. Dos, se tendrá por el incremento que compense a la inflación esperada que eso lo deja igual, pero el primer incremento real tendrá que ver con la productividad, el incremento en la productividad; el segundo con la desgravación fiscal.

Y aquí, yo quisiera detenerme un momento señores diputados, para decirles que creo, sinceramente lo creo, no hay nada más importante en términos de la productividad hacia el futuro del país, que este cambio en la mecánica salarial. En verdad creo, que es un giro de 180 grados lo que ha propuesto el presidente Salinas, porque el que la retribución se dé en base a la inflación esperada, más el incremento en la productividad, van a ser tres cosas.

Por primera vez la productividad va a dejar de ser, perdón que lo diga, va a dejar de ser rollo, en el sentido de que se va a tener que medir y esto va a significar mayor competitividad para las empresas y mayor incremento en el poder adquisitivo del salario; y segundo, quisiera también decir que esto va a llevar a cabo nuevos contratos laborales porque se van a tener que hacer contratos de productividad.

Y por último, quisiera enfatizar lo que dijo el diputado Aceves .

En 1989, por cada peso que gastábamos de intereses sobre la deuda pública, podíamos gastar 36 centavos para gasto social; en 1994, a su consideración, por cada peso que gastamos en intereses de la deuda pública, se propone gastar cuatro pesos en educación, en salud, en vivienda, en ecología. Hay una reforma presupuestal de 180 grados en que dedicamos menos recursos al pago de intereses, menos recursos a cosas, mucho más al bienestar de nuestro pueblo. Muchas gracias.

PRIMER TURNO DE PREGUNTAS Y RESPUESTAS

El Presidente:

Muchas gracias señor secretario doctor Pedro Aspe. Le solicito pase a ocupar el lugar que se le ha asignado en la Secretaría, para proceder al desahogo de la etapa de preguntas y respuestas.

Esta Presidencia, en razón de los tiempos y con el acuerdo de todas las fracciones parlamentarias, les señala a ustedes que se suprime el receso y continuamos en la sesión en el orden previsto en el acuerdo parlamentario.

En los términos del acuerdo de práctica parlamentaria que norma esta sesión, se va a proceder a desahogar el inciso e, del punto cuarto, para lo cual informo que se han inscrito los siguientes diputados: por el Partido Popular Socialista, Gabriela Guerrero Oliveros; por el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, Gonzalo Cedillo Valdez; por el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional, Jesús Berrospe Díaz; por el Partido de la Revolución Democrática, Liliana Flores Benavides; por el Partido de Acción Nacional, Fauzi Hamdan Amad. Por el Partido Revolucionario Institucional, Vinicio Mejía Tobías.

Vamos entonces a iniciar esta ronda de preguntas desde nuestras curules y le solicitaremos respetuosamente al señor Secretario vaya respondiendo en cada caso. Tiene la palabra la diputada Gabriela Guerrero, del Partido Popular Socialista.

La diputada Gabriela Guerrero Oliveros:

Muchas gracias, señor Presidente:

Señor Secretario de Hacienda y Crédito Público, independientemente de su respuesta a mi compañero diputado Juan Campos Vega, que no compartimos, me permito abrir un paréntesis para tratar un problema sectorial.

Es un hecho que se debe reconocer, el que el Gobierno Federal haya cambiado positivamente su valoración respecto del papel de la ciencia y la tecnología en la economía de nuestros

tiempos, a partir de la premisa de que la revolución científico - técnica es uno de los tres principales factores que están cambiando el mundo y las relaciones entre los países y consecuentemente con esta premisa, al adoptar medidas de Gobierno se ha dado importante impulso al sistema científico y tecnológico del país.

Entre estas medidas destaca la del presupuesto asignado a ciencia y tecnología, con incrementos anuales en términos reales que han hecho que se pase del 0.27% del producto interno bruto en 1989, al 0.38% en 1993. Continuando con esta actitud positiva, ahora se propone en el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 1994, un incremento de 11.1%, de tal manera que el gasto total correspondiente representará el 0.43% del producto interno bruto.

En este proyecto observamos con satisfacción dos aspectos importantes: que con el 11.1% de incremento, se revierte la peligrosa disminución del ritmo de apoyo presupuestal que habíamos venido observando en años anteriores y que nos acercamos al 0.46% del PIB, que para ciencia y tecnología se aplicó en 1981, el mayor de nuestra historia. Sin embargo, siempre hemos expresado nuestra preocupación de que por un lado los incrementos se producían a partir de un nivel presupuestal extremadamente bajo, y por el otro, nuestro atraso en el número de recursos humanos en ciencia y tecnología, en infraestructura de investigación científica y en instituciones de desarrollo tecnológico respecto de nuestros competidores en el mercado internacional, es tan grande que el esfuerzo que debía realizar el país para disminuir la brecha tendría que ser más importante desde el punto de vista presupuestal y más audaz y enérgico, desde el punto de vista de los mecanismos y acciones para que nuestro sistema científico y tecnológico se convirtiera en real y efectivo instrumento para el desarrollo económico independiente del país.

Por ejemplo, los Estados Unidos emplean más del 2.4% de su PIB para el sector de ciencia y tecnología, además de que este país se encuentra en un proceso de intensa reestructuración de su sistema científico y tecnológico, con el objeto de que su industria recupere su capacidad competitiva frente a los de Europa y Japón.

En una situación parecida se encuentra Canadá, lo cual explica que de cara a los resultados de la votación sobre el Tratado de Libre Comercio en el Congreso de los Estados Unidos, las autoridades gubernamentales mexicanas hayan declarado que la ciencia y la tecnología han pasado a ser parte de nuestras prioridades nacionales.

Motivada por la importancia que para México ha adquirido el problema del desarrollo tecnológico, la Comisión de Ciencia y Tecnología organizó en el pasado mes de octubre un foro sobre desarrollo tecnológico, que contó con la participación de las directivas de los laboratorios industriales más prestigiados del país y del cual surgieron valiosas propuestas para impulsar la política en la materia, incluidas algunas de carácter fiscal, para estimular la contribución de la empresa privada en el desarrollo tecnológico. Por ejemplo, surgió la novedosa y trascendental propuesta de renovar la infraestructura de los laboratorios industriales del país y firmar un convenio de colaboración de todos ellos, con el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional, mismo que abarcaría desde la actualización del personal técnico y científico de los laboratorios industriales, pasando por el intercambio de personal y la asesoría, hasta la realización de proyectos conjuntos, con el propósito de elevar la productividad y competitividad de las empresas de las que forman parte o con las que están vinculados.

En base a estas consideraciones, propuestas y preocupaciones, me permito hacerle, señor Secretario, las siguientes preguntas concretas:

¿Qué mecanismo se podría aplicar con objeto de obtener recursos adicionales para apoyar y hacer que se concrete en el menor tiempo posible ese convenio de los laboratorios industriales, estatales y privados, con el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional, que requerirá de cuantiosas inversiones?

Y finalmente, ¿no considera usted que es oportuno dejar a las nuevas condiciones del país, pensar en la implantación de mecanismos fiscales, tanto para estimular el establecimiento de laboratorios industriales por parte de la industria privada, como para destinar más recursos a la modernización tecnológica de la misma industria, aprovechando la experiencia positiva en materia fiscal de muchos países, tanto desarrollados como en vías de desarrollo, que también se afanan en tener participación en el mercado internacional?

Le reconocemos de antemano por su respuesta, señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Con su permiso, señor Presidente.

Señora diputada doña Gabriela Guerrero, yo coincido con usted en dos comentarios, muy rápido, el primer comentario es que las ventajas comparativas de un país son totalmente distintas en el Siglo XIX y yo diría hasta mediados del Siglo XX, que en los umbrales del Siglo XXI, es decir ya al fin del Siglo XX.

¿Cuáles eran las ventajas comparativas hace 30, 40 ó 50 años? Básicamente era la dotación de factores. Aquel país que tenía petróleo, que tenía plata, que tenía costas etcétera, tenía una serie de ventajas sobre aquellos que no lo tenían, pero al fin del Siglo XX y en el umbral del Siglo XXI, vemos que ésos ya no son, y yo coincido con usted, los factores que necesariamente dan competitividad, sino que ahora son básicamente tres factores: primero, cuál es la calidad y la capacitación que tiene su fuerza de trabajo; segundo, cuál es el estado de su ciencia y tecnología; tercero, su infraestructura, y la más importante, la cuarta, ¿cuál es la posibilidad que tiene su sociedad en su conjunto y el Estado, para la movilización de estos factores hacia la productividad y la competitividad? Coincido totalmente con usted.

Yendo a la respuesta muy concreta, yo creo que efectivamente el presupuesto que está a su consideración propone 5 mil 280 millones de nuevos pesos, que como bien decía la diputada Guerrero, eso significa 11.1% en término reales, y eso nos llevaría al 0.43% del PIB, que es prácticamente casi el doble de lo que existía en 1988. Entonces esto se está dando en varias cuestiones; está desde la retabulación de investigadores, están las becas del Sistema Nacional de Investigación, los portes becarios y están las becas de excelencia de los investigadores y ahí hay incrementos realmente grandes en términos reales.

Por otra parte nos decía la diputada dos cuestiones muy concretas: ¿qué sugeriría yo para poder, digamos aterrizar esta idea, de una mucho mayor liga entre los laboratorios y el sector productivo? Yo recomendaría tres cosas diputada: la primera, la primera es que yo creo que hay que trabajar mucho más cerca de la banca de desarrollo. Usted preside la Comisión de Ciencia y Tecnología, y yo le sugeriría que se invitara a una reunión al director de Bancomex, del Banco Nacional de Comercio Exterior, usted lo conoce bien, a José Angel Gurría, y a Oscar Espinosa, el director de Nacional Financiera, que tienen los dos programas para el financiamiento de ciencia y tecnología. Esa sería la primera.

Segundo, que en el caso de Nacional Financiera, diputada, hay la posibilidad de que Nacional Financiera, como órgano del Estado mexicano, pueda entrar en el capital de estos laboratorios, siempre y cuando se cumplan dos condiciones: tiene que ser minoritario y tiene que ser temporal, es decir, mientras sea minoritario, digamos el 25% del capital y hay un esquema de salida, Nacional Financiera entra, no con deuda, sino con aportación de capital, al área de ciencia y tecnología, y de esta manera usted va a poder seguramente destrabar estos proyectos.

Por último, me decía usted, ¿qué otra posibilidad hay de recursos adicionales? Yo creo que hay dos diputada, uno es el crédito externo a través de la banca de desarrollo, dentro de los límites autorizados por esta soberanía. Quisiera dar un ejemplo.

En este año, que es programa de equipamiento de la Universidad Nacional Autónoma de México, que se hace con el llamado Crédito BID, el Banco Interamericano de Desarrollo está dando un crédito para la compra de equipo, tanto para investigación como desarrollo en la UNAM y que va a ser un cambio enorme con respecto a los equipos que se tenían, porque ya prácticamente eran obsoletos, tenían una obsolescencia enorme, y entonces esto se puede ver también a través de Bancomex y de Nacional Financiera, una vez que se haya dado la autorización sobre el techo de endeudamiento externo, que como ustedes saben está a su consideración; como el Gobierno no tiene déficit, no estamos pidiendo endeudarnos para cubrir un déficit que no tenemos, sino se está pidiendo la posibilidad de que la banca de desarrollo acuda a los mercados internacionales de dinero de capital, para financiar y hacer la intermediación para las pequeñas y medianas empresas, y para el programa de desarrollo científico tecnológico. Estas serían mis respuestas, diputada Guerrero.

El Presidente:

Tiene la palabra el diputado Gonzalo Cedillo Valdez, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana.

El diputado Gonzalo Cedillo Valdez:

Ciudadano doctor Pedro Aspe Armella, en cumplimiento al acuerdo de práctica parlamentaria para la presentación y comparecencia de usted, señor Secretario, con relación a las iniciativas de leyes de Ingreso, y los proyectos de

Presupuesto de Egresos de la Federación y para el Departamento del Distrito Federal, así como el decreto que reforma, adiciona y deroga diversas disposiciones fiscales, me permito formular, a nombre del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, algunos cuestionamientos.

Por considerar que dicho ejercicio contiene un marco general de sustentación, definición de objetivos y políticas generales orientadas a los ingresos, el gasto y la deuda pública para 1994, para tales efectos se ha propuesto una profunda reforma del Estado y modernización de la economía, y observamos con agrado que el índice inflacionario se ha reducido a una tasa anual cercana a un dígito, y que el ritmo de crecimiento de precios sufrió una reducción importante.

Igualmente se nos informó que la deuda pública fue abatida sacrificando durante cinco años el gasto público.

Sin embargo, a la vez, si me lo permite usted señor Secretario, preguntaría si el castigo al gasto público, mismo que está sustentado en sacrificar los salarios, no obstante el mejoramiento que se pretende con la Ley de Deducciones Impositivas, acordadas en el Pacto para la Estabilidad, la Competitividad y el Empleo, ¿cuál puede ser su costo social, si consideramos que al cierre del primer semestre de año, el 12.6% de la población económicamente activa tuvo ingresos superiores al salario mínimo, y al finalizar el mes de junio de este año, la tasa de desempleo fue del 3.1% y la acumulada llegó a niveles de 12%. Y más preocupante es lo relativo a la caída en un 40% en los salarios en los últimos 10 años. Y si adicionalmente agregamos que hasta el momento existe un grave desplome de las actividades sustantivas de la economía nacional, tal como usted lo indicó en su informe, en donde las actividades agropecuarias disminuyeron en 1.5%, en el ramo industrial manufacturero se redujeron en 1.3%, y en el minero 0.1%.

Por el otro lado, nos preocupa, señor Secretario, si se tiene contemplado dentro de las políticas para el ejercicio del gasto de 1994, impulsar la actividad productiva del sector agropecuario, mediante el cual se propone asignar al desarrollo rural 15 mil 206 millones, por lo que el gasto de este sector, se dice, crecerá con respecto al de 1993, el 33%; que dicha designación estará orientada a realizar programas de apoyo al campo, por lo que se considera una atinada medida política para reactivar la economía sustantiva nacional.

Sin embargo, es necesario avanzar en la instrumentación de medidas de control y vigilancia que permita que el recurso efectivamente llegue al campo.

Pero nos interesan dos aspectos, señor Secretario. El primero, consiste en conocer qué mecanismos de control financiero se tienen contemplados, a fin de evitar la burocratización que nos lleve al incumplimiento del programa que nos ocupa e implique el crecimiento de estructuras orgánicas y de la planta de personal innecesario.

Y, por otro lado, si se tienen previstos los recursos presupuestales para apoyar la tecnificación de la producción agropecuaria, toda vez que existe el gran reto que nuestro país virtualmente forme parte integrante del Tratado de Libre Comercio.

Señor Secretario, en lo relativo a la política del gasto que se propone para la educación en 1994, existe la inquietud de consolidar el cambio estructural del sector educativo y avanzar en el desarrollo científico y tecnológico.

Esto significa una política tendiente a involucrar a la sociedad mexicana en el contexto mundial.

En este aspecto es clara la definición del Ejecutivo Federal hacia el federalismo con una política modernizadora que rompe el centralismo, aspecto por demás importante que obliga a los mexicanos a no rezagarse, so pena de permanecer peligrosamente marginados.

En este contexto manifiesta usted, señor Secretario, que para el próximo ejercicio fiscal, el presupuesto en educación será de 54 mil 465 millones de nuevos pesos, con lo que se acumulará en este sector un incremento real del 101% en esta administración. Si a esto el Ejecutivo promueve un incremento sustancial a este sector por parte del gasto programable de las entidades gubernamentales, obtendríamos un reflejo en la necesaria mejoría de los salarios de la planta magisterial y de esta forma se consolidaría la cobertura del Sistema Educativo Nacional. La pregunta al respecto, señor Secretario, es si es que los alcances presupuestales asignados para este rubro serán los necesarios para cumplir con los objetivos y metas asignadas, que nos permitan lograr que la educación esté vinculada a la producción y que se ubique en el nivel que se requiere, para poder competir en el mercado mundial.

Por último, señor Secretario, nuestro partido apoya la estrategia general que ha fijado el

Ejecutivo Federal, para reformar el Estado y modernizar su economía, estrategias apoyadas dentro de una política plural y de concertación, que permitirán abrir espacios democráticos a la sociedad civil, para estar en condiciones de recibir el año 2000, dentro de un contexto de desarrollo, productividad y competitividad.

Por sus respuestas muchas gracias, señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Señor diputado Gonzalo Cedillo, hace usted tres comentarios: el primero, sobre la reactivación. Quisiera decirle, en primer lugar, las finanzas públicas este año tenían un superávit ligeramente superior al 1% del producto. Al proponer igualar ingreso y gasto el año que entra, quiere decir que ese 1% del producto se va a más oferta y a más demanda de mercado para el año que entra.

Pero, adicionalmente, como el cargo del servicio de la deuda ha venido disminuyendo, ahí tenemos otro medio punto adicional que baja del 3.1% al 2.6%, y hay servicio de la deuda en relación a lo que producimos los mexicanos. Por tanto, el superávit, más la baja adicional en la parte del pago del servicio sobre la deuda pública, nos hacen que tengamos 1.5% más de destino para la reactivación económica.

Como usted sabe, se decidió hacer parte por medidas de oferta, y parte por medidas de demanda. Dentro de las medidas de oferta las que más llaman la atención, por su peso cuantitativo, es la desgravación de impuestos, la reducción de impuestos, la reducción arancelaria y, por el lado de la demanda, el incremento en el gasto social y el incremento en el Programa de Desarrollo Rural.

Segunda pregunta. Esto me lleva justamente a la segunda, que es en el sector agropecuario, el programa Procampo. Yo sé que ustedes, señores diputados, han tenido mucho tiempo y han oído y escuchado y leído del Procampo; yo quisiera brevemente, en estos breves minutos que tenemos, explicar el por qué creo que es un programa muy importante el Procampo.

Como ustedes saben, el grueso de la ayuda al sector agropecuario, se basó en nuestro país, está basado en nuestro país hasta ahora, a través de otorgar precios de garantía altos. Y déjeme decirle cuál es la mecánica de razonamiento detrás de esto, en que todos nos educamos en base a eso. La idea es la siguiente: si la verdadera pobreza de este país, de nuestro país, el rural, y son productores de maíz, entonces, ¿por qué no darle, a través de Conasupo, un precio de garantía muy alto, muy por encima del precio internacional para mejorar los términos de intercambio entre el campo y la ciudad y así darle mayores incrementos en el bienestar a la población rural de nuestro país? Y así se creó el Sistema de Precios de Garantía. Bien.

A raíz de las encuestas ingreso - gasto que ha llevado a cabo el Instituto Nacional de Estadística, se ha podido comprobar que esta política, por lo menos para los 2 millones 200 mil familias de menores ingresos relativos en nuestro país, fue una política inadecuada.

¿Por qué? Al tener un precio como en el maíz, que tenemos un precio de más del 100% por encima del precio internacional, la idea era ésta, que yo decía, de ayudar al campo. ¿Pero realmente se le ayudó, diputado Cedillo?

Piense usted en estos 2 millones 200 mil familias, las más pobres del país. Con la última encuesta ingreso - gasto, se tiene ahora perfectamente claro que, efectivamente, como se decía con anterioridad, la verdadera pobreza, pobreza en el país, el rural, es cierto, efectivamente son productores de maíz, es cierto, pero se aprendió algo que no se sabía, y es que los 2 millones 200 mil productores agrícolas de maíz de menores ingresos en todo el país eran deficitarios. Es decir, tenían un consumo de alrededor de 2.5 toneladas, producían 1 millón 800 y tenían que salir al mercado a vender su fuerza de trabajo por los 700 kilos de remanente. Y al tener un precio de garantía tan alto, ese remanente fue exactamente igual que bajarle los salarios reales, es la típica política de buenas intenciones y me temo que malos resultados, porque los productores de maíz más pobres de nuestro país son deficitarios.

¿Cómo corregir esta iniquidad? Mediante dos cuestiones: primero, ir bajando el precio del maíz hacia el precio internacional. La primera propuesta es bajarlo de 750 a 650, pero la idea después de la transición, es continuar bajando el precio del maíz hasta llegar al precio internacional y darle un apoyo por hectárea que se inicia en 330 nuevos pesos por hectárea.

Piense usted en el típico agricultor promedio, esos 2 millones 200 mil, tiene 1.5 hectáreas, produce alrededor de una tonelada y media, 1 mil 500, 1 mil 600 kilos, y requiere 200, 300, o sea, tiene que salir a comprar alrededor de 700, 800

kilos al mercado, eso es en la actualidad. ¿A qué precios los compra? ¿A 750? ¿Qué apoyo recibe? Ninguno, porque él no comercializa su maíz porque es autoconsumo. Entonces todo el programa montado a lo largo de 30 años no le llegaba a los productores deficitarios del maíz.

Muy bien, ¿qué propone el presidente Salinas del cambio de 180º? Primero, bajemos el precio final de 750 a 650 y que se siga bajando hasta llegar a precios, digamos, de mercado, a precios internacionales. Segundo, vayamos aumentando el apoyo por hectárea, a este productor rural, que yo el caso que le decía, si tiene dos hectáreas o hectárea y media fracción de la segunda, recibiría 660 nuevos pesos, primera ventaja por primera vez, por primera vez en su vida va a recibir un apoyo del Estado mexicano, porque el sistema creado en Conasupo no le llegaba a los productores de ingresos más bajos, porque no comercializa sus productos, porque produce para autoconsumo.

Segundo, segundo caso, y éste es suficiente en equidad en principio de justicia distributiva, yo creo que es el punto más importante de Procampo. Pero hay un segundo punto muy importante, al salir él a vender su fuerza de trabajo, al emplearse fuera de la época de cosecha para conseguir el remanente, lo va a comprar no a 750 sino a 650. Entonces va a tener en primer lugar el apoyo de 330 por hectárea y en segundo va a comprar y va a haber precios en el medio rural más bajos para comprar el excedente que requiere. Dos cuestiones vitales en términos de equidad.

Pero en términos de eficiencia, diputado, también quisiera mencionar que Procampo es muy importante en términos de eficiencia, en términos de equidad es esto, pero en términos de eficiencia es muy importante porque permite ir eliminando gradualmente las distorsiones en las decisiones de producción, también que homóloga a los productores mexicanos con sus competidores internacionales. También que es un esquema que justamente va a promover los canales de comercialización. También que va a permitir eficientar los esquemas para atención de los mexicanos de menores ingresos, y que efectivamente los subsidios les lleguen y no a través de un sistema como el actual que por definición a todos los que tengan autoconsumo Conasupo no les llega.

Por otro lado, llega también ayuda a que los consumidores en general del país, tengan alimentos a precios de mercado, es decir, a una economía abierta, a precios más bajos y no como ahora tenemos precios del más del 100% por arriba de los precios internacionales.

Bien, éstas son las medidas mas importantes de Procampo y desde el punto de vista de equidad, ahí están los datos que le doy, estos 2 millones 200 mil familias nunca han recibido ningún tipo de atención por el Estado, por primera vez lo van a recibir y además van a recibir, además del programa por hectárea, precios más bajos.

¿Cuántos recursos estamos destinando a esto? 11.7 millones de nuevos pesos. ¿Cuánto es esto? Son exactamente 11.7 miles de millones de nuevos pesos que son el 83% más que el año pasado. Ningún rubro del presupuesto crece más que éste.

Tercero. ¿Cómo va a operar? Y ahí está mucho de su preocupación. Va a operar con 33 delegaciones estatales, con los 193 distritos de desarrollo rural y va a haber 712 oficinas de apoyo Cader, ubicadas en los distritos de desarrollo rural.

En términos de vigencia, importantísimo, es un programa multianual con pagos constantes en términos reales durante los primeros 10 años y luego su desfasamiento.

Por último. ¿Quiénes son sujetos? Superficies sembradas en los últimos tres años. Los que hayan sembrado en los últimos tres años maíz, frijol, trigo, algodón, soya, sorgo, arroz, cebada, girasol, cártamo y ajonjolí.

Por otro lado, subsidiar otros productos originaría obviamente medidas compensatorias a las exportaciones de México dentro del GATT.

Y, por último, decía usted, ¿cómo vamos a estar seguros de que no va a haber una burocracia y va a haber dispendios de recursos. Yo creo que lo más importante es lo siguiente: va a haber un control de recursos en dos vertientes, señor diputado. Primero, es un control institucional, donde entra la Secretaría de la Contraloría General de la Federación en coordinación con Auditoría General de la SARH y, segundo, un Programa de Contraloría Social, es decir, donde participen los productores de manera directa y permanente.

Yo quisiera agregar un tercer punto. Se está viendo la forma operativa, pero ésa es mi recomendación como Secretario de Hacienda, que se trate de hacer todo el pago de Procampo a través del sistema bancario nacional, y que las oficinas de la SARH no manejen recursos en efectivo. Estamos viendo si la red, a través de la asociación mexicana de bancos, si los bancos podrían manejar todo el programa, para que todo el

programa se manejara a través de bancos y no tuviéramos el manejo de 3 millones 300 mil cheques en una institución que no tiene una estructura regional fortalecida.

¿Cómo participa la ciudadanía para el control de Procampo? Hay tres partes: primero, informándose de sus derechos y obligaciones, esta parte ya está en operación y, segundo, eligiendo al vocal de Contraloría y Vigilancia de cada una de esas Cader, de esas 712 oficinas que yo le decía, cada una de ellas va a ser nombrada por la comunidad.

Por último, esto obviamente eleva los apoyos al campo, sí, y homóloga; de hecho, son ligeramente superiores a los que se otorgan en Estados Unidos y en Canadá. Con este programa ya no se podrá decir que enfrentan estos productores competencia desleal, porque de hecho nuestros productores recibirán un apoyo como porcentaje del precio, superior que lo de nuestros socios comerciales. Muchas gracias diputado.

El Presidente:

Muchas gracias.

Tiene la palabra el diputado Jesús Berrospe Díaz, del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional.

El diputado José de Jesús Berrospe Díaz:

Muchas gracias, señor Secretario:

En nuestro partido creemos que un lustro de política económica es un período suficiente para valorar sus adelantos, problemas y limitaciones. De 1998 a 1993 en la economía mexicana se han operado transformaciones relevantes, en el Partido del Frente Cardenista lo hemos reconocido sin ambages, desde sus inicios.

La regulación pública se apoyó, como se sabe, en un ajuste estabilizador relativamente provechoso. Más que una política de ajuste, de oportunidad, se fincó en una reforma del Estado. Los resultados fueron positivos, bajo la presión inflacionaria se posibilitó la recuperación productiva y al disminuir las transferencias netas al exterior, por servicio de la deuda pública externa, el manejo presupuestal estatal ha tenido efectos más positivos en el desarrollo social y la infraestructura.

Pero debe reconocerse, que a pesar de los progresos estabilizadores, se mantienen y agudizan algunos de los grandes problemas nacionales.

Sería incorrecto negar que México, hoy es más desigual e injusto que en 1988 o en los inicios de los años 80.

Las estadísticas de las cuentas nacionales de un concepto fundamental como el de la distribución del ingreso disponible del INEGI y la Comisión Económica para América Latina, lo confirman de manera clara: ni hay un crecimiento sostenido, ni tampoco hay una mejor distribución del ingreso, a pesar de los encomiables esfuerzos de la política social de los últimos cuatro años; en el ajuste estabilizador, se han profundizado las brechas de la desigualdad social, usted mismo lo ha reconocido hace unos días ante nosotros, que en el avance en la lucha contra la pobreza, se sintetiza el reto del verdadero desarrollo de un país como el nuestro.

Señor Secretario nuestras observaciones no las anima el dejo nostálgico de los tiempos populistas; tampoco se inspiran en el afán de abultar sólo los lados positivos de la política económica; nos interesa resaltar en el mejor ánimo, los claroscuros de la estrategia del desarrollo gubernamental de explicar y comentar con usted situaciones como las siguientes: hay progresos evidentes en la estabilización de precios, los mejores de los últimos 20 años, empero, se dan con una desaceleración que comenzó en 1991 con una menor tasa de crecimiento y se ha hecho más evidente en el segundo semestre de 1992 y en 1993. Un crecimiento en nuestra opinión, alejado de ser sostenido y que hemos llamado errático.

Usted lo considera resultado del entorno internacional recesivo y de la restauración productiva. Pero curiosamente se suscita en una caída de la inversión bruta fija, la más alta del sexenio.

Preguntamos: ¿Cómo explicar esta convergencia de tendencias opuestas? La renegociación del débito externo tuvo impactos positivos en el gasto social, pero preguntamos: ¿Cómo negar que a pesar de estos avances hoy es más desigual la distribución del ingreso entre patronos y empresarios, que en 1988?

Desapareció el gran problema de las transferencias netas de recursos al exterior que de 1982 a 1988, provocaron el estancamiento del producto nacional y la distribución regresiva del ingreso. Hoy empero, el peso de la deuda externa es menor en el PIB y se refleja saludablemente en el presupuesto público. Pero aquí preocupan situaciones como las siguientes: se ha venido dando un explosivo crecimiento de la deuda externa privada y bancaria, de la que por cierto no ha habido suficiente información por parte del

Ejecutivo en este Gobierno. ¿Acaso ésta no es deuda de la nación? ¿No se pagan tales obligaciones con trabajo del país? ¿No considera que deben ser reguladas por el Estado? Anteriormente había un concepto de deuda externa total que ha desaparecido de los informes trimestrales de la deuda pública al Congreso de la Unión. Nos gustaría conocer los motivos de tal actitud.

La creciente relevancia de la inversión extranjera en el mercado de dinero es un asunto fundamental, refleja por igual confianza del ahorrador extranjero en el país y su interés, un interés predominante por la inversión especulativa. Aquí hay un tema de la mayor trascendencia: más de la mitad de la deuda pública interna, está en manos extranjeras. Este es un fenómeno relativamente reciente y acompaña a la disminución del saldo de la deuda pública externa neta y su proporción con el PIB.

Desde luego que es mejor ser receptores de capitales. Un país en desarrollo precisa de tales recursos, pero aquí hay cuestiones dignas de reflexionar: ¿Qué implicaciones tiene, que más de la mitad de la deuda interna esté en manos foráneas? ¿Cuáles son sus riesgos? ¿De qué modo su peso gravita el mercado de dinero? ¿Afecta a las tasas de interés y vuelve más vulnerable el mercado bursátil y la paridad cambiaría? ¿Cómo explicar los sucesos de hace dos semanas, en los cuales se dio al mismo tiempo, aumento de tasas de interés, devaluación del 4% y disminución de las reservas del Banco de México que, especialistas calculan entre 2 mil y 3 mil billones de dólares?

Señor Secretario: nos preocupan dichos opuestos en su exposición de motivos del Presupuesto de Ingresos y Egresos de la Federación, que por un lado se diga que en el futuro inmediato no hay ni habrá cambios de rumbo, y por el otro, se reconozca que el progreso no se mide por unos pocos indicadores macroeconómicos, debido a que muchas economías aparentemente sanas, se han visto estranguladas por la pérdida de competitividad, la falta de infraestructura social, la insuficiencia de recursos para satisfacer la demanda social.

En nuestra opinión, debe precisarse el rumbo de la política económica, traducir los adelantos del crecimiento y de la estabilidad de una mejor distribución del ingreso. Por eso nos parece atingente que se reconozca que la equidad y progreso social son condiciones para la estabilidad macroeconómica y que el resto de la política pública sea el avance en la lucha contra la pobreza.

Por último, el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional está convencido de que debe haber una permanencia de la estabilidad macroeconómica y avanzar en la reforma microeconómica. Pero este salto lo entendemos con un sentido de concertación en la célula productiva más importante de nuestra economía: en la fábrica y en las unidades económicas.

Para ser más productivos se requiere de una concertación profunda entre el capital, el trabajo y el Gobierno; de una democratización productiva que dé realce a los adelantos macroeconómicos, logrando por la reforma del Estado. Esta es la continuidad y desarrollo que propone el Frente Cardenista para el porvenir inmediato de la patria.

Gracias por su atención y por sus valiosos comentarios, señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Con su venia, señor Presidente.

Señor diputado Jesús Berrospe: hizo usted muchas preguntas y muchos comentarios. Voy a tratar de escoger algunos, a los cuales no me había referido y otros a los cuales ya me había referido, pues no los voy a comentar para cumplir con el tiempo.

El primero que usted comentó, se refiere al estudio que realizó el Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática y la Comisión, la CEPAL, de las Naciones Unidas para América Latina.

Antes de comentar brevemente los principales aspectos de la metodología del estudio, porque me da la impresión de que hablamos de cosas distintas, quisiera manifestarle que como en otras ocasiones, el Instituto Nacional de Estadística, su presidente, Carlos Jarque, que está aquí, nos acompaña, está a su disposición en el momento que ustedes quieran, para que se lleven a cabo las reuniones que sean necesarias, a efecto de despejar todas estas dudas de metodología sobre el tema de la pobreza en México.

Esta disposición también la van a encontrar ustedes en la CEPAL, institución con la que el INEGI realizó todos estos estudios y en los cuales estamos totalmente dispuestos a abrir todos los datos que ustedes deseen conocer.

El segundo punto que quisiera decir, es que la metodología empleada, es una metodología muy conocida internacionalmente que se llama Líneas de Pobreza. Esta es muy conocida en América Latina y muy empleada, frecuentemente empleada por los organismos internacionales, ya que esta metodología permite analizar claramente la evolución en el tiempo del fenómeno.

¿En qué consiste la metodología? Para ver si estamos platicando o hablando de lo mismo. Más que decir que si las cifras son ciertas y no son ciertas, y hay gente que se pronunció a favor y en contra, y nadie ha visto las cifras ni ha estudiado la metodología.

La metodología consiste en determinar los requerimientos nutricionales, yo quisiera enfatizar esto, los requerimientos nutricionales de las personas, tomando en consideración la estructura por edad y sexo de la población, así como las actividades físicas que realizan cada uno de los miembros del hogar.

De esta forma se definen las necesidades digamos, teóricas de calorías y proteínas que demanda un individuo, con base en las recomendaciones actuales que hacen estos organismos internacionales, y estos organismos son organismos especializados como es: la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, la FAO; la Organización Mundial de la Salud, la OMS y la Universidad de las Naciones Unidas.

Bueno, con estos elementos ya se tiene, para cada país es distinto, ¿verdad?, ya se tiene, con estos elementos se elabora una canasta básica de alimentos cuya composición cubra totalmente las necesidades nutricionales de la población. Considerando los hábitos de consumo, considerando la disponibilidad específica de alimentos en ese mercado y obviamente los precios de mercado.

Al valor monetario de esta canasta se le denomina la línea de pobreza extrema.

Perdón que me vaya paso por paso por la metodología, pero creo que es muy importante que sepamos de qué estamos hablando y no que simplemente se diga: esas cifras no cuentan o esas cifras están muy bien, y la defensa o el ataque sean sin base.

A esa canasta se le adiciona una estimación de los recursos requeridos por los hogares, por las familias, para satisfacer otras necesidades no alimentarias. Aquí por ejemplo don Gilberto Rincón Gallardo decía: "Cómo es posible que sea nada más para la parte nutricional". No es así y está claramente, ahorita les voy a dar el tema de metodología, a ésa se le adiciona la estimación de los recursos requeridos por los hogares para satisfacer otras necesidades no alimentarias y de esta manera se obtiene el valor que sirve para determinar los niveles de vida de la población.

Muy bien. Luego, voy a pasar al quinto punto, conforme a los valores de esta línea de pobreza extrema se definen tres grupos:

El primero, hogares en pobreza extrema;

El segundo, hogares intermedios, y

El tercero, hogares con niveles superiores a los medios.

6o. ¿Cuáles fueron las fuentes de los datos utilizados? La riqueza informativa que nos proporcionan las encuestas ingresos y gastos para conocer los padrones de los gastos de los hogares, así como su fuente muy detallada de ingresos hacen de este instrumento una fuente de información muy útil para analizar la pobreza.

De hecho los que se utilizaron fueron: la encuesta ingreso - gasto de 1984, que yo tuve el privilegio de hacer cuando estaba en el Instituto Nacional de Estadística. La de 1989, que está publicada. Y la de 1992, que acabamos de publicar y que tienen ya varios de ustedes una copia que recibieron la semana pasada.

Es decir, el cálculo de la magnitud de la pobreza en México se hizo utilizando información generada por el instituto y que es del dominio público.

Siguiente punto. ¿Qué nos indican los resultados? Nos indican que en 1992, 13 millones 600 mil mexicanos estaban en condiciones de pobreza extrema; es decir, que su nivel de ingreso no les permitía atender adecuadamente sus necesidades alimentarias, definidas como ya lo mencioné.

Siguiente punto. El estudio elaborado por la CEPAL y el Instituto Nacional de Estadística también indica que el número de personas que viven en condiciones de pobreza extrema disminuyó en 8.7% entre 1989 y 1992, al pasar de 14 millones 900 mil a 13 millones 600 mil que ya mencioné. Es decir, que se redujo en 1 millón 300 mil personas, a pesar de que en ese lapso hubo un crecimiento de la población del 6%.

Entonces, ¿cuáles son los datos claves?, once millones, 14 millones 900 mil y 13 millones 600 mil de 1984, 1989 y 1992. De 1984 - 1989 el PIB per capita se cae. Al caer el PIB per capita aumentan el número de pobres por debajo de la línea de pobreza, no hay la menor duda y está comprobado en el estudio. En 1989 - 1992 crece más el producto que la población, crece el ingreso per capita y baja otra vez. De hecho hay algo muy sabido, Carlos Jarque se los podrá explicar con mucho más detenimiento a todos ustedes que tengan interés, hay una regla de oro para calcular estas cosas a nivel internacional, es que por cada dos puntos porcentuales del crecimiento del PIB, por arriba del crecimiento demográfico, o sea, cada dos puntos de crecimiento del PIB per capita, se reduce en 1% la población en pobreza extrema; es decir, la relación entre el producto per capita y la pobreza extrema es dos a uno.

Bien, si tomamos el nivel de pobreza extrema en México en 1984, como punto de partida, tenemos una población en pobreza extrema de 15.4%, de 1984 a 1989 la población creció en 11% y el PIB creció solamente en 5%; es decir, hubo una caída del producto por habitante del 6%. Exactamente al ver la relación Dos a uno nos da el aumento del número de familias ubicadas por debajo de la línea de pobreza extrema de 1984 a 1989.

¿Qué pasó de 1989 a 1992? Les voy a recordar algunos datos. La población creció entre 1989 y 1992 6%, pero el crecimiento del producto fue 11.2%, es decir, el crecimiento del producto casi duplicó el crecimiento de la población, así se tuvieron 5.2 puntos porcentuales que contribuyeron a reducir la pobreza extrema; al dividirlos entre dos nos da 2.6, se la restamos al 18.8 del año 1984 y nos da 16.2, que es exactamente igual que el 16.1 que mencionamos al principio. No hay ninguna sorpresa.

Yo creo que lo que es muy importante aquí es que más que tener frases sin ningún fundamento de que esto no es cierto o que esto es cierto, es que yo creo que como en muchas cosas, hay que ver cuál es la metodología, hay que sentarse a verlo, discutirlo. Y ustedes van a ver este estudio, Carlos Jarque, en el momento que ustedes quieran está a sus ordenes, a partir de ya, cuando ustedes lo digan, podrán ver el porqué este estudio está haciendo la CEPAL para Chile, para Argentina, para Uruguay, para Guatemala y para México; no hay ninguna sorpresa en metodología, no hay ningún ánimo de engañar y, por consiguiente, yo creo que lo que tenemos que hacer en un tema tan delicado, tan importante, es sentarnos a ver con lupa cómo se hizo este estudio, qué significa, qué alcances tiene.

El segundo comentario... ya me pasé un minuto señor Presidente, me voy muy rápido, pero es que eran varias preguntas. El segundo punto que tocó don Jesús Berrospe era sobre distribución del ingreso. Don Jesús, para no discutir que dice usted que una cosa y otra, los datos que están publicados por el INEGI y de los cuales acabo de hablar, de la encuesta ingreso - gasto de los hogares de 1992, que se puede comparar con la de 1989, muestra que la distribución global del ingreso en nuestro país, medida por el coeficiente de Yini, que tiene muchas limitantes, yo escribí en los años que era profesor, escribí varios artículos sobre esto, pero en fin, es un indicador después de todo, se quedó el coeficiente de Yini exactamente igual, .47 y .47, no hay un deterioro; ahí están las cifras, ahí está la metodología, está a su disposición; costó una fortuna realizar estas encuestas y son para el uso del pueblo de México.

Nada más para terminar, el diputado también mencionó que quería saber dónde estaba el grueso del endeudamiento privado. Diputado, el grueso del endeudamiento privado, el 60%, 70%, está ubicado en el sistema bancario, en la banca que ha tomado pasivos muy importantes en moneda extranjera los hemos regulado y los hemos limitado a través de una circular, que se llama la dos nueve dos del Banco de México, para que tengan tres características, diputado:

Primero, tienen que tener una posición equilibrada en divisas, no pueden estar largos, no pueden estar cortos; no pueden estar especulando en pesos o especulando en dólares, tienen que tener una posición equilibrada de divisas, esto quiere decir que si ellos han tomado un endeudamiento, digamos no han tomado un endeudamiento, su acervo, su stock, su acervo de deudas es de 22 mil millones de dólares, quiere decir que en activos tienen que tener denominados en moneda extranjera exactamente 22 mil millones de dólares, no pueden tener 19, no pueden tener 24, es una posición totalmente equilibrada.

¿Qué porcentaje explica esto del endeudamiento privado? 70%, entonces aquí está básicamente en la banca. Esto es algo que supervisamos con muchísimo cuidado a través de la Comisión Nacional Bancaria, Banco de México tiene atribuciones de regulación directas en la posición externa de divisas de la banca y se ve que estén totalmente equilibrados pasivos con activos, no pueden estar cortos, no pueden estar largos, tienen que estar equilibrados.

Por último dice usted y para terminar, señor Presidente, hizo el diputado un comentario sobre qué había pasado hace dos semanas, el tipo de cambio se había ido para arriba y las tasas de intereses diputado, en el pacto nos pusimos de acuerdo de tener un régimen cambiario que tiene dos bandas, una banda inferior que es horizontal y una banda superior que es creciente, ¿por qué? porque estamos deslizando el techo de la banda a razón de antiguos 40 centavos diarios el equivalente en nuevos pesos.

Dentro de estas bandas de flotación lo que hacemos es que el tipo de cambio puede moverse libremente dentro de estas bandas y lo que hicimos, señor diputado, fue algo muy sencillo, empezamos a observar inquietud en los mercados y lo que hicimos fue dejar que el tipo de cambio se depreciara hacia la parte alta de la banda, soltamos las tasas de interés, se fueron 3.7% para arriba, el tipo de cambio se depreció dentro de la banda en casi 4%, se detuvo totalmente el nerviosismo y el tipo de cambio el día viernes, son los últimos datos que vi, porque hoy he estado con ustedes toda la mañana, el tipo de cambio estaba por debajo del lunes donde había empezado a depreciarse, es decir, tuvimos una depreciación dentro de la banda, tuvimos una depreciación, una revaluación enorme del tipo de cambio de casi 5%, revaluándose y ya estamos en un tipo de cambio más bajo que con el que iniciamos esto.

Las tasas de interés subieron 3.7% en el momento en que se veía que había mucho arbitraje y se soltaron las tasas rápidamente, el movimiento del tipo de cambio, el movimiento de las tasas de interés y quemamos a los especuladores, las tasas de interés volvieron la semana pasada 3.36 abajo. Esa es la manera como se puede manejar el tipo de cambio dentro de lo pactado, ninguna sorpresa, dentro de lo pactado se puede mover dentro de la banda hacia arriba como se movió y hacia abajo como también se movió, revaluándose neto más que habiéndose depreciado. Muchas gracias.

El Presidente:

Muchas gracias, señor Secretario.

Tiene la palabra la diputada Liliana Flores Benavides, del PRD.

La diputada Liliana Flores Benavides Bueno, compañeras y compañeros diputados, doctor Pedro Aspe: Antes de empezar quisiera leer una nota que me trajeron unos trabajadores, yo pensaba pasar a la tribuna, pero decidí mejor permanecer sentada porque me siento un poco mal.

Dice: "Licenciado. Pedro Aspe. La entrevista que ofreció en su anterior comparecencia a la fecha no se ha efectuado, Comisión de Trabajadores de Banco Mexicano, S. A." Griselda de Fuentes.

Entonces hago llegar este mensaje a usted.

Por otro lado, usted estuvo hablando hace rato de las coincidencias, de las coincidencias entre su anterior comparecencia o anteriores y los puntos de vista expresados por los diferentes grupos parlamentarios en esta Cámara. También tenemos otra coincidencia, doctor, que es algo que usted no mencionó, en 1991, el grupo parlamentario del PRD propuso una iniciativa de Ley que hoy todavía se encuentra congelada, en relación a la desgravación de las personas físicas que recibieran dos salarios mínimos. Y en 1992 hicimos una propuesta todavía más avanzada que sería importante que usted la conociera.

Ahora, ya voy a pasar a mi intervención.

En su pasada comparecencia de hace unos días, usted dijo que venía a esta soberanía no sólo por mandato del artículo 74 constitucional, sino por un acto de reivindicar el equilibrio de poderes y la transparencia de los recursos. Con ese mismo espíritu con el que usted tiene, en ese mismo espíritu yo me adentre al análisis de las finanzas públicas durante estos pasados cinco años de Gobierno, cuestión que me permitió tomar o tener algunos elementos para poder evaluar las propuestas que aquí estamos discutiendo, y empece a hacer una evaluación en relación al análisis del balance financiero desde 1988 al de 1994.

Aquí, nos encontramos con algo interesante, nos encontramos con una evolución ascendente de la intermediación financiera hasta el año de 1992. En 1993 y 1994 esta intermediación financiera ya no apareció, y ya no apareció debido a que ustedes cambiaron la metodología; en lugar de presentar un balance financiero, ahora es un balance económico. Después hablaré en relación al cambio de metodología.

Sabemos nosotros que la intermediación financiera no está sujeta a un control presupuestal directo, pero sí es llamativo que en 1992 dicha intermediación ascendió a 11 mil 430 millones 600 mil de nuevos pesos, que equivalía al 13% del gasto social y casi a dos veces el presupuesto

asignado al Programa de Solidaridad. Además, quisiera que analizáramos lo que ustedes mismos nos dicen en relación a la intermediación financiera; lo voy a leer, esto es de los criterios de 1993. Exacto. Voy a leer, dice:

"Anteriormente, la banca de desarrollo, además de canalizar una elevada proporción de sus recursos al financiamiento del propio sector público, aquella parte que destinaba al sector privado lo hacía a través de operaciones de primer piso. De este modo, la banca asumió riesgos desproporcionados a su base de capital y se hizo necesario recurrir continuamente a apoyos con recursos presupuestales; en vista de tales circunstancias, desde mediados de los años 70 se decidió incorporar como parte del déficit financiero a la intermediación de recursos canalizados al sector privado por parte de las instituciones mencionadas, considerando que dicho financiamiento era un riesgo contingente para el Gobierno Federal."

Aquí hay algo que quisiéramos destacar y que a mí personalmente me preocupa. Primeramente, la cuestión de esas cifras que en un momento dado pueden estar sujetas a un manejo discrecional; por otro lado, el destino de los recursos al sector privado a través de operaciones de primer piso; y, por otro lado, el problema que implicó al grado tal de que causaba un riesgo contingente, y esto lleva a tener que considerarlas como déficit financiero.

Me preocupa primero lo ascendente, me preocupa lo ascendente porque aquí lo tengo a la mano, tenemos por ejemplo en 1988 menos 6 mil 255 millones 200 mil; en 1989 ahí baja un poquito, menos 3 mil 186 millones; en 1990 menos 7 mil 648 millones 200 mil; en 1991 menos 9 mil 697 millones 100 mil y en 1992 menos 11 mil 430 millones 600 mil, que son cifras que saqué de los indicadores del Banco de México.

Entonces ante esa tendencia yo quisiera preguntarle si usted nos podría decir ¿cómo se aplicó por ejemplo en el caso de 1992 la intermediación en ese año?

Por otro lado, en relación a la metodología, como ya vemos que causaba un riesgo de contingencia, ustedes argumentan que era un riesgo contingente, por lo tanto se decide modernizarla, y voy a leer en qué consiste el concepto de modernización. El cambio en el concepto de banca de desarrollo implica implantar nuevas prácticas orientadas a garantizar la solvencia y el respaldo financiero de los riesgos que asumen las instituciones. Se adoptará un régimen de capitalización y uno de calificación de la cartera, similares a los correspondientes a la banca comercial, con el propósito de adecuar su operación crediticia a su base de capital, constituyendo reservas adecuadas para enfrentar posibles contingencias propias de su actividad.

Con base en lo anterior, o sea en función de su concepto de modernización, dice: "Ahora se justifica la eliminación del concepto de intermediación financiera del cálculo del balance financiero del sector público". Aquí va una de mis preguntas. Primero: consideraron desaparecerlo del balance financiero, pero no dice que desaparecieron los recursos.

Entonces aquí ya vamos a las preguntas. Para 1993 ustedes hacen una estimación del balance financiero en un 1%, en los criterios para 1994 ahí está. Mi pregunta es la siguiente: ¿En esa estimación está considerada la intermediación financiera, sí o no? Si no está, entonces ¿de cuánto fue?

Por otro lado también en 1993 quiero preguntarle si están considerados o no los ingresos recurrentes. Si están considerados, no se reporta nada, y si no están considerados, deberían de considerarse, porque no podemos olvidar que en 1993 hubo una generación de ingresos no recurrentes por la venta del paquete de los medios de comunicación, y ahí no se nos reporta nada.

Por otro lado, en este mismo sentido, ¿sería usted tan amable de explicar qué pasa con la intermediación financiera en un balance económico como el que están ustedes proyectando para 1994, de cero, porque hablamos que desaparece en su presentación pero los recursos no?

Por otro lado, en estas búsquedas que estuvimos revisando algunos materiales, nos encontramos que en 1992 no se informa en la cuenta pública que se desincorporó Ficorca. Se nos informa hoy en los criterios para 1994. Entonces mi pregunta es la siguiente: Considerando la metodología que ustedes utilizaban para definir el balance financiero, ¿qué pasaría con el superávit si se incorpora Ficorca?

Y por último, abusando un poco de esta oportunidad, yo quisiera preguntarle ¿cuál metodología utilizaron ustedes para calcular la extrema pobreza?, ya que en la publicación del nuevo perfil de la economía mexicana de agosto de 1992, en la página 12, de la Secretaría que usted dirige, ustedes reportan 24 millones de mexicanos en extrema pobreza.

Por otro lado, yo estoy segura que el grupo parlamentario votaríamos de acuerdo para que se le diera a usted el tiempo suficiente para que nos pudiera contestar estas preguntas. Gracias.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Como no; con mucho gusto, diputada Liliana Flores.

Déjeme comenzar por hablar de esta parte de las coincidencias. Decía usted "1991 la desgravación de personas físicas a dos salarios mínimos", el PRD presentó una propuesta. Sí, efectivamente, y déjeme contarle qué problema tiene esa propuesta, que lo platicamos bastante con algunos diputados del PRI y con los diputados del PPS.

El problema era el siguiente: se proponía decir: antes podíamos todos deducir un salario mínimo, entonces decía ¿por qué no?, muy fácil: que se deduzcan dos y ya, y ésa era la propuesta, deducir dos. Le voy a contar cuál es el problema con esta propuesta, es una propuesta que sonaba muy limpia, pero tiene un problema: los de altos ingresos también podían deducir dos, entonces nos sale muy caro, entonces el PPS lo que presentó fue: ¿por qué no acotarlo que nada más se pudieran deducir dos en los ingresos bajos?, pero que no se le fuera a dar al que gana yo no sé, 50 ó 150 salarios mínimos, que no se le fuera a dar la posibilidad de deducir un segundo, porque realmente no lo requería, no es muy injusto. Bien, ésa es la razón.

Entonces, diputada, lo que hicimos fue lo siguiente, fue decir: bueno, vamos a concentrarnos para tirar, digamos con rifle y no con escopeta, para que los recursos rindan más, fue centrarnos nada más en la desgravación, en la reducción fiscal hasta cuatro salarios mínimos. Que se requería bajar en cinco y en seis, seguramente sí, seguramente toda la tarifa va rápido, pero donde nos teníamos que concentrar era en uno, dos, tres y cuatro y ahí concentramos todas las baterías. Segundo, al concentrarlo ahí, para el mismo sacrificio fiscal pudimos dar no nada más la desgravación completa hasta dos salarios mínimos, sino que inclusive un acreditamiento en efectivo extra. Esa es la razón. Entonces, yo sabía que había varias propuestas, las había analizado y lo que hicimos fue ponernos a estudiar y ver como esto que andaba en el ambiente de cómo desgravar, técnicamente como se dice es correr el umbral para que la gente llegue hasta un umbral por debajo del cual no pague impuestos.

Entonces, lo que necesitábamos era encontrar una manera creativa de hacer esto, y la manera que encontramos creo que satisface todo, primero, ustedes querían que dos salarios mínimos quedaran desgravados, quedan; que no se le diera una deducción muy alta a los de altos ingresos, no se les da nada porque está concentrada en los cuatro salarios mínimos, y tercero, que inclusive se pudiera quitar esta parte de iniquidad que había en la tarifa del impuesto sobre la renta, en el artículo 80, de que alguien con 20 salarios mínimos sí puede acreditar por encima del impuesto, y alguien en un salario mínimo no, muy injusto.

Entonces, yo creo que sí es una coincidencia, como usted decía, diputada. Simplemente creo que viendo todas estas propuestas hicimos algo que creo que toma lo mejor de todas; sinceramente lo creo.

Esto de la intermediación financiera, diputada, a mí me apena mucho, porque hay un problema ahí en que como platicamos poco en ocasiones, como platicamos poco, entonces muchas veces sin querer, créamelo que es genuino, confundimos a veces al hablar de estas cosas. Déjeme tratar de ir muy despacio en qué consiste la intermediación financiera, cuál fue el origen de haberlo metido al presupuesto, al cálculo del déficit financiero, por qué se quitó y por qué no hay un problema.

Déjeme decirle.

Hace muchos años, tengo entendido, yo era estudiante entonces, pero tengo entendido que fue en el convenio con el Fondo Monetario en 1976, que el Fondo Monetario calcula cuál es el déficit financiero tomando lo que ellos llaman el uso de recursos financieros totales del sector público.

Entonces quisieron meter a toda la banca de desarrollo ahí, y se metió, en 1976. Tengo entendido que ése fue el origen, y se metió en aquel convenio, y desde entonces siguió por muchos años.

Fíjese nada más que cosa más absurda. Y le voy a dar un ejemplo de lo absurdo que era, y por lo cual hace, no me acuerdo si dos o tres años, les dije que esto era un absurdo y que lo íbamos a tener que quitar, porque yo no sé quién lo había dejado, lo habían convencido, pero eso estaba mal.

Fíjense nada más, vamos a pensar que nada más hay un Banco de Desarrollo, para que me salga la explicación fácil, pero luego hay más, nada más es multiplicar por seis, o sea, es el mismo problema. Piensen ustedes en Nacional Financiera, nada más que era el único banco de desarrollo.

Nacional Financiera daba dos tipos de créditos: un crédito al sector público y un crédito al sector privado. Bueno, no me lo van a creer, pero intermediación financiera era que todo el crédito que se daba al sector público no se sumaba como déficit, pero todo el crédito que se daba al sector privado, se sumaba como déficit, porque decían: dentro del sector público, si es Sidermex o Fertimex, todas ésas que no, digamos, siempre andaban en problemas, en números rojos, y no pagaban, pues el Gobierno acababa pagando.

En cambio, si es Juan Pérez, del sector privado, que le da un crédito Nafinsa: "Entonces eso sí me lo calculas como déficit, porque es seguro, no te va a pagar". Es increíble, pero es genuino lo que le estoy contando.

Entonces, digamos, yo desde que era subsecretario, decía que cómo era posible que tengamos esto. Bueno, cuando me tocó ser Secretario, dije, ahora sí me va a tocar la oportunidad de tocarlo.

Entonces lo que dijimos es un absurdo, si yo le doy un crédito a Fertimex no lo sumo, si le doy un crédito a cualquier actividad privada, tengo que sumarlo como déficit, porque los privados a lo mejor no pagan. Increíble.

Bueno, entonces hicimos la propuesta y la enviamos acá. ¿En qué consiste la propuesta? Bueno, quitar esta aberración, quitarla, porque además la banca de desarrollo, piense usted en Nacional Financiera. Nacional Financiera, el grueso de sus operaciones, el 80% o 90%, es de segundo piso. Déjeme contarle cómo opera esto.

Yo soy pequeño empresario, voy y pido un crédito a cualquier banco comercial, digamos a Bancomer, voy y pido mi crédito. Entonces me dicen: "Bueno, usted quiere entrar al Programa de Pequeña y Mediana Empresa, Nacional Financiera me da el dinero para prestarle a usted". Entonces si Bancomer toma el riesgo de darme a mi, particular, el crédito, Nacional Financiera en 24 horas le da el dinero para que se le dé a este particular.

Si no paga el particular, ¿quién sale bailando? Bancomer. Nacional Financiera está en segundo piso, y ahí la ve, digamos, ahí no tiene riesgo, simplemente le redescuenta, decimos, perdonen los términos, redescuenta en segundo piso al banco privado para que el banco privado se lo dé al pequeño empresario. ¿Sí me explico? Bien.

Supongamos que todas las operaciones de Nacional Financiera fueran en segundo piso, ¿qué riesgo tendría Nacional Financiera de que no le pagaran? Ninguno. Porque si no le pagaban, no le pagaban al banco, pero a Bancomer sí le pagaba Nacional Financiera. ¿Me explico? Bien.

¿Por qué el Fondo Monetario originalmente metió esto? Porque había una cosa, lo tengo que decir, son de las cosas que no son muy agradables, pero si no las dice uno, ¿cómo explica las cosas?, porque Nacional Financiera daba grandes créditos a grupos privados que no pagaban.

¿Entonces qué es lo que hicimos? Bueno, yo entré y vi cuáles eran, y entonces les pusimos una fecha: me pagas o te quiebro. La mitad pagó y la mitad los quebré y les quitamos las empresas. Recuperamos más o menos como 2 mil 500 millones de dólares, y las vendimos, las empresas, en licitación pública, y dijimos: Nacional Financiera ya no va a dar esos grandes créditos por razones de otro tipo. ¡Correcto! Muy bien.

Entonces teníamos una Nacional Financiera que básicamente operaba en segundo piso, habíamos cobrado todos los créditos que no nos habían pagado. Entonces dijimos, muy bien: ¿por qué no hacemos lo siguiente? ¿Por qué no Nacional Financiera lo tratamos igual que cualquier banco? En los créditos, que es de segundo piso, no tiene que tener reservas porque no hay riesgo, pero si da un crédito a una unión de crédito que ahí sí lo da directo a la unión de crédito, ahí que cree su reserva. Bien.

Hay una cosa que se llama la Convención de Basilea. Basilea es una ciudad en Suiza donde se juntaron todos los organismos internacionales para hacer una convención en la cual lo que se hace es que se dice: la banca del mundo tiene que tener una contabilidad de 8% sobre su capital, y ése es el estándar internacional.

Nosotros aceptamos las recomendaciones de Basilea. La banca comercial hoy en día tiene esa Convención de Basilea, y los hicimos a la banca de desarrollo. Muy bien.

En síntesis, la banca de desarrollo tenía, o préstamos en segundo piso, donde no tenía riesgos, o préstamos en primer piso, tipo uniones de crédito, donde cumplía con las reglas de Basilea.

¿Hay una contingencia fiscal latente bajo ese entendido? No. Si Nacional Financiera tiene una contingencia fiscal, tiene sus reservas y el Gobierno no tiene por qué acudir. Dado que no presiona las finanzas públicas, las sacamos de la intermediación financiera. Esa es la razón, un poco larga, pero ésa es la razón. Bien.

¿De qué tamaño es el crédito de la banca de desarrollo a los particulares? Es muy grande, por dos razones: primero, porque ya casi no le presta al sector público. En 1988, cuatro créditos de Nacional Financiera eran el 96% de toda su capacidad, cuatro créditos el 96%; dos eran públicas que no pagaban y dos eran privadas que no pagaban. Y nada más le daba el 4% a la sociedad civil.

Hoy en día, el 96% del crédito de Nacional Financiera es a 280 mil pequeñas y medianas empresas, en promedio 12 trabajadores por empresa. Es un cambio de 180 grados.

De ese crédito, el 90% está en segundo piso, no tiene riesgo; el 10% está en primer piso, pero es a uniones de crédito, etcétera, y cumple con las reglas de Basilea, tiene su capitalización, no tiene que sumarse al déficit, porque está respaldado por reservas que ha creado la propia Nacional Financiera.

Es una explicación un poco larga, diputada. Bien.

Esto lo hacemos para casi toda la banca de desarrollo. Banco Nacional de Comercio Exterior, José Angel Gurría que está aquí, el 97% del crédito que da José Angel, hoy en día, es el segundo piso, no toma riesgo, él lo que hace es conseguir el dinero en los mercados internacionales lo más barato, pasárselo a las empresas y utilizar, trabajar muchísimo con la banca comercial y tratar de tomar los menos riesgos posibles directos, porque para eso lo puede tomar el sector privado, no nosotros. Bien.

En segundo tema, dice la diputada Liliana Flores, que hasta ahora les comentamos lo del Fondo de Contingencia, hasta criterios. La verdad es que no, lo entregamos en el Informe Trimestral a la Cámara, pero déjeme platicar, que es un tema, digamos, que no es importante, lo que sí es importante es de dónde salieron estos recursos.

En la página 42 del documento de Criterios, señores diputados, se entrega la contabilidad del Fondo de Contingencia al 30 de septiembre. Ahí en el grueso están todos los ingresos por privatizaciones, de 59 mil millones de nuevos pesos, el 98% son privatizaciones, y ahí se metieron, ustedes recuerdan que ahí se metieron, y estamos presentando en el Informe Trimestral la contabilidad. Muy bien.

¿Estos ingresos para qué sirvieron? Para cancelar deuda interna o externa. Y entonces ahí hacemos la contabilidad, cuáles son las entradas, ingresos; cuáles son las salidas, cómo amortizamos deuda, etcétera. Muy bien.

Pero sucedió, diputada, que el Ficorca, que se había creado hace muchos años, a mí me tocó participar en su creación, se quedó con un remanente enorme, había mucha discusión y el diputado Encinas recordará algunas discusiones con él y con Jorge Alcocer, hace muchos años, que me decían: "Van a acabar con pérdida en Ficorca". Yo le decía: "No, vamos a acabar con utilidades".

Aquí sí la verdad tuvimos nosotros aproximadamente estas utilidades. ¿Cuánto quedó de total? Siete mil 400 millones de nuevos pesos, una cantidad enorme, más de 2 mil 500 millones de dólares, una cosa así, de remanente de todos esos préstamos de deuda privada, donde se muestra que no dimos subsidios a las grandes empresas en la deuda privada.

Y esto es totalmente financiero, diputada, no entra en el Presupuesto de Egresos de la Federación, es un Fideicomiso en Banco de México y es simplemente un traspaso de cuentas. Pero pensamos que era muy bueno incluirlo dentro del Fondo de Contingencia, como un apartado, y en el Informe Trimestral a la Cámara lo presentamos, lo empezamos a presentar en nuestro informe.

Ahí básicamente es totalmente financiero, los ingresos son: cuánto nos traspasó el Banco de México, en qué se depositó. Básicamente se depositó en la capitalización de los bancos de desarrollo: Nafinsa, Bancomex, etcétera, como usted lo ve. Y la única cuestión que llama la atención, es que es un rubro que dice: Coberturas. Déjeme explicarle qué es, él es el único que pudiera llamar la atención, son, que lo hemos anunciado, las coberturas contra posibles disminuciones del precio del petróleo y las coberturas contra las posibles elevaciones de las tasas de interés internacionales. Ese costo de coberturas se utilizó con la fortaleza financiera del Ficorca, para no tener que quitar recursos del presupuesto de egresos de la Federación. Esos son mis comentarios.

Un último comentario, diputada, y ahí termino. Decía la diputada Liliana Flores que en este año

de 1993, en el Fondo de Contingencia sí aparecen los ingresos, por ejemplo, por darle un ejemplo, la semana pasada, hace 10 días venía el segundo pago del 60%, que era el segundo pago de Televisión Azteca, que eran aproximadamente 810 millones de nuevos pesos, pero con intereses eran como 840. Nos pagaron el día, creo que era el 10 de noviembre, nos pagaron ese día, ¿y a dónde entró ese dinero? Ese dinero entró en el Fondo de Contingencia, les podemos dar la cuenta, cuanto entró, etcétera.

Bien, ¿qué se hace con ese dinero? Si entra al Fondo de Contingencia nos sirve para matar deuda interna, y dice la diputada, si entendí bien, diputada. Dice: bueno, todo está muy bien en toda esta historia, pero en la página 103 del documento de Criterios abren ustedes 1991 - 1992 con privatizaciones sin privatizaciones y en 1993 no, ésa es la razón.

La razón, diputada, al momento de hacer criterios, ese criterio se puso, y yo lo expliqué así en mi comparecencia del año pasado, que una parte de ingresos de la privatización entraban en derechos y la otra entraban directamente al Fondo de Contingencia.

Entonces se puede abrir perfectamente, yo me encargo mañana de entregarle la división de las dos partes cerradas. Inclusive traigo aquí, si les interesara cuanto es el Fondo de Contingencia al viernes pasado, y la cantidad subió bastante, porque hubo algunos pagos de privatizaciones pasadas, pero afortunadamente ustedes tienen, bueno, les doy esta información. La Contaduría Mayor de Hacienda de la Cámara de Diputados, aquí veo al Contador Mayor, nos cayó hace tres meses, en una auditoría en el Fondo de Contingencia, están sustentos ahí en la Tesorería y tienen los datos al día, en los cortes diarios del Fondo de Contingencia. Yo se los puedo dar, pero también el Contador Mayor de Hacienda de la Cámara de Diputados lo tiene completo. Muchas gracias.

El Presidente:

Muchas gracias.

Tiene la palabra el compañero diputado Fauzi Hamdan Amad, del Partido Acción Nacional.

El diputado Fauzi Hamdan Amad:

Gracias, señor Presidente; señor Secretario:

Entre los objetivos de política económica para 1994, se encuentran promover la recuperación de la actividad económica y el empleo a través de acciones que incidan principalmente en el fortalecimiento de la oferta interna, así como elevar el poder adquisitivo de los ingresos de los trabajadores, particularmente de los que se encuentran en los estratos de menores ingresos.

En los propios criterios generales de dicha política económica, el Ejecutivo Federal, por su conducto, señor Secretario, señala que para alcanzar la política tributaria constituye uno de los instrumentos fundamentales.

Ciertamente que la iniciativa que establece las reducciones impositivas acordadas en el Pacto para la Estabilidad, la Competitividad y el Empleo, pretenden coadyuvar a tales objetivos, pero consideramos que en las circunstancias actuales, de grave deterioro del poder adquisitivo, la caída brutal de los salarios reales aunque con su recuperación a la que usted ha hecho alusión, el aumento creciente del desempleo y el subempleo y el cierre o quiebra de múltiples empresas, hacen necesarias medidas más drásticas de apoyos fiscales que vengan, en forma complementaria a la iniciativa de Ley, a fomentar y estimular la reactivación económica y la recuperación del poder adquisitivo.

Entre tales medidas consideramos que habría que hacer ajustes a la Ley del Impuesto Sobre la Renta, a la Ley del Impuesto al Activo y a la Ley del Impuesto al Valor Agregado, sin que tales medidas traerían como consecuencia disminuir el ingreso del Erario Federal previsto en el proyecto de la Ley de Ingresos de la Federación, excepto, reconozco, por lo que concierne a la propuesta de ajustes a las tarifas de los artículos 80 y 141 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta, cuyos ajustes evidentemente no significarían una reducción importante de tales ingresos federales.

A reserva, naturalmente, de que tales proposiciones se hagan por el grupo parlamentario del Partido Acción Nacional, en el momento legislativo oportuno, desde ahora anticipamos en forma sinóptica, en qué consistirían.

1o. El pago provisional mensual del impuesto sobre la renta e impuesto al valor agregado en épocas como la actual, implican una fuerte carga financiera y administrativa para las empresas. Es pertinente recordar, señor Secretario, que cuando se instituyó en 1987 el pago provisional mensual, tuvo como propósito no erosionar la recaudación debido a tasas inflacionarias

sumamente altas. Actualmente la tasa inflacionaria es de un dígito y no significaría una merma o castigo a la recaudación si ésta fuese enterada trimestralmente y en cambio, sí constituiría un alivio para las empresas que obtuvieren ingresos gravables anuales superiores a 2 millones 250 mil nuevos pesos, ajustada este año, que son los únicos que actualmente, entre otros, se benefician de dicho pago trimestral.

2o. Hoy en día, donde la economía refleja problemas de liquidez, la demanda se ha visto disminuida originando que las empresas otorguen créditos a sus clientes entre 30, 60 y hasta 90 días. Sin embargo, las cuentas por cobrar son ingresos gravables y, por ende, la causación inmediata de impuesto sobre el total de las operaciones aún sin haberse cobrado, razón por la cual sería conveniente que el actual sistema de enajenaciones a plazos, aplicables sólo a operaciones con el público en general, se hiciera extensivo a clientes que no son calificados por la Ley como público en general, salvo, naturalmente, tratándose de aquellos créditos entre empresas que formen un mismo grupo, para evitar desfasamientos, ocultamientos o maquinaciones fraudulentas.

3o. Igualmente, señor Secretario, dado los problemas de liquidez por los que atraviesa la administración pública federal, estatal y municipal, tanto centralizada como paraestatal, cuyos pagos a proveedores llega a diferirse entre 90 y 180 días, sería también plausible que las empresas proveedoras pudiesen efectuar los pagos de los impuestos conforme efectivamente fueran cobrando las cuentas por cobrar.

4o. Conforme al artículo 9o. de la Ley del Impuesto al Activo, cuando en un ejercicio el impuesto sobre la renta exceda el impuesto al activo, se podrá solicitar su devolución o compensación conforme a la famosa regla 194 de la miscelánea de 1993. Y no precisamente esta primera miscelánea contiene reglas de aplicación, para la aplicación y ejecución de la Ley, sino verdaderas normas de integración de la Ley del Impuesto Sobre la Renta, de cuyas cantidades actualizadas que se hubieren pagado en el impuesto al activo en alguno de los cinco ejercicios anteriores o de 10, conforme a la propuesta contenida en la iniciativa de Ley.

Esta devolución o compensación, según el esquema normativo actual, procede hasta el siguiente ejercicio, mientras tanto, la empresa deberá desembolsar durante el año el impuesto sobre la renta sin poder recuperar el impuesto al activo que tuviere a su favor, afectando severamente su flujo de efectivo en tal ejercicio, por lo que también se propone que previa autorización de la autoridad, como sucede en el caso de disminución de los coeficientes en pagos provisionales del impuesto sobre la renta, se prevea un mecanismo similar, pero fijando naturalmente candados para evitar que los contribuyentes aprovechen tal circunstancia o que efectivamente no lleguen a causar el impuesto sobre la renta igual o superior al que hubieren pagado por el impuesto al activo.

5o. También, dado que las empresas hoy en día han aumentado considerablemente sus pasivos, con el sistema financiero, sería de gran alivio que las deudas con dicho sistema se redujeran de la base gravable para el pago del impuesto al activo.

6o. Sería conveniente, que se les aplicara el mismo régimen de deducciones del impuesto sobre la renta, tratándose de dividendos que no provengan de la cuenta de utilidad fiscal neta, el famoso Cufin, de manera que lo lógico y justo sería que haya o no Cufin, el pago del impuesto recibiese el mismo tratamiento.

7o. Ciertamente que en 1987 se introdujo en la base nueva del impuesto sobre la renta, el concepto de interés real acumulable o deducible, según sea el caso, así como la ganancia o pérdida inflacionaria. Esquema que tuvo su razón de ser en épocas de alta inflación. Pero dado que el escenario actual como se reconoce por el propio Ejecutivo Federal, es de un sólo dígito y que se seguirá preservando en ese esquema, no tiene razón de ser, mantener el esquema de componente inflacionario y de actualizaciones.

Asimismo, y es quizá en donde pudiera haber el ajuste a la Ley de Ingresos de la Federación, las tarifas de los artículos 80 y 141 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta, deberían hacerse, como creo que usted lo reconoce, señor Secretario, más flexibles y progresivas, de manera que también alcance el beneficio de esa progresión salarial que excedan de cuatro veces el salario mínimo, pues se está dejando desprotegido a un núcleo de población muy importante entre seis y ocho millones de asalariados a quienes no les está beneficiando el nuevo esquema del crédito fiscal contemplado en la iniciativa de ley.

Bajo tales consideraciones, señor Secretario, y de manera objetiva y con proposiciones concretas, ¿no cree usted que en adición a las que se contienen en el paquete fiscal, dichas acciones propuestas serían justas y sanas dentro de una política tributaria de redistribución del ingreso

para lograr los dos grandes objetivos señalados al inicio de mi pregunta? Gracias anticipadas por su contestación.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Señor diputado Fauzi Hamdan.

El diputado Hamdan propone una miscelánea fiscal con muchos cambios en varias cuestiones. Yo creo que hay dos cambios importantes. No quisiera entrar mucho al detalle, pero digamos, uno como una visión... es que el diputado Hamdan desea utilizar el sistema fiscal para dar apoyos transitorios.

A mí me parece bastante peligroso el cambiar el sistema fiscal para dar un apoyo transitorio, porque la verdad es que yo creo que es mucho mejor tener la máxima estabilidad en el sistema fiscal y bajar lo más que se pueda las tasas, en lugar de estar dando, digamos, apoyos de una sola vez.

Pero vamos a comentar algunos: el primero, dice el diputado Hamdan: "bueno, ¿por qué no el 90% de las empresas en lugar de pagar mensualmente pagan trimestralmente? A mí me parece bien, de hecho ya está así, hicimos hace seis meses el cambio, es el 91% de las empresas las que nos pagan nada más trimestralmente.

Luego dice el diputado Hamdan, dice: "bueno, ¿por qué no si la inflación ya está muy baja, por qué no quitamos el ajuste inflacionario?" Diputado, yo sinceramente no coincido con eso porque primero que nada no creo que les ayude a las empresas, porque si se les quita la corrección inflacionaria de un lado, de la cuenta doble, también se va a quitar del otro; o sea, se va a quitar por el lado de los pasivos, pero también por el lado de los activos. O sea, no quieren tener la reducción digamos... o la ampliación de la base por las tasas de interés reales en los pasivos, pero tampoco van a poder revaluar activos. Ese es el sistema de los Estados Unidos. Yo creo que es un mal sistema. Y le voy a explicar por qué, diputado:

Piense usted en un país que tiene muy baja inflación como los Estados Unidos; tiene una inflación del 3%, 3.5%. Pero es un mal sistema porque lleva 10 años, ¡no! más, 15 años sin corrección inflacionaria. Entonces aunque es 3%, es 3% el primer año, 3% el segundo, 3% el tercero. Y al cabo de una década es el 50%, 60%.

Entonces yo creo que aunque la inflación sea del 1% o del 2%, hay que tener corrección inflacionaria, tanto en el lado del activo como del lado del pasivo.

Creo que el sistema correcto es el sistema alemán y suizo, que por cierto tienen inflaciones más bajas que los Estados Unidos, y hacen la corrección inflacionaria en todo el balance: en el activo y en el pasivo.

Nos dice el diputado Hamdan: "Ojalá que se pudiera desgravar más de cuatro salarios mínimos..."Pues sí, a mí me encantaría. El problema es ¿cómo sacamos los recursos?, diputado Hamdan, ¿de dónde los sacamos?, ¿qué quitamos? Obviamente puede haber propuestas; yo no voy a decir que no. Pero para dar de cuatro a cinco salarios mínimos, nos costaría más o menos como el 60% de lo que nos costó de uno a cuatro, porque son niveles del salario mucho más altos. ¿Cómo le hacemos para... de dónde quitamos recursos de otra parte? Ahí está mucho del problema.

Y por último, decía el diputado que hay algunas cosas, como por ejemplo que el sector público, si entendí bien, cuando paga a 30, 60, 90 días, pues que eso se reconozca desde el punto de vista del sistema fiscal.

Yo lo que prefiero mil veces, es que el sistema fiscal, que el sistema de empresas tengan una buena calendarización, para que le paguen a todo mundo. Y yo, diputado Hamdan, a la mejor me equivoco, pero la impresión que tengo, por las reuniones que hemos tenido con las cámaras empresariales, es que en esta coyuntura difícil, la mejor paga se da en las empresas públicas: Petróleos Mexicanos, Comisión Federal de Electricidad, no se han rezagado en sus pagos a proveedores ni un solo día y en esta coyuntura difícil, curiosamente son la mejor paga en el país. Así que creo que, en resumen, pasa lo siguiente, diputado Hamdan: si no nos cuesta dinero, es que no ayuda. Y si cuesta, ¿de dónde lo sacamos, diputado Hamdan?

Ese es un poco el resumen. Muchas gracias.

El Presidente:

Muchas gracias. Tiene la palabra el diputado Vinicio Mejía Tobías, del Partido Revolucionario Institucional.

El diputado Jorge Vinicio Mejía Tobías:

Con su venia, señor Presidente; señor Secretario:

En los últimos años todos los mexicanos y en especial la clase trabajadora del país, hemos realizado un gran esfuerzo para crear las condiciones necesarias para la estabilidad económica y el crecimiento sostenido, con el fin de promover oportunidades de desarrollo individual más equitativas y el mejoramiento del nivel de vida de todos nuestros compatriotas, en especial, de los que menos tienen.

No hay duda alguna que durante esta administración se han logrado cosas relevantes: la concertación de los distintos sectores sociales y la modernización se han logrado gracias a la moderación que los trabajadores del país han mostrado en sus demandas salariales, en una actitud nacionalista y de apoyo a la política económica y austeridad fiscal y claridad en el manejo monetario. Todo esto ha hecho posible bajar la inflación a niveles que como lo ha señalado en repetidas ocasiones, el presidente Salinas de Gortari, no la habían conocido la mitad de los mexicanos.

Los trabajadores entendemos lo que usted ha dicho: que la reducción de la inflación ha derogado el único impuesto que no fue aprobado por esta soberanía y que por lo mismo es el más injusto, y es el que más lesiona los bolsillos y la economía familiar; el impuesto que resulta de la inflación.

Podemos recordar que hace apenas poco tiempo las alzas generalizadas y constantes de los precios, volvían efímera cualquier conquista laboral. Acababa con el poder adquisitivo y el trabajador veía que sus ingresos cada vez servían menos para adquirir cosas. Y no había nada que se pudiera hacer para evitar que la inflación continuara dañando su ingreso.

La baja de la inflación como un primer paso para la recuperación del poder adquisitivo de los salarios, ofrece a los trabajadores una mayor estabilidad, obteniendo más bienes por nuestros pesos. Además de la disminución de la inflación, el aumento de la productividad ha comenzado a reflejarse en una elevación de los salarios de los trabajadores en términos reales, como lo muestran las cifras representativas del Instituto Mexicano del Seguro Social.

Durante los años de gran inflación los salarios de los trabajadores fueron los que más resintieron la carga de la crisis. Pero si tomamos en cuenta los incrementos de 1989, 1990 y así hasta la fecha y los acumulamos, observaremos que realmente, descontando el aumento del costo de la vida, el salario promedio de cotización al Instituto Mexicano del Seguro Social se ha incrementado prácticamente en un 19%.

Esta cifra nos muestra que vamos por la dirección correcta y que hemos logrado aumentar los ingresos reales de la clase trabajadora del país. Sin embargo, señor Secretario, a pesar de reconocer esta mejoría; sería irresponsable no aceptar que estas cifras han partido de una base muy baja y que es todavía mucho lo que falta por hacer, aunque sabemos que si perseveramos, podemos lograr la recuperación de estos salarios y acceder a mejores niveles de vida.

Para continuar en esa dirección, México se prepara para afrontar los retos de una situación económica mundial cambiante, con una nueva confianza en que los mexicanos somos capaces de alcanzar, cuando los sectores suman sus esfuerzos hacia un objetivo común, todas las metas que nos podamos fijar.

Los trabajadores estamos convencidos de que sólo mediante el trabajo y el esfuerzo, es posible construir un México mejor para nuestros hijos. Por eso aceptamos con entusiasmo el Acuerdo Nacional para la Elevación de la Productividad y de la Calidad.

Esperamos que se puedan establecer los indicadores adecuados para medir ésta, y que una vez establecidos se pueda saber realmente cómo van a ser los incrementos salariales y que respondan a los resultados del control de la inflación para contrarrestar el efecto del aumento en los precios sobre los salarios, más los incrementos de productividad atribuibles al factor trabajo que se determinen a nivel de cada comisión mixta de productividad en cada empresa en todo nuestro país.

Señor Secretario: el sector obrero ha manifestado en repetidas ocasiones en el seno del Pacto para la Estabilidad, la Competitividad y el Empleo y de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, su profunda preocupación por la tendencia que hasta la fecha ha venido mostrando el valor real del salario mínimo.

Es lacerante observar cómo entre 1981 y 1993 éste ha caído año tras año. Es por eso que propusimos, en ese marco de concertaciones, lo que fue posteriormente aceptado por las partes: la necesidad de encontrar formas que permitieran elevar el poder adquisitivo de los trabajadores.

Vemos con satisfacción cómo la iniciativa de reformas al artículo 80 de la Ley del Impuesto

Sobre la Renta, que el ciudadano Presidente de la República ha enviado a este honorable Congreso de la Unión, responde, al menos en principio, a este reclamo mediante el otorgamiento en efectivo de un crédito fiscal a los trabajadores que ganan hasta dos salarios mínimos.

Permítame reiterar, señor Secretario, que ha afirmado que en principio esta medida parece cumplir con su propósito. Sin embargo, el movimiento obrero está interesado en comprender cómo podemos estar seguros de que las modificaciones que se inscriban en la Ley efectivamente se materializarán en el ingreso líquido de los trabajadores.

En este sentido, señor Secretario, con todo respeto quisiera preguntarle de manera muy concreta las siguientes dudas del sector obrero:

En primer lugar, se dice que los trabajadores recibirán montos o cantidades en efectivo. ¿Quisiera saber a cuánto ascenderán estas cantidades para los trabajadores de diferentes niveles de ingreso?

En segundo lugar, ¿de qué manera contribuye esta medida a mejorar la equidad del sistema tributario no sólo para los trabajadores que ganan un salario mínimo, sino para aquellos que ganan hasta cuatro salarios mínimos, donde se encuentra precisamente el 70% de los trabajadores asalariados del país?

En tercer lugar y ligado a las anteriores preguntas. ¿En qué manera incide para una mayor obtención de créditos fiscales o en efectivo o en tasas de impuesto más bajas para los trabajadores de ingreso de más de dos salarios mínimos y que además cuentan con prestaciones contractuales más altas que las que señala la Ley Federal del Trabajo?

Y, por último, algo que son preguntas muy ligadas. Que me explicara ¿cuál es el mecanismo que asegurará que los patrones cumplan con la obligación de entregar estas ayudas a los trabajadores?, ¿a partir de cuándo se harán?, ¿por cuanto tiempo durará este beneficio?, ¿cuáles serán los plazos de entrega y si puede sufrir modificaciones la tabla de cálculo?, y, por último, ¿qué sucederá cuando los empleadores no entreguen estos beneficios?

Agradecemos de antemano todas sus respuestas, señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Con su venia, señor Presidente:

Señor diputado Jorge Vinicio Mejía, he escuchado con atención su planteamiento y quisiera hacer tres comentarios muy puntuales a sus preguntas.

El primero, ¿a cuánto ascenderán en efectivo las cantidades que recibirán los trabajadores en diferentes niveles de ingreso? Bueno, el monto que percibirán los trabajadores obviamente, como usted bien lo decía, dependerá del nivel de su ingreso y del monto de prestaciones exentas.

Por ejemplo, un trabajador que nada más tenga el mínimo de prestaciones de Ley, esto es, que tenga tres prestaciones: Instituto Mexicano del Seguro Social, Sistema de Ahorro para el Retiro y el Infonavit; son las tres prestaciones mínimas de ley, obtendrían los siguientes incrementos, diputado: en un salario mínimo el acreditamiento en efectivo sería de 47 nuevos pesos, en 1.1 de 45; en 1.2 de 42 y así llega hasta una vez y medio el salario mínimo, sería de 32 pesos con 60 centavos; y esto llega obviamente hasta el límite de dos salarios mínimos, donde va disminuyendo la cantidad, empieza en 47 y termina en 12. Entonces, éste es el primer comentario a su pregunta, señor diputado.

El segundo comentario del diputado Jorge Vinicio Mejía, hasta cuatro salarios mínimos, ¿cómo estaría, como iría operando? Bueno, el crédito al salario, como ya se decía, creemos que es una forma bastante innovadora de redistribuir el ingreso en favor de los trabajadores de menores ingresos. La idea, como usted sabe, en la actualidad, pensemos en un trabajador que gana 1.7 veces salario mínimo; el trabajador que gana hoy en día 1.7 veces salario mínimo, uno, paga impuestos y, dos, no recibe el acreditamiento completo. ¿Cómo estarían en la nueva situación?, el trabajador, uno, dejaría de pagar totalmente los impuestos y, dos, recibiría un crédito fiscal de alrededor de 22 pesos adicionales, además de que dejaría de pagar el impuesto. Bien, entonces entre uno y dos veces se deja totalmente de pagar impuestos.

En tasas, nos dice el diputado. Bueno, en tasas lo que sería es lo siguiente: un trabajador de un salario mínimo con las tres prestaciones mínimas de Ley, tendría un incremento de 47 pesos, que significa 10.8% líquido, 10.8 es la respuesta; si estuviera en un salario y medio de ingreso mensual, tendría 5.01 de ingreso líquido; si estuviera en dos recibiría 2.98; si estuviera en tres recibiría... etcétera; va bajando la tabla.

Tercera pregunta: ¿cuántos trabajadores actualmente pagan impuestos que dejarían de pagarlos

y recibirían un crédito en efectivo? Respuesta: 1 millón 300 mil familias adicionales, 1 millón 300 mil familias que están pagando impuestos dejarían: uno, de pagar impuestos, y dos, recibirían, y la siguiente pregunta, ¿cuántos trabajadores se ven beneficiados por la reducción impositiva y por el acreditamiento fiscal? seis millones 900 mil, diputado Jorge Vinicio Mejía, 6 millones 920 mil de trabajadores verán de una o de otra manera disminuida su carga fiscal.

La tercera pregunta del diputado ¿cómo nos vamos a asegurar que los patrones van a cumplir con esta obligación? Es una pregunta muy buena, que es la primera vez que surge. Bien, primero, son varias las medidas. La primera es que los empleadores podrán acreditar el pago en efectivo que le van a hacer al trabajador contra cualquier contribución a su cargo y su carácter de retenedor, contra cualquier impuesto federal. Si no tienen utilidades no hay problema, tienen ventas, tienen IVA, tienen empleados, tienen retención. En este problema, con esto se resuelve el problema, digamos se cobra contra los impuestos federales y se le otorgan al trabajador de menores ingresos.

Segundo. Si existiera un caso teórico que no tuviese ninguna posibilidad de hacerlo porque en un trimestre no tendría ningún impuesto federal a su cargo, puede pedirlo directamente que la Secretaría de Hacienda se lo devuelva directamente.

Tercero. ¿Qué pasa, nos dice el diputado Jorge Vinicio Mejía, qué pasa si no lo pagan? Bueno, si no lo pagan ésta es la parte que nunca es agradable de mencionar, pero el incumplimiento de estas obligaciones en la propuesta que está a su consideración, es equiparable al delito de evasión fiscal. Esa es la manera como podemos estar bastante seguros de que se va a llevar a cabo.

Fechas, dice el diputado. La idea, señor diputado, es que sea retroactivo al 1o. de octubre y que si se hace rápidamente se pueda pagar a la brevedad, por eso ojalá que se pueda discutir lo antes posible esta propuesta, porque la Secretaría obviamente no puede llevar a cabo ningún contacto con contribuyentes mientras esta soberanía y la Cámara de Senadores no hayan aprobado esta reforma, entonces no tenemos ningún contacto todavía con contribuyentes a nivel de mecánica operativa ni lo podemos tener hasta que ustedes no hayan analizado el caso completamente.

Por último, diputado, Jorge Vinicio Mejía, yo quisiera decirle que usted hizo un comentario que el sector obrero sí otorga mucha importancia a que una parte de estos incrementos sean por la vía de la desgravación fiscal y el acreditamiento y otro por el incremento en la productividad. Yo coincido, señor diputado, no hay la menor duda que es muy importante, yo creo que éste es el cambio más importante en la fijación de los salarios contractuales y que por cierto y un factor que debe acelerar fuertemente los avances en la reforma microeconómica.

¿Por qué su relevancia? Bueno, su relevancia estriba en que al haber conciencia en los trabajadores de que su esfuerzo y dedicación en el trabajo se va a reflejar en que cuenta con mayores remuneraciones, entonces lo que van a tener va a ser un incentivo muy claro, para exigirle al patrón programas de capacitación laboral, y esto es algo muy importante, porque el trabajador va a ver que entre más productivo, más eficiente sea, el bono de productividad va a ser mayor, va a poder llevarse a su casa, a su familia, un mayor ingreso disponible y eso al fin y al cabo es lo que cuenta.

Esto, lo que va a suceder es que va a provocar como ya está empezando a ocurrir en los 1 mil y tantos nuevos convenios de productividad que se han firmado en las últimas semanas, lo que va a ocurrir es que no solamente va a haber mayor productividad del factor trabajo, como usted lo dijo, sino también que va a dar esto, al trabajador, le va a dar mayor nivel de vida, mayor poder adquisitivo del salario, pero a la empresa, diputado, también es muy importante, a la empresa le va a dar mayor competitividad en una economía global.

Esta mecánica de fijación de salarios es muchísimo mejor que aquélla donde había simplemente un indicador parejo, ¿por qué, diputado? Porque si hay un indicador parejo, lo que sí típicamente debe de suceder es que en algunos lugares, en algunas empresas donde la productividad de la mano de obra viene creciendo muy fuerte, no se pagaría lo suficiente y en otras donde la productividad está estancada y se da una tabla rasa, un indicador general, se está dando de más y está perdiendo competitividad la empresa.

Entonces por eso es un cambio muy trascendente el que la fijación salarial en contratos, en los salarios contractuales, sea en base a la inflación esperada más los incrementos de productividad a nivel de planta.

Y yo termino simplemente con dos reflexiones, diputado. En las últimas semanas hemos tenido la agradable visita de muchos líderes obreros

al Instituto Nacional de Estadística, donde han estado tomando cursos como nunca nos había sucedido, sobre los datos de productividad. Por cierto me comentaban también, me comentaba el doctor Jarque, que las publicaciones del Instituto Nacional de Estadística sobre los avances de productividad en manufacturas, que no eran muy populares y no se vendían mucho, en las últimas tres semanas hemos vendido más que en los últimos dos años.

Y es precisamente esta necesidad de entender cuál es el fenómeno de la productividad, cómo es medible para que se traduzca en hechos, para el trabajador en mayor poder adquisitivo de su salario y para la empresa en tener mayor competitividad.

Y termino con la última reflexión. Hace algunos años, diputado Jorge Vinicio Mejía, en 1988, no hace mucho tiempo, cuando se inició la administración del presidente Salinas, se tenía que del total de la recaudación del impuesto sobre la renta, el 65% provenía del capital y el 35% del factor trabajo. Esto lo mencioné, en 1988 hubo mucha discusión con la pasada legislatura, se dieron las cifras y hemos actualizado el estudio y para este año, para el cierre de 1993 esperamos que del 100% de la recaudación del impuesto sobre la renta, el 69% venga del factor trabajo y únicamente el 31% del factor de mano de obra.

Con esto creo, diputado, que prácticamente contesto a sus preguntas. Quizá una última más que no me toma más que medio minuto. Yo creo que aquí, señor diputado, lo que es muy importante es la participación de los líderes obreros para enseñarles rápidamente a los trabajadores cuáles son sus derechos; por qué tienen derecho a un acreditamiento en efectivo; por qué deben rápidamente, en caso de que esta soberanía así lo decida, bajarse las tasas fiscales.

Y les quiero poner un ejemplo, un ejemplo muy claro que para algunos les va a sorprender. De la manera como cuando el movimiento obrero organizado trabaja cerca de sus autoridades, algunos datos interesantes de la Subsecretaría de Ingresos; simplemente voy a mencionar dos: en el caso que hemos recibido de este año de 1993, de objeciones de los trabajadores por el reparto de utilidades donde los trabajadores nos dirigieron cartas a la Secretaría de Hacienda para que en base a derecho pudiéramos trabajar en auditorías especiales para checar si habían recibido lo justo, las cifras de las cartas que recibimos, simplemente lo que la Secretaría por medio de las auditorías que se pidieron pudo entregar a los trabajadores, es 1 millón 925 mil nuevos pesos, simplemente en estas auditorías que se pidieron.

Y por último, tenemos un programa especial con el Congreso del Trabajo por medio del cual a todas las empresas que les encontramos en una auditoría diferencias a favor del fisco en materia del impuesto sobre la renta, estamos comunicando al movimiento obrero organizado el caso de elevación o de la elusión del impuesto, para que se lleve a cabo lo que procede en términos del reparto de utilidades.

La cifra, es espectacular. Para el año 1991, 1992 y 1993, los trabajadores han recibido adicionalmente como resultado de la auditoría por este concepto, 69 millones 886 mil nuevos pesos. Juntos, trabajando juntos, lo podemos hacer mejor. Muchas gracias, diputado.

SEGUNDO TURNO

El Presidente:

Muchas gracias, señor Secretario.

Compañeros legisladores, están inscritos para la segunda ronda los siguientes diputados: Clara Mejía Guajardo, del Partido Popular Socialista;

Francisco Dorantes Gutiérrez, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; Luisa Alvarez Cervantes, del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional; Raúl Alvarez Garín, del Partido de la Revolución Democrática; Alfredo Lujambio Rafols, del Partido Acción Nacional y Jesús Molina Lozano, del Partido Revolucionario Institucional.

Les recordamos que de acuerdo con el convenio de práctica parlamentaria, tenemos cinco minutos para presentar esta segunda ronda de preguntas.

Tiene la palabra la diputada Clara Mejía Guajardo.

La diputada María Clara Mejía Guajardo:

Gracias, señor Presidente:

Señor Secretario de Hacienda, la primera observación que deseamos hacer a la temática que hoy nos ocupa, es el hecho que previamente el Ejecutivo ha comprometido la gestión gubernamental en el llamado pacto, y en consecuencia, sentimos que un numeroso grupo de diputados

se siente comprometido a aprobar, sin más, la parte sustancial de la Ley de Ingresos propuesta y obviamente en su momento el decreto correspondiente al pacto, por lo que esta representación popular se ve relegada a un papel secundario informal, en virtud, repetimos, de que ya existen compromisos previos, firmados y hechos públicos por los sectores representados ante el pacto.

La segunda observación que queremos hacer es en relación al hecho de que mismas condiciones firmadas en el pacto y que se convertirán en parte de las leyes, obedecen fundamentalmente a los reclamos y a las presiones que ha venido realizando el sector empresarial, es decir, las medidas anunciadas no obedecen a los reclamos del pueblo y de la clase trabajadora, que fueron persistentemente desoídos, sino a las presiones empresariales.

Deseamos hacer algunas preguntas que nos permiten tener una mayor claridad sobre la política de ingresos y egresos de la Federación, para en su oportunidad poder examinar en el seno de la Cámara, con mayor objetividad, las causas y efectos económicos que en representación del Ejecutivo usted, doctor Aspe, viene a comentarnos hoy, partiendo de la base de que el salario en general ha representado un porcentaje menor del producto interno bruto y que en el factor de trabajo representa costos menores en los presupuestos de las empresas.

Primer pregunta: ¿qué proporción del producto interno bruto representa hoy el salario?

Segunda: ¿en qué proporción del producto interno bruto se elevará la participación del salario con las medidas señaladas en el pacto?

Tercera: ¿en qué medida se contempla que pueda aumentar el poder adquisitivo de los trabajadores en términos de la canasta básica?

Y cuarto: ¿de qué manera el Gobierno espera que el sector empresarial cumpla con la intención de repercutir en menores precios de venta las reducciones en los costos de insumos públicos y en el descenso de la tasa del impuesto sobre la renta?

Por sus respuestas muchas gracias, señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Con su venia, señor Presidente:

Diputada María Clara Mejía Guajardo, dos comentarios sobre su parte introductoria.

Diputada, el titular del Ejecutivo Federal lo único a lo que se comprometió en el pacto, y así lo señala el pacto, es a enviar las iniciativas correspondientes en materia de ingresos, pero fue totalmente respetuoso de esta soberanía; el titular del Ejecutivo Federal dijo: "Solamente nos podemos comprometer a enviar las iniciativas".

Segundo comentario; no creo que usted en verdad sienta que las medidas del pacto todas fueron para quedar bien ante presiones del sector empresarial, sinceramente no, no creo que sea justo mencionar eso, creo que no es justo y creo que no es correcto.

Usted cree, diputada, que es quedar bien ante el sector empresarial, y utilizar el superávit para desgravar hasta dos salarios mínimos?, por cierto, propuesta de su partido, del PPS, en la cual yo tuve la oportunidad de dialogar dos o tres veces durante este año con varios de los diputados para ver cómo se podía desgravar el salario. ¿Usted cree que ésa es una propuesta empresarial?

¿Usted cree diputada, que la disminución de la tasa de crecimiento de los precios de la gasolina y de la electricidad, sobre todo en los consumos menores de 200 kilowatts ha sido una demanda empresarial? ¿Realmente usted cree que le interese a ese sector este tipo de cuestiones?

Particularmente yo diría: todo lo que es la desgravación, la desgravación la presentó en el pacto, diputada, el movimiento obrero organizado, por cierto algunos de los elementos más significativos de dicho movimiento se encuentran aquí, sabrán que no miento, donde acuden ellos siendo líderes obreros, pero además diputados federales y traen propuestas en cuestiones de desgravación muy claras, y hubo enormes discusiones de cómo se podía hacer la desgravación, hasta qué niveles, etcétera. Estas no son propuestas del sector empresarial.

Pero también, lo debo reconocer y lo hago sin ninguna pena, hay ciertos impuestos que era importante darles a las empresas, porque también queremos empresas competitivas, y en la medida en que tengamos empresas competitivas, en esa medida vamos a tener más inversión, más empleo, y yo creo que esto debe de verse como es, simplemente el tratar de tener cuestiones de equidad desde el punto de vista social y cuestiones de eficiencia desde el punto de vista de los mercados.

Me preguntaba diputada ¿qué relación existe entre salarios y producto interno bruto? Como usted lo ha de conocer bien diputada, si uno toma la contabilidad nacional, y quita uno el excedente de explotación, que el excedente de explotación en nuestro país, en un gran porcentaje está compuesto por Petróleos Mexicanos, pero quitando todas esas cuestiones de lado, la última cifra que tiene el INEGI para la pregunta que usted hacía de remuneraciones sobre producto interno bruto, es del 27%.

En la segunda parte preguntaba usted cuánto puede ser el incremento en los salarios reales. Le voy a dar primero la cifra que tengo para enero - agosto de este año, la cifra es 4.6% en términos reales.

Tercero, preguntaba usted cuánto es la desgravación. La desgravación para el 70% de los trabajadores que son los trabajadores que están entre un salario mínimo y cuatro salarios mínimos, la desgravación o acreditamiento promedio, es de un 4.56% adicional. Con eso contesto sus preguntas diputada Mejía Guajardo. Gracias.

El Presidente:

Muchas gracias. Tiene la palabra el diputado Francisco Dorantes Gutiérrez, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana.

El diputado Francisco Dorantes Gutiérrez:

Señor Secretario, a juicio del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, INEGI, es un organismo que nos permite conocer en términos generales la manera de cómo se encuentra integrada la nación, de ahí que lo consideremos de enorme valía en el apoyo de quienes tenemos necesidad de usar la estadística y la informática.

Mi pregunta señor Secretario, de manera concreta es la siguiente: ¿Considera que la labor del INEGI es eminentemente técnica y que es conveniente que sea estrictamente neutral?

Por otra parte, es usted de la opinión de que el INEGI, que pasó de Programación y Presupuesto a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en la fusión de ambas secretarías, debería tener el estatuto de un departamento fundándose para ello en la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal.

Otra pregunta, señor Secretario; existe el antecedente de que Sánchez Colín, gobernador del Estado de México, en su tiempo, buscó la exención de impuestos para los nuevos industriales que se asentaran en el Estado, buscando la industrialización de ese Estado, y logrando en gran parte que la zona conurbada, en parte Tlalnepantla y Atizapán, tuvieran un gran incremento industrial.

Permítame, señor Secretario, poner como ejemplo, la misma ciudad y la misma industria que usted mencionó hace algunas horas: León, Guanajuato, y la industria del calzado.

En León, Guanajuato, existen grandes industriales, con grandes fábricas, que omito los nombres de las marcas, pero que tienen un poder económico enorme para sostener cinco o seis ciclos económicos. Como usted sabe mejor que yo, el ciclo económico de los zapateros es en el momento que empiezan a montar un par de zapatos y en el momento en que lo venden.

Ellos, los grandes industriales de León, Guanajuato, tienen para estar, por ejemplo, entregando ya 100 pares, otros que ya están cobrando porque tienen cheques o letras adelantadas, otros que le están poniendo el corto, otros que les están poniendo las suelas apenas, entonces tienen para sostener varios ciclos económicos de 100 pares cada uno, y además tienen 10 o más capitales para sostener su empresa, no así los pequeños fabricantes que son, en la cuestión económica, células también de producción y que dan empleo a una gran parte de la población de León, Guanajuato, como puede suceder en cualquier ciudad de la República.

Estos pequeños fabricantes o pequeños industriales, apenas se ponen o abren la puerta de su empresa, sufren el acoso legal de los inspectores de Hacienda o del Seguro Social. Muchas veces son descubiertos y termina ahí la ilusión de aquellos pequeños fabricantes que a veces también son obreros de la misma empresa y se acabó el negocio, el pequeño negocio o el pequeño taller.

Entonces resulta, señor Secretario, de que esta es una forma tan desventajosa de trabajar, para los pequeños industriales, pues sufren la competencia desmedida de los grandes industriales que los acaban.

Ahora con el Tratado de Libre Comercio, que entra el próximo año, seguramente su situación se va a tornar más difícil aún.

Señor, quiero preguntarle: ¿qué posibilidades habría para exentar de impuestos, aunque fuera por unos seis meses, a los nuevos pequeños talleres, a los nuevos pequeños industriales, para combatir el desempleo, en las zonas de depresión económica difícil o en los municipios de extrema pobreza? Por sus respuestas muchas gracias.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Con su venia, señor Presidente:

Señor diputado Francisco Dorantes, usted presentó dos preguntas, la primera es con respecto al Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, me pregunta usted si lo considero de enorme valía. Definitivamente, sí; claro, no soy alguien neutral respecto a esto, porque a mí me tocó, porque tuve el enorme privilegio de crearlo, cuando se creó como instituto. Entonces lo considero de enorme valía, y creo que su labor es técnica, debe de ser profesional y neutral, absolutamente profesional y neutral, estoy convencido, estoy convencido. Así debe de ser. La pregunta que usted hace es complicada, porque dice usted: "...si pudiera ser un departamento". Si fuera un departamento tendría mucho menos autonomía que en realidad tiene ahora.

Le quisiera nada más recordar cuál es el status actual del instituto. El instituto es un órgano desconcentrado que está ubicado en la Secretaría de Hacienda, pero que por Ley de información estadística tiene dos características: es autónomo en lo técnico y es autónomo en lo administrativo.

Si fuera un descentralizado, no podría ser autoridad, porque le recuerdo, diputado, que los descentralizados no pueden ser autoridad. Entonces la ubicación de órgano desconcentrado le da la suficiente autonomía en materia técnica, y al mismo tiempo le permite ser autoridad para la imposición de sanciones en materia estadística y geográfica.

Pero, ciertamente, éste es un tema de fondo, es un tema de fondo que hemos estado discutiendo en las últimas semanas, diputado, y que creo que vale la pena continuar profundizando en él. Es un instituto que tiene prácticamente un servicio civil de carrera, que tiene un prestigio nacional e internacional acrecentado, que tiene, con su propia autonomía, etcétera, ha ido conformando un grupo de colaboradores, que es la verdadera riqueza, la riqueza humana de la institución, y en la medida en que podamos fortalecerlo y hacerlo un instituto sólido, un instituto totalmente profesional, y que no dependa de ningún tipo de presión política, estoy seguro que ésa ha sido la intención del presidente Salinas, ciertamente, sería la intención de su servidor.

Respecto al segundo punto, de la exención de impuestos, decía usted: "Bueno, ¿por qué no exentar de impuestos? Yo quisiera recordarle, diputado Dorantes, que para los casos que usted mencionaba, no voy a decir que para otros casos, pero los casos que usted mencionaba de pequeños industriales, microindustriales, tenemos un régimen simplificado de forma tributaria, y le quisiera recordar en qué consiste.

Este régimen simplificado tiene tres características: Primero, es el sistema de contabilidad más sencillo que el Instituto de Contadores y los servidores públicos de la Secretaría de Hacienda, juntos pudimos encontrar. Simplemente hay entradas y salidas, no hay ninguna otra complicación, no hay inventarios, no hay correcciones inflacionarias, no hay posición monetaria, ninguna de estas cuestiones; simplemente, todo; lo que ingresa se acumula y todo lo que sale se deduce, son entradas y salidas.

Desde el punto de vista de mantenimiento de operación, es el más sencillo que podemos pensar.

En segundo lugar, lo que es importante es ver qué carga fiscal promedio, están soportando estas empresas que están inscritas en el régimen simplificado.

Como usted comprenderá, la única manera de cobrar impuestos a estas empresas, es cuando sale del flujo de efectivo de la empresa para el consumo del dueño. En ese momento sí se paga un impuesto.

Pero piense usted en una empresa que está en el régimen simplificado, que tiene enormes utilidades pero que se está reinvirtiendo todo, ¿cuál es la carga fiscal para esa empresa? Es cero, es cero por Ley, diputado. No hay impuesto en el caso de reinversión de utilidades de las empresas del régimen simplificado.

Entonces, el único impuesto es cuando el dueño de la empresa tiene que retirar cierto nivel de recursos para su propio consumo. En ese momento sí se cobra un impuesto.

En promedio las empresas que están en este régimen simplificado, en promedio, lo que

hemos observado, es que tienen una deducción de dos terceras partes del impuesto sobre la renta actual. El impuesto sobre la renta actual es del 35%, y estas empresas en promedio pagan 12% del impuesto. Muchas gracias, diputado.

El Presidente:

Tiene la palabra la compañera diputada Luisa Alvarez Cervantes, del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional.

La diputada Luisa Alvarez Cervantes:

Señor Secretario; en el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional mantenemos una preocupación.

Reiteramos nuestra preocupación con la concentración del ingreso. Existe un abismo entre una minoría privilegiada, concentradora de los beneficios del desarrollo nacional y una mayoría, a nuestro juicio, excluida, que ni siquiera la posibilidad de un salario decoroso tiene para vivir dignamente.

El problema, a nuestro juicio, no es el mecanismo de distribución de acciones; el problema es que en las cuentas nacionales el salario sigue cayendo.

Según los datos que tiene el INEGI, en el ingreso nacional disponible de 1980, de 1988 y de 1991, la tendencia de las remuneraciones a los salarios sigue cayendo. Nuestra pregunta es: ¿qué nuevos mecanismos a su juicio se deben de implementar para revertir esta tendencia aún a sabiendas de que en los últimos años ha habido una orientación del gasto al área social? Por sus comentarios o respuestas, muchas gracias, señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Con su venia, señor Presidente:

Diputada Luisa Alvarez Cervantes, usted externa con claridad su preocupación sobre la distribución del ingreso, es bien sabido y ahí están los datos de la encuesta ingreso - gasto de 1992 de estos problemas, ya me he referido a ellos. Pero dice usted: ¿Qué hacer? ¿Dónde está la posibilidad de avanzar en materia de distribución del ingreso y distribución de oportunidades?

Bueno, yo creo que las tesis que se han planteado aquí han sido bastante consistentes y se ha ido avanzando en ellas, yo creo que son básicamente sí, en primer lugar, punto número uno, bajar rápidamente la inflación, ¿por qué? Porque la inflación es el impuesto más injusto que puede haber, golpea más al que menos tiene, ayuda más al que más tiene. El impuesto inflacionario es un impuesto regresivo, es un impuesto injusto y es un impuesto que termina por lacerar y por destruir el tejido social.

Entonces yo diría, punto fundamental para corregir en verdad la distribución del ingreso, condición necesaria, ciertamente no suficiente, pero condición necesaria, una disminución fundamental, bien basada, no con represiones temporales y efímeras de precios, sino una verdadera estabilización de los mismos.

Segundo. El segundo punto se refiere a ligar la evolución de los salarios a la productividad. Decía usted, diputada Cervantes, que el salario sigue cayendo respecto a la distribución funcional del ingreso que publica el instituto nacional de estadística, la respuesta no es ésa. Se ha estabilizado, pero se ha estabilizado en un nivel muy bajo, o sea, que tampoco es digamos como para estar muy satisfechos de esta cifra, ya no está cayendo, es cierto, se ha estabilizado pero a nivel bajo

Yo creo que es importantísimo el que los salarios estén cubiertos por la inflación, la primera parte por pequeña que sea y que estén ligados a la productividad, ¿por qué? Porque con la apertura comercial y con las posibilidades que seguramente tendremos hacia futuro con las posibilidades de acceso al mercado más grande del mundo, la posibilidad de ligar salarios a productividad en verdad lo que significa es la posibilidad de incrementar en términos reales los salarios, y claramente eso es lo que significa.

El tercer punto, el sistema fiscal. Yo creo que el sistema fiscal tiene que ser un sistema fiscal progresivo que tenga cargas, las más bajas en la parte baja de la tarifa y cargas, las más altas soportables en una economía abierta en la parte alta de la tarifa.

Usted me dirá, ¿por qué no tener en la parte alta de la tarifa, en lugar de tasas del 35%, tener tasas del 40%, 50%? La razón usted la conoce, diputada, es que en una economía abierta, si las tasas al margen se van a tasas del 40%, 50% y 60% en personas físicas, inmediatamente corremos el enorme peligro de que la tributación se haga en el extranjero, entonces muy buenas intenciones y pésimos resultados, porque nos va a erosionar la recaudación, la base gravable, y volveremos a generar inflación porque no

tendremos ingresos suficientes para financiar en forma sana, en forma responsable el gasto público.

En cuarto lugar, y aquí hay un punto fundamental en términos de distribución del ingreso, es la reordenación del presupuesto de egresos de la Federación. En la reordenación que se ha venido haciendo, diputada, de ir quitando recursos de un sector industrial paraestatal deficitario, en el cual las pérdidas han sido cuantiosísimas y en donde nunca hubo una intención política clara de tener bajo el dominio público empresas, como la Productora de Planchón, donde se perdieron miles de millones, miles de millones de nuevos pesos, y cortar las pérdidas ahí y trasladar esos recursos del pueblo de México que se estaban destinando a apoyar la operación deficitaria de Planchón, de las aerolíneas, de los fertilizantes, etcétera y trasladarlos a la educación, creo que es una medida, sin duda, de gran progresividad y de gran avance social.

¿Por qué es tan importante el gasto en educación? El gasto en educación es absolutamente crucial en una sociedad con las enormes desigualdades, como la nuestra, porque da activos permanentes al niño, a la niña, al estudiante para que independientemente de su origen, independientemente de su medio, a través de una buena educación, pueda progresar, y la educación en este sentido nos abre esa parte tan importante del tejido social que es la permeabilidad de una sociedad. Una sociedad con buena educación pública tiene permeabilidad; una sociedad con mala educación pública no tiene permeabilidad social y va simplemente repitiendo los patrones de concentración del pasado y no hay nada, en este caso, más preocupante que la repetición de una injusticia. Quiero recordarle, diputada, que durante el Gobierno del presidente Salinas, el gasto en educación ha crecido, incluyendo éste, de 1994, que está a su consideración, en 101%, en términos reales, en términos del poder adquisitivo.

Otro punto importante, es el gasto en lo social en materia de salud y de infraestructura urbana básica. Piense usted, diputada, simplemente en la enorme ventaja que puede tener un muchacho, una familia que tenga acceso a la seguridad social versus una que no la tenga; una enfermedad, cuestiones de nutrición, etcétera, es fundamental.

Y, por último, y ahí termino, además del mayor gasto social, un sexto punto, es volver a crecer por encima de la tasa de crecimiento de la población, y ojalá que podamos volver a crecer aceleradamente, y esto en nuestro país significa crecer a tasas alrededor del 6%, se puede hacer, se puede hacer con estabilidad de precios, se puede hacer con avance social. La generación de los 50 y los 60 así lo probó al tener durante 30 años, un crecimiento promedio del 6.6% del producto con únicamente una inflación promedio anual del 4%.

Y aquí termino diciendo, que como veíamos al hablar de las medidas de erradicación de la pobreza, el crecimiento económico, además del gasto social y la reducción de la inflación, son un punto vital para sacar de la línea de pobreza extrema a ese porcentaje aún tan numeroso de mexicanos. Muchas gracias.

El Presidente: Muchas gracias. Tiene la palabra el diputado Raúl Alvarez Garín, del Partido de la Revolución Democrática.

El diputado Luis Raúl Alvarez Garín:

Muchas gracias. Señor Secretario:

A estas alturas ya se han tratado una cantidad de temas, sin embargo, yo quisiera, primero, resaltar una coincidencia con muchas de las preguntas que se han hecho y está en torno al problema de la información. Yo preparé unas notas en donde el eje central está en esta circunstancia de la información que se tiene en el Poder Ejecutivo y cómo finalmente se le da a conocer al público y al Poder Legislativo, y trato una serie de cosas, algunas pueden parecer muy elementales, muy menores, muy incidentales y otras están en un terreno en el que hay implicaciones políticas fuertes.

En general, es éste cuestionamiento de las cifras, yo quisiera generalizar diciendo que independientemente de todas las observaciones que nos ha hecho del INEGI, que es quien está en el centro, creo que políticamente es muy delicado que se haya entrado en una situación de incredibilidad con respecto al INEGI.

Esto sucedió a principios de año en torno a la discusión de cómo habían mejorado los salarios, las remuneraciones manufactureras y cuáles eran los incrementos que se daban a la productividad en este sector. Y el debate se dio precisamente entre el sector académico del país y el INEGI.

Y ahora tenemos otro incidente donde cómo se han modificado estas cifras en torno a la pobreza

y la relación que se tiene en el trabajo del INEGI y CEPAL. Y también hay una serie de observaciones de carácter político en donde CEPAL relativamente pero guarda su distancia respecto a estos trabajos a los que califica como todavía inacabados.

El caso es que creo que sí podríamos admitir en general que hay una situación de incredibilidad que se manifiesta en la sociedad y que se ha manifestado hoy aquí.

Ahora, digo que son detalles incidentales algunos, porque se puede dar una explicación casuística de cada uno de ellos y relativamente remontar la situación, pero el conjunto no se remonta y persiste esta situación.

Por ejemplo, yo quiero decir que nuestras dudas y nuestra inconformidad y nuestra incredibilidad respecto a estas cosas, pues se ve en los propios documentos. Por ejemplo, en la página 118, en donde nos presentan un cuadro de evolución económica estimada, el subtítulo nos dice "Producción y Empleo" y en los tres rubros, no hay una sola referencia a empleo.

Pero le quiero decir que es más que eso, porque ustedes que tienen una serie de instrumentos muy poderosamente desarrollados, que tienen modelación matemática, que tienen estadísticas, que pueden diseñar una encuesta y ejecutarla para estudiar un problema así, no arriesgan un sólo dato en lo que se refiere a empleo. No dicen ¿cómo va mejorar?, nunca; no arriesgan un dato así al público al decir: Ahora que vamos a hacer esta nueva política económica, va a suceder esto. Y estimamos tal y tal cosa en esta cuestión del empleo que es lacerante. No arriesgan nada.

Y hoy nos enteramos también de cosas que pues alarman. Por ejemplo, cuando se habla de que los salarios van a aumentar con la productividad, pues todos pensamos en las cifras que ustedes dieron de la productividad del sector manufacturero, que era del 28%, del 30%... perdón, entonces, estábamos pensando en las cifras que dieron para el sector manufacturero, que eran 28% y 30% y hoy usted hace unos instantes, nos dijo que era la productividad promedio de la economía y la estimó en un 2% generosamente. Bueno, entonces digamos, contrasta; contrasta muy notablemente estas cosas que en estos problemas que son los que más preocupan a los trabajadores, ustedes esconden la información o la utilizan en su beneficio.

Mire por ejemplo, la deuda, alguno de mis compañeros recordó antes se hablaba de la deuda externa total, hoy nada más nos hablan de la deuda pública y nos dicen que la privada por ahí anda. Pero cuando hablan del gasto en educación, entonces ustedes sí consideran el gasto total y ahí si incorporan el gasto privado. Y le doy la página en donde está ese asunto, entonces se está haciendo un manejo sesgado.

Cuando les conviene agrupar las cifras, las dan agrupadas y cuando les conviene darlas por separado, las dan por separado. Esto simplemente lo presento como panorámica general de la situación que está en el centro, creo que hay un grave problema de información entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo, para decir lo menos.

Bueno, pero más todavía: yo creo que ha habido unos cuantos casos, y podía mencionar varios, que son significativos de esta relación entre poderes en donde está de por medio una cuestión de información esencial.

El caso del Seguro Social, nosotros estábamos esperando una información absolutamente importante precisamente con observaciones que usted había hecho, respecto a que el SAR iba a tener un significado de que los trabajadores iban a poder controlar la evasión de los empresarios en la cotización al Seguro Social. Cuando el director del Seguro Social habló que tenía 1 mil 300 millones de nuevos pesos, que le sobraban, pensamos que la explicación estaba precisamente en eso, ¿verdad?, en que ya habían comenzado a cotizar los patrones ante la amenaza y que existía ese excedente y que se podían utilizar para ciertas cosas. Bueno.

Cuando se vino toda la reforma, ya lo hemos comentado, finalmente la información que se dio fue diferente en distintos de los actores y eso me da mucha pena pero lo podría comprobar. No estoy diciendo ninguna exageración ni mentiras, fue información distinta. Y la que se le dio a la prensa y a los patrones, era para entender cuál era el fondo del problema y la que se dio en comisiones era aparentemente técnica pero ocultaba el fondo de la situación. ¡Aparentemente técnica!

Ahí además hay una crítica concreta que hacerles, porque yo creo que se excedieron funciones. Ustedes negociaron aparte del Poder Legislativo, con los organismos patronales, la derogación de un impuesto. Yo entiendo que el principio de legalidad no permite ese tipo de cosas. O sea, evidentemente, usted puede decir que tenían toda la soberanía, para finalmente aprobarlo o no aprobarlo. Pero la verdad es que era un hecho, vamos a decirlo, relativamente consumado porque faltaba la formalidad del Poder Legislativo.

Pero aquí nos llegó ya una negociación en la que estaba incluida la abrogación de un impuesto, con lo cual resultó que la patronal no pagaba el 1.2%, sino el .2%, y además ni siquiera tuvo el efecto positivo, sino que provocó una oleada de protestas en los sectores patronales que hoy todavía están reclamando participación en los organismos dirigentes del Seguro Social y yo digo que éste es un error político que cometió la Secretaría de Hacienda, porque la negoció. Bueno.

Más todavía, y lo quiero decir. Empezamos a estudiar el caso de Teléfonos de México, y lo quiero decir aquí, porque está incompleta la discusión. Tuvimos un par de sesiones, una con el señor Rogozinsky y otra con un subsecretario de Comunicaciones, y no continuó la discusión.

Y ahí nos encontramos con una serie de características de la operación. Lo quiero decir de la manera más cuidadosa del caso. A mí me parece que dada la serie de estudios que evidentemente tenía la unidad de desincorporación y con los organismos con los que trabajó, y dado el carácter monopólico de esta empresa, por lo menos durante su operación anterior y unos cuantos años adelante y dada la forma en la que finalmente se iba a establecer ese título de concesión, resulta que el título de concesión, yo digo, es una legitimidad, ahí se legalizá a posterior una serie de datos, una serie de características de operación de la empresa que están terriblemente estudiados previamente y que se pueden, por decirlo así, predeterminar los niveles tarifarios, los niveles de imposición fiscal, esa característica de que la empresa puede acreditar hasta el 70% del impuesto que se le establece si justifica que lo ha invertido; una forma que tiene de indexación prácticamente de indexación con la inflación de las tarifas, un control de calidad excedido, etcétera.

Todo eso lo quiero decir muy cuidadosamente. A mí me parece que es exactamente lo que se podría llamar: "Información privilegiada". Exactamente lo que...

El Presidente:

Diputado Alvarez Garín; precise la pregunta porque nos hemos pasado del tiempo reglamentario.

El diputado Luis Raúl Alvarez Garín:

O sea, en fin, el centro de la argumentación es esto: Aquí hay problemas de información como los que mencioné al principio o tan delicados como esto que estoy señalando en este momento, en donde se trata de operaciones que están con un grado de precisión en la información tan grande que precisamente se pueden calificar en este sentido y que esa información yo no digo nada, se puede utilizar para el mejor beneficio del pueblo o no. Pero me parece que ya no debemos de espantarnos en México por hacer estas reclamaciones y preguntar qué es lo que está pasando en este tipo de cosas con todo detalle. Entonces ése es el tipo de preocupaciones.

La pregunta concreta que yo me estaba haciendo hace rato. La pregunta concreta es esta: En los Estados Unidos hay una oficina del Congreso, que es la oficina del presupuesto que precisamente estudia este tipo de cosas y que tiene independencia respecto al Poder Ejecutivo.

Nosotros podríamos pensar en la necesidad de que hubiera organismos de ese estilo. Podrían tener algunas de las funciones del INEGI y otras muchas más, y quizá agrupando funciones como las de la Contaduría Mayor de Hacienda. Pero no tenemos esos mecanismos de información y hay una situación evidentemente desventajosa. Entonces, yo sí quisiera un comentario político, general, respecto a todo ese tipo de cuestiones. Y sí necesitamos resolver un problema político, que es: que no hay credibilidad en las cifras que ha dado el INEGI.

El Presidente:

Muchas gracias, diputado Alvarez Garín.

Señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Con su venia, señor Presidente:

Nos dice el diputado Alvarez Garín que no hay credibilidad en las cifras. Lo que pasa, diputado, también, es que hay veces que ni siquiera sabemos cual es la metodología. Nos atrevemos a gritar: mentira, ¿verdad? Entonces también, también cuando no trabaja uno y no se sienta a ver uno la metodología y no se pone uno a ver cómo está esto y acudir a las reuniones.

Yo sinceramente creo que tenemos un nivel de información mucho, pero mucho mejor que en el pasado y que esta soberanía recibe una calidad de

información realmente, inusitadamente alta. Vamos a ver algunas cuestiones.

Piensen ustedes, por ejemplo esta cuestión de pobreza que se comentaba. Es muy interesante que simultáneamente está el trabajo en Chile, en Argentina, en Guatemala, en Uruguay y se me olvida algún país, además de México.

Bien. Y lo que es más interesante de todo es que se ha publicado la metodología y nadie discute la relevancia de la metodología. Simplemente la gente dice: "No puede ser o sí puede ser". Y defensa a ultranza o crítica a ultranza.

Sabemos que es un estudio que va a tomar tres años, de la CEPAL. Que lo está haciendo simultáneamente en todos estos países y que el único compromiso que tenemos es que en el momento en que está lista la información lo tenemos que publicar, porque ésa es precisamente una de las responsabilidades.

Yo creo, y en verdad, que lo que tenemos que hacer es también en estas cuestiones, y no hablo de temas menores hablo de temas como el de la erradicación de la pobreza o como la participación de los salarios, etcétera. Yo creo que lo que tenemos que hacer es trabajar mucho más y los partidos tienen que tener cuerpos especializados de gente que estudie esto con toda seriedad y profesionalismo.

Yo creo que lo más malo para el país que puede suceder es simplemente el decir: "Como esto proviene del Gobierno no sirve o como esto proviene del Gobierno tiene que estar bien".

Yo creo que nos falta mucha capacidad, primero que nada analítica, y creo, diputado Alvarez Garín, que a diferencia del pasado hay mucha más información que análisis.

Antes teníamos, yo recuerdo muy bien hace algunos años bastante buen análisis, pero muy mala información. Y había que andar haciendo muchos supuestos en muchas cosas. Y ahora curiosamente lo que tenemos es mucho más información, y me temo que el análisis se ha quedado atrás.

Piensen ustedes un poco en lo de productividad. Si usted me dice como van a evolucionar los salarios contractuales en manufacturas. Bueno, más o menos el crecimiento de la productividad en manufacturas, en promedio, está creciendo alrededor del 6.5% ó 7% anual. Y están las cifras, cuánto en textiles, cuánto en metalmecánica, etcétera, ¿no? Pero todos sabemos también que hay sectores como el de servicios donde crecen menos y hay sectores donde la productividad es negativa. Como en ciertos sectores de la agricultura. Entonces no nos debe de sorprender que el promedio es mucho menor que manufacturas, porque manufacturas es la parte más alta.

Pero fíjese diputado Alvarez Garín: ¿Creerá usted que llevamos en el INEGI 10 años de publicar los datos de productividad y que práctica mente, salvo algunas instituciones de educación superior de excelencia muy connotada, pero prácticamente no se estudia?

Y esto es algo muy preocupante, y muy preocupante en los partidos y muy preocupante también en el Ejecutivo. Pero yo creo que se están haciendo cada vez mejores publicaciones.

Por ejemplo me decía usted: "Por qué en el empleo no dan los datos".

Si los damos. Déjeme platicarle del informe trimestral. Por ejemplo, estamos dando datos de tres tipos: damos el empleo en manufacturas, que se otorga mensualmente y en el informe trimestral hacemos el resumen; también tenemos la encuesta de la construcción y la encuesta comercial, también los publicamos; y luego hemos estado publicando unos datos del Instituto Mexicano del Seguro Social, que se llama el rubro de cotizantes. Inclusive usted podrá ver por qué creemos que es mucho mejor el número de cotizantes que el número de asegurados permanentes. La razón es muy sencilla, el número de asegurados permanentes creemos que no es el mejor indicador censal del empleo en el sector privado, ya que incluye algunas categorías o que no son trabajadores o porque el aumento o disminución de éstas no está directamente ligado a creación o reducción de puestos de trabajo.

Déjeme darle cinco ejemplos. En el número de asegurados están los estudiantes, no están en los cotizantes; el seguro facultativo; la continuación voluntaria, yo puedo estar trabajando, soy cesado y sin embargo puedo dar aviso y puedo estar en continuación voluntaria, soy derechohabiente sí, soy cotizante no, porque estoy justamente saliendo; trabajadores independientes, éste es un problema adicional; y los llamados asegurados no identificados.

¿Qué nos dicen las cifras agregadas del IMSS? Las cifras agregadas del IMSS que tenemos al mes de julio dicen que, por ejemplo, el año pasado venía creciendo al 3.5% el número de cotizantes; hace dos años al 6.49%; este año únicamente el 0.31%, así dice la cifra que se publicó

en el informe. Entonces, efectivamente, no hay caídas, pero sí hay una desaceleración muy fuerte en este ramo.

Entonces, yo no creo sinceramente diputado, que haya una intención de engañar, yo creo que al contrario, yo puedo decirle sin ningún rubor, pero sin ninguno, de que cualquier tema que se ha querido tratar en el ámbito de nuestra competencia, lo hemos publicado y el INEGI lo publica, y nadie creía que íbamos a publicar que la cuenta corriente llegó al 6.8% del PIB y decían: ¡seguramente no lo van a poner!; se publicó, inclusive en el pronóstico nos quedamos arriba ligeramente.

Entonces nunca ha habido engaño. ¿Usted cree diputado Alvarez Garín que si hubiera intención de engaño por parte del Gobierno del presidente Salinas, usted cree que cuando todos los pronósticos del sector privado en esta coyuntura mostraron 2% del crecimiento del PIB este año, hubiéramos puesto el 1.1%? Esto fue una sorpresa para muchísima gente, sin embargo yo creo que es lo profesional, lo honesto que se debe de hacer y en eso lo hemos publicado.

Dice usted que le preocupa cuando nosotros tenemos contacto con los sectores y se llega a algunas negociaciones antes de llegar al Congreso. Yo creo que esto es una cuestión bastante común en muchos lugares, y usted lo conoce diputado, en qué medidas de enorme trascendencia se tratan por lo menos de discutir con ciertos sectores antes que el titular del Ejecutivo Federal lo envíe a la consideración de las cámaras.

No creo que sea una práctica que tenga ningún problema de moralidad, un problema de legitimidad política, sinceramente no lo creo, como tampoco creo que nos debamos nosotros de molestar si la Cámara quiere directamente platicar con los sectores relevantes, nada más faltaba, ésas son sus atribuciones, exactamente igual que el Ejecutivo las tiene.

Veamos un poco esta cuestión de Telmex diputado, porque a mí lo que me preocupa de esto es que hemos dado muchísima información. Por cierto tengo entendido que las tres auditorías que se hicieron a cada una de las operaciones están terminadas. Se hizo la primera colocación, se acuerdan ustedes, fueron las acciones del grupo de control, donde el Grupo Carso, Sadwestenbell y Franstelecom ganó, después hicimos dos colocaciones internacionales en los países, yo estuve al frente de ellas, y la información que hay es enorme, riquísima información. Usted toca algunos temas que a mí sinceramente sí me gustaría tocar y no dejar pasar, porque aunque es cierto que usted estuvo muy respetuoso de esto y no hizo ninguna insinuación, sí, como que hay un problema digamos de qué hacer cuando se privatiza una empresa como Teléfonos de México o los bancos que tienen cierto poder monopólico y yo creo que el tema no hay que rehusarlo, es un tema importante y hay que simplemente debatirlo y discutirlo. Miren ustedes, ¿cómo se han privatizado los teléfonos en el mundo?, Yo aquí sí quisiera pedir, señor Presidente, si pudiera extenderme unos dos o tres minutos más, por favor, gracias. ¿Cómo se han vendido las empresas telefónicas en el mundo? Veamos por ejemplo una de las ventas muy exitosas que fue British Telecom que fue vendida en Gran Bretaña, pero hay algunas otras como la empresa en Singapur o la alemana que está ahora por venderse, como la privatización de los teléfonos en Argentina, en Nueva Zelandia, o sea, no es un caso aislado, es un caso bastante común en muchísimos países del mundo desarrollados, en vías de desarrollo y yo lo que quisiera comentarle es lo siguiente.

En primer lugar siempre que se vende una empresa que tiene cierto grado de poder monopólico es absolutamente fundamental venderla con un título de concesión ¿por qué? Bueno porque los monopolios privados requieren de un título de concesión que mantenga en control las tarifas, la inversión, una serie de cosas porque no se puede dejar al libre mercado, porque precisamente hay un grado de competencia escaso o un grado de monopólico en cierta medida. ¿Cómo funcionó esto? Hay dos teorías para privatizar los teléfonos y yo los estudié muy a fondo; una primera teoría es partir la empresa en cuatro o en cinco o en seis, que es lo que hizo el juez Green en los Estados Unidos y partir la empresa por regiones y eventualmente permitir que haya más competencia en las regiones. Esta es una manera como eventualmente se llega a la competencia, se parte primero la empresa, eso quiere decir que las subempresas tienen poder monopólico en la región pero que eventualmente en la región va a haber más competencia, ésa es una vía.

Y hay otra vía que es donde se mantiene la empresa integral y se dice, muy bien, ¿cuáles son las tres o cuatro áreas donde típicamente ocurre mucha competencia y cuáles son las áreas donde hay cierta capacidad de monopolio natural, déjeme tratar de explicar qué es esto. Un monopolio natural es por ejemplo la telefonía local, piensen ustedes en una empresa telefónica que ya hizo los agujeros en las calles, parchó las calles,

etcétera, esa empresa tiene una ventaja enorme sobre cualquier otra que quisiera llegar a entrar a telefonía local, porque tomaría tantos años para poner toda esa red que prácticamente hay una barrera natural de entrada. Entonces lo primero que se dijo es, telefonía local tenemos que tener un título de concesión porque las entradas, las barreras naturales a entradas son tan grandes que tenemos que controlar; y segundo, ¿qué se hizo? Se abrió a la competencia, aquí diputado Alvarez Garín, quizá usted lo recuerde, está abierto, totalmente abierto a telefonía local, pero por supuesto no ha entrado otra empresa por los enormes gastos que requieren para instalarse.

Muy bien, el segundo término era todos los llamados productos de valor agregado, ¿cuáles son esos? Básicamente celulares, fax y algunos otros productos derivados, pero celulares y fax tienen el 70% del mercado, ¿cuál fue la idea aquí?, abrir inmediatamente a competencia, inmediatamente, desde antes de privatizar la empresa, siendo la empresa pública yo era su presidente del consejo, se abrió inmediatamente el fax y todos los celulares en el país. Entonces la única parte que quedó realmente de monopolio y digámoslo como es, de monopolio poco usual, es la parte de telefonía de larga distancia tanto nacional como extranjera y ahí sí se podía abrir inmediatamente, pero teníamos nosotros subsidios cruzados, ¿qué era en lo que se había hecho?, típicamente en todos los países cuando fueron las empresas telefónicas públicas lo que se hizo fue reprimir el precio de la telefonía local y cargar el precio de larga distancia. Esto toma mucho tiempo ir rebalanceando los precios y lo que se hizo fue título de concesión que fueran rebalanceados los precios a lo largo de cuatro años para que al final del cuarto año se abra a competencia externa; por cierto ahí hay una pregunta muy interesante, porque el título de concesión dice que se abrirá a partir del 1o. de enero tal, etcétera, y sé que hay varias empresas extranjeras que dicen muy bien, nos gustaría que la licitación fuera mucho antes para poder hacer las inversiones y entrar a operar en esa fecha y no que el concurso sea en esa fecha y las inversiones sean dos años después y creo que hay un punto muy interesante ahí.

Entonces, qué partes tiene el título de concesión. El título de concesión tiene tres partes. La primera es que no pueden mover a su arbitrio la tarifa; de hecho, las tarifas tienen cierta pérdida en términos reales a través del tiempo porque estaban en algunos casos ya altas.

Segundo, entonces, ahí, durante la transición donde sí hay un poder monopólico y se dice, se tiene que controlar tarifas. Muy bien. La segunda parte, la segunda parte es la más delicada. ¿Qué hacer con telefonía rural?, ¿qué hacer con los cientos de miles de poblaciones en todo el país?, que no tienen teléfono y que la empresa telefónica los podría llevar a cabo, pero que no es rentable en el sentido privado del término, llevar muchas veces esos teléfonos que obviamente son llamadas pues bastante modestas en lugares donde no hay ingresos tan altos, donde no hay una rentabilidad privada.

Y ahí, lo que se puso son una serie de condiciones donde la empresa le guste o no le guste, tiene que poner dos servicios, telefonía rural y servicios públicos, casetas en esquinas, etcétera, y ahí la verdad los datos son espectacularmente buenos, hasta ahora. Está creciendo telefonía rural alrededor, voy a checar después y yo le mando a usted los datos exactos, pero la última evaluación, al 20% real por año.

Lo que es estupendo de todo esto, es que si la empresa sigue creciendo, a ese tamaño, prácticamente en cinco años se va a cubrir todo lo que queríamos de telefonía rural en el país. Entonces, esto es muy bueno ¿por qué? Porque la empresa está tomando recursos del exterior, etcétera, sin presionar las finanzas públicas y desarrollando una labor eminentemente social que sí es importante y está en el título de concesión.

¿Cuál es la otra parte que es muy importante?, que es la modernización de cambiar toda la red hacia un sistema digital, y aquí es donde entraba el problema del impuesto que alguna vez hace poco tuvimos la oportunidad de platicar.

El miedo normal del privatizador es que la empresa al ser privatizada no vaya a invertir suficiente, genere un flujo de caja enorme, utilidades enormes, que el título de concesión se evalúe un año después, que se diga no cumplió con el título de concesión, se tiene que revertir, pero mientras tanto el flujo que generó es de tal tamaño que pudiéramos tener en verdad un escándalo genuino, una cosa realmente de preocupación. Fue por eso que Francisco Gil, el subsecretario de ingresos se le ocurrió montarle un impuesto especial a la empresa durante esta transición, para que si la empresa no invierte suficiente, inmediatamente tiene un impuesto especial que se monta sobre el impuesto normal y le seca toda la caja.

Y esto lo expliqué yo aquí hace algunos años, lo expliqué que éste era un impuesto temporal que precisamente se quita en el momento que entra la competencia internacional porque ya

entrando la competencia internacional, ya no tenemos porque tenerla.

Entonces, yo creo diputado Alvarez Garín, perdóneme que lo diga y créame que lo digo de buena fe, yo creo que información hay, yo creo que no hay engaño, yo creo que lo que nos pasa y lo que nos falta es vernos más seguido, platicar más, dialogar más. Yo creo que ha sido malo el distanciamiento, no creo que sea bueno para el país, no creo genuinamente que sea para la nación bueno, y en la medida en que podamos tener un contacto mucho más cercano, podremos compartir con ustedes toda la información, podremos seguramente tener mejor política económica y seguramente podremos controlar mucho mejor el que nuestras visiones, un tanto unilaterales, a la hora que se comparte la información y que se reconoce que bien, estamos en distintos lados y podemos ser adversarios pero ciertamente antes que todo somos mexicanos y tenemos que trabajar en bien de la nación.

Ojalá, queda un año, pero un año que puede ser muy fructífero, ojalá que podamos trabajar más con usted y con su partido. En términos de la Secretaría de Hacienda, yo se los digo en verdad, por ejemplo, con el Partido Acción Nacional, por ejemplo con el Partido Popular Socialista, hemos tenido el privilegio de platicar muy seguido; yo creo que con Acción Nacional veo caras que dicen: bueno, sí, pero no coincidimos en muchas cosas. Cierto, lo sabemos, pero yo creo que si hemos tenido 20 reuniones este año son pocas, yo creo que es muy bueno. Yo ciertamente aprendo de las reuniones y creo que también muchos problemas que parecerían una cuestión de engaño o de mala fe, en el momento que nos sentamos y platicamos, oye, mira, esto es así por esta razón, etcétera, podemos suavizar. Tenemos bastantes diferencias en ocasiones, en cuestiones de principios y de valores. Que la información no sea un tema que nos separe, sino al contrario, un tema que nos una. Gracias, diputado Alvarez Garín.

El Presidente:

Muchas gracias, señor Secretario.

Tiene la palabra el diputado Alfredo Lujambio Rafols, del Partido Acción Nacional.

El diputado Alfredo Lujambio Rafols:

Muchas gracias, señor Presidente:

Señor Secretario, sobre esta última afirmación que hacía del número de veces que hemos tenido oportunidad de reunirnos, yo quería nada más hacer la precisión de que por lo que toca a un servidor miembro de la Comisión de Programación y Presupuesto, no he tenido oportunidad más que de reunirme quizá dos o tres veces en este año con usted.

Probablemente algunos compañeros míos se hayan reunido en otras oportunidades, pero no he tenido conocimiento. Tendríamos otra vez que ponernos a cotejar cifras.

Por otro lado, quisiera empezar mis planteamientos retomando parte de las preguntas que hizo el diputado Hamdan, que me pareció en alguna de ellas que no hubo una respuesta suficientemente amplia, suficientemente, digamos, adecuada al sentido que llevaba la pregunta. El diputado Hamdan hablaba de que sería muy conveniente el que la Secretaría de Hacienda pensara en una eventual reducción de la carga tributaria o eliminación de la carga tributaria, a aquellos salarios de hasta cuatro veces el mínimo.

La respuesta de usted fue un poco lacónica, señor Secretario, porque usted comentaba que también le gustaría reducirlo, pero, pues simplemente que aparentemente no había manera de lograr tal propósito.

Yo quisiera hacerle a este respecto una pregunta muy concreta: ¿Considera usted que no sería posible el reducir la carga tributaria como lo proponía el compañero Hamdan, a trabajadores hasta de cuatro veces el salario mínimo que ha quedado perfectamente demostrado que es la parte que más ha sufrido de la recesión que estamos viviendo actualmente? Pero la pregunta es ésta: ¿Considera usted justo, equitativo, razonable, que en tanto que trabajadores de hasta cuatro veces o cinco o seis salarios mínimos, sí van a tener que pagar un impuesto?

Los grandes especuladores en la bolsa de valores, los grandes capitales que se han amasado precisamente en estos últimos años, sigan permaneciendo exentos y que todas estas fortunas de las que nos han dado cuenta y a las que nos hemos referido en repetidas ocasiones, que se han amasado muchas de ellas con especulaciones verdaderamente desproporcionadas en la bolsa, ¿es justo que ellos no paguen impuestos sobre estas utilidades? Esa sería mi primer pregunta.

Usted en una de sus intervenciones anteriores mencionó, y yo concuerdo con la afirmación que usted hizo, de que no se trata solamente de gastar más y de gastar por gastar, se trata de gastar bien. Yo creo que la afirmación estamos

plenamente de acuerdo. Sin embargo nosotros añadiríamos que se trata de acreditar fehacientemente ante la Cámara de Diputados, ante el pueblo de México, este hecho, el hecho de que en México se está realmente gastando bien los impuestos de que no hay desviaciones ni conductas dentro de los servidores de la administración pública central o paraestatal, que establezcan esa falta de credibilidad de que nos hablaba otro compañero diputado hace un momento, o esa falta de confianza más bien, muy extendida en un amplio sector de la población mexicana, de que en México no se administra bien el erario público.

Entonces, un ejemplo que le voy a poner para ilustrar estas afirmaciones, en relación a que se debe de gastar pero se debe de gastar bien, yo digo hay que acreditarlo adicionalmente el que se esté gastando bien.

En el Presupuesto de Egresos, en el tomo I, la página 268, donde vienen los sueldos mensuales de servidores públicos superiores de la administración pública centralizada, observamos por ejemplo salarios que verdaderamente resultan, pues hombre, que serían materia de una consideración y un análisis serio de esta Cámara, porque creo yo que lo que está señalado en el presupuesto resulta francamente anacrónico, y que nos hace precisamente, nos reafirma en las dudas, en las suspicacias que a veces surgen al estar leyendo los documentos públicos, por ejemplo el director general y secretario particular de un Secretario de Estado tiene un ingreso neto de 5 millones 845 mil viejos pesos, o sea 5 mil 845; el coordinador general de Secretaría de Estado, tiene un sueldo igual, de 5 mil 845 nuevos pesos mensuales. Estoy hablando de salarios netos. El Oficial Mayor, 9 mil 224, el subsecretario de Estado la misma cantidad, el Secretario de Estado, o sea como es el caso de usted, tiene un salario de 9 mil 678 pesos con 15 centavos, y finalmente el Presidente de la República un salario de 13 mil 881.20.

Yo le preguntaría señor Secretario, si en alguna parte del presupuesto, que es un documento de muchos tomos, hay alguna explicación de cuáles son las remuneraciones adicionales, compensaciones, gastos de otro tipo, gastos de relaciones públicas, cuáles son los ingresos reales de un Secretario de Estado, cuáles son los ingresos reales del Presidente de la República, porque realmente nos cuesta trabajo creer que sean esas las remuneraciones totales.

Yo creo que si se analiza la forma en que viven los señores secretarios, los altos funcionarios del Gobierno Federal, no correspondería ni remotamente a estos ingresos. Yo quisiera que usted nos señalara entonces hasta dónde este presupuesto, en algunos de sus datos, no puedo generalizar, es verídico como en éstos que acabo de mencionarle.

En el mismo cuadro por ejemplo se menciona que el fondo de retiro es de siete pesos con 90 centavos para todos estos importantes servidores.

Aquí también surge una pregunta, ¿qué pasa cuando se retiran los servidores, los ex presidentes, los ex secretarios, cuáles son los niveles de remuneración y de prestaciones que reciben, porque no aparecen en ninguna parte del presupuesto? Me gustaría que nos mencionara también este asunto del fondo de retiro, que me parece una cifra irrisoria, viene siendo, no sé, un 2%, un 4% tal vez del total del salario neto que perciben los funcionarios.

Y en el análisis preliminar del presupuesto, y digo preliminar porque no es posible que en unos cuantos días podamos examinar con toda la amplitud necesaria, tanto el presupuesto de egresos, el decreto, la iniciativa de decreto, surgen algunos datos que tienen que ser cotejados necesariamente con otros elementos de información, es decir las cifras solas, por sí las cifras del presupuesto no son suficientemente elocuentes para sacar toda su significación, hay que cotejar, por ejemplo, con presupuestos anteriores, con otros documentos que permitan evaluar mejor el significado de las cifras.

Esto nos llevó a hacer una revisión de la cuenta pública de 1992, e inclusive de otras cuentas anteriores; recurrimos a algunos de los documentos que ha expedido tanto la Contaduría Mayor de Hacienda, como es el informe de resultados, informes también de los dictámenes de los auditores externos. Y vemos, por ejemplo, que para la Secretaría de Hacienda, en el año de 1992, esto lo planteamos en una reunión de comisiones, se habían aprobado 2.68 billones de viejos pesos, que se gastaron en realidad 7.49 billones.

Cuando lo mencionamos en una Comisión, en la que comparecían algunos de los señores subsecretarios, se nos dijo, por ejemplo, y me adelanto de una vez, que es que no estábamos considerando el presupuesto de la Secretaría de Programación y Presupuesto, que fue incorporada, fusionada a la Secretaría de Hacienda y que eran aproximadamente, pero esta diferencia solamente justificaría aproximadamente 800 mil millones de viejos pesos, de un total de exceso en el gasto de 4.81 billones. O sea, el exceso fue de un 179%.

Es cierto que en esa reunión de la Comisión algunos otros subsecretarios y funcionarios nos dieron algunos otros datos referentes a que se habían dedicado parte de esos recursos para erogaciones para saneamiento financiero, si mal no recuerdo, en fin, se nos dieron algunas explicaciones que no nos resultaron del todo satisfactorias.

La Secretaría de la Reforma Agraria también en 1992, tiene un presupuesto de 422 mil millones y ejerce 1 billón 131 mil millones, es decir, rebasa en un nada modesto 165% el presupuesto aprobado por la Cámara.

La Secretaría de Turismo también ejerce un gasto superior en un 120% al que fue originalmente aprobado por esta Cámara.

Podría seguir dando muchos más ejemplos que ya omito por no extenderme más de lo que quisiera, pero la conclusión simplemente en esta falta de apego del presupuesto que la Cámara aprueba y el gasto que realiza realmente el Ejecutivo es verdaderamente pasmosa, las diferencias que se dan en muchas secretarías.

Realmente hay personas que se preguntan: bueno, ¿qué sentido tiene que llegue un presupuesto a esta Cámara que simplemente no va a ser respetado, que se va a variar de una manera muy discrecional, en donde encontramos al final del ejercicio este tipo de desviación? Es decir, ¿cuál es el sentido real de que estemos discutiendo, analizando, un presupuesto para 1994, que ya de antemano sabemos que no se va a respetar en la mayoría de las partidas, como demuestra la experiencia? Inclusive alguien decía que el presupuesto debería ser reducido a una sola página, en donde dijera, algo así me apuntaba una persona, que dijera: "El Ejecutivo Federal queda facultado para ejercer el gasto conforme a su buen juicio y su mejor criterio lo determine".

Pues esto desde luego sería aberrante, pero en términos prácticos y de la experiencia vivida, así ocurre. No hay un apego del Ejecutivo a lo que aprueba la Cámara, hay unas desviaciones verdaderamente impresionantes que yo no sé si en otros países también se den, pero desde luego, algo está pasando ahí o no hay capacidad de presupuestación o hay un desorden muy grande en la administración.

Yo tengo algunas otras más preguntas. Por ejemplo, el 45% del total del gasto de 1994 lo van a ejercer las entidades paraestatales. Esto pone en entredicho, en mi opinión, la afirmación de que ya estamos dejando aquel viejo esquema de Estado - propietario, y ahora el Estado asa a ser solamente un rector de la economía.

El 45% del total del gasto público de 1994 va a ser, se lo van a llevar las entidades paraestatales. Las transferencias que van a recibir las entidades paraestatales, señor Secretario, para 1994, también es una cifra impresionante: 52 mil millones de nuevos pesos aproximadamente, no sé, un 20% o un poco más del gasto programable.

Entonces vemos como una gran parte de los esfuerzos, de los recursos que aportan los ciudadanos, vía pago de sus impuestos, todavía se destina a satisfacer la ineficiencia, cuando no dispendio o irresponsabilidades, que frecuentemente se dan en este tipo de entidades.

Como, por ejemplo, lo mencioné en la tribuna, señor Secretario, en una ocasión. no sé si usted haya tenido conocimiento, de que el Instituto Mexicano del Seguro Social, en un sólo año paga de factoraje 368 mil millones de pesos, en un sólo año.

Sabemos lo que es la operación de factoraje, es una operación mercantil que utilizan las empresas para financiarse, aunque a un costo mayor. ¿Cómo es posible que el Seguro Social destine una partida, éstos son datos de la Contaduría Mayor de Hacienda, una partida, estoy hablando de 1990, pero tengo datos de 1991, de 1991, que ya omito, de 368 mil millones de pesos para pagar el factoraje, cuando todos sabemos que el Seguro Social tiene una gran capacidad de ejercer su facultad económico - coactiva?

Y hemos tratado de investigar el nombre de la empresa con la que se descontaron estas cobranzas del Seguro Social, hasta este momento no lo hemos logrado, se mantiene muy en secreto el nombre de la empresa y quiénes son los dueños, y sería muy bueno, y yo le pediría a usted, señor Secretario, que investigase cuál es la empresa de factoraje, y si lo tiene a bien hacérnoslo saber y qué justifica que el Seguro Social dedique partidas de esa magnitud.

Nos dice la Contaduría Mayor de Hacienda en su informe de resultados, que el 88% de los contratos de obra pública que realiza el Instituto Mexicano del Seguro Social, tienen muy serias violaciones a las leyes de esta materia; el ausentismo diario en la propia institución, lo dijo hace pocos días, pocas semanas, el director de finanzas, es de más del 30%.

Podría ahora abundar, entrar al ISSSTE, por darle algunos ejemplos de cómo las paraestatales

o las entidades que forman parte del sector y de organismos y empresas, realmente operan con un grado de ineficiencia y, yo diría, de falta de control verdaderamente escalofriante, si se toman en serio estos datos.

En el ISSSTE, por ejemplo, tratándose de evasión y elusión fiscal, señor Secretario, que usted ha, o la Secretaría a su cargo ha tenido una acción dura hacia el evasor fiscal, en el ISSSTE, por ejemplo, solamente en tres años hubo partidas por 158 mil millones de viejos pesos, que no correspondían entre los impuestos retenidos y los que habían causado los funcionarios y empleados de ese organismo.

Es decir, el ISSSTE calcula el impuesto y no lo entera completo a la Secretaría de Hacienda.

Yo quisiera también que esa energía que se aplica para castigar al contribuyente particular, al ciudadano, al pequeño empresario, o a los artistas, que hoy en día está muy de moda meternos a la cárcel, esa misma energía se viera con este tipo de entidades.

El Presidente:

Señor diputado Lujambio, le recuerdo que se ha pasado el tiempo. Ojalá pueda concluir con su pregunta.

El diputado Alfredo Lujambio Rafols:

Voy a terminar, señor, aunque desde luego también quisiera, con todo respeto, recordar a la Presidencia que en varias ocasiones al señor Secretario se le han concedido algunos minutos adicionales, y creo que también los diputados tenemos ese derecho.

En 1994 el presupuesto nos presenta una partida para el número de plazas que va a tener la Presidencia de la República. En el cuadro correspondiente, donde se detallan el número de empleados, nos indica que para 1994 igual que en 1993, la Presidencia de la República tiene 2 mil 232 plazas autorizadas, o sea más que la Secretaría de Energía, Minas e Industria Paraestatal, más que la Secretaría de la Contraloría General de la Federación, y asómbrese, señor Secretario, más que las que tiene la Presidencia de los Estados Unidos de América, nuestro futuro, o nuestro ya próximo, eminente socio comercial, que solamente tienen 1 mil 731 empleos dentro de la Presidencia, o en la partida presupuestal correspondiente.

Me gustaría también que nos hiciera algunos comentarios de usted al respecto.

Tendrían muchos más, pero voy a terminar con un cuarto punto, señor Secretario, que es, y ya muy reiterativo, pero del cual nunca podremos quitar el dedo del renglón, el de la situación de pobreza crónica que padecen, y me voy a referir muy específicamente a los municipios, no tanto a los estados, a los municipios, porque sabemos que los municipios, pues, son la fundamentación, la piedra angular de nuestro sistema federal. Pero nos sigue preocupando muchísimo y quisiera oír sus opiniones, sus comentarios, el hecho de que todos los municipios del país en conjunto, ahora son 2 mil 391, si no estoy mal informado, sólo representa, su presupuesto, aún incluyendo sus ingresos propios, no sólo participaciones, una cifra del orden del 4% ó 4.5% y estoy dispuesta a cotejarla en cualquier momento con quienes ustedes tenga a bien designar. Un 4% ó 4.5% del total de los ingresos o del total de los recursos que maneja el Gobierno Federal.

Existen muchas iniquidades, aquí hemos hablado de equidad, de justicia, y en este asunto sentimos que es verdaderamente inequitativo el hecho de que a los municipios se les siga manteniendo en estas condiciones verdaderamente precarias, lamentables. Yo estoy seguro que todos los diputados, aquí presentes, podríamos dar ejemplos cada uno de nosotros, de varios municipios y de las carencias verdaderamente lacerantes que se viven en la gran mayoría de los municipios del país.

Cuando también ahora tendremos que estarnos comparando con nuestros futuros socios comerciales, en Canadá, por ejemplo y en Estados Unidos y entiendo que en otros países de Europa, los municipios manejan entre un 40% y un 50% del total del erario público.

Yo quisiera entonces saber su opinión, si esta misérrima participación de los municipios en el gasto público la considera usted correcta, la considera usted justa y que deba persistir o habrá alguna posibilidad de que en una fecha próxima esto se empiece a atender en serio y a fondo.

Y por último, en la página 95 del tomo I, se indica como meta sustantiva algo que se puede prestar hasta para las guasas, las bromas o hacer una serie de comentarios chuscos.

Por ejemplo, el Sector Salud, nos dice en la página 95 del Tomo I, que va a otorgar el Sector Salud en 1994, 500 mil préstamos, 500 mil

préstamos a corto plazo; va a otorgar 100 mil préstamos a mediano plazo, no sabemos a quién, no lo precisa, pero entendemos que es a los propios empleados, supongo del Seguro Social o de las instituciones que forman parte del Sector Salud; 12 mil préstamos para automóvil; 35 mil préstamos hipotecarios. Verdaderamente parece como el Sector Salud fuese una institución financiera, que está dedicada a favorecer a los propios empleados que forman parte de ese sector, de manera que también quisiera su opinión.

Y luego cuando nos dicen que la Secretaría de Gobernación programará 100 mil horas de televisión para el uso de tiempo que le corresponde al Estado, 100 mil horas de televisión es lo que la Secretaría de Gobernación programará para 1994, lo dice la página 209 del Tomo I.

Cien mil horas de televisión significan sencillamente, haciendo cálculos aritméticos, que 11 y media estaciones de televisión estarían transmitiendo en forma ininterrumpida 24 horas al día, 365 días al año, los programas que determine la Secretaría de Gobernación, ¿es esto lógico? Le agradezco sus respuestas y comentarios, señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Señor diputado Lujambio, no se si voy a poder contestar todas las preguntas, pero voy a tratar de ir una por una. Haber, vamos a ver la primera. Nos dice el diputado Lujambio, algo que obviamente no he podido explicar bien, porque se lo he explicado cuatro veces, obviamente es mi culpa, haber si en esta quinta me sale bien.

Nos dice el diputado Lujambio que por qué los grandes especuladores están exentos en bolsa, bueno, vamos viendo algunos datos. Primero, el 75% de las operaciones son de personas morales no son de personas físicas, personas morales pagan impuestos por ganancia de capital.

Entonces tres cuartas partes del problema, diputado Lujambio, tranquilo, tres cuartas partes ya está resuelto. Ahora, vamos con la cuarta parte que queda, ¿qué pasa con personas físicas, ganancia, de capital por enajenación de acciones? Vamos viendo poco a poco esto porque es un tema que yo si comprendo, que la gente diga: ¡ah caray!, ¿cómo que en personas físicas sí está exento y por qué personas morales no lo está?, vamos viendo una por una.

Primero. Es cierto, los ingresos provenientes por la ganancia de capital que obtienen las personas físicas en la enajenación de acciones que coticen en la bolsa, no están sujetas a gravamen. Eso es cierto, vamos a ver qué pasaría si las graváramos, yo creo que es muy interesante y hemos hecho varios ejercicios como si las graváramos.

Vamos a suponer, que digamos: muy bien, que si ya en personas morales están gravadas, pues de una vez vamos a gravar personas físicas, y con esos montos enormes de recaudación que va a haber, a ver a qué los destinamos. Vamos a ver si el costo de la recaudación no fuera a lo mejor más grande que el impuesto y nos vaya a salir como dicen por ahí: "más caro que las albóndigas", aunque suena muy bonito esto. Fíjese, vamos a ver, decimos, bueno, vamos a empezar por gravar, pero obviamente no podemos hacer doble tributación, usted y yo estaremos de acuerdo, diputado Lujambio, que no se puede hacer doble tributación. Entonces el incremento en el valor de las acciones, por ejemplo, derivadas de las utilidades obtenidas por una emisora, no debe de hacer que el accionista, al vender esos títulos, pague el impuesto, toda vez que dichas utilidades ya pagaron el impuesto sobre la renta correspondiente.

Entonces lo que tendríamos que hacer es cumplir con el principio de integración fiscal, que está adoptado en nuestra Ley, y es que las utilidades paguen una sola vez el impuesto.

Bien, ¿entonces en el fondo qué es lo que tendríamos que hacer, diputado Lujambio?, fíjese. Teníamos que decir: muy bien, las personas físicas que realizan operaciones en bolsa van a hacer dos cosas: van a pagar el impuesto, pero como no queremos pagar doble tributación, no queremos cobrar impuesto sobre impuesto, tienen que llevar a cabo dos cálculos: primero, corrijan por inflación todo lo que haya pasado durante el período mientras compraron y vendieron, porque obviamente si yo compré unas acciones hace tres años y las vendo hoy en 120% más, pues esa no es mi ganancia, porque en estos cinco años hubo un incremento de precios, entonces lo primero es desinflar todas las utilidades nominales por el aumento en el poder adquisitivo del dinero ¿verdad? Entonces vamos a gravar utilidades reales, no utilidades nominales. Primer cálculo, bajar todo por inflación.

Segundo. Como tenemos en nuestra Ley, en la Ley mexicana el principio de integración, todo aquello que la empresa haya reinvertido, haya reinvertido, es valor real y, por tanto, lo tengo que disminuir de incremento en el valor real de mis acciones.

Si uno toma un período donde justo las acciones van para arriba, diputado, uno puede decir: ¡caray!, sí da algo de recaudación; pero por qué no hacer medias móviles de 10 años, jugar con ellas para adelante y para atrás, 10 años, y ver cuánto darían. Muy bien.

Lo que vimos al hacer todo esto. ¡Ah!, y a eso le tenemos que quitar el costo de recaudarlo, porque ese es un costo que tenemos que tomar en cuenta. Muy bien. Pero además diputado Lujambio, lo que tenemos que estar seguros es que cómo se va a pagar este impuesto, si se hace limpiamente, tengamos mucho cuidado que no vaya a ser que los corredores de la bolsa se vayan a encontrar en los pasillos y entonces si se cambien unas acciones por otras, porque entonces no pagarían el impuesto. Eso sería muy preocupante.

A la hora que hace uno todas estas complicaciones se da uno cuenta que con medias móviles corridas por 10 años, más o menos la recaudación que nos podría dar esta medida sería, números más, números menos, alrededor de 20 millones de nuevos pesos. ¡No vale la pena!, ¡absolutamente no vale la pena!

¿Por qué en personas morales sí lo tenemos. ¡Ah!, es que en personas morales queremos justamente tomar la base gravable de la empresa para que no nos vaya, con traspasos de activos, pasivos y fechas, a bajar el impuesto sobre la renta y entonces sí, tendríamos un problema enorme, no por la ganancia de capital, que le cobramos pequeña, sino por la erosión que nos haría en la base gravable.

Por eso diputado Lujambio, en la inmensa mayoría de los países hay o no hay impuestos o hay un impuesto de transacciones, simplemente ya que hemos adoptado la no doble tributación, ya que hemos adoptado el no gravar utilidades reales, es decir, no gravar utilidades nominales sino reales, con ambas correcciones nosotros veríamos que realmente el impuesto es muy pequeño y nos podría llevar a que saldrían muchísimas operaciones del cobro y entonces, simplemente el costo de recaudación sería superior a lo recaudado.

Punto número dos: dice el diputado Lujambio que realmente lo podíamos ver después en comisiones pero en fin, usted lo preguntó, lo tengo que contestar. Que por qué la Secretaría de Hacienda tiene tanto presupuesto. Yo nada más le recuerdo una cosa diputado Lujambio, creo que ésta ya también la hemos platicado varias veces.

Cuando uno depura muy bien las cifras y ve uno lo que es el ramo de Hacienda año con año, uno ve la reducción en el ramo, estrictamente hacendario incluyendo programación y presupuesto, va a ser del 46% y el 47% en seis años.

No quiero decir que no tengamos todavía cosas que sobren, pero así como dispendiosos, este, diputado Lujambio, creo que no es precisamente el adjetivo que nos merecemos. Pero ¿cuál es el problema?, bueno, diputado Lujambio por ejemplo un problema, dice el diputado: ¿cómo es posible que autoricemos de repente esto y luego aparece esto?, bueno, es que en el ramo de Hacienda diputado Lujambio, cuando se procede a una desincorporación, la empresa se resectoriza de SEMIP a Hacienda. Y si toca la de malas que la vendemos en la primera semana de enero, con los reyes magos, y no en navidad, pues entonces en la cuenta pública se entrega, esta empresa estaba sectorizada en el ramo de Hacienda hasta el 31 de diciembre. Y eso obviamente infla los ingresos y el gasto de Hacienda.

Dice usted: bueno, pero es que nosotros no lo habíamos autorizado. Bueno diputado, ustedes de acuerdo a la Ley, podemos proceder a la desincorporación y de acuerdo a la Ley podemos resectorizar las empresas en Hacienda para que haya un orden y un control. No por eso usted puede decir que hay un derroche y un desorden y que el Ejecutivo hace lo que quiere, sino simplemente hay que ver qué cosas son de contabilidad y no de análisis y verlas como eso, son cosas simplemente de contabilidad y no hacer un lío donde no existe.

Ahí le va otra para el ramo de Hacienda, a usted que le interesa ver esas cuestiones muy minuciosas. Le voy a dar tres ó cuatro más, para que en su investigación minuciosa del crecimiento del rubro de Hacienda esté usted tranquilo.

El año pasado en los costos de recaudación de la subsecretaría de ingresos, usted recordará diputado Lujambio, que en la cuenta doble, si uno ve la cuenta doble hacia el final del presupuesto, cuando uno ve la cuenta doble, uno se da cuenta... es en la 280... 278, de acuerdo. Cuando uno ve la cuenta doble, usted verá en la de este año que dice: participaciones a entidades federativas y estímulos, suma 37 mil 786 ¿de acuerdo?. Bien, si uno ve la del año pasado, decía así: participaciones a entidades federativas, estímulos y otros. Bueno, ¿qué teníamos en, y otros?, teníamos todo lo llamado gastos inherentes a la recaudación, que para este próximo año son 1 mil 468 millones de nuevos pesos, que los programábamos antes, dentro del gasto primario no presupuestal.

Nosotros consideramos que fue una mala práctica el disminuir de ingresos esto, y que era mejor pasarlo al gasto programable. Este tipo de cosas ocurren porque se van depurando justamente las cifras, entonces, ¿qué es lo que pasa? que estaba antes en el ramo 28, lo estamos pasando al ramo seis que es el ramo Hacienda. Si usted no lo sabe y compara con el año pasado dice: ¡qué barbaridad, cómo es posible que éstos sean austeros si gastan 80% más!, no es eso, es simplemente este reordenamiento, y vienen las notas expresas ahí.

Pero además le puedo comentar otras cosas más. Por ejemplo, diputado Lujambio, además de las empresas privatizadas que entran y salen conforme las vamos vendiendo, entra en el ramo de Hacienda o no, y esta parte que hicimos de los gastos inherentes a la recaudación, tenemos también otra que también le voy a dar una explicación y usted la va a recordar.

El año pasado varios diputados nos dijeron: señor Secretario, ¿por qué en el ramo 23 donde tienen toda la parte de sueldos y salarios, por qué incluyen los censos, por qué no han depurado estas cosas y lo pasan del ramo 23 al ramo 6 que es Hacienda donde está sectorizado por efectos administrativos el INEGI, ¿de acuerdo? Entonces esa es otra. Ustedes recordarán que el año pasado estaba en el 23, ahora está en el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática; no estaba el año pasado. Si usted compara uno con otro va a decir: ¡qué barbaridad! cómo tenemos incremento.

Este tipo de cuestiones, diputado Lujambio, son cuestiones que vamos avanzando, vamos depurando el ramo 23. Entonces yo creo que lo que es muy importante es más que hacer una investigación así enorme y dedicarle mucho tiempo a esto, es sentarse con nuestros técnicos que están manejando estas cosas y tenemos varias hojas de todos estos cambios y dárselos de una vez para que uno no sienta que está uno encontrando una cosa así muy grande, cuando en el fondo tenemos todas estas cosas y es parte del proceso normal de depuración del presupuesto. Y por cierto, a petición de ustedes estamos reduciendo el ramo 23.

Bien, nos decía el diputado Lujambio también que en el rubro de servicios personales se incluían, y ésta es una práctica que tendremos que avanzar también en ello, toda la parte de sueldos, y decía el diputado Lujambio: qué curioso que haya estos sueldos. Ustedes los conocen mejor que nosotros. Ustedes los diputados están en una clave si mal no recuerdo de oficial mayor, aproximadamente, y usted podrá checar ahí que ese es el cheque azul.

Y si usted pasa cinco páginas antes, está la página 263 donde dice: "Asimismo en el rubro de servicios personales se incluyen recursos para... de productividad".

En el caso del sector central, se dice cuáles son los bonos de productividad. En el caso de ustedes en la Cámara, saben muy bien lo que es su cheque azul y lo que son los pagos adicionales.

Quizás, diputado Lujambio, debamos de avanzar como dice usted, pero está incluido en la 263 en el segundo párrafo en eso.

Diputado Lujambio: el punto tres del fondo de retiro, quisiera recordarle nada más que hay dos partes del fondo de retiro del ISSSTE. Una es la que usted vio, y otra vez, perdón a los demás diputados, todavía me quedan cuatro minutos, pero usted podrá ver, diputado Lujambio que en la cuenta doble, en la página 280, en la cuenta doble de ingresos, están, incluye los 4 mil 632.5 y se nota en pie de página número dos hasta abajo, de aportaciones del Gobierno Federal al ISSSTE. Son donde están catalogados; no hay un tema realmente de fondo. Nos decía usted, por ejemplo, diputado Lujambio, eso después lo podremos ver en comisiones, pero decía: ¿por qué en Reforma Agraria ha habido bastante la diferencia ex ante y ex post dentro de lo autorizado?

Quizás eso no me atrevo a afirmarlo con la misma seguridad con la que afirme lo de Hacienda, pero creo que hay tres hipótesis. El subsecretario de egresos podrá corregirme, pero yo tengo tres hipótesis en Reforma Agraria:

1. El programa Procede estaba originalmente en el ramo 23, porque era una parte al INEGI, una parte a Procuraduría Agraria y una parte a Reforma Agraria, ¿verdad?, ¡es así! Entonces justamente en esta petición que nos han hecho los diputados de pasar del ramo 23 lo más que se pueda a los sectores, lo estamos bajando y eso obviamente baja el 23, infla Reforma Agraria. Esto es en el Programa de Certificación de Derechos Ejidales, el llamado: Procede.

Pero hay otros dos. Hay también un programa de regularización de tenencia de la tierra que quizás esto pudo haber sido, y hay un rubro adicional que siempre se guarda en el 23 pero que puede ser atendido en Reforma Agraria. Ese

ya me ha tocado tanto como subsecretario como secretario atenderlo, que son las resoluciones de la corte, de la Suprema Corte de Justicia en materia de indemnizaciones en tierras. Nosotros tenemos un cálculo aproximado de cuánto va a ser, pero obviamente la Suprema Corte no nos dice: fíjate que voy a fallar y de esta manera voy a fallar en tantos casos.

Entonces tenemos que tener una reserva, porque cuando la Suprema Corte ordena a la Reforma Agraria que proceda a la indemnización por haberse ganado un amparo por parte de un particular, etcétera, no tenemos otra más que pagar. Ya sabe usted lo que pasó hace dos años, cuando tuvimos un rezago; un rezago y fue removido por parte de la Suprema Corte un funcionario de casi segundo y tercer nivel de Reforma Agraria por estar tarde en esto. Entonces ésa también puede ser una explicación.

Un punto adicional, diputado. Yo le voy a decir una cosa, es cierto que hemos tenido algunos problemas muy serios, yo soy el primero que lo reconozco, con las paraestatales. Que había paraestatales que quizá en mi opinión, en mi modesta opinión, no debieron haber estado. Pero de ahí a hablar mal de todas las paraestatales yo creo que hay que tener mucho cuidado.

No olvidemos, diputado Lujambio, no olvidemos que si consolidamos todas las paraestatales son superavitarias. Nunca lo olvidemos. Nunca olvidemos que Petróleos Mexicanos da para todo lo que es Petróleos, es el contribuyente más grande del país y da para todas las transferencias de todas las paraestatales y sobra. Cuidado diputado, no todas pierden, no exageremos.

El diputado Lujambio hace un comentario sobre los recursos municipales y la necesidad de darles más recursos a los municipios, y yo creo que está bien, y mencionó muchas cosas, pero no mencionó dos que yo creo que son particularmente importantes.

La primera que está ante ustedes, ante esta soberanía, una iniciativa del presidente Salinas de duplicar el Fondo de Fomento Municipal.

De un año a otro se propone un crecimiento del 100%, no es despreciable, no es despreciable, cuando estamos hablando de finanzas públicas en el municipio, quizás aunque sea de pasadita se podría haber mencionado.

Pero la segunda es más importante, diputado Lujambio. Es cierto que los municipios deben de tener, yo coincido con usted, más recursos, y aquí hay una prueba de ello, pero también no olvidemos algo. En 1979 los municipios cobraban, .25% del PIB de predial. En 1989 cobraban 0.08%.

¿Qué es lo que sucedió?, que simplemente con el Sistema de Coordinación Fiscal, pues que nos los dé la Federación y desatendieron totalmente sus fuentes locales de ingresos. Prefirieron mil veces tener todo el tiempo discusiones con el Gobierno del Estado y echarle la culpa al Gobierno del Estado, seguramente también a la secretaría a nivel federal, que mantener, por lo menos mantener lo que habían llegado a hacer en materia de predial y agua.

Le voy a dar los datos. En predial llegaron al punto más bajo de 08% y afortunadamente ahora con el Fondo de Fomento Municipal que lo damos para aquél que cobre más predial y más agua, ya levantamos hasta el nivel del año 1979, ya en el año de 1992 fue .24% del PIB y esperamos el .25%.

Por otro lado, en la parte de derechos de agua es donde se da el cambio más importante. Se llegó a tener la ridícula cifra en 1988 de 0.01% de la recaudación de agua por parte de los municipios.

Quiero nada más comparar con Francia, 1.7%, 17 veces, 1 mil 700% de diferencia. Con Chile 42 veces. Entonces tampoco digamos que todo está muy bien en las finanzas municipales y el problema es nada más acá.

Hay más recursos para el Fondo de Fomento Municipal, lo hay, y un incremento del 100% para el año que entra.

Pero creo que tenemos que avanzar más en derechos y en agua.

Por último diputado Lujambio, faltan dos cosas, ya se me acabó el tiempo. Pediría al señor Presidente que si no hay inconveniente pudiera... un minuto más, no tomo más...

El Presidente:

Adelante, señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Dos cuestiones más.

Le decía al diputado Lujambio que hay otros países donde se maneja a nivel local mucho mayor porcentaje del presupuesto. Sí, sí lo hay, pero veamos el cambio.

En nuestro país hasta hace tres años se manejaba exclusivamente el 21% de los ingresos participables. Pero ahora, y ustedes lo tienen ahí, en el ramo 25, que es el ramo de educación, que es el ramo de la federalización de los maestros, de la federalización de la educación, se está pasando para los niveles locales 25.6 millones de nuevos pesos, es decir, entre los dos casi manejan ya la cifra que le parecía interesante al diputado Lujambio, del 40% de los ingresos participables; aquí ya se está manejando 38% y la idea es traspasar totalmente todos estos gastos hacia los estados que son los patrones, que tienen ahora la depuración de nóminas.

Le quería comentar diputado, quizás no lo sepa, sería muy interesante, hay distintos gobiernos que han hecho una depuración muy importante de nóminas y que han encontrado plazas supuestamente que estaban siendo ocupadas, que en realidad no lo estaban, y ¿de quién son esos recursos en la auditoría?, son recursos para el Gobierno del Estado, de acuerdo al patrón, y los están llevando a ellos.

Por último, yo quisiera decirle diputado, que cuando usted dice que ojalá que tengamos la misma firmeza con el propio sector público, que tenemos con los contribuyentes, creo sinceramente que es injusto el comentario e inmerecido, sinceramente creo que es muy inmerecido, porque la Secretaría le ha tocado un tema complicado, el tema del control de la evasión, pero yo quisiera decirle que en casa ha habido algunas cosas que por lo menos son dignos de mención; estamos trabajando con 40% menos de gasto en el ramo central.

La unidad de la contraloría interna de la Secretaría ha sancionado por la vía de Ley de responsabilidades hasta junio de 1993 a 1 mil 271 servidores públicos, de los cuales 508 fueron inhabilitados y destituídos; 260 han sido suspendidos temporalmente; 470 amonestados y 33 se les ha aplicado sanción económica, casos penales, señor diputado, casos penales, si usted saca la población del país y la población de la Secretaría, que no es muy justo, pero la presión fiscal que hemos puesto dentro es cuatro a uno con la que hemos puesto fuera.

En los casos de aduanas la separación completa del resguardo aduanal, completa de resguardo aduanal, las nuevas creaciones de la policía fiscal, sinceramente creo que si bien falta mucho por hacer lo debemos de hacer, sinceramente creer que hay dos varas y que con el sector privado somos muy estrictos y en casa no lo somos, creo, sinceramente creo, que no denota la realidad. Muchas gracias.

El Presidente:

Tiene la palabra el compañero diputado Jesús Molina Lozano, por el Partido Revolucionario Institucional.

El diputado Jesús Molina Lozano

Con su permiso, señor Presidente.

Señor Secretario Aspe: si bien los problemas que enfrenta el campo son profundos y difíciles, de combatir, estamos satisfechos con el empeño y las medidas de gran importancia que el Gobierno Federal ha venido implementando para tratar de mejorar las condiciones en que vivimos quienes trabajamos la tierra y aportamos el alimento de nuestro país.

Las modificaciones al marco agrario aprobadas en este recinto, por primera vez le permiten a los campesinos y productores rurales certeza sobre la propiedad de sus tierras, así como la capacidad de juntar esfuerzos entre ellos y con otros interesados, esto sin lugar a dudas permitirá a muchos compañeros y a nosotros mismos, el trabajar con mayor seguridad y con mayores apoyos. La reforma al artículo 27 constitucional es piedra angular de las reformas en el campo; sin seguridad no puede haber bienestar.

La creación de la Procuraduría Agraria y de los Tribunales Agrarios, así como la puesta en marcha del Programa de Certificación de Tierras Ejidales, también los vemos como un acierto, pues a través de estos instrumentos se garantizan los derechos de los productores del campo.

En cuanto a recursos destinados a la agricultura, señor Secretario, también sabemos que hay avances. Los fondos de solidaridad y los créditos a la palabra han sido un gran apoyo para el campo; según datos oficiales más de 1 millón de productores han recibido recursos de esta manera.

Adicionalmente se acaba de anunciar el Procampo, a través de este mecanismo se cumple con una demanda campesina que se ha reiterado desde hace mucho tiempo; el que los productores contemos con un apoyo directo. En este sentido y reconociendo que hay un incremento real del 32.8% en el presupuesto destinado al campo para 1994 respecto al de 1993, sólo nos preocupa, señor Secretario, el conocer, aquí mi primera pregunta, el conocer si los recursos adicionales no serán inflacionarios ni tampoco un

desequilibrio en las finanzas públicas. Se dice que Procampo apoyará cerca de 2.2 millones de productores que no recibían apoyo antes, señor Secretario, el que se destinen tan importantes recursos en el programa Procampo es alentador; sin embargo yo quisiera saber si estos recursos no se van a restar de los que se dan a través de otros programas, sería importante conocer esto, por ejemplo los que se dan a través del Programa de Crédito a la palabra, los Programas de Apoyo a la Producción, Fondos Regionales, Nafinsa, Solidaridad, los Fondos de Garantía, etcétera.

Se ha señalado que los recursos destinados al Procampo son 11.7 miles de millones de nuevos pesos, es fundamental asegurar que dichos recursos lleguen a quienes más lo necesitan, es decir, los productores de más bajos ingresos. En este sentido me gustaría saber qué tipo de mecanismos señor Secretario se han diseñado para garantizar el uso adecuado de estos recursos, así como que estos lleguen a los campesinos para los que están programados y no se nos vayan a entrampar en la burocracia.

A pesar de todos los esfuerzos realizados señor secretario, como usted sabe, el campo está pasando por una situación crítica y difícil, muchos de nuestros compañeros campesinos y productores rurales viven una situación de pobreza, si bien algunos de ellos han logrado mejorar un poco, en términos generales siguen pasando un mal momento, por esto es sumamente importante conocer de usted lo siguiente: del presupuesto destinado a Desarrollo Rural y a Desarrollo Social me gustaría saber los montos destinados a cada uno de los rubros de inversión pública y de gasto social programable, que los primeros ayuden a reactivar la economía rural y los segundos, ayuden a combatir la pobreza, y promover el bienestar social.

También sabemos que el crédito que se ha dado al campo en este año ha crecido respecto al dado en otros años, muchos compañeros pasan por problemas de carteras vencidas, en este sentido me gustaría saber dos cosas señor Secretario; ¿qué tanto ha crecido el crédito para los productores rurales?, ¿y el apoyo de Procampo también servirá para dar una ayudadita a los que están metidos en problemas de cartera?

Y por último señor Secretario, con mucho respeto, se habla de justicia y de equidad en relación con el Procampo, también se habla de un posible aumento en la producción y en los niveles de vida de nosotros los productores rurales y nuestras familias. Quisiéramos saber, señor Secretario, en qué términos concretos podremos nosotros y nuestros representados campesinos medir sus beneficios como producto del Presupuesto de Egresos que usted somete a consideración de esta soberanía.

Por sus comentarios y por su atención a mis preguntas le doy las gracias anticipadas. Muchas gracias señor Secretario.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Con su venia señor Presidente. Señor diputado Jesús Molina.

Comentábamos que el Procampo es un programa de un enorme alcance y de una enorme importancia cuantitativa, ustedes han visto el porcentaje en que crece, los subsidios directos al campo 83% o lo que crece todo el sector rural que son las cifras que usted daba del 32%, pero como han mencionado varios diputados, el diputado Correa, el diputado Lujambio, yo mismo, lo que es importante, bueno, es en principio gastar más en esa actividad pero sobre todo gastar mejor y ahí hay que tener un cuidado enorme porque es un Programa de una dimensión realmente grande y donde tenemos un problema de logística para llegar claramente con recursos en efectivo a 2.2 millones de compatriotas nuestros que representan 10 millones de personas al ser jefes de familia y que nunca han recibido apoyo del Gobierno de la República porque el grueso de los apoyos se daban a través de Conasupo y ellos al no comercializar su producto, no tenían acceso a ningún tipo de apoyo gubernamental. Entonces en base a esto su pregunta yo creo que es muy atinada y creo que su preocupación es legítima y la comparto. Creo que tenemos que tener un cuidado enorme para ver que los recursos lleguen a tiempo y que cumplan con todas las disposiciones de racionalidad, austeridad y disciplina y sobre todo de transparencia como debe de ser.

Yo quisiera recordar, que he mencionado tres puntos importantes en relación a la transparencia. Primero, estamos trabajando en la Tesorería de la Federación, con la Secretaría de Agricultura y los gobiernos de los estados para ver si podemos canalizar el grueso de los apoyos de Procampo a través del sistema bancario nacional y que el manejo de cheques y que el manejo de efectivo, sea el mínimo posible porque estamos hablando de cientos de miles, de hecho, de millones de 3.3 millones de cuentas.

Segundo, que la Secretaría de la Contraloría y la unidad de Contraloría Interna de la SARH

han diseñado un programa de vigilancia para ver cada una de las etapas.

Tercero, que la propia estructura como está diseñada del Procampo, debe de nombrar contralores realmente de la comunidad, que al final de cuentas es la prueba máxima sobre la transparencia y probidad de los fondos.

Diputado Molina, yo coincido con usted, este es un punto que hay que tener muchísimo, muchísimo cuidado y estoy de acuerdo que no hay garantías de este buen manejo, sino lo que debe de haber es un esfuerzo enorme por tener los temas más sencillos y supervisar y supervisar. Le aseguro que así lo haremos.

Quisiera pasar al segundo tema que trató usted, el de la cartera vencida del sector agropecuario. Fundamentalmente, aunque no lo dijo el diputado Jesús Molina, pero él viniendo de la zona de La Laguna, sé muy bien a lo que se refería; no es con Banrural, es básicamente con la banca comercial a lo que se estaba refiriendo el diputado Molina.

Aquí, efectivamente, hay un problema; ustedes lo han visto, lo han visto en la Prensa, lo han visto en los estados, tenemos un problema importante en el cual dada la baja rentabilidad del sector, las necesidades de reconversión, muchos productores cayeron en cartera vencida y ha habido un problema fuerte de jaloneo entre la banca comercial y los acreditados.

Bien. La manera como el Gobierno podía participar es la siguiente, diputado Molina. Ese es un problema privado en el sentido de que son instituciones de crédito privadas y acreditados privados de crédito; entonces quiero ponerlo esto muy claramente, porque no es un problema de acreditamiento con la banca de desarrollo, o en el caso de operaciones, con el sector público.

La manera como pudimos contribuir es la siguiente: el FIRA, que es el Fideicomiso instituido en Banco de México para el Fomento del Sector Agropecuario, separó dentro de su presupuesto 1 millón de millones de pesos viejos, 1 mil millones de nuevos pesos, para fondear su segundo piso a la banca comercial en un programa que se llama el EPL, Empresas con Problemas de Liquidez, y de esta manera poder reestructurar los pasivos.

A la fecha que se hizo, bueno, una vez con el EPL se pudieron hacer lo siguiente; primero se amplió el plazo de reestructuración de cinco a 15 años con tres de gracia, creo que éste fue un avance muy importante para los productores y después aumentamos las garantías complementarias al 50%. Antes como usted sabe, todo el plazo y la reestructura era de cinco años y sólo otorgábamos garantías por el 30%, estos dos primeros pasos ya están, tres años de gracia, de cinco a 15 años de reestructuración y hasta 50% de garantías complementarias.

Segundo, diputado, y aquí es donde está el grueso de la participación del sector público que no lo podemos hacer en todas las empresas del país, y es que en todos los casos en que se acepta la reestructura se aplica una tasa de CETES más dos, en lugar de CETES más seis, ó CETES más ocho que tenía con anterioridad. Realmente esto sí, reduce genuinamente la carga financiera.

Y, por último, se están revisando caso por caso, lo estamos viendo en todo el país y hemos tenido, se pidió una espera en los estados donde estamos reestructurando, para que hubiera una especie de impasse en los juicios de embargo ya iniciados, por lo menos en los meses de octubre, noviembre y diciembre para darnos tiempo a que todos pudiéramos avanzar; y para terminar, se acepta eliminar la sobretasa de moratorios y se acepta eliminar los intereses moratorios capitalizados. La idea es ir banco por banco, tenemos un equipo en cada uno de los estados para ayudar a través de FIRA y si usted siente que hay algún Estado donde no hemos podido avanzar, avísenos porque en algunos donde no podíamos avanzar por fin estamos avanzando y ahí está concentrado el grueso del problema.

Por otro lado, en Fircaven y en Banrural, usted lo sabe, está prácticamente resuelto el problema, creo que no tiene mucho caso dedicarle a esto.

Nos decía el diputado Jesús Molina, con la perspicacia de los hombres del campo, diciendo: de veras estos recursos crecen así o los quitan también de otros lados. No, esto es neto, es genuino, no se están reduciendo en otros lados para aumentarlo en esto. Estos incrementos que damos, diputado Jesús Molina, son genuinos.

Otro punto que hizo sobre las comparaciones de lo que da Procampo, yo sí quisiera enfatizar esto. Si consideramos las transferencias agrícolas que dan nuestros vecinos del norte, los Estados Unidos y Canadá, con respecto a lo que producen, a su producto interno bruto, para el período de los últimos cuatro años los datos para Canadá son 1.6% del producto, los datos para Estados Unidos 1.3% y los datos para México 1.8%. Yo creo que aquí hay que tener mucho cuidado porque ya estábamos dando cifras más

altas con respecto a Estados Unidos y Canadá y con el Procampo las cifras se van más para arriba.

No tenemos un problema en el GATT porque la manera como se está dando es a través de apoyos por hectárea, que se considera en el seno del GATT una medida neutra y por tanto no tenemos un problema importante.

Pero nada más le quiero dar un ejemplo: en maíz en los Estados Unidos los subsidios son de 30 dólares por tonelada. En el caso de México los apoyos fluctúan entre 100 y 150 dólares por tonelada en el caso de México.

Por último el diputado Molina, me quedan 30 segundos, ¿va a ser esto inflacionario, va a tener problemas?, yo creo que no, diputado, la verdad es que con la reforma del Estado y con la reforma fiscal, la reordenación que hemos hecho en el presupuesto es tan grande, y éste es el mérito enorme del presidente Salinas, que con una visión muy clara lo presentó a la nación el 1o. de diciembre de 1988, cuando dijo: utilicemos estos bienes públicos para corregir males sociales; bajemos las tasas impositivas y aumentemos la base gravable. Esas fueron frases dichas ante esta soberanía por el Presidente de la República el 1o. de diciembre de 1988 y de ahí salen los espacios. Muchas gracias.

CONSIDERACIONES FINALES

El Presidente:

Muchas gracias, señor Secretario.

Con base en el acuerdo parlamentario y a fin de presentar sus consideraciones finales, se han registrado los siguientes oradores, mismos que pasarán a esta tribuna por cinco minutos. En la parte final pondremos a consideración del señor secretario Pedro Aspe, también para sus consideraciones finales.

La lista de oradores es la siguiente: por el Partido Popular Socialista el diputado Jorge Tovar Montañez; por el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana el diputado Servando Hernández Camacho; por el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional el diputado Félix Bautista Matías; por el Partido de la Revolución Democrática el diputado Alejandro Encinas Rodríguez; por el Partido de Acción Nacional el diputado Miguel Martínez Mireles y por el Partido Revolucionario Institucional el diputado Jorge Flores Solano.

Tiene la palabra el diputado Jorge Tovar Montañez, por cinco minutos en esta tribuna.

El diputado Jorge Tovar Montañez:

Con el permiso de la Presidencia, señor Secretario de Hacienda, doctor Pedro Aspe Armella:

En cumplimiento del acuerdo parlamentario, y cumpliendo el alto honor de mi partido, de la fracción parlamentaria del Partido Popular Socialista, me permito plantear algunas conclusiones en relación concreta con los planteamientos que nuestro partido ha hecho al señor Secretario de Hacienda.

En primer término agradecemos las respuestas que el señor Secretario se ha dignado dar a nuestros planteamientos, especialmente las indicaciones muy concretas a las preguntas que la Presidenta de la Comisión de Ciencia y Tecnología, nuestra compañera Gabriel Guerrero Oliveros hizo al señor Secretario.

Respecto al resto de nuestros planteamientos, y examinado de una manera general, podremos afirmar que efectivamente hay una coincidencia en los objetivos generales aquí expresados, y que de alguna manera reproducen los documentos que nos han sido entregados de una manera oficial, en los lineamientos de política económica. Efectivamente coincidimos en la idea, y lo reiteramos, de que el propósito final de la actividad económica, es un desarrollo tal, de manera que los mexicanos todos podamos vivir con dignidad, a través de elevar de continuo el nivel de vida del pueblo, de las grandes masas de trabajadores fundamentalmente, nivel de vida que se requiere no solo a lo material, sino también a la elevación de la cultura y del espíritu.

Pero obviamente no coincidimos en los caminos, en las vías que aquí se han planteado por parte de la representación del Ejecutivo. La concentración de la riqueza en México sigue siendo agresiva y atentatoria contra esos objetivos en los que coincidimos, objetivos de justicia social, sobre es sabido que el promedio de ingreso de los sectores de mayor ingreso en México, están muy alejados del correspondiente promedio de los sectores de menores ingresos.

La diferencia entre ricos y pobres en México, nos lleva a afirmar que vivimos en medio de una gran falta de democracia por lo que se refiere al reparto del ingreso nacional, una diferencia

mayor, una injusticia mayor que en países desarrollados como Japón o de un desarrollo un poco menor que el anterior como Australia, por lo cual podríamos afirmar que el grado de reparto de la riqueza en México sigue siendo todavía profundamente injusto.

Por otra parte, la recuperación salarial anunciada representa, en el mejor de los casos, sólo parte del rezago salarial histórico que se ha venido acumulando.

Para el Partido Popular Socialista y su fracción parlamentaria, una conclusión objetiva, sin calificativos, es de que el actual Gobierno no podrá cumplir las metas de justicia social que se le adeudan a la mayor parte de los mexicanos que son fundamentalmente los trabajadores, y nos preguntamos también con razón, si los próximos gobiernos, el próximo Gobierno será capaz de pagar esa deuda social antes de que ésta misma crezca y sea prácticamente imposible de cubrir.

El Presidente:

Compañero diputado, le pedimos concluya usted por favor.

El diputado Jorge Tovar Montañez:

En unos cuantos minutos.

No estamos convencidos de que el desarrollo económico sea sano; el grado de dependencia del factor externo es totalmente riesgoso.

La comparación con Japón que de importador de capital, equilibró su economía para convertirse después en exportador neto de capital, corresponde a procesos económicos diferentes, aquel país era ya industrializado y productivo cuando inició este proceso.

Dos preocupaciones más para finalizar, muy brevemente las expondré. Nos preocupa que la balanza comercial, aunque se defienda el déficit, corresponda fundamentalmente a la importación de bienes intermedios y ni siquiera de bienes de capital, y nos preocupa profundamente que las exportaciones mexicanas correspondan también en un grado muy importante a empresas de carácter extranjero, es decir, no nacionales.

No podemos convencernos aún de que las compañías automotrices sean nacionales, es muy difícil convencerse de ello. Lo mismo cuando se refiere a las exportaciones del sector maquilador. Por lo tanto, con estas últimas afirmaciones reiteramos que nos preocupa profundamente el grado de dependencia del capital externo. Con esto concluimos, pues nuestra intervención, y agradecemos nuevamente las atenciones que nos ha brindado el señor Secretario de Hacienda. Con permiso.

El Presidente:

Muchas gracias, diputado Jorge Tovar Montañez.

Tiene la palabra el compañero diputado Servando Hernández Camacho, por el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana.

El diputado Servando Antonio Hernández Camacho:

Con su venia, señor Presidente; señor Secretario de Hacienda, doctor Pedro Aspe Armella; compañeras y compañeros diputados.

Con mucha atención, señor secretario, hemos escuchado las diferentes respuestas a los cuestionamientos que han hecho todos los partidos políticos.

Mi partido, el Auténtico de la Revolución Mexicana, fijó su posición a través de la intervención del diputado Adolfo Kunz Bolaños, reconociendo el avance en materia fiscal y económica, pero también reconociendo los grandes retos que aún siguen sin respuesta, gravitando todos ellos, y si lo analizamos en todas las intervenciones, se basaron en la pérdida del poder adquisitivo del trabajador, así como también el alto índice de desocupación por la falta de una planta productiva que se fue perdiendo al abrirse el mercado a través del GATT.

Por lo tanto, señor Secretario, es necesario hacer diferentes reflexiones que en un momento de su intervención usted también las hizo.

En el caso de los salarios, señor Secretario, es necesario hacer un análisis de los registros de los trabajadores de las diferentes ramas en el Instituto Mexicano del Seguro Social, donde el 92% de ellos reciben entre uno y dos veces el salario mínimo. Sin embargo, la canasta básica se fijó en 48.50 de nuevos pesos diarios.

Y esto, señor Secretario, de alguna forma nos da una reflexión respecto a la medida correcta del salario mínimo.

En Procampo, los subsidios, si se pueden valorizar en lo que representa el programa, podríamos decir que representarían el 10%, tomando como base el PIB, y haciendo una comparación con los Estados Unidos, los subsidios representan el 27% del PIB; en la Comunidad Europea representan el 46%, y en el Japón llegan hasta el 63%.

Reflexión también en cuanto a la intervención del Banco de México. Sabemos, y usted lo explicó y lo consideramos así, que va a tener una gran libertad, sobre todo en poder llevar a cabo un verdadero análisis de la situación económica y poder normatizar las operaciones, hasta cierto punto bancarias, para no ir a caer en lo que representa hoy la cartera vencida de los tarjetahabientes, donde por cada peso dado de crédito, 20 centavos se utilizaron al consumo.

Dentro de las medidas fiscales que fueron aplicables a nuestro país, con una inflación, como usted también en su momento lo explicaba, pero también con un bajo crecimiento, basados en un mercado cerrado, creemos que no sean las mismas formas a aplicar en un nuevo país, que entra a una situación de un mercado libre.

Señor Secretario, esperamos que México entre pronto a la política de equilibrio que usted mencionó. Muchas gracias.

El Presidente:

Muchas gracias, diputado Servando Hernández.

Tiene la palabra el diputado Félix Bautista Matías, por el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional.

El diputado Félix Bautista Matías:

Con su permiso, señor Presidente, compañeras y compañeros diputados, señor Secretario:

Nuestro partido, el Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional, ha querido ser justo. Valoramos los aspectos positivos de la gestión económica de este Gobierno, pero no quitamos el dedo de los renglones adversos o las diferencias tácticas. Las hemos señalado en múltiples ocasiones, no vamos a reiterarlas aquí, aunque a veces por el tiempo o la política usted nos la reconozca públicamente, las conoce bien.

Nos hemos esforzado en comprender el nuevo modelo de gestión estatal. No es un asunto nada más de objetivos, ni tampoco de mezclas instrumentales; es un problema mayor, es el modo de gobernar los procesos económicos, es el marco en el que se desenvuelven los conflictos, los problemas y tribulaciones de la población.

Por eso, queremos analizar la lógica gubernamental y captar sus puntos débiles, sus límites y sus contradicciones. Ya hemos dicho las ventajas de la reforma del Estado. También hemos reconocido sus resultados en estabilidad, inflación y finanzas públicas. Pero advertimos las desventajas muy claramente, no en esta ocasión sino desde 1989.

Es el caso del financiamiento del déficit comercial.

El problema es el financiamiento, sobre esto queremos decir que nos alegramos que ya lo haya aceptado. El problema es la volatilidad del financiamiento, no por el mercado de valores, sino en el papel comercial, como correctamente lo explicó.

Lo venimos diciendo así desde hace más de cuatro años, pero hay que sacar conclusiones.

Debemos ver el significado profundo de este fenómeno y no es otro sino el acortamiento de los márgenes en la toma de decisiones soberanas.

En una creciente interrelación comercial y financiera, depender del financiamiento externo en el mercado de dinero es peligroso para la estabilidad y la soberanía nacional.

No se trata de cerrarse, sino de manejar y estar atentos a los focos rojos. El que hoy lo haya reconocido es ya un avance, pero hay que actuar.

Otro problema que venimos señalando es el de los salarios y la distribución del ingreso. En general, estamos de acuerdo con la modalidad de incremento real basados en productividad, pero en esto la definición de productividad y su medición es fundamental. El Congreso de la Unión deberá tener injerencia en este punto, recordemos que los ingresos de muchos trabajadores, activos o en retiro, dependen de sus salarios como única fuente de ingresos y en particular de los salarios mínimos.

Seguimos sin estar de acuerdo en el problema de la concentración del ingreso y la propiedad, esto es fundamental. El asunto no es de acciones nada mas pues habría que ver los índices de concentración y no nada mas el número de accionistas. También el tipo de acciones es evidente, que la concentración del capital se ha

profundizado, los nombres de billonarios mexicanos es un índice nada despreciable, también lo es de la distribución funcional del ingreso. En las cuentas nacionales queda al descubierto la participación de los asalariados

ha venido disminuyendo en términos relativos, es un indicador muy grueso pero muy ilustrativo. Esos también son hechos y no podemos suponer que baste crecer para luego distribuir.

La reforma fiscal y presupuestal son de una importancia mayor y en general lo habíamos advertido en las discusiones con usted, las medidas fiscales para 1994 corrigen aspectos programáticos del presente tanto en el lado de la demanda como de la oferta.

Los créditos fiscales, las deducciones impositivas y el gasto en infraestructura seguramente incidirán en el crecimiento y el consumo y la inversión, en este punto estamos de acuerdo.

Pero queremos insistir en otro punto. La discusión presupuestal no nada mas es un asunto de cifras, de montos y de estímulos, es un problema de eficiencia e incidencia social. Tenemos que insistir en la toma de decisiones presupuestales, en la reestructuración democrática de las entidades públicas y en la vigilancia y supervivencia efectiva del gasto. No sólo hay que gastar más sino gastar bien en lo socialmente útil, esto es fundamental. Sobre esto...

El Presidente:

Compañero Bautista, le rogamos sus conclusiones, por favor.

El diputado Félix Bautista Matías:

Le solicito con todo respeto me permita terminar. Sobre esto, insisto, la reforma del Estado es insuficiente, debemos efectuar modificaciones en los procedimientos de planeación democrática. Tenemos que introducir mecanismos democráticos de decisión y vigilancia presupuestal. Ni la Secretaría de la Contraloría General de la Federación ni la Contaduría Mayor de Hacienda garantizan hoy el gasto efecto y el gasto útil, la corrección de las finanzas públicas no es sólo un asunto macroeconómico sino de convivencia social su congruencia democrática.

Señor Secretario, ya para finalizar, quiero decirle que el reto para los próximos años, es impedir que las tendencias excluyentes se agudicen en la economía y la política en México. Hay señales de intolerancia política y de marginación económica, van de la mano, no corresponden a procesos diferentes, corresponden por desgracia a opciones paralelas.

Una mayor concentración del ingreso propicia fenómenos de opciones políticas restringidas. A eso apuesta hoy algunas fuerzas partidarias y algunas élites económicas, nosotros no.

Por eso hemos transitado en el difícil camino de reconocer lo ventajoso de la política gubernamental, sin tener ningún temor de denunciar y protestar por lo que consideramos dañino a la población y al país.

Por su atención, señor Secretario y compañeros diputados, muchas gracias.

El Presidente:

Muchas gracias. Tiene la palabra por cinco minutos para consideraciones finales el compañero diputado Alejandro Encinas Rodríguez del Partido de la Revolución Democrática.

El diputado Alejandro de Jesús Encinas Rodríguez:

Con su permiso, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados; señor Secretario de Hacienda y Crédito Público:

Me toca intervenir en esta última ronda para hacer una serie de consideraciones generales de esta sesión sui generis y turbulenta en la que, sin lugar a dudas, pues hay mucho que discutir, muchos asuntos que merecerían una mejor atención del Poder Legislativo. Voy a eliminar el protocolo para poder entrar a los asuntos, agradeciendo de antemano la tolerancia del Presidente de debates, porque evidentemente ocuparé unos minutos más de los cinco.

Quisiera empezar por un asunto particular y precisar lo dicho aquí por mi compañero Gilberto Rincón Gallardo respecto del ramo 23, porque efectivamente ramo 23, además de los paquetes salariales contiene un sinnúmero de rubros en el que nosotros insistimos deberían de sectorizarse, todo lo que se refiere a programas de apoyo de infraestructura económica, infraestructura hidroagrícola, subsidios corrientes, a inversión física, conservación y mantenimiento, infraestructura, etcétera, deberían sectorizarse y eliminarse el manejo centralizado discrecional de ese ramo.

Es un debate que hemos tenido ya con anterioridad, no desconocemos que ahí van algunos paquetes salariales, pero muchas de las partidas de este ramo pudieran entrar en diversos sectores del Presupuesto de Egresos de la Federación.

En este ánimo de recapitular, efectivamente hay un conjunto de coincidencias que tanto el Ejecutivo como las diferentes fracciones parlamentarias hemos identificado en esta discusión. Todos coincidimos, efectivamente, en la disminución de la inflación, en que esto no solamente es un objetivo económico sino fundamentalmente social, un requerimiento para el progreso en el país. Coincidimos en acelerar el crecimiento, en recuperar el poder adquisitivo del salario, en avanzar en la erradicación de la pobreza y lograr con ello una economía estable que avance hacia el bienestar general.

Y en algunos casos, ha habido más que coincidencias, yo digo que aquí ha habido algunos encuentros, porque después de dos años de estar insistiendo por parte de nuestro grupo parlamentario por fin nos han hecho caso en algunos asuntos. Es el caso de las finanzas públicas equilibradas, del superávit cero, y a partir de ello, incrementos importantes en gasto social, en educación, en salud, por ejemplo.

Este reconocimiento de la necesidad de dar subsidios directos al campo, durante muchos años estuvieron considerados como algo totalmente ajeno a una política de modernización de nuestra economía. Y es el caso de la desgravación, no la deducción, como se quiso malinterpretar al planteamiento de Liliana Flores, de los salarios mínimos. Y yo creo que ésta no es una feliz coincidencia coyuntural y que cualquier coincidencia con el año electoral sea mera especulación.

Pero creo que habría que ir precisando también las diferencias que no tiene que ver solamente con la diferente mezcla de instrumentos para enfrentar la situación económica o el balance que hagamos de los diferentes costos sociales que ha tenido la política de ajuste. Estas críticas comunes sobre el deterioro de salarios mínimos o de revertir el desaceleramiento de nuestra economía.

Creo que valdría la pena hacer también una consideración general sobre lo que ha sido el sexenio. En el Plan Nacional de Desarrollo se plantearon tres objetivos fundamentales: crecimiento, estabilidad y mejoramiento de la calidad de vida de la población. Creo que en el caso de crecimiento ha habido un reconocimiento de que fue insuficiente; de 1988 a 1990, efectivamente hubo un crecimiento económico superior al crecimiento de la población; en 1991, hubo un desaceleramiento de la economía. Lo que ha llevado a que el crecimiento no se haya dado de manera sostenida y estable y andemos en una tasa del 2.29, 2.30 de tasa media de crecimiento anual. Y este tipo de crecimiento, pues generó pocos empleos; y más aún, fue un tipo de crecimiento concentrado que abarcó algunas ramas de algunos sectores en la actividad productiva, no fue generalizado, se concentró básicamente en la industria automotriz, en la cementera, en algunas ramas de la industria química, la industria de alimentos, el comercio y la importación.

Pero la mayor parte de la planta productiva, orientada al mercado interno, no recuperó el dinamismo esperado desde el propio Plan Nacional de Desarrollo.

Este tipo de crecimiento afectó regresivamente la participación de los trabajadores en el producto interno bruto, en una caída de alrededor de 10 puntos, lo que impacto de manera importante a las condiciones de vida, agravó la pobreza y la pobreza extrema.

Y cuando hablamos de pobreza extrema yo quisiera que dejáramos de lado el aspecto metodológico. Yo creo que con Carlos Jarque, habrá tiempo suficiente para discutirlo porque son muchos los datos que se han manejado. Hay una publicación de la propia Secretaria de Hacienda y Crédito Público, "El Nuevo Perfil de la Economía Mexicana", publicado en agosto de 1992, donde en la página 12 se reconoce que hay 24 millones de mexicanos en pobreza extrema.

La Secretaría de Desarrollo Social, a través de la subsecretaría de desarrollo regional ha dado otros datos diferentes de entre 17 y 20 millones de pobreza extrema. Pero creo que lo que valdría la pena aquí no es tanto entrar al análisis metodológico de cómo evaluar la pobreza. Creo que el asunto de fondo y creo que es una coincidencia general, es que hoy la pobreza en nuestro país, es el principal problema económico, político y social a resolver y que la pobreza en nuestro país ha alcanzado niveles inimaginables para no generaciones que nacieron hace muchos años. Quienes nacimos en los 50 o en los 60, nunca pensamos que al paso de poco más de 20 años hubiera un deterioro muy profundo en la calidad de vida de los mexicanos.

Y yo por eso creo que entrar a discutir y debatir sobre la pobreza, tiene que ver con las políticas particulares de empleo y de ingreso.

Y aquí es donde yo quisiera referirme a su propuesta que

ha hecho para recuperar el nivel de salarios reales de los salarios, entrando al terreno de los hechos.

Usted reconoció que no es a partir de 1982, sino que es desde 1976, que se viene deteriorando el salario. Aquí valdría hacer la primera pregunta: ¿qué juicio le merece a usted una política que en 15 años no logró revertir el mayor deterioro del salario?

Cada año que vienen aquí a presentarse los criterios generales de política económica, lo tengo muy presente desde 1987 que usted vino por primera vez aquí, a la Cámara de Diputados en su calidad de Secretario de Programación y Presupuesto, se nos planteaba que ahora sí, este es el año bueno, ahora sí se van a recuperar los salarios y bueno, vamos a concederle el beneficio de la duda para esta propuesta de tres medidas específicas, que se nos ha hecho para recuperación del salario: inflación esperada, productividad y desgravación del salario mínimo.

Compañeros, ustedes pueden retirarse si gustan, yo creo que estamos discutiendo cosas interesantes.

El Presidente:

Vamos a guardar orden por favor.

El diputado Alejandro de Jesús Encinas Rodríguez:

Respecto al primer punto del incremento del 5% directo de incremento al salario en una aplicación por anticipado, nos resulta, pues es una medida positiva. La pregunta sería; ¿por qué no se hizo esta aplicación cuando la inflación fue del 100% ó del 120%? Tal parece que es un pago en abonos de lo que la crisis le arrancó a los trabajadores y la política económica de un solo tajo.

En cuanto a la productividad coincidimos con usted en que sin lugar a dudas es muy difícil medirla, existen diversas concepciones en torno a la productividad. A mí en la escuela cuando estudiaba, ahora que está de moda estudiar, me enseñaron que la productividad sólo el trabajo es productivo; sólo el trabajo genera riqueza y valor y al trabajo hay que reconocerle productividad. Evidentemente tenemos escuelas distintas, pero creo que sí podríamos ir despejando algunas dudas.

Usted nos dijo en su intervención que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos estaba haciendo un estudio respecto a cómo evaluar la productividad. Sin embargo ya nos anticipó un porcentaje de alrededor del 2.5% para 1993. Eso nos hace despertar una sospecha porque nos recuerda a algunos economistas que ven en la productividad desde el lado del ingreso nacional, es decir, desde la participación de la retribución al factor trabajo en la formación del ingreso nacional. Y como ésta es una retribución muy baja, la que contribuye en la formación en esta ecuación del ingreso nacional, pues la tendencia prácticamente es al cero porque el salario no se ha movido y efectivamente estaría oscilando ahí entre el 1% ó el 2.5%.

Nosotros creemos que habría que conocer con mayor detalle primero el estudio y luego hacer una estimación de este nivel de productividad.

Y finalmente nos dice que gracias a la modificación del artículo 80, de la Ley del Impuesto Sobre la Renta, todos los trabajadores podrán tomar el crédito fiscal equivalente al 10% del salario mínimo elevado al año y que eso de acuerdo a los cálculos de la propia Secretaría, representará un 9.52%.

Aquí, habría algunas dudas, estamos hablando del salario mínimo que es el que reconoce la Constitución, no del ingreso familiar, no de los salarios multiplicados o los salarios de contractual.

La primera pregunta sería: ¿cuántos trabajadores de salario mínimo... cuánto paga de impuesto un trabajador de salario mínimo? y de acuerdo a la información pues paga cero. Ningún trabajador de salario mínimo paga ningún impuesto sobre la renta sobre su ingreso...

El Presidente:

Compañero Encinas. Le ruego que concluya su intervención.

El diputado Alejandro de Jesús Encinas Rodríguez:

Termino, señor Presidente. Porque qué es lo que se le va a restar al salario mínimo o se le va a dar un ingreso directamente. Pero además valdría la pena ver lo que sucede hasta con cuatro salarios mínimos, porque para hacer efectiva esta ventaja se requiere de la declaración anual, esa declaración que usted nos dice que hace y que yo igual que todos los compañeros diputados seguramente hacemos, ¿pero cuántos

dores hasta de cuatro salarios mínimos presentan su declaración anual?, el grueso son causantes cautivos, o ¿quién va a calcular el pago del impuesto de estos trabajadores, para que efectivamente ya lleguemos al 17% que usted nos había planteado.

Hay muchas cosas que discutir. Lamentablemente lo intempestivo de esta sesión distrajo en mucho el centro del debate, pero bastaría reconocer su punto de vista, por ejemplo con esta tesis que usted nos dio a conocer hoy en el sentido de que cuando se caen los precios la bolsa se estabiliza. En 1987 usted vino aquí a presentar la primera fase del pacto. Se cayó la bolsa y no se estabilizó la economía.

Y por último también valdría la pena conocer su punto de vista sobre el populismo, porque efectivamente el populismo es imprimir billetes, pero también hay otras formas de populismo más allá de la impresión de billetes que valdría la pena conocer.

Por su atención, agradeciendo la atención de mis compañeros diputados, antes le doy las gracias.

El Presidente: Muchas gracias. Tiene la palabra el compañero diputado Miguel Martínez Mireles, del Partido Acción Nacional.

El diputado Alberto Miguel Martínez Mireles:

Gracias, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados; señor Secretario de Hacienda, doctor Pedro Aspe Armella:

En el transcurso de sus intervenciones hemos notado la confianza con la que expone sus conceptos; la seguridad de sus respuestas nos hacen reflexionar sobre la certeza que usted tiene sobre los pasos que sigue el rumbo de nuestra economía. Esta confianza la hemos visto ya en otros secretarios de Hacienda, como los que tuvieron esta responsabilidad en aquellos sexenios gubernamentales conocidos por el pueblo mexicano como: La Decena Trágica, aquellos sexenios que se nos pidió al pueblo aprender a administrar la abundancia y de cuyos resultados, nos hicimos expertos en tácticas de supervivencia.

No estamos responsabilizando a la actual administración de los errores pasados, pero sí debemos recordar su origen común.

Decisiones de otros secretarios de Hacienda provocaron que se fugaran enormes cantidades de recursos económicos tanto en grandes capitales como en los pequeños ahorradores que creían garantizar sus ahorros fuera de nuestro México.

Ahora la economía nacional ha dado un viraje, 180 grados hacen que el rumbo varíe totalmente. La liberalización de la economía ahora trata de ganar confianza entre la microeconomía, pero no podemos, señor Secretario, dejar de subrayar que la actual administración ha empleado el 85% de su tiempo en la planeación y la reestructuración de la macroeconomía y que tan sólo le restan a este sexenio, escasos 12 meses para lograr conocer los resultados en la base actuante de todo sistema económico.

Después, si el mismo partido conserva el Gobierno Federal, nadie sabe qué va a pasar. Quizá siga la misma política de liberalización o quizá regrese a una estatización económica.

El sistema político mexicano de un presidencialismo excesivo que subordina al Poder Legislativo, no permite una planeación a más de un sexenio, con las severas limitantes que esto tiene para cualquier economía.

Por lo anterior, señor secretario, el Partido Acción Nacional considera que es responsabilidad nuestra, pero usted como responsable actual de la economía nacional, y de nosotros como Poder Legislativo, implementar un auxilio que permita a la micro y pequeña empresa hacer frente a la difícil situación que prevalece. Usted, señor secretario, ha manifestado que Nacional Financiera es ya proveedor de crédito a través de la banca comercial para la microempresa.

Ahora, es indispensable crear también un mecanismo que apoye la demanda para consumir los productos que estas empresas elaboran.

Independientemente de los criterios que ya hemos conocido para incrementar el poder adquisitivo de los asalariados, que tiende al final de cuentas precisamente a incrementar la demanda, su poder adquisitivo, en el momento oportuno hemos de proponer a esta soberanía que para el Presupuesto de Egresos de la Federación, así como el de los estados y hasta de los municipios, se obligue a gastar parte de este mismo presupuesto en compras que se hagan a la micro y pequeña empresa para con ello apoyar el desplazamiento de sus productos.

Otras economías tienen esta obligación para el Estado, con las empresas propiedad de minorías

étnicas. En México esto mismo puede ser para las pequeñas empresas cuyo monto de capital no exceda de un tope determinado.

En el orden de las finanzas públicas, ahora que finalmente se encuentra estabilizada. Es decir, que recauda el Estado por la vía de impuestos, derechos y aprovechamientos, lo mismo que se gasta, que se eroga, en su sostenimiento en el desarrollo del país y en el llamado gasto social, cuya pretensión es elevar el nivel de vida de los mexicanos menos favorecidos. Y sobre lo cual en repetidas ocasiones, incansablemente nuestro partido ha dicho que este gasto social más que apoyar al desarrollo de México, pretende convertirse en la forma de favorecer al sistema político mexicano en materia electoral.

Usted señor Secretario defendió el Procampo y lo mismo pudiéramos entender de Pronasol. Yo le pediría a usted que tuviera las reservas necesarias, porque aquí mismo tengo suficiente información de medios impresos del Estado de Yucatán, donde ya en este momento, en la actual contienda electoral, es ampliamente difundido, a través de un compañero diputado federal, las ventajas de Procampo aplicadas exclusivamente a quienes apoyen al partido gobernante.

En ese sentido Acción Nacional siempre tendrá que decir que lo lógico será recabar quizá menos impuestos, tener menos obligaciones fiscales y tener mucho cuidado con programas de apoyo al pueblo, que siempre van a tener una dudosa aplicación.

Señor Secretario: estos son los puntos de vista de nuestro partido.

Le agradecemos su atención.

El Presidente:

Muchas gracias. Tiene la palabra el diputado Jorge Flores Solano, del Partido Revolucionario Institucional.

El diputado Jorge Flores Solano:

Con su venia señor Presidente; señor Secretario; compañeros:

Antes que todo mí partido agradece su presencia en esta Cámara para ampliarnos de manera objetiva la información acerca del conjunto de medidas que el Estado pretende realizar con la ejecución del Presupuesto de Egresos de la Federación y la Ley de Ingresos para 1994.

Los mexicanos celebramos que por quinto año consecutivo nuestra economía muestre un ritmo ascendente en sus aspectos cuantitativos y desde luego cualitativos. Pero nos quedan todavía grandes áreas de insatisfacción. Desearíamos acercarnos con celeridad al proyecto de nación establecido en nuestra Constitución.

Sin embargo, es de destacar que las medidas de política económica del Gobierno nos han puesto sobre bases firmes hacia él. Debemos valorar la conducción de la política económica que a pesar del contorno adverso ha superado las dificultades y contingencias negativas.

En el pasado algunos acontecimientos mundiales, no obstante su magnitud, no tuvieron grandes repercusiones para nuestro país. Durante la Primera Guerra Mundial estábamos ocupados en la consolidación de nuestra nación. En los años de la gran depresión, los nexos económicos entre los países no tenían el alcance y la penetración de los tiempos actuales.

En la Segunda Guerra Mundial nuestra participación fue marginal y de alguna manera permitió incluso acelerar el proceso de nuestra incipiente industrialización. Pero ahora, con la globalización de las economías, el desarrollo de las comunicaciones y la interrelación de las naciones, hacen que los acontecimientos y sus resultados tomen otra dirección.

No acepto que no haya congruencia de mi partido al reconocer la evolución del mundo y la necesidad de adoptar los instrumentos de política económica a los fines del pueblo mexicano. Dejamos atrás políticas

de proteccionismo y de estado productor por políticas de modernización y competitividad de la economía, sin que el Estado pierda su carácter de rector de la misma pasamos de un Estado propietario a un Estado solidario, como lo ha dicho el Presidente de los mexicanos, Carlos Salinas de Gortari.

En un plazo relativamente corto se ha logrado poner a nuestro país en condiciones de mayor fortaleza y capacidad para favorecer nuestro desarrollo, a pesar del entorno negativo que representa el lento crecimiento o retroceso de las principales naciones del orbe que indudablemente afectan posibilidades de progreso para un cúmulo de países, incluyendo el nuestro.

Destaco en ese esfuerzo el crecimiento de las exportaciones de productos mexicanos. No obstante, la contracción de la demanda que en algunos de los casos ha significado el abatimiento de nuestros precios de productos tradicionales, un hecho manifiesto es que el incremento de las exportaciones indica que hemos logrado ser competitivos en importantes ramas.

Hay crecimiento en la lucha, en los esfuerzos para el abatimiento de la inflación, eso es ostensible. Hay crecimiento de los salarios contraactuales, aunque el salario mínimo haya descendido y sea en muchos casos sólo un indicador.

Ahora, el país está en posibilidad de revertir esa tendencia. Ahora, en estos tiempos, hemos sido capaces de generar un superávit y ha habido la jerarquización adecuada para el uso de ese superávit, primero para reducir la enorme carga del peso de intereses de la deuda externa y alterna; ahora hay posibilidades de aplicar ese superávit para el impulso mayor de la economía.

Por un mecanismo previsto en nuestra Constitución, la concertación, que los sectores productivos del país han hecho uso para lograr las tendencias negativas, revertirlas, estamos conscientes todos los mexicanos que hay un costo social. Pero para nosotros estos presupuestos de ingresos y egresos que nos han sido presentados a nuestra consideración, el no cejar en las trascendentales medidas que han dejado resultados positivos para que el beneficio abarque a las mayorías y se traduzca en mayor justicia, equidad y progreso; eso significa.

Señor Secretario: las letras que contienen las medidas económicas son cautas y realistas, indudablemente se han establecido con base en las posibilidades materiales de nuestra economía y de los esfuerzos del pueblo de México. Estos son los resultados de tener un Plan Nacional de Desarrollo. Señor Secretario, tenemos rumbo y destino. Muchas gracias, señor Secretario.

El Presidente:

Muchas gracias. Se concede el uso de la palabra al doctor Pedro Aspe Armella, secretario de Hacienda y Crédito Público.

El doctor Pedro Aspe Armella:

Muchas gracias, ciudadano Presidente.

Ciudadano Presidente de la LV Legislatura; señoras y señores diputados:

Quisiera antes que nada agradecer a todas las fracciones parlamentarias la seriedad con la que en esta ocasión, como en las anteriores que he comparecido ante ustedes, se llevó a cabo el diálogo de la política económica propuesta por el presidente Carlos Salinas de Gortari para 1994.

Estos debates, aunque duren 12 horas, no sólo son necesarios para fortalecer nuestras prácticas republicanas que les han dado origen sino que permiten ampliar los espacios democráticos que disfrutamos en el país, resultan fructíferos para estrechar los vínculos de colaboración entre los poderes Legislativo y Ejecutivo, y sin duda permiten enriquecer los objetivos, metas e instrumentos propios de la política económica.

En lo personal y en lo humano, les agradezco las posibilidades de dialogar, de disentir en forma civilizada, ojalá podamos seguirlo haciendo, debemos de seguir haciéndolo. Evidentemente hay y puede seguir habiendo divergencias en cuanto a los caminos que cada partido considera más apropiados para alcanzar los objetivos que todos compartimos, el de elevar el bienestar en forma generalizada en el país. Es indudable que desde el primer día de la administración del presidente Salinas, hubo claridad en los propósitos, consistencia en las medidas y perseverancia en las acciones. Ha habido congruencia, su reflejo es el fortalecimiento del gasto público por ejemplo en los rubros más importantes: en educación, en salud, en desarrollo rural, en infraestructura urbana, en ecología, en solidaridad, no hay duda que año tras año hemos ido incrementándolo.

Pero también es cierto que haya o no acuerdo en las medidas y en los caminos, nadie puede sorprenderse de lo realizado ni tampoco de los retos que tenemos como sociedad por delante. Cuando las condiciones tanto internas como externas nos han permitido avanzar más rápido, creo que lo hemos podido hacer, cuando hemos tenido que actuar con toda prudencia y serenidad, creo que también se ha hecho. Creo en este sentido que se ha avanzado por un rumbo, sin sobresaltos y sin sorpresas, tenemos, no hay duda, un Presidente que es congruente y perseverante, que ha sabido actuar conforme a estos tiempos; pensemos hace cinco años, él ha reformado el Estado y él está transformando al país para modernizarlo de viejas prácticas en zonas que en verdad lo necesitaban, en el campo, en la educación, en la salud, las comunicaciones, el ámbito financiero, el tributario, el aspecto comercial, en fin, todo aquello que interesa a la sociedad, pero ha habido congruencia y perseverancia.

Quisiera manifestar finalmente que este proyecto sigue en marcha, que continuaremos aprovechando estas circunstancias favorables que hoy se abren para propiciar mayor crecimiento en un ambiente de estabilidad, así es como el Presidente nos ha instruido actuar y así lo haremos.

Resueltos los problemas más apremiantes que teníamos en el pasado, hoy debemos de transitar hacia una senda de progreso, el énfasis tiene que ser mejores distribuciones de oportunidades, erradicación de pobreza, mejores niveles de vida y sobre todo debemos redoblar el paso en esta última etapa de la administración.

Es cierto, muchos de ustedes lo han dicho aquí, no podemos resolver problemas ancestrales en un solo año, no podemos, no tenemos los recursos físicamente, humanamente no se puede pero si podemos avanzar seriamente, seriamente en forma consistente hacia un mayor bienestar en el país.

Yo quisiera por último señores diputados, que antes de emitir su voto cuando haya discutido y reflexionado sobre estas iniciativas, piensen en qué otros órganos legislativos y parlamentos del mundo se presenta a consideración de ustedes una política que representa más gasto en educación, más gasto en salud, menos impuestos para las empresas, desgravación completa para un millón 300 mil jefes de familia mexicanos; 7 millones de trabajadores que paguen menos impuestos y que también se presente la oportunidad histórica, cuando pasen los años y volteemos para atrás, así creo, sinceramente lo creo, que diremos baja de impuestos, mayores salarios, mayor gasto en educación y podemos por fin, dar apoyos directos al campo.

Nos ha tocado vivir en épocas difíciles, épocas de reto, de globalización, de cambios, verdades inmutables que delante de nosotros se hacían pedazos, pero también tenemos ante nosotros el enorme privilegio, el honor único ante la Patria de tener como opciones más gasto en lo social, menos impuestos, desgravaciones salariales, más apoyo al campo, más apoyo a educación.

Ha sido, al final de cuentas, un privilegio haber estado ante ustedes.

Muchas gracias.

AGRADECIMIENTO

El Presidente:

Solicito al señor Secretario tomar asiento.

Compañeros legisladores, señor Secretario de Hacienda y Crédito Público, doctor Pedro Aspe Armella, esta soberanía popular ha desarrollado una jornada de trabajo intensa, interesante y fructífera para las tareas que el pueblo le ha encomendado; jornada que además ratifica la necesaria relación y colaboración entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, en un ambiente en el que prevaleció el respeto y la tolerancia, los diferentes puntos de vista representados en esta honorable Cámara de Diputados, se han expresado.

Los representantes populares hemos conocido y debatido el Proyecto de Presupuesto de Egresos y la Ley de Ingresos de la Federación para 1994, pieza fundamental en la definición de la política económica e instrumento básico en el desarrollo del país.

Señor secretario Aspe Armella, agradecemos su presencia en este recinto; con su comparecencia se cumple lo establecido en los artículos 93 y 74 fracción IV, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 53 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General.

Sus conceptos, junto con las ideas que en esta sesión se han expresado, ayudarán indudablemente a clarificar el punto de vista y obligan a esta Cámara a continuar una discusión provechosa para todos y sana para la nación. Muchas gracias.

Se designa en comisión para acompañar al doctor Pedro Aspe Armella, secretario de Hacienda y Crédito Público, cuando éste desee retirarse del recinto, a los siguientes ciudadanos diputados:

Angel Aceves Sauceso, Javier Garduño Pérez, Fidel Herrera Beltrán, Miguel Martínez Mireles, Israel González Arreguín, Francisco Dorantes Gutiérrez y Jorge Tovar Montañez. Muchas gracias.

Se les ruega cumplan con su cometido.

Se ruega a los ciudadanos diputados permanecer en el recinto a fin de continuar y agotar los asuntos en cartera. Continúe la Secretaría con los asuntos en cartera.

ORDEN DEL DÍA

La secretaria Noemí Guzmán Lagunes:

Señor Presidente, se han agotado los asuntos en cartera.

Se va a dar lectura al orden del día de la próxima sesión.

«Primer Período de Sesiones Ordinarias. Tercer Año. LV Legislatura.

Orden del día

23 de noviembre de 1993.

Lectura del acta de la sesión anterior.

Comunicaciones de ciudadanos diputados.

Comunicación de la honorable Cámara de Senadores.

Comunicación de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política.

Oficios de la Secretaría de Gobernación.

Con los que se remiten los informes de labores de las secretarías de: Agricultura y Recursos Hidráulicos, Comercio y Fomento Industrial, Defensa Nacional, Energía, Minas e Industria Paraestatal, Salud y Turismo, correspondientes al Período de 1992 - 1993.

Dictámenes de primera lectura

De la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales con proyecto de decreto que concede permiso a la ciudadana Andrea Martínez de Haas, para prestar servicios como secretaria consular en la Embajada Británica en México.

De la Comisión de Hacienda y Crédito Público con Proyecto de Ley que Establece las Reducciones Impositivas acordadas en el Pacto para la Estabilidad, la Competividad y el Empleo.

Y los demás asuntos con los que la Secretaría dé cuenta.»

El Presidente (a las 22:50 horas):

Se levanta la sesión y se cita para la que tendrá lugar mañana martes, 23 de noviembre, a las 10:00 horas.

NOTAS

Siglas y abreviaturas incluidas en esta edición:

Bancomer Banco de Comercio, Sociedad Anónima

Bancomext Banco Mexicano de Comercio Exterior

Banrural Banco Nacional de Crédito Rural

BID Banco Interamericano de Desarrollo

Cader (Sin aclaración)

Carso (Sin aclaración)

CFE Comisión Federal de Electricidad

Conasupo Compañía Nacional de Subsistencias Populares

CEPAL Comisión Económica Para América Latina

CPC Costo Promedio Captación

Cetes Certificados de la Tesorería

Eneho (Sin aclaración)

EPL Empresas con Problemas de Liquidez

Fertimex Fertilizantes Mexicanos

Ficaven Fideicomiso de Carteras Vencidas

Ficorca Fideicomiso para la Cobertura de Riesgos Cambiarios

GATT Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio, por las siglas en inglés

IMSS Instituto Mexicano del Seguro Social

INEGI Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática

Infonavit Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores

ISSSTE Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado

IVA Impuesto al valor agregado

Nafinsa Nacional Financiera, Sociedad Anónima

PECE Pacto para la Estabilidad, la Competitividad y el Empleo

Pemex Petróleos Mexicanos

PIB Producto interno bruto

PPS Partido Popular Socialista

PRD Partido de la Revolución Democrática

Procampo Programa de Apoyos Directos al Producto

Pronasol Programa Nacional de Solidaridad

S.A. Sociedad Anónima

SARH Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos

SEMIP Secretaría de Energía, Minas e Industrias Paraestatales

Sidermex Siderúrgica Mexicana

Telmex Teléfonos de México

TLC Tratado de Libre Comercio

UNAM Universidad Nacional Autónoma de México