LVIII LEGISLATURA

POR LA TARDE
COMPARECENCIA DEL DIRECTOR GENERAL   DE CONACYT, LIC. JAIME PARADA ÁVILA


LA PRESIDENTA DIP. SILVIA ALVAREZ BRUNELIERE: Esta Presidencia informa que han registrado su asistencia ciudadanos diputados miembros de la Comisión de Ciencia y Tecnología.

Hay quórum

(A las 17:24 horas) Se abre la reunión.

De conformidad con el artículo séptimo, numeral 4 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, comparece el ingeniero Jaime Parada Avila, Director General del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, invitado a esta reunión de la Comisión de Ciencia y Tecnología, en la que se llevará a cabo el Análisis del Segundo Informe de Gobierno del Presidente de la República, Vicente Fox Quesada, en el tema de su competencia.

Nos acompañan la diputada Adela Cerezo Bautista, representante de la Mesa Directiva.

Nos acompañan así también, los distinguidos directores de centros e institutos de investigación de la República. Muchas gracias por su presencia.

Voy a dar lectura al Acuerdo Parlamentario aprobado por la Cámara de Diputados en la sesión del 5 de septiembre.

La Junta de Coordinación Política de la LVIII Legislatura, con fundamento en lo dispuesto en los artículos 34 de la Ley Orgánica del Congreso General de los estados Unidos Mexicanos y para dar cumplimiento a lo señalado en el artículo séptimo, párrafos cuarto y quinto del mismo ordenamiento y considerando:

Primero.- Que el artículo 69 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos ordena, que a la apertura del Primer Período Ordinario de Sesiones del Congreso General, asistirá el Presidente de la República y presentará un informe por escrito en el que manifieste el estado que guarda la Administración Pública del país.

Segundo.- Que el artículo 7° Párrafo Cuarto de la Ley Orgánica del Congreso General establece: que las Cámaras del Congreso de la Unión analizarán el informe presentado por el Presidente de la República y que dicho análisis se desarrollará clasificándose por materias en política interior, política económica, política social y política exterior.

Tercero.- Que conforme a lo dispuesto en el artículo 34 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, corresponde a la Junta de Coordinación Política, presentar al Pleno, proyectos de Punto de Acuerdo sobre asuntos que deban ser desahogados en ese órgano.

Cuarto.- Que realizar el Análisis del Segundo Informe de Gobierno de la Administración 2000-2006, de la mejor manera, así como para ordenar comparecencias de los funcionarios responsables de los diversos ramos de la Administración Pública Federal, para ese efecto, es conveniente que la Junta de Coordinación Política en uso de sus facultades, acuerde y proponga al Pleno el formato conforme al cual se desahogarán las mencionadas comparecencias.

Con base en las consideraciones procedentes y con fundamento en el artículo 69 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como en los artículos 7° y 34 de la Ley Orgánica del Congreso General, la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados somete a consideración del Pleno, el siguiente:

ACUERDO

Primero.- El presente Acuerdo regular exclusivamente lo relativo al formato que habrá de observarse durante las comparecencias de los funcionarios del Ejecutivo Federal ante la Cámara de Diputados, a efecto de realizar el Análisis del Segundo Informe de Gobierno del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, Administración 2000-2006.

Segundo.- Las sesiones en que se desahoguen las comparecencias se desarrollarán conforme a las siguientes bases:

1.- En primer término, el funcionario compareciente expondrá el estado de su respectivo ramo hasta por 15 minutos.

2.- A continuación, un representante de cada grupo parlamentario hablará hasta por diez minutos, para establecer la posición del grupo respecto del tema.

3.- A continuación se dará inicio a una o dos rondas de preguntas y replicas, según el acuerdo que para cada comparecencia adopte la Junta de Coordinación Política que se desarrollarán cada una, y en su caso, sucesivamente de la forma siguiente:

a) Cada grupo parlamentario planteará al funcionario, por conducto de uno de sus diputados, una pregunta en un tiempo no mayor a tres minutos.

b) El funcionario responderá cada pregunta lo conducente durante un lapso que no exceda de cinco minutos.

c)El grupo parlamentario en turno, tendrá derecho a una réplica de hasta tres minutos. El orden de intervención de los diputados, tanto para el posicionamiento como para las preguntas y réplicas, será de manera ascendente, según el número de legisladores integrantes de cada grupo parlamentario.

4º.- Concluida la etapa de preguntas, respuestas y réplicas, el funcionario dirigirá a la Asamblea un mensaje final de hasta ocho minutos.

5º.- El presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, concluirá la comparecencia con un mensaje institucional de no más de cinco minutos.

III.- Las comparecencias que se realicen ante Comisiones, se desarrollarán en lo conducente, conforme a las reglas aplicables en el pleno. El mensaje institucional final estará a cargo de quien la presida.

IV.- Las comparecencias en pleno o Comisión, se llevarán a cabo conforme al número y programación que acuerde la Junta de Coordinación Política.

T R A N S I T O R I O

UNICO.- El presente Acuerdo entrará en vigor a partir de su aprobación por el pleno de la Cámara de Diputados.

Firman los Coordinadores de los grupos parlamentarios de la H. Cámara de Diputados.

De conformidad con el Acuerdo Parlamentario que acabo de leer, y que fue aprobado por la H. Cámara de Diputados, que norma el procedimiento para el análisis del Segundo Informe de Gobierno, y dar cumplimiento al Punto Segundo, Numerales I, II y III, se concede el uso de la palabra, al ingeniero Jaime Parada Avila, director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología hasta por 15 minutos.

-EL C. ING. JAIME PARADA AVILA, Director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología: Muy buenas tardes. Diputada Adela Cerezo Bautista, representante de la mesa directiva de la LVIII Legislatura de esta H. Cámara de Diputados. Diputada Silvia Alvarez, presidenta de la Comisión de Ciencia y Tecnología. Señores diputados y miembros de la mesa directiva de la Comisión de Ciencia y Tecnología. Señoras y señores legisladores. Comparezco ante esta soberanía en el marco de la glosa del Segundo Informe de Gobierno del presidente Fox, con fundamento en el Artículo 93 Constitucional, para dar cuenta del estado que guardan la ciencia y la tecnología en el país y de los principales programas, acciones, resultados y avances en el tema.

Lo hago convencido de que es mediante el diálogo y la cooperación entre ambos poderes, como habremos de coadyuvar en la consolidación de nuestro Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología.

Esta primera comparecencia, constituye un hecho sin precedentes, que habla por si misma de la importancia que la ciencia y la tecnología, ocupan actualmente en la agenda del Poder Legislativo y de la presente administración.

Como ya ha sido señalado en el diagnóstico del Programa Especial de Ciencia y Tecnología 2001-2006 PECYT, en los últimos 30 años México no ha logrado sostener una inversión creciente en ciencia y tecnología, rubro al cual este año le dedica sólo el 0.47% del producto interno bruto, equivalente al 1.95% del presupuesto de egresos de la federación, por lo que su crecimiento ha sido marginal, subordinado siempre a lo urgente y lo inmediato.

Países que en la década de los 70 se encontraban en un nivel de desarrollo similar al de México, tales como Brasil, España, Corea, el día de hoy nos superan ampliamente con porcentajes de inversiones en ciencia y tecnología del 0.9%, 1% y 2.6% respectivamente. Cabe hacer notar que Brasil, cuyo producto interno bruto es similar al nuestro, invierte más del doble en investigación y desarrollo experimental que México.

Existe extensa evidencia empírica a nivel internacional de la estrecha correlación entre la inversión que un país realiza en investigación y desarrollo y su competitividad internacional y su ingreso percápita.

Por solo citar unos pocos casos se tiene que países como Estados Unidos, Japón y Francia que invierten más del 2% de su Producto Interno Bruto en investigación y desarrollo, ocupan las más altas posiciones en las clasificaciones de competitividad: primeros ocho lugares y de ingreso percápita más de 30 mil dólares anuales.

Existe otro grupo de países que invierten entre el 1 y 2% de su Producto Interno Bruto en investigación como Canadá, Italia, Singapur y España y ocupan posiciones intermedias en las clasificaciones de competitividad internacional: lugares 9 a 20 y reportan ingresos percápita de 15 mil a 29 mil dólares anuales.

Los países que invierten menos del 1% de su Producto Interno Bruto como México, Indonesia, Turquía, ocupan las posiciones más bajas en la competitividad internacional; México ocupa el lugar número 41 y tienen ingresos percápita inferiores a los 10 mil dólares anuales.

Las experiencias de países que se han esforzado por invertir cada vez más en investigación y desarrollo en los últimos 20 años, como es el caso de Corea, Taiwán, España y más recientemente Brasil, han logrado como resultado elevar sensiblemente su posición competitiva internacional y el ingreso de sus habitantes, lo que demuestra que es la decisión de invertir, en ciencia y tecnología, lo que les ha permitido dichos avances.

Dos de los indicadores más importantes para dimensionar el esfuerzo de un país en materia de ciencia y tecnología, son sus recursos humanos especializados y su infraestructura física, científica y tecnológica.

En el primer indicador, México cuenta actualmente con alrededor de 25 mil personas dedicadas a actividades de investigación y desarrollo, cifra que considera a los investigadores y personal técnico, de los cuales sólo cerca de 8 mil son miembros acreditados del Sistema Nacional de Investigadores, SIN; esto comparativamente con Brasil que cuenta con 50 mil y España con más de 116 mil profesionales científicos y tecnológicos, habla de la brecha que tenemos que superar.

En el segundo indicador, la infraestructura física, científica y tecnológica de nuestro país, también tiene un marcado rezago; el valor acumulado en los últimos 30 años considerando el número de centros de investigación, equipos de laboratorio y otras instalaciones, está estimado en menos de 6 mil millones de dólares, valor que se compara desfavorablemente con los 14 mil millones de dólares acumulados por Brasil y los 18 mil 500 millones de dólares de España en el mismo período.

La enorme brecha que ha generado este rezago histórico se ampliará en los próximos años, ya que hay países que avanzan más rápidamente como es el cado de los Países Miembros de la Comunidad Económica Europea, que para el año 2010, pretenden alcanzar el 3% de su Producto Interno Bruto en investigación y desarrollo experimental. Para el mismo año China pretende alcanzar 2% de esa inversión, con lo que terminará por desplazar a los países manufactureros de baja y media tecnología, entre los cuales se encuentra México.

A pesar de que nuestro país se encuentra claramente en una posición desventajosa, el Programa Especial de Ciencia y Tecnología trazado por la presente administración, ha sentado las pases que nos permitirán no sólo ampliar la capacidad científica y tecnológica del país y elevar la competitividad de las empresas, sino articular y orientar el Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología, hacia la solución de los problemas sociales y económicos de mayor prioridad.

El primer objetivo estratégico del programa especial de ciencia y tecnología es disponer de una política de estado en materia de ciencia y tecnología. Para ello era menester contar con un nuevo marco legal que permitiera los cambios estructurales.

El apoyo brindado por el quincuagésima octava Legislatura en el transcurso de los últimos meses ha sido invaluable y decisivo. Concretamente las modificaciones, consultas, aportaciones y aprobación unánime que el Congreso de la Unión realizó a la Ley de Ciencia y Tecnología, a la Ley Orgánica del CONACYT y la reforma a la Ley del Impuesto sobre la Renta, relativo a los incentivos fiscales, constituyen la estructura jurídica y normativa requerida para una auténtica política de estado en la materia.

Con respecto a la Ley de Ciencia y Tecnología, se ha avanzado en su implementación instaurando el Foro Consultivo Científico y Tecnológico, mismo que está presidido e integrado por 17 miembros destacados de las comunidades científica, tecnológica y académica de mayor renombre del país. La función principal del foro es la de brindar asesoría al Consejo General de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico y a la Junta de Gobierno de CONACYT.

Para la integración del presupuesto federal de Ciencia y Tecnología de la Administración Pública Federal, se instaló el comité intersecretarial contemplado en la ley, que es coordinado de manera conjunta por la subsecretaría de egresos de la Secretaría de Hacienda y la dirección general del CONACYT. Hemos sesionado hasta el día de hoy en 4 ocasiones para presentar en su oportunidad el proyecto de presupuesto 2003, de Ciencia y Tecnología.

El Consejo General de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico, presidido por el señor Presidente de la República, fue instalado el pasado 6 de agosto, en su integración participan 9 secretarios de estado y algunos miembros de la comunidad científica, tecnológica y empresarial invitados por el Titular del Ejecutivo.

Entre sus responsabilidades se encuentra la de definir y establecer las políticas de la Administración Pública Federal en materia de ciencia y tecnología, así como la aprobación del anteproyecto de presupuesto por el comité intersecretarial. En esta primera reunión se llevó a consideración de este consejo general, la ratificación del programa especial de ciencia y tecnología, se rindió el informe general del estado que guarda la ciencia y tecnología en el 2002 y se puso a consideración el anteproyecto de presupuesto 2003,.

Los avances para la conformación de la red de grupos y centros de investigación, así como el establecimiento de la Conferencia Nacional de Ciencia y Tecnología, se han enfocado en esta etapa, a la construcción de consensos de su operación. Se cuenta ya con un proyecto de bases y reglamento para la operación de los mismos.

En cuanto a los avances en la implementación de la Ley Orgánica del CONACYT, se llevó a cabo la instalación de la primera reunión de trabajo de la junta de gobierno, presidida por el Secretario de Economía, quien fungirá como presidente de la misma hasta el mes de junio del año entrante.

Posteriormente de manera rotativa y por periodos de un año, asumirá la presidencia los Secretarios de Salud, Agricultura y Energía, subsecuentemente. Así se garantizará la participación de las distintas secretarías del Gobierno Federal en los diferentes programas y acciones relativas a ciencia y tecnología. Asimismo, conforme a las disposiciones de la nueva legislación, se elaboró el estatuto orgánico del Conacyt como un instrumento innovador en la administración pública, ya que contiene las bases de organización y funcionamiento de Conacyt como entidad no sectorizada, dependiente del Ejecutivo Federal, con funciones de coordinación sectorial y administrador de un ramo presupuestal específico para ciencia y tecnología.

Simultáneamente se ha llevado a cabo la reestructuración de procesos internos para mejorar la calidad del servicio y evaluación de las actividades del Conacyt como entidad asesora y especializada del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología.

El segundo objetivo estratégico del Programa Especial de Ciencia y Tecnología, el Pecyt, es incrementar la capacidad científica- tecnológica del país. La meta al 2006 es alcanzar el uno por ciento del producto interno bruto, como inversión en investigación y desarrollo, en la cual participen conjuntamente el Gobierno Federal, los gobiernos estatales y municipales y el sector productivo.

Es importante señalar que en la propuesta original de presupuesto para el Conacyt durante el ejercicio fiscal de 2002 le otorgaba un monto de 3 mil 366 millones de pesos. Dicho monto ponía en serio riesgo la continuidad de los programas sustantivos y la posibilidad de alcanzar los objetivos planteados en el programa de ciencia y tecnología.

Es justo dar crédito a la LVIII Legislatura de esta Cámara de Diputados por haber reconocido la importancia estratégica que tiene la ciencia y la tecnología para el crecimiento y desarrollo del país y haber decidido aprobar un incremento de mil millones de pesos al presupuesto total para Conacyt.

De los recursos adicionales autorizados por esta soberanía 520 millones de pesos se aplicaron en la constitución de los fondos sectoriales y mixtos, 260 millones para otorgar nuevas plazas y nuevas categorías en el Sistema Nacional de Investigadores, 180 millones para apoyo de proyectos de investigación científica básica de alta calidad y los 40 millones restantes para ampliar la cobertura del programa de becas para la formación de científicos y tecnológicos.

Es importante destacar que de este incremento presupuestal no se aplicó recurso alguno para gastos de administración del Consejo.

Entre los diferentes instrumentos previstos por la ley para propiciar una mayor inversión nacional en ciencia y tecnología se encuentran los fondos sectoriales establecidos con las secretarías y entidades del Gobierno Federal y los fondos mixtos establecidos con los gobiernos de los estados.

A la fecha se tienen siete fondos sectoriales en operación para la presentación de proyectos de investigación y desarrollo en Semarnat, Sagarpa, Economía, Marina, Sedesol, Conafor y Educación.

En el caso de las tres primeras convocatorias cerradas en días pasados se recibieron 620 proyectos para Semarnat, 524 de Sagarpa y 288 en la Secretaría de Economía. En total, un mil 432 proyectos propuestos, con un monto total solicitado de recursos de 4 mil 316 millones de pesos y con recursos disponibles de 420 millones de pesos, es decir, una respuesta a las convocatorias 10 veces superior, por parte de las comunidades científica, tecnológica y empresarial en relación al presupuesto disponible.

En los últimos meses de 2001 y 2002 el Conacyt y las secretarías han comprometido recursos para estos fondos por 878 millones de pesos, de los cuales al mes de julio de 2002 ya se han aportado 292 y están por aportarse en el resto del año 586 millones.

Los montos comprometidos por CONACYT son 378 millones de pesos, de los cuales 126 millones de pesos ya han sido aportados para la constitución de estos seis fondos a los que he hecho alusión.

- LA C. PRESIDENTA: Ingeniero, cuenta con un minuto para terminar.

- EL SR. ING. JAIME PARADA AVILA, DIRECTOR DE CONACYT: ¡Ay Dios santo! De igual forma a la fecha se han suscrito convenios para la constitución de 23 fondos mixtos por un monto aproximado de 247 millones de pesos comprometidos por el CONACYT y los estados involucrados. Esta cifra supera diez veces los recursos aportados por los gobiernos estatales en el año 2000 y permitirán atender problemas específicos de las entidades federativas, lo cual representa un importante avance en la meta de descentralización de las actividades científicas y tecnológicas del país.

La constitución de estos fondos mixtos y sectoriales permitirá que el presente año se aprueben proyectos por 1,400 millones de pesos.

También quisiera hacer alusión al otorgamiento de los incentivos fiscales autorizados por este Congreso de la Unión en donde precisamente se otorgaron 415 millones de pesos a 548 proyectos aprobados que corresponden a 150 empresas de las cuales 90 de ellas son micro, pequeñas y medianas empresas.

Todo esto da cuenta de que durante el presente ejercicio el gasto federal en materia de ciencia y tecnología ascenderá a la cantidad de 26 mil 601 millones de pesos, que significa un 5 % aproximadamente de incremento en relación con el año previo.

Muchas gracias.

- LA C. PRESIDENTA: Muchas gracias, ingeniero.

Están inscritos para fijar la posición de su partido los siguientes ciudadanos diputados: Por el Partido de la Revolución Democrática, el diputado Francisco Patiño Cardona; por el Partido Acción Nacional, el diputado Luis Aldana Burgos y por el Partido Revolucionario Institucional, el diputado Aarón Irizar López. Tiene la palabra hasta por diez minutos, el diputado Francisco Patiño Cardona, del Partido de la Revolución Democrática.

- EL C. DIP. FRANCISCO PATIÑO CARDONA: Compañeras y compañeros diputados; maestro Jaime Parada: El día de hoy es un día especial porque por primera vez en esta Cámara de Diputados se recibe al Consejo Nacional de Ciencia y tecnología, como una Secretaría de Estado, lo cual deja un buen sabor de boca a la comunidad científica de nuestro país. Es un buen inicio, con nuevas leyes y con un trato mucho mejor, que da mayor prioridad a la ciencia y a la tecnología del país que usted actualmente dirige en nuestra nación.

Sin embargo un balance objetivo y sereno del último año en esta tarea tan importante para la nación, nos muestra que las cosas han logrado caminar en algunas cuestiones básicas, aunque un cúmulo de transformaciones fundamentales siguen atoradas, a veces por falta de voluntad y a veces por falta de proyecto.

Un nuevo escenario legislativo nos separa del anquilosamiento que veíamos en el 2001. Como es de su pleno conocimiento, maestro Parada, a fines del año pasado el Presidente Fox envió a esta Cámara de Diputados dos iniciativas de ley que plantearon reformar el marco legal de la ciencia y tecnología mexicana. Con todo y sus limitaciones dichas iniciativas fueron un punto de partida suficiente para ser enriquecido por parte de las distintas fracciones parlamentaria, en particular y destacadamente el PRD que las dimensionó, dando lugar a ordenamientos legales de mucho mayor alcance y contenido. Distintos son los beneficios de ambas leyes y han sido ampliamente señalados y no me detendré en este punto.

No obstante en mi partido consideramos que los nuevos ordenamientos necesitan ser perfeccionados y al mismo tiempo creemos que también se necesita dar mayor, mucho mayor dimensión a la ciencia y la tecnología en el marco legislativo, a fin de hacer converger todas las condiciones necesarias para contar con una verdadera política de Estado en ese tema. Para ello estamos preparando una iniciativa de reforma constitucional para crear un organismo que encarne una verdadera política de Estado para la ciencia y la tecnología.

En ese tenor también es destacable el ambicioso Programa Nacional de Ciencia y Tecnología que se integró para enfocar los esfuerzos que en ese sentido se desarrollarán durante este sexenio en perspectiva de mediano y largo plazo. Pero en ese claroscuro que caracteriza la administración del Presidente Fox, la buena acogida que el nuevo programa recibió por parte de la comunidad científica, académica, empresarial y política, junto con el compromiso de elevar para el 2006 el gasto de ciencia y tecnología al 1 por ciento del PIB, fue puesta en entredicho por el propio Ejecutivo Federal poco tiempo después al proponer el presupuesto de egresos de la federación para este 2002, en donde se aprecia un enorme recorte al gasto federal en ciencia y tecnología del orden del 20 por ciento en términos reales.

En el año 2000 la inversión federal en ciencia y tecnología fue del 0.42 por ciento del PIB, la cual representa continuar o representaba continuar con el crecimiento que se inició luego de la crisis de 1995. Para 2001 esta proporción llegó a cerca del 0.45 por ciento del PIB.

Pero fiel a su lógica política de prometer mucho pero cumplir poco, muy poco, el Titular del Ejecutivo Federal propuso reducir drásticamente el gasto federal a solo 21 mil 936 millones de pesos. Esto significaba regresar a una proporción del 0.35 por ciento del PIB, lo cual en términos globales era un retroceso a los niveles de 1995, cuando el país se encontraba sumido en una crisis profunda.

El Congreso, a iniciativa original de un servidor y en la madrugada de aquél entonces y a través de mi partido, acordó asignar 1,000 millones de pesos adicionales para el Conacyt, aunque esto no fue suficiente para revertir los efectos de esa política económica que prioriza destinar 28 mil millones de pesos para el Instituto Bancario de Protección al Ahorro, institución que no solo ha sido ineficaz sino dolosamente manejada mientras se escatiman recursos para becas de posgrado y plazas para investigadores, que son la oportunidad de miles de jóvenes para realizar el relevo generacional que esta tarea nacional está demandando.

Contra lo señalado en el informe, en el sentido de que el presupuesto para la ciencia y tecnología en este 2002 es de 26 mil 601 millones de pesos, nosotros sostenemos que éste es de sólo 22 mil 936 millones de pesos, como se asienta en la página 24 del Capítulo 2 de la Exposición de Motivos del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación que la Secretaría de Hacienda presentó a fines del 2001, de la cual le voy a entregar una copia. Se establece un monto de 21 mil 936.7 millones para ciencia y tecnología.

Si los legisladores sólo incrementaron en mil millones el presupuesto del CONACYT, eso nos da 22 mil 936.7 millones, por lo que nos preguntamos: ¿De dónde salieron casi 3 mil 700 millones de pesos, los cuales no presupuestó Hacienda ni aprobamos los diputados?

Le reitero maestro Parada, el presupuesto es menor en términos reales al de 2001 y en ello coincidieron en su momento el Foro Permanente de Ciencia y Tecnología, la Academia Mexicana de Ciencias y la Asociación Mexicana de Directivos de la Administración Aplicada y el Desarrollo Tecnológico, en un documento fechado en noviembre del año 2001, que nos fue entregado a diputados de todos los partidos; también le entregaré una copia, con la finalidad de estar en la misma frecuencia y poder llegar a conclusiones favorables en materia de presupuesto.

Ojalá que en adelante no existan tales discrepancias, ni pretendan presentar un mismo recurso, presupuestándolo tanto en el área de educación como en el tema de ciencia y tecnología, como acostumbran hacerlo los tecnócratas que todavía manejan las finanzas públicas.

Ese financiamiento no sólo es raquítico, sino que en nuestra opinión no se canaliza con oportunidad, como se quejan los beneficiarios de los proyectos de investigación financiados por CONACYT. A ese respecto vale la pena señalar que la nueva Ley de Ciencia y Tecnología abre la posibilidad de que la iniciativa privada acceda a fondos públicos y ante ello mi partido planteó una serie de reservas que no fueron incorporadas, por lo cual le planteamos que en las reglas de operación para acceder a esos recursos, se establezcan criterios que beneficien a la micro, pequeña y mediana empresas de manera prioritaria, cuidando que ellas sean de origen nacional. Sería contrario al espíritu de la ley que esos recursos sólo beneficiaran a grandes empresas, incluso a grandes grupos empresariales transnacionales.

El Partido de la Revolución Democrática se pronuncia por un financiamiento público suficiente a las acciones de ciencia y tecnología equivalente al 1 por ciento del PIB y se manifiesta en contra de lo señalado por el Presidente, en el sentido de que ese 1 por ciento se componga de sólo 0.6 por ciento por parte del dinero público y de que el otro 0.4 por ciento lo aporte el sector privado.

Creemos que el 1 por ciento del PIB debe ser público y aspiramos a que la iniciativa privada invierta otro medio punto porcentual, como ya sucede en otros países que tienen un nivel de desarrollo como el nuestro, como usted lo señaló recientemente, poniendo como ejemplo Brasil.

Bienvenida la inversión privada, la cual debe ser alentada por distintos medios. Voy a concluir maestro Parada.

Por parte de mi partido, en las semanas que siguen propondremos una iniciativa de reformas a la Constitución, a fin de crear un órgano con plena autonomía y capacidad de  decisión y gestión, que encarne esa política de Estado de la ciencia y tecnología que tanto necesita el país para convertirse en una potencia media. Creo que en ello coincidimos plenamente.

La política de Estado en ciencia y tecnología que aún no vemos más que en planes, debe tener un carácter transexenal y estar al margen de intereses partidistas y de grupos, que fortalezca la carrera científica, que aliente a la inversión privada sin afectar el interés público, que sea descentralizada y que, entre otras cosas fortalezca el sistema de investigación de las instituciones de educación superior, en particular las públicas.

En el Partido de la Revolución Democrática –y usted lo sabe muy bien, maestro Parada- apoyaremos...

LA PRESDIENTA: Concluya por favor, señor diputado.

EL DIP. FRANCISCO PATIÑO CARDONA: Concluyo...apoyaremos todo aquello que tienda a impulsar esa política, pero igualmente seremos muy claros y muy duros en rechazar todo aquello que atente contra los principios públicos de la política científica.

Esperamos que el nuevo CONACyT que surja de las leyes aprobadas por esta soberanía pueda trabajar a plenitud por el bien de la ciencia y la tecnología mexicanas, pues al día de hoy aún hay muchas promesas por cumplir.

Muchas gracias.

LA PRESIDENTA: Gracias, diputado Francisco Patiño Cardona.

Tiene la palabra hasta por diez minutos, el ciudadano diputado Luis Aldana Burgos, por el Partido Acción Nacional.

EL DIP. LUIS ALDANA BURGOS: Con su permiso, señora Presidenta. Compañeros legisladores; señor Director del CONACyT:

En el Partido Acción Nacional también celebramos esta primera comparecencia histórica de un Director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología ante esta Cámara de Diputados.

La ciencia y la tecnología se han convertido en herramientas indispensables en la construcción de sociedades modernas e incluyentes; México no es un gran productor ni generador de estos rubros pero en contraparte está íntimamente ligado con países que sí lo son, por eso Acción Nacional considera urgente y necesario enfatizar el apoyo y la promoción, tanto pública como privada en estas materias para revertir esa situación y competir en mejores condiciones con nuestros socios comerciales, y más importante aún: estar en la posibilidad de brindar un mayor nivel de bienestar a la población a través de la generación y aplicación del conocimiento científico y tecnológico hacia sus necesidades.

Acción Nacional está convencido que no actuar o responder pasivamente ante esos fenómenos y permitir que sea la vorágine externa la que nos conduzca, sería irresponsable, sobre todo que tenemos la capacidad para forjar nuestro futuro.

El Ejecutivo Federal, consciente de la situación que prevalece en nuestro país, ha plasmado sus intenciones en políticas, estrategias y acciones en el Programa Especial de Ciencia y Tecnología 2001-2006. En este documento se establecen las prioridades del programa y las metas a alcanzar a final de esta administración. Parte medular del programa lo componen sus tres objetivos estratégicos:

Primero. Contar con una política de Estado en ciencia y tecnología.

Segundo. Incrementar la capacidad científica y tecnológica del país, y

Tercero. Elevar la competitividad y la innovación de las empresas.

Sobre el primer objetivo, el diagnóstico del Programa Especial en Ciencia y Tecnología describe una situación no muy halagadora; hasta hace poco el Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología, compuesto por un agregado de instituciones de los diversos sectores públicos, tanto Federal como estatal, privado, social, las comisiones de Ciencia y Tecnología del Congreso y el sector externo, estaba desarticulado, pues no se concebía como un sistema ya que prácticamente en todos los casos faltaba una adecuada institucionalización de las relaciones y flujos de información entre ellos. Esta desarticulación se manifestaba en una nula unidad en los procesos de planeación, programación y evaluación; en una ausencia de un presupuesto nacional de ciencia y tecnología como orientación estratégica y programática y se carecía de una entidad que planificara, presupuestara y coordinara al gasto federal de una manera integral. Hoy, este diagnóstico, no describe la realidad.

A partir de las iniciativas presentadas por el Poder Ejecutivo y que el Congreso de la Unión perfeccionó y aprobó por unanimidad, México cuenta con las bases normativas de una política de estado en ciencia y tecnología, producto de las leyes de ciencia y tecnología y orgánica del CONACYT.

Se estableció un Consejo General de Investigación Científica y Tecnológica como el máximo órgano de política y coordinación en la materia, presidida por el Presidente de la República y el Director del CONACyT, aquí presente, el cual funge como Secretario Ejecutivo.

Asimismo se transformó la figura jurídica del CONACyT a un organismo descentralizado no sectorizado, lo cual le permite gozar de mayor autonomía técnica y de gestión.

Aunado a ello, se creó un ramo presupuestal para Ciencia y Tecnología que agilizará la asignación de recursos y facilitará su escrutinio y evaluación por parte del Poder Legislativo.

También se cuenta, hoy día, con un Comité Intersecretarial para la integración del Presupuesto Federal de Ciencia y Tecnología.

Quisiera hacer énfasis, en que el dictamen emitido por la Comisión de Ciencia y Tecnología fue votado por unanimidad por ambas Cámaras Legislativas y con ello se sentaron las bases del marco jurídico para ordenar, agilizar y hacer más fluida la acción gubernamental en el rubro de ciencia y tecnología.

Este hecho es de gran trascendencia para el país, puesto que otorga a las autoridades responsables de la materia, las facultades necesarias para llevar a buen término sus tareas encomendadas. Y si bien, no es un hecho que por sí solo resuelva y revierta el rezago que exhibe nuestra República, sí brinda las herramientas y mecanismos para que ello suceda.

En cuanto al incremento en la capacidad científica y tecnológica, como sabemos, las cifras sobre la actividad de patentes, reflejan fielmente el nivel tecnológico que guardan los países y de acuerdo a los datos que reporta el segundo informe, la situación no es halagadora para nuestro país. El año pasado de cada 100 patentes que se solicitaron, apenas cuatro eran de origen nacional y de cada 1000 patentes concedidas, sólo dos fueron nacionales.

Eso, ingeniero Parada, es muy grave, pues revelan una enorme dependencia del exterior.

Respecto al personal dedicado a la ciencia y a la tecnología en México, por cada mil personas de la población económicamente activa, apenas hay un punto 8 personas dedicas a actividades de investigación y desarrollo, mientras que esa misma relación en España es de cinco; en Estados Unidos es de más de 8 y en Francia y Alemania es de casi 7. Eso sin contar que la cifra para México es de este año y las de los demás países que mencioné, es de un par de años atrás, por lo menos.

El reto es enorme y Acción Nacional sabe muy bien que este capital humano no se hace de la noche a la mañana. Por esa misma razón le pedimos y exigimos, señor director, que imprima mayor celeridad y ahínco en las acciones dirigidas a formar personas con postgrados.

Las becas que se otorgan con este fin, son un medio indispensable para dar alcance a nuestros socios comerciales y ubicarnos en mejores condiciones de competencia, a la vez de ser capaces de producir conocimiento científico y tecnológico al servicio y atención de las necesidades de los mexicanos.

Sin duda, es loable también la meta trazada para el 2006, en la que se espera contar con un gasto en investigación y desarrollo equivalente al 1% del Producto Interno Bruto y me parece importante hacer hincapié en que este concepto se refiere, por definición, al gasto público y privado.

La participación de las empresas es crucial y al igual que como nos comparamos con aquellos quienes nos aventajan, también hay que hacerlo cuando las cifras nos revelan el formidable esfuerzo que realiza el Estado.

Quisiera dejar en claro que Acción Nacional, tanto en el Poder Legislativo como en el Ejecutivo y otros órdenes de gobierno, no comparte la idea de que sea el Estado en quien recaiga todo el peso de este rubro. Para los que argumentan que la participación del Estado es magra y que debe aumentarse, les daré algunos datos, sobre la participación en el gasto de investigación y desarrollo en países, hoy ya desarrollados, que es del orden siguiente:

En Francia la inversión pública en ciencia y tecnología anda un 37% aproximadamente, mientras que la privada anda en un 54%.

En España hay una participación de 39 contra 50%.

En Alemania 31 contra 66

En Estados Unidos 27 contra 68%

Y en Japón la participación pública es del 20% y la privada de 72%.

Si lo comparamos con México, aquí tenemos una participación pública del 65%, mientras que la inversión privada es de apenas del 24%.

Como vemos la contribución del Estado mexicano en el gasto, en la investigación y desarrollo es la más alta, entre los países miembros de la OCDE, esta contribución señala el compromiso del Estado en la investigación y el desarrollo pero debe revertirse.

Un medio para alcanzar este objetivo, es incentivar a las empresas para que inviertan en investigación y desarrollo, también en este rubro Acción Nacional ha hecho su parte, pues si ustedes recuerdan en marzo del año, nuestro compañero diputado, José Marcos Aguilar Moreno, presentó una iniciativa, para agilizar y hacer expedito el crédito fiscal para aquellas empresas que inviertan en proyectos de investigación y desarrollo tecnológico. Además se aumentó el porcentaje de crédito y se modificó su aplicación al gasto total de la inversión, en vez del incremental como se venía aplicando.

Nos parece, señor director, que las acciones del legislativo le han allanado el camino al CONACYT en términos normativos, que es el ámbito y espacio de trabajo en las Cámaras. Nuestra labor la hemos cumplido a cabalidad, conscientes del impulso necesario, que exige la ciencia y la tecnología y la investigación y desarrollo de nuestro país.

Ante ello, los legisladores de Acción Nacional, solicitan de usted congruencia en los cursos de acción que promueven y fortalezcan la cooperación entre los distintos sectores de la sociedad: el público, el privado y el socia, estrategia y dirección en la elaboración de programas de investigación científica, desarrollo, innovación y transferencia tecnológica, que incidan en la generación del conocimiento, el bienestar social, la creación de empleo y el desarrollo del país.

Sensibilidad y conciencia, en que gran parte de lo que siembre con sus acciones, será la base sobre la que millones de mexicanos vivirán en un futuro no muy lejano. Estas tareas, señor director, están en sus manos. Muchas gracias.

-LA C. PRESIDENTA: Gracias diputado Luis Aldana Burgos. Tiene la palabra hasta por 10 minutos el ciudadano diputado Aaron Irizar López por el Partido Revolucionario Institucional.

-EL C. DIPUTADO AARON IRIZAR LOPEZ: Con su venia señora presidenta. Compañeros legisladores. Ingeniero Jaime Parada es un placer tenerlo en esta su casa, en este Congreso. México y los mexicanos nos encontramos ante una realidad sumamente diferente en lo social, en lo político y en lo económico al inicio de este nuevo siglo, si lo comparamos con el siglo que nos antecedió.

Esto conlleva a enfrentar con decisión, graves y distintos retos que nos permitan lograr la estabilidad y el avance de los mexicanos. En esta dirección y con esta problemática, la educación y la ciencia y la tecnología juegan un papel extraordinariamente importante.

En una estrecha semblanza, visualizamos que México en los próximos 25 años tendrá transformaciones importantes; se destaca que el cambio estructural de la población que influye e influirá en las decisiones productivas, en la política del campo, en la medicina, en la agroindustria, en la genómica, etcétera, etcétera.

Por ejemplo, en el año 2000, México contaba con poco más de 98 millones de habitantes, pero según estudios de prospectiva, al año 2025 la población nacional alcanzará entre 136 y 150 millones. Es decir, más del 50% de los habitantes de México en 1995.

Esto implica cambios sustantivos en las cantidades de necesidades de la población mexicana. Tan solo en alimentos se requerirá una y media veces la cantidad de alimentos disponibles el día de hoy; el proceso de urbanización también continuará aumentando; en el futuro, la población será en promedio más vieja que la actual. En resumen, tendremos impactos diferentes en calidad y en intensidad. Sería necesario recurrir a la ciencia y a la tecnología para incrementar la productividad, la competitividad avanzar en la medicina genómica, generar tecnologías nacionales, etcétera y todos estos son campos de actuación certera de la innovación y el desarrollo tecnológico.

Por ello consideramos que el cambio estructural más urgente de México es el de renovar el sistema educativo nacional, que nos permita incorporar a México a niveles de igualdad con los países socios y competidores en el entorno internacional.

Somos convencidos que con un sólido sistema de educación, dándole primerísima importancia a la ciencia y a la tecnología, México tendrá posibilidades reales de lograr las grandes transformaciones sociales que tanto anhelamos los mexicanos.

Los ejemplos de países que han logrado cambios radicales y que han incorporado a su población a mejores indicadores de desarrollo y bienestar social, le han apostado sin tibiezas, sin titubeos a la educación, a la ciencia y al desarrollo tecnológico.

Nuestro país requiere hacer de la ciencia y la tecnología toda una política de Estado y ésta no sujeta a variables de ninguna naturaleza; también requiere un creciente aumento presupuestal para este rubro; necesitamos también consolidar una estrecha vinculación entre el sector productivo empresarial con los centros de educación superior e instituciones de desarrollo tecnológico.

Necesitamos ir todavía más, para conformar agresivas políticas de incentivación fiscal para motivar a los que hacen e invierten en innovación y desarrollo científico tecnológico; se requiere de igual manera potenciar regionalmente con proyectos específicos de desarrollo tecnológico.

Es necesario de igual manera y de enorme importancia también, impulsar el federalismo a través de la descentralización de la ciencia y la tecnología hacia los municipios y hacia los estados de una manera concertada con los sectores público, social y privado.

Es cierto, hoy tenemos un marco jurídico mejor, indiscutiblemente que es una realidad, pero no es suficiente. Tenemos que divisionar (¿) todos los esfuerzos para lograr una sola voluntad favorable que converja en una gran estrategia nacional sin escatimar esfuerzos y sin escatimar recursos.

Los diputados priístas definimos como éste, el camino que debe reconocer México. Haremos en este sentido todo el esfuerzo que nos corresponda, porque demostrado está que un país con buena ciencia y tecnología es más productivo que aquel país que no la tiene, la tiene insuficiente o la tiene rezagada.

Ya no basta con contar amplios y variados recursos naturales para ser un país rico, ejemplos tenemos muchos en el mundo: Venezuela tiene petróleo; Sudafrica tiene oro y diamantes; Brasil tiene selvas, litorales y minerales; Arabia Saudita tiene petróleo; México tiene litorales, plata y petróleo y todos estos países en la actualidad siguen siendo pobres.

En cambio hay países que son ricos porque su recurso humano es rico en conocimientos, por lo que se deduce que la alternativa es educar y educar muy bien a la gente para darle valor a la mente de obra, en lugar como viene sucediendo, le estamos dando valor a la mano de obra.

Cuánta razón tenía Winston Churchill, cuando afirmó: "Todos los grandes imperios del futuro serán los imperios de la mente. La fuerza está en el conocimiento". Resulta interesante estar atento a los impactos que están causando las nuevas tecnologías en los países desarrollados del mundo. Podemos poner como ejemplo a los Estados Unidos en 1900, del cual sus 12 empresas más importantes diez de ellas vendían productos básicos y solamente dos, vendían tecnología, es decir, vendían conocimientos.

Después, al año 2000 de las doce compañías más importantes de ese país, hoy diez venden tecnología, venden conocimientos y solamente dos, venden productos básicos. Y se puede afirmar sin atrevimiento alguno que en los próximos años la investigación científica y el desarrollo tecnológico transformará radicalmente las economías de los pueblos y modificará los estándares de calidad de vida de los humanos.

Los países no se pueden aislar de las fuerzas del mercado, pero tampoco se pueden aislar de los impactos y los avances de la tecnología. Con la revolución digital y con la revolución genética, se inicia una nueva etapa en los humanos en la tierra. Habrá cambios profundos en los próximos años en la agricultura, en la química, en la medicina, en la genómica, en los energéticos, etc. etc. Los países poderosos serán los países que posean el conocimiento.

Ingeniero Jaime Parada, para finalizar quiero dejar asentado que los diputados priístas estamos abiertos y dispuestos para sumar esfuerzos que vayan mucho más allá de la pluralidad para lograr juntos toda una estrategia nacional para potencia el crecimiento de la ciencia y de la tecnología en nuestro país y que sus frutos beneficien a todos los mexicanos.

No podemos perder las batallas del futuro por no darle la dimensión, el tamaño y el tratamiento que requiere la investigación y el desarrollo científico y tecnológico de México. Estamos en la mejor disposición para ir juntos para que México avance.

-PRESIDENTA: Muchas gracias diputado Aarón Irizar López.

Para dar cumplimiento al punto segundo, numeral tercero incisos a) b) y c), para la primera ronda de preguntas hasta por 3 minutos con derecho a réplica y por 3 minutos, se han inscrito los siguientes ciudadanos: por el Partido de la Revolución Democrática, el diputado Humberto Mayans Canabal; por el Partido Acción Nacional, la diputada Mónica Serrano Peña y el diputado José Rivera; por el Partido Revolucionario Institucional, el diputado Luis Gerardo Rubio Valdés.

Tiene la palabra hasta por 3 minutos para formular su pregunta, el diputado Humberto Mayans Canabal.

.EL C. DIPUTADO HUMBERTO MAYANS CANABAL. Compañeras y compañeros legisladores, maestro Jaime Parada: el Programa Especial de Ciencia y Tecnología, integrado por la entidad a su cargo, establece cinco condiciones indispensables para alcanzar el conjunto de metas planteadas para el 2006.

La primera de estas condiciones tiene que ver con el financiamiento público suficiente para este rubro, cuestión que como mostró el posicionamiento hecho por el diputado Patiño del grupo parlamentario del PRD, no es suficiente sino incluso es menor al de años anteriores.

La segunda se refiere a que el sector privado eleve su inversión en investigación y desarrollo experimental a una tasa anual del 33%, lo que equivale a que las principales empresas en el país inviertan por lo menos el uno por ciento de sus ventas en dichas actividades.

A este respecto consideramos que aun con el incremento en lo invertido por las empresas mediante el crédito fiscal del 30%, según se reporta en el informe esa meta aún está muy lejana de cumplirse.

La tercera condición tiene que ver con la modificación del marco legal que norma el desarrollo de esta tarea estratégica para la nación. A este respecto los legisladores cumplimos mejorando sustancialmente las iniciativas enviadas por el titular del Poder Ejecutivo al Congreso de la Unión.

La cuarta se refiere a la importancia en la formación de posgraduados y al fortalecimiento de la educación superior.

La quinta está íntimamente relacionada con la anterior y tiene que ver con la creación de plazas para personal dedicado a la investigación y al desarrollo de los centros públicos de investigación y de las instituciones de educación superior.

Baste decir que el propio informe que envió la SEP a esta soberanía no da cuenta de una sola plaza creada en el período que se informa.

Ante este conjunto de condiciones me permito hacer las siguientes preguntas, señor director:

¿No considera usted que a partir del diagnóstico que hizo al inicio de esta comparecencia el día de hoy y de las metas planteadas en el programa sexenal se contradicen éstas fundamentalmente con los recursos y estrategias que el Gobierno Federal ha canalizado e instrumentado para ello, cuestión que en nuestra opinión se evidencia ante los pobres resultados obtenidos? Qué está pasando, señor director.

Dos. Cómo se va a lograr crear 12 mil 500 nuevas plazas en centros públicos de investigación y 15 mil 500 en instituciones de educación superior.

Tercero. Cómo evitar la fuga de cerebros y la repatriación de los que han decidido irse por falta de perspectivas y condiciones óptimas para realizar su trabajo.

Cuarto: Cómo renovar la planta académica dedicada a la investigación, cuyo envejecimiento empieza a poner en riesgo la viabilidad misma de la investigación nacional pues el promedio es de 52 años.

Quinto. Por qué, señor director, en el Foro de Cuernavaca hace usted un llamado a la comunidad científica para presionar al Congreso para lograr un presupuesto alto para el Conacy el año entrante, es decir para el 2003, si nosotros, los legisladores de todos los partidos, somos sus aliados, como se lo demostramos durante todo el año pasado que, gracias a la iniciativa del diputado Patiño y por apoyo de ello se tuvo incluso un incremento adicional del presupuesto del organismo que usted dirige.

¿No cree usted que a quien debe de presionar es a la Secretaría de Hacienda para que envíe a esta honorable Cámara una propuesta de presupuesto acorde a las necesidades, demandas y aspiraciones del Conacyt y no sufra recortes durante el año 2003?

Por sus respuestas muchas gracias. (aplausos)

LA C. PRESIDENTA: Gracias, diputado Mayans. Tiene la palabra el ingeniero Jaime Parada Avila hasta por 5 minutos, para dar respuesta.

EL C. INGENIERO JAIME PARADA AVILA: Muchísimas gracias. Voy a tratar de responder a las inquietudes planteadas por el señor diputado Humberto Mayans.

Justamente esta falta de congruencia entre las metas planteadas y el presupuesto para lograrlo y que el tema de ciencia y tecnología es un tema que corre horizontalmente a lo largo de todas las secretarías de Estado y dependencias del Gobierno Federal es que fue muy importante esta nueva Ley de Ciencia y Tecnología.

Déjeme darle algunos datos, señor diputado…

Del presupuesto de 26 mil millones aproximadamente de este año, solamente el presupuesto de CONACYT es de 4 mil 366. Con la Nueva Ley, punto número uno, el tema de ciencia y tecnología tiene una mayor visibilidad porque antes se perdía en las cuestiones programático-presupuestales de cada dependencia y dependía de la voluntad, el interés y la dedicación del titular respectivo.

Ahora con la creación de un ramo específico para ciencia y tecnología, con una obligación específica de parte del Consejo General de supervisar que se tenga un presupuesto digno, consolidado de ciencia y tecnóloga, yo espero que este tipo de incongruencias dejen de ocurrir en el futuro.

Ciertamente ustedes saben desde 1970 que fue creado CONACYT, nació con una estructura un poco ambigua, con alguna junta directiva rodeada de Secretarios de Estado que fue sumamente difícil convocar.

Posteriormente se sectorizó en la SPP, y posteriormente en la SEP. Se entenderá entonces que el tema de ciencia y tecnología en una secretaría con tantas necesidades en el tema educativo, el de ciencia y tecnología obviamente quedaba como uno de una lista inmensa de necesidades a cubrir.

Es precisamente los avances en implementación de esta Ley, que yo espero, señor diputado, que nos permitan, lo comparto con usted, que tengamos un presupuesto acorde a las metas trazadas.

Desde luego el tema que usted menciona de plazas, es un tema de toral importancia. El Gobierno Federal enfrenta un severísimo problema de pasivo laboral. Creo que es de conocimiento de este Congreso. Hemos hecho la petición al Consejo General, al señor Presidente de que se abran cuando menos 4 mil nuevas plazas para científicos y tecnólogos en nuestros centros públicos y en nuestras instituciones de educación superior, porque de otra manera sería incongruente que estemos formando becarios donde el país invierte cantidades importantes y luego no tenemos una plaza de carrera para ofrecerles una posición laboral.

El asunto de la fuga de cerebros, nosotros hemos hecho análisis, señor diputado, de cerca de cien mil becas que en 30 años hadado CONACYT, del orden de 60 mil personas, porque algunas son de maestría y luego de doctorado.

Aproximadamente de estas 60 mil, yo diría que como un 40 % son al extranjero Y de esa cifra tenemos por estudios y muestreos que se han hecho en el pasado, que del orden del 6 % es la gente que se queda a laborar en otros países por distintos motivos. El 6 % de los becarios que mandamos.

Sin lugar a dudas coincido con su preocupación de que debemos de tener una carrera muy atractiva de investigación en México para que esos talentos vengan a laborar en el país.

Antes conseguir plazas de una manera individual cada dependencia, secretaría, era una tarea verdaderamente difícil. Esperemos que ahora, haciendo visible el tema, consolidando las necesidades y alineando el presupuesto a las metas realmente podamos satisfacer eso.

CONACYT tiene un Programa de Repatriación para que justamente como no tenemos resuelto el problema de plazas, con la Secretaría de Hacienda, CONACYT ideó un programa para facilitar durante el primer año, el ingreso de gente que termina su doctorado en el extranjero y se repatría en alguna institución pública. Entre tasas de 200 a 300 personas por año se han repatriado en promedio.

Desde luego coincido totalmente con usted en renovar la planta en la infraestructura científico tecnológica. Mencionaba yo que apenas nosotros en México tenemos 6 mil millones de dólares de inversión acumulada en infraestructura científica tecnológica, contra dos y tres veces que tienen países que en los años 70 estábamos igual, como el caso de España y de Brasil.

En el sentido de presionar al Congreso no es el sentido, de ninguna manera, el Congreso no lo tenemos que convencer son nuestros aliados naturales y de alguna manera el gran reto que enfrenta por obligación de ley ahora es el Consejo General que aprueba el presupuesto consolidado de ciencia y tecnología, y ese cuerpo lo preside el señor Presidente.

- LA C. PRESIDENTA: Gracias, señor Director.

Tiene la palabra hasta por tres minutos para réplica el ciudadano diputado Humberto Mayans, del Partido de la Revolución Democrática.

- EL C. DIPUTADO HUMBERTO MAYANS CANABAL (PRD): Gracias, Presidenta.

Señor Director:

El balance es claro. De las cinco condiciones solo uno se cumple a cabalidad durante el año y es la que corresponde al Poder Legislativo, es decir, a nosotros en términos de la ley aprobada, la nueva Ley de Ciencia y Tecnología. De las otros cuatro, doce se han cumplido parcialmente y otras dos de plano no reportan el mínimo avance.

La referida al crédito fiscal para que la iniciativa privada invierta en ciencia y tecnología promete ir por buen camino, aunque no hay resultados cuantificables. En nuestra opinión deben de instrumentarse nuevas estrategias por el organismo a su cargo para que las empresas grandes, medianas y pequeñas inviertan más pero mucho más en investigación científica y tecnológica, y se vean beneficiadas con el mecanismo fiscal aprobado, pues de las 2,500 grandes empresas que de alguna manera exportan al exterior, solo 300 invierten sistemáticamente en innovación y desarrollo tecnológico.

Ello revela, señor Director, que en México y de hecho en toda América Latina tenemos una iniciativa privada dependiente en este campo del exterior y en otros también, pero en este que nos interesa a nosotros. Es decir, una iniciativa privada de iniciativa salvo honrosas excepciones que no están creando las condiciones de su propia sobrevivencia en el corto y mediano plazo.

En cuanto a las condiciones del financiamiento y creación de plazas no hay avance alguno. Hoy, señor Director, no se perciben acciones de que se vaya a fortalecer la figura del docente e investigador universitario quienes realizan el 80 por ciento de la investigación del país.

Como usted sabe, señor Director, existen 230 mil 979 profesores de nivel superior laborando en el país. De los cuales más del 80 por ciento no cuenta con plazas definitivas y de ellos tan solo 8 mil, aproximadamente, forman parte como usted lo señaló del Sistema Nacional de Investigadores.

¿Cómo puede avanzar y desarrollarse un país si tiene a su inteligencia, a la inteligencia muriéndose de hambre? ¿Si tiene a sus mejores hombres, a los más formados, a los más inteligentes, a los que nos costó más en inversión formar muriéndose de hambre, señor Director? Así nunca vamos a llegar a ser la nación que usted vislumbra: productora de bienes de alto valor agregado.

Pero además y especialmente si todos los esfuerzos en ciencia y tecnología se encaminan a fortalecer la investigación tecnológica de alta rentabilidad en el corto plazo, en detrimento de la investigación en ciencias exactas o puras, base del desarrollo tecnológico ulterior, como planteó usted en el foro de análisis realizado recientemente en Cuernavaca, Morelos.

Concluyo. En conclusión, como se puede apreciar con toda objetividad y responsabilidad, señor Director, en materia de ciencia y tecnología el gobierno del Presidente Fox y especialmente el organismo que usted representa, hablando académicamente y con todo respeto, en este año está reprobado. Pero cuente usted con los legisladores del PRD y de esta Honorable Cámara para que el año que entra pueda usted aprobar.

Muchas gracias.

-PRESIDENTA, DIP. SILVIA ALVAREZ BRUNELIERE: Muchas gracias.

Tiene la palabra hasta por tres minutos, para formular su pregunta, la ciudadana diputada Mónica Serrano Peña, del Partido Acción Nacional.

Les ruego respetar el tiempo de presentación.

-DIP. MONICA LETICIA SERRANO PEÑA: Con su permiso, señora Presidente.

Compañeras y compañeros Legisladores; señor Director: A raíz de la abrogación de la Ley de Fomento a la Investigación Científica y Tecnológica, ahora Ley de Ciencia y Tecnología, así como a las modificaciones de la Ley Orgánica del CONACYT, este organismo tiene las funciones de coordinador de sector, lo cual le permite integrar con mayor coherencia y dirección las acciones gubernamentales en este campo.

En el Programa Especial de Ciencia y Tecnología 2001-2006, ya se dibujaba un cambio estructural del CONACYT como entidad de fomento a la investigación científica y tecnológica, pasando de una operación por programas a otra basada en fondos de apoyo y financiamiento.

Este cambio tiene por objeto propiciar compromisos específicos por parte de las dependencias y entidades. Los instrumentos para llevar a cabo esta tarea tienen, entre otros, el Programa Especial de Ciencia y Tecnología, los incentivos fiscales establecidos en la Ley del Impuesto Sobre la Renta y los fondos recurrentes. Es acerca de éstos últimos sobre los que deseo dirigir mis preguntas.

Año con año los legisladores nos abocamos al estudio y análisis de los informes de gobierno correspondientes, pero a pesar de la relevancia e impacto de las acciones gubernamentales, siempre hay vacíos en la información y desafortunadamente este año no es la excepción.

En cuanto a fondos sectoriales el informe escrito apenas da cuenta de los montos comprometidos por CONACYT y las Secretarías y de fondos mixtos menciona brevemente cuántos convenios se han firmado con las entidades federativas.

Resulta increíble que para tan importantes rubros no aparezcan cuadros sobre su desempeño en el anexo estadístico del informe, a menos que estén integrados bajo el rubro de gasto federal ejercido en ciencia y tecnología por objeto socioeconómico, lo cual tampoco tenemos información desagregada que permita profundizar en el análisis. Por eso ahora me veo en la necesidad de hacerle las siguientes preguntas.

Ingeniero Parada, sobre los fondos sectoriales: ¿Cuáles son los proyectos de cada Secretaría o cuál es uno de los más importantes? ¿Cuáles son sus objetivos? ¿Qué pretende resolver? ¿Cuáles son sus avances y sus logros? ¿Existe algún proyecto enfocado al genoma humano? ¿Cuáles son los proyectos pendientes y hacia dónde se dirigen?

En cuanto a fondos mixtos, deseamos saber si de los 21 convenios cuál fue el sistema para aplicar y decidir la aportación de cada estado, sobre los siete restantes si está incluido el Distrito Federal y qué estado guardan.

Por su atención, muchas gracias.

(aplausos)

-PRESIDENTA: Muchas gracias diputada Mónica Serrano Peña.

Tiene la palabra el ingeniero Jaime Parada Ávila, hasta por cinco minutos, para dar respuesta.

-ING. JAIME PARADA AVILA: Sí, con mucho gusto desde luego, como yo lo mencionaba en mi exposición, se encuentran constituidos 7 fondos sectoriales que están en operación. Tenemos de los fondos sectoriales, como mencionaba, ya recibidos 600 proyectos, 620 proyectos de SEMARNAT, 524 de SAGARPA, 280 de IOTO (¿) , 88 de la Secretaría de Economía, y eso hace mil 432 los proyectos que hemos recibido.

Las aportaciones entre la suma de recursos de CONACyT y de las secretarías de Estado, a la fecha suman 878 millones de pesos y esperamos que este año terminemos alrededor con unos 10 a 12 fondos sectoriales. De este monto de recursos ya hay dinero fideicomitido, como ya mencionaba, 292 millones y están por aportarse otros 586 millones.

En el caso de los fondos mixtos tenemos ya constituidos 23. La intención, se han hecho negociaciones con los 32 estados de la República, yo espero que antes de que termine el año podamos tener alrededor de unos 25 fondos mixtos operando. El criterio que se establece para las aportaciones es el nivel de desarrollo científico-tecnológico de cada estado y el tamaño en su producto interno bruto. Ahorita inicialmente la mayoría de los fondos han sido aportaciones paritarias, salvo aquellos casos en los estados con menor desarrollo relativo.

Aquí quiero hacer mención que como resultado de esto se han captado 247 millones de pesos, que es una cifra diez veces superior que la que invertían los gobiernos de los estados para apoyar la ciencia y a la tecnología, de tal suerte que si sumamos los recursos de CONACyT mas los recursos de las secretarías y de los gobiernos federales, este año como les decía, estaremos presenciando la autorización del orden de mil 400 millones de pesos de proyectos científicos y tecnológicos, que es una cifra que contrasta muy favorablemente contra los 850 millones de pesos que en promedio se venían apoyando en proyectos científicos-tecnológicos.

Creo que eran las dos cuestiones que planteaba la señora diputada.

LA PRESIDENTA: Muchas gracias, señor Director.

Tiene la palabra hasta por tres minutos para réplica, el ciudadano diputado José Rivera Carranza, del Partido Acción Nacional.

EL DIP. JOSE RIVERA CARRANZA: Gracias por sus respuestas, señor Director.

El interés de Acción Nacional por los fondos mixtos y sectoriales reside en que los primeros, los fondos mixtos son los que se llevan a cabo con los gobiernos de los estados y los sectoriales se elaboran junto con las secretarías, y ambos buscan atender situaciones concretas de interés surgidas de las necesidades ya sea de las entidades federativas o son fondos que apoyan los proyectos de investigación y desarrollo, dirigidos a su vez problemas de alta prioridad para la sociedad en el ámbito de cada secretaría, por lo que es necesario fortalecer e incrementar los convenios con los distintos órdenes de gobierno y con el sector productivo, a fin de potencializar aún más los recursos públicos de CONACyT en pro de incentivar aún más el desarrollo de la ciencia y la tecnología de nuestro país.

Acción Nacional pone todo su interés y vigilancia en el rostro social de la ciencia y de la tecnología, pues está cierto que no basta con generar nuevos conocimientos sino orientarlos al servicio de las y los mexicanos, principalmente de los que menos tienen.

La relevancia que cobran estos dos fondos en nuestra vida cotidiana no es menor. Por ejemplo, el impulso que se dé a los fondos sectoriales repercutirá en aspectos específicos como la educación, la salud, la energía, la protección civil, la seguridad nacional, el desarrollo social y rural, la agricultura, el medio ambiente y la formación del capital humano; mientras que el producto que se genere de los fondos mixtos incidirá en la descentralización de la investigación científica y tecnológica y en los proyectos que den respuesta integral a problemas de cobertura interestatal o regional.

Nos parece fundamental subrayar la importancia del segundo objetivo estratégico de incrementar la capacidad científica y tecnológica del país planteado en el Programa Especial de Ciencia y Tecnología.

No nos cansaremos de señalar que sólo a través del fortalecimiento y el aumento del número de investigadores en el país, México estará capacitado para contender y sobresalir en el ámbito internacional.

En este sentido, el grupo parlamentario del Partido Acción Nacional confía en que se implementen los mecanismos que hagan regresar a México a numeroso conjunto de personas con postgrado, toda esa fuga de cerebros que hemos tenido durante muchos años que ya se ha comentado aquí, y que por alguna circunstancia no han encontrado las mismas oportunidades que en el exterior. Reconocemos en ello el esfuerzo de CONACyT, es una tarea titánica, pero estamos seguros que con el esfuerzo conjunto de todos nosotros, cada quien en su ámbito de competencia, podremos llevar a cabo esta gran labor.

La estrategia que siga las acciones de CONACyT, en cuanto al enfoque y la investigación aplicada de corto y mediano plazo, es crucial, porque nuestras necesidades son muchas, no por ello debemos de olvidarnos ni apartarnos de las acciones de largo plazo y mucho menos escatimar esfuerzos en ella.

Sin duda, este no es el mensaje que deseamos transmitir, pues todas las acciones que hoy hacemos deben ser congruentes con la visión que tenemos de nuestro país.

Por su atención, muchas gracias.

LA PRESIDENTA: Muchas gracias, diputado José Rivera Carranza.

Tiene la palabra, hasta por tres minutos, para formular su pregunta, el ciudadano diputado Luis Gerardo Rubio Valdés, del Partido Revolucionario Institucional.

EL DIP. LUIS GERARDO RUBIO VALDES: Con el permiso de la compañera Presidenta.

Señor director, ingeniero Jaime Parada Avila, al igual que hace un año donde yo tuve la oportunidad de estar presente en un informe en comisión en aquél entonces, que usted dio, donde se entregaron estadísticas muy interesantes en relación al número de científicos que se desarrollan en México, que son relativamente pocos comparados con otros países desarrollados o con un desarrollo similar como es el caso de Brasil.

Esas cifras, de hace un año, las consideroa muy similares a las que usted expresó el día de hoy, que México está en posición baja, en número 41 en capacidad científica y tecnológica; que se tienen 10 mil dólares de ingreso per capita; que se invierte menos del 1% del Producto Interno Bruto; que se cuentan sólo con 8 mil miembros acreditados, etcétera.

En relación a esto, yo me permito formular las siguientes preguntas: ¿realmente hemos avanzado en dos años que usted ha tenido esta responsabilidad? ¿Y si realmente tendremos cifras más optimistas para el 2006?

Y también un tema que me parece muy interesante, en relación a los talentos, de la fuga de talentos, de la fuga de talentos,

quedo más contento, porque me dicen que nada más el 6% de la formación de las últimas tres décadas, pero de estos 94% que están trabajando en el país, yo quisiera saber si existen programas o políticas, encaminados a que estas personas desarrolladas, lleven a ese aprendizaje a sus zonas de origen, a su zona geográfica, que redunde directamente en el desarrollo de sus propias comunidades, de sus propios estados. Por su atención muchas gracias.

-LA C. PRESIDENTA: Le agradecería la respuesta al ingeniero Parada hasta por cinco minutos.

-EL C. ING. JAIME PARADA AVILA: Si, muchas gracias. Bueno, desde luego con relación a los avances que han existido en materia de ciencia y tecnología, el programa Especial de Ciencia y Tecnología contemplaba tres objetivos estratégicos: contar con una política de Estado en materia de ciencia y tecnología, que se ha logrado a través de la autorización de las leyes que nos ha aprobado aquí precisamente el Congreso, en la constitución de un importante número de fondos, que no solamente traen dinero adicional a la ciencia y a la tecnología, ya di cuenta e las cifras de eso sino que traen una cosa muy importante, la definición de prioridades, necesidades, problemas y áreas de oportunidad en cada uno de los sectores, y también para los estados, definición de cuáles son las prioridades de su temática regional muy particular.

Creo que conectar el conocimiento científico con las necesidades y con la demanda de problemas que tiene el país, es una cosa muy afortunada que tienen los fondos. Acuérdense ustedes que Conacyt manejaba una convocatoria, para apoyar proyectos de investigación, estamos estimando que este año vamos a terminar manejando cerca de 30 fondos, con 30 convocatorias, con una complejidad sumamente grande.

Todo el sistema logístico alrededor de esto ha sido una tarea grande, así como también el crear un Sistema Nacional de Evaluación, para que con árbitros certificados por las personas de más alto reconocimiento del CNI, puedan valorar las propuestas.

Con relación al postgrado, ustedes recordarán que de cerca de 3,500 postgrados que tiene el país, solamente en el registro de CONACYT en el padrón de excelencia, existían 431.

Hicimos una convocatoria a la Secretaría de Educación Pública y Conacyt para revertir esa situación, porque el postgrado nacional es la fuente fundamental de recurso humano para el sistema de ciencia y tecnología.

Como resultado de esto se presentaron 1,150 solicitudes a este programa, el cual fue evaluado muy rigurosamente por comités ad hoc, y han quedado registrados 620 programas de postgrado, a los cuales se les va a otorgar becas y apoyos complementarios.

Yo quisiera mencionar en materia de becas nacionales que el año pasado que dimos 4,800, este año se van a dar 7 mil 100 becas, lo cual representa un 47% más que el año pasado.

Y creo que estos avances muy importantes, para fortalecer un ingrediente fundamental del sistema científico-tecnológico, que es nuestro postgrado nacional.

-LA C. PRESIDENTA: Muchas gracias Ing. Parada. Iniciamos la segunda ronda de preguntas y están registrados para esta ronda:

Por el Partido de la Revolución Democrática la diputada Hortensia Aragón Castillo.

Por el Partido Acción Nacional el diputado Oscar Maldonado Domínguez;

el diputado Martín Gerardo Morales Barragán y por el Partido Revolucionario Institucional, el diputado Roberto Domínguez Castellanos.

Tiene la palabra hasta por tres minutos par formular su pregunta, la ciudadana diputada Hortensia Aragón Castillo, del partido de la Revolución Democrática.

LA C. DIP. HORTENSIA ARAGON CASTILLO.

Señor Director Jaime Parada Avila, buenas tardes.

Compañeros legisladores, compañeras legisladoras:

En el PRD reconocemos que a lo largo de los últimos dos años, el CONACYT ha buscado romper con algunas inercias que vienen del pasado; aunque creemos que sus resultados no muestran mucho éxito. Uno de los ejemplos es el relativo a la descentralización de las tareas científicas y en particular de los recursos de la Federación, los cuales dirige hacia las entidades de la república, a fin de promover esa importante función social donde no hemos visto resultados, como dice, sustantivos.

Vemos con preocupación cómo luego de dos años de gobierno, el monto de inversión en la Federación hacia las entidades mediante la figura de "fondos mixtos", implica montos de alrededor de apenas el 1% del gasto federal en este rubro; de ese porcentaje invertido a los estados hay que decir que el 52% se aplica exclusivamente en el Distrito Federal y otro 42% se distribuye entre solo once estados más. Ello significa que únicamente se destina el 0.02% del PIB para las restantes 20 entidades federativas, por lo que en los hechos se abandona el quehacer científico y tecnológico en el 66% del territorio nacional.

Como podemos ver, el problema de inversión en esta materia no sólo es un asunto de incremento de recursos, hace falta una política financiera adecuada que nos permita una distribución estratégica y en este caso, que permita una auténtica federalización del recurso.

A este respecto le pregunto ¿qué planes tiene el CONACYT para canalizar mayores recursos a los Estados de la Federación y con ello promover que los gobiernos locales inviertan en ciencia y tecnología?

El macro avance en esta materia también lo constituye el pobre apoyo a la investigación que se realiza en las instituciones de educación superior, pues no se ha logrado incidir mínimamente en las condiciones en las que miles de académicos, ya se ha mencionado aquí, llevan a cabo sus actividades de docencia e investigación, la cual por cierto, constituye más del 60% de la que se realiza a nivel nacional. La situación es muy preocupante, pues más del 80% de los profesores e investigadores de las universidades públicas, no cuenta con un sueldo decoroso, por lo que tienen que buscar empleos alternos que los distraen de su actividad fundamental.

Ante ello, me permito preguntarle de manera particular, ¿qué ha hecho el CONACYT para contribuir a aliviar los impactos negativos en el trabajo científico que genera el déficit de los fondos de pensiones de los trabajadores universitarios?

Por otra parte, considerando que existen muchas mujeres que se encuentran cursando estudios de postgrado y que están en condiciones de realizar una carrera científica, ¿qué tipo de políticas de equidad de genero, para ponerse a tono con las políticas de Gobierno Federal está promoviendo el CONACYT para apoyarlas?, de ser positiva su respuesta, ¿qué resultados se han obtenido?

Me voy a permitir concluir señalando en esta materia que para nosotros es sumamente importante que pudiéramos tener una respuesta concreta al respecto.

Muchas gracias.

LA C. PRESIDENTA.- Gracias, diputada Hortensia Aragón Castillo.

Tiene la palabra el ingeniero Jaime Parada Avila hasta por cinco minutos, para dar respuesta.

-ING. JAIME PARADA AVILA: Desde luego miren que la concentración de recursos y presupuesto en el área metropolitana actualmente son 55% lo que se canaliza a los estados de la República.

Miren, la meta es lograr que el 70% se canalice al interior del país. Hoy día la distribución de recursos es 55% a los estados y 45 en el área metropolitana.

Los fondos sectoriales y los fondos mixtos pueden acudir todos los investigadores del país, es decir, ahora los investigadores independientemente del estado al que pertenezcan, pueden acudir a concursar por propuestas en cualquier de los fondos.

Y también quiero hacer mención de un fondo muy importante, el de ciencia básica, que lo constituimos con aportaciones de SEP y de CONACYT, precisamente para que la temática de conocimiento de frontera que no tiene cliente, realmente se apoya. En este sentido esperamos que como resultado de estos fondos, realmente puedan tener más ventanillas de acceso los investigadores a recibir apoyo.

Y respecto al plan de carrera yo creo que es una cuestión que ha quedado plasmada en la Ley de Ciencia y Tecnología. Tenemos que pensar para nuestros mejores hombres, nuestros mejores talentos, un sistema de compensaciones, un plan de carrera que permita la movilización de los investigadores y que permita que tenga atractivo la carrera de investigador en México.

Actualmente ustedes saben que el SNI ha actuado como un mecanismo complementario para resolver un problema de deficiencia de un sistema de pago ciertamente nada atractivo.

Yo les podría comentar que en estos dos años vamos a logra un incremento muy importante de miembros del SNI. Espero yo que este año terminemos con 8 mil 531 personas y esto significa dos veces más al que se tuvo en el periodo 99-2000, ese crecimiento y representa más del 30% del crecimiento registrado en toda la administración pasada.

De tal suerte que aquí ésta es una preocupación compartida. Tenemos que resolver de fondo el asunto del plan de carrera, del sistema de compensaciones y crear la figura de investigador nacional y hacer atractiva la carrera para los nuevos jóvenes y talentos.

La mujer. El 30% de los becarios de CONACYT con mujeres, 30%. Y el 30% aproximadamente del SNI son mujeres también y ojalá pudiéramos llegar a una meta del 50.

Yo les quería comentar aquí, tenemos ya un banco de 4 mil personas jóvenes, estudiantes, de los mejores talentos, de los mejores promedios, de los ganadores de las olimpiadas de la ciencia, de los veranos de la ciencia y la tecnología, que vamos a hacer un programa de inducción de jóvenes precisamente para encauzarlos a la carrera de investigador , y muchos de ellos, yo estimo que es aproximadamente el 60% de ese banco de datos, son mujeres, que son trabajadoras, inteligentes y responsables.

LA C. PRESIDENTA: Muchas gracias, ingeniero. Tiene la palabra, hasta por tres minutos, para réplica, la ciudadana diputada Hortensia Aragón Castillo, del Partido de la Revolución Democrática.

LA C. DIPUTADA HORTENSIA ARAGON CASTILLO: Personalmente le agradezco el esfuerzo físico que está realizando para contestarnos.

Tenga la seguridad de que en el PRD estaremos muy atentas y atentos de que ese 70% que dice usted que tiene como meta de inversión para los estados se cumpla, y también estaremos atentos a esa última meta que acaba de anunciarnos aquí del 50% de mujeres becarias.

En el marco de esta comparecencia no podemos eludir la responsabilidad que tiene el Congreso de la Unión y esa responsabilidad quiero remitirla a la omisión que se tuvo al aprobar, en sus términos actuales, la fracción XII del artículo 56, que establece que los órganos de gobierno de cada centro público de investigación tiene la atribución de fijar los términos de ingreso, promoción y permanencia de su personal académico.

Lo que en un principio desde el Legislativo vimos como una dimensión más que permitiría contar con mayor autonomía a dichos centros, en sentido estricto esta fracción permite que se vulneren los derechos laborales de los trabajadores académicos e investigadores pues, a partir de la publicación de la ley, la juntas de gobierno de cada centro pueden decidir, sin ninguna restricción, sobre cuestiones laborales clave que afectan la investigación científica, como los sueldos, las promociones, los contratos y muchas otras cosas más que ya se han encargado los investigadores de hacernos saber.

A este respecto el PRD está consciente de esa deficiencia y por ello buscaremos enmendar en fechas próximas a fin de que no quede resquicio alguno que permita violar los derechos laborales de quienes trabajan en esos centros públicos.

Nos preocupa que ante esta situación autoridades de esos centros como los del Colegio de la Frontera Norte hayan tomado iniciativas contra los contratos colectivos de trabajo que regulan la relación laboral.

Las políticas públicas, y sobre todo aquéllas que tienen que ver con el impulso de la ciencia y la tecnología en nuestro país, son políticas que se encarnan precisamente en los sujetos que las promueven y esos sujetos tienen que estar totalmente respaldados por nuestro cuerpo jurídico y labora.

La pregunta final, para no dejar de hacerla y no perder la costumbre es, qué opinión le merecen las decisiones que en ese sentido han tomado autoridades de algunos centros y qué piensa hacer, como titular del Consejo, en calidad de mientras, que tiene entre sus responsabilidades, ya que en ello estriba mejorar y que no empeoren las condiciones de trabajo de los académicos e investigadores del país. Muchas gracias.

LA C. PRESIDENTA: Gracias, diputada Hortensia Aragón Castillo, del Partido de la Revolución Democrática.

Tiene la palabra, hasta por tres minutos para formular su pregunta, el ciudadano diputado Oscar Maldonado Domínguez, del Partido Acción Nacional.

EL C. DIPUTADO OSCAR MALDONADO DOMINGUEZ: Quiero celebrar en voz alta el hecho de que por primera vez en la historia de México comparezca el director de Conacyt a rendir cuentas ante esta soberanía. Su actitud contrasta mucho con el comportamiento de quienes ahorita harían cualquier cosa en el país por conservar impunidades.

Señor director del Conacyt, el Congreso General de los Estados Unidos (Mexicanos) apoyó decididamente el Programa Especial de Ciencia y Tecnología 2001-2006, reformando leyes que impulsan ambas ramas.

Tales apoyos, por orden cronológico son los siguientes.

Primero.- El otorgamiento de un sustancial estímulo fiscal del 30 % sobre el gasto total en el ejercicio contra la declaración del Impuesto Sobre la Renta (ISR) o sobre el activo fijo a las personas que inviertan en ambos rubros.

Segundo.- El otorgamiento del voto de calidad a favor del representante del CONACYT en el comité interinstitucional que califica a los proyectos para que no lo ejerza el representante de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público como en el pasado.

Tercero.- Reformas a la Ley de Ciencia y Tecnología y a la Ley Orgánica del CONACYT, las que le dan autonomía de un órgano descentralizado para que tenga un espacio de actuación tal que le permita cumplir con las metas del sector.

Los legisladores estamos cumpliendo con el área, y hay muchas más posibilidades en el tintero. Nos sentiríamos optimistas de estar dando apoyo a la ciencia y tecnología nacionales si conociéramos resultados concretos positivos del CONACYT y del sector productivo que sean cuantificables y medibles.

Por ejemplo en incrementos de producción y de calidad, vistos proyecto por proyecto y estado por estado, que nos permitan ver que la renuncia fiscal otorgada por la Secretaría de Hacienda finalmente es o será rentable.

La ciencia y la tecnología son fuente de todo tipo de riqueza cuando bien se manejan.

Señor Director: Los legisladores hemos hecho nuestro trabajo. Necesitamos retroalimentación e información para continuarlo.

Del segundo Informe de Gobierno deducimos que apenas a mediados del año se había empleado poco más del 83 % del crédito fiscal, que hay una alta concentración de proyectos en empresas grandes, que se recibieron proyectos de inversión que rebasan por mucho el crédito fiscal acordado.

De nuevo, señor Director, no podemos evaluar con precisión su gestión ni la nuestra sin tener la información que nos lo permita. Pregunto a usted:

¿Cuáles son los efectos previstos en los proyectos que recibieron el estímulos? ¿Cuáles son los avances? ¿Cuáles son los montos que la realidad reclama en cuanto al crédito fiscal? Deseamos ser partícipes de la actividad científica y tecnológica del país, pero no podemos hacerlo a ciegas. Muchas gracias.

- LA C. PRESIDENTA: Muchas gracias, diputado Oscar Maldonado Domínguez.

Tiene la palabra el ingeniero Jaime Parada Avila, hasta por cinco minutos para dar respuesta.

- EL ING. JAIME PARADA AVILA, DIRECTOR DE CONACYT: Desde luego, señor diputado. Yo creo que esta medida de haber aprobado los incentivos fiscales, es una decisión muy afortunada, es una política de fomento para alentar a la empresa mexicana a que invierta decisivamente en esta materia. Solamente 300 empresas en México aproximadamente, inviertan regularmente en investigación y desarrollo. Esto contrastado con el universo de las 20 mil empresas manufactureras del país, se podrán ustedes dar cuenta que hay una brecha enorme. De tal suerte que este incentivo fiscal, y así nos hemos comprometido con la Secretaría de Hacienda, darle un estrecho seguimiento.

Hasta ahorita, de los proyectos que se aprobaron, tenemos evidencias que a raíz de la aplicación del incentivo las empresas que concursaron por el mismo porque todo esto se concursa, se evalúa y se dictamina, han aumentado significativamente su gasto. Al día de hoy tenemos más de 3 mil millones de pesos de solicitudes para el techo presupuestal de los 500 millones de pesos.

Yo le podría decir que tenemos prácticamente todas las ramas industriales presentes. Tenemos que los proyectos apoyados pretenden desarrollos de nuevos productos, de nuevos negocios y esto es muy importante, porque el desarrollo de un nuevo producto, de un nuevo negocio va a acarrear inversión fija que va a ser muy importante para el país, y consecuentemente ventas nuevas de nuevos productos que acarrearán no solamente mayor captación fiscal, sino también mayor generación de empleo. Caso a caso vamos a dar un seguimiento a esta situación. El incentivo apenas arranca, se otorgó apenas en el mes de marzo, son proyectos algunos que duran un año, a veces que duran tres años y el incentivo está configurado para apoyar el gasto anual que hagan las empresas en este sentido. Pero estaremos muy atentos, señor Diputado, a dar una rendición de la creación de valor que genera esta inversión.

Y por otra parte yo quisiera señalar que no solamente en el caso de los incentivos fiscales, sino en los proyectos que se apoyen en los fondos mixtos y sectoriales se está buscando que resuelvan problemas prioritarios del país, que atiendan en especial a la pequeña y la mediana industria, y que se genere conocimiento de frontera en las distintas áreas del conocimiento que requiere el país.

De esta manera creemos que estos dos instrumentos, los incentivos fiscales más los fondos mixtos y sectoriales, van a ser una clara política de fomento para que la iniciativa privada aumente significativamente su inversión.

- LA C. PRESIDENTA: Muchas gracias, señor Director.

Tiene la palabra hasta por tres minutos, para réplica, el ciudadano diputado Martín Gerardo Morales Barragán, del Partido Acción Nacional.

- EL C. DIPUTADO MARTÍN GERARDO MORALES BARRAGÁN (PAN): Con su permiso, compañera Presidenta.

Ingeniero Parada:

Acción Nacional agradece sus respuestas, no obstante quisiera mencionar que los hechos demuestran que los países con mayor desarrollo son quienes han sustentado la competitividad de sus empresas en la inversión tecnológica de nuevos productos, materiales, procesos y sistemas.

Hasta ahora ningún país se ha insertado exitosamente en un proceso mundial de crecimiento económico contemporáneo sin haber invertido en este rubro al tiempo de aumentar de manera significativa la preparación, capacitación y educación de su fuerza laboral.

Como hemos señalado, la tarea no depende exclusivamente del Estado, pensarlo así sería retrógrado y poco visionario ante la corresponsabilidad del sector privado y social en las políticas públicas. Lo que sí depende y es deber ineludible del Estado es aumentar y generar las bases para que ello suceda. Existe un estudio de la OSD, organización de la cual somos miembros, que analiza los efectos de la investigación y el desarrollo de las empresas que tiene el financiamiento directo y a través de los estímulos fiscales por parte del Estado.

Los resultados de este documento reportan un efecto positivo en el producto generado por las empresas, gracias al apoyo estatal y es aún mayor y efectivo cuando el respaldo es estable en el tiempo. Naturalmente la certidumbre permite tomar acciones con cierta proyección en los resultados esperados. La meta que se ha fijado esta administración es lograr que el gasto en investigación y el desarrollo alcance el equivalente al uno por ciento del producto interno bruto hacia el año 2006, donde concurran en este objetivo el sector público y privado con una participación del 60 y 40 por ciento respectivamente.

Le reitero, señor Director, el compromiso de Acción Nacional de Mantener y aumentar responsablemente el crédito fiscal, siempre y cuando usted nos proporcione los elementos para ello. Por esta razón lo invito a establecer una agenda común que nos suministre de la información suficiente, para que cuando analicemos el paquete presupuestal y de ingresos para el próximo año, sea totalmente loable.

Por su atención, muchas gracias.

(aplausos)

-PRESIDENTA: Muy amable señor diputado Gerardo Barragán.

Tiene la palabra hasta por tres minutos para formular su pregunta, el ciudadano diputado Roberto Domínguez Castellanos, del Partido Revolucionario Institucional.

-DIP. ROBERTO DOMÍNGUEZ CASTELLANOS: Con su permiso, ciudadana Presidenta.

Ingeniero Jaime Parada Ávila, Director General del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, sea usted bienvenido a esta reunión de trabajo y me uno al reconocimiento que hizo la compañera del PRD en cuanto al esfuerzo que está haciendo. Bienvenido señor ingeniero.

Esperamos que durante la comparecencia el día de hoy y con la información que ya nos ha brindado y la que nos pueda dar en el desarrollo de esta reunión que todavía nos espera, nos permita reforzar el trabajo que hemos realizado aquí para fortalecer a la ciencia y la tecnología, área prioritaria para los países como el nuestro, que están sufriendo los terribles embates de la globalización que está viviendo el mundo y en donde la ciencia y la tecnología deben ser un arma importantísima, una herramienta poderosa que nos va a ayudar para poderla enfrentar.

Al fundamentar mi pregunta, señor ingeniero, no pretendo confrontarlo con ninguna instancia de gobierno ni ningún gobierno estatal. Usted aquí nos ha planteado los diferentes convenios tanto en fondos mixtos como sectoriales que ya han firmado. Pero también en otras reuniones de trabajo usted ha comentado que no todas las instancias del gobierno federal han atendido la firma de estos convenios.

on convenios importantes, ya que todos tienden al impulso que debe darse desde la administración pública federal a la materia de ciencia y tecnología, lo cual parece una incongruencia desde el punto de vista de un gobierno que, como usted también ya lo ha señalado, ha asumido el compromiso de dar prioridad a este rubro.

Mi pregunta señor director va en el sentido de cómo aprecia usted, cómo ve, cuál es el verdadero compromiso del gobierno federal para con la ciencia y tecnología, puesto que no es nada más la no firma de estos convenios de fortalecimiento sino en la presentación de solicitudes de presupuestos sumamente raquíticos para esta área; los recortes presupuestales realizados también son los primeros en sufrirlos.

Además le solicitaría que nos comentara cuáles son las políticas, las estrategias, cuáles son las medidas de la dirección a su cargo, que ha tomado, para poder avanzar en este sentido.

Por sus respuestas, muchísimas gracias señor director.

(aplausos)

-ING. JAIME PARADA AVILA: Claro que sí.

-PRESIDENTA: Tiene la palabra el ingeniero Jaime Parada Ávila, hasta por cinco minutos.

-ING. JAIME PARADA AVILA: Muchas gracias señor diputado.

Mire, precisamente haciendo honor a la nueva Ley de Ciencia y Tecnología y en mi calidad de Secretario Ejecutivo del Consejo General de Investigación y Desarrollo Tecnológico que preside el señor Presidente, es que en la junta del 6 de agosto elevamos a su atención la petición de tener un presupuesto incremental de 9 mil 500 millones de pesos. Ese presupuesto incremental se compone de 2 elementos, el primero de ellos 4 mil 500 millones de pesos, que c en el techo presupuestal de cada una de las Secretarías de Estado asignarán a los fondos sectoriales que estamos constituyendo. Y otro componente importante es el otorgar al CONACYT 5 millones de pesos precisamente para  honrar los compromisos de fondos concurrentes no solamente sectoriales sino con los estados de la República, eso entonces colocaría a que la ciencia y la tecnología, de representar el 1.8 por ciento del PEF, del Programa de Egresos de la Federación, lo pudiéramos colocar en el 2.5 por ciento del PEF.

También hemos hecho la petición al señor Presidente del otorgamiento de 4 mil plazas nuevas para posiciones de nuevos investigadores científicos y tecnológicos y esto es lo que constituye el paquete presupuestal que precisamente en la parte de las secretarías de Estado a través de la Comisión Intersecretarial de Presupuesto de Ciencia y Tecnología, ya hemos acordado los 4 mil 500 millones de pesos y falta el presupuesto incremental de 5 mil millones de pesos para CONACyT. Así que el gran reto es cómo entre las grandes prioridades que enfrenta el Gobierno Federal para el año entrante, puede caber el tema de la ciencia y la tecnología.

En el señor Presidente de la República hay la mayor convicción, hay el mayor apoyo y en este sentido será balancear justamente con los ingresos fiscales disponibles, como se puede atender esta demanda de recursos. Mi posición al respecto es, independientemente del tamaño que sea el PEF, que el tema de ciencia y tecnología progrese en términos relativos. Todos podemos entender las dificultades de captación de impuestos o las dificultades de un entorno económico difícil, pero aquí lo importante es que el tema avance en términos relativos de manera significativa para el cumplimiento de las metas.

LA PRESIDENTA: Gracias, señor Director.

Tiene la palabra hasta por tres minutos para réplica...

EL ING. JAIME PARADA AVILA: Perdón. Se me quedó en el tintero, señor diputado. No quisiera omitir una pregunta que usted señaló.

Hemos estado negociando con la Secretaría de Hacienda la posibilidad que el presupuesto que se asigne a ciencia y tecnología sea inafectable. Eso nos daría una gran certidumbre para la planeación. Y déjenme decirles otra cosa.

La gran virtud que tienen los fondos mixtos y sectoriales es precisamente que el dinero depositado en esos fondos es presupuesto devengado, de tal suerte que tenemos en la nueva ley un mecanismo fabuloso y además en la Secretaría de Hacienda una buena disposición de declarar en el PEF una cláusula que el presupuesto de ciencia y tecnología será inafectable de recortes presupuestales.

LA PRESIDENTA: Muchas gracias.

Señor diputado Roberto Domínguez Castellanos para réplica, por favor.

EL DIP. ROBERTO DOMÍNGUEZ CASTELLANOS: Agradezco sus respuestas, señor Director y ojalá tengamos la oportunidad, que estoy seguro que así va a ser, en próximas reuniones podamos profundizar más en este análisis.

Yo le quisiera comentar que mi partido, el Revolucionario Institucional adquiere como siempre lo hemos demostrado y lo hemos hecho, el compromiso de trabajar fuertemente para lo que es el impulso y el apoyo a la ciencia y la tecnología y que no nada más trabajemos con lo que son las instancias federales y estatales, sino también que se amplíe –que estoy, insisto que así va a ser- con las instituciones de enseñanza e investigación y analicemos sus presupuestos, que se sientan en confianza y que con mucho gusto de nueva cuenta, así como usted ya dio fe aquí en esta comparecencia del compromiso de esta soberanía para con la ciencia y tecnología, así le ratificamos el compromiso del Revolucionario Institucional para trabajar a favor de ella.

Muchísimas gracias.

LA PRESIDENTA: Muchas gracias, señor diputado Roberto Domínguez Castellanos, del Partido Revolucionario Institucional.

Tiene la palabra el ingeniero Jaime Parada para el cierre, hasta el límite de ocho minutos.

EL DIRECTOR GENERAL ING. JAIME PARADA AVILA: Sí, muchas gracias.

Bueno, en primer lugar yo quisiera agradecer la gentileza de la Cámara de Diputados, de haber incorporado en su agenda de la Glosa del Informe de Gobierno este importantísimo tema de la vida nacional que es la ciencia y la tecnología.

Así que no tengo para este Congreso más que mi sentimiento más alto de gratitud y de reconocimiento por su solidaridad, por haber hecho de la ciencia y la tecnología un tema de convergencia, no un tema de partidos, sino un tema de interés para la vida nacional.

En este sentido, yo también quiero expresarles que en el Gobierno Federal, su servidor, junto con mis colegas del gabinete, peleamos ferozmente por los recursos y todas las causas las defendemos a sangre y fuego y es el señor Presidente de la República el que tiene la difícil tarea de asignar las prioridades y de decidir los techos presupuéstales.

Pero ahora en este nuevo México que estamos viviendo, de equilibrio de poderes, pienso yo que el papel del Congreso juega una cuestión de vital importancia, ya que en este sentido cualquier deficiencia que de origen provenga, creo que el Congreso está suficientemente sensible como para brindarnos nuevamente su apoyo.

Así que muy agradecido, les pido una disculpa por haberme quedado sin voz y como dijo el diputado, ojalá que me quede nada más sin voto pero no sin presupuesto.

Muchas gracias.

LA PRESIDENTA: Muchas gracias ingeniero Jaime Parada Avila, Director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.

Quiero expresar mi más profundo agradecimiento a la comparecencia del ingeniero Jaime Parada Avila, ante la Comisión de Ciencia y Tecnología.

Los posicionamientos presentados por los distintos grupos parlamentarios que conforman esta Comisión, así como sus cuestionamientos, son muestra clara de la coexistencia de la diversidad ideológica en el seno de esta Comisión que me honro en presidir, pero también resulta altamente gratificante constatar que unimos esfuerzos y nuestro compromiso legislativo y convergemos en un mismo punto, el desarrollo integral de la nación sustentado en el impulso en la creación del conocimiento, el desarrollo tecnológico y la innovación.

Somos conscientes que las metas propuestas por el Ejecutivo y la propia Comisión de Ciencia y Tecnología relativas a conferir a este sector una posición de primer nivel, todavía está en proceso de realización.

No obstante los pasos importantes dados para su consecución, los retos por superar en materia legislativa implican procesos de largo plazo que avivan nuestro compromiso.

De manera similar, el Programa Nacional de Ciencia y Tecnología instrumento estratégico para el desarrollo nacional representa, sin lugar a dudas, un alto compromiso.

Sin embargo confiamos que cubrirá sus metas a cabalidad dado que su incidencia es indiscutible para el bienestar de nuestra sociedad.

La Comisión de Ciencia y Tecnología de esta LVIII Legislatura externa ante ustedes su firme deseo de continuar trabajando de manera estrecha y coordinada con el Ejecutivo, especialmente en estos momentos de alta trascendencia para el país como son los próximos trabajos en materia presupuestaria.

Desplegaremos nuestro mejor esfuerzo por responder de manera significativa la esperanza que académicos, científicos, tecnólogos y empresarios depositaron en este cuerpo de representación social.

Los consensos necesarios están encaminados, coincidimos en caminar hacia una política de estado, coincidimos en la presentación de un presupuesto consolidado, en que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología sea un organismo vinculador del sector productivo, del sector social.

Esperamos que estos consensos, estén encaminados hoy a un pleno desarrollo de nuestra nación.

Nuestra ciencia es joven, tenemos 30 años de una política estatal en este contexto, y recordemos que Einstein cuando era estudiante de preparatoria, fue reprobado en física, y fue después un Premio Nobel.

Creo que la ciencia y la tecnología y el sector científico-tecnológico, pueden aspirar a llegar a ser un área estratégica de desarrollo y de soberanía nacional.

Muchas gracias por su presencia.