Legislatura XXIX - Año I - Período Ordinario - Fecha 19201108 - Número de Diario 62

(L29A1P1oN062F19201108.xml)Núm. Diario:62

Colegio Electoral

ENCABEZADO

MÉXICO, LUNES 8 DE NOVIEMBRE DE 1920

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

AÑO I.- PERIODO ORDINARIO XXIX LEGISLATURA TOMO I.- NUMERO 62

SESIÓN DE COLEGIO ELECTORAL

DE LA

CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA

8 DE NOVIEMBRE DE 1920

SUMARIO

1.- Se abre la sesión. Es leída y aprobada el acta de la anterior. Usan de la palabra para hechos varios ciudadanos diputados y presuntos diputados.

2.- Sin discusión, se aprueba el dictamen relativo al 4o. distrito electoral de Oaxaca.

3.- Es discutido y aprobado el dictamen correspondiente al 5o distrito electoral de Zacatecas.

4.- Se aprueba, sin discusión, el dictamen referente al 50. distrito electoral de Durango. Se levanta la sesión.

DEBATE

Presidencia del C. LEÓN LUIS L.

(Asistencia de 127 ciudadanos diputados y presuntos diputados.)

El C. presidente, a las 10.45 a. m.: Se abre la sesión de Colegio Electoral.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Acta de la sesión de Colegio Electoral celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el día cinco de noviembre de mil novecientos veinte.

"Presidencia del C. Miguel F. Ortega.

"En presencia de ciento veintiséis ciudadanos diputados y presuntos diputados, según consta en la lista respectiva, se abrió la sesión en la ciudad de México, a las diez horas y cuarenta y cinco minutos de la mañana del viernes cinco de noviembre de mil novecientos veinte.

"El acta de la sesión efectuada el último miércoles resultó aprobada sin discusión.

"Se procedió a repetir la votación nominal relativa a la elección de diputados por el noveno distrito electoral del Estado de Guanajuato, y el recuento de votos correspondiente demostró la falta de quórum.

"En nueva votación nominal se aprobó el dictamen de que se trata, por setenta y ocho votos de la afirmativa contra setenta y cinco de la negativa, por lo que se declaró que eran diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el mencionado distrito electoral, los CC. Enrique Fernández Martínez y Ramón León.

"El C. Bordes Mangel paso a la tribuna para rectificar un hecho, interpeló al C. Velarde y dio lugar a una aclaración de C. Soto Francisco.

"Después de la lectura del artículo 47 reglamentario, solicitada por el C. Pérez José Dolores, se dieron a conocer el dictamen formulado por la mayoría de la sexta Sección de la primera Comisión de Poderes y el voto particular subscripto por el C. Leopoldo E. Camarena, relativos a las elecciones para diputados en el primer distrito electoral del Estado de México.

"A discusión el dictamen, que propone para diputado propietario al C. Alberto Román y para diputado suplente al C. Vicente G. Abasta, el C. José Luis Solórzano, invocando al artículo 106 reglamentario, pidió que alguno de los miembros de la referida Sección sexta fundara el dictamen.

"El C. Hidalgo Catalán reclamó el quórum. La Secretaría paso lista y declaró que había una asistencia de ciento veintinueve ciudadanos diputados y presuntos diputados.

"El C. Enrique del Castillo solicitó también que se fundara el dictamen.

"El C. Federico N. Solórzano, firmante de aquél, expresó que en la parte expositiva del mismo se daban a conocer las razones que lo fundaban.

"Hizo una moción de orden del C. José Luis Solórzano, y el C. Federico Solórzano contestó interpelaciones del C. César A. Lara.

"Usó de la palabra en contra del dictamen el C. José Luis Solórzano.

"El C. Manrique hizo una aclaración.

"En pro habló el C. Pérez Gasga, quien fue interrumpido por una aclaración del C. Enrique del Castillo, por una interpelación que el C. Francisco Castillo dirigió a la Secretaría, y por otra pregunta del C. Felipe de la Barrera, a la que contestó el orador.

"Así que éste concluyó su peroración, respondió a una interpelación del C. Manrique.

"Los CC. Mendoza y Enrique del Castillo renunciaron al uso de la palabra en contra.

"Suficientemente discutido el dictamen, se aprobó en votación económica, la proposición referente a la validez de las elecciones, y en la misma forma se desecharon las otras dos, que tratan de nulificar los votos emitidos en favor del C. Enrique del Castillo y que se declare diputado propietario al C. Alberto Román.

"A debate el voto particular, que otorga el triunfo como diputado propietario al C. Enrique del Castillo y como diputado suplente al C. Vicente G. Abasta, hicieron uso de la palabra los CC. Federico Solórzano y Manrique; el primero para una moción de orden y el segundo para una aclaración.

"La Secretaría leyó el artículo 116 reglamentario.

"La Asamblea aprobó el voto particular en votación económica y la Secretaría hizo la declaración correspondiente.

"A moción del C. Meza se dieron a conocer los dictámenes con que se dará cuenta en la próxima sesión de Colegio Electoral.

"A la una y quince minutos de la tarde se levantó la sesión."

Está el acta a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobada.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"1a. Comisión Revisora de Credenciales..."

El C. Guadarrama, interrumpiendo: Pido la palabra.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Guadarrama: Desde el día 18 de septiembre, es decir, desde hace cerca de dos meses... (Voces: ¡No se oye!) Desde el 18 de septiembre, es decir desde hace cerca de dos meses quedó dictaminado el expediente relativo al 9o. distrito electoral del Estado de Michoacán, y cuyo dictamen, que es favorable al ciudadano Eduardo Laris Rubio, aún no ha sido presentado a la Presidencia de esta Cámara para su discusión.

El C. presidente: No se oye. Se suplica a los ciudadanos diputados se sirvan ocupar sus curules.

El C. Guadarrama: Aún no ha sido presentado a la Presidencia de esta Cámara el dictamen hecho ya desde el 18 de septiembre, relativo al 9o. distrito del Estado de Michoacán. Por lo tanto, suplico al señor presidente se sirva acordar que se pida ese dictamen para que cuanto antes entre a discusión.

El C. presidente: La Presidencia informa que ya va a someter a discusión los dictámenes por el orden de fechas que le han sido entregados por la Oficialía Mayor. Terminado de leerse este dictamen, se pasará al del 5o. distrito de Zacatecas, que tiene fecha 9 de octubre y es el más antiguo de los dictámenes que ha presentado la Oficialía Mayor.

El C. Ollivier: Moción de orden.

El C. presidente: Tiene la palabra para una moción de orden el C. Ollivier.

El C. Ollivier: En la orden del día que se leyó en la sesión pasada de Colegio Electoral, se anunció que el dictamen correspondiente al 5o. distrito de Zacatecas se pondría a debate en primer término hoy. Suplico a su señoría se sirva ordenar se cumpla con la orden del día.

El C. presidente: Me permito indicarle a su señoría que este dictamen quedó pendiente en la orden del día anterior, y en seguida se va a entrar a la discusión del 5o. de Zacatecas.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Honorable Asamblea:..."

El C. Laris Rubio, interrumpiendo: Moción de orden.

El C. presidente: No está alterado el orden.

El C. Laris Rubio: Moción de orden.

El C. presidente: Diga qué artículo se está violando.

El C. Laris Rubio: He presentado una moción para que se presente a la consideración de la Asamblea y, por lo mismo, debe dársele preferencia.

El C. presidente: No está en la orden del día; luego que se termine con ella se dará cuenta con su moción.

El C. Mendoza Salvador: Señor presidente, pido la palabra.

El C. presidente: ¿Para qué?

El C. Mendoza: Para hacer una súplica a su señoría.

El C. presidente: Pues luego que termine de leerse este expediente.

El C. Mendoza: Creo que es pertinente, porque de otra suerte interrumpiría el debate y no quiero perturbar los trabajos de la Asamblea.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Mendoza: Honorable Asamblea: Siento verdaderamente que no se halle presente en estos instantes en esta Cámara el señor general Manuel García Vigil, a quien forzosamente habré de aludir al formular esta petición que he indicado a la Presidencia. Me trae precisamente a esta tribuna el objeto de pedir que mi expediente, el expediente electoral correspondiente al 8o. distrito del Estado de Oaxaca, pase a otra Comisión, en virtud de que la que actualmente lo tiene en su poder no acaba de formular dictamen, mejor dicho, ni siquiera comienza a formular el dictamen correspondiente, a pesar de que existe en su poder este expediente desde el 20 de agosto o desde la fecha en que se hizo el turno respectivo por el Colegio Electoral. Durante todo este lapso de tiempo, los contendientes políticos que lucharon conmigo por el 8o. distrito electoral del Estado de Oaxaca han tenido ocasión para desarrollar toda clase de maquinaciones en mi contra sin que, repito, la honorable Comisión que tiene este expediente inicie siquiera los trabajos respectivos para formular dictamen. Creo, por lo tanto, que es el caso patente de hacer obra de justificación por esta Cámara, haciendo que otra Comisión que goce igualmente de la confianza de la Asamblea se ocupe del conocimiento de mi dictamen.

El C. González Marco Aurelio, interrumpiendo: ¿Me permite una interpelación el orador?

El C. Mendoza, continuando: La 9a. Sección Revisora de Credenciales se encuentra integrada por el señor licenciado Manlio Fabio Altamirano, por el señor Marco Aurelio González y por el señor licenciado Felipe de la Barrera. Parece que tomó conocimiento desde luego de este asunto el señor Marco Aurelio González, si no me equivoco; formuló, según creo, una serie de observaciones respecto a mi elección y las paso al señor licenciado De la Barrera. Este, sin que hubieran sido abiertos aún los paquetes electorales, me informó que en vista de las observaciones que había hecho previamente el señor Marco Aurelio González, tendría sumo placer en examinar el expediente con toda atención. El señor De la Barrera se ha visto obligado a

entregar este dictamen, este expediente, según me ha referido, el señor Manlio Fabio Altamirano, y es el caso que de todas suertes yendo de una mano a otra y pasando por todas estas vicisitudes, mi expediente aún no se dictamina.

El C. Castrejón: Moción de orden. Yo creo que lo que está haciendo el compañero Mendoza es una proposición y en este sentido debe presentarla por escrito. Por lo demás, yo creo que se debe cumplir con la orden del día.

El C. Mendoza: Voy a formular por escrito la proposición correspondiente, que tengo ya hecha; pero pido a la Asamblea que se sirva tomar en consideración las razones expuestas a fin de que en su caso apruebe o rechace el trámite que la Mesa se sirva acordar.

- El mismo C. secretario: Continúa la lectura del dictamen. Voy a empezar otra vez:

"1a. Comisión Revisora de Credenciales.- 2a. Sección.

"H. Asamblea:

"Fue turnado para su estudio y dictamen a esta 2a. Sección de la 1a. Comisión Revisora de Credenciales, el expediente relativo a las elecciones para diputados al Congreso de la Unión, verificadas en el 4o. distrito electoral del Estado de Oaxaca.

"Estudiado minuciosamente el expediente, encontramos que las elecciones se verificaron con todo apego a la ley, habiendo jugado en los comicios las fórmulas siguientes: Francisco M. Ramírez - Bolaños, con 4,564 votos, y la de Hermenegildo Esperanza - Emilio D. Ortiz, con 3,691 votos.

"Figuran en el expediente varias protestas denunciando irregularidades cometidas durante la votación, por los partidarios del C. Francisco Modesto Ramírez, y que son las siguientes: que algunos presidentes municipales se rehusaron a sellar las boletas del contrincante Esperanza, aduciendo que no tenían aviso del registro de esta candidatura, cosa que no está comprobada debidamente por estar todos los documentos y boletas sellados.

"Señala el contendiente de Ramírez detalles insignificantes que no afectan a la elección, pues son irregularidades no esenciales.

"Como la fórmula Ramírez - Bolaños obtuvo la mayoría de los sufragios, esta Comisión somete a la aprobación y deliberación de esta H. Asamblea, los siguientes puntos resolutivos:

"1o. Son válidas las elecciones que para diputados al Congreso de la Unión se efectuaron en el 4o. distrito electoral del Estado de Oaxaca.

"2o. Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el mencionado distrito, los CC. licenciado Francisco Modesto Ramírez y licenciado Próspero Bolaños."

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. - México, 4 de septiembre de 1920.- Lic. L. Castro y López.- B. Vadillo.- A. Cienfuegos y C."

Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobado.

La Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 4o. distrito electoral del Estado de Oaxaca, los ciudadanos Francisco Modesto Ramírez y Próspero Bolaños. (Aplausos.)

- El mismo C. secretario, leyendo:

"1a. Comisión Revisora de Credenciales.- 3a. Sección.

"Estudiado que fue por esta 3a. Sección Revisora de Credenciales el expediente electoral relativo a las elecciones de diputados al Congreso General, efectuadas en el 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas, el 1o. de agosto del corriente año, encontró lo siguiente:

"La documentación llegó en dos partes. En una de ellas las actas, listas de escrutinio y demás documentos semejantes, y en la otra las boletas de todas las secciones sin ninguna separación, confundidas. Esta irregularidad débese a que el expediente electoral fue enviado al gobernador de Zacatecas, y de allí, a repetidas instancias de esta Comisión, fue remitido a esta Cámara de Diputados.

"Contendieron las fórmulas Indalecio Delgado - Isaac Díaz de León, Manuel García Rojas - Ignacio Velasco, Leandro Díaz de León - Antonio R. Robledo, Adolfo A. Beltrán - Antonio R. Robledo y Joaquín L. García, sin suplente.

"El candidato Adolfo A. Beltrán pide nulidad de votos para distintas secciones electorales, sin presentar ningunas pruebas. El C. Indalecio Delgado también se queja de irregularidades y pide que se nulifique la votación emitida en favor del C. Manuel García Rojas, sin aducir tampoco ninguna prueba.

"El club político "Redención", de Villa García, pide también la nulidad de la votación en favor del C. García Rojas, sin aducir pruebas. El memorial viene subscripto por numerosas firmas sin legalizar.

"El club político "Redención", de Bimbaletes, también pide la nulidad de la elección en favor del C. García Rojas, sin pruebas para ello. El documento lo subscriben 66 ciudadanos, cuyas firmas están debidamente legalizadas.

"Esta Comisión se permite llamar la atención de la H. Asamblea respecto a estos tres documentos, por ser las agrupaciones que los envían de carácter societario y que si no se toman en consideración sus peticiones, es porque desgraciadamente, a pesar de la sinceridad que manifiestan los asignantes, no aducen ninguna prueba legal en apoyo de ellas.

"No siendo posible consultar cada uno de los expedientes de las secciones electorales, por haber venido confundidas las boletas de todos ellos, esta Comisión sólo tomó en consideración los datos que proporcionan el acta de la Junta Computadora y los documentos de las respectivas secciones.

"Municipalidad de Pinos.

"Se anula la sección 5a. por haberse instalado la casilla en la finca de la Hacienda. Fracción II del artículo 48.

"La 7a. por error en el cómputo. Fracción V del artículo 104.

"La 12. por no haber tenido la Junta Computadora las boletas de la sección, pues no las envió la Mesa de la casilla, artículo 71.

"La 21 se nulifica por haberse instalado en la finca de la Hacienda. Fracción VI, artículo 104, y II del 48.

"La 22 se nulifica por violación del secreto de voto. Fracción VII del artículo 104.

"Municipalidad de Villa García.

"Se nulifica la sección 6a. por estar firmadas las boletas. Fracción última del artículo 55.

"La 13 se nulifica por haberse embriagado a los votantes y haber ofrecido públicamente en carteles fijados en la puerta de la casilla cientos de peras por cada voto que se emitiera en favor del C. García Rojas. Fracción III del artículo 104.

"La 15 se nulifica por carecer de padrones, pues sólo tiene simples listas hechas a mano con numeración duplicada y triplicada. Fracción VI del artículo 104.

"Municipalidad de Santa Rita.

"Sección 4a. se nulifica por carecer de documentos electorales, dato de la Junta Computadora. Fracción 5a. del artículo 104.

"Hechas las deducciones respectivas, se obtuvo el siguiente resultado:

"Para la fórmula Manuel García Rojas - Ignacio Velasco, 1,472 votos válidos; para la fórmula Indalecio Delgado - Isaac Díaz de León, 1,348 votos válidos; para el C. Joaquín L. García, 768 votos válidos; para la fórmula Leandro Díaz de León - Antonio R. Robledo, 599 votos válidos.

"Por todo lo anterior, esta Comisión Revisora de Credenciales somete a vuestra consideración los siguientes puntos resolutivos:

"1o. Son válidas las elecciones para diputados al Congreso General efectuadas en el 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas, el día 1o. de agosto del corriente año.

"2o. Son diputados propietario y suplente, respectivamente, por el mencionado distrito electoral, los CC. Manuel García Rojas e Ignacio Velasco.

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. - México, a 8 de octubre de 1920.- M. García Vigil.- Nicolás Cano."

Está a discusión. Los ciudadanos que deseen hacer uso de la palabra sírvanse pasar a inscribirse.

El C. presidente: Están inscriptos para hablar en contra los ciudadanos Días Soto y Gama, Pérez José Dolores y León Luis L., y en pro los ciudadanos Ollivier, Macías Rubalcaba y González Jesús B. Tiene la palabra en contra el ciudadano Díaz Soto y Gama.

El C. Díaz Soto y Gama: En todos los asuntos electorales que se han presentado a esta Cámara, ninguno evidentemente, así como suena, ninguno ha tenido la importancia y la trascendencia de este asunto; por eso no me extraña ni me asusta que se hayan inscribido (Voces: ¡inscripto!) tantos ciudadanos diputados o presuntos diputados en contra. ¿Dije inscribido? (Voces: ¡Sí!) Bueno, estoy nervioso, como es lógico suponer, porque en este caso se trata de la lucha, frente a frente, del agrarismo organizado, contra el latifundismo también natural y espontáneamente organizado. Digo que este caso es el más importante de todos, porque es el primer caso en que se presenta un candidato apoyado por los sindicatos de campesinos organizados. Todos sabemos la historia del agrarismo en Zacatecas que es el Estado donde, después de Morelos, ha dado mayor impulso a su esfuerzo reivindicador el proletariado de los campos; todos sabemos que Zacatecas es el único Estado en que la Legislatura y el Gobierno cumplieron con su deber dando una Ley Agraria que si no se ha podido llevar a la práctica, es por la incuria y por la obstrucción criminal de ciertos elementos, así como por la tendencia reaccionaria de la Suprema Corte de Justicia; pero así y todo, en el Estado de Zacatecas es donde se ha hecho labor agraria más intensa e importante. Y entre los distritos del Estado de Zacatecas donde la labor agraria ha sido más formidable, está a la cabeza el distrito de Pinos, que conozco desde mi primera juventud por ser colindante de mi Estado natal; de manera que no hablo de memoria, sino sobre bases precisas. En ese distrito las tierras todas están acaparadas por una familia García y García Rojas, de la que forma parte el señor Manuel García Rojas, quien modestamente dice que no es latifundista; pero no solamente lo es, no sólo es terrateniente, sino que es miembro de una de las castas de terratenientes más conocidos en todo el país, la casta de los García; e iré citando nombres: general García...¿Lo conoce el señor García Rojas? El señor García es su tío. (Voces ¡No!) ¿Cómo no? El señor don Jenaro García fue puesto de gobernador en Zacatecas por Porfirio Díaz, por el autócrata Porfirio Díaz, en los momentos, en los tiempos en que se seguía la política de encumbrar a los puestos públicos, no a los ciudadanos más aptos, sino a los ciudadanos más fuertes, económicamente; en los mismos tiempos en que a Pablo Escandón se le llevaba a Morelos, a don Jenaro García se le llevaba a Zacatecas, como se llevaba a los hacendados y a los científicos a las principales gubernaturas de los Estados. Con el nombre de Jenaro García se liga el de Antonio García, también latifundista; se liga el de José León García, tío o primo del señor García Rojas, se liga el de toda la familia García Rojas, el de toda la familia García Rojas cuyos nombres constan en todos los títulos de acaparamiento de tierras del distrito de Pinos. Mi primer negocio, como abogado, cuando tenía la sangre brava, la sangre pujante de la juventud, cuando fui a luchar por primera vez contra el latifundismo y por primera vez contra el porfirismo, mi primer negocio fue contra la familia García Rojas, y entonces ví los títulos de tierras de Pinos, figurando como principal propietaria en el acaparamiento de tierras esa familia García Rojas desde los primero años del siglo pasado, y desde entonces han sido dueños absolutos, señores de vidas y haciendas de ese Estado. No es extraño, por lo mismo, que en ese distrito la revolución haya alcanzado un vuelo tan pujante, no es extraño que allí Pánfilo Natera y los suyos hayan hecho proezas, y tampoco es extraño que allí el señor García Rojas, unido a los empleados de una hacienda, San Marcos, se haya puesto al lado del huertismo y haya recibido a tiros y a balazos a los revolucionarios de 1914. Y voy a probar los hechos con documentos fehacientes. Me escribe una carta nada menos que José G. Escobedo, que fue secretario general de la Cámara obrera, o sea de la Federación de Sindicatos de agricultores, una carta

alarmante, una carta efusiva, una carta de apremio en la que me dice:

"En cuanto al contrincante del compañero Indalecio Delgado, sólo debo agregar a los datos que sobre el particular obran en el expediente respectivo, que el señor Manuel García Rojas es un viejo huertista, que en 1914 y en la hacienda de San Marcos recibió a tiros a los revolucionarios Fernando Reyes y Juan Ignacio Galván, quienes en aquella época militaban a las órdenes del general Natera y que atacaban la finca de campo aludida; siendo, de paso, un latifundista, cuyos intereses lo privan de estar de acuerdo con los principios agrarios."

Quiero de intento presentar primero la cuestión política, porque la cuestión legal es tan clara, que poco tiempo va a ocuparnos. Esto, que no lo niega el señor García Rojas, porque a mí me ha confesado que, efectivamente, recibió a balazos a los revolucionarios de 1914 defendiendo los intereses de los suyos, sus intereses de casta, de oligarca latifundista, estos hechos están comprobados también en protestas calzadas por numerosas firmas y que obran en el expediente que tuvo a la vista la Comisión. Una de esas protestas dice lo siguiente:

"Siendo dicho García Rojas un latifundista reaccionario que en 1914 en unión de empleados de la hacienda de San Marcos hizo fuego a las fuerzas revolucionarias, siendo causa de actos violentos por parte de las mismas fuerzas y que se segaran vidas inocentes; de que no hizo ninguna propaganda seria, pues en la referida hacienda de San Marcos, un día antes de las elecciones, embriagó a la peonada y ofreció con rótulos a la puerta de la casa donde se instaló la casilla electoral, cientos de peras por cada voto a su favor; que no dio a conocer ningún programa, ni contrajo ningún compromiso con sus electores", etcétera, etcétera.

Por todo esto piden que se nulifiquen las boletas a favor del ciudadano García Rojas. Naturalmente, con estos antecedentes todos los hacendados, absolutamente todos los del distrito de Pinos, se pusieron a contribución para apoyar la candidatura del ciudadano García Rojas. Este señor empleó procedimientos de esta clase: embriagar en algunos puntos a la peonada, como consta por una protesta firmada por los campesinos; y la declaración del ciudadano García Rojas, parte interesada, merece menos fe que la declaración honrada de los campesinos que no tenían por qué mentir. Puesto que el ciudadano García Rojas se ríe, voy a leer documentos donde consta lo que él niega. En la protesta del club político "Redención", establecido en Bimbalete, del cual habrá ocasión de oír antecedentes por boca del compañero León, que tomará parte en este debate, se lee lo siguiente:

"El señor García Rojas no hizo ninguna propaganda seria, pues en la referida hacienda de San Marcos, un día antes de las elecciones, embriagó a la peonada y ofreció, con rótulos a la puerta de la casa donde se instaló la casilla electoral, cientos de peras por cada voto a su favor..."

¿Hasta qué punto llegará la infelicidad, la miseria económica de aquellos hombres a quienes se compra con peras?

"...que no dio a conocer ningún programa, ni contrajo ningún compromiso con sus electores."

Me parece que esto para una Cámara honrada es mejor prueba que el dicho de burgueses o comerciantes; esto merece por mí más fe que todos los documentos oficiales. En otros lugares, como lo confiesa la Comisión, las casillas se instalaron en el interior de los cascos de las haciendas. La Comisión hace un recuento de los votos que debían invalidarse y llega a la conclusión de que hay una diferencia de 120 votos entre la votación que reconoce a favor del ciudadano García Rojas, y la que reconoce a favor del ciudadano Delgado. Estos 120 votos es muy fácil nulificarlos, como lo va a ver la honorable Cámara. Simplemente en la casilla que se instaló en una fábrica que tiene establecida el señor García Rojas en su finca "Victoria", ahí obtuvo la unanimidad de votos el señor García Rojas, o sean 97 votos. ¿Es cierto que tiene usted esa fábrica "Victoria", señor García Rojas?

El C. García Rojas: No es cierto.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿No tiene usted ninguna fábrica "Victoria"? ¿No?

El C. García Rojas: No, es un rancho. (Murmullos.)

El C. Díaz Soto y Gama: Está bueno. Aquí está una lista de las casillas electorales de la municipalidad de Pinos, autorizada con el sello de la Presidencia Municipal, como puede ver el señor secretario, y le suplico que dé fe, y en la casilla de la fábrica "Victoria" aparece como instalador don Antonio García Rojas.

El C. prosecretario Castrejón: La Secretaría da fe de tener a la vista las casillas electorales del municipio de Pinos, Zacatecas, autorizadas con el sello de la Presidencia Municipal, y en el renglón que corresponde a la sección número 24 aparece como instalador el ciudadano Antonio García Rojas, fábrica de "Victoria".

El C. Díaz Soto y Gama: A mí me han asegurado los campesinos de Zacatecas que esta finca de "Victoria" es del señor García Rojas; tiempo habrá de demostrarlo. ¿Cuál es el nombre de la propiedad que tiene usted, señor García Rojas? ¿Me hace usted favor? Con permiso de la Presidencia.

El C. García Rojas: La fábrica no es mía; existe la creencia de que la fábrica es de nosotros, pero no es así.

El C. Díaz Soto y Gama: No se oye nada, señor.

El C. García Rojas: El rancho de nosotros colinda con otro que está muy cerca, que es adonde pertenece esa finca. (Murmullos.)

El C. Díaz Soto y Gama: No se oye nada, señor García Rojas.

El C. García Rojas: Esa fábrica está junto a los linderos del rancho de nosotros.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Está dentro de los terrenos de usted?

El C. García Rojas: No, señor; está cerca de los linderos de nosotros; esa fábrica es de un señor Velasco.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Ese señor Antonio García Rojas es pariente de usted?

El C. García Rojas: Sí, señor; es hermano mío.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Y el hermano de usted es el instalador de la casilla?

El C. García Rojas: Yo creo que sí.

El C. Díaz Soto y Gama: Perfectamente. Hay la circunstancia especialísima de que en todas las

casillas establecidas en las haciendas, aparece una unanimidad de votos a favor del señor García Rojas: en todas las casillas establecidas en las haciendas de la municipalidad de Pinos; y en cambio en todas las otras casillas de la misma municipalidad y en todas las otras casillas de las otras municipalidades, jugaron, como es lógico, diversas candidaturas; la candidatura del señor García Rojas por los latifundistas, la del señor Delgado por los campesinos organizados, y otra, la tercera candidatura. Sólo en estas casillas que voy a mencionar aparece una unanimidad bastante sospechosa; estas casillas, sin embargo, no fueron anuladas por la Comisión, y son las siguientes: "Casilla número 13, instalada en "La Sauceda", 73 votos a favor del señor García Rojas. Fábrica "Victoria", rancho del señor García Rojas, 97 votos unánimes." ¿La casilla establecida en la fábrica de "Victoria" está dentro de la propiedad de usted, señor García Rojas?

El C. García Rojas: No, señor; ni tengo peones.

El C. Díaz Soto y Gama: De manera que todos los votos de los peones del señor García Rojas, 97 votos, fueron a su favor, y no pueden ser válidos, porque están viciados por la presión económica; esos votos fueron arrancados por hambre, por miseria, por la necesidad de vivir que tiene todo peón y todo jornalero; esos hombres es claro que no irían a votar sino por el amo, por el señor de horca y cuchillo de la localidad; por lo tanto, esos votos deben nulificarse, máxime cuando está comprobado con documento oficial que el hermano del señor García Rojas, don Antonio García Rojas, fue el instalador de la casilla respectiva, como consta en la lista correspondiente.

El C. García Rojas: ¿Consta que mi hermano presidió la elección o hubo algún presidente?

El C. Díaz Soto y Gama: Lo que consta es que su hermano fue el instalador y que sus peones votaron a favor de usted, mientras que en todos los demás lugares hubo votación a favor de unos y de otros. La misma unanimidad sospechosa existe en las otras fincas: en la hacienda de Santiago tuvo García Rojas 53 votos y ni un sólo voto para los demás; en la hacienda de San José Castellanos, el administrador de ella es el suplente del señor García Rojas. ¿No se llama Ignacio Velasco?

El C. García Rojas: No, señor; el señor Velasco es administrador de una casa de comercio de Pinos.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Pero está en el sector de la hacienda?

El C. García Rojas: No, señor.

El C. presidente: Se prohiben los diálogos.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Dónde está la casa de comercio del señor Velasco?

El C. García Rojas: En Pinos.

El C. Díaz Soto y Gama: En la hacienda de Noria de San Pablo, que pertenece al señor Francisco Velasco, la unanimidad también aparece visible: 69 votos. ¿El señor Francisco Velasco es pariente de usted, señor García Rojas?

El C. García Rojas: Sí, señor.

El C. Díaz Soto y Gama: Es pariente de usted. Así es como se ganan las elecciones en el distrito de Pinos; los parientes del señor García Rojas en el distrito de Pinos, son los que van ustedes a oír. Desde luego, el señor José León García, propietario de varias haciendas en el Estado, entre otras importantísimas, la conocida hacienda de "Trancoso". ¿Es cierto que la hacienda de "Trancoso" es una de las más grandes, de las más extensas, de las más ricas, de las más importantes del Estado de Zacatecas?

El C. García Rojas: Permítame usted que después conteste, señor.

El C. Díaz Soto y Gama: Es cierto.

El C. García Rojas: No es cierto.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿No es cierto que esta hacienda es de las más importantes en el Estado? ¿No es cierto que don José León García es el propietario? ¿No es cierto que don José León García es primo hermano de don Jenaro y de don Antonio? ¿No es cierto que don Jenaro y don Antonio García los dos son parientes de usted, señor García Rojas?

El C. García Rojas: No son parientes.

El C. Díaz Soto y Gama: Pues yo le aseguro a usted haber visto....

El C. Macías Rubalcaba: ¿Me permite una interpelación?

El C. Díaz Soto y Gama: Estoy en el uso de la palabra; después hablará usted. Yo garantizo a la Asamblea que en los títulos, muy numerosos, que he revisado sobre tierras, sobre fincas situadas en el distrito de Pinos, la familia García Rojas aparece como propietaria de esos terrenos desde hace muchos años, y ahí aparece el parentesco de los García Rojas con los García el parentesco que hoy niega el señor García Rojas. Eso me consta a mí, por haberlo visto en documentos oficiales, que es la misma mata, que es la misma casta, que es la misma oligarquía, que es la misma familia. Cualquiera persona que conozca el Estado de Zacatecas, cualquiera persona de los Estados limítrofes, conoce que es la misma rama de latifundistas. Pues bien; el señor don León García, de la familia, de la casta de la aristocracia de los García Rojas, es propietario de esta finca "Trancoso", "San Marcos", etcétera; a la vez poseen los señores García y los señores García Rojas en esa misma municipalidad, las siguientes haciendas, todas de importancia territorial y económica. Aquí están enumeradas simplemente las siguientes: Jaula de Arriba El Sitio, Santa Elena, La Sauceda, Santiago, Pedregoso, La Victoria y El Obraje.

Ocho propiedades. En estas condiciones, ¿cómo se puede creer que la elección del señor García Rojas haya sido una elección libre de presión, una elección libre de coacción? La Comisión dice que no hay pruebas sobre el asunto, y las pruebas no consisten en la declaración, no de dos testigos, como quiere la ley, sino de numerosos testigos, miembros del sindicato, que entraron a la lucha, todos los cuales declaran, como ve la honorable Cámara, que hubo presión, y presión excesiva, que no se votó libremente, que la coacción económica se manifestó como tenía que manifestarse. Yo no sé por qué la Comisión niega plena fe al dicho de 66 testigos, legalizadas las firmas por la autoridad correspondiente, cuando en un tribunal, por más exigente que se le suponga, hace prueba plena el dicho de dos testigos. La Comisión, terminantemente, dice en uno de sus párrafos lo siguiente:

"..... El club político "Redención", de

Bimbalete, también pide la nulidad de la votación en favor del C. García Rojas, sin pruebas para ello."

El documento lo subscriben 66 personas, cuyas firmas están debidamente legalizadas. "Los componentes de esta agrupación, pequeños propietarios o poseedores de terreno, en la zona de fraccionamiento de la hacienda de "San Marcos", de esta jurisdicción, debido a la Ley Agraria del Estado....."

Debe tener presente la Cámara que esta congregación, pueblo o como quiera llamársele, de Bimbalete, se formó por obra de la Revolución; es hijo de la Revolución; en virtud del reparto de tierras hecho por la Revolución, se formó esta agrupación, cuyos beneméritos antecedentes revolucionarios dará a conocer el señor León. Pues bien; estos hombres, hijos legítimos de la Revolución, que la aman con toda su alma, por haber recibido tierras de ella, están identificados con la Revolución, y son los firmantes de este documento, al que niega todo valor probatorio la Comisión. Dicen:

"Los componentes de esta agrupación, pequeños propietarios o poseedores de terreno en la zona de fraccionamiento de la hacienda de San Marcos, de esta jurisdicción, debido a la Ley Agraria del Estado, de la manera más espontánea hacemos constar: que en las elecciones para renovación de poderes federales, en lo que respecta a diputados al Congreso de la Unión, estuvimos de parte de la planilla de los CC. Indalecio Delgado e Isaac Díaz de León, candidatos por este distrito electoral, por sernos reconocida su franca y enérgica labor en la lucha por los principios revolucionarios, en lo principal en la cuestión agraria; que el señor Manuel García Rojas obtuvo una mayoría de boletas, debido a las irregularidades que se cometieron, principalmente en la municipalidad de Pinos, donde los votos pueden contarse por el número de hacendados de esa, porque allí los peones votan por el que les indican."

Oigalo usted, señor García Rojas, es claro; la votación aparece unánime en favor de usted en todas esas fincas, mientras que en las demás casillas hay lucha, dejando sólo de haberla donde domina el señor feudal. ¿Puede haber pureza en esos votos arrancados por hambre? "Libertad y Tierra.- Bimbalete, Zacatecas, 16 de agosto de 1920." Calzado con más de sesenta firmas.

Este es un documento que la Comisión rechaza y yo me permito preguntarle a la Comisión, que ha sido tan escrupulosa en el sentido legalista, ¿tiene la convicción moral de que se ejerció presión por los latifundistas en favor del señor García Rojas?

El C. Cano: Pido la palabra, señor presidente.

El C. presidente: Tiene la palabra la Comisión.

El C. Cano: Efectivamente, los documentos que el señor licenciado Soto y Gama está analizando, la Comisión, en su criterio particular, cree que son sinceros, cree que son honrados; que todas las violaciones de que se quejan estos compañeros de Zacatecas son ciertas. Pero también desgraciadamente la Comisión, teniendo que desempeñar su papel de juez, solamente tiene que atenerse a los documentos que vienen en el expediente electoral, y, efectivamente, esos documentos dicen que hubo presión, que se hizo aquello, que se hizo lo otro, que se hizo lo de más allá; pero desgraciadamente también a pesar de la buena fe del compañero Soto y Gama y a pesar del juicio particular del que habla, no hacen prueba los dichos de los compañeros. (Aplausos.) Porque si nosotros fuésemos a hacer caso de la mayoría de los documentos que nos traen, diciendo que esto, aquello o lo de más allá, nada más por el simple dicho de 60 o 70 ciudadanos que son una minoría de los de todo el distrito, seguramente que tendríamos que nulificar todas las elecciones. Pero vuelvo a repetir, contestando la interpelación del ciudadano Soto y Gama; él apela a la conciencia del que habla y la conciencia del que habla dice que esas pruebas son morales muy bien fundadas, (Aplausos. Siseos.) que él cree, moralmente, que esta elección en favor del señor García Rojas se ha arrancado por la presión de los terratenientes; pero como juez no puede aceptar esas pruebas para fallar en contra. (Aplausos. Siseos.)

El C. Díaz Soto y Gama: Me satisface la contestación del compañero miembro de la Comisión, porque precisamente este es el punto toral del debate. Hay la presunción, lo que los jurisconsultos llamamos juris tantum, es decir, subscripta la prueba en contrario, es decir, en todos los casos en que interviene el patrón, sea patrón industrial o sea patrón latifundista, los jornaleros que de él dependen, ante la amenaza de perder el trabajo y de quedarse sin comer al día siguiente, van a votar en el sentido que les marca el patrón; es la presunción juris tantum; pero cuando a esa presunción juris tantum se agrega el dicho de 66 ciudadanos con firmas debidamente legalizadas, esa presunción juris tantum sube a la categoría de presunción juris et de jure. ¿Por qué? Porque a esa presunción se agrega la prueba testimonial, la prueba testimonial en Derecho para hacer prueba plena, lo saben los abogados, se forma con el dicho de dos testigos y aquí hay 66, ¿qué más se quiere? Esos testigos no tienen viciada su declaración por algún motivo pasional; la Comisión misma que ha estudiado el documento, honradamente nos dice que cree sinceros y espontáneos, es decir, dignos de fe esos dichos; ¿pues qué más falta a la declaración de 66 testigos para que sea considerada como prueba plena? En Derecho sólo se puede rechazar el testimonio de un testigo cuando está movido por pasión, por enemistad o alguna otra causa que quite la sinceridad; aquí la sinceridad está reconocida por la Comisión y por la Cámara misma, pues basta que se vea el tono de estos documentos, tono angustioso, tono de queja, tono casi de desesperación; porque es claro, porque esos hombres han derramado su sangre por el triunfo de la lucha revolucionaria, y en la primera elección en que concurren a dar sus votos con entusiasmo, tropiezan con la eterna chapuza, con el eterno chanchullo, con la eterna infamia del fuerte y aparece su elección ganada por el contrincante sostenido por su enemigo. No cabe mayor sinceridad ni pureza en este testimonio. Los otros clubes dicen exactamente lo mismo. El de Villa García también calza su documento con numerosas firmas; dicen:

"Que si no obstante nuestras peticiones, que apoyamos con razones de orden legal y moral, se comete el crimen político, de ayudar a salir avante a un individuo de esos antecedentes y contra las circunstancias mencionadas en su contra, el

agrarismo organizado en esta región protesta solemnemente ante la opinión pública..."

Es el único caso de agrarismo organizado en el país en que los campesinos han tenido la energía y capacidad bastantes para agremiarse, y no es justo que la Cámara les quite su fe, su esperanza y su anhelo, dando el triunfo al individuo que no quieren tener por representante, porque dicen que:"...sería una magna inconsecuencia y un absurdo dar un voto aprobatorio a una personalidad que irá a la Representación Nacional a obstruccionar el desarrollo y encauzamiento de estos principios libertarios y que los miramos sintetizados en los artículos 27 y 123 constitucionales."

Y es natural: un hombre que combatió con las armas en la mano a la revolución, un huertista connotado como el señor García Rojas..."

El C. García Rojas, interrumpiendo: ¡No es cierto!

El C. Díaz Soto y Gama: Usted mismo me lo ha confesado; usted me ha dicho que tiró balazos contra los revolucionarios con sus propias manos. ¿Un individuo como usted, miembro de una casta de terratenientes, es posible que venga a esta Cámara a trabajar por el cumplimiento de los principios constitucionales de reformas sociales? Evidentemente que no. Si se quiere que entré un enemigo del pueblo, un hombre que representa, no a la gran mayoría de ciudadanos de su distrito, sino a un pequeño grupo de hombres que por medio del poder de las autoridades domina en una región; si se quiere que venga un individuo a representar, no a los campesinos, sino a los hacendados del distrito; si se quiere que el señor García Rojas sea el diputado por los latifundistas de esa región, santo y bueno, que se le acepte, a eso se reduce todo el dilema, a eso se reduce toda la cuestión: o le damos el triunfo al candidato latifundista, terrateniente, el mismo de los miembros de una familia de terratenientes y se lo damos en nombre del escrúpulo legalista, torpe, destruído con pruebas que merecen fe ante nosotros, o le damos el triunfo al hombre, al único hombre que a esta Cámara viene apoyado por el sindicato de campesinos. Es un problema moral que en su conciencia tiene esta Cámara y esto tiene que resolverlo primero que nada por la convicción moral. ¿Cómo nosotros los revolucionarios vamos a detenernos en el escrúpulo torpe de que estas firmas no vengan dadas ante un juez con citación del agente del Ministerio Público y todas esas pamplinas? Nos consta que vienen firmadas por los campesinos y los campesinos son sinceros, esos campesinos merecen fe y esos campesinos tienen el derecho de estar representados; no les exijamos a esos campesinos que sepan llevar sus documentos electorales y traerlos a esta Cámara perfectos, como si fueran abogados, como si fueran tinterillos. Estos hombres creyeron que la Representación Nacional tenía sentido común y sentido moral, y mandan sus protestas sinceras, honradas; ¡y luego se les va a decir que esas no son pruebas! ¡Eso no es lo que podían esperar los campesinos de "El Carro", de "El Bimbalete", de Villa García! A mí me desespera que por un escrúpulo legalista no se haga justicia al pueblo; a mí me desespera que siga el chanchullo imperando sobre la voluntad nacional. ¿Venimos a ver aquí el voto verdadero del pueblo, o la apariencia legalista de una elección? Venimos a ver el fondo de la elección y el fondo de la elección es este: aquí los latifundistas impusieron a uno de los suyos y, en cambio, el pueblo fue burlado ¿Y se quiere una prueba más todavía de la imposición, una prueba más del chanchullo descarado? Y lo reconoce la Comisión en estas palabras textuales; ruego a la Cámara que las escuche para que no se crea que es obra de apasionamiento mía:

"La documentación llegó en dos partes. En una de ellas las actas, listas de escrutinio y demás documentos semejantes, y en la otra las boletas de todas las secciones sin ninguna separación, confundidas."

¿Saben ustedes, señores diputados, a qué se debe esta irregularidad de que todas las boletas vinieran, no en un paquete por separado, sino revueltas en un mare magnum en el que era imposible todo estudio? Por esta circunstancia: "Esta irregularidad débese a que el expediente electoral fue enviado al gobernador de Zacatecas..." - la eterna alianza entre el fuerte y el gobernante - "...y de allí, a repetidas instancias de esta Comisión, fue remitido a esta Cámara de Diputados."

¿Qué confianza merece a la Cámara un montón de boletas manejadas a su antojo por la burocracia de Zacatecas, que debe suponerse apoyando a un latifundista, como siempre ha pasado en todos los Estados de la República, con excepción de dos o tres hombres, entre ellos el general Enrique Estrada? Desgraciadamente éste ya no es gobernador, mientras que todos los demás gobernadores de los Estados apoyan siempre a los latifundistas. ¿Por qué la Comisión no dijo que esos votos del ciudadano García Rojas eran nulos y que, en cambio, los votos hermosos consagrados por el sacrificio popular son los votos del compañero Delgado? ¿Y cuántos son esos votos? Mil trescientos y tantos reconocidos por la Comisión, contra 1,400 de García Rojas. ¿Y por 100 votos de diferencia vamos a echar de aquí al representante de los campesinos para meter al representante de los hacendados? No, y menos cuando en las otras casillas no anuladas hay detalles como el de que el hermano del señor García Rojas, en una fábrica lindante con su finca, recogió los votos y obtuvo una unanimidad a favor de su hermano. Con anular cualquiera de las demás casillas en que aparece también unanimidad a favor del señor García Rojas, por ejemplo: "La Sauceda", "Victoria", hacienda de "Santiago", hacienda de "San José de Castellanos", "La Noria de San Pablo", basta para dar la mayoría legítima al compañero Delgado. La personalidad del señor Delgado debe conocerla la Cámara; Delgado fue uno de los individuos que más lucharon por el agrarismo en Zacatecas; personalmente vino el secretario general de la Cámara Obrera de Zacatecas, quien también lo fue de la Confederación Regional Obrera, el compañero Escobedo, conocido ventajosamente en todos los círculos obreros del país, a darnos estos datos sobre la personalidad de Delgado:

"Con el propósito de constituir una fuerza moral y material que respaldara la acción benéfica de los principios renovadores contenidos en la Ley Agraria de 20 de noviembre de 1917, sancionados por mera política por la Legislatura y sostenida con

todo entusiasmo por el Ejecutivo, representado por el general Enrique Estrada, establecimos en la capital del Estado de Zacatecas la Cámara Obrera (Federación de Sindicatos de Agricultores), emprendiendo una labor activísima en todo el Estado, tendente a la agremiación del asalariado agrícola, quien respondió a nuestro llamado, dándonos la oportunidad de organizar 22 sindicatos de agricultores. En esta labor de reforma agraria contamos con la franca y decidida ayuda - en sus respectivas zonas - de los compañeros Guillermo C. Aguilera e Indalecio Delgado, llegando a organizar sindicatos agrícolas..."

¿Vamos a permitir que un hombre tan valioso para el proletariado del Estado de Zacatecas, que tan genuinamente lo representa, como el señor Delgado, ceda el puesto a una persona que no está identificada con los intereses del pueblo? Y tan no lo está, que estuvo contra el pueblo en la lucha armada del año de 1914, sosteniendo al dictador Huerta. La Asamblea lo sabrá; lo que sostengo es que merece plena fe, que merece pleno crédito el dicho de los ciudadanos que en cierto número, más de cien, vienen a decirnos que hubo presión en las haciendas donde aparece la votación unánime a favor del señor García Rojas. La Asamblea juzgará y dirá lo que quiera; yo lo que vengo a decir es esto: la decepción que sufrirá el distrito de Pinos, uno de los distritos más agrarios, uno de los distritos en que el empuje revolucionario de los campesinos se ha dejado sentir más, será una decepción profunda, una decepción honda si esta Cámara, contra todo principio, contra toda tendencia revolucionaria y de justicia, da su voto por razones de aparente legalidad, que no son más que aparentes, puesto que la legalidad verdadera está en contra de esos votos del señor candidato de los latifundistas, contra Indalecio Delgado, candidato del agrarismo organizado en el Estado de Zacatecas. La Cámara sabe lo que hace; por fortuna no estoy solo en esta defensa. Vendrá el compañero León con su voz juvenil a robustecer mis argumentos; vendrá a decir lo que significa el voto de aquellos hombres; si ustedes prefieren atenerse a una triquiñuela legal, a algo aparentemente legal, en lugar de atender a la profundidad del voto, a las entrañas del voto popular, a las entrañas de la voluntad popular, ustedes sabrán lo que han hecho; pero no habrán obrado a conciencia, no habrán obrado revolucionariamente. (Aplausos. Siseos.)

El C. presidente: Tiene la palabra en pro el ciudadano Ollivier Francisco.

El C. Ollivier: (Aplausos.) Señores representantes: El señor licenciado Díaz Soto y Gama ha venido nervioso a esta tribuna, dada la trascendencia del asunto que en estos momentos está a debate. Mucho más nervioso vengo yo, porque es mi convicción íntima que aquí se trata de desvirtuar flagrantemente la manifestación de la voluntad popular en el 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas. (Voces: ¡No, hombre!) Sí, señor. Voy a ir analizando uno por uno los cargos que el ciudadano licenciado Díaz Soto y Gama ha formulado al candidato García Rojas, y veremos que aparte de ser infundados se vuelven más bien en contra de su defenso, el señor Indalecio Delgado. Voy allá. Primero: latifundismo. Ha dicho el señor licenciado Díaz Soto y Gama, hasta la saciedad, que el señor García Rojas es un latifundista. (voces: ¡Es cierto!) Voy allá. En el municipio de Pinos, del 5o. distrito electoral, existe una propiedad rural que mide unas 1,200 hectáreas, como suele usted decir, señor licenciado, palabra de hombre, 1,200 hectáreas. De estas 1,200 hectáreas, las tres cuartas partes vienen a ser de terreno completamente eriazo; las 300 que quedan de terreno laborable, están distribuídas entre doce propietarios que componen la familia García Rojas; les tocan veintitantas hectáreas aproximadamente, por cabeza: así se es latifundista; el señor Delgado, en cambio, tiene él sólo en el municipio de Villa García cuatrocientas y tantas hectáreas. ¿Quién es el latifundista, García Rojas o Delgado? Ha aludido usted a los progresos del agrarismo en Zacatecas. Siento que no esté usted informado con todo detalle de lo que allá ha sucedido; allí se ha hecho más de lo que usted concede; sencillamente hemos salvado el artículo 27 constitucional; allí por él seguiremos propugnando; allí el agrarismo no se perderá jamás, a pesar de que usted diga que los gobernadores estarán arrodillados a los pies de los potentados: eso no sucederá; la iniciación del general Estrada se llevará a feliz término. En el 5o distrito electoral se ha trabajado, como en pocas regiones del país, por hacer progresar el agrarismo; allí ha habido hombres que han logrado consolidar estos mejoramientos sociales; ha habido una junta de fraccionamiento agrario, ¿y sabe usted quién ha sido el presidente de esa junta de agrario? Don Manuel García Rojas. (Aplausos. Voces: ¡No se ha hecho nada!) ¡Cómo no! ¿Y las 100,000 hectáreas de terreno distribuídas en Zacatecas, más que en Morelos? (Aplausos.) Allí tenemos una ley agraria...

El C. Mijares, interrumpiendo: ¡Todo lo hizo el general Estrada!

El C. Ollivier: No lo niego. Suplico a la Secretaría dé lectura a este documento.

El C. Mijares: El general Estrada tuvo a toda la Legislatura en su contra.

El C. Castillo Francisco: ¡Moción de orden!

El C. presidente: Se suplica a los ciudadanos diputados que no hagan uso de la palabra sin que antes se les conceda.

- El C. prosecretario Castrejón, leyendo:

Un sello que dice: "Ejército Nacional.- 2a. División del NO.- Cuartel General.

Enrique Estrada, general de División del Ejército Nacional, actualmente jefe de la segunda División del Noroeste, certifica:

"Que siendo el subscripto gobernador constitucional del Estado de Zacatecas, en el año de mil novecientos diez y ocho, el C. Manuel García Rojas fue presidente municipal de Pinos, Zacatecas, no habiendo tenido el Gobierno de mi cargo, que hacerle ninguna observación respecto a su labor, por haber obrado de acuerdo con el criterio del subscripto, especialmente en lo que se refiere a la protección de los campesinos y mineros.

"Que colaboró en la pacificación del Estado, organizando defensas civiles en la región.

"Que niveló el Presupuesto del municipio en el año antes citado.

"Que fue presidente de la Junta de

Fraccionamiento Agrario de Pinos, y colaboró eficazmente, hasta donde era posible, en la recta aplicación de la legislación agraria de aquel Estado.

"Extiendo el presente en la ciudad de México, a los veintinueve días del mes de octubre de mil novecientos veinte.- E. Estrada."

El C. Ollivier: Agradezco a la Asamblea la atención que prestó a la lectura de este documento. No quiero insistir en este asunto, que con esto queda definitivamente agotado. Voy a permitirme leer nuevamente, con más claridad, la parte final, que es la verdaderamente reveladora de la situación:

"Que fue presidente de la Junta de Fraccionamiento Agrario de Pinos, y colaboró eficazmente, hasta donde era posible, en la recta aplicación de la legislación agraria de aquel Estado."

El C. Cerda: Pido la palabra para una aclaración.

El C. presidente: Si el orador lo permite.

El C. Cerda: Para hacer una pequeña aclaración, señor presidente.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Cerda para hacer una interpelación al orador (Voces: ¡No! ¡No! ¡Sí! ¡Sí!)

El C. Cerda: Tengo derecho a hacerla, me han concedido la palabra. El orador lo permite.

El C. Ollivier: No, una aclaración, no; interpelaciones, las que usted guste, señor. Yo le contesto a usted todas las que guste.

El C. Cerda: Perfectamente. ¿Es cierto que la solución del problema agrario, o la casi solución del problema agrario en Zacatecas, se debe, principalmente, al Sindicato de Agricultores, o a la junta que primitivamente trató de resolverlo y que no lo logró hacer, y hasta después vinieron a hacerlo los sindicatos de agricultores, de los cuales el señor Indalecio Delgado ha sido uno de los principales líderes? Sírvase usted contestar.

El C. Ollivier: No niego, señor, honradamente, porque ante todo soy honrado,..... (Murmullos. Algunos ciudadanos diputados pretenden hablar.)

El C. presidente: Se ruega a los señores diputados no hagan uso de la palabra, sin pedirla previamente.

El C. Ollivier: Honradamente declaro a usted, señor, que, en mi concepto y en el concepto propio del señor García Rojas, la actuación del señor Indalecio Delgado, si no es trascendental, sí es bastante eficaz, a base de honradez y sinceridad políticas; es un buen colaborador de las buenas causas políticas y del agrarismo; pero yo creo que la solución de estas reformas, no se deben ni al señor Delgado ni al Sindicato de Agricultores; se debe, en primer término, a la iniciativa del general Estrada y, además, a la colaboración del Congreso de Zacatecas. (Aplausos.)

El C. Pérez José Dolores: Pido la palabra, señor presidente, para hacer una interpelación, si me lo permite el orador.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Pérez: Si el cierto, como usted dice, que el señor ha resuelto, en parte, eso del agrarismo en Zacatecas, hágame usted favor de decirme: ¿de sus haciendas cuánto fue lo que dio para sus peones? (Voces: ¡Huy! ¡Huy! Campanilla.)

El C. Ollivier: Si no tiene que dar, señor; ahí hay terreno suficiente.....

El C. Pérez, interrumpiendo: Entonces usted viene a defender sus intereses.

El C. Ollivier: En Zacatecas la ley concede derecho para tener ochenta veces más de lo que tiene; ahí tenemos terreno suficiente para todos, y no en cantidad tan exigua como el señor García Rojas tiene; en este caso, que las dé Delgado, que tiene más.

El C. Manrique: Pido la palabra para una interpelación.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Manrique.

El C. Manrique: Señores diputados: Colocada ya la cuestión en este punto de vista, es decir: estudiando ahora el aspecto personal de los candidatos, la importancia personal de la labor social de cada uno de ellos; tratándose de una elección en que, según el dictamen de la Comisión, el número de votos en favor del señor García Rojas es escaso comparativamente con la votación del señor Delgado; ya que el señor Ollivier ha reconocido honradamente que Delgado ha sido factor en la solución del problema agrario del Estado de Zacatecas, quiero que se sirva decirme: en su opinión, en su concepto personal ¿quién ha sido más eficaz colaborador para la solución de ese problema, el ciudadano García Rojas o el ciudadano Delgado, presidente de una comisión agraria el uno, y jefe o presidente de sindicatos el otro?

El C. Ollivier: El ciudadano García Rojas es un colaborador mucho más aceptable. Por otra parte, no voy a rehuir ninguno de los aspectos de la cuestión. La votación de García Rojas aparece ligeramente superior a la de Delgado, porque la Comisión le nulificó 600 votos, que no debió haber nulificado a aquél. Voy a referirme a las protestas famosas de los clubes, esas protestas impregnadas de sinceridad, que tanto han conmovido al ciudadano Díaz Soto y Gama y a la Comisión; voy a analizarlas, para que se vea qué clase de documentos son; son en número de 3: una, escrita con una letra que no conozco; la otra escrita en máquina, y la tercera, escrita de puño y letra del ciudadano Delgado. Y el licenciado Díaz Soto y Gama se ha servido darnos un dato revelador: ¡las tres dicen exactamente lo mismo! (Aplausos.) ¿Qué quiere decir esto? (Aplausos.) Esta es la sinceridad y la honradez que tanto le llama la atención. Aquí está una protesta, la de Bimbalete, justamente la escrita por el señor Delgado, cuya parte final voy a leer:

"1a. Pedir que se nulifiquen las boletas, es decir, esa mayoría, con que resultó el señor Manuel García Rojas, por las irregularidades apuntadas.

"2a. Que se reconozcan los votos obtenidos por la planilla Delgado Díaz de León, por haber sido ganadas honradamente.

"3a. Que si desgraciadamente se comete el crimen político de hacer salir avante al referido García Rojas, u otro de los candidatos, sin hacérsenos justicia en nuestros deseos y anhelos, haciéndose punto omiso de la razón que nos asiste, este conglomerado protestará ante la opinión pública y ante las Cámaras de la Unión, por dicho acto, y preferirá quedarse sin representación que dar un voto de confianza a un individuo sin antecedentes en la lucha libertaria; reaccionario y que su labor será

en beneficio de los eternos enemigos de las libertades públicas, y

"4a. y última. Póngase este documento en manos del C. Indalecio Delgado, que fue como antes decimos nuestro candidato, para los usos que a él y a la colectividad convengan."

Señores compañeros, no me considero con derecho a ocupar demasiado tiempo la atención de ustedes; afortunadamente lo que estoy diciendo no puede ser puesto en duda, puesto que el mismo ciudadano Díaz Soto y Gama lo ha confesado en esta tribuna: él mismo ha dicho que todas las protestas dicen exactamente lo mismo que la de Bimbalete que está hecha de puño y letra del candidato Delgado. (Voces: ¡Pruebas!) Basta confrontar las firmas de Delgado que aparecen aquí en el expediente, con cualquier escrito del mismo Delgado. Suplico a la Secretaría que venga a dar fe del hecho. La Secretaría no se considera capacitada para dar fe de que es la misma letra; pero sí da fe de otros escritos. (Voces: ¡Otro secretario! ¡Valadez Ramírez!) Con permiso de ustedes va a dar fe la propia Asamblea. Uno de los escritos está firmado por el señor Delgado, y en otro ¡Claro! no lo está, porque es protesta colectiva, y la Asamblea va a ver los dos documentos. Otro de los cargos que con más virulencia se han formulado aquí en contra del señor García Rojas, es el pretendido cargo de que fue huertista en el año de 1914. No hay tal, lo que sucedió fue esto: En el año de 1914, estando el señor García Rojas en San Marcos, se acercó una partida como de unos doce individuos capitaneados por el cabecilla Fernando Reyes, a quien los ciudadanos de San Luis y Zacatecas conocemos muy bien.

El C. Soto y Gama: Un revolucionario.

El C. Ollivier: Está bueno. Hace unos cuatro o cinco días conversando con el general Trinidad Cervantes, que juntamente con el general Natera dirigía las operaciones revolucionarias constitucionalistas en el Estado de Zacatecas por aquel entonces, me declaró honradamente que él había autorizado en esos días al señor García Rojas para defenderse con las armas en la mano en la finca de San Marcos contra cualquiera partida de fascinerosos. (Siseos.) Voy a probarlo. La carta, (dirigiéndose al C. García Rojas) si me hace usted favor.

El C. Soto y Gama: ¿Me permite usted una aclaración? ¿Cree usted, según eso, que el general Natera se convirtió en estos momentos en un traidor a la revolución, poniendo una trampa a los suyos autorizando al señor García Rojas para que defendiera su hacienda cuando fuera atacada por los elementos de la revolución? ¿Cree usted que ese haya sido el procedimiento de un hombre como Natera? ¿Cree usted que Natera haya ordenado eso a un revolucionario tan honrado como Cervantes? (Murmullos. Campanilla.)

El C. Ollivier: No, señor; el general Natera no autorizó al señor García Rojas a batir a Fernando Reyes, lo autorizó a batir a los bandidos; el señor García Rojas se equivocó e hizo fuego sobre la gente de Reyes creyendo que eran bandidos. (Desorden. Campanilla.)

El C. Soto y Gama: Para otra interpelación.

El C. Ollivier: Voy a terminar, señor. El señor García Rojas se equivocó creyendo que eran bandidos....

El C. Díaz Soto y Gama, interrumpiendo: ¿Me permite una interpelación? (Murmullos.)

El C. Ollivier: Un momento, señor.

El C. presidente: Si lo permite el orador.

El C. Ollivier: Cuando se cercioró de que no eran bandidos, suspendió su fuego, no hubo víctimas en la escaramuza, se entregó a las fuerzas rebeldes y Fernando Reyes no lo molestó. ¿Qué quiere decir esto? Fernando Reyes certifica que de esa manera fue la acción.

El C. Díaz Soto y Gama: Para una interpelación al señor Ollivier.

El C. presidente: Si lo permite el orador.

El C. Ollivier: Sí, señor.

El C. Díaz Soto y Gama: El revolucionario de 1910, Fernando Reyes, que es conocido en esta Asamblea, como lo va a ver el señor García Rojas, ¿es bandido un revolucionario de principios?

El C. Ollivier: Yo no sé qué conexión tenga esto con lo que estamos discutiendo; creo que es un revolucionario de principios.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Me permite usted y la Presidencia, que traiga a colación el testimonio de Franco Urías para que diga cuáles son los antecedentes de Reyes?

El C. Ollivier: Suplico a usted que no lo permita, señor presidente; ¿qué tiene que ver eso con lo que se está discutiendo?

El C. Díaz Soto y Gama: Entonces interpelaré después al señor Franco Urías. (Siseos. Murmullos.)

El C. presidente: Continúa en el uso de la palabra el ciudadano Ollivier.

El C. González Jesús B.: Moción de orden, señor presidente: Si usted va a tomar parte en el debate, tenga usted la amabilidad de abandonar la Presidencia y dejarla al señor Cantón, porque de otra manera vamos a suponer que es usted muy consecuente con los que están en pro de lo que se defiende en la tribuna. Yo le ruego que por una elemental razón de justicia nos conceda usted ese favor.

El C. presidente: Con mucho gusto atenderé a la petición del ciudadano colega; pero creo que la Asamblea tiene en su conciencia que siempre me he manifestado imparcial en el debate y la prueba es que la interpelación al señor Franco Urías no la permití, por no autorizarlo el Reglamento.

El C. González Jesús B.: Pero estamos viendo interrumpido al orador a cada momento.

El C. presidente: Porque el orador permitió que le hiciera la interpelación el ciudadano Soto y Gama y por esto le concedí la palabra. (Aplausos.)

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"José Trinidad Cervantes, México, D. F.

"México, septiembre 20 de 1920.

"Señor Manuel García Rojas.- Presente.

"Muy señor mío y amigo:

"Con referencia a la conversación que tuvimos en la cual me manifestó que algunos enemigos políticos suyos lo tachaban de ser usted antirrevolucionario por el hecho, de que en el año de 1914 rechazó usted, acompañado de los mozos de la hacienda de San Marcos, a un grupo que siendo en número reducido me consta, por operar yo en esa región, que no estaban filiados a las fuerzas revolucionarias que derrocaran el Gobierno del general Huerta los

individuos antes mencionados, y además, hago constar que yo y los jefes mis compañeros autorizamos para que esas gavillas que a título de revolucionarios pretendían cometer toda clase de desmanes, fueran castigadas por los elementos particulares que estuvieran dispuestos a hacerlo en pro del prestigio de la revolución.

"Me es grato dirigirle la presente autorizándolo para que haga de ella el uso que a sus intereses convenga, agregando que igualmente me consta que en el Gobierno revolucionario ocupó un puesto en el Departamento Agrario en el Partido de Pinos, Estado de Zacatecas.

"Suyo afectísimo y seguro servidor.- J. T. Cervantes."

Como se ve, señores compañeros, se ha dado una importancia exagerada a este pequeño detalle de los tiros cambiados en la hacienda de San Marcos, en 1914, entre la gente de Fernando Reyes y la gente de Rojas. Tampoco es un cargo el que ha afirmado aquí el señor Soto y Gama respecto a las grandes propiedades que poseen los señores Jenaro García y León García y que no están ubicadas en el 5o. distrito electoral. Por otra parte, entre los candidatos a diputados propietarios del 5o. distrito electoral hubo uno que es hijo del señor García ¿No es lógico suponer que en todo caso la influencia hubiera sido a favor de este candidato? El señor García Rojas....

El C. secretario Valadez Ramírez: Se ruega muy atentamente a los señores diputados se sirvan ocupar sus curules a fin de que el orador pueda hacer uso del derecho que le corresponde.

El C. Ollivier: Sería sencillo probar que la candidatura del señor García Rojas no emanó de los latifundistas, sino que emanó del Club Progreso, el único club político radicado en el 5o. distrito electoral que durante toda la época aciaga de la imposición bonillista y de Murguía en Zacatecas se mantuvo obregonista y morenista y fue el Club Progreso el que lanzó la candidatura del señor García Rojas para diputado y por eso triunfó, no por una ligera mayoría, sino por una apreciable mayoría de 600 votos, que es bastante difícil obtener, sobre todo en esas condiciones cuando, como en ninguna ocasión, intervinieron más de seis candidatos en el 5o. distrito electoral y solamente hubo elecciones en tres municipios. Voy a procurar llegar cuanto antes al final de mi discurso, señores diputados, porque, repito, no creo estar autorizado para abusar de vuestra atención. Se ha dicho con mucha insistencia que García Rojas es un latifundista, que es un imposicionista que se valió de la influencia de sus amigos, de sus parientes y empleados públicos para sacar avante su candidatura. Cómo me explicaría el ciudadano Soto y Gama este detalle: en el Municipio de Villa García donde residen principalmente los parientes del ciudadano García Rojas, donde hasta la ciudad y el Municipio lleva el nombre de García con los antecedentes no reaccionarios de uno de los García Rojas, no me explicó que allí ganara Indalecio Delgado. Yo sí me lo explico. Yo lo voy a explicar esto perfectamente, porque Indalecio Delgado fue jefe de las armas en Villa García hasta la víspera de la elección y es cuñado y primo hermano del presidente municipal, J. Jesús Delgado. Esto es ser imposicionista. (Aplausos.) Los demás cargos, señores, me parecen verdaderamente ligeros, que la documentación haya venido en dos partes, nada tiene que ver; lo que paso fue que se remitió a Zacatecas como expedientes de elección para gobernador; nadie los trasegó, los únicos que tuvieron que ver con ellos fueron los miembros del Supremo Tribunal de Justicia que los mandaron acá. El perfecto acuerdo de los datos que aquí llegaron de la Junta Computadora de Pinos, revela que no fueron alterados esos datos; de manera que si hubiese duda, quedan enteramente desvanecidos los cargos en contra de García Rojas y más bien vueltos en contra del señor Indalecio Delgado. Pido un acto de elemental justicia para los habitantes del 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas. (Aplausos.)

El C. presidente: Tiene la palabra en contra el ciudadano José Dolores Pérez.

El C. Pérez José Dolores: Honorable Asamblea: Aunque yo soy novel en asuntos parlamentarios, voy a ser sencillo en mis palabras, no soy orador brillante como muchos quizá de los que me oyen. Yo vengo, compañeros diputados, de las más bajas esferas del pueblo. Comencé mi actuación como revolucionario afiliándome a las filas del general Obregón como soldado raso. En mi larga vida que he tenido de revolucionario, he visto con tristeza que las elecciones, en los ranchos, en las haciendas, en los pueblos grandes, y aun en la capital y en las ciudades, se hacen por lo que dicen los señores de chaqueta y bombín. Se van a las haciendas, ven a los mayordomos, ven a los administradores y éstos son los que dirigen las elecciones en las haciendas: llevan a los peones las boletas dándoles las planillas para que las hagan. Desde ese momento, señores, debe comprenderse que es muy fácil que haya habido una mayoría de 600 votos en este dictamen contra la candidatura de los trabajadores; desde este momento debe venir por tierra esa votación y aprobar la credencial del ciudadano Delgado. Es muy sencillo, señores, y es más honrado todavía que 60 firmas de campesinos, que ven de cara al sol porque no se venden a nadie, sean de tenerse más en cuenta que 600 firmas que apoyan a un señor que de rodillas pide que se le apruebe su credencial aquí en esta Cámara. (Siseos.) ¿No comprendéis la organización de los terratenientes del Estado de Jalisco que se agrupan y se están sindicalizando para imponerse para hacer fracasar el artículo 27 constitucional, para hacer una presión? ¿Qué no se tiene en cuenta que esa organización de los terratenientes sencillamente está tendiendo a burlar a la Revolución? ¿Qué después de haber muerto un gran número de compatriotas nuestros en los campos, ahora vamos a resolver que el artículo 27 constitucional no se puede reglamentar? Y he aquí que este señor puede ser una de la avanzadas de los terratenientes de Zacatecas para burlar la revolución. Yo no estoy muy perito en estos asuntos, pero si no queréis que se burle a la revolución, todos los revolucionarios por ningún motivo debéis dar vuestro voto a favor de este dictamen. El compañero Delgado ha sido miembro de la Confederación, y antes que ser terrateniente ha defendido a las clases laborantes en todas partes donde ha

podido. Está con los trabajadores, no está con los terratenientes. (Siseos. Aplausos.)

El C. presidente: Tiene la palabra en pro el ciudadano Macìas Rubalcaba.

El C. Macías Rubalcaba: Tenía la firme intención, señores representantes, el firmísimo propósito de no tomar parte en los debates que se suscitan en esta Cámara, con motivo de la discusión de credenciales, porque siempre he tenido para mí que cuando no se conoce perfectamente el medio donde se verifica una elección, y consiguientemente no se podrá probar nunca la legitimidad de una candidatura, se desciende generalmente a ataques personales con el objeto de sorprender la buena fe de esta honorable Asamblea para sacar avante tal o cual candidatura que se proponen algunos de los señores oradores sacar, por puro personalismo, triunfante. Por esto siempre me había limitado yo a tener en cuenta sólo los informes que algunos señores compañeros que están más al tanto de las cosas, nos pudieran ministrar por el conocimiento que tienen personalmente de determinada elección y decía siempre me he mantenido sereno, tranquilo, escuchando a los oradores del pro y del contra sobre determinado dictamen, haciendo abstracción completa de todo apasionamiento y de todo lirismo. De esta manera he podido, en muchas circunstancias ilustrar mi criterio y votar con más o menos justificación; pero ahora, señores diputados, me he visto en la necesidad imprescindible de tomar parte en estos debates, después de haber oído la impugnación apasionada, personalista enteramente del ciudadano diputado Díaz Soto y Gama, impugnación contra el portador de la credencial por el 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas, ciudadano García Rojas, y me he creído en el deber, porque como zacatecano estoy más al tanto que los extraños, de los asuntos políticos de mi Estado; conozco cuál es la opinión pública dominante, y hasta muchas de las irregularidades habidas en el distrito electoral con motivo de las elecciones pasadas y he creído de mi deber encauzar la opinión. Haciendo abstracción de esa oratoria oropelesca, ampulosa, con que generalmente se trata de desviar toda discusión sin sujetar una credencial al análisis de los tres criterios político, moral y legal que debe servirnos de norma, de pauta, para juzgar de la bondad de una elección, procederemos con entero orden sin entrar absolutamente en ningún apasionamiento.

Desde luego, señores diputados, es de notarse que en las elecciones verificadas en el 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas, la votación fue sumamente repartida; no hubo casilla, a excepción - en lo general, digo -, a excepción de una o dos, donde no tuvieron todos los candidatos que jugaron en aquella lucha electoral, una diferencia numerosa, fue verdaderamente insignificante. Más todavía: las mismas irregularidades encontradas en alguna de las casillas, que son las que la Comisión a tenido en cuenta para nulificar los votos que han venido en favor del señor García Rojas, en su mayoría esas mismas irregularidades, distintas entre sí de unas casillas a otras, vienen a colocar a cada uno de los candidatos en idénticas circunstancias, es decir: han afectado la votación de todos los candidatos que jugaron allí. Esto prueba de una manera patente, habiendo estado tan repartida la votación, que hubo una verdadera lucha y, en consecuencia, que esa imposición tan decantada, de que han venido a hacer alarde los oradores del contra, no ha existido. Por otra parte, haciendo hincapié en las mismas protestas, en todas las protestas que el mismo candidato Delgado presentó contra la votación del ciudadano García Rojas, notamos desde luego, que casi todas fueron tomadas en consideración por la Comisión; y así, nulificaron toda la votación habida en Tierra Blanca, me parece que fue la 15 casilla del municipio de Pinos; fue nulificada toda la votación de San Marcos; fue nulificada en dos o tres secciones del municipio de Santa Rita, y de la 5a. casilla del municipio de Pinos, también fue nulificada completamente. Con toda calma, con toda serenidad, analicemos las bases que tuvo la Comisión para haber nulificado todas estas casillas que, en mi concepto, fue esto de una manera indebida. En Tierra Blanca, se dice que fue nulificada aquella votación por la falta de patrones, y aunque la Comisión, justificadamente, ateniéndose a los documentos que podían existir en el expediente, nulificó esos votos, lo cierto es que lo que sucedió allí fue que fraguaron un verdadero chanchullo los representantes del candidato Indalecio Delgado, siendo el representante de esa casilla, el mismo Rafael Delgado, hermano y representante de don Indalecio. Existe una protesta, que no fue entregada a la Junta Computadora, porque en ésta hubo cierta parcialidad para el candidato Delgado, de que no se admitió en ella a ninguno de los representantes del ciudadano García Rojas. Esa protesta, que fue elevada ya y que no fue recibida, no existe aquí en este expediente, y yo la traigo con objeto de presentarla a la consideración de ustedes. Suplico a la Secretaría se sirva darle lectura.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Ciudadano presidente del Colegio Electoral.- Presente.

"Los que subscribimos, vecinos de Tierra Blanca, protestamos contra los actos del C. Rafael Delgado, como representante del candidato Indalecio Delgado, pretextando el de que el C. Manuel Palacios Espino había cruzado una boleta del C. Juan Palacio, vecino del Pastor, quién votó personalmente, entregándole dicha boleta en sus manos a dicho Manuel Palacios E., como depositando su voto; él justificó dicha averiguación con los mismos vecinos del Pastor, los cuales certificaron que, efectivamente, el mismo Juan Palacio en persona había depositado su voto, retirándose luego de la Mesa; creemos que el mencionado Rafael Delgado según se manifestó, por sus actos, pretende hacer nula la candidatura Manuel García - Ignacio Velasco, o hacer nula la elección, ignorando por qué causa lo haga, pues únicamente pudimos cerciorarnos que es hermano del C. Indalecio Delgado. Entendemos, pues, que no por este sólo hecho o por un sólo voto, en caso de que fuera cierto, dejaría de ser lícito el sufragio; no habiendo, pues, más representantes de partidos distintos, pudo hacer a su contento todas las actas y listas de escrutinio, lo que suplicamos se tome en cuenta.

"Protestamos a usted las seguridades de nuestra atenta consideración y respeto.

"Sufragio Efectivo. No Reelección.- Tierra Blanca, agosto 1o.,1920."

Las firmas que calzan esta protesta vienen a ser de los miembros de la Mesa o de la casilla instalada en Tierra Blanca que, como decía a ustedes hace un momento, esta protesta no fue a dar a la Junta Computadora, instalada en Pinos; precisamente por la parcialidad de esa Junta, no se admitió a ninguno de los representantes del ciudadano García Rojas. Ahora bien; si esa casilla o la elección verificada en esa casilla fue nulificada por la Comisión, que tuvo conocimiento en esta Cámara de la elección del 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas, ¿qué de extraño es suponer que, habiendo sido el representante de don Indalecio Delgado el hermano, y que, conforme a esta protesta, él hizo todas las listas de escrutinio, todas las actas, qué extraño es que él mismo haya substraído los documentos en que se basó la Comisión para nulificar aquella votación? En la 13 casilla electoral, o sea la correspondiente a San Marcos, de donde se ha dicho que hubo presión, por considerarse al ciudadano García Rojas como un latifundista, debo, desde luego hacer esta aclaración que debe de tener muy en cuenta la honorable Asamblea: la Hacienda de San Marcos es de propiedad de don León García. El señor don Joaquín García, que fue contrincante en aquella lucha electoral, del señor García Rojas, había mandado cartas a los administradores, con el objeto de que se diera la votación en favor de los dueños o del dueño de ella, naturalmente el señor Joaquín García; y, naturalmente, al ser contrincante de él, no era posible que aquella votación se hubiera inclinado a favor de García Rojas, si éste hubiera contado con la influencia que pudieran tener los dueños de aquella propiedad. Lo que sucedió fue ésto: El señor García Rojas estuvo en años atrás, en la época en que se dice que hubo algunos disparos o que rechazaron a alguna partida de revolucionarios los empleados de la hacienda de San Marcos. El ciudadano García Rojas era, efectivamente, empleado de aquella hacienda, encargado de la trilladora; en consecuencia, no representaba, ni siquiera, el primer cargo que pudiera tener ahí algún empleado; pero yo hago referencia a esto, señores diputados, por la circunstancia de que el dueño de la hacienda se interesó, no precisamente para que saliera la votación en favor del señor García Rojas, sino del dueño de ella, que es don Joaquín García. No debió de nulificarse esta votación, porque el mismo representante del señor Indalecio Delgado, firmó el acta, de conformidad, levantada por el presidente de la misma casilla, instalada en aquella finca. En estas dos casillas, por ejemplo, donde viene votación casi unánime del señor García Rojas, me parece que he demostrado que no hubo absolutamente ninguna presión y que, al contrario de haberse nulificado, debían de haberse dejado subsistentes las votaciones que ahí obtuvo. En la casilla de Santa Rita, en la 2a, y 4a. sección, en ellas tuvo en cuenta la Comisión el hecho de que algunos empleados municipales, el jardinero, el encargado del reloj, tomaron parte activa en las elecciones verificadas allí. Como allí no se tuvo representante por parte del señor García Rojas, la verdad del caso es que no vale la pena hacer mención de ello.

Otro tanto sucedió en la 5a. casilla del municipio de Pinos, donde se dice que se recurrió al soborno y al cohecho; no habiendo habido representante del señor García Rojas, no vale la pena mencionarlo, pero en las dos casillas primeras sí está plenamente justificado que la votación fue enteramente justa y favorable al señor García Rojas. No me puedo extender en largas consideraciones respecto a la cuestión legal, porque ya el compañero Ollivier ha demostrado que las elecciones allí se verificaron perfectamente apegadas a la ley. No diré absolutamente nada de las impresiones muy particulares de la Comisión respecto a la espontaneidad o sinceridad de las protestas presentadas, porque aquí se ha demostrado de una manera palmaria que no hubo sinceridad, puesto que las protestas fueron hechas por el señor Indalecio Delgado, que después anduvo recogiendo firmas; ustedes saben que fácilmente se pueden conseguir veinte o treinta firmas de amigos y de partidarios. Ahora vamos a la cuestión política, porque me propongo analizar las cosas desde el punto de vista del criterio político, del criterio legal y del criterio moral, porque éste no viene a ser más que un complemento de los otros dos criterios. Se ha dicho aquí, y creo que no se ha llevado a la convicción, el ánimo de la Asamblea, la idea de que cuando se hizo fuego en San Marcos contra un grupo de revolucionarios, fue más bien debido a una equivocación. En mayo de 1914, casi todo el Estado de Zacatecas estaba perfectamente dominado por la Revolución. El general Natera, que había establecido ahí hasta su Gobierno, poniendo al ciudadano Salinas como gobernador en Sombrerete, había dictado medidas enérgicas con objeto de reprimir todos los abusos y todos los desmanes cometidos por pequeños grupos de verdaderos bandoleros que sin bandería política alguna, sin pertenecer a las filas revolucionarias estaban en acecho constante de cualquiera oportunidad con objeto de saquear las rancherías y algunas haciendas; sólo con el objeto de saquearlas. Y esto se ha demostrado de una manera palmaria, como decía antes, porque se ha leído aquí algunos documentos, nada menos que el del general Cervantes, subalterno del general Natera, donde se autorizaba a los pacíficos a que se armaran para su seguridad, y no sólo eso, sino que hasta se les dieron armas para ello. Precisamente, pocos días después de haber sido avisado que en San Marcos un señor García, de Tepetates o del Pastor, se habían levantado con doce o quince individuos con objeto de hacer robos, cayeron ocho o diez revolucionarios precisamente el mismo día en que se hacía la raya en la hacienda, y como no dieron aviso, hubo cierta confusión al principio, y de ahí se vino a un tiroteo, habiendo sido rechazados ellos; pero aclaradas las cosas, poco después volvieron, habiendo llegado la gente del coronel Reyes y no se tuvo en cuenta absolutamente ese incidente desgraciado, porque ellos mismos convinieron en que obedecían los mismos de la hacienda instrucciones que de antemano se les habían dado. No hubo, felizmente, un muerto ni ningún herido, como se ha asentado aquí, ni nada; fue un tiroteo insignificante y que no sé cómo se le ha dado tanta importancia en la discusión de esta credencial.

Lástima que el ciudadano García Rojas, como contendiera con toda fe y honradez, no hubiera podido recoger muchas cartas de los candidatos sus contrincantes, donde precisamente ahí se ve la imposición que querían hacer ellos allá; pero voy a referir a ustedes un sólo hecho. El señor Joaquín García, habiendo llegado a San Marcos con dos o tres peones armados, fue desarmado por la defensa social, encabezada por el ciudadano Indalecio Delgado, y no lo dejó seguir sus trabajos de propaganda. Es necesario que nosotros nos fijemos en esto: en este dictamen se han achacado, en general, todos esos actos de que pudieron haberse valido los que proponían la candidatura de don Joaquín García, al ciudadano García Rojas, y debemos hacer esta distinción: el ciudadano García Rojas, siendo contrincante de uno de los principales terratenientes, todas las haciendas pertenecientes a este terrateniente, naturalmente que tenían que estar bajo la influencia directa del patrón y no precisamente en favor de la candidatura García Rojas, sino en favor de la candidatura Joaquín García. No sólo el ciudadano García Rojas no fue contra el elemento revolucionario de 1914; en esa época, estando perfectamente fortificado en Aguascalientes el señor general Ruelas, no recuerdo cómo se llama, fue comisionado por Fernando Reyes para que viera qué cantidad de gente traía dicho general y hasta para que levantara algunos planos, con el objeto de ver si era posible el ataque a aquella población. Otra circunstancia que debemos tener en cuenta es esta: que las haciendas en el Estado de Zacatecas, dentro de la zona revolucionaria, no podían trabajarse, sino eran aquellas que estaban precisamente en actividad por empleados enteramente simpatizadores o pertenecientes al mismo bando revolucionario: luego viene a probar este aserto mío el hecho mismo de que el señor García Rojas fue, en estas circunstancias, comisionado por algunos elementos revolucionarios para hacer tales o cuales indagaciones. Respecto a la cuestión agraria, creo que no debemos insistir, porque se ha demostrado de una manera clara, con luz meridiana, que García Rojas siempre ha estado en los principales puestos de la Comisión Agraria de Zacatecas. Demostrado, pues, que legalmente ha triunfado en el 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas y que políticamente es una persona que nos merece confianza por su afinidad misma con la Revolución, el criterio moral no viene a ser sino un complemento de estos dos criterios... (Voces: ¡Ya! ¡Ya!) Como es la primera vez que yo abordo esta tribuna y, sobre todo, con toda la meticulosidad que en estas circunstancias me impone el convencimiento de que el cuidando García Rojas es el que triunfó, y que por uno de tantos cambios que a veces se obran en la Representación Nacional pudiera cometerse una injusticia, yo me reservo en otros puntos para oír a los oradores que impugnan este dictamen, para volver a esta tribuna; sólo haciendo presente a ustedes que en mi convicción íntima y en la de todos los de la diputación en general de Zacatecas, de todos aquellos individuos que tienen perfecto conocimiento del medio, que tienen conocimiento de las personas y que, naturalmente, conocen hasta la opinión pública dominante, el candidato García Rojas triunfó legal y políticamente, siendo merecedor de que votéis en favor del dictamen.

El C. Soto y Gama: Pido la palabra para una interpelación a la Comisión.

El C. presidente: Tiene la palabra en contra el ciudadano diputado León.

El C. León Luis: Señores diputados y presuntos: Vengo a tratar esta cuestión exclusivamente desde le punto de vista legal.

Aquí me parece que al estar hablando el señor Ollivier y sus interpelantes, se tergiversó el asunto que se refiere al latifundismo. A mi modo de ver, para discernir sobre la legalidad de la elección, no se trata de demostrar si el ciudadano García Rojas es latifundista o no; lo que se trata de demostrar es si el latifundismo del 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas impuso al señor García Rojas o no. Si los partidarios del sistema latifundista en la República fueran únicamente los dueños de latifundios, hace mucho tiempo que esa clase social habría terminado en la explotación que ejerce sobre el pueblo mexicano, porque son pocos. Precisamente el problema agrario nace de que una minoría sea la dueña de un instrumento formidable para la producción de la tierra, en contra de una mayoría que no tiene los instrumentos para hacer esa producción; pero desgraciadamente el sistema latifundista entraña toda una red que va a envolver a muchos individuos favorecidos por él y que son defensores de ese sistema y no se necesita forzosamente que sean los propietarios para considerarse afiliados al latifundismo; se necesita muchas veces ser el sirviente, ser el capataz de los peones, ser el administrador de la hacienda, ser el tinterillo de la localidad, ser el cura párroco, ser tantos de esos seres que viven de las migajas del festín latifundista. Y precisamente si nosotros examinamos esta elección, vemos lo siguiente: que en la municipalidad de la cabecera, donde triunfó, según afirma el dictamen, el señor García Rojas, se instalaron 25 casillas. Yo interpelo, si me lo permite, al compañero Estrada para que me diga lo siguiente: "Noria de San Pablo" ¿no es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"San José de Castellanos" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"El Tepozán" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"Tiro de Arriba" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"El Sitio" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"Santa Elena" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

- El C. León ¿"Cerrito de Dolores" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"Colorada es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"San Martín" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"La Sauceda" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"Santa Ana" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"Santiago" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"Espíritu Santo" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"La Trinidad" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"La Pendencia" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"El Chino" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"Pedregosa" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"San Nicolás" es hacienda?

El C. Estrada: Sí.

El C. León: ¿"Buenavista", "Santa Ana", "Santiago", "Espíritu Santo", "La Trinidad", "La Pendencia", "El Chino", "Pedregosa", "San Nicolás", "Buenavista", "La Victoria" y "El Obraje"?

El C. Estrada: Sí, señor, sí, señor.

El C. León: Pues sencillamente el señor García Rojas ganó su elección en las haciendas. (Aplausos.) Ahora se me dice: "Pero en Villa García, donde residen los parientes latifundistas del señor García Rojas, ahí perdió la elección y la ganó Delgado." Muy bien, señores; porque sabe perfectamente bien el compañero Manlio Fabio Altamirano que en Villa García sí se han repartido tierras y, por consiguiente, el proletariado de Villa García tiene libertad económica y tiene independencia política y puede votar por quien desea y en contra de los latifundistas. (Aplausos.) Que se me diga cuántas haciendas de éstas en que tuvo mayoría de votos el señor García Rojas, cuántas haciendas están fraccionadas, dónde hay fraccionamiento en estas haciendas; si éstas estuvieran fraccionadas y los dueños hubieran votado en favor del señor García Rojas, yo sería el primero en venir a elogiarlo y aplaudir su elección.

El C. Ollivier: Con permiso de la Presidencia deseo hacer una aclaración.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Ollivier.

El C. Ollivier: Señor León, no es cierto; con exclusión de San Martín, que sí es hacienda, todas las demás no lo son; es inconcebible que veintitantas haciendas integren un municipio, y no es cierto que en todas ganó el señor García Rojas; al contrario, ganó de una manera absoluta un número mínimo de casillas. (Aplausos. Siseos.)

El C. León: Yo apelé el testimonio del señor licenciado Estrada, que lo creo honorable y que es conocedor de la región, y me dijo que son haciendas. (Aplausos.) Ahora bien, señores; si examinamos el mismo dictamen de la Comisión, veremos lo siguiente en la parte conducente: "En la municipalidad de Pinos se anuló la sección 5a. por haberse instalado la casilla en la finca de la hacienda; en la 21 se nulificó por haber instalado en la finca de la hacienda; en la 22, por violación al secreto del voto, etcétera, etcétera; en la 13 se nulificó por haber embriagado a los votantes y haberles ofrecido públicamente en carteles fijados en la puerta de la casilla, cientos de peras por cada voto que se emitiera en favor del C. García Rojas."

Analizando cualquiera de estos hechos que nos llevan a la conclusión de que se han de nulificar las casillas aisladamente, no es una prueba formidable, pero analizando en conjunto, si tenemos en consideración las protestas de los colonos de Bimbaletes, en Villa García, etcétera, entonces sí se ve una serie de atentados en contra del sufragio, hechos precisamente por los hacendados; si lo hubieran hecho en una hacienda, no tendría nada de particular, podría tratarse de un amigo del señor García Rojas; pero que se nulifiquen cuatro casillas y todavía pidan que se nulifiquen más, porque en una repartieron peras y en otras embriagaron a los peones, sí ya nos da una fuerte presunción de que hubo allí un movimiento total de todos los latifundistas, de todos los beneficiados con ese sistema para traer aquí a un candidato que defendiera en esta Legislatura sus intereses. Nos decían de la participación que el señor García Rojas tuvo en la elaboración de la Ley Agraria en el Estado de Zacatecas. Yo no creo, señor Ollivier, que sea más importante la participación para realizar un asunto revolucionario que una reforma social que las legislaturas tienen que hacer; pues nosotros hemos visto cómo las administraciones ya en el momento de arruinarse, en el momento del desprestigio acuden a leyes para atraerse la voluntad política, para atraerse la simpatía, y esto lo hacen únicamente por una medida política para distraer la opinión pública justamente indignada en su contra. La misma administración porfiriana en sus últimos días trajo a esta Asamblea proyectos de Ley Agraria, ya que durante 35 años no había hecho más que consolidar la aristocracia latifundista, por el grito formidable que se levantaba en toda la República y querer satisfacerla; pero ya no era tiempo.

Así paso también; ¿no hemos visto nosotros que cuando el carrancismo no era sino un ideal atrincherado en Veracruz, cuando el carrancismo no tenía vida propia porque no tenía fuerza militar con qué imponerse, solamente lanzando el decreto de 6 de enero como bandera, solamente hablando del municipio libre, solamente hablando de las garantías a los trabajadores, fue como pudo conquistarse una opinión favorable para conquistar soldados y defender su pendón? Pues en la misma forma señores, diputados, no debemos hacerle el cargo a Carranza, no debemos hacerle el cargo de que haya expedido la ley del 6 de enero, no le debemos hacer el cargo de que haya hablado de los municipios libres y, sin embargo, al llegar al poder, una vez conquistada la opinión pública y contando con la fuerza suficiente para llegar al poder, Carranza traicionó sus ofertas. Luego entonces Carranza no tenía una intención sana cuando hizo esa ley; pero la opinión pública, la fuerza organizada de los que sí creyeron en la revolución, destruyeron y destronaron a Carranza; por consiguiente, el verdadero defensor del Municipio Libre, el verdadero defensor de la ley del 6 de enero, fue el pueblo, no fue Carranza ni el grupo de legisladores que con él dio esos decretos en Veracruz; fue la inmensa mayoría del proletariado mexicano que se levantó y destronó a Carranza por haber traicionado sus principios. (Aplausos. Siseos.) Sí, señores; ahora yo quiero interpelar la Comisión, si la Comisión lo permite. No tuvo en cuenta la Comisión que la mayoría de las

casillas de la mayoría de Pinos fueron instaladas en haciendas; no tuvo en cuenta lo que dice el artículo 48 de la Ley Electoral, que dice:

"Las casillas electorales no podrán instalarse en casas habitadas por funcionarios o empleados del Gobierno, ni en haciendas o fincas de campo que disten menos de cinco kilómetros de alguna cabecera de municipio, pues entonces en la cabecera deberá instalarse la casilla, y reunirán, además, los requisitos siguientes:

"I. El local será suficientemente amplio para poder colocar en él todo lo necesario para el fácil cumplimiento de las operaciones electorales.

"II. En cada casilla electoral se colocará una mesa, asiento para un elector y los útiles de escritorio necesario, suficientemente apartada del personal de la casilla y lo más a cubierto que se pueda de las miradas del público, a fin de que el voto que se emita permanezca secreto.

"La administración pública podrá construir uno o más gabinetes o compartimientos aislados y cerrados, sin comunicación entre sí ni con el exterior, más que por la puerta de entrada, con el mismo objeto de emitir el voto en secreto. En caso de que las haciendas o fincas de campo distaren más de cinco kilómetros de la cabecera del municipio o de la sección inmediata; la casilla electoral no podrá instalarse en la casa o dependencia de la finca, sino en cualquier otro sitio público..."

Yo pregunto a la Comisión, porque no sé si estas casillas de la municipalidad de Pinos fueron instaladas en lo que políticamente se llama haciendas, o fueron instaladas fuera de las casas y dependencias de la finca.

El C. Cano: Pido la palabra para contestar la interpelación. La Comisión tuvo en cuenta el artículo a que se refiere el compañero León; pero también tuvo en cuenta que solamente dos casillas está perfectamente comprobado que se instalaron en la finca de la hacienda, tal como lo prohibe la ley y están nulificadas, las del municipio de Pinos; las otras casillas ciertamente están instaladas en las haciendas en donde creyó conveniente la autoridad municipal, pero de ninguna de ellas hay ninguna prueba de que se haya instalado en la finca de la hacienda.

El C. León: Ahora bien, señores. Dice el artículo 105 de la Ley Electoral: "La nulidad de que habla el artículo anterior..." que en su fracción II dice: "Haber mediado cohecho, soborno o presión de alguna autoridad para obtener la votación en favor de determinado candidato."

Dice el artículo 105: "La nulidad de que habla el artículo anterior, no afecta a toda la elección, sino simplemente a los votos que estuvieren viciados..."

Aquí, como se demostraba la presión a favor del ciudadano García Rojas, la nulidad debía recaer sobre los votos viciados del ciudadano García Rojas y sobre los votos del señor Indalecio Delgado y la Comisión nulifica toda la casilla, los de unos y otros. Y sé perfectamente que los votos del señor Indalecio Delgado son insignificantes en las haciendas. ¡Es claro! Vemos que en tres de ellas la votación es unánime, en tres haciendas, a favor del señor García Rojas y en las otras es una proporción ridícula de setenta y tantos por uno, dos o tres. Pues bien; yo afirmo que esos dos o tres votos de los individuos que tuvieron valor civil para enfrentarse contra la presión del hacendado, vienen a demostrar que tienen un valor para ser nulificados, viene a decir que a pesar de la presión se tuvo el convencimiento de que el verdadero candidato popular es el señor Indalecio Delgado, puesto que hubo dos o tres ciudadanos que votaron por él... (Siseos.) aunque les escueza a los latifundistas lo diré recio, se viene a demostrar que a pesar de los hacendados hubo tres o cuatro individuos con valor civil para expresar su opinión personal. (Aplausos. Murmullos.) Suplico al ciudadano Céspedes que se sirva completar su interpelación. (Murmullos.)

Me permito interpelar a la Comisión. ¿Es cierto que aparece en la documentación del expediente que en Santa Rita, Balbuena y Lagunita las autoridades tuvieron cierta intervención en la votación en connivencia con individuos parciales al ciudadano García Rojas?

- El C. Cano: Pido la palabra. No puedo contestar de una manera precisa al compañero León ese dato, porque no lo creí de importancia, tanto más cuanto que parece que no está debidamente comprobado, son de las muchas acusaciones y peticiones que trae el expediente y que no son de primordial importancia; pero creo que sí hay algo de eso en el expediente, compañero León.

El C. León: Entonces hay cuando menos protestas; dice la Comisión que hay acusaciones, protestas, etcétera, si no debidamente corregidas conforme a las fórmulas legales, sí que acusan imposición en las casillas que acabo de leer: Santa Rita, Balbuena y Lagunita; hubo intervención poderosa en favor del señor García Rojas. Indudablemente que los formulismos legales no han de haber sido completamente satisfechos en estas acusaciones, yo he conocido algunos puntos de ese distrito y he estado en Balbuena y en Villa García, y comprendo perfectamente que aquel proletariado rural, apenas libertado de la esclavitud latifundista, que empieza a vivir de su pequeño lote merced a sus esfuerzos personales y de su familia, no tengan la cultura y la ilustración suficientes para hacer sus protestas, para llevar a cabo sus acusaciones apegándose en todo a lo que marca la ley; indudablemente que en este sentido tienen muchísima superioridad los partidarios de García Rojas. Ellos sí podían apegarse en todo a la ley, porque tienen una cultura y una instrucción más amplia; por lo demás, señores diputados, yo veo que aquí hay una serie de cuatro o cinco casillas nulificadas, porque se demostró la intromisión de la presión latifundista en las elecciones. He visto que aquí se levanta la protesta de todos aquellos beneficiados por la Ley Agraria en el Estado de Zacatecas en contra del señor García Rojas, y he creído de mi deber venir a impugnar esta elección.

Señores diputados y presuntos diputados: Cuando en marzo último salimos de Aguascalientes para San Luis Potosí, en compañía del general Obregón, en gira de propaganda, y llegamos, merced a una invitación especial, a la nueva ranchería de Bimbaletes, 300.....

El C. Manrique, interrumpiendo: ¡Fue en febrero!

El C. León, continuando: En febrero, tiene

usted razón, 300 agricultores de los libertados por la Ley Agraria en el Estado de Zacatecas, le hicieron al candidato popular una manifestación muy entusiasta, y nos encontramos que en la antigua ranchería, que en la sabana infecunda que tenían en San Marcos destinada únicamente para crear caballos de lujo y toros de pelea, había un mundo nuevo, había un pueblo nuevo; tenían en sus casas, recién construidas, arroz, maíz, chile y todos los artículos de primera necesidad, para el consumo de sus familias; ya no estaban en estado miserable, se habían transformado por completo, era una humanidad nueva que nacía al calor del principio agrarista de la Revolución. Ahora, señores, he creído de mi deber, recordando que en aquellos momentos aciagos en que peligraban las libertades públicas, en aquellos momentos en que peligraba la suprema aspiración de la Revolución: el sufragio, los únicos que en esa región estuvieron con nosotros, los únicos que arrostraron las iras de los tiranos, fueron los hombres libertados por la Ley Agraria, he creído de mi deber venir a defender su voto, porque los otros, la clase media y la latifundista, quizá estuvieron con nosotros por odio a Carranza, pero no tenían el valor de decirlo ni de arrostrar la responsabilidad de sus actos; porque aquellos proletarios combatieron en aquellos momentos a la sombra de la bandera revolucionaria con nosotros, porque combatieron decidida y denodadamente, por eso he querido unirme a ellos y unir mi débil voz para pedir que tengan aquí un representante, y que desechéis la credencial del representante de los latifundistas. (Aplausos.)

El C. Díaz Soto y Gama: Pido la palabra.

El C. presidente: ¿Con qué objeto?

El C. Díaz Soto y Gama: Deseo hacer una interpelación, mejor dicho, una serie de interpelaciones a la Comisión.

El C. presidente: Tiene usted la palabra, si la Comisión consiente.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Es cierto que no como lo afirma el dictamen, que todo el boletaje relativo a la elección de la municipalidad de Pinos, o, mejor dicho, el distrito electoral de Pinos, vino confundido y todo, fuera mandado por el gobernaquetes o de secciones?

El C. Cano: Pido la palabra para contestar. Es cierto que así vino, ciudadano Soto y Gama.

El C. Díaz Soto y Gama: Primero: ¿Es cierto , necesidad de repetir instancias de la Comisión, de la que usted forma parte, para que este boletaje, confundido, sin distinción de ninguna clase, de pador de Zacatecas a la Comisión?

El C. Cano: Es verdad también eso. (Siseos. Voces: ¡Ya! ¡Ya!)

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Es cierto que hubo hay razón alguna que explique por qué este boletaje fue a parar en manos del gobernador del Estado, que no tiene ninguna intervención en estos asuntos ni debe tenerla? (Siseos.)

El C. Cano: La razón que adujo el presidente de la Junta Computadora, fue que, por un error, lo habían remitido al gobierno del Estado, razón que no estimamos nosotros pertinente.

El C. Díaz Soto y Gama: (Siseos, Campanilla.) Sigo interpelando. ¿Cree usted que está garantizada una elección cuando interviene en ella el gobernador de un Estado con todo su peso, con todo su personal burocrático; cree usted que no quepa un fraude electoral?

El C. Cano: Seguramente que no está garantizada la elección.

El C. Díaz Soto y Gama: (Siseos. Desorden.) ¿Es cierto que la diferencia que encuentra la Comisión, después de examinada minuciosamente la votación, es simplemente de ciento y pico de votos a favor de García Rojas, y no 600, como afirma el señor Ollivier?

El C. Cano: También es verdad; es cierto.

El C. Díaz Soto y Gama: (Siseos. Desorden. Campanilla.) ¿Es cierto que, según la comprobación que se hizo por medio de la Secretaría, el instalador de la casilla establecida en la fábrica de "Victoria", es Antonio García Rojas hermano de señor García Rojas y, por consiguiente, afín de él?

El C. Cano: No recuerdo de esto, compañero.

El C. Díaz Soto y Gama: Entonces me permito interpelar al señor Castrejón. (Voces. ¡No está! ¡No está!)

El C. presidente: No se encuentra presente el señor Castrejón.

El C. Díaz Soto y Gama: Entonces esperaré a que se encuentre presente, para interpelarlo. (Siseos. Voces: ¡Ya! ¡Ya! ¿Es cierto, señor Cano.... (Desorden. Campanilla.) Tengo derecho a interpelar. ¿Es cierto, señor Cano, que en la casilla 13, establecida en la hacienda de "La Sauceda", la votación es completamente unánime a favor de García Rojas?

El C. Cano: Es verdad.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Cuántos son?

El C. Cano: 73.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Completamente todos a favor de García Rojas?

El C. Cano: Completamente.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Es cierto que en la casilla número 24, establecida en la fábrica de "Victoria", la votación también es unánime a favor del señor García Rojas?

El C. Cano: Es cierto.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Cuántos votos?

El C. Cano: 97.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Es cierto que en la sección 4a.......?

El C. Moreno, interrumpiendo: ¡Moción de orden! Se está interrumpiendo al orador, contra lo preceptuado por el Reglamento.

El C. Díaz Soto y Gama, continuando: No hay orador, señor. Estoy haciendo uso de un derecho, estoy interpelando a la Comisión. Sigo interpelando a la Comisión, porque la Asamblea está obligada a conocer el expediente. (Aplausos.) La sección 4a..... (Siseos. Gritos en las galerías.) No vamos a intimidarnos por una porra que es la misma que defendió a Nieto. (Aplausos. Siseos.) La Asamblea es libre y soberana y no tiene que atender a los gritos y a las demostraciones de la galería. ¡Nada más eso faltaba! ¿La sección 4a., establecida en la hacienda de San José Castellanos, arroja una votación unánime de 88 votos, a favor del señor García Rojas?

El C. Cano: ¡Es cierto!

El C. Díaz Soto y Gama: En la sección 3a., establecida en la hacienda de "Noria de San

Pablo", ¿Me hiciera favor de decirme la Comisión cuántos votos aparecen a favor del señor García Rojas?

El C. Cano: ¡69!

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Y a favor de otros candidatos?

El C. Cano: Uno a favor del señor Joaquín García, nada más.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Cree la Comisión que pudo haber democracia donde las votaciones son unánimes a favor de determinada persona?

El C. Cano: La Comisión no tuvo prueba para nulificarlas.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Pero cree democrático el procedimiento de votar unánimemente en todas las haciendas a favor de un candidato? Una última pregunta. ¿Es cierto que en la municipalidad de Pinos... (Siseos.) en donde dominan los parientes, los familiares del señor García Rojas, según confesión de los oradores del pro, que dicen que dicha familia domina en Pinos, es cierto que en toda la municipalidad de Pinos, Delgado sólo obtuvo 25 votos?

El C. Cano: Es cierto.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Contra 1,393 de García Rojas?

El C. Cano: También es verdad.

El C. Díaz Soto y Gama: Luego los hacendados votaron por García Rojas. (Aplausos.) Para interpelar al señor Castrejón.

El C. presidente: Va a hablar la Comisión, que tiene derecho.

El C. Cano: La Comisión, como siempre, consecuente de no intervenir en los debates, sólo hace esta aclaración: Las palabras vertidas por el compañero Céspedes, que apenas oídas por el ruido producido por este incidente, parece que fueron de que el ciudadano Soto y Gama y el que habla se habían puesto de acuerdo...

El C. Céspedes: Y las repito a usted. Con permiso de la Presidencia.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Céspedes.

El C. Céspedes: Al hacer las preguntas el ciudadano Soto y Gama al ciudadano Cano, de si era cierto o no que en las casillas del distrito electoral que se discute había tenido unanimidad de votos el señor García Rojas, yo desde mi asiento decía que la Comisión debería decirnos no solamente si en estas casillas obtuvo unanimidad de votos el señor García Rojas, sino que los empadronados en esas casillas fueron doscientos y pico y que de esos doscientos y tantos empadronados fueron a votar unánimemente cuarenta o cincuenta por el señor García Rojas a que se refiere el ciudadano Soto y Gama, o nada más son los empadronados los que votaron, es decir, la totalidad de los empadronados los que fueron a las casillas a que se refiere el ciudadano Soto y Gama o quedaron por votar muchos ciudadanos en las casillas.

El C. Cano: ¿Ya concluyó usted? Independientemente de lo que pide el compañero Céspedes, que no sería posible contestar, manifestó que la Comisión únicamente trae los datos necesarios para contestar interpelaciones y no con minuciosidad de detalles que nos costaría muchísimo trabajo tomar, como de si esa votación fue unánime, o no fue unánime, porque minuciosidades de esta especie no puede decir la Comisión. De suerte que no sabré decirle al compañero Céspedes si en esta casilla los 70 ú 80 votantes fueron los de toda la sección o solamente votó una mayoría unánimemente. Por esta razón no puedo decirlo, porque no tengo los datos.

Ahora voy a contestar la parte principal, por lo cual la Comisión pidió la palabra. La Comisión en este caso, como en otros muchos y como en todos, contestará todos aquellos datos que deseen los compañeros diputados para normar su criterio. La Comisión no solamente al ciudadano Soto y Gama, sino a todas las personas que sin tener representación determinada para defender a estas personas, sino con su carácter y derecho de diputados para informarse de cómo están los expedientes que revisa esta Sección, ha dado toda clase de datos y documentos, porque la Comisión tiene este criterio: Que los expedientes no son de su propiedad exclusiva; estos expedientes y estas documentaciones son de utilidad pública. Todos los compañeros deben informarse de cómo están esos expedientes y para todos esos compañeros que se acercan a pedir un dato, dos, tres, mil, copias de documentos, certificaciones y todo lo que quieran en la 3a. Sección, y apelo al testimonio de todos los que hayan ocurrido que nunca se ha negado un documento a nadie. Si el compañero Espinosa está aquí, me hará favor de contestar esta interpelación. No está; hace un momento me acaba de pedir cuatro certificaciones referentes al 4o. distrito electoral de Chiapas, y yo, como secretario de esta Comisión, se los he dado, porque tengo la obligación de dárselos y él el derecho de pedirlos. No sé por qué las comisiones se han reservado esos documentos para su uso exclusivo negando todos los datos y negando todos los documentos para que se defendieran mutuamente los contrincantes que venían a contender a las sesiones de Colegio Electoral. Es por eso por lo que la Comisión ha contestado al ciudadano Soto y Gama y por eso que antes la interpelara públicamente, en mi pupitre le dí los datos para poder fundamentar sus interpelaciones; porque no hubiera yo creído honrado negar estos datos al ciudadano Soto y Gama para que hubiera hecho eso en defensa del ciudadano a quien defiende. Ese es el criterio de la Comisión, no hay parcialidad, no hay mutuo acuerdo, protesto, pues, por esa imputación y doy estas explicaciones a la Asamblea porque ella tiene la obligación de oírlas y yo el deber de darlas.

El C. Díaz Soto y Gama: Pido la palabra para interpelar a la Secretaría, si está presente el ciudadano Castrejón.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Díaz Soto y Gama: Señor prosecretario Castrejón: ¿Es cierto que en una lista de las casillas electorales que tiene a la vista la Secretaría, autorizada con un sello de la Presidencia Municipal de Pinos, aparece que la casilla instalada en la fábrica "Victoria" fue instalada por Antonio García Rojas?

El C. prosecretario Castrejón: Sí, señor.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Es cierto que en el curso del debate, en una interpelación, pregunté al señor Manuel García Rojas, al actual candidato, si

Antonio, el instalador, era su hermano y contestó que sí?

- El mismo C. prosecretario: Sí es cierto.

El C. Mendoza: Pido la palabra para una interpelación a la Comisión.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Mendoza: Desearía que la Comisión se sirviera decirme si fuera de los documentos procedentes de los clubes que postularon al señor Delgado o de éste, obran en el expedientes algunas otras constancias que acrediten la presión de caciques o de autoridades en favor del señor García Rojas.

El C. Cano: Pues francamente no entiendo la interpelación de su señoría.

El C. Mendoza: Voy a repetirla: Quisiera saber si aparte de los documentos que procedentes de los clubes que postularon al señor Delgado o de éste, hay algunos otros indicios o constancias en el expediente que acrediten la presión ejercida en favor del señor García Rojas.

El C. Cano: Pido la palabra. Parece que hay uno que otro documento de personas que en lo particular hacen peticiones de esa naturaleza que la Comisión, no encontrando fundadas, no las tuvo en cuenta.

El C. Mendoza: Mil gracias. (Voces: ¡A votar! ¡A votar!)

El C. Díaz Soto y Gama: Para una moción de orden. Han hablado ya todos los oradores que previene el Reglamento... (Voces: ¡Falta uno!) Está bien.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano González Jesús B.

El C. González Jesús B.: Voy a ser muy breve, porque la Asamblea está ya un poco cansada; pero considero sumamente necesario que la Asamblea conozca algunos puntos más sobre el debate. Desde luego, me permito llamar la atención de la Asamblea sobre este particular: los interesados en favor del dictamen son precisamente los diputados por el Estado de Zacatecas, y el señor Soto y Gama, que con una gran voluntad y con una gran buena fe, ha atendido las exhortaciones de Indalecio Delgado, por muy bien enterado que esté, no ha de estarlo como nosotros, y voy a decir por qué. En primer lugar, el distrito del ciudadano García Rojas colinda con el distrito que yo represento; así es que tuve noticias inmediatas de la elección en aquel lugar. Desde luego, hay más razón para que se tenga más fe a las palabras de los diputados zacatecanos, puesto que muchos de ellos han colaborado al lado del general Estrada, de una u otra manera, como el señor Leopoldo Estrada, diputado al Congreso por Zacatecas; el señor Macías Rubalcaba, también diputado por Zacatecas. El que habla, desde que tomó posesión del Gobierno de Zacatecas el general Estrada, ha estado constantemente defendiéndolo de los ataques que se le hacían. Esta ha sido mi misión, y tengo un certificado del general Estrada aquí, en que dice que siempre me he portado de acuerdo con sus deseos y, hasta cierto punto, con eficacia. Los cargos del señor Soto y Gama para García Rojas, son para hacerlo víctima nada más de un simple apellido; son verdaderamente pueriles, porque es verdad que tiene parientes que son latifundistas, el señor García Rojas; muchos llevan su apellido; pero, en primer lugar, no están el distrito en donde él fue a trabajar su elección; los García únicamente tienen la hacienda de "San Marcos" ,y es propietario don José León García. Don José León García es padre de Joaquín García, que fue contrincante del señor García Rojas; así es que no era de esperarse mucho en la hacienda de "San Marcos" en favor del señor García Rojas. Las demás propiedades de los García, señores, están ubicadas en el 2o. distrito electoral, y una de ellas, "Bocas" está ubicada en el distrito electoral de usted (dirigiéndose al C. Díaz Soto y Gama), y los peones del señor García votaron por usted. (Aplausos.)

El C. Díaz Soto y Gama: Ninguno.

El C. González: Sí, señor, "Bocas". (Aplausos.) Tengo testimonios de la diputación por San Luis Potosí. Hay más: También el señor García Rojas tiene parientes que no ha mencionado el señor Soto y Gama, y que han sido una verdadera honra para el Estado de Zacatecas. El señor García Rojas desciende de Francisco García Salinas, Tata Pachito.

El C. Díaz Soto y Gama: Ya se murió.

El C. González: Sí, señores, ya se murió, y qué que se haya muerto; ¿por eso se ha dejado de ser una gran hombre? Nosotros no toleraremos que se nos toque para mal la memoria de Tata Pachito, como la memoria de García de la Cadena y de González Ortega. José León García es el latifundista, y ha sido el hombre que, cuando triunfó la Revolución de Madero, fue hecho gobernador, para que hiciera las elecciones allí, y cuando los revolucionarios se levantaron en contra de Huerta, ya el señor García había entregado el poder, y le fue llevado un gallo por simpatía, por el instinto revolucionario del señor García. El señor García, por una diferencia de ubicación está dispuesto a entregar los títulos a todos los individuos a quienes ha repartido tierras que han pertenecido a sus propiedades. No todos, pues, son latifundistas, como usted dice que son todos los García; en el mismo Bimbaletes, de que acaba de hacer elogio el señor León, el mismo propietario fue el que hizo la repartición de los terrenos de la hacienda de "Tayahua", y ha hecho más: los créditos que le reconoce el Estado por los terrenos que se dispusieron de esa propiedad, esos créditos lo ha legado a los mismos hijos de los individuos que han recibido las tierras, que reciben educación. El señor García Rojas tiene parientes ricos, sí, señor; pero al culto señor Soto y Gama se le olvida que Mirabeau perteneció a la rancia aristocracia de Marsella y, sin embargo, fue uno de los oradores que iniciaron la tarea más importante de la Revolución Francesa. Este no es un cargo fundamental. Además, consta que dio tierras a sus electores, y muchos de los que están aquí, que les han ofrecido el oro y el moro, como dice el dicho, nada más les han dado el moro. Hay una cosa muy importante, señor Soto y Gama, que probablemente el señor Delgado no se la quiso decir: el señor Delgado comandó un grupo fuerte de hombres, dentro del distrito de Pinos, hasta el último momento de la elección, y uno de los candidatos, el señor don Joaquín García, contrincante también del señor García Rojas, se acompañaba de tres o cuatro peones armados, porque cruzaba por una

región del Estado que no ofrecía, por cierto, muchas seguridades, y al llegar a "San Marcos" fue desarmado por las fuerzas de Indalecio Delgado, y esto aconteció precisamente seis días antes de la elección, y aquí están las pruebas, señor Soto y Gama. El señor García, candidato de la Confederación Democrática Zacatecana, Joaquín García, dice en esta carta lo siguiente: Suplico a la Secretaría dé fe de que voy a leer con toda exactitud.

"Hacienda de San Marcos, julio 27 de 1920.

"Señor ingeniero don Francisco Ollivier.- Zacatecas.

"Muy estimado y fino amigo:

"Confirmo mi carta de ayer, en que le decía de mi desarme y le rogaba recogiera mis armas.

"Ahora, ya no me parece raro que me hayan desarmado, porque sé los motivos que tuvieron; se trata de lo siguiente: En Villa García viven unos señores Delgado, que son los caciques de estos rumbos; uno de estos señores, Indalecio, lanza su candidatura para diputado al Congreso de la Unión y, sabiendo que yo llegaba a ésta, me mandó sus soldados que, para disimular, tienen el nombre de defensa social, pero que no hacen otra cosa que defender los intereses de estos señores Delgado. La venida de la escolta a ésta y el desarme de mis tres mozos, no tiene, pues, más objeto que obstruccionar mi propaganda y, tal vez, meterme miedo.

"¡Qué chasco se lleva don Indalecio Delgado, pues no le tengo ni poco ni mucho miedo ni a él ni a los incautos que se han dejado ganar!

"Me propongo, si tengo tiempo, hacer mi propaganda más intensa, justamente en los terrenos del señor Delgado.

"Con fecha 9 de los corrientes escribí yo a dicho señor Delgado, creyendo, naturalmente, que trataba con un contrincante leal, incapaz de usar fuerza armada contra tres mozos y mi rifle, que no tenían más objeto que prevenirme contra el asalto posible, en despoblado, de 4 o 6 bandidos.

"Ruégole, pues, interponga su influencia con nuestro mutuo amigo, el general Sepúlveda, para que me vuelvan mis armas.

"Y como secretario de esta Confederación, le ruego que tome nota de cómo se portan los amigos de Villa García.

"Sin otro particular, quedo de usted afectísimo amigo y seguro servidor, Joaquín L. García." Ahora bien; esto mismo lo supe yo inmediatamente en la cabecera de mi distrito; tuve noticias de que el señor Delgado había desarmado a Joaquín García y se había apoderado.....

El C. Díaz Soto y Gama, interrumpiendo: Hizo muy bien.

El C. González: Pues sí, hizo muy bien; por eso ha ganado en Villa García la elección. Y aquí hay otra carta de los vecinos del lugar, en donde dice que las fuerzas de Delgado hacían propaganda por él, las fuerzas, los hombres armados.

El C. Díaz Soto y Gama: Eran revolucionarios.

El C. González: Sí, muy revolucionarios, pero muy armados. (Aplausos.) Voy a terminar únicamente diciendo esto: En el Estado de Zacatecas los campesinos no votan ciegamente como cree el señor Soto y Gama; en una de las propiedades de los señores García, perteneciente a mi distrito, sucedió lo siguiente: se establecen tres casillas: en una de las casillas, San Jerónimo, ganó el candidato Medina Barrón; en otra casilla que se establece en el Refugio Palmillas, ganó el candidato Delgado, del Partido Liberal Constitucionalista, y en otra de las casillas ganó el que habla. Allí se verá que siendo del mismo propietario, no estaba unificada la votación, sino que obtuvimos todos los candidatos votación dentro de la propiedad de ese señor. (Aplausos.) Hay aquí otra prueba que si es necesario se hará conocer a los señores, demostrando cómo el señor Delgado ejerció presión con sus fuerzas para que votaran en su favor.

Ahora nada más me queda encarecer a la Asamblea que tenga a bien proceder con todo juicio, es decir, que piense en esto: que el señor Soto y Gama con toda buena fe ha acogido las indicaciones que se le han hecho. Yo no lo creo de mala fe, señores, lo creo bienintencionado, pero esto no quiere decir que no esté perfectamente equivocado; por lo demás, es muy fácil venir aquí a disponer, y es por lo que nosotros nos levantamos a protestar, señor Soto y Gama. ¿Con qué derecho se viene a disponer aquí con esa holgura, con esa fanfarronería, de los votos de los ciudadanos de Zacatecas? (Aplausos en las galerías.) Aquí debo hacer mención, por más que no venga al caso, de un incidente que también es necesario que conozca la Asamblea: Cuando se trató de proteger, por ejemplo, a los huelguistas de Agujita, a invitación del compañero Mijares, algunos se subscribieron con cantidades desde $100.00 para ayudarlos, y los señores Soto y Gama, y Soto, que nos hablan tanto de las clases trabajadoras, apenas y dieron diez y cinco pesos. (Aplausos en las galerías.) Para eso sí hay que tener el codo duro; pero para disponer de los votos de los zacatecanos, no, señores, manga ancha, si al cabo nada le cuestan al señor Soto y Gama. (Aplausos en las galerías.) Y esto no es justo. Varias veces ha hecho el cargo de que venimos todos nosotros , los diputados zacatecanos, apoyados por los votos de los ricos. Sí, señor; si hubiera 2,887 ricos en mi distrito, ¡qué bello sería mi distrito, amigo! (Aplausos en las galerías.) Pero no hay más que cinco o seis ricos y los demás son pobres, más pobres que usted y que yo. Esos son los votos que amparan nuestras credenciales y esos votos no es justo, naturalmente, de aquí vayan a ser despilfarrados así como así por el señor Soto y Gama, y no porque tiene su amigo Indalecio Delgado que le escribe y le dice que es de los suyos y que es muy partidario del fraccionamiento, (Aplausos.) por eso se impresione el señor Soto y Gama, como yo me impresioné de una bailarina el día que la ví bailar una marcha fúnebre de Chopin. No, señor, son plañideras; pero hay que tener un poco fuerte el corazón para verlas venir y saber que después de la derrota muy difícilmente se resignan a perder y quieren venir a alegar cosas que no son justas. Repito; el señor Delgado estaba armado e hizo presión con sus hombres armados y es necesario que seamos un poco más cautos. (Aplausos.)

El C. Díaz Soto y Gama: Para rectificar hechos pido la palabra. (Voces: ¡A votar! ¡A votar! Siseos.) Tengo derecho a rectificar hechos conforme al Reglamento. (Siseos. Voces: ¡No! ¡No!)

El C. Castillo Francisco: Moción de orden.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Castillo Francisco: El señor Soto y Gama pide la palabra para rectificar hechos, y después de la votación se le debe conceder la palabra. (Voces: ¡Sí! ¡Sí! ¡No! ¡No! Siseos. Desorden.)

El C. Díaz Soto y Gama: Yo pido a la Secretaría se sirva dar lectura al artículo relativo a los derechos que tiene todo ciudadano diputado para rectificar hechos, a ver si es antes o después de la votación. (Voces: ¡Que se lean!)

El C. Manrique: Para una moción de orden, señor presidente. (Voces: ¡No hay desorden!) Eso creéis.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Artículo 101. Los individuos de la Cámara, aún cuando no estén inscriptos en la lista de oradores, podrán pedir la palabra para rectificar hechos o contestar alusiones personales."

El C. Díaz Soto y Gama: Pido la palabra para interpelar a la Mesa. ¿Cuándo cree la Mesa que se deban rectificar los hechos: antes de la votación para ilustrar a la Asamblea, o después de la votación cuando la cosa no tiene remedio?

El C. presidente: Tiene la palabra para rectificar hechos el ciudadano Cerda, y en seguida el diputado Soto y Gama que pidió la palabra después.

El C. Cerda: El hecho que quiero rectificar, señores, es el siguiente:...

El C. Castillo Francisco, interrumpiendo: ¡Moción de orden, señor presidente! Ya ha habido aquí precedentes: es ciudadano general García Vigil, en una sesión como ésta, demostró que los que quieran rectificar hechos, deben hacerlo hasta después de la votación, no antes. (Aplausos. Voces: ¡No! ¡No!) Ahí está el caso de Nieto, en que no se dejó a nadie que rectificara hechos y, sin embargo, ahora se pretende que se rectifiquen hechos.

El C. presidente: La Presidencia manifiesta al ciudadano que acaba de hacer uso de la palabra, que al interpretar el Reglamento no necesita tener en cuenta los precedentes anteriores. (Aplausos.)

El C. Castillo Francisco: ¿Cómo no, señor presidente? Protesto....

El C. Lara César, interrumpiendo: Moción de orden.

El C. Castillo, continuando: ...porque esto es facultad solamente de la Asamblea, y la Asamblea ya ha aprobado eso.

El C. Céspedes: Reclamo el trámite.

El C. Lara César: Moción de orden. El ciudadano que presidía la sesión, el ingeniero Luis León, leyó los nombres de los diputados y presuntos diputados que estaban inscriptos para hablar en pro y en contra; se ha agotado la lista de oradores y se debe preguntar si el asunto está ya suficientemente discutido y la Asamblea debe decidir si se acepta la rectificación de hechos.

El C. Díaz Soto y Gama: Pido la palabra para una moción de orden.

El C. Rodríguez Herminio: No está a discusión el trámite, señor presidente.

El C. Gómez Carlos: Moción de orden. Que se lea el artículo 112 del Reglamento.

El C. Moreno: Moción de orden...

El C. Díaz Soto y Gama: Mi moción de orden consiste en esto. En que se cumpla literal y estrictamente el artículo del Reglamento. El artículo del Reglamento dice....

El C. Gómez Carlos, interrumpiendo: Que se lea el artículo 112.

El C. Manrique: Para una moción de orden, señor presidente.

El C. secretario Valadez Ramírez: Se va a dar lectura al artículo 112 del Reglamento.

"Artículo 112. Cuando hubieren hablado todos los individuos que puedan hacer uso de la palabra, el presidente mandará preguntar si el asunto está o no suficientemente discutido. En el primer caso, se procederá inmediatamente a la votación; en el segundo, continuará la discusión; pero bastará que hable uno en pro y otro en contra, para que se pueda repetir la pregunta."

El C. Díaz Soto y Gama: Tenía la palabra para una moción de orden.

El C. Manrique: Para moción de orden pido la palabra.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Manrique para moción de orden.

El C. Manrique: Señores diputados: Espero que me escucharéis con atención, sin interrumpirme con una nueva moción que a la postre a nada conduce. El compañero Francisco Castillo invoca precedentes - que en realidad no se puede hablar ni siquiera en plural -; no ha habido sino un precedente: el caso del ciudadano Bordes Mangel en la discusión de Nieto. El propio ciudadano Céspedes se levantaba hace unos momentos pidiendo se sometiese a la aprobación de la Asamblea el trámite de la Mesa. Debo recordar lealmente que hace pocos días él impugnó el trámite de la Mesa, que quería que se reservase para después de la votación el conceder la palabra a determinados oradores que la habían solicitado para rectificación de hechos. Recuerde el compañero Céspedes...

El C. Céspedes, interrumpiendo: Eso es lo que usted supone...

El C. Manrique, continuando: No, ciudadano Céspedes. Hace pocos días la Mesa quería que se reservara a los oradores que se habían inscripto para rectificar hechos para después de la votación; el ciudadano Céspedes impugnaba ese trámite... (Voces: ¡No! ¡No! Murmullos.) Supliqué que no se me interrumpiese (Voces: ¡Ah!) Puedo ufanarme, ciudadano Moreno, de no tener mala memoria; afirmo que las cosas sucedieron como estoy diciendo. No hay sino un precedente y esto se debió en aquella ocacion a la impaciencia de la Asamblea; todos los que estábamos inscriptos para rectificar hechos renunciamos al uso de la palabra y los partidarios del señor Nieto que deseaban hacer uso de la palabra para rectificación de hechos, se vieron privados de este derecho, porque se impacientó la mayoría de la Asamblea; pero el artículo 101 da este derecho. (Voces: ¡No! Murmullos. Desorden. Campanilla.) Si hemos sentado un precedente explicable en determinados momentos, no puede servir como regla...

El C. Castillo, interrumpiendo: Que se someta a la consideración de la Asamblea.

El C. Manrique, continuando: Sí, compañero. El artículo 101 complementa el 112, porque el 112 dice que los oradores que pueden hacer uso de la palabra y el 101 dice que los individuos de la Cámara, aunque no estén inscriptos, pueden hacer uso de la palabra; luego en tanto que no hayan

terminado de hablar los oradores que se hayan inscripto para rectificación de hechos, pueden hacer uso de la palabra; no está suficientemente discutido, compañero...

El C. Moreno, interrumpiendo: Que se pregunte a la Asamblea.

El C. Manrique, continuando: De otra manera, compañeros, hay que preguntarnos cuál es la lógica del artículo reglamentario. Si un orador afirma un hecho falso y se dice, por ejemplo, que Indalecio Delgado - es un suponer, para que vean los compañeros -, que Indalecio Delgado fue jefe de las armas en Villa García, yo quiero suponer por un momento - no prejuzgo - que este hecho sea falso, pero lo afirma un compañero y como se niega la palabra para rectificación de hechos, cuando más tarde un compañero demuestre que no hubo tal jefatura de armas, si eso viene después de la votación, ya la Asamblea habrá cometido una injusticia. He aquí por qué es necesario que la rectificación de hechos se haga antes de la votación; después sería prácticamente inútil. Mi moción de orden consiste en pedir a la Asamblea que sostenga su trámite, porque es el reglamentario y es el debido.

El C. Díaz Soto y Gama: Para una moción de orden.

El C. Moreno: Para una moción de orden.

El C. Lara César A.: Moción de orden.

El C. Díaz Soto y Gama: Moción de orden. Había pedido antes la palabra, pero me interrumpieron los señores... (Murmullos.) antes tenía pedida la palabra y me interrumpieron con toda descortesía los señores de las derechas; pedí la palabra antes que el señor Manrique. Pido la palabra para una moción de orden.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Díaz Soto y Gama: Mi moción de orden es tan categórica como esto: que se cumpla estricta y literalmente con el artículo 101 que leyó la Secretaría y que terminantemente concede derecho a todo diputado, esté o no inscripto, para hacer rectificaciones, y como hay un aforismo en derecho que conocen hasta los estudiantes de primer año de Jurisprudencia, que dice: "donde la ley no distingue, nosotros tampoco debemos distinguir: ubi lex, etcétera"; como hay ese aforismo perfectamente conocido y aquí la ley no hace distinción, yo pido que, tanto por eso como por un principio de sentido común, de que los hechos deben rectificarse para ilustrar a la Asamblea antes de la votación y no para hacer que la Asamblea sea ilustrada cuando ya haya votado erróneamente, yo pido que por justicia, por razón, por sentido común, por honradez, la Presidencia se imponga y haga cumplir el Reglamento.

El C. Castillo Francisco: Pido la palabra para una moción de orden. Para rectificar lo que dijo el compañero...

El C. Díaz Soto y Gama, interrumpiendo: Insisto en pedir la palabra para rectificar hechos.

El C. presidente: La Presidencia no tiene por qué apelar a ninguna moción de orden presentada por los ciudadanos diputados, porque en este momento está cumpliendo precisamente con el artículo 101 del Reglamento, que textualmente dice que debe concederse la palabra a quien la pida para rectificar hechos. Una vez que se hayan rectificado los hechos que se desea rectificar el ciudadano Soto y Gama, se preguntará a la Asamblea si está suficientemente discutido el asunto. (Aplausos.)

El C. Moreno: No, señor.

El C. Cerda: El hecho que quiero rectificar es el siguiente, señores...

El C. Lara César A., interrumpiendo: Señores diputados y presuntos diputados: Como las rectificaciones de hechos son ardides de que se valen ciertos diputados o presuntos diputados...

El C. Díaz Soto y Gama, interrumpiendo: ¿Cómo lo sabe usted?

El C. Lara, continuando: ...para hablar en pro o en contra de algún dictamen, yo pido a la Presidencia que exija a los ciudadanos diputados que van a hacer uso de la palabra para rectificar hechos, que se sujeten estrictamente al hecho que quieren rectificar. (Aplausos.)

El C. Cerda: El hecho que quiero rectificar es este: El ciudadano Indalecio Delgado no es jefe militar ni ha sido jefe militar nunca; es falso, pues, que fuera jefe de determinado sector militar en el Estado de Zacatecas... (Voces: ¡Ah! ¡Ah! ¡A votar! ¡Pruebas!) Lo que dijo el ciudadano González, de que los ciudadanos Soto y Gama, y Soto habían contribuído únicamente con determinada cantidad, muy pequeña, para ayuda de los huelguistas de "Agujita", no implica absolutamente ningún cargo para ellos, puesto que ellos siguen siendo en nuestra opinión los mismos líderes del agrarismo y del obrerismo, siguen estando en el concepto en que los hemos tenido siempre. Otro hecho: los señores de Zacatecas que ahora vienen a alegar son revolucionarios, en marzo, cuando se reunió la convención del Partido Laborista en Zacatecas, brillaron por su ausencia siempre y no había allí un hombre que fuera a integrar el comité obregonista del Estado de Zacatecas, porque todos tenían miedo, y fueron los del Partido Laborista los que en pleno público, y ateniéndose a todo lo que viniera, fueron ellos los únicos que pudieron tener una actuación decidida en pro del último movimiento revolucionario. Esos son los hechos que quería rectificar. (Voces: ¡Ya constan!)

El C. Díaz Soto y Gama: Pido la palabra.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Soto y Gama para rectificación de hechos.

El C. Díaz Soto y Gama: El primer hecho que quiero rectificar, es este: se ha asentado por los señores de Zacatecas que ellos son genuinos representantes del agrarismo allí y que han hecho muchas obras agrarias, y quién sabe cuántas cosas más. Yo quiero rectificar este hecho, basado en el testimonio de un obrero, de uno de los connotados líderes obreros, de José G. Escobedo, que acaba de fungir como secretario general del exterior de la Confederación Regional Obrera de México, Confederación que en su seno comprende multitud de corporaciones obreras y que es el centro más fuerte del proletariado organizado de la República. Pues bien; el ciudadano José Escobedo, que también fue secretario general de la Cámara Obrera de Zacatecas y a cuyo impulso se debe, en mucho, la labor agraria en aquel Estado, me dice, en carta especial para este debate.... (Voces: ¡Oh! ¡Oh!)

El C. Castillo Francisco, interrumpiendo: Moción de orden. Eso no es rectificación de hechos,

señor presidente; es hablar en pro. (Voces: ¡No! ¡No! ¡Sí! ¡Sí!)

El C. Mijares: No se permite interrumpir al orador.

El C. Díaz Soto y Gama, continuando: "Por otra parte..... (Murmullos. Desorden.)

El C. Castillo Francisco, interrumpiendo: Se está violando el Reglamento. (Desorden.)

El C. Díaz Soto y Gama: Pido a la Presidencia que garantice la libertad de palabra.

"Por otra parte, y a efecto de justificar la necesidad de que usted apoye a los compañeros Aguilera y Delgado, debo agregar al presente escrito, la opinión franca, fría, sin pasiones, que tengo de los ciudadanos diputados - con muy raras excepciones - que actualmente representan a mi Estado; opinión con la que están de acuerdo todos los elementos obreros de Zacatecas, es decir: que nuestra representación está integrada por indolentes, impávidos, sin entusiasmos unos, y reaccionarios y clericales otros."

Y para comprobar esta aserción del compañero Escobedo, vuelvo a decirles, uno de los líderes obreros más connotados, me basta señalar el hecho de que varios diputados de Zacatecas están con las derechas, están con el señor Vicencio, están con el señor Norberto Domínguez, están con todos los señores reaccionarios de esta Cámara.

El C. Castillo Francisco, interrumpiendo: Son independientes.

El C. Soto y Gama, continuando: Por un lado, y en cuanto a los otros diputados de Zacatecas, han hecho esa labor indolente, han adoptado esa actitud impávida ante todas las cuestiones que se han debatido. Yo no he oído a los señores diputados de Zacatecas levantar la voz una sola vez por el agrarismo; ha habido cuestiones en que se ha debatido asuntos agrarios y ha habido ocasiones en que se ha tenido que atacar a caciques; estuvo el caso de Florencio Salgado, y nunca he oído, hasta ahora, la voz de los diputados por Zacatecas. (Voces. Desorden. Campanilla.) Pero apenas se trata..... (Siseos. Campanilla.) Pero apenas, señores diputados, se trata de atacar..... (Siseos. Campanilla. Golpes en los pupitres. Gran desorden.)

El C. Villegas Ignacio C., interrumpiendo: Moción de orden, señor presidente. La conducta del señor Céspedes no honra a esta Cámara, nos desprestigia altamente y las galerías, que se están dando cuenta de esta actitud del señor Céspedes, lo proclamarán por toda la República y será una vergüenza para esta Representación Nacional. (Campanilla.)

El C. Díaz Soto y Gama: Sigo con el uso de la palabra. Lamento sinceramente, lamento con toda sinceridad, que las personas que aquí dicen que yo soy apasionado, sean ellas las que demuestren apasionamiento. La pasión se revela en el hecho de que no se quiera que esta Cámara juzgue con todos los datos necesarios en estos asuntos trascendentales. Sigo rectificando hechos. Aseguran los diputados por Zacatecas que han hecho aquí labor, porque son agraristas, y que han hecho labor agrarista. Y lo más curioso del caso es que nunca han levantado su voz, sino ahora que se trata de atacar al representante genuino del sindicato de campesinos más importante de Zacatecas. (Siseos.) A este propósito tengo que rectificar otro hecho. (Siseos.) Se ha dicho que yo, en este caso, he venido al debate por la recomendación de mi amigo Indalecio Delgado; eso no es cierto. (Voces: ¡Pruebas!) Los sindicatos, las agrupaciones agremiadas, organizadas, del agrarismo en Zacatecas, se han dirigido a muchos diputados radicales de la Cámara, entre ellos el señor León, aquí presente, y a mí, y nos han excitado para que defendamos, por solidaridad, al representante del proletariado. Podrá decir, con un movimiento de cabeza, el compañero León, si eso es cierto, si es cierto que los sindicatos de Zacatecas nos han pedido que defendamos a un compañero en quien ellos tienen confianza.

El C. León: Pido la palabra.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano León, para contestar.

El C. León: Sí es cierto, ciudadano Soto y Gama.

El C. Soto y Gama: Ya ven ustedes cómo se han asentado aquí los hechos gratuitamente; no es, pues, pasión la mía; pasión la de los señores de la derecha y la del señor Céspedes, del centro, que impiden se oiga la voz del orador. Estoy rectificando hechos y voy a seguir rectificando hechos. Para terminar, los oradores del pro dicen que no hay que disponer con holgura, con despilfarro, de los votos del pueblo. Yo rectifico el hecho: quienes tratan de disponer de los votos, son aquellos hombres que quieren que esta Cámara vote sobre votaciones unánimes, en masa, de hombres llevados como carneros a votar. (Aplausos. Siseos.) Precisamente, por esto tan claro, que quería obscurecer la pasión de los miembros de las derechas, por eso es por lo que no se me quería dejar hablar, y porque aquí se trata, precisamente, de pretender que la voluntad de cuatro, cinco, seis o veinte hacendados, sea la que decida de la votación de todo un distrito, y eso no puede ser y no será, (Aplausos.) mientras haya revolucionarios en México, mientras haya en esta cámara un sólo revolucionario verdadero y un sólo demócrata que sepa respetar el voto de los campesinos; mientras haya un sólo revolucionario, no permitiremos que se nos traiga aquí a individuos impuestos por la voluntad de una oligarquía de latifundistas. Nosotros no permitiremos que se juegue con los votos del pueblo, (Siseos.) por eso rectifico yo el hecho de que, en lugar de que el despilfarro de votos venga de parte nuestra, viene de parte de esos señores de las derechas, y lo he demostrado con mis interpelaciones concretas a la Comisión. ¡Votación unánime en cuatro casillas; dos casillas instaladas en cascos de haciendas! (Siseos. Desorden.) ¡ Votación unánime en cuatro casillas, dos de ellas instaladas en cascos de haciendas! Y luego, señores diputados..... (Desorden.)

El C. Gómez Carlos, interrumpiendo: Moción de orden, señor presidente.

El C. Mijares: Señor presidente, pido la palabra para una moción de orden. Suplico a su señoría se sirva hacer sentar a los señores diputados que están interrumpiendo al orador.

El C. Díaz Soto y Gama, continuando: Y luego, lo más grave de todo: la documentación en manos del gobernador del Estado, cuya conducta yo precisaré en estos momentos, y el boletaje entregado a la Comisión caóticamente, sin distinción de

paquetes ni de expedientes, y la conducta del gobernador actual del Estado, no es absolutamente, como se ha dicho, en sentido agrarista. También rectifico este hecho y, al efecto, voy a pedir que la Secretaría lea un documento... (Voces: ¡No! ¡No! ¡A votar! ¡A votar!) Entonces lo leo yo; si no se quiere que la Secretaría lo lea, lo leeré yo. El documento dice:

"Al Ciudadano Tomás Leal, representante de los solicitantes de Ciudad García.- Presente..."(Siseos. Voces: ¡A votar! ¡A votar! Desorden) No se puede oír mi voz, señor presidente.

El C. Manrique: Para una moción de orden, señor presidente.

El C. secretario Valadez Ramírez: se manifiesta a los ciudadanos diputados que si no se conserva el orden, la Presidencia se verá en el caso de levantar la sesión. (Voces: ¡Muy bien! Aplausos.)

El C. Manrique: Mi moción de orden consiste cabalmente en excitar a la Presidencia para que cumpla el artículo 23 reglamentario que dice:

"Son obligaciones del presidente:

"I. Abrir y cerrar las sesiones a las horas señaladas por este Reglamento;

"II. Cuidar de que, así los miembros de la Cámara como los espectadores, guarden orden y silencio;..."

Es muy poco decoroso que un ciudadano diputado que no se representa a sí propio, sino que representa a 60,000 habitantes, esté manchando aquí la Representación...(Aplausos. Siseos. Desorden.) de su distrito, interrumpiendo a los oradores.

El C. Castillo Francisco: Es más indecoroso que aquí se viole el Reglamento.

El C. Rodríguez Herminio: Somos varios los que estamos protestando porque es manifiesta la parcialidad de la Mesa con las izquierdas.

El C. Manrique: Es muy triste que los distritos de Matamoros, Oaxaca, y algunos otros, presenten el espectáculo de colegiales...

El C. Rodríguez Herminio, interrumpiendo: ¡Tenemos valor civil para protestar! (Siseos. Desorden.)

El C. Manrique, continuando: ¿Valor civil? Para golpear como colegiales indisciplinados en los pupitres y dar este espectáculo cobarde de quienes no quieren escuchar la voz de un contrario. (Voces: ¡Muy bien! Aplausos.)

El C. Castillo: Se está violando el Reglamento, señor. El ciudadano Soto y Gama ha pedido la palabra para rectificar hechos. (Voces: ¡Ah!)

El C. presidente: Continúa en el uso de la palabra el ciudadano Soto y Gama.

El C. Manrique: Se teme la voz de la verdad, es lo que pasa.

El C. Díaz Soto y Gama: Sigo rectificando las inexactitudes que se han vertido en este momento acerca de la supuesta labor agraria de ciertos elementos, entre otros, el actual gobernador de Zacatecas, y para demostrar que el actual gobernador de Zacatecas no está siguiendo los mismos pasos del honrado, radical y eminente revolucionario Enrique Estrada, voy a dar lectura a este documento...(Voces: ¡No! ¡No! ¡A votar!) Tengo el derecho, naturalmente, de pedir que la Secretaría lo lea, conforme al Reglamento; pero ya que hay señores que no quieren que se lea, ahora me voy a empeñar en que se lea.

El C. Gómez Rodrigo: Que se lea para que se conozcan los hechos.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Comisión de Fraccionamiento Agrario.- Estado de Zacatecas.- Estados Unidos Mexicanos.

"Al Ciudadano Tomás Leal, representante de los solicitantes de Ciudad García.- Presente.-

"El Ejecutivo del Estado, en oficio número 3,200 fechado ayer, dice a esta Comisión lo siguiente:

"En el expediente relativo al fraccionamiento de la zona correspondiente al centro poblado de Jerez, con fecha de hoy recayó el siguiente acuerdo: A su expediente el oficio número 1,183 de fraccionamiento. Transcríbase a la Comisión de Fraccionamiento Agrario, para conocimiento de los interesados, el acuerdo de este Ejecutivo, de fecha 17 de junio último. El acuerdo referido dice a la letra:

"Zacatecas, 17 de junio de 1920. A su expediente el escrito del C. licenciado Jesús Soto fecha 15 del actual, y dictamen respectivo de la Comisión de Fraccionamiento Agrario. Se prorroga por tres meses el plazo concedido a los dueños de la hacienda de Ciénega, afectada por la zona de fraccionamiento del Centro poblado de Jerez para que fraccionen libremente los terrenos de su finca comprendidos dentro de dicha zona, y satisfagan las solicitudes de lotes, en los términos 16 a 19 y demás relativos de la Ley Agraria; siempre que se otorgue fianza a satisfacción de este Ejecutivo, por la cantidad de $1,000.00. Comuníquese.- El gobernador constitucional interino, Francisco L. Vásquez.- El oficial 1o. encargado de la Secretaria, M. T. Obregón."- Rúbricas.

"Lo que transcribo a usted para su conocimiento, protestándole mi distinguida consideración.

"Sufragio Efectivo. No Reelección.- Zacatecas, 20 de agosto de 1920 .- El presidente, Francisco Cardona.- El secretario, D. Cardona."

Este documento quiere decir esto en castellano: que el actual Ejecutivo de Zacatecas está destrozando el cumplimiento del artículo 27 de la Constitución; no ha hecho pues, ninguna labor agraria, y no la ha hecho porque conforme al artículo 27 de la Constitución debía haberse llevado a cabo el fraccionamiento de las haciendas dentro del periodo primero que inmediatamente siguió a la expedición de la Constitución de 17. La Constitución de 17 previene que en ese primer período se haga el fraccionamiento, es decir, entre 17 y 18, estamos en 1920 y todavía hay un gobernador que no contento con los plazos sucesivos que se han dado a los latifundistas, todavía concede prórrogas. ¡Que diferencia entre esta actitud y la actitud siempre firme, siempre favorable al proletariado del gobernador Enrique Estrada! (Aplausos.)

El C. Lara: Para una verdadera rectificación de hechos.

El C. Díaz Soto y Gama: Nunca se puede interrumpir al orador. Sigo rectificando hechos.(Siseos.) Hay algo verdaderamente escandaloso que no se quiere, que desde esta tribuna se conozcan, se señalen las faltas al cumplimiento de las más grandes promesas de la Revolución. Señores, siquiera por tratarse de algo importante como esto, siquiera

por tratarse de hombres públicos, siquiera por eso no se ponga obstrucción a la verdad. Se me ha cortado la palabra y el hilo de mi raciocinio quinientas veces, esto no es honrado; ya tendrán ustedes oportunidad de defender al gobernador quinientas veces, pero no es esta la oportunidad....

El C. Castillo, interrumpiendo: Todo eso es una falsedad.

El C. Díaz Soto y Gama, continuando: Yo estoy señalando hechos, porque uno de los argumentos que se ha presentado es que los diputados de Zacatecas, vienen hablando aquí en nombre del agrarismo de Zacatecas, y eso no es cierto. Los diputados de Zacatecas han olvidado el compromiso que tenían con el pueblo, y aquí no han defendido al agrarismo, debiendo haber defendido el agrarismo probándolo con hechos. En los momentos presentes, un individuo que ustedes saben quién es, Indalecio Delgado, uno de los hombres que más ha hecho por el sindicalismo de los agricultores de allá, como lo voy a comprobar, uno de los individuos más apoyados por aquél proletariado, lucha contra un individuo miembro de las familias latifundistas, y era obligación de los diputados de Zacatecas hacer lo contrario precisamente de lo que han hecho, no levantarse apoyando al candidato de los hacendados, sino levantarse apoyando con toda energía, como lo hago yo que no soy diputado Zacatecano, al candidato legítimo del agrarismo organizado por los campesinos agremiados, llevados a votar a las casillas como carneros a las casillas del Municipio de Pinos, ese era el deber de ustedes. (Voces: ¡Ya! ¡Ya!) Un momento. Pido a la Secretaría que lea este documento.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Poder Ejecutivo Federal.- Secretaría de Guerra y Marina.

"Al C. Indalecio Delgado.- Presente.

"Como lo solicita, esta Jefatura de Operaciones Militares en el Estado, en acuerdo de hoy, ha tenido a bien conceder a usted licencia ilimitada para separarse de su cargo como jefe de la defensa social de Villa García, Zacatecas, nombrándose para substituirlo al C. Pilar López a quien deberá hacer la entrega correspondiente.

"Lo que comunico a usted para su conocimiento y efectos, dándole las gracias en nombre de esta misma Jefatura por los importantes servicios que prestó en el ejercicio del referido cargo.

"Hago a usted presentes las seguridades de mi atenta consideración.

"Consideración y Reformas.- Zacatecas, 28 de febrero de 1920.- El teniente coronel jefe del Estado Mayor de la Jefatura de Operaciones en el Estado, A. Nivón."

Un sello que dice: Ejército Liberal Constitucionalista.- Estados Unidos Mexicanos.- Jefatura de Operaciones del Estado de Aguascalientes.- Cuartel General.

"El C. Indalecio Delgado se ha presentado en este Cuartel General, y a solicitud hecha por él, se le concede permiso para usar una pistola para su seguridad en jurisdicción de esta Jefatura de Operaciones.

"Aguascalientes, 8 de junio de 1920.- Por orden del general jefe de las operaciones, el teniente coronel jefe del Estado Mayor, A. Nivón"

(Voces: ¿fecha de licencia?) 28 de febrero de 1920.

El C. Díaz Soto y Gama: Esta es otra rectificación de hechos. No es cierto que el señor Delgado haya ejercido presión en su distrito, no es cierto tampoco que sea un cacique, porque Delgado no es cacique de aquel lugar, porque ya demostré con documentos emanados de la Cámara Obrera de Zacatecas que allí se le considera como un defensor del proletariado. Para terminar, sólo quiero hacer constar, como lo dije desde el principio, que éste era uno de los asuntos más trascendentales de los que se iban a traer a la Cámara... Se reían socarronamente los miembros de las derechas y hoy las pasiones que han demostrado vienen a comprobar una vez más el eterno conflicto de la lucha de clases, los de abajo contra los de arriba, del débil, del ignorante que no sabe ir a las elecciones, que no sabe cumplir los requisitos legales, contra los chanchulleros electorales, contra los hombres del Poder, que lo mismo dominan en el terreno de la Economía Política, que en las luchas electorales, en las finanzas, que en la misma tribuna, trayendo a estas tribunas porra de latifundistas y porra de científicos.

- El mismo C. secretario: Habiendo hablado todos los oradores inscriptos, en votación económica se pregunta si el asunto está suficientemente discutido. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Suficientemente discutido. Se va a tomar la votación de las siguientes proposiciones: "

1o. Son válidas las elecciones para diputados al Congreso General efectuadas en el 5o, distrito electoral del Estado de Zacatecas, el día 1o. de agosto del corriente año.

"2o. Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el mencionado distrito electoral, los C.C. Manuel García Rojas e Ignacio Velasco."

El C. Ollivier: Estando suficientemente apoyado, ruego a su señoría votación económica para el primer punto y nominal para el segundo.

- El mismo C. secretario: De acuerdo con lo solicitado por el ciudadano Ollivier, se va a tomar la votación económica del primer punto, que dice:

"Son válidas las elecciones para diputados al Congreso General efectuadas en el 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas, el día 1o. de agosto del corriente año."

Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobado. Se va a tomar la votación nominal del segundo punto, que dice así:

"Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el mencionado distrito electoral, los C.C. Manuel García Rojas e Ignacio Velasco". Por la afirmativa.

El C. secretario Zincúnegui Tercero: Por la negativa. (Se recoge la votación.)

- El mismo C. secretario: Votaron por la negativa 50 ciudadanos diputados y presuntos diputados.

El C. secretaria Valadez Ramírez: Votaron por la afirmativa 81 ciudadanos diputados. (Aplausos nutridos.) En consecuencia, la Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 5o. distrito electoral del Estado de Zacatecas, los ciudadanos Manuel García Rojas e Ignacio Velasco. (Aplausos nutridos.)

- El mismo C. secretario, leyendo:

"1a Comisión revisora de Credenciales.- 4a. Sección.

"H. Asamblea:

"A la Comisión que subscribe fue turnado para su estudio el expediente relativo a las elecciones de diputados efectuadas en el 5o. distrito electoral del Estado de Durango.

"Hecho el estudio detenido de dicho expediente, resulta una votación de 2,669 sufragios en favor de la fórmula Emilio Gandarilla y Vicente Galindo, y de 811 en pro de la fórmula Marino Castillo Nájera - A. Fernández. También jugó la fórmula Guadalupe Gracía García - Agustín Manzanera; pero como la votación que obtuvo es verdaderamente insignificante, no es de tomarse en consideración.

"En el municipio de Nombre de Dios se instalaron once casillas, siendo de nulificarse, por virtud de haberse instalado a las 8 a. m. del día de la elección, las números 1, 5, 7, 11, 12, así como la número 2, en razón de que el instalador fue quien hizo la designación de los miembros integrantes de la Mesa. El total de los votos en estas casillas es de 638 para Gandarilla - Galindo y 169 para Castillo Nájera - Fernández; pero hecha la deducción de los votos nulos, sólo quedan 175 para la primera y 64 para la segunda.

"Instaláronse en el municipio de Santiago Papasquiaro 17 casillas, dando una votación de 1,151 para Gandarilla - Galindo y de 507 para Nájera - Fernández. Son de nulificarse por haber instalado a las 8 a.m., las siguientes casillas: número 4,9, 12 y 18. De la número 5 aparece substraído el paquete relativo y todos los votos de la 7a. no son de tomarse en cuenta por estar firmadas las boletas respectivas. Hecha la deducción de la votación nulificada, queda un total de 898 votos (en el municipio de que se trata) a favor de Gandarilla - Galindo y de 395 para Castillo Nájera - Fernández.

"En el municipio de Pueblo Nuevo se instalaron dos casillas, obteniendo votos únicamente la primera fórmula, 84 en la primera y 100 en la segunda.

"En el municipio de Otáez se instalaron 3 casillas: ningún voto de la segunda fórmula y 291 la primera.

En San Dimas instaláronse 4 casillas: 245 la primera fórmula y 0 la segunda.

"En Huasamota se instaló solamente una casilla: 160 votos la primera y ninguno la segunda.

"En los municipios de Mezquital y de San Andrés, la documentación está tan incompleta, que hace imposible conocer la votación habida.

"Como se ve la fórmula Castillo Nájera - Fernández obtuvo 0 votos en los citados municipios y, en cambio, Gandarilla - Galindo obtuvo 880 votos que, en concepto de la Comisión, son de nulificarse por estar comprobadas numerosas violaciones a la ley y aparecer del todo irregular la documentación.

"La votación válida que queda, deducidos los votos afectados por nulidad, es la siguiente: 1,073 votos para los C.C. Emilio Gandarilla y Vicente Galindo y 459 para los C.C. Marino Castillo Nájera y Antonio Fernández, propietarios y suplentes, respectivamente.

"Tendente a demostrar la incapacidad constitucional del C. Emilio Gandarilla para desempeñar el cargo de diputados, se alega que no se separó noventa días antes del día de la elección, del cargo de secretario particular del gobernador del Estado de Durango, que venía desempeñando con alguna anterioridad. A este respecto es pertinente aducir que la Asamblea, en repetidos casos, ha sentado el criterio de que la incapacidad constitucional no se extiende a los secretarios particulares de los gobernadores, sino sólo a los secretarios generales de Gobierno; pero aunque así no fuere, aparece debidamente comprobado en el expediente, que el presunto diputado Gandarilla se separó de dicho empleo el mismo día en que fue expedida la convocatoria respectiva; de manera que, aunque la incapacidad alegada alcanzara a los secretarios particulares, en el caso no sería aplicable por virtud del reconocido y justo principio de que las leyes no producen efectos retroactivos.

"Alégase también que el mencionado presunto representante Gandarilla no puede ser diputado, en razón de ser militar en servicio activo, sin haber gozado de licencia alguna. En cuanto a este concepto de incapacidad, la Comisión no ha podido llegar al convencimiento de la verdad, pues existen en el expediente documentos contradictorios, entre otros, un certificado subscripto por el ciudadano oficial mayor de la Secretaría de Guerra y Marina, por orden del subsecretario, en el que consta que el C. Gandarilla, sí ha gozado de licencia en los términos requeridos por la ley para poder ser electo representante del pueblo, y otro expedido por el encargado del Departamento de Caballería del propio Ministerio, en el que se asienta que dicho señor no ha gozado de licencia en el tiempo transcurrido del presente año, certificado este hecho por el C. general Plutarco Elías Calles, cuya firma aparece en el documento que se cita.

"A efecto de esclarecer el punto antes referido, oficialmente solicitó la Comisión informes del ciudadano secretario de Guerra y Marina, haciéndole notar la contradicción antes referida, sin que hasta la fecha haya obtenido contestación alguna, no obstante haber transcurrido más de quince días desde que dichos informes fueron solicitados, esperando que en el curso de los debates, si los hay con motivo de esta elección, se esclarezca la verdad a este respecto; pero entretanto, los subscriptos, en el caso de duda, creen cumplir con su deber no tomando en consideración la incapacidad alegada.

"Por presión y fraude aparecen presentadas numerosísimas protestas en contra de la fórmula Gandarilla - Galindo, y aunque moralmente la Comisión tiene el convencimiento de que estas elecciones distan infinito de la moralidad y honradez en los procedimientos llevados a cabo por los diversos contendientes no existe una sola prueba de ningún hecho concreto de fraude o presión, no tomando por ello en cuenta las aludidas protestas.

"Por las consideraciones anteriormente expuestas y en vista del resultado de la votación, proponemos a la consideración de la Asamblea las proposiciones siguientes:

"Primera. Son válidas las elecciones de diputados efectuadas en el 5o. distrito electoral del Estado de Durango.

"Segunda. Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el expresado distrito electoral, en virtud de haber obtenido la mayoría de votos, los C.C. Emilio Gandarilla y Vicente Galindo."

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados. - México, noviembre 5 de 1920.- Rafael Martínez de Escobar.- Uriel Avilés.- Erasmo Trejo."

Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobado. (Aplausos.)

La Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 5o. distrito electoral del Estado de Durango, los ciudadanos Emilio Gandarilla y Vicente Galindo.

El C. presidente, a las 2.08 p. m.: Se levanta la sesión y se cita para la tarde a las cinco.

SESIÓN

DE LA

CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 8

DE NOVIEMBRE DE 1920

SUMARIO

1.- Se abre la sesión. Lectura y aprobación del acta de la anterior.

2.- Rinden la protesta de ley los C.C. Francisco Modesto Ramírez, Manuel García Rojas y Emilio Gandarilla, diputados propietarios, respectivamente, por los distritos electorales 4o. de Oaxaca, 5o. de Zacatecas y 5o. de Durango.

3.- Proyecto de ley que reglamenta el artículo 4o. constitucional, suscrito por numerosos ciudadanos diputados; a la 2a. Comisión de Puntos Constitucionales, que tiene antecedentes, e imprímase.

4.- Escrito firmado por el C. Manuel E. Ortiz y hecho suyo por la mayoría de la diputación michoacana, por el que se presenta acusación en contra del C. Primo Serranía Mercado; dése cuenta y archívese.

5.- Iniciativa del C. diputado Luis Espinosa, a fin de que se reduzcan las dietas de los miembros del Congreso de la Unión; de primera lectura. Se concede licencia al C. Francisco Castillo.

6.- Se recoge la votación pendiente, referente a la moción suspensiva para que se discuta la Ley de Ingresos antes que el Presupuesto de Egresos; se aprueba. Sin debate es aprobada una proposición presentada por los C.C. Céspedes y Moreno Jesús Z., para que se nombre una Comisión que se acerque al ciudadano presidente de la República, a fin de pedirle envíe cuanto antes la Ley de Ingresos. Se nombra dicha Comisión. Para hechos usó de la palabra el C. diputado Bojórquez.

7.- A votación el dictamen de la Comisión de Presupuestos y Cuenta, que propone se amplíe la partida número 63 del Presupuesto de Egresos vigente, se levanta la sesión por falta de "quórum".

DEBATE

Presidencia del

C. CANTÓN EDMUNDO G.

(Asistencia de 128 ciudadanos diputados.)

El C. presidente, a las 5.29 p. m.: Se abre la sesión.

El C. Mayén: Pido la palabra, señor presidente, para un asunto particular mío. (Campanilla.)

El C. prosecretario Castrejón: La Presidencia, por conducto de la Secretaría manifiesta al ciudadano Mayén que no puede hacer uso de la palabra en sesión de Cámara de Diputados.

- El mismo C. prosecretario, leyendo:

"Acta de la sesión celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el día seis de noviembre de mil novecientos veinte.

"Presidencia del C. Luis L. León.

"En la Ciudad de México, a las once y diez de la mañana del sábado seis de noviembre de mil novecientos veinte, se abrió la sesión con asistencia de ciento veintisiete ciudadanos diputados.

"Sin objeción se aprobó el acta de la sesión celebrada el día anterior.

"Fue aprobado sin debate un dictamen de la primera Comisión de Peticiones, que propone pasen a las comisiones unidas de Justicia y Gobernación en turno, los oficios del juez de Distrito de Michoacán, relativos a dos autos dictados en el juicio de amparo promovido por los C.C. José Cueto y Manuel Gómez.

"Procedióse a la elección de los suplentes de las secciones quinta y octava de la primera Comisión de Poderes, así como de un miembro de esta última Sección para substituir al C. Luis Espinosa, quien renunció.

"De la votación resultaron electos, para tercer miembro de la octava Comisión el C. Emilio Portes Gil, y para suplentes de la misma y de la quinta Sección, respectivamente, los C.C. Francisco López Soto y Juan B. Salazar.

"Se puso a discusión el dictamen de la Comisión de Presupuestos y Cuenta, referente al Ramo Primero del Presupuesto de Egresos para 1921.

"El C. Portes Gil habló en contra, siendo interrumpido por mociones de orden de los C.C. Casas Alatriste, Rivera Cabrera y Jesús Z. Moreno, por aclaraciones del C. Candelario Garza y de la Presidencia, por la lectura del artículo 104 del Reglamento solicitada por el C. Mijares y por una moción del C. Céspedes, tendente a que se cumpliera con el artículo 74 constitucional, discutiéndose la iniciativa de ingresos antes que los ramos del Presupuesto de Egresos. En este sentido presentó una moción suspensiva el propio C. Céspedes, quien la fundó y expuso la conveniencia de que una Comisión de esta Cámara expresara al Ejecutivo la necesidad de que remita cuanto antes la iniciativa de Ley de Ingresos.

"Tomada en consideración la moción suspensiva, se puso a debate .

"Hablaron en contra los C.C. Francisco Trejo, Castrejón y Casas Alatriste, y en pro los C.C. Manrique y Portes Gil. Hicieron aclaraciones, la

Presidencia y el C. Manrique, quien también propuso el nombramiento de la Comisión a que antes se había referido el C.C. Céspedes. El C. Portes Gil contestó interpelaciones de los C.C. Candelario Garza y Abraham Franco. Dieron fin al debate varias aclaraciones que hizo el C. Díaz Soto y Gama.

"El C. Céspedes, debidamente apoyado, pidió votación nominal sobre la moción suspensiva. Y habiendo votado ochenta y dos ciudadanos diputados por la afirmativa y veinte por la negativa, la Secretaría declaró que no había quórum.

"A la una y veinte se levantó la sesión".

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, se servirán ponerse de pie. Aprobada.

- El mismo C. secretario: Estando a las puertas del salón los ciudadanos cuyas credenciales fueron aprobadas esta mañana, y que son Ramírez Francisco Modesto, García Rojas Manuel y Gandarilla Emilio, se nombra en comisión a los ciudadanos Franco Urías, Espinosa y Elenes y prosecretario Bojórquez, para que los introduzcan al salón. (Rinden la protesta de ley los C.C. Francisco Modesto Ramírez, Manuel García Rojas y Emilio Gandarilla, diputados propietarios, respectivamente, por los distritos electorales 4o. de Oaxaca, 5o. de Zacatecas y 5o. de Durango. Aplausos).

- El C. prosecretario Castrejón, leyendo:

"H. Asamblea:

"Considerando primero: Que el artículo 4o. de la Constitución..."

La Presidencia, por conducto de la Secretaría, suplica a los ciudadanos diputados, se sirvan ocupar sus curules y prestar atención a la lectura de esta iniciativa.

"Considerando primero: Que el artículo 4o. de la Constitución previene que la ley, en cada ...."

Se vuelve a rogar a los ciudadanos diputados presten atención a este proyecto de ley.

"....previene que la ley, en cada Estado, determinara cuáles son las profesiones que necesitan título para su ejercicio, las condiciones que deban llenarse para obtenerlo y las autoridades que han de expedirlo; que la fracción IV del artículo 121 de la misma Constitución dispone que los títulos profesionales expedidos por las autoridades de un Estado con sujeción a sus leyes, serán respetados en los otros, y que el artículo 16 transitorio de la propia Constitución, impuso la obligación al Congreso constitucional, de expedir todas las leyes orgánicas de la Constitución, dando la preferencia a las relativas a las garantías individuales, entre las que se encuentra la consagrada por el citado artículo 4o.

Considerando segundo: Que es positivamente urgente se expida la ley reglamentaria del expresado artículo constitucional, teniendo en cuenta los graves males que ocasiona a la sociedad el ejercicio de profesiones científicas por quienes no tienen los conocimientos ni la idoneidad necesarios, sobre todo por lo que respecta a la Medicina en sus diferentes ramos.

Considerando tercero: Que sólo en la capital de nuestra República encuentran todavía campo abierto los charlatanes, pues en todas las capitales del extranjero y en muchos de los Estados, se ha reglamentado ya el ejercicio de las profesiones científicas, habiéndose limitado las Cámaras legislativas, en la mayoría de los casos, a señalar, en la ley respectiva, las profesiones que requieren título para su ejercicio, a determinar las penas en que incurren los que las ejercen sin el correspondiente título, y a mencionar las bases generales bajo las cuales el Poder Ejecutivo tiene que fijar las condiciones reglamentarias que deben llenarse para la adquisición de tales títulos, siendo un notable ejemplo de la precisión y eficacia de una ley sobre la materia, en tales términos, la expedida en Francia con fecha veinte de noviembre de mil ochocientos noventa y dos.

"Considerando cuarto. Que la autoridad sanitaria ha sido siempre la encargada de vigilar por el ejercicio de las distintas profesiones médicas en sus diferentes ramos, siendo, por lo tanto, la más adecuada para que se le faculte con el objeto de que pueda suspender en el ejercicio de alguna de esas profesiones, a las personas que, por su notoria incompetencia o por haber cometido un delito en el ejercicio de su profesión, sean un positivo peligro para la salubridad pública.

"Considerando quinto: Que es a la misma autoridad a la que compete la vigilancia del estricto cumplimiento de la presente ley, por lo que respecta al ejercicio de las distintas profesiones médicas, siendo, por lo tanto, la que debe estar legalmente capacitada para vigilar ese ejercicio.

"Por todo lo expuesto, sometemos a la deliberación y aprobación de esta honorable Cámara, el siguiente proyecto de ley...."

El C. Moreno Jesús Z., interrumpiendo: Moción de orden, señor presidente. Pido la palabra para una moción de orden. En la sesión pasada de Cámara, quedó pendiente de votación el proyecto relativo a Presupuestos; en consecuencia, antes de pasar a cualquier otro asunto, debe votarse éste, y esto es lo que muy respetuosamente pido a la Presidencia.

El C. presidente: La Presidencia se sirve informar al ciudadano Moreno que, en cumplimiento del Reglamento, primero se debe de dar cuenta con los asuntos en cartera, e inmediatamente se pasará a la votación pendiente.

- El C. prosecretario Castrejón, continuando:

"......Artículo 1o. Para ejercer en el Distrito y Territorios Federales la Abogacía, la Arquitectura, la Cirugía, la Farmacia, la Homeopatía, la Ingeniería, la Medicina, la Obstetricia la Odontología, la Química y la Veterinaria, así como cualesquiera de las especialidades de estas profesiones, se necesita el título respectivo, expedido por la autoridad legalmente facultada para ello en el propio Distrito Federal, o revalidado por la misma autoridad, con sujeción a las disposiciones reglamentarias correspondientes.

"Artículo 2o. Las personas que en el Distrito o Territorios Federales ejerzan alguna de las

profesiones y especialidades enumeradas en el artículo que antecede, sin tener el título legal correspondiente, sufrirán la pena de uno a dos años de prisión y, además, una multa de cien mil pesos.

"Artículo 3o. El Eejecutivo Federal expedirá el reglamento correspondiente para fijar los requisitos bajo los cuales pueden adquirirse o revalidarse los títulos de las profesiones iniciadas, sujetándose a las siguientes prevenciones generales:(a) Determinará, con toda claridad , la denominación legal que tendrá derecho a usar el profesionista titulado, quedando prohibido a éste usar como título otra denominación distinta. (b) Para la revalidación de títulos expedidos por las autoridades de los Estados, no exigirá más requisitos que la autenticidad de dichos títulos, la comprobación de que fueron expedidos con sujeción a las leyes relativas, y la identificación de los interesados, debiendo sujetarse éstos, por lo que respecta al uso de la denominación legal que les corresponda como profesionistas, a las prevenciones del reglamento respectivo. (c) Para la revalidación de títulos expedidos en el extranjero, fijará las bases que crea convenientes; pero siempre bajo la estricta reciprocidad, de manera que los profesionistas titulados en el extranjero, se sujeten a los mismos requisitos que a los profesionistas nacionales se les exige en su respectivo país. (d) Para la revalidación de títulos expedidos por las escuelas libres de la República, tendrán en cuenta los programas de estudios de dichas escuelas, concediendo la revalidación, en todo caso, cuando, además de ser iguales o equivalentes a los de las facultades correspondientes de la Universidad Nacional, el interesado acredite haber cursado todas las materias y haberse examinado al fin de cada curso, en el periodo ordinario de exámenes y no a título de suficiencia o por exámenes extraordinarios; en caso contrario, la revalidación sólo se otorgará previo el examen de incorporación correspondiente, en los términos que fije el reglamento de esta ley.

"Articulo 4o Para el ejercicio de las distintas profesiones médicas en sus diferentes ramos, además del título legal a que se refiere el artículo 1o. de esta Ley, se necesitará el permiso correspondiente del Consejo Superior de Salubridad, el que tendrá la obligación de otorgarlo a todo el que compruebe tener el título correspondiente, quedando además facultada la propia autoridad para retirar los permisos a los profesionistas que a su juicio sean notoriamente incompetentes, los que podrán readquirir su permiso mediante el examen de competencia que sustentarán en los términos que establezca el Reglamento de esta Ley. La propia autoridad sanitaria retirará también los permisos a todos los profesionistas que hubieren quedado ejecutoriamente sentenciados con motivo de faltas o delitos en el ejercicio de su profesión, no volviendo a concederlos a dichas personas, sino después de un plazo que no bajará de un año ni excederá de cinco, y que fijará teniendo en cuenta la gravedad de la falta o delito. Los acuerdos o determinaciones que con motivo de este artículo tiene facultad para dictar el Consejo de Salubridad, los tomará en sesión plena para la que se necesitará la concurrencia de las tres cuartas partes de sus miembros, y por mayoría absoluta de votos.

"México, D.F., a cinco de noviembre de mil novecientos veinte .- Enrique Hernández Alvarez.- Ricardo A. Alvarez.- Federico Guillén.- Edmundo G. Cantón M.- José H. Romero.- Carlos Gómez.- Antonio Díaz.- Doctor V. A. del Pino.- Pedro de Alba.- F. M. de Escobar.- E. Bordes Mangel.- José Macías Rubalcaba.- E. Portes Gil.- Leopoldo Estrada.- Liborio Espinosa y E.- Rodrigo Gómez.- Manuel Ortiz.- Enrique von Borstel.- Jaime A. Solís.- N. R. Vázquez.- José Méndez.- Lucas Contreras.- Rafael Martínez de Escobar.- T. T. Gutiérrez.- Ignacio C. Villegas.- A. Maldonado.- S. Franco Urías.- Guillermo Rodríguez.- M. F. Altamirano.,- I. Borrego.- A. C. Rama.- Juan B. Sariol.- L. Zincúnegui T.- C . Argüelles.- José R. Colón.- Ángel Alanís.- Juan B. Salazar.- José Juan Ortega.- Leopoldo Guadarrama.- J. M. Vergara.- Rodrigo Palacio.- Gustavo P. Serrano.- Francisco López Soto.- E. M. Barragán.- Erasmo Trejo.- A. Cienfuegos y Camus.- J. M. Soto - Edmundo Bolio.- V. Alvarez.- Manuel Berzunza.- Francisco Soto.- Martínez Rendón Miguel.- L. Guzmán.- Arnulfo Portales.- Flavio B. Ayala.- Felipe de la Barrera.- Lucas Lira.- L. Sánchez de Cima.- Ignacio Luquín.- J. C. Miramontes.- L. Gámiz.- Antonio Ortega.- R. Velarde.- S. García.- Carlos Chico.- A. Arroyo Ch.- B. Carrillo P.- Abraham Franco.- Nicolás Cano.- E. Aguirre C.- C. Munguía.- Moisés Huerta.- I. Cervantes.- J. B. González.- F. de la Torre.- M. Tello.- Fidel Ramírez M.- A. Gutiérrez Castro.- Godofredo Guzmán Peláez.- Porfirio del Castillo.- Manuel E. Miravete.- Francisco Garza."- A la 2a. Comisión de Puntos Constitucionales que tiene antecedentes, e imprímase.

- El mismo C. prosecretario, leyendo:

"Ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados.- Presente.

"Hoy digo al ciudadano presidente de la República:

"Manuel E. Ortiz, abogado, con domicilio en la casa número 162 de la calle de San Felipe Neri de esta Ciudad, y con el carácter de presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Michoacán, ante usted, con el mayor respeto comparezco y expongo:

"Que a fin de que por medio del elevado conducto de usted, sea consignado ante la autoridad judicial que corresponda, vengo a presentar en contra del señor doctor Primo Serranía Mercado, formal acusación por los delitos de violación a las constituciones General de la República y particular del Estado de Michoacán, desobediencia a un mandato de autoridad legítima y usurpación de funciones, fundando mi querella en los hechos y consideraciones de derecho que en seguida paso a exponer:

"Hechos:

"I. El señor general Lázaro Cárdenas, que fungió como gobernador interino del Estado de Michoacán en las postrimerías del periodo constitucional que feneció el día 16 de septiembre último, declaró en la misma fecha citada que no entregaría el Poder Ejecutivo del Estado a ninguno de los

candidatos que figuraron en la justa electoral para el nuevo periodo.

"II. Expirado que hubo el término constitucional durante el cual funcionaron los poderes del Estado, desaparecieron legalmente el Ejecutivo y el Legislativo pero no el Judicial, pues que previniendo el artículo 70 de la Constitución Política del Estado que los ministros que integren el Tribunal Superior sigan por ministerio de la ley en el desempeño de sus funciones hasta que se presenten los nuevamente electos, claro es que legítimamente subsistía ese Poder y que a su presidente correspondía encargarse de la gubernatura del Estado, supuesto que el señor general Cárdenas el 16 de septiembre había perdido, por prevensión expresa de la Constitución, todo carácter de legalidad, en virtud de lo terminantemente prescripto en la disposición constitucional ya citada en la 164 del mismo Código.

III. En la ya citada fecha, 16 de septiembre de 1920, yo, con el carácter de presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Michoacán, dirigí al señor general Cárdenas un oficio por medio del cual le pedía que me fuera entregado el Poder Ejecutivo del Estado, en cumplimiento de lo mandado por las prevenciones legales que se citan en el párrafo que antecede. El señor general Cárdenas contestó que consultaría el caso con el señor presidente de la República, sin que con posterioridad llegara a dar una contestación definitiva y categórica.

"IV. El 23 de septiembre del año en curso queda de hecho, aunque no de derecho, disuelto el Poder Judicial del Estado, sin que esa disolución implique la pérdida de los derechos míos como presidente del Supremo Tribunal de Justicia, pues el artículo 164 de la Constitución Política local es terminante a este respecto.

"V. El 25 de septiembre de este mismo año, el Senado de la República declara que han desaparecido los poderes de Michoacán y rectifica mis derechos, con el carácter que ya tengo expresado, confirmándolos más tarde, al discutirse por segunda vez el conflicto michoacano, en atención a las observaciones hechas por el Ejecutivo de la Nación.

"VI. El señor licenciado José Inocente Lugo, subsecretario de Gobernación Encargado del Despacho, sin fundamento en qué basar sus aseveraciones declaró a la prensa metropolitana que yo, presidente del Tribunal de Justicia del Estado, me había rehusado a asumir el Poder Ejecutivo del mismo, y viéndome obligado por esa declaración a hacer una rectificación, también por medio de la prensa según puede verse en el ejemplar de "El Universal" que acompaño a este escrito.

"VII. El mismo señor licenciado Lugo ordenó posteriormente al licenciado José Huerta, que estaba al frente del Gobierno de Michoacán, por entrega que de él le hizo el señor general Cárdenas, en virtud de la aceptación de la renuncia de éste último, que entregara el Poder al doctor Serranía Mercado, quien imposibilitado legalmente para desempeñar dicho encargo por haber sido gobernador bonillista en abril del año en curso; por estar sujeto a un proceso, y porque la desaparición de los poderes en el Estado de Michoacán no se realizó estando en funciones la Comisión Permanente, único caso probable en que el doctor de referencia pudiera llegar a la gubernatura, pues que formaba parte de dicha Comisión.

"VIII. Aun en el falso supuesto de que al doctor Serranía Mercado correspondiera por ministerio de ley encargarse provisionalmente del Poder Ejecutivo del Estado de Michoacán, no podría hacer entrega de ese mismo Poder a ninguno de los candidatos que contendieron en las últimas elecciones para gobernador del Estado, pues la Constitución general de la República, en su artículo 76, previene de modo categórico que al encargarse provisionalmente de la gubernatura un individuo por la desaparición de los poderes del Estado, será exclusivamente para convocar a elecciones y no para calificar las llevadas a efecto con anterioridad, pues resolver a este respecto por el gobernador provisional que designe el Senado o que asuma el poder de acuerdo con las prevenciones de la Constitución local, implica una flagrante violación a dicho Código y a la Constitución general de la República, dado que ambas previenen que desde luego se convoque a elecciones. Se incurre, además, en la comisión de delito común de usurpación de funciones, supuesto que no es el gobernador provisional el que debe resolver acerca de la validez o nulidad de las elecciones verificadas y se comete también el delito de desobediencia a un mandato de autoridad legítima, desde el momento en que dos ocasiones el Senado de la República ha declarado que los poderes de Michoacán han desaparecido, y, en consecuencia, ninguna resolución de las llamadas nuevas legislaturas constitucionales del Estado podría servir de base al delincuente para dictar una resolución a este respecto fundada en disposiciones legales, inconmovibles o en acuerdos de autoridades legítimas competentes para el caso. "A la precedente relación de hechos son aplicables las siguientes consideraciones de "Derecho:

"1o. Dice la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en la fracción V de su artículo 76, que son facultades exclusivas del Senado, declarar, cuando hayan desaparecido todos los poderes constitucionales de un Estado, que es llegado el caso de nombrarle un gobernador provisional, quien convocará a elecciones conforme a las leyes constitucionales del mismo Estado. Y el artículo 164 de la Constitución Política del Estado de Michoacán, complementaria de la general ya citada y en concordancia con ella, dice en su parte final que la persona que asuma el Poder Ejecutivo, convocará desde luego a elecciones, sujetándose en lo posible a la forma y términos prescriptos por esta Constitución.

"2o. El mismo artículo 164 de la Constitución local que acaba de citarse, previene que en el caso de la fracción V del artículo 76 de la Constitución general, asumirá el Poder Ejecutivo cualquiera de los funcionarios siguientes, por el orden de designación:

"I. El presidente de la última Legislatura o el de la Diputación Permanente, si la disolución de los poderes ocurriese estando ésta en funciones;

"II. El vicepresidente de la Legislatura;

"III. El último secretario de Gobierno, y

"IV. El último presidente del Supremo Tribunal de Justicia.

"Ahora bien; por la relación de hechos que anteceden, se ha demostrado que no pudieron asumir el Poder Ejecutivo del Estado de Michoacán el presidente de la Legislatura, su vicepresidente ni el último secretario de Gobierno, porque los dos primeros no estaban en las condiciones requeridas para ese efecto y porque el tercero había renunciado con anterioridad a ese cargo. Quedaba sólo capacitado constitucionalmente para ocupar este alto puesto el presidente del Supremo Tribunal de Justicia, que al presentarse el caso constitucional que nos ocupa, era yo.

"Si no se ha hecho lo que las leyes citadas previenen, es indiscutible que se han violado las dos constituciones y que, como ello implica la comisión de un delito, es de aplicarse al autor de él la pena en que haya incurrido.

"3o. Está probado que el señor doctor Primo Serranía Mercado no pudo conceptuarse legalmente como un funcionario público, y el artículo 758 del Código Penal para el Distrito y Territorios federales, que es el aplicable, porque el delito es de orden general, dice que el que sin ser funcionario público ejerza algunas de las funciones de tal, sufrirá la pena de 6 meses de arresto o 3 años de prisión y multa de $100.00 a $2,000.00. Considerándose como agravantes de primera o cuarta clase, a juicio del juez, la importancia de la función usurpada.

"4o. El que sin causa legítima rehusare prestar un servicio de interés público a que la ley lo obligue, o desobedeciere un mandato legítimo de la autoridad pública... será castigado con arresto mayor y multa de $10.00 a $100.00, según lo terminantemente dispuesto por el artículo 904 del mismo Código Penal.

"Si el Senado de la República ha declarado que los poderes de Michoacán han desaparecido y que el gobernador provisional que asuma el Ejecutivo convocará desde luego a elecciones, es inconcuso que quien ocupare ese alto puesto debió desde luego hacer esa convocatoria; y como con tal mandato no se cumplió se ha incurrido en la responsabilidad penal que señala el artículo que acaba de citarse.

"5o. El capítulo destinado en el Código Penal que se ha invocado a los atentados contra las garantías constitucionales, al referirse a los delitos cometidos en las elecciones populares, previene en su artículo 965, que cualquier otro fraude que se cometa en una elección y que no esté especificado en ese capítulo, se castigará con multa de $5.00 a $ 500.00, con reclusión de 3 días a 3 meses o con ambas penas, según las circunstancias.

"Es indudable que el señor doctor Serranía Mercado, al calificar de válidas las elecciones para gobernador verificadas últimamente en Michoacán, y declarar que son buenos los votos emitidos en favor del señor general Múgica, ha cometido un fraude electoral, demostrado con la exposición de hechos contenidos en esta demanda.

"6o. Constitucionalmente yo, como presidente del Supremo Tribunal de Justicia, era el único que tenía derecho para ocupar provisionalmente la gubernatura del Estado de Michoacán, y al proceder el señor doctor Serranía Mercado en forma distinta a la prevenida por las constituciones general de la República y particular del Estado, violó el artículo 992 del Código Penal ya citado y, en consecuencia, se hizo acreedor a la pena que el mismo precepto señala.

"7o. Todavía más: el señor doctor Primo Serranía Mercado estuvo ejerciendo funciones de gobernador provisional de Michoacán sin haber tomado posesión legítima de ese cargo ni haber llenado los requisitos legales; en consecuencia, infringió lo dispuesto por el artículo 993 del ordenamiento invocado, haciéndose merecedor de las penas que el mismo señala.

"El Código Penal del Estado de Michoacán contiene prevenciones iguales a las apuntadas, y en caso de resolverse que aquel cuerpo de leyes es el aplicable, quedarían en pie los fundamentos que de derecho anotados, pues en el Código local existen artículos correlativos de los que acaban de citarse.

"Por lo expuesto y con apoyo en las disposiciones legales aplicadas, a usted, con todo respeto pido que una vez tomada debida nota de esta acusación, sea usted servido consignarla a la autoridad competente que corresponda, a fin de que ésta aplique el castigo a que se ha hecho acreedor el responsable de los hechos denunciados y desde luego se dicten las medidas encaminadas a restablecer el orden constitucional de Michoacán.

"Protesto a usted las seguridades de mi muy atenta consideración y respeto.

"Sufragio Efectivo. No Reelección.- México, 27 de octubre de 1920.- Manuel Ortiz.- Mi domicilio: Donceles, número 2.

"Los subscriptos, diputados en ejercicio, hacemos nuestro el presente escrito, para el hecho de que sea leído ante esta Representación Nacional.

"México, D. F., a 5 de noviembre de 1920.- José Sánchez A.- Martín Barragán.- José Bravo B.- B. Ibarra.- Uriel Avilés.- P. Carriedo Méndez.- S. Hurtado.- L. Zincúnegui T.- J. M. Soto." - Dése cuenta, y archívese.

- El C. prosecretario Castrejón, leyendo:

"H. Asamblea:

"La voz pública viene clamando en contra del Poder Legislativo, haciéndole los más duros cargos, como los de incompetente, incondicional y poco escrupuloso.

"Los principales diarios metropolitanos, los políticos despechados, los autores de obras teatrales, las asociaciones obreras, y hasta algunos ciudadanos delegados al H. Congreso Nacional de Ayuntamientos, faltando al respeto que deben a uno de los poderes de la Federación, injurian, casi diariamente, a los ciudadanos que integran dicho poder, porque, según ellos, ganan $1,000.00 al mes y no hacen nada en bien del país.

"Sin la idea de aprobar tan injustos como apasionados cargos, en la mayoría de los casos, sino obedeciendo al clamor general de pública protesta y a la necesidad de reducir impuestos que, por lo gravoso, ya no los soporta el pueblo y, en consecuencia, disminuir los Presupuestos de Egresos, muy especialmente los del Ejecutivo, he creído de

mi deber proponer que la partida del ramo primero, relativa a dietas de los ciudadanos senadores y diputados, sea reducida considerablemente.

"Por lo expuesto, y por las demás razones que formularé en la tribuna, si fuere necesario, me permito someter a la consideración de vuestra soberanía, la siguiente iniciativa:

"Única. Las dietas de los ciudadanos senadores y diputados, a partir del 1o. de enero próximo, serán de $20.00 diarios."

"Salón de Sesiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, a los 6 días del mes de noviembre de 1920.- Luis Espinosa." (Aplausos.)- De primera lectura.

El C. Espinosa: Pido la palabra, señor presidente, en contra del trámite.

El C. prosecretario Castrejón: Se va a proceder....

El C. Espinosa: Pido la palabra en contra del trámite. Para manifestar a su señoría que, en virtud de que este asunto es una iniciativa sobre reforma al Presupuesto, entiendo que, en lugar de primera lectura, debe dársele el trámite de que pase a una Comisión de Presupuestos. (Voces: ¡No! ¡No! ¡Si!)

El C. secretario Valadez Ramírez: Se informa al compañero Espinosa que, no estando firmada esta iniciativa por mayoría de diputación, forzosamente tiene que quedar de primera lectura.

El C. Bojórquez: Moción de orden.

- El C. prosecretario Castrejón, leyendo:

"Honorable Asamblea:

"El subscripto, diputado por el 11 distrito electoral del Estado de Oaxaca, con todo respeto expone:

"Que al venir del Estado de Oaxaca con objeto de asistir a las sesiones de Colegio Electoral y Juntas Preparatorias, dejó pendientes múltiples asuntos, tanto particulares como de familia; por lo que hoy viene a solicitar de vuestra soberanía le conceda, previa dispensa de trámites, licencia por veinte días, con goce de dietas.

"México, a 8 de noviembre de 1920.- Francisco Castillo."

En votación económica se consulta si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Se dispensan los trámites. Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Concedida.

El C. prosecretario Castrejón: Se va a proceder a la votación nominal, solicitada por el ciudadano Céspedes, relativa a la suspensión de la discusión del Presupuesto de Egresos, hasta que se haya discutido previamente el de Ingresos.

El C. secretario Valadez Ramírez: Se va a dar lectura a la moción suspensiva que se va a votar:

"Señor:

"Con fundamento en la fracción IV del artículo 74 de la Constitución, que previene que debe discutirse previamente al Presupuesto de Egresos, la Ley de Ingresos, pido se suspenda la discusión iniciada ya sobre el ramo del Poder Legislativo.

"México, noviembre 6 de 1920.- E. L. Céspedes."

Por la afirmativa.

El C. prosecretario Castrejón: Por la negativa.

(Se recoge la votación) Votaron por la negativa 30 ciudadanos diputados.

El C. secretario Valadez Ramírez: Votaron por la afirmativa 98 ciudadanos diputados. En consecuencia, ha sido aprobada la moción suspensiva.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"Señor:

"Los subscriptos, diputados en ejercicio, y con el objeto de hacer eficaz la aprobación de Presupuestos, de acuerdo con los preceptos constitucionales, sometemos a vuestra soberanía la siguiente proposición:

"Única. Nómbrese una Comisión del seno de esta Cámara para que se acerque al presidente de la República, a fin de manifestarle la ingente necesidad de que se envíe cuanto antes la Ley de Ingresos que sirva para fijar el criterio de esta Cámara en las discusiones sobre los distintos ramos de los gastos de la nación".

"México, noviembre 6 de 1920.- Jesús Z. Moreno.- E. L. Céspedes."

En votación económica se pregunta si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, se servirán ponerse de pie.

El C. Aillaud: Pido la palabra.

El C. secretario Valadez Ramírez: Se dispensan los trámites. Está a discusión. Los ciudadanos diputados que deseen hacer uso de la palabra, se servirán pasar a inscribirse. (Murmullos.) No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba la proposición. Los que estén por la afirmativa, se servirán ponerse de pie. Aprobada.

La Presidencia a tenido a bien designar para que desempeñen esta comisión, a los ciudadanos Céspedes, Casas Alatriste, Enrique Barragán, Luis Espinosa, Montes de Oca David y secretario Valadez Ramírez.

El C. Bojórquez: Señor presidente; Pido la palabra para un hecho.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Bojórquez.

El C. Bojórquez: Ciudadanos diputados: Es bien sabido de todos vosotros y de la nación entera, que con marcada frecuencia la prensa de la capital que se ocupa de nuestros asuntos, lo hace siempre en contra de los intereses nacionales y, sobre todo, en contra de las determinaciones que toma la Cámara de Diputados. Con marcada frecuencia también aparecen editoriales en contra de la Representación Nacional, y ya hemos visto de qué manera se ha ido perdiendo el respeto, gracias a esa labor de la prensa, aun en el mismo teatro, puesto que ya nosotros somos un tema de burla para nuestros incipientes y malévolos autores nacionales. Y, ciudadanos representantes, cuando se

esgrime toda clase de armas en contra de nosotros, cuando un grupo numeroso de la Representación Nacional que viene con definidos propósitos revolucionarios con ideales levantados y, sobre todo, con el deseo de trabajar por que sean llevadas adelante determinadas reformas que ansía el pueblo de México, es injusto que hombres que no tienen una hoja de servicios limpia, vengan a esgrimir todas sus armas en contra de nosotros. Entre los periódicos que más se han distinguido últimamente en su labor contraria a la Cámara de Diputados, figura "El Heraldo de México". Casualmente esta tarde yo he encontrado una hoja suelta, que exhibe de cuerpo entero al director de ese periódico, que ha venido escribiendo en todos los órganos de la prensa nacional, desde mucho antes que cayera la dictadura porfiriana. Por eso ciudadanos representantes, ya que no se puede protestar en otra forma, puesto que la Representación Nacional no tiene un órgano con qué defenderse, vengo en este momento a exhibiros esta hoja suelta, donde aparece la fotografía y el nombre del ciudadano Manuel Carpio, director de "El Heraldo de México", que al mismo tiempo postula presidente de la República al ciudadano Ignacio Bonilla. Ya comprenderéis, pues, de qué calibre (Risas.) será el nivel moral de este individuo; ya podéis juzgar por qué la labor del director de "El Heraldo de México", candidato bonillista por el Estado de Jalisco para el Congreso de la Unión, es contraria a los intereses de esta Cámara y contraria a la Revolución. Por eso, ciudadanos representantes, no habiendo otro medio de hacerlo, como he dicho, yo he venido a esta tribuna para exhibiros al ciudadano Carpio y para que sepáis hasta dónde podéis tomar en cuenta las palabras de un hombre que tiene tan pésimos antecedentes políticos. (Aplausos).

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Comisión de Presupuestos y Cuenta.

"H. Asamblea:

"Al estudio de esta Comisión paso, por acuerdo de esa H. Cámara, el proyecto de decreto que envía la Comisión de Administración de la Cámara de Senadores, proponiendo se aumente en la cantidad de $6,000.00 la partida número 63 del Presupuesto de Egresos vigente, destinada a gastos extraordinarios del Senado, en virtud de encontrarse a la fecha, agotada. "

La Comisión no encuentra objeción alguna que hacer al proyecto de referencia y, por tanto, consulta la aprobación del siguiente proyecto de decreto: "Artículo único. Se amplía en la cantidad de $6,000.00 la partida número 63 del Presupuesto de Egresos vigente, destinada a gastos extraordinarios de la Cámara de Senadores."

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso General.- México, 25 de octubre de 1920.- M. García Vigil.- Candelario Garza.- R. Casas Alatriste.- Israel del Castillo.- A. Aillaud."

Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, se va a proceder a tomar la votación nominal.

El C. prosecretario Castrejón: Por la afirmativa.

El C. secretario Valadez Ramírez: Por la negativa. La Secretaría suplica atentamente a los ciudadanos diputados se fijen en el turno que les corresponde para votar, con objeto de ahorrar tiempo.

(Se recoge la votación.)

El C. prosecretario Castrejón: Votaron por la afirmativa 7 ciudadanos diputados.

El C. secretario Valadez Ramírez: Votaron por la afirmativa 104 ciudadanos diputados; en consecuencia, no hay quórum.

El C. presidente, a las 6.32 p. m.: Se levanta la sesión y se cita para mañana, a las cuatro, a sesión de Congreso General y, en seguida, continuará la orden del día. (Voces: ¡No! ¡No vamos a trabajar!)