Legislatura XXIX - Año I - Período Ordinario - Fecha 19201213 - Número de Diario 90

(L29A1P1oN090F19201213.xml)Núm. Diario:90

Colegio Electoral

ENCABEZADO

MÉXICO, LUNES 13 DE DICIEMBRE DE 1920

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

AÑO I. - PERIODO ORDINARIO XXIX LEGISLATURA TOMO I. - NÚMERO 90

SESIÓN DE COLEGIO ELECTORAL DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 13 DE NOVIEMBRE DE 1920

SUMARIO

1.- Se abre la sesión. Lectura y aprobación del acta de la anterior.

2.- Es aprobado sin debate, el dictamen reformado relativo al 19 distrito electoral de Veracruz. Se levanta la sesión.

DEBATE

Presidencia del

C. MARTÍNEZ DE ESCOBAR R.

1 (Asistencia de 126 ciudadanos diputados y presuntos diputados.)

El C. presidente, a las 11.25 a. m.: Se abre la sesión de Colegio Electoral.

- El C. secretario Tirado, leyendo:

"Acta de la sesión de Colegio Electoral celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el día diez de diciembre de mil novecientos veinte.

"Presidencia del C. Aurelio Manrique.

"En la ciudad de México, a las once y veinte de la mañana del viernes diez de diciembre de mil novecientos veinte, con asistencia de ciento treinta y tres ciudadanos diputados y presuntos diputados, se abrió la sesión.

"El acta de la celebrada el día anterior se aprobó sin objeción.

"Se dio cuenta con un escrito en que el ciudadano presunto diputado Custodio Valverde pide se invite a la primera Sección de la primera Comisión de Poderes para que señale el día en que presentará el dictamen relativo a las elecciones en el primer distrito electoral de Guerrero. - Transcríbase a la Sección respectiva.

"A moción del C. Vito Alessio Robles, la Secretaría dio a conocer los nombres de los diputados que integran dicha primera Sección; el C. Borrego, como miembro de ella, y a invitación de la Presidencia, informó sobre el estado en que se encuentra el estudio del referido expediente electoral. El ciudadano presidente hizo un excitativa para que a la mayor brevedad se presente este dictamen.

"El C. Porfirio del Castillo continuó su discurso en contra del dictamen referente a las elecciones del quinto distrito electoral de Puebla, que propone para diputado propietario al C. Carlos Sánchez Pontón y para diputado suplente al C. Cosme del Razo. El orador fue interrumpido por el C. Carlos Sánchez Pontón para interpelar al C. Borrego, quien contestó, y por mociones de orden de los CC. Jesús Z. Moreno y Borrego.

"El C. Carlos Sánchez Pontón habló en pro, contestó una interpelación del C. Porfirio del Castillo y fue interrumpido por una aclaración del C. Barbosa.

"Usó de la palabra en contra el C. Sebastián Rojas, quien al terminar su peroración dirigió frases injuriosas al C. Carlos Sánchez Pontón, que dieron lugar a mociones de orden de los CC. César A. Lara y Altamirano.

"Suficientemente discutido el dictamen, y así que el C. Guzmán Peláez retiró la petición que previamente había hecho para que se recogiera votación nominal sobre la validez de las elecciones, en votaciones económicas sucesivas se aprobaron las dos proposiciones con que dicho dictamen concluye y la Secretaría hizo la declaración correspondiente.

El C. Porfirio del Castillo pidió se hiciese constar en esta acta su protesta, porque, a su juicio, la Secretaría había festinado la votación del primer punto resolutivo. Con este motivo, hicieron aclaraciones el C. secretario Tirado y el mencionado C. Del Castillo y la Presidencia expresó que asumía la responsabilidad de este incidente.

"El ciudadano presidente dijo que ya no había en cartera ningún dictamen sobre credenciales y que el expediente relacionado con las elecciones del décimonoveno distrito electoral de Veracruz pasaba de la tercera Sección a la séptima.

"El C. César A. Lara se refirió a los expedientes que aún no ha dictaminado la quinta Sección, de que forma parte el C. Manrique, y éste manifestó que en la próxima semana se presentarán esos dictámenes.

"El C. Cienfuegos y Camus expuso que obraba en poder de la Secretaría el que se refiere a las elecciones del quince distrito electoral de Puebla. La Presidencia ratificó esto y anunció que en la próxima sesión se discutiría ese dictamen.

"A la una y veinte se levantó la sesión."

Está a discusión el acta. Los ciudadanos diputados y presuntos diputados que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse. No habiendo ningún ciudadano diputado y presunto diputado que desee hacer uso de la palabra, en votación económica se consulta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobada el acta.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"1a. Comisión Revisora de Credenciales. - 7a. Sección.

"H. Asamblea:

"En la sesión de Colegio Electoral que tuvo verificativo el día 8 del mes en curso, la mayoría de la Asamblea rechazó la proposición segunda del dictamen que presentara la 3a. Sección de la 1a. Comisión Revisora de Credenciales, proponiendo como diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 19 distrito electoral del Estado de Veracruz, a los CC. Jesús Z. Nucamendi y Aurelio Pavón Flores; y como por orden de la Presidencia fue turnado el día de hoy a esta 7a. Sección el respectivo expediente para que se reformara el propio dictamen en el sentido en que se discutió y fue votado, cumpliendo con nuestro deber y de conformidad con la resolución tomada por vuestra soberanía, nos permitimos someter a vuestra aprobación, la proposición siguiente:

"Única. Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 19 distrito electoral del Estado de Veracruz, los CC. Aurelio P. Márquez y Bernardo H. Simoneen."

"Sala de Comisiones de la H. Cámara de Diputados. - México, a 10 de diciembre de 1920. - A. Aillaud. - Moisés Huerta. - Porfirio del Castillo."

Está a discusión. Los ciudadanos diputados y presuntos diputados que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse. No habiendo ningún ciudadano diputado o presunto diputado que desee hacer uso de la palabra, en votación económica se consulta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobado. (Aplausos.)

La Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 19 distrito electoral del Estado de Veracruz, los ciudadanos Aurelio P. Márquez y Bernardo H. Simoneen.

No habiendo otro expediente de Colegio Electoral, se levanta la sesión de Colegio Electoral y se pasa a sesión de Cámara.

El C. Borrego: Sí hay expedientes de Colegio Electoral; hay un dictamen en favor del señor F. Méndez, que debía haberse puesto a discusión hoy.

El C. presidente: La Presidencia declara al ciudadano diputado Borrego, que no se puso a debate el asunto a que se refiere, porque el interesado que trae la credencial no está aquí, está en Puebla y puso un telegrama suplicando que se le esperara, y por eso la Presidencia no lo puso a discusión. Si la Asamblea, a pesar de no estar aquí el interesado, quiere que se trate este asunto, la Presidencia no tiene ningún inconveniente. (Voces: ¡No! ¡No!) Se levanta la sesión de Colegio Electoral y se pasa a sesión de Cámara de Diputados. (11.40 a. m.)

SESIÓN DE LA CAMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 13 DE DICIEMBRE DE 1920

SUMARIO

1.- Se abre la sesión. Es leída y aprobada el acta de la anterior. Rinde la protesta de ley C. Aurelio P. Márquez, diputado por el 19 distrito electoral de Veracruz.

2.- Usan de la palabra para hechos el C. diputado Díaz Soto y Gama. Se recoge la votación pendiente, acerca de la proposición relativa a las elecciones municipales; es desechado.

3.- Documentos en cartera. La Secretaría de Gobernación envía los proyectos de ley de Ingresos y Egresos del Distrito Norte de la Baja California para 1921; recibo y a la Comisión de Presupuestos y Cuenta.

4.- Es aprobada sin debate, la minuta de la 1a. Comisión de Corrección de Estilo, que contiene el decreto que otorga pensión a la señorita Ana María Palacios; pasa al Ejecutivo para los efectos legales. Se concede licencia a los CC. diputados Azuara y Natalio Espinosa.

5.- Proposición del C. diputado Reinaldo Esparza Martínez, tendente a que se envíe un cablegrama de condolencia a la familia del extinto C. Jesús Urueta; aprobada.

6. - Proposición de los CC. diputados Guillermo Rodríguez y Nicolás Cano, a efecto de que las comisiones unidas del Petróleo investiguen e informen a esta Cámara acerca de las concesiones hechas por la Secretaría de Industria y Comercio. A discusión, se levanta la sesión por haber transcurrido la hora reglamentaria.

DEBATE

Presidencia del

C. MARTÍNEZ DE ESCOBAR R.

El C. presidente, a las 12.27 p. m.: Se abre la sesión.

El C. prosecretario Castrejón: La Secretaría hace esta aclaración a los ciudadanos diputados que dicen que no hay quórum: efectivamente, aquí en el salón no se ve a todos los ciudadanos diputados que han pasado lista, pero tienen por costumbre, desgraciadamente, venir a hacerse presentes y salirse luego, unas veces a comisiones y otras a la calle; de eso no es culpable la Secretaría.

El C. Altamirano: Moción de orden. La Secretaría está justificada al decir lo que pasa, pero el hecho es este: que dentro del salón, que es donde debe existir el quórum, no lo hay, ostensiblemente no lo hay. (Voces: ¡Muy bien!)

El C. presidente: Si los diputados que han pasado lista no se encuentran en el salón y se hallan en las comisiones o en cualquier otro lugar, pues...

mandarlos llamar, ¿por qué, si están tomando un vaso de agua o están en las comisiones, por qué se va a suspender la sesión? Para la Presidencia no puede haber otro documento que demuestre que hay quórum, más que la lista ante la cual se abre la sesión.

- El mismo C. prosecretario: Habiendo declarado abierta la sesión la Presidencia, la Secretaría da lectura al acta de la anterior.

El C. Moreno: Reclamo el quórum, señor presidente.

- El mismo C. prosecretario, leyendo:

"Acta de la sesión celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el día once de diciembre de mil novecientos veinte.

"Presidencia del C. Rodrigo Gómez.

"En la ciudad de México, a las once y cuarenta y cinco de la mañana del sábado once de diciembre de mil novecientos veinte, con asistencia de ciento veintiocho ciudadanos diputados, se abrió la sesión.

"El acta de la celebrada el día anterior se aprobó sin debate.

"Los CC. Siurob y Casa Alatriste, como miembros de la Comisión de Presupuestos y Cuenta, pidieron que se giraran los oficios respectivos, a fin de que a la mayor brevedad remita el Ejecutivo los proyectos de presupuestos correspondientes a los departamentos de Establecimientos Fabriles y Aprovisionamientos Militares, Contraloría y Universidad. La Secretaría manifestó que se accedería a esta petición.

"El C. Leopoldo Estrada, que forma parte de la segunda Comisión de Puntos Constitucionales informó, a moción del C. Bolio, que en la próxima semana se presentará el dictamen sobre la reforma al artículo 3o. constitucional.

"Continuó el debate de la proposición relacionada con el resultado de las elecciones municipales verificadas en esta ciudad el día cinco del presente mes.

"La Secretaría leyó el artículo 103 reglamentario y en seguida el C. Díaz Soto y Gama dio fin a su peroración en pro.

"Presidencia del C. Ignacio Borrego.

"El C. Rafael Martínez de Escobar pronunció un discurso en contra, y acto continuo se estimó la proposición suficientemente discutida.

"Se concedió la palabra al C. Díaz Soto y Gama para rectificar hechos y varios ciudadanos diputados se manifestaron inconformes con ello; el C. Luis Espinosa hizo una moción de orden y la Secretaría leyó el artículo 112 reglamentario. Este incidente dio lugar a manifestaciones de los concurrentes a las galerías, y como el desorden no terminara, la Presidencia levantó la sesión, pero inmediatamente se reanudó bajo la

"Presidencia del C. Rafael Martínez de Escobar.

"El ciudadano presidente manifestó su inconformidad para que el C. Soto y Gama rectificara hechos, y con este motivo hizo una moción de orden el C. Bordes Mangel. Después de aclaraciones de la Presidencia, se procedió a la votación nominal de la proposición.

"El C. Quiroga reclamó el quórum y la Presidencia hizo observar que el resultado de la votación demostraría si aquél se había desintegrado.

"Setenta y dos ciudadanos diputados votaron por la negativa y seis por la afirmativa. En consecuencia, no había quórum.

"A las dos y cuarenta y cinco de la tarde se levantó la sesión."

El C. Moreno: Moción de orden, señor presidente; no hay quórum.

- El mismo C. prosecretario Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica...

El C. Díaz Soto y Gama, interrumpiendo: Pido la palabra para rectificar hechos.

El C. presidente: Está a discusión el acta; no es el momento de rectificar hechos, sino después de aprobada el acta.

- El mismo C. prosecretario: No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén...

El C. Avilés, interrumpiendo: Pido votación nominal para que se vea que no hay quórum.

- El mismo C. prosecretario: Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobada el acta. Encontrándose a las puertas del salón el ciudadano diputado Márquez Aurelio P., la Presidencia, por conducto de la Secretaría, nombra en comisión a los señores Flores Joel, Octavio Paz y secretario Tirado, para que lo acompañen al salón a rendir la protesta de ley.

(Rinde la protesta legal el C. Aurelio P. Márquez, diputado por el 19 distrito electoral de Veracruz.)

Presidencia del

C. MANRIQUE AURELIO

El C. Moreno: Para una moción de orden, señor presidente.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Moreno para una moción de orden.

El C. Moreno: De una manera visible y notoria no hay quórum para sesión de Cámara de Diputados. (Voces: ¡Sí! ¡Sí! Murmullos. Desorden.) Perfectamente bien; ustedes tienen el derecho de aplastar a las minorías de las derechas, con gritos, y las minorías de las derechas, la única forma que tienen de protestar es la de abandonar el salón si no se pasa lista. Reclamo el quórum.

El C. presidente: No se exalte su señoría. Habiendo reclamado el quórum el ciudadano diputado por Paso del Macho, se procede a pasar lista. (Risas. Aplausos.)

El C. Paz: Moción de orden. Pido que al que se vaya, se le multe.

- El C. secretario Tirado, comienza a pasar lista.

El C. Lara César: Para una moción de orden, señor presidente. Yo hago constar que el ciudadano Moreno y otros dos o tres ciudadanos diputados tienen el fin preconcebido de que no haya sesión, y a eso se debe la maniobra de estar reclamando el quórum y estar haciendo propaganda entre los diputados de las derechas para que abandonen el salón. (Aplausos.)

- El mismo C. secretario, continúa pasando lista.

El C. prosecretario Castrejón: La Secretaría ruega atentamente a los ciudadanos diputados contesten al llamado que se les hace al pasar lista,

porque el compañero Tirado no los conoce perfectamente y, además, con el ruido que hay no se oye cuando contestan.

(Continúa pasándose lista.)

- El mismo C. secretario: Hay una asistencia de 131 ciudadanos diputados. Hay quórum. (Aplausos.)

El C. presidente: ¿Está conforme el ciudadano Moreno?

El C. Moreno: Pido la palabra. Hace un momento que decía el ciudadano Lara que había yo protestado con objeto de evitar que se trabajara; quiero establecer este hecho: ninguno de las derechas ha salido cuando se estaba pasando lista; nosotros a lo que nos oponemos es a que se abra la sesión sin el quórum reglamentario; evidentemente que hace un momento no lo había. Ahora hay quórum y estamos en nuestros puestos; eso es todo lo que quería aclarar.

El C. Díaz Soto y Gama: Señor presidente, pido la palabra.

El C. presidente: Sírvanse tomar asiento los señores diputados. Se va a recoger la votación pendiente en la última sesión relativa a las elecciones municipales en el Distrito Federal.

El C. Díaz Soto y Gama: Para moción de orden pido la palabra.

El C. presidente: Tiene la palabra, para una moción de orden, el ciudadano Soto y Gama.

El C. Díaz Soto y Gama: Me extraña sobremanera el trámite de la Mesa. Hace un momento, cuando se puso a discusión el acta antes de la votación, solicité, atentamente la palabra de la Presidencia para rectificar hechos relacionados con el debate de la sesión anterior y me contestó que inmediatamente después de aprobada el acta se me concedería; ¿hoy ya no se me concede?

El C. Altamirano: Moción de orden, señor presidente.

El C. Díaz Soto y Gama: Estoy hablando. ¿Quiere esto decir que la Presidencia se negó con poca buena fe o con ninguna buena fe a concederme la palabra antes de la votación del acta para cuando llegara la oportunidad negármela? Yo quisiera que la Presidencia me explicara esas contradicciones que son manifiestas; de manera que yo insisto en pedir la palabra para rectificación de hechos.

El C. Altamirano: Moción de orden.

El C. presidente: Voy a contestar al señor Soto y Gama. Aunque es verdad que la Presidencia es una, la verdad es que no puedo referirme a promesa ninguna, porque yo personalmente no la hice. Creo que la rectificación de hechos a un asunto que ya está agotado, sólo cabría después de la votación; sin embargo, no tengo ningún empeño en negar la palabra al ciudadano Soto y Gama y la Presidencia se la concede.

El C. Altamirano: Pido la palabra.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Altamirano: Yo creo, señores diputados, que en este caso el señor compañero Soto y Gama no está en lo debido, porque no tan sólo se va a proceder a la votación, sino que ya se tomó una votación con respecto al asunto que ya se debatió y no se hizo declaratoria, porque faltó el quórum. De manera que aquí no cabe ya absolutamente ninguna discusión más, sino únicamente ir a la votación, y después el señor compañero Soto y Gama hará todas las rectificaciones que quiera hacer. (Aplausos.) Pido, señor presidente, que se lea el artículo reglamentario alusivo a esto.

El C. presidente: Yo creo que en realidad tiene derecho de hablar en estos momentos el ciudadano diputado Díaz Soto y Gama y voy a explicar al ciudadano diputado Altamirano por qué: si estuviésemos, señores diputados. (Desorden. Campanilla.) Señor diputado Martín Barragán... (Desorden.)

El C. Altamirano: Moción de orden, señor presidente. Yo creo que debe evitarse que continúe la discusión, porque así como el señor diputado Soto y Gama pidió la palabra para rectificación de hechos, podemos pedirla tres o cuatro de nosotros para rectificación de hechos y resulta que un asunto que debíamos ya terminar, no va a terminarse.

El C. presidente: Ciudadano diputado Rama, sírvase tomar asiento. Ciudadano diputado Barragán...

El C. Espinosa: Para una moción de orden, señor presidente.

El C. presidente: En estos momentos voy a explicar; un momento.

El C. Espinosa: Se está violando el Reglamento.

El C. Díaz Soto y Gama: Se violó la vez pasada.

El C. presidente: Señores diputados: La Presidencia debe explicar por qué concedió la palabra al ciudadano Díaz Soto y Gama. La Presidencia le ha concedido la palabra y sostiene su trámite; los señores diputados creo que pueden permitirme explicarlo. Es verdad que el ciudadano diputado Díaz Soto y Gama solicitó la palabra para rectificación de hechos; si el ciudadano Díaz Soto y Gama quisiese hablar inmediatamente después de haberse declarado agotado el debate en la sesión misma en que esto se había hecho, no se le podría conceder la palabra, porque lo indicado sería que se pasara inmediatamente a la votación; pero como pidió la palabra para rectificación de hechos relativos a la sesión anterior, inmediatamente después de la lectura del acta... (Voces: ¡Está pendiente la votación!) Yo apelo a la memoria del señor diputado Espinosa y a la de todos los señores diputados que tengan alguna experiencia en materia parlamentaria, y ellos convendrán en que es costumbre conceder la palabra para rectificación de hechos inmediatamente después de la lectura y aprobación del acta. (Voces: ¡Después de la votación!)

El C. Espinosa: Señor presidente, conforme al artículo 112 del Reglamento, que el ciudadano Díaz Soto y Gama trata de violar, no procede en estos momentos que el ciudadano Soto y Gama haga uso de la palabra, y la razón es esta: si el ciudadano Soto y Gama hubiese subido a la tribuna o hubiese pedido la palabra para rectificar hechos o para lo que diese la gana, antes de que la Secretaría hubiese reanudado el acto pendiente, es decir, el de votación declarando, como ya declaró, hace un momento, que se procedía a recoger la votación pendiente sobre el asunto de las elecciones

municipales, muy bien; pero claro es, señor presidente, que ya estamos dentro del acuerdo de la misma votación pendiente, de tal manera, señor, que dentro de la lógica, el señor Soto y Gama debió haber hablado entes de este hecho y podía hablar después de recogida la votación; pero en manera alguna en estos instantes, porque sería tanto como interrumpir el acto anunciado ya por la Secretaría, de que se procede a recoger la votación que ya está hecha, que quedó nada más pendiente por falta de quórum. Así pues, no pido más que respeto para el Reglamento. (Aplausos.)

El C. presidente: Como dice muy bien el ciudadano Espinosa, no se había hecho otra cosa sino anunciar que se pasaría a votación y el ciudadano Soto y Gama con la antelación que había solicitado la palabra para rectificación de hechos, primero al ciudadano Martínez de Escobar y después al que habla.

El C. Soto y Gama: Señores diputados: Vengo a hacer constar desde luego, que cuando se violó el Reglamento, fue la vez pasada; yo me acerqué con anticipación a la Presidencia, con anticipación de diez o quince minutos antes de que concluyera de hablar el señor Martínez de Escobar, y solicité ser inscripto en la lista de los ciudadanos que pedían hacer rectificaciones; se me inscribió y cuál no sería mi sorpresa cuando inmediatamente después, sin dejar pasar un momento de reposo, una interrupción, inmediatamente después que acabó de hablar el ciudadano Martínez de Escobar, asalta la Secretaría persona que nunca la ocupa, como es el señor Saucedo, y precipitadamente, con una festinación enteramente impropia, hace la pregunta de si estaba suficientemente discutido. Yo, ante esa negación del uso de la palabra, naturalmente protesté, aunque en vano, y hoy naturalmente me valgo de la costumbre inviolable y parlamentaria establecida en esta Cámara y vengo a hacer uso de la palabra en el momento en que hacen uso de la palabra cuantos quieren rectificar hechos respecto de la sesión anterior.

El primer hecho que voy a rectificar es de suma importancia: El compañero Martínez de Escobar, en su brillante discurso, pintó en frases hermosas, pintó en oratoria que abundó en efectos de retórica, pero consignó una serie enorme de inexactitudes que completamente tienen que extraviar el criterio de la Asamblea; una de esas inexactitudes, la más notoria de todas, la quiero puntualizar brevísimamente: para ello repetiré textualmente tal como están consignadas en la versión taquigráfica las palabras del ciudadano Martínez de Escobar a ese respecto. Dijo el señor Martínez de Escobar, refiriéndose nada menos que al voto del ciudadano Obregón:

"Señores: En la casilla en que fue a votar el ciudadano Obregón; y conste que yo no adulo al general Obregón; pero digo en la casilla en que fue a votar, creo que fue la casilla número 37, él lo sabe y están personas como Aarón Sáenz y otros testigos, tuvieron que estar renovando los trabajos porque los cooperatistas se llevaron los documentos. Ahí tenemos un chanchullo. (Siseos.) Pero señores, si es verdad, si es esa nuestra idiosincrasia...." (Desorden. Campanilla.)

Pues bien, señores diputados; el discurso del señor Martínez de Escobar, que se caracterizó por una verbosidad muy propia de él, no contiene casi ningún hecho de verdad, y en lo que no se refiere al hecho no contiene más que sofismas, y para poner de bulto esta circunstancia que dio por origen el que partiera un grito que sintetiza admirablemente todo el discurso del señor Martínez Escobar, grito que fue este: facta, non verba: hechos, no palabras, para demostrar que la oratoria del señor Martínez de Escobar se redujo a palabras inexactas, es decir, a palabras que desvirtuaron, que falsearon los hechos. Voy a decirle al señor Martínez de Escobar lo que el presidente de esa casilla, que no fue la 37, sino la 36, el presidente de la casilla en que depositó su voto el señor general Obregón , o sea el señor don Roque González Garza, me dijo en los momentos en que hablaba sobre este particular: "eso no es exacto; en la casilla número 36 hubo tal libertad....."

El C. Martínez de Escobar, interrumpiendo: No dije que allí votó, compañero.

- El C. Soto y Gama, continuando:..."tal corrección, de tal manera se arreglaron el presidente de la casilla y todos los ciudadanos a la ley, que la Mesa estuvo integrada por componentes de los dos partidos. No hubo, pues, ningún chanchullo; todo lo contrario: el presidente fui yo, cooperatista, y yo tomé la precaución de que los dos secretarios fueran peleceanos. No hubo tal interrupción de los trabajos de la Mesa; hubo, sí, la tentativa que hubo en casi todas las casillas, de apoderarse, por la fuerza, como lo preconizó audazmente el juvenil compañero Martínez de Escobar; hubo, sí, la tentativa de tomar a sangre y fuego la casilla, como él dijo antier que debían tomarse las casillas electorales; hubo, sí, el intento de apoderarse, porque podían, porque tenían pantalones, como dijo con más franqueza el ciudadano Martínez de Escobar, la tentativa de los peleceanos de asaltar atrevidamente, como si se tratara de una trinchera en una lucha armada, en un combate, de asaltar la casilla número 5; camiones cargados de gente armada, dice, puedo protestarlo bajo mi palabra de honor, trataron de imponerse y yo, gracias a un esfuerzo de serenidad, pude evitar el atentado." El señor González Garza podrá atestiguar este hecho en la prensa, por carta o como se quiera. "Pues bien; iba el señor Obregón a votar; deposita su voto, se lo dicta al señor diputado León, lo escribe León con su letra, y con el puño y letra de León existe el voto depositado por mí junto con el expediente." De tal manera que, señores diputados, para que se vea hasta qué punto fue gordo el chanchullo, hasta qué punto estuvo mal confeccionado el pastel que nos quería dar a comer el señor Martínez de Escobar; hasta qué punto fue grosera la violación, fue el fraude electoral cometido, resulta que la casilla donde votó el presidente de la República es nula, según el Pélece es nula y según el Ayuntamiento, esa casilla número 36, donde depositó su voto nada menos que el presidente de la República, no fue registrada por el Ayuntamiento, señor Martínez de Escobar.

El C. Martínez de Escobar, interrumpiendo: Porque no la quiso registrar su presidente.

El C. Soto y Gama, continuando: El Ayuntamiento declaró fraudulenta la casilla, ¡una casilla

en que estaban representados los dos partidos! ¿Cómo serían las elecciones en otras partes, si a la casilla donde votó el presidente se le negó el registro, si allí mismo no hubo respeto, si para esa casilla no hubo respeto, qué será para las otras casillas ganadas por el Cooperatista? Mueve la cabeza en señal de negativa el señor Martínez de Escobar. En este caso le diré al señor Martínez de Escobar, y les diré a los señores diputados: el hecho está de tal manera comprobado, que existe totalmente íntegro el expediente de esa casilla en poder del diputado Calderón, agrarista, porque el señor González Garza, en vista de los asaltos, en vista de los golpes de mano, en vista de los actos de fuerza a que se entregaron los peleceanos, no consideró seguros los expedientes guardándolos en su poder, y todos los expedientes de casillas ganadas por el Cooperatista, que no fueron registrados por el ayuntamiento en virtud de que se le atravesó un rifle sobre el pecho a González Garza, cuando en unión de un notario iba a registrar las casillas, todos esos expedientes, cuyo registro probablemente se negó, todos esos expedientes fueron depositados por Roque González Garza en poder de un diputado, garantizado por su fuero, diputado que lo es Miguel Calderón; él guarda esos expedientes, la llave de esos expedientes la tiene el señor González Garza y esos expedientes los tiene a la disposición de las autoridades judiciales, ya sea de la Suprema Corte de Justicia, sea de las autoridades comunes locales judiciales, para que se haga la averiguación respectiva. Ya ven ustedes cómo el discurso del ciudadano Martínez de Escobar se redujo en realidad a verba, no a hechos, no a facta. Primera rectificación. Segunda rectificación: Nos dijo el señor Martínez de Escobar que en México no podía haber democracia, que en México todavía estamos en el caso, en el tipo primitivo de tener que ganar las casillas a sangre y fuego, de tener que asaltar las casillas, y esto, señores, amerita una rectificación. Sería verdaderamente triste que en nuestro país se estableciera el principio de que las elecciones deben ganarlas no los más fuertes por la razón, más fuertes por la popularidad, sino los más fuertes por los puños, los más robustos o los más valientes; esa es una democracia sui generis, de la que no había antecedentes en el mundo. Aquí el hombre más valeroso, el que es más capaz de asesinar a su contrincante en una casilla, es el que debe ganar. Esto amerita una rectificación y una protesta. ¿A dónde vamos a dar, señores, si en nuestro país ya no es la fuerza de la mayoría la que triunfa en las casillas, ya no es el partido que tenga más popularidad, sino el partido que cuente con hombres más desalmados?

¿Cómo vamos a permitir que en la tribuna de la Cámara se excite a las multitudes a que vayan a sangre y fuego, revólver en mano, a ganar casillas y después se les garantice la impunidad desde la misma tribuna? ¿Que hubo cinco o seis heridos? ¿Y esto qué importa? Al cabo que son hombres. ¿Que hubo muerto? ¿Y eso qué? Son gotitas de sangre. ¡Si al cabo la Cima y Ticumán fueron peores! Pero la Cima y Ticumán fueron actos de represalia, actos de defensa, actos de contestación para repeler el proletario la agresión brutal de la dictadura que amparaba la plutocracia; estábamos en el período de lucha armada. Y el señor Martínez de Escobar quiere que nunca se acabe, que no venga la consolidación del régimen; quiere continuar las provocaciones de los unos a los otros y que siga la lucha en las calles y que las elecciones vuelvan a significar el trastorno de la paz pública. Si las galerías y la República entera obedecen las excitativas del líder peleceano, no va a haber nunca paz en México. De manera que yo rectifico el hecho en esta forma: la democracia en México puede existir y debe existir. ¿Cómo? Evitando los abusos electorales. ¿Cómo? Reformando la Ley Electoral. ¿Cómo? Quitando la intervención a los ayuntamientos. ¿Cómo? Impidiendo que en los ayuntamientos sea en donde se gane la elección, impidiendo que en los ayuntamientos sea en donde se gane la elección, impidiendo que en los ayuntamientos sea en donde se falsifique el voto. ¿Cómo? Dando libertad al voto público, librándolo de la tutela municipal. A eso debemos ir. Señores diputados: tendría que rectificar muchísimos otros hechos, entre otros, el de que yo trataba de atacar al Pélece, y no, compañeros; yo trataba de atacar al grupo de hombres que violaba el sufragio, es decir, trataba de defender y trato de defender el verdadero idealismo, el que existe en el caso del sufragio efectivo, y el señor Martínez de Escobar, con sus frases brillantes, con sus frases hermosas que merecieron el aplauso de todos, inclusive el mío, nos dice: entre el idealismo y la imposición del ideal, el idealismo está de parte de nosotros, que defendemos el sufragio, etcétera, etcétera. Si la imposición está de parte de los peleceanos, que en este caso lo único que han querido hacer es imponer su grupo de munícipes, pasando sobre los principios, pasando sobre los ideales, pasando sobre la justicia, pasando por encima de la verdad, por encima de la vergüenza electoral. El señor Martínez de Escobar asienta también otro hecho falso: que no es desobediencia al mandato de una autoridad judicial el hecho de ponerse a discutir este mandato, y el hecho de erigirse un tribunal de Segunda Instancia para juzgar de los actos del juez de Primera Instancia. Es verdaderamente inadmisible que esta tesis se sostenga en esta tribuna. ¿Cómo vamos nosotros a autorizar a todos los funcionarios públicos, y por lo mismo a los ciudadanos para que en cada caso que se les hace ver un mandato, para que en cada caso que se les exige el cumplimiento de un mandato judicial, ellos tengan el derecho de decir: ese mandato es malo, ese amparo está mal interpuesto, ese amparo es improcedente? De tal suerte, señores, que según esta tesis del ciudadano Martínez de Escobar, los amparos no van a ser obedecidos, porque en cada caso la persona, sea funcionario público, sea particular a quien se le presente una orden de suspensión o una sentencia ejecutoria de amparo, tiene el derecho de decir: esos son disparates; el amparo no procede en este caso por esto o por lo otro. ¿A dónde vamos a dar con la enormidad de que en la Cámara de Diputados un diputado representativo de un grupo autorice a las autoridades administrativas para que desobedezcan sistemáticamente las resoluciones de la Corte de Justicia que no les parezcan ajustadas a derecho? ¿No se ve en esto un tremendo absurdo? ¿No se

ve que es inadmisible que una autoridad administrativa juzgue de los actos de una autoridad judicial? De manera que las autoridades judiciales van a tener como revisores de oficio a las autoridades administrativas y también a los ciudadanos: esto no es sino establecer la anarquía. Con estas teorías y excitativas a la desobediencia es imposible que el general Obregón, esta Cámara o cualquiera pueda consolidar el Gobierno.

Concluye el ciudadano Martínez de Escobar manifestando que no hubo usurpación de funciones en el caso del presidente municipal; ¿pero cómo no cuando éste no es más que un registrador automático y mecánico de credenciales? Que se le presenta una credencial, la registra; que hay duplicidad de credenciales, pues también deben registrarse. ¿Con qué derecho el presidente municipal se convierte en Junta Computadora, que es la única que puede juzgar de la validez de una credencial? ¿Con qué derecho el presidente municipal se constituye, si no en Junta Computadora, sí en autoridad judicial, resolviendo con facultades de jurisdicción sobre un caso dudoso?

¿Pues qué, el ciudadano Martínez de Escobar y los abogados de esta Cámara y los que se han asomado al derecho constitucional, no saben que en todos los casos de duda, en todos los casos en que exista controversia interviene inmediatamente el Poder Judicial? ¿Pues cuál es la diferencia entre el Poder administrativo y el Poder Judicial? ¿No el Poder administrativo ejecuta cuando no hay controversia y el Poder Judicial deduce cuando hay controversia? ¿Vamos a olvidar, señores, el principio de la división de poderes? ¿A dónde vamos a dar con esas teorías sustentadas simplemente para sacar a todo trance a un grupo de regidores sostenidos por un grupo político? Eso es un desbarajuste, eso es la anarquía gubernamental. Yo, para concluir, digo esto, señores diputados: ¿Sería lícito, sería posible que el secretario de la Cámara de Diputados o el oficial mayor hiciera lo que ha hecho el presidente del Ayuntamiento, y cuando viene un individuo, es decir, dos presuntos diputados con sus credenciales, por sí y ante sí dijeran: esta es la buena y esta es la mala? ¿Sería posible concederse tal suma de atribuciones a la Secretaría de la Cámara o al oficial mayor de la misma? Pues esto es lo que se quiere hacer en el caso. Se quiere que el ciudadano presidente municipal sea juez en las elecciones; ha sido juez al grado de que ha declarado nula la casilla donde votó el ciudadano presidente de la República, donde debía haber habido todas las garantías. Si no se computó siquiera el voto del presidente de la República, ¿cómo se van a computar los votos de todos los ciudadanos que no tienen ningún apoyo oficial? Ven ustedes lo escandaloso que es que por simples cuestiones de partidarismo se venga a querer sacar avante a toda costa a un partido. He puesto esto a la consideración de la Cámara para que juzgue en este caso sin dejarse deslumbrar por palabras, sino ateniéndose a los hechos.

El C. Martínez de Escobar: Pido la palabra para una aclaración, señor presidente. Tres minutos.

El C. Tirado: Pido la palabra para una interpelación.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Tirado para una interpelación.

El C. Tirado: ¿Está usted perfectamente seguro de la contestación que el ciudadano licenciado Rafael Zubaran, presidente municipal, les dió a los ciudadanos Roque González Garza y Jorge Prieto Laurens y a algunos otros cooperatistas, cuando se presentaron a querer pretender registrar sus credenciales? ¿Sabe usted lo que les contestó el señor licenciado Zubaran?

El C. Soto y Gama: Yo lo que sé, porque me lo dijo el señor González Garza,(Murmullos.) es que en el momento de presentarse el señor González Garza, acompañado de un notario en la puerta del Ayuntamiento, les atravesaron el rifle, se los colocaron en el pecho y no los dejaron pasar. (Siseos. Murmullos.) Y sé, entre otras cosas, que el señor presidente municipal o expresidente municipal Zubaran, está acusado, está consignado por desobediencia al mandato de una autoridad judicial, consignación que hizo el mismo juez desobedecido. Eso es lo que yo sé. De manera que si el señor Tirado tiene tal escrúpulo, podría haber ido al tribunal ante quien fue consignado el expresidente del Ayuntamiento para ver si existe ahí o no la desobediencia. Yo creo que el solo hecho de que el juez desobedecido haya consignado a otro juez el delito de la desobediencia, es bastante probatorio para esta Cámara.

El C. Tirado: Ya que el compañero Soto y Gama no ha sabido contestar esta interpelación, porque no conoce las cosas más que a través de las declaraciones de los cooperatistas, que en este caso son parciales, me voy a permitir interpelar a un compañero cooperatista que estuvo presente en aquella entrevista; él podrá decir que no es cierto que se les haya opuesto la fuerza de las armas para que llegaran hasta el presidente municipal. Ese compañero es el ciudadano Candelario Garza. El ciudadano Rafael Zubaran Capmany, presidente municipal, después de una hora de discusión en que el ciudadano Roque González Garza quería con sofismas jurídicos y casi de chicana tinterillesca, orillar al ciudadano Zubaran a que prejuzgara de las credenciales presentadas, a lo que él se negó; dijo: las credenciales que primero se presentaron aquí fueron las que se registraron conforme a la ley; ahora ustedes se presentan con otras credenciales diciendo que son las legítimas, pero como a mí no me toca prejuzgar, lo único que haré, señor Roque González Garza, es registrar hoy a las cuatro de la tarde las credenciales de ustedes y consignar, en el caso de duplicidad de credenciales, el hecho a la autoridad judicial; y a las cuatro de la tarde, los señores cooperatistas no se presentaron; no es cierto que se les haya puesto fuerza armada... (Voces: ¡Sí es cierto!) Estaba lista la Sección de Gobernación para recibir el registro de las credenciales, y sin embargo, no lo verificaron. (Voces: ¡No es cierto!) Esta es la exactitud y esta es la verdad en el caso que cita el ciudadano Soto y Gama.

El C. Garza Candelario: Pido la palabra para hacer una aclaración. El ciudadano Tirado me ha aludido y tengo derecho para aclarar.

El C. presidente: Sí, compañero, a su tiempo. El compañero Garza está inscrito, pero el señor

Tirado pidió la palabra para una interpelación y se extralimitó; hizo mal el señor Tirado. El compañero Martínez de Escobar está inscrito y tiene la palabra.

El C. Martínez de Escobar Rafael: Nada más, compañeros, para decir unas cuantas palabras relacionadas con lo que acaba de asentar el señor Soto y Gama en la tribuna. manifesté yo que el general Alvaro Obregón se había presentado a la casilla número 36, en Medellín, y ahí fue donde se verificó el suceso a que hice mención el sábado; que ahí se llevaron los documentos de la casilla instalada, casilla que estaba integrada por elementos del Partido Liberal Constitucionalista, y ahí se le dijo al general Obregón que no era la casilla donde le correspondía votar, sino en el edificio de la Condesa; de manera que ahí fue donde votó el general Obregón; en el edificio de la Condesa fue donde se verificaron los sucesos y parece que fue en la casilla número 36 en donde contribuyó para la reinstalación de ella el ciudadano general Aarón Sáenz, y ahí fueron los acontecimientos de violencia del Partido Cooperatista. Así es que este hecho está perfectamente rectificado a lo que quiso rectificar el ciudadano Soto y Gama.

El otro hecho es este: Dice que cómo no se registró la credencial del ciudadano González Garza. Por no hacer perder más tiempo a la Asamblea, no le dí lectura a la lista de las casillas, en donde aparecían cincuenta y tantas casillas no registradas en el Ayuntamiento, porque no quisieron registrarlas los cooperatistas. Ellos deseaban que se les registraran todas las 180 que decían habían ganado; de manera que aparecían 50 o 60 casillas ganadas por los cooperatistas no registradas en el Ayuntamiento, es decir, no podía haberse dado el caso de duplicidad de credenciales. Si ellos hubieran querido, habría registrádosele al señor González Garza, porque pudo habérsele registrado su casilla. Pero no quiso hacerlo porque no se accedió a registrarle todas las demás, y la Presidencia Municipal les dijo que se registraran aquellas que no aparecían registradas y no aparecía registrada la de González Garza.

Otro hecho, compañeros, la cuestión del amparo. Dice el señor Soto y Gama que cómo es posible que una autoridad haya desobedecido el mandato legítimo de otra superior; pero esto lo toma desde el punto de vista general. Yo le pregunto: si el Partido Republicano, cuando nosotros nos instalamos en Colegio Electoral, presenta un amparo ante el juez y viene una decisión de ese juez diciendo que el Colegio Electoral no se instale, ¿qué habíamos hecho? Pues indudablemente que nos habríamos instalado en Colegio Electoral, porque no hay orden suprema ni disposición de ninguna especie que tenga fuerza jurídica capaz de evitar que nos hubiésemos constituído en Colegio Electoral, ya que este acto es integrante de la institución electoral. De manera que el licenciado Zubaran, teniendo obligación, conforme a la ley, por ser una ley imperativa, de constituir la Junta Computadora el jueves, no pudo haber hecho caso de la orden ilegítima del juez, que no tenía origen legal, no en cuanto a la autoridad, sino en cuanto al mandato imperativo de la ley que no faculta a los jueces de Distrito para suspender actos electorales. Así es que eso no hizo el presidente municipal tampoco lo habríamos hecho nosotros en el caso de que hubiera venido una orden de un juez de Distrito en virtud del amparo que promovió el Partido Republicano para que no nos constituyéramos en Colegio Electoral para conocer de las elecciones presidenciales. Y si el mismo Partido Republicano, después de eso pide que no se tomara la protesta al general Obregón, ¿qué habríamos hecho? Si hay un juez capaz de tanta ignorancia y ordena que se suspenda el acto de la protesta ¿qué habríamos hecho? Pues no tomar en cuenta esa orden de suspensión, lo mismo que hizo el licenciado Zubaran. Es indudable que se trata de asuntos netamente electorales y por eso él, cumpliendo con la ley y desconociendo un mandato violatorio a la ley, constituyó la Junta. Además, eso de que tengamos temor de que se aclaren las cosas, ya lo dije hasta convencer a cualquiera de ustedes, así lo creo; si se trata, ciudadanos representantes, de investigar la violación del voto, primeramente ya estos señores presentaron un amparo, presentaron con el objeto de demostrar que no habían ganado los del Pélece las casillas y ya se están practicando averiguaciones. Ustedes saben que el juez de Distrito concedió la suspensión provisional; pero al llegar a la audiencia de derecho para la suspensión definitiva, toda la prensa ha publicado que se negó la suspensión definitiva del acto por los dos jueces, el licenciado Pellicer y el licenciado Lombardo. ¿Por qué? Porque comprendieron que no era procedente. Si, pues, no procedió la definitiva, tienen ustedes que al negarse la definitiva no procedió la provisional. (Murmullos.) Bien. Un momento, señores. Sigue ese amparo su trámite; tienen que haber pedido revisión los interesados, y pasa a la Corte; allí, pues se ve que el trámite seguirá conforme a lo que la ley dice. Además, ya presentaron acusación ante el procurador general de Justicia del Distrito Federal; este señor consignó los hechos a un juez de lo Penal, como dije el sábado; se abrió ya el proceso, ya se están practicando las diligencias, ya se están oyendo testigos, ya se mandan todos los documentos, las actas de instalación, los padrones, las boletas, etcétera, etcétera. ¿Para qué, pues, esa comisión? ¿Qué objeto va a tener se hasta la evidencia demostré que lo único que podría hecerse es que la Corte nombrara abogados que de acuerdo con el Cooperatista o con el Partido Liberal Constitucionalista, el que tuviera más influencia con ellos, vinieran a hacer una farsa más?

Si se trata de investigar una violación a la ley, si se trata de investigar los delitos, ahí está un juez de lo Penal, que tiene competencia, jurisdicción bastante para señalar la pena una vez que se haya averiguado que hubo delito. Por esta razón, señores, es que resulta completamente nimio que se nombre una Comisión. Creo que está tan en la conciencia de los ciudadanos diputados, que no quiero perder tiempo, y termino con esto.

El C. presidente: ¿Desea usar de la palabra ciudadano Cienfuegos?

El C. Cienfuegos: Creo que ya el incidente está perfectamente resuelto y no quiero distraer más la atención de la Cámara, porque sería lastimosa la pérdida de tiempo.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Altamirano. (Voces: ¡No está!) Tiene la palabra el ciudadano Garza Candelario.

El C. Garza: Yo voy a hacer simplemente una aclaración respecto a lo que ha dicho el ciudadano Tirado. Yo estuve con el señor Roque González Garza a ver al presidente municipal. Después de haberle indicado el asunto que nos llevaba con él, nos dijo que por ningún motivo podía él prejuzgar, y le dijimos: "¿Cómo, pues, dice usted que las credenciales ya registradas son buenas y que esas deben existir ahí?"

El C. Tirado: No dijo eso.

El C. Garza: Y dijo: "Es que son los primeros que han venido y por eso los registré yo." Eso fue todo lo que contestó; después accedió a que se registraran todas las credenciales, pero diciendo que saldría y que volvería a las 4, dicho del ciudadano Zubaran, que fue tomado por un notario. El ciudadano Zubaran faltó a su palabra, porque no volvió en todo el día. No es cierto, pues, ciudadano Tirado, que a las 4 de la tarde haya vuelto a registrar nuestras credenciales y que nosotros no hubiésemos estado ahí: el ciudadano Zubaran no regresó ni dejó orden de que se hicieran nuestros registros, habiendo dicho el ciudadano Caso que él no podía hacerlo, y lo cual dijo en la planta baja, ya que a la alta no podíamos subir, porque estaba llena de gendarmes y soldados que lo impedían. Quiero también hacer notar el siguiente hecho: yo fui presidente de la casilla número 14 del primer distrito, que se instaló en la calle de Isabel la Católica número 3; pues bien, todo el tiempo hábil de ese día de las elecciones para tomar la votación, estuve recogiendo ésta en el lugar indicado por la Presidencia Municipal; más todavía: en aquella calle, 1a. de Isabel la Católica, ninguna otra casilla se instaló, porque tuve el cuidado de informarme si se instalaba otra, para saber si existía la duplicidad de casillas. Pues bien; como no se instaló, fui a la Presidencia Municipal yo solo a registrar mi expediente, y me han dicho: No, señor, la casilla número 14 está ya registrada. Y esto es cierto, por que el ciudadano Lavín el sábado último trajo el libro de registro y le dije: Compañero, tenga la bondad de enseñarme el registro de la casilla número 14. Me lo enseñó, y estaba allí un Jesús Fierro, o no sé quién, como presidente de aquella casilla. ¿Qué, pues es esto? ¿Dónde se hizo esa votación, dónde se recogió? Probablemente en el comité del 1er. distrito del Pélece, porque en la calle, donde debía recogerse la votación Pública, no se recogió. Ya ve usted que estos son hechos concretos; en eso basamos nosotros para considerar defraudados nuestros intereses. Por lo demás, ¿que el ciudadano Zubaran no quiso registrarnos? Muy bien. ¿Que tenía derecho? También muy bien. Ejercitó su derecho, pero violando expresamente la ley, y el ciudadano Zubaran, que violó primeramente la ley, porque dio formas únicamente con su firma para que allí los ciudadanos del Partido Liberal Constitucionalista, cuando les hiciera falta las usaran, las que se habían dado a los instaladores llegaran y las dieran a otros instaladores, y segundo, porque no quiso recibir la votación de las casillas ganadas por el Cooperatista; así pues, el ciudadano Zubaran en vez de ir a un ministerio, debía haber ido a la cárcel, (Voces: ¡Huy! ¡Huy! Siseos.) porque quien comete un delito, debe ir a la cárcel. Por lo demás, ciudadanos diputados, si porque el compañero Martínez de Escobar dice que legítimamente el triunfo es del Partido Liberal Constitucionalista, porque es el más fuerte, pues sí, efectivamente, vamos a suponer que sea el más fuerte, y qué, ¿por eso todo el tiempo los fuertes en asuntos electorales son los que obtienen el triunfo? ¿No algunas veces, por ventajas no previstas, se puede obtener ese triunfo? A las diez y media de la mañana, el Partido Cooperatista tenía la mayoría de casillas en la ciudad de México; pero con los camiones (Voces: ¡Huy!) que el Partido Liberal Constitucionalista esparció por todas partes, los cuales iban llenos de soldados armados, comenzaron a cometerse toda clase de atropellos. Creo que no hay alguno que diga que esto no es cierto.... (Voces: ¡No es cierto!) A mi casilla fue un camión lleno de soldados, pero a mí no me levantaron.... (Voces: ¡Allí iba Vizcarra!) No iba allí Vizcarra. Pero el individuo que encabezaba a los soldados se dio cuenta..... (Voces: ¿De qué? ¿De qué?) Voy a contar a ustedes el incidente, para que no digan que miento. Un ciudadano se acercó al jefe y le dijo: "El señor es diputado", dirigiéndose a mí, y no hizo más ese jefe. Yo le dije: "Aquí no hay planillas del Partido Liberal Constitucionalista; si ustedes traen y quieren dejar algunas, pueden hacerlo." Entonces las sacó del bolsillo, las puso en la mesa y les dio orden de que se volvieran. Después, naturalmente, se fueron a atacar en alguna forma a las casillas, se fueron a otras casillas, porque eran del Pélece, ciudadano Altamirano. (Voces: ¡A votar! ¡A votar!) Efectivamente; esos individuos que estuvieron en esa casilla, asaltaron otra que estaba por la calle de Tacuba o por Santo Domingo; golpearon al individuo que estaba allí, corrió éste y se vino con los documentos; paso por la casilla por donde nosotros estábamos. (Voces: ¡Pruebas! ¿Quién corrió?) El presidente, yo lo ví. (Murmullos. Siseos. Campanilla.) Yo suplico a la Presidencia que imponga el orden, ya que es tan amante de él.

El C. presidente: Usted no tiene derecho, ciudadano Garza, a pedirlo en tono de reproche; sabe muy bien que la Presidencia sabe cumplir con su deber. Se excita a las galerías y a los ciudadanos diputados para que guarden silencio.

El C. Garza: En la sesión pasada, tratando de este mismo asunto, el ciudadano Martínez de Escobar produjo un brillantísimo discurso, que le sirvió tanto para elogiar al Pélece, como para electrizar a las galerías, que en aquellos días eran pagadas para que le vinieran a hacer bombo. (Voces: ¡No! ¡No! ¡Sí! ¡Sí! Murmullos. Siseos. Campanilla.) Sí, señores, eran los empleados municipales. (Voces: ¿Y cumplieron?) Sí cumplieron, porque le hicieron todo el bombo necesario. En esa sesión atacó de una manera despiadada al Partido Cooperatista, diciendo que es un partidito y otras cosas por el estilo. Pues sí, el licenciado Martínez de Escobar siempre que va a la tribuna hace discursos brillantísimos, y lo mismo le sirven para elogiar al Pélece, que para electrizar a las galerías, que para ¡miren nada más ustedes! para atacar la

soberanía del Estado de Tabasco, su Estado natal. (Voces: ¡Ah! ¡Ah! Siseos. Campanilla.)

El C. Tirado: Pido la palabra. Ciudadanos representantes: Yo lamento... (Voces: ¡A votar! ¡A votar!) No voy a referirme a los conceptos del ciudadano Garza; su falta de sindéresis en este asunto me impide refutar uno a uno los puntos que ha tocado; solamente quiero asentar estos hechos: es público y notorio que la actuación del licenciado Zubaran ha sido de neutralidad absoluta... (Voces: ¡Ah!) Sí, señores. Me consta y les consta a muchos de los compañeros que anteriormente a esta elección, el licenciado Zubaran estuvo muy interesado en que se llegara a un acuerdo entre el Partido Cooperatista y el Liberal Constitucionalista, y deseaba este acuerdo precisamente para evitar estas discusiones, que realmente ponen en tela de juicio su actitud de neutralidad y de honradez en la Presidencia Municipal. Si estuvieran aquí presentes los compañeros Prieto Laurens y otros, comprobarían el aserto mío, esto es, que el licenciado Juan Cataño Flores, que era secretario del Ayuntamiento, por el simple hecho de ser tildado por el Cooperatista como un peleceano connotado y como un peleceano que estaba dispuesto a trabajar por su partido, tuvo que renunciar y se le aceptó su renuncia, lo mismo que a otros varios compañeros, al grado de que entre los mismos compañeros peleceanos hubo algunos que creían que el licenciado Zubaran estaba de parte del Cooperatista. Estos son hechos públicos y notorios. (Voces: ¡A votar! ¡A votar!)

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Espinosa. (Voces: ¡Huy! ¡Huy!) La tiene el ciudadano doctor Cantón, que la pidió en último término.

El C. Cantón: Para una brevísima interpelación que deseo hacer al ciudadano Soto y Gama para orientarnos debidamente y consiguientemente a la votación. La interpelación consiste en lo siguiente: Yo deseo saber si la impugnación que hizo en la tribuna con respecto al acto electoral llevado a cabo el domingo antepasado, se refiere a la conducta observada por el Partido Liberal Constitucionalista, que directamente pugnó contra el Partido Cooperatista, o se dirige a la conducta observada por el Ayuntamiento de la ciudad de México, que se manifestó francamente parcial en favor de uno de estos partidos (Campanilla.)

El C. presidente: En realidad sólo cabe conceder la palabra para rectificaciones de hechos. Se puede conceder la palabra para interpelaciones al orador en el momento que ocupa la tribuna. Dejo a la Asamblea resuelva si se le concede la palabra al ciudadano diputado Soto y Gama.

El C. Cantón: Es una interpelación que trae una rectificación como consecuencia.

El C. presidente: Sírvase la Asamblea decidir se permite al ciudadano Soto y Gama contestar la interpelación. (Voces: ¡Sí! ¡Sí! ¡No! ¡No!)

El C. Cantón: Señor presidente, esto orientará la votación. (Voces: ¡Sí! ¡Sí!)

El C. presidente: Hay mayoría; sí se concede.

El C. Díaz Soto y Gama: En muy pocas palabras contestaré la muy interesante interpelación del compañero Cantón, que, efectivamente, se refiere al fondo del debate. Es claro que quien ha faltado aquí a su deber visiblemente, que quien ha cometido un delito o una serie de delitos, es el presidente del Ayuntamiento en el momento en que debía haber sido enteramente neutral. Yo no sé cómo al C. Tirado no se le subió el color a la cara cuando dijo eso. (Risas.) En lugar de haber sido enteramente neutral, fue absolutamente y cínicamente parcial; tan parcial, que sólo declaró buenas las credenciales de los suyos, creyendo que los suyos eran, no los vecinos de la ciudad de México que tienen el derecho de representación en el Ayuntamiento, sino los miembros de un grupo, partido, camarilla o grandísimo partido nacional, según dicen estos señores peleceanos. (Aplausos.) Y por supuesto que estos aplausos no tiene razón, porque estoy hablando hipotéticamente; por enorme que fuese el grandísimo partido nacional que ellos pregonan y que está degenerando en camarilla absorbente, en camarilla de Gobierno;... (Voces: ¡No! Aplausos.) por enorme que fuese este partido, no es la ciudad de México y el Ayuntamiento; por grande que sea el prestigio que atribuyen ustedes al Partido Liberal Constitucionalista, el Ayuntamiento no representa al Partido Liberal Constitucionalista. ¡Ahí está la enormidad, ahí está el delito, ahí está el crimen, en que el Ayuntamiento de la ciudad de México, en lugar de elevarse a la altura de imparcialidad a que está llamado, se convierta en instrumento de un partido! (Aplausos.) ¡Y se atreve a aplaudir el ciudadano García Vigil, con todo el talento que le reconozco! De manera que el delito, ciudadano Cantón, es del Ayuntamiento de la ciudad de México, especialmente del presidente municipal, quien si tuviera noción de lo que es integridad política, jamás hubiera aceptado ser ministro, ser secretario de Estado, teniendo sobre sí tan terrible acusación. Respecto del Partido Liberal Constitucionalista, su pecado ha estado en hacerse cómplice de la corruptela imperante en materia de elecciones; su deber es evitar esa corruptela, y el deber de nosotros, los que, quiéranlo o no los señores peleceanos, hemos sido neutrales en este debate, el deber nuestro... (Voces: ¡Huy! ¡Huy!) Y lo somos, señores, porque reconocemos que la corruptela existe de parte de todos los grupos políticos que entran en las elecciones; el deber nuestro, el deber nuestro de hombres conscientes, de hombres imparciales, de hombres que venimos a velar por el sufragio, y más que eso, de diputados que venimos a cumplir aquí con el deber de que se haga efectiva una de las más grandes promesas de la revolución, el deber nuestro estaba en señalar la llegada para que se le aplique el cauterio, en señalar el vicio para que se le ponga el correctivo. (Voces: ¡Ya! ¡Ya!) De tal suerte, que la responsabilidad legal, la criminal, la delictuosa, es del Ayuntamiento y de su presidente; la responsabilidad política es del P. L. C., que era el grupo dominante, del Partido Liberal Constitucionalista; le toca su parte al Cooperatista por haber incurrido también en los chanchullos electorales a que tuvo que acudir en ciertos casos, como defensa, ¡claro! como defensa contra los actos de violencia y de fraude del Partido Liberal Constitucionalista. De tal manera, señores, poniéndose en el caso de la verdad y de la honradez, se portó mal el Partido Liberal Constitucionalista y se portó mal el Partido

Cooperatista, dejándose llevar los dos por la corruptela ambiente, por la corruptela dominante. En consecuencia, la conclusión se cae por su peso: las elecciones fueron nulas porque no hubo tales elecciones. (Aplausos. Siseos.)

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano García Vigil para decir dos palabras. (Risas.)

El C. García Vigil: Únicamente le quiero decir, sólo le quiero decir al ciudadano Díaz Soto y Gama, que el P. L. C. no tiene un delito, tiene una serie de delitos. Estos delitos son la serie de triunfos que ha venido obteniendo en la lucha desde que se fundó este partido. Su delito es haberle arrojado el guante a Carranza, su delito es haberlo vencido, su delito es no haberse corrompido, su delito es no haberse quebrantado cuando paso por horas de angustia, su delito es no haber aceptado toda clase de elementos, su delito es ser radical, su delito es ser fuerte. Aceptamos la responsabilidad de todos estos delitos y sigamos luchando, señores. (Aplausos. Voces: ¡A votar!)

El C. presidente: Por temor de que salgan algunos señores diputados para Oaxaca y no pudiera haber quórum en estos días, creo que no tendrán inconveniente los señores diputados en pasar cinco minutos más en el salón para resolver asuntos de importancia.

El C. Martínez de Escobar: ¡Está a votación este asunto!

El C. Altamirano: ¡Está pendiente una votación y debemos ir a ella!

El C. presidente: El ciudadano Altamirano y el ciudadano Martínez de Escobar no tienen razón para exaltarse; No se está faltando al Reglamento. Este debate fue absolutamente independiente de la discusión anterior; fue una serie de rectificaciones de hechos después de la lectura del acta. El Reglamento en su artículo relativo al orden en que deben tratarse los asuntos en las sesiones, coloca en el último término los asuntos pendientes de votación; en consecuencia, tiene pleno derecho la Presidencia para poner al debate algunos asuntos... (Voces: ¡Moción de orden!)

El C. Martínez de Escobar: Pido la palabra.

El C. Altamirano: Pido la palabra.

El C. presidente: Un momento, no ha terminado la Presidencia; calme su impaciencia el ciudadano Altamirano. La Presidencia está obrando dentro del Reglamento, como puede comprobarlo la lectura del artículo relativo. La razón principal de la Presidencia para proceder así es el temor de que no haya quórum en la votación nominal... (Voces: ¡Entonces que se tome votación económica!)

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

Artículo 32 reglamentario. "En las sesiones se dará cuenta con los negocios en el orden siguiente:

I. Acta de la sesión anterior, para su aprobación. Si ocurriese discusión sobre alguno de los puntos del acta, deberá informar la Secretaría y podrán hacer uso de la palabra dos individuos en pro y dos en contra, después de lo cual se consultará la aprobación de la Cámara;

II. Comunicaciones de la otra Cámara, del Ejecutivo de la Unión, de las Legislaturas y de los gobernadores de los Estados;

III. Iniciativa del Ejecutivo, de las Legislaturas y de los individuos de la Cámara;

IV. Dictámenes de primera lectura;

V. Dictámenes de segunda lectura;

VI. Memoriales de los particulares;

VII. Dictámenes señalados para discutirse;

VIII. Minutas de ley."

El C. Altamirano: Mi moción de orden consiste en esto: Hace un momento el ciudadano presidente alegaba como una razón para proceder dentro de determinado sentido, la costumbre. Ahora yo también apelo a la costumbre, y la costumbre aquí, cuando queda pendiente una votación, es que en la sesión siguiente inmediatamente se proceda a esa votación. ¿Entonces en qué quedamos señor presidente? Unas veces se alega la costumbre y otras el Reglamento. Además, pido que se consulte a la Asamblea, que es la única que decidirá en último término para ver si se procede a la votación.

El C. Martínez de Escobar: Pido la palabra para hacer esta aclaración. El ciudadano diputado Soto y Gama pidió la palabra para rectificaciones de hechos; el mismo ciudadano presidente Manrique ya había ordenado que se procediese a la votación, entonces el ciudadano Soto y Gama solicitó la palabra y el ciudadano Manrique hizo bien, le concedió la palabra, y ya han hablado tres o cuatro. Cuando abrió la sesión y solamente para que no se dijera que era parcial, concedió la palabra, de manera que es un hecho que empezó esta Asamblea con votación y que la suspensión de ésta fue momentánea. Vamos, pues, a votar, compañeros. (Voces: ¡A votar!)

El C. Casas Alatriste: Pido votación nominal.

El C. presidente: La Presidencia debe aclarar que es inexacto que haya costumbre de tomar la votación inmediatamente después, lo que sí es cierto es que la Asamblea puede decidir que el orden de los asuntos no sea el que indique el Reglamento sino el que ella desee. Se invita a la Asamblea a que diga si quiere que se pase a votación, y si ella lo desea, no hay ningún inconveniente. Los que estén por la afirmativa se servirán manifestarlo. Se pasa a votación.

El C. secretario Zincúnegui Tercero: Por la afirmativa.

El C. secretario Valadez Ramírez: Por la negativa.

(Se recoge la votación.)

El C. Zincúnegui Tercero: Votaron por la afirmativa los siguientes ciudadanos diputados: Acevedo, Aguilera, Alba, Alvarez Ricardo A., Ayala, Barragán Enrique M., Basaldúa, Calderón, Cantón, Casas Alatriste, Castrejón, Céspedes, Chavéz Franco, Díaz Soto y Gama, Domínguez, Dorantes, Estrada, Franco Urías, García Rojas, Garza Candelario, Garza Francisco, Gómez Rodrigo, González Jesús B., Guadarrama, Guzmán Peláez, Lara César A., Luquín, Macías Rubalcaba, Martínez Gabriel, Martínez Rendón, Mijares, Miramontes, Moreno, Ollivier, Portes Gil, Quiroga, Ramírez M. Fidel, Rico G., Romero, Sánchez Pablo H., Serrano Gustavo P., Solórzano José Luis, Torre, Valadez Ramírez, Villalobos, y Villegas. Total 46 votos.

El C. secretario Valadez Ramírez: Votaron por la negativa los siguientes ciudadanos diputados: Aguirre Colorado Fernando, Aguire Emilio, Aillaud, Aja, Altamirano, Alvarez Vicente, Argüelles, Arroyo Ch., Azuara, Barbosa, Barragán Martín, Barrera,

Borrego, Bravo Betancourt, Castañeda Nigra, Castillo Garrido, Castillo Israel del, Castillo Porfirio del, Cienfuegos y Camus, Contreras Adolfo, Contreras Lucas, Cuéllar, Chico, Damián, Díaz Antonio, Esparza Martínez, Espinosa Luis, Espinosa Natalio, Fernández Martínez, Flores, Franco Cerqueda, García Vigil, Goméz Carlos, Gómez Cosme D., Gómez Luna, González Rafael M., Gutiérrez Castro, Gutiérrez Macedonio B., Gutiérrez Teodomiro T., Hernández Alvarez, Hernández Mariano M., Hidalgo Catalán, Ibarra, Lechuga, Lira, Lomelí, López Soto, Llaca, Manrique, Maqueo Castellanos, Martínez de Escobar Federico, Martínez de Escobar Rafael, Martínez Gustavo S., Meza, Montes, Morales, Navarro Uriel, Ortega Antonio, Palacio, Peña, Pérez Gasga, Portales, Ramos Esquer, Ramos Pedrueza, Reyes Ignacio C., Reyes Tereso, Riva Palacio, Rivera Cabrera, Rodríguez Guillermo, Romero, Salazar, Sánchez José María, Saucedo, Sepúlveda, Serrano Hermosillo, Silva, Solís, Soto José M., Sánchez Pontón, Tejeda Llorca, Tirado, Trejo Erasmo, Trejo Francisco, Velásquez López, Vergara, Villalobos, Zincúnegui Tercero. Total 86 votos.

(Aplausos. Voces: ¡Viva el Pélece) En consecuencia, se declara desechada la proposición. (Aplausos.)

El C. presidente: Sírvanse ocupar asientos los señores diputados.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Secretaría Particular del presidente de la República. - México, D. F., diciembre 10 de 1920.

"H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. - México, D. F.

"Únicamente para conocimiento de esa H. Asamblea, me permito transcribir siguiente mensaje que he recibido del C. J. J. Galindo, presidente municipal de la Paz, B. C., "En nombre este Ayuntamiento permítome honra encarecer esa superioridad se digne interponer su valioso contingente para que sea aprobado proyecto reformas artículo 56 Ley Orgánica 13 de abril 1917 presentada H. Cámara de Diputados por alguno de sus miembros y hacerse conocer telegráficamente esta Entidad antes expire corriente año". Atentamente. El presidente de la República, Alvaro Obregón." - Recibo y a su expediente.

"Poder Ejecutivo Federal. - México. - Estados Unidos Mexicanos. - Secretaría de Gobernación. - Número 6,473.

"Ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. -Presente.

"Con el fin de que se sirvan dar cuenta a esa H. Cámara, tengo la honra de remitir a ustedes un ejemplar del Proyecto de Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos del Distrito Norte del Territorio de la Baja California, con exposición de motivos para el año fiscal de 1o. de enero a 31 de diciembre de 1921, así como un ejemplar del Proyecto de Ley de Contribuciones del mismo Distrito para el propio año, y un cuadro demostrativo de las cantidades probables por concepto de recaudaciones.

"Reitero a ustedes las seguridades de mi distinguida consideración.

"Sufragio Efectivo. No Reelección. - México, a 9 de diciembre de 1920. - P. O. del secretario, el subsecretario, J. I. Lugo." - Recibo y a la Comisión de Presupuestos y Cuenta.

"1a. Comisión de Corrección de Estilo.

"Minuta.

"Proyecto de decreto.

"Artículo único. Se concede a la señorita Ana María Palacios, mientras conserve su actual estado civil, una pensión de cinco pesos diarios, que le serán pagados sin descuento alguno, por los servicios que prestó a la nación su finado padre el C. general de Brigada Miguel Palacios.

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso General. - México, 11 de diciembre de 1920. - J.B. González. - Juan B. Salazar. - Gustavo P. Serrano."

Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se consulta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobado. Pasa el Ejecutivo para los efectos constitucionales.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"H. Asamblea:

"Teniendo urgente necesidad de salir fuera de la capital al arreglo de asuntos de familia, pido atentamente me sea concedida, con dispensa de todo trámite, una licencia por veinte días, con goce de dietas.

"México, a 13 de diciembre de 1920. - J. F. Azuara."

En votación económica se consulta si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Se dispensan los trámites. Está a discusión.

El C. Casas Alatriste: Pido la palabra. Para interpelar a la Secretaría nos diga si todavía se pueden seguir concediendo licencias.

El C. secretario Valadez Ramírez: Hay margen todavía.

En votación económica se consulta si se concede. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Concedida.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"A los ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados:

"El subscripto, diputado por el 20 distrito del Estado de Jalisco, solicita de esa H. Asamblea le conceda un permiso hasta por quince días, con goce de dietas, para lo cual pide también dispensa de todo trámite.

"Protesto a ustedes mi atenta y distinguida consideración.

"Sufragio Efectivo No Reelección. - México, D.F., diciembre 13 de 1920. - Natalio Espinosa."

En votación económica se consulta si se dispensan los trámites. Los que están por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Se dispensan los trámites. Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se consulta si se concede la licencia. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Concedida.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"El subscripto, diputado al Congreso de la Unión por el 12 distrito de Jalisco, ante vuestra soberanía, respetuosamente, expongo:

"Teniendo en cuenta los indiscutibles y honrosos precedentes parlamentarios que el vigoroso tribuno don Jesús Urueta sentó en nuestra República como diputado al Congreso de la Unión, y en ocasión de su reciente y sentido fallecimiento, acaecido en tierras del Plata, a esta Representación Nacional, y como una muestra de distinción para nuestras glorias mexicanas, pido la aprobación del siguiente acuerdo económico, con dispensa de todo trámite.

"Único. Envíese un cablegrama a los familiares del extinto diplomático mexicano Jesus Urueta, manifestándoles nuestra condolencia por la muerte del que en vida honró la Representación Nacional con su verbo inflado y elocuente."

"Salón de Sesiones de la Cámara de Diputados. - México, D.F., diciembre 10 de 1920. - Reinaldo Esparza Martínez."

El C. presidente: Tiene la palabra para fundar su moción, el ciudadano Reinaldo Esparza Martínez. (Voces: ¡No es necesario!)

El C. Esparza Martínez: Pido la palabra, señor.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Esparza Martínez.

El C. Esparza Martínez: Ciudadanos diputados: Es la voz clara y esplendente de la verdad, e imperativa, contundente de la acción y la belleza, lo que me mueve, lo que mueve mi espíritu en estos instantes de serena apreciación y de santo análisis, al reclamar de la Representación Nacional una distinción modesta, pero grande, para aquella gloria nacional que se llamó Jesús Urueta, para el helenista sutil y docto, que desde esta tribuna que hoy aviva mi incipiente personalidad parlamentaria, con sólo invocar desde ella la memoria del tribuno del habla de oro, que derramó el manantial inagotable y terso de su elocuencia, siempre al servicio de las acciones nobles, siempre fiel para defender la razón ante la severidad augusta de la ley; la figura de Jesús Urueta, inmensamente aquilatada por la intelectualidad mexicana y hondamente discutida en los países de habla española, es de tanta belleza indiscutible y en fuerza de su propia y vigorosa influencia está por encima de toda ponderación. La labor del maestro está viva en nuestras mismas personalidades y se adivina a través del moderno movimiento oratorio que se ha despertado en México. No será, de seguro, mi desautorizada palabra la que se atreva a delinear la vigorosa personalidad del lúcido Demóstenes Mexicano, y solamente quiero contribuir a que México afiance definitivamente sus glorias, honrando la memoria del hombre que fue, a no dudarlo, el tipo representativo más alto y más legítimo de nuestra cultura. Que vaya nuestra condolencia hasta la tierra exuberante del Plata, donde el poeta vivió sus últimos días, a subrayar con nuestro dolor la desaparición del inmenso poeta que supo, al igual que el llorado Amado Nervo, llevar como mensaje de amor y libertad a los gloriosos pueblos de Sudamérica, el bagaje misterioso de su palabra divina y el caudal victorioso todo luz, todo vida. Tengo para mí, en abono de mi elogio, que vale más uno de los magnos y bellos discursos de Urueta, que todo ese desbordamiento de pasiones que hemos presenciado, que todo ese laborar inútil que desgasta nuestras energías y amengua nuestro concepto de hombres cultos. Y por eso, señores, pido a esta Representación Nacional que dé un voto afirmativo a la proposición que en estos momentos subscribo. Así triunfará definitivamente el talento sobre la mediocridad, y brillará la belleza por encima de todas las pasiones, de todos los odios y de todos los rencores políticos, como una estrella, como un faro, como un sol omnipotente y claro. (Aplausos.)

El C. secretario Valadez Ramírez: En votación económica se consulta si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Se dispensa los trámites. Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se consulta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobada. Se enviará el cablegrama a que se refiere esta iniciativa.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"Honorable Asamblea:

"Los subscriptos, ante vuestra soberanía, respetuosamente exponen que:

"Son de tal manera graves las declaraciones de la prensa, referentes a las concesiones leoninas, fraudulentas y antipatrióticas hechas en la Secretaría de Industria y Comercio que faltaríamos a nuestro deber si no investigamos lo que haya de cierto, pues como legítimos representantes del pueblo, tenemos obligación de cuidar que las riquezas naturales de la patria no sean repartidas entre unos cuantos favoritos sin escrúpulo ni patriotismo, que no vacilan en negociar esas concesiones, particularmente las de los puertos y fronteras, a compañías extranjeras, en contra de la disposición expresa de la Constitución, que hemos protestado guardar y hacer guardar. Por lo expuesto, y con dispensa de todo trámite, nos permitimos someter a la consideración de vuestra soberanía, la siguiente proposición:

"Única. Encarézcase a las comisiones del Petróleo para que se constituyan en Comisión especial que se encargue de hacer, bajo su responsabilidad, las investigaciones del caso e informe a esta Cámara en el término máximo de 10 días, transcribiéndose este acuerdo al Ejecutivo para que dé facilidades e informe ampliamente a las comisiones."

"México, D.,F., 9 de diciembre de 1920. - Nicolás Cano. - Guillermo Rodríguez."

En votación económica se consulta si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Se dispensan los trámites. Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se consulta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. (Voces: ¡Qué la funde! ¡Qué la funde!)

El C. presidente: Para fundarla, tiene la palabra el ciudadano Rodríguez.

El C. Céspedes: Pido la palabra en contra.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Céspedes: Antes tiene derecho a fundarla el autor.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Céspedes.

El C. Céspedes: Suplico al compañero Rodríguez se sirva exponer los argumentos que tiene en apoyo a su proposición. Yo creo que es conveniente, para después hablar en contra.

El C. presidente: Tiene la palabra en pro de su proposición, el ciudadano Rodríguez.

El C. Rodríguez Guillermo: Señores diputados: En primer lugar, lamento profundamente la impaciencia de los señores diputados que tengo la seguridad de que no están acostumbrados como el que habla, a tener 20 ó 30 horas de vigilia, sobre las máquinas; les concedo la razón y, por lo mismo, deseo ser breve en la exposición que haré. Pero debo decir a ustedes que, al entrar a esta Cámara, protesté, como todos lo habéis hecho, de una manera consciente, guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Tuve la mejor intención de hacerlo y, por lo tanto, he procurado asimilarme todas las páginas de la Constitución, y en ellas me encuentro que está prohibido dar concesiones a compañías extranjeras, para defender nuestra nacionalidad, en la frontera y en los puertos. La prensa diariamente nos da noticias de que la República entera ha sido repartida entre unos cuantos favoritos y, por lo mismo, faltaríamos a nuestro deber si no investigáramos lo que haya de cierto en este particular. Aquí continuamente se ataca a los latifundistas, se habla de los acaparadores de la tierra y, sin embargo, caemos en el vicio de dar concesiones que abarcan a toda la República y, por lo tanto, sin prejuzgar lo que haya de cierto en las declaraciones hechas por la prensa, creo que tenemos el deber de hacer luz y evitar todos estos malos manejos de funcionarios sin escrúpulos, que no vacilan en dar a individuos faltos de patriotismo, vulgarmente llamados coyotes, que no son ellos los que van a hacer la explotación, porque carecen de capital y no pueden demostrar que van a disponer desde luego de él para el negocio sin embargo, se les conceden sin taxativas de ninguna clase, sin garantías, sin tener en cuenta nuestra nacionalidad, concesiones absurdas, que no estamos dispuestos, los que venimos a defender la integridad nacional, a que subsistan; como la Constitución no les concede facultad de regalar los jirones de patria a unos cuantos, por esto yo soy el primero que hago esta proposición, y pido muy respetuosamente a todos los señores diputados, a quienes considero con el suficiente patriotismo, a no ponerse de parte de estos funcionarios sin conciencia, para que se haga la investigación que yo pretendo.

El C. Borrego: Pido la palabra para una moción de orden.

El C. presidente: ¿Desea hablar el señor Céspedes? La Presidencia ordenó que se leyese esta proposición, en la esperanza de que no provocaría discusión; pero en vista de que sí se suscita una discusión y no hay quorum, se suspende la discusión. (Voces: ¡Sí hay quorum! ¡No hay quorum!)

Se cita para la tarde, a las 5 en punto.

Se levanta la sesión. (2.15 p.m.)