Legislatura XXIX - Año I - Período Ordinario - Fecha 19201218 - Número de Diario 92

(L29A1P1oN092F19201218.xml)Núm. Diario:92

ENCABEZADO

MÉXICO, SÁBADO 18 DE DICIEMBRE DE 1920

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

AÑO I. - PERIODO ORDINARIO XXIX LEGISLATURA TOMO I. - NÚMERO 92

SESIÓN DE COLEGIO ELECTORAL DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DIA 18 DE DICIEMBRE DE 1920

SUMARIO

1. - Se abre la sesión. lectura y aprobación del acta de la anterior.

2. - Es discutido el dictamen relativo al 15 distrito electoral del Estado de Puebla; a votación se levanta la sesión por falta de "quorum".

DEBATE

Presidencia del

C. MARTINES DE ESCOBAR R.

(Asistencia de 128 ciudadanos diputados y presuntos diputados.)

El C. presidente, a las 11.35 a.m.: Se abre la sesión de Colegio Electoral.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Acta de la sesión de Colegio Electoral celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el día 13 de diciembre de mil novecientos veinte.

"Presidencia del C. Martínez de Escobar Rafael.

"En la ciudad de México, a las once y veinticinco de la mañana del lunes trece de diciembre de mil novecientos veinte, con asistencia de ciento veintiséis ciudadanos diputados y presuntos diputados, se abrió la sesión.

"Sin debate se aprobó el acta de la celebrada el día diez del presente mes.

"Fue aprobado, sin discusión, el dictamen reformado que presentó la séptima Sección de la primera Comisión de Poderes, y que propone a los CC. Aurelio P. Márquez y Bernardo H. Simoneen para diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 19 distrito electoral de Veracruz .

"El ciudadano presidente dijo que no obraba en poder de la Mesa otro expediente, y el C. Borrego manifestó que debía estar ya en cartera el relativo al 15 distrito electoral de Puebla; la Presidencia repuso que por encontrarse ausenté el interesado no se ponía a consideración de la Asamblea el dictamen de referencia.

"A las once y cuarenta se levantó la sesión para pasar a sesión de Cámara de Diputados."

Está a discusión. ¿No hay quien pida la palabra? En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobada.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"1a. Comisión Revisora de Credenciales. - 2a. Sección.

"H. Asamblea:

"La Comisión que subscribe estudió con detenimiento la documentación relativa al 15 distrito electoral del Estado de Puebla, y de la misma documentación se desprende lo siguiente:

"En el distrito de referencia jugaron como candidatos a diputados propietarios, los CC. Abraham González Galindo que obtuvo 2,047 votos; Manuel F. Méndez, con 1,735; José Dolores Pineda, 1,511; ingeniero Sergio Bonilla, 1,194; Ignacio Betancourt, 2; Francisco Hernández, 1, y Arturo Fuentes, 1. Como candidatos a diputados suplentes, los CC. Luis Veloz obtuvo 2,065 votos; Antonio Hernández, 1,709; Ricardo Domínguez, 1,586, Ignacio Hermosa, 3; Atenógenes Rosales, 2; Manuel F. Méndez, 1; José Dolores Pineda, 1, y Abraham Lucas, 1.

"Como se ve por el párrafo anterior y por los detalles que suministran los paquetes respectivos de la elección a que venimos refiriéndonos, la mayoría de sufragios favoreció a la fórmula integrada por los CC. Abraham González Galindo, como propietario, y Luis Veloz, como suplente. Pero leídas las constancias que obran en el expediente y que hacen prueba plena, llegamos al conocimiento de que el C. Abraham González Galindo fue hasta última hora presidente municipal de Alatriste, cuya cabecera es Chignahuapan, en las condiciones de impedimento señaladas por el artículo 43 de la Ley Electoral vigente, en su fracción VI; pues dicha municipalidad constituye la mayor parte del distrito susodicho, en virtud de que el municipio de Tetela de Ocampo, cabecera del distrito electoral, sufre la pérdida de tres departamentos muy importantes, los cuales son agregados a otros distritos electorales.

"Que el señor González Galindo era presidente municipal durante los días de la elección, se prueba con un certificado subscripto por el C. Leopoldo García Veyrán, como secretario general del Gobierno del Estado de Puebla, en el que aparecen

transcriptos desde la nota oficial en que participaba al Gobierno del Estado la elección de dicho señor como presidente municipal, hasta aquellas por las cuales se ven las varias licencias que fueron concediéndose al señor González Galindo durante la lucha electoral.

"Esto demuestra hasta la evidencia que no se separó definitivamente de su puesto de presidente municipal, como lo manda, clara y terminantemente, la precitada ley de la materia. La Comisión considera, pues, que la elección recaída en favor del señor González Galindo está viciada de nulidad por las razones expuestas.

"En segundo término figura la fórmula Manuel F. Méndez y Antonino Hernández, y a pesar de que hay algunas denuncias de que esta fórmula fue objeto de imposición por parte de las fuerzas serranas al mando del C. coronel Barrios, a esta Comisión le parece moral afirmar en tono categórico, que dichas denuncias carecen de toda fuerza probatoria y que, por consiguiente, a ésta correspondió el triunfo: pues no puede ocultarse que de haber habido presión militar, el susodicho C. Manuel F. Méndez había obtenido la credencial que no obtuvo, porque, según la votación, quedó en segundo lugar.

"La elección se verificó, según los datos de que dispone la Comisión que subscribe, dentro del mayor orden; los expedientes aparecen arreglados conforme a la ley, aun cuando la Junta Computadora que se reunió en Tetela de Ocampo no envió, como era su deber, los paquetes respectivos a la H. Cámara, sino que permanecieron en poder del presidente municipal respectivo, hasta que esta Comisión hizo las averiguaciones conducentes y ordenó le fueran remitidos.

"Por todo lo expuesto, tenemos el honor de proponer los siguientes puntos resolutivos:

"1o. Son válidas las elecciones ordinarias verificadas en el 15 distrito electoral del Estado de Puebla, para diputados al Congreso de la Unión.

"2o. Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el mencionado distrito, los CC. Manuel F. Méndez y Antonio Hernández."

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. - México, D. F., 29 de noviembre de 1920. - A Cienfuegos y C. - B. Vadillo."

Está a discusión. Los ciudadanos representantes que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse.

El C. presidente: Tiene la palabra en contra el ciudadano Tirado.

El C. Tirado: Ciudadanos representantes: Comienzo por felicitar cordialmente a la Comisión que firma este dictamen, porque en su primer punto expositivo hace justicia eliminando al tenedor de la credencial, Abraham González Galindo en virtud de haber violado flagrantemente el artículo 43 de la Ley Electoral en su fracción VI, que dice lo siguiente:

"Artículo 43. Es nula la elección de diputado y senador que recaiga:

"VI. Sobre los que desempeñen el cargo de presidente de Ayuntamiento en municipalidades que constituyan uno o más distritos electorales o la mayor parte de un solo distrito electoral, salvo que se hayan separado definitivamente de sus cargos tres meses antes del día de la elección, o que sean elegidos en lugares en que no ejerzan autoridad."

En efecto en el expediente respectivo obran las pruebas de que el ciudadano Abraham González Galindo era presidente municipal hasta el día de la elección y la votación que trajo, con la que ganó la credencial, la obtuvo exclusivamente en las casillas que se establecieron en el distrito de su jurisdicción; pero la Comisión no ha hecho justicia completa, porque dice en el dictamen que no encontró pruebas fehacientes para declarar que el ciudadano Manuel F. Méndez, que ocupa el segundo lugar, había sido impuesto por la fuerza de las armas y por la presión militar. Esto es completamente falso, porque, en efecto, en el expediente respectivo obran documentos fehacientes. Me voy a permitir dar lectura a fin de que vea vuestra soberanía que, en efecto, hubo presión de armas, sino que la Comisión por recomendaciones especiales y, además, por otra circunstancia, porque encontró que la credencial del ciudadano González Galindo paso al segundo, o sea al ciudadano Méndez, declaró el dictamen en su favor. En el 15 distrito electoral del Estado de Puebla, que es el que nos ocupa, ahora se trata nada menos que de tres imposiciones: la primera, que es un caso típico y muy especial, la del ciudadano González Galindo, presidente municipal de Chignahuapan, en que él se hizo allí la elección y donde sacó la mayoría de la votación. En seguida el ciudadano Manuel F. Méndez, impuesto por el nefasto coronel Barrios que en la Sierra de Puebla hace lo que quiere y domina completamente aquella región. En seguida sigue el ciudadano Sergio Bonilla, que es comandante militar en Tetela de Ocampo y también a su vez, en esa jurisdicción de Tetela de Ocampo se impuso de la manera más atentatoria. De las dos partes, es decir, del ciudadano comandante militar o sea el ciudadano Sergio Bonilla, y además de él, del ciudadano José Dolores Pineda, hay denuncias en contra de Manuel F. Méndez de que fue impuesto por presión de armas.

"El subscripto, representante de los partidos Liberal Constitucionalista de la capital de la República y Liberal Independiente de la ciudad de Puebla, cuyo carácter acredita con las credenciales que exhibe, debidamente requisitadas, para que se tome razón de ellas y le sean devueltas, con fundamento en el artículo 90 de la Ley para Elecciones de Poderes Federales vigente, protesta formalmente ante el personal de esta Junta Computadora por las siguientes infracciones de la ley citada, consistiendo en los siguientes hechos:

"1o. El domingo primero del actual, en la casilla número 8 de este Departamento, se rechazó por el presidente de la Mesa, la protesta que presentara ante la misma el C. Manuel L. Lara representante en aquella sección del Partido Liberal Independiente. Asimismo se presentó el oficial de la Brigada Serrana, C. Daniel Vázquez, armado, revisó todos los documentos electorales de la casilla e intimó a los ciudadanos que no votaban por el candidato que imponía su jefe, haciendo un disparo sobre el C. Juan Arellano, al mismo tiempo que profiría ofensas o frases injuriosas para el C. Alvaro Obregón, candidato popular a la Presidencia de la República.

"2o. En el barrio de San José y casilla respectiva de este Departamento aparece el C. Porfirio Sánchez como presidente de dicha casilla, siendo así que durante el día de la elección estuvo ausente de ese lugar.

"3o. En la casilla número 2 del departamento de Ixtacamaxtitlán, se hizo nombrar presidente de la Mesa electoral el C. Antonino Maldonado, no obstante ser militar. Ejerció presión para que los ciudadanos votaran por la candidatura que apoya su jefe, el C. Gabriel Barrios.

"4o. En la casilla de Santa María, del mismo Departamento, se hizo nombrar igualmente presidente de esa casilla el C. Manuel Lira, que es el inspector de la sección y además es soldado de los que comanda Otilio Herrera.

"5o. En la casilla número 12 de Xocoxiutla, del mismo Departamento, el procesado y prófugo de la justicia, Fidel Romano, que se ha refugiado como soldado, ejerció presión por medio de las armas, para que los ciudadanos votasen por el candidato impuesto, y por último, en la casilla correspondiente a las secciones de Petoloya, Tuligtic y Cruz de Ocote del mismo Departamento, el militar Sacramento Rivera ejerció presión para que triunfara la candidatura antes mencionada, es decir, las del C. Manuel F. Méndez y Antonio Hernández como diputados al Congreso de la Unión.

"Público y notorio es lo manifestado, pero a mayor abundamiento, adjunto documentos que acreditan de un modo patente mi aseveración, los cuales suplico sean estudiados por esa Junta Computadora.

"Me he referido a lo que me consta y tengo documentado de esta parte del distrito, donde a pesar de la virilidad de los ciudadanos, se marcó perfectamente el terror impuesto por la Brigada Serrana y no puedo denunciar los efectos de la misma influencia en los demás departamentos en donde la gente es más miedosa y más decisivas las disposiciones del jefe de la Brigada expresada, fanático, personalista, que a más del amago de las armas, hizo uso del oro de la Nación, para corromper la honradez de los ciudadanos.

"Por lo expuesto, y a nombre de los partidos que me honro en representar, pido la nulidad de los votos obtenidos en las casillas referidas, en favor de los ciudadanos Manuel F. Méndez y Antonino Hernández para diputados propietario y suplente, respectivamente, al Congreso de la Unión.

"Protesto a usted lo necesario.

"Patria, Libertad y Constitución. - Tetela de Ocampo, Salón de la Junta Computadora del 15 distrito electoral, a 6 de agosto de 1920. - El representante P. Pineda."

Por otra parte, hay un documento aquí que dice:

Al margen dos sellos que dicen: "Juzgado Menor Correccional de Ixtacamaxtitlán . - Distrito de Alatriste. - Estado de Puebla.

"Ayuntamiento Constitucional. - Ixtacamaxtitlán Alatriste, Puebla. - Estados Unidos Mexicanos.

"En el pueblo de Ixtacamaxtitlán, Cabecera de Departamento de su nombre del municipio de Alatriste, Puebla; presentes a las cinco de la tarde del miércoles veintiocho de julio de mil novecientos veinte, en el salón de la Presidencia Municipal de este lugar, los ciudadanos Porfirio Pineda, delegado de los partidos Liberal Constitucionalista de la capital de la República e Independiente del Estado; Vicente Bonilla, juez Menor y Correccional; Eligio Herrera, presidente del Departamento, y Francisco López, secretario que autoriza, a petición del primero, hacemos constar y certificamos:

"1o. Que el viernes veintitrés de los corrientes, como a las cinco de la tarde, se presentó en esta oficina el señor Demetrio Barrios, miembro de la Brigada Serrana, acompañado como de veinte soldados armados y procedentes, según manifestaron del Cuartel General de la misma, manifestando el ciudadano presidente entre otras cosas: que venían con objeto de ver que se apoyase por todos los medios posibles la candidatura Manuel F. Méndez - Antonio Hernández, para diputados propietario y suplente, respectivamente, al Congreso de la Unión, en las próximas elecciones.

"2o. Que el domingo veinticinco de este propio mes, el prófugo de la justicia y procesado, Fidel Romano, a la cabeza de seis soldados armados y que dicen pertenecer a la Brigada Serrana y al mismo tiempo propagandistas de la candidatura Méndez, cometieron escándalos, amagando con las armas a algunos ciudadanos.

"3o. Que hoy a la cinco de la tarde se presentaron en esta oficina, también armados, los ciudadanos Eduardo Arenas y Otilio Herrera que, según decir del último, pertenecen a las fuerzas de la expresada Brigada Serrana; tratando el primero de hacer fuese apoyada de una manera oficial por este Consejo Municipal, la candidatura del señor Méndez, para diputado propietario al Congreso de la Unión, y de levantar una acta que le interesaba para desechar las boletas de una candidatura, que a su modo de ver no debía aceptarse. Como el expresado señor Arenas no presentara sus credenciales debidamente requisitadas que lo acrediten como representante de ningún partido político o candidato y únicamente mostró una tarjeta de identificación como miembro del Partido Cooperatista Nacional, no se le reconoció personalidad alguna para inmiscuirse en actos electorales y menos de una manera agresiva como él lo pretendió.

"A pedimento del ciudadano Pineda, se hace constar lo anterior, para los efectos del artículo 104, fracción II de la Ley Electoral vigente.

"El juez Menor y Correccional, Vicente Bonilla. - El delegado, P. Pineda. - El presidente del C. Municipal, Eligio Herrera. - El secretario, Francisco López."

Hay otra denuncia que hace el ciudadano Sergio Bonilla, comandante militar, que también se quiso imponer en Tetela. Con esto verán ustedes que, de los dos candidatos, parten las mismas denuncias. Dice así en la parte respectiva:

"Con relación al segundo candidato, ciudadano Manuel F. Méndez, nos permitimos muy respetuosamente llamar la atención de esa honorable Asamblea sobre las reclamaciones y protestas presentadas por los representantes de todos los candidatos, en las diversas casillas electorales, tanto del municipio de Alatriste, como en las de éste de Tetela, contra la imposición que, por medio de las armas, intentó hacer un jefe militar, que pretende controlar toda esta región. Al efecto, fuertes

contingentes de soldados recorrieron los departamentos municipales de Ixtacaxtitlán, Aquixtla y Chignahuapan, del distrito de Alatriste, y en el pueblo de Tonalapa y los barrios de Xilitetitla, Cuapacingo y Taxco y pueblo de Xaltatempan, la mayor parte de los vecinos que son soldados del mismo jefe militar de que antes hacemos referencia, la votación fue unánime en favor de este candidato; procede, por lo tanto, la declaración de nulidad de todos los votos que adolecen de este vicio y así pedimos, respetuosamente, a esa H. Asamblea, se sirva declararlo."

Aquí están los documentos que la Comisión tuvo al frente para haber declarado que en la votación que recayó en favor del ciudadano Méndez había vicios de nulidad; sin embargo, la Comisión, quizá por ignorancia, quizá por fatiga o por cansancio, no quiso estudiar con toda la acuciosidad necesaria, este expediente, y solamente se concretó a dictaminar en favor del propio ciudadano Méndez, cuando está perfectamente comprobada la presión militar. Recordarán ustedes, ciudadanos diputados, que al discutirse la credencial por el 17 distrito electoral del Estado de Puebla, se dio lectura aquí, por el ciudadano Arroyo Ch., a una carta que es verdaderamente reveladora, además de estos documentos a que he dado lectura antes, y al efecto, me voy a permitir leerlo a vuestras señorías. Dice "El Diario de los Debates":

"- El mismo C. secretario: Un timbre que dice.

"Doctor Alfonso Cabrera. - Facultad de México.

"México, 25 de julio de 1920.

"Señor don Fidel Arroyo. - Zacatlán.

"Estimado amigo:

"Te participo que ya se habló al coronel don Gabriel Barrios para lograr preste su apoyo en favor de Rodolfo Hernández en su campaña por ese distrito para diputado al Congreso de la Unión. El coronel está bien dispuesto para realizar los propósitos de nuestro partido, y asegura que le conseguirá la credencial a todo trance.

"Tú ya conoces la eficacia de nuestro común amigo el coronel Barrios; de manera que resuelto como está a apoyar a Rodolfo, puedes estar seguro de su éxito, que es nuestro, y con mayor razón si es que, como dices, no ha habido ningún cambio de autoridades hasta la fecha en ese distrito.

"Te comunico también que la misma ayuda nos dará el coronel en favor del profesor Rafael Jiménez en Huauchinango, y para Manuel F. Méndez en Tetela.

"Sí aún permanece nuestro amigo Porfirio Baños como tesorero municipal de esta cabecera, ponte al hable con él para que no vaya a ministrar constancia alguna respecto de los fondos que substrajo Rodolfo cuando estuvo como tesorero el año de 1914, porque esto sí daría lugar a que fuésemos al fracaso.

"Dile a Federico que Alfonso se encuentra bien y que ya le avisaré cuándo pueda venir.

"Tu amigo que te saluda afectuosamente, José M. Cabrera."

Ya veis, señores, que todos los antecedentes nos demuestran que el ciudadano Méndez ha sido impuesto por el nefasto coronel Barrios en la Sierra de Puebla, y ¿sabéis, ciudadanos diputados, qué representa Barrios en la Sierra de Puebla? Representa al cabrerismo, al cabrerismo rabioso de despecho, que actualmente está en intensa actividad esperando solamente que comience a brotar algún movimiento revolucionario en la República, para agitar aquella región de la Sierra Norte del Estado de Puebla. Así es, señores, que Manuel F. Méndez será dentro de nosotros un representante de esa nefasta facción, que seguramente dará días de luto todavía a nuestra República durante la administración del ciudadano Obregón. Pero hay más, señores, y si acaso no fuese el cargo político y el cargo legal que tiene desde el punto de vista legal el ciudadano Méndez, yo os pediría, ciudadanos diputados, que en el caso de que solamente hubiese esos tres candidatos, declararais, como en el caso del 17 distrito electoral del Estado de Puebla, es decir, Zacatlán, declararais la nulidad de la elección. Pero es el caso que aquí hay un candidato que tiene completamente limpia su elección, como voy a demostrarlo a vosotros; está completamente limpia, es una votación realmente de voluntad popular, completamente democrática y completamente limpia. Ningún otro candidato se atreve a hacerle cargos; el único cargo que han hecho a este candidato, que es el ciudadano José Dolores Pineda, que perteneció a la XXVII Legislatura y que en esa XXVII Legislatura se mantuvo a la altura de su deber, siempre revolucionario, siempre honrado, siempre discreto, siempre patriota, ese ciudadano José Dolores Pineda es quién triunfó en la elección, y el único cargo que se le hace, es el de no haber resellado sus boletas en la cabecera del distrito, sino haberlas resellado en las municipalidades foráneas. ¿Por qué fue esto, ciudadanos diputados? Porque el ciudadano José Dolores Pineda llevó sus boletas a la cabecera del distrito, llevó sus boletas oportunamente, y se le estaban deteniendo de la manera más infame, puesto que Sergio Bonilla, comandante militar en Tetela de Ocampo, era uno de los interesados y el Ayuntamiento estuvo completamente de su parte, y él quería detener las boletas para que llegasen tarde, para que no hubiese elección. El representante del ciudadano José Dolores Pineda, comprendiendo al chanchullo de que se le quería hacer víctima, tomó sus boletas, las llevó a cada municipio, y reselladas por los ayuntamientos foráneos, fueron a la elección. Esto no es una causa de nulidad; es el único, el único cargo que aparece en este dictamen en contra del ciudadano José Dolores Pineda; pero, señores, yo siento mucho que la Comisión no haya estudiado el expediente; hay cosas que, verdaderamente, van a dar vergüenza a quien pretende tener el triunfo en estas elecciones. Aquí están los expedientes electorales, y ahora que veáis el chanchullo y el fraude electoral tan escandaloso en este asunto, ya no tendréis más que rechazar el dictamen, porque es verdaderamente vergonzoso lo que ha acontecido. Tenéis, por ejemplo, un caso, el caso principal en que debe radicar la sospecha de que ha sido completamente violada toda la elección y que el ciudadano Méndez, de la manera más arbitraria, o sus partidarios, han hecho esta modificación, porque ya no corresponde los datos que dan los expedientes electorales a los datos que da la Junta Computadora en su acta; es el siguiente. Yo interpelo a la Secretaría para que ella informe....me permito

suplicar a la Secretaría que informe....Bueno, señores voy a hacerlo yo.

Los expedientes electorales de la Junta Computadora en el 15 distrito electoral ¿sabéis dónde se quedaron? En Tetela de Ocampo, en el Ayuntamiento de la cabecera. No se habían recibido en esta Cámara, como era obligación del presidente de la Junta Computadora y de la Mesa de la Junta Computadora remitirlos aquí bien cerrados y con las firmas encima para que constara que no habían sido violados. ¿Sabéis adónde se quedaron? En el Ayuntamiento de Tetela de Ocampo. La Comisión no sabía dónde estaban estos paquetes electorales, pues fue el ciudadano Manuel F. Méndez quien vino a decir que estaban en Tetela, y entonces él, personalmente, fue por ellos, los recogió, los trajo aquí a la Cámara de Diputados después de dos meses y los entregó completamente violados. Váis a leer y váis a oír el oficio que contestó el ciudadano. Cienfuegos y Camus, como miembro de esa Comisión, acusando recibo de los expedientes electorales:

"1a. Comisión Revisora de Credenciales. - 2a. Sección. - Número 100.

"Con el atento oficio de usted número 1,454, girado por la Sección de Gobernación fechado el 21 de los corrientes, recibió esta 2a. Sección Revisora de Credenciales, dos cajas de madera conteniendo 88 expedientes abiertos, referentes a las elecciones que para diputados al Congreso de la Unión, se verificaron el 1o. de agosto próximo pasado en ese distrito.

"Protesto a usted mi atenta consideración.

"México, D. F., 23 de noviembre de 1920. - El presidente de la 2a. Sección A. Cienfuegos y Camus." - Al ciudadano presidente municipal. - Tetela de Ocampo, Puebla.

Ya véis señores, hasta cuándo llegó el expediente electoral completamente violado. ¿Qué garantía tuvo la Comisión de que todos los expedientes electorales hayan sido modificados, como lo fueron? (Siseos. Murmullos.) Como lo fueron, porque está perfectamente claro, como lo demostraré en el curso de esta peroración, que los expedientes electorales ya no corresponden a lo que rindió la Junta Computadora, y me voy a permitir, para confirmar este dicho, suplicar a la Secretaría se informe en la Oficialía Mayor e informe a la vez a vuestra soberanía quién entregó estos expedientes electorales completamente violados, después de dos meses, a la Oficialía Mayor.

El C. secretario Valadez Ramírez: La Secretaría hace constar que desde el 22 de noviembre, y traídos por un particular, fueron entregados tres cajones al Archivo de la Cámara. (Siseos.)

El C. Tirado: El particular es el ciudadano Manuel F. Méndez, a él se le dio el recibo, esto me fue informado por un empleado de la Oficialía Mayor, él fue quien fue a traer los paquetes y los trajo aquí completamente violados. Pero ahora, señores, la Comisión - vuelvo a repetir - , no quiso ya revisar los expedientes; estoy seguro de que si los hubiera revisado, un escrúpulo de conciencia y de honradez le hubiera vedado el dictaminar en favor de Manuel F. Méndez; está tan claro, tan preciso el fraude electoral, que vosotros por vuestros propios ojos váis a verlo: por ejemplo, en la Sección 7a. de Totutla los padrones están a base de lista de raya, sin firmar, sin sellos, y no existe nombramiento de instalador; existe solamente una copia sin firma de ninguna especie y sin sello de autorización tampoco; no hay credencial de elector, las boletas vienen todas firmadas son noventa y tres y, sin embargo, la Comisión le computó esos votos, no los deduce para nada. En la Sección 4a. de Cuauhtepan, no hay votos, no hay más que credenciales, no vienen boletas de ninguna especie y sin embargo la Comisión le computa 180 boletas, por esa casilla. Probablemente allí alguno de los otros candidatos había ganado y entonces el ciudadano Méndez y sus partidarios arrebataron las boletas, las sustrajeron, e hicieron el expediente a su favor.

Más adelante veréis que el ciudadano Méndez en un momento dado no tuvo esas boletas, porque después de dos meses ¿quién conserva boletas ciudadanos diputados? Esto lo sabemos todos, señores, esto lo saben todos. Para la elección no tenía boletas y lo que hizo entonces el señor Méndez allí fue sustraer las boletas con los votos y hacer expedientes para él, con declaratorias y escrutinios para él, a favor de él, padrones completos, etcétera, etcétera. En una casilla, señores, paso una cosa verdaderamente estupenda. Todas las boletas del candidato vienen votadas, aquí las tienen ustedes, señores, y pido a algunos de los compañeros que se acerquen a verlas, vienen votadas, excepto nueve del Partido Liberal Constitucionalista, ¿me hace favor algún compañero? (Algunos ciudadanos se acercan a la tribuna) Vienen votadas al frente todas en el círculo y, sin embargo, a la vuelta están votadas: "Manuel F. Méndez y Antonio Hernández", están con sus cruces, (Murmullos.) y, sin embargo, están los votos aquí, ¿Cuáles son las que computó la Comisión? Seguramente que este es un fraude electoral de lo más escandaloso. Es conveniente que vuestra soberanía se fije atentamente en esto, porque esto es verdaderamente escandaloso, esto es verdaderamente sucio. Las boletas electorales están firmadas, están respaldadas con la candidatura de "Méndez Hernández" ¿qué manera de votar es esta? Desde luego véis que esto se hizo después de la votación. Esto está completamente demostrado.

El C. Garza Candelario: ¿Qué sección es?

El C. Tirado: La 6a. Sección de Petolaya. Suplico al ciudadano secretario que me haga el favor de entregar a los compañeros algunas boletas para que vean el fraude electoral tan escandaloso. Hay este otro que también me permitiré suplicar a la Secretaría lo pase a la vista de algunos compañeros, para que vean que en este expediente es absolutamente notable, aun sin ser un perito en caligrafía, que las firmas son hechas por la misma mano, y todo este expediente está completo para el ciudadano Méndez, es la Sección 2a. de Tetela; ved, señores, cómo las firmas al final, la rúbrica, una misma rúbrica estuvo haciendo todas...

El C. Mijares: ¿La rúbrica o la misma mano?

El C. Tirado: La misma rúbrica se estuvo empleando para los demás nombres. Este otro expediente también es fácil ver, es muy notable que la misma mano hizo rúbricas, los mismos nombres. Como véis, señores, es una serie de vicios, en la elección del ciudadano Méndez; es imposible, a no ser que la Cámara perdiera su sentido de convicción de honradez, en cuestión electoral sería

únicamente como saliera aprobado el ciudadano Méndez con esas cosas que son verdaderamente notorias y claras. Los mismos defensores de él estoy seguro que únicamente vendrán a abandonar su conducta como revolucionario, como político. Yo sé que el ciudadano Méndez ha sido un hombre que anteriormente fue honrado y fue revolucionario, que perteneció a la XXVI Legislatura y que en esa XXVI Legislatura se mantuvo con decoro y con alteza de miras y que, por otra parte, votó en contra de la renuncia del señor Madero y del señor Pino Suárez, acto verdaderamente noble y que soy el primero en admirar; pero el ciudadano Méndez que de esta manera se eleva a los altos principios revolucionarios allá en la política local se une a elementos que extorsionan a los indígenas y que hacen chanchullos electorales y, sobre todo, lo más peligroso ahora, es que está unido al nefasto Gabriel Barrios, quién seguir dominando en la sierra de Puebla a ciencia y paciencia del Gobierno y de todos.

El ciudadano Méndez no podrá negar, absolutamente su complicidad con Barrios, que es quien lo ha impuesto, y él será, en esta Cámara de Diputados, la voz de Barrios, y como Barrios es el representativo, es hechura de los Cabrera, será el representativo del cabrerismo, porque debéis saber, señores representantes, que en la Sierra Norte del Estado de Puebla - vosotros lo sabéis - existió un general llamado Juan Francisco Lucas, de gran prestigio entre los indígenas. Cuando el cabrerismo, siempre ladino y atento al porvenir y al futuro, quiso que algún hombre heredase el prestigio, el prestigio que tenía sobre la clase indígena el general Juan Francisco Lucas, comenzó a levantarlo, a darle hombres, a darle armas y todo lo que necesitara Barrios para que éste heredara todo el prestigio y todo el predominio que tenía Juan Francisco Lucas. Desde entonces viene el cacicazgo de Barrios, y allí están los Cabrera esperando que algún movimiento estalle, para que ellos también comiencen a levantarse en armas en la Sierra Norte del Estado. Ya vuestra soberanía ha dado varias lecciones y, sobre todo en el 17 distrito electoral de Puebla, con el ciudadano Hernández, ha dado una lección a ese cacique Barrios, de que no es él quien debe nombrar a los diputados al Congreso de la Unión por esa rica región, sino que es el pueblo, al pueblo es a quien le corresponde elegir sus mandatarios y, señores, aquí el único que representa la voluntad popular y democrática, es el ciudadano José Dolores Pineda, hombre que en la XXVII Legislatura supo estar a la altura de su deber, hombre honrado y patriota, hombre que no tiene cargos absolutamente que hacérsele, porque es un hombre que ha sabido estar siempre a la altura de la Revolución y siempre a la altura de los altos principios proclamados por la misma Revolución. Así pues, señores, a reserva de refutar algunos de los cargos que pudieran hacerse, que no tendrá ninguno, o refutar las frases que traigan aquí en favor del ciudadano Manuel F. Méndez, termino pidiendo a vuestra soberanía que rechacéis este dictamen para que vaya a Comisión, y que la Comisión haga un estudio minucioso de ese mare magnum de papeles, de los que a mí me ha costado un trabajo ímprobo poder sacar algo de lo que he presentado a vuestra soberanía, porque es un mare magnum que lo hicieron exprofeso, a propósito para que fuera inútil por completo a la Comisión sacar una consecuencia lógica de ello y solamente se guiara por las indicaciones del propio tenedor de los paquetes violados. Yo espero que vuestra soberanía, ciudadanos diputados, rechace este dictamen para que vaya a la Comisión, y que con toda honradez y con toda acuciosidad revise el expediente y dé el triunfo a quien lo merece, a quien lo ha ganado en buena lid: al ciudadano José Dolores Pineda.

El C. presidente: Tiene la palabra en pro el ciudadano Borrego.

El C. Borrego: Señores diputados: Hay que dar alas al debate, como decía Rafael Martínez de Escobar, y no colocar pies de plomo, como lo ha hecho el señor Tirado. Yo no voy a hurgar en todo este expediente de papeles; yo no voy a leer diligencias de jurisdicción voluntaria, que nada significan y que nada valen; yo no voy hacer hincapié ni a fatigar el espíritu de esta honorable Asamblea con la lectura de protestas, protestas no comprobadas, todo eso, señores, señor Tirado, repito a usted, hay que elevar el debate; cierta clase de debates enferman, deprimen, ensombrecen, asquean, ponen repugnancia en el espíritu; y yo repugno de esos debates, en esos ni siquiera quisiera ser testigo, conste, señores, que no me refiero a los debates habidos con motivo de las elecciones municipales; esos debates, en lugar de debilitar, fortifican; en lugar de abatir; levantan; en lugar de poner ascos, ponen alientos en el espíritu. ¿Pues qué, señores diputados, no es ley, histórica, no ha venido a poner de relieve este debate, el hecho importantísimo, la revelación de que la democracia mexicana ha nacido, y que ha nacido viable? Señores diputados, ¿habéis olvidado quizá una ley histórica, que la quietud y el silencio son el acompañamiento forzado de las dictaduras, y que la turbulencia y la inquietud y el bullicio son el público cortejo de las democracias, en tanto que la inmovilidad, la quietud y el silencio lo son de los gobiernos despóticos? Agitada y tumultuosa fue la democracia ateniense; turbulenta y tempestuosa la democracia romana; tempestuosa y huracanada la democracia francesa; huracanadas y no menos violentas han sido las democracias hispanoamericanas, y, entonces, señores, ¿por qué nosotros venimos a señalar aquí que la democracia haya nacido entre relámpagos y truenos, y en medio de tormentas y del estallido de la Revolución? Pero no quiero incidir en el error en que incurren algunos oradores, no quiero, no puedo, no debo olvidarme que no está a discusión la democracia mexicana, sino el dictamen formulado en favor del ciudadano Manuel F. Méndez. Yo no conozco un dictamen más claro, más natural, más sencillo, es una nota cristalina a través de la cual se ven las guijas de oro. El asunto legal es tan claro y sencillo, que está al alcance de todo el mundo, que fácilmente se entiende, que fácilmente se comprende. En el distrito 15 del Estado de Puebla jugaron tres fórmulas, no digo más que tres fórmulas, porque son las más importantes, la fórmula de Abraham González Galindo, que aportó 2,047 votos, la fórmula de Manuel F. Méndez, que obtuvo 1,755 votos, y la fórmula con 1,511 votos, que obtuvo el ingeniero Sergio

Bonilla. La Comisión dictaminadora, con una caridad manifiesta, dice que el señor José Dolores Pineda tiene 1,551; la Comisión dictaminadora, con una sencillez y con una claridad que pudiéramos llamar flaubertina o flobertina, si el neologismo no les agrada, nos presenta claramente la cuestión legal. La mayoría estaba a favor del señor Abraham González Galindo; pero este señor, en virtud de la Ley Electoral; se encuentra inhabilitado para desempeñar este cargo, por las siguientes razones: primera, porque era presidente municipal del distrito de Alatriste, cuya cabecera es Chignahuapan, y segunda, porque dicha municipalidad constituye parte de los distritos electorales, la mayor parte de las secciones de ese distrito electoral. La Ley de la materia la ley vigente electoral en su artículo 43, fracción VI, dice lo siguiente:

"Es nula la elección de diputados y senador que recaiga:

"IV. Sobre los que desempeñen el cargo de presidente de Ayuntamiento en municipalidades que constituyan uno o más distritos electorales o la mayor parte de un solo distrito electoral, salvo que se haya separado definitivamente de sus cargos, tres meses antes del día de la elección, o que sean elegido en lugares en que no ejerzan autoridad."

La Comisión dice a este respecto:

"Que el señor González Galindo era presidente municipal durante los días de la elección, se prueba con un certificado subscripto por el C. Leopoldo García Veyrán, como secretario general del Gobierno del Estado de Puebla, en el que aparecen transcriptos desde la nota oficial en que participaba al Gobierno del Estado la elección de dicho señor como presidente municipal, hasta aquéllas por las cuales se ven las varias licencias que fueron concediéndose al señor González Galindo durante la lucha electoral."

Descartado, señores diputados, de la contienda electoral el ciudadano Abraham González Galindo, la Comisión no podía, no debía hacer otra cosa que otorgar su dictamen en favor del ciudadano Manuel F. Méndez, que tenía 1,735 votos; éste es el que venía en segundo lugar. Ahora voy a entrar, dicho esto, voy a refutar algunas de las razones aducidas aquí por el ciudadano Tirado. Nos habla de imposición, nos habla de que el ciudadano Méndez es cabrerista, nos ha hablado de un expediente que afirma haber venido por conducto del ciudadano Méndez, y sobre estos tres puntos voy a no extenderme mucho, porque no lo creo necesario, para demostrar la escasa solidez de los argumentos que ha aducido el orador que me precedió en la tribuna. Respecto a la imposición que dice que ejercieron las fuerzas de Barrios en favor del ciudadano Méndez, váis a oír la voz de una persona enteramente imparcial en esta materia, que no tiene absolutamente ningún interés en el debate y que, por lo mismo, tiene su afirmación mucho valor. Suplico al ciudadano Jesús Z. Moreno se sirva decirme lo que sepa respecto a este particular, esto es, respecto a la presión que hayan podido hacer las fuerzas de Barrios en favor del señor Méndez.

El C. Moreno: Pido la palabra para contestar, señor presidente.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Moreno: Honorable Asamblea: Voy a satisfacer tan brevemente como sea posible, la demanda del orador que está en el uso de la palabra, con el objeto de hacer del conocimiento de vuestra soberanía estos breves hechos. Hace más de diez años que la Sierra Norte del Estado de Puebla permanecía unida como un sólo hombre, bajo el patriarcado, si se quiere, del general Juan Francisco Lucas. En esa época estaba unida la familia serrana y los ligaba una unidad de lazos políticos, lo mismo al ciudadano Méndez que al ciudadano Barrios, que el ciudadano Bonilla y que al ciudadano José Dolores Pineda. Los acontecimientos políticos que se registraron en el país en el año de 1915, dieron lugar a una profunda escisión en la familia de la Sierra Norte del Estado de Puebla. Por esta escisión vinieron a establecerse estos dos campos: en uno, en el campo netamente carrancista, el coronel Barrios, y aun el mismo señor Lucas, y en el campo convencionista imperaba el señor Manuel F. Méndez y, por lo tanto, allí se inició un distanciamiento político, como le consta al ciudadano Borrego y les consta a todos los correligionarios del ciudadano Méndez, que explica con claridad bastante notoria, en mi humilde concepto, que el ciudadano Méndez, no pudo contar con el apoyo político del ciudadano Barrios y, por lo tanto, no pudo haberse ejercido presión por la fuerza de las armas que tiene en sus manos el coronel Barrios, en favor del ciudadano Méndez. En el mismo caso de esta consideración de orden político, que puede hacer la psicología de esta elección, se encuentra el ciudadano ingeniero Bonilla, distanciado políticamente del ciudadano Barrios y, por lo tanto, es perfectamente absurdo querer impresionar a vuestra soberanía con el juicio de que en favor del ciudadano Méndez o del ciudadano Bonilla se hubiera ejercido presión de las armas que tiene el ciudadano Barrios; pero hay un dato más, señores, que a todos los poblanos que están aquí, les consta y que explica también de una manera que no deja lugar a duda, la legitimidad de la elección del ciudadano Méndez; la razón es ésta: desde la época de la Guerra de Reforma existieron tres grandes representantivos de la región Norte del Estado de Puebla, y éstos, como todos vosotros sabéis, fueron los ciudadanos generales Juan Nepomuceno Méndez, Juan Crisóstomo Bonilla y Juan Francisco Lucas. Estos hombres, por medio de una obra de verdadero amor y de verdadero espíritu liberal y democrático, lograron ejercer siempre una poderosa influencia en la región, influencia que los sucesores, y entre ellos se encuentra el ciudadano Méndez, no hicieron más que conservar el afecto y el respeto de sus conciudadanos. Estas razones, que están en la conciencia del ciudadano Tirado, porque el ciudadano Tirado representa en este Congreso uno de los distritos de la Sierra Norte del Estado de Puebla, y que estoy seguro que él respaldará, llegado el caso, mis propias palabras, confesando que son la expresión fiel de la verdad histórica en lo que se refiere a estas personalidades en el Estado de Puebla, explican con toda sinceridad y con toda buena fe, que la elección en favor del ciudadano Méndez, es perfectamente legítima y perfectamente democrática.

Está servido su señoría.

El C. Borrego: Doy las más expresivas gracias a mi querido compañero, el ciudadano Jesús Z. Moreno. Habéis oído, señores diputados, esa información clara, precisa y terminante respecto de la posibilidad de una imposición en favor del señor Méndez: pero que yo quiero llamar a ustedes la atención sobre este argumento que considero capital y contundente: la Cámara de Diputados, hace muy pocos, días, considerando que las influencias del coronel Barrios en la Sierra de Puebla eran decisivas, declaró la nulidad de las elecciones habidas en el 17 distrito electoral del Estado de Puebla. Y bien, señores; si la influencia de este coronel Barrios es de tal manera decisiva, ¿no es racional suponer que si la hubiese habido en favor de Méndez, no hubiera ocupado el segundo lugar el primero? Eso me basta para destruir el cargo de imposición. Repito, yo no voy a hurgar este expediente. Otro cargo que hizo el señor Tirado, es que el expediente de no sé qué municipalidad o de que casilla electoral, fue traído hacer unos cuantos días por el señor Méndez. Yo me permito suplicar al compañero Candelario Garza, si sabe algo sobre el particular, que se sirva decirlo a esta Asamblea.

El C. Garza Candelario: Pido la palabra.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Garza Candelario: Para contestar su interpelación, compañero Borrego, únicamente diré que, precisamente en el expediente relativo al asunto que se trata, está un mensaje del presidente municipal de Chignahuapan, en el cual avisa a la Cámara de Diputados haber remitido por express una caja de madera conteniendo los expedientes de las elecciones verificadas en ese distrito. Por lo que se refiere a que dentro de esa caja venían abiertos, es natural, porque la Junta Computadora, al hacer sus trabajos, los abrió y luego nada más los arregló y los puso dentro de esa caja y así los mandó a la Cámara de Diputados.

El C. Borrego: Lo habéis oído, señores; los dos hechos son perfectamente claros y los dos relevan que el compañero Tirado no ha procedido con toda corrección al hacer esas afirmaciones. Los paquetes no fueron traídos por el señor Méndez, como afirma el señor Tirado, primera inexactitud; en segundo lugar, si venían abiertas, la explicación que nos ha dado el compañero Garza es natural: fueron abiertos por la Junta Computadora.....

El C. Tirado: Abiertos los expedientes, pero no los paquetes.

El C. Borrego: Estoy en el uso de la palabra. No los volvió a cerrar; pues claro está que tenían que venir abiertos. Dejo para el último punto el cargo político, porque es el cargo más interesante, el cargo político de cabrerista. Señores: francamente yo creía que el compañero Tirado era un espíritu amplio, fuerte, vigoroso, exento de supercherías y supersticiones; creía que tenía el alma del siglo XX y no el alma del siglo X; pero me estoy convenciendo de que es no un fantasma, no un duende, ni trasgos ni fantasmas los que vienen a turbar su sueño, lo es el fantasma de Cabrera, que todavía se levanta en el banquete de su fiesta de diputado para venir a turbar sus alegrías. (Risas.) No señores, ni señor diputado Tirado; Luis Cabrera, en la alborada de la Revolución, brilló con fulgores de astro; más tarde fulguró con siniestros resplandores de incendio y, por último, en la trágica noche de Tlaxcalantongo Cabrera se extinguió como una chispa. (Aplausos.) En política, compañero Tirado, hay muertes definitivas y hay muertes aparentes; créame usted, la muerte de Cabrera es definitiva, y es definitiva, porque la opinión pública, como una inmensa, como una grandiosa lápida de plomo, pesa sobre su memoria. Es muy fácil, señor Tirado, volver de Elba; pero jamás se ha vuelto de Santa Elena, y yo digo a usted lo siguiente, le recuerdo a usted una máxima oriental: " los muertos están bien muertos, dejémosles que duerman", ¡que no turbe más su sueño al fantasma de Luis Cabrera! No conozco pasiones que tanto cieguen los mejores criterios, las inteligencias más clara, como la pasión religiosa y la pasión política, en este caso, ciega a nuestro compañero Tirado, al grado de venir a atacar al ciudadano Méndez como representante del cabrerismo, y vean ustedes, señores, este dato importantísimo: a quien defiende Tirado es al señor Dolores Pineda, y según datos que tengo aquí, el señor Dolores Pineda es el que vino a solicitar una pensión para la viuda de don Ramón Cabrera, es decir: vino a defender aquí a un cabrerista, ¡y ha venido a atacar al señor Méndez por cabrerista el señor Tirado! Estas son inconsecuencias en política, ciudadano Tirado.

El C. Tirado: ¿Me permite una interpelación?

El C. Borrego: Le concedo las que usted guste.

El C. Tirado: Con permiso de la Presidencia, ¿me puede usted decir, ciudadano Borrego, en qué fecha fue esa solicitud?

El C. Borrego: Los datos que se me han comunicado no expresan la fecha; lamento no podérsela decir.

El C. Tirado: La fecha, señores, esa a la que se ha referido el ciudadano Borrego, esto es, cuando los Cabrera eran verdaderamente unos patriotas y unos revolucionarios, cuando los Cabrera, cuando Ramón Cabrera y Alfonso y todos los demás estaban al lado de la Revolución y no se habían corrompido todavía; después los más acérrimos enemigos del ciudadano José Dolores Pineda fueron los Cabrera, porque tan pronto como comenzó la dictadura de Carranza, entonces el ciudadano Pineda se retiró y maldijo de la unión y de la amistad que tenía con los Cabrera, no obstante que el señor Pineda había ayudado de una manera eficaz a la elección de Alfonso Cabrera como gobernador del Estado, porque después comenzó a falsear todos los principios de la Revolución en el Gobierno del Estado de Puebla. El ciudadano Pineda hizo esa moción y trabajó en ese sentido cuando Luis Cabrera era revolucionario, cuando era un astro, como dijo el ciudadano Borrego, y no cuando fue chispa. (Risas.)

El C. Borrego: Declaro que no es inconsciente en este punto el compañero Tirado, pero queda en pie lo que dije antes. Y ahora voy a decir a usted, ciudadano Tirado, quién es el señor Méndez. Decía al principio de mi peroración que si hay debates que infaman que deprimen el espíritu, en cambio hay otros que lo levantan y lo fortifican. Defender el dictamen, defender al señor Méndez es defender a la Revolución, por que uno de los

hombres más puros, más honrados, más sinceros y más leales es el ciudadano Manuel F. Méndez. No voy a cansar a la Cámara haciendo la biografía de Méndez, pero voy a poner de relieve dos o tres detalles que pintan con pincelada vigorosa, con pincelada maestra, quién es aquél a quien la Comisión ha otorgado el dictamen. En una de las horas más lúgubres para el país, cuando el usurpador había miserable y cobardemente, cuando el usurpador Huerta tenía encerrados en el Palacio Nacional al apóstol Madero y al vicepresidente Pino Suárez, la Cámara de Diputados por indicación de muchos de sus líderes se reunió el 19 de febrero. Tocábame presidir aquella sesión y como a las tres de la tarde un grupo de familiares del señor Madero, descompuestos los rostros, pálidos los semblantes y las lágrimas en los ojos, venían a pedirme que influyera sobre el escaso número de renovadores que había en aquella sesión a fin de que se le aceptara la renuncia al ciudadano Madero. Convoqué, repito, inmediatamente llamé a ese pequeño grupo de individuos (quince o veinte) renovadores, entre los que se encontraba el ciudadano Méndez y nos reunimos en este salón, en el Salón Amarillo. La opinión se dividió y en algunos el factor sentimentalismo dominó; se decía: hay que salvar la vida del señor Madero. Entonces se levantó el señor Méndez y pronunció estas palabras que he recogido y la historia recogerá algún día: "Cuando se llega a determinadas alturas, hay que saberse sacrificar; no votaré en favor de la renuncia". Y vino la sesión y el ciudadano Méndez fue uno de los que negó su voto para la renuncia del señor Francisco I. Madero. Eran igualmente aquellos días terribles y trágicos de la Decena Trágica. La Cámara de Senadores con torpeza, con vileza, que no quiero calificar más enérgicamente, fue a pedir al señor Madero la renuncia del alto puesto que desempeñaba. Entonces unos cuantos diputados llevamos una hoja diciendo que la Cámara de Diputados sabría seguir la suerte del ciudadano Madero, y en esa hoja se encuentra la firma del señor Méndez; no sé si alguno de los diputados conoce el manifiesto que el Partido Liberal lanzó durante el período de la usurpación: era un terrible bofetón en pleno rostro a Huerta: era en aquel momento en que una palabra costaba la vida, y la firma del señor Méndez figura igualmente allí. Señores diputados, no quiero seguir cansado a ustedes con este tema; repito a ustedes que el señor Méndez es una de las figuras más puras y más limpias que honran no sólo a su tierra, que honran a la Revolución y que honran a la patria. La Junta Computadora dio una credencial en favor del señor Abraham Galindo y voy, para terminar, a repetir las palabras del más elocuente tributo español y a hacer un pequeño cementerio de mi parte: decía Castelar: "¿Qué vale una gran gloria si está manchada con sangre? ¿Qué vale una palabra, una gran palabra, si brota de un corazón corrompido? ¿Qué vale un gran poder, si ese poder sólo acierta a oprimir?" Eso decía Castelar, señores, y yo digo a ustedes: ¿qué vale la credencial expedida en favor del señor Abraham Galindo, si está manchada con los lodos de la ilegalidad? Pido que votéis en favor del dictamen. (Aplausos.)

Presidencia del C. MANRIQUE AURELIO

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Tirado por segunda vez.

El C. Tirado: Ciudadanos representantes: (Voces: ¡A votar! ¡A votar!) No voy a cansaros, únicamente quiero hacer algunas aclaraciones que creo que me permitiréis, voy a ser demasiado breve.

El ciudadano Borrego ha venido a hacer aquí un discurso meramente lírico; él dijo que había que elevar este debate, pero desgraciadamente los chanchullos y los fraudes electorales tan trascendentales que hizo su defenso, ciudadano Méndez, nos han obligado a rastrear en este debate. Precisamente el ciudadano Borrego no ha destruido ni uno solo de los cargos que se le hacen de fraude electoral. A la vista de todos los ciudadanos diputados o de la mayoría de ellos han estado las boletas respaldadas, una vez votadas, por la candidatura del ciudadano Méndez, y no ha podido destruir, porque no se puede destruir con nada, las actas de varias casillas que están firmadas por una misma mano; no ha podido destruir absolutamente ninguno de los cargos que se le hacen de fraude electoral y de presión de armas. Leí antes, señores, la carta en que el ciudadano Rodolfo Hernández y el ciudadano Méndez era designados por el cabrerismo de la sierra Norte del Estado de Puebla para que Barrios los impusiera allí; no ha destruido nada de esto y precisamente él es quien se ha ido por los cerros de Ubeda...(Voces: ¡Ubeda!) porque no ha tenido siquiera el tiempo necesario para ir a escudriñar y hurgar, como él ha dicho, este expediente electoral, no ha tenido pruebas, no ha podido presentar pruebas, que destruyan los cargos que yo he venido a hacer con perfecto conocimiento del caso, porque yo sí fui a estudiar, pedí permiso a la Comisión para estudiar, el expediente electoral. El interpeló al ciudadano Jesús Z. Moreno para que le dijese algo de historia; ya os había dicho, señores diputados, que el general Juan Francisco Lucas realmente era un patriarca en la sierra Norte del Estado de Puebla; por sus luchas en pro de la libertad en la época de la Reforma y por muchas otras circunstancias, el general Juan Francisco Lucas dominaba la sierra Norte del Estado de Puebla. Pues bien; el cabrerismo, señores, se preocupó de que heredase Barrios ese predominio y ese cacicazgo que va a traer dolores de cabeza, aunque no lo crea el señor Borrego, a la administración revolucionaria, legal y honrada del general Obregón, y si no, el tiempo será el que nos lo demuestre. El señor Candelario Garza dijo que los paquetes venían abiertos, que la Junta Computadora los abrió. En efecto, señores, se abren los expedientes de las casillas, pero recordaréis vosotros que la misma ley establece que una vez revisados los expedientes de cada casilla, éstos serán remitidos en paquetes perfectamente cerrados, ya sea en papel o ya sea con manta o con cualquiera otra envoltura y se envían a la Cámara de Diputados firmados por la Mesa directiva de la Computadora, así como se hace también con los paquetes electorales de cada casilla. Esto sirve para garantizar tanto a la Computadora como al Colegio Electoral de la Cámara de

Diputados, de que esos paquetes no han sido violados, y esos paquetes sí vinieron violados aquí a la Cámara de Diputados.

Ahora bien, señores, el argumento que presenta el ciudadano Borrego y que también la dictaminadora presenta como toral para dar el dictamen en favor del ciudadano Méndez, es que no sacó la credencial a pesar de haber sido impuesto por Barrios. Pues bien, señores, es como dije antes: allí lucharon tres caciquismos a la vez: el caciquismo de Abraham González Galindo, presidente municipal de Chignahuapan, él se impuso allí, si no, os voy a leer unas cuantas de las casillas nada más para que veáis:

"En la 13 casilla de Chignahuapan Abraham González Galindo `obtuvo 127 votos; en la 10 de Ciénega Larga, 94 votos; en la 11 de Chignahuapan, 106; en la 17, 144; en la 22, 43; en la 8a. casilla, 73; en la 3a., 118; en la 1a., 78; en la 9a., 155, etcétera."

Es decir, ahí como presidente municipal, él mismo se impuso. Luego vamos a Tetela; En Tetela el señor Sergio Bonilla, comandante militar de la plaza, según un documento que está aquí y que también me voy a permitir darle lectura porque es muy pequeño, para no quitarles a ustedes el tiempo, se impuso allí en Tetela... (Voces: ¡A votar! ¡A votar! ) Por esto naturalmente veréis lo que dice:

Un sello: "Comandancia Militar. - Tetela, Puebla.

"Al C. Macario J. Vázquez. - Cañada.

"Acompañado del portador de la presente se servirá usted presentarse a la Administración subalterna del Timbre de esta localidad, trayendo consigo los documentos relativos a dicha oficina, con objeto de que sean tramitados todos los asuntos pendientes por ser de urgencia.

"Sufragio Efectivo. No Reelección. - Tetela de Ocampo, 10 de junio de 1920. - El comandante militar, Sergio Bonilla."

Es decir, el ciudadano Sergio Bonilla se impuso en Tetela. El señor Abraham González Galindo en Chignahuapan, y en los lugares en donde pudo y con las fuerzas de Barrios, el ciudadano Méndez; así es que la obligación de la Comisión es de escudriñar el expediente y ver cuál era la votación que representaba la voluntad democrática, que representaba real y efectivamente la voluntad popular, y darle a esa votación el dictamen en su favor; pero no lo hizo así la Comisión por recomendación del ciudadano Borrego o de algún otro compañero. Probablemente la Comisión ya no quiso hurgar más el expediente y declaró al segundo. Yo pido sencillamente esto: Que se rechace el dictamen y que vaya a la Comisión y que se obligue a esta para que, por su honor, por el decoro de esta Cámara, haga una revisión escrupulosa del expediente y estoy seguro de que le corresponderá el triunfo al ciudadano José Dolores Pineda, porque no tiene absolutamente ningún cargo en su contra, más que el que les dijo a ustedes, esto es, de que no había resellado sus boletas en la cabecera del distrito; pero hay una inconsecuencia realmente que no me explico del compañero Borrego, y voy a hacer una interpelación al compañero Borrego, si me lo permite.

El C. Borrego: Con mucho gusto.

El C. Tirado: ¿Usted, señor Borrego, es miembro del Partido Liberal Constitucionalista?

El C. Borrego: Soy miembro del Partido Liberal Constitucionalista, pero antes que miembro del Partido Liberal Constitucionalista soy revolucionario, como antes de ser revolucionario soy mexicano, y sepa el ciudadano Tirado, porque sé a donde va su interpelación, que si están en conflicto los intereses de la Revolución con los del Partidos Liberal Constitucionalista, defenderé a la Revolución; y si están en conflicto los intereses de la patria con los de la Revolución, defenderé a la patria. (Aplausos.) Pero voy a ampliarme contestando la interpelación. No sé si ha venido ya la iniciativa respecto a la cuestión agraria, ya sea el proyecto del general Obregón o ya sea el dictamen del ciudadano Soto y Gama; yo estoy en desacuerdo con esa iniciativa, porque yo no creo que el problema agrario se resuelva socializando la tierra, y, sin embargo, yo votaré en favor del dictamen del señor Soto y Gama o de la iniciativa del general Obregón porque creo, en primer lugar, que el régimen de la pequeña propiedad vale más que el régimen latifundista; y en segundo lugar, si para socializar la tierra necesitamos ensangrentar otra vez el país, prefiero continuar en el estado de cosas que tenemos, es decir, crear la pequeña propiedad.

El C. Tirado: El ciudadano diputado Borrego ha declarado que es miembro del Partido Liberal Constitucionalista; además, que es revolucionario y, además, que es mexicano; yo creo que dentro del concepto revolucionario está el respecto a la ley; pues si el ciudadano Borrego es revolucionario de principios y de ideales, estoy seguro que él en su conciencia no aprueba este dictamen, porque sencillamente está lleno de violaciones flagrantes a la Ley Electoral vigente. El ciudadano Borrego, como miembro del Partido Liberal Constitucionalista, debía apoyar al miembro del Partido Liberal Constitucionalista que se lanzó allá. (Voces: ¡No! ¡No!) Pero si él es revolucionario y es respetuoso de la ley, si es respetuoso de los procedimientos limpios en materia electoral, debe rechazar el dictamen porque no ha podido destruir uno solo de los cargos que en materia de fraude electoral se le han hecho a su defenso, el ciudadano Méndez. (Voces: ¡A votar! ¡A votar!) Yo, señores, pediría que se erigiera una estatua, un alto loor para el ciudadano Méndez que en la XXVI Legislatura se manejó con toda la alteza que se necesitaba en esos momentos; yo pediría un alto loor para él, pero que no entrase a esta Cámara de Diputados con un chanchullo tan vergonzoso ni con un fraude electoral tan demostrado, porque en ese caso, señores, habremos dado una lección a Zacatlán de que ahí no debe imperar la voluntad de Barrios, sino a voluntad del distrito electoral y, en cambio, por el distrito de Tetela entrará el representativo de Barrios. Así pues, yo pido a vosotros, yo pido a esta honorable Cámara que rechace el dictamen, que vuelva a la Comisión a estudio y que ésta, después de un acucioso estudio, rinda el dictamen necesario porque, señores, está de por medio el decoro de esta honorable Asamblea.

El C. Castrejón: ¿Y cuando Pérez Abreu? (Voces: ¡A votar! ¡A votar!)

El C. presidente: Han hablado en pro el ciudadano Borrego y en contra el ciudadano Claudio N. Tirado por dos veces; no hay más oradores inscriptos.

El C. secretario Valadez Ramírez: En votación económica se consulta si el asunto está

suficientemente discutido. Los que estén por la afirmativa sírvanse ponerse de pie. Suficientemente discutido.

El C. Tirado: Pido votación nominal para el segundo punto. (Voces: ¡No! ¡No está suficientemente apoyado!)

El C. presidente: Los ciudadanos diputado que apoyen al ciudadano Tirado, sírvanse ponerse de pie. Estando suficientemente apoyado, se procede a la votación nominal.

El C. secretario Valadez Ramírez: En votación económica se consulta el primer punto resolutivo que dice:

"Son válidas las elecciones ordinarias verificadas en el 15 distrito electoral del Estado de Puebla, para diputados al Congreso de la Unión."

Los que estén por la afirmativa sírvanse ponerse de pie. Aprobado el primer punto. Son válidas las elecciones.

Se va a proceder a la votación nominal del segundo punto resolutivo que dice:

"Son diputados propietario y suplente, respectivamente, por el mencionado distrito, los CC. Manuel F. Méndez y Antonio Hernández."

El C. prosecretario Castrejón: Por la afirmativa.

El C. secretario Valadez Ramírez: Por la negativa.

(Se recoge la votación.)

El C. secretario Valadez Ramírez: Votaron por la afirmativa 94 ciudadanos representantes.

El C. Moreno Jesús Z.: Votaron por la negativa 9 ciudadanos representantes.

El C. secretario Valadez Ramírez: ¡No hay quorum!

"Orden del día para el 20 de diciembre de 1920.

"A las 10 a. m., sesión de Colegio Electoral.

"A la 4 p. m., sesión de Cámara.

"Dictamen sobre las adiciones a la ley reglamentaria de la fracción XII del artículo 123 constitucional.

"Proyecto de ley sobre la apertura de la Escuela Náutica de Mazatlán.

"Ley de Ingresos.

"Sesión secreta."

El C. presidente, a las 1.15 p. m.: Se levanta la sesión y se cita para el lunes a las 10 de la mañana.