Legislatura XXX - Año II - Período Ordinario - Fecha 19231011 - Número de Diario 20

(L30A2P1oN020F19231011.xml)Núm. Diario:20

ENCABEZADO

MÉXICO, JUEVES 11 DE OCTUBRE DE 1923

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921.

AÑO II. - PERÍODO ORDINARIO XXX LEGISLATURA TOMO III. - NÚMERO 20

SESIÓN DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 11 DE OCTUBRE DE 1923

SUMARIO

1. - Se abre la sesión. Lectura y aprobación del acta de la anterior. El C. diputado Fabila informa del resultado de la comisión que se le confirió.

2. - Es recogida la votación y se aprueba el proyecto de decreto por el que se autoriza al Ejecutivo de la Unión, para que destine la cantidad de $25,000.00 en auxiliar a las víctimas de la inundación de Ameca, Jalisco; pasa al Ejecutivo para los efectos constitucionales. Se concede licencia a los CC. diputados Zarza y Breceda. Rinde la protesta de ley el C. Luis G. Ramírez, diputado suplente por el 11 distrito electoral del Estado de México.

3. - Cartera. La Cámara de Senadores envía un proyecto de ley relativo al uno al millar sobre utilidades; recibo; a las comisiones unidas 1a. y 2a. de Hacienda e imprímase. El C. diputado Marín Efrén D. informa de la comisión que se le confirió.

4. - Diversas sociedades profesionales, apoyadas por la mayoría de la diputación del Distrito Federal, presenta un proyecto de ley sobre profesiones; a la 1a. Comisión de Gobernación, e imprímase. El C. diputado Gálvez, secundado por la diputación poblana y numerosos ciudadanos diputados más, hacen suya la solicitud del Ayuntamiento de Xochiapulco, Tetela, Estado de Puebla, a fin de que se pensione a los supervivientes de la batalla del 5 de Mayo de 1862; a la 3a. Comisión de Guerra. Se nombran dos comisiones: una que se acerque a la Secretaría de Hacienda a gestionar se haga efectivo a la mayor brevedad el decreto relativo a los damnificados de Ameca, Jalisco; y la otra para que asista al festival organizado por la Dirección de Cultura Estética.

5.- El ciudadano secretario de Gobernación informa sobre los sucesos políticos del Estado de Nuevo León. Se levanta la sesión.

DEBATE

Presidencia del C. FERNÁNDEZ GUILLERMO

(Asistencia de 131 ciudadanos diputados.)

El C. presidente, a las 17.08: Se abre la sesión.

- El C. secretario Puig y Casauranc, leyendo:

"Acta de la sesión celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el día diez de octubre de mil novecientos veintitrés.

"Presidencia del C. Guillermo Fernández.

"En la ciudad de México, a las diez y siete horas del miércoles diez de octubre de mil novecientos veintitrés, se abrió la sesión con asistencia de ciento treinta y un ciudadanos diputados.

"Se aprobó sin debate el acta de la sesión anterior, celebrada el día ocho del mes en curso.

"El C. Esparza Martínez pidió se diera cuenta con un proyecto de decreto por el que se vota una cantidad para los damnificados de la inundación ocurrida en Ameca, Jalisco. La Presidencia manifestó que se accedería a esa petición.

"Se sometió a consideración de la Cámara una proposición firmada por los CC. Quiroga, Robledo, Esparza Martínez y José Torres H., que en su parte resolutiva dice:

"Con carácter de urgente, cítese hoy mismo a los ciudadanos secretarios de Gobernación y de Guerra para que informen en sesión pública acerca de la desobediencia de las fuerzas federales de Monterrey a las resoluciones dictadas por el ciudadano juez 3o. supernumerario de distrito, con objeto de establecer o no la posibilidad de una acusación en los términos de la fracción V del artículo 74 constitucional."

"La Asamblea votó la dispensa de trámites, después de que el C. Portes Gil pidió la palabra para oponerse a ella y desistió de hacerlo.

"A moción del C. Romeo Ortega, el C. Quiroga fundó la proposición.

"El C. Romeo Ortega hizo una moción de orden y el C. Esparza Martínez una aclaración.

"El C. José Manuel Puig y Casauranc habló en pro.

"Aprobada la proposición en votación económica, se designó para acercarse al secretario de Gobernación, a los CC. Trillo, Méndez Manuel M., Cardona Isidro, Martínez Rojas, Herrera Moisés y secretario Fabilia, y para llamar al secretario de Guerra, a los CC. Torregrosa, Efrén D. Marín, Arnulfo Pérez H., Basáñez y prosecretario Barragán.

"Con dispensa de trámites y sin debate se aprobó una solicitud de licencia del C. Leocadio Frías Quirarte, hasta por veinte días, con goce de dietas.

"Se dio cuenta con el proyecto de decreto a que antes se había referido el C. Esparza Martínez, y que en su parte resolutiva dice:

"Articulo único. Se autoriza al ciudadano

presidente de la República para que, con cargo a la partida que estime conveniente, se destine la cantidad de veinticinco mil pesos, oro nacional, para los damnificados de la inundación ocurrida en Ameca, Jalisco."

"Este proyecto, que está firmado por el referido C. Esparza Martínez, y que hacen suyo otros varios representantes, fue fundado por su autor. En seguida se le consideró de urgente y obvia resolución y se puso a debate. No hubo quien hiciera uso de la palabra y al votarse nominalmente se vio que se había desintegrado el quórum, pues tan sólo votaron afirmativamente ochenta y tres diputados.

"A las diez y siete horas y cuarenta minutos se levantó la sesión y se citó para las diez y seis del día siguiente."

Está a discusión el acta. No habiendo ningún ciudadano diputado que haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, se servirán manifestarlo. Aprobada. (Voces en las galerías: ¡Viva Calles! Murmullos. Siseos. Campanilla.)

Por primera y última vez, la Secretaría, por orden de la Presidencia, comunica a las galerías, que deberán abstenerse de hacer manifestaciones de cualquier género.

El C. Espinosa Luis: Pido la palabra, señor presidente.

El C. presidente: ¿Con qué objeto?

El C. Espinosa Luis: Lo va a saber su señoría, si me la concede.

El C. presidente: Tiene obligación de manifestarlo.

El C. Espinosa Luis: Para un acto que se relaciona directamente con su señoría y, por lo tanto, no podrá negármela.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Espinosa Luis: Para pedirle, en la forma más respetuosa posible, que libre sus respetables órdenes a efecto de que los soldados que resguardan los pasillos de esta Cámara abandonen este recinto. (Aplausos en las galerías. Campanilla.) Yo, como diputado, siento y comprendo que la presidencia de fuerza armada en la Cámara de Diputados es una ofensa para la Representación Nacional. Como diputado elevo mi más enérgica protestad y pido a su señoría nos dé explicaciones sobre la presencia de los soldados en los pasillos de la Cámara.

El C. presidente: La Presidencia aclara que, fundándose en el artículo 199 y estando esta Cámara amenazada por grupos que intentaban entrar a las galerías sin autorización..... (Murmullos. Campanilla.) se vio en la necesidad de tomar esa medida y no puede satisfacer el deseo del ciudadano diputado Espinosa.

El C. Espinosa Luis: Señor presidente:

El artículo que ha invocado su señoría, se refiere al derecho de la Asamblea, de pedir el auxilio de la Policía, pero no de la fuerza militar, a efecto de que se guarde el orden. (Voces: ¡No son militares!) De cualquier manera, son individuos que tienen todas las características de soldados y no de gendarmes; no tienen garrotes, sino rifle al hombro. De tal manera, señor presidente que no debemos aquí pretender equivocarnos ni engañarnos: Los que están resguardando la puerta e impidiendo que entremos por donde nos dé la gana a este recinto, ya que es nuestro, mientras seamos diputados, son soldados y no policías. Así pues, que su señoría reemplace la tropa por gendarmes y entonces el que habla respetara la determinación de su señoría. (Aplausos.)

El C. presidente: La Presidencia aclara al ciudadano Espinosa, que no es fuerza federal, sino Policía, y que sí está fundada debidamente la Presidencia; pero para satisfacción de la Asamblea, va a ordenar que se retire. (Aplausos: Voces: ¡Muy bien!)

El C. secretario Puig y Casauranc: Se suplica a los presidentes de las comisiones designadas ayer por esta Cámara para que se acercaran a los señores secretarios de Guerra y Gobernación, tengan la bondad de rendir sus informes a la Cámara.

El C. Fabila: Señores diputados:

Honrado por el ciudadano diputado presidente de la comisión que fue nombrada por vuestra soberanía para entrevistar al ciudadano secretario de Gobernación, es muy honroso para mí informar que el señor licenciado Colunga, con la caballerosidad que le es característica, recibió a la comisión mencionada, habiéndonos manifestado que por la circunstancia de tener muy breves días de tener a su cargo la Secretaría en cuestión, no estaba todavía muy empapado en los negocios políticos relativos al Estado de Nuevo León; que rogaba muy respetuosamente a esta Representación Nacional se le concedieran veinticuatro horas para enterarse, término que se vence en estos momentos, para asistir a esta Representación, de acuerdo con el mandato de la misma. Nos manifestó, también por las circunstancias aludidas, que él vería con agrado, que se sentiría muy complacido si el ciudadano representante a cuya iniciativa se le llamaba a este recinto parlamentario, tuviera a bien remitirle, de acuerdo con las prescripciones legales del caso, el cuestionario a que sería sujetado en esta Asamblea. La comisión ofreció hacer del conocimiento de esta Representación los dos puntos de su atenta solicitud. Es cuanto tengo que informar a vuestra soberanía.

El C. Gandarilla: ¿Me permite hacer una interpelación su señoría? Acaba de decir su señoría que el ciudadano secretario de Gobernación indicó a usted que comunicara al ciudadano diputado interpelante, que tengo entendido que eso quiere, que le enviase el interrogatorio, según las prescripciones constitucionales, para contestarlo. Pregunto yo a su señoría si se refirió expresamente a determinada facultad constitucional o prescripción constitucional, o si le indicó a usted, como presidente de esta comisión, si le dijo en qué se basaba para hacer esa solicitud.

El C. Fabila: Compañero Gandarilla: En primer lugar no sería yo quien respondiera a esta interpelación, puesto que he dicho que vengo honrado con la comisión que el compañero Trillo me confirió en mi humilde persona, como secretario, para informar a esta Asamblea; en consecuencia y en virtud de que el ciudadano Colunga no quiso o no creyó conveniente entrar en disquisiciones

jurídicas que yo no entendería en ningún caso sobre la justificación de su atenta solicitud, como he repetido, no le puedo contestar en lo relativo a que se le enviara este cuestionario a que sería sujeto.

El C. Gandarilla: Me he permitido hacer esta interpelación, porque es el primero caso insólito que se ha dado en esta Representación de que un ministro, un secretario, el Ejecutivo mismo, pida primero los interrogatorios para estudiarlos y contestarlos en seguida. Pido que se haga constar en el acta y en el DIARIO DE LOS DEBATES y doy las gracias por su atención.

El C. Fabila: Tiene usted derecho, compañero Garandilla.

El C. secretario Puig y Casauranc: La Presidencia ha tenido a bien suplicar al diputado secretario Fabila se comunique telefónicamente con el secretario de Gobernación, indicándole que la Asamblea lo espera; se suplica a algunos de los miembros de la comisión designada para que se acercara al ciudadano secretario de Guerra, se sirva informar. En vista de que la comisión nombrada ha salido para entrevistar al ciudadano secretario de Guerra, porque ayer no le fue posible hacerlo, se va a dar cuenta con los asuntos en cartera.

El C. Casas Alatriste: Pido la palabra. Para suplicar a la Presidencia que, si no tiene inconveniente, dé preferencia, entre los asuntos en cartera, a un proyecto de ley que presentó la diputación de Puebla relativo a que se declare día de fiesta el día de la raza, que es mañana.

El C. secretario Puig y Casauranc: Se va a proceder a recoger la votación que quedó pendiente el día de ayer acerca del decreto que en su parte resolutiva dice:

"Se autoriza al ciudadano presidente de la República para que, con cargo a la partida que estime conveniente, se destine la cantidad de veinticinco mil pesos, oro nacional, para los damnificados de la inundación ocurrida en Ameca, Jalisco."

El C. secretario Valadez Ramírez: Por la afirmativa.

El C. secretario Pig y Casauranc: Por la negativa.

(Se recoge la votación.)

El C. secretario Valadez Ramírez: Votaron por la afirmativa ciento treinta y cuatro ciudadanos diputados.

El C. secretario Puig y Casauranc: No votó ningún ciudadano diputado por la negativa. En tal virtud, ha sido aprobado el proyecto de decreto y pasa al Ejecutivo para los efectos de ley.

Ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados:

"Atentamente me permito suplicar a ustedes se sirvan dar cuenta a la H. Asamblea con la presente solicitud, a fin de que se me conceda, con dispensa de todo trámite, una licencia, hasta por treinta días, para separarme de mi puesto, con objeto de atender a mi quebrantada salud.

"Asimismo, suplico a ustedes se sirvan mandar llamar al C. Luis G. Ramírez, mi suplente, a fin de que ocupe mi puesto durante mi ausencia.

"Reitero a ustedes las seguridades de mi consideración muy distinguida y particular aprecio.

"México, 11 de octubre de 1923.- Eduardo Zarza."

En votación económica se pregunta a la Asamblea si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Se dispensan los trámites. Está a discusión. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se concede la licencia. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Concedido, y se llamar al suplente.

Encontrándose en los pasillos de la Cámara el ciudadano diputado Luis G. Ramírez, suplente del ciudadano Eduardo Zarza, la Presidencia nombra en comisión a los ciudadanos diputados Bravo Gustavo, Gudiño y secretario Fabila para que lo acompañen a rendir la protesta de ley.

(Rinde la protesta legal el C. Luis G. Ramírez, diputado suplente por el 11 distrito electoral del Estado de México. Aplausos.)

"Ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados.- Presentes.

"Habré de agradecer a ustedes que en la sesión de hoy se sirvan dar cuenta a la H. Asamblea, con esta mi solicitud de licencia, con goce de dietas, por término de veinticinco días, que presento pidiendo también dispensa de trámites, en consideración de que diferentes asuntos particulares me obligan a ausentarme de esta capital.

"Reitero a ustedes las seguridades de mi atenta y distinguida consideración.

"Sufragio Efectivo. No Reelección.- México, D.F.., a 11 de octubre de 1923.-

Diputado por el 4o. distrito de Coahuila, E. Breceda."

Se consulta a la Asamblea si se dispensan los trámites. Los que estén por la afirmativa se servirán manifestarlo. Dispensados. Está a discusión. No habiendo inscripto ningún ciudadano diputado ni en pro ni en contra, en votación económica se consulta a la Asamblea si concede la licencia que solicita el ciudadano diputado Breceda. Los que estén por la afirmativa se servirán manifestarlo. Concedida.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"Cámara de Senadores del Congreso de la Unión. -México.- Estados Unidos Mexicanos.- Sección de Archivo.- Número 512.

"Ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados. - Presentes.

"Por acuerdo del Senado y para los efectos del artículo 72, letra (h), de la Constitución general de la República, tenemos el honor de remitirá a ustedes, en seis fojas útiles, el proyecto de ley que

crea el impuesto de uno al millar, mensual, sobre utilidades, presentado al propio Senado por los CC. Alejandro Martínez Ugarte y Pedro de Alba, miembros del mismo.

"Reiteramos a ustedes las seguridades de nuestra atenta y distinguida consideración.

"México, 10 de octubre de 1923.- A. Magallón, S.S.- Gerzayn Ugarte, S.S."-

Recibo , a las comisiones unidas 1a. y 2a. de Hacienda, e imprímase. La Presidencia invita al ciudadano diputado Efrén D. Marín, para que se sirva dar cuenta del resultado de su comisión.

El C. Marín Efrén D: Honorable Asamblea:

En cumplimiento de la comisión que se sirvió otorgarnos el día de ayer esta honorable Representación a fin de que invitáramos al señor secretario de Guerra y Marina a concurrir a esta Representación Nacional con objeto de informar acerca de los asuntos de Nuevo León, tengo el honor de informar a esta Asamblea que fuimos recibidos hace media hora por el ciudadano secretario de Guerra y Marina, y de la manera más atenta y cordial nos ofreció concurrir en breves momentos al seno de esta Representación. (Voces: ¡Muy bien! Aplausos.)

- El mismo C. secretario, leyendo:

"La Secretaría de Gobernación comunica que con fecha 5 de octubre, tomó posesión del cargo de secretario de Estado y del Despacho de Gobernación el C. Licenciado Enrique Colunga." - De enterado.

"La Secretaría de Hacienda y Crédito Público comunica que con fecha 1o. de septiembre dejó de prestar sus servicios como subsecretario, el C. ingeniero Luis L. León." - De enterado.

"El C. Tomás Orozco, jr., comunica que con fecha 24 de septiembre, y bajo su dirección, quedó establecida en el Paso, Texas, la Agencia Financiera de México." - De enterado.

"La Secretaría de Hacienda y Crédito Público comunica que con fecha 27 de septiembre tomó posesión del cargo de secretario del propio Ministerio el C. Ingeniero Alberto J. Pani." - De enterado.

"La Secretaría de Hacienda y Crédito Público comunica que con fecha 4 de octubre tomó posesión del cargo de subsecretario el C. ingeniero León Salinas." - De enterado.

"La Legislatura del Estado de Colima comunica que con fecha 16 de septiembre abrió el primer período ordinario de sesiones de su segundo año de ejercicio." - De enterado.

"La Legislatura del Estado de Colima comunica que apoya y secunda la iniciativa de la Legislatura del Estado de Tabasco, sobre reforma al artículo 83 de la Constitución General." - Recibo, y a su expediente.

"La Legislatura del Estado de Chihuahua comunica que apoya la iniciativa de la Legislatura del Estado de Campeche, relativa a la reglamentación del artículo 27 constitucional." - Recibo, y a su expediente.

"La Legislatura del Estado de Chihuahua solicita que el Presupuesto de egresos para 1924 se reduzca en un veinticinco por ciento con relación al actual presupuesto." - A la Comisión de Presupuestos y Cuenta.

"La Legislatura del Estado de Chihuahua solicita no se tome en consideración el proyecto de decreto presentado por el Ejecutivo sobre desarme de fuerzas regionales de los Estados." - Recibo, y a su expediente.

"La Legislatura del Estado de Guanajuato comunica que ha tenido a bien conceder treinta días de licencia al ciudadano gobernador constitucional del Estado, licenciado Enrique Colunga, que comenzar n a contarse desde el día 5 del presente." - De enterado.

"El Congreso del Estado de Tlaxcala comunica que con fecha 29 de septiembre clausuró un período extraordinario de sesiones." - De enterado.

"El Congreso del Estado de Tlaxcala comunica que con fecha 1o. de octubre abrió el segundo período de sesiones de su primer año de ejercicio." - De enterado.

"Acción Ibero-americana.

"Señores secretarios:

"La Sociedad "Acción Ibero-americana", por mi medio, tiene el honor de invitar a la honorable Cámara de Diputados, para la sesión solemne que celebrar á el próximo día 12 a las diez y nueve

horas en el Anfiteatro de la Preparatoria, para inaugurar sus labores y conmemorar el día de la raza.

En el programa tomarán parte profesoras y alumnas del Conservatorio Nacional de Música, la señorita Gabriela Mistral, conocida poetisa Chilena, el subscripto y el diputado José Castillo Torre.

"Confiando en que ustedes y sus compañeros se dignarán honrarnos con su presencia, quedo de ustedes con todo aprecio, atento seguro servidor.- México, 9 de octubre de 1923.- Isidro Fabela.- Señores secretarios de la Cámara de Diputados." - De enterado con agradecimiento.

El C. Espinosa Luis: Señor presidente, pido la palabra. Entiendo que este documento entraña una invitación para que esta Cámara nombre representantes que asistan a una ceremonia y no basta el trámite de "enterado con agradecimiento", sino que procede el nombramiento de una comisión que represente a esta Cámara de Diputados.

- El mismo C. secretario: La Secretaría, por orden de la Presidencia, hace la aclaración al ciudadano Espinosa de que la invitación es general para todos los miembros de la Cámara de Diputados.

"Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal.- México.- Estados Unidos Mexicanos.- Tribunal Pleno.- Secretaría de Acuerdos.- Número 4,645.

"A los ciudadanos secretarios de la H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. - Presentes.

"Tengo la honra de manifestar a ustedes que el H. Tribunal Pleno, en sesión celebrada el 1o. de los corrientes, tuvo a bien conceder licencia por un mes, con goce de sueldo, por causa de enfermedad, al C. licenciado Raul Gutiérrez Orentes, juez séptimo correccional de esta ciudad, a fin de que se provea al nombramiento de la persona que debe substituirlo en el referido cargo, mientras dura la licencia concedida.

"Reitero a ustedes las seguridades de mi atenta y distinguida consideración.

"Sufragio Efectivo No Reelección.- México, D. F., octubre 5 de 1923.

- El presidente del Tribunal, Eleuterio Martínez." - Recibo, y resérvese para el Congreso General.

"Ciudadanos secretarios del H. Congreso de la Unión.- Presentes.

"Fernando de la Fuente, magistrado del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, manifiesta por el conducto de ustedes al H. Congreso de la Unión, que se encuentra enfermo de tifo, como lo comprueba con los certificados del facultativo que lo atiende, doctor José Saloma, y del doctor José Torres Torija, jefe del Servicio Médico Legal.

"En tal virtud, solicita de ese H. Congreso de la Unión, licencia por dos meses, con goce de sueldo, para separarse de su empleo.

"Protesto a ustedes las seguridades de mi atenta y distinguida consideración.

"Sufragio Efectivo. No Reelección.- México, D.F., octubre 8 de 1923.- F. de la Fuente." - Recibo, y reservese para el Congreso General.

Telegrama procedente de "San José del Cabo, Baja California, el 6 de octubre de 1923.

"Señores diputados al Congreso de la Unión.- Cámara de Diputados.

"Nombrado juez este lugar por H. Congreso, emprendí penoso viaje desde Chiapas, instalando Juzgado julio. Hasta hoy no págasenos nada; adéudasenos cinco mil pesos, siendo ya imposible subsistir, intervención H. Congreso salvaríame insostenible situación.- Respetuosamente.- El juez de Primera Instancia, Manuel Suárez." - Transcríbase al Ejecutivo.

- El mismo C. secretario, leyendo:

"Diversas sociedades de profesionistas envían un proyecto de ley sobre profesiones, reglamentario del artículo 4o. constitucional.

"Hace suya esta iniciativa la mayoría de la Diputación del Distrito Federal." -A la 1a. Comisión de Gobernación, e imprímase.

(El proyecto de referencia está concebido en los siguientes términos:)

C. Secretario de la H. Cámara de Diputados:

PROYECTO DE LEY REGLAMENTARIO DEL ARTÍCULO 4o. CONSTITUCIONAL

Artículo 1o. En el Distrito Federal y Territorios las profesiones de abogado, ingeniero, arquitecto, médico cirujano, veterinario, dentista, partera, farmacéutico, perito forestal y perito agrónomo, necesitan títulos para su ejercicio.

Artículo 2o. Las condiciones que deben llenarse para obtener ese título son:

I.- Haber cursado, en los términos que prescribe la ley, todas las asignaturas que para cada profesión, de las expresadas, marque esa misma ley;

II.- Sustentar el examen correspondiente y haber sido aprobado para ejercer la profesión, y

III.- Ser el aspirante de buena conducta, comprobada legalmente ante la autoridad o corporación facultada para expedir el título.

Artículo 3o. En el Distrito Federal y Territorios, la Universidad Nacional, dependiente de la Secretaría de Educación Pública y las escuelas especiales, como la de Agricultura y Ciencias Forestales, dependientes de otras secretarías, son las autorizadas para expedir los títulos, así como la facultad o escuela privada a quien el Congreso General confiera esa autorización.

Artículo 4o. Los títulos profesionales expedidos en los Estados de la Federación, con sujeción a sus leyes respectivas, serán respetadas en el Distrito Federal y Territorios, siempre que haya los correspondientes planteles de enseñanza efectiva, en consecuencia con los programas de estudios y que éstos equivalgan a los de la enseñanza federal.

Tales títulos deben registrarse en la Universidad

Nacional, dependiente de la Secretaría de Educación Pública, o en la escuela especial, dependiente de otra Secretaría, en el caso de que los que los hayan obtenido pretendan ejercer su profesión en el Distrito Federal y Territorios.

Artículo 5o. Si el título profesional fuere otorgado por una escuela libre del Distrito Federal, y el que lo obtuvo pretende ejercer su profesión en el Distrito Federal, deber llenar los siguientes requisitos:

a)Que la persona de que se trate haya cursado las asignaturas que prescribe el plan de estudios de dicha escuela libre para hacer la carrera respectiva;

b)Que se haya sustentado el examen correspondiente.

c)Que a este examen hayan asistido tres personas tituladas que designe la Universidad Nacional, o escuela especial, a fin de que rindan informes sobre la aptitud revelada por el sustentante, por haber resuelto éste los temas que se hayan propuesto al sortear con toda escrupulosidad esos temas, que deben comprender todas las asignaturas.

d)Que el poseedor del título, compruebe legalmente su buena conducta.

Las personas que durante los llamados gobiernos de la usurpación y Convención, hayan prestado examen profesional respectivo y hubiesen sido aprobadas por quien corresponde, pero que no hayan obtenido el título respectivo en la época de los gobiernos ilegítimos, tendrán derecho a que se les expida por la Universidad Nacional, llenando las últimas condiciones que establece este artículo.

Artículo 6o. Si el título ha sido expedido por una escuela libre en un Estado de la Federación y Territorios, deberán acreditar:

I. Que el interesado hizo todos los cursos que fije el plan de estudios de tal escuela;

II. Que sustentó el examen correspondiente y que la autoridad respectiva del Estado dio como comprobada la aptitud del sustentante, por haber intervenido dicha autoridad en el examen, y

III. Que es de buena conducta.

Artículo 7o. Respecto de los títulos profesionales otorgados en el extranjero, se distinguen tres casos:

a)Si el titulado es mexicano y los estudios hechos equivalen a los correspondientes de la misma profesión en México, y proviene el título, debidamente legalizado, de una universidad o escuela especial reputadas, se podrá revalidar el título sin previo examen.

b)Si el titulado es extranjero, con diploma extranjero, se exigir examen de las materias, conforme al plan y programa de estudios correspondientes en México y la nacionalización del solicitante, si fuere aprobado.

c) El especialista de fama mundial podrá ser autorizado a ejercer su profesión o especialidad, sin el requisito de examen ni de nacionalización en su caso, hasta por seis meses, plazo que ser prorrogado, si dicho especialista se dedica además a la enseñanza de la profesión o ramo especial que cultiva.

d)Si el mexicano o extranjero, titulados en el extranjero, lo son en materias especiales, o en profesiones comprendidas dentro de la enumeradas en el artículo 1o.., pero que se cursen en México en escala mucho más baja, podrán ser autorizados a ejercer su profesión o especialidad, sin el requisito de examen, ni de nacionalización en su caso, hasta por un año, si hacen enseñanza de dicha materia.

Artículo 8o. Si el Título profesional fue expedido durante los denominados gobiernos de la usurpación y de la Convención, se observará lo siguiente:

I. Si el poseedor del título hizo todos los estudios que establece la ley y sustentó el examen profesional respectivo siendo aprobado, se revalidar el título por la Universidad respectiva, previo informe de la buena conducta del interesado y la presentación legal de que hablan los artículos anteriores, y

II. Si el interesado no hizo el curso de todas las asignaturas que a cada profesión marque la ley vigente en el Distrito Federal o en el Estado en que se expidió el título, éste no podrá ser revalidado ni su poseedor estar habilitado para ejercer la profesión en el Distrito Federal y Territorios.

Artículo 9o. Todo el que ejerza alguna de las profesiones a que se refiere esta ley, sin tener un título que satisfaga las condiciones previstas en los artículos anteriores, comete el delito de usurpación de profesión, previsto en el artículo 5o., título IV, libro III del Código Penal vigente.

Artículo 10. Todo profesionista, para ejercer en el Distrito Federal y Territorios, deber registrar su título en los términos que a continuación se expresan:

I. Los abogados, ante la Primera Sala del Superior Tribunal de Justicia del Distrito Federal, con sujeción al reglamento de la Ley Orgánica de Tribunales;

II. Los médicos cirujanos, médicos militares, cirujanos dentistas, farmacéuticos y parteros, harán el registro en el Consejo Superior de Salubridad;

III. Los ingenieros y los arquitectos, en la Universidad Nacional, la que comunicar a la Dirección General de Obras Públicas los registros y la revalidación, y

IV. Los peritos e ingenieros agrónomos, los peritos e ingenieros forestales y los veterinarios en la Secretaría de Agricultura.

En los territorios se hará el registro por los abogados ante la autoridad judicial superior de la localidad y los demás profesionistas ante la autoridad política superior o municipal del lugar.

Artículo 11. La Universidad Nacional publicará en cada trimestre una noticia de los títulos que revalide, con expresión exacta de si el título se obtuvo en la escuela oficial o libre, en un Estado de la Federación o en el extranjero; si el profesionista, en caso de haberse recibido en un estado, llenó los requisitos de haber hecho los estudios que para la carrera de que se trata, prescribe la ley de dicho Estado.

La noticia a que se contrae la parte anterior de este artículo, se remitirá de preferencia a los tribunales y juzgados del Distrito Federal y Territorios, al Departamento de Salubridad de la ciudad de México y a la Dirección General de obras Públicas.

Artículo 12. Las autoridades que hagan el registro de los títulos, harán constar en él todas las circunstancias a que se contrae el artículo

anterior y publicarán las noticias, en los términos a que se refiere el presente artículo.

Artículo 13. Todos los profesionistas de que trata esta ley, deberán expresar en sus anuncios, en los certificados y documentos que subscriban con su carácter profesional, la escuela a que pertenecen y si el título que poseen ha sido registrado conforme a la ley.

La infracción de lo dispuesto en este precepto, se castigará con multa de diez a cien pesos, por primera vez, y suspensión en el ejercicio de la profesión en caso de reincidencia, hasta que se haga el registro.

Artículo 14. Sólo en el caso de que en la localidad no haya profesionistas titulados, podrán expedirse certificados de defunción y rendirse dictámenes por personas prácticas en la matería de que se trata, sin perjuicio de recabar en su oportunidad, en estos dictámenes el parecer de los titulados.

Sólo los profesionistas titulados podrán, en caso de litigio, cobrar la prestación de sus servicios profesionales, con arreglo a los aranceles vigentes.

Artículos 15. Los profesionistas titulados a que se refiere el artículo 1o. que otorguen responsivas o licencia, respecto de actos, dirección pericial u otras actividades profesionales, en que no sean de hecho ellos mismos los que intervengan, dirijan o vigilen la ejecución, sino que den su responsiva únicamente para encubrir a un tercero no titulado, serán penados como si hubieren cometido personalmente el fraude a que se refiere el artículo 9o. y en caso de reincidencia, serán declarados inhábiles para el ejercicio profesional, anulándose el título.

Artículo 16. Las cuestiones pendientes sobre pago de honorarios a personas cuyos títulos deben revalidarse conforme a esta ley, se sujetarán, a falta de convenio, a lo prescrito en el artículo 14.

Artículo 17. Toda autoridad que tenga conocimiento de que alguna persona, sin el título respectivo, pretende ejercer una profesión de las que expresa el artículo 1o., está obligada a denunciar el hecho ante el Ministerio Público o ante el que haga sus veces, para los efectos correspondientes.

Los profesionistas titulados a que se refiere el artículo 1o. que por medio de responsivas, licencias, certificados o por cualquier otro medio se presten a favorecer el ejercicio de alguna de las profesiones a que esta ley se refiere, por personas que carezcan de título, incurrir n en la pena de suspensión por seis meses y multa de 100 a 500 pesos, la primera vez, y el doble de esas penas en cada una de las reincidencias.

Artículo 18. Los tribunales y jueces, al pronunciar una sentencia ejecutoria que inhabilite a un profesionista para ejercer su profesión, denunciarán dicho fallo a las oficinas que hayan hecho el registro del título, para que se hagan las anotaciones correspondientes.

La misma obligación se impone a la autoridad que haga la rehabilitación.

Artículo 19. Los practicantes que por razón de la carrera para la cual se preparan, ejerzan las funciones de un profesionista, no quedan comprendidos en las restricciones de esta ley, siempre que se demuestre que tal práctica tiene un carácter transitorio.

Artículo transitorio. La presente ley comenzar a regir desde la fecha de su promulgación y ser reglamentada por el Poder Ejecutivo. En dicho reglamento se fijarán las atribuciones de cada profesionista con el objeto de que en el ejercicio de su profesión se ciñan a ellos sin invadir el campo de los otros.

Presidente M. Godoy Alvarez. - Secretario, una firma ilegible. - Miembro de la comisión, Daniel Mireles. - Miembro de la comisión, Miguel A. de Quevedo. - Presidente de la S. Farmacéutica Mexicana, Amador E. Ugalde. Firmaron por las siguientes sociedades: Centro de Ingenieros, Sociedad de Arquitectos Mexicanos, Sociedad de Ingenieros y Arquitectos, Sociedad Farmacéutica Mexicana, Sociedad de Parteras, Sociedad de Biología, Sociedad Científica " Antonio Alzate", Sociedad "Pedro Escobedo", Academia Nacional de Medicina, Facultad Homeopática, Ateneo de Abogados, Asociación de Cirujanos, Sociedad Dental Mexicana, Sociedad Odontológica Nacional Mexicana, Federación Dental Nacional Mexicana, Escuela Nacional de Agricultura, las siguientes personas: profesor Amador E. Ugalde, doctor Daniel M. Velez, doctor Miguel F. Bachiller, doctor Saturnino G. Chirino, doctor Enrique Gómez, licenciado Hilarión Castro, ingeniero Lorenzo Pérez Castro, ingeniero Miguel A. Quevedo, ingeniero Cesáreo Puente, doctor Moisés N. Ramos, doctor M. Montiel, F. de Juambelz, doctor Galván, Faustino T. Martínez.

"La diputación del Distrito Federal hace suyo en todas sus partes el anterior proyecto de ley. - Rafael Pérez Taylor. - Policarpo Mercado. - Romeo Ortega. - C. Argüelles. - Martín L. Guzmán. - Mauricio Gómez."

"El C. diputado José Gálvez, secundado por la diputación del Estado de Puebla y por numerosos ciudadanos diputados hacen suya una solicitud del Ayuntamiento de Xochiapulco, Tetela, Estado de Puebla, con el fin de que se otorgue una pensión a los supervivientes de la batalla del 5 de mayo de 1862, que actualmente residen en el propio municipio de Xochiapulco." A la 3a. Comisión de Guerra.

(El oficio de referencia, a la letra dice:) Presidencia Municipal.- Xochiapulco, Tetela.- Sección de Gobernación.- Número 40.

Al ciudadano diputado profesor José Gálvez. México, D.F.

El Ayuntamiento que me honro en presidir, en sección ordinaria de hoy, tuvo a bien nombrar a usted su representante para gestionar ante el supremo Gobierno de la República, que pensione a los supervivientes de la gloriosa batalla del 5 de mayo de 1862 (mil ochocientos sesenta y dos), residentes en este municipio, ciudadanos Francisco Acuapan, Pedro Loma, Pedro Pablo, Juan José Miranda, Antonio de la Luz, Juan José Naranja, José Apolonio, Eusebio Valerio, José de la Cruz Naranja, Ignacio Acuapan, Antonio Carbajal, Martín Miranda, Martín de la Cruz y José María de Jesús, cuya personalidad queda suficientemente justificadas por las copias certificadas de las informaciones ad-perpetuam rendidas con tal objeto, ante

el juez menor de esta cabecera, las cuales van adjuntas.

Conocidos como son los fervientes deseos que abriga usted para que este pueblo se haga justicia por sus servicios patrióticos, espero que aceptar con agrado este encargo y por ello le anticipo las gracias más expresivas.

Reitero a usted las seguridades de mi atenta y distinguida consideración.

Sufragio Efectivo. No Reelección.- Xochiapulco, 25 de septiembre de 1923.- El presidente municipal, Manuel Rivera.

Hacemos nuestra la anterior solicitud. - José Gálvez.- F.F. Franco. - L. Sánchez de Cima. - G. Bautista. - Porfirio del Castillo. - F. Hernández. - A. Pérez H. - E. Arrioja Isunza. - R. Reyes Márquez. - G. Bosques. - Saltiel Oliver y C. - F. L. Montoya. - R. Casas Alatriste. - Guillermo Castillo Tapia. - Ricardo Covarrubias. - R. González Garza. - Gilberto Fabila. - Adrián Aguirre Benavides. - J. Pérez Gil y Ortiz. - C. Garza Castro. - Marcos Esmerio. - Manuel E. Miravete. - José Manuel Puig y Casauranc. Justo - A. Santa Ana. - Luis Torregrosa. - E. Mena Córdova. - E. Gandarilla. - Liborio Espinosa y E. - J. de D. Robledo. - R. Rivero. - J. Torres H. - F. Gonzáles Guerrero. - F. Herrera. - Enrique Trejo. - Alfredo Alvarez. - Celerino Luviano. - A. Gómez Campos. - Enrique Parra. - Miguel A. Quintero. - J. Barriga Zavala. - A. Valladares. - Jesús Magaña Soto. - Rubén C. Navarro. - E. Padilla. - Jaime A. Solís. - A. Gutiérrez. - J. J. Razo. - Enrique M. Barragán. - Quirino S. Trillo. - M. M. Méndez. - N. Aranzábal. - Aurelio Sepúlveda. - Carlos Cuervo. - Juan Quiroga. - José Castillo Torre. - Luis Ramírez Corzo. - Gabriel Martínez. - J. C. Hernández. - A. R. Guzmán. - A. Altamirano. - Angel G. Castellanos. - Miguel Martínez Rendón. - Enrique Meza. - Francisco Escudero. - A. Díaz Soto y Gama. - E. Ramírez. - J. Silva. - E. Súllivan. - Ezequiel Salcedo. - S. Vizcarra, hijo. - Francisco de P. Alvarez. - L. Bolaños. - J. P. Camacho. - Ignacio C. Villegas. - José F. Gómez. - M. Samayoa. - José Alva Reza. - C. Avilés. - Rafael Torres. - Moisés G. Herrera. - A. M. Azueta. - Federico Medrano. Enrique García. - E. Barón Obregon. - Rodrigo Palacio. - F. Ollivier. - León J. Oteo. - L. Frías Quirarte. - J. J. Velasquez. - I. Sánchez Campa. - Tereso Reyes. - Gabriel Martínez. - Isidro Cardona. - J. Sáenz Juárez. - Mauricio Gómez. - Moisés Huerta. - R. Cervantes. - P. Manzano. - Fermín E. Díaz. - Manuel Ortiz. - Francisco Olivares. - Juan G. Abascal. - J. A. Guerra. - J. López Lira. - César Martínez R. - Gabriel Martínez. - José Castilleja. - R. Garibay. - P. Rodríguez. - Leopoldo Reynoso Díaz. - Luis Méndez. - J. M. Cuéllar. - Procuró Dorantes. - D. Montes de Oca. - F Gonzáles y González. - Pedro Suárez. - M. Vicencio. - D. Hinostrosa. - J. M. Díaz. - Clemente Trueba. - R. Nieto. - E. Aguirre. - F. González. - Guillermo Rodríguez. - Policarpo Mercado. - A. E. Rama. - Porfirio Hernández. - Jenaro V. Vásquez. - R. V. Balderrama. - W. Macip. - E. Barrera. - Manuel L. Díaz. - R. Vizcarra. - J. M. Díaz. - E. Portes Gil. - N. Peréz. - Francisco Garza. - M. G. Calderón. - Ricardo Delgado. - J. E. Domínguez. - Vicente Aranda. - J. Canal." - Cinco firmas ilegibles.

El C. Castillo Tapia: Pido la palabra, señor presidente. La Dirección General de Cultura Estética ha organizado para el día de mañana, a las diez y nueve y media, una función en la Colonia de la Bolsa en honor de la Cámara de Diputados. Yo he sido honrado por el director de la Dirección de Cultura Estética para suplicar a los miembros de esta Asamblea concurran mañana a ese tracendental espectáculo, para que observen los ciudadanos representantes cómo trabaja esa Dirección para hacer adelantar la educación de aquella gente desheredada. Yo ruego en nombre del señor director de ese departamento, que todos concurran a esa función, donde habrá orfeones, se darán dos o tres zarzuelas y se ver que la gente humilde, la gente que antes distraía las horas en círculos de vicio, ha sido substraída de esos círculos para llevarla a otra esfera educacional. El punto de reunión es aquí en la Cámara, a las diez y nueve. Habrá muchos agasajos para los señores diputados. (Risas Aplausos.) De manera que no hay que dejar de ir.

El C. Esparza Martínez: Pido la palabra. Como el subsidio que he solicitado de esta Cámara para los damnificados de la inundación de Ameca es de urgente aplicación, atentamente pido a la Presidencia.... (Voces ¡Ya se votó!) Un momento. Atentamente pido a la Presidencia se digne nombrar una comisión para que se acerque al ciudadano secretario de Hacienda con el objeto de que sea portadora de este decreto.

El C. secretario Puig y Casauranc: La Presidencia manifiesta, por conducto de la Secretaría, al ciudadano diputado Esparza Martínez, que cree estar en lo justo al sostener su trámite de que pase este decreto al Ejecutivo para los efectos de ley.

El C. Esparza Martínez: Como representante del pueblo tengo el derecho de petición, y respetuosamente espero que la Presidencia acceda a mi súplica. Sé perfectamente que una tramitación de éstas dura dos o tres semanas, o un mes o un año, y cuando esta cantidad vaya a ser destinada a los damnificados de Ameca, ya no se necesitar para nada.

- El mismo C. secretario: La Secretaría, por orden de la Presidencia, manifiesta al ciudadano diputado Esparza Martínez que por disposición constitucional el decreto tiene que pasar a la Secretaría de Gobernación.

El C. Esparza Martínez: Ruego a la Presidencia que por conducto de la Secretaría consulte a la Asamblea si está de acuerdo en acceder a mi súplica. (Voces: ¡Sí! ¡Sí!)

El C. secretario Puig y Casauranc: Se consulta a la Asamblea si se accede a lo que solicita el ciudadano Esparza Martínez. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Concedido. La Presidencia nombra a los ciudadanos diputados Esparza Martínez, Covarrubias Ricardo, Robledo y prosecretario Barragán para que entreguen el decreto y hagan ante la Secretaría de Hacienda las gestiones que solicita el ciudadano diputado Esparza Martínez. La Presidencia nombra en comisión a los ciudadanos diputados Gálvez, Gómez Dionisio, Torregrosa, Robledo, Díaz Soto y Gama, Garza Francisco, Hinostrosa, Joachín, Mercado y secretario Medrano Federico, para que asistan al

festival que tendrá verificativo mañana en la Colonia de la Bolsa.

El C. Castillo Tapia: Señor presidente: Toda la Cámara está invitada, y oficialmente su señoría indicó que treinta irían con ese carácter, y no se ha nombrado más que a ocho o nueve ciudadanos diputados. (Risas.)

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano secretario de Gobernación.

El C. licenciado Enrique Colunga, secretario de Gobernación: Honorable Asamblea:

Obedeciendo al llamado que se sirvió hacerme esta respetable Cámara, tengo el honor de informar a ustedes sobre el curso de los sucesos políticos acaecidos en el Estado de Nuevo León. Las circunstancias de que no tenga sino unos cuantos días de haberme hecho cargo de la Secretaría de Gobernación y la enfermedad que aqueja al señor presidente de la República que me ha impedido entrar en conferencias detenidas con este alto funcionario acerca de algunos de los acontecimientos políticos que tienen suspensa la atención del país, serán causa de alguna deficiencia que notaréis en los informes que debo rendir y que espero de vuestra benevolencia me excusaréis.

La prensa de la República ha dado cuenta de que el ciudadano presidente de la República acordó no entrar en relaciones con ninguno de los dos grupos que aseguran respectivamente representar a los poderes Ejecutivo y Legislativo del Estado de Nuevo León, en virtud de que encontró en los procedimientos conforme a los cuales se verificaron las elecciones, irregularidades de tal magnitud, que le dan a comprender que estos grupos no son representativos de la opinión popular del Estado de Nuevo León. Contra este acuerdo del señor presidente de la República, interpuso amparo un grupo de ciudadanos que integran la Legislatura que llamaré por abreviatura, perista, porque es la que ha declarado y proclamado gobernador del Estado al general Alfredo Pérez. El juez tercero supernumerario de Distrito, ante quien se presentó la demanda, dio entrada a ésta y acordó la suspensión definitiva del acto reclamado, pero con algunas salvedades; el juez de Distrito en su auto dice que no procede la suspensión del acto reclamado consistente en la declaración de nulidad de las elecciones verificadas en el Estado de Nuevo León, porque el acuerdo del Ejecutivo federal no tiene ninguna declaración en este sentido. Concedió la suspensión del acto reclamado el juez de Distrito para los efectos de que el presidente de la República se abstenga de tomar las medidas que anunció que se proponía tomar a efecto de reintegrar pronta y debidamente los poderes constitucionales de dicha Entidad Federativa. El señor presidente de la República expresó su propósito de obedecer a los autos o mandamientos de la justicia federal; entretanto ocurrió que el Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Nuevo León dictó un acuerdo con fecha 3 de los corrientes, por medio del cual declara que el mismo día 3 a las veinticuatro horas, se considera que han desaparecido los poderes Ejecutivo y Legislativo del Estado de Nuevo León y que, en consecuencia, nombra gobernador provisional al profesor Anastasio Treviño Martínez, y contiene este acuerdo algunos otros puntos referentes a la subsistencia o permanencia de los jueces y empleados del Poder Judicial de dicho Estado. El profesor Anastasio Treviño Martínez comunicó a la Secretaría de Gobernación que había tomado posesión del Gobierno provisional el día 8 de los corrientes. El Supremo Tribunal de Justicia resolvió que el gobernador provisional que había nombrado en esta forma, debería instalarse en el Palacio del Gobierno local; solicitó el auxilio de la fuerza federal, y el jefe de las operaciones en el Estado de Nuevo León interrogó al señor presidente si debía prestarle tal auxilio. El señor presidente contestó que el Poder Judicial del Estado de Nuevo León constituía una Entidad cuya legitimidad no se había puesto a discusión, no estaba a discusión, y más, que tiene varios años de estar funcionando. El Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Nuevo León es un poder de facto independientemente de sus antecedentes de legitimidad; que, en consecuencia, no correspondía al presidente de la República revisar los actos de uno de estos poderes, de un poder cuya legitimidad no se ha discutido, como es el Poder Judicial de Nuevo León, y que en tal virtud el jefe de las operaciones debería prestar los auxilios que requiriera esta Poder. Posteriormente, el gobernador provisional a que me he referido, avisó a la Secretaría de Gobernación que se había instalado en el Palacio de Gobierno del Estado. Estos son los antecedentes del caso, y tal es el estado en que se encuentra actualmente.

El C. Quiroga: Pido la palabra, señor presidente.

El C. presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Quiroga: Rogaría al señor secretario de Gobernación, en virtud de los acontecimientos sucedidos en el Estado de Nuevo León, se sirviera contestar ente la honorable Asamblea las siguientes preguntas:

-"¿No considera la Secretaría de Gobernación como órgano del Ejecutivo que la transmisión de los poderes de los Estados debe hacerse conforme a la Constitución local y a las leyes relativas de los mismos?"

El C. secretario de Gobernación: Indiscutiblemente que sí, señor diputado.

El C. Quiroga: "¿Verificada la transmisión de poderes en un Estado conforme a la Constitución y leyes locales relativas, el Ejecutivo puede tomar otra actitud que no sea la de reconocer a los poderes así constituídos?"

El C. secretario de Gobernación: Si existe un solo poder, es decir, si no aparece duplicidad de poderes, como ha acontecido en algunos Estados, indudablemente que el Ejecutivo no puede hacer otra cosa más que reconocerlos.

La dificultad viene muy seria y muy grave cuando los poderes se duplican como ha acontecido varias veces. En esos casos la doctrina y los precedentes han autorizado al Ejecutivo para resolverlos de distintas maneras según las circunstancias; algunas veces reconociendo a aquellos de los grupos contendientes cuya elección parece haber sido más popular, más democrática y más conforme a

las leyes; en algunos otros casos no ha reconocido a ninguno de los dos grupos y, por último, no ha faltado caso en que consigne los hechos al Senado, y el Senado de la República es el que los ha resuelto.

El C. Quiroga: "¿No considera la Secretaría de Gobernación que se violaría el pacto federal en el caso de que el Ejecutivo no reconociese a las autoridades constituídas conforme a la Constitución y leyes del Estado?"

El C. secretario de Gobernación: Verdaderamente se violaría el pacto si el Ejecutivo no reconociera a los poderes que se han constituído conforme a la Constitución y a las leyes del Estado.

El C. Quiroga: "¿No es cierto que la Secretaría de Gobernación conoce que fue legítima la transmisión de los poderes en Guanajuato?"

El C. secretario de Gobernación: Es verdad.

El C. Quiroga: "¿No es verdad que la Secretaría de Gobernación sabe que la Constitución de los nuevos poderes en Guanajuato fue sancionada conforme a la Constitución y leyes locales por los poderes que estaban legítimamente constituídos en dicho Estado?"

El C. secretario de Gobernación: Es verdad.

El C. Quiroga: "¿No es verdad que en Guanajuato la legitimidad del Poder Ejecutivo fue declarada por la Legislatura del Estado conforme a la ley?"

El C. secretario de Gobernación: Sí, señor.

El C. Quiroga: "¿No es verdad que en el caso de Guanajuato el Ejecutivo del Estado sancionó y publicó en el periódico oficial la elección de nuevo gobernador?"

El C. secretario de Gobernación: Es verdad.

El C. Quiroga: "¿Qué efectos legales produce la sanción y publicación en el periódico oficial del Estado, frente a las autoridades federales?"

El C. secretario de Gobernación: Los hace obligatorios para las autoridades federales. (Aplausos.)

El C. Quiroga: "¿Puede o debe el Ejecutivo federal tener dos criterios distintos para aceptarse como buena la transmisión de los poderes?"

El C. secretario de Gobernación: Tratandose del mismo caso, indudablemente que no. La verdad no es más que una. (Aplausos.)

El C. Quiroga: "¿A pesar de que se hayan llenado todos los requisitos legales anteriores puede el Ejecutivo rehusarse a reconocer a las autoridades constituídas de un Estado?"

El C. secretario de Gobernación: Mientras no violen el Pacto Federal, no puede desconocerlos.

El C. Quiroga: "¿En el caso de Nuevo León, la XL Legislatura fue instalada conforme a la Constitución y leyes locales por la Comisión Permanente del Congreso del Estado. No considera la Secretaría de Gobernación que ésta transmisión del Poder fue legítima?"

El C. secretario de Gobernación: En el Estado de Nuevo León se transmitió el poder -o por lo menos se ha recibido aviso en la Secretaría de Gobernación- de que se transmitió el poder a dos grupos. La Comisión Permanente reconoció a la Legislatura que designé antes con el nombre de "perista"; pero, además, otro grupo de ciudadanos que dicen representar al Poder Legislativo de Nuevo León, se dirigía a la Secretaría de Gobernación diciendo que ellos constituían el Poder Legislativo; y de aquí viene la ambigüedad en que se pone el Ejecutivo cuando dos grupos de personas le aseguran que cada uno representa el Poder Legislativo....

El C. Olivé Isaac, interrumpiendo: ¿Me permite una aclaración el señor ministro de Gobernación? (Campanilla.)

El C. Quiroga: "¿En el Estado de Nuevo León, la XL Legislatura constitucional declaró electo gobernador al C. Alfredo Pérez y esta declaración fue sancionada por el gobernador saliente, doctor Tamez y publicada en el Diario Oficial. En consecuencia, transmitió legalmente conforme a la Constitución y leyes locales el Gobierno de Nuevo León, por qué el Ejecutivo federal lo desconoce?" (Una voz: ¡No te importa!)

El C. secretario de Gobernación: No es precisamente un desconocimiento en términos absolutos lo que ha hecho el señor presidente de la República en el caso de Nuevo León; simplemente ha declarado que en virtud de las graves irregularidades que se hacen mutuamente, de las inculpaciones que se hacen los dos partidos que contendieron y los dos grupos que sostienen su legitimidad para titularse Poder Legislativo y Poder Ejecutivo, respectivamente, el Ejecutivo se encuentra incapacitado para sostener relaciones con dos grupos, cada uno de los cuales sostiene su propia legitimidad. En estos casos no es que se crea que se corten las relaciones con los Estados de que se trata, sino que se suspende momentáneamente con esos grupos hasta que la autoridad competente diga cuál es el que debe ser reconocido definitivamente, o bien que el pueblo manifieste ostensiblemente a cuál de los dos grupos apoya.

El C. Quiroga: "¿Qué autoridades conforme a las leyes constitucionales son competentes para declarar desaparecidos los Poderes de un Estado?"

El C. secretario de Gobernación: ¿Tuviera la bondad de repetir la pregunta, porque no oí el principio?

El C. Quiroga: "¿Qué autoridades conforme a las leyes constitucionales son competentes para declarar desaparecidos los Poderes de un Estado?"

El C. secretario de Gobernación: En términos generales el Senado de la República tiene facultad conforme al artículo 76, fracción V de la Constitución para declarar cuándo han desaparecido los poderes de un Estado, que es llegado el caso de nombrarse un gobernador provisional. La facultad que se le da de nombrar un gobernador, trae la facultad de reconocer el hecho, esa suspensión de facto por la cual han desaparecido los poderes. Esa disposición sólo tiene lugar cuando las Constituciones de los Estados no preveen el caso, y la Constitución del Estado de Nuevo León sí lo prevé; de manera que respecto de esta Entidad federativa, es al Poder Judicial de Nuevo León al que le corresponde este derecho.

El C. Quiroga: "¿En que artículo de la Constitución general y de la local del Estado de Nuevo León se fundó el Ejecutivo federal para declarar desaparecidos los Poderes Legislativo y Ejecutivo de dicha Entidad?"

El C. secretario de Gobernación: Como he dicho

antes, el Ejecutivo federal no ha declarado desaparecidos los poderes; ha declarado simplemente que suspende sus relaciones con los dos grupos que se titulan representativos de los poderes locales de Nuevo León.

El C. Quiroga: "¿En qué preceptos legales se fundó el Ejecutivo federal para dar su apoyo al Tribunal Superior de Justicia de Nuevo León en la designación de gobernador provisional, siendo que dicho Tribunal sólo puede, según el artículo 144 de la Constitución local, hacer tal designación en el caso de la desaparición de los Poderes Ejecutivo y Legislativo, y siendo también que esta desaparición no ha sido declarada legalmente por las autoridades competentes?"

El C. secretario de Gobernación: El ciudadano presidente de la República se fundó precisamente en el respecto a la soberanía de los Estados y a la soberanía de los poderes locales de los Estados, desde el momento en que un Poder Judicial de Nuevo León, cuya legitimidad no está en duda, que está funcionando de facto hace cerca de cuatro años, se dirige al presidente de la República diciéndole que en uso de su soberanía y con apoyo en tales y cuales artículos de la Constitución del Estado, ha tomado tales y cuales providencias, el Ejecutivo federal lesionaría la soberanía de Nuevo León si se pusiera a revisar los actos de ese poder. Bajo su responsabilidad tiene que someterse a los que ese poder ha dicho en lo que no afecte más que al régimen interior del Estado. (Aplausos.)

El C. Quiroga: "¿Las resoluciones de los jueces de Distrito debe acatarlas el Ejecutivo federal?"

El C. secretario de Gobernación: Ha manifestado su decisión de acatarlas.

El C. Quiroga: "¿Por qué el Ejecutivo federal no obedece la resolución del juez 3o. supernumerario de Distrito, según la cual concedió suspensión definitiva a la Legislatura instalada en el recinto oficial?"

El C. secretario de Gobernación: Sí la ha obedecido. Desde que se dictó el auto de suspensión, el Ejecutivo se ha abstenido de tomar las medidas que se proponía para la pronta y debida -como dice el acuerdo- reconstrucción de los poderes constitucionales del Estado de Nuevo León.

El C. Quiroga: "¿Por qué razón en el conflicto entre las disposiciones de la autoridad judicial federal y la disposición del Tribunal del Estado de Nuevo León, respetó la resolución de esta última, en vez de atenerse a la primera?"

El C. secretario de Gobernación: Ha respetado, como he dicho, la resolución pronunciada por el juez 3o. supernumerario de distrito y, como explique antes, lo único que hizo cuando el jefe de operaciones en Nuevo León le pidió instrucciones sobre si prestaba al Poder Judicial los auxilios que éste impetraba, fue contestarle que estaba en su poder, puesto que el Ejecutivo federal, conforme a un artículo constitucional, está en la obligación de facilitar al Poder Judicial todos los auxilios que impetre o solicite para el ejercicio de sus funciones.

El C. Quiroga: Señor secretario: Por la salud nacional y en nombre del Estado de Nuevo León, doy a usted las más expresivas gracias por estas contestaciones.

El C. secretario de Gobernación: He cumplido con mi obligación. (Aplausos.)

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Pido la palabra para interpelar al secretario de Gobernación. (Desorden.) Si el Ejecutivo federal hubiera ordenado al gobernador Ramiro Tamez que continuara en el Poder transcurrido el término constitucional de su Gobierno, ¿habría cometido un atentado constitucional?

El C. secretario de Gobernación: Indudablemente que habría infringido la Constitución y violaba abiertamente la soberanía del Estado.

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Violaba la soberanía del Estado. Si el Ejecutivo federal hubiera llamado a los dos gobernadores en pugna a la ciudad de México para arreglar con ellos en el Palacio Nacional los asuntos de Nuevo León, ¿habría cometido una violación a la soberanía del Estado?

El C. secretario de Gobernación: Habría faltado indudablemente a la esencia del régimen democrático. (Aplausos.)

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Señores diputados: La Asamblea, por unanimidad, ha recogido con aplauso...

El C. Olivé Isaac, interrumpiendo: Pido la palabra.

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Estoy hablando, compañero. (Gritos.)

El C. Gandarilla: ¡Moción de orden! (Campanilla.)

- El Puig y Casauranc José Manuel: Estoy interpelando...

El C. Gandarilla: ¡Moción de orden! Honorable Asamblea:... (Campanilla.)

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Estoy interpelando, voy a fundar mi interpelación, compañero. La Representación Nacional, por unanimidad, no me hizo caso, pero por unanimidad aplaudió al señor secretario de Gobernación, autoridad indiscutible en Derecho Constitucional, cuando aseguró que si el Ejecutivo federal hubiera ordenado al gobernador Tamez que continuara en el Poder transcurrido el término constitucional, habría cometido un grave atentado contra la soberanía del Estado, y que no sólo hubiera cometido un atentado contra la soberanía del Estado, sino que constituiría un verdadero crimen democrático si el Ejecutivo federal hubiera llamado al Palacio de Gobierno a los dos gobernadores en pugna para tratar de arreglar en la ciudad de México los asuntos de Nuevo León. Pues bien, señores diputados; en estos momentos, en que estamos fijando posiciones, en que se están marcando los valores morales que habrá n de servir de exponente para la lucha democrática que se avecina; en estos momentos de elemental deber de los representantes del pueblo decir algo que hemos olvidado en nuestra inconsciencia política: Que hubo en la historia de los presidentes de México alguien que cometió ese doble delito contra la soberanía de los Estados, y que no fue el general Obregón quien sentó el precedente de intromisión en asuntos de dobles legislaturas o de dobles gobernadores de Estados, sino

que el llamado a la ciudad de México de los dos gobernadores en pugna para arreglar extrademocráticamente un asunto netamente popular y la orden terminante de que un gobernador continuara en el Poder transcurrido el término constitucional, se hizo en México por el ciudadano Adolfo de la Huerta. (Aplausos.) Señores diputados: No vendré a la próxima Legislatura, seguramente... (Desorden. Gritos.)

El C. Gandarilla: Moción de orden. Honorable Asamblea: Pido respetuosamente a los concurrentes a las galerías, que se sirvan guardar silencio en tanto termina uno de los más fervorosos propagandistas de la candidatura Calles, que ya viene a demostrar en dónde está la imposición.

El C. Guzmán Apolonio R.: ¡Moción de orden!

El C. Fabila: Pido a su señoría se hagan cumplir, señor presidente, las percepciones reglamentarias. (Desorden. Campanilla.)

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Señores compañeros:... (Gritos en las galerías. Campanilla. Voces: ¡Bájate!)

El C. presidente: La Presidencia, con profunda pena, se ve obligada a manifestar a los asistentes a las galerías, que si insisten en sus manifestaciones, interviniendo en los debates, se ver obligada a mandarlas desalojar.

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Yo ruego a las galerías que me oigan un minuto, un momento. (Voces en las galerías: ¡Viva De la Huerta!) ¡Un momento, señores!

El C. Arce Gustavo: ¡Moción de orden, señor presidente!

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Arce para moción de orden.

El C. Arce Gustavo: Señores diputados:

He pedido la palabra una moción de orden, y mi moción de orden consiste en lo siguiente: Disposiciones reglamentarias que esta Asamblea Nacional sabe acatar profundamente, han autorizado a algunos ciudadanos representantes para mandar llamar a dos secretarios de Estado para hacerles interpelaciones. Estos funcionarios de la Federación han acudido, solícitos y respetuosos, al llamado de la Representación Nacional. Ha comenzado las interpelaciones el ciudadano Quiroga; el compañero Puig y Casauranc inició las suyas, pero ahora entra en un debate político al cual iremos con mucho gusto; pero es una falta de respeto o de consideración -porque no creo que el doctor Puig no sea siempre respetuoso-, es una falta de consideración...

El C. Portes Gil, interrumpiendo: ¡Le tienen miedo al debate!

El C. Arce. continuando: Por consiguiente, en moción de orden pido a los ciudadanos diputados agoten las interpelaciones con los ciudadanos secretarios de Estado para que puedan retirarse, porque los ciudadanos secretarios de Estado no deben ni pueden intervenir en los debates de la Representación Nacional. (Aplausos.)

El C. Puig y Casauranc José Manuel: ¿Ya puedo hablar?

El C. Gandarilla: Moción de orden. Mi moción de orden consiste en esto: El señor Puig va a sostener debate político. Yo tengo que hacer, como representante, algunas interpelaciones al ciudadano secretario de Gobernación y pido que su señoría lo tenga en cuenta antes de despedir respetuosamente al señor secretario. Vea, pues, el señor Puig, que es justa mi petición.

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Señores diputados:

El que habla es el que conscientemente ha dado ocasión para que este debate se verificara ante las galerías presentes; en la sesión de ayer si no hubiera yo anunciado de una manera terminante, con absoluta lealtad, con plena franqueza, que esto iba a servir para un debate político, indudablemente que sin la asistencia de las galerías, con unas galerías insignificantes, se hubiera verificado este debate; pero precisamente por respeto a la opinión nacional, por deseo de que todos los fervientes delahuertistas estuvieran presentes y escucharán este debate, precisamente por esta razón ayer lo anunciamos de modo claro y terminante, para que con veinticuatro horas de anticipación hubiera tiempo sobrado de venir aquí. Voy a presentar a las galerías un argumento elemental para que me escuchen. (Gritos en las galerías.)

El C. Arce, interrumpiendo: Una interpelación al orador, si me lo permite, muy breve.

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Diga, compañero.

El C. Arce: A pesar de mi moción de orden, compañero Puig y Casauranc, usted está viendo que el debate, con el calor natural de las cosas políticas que no debemos ni podemos rehuir, se está llevando por un camino torcido y estamos cansando la atención de los ministros que esperan interpelaciones. Yo le ruego a usted que si no ha terminado sus interpelaciones, las termine brevemente, porque tenemos que hacer otras interpelaciones. Y si gusta, en obsequio a la Asamblea y a la petición de un compañero, deje el debate para después, pues estaremos contra usted en cada ocasión.

El C. Puig y Casauranc José Manuel, continuando: Yo pongo a la consideración del señor ministro de Gobernación este asunto. Señor ministro de Gobernación: ¿Se siente de tal modo cansada su señoría que considere molesto que un representante del pueblo haga estas interpelaciones, usando de la manera y argumentos que su pobre cerebro le permite; o cree el señor secretario de Gobernación que en algo se le faltar al respeto con que en su presencia y sin el menor ataque a su persona, se haga un debate político en esta Asamblea?

El C. secretario de Gobernación: He sido llamado por la Representación Nacional, y estaré en la Representación Nacional hasta que ella me indique que debo retirarme.

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Señores diputados:

Del mismo modo que todos somos capaces de leer el artículo del más enconado enemigo y serenamente llegar hasta el último renglón, y después contestar con los medios que nuestro talento permita, por qué no vamos a poder en esta ocasión escuchará lo que podría escribirse, en lo que no habrá ninguna palabra de insulto, porque la Representación Nacional sabe que nunca he venido a esta tribuna a insultar, que no he venido a calumniar, que vengo a exponer hechos. (Desorden.) Que vengo a exponer hecho que todos conocemos, hechos que

fueron publicados por todos los periódicos de la capital en 1920, pero que son absolutamente indispensables en este momento para ilustrar el debate al margen de la intromisión del Gobierno federal en el asunto de Nuevo León.

El C. Quiroga: ¿Me permite usted una interpelación?

El C Puig y Casauranc José Manuel: Sí la permito, compañero; yo permito todo.

El C. Quiroga: Señor diputado Puig:

El que hizo estas interpelaciones al secretario de Gobernación y va hacerlas al secretario de Guerra, no ha tenido ni por un momento la mente de atacar al Ejecutivo federal; la intención ... (Desorden.) la intención de recalcar los acontecimientos desagradables que se han desarrollado en el Estado de Nuevo León.

El C. Puig y Casauranc José Manuel: A mí no me importa nada que la intención del compañero Quiroga hubiera sido atacar al Gobierno federal; me tiene muy sin cuidado el Gobierno federal; yo lo he acatado y lo he interpelado en numerosas ocasiones en esta tribuna, y la Representación Nacional sabe que alguna ocasión, del mismo modo que están las galerías llenas de enemigos, las llenó un secretario de Estado para venir a contestar mis interpelaciones. (Gritos en las galerías. Voces: ¡Viva De La Huerta!)

El C. Padilla: Moción de orden. (Campanilla.)

El C. secretario Fabila: La Presidencia, por conducto de la Secretaría, manifiesta a los concurrentes a las galerías que ha girado las órdenes conducentes para que se presente la Policía a fin de que al próximo aviso las mande desalojar.

El C. Puig y Casauranc José Manuel, continuando: Señores diputados. Hasta en el teatro.... (Siguen los gritos en las galerías Campanilla.) cuando el individuo más odioso.... (Continúa el desorden en las galerías. Campanilla.) Pues será peor para las galerías, que no van a presenciar este debate político; yo estoy tratando de que lo presencien.

El C. Pastoriza, interrumpiendo: ¡Es muy interesante!

El C. Puig y Casauranc José Manuel; continuando: Sí es interesante, compañero. Resulta, señores diputados, verdaderamente curioso que cuando en ejercicio de un pleno derecho democrático se trata de aquilatar con hechos, con sucedidos, la conducta política que todos tenemos perfecto derecho y deber de aquilatar en los hombres públicos.... (Sigue el desorden, Campanilla.) ¿En qué se opone, en lo absoluto a que el señor De la Huerta siga disfrutando de prestigio cerca de sus admiradores? ¿En qué se opone, en absoluto, el que un representante del pueblo venga.... (Una voz: ¡No hay derecho!) ¿A qué compañero, no hay derecho? ¿A hablar?

El C. Padilla: Moción de orden: Es ya tiempo de que en el seno de esta Cámara de representantes se termine de una vez con este espectáculo bochornoso. Estamos en los momentos de pasar los dinteles de una nueva vida institucional y tenemos el más alto deber de señalar desde estos momentos como primer paso, el que se haga respetar está Representación del pueblo; que quince millones de hombres que están representados aquí, no deben será ahogados, por un caterva de hombres que faltan el respeto a la soberanía de los demás. Si no es posible que estás galerías, que son muy saludables cuando viene a será el público, si es posible que no sean público, sino que vengan a será una facción que altere el orden, es necesario que usted, señor presidente, cumpla el Reglamento y haga efectivas las disposiciones de él. (Voces en las galerías: ¡Somos el pueblo!)

El C. secretario Fabila: La Presidencia insiste, por conducto de la secretaría, excitando por última vez a las galerías para que eximan de intervenir en los debates de está Representación Nacional.

El C. Puig y Casauranc José Manuel, continuando: Para nadie, señores diputados, para nadie es un secreto que el motivo fundamental, único, de la renuncia del señor don Adolfo de la Huerta como secretario de Estado y del Despacho de Hacienda y Crédito Público fue. (Gritos en las galerías. Campanilla.) el que consideró indebida la intromisión del Ejecutivo federal en los casos de Nuevo León y San Luis Potosí como el señor De la Huerta, exactamente, (Voces en las galerías: ¡Viva!) exactamente lo mismo que el señor De la Huerta, he sostenido siempre, dentro y fuera de la Representación Nacional y seguiré sosteniendo siempre: La necesidad absoluta, la necesidad absoluta para la persistencia de nuestro régimen democrático de que no subsista ese grave pecado de las pseudo-democracia latinoamericanas, que han pretendido trasformar constantemente las instituciones federales en organización de centralismo.

Y conforme con este criterio, habría llevado mi aplauso sincero y leal a la conducta del secretario de Hacienda que renunciaba a una tan alta representación política por un convencimiento, por seguir un ideal, si no hubiere tenido presente en la memoria el caso concreto de Michoacán. Aquel caso de Michoacán, (Gritos. Siseos.) aquel caso de Michoacán, que yo ruego a los señores diputados que permitan exponer, ya que representantes de Michoacán que me podrán decir si en una sola palabra de las que voy a decir, miento.

En 1920, señores diputados, lucharon en el Estado de Michoacán, apenas triunfante la revolución de mayo, tres partidos que postulaban, respectivamente, a Márquez de la Mora, a Mújica y a García de León. Como el ciudadano Ortiz Rubio, entonces secretario de Comunicaciones, pareciera inclinarse de una manera definitiva en favor de García de León y hasta hubiera ido asumir tres días antes de las elecciones la gubernatura de aquel Estado para ayudar a su candidato a instalarse, la Legislatura en que estaban representados los tres partidos en la proporción de cinco, cinco y seis, los diputados mugiquistas y moristas se unieron contra los presuntos diputados García de León y después de haber estado funcionando en Colegio Electoral aquel cuerpo, unidos en un solo grupo los representantes de los tres partidos del Estado de Michoacán, los diputados de García de León abandonaron el recinto y declararon gobernador a su candidato, haciendo lo mismo los dos grupos de Mújica y de la Mora, que declararon que era gobernador el general Mújica. En estás circunstancias, señores diputados, ocurrió

algo muy distinto de lo que a pasado en San Luis y en Nuevo León, en donde ni un solo momento los elementos contrarios han llegado a reunirse en un solo local o a aceptar la integración de un grupo.

El C. Barriga Zavala: En Nuevo León había Comisión Permanente que entregaba a la que seguía. En Michoacán no había Comisión permanente, sino que estaban disueltos los poderes Ejecutivos y Legislativo.

El C. Puig Y Casauranc José Manuel: Es exacto: El gobernador Ortiz Rubio había declarado disuelta la Legislatura del Estado de Michoacán y no había, por lo tanto, Poder legislativo en el Estado. Pues bien; cuando se planteó el conflicto, ese aspecto de dos grupos de hombres que reclamaban el triunfo de la lucha electoral en su Estado, entonces el presidente de la República ordenó,

primero, que el general Lázaro Cárdenas, gobernador militar del Estado, después del día fijado como tiempo del período constitucional por el cual estaba funcionando como gobernador militar. (Una voz: ¡No había gobernador constitucional!) No existía gobernador constitucional, compañero, pero término constitucional sí existía, término constitucional sí existía. (Aplausos.) El señor presidente de la República ordenó, primero, al general Lázaro Cárdenas lo siguiente: -Como yo no puedo ver desde aquí cuál de los dos grupos es el que representa la legalidad en Michoacán, no entregues el Poder a ninguno; a ninguno reconozco y continúa como gobernador del Estado de Michoacán. Esto, señores diputados, constituía evidentemente y apelo al crédito jurídico de todos los distinguidos abogados de este Parlamento, apelo al criterio jurídico de ellos a que me digan si el ordenar a un gobernador, después, de concluido el término constitucional, que siguiera funcionando y el ordenar que no entregara el poder a ninguno de los grupos contendientes, no significaba una intromisión del Poder Ejecutivo en asuntos locales, más seria, más grave, de más trascendencia constitucional, de más alcance jurídico, de mayor peligro democrático que la intervención del Ejecutivo en el caso de Nuevo León.

El C. Barriga Zavala: El presidente de la República en aquel entonces ordenó a un gobernador militar, es decir, a un simple empleado de él, lo que usted está diciendo; después el presidente Obregón y el secretario de Gobernación, Calles reconocieron a la Legislatura instalada en el Palacio de Gobierno y al gobernador que dimanó de ella.

El C. Puig y Casauranc José Manuel: A eso voy precisamente, compañero. ¿El diputado Barriga Zavala se encuentra en el salón? (¡Voces: Fue quien contesto!) El diputado Barriga Zavala firmó entonces telegramas que fueron publicados en toda la prensa de la capital y que aparecen en el DIARIO DE LOS DEBATES del senado, de donde he hecho tomar las copias. Telegramas diciendo:

"Morelia, Michoacán, 16 de septiembre de 1920. "Señor Adolfo de la Huerta.- Presidente de la República.

"Colegio Electoral, legítimamente instalado en el Palacio del Gobierno del Estado, protesta ante usted de manera respetuosa, pero enérgica, por la violación a la soberanía del Estado de Michoacán, que implica la orden enviada al gobernador de facto, general Lázaro Cárdenas, de no hacer entrega hoy, del despacho al Ejecutivo del C. general Francisco J. Múgica, electo legalmente a mayoría de votos válidos en las pasadas elecciones ordinarias, y cuya consecuencia sería interrumpir el establecimiento del orden constitucional en el Estado y no reconoce facultades en usted para intervenir en asuntos como el presente, de la exclusiva competencia de las autoridades locales respectivas. -Presidente del Colegio Electoral, J. Barriga Zavala.- Secretario, A. Gómez.- segundo secretario, Alberto Coria."

"Palacio Nacional a Morelia, Mich., 17 de septiembre de 1920.

"Señores J. Barriga Zavala y A. Gómez, presidente y secretario del Colegio Electoral:

"Refíérome a su mensaje de ayer. Habiéndose instalado dos legislaturas en ese Estado, que propugna cada una por el triunfo de su candidato, la intromisión del Ejecutivo de mi cargo en este caso se ha limitado a resolver con apego a la ley, que sea el Senado de la República quien decida sobre la validez y triunfo del candidato, pues carezco de autorización para juzgar; con está explicación creo que se justificarán las instrucciones que he dado al general Cárdenas. - Afectuosamente, el presidente de la República, A, de la Huerta."

"Palacio Nacional a Morelia, Michoacán, 17 de septiembre de 1920.

"J. I. Arriaga:

"Su mensaje. Mucho estimo y agradezco el alto concepto en que me tiene. Habiéndose instalado dos legislaturas en ese Estado, que, propugnan cada una por el triunfo de su candidato, la intromisión del Ejecutivo de mi cargo en este caso, se ha limitado a resolver, con apego a la ley, que sea el Senado de la República quien decida sobre la validez y triunfo del candidato, pues carezco de autorización para juzgar en el caso; con está explicación creo que se justificarán instrucciones que he dado al general Cárdenas- Afectuosamente, el Presidente de la República, A. de la Huerta.

"Morelia, septiembre 15 de 1920.

"C. presidente de la República.- Palacio Nacional.

"Saludo al amigo, después suplico al señor presidente: Tus últimas órdenes general Cárdenas nos han con movido profundamente. Creemos no estás en lo justo ordenando no se me entregue poder mañana siendo que Cárdenas manifestó ya en documento oficial a municipios reconocer como única Legislatura la instalada en Palacio con absoluto apego a la ley y a lo cual han concurrido los presuntos diputados que formaron más tarde otro grupo con pretensiones de Legislatura. Creemos además que el gobierno militar que has constituído aquí sólo puede justificarse mientras terminara período constitucional que termina hoy según nuestra Carta Constitutiva. Sabes de sobra y tienes documentos e informes de personas de tu confianza de los que alegan derechos deben dirimirlos ante las autoridades competentes de aquí, pues la intromisión de tu Gobierno viola la soberanía del Estado.

Si es tu convicción que no tienes derecho a que tu representante en está reconozca legalidad en los grupos que pretenden tener, no obstante lo terminante de la Ley Electoral y de la Constitución, te sugiero la idea y se lo pido al C. presidente nos permitas resolver a los michoacanos los asuntos de nuestro Estado, ordenándole al general Cárdenas deje de funcionar como Ejecutivo de facto y se concreta a guardar el orden, única función legal que puede ejercitar en ciertos casos, las fuerzas federales, pues te protesto que nosotros no intentamos turbarlos sin motivo y justificación. Sería prolijo relatarte la sin razón de nuestros contrincantes porque mucho sabes de ellos y lo tienes comprobado. Aquí espero tu parecer. -Mújica."

Mújica señores diputados, Mújica, que no había sido reconocido por el Ejecutivo de entonces, lo fue después cuando el general Obregón llegó a la presidencia de la República, y hecha ya la luz en los asuntos del Estado y pareciendo con claridad meridiana los dos grupos contendientes, pudo el Ejecutivo federal estar en posición de saber cuál era digno de reconocimiento del Centro. En la tesis que sostengo, lo interesante, lo fundamental es que si el señor don Adolfo de la Huerta (Voces en las galerías: ¡Viva!) como presidente de la República. (Una voz en las curules: ¡Lo será aunque le duela!) No me duele. Sentaba, como presidente de la República, el grave presidente de intromisión del Ejecutivo en un asunto local electoral, llevando su intromisión hasta el extremo de ordenar la continuación del gobernador después del termino constitucional que no cambia aunque haya veinte revoluciones en el Estado; si eso sucedía, no se explica bien, no queda claramente definido, es indispensable que se vaya a otros casos para entender cómo podía haber consistencia en la organización mental del presidente de la República de 920, que habiendo sentado un precedente de orden constitucional, venía en 1923 a renunciar la cartera de Estado porque se siguiera el precedente sentado por él, (Aplausos.) pero de buena fe, de magnifica buena fe; pero de muy buena fe indudablemente se llevó más adelante todavía la intromisión en asuntos de soberanía netamente local. He aquí el siguiente telegrama:

"De México a Morelia, Mich., septiembre 15 de 1920.

"General francisco J. Mújica.

"Correspondo a tus saludos con todo afecto; cualquiera que pudiese será mi concepto personal sobre asuntos refiérese tu telegrama está fecha, debo manifestarte que carezco en absoluto facultades para decidir sobre legalidad que pretenden tener a su favor cada uno de los grupos que contendieron en elecciones. Además de tu gestión, se han hecho numerosas representaciones ante este Ejecutivo y la Secretaría de Gobernación, no sólo por ambos partidos sino por los representantes de ese Estado en el Congreso General. En estás condiciones y debiendo sujetarme estrictamente a la ley, he de agradecer labores en el sentido de que contigo concurra el otro gobernador presunto a está capital, a fin de discutir ampliamente los puntos que se requieran y tratar de llegar a una solución que redunde en beneficio de ese Estado y a la vez demostrar el respeto que todos debemos a la ley.- Te saluda cariñosamente, A. de la Huerta."

Cuando la Cámara de diputados toda aplaudió al secretario de Gobernación cuando opinaba que trataba de resolver en la ciudad de México, por el llamado de dos gobernaciones en pugna, un asunto de soberanía netamente legal, constituía un ataque a las instituciones democráticas; era indudablemente, señores diputados, porque se entendía que no era posible, a pesar de la buena fe y del deseo de concordia política y de los mejores anhelos de hacer paz y de confraternidad, que se tuviera, que no era posible, dentro de las instituciones democráticas ticas y dentro del régimen local constitucional de cada Estado, el que las cuestiones de un Estado trataran de resolver en el Palacio Nacional por conferencia de dos candidatos. En los casos de Nuevo León y de San Luis- y esto es lo que he querido dejar absolutamente sentado y demostrado como hechos - el Ejecutivo federal se ha limitado, viendo dos grupos enfrente, cuyos tonos, cuya modalidad especial de ley no podía apreciar de momento, a no hacer el reconocimiento de ninguno de ellos; pero no llevó su intromisión a los asuntos legales hasta cometer un ataque a la soberanía, y por esto, repito, el argumento toral que está en la conciencia de todos los ciudadanos de México, que como motivo fundamental de la renuncia del señor De la Huerta para aparecer como constante, como celosos defensor de la soberanía de los Estados, resulta falso, cae la piedra por su base, por que existe el precedente de Michoacán que ha servido al presidente de la República en el presente caso para normar su actitud en estos dos asuntos. Para concluir señores diputados, después de dejar sentados estos hechos que, como antes digo, no debieron haber sido olvidados por políticos, que estamos todos en la obligación de conocer los antecedentes de cada circunstancia para apreciar los hechos futuros, por está simple consideración no debiera la mayoría cooperatista, si hubiera obrado con verdadero tacto en el asunto, tocar el caso de Nuevo León o de San Luis, porque el precedente anterior, señores diputados, está sentado precisamente por el hombre que ahora se quiere aparecer como defensor de soberanías que él ha enseñado a violar. (Desorden.)

El C. Gandarilla: Honorable Asamblea:

Hace un momento, el para mí muy honorable diputado y compañero Puig Casauranc vino a está tribuna con objeto de interpelar al para mí también honorable respetado señor secretario de Gobernación, señor Colunga, y ha visto la Asamblea y ha visto también, no como lo dijera un compañero aludiendo a los asistentes a las galerías, "las porras", sino ha visto esa parte del pueblo de la República cómo ciudadano Puig y Casauranc no ha interpelado al ciudadano secretario de Gobernación para que diera luz en este debate. El ciudadano diputado Puig y Casauranc ha venido a traer el tapete de la discusión un debate verdaderamente político, trascendental, afirmando algo que es verdaderamente capcioso y va a encargarse la diputación de Michoacán de demostrar que el honorable diputado Puig y Casauranc no ha estado en lo justo en sus apreciaciones. (Gritos y aplausos en las galerías.)

Pedí la palabra para interpelar al honorable secretario de Gobernación. Voy a interpelarlo sobre algo que es verdaderamente trascendental, para que el pueblo de la República, por medio de sus representantes en las galerías y por medio de la prensa,... Alguno de las galerías me dice que no es representante del pueblo; claro, si él mismo lo dice no será yo el que lo afirme. (Desorden.) he pedido la palabra para interpelar al secretario de Gobernación y lo haré; pero antes quiero verdaderamente venir a la tribuna para demostrar que en el debate político de los que hasta ahora- óigalo bien Puig y Casauranc-, se han declarado amigos sinceros de Adolfo de la Huerta, lo atacan de manera artera. En el caso de Michoacán, señores, el señor Puig y Casauranc se basa en él para decir que la renuncia del señor De la Huerta como miembro del gabinete del presidente de la República, Alvaro Obregón, viene a decirnos Puig que el señor de la Huerta ha hecho ahora una inconsecuencia, porque cuando él fue presidente de la República siguió los mismos pasos que ahora sigue Alvaro Obregón y que, en consecuencia, no estuvo en lo justo al adoptar está actitud que nosotros, los partidiarios de don Adolfo de la Huerta -óiganlo bien-, sí creemos atinada. (Aplausos. Desorden. Campanilla.) En el caso de Michoacán, honorable Asamblea, obraban circunstancias perfectamente distintas a las que obran en el caso de Nuevo León. En el caso de Michoacán se había declarado un estado de verdadera guerra: Habían desaparecido los poderes; Ortiz Rubio, que se hallaba en está capital, se había levantado y existía en esa época un gobernador militar por prevalecer circunstancias especiales en Michoacán, el general Lázaro Cárdenas...

El C. Pérez Gil y Ortiz, interrumpiendo: Una rectificación. usted no conoce la Constitución de Michoacán: No habían desaparecido los poderes.

El C. Gandarilla, continuando: El muy ilustre doctor y culto profesionista y amigo mío, me da una demostración de que escuece cuando pongo el dedo en la llaga!....

El C. Pérez Gil y Ortiz: No conoce usted la Constitución de Michoacán.

El C. Gandarilla: Para aclarar, y como quiera que el mismo doctor Pérez Gil y Ortiz me ha dicho que no conozco perfectamente el caso de Michoacán,....

El C. Pérez Gil y Ortiz, interrumpiendo: ¡La Constitución!

- El C. Gandarilla, continuando:... voy a dar gusto a su señoría, interpelando al compañero don Rubén C. Navarro para que nos diga, en dos palabras, como hijo de Michoacán, como conocedor de la constitución de Michoacán, si Puig y Casauranc estaba en lo justo al hacer sus apreciaciones. Suplico a la presidencia conceda la palabra al compañero Navarro.

El C. Navarro Rubén C: Señores compañeros: Nadie como yo conoce el caso de Michoacán que ha presentado a la consideración de está honorable Asamblea el compañero Puig y Casauranc, confundiéndolo, erróneamente, con el caso actual que se presenta en los Estados de San Luis y Nuevo León. (Gritos en las galerías.) A raíz de la revolución obregonista, el Estado de Michoacán entró en un período preconstitucional, y el error del Centro en esa época consistió en consentir que en Michoacán había desaparecido los poderes, cuando según la Constitución del Estado no puede darse el caso de que en esa Entidad desaparezcan los poderes.... (Continúan los gritos en las galerías.) Mi peroración no es política. Vengo a hablar aquí con honradez y con la verdad. Voy a probar que el caso de Michoacán no es el caso de Nuevo León ni el de San Luis Potosí. (Gritos) En la lucha en Michoacán contendieron dos partidos, el Partido socialista y el Partido Liberal Michoacán; al Partido Católico no lo tomamos en cuenta en el Estado, o mejor dicho, a sus candidatos. (Gritos.) Suplico tengan la bondad de escucharme un momento...(Gritos.)

El C. presidente: La Presidencia suspende la sesión por cinco minutos para desalojar las galerías. (Voces: ¡No! ¡No!) Se suspende la sesión.

El C. secretario Fabila: Por orden de la Presidencia se invita a las galerías a que sean desalojadas... (Voces: ¿No! ¿No!)

El C. presidente: A solicitud de varios ciudadanos diputados se reanuda la sesión con asistencia de las galerías, en la inteligencia de que si no cumplen estrictamente el Reglamento, se aplicará este con todo rigor.

El C. Espinosa Luis: Moción de orden. Quiero manifestar a la Presidencia que su amenaza resulta pueril en esto instantes y que la actitud de mandar desalojar las galerías es ridícula, porque todos, callistas y de la huertistas, hemos traído a esas galerías a nuestros amigos (Aplausos.) y somos, por tanto, los diputados, no los asistentes a las galerías, los únicos responsables de la actitud que asuman nuestro amigos en estos instantes. (Aplausos.) Por lo demás, señor presidente, yo levantaría también mi voz para apoyar la determinación de su señoría si en este momento hubiese "porra", es decir, un grupo de individuos defendiendo un interés de grupo, como ha sucedido en muchos ocasiones; pero en estos momentos hay en las galerías partidarios de una y otra tendencia y, por lo tanto, señor presidente, podemos decir, en términos vulgares, que estamos caballo a caballo y que no debe temer nada su señoría. (Aplausos.)

El C. Portes Gil: Para una moción de orden, señor presidente. Todos los ciudadanos diputados pueden darse cuenta de que en las galerías está un piquete de hombres armados. Como esto es indigno de la Representación Nacional y yo protesto contra esa autorización de la presidencia y le pido atentamente que se sirva mandar desalojar a esos hombres armados que están en las galerías.

El C. presidente: La Presidencia aclara al ciudadano Portes Gil que en virtud de la orden que dio para que se desalojara las galerías, había venido la fuerza, pero que ya dieron instrucciones para que se retire. ¿Por qué se alarma usted? (Desorden.)

El C. Gandarilla: ¡Usted lo pidió!

El C. presidente: Continúa en el uso de la palabra el ciudadano Navarro.

El C. Navarro Rubén C.: En Michoacán, señores representantes, se instalaron dos legislaturas en esa época: Una legal, en el Palacio de Gobierno, en la Cámara de diputados, y la otra ilegal, en el

Palacio del Ayuntamiento de Morelia. Al llegarse la fecha en que debía...

El C. González y González, interrumpiendo: ¿ Me permite una interpelación?

El C. Navarro Rubén C. continuando: Un momento compañero. después le permitiré todas las que quiera.

Al llegarse la fecha de la toma de posesión del gobernador constitucional, existía ese conflicto en Michoacán, por más que los habitantes de ese Estado conocíamos claramente que no había tal conflicto, porque una de las dos legislaturas había sido instalada de un modo ilegal bajo todos conceptos. Entonces una y otra Cámara comunicaron al Ejecutivo sus instancias respectivas y éste contestó a las que hicimos nosotros- pues yo entonces era diputado local en Michoacán- que él no quería intervenir en el asunto, por no será de su competencia. (Voces: ¡Lo de Obregón!) Después lo voy a decir. Creyó entonces el Ejecutivo que el Senado de la República debía resolver aquel conflicto, por considerar que habían desaparecido los poderes en el Estado; pero la constitución señala a los funcionarios que deben ir haciéndose cargo del Gobierno a medida que van desapareciendo los poderes. En el caso, pues de Michoacán, el presidente de la República no quiso intervenir en el asunto por creer que no era de su competencia, y en el caso de Nuevo León el Ejecutivo desconoce al poder Ejecutivo emanado de las elecciones últimamente verificadas allí y a la Cámara local. (Voces: ¡No! ¡No!.) Sí las desconoce, porque no reconocer es desconocer... (Voces ¡No! ¡No!) ¿Entonces qué es? En el caso de Michoacán no reconoció ni desconoció, porque el Ejecutivo federal no tenía facultades... (Gritos) Se trataba de un gobernador militar Estába interrumpiendo el orden constitucional en Michoacán. (Gritos.) El gobernador militar fue el que siguió en Michoacán; pero cuando el centro convencieron de que no habían desaparecido los poderes en el Estado, entonces la comisión Permanente que Ortiz Rubio había hecho desaparecer arbitrariamente en Michoacán, volvió a sus funciones y se reconoció al gobernador que ésta había nombrado, que fue el doctor Primo Seráranía Mercado y éste entonces recibió el Gobierno del general Lázaro Cárdenas, y Primo Seráranía Mercado, haciéndose eco de la voluntad popular del Estado de Michoacán, entregó el Poder al general Mújica, único gobernador electo en esa época, en Michoacán.

presidencia del C. OLLIVIER FRANCISCO

El C. Gandarilla: Ya ve, pues, la honorable Asamblea.... (Desorden, Voces: ¡No! ¡No! ¡Sí! ¡Sí! Campanilla.) como no es exactamente igual el caso de Michoacán al caso de Nuevo León. (Desorden. Campanilla.) En el caso de Nuevo León el ciudadano Alfredo Pérez ha protestado ante una Legislatura que fue por la Comisión Permanente de la Legislatura que había sido reconocida indudablemente como legal. No es, pues, el mismo caso de Michoacán y es claro que Adolfo de la Huerta, en el primer caso, en el caso de Michoacán, como dijera Puig y Casauranc, puso sus buenos oficios, pero no para mandar las bayonetas a Michoacán para que fuera tal o cual gobernador, sino como buen revolucionario y amigo de revolucionarios, para evitar conflictos y hacer en el terreno amistoso las veces de mediador a fin de que los gobernadores se entendieran, (Aplausos.) y si no se entendían, hacer entonces lo que pasó: Que viniera a respetarse en todo la Constitución local. Pero en el caso de Nuevo León ocurre algo verdaderamente monstruoso que no han querido apreciar los partidarios acérrimos de don Plutarco Elías Calles, y voy a decir por qué. (Desorden en las galerías.) El caso de Nuevo León, señores, es diáfano: En Nuevo León existían los tres poderes, Ejecutivo, Legislativo y Judicial; existiendo estos poderes se efectuaron las elecciones; el resultado de las elecciones favoreció en primer termino, según lo declaró la prensa y según lo declararon sus partidiarios, al candidato Aarón Sáenz. Y aquí va lo que les duele, compañeros. (Voces: ¡Ah! ¡Ah! Aplausos. Desorden.) Y digo que el triunfo correspondió a Aarón Sáenz, porque todo el mundo, inclusive el ciudadano Porfirio González, reconoció que el ciudadano Aarón Saenz tenía mayoría de credenciales de diputados, de donde resultaba algo incomprensible, o sea Aarón Sáenz, perdido, tenía mayoría de diputados que había jugado con su misma formula...

El C. Martínez Rendón: Permítame usted una palabra.

El C. Gandarilla: Aarón Sáenz vino aquí a la capital y hablo con nuestros compañeros de Cámara, trayendo la convicción íntima de que había triunfado democráticamente en Nuevo León; pero después de entrevistar al ciudadano presidente de la República, después de cambiar impresiones con él, que por conducto del honorable secretatrio de Gobernación en está tarde memorable, como lo voy a demostrar, se ha convertido en gran único elector, el ciudadano presidente de la República después de cambiar impresiones con Aarón Saénz, este ciudadano declaró urbi et orbi, ante el asombro de toda la República, que él no había triunfado, que el que había triunfado era el candidato oficial, Porfirio González. (Aplausos.) Todos los que habían hablado con Aarón Sáenz y a quienes nos había dicho la víspera que había triunfado legalmente, se sorprendieron de manera inusitada cuando al día siguiente Aarón Sáenz por la prensa se declaraba perdido. ¡Milagros de la democracia en este país en que, digase lo que se quiera, y a pesar de los cirineos del Ejecutivo, continúan las tiranías más terribles ya que la de Porfirio Díaz! (Aplausos. Gritos.) ¡Está es la verdad!... Adolfo de la Huerta ha sido reconocido por todos sus amigos callistas los que se sientan en esos escaños, públicamente como hombre honorable, como sincero revolucionario y por esos sus amigos que ayer ocurrían a las antesalas de la Secretaría de Hacienda con una sonrisa en los labios; Adolfo de la Huerta ha sido pregonado por ellos mismos como hombre incapaz de cometer una violación a la ley y como hombre que sabe respetar los derechos del pueblo; eso han dicho los señores "callistas" (Desorden. Aplausos, Voces: ¡Bien! ¡Bien!) Adolfo de la

Huerta, señores, al ver que el Ejecutivo de la Unión quería en los casos de San Luis Potosí y Nuevo León establecer un criterio único que ya aquí ha expresado el honorable secretario de Gobernación, Colunga... (Desorden. Gritos en las galerías.) No gritéis, compañeros, que las razones se escuchan y se combaten. Vuestros diputados están allí; ellos vendrán a la tribuna, aceptamos el reto.(Aplausos en las galerías.) El Ejecutivo federal, señores ha dicho por la prensa, el Ejecutivo federal ha clamado a los cuatro vientos que en el caso de Nuevo León y en el caso de San Luis Potosí se abstiene de reconocer a los gobiernos que resultaron, según se dice, de las elecciones, porque él ha encontrado fallas en esas elecciones, porque él cree que no son elecciones legítimas, porque él juzga -óigase bien-, juzga que no son buenas las elecciones. (Desorden.) Aquí el muy honorable secretario de gobernación, señor Colunga, ha tenido una frase que ha quedado estampada ya en el DIARIO DE LOS DEBATES; el secretario de gobernación, Colunga, ha dicho, contestando a una interpelación del ciudadano Quiroga- y allí está el DIARIO DE LOS DEBATES-: El "Ejecutivo federal tiene este criterio: En unos casos reconoce a los gobernadores cuando se ajustan a las prácticas de las leyes locales, y en otros casos -dice- se atiene a las elecciones y a cómo se verificaron" Allí está el DIARIO DE LOS DEBATES; quiero coger está frase del para mí muy respetable ciudadano secretario de Gobernación. Quiere decir, entonces, que el Ejecutivo federal sigue está política y la seguirá en lo sucesivo: (Gritos.) El Ejecutivo federal de los sucesivos ver si en cada Estado en las elecciones no hubo chanchullos, ver si en cada Estado se jugó verdadera y democráticamente, verá si en cada Estado se ajustaron los actos electorales a las prácticas democráticas, y entonces ese gran elector vendrá a decir: Este gobernador sí jugó bien y este gobernador jugó mal, es decir, pretende establecer este sistema: Poner sus incondicionales en los gobiernos para entronizar la dictadura (Aplausos. Gritos.) Pero el señor Puig y Casauranc trajo a debate político el caso De la Huerta y yo voy a traer, pésele a quien le pese, el caso Plutarco Elías Calles, y voy a demostrar que en México, a pesar de las buenas intenciones de algunos funcionarios, continúa haciéndose la más ignominiosa de las imposiciones. Van las pruebas. (Aplausos)

El C. Martínez Rendón: Una interpelación.

El C. Gandarilla: Cuando termine.

El C. Martínez Rendón: Quiero que se fije bien en que se me permitirá hablar cuando usted termine.

El C. Gandarilla: Desde el año de 1921, en que tomaba posesión de la Secretaría de Gobernación el general Plutarco Elías Calles... (Gritos.) ya empezaba la farsa electoral; el señor general Calles fingía ignorar en la Secretaría de Gobernación que él iba a será candidato a la presidencia de la República; el general Calles, estando en la Secretaría de Gobernación, decía al país que no se aprovecharía de la Secretaría a su cargo para imponerse él mismo como presidente de la República. (Gritos.)

El C. Guzmán Apolonio R: ¡Y los propagandistas de De la Huerta desde hace tres años están trabajando!

El C. Gandarilla: El país, señores, desde el año de 1921 se encontraba ya, por obra y gracia de la Secretaría de Gobernación, ante el arduo problema, trascendental, de la sucesión a la Presidencia de la República. El pueblo del país ha manifestádo, urbi et orbi, que lo único que desea es que suba a la silla presidencial un hombre honrado; el pueblo del país... (Desorden. Campanilla.)

El C. presidente: Se previene a las galerías que se abstengan de seguir interrumpiendo al orador; de lo contrario, la Presidencia se verá en la necesidad de levantar la sesión.

El C. Gandarilla, continuando: El pueblo del país ha deseado de una manera constante, que quien llegue a la silla presidencial, lo haga por sus propios méritos, sin hipocresías, sin falacias, sin mentiras y, sobre todo - óigalo usted bien, que sabe de balar como borrego-, sin crímenes, compañero! (Aplausos ruidosos en las galerías.) Yo he sido tildado por algunos compañeros de Cámara a quienes siempre he respetado, de traer a la conciencia de algunos, ideas que no cuadran mucho con su manera de pensar; se me ha dicho que yo lanzo cargo falsos; que yo he señalado a Plutarco Elías Calles como el autor intelectual de la muerte de Francisco Villa; y puesto que se me ha hecho esa imputación por el representante oficial de Calles, Portes Gil; voy a tratar este asunto. (Gritos)

Voy a entrar en un ligero paréntesis, suplicando respetuosamente al ciudadano secretario de Gobernación me perdone mi digresión.

Decía antes que desde 1921 el general Calles Plutarco Elías, ya laboraba en sus trabajos electorales en la Secretaría de Gobernación.

Nada de extraño sería este país, que cuando se juzgue alguien con méritos, bastantes, aspire al elevado puesto de presidente de la República; para nosotros sería obligatorio respetar, compañero Manzano, a cualquier candidato que, encontrandose con méritos bastantes, quisiera será, por esos méritos, nuestro primer mandatario!... A mediados de este año, cuando el secretario de Gobernación, teniendo todavía las riendas del Gobierno de la República, hacía y deshacía en los actos electorales, surgió, naturalmente, algún individuo - a quien los partidiarios de Calles llaman iluso, pero que en concepto de algunos es un ciudadano que tiene derecho de trabajar-, apareció un candidato a la presidencia: Raúl Madero. (Murmullos.) Entonces debo decir que yo, señores - y está es una aclaración que debo a los representantes del pueblo y al pueblo que se encuentra en las galerías-, (Voces: ¡Huy! ¡Huy!) yo era partidario de Calles porque... (Voces: ¡Ah! ¡Ah! Desorden.) Aquí va lo bueno.

El C. Garza Candelario: Porque eres un farsante, por eso eras...!

El C. Gutiérrez José F.: Allí no había granjerías; por eso cambiaste chaqueta; allí no había dinero. (Desorden. Campanilla.)

El C. Gandarilla: Debo decir a los ciudadanos diputados Candelario Garza, y Gutiérrez, que deben dar una demostración de que saben cumplir sus deberes no insultando al orador, porque el

orador no contestara insulto por insulto aquí, pero donde lo citen va, compañeros. (Aplausos.)

El C. Garza Candelario: No es insulto, es la verdad. (Desorden.)

El C. Quiroga: Para una moción de orden, señor presidente.

El C. presidente: Tiene la palabra para una moción de orden el ciudadano Quiroga.

El C. Quiroga: Señores representantes:

Por respecto a está honorable Asamblea, por respecto a los ciudadanos secretarios que se ha servido llamar está Representación Nacional, yo ruego al compañero Gandarilla suspenda por lo pronto el asunto político para hacer mi interpelación al ciudadano secretario de Guerra, y al mismo tiempo pido a la Asamblea se acepte mi ruego. (Aplausos.)

El C. presidente: La Presidencia manifiesta al ciudadano Quiroga, que después del ciudadano Gandarilla están inscriptos para interpelar al ciudadano secretario de Gobernación, los ciudadanos Arce Gustavo, Olivé Isaac, Martínez Réndon Miguel y Pastoriza Juan. Por otra parte, no se cree autorizada para restringir el uso de la palabra al ciudadano Gandarilla. (Aplausos.)

El C. Gandarilla: Pero sucedió que en el Norte de la República, en el Estado de Durango, se encontraba uno de los individuos que, quiérase que no se quiera, había luchado por la revolución: Francisco Villa; y se decía y se rumoraba que Francisco Villa, con los elementos armados que disponía, podía en un momento dado ponerse a trabajar activamente en favor de determinado candidato presidencial... (Voces: ¡Es falso eso!) Sucedió entonces - esto fue público y notorio- que los candidatos se decía en todas partes, tomaban como factor en la próxima lucha electoral a Francisco Villa. Nada puede desmentirme sin faltar a su propia conciencia. (Gritos.) Pues bien; sucedió en una buena mañana en las calles de Guanajuato, de Hidalgo del Parral, fue muerto Francisco Villa por algunos individuos que en esa época no se supo quienes eran; y en está Cámara algunos representantes, hoy partidarios acérrimos del general Calles... (Desorden. Campanilla.) El compañero Pedro Ignacio Chacón con otros presentó una moción a está Cámara para que se nombrase una comisión que investigara en Parral como había sucedido los hechos, y esa comisión la formaron, entre otros el ciudadanos Céspedes y el que habla. (Voces: ¿Y Azueta?) Al regresar de esa comisión recogimos los datos de consignamos en un informe y "que no nos callamos", como dice una voz en la galería, sino que venimos en uná sesión pública a leerlos aquí bajo la firma de todos y cada uno de los comisionados: El ciudadano Céspedes, el que habla y otros compañeros más. Aquel informe fue publicado por la prensa y la opinión pública, que se engaña pocas veces, dio fallo inapelable. Pero faltaba algo grave... (Voces: ¡Agua! ¡Agua! Desorden. Campanilla.) En el informe que rindió esa comisión no se señalaba en nombre del general Calles y entonces ya el ciudadano Portes Gil, que se encuentra allí presente, el ciudadano que juró por el honor y por la sangre de sus hijos será fiel al Partido Cooperatista y que lo traicionaba al día siguiente... (Siseos.) venía a está tribuna e imputaba a los miembros de la comisión el cargo de que nosotros habíamos dicho que era el general Calles, o que al menos queríamos decir que era el general Calles el autor del asesinato. Y esto nos obligó, especialmente a mí, a seguir sobre la pista de Jesús Salas B., que había cometido - y se había declarado confeso- el asesinato de Villa. (Una voz: ¿Ya acabaste?) Todavía no acabo, y va usted a saber lo que le interesa, compañero "callista". (Desorden.) Naturalmente que este cargo artero del diputado Portes Gil, que venía de Soledad de la Mota para luchar en el Parlamento, para atacar inconsideradamente a los que fuimos a esa comisión, tendió sus redes con el presidente de la Cámara y allí está el presidente de entonces, diputado Olivé; este presidente puso a la comisión que se encontraba en Parral un telegrama, diciéndole que suspendiera todas sus averiguaciones, que regresara cuanto antes. ¿Es cierto o no, compañero Olivé? Este telegrama lo tengo en mis manos. Dice así: La mayoría de está Cámara se opone a que continúen ustedes allá y no puede mandar enviar elementos para que continúen las pesquisas. Compañero Olivé, diga usted si es cierto, sí o no.

El C. Olivé: No puedo contestar sí o no.

El C. Gandarilla: Entonces muchas gracias. Venimos los comisionados ante está Cámara y en una sesión tormentosa preguntamos a la Asamblea si el cierto que la mayoría se había opuesto a que continuásemos nuestras investigaciones, ordenándose que regresáremos sin terminar nuestra labor; entonces la mayoría, como un solo hombre, dijo que no, descubriéndose los consejos de Portes Gil, que decía que no había sido político ni conveniente que hicieran esas investigaciones.

El C. portes Gil: ¡Si ni siquiera estaba yo aquí!

El C. Gandarilla: Naturalmente que Gandarilla y sus compañeros nunca habían dicho que era Calles el autor intelectual del asesinato de Villa, porque para hacer una afirmación de esa naturaleza, a pesar de que la opinión pública ya la había hecho antes, nos faltaban elementos probatorios bastantes; pero como Portes Gil trataba a Gandarilla y a sus compañeros, pero especialmente a Gandarilla, como a un calumniador, me vi obligado a seguir las huellas de Salas y las he encontrado. Entre las cartas que recibía Gandarilla, recibió una que inmediatamente presentó al compañero de Cámara, entonces, y creo que ahora -¡quién sabe!- Puig Casauranc...

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Siempre amigo de usted, señor.

El C. Gandarilla, continuando: Muchas gracias. En está carta, señores, un individuo que decía escribir de Torreón, me daba las huellas y los pasos de Salas después del asesinato de Francisco Villa; pero yo no le dí ningún valor a está carta, porque a pesar de que decía que estaba en Torreón, etcétera, y me daba datos precisos, no me lo afirmaba por su nombre, decía, "¡Por miedo!" Pero aquí va lo grave. (Siseos.) Lo que me importaba, señores, era encontrar las fechas y los lugares donde Salas había estado; pero sucedió algo verdaderamente asombroso en presencia del mismo Puig y Casauranc: En esos momentos llegaba el diputado Azueta a Torreón y sin preguntarle nada me

dice: "Gandarilla: Ahora sí traigo los pelos de la burra prieta que está en el Norte...." Y entonces Azueta, delante de nosotros y de nuestros amigos relató cómo Salas, después de consumado su acto en Parral, tomaba en el pullman la cama número siete, que lo debía conducir a Torreón. Y asómbrense ustedes: Los datos que nos proporcionó Azueta a Puig y a mí, y al otro Puig, y a todos, coincidían con los datos proporcionados en está carta. (Murmullos.) Yo no sé si después de que lo que digo se desencadenen sobre mí las iras de todos los partidarios del general Calles, (Voces: ¡No! ¡No! ¡No!) pero me importa poco y debo continuar. En está carta se decía lo siguiente. Es el itinerario de Salas....

El C. Puig y Casauranc Carlos: Es anónimo.

El C. Gandarilla: Voy a demostrar a ustedes que tengo pruebas plenas, compañeros. (Desorden.) Dice la carta: "Salas B. es el asesino del general Francisco Villa; el día 22 del pasado llegó aquí a Torreón y estuvo diciéndoselo a un personaje; estuvo está tarde y noche en la ciudad, y el día 23 salió por el tren que va a Piedras Negras a la ciudad de Monterrey, y el día 24 tomó el tren que va a Tampico, bajándose en Terán, lugar donde salió para Soledad de la Mota, y volvió a tomar el tren el día 25, y el 26 estuvo de regreso en Torreón y salió ese día para Durango, y anduvo cambiando oro por plata en diversas partes."

(Gritos. Aplausos.) Voy a decir lo que ya ansían que les diga los compañeros callistas. Para mí, como lo dije al compañero Puig y Casuranc, está carta pudiera no tener significación, pues sólo me ha servido para recoger las fechas y hasta con está sola carta el compañero Puig y Casauranc, que es hombre honrado, a quien seguiré conceptuando como tal, exclamaba cuando yo le decía: ¿Qué te parece de Calles?", con esa hombranía muy suya contesto: "Matemático, compañero Gandarilla, matemático, pero no digas nada!" (Gritos. Aplausos.)

El C. Puig y Casauranc José Manuel: Permítame usted la palabra.

El C. Gandarilla: Un momento. (Voces: ¡Que hable!) Hasta aquí señores, todavía me puede decir algún partidario de Calles que no tiene valor ninguno está carta; pero.... y aquí va un terrible pero compañero y general Campillo Seyde: Estuvo en esta ciudad el ciudadano diputado Salas B. En está ciudad estuvo también el ciudadano oficial mayor del Gobierno de Durango, Alberto Sánchez, persona honorabilísima, de cuya manera de conducirse, decentísimamente, pueden dar fe todos y cada uno de los compañeros que lo hayan tratado, como el compañero Espinosa y Elenes, como el compañero Gámiz. ¿Es cierto, o no, compañeros? (Afirman.) Y otros muchos. Alberto Sánchez goza en la región lagunera y en Durango de un prestigio envidiable como hombre honradísimo. Me encontraba con Aquilino Rama, compañero de diputación, conversando sobre esta carta, y me decía Rama con una sinceridad muy suya, como dicen los compañeros "callistas" con su sinceridad también que era un simple anónimo, que esto no tenía importancia.... (Voces: ¡Ah! ¡Ah!) Pero.... Y aquí va un "pero". "Pero" cuando me decía Aquilino Rama que esta carta no tenía importancia, entonces el hombre honrado, Alberto Sánchez, reconocido como tal por todos los que lo conocen, nos dijo a mí y a Rama, y lo repitió después delante de Azueta y de Barón Obregón: "Este itinerario es exacto, porque a mí, honradamente, Jesús Salas B. me lo ha confesado, señores." (Siseos. Desorden. Campanilla.) De manera que Salas B. había confesado lo que esta carta decía. De manera que Salas B. había cometido acto y después había ido, "por misterios del destino", o bien atraído por la popularidad grandiosa del caudillo de Soledad de la Mota, a dar cuenta, tal vez, de su cometido, compañero Portes Gil. (Aplausos.) Si la confección de un individuo no es prueba plena, no sé entonces qué podrá será prueba plena, compañero Campillo Seyde!....

El C. Olivé: ¿Y el caballerango que estaba en Parral, compañero?

El C. Gandarilla: Me habla el compañero Olivé de otro detalle que había olvidado y que fue el compañero Espinosa quien lo presentó a la consideración de los compañeros, públicamente. El caballerango de este ilustre caudillo se encontraba en Parral días antes de este hecho verdaderamente bochornoso, bochornoso porque en México no con asesinatos es como se conquista la voluntad popular, compañeros de Cámara. (Aplausos. Siseos. Gritos. Desorden.) Así es que ya ve la honorable Asamblea que yo nunca había señalado a Calles como autor de este asesinato; nunca había dicho: "Es Calles el que asesinó a Francisco Villa"; pero la opinión pública se había formando un concepto. Las pruebas que he tenido las he presentado a la Asamblea, y que sea la opinión pública la que juzgue cuáles con los procedimientos electorales que se emplean en México, en donde se dice que ya impera la democracia. Voy, pues, a terminar diciendo esto: Todos los partidarios de Adolfo de la Huerta que hasta hoy se dicen sus amigos, lo servían indudablemente de Calles, óigase bien, si todos estuviésemos convencidos de que el general Calles en el poder, como lo dicen los compañeros callistas, fuera a hacer una labor verdaderamente enérgica y revolucionaria. (Voces: ¡¡Sí! ¡No!)

Se dice que el general Calles es un hombre amante del proletariado, se dice que es un hombre de caracter enérgico que va siempre haciendo a un lado los obstáculos en pro del mejoramiento del proletariado, que es un hombre de energías que nadie puede detener; pero señores diputados, a principios de este año, en febrero, cuando en la capital estallaba el ruido ensordecedor de las huelgas, cuando los obreros abandonaban sus talleres para proclamar los derechos a que eran legítimamente acreedores, entonces una mano salía de la Secretaría de Gobernación y empujaba a esos obreros hacía la huelga; pero cuando oía el estruendo causado por la voz de los mismos obreros y de la huelga, entonces Calles, por conducto del gobernador del Distrito, mandaba acribillar a balazos a los obreros rojos. (Aplausos ruidosos Desorden. Campanilla.)

El C. Gutiérrez José F.: Reto a usted para que pruebe su dicho; ya estamos cansados de que mientan.

El C. Gandarilla: Voy a hablar todavía algo, compañeros, algo grave.

El C. Torregrosa: Diputado Gandarilla:.....

(Desorden.) Diputado Gandarilla. Una interpelación.

El C. Gandarilla: Con mucho gusto.

El C. Torregrosa: Diputado Gandarilla: Usted se contradice y levanta calumnias contra el general Calles... (Voces: ¡No! ¡No! ¡No! Desorden.) Usted se contradice y malamente imputa... (Gritos en las galerías. Desorden. Campanilla.) malamente le imputa al general Calles... (Voces: ¡No! ¡No! Gritos y tumulto en las galerías.)

El C. presidente: (Campanilla.) Se excita a las galerías a fin de que se sirvan escuchar a los oradores, de otro modo es imposible que el debate continúe.

El C. Torregrosa: Injustamente le imputa... (Voces: ¡No! ¡No! Gritos en las galerías.)

El C. presidente: Si el desorden continúa, la Presidencia se ver obligada, muy a su pesar, a levantar la sesión. Tienen la palabra el ciudadano Torregrosa para una interpelación.

El C. Torregrosa: Diputado Gandarilla... (Voces: ¡No! ¡No! Gritos en las galerías.) Injustamente, compañero Gandarilla injustamente le imputa usted... (Continúa el desorden en las galerías. Silbidos.)

El C. presidente a las 20.03: Se levanta la sesión y se cita para el próximo lunes a las diez y seis en punto.