Legislatura XXXI - Año I - Período Ordinario - Fecha 19240821 - Número de Diario 3

(L31A1P1oN003F19240821.xml)Núm. Diario:3

Colegio Electoral

ENCABEZADO

MÉXICO, JUEVES 21 DE AGOSTO DE 1924

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921.

AÑO I.- PERÍODO ORDINARIO XXXI LEGISLATURA TOMO I.- NÚMERO 3

TERCERA JUNTA PREPARATORIA DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 21 DE AGOSTO DE 1924

SUMARIO

1.- Se abre la junta. Lectura y aprobación del acta de la anterior.

2.- Sin debate se aprueba el dictamen relativo al 23 distrito electoral de Jalisco.

3.- A discusión el dictamen referente al 4o. distrito electoral de Guerrero; se suspende la junta.

4.- Reanudada ésta, continúa a debate el anterior dictamen, y es aprobado.

5.- Son aprobados sin discusión, los dictámenes correspondientes a los distritos electorales siguientes: 11 del Estado de Guanajuato, 1o. de Yucatán, 22 de jalisco y 1o. de Puebla. Se levanta la junta.

DEBATE

Presidencia del

C. FILIBERTO GÓMEZ

(Asistencia de 197 ciudadanos diputados y presuntos diputados.)

El C. presidente, a la 11.45: Se abre la junta.

- El C. secretario Vásquez, leyendo:

"Acta de la junta Preparatoria de la Cámara de Diputados del XXXI Congreso de la Unión, celebrada el día veinte de agosto del mil novecientos veinticuatro.

"Presidencia del C. Filiberto Gómez.

"En la ciudad de México, a las diez y seis horas y cuarenta minutos del miércoles veintiuno de agosto de mil novecientos veinticuatro, se abrió esta Junta Preparatoria con asistencia de doscientos veintiocho ciudadanos presuntos diputados.

"El acta de la primera Junta Preparatoria, celebrada el día quince del mes en curso, fue aprobada con una adición del C. Siurob.

"Sin discusión se aprobó el dictamen formulado por la octava sección de la Primera Comisión de Poderes, que trata de las elecciones en el décimo cuarto distrito electoral del Distrito Federal, y que propone para diputado propietario al C. Rafael Ponce de León y para diputado suplente al C. Antonio Espinosa y Rodríguez.

"Se puso a debate el dictamen relativo a las elecciones en el sexto distrito electoral de Chihuahua, firmado por los miembros de la cuarta sección de la Primera Comisión de Poderes, y favorable a los CC. José Calles y Mariano Guillén, como diputados propietario y suplente, respectivamente.

"Este dictamen, además, consulta un tercer punto resolutivo concebido en los siguientes términos:

"Consígnese al ciudadano procurador general de la nación el documento presentado como credencial por el C. doctor Ángel G. Castellanos, para que investigue la autenticidad de las firmas del dicho documento, e igualmente remítanse a dicho funcionario los paquetes entregados en la Oficialía Mayor de la Cámara por el C. ingeniero Eduardo Gutiérrez Guerrero, a efecto de que se imponuga a los que resulten responsables las penas de ley."

"El C. Romeo Ortega, citando el artículo ciento ocho del Reglamento, pidió se diera cuenta con una moción suspensiva que estaba en el poder de la Mesa. Esta accedió y la moción, una vez que la leyó la Secretaría, fue fundada por el C. Ortega. El C. Siurob pidió la palabra y la Secretaría leyó el artículo ciento ocho del Reglamento. La Asamblea no tomó en consideración la moción suspensiva y nuevamente se puso a discusión el dictamen.

"El C. García Téllez lo fundó, a pedimento del C. Díaz Soto y Gama, quien habló en contra, interpelando al C. José U. Escobar, el que respondió. El C. García Téllez refutó al C. Díaz Soto y Gama y le siguió en el uso de la palabra, en contra, el C. Luis N. Morones.

"El C. García Carranza dio a conocer algunos documentos, por conducto de la Secretaría, favorables al candidato Calles, y habló en apoyo del dictamen.

"Dio fin en el debate con dos discursos en contra y en pro, respectivamente, de los CC. Siurob y Arroyo Ch. y aclaraciones del C. Luis L. León.

"Agotada la discusión, se aprobó el dictamen en votación económica. Varios presuntos diputados pidieron votación nominal, pero la Secretaría manifestó que la declaratoria de la aprobación estaba hecha.

"El dictamen presentado por la primera sección de la Primera Comisión, referente a las elecciones en el tercer distrito electoral del Estado de México y que otorga el triunfo al C. David Montes de Oca, como diputado propietario, y al C. Margarito Gómez como diputado suplente, no dio lugar a

debates, pues aunque el C. Siurob pidió la palabra en contra, desistió de hacer uso de ella, manifestado que creía que se trataba de otro caso electoral.

"El dictamen fue aprobado en votación económica y se hizo la declaratoria de costumbre.

"A las veinte horas y cuarenta y cinco minutos terminó la Junta y se citó para las once horas del día siguiente."

Está a discusión el acta. Los ciudadanos que deseen hacer uso de la palabra pueden pasar a inscribirse. no habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobada.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. - Estados Unidos Mexicanos.- 1a. Comisión de Poderes.- 9a. Sección.

"Honorable Asamblea:

"A la 9a. Sección de la 1a. Comisión de Poderes que subscribe, fue turnado, para su estudio y dictamen, el expediente relativo a las elecciones para diputados del Congreso de la Unión efectuadas en el 23 distrito electoral del Estado de Jalisco.

"Hecho un estudio minucioso del referido expediente, la subscrita Comisión tiene el honor de informar a vuestra soberanía lo siguiente:

"Se recibieron cuarenta y siete paquetes correspondientes al mismo número de casillas electorales instaladas en el citado distrito. Examinados los referidos paquetes se encontraron, sin excepción en perfecto orden y ajustados a las percepciones legales. Igualmente fueron examinados los documentos relativos a la Junta Computadora, cuya instalación y actuación fue así mismo ajustada a la ley, y de ellos se desprende que jugaran tres fórmulas: Carlos Cuervo - Emilio Hernández; Bartolomé Ontiveros - Gregorio Rubio, y Arnulfo R. Santa Ana - Daniel Galindo, habiendo obtenido la primera fórmula una mayoría de 7,829 votos; la segunda 492, y la tercera 339. No habiéndose encontrado en los paquetes electorales ni en la documentación de la Junta Computadora protestas por violación a la ley o por irregularidades en los actos electorales.

"Por lo anteriormente expuesto, la subscrita Comisión somete a consideración de vuestra soberanía los siguientes puntos resolutivos:

"Primero. Son válidas las elecciones para diputados a la XXXI Legislatura de la Unión, efectuadas el día seis de julio del presente año el vigésimo tercer distrito electoral del Estado de Jalisco.

"Segundo. Son diputados propietario y suplente, respectivamente, por el citado distrito, los ciudadanos Carlos Cuervo y Emilio Hernández.

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, a 21 de agosto se 1924.- Gilberto Fabila.- Ernesto Prieto.- Enrique L. Soto."

Está a discusión. Los ciudadanos que deseen hacer uso de la palabra sírvanse pasar a inscribirse. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobada. (Aplausos.) En consecuencia, la Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: son diputados propietario y suplente, respectivamente, por el 23 distrito electoral de Jalisco, los ciudadanos Carlos Cuervo y Emilio Hernández. (Aplausos.)

- El mismo C. secretario, leyendo:

"1a. Comisión de Poderes.- 3a. Sección.

"H. Asamblea:

"Del examen cuidadoso de los expedientes electorales que han llegado a nuestra comisión dictaminadora sobre las elecciones del 4o. distrito electoral del Estado de Guerrero, hemos llegado a las siguientes conclusiones:

"1o. El triunfo legal en las elecciones se presta a discusión sólo en lo que se refiere a los candidatos licenciado Ezequiel Padilla y licenciado David Pastrana Jaimes, y sus respectivos suplentes. Ninguno de los otros candidatos independientes que jugaron en la elección discuten derechos; por tanto, el dictamen nuestro debe concretarse a decir quién de los presuntos diputados, Pastrana Jaimes y Padilla, tienen, conforme a la ley, el triunfo legal.

"2a. En el curso de la elección está francamente demostrada la parcialidad de las autoridades municipales en algunos municipios de este 4o. distrito electoral; pero con excepción de los actos llevados acabo en el municipio de Tepecuacuilco, donde el Consejo Municipal, patrocinado por el secretario del mismo Consejo, señor Evodio Molloa, patrocinó una forma enteramente flagrante la candidatura del licenciado Pastrana Jaimes, las irregularidades que traen los expedientes electorales no afectan, por regla general, la validez de las elecciones llevadas a cabo. Durante las elecciones, al disputarse los partidarios del licenciado Pastrana Jaimes y del licenciado Padilla el triunfo de la casilla electoral, hubo incidentes que culminaron en la destrucción de los documentos electorales, pero que en definitiva quedaron solucionados con la categórica declaración del instalador de la casilla y el expreso reconocimiento del presidente municipal de Iguala, de que el señor Santiago Rodríguez era el legítimo presidente de la 1a. casilla electoral y, por tanto, el presidente provisional de la Junta Computadora. Transcurridas las elecciones, y al llevarse a cabo la instalación de la expresada Junta Computadora, ocurrió el incidente que a continuación explicamos: el candidato independiente, licenciado Padilla, dirigió al presidente provisional de la Junta Computadora, un escrito denunciado con testimonios perfectamente fechacientes, que en numerosas casillas instaladas en el municipio de Tepecuacuilco no se había celebrado elecciones de ninguna especie y que tenía noticias de que en una forma clandestina e irregular, se habían hecho paquetes y designado individuos con carácter de presidentes de casillas, y terminaba el propio candidato independiente, señor licenciado Padilla, pidiendo que en la instalación de la Junta de Computadora no se permitiera la entrada a los individuos que se presentaran con carácter de presidente de casilla,

pues que estaba perfectamente comprobado que eran presidentes apócrifos. El presidente de la Junta Computadora, en su más estricto derecho, acordó, de conformidad con la ley, que establece que sólo formarán parte de la Junta Computadora los presidentes de casilla que hubieren sido electos, que los presidentes de casilla de municipio de Tepecoacuilco, comprendidos en la solicitud perfectamente documentada del candidato licenciado Padilla, no penetraran al salón de la Junta Computadora hasta tanto que comprobarán que sus expedientes eran legítimos, pues de otra manera desnaturalizarían, con una mayoría absolutamente espuria, el funcionamiento de la Junta Computadora. El mismo presidente de la Junta Computadora negó la entrada al señor don Jesús Nava, quien también pretendió pasar como presidente de la 1a. casilla y, por tanto, con carácter de presidente de la Junta Computadora, a pesar de que el propio presidente municipal reconoció el legítimo triunfo del señor Santiago Rodríguez, en oficio que obra entre los documentos electorales.

"Estos hechos fueron motivo alegado por el señor licenciado Pastrana Jaimes para buscar la instalación de sus presidentes de casilla en otro local distinto del previamente señalado por el presidente municipal, de acuerdo con la disposición terminante de la ley.

"El presidente municipal, incurriendo, según nuestro criterio, en grave responsabilidad, y demostrando manifiesta parcialidad en favor del señor licenciado Pastrana Jaimes, señaló nuevamente salón para la Junta Computadora especial de mencionado candidato.

"La Junta Computadora instalada en el local previamente señalado por el presidente municipal e instalada por el presidente provisional, que lo fue, conforme a la ley, el presidente de la 1a. casilla, señor Santiago Rodríguez, extendió credencial a favor del señor licenciado Padilla, cuya credencial se negó terminantemente a certificar el presidente municipal en funciones, señor Manuel Román pidiendo una licencia y entrando a ocupar su lugar en el mismo día el señor don Primitivo Torres, quien a su vez se rehusó a certificar la credencial del licenciado Ezequiel Padilla, dejando de estar en funciones para que ocupara su lugar el C. Crecensiano Román, quien al otro día firmó la credencial otorgada al señor licenciado Pastrana Jaimes, y no la otorgó al C. licenciado Padilla, declarando en el acta notarial que lo hizo por habérselo consultado al ciudadano gobernador del Estado.

"Por lo tanto, esta comisión dictaminadora se ha encontrado frente ha expedientes que provienen de dos juntas computadoras distintas.

"Como los expedientes que llegan a la Comisión pueden estudiarse desentendiéndonos de las juntas instaladas, hemos procedido desde luego al examen detenido de dichos expedientes, para desprender el resultado auténtico de la votación.

"3a. La Junta Computadora celebrada en el salón legal por los presidentes de casilla partidarios del licenciado Padilla, arrojó una votación de 3,669 votos en favor del licenciado Ezequiel Padilla, como diputado propietario, y 3,585 a favor del doctor Galo Soberón y Parra, como diputado suplente, por una parte, y 714 votos a favor del licenciado Pastrana Jaimes, como diputado propietario, y 712 votos a favor del C. David C. Cardona, como diputado suplente.

"El acta oficial de la Junta Computadora celebrada por el licenciado Pastrana Jaimes, arrojó un resultado de 3,438 votos a favor de este candidato como diputado propietario y 3,404 votos a favor del señor profesor Cardona, como suplente, por otra parte, 340 votos a favor del licenciado E. Padilla, como diputado propietario, y 304 a favor del doctor Galo Soberón y Parra, como diputado suplente.

"Como los expedientes quedaron distribuidos entre las dos juntas, procede correctamente, de acuerdo con los mismos expedientes, hacer un examen de los votos obtenidos en total por las dos fórmulas en contienda, lo cual da como resultado lo siguiente: 4,009 votos a favor del licenciado Padilla, como diputado propietario; 3,889 votos a favor del C. Galo Soberón y Parra, como diputado suplente del licenciado Padilla, y 4,152 votos a favor del licenciado Pastrana Jaimes, como propietario, y 4,116 votos a favor del profesor Cardona, como suplente de este último candidato. A continuación procedimos al examen atento de los expedientes electorales con el objeto de precisar la validez de cada uno de ellos, y llegamos a la siguiente conclusión: que los paquetes electorales relativos a las casillas: La Venta de Palula, Coacoyula, Sábana Grande, Acayahualco, Palula, Xolitla, Tonalapa del Sur, Ahuehuepan, Xilocintla, Tierra Colorada, Tecoacuilco, de la municipalidad de Tecoaucuilco, y la de Cocula, de la municipalidad de Apipilulco, así como la de Tlacotepec, municipalidad de las Mesas, todas del municipio de Tepecoacuilco, deben declararse nulas por aparecer como fraguadas fuera de los actos electorales, corroborando la denuncia hecha por el candidato licenciado Padilla, relativa a que no se habían celebrado elecciones, sino que se habían improvisado dentro y fuera de las comisarías, expedientes totalmente ajenos a la voluntad popular, aprovechando el material electoral que tenía en sus manos en Consejo Municipal de Tepecoacuilco.

"Efectivamente, las imputaciones formuladas por el candidato licenciado Padilla son perfectamente ciertas, puesto que los documentos electorales y las boletas denuncian la intervención de personas que se ocuparon de hacer esos expedientes ajenos enteramente a la voluntad popular.

"Estamos en disposición de mostrar a ese H. Colegio Electoral, los expedientes expresados, para que, por sus propios ojos, se convenza de nuestras afirmaciones. Examinando cuidadosamente estos expedientes forjados por este medio fraudulento, llegamos a la necesidad legal de anular las votaciones de las expresadas casillas, que arrojan una votación de 1,189 votos a favor de la fórmula Pastrana Jaimes - Cardona y 77 a favor de la fórmula Padilla - Soberón.

"4o. Haciendo las reducciones y rectificaciones correspondientes, resulta que la auténtica votación que se ha podido comprobar, es la siguiente: Fórmula Padilla- Soberón y Parra, 3,932 y 3,812, respectivamente, para el diputado propietario y

suplente; fórmula Pastrana Jaimes - Cardona, 2,963 y 2,927, respectivamente.

"5o. Teniendo en consideración que una elemental necesidad de moralizar los procedimientos electorales, para hacer funcionar debidamente, nuestras instituciones, aconseja que sean consignados los individuos que hayan contraído responsabilidad que la ley castiga, durante los actos electorales, nos permitimos señalar desde luego la participación efectiva y demostrada ampliamente que tomó contra toda ley y violando disposiciones terminantes, al señor Evodio Malloa, secretario del Consejo Municipal de Tepecoacuilco; al señor Juan Pedro, vecino de la cuadrilla de Tonalapa del Sur, según declaración del mismo comisario de la propia cuadrilla, este señor tiene comprobados hechos delictuosos, y la del presidente del Consejo Municipal, señor Manuel Román, quien contra toda ley, señaló nuevamente sitio para que se estableciera otra Junta Computadora distinta de la que, conforme a la ley, se instaló en el lugar previamente señalado; y el presidente municipal Crescenciano Román, por haberse negado a firmar la credencial del licenciado E. Padilla.

" La Junta computadora instalada en el salón, previamente señalado por el presidente municipal y presidida por el señor Santiago Rodríguez, funcionó con 36 presidentes de la casilla, por tanto, con quórum legal, como puede verse en el acta de la Junta Computadora.

"Creemos pertinente hacer constar que aparte de los documentos que prueban la parcialidad de las autoridades locales en contra del licenciado Padilla, como son las ya anotadas del municipio de Tepecoacuilco, las que se desprenden de la exposición hecha sobre la parcialidad de las autoridades locales de Iguala y las que constan en una certificación de las autoridades locales del municipio de Cocula, que la víspera de las elecciones habían ordenado a todas las cuadrillas de sus dependencias que se retiraran las boletas de la fórmula Padilla- Soberón y Parra, debemos hacer especial mención del hecho que establece una fuerte presunción de parcialidad del Gobierno local en contra del licenciado Padilla, relativo al cambio ordenado durante un mes y medio de propaganda electoral de seis presidentes municipales en el municipio de Iguala.

"Por todo lo expuesto, dictaminamos lo siguiente:

"1o. Que el señor licenciado Padilla es diputado propietario por el 4o. distrito electoral del Estado de Guerrero.

"2o. Que el diputado suplente por el mismo distrito electoral lo es el doctor Galo Soberón y Parra, y

"3o. Que se consigne con la documentación correspondiente ante las autoridades competentes a los señores Evodio Malloa, Juan Pedro, de Tonalapa del Sur; Manuel Román y Crescenciano Román, de Iguala, que han fungido como presidentes municipales de Iguala, para que la justicia federal establezca responsabilidades y aplique las penas respectivas a los responsables, sentando con esto un saludable precedente para el funcionamiento debido de nuestras instituciones democráticas.

"Salón de Comisiones del H. Colegio Electoral de la XXXI Legislatura del Congreso de la Unión.- México, D. F., a 20 de agosto de 1924.- Gustavo R. Cristo.- Luis M. Díaz.- Francisco López Cortés."

Está a discusión. Los ciudadanos presuntos diputados que deseen hacer uso de la palabra se servirán pasar a inscribirse. Se ha presentado la siguiente moción suspensiva:

"H. Colegio Electoral de la Cámara de Diputados de la XXXI Legislatura de la Unión.

"David Pastrana Jaimes, presunto diputado por el 4o. distrito electoral del Estado de Guerrero, ante ustedes respetuosamente expone:

"A la 3a. Sección de la primera Comisión dictaminadora, en uso del derecho que me concede el artículo 8 de la Constitución general de la República, presente una solicitud para que se recabaran de la Secretaría de Gobernación unas copias de padrones de algunas casillas electorales cuya documentación perdió todo valor legal, por haber sido violadas y el dato preciso del número de casillas para saber qué número de presidentes de casillas formó el quórum legal de la Junta Computadora.

"Estos datos son indispensables para un dictamen y son también indispensables y necesarios para mi defensa. La 3a. Sección no atendió mi petición, no obstante de mis súplicas para que no se me privara de medios de defensa y no obstante de mis súplicas de que se dictaminara con toda justicia.

"Como se ha producido el dictamen y se manda poner a discusión, antes de esto, vengo a solicitar se suspenda la discusión hasta que se recaben los datos pedidos, indispensables y necesarios para mi defensa.

"De acuerdo con los artículos 107 y 108 del Reglamento, a ustedes, señores presuntos diputados, respetuosamente pido se sirvan acordar que se suspenda la discusión del dictamen hasta que se recaben los datos.

"Protesto mis respetos.- México, 20 de agosto de 1924.- Licenciado D. Pastrana Jaimes.- Luis L. León."

El C. Pastrana Jaimes: Pido la palabra , señor presidente.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Pastrana Jaimes para fundar la moción suspensiva.

El C. Pastrana Jaimes: Ciudadanos presuntos diputados:

Ayer, al darse lectura de varios dictámenes, especialmente los de esta sección, se estableció que esta comisión había procedido con toda honradez, citando a los interesados para la discusión de sus casos y para el estudio del expediente. Yo no vengo a denunciar aquí a los procedimientos de la 3a. sección, pero voy a referir los hechos para que vean ustedes la justificación con que procedo a solicitar esta moción suspensiva. En la 3a. sección, en el local en donde está trabajando, se publicó una lista de los asuntos que iban a estudiarse, para que los interesados tuvieran conocimiento de ellos y fueran a hablar con las comisiones. En esa lista no está el asunto del 4o. distrito electoral del Estado de Guerrero. Me permito interpelar al señor García Carranza, al señor Rouaix, que vieron la lista de los asuntos. que est pegada en la puerta, para que digan si es o no verdadero mi aserto. Me permito interpelar también al señor Leyva para que diga

si en la lista que est aquí, a la vuelta, est inscripto el nombre del 4o. distrito electoral del Estado de Guerrero.

El C. Leyva: No.

El C. Pastrana Jaimes, continuando: No está fijada , señores , en la lista de la puerta la discusión de la credencial del 4o. distrito del Estado de Guerrero. Fui a ver a los comisiones, de un manera accidental, para entregarles un escrito en que trataba yo acerca de cuestiones jurídicas de capital importancia. Eso paso antes de ayer. El señor presidente de la comisión, señor Cristo, me oyó, y estuvimos tratando únicamente los puntos jurídicos relativos a ese escrito. Suplique al señor Cristo que me permitiera leer la documentación del expediente, y me citó para ayer a las diez de la mañana. Fui ayer a las diez de la mañana a suplicarle que me permitiera ver los expedientes electorales, y pretextando una comisión urgente, salió del local donde trabajaba la 3a. sección. Me permitieron ayer, así, como por gracia, como por misericordia, ver un documento, una acta de una supuesta Junta Computadora, que no llego a funcionar nunca legalmente. En vista de ese documento, único que me permitieron leer, presente un escrito a la comisión, con fundamento en el artículo 8o. constitucional, suplicándole que dirigiera un atento oficio a la Secretaría de Gobernación para que ésta remitiera a la 3a. sección las copias de unos padrones y diera informes acerca del número exacto de presidentes de casillas, con el fin de determinar cuál era el quórum legal con el que debió contar la Junta Computadora. La 3a. sección recibió mi escrito, le supliqué que me entregara el ocurso para llevarlo a la Gobernación y gestionar la pronta remisión de esos datos, y con evasivas me negaron ese escrito, para privarme de medios de defensa en esta tribuna. Voy a indicar, señores, por qué razón es indispensable tener aquí esos datos que he pedido. En la ciudad de Iguala, cuando mi contrincante vio notoriamente perdida la votación en su favor, se valió de las fuerzas federales para apoderarse del edificio en que debió establecerse la Junta Computadora, y solamente permitieron entrar a determinados presidentes de casillas, de aquellas en donde consideraba mi contrincante tener una mayor votación. No es verdad, como se asienta en el informe, que únicamente a los presidentes de casillas del municipio de Tepecoacuilco se cerraran las puertas; eso no es cierto. Se cerraron las puertas a presidentes de casillas de los municipios de Iguala, de Tepecoacuilco, de Cocula, de Huitzuco y de Tlacotepec. Eso consta en documentos públicos que se leerán a su debido tiempo. Estableció así, él, una Junta Computadora que no es Junta Computadora, sino una farsa de Junta Computadora. Esos veintidós o veintitrés presidentes de casillas que estuvieron en ese local, cometieron dos delitos: el delito de usurpación de funciones y el delito de violación de expedientes electorales. Y yo naturalmente que necesitaba de la Secretaría de Gobernación los datos, o sean los padrones, para tener siquiera un dato y confrontar con los padrones que existen aquí, las padrones presentados en aquellos expedientes. Y, sin embargo de eso, señores, sin embargo de que es justo que tenga en mis manos esos medios de defensa, la 3a. comisión me ha privado de ellos de una manera arbitraria, atentatoria; la 3a. sección estaba obligada a pedir esos documentos a la Secretaría de Gobernación. Se va a leer el artículo 88 del Reglamento.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

Artículo 88 reglamentario: "Las comisiones, por medio de su presidente, podrán pedir de cualesquiera archivos y oficinas de la nación, todas las instrucciones y copias de documentos que estimen convenientes para el despacho de los negocios; y esas constancias les serán proporcionadas...." etcétera, etcétera.

El C. Pastrana Jaimes, continuando: Estaba, pues, en manos de la 3a. sección haber pedido esos documentos. Yo les supliqué encarecidamente que me dieran el oficio para ir pronto a recabarlos a la Secretaría de Gobernación, para presentar los datos y que los leyeran y los tomaren consideración. La moción suspensiva que he presentado no tiene más objeto que el de evitar que se me prive de medios de defensa, porque es de justicia que se oiga ampliamente a todos los interesados en esta discusión. Yo suplico encarecidamente a los ciudadanos diputados que aprueben esta moción suspensiva y que me permitan siquiera un día para recabar esos documentos de la Secretaría de Gobernación.

El C. presidente: Tiene la palabra en contra el ciudadano Arroyo Ch.

El C. Cristo: La comisión pide la palabra.

El C. presidente: Tiene la palabra la comisión.

El C. Cristo, de la comisión: Ciudadanos representantes:

Voy a desvirtuar los cargos que ha venido a hacer aquí el licenciado Pastrana Jaimes como presunto diputado por el 4o. distrito electoral del Estado de Guerrero.

El C. Siurob: Moción de orden, señor presidente. Parece que aquí no se trata de apoyar o defender la moción suspensiva, y el compañero, por lo que acaba de decir, viene exclusivamente a contrarrestar los ataques que indudablemente se contrarrestarán en el curso de la discusión que haya del caso. Yo digo, para que....

El C. Cristo, interrumpiendo: El señor no me ha dejado terminar, y malamente puede adivinar la idea que yo iba a exponer. Se han hecho cargos concretos a la comisión -cargos que voy a contestar precisamente-, que tienden a demostrar que la comisión no ha obrado con la misma liberalidad que en los demás casos y que la moción suspensiva es absolutamente improcedente, porque el señor licenciado Pastrana Jaimes la ha venido a fundar basándose en hechos que son falsos.

La comisión ha observado sistemáticamente la práctica de fijar en la puerta del salón en donde despacha, una lista con los asuntos que se están tratando, poniéndolos en conocimiento de los candidatos, a fin de que pasen a exponer todos los argumentos que a su derecho convenga. En el caso especial del señor Pastrana Jaimes no se fijó, efectivamente, esa lista, porque el señor Pastrana concurría tal vez con más asiduidad al despacho destinado para las comisiones, que los propios comisionados.

El señor Pastrana Jaimes repetidas ocasiones se presentó ante la comisión y expuso toda clase de argumentos que juzgó pertinente exponer; se le

recibió el documento al que ha dado lectura, y cuando el señor licenciado Pastrana Jaimes solicitó que fueran pedidas de la Secretaría de Gobernación las copias de padrones que deben figurar en el expediente, la comisión estimó, conforme al mismo artículo al que se acaba de dar lectura, que es potestativo de las comisiones

pedir o no esos informes en tanto se crean o no debidamente informados. (Voces: ¡No!) Sí, señores, que se lea el artículo que leyó el señor Pastrana Jaimes. La comisión, como digo, se creyó suficientemente informada y por eso ha producido su dictamen en la forma que acaban de oir. Nosotros, los miembros de esta comisión, tal vez vamos a carecer de esa oratoria que se usa en esta tribuna para impresionar a la Asamblea; nos concretamos exclusivamente a presentar hechos concretos y pruebas fehacientes, documentaciones irrefutables, y se va a ver de un manera clara que la comisión ha obrado legalmente. No quiero entrar al fondo del dictamen; nos vamos a reservar toda esa clase de argumentos para cuando lo creamos pertinente; pero quise hacer esta aclaración para que no se piense que hemos venido a dar una puñalada de pícaro y que hemos juzgado apriorísticamente el caso del señor Pastrana Jaimes. Por consiguiente, pido que se deseche la moción suspensiva.

El C. secretario Valadez Ramírez: Habiendo hablado los oradores que marca el Reglamento, en votación económica se pregunta si se toma en consideración la moción suspensiva. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. (Voces: ¡Sí! ¡No!) No hay mayoría. No se toma en consideración. Continúa el debate. Los ciudadanos que deseen hacer uso de la palabra se servirán pasar a inscribirse.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Pastrana Jaimes, en contra. ç

El C. Díaz Soto y Gama: Moción de orden.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Soto y Gama para una moción de orden.

El C. Díaz Soto y Gama: Conforme al Reglamento, la Presidencia está obligada a ordenar se dé lectura a la lista de oradores, porque nos inscribimos en contra el ciudadano Pastrana Jaimes y el que habla, y yo temo un escamoteo de la Presidencia, porque no le tengo ninguna confianza. (Risas. Murmullos)

El C. secretario Valadez Ramírez: Se han inscripto los siguientes oradores: En contra, Pastrana Jaimes, Díaz Soto y Gama, Morones y Siurob. En pro, Juan B. Salazar, Vásquez Genaro V. Arroyo Ch.

El C. Pastrana Jaimes: Pido a la comisión que funde su dictamen. - El mismo C. secretario: Habiéndolo solicitado el ciudadano Pastrana Jaimes, la comisión se servir fundar su dictamen.

El C. López Cortés Francisco: Honorable Asamblea: La extensión del dictamen y la prolijidad con que enumera los fundamentos en que la comisión creyó lógico y justo sustentar los puntos resolutivos del mismo dictamen, debía relevar a la comisión de la obligación legal que tiene de fundarlo, porque, en todo caso, no hará más que incurrir en una repetición que tal vez contribuya a cansar la atención de vuestras señorías.

Las elecciones efectuadas en el 4o. distrito del Estado de Guerrero, según la documentación que obra en poder de la comisión y de la que forma parte del expediente que le fue turnado, se hicieron bajo una presión oficial plenamente comprobada y que con suma dificultad podría evitar en el carácter de un cargo formidable, así el presunto señor diputado Pastrana Jaimes, como el mismo Gobierno del Estado de Guerrero. Las elecciones en general se desarrollaron, repito, bajo este ambiente, pero merecieron especial atención, especial estudio de la comisión las efectuadas en la municipalidad de Tepecoacuilco, en virtud de que esa municipalidad, desde que se empezaron las medidas preparatorias de las elecciones hasta que éstas se terminaron culminando con la expedición de la certificación de las firmas que calzaron la credencial del señor licenciado Pastrana Jaimes, se cometió una serie no interrumpida de atentados, perfectamente comprobados en este expediente. En esa municipalidad, que según noticias que hemos tenido no cuenta más que alrededor de siete mil habitantes, se hizo una división en secciones electorales, de treinta casillas, de tal manera que esta sola división constituye una infracción flagrante a la disposición legal que manda que por cada quinientos, o de quinientos a dos mil habitantes, se constituya una casilla. En las elecciones anteriores el número de casillas que se ha instalado en esta municipalidad no ha pasado de nueve, y sorprende, llamó naturalmente la atención de la comisión, el hecho de que en esa municipalidad se establecieran treinta casillas cuando las otras fueron ganadas, según la documentación que ofrece la Junta Computadora establecida por el señor Pastrana Jaimes, y según la documentación presentada por el señor licenciado Padilla, fueron ganadas por este último, es decir, por el señor licenciado Padilla. Desde luego, el solo hecho de que con especialidad el triunfo del señor licenciado Pastrana Jaimes, según la documentación por él presentada, estuviera radicado o fincado en la elección practicada en la municipalidad de Tepecoacuilco, llamó poderosamente la atención de la comisión y este dato, en relación con la división tan amplia que se hizo de esa municipalidad, nos indujo a estudiar de una manera detenida los expedientes, habiendo comprobado que en la Venta de Palula, Apipilulco, (Cocula), Coacoyula, Sábana Grande, Acayahualco, Palula, Xolitla, Tonalapa del Sur, Ahuehuepan, Xilocintla, Tierra Colorada, Tecoacuilco y Las Mesas (Municipalidad de Tlacotepec), fueron fraguadas fuera de los actos electorales y nos vimos en el caso imprescindible de declarar la nulidad de estas elecciones, fundados, en primer lugar, en la presión oficial que al efectuarse dichas elecciones se ejerció en esa municipalidad, y en seguida, en que esa presión fue respaldada por la sustracción de los documentos que componen ese expediente. El señor Pastrana Jaimes ha hecho hincapié muy insistente en la circunstancia de que establecieron estas dos juntas computadoras y también en la circunstancia de que la Junta computadora establecida por el señor licenciado Padilla, no es la legal. La 3a. Sección de la 1a. Comisión, para estudiar este caso, se desentendió des carácter legal o ilegal que pueden tener las juntas y se dedicó exclusivamente a estudiar

la votación que las dos trajeron a la Oficialía Mayor de la Cámara, y a la cual fue turnada a esta 3a. Sección por el presidente del Colegio Electoral. La comisión tiene en su poder , y obran también en el expediente respectivo, todos los documentos que comprueban de una manera plena y expresa la legalidad y justicia con la que la comisión obró al dictaminar en el sentido en que acaban de hacerlo. La comisión espera que el señor Pastrana Jaimes o los impugnadores de este dictamen hagan las objeciones del caso, y tiene el propósito de contestar, no con literatura ni con discursos sentimentales, las impugnaciones que se le hagan, ni los cargos que pretenda enderezar en nuestra contra, sino con los documentos que aquí están y que estamos dispuestos a exhibir inmediatamente. Lo que la comisión puede informar concretamente, antes de empezar este debate, es que la elección en ese distrito electoral del Estado de Guerrero se hizo bajo una presión oficial formidable, para cuya comprobación estamos perfectamente documentados; que en esa presión oficial tuvieron una intervención directa y casi delictuosa tanto las autoridades municipales como el propio señor licenciado Pastrana Jaimes.

El C. presidente: Tiene la palabra en contra el ciudadano Pastrana Jaimes.

El C. Pastrana Jaimes: Señores diputados: A la 3a. Sección de la 1a. Comisión presente un escrito sintético fundado en las razones jurídicas que existen para conceptuar como nula, como sin valor legal alguno toda la votación, absolutamente toda la votación recogida a favor de mi contrincante el licenciado Padilla. La comisión ha pasado por ese escrito como si no le hubiera presentado, como si no estuviera formada esa Comisión por dos abogados que pasaron por la aulas y que se supone que tienen siquiera algunos conocimientos rudimentarios de derecho. Voy a tocar esos puntos y luego me referiré de una manera especial y detallada a los absurdos que asienta el dictamen rendido por la 3a. Sección. Estoy plenamente seguro, absolutamente seguro de que en vuestras conciencias existe la íntima convicción de que nuestras instituciones democráticas se basan de una manera esencial en la efectividad del sufragio y en el funcionamiento normal de los partidos políticos. En nuestra República, en 1910, el apóstol Madero, el visionario, ese hombre virtuosamente audaz, enarboló la bandera de la efectividad del sufragio, hizo una revolución y selló con su sangre el mismo principio que le sirvió de estandarte, o sea el sufragio efectivo. En nuestro México, fundándonos en el principio de la efectividad del sufragio, fue posible m s tarde que a los Congresos Nacionales llegaran representativos de nuevas orientaciones, de nuevas ideas. En nuestro México, fundándonos siempre en la efectividad del sufragio, fue posible que a este recinto llegaran revolucionarios como Luis Cabrera, y con él el grupo aquel de renovadores al que correspondió el éxito de haber iniciado reformas sociales en el orden legal. Fundándonos siempre en el mismo principio de la efectividad del sufragio, fue posible que al Congreso Constituyente de Querétaro llegáramos humildes representativos de nuevas aspiraciones nacionales que parecían sepultadas y aplastadas por el polvo que había formado la montaña de trescientos de esclavitud y treinta y cinco de dictadura porfiriana. Debido al mismo principio de efectividad de sufragio, fuimos a ese Congreso memorable humildes representativos de nuevas orientaciones, habiendo sintetizado la obra revolucionaria en los artículos 27 y 123 de la Constitución, que han servido para remover los fondos económicos y establecer las nuevas bases de la vida social del pueblo mexicano. Por ese mismo principio de la efectividad del sufragio fuimos a ese Congreso algunos humildes representantes que supimos -sobre las viejas teorías consagradas por la Constitución de 57-, supimos colocar las primeras piedras de una reforma legislativa a base de un socialismo científico, a base de un socialismo evolucionista. Y se consagraron esos artículos, el 27 y el 123, que años después nuestro candidato a la Presidencia de la República, el señor general Calles, los enarbolara como un estandarte de triunfo, como un estandarte de éxito en toda su campaña política.

El C. Arroyo Ch., interrumpiendo: ¡Y Obregón también!

El C. Pastrana Jaimes, continuando: Vamos ahora, señores, a considerar a grandes rasgos cuáles son las causas que evitan en la práctica la efectividad del sufragio. Podríamos reducirlas a tres: la conducta de los electores, la conducta de las autoridades, y la conducta de los candidatos. Voy a referirme de un manera especial a la conducta de los candidatos, porque es indudable que nosotros tenemos en gran parte la culpa de las violaciones a la efectividad del sufragio. Nuestra Ley Electoral consagra de una manera terminante y expresa una enorme división de candidatos políticos, una grandísima clasificación de candidatos políticos que pueden resumirse en dos clases: candidatos independientes y candidatos dependientes de partidos políticos. El candidato independiente es un candidato netamente personalista; el candidato independiente tiene la obligación ineludible de presentar un programa político propio, exclusivo, personal del mismo candidato. Ese candidato independiente tiene la obligación también de presentar boletas anunciando en ellas que es candidato independiente y tiene la obligación de hacer toda su propaganda a base de candidatura independiente. En cambio el candidato de un partido político tiene otras obligaciones, tiene otra personalidad política, tiene otra responsabilidad. La Ley Electoral también se refiere, señores diputados, a personas políticas. Habla de candidatos a diputados, habla de candidatos a senadores , habla de candidatos a la Presidencia de la República. Y esas tres clases de personas son forzosamente personas políticas; la ley no se refiere a persona física ni a persona moral, sino esencialmente a persona política. La Ley Electoral establece en uno de sus capítulos que es un motivo de nulidad en la votación el error sobre la persona. Yo no desconozco, señores diputados, que en la lucha por la vida que tenemos necesidad de seguir, hay frecuentes simulaciones. La simulación en sí misma es una mentira, la simulación es un embuste, la simulación es una impostura. El hombre que simula alguna cosa lo hace con el deliberado propósito de que los demás incurran en error; el hombre que simula ser millonario, hace

esta simulación para que las demás gentes crean que es millonario; el hombre que simula ser un sabio, hace una simulación para que los otros incurran en el error de creer que efectivamente se trata de un sabio. En el orden político el hombre que simula influencias políticas, hace esa simulación para que los otros incurran en el error de creerlo con influencias políticas y como una entidad poderosa. En el mismo orden político, el hombre, el candidato que simula ser candidato de un partido político, hace esa simulación para que los ciudadanos incurran en el error de creerlo candidato de un partido político. Al contrario, el hombre, el candidato independiente que simula ser candidato de un partido político, lo hace indudablemente para que los ciudadanos incurran en el error de creerlo miembro de un partido. Voy a citarles a ustedes un ejemplo típico de estas personalidades políticas: es la personalidad del señor general Calles. El señor general Calles fue sostenido por muchos partidos políticos afines y en todos ellos había la suprema base de su propaganda , o sean los artículos 27 y 123 de la Constitución general de la República. El señor general Calles hizo toda su propaganda política, absolutamente toda, a base de candidato de esos partidos políticos, y nunca cambió su chaqueta en ninguna parte, siempre se presentó al pueblo en todas partes como candidato del partido político radical. En ninguna parte, en todo el expediente de votación del señor general Calles, no se encuentra una palabra de propaganda en que el señor general Calles se muestre como candidato independiente. No hay en todos los expedientes electorales una sola boleta del general Calles a base de candidatura independiente. Pero es que el señor general Calles es un hombre honrado, no un simulador ni un impostor. El señor general Calles se presentó a la lucha, tal cual es, tal cual es su personalidad política, y así también lo hicieron muchísimos diputados que están en esta Asamblea. Hay muchos diputados que registraron su candidatura como independiente y sostuvieron su personalidad política de candidatos independientes en toda la lucha; no hubo necesidad de que anduvieran engañando al pueblo para que se les atribuyera una personalidad distinta. Hay otros candidatos que jugaron como miembros de un partido político y sostuvieron en toda la lucha esa personalidad política de candidatos de un partido político. Yo me permito interpelar al ciudadano Soto y Gama, candidato del Partido Nacional Agrarista, a ver si él cambió su investidura, a ver si él se anunció en alguna parte como candidato independiente, o si sostuvo siempre que era candidato del Partido Nacional Agrarista, para que el pueblo conociera su personalidad política.

El C. Díaz Soto y Gama: Con permiso de la Presidencia. Yo creo, como el compañero Pastrana Jaimes, que todos aquellos que juegan con el nombre de partidos independientes, son individuos que se declaran independientes de la revolución, es decir, reaccionarios... (Voces: ¡No! ¡No!) Recuerdo en este momento, por ejemplo, que en el primer ensayo democrático que se hizo en México, los reaccionarios más grandes que ha habido en este país, los más cínicos - Querido Moheno "hincapié"-, se llamaron "independientes". Aquí en los escaños de esta Cámara empezó a jugar la reacción con el nombre de "Partido Independiente", ¿Independiente de qué? De las masas que están triunfando, ¿Independiente de qué? Del movimiento que est abriéndose paso. De manera que el solo hecho de declararse candidato independiente de la revolución, es declararse anodino, y el que es anodino, es algo más que simulador. "El que no está conmigo, está contra mí". (Murmullos.) O se est con la revolución o contra la revolución. Yo voy a demostrar en la tribuna que el compañero Padilla ha estado siempre contra la revolución. Yo no puedo comprender que un individuo pueda cometer el disparate de desligarse de un partido de clase. El orgullo de los laboristas y agraristas es este: que representamos partidos de clases, política de clases, partido económico, de acción económica, en vez de esa revoltura que se llama Bloque Confederado, que no presenta nada, sino el deseo de los mil pesos. (Siseos.)

El C. Pastrana Jaimes, continuando: Siguiendo mi tesis, señores diputados, me permito interpelar a cualquiera de ustedes que haya jugado con bandera de candidato independiente, con la personalidad política de un candidato independiente, para que me diga si acaso se presentó o simuló ser candidato de un partido político. Yo conozco a muchos ciudadanos diputados que son honrados, que tienen nociones de moralidad política, que iniciaron su campaña como independientes y sostuvieron en toda la línea su personalidad política como candidatos independientes, para que el pueblo conociera que se trataba de candidatos independientes, de candidatos personalistas con programa personal, que hacían toda su campaña a base de esfuerzo propio. Creo que no hay aquí otro caso enteramente igual. Creo que abundan aquí los hombres honrados y los hombres de alta moralidad política. Pido a la Secretaría dé lectura de estos documentos.

El C. secretario Valadez Ramírez: Un sello que dice:

"Ayuntamiento Constitucional.- Municipalidad de Iguala.- Distrito de Hidalgo, Guerrero.

"El C. Manuel Román, presidente del Consejo Municipal de esta cabecera, "Certifica: que con fecha 2 de junio de 1924, a fojas 10 del libro de registro de candidaturas, a solicitud del C. licenciado Ezequiel Padilla, se registró su candidatura como independiente para diputado al Congreso de la Unión en las elecciones que se verificarán el día 6 de julio del año actual.

"Asimismo, certifica que la "Unión Suriana de Obreros y Campesinos", como partido político no comprobó a esta autoridad municipal haberse constituído de acuerdo con el artículo 106 de la Ley Electoral vigente y no hizo ningún registro dicha Unión de ningún candidato ni para presidente de la República, ni para senadores, ni para diputados.

"Y a pedimento del C. licenciado David Pastrana Jaimes, extiendo el presente en la ciudad de Iguala, a los nueve días del mes de julio de mil novecientos veinticuatro.- Manuel Román.- G. M. Rueda."

Una planilla de elección, que en la parte conducente dice:

"Unión Suriana de Obreros y Campesinos, licenciado Ezequiel Padilla, candidato registrado."

"Unión Suriana de Obreros y Campesinos.- Iguala, Guerrero.- Unión y fraternidad de las clases trabajadoras.

"Al C. Federico Cerezo.

"Ezequiel Padilla, candidato de la Unión Suriana de Obreros y Campesinos, teniendo en cuenta la honradez de usted y su firmeza de principios, acordó nombrarlo su representante en la Mesa electoral correspondiente a la sección número 11, formada por las cuadrillas de Tlapala y Tecolotla, a efecto de que durante las elecciones para poderes federales que se verificarán el domingo 6 del próximo julio, vigile usted por la pureza del sufragio y haga usted uso de las facultades que como tal representante le da la Ley Electoral vigente.

"Sírvase aceptar mi atenta consideración.

"Unión y fraternidad de las clases trabajadoras.

"Iguala, Guerrero, junio de 1924.- E. Padilla."

Al margen un sello que dice: "Estado de Guerrero.- Ayuntamiento Constitucional de Huitzuco.- Distrito de Hidalgo.- Estados Unidos Mexicanos."

"En cumplimiento del artículo 33 de la Ley Electoral de Poderes Federales, vigente, fue registrada con esta fecha en esta Presidencia la presente credencial.

"Huitzuco, Guerrero, a 21 de junio de 1924,.- El presidente municipal, Raymundo García."

El C. Pastrana Jaimes, continuando: Como es de comprenderse, fácilmente por la lectura de estos documentos, la personalidad política de mi contrincante quedó definida como la de un candidato independiente. Sin embargo, en la propaganda y en las boletas cambió esa personalidad política, la cambió simulando ser candidato de un partido político que no existe, que no se registró en ninguna parte. No solamente cambió su personalidad, sino que simuló también la existencia de un partido político, y voy a demostrarlo.

El C. secretario Valadez Ramírez: El certificado cuya lectura se pide, dice en la parte conducente lo siguiente: "Asimismo certifica..." - dice el ciudadano presidente municipal de Iguala - que la "Unión Suriana de Obreros y Campesinos", como partido político no comprobó ante esta autoridad municipal haberse constituído de acuerdo con el artículo 106 de la Ley Electoral vigente y no hizo ningún registro dicha Unión de ningún candidato ni para presidente de la República, ni para senadores, ni para diputados."

El C. Pastrana Jaimes, continuando: Este es, señores, el caso típico del error sobre la personalidad política a que se refiere la fracción IV del artículo 104 de la Ley Electoral. Esa ley no se refiere a personas políticas, no se refiere al nombre. Cuando hay un error sobre el nombre, se corrige el nombre. La ley dice: "Votar con error sobre la persona". ¿A qué persona se refiere la ley? ¿A la persona física de un candidato? Serían un absurdo. Se refiere a la persona política, al candidato político, y por eso cuando una persona se anuncia como candidato independiente, debe conservar íntegra esa personalidad en toda la lucha y en todo tiempo hasta que no se apruebe la elección. Y cuando se registra como candidato de un partido político, debe sostenerse esa personalidad para que el pueblo sepa a qué persona política le da su voto. Este asunto cae también bajo otra consideración, bajo otro aspecto de nulidad. Dice la fracción I del artículo 104, que es nula la votación cuando los candidatos no cumplen con los requisitos que señala la ley. La ley, señores, señala unos requisitos para el candidato independiente, y otros requisitos para el candidato de un partido político. Y en este caso mi contrincante no cumplió ni con los requisitos que señala la ley para el candidato independiente, ni con lo que señala para el candidato de un partido político, colocándose en el caso de nulidad a que se refiere el artículo que antes he citado. Este capítulo de nulidad, la comisión que estudió el expediente ni siquiera lo menciona. Yo sé que es un punto técnico, yo sé que quizá algunos señores diputados no quieran aceptar esta teoría, que es absolutamente verdadera y absolutamente legal; pero voy ahora a pasar al segundo punto, que es más claro, que es más di fano y que creo que todos los ciudadanos diputados entender n perfectamente. Todo el mundo sabe - porque es rudimentario- que los cuerpos colegiados para funcionar necesitan de una manera esencial tener quórum. La Suprema Corte de Justicia, sin quórum, no puede acordar ni siquiera la compra de un lápiz. La Cámara en Colegio Electoral, sin quórum, no puede hacer absolutamente nada, ni siquiera citar a sesión para el día siguiente. La Cámara de Diputados, sin quórum, no puede trabajar ni un solo minuto. Todos los cuerpos colegiados necesitan forzosamente el quórum legal; sin quórum no hay personalidad, no hay entidad, no hay autoridad. En la ciudad de Iguala, señores diputados, como lo anuncié al defender a la moción suspensiva, sólo hubo una junta legalmente constituída, con quórum legal. En el local designado de antemano para el establecimiento de esa junta, por maniobras de mi contrincante, un llamado presidente de la 1a. casilla, con el auxilio de la fuerza pública, evitó que entraran a ese local los presidentes de las casillas y se encerró adentro con veintidós o vientres presidentes de casillas y dejó afuera a cuarenta y ocho presidentes de casillas, es decir, dejó afuera al quórum legal, a la verdadera Junta Computadora. Pido a la secretaría se sirva dar lectura a este documento.

El C. secretario Vázquez, leyendo:

Un sello que dice: "Poder Ejecutivo Federal.- México.- Estados Unido Mexicanos.- Secretaría de Gobernación.- Departamento Consultivo.- Número 215.

"A los ciudadanos secretarios de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión.- Presentes.

"Se ha recibido en esta Secretaría el siguiente telegrama:

"5 Iguala, Guerrero, 13 de julio 924 x on r 1050. 12 md.- Secretario Gobernación.- Refiérese esta Presidencia Municipal mensaje ayer esa Secretaría, relativo queja licenciado Padilla, por falta certificación firmas credencial.- Esta Presidencia informa esa superioridad, que día jueves, en local

señalado para instalación Junta Computadora, señor Santiago Rodríguez, dirigido por licenciado Padilla con una escolta de fuerzas federales impidieron la entrada al local designado a 47 (cuarenta y siete) presidentes casillas.- cerciorada esta Presidencia de que, efectivamente, Rodríguez y Padilla con soldados federales impedían entrada a 47 (cuarenta y siete) presidentes casillas, cerciorada también de que estos 47 presidentes casilla constituían gran mayoría, más que el quórum requerido por el artículo 81 Ley Electoral, Presidencia Municipal autorizó dichos presidentes para constituirse en Junta Computadora en otro lugar para que cumplieran se función legal. el local ocupado por Rodríguez, Padilla y escolta federal, estuvieron 30 presidentes casillas en lugar que nuevamente designó, por hecho referido estuvieron funcionarios 48 presidentes casilla. Llamada Junta Computadora establecida por Rodríguez, licenciado Padilla y fuerza federal, no fue Junta Computadora ni pudo funcionar jamás como Junta Computadora, por notoria falta de quórum requerido por artículo 81 Ley Electoral. En cambio, otra junta tuvo quórum legal, esta Presidencia estudió detenidamente asunto y consideró que, según artículo 81 mencionado, es esencial quórum legal. Consideró también que 48 presidentes casillas no pudieron constituirse primer lugar designado por una fuerza mayor. Consideró también que esta Presidencia había obrado dentro espíritu legal y principios justicia, señalando nuevo lugar para instalación junta por mayoría notoria presidentes casillas, estas razones que estimar esa secretaría, determinaron esta Presidencia de mi cargo, certificar firmas credenciales expedidas por única Junta Computadora que funcionó con quórum legal. Suplico muy atentamente esa Secretaría se sirva decirme si, no obstante razones expuestas y certificación puesta en credenciales expedidas por Junta Computadora que contó con quórum legal, puede esta Presidencia certificar otras credenciales.- Atentamente.- Presidente Municipal, C. R. Morales."

"Lo que tengo el honor de transcribir a ustedes para los efectos a que haya lugar.

"Reitero a ustedes mi distinguida consideración.- Sufragio Efectivo. No Reelección.- México, D.F., a 14 de julio de 1924.- Por ausencia del secretario, el subsecretario, D. Benítez."

Un sello que dice: "Estado de Guerrero.- Juzgado de 1a. Instancia.- Distrito de Hidalgo.- Estados Unidos Mexicanos- Número 30 (treinta.)

"En la ciudad de Iguala de la Independencia, a las doce horas del día diez de julio de mil novecientos veinticuatro, constituído el subscrito notario, en la puerta de la escuela oficial de niños de esta misma, ante los instrumentales, ciudadanos Cirio G Adame y Juan Balanzar, el primero originario de Ajuchitlán y vecino de ésta, el segundo originario y vecino de este propio lugar, casado el señor Adame, comerciante y mayor de edad, y el señor Balanzar, soltero, empleado y también mayor de edad, y testigos de asistencia Wenceslao Ramírez y S. Gildardo M. Rueda, el primero originario de San Jerónimo de Juárez y vecino de ésta, soltero, empleado y mayor de edad; el segundo de este origen y vecindad, casado, empleado, y también mayor de edad, comparecieron los ciudadanos licenciado David Pastrana Jaimes y Profesor David Próspero Cardona, candidatos a diputados al Congreso de la Unión, quienes comprobaron legalmente este último con los documentos respectivos, los cuales doy fe tener a la vista, y los señores ya expresados, con el carácter antes indicado, solicitaron dé fe el subscripto de que en la puerta de la escuela oficial de niños, lugar designado por el Ayuntamiento para instalar el Colegio Electoral de esta cabecera, el infrasquito da fe a petición de tales candidatos que en la puerta de entrada de la escuela que se ha mencionado se encuentra una guardia compuesta de fuerza federal, a las órdenes de un oficial que está impidiendo la entrada de la mayor parte de las mesas electorales, o sea de los presidentes de casillas electorales, y expresando el precitado oficial que tiene órdenes superiores para no permitirle la entrada a nadie, con excepción de las personas que el señor Santiago Rodríguez dijera que entraran, y que no daba más explicaciones. "El propio notario da fe de lo siguiente: traslado al lugar indicado por los peticionarios, en la puerta de la escuela oficial de niños, encontré una escolta federal y el jefe de ella no permitió la entrada de los siguientes presidentes de casillas electorales: 1, Tomás Morales, de Tierra Colorada, municipio de Tepecoacuilco; 2, Juan Román, de Palula, del propio municipio; 3, Pablo Padilla, de la primera demarcación de esta ciudad y 6a. sección; 4, Francisco Alarcón, de Tlapala, municipio de Huitzuco; 5, Toribio Anaya, de Coacoyula, municipio de Tepecoacuilco; 6, Sabás A. Carrera, Tlacotepec; sección primera, demarcación primera; 7, Trinidad Bautista, Naranjo, perteneciente a Tlacotepec; 8, Jesús Lozano, de Tepecoacuilco; 9, Marcial Cruz, Sábana Grande, Tepecoacuilco; 10, Teódulo Tenda, Sasamulco, Tepecoacuilco; 11, Clemente González Hernández, Huitzuco; 12, Lorenzo Suárez, Iguala, primera sección, 13, Jesús Nava, primera demarcación, sección primera Iguala; 14, Crisóforo Montes, Venta de Palula, Tepecoacuilco; 15, Heliodoro Moyao, Tepecoacuilco; 16, Adrián Landa, Acatlán del Río, Tlacotepec; 17, Feliciano Pérez, Iguala, 18, Manuel Fuentes, Apipilulco; 19, Faustino L Hernández, Tepecoacuilco; 20, Melesio Díaz, Santa Cruz, Tepecoacuilco; 21 Margarito Pastrana, Tepecoacuilco; 22, Ascención Molina, Tepecoacuilco; 23, Miguel Mota, Tlacotepec; 24, Joaquín Nava, también de Tlacotepec; 25, Gaspar Ocampo, Salitla, Tepecoacuilco; 26, Abraham Nájera, Tlacotepec; 27, Febronio Flores, Tlacotepec; 28, Jesús Rodríguez, Tepecoacuilco; 29, José María Sandoval, Tepecoacuilco; 30, Cornelio Montaño, Sacacoyuca; 31, Pulcherio Hernández, Cacahuananche, municipio de Huitzuco; 32, Bartolo Castro, Tlacotepec; 33, Gregorio Carranza, Tepecoacuilco; 34, Florentino Molina, Tonalapa del Sur, Tepecoacuilco; 35, Jesús Castro, Tlacotepec; 36, David Figueroa, Acayahualco, de Tepecoacuilco; 37, Tomás Velásquez, Siloxintla, Tepecoacuilco; 38, Anacleto Hernández, Lagunillas, Huitzuco; 39, Germán Sánchez, Pololcinco, Huitzuco; 40, Fermín Tenorio,

Pololcinco, de Huitzuco; 41, Romualdo Nava, Ahuehuepan, Tepecoacuilco; 42, Antonio Vera, de Huitzuco; 43, Wenceslao Rodríguez, Teacalcinco, de Atenango del Río; 44, Anselmo Alonso, de Escuchapan, municipio de Huitzuco; 45, Feliciano Pineda, de Iguala, y 46, Feliciano Aguirre, de Atetetla, Huitzuco; todos estos presidentes de casillas tenían en sus manos los papeles electorales que doy fe haber visto. El jefe de la escolta federal no permitió la entrada a dichos presidentes de casilla diciendo: que sólo permitía entrar a los que indicara el señor Santiago Rodríguez. El subscrito pretendió entrar el local, y el mismo jefe de la escolta le impidió la entrada. Después, trasladados los cuarenta y siete presidentes de casilla al portal del Ayuntamiento, a pedimento de los mismos candidatos y de los mencionados presidentes de casilla, el ciudadano presidente del Consejo Municipal los autorizó para hacer su Junta Computadora en el local que ocupa la escuela, o sea en el "Instituto Altamirano", lugar en que doy fe haber dejado instalados a los mencionados presidentes de casilla. Dando fe de haber quedado instalado en Junta Computadora, dándose por terminada la presente acta, que se ratificó previa lectura de ella y se firmó.- Lic. D. Pastrana J.- David Próspero Cardona.- I. G. G. Adame.- I. Juan Balanzar. - Ante mi.- Gabino A. Rueda.- A. Wenceslao Ramírez, I.S.- A.- G. M. Rueda."- Rúbricas.

El C. Pastrana Jaimes, continuando: Como se desprende, señores, de la lectura de estos documentos, a la inmensa mayoría de presidentes de casilla se les dejó en la calle y no se les permitió la entrada al local designado por la autoridad. La fuerza pública, la fuerza federal que estuvo a disposición del señor licenciado Padilla, fue la que ayudó a cometer este atentado. Y para cometerlo se valieron de un simple chanchullo. El objeto primordial que buscaban era que a la Junta Computadora no entraran más que determinados presidentes de casillas, donde mi contrincante juzgaba que había ganado y dejar a fuera no solamente a los presidentes de casillas objetadas sino a la gran mayoría de presidentes de casillas de distintos ayuntamientos. Voy a dar lectura a un documento para que vea este honorable Colegio Electoral cuál fue el chanchullo que se hizo para que la mayoría de los presidentes de casillas de distintos municipios no entrara al lugar designado por la autoridad. Un señor Santiago Rodríguez, diciéndose presidente de la primera casilla, se pone de acuerdo con el licenciado Padilla y éste le presenta un escrito objetando cinco o seis presidentes de casillas de un solo municipio, o sean del municipio de Tepecoacuilco. No hubiera sido tan malo que se hubiera prohibido la entrada a esos cinco o seis presidentes de casillas objetadas; de todas maneras resultaba un atentado, porque el señor Santiago Rodríguez no tenía facultades para separar a ningún presidente de casilla. No es el presidente de una casilla el que puede decir, nada más por sus pistolas, que entren a formar parte de una Junta Computadora tales y cuales presidentes de casillas. El presidente de la primera casilla debe instalar la Junta con cuantos presidentes de casillas se le presenten con sus paquetes, y no debe absolutamente cerrar las puertas a nadie, ni tiene facultad para calumniar, ni tiene facultad para cerrar las puertas a los demás presidentes de casillas. El documento, la queja del licenciado Padilla se refiere únicamente a determinados presidentes de casillas del municipio de Tepecoacuilco y, sin embargo, señores, por la lectura de estos documentos que se acaban de leer, se ve que no dejaron entrar a la Junta Computadora ni a los presidentes de las casillas de Iguala, ni a los presidentes de las casillas de Huitzuco, ni a los presidentes de las casillas de Cocula, ni a los presidentes de las casillas de Tlacotepec, de casi todos los municipios. solamente entraron al local para tener una encerrona delictuosa, todos aquellos presidentes donde consideró mi contrincante que había ganado la votación. Y así, señores, se encerró allí con veintitrés presidentes de casillas, y no con treinta y seis presidentes de casillas, como de una manera dolorosa y perversa lo asienta el informe de la comisión revisora.

Pido a la honorable comisión que mande dar lectura el acta, a esa supuesta acta que salió de la supuesta delictuosa Junta Computadora establecida por el licenciado Padilla y su camarilla.

- El C. secretario Vásquez, (leyó):

La Secretaría hace constar que no hay otras firmas fuera de éstas.

El C. Pastrana Jaimes: Señores presuntos diputados:

Yo les suplico encarecidamente de fijen en estos detalles, que son de capital importancia. En esta acta de esta supuesta Junta Computadora no solamente se ha incurrido en los delitos que yo he enunciado, sino que hay otros delitos más, pues se supone o se presupone la existencia o la presencia de determinados presidentes de casillas que no estuvieron en esa llamada Junta Computadora. Allí, en esa acta, figura un señor Lorenzo Suárez, que no estuvo en esa llama Junta Computadora; figura también un señor Feliciano Pérez, que no estuvo en esa llamada Junta Computadora. y también hacen figurar a un señor Feliciano Pineda, que tampoco estuvo en esa llamada Junta Computadora. Estos tres presidentes de casillas, según consta en este documento público, estuvieron en la Junta Computadora que se estableció en el Instituto Altamirano, autorizada por el presidente municipal de la ciudad de Iguala, y no es posible, señores, que esos tres presidentes de casillas hubieran estado al mismo tiempo en la encerrona que tuvieron las fuerzas federales y el licenciado Padilla con los otros presidentes de casillas, y en la verdadera Junta Computadora, que tuvo quórum legal. Yo no me explico cómo una persona puede estar en dos partes a la vez, yo creo que ustedes tampoco pueden explicárselo, a no ser que se trate de un acto delictuoso, absolutamente delictuoso, de un documento que debe ser consignado a las autoridades.

Según lo dispone nuestra Ley Electoral, ninguna Junta Computadora sin quórum puede actuar, y sin aquellos presidentes de casillas que se atrevan a actuar, cometen dos delitos: el delito de ursupación de funciones y el delito de violación de expedientes electorales. Y en este caso especial hay otro delito, pues supone la presencia de tres presidentes de casillas que no estuvieron en la encerrona.

- El C. secretario Vásquez, leyendo:

"Artículo 81. Ya en el lugar designado, asumir la Presidencia de la Junta el presidente de la primera casilla electoral de la cabecera, y nombrar dos secretarios y dos escrutadores de entre los presentes, para que lo auxilien en la elección que se hara en la Mesa de la Junta. "Inmediatamente se hará un registro de los presidentes para ver si están presentes cuando menos la mitad más uno de los que resultaron electos; sólo con este quórum podrá instalarse la Junta. En caso de que no hubiere quórum, el presidente de la Junta mandará llamar a los faltistas, apercibiéndolos de la pena correspondiente, y citará a sesión para esa misma tarde, y si tampoco hubiere quórum, repetirá la citación en los días subsiguientes hasta que se instale la Junta Computadora.

"Cuando haya quórum, se procederá a elegir en escrutinio secreto, por mayoría de votos, un presidente, un vicepresidente, cuatro secretarios y cuatro escrutadores.

"Los candidatos o representantes que hagan indicaciones o recomendaciones en favor o en contra de algún candidato a la Mesa, serán expulsados del local de la Junta; pero se aceptará a algún otro representante del mismo partido o candidato que se presente en lugar del expulsado."

El C. Pastrana Jaimes: Como ven ustedes, señores presuntos diputados, ninguna Junta puede actuar sin el quórum legal, es decir, sin el quórum legal no hay Junta Computadora, no hay autoridad de Junta Computadora, no hay personalidad de Junta Computadora. Los presidentes de casillas que en simple reunión, sin quórum legal, abren expedientes electorales, cometen el delito de violación de tales expedientes y los perjudican, los nulifican. El expediente electoral que sale de una casilla sólo puede ser abierto en dos situaciones jurídicas; ante una Junta Computadora con quórum legal, o ante el Colegio Electoral de la Cámara de Diputados; y ninguna otra autoridad de la República, cualquiera que ella sea, puede abrir un expediente electoral, sin violarlo, sin perjudicarlo. Yo demuestro a la comisión dictaminadora con documentos irrefutables que esa llamada Junta Computadora establecida por el licenciado Padilla y apoyada por las fuerzas federales de la ciudad de Iguala, no reunió el quórum legal. Lo informó el presidente municipal, dio fe de ello el juez de primera instancia de que esa Junta no tenía el quórum legal; sin embargo, la comisión dictaminadora paso por estas cosas como se paso sobre todo. A un infeliz líder lo mandó consignar y a los que se encerraron y usurparon las funciones de la Junta Computadora, ni siquiera la honorable comisión dictaminadora dice que se consigne ese expediente al procurador de Justicia; así es la justicia de las comisiones dictaminadoras. Esos expedientes abiertos, esos expedientes violados en una encerrona de presidentes de casillas, perdieron todo su valor jurídico y ninguna voltea debe computarse ni a favor del licenciado Padilla, ni a favor mío, ni a favor de nadie. Deben ser consignados esos paquetes a las autoridades judiciales, al procurador de la República y debe imponerse el castigo correspondiente a todos los que hayan tomado participación en esos tres delitos que se han cometido. este caso de nulidad de boletas, de nulidad clara, de nulidad radical de boletas, de nulidad en la votación recogida en los expedientes violados, este caso de nulidad la comisión sí no lo tomó en cuenta. Tuvo en cuenta otros documentos sin valor, que veremos después, en el proceso; pero no tuvo en cuenta los documentos públicos que obran en los mismos expedientes para determinar si tales o cuales personas se habían constituído realmente en Junta Computadora.

En resumen, señores por esas dos grandes causas, por el error, por el cambio de la personalidad política y por las violaciones, por los delitos cometidos en una supuesta Junta Computadora, no debe computarse, no debe considerarse ninguno de los votos que la comisión atribuye al licenciado Padilla. Yo pido atentamente a la comisión que enseñe, que muestre aquí los documentos en que dice que se justifica la presión oficial a mi favor. ¿Cuáles son los documentos?

El C. López Cortés: Yo haré uso de la palabra oportunamente.

El C. Pastrana Jaimes: Los espero para rebatirlos. Pido a usted me muestre un documento para rebatirlo.

El C. Síurob: Pido la palabra para una moción de orden.

El C. presidente: No hay desorden.

El C. Síurob: Si lo hay, compañero. La comisión tiene la obligación de contestar las interpelaciones que le hagan los presuntos diputados.

El C. López Cortés: La comisión sabe que tiene la obligación de hacerlo y lo cumplir oportunamente.

El C. Pastrana Jaimes: Esos documentos que va a exhibir la muy honorable comisión dictaminadora, como lo demostraré a su debido tiempo, no hacen prueba alguna. Voy a citar nada más un caso general para que este honorable Colegio Electoral tenga una noción definida, una idea aproximada, para que se vea que no fue posible, que materialmente fue imposible que hubiera presión oficial a mi favor. He demostrado con la lectura de documentos auténticos, con la lectura de documentos públicos, que las fuerzas federales estuvieron auxiliando a mi contrincante. Ustedes que saben lo que son las fuerzas federales a disposición de un candidato, también sabrán si es posible que ante la fuerza federal pueda tener alguna acción un infeliz secretario de ayuntamiento; cuando las fuerzas federales se ponen a disposición de un candidato, todo el mundo tiembla ante ese candidato y ante las fuerzas federales. No sé en qué cabeza cabe que habiendo demostrado el auxilio de las fuerzas federales en favor de mi contrincante, pudo suponer la comisión que un empleado, un secretario de ayuntamiento me prestó a mí un servicio. Y ahora también voy a demostrar aquí que fue al contrario: las autoridades municipales estuvieron a disposición del licenciado Padilla favoreciendo su candidatura y estuvieron recomendándolo. Suplico al señor secretario que lea estos documentos.

- El C. secretario Vásquez, leyendo:

"Tlacotepec, junio 15 de 1924.

"Señor Donaciano Figueroa.- Las Vinatas.

"Muy señor nuestro amigo:

"Con motivo de la aproximación de las

Elecciones para poderes federales, se han lanzando varias candidaturas para diputados al H. Congreso de la Unión, entre las cuales se destaca la del licenciado Ezequiel Padilla, quien por sus méritos de intelectualidad y prestigio, merece ser hecha llegar al seno de la Representación Nacional, por haber sabido estar al nivel de su deber cuando ha tenido la representación de otros pueblos del Estado.

"Con ese motivo, los subscriptos decidimos dirigir la presente, con el fin de que estando dispuesto a sostener la postulación de nuestro candidato, y usted, teniendo en consideración los méritos de que hablamos, se sirva laborar en pro a fin de que hagamos llegar al seno de esa Representación a nuestro candidato, haciendo que los vecinos de esa localidad donde debe instalarse una casilla, reconozcan que tendremos un representante genuino, que sabrá responder a la confianza que le depositamos.

"No dudando de que sabrá atender nuestra excitativa, nos es grato repetirnos de usted sus afectísimos atentos y S. S.- J. Valadez - Benjamin V.- Tomás Gutiérrez - Al margen un sello - Que dice: Poder Ejecutivo del Estado.- Guerrero.- C. Bravos. Gro., 16 de agosto de 1924 .- El C. licenciado Rodolfo Neri, gobernador constitucional del Estado libre y soberano de Guerrero,

"Certifica: que las firmas de los ciudadanos Tomás Gutiérrez y Josefat Valadez, regidor y secretario, respectivamente, del Ayuntamiento de Tlacotepec, de esta jurisdicción, son auténticas.

"Chilpancingo, Guerrero, 16 de agosto de 1924.- R. Neri.- El secretario general, Teófilo Escudero."

- El C. Pastrana Jaimes, continuando Otro de los datos que ha servido a la comisión para insinuar la idea de que hubo presión a favor de mi parte, es el hecho de que el gobernador del Estado de Guerrero cambió algunos ayuntamientos La comisión dictaminadora no ha hecho ninguna averiguación, no ha hecho ninguna pregunta para saber por qué razón se cambiaron esos ayuntamientos. Y yo voy a decirlo aquí, señores presuntos diputados.

Es bien sabido por todos, al menos los que leen la prensa, los que quieren algo a la patria y se interesan por los asuntos generales, que en el Estado de Guerrero estalló la rebelión en el mes de noviembre del año pasado; que esa rebelión se sostuvo allí en el Estado hasta el mes de abril o hasta el mes de marzo de esta año, en que fue posible el avance de las fuerzas federales para Guerrero. El gobernador del Estado llegó a Guerrero y se encontró con muchísimos ayuntamientos puestos durante la rebelión; se encontró con ayuntamientos puestos por los mismos rebeldes. ¿ Y van ustedes a pedir al ciudadano gobernador del Estado que siga gobernando el Estado de Guerrero con ayuntamientos de la rebelión? ¿No encuentran ustedes justificado, justificadísimo, que el gobernador del Estado de Guerrero corriera a todos eso presidentes municipales que había impuesto la rebelión? Se necesita no tener sentido común, señores, para exigir a un pobre gobernador que siga gobernando con ayuntamientos impuestos por los enemigos del Gobierno. Teniendo esa idea fundamental el gobernador de Guerrero, con perfecto derecho, con perfecta justificación corrió o todos los presidentes municipales y también ese mismo gobernador, acosado en el Estado de Guerrero, perseguido por los Figueroa, no solamente tuvo el deber de remover a las autoridades municipales, sino que por un espíritu de conservación, por un espíritu de defensa del Poder público, por un espíritu de defensa de nuestras instituciones, tuvo también necesidad de cambiar a los ayuntamientos, poniendo a gente de reconocida lealtad para el Gobierno. ¡Pues no faltaba más, señores, que en lugar de combatir a un desleal, a un traidor, y que por algún descuido se hubiera sentado otro traidor, un gobernador no hubiera tenido facultad para quitar a ese segundo traidor, evitándole ocupar un puesto en el segundo Consejo Municipal!

El Gobernador de Guerrero procedió, pues, con toda justificación y está procediendo con toda justificación todavía al depuramiento de la Administración pública. Tiene necesidad el gobernador Neri de contar con elementos de absoluta lealtad. En el municipio de Tepecoacuilco no hubo m s que una sola remoción: quitaron al Ayuntamiento rebelde y pusieron un Consejo Municipal. En el municipio de Huitzuco no hubo m s que esa remoción: quitaron al Ayuntamiento rebelde y pusieron un Consejo Municipal. En el municipio de Atenango quitaron al Ayuntamiento rebelde y pusieron un Consejo Municipal de relativa lealtad, hasta donde es posible obtener elementos leales y honrados. En el municipio de Cocula se hizo lo mismo, un solo cambio, e igual cosa en Tlacotepec; solamente en Iguala hubo dos cambios y voy a decir por qué: Cuando llegó el gobernador Neri estaba funcionando el Ayuntamiento rebelde y, naturalmente, hubo necesidad de quitarlo. Ya en el mes de abril hubo quejas contra el Ayuntamiento que estaba funcionando y lo mandó retirar el ciudadano gobernador del Estado, nombrando un Consejo, que estuvo funcionando únicamente ocho días. Contra este Ayuntamiento constituído en una forma ilegal en un principio, el gobernador nombró otros tres miembros del Consejo Municipal; eso fue todo lo que paso en Iguala, pero ningún Ayuntamiento, absolutamente ninguno, me hizo el menor servicio electoral. Y voy a decir por qué razón no tengo en ese distrito ninguna necesidad de ayuda oficial. El distrito de Hidalgo, en Guerrero, es un distrito esencialmente agrarista; desde el año de 1918 se est trabajando en ese Distrito la cuestión agraria y se ha llegado hasta el caso de que a la misma ciudad de Iguala, el año pasado, el señor presidente de la República le hiciera una dotación de tierras; esto paso en septiembre o noviembre del año pasado. Como ustedes comprenden, un distrito esencialmente agrarista, por lógica, por sentido común, tiene un candidato agrarista; y eso pasa forzosamente en todos los distritos. Yo he servido a los pueblos de ese distrito desde el año de 1918 en calidad de abogado consultor, y si no a todos, sí a la mayor parte les he servido como abogado patrono. En el mes de abril de este año hubo una convención, a la que concurrieron representantes de muchísimos pueblos, habiendo contado con una asistencia como de trescientos siete o trescientos diez

representantes. En esa convención yo obtuve doscientos ochenta y nueve votos; el licenciado Padilla siete votos y representantes. En esa convención yo obtuve doscientos ochenta y nueve votos un señor José María Suárez cinco votos. Si el señor diputado Castilleja pudiera tomar parte en esta discusión, lo interpelaría a él para que diga si es verdad o no lo que estoy diciendo. Pues bien, señores presuntos diputados, siendo ese distrito esencialmente agrarista, totalmente agrarista, habiendo yo obtenido en la convención doscientos ochenta y nueve votos contra siete de mi contrincante, o a caso iba yo a necesitar del auxilio de los ayuntamientos para ganar la elección? sería una estupidez, la m s grande de las estupideces en que yo hubiera incurrido al pedir el auxilio a los Ayuntamientos, cuando contaba yo de una manera plena, de una manera consiente y entusiasta con todo el pueblo. ¿Que necesidad tenía yo de manchar la elección contando con la buena voluntad de los ciudadanos? No, la honorable comisión que ha estudiado el expediente, sin ningún estudio, guiada nada m s por su pasión obedeciendo a un pacto ciego a un pacto infame que hay entre determinados elementos que se empeñan en meter a mi contrincante en esta Cámara, obedeciendo a un pacto criminal, (Siseos.) por eso ha venido ese dictamen a esta tribuna.

No si se encontrar en este Colegio Electoral el señor Lailson Banuet, a quien consta también que hay un pacto, que hay un convenio, que hay un compromiso para que entre aquí mi contrincante. Yo ya les he dicho a todos los ciudadanos presuntos diputados: que entre sí, sí, señor, pero que no entre por donde entran los hombres honrados, por eses puertas, que son los que han ganado legalmente una elección; si quieren ustedes meterlo, manden ustedes abrir las cloacas, y que pase por allí. (Siseos. Aplausos.)

El C. presidente: Tiene la palabra la comisión.

El C. López Cortés: Honorable Asamblea: Voy a ocuparme de los puntos m s importantes sobre los cuales versa la impugnación del señor licenciado Pastrana Jaimes al dictamen que tuvimos el honor de presentar a la consideración de esta Asamblea.

El señor licenciado Pastrana Jaimes, refiriéndose a que el señor licenciado Padilla no tenía derecho de intervenir en las elecciones practicadas en el Estado de Guerrero en el 4o. distrito, el 6 de julio de este año, afirma que en virtud de haberse registrado el licenciado Padilla como candidato independiente y de haber jugado con boletas en donde se lee el nombre de la Unión Suriana Campesina, hay un error en la persona y pretende la aplicación adecuada de un principio legal que establece lisa y llanamente que es caso de nulidad el error en la persona; pero el licenciado Pastrana Jaimes dice que el error en la persona política, que este error cae bajo sanción de esa disposición legal, cuando esa disposición legal, repito, sólo expresa error en la persona. El señor licenciado Pastrana Jaimes al decir en la persona política hace un distingo, olvidando, como abogado, que donde la ley no distingue, no hay que distinguir. Por otra parte, creo que no es necesario detenerse o argumentar extensamente sobre el particular y la honorable Asamblea se habrá dado cuenta de que sólo se trata de un ardid innoble, por cierto, y al cual se recurrió unos días antes de la elección, dejando al señor licenciado Padilla dentro de un plazo en el cual prácticamente no podría subsanar esta dificultad, si realmente constituyera una dificultad para que jugara en dichas elecciones. Por lo que respecta a las juntas computadoras establecidas, voy a exponer sintéticamente la historia que se desprende de los documentos que obran en nuestro poder de la constitución de esas dos juntas Computadoras. Suplico a la Secretaría se sirva dar lectura a este documento con el objeto de que cualquiera dificultad o cualquiera suspicacia desaparezca.

El C. secretario Valadez Ramírez: Un sello que dice:

"Ayuntamiento Constitucional.- Municipalidad de Iguala.- Distrito de Hidalgo, Guerrero.- Número 2157.

"Al ciudadano presidente de la casilla electoral de la 1a. Demarcación, Sección 1a., Santiago Rodríguez. - Presente.

"De acuerdo con lo dispuesto por los artículos 80 y 81 de la Ley Electoral para Poderes Federales, me permito manifestarle que a las 9 horas del día de mañana se cita como punto de reunión el local que ocupa la Escuela Oficial de Niños de esta ciudad, donde se instalar la Junta Computadora de esta 4o. distrito electoral.

"Los que digo a usted para su conocimiento y efectos.- Atentamente.

"Sufragio Efectivo. No Reelección.- Iguala, Gro., julio 9 de 1924.- El presidente del Consejo Municipal, Manuel Román.- El secretario, G. M. Rueda."

El C. López Cortés: Este documento prueba al mismo tiempo dos hechos: En primer lugar, que el Presidente del Consejo Municipal de la cabecera del 4o. distrito electoral del Estado de Guerrero, señaló la escuela oficial de niños de aquel lugar como lugar en donde debía instalarse la Junta Computadora correspondiente. En seguida, que el señor Santiago Rodríguez era el presidente de la primera casilla reconocida de una manera oficial.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"EL ciudadano comisario propietario de Tierra Colorada, del Municipio de Tepecoacuilco de Trujano, hace constar: Que las boletas y credenciales para las elecciones de Poderes Federales que se deberías verificar el domingo seis del actual, llegaron a este lugar hasta las quince horas del citado día, hora en que no había ciudadanos para la instalación de la casilla, siendo instalada dicha mesa hasta las veintitrés horas del día siguiente. Y para constancia y los efectos a que haya lugar, se levanta la presente en la cuadrilla de Tierra Colorada, Municipio de Tepecoacuilco, a los ocho días del mes de julio de mil novecientos veinticuatro.- El comisario propietario, Amado Rivera.

Un sello que dice: "Estado de Guerrero.- Comisaría de Tierra Colorada. - Municipio de Tepecoacuilco de Trujano.- Distrito de Hidalgo.- Estado de Guerrero Estados Unidos Mexicanos."

"El ciudadano comisario de la cuadrilla de Tepastitlán, del Municipio de Tepecoacuilco de Trujano, hace constar que las credenciales y las

boletas para la elección de Poderes Federales que se verificaron el día de hoy, llegaron de la cabecera municipal a las diez de la mañana del día seis del actual, lo que hago constar, para los efectos legales a que haya lugar en derecho.- Sufragio Efectivo. No Reelección.- Tepastitlán, julio 6 de 1924.- Doy fe. El comisario 1o., Francisco Marquina."

"Hago constar por la presente que el padrón para las elecciones de esta casilla electoral fue hecho hasta el jueves tres de julio.- Jalapa, julio 8 de 1924.- El empadronador, Eufemio Escobar."

"Al ciudadano representante de la candidatura del licenciado Ezequiel Padilla, señor Carlos F. Carranco.- Presente.

"Se recibieron en esta casilla electoral que se instala en esta cuadrilla, conforme a la división territorial de la cabecera que es Tepecoacuilco de Trujano, dos protestas fundadas en los artículos 112, 45, 48 y I y II fracciones del mencionado artículo 48. A fin de anexarlas al expediente de elecciones de diputados al H. Congreso de la Unión de lo cual se da entrada a dichas protestas por ser verídicos los actos que en ellos menciona y por estar basadas en la Ley de Poderes Federales vigente en la República, acusándole a usted, como representante del licenciado Padilla, el presente recibo, a fin de hacer valer sus derechos en el Colegio Electoral que en Iguala se instalar el próximo jueves diez del actual.- Xalitla, julio 6 de 1924.

- El presidente de la casilla, Gaspar Ocampo.- El secretario 1o., Francisco Ruiz (no sabe firmar).- El secretario 2o., Marino Celis.- Primer escrutador, Pedro Aguilar (no sabe firmar).-Segundo escrutador, Francisco Bello (no sabe firmar) Vo. Bo. de la legalidad del presente documento.- Sufragio Efectivo. No Reelección.- Xalitla, 6 de julio de 1924.

- El comisario 1o. Concepción Ramírez."

"Zeferino Corral, comisario propietario de la cuadrilla de Tonalapa del Sur, certifica: que la casilla electoral para la elección de Poderes Federales verificada el día de hoy, fue instalada en el interior de la Comisaría de mi cargo, contraviniendo con ello el artículo 48 de la Ley Electoral de Poderes Federales.

"Expidiendo la presente constancia a solicitud del C. Carlos J. Carranco, quien antes me comprobó ser representante legítimamente autorizado, de la candidatura del licenciado Ezequiel Padilla.

"Sufragio Efectivo. No Reelección.- Tonalapa del Sur, a 6 de julio de 1924. Doy fe. El comisario 1o., Zeferino Corral.

Un sello que dice: "Comisaría de Tonalapa del Sur.- Municipalidad de Tepecoacuilco de Trujano.- Distrito de Hidalgo.- Estado de Guerrero.- Estados Unidos Mexicanos."

"En la cuadrilla de Ahuehuepan, del municipio de Tepecoacuilco de Trujano, a las catorce horas del día seis de julio de mil novecientos veinticuatro, ante mí, comisario primero, se presentó el ciudadano Carlos F. Carranco, exhibiéndome su credencial legítimamente autorizada conforme a la ley, por el Consejo Municipal de Tepecoacuilco de Trujano, que es la cabecera, y en seguida manifestó que pasaba a ejercer sus derechos como representante de las candidaturas para diputados propietario y suplente a favor del licenciado Ezequiel Padilla doctor Galo Soberón y Parra, y para presidente de la República, general Plutarco Elías Calles, a lo que contesté yo: que el señor Juan Pedro, vecino de la cuadrilla de Tonalapa del Sur, se había presentado en esta cuadrilla de mi mando y me exigió que se instalara la Mesa Electoral en esta misma Comisaría, a lo cual accedí, por ser ignorante, Habiéndose después marchado para su tierra, llevándose consigo el expediente, o m s bien dicho, todos los documentos relacionados con la referida elección, sin haber antes arreglado, conforme a la ley, el referido expediente, sin que para esto fuera con él el señor Romualdo Nava, que salió de presidente de la Mesa de esta cuadrilla, a lo que el representante señor Carranco protestó enérgicamente, por los actos flagrantes y violatorios cometidos por el mencionado Juan Pedro, apoyándose el señor Carranco en los artículos 48, fracciones I y II, y 112 de la Ley de Poderes Federales vigente en la República y solicitó se levantara la siguiente acta para ejercitar sus derechos a donde corresponda, autorizándola para que surta los efectos legales.- El comisario 1ro., Andrés Bernal. (No sabe firmar.)"

El C. López Cortes: Estos documentos, señores presuntos diputados, son documentos cuya autenticidad es irrefutable; traen el sello de las oficinas en que ejercen sus funciones las personas que los subscriben, y est n a la disposición de todos los miembros de esta honorable Asamblea que quieran cerciorarse de las circunstancias que garantizan la autenticidad de los mismos documentos. Como se ver , todos ellos se refieren a las elecciones o a las supuestas elecciones practicadas en la municipalidad de Tepecoacuilco, y una vez en posesión de estos documentos, el señor licenciado Padilla hizo al presidente de la primera casilla de la cabecera la siguiente gestión, en cuya virtud los presidentes supuestos de estas casillas que portaban paquetes fraguados, como es de suponerse, o de elecciones practicadas fuera de la ley, si generosamente se quiere hacer esa remota suposición, hizo el señor licenciado Padilla la gestión de que no se admitiera a esos supuestos presidentes. En mi concepto, señores presuntos diputados, el presidente de la primera casilla de la cabecera tiene la obligación legal de instalar esa Junta Computadora, y es indiscutible que esta obligación legal implique la de instalar esa Junta Computadora con estricta sujeción a la ley. Cuando la ley dice que esos presidentes debían ser electos legalmente, es claro que establece una garantía contra el fraude y contra la que en ese municipio de Tepecoacuilco estuvo ejercitándose por las autoridades y bajo la presión del señor licenciado Pastrana Jaimes, a quien s e atribuye una influencia decisiva en el Gobierno del Estado de Guerrero. La gestión que hizo el señor

licenciado Padilla al presidente de la primera casilla consta en el documento que se va a leer y a cuyo respecto suplico una atención detenida, en virtud de contener, en primer lugar, las razones legales que informaron el procedimiento que se siguió en esa Junta Computadora, y en segundo, el citarse los hechos que se comprueban con los documentos que acaban de exhibirse.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Unión Suriana de Obreros y Campesinos.- Iguala, Guerrero.- Unión y fraternidad de las clases trabajadoras.

"Ciudadano presidente provisional de la Junta Computadora de este 4o. distrito electoral.- Presidente.

"Ezequiel Padilla candidato independiente al Congreso de la Unión por este distrito electoral, ante usted, con todo respeto, paso a exponer:

"Que estando comprobado por la documentación que exhibo, que las elecciones en el municipio de Tepecoacuilco han sido un fraude grosero, en el cual no se han cubierto ni siquiera las m s elementales formas legales, no deben registrarse los presidentes falsificados que pretenden aparecer como presidentes de casilla legítimos, por los siguientes hechos y fundamentos legales:

"La maniobra que el Ayuntamiento de Tepecoacuilco pretendió ejercer en las elecciones llevadas a cabo en ese municipio, consistió en que las boletas y las credenciales se repartieron hasta la hora de la elección, con el objeto de que los ciudadanos no partidarios del candidato Pastrana Jaimes, por quien el Ayuntamiento de Tepecoacuilco ha trabajado con desembozada parcialidad, no pudieran ejercitar con sus derechos ciudadanos. Naturalmente, como el Consejo Municipal de Tepecoacuilco designó los comisarios, es muy difícil obtener de ellos, puesto que son elementos incondicionales, pruebas de esta maniobra. Pero en algunas cuadrillas donde el Consejo Municipal de Tepecoacuilco no pudo encontrar esos elementos incondicionales, porque sus ciudadanos son en su gran mayoría mis partidarios, la maniobra ha sido flagrantemente descubierta. Exhibo desde luego una constancia subscrita por el mismo presidente de la casilla de Xalitla, en la que consta que la farsa electoral se llevó a cabo dentro de la comisaría seguramente llevando de antemano hechos los expedientes electorales con las anotaciones de "votó" en los padrones. Exhibo también una constancia subscrita y sellada por el comisario primero de Tonalapa del Sur, por la cual consta que la casilla electoral para la elección de poderes federales fue instalada en el interior de la comisaría, contraviniendo, dice el propio comisario, la Ley de Poderes Federales. Acompaño también un acta debidamente sellada por la comisaría de Ahuehuepan, por la que consta que el señor Juan Pedro, vecino de la cuadrilla de Tonalapa del Sur, se presentó en la cuadrilla de Ahuehuepan y exigió al comisario que se instalara la Mesa Electoral dentro de la Comisaría a lo cual accedió el comisario, según su propia expresión "por ser ignorante", habiéndose marchado después el citado Juan Pedro, llevándose consigo los expedientes, o m s bien dicho, todos los documentos relacionados con la referida elección, sin que lo acompañara el señor Romualdo Nava, que salió presidente de la Mesa en esa casilla, que conforme a la ley debió haber guardado en su caso el expediente. Acompaño también un nombramiento del representante del Partido Nacional Agrarista en la municipalidad de Tepecoacuilco, en que el nombre del representante esta escrito por el mismo secretario del Ayuntamiento, como puede comprobarse cotejando las letras. Acompaño también la certificación del comisario de Tierra Colorada, por el cual consta que las boletas y las credenciales fueron repartidas hasta las tres de la tarde el día de la elección, hora en que todos los votantes se habían dispersado, y que hasta las once de la noche los comisarios del Consejo Municipal hicieron el simulacro de una instalación. En todos los nombramientos de instaladores se dejó en blanco el lugar de la instalación, con el objeto de poder trabajar por sorpresa, en el momento y el lugar para hacer una falsa instalación. Por último, muchas credenciales que se me han mostrado de algunas cuadrillas, han venido enteramente en blanco, con el objeto de ser repartidas exclusivamente entre los partidarios de la candidatura impuesta por el Consejo Municipal.

"Los hechos denunciados están tan perfectamente comprobados, que llama la atención que se acuda a medios tan flagrantes y ostensibles para imponer una candidatura por medio del fraude y de la farsa.

"Conforme a la ley, el presidente de la Junta de Computadora hará un registro de los presidentes para ver si est n presentes cuando menos la mitad más uno de los que resultaren electos. Cuando la ley habla de presidentes que resultaren electos, ofrece una garantía contra estos fraudes que nuevamente califico de groseros; de manera que los actos electorales de la Junta de Computadora no se inicien con una falsedad que pueda sin duda desnaturalizar el resultado de la voluntad popular. Por tanto, cuando está perfectamente comprobado que los presidentes de casillas no resultaron electos, sino simplemente por maniobras perfectamente comprobadas, no tendrán derecho a que se les registre en el acto a que se refiere el artículo 81.

"Por lo expuesto, a usted atentamente pido, que los presidentes de casillas del municipio de Tepecoacuilco, no se registren hasta tanto que la Junta de Computadora formada con los presidentes auténticos revisen los expedientes respectivos y resuelvan que son los presidentes que resultaron electos.

"Protesto a usted mi consideración y respeto.- Sufragio Efectivo. No Reelección.- Iguala, Guerrero, a 8 de Julio de 1924.- Licenciado E. Padilla."

El C. López Cortés, continuando: Ahora bien, señores; la comisión, como por mi conducto declaró desde un principio, se ha desentendido de la situación de esas dos juntas computadoras y ha examinado los paquetes independientemente de los documentos que ambas juntas trajeron; pero el criterio de la comisión respecto a esta cuestión es que el presidente de la primera casilla de la cabecera sí tiene facultad para resolver esta gestión, supuesto que la obligación de instalar esa junta implica la de instalarla con arreglo a la ley. Recuerdo perfectamente bien que en alguno de los distritos electorales de Estado de Oaxaca un candidato que ya se había propuesto no abandonar

la curul que corresponde a la presentación de uno de esos distritos en este lugar, con el objeto de obtener la credencial recurría a este expediente para establecer una Junta Computadora exclusivamente suya: El día en que debía instalarse esa junta, llegaban individuos portando paquetes que no contenían m s que periódicos y otros papeles completamente ajenos a la elección y se registraban como presidentes de casillas. Como el presidente de la primera casilla no se preocupaba por cumplir con su obligación precisamente con estricto apego a la ley, resultaba que aquella junta espuria establecía una Mesa Directiva supeditada completamente a la voluntad de ese candidato y que le daba, en contra de la votación que se obtenía en contra de la protesta de todo el distrito, la credencial con que venía a ocupar su curul y con que estuvo ocupándola por espacio de tres o cuatro períodos. Ese fraude es indiscutiblemente en el que se incurre cuando el presidente de la primera casilla no tiene escrúpulos para establecer ésta con perfecto apego a la ley. ¿Me permite el señor licenciado Pastrana Jaimes una interpelación?

El C. Pastrana Jaimes: Sí, señor.

El C. López Cortés: ¿En la opinión de su señoría qué garantía queda en la Junta Computadora de que, efectivamente, han asistido los presidentes de casillas y han dejado o han entregado los paquetes que se formaron en la elección en sus respectivas secciones electorales?

El C. Pastrana Jaimes: La garantía es la que da la misma Junta Computadora establecida legalmente. La garantía solamente la da la personalidad que constituye la Junta Computadora, porque es una autoridad, y si ante esa Junta Computadora legal, con quórum, se presenta un presidente de casilla, ¿qué m s garantía quiere usted? Ahora permítame usted una interpelación. ¿Qué criterio sigue usted para identificar a un presidente de casilla? ¿Le exige usted una credencial? ¿Le exige usted que lleve un nombramiento público o el visto bueno de alguna autoridad? ¿Qué cosa le exige usted a un presidente de casilla? ¿El criterio de un candidato?

El C. López Cortés: No, el criterio del candidato no, evidentemente.

El C. Pastrana Jaimes: ¿Cuál es el criterio?

El C. López Cortés: Muy bien, compañero; pero cuando se tienen...

El C. Pastrana Jaimes, interrumpiendo: Contésteme usted mi interpelación. ¿Sí o no?

El C. López Cortés, continuando: Permítame usted la palabra. Cuando un presidente de casilla se presenta, naturalmente el presidente de la primera casilla, que va a instalar la junta, no tiene por qué hacer una imputación m s o menos calumniosa a ese presidente de casilla; pero si en contra de esa personalidad se presentan pruebas tan concluyentes como las que ha presentado el señor Padilla, entiendo que yo tendría la obligación de sujetar mis procedimientos a la ley. Ahora, compañero, la respuesta que yo le pedía era esta, es una respuesta completamente legal porque es un trámite muy bien conocido, y que todos nosotros hemos practicado seguramente. Cuando los presidentes de casillas entregan sus paquetes, se forma un inventario y subscriben ese inventario, ¿no es así? Suplico al señor secretario tenga la bondad de dar lectura a este documento.

El C. Díaz Soto y Gama: Para interpelar a la comisión, pido la palabra.

El C. López Cortés: El hecho es éste.

El C. Díaz Soto y Gama: Voy a interpelar a la comisión con el derecho que me da el Reglamento, compañero. ¿Qué la comisión ignora que hay un precepto que prohibe a las juntas computadoras calificar elecciones y calificar votos? ¿Lo ignora?

El C. López Cortés: No, señor.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Entonces, el derecho que no tiene la Junta Computadora, se lo concede usted en la forma m s arbitraria e injusta al presidente de la primera casilla, supeditado, asesorado por el candidato? No puede verse nada m s injusto, no puede verse nada m s parcial que ese absurdo, ese disparatado, ese ridículo criterio de usted, que autoriza al presidente de la primera casilla para que se deje guiar y asesorar por el criterio de su candidato. De manera que yo interpelo a usted en esta forma: ¿usted cree que el derecho que la ley niega a la Junta Computadora de calificar votos, de calificar elecciones, lo va a tener el presidente de la primera casilla asesorado por el candidato? ¿Usted cree que el criterio del candidato va a imponerse al presidente de la primera casilla? ¿usted cree que ese presidente tenga derecho de calificar votos a priori, no a posteriori, por el solo dicho del candidato? ¿Y usted cree que puede haber elecciones cuando el presidente de la primera casilla est supeditado al voto del candidato? ¡No he visto cosa m s disparatada!

El C. López Cortés: Voy a contestar. En primer lugar, no se trata de examinar ni de calificar votos...

El C. Díaz Soto y Gama: ¡Cómo no! ¿Rechaza usted el expediente?

El C. López Cortés: No lo rechazo. (Murmullos.) Pues bien, señores presuntos diputados; en el inventario que formó en la Junta Computadora instalada por los presidentes y misma que expidió credencial al señor licenciado Padilla, se registraron treinta y tantos paquetes y subscriben ese inventario treinta presidentes de casillas. Tres de los presidentes de casillas que dice Pastrana Jaimes que también aparecen en la Junta Computadora que él estableció, no subscriben el inventario de los paquetes entregados en la Junta Computadora al licenciado Padilla, y no los subscriben porque por indicaciones del licenciado Pastrana Jaimes se retiraron abandonando su encargo.

El C. Pastrana Jaimes, interrumpiendo: Pido la palabra.

El C. López Cortés, continuando: Ahora el inventario que se formó en la Junta Computadora instalada por el señor licenciado Pastrana Jaimes, aparece subcripto por diez y ocho presidentes de casillas. ¿Qué garantía tiene la 3a. Comisión para establecer la falsedad de que la Junta Computadora instalada por el licenciado Pastrana Jaimes y que le expidió credencial era la Junta Computadora legal que tenía quórum, supuesto que sólo constan diez y ocho firmas de los presidentes de casillas?

El C. Pastrana Jaimes: Vea usted el acta notarial.

El C. López Cortés: Respecto de esta acta notarial voy a permitirme hacerle la siguiente observación.

Entiendo que ese documento, en el proceso jurídico, por ser un instrumento público, hace prueba plena; pero le suplico que levantándose del plano de las pasiones que en este momento agitan el ánimo de usted, me conteste si puede tomarse como una prueba en este caso un documento producido por el juez de primera instancia en funciones de notario y que, como se sabe, como tal juez de primera instancia es el instrumento más eficaz con que cuentan los gobiernos locales para cometer atropellos a la libertad y al sufragio efectivo. (Aplausos.) Ahora bien, ese es un documento público, éste es otro.

El C. Díaz Soto y Gama: ¿Qué sucedió con el criterio legal?

El C. López Cortés: Es un documento público y éste es otro. ¿A que debo atenerme, señor licenciado Pastrana Jaimes?

El C. Díaz Soto y Gama: Al criterio legal. (Murmullos.) A la documentación pública que hace prueba. Eso se cae de su peso.

El C. López Cortés: En primer lugar, una certificación notarial suple los documentos que legalmente debe producir la Junta Computadora, y sólo en defecto de esos documentos que legalmente produce la Junta Computadora, pueden extenderse los otros. Ahora bien; me trae el licenciado Pastrana Jaimes una certificación notarial hecha por un juez de primera instancia, nombrado y removido según sea la voluntad del gobernador del Estado. Yo quiero preguntar: cuando no es necesario, puesto que aquí existe la documentación, ¿a qué debemos atenernos? (Murmullos.) En todo caso, señores, la Junta Computadora que estableció el señor licenciado Pastrana Jaimes tiene ese gran defecto; en ese documento sólo consta que asistieron diez y ocho y por m s que se haga o que se diga o que se haya escrito en todas partes que asistieron en mayor número, puesto que sólo firman el documento que deben subscribir diez y ocho presidentes de casillas.

Respecto del cambio de ayuntamientos a que se ha referido el licenciado Pastrana Jaimes, me acuerdo que ha citado los siguientes: en primer lugar, que sólo se han verificado tres cambios de presidentes municipales. Suplico a la Secretaría dé lectura.

- El C. Secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Ayuntamiento Constitucional.- Municipalidad de Iguala.- Distrito de Hidalgo, Guerrero.

"El ciudadano Manuel Román, presidente del Consejo municipal de esta cabecera,

"Certifica:

"Que por las constancias que obran en los archivos de estas oficinas, aparece que fungieron como presidentes municipales los siguientes ciudadanos regidores:

"Año de 1924.

"Del 1o. de enero al 31 del mismo, el C. Narciso Chávez.

"Del 1o. de febrero al 25 de marzo, el C. J. Francisco Catalán.

"Del 26 de marzo al 31 de mayo, el C. Francisco Rodríguez.

"Del 1o. al 18 de junio, el C. Crescenciano R. Morales

. "Del 19 de junio al 10 de julio, el C. Manuel Román.

"Del 11 al 12 de julio, el C. Primitivo Torres.

"Del 13 al 25 de julio, el C. Crescenciano R. Morales, y del 26 en adelante, el subcripto presidente municipal.

"Y a solicitud de los CC. Rafael M. Gama y Agustín Flores, expido el presente certificado, en la ciudad de Iguala de la Independencia, a los veintisiete días del mes de julio de mil novecientos veinticuatro.- Manuel Román.- G. M. Rueda, secretario."

El C. López Cortés: Este documento, señores, prueba elocuentemente la falsedad en que incurrió el licenciado Pastrana al aseverar que sólo se habían hecho tres cambios, y muy especialmente que esos cambios obedecieran....

El C. Pastrana Jaimes, interrumpiendo: Para una interpelación. (Voces: ¡Después! ¡Después!) Tengo derecho.

El C. López Cortés, continuando: Al final, compañero. Muy especialmente, repito, a las causas que el señor licenciado Pastrana atribuye a los cambios practicados por el Gobierno del Estado en los ayuntamientos. Pues basta observar que de los cambios hechos después de la elección, es decir, desde el 11 de julio al 25 de julio, hubo tres cambios, cambios que se practicaron precisamente no por lo que dice el señor Pastrana Jaimes, es decir, porque los ciudadanos designados para ocupar ese puesto hayan sido rebeldes a la legalidad o al Gobierno constituído, sino porque simple y sencillamente fueron rebeldes a la consigna y al atropello que por conducto de ellos quería cometer el gobernador del Estado en la persona del señor licenciado Padilla, al sufragio efectivo. (Aplausos.)

El C. Pastrana Jaimes: Pido la palabra.

El C. Secretario Valadez Ramírez: Han hablado solamente.... (Desorden. Campanilla.)

El C. Díaz Soto y Gama: Moción de orden. Por esto dije que no merece ninguna confianza la Presidencia.

- El mismo C. secretario: No sabe usted lo que va a decir la Secretaría; (Desorden. Campanilla.) el ciudadano Soto y Gama prejuzga de lo que va a expresar la Secretaría. La Secretaría va a informar que ha hablado solamente el ciudadano Pastrana Jaimes y la comisión, y que, por acuerdo de la Presidencia, se suspende la sesión para reanudarse a las diez y seis horas. (14.05 horas.)

CONTINUACIÓN DE LA JUNTA PREVIA

Presidencia del C. FILIBERTO GÓMEZ

(Asistencia de 181 ciudadanos diputados y presuntos diputados.)

El C. presidente, a las 16.55: Se reanuda la Junta. Tiene la palabra en contra el ciudadano Díaz Soto y Gama.

El C. Díaz Soto y Gama: Estoy en contra, falta el pro; habló en contra el ciudadano Pastrana Jaimes; la Comisión defendió su dictamen, pero no cubre el turno del pro; debe hablar un orador en pro.

El C. presidente: Tiene la palabra en pro el ciudadano Salazar.

El C. Salazar Juan B.: Ciudadanos presuntos diputados: El asunto electoral que est a debate es típico, porque él revela el proceso que se desarrolló en casi todos los distritos electorales del Estado de Guerrero. En el Estado de Guerrero, como en otros muchos de la República, los preceptos cívicos encuentran dificultad para entrar a la práctica democráica, por una razón histórica: durante mucho tiempo los pueblos obedecían la consigna del jefe político y a pesar de lo esfuerzos que se han hecho por los candidatos que juegan alejados de la influencia oficial, a pesar de eso los indios, los presidentes indígenas especialmente, ocurren a la cabecera distrital a la que consideran todavía como si fuese jefatura de antaño. De tal manera, señores que al hacer la propaganda se encuentra uno con esta enorme dificultad: a pesar del convencimiento, a pesar de la lucha sistemática, los pueblos indígenas son el lastre para las cuestiones democráticas. Ahora bien si vemos rápidamente el panorama político actual del Estado de Guerrero, nos encontramos con que formando un círculo al ciudadano gobernador del Estado se encuentran los ciudadanos diputados al Congreso local, verdaderos caciques en cada uno de los distritos electorales, a tal grado, que desde el guardacantón hasta el juez de Primera Instancia son nombrados a propuesta de esos individuos, bajo la influencia de ellos. Estas tiranías locales o sub - locales son de tal manera alarmantes, señores presuntos diputados, que los cacicazgos del porfirismo en muchos casos resultan pálidos. Cuando se juzga de los problemas locales, de los problemas de los Estados desde la capital de la República, se equivocan los ciudadanos que hacen el análisis: es preciso ir allí, es preciso estar en contacto con los pueblos para darse cuenta de esa desventurada situación, pues hay quien haya cobrado diez pesos a un individuo, a un indio, por contestar un oficio a la Comisión Local Agraria; tinterillo ha habido que cobre a un desdichado indígena diez pesos por hacer un telegrama de unas cuantas líneas. Este es el engranaje de las autoridades locales en el Estado de Guerrero. El ciudadano gobernador padece de abulia, se ha dejado dominar por este círculo que lo est asfixiando, y con él al pobre Estado de Guerrero. Desde mucho tiempo antes de las elecciones se comenzó a preparar el terreno para sacar avante a determinados candidatos. El Estado de Guerrero había permanecido en poder de fuerzas delahuertistas. Ahora bien, se verificó una Transición, se rindieron las fuerzas delahuertistas y entonces desde aquí se preparó el terreno para mandar jefes de armas especiales a cada una de las regiones para poner a algunas autoridades. La Constitución del Estado de Guerrero, atentatoria al principio de la libertad municipal, tiene entre sus postulados uno que mata completamente esa libertad. Después de anunciar las fracciones anteriores, dice así: "Son facultades del gobernador suspender, con causa justificada, a los ayuntamientos o alguno de sus miembros, dando cuenta al Congreso de o a la Diputación Permanente, en su caso, con el expediente respectivo, para que determine lo conveniente." Pues bien, señores a pesar de esta arma tremenda que tiene el gobernador del Estado en sus manos, no fue suficiente y a raíz del indulto de las fuerzas delahuertistas se dio un decreto por el Congreso autorizando al gobernador para cesar en sus funciones a los ayuntamientos y nombrar en su defecto consejos municipales. Este decreto había de regir debía regir hasta el 15 de julio. Ahora bien, con miras enteramente electorales, se nombraron después de esta fecha consejos de una manera arbitraria, es decir, fuera del precepto que había dado el Congreso local. El caso de Iguala es el caso de Tlapa, de Omeotepec y de otros distritos electorales del Estado de Guerrero. Así pues, del 11 al 12 de julio en el Estado de Guerrero se nombró al ciudadano Primitivo Torres, ya cuando el ciudadano gobernador no tenía facultad para nombrar a este ciudadano presidente municipal. En tal virtud el origen es ilegal; no es este ciudadano Primitivo Torres presidente legítimo de la ciudad de Iguala; esto lo saben perfectamente los ciudadanos presuntos diputados por el Estado de Guerrero. El hecho de dejar a los presidentes municipales el control de la elección en los distritos, es sumamente grave, señores. Yo invito cordialmente a todos los ciudadanos presuntos diputados, lo mismo a los de uno que a los de otro bando, para que haciendo un esfuerzo y proclamando una verdadera tabla de valores morales, hagamos un esfuerzo porque las autoridades sean completamente eliminadas de estas funciones electorales. De lo contrario estamos perdidos; de lo contrario han sido inútiles los años de revolución e inútiles todos los esfuerzos para hacer que cuaje el principio del voto popular.

En Iguala se hizo una división de casillas arbitraria lo mismo que en otras partes del Estado, con el objeto de tener quórum a favor del contrincante que tenía el apoyo oficial. De tal manera que al reunirse la Junta Computadora se encontraba uno con un quórum artificialmente formado por intereses de orden oficial.

Haciendo hincapié en lo que afirmaba hace un momento de la influencia decisiva que estos señores tienen en el Congreso del Estado, tengo aquí una carta, a la que voy a leer en su parte conducente y suplico a la Secretaría que testifique. La carta es del ciudadano Saturnino Martínez, presidente del Congreso local del Estado de Guerrero. Es de fecha 20 de junio. Dice así:

"Pastrana no ha lanzado todavía un solo manifiesto; no tiene dinero. Mucho de su tiempo lo ocupa en asuntos de su profesión para arbitrarse fondos. Cuenta con los ayuntamientos de Tepecoacuilco y Huitzuco." En seguida hay otro párrafo que dice así: "En esta ciudad existe ya la opinión en favor de Padilla, quién exclusivamente se ha dedicado a la lucha lanzando un sinnúmero de manifiestos, organizando mítines, etcétera, etcétera." agrega: "Que esa noche - la del mitin - llevaron porra y que a pesar de eso, disertó tan brillantemente que convenció a ésta y los chiflidos de un

principio se cambiaron en aplausos. Esto me lo contó uno de los porristas." Pido a la Secretaría que se conserve esta carta y si lo que hemos afirmado no es cierto, que se consigne. Pues bien, señores, en el Estado de Guerrero ha desaparecido el principio cívico; se ha luchado con verdadero esfuerzo; aquí pasar n por esta tribuna oradores que vengan a tratar uno a uno los casos en los que se hizo patente la presión oficial y donde se demuestre hasta la evidencia cómo se verificaron las elecciones en el Estado de Guerrero. El ciudadano Padilla representaba, así como el ciudadano Vásquez del Mercado, la avanzada de un grupo de hombres que fuimos a enfrentarnos en el Estado de Guerrero con las autoridades. Cada uno de nosotros sin ir a ninguna antesala ministerial, sin buscar ninguna carta de recomendación, fuimos a nuestros distritos enamorados de un ideal, caballeros todavía del ensueño; y, señores gracias al esfuerzo que desarrollamos, gracias a la constancia que desplegamos, hemos triunfado en toda la línea, a pesar de la hostilidad de parte de las autoridades.

En el Estado de Guerrero, pasadas las elecciones, no vuelve a cada quién a sus trabajos; no se ve a los contrincantes o a los que tomaron parte en uno u otro partido como individuos que ejercieron un derecho, sino que aún después se sigue hostilizando de una manera brutal a nuestros partidarios; después se persigue a cada uno de los que votaron y a los pueblos indígenas se les est llamando para aplicarles el rigor de la venganza política; ya sea el recaudador -otro monstruo de los distritos-, ya sean los jueces de primera instancia, que debieran estar en presidio, ya sean los presidente municipales, con cualquier pretexto fútil encarcelan, multan y persiguen a los partidarios de los que hemos ido a luchar. Ayer recibí un telegrama de uno de los pueblos de mi distrito, donde se ve qué clase de acontecimientos se est n desarrollando en el Estado de Guerrero.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"Estados Unidos Mexicanos.- Telégrafos Nacionales.

"Tlapa, Guerrero, 16 de agosto de 1924.

"Profesor Juan B. Salazar.- Calle Josefa O. de Domínguez número 20, veinte.

"Pueblo Xalpatlahuac hállase comprometido motivo tres muertos ocasionados escándalo; enemigos nuestro partido han sorprendido Gobierno tramando asunto movimiento revolucionario; nos hemos dirigido gobernador y Secretaría Gobernación; no han contestado. No hay autoridades, pues éstas impuestas Neri, sostiene enemigos; capitán fuerzas ésta fue personalmente cerciorarse no hay movimiento revolucionario, y así ha informado. Doce presos nuestros remitidos jefe sector. Ruégole interponga influencias.- M. Villalva."

El C. Salazar Juan B.: Esta es una prueba palmaria, ciudadanos presuntos diputados, de lo que ha acontecido.

Pasadas, pues, las elecciones, siguen persiguiendo a nuestros partidarios. Por eso es que nosotros venimos aquí a invitar a los ciudadanos presuntos diputados para que, formando causa común con nosotros, hagamos justicia a aquellos individuos que fueron a luchar en un terreno completamente desigual; hagamos justicia a aquellos individuos que no tienen m s que la fe en su triunfo y la fe en su causa. Así es cómo el ciudadano Padilla, pongo por caso, fue a enfrentarse al ciudadano Neri; así es cómo el ciudadano Vásquez del Mercado fue a enfrentarse al ciudadano Neri en Chilpancingo. Ellos fueron nuestras avanzadas. Fuimos a luchar nosotros contra estas tiranías locales. ¿De qué sirven entonces señores, de que sirven las armas hechas por la revolución?.

Cierta ocasión - y hace años de esto-, cuando en Guerrero teníamos un mal gobernante, vino aquí el joven Martínez de escobar, con su brillante oratoria de enamorado de la justicia, a pedir por el pueblo de Guerrero; señores, yo entonces, un provinciano, deseaba ardientemente conocer a Martínez de Escobar para ir a estrechar su mano y felicitarlo porque había quien se acordara siquiera de los surianos. El Estado de Guerrero est en una situación difícil, en las montañas; por su situación topográfica, por el aislamiento en que se encuentra, ven ustedes muertes, asesinatos; se imponen autoridades. Como la prensa no llega, y si llega, llega muy tarde, nadie hace caso, nadie conoce estos asuntos, y por eso aprovechando hoy esta oportunidad, yo vengo a denunciar lo que pasa en el Estado de Guerrero; vengo a denunciar también a aquellos individuos que lejos de ir por el camino de la democracia y de la honradez, han ido a buscar el apoyo oficial. Si no es prueba suficiente la documentación que est en el expediente relativa a las casillas de Tepecoacuilco, no sé entonces, señores, qué prueba debemos pedir; si Tepecoacuilco es amigo del compañero Pastrana Jaimes, si Tepeoacuilco era uno de los municipios de él y de allí se han traído pruebas de las irregularidades, de que no hubo elecciones; si los nombramientos est n expedidos sin decir dónde se va a establecer la casilla; si todos estos documentos los hemos visto línea por línea, ¿Entonces qué cosa esperamos, cuando se va a hacer justicia a un hombre que viene a pedirla a esta Representación Nacional? Se decía hace un momento, en la mañana, cuando se presentaba un testimonio, que lo había expedido el juez en funciones de notario; señores, si en la capital la justicia ha llegado a la ignominia, en el Estado de Guerrero la justicia no existe, porque los jueces debían estar en presidio, no debían ser los que conocieran de la justicia pública o la impartieran, sino que debía procesárseles. Generalmente en el Estado de Guerrero los m s perversos, los m s incondicionales son los que se han puesto al servicio de las autoridades del Estado y municipales. Esto es lo que sucede en el Estado y vengo con toda buena fe, con toda sinceridad y con toda honradez a denunciar esto aquí. Yo preguntaría al grupo legalista, el grupo que como una avanzada ha proclamado la ley, qué actitud tendrá en estos casos del Estado de Guerrero. Vengo a preguntar a los viejos amigos, a los viejos luchadores Martínez de Escobar y Siurob, qué actitud tendrán en esta situación dolorosa para nosotros los surianos. ¿Cómo votar n ellos? ¿Se han convencido de lo que pasa en nuestro Estado? Quiero todavía suponer que el ciudadano gobernador es un hombre honrado; pero por su debilidad, por su abulia, completamente est absorbido por un grupo de canallas (Aplausos.) ¡Sí, señores! Por la progenie gloriosa del Estado

de Guerrero venimos nosotros a pedir, venimos a exigir que os acordéis que todavía quedan hombres libres en el Estado de Guerrero; venimos a exigir que en contra de un líder latifundista, se levante un maestro de escuela que se llama Daniel Barrera; venimos a deciros que en contra de toda imposición se levantan los hombres sencillos y sinceros, pero que tienen todavía fe en la justicia, que tienen todavía fe en su triunfo y todavía seguirán luchando, a pesar de todo y contra todo.

Se ha dicho aquí que los grupos agraristas sostuvieron la candidatura del compañero Pastrana Jaimes. Señores, los agraristas de Iguala, hay que decirlo, esos no son todos los agraristas, porque los pueblos agraristas no son los del núcleo de Iguala, compañeros. Todos nosotros hemos hecho labor agrarista. Recordar el compañero Hernández Alvarez y otros como cierto periódico decía alguna vez, con motivo de mi propaganda: "al grito de ¡viva Zapata! y de ¡mueran los gachupines!, entró Juan B. Salazar a Tenango Tecaltiche." En mi distrito, pongo por caso, se celebraron las elecciones cuando en los pueblos de Cruz de Juárez, de Ixcatiopan, de Alpuyeca y otros, se estaban dando ejidos y el ingeniero había repartídolos, en tanto que en las cabeceras distritales se nos negaba, señores, hasta vendernos papel para nuestra correspondencia. Así pues al, margen del más puro idealismo quiero que aquí en esta caso se haga justicia plena; que se diluciden plenamente las responsabilidades y que votemos a conciencia, puesto que el ciudadano Padilla ha sido un hombre independiente a las tiranías del Estado de Guerrero.

Refiere Emilio Rostand, en uno de sus admirables poemas, en cierta ocasión llegaba un anciano a las fronteras de Francia; venía de España; cargaba en su asno un fardo; se desprendió del fardo una daga. Entonces, el aduanero, con ojo avizor, fue a registrar el bulto; encontró un yelmo, encontró una armadura herrumbrosa, encontró un estoque. Creyéndolo peligroso, el aduanero no le permitió pasar la frontera. Aquel viejo, aquel hombre era don Quijote.

Señores, del Estado de Guerrero viene también un hombre, viene de la tierra de la independencia, de Iguala, del Plan de la Independencia. En su alforja de viaje trae sus armas, trae su estoque, trae su escudo y trae su armadura, os emplazo para que vengáis a contender con él. (Aplausos.)

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Díaz Soto y Gama.

El C. Díaz Soto y Gama: Compañeros:

Antes de entrar a la refutación del deshilvanado y raro discurso del compañero Salazar, quiero cumplir con un deber de justicia. En esta época de intereses sórdidos, de egoísmo, de bajeza moral, es satisfactorio encontrar de repente, allá por excepción, allá por rareza, detalles de verdadera virilidad y detalles que representan la posesión de un valor moral sólido. Cuando hoy en la mañana oí a Pastrana Jaimes, con la guillotina sobre el pescuezo, sobre el cuello, que desafió a la Asamblea, desafió a sus jueces, se encaró con ellos, y en vez de pedirles clemencia les grita su pecado, les grita su delito y valerosamente, virilmente les dice que han pactado criminalmente para meter a la Cámara por la puerta falsa, por las cloacas, como él dijera, a Ezequiel Padilla, yo en el fondo de mi alma tuve un aplauso, tuve un gesto de simpatía para la actitud de Pastrana Jaimes e involuntariamente me acordé de otro ejemplo análogo, el de Aurelio Manrique, el bizarro luchador que tanta falta nos hace en estos escaños... (Siseos. Aplausos.) el Quijote del ideal, el caballeroso Aurelio Manrique, uno de los pocos hombres que verdaderamente han honrado a esta tribuna, quién frente a la guillotina esgrimida con ferocidad -con mayor ferocidad que hoy- por el bandolero Prieto Laurens, ante esa guillotina se reía sarcásticamente y desafiaba valerosamente a aquella multitud más feroz y más implacable que ésta, y esos dos gestos, el de Aurelio Manrique el Grande y el de David Pastrana Jaimes el Modesto, son gestos que deben grabarse en la conciencia nacional, para que sepa que todavía enmedio de la degeneración universal, en medio de la corrupción de esa juventud, que a reaccionarios como García Naranjo, sin delicadeza moral, a ellos mismos les escuece, para que se vea que en medio de la degeneración moral todavía hay gestos desinteresados y altivos.

Yo aplaudo a Pastrana Jaimes, porque ha desafiado a sus jueces, porque les ha echado en el rostro su falta de justicia, de equidad y de honradez en este caso y sepan los hombres de la mayoría que nosotros preferimos ser guillotinados uno a uno, antes que sacrificar nuestras conciencias y antes de callar las muchas verdades. (Aplausos.) Todas las verdades que traemos en nuestro cerebro y en nuestro corazón las vaciaremos sobre la mayoría para educarla, para corregirla, para orientarla y para moralizarla. (Aplausos. Siseos.) Venimos, sí, a moralizar a la mayoría a moralizar a los mexicanos, a dar clases de civismo y de honradez frente a la vergonzosa cátedra de fraude electoral y de burla al sufragio que ha estado sentado desde ayer la Comisión de Poderes, la Comisión Revisadora de Credenciales, una bochornosa cátedra de fraude electoral parece que les est diciendo a los compañeros provincianos: aprende a mentir, aprende a engañar, aprende a engañar el voto del pueblo. Lo que est pasando Aquí es indecoroso, y lo decimos aunque se nos arroje de esta Cámara. Lo hemos dicho y lo seguiremos diciendo, y nos importa absolutamente nada la suerte que corran nuestras credenciales. Por eso yo repito mi aplauso sincero y cordial a Pastrana Jaimes.

En este asunto, señores, después de cumplir ese deber de justicia, y analizando ya serenamente, pasada la indignación que tenía que venir en nosotros forzosamente ante el escándalo de hoy en la mañana, ante el escándalo de negar la fe notarial, ante el escándalo de negar la fe pública inherente a todo documento emanado de un notario y renegar del criterio legal, detrás del cual se parapetaba hipócritamente la comisión revisora, y con ella a mayoría; apaciguada ya la indignación, se puede entrar serenamente al estudio del caso Pastrana Jaimes - Padilla.

Hay dos tesis en el caso, no las tesis superficiales del leguleyo, no las tesis superficiales de hombres como Salazar, que parece que vive todavía en la época del porfirismo o allá en la época

de revolucionarismo de nuestros abuelos o de nuestros padres; hay dos tesis: la tesis jurídica y la tesis humana. La tesis humana es la que yo vengo principalmente a exponer, quiero analizar un poco m s todavía, quiero entrar, si me es posible, dentro de la pobreza de mis recursos, a desentrañar los fondos, las entrañas de la vida nacional, esa vida que desconoce lastimosamente el compañero Salazar. Es vergonzoso que frente a una revolución social como ésta, que todo lo ha sacrificado, que todo lo ha conmovido, frente a una revolución como ésta que por primera vez interesa a las clases desheredadas, que por primera vez llega hasta el indio abandonado, se nos venga el compañero Salazar con triquiñuelas legalistas y se nos diga que el mérito de los hombres que fueron al Estado de Guerrero ha sido el enfrentarse con el gobernador. No son ya las cuestiones políticas, no es ya la cuestión de los diputados locales, ni de un Gobernador ni de los presidentes municipales que apasionan; es vergonzoso y doloroso que olvide esto el compañero Salazar. El compañero Salazar parece que es m s extraño al Estado de Guerrero que yo mismo. En Guerrero, como en Puebla, en Yucatán como en Morelos, en San Luis Potosí y Chihuahua no hay m s que dos grupos, y esto lo ha olvidado lastimosamente el compañero: agraristas y antiagraristas; defensores del ideal económico, de la redención material y práctica y tangible para el indio y para el proletariado, y los defensores secos, fríos, tétricos, sin corazón ni entrañas, todo cálculo, toda vileza que se llaman los defensores de los intereses creados, del capital. Es doloroso y vergonzoso que un ministro, que un secretario de Estado que debería considerarse m s frío y m s conservador y con menos dinamismo que nosotros, que el señor De Negri, nos venga a dar una lección, nos venga a dar la frase de la época, la frase lapidaria que ha asentado hoy en la prensa para orgullo del Gobierno. Dice El señor de Negri, y debemos repetirlo y comentarlo, y debemos entenderlo, que la nueva legislación, la que se discute con tanto acaloramiento en nuestro país, no deslumbra a los académicos ni a los pedantes pero que ella ha trañido - y aquí est fondo de la Revolución en México- inmediato alivio a los hombres del trabajo; ese es el fondo de nuestra revolución. (Aplausos.) Y es doloroso, señores, que en esta tribuna donde debemos venir a representar anhelos nacionales y donde debíamos estar respaldados por la raza indígena, nos vengan a citar a Rostand y a otros autores franceses, acordándonos seguramente de que hemos estado en la Secretaría de Educación, donde se ha falseado la educación de la época, adiestrándonos en clásicos serviles que siempre estuvieron de rodillas ante los cesares más abominables de la decadencia romana, de esa enseñanza malsana, de esa enseñanza lúgubre que ha afectado los cerebros y los corazones de la juventud mexicana. Esto no puede y tenemos que reclamar aquí por los fueros de la revolución, ¿pues que la revolución social no ha existido en nuestro país? por eso yo quiero demostrar que no es cierto. Ya, como decía pesimistamente, con un pesimismo impropio de su juventud el compañero Salazar, con un pesimismo digno de Bulnes, digno del porfirismo de la peor laya, los pueblos indígenas son un lastre en cuestiones democráticas. Que los pueblos indígenas son un lastre en cuestiones democráticas, ¿qué ignorancia! ¡qué necedad! Les voy a leer a ustedes, compañeros, una carta sentida de un indígena, de un modesto indígena de Jilitla, de allá de las Huastecas, de un pueblo perdido en las Huastecas, pueblo de raza azteca, perdido entre la degenerada raza huasteca, pueblo que por primera vez entra a la lucha cívica, en los momentos en que la Huasteca, ignorada y abandonada por la civilización, por el espíritu y por el ideal, hasta allá llega la conmoción y el sacudimiento de la lucha, el sacudimiento del orden nuevo, el sacudimiento de este grandiosos movimiento que se llama una revolución social libertaria. ¡Y en estos momentos se nos viene a hacer creer que en Guerrero todavía van a buscar la consigna de los Presidentes Municipales! Eso es mentira en Guerrero sólo buscan una orientación: la del enemigo del latifundista, la del enemigo de Figueroa, la del enemigo de los hombres que quieren conservar todavía haciendas y propiedades mal habidas, y van detrás del agrarista, del agrarista sincero, del agrarista defensor; allá van. Por eso fueron detrás de Calles. ¿Y cómo vamos a creer que las prédicas de Calles, todas sociales, nada políticas, todas hondas, nada superficiales, todas moral y justicia, hubieran sido perdidas entre los pueblos de Guerrero? Por eso en estos momentos olvido que estoy en presencia de bloques, y quiero estar nada m s en presencia de mexicanos, y quiero traerles la nueva de que el indio huasteco, el m s degenerado, responde ya al civismo y responde ya a las nuevas ideas. Esta carta me impresionó, y exigía un compañero, al delegado de la Nacional Agraria, Julián Adame, hombre hermoso, sucesor de otro hombre también digno de otro hombre que nos alienta en este momento; Henshaw y Adame, dos colaboradores de Manrique en la destrucción del latifundio, en la destrucción de los privilegios, y por eso yo en esta tribuna siempre tendré para Manrique y para Henshaw francés de aliento y de aprobación; esa carta dirigida a Adame, dice así en su laconismo, dice así en su mal estilo, dice así en sus mal pergeñados términos:

"Xilisto, 10 de julio de 1924.- Señor ingeniero Julián Adame.- San Luis Potosí.

"Tenemos el honor de informar a usted que las elecciones verificadas en este lugar tuvieron un feliz término.

"Todas las fracciones, con excepción del pueblo, se prestaron de una manera enteramente unida, con verdadero interés. Es la primera vez que al indio se le ve luchar."

¡Qué distinto este grito hermoso de optimismo, al pesimismo de ese bloque de tumba del pasado que inspira el compañero a quien yo creía joven, pero que ya tiene el alma vieja! "Es la primera vez que al indio se le ve luchar" (Aplausos.) Con esto solo, señores, los que todavía queremos al indio, los que primero que nada nos sentimos indios, los que reclamamos una gota o diez o un chorro de sangre indígena, con esto solo nos consideramos pagados de todos nuestros sacrificios y ante esto nada significan las dietas ni nada significa cualquiera dentro que aquí suframos, si los que

hemos luchado modestamente, pobremente, sin pretensiones de líderes ni directores, sino como uno de tantos obreros en la gran lucha de la renovación social, hemos visto que al fin el indio, el irredento, el indio triste, el eternamente olvidado, empieza a formar parte de la civilización y empieza a pensar como nosotros que hemos sido sus eternos enemigos y que empezamos a ser sus hermanos. El indio votó por Calles unánimemente como ustedes lo van a ver "Es la primera vez que al indio se le ve luchar. Una sola vez se oyó en las fracciones y los inditos, con palabras nuestras, gritaban vivas al general Calles."

Es decir, vivas al enemigo del capital opresor, al enemigo del latifundista, de los compañeros aliados de Padilla porque Padilla -y esto lo demostraré aquí -, no es cierto que sea un individuo que forme las avanzadas de los grupos nuevos, ni es cierto que vea hacia el porvenir; ve para el pasado y yo recordaré aquí que Padilla era tan amigo y de tal manera quería, y estaba ligado a Rómulo Figueroa, con el lúgubre Figueroa, que el se ofreció hacer el mediador en una rendición falsa que después resultó un engaño para el Gobierno. De manera que es distinto el grupo idealista constituído por Calles, por Henshaw, por Manrique y por Adame, de los pocos hombres que tienen ideales, del grupo que ve para atrás.

Son los indios, aquella raza muda, son los campesinos que ustedes conocieron en su distrito, aquella raza que nunca ha tenido defensores y por eso nosotros sentimos que la raza tarahumara haya perdido un defensor en Castellanos. Me decía un compañero que todo esta era tiempo perdido, que todo era un vacilón político; no, compañero; en una época corrompida, en una época de sórdida avaricia un a |poca en el oro es el todo, es mucho que una minaría, una pequeña minaría, cinco o seis, sean los que estén llamando al deber y al sacrificio a los demás. No me espanta estar en minoría; yo sé, como dice Carlyle, que todas las grandes ideas han empezado por la minoría de uno solo. Minoría de uno solo fue el cristianismo minoría de uno solo fue Cristóbal Colón queriendo descubrir otro mundo; minoría de uno solo es cualquier inventor en la ciencia o cualquier reformador minoría de uno solo era Zapata el invicto que venimos aquí indignamente a representar. Y como aquí se trata precisamente de los intereses que Zapata defendió, de los intereses santos de los campesinos, por esos yo vengo aquí a emplear mi energía, no a perderla, como decía algún compañero, para defender a la minoría.

Zapata y los suyos -y quiero entrar al problema de Guerrero, el que tan lastimosamente ignora, que lastimosamente olvida el compañero Salazar-, todos los que estuvimos con Zapata, los que tuvimos el honor de ser humildes soldados o seguidores al principio inconscientes y después conscientes del gran luchador, sabemos de memoria que el primer obstáculo que se atravesó en el camino de Zapata fue Ambrosio Figueroa. Allí, en el hotel central, en la calle de las Escalirillas, se hospedó Francisco Figueroa, el que después había de ser subsecretario de Educación Pública, y allí Francisco Figueroa traía el encargo de Ambrosio Figueroa de entenderse con Limantour. Y entonces Emiliano Zapata publicó allá en los albores de la revolución, una carta en que echaba en cara a Ambrosio Figueroa su traición, su connivencia con Limantour y en que le contestaba, indignado, que él no podía aceptar ninguna transacción en materia de principios. Desde entonces empezó a deliniarse la figura de Zapata como defensor honrado de los campesinos, y la figura de los Figueroa como defensores vendidos a la reacción. Y todos los obstáculos que tuvo Zapata en el Estado de Guerrero, todos los obstáculos que tuvo el agrarismo, todos los obstáculos que tuvo en ese Estado fueron obra de los Figueroa, y todo el que conozca la historia de Morelos, sabe que los colorados de Figueroa, hombres feroces, hombr es sin entrañas, fueron los comisionados por los gobiernos dictatoriales de México para acabar con el zapatistas, y no hay hombres m s odiados en el Estado de Guerrero que los colorados de Figueroa. Pasa el tiempo, la revolución constitucionalista comienza a definirse, comienza a consolidarse la nebulosa aquella, toda política y toda vanidad; comienza a consolidarse el fondo socialista que trae la revolución, y entonces Figueroa, que falsamente, mañosamente se había colado en las filas de la renovación, empieza a tomar sus perfiles, Ambrosio Figueroa muere y Rómulo Figueroa sigue de defensor de los latifundistas, y eso lo sabe todo el Estado de Guerrero, y eso lo dicen los hechos últimos.

Los directores del Partido Agrarista, el compañero Rodrigo Gómez entre otros, tuvimos que ir -el especialmente- a hablar con el señor presidente de la República llevándole las quejas continuas, numerosas, constantes, desesperadas de los pueblos de Guerrero, que veían en Figueroa el único estorbo, el principal estorbo a su felicidad, y el señor presidente de la República oyó aquellas quejas y trató de cambiar a Figueroa. Entonces Figueroa, enloquecido por temor de perder la posición, el poder, los intereses creados, porque Rómulo Figueroa, es latifundista; entonces Figueroa enloquecido, tuvo aquellos horrorosos arrebatos que se llamaron los asesinatos en masa de municipios indefensos. Allí est la misma prensa reaccionaria llena de esos capítulos de sangre, en los que se estampaba la maldad de los Figueroa. Y viene el momento m s crítico de la revolución mexicana, el momento decisivo, este momento en que la revolución se divide en falsos revolucionarios vendidos al oro y a la reacción, y en verdaderos revolucionarios, y ¿De qué lado se coloca Rómulo Figueroa, el amigo de Padilla? Del mismo lado que Guadalupe Sánchez, Enrique Estrada y todos los traidores del Ejército, porque Rómulo Figueroa es para Guerrero lo que Guadalupe Sánchez para Veracruz y lo que Estrada para Michoacán, así como lo que es el general Caloca para Guanajuato, es decir, instrumentos pretorianos de que la reacción se ha valido para oprimir a los pueblos y detener el reparto de tierras; y basta esto para saber que Figueroa se quitó al fin la careta y se vino a catalogar en el grupo de los defensores del capital, de los par sitos; y aquí viene la fase humana del asunto, sin tanto análisis ni tanto alambicamiento ni desorden como el del compañero Salazar: si el agrarista provoca o produce un

inmediato alivio a los hombres de trabajo y éstos son los m s, ¿qué quieren ustedes que haya sido el papel de los hombres de Guerrero frente a los dos fuerzas, la de conservación que los conservaría en la miseria y en la inercia y la fuerza redentora que los lleva a darles un pedazo de tierra, independencia económica, justicia y bienestar para sí y sus familias? Evidentemente que no podían vacilar y por eso los pueblos de Guerrero son agraristas y por eso en la convención de Iguala sacó siete votos Padilla y quinientos Pastrana Jaimes Por eso decía que no necesitaba el servicio de ninguna autoridad para salir triunfante en Iguala. ¿Que los presidentes municipales son los que imponen? ¡mentira! Frente a esta situación en que ya el agrarismo interesa al indio, al campesino, como ninguna otra revolución lo había interesado; frente a este hecho nuevo que sí se traduce en algo, que destruye la inercia y produce el movimiento de las clases bajas; frente a este movimiento las personalidades se borran, y aquí tengo a la vista a mis compañeros de San Luis, los que no me dejar n mentir. ¿De qué sirvieron León García, Valentín Narváez, José Camacho, los ayuntamientos prietistas, ante el arrollador empuje de los campesinos de San Luis Potosí? ¿Dónde est n aquellos ayuntamientos y dónde est n aquellas porras vencidas por los heroicos campesinos de Matehuala, de Venado, de Catorce, de Cedral? ¿Dónde est n aquellas autoridades impuestas que no pudieron resistir el primer embate de los agraristas potosinos? ¿De qué sirvió todo el dinero de la Tesorería de la Cámara? que sirvió todo el dinero de la Tesorería de la Nación? ¿De qué sirvieron todos millones que Adolfo de la Huerta le daba a Prieto Luarens? ¿De qué sirvieron el cohecho y la corrupción de tantos miles de ciudadanos, si las huestes agraristas triunfaron y fueron después a Ocotlán y a Palo Verde y fueron a la Huasteca a vencer a las malos militares y a los falsos revolucionarios?

Ya se ve, pues, que por encima de los presidentes municipales, de que por encima de los gobernadores, de que por encima del dinero y de la corrupción est el hecho fundamental, el hecho básico, el hecho vertebral, que dijera Calles, de la vida nacional mexicana: la reforma agraria. Y por mucho que se le dé vuelta, la reforma agraria es básica en todo; para todo lo es, hasta con relación al problema obrero, porque el obrero, hoy apoyado por los campesinos, podrá tener libertad, y cuando un obrero tenga dificultades -como decía muy bien el compañero Morones y lo saben todos los laboristas-. cuando tenga dificultades en el taller o en la fábrica, cuando no esté contento con las condiciones de trabajo tiene la válvula de seguridad del campo para librarse de la esclavitud del taller y de la tiranía de los capitalistas.

De manera que yo quisiera que la Cámara comprendiera que ésta es la tesis humana en el Estado de Guerrero, formado por indios y que allí sólo puede triunfar el agrarista. Al Estado de Guerrero no se le puede olvidar quién ha sido Rómulo Figueroa ni se le puede olvidar quién ha sido Padilla, su íntimo, que lo acompaño en su aventura. Por lo menos Padilla se interesó en una rendición que no resultó sino un burdo engaño.

Bastan estos hechos, que todos podemos palpar no con la vista material, porque hay cosas que no se ven con los ojos, según frase del presidente Obregón; hay cosas que se sienten con el alma, y yo prefiero tener la convicción moral, que me entre por todos los poros del cuerpo y del espíritu, que una convicción vacilante basada en papeles, de los cuales se puede sacar lo mismo un argumento en pro que en contra. De manera que ustedes podrá n comprender que en Iguala no puede triunfar m s que un agrarista, no puede triunfar allá Padilla; y bástame con esta convicción moral que ustedes tengan. por lo demás, compañeros deploró de las exigencias de momento los reúnan a ustedes en bloques. Nosotros los revolucionarios, los del Bloque Revolucionario, por intransigentes que seamos, no culpamos a todos por igual; culpamos a los directores y disculpamos a los dirigidos; y no a título de profecía, sino a título de un proceso natural, afirmamos que hay afinidades morales, como hay afinidades físicas, y del mismo modo que Padilla se fue a interceder por Figueroa, del mismo modo que los soñadores, los idealistas nos agrupamos alrededor de Calles, Manrique, Zapata, del mismo modo en esta Cámara se formar n las dos familias morales, como decía Manrique, la de los hombres que echan un velo sobre el honor, que ponen la mano sobre la conciencia y la acallan, y la de los hombres no maleados que esos sí sabrán tener honor y vergüenza, que esos sí sabrán tener un gesto desinteresado. Y no vamos nosotros a la torpe y necia y mezquina labor de destruir al Bloque Confederado con miras políticas; no nos estorba, queremos que ese bloque se imponga a sus directores, queremos que en ese bloque no se impongan la diputaciones interesadas en el chanchullo, pongo por caso la diputación de Puebla; queremos que no sean las que se impongan, queremos las que vengan limpias, porque no creemos que todas las credenciales estén manchadas, hay alguna, sí, señores, completamente sucias; y queremos que los hombres que verdaderamente representan al pueblo, se impongan a sus malos directores y en nosotros tendrán a sus hermanos, y si alguna vez buscan quien los guíe, aquí estamos nosotros que conocemos el camino y tenemos m s experiencia que ellos en la lucha política, y les señalaremos el buen camino. En esta vez quizá sea tarde para salvar a un representativo de las clases indígenas y campesinas, pero quizá mañana, muy pronto, ustedes reprueben este acto de injusticia y de iniquidad, siendo el último que se realice.

Perdonadme se he sido un poco lírico, un poco sentimental; pero es que hay casos que deben tratarse con todo el espíritu, y el espíritu no es sólo cerebro, inteligencia reflexiva; hay también vínculos con toda la colectividad. nosotros los mexicanos que hemos vivido en una época de dolor y de sangre tenemos vínculos y compromisos santos con todos los hombres que han dado su sangre porque si nosotros tenemos libertad, nosotros antes que nada debemos de considerar que nuestro principal compromiso es con la conciencia y la conciencia no puede estar sino del lado de la salvación de las masas campesina y trabajadoras que después de habernos dado de comer y después de estar dándonos todavía de comer y de estar formando la base de nuestra existencia y de nuestras comodidades

físicas y morales, después de todo eso son las que derraman su sangre y las que en el momento supremo deciden de la libertad y destruyen tiranías; por esas masas campesinas que aspiran tener aquí sus representantes, espero que siquiera una parte del Bloque confederado esté con nosotros, con los compañeros legalistas que no pueden estar del lado de Padilla y con los compañeros del Bloque revolucionario que en nuestra minoría, exigua pero altiva, que se quiebra pero no se dobla, estarán siempre del lado de la justicia y seguramente del lado del honor, aun cuando se nos aplaste, aun cuando se nos apachurre, pero siempre estaremos nosotros en el puesto que nos marca el ejemplo marcado por otros luchadores más grandes que nosotros. De manera que nosotros, en nuestra humildad y en nuestra modestia, pedimos a los compañeros del Bloque Confederado que tengan simpatías para los trabajadores y para los campesinos; que en esta vez sacrifiquen un poco el compromiso del Bloque y voten por el compañero Pastrana Jaimes contra el amigo de Rómulo Figueroa, licenciado Ezequiel Padilla.

El C. Salazar Juan B.: ¿Me permite una interrogación el compañero?

El C. Díaz Soto y Gama: Sí, señor.

El C. Salazar Juan B.: El compañero Soto y Gama, que es una máquina admirable para hacer sofismas, ha dicho que yo he ido contra el indio. ¿Sabe el querido compañero Soto y Gama quién o quiénes propusieron la creación del Departamento de Cultura Indígena?

El C. Díaz Soto y Gama: Sé en que forma ha desempeñado ese Departamento sus funciones....

El C. Salazar Juan B.: ¿Me hace usted favor de decirme, compañero Siurob, quiénes propusieron la creación del Departamento de Cultura Indígena?

El C. Siurob: Nosotros, compañero; usted y el que habla.

El C. Salazar Juan B.: Muy bien que señale errores; eso es lo honrado, compañero. Nada más eso quería decir. (Aplausos.)

El C. secretario Valadez Ramírez: Por acuerdo de la Presidencia tiene la palabra en pro el C. Arroyo Ch.

El C. Arroyo Ch. Agustín: Estaba inscrito antes que yo en pro el ciudadano Vázquez. Deseo saber si esta en el recinto.

El C. secretario Valadez Ramírez: La Secretaría informa al compañero Arroyo Ch. que el ciudadano Vázquez no está en estos momentos dentro del salón. Se le ha inscrito en último lugar de acuerdo con el Reglamento.

El C. Arroyo Ch. Agustín: Honorable Asamblea: Insisto en que el C. Soto y Gama y el grupo de agraristas tienen una enorme obligación que cumplir, están en su perfecto derecho para venir a decir a esta tribuna todo cuanto sientan y todo cuanto quieran en favor de sus coasociados; pero insisto también en que no es ese correligionarismo ciego lo que nos debe guiar para la reivindicación de la revolución que se inicia en esta última etapa al grito de "sufragio efectivo", ciudadano Soto y Gama. El ciudadano Soto y Gama olvidó en su fogosa peroración todos esos pequeños detalles a que la Comisión Dictaminadora acudió para justificar su dictamen; y el ciudadano Soto y Gama sencillamente nos hizo un panegírico de Zapata, nos hizo un panegírico de Manrique y de otros hombres a quiénes él estima, pero que esos hombres, ni Manrique ni Zapata son necesarios en estos momentos en que se trata de otra cuestión muy distinta. Pero ni en esos casos est seguro el ciudadano Soto y Gama de la verdad, porque al hacer aquí alarde de esa valentía del ciudadano Manrique, no ha estado en lo cierto; el ciudadano Manrique temía a aquellas mayorías cooperatistas y fue de uno en uno a pedir el voto de ellas para estar respaldado primero y luego podérsele echar encima a Prieto Laurens; aquí hay testigos. Apelo a la honorabilidad de algún ciudadano diputado de la pasada Legislatura que haya recibido la invitación del ciudadano Manrique para estampar su firma a favor del mismo ciudadano; recuerdo en estos momentos al señor Hernández Alvarez. (Voces: ¡No está!) Sí está. No sé si está el señor Hernández Alvarez aquí presente, pero es cierto.

El C. Hernández Alvarez: Debo aclarar que el compañero Manrique fue a pedirme esa firma, pero como el sabía y sabe que siempre fui antiprietista, no tuvo necesidad de eso.

El C. Arroyo Ch.: El ciudadano Hernández Alvarez, como el habla, gustosos estampamos la firma en los documentos que traía el ciudadano Manrique para enfrentarse al ciudadano Prieto Laurens. Ya ve, pues, el ciudadano Soto y Gama cómo hasta ese elogio es vano y ese argumento que el quiso él hacer es deleznable.

Para no dejar nosotros ni un solo escrúpulo en nuestra conciencia y para que podamos votar a favor del dictamen, basta hacer una pequeña recordación de lo que ya nos dijo la Comisión: fueron 86 casillas, ciudadano Soto y Gama, las que debieron haberse instalado. Consultad este caso con el ciudadano Pastrana Jaimes; cinco dejaron de instalarse y en eso estuvieron perfectamente de acuerdo ambos contendientes, los ciudadanos Padilla y Pastrana Jaimes. En consecuencia, quedaron 81 casillas; de éstas 18 correspondían a Tepecoacuilco, lugar en donde no hubo elecciones, y las fraguó el ciudadano Pastrana Jaimes de acuerdo con algunos elementos oficiales del lugar. (Voces: ¡Mentira!)

El C. Pastrana Jaimes: Pido la palabra para hacer una interpelación.

El C. Arroyo Ch.: No permito interpelaciones. Después contestará usted.

El C. Pastrana Jaimes: Porque no es cierto que yo haya....

El C. Arroyo Ch.: Después lo demuestra usted. En este expediente hay constancias de que esas casillas se instalaron con una sola persona. Estos expedientes fueron hechos con todo cuidado, con seda; están cosidos con seda, con la misma seda, siendo que hay lugares distantes de una casilla a otra, y, sin embargo, aparecen con el mismo papel, con la misma seda y con la misma tinta, etcétera, etcétera; hechos inequívocos de que fue una sola mano, y cuando las elecciones las hace una sola mano, es prueba irrefutable de que hubo fraude, fraude a favor de Pastrana Jaimes.

El C. Fabila: Que se exhiba el expediente.

El C. Arroyo Ch.: Pero si esto no fuese suficiente para demostrar que el ciudadano Pastrana Jaimes no fue favorecido por el voto, vamos a

citarle otro caso que él no negar . El presidente de la primera casilla, al irse a instalar la Junta Computadora, solicitó de las fuerzas federales, por conducto del presidente municipal, una escolta a efecto de que se reprimiera algún desorden que pudiera producirse por la exaltación de ambos contendientes. Las fuerzas federales asistieron solícitas al llamado del señor presidente municipal, y cuando el ciudadano Pastrana Jaimes vio que la mayoría de los presidentes de casilla era de los partidarios del ciudadano Padilla, abandonó aquella Junta Computadora y en compañía del ciudadano presidente municipal acudió a las fuerzas federales a efecto de que éstas fueran retiradas del lugar, puesto que ya no las había podido utilizar a su favor. También de esto hay constancias y pido atentamente al ciudadano diputado Cristo, que es poseedor de un telegrama de quien era entonces comandante militar en aquel lugar, para que nos diga si es cierto o no este dato a que acabo de referirme. Pido atentamente a la Secretaría que se sirva leer ese telegrama.

El C. secretario Valadez Ramírez: Telegrama procedente de: "México, D. F., agosto 20 de 1924.

"Señor licenciado Gustavo R. Cristo.- Cámara de Diputados.- Comisiones dictaminadoras.- Ciudad.- Urgente.

"En contestación a su atento mensaje numero 383, de fecha 19 del corriente, me permito comunicarle que, al reunirse la Junta Computadora del 4o. distrito electoral en Iguala, Guerrero, con motivo de las pasadas elecciones para poderes federales, el ciudadano presidente municipal de dicho lugar se dirigió por oficio al Cuartel General a mis órdenes, a fin de que se estableciera una escolta de fuerzas federales en el recinto donde debía reunirse la mencionada Junta Computadora y con objeto de resguardar el orden, pues se temía que éste se alterase debido a la excitación política del momento entre los partidos políticos contendientes. La mencionada escolta y por indicación del propio presidente municipal, quedó a las órdenes del presidente de la Junta Computadora, que en aquel caso y en aquel lugar era la única autoridad. Posteriormente me entrevistaron en mi cuartel general, el presidente municipal y el señor licenciado David Pastrana Jaimes, manifestándome que retirara la escolta que, como ya digo, se había establecido en las afueras del recinto donde se encontraba la Junta Computadora; el subscripto manifestó al ciudadano presidente municipal, que desde luego se atendería a sus deseos, siempre que su solicitud para que se retirara la mencionada escolta fuera hecha también por oficio, como ocurrió para que fuera puesta, cosa que no llegó a verificar.

"Fuera de estos informes que me permito proporcionarle, soy ajeno a lo que haya ocurrido dentro de la Junta Computadora.

"Atentamente.- General de División, Roberto Cruz."

El C. Arroyo Ch.: Ya ve, la honorable Asamblea, de parte de quién estuvo el apoyo oficial y cómo querían esgrimirlo estos ciudadanos después de que les había fallado el golpe a su favor. Instalaron la junta, reconocieron la autoridad del presidente de la primera casilla, pidieron la fuerza para que ésta se apostara allí y evitara algunas dificultades, y cuando se vieron derrotados abandonaron el lugar designado por la autoridad y se fueron a instalar a otro lugar, para venir a fraguar esa credencial, que es fraudulenta. Sobre esto nada nos dijo el ciudadano don Antonio Díaz Soto y Gama; se limitó otra vez a espertarnos un discurso lírico y conmovedor, al cual nosotros no debemos dar ningún oído absolutamente, porque este ciudadano no nos ha dicho a nosotros cuales son los méritos tan enormes que nos condujeran hasta a violar la ley y hasta a violar todos los principios revolucionarios con sólo el objeto de introducir aquí al ciudadano Pastrana Jaimes. El ciudadano Soto y Gama ha dicho que alguien le contó que era tiempo perdido el que venía a gastar aquí, y debe tener en cuenta él que no es tiempo perdido, que tiene la tribuna a sus órdenes para venir a este lugar y desenmascarar a tanto falso revolucionario, como nosotros lo vamos a hacer de hoy en adelante.

Dice el ciudadano Soto y Gama que el ciudadano Padilla es de los enemigos de la revolución. ¿Pues por qué el ciudadano Soto y Gama hace dos años, cuando entraba en compañía del ciudadano Padilla en un dictamen global, no se paró enérgicamente, lo rechazó y lo separó? (Aplausos.) Sí, señores. Yo tengo derecho para decirle esto al ciudadano Soto y Gama, cuando viene con mistificaciones a esta tribuna. Yo lo respeto, lo estimo; pero tengo también el valor suficiente para decirle cuándo comete equivocaciones de esa naturaleza. Es decir, cuando cualquier individuo va pegado a Soto y Gama, cualquiera que sea el defecto de ese hombre, es revolucionario, y es estimado y es digno de toda consideración; pero si mañana ese mismo individuo no quiere uncirse al carro de locuras del ciudadano Soto y Gama, entonces es reaccionario, es un traidor, es latifundista, es hipócrita y es inmoral. (Aplausos.)

Es necesario que ya establezcamos nosotros aquí una línea recta, que gastemos menos palabras, que se acabe toda esa verbosidad de pirotecnia y se digan unas cuantas cosas, pero con fundamento, con rectitud, con moralidad, con substancia. ¿Qué nos ha dicho aquí el ciudadano Soto y Gama para que nosotros rechacemos este dictamen? Nada; que él idolatra a Zapata, a Henshaw, a Manrique, pero nada nos ha dicho del dictamen. (Aplausos.) Nosotros, que formamos la mayoría, tenemos la enorme obligación de no oír los discursos del ciudadano Soto y Gama, sino los dictados de la revolución, las voces de todos aquellos que han caído en los campos de combate, en tanto que muchos que vienen a hablar aquí de revolución vivían pegados a las ubres del presupuesto de todos los gobiernos. (Aplausos.) En buena hora nuestra admiración a Manrique, revolucionario y parlamentario; en buena hora nuestro aplauso para el ciudadano Chencho; en buena hora también nuestra admiración porque después de cien años esos ciudadanos de la Huasteca han tenido un grito de rebeldía y han sabido estar a la altura, respondiendo al deber, que les dice que en esta ocasión estuvieron del lado del ciudadano Calles. Estamos de acuerdo en que ha habido jefes de operaciones, como todos esos que usted enumera, que han sido

una barrera para que pase la revolución triunfante; ¿pero qué nos ha dicho usted respecto al dictamen, a las elecciones en Guerrero? ¿qué nada más por ser nosotros consecuentes, con ese rasgo que usted llamó de valentía del ciudadano Pastrana Jaimes, vamos nosotros a perder el dictamen, a violar el sufragio porque se está luchando en muchos lugares, ciudadano Soto y Gama? (Aplausos.) Así es que, ciudadanos, vamos a cumplir con nuestro deber, nada nos ha dicho el ciudadano Soto y Gama en concreto respecto a algunos de los contendientes, luego no tenemos nosotros más que cerrar los ojos y arremeter a favor de la legalidad, porque la legalidad es la revolución. Ya para eso está la Constitución, ciudadano Soto y Gama; para eso están esas leyes que han costado tanta sangre a la República. Si después de hablar de revolución, si después que han muerto muchos hombres para hacer esas leyes las seguimos violando, tened en cuenta que no seremos nosotros los culpables, sino vosotros que por sobre la ley y los principios de la revolución queréis hacer que triunfe el compadrazgo. Ahora estáis contentos porque el ciudadano Pastrana Jaimes está con vosotros; pero si mañana o dentro de dos años, cuando el Partido Agrarista pueda formar una mayoría, el ciudadano Pastrana Jaimes está del otro lado, ¿tendréis los mismos arrestos para defenderlo? ¿Ahora llamáis revolucionario al grado de que haga olvidar los principios legales a quién hace apenas cuatro años vociferaba de Obregón, que ha sido el primero que con mano firme ha impuesto aquí los principios revolucionarios y las doctrinas avanzadas por que tanto estáis luchando? Ciudadano Soto y Gama, ¿no es el ciudadano Pastrana Jaimes quien tuvo que huir de la República seguido de las furias obregonistas que reclamaban venganza y exigían que se cumplieran los postulados de la revolución? ¿Ese es vuestro compadre? ¿Ese es vuestro defenso? ¿Y ese es el ciudadano a quien nos presentáis para que, animados por el cariño que le tenéis, nosotros pasemos por sobre los dictados de la revolución, por sobre los dictados de la conciencia y sobre lo que nos exige nuestra conciencia? No, señores; ante esa oratoria de pirotecnia, ante esos argumentos sofísticos del ciudadano Soto y Gama no debemos tener m s que una línea recta: el cumplimiento de nuestro deber para con la nación mexicana que con sus mil ojos nos está viendo y debemos nosotros dignificar esta Representación Nacional y de una vez por todas acabar con esa farsa de los líderes que quieren embaucar a esa gente que viene de lejanas tierras a cumplir con su deber y con el mandato del pueblo. (Aplausos.)

El C. presidente: Tiene la palabra en contra el ciudadano Morones.

El C. Morones: Permitidme, compañeros, que insista dentro del criterio formulado ayer al tratar el asunto del compañero Castellanos y del ciudadano Calles, insisto en mantener que en discusiones como ésta debe prevalecer el criterio revolucionario y el criterio político, por más que en el caso que nos ocupa hay material más que suficiente para establecer una comparación o una serie de comparaciones en la forma que procedió ayer la comisión que dictaminó el caso Castellanos, y la forma en que hoy se conduce la comisión que presento el dictamen de Pastrana Jaimes y de Padilla. Ayer se alegaron dificultades materiales que obligaron a la comisión a formular un dictamen apegado a la documentación que existía; ayer se exhibió el criterio de que esta misma comisión se hallaba incapacitada para hacer deducciones para ir al fondo de la cuestión. Hoy la comisión sí se pone a examinar paso a paso las situaciones que ayer la comisión que estudió el caso Castellanos no tuvo en cuenta. Dicen los que defienden el dictamen, alguno de ellos, Padilla en un escrito de uno de los comisarios de las cuadrillas correspondientes al distrito que no ocupa, que se prueba el salto, que se prueba la violencia al sufragio en virtud de que ese documento el comisario, delegado que por ignorancia permitió que se instalara en su oficina la Mesa electoral y que ahora hechas las aclaraciones por el representante de Padilla se apresura a confesarlo, y la persona o personas que hacen de esto un argumento quieren probar con ello que los representantes de la candidatura de Pastrana Jaimes sorprendieron o forzaron la voluntad del comisario hasta el grado de obligarlo a que cometiera un verdadero disparate, un verdadero atentado. Si hemos de admitir que por ignorancia el comisario permitió que se instalara la Mesa electoral en su oficina, ¿quién nos responde de que por esa misma ignorancia se haya visto obligado a firmar el documento que se nos leyó esta mañana? ¿Quién nos responde de que también esa serie de comunicados, esa serie de aclaraciones con apariencia de legales que se nos han presentado aquí no hayan sido formuladas por Padilla, o por alguno de los representantes de él? La comisión indicaba también que se había desentendido por completo, lo dijo en varias ocasiones, respecto a calificar la atención de las juntas computadoras, cuando ayer la comisión presidida por el compañero García Telas se mostraba minuciosa, se mostraba escrupulosa, tratando de dar una importancia enorme a la validez de la Junta Computadora; ¿a qué criterio habemos de ajustarnos cuando hoy se nos presenta un caso y se echa mano de razones legales en realidad y al día siguiente, unas cuantas horas después se presenta un criterio diametralmente opuesto? Yo creo, y a ello me refería al comenzar a dirigirme a ustedes, creo que precisa de una vez por todas determinar el criterio que hemos de establecer al resolver estas importantes cuestiones. Pastrana tiene en su pasado manchas, máculas que nos lo presentan como un hombre que no garantiza los intereses de los habitantes, de los ciudadanos del distrito que viene a representar, o que pretende representar, Si hay cargos contundentes, si hay hechos tangibles, si hay, en fin, una documentación bastante para probar que aparte de la función electoral existe en él inconvenientes de tal naturaleza que puedan llevar a nuestro ánimo el convencimiento de que admitirlo en el seno de la Representación Nacional constituiría una traición a nuestro credo revolucionario, que se exhiba, que se diga todo lo que en esa materia tenga que decirse, para que siempre el criterio revolucionario sea el que impere, y si en su caso el ciudadano Padilla tiene en su pasado máculas, tiene en su

actuación serios inconvenientes que no presten en lo absoluto garantías para la causa que estamos defendiendo, también se proceda de acuerdo con el criterio revolucionario. Yo sé que el señor profesor Salazar no está en lo justo cuando pretende que sea representado el valiente, el honorable, el digno Estado de Guerrero, por un hombre como Padilla. Yo sé que Guerrero, ese Estado viril tiene derecho a que lo representen hombres en la acepción completa del vocablo y no fifíes y no individuos artificiales, no hombres como estos, huecos; no gentes que, siguiendo única y exclusivamente una corriente de oportunismo, se nos presentan con la etiqueta de socialistas, de hombres avanzados, cuando nunca han sentido, cuando nunca han podido sentir el dolor ni la desesperación inherentes al indio, al hombre que sufre, al hombre que trabaja. Se queda a la parte contraria a demostrar las máculas que tenga Pastrana Jaimes; pero por lo que se refiere a nosotros no podemos aceptar la presentación de un Padilla, simple y sencillamente porque en su pasado hay una negación completa por lo que se refiere a las cualidades que se necesitan para representar a un Estado, como es el de Guerrero, y más que todo para representar a la causa de la revolución. Padilla, el exprotegido de Victoriano Huerta, el hombre vinculado con la reacción, el individuo que, según las informaciones que tenemos, fue el inspirador de la traición de Figueroa, un individuo que por darse la satisfacción de rendirlo después y adquirir con ello méritos ante el Gobierno revolucionario, no hizo otra cosa que quedar en ridículo y que simular una rendición que permitió al infidente Figueroa una oportunidad más para ratificar el calificativo que hasta entonces se le aplicara, de traidor. ¿Padilla es revolucionario? ¿Padilla es un hombre que en su pasado tenga hechos que comprueben tal cosa?

Ya lamento que el estimable compañero Arroyo Ch., haciendo uso de un derecho muy legítimo al defender su tesis, presente el caso, el hecho de que en un dictamen global fraguado repentinamente y por sorpresa, se haya intercalado en la lista de aquellos diputados de la XXX Legislatura a Padilla, a Soto y Gama y a algunos de nosotros. ¿Qué prueba eso? No prueba otra cosa sino que se trató de hacer mescolanza, se trató de formular un dictamen global de tal naturaleza, que hiciera que en momento dado funcionara la terrible aplanadora cooperatista; pero eso no prueba que el ciudadano Soto y Gama hubiera aceptado como revolucionario a un hombre como Padilla, perfectamente señalado por los elementos revolucionarios, no sólo por los que militan en nuestro grupo, sino también por aquellos que saben perfectamente a qué atenerse por lo que se refiere a la personalidad de Padilla; que se cite un hecho o varios en los cuales Padilla haya demostrado que ama a la revolución. ¿No fue uno de los más reacios para ingresar al bloque callista, no fue uno de los más difíciles de ganar en los momentos en que la acción de los elementos callistas se necesitaba y se requería para enfréntala al poder de la mayoría cooperatista? ¿No fue uno de los que más condiciones puso, no fue uno de los que más coqueto con Adolfo de la Huerta? Aquí hay compañeros que formaron parte de la Legislatura pasada, que saben que es una verdad completa, irrefutable, la que estoy sosteniendo. Les consta que se hacía verdaderamente penoso tener que estar constantemente trabajando a este señor revolucionario, a este falso revolucionario, para hacerle el servicio de salvarlo de la hecatombe aquella. Fue uno de los últimos, les consta compañeros, y jamás, jamás en los momentos en que se hizo necesaria la presencia de hombres de temple, figuró. Padilla no figuró más que en el instante en el que Figueroa reclamo sus servicios, en que era preciso servir de intermediario y que se abonara algo a su haber de falso revolucionario, porque Padilla ha venido a esta tribuna y ha hablado de la acción social que se verifica en otros países, porque ha tenido la audiencia de analizar torpe e imbécilmente la situación de Rusia; porque habla de Lenine y de Troztky, porque ha hablado de otros pensadores y de otros revolucionarios se cree que este hombre es revolucionario. ¿Pues qué los socialistas se improvisan? ¿Pues qué los revolucionarios se improvisan? Mentira; la revolución no se aprende en los libros; no, por más que éstos sean escritos por grandes hombres; la revolución se lleva dentro, la revolución se siente, es algo que mueve la voluntad de un individuo cuando ese individuo tiene la oportunidad de estar en contacto con el dolor. ¿Padilla ha sido un hombre que haya estado sujeto a esas circunstancias? ¡Nunca, nunca, nunca! Treinta días antes de verificarse la elección, trataba aquí en el Distrito Federal de llegar a un arreglo con los partidos nuestros para ver si era posible que fuera postulado por uno de los distritos de este lugar. Yo interpelo con toda atención al compañero Yépes Solórzano para que me diga si es o no verdad que treinta días antes de la elección estaba Padilla todavía haciendo trabajos para presentarse como candidato por el Distrito Federal.

El C. Yépes Sólorzano: Sí, es cierto.

El C. Morones: ¿Cómo es posible que una persona que tiene ya fijado su criterio respecto del lugar en donde va a lanzar su candidatura, y más conociendo todos los compañeros lo difícil, lo arduo, lo penoso que es preparar una elección en provincia y más todavía, aceptando la situación anóma del Estado de Guerrero, la presión oficial en contra de él, como se explica que esta persona no hubiera ido con mayor anticipación a hacer sus trabajos electorales, sabiendo que la maquinaria oficial, como se ha dicho aquí, estaba a disposición de su contrincante o contrincantes? ¿Cómo se explican los compañeros este fenómeno, que cuando se vio desauciado, que cuando nuestro grupo tuvo la audacia, tuvo la indignidad de aceptarlo en su seno, cómo se explica que este señor en menos de treinta días haya hecho su propaganda, organizando este trabajo tan complicado en un distrito que se señala como completamente favorable a Pastrana Jaimes en virtud de la imposición gubernamental ? La historia política de Padilla deriva de la candidez de un estimable compañero nuestro, de Desiderio Borja, perfectamente popular en uno de los distritos de la Estado de Guerrero, que fue sorprendido por Padilla y que se prestó a servirle de biombo, presentándose como su suplente, después de que el pueblo de su distrito lo había aclamado como su

candidato propietario. Desiderio Borja creyó de buena fe que este hombre, que este guerrerense prestigiaría a la revolución, defendería los intereses de los trabajadores del campo de aquel Estado, que se enfrentaría a la oposición, que haría un bello papel y Desiderio Borja tiene sobre su conciencia esta grave falta, o error por lo menos, porque aparte de esa acción de Borja, ningún mérito hubo de por medio para ser traído a Padilla al seno de la Legislatura pasada. Los guerrerenses saben, el mismo compañero Salazar conoce a Padilla es ignorado en el Estado de Guerrero, que Padilla es un desconocido completamente en su Estado. ¿Cómo puede triunfar un hombre en esas condiciones? En buena hora que si se trata de prestigiar a la revolución se busque a los hombres que verdaderamente respondan a las cualidades que deben tener un verdadero representativo de la revolución. Mentira que un grupo, que el grupo nuestro o una parte de él o nuestros aliados, pretendan o pretendamos los que nos arrogamos el derecho de ser reconocidos como los únicos revolucionarios. ¿No hay entre ustedes, y fuera de aquí, enemigos nuestros por cuestión de criterio, hombres revolucionarios que se han sacrificado, que han dado su vida, su sangre en los campos de batalla, hombres que si no han tenido la oportunidad de colocarse dentro de nuestro medio, dentro de nuestra corriente, dentro de nuestro postulados, que si no han tenido las facilidades para llegar al seno de las organizaciones, no por esto han dejado de sentir la revolución, de sentirla, más que comprenderla? Entre el elemento campesino, entre el elemento obrero es muy difícil encontrar la comprensión, acerca de lo que son las doctrinas sociales; es muy difícil encontrar a un grupo de hombres numerosos, de indígenas, de trabajadores del taller que conozcan perfectamente y definan la significación, la trascendencia de las doctrinas nuevas; pero todos estos hombres las sienten, todos estos hombres las viven, todos estos elementos se han sentido posesos de una gran esperanza, cuando han visto que el credo revolucionario va llenando de esperanza y de luz el camino que antes recorrían estos hombres. No entienden ni conocen a Trotzky, no saben quién fue Lenine ni otros grandes pensadores del movimiento social; pero, sin embargo, sin conocerlos, sin comprenderlos, muchas veces sin poderlos leer porque son analfabetos, se sienten revolucionarios, se sienten socialistas y claman por la doctrina igualitaria, y éstos no son el lastre que dijera el compañero Salazar....

- El C. Salazar, Ya voy a comprobarlo.

El C. Morones: Permitirme que insista en ello; Yo no tengo derecho para atribuirle al compañero la idea e denigrar al elemento campesino; no, pero yo he de insistir en esto, porque me sentiría avergonzado, nos sentiríamos avergonzados de reconocer que un lastre, algo inútil, el que se mueve de acuerdo con las influencias a que está sujeto, que el lastre de los indígenas, el lastre de los trabajadores del campo y del taller había dado el triunfo a Plutarco Elías Calles, como se lo dio a Alvaro Obregón en el pasado. ¿A quién vamos a acudir nosotros? ¿A los hombres llamados cultos? ¿A los hombres preparados? ¿A esa clase media anodina? ¿A los hombres que están sujetos a todos los criterios y a todas las conveniencias? ¿A dónde va la revolución a hacerse escuchar, a iniciar su movimiento formidable, siempre cuesta arriba? ¿En que corazones encontrará eco el nuestro? ¿En que cerebro, por más rudimentario que sea, la luz escasísima de nuestros elementos encontrara el reflejo? En el corazón de los que si no saben leer, sí saben sentir; de los que si no tienen un cerebro cultivado, sí saben pensar por lo menos embrionariamente, obrando por intuición. Esta es nuestra condición y el compañero Salazar a quien yo respeto y de quien no tengo que decir ni media palabra, el ciudadano Salazar tiene derecho de pedir a todos que el Estado de Guerrero, al que yo amo tanto como él, porque en momentos de lucha defendió y acogió en seno a la pequeña carabana que acompaño a Obregón por las montañas surianas y le dio a Obregón un estímulo; ¿cómo no querer a ese Estado del cual es originario y representante el compañero y en nombre de él le pido que sea m s exigente, que abra las puertas de esta Cámara a esos hombres que yo señalaba, pero que no se parecen en nada a la histórica figura de Padilla? (Aplausos,) No, los grupos confederados tienen en su seno hombres de antecedentes que inspiran nuestro respeto y nuestra atención; los elementos del bloque de ustedes, como todos los grupos parlamentarios, tienden a prestigiarse; pero qué ¿es posible que la falsa oratoria, que la preparada oratoria de un Padilla pueda haber influído en los cerebros, en la sana intención, en el gran corazón de los verdaderos revolucionarios que militan en las filas de ustedes, para creer que éste es elemento que viene a prestigiarlos? Si es que no hablamos a nuestro favor si es que hablamos a favor de la revolución que debe estar representada por hombres de talla, hombres gigantes, por lo menos en lo que se refiere a sentimientos, a intereses; aquí los anodinos salen sobrando, los hombres que no sean de acción; lo mismo del modesto compañero que no puede expresar su pensamiento, que no sea un enciclopedista, que del hombre de nosotros que felizmente ha salido preparado para decir bellas cosas en la tribuna, de todos estos hombres se requiere que tengan por lo menos tamaños, los antecedentes y la energía bastantes para que podamos estar seguros, aunque sea en forma relativa, de que si los gritos de nuestros enemigos llegaran a hacer seria nuestra situación y a determinar otra crisis, en dondequiera encontrar hombres; ¿Pero cómo estar tranquilos cuando recuerdan los compañeros con que tropezamos en los momentos en que el bloque callista se estaba formando, cómo querer que se repitan de nuevo aquellos hechos vergonzantes de que había necesidad de escoltar a un excooperatista e invitarlo a comer, e invitarlo a tomar unas copas para venir hasta el seno de esta Cámara? ¿Cómo es posible que nosotros queramos de esta naturaleza, hombres que obraron, como obró Padilla, eximiéndose en momentos difíciles? ¿Es esta la representación que habrá de tener el Estado de Guerrero y sois vosotros, compañeros del bloque confederado, los que no tendréis un rasgo , un gesto que sea una promesa, que sea una bella realidad en tratándose de ecuanimidad para juzgar de la situación en que estamos colocados? Es preciso que

os déis cuenta de que no se puede tomar a cualquier hombre, al primero que pase por la calle diciéndose revolucionario para que engrose nuestras filas. Los revolucionarios no se reclutan en las calles de la metrópoli, los revolucionarios no se reclutan en los centros populosos, los revolucionarios verdaderos siempre se han reclutado en la provincia, en las montañas, en los pueblos ignorados, son raros los casos y excepcionales aquellos en que una ciudad de importancia o un centro poblado, también de importancia, de un continente de hombres enteros y de hombres íntegros. ¿No en esta misma capital una parte del pueblo, pequeña o grande, lo mismo le daba aplaudir a Porfirio Díaz que a Madero o que a Victoriano Huerta? ¿Lo mismo pasaba en aquel entonces en otros lugares? No, por esa intuición, por esa apariencia, por esa realidad del sentimentalismo del pueblo nuestro, precisamente se dieron más ejemplos de conciencia. Es en nombre, pues, de un interés común, de un prestigio común, por lo que vengo a esta tribuna a hablaros nuevamente de que al votar este dictamen, lo hagaís en sentido negativo, lo hagáis en contra de la tesis que pretenden sustentar los que han formulado no diré un disparate, atenuaré el término, una verdadera aberración. Se me dirá: Morones ha hablado y ha hablado y no ha dicho nada por lo que se refiere a tal o cual hecho, a tal caso, a tal detalle de apariencia legal. No, es que yo estoy obsesionado, es que yo quiero obsesionarme, quiero autosugestionarme, y no me arrepiento de ello, pensando en que lo que m s urge, lo que m s falta hace, es que de una vez por todas definamos el criterio con el que todos los casos habrán de tratarse en lo futuro. Imposible; se me dirá: ¿qué culpa tenemos de que un distrito del Estado de Guerrero mande a un reaccionario? Se me dirá: ¿qué culpa tenemos? Debemos respetar el voto de un distrito aun cuando haya mandado a un enemigo de la revolución; pero yo no puedo admitir, tengo derecho de no admitir eso, ante la necesidad ingente de consolidar la fuerza de la revolución, y la fuerza de la Revolución se ha consolidado únicamente en el Poder Ejecutivo: de los tres poderes que componen, que son el eje en torno del cual gira el funcionamiento nacional, toda su vida y todas sus actividades, solamente en el Poder Ejecutivo se ha visto homogeneidad en la mayor parte de los casos, por lo que se refiere al criterio revolucionario. En el poder Judicial, vosotros sabéis tan bien como yo, qué es el Poder Judicial, qué son los Juzgados, qué cosa es toda esa máquina en donde de una manera descarada se comercia con la ley, se vulnera la ley, se aplica no dos criterios, cincuenta criterios distintos por parte de los hombres encargados de impatir justicia. ¿No ha sido mil y mil veces maldecido por los humildes la representación que actualmente, salvo muy contadas y muy honrosas excepciones, tiene la revolución en el Poder Judicial? ¿No están más corrompidos los encargados de impartir justicia que en la época porfiriana? ¿ No hay más cinismo, no a plena luz y en mitad de la calle se comercia y se transa, etcétera, etcétera? Y nosotros también, ¿no es en el Poder Legislativo donde se ha visto los mayores desacatos, las mayores claudicaciones? ¿y todavía hay ingenuos, y todavía hay hombres que pretendan que se abran las puertas de este recinto para individuos que son un amargo a la causa de la revolución?

No, es que al hablar de la revolución no solamente hablamos de la revolución de aquí; si la revolución no es algo exclusivo, algo hecho puramente para el hombre o un grupo, es algo que está en todos los que la sienten, en todos los que la comprenden, sobre todo los que la sienten. Todos los individuos, no sólo de un lugar, sino del mundo entero, en virtud de este enorme sentimiento de esta fuerza imánente van caminando hacia su liberación, y veis a esos hombres a ese ejército de desarrapados, de desheredados de la fortuna, a ese montón, a esos millones de hombres que han estado sujetos por tan largos años a la inicua explotación y les pedís que tengan un gesto para sus enemigos o para los hombres que los representan; queréis detener el avance de esa columna en marcha, y esto es insensato, esto es suicida. Por esto os pido que meditéis acerca de la trascendencia que tiene fijar un criterio bajo la responsabilidad de todos en materia tan importante como es esta, a mi manera de ver. Que venga la nulidad de elecciones si queréis, volvedlas a hacer, pero que haya el gesto de que unánimemente, o por lo menos en una forma más clara más franca y más justiciera esté representado el glorioso Estado de Guerrero por hombres que verdaderamente respondan a la responsabilidad que se requiere en este momento de todos los que estamos formando este Colegio Electoral. Padilla en manera alguna puede ser; yo sé, yo tengo la convicción, y de ello me felicito, que una buena parte de los elementos del Bloque Confederado, los que conocen un poco a Padilla, nunca se atrever n a decir que es revolucionario; nunca, absolutamente nunca. Yo sé que se votar este asunto por tales o cuales razones que no me detendré a analizar, pero que de todas maneras no es la convicción la que mover la voluntad de los elementos del Bloque Confederado que voten apoyando el dictamen. Si todavía hay esperanzas de hacer el reajuste invocado en legislaturas pasadas, si la voz de la revolución se ha de dejar oír en los corazones y en los espíritus de los compañeros que integran este Colegio Electoral sin distingos de bloques, que lo diga la votación. Yo pido desde ahora votación nominal y en su oportunidad pediré que sea apoyada esta moción para poder saber quiénes son los elementos que pueden constituir una garantía, una promesa para la causa de la revolución favoreciendo a todos o creando responsabilidades para todos y quiénes son que en forma sistemática o por propia convicción, por error o por maldad, quieren hacer creer que Padilla ha triunfado cuando ni él mismo lo cree; es imposible que él crea que ha triunfado, no puede nadie que conozca a fondo el proceso seguido en la elección del distrito a debate, no puede nadie aceptar el triunfo de Padilla, como nadie puede aceptarlo como revolucionario, es algo que avergüenza, yo preferiría al mismo Bulnes sentado aquí que a Padilla, porque Bulnes al fin es el producto de determinado medio, es en fin un hombre en el tramonto de la vida; pero admitir las falsas apariencias de radicalismo de un Padilla, de un hombre joven en apariencia, pero viejo

en espíritu; admitir que este hombre sea el que represente a un Estado como el de Guerrero es algo que avergüenza, es algo que denigra, si acaso entra, como dijera Pastrana Jaimes, por la cloaca, porque por ahí tiene que entrar, si acaso entra y llega aquí; le vamos a hacer el honor de discutir con el precisamente sobre aquellos temas que audazmente ha tratado de presentar a la consideración de los compañeros confederados, queriendo con ello ganar su voluntad. No, yo prefiero cincuenta veces la ignorancia relativa o real de cualquiera de nuestros compañeros, a esa sapiensa falsa, a ese falso criterio de un hombre como Padilla; Padilla, el detractor de la revolución; Padilla, el enemigo acérrimo del socialismo, diciéndose socialista; Padilla, que no entiende el socialismo; Padilla, que no puede entender la revolución; esa es la condición nuestra, ese es el estado de nuestro espíritu cuando venimos a hablar en contra de Padilla, en contra de Padilla que no ha triunfado, oidlo bien, y si vosotros, inspirados siempre, seguramente por afán de demostración de fuerza inherente a las mayorías que a cada paso quieren demostrar que son fuertes, abrí la entrada a Padilla, habréis abierto una brecha al grupo revolucionario y muy pronto os arrepentiréis de ello. De nuevo apelo a la voz de la concordia y de la honradez, de nuevo apelo a vuestra conciencia de revolucionarios, de nuevo apelo al esfuerzo de partido de todos, tratando de no dividirse, tratando de no ahondar nuestras dificultades de no acrecentar nuestras pasiones. Con este mismo deseo vengo a vosotros, todavía es tiempo, habré de repetir que hasta que verdaderamente la fuerza de las circunstancias, los hechos, los chanchullos me demuestren que hay que perder, hasta entonces perder la esperanza, y lo mismo que ahora he hablado de concordia y propuesto la paz en nombre de la revolución, tendré, no el gusto, sino el dolor de aceptar la guerra despiadada, sin cuartel, que habrá de destruirnos y llevarnos a una situación a la que nadie puede llegar triunfante, unos u otros; yo he querido, como sinceramente he creído lo han entendido los compañeros, que se den cuenta de su responsabilidad, dar una facilidad más, aunque sea en la modesta esfera de nuestras actividades, al Gobierno radical del general Calles, continuación del Gobierno radical del general Obregón; yo he querido que cuando este hombre entre al Gobierno, cuando inicie sus trabajos, cuando el enemigo común enderece todos sus fuegos en contra de él, sólo exista una barrera infranqueable por lo que se refiere al Poder Legislativo y que todos como un solo hombre, todos con una sola voluntad puedan hacer frente a esta situación que será difícil, porque la lucha ser interna, porque la lucha será externa también, porque el capitalismo organizado en nuestro país no perdonar nunca al México revolucionario el triunfo obtenido con la elección y con la victoria del general Calles. Por esto, en cumplimiento de este deber, para tener derecho mañana de decir; cuanto esfuerzo pudo hacerse para evitar que vinieran hombres que desprestigian nuestra causa que vinieran a ahondar nuestras pasiones, cuanto esfuerzo pudo hacerse en ese sentido tratando de buscar la concordia y fortalecer con ello nuestro frente, todo esto se ha hecho; pero si no pudo lograrse nuestro anhelo culpa será de aquellos que obcecadamente no quisieron oír la voz de la sinceridad. Todavía confío, compañeros del Confederado, en que atenderéis nuestra voz. (Aplausos.)

El C. Díaz Soto y Gama: Pido votación nominal.

El C. Morones: Pido votación nominal.

El C. secretario Valadez Ramírez: En votación económica se pregunta si está suficientemente discutido.

El C. Siurob: Una moción de orden, señor presidente.

El C. secretario Valadez Ramírez: Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo.

El C. Siurob: Para una moción de orden.

El C. secretario Valadez Ramírez: Suficientemente discutido.

El C. Siurob: Para una moción de orden.

El C. Pastrana Jaimes: Para contestar alusiones personales. Tengo derecho de hablar.

El C. secretario Valadez Ramírez: Habiéndose solicitado votación nominal, se procede a recogerla.

El C. Siurob: No sabe su señoría lo que voy a hablar.

El C. secretario Valadez Ramírez: Estamos en votación. Después.

El C. Siurob: Para hacer uso de la palabra me autoriza el Reglamento y su señoría no tiene derecho de impedirme hacer uso de la palabra. Protesto contra el hecho de que su señoría se niega a concederme el uso de la palabra, en uso de mi legítimo derecho.

El C. secretario Valadez Ramírez: Se invita a los ciudadanos Prieto Ernesto y Arroyo Ch., Covarrubias y Pérez Gil y Ortiz y Puig auxilien a la Secretaría a tomar la votación. Por la afirmativa.

El C. Puig y Casauranc: Por la negativa.

El C. secretario Valadez Ramírez: Se ruega a los ciudadanos presuntos diputados presentes que al votar se sirvan decir su nombre, a fin de que la secretaria pueda tomar la votación lo más rápidamente posible.

(Se recoge la votación.)

¿Falta algún ciudadano diputado o presunto diputado por votar? Se procede a recoger la votación de la Mesa. (Votación.) Votaron por la negativa sesenta ciudadanos diputados y presuntos diputados; por la afirmativa ciento sesenta y seis.(Aplausos.)

En consecuencia, la Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 4to. distrito electoral del Estado de Guerrero, los ciudadanos Ezequiel Padilla y Galo Soberón y Parra. (Aplausos nutridos.)

Se consignar la documentación correspondiente, de acuerdo con el dictamen.

El C. Zincúnegui Tercero: Pido la palabra.

El C. presidente: ¿Con qué objeto?

El C. Zincúnegui Tercero: Para una moción de orden. Para referirme a un artículo reglamentario.

El C. presidente: Tiene la palabra el ciudadano Zincúnegui Tercero.

El C. Zincúnegui Tercero: El Bloque

Legalista, ciudadano presidente, quiere hacer a usted, con toda la atención debida, una súplica a efecto de seguir evitando falsas interpretaciones. El Bloque Legalista desea, en cumplimiento de un precepto reglamentario y por convenir así a los intereses de todos los presuntos, que bien sea al final de las sesiones, en caso de no poderse en la mañana, o bien, antes de que éstas principien, se dé lectura a la orden del día. Está ocurriendo que diariamente venimos aquí los presuntos si saber qué casos van a entrar a discusión. Este es un principio de moral política. Es necesario que ustedes que tienen la mayoría perfectamente controlada, no estén incurriendo en un error que sería perjudicial a los intereses de su misma mayoría. Nosotros reconocemos toda la honradez que caracteriza a la Presidencia de la Cámara y, por lo tanto, esperamos los del Bloque Legalista, y con nosotros todos los elementos que se encuentran en igualdad de circunstancias, que se accederá a esta petición. Me refiero a la fracción II del artículo 23 reglamentario. Se me pondrá decir que se trata de un artículo del Reglamento vigente para las sesiones ordinarias de la Cámara; pero por razón natural, por analogía tiene que aceptarse este Reglamento para las sesiones de Colegio Electoral. En consecuencia, esperamos que se cumplimentarán nuestros deseos.

El C. presidente: La Presidencia manifiesta al ciudadano presunto diputado Zincúnegui Tercero que se cumplimentará el precepto reglamentario a que ha hecho referencia.

El C. Siurob: Pido la palabra.

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"1a. Comisión revisora de Credenciales.- 5a. Sección.

"H. Asamblea:

"A esta sección paso para su estudio y dictamen el expediente relativo a la elección para diputados al Congreso de la Unión por el 11 distrito electoral del Estado de Guanajuato.

"Del examen minucioso que se hizo de la documentación, aparece que jugaron las fórmulas Arroyo Ch.- Montenegro, Herrera- Arce y Munguía Torres- Paniagua, para diputados propietarios y suplentes, respectivamente.

"La Junta Computadora se instaló legalmente, con una asistencia de 32 presidentes de casillas, llenando todos los requisitos que señala la ley de la materia.

"El resultado de la votación es como sigue: 3,935 votos a favor de Agustín Arroyo Ch., para diputado propietario; 3,952 a favor de Fermín Montenegro, como diputado suplente; 1,702 a favor de José Herrera para diputado propietario; 1,658 a favor de Alberto Arce como diputado suplente; 686 a favor de Francisco Munguía Torres, como diputado propietario, y 758 a favor de Herbert Paniagua, para diputado suplente.

"La votación de la 3a. casilla de Cortazar, no fue tomada en consideración por esta comisión, en virtud de que en el paquete respectivo no se encontró autorizado el padrón necesario para comprobar la votación; igualmente, no fue tomada en consideración la votación de la 3a. casilla de Comonfort, en atención a que esta misma comisión encontró justificada la protesta que presentó el candidato Paniagua, en el sentido de que la votación sobrepasa al número de ciudadanos empadronados.

"Hay algunas otras protestas de parte de los candidatos Munguía Torres y Paniagua, consistentes en que el instalador no firmó, en que el instalador no estaba empadronado, etc., pero que, a juicio de esta misma comisión, no son de tomarse en cuenta, porque no afectan en nada el fondo de la elección ni encontrarse justificadas.

"Por todo lo anteriormente expuesto, nos permitimos someter a la consideración y aprobación de esta Asamblea, el presente caso, conforme a las siguientes proposiciones:

"Primera. Se declaran válidas las elecciones verificadas para diputado propietario y suplente al Congreso de la Unión por el 11 distrito electoral del Estado de Guanajuato.

"Segunda. Son diputados, por haber obtenido la mayoría de votos, los CC. Agustín Arroyo Ch. y Fermín Montenegro, propietario y suplente, respectivamente, por el expresado distrito."

"Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, D. F., 21 de agosto de 1924.- Procuró Dorantes- Juan Madrigal.- Silvestre Guerrero."

Está a discusión. Los ciudadanos presuntos diputados que deseen hacer uso de la palabra sírvanse pasar a inscribirse. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobado. (Aplausos.)

En consecuencia, la Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 11 distrito electoral de Guanajuato, los ciudadanos Agustín Arroyo Ch. y Fermín Montenegro. (Aplausos.)

"1a. Comisión Revisora de Credenciales.- 2a. Sección

"H. Asamblea:

"Los que subscribimos, miembros de la 2a. Sección, 1a. Comisión Revisora de Credenciales, habiendo examinado los expedientes relativos a la elección de diputados al Congreso de la Unión, verificada el día 6 de julio próximo pasado, en el 1er. distrito electoral del Estado de Yucatán, encontramos que las elecciones de referencia tuvieron lugar con apego a la ley, sin que se registrara incidente ni protesta alguna.

"Revisados todos los documentos relativos, la comisión que subscribe llegó al convencimiento de que obtuvieron el triunfo como diputados propietario y suplente, respectivamente, los ciudadanos José E. Ancona y José Pérez Rosado, obteniendo, el primero, 9,166 votos, y el segundo, igual número de votos.

"En tal virtud, sometemos a la deliberación y aprobación de la H. Asamblea, las siguientes proposiciones:

"Primera. Son válidas las elecciones para diputados al Congreso de la Unión, efectuadas el día

6 de julio último, en el 1er. distrito electoral del Estado de Yucatán.

"Segunda. Son diputados propietario y suplente, respectivamente, por el mencionado distrito, los ciudadanos José E. Ancona y José Pérez Rosado.

"Sala de comisiones de la Cámara de diputados del Congreso de la Unión.- México, agosto 20 de 1924.- Francisco López Soto.- Marino Pérez.- Fernando González Madrid."

Está a discusión. Los ciudadanos presuntos diputados que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse. No habiendo oradores, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobado.

En consecuencia, la Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 1er. distrito electoral de Yucatán, los ciudadanos José E. Ancona y José Pérez Rosado (Aplausos.)

- El C. secretario Vázquez, leyendo:

"2a. Comisión Revisora de Credenciales.- 1a. Sección.

"H. Asamblea:

"A la 1a. Sección de la 2a. Comisión Revisora de Credenciales, tocó conocer del expediente número 111, que se relaciona con las elecciones de diputados propietario y suplente al Congreso de la Unión, que tuvieron verificativo en el 22 distrito electoral del Estado de Jalisco.

"Abiertos los expedientes para su estudio y revisión, se encontró que en dicho distrito contendieron las fórmulas registradas: ciudadanos "Juan Madrigal y Fernando Chávez", obteniendo una votación de 4,943 votos; Fructuoso Aguirre y Felipe Jiménez", con 499 votos, y "José Rodríguez Bañuelos y Joaquín Romero", con 198 votos.

"Los documentos de los paquetes electorales están de acuerdo con las prescripciones establecidas en la Ley Electoral vigente para poderes federales.

"Las elecciones que en dicho distrito se verificaron, al parecer, se desarrollaron tranquilamente, sin que se haya suscitado incidente alguno, pues la Junta Computadora se instaló en el lugar designado por la Presidencia Municipal de la ciudad de Ameca. Durante el funcionamiento de dicho Junta Computadora, no se presentaron protestas de ninguna clase, que partido alguno hubiese objetado la elección de alguna casilla.

"En vista de estos antecedentes, y de la mayoría absoluta de sufragios que obtuvieron los ciudadanos Juan Madrigal y Fernando Chávez en los comicios electorales de dicho distrito, la comisión que subscribe se permite someter a la aprobación de la H. Asamblea, los siguientes puntos resolutivos:

"Primero. Son válidas las elecciones que para diputados propietario y suplente al Congreso de la Unión, tuvieron verificativo en el 22 distrito electoral del Estado de Jalisco, el día 6 de julio último.

"Segundo. Son diputados propietario y suplente, respectivamente, por el citado distrito, los ciudadanos Juan Madrigal y Fernando Chávez.

"Sala de Comisiones de la H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, D. F., a 20 de agosto de 1924.- Alfredo Romo.- R. Quevedo."

Está a discusión el dictamen. Los ciudadanos presuntos diputados que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse. No habiendo oradores, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobado. (Aplausos.)

En consecuencia, la Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: Son diputados propietario y suplente, respectivamente, por el 22 distrito electoral de Jalisco, los ciudadanos Juan Madrigal y Fernando Chávez. (Aplausos.)

- El C. secretario Valadez Ramírez, leyendo:

"2a. Comisión Revisora de Credenciales.- 1a. Sección.

"H. Asamblea:

"A esta 1a. Sección de la 2a. Comisión Revisora de Credenciales, tocó conocer el expediente número 178, que se refiere a las elecciones verificadas el día 6 de julio último en el 1er. distrito electoral del Estado de Puebla, para diputados propietario y suplente al Congreso de la Unión.

"Hecho el estudio de la documentación respectiva, aparece que en dicho distrito electoral contendieron las fórmulas registradas por los CC. Luis Sánchez de Cima y Donaciano Jiménez; Rodolfo los que forman la segunda fórmula, y 708 y Herón Jiménez.

"La votación que se obtuvo en esta elección, se dividió en la siguiente forma: 3,441 y 3502 votos para el propietario y suplente de la primera fórmula; 1,874 y 1863 votos, respectivamente, para los que forman la segunda fórmula, y 708 y 605 para los que forman la tercera.

"De acuerdo con la prescripción contenida en la Ley Electoral vigente, para Poderes Federales, la Junta Computadora, única que funcionó en dicho distrito electoral, se instaló en el lugar designado por la autoridad municipal de la cabecera y principió sus labores con la concurrencia de treinta y ocho ciudadanos presidentes de casillas electorales de las cuarenta y cuatro que se designaron para funcionar.

"Las elecciones, al parecer, se desarrollaron dentro de una actitud pacífica.

"Durante el funcionamiento de la Mesa de la Junta Computadora, según se ve del acto de la misma, se presentaron varias protestas denunciando irregularidades cometidas en las casillas números 5, 22 y 23, que venían, según se asienta, acompañadas en los paquetes electorales; se procedió a la busca de las protestas mencionadas, y después de revisar cuidadosamente cada paquete, no se encontró más que una que se refiere a la casilla número 1, pero por carecer de toda justificación legal para que hiciera prueba plena de su contenido, no se tomó en consideración dicha protesta.

"Igualmente consta en el expediente un oficio de la Secretaría de Gobernación, que transcribe una protesta de los partidos regionales coligados, denunciando irregularidades cometidas en distintas

casillas electorales, pero como este documento no revela más que una simple información por estar carente de toda justificación legal que pudiera certificar los hechos que detalla, la comisión que subscribe lo conceptuó sin ningún valor y no lo tomó en consideración.

"Por los antecedentes expuestos y en vista de la mayoría absoluta de sufragios que obtuvo la fórmula Sánchez de Cima- Jiménez en las elecciones pasadas para representantes del 1er. distrito electoral del Estado de Puebla, la comisión que subscribe se permite someter a la aprobación de la H. Asamblea, los siguientes puntos de acuerdo:

"Primero: Son válidas las elecciones que para diputados, propietario y suplente, al Congreso de la Unión, tuvieron verificativo el día 6 de julio anterior en el 1er. distrito electoral del Estado de Puebla.

"Segundo. Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el mencionado distrito, los CC. Luis Sánchez de Cima y Donaciano Jiménez.

"Sala de Comisiones de la H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.- México, D. F., a 21 de agosto de 1924.- La Comisión: Alfredo Romo y R. Quevedo."

Está a discusión. Los ciudadanos presuntos diputados que deseen hacer uso de la palabra, sírvanse pasar a inscribirse. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobado. (Aplausos.)

En consecuencia, la Presidencia, por conducto de la Secretaría, declara: Son diputados, propietario y suplente, respectivamente, por el 1er. distrito electoral del Estado de Puebla, los ciudadanos Luis Sánchez de Cima y Donaciano Jiménez. (Aplausos.)

"Orden del día para el 23 de agosto de 1924.

"Discusión de los dictámenes correspondientes a los siguientes distritos electorales: 7o. de Guerrero, 7o. de Jalisco; 2o., 12 y 14 del Estado de México, 2o. de Puebla y 2o. de Tabasco."

El C. presidente, a las 19.27: Se levanta la sesión y se cita para el sábado 23 del actual, a las once horas.