Legislatura XLIV - Año II - Período Ordinario - Fecha 19591127 - Número de Diario 29

(L44A2P1oN029F19591127.xml)Núm. Diario:29

ENCABEZADO

MÉXICO, D. F., VIERNES 27 DE NOVIEMBRE DE 1959

DÍARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos. el 21 de septiembre de 1921.

AÑO II. PERIODO ORDINARIO XLIV LEGISLATURA TOMO I. - NÚMERO 29

SESIÓN SOLEMNE

DE LA

H. CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 27

DE NOVIEMBRE DE 1959

SUMARIO

1.- Se abre la sesión solemne. En homenaje a los hombres que iniciaron la Revolución Mexicana. Pronuncian discursos alusivos los CC. diputados Celso Vázquez, Vicente Salgado Páez y Blas Chumacero Sánchez.

2.- Se lee y se aprueba el acta de la presente sesión, levantándose ésta.

DEBATE

Presidencia del C. ENRIQUE GÓMEZ GUERRA

(Asistencia de 90 ciudadanos diputados).

El C. Presidente (a las 13.10 horas): Se abre la sesión solemne en homenaje a los hombre que iniciaron la Revolución Mexicana, y de conformidad con el acuerdo tomado por esta H. Asamblea en la sesión el día 19 del corriente. Tiene la palabra el C. diputado Celso Vázquez Ramírez.

El C. Vázquez Ramírez Celso: Señor Presidente de esta honorable Cámara, señoras y señores diputados, distinguidas personalidades que nos acompañan: agradezco a vuestra soberanía el haber aprobado mi proposición para efectuar este recinto un homenaje de admiración y respeto a los hombres que iniciaron la Revolución.

Dos lugares eran los indicados: la tumba de nuestros próceres o esta tribuna que simboliza la expresión del pueblo de México; en la presente ocasión, será éste el sitio donde manifestaré mi modesto pensamiento, en la forma sincera que lo he hecho toda mi vida.

Pertenezco a la primera generación que hereda directamente los postulados de la Revolución Mexicana.

Educado en el heroico Colegio Militar, bastión secular de las tradiciones de México, depositario de la consigna de la patria, que es: "Por el Honor de México", aprendimos a venerar y respetar las doctrinas revolucionarias; es nuestra generación, la predestinada a conservar los principios libérales, por los que lucharon nuestros antepasados.

Esta sesión solemne que vuestra soberanía acordó se efectuara en este día, es justa, y estoy seguro de que cuando todos ustedes dieron su aprobación para este acto, pensaban en las lágrimas de nuestras madres, en la angustia de las esposas abandonadas, en los huérfanos de la Revolución; en fin, en los hombres que murieron por legarnos un México mejor; pensaban en esa juventud valiente y decidida que llevada por su amor a México, empuñaba un fusil para ir a morir en las inmensas llanuras del Norte o en la jungla del Sur de nuestra patria; pensaban en los hombres que a lo largo y a lo ancho del país, abandonaron los surcos en los campos, los talleres y las minas, para cimentar nuestra estructura constitucional.

De todos es conocido cómo se engendró ese anhelo de lucha para encontrar mejores hombres que rigieran nuestros destinos; todos sabemos que en lo más intrincado de nuestras sierras, en los pueblos más alejados como: San Pedro Soteapan, Mecayapan, Chinameca, Acayucan, Río Blanco, Naco y Cananea, constantemente se escuchaba el grito lacerante de la gente humilde de nuestro pueblo que decía refiriéndose al mismo: ¡Pueblo, sálvame, que voy vendido para Valle Nacional¡

Pobres gentes, eran incultos, sumidos en la ignorancia, en que deliberadamente se les tenía; pero sabían por intuición propia, que sólo el pueblo era el único que podía salvarlos.

Y el eco de sus ruegos y las múltiples violaciones de los derechos humanos, fueron los que armaron los brazos de nuestros campesinos, de nuestros obreros, para derrocar a un régimen despótico y tirano que cada día se encontraba más lejos del pueblo que pretendía gobernar.

Años después de iniciado nuestro movimiento reivindicador, fue necesario en 1913, volver a cambiar las herramientas de trabajo, por el rifle nuevamente, vengar la sangre derramada por el apóstol de México, por el hombre noble y generoso, como lo era el señor don Francisco I. Madero, que había sido vilmente asesinado por quienes tenían el deber ineludible de respetarlo y protegerlo, y desde esas fechas, hasta nuestros días, nace lo que hoy conocemos como: glorioso Ejército Nacional.

Permítaseme, señoras y señores, dedicar unas palabras a esta institución, a la que tengo el honor de pertenecer.

Nuestro Instituto Armado, es el mismo que inició el movimiento reivindicador de 1910, y que se

ha venido nutriendo de los tres sectores que forman nuestro Partido: el campesino, el obrero y el popular, y que, a través de los años, ha sufrido una transformación, siempre de superación, por medio de sus diferentes centros de cultura, que fueron creados por los regímenes, revolucionarios, y podemos afirmar con satisfacción, que en nuestro Ejército no hay analfabetas y, en cambio existe un porcentaje elevado de cultura y capacidad.

En el orden científico, sus miembros tienen buena reputación, como elementos capaces y regidos de una ética profesional tan estricta como los del instituto más exigente; y todo esto, señores, es producto de la educación revolucionaria; luego, sí hay moral y hay principios éticos dentro de nuestra institución.

Hoy, nuestro Ejército sirve Única y exclusivamente al pueblo de México y, consecuentemente, a los regímenes revolucionarios, que éste mismo elige, libremente; de igual manera, es depositario de la soberanía nacional. Ya nuestra patria no es la misma de la época porfiriana; a través de los años se ha transformado su fisonomía social, y a esta transformación han contribuido todos los buenos mexicanos y, de manera especial, los hombres y mujeres que militan en nuestro Partido.

Asimismo, nos sentimos satisfechos, porque la prensa nacional que representan a la opinión pública, en sus editoriales que sirven para orientar a la Nación rinde homenaje a la Revolución; hace unos días, mejor dicho, el 21 del presente mes, uno de ellos intitula su editorial: "Revolución Mexicana", y como lo considero de interés, nacional me he permitido reproducir unos párrafos, a que la letra dicen:

"Ya nadie discute ahora el fondo de justicia que hubo en el movimiento social y político que se conoce con el nombre de Revolución Mexicana; no sólo por su ideario y sus condiciones peculiares, sino por el año en que inicióse; es algo muy diferente a otra revolución.

"Nuestra Revolución surgió de los elementos de la clase media, como un doble anhelo: por una parte, romper una oligarquía que habíase formado en torno al viejo dictador Profirió Díaz. La democracia política, fue el anhelo popular encarnado en la persona de Francisco I. Madero.

"El otro aspecto fundamental fue la injusticia que cometíase, en lo económico, con la gran masa campesina del país; el latifundio, las "tiendas de raya", y aun los castigos corporales, como en el Sudeste de México, fueron duras realidades.

"Los líderes que surgieron de la clase media, profesionales, sobre todo, hicieron los planes revolucionarios inspirados en esos ideales de justicia.

"Y los campesinos dieron la carne estoica y abnegada, para que se formasen las huestes revolucionarias.

"Ayer, pudo México conmemorar el inicio de su Revolución, en paz y con una ordenada alegría.

"Las principales calles y avenidas de esta Capital tuvieron el aspecto de una fiesta popular, en que las familias salieron con el ánimo de un esparcimiento patriótico y a presenciar el desfile deportivo que , en verdad, fue bastante lucido.

"En cambio, pudo afirmar sus anhelos de pacífica convivencia, de mayores libertades políticas, dentro de las normas de justicia que inspiraron el movimiento revolucionario mexicano".

Después de lo que acabamos de leer, podemos afirmar que nuestra Revolución ha triunfado definitivamente, en las conciencias de la gran familia mexicana, pues siendo un diario tan importante, el que tal cosa afirma, y siendo el reflejo de la opinión pública, ésta se encuentra en su etapa definitiva.

Señores diputados: nosotros, como militantes de un partido político, cuyas normas son eminentemente revolucionarias, y que por razón natural somos los depositarios de las conquistas en nuestra lucha armada, que hoy estamos recordando, estamos enjuiciados por una juventud estudiosa, universitaria, que nos señaló nuestros errores, cuando conmemoraba el IV Centenario de su Fundación; pero ese enjuiciamiento, que se nos hiciera, llegó a su término, en el preciso instante, en que ciñera la banda tricolor, sobre su pecho, un nuevo Presidente universitario, pues la ciudadanía del pueblo de México sabe, por experiencia propia, que cuando el poder Ejecutivo lo ostenta una persona que se ha educado en las rígidas disciplinas de una Universidad; es una garantía para el progreso de México.

Y como si esto fuera poco, la mayor parte del equipo del señor Presidente de la República, así como los dirigentes de nuestro Partido Revolucionario Institucional, y las personas señaladas como elementos de enlace y coordinadores de actividades, entre los Poderes Legislativo y Ejecutivo, también fueron educados dentro de las mismas doctrinas y las mismas ideas, y, por lo tanto, tendrán que dar el máximo rendimiento en beneficio de México.

Tampoco debemos olvidar que hoy, como ayer, y como mañana, estaremos los de la gran familia revolucionaria sujetos a la crítica; pero nos sentimos más seguros de nuestro destino, porque como decía hace un momento: desde el Ejecutivo, conjuntamente con su equipo de trabajo, no son improvisados, sino están respaldados por una amplia cultura y experiencia, en la ciencia de gobernar; puede haber errores en este Régimen, por ser humanos los que gobiernan, pero serán menos sensibles.

No hace mucho tiempo, en esta misma tribuna, afirmaba el señor diputado Salas Armendáriz, que nosotros mismos deberíamos hacer la crítica para corregir nuestros errores, en lo que estoy seguro que todos nosotros, estamos de acuerdo, y para ello debemos honrar a los revolucionarios, que murieron en los campos de batalla, y que hoy recordamos con veneración y respeto, tratando de hacernos cada día mejores ciudadanos, dignos de recibir sus sacrificios, honrando a nuestras familias, educando a nuestros hijos, dignificando nuestro hogar, para predicar con el ejemplo y dentro de las normas morales que exige la sociedad con la que convivimos, y de esta manera no dar lugar a que los llamados "reaccionarios" no señalen nuestras obligaciones.

Es la valiente juventud de México, la que tendrá que recoger la herencia de la Revolución, y con el conjunto de su fuerza constituida en Gobierno, afirmar para siempre las conquistas de democracia y justicia social.

Es a ellos a nadie más que a ellos, a quienes corresponde constituirse en severísmo tribunal para emitir su fallo que tendrá que ser justo y libre de perjuicios o consignas, en la obra fecunda y creadora de los diferentes regímenes revolucionarios que han regido los destinos del país y colocar a cada uno en el sitio que le corresponda.

A este respecto, podemos afirmar que el saldo será favorable, porque en las diferentes Administraciones todos han actuado con verdadero patriotismo, y puestas en la balanza de la justicia, son más las obras buenas, que los errores que pudieren haberse cometido.

Considero, por otra parte, que el éxito de nuestros Gobiernos se debe a los programas de trabajo que tratan de ajustarse a las aspiraciones de la gran familia mexicana; ese sólo hecho basta para que, la ciudadanía en general siga militando, con fuerza y decisión, y participando en los actos electorales, a través de nuestro Partido Revolucionario Institucional.

¡Qué importa que nosotros vayamos de salida, si queda la juventud de México, como alertas centinelas y fieles custodios de las doctrinas de la Revolución! Antes de terminar mi pensamiento, dedicado a nuestros muertos en la lucha reivindicadora, deseo agregar, que seguiremos luchando, porque la tierra sea de quien la trabaje, que no exista un hogar sin lumbre, y que por un día el Ministro de Educación Pública, diga desde esta misma tribuna: ¡que en México ya no hay analfabetas!

¡Esperaremos, serenos, el fallo severo del Tribunal de la historia! (Aplausos)

El C. Presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Vicente Salgado Páez.

El C. Salgado Páez Vicente: H. Cámara de Diputados: en vísperas del aniversario del Plan de Ayala y a un año de distancia del primer cincuentenario de nuestra Revolución Mexicana, tengo el privilegio de ocupar esta tribuna, la más alta de mi patria, no para ensalzar las conquistas que por ella hemos obtenido, ya que otras personas con mayor autoridad y capacitada lo han hecho antes en forma completa y brillante destacando sus beneficios innegables, sino para expresar algunos conceptos que me parecen adecuados para aprovechar la oportunidad que me brinda la celebración de esta sesión solemne.

Dos generaciones han pasado desde que empezó el movimiento armado de 1910, y los que iniciaron la Revolución si no han muerto, la mayor parte han desaparecido del escenario político.

Durante la pubertad me tocó en suerte haber estado cuando el apóstol Madero se lanzó a la lucha y he tenido la fortuna de ser testigo del desarrollo de nuestro movimiento libertario. En forma personal, me ha tocado ser actor de uno de los aspectos más importantes de la Revolución, como indudablemente es la resolución del problema agrario al que he dedicado mi vida profesional el año de 1916.

Empecé a actuar, en aquellos días, al lado de un grupo de agrónomos salidos de la escuela de San Jacinto. Tanto por no ser yo hijo de dicha escuela, como porque algunos de mis compañeros de la lucha ya han fallecido y otros en vida la siguen honrando, aprovecho esta oportunidad como un acto de elemental justicia para mencionar algunos de sus hombres: Manuel Fitzmaurice, Guillermo Bazán, Enrique Henshaw, Heriberto Allera, Salvador de Gortari, Miguel Yépez Solórzano, Enrique J. Nájera, Mariano Cervantes, Ángel Posada, Ignacio L. Figueroa, Marte R. Gómez, Francisco García Robledo, José Gómez Vallejo, Wintilo Caloca, Julián Rodríguez Adame, Jacobo Aragón Aguillón, Gustavo Noble, Gilberto Fabila, Mario Javier Hoyo, Luis L. León, Juan de Dios Bojórquez, José Mares, José Eroza Peniche, José Gutiérrez, Ezequiel M. Gracía, Arturo I. Aguirre, Bartolomé Vargas Lugo, Abel Hernández Coronado, David Perales Viñas, y otros muchos más cuyos nombres no recuerdo. He mencionado a estos agrónomos, porque sólo debido a la mística y entusiasmo que junto con ellos pusimos los que en aquella época eramos jóvenes, fue posible la continuación de los esfuerzos desarrollados para resolver el problema agrario de México, teniendo que llegar, en algunas ocasiones, hasta contrariar los propósitos retardatorios del propio Gobierno Federal. En contraposición con nuestra actitud, en la actualizada la juventud se encuentra desorientada; jóvenes de derecha e izquierda actualmente critican a la Revolución Mexicana, condenado los errores humanos y las claudicaciones de los revolucionarios, sin tener un concepto claro de las ventajas que se han obtenido con sus aciertos y nadie se ocupe e informarles a qué se deben la ventajas, libertades y oportunidades de que ahora gozan y antes no disfrutaban.

Parece que a los jóvenes ya no les interesa que la Revolución siga su marcha y perfeccione sus procedimientos porque consideran que México no se puede sustraer a las dos corrientes mundiales opuestas; el comunismo o el anticomunismo. No debemos culparlos. Hemos descuidado su educación y para corregir este error, creemos que la educación se debe impartir desde la niñez, con un espíritu eminentemente revolucionario y que es necesario orientar a la juventud campesina hacia actividades conexas con la explotación de la tierra, en bien de la industrialización de la tierra, en bien de la industrialización nacional. También se les debe enseñar que nuestra Revolución Mexicana es anterior a todas las que se han producido en el mundo en este siglo y que los conceptos contenidos en nuestra Constitución Política, como resultado de las aspiraciones de mejoramiento social que se manifestaron en los movimientos armados a partir de 1910, sin copiar ejemplos ni teorías extrañas, contienen todas las disposiciones de carácter legal que pueden producir el bienestar y felicidad del pueblo.

Los artículos 3o, 5o, 6o, 7o, 16, 27, 123, y tantos más de nuestra Carta Magna, se pueden tomar normas o modelos para la Constitución Política de cualquier pueblo que quiera una legislación progresista. Es cierto que algunas de estas disposiciones no se cumplen parcialmente como las contenidas en el artículo 3o, que otras se han modificado desventajosamente como el artículo 27 constitucional, al cual se le han hecho mutilaciones y adiciones que entorpecen la rápida resolución del problema agrario y exterminio del latifundio; pero también es verdad que, en la actualidad, la bandera de la Revolución está en manos de un joven Presidente progresista que sí

entiende y siente la Revolución y que tiene el mejor propósito de que siga su marcha y que la resolución del problema agrario no se limite solamente a la simple distribución de la tierra, sino que el ejido, en su concepción netamente mexicana, se derive hacia una explotación completa, industrializando sus productos y aprovechando, en forma económica, sus recursos racional e íntegramente, como ya empezó a hacerlo, con su importante decreto del 23 de abril del año actual, que contiene disposiciones para la planeación, organización y aplicación del fondo común de los pueblos. Este factor favorable no debe llenarnos de optimismo, porque no basta la buena disposición gubernamental para que los problemas del campo se resuelvan en forma satisfactoria.

Todo lo que se haga en materia agraria tendrá el carácter de provisional, dado lo mutable de la técnica, de la ciencia, de la naturaleza misma y de los asuntos económicos y sociales relacionados con ella. Para atender con eficiencia el mejor aprovechamiento de la tierra, no basta la buena voluntad de un hombre ni siquiera la de un grupo de hombres, se hace necesaria la cooperación de todo el sector campesino organizado y, en materia de crédito, no sólo esto sino la concurrencia patriótica del capital privado.

Mucho se ha dicho que de las grandes ventajas que para la producción agrícola del país ha tenido la aplicación de la reforma agraria, lo mismo de la paz y bienestar que ha producido para la mayor parte de los individuos que vienen en el campo; pero debemos confesar, con franqueza y sinceridad, que no estamos satisfechos. A casi 50 años de iniciada nuestra Revolución, todavía hay aproximadamente un 33% de jefes de familia que no ha sido dotados con tierras no obstante la existencia de numerosos latifundios; la indebida intervención de autoridades judiciales y administrativas han desposeído de parte de sus ejidos a muchos pueblos; el personal encargado de repartir la tierra y ministrar los créditos para su cultivo, se ha pervertido; podemos decir que la resolución del problema agrario de México actualmente casi se encuentra en crisis, y por ello el Secretario General de nuestra Confederación Nacional Campesina, profesor y senador Francisco Hernández y Hernández, en la convención que tuvo lugar durante los días 26, 27 y 28 del mes de agosto próximo pasado, entre otras cosas dijo lo siguiente: "Entregar la tierras a los campesinos, es entregar un pedazo de la patria y con la patria no puede traficarse, por lo que ratificamos ante ustedes que habremos de combatir el monopolio de la tierra y los latifundios, porque éstos niegan al hombre y no nos conformaremos con la simple entrega de tierra; queremos garantías y seguridad y exigiremos que nadie se enriquezca a costa del hambre y miseria de los campesinos".

"La suerte del campesino afecta a todos los sectores del País; Industria, Comercio, Banca, etc. etc. Y sus problemas repercuten en todas las esferas de la vida nacional. Los que se oponen al mejoramiento del campesino son los que insisten en aprovechar el atraso y el abandono en que nos han dejado los regímenes pasados. Los campesinos que lo han dado todo al país, justo es que reciban el respeto y el reconocimiento de los que aman a la patria".

"Por la lealtad a México y a sus instituciones, nada nos aportará de luchar porque la tierra de México ampare por igual y en primer término a todos sus hijos, para que ninguno viva como extraño en el hogar que en nuestra patria".

"Los ejidatarios, los medianos y pequeños propietarios que buscan en la explotación de la tierra y sus recursos el camino de su mejoramiento, son hermanos y aliados de una causa común: la de engrandecer el país merced al trabajo, protegidos por la ley, el derecho y la justicia".

"Tenemos que superar los éxitos, corregir los errores, depurar nuestras filas y enriquecer los alcances de la Reforma Agraria...".

"Si el ejido y la pequeña propiedad precisan el camino para liberar al hombre de la servidumbre, el peonaje y la esclavitud, corresponde al sector revolucionario y a los Gobernadores del país, garantizar su consolidación y desarrollo, sin descuidar un solo instante el deber patriótico de salir en defensa del trabajo, como causa del honor y fuente de prosperidad nacional".

"Para cumplir nuestros deberes y realizar las tareas de la hora presente, tenemos una bandera, la de México y un guía patriota y revolucionario: Adolfo López Mateos".

Estos brillantes conceptos y propósitos que desde hace apenas tres meses estamos empeñados en que se realicen, en esta fecha memorable, por mi conducto, los hacen suyos el sector campesino de esta Cámara de Diputados, porque saben por voz del propio Primer Magistrado de la Nación, que se aproxima una etapa de luchas intensas y que ahora debemos permanecer más unidos que nunca en bien de la patria y a la sombra de la Revolución". (Aplausos).

El C. Presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Blas Chumacero.

El C. Chumacero Sánchez Blas: Señores Senadores. Señores Diputados, Militares que se encuentran aquí presentes: los compañeros Celso Vázquez y Vicente Salgado Páez se han encargado de narrar desde esta tribuna, los puntos polémicos que son de encuentro permanente en el proceso de la Revolución Mexicana.

Vengo a afirmar, desde mi modesta forma de pensar, que han sido tres conceptos los que han servido de base, primero para nuestra Revolución armada y, más tarde, para plasmar en leyes las normas jurídicas a que debemos sujetarnos.

Siempre que ha sido la aspiración de poseer un pedazo de tierra. La corona española otorgó mercedes por infinidad de leguas a sus caudillos que nos conquistaron y, más tarde, a su credo político; pero la dictadura de Díaz, con el procedimiento de las compañías extranjeras deslindadoras, entregó extranjeros y a los ya grandes latifundios, la tercera parte de la tierra deslindada de nuestro país. Es decir, conscientemente y en forma que consideramos malévola, la tierra se le quitaba a nuestros indios para entregarla a extranjeros, con el señuelo de que harían progresar el país.

Esto provocó inquietudes, inquietudes reflejadas en el Plan de San Luis; movimientos precursores de Cananea y Río Blanco unieron los esfuerzos de los hombres para fijarse en la figura central.

No es posible, desde esta tribuna, recordar a todos, pero sí tenemos que expresar nuestro modesto pensamiento en favor de la primer figura de Francisco

I. Madero.

¿Por qué no hemos de recordar en esta tribuna a Andrés Molina Enríquez?

¿Por qué no hemos a Emiliano Zapata, ¿Por qué no hemos de recordar a Otilio Montaño, precursores del movimiento agrario, y los que le dieron contenido social a la reivindicación de la tierra? ¿Por qué no hemos de recordar en esta tribuna a Máximo y Aquiles Serdán, a Carmen Serdán, que con el sacrificio de la vida de Máximo y de Aquiles hicieron brotar la chispa revolucionaria que ya no pudo apagar nadie?

La bondad de los hombres de la Revolución, la bondad de nuestro pueblo, siempre ha ido a las transacciones políticas. ¿Por qué cuando luchó por principios como el de Sufragio Efectivo y la No Reelección para acabar con la dictadura de Díaz pensaron los hombres que con los tratados de Ciudad Juárez se resolviera este problema? Pero no, los propietarios de la riqueza, el grupo científico y el que más daño le hizo a la Revolución, León de la Barra, se aprovecharon de la bondad de Madero para asesinar a la Revolución; pero con el asesinato de los hombres, el proceso revolucionario no se detiene. Por el contrario, la sangre de Madero y Pino Suárez germinó en el corazón y en la mente de todos los mexicanos para continuar la lucha.

Si nuestros caudillos del Norte y nuestros caudillos del Sur no coincidían en el procedimiento porque unos querían hacerlo con mayor rapidez y otros en forma discreta, la realidad fue que nuestra Revolución logró, todavía con los fusiles humeantes, reunir el Congreso del Constituyente y en la Constitución establecer preceptos que garantizaron los derechos de la nación, la posesión de la tierra en manos de los campesinos del país y la protección de la clase trabajadora en el artículo 123. ¿Pero la Revolución podía, en la lucha violenta, abordar el problema de la educación en toda su integridad? No, porque a nuestro pueblo no se le había educado; se le había mantenido en la más completa ignorancia y los hombres de nuestra Revolución estaban empeñados primeramente en vencer la soberbia y acabar con el poderío del latifundio en México y de los poseedores de la industria, que eran verdaderos señores de horca y cuchillo en las fábricas y en las minas. En las haciendas, donde las deudas se heredaban de padres a hijos y a nietos.

Si el proceso ha sido doloroso, si se nos quiere confundir con que no ejercemos la democracia, nosotros tenemos que decir nuestro pueblo ha ejercido la democracia desde la guerra de Independencia y en las luchas entre el liberalismo y los conservadores, en el Primer Congreso Constituyente de 1824, en el de 1834 y en el de 1857; estuvieron en ese Congreso, representadas las castas sociales, pero triunfó la inquietud del pueblo de esos Constituyentes, y hemos llegado a una etapa de progreso social a donde nadie nos puede decir que tiene amenazada su vida porque no puedan expresar sus ideas.

Aquí, en esta misma se han expresado los conceptos más soeces, en lo que no solamente se ha ofendido la dignidad de los hombres, sino se ha ofendido la dignidad de la patria. Sin embargo de ello, es una gloria para los mexicanos haber nacido en este país y a donde disfrutamos de estas libertades.

Los mandatos constitucionales en materia religiosa en materia de cultos, garantizan la libertad de ellos y se abusa de la tolerancia y de la discreción que se tiene para las gentes que auspician esa tendencia.

Nuestro pueblo ha ido a la Revolución y lo mismo se ha colocado en el sombrero la Estampa de la Virgen de Guadalupe, que en el pecho un escapulario; pero empuñado el 30- 30 para vencer a los enemigos del progreso.

Que tengan en cuenta los que quieren detener el avance social de México esto: por cada agresión de ellos ha de responder nuestro pueblo unido. Desde que se liquidó el Ejército Federal, hay un ejército del pueblo, cada día superándose, cada día con mayor conciencia del servicio militar, para convertirse en verdadero guardián de las instituciones de México. Entonces no pueden encontrar ya gentes en el ejército para los golpes de Estado. El Ejército es de la Revolución y nunca ha servido a los intereses de la clase retrógrada de México; sirve al progreso del país.

El programa, nuestros regímenes revolucionarios no lo habían podido afrontar en toda su amplitud, pero ha llegado a la Presidencia de la República un hombre que sí ha pensado profundamente en él, y que ha encomendado la elaboración de un plan para darle la educación primaria, en un término de 11 años, a todos los niños mexicanos. Dentro de dos décadas podremos hablar, si la vida nos permite hacerlo, de que habrá menos analfabetas en nuestro país y se cometerán menos atropellos porque el ciudadano de México estará mejor preparado para su defensa. Ese es el problema fundamental.

La lucha por la tierra continuará, porque todavía hay muy grandes extensiones en el norte del país y en el sureste de la patria, que hay que distribuir, entregando esa tierra a los campesinos del país; en las regiones donde no se pueda poblar con los hombres y las mujeres de esa región, sea una migración nacional para reivindicar esa tierra, como se hizo en Baja California. El progreso alcanzado en Baja California es una lección para todos los que quieren seguir poseyendo grandes extensiones de tierra.

Es muy común, en esta tribuna, enjuiciar a la Revolución. Nosotros los que militamos en sus filas tenemos que defenderla y tenemos que decir que los errores son de los hombres no de la Revolución.

¿Por qué los reaccionarios del país, los que han detenido siempre la riqueza, no enjuician ellos

a los malvados que existen en sus filas? ¿Por qué quieren enjuiciar a los nuestros?

Nuestra Revolución cada día se perfecciona, y es un honor para la Revolución misma abrir el país a su progreso, en la agricultura, en la industria, en la educación, en las líneas de navegación aérea y marítima, en el camino vecinal, en las carreteras troncales y establecer, para garantía de la nación, que todo el que venga invertir a México, tiene primero que hacer la declaración ante la Secretaría de Gobernación de que se considera como mexicano, para que sea juzgado, en caso de infracción, por las leyes del país.

Esto es garantía de progreso, garantía para el Territorio Nacional y garantía en las finanzas del país. El Presupuesto nacional a estas fechas equilibra la finanza de la patria, el progreso aumenta. Claro está que todavía se cometen atropellos. ¿Por quién? Esa es la pregunta. Por los funcionarios del país o por los detentadores de la riqueza que tratan siempre de buscar algún funcionario débil para hacerlo transgredir en su forma de pensar. ¿Por qué de eso no hablar? El mejor homenaje que debemos de rendir a los hombres de la Revolución que, para mi modesta forma de pensar hay que distribuir, en tres etapas: los hombres que actuaron de 1910 a 1920; los de 1920 a 1930 y los que actuaron de 1930 a 1940. No puede decirse que ha habido transgresiones en el progreso. Unos más, otros menos, pero han trabajado en favor del país y nuestra Constitución se ha mantenido íntegra en sus mandatos, y si hay algunas reformas que se han hecho, lo ha hecho el Congreso de la Unión; esa reformas las ha discutido aquí, las ha mandado a las Legislaturas de los Estados y se ha hecho el cómputo en este mismo Congreso para ponerlas en vigor. Si en la práctica no han dado resultado, nuestra Constitución establece mandatos mínimos y la Revolución es un progreso dinámico permanente. Se puede ir reformando en cualquier tiempo, para perfeccionarla. La voz de libertad que hay en México, debemos defenderla.

A últimas fechas se ha levantado un campaña de agresión en contra del movimiento sindical mexicano. Que la levanten conforme a la Constitución los hombres del movimiento obrero y los de fuera del movimiento obrero; tienen mucho derecho a hacerlo, ya que nosotros constatamos que con este concepto en México hay libertad sindical; no hay una organización sindical de Estado; por eso hay diversas organizaciones. Lo importante es que cada día los hombres del movimiento obrero lo llevemos a su completa independencia, para que sea una voz autorizada de opinión en el proceso del país.

Y estamos empeñados en ello; estamos empeñados en la Revolución de sus hombres. A nosotros no nos espanta la diatriba, el insulto o la calumnia. Lo importante es que el ejemplo de los de los hombres del movimiento obrero pueda resistir esa embestida.

Otra acusación que se lanza al movimiento obrero es la que no auspicia determinadas corrientes internacionales. No somos tan tontos, somos amantes del avance social en cualquier país de la tierra; pero no podemos proceder en forma inmediata para quebrantar la autoridad de los regímenes que ha establecido la Revolución.

Esa es la contestación que les damos a nuestros calumniadores. En todos los movimientos de carácter social hemos unido nuestros esfuerzos con los hombres de la clase media, los hombres y mujeres de la clase media conocidos con el nombre de sector popular; con la clase campesina que forma el sector agrario; con el sector obrero; con los militares y con todos los que quieran trabajar por el progreso del país.

Ese es el homenaje que le rendimos a Madero, que le rendimos a Aquiles y a Máximo Serdán, a Carmen Serdán, a Zapata, a Otilio Montaño, a Andrés Molina Enríquez, a Obregón, a Cárdenas y tantos y tantos hombres que no puede uno tener en la memoria, que entregaron lo mejor de su pensamiento para el progreso de México.

Pensamos que rindiendo este homenaje de gratitud y de respeto a esos hombres que hicieron posible la realización de la Revolución, les entregamos en este momento el proceso de un régimen que es todo bondad, que es todo democracia, que es todo lealtad y que a pesar de que México es un país preparado para la guerra, la voz de libertad se ha hecho escuchar en todas las tribunas del mundo por el Primer Magistrado del país. Este es un honor para mí, un honor para los mexicanos y un honor para la patria. (Aplausos)

- El C. secretario Pérez Ríos Francisco (leyendo):

"Acta de la sesión solemne celebrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el día veintisiete de noviembre de mil novecientos cincuenta y nueve.

"Presidencia del C. Enríque Gómez Guerra .

"En la ciudad del México, a las trece horas diez minutos del viernes veintisiete de noviembre de mil novecientos cincuenta y nueve, con asistencia de noventa ciudadanos diputados según lista que pasó la Secretaría, se abre esta sesión solemne en homenaje a los hombres que iniciaron la Revolución Mexicana y de conformidad con el acuerdo tomado por esta honorable Asamblea en su sesión del diecinueve del corriente.

"Pronuncian discursos alusivos al objeto de esta sesión los CC. diputados Celso Vázquez Ramírez, Vicente Salgado Páez y Blas Chumacero Sánchez.

"Se da la lectura a la presente acta".

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobada.

El C. Presidente (A las 14.05): Se levanta la sesión solemne y se pasa a sesión ordinaria.

SESIÓN

DE LA

H. CÁMARA DE DIPUTADOS

EFECTUADA EL DÍA 27

DE NOVIEMBRE DE 1959

SUMARIO

1.- Se abre la sesión. Se da lectura a la Orden del Día, Se lee y aprueba el acta de la sesión anterior.

2.- Elección de Mesa Directiva para el mes de Diciembre, Proposición del C. diputado José Ortiz Ávila, Escrutinio. Declaratoria.

3.- Primera lectura al dictamen sobre un proyecto de decreto en que se establecen bases para la ejecución en México, del Convenio Constitutivo del Banco Interamericano de Desarrollo.

4.- Continúa la discusión en lo particular del proyecto de reformas a los artículos 73, fracción XXIX, y 115, fracciones I y II de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Se discuten los párrafos quinto y sexto. Se vota nominalmente y se aprueban. Los párrafos séptimo y octavo no se discuten. La fracción II del artículo 115 se divide en incisos: los incisos a), b), c) y d), no son impugnados. Al ponerse a discusión el inciso e), el C. diputado Fernando Díaz Durán, reclama el quórum. Se pasa lista para verificarlo, y no habiéndolo, se levanta la sesión.

DEBATE

Presidencia del

C. ENRIQUE GÓMEZ GUERRA

(Asistencia de noventa ciudadanos diputados).

El C: Presidente (A las 14.05 horas): Se abre la sesión.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique (leyendo)

"Orden del día.

"México, D. F., a 27 de noviembre de 1959.

"Sesión solemne.

"Sesión ordinaria.

"Acta de la sesión anterior.

"Elección de Presidente y Vicepresidente para el mes próximo.

"Primera lectura al dictamen de la Comisión de Economía y Estadística sobre el proyecto de decreto en que se establecen bases para la ejecución en México del Convenio Constitutivo del Banco Interamericano de Desarrollo.

"Continuación del debate en lo particular, sobre el dictamen en que se reforma la Constitución Política de la República en sus artículos 73 y 115".

"Acta de la sesión celebrada por la H. Cámara de Diputados del XLIV Congreso de la Unión, el día veintiséis de noviembre de mil novecientos cincuenta y nueve.

"Presidencia del C: Enrique Gómez Guerra.

"En la ciudad de México, a las trece horas y treinta minutos del jueves veintiséis de noviembre de mil novecientos cincuenta y nueve, se abre la sesión con asistencia de noventa y dos ciudadanos diputados según declaró la Secretaría después de haber pasado lista.

"Se da lectura a la Orden del día.

"Sin que motive discusión se aprueba el acta de la sesión anterior celebrada el día veinticinco del mes en curso.

"La Secretaría da cuenta con los asuntos en cartera:

"Iniciativa de la Diputación Federal del Estado de Nuevo León para adicionar al artículo ciento seis de la Ley de Impuestos sobre la Renta. a la Comisión de Impuestos e imprímase.

"La Presidencia, por conducto de la Secretaría, pone a discusión en lo particular el dictamen relativo a las reformas de los artículos setenta y tres, fracción XXIX último párrafo, y ciento quince, fracciones I y II, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

"A discusión el último párrafo de la fracción XXIX del artículo setenta y tres constitucional. Impugnan el texto del dictamen, los CC. diputados, Eduardo Molina Castillo y Miguel Olea Enriquez, quienes hacen proposiciones de adición; por la Comisión, hace uso de la palabra el C. diputado Enrique Sada Baigts; hacen interpelaciones a los oradores de los CC. diputados Sda Baigts, Emilio Sánchez Piedras. El diputado Carlos Hank González, propone se decrete un receso para que los miembros de la Comisión dictaminadora estudien las adiciones propuestas. Se decreta un receso de cinco minutos; concluido éste, la Comisión, por voz del C. diputado Enrique Sada Bagts, pide a la Asamblea se permita cambiar el texto del dictamen conciliándolo con

las adiciones propuestas. La Asamblea vota afirmativamente.

"La Secretaría procede a recoger la votación nominal, resultando aprobado el nuevo texto del dictamen por ciento en votos de la afirmativa y cuatro en contra.

"A discusión el artículo ciento quince, fracción I. Se concede el uso de la palabra, para hablar en contra, al C. Diputado Humberto Zebadúa Liévano. El C: diputado Carlos Hank González hace una moción de orden y sugiere a la Presidencia, con base en el reglamento, se numeren los párrafos reformados de la fracción I y se discuten sucesivamente. El C. diputado Emilio Sánchez Piedras, abunda en la proposición del C. diputado Hank González y se adhiere a ella. En votación económica la Asamblea acepta el procedimiento. La Presidencia informa a la Asamblea que se han dividido en párrafos del uno al octavo, las partes para las que se sugieren reformas a la fracción I, con el objeto de facilitar y ordenar la discusión, de acuerdo con la resolución tomada por la Asamblea. Para una moción de orden, pide la palabra el C. diputado Ochoa Campos, quien aclara a la Presidencia, no estar conforme con que solo se numeren y discutan los párrafos reformados por la Comisión dictaminadora. Pués pretende impugnar el enunciado de la fracción I que se contiene en el dictamen, enunciado al que no introduce reforma la Comisión a pesar de figurar en el texto del dictamen. La Presidencia informa que sólo están a debate las reformas contenidas en el dictamen y sería motivo de nueva iniciativa revisar otros enunciados constitucionales. En la aclaración hecha por el C: diputado Ochoa Campos, intervienen para mociones, los CC. diputados Fernando Díaz Durán, Humberto Zebadúa Liévano y Emilio Sánchez Piedras. La Secretaría pone a discusión el primer párrafo reformado. La Presidencia, pide la palabra, continúe.

"Impugnan el primer párrafo a discusión, los CC. diputados Humberto Zebadúa Liévano y Macrina Rabadán Santana de Arenal; a esta última, le hace aclaración sucesivas, el C. diputado Manuel Barrera Ángeles. La Presidencia prohibe los diálogos. En pro del texto del dictamen, el C. diputado Antonio Lomelí Garduño hace uso de la palabra y es interpelado por la C. diputada Macrina Rabadán. A continuación y en pro del dictamen, interviene el C. diputado Fernando Díaz Durán. Se pregunta a la Asamblea si está suficientemente discutido el asunto. Suficientemente discutido. Se procede a recoger la votación nominal del párrafo primero reformado. Aprobado el texto del dictamen por noventa y un votos contra cinco.

"A discusión el segundo párrafo de la reforma. Hace uso de la palabra, en contra, el C. diputado Antonio Garza Peña; en pro, por la Comisión, el C. diputado Enrique Sada Bagts, quien es interpelado por el C. diputado J. Concepción Carrillo Carrillo. La Presidencia pregunta a la Asamblea si considera suficientemente discutido el asunto, votando ésta afirmativamente, la Secretaría recoge la votación nominal. Aprobado por ochenta y seis votos de la afirmativa y nueve en contra.

"A discusión el párrafo tercero de las reformas. Hacen uso de la palabra en contra, los CC: diputados Moisés Ochoa Campos, Miguel Olea Enriquez, Carlos Hank González, Alejandro Martínez Rodríguez y José Concepción Carrillo Carrillo; en defensa del dictamen, por la Comisión el C. diputado Enrique Sada Bagts, y en pro, los CC. Fernando Díaz Durán, Florencio Barrea Fuentes, Jesús Ortega Calderón y Rubén Vargas Garibay; para aclaraciones intervienen los CC. Moisés Ochoa Campos, Fernando Díaz Durán y Miguel Olea Enriquez. La Presidencia, pregunta a la Asamblea si se considera el párrafo tercero de la reforma, suficientemente discutido. Suficientemente discutido. La Secretaría procede a tomar al votación nominal, resultando aprobado el texto del dictamen por noventa y un votos de la afirmativa y doce en contra.

"A discusión la reforma contenida en el párrafo cuarto. Hace uso de la palabra para hablar en contra, el C. diputado Manuel Hernández Hernández y en pro, el C. diputado Antonio Lomelí Garduño.

"La Presidencia pregunta a la Asamblea si se considera suficientemente discutido el párrafo. Suficientemente discutido. La Secretaría procede a tomar la votación nominal. Aprobado por ochenta y un votos de la afirmativa y tres en contra.

"El C. diputado Emilio Sánchez Piedras pide la palabra y sugiere a la Asamblea, tomando en consideración lo avanzado de la hora, se posponga la discusión de los párrafos pendientes para el día siguiente.

"La Presidencia consulta a la Asamblea respondiendo ésta afirmativamente.

"Siendo las dieciséis horas y quince minutos se levanta la sesión y se cita para el día siguiente a las doce horas en que principiara la sesión solemne en honor de los hombres que iniciaron la Revolución, para luego pasar a sesión ordinaria". Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobada.

- El mismo C. Secretario (leyendo):

Se va a proceder a la elección de Presidente y Vicepresidente para el mes próximo.

El C. Ortiz Ávila José: Pido la palabra.

El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Ortiz Ávila.

El C. Ortiz Ávila José: Señores diputados: los miembros de la Gran Comisión que me honro en pertenecer me han suplicado viniera a poner a la consideración de vuestra soberanía la proposición de nuestros compañeros de Cámara que deberán regir con el voto de ustedes, si así lo determinan, la Directiva durante el mes de diciembre.

Los miembros de la Gran Comisión, al escoger a nuestros compañeros, hemos atendido principalmente el trabajo que han venido desarrollando a lo largo de estos dos periodos ordinarios de sesiones. Hemos tomado en cuenta su convicción en el trabajo y su lealtad en los procedimientos y hemos pensado que al llegar a ellos a la dirección de la

Cámara sabrán encauzar los debates que tanto están interesando a esta XLIV Legislatura y que por sí mismos la dignifican.

Mis compañeros de la Gran Comisión ruega a ustedes, por mi conducto, solidarizarse con esta proposición: para Presidente, durante el mes de diciembre, el compañero diputado C: Juan Sabines Gutiérrez como Primer Vicepresidente, al compañero diputado C. Ramón Villareal Vázquez para Segundo Vicepresidente, al compañero diputado C. Ramón Berzosa Cortés. Esperamos que con el voto de ustedes sean nuestros compañeros los que formen parte de la Directiva para el próximo mes de diciembre. Muchas gracias.

El C. secretario Olivares Santana Enrique: Se suplica a los señores diputados que en el orden de lista en que vayan siendo llamados, pasen a depositar sus cédulas a la Mesa de la Presidencia. (Elección).

El resultado de la elección fue el siguiente: Por la plantilla presentada por los miembros de la Gran Comisión, 85 votos en pro de las candidaturas del C. diputado Juan Sabines Gutiérrez, para Presidente y de los CC. diputados Villareal Vázquez y Bersoza Cortés, para Vicepresidentes; otros votos para Presidente: Andrés Henestrosa, un voto; José Pérez Moreno, dos votos; José Ortiz Ávila, un voto; Carlos Hank González, un voto; Alfredo Chávez Vázquez Jr., un voto.

Para Vicepresidentes: José Luis Martínez Rodríguez, un voto; adán Cuéllar Layseca, dos votos; Luis Ramírez Meza, dos votos; Leopoldo González Sáenz, ters votos; Carlos Hank González, un voto; Armando Cortés Bonilla, dos votos; Blas Chumacero Sánchez, tres votos; José Concepción Carrillo Carrillo, un voto; J. Jesús López González, un voto; Benito Contreras García, un voto; Juan José Osorio Palacios, un voto y Francisco Rivera Caretta, un voto.

El C. Presidente: En vista del resultado del escrutinio se declara que para el próximo mes de diciembre son Presidente y Vicepresidente, respectivamente, de esta Cámara, los ciudadanos diputados Juan Sabines Gutiérrez, Ramón Villareal Vázquez y Ramón Berzosa Cortés.

- La C. secretaria Andrade de Del Rosal Marta: Se va dar cuenta con los asuntos en cartera. (leyendo:)

"Honorable Asamblea: A la suscrita Comisión de Economía y Estadística, por acuerdo de vuestra soberanía.

Le fue turnada para estudio y dictamen la iniciativa de ley del C. Presidente de la república en que establece las bases para la ejecución en México del Convenio Constitutivo del banco Interamericano de Desarrollo.

"Esta iniciativa de ley a tenido como origen la celebración de varias reuniones y conferencias económicas en distintas ciudades del Continente americano, mismas que han venido sugiriendo la creación de instrumentos de cooperación económica ajustados a las condiciones y necesidades especificas en los países latinoamericanos.

"Como antecedentes podemos citar: desde el año de 1890, la reunión de Washington de la Primera Conferencia Internacional de las Repúblicas americanas en donde se aprobó, con el voto afirmativo de México una resolución para la constitución de un Banco Interamericano; la segunda Conferencia Internacional americana acelerada en la ciudad de México en 1901 que apoyo la idea; la reunión del Comité Consultivo Económico Financiero Interamericano, celebrada en mayo de 1940 en que varios países, entre ellos el nuestro, firmaron la decisión de establecer el Banco Interamericano; la Tercera Reunión de Consulta de Secretarios de Relaciones Exteriores celebrada en Río de Janeiro en el año de 1942 en que se recomendó a los Gobiernos que ratificaran el Convenio de creación del Banco Interamericano Económico y Social reunido en Washington en el año de 1947 en donde México presentó una proposición para el establecimiento de una Institución Financiera Interamericana de Fomento; la Primera Reunión Extraordinaria del Consejo Interamericano Económico y Social celebrada en 1950; la reunión de Secretarios de Hacienda y Economía celebrada en Petrópolis, Brasil, en el año de 1954 en que nuestro país también apoyó la formación de una Comisión para esa Institución Financiera, la reunión del Comité Interamericano de Representantes de los Presidentes, en mayo de 1957, la Primera Conferencia Económica de la Organización de los Estados Americanos, de septiembre de 1957.

"En la ciudad de Washington a fines del año próximo pasado, el Consejo Interamericano Económico y Social de la Organización de los Estados Americanos convocó a los representantes de los gobiernos de los Estados miembros para redactar el proyecto constitutivo del Banco Interamericano de Desarrollo y en las postrimerías de abril y principios de mayo del presente año, en la reunión de Buenos Aires, Argentina a la que asistieron los representantes de los 21 países americanos, la Comisión Especial de la Organización de los Estados Americanos para estudiar la formulación de nuevas medidas de cooperación económicas manifestó su complacencia por la redacción del Convenio Constitutivo del Banco Interamericano de Desarrollo.

"El Banco Interamericano de Desarrollo es un organismo creado por los 21 países americanos que propende a expedir recursos de financiamiento económico y tiende a resolver las necesidades crediticias para el desarrollo económico interno de cada uno de los países miembros que integran el Consejo Interamericano Económico y Social de la Organización de los Estados Americanos. El Banco tendrá patrimonio propio integrado con oro y moneda de los distintos países asociados.

"El capital autorizado del Banco será de mil millones de dólares de los Estados Unidos de Norte América de peso y ley en vigencia al 1º de enero de 1959, de los cuales ochocientos cincuenta millones de dólares integrarán el capital autorizado del Banco y ciento cincuenta millones de dólares se

destinarán a un fondo para operaciones especiales.

"La escritura y funcionamiento de este organismo interamericano se ajustan a las condiciones específicas de demanda de crédito en los países que, como el nuestro, tienen la necesidad inaplazable de obtener un mayor desarrollo económico y un mayor aprovechamiento de sus recursos naturales y humanos disponibles; así como la elevación de los niveles de vida de los sectores de población que perciben la proporción más baja del ingreso nacional.

"Las ventajas que México obtiene al pertenecer como país miembro del Banco Interamericano de Desarrollo, son las siguientes:

"a) Disponer de suficientes volúmenes de crédito mediante una aportación relativamente baja, cubriendo las aportaciones de capital en plazos y condiciones que se ajusten a las disponibilidades financieras del Gobierno de nuestro país.

"b) Obtener nuevas fuentes financieras como son: el capital propio de la institución, los fondos que la misma obtenga de los mercados financieros; así como la importancia de percibir créditos directos por medio del otorgamiento de la garantía del Banco Interamericano de Desarrollo.

"c) Canalizar estos créditos para estimular las inversiones que contribuyan al desarrollo económico equilibrado del país y al crecimiento ordenado de su comercio exterior.

"d) Encauzar la política económica a una mejor utilización y defensa de los recursos naturales y corregir los niveles de desempleo, mediante la creación de nuevas actividades productivas con miras a incrementar los satisfactorios que requieren los sectores económicamente débiles de nuestra población.

"Las principales obligaciones que contrae nuestro Gobierno al aceptar el Convenio, serían:

"a) Suscribir la cantidad de sesenta y seis millones trescientos mil dólares de los Estados Unidos de Norteamérica, de los cuales el 50% se cubrirá en efectivo y la otra mitad quedará como capital de garantía y su pago sólo será exigido por el Banco Interamericano de Desarrollo para hacer frente a sus obligaciones derivadas de operaciones que no haya realizado con fondos propios.

"De la parte que debe cubrirse en efectivo, el 20% o sean, seis millones seiscientos treinta mil dólares, se anotará antes del 30 de septiembre de 1960 como primera cuota y el 80% repartido en forma proporcional se cubrirá, a más tardar, el 30 de septiembre del mismo mes del año de 1962.

"b) Contribuir a la formación del fondo para operaciones especiales que admitirá el propio Banco Interamericano con la cantidad de seis millones seiscientos treinta mil dólares de los Estados Unidos de Norteamérica, de los cuales solamente la mitad, o sean, tres millones trescientos quince mil dólares, se aportarán en oro o dólares y el otro 50% en moneda nacional; la primera aportación deberá cubrirse antes del 30 de septiembre de 1961 y la otra en la fecha fijada para abonar la tercera cuota de la suscripción del capital pagado del Banco.

"Al comparar las ventajas que obtendrás con las obligaciones contraídas, se advierte que México gozará de efectivas prerrogativas que compensan, con amplitud, la aportación que el mismo Gobierno mexicano hace al ejecutar el Convenio de que se trata.

"Por otra parte, han quedado satisfechos los requisitos establecidos por nuestra Constitución, al haber aprobado la H: Cámara de Senadores del Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, el 27 de octubre próximo pasado, el Convenio Constitucional del Banco Interamericano de Desarrollo, en ejercicio de la facultad que lo concede la fracción I, del artículo 76 constitucional.

"La Comisión modificó el texto del artículo 10o. de la iniciativa de ley en cuestión, para delimitar la competencia de los tribunales federales en los asuntos en que el Banco sea parte.

"Fundada en las consideraciones que antecede, la Comisión de Economía y Estadística somete a la consideración de vuestra soberanía el siguiente proyecto de decreto que establece bases para la ejecución en México, por el Poder Ejecutivo Federal, del Convenio Constitutivo del banco Interamericano de Desarrollo.

"El Congreso de los Estados Unidos Mexicanos decreta:

"Artículo 1o. Se aprueba el convenio Constitutivo del Banco Interamericano de Desarrollo, para los efectos de la fracción VIII. del artículo 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, conforme al texto adoptado en Washington el 8 de abril de 1959.

"Artículo 2o. El Banco de México, S: A; hará con la garantía del Gobierno Federal, la suscripción de acciones o parte sociales del Banco Interamericano de Desarrollo hasta por la cantidad de Dls. 66,300.000.00 (sesenta y seis millones trescientos mil dólares, moneda de los Estados Unidos de Norteamérica.)

"Artículo 3o. El Banco de México, S: A; aportará con la garantía del Gobierno Federal la cantidad de Dls. 6,630.00 (seis millones de seiscientos treinta mil dólares, moneda de los Estados Unidos de Norteamérica) para cubrir la cuota de contribución de México, al Fondo para operaciones especiales que estipula el artículo IV del Convenio Constitutivo de dicho organismo.

"Artículo 4o. El Banco de México, S: A; será única entidad autorizada para tratar de todo lo relativo al Banco Interamericano, de Desarrollo así como para operar con dicho organismo y ejercitar al respecto toda clase de facultades.

"Artículo 5o. El Banco de México, S: A; será el deposito en México de las disponibilidades del Banco Interamericano, de conformidad con el artículo XIV. Sec. 4ª. del Convenio Constitutivo del citado organismo.

"Artículo 6o. El Gobierno Federal garantizará al Banco Interamericano, así como todas las operaciones que el Banco de México, S. A. realice con dicho organismo, en forma tal que el Banco de México, S. A. nunca resienta pérdida

alguna con motivo de dicho suscripción y operaciones.

"Artículo 7o. El Banco de México, S. A; con la aprobación del Secretario de Hacienda y Crédito Público designará un Gobernador propietario y un Gobernador suplente que fungirán con tal carácter en el Banco Interamericano de Desarrollo.

"Artículo 8o. El Gobernador y su suplente mencionados en el artículo anterior, podrán durar en su encargo cinco años y ser nombrados nuevamente.

"El mismo Gobernador del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento y del Fondo Monetario Internacional puede serlo también del banco Interamericano de Desarrollo.

"El Banco de México, S. A. con la aprobación del Secretario de Hacienda y Crédito Público, podrá revocar las designaciones a que se refiere el artículo 7o. de esta ley.

"Artículo 9o. El Gobernador y su suplente tendrán plenas facultades en el desempeño de sus cargos, salvo las restricciones que con la aprobación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público establezca concretamente el Banco de México, S. A.

"Artículo 10. El Estado mexicano reconoce la personalidad jurídica del Banco Interamericano de Desarrollo.

"Los Tribunales Federales serán los únicos competentes para conocer de los negocios en que sea parte el Banco Interamericano de Desarrollo, de sus funcionarios o empleados residentes en México, en función del puesto o empleo que ocupen, o de aquellos que en alguna forma puedan afectar bienes propiedad de dicha institución.

"Artículo 11. Los funcionarios y empleados de Banco Interamericano de Desarrollo, así como las propiedades y bienes de este organismo, sus archivos y sus comunicaciones oficiales, disfrutarán de las inmunidades, privilegios y exenciones tributarias a que se refiere el texto aprobado por la Comisión Especializada de Representantes de los Gobiernos de los Estados Miembros.

"Artículo 12. El Gobierno Federal requerirá la autorización expresa del Congreso de la Unión para aceptar modificaciones a la suscripción de México al Banco Interamericano de Desarrollo, aceptar enmiendas al Convenio respectivo, hacer préstamos a este organismo y separarse del mismo.

"Sala de Comisiones de la H. Cámara de Diputados.- México, D. F; a 27 de noviembre de 1959. Comisión de Economía y Estadística.- Enrique Salgado Sámano.- Silvestre García Suazo.- Francisco Argüello Castañeda".- Primera lectura.

El C: Presidente: Se reanuda la discusión, en lo particular, sobre el dictamen relacionado con los artículos 73 y 115 de la Constitución General de la República. Se pone a discusión el párrafo que se marcó con el número 5 de la fracción I del artículo 115. Se abre el registro de oradores.

- El C: secretario Pérez Ríos Francisco (leyendo):

"Los integrantes de Ayuntamiento, individualmente o en su totalidad, solamente podrán ser privados de su cargo por causas graves, previstas en la ley, a juicio de la Legislatura correspondiente, la que erigida en Gran Jurado y en sesión pública, practicará las diligencias pertinentes y oirá a los afectados. Su destitución no podrá ser acordada sino por el voto de más de las dos terceras partes de los miembros del Congreso local". - El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Villarreal.

El C. Villareal Villareal Aarón S.: Señor Presidente. Señoras y señores diputados: el párrafo V se refiere a la forma como pueden ser privados de sus cargos los miembros de un ayuntamiento que por alguna razón violen algún precepto legal o se pongan al margen de sus obligaciones contraídas con su pueblo. Habla el mencionado párrafo no solamente de los cargos precisos que se deben de considerar, sino que también habla de la manera de calificarlo e inclusive el procedimiento a seguir por parte de las Legislaturas locales.

Como es una innovación en nuestra Carta Magna, consideramos que debe comprender también los aspectos generales desde luego, pero sin quitarle su aspecto podríamos llamarlo puramente doctrinario; está bien que se señale que deben enjuiciarse a los miembros de un Ayuntamiento por causas graves señaladas en la ley, calificar esas mismas causas y determinar lo conducente.

No creo justo que esté en la Constitución, puesto que, para ello, están las Legislaturas respectivamente de cada Estado que por naturaleza propia para su régimen interior tiene su propio reglamento. En tal virtud, me parece demasiado celo de parte de la Comisión o de los señores que formularon la iniciativa, el hecho de que se daba poner en la propia Constitución general el procedimiento que deban seguir; es decir, reunirse en sesión especial y conocer exhaustivamente todos los motivos que tengan a mano para enjuiciar a los ya referidos miembros de equis Ayuntamiento.

Yo,. en concreto ,sugeriría respetuosamente a la Comisión que par a todos esos

cursos, se dejaran en libertad a las Legislaturas, puesto que tienen su propia Constitución y su propio Reglamento por el cual se rigen y quedara, es decir, quitar el aspecto ese que dice: "que se erigirá en gran jurado y en sesión pública practicará las diligencias pertinentes" y sintetizar el párrafo de la siguiente manera - desde luego si a bien lo tiene la Comisión Dictaminadora - : "Los integrantes de un Ayuntamiento, individualmente o en su totalidad, solamente podrán ser privados de sus cargos por causas graves, previstos en la ley, a juicio de la Legislatura correspondiente, su destitución no podrá ser acordada sino por el voto de más de las dos terceras partes de los miembros del Congreso local".

Esta es mi proposición en concreto. Muchas gracias.

El C. Presidente: Tiene la palabra la Comisión.

El C: Sada Baigts Enrique: Señor presidente. señores diputados: Cuando el grupo de diputados autores de la iniciativa la formuló, indudablemente que una de sus máximas preocupaciones consistió en l afectiva libertad en el aspecto político que debían gozar los municipios. De ahí que, según recuerden ustedes, en el texto de la misma se habla de un procedimiento realmente excepcional, un procedimiento que trasladaban la destitución de los municipio,

sólo por causas graves previstas en la ley, ya no sólo al conocimiento de una Legislatura, sino a una medida de tanta trascendencia como aquella que significaba un referéndum, una ratificación por parte del pueblo, de la decisión de los miembros de la Legislatura en más de sus dos terceras partes.

Nos preguntamos: ¿se quiere o no se quiere realmente darle libertad política a los Municipios? ¿Se quiere o no se quiere proteger en todo lo que abarca la ley y nuestras instituciones a los integrantes de un Ayuntamiento? ¿De qué manera será posible que esos municipios desempeñen su contenido? ¿Exponiéndolos de aquellos que provocan desordenes y que después ni siquiera son responsabilizados? La Comisión, con preocupación especial, estimó en este punto, comprendiendo que se trataba del remate precisamente del aspecto de la autonomía política, propició un procedimiento tendiente a devolver la dignidad a los municipios, a devolverles su categoría. Y formuló el proyecto en el sentido de que fueran las Legislaturas locales, sí, las que juzgaran los motivos de destitución por causas graves de los munícipes, pero erigidas en gran jurado, en sesión pública, para que no hubiera en ninguna forma...

El C: Hank González Carlos (interrumpiendo): ¿Me permite usted una interpelación ?

El C. Sada Baigts Enrique: Con todo gusto.

El C. Hank González Carlos: El señor orador habla de devolverles a los munícipes su respetabilidad. ¿Alguien se las ha quitado?

El C: Salda Baigts Enrique: La realidad actual, compañero diputado Hank González, es de que los munícipes en la situación en que se encuentran, no gozan de una gran libertad política, no tienen libertad en el ejercicio de sus funciones. Se necesita, a la altura de la ley, a la altura de la Constitución, dar normas para que puedan cumplir su misión, la alta función que tienen encomendada, sin sufrir influencias de ninguna especie, sin estar expuestos a esas influencias.

El C: Hank González Carlos: Muchas gracias.

El C. Sada Baigts Enrique: Decía a ustedes que la Comisión dictaminadora, interpretando la preocupación de los autores de la iniciativa, solo porque el referéndum venía a ponerse en contraposición con nuestro sistema constitucional, fue desechado para incorporarlo al texto constitucional, pero se busco un procedimiento que garantiza esas instituciones de los munícipes, procedimiento que ya se encuentra estatuido en nuestra Constitución y que por tanto forma parte de la misma.

En esas condiciones, si nosotros hacemos a un lado este procedimiento y dejamos escuetamente que sean las Legislaturas locales las que juzguen sobre las causas de destitución de los munícipes nos encontraremos con que hemos dejado indefensos a esos munícipes, que no les hemos dado la oportunidad de ser oídos en audiencia pública, con personal de la prensa que será el encargado de llevar a la opinión pública todos los detalles de la acusación con el objeto de investigar la verdad de los hechos. De esa manera, se producirá un climax mejor para que nuestros munícipes puedan responder a estos cargos y cumplir con su cometido para un mejor servicio de la patria. Muchas gracias.

El C. Presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Hank González.

El C. Hank González Carlos: Señores diputados: parece que no se ha querido entender por parte de la Comisión una cosa en que hemos insistido frecuentemente. No nos oponemos a que a un munícipe que por equis causa graves deba destituirse, se le juzgue en sesión pública instaurada o no en gran jurado la Legislatura local; insistimos, en que no nos oponemos a que desde la Constitución tengamos que enseñarle a la Legislatura local cómo debe hacerse las cosas. Y me parece, una vez más, incongruente la postura de la Comisión.

La Comisión dictaminadora nos dice que se encargará a las Legislaturas locales de vigilar cuáles son las causas graves que puedan ameritar la destitución del miembro de un Ayuntamiento. ¿Cuáles son esas causas graves? ¿Considera capaz a la Legislatura de calificar esas mismas causas graves y le considera incapaz de saber cuál es el camino para Calificarlas? Me parece incongruente considerar a una legislatura capaz de fijar primero y calificar después y totalmente incapaz de saber cómo lo debe hacer.

Vamos a tener que llegar a un momento a que la constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos se inserte un reglamento para cada Legislatura local. les vamos a decir cuáles asuntos pueden tratar en audiencia pública, cuáles en sesión privada, cuáles convertidas en gran jurado, cuándo deben hacer sesiones solemnes, etc. ¿No podrán nuestras legislaturas locales hacerlo, señores dictaminadores ? Vuelvo a insistir en que no nos oponemos a que se les juzgue en sesión pública o privada, nos oponemos a que tengamos que darles desde aquí el guión a que deben sujetarse a sus actividades.

El señor diputado Sada Baigts ha hecho desde aquí una afirmación muy peligrosa, muy peligrosa para un miembro del Partido Revolucionario Institucional. El señor diputado ha informado textualmente :

"Actualmente no tiene libertad los municipios ". ¿Quien les está quitando esa libertad señor diputado Sada Baigts? ¿Quién les está frenando? Se trata, sí, de dar mayor libertad económica, porque hoy no tienen con qué cumplir sus funciones los Ayuntamientos, pero no por defender un dictamen, no por defender un dictamen, no por defender una redacción se pueden hacer afirmaciones tan graves como las que ha hecho al señor diputado Sada Baigts. Es necesario siempre medir hasta dónde llegan los conceptos que se emiten, fundamentalmente aquí en esta tribuna de resonancia nacional y que habrá de llegar a todos los ciudadanos de México. Nos hablaba el señor diputado Sada Baigts de que la Comisión Dictaminadora nos había hecho una rebajita: Quitó el referéndum, porque no consideró conveniente que permaneciera en la Constitución. Con el referéndum estábamos desconociendo la autoridad de las Legislaturas locales. Ahora la Comisión simplemente le está negando capacidad a las Legislaturas locales para señalar sus procedimientos. Insisto,

señores diputados, en que ustedes enjuicien esto serenamente, mediten la proposición concreta que el señor diputado Villareal Villareal con tanto acierto ha hecho desde esta tribuna: Que no marquemos caminos precisos; que no le marquemos procedimientos a las Legislaturas locales; que pensemos en la provincia de donde la mayor parte de nosotros provenimos y en donde hay gente tan o más capaz que los que aquí estamos representándola; que ahí hay gente preocupada y que ellos sabrán escoger muy bien cuál es el mejor camino a seguir para juzgar a un munícipe que a veces podrá ser mal acusado, pero que en ocasiones puede ser un munícipe que no esté cumpliendo con sus funciones y que entonces se hará necesario que la Legislatura local lo juzgue y destituya para mayor prestigio de los Ayuntamientos y para que se impida que en ellos pueda colarse algún pícaro que nunca faltan en este mundo. (Aplausos)

El C. Presidente: Tiene la palabra la Comisión.

El C. Sada Baigts Enrique: Señores diputados: tal parece que el compañero diputado Carlos Hank no aprendió suficientemente la lección de Derecho Constitucional que tan brillantemente y en cátedra especial fue dictada en esta tribuna por el licenciado Llórente González.

Vuelve con su cantilena: "No señalamos a las Legislaturas locales tales y cuales caminos". No lo dice, pero lo está dando a entender: "Lesionamos su soberanía ...." "Vuelve la misma situación...".

El C. Hank González Carlos (interrumpiendo): Para una aclaración.

El C. Presidente: Si el orador se lo permite.

El C. Hank González Carlos: Para una aclaración no se necesita que la conceda el orador. El orador puede conceder o no el permiso para una interpelación.

El C. Presidente: Se le concede, después de que termine el orador.

El C. Sada Baigts Enrique: Desde ese punto de vista se tacha de incongruente el punto de la Comisión Dictaminadora que propone un sistema por medio del cual se podrá responsabilizar mejor a los munícipes y aún cuando se hablo de libertades en esa tribuna, por un servidor, al hablar de ellas se habló de libertades de responsabilidad; es decir, de responsabilizaciones. No se dijo, como lo hiciera también el señor diputado Hank González en esta tribuna, que "estábamos pisoteando la Constitución", también afirmación por demás atrevida que no había razón....

El C. Hank González Carlos: Moción de orden, señor Presidente.

El C. Presidente: ¿En qué sentido?

El C. Hank González Carlos: Yo no he dicho que estemos pisoteando la Constitución; no pronuncié tampoco el término "soberanía" en esta intervención. Si el señor diputado Sada Baigts no encontró ningún argumento en mi intervención de hoy se lo puedo dar para que me lo pueda refutar.

El C. Presidente: Su intervención era para una moción de orden y no para una aclaración de preceptos.

El C. Sada Baigts Enrique: No creo necesitar ningún dato para hablar de convicciones, porque las convicciones se tienen.

Vuelve, pues, la Comisión dictaminadora a insistir ante ustedes que es necesario que refleccionen en la necesidad imperiosa de crear un sistema que garantice en todos sentidos y con toda firmeza una responsabilización mayor de los munícipes y al mismo tiempo una forma mejor de que éstos cumplan sus funciones. En tal sentido, la Comisión sostiene su dictamen y ruega a la Asamblea se sirva tomarlo en cuenta para el momento oportuno.

El C. Presidente: Tiene la palabra el señor diputado Ortega Calderón.

El C. Ortega Calderón Jesús: Honorable Asamblea: como uno de los autores de la iniciativa que está a discusión, juzgo conveniente aclarar las razones que tuvimos para establecer las bases a que habrán de sujetarse las legislaturas de los Estados en los casos de destitución de los munícipes.

Quiero hacer notar a ustedes en forma especial, como ya lo hice notar en otra intervención, que se trata de una reforma a la Constitución que estamos formando parte de un poder constituyente permanente que establece el artículo 135 de nuestra Constitución y, en esas condiciones, debemos juzgar los actos que estamos realizando.

Nosotros no podemos desentendernos del sistema de nuestra propia Constitución. Podrá acaso establecerse un sistema diverso al que para otros aspectos se señalan en la Constitución. Esta debe ser un todo armónico y debe estar congruente en todos sus aspectos.

Si nosotros examinamos el sistema que se sigue en nuestros cuerpos legislativos federales, podríamos apreciar cómo, en tratándose de las responsabilidades en que se pueda juzgar a cuales quiera de su miembro o a los altos funcionarios de la Federación, se establecen en la propia Constitución las normas que deben regirse en ese sentido. En ese aspecto el artículo III de nuestra Constitución dice:

"Artículo 111. De los delitos oficiales conocerá el Senado erigido en gran jurado; pero no podrá abrir la averiguación correspondiente, sin previa acusación de la Cámara de diputados".

Y a continuación agrega: "Si la Cámara de Senadores declarase, por mayoría de las dos terceras partes del total de sus miembros, después de practicar las diligencias que estimen convenientes y de oír al acusado, que éste es culpable, quedará privado de su puesto, por virtud de tal declaración, e inhabilitado para obtener otro por el tiempo que determine la ley".

Si en la propia Constitución se está estableciendo que debe oírse al acusado; si tenemos un artículo 14 constitucional que dice que a nadie podrá privársele de la vida, de la libertad, de sus posesiones o derechos, sino mediante juicio seguido ante los tribunales previamente establecidos, en que se cumplen las formalidades esenciales del procedimiento, ¿por qué no hemos también de poder poner aquí en este aspecto una disposición de esta naturaleza? De no hacerlo, seriamos incongruentes

con nuestra propia Constitución, con el sistema de ella.

Recordemos también que el artículo 133 establece la supremacia de la Constitución; que al artículo 40 de nuestra propia Carta Fundamental está diciendo que las contribuciones de los Estados se ajustarán a lo que determine la Constitución Federal.

En esas condiciones, no estamos dando ninguna lección a las Legislaturas de los Estados; no estamos señalando un camino; estamos simplemente siendo congruentes con la propia Constitución y estableciendo bases para limitar posibles arbitrariedades que pudieran cometerse en esas condiciones.

No bastaría, señores diputados, con que la Legislatura estableciera en su ley orgánica el que hubiera determinadas causas para poder destituir a un municípe; no bastaría que después ella fuera a tratar de aplicarlas. Quizá pueda en algunos casos violar esas normas, y entonces, si no se establece en una constitución local o no se establece en una ley secundaria que pudiera emanar de esa Constitución local el derecho de defensa del acusado, ¿en qué condiciones quedaría ese acusado y en que condiciones quedaría esa norma?

Por eso, señores, al estudiar nosotros en nuestra iniciativa este aspecto, después de haberlo discutido y haber examinado el marco de nuestra Constitución, considerando que debemos ser congruentes con él, hemos puesto y sostenido que debe prevalecer un párrafo de esa naturaleza. De otra manera nos estamos saliendo del marco de la Constitución.

El C. secretario Pérez Ríos Francisco: Por la negativa. (votación)

El C. secretario Olivares Santana Enrique: ¿Falta algún ciudadano diputado de votar por la afirmativa?

El C. secretario Pérez Ríos Francisco: ¿Falta algún ciudadano diputado de votar por la negativa? Se procede a recoger la votación de la Mesa.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

Habiéndose agotado el registro de oradores para la discusión del párrafo quinto, se va a proceder a la votación nominal.

Por la afirmativa.

- El C. secretario Pérez Olivares Santana Enrique:

¿Falta algún ciudadano diputado de votar por la afirmativa?

El C. secretario Pérez Ríos Francisco: ¿Falta algún ciudadano diputado de votar por la negativa? Se procede a recoger la votación de la Mesa. (Votación).

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

Por 84 votos de la afirmativa y 7 de la negativa fue aprobado el párrafo quinto.

El C. Presidente: Está a discusión el siguiente párrafo que se marcó con el número 6 y al cual se le dará lectura.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique (leyendo):

''Los Ayuntamientos estarán representados en todos los organismos creados por disposiciones de los Gobiernos Federal o de los Estados para la construcción de obras o la prestación de servicios médicos organismos serán coordinados con los Ayuntamientos y requerirán la conformidad de éstos para su ejecución; unos y otros otorgarán atención a los servicios públicos indispensables, primordialmente a los de agua y drenaje. La s obras construidas por los referidos organismos forman parte del patrimonio y serán administradas por al Ayuntamiento respectivo''.

El C. Presidente: Se abre el registro de oradores .

Tiene la palabra el ciudadano diputado Manning Valenzuela.

El C. Manning Valenzuela Andrés: Ciudadanos diputados: No quiero empezar mi argumentación sobre este párrafo sin antes encomiar el propósito que los autores de la iniciativa y los autores del dictamen persiguieron al presentarla a la consideración de esta H. Cámara de Diputados.

No quiero, inclusive, dejar pasar desapercibido el que en esta tribuna se haya hecho muy poco honor a los encargos de administrar el poder municipal en nuestra patria, ya que han sido objeto de calificativos que, a mi juicio sinceramente, no merecen.

El hecho de que hayan existido alcaldes o municípes que se hayan apartado de su deber en el ejercicio de sus funciones, no es posible que esto se extienda a tantas personas muy dignas, mexicanos patriotas, que han sabido gobernar a sus Municipios con celo, con honradez y con patriotismo.

Ya el señor diputado Díaz Duran, en su intervención del día de ayer, mencionaba los nombres de algunos legisladores compañeros nuestros de hilera, que habían sabido ejercer su mandato con dignidad y con honestidad.

Por esa razón, cuando el dictamen de la Comisión, al redactar este párrafo, se inspiró en lo expuesto en su preámbulo, y dice: ''Gran interés encierra el párrafo de la iniciativa que comentamos por el cual se tiende a reintegrar a los Ayuntamientos, la intervención que les corresponde a los diversos organismos creados por disposiciones de la Federación o de los Estados, para la construcción de obras o la prestación de servicios públicos''.

Hace plena justicia a un asunto que hemos debatido en esta Cámara y que justamente tiende a dignificar al Presidente Municipal, a los municípes, a reintegrarles la

personalidad que deben tener en la administración de sus Municipios.

Hemos presenciado en los Municipios que representamos, en muchos Municipios de la República, que el funcionamiento de las juntas de mejoramiento, de agua potable, de irrigación, etc., indiscutiblemente creada con un noble propósito por el Gobierno Federal o por los Gobiernos de los Estados, muchas veces en el ejercicio de sus funciones han creado en el Municipio otro poder que viene a postergar las funciones del Presidente Municipal y de los integrantes de los Ayuntamientos.

Si estamos nosotros tratando de obtener la independencia absoluta del Municipio, hacemos eco del propósito del Constituyente del 17 que al inscribir su pensamiento en el artículo 115 constitucional, inició precisamente el deseo del pueblo de México y que la célula política principal de México: el Municipio, obtuviera su autonomía, consideró que a los Presidentes Municipales si se les debe conceder la facultad que los autores de la iniciativa inscribieron en su proyecto inicial. La iniciativa suscrita por

nuestros compañeros legisladores autores de ella, establecía: ''Los Presidentes de los Ayuntamientos presidirán también todos los organismos oficiales que se creen por disposiciones de los Gobiernos Federal o de los Estados, para la construcción de obras o la prestación de servicios municipales''.

Lo estipulado también por la Comisión en el considerando que leí antes, en el sentido de que ante la posibilidad física de que sean los Presidentes Municipales quienes presidan todos estos organismos, considero que no es de peso. Si algún Presidente Municipal, por razón de que gobierne un Municipio de considerable importancia no puede atender la presidencia de una Comisión, vamos dejándole la libertad de promover ante el Ayuntamiento el derecho a nombrar una persona que lo sustituya, pero que sea el Ayuntamiento, la presentación del Ayuntamiento la que presida esta junta, y que no solamente se le dé una presentación básica como miembro de una junta de esta naturaleza.

Yo quiero suponer que en una junta se designa al Presidente Municipal representante del Ayuntamiento en ese organismo. Entonces el Presidente Municipal debería supeditarse en su Municipio a la Presidencia de una obra encabezada por una persona designada ya sea por el Gobierno Federal o por el Gobierno del Estado, y esto, señores diputados, considero que debemos corregirlo, debemos estar de acuerdo con lo propuesto atingentemente por los ponentes; es decir, que sea el Presidente Municipal el que presida por sí o por delegación que le haga el Ayuntamiento ante otra persona en estas juntas.

Hemos presenciado como la intromisión de personas extrañas a los Municipios, en juntas de esta índole han venido a crear en el Ayuntamiento un serio problema; muchas veces serios problemas de carácter político y esta es la oportunidad, señores, de que lo evitemos; que sea realmente el programa de un hombre que se hace cargo de un Municipio, el programa de un individuo ungido por el pueblo el que pueda desarrollarse y que obtenga la colaboración de la iniciativa privada. Sí, que se forme la junta, que se apele a los mejores vecinos del Municipio para que lo ayuden, pero que no se vede al Presidente Municipal ni se le reste la investidura que debe tener como administrador del Municipio.

Por esa razón, constriñendo mi proposición no sólo a lo propuesto por los compañeros diputados autores de la iniciativa, yo diría que se estuviera a lo propuesto por ella, diciendo solamente: ''Los Presidentes de los Ayuntamientos presidirán también todos los organismos oficiales que se creen por disposición de los Gobiernos Federal o de los Estados, para la construcción de obras o la prestación de servicios municipales''. Negar este derecho a los Presidentes Municipales, tal me parece que será justificar los ataques que en lo general han surgido los alcaldes de nuestra patria. Esté postulado indiscutiblemente tiene que ver mucho en la independencia económica y política del Municipio, para que no sea, como dije antes, una fuerza extraña, el interés de una persona que se cuele en una cosa de la naturaleza, la que venga a trastocar el interés de una persona, de un ciudadano que, como dije, fue ungido por el pueblo. Muchas gracias.

El C. Presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Llórente González.

El C. Llórente González Arturo: Señor Presidente. Honorable Asamblea: en primer término quiero expresar a ustedes que los autores de la iniciativa nos hemos solidarizado con la nueva redacción que a esté párrafo le dio la Comisión dictaminadora.

Efectivamente, nosotros propusimos que fuéramos presidentes municipales los que presidieran todos los organismos creados por disposiciones de los Gobiernos Federales o de los Estados.

La finalidad de la proposición iba al parejo de fortalecer la vida municipal, de volver a los Ayuntamientos su intervención en todos los aspectos de la vida municipal, que no se pudieran segregar a las actividades de la comuna algunos renglones de obras o de servicios que revisten un carácter eminentemente municipal. Ese fue el propósito de los autores de la iniciativa, pero nosotros hemos aceptado el dictamen por que nos ha parecido congruente la nueva redacción de esta párrafo, con el mismo propósito que perseguimos en la iniciativa; esto es, y a mayor abundamiento, lo confesamos, nos parece que la nueva redacción proporciona a los Ayuntamientos una mayor fuerza, un a mayor autoridad, y una mayor oportunidad para intervenir en todas las actividades que les son y que les deben ser a fines. La presidencia de los organismos oficiales puede no pasar de ser un elemento puramente formal. Un alcalde puede presidir la Junta Federal de Mejora Materiales, puede presidir una junta de mejoramiento, puede presidir una junta de electrificación o una junta local de caminos; pero, ¿y los programas de obras? ¿La determinación sobre esos programas de obras? ¿ La orden para ponerlos en marcha?. ¿La estructura de los mismos? ¿No es, acaso, señores diputados, un elemento de más importancia para la colectividad que la sola presidencia de juntas, de los comités o de los patronatos? Evidentemente que es de más importancia poder convertir al Ayuntamiento en el órgano planificador de una comunidad, el Ayuntamiento se convierta en el órgano supremo para decidir cuales son los programas de obras que deben realizarse y cuales son los servicios públicos que deben atenderse. Además, todos sabemos que las juntas federales las mejoras materiales son organismos de carácter federal, no podemos negar que ella al través de su ejercicio y de su actuación, han contribuido, en mayor o menor grado, al progreso de los lugares donde han funcionado; múltiples obras de las ciudades fronterizas y portuarias se han constituido. Por lo que hace a las juntas el mejoramiento moral, cívico y material, sabemos que estas, según las leyes que las rigen, que rigen estructuración y su funcionamiento de las diversas entidades federativas, se constituyen en las reuniones convocadas por la autoridad municipal y se integran por los vecinos más prominentes, capaces y entusiastas que desean contribuir a las actividades profesionales, incorporándose a la tarea de

la administración pública, como organismos auxiliares de la autoridad municipal.

En consecuencia, podría desnaturalizarse el origen y los objetivos de este importante organismo vecinal, que en una buena medida han servido para promover y para canalizar la incorporación de la iniciativa privada a la ejecución de obras o a la de prestación de servicios públicos.

La escencia de la vida municipal, por eso es la participación de los vecinos. Para mi, además de las normas constitucionales, además de los preceptos legales de órbita estatal, me parece que donde radica la escencia más pura e importante de la actividad municipal, es la incorporación de los vecinos a las tareas de la administración pública, que todos y cada uno de los habitantes participen con la misma convicción con el mismo entusiasmo, de que para lograr el progreso de una comunidad es preciso que todos participen en la tarea común; que consideren a una ciudad, que consideren a un pueblo como la casa de todos y de cada uno de los vecinos. No frenemos, por la disposición puramente formulista, esta importantisima participación de los vecinos, repito, en las tareas de la administración pública. Dejemos que estos organismos sigan encausando sus trabajos, sigan proliferando en toda la extensión del territorio nacional; que los buenos ciudadanos, que los buenos vecinos se constituyan en auxiliares de sus autoridades municipales; pero que si, subordinemos los programas de estos organismos vecinales; subordinemos los programas de las Juntas Federales de Mejoras Materiales y de todos los organismos oficiales a una suprema autoridad en cuanto a la decisión de las obras que deben emprenderse y de los servicios públicos que deben prestarse.

Por tanto, los autores, repito, encontramos la Comisión dictaminadora la condición de que los programas que realicen todos los organismos deben ser coordinados con los Ayuntamientos y la ejecución de esos mismos programas que requieran aprobación el visto bueno de las autoridades municipales, estamos siendo congruentes con el principio inicial de los autores de la iniciativa. Pero por otra parte no frenaremos por un formulismo solamente, las actividades que puedan seguir realizando la Federación y los particulares en beneficio de una comunidad municipal.

Por tanto, los autores, repito, encontramos la redacción no solo adecuada, si no superada; el precepto formal de la presidencia de todos los organismos, que por otra parte pudieran conducir a una imposibilidad física, porque hay muchas comunidades del país en las cuales funcionan muy distintas clases de estos organismos auxiliares; esta redacción, sustituyendo el concepto formal de la presidencia, se refugia en el aspecto de fondo que es el que nos debe preocupar: que no haya un solo programa de obras que se organice, que se pretenda realizar, al margen de la autoridad municipal; que no se formule un solo programa de obras del que no tenga conocimiento el Ayuntamiento, que estos programas, cualquiera que sea el organismo del que provengan, se sujeten a la coordinación del Ayuntamiento y que requieran, para su ejecución, para su iniciación, aprobación completa de las autoridades municipales.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

Agotado el registro de oradores que se abrió para la discusión del párrafo sexto, se va a proceder a la votación nominal. Por la afirmativa.

El C. secretario Pérez Ríos Francisco: Por la negativa. (votación).

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

¿Falta algún ciudadano diputado de votar por la afirmativa?.

El C. secretario Pérez Ríos Francisco: ¿Falta algún ciudadano diputado de votar por la negativa?

Se procede a recoger la votación de la Mesa. (votación).

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

Por ochenta y seis votos de la afirmativa contra uno de la negativa, fue aprobado el párrafo sexto.

Está a discusión el siguiente párrafo, marcado con el número 7, al cual se le va a dar lectura.

''Los Municipios podrán asociarse para la prestación de servicios públicos o la realización de obras de interés común, con la aprobación de la Legislatura del Estado o Estados a que pertenezcan''.

El C. Presidente: Se abre el registro de oradores.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para la votación nominal.

El C. Presidente: Esta a discusión el siguiente párrafo, marcado con el número 8, al cual se va a dar lectura.

El C. secretario Olivares Santana Enrique: (leyendo):

''Los Congresos de los Estados reglamentaran en sus respectivas jurisdicciones, respetando las normas anteriores, el funcionamiento de la administración municipal, determinando el número de munícipes, fecha de requisitos para su elección, forma de sustituirlos, sus facultades y obligaciones y la de los funcionarios que los auxilien en el gobierno interior, y ...''

El C. Barrera Fuentes Florencio: Para una aclaración. en la parte final del párrafo que la Secretaría esta poniendo a discusión, dice: ''...y la de funcionarios que los auxilien en el gobierno interior ''coma''. Debe ser ''punto y aparte'', porque aquí se da a entender que el artículo 115 solamente consta de dos fracciones y nos hemos olvidado de que no se ha discutido la fracción tercera que es la que lo integra.

El C. Sada Baigts Enrique: La Comisión acepta la corrección.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

Con la aclaración hecha por el C. diputado Barrera Fuentes, se reserva la votación nominal.

El C. Presidente. Se pone a discusión la fracción II, el artículo 115, el primer inciso: a) al cual se le va a dar lectura.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique.

''II. Los municipios administraran libremente su hacienda, la cual se formara de:

''a) Los impuestos de carácter privativo municipal sobre las actividades comerciales e industriales que las leyes impositivas, federales o locales, consideran como menores; los que graven el comercio ambulante o en plazas y vías públicas; el efectuado en mercados; las diversiones y espectáculos públicos, la matanza de ganado, los anuncios y propaganda comercial en la vía pública; los que se causen sobre juegos, rifas y sorteos permitidos y los demás que señalen las Legislaturas de los Estados''.

El C. Presidente: Se abre el registro de oradores.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

No habiendo quien desee hacer uso de la palabra, se reserva la votación nominal. - El C. Presidente: Se pone a discusión el siguiente inciso marcado con la letra ''b'' al cual se le va a dar lectura.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

''Inciso b). Los derechos por prestación de servicios de carácter municipal tales como los de agua, drenaje, rastros, mercados, registro civil, cementerios, autorizaciones, así como los de cooperación para obras de urbanización y servicios públicos''.

El C. Presidente: Se abre el registro de oradores.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para la votación nominal.

El C. Presidente: Esta a discusión el siguiente inciso marcado con la letra ''c'', al cual se va a dar lectura.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

''Inciso c). Las contribuciones, principales y adicionales, que establezcan las Legislaturas de los Estados sobre otros ramos de su competencia y que consideren necesarias para atender los servicios municipales''.

El C. Presidente: Se abre registro de oradores.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para la votación nominal.

El C. Presidente: Esta a discusión el siguiente inciso, marcado con la letra ''d'', al cual se va a dar lectura.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

''d) Los adicionales que podrá fijar el Congreso de la Unión sobre impuestos federales''.

El C. Presidente: Se abre registro de oradores.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique.

No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para la votación nominal.

El C. Presidente: Esta a discusión el siguiente inciso, marcado con la letra ''e'', al cual se va a dar lectura .

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

''inciso e). Las participaciones que obligatoriamente señalaran el Congreso de la Unión y las Legislaturas Locales, en todos los impuestos federales y estables, respectivamente.

''Las participaciones serán distribuidas en proporción a la producción, al consumo o a las necesidades de los Municipios, para la prestación de servicios públicos indispensables''.

El C. Presidente: Se abre el registro de oradores.

Tiene la palabra el señor diputado Olea Enríquez.

El C. Olea Enríquez Miguel A.: ''Compañeros diputados : Progreso significa ir hacia delante, en continuo movimiento, lenta, pausada, rápidamente, pero en movimiento, si se detiene, ya no es progreso: Es estancamiento; si vuelve atrás podemos llamarle retroceso. Sin embargo, en México en la época en que vivimos, estancamiento también significa retroceso.

El progreso en la mejoría constante de la técnica, de los métodos, de los propósitos de la vida misma.

El progreso en México a seguido un camino ascendente y a ritmo acelerado en los últimos años.

¿A quien se debe? Fundamentalmente a la doctrina revolucionaria y a la Federación como ejecutora de dicha doctrina y como abanderada del progreso''.

El C. Cortés Silva Profirió: ( Interrumpiendo): Moción de orden: que el orador se refiere exclusivamente a la cuestión particular del párrafo que esta a discusión.

El C. Olea Enríquez Miguel A.: Señor Presidente: El párrafo a discusión es el inciso e), que dice: ''Las participaciones que obligatoriamente señalaran el Congreso de la Unión y las Legislaturas Locales, en todos los impuestos federales y estables, respectivamente.

''Las participaciones serán distribuidas en proporción a la producción, al consumo o a las necesidades de los Municipios, para la prestación de servicios públicos indispensables''.

Mi tesis es que no se le quite nada a la Federación. Estoy enumerando algunas de las cosas que la Federación necesita, por lo que no se le puede quitar ....

El C. Hernández Hernández Manuel: Para una aclaración, señor Presidente.

El C. Presidente: Si le concede permiso al orador.

El C. Díaz Durán Fernando: Moción de orden, señor Presidente: Es indudable que

estamos debatiendo un asunto de singularisima importancia para el país. La constitución de la República no puede reformarse en forma por demás ligera. Evidentemente no hay quórum. Me permito reclamarlo en los términos del artículo 106 del Reglamento.

El C. Presidente: Se va a dar lectura al artículo 106 del Reglamento.

- El C. secretario Olivares Santana Enrique:

''Artículo 106. Si durante el curso de una sesión alguno de los miembros de la Cámara reclamare el quórum y la falta de este fuera verdaderamente notoria, bastara una simple declaración Presidente de la Cámara sobre el particular para levantar la sesión; en todo caso, y cuando la dicha falta del quórum

sea dudosa, deberá procederse a pasar lista y comprobada aquella, se levantara la sesión''.

El C. Díaz Durán Fernando: Señor Presidente: yo no me empecino, pero es necesario que se pase lista con el propósito de que un asunto de está naturaleza sea debatido por la mayoría o sea con quórum legal.

El C. Presidente: La Presidencia propone que la Secretaría pase lista para comprobar el quórum.

(Se pasa lista de asistencia).

El C. secretario Pérez Ríos Francisco: Hay una asistencia de 72 ciudadanos diputados.

El C. Presidente: La Presidencia, ante el resultado de la lista, se permite hacer notar a los señores diputados, la necesidad de que asistan con puntualidad a las sesiones ordinarias y, además, permanezcan en el Salón hasta que la sesión concluya. (A las 16.10 horas): Estando desintegrado el quórum, se levanta la sesión y se cita para el próximo martes 1o. de diciembre, a las 12.00 horas.

TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA Y

''DIARIO DE DEBATES''