Legislatura XLVI - Año II - Período Comisión Permanente - Fecha 19660210 - Número de Diario 47
(L46A2PcpN047F19660210.xml)Núm. Diario:47ENCABEZADO
MÉXICO, D. F., JUEVES 10 DE FEBRERO DE 1966
DIARIO DE LOS DEBATES
DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS
DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS
Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921
AÑO II. - PERÍODO ORDINARIO XLVI LEGISLATURA TOMO I. - NÚMERO 47
SESIÓN
DE LA
H. COMISIÓN PERMANENTE
EFECTUADA EL DÍA 10
DE FEBRERO DE 1966
SUMARIO
I. Se abre la sesión. - Lectura de la orden del día. - Lectura y aprobación del acta de la sesión anterior
II. Se turnan a las Comisiones respectivas las solicitudes de permiso para que el C. Eduardo Espinosa y Prieto pueda aceptar y usar una condecoración que le confirió el Gobierno de Polonia, y el C. Leonardo Garnica G., pueda desempeñar el cargo de Cónsul Honorario de Guatemala en Nuevo Laredo, Tamps.
III. Informes de las Legislaturas de los Estados: de Hidalgo, la clausura del segundo período ordinario de sesiones del tercero y último año de ejercicio, así como la instalación de su Diputación Permanente; de Jalisco, la clausura de la Permanente; la apertura del primer período ordinario de sesiones de su segundo año, y la integración de su Mesa Directiva; de Guerrero, la apertura y clausura del quinto período extraordinario de sesiones, de su tercer año de ejercicio. De enterado
IV. Invitación de los CC. Gobernadores de los Estados de Oaxaca y Guerrero, al acto de inauguración en Cuilapan, Oaxaca, del monumento erigido a la memoria del insigne consumador de la Independencia Nacional, general don Vicente Guerrero, en ocasión al aniversario de su sacrificio, el día 14 del presente. Se designa Comisión
V. Se reservan para la Cámara de Diputados las solicitudes de pensión de las CC. Rafaela Barreda viuda de Valadez y Juana Acevedo Rodríguez.
VI. Informe suscrito por el C. senador Raúl Bolaños Cacho y demás integrantes de la Comisión que asistió el día 1o. del actual al acto de la lectura del Informe de Gobierno el C. Gobernador del Estado de Jalisco. De enterado.
VII. Los CC. senador Juan Pérez Vela y diputado Tulio Hernández Gómez hacen uso de la palabra para rendir homenaje a los Constituyentes y a tantos dignos mexicanos que con su sacrificio nos han legado un régimen de derecho, y el profundo interés que la Comisión Permanente ve en la celebración de los acontecimientos del pasado histórico de México, destacando la importancia que tiene el hecho de que el C. Presidente de la República creara una nueva institución cívica, al recorrer, el día de ayer, "La Ruta de la Lealtad". Se levanta la sesión
DEBATE
Presidencia del
C. ALFONSO MARTINEZ DOMINGUEZ
(Asistencia de 22 ciudadanos representantes.)
I
El C. Presidente (a las 12.45 horas): Se abre la sesión.
- El C. secretario Gómez Guerra, Enrique:
"Comisión Permanente.
2o. Receso de la XLVI Legislatura.
Orden del Día.
10 de febrero de 1966.
Lectura del acta de la sesión anterior.
La Secretaría de Gobernación transcribe oficio de la de Relaciones Exteriores en el que se contiene la solicitud del C. Eduardo Espinosa y Prieto, Embajador de México, para aceptar y usar condecoración conferida por el Gobierno de Polonia.
La Secretaría de Relaciones, a través de la de Gobernación, envía oficio conteniendo la solicitud de permiso del C. Leonardo Garnica G. para desempeñar el cargo de Cónsul Honorario de Guatemala en Nuevo Laredo, Tamps.
Circulares de Legislaturas Locales.
Los ciudadanos Gobernadores de los Estados de Oaxaca y Guerrero, invitan a esta H. Comisión Permanente, al acto en el cual se rendirá homenaje al generalísimo don Vicente Guerrero, el próximo día 14 de los corrientes en Cuilapan, Oax.
Las CC. Rafaela Barreda viuda de Valadez y Juana Acevedo Rodríguez, solicitan pensiones de gracia.
Informe que rinden los miembros de esta Comisión Permanente que asistieron a la sesión solemne del
Congreso de Jalisco, en la cual el Gobernador de la Entidad rindió el informe de su gestión administrativa."
"Acta de la sesión efectuada por la Comisión Permanente del XLVI Congreso de la Unión, el día tres de febrero de mil novecientos sesenta y seis.
Presidencia del C. diputado Alfonso Martínez Domínguez.
En la ciudad de México, a las doce horas y cincuenta y cinco minutos del jueves tres de febrero de mil novecientos sesenta y seis, se abre la sesión con asistencia de veintiún ciudadanos representantes, según declara la Secretaría, una vez que pasa lista.
Lectura de la Orden del Día y del Acta de la sesión anterior celebrada el día veintisiete de enero próximo pasado, que sin discusión es aprobada por la Asamblea.
Se da cuenta con los asuntos en cartera:
Oficio de la Secretaría de Gobernación comunicando el nombramiento hecho por el C. licenciado Gustavo Díaz Ordaz, Presidente de la República, en favor del C. licenciado José Luis Gutiérrez Gutiérrez, como Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
De conformidad con la fracción V del artículo 79 de la Constitución Federal, la Asamblea en votación económica aprueba el nombramiento.
Encontrándose a las puertas del recinto el C. licenciado José Luis Gutiérrez Gutiérrez, se designa en comisión para que lo introduzcan al Salón, a fin de que rinda la protesta de ley ante la H. Comisión Permanente, a los CC. diputado Enrique Gómez Guerra y senador Fernando Ordorica Inclán.
A continuación puestos todos los presentes de pie, el nuevo Ministro, licenciado José Luis Gutiérrez Gutiérrez rinde la protesta de rigor.
La misma comisión que lo introdujo lo acompaña al retirarse.
Se continúa con los asuntos en cartera.
La Secretaría de la Defensa Nacional, a través de la Gobernación envía, para los efectos de la fracción II del artículo 76 constitucional, las hojas de servicios de los siguientes Jefes de la Armada: generales, Alejandro Chávez Oviedo, Joaquín Paredes Menchaca, Ignacio Valdez Cangas, Joaquín Morales Solís, Roque Madrigal Martínez, Miguel Torres Contreras, Felipe Romano Linares, Raúl Emilio Foullón Cabrera y Procopio Ortiz Reyes, Recibo, y resérvese para la H. Cámara de Senadores.
La Legislatura de Zacatecas comunica la clausura del período único ordinario de sesiones, correspondiente al primer año de su ejercicio y la designación de su diputación Permanente. De enterado.
La Legislatura del Estado de Baja California participa la apertura y clausura del primer período extraordinario de sesiones, correspondiente al primer año de ejercicio. De enterado.
El Congreso de Puebla comunica la inauguración del primer período ordinario de sesiones, correspondiente al primer año de ejercicio y la integración de su Mesa Directiva. De enterado.
La Presidencia a través de la Secretaría, propone a la consideración de la Asamblea, para cumplir con el acuerdo aprobado con anterioridad por la H. Comisión Permanente, el texto del mensaje que deberá enviarse a los Poderes Legislativos de las seis Repúblicas centroamericanas recientemente visitadas por el C. licenciado Gustavo Díaz Ordaz, Primer Magistrado de la Nación.
La Asamblea en votación económica aprueba el texto propuesto.
El C. licenciado Ernesto P. Uruchurtu, Jefe del Departamento del Distrito Federal hace atenta invitación a la ceremonia que en conmemoración del cuadragesimonoveno aniversario de la promulgación de la Constitución de 1917, tendrá lugar el día 5 del actual, en el Monumento a la Revolución.
Se nombra para que asistan a dicho acto en representación de la H. Comisión Permanente, a los CC. diputados Alfonso Martínez Domínguez, senador Raúl Bolaños Cacho, diputado Enrique Ramírez y Ramírez, senador Napoleón Gómez Sada, diputado Fluvio Vista Altamirano, senador Luciano Huerta Sánchez, diputado Tulio Hernández Gómez y senador Jesús Romero Flores.
Por instrucciones de la Mesa Directiva, se invita a todos los integrantes de la H. Comisión Permanente, para que acompañen a los representantes anteriormente designados, en los actos de conmemoración de nuestra Carta Magna.
Comunicación de la Embajada de la República de Bolivia dando a conocer que el señor Mario Ovando Ovando ha sido designado para hacerse cargo de la misión diplomática de ese país en calidad de Encargado de Negocios a, i., habiendo sido ya acreditado ante las correspondientes autoridades nacionales de México. De enterado.
El C. Gerardo Estrada Flores solicita el permiso constitucional necesario, para que sin perder su ciudadanía mexicana pueda prestar su servicio militar en los Estados Unidos de Norteamérica. Recibo, y a la Comisión de Puntos Constitucionales.
Dictamen suscrito por la Comisión de Puntos Constitucionales con proyecto de decreto que concede permiso al C. Enrique Ernesto Pugibet Tron para que acepte y use la condecoración de la Orden del Mérito Agrícola, que en el grado de Caballero le confirió el señor Ministro de Agricultura del Gobierno de la República Francesa.
A discusión, sin ella, se reserva para su votación nominal.
La Comisión de Relaciones Exteriores presenta un dictamen conteniendo proyecto de decreto en virtud del cual se concede permiso al C. J. Jesús González Gortázar, a efecto de que acepte y desempeñe el cargo de Cónsul Honorario del Gobierno de Filipinas, en Guadalajara, Jal.
A discusión, no habiendo quien haga uso de la palabra, en votación nominal se aprueban los dos proyectos de decreto, por unanimidad de veintitrés votos. Pasan al Ejecutivo para sus efectos constitucionales.
El C. diputado Enrique Ramírez y Ramírez pide la palabra para denunciar hechos que desde su punto de vista afectan gravemente la economía y la salud del pueblo de México, sobre todo de las clases más necesitadas. Afirma que acaparadores y encarecedores de los artículos de primera necesidad como la leche el pan y la carne, protegidos de buena o mala fe por jueces, consiguen el amparo de la justicia federal burlando así el control tanto de precios como de normas sanitarias.
El senador Jesús Romero Flores, une su protesta a la denuncia del diputado Ramírez y Ramírez; hace un llamado a la unidad de las fuerzas revolucionarias en torno al régimen que preside el licenciado Gustavo Díaz Ordaz, exhortando asimismo a los Poderes Legislativo y Judicial, a secundar el pensamiento presidencial para que ningún mexicano carezca de instrucción, de alimentos y de condiciones sanitarias aceptables, y finaliza diciendo que debe prevalecer el interés del pueblo, por encima de los intereses monopolísticos.
A las catorce horas y veinte minutos se levanta la sesión pública y se pasa a sesión secreta."
Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Aprobada.
II
- El C. secretario Hernández Gómez, Tulio:
"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Poder Ejecutivo Federal. - México, D. F. - Secretaría de Gobernación.
CC. Secretarios de la H. Comisión Permanente del Congreso de la Unión.
Presente.
La Secretaría de Relaciones Exteriores se ha dirigido a ésta de Gobernación, con fecha 31 de enero próximo pasado, manifestando lo siguiente:
"Ruego a usted muy atentamente se sirva solicitar de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión el permiso a que se refiere la facción III, inciso B), del artículo 37 de la Constitución Política, para que el C. Eduardo Espinosa y Prieto, Embajador de México, pueda aceptar y usar la Condecoración de la Orden de Polonia Restituta, que en el grado de Cruz de Comendador con Estrella le confirió el Gobierno de Polonia."
Hago del conocimiento de ustedes lo anterior, para los fines legales procedentes, reiterándoles mi consideración distinguida.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
México, D. F., a 4 de febrero de 1966.
Por Ac. del C. Secretario. El Oficial Mayor, Lic. Carlos Gálvez Betancourt."
Trámite: Recibo, y a la Comisión de Puntos Constitucionales.
"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Poder Ejecutivo Federal. - México, D. F. - Secretaría de Gobernación.
CC. Secretarios de la H. Comisión Permanente del Congreso de la Unión.
Presente.
La Secretaría de Relaciones Exteriores se ha dirigido a ésta de Gobernación, manifestando lo siguiente:
"Con el presente tengo el agrado de remitir a usted la solicitud que hace el señor Leonardo Garnica G., ciudadano mexicano, quien ha sido designado por el Gobierno de Guatemala para desempeñar el cargo de Cónsul Honorario de su país en Nuevo Laredo, Tamaulipas, a fin de que se gestione ante el H. Congreso de la Unión, en los términos del artículo 37 fracción II del inciso B), de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, el permiso respectivo para desempeñar dicho puesto, sin perder su ciudadanía. A fin de completar el expediente respectivo, se acompaña igualmente copia fotostática del acta de nacimiento del citado señor Garnica G., de acuerdo con lo dispuesto por la Comisión de Asuntos Diplomáticos y Consulares de la XLVI Legislatura."
Lo que transcribo a ustedes para su conocimiento y fines legales procedentes, acompañándoles con el presente los anexos que se mencionan.
Reitero a ustedes mi atenta consideración.
Sufragio efectivo. No Reelección.
México, D. F., a 24 de enero de 1966.
Por Ac. del C. Secretario. El Oficial Mayor, Lic. Carlos Gálvez Betancourt."
Trámite: Recibo, y a la Comisión de Relaciones Exteriores.
III
- El mismo C. Secretario:
"Escudo del Estado. - República Mexicana. - Independencia. Patria. Libertad. - Congreso del Estado de Hidalgo. - Secretaría.
La XLIV Legislatura del H. Congreso Constitucional del Estado de Hidalgo, tiene el honor de comunicar a Ud.(s), que en sesión celebrada el día de hoy, clausuró su segundo período ordinario de sesiones, correspondiente al tercer y último año de su ejercicio legal, habiendo quedado instalada la Diputación Permanente que fungirá durante el receso, en la siguiente forma:
Presidente, Miguel Gómez Mendoza; Vicepresidente, Tomás Devereu; Secretario, César Vieyra S.; Suplente, Samuel Zenteno R.; Suplente, Sergio González L.
Al participar a Ud.(s) lo anterior, aprovechamos la oportunidad para saludarlo(s) y renovarle(s) las seguridades de nuestra consideración atenta y distinguida.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
Pachuca, Hgo., a 15 de noviembre de 1965.
José Lugo Gil, D. S. - Jorge Preisser Terán, D. S."
Trámite: De enterado.
"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Congreso del Estado Libre y Soberano. - Jalisco. - Diputación Permanente.
H. Congreso de la Unión.
México, D. F.
La H. Diputación Permanente de la XLIV Legislatura del Estado Libre y Soberano de Jalisco, tiene el honor de comunicar a usted, que con esta fecha clausuró sus labores correspondientes al presente receso.
Reiteramos a usted las seguridades de nuestra atenta y distinguida consideración.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
Guadalajara, Jal., a 31 de enero de 1966.
Salvador Orozco Loreto, D. S. - Juan Ramírez García, D. S."
Trámite: De enterado.
"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Congreso del Estado Libre y Soberano. - Jalisco.
H. Congreso de la Unión.
México, D. F.
Tenemos el honor de comunicar a usted(es), que la XLIV Legislatura del Estado Libre y Soberano de Jalisco, inauguró el día de hoy el primer período ordinario de sesiones correspondiente al segundo año de su Ejercicio Constitucional, quedando integrada su Mesa Directiva en la siguiente forma:
Presidente, Saturnino Coronado O.; Vicepresidente, Agustín Camarena H.; Secretarios, Genaro Cornejo C. y Salvador Orozco Loreto; Prosecretarios, Francisco Chavira Rojas y J. Santana Campante Nuño.
Reiteramos a usted(es), las seguridades de nuestra atenta y distinguida consideración.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
Guadalajara, Jal., 1o. de febrero de 1966.
Genaro Cornejo C., D. S. - Salvador Orozco Loreto, D. S."
Trámite: De enterado.
"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Gobierno del Estado Libre y Soberano de Guerrero. - Poder Legislativo. - Diputación Permanente.
Chilpancingo, Gro., a 28 de enero de 1966.
C. Presidente de la H. Cámara de Diputados al Congreso de la Unión.
México, D. F.
Nos estamos permitiendo comunicar a usted que con fecha 26 del actual este H. Congreso del Estado inauguró su quinto período extraordinario de sesiones, correspondiente al tercer año de su ejercicio legal, el cual fue clausurado el 27 del mismo mes, habiendo sido convocado por esta Diputación Permanente, con el objeto de celebrar en esta última fecha Sesión Pública y Solemne en la población de Arenal de Alvarez, Mpio. de San Jerónimo de Juárez, Gro., en conmemoración del CLXXVI Aniversario del Natalicio del Gral. don Juan Alvarez.
Reiteramos a usted nuestras atenciones.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
Rafael Urióstegui Bahena, D. P. - Manuel Vázquez Sevilla, D. S."
Trámite: De enterado.
IV
- El mismo C. Secretario:
"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Gobernador Constitucional del Estado de Guerrero.
Chilpancingo, Gro., 27 de enero de 1966.
Sr. Alfonso Martínez Domínguez.
Presidente de la H. Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión.
México, D. F.
Respetable señor:
El próximo 14 de febrero se inaugurará en la población de Cuilapan, Oax., el Monumento que los Gobiernos de los Estados de Oaxaca y Guerrero acordaron construir para perdurar la memoria del insigne consumador de la Independencia Nacional, general don Vicente Guerrero, con motivo del Aniversario de su sacrificio.
En nombre de los dos Estados nos permitimos hacerle cordial invitación así como a los CC. Diputados y Senadores de la H. Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión, para que nos honren con su presencia en el acto que se ha organizado para rendir culto homenaje al Héroe que ofrendó su vida por la Patria y nos legó la Enseña Nacional.
Agradeciendo su asistencia a la ceremonia, aprovechamos esta oportunidad para reiterarle las seguridades de nuestra atenta y distinguida consideración.
Gobernador Constitucional del Estado de Oaxaca, Rodolfo Brena Torres; Gobernador Constitucional del Estado de Guerrero, Raymundo Abarca A."
Se designa en comisión a los ciudadanos senador Raúl Bolaños Cacho y diputado Miguel Osorio Marbán.
V
- El C. secretario Gómez Guerra, Enrique:
"Rafaela Barreda Vda. de Valadez.
Dom. Laurel No. 42 "A" Col. Santa María.
México, D. F., a 7 de febrero de 1966.
Al C. Presidente del Congreso de la Unión.
Senado de la República, México, D. F.
Rafaela Barreda Vda. de Valadez, de nacionalidad mexicana y con domicilio en la calle de Laurel No. 42 "A" Col. Santa María; ante usted con todo respeto suplica que, previo estudio del expediente que tiene formado en la Secretaría de la Defensa Nacional mi finado esposo el coronel de caballería Salvador Valadez de la Cerda, y por los servicios prestados en la Revolución Mexicana y en el Ejército ya organizado, y quien falleció el día 5 de abril de 1961, se me conceda una pensión, manifestando a usted que, mi esposo estaba separado del servicio y gestionando su incorporación al Ejército cuando lo sorprendió la muerte, y como creo que tenía derecho a su reingreso al Ejército como todos los generales y otros jefes que tomaron parte en los movimientos rebeldes contra el Gobierno, como fueron Escobar, Guadalupe Sánchez, Roberto Cruz y otros y que a la fecha están retirados con haberes, y varias viudas de los que tomaron parte en dichos movimientos y fallecieron están gozando de una pensión, es por esto señor Presidente del H. Congreso de la Unión, que pido a usted sea servido en concederme la pensión que solicito ya que mi situación económica es muy apremiante.
Por la cabida que se dé a esta mi solicitud, le ruego que me sea informado con el resultado a la dirección que indico al margen superior izquierdo.
Para comprobar mi dicho, acompaño a usted un legajo de documentos originales de mi esposo, mismos que deben existir en el expediente de la Defensa Nacional.
Acta de Matrimonio con el finado en dos fojas.
Copia fotostática que como teniente coronel le expidió la Secretaría de Guerra y Marina, en despacho respectivo, debidamente requisitada.
Copia fotostática de la patente de coronel expedida por la Secretaría de Guerra y Marina, debidamente requisitada.
Nombramiento de teniente de caballería expedido por el general Antonio A. Villarreal.
Nombramiento expedido como capitán 2o., expedido por el propio general Villarreal.
Certificados expedidos por los CC. generales Fortunato Zuazua, Francisco Zuazua y Baltazar C. Chapa. (3 certificados.)
Certificado expedido por el coronel Arturo Lazo de la Vega.
Diploma de la condecoración concedida por el Primer Jefe, por méritos en campaña, cuya condecoración obra en mi poder, esta fue por la defensa de Ciudad Juárez en el año de 1919.
Carta del general Olachea, donde consta que le sigue dando el carácter de coronel.
Como por los documentos que acompaño creo compruebo mi dicho, en tal virtud espero sea acordada de conformidad esta solicitud de Pensión en mi favor.
Respetuosamente.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
Rafaela Barreda Vda. de Valadez."
Trámite: Recibo, y resérvese para la Cámara de Diputados.
México, D. F., a 4 de febrero de 1966.
"C. Presidente de la H. Comisión Permanente de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.
Presente.
La suscrita Juana Acevedo Rodríguez, ciudadana mexicana, de 63 años de edad, con domicilio para oir notificaciones en la Conserjería de la Escuela "San Rafael" de la colonia Gabriel Hernández, Distrito Federal, ante usted y con el debido respeto comparezco y expongo lo siguiente: siendo mi extinto padre de nombre Evaristo Acevedo Padilla, militar con el grado de teniente al servicio de la Revolución desde el año de 1911, fecha en que se inició en la misma, encontrándome yo internada en el entonces Hospicio de la ciudad de Durango y siendo huérfana de madre, mi padre decidió en el año de 1914 al desconocer los poderes del Estado de Coahuila al traidor Victoriano Huerta, y lanzarse a la Revolución con el señor Venustiano Carranza, mi padre que a la sazón militaba con el C. general Francisco Murguía, decidió llevarme con él, y vistiéndome de hombre teniendo indumentaria de soldado, lo acompañe a gran parte de las acciones de armas que se efectuaron en aquel entonces, y de las cuales por fortuna resulté ilesa. Al triunfo de la Revolución Constitucionalista y habiéndose formado algunos grupos de militares con el título de la Legión de Honor, y habiendo pasado mi extinto padre al grupo "A" volví a vestir mi indumentaria femenina, resolviendo mi padre que debería yo trabajar en las labores del hogar para atenderlo, y a los familiares que vivían con nosotros.
Señor Presidente de la honorable Cámara de Diputados, la breve historia que le hago de mi caso y la cual puedo comprobar debidamente con una amplia documentación, tiene con el objeto de solicitar de su gran magnanimidad como representante del Poder Legislativo, una pensión económica de las más humildes para poder vivir el resto de mi vida, y para fundar esta petición mía, debo manifestar a usted que habiendo solicitado de la Secretaría de la Defensa Nacional, la pensión que me correspondía por ser hija legítima de mi padre, resultó que por verdadera ignorancia no la solicité a tiempo y prescribió, siendo materialmente mis instancias ante el señor Presidente de la República, y el Secretario de la Defensa Nacional, para lograr algo en mi favor. Debo manifestar a usted como puedo comprobarlo debidamente, que me encuentro en la miseria más espantosa, pues al quedar huérfana totalmente y no habiendo contraído nunca matrimonio, quedé desamparada yéndome a refugiar en un pequeño local del Cerro de la Villa, Villa Gustavo A. Madero; perteneciente a la colonia Gabriel Hernández, lugar donde fueron expulsados los colonos a la Unidad "San Juan de Aragón", habiendo quedado yo sola en el sitio donde me encuentro cubriendo un pequeño cobertizo con láminas de cartón, y en él me encuentro actualmente. Debo aclarar a usted señor Presidente, que no escucharon las autoridades mis motivos y documentos que presenté para estar en ese lugar, y que únicamente consideraron que no tenía yo descendientes ni familiares, y que por esa razón no se me podía dar alojamiento en la Unidad de "San Juan de Aragón". Debo aclarar a usted que en la actualidad me gano la vida vendiendo dulces de los más baratos a los niños de la escuela que al principio hago mención, con el temor correspondiente de que se me quite este humilde medio de vida que tengo, por las camionetas del Departamento Central, que constantemente recorren el rumbo en busca de vendedores ambulantes.
Señor Presidente, como mujer avanzada de edad y habiendo sufrido en mi juventud los embates de la Revolución, exponiendo mi vida al lado de mi padre, no considero justo terminar los días de mi vida sin el amparo del Gobierno de la Revolución, por el que luché con las armas en la mano al lado de mi extinto padre el teniente de caballería Evaristo Acevedo Padilla, de quien obran antecedentes en su expediente muy amplios de sus servicios en el archivo de la Secretaría de la Defensa Nacional, es por lo que orientada por compañeros Veteranos de la Revolución, acudo en última instancia a la magnanimidad de usted a fin de que interponga su valiosa influencia ante esa H. Cámara de Diputados y lograr la pensión de gracia que estoy solicitando en mi favor. Acompaño al presente una fotografía en reproducción donde me encuentro en el lado izquierdo acompañada de otro soldado de mi regimiento así como una copia fotostática de credencial expedida por la Secretaría de Guerra y Marina el día 9 de febrero de 1926, a favor de mi extinto padre Evaristo Acevedo Padilla.
Con la seguridad de que mi asunto será juzgado por usted debidamente y pudiendo con amplia documentación probarlo, me es grato repetirme de usted su atenta y S. S. Juana Acevedo Rodríguez.
Nota: El domicilio de la Escuela "San Rafael" de la colonia Gabriel Hernández, que cito al principio de este oficio, es donde pueden entregarme cualquier comunicación, en virtud de que en el cerro donde estoy viviendo es difícil que me puedan entregar alguna correspondencia. Gracias."
Trámite: Recibo, y resérvese para la H. Cámara de Diputados.
VI
- El mismo C. Secretario:
"C. Presidente de la Comisión Permanente de la XLVI Legislatura del Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, diputado Alfonso Martínez Domínguez, Honorable Asamblea:
Con la debida atención nos permitimos rendir el informe correspondiente a la comisión que tuvimos el honor de cumplir, para escuchar el primer informe de gobierno del C. licenciado Francisco Medina Ascencio, Gobernador Constitucional del Estado de Jalisco, el cual rindió ante la representación del pueblo jaliscience y del representante del C. Presidente de la República el día 1o. de los corrientes.
Queremos señalar ante esta representación nacional, que ese noble pueblo hermano, cuyos esfuerzos han contribuido siempre al engrandecimiento de México se encuentra dentro de un clima de orden y tranquilidad públicas, dedicado tesoneramente a su superación progresista bajo la patriota dirección de su Gobernador licenciado Francisco Medina Ascencio.
El Ejecutivo del Estado presentó una impresionante suma de realizaciones que comienza con los resultados del plan agrícola Jalisco, cuya cosecha produjo 2.279,429 toneladas de maíz, y en el renglón pecuario con una riqueza ganadera de 10,075.00 cabezas de diferentes especies.
El Estado de Jalisco ejerce un presupuesto de $233.766,100.00 en una labor conjunto de ciudadanía y gobierno para lograr obras y servicios que el pueblo necesita.
El C. Presidente de la República licenciado Gustavo Díaz Ordaz acordó que Petróleos Mexicanos destinara un presupuesto inicial de $ 80.000,090.00 para construir el gasoducto Salamanca - Guadalajara, lo que se traducirá en gran impulso en su vida industrial. El trabajo de progreso del régimen federal se hace sentir en esa entidad, en los caminos que construye la Secretaría de Obras Públicas, en el intenso trabajo en Obras Hidráulicas, Aeropuertos Internacionales en Guadalajara y Puerto Vallarta, con inversión de más de $100.000,000.00
El respeto a la vida humana y a las garantías individuales, signo de florecimiento de toda época, tiene plena vigencia en el Estado de Jalisco, y el Gobernante ha señalado en plan ético que para la protección de la vida de la ciudadanía de Jalisco, ésta tiene para él tanta importancia como la vida de sus propios hijos.
Hasta aquí damos una ligera síntesis informativa de la situación de un progresista pueblo hermano, de una noble entidad federativa, donde nacieron los derechos del hombre, del hombre mexicano, en los cerebros privilegiados de Ignacio L. Vallarta y Mariano Otero.
Sólo nos resta manifestar que la comisión fue objeto de todas las atenciones y de la proverbial gentileza y hospitalidad jaliscience, que motivaron nuestro profundo agradecimiento para todos ellos.
México, D. F., a 10 de febrero de 1966. - Sen. Raúl Bolaños Cacho. - Dip. Luis Mario Santana Cobián. - Sen. Juan Pérez Vela. - Dip. Raúl Alvarez Gutiérrez. - Sen. Manuel Sarmiento S."
Trámite: De enterado.
VII
El C. senador Pérez Vela, Juan: Pido la palabra.
El C. Presidente: Tiene la palabra el señor senador Juan Pérez Vela.
El C. senador Pérez Vela, Juan: Señor Presidente, señores diputados, señores senadores, redactores de prensa, señoras y señores:
El día 5 de presente mes se celebró el XLIX Aniversario de la Promulgación de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en la ciudad de Querétaro.
He creído pertinente subrayar, con una breve intervención, el profundo interés con que ve esta Honorable Comisión Permanente del Congreso de la Unión aquellos acontecimientos que en el pasado o en el presente han contribuido o contribuyen a la mejor estructuración de México.
"La Nación mexicana, nuestra entrañable Patria, vive y se desarrolla en un régimen de derecho que reconoce su origen en el cruento sacrificio que de su sangre y de sus vidas han hecho generosamente a través del tiempo muchos dignos mexicanos, a quienes debemos el homenaje de nuestra reconocida gratitud.
Nuestro pueblo, desde siempre, ha tenido una innata vocación a estructurar jurídicamente los ideales y anhelos que lo han impulsado en sus luchas; en la guerra por nuestra Independencia, José María Morelos y Pavón interpreta el sentir popular y quiere plasmar en una ley general todas las facultades y obligaciones que los gobernantes tienen y todos los derechos y obligaciones de los gobernados; cita al Congreso de Chilpancingo y, conscientemente, el caudillo militar, el héroe popular, se transforma en estadista y legislador al renunciar a sus posibilidades de movimientos militares y tácticos, hasta entonces su mejor arma, para consagrarse, aún al precio de su propia vida, a proteger al Congreso, porque considera el Siervo de la Nación que más importante que conservar su hegemonía personal, es sentar las bases legales del desarrollo de la patria.
La regeneradora revolución de Ayutla, cumple su promesa de volver al país al cauce constitucional, después de la dictadura de Antonio López de Santa Anna y culmina con la elaboración de la Constitución del 5 de febrero de 1857, antecedente inmediato de nuestra actual Constitución y en la que, con grande y profundo sentido patriótico participaron entre muchos, Ignacio Ramírez, Francisco Zarco, Ponciano Arriaga, Guillermo Prieto, Valentín Gómez Farías y Melchor Ocampo, preclaros exponentes de la limpia generación liberal de 1857.
El Benemérito de las Américas, don Benito Juárez, plasma su pensamiento, el sentido patriótico
de su lucha y esboza las soluciones a los problemas de su momento histórico, con las, en un tiempo, injustamente vilipendiadas por algunos, que nunca discutidas, Leyes de Reforma.
La Constitución que nos rige, la del 5 de febrero de 1917, se nutre en su contenido con las ideas más avanzadas de su época, es el producto social, lógico, de nuestro movimiento armado de 1910 y en ella el pueblo triunfante deja cristalizado y consagrados como derechos, las motivaciones de su lucha; da certeza jurídica a lo que sólo había sido aspiración.
Por eso, afirmamos, que nuestro pueblo, desde siempre, ha tenido una innata vocación a estructurar jurídicamente todos sus ideales y anhelos.
Nuestra Constitución armoniza los indiscutibles derechos del hombre como sujeto particular, con los también indiscutibles derechos de la colectividad porque los constituyentes de Querétaro sabían que el bien individual, si de verdad lo es, no está nunca reñido con el verdadero bien social, y si en su Capítulo Primero establece las garantías individuales y les otorga la original y efectiva protección del Juicio de Amparo, en los artículos 27 y 123, establece las garantías sociales que impiden el exagerado individualismo que sólo podría conducir a la injusta e inicua explotación del hombre por el hombre.
En nuestra ley fundamental se acepta el principio jurídico formal de que la autoridad solo pueda aquello que la misma ley le permite, mientras que el particular pueda todo lo que la ley no le prohibe, con lo que se garantiza la libertad del individuo y se evita el abuso del poder, abuso que nos llevaría necesariamente a una forma de dictadura.
Es un mérito indiscutible del Poder Constituyente de Querétaro, haber superado el anticuado concepto que de las funciones del Estado, como mero espectador o a lo sumo castigador de violaciones, tenía un liberalismo exagerado, para aceptar las modernas teorías sociales, y establecerlo así, que mejor conciben al Estado como prevensor de problemas y estabilizador de situaciones sociales injustas, pues es claro que la ley no puede tratar como iguales, a quienes tienen notorias desigualdades económicas, por eso los artículos 27 y 123 constitucionales son proteccionistas de las clases económicamente débiles.
La Constitución acepta la teoría tripartita de la división del poder, que los juristas, en estricto rigor, han interpretado como división de funciones y nos parece adecuada, porque el sistema de pesos y contrapesos no solo evita la concentración de facultades en un órgano, sino que hace más rápidos los trámites de la administración pública en cualquiera de sus ramas.
Por lo demás, creemos, que nuestra Constitución no se agota con su contenido o interpretación estrictamente jurídicos, sino que, tiene un enorme y singular valor humanista.
Los conceptos que en su manifiesto leyera Francisco Zarco el 5 de febrero de 1857, aplicados a la Constitución de esa fecha, tienen a nuestro juicio, vigencia plena y pueden aplicarse también a la Constitución de 1917; es conveniente recordarlos siempre:
"La obra de la Constitución debe, naturalmente, lo conoce el Congreso, debe resentirse de las azarosas circunstancias en que ha sido formada, y puede también contener errores que se hayan escapado a la perspicacia de la Asamblea. El Congreso sabe muy bien que en el siglo presente no hay barrera que pueda mantener estacionario a un pueblo, que la corriente del espíritu no se estanca, que las leyes inmutables son frágil valladar para el progreso de las sociedades, que es vana empresa querer legislar para las edades futuras, y que el género humano avanza día a día necesitando incesantes innovaciones en su modo de ser político sin más precaución que la seguridad de que los cambios sean reclamados y aceptados por el pueblo. Siendo tan fácil la reforma para satisfacer las necesidades del país, ¿para qué recurrir a nuevos trastornos, para qué devorarnos en la guerra civil, si los medios legales no cuestan sangre, ni aniquilan a la República, ni la deshonran, ni ponen en peligro sus libertades y su existencia de nación soberana? Persuadíos, mexicanos, de que la paz es el primero de todos los bienes y de vuestra libertad y vuestra ventura dependen del respeto, del amor con que mantengáis vuestras instituciones.
Si queréis libertades más amplias que las que os otorga el Código fundamental, podéis obtenerlas por medios legales y pacíficos. Si creéis, por el contrario, que el poder de la autoridad necesita de más extensión y robustez, pacíficamente también podéis llegar a este resultado."
Repetimos, que en la Revolución Mexicana de 1910, está el origen de nuestra actual Constitución Política y en respuesta a las afirmaciones de los pesimistas, de los resentidos, de los tradicionales enemigos históricos del pueblo, en respuesta a todos aquéllos que dicen que nuestro movimiento social ha muerto, que sus postulados son caducos, enfáticamente declaramos, con profunda convicción, que la lucha armada de 1910 se purificó en la limpieza inmaculada de su origen, en la actual fidelidad a sus doctrinas, en la lucha diaria por la plena realización de sus fines. Y para probar nuestro aserto, mostramos a todos una patria cada día más respetada en ámbito de sus relaciones internacionales y cada día más preocupada por coadyuvar desinteresadamente a la solución de los problemas de otros pueblos, principalmente de aquellos con los que compartimos un mismo origen y destino les mostramos un país dinámico, en ascenso constante, con una distribución de la riqueza cada vez más equitativa, les mostramos un pueblo con indomable voluntad de lograr justicia social y con la madurez bastante para luchar por ello, al amparo de nuestras sólidas instituciones democráticas, teniendo como inspiradora y ley suprema nuestra Constitución Política, y como guía al fiel depositario y primer guardián de la doctrina revolucionaria mexicana, al nuevo Siervo de la Nación, al señor Presidente de la República licenciado Gustavo Díaz Ordaz." (Aplausos.)
El C. Hernández Gómez, Tulio: Pido la palabra.
El C. Presidente: Tiene la palabra el diputado Tulio Hernández.
El C. Hernández Gómez, Tulio: Señor Presidente. Honorable Asamblea; señoras y señores diputados: Los pueblos se nutren de su historia y
trabajan con decisión, cuando han sabido encontrar en su camino símbolos bastantes para exaltar sus fuerzas mejores y seguir el sendero del progreso.
Nada que ayude a continuar una marcha hacia adelante, es ocioso, ni es obvio, nada que exalte el valor de la historia y empuje a los hombres a construir un mejor destino debe olvidarse; el pasado no es para nosotros el recuerdo de épocas mejores, sino la lección de aquellos valores permanentes que han de servir para proyectarnos hacia el porvenir.
Cuando alguien piensa que recordar la historia, emocionadamente, resulta ya un poco inútil, nosotros pensamos que nada es inútil, cuando se trata de recoger las lecciones de quienes merecen el reconocimiento de las generaciones que los sucedieron. De ahí que la Comisión Permanente del Congreso de la Unión haya querido, en este día, recordar con reverencia y con emoción, no sólo a los Constituyentes que supieron expresar con voz limpia y justiciera los reclamos del pueblo para plasmarlos en las normas jurídicas, sino, fundamentalmente, para recordar todas las luchas, todas las luchas sangrientas de nuestro pueblo, que al fin y al cabo es el héroe eterno de la historia y el motor definitivo de nuestro desarrollo.
La Constitución de 1917, es una síntesis de la historia de nuestro pueblo, es un claro compendio de las mejores experiencias del pasado de nuestro país. La ley suprema de la República es, en efecto, resultado de las luchas heroicas de nuestro pueblo desde que se empeñó en alcanzar la independencia, hasta nuestros días. Las mejores ideas, los mejores principios filosóficos y jurídicos se han venido incorporando en cada una de las Cartas constitucionales que han regido la vida del país.
Nuestra Constitución vigente, en efecto, recuerda los mejores pasajes de la historia, en ella alienta la voz encendida y limpia del Padre Hidalgo convocando a la libertad y a la Independencia, aboliendo la esclavitud y condenando la injusticia. En sus preceptos vive también el mensaje, la apasionada visión y la claridad patriótica de José María Morelos y Pavón, que supo dar a la Revolución de Independencia un profundo contenido social y que nos entregó como principios inconmovibles de nuestra vida institucional, aquéllos que hacen radicar en el pueblo toda soberanía; que proclaman la independencia y la autodeterminación de nuestra patria y que apoyan en el derecho, la existencia auténtica de cualquier autoridad.
Nuestro Código Fundamental no podría comprenderse sin la herencia invaluable de la luminosa generación de la Reforma encabezada por Benito Juárez, que nos entregó, para siempre, con la Constitución de 1857, la consolidación de la República, la independencia del Estado mexicano respecto de cualquier otro poder, y la libertad espiritual más amplia para todos los mexicanos.
La Constitución de Querétaro es, en fin, depurada síntesis de las más caras aspiraciones, de las más dolorosas angustias y de los más limpios anhelos del pueblo mexicano que, en la Revolución, no dudó en entregar su sangre, un millón de vidas, en busca de una transformación social profunda, capaz de dignificar al hombre y de impulsar a nuestra nación por senderos de progreso y de reivindicación social.
El pueblo, héroe permanente de toda la historia de la humanidad y de la nuestra, ha sido, en última instancia, el forjador de las normas constitucionales que hoy rigen la vida de la República Mexicana.
Al amparo de esas normas, nuestro país avanza, y los mexicanos, en un clima de libertad, trabajan esforzadamente por alcanzar su bienestar y por construir la grandeza de México.
Constitución significa historia, significa revolución, lucha permanente del pueblo y herencia luminosa de quienes, encabezándolo, ganaron para siempre un sitio de honor en la historia y en la admiración de todos los mexicanos.
Nuestra Constitución es instrumento normativo eficaz en el presente; es la ley suprema que rige la vida nacional, y nadie puede ni debe discutir la obligación de acatar sus preceptos para garantizar la vida ordenada, pacífica y progresista de nuestra patria. Al amparo de la Constitución todos los mexicanos pueden y deben trabajar confiadamente en favor de su propio bienestar y de una imagen más justa de la patria que a todos nos ampara.
Nuestra Constitución garantiza las libertades individuales. En México no tiene ataduras el pensamiento. Las creencias, las voces, las palabras escritas, las reuniones de ciudadanos merecen el mayor respeto y están garantizadas por la norma constitucional, con la única limitación de evitar que lesionen a otros o a la sociedad misma.
Para nuestro derecho constitucional, el valor esencial es el hombre, el pueblo mismo, su desarrollo pleno, su bienestar y su felicidad. Todo poder dimana del pueblo y se instituye para beneficio de él, dice la Constitución y, sin embargo, el Constituyente, los hombres que vinieron de todos los rumbos del país ensangrentado en una revolución extraordinaria transformadora, sabían y entendían que los encargados del poder son falibles y que en el ejercicio del poder suelen cometer graves abusos.
De ahí que la Constitución garantice que nadie puede ser privado o molestado en sus derechos sino en virtud de mandamiento escrito de la autoridad competente y de ahí también que consagre, además, como instrumento de defensa en manos de todos los mexicanos, una de las creaciones jurídicas más bellas de nuestra historia: el juicio de amparo.
La Constitución recogió, además, las demandas democráticas que con tanta claridad y emoción supo levantar Madero: desarrollo democrático, sufragio efectivo, no reelección para el Poder Ejecutivo, necesidad de que el pueblo pudiera tomar parte en todas las decisiones políticas; necesidad de que la continuidad del país signifique continuidad de principios y no continuidad de hombres.
Este desarrollo democrático exigido por el pueblo tiene, en la norma constitucional, los principios fundamentales que le han permitido avanzar. Sólo quienes están empeñados en ver hacia el pasado, o en encontrar pretextos para no entender el desarrollo del país, pueden negar que la vida democrática de México está avanzando con pasos firmes y acelerados. Este desarrollo debe continuar para que todos los hombres de México y todos los partidos puedan discutir con limpieza, con lealtad, con altura de miras, con emoción, pero con respeto a los
principios fundamentales de nuestra Carta Fundamental y del país mismo, sus posiciones políticas, sus doctrinas y sus principios.
Discutir sin encontrar en el oponente político un enemigo personal, sino un mexicano más que, discrepando de nosotros, siente apasionadamente la necesidad de construir una patria más digna para todos los mexicanos.
Pero, además, nuestra Constitución rompió en los primeros años de este siglo, la tradición constitucional y abrió una nueva etapa en la historia de las leyes fundamentales que rigen las estructuras de los distintos pueblos de la tierra: las garantías sociales, resultado de nuestras luchas, que protegen a aquellos grupos que dentro de la sociedad tienen una situación de debilidad, que constituyen mayoría y que, por lo mismo, merecen la protección del Estado para impulsar su desarrollo y lograr su bienestar. El concepto de que todos los hombres son iguales ante la ley, hermoso principio que, sin embargo, ha sido motivo de las más graves injusticias, fue enriquecido con un concepto más justo y más humano: el de que la ley y las instituciones deben proteger a los más débiles frente a los poderosos para lograr así el desarrollo armónico de toda la sociedad.
Nuestra constitución garantiza el derecho que el pueblo tiene a la educación, pero garantiza también el derecho del Estado para impartirla y esto, frente a lo que a los críticos dicen, no significa un deseo sectario, sino un derecho que el Estado tiene para impartir la educación con un amplio sentido de solidaridad, apegándose al conocimiento científico, y al margen de sectarismos o de concepciones que sólo corresponde a cada individuo adoptar mediante su limpia y libre voluntad. Esta es una fórmula esencial para lograr la unidad nacional por encima de pugnas de grupo, para fortalecer a la nación ,respetando lo más íntimo de la persona humana: sus creencias y su vida espiritual.
Con el espíritu humanista del artículo tercero constitucional México realiza con empeño importantes tareas en favor de la educación. La Constitución nos impulsa a trabajar permanentemente por cumplir sus objetivos: educación para todos; educación para la paz, educación basada en el conocimiento científico y al margen de prejuicios, educación para la fraternidad humana y la solidaridad entre todos los mexicanos; educación, en fin, sin sectarismos, para la unidad nacional y la grandeza de México.
Nuestra Constitución reivindicó el derecho de la nación sobre los bienes y recursos naturales para destinarlos a la causa del bienestar y del progreso del pueblo mexicano. Sabían los constituyentes que la Revolución exigía el cambio del simple Estado de derecho por el Estado de servicio, como organización creada por el pueblo para realizar sus ideales de justicia y sus anhelos de superación en beneficio de todos.
La clase trabajadora tiene en los preceptos constitucionales el mejor instrumento para mantener sus justas conquistas y para continuar su lucha independiente, y autónoma, como fuerza impulsora del progreso de México y como vanguardia, como avanzada de la lucha por la justicia social.
Los campesinos, con la Constitución en sus manos, con los derechos que ella misma les otorga, han recibido millones de hectáreas y, a partir de la Revolución, rescataron su plena dignidad ciudadana. Ahora mismo siguen luchando por alcanzar su liberación económica llevando la reforma agraria hasta sus últimas consecuencias, sin claudicaciones y sin deshonestidades.
Los industriales progresistas tienen en el marco constitucional amplias oportunidades y limpios caminos para trabajar en su beneficio, para contribuir al desarrollo nacional y para empeñarse, con todos los sectores responsables del país, por acelerar el progreso económico, independiente y soberano de nuestra patria.
Garantías individuales, garantías sociales y garantías de la nación, son elementos fundamentales, indivisibles y eficaces para la vida mexicana. Sobre estos tres pilares descansa nuestro desarrollo, nuestra lucha por superar problemas ancestrales, nuestra estabilidad política y nuestra decisión inquebrantable de construir un futuro mejor.
La realidad mexicana, nuestra entrañable realidad, ha demostrado el valor de la Constitución como instrumento normativo, eficaz y justiciero en el pasado y en el presente, sin que por ello pretendamos que sirva para garantizar el desarrollo de otras naciones o de modelo universal.
Vivimos un etapa constructiva y de firmes instituciones al servicio de pueblo mexicano. Esto es obra del imperio de la Constitución y de la decisión permanente de progreso que a todos los mexicanos nos anima.
Ayer, el presidente Gustavo Díaz Ordaz rindió homenaje a uno de los más limpios y generosos constructores de nuestra vida institucional, y a quienes, con su limpia juventud, dieron un ejemplo de lealtad, en 1913, frente a la traición y a las turbias ambiciones de la contrarrevolución.
El gesto del Presidente Díaz Ordaz, al instituir la conmemoración del día de ayer, recorriendo la misma ruta que Madero siguió angustiosamente rumbo al Palacio Nacional en 1913, es una exaltación del Presidente Mártir, y un reconocimiento a la lealtad de los jóvenes cadetes del heroico Colegio Militar que supieron respaldar la decisión democrática y las instituciones creadas por el pueblo en la limpia, en la emocionada, en la clara figura de Francisco I. Madero. (Aplausos.)
La etapa que vivimos es producto de luchas sangrientas y de incalculables esfuerzos realizados por el pueblo. Nada ha sido fácil, nada se nos ha otorgado graciosamente, nada ha recibido el pueblo por magia o por generosidad. El camino siempre ha estado pleno de obstáculos y de sombras; pero el pueblo y sus guías han sabido salvarlos y vencerlos, disipando las sombras con la luz de su pensamiento y de sus vidas.
Muchos problemas existen aún, muchas angustias y carencias laceran la vida del pueblo y muchos obstáculos siguen oponiéndose a nuestro desarrollo.
Nuestra Constitución no es perfecta, no es inmutable, es dinámica, perfectible, ella misma, en su artículo 39, garantiza el cambio, la mutación, la posibilidad de perfeccionar las instituciones al reconocer el derecho del pueblo para cambiar su estructura, su gobierno, el rumbo mismo de su destino, cuando lo juzgue conveniente.
Rendir homenaje a la Constitución, es cumplirla puntualmente.
Rendir homenaje a la Constitución, es superarla, recogiendo cada día las aspiraciones del pueblo, sin apartarse de sus principios esenciales.
Su raíz, está en el pasado. Su vigencia, es la base de nuestra vida en el presente, y su proyección hacia el futuro es indudable. Nos recuerda las mejores lecciones de la historia. Nos obliga, y nos excita, a vivir en un orden revolucionario y dinámico, y nos impulsa para alcanzar un mayor desarrollo.
Nuestra Constitución es historia, sí; es instrumento del presente también; pero es, sobre todas las cosas, ley del pueblo para construir el porvenir decidiendo en cada hora, y en cada circunstancia, su más alto destino.
La herencia de la historia es invaluable, nuestro pueblo, y nuestras instituciones, se nutren de esa historia, y todos los mexicanos nos sentimos orgullosos de las mejores luchas del pasado. Pero hoy, en nuestra hora en esta hora plagada de angustias para el mundo, nadie debe escudarse en ese pasado para justificar negligencia o quietud frente a los reclamos y los obstáculos que la realidad nos opone.
Dentro del marco de la Constitución los caminos son amplios, abiertos, y sin límites, para crear, para pensar, para vivir apasionadamente en favor de una sociedad mejor, más justa en el presente, más luminosa en el porvenir. (Aplausos nutridos.)
El C. Gómez Guerra, Enrique: Señor Presidente, la Secretaría informa que se han agotado los asuntos de la orden del día.
El C. Presidente (a las 13.50 horas): Se levanta la sesión y se cita para el próximo jueves 17 a las 12 horas.
TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA Y
"DIARIO DE LOS DEBATES"