Legislatura XLVIII - Año I - Período Ordinario - Fecha 19700829 - Número de Diario 12

(L48A1P1oN012F19700829.xml)Núm. Diario:12

Colegio Electoral

ENCABEZADO

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

XLVIII LEGISLATURA

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921.

AÑO I México, D. F., Sábado 29 de Agosto de 1970 TOMO I. - NUMERO 12

DECIMASEGUNDA JUNTA PREPARATORIA

SUMARIO

Orden del Día .

Lectura del Orden del Día

Acta

Lectura y aprobación del Acta de la Junta Preparatoria anterior

DICTÁMENES A DISCUSIÓN

Expedientes electorales

La Secretaría da lectura y somete a consideración de la Asamblea, cinco dictámenes relativos a las elecciones que, para diputados federales y de partido, tuvieron lugar el 5 de julio del año en curso, en el siguiente orden:

Segundo del Estado de Colima. Sin discusión se aprueba

Cuarto del Estado de Puebla. Sin discusión se aprueba

Cuarto del Estado de San Luis Potosí. Sin discusión se aprueba

Tercero del Estado de Zacatecas. Sin discusión se aprueba

La Presidencia hace en cada uno de los casos, la Declaratoria correspondiente.

Comentarios respecto al Colegio Electoral

El C. Santiago Roel García hace uso de la palabra, para hacer un análisis del Colegio Electoral que hoy concluye

Diputados de Partido

Dictamen de la Tercera Comisión Dictaminadora relativa a la elección de diputados de partido que, de acuerdo con el artículo 54 Constitucional, resultó en favor de las fórmulas de candidatos del Partido de Acción Nacional, Partido Popular Socialista y Partido Auténtico de la Revolución Mexicana

Para hacer consideraciones en torno al dictamen y en apoyo del mismo, hacen uso de la palabra, los CC. Héctor Rentería Acosta, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; Francisco Ortiz Mendoza, del Partido Popular Socialista; Armando González Soto, del Partido Revolucionario Institucional; para hechos, el C. Julio Antonio Gallardo Ortiz; por la Comisión Dictaminadora, el C.Alejandro Peraza Uribe. Se aprueba en sus términos. La Presidencia hace la Declaratoria de rigor. Notifíquese a los partidos políticos interesados, para los efectos del artículo 63 constitucional

Orden del Día

Se da lectura al Orden del Día de la próxima Junta Preparatoria. Se levanta la Junta Preparatoria

DEBATE

PRESIDENCIA DEL C. MARIO COLÍN

(Asistencia de 172 ciudadanos presuntos diputados.)

- El C. Presidente (a las 12:45 horas): Se abre la Junta Preparatoria.

ORDEN DEL DÍA

- El C. secretario Orijel Salazar, Manuel:

Decimosegunda Junta Preparatoria.

XLVIII Legislatura.

Orden del día

29 de agosto de 1970.

Lectura del acta de la Junta anterior.

Dictámenes a Discusión

De las respectivas Comisiones Dictaminadoras acerca de los siguientes expedientes electorales:

Segundo del Estado de Colima. Cuarto del Estado de Puebla. Cuarto del Estado de San Luis Potosí. Tercero del Estado de Zacatecas. De la Tercera Comisión Dictaminadora, relativa a la elección de diputados de partido."

ACTA

- El mismo C. Secretario:

"Acta de la Junta Preparatoria de la Cámara de Diputados del H. XLVIII Congreso de la Unión, efectuada el día veintiocho de agosto de mil novecientos setenta.

Presidencia del C. Mario Colín.

En la ciudad de México, a las doce horas y quince minutos del viernes veintiocho de agosto de mil novecientos setenta, se abre la Junta Preparatoria con asistencia de ciento cincuenta y tres ciudadanos presuntos diputados, según declara la Secretaría una vez que pasa lista.

Lectura del Orden del Día.

Sin que motive debate, se aprueba el acta de la Junta Preparatoria celebrada el día veintisiete del presente.

Se da cuenta de los documentos en cartera.

La Secretaría da lectura y somete a discusión catorce dictámenes, relativos a las elecciones que, para diputados al Congreso de la Unión, se efectuaron el día 5 de julio del año en curso, en el siguiente orden:

Segundo Distrito Electoral del Estado de México: José Delgado Valle y María del Carmen Colín Pouchet, propietario y suplente, respectivamente.

A discusión, sin ella, en votación económica se aprueba el dictamen.

Decimocuarto Distrito Electoral del Estado de Veracruz: Sergio Martínez Mendoza, propietario, y licenciado Rafael Córdoba García, suplente.

Sin discusión se aprueba el dictamen, en votación económica.

Primer Distrito Electoral del Estado de Tamaulipas: profesor Donaciano Muñoz Martínez y José Pérez Cardona, propietario y suplente, en su orden.

A discusión. Hablan: en contra, el C. licenciado Carlos R. Pérez Mancillas, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; en pro, los CC. Gerardo Ballí González y Raymundo Flores Bernal.

Suficientemente discutido el dictamen, en votación económica, se aprueba en sus términos.

Décimo Distrito Electoral del Estado de Puebla: Julio Abrego Estrada, propietario, y profesor Isidro Herrera Maldonado, suplente.

Sin debate se aprueba en votación económica.

Sexto Distrito Electoral del Estado de Michoacán: profesor Agapito Hernández Hernández y José Rangel Aguilar, propietario y suplente, respectivamente.

Sin discusión se aprueba el dictamen en votación económica.

Tercer Distrito Electoral del Estado de San Luis Potosí: Salvador Díaz Macías, propietario, y José Víctor García Villar, suplente.

Sin debate, en votación económica, se aprueba.

Quinto Distrito Electoral del Estado de Guanajuato: Bonifacio Ibarra Morales y Juan Flores Aguilar, propietario y suplente, en su orden.

A discusión. Habla para hacer consideraciones y en pro del dictamen el C. Genaro Cornejo Cornejo.

Suficientemente discutido el dictamen en votación económica, se aprueba en sus términos.

Quinto Distrito Electoral del Estado de Oaxaca: Francisco Rosado Lobo, propietario, y Magdaleno Villegas Domínguez, suplente.

Sin debate, en votación económica, se aprueba el dictamen.

Décimo Distrito Electoral del Estado de Veracruz: Marco Antonio Ros Martínez y Ulpiano Gómez Vargas, propietario y suplente, en su orden.

A discusión. Hablan: en contra, el C. Alberto Contreras Valencia, del Partido Popular Socialista; para defender su caso el C. Marco Antonio Ros Martínez.

Suficientemente discutido el dictamen, en votación económica, se aprueba en sus términos.

Octavo Distrito Electoral del Estado de Puebla: doctor Alberto Guerrero Covarrubias, propietario, y Armando González Sánchez, suplente.

Sin discusión se aprueba el dictamen, en votación económica.

Segundo Distrito Electoral del Estado de Zacatecas: Nicolás Márquez Acosta y Francisco Arellano Macías, propietario y suplente, en su orden.

A discusión, sin ella, en votación económica se aprueba.

Primer Distrito Electoral del Estado de Oaxaca: José Estefan Acar, propietario, y Gudelia Pineda Luna, suplente.

La Secretaría da lectura al artículo 209 del Reglamento.

A discusión. Hablan: en contra, el C. Francisco Hernández Juárez, del Partido Popular Socialista; en pro, el C. Rubén Moheno Velasco; nuevamente, en el mismo sentido, los oradores ya mencionados.

Suficientemente discutido el dictamen, en votación económica, se aprueba en sus términos.

Cuarto Distrito Electoral del Estado de Tamaulipas: Marciano Aguilar Mendoza, propietario, y Esperanza Quijano Herrera, suplente.

Sin debate se aprueba en votación económica.

Cuarto Distrito Electoral del Estado de Guerrero: Rogelio de la O. Almazán y Franco Núñez Ramírez, propietario y suplente, respectivamente.

No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se aprueba el dictamen.

En cada uno de los casos, la Presidencia hace la Declaratoria de rigor.

Cuantas veces fue necesario la Presidencia llamó al orden a las galerías.

Agotados los asuntos del Orden del Día, a las diecisiete horas y quince minutos se levanta la Junta Preparatoria y se cita a la que tendrá lugar el día de mañana, veintinueve de agosto, a las once horas."

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén de acuerdo, sírvanse manifestarlo. Aprobada.

DICTÁMENES A DISCUSIÓN

Expedientes electorales

- El mismo C. Secretario:

"Primera Comisión Dictaminadora. - Primera Sección.

Honorable Asamblea:

Esta Primera Sección de la Primera Comisión Dictaminadora, en cumplimiento del cargo conferido por esa H. Asamblea, para dictaminar sobre el expediente relativo a las elecciones para diputados federales, que tuvieron lugar en el Segundo Distrito Electoral del Estado de Colima, el día 5 de julio del presente año, expresa que:

En el Distrito de referencia se registraron las siguientes fórmulas, que junto con la votación obtenida, a continuación se mencionan:

PAN: propietario, Carlos Barreto Rangel; suplente, José Barajas Vallejo, 1,421 votos.

PRI: propietario, profesor José Ernesto Díaz López; suplente, Fidel Nando Vázquez, 22,887 votos.

PPS: propietario, Pedro Avalos Armenta; suplente, J. Guadalupe Ruelas Quiles, 92 votos.

PARM: propietario, Miguel Figueroa Valdez; suplente, Manuel García Vaca, 70 votos.

Del informe del Comité Distrital Electoral respectivo, competente para normar la preparación y el desarrollo de la elección, se desprende que el registro de los candidatos de los Partidos Acción Nacional, Revolucionario Institucional, Popular Socialista y Auténtico de la Revolución Mexicana, se realizó en tiempo y que tanto en los actos preparatorios como en la misma elección, no se presentaron incidentes que pudieran tener trascendencia en el resultado de la votación.

En el acta circunstancial levantada con motivo de la sesión, a la que asistieron todos los representantes de los Partidos contendientes, verificada en cumplimiento a lo preceptuado por los artículos 105 y 106 de la Ley Electoral Federal, con la fecha 12 de julio del presente año; así como en la del cómputo total de la elección para diputados federales, consta: que los paquetes electorales no tuvieron ninguna muestra de alteración; que todos los votos se computaron debidamente y que no se presentó objeción alguna en los términos de la fracción III del ordenamiento antes citado.

El Comité Distrital Electoral extendió la constancia de mayoría a la fórmula del Partido Revolucionario Institucional integrada por los CC. profesor José Ernesto Díaz López, candidato propietario, y Fidel Nando Vázquez, suplente.

La Comisión Federal Electoral, después del examen de la documentación, registró la constancia de mayoría de votos, expedida a favor de los candidatos del Partido Revolucionario Institucional.

Esta Sección de la Primera Comisión Dictaminadora, habiendo examinado la documentación citada en antecedentes, tiene elementos de convicción suficientes, para fundadamente concluir: en el presente caso el proceso electoral se desarrolló en sus diversas fases, con apego a los mandatos de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, de la Ley Electoral Federal, de los Reglamentos y de las instrucciones y acuerdos de los Organismos Electorales competentes.

Por lo expuesto, y para los efectos consignados por el artículo 60 constitucional y 127 de la Ley Electoral Federal y en acatamiento de los artículos 5o., fracciones I y III; 6o. y demás relativos del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, proponemos a esa H. Asamblea, los siguientes puntos resolutivos:

Primero. Son válidas las elecciones para diputados federales, propietario y suplente, que se realizaron el día 5 de julio del presente año, en el Segundo Distrito Electoral del Estado de Colima.

Segundo. Por el mencionado Distrito Electoral, son diputados federales de mayoría a la XLVIII Legislatura al Congreso de la Unión los CC. profesor José Ernesto Díaz López, propietario, y Fidel Nando Vázquez, suplente.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 18 de agosto de 1970. - Licenciado Ramiro Salas Granado. - Profesora María de los Ángeles Grant Munive. - Doctor Oscar Hammeken Martínez."

Está a discusión el dictamen. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba el dictamen en sus términos. Los que estén de acuerdo, sírvanse indicarlo. Aprobado.

El C. Presidente: En consecuencia, la Presidencia declara:

Primero. Son válidas las elecciones para diputados federales efectuadas en el 2o. Distrito Electoral del Estado de Colima, el 5 de julio del presente año.

Segundo. Son diputados federales de mayoría al XLVIII Congreso de la Unión, los CC. José Ernesto Díaz López y Fidel Nando Vázquez, como propietario y suplente respectivamente. (Aplausos.)

- El C. secretario Santa Ana, Cuauhtémoc:

"Primera Comisión Dictaminadora. - Sección Segunda.

Los que suscriben, miembros de la Sección Segunda de la Primera Comisión Dictaminadora procedieron al estudio del expediente que nos fue turnado, relativo a la elección para diputados al Congreso de la Unión, que tuvo lugar el domingo 5 de julio del año en curso, en el Cuarto Distrito Electoral del Estado de Puebla.

Contendieron en el mencionado Distrito las fórmulas de candidatos de los partidos que a continuación se relacionan, obteniendo los siguientes resultados en la votación:

PAN: José Anzures Solís, propietario, e Isaac Martínez Lara, suplente, 3,822 votos.

PRI: Eleazar Camarillo Ochoa, propietario, y Agustín Pérez Caballero, suplente, 84,728 votos.

PPS: Jesús Torres Martínez, propietario, y Victorio Vargas López, suplente, 104 votos.

PARM: Arnulfo Siliceo Herrera, propietario, y Evaristo Siliceo Flores, suplente, 92 votos.

Habiendo hecho un estudio detenido de la documentación que integra dicho expediente, se llega al conocimiento que la preparación de las elecciones se desarrolló siguiendo las normas legales vigentes y las instrucciones de los organismos electorales; así como que las mismas se efectuaron sin incidentes.

Cumpliendo con lo establecido por la Ley Electoral Federal, el Comité distrital respectivo realizó el cómputo de los votos emitidos y como resultado del mismo procedió a expedir las constancias de mayoría en favor de los CC. Eleazar Camarillo Ochoa y Agustín Pérez Caballero, como candidatos a diputados Federales propietario y suplente, respectivamente, postulados por el Partido Revolucionario Institucional. La mencionada constancia de mayoría fue debidamente registrada por la Comisión Federal Electoral.

Conforme al estudio del expediente, aparece que el acta relativa al cómputo total de la elección está firmada de conformidad y sin objeción alguna por los representantes del Partido Revolucionario Institucional y del Partido de Acción Nacional.

En mérito a lo expuesto y con fundamento en los artículos 60 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 127 y 134 de la Ley Electoral Federal; 5o., fracciones I y III, 6o., 7o., y demás relativos al Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso, esta Comisión se permite someter a la consideración de la H. Asamblea, los siguientes puntos resolutivos:

Primero. Son válidas las elecciones de diputados federales efectuadas en el Cuarto Distrito Electoral del Estado de Puebla, el 5 de julio del presente año.

Segundo. Son diputados federales de mayoría al XLVIII Congreso de la Unión, los CC. Eleazar Camarillo Ochoa y Agustín Pérez Caballero, propietario y suplente, respectivamente.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 16 de agosto de 1970. - La Comisión: Licenciado J. Carlos Osorio Aguilar. - Armando González Soto. - Profesor Marco Antonio Bolaños Cacho."

Está a discusión el dictamen. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba el dictamen en sus términos. Los que estén de acuerdo, sírvanse indicarlo. Aprobado.

El C. Presidenta: En consecuencia, la Presidencia declara:

Primero. Son válidas las elecciones para diputados federales efectuadas en el 4o. Distrito Electoral del Estado de Puebla, el 5 de julio del presente año.

Segundo Son diputados federales de mayoría al XLVIII Congreso de la Unión, los CC. Eleazar Camarillo Ochoa y Agustín Pérez Caballero, propietario y suplente respectivamente. (Aplausos.)

- El C. secretario Orijel Salazar, Manuel:

"Primera Comisión Dictaminadora. - Cuarta Sección.

Honorable Asamblea:

Fue turnado a la Cuarta Sección de la Primera Comisión Dictaminadora, para su estudio y resolución, el expediente formado con motivo de las elecciones para diputados federales efectuadas el último 5 de julio y relativas al IV Distrito Electoral Federal de San Luis Potosí.

Del examen que la suscrita Comisión hizo, aparece que en el referido Distrito Electoral contendieron para diputados propietario y suplente, respectivamente, los ciudadanos que a continuación se mencionan:

PAN: propietario, licenciado Alfonso Guerrero Briones; suplente, Silverio Vázquez Duque.

PRI: propietario, Luis Tudón Hurtado; suplente, profesor Raymundo Escobar Nieto.

PPS: propietario, Félix Vara Pérez; suplente, Lorenzo Medina Alvarez.

PARM: propietario, Juan José Silva Martínez; suplente, Nicolás Balleza Perea.

La preparación de las elecciones satisfizo los ordenamientos que la Ley Federal Electoral establece; el desarrollo de la misma no produjo violaciones de naturaleza o magnitud susceptibles de fundamentar invalidez de ésta.

Como lo ordenan los artículos 104 y 105 de la Ley Electoral Federal, el Comité Distrital respectivo efectuó el cómputo total de la elección sin que en la sesión respectiva se hubieran verificado irregularidades graves, por lo que expidió constancia de mayoría en favor de los integrantes de la fórmula que fue postulada por el Partido Revolucionario Institucional, con el resultado de la votación como a continuación se indica.

PAN: 5,254 votos. PRI: 66,749 votos. PPS: 195 votos. PARM: 1,073 votos.

La Comisión Federal Electoral registró la constancia de mayoría de votos.

Esta Comisión realizó un cuidadoso examen de los documentos que forman parte de los paquetes electorales y todas las demás constancias que obran en el expediente relativo, encontrando que la preparación y desarrollo de la elección, se ajustó a los preceptos legales que rigen sobre la materia.

Consecuentemente, con fundamento en lo que disponen los artículos 127 y 134 de la Ley Federal Electoral y 6o. y 7o. del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos propone a esta honorable Asamblea los siguientes puntos resolutivos:

Primero. Son válidas las elecciones para diputados federales celebradas el día 5 de julio del presente año en el Cuarto Distrito Electoral del Estado de San Luis Potosí.

Segundo. Son diputados de mayoría a la XLVIII Legislatura del H. Congreso de la Unión, propietario y suplente, respectivamente, los CC. Luis Tudón Hurtado y profesor Raymundo Escobar Nieto.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 28 de agosto de 1970. - Licenciado Raúl Rodríguez Santoyo. - Licenciado Porfirio Cortés Silva. - Carolina Morales Farías."

Está a discusión el dictamen. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba el dictamen en sus términos. Aprobado.

El C. Presidente: En consecuencia, la Presidencia declara:

Primero: Son válidas las elecciones para diputados federales efectuadas en el 4o. Distrito Electoral del Estado de San Luis Potosí, el 5 de julio del presente año.

Segundo: Son diputados federales de mayoría al XLVIII Congreso de la Unión, los ciudadanos Luis Tudón Hurtado y profesor Raymundo Escobar Nieto, como propietario y suplente, respectivamente.

- El C. secretario Santa Ana, Cuauhtémoc:

"Primera Comisión Dictaminadora.

Primera Sección.

Honorable Asamblea:

Fue turnado a esta Sección Primera de la Primera Comisión Dictaminadora, el expediente formado con motivo de las elecciones de diputados federales, efectuadas el 5 de julio próximo pasado en el Tercer Distrito Electoral del Estado de Zacatecas.

Participaron en este proceso electoral, los partidos cuyas fórmulas de candidatos registrados en tiempo obtuvieron la siguiente votación:

PAN: propietario, Rubén Mercado Lara; suplente, José López Sandoval, 2,842 votos.

PRI: propietario, licenciado Jesús Yáñez Castro; suplente, Salvador López Olmos, 61,158 votos.

PPS: propietario, Felipe Torres González; suplente, J. Rosario Rodríguez Haro, 253 votos.

Del estudio detenido de la documentación que integra el expediente electoral, apreciamos, que el Comité Distrital respectivo, verificó el cómputo de los votos emitidos y como resultado del mismo, extendió la constancia de mayoría en favor de los candidatos del Partido Revolucionario Institucional; constancia que fue debidamente registrada por la Comisión Federal Electoral.

Por lo anterior, llegamos a la conclusión de que todo el proceso electoral se desarrolló conforme a las normas legales que lo regulan, así como las instrucciones de los organismos electorales.

Por lo expuesto y para los efectos consignados en el artículo 60 de la Constitución General de la República; 127 y 134 de la Ley Electoral Federal; 5o., fracciones I y III, 6o., 7o., y demás relativos al Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso, esta Comisión se permite someter a la consideración de la honorable Asamblea, los siguientes puntos resolutivos:

Primero. Son válidas las elecciones a diputados federales efectuadas en el Tercer Distrito Electoral del Estado de Zacatecas.

Segundo. Son diputados de mayoría a la XLVIII Legislatura del Congreso de la Unión, los CC. licenciado Jesús Yáñez Castro, propietario, y Salvador López Olmos, suplente.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 21 de agosto de 1970. - Licenciado Ramiro Salas Granado. - Profesora Ma. de los Ángeles Grant Munive. - Doctor Oscar Hammeken Martínez."

Está a discusión el dictamen. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se consulta a la Asamblea si aprueba el dictamen en sus términos. Aprobado.

El C. Presidente: En consecuencia, la Presidencia declara:

Primero. Son válidas las elecciones para diputados federales efectuadas en el Tercer Distrito Electoral del Estado de Zacatecas, el 5 de julio del presente año.

Segundo. Son diputados federales de mayoría al XLVIII Congreso de la Unión, los ciudadanos licenciado Jesús Yáñez Castro y Salvador López Olmos, como propietario y suplente, respectivamente.

COMENTARIOS RESPECTO AL COLEGIO ELECTORAL

El C. Presidente: H. Asamblea, en virtud de que se ha concluido la revisión de todos los casos electorales de diputados de mayoría al Congreso de la Unión, esta Presidencia ha pedido al C. diputado Santiago Roel haga una glosa de todas las actividades realizadas durante este Colegio Electoral, en la revisión de los casos de diputados de mayoría.

Tiene la palabra el C. Santiago Roel.

El C. Roel García, Santiago: Estamos a punto de conocer el dictamen de la Tercera Comisión Dictaminadora y con ello a punto también de dar fin a la primera importante etapa de nuestras labores. Con este motivo, consciente de que este Colegio se comportó siempre dentro de marcos institucionales y conforme a los principios democráticos que informan la vida nacional, ha creído oportuno presentar, siguiendo instrucciones de la Presidencia, a la atenta consideración de ustedes, un Comentario del propio Colegio:

"México tiene una gran historia parlamentaria. Desde los albores de nuestro ser constitucional, hasta nuestros días, han sido proverbiales los debates en las Cámaras que integran la más alta Representación Nacional.

En las discusiones parlamentarias que se realizaron durante la gestación de la primera Constitución

Política de México independiente (la de 1824) se distinguieron dos pilares de la palabra oral y escrita: el ilustre coahuilense Miguel Ramos Arizpe y el agudo regiomontano Servando Teresa de Mier.

Cada uno en su sitio, en su altura, en sus ideas; pero ambos sirviendo con desinterés al país, sosteniendo, debatiendo, disintiendo o configurando sus ideas políticas en los albores de nuestra Independencia Nacional.

Jamás se coartó en el constituyente de 18, 23 - 24 ni el derecho a hablar, ni el derecho a pensar, ni el derecho a disentir.

Hubo incluso - en esta ocasión - alguna tormentosa sesión parlamentaria en la que Servando Teresa de Mier defendió hasta la saciedad que la Capital de la República permaneciese en su mismo sitio - entonces transparente región del aire - contra la peregrina idea de trasladar los Poderes de la Unión a otro lugar de la incipiente y flamante República.

Con excepción de la Constitución Centralista de 1836 que constituyó un retroceso transitorio en la libertad parlamentaria de la expresión mexicana, los subsecuentes medios preparatorios a los Constituyentes y los Constituyentes en sí mismos, tuvieron la virtud de configurar un devoto homenaje a la libertad máxima que el hombre tiene: la de pensar lo que quiere y la posibilidad de expresarlo en el ropaje verbal que le acomode.

¿Y qué decir de la Constitución de 1857, hija legítima de Ayutla y del segundo gran Movimiento Libertario de México?

Participaron en ella ilustres tribunos que fueron sentando las tesis que sirvieron de antecedentes al México de hoy.

Achina el cuerpo el pensar simplemente en los nombres de Valentín Gómez Farías: jalisciense talentoso y Presidente del Congreso; de León Guzmán - hijo predilecto del Estado de México y Vicepresidente del mismo -; de Ponciano Arriaga, por el Distrito Federal, cuyo voto relativo al abuso de la propiedad todavía es vigente; de Francisco Zarco, duranguense egregio y conspicuo relator de los debates; de Santos Degollado, de Michoacán; de Manuel P. de Llano, de Nuevo León; de Guillermo Prieto, de Puebla, de Melchor Ocampo, de Ignacio Ramírez... y de tantos otros que le dieron lustre, vigor y contenido al Constituyente que formó la Carta Magna antecedente de la que actualmente nos rige. (Aplausos.)

Así continuó México su gran tradición parlamentaria, con excepción de la época del porfirismo, en que la palabra se coartaba en la Tribuna y en el ágora y se ahogaba en pensamiento en las cárceles de Belén y en las Tinajas de San Juan de Ulúa, dejando a la República ayuna del debate imprescindible de las ideas, que es segunda naturaleza del mexicano, adquirida a fuerza de ser ejercitada.

La Revolución Mexicana - reivindicatoria magistral de la dialéctica parlamentaria - restituyó, por legítimos fueros, en esa recoleta ciudad de Querétaro, la libertad de palabra y el debate público de las ideas.

Y del 1o. de diciembre de 1916 al 31 de enero de 1917 - ocuparon la Tribuna los oradores que nos legaron la Suprema Ley que nos gobierna:

¿Nombres? ¡Sería prolijo enumerarlos?

Paulino Machorro Narváez, Hilario Medina, Heriberto Jara, Jesús Romero Flores, Félix Palavicini, Pastor Rouaix, Francisco J. Múgica, constituyen - entre otros - una talentosa gama en el devenir parlamentario y constitucional del país.

De entonces hasta ahora, han pasado por este recinto innumerables oradores, jefes políticos del país, estadistas, maestros, profesionales, jóvenes promisorios, damas distinguidas, quienes en abigarrado mosaico humano, parlan, discuten, legislan, disputan y sacan avantes, la única conclusión posible de un debate parlamentario, a saber:

La de ventilar las ideas para que, a fuerza de expresarlas y contrastarlas, entre personas de los más distintos principios ideológicos, se pulan en sus aristas y se acomoden mejor a la realidad económica, social y política del país.

Pues bien: herederos legítimos de ese acervo histórico parlamentario somos nosotros, por ustedes, y de ello debemos estar orgullosos, defendiendo la libre expresión de las ideas como vestales modernas.

Durante quince extenuantes días se debatieron otra vez - en este Reino Legislativo - las ideas imperantes en el momento actual en que vive México. México: ínsula de libertad y de paz en un mundo perdido en agresiones y violencias, y en el cual la razón se ha enajenado, la emoción contraído y la voluntad del hombre amortece en inútiles filosofías del nihilismo, del aburrimiento, desesperación y de la destrucción.

Por fortuna en México aún se vive y piensa hacia adelante y arriba en una era de progreso y esperanza. (Aplausos.)

Señala el artículo 60 de nuestra Carta Magna, que cada Cámara calificará las elecciones de sus miembros y resolverá las dudas que hubiese sobre ellas y que: su resolución será definitiva e inatacable.

Complementando este sabio precepto constitucional, rigen también los debates de la Cámara de Diputados y de la de Senadores, por supuesto por autodeterminarse y calificar las elecciones de sus miembros, los artículos 3o. y 4o. del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General y relativos al funcionamiento de los debates y de las Juntas Preparatorias llamados por costumbre Colegio Electoral.

Desde el 15 de agosto de 1970 en que la Comisión Instaladora dio posesión a la Primera Junta Preparatoria - y al Colegio Electoral - hemos venido discutiendo las ideas ante esta Tribuna abierta al pensamiento de México.

Resumió el Presidente del Colegio Electoral, señor licenciado Mario Colín, la función del mismo en sus palabras iniciales:

"La reunión del Colegio Electoral, es la culminación del proceso democrático de la elección de quienes durante tres años van a representar

en la Cámara de Diputados los intereses y las aspiraciones del pueblo de México."

Han participado en este Colegio Electoral tres partidos políticos del país:

a) El Partido Revolucionario Institucional;

b) El Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; y

c) El Partido Popular Socialista.

En él han hablado genuinos representantes de sendos partidos, manejando con absoluta libertad de palabra sus doctrinas e ideologías.

A nadie se le coartó el uso libre de la tribuna y no se pusieron más limitaciones que aquellas que norma el Reglamento, el respeto a la dignidad imperatoria de este Colegio, a la ética y las más elementales reglas de la educación. (Aplausos.)

PARM.

El Partido Auténtico de la Revolución Mexicana - por conducto de sus miembros distinguidos -, salvo error u omisión hizo en síntesis las siguientes aseveraciones en el transcurso de los parlamentos de sus distinguidos miembros.

I. Que su Partido, por convicción revolucionaria - hijos al fin también del movimiento armado e ideológico de México -, habían apoyado sin reservas la candidatura del señor licenciado Luis Echeverría Alvarez (aplausos);

II. Que consideraba la necesidad de una perfectibilidad en algunos casos aislados del proceso electoral;

III. Que estaban de acuerdo con la política eminentemente revolucionaria del señor licenciado don Gustavo Díaz Ordaz (aplausos);

IV. Que con las variantes ligeras a que alude su cuerpo doctrinario de 28 de febrero de 1954, también estaban de acuerdo con las tesis sostenidas por la Revolución Mexicana y por los "Hombres de la Revolución".

Entre sus oradores se distinguieron varios que participaron en el movimiento armado, algunos jóvenes inteligentes y distinguidas damas que apoyan sus tesis y doctrinas.

En ningún momento y bajo ningún concepto se coartó el derecho a la expresión parlamentaria de los miembros del PARM y así lo han reconocido con plenitud.

PPS.

El Partido Popular Socialista, por boca de sus connotados miembros - sostuvo - salvo error u omisión en el decurso del Colegio Electoral del 15 de agosto de 1970 a la fecha, básicamente los puntos de su doctrina política, desde que nació a la vida pública del país el 20 de junio de 1948, hasta nuestros días.

Fundamentalmente dijeron sus miembros que hicieron uso de la palabra:

I. Que habían apoyado sin reservas al licenciado Luis Echeverría para candidato a la Presidencia de la República, porque concordaban con su personalidad y su sentido revolucionario;

II. Que luchaban en contra la penetración extranjera y el imperialismo yanqui;

III. Que pedían una coalición de lo que ellos intitulan las "fuerzas democráticas y patrióticas" del país para combatir a los enemigos de México, a las fuerzas oscurantistas y al propio imperialismo señalado (aplausos);

IV. Que consideraban la necesidad de perfeccionar ciertos aspectos de la Ley Electoral para mejorar los sistemas democráticos del país.

Entre sus miembros se destacaron dialécticos incisivos, maestros maduros, jóvenes apasionados a quienes, justo es reconocerlo y siguiendo la inveterada costumbre parlamentaria de México: Jamás se les coartó el derecho a decir lo que pensaban.

PRI.

Por su parte, los miembros del PRI asistimos a este H. Colegio Electoral y sostuvimos esencialmente las siguientes tesis: las cuales ante la imposibilidad de sintetizar, enumero en el orden en que fueron expuestas:

I. La limpieza absoluta del proceso de una elección que ha sido la más libre y democrática de nuestra historia, ya que los partidos políticos y los candidatos respectivos, participaron en la actualización y perfeccionamiento del padrón electoral, en la integración de los organismos electorales, en la libre designación de representantes a las casillas y en el escrutinio y cómputo de la elección, cuya culminación es el Colegio Electoral que constituye el supremo e inobjetable Tribunal Juzgador de las Elecciones.

II. Que el PRI es el partido de la unidad nacional y el cual abarca las grandes mayorías nacionales;

Se habló también de:

III. La mujer y su participación en el movimiento obrero de México;

Se recalcaron:

IV. Las tesis fundamentales de índole agraria del PRI que han culminado con la entrega de 15 millones de hectáreas a cerca de tres millones de campesinos;

Se refirieron nuestros oradores a:

V. La posición de México en materia de política internacional y las cuatro reglas áureas de su conducta en esta materia, y al enriquecimiento que de este cuerpo de doctrina, hizo el Presidente Gustavo Díaz Ordaz en "Punta del Este";

Se realizó por boca de uno de sus miembros:

VI. El homenaje al Territorio de Quintana Roo y a sus hombres;

VII. El apoyo incondicional al Presidente Díaz Ordaz en su posición con motivo de la visita del Presidente Nixon.

VIII. El homenaje a Coahuila y a Carranza, respectivamente: cuna de la Revolución y origen del movimiento armado e ideológico que culminó con la Constitución de 1917 (aplausos);

Se habló de:

IX. La juventud y del voto a los 18 años;

X. De la mujer campesina y su militancia revolucionaria;

XI. De la mujer y de la política;

XII. De la industria petrolera; del petróleo y de la expropiación y sus consecuencias en el desarrollo económico de México;

Se analizó en fin:

XIII. La educación;

XIV. La salud;

XV. La Justicia Social, etc., y finalmente se mencionó urbi et orbi,

XVI. El apoyo al licenciado Luis Echeverría para Presidente de México como miembro angular del Partido de la Revolución Mexicana, cuyas perspectivas ideológicas y políticas acrecentó notablemente, recogiendo la voz inconfundible del pueblo, que es el primer Ideólogo de la Marcha de la República. (Aplausos.)

En fin: los miembros del P. R. I., que como presuntos diputados asistimos al H. Colegio Electoral, confirmamos a lo largo de intervenciones las tesis de nuestro partido que "forma una asociación nacional constituida por la mayoría progresista del país para sostenimiento y desarrollo de las instituciones democráticas y revolucionarias, mediante la función electoral de los ciudadanos y la orientación política, social y económica del pueblo mexicano".

Culmina hoy el Colegio Electoral que ha integrado e integrará muy pronto la XLVIII Legislatura.

Es indiscutiblemente uno de los más interesantes de la historia parlamentaria de México.

No se necesita ni hacer aspavientos, ni injuriar, ni ejecutar falsos actos de inútil exhibicionismo, para que opere un Colegio Electoral - como el presente - con fluidez y libertad. (Aplausos.)

Después de todo, señores diputados, lo que aquí venimos a debatir, son las ideas y apenas de soslayo interesan las personalidades, las pasiones y los malabarismos verbológicos.

Estoy convencido que este Organismo Colegiado, significó y significa un avance en la madurez emocional y cívica de la República.

Me ha tocado en suerte hacer la glosa o crónica, como se decía antiguamente, de un Colegio en el que hubo de todo: galerías inquietas y entusiastas, porras agitadas, ignoradas y pálidas ausencias, oradores de fuste, dialécticos de garra, irónicos parlamentarios cuyo sarcasmo hería el talón de Aquiles del adversario, jóvenes valientes que son presente y futuro de México, claras voces obreras, reclamantes voces campesinas y voces femeninas que recuerdan las libertarias tonalidades de algunos próceres de la patria. (Aplausos.)

Apreciamos en su justo valor la objetiva y clara actuación del Colegio Electoral, cuya fundamental aunque efímera vida, hoy culmina. Campearon en él, la garantía constitucional denominada de Audiencia, y también ¿por qué no decirlo? la serenidad, la madurez política y el buen juicio.

Aún hay mucho por hacer indudablemente y en un plano de sincera autocrítica, es menester continuar ventilando todas las ideas de nuestra convivencia nacional para que, dentro de este histórico Recinto se respire siempre el aire tonificante y puro de la verdad democrática, de la verdad patriótica.

Creemos, en fin, señores diputados, haber cumplido, decorosa, vitalmente con el instante histórico que nos tocó vivir. Muchas gracias. (Aplausos.)

DIPUTADOS DE PARTIDO

- El C. secretario Santa Ana, Cuauhtémoc:

La Secretaría va a proceder a leer el dictamen de la Tercera Comisión Dictaminadora:

"Tercera Comisión Dictaminadora. Honorable Asamblea:

Por acuerdo de vuestra soberanía y de conformidad con lo dispuesto por el artículo 5o. del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso de la Unión, se turnaron a esta Comisión los expedientes electorales que corresponden a las Elecciones Constitucionales de Diputados celebradas en el país el día cinco de julio próximo pasado, para su estudio y la elaboración del dictamen que indica el artículo 6o. del propio ordenamiento, a fin de acreditar a los diversos Partidos Políticos Nacionales que participaron en dichos actos electorales los diputados de partido a los que tienen derecho.

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, promulgada el 5 de febrero de 1917, ratifica el sufragio universal como derecho y deber cívico de los ciudadanos y establece la obligatoriedad del desempeño de todo cargo de elección popular; la adopción categórica del sistema de elección directa de diputados, senadores y Presidente de la República; la determinación de que los diputados son representantes del pueblo y por ende de la Nación y el principio de la no reelección absoluta para el cargo de Presidente de la República.

Consagra nuestra Carta Magna los principios del régimen federal democrático y representativo como elementos esenciales de la organización del pueblo mexicano cuya voluntad es constituirse en República. Y establece que la soberanía nacional reside esencial y originalmente en el pueblo y que todo poder público dimana del pueblo y se instituye para su beneficio.

La Constitución de 1917 ha sufrido subsecuentes reformas, tendientes a perfeccionar el sistema democrático, que como se ha visto, ha sido el anhelo del pueblo mexicano; el derecho de sufragio, que estaba limitado únicamente a los varones, se amplía al concederse el voto a las mujeres, según la reforma al artículo 34 de la Constitución, por decreto del Congreso, publicado el 17 de octubre de 1953; la base democrática del sufragio sufre una nueva ampliación con la reforma cuya iniciativa presentó el C. Presidente de la República, licenciado Gustavo Díaz Ordaz, el 20 de diciembre del año de 1968 para otorgar el derecho de voto a la juventud, por la que se reconoce la ciudadanía a los jóvenes, varones y mujeres, a partir de los 18 años independientemente de su estado civil, fortaleciéndose aún más la base popular del poder representativo.

En un sistema democrático, que el pueblo ha tendido a perfeccionar en el transcurso de su historia, no resulta suficiente el que los sectores más numerosos de la población elijan a sus representantes por medio del voto mayoritario, sino que es necesario que aquellas minorías de población que disienten, puedan a su vez tener

representantes que expresen fielmente sus opiniones y que éstos, conjuntamente con los representantes de la mayoría, puedan opinar y decidir sobre todos los asuntos públicos de interés nacional. Ningún sitio mejor, constitucionalmente, que la Cámara de Diputados, expresión fiel de la representación popular, para que mayorías y minorías concurran a participar en el gobierno del país.

Precisamente con el deseo de que todas las corrientes de la opinión pública pudieran expresarse en la Cámara de Diputados, se llevaron a feliz término en el año de 1963, las reformas a los artículos 54 y 63 de la Constitución que establecieron un sistema electoral mixto para la elección de diputados federales, el cual combina nuestro tradicional régimen de elección distrital por mayoría, con otro, ubicado en el plano nacional, que facilita el que los partidos minoritarios, entendiendo por éstos los que hubiesen obtenido veinte o menos triunfos por mayoría, puedan acreditar hasta ese número de diputados de partido mediante el cumplimiento de los requisitos que las propias normas jurídicas señalan.

Con esta trascendental reforma se inicia, ciertamente, una nueva etapa en nuestros procedimientos democráticos, pues el nuevo sistema significa la apertura de nuestro régimen legal a todas las corrientes de opinión y el estímulo para el advenimiento del pluripartidismo en México.

Los orígenes del pluripartidismo tienen hondas y antiguas raíces en nuestro medio. Históricamente, a falta de partidos políticos claramente definidos, actúan, en la sociedad mexicana, desde la consumación de la Independencia, dos corrientes políticas llamadas en términos generales la corriente liberal y la conservadora, y no es sino hasta 1847 cuando como resultado de alternativos ascensos y descensos de los grupos conservadores y liberales al Poder, que Mariano Otero, ilustre liberal, apunta la necesidad de estabilizar el régimen con la coexistencia de liberales y conservadores en el seno del Congreso, ya que la presencia de unos en el Poder solía traer la insurrección de los otros. A mayor abundamiento, el destacado legislador y político apunta la posibilidad de que otras corrientes minoritarias puedan llegar a formar parte del Gobierno, cuando en una de sus múltiples intervenciones habla de "La necesidad de llamar todos los intereses a ser representados", y agrega, que este hecho, constituye "...una verdad tan universalmente reconocida, que sólo ignorando el estado actual de la ciencia puede proclamarse el duro y absoluto imperio de la mayoría sin el equilibrio de la representación de las minorías".

Otero, adelantándose a su tiempo, afirmaba que: "...el sistema representativo es mejor en proporción que el cuerpo de representantes se parezca más a la Nación representada", y que "La teoría de la representación de las minorías no es más que una consecuencia del sufragio universal: porque nada importa que ninguno quede excluido del derecho de votar, si muchos quedan sin la representación, que es el objeto del sufragio".

La Revolución Mexicana respondiendo a su origen democrático retoma este principio. El Presidente Plutarco Elías Calles en el mensaje del primero de septiembre de 1928, afirmó ante el Congreso de la Unión: "Quiero decir, entre otras cosas, que este triunfo de la Ley parecerá más augusto y ha de satisfacer mejor las necesidades nacionales, cuando estén en esos escaños representadas todas las tendencias y todos los intereses legítimos, cuando logremos, como está en gran parte en vuestras manos conseguirlo por el respeto al voto, que reales, indiscutibles representativos del trabajador del campo y de la ciudad, de las clases medias y submedias, e intelectuales de buena fe, y hombres de todos los credos y matices políticos de México, ocupen lugares en la representación nacional, en proporción a la fuerza que cada organización o cada grupo social haya logrado conquistar en la voluntad y en la conciencia pública." Y más adelante agrega: "Más peligroso resulta ahora para las conquistas revolucionarias la intolerancia política llevada al extremo... que la aceptación de todo género de minorías, que la lucha de ideas en este Parlamento..."

La realidad política mexicana hasta antes de 1963, mostraba el predominio del gran partido mayoritario originado por la Revolución, que no tan sólo ha conquistado legítimamente el Poder Público, sino que mantenía una abrumadora mayoría representativa en la Cámara de Diputados. A ello contribuía, además, la rigidez del sistema electoral, muchas veces criticada, cuya naturaleza dificultaba la expresión de las corrientes políticas minoritarias, hecho más patente en la medida que el desarrollo económico del país propiciaba su crecimiento demográfico y la concentración de más grandes núcleos humanos, tanto en las zonas urbanas como en las rurales.

Atento a esos fenómenos, el Ejecutivo Federal promovió la reforma a la que hemos hecho referencia en este dictamen, que creó la institución de los Diputados de Partido, con el objetivo central de consolidar la estabilidad política y orgánica de que México disfruta, mediante la mejor canalización, por cauces legales, de las fuerzas cívicas, y en particular de las minoritarias agrupadas en partidos políticos nacionales.

El sistema mixto creado en 1963 tuvo entre otras la gran virtud de respetar la tradición mexicana de elección por distrito facilitando al mismo tiempo la adjudicación de los diputados de partido a las organizaciones políticas que no obtuviesen suficientes triunfos distritales.

Con ello conservaba el principio democrático de que mayorías y minorías deben opinar y debatir, pero de que sólo las mayorías tienen el supremo derecho de decidir los destinos nacionales.

Ubicado en el contexto de su época nuestro sistema electoral mixto busca aprovechar el valor de todos los votos ciudadanos, sin que ninguno se desperdicie, de tal manera que no solamente aquellos expresados en favor del partido mayoritario conduzcan a la obtención de una

representación política, sino también los otorgados en pro de las organizaciones minoritarias, en la debida proporción a su fuerza electoral.

Al integrarse un sistema sui generis de representación, nuestro derecho no se limitó a garantizarla a las corrientes menores de opinión sino que, mirando hacia el porvenir, buscó el estímulo y fortalecimiento de esas propias corrientes políticas asegurándoles que sus ideas y sus pronunciamientos serían escuchados en la Cámara Popular.

Como consecuencia de las elecciones federales de 1964 y 1967 la XLVI y XLVII Legislaturas de la Cámara de Diputados, fueron integradas con un sentido pluripartidista, con diputados no sólo del partido mayoritario, el Partido Revolucionario Institucional, sino de otras tres respetables corrientes de opinión ciudadana: las canalizadas a través de los partidos Acción Nacional, Popular Socialista y Auténtico de la Revolución Mexicana.

Para ello, las normas jurídicas producto de la reforma fueron aplicadas ciñéndose a la interpretación del método histórico - político y no sólo a la interpretación literal del método jurídico puro, estimando que como partes de nuestro Derecho Constitucional tenían una misión eminentemente social que cumplir y no podían desvincularse de los fenómenos históricos, económicos y políticos que las habían motivado.

Así, la representación popular conjugada en la Cámara de Diputados no quedó constreñida a su ya de por sí importante dimensión política, sino, como lo avizoraba Mariano Otero, lo prevenía Plutarco Elías Calles lo señalaba claramente el espíritu de la reforma constitucional, con una plena dimensión sociológica. La representación, entendida en esos términos, no designa solamente una relación de derecho o de opinión entre electores y elegidos, entre mandantes y mandatarios, sino la coincidencia entre la integración de las fuerzas políticas y sociales del país y la composición de la Cámara Popular.

Quedó integrado de esta manera el proceso entre la Ley como expresión normativa y la realidad como consecuencia de la norma y al mismo tiempo como conformadora de derecho. A tal grado, que para esta Tercera Comisión las resoluciones de los honorables Colegios Electorales que dieron vida a las dos Legislaturas inmediatas anteriores constituyen ya fecundos y valederos precedentes.

El régimen de libertades públicas que hemos construido en el transcurso de un largo proceso histórico, garantiza plenamente el derecho de todos a opinar en el foro público, a vigorizar las diversas corrientes ideológicas y a disentir dentro de los marcos de la Ley. El resultado del nuevo sistema electoral que tutela esas libertades ha sido a todas luces loable y fructífero. La presencia en esta Cámara de los diputados de partido, representantes de organizaciones políticas minoritarias, ha renovado la vida democrática al desarrollar y mantener cauces pacíficos y libres a la expresión de las distintas opiniones públicas.

Los limpios y ordenados comicios celebrados el 5 de julio del corriente año, constituyen por sí mismos un nuevo y sólido avance en el camino del pueblo mexicano hacia su plena superación democrática. Por la organización que tuvieron, por el respeto a las leyes electorales que los distinguió, por la forma masiva, pacífica y libre con que los ciudadanos mexicanos se expresaron a través de ellos, y por el alto nivel cívico que campeó en su preparación y desarrollo, fueron una auténtica consulta popular y reflejan sin lugar a duda la voluntad democrática de la nación. Traducen, además, el predominio de las corrientes políticas mayoritarias y la gradual expresión de aquellas otras que, apoyadas por minorías, contribuyen también, en términos electorales, a la configuración del ser nacional. En estas ejemplares elecciones los ciudadanos sufragaron en favor de los cuatro partidos políticos nacionales registrados y, en consecuencia, sentaron los presupuestos para que respetando su voluntad la Cámara de Diputados se integre con representantes surgidos de estos mismos partidos políticos.

Para resolver los derechos de los partidos políticos contendientes o acreditar diputados de partido en esta representación nacional, la Comisión estima que no debemos detenernos en el simple examen del resultado numérico de la votación general, toda vez que no bastan las escuetas operaciones aritméticas derivadas de los escrutinios, para estar ciertos de una interpretación correcta del espíritu de los preceptos de nuestra Ley Fundamental, pues como hemos sostenido, más allá de su propia literalidad deben valorarse la génesis de los principios que contienen, la exigencia histórica que los motivó, el factor político presente para individualizar su contenido, la antigüedad e importancia de los partidos políticos nacionales, y la orientación del país hacia un porvenir democrático verdaderamente integrado, con base en las esencias de nuestra tradición histórica y en los anhelos de constante superación de nuestro pueblo.

Por lo expuesto y fundado y con apoyo en lo establecido en los artículos 39, 53, 54, 60, 63 y demás relativos de la Constitución General de la República, y 127 de la Ley Electoral Federal, esta Comisión Dictaminadora propone a esa H. Asamblea los siguientes puntos resolutivos:

Primero: De acuerdo con la fracción II del artículo 54 de la Constitución General de la República, el Partido Revolucionario Institucional no tiene derecho a diputados de partido, por haber alcanzado más de 20 diputados de mayoría.

Segundo: Son diputados de Partido, de acuerdo con las fracciones III, IV y V del artículo 54 Constitucional y con las fracciones III, IV y V del 127 de la Ley Electoral Federal, los siguientes ciudadanos:

1. Ingeniero José Melgarejo Gómez, propietario, y profesora Ma. Margarita Pineda y Téllez,

suplente; del Séptimo Distrito electoral del Estado de México.

2. Mayo Arturo Bravo Hernández, propietario, y Julio Alberto Lujambio Rafols, suplente; del Vigésimo Distrito electoral del Distrito Federal.

3. Doctor Roberto Flores Granados, propietario, y C. P. Othón Neri Mosco, suplente; del Vigésimo Primer Distrito electoral del Distrito Federal.

4. Miguel Hernández Labastida, propietario, y José Ma. Martínez Hinojosa, suplente; del Vigésimo Segundo Distrito electoral del Distrito Federal.

5. Licenciado Miguel López González, propietario, y Teodoro Ortega García, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Puebla.

6. Doctor Guillermo Islas Olguín, propietario, y Luis Torres Delgado, suplente; del Décimo Noveno Distrito electoral del Distrito Federal.

7. Licenciado Juan Landerreche Obregón, propietario, y Román Rodríguez Sánchez, suplente; del Décimo Tercer Distrito electoral del Distrito Federal.

8. C. P. Magdaleno Gutiérrez Herrera, propietario, y Guillermo Eugenio López Lankenau, suplente; del Décimo Cuarto Distrito electoral del Distrito Federal.

9. Inocencio Sandoval Zavala, propietario, y Lorenzo Reynoso Ramírez, suplente; del Décimo Distrito electoral del Distrito Federal.

10. Licenciado Hiram Escudero Alvarez, propietario, y Alvaro Fernández de Ceballos Ramos, suplente; del Segundo Distrito electoral del Distrito Federal.

11. Profesor José Blas Briceño, propietario, y Adrián Ochoa Olvera, suplente; del Noveno Distrito electoral del Estado de México.

12. Alfonso Orozco Rosales, propietario, y Miguel Angel Martínez Cruz, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Jalisco.

13. Licenciado Guillermo Ruiz Vázquez, propietario e ingeniero Carlos Petersen Biester, suplente; del Tercer Distrito electoral del Estado de Jalisco.

14. Licenciado Bernardo Bátiz Vázquez, propietario, y Edmundo Lorenzo Rocha Rosales, suplente; del Décimo Sexto Distrito electoral del Distrito Federal.

15. Licenciado Guillermo Baeza Somellera, propietario, y Miguel Campos Martínez, suplente; del Cuarto Distrito electoral del Estado de Jalisco.

16. Licenciado Jorge Garabito Martínez, propietario, y Susana Herrasti y Ortiz de Montellano, suplente; del Primer Distrito electoral del Distrito Federal.

17. Profesor Jesús Rojo Pérez, propietario, y R. Jorge Villa Roldán, suplente; del Vigésimo Cuarto Distrito electoral del Distrito Federal.

18. Ingeniero Ernesto Velasco Lafarga, propietario, y Eugenio Roldán Parrodi, suplente; del Décimo Séptimo Distrito electoral del Distrito Federal.

19. Juan Manuel López Sanabria, propietario, y José Ramírez Landeros, suplente; del Segundo Distrito electoral del Estado de Guanajuato.

20. Licenciado Francisco José Peniche Bolio, propietario, y Mario Sentíes Gutiérrez, suplente; del Séptimo Distrito Electoral del Distrito Federal.

Por el Partido Popular Socialista:

1. Ingeniero Jorge Cruickshank García, propietario, y Eréndira Ramírez Martínez, suplente; del Tercer Distrito electoral del Distrito Federal.

2. Francisco Ortiz Mendoza, propietario, y Gabriel Guerrero Olivares, suplente; del Séptimo Distrito Electoral del Distrito Federal.

3. Alejandro Gascón Mercado, propietario, y Raúl Rea Carbajal, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Nayarit.

4. Manuel Stephens García, propietario, y Florentino Islas, suplente; del Décimo Octavo Distrito electoral del Distrito Federal.

5. Maximiliano León Murillo, propietario, y Artemio Vargas Cruz, suplente; del Décimo Cuarto Distrito electoral del Distrito Federal.

6. Profesor Felipe Cerecedo López, propietario, y Delio C. Vite Vite, suplente; del Segundo Distrito electoral del Estado de Veracruz.

7. Licenciado Francisco Hernández Juárez, propietario, y profesor Gilberto Velázquez Sánchez, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Oaxaca.

8. Profesor Simón Jiménez Cárdenas, propietario, y Raúl Osuna Burgueño, suplente; del Cuarto Distrito del Estado de Sinaloa.

9. Profesora Emilia Dorado Baltazar, propietaria, y Magdalena Romero Enríquez, suplente; del Tercer Distrito electoral del Estado de Jalisco.

10. Profesor Jesús Luján Gutiérrez, propietario, y profesor Hildebrando Gaytán Márquez, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Chihuahua.

Por el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana:

1. General Juan Barragán Rodríguez, propietario, y Adolfo Kunz Bolaños, suplente; del Primer Distrito electoral del Distrito Federal.

2. General Héctor Rentería Acosta, propietario, y doctor Jesús García Tapia, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Michoacán.

3. Laura Peraldi Ferriño, propietario, y doctor José Fallat Badillo, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Coahuila.

4. Fortino Alejandro Garza Cárdenas, propietario y Basilio Sánchez Garza, suplente; del Quinto Distrito electoral del Estado de Nuevo León.

5. Roberto Herrera Giovanini, propietario, y Roberto Gómez Godínez, suplente; del Cuarto Distrito electoral del Estado de Oaxaca.

Tercero: Notifíquese este dictamen en sus puntos resolutivos a los partidos políticos interesados para los efectos del artículo 63 de la Constitución General de la República.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. - México,

D. F., a 29 de agosto de 1970. - Tercera Comisión Dictaminadora. - Licenciado Luis Ducoing Gamba. - Licenciado Alejandro Peraza Uribe. - Licenciado Máximo Contreras Camacho."

El C. secretario Santa Ana, Cuauhtémoc: Está a discusión de la Asamblea el dictamen de la Tercera Comisión Dictaminadora.

El C. Presidente: Se abre el registro de oradores.

Se manifiesta a la Asamblea que se han inscrito los siguientes ciudadanos para discutir el dictamen que acaban ustedes de escuchar: el C. Héctor Rentería Acosta del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; el ciudadano Francisco Ortiz Mendoza del Partido Popular Socialista y el C. diputado Armando González Soto del Partido Revolucionario Institucional.

Tiene la palabra el ciudadano Rentería Acosta.

- El C. Rentería Acosta, Héctor:

"Señor Presidente:

Compañeros diputados y presuntos diputados:

Con la emoción de ocupar la más alta tribuna de la República, vengo a apoyar el magnífico dictamen de la Tercera Comisión en nombre de mi partido: el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana. No vengo a defender el dictamen porque no necesita defensa un análisis jurídico, político y sociológico tan claro como el que contiene; vengo más bien a subrayar en nombre de mi partido, que de ser aprobado dicho dictamen por esta honorable Asamblea, nuestro país habrá de dar un nuevo paso hacia adelante en el camino de su evolución democrática. No defiendo el dictamen sino lo que el propio dictamen defiende: el respeto íntegro, cabal y razonado al voto del pueblo mexicano.

Dos objeciones iniciales motivaron ese dramático episodio que da vida y sentido al México de hoy, esa gesta heroica gracias a la cual se ha escrito nuestra historia en los últimos sesenta años: la Revolución Mexicana. Esos dos principios fundamentales, que todos los mexicanos debemos tener presentes en la mente y en el corazón son el de la efectividad del sufragio y el de la no reelección.

Gracias al segundo ha sido posible la vida institucional del país, la estabilidad de que gozamos y que muchas naciones nos envidian, el progreso de México en todos los órdenes, pues la no reelección nos liberó de las luchas facciosas por el poder, del continuismo político y de la perpetuación de unos cuantos en los puestos de mando.

Por su parte, el sufragio efectivo, que se traduce hoy en día en la cada vez mejor organización de las elecciones y en el respeto a la voluntad de los votantes, ha garantizado que sean precisamente los electores quienes señalen a los hombres que deben dirigirlos y representarlos, y escojan los programas que debe aplicar nuestra nación para completar su ruta histórica.

Por fortuna, y como confirmación de que el pueblo nunca se equivoca, hasta ahora esos hombres y esos programas han sido, para bien de México, los programas y los hombres de la Revolución Mexicana.

Con la voz del Sufragio Efectivo y de la No Reelección el pueblo mexicano desterró a una dictadura oprobiosa que representaba todo lo conservador y retrógrado que había en el país. Con la voz del Sufragio Efectivo y de la No Reelección el pueblo mexicano ha construido un nuevo orden social, fincado en la posesión de la tierra para los campesinos, en la tutela de los derechos de los trabajadores, en las libertades políticas, en la educación general, en el progreso económico y en el bienestar social de las grandes masas populares.

Para que el sufragio sea verdaderamente efectivo, para que represente la auténtica voluntad del pueblo, no debe nada más contener y resaltar la opinión suprema e indiscutible de las mayorías, sino también la respetable y necesaria opinión de los núcleos minoritarios. El Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, desde el punto de vista ideológico, no se considera de ningún modo una minoría, sino todo lo contrario, puesto que posee los principios y los programas que han apoyado y apoyan las mayorías de México. Pero el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, orgánicamente contribuye a agrupar ciertos sectores de la vasta mayoría revolucionaria, sobre todo aquellos que están, por su origen y por sus ideales, más interesados en vigilar la pureza de los principios revolucionarios y la efectividad de su cumplimiento.

Somos, pues, en tanto partido político, un partido político minoritario pero profundamente respetable porque nos preocupamos por custodiar y mantener encendida la llama vigorosa de un movimiento social del que otros se han beneficiado pero del cual nosotros fuimos los autores.

Y no lo decimos por quienes comparten nuestras ideas, sino por aquellos otros, manifiestos enemigos de la Revolución Mexicana, que niegan la democracia gracias al ambiente democrático que la Revolución creó; que defienden y ejercen sus derechos, gracias a que se los otorga la gloriosa Constitución de 1917, y que, aunque forman parte de las corrientes secularmente enemigas del progreso de México, se les reconoce su representación política debido a las reformas del sistema electoral impulsadas y mantenidas por la Revolución.

Sabemos muy bien que no faltará quien trate de impugnar las cinco diputaciones de partido que nuestro partido ha obtenido legítimamente. Nosotros responderemos que si no les parece suficiente que las hayamos ganado en las urnas electorales que recuerden que también las ganamos desde hace mucho tiempo en los campos de batalla.

De nada sirve que persistan en negar la autoridad moral indiscutible que es la fuerza básica de nuestro partido porque quien definitivamente nunca lo olvidará, es el pueblo mexicano.

Por eso apoyamos decididamente los principios democráticos que sustentan la asignación de las diputaciones de partido. Al reconocérsele a nuestra organización el derecho que le corresponde a estar presente en la conformación de la voluntad colectiva, se está reconociendo

a una corriente ideológica que se encuentra firmemente arraigada en todos los rincones del país, y eso desde muchos años antes de que aparecieran en la escena nacional esas organizaciones que hoy pretenden contar con un electorado de gran amplitud y que sólo son en verdad organizaciones de gentes cómodamente apoltronadas, gozando de los beneficios de nuestra Revolución.

Nuestro partido ha participado activamente en todas las etapas del progreso electoral, y estamos convencidos de que es a base de discutir ideas, presentar programas y analizar los problemas del pueblo, que se fortalece el espíritu cívico colectivo y con ello la democracia. No hemos abandonado en ningún momento la lucha, a sabiendas que nuestro electorado es pequeño, no hemos dejado de insistir en nuestros ideales, por todos los medios que hemos tenido a nuestro alcance. Consideramos que ésa es nuestra función, y con la misma entereza con que la hemos venido desempeñando, la continuaremos desde esta tribuna por los próximos tres años. Aquí seguiremos sosteniendo la ideología a la que hemos entregado nuestra vida. Actuando, no eludiendo responsabilidades.

México está por concluir una fecunda etapa política. Un gran patriota, genuino revolucionario nos ha jefaturado con acierto. Hemos logrado grandes avances políticos, económicos y sociales, resultado que nos impulsará hacia metas más elevadas. Me refiero, señoras y señores, al licenciado Gustavo Díaz Ordaz. El futuro, además, puede verse con optimismo. Vigorosas manos, igualmente progresistas, tomarán en breve la bandera nacional, serán las manos limpias y entregadas al servicio de la patria, de Luis Echeverría.

El Partido Auténtico de la Revolución Mexicana estará entonces, como siempre lo ha estado en la misma trinchera, en defensa de los más puros ideales de nuestro movimiento social.

Por todas las consideraciones anteriormente expuestas pido a todos ustedes que apoyemos con entusiasmo el dictamen, por el bien de México." (Aplausos.)

El C. Presidente: Tiene la palabra el C. Francisco Ortiz Mendoza, del Partido Popular Socialista.

El C. Ortiz Mendoza, Francisco: Señor Presidente; H. Asamblea: Con el dictamen que acaba de ser leído entramos de lleno a la tercera Legislatura con diputados de partido. Es indudable que el cambio cualitativo que sufrió la lucha electoral en nuestro país, al instaurarse por medida patriótica, revolucionaria del entonces Presidente de la República don Adolfo López Mateos, nuestro país dio un gran salto hacia un régimen democrático de mayor amplitud.

Sin embargo, mi partido, el Partido Popular Socialista, considera necesario y conveniente plantear algunas cuestiones que considera de importancia en el momento mismo en que se encuentra a debate el planteamiento, el dictamen de la diputación de partido de esta XLVIII Legislatura, porque debemos estar de acuerdo todos en que la lucha de nuestro pueblo a lo largo de más de cincuenta años de vida independiente, ha sido muy intensa, sangrienta y dramática en muchas ocasiones; permanentemente amenazado su porvenir, pero permanentemente también haciendo que surgieran de las propias filas populares hombres extraordinariamente valiosos que lo han sabido guiar.

¿Cuáles son en última instancia, los objetivos que han perseguido todos los hombres que han contribuido a construir esta patria que, como en la glosa se decía, nos toca a nosotros ahora recibir y contribuir con nuestro esfuerzo a que sea cada vez más grande y más generosa?

Los objetivos fundamentales han sido siempre el vivir con independencia, ejercer la soberanía de la nación, elevar el nivel de vida de nuestro pueblo, vivir con menos zozobra y con menos angustia, alcanzar los más altos niveles de la cultura y de las manifestaciones del espíritu, indudablemente que todos los mexicanos, bien nacidos, en esta tierra nuestra, hemos luchado siempre, o mejor dicho, han luchado siempre históricamente por alcanzar esos elevados objetivos. ¿Cuál es entonces la lucha que tenemos planteada en el año de 1970 los mexicanos de ahora?, en un momento de transición, de encuentro de dos sistemas convulsos, unos, a nuestro juicio, en agonía, los otros, en el momento de su nacimiento.

El problema de nuestro país consiste en saber si dentro del sistema capitalista muy particular en que vivimos, es posible seguir luchando por esos objetivos históricos. Si es posible alcanzar lo que se llama, en algunos sectores, la justicia social de nuestro pueblo. Si es posible, en este sistema en el que vivimos, elevar el nivel de vida de los mexicanos; si es posible seguir construyendo a nuestro país con independencia y soberanía.

Algunos sectores, que dicen manejar la misma ideología que maneja el Partido Popular Socialista, que es el materialismo dialéctico, sostiene que sólo en el socialismo, sólo en un régimen socialista, se puede alcanzar la plena justicia social del pueblo. Indudablemente que así es, pero la otra parte del planteamiento que hacen estos mismos sectores que sostienen que en consecuencia, lo único que tenemos que hacer en este momento es construir el socialismo en México, porque no es posible, en esta situación actual, elevar el nivel de vida y dar mayor justicia social al pueblo. A nuestra manera de ver, es falso.

Es posible, en este momento, en las condiciones en que México vive, en el momento de transición en el que estamos desarrollándonos, elevar el nivel de vida de nuestro pueblo; darle mayor justicia social a las clases sociales más desamparadas.

Es posible, en este régimen, en este sistema, en esta etapa revolucionaria de México, seguir construyendo nuestra patria, con independencia, con libertad y con soberanía, y esto es posible porque precisamente existen en nuestro país amplios sectores de las diferentes clases sociales que componen a nuestra patria, que persiguen, que se puede caminar, que se puede

avanzar, entendiendo con claridad los problemas de México y tratando de encontrarles soluciones adecuadas.

Una de esas vías para lograrlo es precisamente el régimen electoral en el que entramos hace 6 años, de abrir las puertas a las minorías del pueblo mexicano para que tuviéramos posibilidad de expresar nuestras ideas desde esta tribuna. Bienvenida una medida más que acaba de producirse en la Cámara de Senadores, en otro tiempo cerrada a todas las ideas y a todos los partidos que no fuera el partido que tiene, de una o de otra manera, la mayoría de nuestro pueblo. El Senado de la República abrió las puertas al debate; su fruto quizá no se alcance a valorar todavía, pero es indudable que esos actos, esos hechos, contribuyen a que nuestro país camine más aceleradamente hacia la solución de sus más graves problemas.

Nuestro Partido, el Partido Popular Socialista, considera que todavía se puede hacer mucho más, que se puede acelerar el paso, que se puede evitar a nuestro pueblo mucho sufrimiento si tenemos decisión patriótica de resolver los problemas en beneficio de las mayorías.

Nosotros aceptamos, como Partido Popular Socialista, la representación en esta Cámara por el método, por la vía de los diputados de partido, no consideramos desde el principio que era la medida adecuada, consideramos que era una medida transitoria, porque en nuestro país, a cada momento, se están precisando más las clases sociales que componen a nuestro pueblo y, en consecuencia, deben, al mismo tiempo, irse precisando la ideología, el pensamiento, los programas, las plataformas de los grupos que dirigen en la lucha a cada una de las clases sociales que componen a nuestro país, es decir, que cada momento debe, y de hecho así está sucediendo, irse precisando la postura de cada partido político.

Hace un siglo, se recordaba hace un momento aquí, al hacer la glosa de los trabajos de este Colegio Electoral, la lucha se llevaba a cabo entre dos denominados partidos: el Liberal y el Conservador. En rigor no eran partidos políticos, eran movimientos populares, eran movimientos de grupos que luchaban más que nada por el predominio entre el Estado y la Iglesia en nuestro país. Pero partidos políticos como tales, no podían existir, porque las clases sociales todavía no estaban debidamente diferenciadas.

Después de la Revolución del 10, rota la estructura semifeudal que regía en México, los grupos políticos se integraron en torno a los caudillos militares. No era una lucha partidaria todavía. Eran los caudillos los que agrupaban a grandes sectores de nuestro pueblo, y nos llevaron a luchas en muchas ocasiones estériles, pero la mayor de las veces constructivas. Con la Revolución Agraria, con la Ley Federal del Trabajo, con la enseñanza primaria obligatoria, con la escuela rural, con la segunda enseñanza en México, y particularmente con la nacionalización de la industria petrolera en el año de 1938, nuestro país empezó a perfilarse como un país que rompía su sistema agrario, su régimen agrario o agrícola, mejor dicho, y entraba de lleno al proceso de la industrialización.

Cuando en el año de 1950 por primera vez la producción industrial rebasa a la producción agrícola y minera juntas, México empieza a tener un perfil de un país moderno, de un país que empieza a tener sus clases bien estructuradas. El maestro Vicente Lombardo Toledano, en el año de 1944, cuando concluía la Segunda Guerra Mundial, elabora el nuevo programa del sector revolucionario en México, y contra lo que muchos creían, porque el maestro Lombardo Toledano manejaba como nadie el marxismo y era el abanderado fundamental de la clase trabajadora en la lucha de clases, contra lo que muchos suponían, el maestro Vicente Lombardo Toledano insistía en que la medida más urgente para nuestro país era el de desarrollar su industrialización, para poder consolidar la capitalización en México, crear capitales nacionales, crear una industria nacional, para poder resolver los problemas más graves de México. No ignoraba, al elaborar este programa, que se iba a fortalecer la clase social contraria a la nuestra, la burguesía. Pero junto con ella, tenía la absoluta certeza de que crecería la clase obrera, como tenía que acontecer, y en ese mismo nuevo programa del sector revolucionario, planteaba que la industrialización por sí misma no resolvería los problemas de México, sino que tenía que ser impulsada, planificada, orientada y dirigida por el Estado. Desarrollaba la tesis en nuestro país al estilo mexicano, con las concepciones revolucionarias mexicanas que debería crecer y desarrollarse el sector estatal de la economía nacional, y por eso impulsaba las nacionalizaciones en México. A nuestro juicio, descubrió la ley fundamental del desarrollo de los países semicoloniales, que se puede expresar en tres palabras: nacionalizar es descolonizar.

Si nosotros nos adentramos en ese concepto veremos que es verdadero. Que cuando un país como el nuestro nacionaliza los recursos fundamentales para explotarlos en beneficio del pueblo, en la medida que lo va haciendo, cada vez va dependiendo menos de otro país, que originalmente lo tenga supeditado, económicamente hablando. Se ha ido demostrando a lo largo de los años que cuando nosotros hablamos de nacionalizar, hablamos colateralmente de construir la independencia de México cada vez más sólidamente; sabía el maestro Vicente Lombardo Toledano y lo sabe nuestro partido, que en este momento en México es necesario seguir avanzando por esta vía, no están resueltos todos los problemas, no están resueltas todas las necesidades de nuestro pueblo, existen carencias profundas que la mayoría de ustedes conocen porque, poco o mucho, cada una de las personas que están en este momento ocupando una curul en esta Cámara de Diputados, tiene una historia combativa, tiene una historia que le da autoridad suficiente para estar en este lugar. Sin embargo, en el proceso de su formación, van teniendo cada uno intereses diferentes y eso es lo que origina los choques muchas veces

apasionados en esta tribuna; sabemos bien que la lucha de clases en México se da, como en todos los países del mundo capitalista, en todas partes, en la tribuna de la Cámara de Diputados, en la tribuna de la Cámara de Senadores, en la escuela, en el taller, en la calle. Por eso nosotros estamos pidiendo que nuestro régimen electoral cambie en su forma y en su contenido una vez más. En seis años rápidamente avanzó este sistema, y el enfriamiento en los próximos años deberá ser, como sosteníamos hace algunos días desde esta tribuna, deberá ser una lucha de partido, de principios, de programas, de plataformas previamente elaboradas; ¿por qué debe ser así, a nuestro juicio?, porque solamente de esa manera el pueblo tendrá forma de confiar plenamente en su futuro cuando emita su voto, sabrá perfecta y precisamente por qué motivo emite su voto en favor de tal o cual partido, porque estará clarificando entonces de antemano el programa que prometa seguir. El dictamen que se acaba de leer es muy rico, extraordinariamente rico, plantea estas cuestiones aun cuando todavía se manejan cuestiones del pasado en lo que se refiere al proceso electoral. Dimos un paso con los diputados de Partido, pero es necesario que demos otro más, que implantemos la representación proporcional. Cualquiera podría decir a ustedes, del Partido Popular Socialista: no les conviene la representación proporcional, porque con ella, con la baja votación que tienen, según se manifiesta en las actas de elección, ustedes tendrían menos diputados. Y otros partidos, incluso enemigos del pueblo, tendrían más diputados. No importa. Sale ganando la democracia en nuestro país.

Es necesario que en este recinto se refleje exactamente la correlación de fuerza que existe en la calle, para que la lucha de clases se dé aquí, desde la tribuna, con las fuerzas que corresponden a la calle misma; que la lucha de clases se dé aquí, desde el punto de vista de las ideas. De otra suerte, si no damos pasos más firmes en el futuro, pasos más seguros, la lucha de clases será aprovechada por corrientes contrarias e incluso la podrían llevar hasta la clandestinidad.

Consideramos, nosotros, que de esta manera, con métodos nuevos, reconociendo, repito, de altamente patriótico y revolucionario de la medida que dio origen a los diputados de partido, nuestro país, nuestro pueblo saldrá ganando en la democracia.

Es necesario, y así lo hará nuestro partido en esta Legislatura, luchar por la reelección de los diputados. Se debatió públicamente, hace algunos años, nunca hubo argumentos de peso suficiente para derrotar la iniciativa que aprobó la Cámara de Diputados, respecto a la reelección de los diputados mismos.

Porque es necesario que las clases sociales tengan sus parlamentarios de prestigio, formados en las luchas parlamentarias. Que no cada tres años se esté renovando el equipo y se desplacen los que se hayan destacado en la lucha del Parlamento Mexicano.

En esta Legislatura habremos de plantear estas reformas y otras más; que haya dos períodos de sesiones. Fuimos derrotados también en esa iniciativa, pero lo vimos, vimos lo valioso que fue el foro público al que se abrió con motivo del delito de Disolución Social. El pueblo estuvo entusiasmado con los debates, figuras de relevancia extraordinaria que de otra manera no hubieran tenido oportunidad de expresar su pensamiento, vinieron al foro de la Legislatura que está por concluir realizó con este motivo.

Es necesario que los diputados, como lo han empezado ya a hacer indudablemente, pero que debe ser acentuado ese proceso, vuelvan a adquirir la alta investidura de los altos funcionarios de la Federación.

Todavía, por desgracia, se persiste en la idea de que lo fundamental de un diputado es ser gestor del lugar de donde procede. Eso es así por la escasa posibilidad que se tiene de realizar una lucha parlamentaria no sólo en la tribuna, sino en otras actividades que el diputado tiene que realizar en mayores perspectivas.

Fuimos derrotados también en nuestro planteamiento que se transmitan por radio y televisión las sesiones de la Cámara de Diputados. Se manejaron cuestiones de carácter menor para rebatir nuestro punto de vista; pero queremos aprovechar esta oportunidad para hacer notar que esa iniciativa nuestra tenía un objetivo: nuestro pueblo, lo ha demostrado en la práctica, está interesado en la política y mientras más avanza nuestro país más se interesa en los problemas nacionales.

Hemos sostenido que los enemigos del desarrollo del pueblo están profundamente interesados en despolitizarlo, en que se preocupen cada vez menos de los problemas de México, y por esa razón mucha gente del pueblo, sin quererlo, sirve de caja de resonancia de los enemigos del pueblo y hace motivo de mofa, de burla, a los diputados que están trabajando en cada una de las Legislaturas, porque en la medida que el pueblo desconfíe de sus representantes, de sus organismos institucionales, de su perspectiva, en esa misma medida va debilitando sus raíces en el suelo mexicano y es fácil víctima de los enemigos de nuestro pueblo.

Por ese motivo pedimos nosotros que los instrumentos de difusión se abran al debate de las ideas, que no exista una barrera entre los discursos que aquí se dicen, muchos brillantes, incluso, por supuesto, cartas del partido mayoritario, argumentos que manejan los enemigos de México desde esta tribuna que sean conocidos directamente por el pueblo los discursos valiosos que se dicen aquí, que sean discutidos por el pueblo, conociéndolos directamente. Como se ve, señoras y señores diputados, muchas son las tareas que se derivan de esa patriótica medida de los diputados de partido. El pueblo empieza a confiar en esta medida y hoy mismo están a la expectativa de saber como se resuelve este problema en esta Cámara.

El día de ayer, lo acontecido en el Senado, se comenta hoy en todas las calles de México. Por esta razón, nosotros estamos hablando en favor del dictamen; por esta razón el Partido Popular Socialista, independientemente de las diferencias que se pudieran tener en otros aspectos, está seguro que con medidas como está, con medidas que ustedes mismos habrán de proponer, sí es posible elevar el nivel de vida del pueblo mexicano, sí es posible alcanzar mejores niveles de justicia social; sí es posible en nuestro sistema, en México, como estamos todavía, a pesar de que nosotros luchamos por el socialismo, como perspectiva histórica, sí es posible en este momento, con los métodos que estamos meditando, perfeccionándolos cada vez más, construir un México totalmente libre, independiente y soberano como es el México que todos los mexicanos hemos soñado. Muchas gracias. (Aplausos.)

El C. Presidente: Tiene la palabra el ciudadano diputado Armando González Soto, del Partido Revolucionario Institucional.

- El C. González Soto, Armando:

"Honorable Asamblea:

La III Comisión Dictaminadora acaba de someter a la consideración de este honorable Colegio Electoral el dictamen que corresponde a los diputados de partido.

En nombre de todos y cada uno de los señores diputados electos que forman filas en el Partido Revolucionario Institucional, vengo a solicitar la aprobación, en todos sus términos, de ese dictamen, ya que con acierto y con sensibilidad revolucionaria, recoge las más depuradas tradiciones políticas, que informan el caso cuyo estudio le fue encargado.

El sufragio universal es una institución de orden público, incorporado no solamente al texto positivo de nuestra Constitución Política, sino enraizada firmemente en las tradiciones de nuestro pueblo, el cual, a través del ejercicio de aquél, ha venido manteniendo, dentro de nuestro medio nacional, su más pura vocación hacia la democracia representativa.

Ideal que fue expresado con gran vigor por aquel hombre justamente llamado Mártir de la Democracia, "iniciador de la Revolución Mexicana de este siglo", que se llamó Francisco I. Madero. (Aplausos.)

Para la vigencia de todo régimen político institucional no basta que sólo las mayorías se vean representadas en la Asamblea Legislativa, sino que, esta última, también abra sus puertas, a las decisiones electorales de las minorías de nuestra sociedad, puesto que, en la pluralidad y aun en la discrepancia, podemos encontrar, valederamente por cierto, los caminos más cortos para el progreso de la República.

En el proceso de formación de nuestro derecho constitucional positivo tenemos que detenernos en aquel momento histórico, que hizo posible la reforma a los artículos 54 y 63 de nuestra Carta Magna. Que los legisladores promovieron y defendieron, más que con un criterio de derecho puro, con un alto sentido histórico, un sistema electoral mixto, para la elección de diputados federales, que recoge la constante del pensamiento progresista mexicano, cuya raíz inmediata se encuentra en el pensamiento del Siervo de la Nación, el ilustre insurgente y también visionario político, José María Morelos y Pavón y que, captura los planteamientos que acerca de una democracia verdadera hiciera, entre otros, el insigne Mariano Otero, quienes presagiaron y siempre proclamaron, aun en los momentos más críticos de nuestra historia, que nuestra patria ha escogido un solo camino, el de la libertad, no por la libertad misma, sino el de la libertad como valor ético para el encuentro de sus mejores destinos.

Es innegable que la Revolución Mexicana, en todas sus etapas, ha buscado la satisfacción de los más profundos y justicieros anhelos del pueblo mexicano y que, para la satisfacción de sus objetivos, en un ininterrumpido proceso, ha logrado la creación de estructuras políticas constantemente mejoradas por el anhelo democrático del pueblo.

Nos sentimos herederos del pensamiento progresista de Francisco Zarco y de Ignacio Ramírez, cuando en el Constituyente de 1856, apasionadamente debaten exigiendo que las elecciones sean directas, es decir que el pueblo directamente elija a sus gobernantes y a sus representantes, cuando los antecedentes más cercanos de los gobiernos y de la legislación conservadora se fundaban en elecciones indirectas de segundo y tercer grado para burlar la voluntad del pueblo.

A fuerza de ejercer este derecho, desde hace muchos años conquistado, no llegamos a olvidar que fue bravamente obtenida con la acción ininterrumpida del verbo y de la pluma, y de la coincidencia de aquél y de está con los anhelos populares.

En suma, nos sentimos depositarios de la corriente del progreso que siempre ha luchado por lograr los avances democráticos y que ciertamente nos ha fortalecido, porque le han dado una mayor participación al pueblo en el gobierno de sus propios asuntos.

El dictamen que ahora se presenta a nuestra consideración, ilustra adecuadamente la tendencia de: la de auspiciar y fortalecer a las corrientes minoritarias propias de un pueblo que siempre ha mantenido vigor en su expresión y pasión para defender sus ideas, asegurándole a ese mismo pueblo, como lo dice textualmente el propio dictamen "que sus ideas y sus pensamientos serán recogidos en la Cámara Popular."

México es una patria y la patria siempre, en el interior, adquiere relieves multidimensionales.

Estamos seguros de que el dictamen que ahora se presenta habrá de traernos un nuevo motivo más de orgullo como revolucionarios y como mexicanos.

Los millones de ciudadanos que sufragaron el último cinco de julio de mil novecientos setenta, en las ejemplares elecciones constitucionales que acaban de transcurrir, pueden estar

seguros, una vez más, que sus voces han sido escuchadas.

Pedimos, por lo tanto, que por sus propios e ilustrados fundamentos, se apruebe el dictamen al que se acaba de dar lectura." (Aplausos.)

El C. Gallardo Ortiz, Julio Antonio (desde su curul): Señor Presidente: Con fundamento en el artículo 102 del Reglamento Interior del Congreso pido el uso de la palabra.

El C. Presidente: Tiene usted la palabra.

El C. Gallardo, Julio Antonio: Honorables diputados; ciudadanos que me escuchan: Es un hecho que aquí, puestos de pie, aplaudimos sin reservas al señor vicepresidente de este H. Colegio Electoral, cuando dentro de una glosa general de los trabajos de este Colegio Electoral, habló de autocrítica.

Es un hecho que el Presidente del Comité Ejecutivo Nacional de nuestro Partido, Alfonso Martínez Domínguez, ha hablado infinidad de veces, en todo el país, acerca de la autocrítica. La autocrítica de nuestro partido, especialmente.

Es un hecho que un hombre extraordinario como Luis Echeverría, nos haya dicho a los jóvenes del país, en todos los rincones de éste, acerca de la autocrítica de nuestro sistema y de nuestro partido.

Yo quiero preguntar a todos ustedes, miembros del Colegio Electoral, si a nombre de esta autocrítica, no es posible que se fije uno, estando en esta extraordinaria reunión del Colegio Electoral, en este Recinto Parlamentario, el más alto de México, atendiendo a la fracción III del artículo 54 de nuestra Constitución, que dice:

Artículo 54. La elección de diputados será directa, con sujeción a lo dispuesto en el artículo 52 y se complementará, además, con diputados de partido, apegándose en ambos casos a lo que disponga la Ley Electoral y, en el segundo, a las reglas siguientes:

"Fracción III. Estos serán acreditados por riguroso orden de acuerdo con el porcentaje del sufragio que hayan logrado, en relación a los demás candidatos del mismo Partido, en todo el país."

Que yo recuerde, nunca en la historia del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, un candidato, como el compañero Salem, que está en esta tribuna, ha obtenido 12 mil votos..., ¿...oí 19...?, 12 mil votos... 12 mil votos.

Es cierto que aquí escuchamos con todo respeto al señor orador del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, que aunque haya dicho que pertenece a un partido "minoritario", no importa, nosotros lo hemos escuchado con todo respeto.

Bienvenidos todos los cinco candidatos del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana. Bienvenidos los hombres, los candidatos que serán diputados del Partido Popular Socialista. Creo que la intención fundamental del legislador fue el que pudieran venir a esta Cámara de Diputados los representantes de las minorías, es cierto, bienvenidos, pues; pero en nada nos ataca, en nada nos daña, a los representantes del Partido Revolucionario Institucional; tampoco en nada daña a los del PPS; tampoco en nada daña a los del Partido Acción Nacional y tampoco daña a los del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, que un diputado más venga aquí, por derecho propio, a está Cámara de Diputados.

No nos daña que sean en vez de cinco, seis. Someto como una única consideración, a este Honorable Colegio Electoral, que modifique el dictamen, exclusivamente en lo referente a los diputados del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana y pido a los diputados del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, y pido además, con base en el artículo referente de las votaciones que es el 148, que ese voto, por primera vez, sea nominal, exclusivamente con esa observación.

Quiero, antes de bajar de esta tribuna, decir algo muy importante: Soy un hombre disciplinado de mi partido, siempre lo he sido, y les consta a miles de jóvenes de mi partido, porque he sido dirigente nacional del mismo, pero, señor licenciado Sentíes, honorables miembros de este Colegio Electoral y futuros integrantes de la XLVIII Legislatura, de ninguna manera a los jóvenes se les puede impedir hablar porque todo en este mundo moderno puede estar objetado, menos el derecho a objetar; los jóvenes del mundo han dicho que se prohibe prohibir, y yo, en nombre de mi generación, en nombre de los jóvenes de México, quizá en nombre de los jóvenes del mundo, con ese derecho de libertad de la que aquí habló mi compañero González Soto, he venido a expresar este punto de vista. Está a la consideración de ustedes. Muchas gracias.

El C. Presidente: Tiene la palabra el C. Alejandro Peraza.

El C. Peraza, Alejandro: - 2o. Distrito Electoral de Yucatán , por la Comisión Dictaminadora - : Nadie, en este recinto parlamentario, esencia del sentir democrático de nuestro pueblo, limita ni ha limitado, en el pasado ni en el presente, el uso de la palabra a los ciudadanos diputados. (Aplausos.)

Pido a la H. Asamblea y al Presidente de la misma, a nombre de la Comisión Dictaminadora, que de acuerdo con los fundamentos del dictamen, que han sido debidamente expuestos, que pase a la aprobación y a la consideración de la Asamblea los términos del dictamen, tal y como fueron los mismos redactados y leídos y como fueron expuestos por esta Comisión Dictaminadora, íntegramente y sin modificaciones. Gracias. (Aplausos.)

El C. Presidente: Se ruega a la Secretaría consulte a la Asamblea si estima suficientemente discutido el dictamen.

El C. secretario Santa Ana, Cuauhtémoc: Por instrucciones de la Presidencia, se consulta a la Asamblea si considera suficientemente discutido el dictamen. Suficientemente discutido. En consecuencia, en votación económica, se pregunta a la Asamblea si aprueba el dictamen en sus términos. Los que estén por

la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobado. (Aplausos.)

El C. Presidente: La Presidencia declara:

Primero: De acuerdo con la fracción II del artículo 54 de la Constitución General de la República, el Partido Revolucionario Institucional no tiene derecho a diputados de partido, por haber alcanzado más de 20 diputados de mayoría.

Segundo: Son diputados de Partido, de acuerdo con las fracciones III, IV y V del artículo 54 constitucional y con las fracciones III, IV y V del 127 de la Ley Federal Electoral, los siguientes ciudadanos:

Por el Partido Acción Nacional:

1. Ingeniero José Melgarejo Gómez, propietario, y profesora María Margarita Pineda y Téllez, suplente; del Séptimo Distrito Electoral del Estado de México.

2. Mayo. Arturo Bravo Hernández, propietario, y Julio Alberto Lujambio Rafols, suplente; del Vigésimo Distrito electoral del Distrito Federal.

3. Doctor Roberto Flores Granados, propietario, y C. P. Othón Neri Mosco, suplente; del Vigésimo Primer Distrito electoral del Distrito Federal.

4. Miguel Hernández Labastida, propietario, y José Ma. Martínez Hinojosa, suplente; del Vigésimo Segundo Distrito electoral del Distrito Federal.

5. Licenciado Miguel López González, propietario, y Teodoro Ortega García, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Puebla.

6. Doctor Guillermo Islas Olguín, propietario, y Luis Torres Delgado, suplente; del Décimo Noveno Distrito electoral del Distrito Federal.

7. Licenciado Juan Landerreche Obregón, propietario, y Román Rodríguez Sánchez, suplente; del Décimo Tercer Distrito electoral del Distrito Federal.

8. C. P. Magdaleno Gutiérrez Herrera, propietario, y Guillermo Eugenio López Lankenau, suplente; del Décimo Cuarto Distrito electoral del Distrito Federal.

9. Inocencio Sandoval Zavala, propietario, y Lorenzo Reynoso Ramírez, suplente; del Décimo Distrito electoral del Distrito Federal.

10. Licenciado Hiram Escudero Alvarez, propietario, y Alvaro Fernández de Ceballos Ramos, suplente; del Segundo Distrito electoral del Distrito Federal.

11. Profesor José Blas Briceño Rodríguez, propietario, y Adrián Ochoa Olvera, suplente; del Noveno Distrito electoral del Estado de México.

12. Alfonso Orozco Rosales, propietario, y Miguel Ángel Martínez Cruz, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Jalisco.

13. Licenciado Guillermo Ruiz Vázquez, propietario, e ingeniero Carlos Petersen Biester, suplente; del Tercer Distrito electoral del Estado de Jalisco.

14. Licenciado Bernardo Bátiz Vázquez, propietario, y Edmundo Lorenzo Rocha Rosales, suplente; del Décimo Sexto Distrito electoral del Distrito Federal.

15. Licenciado Guillermo Baeza Somellera, propietario, y Miguel Campos Martínez, suplente; del Cuarto Distrito electoral del Estado de Jalisco.

16. Licenciado Jorge Garabito Martínez, propietario, y Susana Herrasti y Ortiz de Montellano, suplente; del Primer Distrito Electoral del Distrito Federal.

17. Profesor Jesús Rojo Pérez, propietario, y R. Jorge Villa Roldán , suplente; del Vigésimo Cuarto Distrito electoral del Distrito Federal.

18. Ingeniero Ernesto Velasco Lafarga, propietario, y Eugenio Roldán Parrodi, suplente; del Décimo Séptimo Distrito electoral del Distrito Federal.

19. Juan Manuel López Sanabria, propietario, y José Ramírez Landeros, suplente; del Segundo Distrito electoral del Estado de Guanajuato.

20. Licenciado Francisco José Peniche Bolio, propietario, y Mario Sentíes Gutiérrez, suplente; del Séptimo Distrito electoral del Distrito Federal.

Por el Partido Popular Socialista:

1. Ingeniero Jorge Cruickshank García, propietario, y Eréndira Ramírez Martínez, suplente; del Tercer Distrito electoral del Distrito Federal.

2. Francisco Ortiz Mendoza, propietario, y Gabriela Guerrero Oliveros, suplente; del Séptimo distrito electoral del Distrito Federal.

3. Alejandro Gascón Mercado, propietario, y Raúl Rea Carbajal, suplente; del Primer Distrito Electoral del Estado de Nayarit.

4. Manuel Stephens García, propietario, y Florentino Islas, suplente; del Décimo Octavo Distrito electoral del Distrito Federal.

5. Maximiliano León Murillo, propietario, y Artemio Vargas Cruz, suplente; del Décimo Cuarto Distrito electoral del Distrito Federal.

6. Profesor Felipe Cerecedo López, propietario, y Delio C. Vite Vite, suplente; del Segundo Distrito Electoral del Estado de Veracruz.

7. Licenciado Francisco Hernández Juárez, propietario, y profesor Gilberto Velázquez Sánchez, suplente; del Primer Distrito Electoral del Estado de Oaxaca.

8. Profesor Simón Jiménez Cárdenas, propietario, y Raúl Osuna Burgueño, suplente; del Cuarto Distrito del Estado de Sinaloa.

9. Profesora Emilia Dorado Baltazar, propietario, y Magdaleno Romero Enríquez, suplente; del Tercer Distrito electoral del Estado de Jalisco.

10. Profesor Jesús Luján Gutiérrez, propietario, profesor Hildebrando Gaytán Márquez, suplente; del Primer Distrito electoral del Estado de Chihuahua.

Por el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana:

1. General Juan Barragán Rodríguez, propietario, y Adolfo Kunz Bolaños, suplente; del Primer Distrito electoral del Distrito Federal.

2. General Héctor Rentería Acosta, propietario, y doctor Jesús García Tapia, suplente del Primer Distrito electoral del Estado de Michoacán.

3. Laura Peraldi Ferriño. propietaria, y doctor José Fallat Badillo, suplente del Primer Distrito electoral del Estado de Coahuila.

4. Fortino Alejandro Garza Cárdenas, propietario, y Basilio Sánchez Garza, suplente del Quinto Distrito electoral del Estado de Nuevo León.

5. Roberto Herrera Giovanini, propietario, y Roberto Gómez Godínez, suplente del Cuarto Distrito electoral del Estado de Oaxaca.

Tercero: Notifíquese este dictamen en sus puntos resolutivos a los partidos políticos interesados, para los efectos del artículo 63 de la Constitución General de la República. (Aplausos.)

El C. secretario Orijel Salazar, Manuel: Señor Presidente: Agotados los asuntos en cartera.

Se va a dar lectura del Orden del Día de la próxima Junta Preparatoria.

"Décima Tercera Junta Preparatoria.

XLVIII Legislatura.

Orden del Día

De la próxima Junta Preparatoria.

Lectura del acta de la Junta Anterior.

Protesta constitucional de los ciudadanos diputados de la XLVIII Legislatura del H. Congreso de la Unión.

Elección de Presidente y Vicepresidente para el mes de septiembre y Secretarios y Prosecretarios para el primer año de ejercicio.

Declaratoria de estar legítimamente constituida la Cámara de Diputados.

Designación de las comisiones de cortesía."

El C. Presidente: Se levanta esta Junta Preparatoria, y se cita para la que tendrá lugar el próximo lunes 31 de agosto a las 10:00 horas.

TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA Y

"DIARIO DE LOS DEBATES"