Legislatura XLVIII - Año II - Período Comisión Permanente - Fecha 19720208 - Número de Diario 7
(L48A2PcpN007F19720208.xml)Núm. Diario:7ENCABEZADO
DIARIO DE LOS DEBATES
DE LA COMISIÓN PERMANENTE
DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS
XLVIII LEGISLATURA
Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921.
AÑO II México, D. F., Martes 8 de Febrero de 1972 TOMO II. - NUM. 7
"AÑO DE JUÁREZ"
SUMARIO
Orden del día
Se abre la sesión. Lectura del Orden del día.
Acta
Lectura y aprobación del Acta de la sesión anterior.
Invitaciones
Del Estado Mayor Presidencial, a la ceremonia que en homenaje a los capitanes Gustavo Garmendia y Federico Montes que salvaron la vida al Presidente Francisco I. Madero durante la Decena Trágica, que tendrá lugar el día 9 de los corrientes "Día de la Lealtad" en el Palacio Nacional. Se designa comisión.
Del Departamento del Distrito Federal, al acto que se llevará a cabo el día 14 de los corrientes en el Jardín de San Fernando, con motivo del CXLI aniversario luctuoso del General Vicente guerrero. Se designa comisión.
Informe
Rendido por la Secretaría sobre el estado que manifiesta el número de expedientes tramitados en el mes de enero anterior, por las comisiones de Trabajo de la Comisión Permanente. Insértese en el Diario de los Debates
OFICIO DE LA SECRETARIA DE GOBERNACIÓN
Hoja de servicios militares
Para los efectos de la fracción VII del artículo 79 constitucional, la Secretaría de Marina envía la hoja de servicios del general de brigada I. M. Adolfo Payán Cárdenas. Se turna a comisión
DICTÁMENES DE PRIMERA LECTURA
Reformas a los artículos 52, 54, 55 y 58 Constitucionales
Dictamen de la Comisión de Puntos Constitucionales, con proyecto de Declaratoria, por la que se reforman y adicionan los artículo 52, 54, fracciones I, II y III; 55, fracción II, y 58 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Primera lectura. Para hacer diversas consideraciones en torno al proyecto de Declaratoria y solicitar se dispense la segunda lectura del dictamen, hace uso de la palabra el C. senador Salvador Gámiz Fernández. Se dispensa la segunda lectura. Se aprueba el proyecto de Declaratoria. Pasa al Ejecutivo para sus efectos constitucionales. La Presidencia hace la Declaratoria correspondiente
Reforma a la fracción XII del Apartado A) del artículo 123 de la Constitución
La Comisión de Puntos Constitucionales suscribe un dictamen con proyecto de Declaratoria que reforma la fracción XII del Apartado A) del Artículo 123 de la Constitución Federal de la República. Primera lectura. Para referirse a la importancia de la reforma en cuestión y pedir se dispense la segunda lectura del dictamen, hace uso de la tribuna el C. diputado Juan Moisés Calleja García. Se dispensa la segunda lectura. Se aprueba el proyecto de declaratoria por unanimidad. Pasa al Ejecutivo para sus efectos constitucionales. La Presidencia hace la Declaratoria correspondiente
DICTÁMENES A DISCUSIÓN
Ratificación de grados militares
Cuatro dictámenes de la Comisión de la Defensa Nacional con puntos de Acuerdo, por los que se ratifican los grados militares que el C. Presidente de la República expidió en favor de los CC. generales: Justiniano González de la Lanza, Alberto Violante Pérez, Salvador del Toro Morán y Angel Rodríguez García. Se aprueban los puntos de Acuerdo. Comuníquese al Ejecutivo. Se levanta la sesión pública y se pasa a sesión secreta
DEBATE
PRESIDENCIA DEL C. DIPUTADO LUIS H. DUCOING
(asistencia de 24 ciudadanos legisladores.)
El C. Presidente (a las 11.50 horas): Se abre la sesión.
ORDEN DEL DÍA
- El C. secretario Flores Bernal, Raymundo:
"Comisión Permanente del H Congreso de la Unión. Segundo receso de la XLVIII Legislatura.
Orden del Día.
8 de febrero de 1972.
Invitación al acto que tendrá lugar el día 9 de los corrientes, en el que se conmemorará el LIX aniversario del Servicio de Escolta que los cadetes del H. Colegio Militar dieron al Presidente de la República, Francisco I. Madero. El Departamento del Distrito Federal invita al acto que tendrá lugar el 14 de los corrientes, en esta ciudad, con motivo del CXLI aniversario luctuoso del General Vicente Guerrero.
De conformidad con la fracción VI del artículo 25 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General, la Secretaría presenta el estado de expedientes tramitados en el mes de enero del presente año, por las Comisiones de Trabajo.
Oficio de la Secretaría de Gobernación
Para los efectos de la fracción VII, del artículo 79 constitucional, se comunica el acuerdo del C. Presidente de la República por el que se confiere al C. Adolfo Payán Cárdenas, el grado de general de brigada.
Dictámenes de primera lectura
Uno de la Comisión de Puntos Constitucionales con proyecto de Declaratoria que reforma los artículo 52, 54, fracciones I, II y III; 55, fracción II, y 58 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Uno de la Comisión de Puntos Constitucionales con proyecto de Declaratoria para reformar la fracción XII del Apartado A) del Artículo 123 constitucional.
Dictámenes a discusión
Cuatro de la Comisión de la Defensa Nacional con punto de acuerdo por los que se ratifican los grados militares a los siguientes ciudadanos: generales de división, Justiniano González de la Lanza, Alberto Violante Pérez, Salvador del Toro Morán y general brigadier Angel Rodríguez García.
Sesión secreta".
ACTA
- El mismo C. Secretario:
"Acta de la sesión efectuada por la Comisión Permanente del H. XLVIII Congreso de la Unión, el día primero de febrero de mil novecientos setenta y dos.
Presidencia del C. Diputado Luis H. Ducoing.
En la ciudad de México, a las once horas y cuarenta y cinco minutos del martes primero de febrero de mil novecientos setenta y dos, se abre la sesión con asistencia de veinte ciudadanos legisladores, según consta en la lista que previamente pasa la Secretaría.
Lectura del Orden del Día.
Sin discusión se aprueba el acta de la sesión anterior efectuada el día veinticinco de enero próximo pasado.
Se da cuenta de los documentos en cartera:
El C. Manuel A. Ravizé, Gobernador Constitucional del Estado de Tamaulipas, invita al acto que tendrá lugar el día cuatro del presente, en el cual rendirá el tercer informe de su gestión administrativa.
Se designa en comisión para llevar la representación de esta Comisión Permanente a ese acto a los CC. diputados Rafael Rodríguez Barrera y senador Florencio Salazar Martínez.
El Departamento del Distrito Federal por conducto de la Dirección General de Acción Cultural y Social, invita a la ceremonia conmemorativa que se efectuará el día cinco del actual, bajo la bóveda del Monumento a la Revolución, de esta Capital, con motivo del LV aniversario de la Promulgación de la Constitución Política de 1917.
Se nombra a la Comisión Permanente en Pleno para asistir a ese acto. Las Legislaturas de los Congresos de los Estados que a continuación se mencionan participan:
Aguascalientes, la clausura del primer período extraordinario de sesiones, correspondiente al primer año de ejercicio. De enterado.
Chiapas, la elección de Presidente y Vicepresidente de su Directiva. De enterado.
Hidalgo, la clausura del segundo período ordinario de sesiones, correspondiente al tercer año de ejercicio y la elección de su Diputación Permanente. De enterado.
Tabasco, la apertura del primer período ordinario de sesiones, correspondiente al segundo año de ejercicio y la integración de su Mesa Directiva. De enterado.
Zacatecas, la inauguración del primer período ordinario de sesiones y la elección de su Directiva. De enterado.
Para los efectos del artículo 135 Constitucional los Congresos de los Estados de Guerrero, Jalisco, Morelos, Puebla, Sonora, Tamaulipas, Tlaxcala y Veracruz, comunican haber aprobado las reformas de los artículos 52; 54, fracciones I, II y III; 55, fracción II y 58 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Recibo y a la Comisión que tiene antecedentes.
Los congresos de los Estados de Baja California, Guerrero, Jalisco, Nayarit, Puebla, Sonora, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas, informan haber aprobado la reforma a la fracción XII del Apartado A) del artículo 123 de la Constitución Federal de la República, para dar cumplimiento al artículo 135 de la propia Constitución, Recibo, y a la Comisión que tiene antecedentes.
El C. almirante Antonio J. Aznar Zetina, solicita el permiso constitucional necesario para que pueda aceptar y usar una condecoración que le confirió el Gobierno de la República de Venezuela. Recibo, y a la Comisión de Puntos Constitucionales.
Para los efectos de la fracción VII del artículo 79 de la Constitución política de los Estados Unidos Mexicanos, la Secretaría de la Defensa Nacional, envía por conducto de la de Gobernación, las hojas de servicios de los siguientes ciudadanos generales, Alberto Violante Pérez, Justiniano González de la Lanza, Salvador del Toro Morán y Angel Rodríguez García. Recibo, y a la Comisión de la Defensa Nacional.
Dictamen con proyecto de Decreto suscrito por la Comisión de Gobernación, por el que se concede permiso al C. licenciado Luis Echeverría Alvarez, Presidente de la República, para que pueda ausentarse del Territorio Nacional durante el próximo mes de marzo, para hacer una visita de Estado al Japón. Primera lectura.
Cinco dictámenes conteniendo puntos de Acuerdo, en virtud de los cuales se ratifican los grados militares a los siguientes ciudadanos: contralmirante Rodolfo Castro Alva, Generales Joaquín Azpiroz Viniegra, Antonio Federico Limón Jara, Augusto Monsalve Bravo y coronel Ricardo Silva Contreras. A discusión en su orden, sin que motiven debate, en votaciones económicas sucesivas se aprueban los puntos de Acuerdo. Comuníquese al Ejecutivo.
La Comisión de Puntos Constitucionales emite un dictamen con proyecto de Decreto, por el que se concede al C. doctor Luis Garibay Gutiérrez, el permiso constitucional necesario para que pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden Nacional del Cruzeiro do Sul en el grado de Comendador, que le otorgó el Gobierno de la República de Brasil. Segunda Lectura.
A discusión, sin ella, en votación nominal se aprueba el proyecto de Decreto por unanimidad de veinte votos, pasa al Ejecutivo para sus efectos constitucionales.
A las doce horas y cuarenta minutos se levanta la sesión y se cita para la que tendrá lugar el martes ocho del presente, a las once horas."
Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobada.
INVITACIONES
- El C. secretario Jiménez del Prado, Salvador:
"El Estado Mayor Presidencial tiene el honor de invitar a usted a la ceremonia que en homenaje a los capitanes Gustavo Garmendia y Federico Montes, quienes salvaron la vida del Presidente Francisco I. Madero durante los sucesos de la Decena Trágica, tendrá lugar en el Patio de Honor del Palacio Nacional a las 11:00 horas del día 9 de los corrientes. "Día de la Lealtad".
Febrero de 1972."
El C. Presidente: Para asistir a este acto encabezados por esta Presidencia, se designan a los siguientes ciudadanos legisladores: senador Juan Sabines Gutiérrez y diputados Manuel Origel Salazar.
- El mismo C. Secretario:
"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Poder Ejecutivo Federal. - México, D. F. - Departamento del Distrito Federal.
México, D. F., a 7 de febrero de 1972.
Año de Juárez.
C. diputado, licenciado Luis H. Ducoing. G. Presidente de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión. - Donceles y Allende. - Presente.
El Departamento del Distrito Federal, por conducto de esta Dirección, invita a usted al acto que tendrá lugar el lunes 14 del actual, a las 10:30 horas, con motivo del CXLI Aniversario luctuoso del Benemérito, General Vicente Guerrero, frente a la estatua erigida a su memoria, en el Jardín de San Fernando de esta Capital.
Al mismo tiempo, me permito rogarle tenga a bien dictar sus respetables instrucciones, con objeto de que una comisión que representa a esa Comisión Permanente a su digno cargo, asista al acto de referencia y haga el depósito de una ofrenda floral.
Reitero a usted, con mi reconocimiento, mi atenta y distinguida consideración.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
El Director General. - Doctor José Rivas Guzmán."
El C. Presidente: Para asistir a este acto encabezados por esta Presidencia, se designan a los siguientes ciudadanos legisladores: diputados José Luis Alonso Sandoval y senador Benito Bernal Miranda.
INFORME
- El C. secretario Jiménez del Prado, Salvador:
"De acuerdo con la fracción VI del artículo 25 del reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General, la Secretaría presenta el estado que manifiesta el número de expedientes tramitados en el mes de enero de 1972, por las Comisiones de Trabajo de la Comisión Permanente.
Dar doble click con el ratón para ver imagen
México, D. F., a 31 de enero de 1972. - Salvador Jiménez del Prado, S.S. - Raymundo Flores Bernal, D. S."
- Trámite: Insértese en el Diario de los Debates.
OFICIO DE LA SECRETARIA DE
GOBERNACIÓN
Hoja de servicios militares
- El mismo C. Secretario:
"Escudo Nacional. - Estados Unidos Mexicanos. - Poder Ejecutivo Federal. - México. D.F. - Secretaría de Gobernación.
CC. Secretario de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión. - Presente.
En oficio fechado el 25 de enero próximo pasado, la Secretaría de Marina manifiesta a esta de Gobernación, lo siguiente:
"Adjunto al presente, me es grato remitir a usted, la hoja de tiempo de servicios del C. general de brigada I. M. Adolfo Payán Cárdenas, a fin de que por su amable conducto sea puesta a la consideración de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión para la ratificación del grado que actualmente ostenta. Se adjunta también copia certificada del Acuerdo Presidencial donde se dispone el ascenso, así como antecedentes militares y datos complementarios. Mereciendo a usted que una vez finiquitado lo conducente sea devuelta la documentación a esta Comandancia General de la Armada para continuar su trámite legal.
Lo que transcribo a ustedes para su conocimiento y fines procedentes, enviándoles con el presente la hoja de servicios que se menciona.
Reitero a ustedes en esta oportunidad las seguridades de mi consideración distinguida.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
México, D. F., a 2 de febrero de 1972.
Año de Juárez.
El Secretario, licenciado Mario Moya Palencia."
- Trámite: Recibo, y a la Comisión de la Defensa Nacional.
DICTÁMENES DE PRIMERA LECTURA
Reformas a los Artículo 52, 54, 55 y 58 Constitucionales
- El mismo C. Secretario:
"Comisión de Puntos Constitucionales.
Honorable Asamblea:
Por acuerdo de vuestra soberanía fue turnado a la Comisión de Puntos Constitucionales que suscribe, para su estudio y dictamen, el expediente que contiene los dictámenes aprobatorios de los Congresos de los diversos Estados de la Federación, para reformar y adicionar los artículos 52, 54, fracciones I, II y III; 55, fracción II, y 58 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, relativos al número de habitantes por los que se elegirá un diputado federal, al porcentaje necesario de la votación total para acreditar Diputados de Partido, así como al número máximo de éstos, y a la edad mínima requerida para ser elegido diputado o senador, respectivamente.
La iniciativa de reformas y adiciones a los mencionados artículos fue enviada por el titular del Poder Ejecutivo de la Unión a la Cámara de Diputados el día once de noviembre de 1971; dicho cuerpo colegiado la aprobó por unanimidad de votos, y remitió al Senado de la República la minuta conteniendo el proyecto de Decreto respectivo, mismo que fue aprobado por esta última Cámara también por unanimidad, la que turnó el expediente en cuestión a los Congresos de los Estados de la Unión, para los efectos del artículo 135 Constitucional.
A la fecha, la reforma materia de este dictamen, independientemente de haber sido aprobada por el H. Congreso de la Unión, lo fue también por todos los Congresos de los Estados que componen la Federación.
La Comisión que suscribe considera que han sido satisfechos los extremos del artículo 135 de la Constitución Federal, dado que la Iniciativa del Ejecutivo fue aprobada por el Congreso de la Unión y por todos los congresos de los Estados, por lo que se permite someter a la consideración de esta Honorable Asamblea el
siguiente proyecto de Declaratoria de reforma y adiciones a los artículos 52, 54, fracciones I, II y III; 55 fracción II y 58 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
La Comisión Permanente del Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, en uso de la facultad que le confiere el último párrafo del artículo 135 de la Constitución General de la República y previa aprobación del Congreso de la Unión y de la totalidad de los congresos de los Estados, declara:
Artículo único. Se reforman y adicionan los artículos 52, 54, fracciones I, II y III; 55, fracción II; y 58 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, para quedar como sigue:
Artículo 52. Se eligirá un diputado propietario por cada doscientos cincuenta mil habitantes o por una fracción que pase de ciento veinticinco mil; teniendo en cuenta el censo general del Distrito Federal y el de cada Estado y Territorio; pero en ningún caso la representación de un Estado será menor de dos diputados, y la de un Territorio, cuya población fuese menor de la fijada en este artículo, será de un diputado propietario.
Artículo 54. La elección de diputados será directa, con sujeción a lo dispuesto en el artículo 52 y se complementará, además, con diputados de partido, apegándose, en ambos casos, a lo que disponga la Ley Electoral y, en el segundo, a las reglas siguientes:
I. Todo Partido Nacional al obtener el uno y medio por ciento de la votación total en el país, en la elección de diputados respectiva, tendrá derecho a que se acrediten, de sus candidatos, a cinco diputados, y a uno más hasta veinticinco como máximo, por cada medio por ciento más de los votos obtenidos;
II. Si logra la mayoría de veinticinco o más distritos electorales, no tendrá derecho a que le sean acreditados diputados de partido, pero si triunfa en menor número, siempre que llene los requisitos señalados en la fracción anterior, tendrá derecho a que le sean reconocidos hasta veinticinco diputados, sumando los electos por mayoría y por razón de porcentaje;
III. Los diputados de partido serán acreditados por riguroso orden, de acuerdo con el número decreciente de sufragios que hayan logrado en relación a los demás candidatos del mismo partido en todo el país;
IV.....
V.....
Artículo 55. Para ser diputado se requieren los siguientes requisitos:
I.....
II. Tener veintiún años cumplidos al día de la elección;
III.....
IV.....
V.....
VI.....
VII.....
Artículo 58. Para ser senador se requieren los mismos requisitos que para ser diputado, excepto el de la edad, que será de treinta años cumplidos al día de la elección.
Transitorio. Las presentes reformas y adiciones entrarán en vigor cinco días después de su publicación en el Diario Oficial de la Federación.
Sala de Comisiones de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 7 de febrero de 1972.
Año de Juárez.
Diputado Rafael Rodríguez Barrera. - Senador Ignacio Maciel Salcedo. - Diputado José Luis Alonzo Sandoval. - Senador Raúl Lozano Ramírez."
- Trámite: Primera Lectura.
El C. Gámiz Fernández, Salvador: Señor Presidente, pido la palabra.
El C. Presidente: ¿Con qué objeto?
El C. Gámiz Fernández, Salvador: Para hacer consideraciones en torno al proyecto.
El C. Presidente: Tiene la palabra el C. Salvador Gámiz Fernández.
El C. Gámiz Fernández, Salvador: Señor Presidente, honorables integrantes de la Comisión Permanente:
Acabamos de escuchar el dictamen que propone la vigencia de las Reformas a los artículos 52, 54, 55 y 58 de la Constitución Política de la República.
Esta consulta, realizada en plano nacional, ha dado como resultado un criterio unánime de todas las legislaturas del país, y este hecho es de gran importancia porque se cumple así el mandato soberano del Pacto Federal y además vuelve a unificarse el concepto político de la República; porque el Estado es un último análisis la concentración del hecho democrático y la democracia es la expresión del sentimiento político nacional a través de la cual se conjuga el espíritu de la soberanía - desde luego hablamos de las democracias en donde impera el criterio de las mayorías - , y ya hemos dicho que la existencia de las mayorías implica por lógica la existencia de las minorías y que desde el punto de vista estrictamente humano no puede ser igual el concepto de la democracia que sostiene un grupo minoritario al que, lógicamente, sostiene un grupo mayoritario. Para la minoría el triunfo de las mayorías nunca será necesariamente reconocible; en cambio, para las mayorías siempre será necesario reconocer la presencia de las minorías. Las reformas constitucionales que deben aprobarse hoy en definitiva y tomar vigencia no son a mi juicio, simples ordenamientos de carácter legal, para mi estas reformas generan una profunda responsabilidad de carácter político y de carácter histórico; desarrollan responsabilidad para los funcionarios públicos porque ellos son los encargados de ejecutar el mandato del pueblo. Desarrollan la responsabilidad de cumplir limpiamente con los ordenamientos populares y obligan al funcionario en cualquier proyección, a observar una conducta más limpia, más ejecutiva, más honesta porque si este funcionario representa un gobierno electo por las mayorías, ahora su conducta ejemplar
tendrá que ser premisa fundamental para conservar en las futuras lides electorales estas mayorías en el poder. Las reformas constitucionales repercuten en la vida interna de todos los partidos nacionales e incluso de todos los partidos pequeños o de los grupos que actúan en algunas regiones de México como partidos, no sólo porque van a contar con un mayor número de diputados los partidos minoritarios, sino porque estos partidos tienen que trabajar ahora mucho más para poder adquirir una mayor votación por lógica, pero obliga a estos partidos minoritarios también a fortalecer su estructura interna, a modelar mejor sus programas, sus principios, y a medir su expresión con mayor honestidad frente al pueblo. Tendrán que ir - los partidos minoritarios - al pueblo con una nueva orientación, con un nuevo propósito; tendrán que presentar hombres más limpios, más decididos a la lucha, con un conocimiento más cabal del proceso histórico de su país, con un concepto más equilibrado de las fuerzas nacionales que imprimen una conducta a la nación.
Pero así como generan una responsabilidad mayor los partidos minoritarios, también para el partido del poder genera responsabilidad. En primer lugar, porque todos estamos de acuerdo en que la autoridad moral de un partido no sólo se adquiere por estar en el poder, porque el poder por sí mismo no da autoridad. Es la práctica, es el método de ejecutar el poder, de aplicarlo, lo que da la autoridad, porque cuando el poder se ejerce correctamente, el pueblo apoya al poder. Cuando se ejerce injustamente es un motivo de irritación contra el poder mismo. El partido en el poder tiene la necesidad de acrecentar su trabajo de difusión ideológica; tiene la urgencia de recapacitar y capacitar aún más sus cuadros de trabajo, de elevar a su máxima expresión su programa, sus principios, y convencer ahora a las nuevas generaciones a quienes el poder público les abre el porvenir, para intervenir en el desarrollo democrático del país, tiene que llevar sus programas con más claridad, con más efectividad y más permanencia. Debe ser un partido que impulse cambios profundos en la vida nacional. Los hombres que integren el poder y que pertenecemos al partido mayoritario, tenemos la obligación de ser más francos y más abiertos en la manifestación de nuestras ideas, evitar cualquier deformación de los principios de la Revolución Mexicana, definir más todavía, con precisión, la presencia del sector revolucionario en el seno del aparato gubernamental. Porque si bien es cierto que estas reformas serían inoperantes si son más aprovechadas por los enemigos de la Revolución que el mismo partido en el poder, que sostiene los principios de la Revolución.
Ahora los hombres cultos, los intelectuales, los académicos que actúan en el seno del poder y fuera del poder, pero que aceptan los principios de la Revolución Mexicana, tienen que aceptar con mayor decisión la relación de ellos con la clase trabajadora, con los campesinos y con los obreros. El derecho de haber adquirido cultura o, mejor dicho, el privilegio de haberla adquirido, debe ahora traducirse en una actividad al lado de su pueblo. Los intelectuales revolucionarios no pueden ser hombres de bufete, no pueden ser hombres de crítica negativa constante; el intelectual revolucionario, para mantener ese papel, esa distinción, necesita actuar estrechamente ligado a los trabajadores, a su pueblo, para que asimismo beba de el las mejores experiencias, las mejores emociones y pueda seguir siendo un intelectual revolucionario.
La Revolución Mexicana necesita de los intelectuales, de su limpieza, de su capacidad, de su cultura; pero también necesita de su amor al pueblo, que es, en último análisis, el pilar fundamental de la Revolución.
La reforma política que hoy comentamos es una reforma que se une a todo el proceso de cambios que está inspirando el actual gobierno de la República; forma parte de transformaciones substanciales, recoge los frutos de los hombres que hicieron la Revolución. Porque también en el Congreso Constituyente de 1917 los jóvenes estuvieron presentes y opinaron - ya como legisladores - demostrando un conocimiento muy profundo de la historia del presente y del futuro de su país.
La reforma política que hoy se ha de aprobar en definitiva, se une o es más bien una necesidad inaplazable frente a las reformas en materia agraria en materia educativa, en materia administrativa. En materia agraria porque independientemente de los éxitos de la Reforma Agraria, particularmente en la época del general Cárdenas, independientemente de los defectos que haya tenido la Reforma Agraria, ha sido y sigue siendo la base substancial del desarrollo económico en el campo y en el país.
Y no podemos admitir, a pesar de los errores, a pesar de los retrasos, no podemos admitir que la Reforma Agraria haya fracasado en el país. La Reforma Agraria es pujante, ha sacado de la miseria a millones de mexicanos, ha sido la base para extender la cultura y para transformar miles de ejidos y para dar de comer a millones de mexicanos; la Reforma Educativa es una reforma que trata de remodelar los conocimientos del mexicano para estructurar un nuevo país; la Reforma Educativa es consubstancial a la Reforma Política, porque con la Reforma Educativa el Gobierno de la República busca impulsar el desarrollo nacional, busca capacitar a la juventud en el aprovechamiento más urgente y más rápido de los recursos del suelo y del subsuelo para transformarlos como satisfactores del hombre; la Reforma Administrativa es un imperativo, porque a través de ella se busca aprovechar mejor los recursos estatales, no solamente de carácter económico, sino también de carácter humano; busca la Reforma Administrativa, eliminar obstáculos en la solución de los problemas de nuestro pueblo; y, finalmente, la Reforma del Pensamiento del mexicano; aquello que se ha dado en llamar el cambio de
estructuras mentales, es decir, el cambio de actitud del mexicano frente a sus problemas cotidianos, frente a las demandas que presenta, ante la urgencia y celeridad de los trámites en todas las gestiones de sus problemas; el cambio de estructura del mexicano, para que abandone esa etapa tradicionalista del conformismo, del silencio, de la apatía y muchas veces de la frustración; el cambio de estructura de pensamiento para no dejar las cosas de por sí, pensando que fatalmente así deban ser, porque la transformación del país está sujeta a la acción evidente de todos los mexicanos, y la Reforma Política constituye un todo. Con estas reformas sustanciales del actual régimen de la Revolución, precisamente la Reforma Política, abre el campo al desarrollo de la democracia, dan la libertad, no sólo para censurar, sino también para participar en todo el resto de las reformas que hemos comentado.
La Reforma Política, de carácter democrático, es un dique, es un obstáculo fundamental a los mecanismos de violencia que se han pretendido desarrollar en el país, porque no es posible que el pueblo mexicano olvide la experiencia desde 1910 hasta la fecha en las luchas fratricidas, en las luchas tan tremendas que se libraron en los campos de batallas; luchas entonces originariamente muy positivas, porque nuestro pueblo no tenía otro mecanismo de hacerse entender que no fuera el de las armas, porque la dictadura porfirista había abatido casi todas las posibilidades de expresión del pensamiento, y fueron las armas las únicas que pudieron abatir a la dictadura desde el punto de vista político, pero después del triunfo de la Revolución de 1910, han sido las armas del pensamiento, han sido las armas de la discusión, de la razón y del entendimiento las que han propiciado las bases fundamentales para el México de hoy, y sería un absurdo, es una irresponsabilidad de cualquier sector, pretender que un debate nacional en torno a los problemas populares del presente y del futuro tuviese como base el uso de las armas, porque esto originaría solamente el derramamiento de sangre de gentes inocentes detrás de lo cual seguramente se manejarían intereses ajenos a las propias víctimas. El pueblo de México no puede aceptar discutir sus problemas sobre alfombras teñidas de sangre de sus hermanos mexicanos. Ciertamente la lucha armada es un método activo, pero es un método contra las dictaduras, es un método contra la injusticia brutal, es un método que probablemente todavía en algunas zonas muy atrasadas de nuestra propia patria pudiera llevarse a efecto, pero no es el método sustancial para resolver los problemas de la actualidad. La coincidencia de ideales, la conciencia de pensamiento no puede llevar a cada grupo a exigir que se le considera siempre como el mejor desde el punto de vista del abanderamiento de sus principios. Todos los mexicanos tenemos coincidencias fundamentales; todos pregonamos y queremos la cabal independencia económica del país; todos queremos la plena realización de los postulados democráticos en la distribución de la tierra, en el proceso de la industrialización; todos queremos que México se industrialice sobre bases de equidad y de justicia y que el proceso industrial del país no recaiga esencialmente sobre las espaldas de aquellos hombres que carecen de elementos sustanciales para su vida. Aun los sectores privados más retrasados tienen necesidad de que el país sea un país libre e independiente; aun ellos tienen la urgencia de que se abran los canales de transformación en la explotación de los recursos de la naturaleza a lo largo de toda la República, porque si eso no se opera, sus capitales quedarán inactivos y serán pasto de la intervención de capitales extranjeros.
¿Cuál necesidad pues, existe en un proceso nacional tan profundamente democrático como en que está labrando hoy el gobierno actual? ¿Cuál necesidad existe, repito, para hacer uso de la violencia armada y derramar inútilmente la sangre de los mexicanos? Ciertamente nuestra Revolución conquistó el poder por medio de las armas y sin duda alguna la Revolución está dispuesta a mantenerse en el poder por cualquier camino, incluso si sus enemigos llegaran a tomar fuerza incongruente con el proceso histórico, el poder revolucionario tendrá el derecho también de hacer uso de las armas; pero la democracia actual obliga al poder a llevar hasta sus últimas consecuencias los métodos pacíficos, los métodos de la persuasión, los métodos del trabajo político, y de ahí la importancia de ampliar la posibilidad de expresión de pensamiento de todos los mexicanos.
Con la reforma política que hoy veremos aprobada, la Revolución Mexicana crea nuevos aparatos; abre el camino para nuevos agrupamientos políticos. Quienes han confundido el desarrollo de nuestro proceso político, lo han hecho conscientemente, porque pretenden oscurecer la brillantez de una posición francamente popular de nuestro gobierno. La Reforma Política no es una dádiva a las nuevas generaciones. La Reforma Política crea una obligación histórica concreta por primera vez en nuestro desarrollo a los jóvenes desde los 21 años. Porque independientemente de que estamos pregonando un diálogo constante con todos los sectores del país, y especialmente con los Jóvenes, el poder público, el Congreso de la Unión, está perfectamente consciente de que la juventud de México no es un simple proceso biológico. México es un país joven. Sus cuadros políticos, administrativos, ejecutivos, son substancialmente jóvenes. ¿Cuántos años hace apenas que hemos logrado nuestra independencia? ¿Cuantos años apenas hace de la reforma juarista, y apenas ayer, la Revolución de 1910, nos abrió el cauce de nuestro desarrollo político, económico y social?
Somos un país joven, que lucha todavía por su integración como nación; somos un país que está buscando la unidad de raza, la unidad de lengua y somos un país que lucha todavía con grandes dificultades por su plena independencia económica y política en forma absoluta.
Los jóvenes de hoy, por tanto, adquieren una obligación extraordinaria para el presente y para el futuro. ¿Cuáles son, a mi juicio, las obligaciones que adquieren con esta reforma política?
En primer lugar nuestros jóvenes deben ser plenamente jóvenes, ejerciendo a través de esta reforma sus facultades físicas e intelectuales en el seno de la población, en el seno de la comunidad donde nacieron.
En segundo lugar la juventud mexicana tiene que combinar el romanticismo que le caracteriza, hechos de esperanza, con la posibilidad real de cristalizar sus ambiciones concretas. El joven debe tomar conciencia de que es un miembro de la comunidad con igual responsabilidad que un adulto y por lo tanto, no puede conformarse con situaciones de limitación de su existencia de sus recursos, ni en el seno de su familia, ni el seno de su comunidad, ni el país.
La primera obligación que se genera para los jóvenes, a través de esta reforma, es la de conocer a su país; es la de conocer su geografía, sus costumbres, sus riquezas, sus pobrezas; empaparse de la verdadera realidad que vive su patria y soñar siempre con una patria plena de justicia social. Si el movimiento juvenil no conoce su patria, no conoce sus posibilidades, ¿cómo puede llegar un joven a formar parte del Congreso de la Unión en donde se debaten substancialmente las bases jurídicas para integrar a su propio país?
Para mi la segunda obligación histórica de la juventud es adentrarse en el origen histórico de su país, conocer a fondo realmente cuáles son las contradicciones, los grupos, las tendencias, que tradicionalmente han venido disputándose la rectoría de la nación. Tienen la obligación de examinar el origen de nuestra cultura, lo complejo de nuestras costumbres, las características, propias del mexicano y conocer a fondo las ambiciones de los hombres pobres y de los hombres ricos. Y estas dos cualidades que se dicen tan fácil, a veces no se conocen ni se perciben durante todo el proceso de una vida.
Por eso los jóvenes al recibir la posibilidad de figurar en la Cámara de Diputados a los 21 años, y en la Cámara de Senadores a los 30 años, deben llegar a estos Cuerpos Colegiados perfectamente capacitados para entender lo que es su país; ¿qué queremos hacer de este país? ¿Qué quiso hacer Benito Juárez de este país, cuando hizo a un lado al poder eclesiástico e impuso la voluntad del pueblo para que fuera el pueblo el que dirigiera sus propios destinos? ¿Qué quiso hacer Francisco I. Madero? ¿Por qué Emiliano Zapata se fue a la lucha al campo? Y, ¿por qué Francisco Villa tomó las armas para derrotar al ejército de la traición? Debe entenderse por qué se ha transformado el Estado Mexicano en un intervencionista conductor de nuestra riqueza; por qué la Constitución Política ha puesto al servicio de la Nación las riquezas del suelo y del subsuelo, porque la Revolución Mexicana es un movimiento que ha hecho posible que sea el propio pueblo el que comande a su propia Revolución; y los jóvenes de México no pueden de ninguna manera dejarse arrastrar por corrientes confusionistas de la historia, ni por gritos ni alardes alejados de nuestra realidad para que puedan convertirse en verdaderos constructores de una patria nueva, porque los esfuerzos de nuestros héroes han sido extraordinarios para darnos precisamente esta patria; y porque nosotros estamos trabajando con tesón para construir nuevas posibilidades de desarrollo que ellos van a recibir en sus manos y que vienen ahora a escudriñar el presente, el pasado y el futuro de su patria; por eso, para mí, la juventud mexicana con esta reforma adquiere su mejor obligación ante la historia y ante el futuro de su patria; por ello debe la juventud tener un gran cuidado con los planteamientos de aquellos que falsean la historia y que falsean la realidad. Deben cuidarse de la influencia de los grupos impacientes que tratan de transformar la vida de manera inmediata sin tomar en cuenta los factores históricos del desarrollo social del país y de la humanidad.
Ahora la juventud tendrá que seleccionar perfectamente bien sus partidos; tendrá que entender que el partido que dirige hoy la Revolución Mexicana ha sido congruente con el desarrollo, ha sido congruente con las luchas del pueblo y que representa hoy el frente más amplio que jamás haya existido en la historia de México para garantizar el desarrollo de México, como un país independiente, y que este partido, que se funda precisamente en la lucha por el mejoramiento de las condiciones materiales, cívicas y morales de nuestro pueblo.
Para quienes hoy están pregonando cambios violentos, para los que son inquietos ante la historia, para aquellos que se han convertido en francotiradores de la Revolución Mexicana y buscan herirla desde lejos, buscan debilitarla desde otros agrupamientos ajenos al proceso histórico del país, para aquellos que no han sabido aquilatar la disciplina histórica, la disciplina política del devenir del tiempo, la reforma que hoy ha de consumarse, es una reforma que debe preocuparles porque nosotros tenemos la seguridad de que los jóvenes de hoy no se dejarán arrastrar por caminos ajenos a los intereses nacionales, no se dejarán arrastrar por los caminos de la violencia, de la confusión y del odio, porque ahora tienen el instrumento político en sus manos, ahora pueden ingresar a los partidos político - democráticos nacionales que mejor garanticen sus aspiraciones y sus anhelos. Hay quienes en el movimiento revolucionario pregonan cambios violentos, aparentemente justos. Hay quienes se aprovechan de la inercia que caracteriza hoy a grandes sectores de nuestra población joven y buscan aislarla de los fenómenos de la historia. Los jóvenes de México saben muy bien que para poder entender el presente necesitan entender el pasado de su patria y que para poder añorar un porvenir feliz se
necesita, indiscutiblemente, no sólo entender el presente.
por eso, en esta ocasión, la Revolución Mexicana entrega un instrumento político substancial a las nuevas generaciones, un instrumento que viene a recoger este gran proceso de transformación social, que ha recibido México bajo la éjida de nuestra Revolución desde 1910. Porque ahora el joven de México no es una entelequia, no es un instrumento al que se le arrastra a cualquier corriente. El joven de México es una entidad responsable tanto de sus actos, de su existencia, de sus propósitos, como de su futuro. Por eso la Revolución Mexicana, sin temor de ninguna naturaleza, les otorga hoy un instrumento extraordinariamente importante para que se incorporen con plena responsabilidad a luchar por el apoyo del pueblo; a luchar por la mayoría de votos, a la lucha por incorporarse al seno de los Partidos políticos. Ofrece un mosaico nacional en donde los jóvenes pueden escoger a su gusto, a sus aspiraciones, a sus necesidades, el mejor frente patriótico para entonces poder llegar al Congreso de la Unión a levantar, como jóvenes, las mejores banderas de su pueblo.
Por eso la Reforma que el señor Presidente de la República, licenciado Luis Echeverría, ha promovido ante el Congreso de la Unión, una reforma histórica, es una reforma que hace al Poder Legislativo más joven, que lo revitaliza, que lo hará volver también al cauce de las discusiones más apasionadas, más congruentes con la realidad. La reforma que el Presidente de la República mandó al Congreso de la Unión, abre la juventud un cauce de gran participación en la construcción de su país, y ya no podemos decir que la juventud, en el seno de la Revolución, es un mero romance, porque ahora será un partícipe directo, corresponsable con los hombres maduros del proceso de la conducción de la patria, de la conducción de la Revolución y en la construcción de un México nuevo.
Al concluir la aprobación por todas las honorables legislaturas locales de la Iniciativa del señor Presidente Echeverría aprobada por el Congreso de la Unión, al concluir su aprobación definitiva, yo pienso que se abren nuevos cauces a la vida política de México y que dentro de estos cauces todos los hombres pueden incorporar, que el camino pacífico de la Revolución para transformar este país en un país nuevo está al alcance de todos los mexicanos y que hoy el pueblo de México sabrá aquilatar dónde están sus enemigos, sabrá indicar severamente quiénes son los que han obstruido su desarrollo. Porque la Revolución Mexicana, bajo la éjida y la dirección del Presidente Echeverría, ha tenido una nueva alfombra que hay que pisar con orgullo y que hay que enseñarle a nuestros hijos a utilizarla, porque esta alfombra política abre el cauce para la integración definitiva de un país nuevo, porque ahora los jóvenes no solamente podrán incorporarse a la ciencia y engrosar las grandes aulas que la Revolución Mexicana ha creado para su enseñanza y para su educación: ahora en este anchuroso mar de la vida política nacional, el joven se convierte en un pilar sustancial de nuestra Revolución, y por eso, la Revolución Mexicana seguirá siendo invencible, seguirá siendo siempre joven, y con la participación de la juventud en las lides políticas en el Congreso de la Unión, la Revolución tiene asegurada su presencia en el poder por muchos años más y creo que será invencible y que los enemigos de ella, se toparán siempre con la sangre nueva de la juventud que habrá de incorporarse definitivamente al gran proceso histórico de conformación del país. Por todas estas razones, señores integrantes de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, quiero rogar tengan ustedes a bien dispensar el trámite de segunda lectura y aprobar unánimemente el dictamen que se nos ha presentado, con la seguridad de que esta Comisión Permanente, interpretando fielmente la responsabilidad del Congreso de la Unión, ofrece al pueblo de México una nueva perspectiva, abre la incorporación definitiva del pensamiento joven, de los hombres que ayer fueron el ejército que hicieron posible el triunfo de Hidalgo y de Morelos; de los hombres que ayer con un entusiasmo inusitado hicieron posible el triunfo de Benito Juárez; y de los hombres que en la Revolución Mexicana, con las armas en la mano, y con el corazón en la mano, supieron darnos una patria en la que hoy nosotros vivimos orgullosos pero inquietamente activos para hacer de esta patria una patria más nueva, aún más vigorosa, más sensiblemente emocional para que nuestros hijos redoblen sus esfuerzos e impidan que los enemigos de la Revolución lleguen al poder. Muchas gracias. (Aplausos.)
El C. Presidente: En atención a lo manifestado en su intervención por el C. senador Salvador Gámiz Fernández, y en virtud de que las reformas constitucionales de que se trata fueron discutidas y aprobadas por los miembros del honorable Congreso de la Unión, durante el último período ordinario de sesiones, esta Presidencia pide a la Secretaría consulte a la Asamblea, si se considera el asunto de urgente resolución y se dispensan los trámites.
El C. secretario Jiménez del Prado, Salvador: Por disposición de la Presidencia, se pregunta a la Asamblea si se dispensan los trámites y se pone a discusión de inmediato el proyecto de Declaratoria. Los que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo. Se dispensan los trámites. En consecuencia, está a discusión el proyecto de Declaratoria. No habiendo quien haga uso de la palabra, se va a recoger la votación nominal. Por la afirmativa.
El C. secretario Flores Bernal, Raymundo: Por la negativa. (Votación.)
El C. secretario Jiménez del Prado, Salvador: ¿Falta algún ciudadano legislador de votar por la afirmativa?
El C. secretario Flores Bernal, Raymundo: ¿Falta algún ciudadano legislador de votar por la negativa?
Se va a proceder a recoger la votación de la Mesa Directiva. (Votación.)
El C. secretario Jiménez del Prado, Salvador: Aprobado el proyecto de Declaratoria por unanimidad de 25 votos. Pasa al Ejecutivo para sus efectos constitucionales (Aplausos.)
El C. Presidente: Se declaran reformados los artículos 52, 54, fracciones I, II Y III; 55, fracción II y 58 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Reforma a la Fracción XII del Apartado A) del Artículo 123 Constitucional
- El C. secretario Flores Bernal, Raymundo:
"Comisión de Puntos Constitucionales.
Honorable Asamblea:
Ha sido turnado a esta Comisión de Puntos Constitucionales, para su estudio y dictamen, el expediente relativo al proceso legislativo de reformas a la fracción XII del Apartado A del artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
La Iniciativa de reformas, materia de este dictamen fue enviada por el C. Presidente de la República a la Cámara de Diputados el día veinticuatro de Diciembre del año próximo pasado, misma que la aprobó por unanimidad de votos, remitiendo a la Cámara de Senadores la minuta con el Proyecto respectivo del Decreto para los efectos constitucionales; este cuerpo colegiado lo aprobó también por unanimidad de votos, enviando el expediente respectivo a los Congresos de los Estados, conforme al procesamiento que señala el artículo 135 Constitucional.
A la fecha de este dictamen, se encuentran en el expediente relativo las aprobaciones de todos los Congresos de los Estados que integran la Federación.
Por lo expuesto, la Comisión que suscribe considera que se han cubierto los requisitos que expresa el artículo 135 constitucional para reformar el Ordenamiento supremo, ya que independientemente de la aprobación del H. Congreso de la Unión, la Iniciativa fue aprobada también por los Congresos de los Estados.
Por ello nos permitimos someter a la consideración de esta H. Asamblea el siguiente proyecto de Declaratoria de reforma a la fracción XII del Apartado A del artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos: La Comisión Permanente del Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, en uso de la facultad que le confiere el artículo 135 de la Constitución General de la República y previa aprobación del Congreso de la Unión y de la totalidad de los Congresos de los Estados, declara:
Artículo único. Se reforma la fracción XII del apartado A del artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, para quedar como sigue:
XII. Toda empresa agrícola, industrial, minera o de cualquier otra clase de trabajo, estará obligada, según lo determinen las leyes reglamentarias a proporcionar a los trabajadores, habitaciones cómodas e higiénicas. Esta obligación se cumplirá mediante las aportaciones que las empresas hagan a un fondo nacional de la vivienda a fin de constituir depósitos en favor de sus trabajadores y establecer un sistema de financiamiento que permita otorgar a éstos crédito barato y suficiente para que adquieran en propiedad tales habitaciones.
Se considera de utilidad social la expedición de una ley para la creación de un organismo integrado por representantes del Gobierno Federal, de los trabajadores y de los patrones, que administre los recursos del fondo nacional de la vivienda. Dicha ley regulará las formas y procedimientos conforme a los cuales los trabajadores podrán adquirir en propiedad las habitaciones antes mencionadas.
Las negociaciones a que se refiere el párrafo primero de esta fracción, situadas fuera de las poblaciones, están obligadas a establecer escuelas, enfermerías y demás servicios necesarios a la comunidad.
Transitorio:
Único. La presente reforma entrará en vigor quince días después de su publicación en el Diario Oficial de la Federación.
Sala de Comisiones de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 7 de febrero de 1972.
Año de Juárez.
Diputado Rafael Rodríguez Barrera. - Senador Ignacio Maciel Salcedo. - Diputado José Luis Alonzo Sandoval. - Senador Raúl Lozano Ramírez."
Primera lectura.
El C. Juan Moisés Calleja (desde su curul): pido la palabra.
El C. Presidente: ¿Con qué objeto?
El C. Juan Moisés Calleja: Para consideraciones.
El C. Presidente: Tiene la palabra el C. diputado Juan Moisés Calleja García.
El C. Calleja García, Juan Moisés: Señor Presidente, señores senadores y diputados:
"Estamos enterados que el Congreso Constituyente Permanente ha aprobado la Iniciativa Presidencial de reformas a la fracción XII, del apartado "A" del artículo 123 de la Constitución Federal, en consecuencia, y conforme a su texto, la nación mexicana dispone de un mandato, mismo que debe ser ponderado a fin de reafirmar en la conciencia nacional su raíz y su trascendencia.
En esta tribuna, que en el orden espiritual es la de siempre, independientemente de su ubicación geográfica, se ha escuchado la voz airada o serena de la patria frente a las injusticias o en las consumaciones reivindicatorias, por lo que concurrimos a ella en nombre de la representación que nos honra, la de la clase obrera para que en esta hora, también de
recuperaciones, conforme a una estricta valoración y en uso de la más amplia libertad que nos define, consideramos los alcances de la nueva fracción XII del artículo 123 constitucional.
Su texto anterior, es entre otros, los que formaban el capítulo de las garantías sociales de la Constitución Federal. El nuevo los enriquece. Ellas son el devenir histórico del pueblo de México. Terminan con un pretérito plagado de ignominia dada la sucesión de una sociedad egoísta, soberbia y dictatorial, empeñada en destruir la dignidad del hombre mediante la opresión y el desconocimiento hasta de lo insignificante que sirvieron para elevar al campesino, al obrero, de la miseria.
Los integrantes de la dictadura porfirista fueron implacables en mantenerlos dentro de las más despiadada opresión. Entre menos educación les fuera dable, mientras mejor se organizara la explotación del obrero, el porfiriato más tranquilo y satisfecho se encontraba. Desde la época de la colonia, el trabajo de la mina, el del obraje, habían sido inmisericordes. El que se hundía en las entrañas de la tierra en busca de los metales que a pesar de su preciosismo eran adquiridos a precio vil por el extranjero, antes y después de las agotadoras jornadas tenía que aligerar el paso para llegar a su alejada y miserable choza, o bien pernoctar en los tiros de la mina en donde muchas veces, su generación futura, lanzó el primer llanto ante la obscuridad, bochorno o humedad de las galerías como protesta a la esclavitud de sus progenitores.
Por la explotación sin límites del pueblo, nuestra lucha armada de 1910 tuvo que ser notoriamente violenta, destructora aun sin piedad para todos los que festejaron las represiones de Santa Rosa, Cananea o Río Blanco, y por eso, también la actitud inflexible del Constituyente de 1917, cuando frente a los razonamientos de los hermeneutas del derecho, los tradicionalistas de las reformas en igual recinto parlamentario, acometieron sus ideas, y si a Cristo había que colgarle un par de pistolas para que los trabajadores se reivindicasen frente a sus explotadores, la decisión fue tomada y ante el azoro de los que pensaron que la Revolución triunfante fracasaría por la ausencia de los científicos apabullados, se creó una nueva normativa constitucional, la de los derechos sociales.
Fue promesa del Jefe Supremo de la Revolución dar todas las leyes encaminadas a redimir a la clase obrera de la triste y miserable situación en que se encontraba, y en su mensaje, a través del diputado Macías propuso casas secas, aereadas, perfectamente higiénicas para los trabajadores. Su mensaje fue el espíritu presente en la redacción de la fracción XII del artículo 123 por virtud de la cual toda negociación agrícola, industrial, minera o cualquiera otra clase de trabajo, los patrones estarán obligados a proporcionar a los trabajadores habitaciones cómodas e higiénicas. Para quienes lucharon con las armas en la mano, los que confrontaron los jacales o cuartos redondos ocupados por los jornaleros, los peones, el operario durante la dictadura en marcada degradación humana, jamás pudieron eludir una disposición reivindicatoria que doctrinariamente y en el orden de su aplicación es la sobresaliente expresión de la justicia social. Comodidades y bienestar habitacional sólo para quienes son poseedores de los bienes de producción y promiscuidad, amontonamiento, suciedad para los que con sus manos e inteligencia los hacen producir, es injusticia, es iniquidad.
El Constituyente de 1917, cumplió con su destino histórico. El lamento recogido, el reclamo formulado fue atendido y a la posteridad le quedó una herencia fecunda, la de que dispusieran los trabajadores de un hogar decente en donde pudieran recuperar las fuerzas perdidas por la fatiga diaria y en donde con dignidad y decoro se fortalecieran los lazos familiares. Las previsiones frente a una economía aún no consolidada industrialmente, concretó la obligación para las empresas fuera de las poblaciones y dentro de éstas, cuando ocuparan un número mayor de cien. Al lograrlas, las realizaciones quedaron a la determinación de la clase obrera, a la actividad tutelar de los regímenes de la Revolución; más la superación, el perfeccionamiento, al común de sus esfuerzos.
A pesar de la incomprensión de los que por pereza mental o ausencia de juicio crítico, cambian nuestra historia por la de otras, de los que son desertores mentales de nuestro proceso social o de quienes siempre se afanan por anular sus logros pensando que fue un día sin huella, la Revolución, el movimiento sindicalista nacional ha dejado constancia de sus luchas: en la contratación colectiva, en sus entrenamientos ante la Suprema Corte de Justicia, en las gestiones y obtención de reformas o reglamentos legales a fin de que las casas para los trabajadores no fueran una disposición ilusoria.
El Presidente Manuel Avila Camacho, correspondiendo al reclamo obrero, expide un reglamento para empresas de jurisdicción federal que fue declarado inconstitucional. Don Adolfo Ruiz Cortines, en 1956, adiciona la fracción III del artículo 111 de la Ley Federal del Trabajo para eliminar todo escollo que dejase a los obreros sin casas habitación, pero el antecedente apropiado de la trascendental reforma constitucional que nos ocupa, fue el nuevo Código Laboral hoy vigente, que es la continuidad revolucionaria del Gobierno y de la clase laborante tan implacablemente escarnecida.
La clase trabajadora y sus líderes, en legítima aspiración, han sostenido que si bien la Constitución no señala que los patrones estén obligados a construir habitaciones para todos sus trabajadores, es indudable que el constituyente de Querétaro en su etapa reivindicadora tuvo en cuenta que la mayoría de las poblaciones y en los centros rurales no existían habitaciones cómodas, higiénicas y baratas, siendo impositiva una conclusión cabal a la que si bien no llega por la situación imperante, el presente por su desarrollo industrial, al acrecentar los núcleos obreros, ha encarecido la propiedad aumentando los alquileres, ha vitalizado de manera incontenible el problema de la habitación obrera, y por qué guardar silencio, también el de la clase campesina y popular.
Es cierto que los trabajadores acogen realizaciones habitacionales debido a su permanente
lucha. Surgen como ejemplo, los azucareros, electricistas, petroleros, la industria del papel, más no abaten la convivencia de la población laboral en auténticos cuchitriles en donde sin servicios, en habitaciones improvisadas con madera, láminas de cartón y con dimensiones inconcebibles se amontona una familia numerosa o bien en añosas vecindades, también con espacios limitados e insalubres dentro de los cuales hasta el débito conyugal se practica, en el amontonamiento de los menores con los adultos.
Es así como a más de cincuenta años de que fue promulgado el texto fundamental de la nación, no por conformismo de los trabajadores, no por la claudicación de sus rectores, no por la indeterminación de los gobernantes, el problema habitacional persiste insoluto. Razones de orden económico, injusta repartición de la riqueza, capitalización antes que comodidades, pueden ser, sin embargo, es una realidad lacerante que la Revolución debe aniquilar. Dentro del panorama nacional surge un ciudadano educado dentro de ella, fortalecido en sus principios, con el ideario de la misma, que al asumir la Primera Magistratura, entre otros de sus meditados conceptos, expuso que la Revolución Mexicana apresurará su marcha a pesar de que se han liquidado antiguas desigualdades estructurales y las que han surgido en los últimos lustros, deben ser circunstanciales y pasajeras. Mientras los humildes no alcancen niveles decorosos de existencia, el programa a cumplir seguirá en pie de lucha, como impulso ascendente del pueblo y de su obra creadora durante este siglo.
En su largo peregrinar como candidato, el licenciado Luis Echeverría recogió el testimonio de un resuelto afán de progreso y de un firme propósito de liquidar injusticias. De los obreros organizados recibió el testimonio donde, entre otros requerimientos, quedó concretado el problema habitacional conforme a la normativa vigente y quien fue y es consciente de que, si para cumplir los mandatos de la Constitución es preciso modificar la estrategia de nuestro desarrollo, procedió resueltamente, con igual espíritu que el de los varones de 1917 y a través de una Comisión tripartita en la que fue actor principal, logró la anuencia para que la prestación habitacional para los obreros que legalmente se concretaba a un treinta por ciento fuera para todos.
Dentro de la Constitución y con la Revolución el Presidente de México cambia estructuras y elimina la injusticia. Reclama más de medio millón de empleos por año, pero no a costa de la dignidad humana y para lograrlo manda al Congreso Constituyente Permanente su Iniciativa de reforma a la fracción XII del artículo 123, que ha sido aprobada por las legislaturas locales y federal. Los trabajadores, todos, los de altos y de bajos salarios han de obtener una morada digna. Hay solidaridad efectiva entre los mexicanos. Habrá ocupación cierta para ese medio millón de compatriotas que serán absorbidos por la industria de la construcción.
Los obreros han ponderado debidamente la reforma legislativa en todas sus asambleas, se aprecia la magnitud de la medida, han dado un mentís a quien desde esta tribuna en exhibicionismo sobresaliente conforme a una mentalidad retrógrada, al servicio de los intereses que se han quedado atorados en el tiempo, se opusieron a que aquélla fuera aprobada no obstante su aparente consentimiento. Su fe puesta en el Presidente Echeverría no ha sido defraudada.
Transforma el sistema imperante, aún de marcados contrastes y de necesidades. Se afianza en la convicción de que la distribución de la riqueza es la realización de la justicia social y en reciprocidad tiene y tendrá a los obreros, a los campesinos, a las clases populares en su lucha incansable por el bienestar colectivo y por que vayamos, como lo ha dicho hacia arriba, al encuentro del porvenir que desea para México.
Ayer se escuchó en esta tribuna las voces de Múgica, Gracidas, Victoria, Jara, con limpia conciencia revolucionaria, hoy a ellas se ha unido la de Luis Echeverría. Al declarar que la reforma constitucional es mandato de observancia obligatoria, el legislador siente la satisfacción del deber cumplido, los trabajadores expresan su reconocimiento al guía de la nación, que contra los vendavales de los eternos inconformes, sabe que un proceso sin justicia, es retroceso. El pueblo le indica que la nueva fracción XII del artículo 123 constitucional es auténtica justicia social, debida a un mandatario que satisface con grandeza la confianza en él depositada. En la lucha y en la hora de las reivindicaciones, pueblo y gobernante marcan el paso dentro del proceso revolucionario. En este recinto fluye la determinación vigorosa de Luis Echeverría para el bien de los trabajadores, como aun no hace mucho tiempo, lo ha hecho para los campesinos. Por todo ello nuestro profundo reconocimiento.
Por tratarse de un asunto de tanta trascendencia, solicito de ustedes acordar la dispensa de la segunda lectura y se proceda a su votación. Muchas gracias. (Aplausos.)
El C. Presidente: En atención a lo manifestado por el C. diputado Juan Moisés Calleja, y en virtud de que las reformas constitucionales de que se trata fueron discutidas y aprobadas por los miembros del H. Congreso de la Unión, durante el último período ordinario de sesiones, esta Presidencia pide a la Secretaría consulte a la Asamblea si se considera el asunto de urgente resolución y se dispensan los trámites.
El C. secretario Flores Bernal, Raymundo: Atendiendo indicaciones de la Presidencia, se consulta a la Asamblea para que en votación económica, se acuerde en el sentido de que se dispensen los trámites y se pase a discusión el proyecto de Declaratoria. Aprobado. Se dispensan los trámites.
Consecuentemente, está a discusión el proyecto de Declaratoria. No habiendo quien haga uso de la palabra, se va a proceder a recoger la votación nominal. Por la afirmativa.
El C. secretario Jiménez del Prado, Salvador: Por la negativa. (Votación.)
El C. secretario Flores Bernal, Raymundo: ¿Falta algún ciudadano legislador de emitir su voto por la afirmativa?
El C. secretario Jiménez del Prado, Salvador: ¿Falta algún ciudadano legislador de emitir su voto por la negativa?
Se va a proceder a recoger la votación de la Mesa Directiva. (Votación).
El C. secretario Flores Bernal, Raymundo: Señor Presidente, el proyecto de Declaratoria ha sido aprobado por una votación unánime de 25 votos. Pasa al Ejecutivo para sus efectos constitucionales.
El C. Presidente: Se declara reformada la fracción XII del Apartado A) del Artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. (Aplausos.)
DICTÁMENES A DISCUSIÓN
Ratificación de grados militares
- El C. secretario Flores Bernal, Raymundo:
"Comisión de la Defensa Nacional.
Honorable Asamblea:
La Secretaría de la Defensa Nacional, por conducto de la de Gobernación, envió a esta H. Comisión Permanente, la hoja de servicios del C. general de división Justiniano González de la Lanza.
En sesión celebrada el día 1o. de los corrientes, se turnó a la Comisión que suscribe el expediente relativo.
La fracción VII del artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos faculta a la Comisión Permanente para ratificar los grados de coroneles y demás jefes superiores del Ejército, Armada y Fuerza Aérea que el Ejecutivo de la Unión otorgue, por lo que la suscrita Comisión se abocó al estudio del mencionado expediente.
De los documentos que integran la hoja de servicios se desprende: que el C. Presidente de la República le otorgó el grado de general de división; que el interesado ha prestado al Ejército Nacional, cincuenta años, cinco meses, dieciocho días, de servicios y que son satisfactorios sus antecedentes, conducta y capacidad profesionales.
Por lo anteriormente expuesto, la Comisión de la Defensa Nacional se permite someter a la aprobación de esta honorable Asamblea, el siguiente punto de Acuerdo:
Único. Se ratifica el grado de general de división, que el Ejecutivo de la Unión expidió en favor del C. Justiniano González de la Lanza.
Sala de Comisiones de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 2 de febrero de 1972.
Año de Juárez.
Senador Benito Bernal Miranda. - Diputado Manuel Orijel Salazar. - Senador José Castillo Hernández. - Diputado Ramiro Robledo Treviño."
Está a discusión el punto de Acuerdo. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobado. Comuníquese al Ejecutivo.
- El mismo C. Secretario:
"Comisión de la Defensa Nacional.
Honorable Asamblea:
Con fecha 25 de enero del presente año, la Secretaría de la Defensa Nacional a través de la de Gobernación envió la hoja de servicios del C. general de división diplomado de Estado Mayor Alberto Violante Pérez.
En sesión celebrada el 1o. de los corrientes, se turnó a la Comisión de la Defensa Nacional el expediente relativo.
Esta Comisión se abocó al estudio de los documentos que integran la hoja de servicios, de los que se desprende que al interesado le otorgó el C. Presidente de la República, el grado de general de división diplomado de Estado Mayor; que ha prestado al Ejército Nacional servicios durante cincuenta y siete años, cinco meses, cuatro días; y que sus antecedentes, conducta y capacidad profesionales son satisfactorios.
Por lo expuesto, y de conformidad con la fracción VII del artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y el Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso, la Comisión que suscribe se permite someter a la aprobación de esta honorable Asamblea el siguiente punto de Acuerdo:
Único. Se ratifica el grado de general de división diplomado de Estado Mayor, que el Ejecutivo de la Unión expidió en favor del C. Alberto Violante Pérez.
Sala de Comisiones de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 2 de febrero de 1972.
Año de Juárez.
Senador Benito Bernal Miranda. - Diputado Manuel Orijel Salazar. - Senador José Castillo Hernández. - Diputado Ramiro Robledo Treviño."
Está a discusión el punto de Acuerdo. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobado. Comuníquese al Ejecutivo.
- El mismo C. Secretario:
"Comisión de la Defensa Nacional.
Honorable Asamblea:
A la suscrita Comisión de la Defensa Nacional, le fue turnado para su estudio y dictamen, el expediente que contiene la hoja de servicios del C. general de división diplomado de Estado Mayor Salvador del Toro Morán que la Secretaría de la Defensa Nacional, a través de la de Gobernación, enviara.
Esta Comisión se abocó al estudio del expediente respectivo, de conformidad en lo que establece la fracción VII del artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y el Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso, que faculta a la Comisión Permanente para satisfacer los grados de coroneles y demás jefes superiores del Ejército.
Armada y Fuerza Aérea que el Ejecutivo de la Unión otorgue.
De los documentos que integran la hoja de servicios se desprende: que el interesado los ha prestado al Ejército Nacional, durante cuarenta y siete años, diez meses, y ocho días; y que sus antecedentes, conducta y capacidad profesional son satisfactorios.
Por tanto, la Comisión que suscribe se permite someter a la aprobación de esta honorable Asamblea, el siguiente punto de Acuerdo:
Único. Se ratifica el grado de general de división diplomado de Estado Mayor, que el Ejecutivo de la Unión expidió en favor del C. Salvador del Toro Morán.
Sala de Comisiones de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 2 de febrero de 1972.
Año de Juárez.
Senador Benito Bernal Miranda. - Diputado Manuel Orijel Salazar. - Senador José Castillo Hernández. - Diputado Ramiro Robledo Treviño."
Está a discusión el punto de Acuerdo. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobado. Comuníquese al Ejecutivo.
- El mismo C. Secretario:
"Comisión de la Defensa Nacional.
Honorable Asamblea:
A la Comisión de la Defensa Nacional que suscribe, fue turnado para su estudio y dictamen, el expediente con la hoja de servicios del C. general brigadier diplomado de Estado Mayor Ángel Rodríguez García, que la Secretaría de la Defensa Nacional, a través de la de Gobernación, enviara.
Con fundamento en la fracción VII del artículo 79 de la Constitución Federal y el Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, que facultan a la Comisión Permanente para ratificar los grados de coroneles y demás jefes superiores del Ejército, Armada y Fuerza Aérea Mexicanos, que el Ejecutivo de la Unión otorgue, esta Comisión se abocó al estudio del mencionado expediente.
Hecha la revisión de los documentos que integran la hoja de servicios mencionada, se desprende, que el interesado los ha prestado al Ejército Nacional, durante treinta y cuatro años, diez meses, nueve días; y que sus antecedentes, conducta y capacidad profesionales son satisfactorios.
En mérito a lo anteriormente expuesto, nos permitimos proponer a la honorable Asamblea, para su aprobación, el siguiente punto de Acuerdo:
Único. Se ratifica el grado de general brigadier diplomado de Estado Mayor, que el Ejecutivo de la Unión expidió en favor del C. Ángel Rodríguez García.
Sala de Comisiones de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión. - México, D. F., a 2 de febrero de 1972.
Año de Juárez.
Senador Benito Bernal Miranda. - Diputado Manuel Orijel Salazar. - Senador José Castillo Hernández. - Diputado Ramiro Robledo Treviño."
Está a discusión el punto de Acuerdo. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobado. Comuníquese al Ejecutivo.
- El mismo C. Secretario: Señor Presidente: Agotados los asuntos que de acuerdo con el Orden del Día correspondían a la sesión pública.
- El C. Presidente (a las 13:25 horas): Se levanta la sesión pública y se pasa a sesión secreta.
TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA Y
"DIARIO DE LOS DEBATES"