Legislatura XLVIII - Año III - Período Ordinario - Fecha 19720921 - Número de Diario 9

(L48A3P1oN009F19720921.xml)Núm. Diario:9

ENCABEZADO

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADO UNIDOS MEXICANOS

XLIII LEGISLATURA

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921

AÑO III México, D. F., Jueves 21 de Septiembre de 1972 TOMO III. -NUM . 9

"AÑO DE JUÁREZ"

SUMARIO

Orden del Día

Se abre la sesión. Lectura del Orden del Día. 2

Acta

Lectura y aprobación del acta de la sesión anterior. 2

OFICIO DE LA SECRETARIA DE GOBERNACIÓN

Autorización de Comparecencia del C. Secretario de Obras Públicas.

El C. Secretario de Gobernación comunica que el C. Presidente de la República ha autorizado al C. Secretario de Obras Públicas para que comparezca ante esta Cámara, en respuesta a la solicitud formulada al respecto. De enterado.

Comparecencia del C. Secretario de Obras Públicas.

El C. ingeniero Luis Enrique Bracamontes, Secretario de Obras Públicas, en cumplimiento del Acuerdo aprobado por esta Cámara de Diputados en la sesión del día 19 de los corrientes, se presenta en el recinto. La Presidencia designa una comisión que lo introduzca al salón. A continuación el C. Secretario de Obras Públicas pasa a la tribuna y da respuesta a las preguntas que, en su orden, le formulan los ciudadanos diputados Rafael Castillo Castro, Manuel Orijel Salazar, Ignacio F. Herrerías Montoya, Raymundo Flores Bernal, Manuel Stephens García, Inocencio Sandoval Zavala, Rodolfo Alvarez Flores, Juan Barragán Rodríguez, José Luis Alonzo Sandoval, Ernesto Velasco Lafarga, J. Jesús Arroyo Alanís, Francisco Ortíz Mendoza, Mauricio Martínez Solano, José María Serna Maciel, Hiram Escudero Alvarez, y Juan Moisés Calleja. El C. Simón Jiménez Cárdenas, en su turno, declina el derecho a su intervención.

La Presidencia, a nombre de la Cámara de Diputados expresa el reconocimiento al C. Presidente de la República por haber autorizado la comparecencia del C. Secretario de Obras Públicas. De igual manera, expresa al C. ingeniero Luis Enrique Bracamontes sus consideraciones por las amplias explicaciones que ha proporcionado respecto a las labores desarrolladas por la Secretaría a su cargo y agradece la presencia y el interés de los asistentes. La misma comisión que lo acompañó dentro del salón de sesiones acompaña al alto funcionario al retirarse del salón.

Invitaciones

Del C. Profr. Juventino Castro Sánchez, Gobernador Constitucional del Estado de Querétaro, al acto que tendrá lugar el día 24 del actual, en el que rendirá el Quinto Informe de su gestión administrativa. Se designa comisión.

El C. Presidente del H. Congreso del Estado de Guerrero, a la ceremonia que, para conmemorar el aniversario del descubrimiento de los restos de Cuauhtémoc, se llevará a cabo el día 26 del presente, en el poblado de Ixcateopan. Se designa comisión.

Comunicaciones

De la Legislatura del Estado de Aguascalientes, participando la apertura y clausura del tercer período extraordinario de sesiones, correspondiente al primer año de su ejercicio. De enterado.

DICTAMEN DE PRIMERA LECTURA

Condecoración

Dictamen de la Comisión de Permisos Constitucionales, con proyecto de Decreto, que concede permiso al C. Rafael Forsbach Escandón, para que pueda aceptar y usar la condecoración que le

fue conferida por el Gobierno de la República de Finlandia. Primera lectura.

Invitación

La Presidencia informa que la Gran Comisión ha citado al C. Director del Instituto Mexicano del Seguro Social a fin de que informe sobre los aspectos de interés del Organismo a su cargo, por lo que invita a los ciudadanos diputados a la reunión que tendrá lugar el día 26 de los corrientes, en el Salón Verde. Se levanta la sesión.

DEBATE

PRESIDENCIA DEL C. CELSO H. DELGADO

(Asistencia de 170 ciudadanos diputados.)

- El C. Presidente (a las 12:10 horas): Se abre la sesión.

ORDEN DEL DÍA

- El C. secretario Soto Reséndiz, Enrique:

"Cámara de Diputados.

Tercer Período Ordinario de Sesiones.

XLVIII Legislatura.

Orden del Día.

21 de septiembre de 1972.

Lectura del acta de la sesión anterior.

Oficio de la Secretaría de Gobernación.

El ciudadano secretario de Gobernación comunica que el C. Presidente de la República, en acatamiento del artículo 93 Constitucional, ha autorizado al C. Secretario de Obras Públicas para que comparezca ante esta Cámara de Diputados, en respuesta a la solicitud de la misma.

El C. Profesor Juventino Castro Sánchez Gobernador Constitucional del Estado de Querétaro, invita al acto en que habrá de rendir el V Informe de Gobierno ante la XLVIII Legislatura del Congreso Local, que tendrá lugar el día 24 del presente mes.

El C. Presidente del Congreso de Guerrero invita al acto que para conmemorar el aniversario del descubrimiento de los restos de Cuauhtémoc, tendrá lugar el próximo 26 de septiembre en Ixcateopan.

Comunicación del Congreso de Aguascalientes.

Dictamen de primera lectura

Uno de la Comisión de Permisos Constitucionales con Proyecto de Decreto por el que se concede permiso al C. Rafael Forsbach Escandón para que pueda aceptar y usar la condecoración que le confirió el Gobierno de la República de Finlandia."

ACTA

- El mismo C. Secretario:

"Acta de la sesión de la Cámara de Diputados del H. XLVIII Congreso de la Unión, celebrada en día diecinueve de septiembre de mil novecientos sesenta y dos.

Presidencia del C. Celso H. Delgado.

En la ciudad de México, a las doce horas y quince minutos del martes diecinueve de septiembre de mil novecientos sesenta y dos, se abre la sesión con asistencia de ciento ochenta y un ciudadanos diputados, según consta en la lista que previamente pasa la Secretaría.

Lectura del Orden del Día.

Sin discusión se aprueba el acta de la sesión anterior efectuada en día doce del presente.

Se da cuenta con los documentos en cartera:

Oficio del C. licenciado Carlos Armando Biebrich Torres, Subsecretario de Gobernación por el que comunica que el C. Presidente de la República, en acatamiento del artículo 93 constitucional, ha autorizado al C. Secretario de Recursos Hidráulicos para que comparezca ante esta Cámara de Diputados. De enterado.

El C. diputado J. de Jesús Arroyo Alanís, hace uso de la palabra par dar lectura a una proposición suscrita por los ciudadanos diputados: Raymundo Flores Bernal, Sixto Uribe Maltos, Nicolás Márquez Acosta, Francisco Navarro Veloz, Francisco Zárate Vidal, Ramiro González Casales, Ramón Uribe Urzúa y el que habla, para que se envíe oficio al C. Secretario de Gobernación para que, con fundamento en lo dispuesto en la fracción VII del artículo 2o. de la Ley de Secretarías y Departamentos de Estado, se sirva recabar del C. Presidente de la República la autorización correspondiente para que el C. Secretario de Obras Públicas, comparezca en fecha próxima ante esta Cámara de Diputados a efecto de que informe sobre los datos contenidos en el segundo informe de gobierno rendido por el propio Titular del Ejecutivo, el día primero del presente mes y responda a las cuestiones que se formulan sobre las atribuciones de la dependencia de su Ramo; y, de conformidad con el artículo 59 del Reglamento Interior para el Gobierno del Congreso General, solicitan de la Asamblea considerar esta proposición de urgente y obvia resolución y se sirva aprobarla en sus términos.

El C. Presidente por conducto de la Secretaría consulta a la Asamblea si son de dispensarse los trámites y se pone a discusión de inmediato.

En votación económica se aprueba.

A discusión , sin ella, en votación económica se aprueba la proposición, y en tal virtud la Presidencia acuerda se gire oficio al C. Secretario de Gobernación y sea este funcionario el conducto para recabar del C. Presidente de la República, la autorización de comparecencia que se solicita y se comisiona al C. Presidente de la primera Sección de la Comisión de

gobernación para que haga llegar dicho ocurso, y en su caso, intervenga, en la fijación de la fecha de su presentación.

Oficio del C. licenciado Mario Moya Palencia, Secretario de Gobernación, por el que comunica el nombramiento que el C. Presidente de la República hizo en favor del C. licenciado Moisés Martínez y Alfonso, como Magistrado del Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal.

La Presidencia por considerar este asunto de urgente resolución, solicita de la Secretaría consulte a la Asamblea si son de dispensarse los trámites y se pone a discusión y votación de inmediato.

En votación económica se aprueba.

A discusión el punto de Acuerdo.

Sin que motive debate, en votación económica se aprueba el punto de Acuerdo respectivo.

Encontrándose a las puertas del recinto el C. licenciado Moisés Martínez y Alfonso, se designa en comisión a los ciudadanos diputados Ramiro Robledo Treviño, Santiago Roel García, Francisco José Peniche Bolio, Roberto Estrada Salgado y Alejandro Ríos Espinosa, para que se sirvan introducirlo al salón.

Puestos de pie todos los presentes el nuevo Magistrado rinde la protesta de Ley.

La misma comisión que lo introdujo se sirve acompañarlo al abandonar el salón.

El C. Rafael Forsbach Escandón, solicita el permiso constitucional necesario para aceptar y usar una condecoración que le fue conferida por el Gobierno de la República de Finlandia. Recibo, y túrnese a la Comisión de Permisos Constitucionales.

La Presidencia informa que de acuerdo con la solicitud de comparecencia del C. Secretario de Recursos Hidráulicos, que fue autorizada por el C. Presidente de la República de acuerdo con el oficio del C. Secretario de Gobernación con el que dio cuenta la Secretaría en esta misma sesión, es como se encuentra a las puertas del recinto el C. ingeniero Leandro Rovirosa Wad; y, se designa en comisión para introducirlo al salón a los siguientes ciudadanos diputados:

Rodolfo Sánchez Cruz, Ildefonso Estrada Jacobo, Bonifacio Ibarra Morales, Ernesto Velasco Lafarga, Simón Jiménez Cárdenas, Jacinto Moreno Villalba y Alberto Hernández Curiel.

El C. Presidente da a conocer las razones por las que se solicitó la comparecencia del C. secretario de Recursos Hidráulicos e informa a la Asamblea que recibió una solicitud de varios ciudadanos diputados miembros de la Comisión para el Desarrollo de los Recursos Hidráulicos en la que expresaron que por virtud de la naturaleza de las atribuciones legales de dicha Secretaría de Estado, el informe contendría aspectos técnicos y datos estadísticos, y por tanto se pidiera a su titular se sirviera dar lectura previamente a un documento escrito, así como también que el mismo fuera complementando con los documentos o películas relacionadas con el propio informe.

El Presidente acuerda se autorice la proyección de un documental, en el momento en que, de acuerdo con el informe, sea oportuno.

El C. Ingeniero Leandro Rovirosa Wade, hace uso de la palabra para dar lectura al documento que contiene la información acerca de las diversas labores desarrolladas por la dependencia a su cargo. En seguida invita a presenciar la proyección de los documentales.

Por su parte la Presidencia ruega a la Secretaría consulte a la asamblea si autoriza a la directiva para que, sin abandonar sus funciones, ocupe curules en el salón durante la proyección.

En votación económica se aprueba.

Después de la proyección del documental el C. Presidente manifiesta que de acuerdo con la información que se ha proporcionado, varios ciudadanos diputados que a continuación se señalan, han manifestado su deseo de formular al C. Secretario Rovirosa Wade varias preguntas. Los inscritos, a saber son: Héctor Lutteroth Camou, Luciano Arenas Ochoa, Francisco José Peniche Bolio, Salvador Díaz Coria, Jesús Luján Gutiérrez, Roberto Suárez Nieto, Guillermo Ruiz Vásquez, Jorge Arellano Amezcua, Maximiliano León Murillo, Arnulfo Villaseñor Saavedra, Juan Barragán Rodríguez, Juan Manuel López Sanabria, Rubén Darío Vidal Ramos, Emilia Dorado Baltazar, Rodolfo Alvarez Flores y Román Ferrat Solá.

En el transcurso del interrogatorio de los ciudadanos diputados Peniche Bolio, Ruiz Vázquez y López Sanabria, los ciudadanos diputados Cuauhtémoc Santa Ana , Alfredo V. Bonfil y Antonio Hernández Ornelas presentan mociones de orden. Al término del interrogatorio, para hechos, los ciudadanos diputados Juan Landerreche Obregón y Alfredo V. Bonfil.

El C. Presidente en nombre de la Cámara de Diputados de la XLVIII Legislatura del Congreso de la Unión, expresa el reconocimiento de este Cuerpo Legislativo al C. Presidente de la República por haber autorizado la comparecencia del Secretario de Recursos Hidráulicos ante esta Representación Nacional, en los términos previstos por el artículo 93 constitucional; al ingeniero Leandro Rovirosa Wade, aceptar sus consideraciones por las amplias respuestas aportadas en torno a las labores desarrolladas por la Secretaría a su cargo; y a los trabajadores, a los militantes de las diversas organizaciones , técnicas, periodistas y funcionarios de dependencias oficiales, les agradece su asistencia.

La misma comisión que lo introdujo, se sirve acompañarlo al retirarse del salón.

Se continúa con los asuntos del Orden del día.

la Comisión de Permisos Constitucionales, presenta cuatro dictámenes con proyectos de Decreto, en virtud de los cuales se concede el permiso constitucional necesario para que puedan aceptar y usar condecoraciones a los siguientes ciudadanos: Mario Espinosa de los Reyes, la Orden Nacional 'Del Crucero del Sur' en el Grado de Gran Cruz, que le

confirió el Gobierno de la República de Brasil; Capitán de Navío José Guardado Domínguez, la Medalla del Mérito Tamandaré que le otorgó el Gobierno de Brasil; Ismael Moreno Pino, la Orden Al Mérito en el grado de Gran Cruz que le confirió el Gobierno de la República de Chile; y Roberto Kolb Smejkal, la Gran Insignia de Honor al Mérito que le otorgó el Gobierno de la República de Austria, Segunda Lectura.

A discusión en su orden, sin que motiven debate, en votación nominal se aprueban por unanimidad de ciento ochenta votos, pasan al Senado para sus efectos constitucionales.

A las dieciocho horas y diez minutos se levanta la sesión y se cita para la que tendrá lugar el jueves veintiuno del presente, a las once horas, en la que se tratarán los asuntos en los que la Secretaría dé cuenta."

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobada.

OFICIO DE LA SECRETARIA DE GOBERNACIÓN

Autorización de Comparecencia del C. Secretario de Obras Públicas.

El C. secretario Rodríguez Santoyo, Raúl: "Escudo Nacional.- Estados Unidos Mexicanos.- Poder Ejecutivo Federal.- México, D. F.,- Secretaría de Gobernación.

CC. Secretarios de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. Presente.

En atención a lo solicitado por esa honorable Cámara de Diputados, por oficio de fecha 19 del actual y con fundamento en el artículo 2o., fracción VII de la Ley de Secretarías y Departamentos de Estado, se comunicó al Titular del Ejecutivo de la Unión, el atento citatorio al C. Secretario de Estado y del Despacho de Obras Públicas, que contiene el ocurso en cuestión.

Enterado el ciudadano Presidente de la República, el deseo de esa asamblea de recibir de manera personal, del C. ingeniero Luis Enrique Bracamontes, un informe sobre diversos asuntos relativos a la Secretaría de su Ramo, en acatamiento del artículo 93 constitucional, dio instrucciones para que el citado funcionario comparezca ante ese cuerpo legislativo en la sesión del próximo jueves 21 del presente y proporcione la información solicitada.

Lo que comunico a ustedes para sus efectos constitucionales, reiterándoles en esta oportunidad las seguridades de mi consideración distinguida.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

México, D. F., a 19 de septiembre de 1972.

'Año de Juárez.'

El Secretario, licenciado Mario Moya Palencia."

- Trámite: De enterado.

COMPARECENCIA DEL C.

SECRETARIO DE OBRAS PÚBLICAS

El C. Presidente: Esta Presidencia se permite informar a la asamblea que de acuerdo con la solicitud de comparecencia del C. Secretario de Obras Públicas que fue autorizada por el C. Presidente de la República, de conformidad con el oficio de los ciudadanos Secretario de Gobernación, con el que acaba de dar cuenta la Secretaría, es como ahora se encuentra a las puertas del recinto el C. ingeniero Luis Enrique Bracamontes.

Para introducirlo a este salón se designan en comisión a los siguientes compañeros diputados: Mario Colín Sánchez, Hernán Pastrana Pastrana, Agapito González Cavazos, Julio Abrego Estrada, Ramón Uribe Urzúa, Alfonso Orozco Rosales, Felipe Cerecedo López y Jesús García Tapia.

(La comisión cumple su encargo.)

- El mismo C. Presidente: En la sesión de apertura de este Período Ordinario de Sesiones, a nombre de mis compañeros diputados y senadores al dar respuesta al informe del C. Presidente de la República, transmití el deseo de esta Legislatura de ahondar en los diversos aspectos del propio informe mediante el diálogo con sus colaboradores: los Secretarios de Estado.

En la sesión pasada - la efectuada el día 19- varios compañeros diputados presentaron una proposición que la Asamblea aprobó, en el sentido de que usted, C. ingeniero Luis Enrique Bracamontes, Secretario de Obras Públicas; compareciera ante esta Asamblea, previa autorización del Presidente de la República, a fin de ampliar el Informe de Labores desarrolladas por la Secretaría a su cargo, durante el período comprendido de agosto de 1971 y 72; con ese propósito, varios compañeros diputados han manifestado su deseo de formularle algunas interrogantes. Voy a dar lectura a sus nombres. Ciudadanos diputados Rafael Castillo Castro, Manuel Orijel Salazar, Ignacio F. Herrerrías Montoya, Raymundo Flores Bernal, Manuel Stephens García, Inocencio Sandoval Zavala, Rodolfo Alavez Flores, Juan Barragán Rodríguez, José Luis Alonzo Sandoval, Ernesto Velasco Lafarga, J. de Jesús Arroyo Alanís, Francisco Ortiz Mendoza, Mauricio Martínez Solano, Simón Jiménez Cárdenas, José María Serna Maciel, Hiram Escudero Alvarez y Juan Moisés Calleja.

El C. Secretario de Obras Públicas: Estoy a sus órdenes, señor Presidente de la XLVIII Legislatura y estoy también a las órdenes de ustedes, señores diputados integrantes de la misma.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Rafael Castillo Castro, del Partido Revolucionario Institucional.

El C. Castillo Castro, Rafael: Señor Secretario, la planeación, construcción y operación de las obras públicas son tres factores que definen una política integral de desarrollo.

Por tanto, ¿podría usted informar a esta

Representación Nacional acerca de las tareas que se llevan a cabo en la Secretaría a su cargo, en lo que respecta a la planeación, construcción y operación de las obras públicas y, asimismo, manifestarnos, ¿qué órdenes de prioridad se emplean para atender cabalmente el desarrollo del país?

El C. Secretario de Obras Públicas: Con mucho gusto. México es, señores diputados, entre los países que integramos el grupo de los denominados en proceso de desarrollo, uno de los que se han desenvuelto económicamente con un grado mayor de desarrollo, con un ritmo muy veloz y durante un período de tiempo sostenido.

México es también, entre los países que pertenecen al denominado Tercer Mundo, uno de los que figura entre los primeros lugares de aquéllos que se han destacado no únicamente por el valor de su producción global y de servicios, sino también por lo que se refiere al ingreso por persona y es, en consecuencia, uno de los países de este grupo que está abocado a ascender más brevemente, en un tiempo más corto, a dejar de ser un país en proceso de desarrollo para convertirse en un país desarrollado.

El crecimiento de México, por lo que se refiere al aspecto económico, ha sido realmente espectacular. De 1935 a 1970, este crecimiento se fue incrementando cada vez más hasta llegar en la década 1961-1970 a alcanzar un promedio anual de 7%.

En poco más de tres décadas llegó a ser un país semiurbano y semirural, un país en el que el 66% de la fuerza activa del trabajo se ocupa en la industria y en los servicios, y en el que también el 55% de la población vive en las ciudades.

Al iniciarse el gobierno del señor Presidente Echeverría, se presentó una situación singular. Terminaba una etapa en nuestra historia económica, una etapa que se había iniciado en los comienzos de la Segunda Guerra Mundial, que se caracterizó por ese desarrollo económico a que nos hemos referido, un desarrollo económico acelerado, hasta cierto punto espontáneo, no regulado que provocó el crecimiento exagerado de determinadas poblaciones del país, especialmente en esta ciudad de México, de su zona de influencia, el área metropolitana del valle de México, de algunas otras ciudades en unos cuantos Estados de la República, en detrimento de las demás que se estancaron o cuya población disminuyó. Que se caracterizó también por una hipertrofia en el crecimiento del comercio a costa de la agricultura, casi sin precedente en ningún otro país y en ninguna otra época. En la década 61-70 el comercio creció un 33% y la agricultura lo hizo en tan sólo en un 11%. Todos estos indicadores, más otros que no viene al caso ni es esta la ocasión de mencionar, obligaron al Gobierno del señor Presidente Echeverría a hacer una serie de ajustes, a dictar políticas que permitieron el que las viejas estructuras que no habían sido radicalmente modificadas, se ajustaron a las nuevas condiciones, con el fin de que no únicamente pudiera continuar el ritmo de crecimiento que habíamos llevado hasta la fecha que ese crecimiento se incrementara en la medida de lo posible.

Pero como síntesis o resumen de toda la situación se podían destacar dos situaciones, dos características, un tremendo desequilibrio entre el crecimiento o el desarrollo económico muy rápido, muy veloz y una lentitud en el desarrollo social. Y además por primera vez en nuestra historia aparecía según datos del censo demográfico de 1970, como el problema nacional número uno, el del desempleo.

La política de Gobierno del señor Presidente Echeverría, como es del conocimiento de todos ustedes, tiene como objetivos fundamentales, el lograr un desarrollo equilibrado y armónico del país; el dar atención preferente a aquellas zonas o regiones que por diferentes circunstancias habían permanecido marginadas a nuestro progreso; el tender a una mayor distribución del ingreso nacional con el objeto de ir disminuyendo las desigualdades sociales y, dentro de este panorama le toca cumplir a la Secretaría de Obras Públicas a mi cargo , una labor muy importante y muy trascendente, ya que la infraestructura para el transporte no debe ser considerada única y exclusivamente como correspondiente a un sector económico. Sus características en el mundo actual y, sobre todo, en el momento en que vive México; ese éxodo del campo a la ciudad, en una forma no programada e incontrolada; ese fenómeno que se denomina urbanización y que se presenta en todos los países, y que en consecuencia nosotros no podemos ser una excepción, se planea, programa, regula o controla, de acuerdo con las políticas que se fijen a la infraestructura para el transporte.

En consecuencia, señores diputados, hablar de la planeación, el proyecto, la construcción y la conservación de la infraestructura para el transporte, no es tan sólo el referirse a esas actividades única y exclusivamente en relación con una actividad constructora de vías terrestres de comunicación, es tomar parte en una forma activa y decisiva en nuestro desarrollo es la manera más eficaz si adecuamos la planeación, el proyecto y los procedimientos de construcción y de conservación de las vías de comunicación, a lograr el equilibrio regional del país en beneficio de los habitantes de esas mismas regiones; a evitar que vuelva a pasar en el futuro, algo como lo que ya pasó en el área metropolitana del Valle de México; a evitar que en estas zonas y en unas cuantas ciudades más del país, estén concentrados los dos tercios de la riqueza nacional de la industria, del comercio, de las finanzas, de los empleos; es hacer que todos participemos en una forma más justa y más equivalente de los logros que hasta hoy se han alcanzado y de los que logren y debemos de lograr cada vez un porcentaje mayor para el futuro.

Para que esto sea posible, fue preciso hacer un análisis que en materia de la infraestructura para el transporte nos permitiera formarnos una cabal idea de cuál era nuestra realidad, de cuál era el problema fundamental que debíamos resolver para cumplir en la parte que

nos toca con esa política de desarrollo, equilibrado con justicia social, que propugna el Gobierno del Presidente Echeverría.

Somos un país insuficiente y mal comunicado, somos un país o éramos, hasta hace muy poco tiempo, un país que estábamos pidiendo seguido en esta materia relativa a la infraestructura para el transporte, así como en otras, en una forma indiscriminada, los modelos, los métodos y los sistemas de los países industrializados, de los países financieros, y naturalmente que en esas condiciones y de acuerdo con nuestras posibilidades económicas reales, sería muy difícil que alcanzáramos un adecuado desarrollo.

Tuvimos que ver que había una gran diferencia en nuestra red de carreteras, por ejemplo, en lo que se refiere a las carreteras troncales que constituían el 80% de la red y los caminos alimentadores que tan sólo llegaban al 20%. Que independientemente de que era una proporción aproximadamente inversa a la que tienen los países ya industrializados, tan solo daba servicio al 55% de nuestra población y al 40% del territorio nacional. Que debíamos dar preferencia sin descuidar la construcción de los demás tipos de caminos, a nuestros caminos alimentadores; pero que sobre todo la política de la Secretaría de Obras Públicas tenía que estar orientada a contribuir en la medida de sus posibilidades, a que el desempleo fuera disminuyendo. Que era importante, por lo mismo, que revisáramos cuáles habían sido nuestros sistemas de planeación y de construcción; que viéramos si estábamos aplicando correctamente una tecnología que dominamos, una tecnología en materia de vías terrestres cuyo dominio y conocimiento se nos reconoce en el extranjero, inclusive en los países latinoamericanos, si la estábamos aplicando bien; si estábamos haciendo un adecuado uso de ese recurso y, en consecuencia, si lo mismo estábamos haciendo por lo que se refiere a contribuir, a disminuir el desempleo, y el subempleo. Y fue así como vimos que era necesario que cambiáramos nuestras normas de planeación; que no nos concretáramos a una planeación estática que tiene como único fin obtener una relación beneficio costo, muy útil en un país que tiene resueltos casi todos sus problemas y que tan sólo trata de fijar un orden de prelación. Que a nosotros nos convenía más una planeación dinámica, una planeación que tuviera como último objetivo el obtener una relación efecto costo; que debíamos de adecuar nuestras normas a nuestra realidad, ya que la red de carreteras estaba planeada indiscriminadamente para 2,500 vehículos diarios y tan sólo en 10 mil kilómetros teníamos más de 500; en el resto de la red, menos de 500. Que eso significaba un mejor aprovechamiento de nuestros recursos económicos; de nuestros recursos presupuestarios, el poder construir atendiendo a nuestras necesidades y sin mengua de la calidad requerida, un mayor kilometraje de caminos por ejemplo con una misma cantidad de dinero.

En fin, que teníamos que darnos cuenta, que no podíamos ignorar a las ciudades, que era imprescindible que una parte importante de las calles de una ciudad, las consideráramos formando parte de la red de carreteras o viceversa; y a la red de carreteras la consideráramos formando parte de las calles de una ciudad; que eso nos permitiría en convenios con los gobiernos y con los municipios, darles una asistencia técnica; que podrían proporcionar un mejor servicio a los habitantes de sus ciudades; que contribuiríamos a resolver el angustioso problema del tráfico en todas nuestras grandes ciudades incluyendo esta ciudad de México y que, al mismo tiempo, daríamos a los municipios, sobre todo a nuestros municipios más pobres, recursos de los que hasta ahora habían carecido. Que teníamos que ver a la Secretaría de Obras Públicas como el elemento fundamental en el cual tendrían que apoyarse, originarse, desarrollarse y realizarse las políticas gubernamentales para un ordenamiento del territorio, para un sano y benéfico urbanismo del país y percatarnos, al mismo tiempo, de que, como lo ha manifestado el Presidente Echeverría, el desarrollo de un país no debe tan sólo considerarse como un proceso económico. Es además, y en parte muy importante, un proceso cultural, social, psicológico; pero, sobre todo, un proceso profundamente humano (aplausos), que si lo analizamos es lo que sintetiza e indica nuestra Constitución de 1917, la primera Constitución Política - social del mundo que ha sido la infraestructura jurídica muy eficaz de nuestro desarrollo, en la cual se ha apoyado la física construida en una forma ejemplar, ininterrumpida, como una, manifestación de la identidad de propósitos, designados y principios de todos los gobiernos emanados de la Revolución y que el Presidente Echeverría, consciente de la época histórica que le toca vivir, de la generación que representa y de la responsabilidad que tiene y con él todos nosotros, de que nuestro desarrollo no solamente no se frene, sino se incremente, ha hecho en todos los órdenes, y desde luego en aquello que corresponde a la Secretaría de Obras Públicas, los ajustes necesarios para lograrlo, y que todos nosotros, todos quienes integramos esta Dependencia, estamos dispuestos a cumplir y a secundar con toda honradez, capacidad y entusiasmo. (Aplausos.)

- El diputado interrogante: Muchas gracias.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Manuel Orijel Salazar, del Partido Revolucionario Institucional.

El C. Orijel Salazar, Manuel: Señor Secretario, quiero relacionar mi pregunta con la exposición que usted nos ha hecho favor de hacernos en este momento. La política de inversiones en materia de obras públicas promueve la creación y vigorización de la infraestructura económica y social que reclama el desarrollo de la nación. ¿Podría usted, señor Secretario ilustrar a esta Asamblea del orden de prelación con que se manejan los recursos de inversión en la Secretaría a su cargo?

Por otra parte, ¿indicarnos con precisión el lugar que ocupa esa dependencia en el

proceso de desarrollo equilibrado que traza el Gobierno de la República?

El C. Secretario de Obras Públicas: El presupuesto de una nación y, en consecuencia, el presupuesto de una dependencia gubernamental, es la materialización en cifras de un programa. Es la representación de la importancia que se asigna a las labores que están encomendadas. En la Secretaría de Obras Públicas, damos a nuestras actividades la siguiente prelación: en primer lugar consideramos las actividades relativas a la conservación y a la reconstrucción de las obras ya existentes, tanto por lo que significan como patrimonio de la nación, como también con el objeto de que puedan proporcionar el mejor servicio a la colectividad. En segundo lugar y dentro de las ideas que hemos expuesto, consideramos la construcción de caminos de mano de obra, porque además de que estamos contribuyendo a resolver el problema tan urgente de comunicación que tiene el país, sobre todo de las pequeñas comunidades, de las que están comprendidas entre 500 y 2,500 habitantes o de menos de 500, hacemos una efectiva labor para disminuir el desempleo y estamos contribuyendo a la resolución de lo que en estos momentos debe ser considerado como el problema nacional número uno. El tercer lugar corresponde a los caminos vecinales, aquellos para cuya construcción cooperan también quienes van a resultar directamente beneficiados con ellos, siguen después los caminos estatales que se construyen con la cooperación financiera de los Gobiernos de las Entidades Federativas, las carreteras troncales llamadas también carreteras federales, las vías férreas, los aeropuertos, las instalaciones deportivas, las obras urbanas en las comunidades rurales, las ciudades industriales, turísticas o comerciales y los edificios, principalmente para el Gobierno Federal. Dentro de este orden las cantidades que se han asignado en el lapso a que se contrae el Informe que rindió el señor Presidente del día 1o. de septiembre, son las siguientes: la inversión fue de 4,611 millones de pesos; de esos 4,611 millones se asignaron a obras 4,384, el 95% de la inversión; y dentro de este capítulo de obras a conservación y reconstrucción, 1,399 millones de los cuales fueron para carreteras: 1,094, y con esos 1,094 millones se conservaron 76 mil 600 kilómetros; aeropuertos 94 millones, para la conservación de 49 autopistas; a edificios, 39 millones, destinados a la conservación o reconstrucción de 8 edificios; al capítulo de construcción se le destinaron 2,985 millones; con esos 2,895 millones se construyeron 7,400 kilómetros en caminos de mano de obra, y a este renglón, en especial, se le dio una asignación de 373 millones ; en caminos vecinales se invirtieron 561 millones y se construyeron 1,100 kilómetros; en carreteras federales se invirtieron 887 millones lo que permitió construir 110 kilómetros; en carreteras estatales con 524 millones se construyeron 2,000 kilómetros. Quiero yo, hacer notar a ustedes, aunque seguramente ya se han percatado de ello con las cifras de inversión y de construcción, cómo se empieza a acusar la política del señor Presidente Echeverría en esta materia. Miren ustedes: En caminos de mano de obra, se invirtieron 373 millones y se construyeron 7,400 kilómetros; en caminos vecinales, se invirtieron 561 millones y se construyeron 1,100 kilómetros.

Para nosotros, los caminos de mano de obra y los caminos vecinales son los caminos alimentadores, es decir, del 1o. de septiembre de 71 al 31 de agosto de 72 se construyeron 8,500 kilómetros de caminos alimentadores y de carreteras troncales se construyeron 3,100 kilómetros; para construir esos 8,500 kilómetros de caminos alimentadores se requirió una inversión de alrededor de 900 millones de pesos y para construir 3,100 kilómetros de carreteras troncales que son de especificaciones de normas más altas, se requirió una inversión de alrededor de 1,400 millones de pesos. En total, en el año, se construyeron 11,600 kilómetros de caminos. Esto significó el construir diariamente 36 kilómetros de caminos, en los años anteriores el mayor promedio diario que se había alcanzado había sido de 12 kilómetros; en este último año se triplicó la construcción de caminos, se triplicó el promedio de construcción y se irá incrementando en los próximos años de la Administración del señor Presidente Echeverría. (Aplausos.)

El C. Orijel Salazar, Manuel: Agradezco su completa información señor Secretario. (Aplausos.)

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Ignacio Herrerías Montoya, del Partido Revolucionario Institucional.

El C. Herrerías Montoya, Ignacio: Señor Secretario, el progreso del país nos impone la necesidad de descentralizar los servicios de la industria para promover de esa forma un crecimiento regional equilibrado y crear polos de desarrollo. En esa virtud, ¿podría usted informar a esta asamblea cuáles son las actividades específicas de la Secretaría a su cargo para promover la creación de parques industriales y explicarnos a qué obedece que en esa política se haya pensado en 110 polos de desarrollo en toda la República?

El C. Secretario de Obras Públicas: Para que la urbanización de un país pueda hacerse en una forma ordenada y equilibrada, es preciso que se planee paralela o simultáneamente con la infraestructura para el transporte de ese país. Atendiendo a esas condiciones, tomando en cuenta una serie de factores determinantes entre los cuales podríamos destacar en forma señalada la infraestructura ya existente, la existencia de agua potable, de elementos de bienestar social, la riqueza que a lo largo de los años han ido acumulando determinadas poblaciones del país, la política del gobierno del Presidente Echeverría que incrementa las inversiones en aquellas zonas -como ya lo decíamos antes - por diferentes circunstancias hasta hoy marginadas al progreso , se localizaron 110 polo de desarrollo como ha dicho

usted, señor diputado. Estos polos de desarrollo, que significaron aquellos lugares de la República, aquellas poblaciones cuya vocación de crecimiento es más viable, más lógica, más fácil, y que al mismo tiempo permite que este crecimiento, que ese desarrollo sea ordenado y equilibrado, son de diferente categoría, de acuerdo con la zona de influencia que puede o que debe tener cada una de ellas.

En el primer nivel tenemos a las que hemos denominado metrópolis regionales, y las cuales son quince, sin tomar en cuenta el área metropolitana del Valle de México y su zona de influencia.

El segundo nivel está ocupado por la metrópolis intermedias. Esas metrópolis intermedias, tienen que apoyar el desarrollo de las metrópolis regionales; y el número de las que hasta este momento se han fijado es de alrededor de 40; el tercer nivel, lo constituyen los centros urbanos y se han fijado 12; y el cuarto nivel, está integrado por los subcentros urbanos y de ésos se han determinado hasta el momento 43.

Para que cada uno de estos polos de desarrollo, los subcentros urbanos puedan apoyar a los centros urbanos, éstos a su vez a las metrópolis intermedias y las metrópolis intermedias a las metrópolis regionales, es preciso que exista una comunicación; una comunicación de ellas entre sí y con las vías troncales del país, y de ahí surge que además de la necesidad que tenemos de comunicarnos necesitamos que esa comunicación terrestre sea una verdadera red, que no sea como es hasta la fecha una figura arborescente y que no usemos la palabra red tan sólo metafóricamente. Esos polos de desarrollo pueden ser industriales, turísticos, comerciales o culturales; algunos de ellos incluyen indiscutiblemente todas estas clasificaciones y los denominamos por aquella característica que más predomina.

Hasta el momento, el programa de la infraestructura física de la descentralización industrial, que debemos entender descentralización como un sinónimo de desarrollo equilibrado y armónico y que está a cargo de la SOP, se han iniciado con la construcción de las denominadas ciudades industriales. Entendiendo por ciudad industrial un conjunto armónicamente planeado y proyectado que generalmente se compone en tres zonas: una zona industrial, una zona cívico - comercial y una tercera zona habitacional.

Nosotros hemos encontrado que para México, en promedio, la ciudad industrial más conveniente es aquélla que se desarrolla en una superficie de alrededor de cuatrocientas hectáreas; que puede dar asiento a una población de 25 mil personas, y en su zona industrial a unas doscientas industrias pequeñas y medianas, porque la verdadera industrialización del país se forma y se sustenta con la pequeña y con la mediana industria.

Estos establecimientos significan grandes ventajas para los empresarios y para los trabajadores. Para los primeros, porque constituyen instalaciones exprofesó para sus fábricas, donde van a disponer de servicios comunes, lo que les va a permitir una disminución en sus costos de producción y, en consecuencia, estar en mejores condiciones de competir, sobre todo en este momento en que México está empeñado en una exportación cada vez mayor de sus productos manufacturados.

Para los trabajadores significa mejores condiciones de trabajo y de vida. Las ciudades industriales son, por lo general, ciudades de peatones y de ciclistas.

El trabajador va a emplear menor tiempo para ir de su hogar a la fábrica o viceversa y, en consecuencia, eso va a representar un incremento en su salario, si nosotros tomamos en cuenta que, por ejemplo, aquí en el Distrito Federal hay quienes trabajan en Vallejo, viven en el sur de la ciudad, y tienen que tomar hasta dos o tres camiones para ir a su trabajo y lo mismo para regresar a su hogar, y al mismo tiempo que no se está mermando el salario del trabajador por el gasto en el transporte, está disponiendo de un tiempo del que en las grandes urbes que han crecido sin ninguna planeación, no dispone para dedicarlo a mejorar sus conocimientos o actividades recreativas sanas.

Lo mismo sucede con las familias de los trabajadores, de los industriales, de los técnicos y de los empleados. Tienen a la mano, pueden hacerlo a pie, si lo desean, todo lo que necesitan en la vida cotidiana: la escuela, el comercio, los cines; porque estas ciudades industriales son ciudades autárquicas, autosuficientes, donde se da ocupación o puede tener ocupación casi el 80% de sus habitantes. Que están rodeadas por cinturones verdes, en donde se instalan granjas agropecuarias de alta producción, que constituyen ampliaciones de la zona habitacional y una fuente de abastecimiento de los productos de primera necesidad, de primera mano que requiere toda ciudad o toda comunidad.

Estas ciudades industriales las realizamos por etapas. En una primera etapa dentro de un proyecto completo, con una proyección financiera también completa que permita enmarcar su desarrollo y su desenvolvimiento, se urbanizan aquellos terrenos en una superficie que permita poner a la venta terrenos industriales, terrenos habitacionales y terrenos comerciales. Esa superficie se fija en parte en función del mercado, de acuerdo con lo que ha indicado la proyección financiera y tomando en cuenta que estos proyectos no son de una realización inmediata, que el alcanzar las metas o los datos a que yo me he referido aquí generalmente requiere para cada ciudad un período de unos 10 años, además estas inversiones son recuperables, las ciudades tienen que ser autofinanciables y no constituir una obra de infraestructura más a cargo del presupuesto del Gobierno Federal o del Gobierno Estatal. Para su realización, para materializar estas ideas se llevan a cabo convenios con los Gobiernos de los Estados y son obras que se realizan en cooperación y con la intervención de los mismos. Generalmente es el Gobierno del Estado el que

aporta el terreno, lo aporta a un fideicomiso y el Gobierno Federal por conducto de la Secretaría de Obras Públicas, aporta la inversión que se requiere para la realización de esa primera etapa, los estudios y los proyectos técnicos así como la supervisión de la misma. El fideicomiso de cada ciudad industrial está íntimamente relacionado y coordinado con el fideicomiso de conjuntos, parques y ciudades industriales que en el mes de diciembre de 1970 el señor Presidente de la República constituyó en Nacional Financiera. Por lo que se refiere a la adquisición de los terrenos hay una serie de modalidades, si son de propiedad privada, generalmente se les invita a que entren como socios al negocio, porque además de que la labor más importante que debe desarrollar este programa, es industrializar al país, es crear las fuentes permanentes de trabajo que tanto necesitamos, estos proyectos dejan y deben dejar utilidades. En el caso de los terrenos ejidales, que es donde se están desarrollando, y seguramente se van a desarrollar el mayor número de estas ciudades y de aquí, que en algunas ocasiones yo haya manifestado la trascendencia de la Ley de la Reforma Agraria última, la gran importancia que tiene desde luego para el campesino, pero no únicamente para el campesino sino para todos los demás sectores sociales, porque es un instrumento básico e indispensable en nuestro desarrollo; se pueden seguir, o bien, los trámites que ustedes conocen y que están fijados por la propia ley, el pagarles a los ejidatarios el valor de los terrenos, o como lo estamos tratando de hacer, darles un pago a cuenta, irles pagando el resto del precio del terreno a medida que ese terreno se vaya vendiendo con un precio base que es el del avalúo fijado de antemano, con un porcentaje de incremento anual al precio del mismo; pero además, hacerlos socios, porque el señor Presidente de la República tiene un particular interés en que al campesino, al ejidatario, al comunero, no únicamente se le indemnice no justamente lo que valga su tierra, sino que al mismo tiempo se procure que los proyectos que vayamos a desarrollar en esa tierra, siempre que así sea posible , constituyan una fuente permanente de trabajo y de ingreso para el ejidatario, el comunero y sus hijos (aplausos.). Y es así, por ejemplo, como en la ciudad industrial de Tijuana, que se está instalando, los ejidatarios por conducto del Fondo de Fomento Ejidal, nos indicaron que ellos deseaban entrar como socios de la ciudad industrial; que deseaban ser los propietarios de las naves industriales que se construyeran para alquilarlas a las industrias de maquila.

Y, lo mismo nos han manifestado para otro tipo de instalaciones, los ejidatarios y los comuneros de otras partes de la República. Y, es que debemos de ver, lo que económica y socialmente significan para nosotros y representan para nuestro desarrollo los campesinos; pero de verlos en su nueva dimensión social y económica y de brindarles no únicamente por lo que debemos a nuestro desarrollo, no porque lo hayamos hecho hasta hoy a costa y con el sacrificio de ellos, sino por conveniencia de todos, no únicamente la comprensión sino el apoyo que se merecen, que necesitan y que necesitamos todos. (Aplausos.)

El C. Herrerías Montoya, Ignacio: Al escuchar su explicación, me han surgido varias interrogantes; en la aplicación de esta política de descentralización industrial, ¿solamente interviene en la localización de estos polos de desarrollo el Gobierno Estatal y la Secretaría a su cargo? Por otra parte, ¿ qué criterio se sigue cuando en la ciudad donde se pretende establecer un parque industrial no cuenta con un plano regulador? ¿qué conductos tienen los habitantes de estos lugares para hacer valer su opinión sobre los proyectos que se están formulando? y, por último, ¿cómo se evalúa el grado de contaminación ambiental que va a producir el parque industrial o la ciudad industrial, si antes no se conoce cuál es el ramo de las industrias que se van a establecer?

El C. Secretario de Obras Públicas: Cómo no. En la localización de los polos de desarrollo, la hace la Secretaría de Obras Públicas, pues de hecho con la colaboración de todas las dependencias del Gobierno Federal, porque tenemos que utilizar datos que están en poder de esas Dependencias y tenemos además que conocer los proyectos que va a desarrollar en un futuro inmediato y mediato. Por eso en el fideicomiso de parques conjuntos y ciudades industriales de Nacional Financiera, están representadas las Dependencias gubernamentales que más tienen que ver con este problema, integran el Comité Técnico de ese fideicomiso.

Por lo que se refiere a la localización ya física de la ciudad industrial, se ha visto que lo más adecuado es que cuando se trata de una metrópoli regional, esta localización se haga a unos dos o seis kilómetros de la ciudad existente, buscando dentro de ese radio el lugar específico que reúna las mejores condiciones por lo que se refiere a la topografía, a la resistencia del suelo, a su situación en relación con los vientos dominantes; y se le ofrece al Gobierno del Estado y al Municipio la colaboración de la Secretaría de Obras Públicas. Esa colaboración puede consistir, en caso de que disponga -como algunos gobiernos ya lo disponen - de los organismos técnicos requeridos, en observaciones de carácter general o en un asesoramiento; a petición de ellos puede llevarse a cabo íntegramente el proyecto, todos los estudios, desde la localización y el levantamiento del terreno.

Para conocer cuál es la opinión de la comunidad en relación con el proyecto con esa ciudad industrial, entre los estudios preliminares que se realizan se incluye una encuesta. Estos estudios preliminares los hemos realizado con mucho éxito, através de estudiantes, de estudiantes de la localidad, ya sea de estudiantes de un Instituto Tecnológico regional o de una Universidad estatal.

Hemos visto con qué entusiasmo, con qué sentido de responsabilidad, con qué profesionalismo, trabajan nuestros estudiantes.

En ocasiones, como nos ha sucedido por ejemplo en el Estado de Jalisco o en el Estado

de Durango, la comunidad hace sus observaciones, expresa en ocasiones su inconformidad por conducto de elementos técnicos, de profesionales que viven y ejercen en esa ciudad, que están constituidos en colegios o en asociaciones y se llevan a cabo con ellos juntas y reuniones, primero para que conozcan con todo detalle desde los primeros datos del estudio, las razones que hacen y que justifican que esa ciudad deba de ser un polo de desarrollo y después todos aquellos datos de detalle que permitan formarse un cabal juicio.

En ocasiones, han atendido plenamente y se han convencido de la bondad del proyecto y de ser aparentemente opositores, se han convertido en los más entusiastas colaboradores; en otras ocasiones, nosotros nos hemos percatado de que en algunos puntos ellos tienen razón y naturalmente los hemos atendido, los hemos escuchado y se han modificado hasta donde ha sido necesario esos proyectos.

La ciudad industrial en sí, el proyecto de lo que es la ciudad industrial tiene que tener una zona de protección debidamente legalizada por el Congreso y el Gobierno local. Esta zona de protección está íntimamente relacionada con el plano regulador de la ciudad y entonces de acuerdo con unos lineamientos de tipo general que fijan unos principios muy sanos se empieza la elaboración de ese plano regulador dándole una plena participación en el desarrollo del mismo al profesionista local, al igual de como lo hacemos en el propio proyecto de la ciudad industrial y en general en todos los proyectos de esas ciudades.

Las ciudades industriales, además de las ventajas que he mencionado, tienden a hacer que la vida sea amable en todos sentidos, tienden a quitar de la mente popular esa imagen que se tiene de que una instalación fabril es algo sucio, algo deprimente. En realidad, se trata de fábricas entre jardines, porque en las ciudades industriales, de acuerdo con sus reglamentos, no se pueden instalar industrias peligrosas, industrias molestas y, en general, aquellas que no se ajusten a las características que previamente han sido fijadas.

Los reglamentos y la ciudad proporcionan un principio de estas instalaciones a través de sus centrales de servicios, prevén lo necesario para evitar la contaminación del suelo, de la tierra y del aire. Para saber qué tipo de industrias sería más conveniente que se instalara en una determinada ciudad y desde luego para utilizarlo únicamente como una guía o como una sugerencia, estamos en estrecha relación con la Secretaría de Industria y Comercio, quien tiene elaborado un catálogo que a la fecha suma más de 1,500 tipos de industria, que son necesarios para el país, catálogo que naturalmente se va incrementando y también trabajamos mucho muy estrechamente con Nacional Financiera, en donde se están realizando los perfiles industriales de cada una de las industrias que aparecen en el catálogo de la Secretaría de Industria y Comercio; pero, además, lo importante no es que se construyan ciudades industriales, siendo ya muy importante por lo que significa al ordenamiento de nuestro territorio y a los elementos de bienestar social y económico que proporciona a sus habitantes. Lo verdaderamente importante es que esas ciudades industriales se llenen de industrias, como esto es un aspecto en que yo estoy exponiendo nada más la política del Presidente Echeverría de industrialización del país ya ustedes saben las medidas de tipo legal, de tipo fiscal, de incentivos que se han dictado para propiciar esta industrialización pero, además, dentro de este programa, dentro de este propósito de que haya una ocupación plena de todos los mexicanos, en todos los niveles; nosotros, en coordinación con Educación Pública, con Industria y Comercio y con Nacional Financiera, hemos preparado promotores industriales.

Se dio por primera vez este año un curso intensivo de promoción industrial en 11 entidades federativas y en 19 centros de enseñanza superior del país, al cual acudieron 900 pasantes de las distintas carreras de educación superior con que cuenta nuestro país. Esos Pasantes han sido contratados, a través de la Secretaría de Obras Públicas y van a trabajar en la promoción industrial de sus respectivos Estados, coordinadamente con Nacional Financiera, porque es muy importante que las Instituciones de educación superior estén vinculadas a la industrialización del país; que se logre cada vez una vinculación más estrecha, como lo es también que en una forma sistemática y permanente la industria y el comercio se vinculen a la educación superior de México. Es por esto que con el objeto de dar un paso más en este sentido de hacer además participar a la juventud mexicana, a la juventud estudiosa de México en el desarrollo del país, en un desarrollo que les es propio, en un desarrollo del que ellos propiamente van a ser los responsables, se ha iniciado como un primer paso, decía, dentro de la Secretaría de Obras Públicas la contratación en este año de 2,500 pasantes de las distintas carreras. Se pretende que cumplan con su servicio social, que realicen un trabajo que no constituya un estudio o un proyecto hipotético o que esté sujeto a una posible realización sino que intervengan en un programa que está en marcha; que se den cuenta de cuál es la realidad de México; de cuales son las carencias y cuáles son nuestras posibilidades; de que vean hasta qué punto están capacitados; cuáles son sus fallas y de que, utilizando este tipo de trabajo y como se lo hemos propuesto a la Secretaría de Educación Pública, que en principio lo han aceptado, desaparezca la tradicional tesis profesional; que estos datos les permitan presentar el examen y obtener su título y lo mismo estamos sugiriendo a las universidades del país, a los señores rectores , para que lo sometan a la consideración de los Consejos Universitarios. Se trata en todos nuestros programas, de acuerdo con los deseos del señor Presidente Echeverría, en que todos los mexicanos participemos en nuestro desarrollo, porque nuestro desarrollo es una responsabilidad de todos nosotros. (Aplausos.)

El C. Herrerías Montoya Ignacio F.: Señor Secretario, en relación con mi última interrogante y de acuerdo a la explicación amplia que usted ha expuesto podemos concluir entonces que las industrias molestas no tienen lugar en los parques industriales y que en consecuencia se les ubicará en un lugar adecuado para evitar la contaminación ambiental que éstas producen.

El C. Secretario de Obras Públicas: Así es, se les da la conveniente localización y se les permite, si lo desean, utilicen las zonas habitacionales y los demás servicios de que disponga la ciudad industrial más cercana.

El C. Herrerías F., Ignacio: Muchas gracias.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra, al compañero diputado Raymundo Flores Bernal, del Partido Revolucionario Institucional.

El C. Flores Bernal, Raymundo: Ciudadano Secretario: Existe un propósito bien definido del Gobierno de la República, éste es claro, resulta notorio, en el sentido de aprovechar grandes recursos humanos ociosos en la tarea de incrementar la productividad y acelerar el desarrollo del país; también de proporcionar empleo a grandes capas que carecen de él o que tienen una actividad a nivel de subempleo; y de integrar o incorporar a grupos marginados al progreso general. Consecuente con estos objetivos bien concretos, el Gobierno de la República ha iniciado recientemente un programa de construcción de caminos llamados de mano de obra o de mano de obras que usted ha mencionado en forma muy breve. Nosotros conocemos en términos más o menos generales, los programas que la Secretaría a su cargo realiza en esta materia; pero tenemos interés en que usted nos proporcione información más amplia en este sentido, ¿cuáles son los alcances de estos programas y qué resultados concretos tenemos en estos momentos?

El C. Secretario de Obras Públicas: Con mucho gusto. Como ya les decía a ustedes, señores diputados, el programa de caminos de mano de obra, además de contribuir a que tengamos un país comunicado, es un factor y un importante elemento de empleo.

Nosotros, México, tiene una muy importante longitud de brechas, esas brechas significan además, de una manifestación del esfuerzo de nuestros compatriotas , en un principio de planeación por lo que se refiere a una necesidad manifiesta de comunicación y un adelanto en la etapa de construcción; hasta ahora, habíamos despreciado a nuestras brechas; a diferencia de como lo hicieron en su época algunos de los países más adelantados del mundo.

En consecuencia y en forma fundamental el programa de caminos de mano de obra es el programa del mejoramiento de nuestras brechas para hacerlas transitables en toda época del año. Es decir, se trata de realizar en la brecha no un trabajo continuado, sino aquel trabajo que está impidiendo que esa brecha se pueda transitar en la temporada de lluvias por vehículos automotores, y por lo mismo, el trabajo a realizar podrá consistir en algún caso, en la construcción del drenaje; en otro, de un puente; en alguno más, en el revestimiento de un tramo, es decir, en poner un material que permita que pasen por él, sobre él, vehículos automotores en la temporada de lluvias; y en condiciones muy excepcionales, habrá una modificación en el trazo, un mejoramiento en sí de lo que significa en ese momento el camino. Este programa de brechas, de Mejoramiento de Brechas, este programa de Caminos de mano de Obra está destinado fundamentalmente a resolver los problemas de comunicación de poblaciones entre 500 y 2,500 habitantes, resolviendo también cuando hay razones que así lo justifiquen, la comunicación de poblaciones de hasta 300 habitantes, es decir, es un programa destinado fundamentalmente al medio rural, al habitante del medio rural, a las pequeñas poblaciones de nuestro medio rural, con el fin de llevarles todos los elementos de desarrollo y de progreso que significa el camino, de terminar en primer lugar con la descriminación geográfica, porque nosotros que no tenemos otro tipo de discriminaciones, la falta de comunicación nos ha hecho caer en una discriminación geográfica, de que ese grupo de compatriotas tenga acceso a los mercados, de contribuir en la forma tan efectiva como lo hace un camino a ir terminando con el caciquismo, con el intermediario, con todos aquellos elementos que son como sanguijuelas sobre el débil cuerpo de la clase más miserable y más necesitada del país, de que como se desea por el señor Presidente Echeverría, no vemos únicamente nuestro desarrollo desde el punto de vista económico, sino lo hagamos también desde el punto de vista social, desde el punto de vista humano.

En las pequeñas comunidades rurales, donde se construyen estos caminos, se les ayuda a los habitantes de la misma a realizar aquellas obras que más necesitan , y se procura hasta donde sea posible, dejar establecida una industria por pequeña que sea, algo que les permita aunque sea en una forma incipiente, dejar de vender simplemente una materia prima y poder vender un producto elaborado.

Ese programa, que es un programa que se va a ir incrementando, que es un programa cuyos resultados han sido tan benéficos bajo todos los puntos de vista, que el Gobierno de la República va a iniciar a partir del año entrante un programa intenso, masivo, de obras rurales a mano.

El programa de caminos de mano de obra, que ya ha dado comienzo, permite que en la actualidad en los caminos y en las obras de esas pequeñas comunidades rurales urbanas, estén trabajando alrededor de ciento quince mil campesinos, de ciento quince mil gentes que en la gran mayoría de los casos por primera vez están disfrutando de un salario fijo, de un salario que se les paga con toda regularidad y con toda puntualidad y sin hacerles ningún descuento, y de un salario que en muchas ocasiones es superior al salario mínimo regional.

El C. Flores Bernal, Raymundo: Señor Secretario, en relación con su exposición quiero formularle a usted una pregunta, esta pregunta contiene una inquietud que no necesariamente es una inquietud de carácter personal, pero que se encuentra en grandes sectores de opinión pública e incluso de opinión especializada, y que creo que ésta es una buena ocasión para aclararla o definirla.

Esta modalidad de caminos de mano de obra, no implica, o no significa una limitación en la aplicación de los modernos recursos de tecnología en materia de construcción de caminos, con un doble inconveniente, por una parte, que se encarezca desproporcionadamente el costo de la obra haciéndola en cierta forma una obra subsidiaria, y por otra parte, que resulten ineficientes para los requerimientos del tránsito de modernos vehículos que son más pesados y más numerosos y que estas dos circunstancias nos pudieran llevar a resultados contraproducentes desde una perspectiva más amplia o más general de desarrollo; además, quisiera consultarle a usted, si están previstos o este programa contempla los aspectos de conservación y de mantenimiento y de si la forma de pago o el empleo de mano de obra será en conservación y mantenimiento similar a la que se utiliza actualmente en la construcción de caminos de mano de obra.

El C. Secretario de Obras Públicas: La construcción de caminos de mano de obra, desde luego que no imposibilita el que en materia de vías terrestres, en aquellas que así se justifique como son por ejemplo en nuestro caso las carreteras de cuota que se han construido y que se seguirán construyendo para resolver en aquellos tramos de la red que representan alrededor de 2 o el 3% de la misma; los únicos problemas de tráfico que tenemos, -repito- en esas carreteras, se han utilizado y utilizaremos lo más avanzado de la tecnología, de la ingeniería y de la maquinaria que haya en materia de vías terrestres.

El construir caminos con gente, no pone en peligro nuestra tecnología, ni constituye tampoco un retroceso, es por el contrario, una manifestación fehaciente y clara del dominio que tenemos de esa tecnología y una justificación y un ejemplo de la necesidad y de la preocupación del actual gobierno, porque cada vez conozcamos, y ojalá que lleguemos a dominar otras tecnologías. Porque el verdadero dominio de la tecnología es lo que le permite a un país desarrollarse. Es lo que le permite no seguir los moldes ni los sistemas ni los métodos ni las imposiciones ni los caprichos de los países industrializados y financieros, y es lo que nos permitirá el no convertirnos en una colonia moderna de esos países. (Aplausos.)

Por lo que se refiere al costo en el mejoramiento de una brecha, en las condiciones que ya he descrito, sería incosteable y absurdo el empleo de maquinaria. Eso sí que sería un retroceso tecnológico o algo peor que no me atrevo a mencionar en este honorable recinto. (Aplausos.)

Pero sin embargo no debemos considerar que todos los caminos de mano de obra vayan a ser mejoramiento de brechas, aunque sea en una mínima proporción; pero habrá algunos que van a tener que ser construidos con gente, con un principio de mecanización, como por ejemplo los caminos que estamos haciendo en las zonas áridas, en el Estado de Coahuila, en el Municipio de Ocampo, para cuya construcción usamos estrepas de mula, aun en estos casos, las ventajas que tiene el empleo de este sistema, si lo vemos en sí, pero más aún si lo vemos como un factor de nuestro desarrollo nos permitirá proporcionarles a ustedes estos datos aproximados: en la construcción de un camino, a base de gente, la derrama directa que se hace de salario es el 85% ; si empleamos maquinaria esa derrama es de alrededor del 35%. Es el tipo de obra que mayor beneficio social tiene, que nos permite utilizar plenamente un recurso del que disponemos en abundancia y que nos permite dejar de adquirir otro del que carecemos, como es la maquinaria y cuya adquisición significa e implica salida de divisas. Además, si tomamos en cuenta las normas de estos caminos, que permiten el tránsito de cualquier vehículo automotor, sin ninguna limitación , pero que naturalmente tienen como un factor preponderante la fijación de sus normas o especificaciones y de su planeación el poco tránsito que van a tener y, si tomamos en cuenta contestando la última parte de su pregunta que, de acuerdo con lo que expuse, que figura en primer lugar en el orden de prelación de nuestras tareas la conservación que a estas obras se la vamos a dar en una forma muy especial, que va a quedar a cargo del Gobierno Federal, que se va a hacer fundamentalmente con el empleo de gente y que cada vez esa conservación , es decir año con año va a ir significando un mejoramiento en las condiciones del camino de mano de obra y, en consecuencia, un adecuamiento al incrementar del tránsito que necesariamente va a provocarse con motivo del desarrollo de las zonas de influencia, debido al camino, veremos que es un programa por el que no tenemos que preocuparnos, pero además cuando el señor Presidente de la República los aprobó fue sobre la base de que el costo del camino en sí, pudiera ser más alto en un 15% del costo del camino construido con maquinaria a los precios unitarios que pagamos a los contratistas, y lo aprobó así porque el enorme beneficio social y lo que significaba esa inversión y esas obras en nuestro desarrollo, justificaban plenamente ese aumento, sin embargo, señores diputados, la realidad ha sido que los caminos de mano de obra cuestan un 7% menos que si los hiciéramos con maquinaria y ese 7% lo estamos dedicando a incrementar el fondo, el presupuesto, a través del cual realizamos las obras urbanas en las comunidades rurales. (Aplausos.)

El C. Flores Bernal, Raymundo: Ciudadano Secretario, le agradezco mucho su respuesta, me felicito de haber tenido la oportunidad de formularle a usted esta cuestión que

ha permitido propiciar una respuesta tan amplia, tan definidora, tan clara, de los objetivos y propósitos del Gobierno de la República, que compartimos en forma absoluta. Muchas gracias, señor.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Manuel Stephens García del Partido Popular Socialista.

El C. Stephens García, Manuel: Señor Secretario de Obras Públicas: "El Partido Popular Socialista ha observado que permanentemente los grandes intereses de la iniciativa privada plantean al gobierno la necesidad de impulsar la construcción de obras de infraestructura en nuestro país, a fin de que se les facilite su actividad en todos los campos de la economía. El Estado, hasta el presente, ha desarrollado en forma importante las obras de ese carácter en nuestro país; pero nosotros pensamos que algunas de éstas, más que con la tendencia de servir a las grandes masas del pueblo mexicano se han programado para servir a los intereses económicos muy poderosos, tanto nacionales como extranjeros.

¿Considera usted, señor Secretario, que es conveniente cambiar esta política para que dichas obras tiendan a resolver los problemas que afectan a nuestro pueblo más que a los intereses de unos cuantos?

El C. Secretario de Obras Públicas: Cuando se inició, ya formando parte de una política, la construcción de obras públicas y por lo que se refiere a vías terrestres, las necesidades de comunicación, que en ese momento eran más ingentes, obligaron a que seguramente en algunas ocasiones se diera la impresión de que se estaba sirviendo a intereses particulares, a intereses de grupo, y se estaban olvidando los intereses de la colectividad.

En la actualidad, señor diputado, puede usted tener la plena seguridad de que el gobierno de la República en general, y en especial en la Secretaría de Obras Públicas, uno de los factores determinantes en la planeación de nuestras obras, es el beneficio social que ellas van a reportar basado en el número de habitantes a que van a beneficiar en los benefactores sociales que les van a proporcionar y en el beneficio económico que esas obras van a representar para las mismas.

Este programa de caminos de mano de obra, el programa de caminos vecinales, el programa de obras urbanas en las comunidades rurales, el programa de instalaciones deportivas y en general todos nuestros programas, son unos programas tendientes al beneficio de las mayorías, al beneficio de la colectividad, porque como decía, entendemos el desarrollo como un proceso fundamental humano y no queremos desarrollarnos a base de una injusticia social, queremos equilibrar el crecimiento económico con el lento desarrollo social. (Aplausos.)

El C. Stephens García, Manuel: Señor Secretario, nos complace que esas normas se estén orientando actualmente a la Secretaría a su cargo. Muchas gracias.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Inocencio Sandoval Zavala, del Partido Acción Nacional.

El C. Sandoval Zavala, Inocencio: Señor Secretario, es bien sabido que el sistema ferroviario mexicano fue planeado no con sentido de intercomunicación y servicio interno al país, sino de comunicación y servicio al vecino país del norte; sin embargo, de lo anterior, el sistema ferrocarrilero es indispensable para la vida económica de México, tanto por la extensión de nuestro territorio como por las dificultades de la topografía, los volúmenes de mercancía que puede mover y el costo más bajo y que ese movimiento representa con relación al transporte por carretera. A su vez, salvo casos de excepciones, la política de los gobiernos revolucionarios, ha sido de no ampliar el sistema ferroviario sino limitarse a conservarlo y mantenerlo en operación con mejoras en cuanto a la calidad de las vías y la substitución de vías angostas por la ancha ordinaria, así como la renovación del equipo que, por otra parte, ha sido indispensable, sustituir tanto por desgaste como por obsolescencia. Entre los pocos ferrocarriles nuevos que se han construido, el Chihuahua - Pacífico que después de iniciado y suspendido por mucho tiempo fue construido por uno de los regímenes anteriores, ha resultado antieconómico en su operación y poco menos que inútil, en cuanto que se pretende usarlo como alimentador de la exportación y para alimentar un puerto: Topolobampo, que no puede ser usado como tal por falta de servicios y de instalaciones; en cambio, el Ferrocarril Durango Mazatlán cuya construcción está muy adelantada y que podría realizar en condiciones favorables la función que se pensaba para el Chihuahua Pacífico, continúa en suspenso hasta la fecha con la pérdida consiguiente de la inversión anterior.

El Informe de la Secretaría a su cargo que en materia ferrocarrilera se iniciaron obras que tienden a acercar entre si los centros de comunicación económica, propiciando un nivel de intercambio que justifique la inversión realizada, la que en el período correspondiente fue de diecinueve millones de pesos, principalmente en las obras de las vías férreas del Sur.

Todos conocemos los grandes déficits de operación que sufren nuestros ferrocarriles, pero puesto que los ferrocarriles son indispensables para el sistema nacional de transportes, parece que debería pensar en algún plan de integración o de ampliación que como dice el informe de la Secretaría a su cargo, tienda a acercar entre sí los centros generadores de actividad económica para favorecer el intercambio y dejar de ser, como usted lo ha indicado, un pueblo mal comunicado.

Aunque un plan de esta naturaleza ciertamente requeriría inversiones por mucho más de diecinueve millones de pesos, en cambio permitiría mayor eficacia y rendimiento y a la vez, mayores ventajas y resultados para el movimiento económico general.

Desearíamos conocer su opinión sobre si el plan indicado existe o se considera conveniente formularlo: ¿cuáles son sus lineas generales, y si hay una estimación de las inversiones que requeriría, y saber en todo caso, cuál es la política del régimen actual en materia de ferrocarriles?

Por otra parte señor Secretario, en el informe de la Secretaría a su cargo, indica que al 30 de noviembre de 1970, el país tenía 71,000 kilómetros de carreteras transitables en todo tiempo, y que hoy a casi dos años de distancia, tiene 120,000 kilómetros. Contrasta fuertemente el hecho de que si en cuarenta y tantos años de política caminera se construyeron 71,000 kilómetro de carreteras, en menos de dos años se hayan podido construir 50,000 kilómetros más; pero en todo caso, nos gustaría saber cuáles son las nuevas carreteras construidas que suman esa longitud. Este dato nos interesa ya que en la respuesta que usted dio al compañero Orijel, afirmó que en el último año se habían construido sólo 11,600 kilómetros entre vecinales, troncales y de mano de obra.

El C. Secretario de Obras Públicas: Voy a dar contestación a sus dos preguntas que son completamente distintas. Primero la que se refiere a ferrocarriles.

Nuestra red ferrocarrilera se inició en una época en que las condiciones y los conceptos sociales y económicos del mundo eran muy diferentes del actual; una época que tendría fundamentalmente a la explotación de los recursos naturales de países como México en beneficio de países más ricos y la red ferrocarrilera construida en gran parte durante la época Porfiriana, es una red al servicio de la explotación minera, de la explotación de nuestros recursos y en consecuencia de nuestra propia explotación para permitir que esos recursos salieran al país vecino del Norte y a Europa y para comunicar de paso a las principales poblaciones del país, con lo que en aquella época se consideraba el mejor medio de transporte terrestre.

Al terminar la Revolución, una de las principales tareas constructivas de los gobiernos, fue restaurar la maltrecha red ferroviaria que nos había heredado el Porfirismo y después, ya con un criterio de integración nacional; con un criterio de servicio público y de servicio a la colectividad fue el integrar esa red, y es así como se dio el primer paso al comunicar por ferrocarril a nuestras dos penínsulas, a la Península de Yucatán mediante el Ferrocarril del Sureste y a la de Baja California en su zona norte mediante el Ferrocarril Sonora Baja California.

Se construyeron en esos años otras lineas ferroviarias, como es por ejemplo en el Estado de Michoacán, un principio hasta Coróndiro de lo que seria y será una comunicación al Pacifico para permitir ya en beneficio de México y por los mexicanos la explotación de una de las más importantes riquezas mineras de nuestro país que existen en esa zona.

Dentro de esa labor de integración, dentro de ese mejoramiento de comunicación, dentro de esa facilidad y necesidad de intercomunicar a regiones con producción diversas, por ejemplo a la región noreste de México con la región noroeste, a una región básicamente industrial o más industrializada con una de las regiones de más desarrollo agrícola que tenemos todavía en la actualidad, surgía la necesidad de construir una vía transversal.

Entre los distintos estudios que se hicieron, tomando en cuenta factores de carácter económico y factores de carácter externo, es decir que por primera vez y a la inversa de lo que siempre hemos hecho o nos han hecho, no fueron los extranjeros quienes vendieran transporte, sino los mexicanos quienes se los vendiéramos a ellos, se escogió como la más conveniente el Chihuahua - Pacifico. El Chihuahua Pacifico, si usted se toma la molestia de comparar los datos, las predicciones y las proyecciones que se lucieron par planear y aprobar su construcción con los resultados de su operación, usted verá por si mismo que no ha sido un fracaso económico. Los volúmenes de carga que mueve y los de pasajeros, son muy superiores desde hace años a los que debería mover de acuerdo con las proyecciones económicas. También al construirlo, se tomó en cuenta que entre tanto no llegara a mover alrededor de 3 millones de toneladas anuales, el puerto marítimo económico de ese ferrocarril era el puerto de Mazatlán.

Por lo que se refiere al Ferrocarril Durango Mazatlán, era en aquel momento un ferrocarril cuya construcción significaba una inversión un 50% mayor, por lo menos, que la del Chihuahua pacífico y cuyos resultados para el país, desde el punto de vista regional, en lo económico y en lo social eran inferiores. Sin embargo, es política de ese Gobierno junto con la conservación de lo existente, el que no haya obras inconclusas y por eso en el programa ferroviario de la Secretaría de Obras Públicas para este sexenio, figura la terminación del ferrocarril Durango Mazatlán.

Hasta en estos años, el año pasado y el presente, la actividad en la construcción de ferrocarriles, como usted lo señala, ha sido escasa, se ha concretado a la terminación de la vía férrea del Sur de México a Cuautla, que es a la que se refiere el kilometraje que figura en la Memoria y la inversión que en la misma figura que ya ha sido terminada y se están construyendo las casas de sección.

Esta no fue una demora casual, era una demora necesaria, necesaria dentro del estudio que se está, que se hizo que ya se terminó, en relación con el transporte terrestre y muy particularmente con el transporte ferroviario, porque el transporte ferroviario hace muchos años que dejó de verse como una empresa, que dejó de verse como una actividad que necesariamente tenía que producir utilidad. El Ferrocarril es quizá la imagen del nacimiento pujante de los Estados Unidos de América y lo que es en la actualidad como empresa, es

también una imagen de lo que ha cambiado el mundo, de lo que han cambiado los conceptos y de lo que deben cambiar por beneficio de ellos mismos, aun en los países financieros e industriales.

El ferrocarril debe verse como un servicio público, hace muchos años que en Europa, después de la Segunda Guerra mundial al reestructurar sus líneas férreas, dejaron ya de tomar en cuenta el llamado coeficiente de explotación. La relación que marca los ingresos y los regresos, que si es inferior a uno son utilidades y si es superior a uno son pérdidas, porque se dieron cuenta de que lo tenían que ver como un servicio público, como un factor más dentro del complejo económico de la nación. Los Estados Unidos que se aferran a ese concepto tradicional de liberalismo pretenden ver los ferrocarriles todavía como una empresa industrial, como una empresa productiva y dentro de su manera de ser, dentro de sus conceptos, se ha negado a ayudar en una forma directa, a recibir en una forma directa la ayuda de su gobierno, los ferrocarriles americanos, según datos que me proporcionaron en una reciente entrevista el Secretario del Transporte de los Estados unidos, el año pasado perdieron tres mil millones de dólares. Los ferrocarriles mexicanos no pueden naturalmente verse y afortunadamente hace mucho tiempo que no se ven así como una empresa, como un negocio, se ven como un servicio público, pero naturalmente como un servicio público, que debe de manejarse en la mejor forma posible, con la mejor administración con los mejores gastos a fin de obtener los mínimos costos. Dentro de toda esa reestructuración, dentro de todo ese estudio del transporte ferroviario y en coordinación con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y con los Ferrocarriles Nacionales de México, hemos definido como programa deseable para este sexenio, la terminación de los trabajos que se suspendieron por las razones que ya expuse, de la vía México Querétaro; la modernización para disminuir pendiente de la vía Veracruz en el tramo Esperanza Córdoba; el problema ferroviario relación con le área metropolitana del Valle de México tendiente a construir si no un cinturón, por lo menos una herradura que haga que no entre a la actual terminal de carga de Pantaco aquélla que no sea indispensable, porque no venga destinada a la ciudad de México, sino que permita que libre a la ciudad de México por el norte y por el oriente, incluyéndose en este plan una nueva terminal de carga en Lechería y el estudio para su solución desde el punto de vista urbano de las vías ferroviarias que cruzan la ciudad de México.

Como vías nuevas se contempla, en primer lugar, la construcción de la vía férrea a la siderúrgica Lázaro Cárdenas Las Truchas, la de Perote- Teziutlán y la de Durango Mazatlán.

Ese es en términos generales el programa ferroviario para el sexenio, señores diputados. (Aplausos.)

Por lo que se refiere a su segunda pregunta, a la relacionada con los caminos, los ciento veinte mil kilómetros de caminos que tenia el país al 31 de agosto del presente año, se integran de la siguiente forma: 90 mil kilómetros, construidos por la Secretaría hoy de Obras Públicas y con anterioridad por la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas, a través de los distintos tipos de caminos y sistemas financieros que se tienen establecidos y a los cuales ya me he referido, y 30 mil dando atención y de acuerdo con el principio de coordinación, que es una de las características del gobierno del señor Presidente Echeverría, a los caminos que para usos específicos habían construido en el curso de los años otras dependencias del Gobierno Federal, organismos descentralizados y aun entidades particulares, escogiendo de esos caminos aquellos que con una inversión relativamente pequeña de parte de la Secretaría de Obras Públicas y con el consentimiento de las entidades que los habían construido, pudieran convertirse en vías generales de comunicación e incorporarse a la red del país. Es así como hasta el momento llevamos incorporados esos 30,000 Kilómetros; para lograrlo, a través de una Dependencia de la Secretaría de Obras Públicas, de la Comisión de Caminos Alimentadores y Aeropistas, hemos establecido una permanente coordinación con esas Dependencias que tienen necesariamente para sus propios usos que seguir construyendo caminos y con todos aquellos sectores que hasta ahora han construido muchos caminos, han gastado mucho dinero en ello, lo han hecho sin planeación, sin técnica, no están sujetos a conservación y casi siempre se pierde, como es por ejemplo el sector cañero, el sector forestal y el sector minero, todos esos caminos estamos celebrando convenios con ellos para irlos incorporando, cuando así se justifique y con pequeñas inversiones, a la red carretera nacional.

Por lo que se refiere, señor diputado, a que le diera yo a usted cuáles son los nombres de las obras, que integran esa longitud, si yo me hubiera puesto a aprendérmelos de memoria tomando en cuenta nada más que los caminos en proceso de construcción en este momento son cerca de tres mil, merecería que el señor Presidente de la República me hubiera ya despedido (aplausos), y si él no se hubiera dado cuenta de ello y al ponerme yo a recitar a ustedes esos tres mil caminos, ustedes se percataran y como justa compensación a las diez horas que los iba a tener oyendo nombres, deberían de pedir mi destitución. (Aplausos.)

Pero si usted desea conocerlos con todo detalle, usted me dice a dónde quiere que se los envíe, es más o menos un fajo regular, no nos costará mucho trabajo, lo podemos hacer en un día, porque lo tenemos todo listado en nuestra computadora. (Aplausos.)

El C. Sandoval Zavala, Inocencio: Muchas gracias, señor Secretario, no pedía yo nombres ciertamente, nada más en líneas generales saber cuáles eran las carreteras que habían alcanzado esa longitud. Muchas gracias.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Rodolfo Alavez Flores del Partido Revolucionario Institucional.

El C. Alavez Flores, Rodolfo: Señor Secretario: Sus contestaciones a preguntas anteriores de los compañeros diputados han sido bastante explícitas y nos van permitiendo formar un concepto total del programa y de la política de comunicaciones que sigue el actual régimen. Considero que es una acción fundamental en nuestro desarrollo esta política en materia de camino. Sin embargo, tengo algunas inquietudes que voy a preguntar a usted, y que pueden permitir ampliar las explicaciones que usted ha tenido la gentileza de darnos, o tocar aspectos nuevos que no hubieran sido explicados anteriormente. Por ejemplo:

¿Qué programas tiene al actual administración? ¿Qué ordenes de prelación se les da a las vías troncales, caminos de penetración y acceso? y asimismo por otra parte, ¿qué programas coordinados se realizan por parte del sector público para promover el desarrollo en aquellas zonas que quedan comunicadas?

El C. Secretario de Obras Públicas: Como ya les decía, señores diputados, sin descuidar la construcción de nuestra red troncal y sin descuidar tampoco los problemas que el exceso de tráfico ocasiona en algunos tramos de la red mediante la construcción de carreteras de cuota, fundamentalmente este gobierno trata de dar atención a los caminos alimentadores y de penetración; a caminos que por lo general son de especificaciones muy modestas, cuya importancia radica no en un camino en sí, sino en el número de caminos, en el gran kilometraje de esos caminos logremos construir.

Para desarrollar zonas que habían permanecido marginadas, es del conocimiento de ustedes que han sido creados organismos especiales que son fundamentalmente organismos de promoción y de coordinación, como por ejemplo la Comisión Nacional de las Zonas Áridas, que es tan importante por la superficie atendiéndonos a una clasificación muy estricta cercana a la mitad de nuestro territorio que es árido; esa Comisión hacer ver a las distintas Dependencias - en el caso de Obras Públicas por ejemplo - cuáles son las necesidades más ingentes de comunicación de caminos y procuramos hasta donde es posible, que esos caminos se realicen con gente.

Una atención del mismo tipo se da en las zonas indígenas, que son también zonas marginadas de mexicanos muy pobres; de mexicanos discriminados, a los que yo me refería antes, a través de la acción que ejerce el Instituto Nacional Indigenista, de la promoción, de la coordinación que va llevando a cabo. En esos lugares de esa política preferencial, se ha centrado mucho la acción del Gobierno. Mire usted por ejemplo: en el caso de las zonas áridas, y sin que incluyamos que en los datos que voy a dar las carreteras federales, no obstante que naturalmente hay carreteras federales en las zonas áridas. Por ejemplo, la transpeninsular en Baja California que tiene mil setecientos kilómetros, está en las zonas áridas, pero por considerar que el propósito que guía la construcción de caminos en las zonas áridas, como en las demás zonas áridas es el de incorporar a la zona y a todos sus habitantes al progreso; luego aquí únicamente los datos de los caminos de mano de obra; en las zonas áridas se han construido, en este año a que nos estamos refiriendo, 2 mil 450 kilómetros, que son el 22% de todo el kilometraje construido en el país. De caminos vecinales se han construido 250, en el mismo lapso, que es el 23% de lo construido en todo el país. De caminos estatales 410 kilómetros, que es el 40% de lo construido en todo el país. De caminos de mano de obra, vecinales y estatales de las zonas áridas, de agosto septiembre de 71 a agosto septiembre de 72, se han construido 3 mil 110 kilómetros de caminos, es el 30% de los 11,600 kilómetros a que antes me referí como construcción total en este año y en las zonas indígenas, en el mismo lapso, se han construido 2,960 kilómetros de caminos de mano de obra, el 40% de lo construido en todo el país. 420 kilómetros de caminos vecinales, el 38%. 210 kilómetros de caminos estatales el 11%. En total, en las zonas indígenas, incluyendo también a los caminos federales, se han construido 3 mil 590 kilómetros, o sea el 34% de la longitud total de caminos que hemos construido en este último año, lo cual está demostrando, además de las comparaciones que les hacía a ustedes, al darles a conocer las inversiones y los avances, que la política del gobierno del Presidente Echeverría no se queda en promesas, se traduce en realizaciones (Aplausos.)

El C. Alavez Flores, Rodolfo: Por otra parte, señor Secretario, en mi carácter de diputado del sector agrario, militante de la Confederación Nacional Campesina, me hace formular esta pregunta. ¿Cuál es la política de adquisición de terrenos, especialmente en el sector ejidal, para carreteras, aeropuertos, parques industriales, etc. en qué consiste el programa de instalaciones deportivas y qué relación tiene con los campos deportivos ejidales?

El C. Secretario de Obras Públicas: Como no. Miren ustedes, señores diputados, por lo que se refiere a las carreteras y a los aeropuertos y desde luego también a las vías férreas, la adquisición de terrenos ejidales tendrá que seguir siempre la vía de la expropiación, retribuyendo justamente a los ejidatarios o a los comuneros expropiados.

Por lo que se refiere a otro tipo de adquisiciones de terrenos, a las cuales ya me referí antes, como pueden ser por ejemplo los terrenos para ciudades industriales, turísticas o comerciales, puede seguirse también esa vía. Pero, además, existe la posibilidad que, como decía en algún caso, ya en el de la ciudad industrial, no solamente ha sido aceptada sino solicitada por los propios ejidatarios, de una asociación en el proyecto, de una integración al proyecto. Sin embargo, en todos los casos, está permanente el espíritu de la política del actual Gobierno: no pagar sólo equitativa y justamente al campesino, al ejidatario, al comunero

el valor de su tierra, crearle una fuente permanente de trabajo para él y para sus hijos.

El programa de instalaciones deportivas a que usted se refiere, es un programa de una gran transcendencia para nuestro desarrollo. Se lleva a cabo en todas las entidades del país. Es un programa nacional en cooperación con los Gobiernos de las Entidades Federativas que tiene como finalidad el construir en cada entidad una ciudad deportiva, por lo menos, que conste de campos deportivos para fútbol, para béisbol, de albercas, de frontenis y de las demás instalaciones que, de acuerdo con las necesidades de la comunidad se requieran.

En la construcción de centros deportivos periféricos y urbanos dentro de las poblaciones, generalmente de aquellas poblaciones que tengan más de 15,000 habitantes y procurando que estas instalaciones se construyan en los barrios más populosos de esa población, que constarán de campos de fútbol, de campos de béisbol, de canchas de basquetbol de volibol, de frontones y donde se procura siempre que haya un gimnasio auditorio que pueda servir como centro de reunión, de sana reunión, no tan sólo para la comunidad juvenil, sino en general a la comunidad de esa población.

De este programa de instalaciones deportivas, ya sea en ciudades deportivas, en centros deportivos urbanos o periféricos, en este último año se ha puesto en construcción 16, la mayoría de las cuales son ciudades deportivas. El programa en general tiende a que existan este tipo de instalaciones por lo menos en 180 localidades, de tal manera que puedan beneficiarse alrededor de 13 millones de jóvenes. Dentro de este plan están incluidos los campamentos juveniles, los albergues y las villas deportivas que poco a poco, de acuerdo con el programa, ya imponiendo su marcha el señor Presidente de la República.

Para el sector rural la base del plan es el programa de campos deportivos similares, es un programa que para nosotros significa un claro ejemplo de lo que puede y debe de ser la cooperación entre distintos sectores sociales. Al igual que los caminos de mano de obra, un campo deportivo ejidal en sí, es insignificante, pero 29,000 campos deportivos ejidales, que es el total que integran el programa, un campo en cada ejido, eso si es importante y trascendente para México. (Aplausos.)

En una primera etapa un campo deportivo ejidal consta de una cancha pavimentada para basquetbol, que puede usarse también para volibol y de un campo de fútbol o de béisbol, según las preferencias que por alguno de esos dos deportes haya en el Estado, en la región o en el ejido y de un astabandera. Las obras son realizadas por el Gobierno Federal a través de la Secretaría de Obras Públicas, como una actividad normal de la Secretaría en su mayor parte, sin embargo el sector representado por los trabajadores de la Secretaría, el sector burocrático representado por los trabajadores de la Secretaría de Obras Públicas y el sector profesional representado por nuestros profesionales, quisieron colaborar y cooperar en este plan con sus compañeros campesinos y, sobre todo, con los jóvenes campesinos, y ofrecieron esa colaboración mediante su trabajo gratuito y en forma rotatoria los sábados en la tarde y los domingos en la mañana.

Para equipar estos campos deportivos ejidales, se hizo una invitación a los contratistas del gobierno. Se les invitó a que aportaran en forma voluntaria el 2 al millar el importe de sus contratos y esa invitación fue acogida en forma entusiasta y tuvo una respuesta calurosa.

Esa aportación de los contratistas se deposita en un fideicomiso que para el efecto se ha constituido en el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos, y es para cubrir de los talleres o fábricas ejidales que ya está empezando a construir en distintos lugares de la República el Fondo de Fomento Ejidal los tableros de basquetbol, los postes, los marcos de fútbol, las pelotas de béisbol, los balones, los bats, las manoplas. A este conjunto de esfuerzo ya mencionado, se suma el del sector estudiantil. A través de los pasantes que trabajan con la Secretaría de Obras Públicas y a quienes se les ha asignado como parte de su labor este proyecto, de los estudiantes del Instituto Politécnico Nacional, que a través de sus comités de lucha nos manifestaron que deseaban que su contribución al programa fuera la fabricación de los aros para basquetbol, y desde luego el entusiasmo, el trabajo personal de los jóvenes campesinos.

Es la primera vez que el México revolucionario realiza un programa integral que beneficie sin excepción a todos los ejidos del país, un programa que deberá estar terminado el 20 de noviembre de 1973 en este año tenemos programada la construcción de cinco mil campos ejidales y el año entrante los otros 24 mil. (Aplausos.)

El C. Alavez Flores, Rodolfo: Muchas gracias señor Secretario por su amplia explicación.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Juan Barragán Rodríguez, del Partido Autentico de la Revolución Mexicana.

El C. Barragán Rodríguez, Juan: Señor Secretario, considero que uno de los principales objetivos de la revolución mexicana como usted lo acaba de informar, es incorporar a todos los mexicanos a las obras de beneficio social realizadas por la propia revolución. La construcción de caminos es sin duda alguna la forma más conveniente y necesaria para unir a todos los mexicanos, pero anteriormente se tenía el criterio de que las carreteras deberían pasar únicamente por las grandes ciudades o por las poblaciones productivas; usted ha expresado en alguna ocasión, que por el contrario, los caminos deben pasar por todas las poblaciones aún las más insignificantes, precisamente para darles vida y unirlas al ritmo del progreso de la nación. ¿Podría usted señor Secretario informarnos qué ha hecho la Secretaría a su cargo para hacer realidad este pensamiento suyo de tanta raigambre revolucionaria?

El C. Secretario de Obras Públicas: Para cumplir con este propósito, señor diputado, de tanta transcendencia social y económica y de tanto beneficio para ese sector del país marginado que es el que generalmente vive en las pequeñas poblaciones, hemos elaborado un programa que permita en una primera etapa comunicar a todas las poblaciones entre 500 y 2,500 habitantes; y en una segunda etapa, a las poblaciones entre 300 y 500 habitantes dejando para futuras etapas la comunicación de núcleos de población más pequeños. La cifra de la longitud de caminos de mano de obra a que me he referido, obedece a este programa que se desea y se hacen todos los esfuerzos para que, en el presente sexenio, en la Administración del señor Presidente Echeverría, se plasme en el terreno, en una red de 150,000 kilómetros de caminos de mano de obra. (Aplausos.)

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado José Luis Alonzo Sandoval, del Partido Revolucionario Institucional.

El C. Alonzo Sandoval, José Luis: Señor Secretario: Es de todos conocido que la inversión que se ha hecho y que se está haciendo para la ampliación del Aeropuerto Internacional de la ciudad de México, prevé no solamente las necesidades que presenta su ya muy intenso tráfico aéreo, prevé también las necesidades en un futuro cercano. Sin embargo, ha habido una insistente noticia en el sentido de que se proyecta construir un nuevo Aeropuerto Internacional al servicio de la ciudad de México, en las cercanías de Zumpango.

La pregunta concreta es ésta: ¿Es necesario efectivamente, es indispensable para servir las necesidades del tráfico aéreo en la ciudad de México, la construcción de otro Aeropuerto Internacional cuando incluso las obras de ampliación del Aeropuerto actual están todavía por terminarse?

El C. Secretario de Obras Públicas: El Aeropuerto llamado de la ciudad de México, es desde luego el Aeropuerto de esta ciudad, pero es además el Aeropuerto de una región del país inscrita en un círculo de unos doscientos kilómetros de radio, en donde se encuentran poblaciones muy importantes y que corresponde a una de nuestras zonas de mayor densidad de población.

El actual aeropuerto de la ciudad de México, da servicio a la Aviación Comercial Internacional, a la Aviación Comercial Nacional, a la Aviación General o Particular, a la Aviación Militar y a las Escuelas de Aviación.

El año pasado, lo utilizaron 4 millones de pasajeros aproximadamente. Tiene una capacidad de operación horario máximo entre 55 y 60 operaciones, y con mucha frecuencia ya, se presentan puntos críticos a determinadas horas en donde hay 65 operaciones.

Para el año de 1975 por ejemplo, se espera que ese aeropuerto sea utilizado por 6 millones de pasajeros aproximadamente; valiéndonos para esta predicción del por ciento de crecimiento histórico tradicional; pero la aviación es dinámica y es probable que este por ciento se incremente, en consecuencia, el número de pasajeros sería mayor.

En estas condiciones, el número de operaciones horarias que se requerirían en el aeropuerto, sería de 110. Entonces, sí se requiere desde luego, o si se requieren nuevas instalaciones. Y el estudio que sobre el particular está por terminarse, propiamente se contrae, en el fondo, en lo fundamental a determinar, cómo se debe resolver, cuál es la mejor forma de atender al problema y a las necesidades de transporte aéreo de la población, del comercio y de las demás actividades no tan sólo de la ciudad de México, sino de su más cercana zona de influencia que forma ya casi un todo, una courbanización, como dirían los urbanistas con la propia ciudad y que es el área metropolitana del valle de México, sino también de toda esa otra zona a la cual le da servicio el aeropuerto a que antes me he referido, y esos estudios llevan -o parece ser que llevaran a esa conclusión, que ése será el resultado - a que en realidad el problema no se resuelve con un aeropuerto, a que tiene que hablarse de un sistema aeroportuario del área metropolitana del valle de México.

En ese sistema quedarían en el actual aeropuerto la aviación comercial mexicana -me refiero a la nacional, dentro de nuestro territorio - y la aviación particular. En Zumpango, parece ser aconsejable la construcción de un aeropuerto internacional. En Ixtapaluca, en el Edo. de México, a un lado de la carretera de Puebla, de un aeropuerto para las escuelas de aviación y en el Estado de Puebla, a la altura de Huejotzingo, de un aeropuerto militar que pudiera servir para jets de mediano alcance, como alterno del de la ciudad de México. (Aplausos.)

El C. Alonzo Sandoval, José Luis; Señor Secretario: Al dar respuesta usted a la contestación que mi colega el diputado Orijel Salazar le hizo, mencionó usted un orden de prelación conforme al cual, según lo entiendo, se sujeta el programa de inversiones de la dependencia a su cargo.

He anotado yo en séptimo lugar aeropuertos, en 8o. lugar instalaciones deportivas, en 9o. lugar ciudades industriales, turísticas y comerciales y en décimo lugar edificios para el gobierno federal.

Una consideración previa, entendemos que el Presidente Echeverría desea imprimir a las realizaciones de su Administración, política de inversión que persigan grandes objetivos nacionales tales, como por ejemplo, una más equitativa redistribución del ingreso, la liquidación del subempleo, una adecuada, un equilibrado desarrollo regional, etc. En función de esta consideración, nos parece que la Secretaría a su cargo, por lo que hasta ahorita se ha manifestado y por lo que conocemos, ha eliminado aquella tendencia, muchas veces criticada, de procurar construcciones que después se constituían en verdaderos elefantes blancos; sin embargo, hace tiempo se inició un rumor, que después se convirtió en noticia, que fue del

dominio público, en el sentido de que se iba a construir al sur de la ciudad de México una llamada Ciudad Gobierno. Pensamos que esta llamada Ciudad - Gobierno requeriría la inversión de un volumen increíble de recursos que podrían ser mejor aplicados, o más inteligentemente aplicados en otros programas de la propia Secretaría, preguntamos, ¿es cierto la existencia de este proyecto?; otra cuestión, ¿no sería más importante colocar en el orden de prelación, en el orden de prioridades que usted ha mencionado, en primer lugar las ciudades industriales, en cuanto que son proyectos, son invitaciones, son sugerencias muy importantes a desarrollar la industria en el país y posteriormente, sin que le restemos importancia, desde luego, al programa de instalaciones deportivas?

El C. Secretario de Obras Públicas: Bueno, mire usted, voy a empezar respondiendo a la última parte de su pregunta, ya a la altura de esos números, pues realmente no significa que en una forma absoluta le diéramos más importancia a una y a otra obra, sin embargo, yo quisiera que usted reflexionara señor diputado, en el sentido de que la población del México actual es una población móvil y que una gran parte de las tensiones de la juventud de nuestros días, de lo que algunos llaman el problema juvenil, se origina en la inhumanidad de nuestras grandes urbes, en las aglomeraciones, en la escasez de espacios en donde nuestra juventud pueda practicar el deporte, todo nuestro desarrollo está basado en nuestra juventud, si nosotros no tenemos una juventud sana de cuerpo, de espíritu y de mente, nuestro desarrollo no podrá ser sano ni con la proyección que necesitamos. A mi me parece que el programa de instalaciones deportivas, por su enorme y trascendente sentido y contenido social, por lo que representa para nuestra juventud, al ser un complemento del programa de educación en el que tanto nos esforzamos, es base y antecedente necesaria de un programa de industrialización, de un programa de desarrollo económico, como es el que representan las ciudades industriales. (Aplausos.)

Por lo que se refiere a la primera parte de su pregunta señor diputado, tiene usted toda la razón en decir que de los programas de realizaciones del actual Gobierno y en consecuencia del de la Secretaría de Obras, Públicas, están eliminadas las obras suntuarias, están eliminados los elefantes blancos, como usted les ha llamado y está destinado básica y fundamentalmente a realizar obras del mayor beneficio social y económico para la colectividad.

Ese proyecto al que usted se refirió, como la ciudad gubernamental, forma parte de un estudio, de un gran estudio que está íntimamente relacionado con el desarrollo presente y futuro del área metropolitana del Valle de México, de un estudio que, coordinado por la Secretaría de Obras Públicas, fue elaborado en colaboración con la Secretaría de la Presidencia, del Departamento del Distrito Federal y del Gobierno del Estado de México, porque la parte del valle que se ha incorporado hasta formar un casi todo urbano con la ciudad, como ustedes saben, corresponde al Estado de México.

La población del área metropolitana está muy mal distribuida. Se encuentran en esta ciudad las concentraciones humanas casi más fuertes que hay en el mundo, mucho muy superiores a las de otras grandes capitales. Para lograr una correcta distribución de esa población y para permitir que tenga habitación, que pueda desarrollarse ese gran y transcendente programa a cargo del instituto del Fondo Nacional de los Trabajadores para la Vivienda Obrera, tiene que hacerse un principio de planeación y una planeación moderna, nuestra, apegada a la realidad. Para lograrlo, se cuenta con la regeneración de la actual ciudad de México, de lo que puede obtenerse al regenerar las colonias Guerrero, Peralvillo, Santa María, etc., que con un área disponible que tiene que desarrollarse a base de grandes superficies, superficies que se les ha denominado submetrópolis; en una de esas submetrópolis que no son todavía una realidad, que forman parte de un estudio en la del sur y que podría dar albergue a millón y medio de personas, es donde se estima conveniente que pudieran llegar a instalarse aquellas dependencias del Gobierno Federal cuya instalación actual, cuya instalación física es tan deficiente que afecta en forma seria a sus servicios y a su operación. Pero viéndolo todo eso como un gran proyecto, como un gran conjunto toda la submetrópoli, con su propia proyección financiera, con su propio programa de desarrollo y de venta, quedarían recursos para que el Gobierno Federal los destinara a lo que se considera más urgente y más conveniente, a incrementar presupuestos de otras dependencias y sin impedir eso, los edificios del Gobierno Federal si se llegan a realizar, resultarían autofinanciables y además constituirían elementos de promoción y núcleos casi indispensables de crearse para poder promover esos grandes desarrollos urbanos ordenados; porque tengamos en cuenta que esa submetrópoli de millón y medio de habitantes, es otra Guadalajara por ejemplo, entonces ustedes comprenderán que nunca -si se llega a realizar - se tratará de una ciudad gubernamental o de una ciudad gubernativa, los edificios que ahí se ubiquen de oficinas públicas, pues serán unos cuantos perdidos en una ciudad que de albergue a un millón y medio de gentes. (Aplausos.)

El C. Alonzo Sandoval, José Luis: Señor Secretario, nos ha parecido muy inteligente su respuesta; ya no voy a elaborar ninguna otra pregunta, pero en el ejercicio del derecho a disentir, quiero dejar apuntada una reflexión: yo no creo, y en ese sentido creo interpretar a muchos jóvenes del país, yo no creo que pudiéramos aliviar las tensiones juveniles de nuestras grandes concentraciones urbanas construyéndoles o dándoles la oportunidad de jugar fútbol o volibol, yo creo que la juventud de México se inquieta más bien por procurar a este país, a nuestro país, un desarrollo económico independiente, o por lo menos llevar a México al gran desarrollo industrial que como consecuencia habría de traerle a esta misma juventud la

creación de centros recreativos y deportes en donde satisfacer las necesidades de esta naturaleza que la juventud con toda libertad tiene derecho de reclamar. Esta simple y sencillamente es una reflexión, sobre la cual considero importante discutir, no ya en este recinto, porque su respuesta, nos parece, deja un espíritu de satisfacción por cuanto que estas entrevistas significan no solamente el ejercicio frío de un derecho constitucional, sino dejan además, un suave sabor en cuanto que se ha abierto y se está estrechando la comunicación y el dialogo entre dos Poderes: el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo. Muchas gracias. (Aplausos.)

El C. Secretario de Obras Públicas: Fíjese que en el fondo coincidimos, señor diputado.

Usted y el Gobierno, por eso estamos haciendo las dos cosas al mismo tiempo. (Aplausos.)

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Ernesto Velasco Lafarga, del Partido Acción Nacional.

El C. Velasco Lafarga, Ernesto: Las inquietudes de mi pregunta estaban enfocadas, fundamentalmente, ala contestación que usted acaba de dar en relación con el Aeropuerto. Quedan solamente dos interrogaciones que esperamos pueda usted contestarnos, aunque sea en forma aproximada.

¿Qué tiempo se ve obligado el aeropuerto de la ciudad de México a suspender sus servicios en el año por causas climatéricas o de contaminación atmosférica; y si esos tiempos justifican la construcción de alguna pista de emergencia que no obligue a los aviones a recurrir a Acapulco o a Monterrey, como frecuentemente sucede?

El C. Secretario de Obras Públicas: El número de horas es muy pequeño, señor diputado, y desde luego no justificaría, esa única razón, el tener pistas de emergencia o pistas alternas; pero un sistema aeroportuario como el que he descrito, basado y apoyado en otras razones, en otras razones a mayor abundamiento permite que entre sí, unos y otros aeropuertos sean alternos de los demás. (Aplausos.)

El C. diputado interrogante: Muchas gracias.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Jesús Arroyo Alanís, del PRI.

El C. Arroyo Alanís, J. Jesús; Señor Secretario: Tenemos entendido que el Estado ha contratado e incorporado al Servicio Público un número cada vez mayor de ingenieros, arquitectos, economistas, técnicos en planeación y programación, etc. Muchos de ellos considerados entre los mejores técnicos de México.

¿Qué razones podrían explicar el hecho de que teniendo el Gobierno los recursos financieros técnicos y humanos indispensables para realizar las grandes obras que demanda el país, se entreguen los contratos de concesión de obras a compañías particulares, y que medidas de control se adoptan para limitar el margen de utilidades de estas compañías contratistas?

- Respuesta: Mire usted, sería desde luego antieconómico e inconveniente, por lo que significaría el volumen de obra total el que las obras fueran realizadas todas sin excepción por las Dependencias Gubernamentales; por ejemplo que la Secretaría de Obras Públicas, adquiriera todo el equipo de construcción necesario para hacer los caminos; sería tan grande el volumen que los costos que obtendríamos resultarían más elevados de los que tenemos actualmente.

Para el otorgamiento de los contratos, nos ajustamos a lo que dispone la Ley de Inspección de Contratos y Obras Públicas, del mes de diciembre del año de 1965, y que tiene como antecedente las facultades que sobre el particular les otorga a la SOP, y a la del Patrimonio Nacional la actual Ley de Secretarías y Departamentos de Estado.

Esa ley dispone la existencia de una Comisión Técnica Consultiva para fijar las bases y normas de la contratación. Esa Comisión es precedida por el representante de la Secretaría de Obras Públicas, es el secretario de la misma el representante de la Secretaría del Patrimonio Nacional, y forman también parte de ella la Secretaría de Hacienda y las demás dependencias u organismos, cuya actividad constructora es determinante en nuestro proceso histórico.

Básicamente el volumen de obras mayor se otorga mediante concurso. Ese concurso significa ya un principio de competencia. En la actualidad, está bastante bien normalizado el concurso, muy precisados los elementos de que debe constar la documentación que el contratista presente para tratar de obtener el contrato. De tal suerte que, tomando como base de juicio el análisis de los precios unitarios, que es el mejor índice, el mejor documento de que se dispone para saber si la propuesta que hace un determinado contratista es conveniente o no para el gobierno, porque ajustándose a la calidad requerida represente, al mismo tiempo, la mejor cotización, haga que haya una gran diversificación en los contratos.

Por ejemplo, mire usted, en el caso de la Secretaría de Obras Públicas, nosotros en este año tenemos 630 contratos divididos en 284 contratistas. La contratación total tiene un importe de 3 mil 200 millones de pesos. De estos 630 contratos 176 tienen un monto menor de un millón de pesos; 304 están entre un millón y cinco millones de pesos, 84 entre cinco millones y diez millones y únicamente tenemos 66 contratos mayores de diez millones de pesos. En realidad está muy diversificada la contratación. Esta sujeta a mucha competencia. Cada vez el contratista mexicano está más tecnificado, mejor organizado, más alejado de aquella imagen que todavía priva en algunas ocasiones entre el público, pues de un contratista muy rico, de un contratista de origen político, de unos contratos dados por amiguismo o por otras circunstancias. Eso ya no existe, es una verdadera industria, además una industria 100% mexicana, muy interesada, como nosotros, en el progreso y en el desarrollo del país y a quien podemos considerar no como un mal necesario, sino como nuestros

colaboradores, como un elemento de suma en nuestro desarrollo. Esa es mi opinión. (Aplausos.)

El C. Arroyo Alanís, J. Jesús: Señor Secretario: A esta Asamblea le interesaría conocer, ya en otro aspecto de nuestras propias y particulares inquietudes, saber ¿cuáles son los resultados que espera tener la actual administración en la tarea de incorporar a mejor nivel de vida a muchos compatriotas que hasta ahorita permanecen marginados?

El C. Secretario de Obras Públicas: Bueno. Como decía al principio de mis intervenciones tienen servicio de comunicación terrestre en estos momentos más o menos el 55% de la población. Si suponemos que, a grosso modo, la población de México en este año y por facilidad de operaciones ante alrededor de 50 millones, pues podemos decir que tienen comunicación, servicio de comunicación unos 27 millones y medio. Con el programa que en materia de comunicación se está desarrollando, nosotros esperamos que pueda darse el servicio de comunicación terrestre y dar ese servicio de comunicación significa dar todos los servicios, porque con el camino llega todo el progreso en todas su manifestaciones, pues que pudiera llegar a darse servicio entre un 75 y un 80% de la oblación al terminar el actual sexenio, es decir que pudiéramos incorporar a un 20 y un 25% más de la actual población, a unos 12 o 12 y medio millones de mexicanos más.

El C. Arroyo Alanís, J. Jesús: Muchas gracias, señor Secretario.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero, diputado Francisco Ortiz Mendoza del Partido Popular Socialista.

El C. Ortiz Mendoza, Francisco: Señor Secretario, es indudable que la orientación social que se da a las obras que realiza el Poder Público es plausible porque es una forma de redistribuir la riqueza nacional, sin embargo, motivado por la pregunta del compañero que me antecedió en el uso de la palabra, se derivan algunas cuestiones que a nosotros nos interesan aclarar, junto con otra que planteamos cuando en esta Cámara se debatió el proyecto de Ley que creaba el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda, nos interesan estas cuestiones porque el otro aspecto social es el de utilizar mejor los recursos económicos con que cuenta el Estado. En esa oportunidad, señalábamos nosotros, que se corría el peligro debido a que el volumen de obra iba a ser muy grande, que los precios de los materiales de la construcción tendieran a elevarse rápidamente, particularmente en lo que se refiere al cemento. Esto desgraciadamente ya empezó a acontecer, cuando apenas se inicia el programa de obras. Además la prensa informó en su oportunidad que empresas extranjeras habían entrado ya al campo de la producción del cemento. Cuando el compañero nuestro me antecedió en el uso de la palabra planteaba la conveniencia que el Estado construyera, se deslizó una respuesta, por parte de usted, que sienta un principio con que nosotros no compartimos, en el sentido de que si el Estado construyera, los costos serían mayores que si construye la iniciativa privada. Nos complace mucho saber que el amiguismo no está de por medio ya en la construcción. Lamentablemente, hasta donde nosotros tenemos conocimiento, muchos funcionarios de diferentes niveles, están atrás de muchas empresas constructoras y por una ley del desarrollo capitalista las empresas más poderosas tienden a absorber a las más débiles, y al mismo tiempo tienen mil formas de llegar y a la contratación de una manera más accesible. Así advertimos que en este campo donde se gastan más de o cerca de 10 millones de pesos al año, algunas empresas muy poderosas, de gentes muy conocidas en nuestro país, son las que acaparan el mayor número de obras y utilizan a las empresas pequeñas como sus contratistas o de otras formas para poder obtener esos contratos. Al mismo tiempo, por tratarse de sociedades anónimas, se corre el peligroso riesgo de que en esas empresas, a pesar de que aparezcan como empresas auténticamente mexicanas, se encuentra el capital extranjero.

Usted nos ha planteado ya algunas formas en que se está tratando de impedir esta cuestión. Quisiéramos preguntarle: ¿No cree usted conveniente para la economía del país, para proteger los recursos que se recogen del pueblo y que el gobierno invierte en obras, que el cemento pase a manos del Estado ya que es el mayor consumidor de este producto y, por la otra parte, se busquen los caminos para que se creen empresas estatales de la construcción que desarrollen amplios campos en esta actividad? (Aplausos.)

El C. Secretario de Obras Públicas: Mire usted, señor diputado, ya existen empresas estatales de construcción. Muchos de los Estados de la República tienen sus empresas constructoras y nosotros hemos alentado la formación de esas empresas, porque nos parece que el volumen de obra que maneja un Estado, en nuestro caso, el volumen de obra que en materia de caminos maneja a través de una Junta Local de Caminos, es muy adecuado para una empresa, se puede manejar con mucha eficiencia, y las utilidades que se obtienen de esas empresas ayudan en una forma importante al financiamiento de las aportaciones estatales a nuestros planes de obra, y hemos estado en contra y les hemos dicho por qué, y hemos procurado convencerlos de la objeción permanente que las compañías constructoras particulares tienen en contra de esas constructoras estatales. En la realización de otros muchos aspectos de obras, por ejemplo de la conservación de los caminos en nuestra Secretaría, existe también una empresa constructora estatal, las hemos ido adecuando dentro de nuestro régimen de economía mixta como hemos considerado que en nuestra realidad y sin ponerse en situaciones ideales o utópicas, realmente vamos a obtener los mayores beneficios.

En el caso de cemento, señor diputado, lo que se necesita es que nuestros industriales, nuestros empresarios, si son mexicanos, procedan con sentido nacionalista y si son extranjeros y esas empresas están constituidas de acuerdo con nuestras leyes, deberás contribuyan a nuestro

desarrollo. El precio del cemento no tiene por qué subir, la producción máxima instalada que tenemos de cemento es de 8 millones de toneladas y nuestro consumo máximo debe andar alrededor de 6 millones y medio. Si el cemento está costando más de lo debido, es porque hay ocultamiento y acaparamiento y eso debemos denunciarlo y proceder con toda energía como lo marcan nuestras leyes y como lo requiere nuestro desarrollo. (Aplausos.)

El C. Ortiz Mendoza, Francisco: Muchas gracias.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Mauricio Martínez Solano del Partido Revolucionario Institucional.

El C. Martínez Solano, Mauricio: Señor Secretario, escuchamos las orientaciones que dio a esta Asamblea al contestar la pregunta que le hiciera el señor diputado Sandoval Zavala de Acción Nacional en materia de ferrocarriles. Pero quedaron flotando algunas dudas en nuestro ánimo. Como es la rehabilitación de la linea transístmica de Coatzacoalcos a Salina Cruz, la terminación de la obra inconclusa de la línea corta México Tampico. Es por esto que a esta representación le gustaría conocer cuáles son las políticas las orientaciones que tiene esa Secretaría a su cargo en la construcción de nuevas vías férreas si las mismas van a seguir construyéndose en la forma como se ha hecho hasta la actualidad en que se da preferencia a la construcción de carreteras paralelas a las mismas en una situación competitiva, porque pensamos nosotros que estas carreteras, al trazarse, debía hacerse en forma de que fueran alimentadoras de las vías férreas.

En la amplia exposición que ha hecho usted a los distintos compañeros, me parece haber oído que se refieren esos caminos alimentadores exclusivamente a carreteras. ¿No sería posible señor Secretario que fueran también alimentadores de ferrocarriles?

El C. Secretario de Obras Públicas: Señor diputado: Desde luego que son alimentadoras de ferrocarriles. Los caminos alimentadores, son alimentadores, por lo que se refiere a nuestro sistema de transportación terrestre, de nuestro sistema troncal terrestre está constituido por las carreteras federales y por los ferrocarriles. Por los 24,100 kilómetros de nuestra red ferrocarrilera.

Si tenemos contemplado, señor diputado, dentro del programa, la reconstrucción del ferrocarril del Istmo. Dentro del estudio que se está realizando, por la importancia que tiene, por una Comisión especial, una Comisión Intersecretarial creada por el señor Presidente de la República, como es del conocimiento, que tiende a que sea un corredor de exportaciones, un corredor industrial, mediante el desarrollo de las propias fuentes naturales de riquezas en la zona de influencia del Istmo, así como también del desarrollo de zonas aledañas. Así es que sí se contempla.

Y en el programa se incluye también la comunicación, por una vía más corta, de la ciudad de México con Tampico. Lo que en este momento ya no estaría en posibilidades de resolverle a usted, es si lo más conveniente sea la continuación de la vía que llega hasta Honey, o se justifique más desde el punto de vista nacional y para la propia región de Tampico otro trazo, pero si está incluido en el Programa.

Para lo que se refiere a que una carretera paralela a una vía del ferrocarril sea competitiva, tenemos muchos ejemplos que demuestran que no lo es, porque la función -salvo el denominador común del transporte, ya en sus particularidades del ferrocarril y de la carretera son distintos y muy en especial, recuerdo en este momento, un estudio hecho en forma muy acuciosa y que si a usted le interesa, tendré mucho gusto en enviárselo entre la carretera costera del pacífico en Chiapas, y el ferrocarril, entre Arriaga y Tapachula. Verá usted qué datos tan interesantes se deducen de ese estudio. (Aplausos.)

El C. diputado interrogante: Señor Secretario, agradezco sinceramente el ofrecimiento que me hace, señor, de enviarme ese estudio, se lo agradecería fuera tan amable enviarlo a esta Cámara; pero también me gustaría señor Secretario conocer esa situación competitiva no sólo de Arriaga al punto que usted dijo, sino de las otras carreteras. Por ejemplo: de la línea a Laredo, de la línea a Juárez, de la línea a Guadalajara, que son las principales de la República. Muchas gracias.

El C. Secretario de Obras Públicas: Con mucho gusto señor diputado, están a su disposición, como lo están a la de todos ustedes, todos nuestros datos y todos nuestros estudios. (Aplausos.)

El C. diputado interrogante: Muchas gracias señor Secretario.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Simón Jiménez Cárdenas, del PPS.

El C. Jiménez Cárdenas, Simón: Señor Secretario, la pregunta que a nombre de nuestro partido haría a usted, ha quedado contestada en el curso de esta Asamblea, por lo tanto, me permito retirarla y agradecerle sus exposiciones al respecto. Muchas gracias señor Secretario. (Aplausos.)

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado José María Serna Maciel, del PRI.

El C. Serna Maciel, José María: Señor Secretario: Como usted lo ha señalado, la Secretaría a su digno cargo es la responsable de planear y construir la infraestructura del transporte. Cuando salimos a carretera nos encontramos con la opción de usar las carreteras libres a las de cuota. ¿Podría usted señalarnos cuál es el criterio para diferenciar las carreteras federales y las de cuota y como hay un organismo que administra y mantiene a las carreteras de cuota, podría ilustrarnos al respeto, de su funcionamiento de este organismo?

El C. Secretario de Obras Públicas: Con mucho gusto. Mire usted, señor diputado, la razón determinante para que se justifique y, en consecuencia, se construya una carretera, de cuota, es que exista ya un problema de tráfico; que

en la carretera - llamémosle libre - que exista en este momento entre los dos lugares que nos preocupen, haya ya un problema de tránsito diario anual superior a los 3 mil 500 vehículos; porque el criterio que fija la política de caminos de cuotas se basó en el hecho de que, teniendo el país un urgente problema a resolver de comunicación, no era muy justificado que el presupuesto federal que podía invertirse en comunicar regiones aisladas, se hiciera en resolver problemas de tráfico, tomando la existencia de un problema de tráfico como la manifestación de un desarrollo social y económico que permite una capacidad de pago para los habitantes de zona de influencia de esa carretera. Las cuotas que se fijaron a las carreteras son con el fin de cubrir los gastos de administración y de conservación o mantenimiento y, a un largo plazo, amortizar el costo de las mismas. Las especificaciones y normas que se le fijan a esas carreteras son las más altas que tenemos en materia de vías terrestres en nuestro país y pueden equipararse con las mejores del mundo; tienden a acortar el tiempo de recorrido haciéndolo a la vez con la mayor seguridad; a disminuir el costo de operación de los vehículos y a proporcionar los mayores beneficios que sea posible al usuario. El proyecto y, desde luego, la planeación y la construcción de estas carreteras de cuota está a cargo de la Secretaría de Obras Públicas. Su administración y la conservación de las mismas, por delegación expresa que para esto ha hecho la Secretaria de Obras Públicas, está también a cargo de Caminos y Puentes Federales de Ingresos. En su Consejo de Administración está representada la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, que lo preside, la de Obras Públicas y las demás dependencias que tienen que ver con el transporte, con los presupuestos o con las finanzas. Hasta ahora esa política ha sido muy exitosa ha correspondido a los principios, a las bases y a los propósitos que la iniciaron y esperamos que, sobre todo por las sensible mejoría en disminución de costos de conservación y administración se ha observado en lo que va de la presente administración, continúa mejorándose y esté capacitada para administrar el programa de carreteras de cuota que realizará el presente sexenio y se cuente desde luego, con los propios recursos para financiarlo y pagarlo en su oportunidad. (Aplausos.)

El C. Serna Maciel, José María: Muchas gracias, señor Secretario.

El C. Presidente: Se concede el uso de la palabra al compañero diputado Hiram Escudero Alvarez, del Partido Acción Nacional.

El C. Escudero Alvarez, Hiram: Señor Secretario de Obras Públicas, como diputados de la oposición sentimos la obligación de señalar aquellos que a nuestro juicio constituyen errores en la administración pública, en desviaciones en el ejercicio del Poder, señor Secretario, en la página 49 del informe de labores de la Secretaría a su cargo, se informa que con una inversión de cinco millones ciento sesenta y cuatro mil pesos, se hicieron trabajos de conservación, mejoramiento de edificios, para dependencias del Gobierno Federal, que se mencionan, así como los edificios del PRI en el Distrito Federal. En la página 84 del mismo informe de labores aparece el desglose de las cantidades invertidas en la restauración de los edificios del PRI que montan la suma de seiscientos siete mil pesos, como de acuerdo con la fracción IV del Artículo 31 de la Constitución Política los mexicanos estamos obligados a contribuir para los gastos públicos de la Federación, así como del Estado y del Municipio en que se recibe, de la manera proporcional y equitativa que disponen las leyes, quisiéramos saber señor Secretario cuál es en opinión de usted el motivo por el que la Secretaría de Obras Públicas se ocupa de restaurar los edificios del PRI y cuál es el fundamento legal para destinar a esto una parte de las contribuciones del pueblo que constitucionalmente deben dedicarse a otros fines.

El C. Secretario: Mire, señor diputado, yo no tengo ningún motivo que exponer a usted de por qué la Secretaría haya hecho restauraciones en el edificio del PRI porque no las ha hecho, lo que si debo explicarle a usted, ya que hizo la pregunta y a los señores diputados a qué obedece ese renglón. La Secretaría de Obras Públicas es una Secretaría que de acuerdo con sus facultades realiza obras de cooperación con Gobiernos Estatales, con particulares, con Municipios, cuando esas obras son obras de fomento, de beneficio o de interés general. La Secretaría de Obras Públicas realiza muchas obras de interés social que nos piden en colonias populares, ya sea de la ciudad de México o de otras ciudades o de otras poblaciones, que nos piden Clubes de Leones, Clubes de Rotarios, en la propio ciudad de México, en otras ciudades, las obras que allí dice edificios del PRI obedece a un error de transcripción, porque bajo el PRI está incluida una relación de ese tipo de obras que por conducto del partido, ese tipo de obras de tipo social, nos han sido solicitadas, como otras han sido por conducto del club de Leones o de los clubes rotarios o de otros organismos de tipo social. (Aplausos.)

El C. Diputado: Muchas gracias, señor Secretario.

El C. Presidente: Finalmente se concede el uso de la palabra la compañero diputado Juan Moisés Calleja, del Partido Revolucionario Institucional.

El C. Calleja, Juan Moisés: Ciudadano Secretario: Cuando ha habido tan destacada explicación, capacidad e inteligencia al contestar las preguntas que se le han formulado a usted, hemos llegado a la consideración que con amplitud ha realizado usted sus comentarios en relación con el informe de labores. De tal manera que tocándonos a nosotros ser el último interrogante, yo he de agradecer su benevolencia, si acaso incurro en alguna repetición. Insisto, ha sido usted tan amplio en la explicación que seguramente mis preguntas hayan estado contestadas por usted.

Sin embargo, al leer detenidamente el informe de labores en nuestro poder, encontramos en su capítulo noveno lo relativo a los corredores y a las ciudades industriales. En lo particular para nosotros esto tiene tanta relevancia, que podríamos decir sin temor a la equivocación, que destaca la obra de un gobierno. Es la industrialización cierta de un país con un sentido profundamente humana, resolviendo problemas de tanta trascendencia que, en verdad, insisto, representa la obra relevante y revolucionaria de un régimen.

Sin embargo, mi pregunta va encaminada en relación con un dato que usted nos proporciona. ¿Estos corredores y ciudades industriales que se vienen construyendo, durante el ejercicio anterior se hicieron, tomando de la partida de conservación, sin que sean motivo mis palabras de la menor critica, sin embargo hay una preocupación; la conservación es el mantenimiento de las obras realizadas por los regímenes de la Revolución; en consecuencia, pensamos y consideramos que no debe este renglón tener distracciones que pudieran afectarlo. Mi pregunta en concreto, señor Secretario, es en el sentido de saber si esa distracción de los fondos de conservación para la creación de las ciudades industriales puede afectar el renglón de la conservación.

El C. Secretario de Obras Públicas: No, no lo afecta señor diputado y voy a explicarle a usted el porqué. La Secretaría de Obras Públicas tiene una organización fija en todo el territorio nacional, esa organización está representada por la Dirección General de Conservación y sus distintas dependencias foráneas, la conservación la llevamos a cabo fundamentalmente con nuestro propio equipo, es decir, con equipo propiedad del Gobierno Federal y que tiene a su cargo la Secretaría de Obras Públicas y con personal de la propia Secretaría. Para poder cumplir con todos los requisitos técnicos y administrativos que deben llenarse para atender una determinada longitud de caminos, ya se trate de una superintendencia o de una división, nosotros tenemos que crear una planta de organización de un determinado tamaño para que se cumplan con todas las funciones, por lo que se refiere a personal y al equipo que debemos asignarle. Sería absolutamente imposible y además pienso que no sería aconsejable ni conveniente hacerlo, el que esa unidad se ajustara estrictamente a la labor que tiene que desarrollar. Esas unidades tienen una capacidad mayor, disponen de un personal que es imposible que en los puros trabajos de conservación de carreteras tenga ocupado ciento por ciento su tiempo laborable, todos los días; de un equipo que en las mismas condiciones, no puede ni es necesario que esté trabajando diariamente en la conservación. A nosotros nos ha parecido que una manera que tiene el Gobierno de dar efectividad a su organización, de ir quitando a la palabra burocracia lo que significa como término peyorativo de holgazanería y de incapacidad, es saturar hasta el máximo posible a nuestras unidades de trabajo.

La partida que figura ahí que si mal no recuerdo es de veinticinco millones, no quiere decir que le estemos quitando veinticinco millones al Presupuesto de conservación, quiere decir que el trabajo que hemos realizado utilizando ese tiempo que el equipo no puede dedicar a la conservación, y ese personal que tampoco puede dedicarse a la conservación, si lo valuamos a precios de contrato, representa veinticinco millones de pesos. (Aplausos.)

El C. Calleja, Juan Moisés: Señor Secretario: De sus palabras surge otra pregunta que deseo formularle: ¿Todo ello implicaría la realización de una reestructuración interna de la Dependencia que usted dignamente dirige, en el capítulo que estamos comentando?

El C. Secretario de Obras Públicas: Si Señor diputado. A principios de este año se completó la reorganización de la Secretaría de Obras Públicas, iniciada a principios del año pasado, al crear, en cumplimiento del Acuerdo Presidencial correspondiente, la Unidad de Organización y Métodos en nuestra dependencia. A principios del año de 1972, en el mes de enero, se puso en vigor la nueva organización de la Secretaría de Obras Públicas. Una nueva organización que tiende a aprovechar al máximo los recursos a nuestro cuidado; que este criterio que acabo de exponer con relación a las ciudades industriales es el mismo que aplicamos para la supervisión del control de los caminos de mano de obra; todas las direcciones de construcción de la Secretaría y la de conservación, hacen caminos de mano de obra, porque es así como podemos bajar los costos de administración; es así como podemos dedicar, por las cifras que les leí a obras el 95% de nuestro Presupuesto; es como creemos que servimos mejor al pueblo de México, que cuidamos mejor los recursos que han sido puestos a nuestro cuidado; que respondemos mejor a la confianza que en nosotros depositó el señor Presidente de la República y que en la medida de nuestras posibilidades y con el único limite de nuestra capacidad le ayudamos a la tremenda responsabilidad que con tanto entusiasmo y con tanto acierto está desarrollando en beneficio del pueblo de México. (Aplausos.)

El C. Diputado Interrogante: Señor Secretario, podríamos nosotros decir que en el ámbito de esta Cámara flota la satisfacción; pero por su organización, corresponde al Presidente de la misma expresar lo que corresponda, de nuestra parte, muchas gracias señor Secretario.

El C. Presidente: A nombre de la Cámara de Diputados de la XLVIII Legislatura del Congreso de la Unión, me permito expresar el reconocimiento de esta Asamblea Legislativa al C. Presidente de la República, por haber autorizado la comparecencia del Secretario de Obras Públicas ante esta Asamblea Legislativa, en los términos que establece el artículo 93 constitucional.

A usted, C. ingeniero Luis Enrique Bracamontes, le pedimos aceptar nuestras consideraciones por las amplias aportaciones que nos

ha proporcionado respecto a las labores desarrolladas por la Secretaría de su cargo. Dichas explicaciones las ha recibido esta Asamblea y evaluado con objetividad y sentido crítico.

A los compañeros trabajadores profesionistas, técnicos, campesinos, estudiantes, maestros, trabajadores, periodistas y funcionarios de las dependencias oficiales, así como distinguidos maestros de instituciones de educación superior, señoras y señores, como a los distinguidos diputados de la hermana República de Costa Rica, les reiteramos su presencia y les expresamos nuestras más cumplidas gracias.

A la Comisión nombrada para introducir a este recinto al señor ingeniero Luis Enrique Bracamontes, le agradecemos lo acompañe cuando él desee retirarse. (Aplausos.)

(La Comisión cumple su encargo.)

Se ruega a la Secretaría continúe con los asuntos en cartera.

INVITACIÓN

- El C. secretario Soto Reséndiz, Enrique:

"Juventino Castro Sánchez, Gobernador Constitucional del Estado de Querétaro, Qro.

Palacio de Gobierno, a 1o. de septiembre de 1972.

C. Presidente de la H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, Allende y Donceles, México, D. F.

De conformidad con lo que dispone la Constitución Política Local, el día 24 del presente mes, a las 11:00 horas, rendiré el V informe de mi gestión administrativa ante la H. XLIII Legislatura del Estado, en el teatro "Plaza" de esta ciudad, declarado recinto oficial para tal fin.

Como el cumplimiento de este precepto constitucional reviste particular importancia dentro de nuestra vida política interna, me permito invitar muy atentamente a esa honorable representación nacional, por el digno conducto de usted, para que se sirva designar, si a bien lo tiene, una comisión de sus miembros que la represente en el acto de referencia.

La presencia de esa H. Cámara dará singular relieve a la ceremonia y será altamente agradecida por el suscrito.

Aprovecho esta oportunidad para patentizarle mi más atenta y distinguida consideración, Juventino Castro Sánchez."

El C. Presidente: Para asistir a este acto se designan en representación de esta Cámara, a los siguientes compañeros diputados: Alfredo V. Bonfil, Ignacio F. Herrerías Montoya, Marco Antonio Espinosa Pablos, Julio Antonio Gallardo Ortiz, Oscar Navarro Franco y Enrique Soto Reséndiz.

El C. secretario Soto Reséndiz, Enrique: "Telegrama ordinario.

Ixcateopan, Gro., a 20 de septiembre de 1972.

C. diputado Celso H. Delgado, Presidente de la Cámara de Diputados.- Donceles y Allende.- México 1, D. F.

Próximo 2 actual tendrá lugar ceremonia conmemorar descubrimiento de los restos de Cuauhtémoc en esta ciudad, por lo que invítole cordialmente asistir o en su caso nombrar comisión representante ese Cuerpo Legislativo.

El Presidente del Congreso, Benjamín torres Lira."

El C. Presidente: Para asistir a dicho acto, se designan en representación de esta Cámara a los compañeros diputados Rafael Riva Palacio y Juan Zurita Lagunes.

COMUNICACIONES

El C. secretario Soto Reséndiz, Enrique: "Escudo Nacional.- Estados Unidos Mexicanos.- Poder Legislativo Aguascalientes, Aguascalientes.- H. XLVIII Legislatura.

"Año de Juárez".

Asunto: Comunica apertura.

Aguascalientes, Ags., 7 de septiembre de 1972.

C. Presidente de la Cámara de Diputados.- H. Congreso de la Unión.- México, D. F.

Tenemos el honor de comunicar a usted, que la H. XLVIII Legislatura del Estado, abrió hoy, su tercer período extraordinario de sesiones, correspondiente al primer año de su ejercicio constitucional, habiendo quedado integrada su Mesa Directiva en la forma siguiente:

Presidente, diputado J. Jesús Guerrero Escobedo; Vicepresidente, diputado Camilo López Gómez; Secretario, diputado Miguel González Hernández; Prosecretario, diputado J. Guadalupe Padilla Maldonado.

Al participar a usted lo anterior, le reiteramos las seguridades de nuestra consideración atenta y distinguida.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

J. Jesús Guerrero Escobedo, D. P.- Miguel González Hernández, D. S."

- Trámite: De enterado.

- El mismo c. Secretario:

"Escudo Nacional.- Estados Unidos Mexicanos.- Poder Legislativo Aguascalientes, Aguascalientes.- H. XLVIII Legislatura.

Aguascalientes, Ags., 8 de septiembre de 1972.

C. Presidente de la Cámara de Diputados.- H. Congreso de la Unión.- México, D. F.

Tenemos el honor de comunicar a usted, que la H. XLVIII Legislatura del Estado clausuró hoy, el tercer período extraordinario de sesiones, correspondientes al primer año de su ejercicio constitucional.

Al participar a usted lo anterior, le reiteramos las seguridades de nuestra consideración atenta y distinguida.

Sufragio Efectivo. No Reelección. J. Jesús Guerrero Escobedo, D. P.- Miguel González Hernández, D. S."

- Trámite: De enterado.

DICTAMEN DE PRIMERA LECTURA

Condecoración

- El C. secretario Rodríguez Santoyo, Raúl:

"Comisión de Permisos Constitucionales.

Honorable Asamblea:

En escrito fechado el día 9 de septiembre del presente año, el C. Rafael Forsbach Escandón, solicita el permiso constitucional necesario para aceptar y usar la condecoración de la Orden del León de Finlandia, que en el Grado de Primera Clase, insignia de Caballero, le confirió el Gobierno de la República de Finlandia.

En sesión efectuada por la Cámara de Diputados el día 19 del presente mes, se turnó a la Comisión que suscribe para su estudio y dictamen, el expediente relativo a esta solicitud.

Considerando:

a) Que el peticionario ha acreditado su nacionalidad mexicana con el acta de nacimiento respectiva:

b) Que al solicitante le ha sido conferida la distinción respectiva tomando en consideración la labor desarrollada para estrechar los lazos de amistad entre los dos países;

c) Que la solicitud se ajusta a lo establecido por la fracción III, del Apartado B), del artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos;

Y como el C. Rafael Forsbach Escandón no queda sujeto de manera alguna al Gobierno otorgante, esta Comisión se permite proponer a la consideración de esta Honorable Asamblea, el siguiente proyecto de Decreto:

Artículo único. Se concede permiso al C. Rafael Forsbach Escandón para que, sin perder la ciudadanía mexicana, pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden del León de Finlandia, que en el Grado de Primera Clase, Insignia de Caballero, le confirió el Gobierno de la República de Finlandia.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- México, D. F., a 20 de septiembre de 1972.

"Año de Juárez".

Licenciado Luis H. Ducoing.- Licenciado Cuauhtémoc Santa Ana S.- Licenciado Rafael Rodríguez Barrera.- Licenciado Santiago Roel García.- Licenciado Ramiro Robledo Treviño.- Licenciado Rafael Castillo Castro."

El C. secretario Rodríguez Santoyo, Raúl: Señor Presidente, agotados los asuntos en cartera.

INVITACIÓN

El C. Presidente: Esta presidencia se permite informar a la Asamblea que la Gran Comisión de la Cámara de Diputados ha citado al Director General del Instituto Mexicano del Seguro Social para que informe a la misma sobre algunos aspectos de interés del Organismo a su cargo. El expresado funcionario acudirá al Salón Verde de la Cámara el próximo martes 26 del presente mes, en tal virtud se invita a todos los compañeros diputados.

(A las 16:05 horas): Se levanta la sesión y se cita para la próxima que tendrá lugar el viernes 29, a las 11:00 horas, en la que se tratarán los asuntos con los que la Secretaría dé cuenta

TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA Y

"DIARIO DE LOS DEBATES"