Legislatura XLIX - Año I - Período Ordinario - Fecha 19730913 - Número de Diario 17

(L49A1P1oN017F19730913.xml)Núm. Diario:17

ENCABEZADO

Diario de los Debates

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

XLIX LEGISLATURA

Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921

AÑO I México, D. F., Jueves 13 de Septiembre de 1973 TOMO I.- NUM. 17

SUMARIO

Apertura

Se abre la sesión

Luto Nacional por la muerte del doctor Salvador Allende

La Secretaría da lectura al Decreto del Ejecutivo Federal, por el que se declara tres días de luto nacional en homenaje y memoria del doctor Salvador Allende, Presidente Constitucional de la República de Chile, recientemente fallecido. La presidencia manifiesta que la Cámara de Diputados se une al homenaje nacional y recuerda la visita que el ilustre estadista hizo a esta Cámara. Se guarda un minuto de silencio en su honor.

Orden del día

Se da lectura al Orden del día

Acta

Lectura y aprobación del Acta de la sesión anterior

Invitaciones

Del Departamento del Distrito Federal, al homenaje que los tres Poderes de la Unión rendirán a los Héroes de nuestra Independencia el día 16 de los corrientes. Se designa comisión.

Del doctor Francisco Guel Jiménez, Gobernador del Estado de Aguascalientes, a la lectura del Quinto informe de su Gobierno el día 16 de los corrientes. Se designa comisión.

De la Legislatura del estado de Campeche, al acto que tendrá lugar el día 15 del actual, en el que rendirá la protesta de Ley como Gobernador Constitucional de la Entidad el C. licenciado Rafael Rodríguez Barrera. Se designa comisión

Del C. Pablo Silva García, Gobernador del Estado de Colima, a la ceremonia que se llevará a cabo el próximo día 15, en la que dará lectura el sexto y último informe de su gestión administrativa. Se designa comisión

Del ingeniero Alejandro Páez Urquidi, Gobernador del Estado de Durango, al acto que se efectuará el día 15 del presente, en el cual dará lectura al quinto informe de la administración pública. Se designa comisión

De la Legislatura del Estado de San Luis Potosí, a la sesión solemne en la que el licenciado Antonio Rocha, Gobernador de la Entidad, rendirá el sexto informe de Gobierno, el día 15 del actual. Se designa comisión

INICIATIVA DEL EJECUTIVO FEDERAL

Ley general de Población

Enviada por el C. Luis Echeverría Alvarez, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos. A las comisiones correspondientes e imprímase

Informe de Labores

Enviado por el C. ingeniero Eugenio Méndez Docurro, Secretario de Comunicaciones y Transportes, relativo a las labores desarrolladas por la dependencia a su cargo durante el lapso de un año. Resérvese en la Oficialía Mayor para consulta de los ciudadanos diputados y córrase traslado a la H. Cámara de Senadores

Comunicación.

De la Legislatura del Estado de Michoacán, participando la apertura y clausura del primer período extraordinario de sesiones correspondiente al segundo año de ejercicio. De enterado

DICTÁMENES DE PRIMERA LECTURA

Condecoraciones

Cuatro dictámenes de la Comisión de Permisos Constitucionales, con proyectos de decreto, que conceden permiso a los CC. Raúl Valdés Aguilar, Alfonso

Herrera Salcedo, Jorge Carrillo y Mauro Jiménez Lazcano, para que puedan aceptar y usar condecoraciones que les fueron conferidas por el Gobierno de Francia. Primera lectura

Análisis al Informe Presidencial

Los CC. Jesús Guzmán Rubio, Lázaro Rubio Félix, Fernando Estrada Sámano, Salvador Robles Quintero, Carlos A. Madrazo Pintado, Píndaro Urióstegui Miranda y Fedro Guillén Castañón, hacen uso de la palabra para hacer un análisis del Informe rendido el día primero de septiembre por el C. licenciado Luis Echeverría Alvarez, Presidente de la República

Ley Federal de Educación

La secretaría informa que en el transcurso de la sesión se recibió la Iniciativa de Ley Orgánica de Educación, enviada por el Ejecutivo de la Unión, con la que se dará cuenta en la próxima sesión. Se levanta la sesión

DEBATE

PRESIDENCIA DEL C. LUIS DANTÓN RODRÍGUEZ

(Asistencia de 180 ciudadanos diputados.)

APERTURA

- El C. presidente (a las 12:20 horas ): Se abre la sesión. Luto Nacional por la muerte del doctor Salvador Allende

El C. presidente: Se va a proceder a dar lectura al Decreto del Poder Ejecutivo por el que declara luto nacional en homenaje al Presidente Constitucional de la República de Chile, doctor Salvador Allende.

- El C. secretario J. Armando Gaitán Gudiño:

"Decreto que dispone que durante tres días, a partir del 17 de septiembre en curso, se observe luto oficial en homenaje a la memoria del Presidente Constitucional de la República de Chile, doctor Salvador Allende.

Al margen un sello con el Escudo Nacional, que dice: Estados Unidos Mexicanos.- Presidencia de la República.

Luis Echeverría Alvarez, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, con fundamento en la fracción I del artículo 89 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y los artículos 14 y 17 de la Ley Sobre las Características y el Uso del Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales, y

CONSIDERANDO

Primero. Que el pueblo de México se ha conmovido profundamente por la desaparición del ilustre estadista latinoamericano doctor Salvador Allende, Presidente Constitucional de la República de Chile, quien además de encabezar un gobierno electo democráticamente, fue abanderado de una lucha social por reivindicaciones nacionalistas;

Segundo: Que durante su visita a la República Mexicana efectuada del treinta noviembre al tres de diciembre de mil novecientos setenta y dos, el Presidente Allende siempre estuvo rodeado de la simpatía de los mexicanos y contribuyó vigorosamente al mejor entendimiento de las causas comunes de Latinoamérica con exposiciones claras y precisas en diversos foros de nuestro país y aun en el propio H. Congreso de la Unión, donde los representantes de la Nación y de las entidades federativas escucharon y aplaudieron las tesis por él sustentadas;

Tercero. Que su gobierno fue el primero en brindar apoyo a la proposición presentada el diecinueve de abril de mil novecientos setenta y dos, por el Gobierno Mexicano ante la III Reunión de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo, celebrada precisamente en Santiago de Chile, en la que se sostiene que la convivencia internacional debe ser regulada por una Carta de Derechos y Deberes Económicos de los Estados que garantice los siguientes principios: "Libre disposición de los recursos naturales; respeto irrestricto del derecho que cada pueblo tiene a adoptar la estructura económica que le convenga e imprimir a la propiedad privada las modalidades que dicte el interés público; renuncia al empleo de instrumentos y presiones económicas para reducir la soberanía política de los Estados; supeditación del capital extranjero a las leyes del país al que acuda; prohibición expresa a las corporaciones transnacionales de intervenir en los asuntos internos de las naciones; abolición de los prácticas comerciales que discriminan las exportaciones de los países no industrializados; ventajas económicas proporcionales según los niveles de desarrollo; acuerdos que garanticen la estabilidad y el precio justo de los productos básicos; amplia y adecuada transmisión de los avances tecnológicos y científicos, a menor costo y con más celeridad a los países atrasados y mayores recursos para el financiamiento del desarrollo, a largo plazo, bajo tipo de interés y sin ataduras", actitud que mantuvo en forma invariable y decidida en favor de las causas de los países en desarrollo;

Cuarto. Que nuestro país tuvo en él a un leal y solidario amigo;

Quinto. Que el día trece del corriente mes se conmemora la gesta de los Niños Héroes de Chapultepec; el catorce es día de fiesta nacional con motivo de la federalización de Chiapas a México y los días quince y dieciséis se

conmemora la Independencia Nacional, he tenido a bien dictar el siguiente

DECRETO

Artículo único. Los Estados Unidos Mexicanos observarán luto oficial en homenaje a la memoria del Presidente de Chile, doctor Salvador Allende, los días diecisiete, dieciocho y diecinueve del presente mes. Estos días la Bandera Nacional será izada a media asta en todos los edificios públicos.

Dado en la residencia del Poder Ejecutivo Federal, en la ciudad de México, Distrito Federal, a los doce días del mes de septiembre de mil novecientos setenta y tres.- Luis Echeverría Alvarez.- Rúbrica.- El subsecretario de Gobernación, encargado del despacho, Sergio García Ramírez. -.Rúbrica.- El subsecretario de Relaciones Exteriores, encargado del despacho, Rubén González Sosa.- Rúbrica."

El C. presidente: Esta Cámara de diputados se une al homenaje nacional que el Gobierno de México rinde a la memoria del estadista ilustre que desde esta tribuna entregó un mensaje de solidaridad al pueblo de México en nombre del pueblo y del Gobierno de Chile. En consecuencia, se ruega a la Asamblea ponerse de pie para rendirle homenaje con un minuto de silencio.

(Se guarda un minuto de silencio.)

- El mismo C. presidente: Muchas gracias.

ORDEN DEL DÍA

- La C. secretaria María de la Paz Becerril:

"Primer Período Ordinario de Sesiones.

XLIX Legislatura.

Orden del día

13 de septiembre de 1973.

Lectura del acta de la sesión anterior.

El Departamento del Distrito Federal invita al acto que con motivo del homenaje de los tres poderes de la Unión, a los Héroes de nuestra Independencia, tendrá lugar el próximo domingo 16 de septiembre.

El Congreso del Estado de Aguascalientes invita a la sesión solemne que

tendrá lugar el próximo 16 de septiembre, en la que rendirá su Quinto Informe de Gobierno el Gobernador del estado, doctor Francisco Guel Jiménez.

La XLVII Legislatura del Estado de Campeche invita a la sesión solemne en la que rendirá la Protesta de Ley el licenciado Rafael Rodríguez Barrera, como gobernador constitucional, la que tendrá lugar el próximo 15 de septiembre.

Invitación a la ceremonia en la que rendirá el Sexto Informe de su Administración el C. Pablo Silva García, gobernador del Estado de Colima, la que tendrá lugar el próximo 15 de los corrientes, en la capital del Estado.

El C. ingeniero Alejandro Páez Urquidi, gobernador constitucional del Estado de Durango, invita al acto en el que rendirá su Quinto Informe de Gobierno, el que tendrá lugar el próximo 15 de septiembre.

El C. licenciado Antonio Rocha Cordero, gobernador constitucional del Estado de San Luis Potosí, invita al acto en el que rendirá su Sexto informe de Gobierno el próximo 15 de septiembre.

Iniciativa del Ejecutivo Federal

El C. Presidente de la República, envía Iniciativa de Ley General de Población.

De conformidad con el artículo 93 constitucional, el C. secretario de Comunicaciones y Transportes, presenta el Informe de Labores correspondiente al período comprendido de septiembre de 1972 al 31 de agosto de 1973.

Comunicación del Congreso del Estado de Morelia.

Dictámenes de primera lectura.

Cuatro de la Comisión de Permisos Constitucionales con proyecto de decreto por los que se concede permiso a los ciudadanos Raúl Valdés Aguilar, Alfonso Herrera Salcedo, Jorge Carrillo, Mauro Jiménez Lazcano, para que puedan aceptar y usar condecoraciones que les fueron conferidas por gobiernos extranjeros."

ACTA

- La misma C. secretaria:

"Acta de la sesión de la Cámara de diputados de la XLIX Legislatura del H. Congreso de la Unión. celebrada el día once de septiembre de mil novecientos setenta y tres.

Presidencia del C. diputado Luis Dantón Rodríguez.

En la ciudad de México, a las once horas y treinta y cinco minutos del martes once de septiembre de mil novecientos setenta y tres, se abre la sesión con asistencia de ciento ochenta y cinco ciudadanos diputados, según consta en la lista que previamente pasa la secretaría.

Previa aclaración del C. diputado Javier Blanco Sánchez, se aprueba el acta de la sesión anterior efectuada el día seis del presente. Se da cuenta de los documentos en cartera:

Lectura del Orden del día.

Previa aclaración del C. diputado Javier Blanco Sánchez se aprueba el acta de la sesión anterior efectuada el día seis del presente.

Se da cuenta de de los documentos en cartera.

El C. presidente manifiesta a la asamblea que se encuentra a las puertas del recinto, una comisión de diputados del Congreso del Brasil, encabezados por el señor diputado Giorgio Vargas; por lo que ruega a los ciudadanos diputados José Luis Escobar, Matilde del Mar Hidalgo y Alejandro Mújica Montoya, se sirvan introducir al salón a los distinguidos legisladores sudamericanos.

El C. presidente da la más cordial bienvenida a los señores diputados del Brasil y les desea una feliz estancia en nuestro país. Con la presencia de los visitantes, continúa la sesión.

El C. licenciado Manuel M. Moreno, gobernador constitucional del Estado de Guanajuato, invita al acto que tendrá lugar el día

15 del actual, en el cual habrá de rendir el sexto informe de su gestión administrativa.

Para asistir a este acto con la representación de esta Cámara, se designan en comisión a los ciudadanos diputados Antonio Torres Gómez, Estela Rojas de Soto, Ignacio Vázquez Torres, Carlos Machiavelo, Gilberto Muñoz Mosqueda, Francisco González Martínez, Tomás Sánchez Hernández, José Mendoza Lugo y José Luis Estrada.

Invitación del Departamento del Distrito Federal, para asistir al acto conmemorativo del 126 aniversario de la Exaltación de los Niños Héroes, que se efectuará el día 13 de los corrientes, con la asistencia del C.

Presidente de la República.

Se nombra en comisión para llevar la representación de esta Cámara a ese acto, a los siguientes ciudadanos diputados: Carlos Sansores Pérez, Luis Dantón Rodríguez, Serafín Domínguez, Guillermo Jiménez Morales, Mariano Araiza, Jesús Guzmán Rubio, Luis Adolfo Santibáñez y Carlos Dufoo López.

La Comisión Permanente del Congreso de Chihuahua invita a la sesión solemne que se llevará a cabo el día 13 de la actual, en la cual el C. licenciado Oscar Flores, rendirá el quinto informe de gobierno.

Se designan en comisión para asistir a ese acto en representación de esta Cámara a los ciudadanos diputados Julio Cortázar Terrazas, Francisco Rodríguez Pérez, Luis Parra Orozco, Héctor Castellanos, Antonio Carrillo Huacuja, Luis Fuentes Molinar, Ernesto Villalobos y Ángel González Estrada.

El C. licenciado Horacio Flores de la Peña, secretario del Patrimonio Nacional, envía, de conformidad con el artículo 93 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, el informe de labores correspondiente al período comprendido de septiembre de 1972 al 31 de agosto de 1973. Recibo, y resérvese en el Archivo para consulta de los ciudadanos diputados y córrase traslado a la H. Cámara de Senadores.

Cinco oficios de la Secretaría de Gobernación transcribiendo otros tantos de la de Relaciones Exteriores, por los que se solicita el permiso constitucional necesario para que los CC. Carlos González Parrodi, Jaime Peña Vera, Mauro Jiménez Lazcano, Jaime Jiménez Muñoz y Alfonso de Rosenzweig Díaz, puedan aceptar y usar una condecoración que les fue conferida por gobiernos extranjeros. Recibo y túrnese a la Comisión de Permisos Constitucionales.

La C. Norma Herrera Camargo solicita el permiso constitucional necesario para prestar servicios de carácter administrativo, como secretaria, en el Consulado General Norteamericano, en Monterrey, Nuevo León. Recibo, y a la Comisión de Permisos Constitucionales.

Seis dictámenes con proyectos de decreto, suscritos por la Comisión de Permisos Constitucionales, en virtud de los cuales se concede permiso a los CC. Ricardo Galán, Alfonso de Rosenzweig Díaz, Jacqueline González Quintanilla, Jesús Cabrera Muñoz, Ignacio Villaseñor Arano, Joaquín Mercado, Victor Manuel Rodríguez García y Héctor Fuentes, para aceptar y usar una condecoración que les fue otorgada por gobiernos extranjeros. Primera lectura.

El C. presidente informa a la asamblea que el día 10 del actual, la comisión de Diputados del Brasil estuvo en visita informal en la Cámara y fue atendida por la directiva de ésta, junto con la Comisión de Relaciones Exteriores; asimismo que los señores diputados del Brasil, por conducto de su representante, diputado Ildelio Martins, desea en esta ocasión hacer uso de la palabra para despedirse de esta Cámara y de México.

El señor diputado Ildelio Martins da a conocer su mensaje de amistad para con México, y en nombre de los brasileños envía un saludo y su admiración al señor Presidente de la República, por todo lo que está haciendo por México.

El C. presidente agradece a la Delegación Parlamentaria de Brasil, el mensaje de amistad que han dejado a través del señor diputado Ildelio Martins, y a la vez ruega sean portadores del saludo cordial y afectuoso del Congreso de México al Congreso del Brasil y al Presidente de la República.

La Comisión de Permisos Constitucionales presenta tres dictámenes con proyectos de decreto, por los que se concede permiso para aceptar y usar las siguientes condecoraciones a los ciudadanos: Manuel Alonso, la Orden Nacional al Mérito en el grado de Encomienda que le confirió el gobierno de Francia; Manuel Araoz Herrasti, la Real Orden de Victoria en el grado de Comendador que le otorgó el gobierno de Gran Bretaña; y, Fernando Elías Calles, la Orden Nacional al Mérito en el grado de Comendador que le confirió el gobierno de Francia. Segunda lectura.

A discusión en su orden, sin que motiven debate, se reservan para su votación nominal.

Dictamen con proyecto de decreto, suscrito por la Comisión de Permisos Constitucionales, en virtud del cual se concede permiso al C. José Antonio Rodríguez Canales para aceptar y desempeñar el cargo de cónsul honorario de la República de Costa Rica, en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, Segunda lectura.

A discusión, sin ella, en votación nominal se aprueba éste y los anteriormente reservados por unanimidad de ciento ochenta y nueve votos. Pasan al Senado para sus efectos constitucionales.

El C. diputado Julio Camelo Martínez hace uso de la palabra, para dar lectura al informe que presenta la Comisión Inspectora de la Contaduría Mayor de Hacienda, de la que es presidente, en relación a la proposición para la observancia de las disposiciones de la ley por parte del gobierno federal de los organismos descentralizados y empresas de participación estatal, y pone a disposición de los diputados interesados las memorias de la Secretaría del Patrimonio Nacional, correspondiente al ejercicio 70-71 y 1971-72 para las consultas pertinentes y, ruega a los interesados establezcan contacto

con la Comisión Inspectora de la Contaduría Mayor de Hacienda a fin de precisar las recomendaciones que en su caso procedan a hacerse a la Secretaría del Patrimonio Nacional para el cabal cumplimiento de la ley.

El C. diputado José Ángel Conchello, hace uso de la palabra, para dar lectura a una proposición suscrita por diputados miembros del Partido Acción Nacional, tendiente a que la Cámara de Diputados respalde un programa contra la carestía de la vida y lo transmita al Ejecutivo de la Unión a fin de colaborar a resolver este grave problema.

El C. diputado Alejandro Cervantes Delgado, hace uso de la palabra en contra de varios aspectos de la proposición presentada por el diputado José Ángel Conchello; y solicita, por ser de interés y trascendencia nacional, sea turnada para su estudio a comisiones.

Para una aclaración el C. diputado José Ángel Conchello.

El presidente turna la proposición a las comisiones unidas de Estudios Legislativos, Puntos Constitucionales y Presupuesto y Gasto Público.

El C. diputado Horacio Labastida hace una aclaración.

Para hacer consideraciones acerca del Senado de la República y sobre las declaraciones publicadas, el diputado Alejandro Mújica hace uso de la palabra. Sobre el mismo tema lo hace el diputado Rodolfo Echeverría Ruiz.

Para una aclaración el diputado Javier Blanco Sánchez; moción de orden del diputado Luis del Toro Calero.

Los diputados, Héctor Guillermo Valencia y Ezequiel Rodríguez Arcos, hacen referencia a los acontecimientos en la República de Chile; el segundo hace una proposición, la presidencia, le ruega de conformidad con lo dispuesto por el artículo 53 del reglamento, se sirva presentarla por escrito.

El diputado Gerardo Medina hace uso de la palabra para referirse al asunto tratado por los diputados Mújica y Echeverría.

Los diputados Fidel Herrera Beltrán y Manuel González Hinojosa, hacen consideraciones acerca de la situación que vive el pueblo chileno.

A las quince horas y quince minutos, se levanta la sesión, y se cita para la que tendrá lugar el jueves trece del presente, a las once horas y treinta minutos."

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo. Aprobada.

INVITACIONES

- La misma C. secretaria:

"Escudo Nacional.- Departamento del Distrito Federal.- México, D.F., a 25 de septiembre de 1973.

C. diputado licenciado Luis Dantón Rodríguez J., presidente de la H.

Cámara de Diputados.- Donceles y Allende.- Presente.

El Departamento del Distrito Federal, por conducto de esta dirección general, atentamente invita a usted a la ceremonia que tendrá lugar el próximo domingo 16 del actual, a las 9:30 horas, con motivo del homenaje de los tres poderes de la Unión a los héroes de nuestra Independencia, en la columna ubicada en el Paseo de la Reforma de esta capital.

Al mismo tiempo, me permito rogarle tenga a bien dictar sus respetables instrucciones con objeto de que una comisión que represente a esa H. Cámara de Diputados a su digno cargo, asista al acto de referencia y haga el depósito de una ofrenda floral.

Reitero a usted, con mi reconocimiento, las seguridades de mi atenta y distinguida consideración.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

El director general, profesor Carlos Jalife Elías".

El C. presidente: Para asistir a este acto, se designa en representación de esta Cámara encabezados por la presidencia, a los siguientes ciudadanos diputados: Mario Ruiz de Chávez, Oscar Bravo Santos, Ofelia Castillo Ontiveros, Ángel Olivo Solís, Jorge Durán Chávez, Modesto A. Guinart López, Tomás Sánchez Hernández, Carlos Armando Madrazo y Arturo González Cosío.

- La C. secretaria María de la Paz Becerril:

"Doctor Francisco Guel Jiménez, gobernador constitucional del Estado de Aguascalientes.- México, D.F., a 10 de septiembre de 1973.

C. presidente de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.-

Presente.

Por acuerdo del C. gobernador constitucional del Estado de Aguascalientes tengo el agrado de hacerle llegar su más cordial invitación para que sea designada la representación de esa H. Cámara con el propósito de que asista a la lectura de su quinto informe de gobierno.

Este acto se efectuará en el Teatro Morelos de la ciudad de Aguascalientes, declarado al efecto recinto oficial de la legislatura local.

Con el respeto que esa representación nacional nos merece ruego a usted aceptar nuestra atenta invitación y considerarme su atento y seguro servidor. Por acuerdo del C. gobernador, Rodolfo Landeros Gallegos, representante del gobierno del Estado de Aguascalientes."

El C. presidente: En consecuencia, se designa para representar a esta Cámara a los siguientes ciudadanos diputados: Federico Martínez Manautou, Julio Camelo Martínez, Efrén Ricárdez Carrión, Higinio Chávez Marmolejo, José de Jesús Medellín Muñoz, Rubén Rodríguez Lozano y Armando Calzada.

- La C. secretaria María de la Paz Becerril:

"Escudo del Estado de Campeche.

La H. Cuadragesimaséptima Legislatura del Estado de Campeche, invita a usted muy atentamente a la sesión solemne que se efectuará, a partir de las 20 horas del próximo 15 de septiembre, en el Cine de la Cruz, declarado recinto oficial, en la que el ciudadano Rafael Rodríguez Barrera, rendirá la protesta de ley

ante esta representación y tomará posesión del cargo de gobernador constitucional para el sexenio 1973-1979.

Campeche, Cam., agosto de 1973.- Concepción Palma de Wong, D. P.- Salustiano Cahuich Canul, D.S.- Carlos Heredia Pérez, D. S. " - El C. presidente: Para representar a esta Cámara en el acto al que se ha hecho alusión se designa a los siguientes señores diputados: Carlos Sansores Pérez, Rodolfo Echeverría Ruiz, Píndaro Urióstegui Miranda, Victor Cervera Pacheco, Sergio Benhumea Munguía, Luis del Toro Calero, Efraín Ceballos, Hernán Morales Medina, Rosa María Martínez Denegri y Luis Fernando Solís Padrón.

- La misma C. secretaria:

"CC. Secretarios de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.-

México, D. F.

Pablo Silva García, gobernador constitucional del Estado de Colima, tiene el alto honor de invitar a usted a la ceremonia en que por mandato legal, rendirá su sexto informe de gobierno ante el H. Congreso del Estado el día 15 del actual a las 19:00 horas, en el Teatro Hidalgo de esta ciudad, declarado para el efecto recinto oficial.

Colima, Col., septiembre de 1973."

El C. presidente: para este acto, se designan a los señores diputados, Daniel Moreno Díaz, Jorge A. Gaitán Gudiño, Francisco Rodríguez Pérez, Lorenzo Reynoso Ramírez, y Francisco Rodríguez Ortiz.

- La C. secretaria María de la Paz Becerril:

"Ingeniero Alejandro Páez Urquidi, gobernador constitucional del Estado de Durango.- Durango, Dgo., a 28 de agosto de 1973.

Señor diputado licenciado Luis Dantón Rodríguez, presidente de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- Cámara de Diputados.- Donceles y Allende.- México, D.F.

Muy estimado señor diputado licenciado Rodríguez y fino amigo:

El día 15 de septiembre próximo a las 10:30 horas en el Teatro Principal 'Ricardo Castro' de esta ciudad, que para el efecto será declarado recinto oficial, presentaré ante el H. Congreso del Estado de Durango la quinta memoria del estado de la administración pública.

Para el pueblo, para el gobierno del Estado de Durango y para mí en lo personal, sería un gran honor que la H. Cámara de Diputados estuviera representada en este trascendental acto, para lo cual me permito extender a usted y por su digno conducto a los señores diputados de la H. XLIX Legislatura, mi muy cordial invitación para que se sirvan favorecerme con su distinguida presencia en la ceremonia mencionada.

Hago propicia la ocasión para reiterar a usted las seguridades de mi muy distinguida y alta consideración.

Rúbrica."

El C. presidente: Para asistir en representación de esta Cámara, se designa a los siguientes ciudadanos diputados: Aurelia de la Cruz Espinosa, Jesús Gamero Gamero, Victor Rocha Marín, Mario Rivas Escalante, José Murat, José Castillo Pombo, José Luis Escobar y Miguel Fernández del Campo.

- La C. secretaria María de la Paz Becerril:

"Escudo Nacional.

CC Secretario de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- México, D. F.

La Diputación Permanente de la H. XLVII Legislatura del Estado, tiene el honor de invitar a usted (es) a la sesión solemne con la cual abrirá la H.

XLVIII Legislatura el primer período ordinario de sesiones correspondiente al segundo año de su ejercicio constitucional, misma en que el C. licenciado Antonio Rocha, gobernador constitucional del Estado, rendirá su sexto informe de gobierno.

El acto se verificará el día 15 de los corrientes, a partir de las 10:00 horas, en el Teatro de la Paz, declarado recinto oficial para este efecto. San Luis Potosí, S. L. P., septiembre de 1973. - Diputado profesor Jorge Márquez Borjas, presidente. - Diputado licenciado Leonardo Hernández Covarrubias, secretario."

El C. presidente: Se acepta la invitación formulada y se designa para tal efecto a los siguientes señores diputados: Ángel Rubio Huerta, Vicente Ruiz Chiapeto, Adalberto Lara Nuñez, Rafael Tristán López, Ernesto Báez Lozano, Reyes Rodolfo Flores Zaragoza, José Ortiz Arana, Filiberto Soto Solís, Carlos Gómez Alvarez y Eugenio Ortiz.

INICIATIVA DEL EJECUTIVO FEDERAL

Ley General de Población

- El C. secretario J. Armando Gaitán Gudiño:

"Escudo Nacional.- Secretaría de Gobernación.

CC. Secretarios de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- Presentes.

Por instrucciones del C. Presidente de la República y para los efectos constitucionales, con el presente les envío el documento que a continuación se menciona:

Iniciativa de Ley General de Población.

Reitero a ustedes en esta oportunidad las seguridades de mi consideración distinguida.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

México, D. F., a 12 de septiembre de 1973.- El secretario, licenciado Mario Moya Palencia."

"CC. Secretarios de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- Presentes.

El desarrollo económico y social sirve al hombre, destinatario último y fundamental de la gran tarea de desenvolvimiento que se ha propuesto y lleva a cabo la Nación. De ahí, entonces, que la población deba ser contemplada en todo caso como elemento integral del desarrollo.

La población presenta transformaciones sustantivas que es preciso conocer, interpretar e instrumentar, regulándolas jurídicamente. Esta

regulación integra el fundamento normativo del constante cambio que se registra en la vida del país y orienta las transformaciones, con criterio humanista, en beneficio del individuo y de la comunidad de la que aquél forma parte.

Hoy día existe y se acentúa en casi todos los países del mundo, en mayor o menor grado, una justa preocupación por las cuestiones demográficas. Ha cobrado presencia, cada vez más intensa, la inquietud por los peligros que aparejan el rápido y excesivo crecimiento de la población y el indebido uso de los recursos naturales.

México posee un extraordinario incremento demográfico, acaso sin precedente histórico. En la actualidad, nuestro país cuenta con cincuenta y seis millones de habitantes, que se duplicarán en sólo veinte años. De persistir esta tendencia, México arribará al siglo XXI con ciento treinta y cinco millones de habitantes, que no sólo demandarán habitación, cultura, empleo y servicios de diversa índole, sino que impondrán una acelerada dinámica social. Los padres de esos millones de mexicanos del año dos mil nacieron ya o están por nacer, por lo que esa previsión demográfica no es un hecho incierto, sino que está extraído de nuestra más evidente realidad. La marcada elevación del ritmo de crecimiento de nuestra población, uno de los más altos del mundo, ha traído consigo el rejuvenecimiento de aquélla, y este influjo posee, a su turno, inmediatas resonancias en todos los ámbitos.

La expansión demográfica intensa limita considerablemente la capacidad de ahorro, en la medida en que disminuye, por una parte, la proporción de la población económicamente activa, al paso que aumenta, por la otra, el grado de dependencia sobre un número cada vez menor de mexicanos, en números relativos.

El rejuvenecimiento de que se habla incide asimismo sobre la educación, cuyas renovadas exigencias gravitan sobre el gasto público, que sufre la presión de una creciente demanda para atender todos los niveles educativos, particularmente el primario.

El acelerado incremento de la población representa un también acelerado aumento en la demanda de empleo. La oferta de mano de obra, que sin cesar se multiplica, hace necesario aumentar en la misma proporción el número de fuentes de trabajo.

Igualmente se ha reflejado este fenómeno sobre el desenvolvimiento de los centros urbanos, que deben proveer, con gran diligencia, los servicios municipales, cada vez mayores y mejores, que requiere su creciente población.

No sólo repercute el incremento de la población sobre la capacidad de ahorro, la educación popular, la generación de empleos y la multiplicación de servicios municipales. Afecta también, en medida determinante, otros numerosos renglones. De todo ello resulta, pues, que la población deba ser considerada, a título de elemento fundamental, al formularse las políticas de empleo, de redistribución del ingreso, de educación, de fomento al ahorro, de industrialización, de energéticos, de provisión de artículos de primera necesidad o de creación de polos de desarrollo.

México se encuentra empeñado en una magna tarea de desarrollo. Para conferir vigor al esfuerzo nacional y no diluirlo en el mar del crecimiento demográfico, es conveniente estabilizar racionalmente la población, a fin de que su dinámico no anule los éxitos que haya logrado la sociedad en su conjunto ni minimice las actividades que el Estado realiza para proporcionar a la población una vida digna en lo material y en lo espiritual.

Hasta un pretérito muy cercano, México afrontó con diverso criterio esta cuestión. Reducido en número de habitantes como consecuencia de la Revolución, fue natural que una de las preocupaciones centrales de la Nación, en los años inmediatos al movimiento armado, fuese recuperar y aun multiplicar los recursos humanos perdidos o agotados en la contienda civil. La vastedad de nuestro territorio, deformada con la falsa tesis del "cuerno de la abundancia", exigía un apolítica de crecimiento de la población. El justo anhelo de convertirnos en un país grande determinó el rumbo de expansionismo demográfico a partir de la primera generación revolucionaria.

Algunos de los triunfos más notables de la propia Revolución hicieron el resto: gracias a la expansión de los servicios de salud pública y de higiene se abatieron notablemente la tasa de mortalidad y las condiciones de morbilidad y aumentó en forma sustancial, por otra parte, la esperanza de vida al nacimiento.

El Gobierno de la República está plenamente consciente de la importancia y complejidad del problema demográfico. Su acción habrá de inscribirse, como invariablemente acontece, en el contexto jurídico político de la Constitución que nos rige, respetuosa de las libertades fundamentales del hombre y de la alta dignidad de la familia, en cuya preservación nos hallamos permanentemente comprometidos.

En nuestro pasado informe ante vuestra soberanía afirmamos ya la necesidad de considerar seriamente un problema al que, desde hace tiempo, han hecho frente muchas naciones de diversa estructura política y económica. Vastos sectores de nuestra población se plantean el problema del crecimiento de la familia. Expresamos también la formal ratificación de nuestro humanismo nacionalista y revolucionario, sosteniendo que todo proceso social debe tener como centro al hombre concreto, y que mejorar su condición implica, siempre, preservar su dignidad y su libre albedrío. En el mismo informe afirmamos que los recursos humanos constituyen el núcleo dinámico de todo cambio trascendente y que el fundamentos del progreso es el poder trasformador de la voluntad comunitaria. En ningún caso estableceríamos, por lo demás, soluciones informadas por la presión del exterior, que encubran una determinada postura ideológica. Las respuestas a los problemas de México deben inspirarse, única y exclusivamente, en las necesidades y realidades de nuestro país, apoyarse en su respeto por la libertad y dignidad de la persona humana y hacer posible la realización de sus anhelos y esperanzas.

Con fundamento en tales principios, es preciso rediseñar y acelerar la estrategia de nuestro desarrollo, incorporando a ella una auténtica política demográfica, que tome en cuenta el volumen, la estructura, la dinámica y la distribución de la población, que incluya la planeación familiar y que permita efectuar racionalmente, por limpias vías institucionales, los cambios y las transformaciones en los que estamos comprometidos.

Debemos advertir, y lo hemos ya, que una política de población no es un sustituto para el desarrollo económico. Por ello, rechazamos la idea de que un puro criterio demográfico orientado hacia la reducción de la natalidad, pueda sustituir a la compleja empresa del desarrollo. En cambio, ratificamos nuestra creencia en el valor de los recursos humanos de nuestro pueblo y en el poder transformador de nuestra instituciones, en la mejor explotación y preservación de nuestros recursos naturales, en los beneficios de la industrialización y en los avances que podemos lograr mediante la ciencia y la tecnología para hacer frente a los desafíos, a que arriba aludimos, que significan la alimentación, el empleo, la educación y la salud de los millones de mexicanos que nacerán en el futuro.

De todo lo anterior resulta, entonces, que la contemplación de los problemas demográficos deba plantearse en términos totalmente diferentes de aquellos que fundaron la legislación existente. Se precisa una política demográfica adecuada para la época y las necesidades actuales, que se oriente a crear mejores condiciones de vida para nuestro pueblo, a lograr mayor productividad y nivel de empleo y a distribuir más justamente el ingreso. A estos propósitos corresponde la orientación del proyecto de Ley General de Población que ahora presentamos ante este H. Congreso de la Unión, cumpliendo así el ofrecimiento formulado en el mismo informe de Gobierno al que arriba se hizo referencia.

Establecidos los propósitos y límites de la acción del estado en este terreno, es preciso crear los órganos y mecanismos necesarios para su conveniente realización. Dado que los problemas de la población repercuten en todas las áreas de la tarea pública, las acciones que en torno a aquélla se resuelvan tendrán consecuencias en el ámbito de competencia de numerosas Secretarías y Departamentos de Estado. Dentro de estos objetivos, en el proyecto se conservan atribuciones de la Secretaría de Gobernación para ser el conducto del Ejecutivo Federal en la resolución de los problemas demográficos nacionales, se fijan las bases jurídicas y operativas de esa coordinación y se estructura al Consejo Nacional de Población como pieza maestra para una acción integral del Estado en este campo, razón por la cual dicho órgano está integrado tanto por las dependencias que intervienen en el manejo directo de cuestiones de población, como por las que realizan tareas relacionadas con la planeación y la aceleración del proceso de desarrollo.

Para nutrir su información con las aportaciones de las más diversas disciplinas, convergentes en la solución de los problemas que suscita el desarrollo, se dispone que este Consejo pueda hacerse auxiliar por consultores técnicos, que deberán ser del más alto nivel, e integrar las unidades interdisciplinarias de asesoramiento que estime pertinentes. De este modo se asegura la mayor eficacia en el cumplimiento de las tareas encomendadas al Consejo.

La cada vez más amplia participación de México en la vida internacional determina que su política migratoria se constituya en un instrumento de desenvolvimiento autónomo y no en un esquema de dependencia. Por ello, la presente iniciativa contempla dicha política en los términos pertinentes a la debida satisfacción de los intereses nacionales: restrictiva, cuando sea necesario proteger, con particular énfasis, la actividad económica, profesional o artística de los mexicanos; abierta, por el contrario, en la medida en que resulte conveniente alentar la internación de extranjeros cuyo desempeño traiga consigo beneficios culturales, sociales y económicos para la Nación. Se debe advertir que los amplios términos utilizados en la formulación de este ordenamiento permiten su eficaz coordinación con los sistemas que derivan de la Ley para Promover la Inversión Mexicana y Regular la Inversión Extranjera y la Ley sobre el Registro de Transferencia de Tecnología y el Uso y Explotación de Patentes y Marcas.

La iniciativa se rige por la idea de que sólo serán admitidos a la vida nacional los extranjeros que deseen sumarse al esfuerzo por el desarrollo del país y compartir experiencias, instituciones y propósitos con los mexicanos.

Por ello, la materia migratoria se ha ordenado sistemáticamente, disponiendo en forma adecuada cada uno de los temas que la integran.

Se estimó conveniente suprimir la autorización para la inmigración colectiva, prevista por la ley en vigor, dado que carece de aplicación en las actuales circunstancias.

Los inmigrantes investigadores, científicos y técnicos son objeto de tratamiento especial, por cuanto su ingreso al país puede ser útil para el desenvolvimiento nacional.

La protección de las víctimas de persecución política se limita actualmente a los nacionales de países latinoamericanos. Con un designio más moderno y generoso, la iniciativa extiende los beneficios del asilo territorial a los perseguidos de cualquier nacionalidad. De esta suerte, nuestro país reafirma y enriquece su convicción humanista, sin distinción de nacionalidades.

Por lo que toca a las calidades migratorias de no inmigrantes y de inmigrantes, que el proyecto reproduce, cabe mencionar algunas innovaciones. Así, se modifica y amplía el régimen del rentista considerándolo dentro de la calidad de no inmigrante. Dentro de la misma calidad Migratoria se introduce la característica de consejero, en favor de quienes presten funciones de asesoramiento a empresas o a asistan a sesiones

de consejo de administración o a asambleas de sociedades.

En cuanto a los inmigrantes, se incorporan novedades, como la autorización otorgada a los rentistas para que presten servicios como científicos, investigadores científicos o técnicos y docentes, cuando estas actividades sean convenientes para el país. También se fija la característica de científico para quien con tal carácter se interne en México con el propósito de dirigir o realizar investigaciones, preparar investigadores o difundir conocimientos especializados. Los inmigrantes inversionistas, por su parte, podrán internarse en México e invertir en un ramo de la industria, de conformidad con las leyes de la materia.

La adquisición por parte de extranjeros de bienes inmuebles, derechos reales sobre los mismos o acciones de empresas dedicadas al comercio de dichos bienes, se regula en forma más rigurosa, dado un interés nacional. Por ello, se ha sujetado este tipo de operaciones a previo permiso de la Secretaría de Gobernación, independientemente de que los interesados se encuentren dentro o fuera del territorio nacional y de que actúen, en consecuencia, por sí mismos o mediante apoderados.

Otras novedades de menor relieve han sido incorporadas en la parte sistemática del proyecto, orientadas a lograr el pleno cumplimiento de los fines a los que este documento pretende servir, en los diversos ámbitos que contempla.

Por lo que toca a la aplicación de penas, se ha ampliado el margen de arbitrio judicial, a fin de que la sanción impuesta responda a las circunstancias del acaso, y se apoye, para ello, tanto en la entidad objetiva del delito como en las circunstancias peculiares del agente.

La práctica ha mostrado la conveniencia de distinguir entre el extranjero que se interna al país ilegalmente y el que lo hace con permiso de la autoridad, proporcionando datos falsos para obtener éste. Además de las sanciones correspondientes a las hipótesis anteriores, se establece una pena para quien, habiéndose internado legalmente, viola las disposiciones legales o administrativas a que está sujeta su estancia y se coloca, por lo tanto en una situación irregular.

Se incorpora un tipo delictivo, para sancionar a quienes por sí mismos o por cuenta de otros introducen o pretenden introducir extranjeros a otro país, a través del territorio nacional, sin contar con la autorización que la ley reclama. Se trata aquí, como lo ha puesto de relieve la experiencia, de una actividad que frecuentemente se realiza y que es necesario combatir. En virtud de lo anterior y con fundamento en lo que dispone el artículo 71, fracción I, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, por el digno conducto de ustedes someto a la consideración de este Honorable Congreso lo siguiente

INICIATIVA

DE

LEY GENERAL DE POBLACIÓN

CAPITULO I

Objeto y Atribuciones

Artículo 1º. Las disposiciones de esta Ley son de orden público y de observancia general en la República. Su objeto es regular los fenómenos que afectan al volumen de la población, su estructura, dinámica y distribución en el territorio nacional con el fin de lograr que participe justa y equitativamente de los beneficios del desarrollo económico y social.

Artículo 2º. El Ejecutivo Federal, por conducto de la Secretaría de Gobernación, dictará, promoverá y coordinará en su caso, las medidas adecuadas para resolver los problemas demográficos nacionales.

Artículo 3º. Para los fines de esta Ley, la Secretaría de Gobernación dictará y ejecutará o en su caso promoverá ente las dependencias competentes, las medidas necesarias para:

I. Ajustar los programas de desarrollo económico y social a las necesidades que planteen el volumen, estructura, dinámica y distribución de la población.

II. Realizar programas de planeación familiar a través de los servicios educativos y de salud pública de que disponga el sector público y vigilar que dichos programas y los que realicen organismos privados, se llevan a cabo con absoluto respeto a las libertades individuales y preserven la dignidad de las familias, con el objeto de regular racionalmente y estabilizar el crecimiento de la población, así como lograr el mejor aprovechamiento de los recursos humanos y naturales del país.

III. Disminuir la mortalidad.

IV. Influir en la dinámica de la población a través de los sistemas educativos, de salud pública, de capacitación profesional y técnica, y de protección a la infancia, y obtener la participación de la colectividad en la solución de los problemas que la afectan.

V. Promover la plena integración de los grupos marginados al desarrollo nacional.

VI. Sujetar la inmigración de extranjeros a las modalidades que juzgue pertinentes, y procurar la mejor asimilación de éstos al medio nacional y su adecuada distribución en el territorio.

VII. Restringir la emigración de nacionales cuando el interés nacional así lo exija.

VIII. Procurar la planificación de los centros de población urbanos, para asegurar una eficaz prestación de los servicios públicos que se requieran.

IX. Estimular el establecimiento de fuertes núcleos de población nacional en los

lugares fronterizos que se encuentren escasamente poblados.

X. Procurar la movilización de nacionales de las zonas muy pobladas en la República, hacia las regiones de baja densidad de población para su radicación en ellas.

XI. Promover la creación de poblados, con la finalidad de agrupar a los núcleos que viven geográficamente aislados.

XII. Coordinar las actividades de las dependencias del sector público federal, estatal y municipal así como las de los organismos privados para el auxilio de la población en las áreas en que se prevea u ocurra algún desastre.

XIII. Las demás finalidades que esta Ley u otras disposiciones legales determinen.

Artículo 4º. Para los efectos del artículo anterior, corresponde a las dependencias del Poder Ejecutivo, y a las demás entidades del Sector Público, según las atribuciones que les confieran las leyes, la aplicación y ejecución de los procedimientos necesarios para la realización de cada uno de los fines de la política demográfica nacional; pero la definición de normas, las iniciativas de conjunto y la coordinación de programas de dichas dependencias en materia demográfica, competen exclusivamente a la Secretaría de Gobernación.

Artículo 5º. Se crea el Consejo Nacional de Población que tendrá a su cargo la planeación demográfica del país, con objeto de incluir a la población en los programas de desarrollo económico y social que se formulen dentro del sector gubernamental y vincular los objetivos de éstos con las necesidades que plantean los fenómenos demográficos.

Artículo 6º. El Consejo Nacional de Población estará integrado por un representante de la Secretaría de Gobernación que será el titular del ramo y que fungirá como presidente del mismo; y un representante de cada una de las Secretarías de Educación Pública, Salubridad y Asistencia, Hacienda y Crédito Público, Trabajo y Previsión Social y de la Presidencia; y uno del Departamento de Asuntos Agrarios y Colonización, que serán los titulares de los mismos o los Subsecretarios y Secretario General que ellos designen. Por cada representante propietario se designará un suplente que deberá tener el mismo nivel administrativo que aquél, o el inmediato inferior.

Cuando se trate de asuntos de la competencia de otras dependencias u organismos del sector público, el Presidente del consejo podrá solicitar de sus titulares que acudan a la sesión o sesiones correspondientes o nombren un representante para desahogar aquéllos.

El Consejo podrá contar con el auxilio de consultorías técnicas e integrar las unidades interdisciplinas de asesoramiento que estime pertinentes, con especialistas en problemas de desarrollo y demografía.

CAPITULO II

Migración

Artículo 7º. Por lo que se requiere a los asuntos de orden migratorio a la

Secretaría de Gobernación corresponde:

I. Organizar y coordinar los distintos servicios migratorios.

II. Vigilar la entrada y salida de los nacionales y extranjeros, y revisar la documentación de los mismos.

III. Interpretar y aplicar esta Ley y su Reglamento.

IV. Las demás facultades que le confieran esta Ley y su Reglamento así como otras disposiciones legales o reglamentarias.

Artículo 8º. Los servicios de migración serán:

I. Interior.

II. Exterior.

Artículo 9º. El servicio interior estaría a cargo de las oficinas establecidas por la Secretaría de Gobernación en el país y el exterior por los Delegados de la Secretaría, por los miembros del Servicio Exterior Mexicano y las demás instituciones que determine la Secretaría de Gobernación con carácter de auxiliares.

Artículo 10. Es facultad exclusiva de la Secretaría de Gobernación fijar los lugares destinados al tránsito de personas y regular el mismo, por puertos marítimos, aéreos y fronteras, previa opinión de las Secretarías de Hacienda y Crédito Público, Comunicaciones y Transportes, Salubridad y

Asistencia, Agricultura y Ganadería y en su caso la de Marina; asimismo consultará a las demás dependencias y organismos que juzgue conveniente.

Las dependencias y organismos que se mencionan, están obligados a proporcionar los elementos necesarios para prestar los servicios que sean de sus respectivas competencias.

Artículo 11. El tránsito internacional de personas por puertos, aeropuertos y fronteras, sólo podrá efectuarse por los lugares designados para ello y dentro del horario establecido, con la intervención de las autoridades migratorias.

Artículo 12. La Secretaría de Gobernación podrá cerrar temporalmente los puertos aéreos, marítimos y fronteras, al tránsito internacional, por causas de interés público.

Artículo 13. Los nacionales y extranjeros para entrar o salir del país, deberán llenar los requisitos exigidos por la presente Ley, sus reglamentos y otras disposiciones aplicables.

Artículo 14. La Secretaría de Gobernación vigilará en relación con el servicio migratorio, el cumplimiento de las disposiciones relativas a estadística nacional. Las personas a que se refieren los artículos 18 y 19 deberán proporcionar para este efecto, los datos necesarios al internarse al país.

Artículo 15. Los mexicanos para ingresar al país comprobarán su nacionalidad, satisfarán el examen médico y proporcionarán los

informes estadísticos que se les requieran. Cuando un mexicano, enfermo de un mal contagioso, desee internarse al país, las autoridades de migración cooperarán con las de sanidad para su pronta internación en un centro de salud, estación sanitario u hospital más próximo que designen las propias autoridades sanitarias.

Artículo 16. El servicio de migración tiene prioridad, con excepción del de sanidad, para inspeccionar la entrada o salida de personas en cualquier forma que lo hagan, ya sea en transportes nacionales o extranjeros, marítimos, aéreos o terrestres, en las costas, puertos, fronteras y aeropuertos de la República.

Artículo 17. Todo lo relativo a la vigilancia e inspección de personas en tránsito por aire, tierra y mar, cuando tenga carácter internacional queda a cargo del servicio de migración, con excepción de las funciones de sanidad.

Artículo 18. Quedan exceptuados de la inspección de que trata el artículo 16, los representantes de gobiernos extranjeros que se internen en el país en comisión oficial con sus familias y empleados, así como las personas que conforme a las leyes, tratados o prácticas internacionales estén exentos de la jurisdicción territorial, siempre que exista reciprocidad.

Artículo 19. A los funcionarios de gobiernos extranjeros que en comisión oficial se internen el país se les darán las facilidades necesarias, de acuerdo con la costumbre internacional y las reglas de reciprocidad.

Artículo 20. La Secretaría de Gobernación reglamentará de acuerdo con las particularidades de cada región, las visitas de extranjeros a poblaciones marítimas, fronterizas y aeropuertos con tránsito internacional. Lo mismo se observará respecto del tránsito diario entre las poblaciones fronterizas y las colindantes del extranjero, respetando en todo caso los tratados o convenios internacionales sobre la materia.

Artículo 21. Las empresas de transportes terrestres, marítimos o aéreos, tienen la obligación de cerciorarse por medio de sus funcionarios y empleados de que los extranjeros que transporten para internarse en el país se encuentren debidamente documentados.

Artículo 22. Ningún pasajero o tripulante de transporte marítimo podrá desembarcar antes de que las autoridades de Migración efectúen la inspección correspondiente.

Artículo 23. Los tripulantes extranjeros de transporte aéreos, terrestre o marítimos, sólo podrán permanecer en territorio nacional el tiempo autorizado. Los gastos que origine su expulsión o salida del país, serán cubiertos por los propietarios o representantes de dichos transportes, ya sean empresas, sociedades de cualquier índole o personas individuales.

Artículo 24. Los pilotos de aerotransportes, capitanes de buques y conductores de autotransportes, deberán presentar a las autoridades de Migración, en el momento de efectuar la inspección de entrada o salida, lista de los pasajeros y tripulantes, así como todos los datos necesarios para su identificación.

Artículo 25. No se autorizará el desembarco de extranjeros que no reúnan los requisitos fijados para esta Ley y su Reglamento, salvo lo dispuesto por el artículo 42 fracción IX, de esta Ley.

Artículo 26. Los extranjeros que encontrándose en tránsito desembarquen con autorización del servicio de Migración en algún puerto nacional y permanezcan en tierra sin autorización legal por causas ajenas a su voluntad después de la salida del buque o aeronave en que hacen la travesía, deberán presentarse inmediatamente a la oficina de Migración correspondiente. En este caso dicha oficina tomará las medidas conducentes a su inmediata salida.

Artículo 27. Los extranjeros cuya internación sea rechazada por el servicio de migración, por no poseer documentación migratoria o por no estar ésta en regla, así como los polizones, deberán salir por cuenta de la empresa transportes que propició su internación sin perjuicio de las sanciones que les correspondan de acuerdo con esta Ley.

Artículo 28. Ningún transporte marítimo podrá salir de puertos nacionales antes de que se realice la inspección de salida por las autoridades de Migración y de haberse recibido de éstas la autorización para efectuar el viaje, salvo casos de fuerza mayor de acuerdo con las disposiciones de la Secretaría de Marina y de las autoridades competentes.

Artículo 29. El Reglamento respectivo determinará las normas a que quedará sujeta la vigilancia de tripulantes extranjeros en transportes marítimos de cualquier nacionalidad surtos en puertos nacionales; igualmente fijará los requisitos para permitir la visita o internación al país de los mismos tripulantes.

Artículo 30. No se permitirá la visita a ningún transporte marítimo en tránsito internacional, sin la autorización previa de las autoridades de Migración y las Sanitarias.

Art¡culo 31. Las empresas de transporte responderán pecuniariamente de las violaciones que a la presente Ley y su Reglamento, cometan sus empleados, agentes o representantes, sin perjuicio de la responsabilidad directa en que incurran las personas mencionadas.

CAPITULO III

Inmigración

Artículo 32. La Secretaría de Gobernación podrá fijar anualmente, previos

los estudios demográficos correspondientes, el número de extranjeros cuya internación podrá permitirse al país, ya sea por actividades o por zonas de residencia, y sujetará a las modalidades que juzgue pertinentes, la inmigración de extranjeros, según sean sus posibilidades de contribuir al progreso nacional.

Artículo 33. De conformidad con lo dispuesto por el artículo anterior, los permisos de internación se otorgarán perfectamente a los científicos y técnicos dedicados o que se hayan dedicado a la investigación o la enseñanza en disciplinas no cubiertas o insuficientemente cubiertas por mexicanos, así como a los inversionistas a que se refiere el artículo 48,

fracción II, de esta Ley. A los turistas se les proporcionarán facilidades para internarse en el país.

Artículo 34. La Secretaría de Gobernación podrá fijar a los extranjeros que se internen en la República las condiciones que estime convenientes respecto a las actividades a que habrán de dedicarse y al lugar o lugares de su residencia. Cuidará así mismo de que los inmigrantes sean elementos útiles para el país y de que cuente con los ingresos necesarios para su subsistencia y en su caso, la de las personas que estén bajo su dependencia económica.

Artículo 35. Los extranjeros que sufran persecuciones políticas serán admitidos provisionalmente por las autoridades de Migración con la obligación de permanecer en el puerto de entrada mientras la Secretaría de Gobernación resuelve cada caso.

Artículo 36. La Secretaria de Gobernación tomará medidas necesarias para ofrecer condiciones que faciliten el arraigo y asimilación en México de investigadores, científicos y técnicos extranjeros.

Artículo 37. La Secretaría de Gobernación podrá negar a los extranjeros la entrada al país o el cambio de calidad o característica migratoria por cualesquiera de los siguientes motivos, cuando:

a) No exista reciprocidad internacional;

b) Lo exija el equilibrio demográfico nacional;

c) No lo permitan las cuotas a que se refiere el artículo 32 de esta Ley;

d) Se estime lesivo para los intereses económicos de los nacionales;

e) Hayan observado mala conducta durante su estancia en el país o tengan malos antecedentes en el extranjero;

f) Hayan infringido esta Ley o su Reglamento;

g) No se encuentren física o mentalmente sanos a juicio de la autoridad; o

h) Lo prevean otras disposiciones legales.

Artículo 38. Es facultad de la Secretaría de Gobernación, suspender o prohibir la admisión de extranjeros, cuando así lo determine el interés nacional.

Artículo 39. Cuando los extranjeros contraigan matrimonio con mexicanos o tengan hijos nacidos en el país, la Secretaría de Gobernación podrá autorizar su internación o permanencia legal en el mismo.

Si llegare a disolver el vínculo matrimonial o dejare de cumplirse con las obligaciones que impone la legislación civil en materia de alimentos, se perderá la calidad migratoria que la Secretaría haya otorgado y se le señalara al interesado un plazo para que abandone el país, excepto si ha adquirido la calidad de inmigrado.

Artículo 40. Los mexicanos que por cualquier causa hayan perdido su nacionalidad, para entrar al país o para seguir residiendo en él, deberán cumplir con lo que la Ley establece para los extranjeros.

Artículo 41. Los extranjeros podrán internarse legalmente en el país de acuerdo con las siguientes calidades:

a) No Inmigrante.

b) Inmigrante.

Artículo 42. No Inmigrante es el extranjero que con permiso de la Secretaría de Gobernación se interna en el país temporalmente, dentro de alguna de las siguientes características:

I. Turista. Con fines de recreo o salud, para actividades artísticas, culturales o deportivas, no remuneradas, con temporalidad máxima de seis meses improrrogables.

II. Transmigrante. En tránsito hacia otro país y que podrá permanecer en territorio nacional hasta por 30 días.

III. Visitante. Para dedicarse al ejercicio de alguna actividad lucrativa o no, siempre que sea lícita y honesta, con autorización para permanecer en el país hasta por seis meses, prorrogables por una sola vez por igual temporalidad, excepto si durante su estancia vive de sus depósitos traídos del extranjero, de las renta que éstos produzcan o de cualquier ingreso proveniente del exterior, o para actividades científicas, técnicas, artísticas, deportivas o similares, en que podrán concederse dos prórrogas más.

IV. Consejero. Para asistir a asambleas o sesiones de consejo de administración de empresas o para prestarles asesorías y realizar temporalmente funciones propias de sus facultades. Esta autorización será hasta por quince días y podrá prorrogarse por igual temporalidad.

V. Asilado político. Para proteger su libertad o su vida de persecuciones políticas en su país de origen, autorizado por el tiempo que la Secretaría de Gobernación juzgue conveniente, atendiendo a las circunstancias que en cada caso concurran. Si el asilado político viola las leyes nacionales, sin perjuicio de las sanciones que por ello le sean aplicables, perderá su característica migratoria, y la misma Secretaría le podrá otorgar la calidad que juzgue conveniente para continuar su legal estancia en el país. Asimismo, si el asilado político se ausenta del país, perderá todo derecho a regresar en esta calidad migratoria, salvo que haya salido con permiso de la propia Dependencia.

VI. Estudiante. Para iniciar, completar o perfeccionar estudios en planteles educativos o instituciones oficiales o particulares incorporados o con autorización oficial, con prórrogas anuales y con autorización para permanecer en el país sólo el tiempo que duren sus estudios y el que sea necesario para obtener la documentación final respectiva, pudiendo ausentarse del país, cada año, hasta por 120 días en total.

VIII. Visitante distinguido. En casos especiales, de manera excepcional, podrán

otorgarse permisos de cortesía para internarse y residir en el país, hasta por seis meses, a investigadores, científicos o humanistas de prestigio internacional, periodistas o a otras personas prominentes. La Secretaría Gobernación podrá renovar estos permisos cuando lo estime pertinente.

VIII. Las autoridades de Migración podrán autorizar a los extranjeros a que visiten puertos marítimos o ciudades fronterizas sin que su permanencia exceda de tres días.

IX. Visitante provisional. La Secretaría de Gobernación podrá autorizar como excepción hasta por 30 días, el desembarco provisional de extranjeros que lleguen a puertos de mar o aeropuertos con servicio internacional, cuya documentación carezca de algún requisito secundario. En estos caso deberán constituir depósito o fianza que garantice su regreso al país de procedencia, de su nacionalidad o de su origen, si no cumplen el requisito en el plazo concedido.

Artículo 43. La admisión al país de un extranjero lo obliga a cumplir estrictamente con las condiciones que se fijen en el permiso de internación y las disposiciones que establecen las leyes respectivas.

Artículo 44. Inmigrante es el extranjero que e interna legalmente en el país con el propósito de radicarse en él, en tanto adquiere la calidad de Inmigrado.

Art¡culo 45. Los inmigrantes se aceptarán hasta por cinco años y tienen obligación de comprobar a satisfacción de la Secretaría de Gobernación, que están cumpliendo con las condiciones que les fueron señaladas al autorizar su internación y con las demás disposiciones migratorias aplicables a fin de que sea refrendada anualmente, si procede, su documentación migratoria.

Artículo 46. En caso de que durante la temporalidad concedida dejare de satisfacerse la condición a que está supeditada la estancia en el país de un Inmigrante, éste deberá comunicarlo a la Secretaría de Gobernación dentro de los quince días siguientes, a fin de que se proceda a la cancelación de su documentación migratoria y se le señale plazo para abandonar el país o se le conceda término para su regularización, a juicio de la propia Secretaría.

Artículo 47. El Inmigrante que permanezca fuera del país dieciocho meses en forma continua, o con intermitencias, perderá tal calidad, en la inteligencia de que durante los dos primeros años de su internación no podrá ausentarse de la República por más de noventa días cada año.

La Secretaría de Gobernación podrá autorizar la salida del país por la temporalidad y veces que juzgue convenientes, sin la aplicación de lo dispuestos en este y el 56, a los inmigrantes que hayan solicitado su calidad de Inmigrado, mientras ésta no se resuelva.

Art¡culo 48. Las características de Inmigrantes son:

I. Rentista. Para vivir de sus depósitos traídos del extranjero; de los intereses que le produzca la inversión de su capital en certificados, títulos y bonos del Estado o de las instituciones de nacionales crédito u otras que determine la Secretaría de Gobernación o de cualquier ingreso permanente que proceda del exterior. La Secretaría de Gobernación podrá autorizar a los rentistas para que presten servicios como profesores, científicos, investigadores científicos, o técnicos cuando a juicio de ella, dichas actividades resulten benéficas para el país.

II. Inversionistas. Para invertir su capital en la industria, de conformidad con las leyes de la materia, y siempre que la inversión contribuya al desarrollo económico y social del país.

III. Profesional. Para ejercer una profesión en casos excepcionales y previo registro del título ante la Secretaría de Educación Pública.

IV. Cargos de confianza. Para asumir cargos de dirección u otros de absoluta confianza en empresas o instituciones establecidas en la República, siempre que a juicio de la Secretaría de Gobernación no haya duplicidad de cargos y que el servicio de que se trate amerite la internación.

V. Científico. Para dirigir o realizar investigaciones científicas, para difundir sus conocimientos científicos, preparar investigadores o realizar trabajos docentes, cuando estas actividades sean realizadas en interés del desarrollo nacional a juicio de la Secretaría de Gobernación, tomando en consideración la información general que al respecto le proporcionen otras instituciones que estime conveniente consultar.

VI. Técnico. Para realizan investigación aplicada dentro de la producción o desempeñar funciones técnicas o especializadas que no puedan ser prestadas, a juicio de la Secretaría de Gobernación, por residentes en el país.

VII. Familiares. Para vivir bajo la dependencia económica del cónyuge o de un pariente consanguíneo, inmigrante, inmigrado o mexicano. Los hijos y hermanos de los solicitantes sólo podrán admitirse dentro de esta característica cuando sean menores de edad, salvo que tengan impedimento debidamente comprobado para trabajar o estén estudiando en forma estable.

Artículo 49. La internación y permanencia en el país de científicos o técnicos extranjeros de empresas, se condicionará a que cada uno de éstos instruya en su especialidad a un mínimo de tres mexicanos.

Art¡culo 50. Todos los extranjeros que realicen en México investigaciones o de estudios que ameriten ser impresos, deben enviar a la Secretaría de Gobernación un ejemplar de dichos trabajos, aun cuando éstos se terminen, perfeccionen o impriman en el extranjero.

Artículo 51. La Secretaría de Gobernación en condiciones excepcionales, podrán dictar medidas para otorgar máximas facilidades en la admisión temporal de extranjeros.

Artículo. 52. Inmigrado es el extranjero que adquiere derechos de residencia definitiva en el país.

Artículo 53. Los Inmigrantes con residencia legal en el país durante cinco años, podrán adquirir la calidad migratoria de Inmigrados, siempre que hayan observado las disposiciones de esta Ley y sus reglamentos y que sus actividades hayan sido honestas y positivas para la comunidad. En tanto no se resuelva la solicitud de la calidad de Inmigrado, a juicio de la Secretaría de Gobernación, el interesado seguirá conservando la de Inmigrante.

Artículo 54. El Inmigrante podrá dedicarse a cualquier actividad lícita, con las limitaciones que imponga la Secretaría de Gobernación, de acuerdo con el Reglamento y con las demás disposiciones aplicables.

Artículo 55. Para obtener la calidad de Inmigrado se requiere declaración expresa de la Secretaría de Gobernación.

Al Inmigrante que vencida su temporalidad de cinco años no solicite en los plazos que señale el Reglamento su calidad de Inmigrado o no se le conceda ésta, se le cancelará su documentación migratoria, debiendo salir del país en el plazo que le señale para el efecto la Secretaría de Gobernación. En estos casos el extranjero podrá solicitar nueva calidad migratoria de acuerdo con la Ley.

Artículo 56. El Inmigrado podrá salir del país y entrar al mismo libremente; pero si permaneciere en el extranjero dos años consecutivos, perderá su calidad migratoria, lo mismo que si en un lapso de diez años estuviere ausente más de cinco. Los períodos de diez años se computarán a partir de la fecha de la declaratoria de Inmigrado, en la reforma y términos que establezca el Reglamento.

Artículo 57. Los diplomáticos y agentes consulares extranjeros que radiquen en el país sin estar sujetos a la jurisdicción territorial, así como otros funcionarios que se encuentren en la República por razones de representación oficial de sus Gobiernos, no adquirirán derechos de residencia por mera razón de tiempo. Si al cesar su representación desean seguir radicando en la República deberán llenar los requisitos ordinarios, quedando facultada la Secretaría de Gobernación para dar a dichos extranjeros por razones de reciprocidad, las facilidades que en los países extranjeros correspondientes se otorguen en esta materia a los que hubieren sido representantes mexicanos.

Artículo 58. Ningún extranjero podrá tener dos calidades o características migratorias simultáneamente.

Artículo 59. No se cambiará calidad ni característica migratoria en el caso comprendido en la fracción II, del artículo 42. En los demás, queda a juicio de la Secretaría de Gobernación hacerlo cuanto se llenen los requisitos que esta Ley fija para la nueva calidad o característica migratoria que se pretenda adquirir y previo pago de los impuestos que determinen las leyes fiscales.

Artículo 60. Para que un extranjero pueda ejercer otras actividades, además de aquellas que le hayan sido expresamente autorizadas, requiere permiso de la Secretaría de Gobernación.

Artículo 61. Quienes tengan a su servicio o bajo su dependencia económica a extranjeros están obligados a informar a la Secretaría de Gobernación en un término de quince días, sobre cualquier circunstancia que altere o pueda modificar las condiciones migratorias a las que éstos se encuentren sujetos. Además, quedarán obligadas a sufragar los gastos que origine su expulsión, para el caso en que así lo ordene la Secretaría de Gobernación. Art¡culo 62. Para internarse en la República los extranjeros deberán cumplir los requisitos siguientes:

I. Presentar certificado oficial de buena salud física y mental, expedido por las autoridades del país de donde procedan, en los casos que fije la Secretaría de Gobernación.

II. Aprobar el examen que efectúen las autoridades sanitarias.

III. Proporcionar a las autoridades de Migración, bajo protesta de decir verdad, los informes que les sean solicitados.

IV. Identificarse por medio de documentos idóneos y auténticos y, en su caso, acreditar su calidad migratoria.

V. Presentar certificado oficial de sus antecedentes, expedido por la autoridad del lugar donde hayan residido habitualmente, en los casos que fije la Secretaría de Gobernación.

VI. Llenar los requisitos que se señalen en sus permisos de internación.

Artículo 63. Los extranjeros que ser internen al país en calidad de

Inmigrantes y los No Inmigrantes que se refieren las fracciones III -por lo que respecta a técnicos y científicos-, V y VI del artículo 42 de esta Ley, están obligados a inscribirse en el Registro Nacional de Extranjeros dentro de los treinta días siguientes a la fecha de su internación.

Artículo 64. Los extranjeros, en el momento de registrarse, comprobarán su legal internación y permanencia y las actividades a que se dediquen; y cumplirán los demás requisitos que señalen esta Ley y sus reglamentos.

Artículo 65. Los extranjeros registrados, están obligados a informar al Registro Nacional de Extranjeros, de sus cambios de calidad o característica migratoria, nacionalidad, estado civil, domicilio y actividades a que se dediquen, dentro de los treinta días posteriores al cambio.

Artículo 66. Los extranjeros, por sí o mediante apoderado, sólo podrán celebrar actos relativos a la adquisición de bienes inmuebles, derechos reales sobre los mismos o acciones de empresas dedicadas en cualquier forma al comercio de dichos bienes, previo permiso de la Secretaría de Gobernación, sin perjuicio de las autorizaciones de deban recabar conforme a otras disposiciones legales.

Artículo 67. Las autoridades de la República, sean federales, locales o municipales, así como los notarios públicos, los que substituyan a éstos o hagan sus veces, los contadores públicos y corredores de comercio, están obligados a exigir a los extranjeros que tramiten ante ellos asuntos de su competencia, que previamente les comprueben su legal residencia en el país y que sus condiciones y calidad migratoria les permiten realizar el acto o contrato de que se trate, o en su defecto el permiso especial de la Secretaría de Gobernación y asentar en el instrumento respectivo tal comprobación. Excepcionalmente, en caso de urgencia, no se exigirá la comprobación mencionada en el otorgamiento de poderes o testamentos. En todos los casos, darán aviso a la expresada Secretaría en un plazo no mayor de quince días.

Artículo 68. Los oficiales del Registro Civil no celebrarán ningún acto del estado civil en que intervenga algún extranjero, sin la comprobación previa, por parte de éste, de su legal estancia en el país. Tratándose de matrimonios de extranjeros con mexicanos, deberán exigir además la autorización de la Secretaría de Gobernación.

En todos los casos deberán asentarse las comprobaciones a que se refiere este artículo y darse aviso a la Secretaría de Gobernación del acto celebrado.

Artículo 69. Ninguna autoridad judicial o administrativa dará trámite al divorcio o nulidad de matrimonios de los extranjeros, si no se acompañan la certificación que expida la Secretaría de Gobernación de su legal residencia en el país y de que sus condiciones y calidad migratoria les permite realizar tal acto.

Artículo 70. En relación con las materias de que esta Ley se ocupa, los extranjeros pagarán los impuestos y derechos que determinen las disposiciones legales correspondientes.

Artículo 71. La Secretaría de Gobernación Establecerá estaciones

migratorias en los lugares de la República que estime conveniente para alojar en las mismas, como medidas de aseguramiento, si así lo estima pertinente, a los extranjeros cuya internación se haya autorizado en forma provisional, así como a aquéllos que deben ser expulsados.

Artículo 72. Las autoridades judiciales, del país están obligadas a poner en conocimiento de la Secretaría de Gobernación la filiación de los extranjeros que se encuentren sujetos a proceso, en el momento de abrirse éste, indicando además el delito de que sean presuntos responsables y la sentencia que se dicte.

Los oficiales del Registro Civil y los jueces en materia civil o de lo familiar, comunicarán a la Secretaría de Gobernación, los cambios del estado civil de los extranjeros dentro de los cinco días siguientes a la fecha en que quede firme el acto, sentencia o resolución de que se trate.

Artículo 73. La fuerza pública federal, local y municipal, prestarán su colaboración a las autoridades de Migración cuando soliciten su auxilio para hacer cumplir las disposiciones de esta Ley, sus Reglamentos y los acuerdos que conforme a ella se dicten.

Artículo 74. Nadie deberá dar ocupación a extranjeros que no comprueben previamente su legal estancia en el país y sin haber obtenido la autorización específica para prestar ese determinado servicio.

Artículo 75. Cuando una empresa, un extranjero o los representantes legales de éstos no cumplan con los requisitos que fije la Secretaría de Gobernación en el plazo que la misma determine en cualquier trámite migratorio, se les tendrá por desistidos de la gestión.

CAPITULO IV

Emigración

Artículo 76. Por lo que se refiere a emigración, a la Secretaría de Gobernación corresponde:

I. Investigar las causas que den o puedan dar origen a la emigración de nacionales y dictar medidas para regularla.

II. Dictar medidas en colaboración con la Secretaría de Relaciones Exteriores, tendientes a la protección de los emigrantes mexicanos.

Artículo 77. Son emigrantes los mexicanos y los extranjeros que salgan del país con el propósito de residir en el extranjero.

Artículo 78. Las personas que pretendan emigrar del país, están obligadas a satisfacer, además de los requisitos generales de migración, los siguientes:

I. Identificarse y presentar a la autoridad de Migración correspondiente, las informaciones estadísticas o personales que les requieran.

II. Ser mayores de edad, o si no lo son o están sujetos a interdicción, ir acompañados por las personas que ejerzan sobre ellos la patria potestad o la tutela en su caso, o acreditar el permiso concedido al efecto por dichas personas o por autoridad competente.

III. La comprobación, si se trata de mexicanos, de que pueden cumplir todos los requisitos que para entrar al país a donde se dirijan exijan las leyes del mismo, según el carácter con que pretendan hacerlo.

IV. Solicitar de la oficina respectiva la documentación correspondiente y presentarla a las autoridades migratorias del lugar por donde se pretenda salir; y no estar sujeto a proceso o ser prófugo de la justicia, ni estar arraigado, por

cualquier causa en virtud de resolución judicial, sin perjuicio de lo dispuesto por el artículo 109 de esta Ley.

V. Los que establezcan otras disposiciones aplicables en la materia.

Artículo 79. Cuando se trate de trabajadores mexicanos, será necesario que comprueben ir contratados por temporalidades obligatorias para el patrono o contratista y con salarios suficientes para satisfacer sus necesidades.

Los agentes de Migración exigirán las condiciones de trabajo por escrito, aprobadas por la Junta de Conciliación y Arbitraje dentro de cuya jurisdicción se celebraron y visadas por el Cónsul del país deban prestarse los servicios.

Artículo 80. El traslado en forma colectiva de los trabajadores mexicanos, deberá ser vigilado por agentes de la Secretaría de Gobernación, a efecto de hacer cumplir las leyes y reglamentos respectivos.

CAPITULO V

Repatriación

Artículo 81. Se consideran como repatriados los emigrantes nacionales que vuelvan al país después de residir por lo menos dos años en el extranjero.

Artículo 82. La Secretaría de Gobernación estimulará la repatriación de los mexicanos, procurando al efecto promover su radicación en los lugares donde puedan ser útiles, de acuerdo con sus conocimientos y capacidad.

La misma calidad podrá ser otorgada por la Secretaría de Gobernación a los nacionales que por virtud de situaciones excepcionales, requieran el auxilio de las autoridades de dicha Dependencia, para ser reinternados al país.

Artículo 83. La Secretaría de Gobernación cooperará con el Departamento de Asuntos Agrarios y Colonización y con los demás organismos federales, locales y municipales que correspondan, para distribuir en los centros de población existentes y en los que se creen, a los contingentes repatriados que en forma colectiva se internen al país.

Artículo 84. La Secretaría de Gobernación propondrá a las dependencias oficiales y empresas particulares las medidas que estime pertinentes a fin de que se proporcione a los repatriados el mayor número de facilidades para el buen éxito de las labores a que se dediquen.

CAPITULO VI

El Registro de Población

e Identificación Personal

Artículo 85. La Secretaría de Gobernación tiene a su cargo el registro e identificación personal de todos los individuos residentes en el país y de los nacionales que residan en el extranjero.

Artículo 86. El Registro de Población e Identificación Personal tiene como finalidad conocer los recursos humanos con que cuentan el país para elaborar los diferentes programas de la administración pública en materia demográfica.

Artículo 87. El registro de la población comprende:

I. A los nacionales.

II. A los extranjeros.

Artículo 88. La Secretaría de Gobernación establecerá los métodos y procedimientos técnicos del registro, y organizará las unidades administrativas del Registro de Población e Identificación Personal que sean necesarias en el país.

Artículo 89. El Registro de Población e Identificación Personal, tiene por objeto:

I. Recabar todos los datos relativos a la identificación de los habitantes de la República, mexicanos y extranjeros, para los efectos de la fracción V de este artículo.

II. Clasificar los datos de los habitantes del país, de acuerdo con su nacionalidad, edad, sexo, ocupación, estado civil y lugar de residencia.

III. Llevar el padrón de los mexicanos residentes en el extranjero.

IV. Coordinar los métodos de identificación y registro actualmente en uso en las distintas dependencias de la administración pública, con el propósito de constituir un solo sistema elaborado científicamente.

V. Crear un documento que se denominará Cédula de Identificación Personal y que tendrá el carácter de instrumento público, probatorio de los datos que contenga en relación con el titular.

Artículo 90. Las autoridades de la Federación, de los Estados, de los Territorios, de los Municipios y los funcionarios y empleados del Servicio Exterior Mexicano, serán auxiliares de la Secretaría de Gobernación en las funciones que a ésta correspondan en el Registro de Población e Identificación Personal, lo mismo que en todas las demás materias reguladas por esta Ley y sus reglamentos.

Artículo 91. Una vez hecho el registro dentro del plazo fijado por la Secretaría de Gobernación, el registro y la cédula de identidad que se expidan, tendrán la vigencia que señale el Reglamento de esta Ley.

Artículo 92. El registro de los nacionales residentes dentro y fuera del país es gratuito y obligatorio; el de los extranjeros es también obligatorio en los casos que señala esta Ley y quedará sujeto al pago de la cuota correspondiente.

CAPITULO VII

Sanciones

Artículo 93. Serán sancionados con suspensión de empleo hasta por treinta días, o destitución, los empleados de la Secretaría de Gobernación que:

I. Sin estar autorizados, den a conocer asuntos de carácter confidencial.

II. Dolosamente o por grave negligencia entorpezcan el trámite normal de los asuntos migratorios.

III. Por sí o por intermediarios intervengan en la gestión de los asuntos a que se refiere esta Ley o patrocinen o aconsejen la manera de evadir las disposiciones y trámites migratorios a los interesados.

IV. No expidan la Cédula de Identidad a la persona que se presente con los documentos requeridos o retengan indebidamente dicha Cédula una vez expedida.

V. Dolosamente hagan uso indebido o proporcione a terceras personas documentación migratoria, sin autorización de la Secretaría de Gobernación.

Artículo 94. Las violaciones a la presente Ley o a las disposiciones que la reglamenten por las autoridades federales, locales o municipales, que no constituyan delitos, serán sancionadas con multa hasta de cinco mil pesos y destitución en caso de reincidencia.

Artículo 95. Al que auxilie, encubra o aconseje a cualquier individuo para violar las disposiciones de esta Ley y su Reglamento en materia que no constituya delito, será castigado con multa hasta de un mil pesos o arresto hasta por treinta y seis horas. Si el infractor no pagare la multa impuesta, se permutará ésta por el arresto correspondiente, que no excederá en ningún caso de quince días.

Artículo 96. Al que en materia migratoria suscriba cualquier documento o promoción con firma que no sea la suya, se le impondrá multa hasta de dos mil pesos o arresto hasta treinta y seis horas, sin perjuicio de las penas en que incurra cuando ello constituya un delito. Si el infractor no pagare la multa impuesta, se permutará ésta por el arresto correspondiente, que no excederá en ningún caso de quince días.

Artículo 97. Se impondrá multa hasta de cinco mil pesos al extranjero que no haya cumplido la orden de la Secretaría de Gobernación para salir del territorio nacional dentro del plazo que para el efecto se le fijó, por haber sido cancelada su calidad migratoria.

Artículo 98. Se impondrá pena hasta de diez años de prisión y multa hasta de cinco mil pesos al extranjero que habiendo sido expulsado se interne nuevamente al territorio nacional sin haber obtenido acuerdo de readmisión. Igual sanción se aplicará al extranjero que no exprese u oculte su condición de expulsado para que se le autorice y obtenga nuevo permiso de internación.

Artículo 99. Se impondrá pena hasta de seis años de prisión y multa hasta de cinco mil pesos, al extranjero que habiendo obtenido legalmente autorización para internarse al país por incumplimiento o violación de las disposiciones administrativas o legales a que se condicionó su estancia, se encuentre ilegalmente en el mismo.

Artículo 100. Se impondrá multa hasta de tres mil pesos y pena hasta de dieciocho meses de prisión, al extranjero que realice actividades para las cuales no esté autorizado conforme a esta Ley o al permiso de internación que la Secretaría de Gobernación le haya otorgado.

Artículo 101. Se impondrá pena hasta de dos años de prisión y multa hasta de diez mil pesos, al extranjero que, por la realización de actividades ilícitas o deshonestas, viola los supuestos a que está condicionada su estancia en el país.

Artículo 102. Se impondrá pena hasta de cinco años de prisión y multa hasta de cinco mil pesos, al extranjero que dolosamente haga uso o se ostente como poseedor de una calidad migratoria distinta de la que la Secretaría de Gobernación le haya otorgado.

Artículo 103. Se impondrá pena hasta de dos años de prisión y multa de trescientos a cinco mil pesos, al extranjero que se interne ilegalmente al país.

Artículo 104. Al extranjero que para entrar al país o que ya internado, proporcione a las autoridades datos falsos con relación a su situación migratoria, se le impondrá las sanciones previstas en el Código Penal, sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo siguiente.

Artículo 105. Al extranjero que incurra en las hipótesis previstas en los artículos 95, 97, 98, 99, 100, 101, 102, 103, 104, 106, 107 y 118 de esta Ley, se le cancelará la calidad migratoria y será expulsado del país sin perjuicio de que se le apliquen las penas establecidas en dichos preceptos.

Artículo 106. El que haya sido expulsado, solamente podrá ser readmitido por acuerdo expreso del Secretario, del Subsecretario o del Oficial Mayor de la Secretaría de Gobernación.

Artículo 107. Se impondrá pena hasta cinco años de prisión y multa hasta de cinco mil pesos al mexicano que contraiga matrimonio con extranjero sólo con el objeto de que éste pueda radicar en país, acogiéndose a los beneficios que la Ley establece para estos casos. Igual sanción se aplicará al extranjero contrayente.

Artículo 108. Son de orden público, para todos los efectos legales, la expulsión de los extranjeros y las medidas que dicte la Secretaría de Gobernación para el aseguramiento de los extranjeros en estaciones migratorias o en lugares habilitados para ello, cuando tengan por objeto su expulsión del país.

Artículo 109. Los arraigos de extranjeros decretados por las autoridades judiciales o administrativas, no impedirán que se ejecuten las órdenes de expulsión que la Secretaría de Gobernación dicte contra los mismos con fundamento en esta Ley y su Reglamento.

Artículo 110. Se impondrá multa hasta de tres mil pesos a las empresa de transportes marítimos, cuando permitían que los pasajeros o tripulantes bajen a tierra antes de que las autoridades migratorias den el permiso correspondiente.

Artículo 111. El desembarco de personas de transportes procedentes del extranjeros, efectuado en sitios y horas que no sean los

señalados se castigará con multa hasta de diez mil pesos, que se impondrá a las personas responsables, a la empresa correspondiente, a sus representantes o a sus consignatarios.

Artículo 112. Las empresas navieras o aéreas que transporten al país extranjeros sin documentación migratoria vigente, serán sancionadas con multa hasta de cinco mil pesos sin perjuicio de que el extranjero de que se trate, sea rechazado y de que la empresa lo regrese, por su cuenta, al lugar de procedencia.

Artículo 113. Cuando los capitanes de los transportes marítimos, o quienes hagan sus veces, desobedezcan una orden de conducir pasajeros extranjeros que hayan sido rechazados, ellos, la empresa propietaria sus representantes o sus consignatarios, serán castigados con multa hasta de cinco mil pesos. A las empresas aeronáuticas se les impondrá la misma multa. En ambos casos se levantará un acta en la que se harán constar todas circunstancias del caso.

Artículo 114. Se impondrá multa hasta de mil pesos, al que sin el permiso de la autoridad migratoria, autorice u ordene la partida de un transporte que haya de salir del Territorio Nacional.

Artículo 115. Se impondrá multa hasta de un mil pesos o arresto hasta por treinta y seis horas a los extranjeros que no cumplan con la obligación señalada por el artículo 26 de esta Ley. Si el infractor no pagare la multa impuesta, se permutará esta por el arresto correspondiente, que no excederá en ningún caso de quince días.

Artículo 116. la infracción al artículo 28 de esta Ley, será castigada con multa hasta de cinco mil pesos y, en caso de reincidencia, se dará a conocer a los Cónsules Mexicanos el nombre y la matrícula del barco infractor, a efecto de que no se le extiendan nuevos despachos para puertos mexicanos.

Artículo 117. La persona que visite un transporte marítimo extranjero, sin permiso de las autoridades migratorias, serán castigada con multa hasta de quinientos pesos o arresto hasta por tres días.

La misma sanción se impondrá a la persona que autorice sin facultades para ello, la visita a que se refiere el párrafo anterior.

Artículo 118. Se impondrá pena de dos a diez años de prisión y multa hasta de diez mil pesos a la persona que por cuenta propia o ajena pretenda llevar o lleve nacionales mexicanos para trabajar en el extranjero, sin autorización previa de la Secretaría de Gobernación.

Igual pena se impondrá al que sin permiso legal de autoridad competente, por cuenta propia o ajena, pretenda introducir o introduzca ilegalmente a uno o varios extranjeros a territorio mexicano o a otro país.

Artículo 119. Al funcionario judicial o administrativo que dé trámite al divorcio o nulidad de matrimonio de los extranjeros sin que se acompañe la certificación expedida por la Secretaría de Gobernación de su legal residencia en el país y de que sus condiciones y calidad migratoria les permita realizar tal acto, o con aplicación de otras leyes distintas de las señaladas en el artículo 50 de la Ley de Nacionalidad y Naturalización, se le impondrá la destitución de empleo y prisión hasta de seis meses o multa hasta de diez mil pesos o ambas, a juicio del juez, quedando desde luego separado de sus funciones al dictarse el auto de sujeción a proceso.

Artículo 120. Toda infracción a la presente Ley o a su Reglamento, fuera de los casos señalados en este capítulo y de los que constituyan delitos de acuerdo con otras leyes, se sancionarán administrativamente con multa hasta de diez mil pesos, según la gravedad de las violaciones cometidas a juicio de la Secretaría de Gobernación o con arresto hasta por quince días, si el infractor no pagare la multa.

Artículo 121. Las sanciones administrativas a que esta Ley se refiere, se impondrán por acuerdo del Secretario, Subsecretario o del Oficial Mayor de la Secretaría de Gobernación, así como por los Directores Generales, Subdirectores Generales, Jefes y Subjefes de Departamento de la propia Secretaría, que tengan a su cargo o bajo sus órdenes servicios relacionados con las materias de la presente Ley.

Artículo 122. Para que una sanción administrativa sea revisable por el superior de quien la impulso, deberá solicitarse dentro de los quince días siguientes a la fecha de notificación de la multa impuesta.

Artículo 123. El ejercicio de la acción penal por parte del Ministerio Público, en los casos de delito a que esta Ley se refiere, estará sujeto a la querella que en cada caso formule la Secretaría de Gobernación.

ARTÍCULOS TRANSITORIOS

Artículo Primero. Se abroga la Ley General de Población de veintitrés de diciembre de mil novecientos cuarenta y siete y sus reformas de veinticuatro de diciembre de mil novecientos cuarenta y nueve, derogándose todas las demás disposiciones que se opongan a la presente Ley.

Artículo Segundo. Esta Ley entrará en vigor a los treinta días naturales después de su publicación en el Diario Oficial de la Federación.

Artículo Tercero. Entre tanto se expide el Reglamento de la Presente Ley, continuarán vigentes los artículos del Reglamento de la Ley General de Población de veintisiete de abril de mil novecientos sesenta y dos, publicado en el Diarios Oficial de tres de mayo de mil novecientos sesenta y dos y fe de erratas de ocho del mismo mes, en lo que no se opongan a esta Ley.

Artículo Cuarto. La Secretaría de Gobernación señalara la fecha en que habrá de iniciarse el registro de la población mexicana.

Reitero a ustedes en esta ocasión, las seguridades de mi consideración atenta y distinguida.

Sufragio Efectivo No Reelección.

México, D. F., a 12 de septiembre de 1973.

El Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, Luis Echeverría Alvarez.

-Trámite: Recibo, y a las Comisiones Unidas primera y segunda de Gobernación y de Estudios Legislativos e imprímase.

INFORME DE LABORES

- La C. secretaria María de la Paz Becerril:

"Escudo Nacional.- Secretaría de Comunicaciones y Transportes.

México, D. F., a 1º. de septiembre de 1973.

CC. secretarios de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- Ciudad.

En cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 93 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, me permito enviar a usted, con este oficio, un ejemplar del Informe de Labores desarrolladas por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en el período que va del 1º. de septiembre de 1972 al 31 de agosto de 1973.

Aprovecho la oportunidad para reiterarle las seguridades de mi consideración atenta y distinguida.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

El secretario, Eugenio Méndez."

-Trámite: Recibo, y resérvese en la Oficialía Mayor para consulta de los ciudadanos diputados y córrase traslado a la H. Cámara de Senadores.

COMUNICACIÓN

- La C. secretaria María de la Paz Becerril:

"Escudo Nacional.- Estados Unidos Mexicanos.- Congreso del Estado de Michoacán de Ocampo.- Morelia.

CC. secretarios de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- México, D.F.

Nos permitimos el agrado de dar a conocer a usted que el día de hoy la H. LIX Legislatura Constitucional del Estado de Michoacán de Ocampo, inauguró y clausuró el primer período extraordinario de sesiones, correspondientes al segundo año de su ejercicio legal, a que fue convocada por su diputación permanente.

Reiteramos a usted la seguridad de nuestra consideración muy distinguida y aprovechamos la oportunidad que nos brindan estos renglones, para enviar nuestros saludos afectuosos a los respetables miembros que integran la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión, que usted dignamente preside.

Sufragio Efectivo. No Reelección.

Margarito Antúnez Domínguez, D.S.- Ingeniero Adán Cárdenas Ochoa."

-Trámite: De enterado.

DICTÁMENES DE PRIMERA LECTURA

Condecoraciones

- El C. secretario J. Armando Gaitán Gudiño:

"Comisión de permisos constitucionales.

Honorable asamblea:

En oficio fechado el 16 de agosto próximo pasado, la Secretaría de Relaciones Exteriores a través de la de Gobernación, solicita el permiso constitucional necesario para que el C. licenciado Raúl Valdés Aguilar, pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden de la Legión de Honor que, en el grado de comendador, le confirió el gobierno de Francia.

En sesión efectuada por la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión, el 24 de agosto, se turnó a la comisión de permisos constitucionales de la Cámara de Diputados, la solicitud relativa, para que realice el estudio correspondiente.

De conformidad con lo anterior, esta comisión se abocó al estudio del expediente relativo, y

CONSIDERANDO

a) Que el peticionario ha acreditado su nacionalidad mexicana con la copia certificada del acta de nacimiento relativa;

b) Que al solicitante le ha sido conferida la distinción respectiva, tomando en consideración la labor desarrollado para estrechar los lazos de amistad entre los dos países;

c) Que la solicitud se ajusta a lo establecido por la fracción III del apartado B) del artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Y como el C. licenciado Raúl Valdés Aguilar al recibir la condecoración señalada no queda sujeto de manera alguna al gobierno otorgante, esta comisión se permite proponer a la consideración de esta honorable asamblea, el siguiente

PROYECTO DE DECRETO

Artículo único. Se concede permiso al C. licenciado Raúl Valdés Aguilar para que, sin perder la ciudadanía mexicana pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden de la Legión de Honor, que en el grado de comendador, le confirió el gobierno de Francia.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.-

México, D. F., a 4 de septiembre de 1973.- Carlos Sansores Pérez.- Carlos Madrazo Pintado.- Flavio Romero de Velasco.- Píndaro Urióstegui Miranda.-Mario Ruiz de Chávez.-Juan C. Peña Ochoa."

-Trámite: Primera lectura.

- El mismo C. secretario:

"Comisión de permisos constitucionales.

Honorable asamblea:

En oficio fechado el 10 de agosto próximo pasado, la Secretaría de Relaciones Exteriores,

a través de la de Gobernación, solicita el permiso constitucional necesario para que el C. Alfonso Herrera Salcedo, ministro consejero de la embajada de México en Francia, pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden de la Legión de Honor que, en el grado de comendador le confirió el gobierno de Francia.

Con base en el artículo 179 del Reglamento para el gobierno interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, la comisión permanente, en sesión efectuada el 24 de agosto del año en curso, turnó a la comisión que suscribe, para su estudio y dictamen, el expediente relativo.

CONSIDERANDO

a) Que el peticionario ha acreditado su nacionalidad mexicana con la copia certificada del acta de nacimiento relativa;

b) Que al solicitante se le confirió la distinción respectiva, con motivo de la visita de Estado que el C. Presidente de la República, hizo a ese país, el pasado mes de abril; y

c) Que la solicitud se ajusta a lo establecido por la fracción III del apartado B) del artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Y como el C. Alfonso Herrera Salcedo, ministro consejero de la embajada de México en Francia, al recibir la condecoración señalada no queda sujeta de manera alguna al gobierno otorgante, esta comisión se permite someter a la consideración de la honorable asamblea, el siguiente

PROYECTO DE DECRETO

Artículo único. Se concede permiso al C. Alfonso Herrera Salcedo, ministro consejero de la embajada de México en Francia, para que, sin perder la ciudadanía mexicana, pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden de la Legión de Honor que, en el grado de comendador le confirió el gobierno de Francia.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.-

México, D. F., a 12 de septiembre de 1973.- Carlos Sansores Pérez.- Carlos Madrazo Pintado.- Flavio Romero de Velasco.- Píndaro Urióstegui Miranda.- Mario Ruiz de Chávez G.- Juan C. Peña Ochoa."

-Trámite: Primera lectura.

- El mismo C. secretario: "Comisión de permisos constitucionales.

Honorable asamblea: En oficio fechado el día 13 de agosto del año en curso, la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la de Gobernación, solicita el permiso constitucional necesario para que el C. Jorge Carrillo, pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden Nacional al Mérito que, en el grado de encomienda, le confirió el gobierno de Francia.

Con base en el artículo 179 del Reglamento para el gobierno interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, la comisión permanente, en sesión efectuada el 24 de agosto próximo pasado, turno a la comisión que suscribe, para su estudio y dictamen, el expediente relativo.

CONSIDERANDO

a) Que el peticionario ha acreditado su nacionalidad mexicana con la copia certificada del acta de nacimiento relativa;

b) Que el solicitante le ha sido conferida la condecoración respectiva, tomando en cuenta su labor desarrollada para estrechar los lazos de amistad entre los dos países; y

c) Que la solicitud se ajusta a lo establecido por la fracción III del apartado B) del artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Y como el C. Jorge Carrillo al recibir la condecoración señalada no queda sujeto de manera alguna al gobierno otorgante, esta comisión se permite proponer a la consideración de la honorable asamblea, el siguiente

PROYECTO DE DECRETO

Artículo único. Se concede permiso al C. Jorge Carrillo para que, sin perder la ciudadanía mexicana, pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden Nacional al Mérito que, en el grado de encomienda, le confirió el gobierno de Francia.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- México, D. F., a 12 de septiembre de 1973.- Carlos Sansores Pérez.- Carlos Madrazo Pintado.- Flavio Romero de Velasco.- Píndaro Urióstegui Miranda.- Mario Ruiz de Chávez G.- Juan C. Peña Ochoa."

-Trámite: Primera lectura.

- El mismo C. secretario:

"Comisión de permisos constitucionales.

Honorable asamblea:

En oficio fechado el día 3 de septiembre del año el curso, la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la de Gobernación, solicita el permiso constitucional necesario para que el C. licenciado Mauro Jiménez Lazcano director general de difusión y relaciones públicas de la Presidencia de la República, pueda aceptar y usar la condecoración de la Orden Nacional al Mérito que, en el grado de encomienda, le confirió el gobierno de Francia.

En sesión efectuada por la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión el día 11 de los corrientes, se turnó a la comisión que suscribe, el expediente relativo para su estudio y dictamen.

CONSIDERANDO

a) Que el peticionario ha acreditado su nacionalidad mexicana con la copia certificada del acta de nacimiento relativa;

b) Que al solicitante le ha sido conferida la condecoración respectiva, tomando en cuenta su labor desarrollada para estrechar los lazos de amistad entre los dos países; y

c) Que la solicitud se ajusta a lo establecido por la fracción III del apartado B) del artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Y como el C. licenciado Mauro Jiménez Lazcano al recibir la condecoración señalada no queda sujeto de manera alguna al gobierno otorgante, esta comisión se permite proponer a la consideración de la honorable asamblea, el siguiente

PROYECTO DE DECRETO

Artículo único. Se concede permiso al C. licenciado Mauro Jiménez Lazcano para que, sin perder la ciudadanía mexicana, puede aceptar y usar la condecoración de la Orden Nacional al Mérito que, en el grado de encomienda, le confirió el gobierno de Francia.

Sala de Comisiones de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión.- México, D. F., a 12 de septiembre de 1973.- Carlos Sansores Pérez.- Carlos Madrazo Pintado.- Flavio Romero de Velasco.- Píndaro Urióstegui Miranda.

- Mario Ruiz de Chávez G.-Juan C. Peña Ochoa."

- Trámite: Primera lectura.

ANÁLISIS AL INFORME

PRESIDENCIAL

El C. presidente: Me permito comunicar a la honorable asamblea, que han solicitado el uso de la palabra para comentar el III Informe de Gobierno rendido por el C. Presidente de la República, licenciado Luis Echeverría, los siguientes ciudadanos diputados: Jesús Guzmán Rubio, Lázaro Rubio Félix, Fernando Estrada Sámano, Pedro Guillén, Salvador Robles Quintero, Carlos A. Madrazo y Píndaro Urióstegui.

Se concede el uso de la palabra al señor diputado Jesús Guzmán Rubio,

vicepresidente de la asamblea.

El C. Jesús Guzmán Rubio: Señor presidente; compañeros diputados: el pasado primero de septiembre el señor licenciado don Luis Echeverría Alvarez, en su carácter de Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, sometió a nuestra consideración su Tercer Informe de Gobierno. Tres años de tesonera y apasionada labor, desinteresada, en aras del progreso con el desarrollo y el desarrollo con justicia del pueblo mexicano; tres años de cabal entrega a las causas más limpias y trascendentes de la nación.

En este informe del Presidente Echeverría. no es fácil justipreciar lo que se ha dicho o lo que se ha omitido, suponiendo que en un corto tiempo es imposible resumir una tarea fecunda de 365 días de apasionado afán por dar a la República lo mejor de sí mismo, con sencillez pero con acierto, y observando las constantes acciones del sistema presidencial, bien podemos hoy decir que el período 1970-1976 debe ser llamado "Sexenio Juarista". Por tanto, el Poder Ejecutivo como el Poder Legislativo y, en suma los Poderes de la Federación y la ciudadanía mexicana, han sabido responder a los deberes de la historia y a las exigencias del presente, pues sin la confianza mutua, sin una fraternal comprensión, no hubiera sido posible avanzar en la revisión de la problemática nacional y apenas si se hubiera hallado algunos paliativos en sus ancestrales necesidades.

Por ello, señores diputados, antes de seguir adelante, quiero llevar a la conciencia y a la consideración de todos que si glosar un informe significa interpretarlo, significa entenderlo y comprenderlo y juzgarlo, bajo este sagrado recinto o debemos interpretarlo con la acción y el trabajo, secundando la labor del señor Presidente de la República ante nuestro pueblo representado que, ayer en las urnas electorales, depositaron su confianza a través del voto con la esperanza de poder salir de esas miserias, de esas necesidades que lo acosan. Por eso me hago esa reflexión. Es deber de todos los representantes populares, no solamente analizar en este recinto y circunscribirlo nada más a las palabras y a las teorías; a los análisis y a los estilos personales y retóricos por algunos de los que intervienen en este análisis, en esta glosa del Tercer Informe del señor Presidente de la República. Debemos secundar con la acción, repito, ante la ciudadanía que está anhelando que las nuevas generaciones, que conjugan precisamente la dinámica, la capacidad y el entusiasmo por servir a sus semejantes, con los hombres de experiencia que tienen el equilibrio y que, conjugando ambas fuerzas, podemos tener un máximo y mayor rendimiento para bien de la sociedad, para bien de la República, para bien de nuestros semejantes.

Es verdad que hemos analizado y hemos escuchado el primero de septiembre el Informe Presidencial, del tercer año de gobierno: año de trabajo en que el Ejecutivo se ha entregado en cuerpo y alma, sin descenso, sin desmayo, sin meditar en algunas consecuencias del excesivo campo de trabajo en lo físico, sino también pensando solamente en su propia nación, pensando solamente en su gran pasión de un hombre que ha venido a transformar los sistemas burocráticos, de un hombre que ha venido a marcar una nueva etapa, una nueva era, para que las nuevas generaciones empecemos con redoblado esfuerzo, en este tiempo en que ha llegado a la mitad de la jornada y nos ha demostrado cómo se trabaja por una nación cuando se tienen sentimientos revolucionarios; cómo se trabaja por un pueblo, cuando solamente en su conciencia existe la idea de servir a sus semejantes y que, indudablemente, las páginas de la historia recogerán el veredicto de haber cumplido con los deberes patrios. Por eso, señores diputados, me hacía esta reflexión: Si glosar un informe se circunscribía nada más a escucharlo en este digno recinto o tenemos que salir a cumplir con la acción, a

cumplir con el trabajo, no solamente como legisladores, sino también como gestores de esos pueblos del medio rural que están necesitando justamente la compresión de sus representantes populares. La complejidad política de nuestra vida democrática y representativa, ha sido el producto de una revolución acelerada en conquistas sociales.

A partir de 1910 se libra una batalla más, y de pronto el mexicano hace se debut como hombre libre de viejas ataduras, a la vez que adquiere serios compromisos que el poder público debe ir resolviendo. La politización ciudadana se inicia entre la agresividad y la inmadurez bajo la mística revolucionaria. Los viejos encomenderos se habían quedado atrás y solamente cambiaron el disfraz por el de reaccionarios que, ante la imposibilidad negada ya para siempre por la historia de alcanzar el poder, se concretaron a combatirlo y a calumniarlo, por sistema o rutina, en lo político; pero, en lo económico y en los social, no han depuesto jamás las armas. Y si no han logrado vencer, a veces han podido envenenar, ante los ojos de gentes bien intencionadas pero ignorantes, las fuentes y raíces mismas de nuestra vida republicana.

La reacción bajo varios camuflajes ha logrado a veces algunos -parece- parcelamientos políticos en sectores como informados y en otros cargados de intereses económicos y hasta espirituales. Por lo que la reacción lo ha intentado todo; aunque solamente ha logrado permanecer en su trinchera chocheante, quejumbrosa y dolida. Ella jamás se pone estática, siempre la reacción ha estado justamente en la vida problemática nacional; siempre ha estado desvirtuando la verdad de las buenas intenciones del Poder Ejecutivo, del Poder Legislativo, del Poder Judicial, a ella no le conforma nada. Ella, que se siente la indicada de poder conquistar algún día el mando del poder, se siente lastimada y por eso deforma la verdad, se encarga simplemente de traicionar el programa de la Revolución Mexicana, el programa de nuestro movimiento libertario que, precisamente, aglutinó e hizo plasmar en la Carta Fundamental de nuestra patria, en la de 1917, nuestro sistema gubernamental. En la reacción solamente analizan la conducta negativa de errores de los funcionarios públicos, pero jamás quieren reconocer el avance y progreso de los hombres de la Revolución Mexicana. Precisamente, en nombre del PARM, al que tengo el honor de pertenecer, vengo a hacer sentir la opinión, el concepto, la voz de aquellos viejos revolucionarios que ayer en los campos de batalla, conformaron los surcos nacionales con su sangre, defendiendo a las clases menesterosas, defendiéndolas del usurpador, de aquel cacique que siempre azota a los humildes y a los desheredados: cacique en la justicia o cacique en la industria o en el comercio que no sabe, con equidad, justamente dar a sus trabajadores los derechos y conquistas que la justicia social de la revolución ha señalado firmemente en sus postulados ya definidos en nuestra propia Ley Federal.

Frente a tales querellas residuales, el Presidente Echeverría con un desafío a las tradiciones políticas, ha venido dando nuevas pautas que, saturadas de teorías, son en esencia fórmulas del bien hacer; y ha sido un gran precursor de un nuevo modelo político que consiste en conjugar el ímpetu de los jóvenes, con la sensatez y experiencia de los adultos, dando como resultado un mejor equilibrio en las actividades públicas. Así, también se rompen los monopolios, las heredades y la burla de escalafones, propiciando la llegada del más apto, del más capaz, y del más útil al país. Las Reformas Constitucionales responden a un anhelo renovador, funcional, y más productivo de nuestras instituciones, que siendo mensajeras de mayor bienestar, crean a la vez serios compromisos sociales para todos. Si tuviéramos que definir las místicas de la política gubernamental del Presidente Echeverría, diríamos, que promueve, fomenta, procura el sentimiento de solidaridad e interdependencia social de los mexicanos. ¿Pero un país puede ser políticamente fuerte si es económicamente débil? ¡No! La pobreza económica lo encadena a otras pobrezas; de aquí la importancia que ha dado el Ejecutivo Federal, a la infraestructura nacional, con la apertura de caminos, la electrificación, el riego, y toda extensión de inversiones en obras y en servicios de carácter social que propicien la industrialización, que faciliten al hombre la creación de riqueza y de bienestar social.

La riqueza se entiende, como un producto del trabajo. Se genera riqueza por el trabajo mental o muscular, o por ambos, que debe retribuirse justamente. Por que debemos reconocer que a través de la historia de nuestro país, la riqueza ha sido el privilegio de unos cuantos como producto de la explotación de millones de mexicanos. Y esos explotadores tradicionales han sido los reaccionarios de ayer, de hoy, y acaso de mañana: los que pagan mal la materia prima y la mano de obra y evaden cuanto pueden los impuestos y, por escaso control de calidad, defraudan o estafan al consumidor con elevados precios.

Seguramente es en esta realidad nacional en donde se ha fijado más le atención y la preocupación del Presidente de México, quien comprende que aún habiendo muchas mercancías que llevarían bienestar a los mexicanos, ellas son prohibitivas, aun las básicas, para quienes no tienen capacidad de compra.

Sin dinero no es posible adquirir siquiera lo indispensable; pero se siembran esperanzas con cargo a la Revolución Mexicana que algún día, por la justicia social, se convertirán en bellas realidades.

Esta, precisamente es una de las realidades que este régimen republicano, de este régimen revolucionario que está venciendo uno a uno los problemas, a pesar de ser cierto que todo mundo sufre de una inflación y se queja y culpa al gobierno de la República, que no sólo lo integra el Ejecutivo, sino los tres poderes que integran precisamente nuestro sistema democrático, republicano y representativo.

De ahí que también somos responsables los del Poder Legislativo; luego entonces debemos contestarles a esas mentalidades que no quieren comprender que la carestía de la vida, que la inflación no es precisamente patrimonio únicamente de México sino también de los países desarrollados, de otros continentes y de paso también de México que no podría apartarse de esta imagen como que viene justamente revolucionando en el mundo entero.

La demografía en nuestra patria ha crecido. La producción cada día la vemos desgraciadamente mermada por ciclones o por fenómenos de otra índole o por sismos; la hemos visto mermar en el contenido de su producción y la esencia de su alcance, contrarrestando esa enorme demografía que año con año se tiene justamente que planificar.

Por eso, señores diputados, consideramos que el tercer informe del señor Presidente de la República, licenciado Luis Echeverría Alvarez, no solamente viene a ser un testimonio en que se esfuerza un mexicano, sino todo su equipo que responde con dignidad a la mística revolucionaria, teniendo como base la bandera y doctrina del gran patricio Benito Juárez.

Seguramente es en esta realidad nacional en donde se ha fijado más la atención y la preocupación del Presidente de México, que comprende que no habiendo muchas mercancías que le darían bienestar a los mexicanos, por lo mismo son prohibitivas para muchos hogares mexicanos, porque sin el dinero no es posible adquirir siquiera lo indispensable. Se siembran esperanzas y ya hemos dicho que la estamos palpando a través del esfuerzo del Ejecutivo y de toda la nación, porque la ciudadanía mexicana está respondiendo.

La juventud, nunca como hoy, tiene la oportunidad y ha tenido la oportunidad de verse representar, ellos son precisamente funcionarios que tienen en sus manos que dejar una escuela, que dejar un ejemplo para las nuevas generaciones que les vienen precisamente a suceder.

Lo económico y lo político son dos caminos cuya convergencia es lo social. El tercer informe de gobierno del Presidente Echeverría es un documento en el que hallamos una moderna filosofía humanística; en él se afirma el derecho a la vida, a la libertad y al disfrute del bienestar; porque la razón, la justificación del Poder Público se encuentra en la forma en que va mejorando el nivel de vida de la población y la forma en que esa población va cambiando, prueba el éxito o el fracaso de sus gobernantes, ya que lo esencial, es el hombre.

Lo esencial es el hombre, siempre que él una sus esfuerzos y su probidad a los esfuerzos de sus gobernantes. La época de las lamentaciones en la pasividad fue ya superada. Ahora hay que lamentar no la falta de oportunidades, sino de voluntades. El paternalismo quedó en el pasado; el Presidente Echeverría aboga por la coparticipación del hombre en su mejoramiento individual, familiar y social. La consigna de su gobierno es una dinámica de participación activa de cada mexicano, pues solamente nuestro propio esfuerzo otorgará algún día, la riqueza bien distribuida. Tal es el humanismo de este Régimen Juarista, según podemos interpretarlo por las palabras y conocerlo a fondo por las acciones. Tal es la realidad de un gobierno cuya única mística, compañeros diputados, es servir a México y vivir para México. De ahí su pasión por la patria, ampliamente demostrada en todos los rincones del suelo nacional.

Señores diputados, vivimos en un país inconforme ante las tiranías, en un país que no sabe resignarse, ante el vasallaje; que ha aprendido a tener fe y confianza en sí mismo y en su gobierno; que sabe que el Gobierno del Presidente Echeverría quiere superar no solamente los problemas de este año o del año anterior, sino que quiere superar los problemas que confronta el país y que ha venido sufriendo hace muchos años en espera de soluciones. Esos son problemas antiguos que han hecho antesala para su solución. Hoy no recibirán más paliativos, ni prórrogas, porque serán solucionados dentro de la prioridad pero sin tregua y en relación directa a como nuestro pueblo se esfuerce junto a su gobierno.

Vivimos en un hermoso país, con carencias, es cierto, pero con posibilidades de resolverlas y con la decisión firme de superar obstáculos, porque es un país unido que no teme enfrentar el futuro. Un país en el que no ocurrirán hechos luctuosos que avergonzarían al hombre de las cavernas, como lo sucedido en la República hermana de Chile, en donde la ambición de pequeños caudillos destruyó el orden constitucional, asesinó a un gran presidente y ha conculcado seriamente el derecho a la vida y a la libertad, haciendo retroceder la historia en por lo menos medio siglo.

Colegas diputados, nosotros confiamos en el alto destino de nuestra República, en la permanencia de las instituciones y en el imperativo de la ley; confiamos en los actos del Ejecutivo Federal porque están inspirados en un alto ideal de justicia y de patriotismo y porque estamos convencidos de que una máxima la verdad anuncia: ¡Con México, por México y para México, arriba y adelante! (Aplausos.)

El C. presidente: Tiene el uso de la palabra el C. diputado Lázaro Rubio Félix.

- El C. Lázaro Rubio Félix:

Señor presidente,

Señoras y señores diputados:

El Tercer Informe de Gobierno del Presidente Echeverría es la reafirmación de una política nacionalista, revolucionaria, que se propone sentar las bases definitivas para que México logre su independencia del exterior y para que el pueblo pueda obtener mejores condiciones en su existir y en su actuación política. No es exagerado afirmar que este es un documento excepcional, de una proyección política profunda.

Independientemente de que el Partido Popular Socialista lucha por una meta histórica - La construcción de una sociedad sin explotadores-, esto no le impide reconocer que el

documento está lleno de afirmaciones positivas; tiene un contenido polémico, firme, contra las fuerzas de la derecha, los intereses que se oponen a nuestro progreso y a los cambios sociales para hacer avanzar la sociedad en que vivimos.

Afirma la solidaridad indeclinable de México con los países hermanos de América Latina; justifica plenamente la actitud de un gobierno progresista con las fuerzas que luchan y defienden la independencia de América Latina en Chile y en Panamá.

El Presidente de México afirmó textualmente: "Todo lo que afecta a los pueblos de América Latina preocupa al pueblo de México".

La dirección nacional y la fracción parlamentaria del Partido Popular Socialista saluda con profunda emoción y felicita calurosamente al señor Presidente Echeverría, por la alta expresión de solidaridad humana que manifiesta a un pueblo que vive horas aciagas, víctima de un golpe militar fascista: el hermano pueblo de Chile.

El asalto a la legalidad ha sido planeado, dirigido y realizado por las fuerzas del imperialismo y la oligarquía apátrida.

Al decretar duelo nacional por tres días en homenaje al ilustre Presidente doctor Salvador Allende -bandera y ejemplo para los pueblos de América Latina-, el Presidente de México reitera una vez más su enérgica postura antiimperialista y su firme decisión de apoyar las luchas de los pueblos que en nuestro Continente y en otros lugares del mundo luchan heroicamente por su independencia.

Más adelante, enfatizando su deseo de cooperación fraterna con los pueblos débiles que luchan por su independencia, el Primer Magistrado de la Nación, informó: "A fin de contrarrestar la estrategia aislacionista en contra de Chile, acordamos la venta de petróleo y cereales..."

Proclama la decisión de México de seguir luchando por encontrar solidaridad a los planteamientos trazados en la Carta de los Derechos y los Deberes de los Estados en el aspecto económico, para buscar un mejor trato internacional para los pueblos débiles y en desarrollo. En Argel, reafirmando esta actitud del Gobierno de México, el Canciller Emilio Rabasa expresó: "El colonialismo sigue siendo un grave problema que requiere de nuestro máximo esfuerzo para lograr su rápida y total eliminación..." "Los países en vías de desarrollo han obtenido ya su autonomía política; pero también es cierto que una gran mayoría se encuentran sujetos a un coloniaje (neocolonialismo) económico al que debemos oponernos y liquidar cuanto antes". "Sin duda el elemento más vigoroso y perturbador de la dependencia económica lo constituyen las corporaciones transnacionales. Las bayonetas de antaño han sido substituidas por una forma más sutil, pero no menos esclavizantes de intervención, merced a la actividad de esos consorcios..." "El derecho de los Estados a disponer libremente de sus recursos naturales, a reglamentar y controlar la inversión extranjera..., el deber de los Estados de no hacer discriminaciones basadas en diferencias de sistemas políticos, económicos y sociales..."

El presidente declara su solidaridad con la tesis de la coexistencia pacífica, que es vital y esencial para resolver los problemas internacionales y para mantener al mundo fuera de las posibilidades de un enfrentamiento nuclear.

Se manifiesta en contra de la actitud de los países imperialistas que explotan a los países débiles, en una postura que dignifica al pueblo y al gobierno de nuestro país.

Señala la crisis de un sistema en el orden internacional que no ha podido resolver los problemas esenciales de la vida humana. Para nosotros, es indudable que el Presidente Echeverría se refiere al sistema capitalista. Plantea la indeclinable postura de nuestra política internacional en defensa de los principios esenciales de autodeterminación y no intervención y se pronuncia por la desnuclearización no sólo de América Latina, sino por la liquidación de los arsenales nucleares para evitar una catástrofe mundial.

Sale al paso a los que con una concepción equivocada o con una actitud de complicidad con el enemigo, adoptan actitudes en la lucha social que, más que ayudar a impulsar el desarrollo democrático y a profundizar a la Revolución, le dan armas al enemigo de nuestro progreso independiente. Se declara por la explotación colectiva de la tierra, única forma con la que se puede superar el problema de la producción agrícola de los ejidatarios, comuneros y pequeños propietarios auténticos.

Critica a los que quisieran constreñir a la Revolución nuestra a los enunciados programáticos planteados inicialmente, sin que ésta se profundice y adopte nuevas metas para señalar el camino definitivo de nuestro pueblo y de nuestro país.

Condena a la minoría enriquecida que por encima de los intereses nacionales no ve más que sus intereses particulares y a la grave plaga que padece el pueblo nuestro: "los acaparadores"...

Anuncia una medida de gran significación para las masas campesinas, a efecto de elevar realmente su nivel de vida, mejorando el precio de garantía del maíz y del frijol.

Defiende la intervención del Estado en la economía y señala el éxito que se ha tenido en algunos aspectos de las administraciones de empresas estatales.

Señala la trascendente y fundamental labor que realiza la CONASUPO en auxilio del pueblo y de las masas campesinas, contraponiendo su opinión a la de los intereses privados de los grandes comerciantes y acaparadores que ven en este instrumento un obstáculo que se opone a ambiciones desmedidas de lucro.

Defiende con calor leyes antiimperialistas que se han aprobado para impulsar el progreso de México sin injerencias determinantes del exterior: la ley sobre la regulación de las empresas extranjeras y la ley para la

transferencia de tecnología, reafirmando que quienes debemos fijar nuestro rumbo histórico somos los mexicanos.

Condena a los que hoy, substrayéndose a los intereses nacionales y del pueblo, transforman los títulos profesionales en títulos de créditos que quieren que tengan el sentido de los antiguos privilegios nobiliarios.

Apunta la urgencia de una Ley Federal de Educación, que es tan necesaria para dar base esencial a la reforma educativa inspirada, como el Presidente expresa, en la filosofía del artículo tercero constitucional, tan pisoteado hasta hoy por instituciones clericales.

Condena a los que con base en la miseria de la mayoría, atesoran riquezas sin límites ni control.

Defiende la jornada de cuarenta horas con argumentos irrebatibles; plantea la necesidad de mejorar los salarios de los trabajadores y expresa que éstos tienen abiertas las posibilidades que les dan las leyes para entablar la lucha que los conduzca a mejorar sus condiciones de vida. La clase obrera debe comprender la intención del Presidente de México y actuar en consecuencia.

Sale al paso a los que, como un elemento de propaganda electoral, han manejado el slogan de que el alza de los precios es culpa del gobierno. Ha esclarecido que esto no es más que un ardid para engañar al pueblo y desviar su atención respecto de los verdaderos culpables, porque "todos sabemos que el alza de los precios favorece fundamentalmente a los sectores del gran comercio y a las instituciones financieras que propician esta alza en contra de los intereses de la mayoría".

Subraya que el presupuesto nacional ha sido elevado para dar atención a las grandes demandas del pueblo y no para favorecer a unos cuantos. Recrimina a quienes han manejado que el presupuesto es inflacionario. Sostiene que los gastos en dirección de las necesidades del pueblo no puedan conducir a la inflación. Afirma que las soluciones a los problemas inflacionarios no tienen que ser necesariamente conservadoras, como algunos pretenden hacer creer a la nación.

Afirma que "México desea continuar avanzando dentro de una economía estable" y explica que "el progreso inflacionario contraría los propósitos de la comunidad, porque permite que quienes más tienen aumenten sus ganancias y quienes menos poseen reduzcan su poder de compra".

Por otra parte, el Presidente también expresa que "el gobierno de México no podría pedir a las clases populares que resistan ellas solas el peso de la inflación, mientras ciertos grupos minoritarios aprovechan en su beneficio las condiciones del mercado". Estos grupos minoritarios se atreven a pedir a los trabajadores cordura y serenidad para seguirlos explotando.

El Informe no sólo examina lo alcanzado hasta hoy, sino que plantea con firmeza continuar un camino. El camino del pueblo de México. Señala perspectivas y expresa una convicción: estar con la mayorías populares, que son las que han movido siempre -a pesar de los deseos de la reacción-, la historia de nuestro país hacia adelante.

La fracción parlamentaria del Partido Popular Socialista saluda con calor el Informe del Presidente Echeverría, a quien la reitera su solidaridad en todas aquellas decisiones que conduzcan a México a estadios superiores y que conquisten para nuestra patria su independencia definitiva respecto del imperialismo. Estamos siempre dispuestos y decididos a formar parte de una sólida alianza popular para defender y darle fuerza a su actitud tendiente a estructurar el destino de una patria que, en el futuro, no esté al servicio de los grupos privilegiados, sino de aquellos que han hecho posible, con su esfuerzo generoso, el México de hoy.

La diputación del Partido Popular Socialista hace un caluroso llamado a la clase obrera, a las masas campesinas, a los intelectuales revolucionarios y a la juventud, a que se movilicen en apoyo solidario con la firme decisión del Presidente Echeverría de seguir avanzando en la lucha por nuestra liberación, por el progreso material de las masas populares y por lograr una etapa superior en la vida democrática.

Llamamos a los verdaderos mexicanos a rodear al Presidente Echeverría para que sienta el respaldo de todos los patriotas y pueda seguir resistiendo las agresiones, las asechanzas y las presiones de los sectores oligárquicos de la derecha, de los provocadores y del imperialismo. Dejar solo al Presidente

Echeverría en esta etapa crucial para la vida de México, cuando las agresiones del imperialismo se enseñan en un país hermano y amenazan la seguridad de nuestros pueblos, no sólo sería asumir una actitud irresponsable, sino que podría convertirnos en cómplices de los enemigos tradicionales de nuestra patria.

La compresión y la solidaridad deben ser la respuesta de las fuerzas democráticas y patrióticas a un presidente que, con apasionada convicción y entrega, está forjando el destino del México de hoy y del mañana inmediato." (Aplausos.)

El C. presidente: Tiene la palabra el diputado Fernando Estrada Sámano.

El C. Fernando Estrada Sámano: Señor presidente, señores diputados:

"El informe sobre el estado que guarda la administración presentado anualmente por el titular del Ejecutivo a la consideración del Congreso despierta con justificación un vivo interés en sectores diversos de la ciudadanía.

Puede el informe ser base de una evaluación objetiva de la actividad gubernamental y al mismo tiempo, señalar metas y planes a alcanzar por el ejercito adecuado del poder político.

En descargo de nuestras funciones, estamos obligados a analizar la información recibida y a realizar una evaluación crítica de los efectos de la acción administrativa en la vida de la comunidad nacional que representamos. Tal han intentado hacer las diputaciones del Partido Acción Nacional en Legislaturas

precedentes. Sin pretender un análisis exhaustivo, queremos en esta ocasión hacer referencia a algunos elementos de especial importancia en el momento actual de México, cuyo examen pormenorizado, por otra parte, habrá oportunidad de hacer en sesiones posteriores.

Puede con frecuencia señalarse, a un nivel meramente descriptivo de un fenómeno sociopolítico, que los informes presidenciales están intencionalmente orientados a constituir un punto de contacto directo entre pueblo y gobierno. Entendemos la búsqueda por parte de un sistema político de medios diversos para la construcción de rasgos favorecedores de su propia imagen y para suscitar fuentes de apoyo y legitimación más o menos auténticas. Sin embargo, creemos no es muy útil ni para el sistema político ni para la ciudadanía dejarse confundir por espejismos engañosos, o aceptar el señalamiento de una intención como el cumplimiento cabal de una obligación. Y esto, no sólo por razones de realismo político: algún estudio reciente, por ejemplo, indica que casi la mitad de la población de sectores populares urbanos con posibilidad física de ponerse en contacto con el informe simplemente no lo hacen; sino, sobre todo, porque el desempeño de una función constitucional y el decoro mismo del Congreso, requieren que éste no llegue a convertirse en mera caja de resonancia del Ejecutivo.

Por lo anterior, nos vemos en la precisión de señalar que en el Informe que comentamos hay una mezcla de deseos generalizados y de pronunciamientos de buenas intenciones que contrastan con la experiencia diaria de la vida de los mexicanos; una confusión en el intento por definir objetivos específicos y viables y en la elección de medios apropiados para alcanzar los que se proponen; una utilización de datos parciales e inconexos sin un marco aceptable de comparación y de juicio.

Por ello, debe indicarse que el presente informe, como otros anteriores, desafortunadamente no ha satisfecho las justas expectativas y el interés de la ciudadanía ni ha cumplido debidamente y en forma adecuada el mandato constitucional de informar sobre el estado general que guarda la administración pública.

Es difícil en México hablar de una serie de medidas como tendientes, simplemente, a "fortalecer la vida democrática"; tal fortalecimiento implica la existencia de una variedad de presupuestos democráticos en verdad operantes. La experiencia de muchos mexicanos señala el desajuste entre las expresiones verbales bien intencionadas y la realidad vivida en nuestro sistema político.

En muchos sentidos, el funcionamiento del mismo se encuentra en etapas predemocráticas y con frecuencia antidemocráticas. No sólo la estructuración del poder en México se fundamenta en la organización vertical del mismo y en el control más o menos inflexible, más o menos primario, en la falta de amplia distribución del poder político y en la correspondiente concentración del mismo. Se está hablando también de una filosofía que tiende a justificar tal funcionamiento del sistema político y a aducir razones de todo tipo para la conservación inalterada del poder.

En un marco semejante, la llamada autocrítica no deja de ser una maniobra típica de sistemas de partido único de cualquier signo, ordenada desde arriba y convenientemente controlada también de arriba hacia abajo.

Para muchos mexicanos, es difícil aceptar entonces la adecuación de pronunciamientos generales como que "procuramos que se manifiesten claramente las distintas corrientes de opinión". En la práctica y en diversas regiones del país, la posibilidad real de tal manifestación se encuentra seriamente reprimida o restringida. Debe señalarse que la libre manifestación de tales corrientes no depende de paternales concesiones del poder político, sino constituyen derechos humanos amparados además constitucionalmente. Deben recordarse frecuentes y recientes violaciones al ejercicio del derecho de asociación, de manifestación de las ideas, de petición -sea de electores en diversos municipios, de maestros o estudiantes, de intelectuales de tendencias diversas-. Por ello, Acción Nacional ha presentado una demanda contra el jefe de la policía de la ciudad de México, pues considera ha habido quebrantamiento de las disposiciones del artículo 9º. constitucional; esa demanda espera respuesta, como el pueblo espera cumplimiento de promesas reiteradas de investigación y castigo en casos anteriores más graves aún.

Porque estamos de acuerdo con la afirmación del Presidente de la República de que "la auténtica democracia supone la participación activa y cotidiana de los ciudadanos en las decisiones públicas", debemos expresar nuestra discrepancia con la suposición de que se ha reforzado "la imparcialidad de los comicios". Como en otros renglones de la vida política mexicana, en el proceso electoral no se ha facilitado ni garantizado la participación eficaz de los ciudadanos en las decisiones que nos afectan. Deseamos reafirmar nuestras exigencias para poder hablar en el funcionamiento político de México con lenguaje y práctica que vayan más allá de supuestos predemocráticos, y por cuyo establecimiento mínimo hemos pugnado: las bases mismas del proceso se encuentran viciados con un padrón de electores alterado e inadecuado y, si hubiera voluntad política para hacerlo, tales bases son fácilmente corregibles por medios diversos como la cédula de identidad o una credencial permanente de elector que realmente cumpliera sus funciones en forma aceptable. La integración de los organismos electorales sigue, a pesar de todo, favoreciendo al gobierno y su partido, los cuales mantienen el control del proceso -desde la variedad de electores cautivos hasta un sistema inaceptable de calificación.

Debe ser fuente de sobria reflexión para todos, el grado considerable de abstención electoral por parte de los ciudadanos. Además del abstencionismo tradicional de apatía hay un dato importante que debe entenderse con todo realismo: se trata de una abstención dinámica,

una expresión de conciencia política y de un rechazo precisamente a los procedimientos de los cuales se desconfía. Sería falta de lucidez el descartar simplistamente la reacción en este sentido expresada por muchos ciudadanos, así como el hecho de que de un análisis de las cifras electorales oficiales se desprende la conclusión de que en México tenemos un gobierno de minoría no sólo respecto al total de electorales potenciales, sino también al de empadronados.

Dada la falta de aplicación adecuada de la justicia y la presencia continuada de procedimientos políticos viciados, es útil afirmar de nuevo que no es posible esperar la unidad constructiva, ni la conjunción fecunda de Estado y Nación, si no hay la representación efectiva y respetada de los ciudadanos en los procesos y en la constitución del poder. Al mismo tiempo, la violación persistente de las normas del derecho conducen al desprestigio del mismo y se abren cauces para el prestigio, justificado o no, de la violencia.

Creemos que las tensiones existentes pueden profundizarse por un desequilibrio creciente entre el funcionamiento del sistema político y la cultura política del pueblo mexicano, que ha demostrado su decisión de participar en la construcción de su propio destino, y la conveniente afirmación de que el pueblo no está preparado, sino para se gobernado por minorías de cualquier tipo, revela no sólo un divorcio trágico entre pueblo y poder, sino miedo ante la posibilidad de un pueblo organizado y políticamente vertebrado.

Intima conexión tienen, como es obvio, los problemas del campo, la educación, el desarrollo social y económico, y es claro también, deben enfocarse en forma integral. Para hacerlo, sin embargo, debe señalarse como causa muy importante de esos problemas, la contradicción inherente en una estrategia de desarrollo que ha puesto énfasis indebido en el ahorro y en la industrialización a cualquier costo con la necesaria consecuencia de una creciente inequidad en la distribución del ingreso y de la riqueza, y la posposición de la satisfacción de las necesidades de los sectores mayoritarios del pueblo mexicano.

Absurdamente, ese retraso ha tenido especial incidencia en el campo. Como en otros renglones, el Informe no proporciona datos suficientes del problema de manera que pudiera conocerse adecuadamente la realidad; no bastan los datos parciales que por sí mismos no tienen explicación y deben compararse con un cuadro general de referencia. Esto es doblemente necesario por la importancia misma del tema y como una posibilidad de evaluación objetiva de dos leyes fundamentales: la Ley de Reforma Agraria y la Ley Federal de Aguas. Por otra parte, continúa presente el énfasis en el reparto de tierras, sin información sobre la calidad de las mismas.

La amplitud del problema es, por supuesto, de extrema complejidad la incidencia de políticas erróneas, puede apreciarse si se considera que el 76% de las familias de los jornaleros agrícolas obtienen un ingreso promedio mensual per capita de $59.99; que el 64% de la población total rural económicamente activa percibe $500.00 o menos por mes por familia; que el 83% de los predios existentes tienen una producción promedio anual de $750.00. El informe aduce el dato, por ejemplo, de una inversión de $2,500 millones, la cual generó empleo para 300 mil campesinos; habría que preguntarse, sin embargo, sobre la significación global de tan cuantiosa inversión si se piensa en las necesidades totales del agro mexicano y debería pensarse, igualmente, en un total superior a los 3 millones de campesinos sin tierra o en poco más de 4 millones de jornaleros desempleados o subempleados.

En realidad el problema sigue en el fondo casi intacto a pesar de las fuertes inversiones hechas, que en el mejor de los casos puede preverse y temerse, sólo lograrán beneficios parciales.

A reserva de tratar el tema en detalle en su debida oportunidad, puede señalarse la necesidad de una reforma estructural con base en una reestructuración del artículo 27 constitucional para establecer principios fundamentales de derecho agrario que puedan garantizar finalidades tan amplias como la conservación y explotación racional de los recursos naturales hasta la proscripción eficaz del minifundismo ejidal y no ejidal, y del latifundismo y la instauración de medios e instrumentos ágiles para la desviación masiva de inversiones, crédito y recursos técnicos al campo.

Acción Nacional sigue considerando necesario dar absoluta prioridad a la resolución de los problemas del agro mexicano y a la búsqueda decidida de justicia debida a los campesinos de nuestra patria.

Fundamental como posibilidad de solución para los problemas del campo, para la elevación del nivel de vida de todos los mexicanos y para la creación de condiciones que favorezcan la realización plena y la liberación de las personas se destaca en el Informe la educación.

El Presidente de la República puso énfasis en los problemas del desempleo y subempleo de los egresados de las instituciones de educación superior. Puede apreciarse la validez de esta preocupación si se piensa que el 30.3% de los egresados con 13 o más años de escolaridad no logró empleo en el período de la década pasada. Desgraciadamente el problema se agrava si se piensa que las posibilidades de empleo adecuado se reducen a medida que se ha tenido menor escolaridad; así por ejemplo, el 64.5% de quienes tuvieron de 1 a 5 años de escolaridad no ingresó a la fuerza de trabajo.

Por otra parte, se señaló la necesidad de una ampliación de las oportunidades de educación técnica de nivel medio. Todos estamos de acuerdo en la necesidad de ampliar las oportunidades educativas en forma democrática para todo el pueblo mexicano. Sin embargo, creemos que medidas relativamente parciales como las que se proponen, dependen en sus efectos de procesos sociales más amplios y complejos que condicionan el éxito de esos propósitos. Habría que discutir, entonces, no sólo la proporción entre

costos y rendimiento, sino la falta de conjunción entre la planificación educativa y el mercado de trabajo que estos problemas están evidenciando.

Deben comprenderse con serenidad las proporciones reales del problema educativo en México, cuya población mayor de 10 años tiene una escolaridad promedio de 2.9 grados escolares; debido entre otras razones a fallas estructurales del sistema educativo mismo el desperdicio escolar representa alrededor de $2,600 millones de pesos.

De cada 100 niños que comienzan la primaria, menos de dos (1.91%), llegan a los últimos años de educación superior. Por otro lado, la distribución de las oportunidades educativas ha sido injusta, en gran parte definida por la capacidad de presión política y presenta un grave desnivel entre el medio rural y el urbano, y entre las regiones socioeconómicas más o menos desarrolladas. Así, por ejemplo, mientras que en el medio urbano 5 de cada 10 niños que comienzan la primaria la terminan, en el campo sólo uno de cada 10 la terminan.

Debemos mostrar de nuevo nuestra extrañeza y preocupación, porque en el Informe que comentamos no se provee una visión de conjunto ni datos suficientes para poder elaborar un juicio global; no se examinan con claridad las necesidades totales educativas, ni parece haber una idea precisa de los medios y costos necesarios para subvenir esas necesidades.

Parece evidente, por una parte, que el sistema educativo nacional con sus patrones actuales de desarrollo será incapaz de satisfacer la demanda educativa de los mexicanos; pensemos, por ejemplo, que a pesar del incremento notable en la inversión para la educación superior, ésta satisface solamente poco más del 5% de la demanda potencial. Por otra parte, es indispensable concebir cualquier intento serio de reforma educativa como dependiente de cambios coincidentes en otros procesos sociales, principalmente cambios substanciales en las relaciones de poder y propiedad entre los mexicanos.

Por último, la diputación de Acción Nacional espera con interés la anunciada iniciativa para una nueva ley reglamentaria de educación. Nos parece obvia la urgencia y magnitud del desafío que este problema presenta para todos los mexicanos.

No podemos dejar de hacer una mención, así sea breve, de un problema fundamental sobre el cual, extrañamente, no hay prácticamente información en la comparecencia del titular del ejecutivo ante el Congreso, a pesar de que una comisión ad hoc de la Secretaría de la Presidencia acaba de terminar sus trabajos sobre la crisis creciente a que nos referimos: el desempleo. Según las cifras disponibles hay hoy en México cerca de 6 millones de desempleados y subempleados; se calcula el número de los mismos en poco más de 8 millones para 1976 y en más de 10 millones para 1980.

Es evidente la necesidad de una reorientación substancial de la vida económica del país hacia una política de pleno empleo y hacia la maximización de los recursos humanos, naturales y financieros de la nación.

En nuestra opinión no hay una conciencia suficientemente precisa de esta necesidad ni una definición razonablemente aceptable de los objetivos de esa reorientación. Por otra parte, la experiencia nos hace dudar de que haya la necesaria voluntad política para aceptar cambios inevitables en las relaciones políticas y el rompimiento de fuertes alianzas entre los económica y políticamente poderosos.

Deseamos, por otra parte, manifestar nuestro acuerdo con los esfuerzos por realizar un desarrollo autónomo de influencias ajenas a nuestro control y la diversificación de contactos con naciones extranjeras; al mismo tiempo hacemos notar el contraste entre afirmaciones en el exterior y nuestra realidad política interna. Acción Nacional ha sostenido la necesidad de una congruencia mínima en el funcionamiento del poder dentro y fuera de la nación, como base necesaria de éxito en ambos ámbitos. Estamos de acuerdo en que es inaceptable la progresiva concentración de poder y riqueza en unos cuantos países y también en que "Toda posición de fuerza implica el riesgo de su ejercicio y su amenaza es, en sí misma, una forma de violencia". Esperamos que esto comience a entenderse y aplicarse en la misma forma en la vida interna de México.

Mientras reconocemos la importancia del dato fundamental de la dependencia y de las imposiciones imperialistas sobre países débiles, afirmamos al mismo tiempo la necesidad imprescindible de una estructuración política interna fuerte, basada en la libertad y de una suficiencia económica que imposibiliten las imposiciones del exterior.

La necesidad de una información mayor que la provista en el informe sobre los acuerdos más recientes en torno al problema de la salinidad en el Valle de Mexicali, nos da la oportunidad de reafirmar nuestra posición favorable a la utilidad de la comparecencia de los Secretarios de Estado ante esta Cámara, de acuerdo a lo previsto en el artículo 93 de la Constitución. Al mismo tiempo, queremos manifestar la necesidad de avanzar un paso más y señalar la exigencia de que sean los secretarios llamados por la Cámara quienes comparezcan ante la misma; que las comisiones de esta Cámara funcionen de modo más eficaz para recabar información adecuada en contactos diversos con los señores secretarios y, por último, que se modifique el sistema de preguntas limitadas a los mismos, por parte de los diversos partidos representados en la Cámara.

A guisa de una apreciación de aspectos más generales del informe que comentamos y dejando de lado por el momento diversas cuestiones particulares del mismo, queremos terminar con el señalamiento de varios problemas que surgen de un análisis atento.

Ya hemos señalado en renglones diversos la falta de suficientes datos comparables y de un marco adecuado de referencia que definiera necesidades, objetivos, metas y medios. Resalta la utilización de cifras relativas sin la

correlación necesaria para que signifiquen algo, lo cual implica la continuación de una costumbre negativa de anteriores informes al Congreso. Por ejemplo, se hace alusión a las reservas de divisas existentes en el Banco de México sin hacer mención del déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos; se informa del número de dotaciones agrarias sin una relación con el número de los expedientes pendientes y sin relación al contexto agrícola total; se da cuenta de gastos educativos sin una indicación de rendimiento actual o previsible.

Por otro lado, debemos expresar que no deja de admirar la serenidad y validez teórica de pronunciamientos diversos sobre aspectos políticos fundamentales como la afirmación de respeto a la autonomía sindical o el rechazo a todo tipo de violaciones electorales y en general los buenos propósitos del gobierno y de su partido.

Parece haber además una tendencia a evadir toda participación y responsabilidad por parte del gobierno en los aspectos negativos de la situación nacional, como por ejemplo, el quebrantamiento de la productividad agropecuaria o problemas económicos como la inflación.

Fuentes justificadas de preocupación son ciertas actitudes reiteradas en donde, parecería haber una preferencia de la emoción sobre la inteligencia seria y de una especie de moralismo sobre las posibilidades de la técnica en el enfoque y análisis de los problemas que conciernen a todos los mexicanos. En parte como consecuencia de lo anterior, preocupa igualmente la falta de planes técnicamente definidos y respetables para afrontar esos problemas.

Al hacer los señalamientos anteriores creemos cumplir con nuestras responsabilidades como representantes de la nación y expresamos nuestra decisión de participar en la búsqueda de soluciones a los problemas del país a lo cual todos los mexicanos tenemos que contribuir. Resta sólo añadir el deseo sincero de que todos los miembros de esta Legislatura sepamos responder con decoro y con altura al desafío serio de la situación

actual de México." (Aplausos.)

El C. presidente: En el uso de la palabra el señor diputado Robles Quintero.

- El C. Salvador Robles Quintero:

Ciudadano presidente de esta honorable asamblea.

Compañeras y compañeros diputados:

El Tercer Informe Presidencial y la obra que contiene, está enmarcado en un programa y en una concepción de la realidad nacional que pretendemos esquematizar.

"Tres ideas centrales predominan en la acción del Presidente Echeverría:

La primordial es que México marcha aceleradamente por cauces sociales inaplazables, y que para lograr íntegramente estas transformaciones se requieren cambios en el sistema económico y político ajustándose a un sentido de libertad y justicia; a cuyas consecuencias ningún grupo puede instalarse en la inactividad o el conformismo absoluto.

Para obtener este cambio, todos debemos cambiar, pero cambiar en los hechos, y no sólo en los hechos, sino en una acción práctica, visible, realmente renovadora y que no sea solamente para el hombre individual, sino para la sociedad. Lo que el Presidente y la nación quieren es el cambio en estado de acto.

Como consecuencia, la segunda idea central del señor Presidente, es que México, por razones históricas; de sus leyes y de su especial ubicación geográfica, tiene un camino propio, diferente al desarrollo teórico de sociedades centralmente planificadas; o a las concepciones del capitalismo evolutivo tradicional, lo cual nos conduciría implacablemente a una sociedad de consumo y de desperdicio como hay tantas. El camino de México, lo ha repetido en muchas ocasiones, está definido claramente en nuestra Constitución, que declara un régimen de economía mixta y que persigue un desarrollo compartido por todos y para todos, y desarrollo compartido no es, en modo alguno, el desarrollo desigual, sino el proyecto social y económico que haga posible la superación de los desequilibrios que hoy contemplamos.

La tercera idea central es, para el Jefe del Estado Mexicano, fincar sólidamente la justicia social bajo un régimen de libertad; pues para hacer posible la libertad ciudadana, ésta debe estar condicionada a la justicia. Lograrla, supone delinear firmemente el desarrollo inaplazable de todos los sectores, así como la solidaridad del pueblo con las instituciones y de éstas con la población.

Queremos definir, antes de continuar, que entendemos como desarrollo el crecimiento más el cambio y que de ninguna manera aceptaríamos el sofisma de que el simple crecimiento del producto nacional bruto supone el desarrollo. Por todos es conocido, que estos doce meses de trabajo tenaz, coordinado y solidario han sido enmarcados por una situación económica internacional caótica y hostil y por un cuadro nacional adverso y contradictorio.

Las metas esenciales del gobierno revolucionario de México han permanecido y se han afinado las medidas para alcanzarlas, no obstante las restricciones y obstáculos del exterior y del inferior.

Son fines prioritarios del pueblo mexicano, en esta etapa de su historia, alcanzar un acelerado y equilibrado desarrollo económico y social; lograr la máxima autonomía posible de sus procesos políticos y conseguir la reforma de sus estructuras para realizar la plena liberación del hombre de México.

Esto reclama una visión transformadora de la sociedad y una imaginación sociológica, de la que ha dado fehacientes pruebas el Presidente Echeverría.

La imaginación sociológica es una regla definitiva para convocar a un cambio delimitado, al tiempo, por la lógica implacable que debe exigirse a un político y por el proyecto de futuro que hace de un político de coyuntura un hombre de Estado.

No obstante, son obstáculos permanentes en esta lucha del pueblo mexicano y de su gobierno las estructuras productivas, sociales y políticas internas, la rigidez heredada de viejos sistemas y la influencia incalculable del poderoso capitalismo multinacional y monopolístico que ejerce su presión en la misma medida en que nos vamos insertando a la economía y a la política mundiales.

Es evidente que nuestro pasado económico inmediato condiciona los resultados del presente. Nuestro pasado económico inmediato, el del decenio pasado, es la historia de un esfuerzo tendiente al desarrollo estabilizador y capitalizador. Nuestro inmediato futuro tendrá que ser mucho más importante que eso porque tendremos que crear viviendas, puestos escolares, y de trabajo a una población que en la próxima generación, en 1985, constará de 85 millones de habitantes. El balance de la pasada década de desarrollo estabilizador y capitalizador arrojó una serie de saldos deficitarios y de rezagos sociales que la nueva estrategia económica y política se esfuerza en corregir; cada vez más mexicanos carecen de empleo; el crecimiento demográfico y la consecuente concentración urbana agudizaron nuestras carencias de ocupación, vivienda, salud, educación, alimentos y demás servicios públicos; aumentó el marginalismo económico y social en el campo y en las ciudades; se acentuó la concentración injusta de la riqueza y del ingreso; disminuyó el ritmo de la producción agropecuaria y se empobrecieron aún más vastos sectores del campesinado; aumentó el endeudamiento externo y el déficit de la balanza de pagos; se amplió la brecha tecnológica y de niveles de vida de nuestro pueblo con respecto a los de los países industrializados; se debilitó en términos relativos y funcionales la participación del Estado en la vida económica, por adelgazamiento de las finanzas públicas del gobierno federal y de las empresas estatales.

Durante la década anterior, sí hubo crecimiento del producto nacional bruto. Sí hubo un intenso proceso de capitalización. Sí hubo aumentos en la producción industrial y de los servicios. Sí hubo -aunque en menor medida- incrementos en la producción agropecuaria y en las exportaciones. Sí se mantuvo la paridad cambiaria del peso con respecto al dólar, la libre convertibilidad y la entrada de capital extranjero complementario a nuestro ahorro interno. Pero evidentemente, ello no bastaba al pueblo mexicano ni al gobierno nacional atento a las demandas populares. De ahí la decisión de cambiar el rumbo y definir una nueva estrategia económica que, pese a las dificultades externas e internas, durante estos tres años, ya ha probado su eficacia.

Este panorama imponía como una exigencia inevitable el cambio en las prioridades del sistema económico y social. Empero, hubiese sido iluso suponer que la política de cambios iba a realizarse sin obstrucciones, sin reservas, sin recelos y aun oposiciones abiertas que nos empeñamos en combatir.

Esta nueva estrategia económica reclama, principalmente la generación de suficientes oportunidades de empleo en todo el país; aumentos en la inversión y el ahorro público y privado, a fin de elevar la producción, sin que, en lo posible, exista desequilibrio presupuestal, endeudamiento externo y aumentos desorbitados en la oferta monetaria. También se busca el fortalecimiento gradual de las finanzas públicas para que éstas cumplan su doble propósito de fomento económico y de ampliación del gasto en política social; ello exige, por otra parte, la necesaria racionalización del desarrollo industrial, a fin de hacer que éste sea más competitivo internacionalmente y disminuya en forma eficaz su dependencia de precios altos, de subsidios, de altos aranceles, de importaciones de equipo, de tecnología y bienes intermedios. Y sobre todo había y hay que intentar la modernización y el impulso a la producción agropecuaria, mediante le elevación de los rendimientos y la canalización eficaz de recursos financieros, técnicos e institucionales al campo mexicano provistos con más altos niveles de eficiencia y de coordinación que en el pasado.

Es preciso reconsiderar, señoras y señores, en una perspectiva dialéctica, todo el problema de la agricultura y de los trabajadores del campo. Los alimentos se están convirtiendo en un arma estratégica en manos de las potencias más ricas de la Tierra que, en sus negocios entre sí, subvencionan y bajan sus precios mientras que, cuando tratan con el Tercer Mundo con nosotros, triplican, como en este año, sus precios. (Aplausos.)

La independencia de México no se basa solamente ya en la inalienable posesión de nuestros recursos naturales, conquista de la Revolución, sino ahora también en el dominio y expansión de la riqueza agraria para alimentar a nuestro pueblo, de un lado, y para quedar, del otro, al margen de la nueva estrategia comercial de los imperios económicos en el campo sagrado y prioritario de la alimentación del pueblo.

En el curso del año que cubre el III Informe Presidencial, constituyeron medidas sobresalientes de la nueva política económica: en primer lugar, una política demográfica insertada en el todo del desarrollo nacional, que procura la orientación del ciudadano hacia un programa de paternidad responsable dentro del respeto a su dignidad y a su libertad personal.

Planear la demografía en el marco del desarrollo y del cambio social y cultural, es hacer de la vida un altísimo proyecto humano; controlar la natalidad para hacer menos penosa la conciencia moral a los privilegiados, es convertir la planeación familiar en un programa sombrío para los más pobres. México elige la reforma de la curva demográfica del país - la más alta del mundo en países con más de 50 millones de habitantes - por la vía pacífica del desarrollo, la cultura, el trabajo y el cambio socioeconómico. El Presidente Echeverría ha puesto en pie, con ese programa de paternidad responsable y de planeación familiar, todo un edificio moral y político. Es

a nosotros, al país entero, a quien corresponde echarle a andar.

Por otra parte, la política económica en el exterior se ha orientado en el sentido de intervernir activamente en el diseño del nuevo orden económico internacional, a través de demandas vigorosas -hechas por nuestro país en diversos foros mundiales-, de mayor cooperación económica y de ampliación de las fuentes financieras, de conocimientos científicos y tecnológicos y de comercio con todos los países sin discriminación ni ventajas unilaterales para nosotros ni contra nosotros.

EL impulso -cuyas cifras omitimos- a las obras de infraestructura económica y social en caminos, vías férreas, puertos, servicios marítimos y postales, telecomunicaciones y aeropuertos, así como la orientación de una reforma educativa para el trabajo productivo y para el cambio social.

El manejo a más altos niveles de eficiencia, de las empresas públicas, y la ampliación de la intervención económica en Teléfonos de México, la minería, la industria automotriz, el crédito industrial, y la descentralización a través de parques industriales. La ampliación del sistema de maquiladoras a todo el territorio, junto con los estímulos fiscales a la exportación. Tiene acentos renovadores la creación de la Comisión Nacional de Energéticos, la creación de la Comisión Coordinadora del Acero y el Proyecto Nucleoeléctrico de Laguna Verde, que tienden a ampliar la oferta en estos renglones fundamentales de la producción nacional.

El pleno empleo es uno de los ejes de la nueva política económica. Las inversiones del sector público han tenido un efecto considerable en la producción y el empleo y sólo deseamos subrayar a título ilustrativo, que 300 mil campesinos trabajaron en los caminos de mano de obra dentro del Programa de Inversiones Públicas de Desarrollo Rural para construir 30 mil kilómetros de caminos, que más de medio millón de ejidatarios y pequeños propietarios han sido beneficiarios con el crédito de la banca oficial; y que el programa de vivienda popular con recursos oficiales ha creado aproximadamente 200 mil empleos directos.

La creación de 300 mil empleos en el marco del Programa de Inversiones Rurales, no sólo supone un haz de cifras de trabajo y consumo, sino algo más: que México considera esencial el máximo capital de que disponemos: los recursos humanos. Ello quiere decir que no concebimos una política de crecimiento económico que esté basada en el uso intensivo del capital y de la técnica, que deja atrás, como residuos descapitalizados y hambrientos, a millones de ciudadanosnos mexicanos que deben cooperar y participar del desarrollo.

La lucha contra la inflación y la especulación resultante de factores externos e internos conjugados en lo que va del presente año, determinó un ajuste coyuntural de la política económica general que consiste en canalizar mayores recursos en inversiones al financiamiento del gasto publico; en contener dentro de límites prudentes el endeudamiento del sector público; en lograr el indispensable equilibrio entre gasto productivo y gasto social, eliminando lo supérfluo y lo suntuario; en combatir mediante diversos instrumentos gubernamentales un mecanismo de distribución lento, pesado, costoso e ineficaz. En un país en crecimiento demográfico como el nuestro, no se puede ni se deben contener, las erogaciones en educación, salud pública, vivienda popular y otros renglones para regresar al desarrollo que sólo estabiliza la miseria y los actuales niveles de concentración del ingreso. Podríamos decir que ha sido la inversión privada la que se ha mostrado omisa, pero no buscamos culpables, queremos solidaridad efectiva y activa.

La lucha contra la inflación supone un acto decisivo en la defensa, primero, del poder de compra colectivo, pero implica también, por nuestro desarrollo desigual y por la desequilibrada distribución del ingreso, que concebimos la lucha contra la inflación como un medio, también, para defender a las grandes mayorías cuyo presupuesto familiar, al contrario que en las familias de mayor renta, se dedica en dos terceras partes a la alimentación o a aspectos básicos y esenciales de subsistencia.

Durante el lapso de este Informe se dictaron dos medidas de política económica que política económica que muestran los fines nacionalistas que mueven al gobierno.

La Ley para Promover la Inversión Mexicana y Regular la Inversión Extranjera y la Ley que Crea el Registro de Transferencia de Tecnología y el Uso y Explotación de Patentes y Marcas.

La política hacia el campo es uno de los procesos más notables del III Informe Presidencial por su intensidad y coherencia. Se singularizan las decisiones de dar atención más fluida a los problemas agrarios en cuanto a tenencia y seguridad de la tierra. El aumento substancial de recursos para fomentar la producción agropecuaria, los programas de capacitación técnica y de organización campesina; el agrupamiento del minifundio en unidades económicas de explotación hasta el punto de propiciar su organización en forma colectiva para la mejor explotación agropecuaria y forestal; los programas de industria rurales, de caminos de mano de obra, de forrajes, de pastizales, de desmontes, de ampliación de la política hidráulica y de creación de empleos en obras de infraestructura y de desarrollo de la comunidad; pero sobre todo destaca la elevación de los precios de garantía o liquidación del azúcar, el maíz, el frijol, el tabaco, el ixtle de

lechuguilla y la fabricación de sombreros de palma, que en conjunto, constituyen verdaderas elevaciones del salario de los campesinos mexicanos que durante muchos años vieron que todos los precios se movían al alza en tanto que sus productos se mantenían en precios congelados.

La incorporación al Seguro Social de cinco millones de agricultores temporaleros y cerca de dos millones más de productores de henequén, caña de azúcar, tabacaleros ixtleros.

Esta es otra medida importante de redistribución de ingresos. El hecho, emocionante en verdad de que dos de cada tres nuevos maestros sean adscritos al campo y que se hayan creado 16 nuevos centros coordinadores para la integración social de los indígenas.

En materia laboral se mantiene un paralelismo con la acción agraria de sentido popular que pocas veces se ha registrado en la historia política de México. Aumento en los salarios mínimos, aumento de salarios y prestaciones a los maestros de educación preescolar y primaria, a las fuerzas armadas, a los empleados de servicio federal, a los trabajadores del petróleo, la electricidad, la industria cinematográfica y los mineros; el apoyo a una política agresiva de vivienda popular representado por el INFONAVIT, el FOVI, el ISSSTE y los fideicomisos de la vivienda para las fuerzas armadas; la creación como avalista e impulsor del crédito y de las tiendas sindicales del Fondo Nacional de Fomento y Garantía al Consumo de los Trabajadores; el apoyo razonado y dentro de la ley, a la semana laboral de 40 horas en cinco días; que conlleva una reforma a fondo del sistema de relaciones entre los patrones y los trabajadores; el perfeccionamiento de la Comisión Nacional para el Reparto de las Utilidades de las Empresas y la elevación de la eficiencia en la administración de la política laboral. No menos importante es la acción de protección del consumo de los trabajadores y de las prestaciones sociales representadas por la CONASUPO y por la nueva Ley del Seguro Social, entre mecanismos del Estado de protección al ingreso de los trabajadores.

Quiero finalizar mencionando medidas de política económica de claro sentido de solidaridad internacional especialmente con los países de Latinoamérica. El IMCE ha fomentado el comercio con todos los países sin distingo de régimen económico o político. Le vendimos petróleo y cereales a Chile; le enviamos alimentos y medicinas a Nicaragua; sostuvimos y seguimos sosteniendo vigorosamente la Carta de los Derechos y Deberes Económicos de los Estados que complementa necesariamente la Declaración Universal de los Derechos del Hombre y del Ciudadano y dota al Tercer Mundo de un insustituible instrumento jurídico de relaciones económicas para la defensa de su soberanía, de su respetabilidad y de sus intereses más legítimos; creamos nuevas embajadas en 6 países los de menor desarrollo relativo, y el viaje tricontinental abrió perspectivas seguras a la lucha por la paz, el desarme, la desnuclearización y la cooperación internacional sobre bases justas.

Por estos hechos y disposiciones aquí velozmente repasados, en un visión de conjunto, apretadamente dispuestos, para conveniencia de nuestro análisis y de nuestro juicio; hechos y disposiciones verdaderos, que no son preámbulo, sino ya camino de los cambios por donde vamos andando, para la mayoría parlamentaria mexicana el ciudadano Luis Echeverría está cumpliendo su compromiso político con el Partido que lo llevó al Poder, su compromiso moral con la nación y el compromiso que todo estadista cabal adquiere con el futuro de su país. Muchas gracias. (Aplausos.)

El C. Presidente: Tiene el uso de la palabra el diputado Carlos A. Madrazo.

El C. Carlos A. Madrazo Pintado: Señor presidente, compañeros diputados:

"Cuando se entiende la política en función de un ideal que trasciende al individuo, mandar implica un compromiso solemne al que es preciso entregarse con responsabilidad suprema".

Es indiscutible que México vive una era de plena madurez ciudadana, por eso, no obstante la pluralidad partidista, y la heterogénea composición ideológica de esta honorable asamblea, a nadie escapa el significado eminentemente humano y social del Tercer Informe del jefe de la nación rendido ante la ciudadanía aquí representada.

Es incontrovertible que las tesis sustentadas en el documento que ahora se comenta, tienen alcances, por su contenido, extraordinarios. Los planteamientos plenos de valentía, los caminos señalados para alcanzar los difíciles pero posibles logros, y en general, su estructura y el significado en sí del análisis realizado, son de vibrante actualidad.

El camino difícil y largo que emprendió el jefe del Ejecutivo hacer tres años, poco a poco va llegando a las metas planteadas desde el inicio de este régimen revolucionario. El esfuerzo por vencer las dificultades, los intereses creados, y en general a la oposición sistemática para otorgar al interés social la importancia que tiene, ha sido titánico, pero sus frutos se pueden observar cada vez con más claridad.

Destaca por su importancia el llamado constante al ciudadano para que participe en las tareas de gobierno, conjuntado esfuerzos para ir en pos de los logros colectivos que tanto ansía nuestra sociedad.

Solamente con esta concurrencia de voluntades y esfuerzos, pueden irse venciendo obstáculos: los naturales y los creados por quienes no sienten de que el país continúe con su impulso creador, aunque para ello tengan que sacrificarse algunos interese particulares, que obstaculizan en su trayectoria el avance hacia el progreso.

Esta representación, a pesar de su distinta conformación y a pesar de los diferentes enfoques de acuerdo a la ideología propia de cada partido no puede dejar de reconocer que el esfuerzo, cuyo resumen se encuentran plasmado en el Tercer Informe, no dio cabida en ningún momento al descanso.

Esta gran empresa en que le Presidente de la República se encuentra empeñado por sacar adelante, sólo es posible con nuestra acción llena de entusiasmo y llena de contenido mexicano. El carácter republicano impuesto a cada una de las tareas llevadas a cabo, consolida en forma indiscutible la democracia, y marca cada vez más las posibilidades de renovación que ha caracterizado al actual gobierno.

Las tesis sostenidas en el transcurso de los tres años de la actual administración, de gran

contenido humano, nacionalista y revolucionario; fijando como su centro principal al hombre, al grupo humano y a la sociedad, han ido obteniendo para éste un mejoramiento en su condición económica y social, y han logrado elevar, cada vez más, la participación social del mexicano.

Somos un pueblo sujeto a una tradición histórica con sus características y sus fines bien delimitados. Somos un pueblo que durante largos años y en diversas actividades de la vida cotidiana hemos sufrido el coloniaje que reduce y avasalla el espíritu, pero hoy, en estos tres años últimos, hemos encontrado un rumbo nuevo que busca incesantemente la elevación propia de nuestra calidad humana, el respeto del libre albedrío, y el fomento del pluralismo ideológico, convencidos de que ésta se la única forma de abrir a nuestra patria horizontes plenos de esperanza, que indudablemente establecen los cimientos de una sociedad próspera en donde campea la igualdad.

En esta forma se prepara al mexicano del futuro, lleno de valor y de confianza ante el porvenir, fundados en la grandeza indiscutible de nuestro pasado histórico, y en el presente vibrante en que ahora se desarrolla nuestra vida pública.

La educación y la cultura por naturaleza propia, señalan el futuro que tenemos que alcanzar, nos permiten vislumbrar en un horizonte el México del mañana; por eso se ha empeñado el más grande de los esfuerzos por lograr cada vez mejores frutos en este renglón.

La reforma educativa puesta en marcha con carreras cortas, permite a los jóvenes incorporarse a una sociedad productiva. Frente al grave problema del desempleo del profesionista, se busca la forma de otorgar mejores oportunidades para proporcionar a la juventud la certeza de su utilidad social. Se busca en la sociedad misma la entraña de la enseñanza. Con un sentimiento profundo de mexicanidad y sin desvincular las políticas a seguir, con un acentuado humanismo, subrayando los rasgos que nos unen a nuestra tradición, y que aseguran la independencia en todos los caminos.

La educación primaria se ha llevado con fuerza al campo, si descuidar desde luego el renglón importante de la enseñanza en la cuidad, en donde cada vez más, dentro los recursos con que se cuenta en esta materia, se intensifican los esfuerzos.

Es innegable que en materia educativa hemos tenido un avance espectacular, solidificando la base cultural del pueblo, con el establecimiento de Escuelas Tecnológicas Agropecuarias, Escuelas Tecnológicas Pesqueras, Escuelas Tecnológicas Industriales, que rompen en muchos aspectos con los esquemas que tradicionalmente se habían utilizado en materia educativa.

No se cierran lo ojos ante la deserción de la juventud en la instituciones de enseñanza superior, pero se busca incansablemente la manera de encauzar a las nuevas generaciones en oportunidades para la formación de un México valioso.

A través de la planeación adecuada y de las pasadas reuniones habidas en materia educativa, que culminaron con las declaraciones de Villahermosa, y los acuerdos de Toluca, en forma tenaz se han puesto los sólidos cimientos para edificar toda una política educativa en el país, que tiene como primordial objeto allegarse la voluntad de la juventud, y preparar sobre todo a nuestro pueblo para enfrentar los días difíciles que nos depara el mañana.

Solamente con este concurso de voluntades los obstáculos que impiden el avance en materia educativa podrán ser vencidos.

Con esta política humanitaria en donde ha campeado la participación, el intercambio de opiniones, y muchos veces el cambio de rumbo para buscar mejor condiciones de vida, se han dado soluciones a los problemas que en su desarrollo histórico ha devenido el sector obrero, afirmándose: "que nuestro patrimonio más valioso, el trabajo humano, ha sido subutilizado y mal remunerado".

La reorientación general en ese aspecto ha sido continua, buscando senderos mejores de la productividad de los recursos humanos, y afirmando al hombre cada vez más digno, precisamente por el hecho de ser hombre.

Esta doctrina humanitaria, desde luego ha sido enfocada en forma impresionante a la importancia que tiene la medicina y seguridad del trabajo, instrumentando al ejecutivo para la consecusión de satisfactores en estas dos ramas.

Se creó la Comisión Nacional para la Participación de los Trabajadores en las Utilidades de las Empresas, para acelerar el que los obreros participen de las ganancias legítimas que les correspondan.

La preocupación del ejecutivo, para garantizar al obrero cada vez mejores condiciones de vida, se encuentran patentes en el proyecto de Decreto enviado a esta honorable Cámara, tendiente a fijar nuevas y mejores condiciones en el salario mínimo, que permite a la clase trabajadora elevar no solamente su ingreso, sino su poder adquisitivo y sufragar en esta forma sus necesidades vitales.

Se ha reconocido en todo momento que los derechos del trabajador no son dádivas, sino producto de la constancia y tenaz lucha que el proletariado de México ha dado dentro de cada uno de los regímenes revolucionarios, habiéndose manifestado el jefe del Ejecutivo, deseoso de que los sectores obreros participen, diseñando nuevas y mejores fórmulas para incrementar realmente la productividad y el aprovechamiento óptimo del tiempo.

Las medidas para dignificar y cumplir el compromiso histórico con la clase obrera, no quedan en la elevación del salario únicamente, sino en la decisión tenaz del Ejecutivo de establecer todos los mecanismos, tanto legales como institucionales, para mantener alta la capacidad adquisitiva del salario; se ideó la forma de crear un organismo que distribuya ya el crédito al obrero, a través del Fondo Nacional y Garantía del Consumo de los Trabajadores, para obtener bienes de consumo duradero, y

obtener los servicios esenciales, sin necesidad de recurrir a financiamientos altamente costosos y muchas veces usureros.

En esta forma se establecieron medidas para proteger el salario e incrementar realmente su poder adquisitivo, lo que indiscutiblemente obtendrá en un futuro próximo, un proletariado pleno, que cumpla en forma más adecuada con su responsabilidad social como factor de la producción, habiéndose desde luego hecho hincapié en la importancia que tiene la vinculación existentes entre la productividad misma y la justicia social.

Se realizó un señalamiento importante respecto a que el índice de productividad no se encuentra en el aumento de cargas de trabajo, sino logrando un cambio en el ambiente y en el medio social en que el trabajador se desenvuelve; habiendo establecido consecuentemente para obtener esto, los comités técnicos de empresas, ampliando el campo de acción del Seguro Social a quienes no gozaban de él, en general, mejorando las prestaciones existentes para los obreros, como para sus hijos; desde la atención médica, la orientación familiar, los campos deportivos para la juventud; hasta la implementación dentro del derecho, para responder mejor en esa forma a la realidad económica y social del país.

No puede dejarse de comentar por su importancia la política que en materia habitacional el actual régimen lleva a cabo.

En forma impresionante se han construido miles de viviendas para el obrero y para la clase popular, cumpliendo en este renglón con una importante tarea social que subraya definitivamente la tesis humanista sustentada por el

Presidente Echeverría.

El gobierno de la República ha cumplido indudablemente con creces el compromiso de renovar las instituciones que hace necesario el cambio. Se ha reconocido en todo momento que gran parte de los logros actuales hubieran sido imposibles sin el concurso de la clase obrera, que es la columna vertebral en el movimiento revolucionario y cuya fuerza ideológica quedó plasmada en la Constitución del 17; se reconoce su gran contribución a la producción nacional que permite, por medio del trabajo, que los mexicanos de hoy tengamos una patria fuerte y generosa.

A través de una auténtica doctrina de solidaridad humana, no solamente se reconoció que las fuerzas populares organizadas son el sustento de las Instituciones, sino que el actual gobierno, representante de las mayorías del pueblo indiscutiblemente, irá a la vanguardia en la lucha auténtica por la defensa de las clases trabajadoras.

El informe del Ejecutivo contiene, en suma, la participación ciudadana para renovar todos los aspectos de la vida pública; una sana comunicación, alentando la opinión de cada ciudadano, y permitiendo la libre expresión y el fluir normal de las ideas. Esto confluye naturalmente en la coparticipación de pueblo y gobierno en las decisiones políticas que marcan la vida del país. Se promueve la necesidad del cambio dentro de las posibilidades reales de acuerdo con nuestros recursos y con nuestra realidad, y solamente el concierto de voluntades de todos los mexicanos y una confianza cada vez mayor en el actual régimen, permitirá el avance continuo y el logro de nuevas formas cada vez más justas de convivencia.

Se gobierna no nada más en la vida presente, sino en una necesidad innegable de prever el futuro mediato e inmediato, y buscar las tesis y las formas que concurran en soluciones adecuadas para nuestra vasta problemática, no dejando al simple destino nuestro futuro como nación progresista. En todo momento se piensa en la realidad, se actúa en la realidad, se tiene en cuenta la compleja problemática mexicana, con sus tradiciones, con los problemas que la vida cotidiana plantea y con las posibilidades que el futuro marca.

El régimen tiene como preocupación central la paz social, que solamente viene con el manejo justo de nuestros recursos y de nuestras instituciones; sin embargo, se promueve un gran programa de transformación, que se emprende desde luego, con la mirada altiva del visionario.

Se busca el que cada mexicano sienta la necesidad del cambio, sienta la necesidad de la transformación que viene pregonando el Presidente Echeverría a través de los tres años de gobierno; se excita al ciudadano para que se integre con emoción y con pasión creadora a concurrir con su esfuerzo a nuestra evolución histórica; y se busca, en fin, que las metas progresistas se alcancen juntos pueblo y gobierno.

México debe tener confianza en su actual gobernante que lleno de un sentimiento de mexicanidad, de un humanismo pleno, ha buscado y continúa buscando la forma de encauzar al país, hacia horizontes más amplios. La intensidad de la fuerza se mide por la resistencia que vence. Por nuestra democracia es evidente sin lugar a dudas la relevancia que presta el actual gobierno al sentimiento de respeto al hombre mismo, el encauzamiento social que da a todos los problemas, y desde luego, su decisión por esforzar cada vez más las tareas cotidianas, por no detener el avance de nuestro país y porque prevalezca en nuestro ámbito social la idea de justicia y de una vida mejor. (Aplausos.)

El C. Presidente: Tiene la palabra el C. diputado Píndaro Urióstegui.

- El C. Píndaro Urióstegui Miranda:

"Señor Presidente:

Honorable asamblea:

El pasado primero de septiembre, el C. Presidente de la República compareció ante esta soberana asamblea, para informar al pueblo de México sobre la gestión de su gobierno en los últimos doce meses, documento que a la vez, por comprender reflexiones y resultados que van más allá de ese lapso, se convirtió en sereno balance de tres años de responsabilidad nacional. Esta representación popular le escuchó con atención y posteriormente, con detenimiento, ha estudiado su información para llegar a las conclusiones que

hoy exponemos.

México no ha desviado el curso de su proceso revolucionario; por el contrario lo ha acelerado perfeccionando sus instituciones y creando otras necesarias, agilizando sus mecanismos con una mayor captación de opinión pública y fortaleciendo nuestra dinámica social con nuevos instrumentos legales. La vida del país ha aceptado e incorporado plenamente a sus estructuras mental y social las directrices ideológicas de la Revolución Mexicana de 1910; los gobiernos y el pueblo han compartido desde entonces, responsabilidades comunes, realizado tarea idénticas y alcanzando metas solidarias. En México, culmina así con el Presidente Echeverría un empeño de singular trascendencia política: un gobierno que abandera la revolución del pueblo y un pueblo que se gobierna a sí mismo con definido y crítico juicio revolucionario.

El Presidente Echeverría nos entregó las realizaciones fecundas y optimistas de una vida republicana en cotidiana superación por la vía democrática. Nada a espaldas del pueblo; nada contra los intereses del pueblo, todo bajo la luz enjuiciadora de la nación, para el servicio exclusivo de ella y sin desviaciones sectariales, de clase o de privilegios particulares. Definió lo que ha definido permanentemente, con pasión humana: una supremacía constitucional, no fría e inmutable, sino profundamente sensible al quehacer del hombre para conformar un estado de derecho dentro del cual el propio Presidente Echeverría se ha echado a cuestas la tarea de reformar nuestras estructuras económicas, políticas, sociales y culturales para lograr una sociedad cada vez más justa, más equitativa, sin sacrificio de ninguna libertad. Esto es, nos entregó los esfuerzos de un gobierno por lograr un orden social, día con día, más justo para acrecentar y fortalecer nuestro régimen Libertades.

El nacionalismo del actual gobierno tiene abiertas sus puertas a la dimensión del mundo en que vivimos y su preocupación atenta a la perspectiva del tiempo en que existimos. No seremos más espectadores pasivos de una política internacional decidida -por indiferencia o temor de los pueblos débiles- en las capitales de las grandes potencias colonialistas e imperialistas de acuerdo con sus conveniencias e intereses económicos, acentuando así el subdesarrollo político y económico y la consecuente pobreza de la mayor parte de los demás países. México rescató en el presente trienio su papel de actor en la conformación de un nuevo orden internacional que restituya a cada nación su dignidad soberana en cuanto al aprovechamiento de sus recursos humanos y naturaleza, así como a decidir su propio destino con independencia e igualdad dentro del concierto de las demás naciones. Esta política internacional responde a una línea eminentemente revolucionaria que hoy define al Tercer Mundo, pero que sin lugar a dudas muchas de sus raíces más importantes, parten de la etapa constitucionalista, del fervor carrancista de nuestro movimiento social de 1913.

Del documento que nos entregó el Presidente Echeverría se desprenden tres grandes empeños: primero, acelerar el desarrollo económico del país para beneficio de sus núcleos populares mayoritarios o sean los obreros y los campesinos; no un simple desarrollismo por el desarrollismo mismo o un desarrollo aristocratizante para beneficio de una burguesía cada vez más intolerante dentro de nuestra realidad socio-política. Un desarrollo como él lo quiere, es como lo demanda el pueblo, con una mayor y mejor distribución de la riqueza entre las clases trabajadoras, a efecto de que no por hambre, renunciaremos a derechos que la Revolución Mexicana conquistó con sangre para el pueblo mexicano.

En segundo lugar advertimos su dedicación por incrementar nuestra democracia, no sólo como forma de gobierno, sino también como base de nuestra vida comunitaria. La apertura creciente a las diversas corrientes de opinión pública, por minoritarias que éstas sean, fortaleció su representación en el seno de esta Cámara a través de reformas que hablan por sí solas y caracterizan a un gobierno. La democracia es ante todo marco institucional que garantiza el ejercicio de otras libertades; preservarlas sin degenerar en libertinaje es guardarnos de una anarquía que sólo ha beneficiado a lo largo de la historia a las corrientes reaccionarias y conservadoras. Para los mexicanos la democracia es vital, porque sólo dentro de ella podremos lograr los cambios sociales que buscamos. Ni autocracia que oprima ni anarquía que desquicie, sólo democracia como fórmula de conciliación nacional, como base de trabajo que dignifique al hombre y como escenario de paz justa que nos permita progresar en fraternal competencia, en equilibrada disidencia y en responsable concurso partidista de superación ciudadana.

En tercer lugar, encontramos una acentuada ratificación a nuestra vocación universal; multiplicamos y diversificamos nuestros contactos con el exterior, dándoles sentido práctico, no sólo porque sabemos que ya ningún país es autosuficiente, sino también porque debemos asegurarnos de preservar sin claudicaciones, ni incertidumbre, los valores políticos y económicos de nuestra soberanía nacional; constituimos un país que a lo largo de cuatro siglos ha pagado muy caro por retener cada centímetro de su territorio; la ambición desmedida de muchas potencias se volcó sobre nuestra historia haciéndola dramática pero a la vez heroica; ahora el Presidente Echeverría define las bases de una nueva diplomacia mexicana anti-imperialista y anti-colonialista pero a la vez de una amplia fraternidad y solidaridad internacionales. Pregona no la ley del poder, sino el poder de la ley; propugna no una esclavitud del hombre por la economía al servicio del hombre; urge de una orden no que sojuzgue, sino que libere a iguale permitiendo a las naciones grandes y pequeñas, fuertes y débiles, compartir con integridad y respecto mutuo, la responsabilidad común de construir un mundo mejor y un futuro más promisorio.

Dicho informe nos ratificó, con profunda satisfacción para esta representación nacional, el

criterio que manteníamos sobre la firme estabilidad de las instituciones públicas que rigen la vida del país, lo que ha permitido una política interna democrática, nacionalista y de interés social siempre dentro de un marco constitucional; para ello, el Presidente Echeverría - merced a su nueva Ley Federal Electoral - fortaleció la participación de un multipartidismo que salvaguarda la libre expresión de las diversas corrientes de opinión. Es consecuencia y fruto innegable de nuestro proceso revolucionario que todos en México busquemos perfeccionar nuestras instituciones partiendo de una adecuada interpretación popular. El actual gobierno de la República no pretende imponer criterios, ni establecer verdades oficiales, ni aplicar axiomas políticos; auspicia por el contrario una forma educativa que estimule desde la infancia el germen de un ciudadano libre, honesto y responsable; respeta una división de poderes para que éstos actúen con equilibrio sin llegar a enfrentamientos innecesarios, la colaboración de éstos entre sí no significa supeditación, se llama orden constitucional; garantiza igualmente la acción de una oposición que responda con sinceridad a inquietudes de la colectividad, participando con altura de miras y no con actitudes pedestres, orientando sanamente y no confundiendo o tergiversando hechos y palabras a quienes confían en ellos, sugiriendo fórmulas razonables y no ofreciendo slogans comerciales huecos y delirantes, la responsabilidad de la oposición es de mucha trascendencia por lo que la nación reclama de ella trabajos tan intensos y leales como los que exige al partido en el poder.

Esta nueva ley estructura un proceso electoral con cargas compartidas por gobierno, partidos y ciudadanos, lo que permitió llevar a cabo el pasado mes de julio las elecciones más limpias, numerosas y pacíficas que registra nuestra evolución política.

El diputado panista Fernando Estrada Sámano siguiendo una línea de su partido acusó al gobierno de todas las calamidades habidas y por haber en este país incluyendo las inundaciones y fenómenos sismológicos. Confundió, confundió esta Cámara con el muro de las lamentaciones, lo que develó su ego confesional. Sus críticas infundadas, sus críticas infundadas al proceso electoral hubieran sido oportunas en las juntas preparatorias donde participaron todos los candidatos que dispusieron de libertad de expresión por parte de sus partidos. ¡Qué lástima que al diputado Estrada Sámano lo haya amordazado Acción Nacional y ahora venga a pretender impresionarnos con una crítica que ya perdió noción publicitaria! (Aplausos.)

Escuchamos una vez más por parte de Acción Nacional, críticas infundadas al ejido con lo que obviamente reflejan que nunca podrán aceptar el reparto de la tierra por parte de los gobiernos emanados de la Revolución. Al ejido no solamente se le debe medir por cifras de producción, el ejido es ante todo una medida de dignidad humana, es una medida de acción revolucionaria y es una medida de preocupación por parte de nuestros regímenes. Acción Nacional debe dejar de añorar de una vez por todas a sus soñadas haciendas. La Revolución rescató para el campesino las tierras que los hacendados le despojaron y ahora para incrementar la producción, se está estimulando la colectivización del campo a través de empresas agropecuarias que respetando al ejido contribuyen a mejorar las condiciones de vida del campesino. Ni el gobierno de Echeverría ni los campesinos, darán marcha atrás; el artículo 27 constitucional y la Ley de Reforma Agraria, son tan sagrados para nosotros como para ustedes la Santísima Trinidad. (Aplausos.)

Reconocemos que uno de los más graves problemas que afronta nuestro desarrollo es la explosión demográfica, de allí que anticipemos la utilidad de las próximas reformas a la Ley de Población que nos anunció el Presidente Echeverría y que nos permitirán, seguramente, una planeación familiar no compulsiva, sino indicativa que lejos de chocar con la tradición de la familia mexicana, fortalezca su confianza en el futuro sin violar su intimidad, ni coartar su libertad. A esto debemos agregar el plausible inicio de una reformas administrativa basada en una descentralización regional que debido al país en nueve zonas para atender más eficaz y prontamente los requerimientos de una ciudadanía que día con día venía sintiendo la pesadez de una burocracia que había rebasado el ideal de la administración expedita y diligente; frente a ello, sin lugar a dudas la aceptación de la semana laboral de cinco días para los trabajadores al servicio del Estado sin disminuir sus horas de trabajo y la creación de la Comisión de Recursos Humanos del Gobierno Federal, representan medidas por demás significativas que contribuyen a forjar la imagen dinámica y renovadora de un gobierno revolucionario y humanista, cuyo principio y fin es servir al hombre y preservar su dignidad.

Esta asamblea se suma al público reconocimiento que el Primer Mandatario hizo de las fuerzas armadas; su presencia y su actuación representan una ideal de nuestra Revolución; preservar la paz social con lealtad inquebrantable a las instituciones. Tal conquista no es un obsequio de la incertidumbre, es el producto de una definida trayectoria de disciplina, de preparación profesional y de mentalidad civilista. De nuestro pueblo surgió el ejército que hizo triunfar a la Revolución, y hoy ella devuelve al pueblo en bines y servicios, sobre todo en sus momentos de infortunio el brazo, el corazón y el esfuerzo de un ejército íntegro, de intachable conducta y acrisolada honradez.

Nuestro Primer Magistrado, igualmente, nos informó detalladamente de los lineamientos de su política exterior. De los motivos de sus viajes a Chile, Canadá, Reino Unido, Bélgica, Francia, Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas y República Popular China; de sus propósitos de una reorganización a fondo de la Organización de Estados Americanos para afianzar el sistema interamericano sobre la base de Estados soberanos: sobre sus empeños por lograr que América Latina sea la primera zona

desnuclearizada del mundo merced al apoyo que las potencias atómicas han venido dando al Tratado de Tlatelolco; del respaldo de un número cada vez mayor de países a la Carta de Derechos y Deberes Económicos de los Estados como complemento indiscutible de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre, lo que permitirá a las naciones una armoniosa conveniencia económica; nos habla en fin, de la multiplicación de acuerdos y tratados de cooperación económica e intercambio científico, tecnológico y turístico,. de los convenios suscritos para equilibrar, nuestra balanza comercial, del próximo establecimiento de nuestro territorio de empresas mixtas de exportación, todo ello para asegurarnos una mayor autonomía interna y una más acentuada independencia del exterior.

Pero lo que mereció especial atención de nuestra parte, fue el enterarnos de la solución permanente y definitiva que a partir del año entrante, se dará al problema de la salinidad en el Valle de Mexicali, al recibir nuestro país aguas del Río Colorado en la calidad y volumen que hemos estado solicitando desde hace más de doce años; la inversión de las obras correspondientes será cubierta por el Gobierno de los Estados Unidos, pero operada por nuestros compatriotas. La feliz culminación de estas negociaciones no representa ni triunfos, ni derrotas unilaterales, sino el reconocimiento a planteamientos de justicia y de razón; con ello advertimos en el vecino país un singular propósito de convivencia pacífica, al mismo tiempo sentimos como en ningún otro momento la fuerza de nuestra tradición anti-intervencionista y el valor de las normas morales y de derechos a cuyo amparo nos acogemos. Espectacular tesón de nuestra diplomacia, da un ejemplo de solución a todo conflicto futuro y de fraternidad para todas las naciones del orbe.

De todo lo anterior concluimos que el Presidente Echeverría, no sólo ha trabajado intensamente, sino que lo ha hecho con fe republicana, con emoción creadora y con dinámica revolucionaria. No es un esclavo del escritorio ni del oficio burocrático; su vigor físico y su mentalidad renovadora le ha llevado permanentemente al desierto y a la montaña, al antiplano y a la selva, a la urbe y a la aldea, a la fábrica y al ejido, a la escuela y al taller con el exclusivo propósito de convivir con su pueblo, de participar en la solución de sus problemas y afianzar la gran unidad nacional que requiere su gobierno para continuar la ardua tarea de transformación social que el país reclama. No es un teórico, es un estadista en busca permanente de soluciones prácticas e inmediatas, por eso no se da tiempo a descansar, le angustia la rapidez con que crecen los problemas y se agudizan las crisis, por eso ha hecho del poder público una entrega absoluta, un fervor apasionado y una misión impostergable de servicio, de trabajo y aun de sacrificio personal.

A la mitad de la jornada, el balance de su gobierno es altamente positivo: su pacto de solidaridad con los obreros y campesinos del país para afrontar desequilibrios sociales; su emoción por descolonizar nuestra tecnología y elevar el nivel cultural de la nación; la fortaleza de las instituciones públicas que representa y la lealtad del ejército del pueblo; su ansiedad por encontrar soluciones no sólo mediatas, sino también la planeación de nuestro desarrollo a largo alcance, mirando siempre con fe y confianza al porvenir, se traduce desde ahora como un gobierno con perspectiva histórica, con juicio crítico de un devenir ansioso de devorar al presente por la pujanza de su creatividad. El Presidente Echeverría por su conducta revolucionaria de estadista, y su gobierno por la trascendencia innovadora de sus instituciones, merece el apoyo irrestricto de este honorable Congreso y el afecto, el respaldo y la solidaridad permanente del pueblo de México. (Aplausos.)

El C. presidente: Se concede la palabra al C. diputado Fedro Guillén, último de los oradores registrados en esta sesión.

El C. Fedro Guillén: Señor presidente; compañeros y amigos: El otro día un compañero de Acción Nacional hablaba de un delito no previsto en el Código Penal que era la improvisación. Y hoy día dadas las circunstancias de tiempo que hemos (acatado) agotado, que esta vez, ese delito podría ser hablar más de 10 o de 15 minutos.

Quiero ocuparme, pues, brevemente de algunos de los aspectos de la política internacional del Presidente Echeverría; aunque la mayoría de ellos han sido inteligentemente tratados desde esta tribuna. Y quiero que se me conceda licencia para un asunto personal, un recuerdo personal. Había escogido el tema de la política exterior de México, recordando a dos personas con la que yo compartí esta rama tan importante de la vida pública del país, me refiero al querido maestro Isidro Fabela, cuya cercanía espiritual me honra y al licenciado Luis I. Rodríguez con quien tuve la gran oportunidad de trabajar en una Guatemala revolucionaria, en la cual el Embajador Rodríguez no sólo cumplió su específica misión diplomática, sino hizo algo más, a que está obligado el diplomático moderno, que es, dentro de las normas de la ley internacional, adherirse a la lucha de un pueblo pequeño como el de Guatemala, que hace veinte años luchaba como hasta hace unos días o unas horas o sigue luchando, el noble pueblo chileno. (Aplausos.)

El señor Presidente, en su importante mensaje del 1º. de septiembre, agotó algunos de los temas de su importante gestión. Yo quiero recordar por un espíritu latinoamericanista que ha presidido la obra y el itinerario del señor Presidente Echeverría, la acción de México cuando las Naciones Unidas discutieron el Estatuto Jurídico del Canal de Panamá. En esa ocasión México con un hondo sentido de fraternidad latinoamericana, en Panamá, la tierra del Congreso de Bolívar, México estuvo acorde con el derecho soberano que tiene el pueblo panameño para recuperar la soberanía en esa faja de su territorio.

Quiero, además puntualizar cómo el viaje por los tres continentes, fue la respuesta de un

hombre que no tiene temor a las distancias geográficas ni ideológicas. Dentro de la tesis mexicana que baja del gran Juaréz con esa frase en oro, citada hace pocos días por un diputado del sur. México entre su postulado de autodeterminación -lo subrayó así el Presidente en numerosas y solemnes ocasiones- llevó la voz de México, trató regímenes capitalistas y regímenes socialistas, alternó en las mesas de los países que están creando una nueva sociedad socialista que iguales los palacios más fastuosos de la vieja Europa; y en todo instante, la voz de México, voz de soberanía, voz de independencia; sin ser alardes, y voz de fraternidad con esa vocación universal que da el diálogo con todos los pueblos y con todos los países.

Y permítaseme recordar cuando se ha leído esta mañana este nuevo Proyecto de Ley de Población, ese inciso hermoso en el que se dice que el asilo territorial, será en el futuro ya no sólo para los nacionales, sino para todos lo perseguidos de la tierra. Y he recordado cómo hace 30 ó 35 años México abrió sus puertas a un inmigrado de todos los pueblos de la tierra de cuya nación no se puede discrepar, León Trotsky para así encontrar en este rincón el derecho a una vida, a una lucha y a una obra de trabajo.

Creo también que ese espíritu humanista presente en esa nueva ley y presente en la política internacional mexicana, estuvo cuando México abrió las puertas a España, cuando México recibió a los emigrados de la República que vinieron a enriquecer la cultura de nuestras universidades, las letras, la teología, las fábricas y el campo. En ese instante México vivió otros de sus momentos estelares de política internacional universalista que es la que inspira sin duda, la nueva proyección de esta ley que hoy hemos oído.

Y, ya que menciono esa hermosa etapa -amigos míos-, esa hermosa etapa de la vida de la vida de las naciones con nuestro delegado Isidro Fabela, con nuestro presidente Lázaro Cárdenas, permítaseme anticipar algo en homenaje a él; a Cárdenas, que me parece es uno de los mexicanos más importantes desde nuestro tiempo. Yo quiero desde esta tribuna, y, aprovechando que estamos hablando de esa gallarda y humana política internacional, proponer de una vez, aunque a su tiempo se hagan los trámites respectivos que el nombre que esté después de Francisco Villa, sea ¡ése!; Lázaro Cárdenas. (Aplausos.) Nuestro jefe de Estado reseñando las visitas de mandatarios del exterior, "se recibió -dijo- la visita del señor Presidente de El Salvador. 'Se tuvieron conversaciones con el señor Primer Ministro del Canadá, y subrayó con la emotividad que le daba la identificación nacionalista con otro gran estadista y patriota', se recibió a la vista del doctor Salvador Allende".

"Chile, amigos míos, es un país de loca geografía" dijo uno de sus ensayistas. De esa abrupta geografía aquella lengua de tierra prisionera entre los hielos del Antártico, la enorme cordillera, el Océano Pacífico de ese país, quisiera citarlo como un caso de la fraternidad mexicana hacia el sur, llegó una modesta rural en la mejor época cuando se estaba creando la doctrina educativa popular en México, la de José Vasconcelos, y ella contribuyó a esparcir la semilla del ABC por todos los caminos y por todos los rincones de México. Ese país, de abrupta geografía, ese país azotado por los golpes de la naturaleza, ese país de entraña de cobre que ha sido, como dijera López Velarde, "nuestro petróleo, los venenos del diablo", ese país nos envió no hace mucho, a ese ilustre estadista y luchador, Salvador Allende, de cuyo suicidio nunca creímos los que conocíamos al luchador desde sus tiempos estudiantiles. (Aplausos.)

Es muy hermoso, amigos y compañeros diputados, es muy hermoso, que comenzando por el señor Presidente Echeverría, por los partidos políticos, por las organizaciones intelectuales, universitarias y pueblo en general, el respaldo ha sido unánime al pueblo y a las mayorías chilenas, y yo me permito felicitar, porque no todo ha de ser discrepancia, al vocero de Acción Nacional que dio su voto de apoyo contra ese golpe de fuerza en un país que tenía la tradición cívica más hermosa de los últimos lustros y que, dijo el vocero de Acción Nacional, había echado por tierra a un Presidente legalmente constituido.

Es posible que se pudieran tener discrepancias con ese régimen que busca su propio camino, es seguro que México, según su tradicional política, nunca intervino ni interviene en los asuntos ajenos, pero hace apenas unos días la señora de Allende, hoy viuda, según las enlutadas, fatales noticias, y también según esa noticia que nos conmueve a todos, huésped ya de la Embajada de México, hace unos días la señora de Allende, trajo el mensaje de la solidaridad chilena a México y una carta tierna de los niños chilenos a los niños mexicanos en desgracia.

Creo pues que México y su Presidente y sus instituciones han sido congruentes con su trayectoria histórica. Creo, amigos míos, que las ideas se matan, olvidan la advertencia de la historia, que la historia nunca retrocede. Creo, amigos, que en el espíritu humanista que ha guiado los pasos internacionales de México, presentes en las giras del Presidente, presentes sobre todo en ese magnífico discurso que dijo en la sede de UNESCO, que está lleno del mejor humanismo político no común en ningún mandatario de nuestro país. Creo, amigos, que para ser leales a esta hora de duelo, a esta hora de dolor universal, con la catástrofe de la ley frente a la fuerza armada, yo me uno a la felicitación que aquí mismo el señor Presidente externo a nuestro instituto armado y que ha recordado el compañero Píndaro, brillantemente, porque lo acaba de repetir el señor Secretario de la Defensa Nacional y esto no es sólo un compromiso, sino es una honra; la hora de las asonadas en México, pasó a la historia y hoy nuestro ejército coadyuva a la lucha contra las calamidades públicas, contra los desastres y por

ello tiene el favor y tiene el cariño del pueblo mexicano. (Aplausos.)

Creo, para terminar, señores y señoras, que la política internacional de México se ha transformado a impulsos de este hombre, renovador que es nuestro piloto, el estadista valiente, firme, que hace mantener nuestra soberanía en todos los instantes y que está dispuesto sin alardes a recordar a los países poderosos que la autoridad de México viene de ayer, viene de la liga de las naciones, cuando defendimos a los pueblos que fueron pisoteados por el fascismo; viene de ayer, cuando la política internacional ha llevado por el mundo la proyección de un pueblo que no es poderoso militarmente, pero que tiene la autoridad moral de los pueblos que aman la paz y que aman la fraternidad. Por ello, en esta hora de luto para América Latina, pero también de lucha de los hombres libres, al lado de la conciencia universal, yo quiero recordar que junto al nombre de Lázaro Cárdenas, nuestro gran luchador contra los intereses extranjeros de otrora, quiero colocar como un homenaje a México y a Luis Echeverría el de Salvador Allende. Muchas gracias. (Aplausos.)

Ley Federal de Educación

El C. secretario J. Armando Gaitán Gudiño: Señor presidente, se informa que en el curso de la sesión llegó a esta H. Cámara la Iniciativa de Ley Federal de Educación, con la que se dará cuenta en sesión próxima. Están agotados los asuntos en cartera.

El C. presidente (a las 16.35 horas): Se levanta la sesión y se cita para la que tendrá lugar el martes 18 del presente, a las 10:30 horas.

TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA Y

"DIARIO DE LOS DEBATES"