Legislatura LIII - Año II - Período Ordinario - Fecha 19861127 - Número de Diario 33

ENCABEZADO

LIII LEGISLATURA

DIARIO DE LOS DEBATES

DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

Registrado como artículo de 2a, clase en la Administración de Correos, el 21 de septiembre de 1921

AÑO II México, D. F., jueves 27 de noviembre de 1986 NÚM.. 33

SENO SOLEMNE

SUMARIO

APERTURA

La presidencia informa que la sesión tiene por objeto conmemorar el bicentenario del natalicio de Don Francisco García Salinas, en cumplimiento al acuerdo aprobado por el pleno el 18 del actual.

INVITADOS

La propia presidencia da la bienvenida a los CC. licenciado Genaro Borrego Estrada, Gobernador Constitucional del Estado de Zacatecas; licenciado Pascual Santoyo, Presidente del Tribunal Superior de Justicia en Zacatecas; senador Rafael Cervantes Acuña, representante de la H. Cámara de Senadores , y a distinguidas personalidades de la vida política social, cultural y económica del Estado de Zacatecas.

HOMENAJE

Rendido al patriota zacatecano Francisco García Cervantes, por los ciudadanos diputados Jaime Haro Rodríguez, Hildebrando Gaytán Márquez y Eliseo Rangel Gaspar.

COMISIÓN DE CORTESÍA

Se designa para que acompañen los visitantes al abandonar el salón.

ACTA DE LA PRESENTE SESIÓN

Sin discusión se aprueba. Se levanta la sesión solemne. Se pasa a sesión pública ordinaria.

DEBATE

PRESIDENCIA DEL C. GUILLERMO FONSECA ALVAREZ

(Asistencia de 322 ciudadanos legisladores)

APERTURA

El C. Presidente (a las 11:20 horas):

Se abre la sesión solemne para conmemorar el Bicentenario del Natalicio de Francisco García Salinas, en cumplimiento del acuerdo aprobado por esta Asamblea el 18 de noviembre próximo pasado.

Breve receso para recibir en el salón de protocolo a los invitados especiales para este acto.

INVITADOS

El C. Presidente: - Nos honran con su presencia y les brindamos una cordial bienvenida a los ciudadanos:

Licenciado Genaro Borrego Estrada, Gobernador Constitucional del Estado de Zacatecas. (Aplausos.)

Licenciado Pascual Santoyo, Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas (aplausos.)

Licenciado y diputado José María Pino Méndez, Presidente de la Legislatura del Estado de Zacatecas.

C. senador Rafael Cervantes Acuña, en representación de la H. Cámara de Senadores.

Así como a distinguidas personalidades de la vida política, social, cultural y económica del Estado de Zacatecas.

HOMENAJE

El C. Presidente: - Han solicitado el uso de la palabra para conmemorar el Bicentenario del natalicio del ilustre zacatecano Francisco García Salinas, los siguientes ciudadanos diputados:

Jaime Haro Rodríguez, del Partido Demócrata Mexicano. Hildebrando Gaytán Márquez, del Partido Popular Socialista.

Y Eliseo Rangel Gaspar, del Partido Revolucionario Institucional.

Tiene la palabra C. diputado Jaime Haro Rodríguez del Partido Demócrata Mexicano.

El C. Jaime Haro Rodríguez: -Señoría, señoras y señores diputados, señor Gobernador del Estado de Zacatecas, señoras y señores invitados, la crisis de la conciencia mexicana se había iniciado, mediante el siglo XVIII al ponerse en la élite pensante de la Nueva España en contacto, en unos vientos de modernidad, una generación de los nacidos entre 1718 y 1731 inició una revolución intelectual al introducir ideas de la filosofía cartesiana minando el monopolio de que disfrutaba hasta entonces la filosofía escolástica, todo ello gracias a la acción de los jesuitas humanistas entre los que destacó Clavijero, a esa generación le siguió la de los ilustrados que recibieron el influjo de la enciclopedia y de la ilustración francesa siendo la figura más representativa la del padre Alzate. Y vendrá después como gozne que enlaza a las generaciones de la historia Juan de Olaguíbel, Lucas Alamán Faguada, Bernardo Couto, Gómez de la Cortina, Isidro Gondra, Basilio Arrillaga, Casimiro Lizeaga, Lorenzo de Zavala. Miguel de Santamaría Tornel, Andrés Quintana Roo, José María de Heredia, Carlos María Bustamante Eduardo de Gorostiza, Rodríguez Puebla, Manuel Díaz de Bonilla, José Espinosa de los Monteros y Francisco García Salinas.

Las fuentes del pensamiento político de entonces y particularmente de este hombre Francisco García Salinas se ubican por lo tanto en la más pura estirpe liberal, que marca definitivamente el girón de la modernidad para el México de nuestros días.

Y en su génesis hay que aludir a la utopía de Don Vasco de Quiroga y desde luego al pensamiento humanístico del Padre de las Casas así como a la tradición jurídica del pensamiento español que desemboca en la Constitución de Cádiz de 1812.

La aportación de la filosofía de la ilustración es también fundamental y está en la tésis de la soberanía popular, con las que Francisco García Salinas levantó las discusiones del constituyente de 1824 y que procede de los pensamientos franceses, aunque Rosso, sólo es citado para ser combatido en esta época paradógicamente, porque la idea democrática enlaza el liberalismo que proviene de otras fuentes, las de Montesquieu, las de Filanllery, Benjamín Consntant y Jeremías Penjan, como fuentes primarias de este pensamiento de modernidad y en la explicación de las relaciones o su estado, denomina las tesis contractualistas que se derivan del naturalismo racionalista.

Se recurren entonces a Montesquieu, a Batelt, Consntant; Filanllery, Penjan y españoles como Flores Estrada, o como García Malo y sin embargo, subsiste el intento por adoptar explicaciones conciliatorias del naturalismo racionalista, con la ortodoxia católica y Obellanos, Geinesio, Almichi, etcétera, para citar algunos de ellos.

No en valde se había abrevado en la sabiduría de Francisco Severo Maldonado, mexicano y el José de Jesús Huerta, jalisciense, fraternizando con ideólogos como Ramos Arizpe, como Prisciliano Sánchez, como el padre Mier, como Cecilio del Valle o Juridi y Alcocer, familiarizados -pese al santo oficio - con las ideas más avanzadas de su tiempo.

Cabe señalar que el genio del doctor Maldonado, había extendido su vuelo, cual inalcanzable águila sobre la humanidad y antes que los sabios de Europa, desflorecen la vida del proletariado con sus miserias, el había reunido los frutos maduros de todas sus meditaciones y encerrándolos en un cofre de oro los lanzó a un mundo que no le entendió, y que por desgracia tampoco los recogió, porque no pudieron salir del territorio mexicano .

Antes que Carlos Furie, antes que Robert Owen, el estudió la reforma social Severo Maldonado antes que la culta y vieja Europa pensara en resolver las áridas cuestiones del trabajo la propia generación de su época hizo lo que podía hacerse en un medio tan difícil, con esto arduos problemas.

Aporta Francisco García Salinas recogiendo estos pensamientos dispersos, las luces de su talento para definir los alcances del liberalismo mexicano, en los instantes en que la

República Federal, nace identificando el liberalismo con el federalismo y el federalismo identificándolo con la democracia. Reyes Heroles, advierte que su liberalismo económico, sin embargo, no sigue servilmente los textos clásicos, sino que ante las realidades nacionales, modifica las doctrinas para adaptarlas y para emprender las transformaciones pertinentes, de una sociedad que nacía entonces, rompiendo los viejos moldes de la colonia y la servidumbre de un medievo que todavía se enseñoreaban sobre México.

Político con sensibilidad cabal, sabe que dichas transformaciones tienen que darse en los términos de las fuerzas en marcha sin apresuramientos, caminando con la sonda en la mano para no incurrir en errores, ni en excesos que obligan muchas veces a retroceder y como ocurre con tantas personalidades de la historia, Francisco García Salinas, profundiza en los ámbitos de un pequeño circulo de interesados, de intelectuales en el conocimiento, aquella vieja sociedad de los amigos del país, donde otros grandes tuvieron igual inicio, acerca de los problemas de su tiempo en torno de estas ideas, de estos principios y respecto de los anhelos masa genuinos de su pueblo. Su sabiduría y luego su personalidad carismática o viceversa, lo ponen en condiciones de elevarse por encima de los hombres y de las circunstancias negativas que lo rodean.

Y cuando el político -y solo el puede hacerlo - , se ubica ante la oportunidad de influir en el rumbo y en la fisonomía del proyecto histórico de su tiempo, ideando, lo hace conjuntando como es propio que procedan los estadistas, los estadistas verdaderos, como proceden las inteligencias más lúcidas y las voluntades más firmes y dinámicas, y como proceden las intenciones más levantadas y más nobles.

Es precursor del agrarismo en México, como en tantos otros aspectos, de un trabajo social, esta correcta visión del problema se enlaza todavía hoy con los requerimientos más vivos de la República de nuestros días, y que consiste en consolidar la soberanía alimentaria, para que se afirme la independencia económica de un país. Se adelanta a su tiempo inclusive aquellos viejos sueños del conde de Fernando de Lesseps, para pensar en un socabón que uniera a Zacatecas con Sinaloa; para traer el agua y para llevar los metales de la altiplanicie de nuestra patria.

Y en las áreas relacionadas con la organización política, es el forjador de principios e instituciones con arreglo a los cuales funciona el sistema federal de vigencia todavía hasta nuestros días; pero es particularmente significativa su resolución de impulsar, la desamortización de nuestras prácticas políticas, mediante la participación capacitada, de una ciudadanía lúcida y vigilante, como debe ser la preocupación de los partidos en 1986.

Para muchos forjadores del espejo de príncipes, la continuidad de la realización de milagros en el campo de la economía fundamentalmente, o en el campo de la educación o en el campo de la organización política, así como en el diseño de un proyecto social que conjunte todas las voluntades, Francisco García Salinas, dio como resultado de su autoridad que se ejerciera por su fascinación personal, sobre un pueblo particularmente altivo, como es el de Zacatecas.

Francisco García Salinas, hombre atractivo y de carisma con la autoridad que el pueblo le entregó, porque él supo reunir las voluntades, y aún sin ella y sin esa autoridad siempre continuó recibiendo la veneración popular, que se entrega a quién sabe responder a las metas a quién a señalado las vías apropiadas para las transformaciones y para todos los esfuerzos.

La portentosa obra de gobierno que realiza al frente de su estado, mismo que le mereció el aplauso de Lorenzo de Zavala, de Mora, de Lucas Alamán, o de Carlos María de Bustamante, se explican por esa sabiduría con la que diseña las acciones pertinentes por el trabajo sin reposo que le permite impulsar todas las tareas a su alcance, por ese carisma y esa honestidad con que se gana una adhesión sin límites, pero seguramente que caló una en el rumbo de un pueblo como es el de Zacatecas, porque tuvo la sagacidad para escoger un equipo de trabajo, donde estuvieron los Gómez Farías, los García Rojas, Marcos Esparza, o Santos Vélez, en donde el propio Teodocio Lares, que habría de ser jefe del gabinete del emperador Maximiliano, habría colaborado con García Salinas, en donde Luis de la Rosa y Oteiza, en donde Fernando Calderón y Severo Cossío, resueltos todos a ganarse un sitio apropiado, en la historia de su patria chica, juntaron sus manos limpias con las limpias manos de Francisco García Salinas.

Este es en síntesis, señoras y señores diputados, el homenaje en el Partido Demócrata Mexicano, quiere rendir en esta sesión solemne a esta gran figura del siglo pasado, a este hombre que siendo diputado o que siendo senador varias veces ministro de Hacienda salió con sus manos limpias y dejó una estela de luminosa de honestidad, a este hombre que fue llamado varias veces para ser candidato a la Presidencia de la República, y que siempre mantuvo mejor su puesto junto al pueblo, de este hombre que andando un día por los rincones de la economía, organiza las finanzas y salva nuestras deudas, y de este hombre que andando un día por los rincones de la cultura funda el instituto de Ciencias, hoy Universidad Autónoma de Zacatecas, y de este hombre que andando por los rincones de los caminos de la política con las armas en

la mano lucha y salva la dignidad del federalismo contra el centralismo, torpe de Santa Anna, se dice muchas veces que la geografía refleja su dureza o su riqueza sobre los hombres y sobre las almas. Zacatecas reflejó intensamente y con fidelidad su carácter de altives en Francisco García Salinas porque Zacatecas ha sentado en un enorme coliseo de rocas como si hubieran sido desprendidas un día de la creación y petrificadas para siempre, formaron el paisaje que ha sido duro como la justicia que ha sido inalterable como la amistad, que es también inseparable como es la adhesión para el pueblo de México recoge está figura de Francisco García Salinas, también, para la historia y para siempre el lema supremo de nuestra ciudad bien amada, labor vicid omnia el trabajo que es esfuerzo, que es dolor, que es misterio y ministerio pero que también es alegría y expiación la realización y de la proyección del propio hombre, cifra y suma, dolor, alegría y expiación, se juntan en la figura de Francisco García Salinas para recoger ese lema que el trabajo todo lo vence, labor vicid omnia. Muchas gracias. (Aplausos.)

El C. Presidente: -Tiene la palabra el diputado Hildebrando Márquez, del Partido Popular Socialista.

El C. Hildebrando Gaytán Márquez: -Con su permiso señor presidente, señor gobernador del estado de Zacatecas, señoras y señores diputados. Con unas cuantas palabras deseamos sumarnos en este homenaje al hombre a quien su pueblo con esa fina intuición y sabiduría lo llamó Tata, el protector, el guía Tata Pachito, porque Francisco García Salinas dedicó su atención como político, como luchador social a defender los intereses del pueblo mexicano y en especial de sus coterráneos de Zacatecas. Tenía muchos problemas el pueblo, problemas con una larga herencia y con unas fuertes cadenas, cuya solución requería de medidas profundas en la economía, en la política y en toda la sociedad mexicana. Irrumpe en la vida de nuestro país en la vida pública, García Salinas, cuando México alcanza su independencia y del lado de ese que fue su amigo de toda la vida, su compañero de lucha asiste al I Congreso de 1822, como diputado de la intendencia de Zacatecas, junto con Valentín Gómez Farías. Estos dos hombres, que poco tiempo después habrían de contar con la ayuda de ese otro gran ideólogo, que fue el doctor Mora, constituyen una triada, constituyen el grupo que va a luchar en estos años del México independiente, para rescatar la herencia de Hidalgo, darle programa y afianzar el rumbo del país. No es posible comprender la importancia histórica de García Salinas, si se le separa de Gómez Farías y del doctor Mora; y la obra del doctor Mora, de Gómez Farías y de García Salinas, para poderla entender hay que comprender que su pensamiento caló exactamente en la esencia del problema histórico de México, que era destruir la herencia colonial de la Nueva España.

Ese mundo económico lleno de monopolios , de prohibiciones, de estancos, que limitó el desarrollo de las fuerzas productivas de este territorio; ese comercio interior que mantenía alejadas a unas y a otras, las poblaciones de la Nueva España y aún de otros de los después, nuevos países del continente.

Esa agricultura tan pobremente desarrollada; y por el otro lado, la vida cultural con una inmensa ignorancia y analfabetismo en el pueblo, con una cultura medieval que pretendían cerrarle a las nuevas corrientes de la filosofía, su lugar en la educación.

Ese mundo de explotación aguda, de irracionalismo, de intolerancia que fue la colonia de la Nueva España, y que habrían de luchar para echarla abajo estos tres hombres ilustres, que poco separa de lo que hoy es en nuestros días el neofascismo colonial, que es países como el chileno, a Pinochet agudizando la explotación, la intolerancia y el irracionalismo. En esos años, en esos primeros años de la independencia de México, García Salinas y Gómez Farías, se enfrentan a Iturbide, defendiendo el Congreso de la Nación, y no obstante que este es disuelto, de la presión del pueblo obligó al emperador a que los restituyera poco después y a que abdique; esta pléyade de mexicanos entre los que sobresale sin lugar a dudas Valentín Gómez Farías, Crecencio Rejón, Fray Servando y García Salinas, naturalmente, ven las trabas que tienen con el Plan de Iguala, que está preservando los intereses de la colonia que detentaba el clero político. Por eso derogan el Plan de Iguala en los pronunciamientos programáticos y políticos sobre la nueva estructura de la nación, y tienen que emprender la tarea desde la raíz, para implantar una nueva estructura política de nuestra nación, como lo hacen con el federalismo de la Constitución de 1824. Y pensando que habría de extender está lucha, de los continuadores de los Insurgentes, García Salinas va a canalizar su obra después de su paso por el senado y como colaborador del presidente Guadalupe Victoria regresará a su terruño de Zacatecas a llevar los ideales de eso que habría de llamar el doctor Mora, " el Partido del Progreso". Es en esta época exactamente cuando toma relevancia la obra de García Salinas. Aparte de su labor como constituyente del 24, es como gobernador de Zacatecas, en una época extremadamente difícil para todo el desarrollo de la nación en su rumbo histórico, donde la obra de García Salinas alcanza toda su relevancia histórica. Es cierto que como gobernante bastaría con decir que repartió tierras, que impulsó la agricultura, que impulsó nuevas formas de exportación de la minería, que le dio auge a la Escuela Normal, primera escuela de profesores de México, y que dictó la primera ley para crear la educación

primaria obligatoria en el continente; con eso bastaría para tener una idea de la dimensión de García Salinas como gobernante; pero no se alejó del problema agudo de nuestra historia nacional. Cuando toma la dirección política de México el centralismo con Bustamante, y con perseguidos los liberales, principalmente Mora y Gómez Farías, van a encontrar en Zacatecas no solamente la protección, el asilo, sino el medio de trabajo para que desarrollen su pensamiento, tomen fuerza y regresen hacia la reconquista de la dirección de México. Es extraordinaria la tarea política e ideológica que va auspiciar Tata Pachito en Zacatecas. Va a estimular a que el Congreso de esa entidad decrete que no es obligación de la autoridad civil obligar a los ciudadanos al pago de los diezmos, dando un golpe exactamente en el nudo donde está la polémica histórica de esa época; va a auspiciar un concurso público sobre el tema fundamental de esos momentos, ese tema será exactamente el del "Arreglo y Aplicación de las Rentas y bienes Eclesiásticos", porque habrían llegado a comprender estos mexicanos que no podría haber progreso en México, que no podrían mejorarse las condiciones de vida del pueblo y el desarrollo de la cultura y del régimen democrático, si no concluían con la estructura económica de la Colonia. La estructura económica de la Colonia era sencillamente el dominio del clero en todos los aspectos de la vida de México, por eso auspician este concurso y el "ciudadano de Zacatecas", como así se llamó en esta convocatoria el doctor Mora, desarrolla a plenitud su pensamiento en análisis de la situación del país y más fundamentalmente en las medidas que deberían tomarse.

Este documento del doctor Mora estuvo hecho no para ganar un concurso, sino para ganar una nueva sociedad; no para obtener un premio, sino para obtener un cambio político y económico en la vida de nuestro país. Y a partir de este momento va a ser muy claro, en los partidarios del progreso, el programa que van a defender, cuya esencia fue:

La extinción de los privilegios del clero y del ejército, la separación del Estado y de la Iglesia; la destrucción del monopolio económico y cultural del clero; la libertad de cultos, la enseñanza obligatoria y gratuita; la fundación de escuelas en todos los poblados; la creación de la enseñanza superior y profesional; la reforma de los programas de enseñanza con un contenido liberal; la libertad de pensamiento y de expresión, para acabar con la censura eclesiástica. Y, en el fondo de todas estas medidas, fomentar una repartición equitativa de la riqueza.

Estos tres hombres, Mora, Gómez Farías y García Salinas, no solamente son el centro de la polémica contra las viejas fuerzas del centralismo, contra los conservadores de la época; son también el motor y la fuente para orientar el futuro de la nación.

Y esa medida que se va adelantar también, muchos años a las disposiciones que se forman alrededor de las cámaras legislativas; ¡como no mencionarlas!. cuando en Zacatecas, por el estímulo de García Salinas, se dispone que ningún miembro eclesiástico puede ocupar el cargo de diputado, por la incompatibilidad que existe en sus compromisos de conciencia con esa institución, completamente incompatibles para llegar a cumplir el cargo público, en defensa de los intereses del pueblo.

Esa es, pensamos nosotros, la importancia histórica de García Salinas; miembro del grupo de combate el primera fila contra las fuerzas del retroceso; pero no solamente, sino como político, dio estímulo y calor a los grandes ideólogos, sus compañeros de lucha en las etapas difíciles del inicio de los 30 del siglo pasado.

Continuará García Salinas después de gobernador, cumplimento y atendiendo a su natal Zacatecas. Combatirá a Santa Anna y verá con dolor cómo es segregada su entidad como un castigo a la estirpe liberal del pueblo zacatecano, mutilándole una parte de su territorio para dar origen a una nueva entidad federativa. Es indudable que García Salinas estuvo dando la lucha exactamente en el problema más profundo de su época. Por eso lo recordamos. Porque estuvo centrada su atención en el hilo conductor de nuestra historia; en favor del progreso. Por eso lo recordamos.

Porque la lucha revolucionaria tiene que apoyarse en el conocimiento de la historia patria. No se pueden alcanzar en ninguna etapa subsecuente los estadios superiores si las fuerzas de avanzada progresista, revolucionaria, no toman en cuenta la experiencia del pasado, no se alimentan de las experiencias históricas. El ilustre García Salinas se inspiró en la lucha de los insurgentes y tuvo directamente la lucha ejemplar, las gestas heroicas de Victor Rosales, y también se inspiró en Victor Rosales, García Salinas. En este mexicano que nos acompaña en esta cámara permanentemente: Hoy ante los méritos indiscutibles de García Salinas, sin embargo, es más importante ante los apremios y problemas contemporáneos, de pasar estas etapas de nuestra historia y recordar a los mexicanos ilustres.

Porque si ellos estuvieron atendiendo el problema fundamental de su época hasta superarlo, hoy es nuestra obligación ver cual es el problema fundamental de nuestra época, y no cabe duda para las fuerzas democráticas, progresistas y patrióticas que, hoy por hoy, el problema de México es conseguir su independencia económica en forma cabal y

promover una distribución más equitativa de la riqueza.

Es indudable que ese es el problema y el objetivo fundamental del México de nuestros días que hay consenso en todos en luchar por este objetivo. Que no hay el total consenso, en que medios hay que utilizar para alcanzarlo, bien, eso es parte de la polémica. Nosotros rechazamos que sea la llamada iniciativa privada ligada a las transnacionales, quién va a resolver el problema histórico de nuestra época, y hemos dicho que será un Estado fuerte en la economía y en todos los aspectos de la vida social quien puede llevarnos a un nuevo estadio del progreso.

Esa es la importancia de repasar los hechos del pasado para poder tener claridad en los problemas de hoy y si García Salinas no llega a ser, no puede llegar a considerársele como uno de los constructores fundamentales de la nación mexicana, es, eso si, sin discusión alguna, un mexicano ilustre que estuvo en primera fila en la lucha de las fuerzas más avanzadas, y por eso hoy con mucho merecimiento, a 200 años de su natalicio, la nación lo recuerda con gratitud y con reconocimiento. Muchas gracias. (Aplausos.)

El C. Presidente: -Tiene la palabra el C. diputado Eliseo Rangel Gaspar, por el Partido Revolucionario Institucional.

El C. Eliseo Rangel Gaspar: - Compañero presidente, compañeros diputados, ciudadano gobernador del estado de Zacatecas, licenciado Genaro Borrego Estrada; ciudadanos representantes de los poderes Legislativo y Judicial de la entidad.

Señoras y señores:

Conmemoramos hoy, en esta sesión solemne en la casa de la República, el bicentenario natalicio de un grande de México y hacemos llegar a la provincia, a Zacatecas, esta solemnidad, en donde los diputados de la nación hacen un alto a su trabajo cotidiano, para rendir alto homenaje al prócer del liberalismo mexicano, a Francisco García Salinas.

Este 28 de noviembre, se cumple un aniversario importante en la historia de nuestra evolución constitucional, en esta fecha hace 163 años Francisco García Salinas, en la tribuna del constituyente formula sus reflexiones al acta constitutiva y enriquece con ella los principios en que se basa el documento por el que se consagra la organización republicana, democrática y federal de la nación.

Ramos Arizpe había presentado el 20 de noviembre el acta constitutiva recogiendo en ella las determinaciones políticas fundamentales que a poco, habrían de incorporarse en el texto definitivo de octubre de 1824, ahí se establece que la nación adopta para su gobierno la forma de república representativa, popular y federal y que sus partes integrantes son estados soberanos independientes y libres, en los términos de la propia Constitución

. Quedaba consagrada en la escueta formulación del principio la vieja consigna de los partidarios de la independencia que la querían a la medida del pueblo; surgía de su prolongado martirio lógico de la República, forma de organización política donde los mexicanos identificaríamos por siempre, libertad con progreso y a cuyo perfeccionamiento habríamos de consagrar como hoy, los afanes mayores. García Salinas con Prisciliano Sánchez y Antonio de José Valdés, desde las páginas del federalista, había explicado los alcances, las modalidades y las ventajas del sistema federal, en una polémica enjundiosa como las suyas, con Lorenzo de Zavala acredita hondura de pensamiento al derrotar su pretensión, de disminuir el número de diputados del primer constituyente, con lo cual se convierte en el caudillo de una corriente republicana, que empieza a ser respetable entre iturvidistas, borbonistas y otros partidarios de la monarquía.

La reivindicación del Congreso, le abre las puertas de la historia y le destaca y le consagra, como liberal y como republicano, defensor insobornable del pueblo, y de su facultad de liberar frente a su destino, en un congreso encargado de diseñar su mejor porvenir.

En sus reflexiones al acta constitutiva, hace dos aportaciones, a nuestro entender, fundamentales. La cuestión de la soberanía relativa para los estados, que maneja como teórico superior de la ciencia política que es, y el concepto de territorio dependiente, que revela su clarividencia con respecto de la amenaza de la potencia del norte, entonces como hoy ominosa, invocando la necesidad de preservar para los mexicanos las californias, protegiéndolas con los recursos de una federación celosa, de su integridad territorial.

Con respecto a la cuestión de la soberanía, que siguiendo la tesis de Rosseau se hacia residir en el pueblo García Salinas sostiene que, si por la soberanía una nación tiene el derecho de gobernarse a sí misma, ese derecho es relativo a distintos objetivos. Y si dividimos dichos objetivos dice de manera que el ejercicio de unos pertenezca a las autoridades centrales y el otro a determinadas porciones de la sociedad, nada impide que estas porciones se llamen soberanas con " soberanía relativa" que esto es con respecto de los derechos que se reservan y sobre los cuales tienen inspección absoluta e independiente.

El debate era y es desde entonces fundamental, por eso rebasó los ámbitos del constituyente y ganó la calle.

En las páginas de los periódicos muchos ventilaron sus opiniones y debatieron sus ideas.

México asistía entonces al portentoso drama de su nacimiento como entidad soberana, hacia cuentas de sus sacrificios enormes y resumía los ideales de sus guías.

Nuestro García Salinas, desde El Águila Mexicana, hace encendida defensa de los principios y lleva a la colectividad nacional claridad en el alcance verdadero de la tesis.

Muchos más con los textos de los autores prohibidos en la mano, discutieron en la calle o en el cerrado ámbito de las logias, las ideas renovadoras de los enciclopedistas y pusieron en voga los principios que produjeron la explosión popular del 89.

En el constituyente entre tanto, se trabaja febrilmente al impulso de requerimientos vitales de la nación. Las provincias demandaban inmediata atención a su reclamo, y amenazaban con la separación.

Esto explica como nos lo dice Juan de Dios Arias, que el acta constitutiva haya sido elaborada en el breve término de tres días y que en los ocho siguientes las reflexiones de García Salinas, dieran puntual respuesta a las aspiraciones de las mayorías nacionales cansadas de monarquía y de centralización.

Pero las primeras sesiones de diciembre, al discutirse el artículo 5o. en que la República Federal se consagra, Fray Servando Teresa de Mier, aborda la tribuna para pronunciarse en contra del sistema en uno de los discursos más elocuentes de cuantos se hayan pronunciado jamas, en el parlamento alguno.

Con él, y otros diputados excepcionales, tales como Becerra, Guridi y Alcocer, González Ángulo, Carlos María Bustamante, Gómez Portugal, Lorenzo de Zavala, Valentín Gómez Farías, Manuel Plascencia Herrejón, Juan Bautista Morales, Juan de Dios Cañedo o José Cecilio del Valle, el constituyente de la exacta magnitud de su grandeza, pues el debate entonces protagonizado reviste de dimensiones efectivamente formidables y cuando la mayoría aprueba el artículo, todos saben que han conquistado la victoria mayor.

Nadie, creo que podrá dudar de mi patriotismo, dijo orgulloso y erguido el noble anciano fugado de todas las cárceles, perseguido por todos los déspotas y por más de una hora, nos dice Bustamante, mantuvo la expectación del auditorio.

La federación era aquí desunir lo unido y de ello nos habrían de derivar los males mayores, concluía Mier, argumentando como liberal ilustrado que era: subrayaba el punto de vista sostenido prácticamente durante toda su vida, y en especial en su voto particular, al proyecto constitucional formulado en su propio domicilio por el diputado del Valle donde se pronunciaba como federalista consecuente.

La nación estaba por el sistema federal por cuanto significaba de rechazo al absolutismo y a la dictadura del centralismo, padecido por más de 300 años. Por eso el mandato imperativo de muchos diputados para votar por la federación y por eso también la amenaza de las doce provincias de separarse en caso de no ser atendidas en sus exigencias de constituir la anhelada república federal.

La Constitución es entonces un pacto compromisorio y ante la correlación de fuerzas que se da no era conveniente arriesgar el sistema federal conquistado y en esa virtud se aplazaron las otras exigencias en favor de la libertad y conciencia, por ejemplo, la afirmación de la supremacía del poder del pueblo sobre cualquier otro, que no se resolvería años más tarde en el camino de las armas, en vista de la terca oposición de los conservadores.

Pero rechazada o enaltecida, por cerca de medio siglo, la Constitución de 24 estuvo en el centro de todas las tormentas, demostraba con ello, la clarividencia de quienes como Francisco Severo Maldonado o Prisciliano Sánchez, que diseñando esquemas constitucionales para un sistema federal de gobierno deslindaron los principios que por siglos persistirán en la regulación de la existencia social de los mexicanos.

García Salinas como todos lo reconocen entrega la suma de su inteligencia a la construcción de la obra en la que entreveía la felicidad futura de la república, senador sobresaliente se esfuerza en la defensa de los intereses del Estado que representa. Da una larga batalla consigo mismo antes de aceptar la responsabilidad que el Presidente Victoria le confiere, pues sostenía la jerarquía mayor del mandato de sus electores, con relación al ministerio que se le otorga. Con base en esta actitud y en su destacada labor en ambas cámaras, es que con el mayor beneplácito arriba a la gobernatura de su estado desde donde cumple una gestión administrativa ejemplar por sus dimensiones y notable por el sentido humanista de su ejecución.

Como hicieron a su tiempo, otros grandes ubicados frente a grande responsabilidad, García Salinas tiembla sus armas desde las sesiones del admirable círculo de amigos del país, en el que destacan Fernando Calderón, Luis de la Rosa Oteiza, Santos Vélez, Teodoso Larez, Marcos Esparza, y al que luego se incorpora Valentín Gómez Farías.

Con ellos propone al pueblo la ejecución de acciones trascendentales que le dan consciencia de sus objetivos y de sus potencialidades,

sentido de sus necesidades y de sus ambiciones.

A muchos en su tiempo sorprendió por la magnitud de una tarea tan trascendente que por ello se ha dicho que en Zacatecas nace la reforma.

Mora, Zavala y Bustamante, que compartieron jornadas de servicio a la nación, tienen juicios acerca de la sabiduría con la que enfrenta la complejidad de los problemas de su tiempo y Lucas Alamán "El Ministro" hábil, le alaba y secunda sus proyectos de desarrollo económico, político y social.

Y cuando moviliza a su pueblo en torno a ideas de mejoramiento claras, viables, accesibles, y cuando diseña una ruta precisa en torno de la cual los esfuerzos solidarios habrían de alcanzar los objetivos buscados, se advierte que hay en su sentido de la racionalidad no solo conocimiento de la realidad que transforma, sino elevación de las ideas que le impulsan.

El suyo es un humanismo social en que el mayor bienestar para el mayor número es principio, ideario y esperanzas.

Creando instituciones avanzadas, desbroza el camino haciendo a un lado lo caduco y lo inservible.

La obra realizada es ciertamente excepcional no obstante que es el momento en que se tiene que ser precursor en prácticamente todas las ramas de la actividad pública, así en las candentes cuestiones de la tierra; lo mismo ante los requerimientos educacionales de una población tradicionalmente marginada de beneficios del saber o en los delicados asuntos de la supremacía del poder civil sobre los demás que les disputaban el mando del pueblo, o en aquellos otros que implican la rectoría del estado en el manejo de la economía y en la orientación racional de las actividades productivas.

Vista en la perspectiva de la historia, la gestión de García Salinas corresponde a un liderismo, carismática que suele surgir en épocas de fuerte aflicción social.

En efecto poniendo en juego un conjunto de facultades de intuición con respecto de las relaciones sociales o naturales de su yo complejas que se simplifican y son comunicadas a la colectividad con la sencillez que solo la concepción carismática puede darles, impulso con notable aptitud hacia metas que todos la entidad que gobierna. Por eso se gana la veneración popular, y secundado sin funciones en su terca aspiración de conseguir el mayor bienestar para sus gobernados.

Por eso están unánimes a su lado cuando el militarismo entra en acción en reclamo de añejos privilegios y en pos del botín apetitoso construido con el trabajo del pueblo.

Pero por qué había sostenido que crea en el federalismo como fuente de la felicidad ciudadana, es que se propone llegar hasta sus últimas consecuencias defendiendo con la misma pasión con la que contribuyo a diseñar sus alcances y modalidades.

Estaba en juego allí el destino de la República de la confrontación que tiene como pretexto la existencia de las milicias cívicas hay un resultado un benemérito de la patria Anastacio Santana, el saqueo de la riqueza del estado y la desmembración de la integridad territorial. Sobre la batalla dice Bulnes irónico: "Santana como buen condotiero, quiso asombrar con su victoria a las galerías y que corrieran ríos de sangre que no habían corrido en el combate, ordenó una espantosa carnicería con los fugitivos y una bárbara hecatombe con los prisioneros, abandonando estos asesinatos a la gloria de una escaramuza que ninguno había tenido. Por este infeliz hecho de armas, desde el punto de vista militar, el congreso dictó un decreto declarando a Santana, Benemérito de la Patria en grado de heroico.

Pese a todo, Francisco García Salinas no pierde la veneración de su pueblo, que sale garante de su probidad y patriotismo, de la lealtad a sus convicciones, por eso pensamos que éste, del carisma, es un fenómeno con profundas raíces y se enlaza con la capacidad para interpretar una objetividad, anhelos plenamente convertidos, unánimemente postulados. Es entonces una cuestión relacionada con el líder y su pueblo, vinculada a propósito, comunes que se plantean como necesarios y que tienen la virtud de concitar afanes superiores. Es el fenómeno que se advierte durante el paso fugaz de Francisco García Salinas, por el Gobierno de Zacatecas.

La República Federal muere con la victoria Santanista y tras ella viene la anarquía mayor, el desprestigio de los sistemas, el constitucionalismo oligárquico, para dar rienda suelta a todos los apetitos, paso franco a todas las calamidades.

Así se explica la tragedia del 47 y se justifica el clamor que por todos los rumbos se escucha en favor de la restauración de la carta del 24.

Diputados hay en 57, que están por su retorno pero ya son otros los tiempos y distintas las necesidades.

En una fría tarde del sureste zacatecano, el 2 de diciembre de 1941, el héroe deja de

existir. No hubo nadie que no llorara la orfandad en que nos quedáramos. Se iba uno de los nuestros tan entrañables que aún hoy en todas las escuelas, en las minas, en los talleres, en todos los ejidos, en torno de todos sus monumentos, hay cantos de niños y ofrendas cotidianas. Su obra será eterna, su recuerdo será inmortal.

Hombre de hoy, su lugar está al lado de los buenos hijos de México, luchando por la soberanía nacional amenazada y en favor del desarrollo nacional independiente. Honrar a su memoria, es más que un acto cívico. Esta representación obliga a dar el debate de las ideas por la nación, puede proponerse encontrar en este paradigma de virtudes, ciudadanas, el impulso para que, elevándose por encima de sus limitaciones, se ponga a la altura del pueblo y le dé respuesta a sus angustias.

Fue la suya una eclosión juvenil en el amanecer de México. Soñando en las libertades, formula principios, asciende a las tribunas, está por un mundo sin castas, ni testamentos, ni privilegios. Es caudillo de alineamientos políticos por la República combatiente de todas las claudicaciones, y no sólo, hace florecer las cementerías, producir las minas, diversificar las artes, multiplica los actos, impulsa el saber y la cultura.

Como en el mito de Prometeo, da a su pueblo el sentido de la disciplina por el trabajo que será eterna y le entrega el fuego de la satisfacción, al someter a la naturaleza agreste. La impronta de su esfuerzo caracteriza para siempre, el definitivo perfil de sus compatriotas. Admirable visión la de este mexicano singular, fruto del siglo XIX mexicano.

Revisando la limpia trayectoria de su existencia, uno no puede sino tener motivos de veneración creciente, y pensar que si las cosas del gobierno saturan nuestras vidas, pues no hay esfera del humano que les sea indiferente, tan ejemplar nos resulta la empresa cumplida, que a más del siglo y medio de distancia sigue punto de partida de la anhelada grandeza de su tierra y la mía.

Por eso el actual dignatario de zacatecanos, con juvenil emoción discurre por el idéntico paralelo de sus ideales, impulsado por la intima convicción de que hay valores eternos, principios inflexibles, objetivos elevados para el quehacer político, tan generosos y nobles como los que hoy hemos convocado y presiden aquí esta solemnidad en la casa de la República.

De el, muy bien pudiera decirse lo que a propósito de otro grande de México, escribiera Alfonso Reyes: "No digamos que ha muerto, como aquel viajero de los Cárpatos, va dormido sobre su bridón. La gratitud del pueblo lo acompaña". Muchas Gracias. (Aplausos.)

COMISIÓN DE CORTESÍA

El C. Presidente:- Se levanta la sesión solemne y se designan en comisión para acompañar cuando deseen hacerlo a los distinguidos CC. zacatecanos encabezados por el C. licenciado Genaro Borrego Estrada, gobernador constitucional del estado de Zacatecas, a los diputados Romeo Flores Caballero y José Luis Galaviz Cabral.

ACTA DE LA PRESENTE SESIÓN

El C. Secretario Antonio Melgar Aranda

"Acta de la Sesión Solemne de la Cámara de diputados de la quincuagésima Tercera Legislatura del H. Congreso de la Unión, celebrada el día veintisiete de noviembre de mil novecientos ochenta y seis.

Presidencia del C.

Guillermo Fonseca Alvarez

En la ciudad de México, a las once horas y veinte minutos del jueves veintisiete de noviembre de mil novecientos ochenta y seis, se abre la sesión solemne con asistencia de trescientos veintidós ciudadanos diputados, que tendrá por objeto conmemorar el bicentenario del natalicio del gran mexicano Francisco García Salinas, en cumplimiento del acuerdo por esta asamblea el 18 de noviembre próximo pasado.

La Presidencia da la bienvenida a invitados especiales a esta sesión, licenciado Genaro Borrego Estrada gobernador constitucional del estado de Zacatecas, licenciado Pascual Santoyo, presidente del Tribunal Superior de Justicia del estado de Zacatecas; senador Rafael Cervantes Acuña, representante de la H. Cámara de Senadores,, así como a distinguidas personalidades de la vida política, social cultural y económico del estado de Zacatecas.

A continuación los CC. Jaime Haro Rodríguez, del PDM; Hildelbrando Gaytán Márquez, del PPS y Eliseo Rangel Gaspar, del PRI; rinden homenaje al patriota Francisco García Salinas.

La presidencia designa en comisión para acompañar a los distinguidos visitantes al abandonar el salón, a los CC. diputados Romeo Flores Caballero y José Luis Galaviz Cabral.

Lectura del acta de la presente sesión.

Está a discusión el acta. Sin que motive debate, en votación económica se aprueba.

A las doce horas y veinticinco minutos se levanta la sesión solemne. Se pasa a sesión pública ordinaria. "

TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA

Y DIARIO DE LOS DEBATES