Legislatura LIV - Año I - Período Extraordinario - Fecha 19891020 - Número de Diario 11
(L54A1P1eN011F19891020.xml)Núm. Diario:11ENCABEZADO
LIV LEGISLATIVO
PODER LEGISLATIVO FEDERAL
DIARIO DE LOS DEBATES
DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS
Registrado como artículo de segunda clase en la Administración de Correos, el 21 de septiembre de 1921
PRESIDENTE DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS
Dip. Mauricio Valdez Rodríguez
PALACIO LEGISLATIVO
DIRECTOR DEL DIARIO DE LOS DEBATES
Lic. Benjamín Martínez Martínez
Año I México, D.F., viernes 20 de octubre de 1989 No. 11
PERIODO EXTRAORDINARIO
SUMARIO
ASISTENCIA
La secretaría notifica que hay quórum.
APERTURA
Se abre la sesión.
ORDEN DEL DÍA
Se da lectura.
ACTA DE LA SESIÓN
ANTERIOR
Sin discusión, se aprueba.
BALANCE DE LOS TRABAJOS
DEL PERÍODO
EXTRAORDINARIO
Externan su opinión en torno a este punto, los ciudadanos Pedro René Etienne Llano, Oscar Mauro Ramírez Ayala, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; Roberto Jaramillo Flores, del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional; Jesús Antonio Carlos Hernández, del Partido Popular Socialista; Ignacio Castillo Mena, del Partido de la Revolución Democrática; Gildardo Gómez Verónica, del Partido Acción Nacional y Horacio Labastida Muñoz, del Partido Revolucionario Institucional.
COMISIONES DE CORTESÍA
Que participarán en la clausura del Primer Período Extraordinario de Sesiones del Primer Receso de la LIV Legislatura al ciudadano Presidente de la República, a la Suprema Corte de Justicia de la Nación y al Senado de la República.
RECESO
La presidencia lo declara a las 16.40 horas.
Se reanuda la sesión a las 18.00 horas.
COMISIÓN DE LA HONORABLE
CÁMARA DE SENADORES
El senador Mario Niebla Alvarez, informa sobre la clausura de los trabajos correspondientes al período extraordinario de sesiones del propio
Senado de la República de la LIV Legislatura del Congreso de la Unión.
Palabras dirigidas por la presidencia, sobre el particular
DECLARATORIA
De la clausura de los trabajos del primer período extraordinario de sesiones del primer receso de esta Cámara de la LIV Legislatura del honorable Congreso de la Unión.
ACTA
De esta sesión. Se aprueba.
Se levanta la sesión para abrir, en su oportunidad, la de Congreso General.
DEBATE
PRESIDENCIA DEL CIUDADANO MAURICIO VALDEZ RODRÍGUEZ
(Asistencia de trescientos cincuenta y seis ciudadanos diputados)
ASISTENCIA
La C. secretaria María Claudia Esqueda Llanes: - Señor presidente, hay una asistencia de 356 diputados. Hay quórum.
APERTURA
El C. Presidente (a las 14.20 horas): - Se abre la sesión.
ORDEN DEL DÍA
El C. secretario Sergio Alfonso Rueda Montoya: - Se va dar lectura al orden del día.
«Cámara de Diputados.- Primer Período Extraordinario de Sesiones. - Primer Receso.- LIV Legislatura.
Orden del día
20 de octubre de 1989.
Lectura del acta de la sesión anterior.
Intervenciones de ciudadanos diputados.
Comisiones de cortesía.
Declaratoria de clausura de labores del Primer Período Extraordinario de Sesiones del Primer Receso de la LIV Legislatura.»
ACTA DE LA SESIÓN ANTERIOR
El C. secretario Sergio Alfonso Rueda Montoya: - Se va dar lectura al acta de la sesión anterior.
«Acta de la sesión de la Cámara de Diputados del honorable Congreso de la Unión, correspondiente al Primer Período Extraordinario de Sesiones del Primer Receso de la Quincuagésima Cuarta Legislatura, celebrada el día diecisiete de octubre de mil novecientos ochenta y nueve.
Presidencia del diputado Mauricio Valdez Rodríguez
En la ciudad de México, Distrito Federal, siendo las trece horas con cuarenta y cinco minutos, del día diecisiete de octubre de mil novecientos ochenta y nueve, con una asistencia de trescientos sesenta y cinco diputados, el presidente declara abierta la sesión.
La secretaría da cuenta con el orden del día e inmediatamente después, da lectura al acta de la sesión anterior misma que, sin motivar discusión, se aprueba en sus términos en votación económica.
Solicita y se le concede el uso de la palabra al diputado Víctor Manuel Ávalos Limón, quien se refiere a los problemas que aquejan a los trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social. Durante su intervención, el presidente insiste en que tanto la asamblea, como las galerías, deben guardar orden y respeto para las palabras del orador.
Para referirse al mismo tema, hacen uso de la palabra los diputados Francisco López González, del Partido Revolucionario Institucional; Rubén Venadero Valenzuela; Fernando Palacios Vela, del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional y Miguel Aroche Parra, del Partido de la Revolución Democrática.
El presidente informa que en relación al dictamen de la Comisión de Gobernación y Puntos
Constitucionales, relativo a las reformas constitucionales en materia político - electoral, se han reservado para su discusión los artículos quinto, cuarenta y uno, cincuenta y cuatro, sesenta, setenta y tres y el segundo transitorio.
Realizado el registro de oradores para referirse al artículo quinto, el presidente concede el uso de la palabra a los diputados Francisco Melo Torres, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, en contra.
Presidencia del diputado Carlos Rubén Calderón Cecilio
Salvador Sánchez Vázquez, del Partido Revolucionario Institucional, en pro; nuevamente Francisco Melo Torres, para contestar alusiones personales.
Presidencia del diputado Mauricio Valdez Rodríguez
El presidente pide a quienes solicitan el uso de la palabra para hechos, que esperen el turno que les corresponda y que se ciñan al reglamento, pues el número de oradores inscritos este día es innumerable.
Desde su curul, el diputado Jesús Ortega Martínez, informa que su parlamentario, el de la Revolución Democrática, no ha firmado ningún acuerdo en el sentido de que solamente harán uso de la palabra quienes se hayan inscrito previamente.
Hace uso de la palabra el diputado Jorge Martínez y Almaraz, del Partido de la Revolución Democrática, para hechos.
Solicita y se le concede el uso de la palabra, con el fin de presentar una moción de orden, al diputado Miguel Montes García, del Partido Revolucionario Institucional, quien aclara el contenido del artículo ciento dos del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, e invita a los grupos parlamentarios a que se facilite el debate que interesa a la República.
Para rectificar hechos, suben a la tribuna los diputados Leonel Godoy Rangel, del Partido de la Revolución Democrática y Enrique Rojas Bernal.
Desde su curul, el diputado Gerardo Medina Valdez, del Partido Acción Nacional, insiste en que el diputado Rojas Bernal está aludiendo asuntos de otro artículo reservado y no el que está a discusión, por lo que le sugiere que se reserve esas opiniones para cuando se discuta.
Por instrucciones de la presidencia se consulta a la asamblea, misma que considera suficientemente discutido el artículo quinto y la secretaría toma la votación nominal respectiva.
El presidente declara aprobado el artículo quinto en sus términos, por trescientos treinta y cuatro votos.
El presidente da lectura a los nombres de los diputados que se han inscrito para hablar en pro y en contra del artículo cuarenta y uno, y concede el uso de la palabra al diputado Juan Antonio García Villa, del partido Acción Nacional, en contra, quien propone un nuevo texto para el artículo cuarenta y uno, mismo que, por instrucciones de la presidencia, se reserva para que, en el caso de aprobarse el texto a discusión, se disponga a consideración de la asamblea.
En seguida hacen uso de la palabra los diputados Javier López Moreno, del Partido Revolucionario Institucional, a favor, quien acepta interpelaciones de los diputados Gerardo Medina Valdez y Pablo Gómez Alvarez.
Presidencia del diputado Carlos Rubén Calderón Cecilio
Juan Antonio García Villa, del Partido Acción Nacional, para hechos; Alexandro Martínez Camberos, desde su curul, pidiendo que se rectifique el trámite dado a la proposición del Partido Acción Nacional y el presidente aclara que se está en turno de oradores y que al final, después de ser votado el artículo, se harán los trámites de reglamento; Amalia García Medina, del Partido de la Revolución Democrática, en contra.
Presidencia del diputado Mauricio Valdez Rodríguez
Juan Antonio García Villa, del Partido Acción Nacional, para hechos, acepta una interpelación del diputado Juan Nicasio Guerra Ochoa; Carlos Navarrete Ruíz, del Partido de la Revolución Democrática, para hechos; Rosario Guerra Díaz, del partido Revolucionario Institucional, a favor, acepta una interpelación de la diputada María Teresa Cortés Cervantes; Félix Mercado Téllez, del Partido Popular Socialista, en contra, presenta una proposición en relación con el artículo cuarenta y uno a discusión, mismo que se reserva para ser tratado después de la votación; Arturo Armendáriz Delgado, del Partido Revolucionario Institucional, en pro.
Desde su curul, el diputado Francisco Ortíz Mendoza, del Partido Popular Socialista, pide que se le ilustre sobre el trámite a la proposición del
diputado Félix Mercado y el presidente pide a la secretaría que se lean los artículos ciento veinticuatro y ciento veinticinco del reglamento.
El diputado Ortíz Mendoza insiste en que no se ha dado el trámite y el presidente informa que se debe esperar a que se dé el supuesto de que el artículo sea aprobado, para después poner a consideración de la asamblea la propuesta de modificación.
El diputado Francisco Ortíz Mendoza, desde su curul, insiste en que debe quedar claro que se va discutir la propuesta de su partido, el Popular Socialista. El presidente le informa que si así lo aprueba la asamblea se hará.
Continúa el debate del artículo cuarenta y uno, y hacen uso de la palabra los diputados Oscar Mauro Ramírez Ayala, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, en contra, propone una modificación, misma que se reserva para después de la votación; Ricardo Monreal Ávila, del Partido Revolucionario Institucional, en pro; Oscar Mauro Ramírez Ayala, para hechos; Pedro René Etienne Llano, en contra; Jaime Castrejón Díez, del Partido Revolucionario Institucional, en pro.
Presidencia del diputado Raúl Bolaños Cacho Guzmán
Bernardo Bátiz Vazquez, del Partido Acción Nacional, en contra; Pablo Gómez Alvarez, del Partido de la Revolución Democrática, para hechos.
Presidencia del diputado Mauricio Valdez Rodríguez
Juan Miguel Alcántara Soria, del Partido Acción Nacional, para contestar alusiones personales; Carlos Navarrete Ruíz, del Partido de la Revolución Democrática, para hechos; Rubén Venadero Valenzuela, para hechos; Carlos Bracho González, del Partido de la Revolución Democrática, para hechos; desde su curul el diputado Jesús Luján Gutiérrez, pregunta si el poema de reconciliación tiene que ver algo con lo que aquí se discute y el diputado José Luis Lamadrid Sauza, pide orden y respeto para el orador.
Continúa el debate del artículo cuarenta y uno, y se concede el uso de la palabra a los diputados Carlos Castillo Peraza, del Partido Acción Nacional, para hechos; Francisco Ortíz Mendoza, del Partido Popular Socialista, para hechos; José Trinidad Lanz Cárdenas, del Partido Revolucionario Institucional, en pro.
Se produce desorden en las galerías y el presidente pide a la secretaría que se dé lectura al artículo doscientos siete del reglamento. Para continuar con el debate, se concede el uso de la palabra al diputado Francisco Curi Pérez Fernández, del Partido de la Revolución Democrática, en contra.
Presidente del diputado Jorge Schiaffino Isunza
Víctor Hugo Celaya Celaya, del Partido Revolucionario Institucional, en pro; Ciro Mayén Mayén, del Partido de la Revolución Democrática, en contra.
Presidencia del diputado Mauricio Valdez Rodríguez
Luisa María Calderón Hinojosa, del Partido Acción Nacional, para hechos; Isidro Aguilera Ortíz, del Partido de la Revolución Democrática, para hechos y Dionisio Pérez Jácome, del Partido Revolucionario Institucional, a favor.
La presidencia hace las explicaciones respecto a los artículos ciento veinticuatro y ciento veinticinco del reglamento y la asamblea considera suficientemente discutido el artículo cuarenta y uno, por lo que la secretaría toma la votación nominal respectiva. Se aprueba el artículo cuarenta y uno en sus términos por trescientos treinta y nueve votos.
Las proposiciones del Partido Acción Nacional y la del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, se desechan en votación económica.
Hacen uso de la palabra para referirse a la proposición del Partido Popular Socialista, los diputados Jesús Luján Gutiérrez, del Partido Popular Socialista, en pro; Mario Ruíz de Chávez, del Partido Revolucionario Institucional, en contra y Alfredo Reyes Contreras, del Partido Popular Socialista, en pro.
Por instrucciones de la presidencia, se consulta a la asamblea, misma que, en votación económica desecha la proposición del Partido Popular Socialista.
La presidencia da lectura a los nombres de los diputados que se han inscrito para debatir el artículo cincuenta y cuatro, y concede el uso de la palabra a la diputada Marcela Lombardo Otero, del Partido Popular Socialista, en contra.
Presidencia del diputado Raúl Bolaños Cacho Guzmán
Hace uso de la palabra, para razonar el voto de su partido, el diputado Alberto Ling Altamirano, del Partido Acción Nacional, quien acepta
interpelaciones de los diputados Patricia Olamendi Torres y Juan Nicasio Guerra Ochoa.
Desde su curul, reclama el quórum el diputado José de Jesús Sánchez Ochoa, del Partido Acción Nacional, y el presidente declara que es obvio que exista el quórum, por lo que para continuar con el debate, concede el uso de la palabra a los diputados Rogelio Montemayor Seguy, del Partido Revolucionario Institucional, en pro.
Presidencia del diputado Mauricio Valdez Rodríguez
Reynaldo Rosas Domínguez, del Partido de la Revolución Democrática, en contra; Juan Jaime Hernández, del Partido Auténtico de la Revolución Democrática, en contra; Guadalupe Gómez Maganda, del Partido Revolucionario Institucional, en pro; Gerardo Medina Valdez, del Partido Acción Nacional, en contra, presenta dos proposiciones, mismas que se reservan para después de la votación; Jesús Ortega Martínez, del Partido de la Revolución Democrática, para hechos; Celia Torres Chavarría, del Partido de la Revolución Democrática, para hechos; Gerardo Medina Valdez, del Partido Acción Nacional, para hechos; Oscar Mauro Ramírez Ayala, del Partido Auténtico de la Revolución Democrática, para hechos; Gregorio Urías Germán, del Partido de la Revolución Democrática, para hechos.
La asamblea, en votación económica, considera suficientemente discutido el artículo cincuenta y cuatro y toma la votación nominal respectiva.
El presidente declara aprobado el artículo por doscientos noventa y un votos.
La asamblea, en votación económica, desecha la proposición del Partido Acción Nacional.
El presidente da lectura a los nombres de los diputados que se han inscrito para debatir el artículo sesenta, y concede el uso de la palabra a los diputados Fernando Antonio Lozano García, del Partido Acción Nacional, en contra; Jesús Hernández Montaño, del Partido Revolucionario Institucional, en pro; Ismael Yañez Centeno, del Partido de la Revolución Democrática, en contra.
Presidencia del diputado Carlos Rubén Calderón Cecilio
Fructuoso López Cárdenas, del Partido Revolucionario Institucional, quien declina su intervención y pide que las palabras que presenta por escrito, se incluyan en el Diario de los Debates; Rubén Venadero Valenzuela, en contra; Sami David David, del Partido Revolucionario Institucional, a favor, quien solicita que su intervención se incluya en el Diario de los Debates; Gerardo Ávalos Lemus, del Partido de la Revolución Democrática, en contra; Rosalía Ramírez de Ortega, del Partido Acción Nacional, para hechos; Enrique Ibarra Pedroza, del Partido Revolucionario Institucional, en pro, quien también, por respecto al número de horas que se han dedicado a este debate, declina su intervención y solicita que sus palabras, presentadas por escrito, se incluyan en el Diario de los Debates.
Se concede el uso de la palabra al diputado Miguel Montes García, del Partido Revolucionario Institucional, quien expresa un enfoque objetivo de lo que se ha discutido. Acepta una interpelación del diputado Pablo Gómez Alvarez y otra del diputado Jorge del Rincón Bernal.
Para hechos hace uso de la palabra el diputado Leonel Godoy Rangel, del Partido de la Revolución Democrática.
Presidencia del diputado Mauricio Valdez Rodríguez
Por instrucciones de la presidencia se consulta a la asamblea, misma que considera suficientemente discutido el artículo sesenta, y tomada la votación nominal respectiva, el presidente declara aprobado el artículo en sus términos por trescientos treinta y ocho votos.
El presidente da lectura a los nombres de los diputados que se han inscrito para discutir el artículo setenta y tres, y concede el uso de la palabra a los diputados Patricia Olamendi Torres, del Partido de la Revolución Democrática, en contra, quien acepta una interpelación del diputado Juan Antonio García Villa; Celia Torres Chavarría, del Partido de la Revolución Democrática, en contra; Mario Ruíz de Chávez, del Partido Revolucionario Institucional, quien declina por respeto al tiempo de la asamblea y José Armando Ocampo Villalobos del Partido Acción Nacional, para hechos.
La asamblea considera suficientemente discutido el artículo setenta y tres y la secretaría toma la votación nominal respectiva.
El presidente declara aprobado en sus términos el artículo setenta y tres por trescientos once votos.
Se somete a discusión el artículo segundo transitorio y el presidente concede el uso de la palabra a los diputados Pablo Gómez Alvarez, del Partido de la Revolución Democrática, en pro y Arturo
Armendáriz Delgado, del Partido Revolucionario Institucional, en pro.
Suficientemente discutido, la secretaría toma la votación nominal respectiva y el presidente declara aprobado en sus términos el artículo segundo transitorio por trescientos treinta y cuatro votos.
Aprobadas las reformas a los artículos quinto, cuarenta y uno, cincuenta y cuatro , sesenta, setenta y tres y segundo transitorio. Pasan al Senado para sus efectos constitucionales.
Agotados los asuntos en cartera, la secretaría da lectura al orden del día de la próxima sesión y el presidente clausura la de hoy a las seis horas del día dieciocho de octubre de mil novecientos ochenta y nueve, citando para la sesión de clausura del período extraordinario el próximo día veinte a las trece horas.»
Está a discusión la presente acta...No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta a los señores diputados si se aprueba esta acta.
Los que estén a favor, sírvanse manifestarlo poniéndose de pie...Aprobada, señor presidente.
BALANCE DE LOS TRABAJOS
DEL PERÍODO EXTRAORDINARIO
El C. Presidente: - Esta presidencia informa a la asamblea que se han inscrito para hacer uso de la palabra en esta última sesión de la Cámara de Diputados durante el período extraordinario, los siguientes ciudadanos diputados: Pedro René Etienne Llano; Oscar Mauro Ramírez Ayala, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana; Roberto Jaramillo Flores, del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional; Jesús Antonio Carlos Hernández, del Partido Popular Socialista; Ignacio Castillo Mena, del Partido de la Revolución Democrática; Gildardo Gómez Verónica, del Partido Acción Nacional y Horacio Labastida Muñoz, del Partido Revolucionario Institucional.
En tal virtud, se concede el uso de la palabra al ciudadano diputado Pedro Etienne.
Esta presidencia solicita atentamente a los ciudadanos diputados tomar sus lugares, guardar silencio y el respeto que merece el orador en turno.
El C. Pedro René Etienne Llano: - Con su venía, señor presidente; compañeros legisladores: Llegamos hoy a la culminación de un período extraordinario que lo ha sido en varios aspectos; extraordinarios, por el tiempo en que fue convocado; extraordinario, por las modificaciones y el proceso mismo legislativo que hemos vivido en los últimos días, y extraordinario también, porque ha sido el marco de presentación de una alianza política que consideramos va más allá de este período extraordinario.
Sin embargo, los tres aspectos que le han dado esta característica de extraordinario al período que hoy culmina, tendrá una profunda repercusión en la vida política nacional y de ahí la importancia de este balance final con la participación de compañeros legisladores de todas las fracciones parlamentarias.
A la Fracción Parlamentaria Independiente le ha parecido extraordinaria una modificación a la Constitución General de la República en un área sensible para el pueblo de México como es la materia político - electoral.
Más aún, consideramos que el acuerdo establecido por el Partido Revolucionario Institucional y por el Partido de Acción Nacional para aprobar esta reforma, tiene que ser juzgado en función del contenido mismo de la reforma. Cada fuerza política asume bajo su propia responsabilidad los acuerdos y las alianzas, y en un país como el nuestro, en donde cada día avanzamos en una real competitividad y en una mayor participación política, no será extraño que en el futuro se tenga que establecer alianzas para lograr la mayoría que no se logra en la urna. En muchos países las alianzas son necesarias por el equilibrio de las fuerzas, México empieza a llegar a ese nivel; las alianzas serán necesarias para establecer la base política en la Cámara y fuera de la Cámara, se exprese en torno a los proyectos que tiene el país como opción.
No es por lo tanto simplemente criticable que se den las alianzas, el problema de ellas radica en torno a la materia que se da y hoy hemos presenciado una alianza en torno a lo que podríamos considerar el área más sensible para el pueblo mexicano, el área de la democracia, el área del respeto al sufragio efectivo, el área político y electoral.
Ya varios legisladores han planteado su posición frente al contenido concreto, habría que señalar que después de un largo proceso de 10 meses de discusión lo más relevante de esta reforma son los aspectos que no han sido tocados, son los temas que han quedado fuera de las modificaciones constitucionales, lo que ya de por sí le da un carácter restringido y un carácter limitado a esta reforma a
la Constitución. Pero más aún, que los momentos en que vive el país era necesario buscar el consenso de todas las fuerzas para poder establecer un auténtico pacto político entre todas las fuerzas que actúan en la nación.
Y se nos ha dicho en varias ocasiones que ese consenso fue imposible por la cerrazón o por la inflexibilidad de los grupos parlamentarios. Sin embargo, los hechos contradicen este pretexto.
Para nosotros ha sido significativo que se rechazara la propuesta del Partido Popular Socialista y del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, porque ese rechazo evidenció una falta de interés político en la búsqueda del consenso.
Ese rechazo evidenció que se abordaba la reforma constitucional sólo buscando el consenso y la alianza con la fuerza que permitiría lograr las dos terceras partes de la votación. Estas propuestas rechazadas , del Partido Popular Socialista y del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, para nosotros constituyeron un termómetro del contenido ideológico, del contenido político de esta alianza que hoy hemos visto presentarse públicamente en el período extraordinario.
No debería de extrañarnos que hoy se hiciera público un proceso que arrancó hace 10 meses; al mismo tiempo que arrancaba la discusión sobre la reforma, arrancó también la relación oficial entre el Partido de Acción Nacional y la institución presidencial.
Y no deberíamos extrañarnos tampoco porque si esta alianza se dio en un tema en donde las posiciones eran más encontradas, esta alianza se va a reflejar de manera más clara en los temas en donde hay un consenso de más atrás, sobre todo en el área de la política económica.
No es casual que se hubiera planteado por un distinguido miembro del Partido de Acción Nacional, que el presidente Salinas de Gortari, les había robado el programa económico. Lo extraño es que este acuerdo se haya dado en el área en donde parecían más encontradas las posiciones y en el área en donde la materia hacía más difícil el acuerdo.
Por eso consideramos que estamos ante la presencia de un pacto de largo alcance. Pero insistimos en que en la realidad del país, cada fuerza asume bajo su propia responsabilidad y su propia decisión, los acuerdos, los pactos, y en su caso las alianzas. Lo que sigue siendo discutible y será materia de discusión en los próximos días, es, si esta reforma parcial se fundó simplemente, en ventajas mutuas.
A nosotros nos parece que incluso cuando en la discusión se ha evidenciado que este acuerdo llegó también a puntos medulares de la ley secundaria, que este acuerdo adelanta también la definición de procedimientos, de estructuras, de organismos, que serán definidos en la ley electoral, nos parece que cuando se ha evidenciado este acuerdo entre sólo dos partes de la Cámara, hay que señalar con mayor insistencia el carácter excepcional de este proceso de este acuerdo. Porque no es posible que la reforma a la ley y que los aspectos que se han transladado para definirse en la ley, se aborden de manera facciosa, se aborden por sólo una fracción de la Cámara de Diputados.
Ya tendremos ocasión de entrar en su momento a la discusión de la ley secundaria, pero no es posible entrar a una discusión de la ley, cuando ha habido previo un pacto entre dos fuerzas para definirla al margen de un proceso legislativo de consulta, de discusión de iniciativa y de lograr efectivamente un avance en materia electoral.
Nosotros consideramos que aquí es donde estriba el principal retroceso de este período extraordinario; retroceso porque el análisis de lo que fue aprobado por esta Cámara de Diputados, tiene que tomar en cuenta la forma actual en que estaba plasmada la integración de los organismos y la representatividad de esta Cámara en la actual Constitución de la República, y retroceso también porque en lugar de permanecer buscando el consenso de todas las fuerzas políticas, se ha optado por un método que excluye, por un método que margina de esta área la participación de otras fuerzas.
Finalmente, compañeros diputados: El país vive momentos difíciles y pensamos que el principal punto de referencia que debemos tomar al discutir en la Cámara, es el de responder a una ciudadanía que después del 6 de julio ha expresado un creciente interés de participación en las cuestiones públicas; asumir la discusión en la Cámara como una extensión del debate nacional.
Ahora mismo, al ser aprobada por el poder legislativo federal esta reforma a la Constitución, tendrá que abrirse un segundo paso de discusión en las legislaturas de los estados. Estamos seguros que al debatirse en las legislaturas locales, se podrá trascender, se podrá trascender los recintos parlamentarios. Pensamos que esa es la principal autocrítica que como fuerza de izquierda debemos asumir.
Llegamos a discutir la materia político - electoral y nos mantuvimos encerrados en las paredes del recinto legislativo; llegamos a discutir las reformas a la Constitución, olvidando la movilización popular, olvidando que en el desarrollo y en la maduración de la democracia, la ley es importante, pero lo fundamental es la participación de los ciudadanos.
Esta reforma tiene un talón de Aquiles: Ni propicia una mayor confianza de los ciudadanos, ni propicia una mayor participación, porque se mantiene en los marcos estrechos de un sistema electoral con predominio del gobierno y su partido, y con esta reforma en la Constitución, ya podemos desde ahora esperar que tipo de cambios y con qué sentido se harán las modificaciones a la ley secundaria.
El acuerdo era posible si todas las fuerzas asumiéramos que no se trata de una sesión del poder, que no se trata de una exigencia al margen del principio democrático fundamental, el poder se gana y el poder se pierde en la urna.
Esa es la falta de voluntad política que hemos observado en esta reforma. Ese es el problema que señala y enmarcará como regresiva la modificación a la Constitución de la República. Y ése es el principal problema por el que podemos afinar finalmente que esta reforma, aparte de limitada, se ha quedado muy lejos de las expectativas de los mexicanos.
Se ha quedado muy lejos de varias fuerzas políticas y de los reclamos legítimos de varias fuerzas políticas, pero lo principal es que se ha quedado muy lejos en la aspiración de los mexicanos de lograr en la Constitución y en la ley secundaria, procedimientos que en sí mismos den garantía de respeto al sufragio.
Esta reforma, en síntesis, no ha tenido como signo el dar certeza y seguridad a los ciudadanos, ha tenido como signo aumentar el predominio y el control del proceso electoral, por eso ha sido considerada como limitativa y por eso ha sido caracterizada como regresiva.
Nos extraña que ya desde ahora se anuncie un proceso de reforma a la ley marcado nuevamente por esta limitación, pero en última instancia, cada una de las fuerzas políticas en esta Cámara asume su responsabilidad ante sus miembros y ante sus ciudadanos.
Hay, finalmente, una forma de responder en positivo a esta contrarreforma, entender que los cambios en la Constitución y en la ley no van a cambiar la actitud y la conciencia de los mexicanos, ha cambiado la correlación de fuerzas en la Cámara y hoy la correlación que el pueblo votó el 6 de julio ha sido modificada por el acuerdo en el pacto político, pero afuera hay una ciudadanía con una participación creciente y eso es lo que no puede alterar y desconocer esta reforma.
La mejor manera de responder será intensificar el trabajo de organización, será intensificar la participación electoral, será plantear un positivo que la reforma a la ley no podrá evitar los cambios que sean fruto de la voluntad de los ciudadanos.
Por nuestra parte, con la participación modesta como legisladores comprometidos en un movimiento popular, pensamos que ésa debe ser la respuesta, lograr la participación política de la mayoría de los mexicanos, aun estas reformas regresivas no podrán impedir los cambios que la mayoría de los mexicanos decidan. Muchas Gracias. (Aplausos.)
El C. Presidente: - Tiene el uso de la palabra el ciudadano diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala.
El C. Oscar Mauro Ramírez Ayala: - Señor presidente; compañeras y Compañeros diputados: Frente a una realidad ensombrecedora, sin claras expectativas para los miembros de las clases populares que ven angustiados cómo sus míseros salarios apenas alcanzan para mal comer, frente a una nación rica en historia, con muchos héroes y mártires, exigiendo que los sacrificios de muchas generaciones de mexicanos valgan la pena, frente a un país que sustentando el principio de sufragio efectivo y la no reelección, hizo la primera revolución del siglo y puso el ejemplo de lo que el pueblo organizado es capaz de hacer; frente a una ciudadanía que contempla en el panorama político nacional, opciones políticas sin afinidad con la historia patria y frente a una reforma electoral político - constitucional incongruente con la realidad del país, la fracción parlamentaria del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, ahora y en su oportunidad presentó las alternativas para una reforma constitucional congruente con los principios de la Revolución de 1910, enmarcados en la lucha social por el sufragio efectivo y la división de poderes.
La incongruencia de la reforma político - electoral propuesta por el Partido Revolucionario Institucional, a la que festinadamente se sumó el Partido Acción Nacional, se explica por el trato, incapacidad y lenguaje soez con que los altos dirigentes del Partido Revolucionario Institucional tratan o califican a sus diputados y militantes, dándoles el título honoris causa de "burros" a sus diputados y de "bueyes" a sus jóvenes militantes.
Con la confabulación, alianza, disciplina o suma del Partido Acción Nacional con el Partido Revolucionario Institucional, en la época de la "modernización" se hizo posible una contrarreforma electoral; el sistema bipartidista Partido Revolucionario Institucional - Partido Acción Nacional, se proyectó como el modelo de gobierno
que se pretende imponer a los mexicanos, impulsado éste desde el exterior, sin respetar nuestros principios revolucionarios, la idiosincrasia del mexicano, la cultura y costumbres de los distintos grupos étnicos que existen en la nación y, lo que es más importante, sin atender las demandas de las bases militantes de los partidos en romance.
Ya en lo económico, la presente administración con su política neoliberal venía aplicando el programa panista, como lo reconoció el propio ingeniero Clouthier, por lo que era previsible pero no deseable, que en lo político hubiera un acuerdo entre los sectores más derechistas del Partido Acción Nacional con el partido en el gobierno.
La actual administración ha promovido la privatización de empresas prioritarias y estratégicas para el país, hecho que ha festinado el panismo más conservador y acaudalado, porque son viejas demandas hechas acción de gobierno sin que gobiernen los blanquiazules formalmente.
En ese contexto, el Partido Revolucionario Institucional y el Partido Acción Nacional convienen una reforma electoral que no responde al reclamo ciudadano, ni siquiera de las bases panistas, de cambios sustanciales en lo político y electoral para garantizar el respeto al voto y a la voluntad popular, ejemplo de ello lo constituye el desplegado del día 12 de octubre de 1989, signado por los dirigentes del Partido Acción Nacional, en el que establecen las bases mínimas para la "verdadera reforma política", cuyos puntos, por lo menos hasta el momento, ninguno fue cumplido por su ad latere, lo cual implica no sólo una alianza, sino una sumisión de ese partido al Partido Revolucionario Institucional.
Con la contrarreforma y la confabulación panista, el Partido Revolucionario Institucional garantiza una sobrerrepresentación en la Cámara de Diputados, los priístas, previendo el alto abstencionismo y sobre todo la poca credibilidad que tienen entre el electorado, se convierten en mayoría absoluta en la Cámara de Diputados al menos con el 35% de la votación total y con las argucias que se establecen en los incisos del artículo 54 de las reformas constitucionales que aprobaran a espaldas de sus militantes, los diputados priístas y panistas sin considerar el desacuerdo que existe con la alianza del Partido Revolucionario Institucional - Partido Acción Nacional por parte de su militancia.
Sin embargo, el meollo lo constituye la falta de paridad y de igualdad en los órganos electorales, el partido en el poder se sigue garantizando la manipulación de los órganos electorales y sus resoluciones, con mañas jurídicas y legales para burlar la voluntad popular y concretar el fraude electoral.
En el artículo 54, el Partido Revolucionario Institucional muestra su gran temor a la instauración de un régimen pluripartidista que se germinó en los comicios federales del 6 de julio de 1988 y lo intenta sustituir por un aberrante bipartidismo que la mayoría de los mexicanos rechazamos.
Al Partido Auténtico de la Revolución Mexicana en su nueva era, no le preocupa el bipartidismo ni los porcentajes con que graciosamente instauran la cláusula de gobernabilidad, puesto que nos enfrentamos al reto de la credibilidad ciudadana al demostrar que la LIII legislatura y en la actual, constituimos la tercera fuerza política nacional de mayoría relativa. Actualmente la nueva era del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana que se inicia a partir de mayo de 1984, cuenta en todo el país con diputados que integran las diversas legislaturas locales con ayuntamientos parmistas y con numerosos regidores integrados por virtud de ser la segunda fuerza electoral en los municipios que conforman las entidades del país.
El Comité Ejecutivo Nacional del Autentico de la Revolución Mexicana tampoco está de acuerdo en que la calificación del Colegio Electoral sea definitiva e inatacable y que contra las resoluciones del tribunal electoral no proceda juicio ni recurso alguno, puesto que esto va contra el artículo 97 constitucional, que faculta a la Suprema Corte de Justicia a practicar de oficio la averiguación de algún hecho o hechos que constituyan la violación al voto público.
Rechazamos el proyecto de reforma electoral del partido Revolucionario Institucional y del Partido Acción Nacional, porque entre cosas, fue elaborado por personas ajenas al Congreso de la Unión, aunque su paternidad se dio a la directiva de la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales.
Además, no se tomaron en cuenta las propuestas del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana presentadas desde el 19 de diciembre pasado ante el responsable del Ejecutivo Federal y ampliadas en una segunda entrevista en septiembre pasado.
Tampoco se tomó en cuenta la opinión de ciudadanos y organizaciones que participaron en la consulta pública sobre reforma electoral que se efectuó en los meses de febrero, marzo y abril, donde se expusieron 91 ponencias, de las cuales
48 correspondieron a representantes de Partidos políticos y 43 a invitados especiales, así como 43 trabajos remitidos por ciudadanos e instituciones académicas y políticas sin registro.
Opinión generalizada de los ponentes en la consulta pública que presidió el presidente de la Comisión Federal Electoral, fue evitar la sobrerrepresentación en la Cámara de Diputados y buscar el equilibrio en los organismos electorales.
La reforma, o más bien dicho la contrarreforma, acepta un tribunal compuesto de magistrados propuestos por el Ejecutivo, ya que la Cámara de Diputados sólo se prestará a un juego de votación o en su caso , de insaculación.
Tal tribunal, al parecer de los autores de la contrarreforma, será quien decida en derechos las barbaridades o los actos ilegales cometidos por los organismos electorales, con ello reconocen tácitamente que en los pasados procesos electorales hubo ilegalidad, componendas e injusticias, de ahí su preocupación de constitucionalizar las magistraturas, según para darle credibilidad y carta de naturalización al fraude electoral, justificando así las incongruencias elevadas a la categoría de dictamen a los procesos del 6 de julio de 1988; esto, aunado a que ahora mediante esta contrarreforma, la Constitución otorgará títulos, diplomas y doctorados ampliamente remunerados con el dinero del pueblo y bajo nómina a quienes en la actualidad y en sórdidos sótanos realizan la alquimia electoral o a quienes roban urnas a los auxiliares, a los taqueros y a los que construyen la obra negra comúnmente conocidos como "mapaches" o hampones electorales.
También hubo acuerdo sobre la conveniencia de que el Senado de la República ampliara su composición pluripartidista, en la consulta pública y en los proyectos de reforma presentados por los partidos políticos a través de sus fracciones parlamentarias y que fueron turnados a la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales; así mismo, se considero que en la actualidad el régimen político del Distrito federal es de excepción y que no hay razones válidas para que se mantenga así.
Se planteó la conversión del Distrito Federal en entidad federativa y el establecimiento en su territorio del régimen municipal, de tal manera que las autoridades sean elegidas mediante el sufragio de la ciudadanía.
Otro aspecto importante que tampoco se tomó en cuenta en la contrarreforma que aprobó el partido Revolucionario Institucional y el Partido Acción Nacional, es el que se refiere a las prerrogativas partidistas. Los comisionados a la consulta Pública organizada por la Comisión Federal Electoral estuvieron de acuerdo en promover un uso más eficiente en el acceso a los tiempos oficiales en los medios de comunicación social mediante mejores apoyos técnicos y en buscar un acceso equitativo a dichos medios en tiempos no oficiales.
En esas mismas reuniones se dio el consenso para recomendar la penalización por el uso de recursos públicos no previstos en la ley a favor de un partido político, en auspiciar la eliminación de tarifas diferenciales para publicidad comercial y propaganda política.
De igual forma se consideró necesario establecer un mecanismo que garantice el ejercicio de los derechos de réplica y rectificación en beneficio de ciudadanos y partidos ante los medios de comunicación electrónica.
En la bola de humo que se formó en la Cámara de Diputados luego de 56 días, siete sesiones plenarias y más de 200 horas de negociaciones, se esfumaron las propuestas ciudadanas y de los partidos políticos y sólo quedaron las del sistema neoliberal.
Incluso se llegó a acusar a la oposición de que nunca presentó proyectos de reforma electoral serios, todo ello con el fin de hacer prevalecer el poder del Partido Revolucionario Institucional que ya empieza a perder credibilidad en la lucha cotidiana con el pueblo en todo el país y por eso ahora la tecnocracia del Partido Revolucionario Institucional necesita del oxígeno panista más retrógrada para subsistir como mayoría; para la oposición democrática la lucha continúa al lado del pueblo en todos los ámbitos, no solo en las elecciones.
Frente a un país que vio morir en la miseria a los verdaderos revolucionarios, quienes exhibían sus medallas en actos oficiales como un reproche a los que viven holgadamente de la industria del muerto, cobrando en las ventanillas oficiales por luchas y sacrificios no vividos.
No transigiremos en la defensa de nuestros principios, somos leales a nuestra historia, principios y tradiciones , creemos firmemente que el movimiento revolucionario de 1910 es la síntesis de la guerra de independencia y la reforma y que sus postulados siguen siendo válidos para el México de hoy y del futuro, ¡en eso creemos y por eso luchamos!
El juicio de la historia no contempla... Está por escribirse el futuro y empieza a quedar atrás el
presente; en nuestro partido reiniciamos con el vigorosos impulso de nuestros cuadros los renovados postulados; continuaremos en los siguientes periodos ordinarios de esta Legislatura y las futuras, promoviendo una verdadera reforma electoral acorde con la voluntad del pueblo, para lograr un futuro inmediato la nueva era que todos queremos para México. Muchas gracias.
El C. Presidente: - Tiene el uso de la palabra el ciudadano diputado Roberto Jaramillo Flores.
El C. Roberto Jaramillo Flores: - Señor presidente; compañeras y compañeros diputados: Un balance objetivo de este período extraordinario de sesiones no podría hacerse sin reconocer que el diálogo y los esfuerzos de todos los partidos por llegar a un acuerdo común, constituye por sí mismo un avance hacia la democracia en nuestro país, es decir, no podemos soslayar la presencia de voluntad política en cada uno de los partidos por explorar mejores caminos en cada uno de ellos hacia la democracia.
Este hecho, insiste el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional, significa ya un paso más hacia la democratización del país, un balance critico de este período, sin embargo, nos exige ver con rigor ciertas falacias, errores que envolvieron al debate político que necesariamente tuvimos que hacer sobre la democracia; a nuestro juicio, una primera falacia presente en las discusiones estuvo en la pretensión de buscar en todo momento y desde el principio, un consenso político entre distintas visiones que los partidos tenemos respecto de la democracia.
En este sentido, el consenso propuesto operó como una acción distractora que condujo a una dilación de los resultados buscados en la reforma electoral a través de la exploración de ese ficticio e imposible consenso que distrajo acerca de la búsqueda de un acuerdo mínimo pluripartidista que no hubiera servido de punto de apoyo para una reforma electoral más amplia y no menor como la que se ha aprobado, pero se nos distrajo durante meses y mediante largas pláticas en torno al consenso, para buscar no un acuerdo plural, dando como resultado natural que dos de los partidos actuaran y acordaran sus diferencias y lograran establecer una alianza que los beneficiara ostensiblemente.
Queda la impresión de que ambos partidos actuaron para estrechar a la izquierda, para llevarse la parte del león en futuras elecciones, este esquema legal aprobado a principios de esta semana, algunos han pensado que obedece al propósito de conjuntarlo con la política de apertura comercial y de privatización que está llevando a cabo el gobierno, veremos si esto es cierto.
Podríamos hacer los siguientes cuestionamientos: ¿Acaso piensa el partido del gobierno que su alianza con el partido Acción Nacional le será útil para el programa nacionalista, popular y revolucionario del que habla el Presidente de la República?, ¿lo quiere para eso, o para que ellos se encarguen de los cortejos de recepción a los inversionistas extranjeros a las misiones vaticanas que preparan la venida triunfal del Papa Juan Pablo II en 1990?
El Partido del frente Cardenista de Reconstrucción Nacional analizará los resultados y el desarrollo del proceso de reforma electoral, buena parte de nuestras propuestas son un reclamo sólido y firme, siguen siendo válidas, tenemos que aceptar la oposición toda, no sólo nosotros, que muchas de nuestras expectativas de una democracia amplia desbordan a veces las sencillas demandas de la mayoría empobrecida de una democracia a veces más tangible y cotidiana, es decir, que nuestros afanes democráticos modernistas no encuentran correspondencia con la exigencia de estos mexicanos, de una democracia de tortillas, de pan, de trigo, de carne, de maíz, vestido, empleo, vivienda y mejores salarios.
Nuestros apetitos de una democracia moderna no hallan correspondencia con la necesidad cotidiana democrática que la mayoría del pueblo mexicano tiene frente a la desmedida acumulación económica de un reducido número de capitalistas nacionales y transnacionales, de burócratas enriquecidos y ¿por qué no decirlo?, de algunos teóricos de partidos divorciados de la realidad mexicana.
En este desentendimiento entre la antidemocracia económica y social del pueblo mexicano y la democracia electoral y abstracta que suele adornar con pocos discursos, está la explicación concreta de este fenómeno inasible que conceptuamos como una expresión de apatía o de simple desinterés político, pero que en su oscuro fondo guarda la clara respuesta del pueblo mexicano a toda propuesta: el abstencionismo.
Sí, en el abstencionismo está quizá la respuesta auténtica del pueblo mexicano a nuestro voluntarismo político, pues en cada voto no expresado, recordemos que voto viene de voz, está el rechazo implícito de una población mayoritaria que tiene desconfianza no sólo al sistema electoral, sino también en algunas organizaciones, porque éstas no saben convertir sus demandas en un voto activo y convencido por la democracia integral que necesitan.
Nuestra fracción parlamentaria no insistirá, por ahora, en reiterar las razones de su postura sostenida en los debates de este período extraordinario, le interesa exponer ante ustedes y la nación, su parecer respecto al panorama de los grandes problemas del país, en particular de la situación en que nos colocan los cambios constitucionales aprobados.
Tal propósito lo anima el deseo de no convertirnos en "estatua de sal" y el profundo optimismo de que las fuerzas de la democracia serán capaces de virar en beneficio de la nación y del pueblo, el rumbo que se nos quiere imponer.
La realidad del país y la internacional, todas ellas cruciales para el futuro de la nación, son para el Partido del Frente Cardenista las siguientes: ¿Como revertir el beneficio de las fuerzas generadoras de la riqueza social, los resultados del proceso productivo, después de casi tres lustros de crisis económica?, ¿que tipo de país construiremos en el proceso de recuperación económica: el democrático y soberano que marca la Constitución y nuestra experiencia histórica, o el que se aconseja en los centros imperialistas?
Los desafíos que nos imponen los cambios que operan en el mundo capitalista avanzado y últimamente los procesos en marcha en varios países socialistas, junto a las carencias, limitaciones y posibilidades del modelo de desarrollo capitalista que vivió el país en el llamado "desarrollo estabilizador" y recientemente por las secuelas de la crisis apuntan a la necesidad del cambio, es decir, a un inevitable proceso de modernización.
Consideramos, en el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional, que la modernización del país se puede encarar por dos tipos de rumbos históricos: por el compromiso histórico de las clases propietarias en cercanía con las tecnocracias financieras criollas y externas, con serios costos para el desarrollo independiente, democrático de la nación, o por la reconstrucción de un pacto social de las fuerzas populares y progresistas mediante un proyecto capaz de reconstruir democráticamente el país, es decir, por otro tipo de compromiso histórico, el de las clases subalternas, que sea capaz de actualizar la rectoría estatal de desarrollo económico y colocar la economía mixta en beneficio de las clases laborantes.
O México avanza por el camino de la democracia integral, o se impondrá un rumbo capitalista excluyente de los beneficios del llamado "capitalismo de bienestar" que profundizará además la dependencia estructural y una mayor dependencia del exterior.
En el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional no compartimos la conceptualización de las modificaciones electorales como una contrarreforma sólo porque el Partido Revolucionario Institucional y el Partido Acción Nacional hubiesen quizá conspirado, dicen algunos, en nuestra contra, reconocemos en la reforma ciertos avances en la vigilancia del voto que pueden contribuir a una reducción de la famosa alquimia y no avalamos la visualización, porque sabemos que las posibilidades de sobrevivencia de la alquimia y de una sobrerrepresentación del Partido Revolucionario Institucional y del Partido Acción Nacional en el futuro, dependerán fundamentalmente de nuestra capacidad de lucha y de nuestra eficacia para buscar en las calles, en las fábricas, en los barrios, en los ejidos, las escuelas y plazas públicas, esa reforma democrática que necesita el país y que desde luego no se encuentra sólo en las urnas.
Sí, para nosotros los cardenistas revolucionarios, la reforma democrática no está sólo en las leyes, sino fundamentalmente en la lucha diaria del pueblo mexicano por empleos, por alimentos, por tierras, viviendas, educación y por la defensa de sus intereses más vitales y ahí ira el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional a buscarla.
Finalmente, compañeros diputados, una ligera digresión: con actitudes lastimeras y exorcismos acerca de una alianza de la que se ha comentado, no creo que vayamos muy adelante, algunos han dicho que ésta es una santa alianza, pues mejor digamos que es una diabólica alianza y que el argumento más severo para esta diabólica alianza es que se van a ir al infierno. Muchas gracias.
El C. Presidente: - Tiene el uso de la palabra...
Silencio en las galerías.
Tiene el uso de la palabra el ciudadano diputado Jesús Antonio Carlos Hernández.
Silencio en las Galerías.
El C. Jesús Antonio Carlos Hernández: - Señor presidente; señoras y señores legisladores: El día 1o. de diciembre de 1988, al expresar nuestra opinión en la apertura de la sesión ordinaria del Congreso, como integrante del Frente Democrático Nacional, dijimos que ése era un día aciago para la República; se iniciaba otro impulso a un camino contrario y antagónico
a la Revolución Mexicana; por desgracia, los hechos de hoy confirman aquellas palabras.
El día 28 de agosto de este año, en la sesión de inicio del período extraordinario que hoy concluye, advertimos que había dos grupos de iniciativas de modificaciones constitucionales, antagónicas entre sí. De una parte, las presentadas por las fuerzas progresistas, con el claro propósito de avanzar en la ampliación del régimen democrático; de la otra, las propuestas de la derecha, consistentes en retrancas para impedir el avance democrático ; es evidente que éstas son las que se impusieron. Se consuma así una parte de la contrarreforma electoral.
El Partido Popular Socialista, hoy como ayer, expresa con claridad sus opiniones. La contrarreforma electoral que hoy se inicia, merced al contubernio contrarrevolucionario que se dio en la Cámara de Diputados, ya sin la careta y la demagogia del partido tradicional de la derecha, que durante 50 años se había autoeregido como el titular exclusivo de la oposición al gobierno y que ahora en franca fusión, con recursos de retórica digna de mejor causa, intenta justificarse ante sí mismo a sabiendas de que nunca podrá hacerle frente al pueblo.
Esta contrarreforma, decimos, es sólo parte de toda una estrategia contrarrevolucionaria, la estrategia contrarrevolucionaria que en todos los campos está aplicando con audacia el actual grupo tecnográfico gobernante que se conoce como neoliberalismo. Esta ideología no tiene nada de novedoso, y es y ha sido el programa de la burguesía, de los dueños del gran capital y del imperialismo desde el siglo pasado. Con profundo chauvinismo y hasta complejo de inferioridad, el grupo tecnocrático gobernante, a pretexto de la modernidad, ha adoptado como su guía la filosofía neoliberal norteamericana y europea, en similitud con el grupo de los científicos ideológicos de la dictadura porfirista que hablaban bien el francés.
Las fuerzas democráticas debemos tomar conciencia de que el neoliberalismo es la estrategia política e ideológica del capital financiero y monopólico transnacional, para intentar superar la crisis del sistema capitalista, acelerar la concentración de la riqueza en favor de los monopolios, triturar la concepción de clase de los trabajadores exaltar el individualismo y acentuar el dominio del imperialismo en los pueblos subdesarrollados sometidos a su influencia.
El neoliberalismo tiene a trasladar el poder del Estado a manos de la empresa privada, es decir, el capital monopolista; eso se advierte en sus dos principios claves: primero, la esfera del Estado debe ser limitada lo más posible, suprimiendo su participación en al producción, los servicios y aun en los reglamentos de control, para dejar que el sector privado ejerza el control absoluto en la economía y todos los demás aspectos de la vida social, incluyendo la educación y los mismos parques de recreo públicos; y segundo, el poder del Estado debe dispersarse para mitigar sus fuerzas cediendo el poder central a los núcleos más pequeños de la administración pública. Se trata de situar a la empresa privada, que hoy domina como poder monopólico por encima de cualquier otra institución de la sociedad incluyendo al Estado, y suprimir todo lo que puede constituir una acción paternalista en la solución de los problemas sociales como la vivienda, los salarios mínimos, la seguridad social, la educación popular, para que los encare de manera personal, cada ciudadano en forma responsable y libre sin la intervención del Estado ni los sindicatos.
Esta teoría novísima se aplica hoy en nuestro país con el evidente propósito de trastocar la estructura económica y social del país establecida por la Revolución Mexicana con el esfuerzo permanente del pueblo y la clase obrera.
Para los neoliberalistas, la abdicación del Estado como motor del desarrollo independiente del país es fundamental, porque su objetivo real es integrar a México con la economía norteamericana y en esas condiciones la independencia económica de México carecería de sentido.
Independencia económica y elevación del nivel de vida del pueblo, que son precisamente los objetivos de las empresas estatales y de la intervención directa y predominante del Estado en la economía nacional, no son los fines del grupo modernizador. Lo vetusto y a la postre inoperante del neoliberalismo se advierte al examinar otro momento triste de la historia humana, en el cual ya se pregonó y aplicó como programa de gobierno, el fascismo. En Italia Mussolini atropelló los derechos e intereses de los trabajadores, aplicando, entre otras, tres medidas esenciales: Primero, privatización total de la economía; segundo, nulificación de los sindicatos y sus formas de lucha y, tercero, imposición de la doctrina de colaboración de clases.
En tal virtud, Mussolini declaró que el Estado "renunciaba a toda la farragosa, costosa y antieconómica maquinaria de las estatisaciones sociales o municipales".
En el programa del Partido Nacional, afirmó: "La intervención del Estado en la producción económica se produce solamente cuando falte o sea
insuficiente la iniciativa privada o cuando estén en juego intereses políticos del Estado", es decir, la misma tesis de la subsidiaridad que sigue sustentando la derecha y ahora los neoliberales de México.
Por lo que se refiere al movimiento sindical, el fascismo italiano en la Carta de Trabajo afirmaba: "Solamente los sindicatos sometidos al control de Estado podrán representar legalmente a los trabajadores". Representación para pactar; para aceptar normas y planes de producción; no para defender salarios y otro tipo de prestaciones. A tal punto que el artículo 18 de la Ley Laboral Fascista, prohibió categóricamente la huelga.
"En realidad, - sigue afirmando Mussolini- , nuestro sindicalismo difiere desde nosotros, porque negamos absolutamente el derecho a la huelga en los servicios públicos; apoyamos particularmente la colaboración de clases y estamos por lo tanto tratando de inculcar en los sindicatos esa idea".
En relación con la contrarreforma electoral que hoy examinamos, ¿por qué afirmamos que ésta, que es la aplicación del neoliberalismo en materia política, entre otras razones?, porque privilegia la intervención protagónica de los individuos sin militancia partidaria en los procesos electorales
Vuelve a la concepción décimonónica de que es el individuo el titular esencial de los derechos electorales, después de que con muchos esfuerzos se había reconocido a los partidos políticos como instrumentos y expresión de las clases sociales antagónicas en el seno de la sociedad, la categoría de entidad de interés público y rango constitucional, y por tanto, titulares fundamentales de los derechos políticos y electorales.
En el fondo además, se trata de fortalecer el control gubernamental de los procesos electorales. El día de hoy nos enteramos por la Prensa, que un partido político fue supuestamente presionado y obligado a votar en favor del gobierno para consumar la contrarreforma electoral. Y si eso se puede hacer con todo un partido, es seguro que será más fácil doblegar a un solo individuo.
Por otra parte, se trata de aplicar en el campo político el neoliberalismo, el individualismo y garantizar el manejo total e indiscutido del gobierno, de todas las instituciones públicas que pudieran subsistir en medio de la euforia privatista, porque el grupo tecnocrático, se apresta al control absoluto del Poder Ejecutivo que por ahora no está a debate, sino en el Poder Legislativo plural, diverso y colectivo por antonomasia designado este principio como cláusula de gobernabilidad, que indica también una peligrosa tendencia hacia trágicas experiencias del pasado en otras latitudes.
En efecto, todos recordamos que la Ley de Acervo, en la Italia fascista, establecía ya ese principio, al ordenar que se asignara al partido que hubiese obtenido la mayoría simple en las elecciones, las dos terceras partes del número total de diputados. Cuidado, compañeros diputados.
El Partido Popular Socialista ha reiterado en muchas ocasiones y lo reafirma ahora, que toda reforma política para serlo en realidad debe fundarse en el fortalecimiento de los partidos políticos, tanto en el incremento de sus derechos como en el de sus prerrogativas constitucionales, que permitan ampliar en igualdad de condiciones, su acción protagónica en el escenario de las luchas nacionales.
Sin partidos políticos fuertes, en las actuales condiciones del país o con partidos que tengan una participación simbólica en el proceso electoral como hoy se consuma en la ley, no será posible ningún avance democrático en México.
La sustitución de los partidos, verdaderos representantes de las clases sociales, de sus funciones y responsabilidades, por personal técnico, así sea altamente calificado, por magistrados y profesionales sin mancha, verdadera junta de notables, no son sino la expresión de ideas y concepciones del siglo pasado, propias del viejo liberalismo que con nuevo ropaje reviven los modernizadores neoliberales de hoy.
La verdadera propuesta revolucionaria y democrática que sí hubiese significado reforma política, son las presentadas por los partidos y fuerzas democráticas que, desde luego, seguiremos impulsando y que son entre otras las siguientes:
Primero. Representación proporcional pura y simple en la integración de todos los cuerpos colegiados de elección popular;
Segundo. Creación de un Poder Legislativo único, integrado sólo por diputados, que sean auténticos representantes populares;
Tercero. Restituir a los habitantes del actual Distrito Federal, sus plenos derechos políticos y electorales, creando aquí el Estado de Anáhuac, para que los capitalinos tengan la facultad de elegir libremente a sus gobernantes.
Cuarto. Establecer como requisito para ser Presidente de la República, el haber ocupado un cargo de elección popular.
Quinto. Instituir la carrera parlamentaria, a efecto de que el diputado se capacite cada vez mejor en sus tareas legislativas y el pueblo tenga el derecho de sancionar o no, con su voto, la conducta del propio diputado.
Señoras y señores legisladores: El programa permanente del Partido Popular Socialista, retomado de las demandas históricas vigentes de la nación y del pueblo mexicano, se puede resumir en tres postulados esenciales.
Alcanzar la plena independencia y soberanía nacional; elevar constantemente el nivel de vida del pueblo, y ampliar de manera creciente el régimen democrático, hasta construir un nuevo sistema de la vida social, en el que desaparezca la explotación del hombre por el hombre.
Este programa se encuentra plasmado en lo esencial en los artículos 3o., 4o., 5o., 27, 39, 123 y 130 de la Constitución Política de la República vigente, porque es el camino que abrió la Revolución Mexicana, y por esa ruta habremos de seguir combatiendo por las mejores causas del pueblo mexicano.
Hoy la derecha está de plácemes, pero que no festine su triunfo. Esta etapa negra de México habrá de superarse, las fuerzas democráticas y revolucionarias de México no nos dejamos ni nos dejaremos aislar. De un momento a otro sabremos reagruparnos para reencontrar el camino revolucionario
. El Partido Popular Socialista convoca a todas las fuerzas democráticas y revolucionarias, donde quiera que se encuentren a no caer en provocaciones.
La vía del neoliberalismo y la entrega al exterior y a los grandes monopolios privados, no es el camino de la revolución. Las fuerzas revolucionarias, a pesar de todo, somos mayoría aun cuando de momento no se manifieste toda su fuerza popular arrolladora que siempre ha sido, no han prevaricado.
Que la derecha no haga cuentas alegres debemos recordar que en su tiempo don Benito Juárez sólo tuvo como recinto físico su carroza peregrina, y allí estaba representada toda su fuerza omnipotente del pueblo que a la postre obtuvo la victoria.
Así inspirados en su ejemplo como en la de los auténticos y verdaderos héroes del pueblo humilde, encabezaron la guerra de independencia, la de reforma y la Revolución Mexicana de 1910, que aún está viva y actuante, a pesar de los prevaricadores seguiremos en el combate porque estamos condenados a la victoria. ¡Viva México!
El C. Presidente: - Tiene el uso de la palabra el ciudadano diputado Ignacio Castillo Mena. ¡Silencio en las galerías!
El C. Ignacio Castillo Mena: - Ciudadano presidente de la Cámara de Diputados; compañeras y compañeros diputados...
El C. Presidente: - Permítame diputado, ¡silencio en las galerías! ¡silencio en las galerías!
El C. Ignacio Castillo Mena: - Hemos vivido en este período extraordinario de sesiones, una experiencia negativa y dolorosa por la imposición de las fuerzas conservadoras, pero positiva y trascendente como experiencia histórica de la unión de las fuerzas democráticas y revolucionarias en contra de los grupos derechistas que en nombre de dos partidos, ahora coincidentes en su acción política han aprobado la contrarreforma que el ejecutivo prometió en diciembre pasado a uno de ellos.
Seguramente que quienes detentan el poder celebran el acontecimiento, pero no creo que esto amerite una satisfacción cabal, porque si bien es cierto que el acuerdo popular alcanzó el logro de la consigna gubernamental, no menos cierto es que las bases de ambos partidos no recibieron con beneplácito la fusión de dos grupos antagónicos en el pasado. Y sus propias bases, al fin leales a sus principios, no admitirán las claudicaciones ni la negociación sobre esos principios, porque saben que éstos no son objeto de comercio.
Para los hombres que son leales a la conciencia y a su doctrina no existen los precios, no hay venta de convicciones ni hay venta de ideas, pero es cuando las convicciones existen, ya que éstas simplemente existen o no, y aquí es cuando se presenta el enfrentamiento del que cree con el que no cree, del que sirve con el que se sirve, del que trabaja y del que aprovecha , del que siembre y del que cosecha. En resumen, de la base con el seudolíder.
Es conveniente hacer un análisis claro de lo que aconteció en el período extraordinario.
Llegamos a la inauguración con buena fe, que algunos, los críticos de siempre, calificaron de ingenuidad. Repito, con buena fe para llegar a acuerdos favorables para la democracia; suscribimos convenios con el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, con la fracción de diputados independientes y con uno de los claudicantes , aparentemente vencedores; dialogamos ampliamente con su corresponsable mayoritario y llegamos a imaginar que había buenos propósitos, que existían intenciones de cambio, que iba a
avanzarse en la reforma electoral para dar un paso a la apertura democrática que el pueblo de México demanda y que, recogiendo ese reclamo, estaríamos viviendo el umbral de un México nuevo.
Pensábamos que convencidos los miembros del grupo gobernante de las exigencias populares, habían accedido a explorar nuevas experiencias, dejando fuera las de fraude, las de parcialidad, las de prepotencia y las de ilegalidad y que, inclusive, se arriesgarían a que el pueblo expresara libremente su voluntad y decidiera el destino del país como debe ser en donde se vive y se practica la democracia.
Confiamos, lo digo con lealtad, en que se iniciaba el cambio y que al fin los mexicanos podrían decidir el rumbo de su país, por el libre ejercicio de sus derechos políticos, con base en el respecto que las nuevas instituciones les garantizarían.
No existió malicia en las fuerzas revolucionarias, tampoco se dudó de las palabras de un hombre, el coordinador del Partido Acción Nacional, cuando declaró a la Prensa 12 horas antes de que se hiciera público el contubernio, que no podría ir el Partido Acción Nacional con el Partido Revolucionario Institucional, solos a una reforma electoral, porque eso sería mezquindad, porque por encima de esos partidos estaba el pueblo de México.
Aclaro, que tengo a la mano, la copia del boletín de Prensa y el cassette de la grabación.
Doce horas después de estas declaraciones, el líder de la fracción priísta nos invitaba a firmar el dictamen de la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales que suscribirían los dos partidos que, obviamente, habían concertado con anterioridad, a un costo que el pueblo desconoce, pero que seguramente condenará cuando se dé una nueva legislación obrera; desaparezca la Reforma Agraria, se empobrezca más el país o se siga cediendo soberanía.
Asistimos a las sesiones subsecuentes de la Cámara porque en quienes luchamos por ideales, siempre existió la esperanza de que no ocurriera el ya casi inevitable maridaje.
Asistimos, para repetirle al pueblo de México, cuál era nuestra reforma, como ya lo habíamos hecho antes; estuvimos hasta el último segundo de la discusión y de la votación con el deseo de que no se consumara la burla, ya que algunos miembros de las dos diputaciones votaban en contra francamente y otros se escurrían por los pasillos para pasar inadvertidos, esperaban que todavía en el último minuto, como lo esperábamos nosotros, no se diera la vergonzante alianza de la reacción para que triunfara la contrarreforma.
Todas las propuestas de iniciativa de reforma, que el Partido de la Revolución Democrática presentó, fueron producto de los acuerdos de su Consejo Nacional; consecuentes con su programa de acción y su declaración de principios.
Basamos nuestros proyectos en realidades de una cultura política, diferente a la de la praxis gobiernista, porque las instituciones cuya vida contempla la Constitución, a partir de las reformas de 1986, fueron creadas para satisfacer los propósitos de una voluntad política unipersonal, que no admite la presencia de otras fuerzas ajenas a las del gobierno. La convivencia de las corrientes políticas diversas en el seno de un régimen plural, no se acepta, se soporta, porque a pesar de las maniobras fue totalmente imposible evitarla. Se tolera, porque a pesar del fraude, la expresión popular se impuso y de aquí la necesidad, la urgente necesidad pri - panista de evitar la coexistencia de los partidos políticos. El apremio de volver a la mayoría absoluta para no tener que buscar otros grupos parlamentarios y no exhibir su identidad ante los ojos de la nación.
En los foros políticos que se celebraron para escuchar las propuestas de los partidos y también de otro tipo de organizaciones y de personas físicas, se profundizó en las demandas del cambio y, en ocasiones, como aconteció en la Comisión Federal Electoral, se llegó a acuerdos, que cuando se presentó la oportunidad de realizarlos, se desconoció el consenso por parte de los comisionados del partido del gobierno, como en el caso de la integración del órgano que regula los procesos electorales.
Y tal como ya he afirmado, sucedió también en la Cámara de Diputados, pero aquí con los líderes panistas, cuya conducta todos conocemos y la gran mayoría reprobamos.
Sería muy extraño, increíble a mi juicio, que en los dos casos haya sido una simple coincidencia. Que con los dos partidos haya habido un desacuerdo, cuando existió al principio y al final de las audiencias públicas un acuerdo formal.
Yo, señores diputados, no creo que el desacuerdo y el rompimiento del criterio común haya sido accidental y, en el último momento esto es a mi entender, y que se perdone mi malicia en el sentido de que no fue en el último momento. Una audiencia en diciembre y dos más tarde con el primer priísta de México, como le llama su partido, no nos permiten pensar que fue una coincidencia al término de la jornada. Yo me atrevería
a afirmar que siempre existió el propósito común que se proyectó a fines del año pasado y de hecho, se consuma el día de hoy. (Aplausos.)
El pueblo ha estado alerta ante el juego político. La información de la Prensa y de todos los medios de comunicación se ocupó ampliamente del comentario, casi siempre objetivo y claro del desarrollo de los sucesos, del camino que tomaban día a día las negociaciones y los avances eventuales que se presentaban.
La opinión pública fue informada con amplitud y de ahí que creciera su preocupación e interés por el desarrollo del asunto político más importante del año a nivel nacional, ya que antes el proceso de Michoacán acaparó la atención no digamos nacional sino internacional.
Por primera vez después de las elecciones de 1988, la ciudadanía recobró el interés por otro acontecer político nacional, suponiendo lógicamente que era de esperarse la superación de los hechos inmediatos anteriores, con la creación de instituciones que garantizarán la legalidad de las elecciones y de efectividad del sufragio, como única forma de avanzar ante los retrocesos notables de la democracia en el orden municipal, estatal y desde luego, nacional.
El pueblo soberano demandó y demanda rectificaciones jurídico - políticas; si no se han dado las oportunidades propicias, es por el mal manejo y el abuso de poder por parte de quienes lo mantienen como patrimonio de camarillas que en mala hora pudieron aplicar sus equívocos conocimientos de gabinete en los entornos de la política nacional.
La contrarreforma está por realizarse. El Constituyente Permanente está manejado por unas cuantas manos dóciles, pero eso no puede, no debe desanimarnos. Que sea esta triste y penosa jornada legislativa un estímulo, un acicate para converger en la unidad de los partidos políticos y las organizaciones revolucionarias.
Es buen momento el que vivimos para revigorizar el proceso de integración del frente amplio, del frente patriótico nacional en el que vayamos los mexicanos revolucionarios, demócratas y progresistas a una etapa superior, cívica y política.
Vayamos a participar en todos los procesos electorales venideros, con el propósito inquebrantable de vencer, a pesar de los impedimentos de las leyes y de las maniobras que realizan los hombres que las manejan.
Volvamos nosotros unos años atrás, cuando en 1982, se inicia un fuerte bloque de poderío económico con Miguel de la Madrid y ahora se pretende convertirlo en fuerte bloque económico y político. Pero volvamos también los ojos al pasado revolucionario de México y establezcamos un parangón.
En el siglo pasado, con Benito Juárez; en este siglo, con Madero, con Carranza y con Lázaro Cárdenas; que su memoria parte de la entraña de la entraña de la patria y médula de la historia, levanten el poderío de la democracia en la reconquista del poder político, la rectoría económica del Estado, la salvaguarda de nuestra soberanía y la dignidad de los mexicanos. Muchas gracias. (Aplausos.)
El C. Presidente: - Tiene el uso de la palabra el ciudadano diputado Gildardo Gómez Verónica.
El C. Gildardo Gómez Verónica: - Señor presidente; ciudadanos diputados: Permítaseme hacer una reflexión acerca de lo que pasó en este período extraordinario.
Veníamos todos los partidos con la disposición y la intención de realizar una reforma política, acudimos a todos los foros e instancias para encontrar puntos de consenso que nos acercaran en el diseño de una nueva forma de la política en México.
Establecimos acuerdo con algunos partidos de oposición para la integración de los órganos fundamentales que habrán de tener a su cargo el desarrollo del proceso electoral.
Una tras otra de nuestras propuestas fue rechazada abiertamente por el Partido Revolucionario Institucional; llegó un momento, después de muchos meses de negociaciones intensas, de audiencias públicas en la Cámara de Diputados y en el grupo especial de la Comisión Federal Electoral, después de conferencias de prensa, entrevistas y de un esfuerzo extraordinario, llegó un momento en que tuvo que realizarse un examen y hacerse la pregunta: ¿Va o no a existir, a darse, a crearse, a producirse la reforma política?
En España, cuando después de la muerte del generalísimo Franco, el país estaba convulsionado, los radicales se plantearon que la alternativa en ese momento de su historia era la república o la monarquía, pero el pueblo español cambió los términos de la alternativa y señalo: "la democracia o la dictadura".
Pero la democracia involucraba la existencia de la monarquía que era herencia de la dictadura, porque los españoles sabían que era ingenuo no contar
con un factor real de poder que estaba presente en ese momento de España.
En México al realizar la reforma política, también nos planteamos la alternativa: ¿Llegamos a la democracia suprimiendo la figura del Presidente de la República o involucramos la figura del titular del Poder Ejecutivo?, sería ingenuo desconocer que es una fuerza creada en México, legítima o ilegítima, es factor real del poder que influye en todas las estructuras políticas y tenía que tomarse en cuenta.
La alternativa era llegar a la democracia política, involucrando la figura del Presidente de la República.
Si analizamos los artículos que contienen la nueva forma de hacer política en México, encontramos avances y encontramos disposiciones inaceptables. El artículo 54, concretamente es un monumento del abuso del poder que puede ejercer un partido. Pero si contemplamos el conjunto, el paquete de la reforma electoral, podemos encontrar que contiene instituciones válidas que pueden hacer posible un paso posterior que lleve al advenimiento de la democracia.
Acción Nacional y su grupo parlamentario, formuló un análisis de cuáles eran los mínimos para que fuera posible, a nuestro juicio, aprobar una iniciativa de reforma política. El contenido del dictamen, recoge la mayor parte de las instituciones que nosotros nos planteamos como el mínimo requerido.
Se establece en la fracción III del artículo 35 constitucional, como prerrogativa del ciudadano, la facultad de poderse asociar libre y pacíficamente para tratar los asuntos políticos del país. Y para nosotros éste es un paso enorme para ir en contra del corporativismo mexicano.
En el artículo 36, se recoge la institución del Registro Nacional de Ciudadanos y de la Cédula de Identidad, que es la base para tener en las elecciones una documentación confiable que pueda hacer un poco más decente y transparente el proceso de reforma política.
En el artículo 41, logramos que el organismo encargado del proceso electoral estuviera integrado por partidos políticos y ciudadanos, a despecho de la propuesta original del partido oficial, que únicamente lo completaba como una función del Estado.
Pero se establece además el principio de legalidad, como uno de los principios rectores del proceso electoral. Se establece un tribunal electoral que responde a la concepción propuesta por Acción Nacional, en alrededor de un 80%. Se establece también, el principio de que en adelante todas las sesiones de los organismos electorales y del tribunal electoral serán públicas y esto contribuye también a la trasparencia del proceso.
En el artículo 54 y 73, logramos moderar la propuesta priísta; pero no pudimos evitar su deseo de sobrerrepresentación. Tuvimos el acuerdo con el gobierno de al cristalizar en el Código Federal Electoral que se legisle, una serie de instituciones que hagan posible rescatar los principios de la democracia.
Para nosotros el proceso de reforma política se divide en tres partes. Hemos apenas realizado la primera, vamos a continuar en la elaboración de la ley electoral, pero aquí quisiera también manifestar una reflexión: Si fuera posible que mediante algún acto logramos conjuntar en una asamblea a los filósofos de la democracia griega y a los filósofos de la Revolución Francesa y a los inspiradores y adalides de todas las grandes revoluciones de la historia, si fuera posible conjuntarlos en una asamblea y pedirles que elaboraran la ley más perfecta y democrática de la historia, esa ley no garantizaría por sí misma la realización democrática de un país, porque lo más importante de todo es la voluntad política de cumplir con la norma democrática. (Aplausos.)
(Desorden.)
El C. Presidente: - Silencio en las galerías.
El C. Gildardo Gómez Verónica: - Era nuestro deseo elaborar una reforma constitucional lo más perfecta y democrática posible. En política no siempre todo es posible; todavía el domingo anterior, cuando entramos a la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, pudimos enterarnos de que el dictamen que supuestamente recogía todas las propuestas de Acción Nacional, estaba sembrado a lo largo su texto de una serie de cláusulas capciosas que hacían nugatoria totalmente cualquier intento o tentativa de reforma.
No se ha manejado el trabajo político de Acción Nacional para suprimir todas esas cláusulas tendenciosas que tal vez pensando que por fatiga no las habríamos de advertir y por una colmillada mañosa habrían de traducirse en el texto constitucional.
Sabemos que esta reforma es defectuosa y limitada; antes de emitir nuestro voto a favor, pensamos en el costo político de asumirla; sabíamos que la alternativa de no suscribir la reforma por de deficiente y limitada que fuera, era
que siguiera vigente la legislación actual que es peor que la que se propone. Lo más fácil, lo más popular, hubiera sido negar la posibilidad de la reforma política; siempre ha sido en toda la historia la figura más popular, cuando el débil se opone al poderoso; siempre todos los hombres en alguna etapa de la vida asumen un propósito de romanticismo para normar su conducta en la práctica y los partidos políticos no escapan tampoco al romanticismo.
Podríamos haber dicho ¡no!, haber votado en contra de la reforma, y plantean ante el pueblo de México cómo el partido el "Robin Hood" de la política, el que defiende a los pobres en contra de los ricos y conquistar efímeros y popularidades.
Pero tenemos los partidos también, que crecer e intentar llegar a la madurez. Tenemos una responsabilidad que cumplir con el pueblo de México; sabemos que podemos habernos equivocado, que tal vez no desechamos la posibilidad de haber cometido un error y los errores y las equivocaciones, en política como en todo, se pagan; sabíamos del riesgo que estábamos corriendo, pero pesó más la responsabilidad de cumplir con nuestro deber político, para no negarle al pueblo de México un espacio democrático que le permita alcanzar mayores estadios de democracia.
(Desde una curul): - ¡Muchas gracias!
El C. Presidente: - Silencio en las galerías.
El C. Gildardo Gómez Verónica: Se ha dicho aquí, se ha repetido que nosotros firmamos una alianza con el Partido Revolucionario Institucional. Quiero dejar bien claro: Nosotros firmamos un dictamen; no hemos hecho alianza con nadie, pero si...
(Desorden.)
El C. Presidente: - Silencio, ciudadanos diputados.
El C. Gildardo Gómez Verónica: - No hemos orquestado alianzas con nadie, firmamos un dictamen, pero tendemos la mano a todos nuestros adversarios.
Pensamos que todos los dolores del parto, nació una reforma política raquítica y sietemesina. Pero en fin de cuentas lleva en sí misma el germen de la vida; más adelante, con el concurso de todos, con la responsabilidad de todos, puede tener un segundo paso y llegar verdaderamente a una reforma de fondo. A ello aspiramos, somos conscientes de nuestra responsabilidad ante el pueblo de México; no renunciamos a nada, seguiremos peleando por todas nuestras causas y banderas, porque Acción Nacional, por encima de su interés y de su popularidad de partido, tiene presente el interés del pueblo de México. Gracias.
(Aplausos.)
El C. Presidente: - Tiene el uso de la palabra...
(Desorden.)
¡Silencio en las galerías! ¡Silencio en las galerías!
Tiene el uso de la palabra el ciudadano diputado Horacio Labastida Muñoz.
El C. Horacio Labastida Muñoz: - Señor presidente; compañeros diputados, señoras y señores: En el Constituyente de Querétaro predominaron el talento revolucionario del pueblo, su ilimitada sabiduría y el apasionado amor por la patria que nos dieron los heroicos insurgentes del grito de dolores.
Nuestro compromiso, el de los legisladores del México moderno, es en consecuencia claro, sencillo y evidente; acatar hasta las últimas consecuencias el ejemplo y las enseñanzas de los asambleístas de 1917.
Cierto, la tarea es difícil pero no imposible. No olvidemos nunca que el forjamiento de la grandeza es quehacer humano y no divino, como creíase en los antiguos tiempos y que nuestra lucha, la de los mexicanos, continúa siendo hoy como ayer la edificación de una sociedad de hombres libres, generosos, justos y empeñados en la creación y recreación de condiciones que garanticen un establecimiento nacional, ajeno a cualquier forma de opresión moral y explotación material. ¿Acaso no fueron esas las demandas que hizo José María Morelos y Pavón al Congreso de Chilpancingo en 1813?, y ésas demandas no eran fruto de una élite mexicana, sino la síntesis de peticiones, diálogos, exigencias, opiniones y reflexiones de un pueblo movilizado en favor de la libertad, por los ideales de independencia. Pronto descubriríamos que la historia no es camino llano en el propósito de dar vida concreta, inmediata, sensible y temporal a las más altas aspiraciones del homo sapiens.
Así es la terrible, que no trágica contradicción escondida en los múltiples rincones del desenvolvimiento humano. Las trampas y riesgos que rodean el bien general y la dignidad moral, al auxilio de unos y otros, al consuelo en la condolencia o al alivio de pesares angustiantes, son muchas y frecuentes; suelen la corrupción,
las ambiciones y el insaciable afán de poseer, traicionar los más limpios propósitos. Y todo esto lo sabemos por amargas experiencias. ¿Cómo vencer a tan descomunales enemigos, sin más armas que la conciencia sin mancha de quienes han conformado su vida a los sentimientos de la nación? Morelos aconsejó a sus seguidores, acumular en las banderas liberadoras, valentía del corazón, saber de la inteligencia y fraternidad sin fin en el alma de los abanderados.
Benito Juárez nos dijo que los hombres y los pueblos deben respetarse mutuamente para hacer posible la paz que sustente el bienestar, la felicidad y el temple del espíritu.
Y Emiliano Zapata aconsejó el camino de tierra para la libertad. "Tierra y Libertad", recordémoslo, es el grito de la justicia social que inspiró a los diputados de Querétaro en el momento de redactar el artículo 27 de nuestra Carta Magna.
Ahora nos hallamos los mexicanos en un mundo más complejo, variado y en muchos aspectos sofisticado, que el vivido por aquellas generaciones y sin embargo, absurdo sería desconocer en el presente las supremas orientaciones que nos legaron.
La valentía, el saber y la fraternidad morelense, el respecto a la paz juarista, la justicia de Zapata y los mandamientos de nuestro texto constitucional, son los caminos que llevarnos pueden con certeza y seguridad a través de las procelosas del presente y porvenir.
En ese contexto histórico social y político, enfrentamos en los largos y agitados debates del período extraordinario que hoy finaliza, el problema de nuestra democracia electoral. El primer motivo de alegría que es por sí mismo prueba del ensanchamiento democrático de nuestra vida, fue el respecto de la asamblea a los puntos de vista que expusieron los representantes de los partidos. En viejos tiempos nada de esto era viable, aun en los años de la legislatura maderista.
La noble figura del senador chiapaneco Belisario Domínguez, simboliza en grado heroico el choque de la verdad del pueblo con la barbarie, desatada por los enemigos; pero el respeto a la libertad de expresión no es suficiente, era indispensable encontrar puntos de convergencia y consensos que abrieran nuevas perspectivas al financiamiento de la libertad electoral y la democracia en el país. Estas, la libertad y la democracia, no son frutos maduros que la mano del hombre pueda arrancar de la naturaleza para su goce político, ¡no!, por el contrario, justicia, libertad y práctica republicana son objetivos, valores cuya realización suele ser gradual o dialéctica, mas nunca realizable de manera inmediata o asequible, sin empeño alguno.
Los retos apesadumbran por su retorno aún inconcluso, fueron primero las de la naturaleza que es fuente de cobijo y sustento indispensables, imprescindibles. ¿Cómo lograr que una naturaleza escasa o pobre satisfaga conservaciones y perpetuidades de la especie? Pero hay más, aparte de la marcha objetiva e indiferente del mundo físico, multiplicase los dominios y parcialidades sociales. ¿Qué hacer para despejar esos faraónicos obstáculos que nos amedrentan y en ocasiones nos vencen? Lo importante es entender que en todo caso se trata de tinieblas circunstanciales; nuestra experiencia acredita el optimismo de tan señalada verdad, el gigantesco problema de nuestra antigua colonialidad hispana fue definitivamente despejado en los once primeros años de independencia. El caos de la primera mitad del siglo XIX, encontró punto final con la Constitución de 1857 y las Leyes de Reforma decretadas por el gobierno de Benito Juárez en Veracruz, hacia 1859.
La dictadura de Porfirio Díaz, no resistió el embate de los revolucionarios de 1910, y en las recientes siete décadas de institucionalidad, logrando estamos el señorío de nuestro destino por el ascenso del pueblo a los centros de decisión y la afirmación de sus intereses ante las poderosas y avasallantes metrópolis de la sociedad industrial.
Nuestra Seguridad de la condición coyuntural de esos obstáculos, se finca en la disposición de la experiencia libertaria de nuestro pasado y de una doctrina revolucionaria que se corresponde con exactitud a las esencias populares.
La Constitución de Querétaro, recordémoslo, sintetizó en forma magistral las aportaciones ilustradas y liberales de sus antecesores. Desde el Decreto de Apatzingán y el acta diseñada por Miguel Ramos Arizpe, en 1824, hasta el documento reformador de los diputados llamados por el Plan de Ayutla.
Soberanía, los derechos del hombre y del ciudadano, la división de los poderes y el régimen federativo, acopláronse armoniosamente con la redistribución de la propiedad y su significación ordenada en el ya mencionado 27 constitucional y los otros mandamientos progresistas en nuestro código, fueron sancionados por los revolucionarios.
Sabemos, repito, que el camino es arduo, zigzagueante y áspero. Y al mismo tiempo, sabemos que los triunfos logrados maduran el ánimo y fecundan la prudencia.
Compañeros y amigos: Estemos muy conscientes de lo logrado y de lo no logrado y preparémonos para lograr más y mejor en el perfeccionamiento de nuestra vida democrática. Y meditemos una vez más, con cuidado y profundidad, en el consejo que Carlos María Bustamente dio a sus colegas del Congreso del Anáhuac: "La imprevisión y la precipitación, son las rutas más seguras al fracaso". Y los mexicanos luchamos por la victoria. Muchas gracias.
El C. Presidente: - ¡Silencio en las galerías! ¡Silencio en las galerías!
COMISIONES DE CORTESÍA
El C. Presidente:- Esta presidencia informa a la asamblea, de la designación de las siguientes comisiones de cortesía.
Para participar al ciudadano Presidente de la República, que la Cámara de diputados cerró su Primer Período Extraordinario de Sesiones, del Primer Receso de la LIV Legislatura, a los siguientes ciudadanos diputados: Guillermo Jiménez Morales, Mauricio Valdez Rodríguez, Hiram Escudero Alvarez, Oscar Mauro Ramírez Ayala, Rafael Aguilar Talamantes, Roberto Jaramillo Flores, Gilberto Ortíz Medina y los integrantes de la Gran Comisión.
Para notificar el mismo hecho a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, los ciudadanos diputados: Napoleón Cantú Cerna, Bernardo Bátiz Vázquez, María del Carmen Segura Rangel, Leonel Godoy Rangel, Francisco Melo Torres, Nelson Madrigal Gómez, Mario Galicia Vargas, Jorge Schiaffino Isunza, Raúl Bolaños Cacho, Arturo Armendáriz Delgado, Antonio Martínez Báez, Ricardo Monreal Ávila, Miguel Martínez Castro, Jorge Esteban Sandoval Ochoa, Claudia Esqueda Llanes, José Luis Alfonso Sampayo y Arely Madrid Tovilla.
Para notificar al Senado de la República la clausura del primer período extraordinario de sesiones, los ciudadanos diputados: Andrés Henestrosa Morales, Juan Miguel Alcántara Soria, Gerardo Ávalos Lemus, Abigaíl Cruz Lázaro, Juan Jaime Hernández, Juan Manuel Rodríguez, Alfonso Alcocer, Rubén Calderón Cecilio, Albertina Barbosa de Meraz, Gustavo Rosario Torres, José Pérez de Jesús, Pedro Alberto Salazar Muciño, Jaime Sabines Gutiérrez, Antonio Alvarez Esparza, Francisco Galindo Musa, Carlos Grajales Salas y Mercedes Erdmann Baltazar.
RECESO
El C. Presidente (a las 16.40 horas): - Con el propósito de que en el momento en que se presenta la comisión de senadores que informará a esta asamblea respecto de la conclusión de sesiones en la Cámara de Senadores, esta presidencia declara un receso hasta las 17.45 horas.
(A las 18.00 horas): - Se reanuda la sesión.
COMISIÓN DE LA HONORABLE CÁMARA
DE SENADORES
El C. Presidente: - Encontrándose a las puertas de este recinto una comisión de ciudadanos senadores, se designa para introducirla a los siguientes ciudadanos diputados: Claudia Esqueda Llanes, José González Mofrin, José del Carmen Enríquez Rosado, Cecilio Barrera Reyes.
Tiene el uso de la palabra el ciudadano senador Mario Niebla.
El C. senador Mario Alfonso Niebla Alvarez: - Ciudadano presidente de la honorable Cámara de Diputados; ciudadano presidente de la gran comisión de la honorable Cámara de Diputados; ciudadano coordinador de las distintas fracciones que integran esta Cámara; señores diputados a la LIV Legislatura del Congreso de la Unión: Nos es altamente satisfactorio asistir a esta sesión de la Cámara de Diputados para cumplir un acuerdo adoptado el día de hoy por el pleno de la honorable Cámara de Senadores, la que nos ha concedido la honrosa misión de venir a informar a ustedes que el día de hoy, 20 de octubre de 1989, han sido clausurados los trabajos correspondientes al período extraordinario de sesiones del propio Senado de la República también integrante de la LIV Legislatura del Congreso de la Unión.
En los términos de la convocatoria respectiva, hemos ejercitado contribuciones compartidas con esta honorable Cámara de Diputados y atendimos también, facultades exclusivas de nuestra Cámara.
En concreto, por lo que esta última se refiere, se aprobó el conferir, y se confirió, la medalla de honor "Belisario Domínguez" al ciudadano embajador de México en la República de Cuba, licenciado Raúl Castellanos.
Por lo que se refiere a actividades estrictamente legislativas, tuvimos el honor de participar en el proceso legislativo que modificó al Código Penal para el Distrito Federal en Materia de Fuero Común y para toda la República en Materia de Fuero Federal, así como el Código Federal de Procedimientos Penales Para el Distrito Federal, con objeto de
ampliar los casos de procedencia del indulto y precisar el reconocimiento de la inocencia; tema fundamental que retuvo nuestra atención fue el relativo a las reformas constitucionales en materia electoral.
La función legislativa requiere prudencia y alto sentido de la responsabilidad, pues en un régimen de derecho exige atender con esmero, y por tanto con preocupación y antigencia, los requerimientos de la sociedad.
En tal virtud, desde el inicio del actual período extraordinario de sesiones en el Senado de la República nos mantuvimos atentos al desarrollo de las sesiones de esta honorable Cámara de Diputados, con el objeto de que en su momento, analicemos y aprobemos las reformas constitucionales de consenso que responden a la demanda nacional de modernizar las instancias, de participación ciudadana, como expresión clara de la consolidación de la democracia en México.
Esta ocasión, nos es propicia para transmitir a ustedes nuestra solidaridad en la busca del bien de México, y para testimoniarles nuestra amistad y nuestro respeto.
Los integrantes de la Cámara de Senadores hacen votos porque continúe el éxito en los trabajos de esta representación popular, pues estamos seguros que invariablemente persiguen el bien y la prosperidad de nuestra nación.
Muchas gracias.
El C. Presidente: - Ciudadanos senadores Mario Niebla Alvarez, César Moreno Martínez, Francisco Solís Rodríguez, Roberto Robles Garnica, Gonzalo Navarro Báez y Antonio Melgar Aranda: La Cámara de Diputados se ha enterado de que la colegisladora dio por terminadas sus labores del primer período extraordinario de sesiones del primer receso de la LIV Legislatura.
A nombre de esta Cámara, afectuosamente retorno el saludo de los señores senadores y hago votos por su prosperidad y bienestar personal.
Honorable asamblea: Al concluir el período extraordinario al que fuimos convocados por la honorable Comisión Permanente, la mesa directiva, y en especial el de la voz, agradecemos a ustedes la distinción de que fuimos objeto para servirles en las tareas correspondientes.
En esta responsabilidad, destacaron con su ayuda, los vicepresidentes diputados María del Carmen Segura, Rubén Calderón Cecilio, Raúl Bolaños Cacho y Jorge Schiaffino Isunza, así como los secretarios diputados Claudia Esqueda, Juan Jaime Hernández, Sergio Rueda, Ismael Orozco Loreto y José Murat.
Pusimos todo nuestro empeño en apegarnos a la legislación en vigor y a los acuerdos parlamentarios que con sensibilidad fueron aplicados para la mejor realización de nuestros trabajos.
Más experiencias hemos acumulado que contribuirán a mejorar las actividades camerales. Confirmamos, que la clave de la práctica legislativa es el diálogo; el diálogo que reclama serenidad, madurez, buen juicio; rectitud para interpretar en cabalidad los anhelos de la nación. Es preciso saber escuchar, conocer lo que expresan los demás y revisar, permanentemente, nuestras propias opiniones para consolidarlas con honestidad.
Así, confirmamos, que mediante el diálogo la confrontación de ideas se impuso sobre el mero enfrentamiento verbal. Confrontación de ideas en la que cada quien hizo valer sus puntos de vista para lograr un propósito común, una nación más democrática.
Diálogo en donde predominaron los argumentos que unen por encima de los que separan. Por ello, debemos aprovechar la experiencia. No incidir en el paso equivocado, ni en la fórmula ineficaz.
Los avances en este período extraordinario evidencian que la concertación y el compromiso entre los grupos parlamentarios derivan de posponer lo que estorba a la unión, en favor de lo que ella contribuye. Avanzar en lo que se logra por consenso y dejar para después las divergencias, sin abandonarlas, sólo para dar tiempo a una mayor concertación.
Hay quienes se han sorprendido y aun escandalizado por la tensión observada en los trabajos legislativos. En un sistema democrático, la tensión entre mayoría y minorías es característica permanente para la generación de la voluntad política.
Es aquí donde los plazos no sirven para reconocer que no podemos esperar indefinida y eternamente al ejercicio ilimitado de la libertad de expresión sin llegar a puntos de consenso, porque las acciones de gobierno deben continuar, porque a todo derecho corresponde una obligación: la obligación de llegar, en los plazos fijados, a puntos de acuerdo para todos.
En esta etapa legislativa no ha sido fácil derrotar al escepticismo ni dominar la incomprensión que obstaculiza nuestros avances. Pero paulatinamente, con solidez, con esa fuerza que sólo poseen la verdad, las causas justas y el servicio honesto a la nación, hemos avanzado.
Los medios de comunicación desempeñan un papel cada vez más relevante en la actividad legislativa, más aún, le dan proyección al trabajo cameral. Nuestro reconocimiento de este hecho a quienes son autores de la crónica parlamentaria; a quienes a nuestro lado han estado informando veraz y oportunamente a la opinión pública, el agradecimiento de esta mesa directiva y el mío personal.
También nuestro agradecimiento al personal de apoyo parlamentario por su entrega y profesionalismo en el cumplimiento de su responsabilidad.
A ustedes, compañeros diputados, compañeras diputadas en todas las fracciones parlamentarias, gracias por su comprensión, su tolerancia y su apoyo a nuestra labor.
A los coordinadores de los grupos parlamentarios, gracias por su participación y trato siempre amable y respetuoso.
Expreso mi reconocimiento al trabajo patriótico, responsable y profesional, de los miembros de las comisiones de Justicia y de Gobernación y Puntos Constitucionales y a quienes condujeron sus trabajos, quienes además nos alentaron con su oportuno y valioso consejo en esta delicada función.
Los resultados de este período extraordinario de sesiones, prestigian positivamente a esta legislatura.
A todos, mi reconocimiento y permanente agradecimiento. (Aplausos.)
Continúe la secretaría.
DECLARATORIA
El C. secretario Ismael Orozco Loreto: - Se ruega a los presentes ponerse de pie.
El C. Presidente (a las 18.20 horas): - Hoy viernes 20 de octubre de 1989, la Cámara de Diputados de la LIV Legislatura del honorable Congreso de la Unión, declara formalmente terminados los trabajos correspondientes al primer período extraordinario de sesiones del primer receso. (Aplausos.)
Proceda la secretaría a dar lectura al acta de la sesión.
ACTA
El C. secretario Ismael Orozco Loreto:
«Acta de la sesión de la Cámara de Diputados del honorable Congreso de la Unión, celebrada el día veinte de octubre de mil novecientos ochenta y nueve, correspondiente al Primer Período Extraordinario de Sesiones, del Primer Receso de la Quincuagésima Cuarta Legislatura.
Presidencia del diputado Carlos
Rubén Calderón Cecilio
En la ciudad de México, Distrito Federal, siendo las catorce horas, veinticinco minutos del día veinte de octubre de mil novecientos ochenta y nueve, con una asistencia de trescientos cincuenta y seis legisladores, el presidente declara abierta la sesión.
La secretaría da lectura al orden del día e inmediatamente después, al acta de la sesión anterior, misma que, sin motivar discusión, se aprueba en sus términos, en votación económica.
Presidencia del diputado Mauricio
Valdez Rodríguez
El presidente informa que se han inscrito para hacer uso de la palabra, un representante de cada uno de los grupos parlamentarios que integran esta Cámara de Diputados y concede el uso de la palabra al diputado Pedro René Etienne Llano.
Se concede el uso de la palabra al diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana.
Hace uso de la palabra el diputado Roberto Jaramillo Flores, del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional.
Hace uso de la palabra el diputado Jesús Antonio Carlos Hernández, del Partido Popular Socialista.
Se concede el uso de la palabra al diputado Ignacio Castillo Mena, del Partido de la Revolución Democrática.
Hace uso de la palabra el diputado Gildardo Gómez Verónica, del Partido Acción Nacional.
Se concede el uso de la palabra al diputado Horacio Labastida Muñoz, del Partido Revolucionario Institucional.
Al terminar, el presidente declara que, con fundamento en el artículo once del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, designa las comisiones de cortesía, para participar que la Cámara de Diputados cerró su Primer Período Extraordinario de Sesiones del Primer Receso de la Quincuagésima Cuarta Legislatura, al Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, a la
Suprema Corte de Justicia de la Nación y a la honorable Cámara de Senadores.
A las dieciséis horas cuarenta minutos, se declara un receso de sesenta minutos.
A las dieciocho horas se reanuda la sesión.
El presidente informa que se encuentra a las puertas del recinto, una comisión de senadores y designan para introducirlos a los diputados: Claudia Esqueda, José González Morán, José del Carmen Enríquez Rosado y Cecilio Barrera.
Se concede el uso de la palabra al senador Mario Niebla Alvarez quien informa de la clausura del primer período extraordinario de sesiones de la colegisladora.
El presidente informa que la Cámara de Diputados se ha enterado de que la Cámara de Senadores dio por terminadas sus labores del primer período extraordinario de sesiones del primer receso de la Quincuagésima Cuarta Legislatura, y respetuosamente, saluda a los senadores y hace votos por sus prosperidad y bienestar personal.
Hace uso de la palabra el presidente de la mesa directiva, quien agradece a todos lo diputados su trabajo, lo mismo que el personal administrativo que de una manera u otra, coadyuvaron en las labores de la Cámara de Diputados en este período extraordinario.
Puestos todos de pie, el presidente declara formalmente terminados los trabajos correspondientes al primer período extraordinario de sesiones del primer receso de la Quincuagésima Cuarta Legislatura.»
El mismo C. Secretario: - Está a discusión el acta...
No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba... Aprobada, señor presidente.
El C. Presidente (a las 18.25 horas): - Se levanta la sesión de Cámara de Diputados.
Se ruega atentamente a los integrantes de la mesa directiva de la honorable Cámara de Senadores, sean tan amables de tomar sus lugares y a los ciudadanos diputados, permanecer en su lugar para iniciar la sesión de Congreso General.
TAQUIGRAFÍA PARLAMENTARIA
Y DIARIO DE LOS DEBATES