Legislatura LIV - Año III - Período Comisión Permanente - Fecha 19910410 - Número de Diario 17
(L54A3PcpN017F19910410.xml)Núm. Diario:17ENCABEZADO
LIV LEGISLATURA
PODER LEGISLATIVO FEDERAL
DIARIO de los DEBATES
DE LA COMISIÓN PERMANENTE DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS
Registrado como artículo de segunda clase en la Administración de Correos, el 21 de septiembre de 1921
PRESIDENTE DE LA COMISIÓN PERMANENTE
Dip. Guillermo Jiménez Morales
RECINTO LEGISLATIVO
CENTRO MEDICO NACIONAL
DIRECTOR DEL DIARIO DE LOS DEBATES
Héctor de Antuñano y Lora
Año III México, D. F. a miércoles 10 de abril de 1991 No. 17
PRIMER RECESO
SUMARIO
ASISTENCIA
La secretaría notifica que hay quórum
SE ABRE LA SESIÓN
ORDEN DEL DÍA
Se da lectura
ACTA DE LA SESIÓN ANTERIOR
Sin discusión se aprueba
SOLICITUD DE LICENCIA
Del senador Ricardo Canavati Tafich para separarse del cargo de senador de la República. Se formula punto de acuerdo. Se aprueba
OFICIOS DE LA SECRETARIA DE GOBERNACIÓN RATIFICACIÓN DE GRADOS
Dos con los que se remiten las hojas de servicios de los ciudadanos Salvador Martínez López y Sergio Oscar Francisco Fernández Barragán, para los efectos de la fracción VII del artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Se turna a la Cámara de Senadores
DICTAMEN DE PRIMERA LECTURA
CONDECORACIÓN
De la primera Comisión con proyecto de decreto por el que se concede permiso al ciudadano Enrique Andrade Sánchez, para aceptar y usar las que le confiere el Gobierno de Venezuela. Se dispensa la segunda lectura. Se aprueba
DICTÁMENES A DISCUSIÓN
RATIFICACIÓN DE GRADO MILITAR
De la Segunda Comisión con punto de acuerdo por el que se ratifica el grado general brigadier diplomado de Estado Mayor, en favor del ciudadano José Luis Martínez Castillo. Se aprueba
CONDECORACIÓN
De la Primera Comisión con proyecto de decreto por el que se concede permiso a la ciudadana Teresa González López, para aceptar y usar la que le confiere el Gobierno de Austria
NOMBRAMIENTO
De la Primera Comisión con proyecto de decreto por el que se concede permiso al ciudadano José María Antonio López Roufosse, para aceptar y desempeñar el cargo del Cónsul honorario de Bélgica en Monterrey, Nuevo León
PRESTACIÓN DE SERVICIOS
De la Primera Comisión con proyecto de decreto por el que se concede permiso a los ciudadanos María Solís Guerra y Héctor Eduardo Huerta Nava, para hacerlo en la Embajada de Japón en México
De la Primera Comisión con proyecto de decreto por el que se concede permiso a las ciudadanas Alicia Rodríguez Hernández y Claudia Teresita Garza Martínez, para hacerlo en la Embajada de Canadá en México.
De la Primera Comisión con proyecto de decreto por el que se concede permiso a los ciudadanos María Elena Saucedo Lugo y Gustavo Rayas Martínez para hacerlo en el Consulado General de los Estados Unidos de América en Guadalajara, Jalisco.
Se aprueban en lo general y en lo particular los proyectos de decreto.
SOBRE EL GENERAL EMILIANO ZAPATA
Se guarda un minuto de silencio en su honor, con motivo de su LXXII aniversario luctuoso.
SOBRE LOS TRABAJOS DE LAS COMISIÓN PERMANENTE
Intervienen los legisladores:
Eliseo Rangel Gaspar
Roberto Jaramillo Flores
Oscar Mauro Ramírez Ayala
Alfredo Reyes Contreras
Roberto Robles Garnica
Eugenio Ortíz Walls
Humberto Roque Villanueva
ORDEN DEL DÍA
De la próxima sesión. Se levanta la sesión
DEBATE
PRESIDENCIA DEL DIPUTADO FERNANDO CÓRDOBA LOBO
ASISTENCIA
La secretaria diputada Judith Murguía Corral: -Señor Presidente, hay una asistencia de 27 legisladores. Hay quórum.
El Presidente (a las 11.21 horas): - Se abre la sesión.
ORDEN DEL DÍA
La secretaria diputada Judith Murguía Corral: - Se va a dar lectura al orden del día.
«Comisión Permanente.- Primer Receso.- Tercer Año.- LIV Legislatura.
Orden del día
10 de abril de 1991.
Lectura del acta de la sesión anterior.
Correspondencia
Comunicación del senador Ricardo Canavati Tafich
Oficios de la Secretaría de Gobernación
Dos con los que remiten las hojas de servicios de los ciudadanos Salvador Martínez López y Sergio Oscar Francisco Fernández Barragán, para los efectos de la fracción VII del artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Dictamen de primera lectura
De la Primera Comisión, con proyecto de decreto por el que se concede permiso al ciudadano Enrique Andrade Sánchez, para aceptar y usar la condecoraciones Cruz de las Fuerzas Terrestres en su Segunda Clase y Cruz de las Fuerzas Aéreas en su Segunda Clase que le confiere el gobierno de Venezuela.
Dictámenes a discusión
De la Segunda Comisión, con punto de acuerdo por el que se ratifica grado militar al ciudadano José Luis Martínez Castillo.
De la Primera Comisión, con proyecto de decreto por el que se concede permiso a la ciudadana Teresa González López, para aceptar y usar la condecoración Medalla de Oro de Honor por Mérito, que le confiere el gobierno de Austria.
De la Primera Comisión, con proyecto de decreto por el que se concede permiso al ciudadano José María Antonio López Roufosse, para aceptar y desempeñar el cargo de Cónsul Honorario de Bélgica en Monterrey, Nuevo León.
De la Primera Comisión, con proyecto de decreto por el que se concede permiso a los ciudadanos María Solís Guerra y Héctor Eduardo Huerta Nava, para prestar servicios en la Embajada de Japón en México.
De la primera Comisión, con proyecto de decreto por el que se concede permiso a las ciudadanas Alicia Rodríguez Hernández y Claudia Teresita Garza Martínez, para prestar servicios en la Embajada de Canadá en México.
De la Primera Comisión, con proyecto de decreto por el que se concede permiso a los ciudadanos María Elena Saucedo Lugo y Gustavo Rayas Martínez, para prestar servicios en el Consulado General de los Estados Unidos de América en Guadalajara, Jalisco.
Intervención de Legisladores de los grupos parlamentarios que integran la Comisión Permanente.»
ACTA DE LA SESIÓN ANTERIOR
La secretaria diputada Judith Murguía Corral: -Se va a dar lectura al acta de la sesión anterior.
«Acta de la sesión de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión, celebrada el día tres de abril de mil novecientos noventa y uno, correspondiente al Primer Receso del Tercer Año de Ejercicio de la Quincuagésima Cuarta Legislatura.
Presidencia del diputado Guillermo Jiménez Morales
En la ciudad de México, Distrito Federal, siendo las once horas con cincuenta y dos minutos del
día tres de abril de mil novecientos noventa y uno, con una asistencia de treinta y un legisladores, el Presidente declara abierta la sesión.
La secretaría da lectura al orden del día y posteriormente al acta de la sesión anterior, misma que sin discusión se aprueba en sus términos en votación económica.
Se da cuenta con una invitación del Congreso del Estado de Hidalgo, a la sesión solemne en la que el gobernador del estado rendirá su cuarto informe de gobierno. Se designa comisión para representar a la Comisión Permanente.
Una invitación de Departamento del Distrito Federal, al acto cívico conmemorativo del septuagésimo segundo aniversario luctuoso del general Emiliano Zapata Salazar. Se designa comisión para representar a la Comisión Permanente.
La secretaría da lectura a la solicitud del ciudadano Manlio Fabio Beltrones Rivera, para continuar separado de su cargo como senador de la República. Se da cuenta con el punto de acuerdo respectivo, mismo que la asamblea aprueba en votación económica. Comuníquese a la honorable Cámara de Senadores.
Un oficio de la Secretaría de Gobernación por el que se solicita el permiso constitucional necesario para que el ciudadano Enrique Andrade Sánchez, pueda aceptar y usar las condecoraciones que le confiere el gobierno de Venezuela. Se Turna a la Primera Comisión.
Cuatro oficios de la misma Secretaría, con los que se remiten las hojas de servicios de un número igual de ciudadanos mexicanos para los efectos de la fracción séptima del artículo setenta y nueve de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se turna a la honorable Cámara de Senadores.
Se da cuenta con un oficio de la Secretaría de Gobernación con el que se remite el segundo informe de ejecución del Plan Nacional de Desarrollo mil novecientos ochenta y nueve, mil novecientos noventa y cuatro. Se turna a la Comisión de Programación, Presupuesto y Cuenta Pública de la honorable Cámara de Diputados y a las comisiones de Desarrollo Económico y Social y de Planeación Democrática del Desarrollo, de la honorable Cámara de Senadores.
Para continuar con el orden del día, la secretaría da lectura a un dictamen de la primera comisión, con proyecto de decreto por el que se concede el permiso constitucional necesario para que la ciudadana Teresa González López, pueda aceptar y usar la condecoración que le confiere el gobierno de Austria. Es de primera lectura.
Otro dictamen de la Primera Comisión, con proyecto de decreto por el que se concede el permiso constitucional necesario para que el ciudadano José María Antonio López Roufosse, pueda aceptar y desempeñar el cargo del Cónsul Honorario de Bélgica en Monterrey, Nuevo León. Es de primera lectura.
Se somete a discusión un dictamen de la Primera Comisión, con proyecto de decreto por el que se concede el permiso constitucional necesario para que el licenciado Carlos Salinas de Gortari, Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, pueda ausentarse del territorio nacional a fin de realizar una visita de Estado a Canadá y una visita de trabajo a los Estados Unidos de América.
Para expresar sus opiniones respecto a este dictamen, la Presidencia otorga el uso de la palabra a los legisladores Alfredo Reyes Contreras, del Partido Popular Socialista, en contra; Blanca Esponda de Torres, del Partido Revolucionario Institucional, en pro; Roberto Robles Garnica, del Partido de la Revolución Democrática, en contra; Bulmaro Pacheco Moreno, del Partido Revolucionario Institucional, en pro; Oscar Mauro Ramírez Ayala, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, para razonar su voto en pro y Eugenio Ortíz Walls, del Partido Acción Nacional, también para razonar su voto en pro.
La asamblea considera suficientemente discutido el dictamen y la secretaría recoge la votación nominal respectiva que resulta aprobatoria por veintiocho votos. Pasa al Ejecutivo para sus efectos constitucionales.
Se da cuenta con un dictamen de la Segunda Comisión, con punto de acuerdo relativo al nombramiento del ciudadano Jesús Silva Herzog como Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de México ante el Reino de España. Es de segunda lectura.
El Presidente otorga el uso de la palabra al senador Fernando Silva Nieto, del Partido Revolucionario Institucional, quien a nombre de la comisión dictaminadora, propone una modificación al dictamen.
Para expresar sus opiniones respecto del dictamen, hacen uso de la palabra los legisladores
Oscar Mauro Ramírez Ayala, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, en contra; José Antonio Gándara Terrazas, del Partido Acción Nacional, para rectificar hechos y expresar su opinión en pro de Idolina Moguel Contreras, del Partido Revolucionario Institucional, para razonar el voto de su partido en pro.
Suficientemente discutido el punto de acuerdo, con la modificación propuesta, en votación económica se aprueba. Pasa al Ejecutivo para sus efectos constitucionales.
El Presidente informa que se encuentra a las puertas del salón de sesiones del ciudadano Jesús Silva Herzog y designa a una comisión para que lo introduzca y lo acompañe en el acto de rendir su protesta de ley. Terminado el acto protocolario, la misma comisión acompaña al Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de México ante el Reino de España, hasta las puertas del recinto.
Se da cuenta con cinco dictámenes de la Segunda Comisión, con puntos de acuerdo por los que se ratifican los grados militares a los ciudadanos Urbano Pérez Bañuelos, Oscar Bernal Rovira, Jorge Rueda Bravo, Manuel Mariano Lugo Medina y Roberto Pozas Cerda. No habiendo quien haga uso de la palabra se aprueban en sendas votaciones económicas y pasan al Ejecutivo para sus efectos constitucionales.
La secretaría da lectura a dos dictámenes de la Primera Comisión, con proyectos de decreto por los que se conceden los permisos constitucionales necesarios para que los ciudadanos Víctor Hugo O'Farrilly Ávila y Jorge Luis Galina Veraza, puedan aceptar y desempeñar los cargos de Cónsul y Vicecónsul honorarios de la República Popular y Democrática de Etiopía en México. No habiendo quien haga uso de la palabra, la secretaría recoge la votación nominal respectiva, misma que resulta aprobatoria por veintiséis votos. Pasan al ejecutivo para sus efectos constitucionales.
Para expresar sus opiniones respecto a la política salarial, hacen uso de la palabra los legisladores Alfredo Reyes Contreras, del Partido Popular Socialista; José Antonio Gándara Terrazas, del Partido Acción Nacional; Jaime Enríquez Félix, del Partido de la Revolución Democrática; Oscar Mauro Ramírez Ayala, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana y Pedro Alberto Salazar Muciño, del Partido Revolucionario Institucional.
Se concede el uso de la palabra al diputado Alfredo Reyes Contreras, quien se refiere a las acciones militares de los Estados Unidos de América en Corea del Sur.
Agotados los asuntos en cartera, la Secretaría da lectura al orden del día de la próxima sesión y el Presidente clausura la de hoy a las quince horas con treinta y siete minutos, citando para la que tendrá lugar el próximo miércoles diez de abril de mil novecientos noventa y uno a las once horas.»
Esta a discusión el acta... No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba... Aprobada, señor Presidente.
SOLICITUD DE LICENCIA
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«Ciudadanos secretarios de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión. - Presentes.
Con fundamento de los artículos 62 y 79 fracción VIII de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, atentamente solicito de esa honorable Comisión Permanente, se me conceda licencia para separarme del encargo de senador de la República.
Licencia que, en caso de ser aceptada por esa honorable Comisión Permanente, me permitirá ocupar el cargo de subsecretario de vivienda de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología.
Con mi reconocimiento por el trámite que se sirvan dar a la presente, les reitero las seguridades de mi consideración distinguida.
Atentamente.
México, Distrito Federal, a 4 de abril de 1991. - Senador Ricardo Canavati Tafich.»
El presidente: -De conformidad con lo que establece la fracción VIII del artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se ruega a la secretaría poner a discusión el punto de acuerdo.
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«PUNTO DE ACUERDO
Único. Se concede licencia al senador Ricardo Canavati Tafich, para separarse de sus funciones de senador de la República, por el estado de Nuevo León, para desempeñar el cargo de subsecretario de Vivienda de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología.»
Está a discusión el punto de acuerdo... los legisladores que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo.
Los legisladores que estén por la negativa, sírvanse manifestarlo... Aprobado, señor Presidente. Comuníquese a la Cámara de Senadores.
OFICIOS DE LA SECRETARIA DE GOBERNACIÓN
RATIFICACIÓN DE GRADOS
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«Escudo Nacional.- Estados Unidos Mexicanos.- Secretaría de Gobernación.- Dirección General de Gobierno.
Ciudadanos secretarios de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión.- Presentes.
La Secretaría de la Defensa Nacional, se ha dirigido a ésta de Gobernación, con fecha 15 del actual, manifestando lo siguiente:
"Por acuerdo del ciudadano general Secretario de la Defensa Nacional, agradeceré a usted, tenga a bien disponer que por su conducto, se haga llegar a la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión, la hoja de servicios del ciudadano general de división piloto aviador diplomado de Estado Mayor aéreo Salvador Martínez López (390380), que en veintitrés fojas útiles se adjunta con carácter devolutivo para efectos de la fracción VII del artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos."
Lo que transcribo a ustedes para su conocimiento y fines legales procedentes, acompañándoles con el presente el anexo que en el mismo se cita.
Reitero a ustedes en esta oportunidad las seguridades de mi consideración distinguida.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
México, Distrito Federal, a 20 de marzo de 1991.- El Secretario, Fernando Gutiérrez Barrios.»
El mismo Secretario senador:
«Escudo Nacional.- Estados Unidos Mexicanos.- Secretaría de Gobernación.- Dirección General de Gobierno.
Ciudadanos secretarios de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión.- Presentes.
Para conocimiento de ustedes y fines legales procedentes, a continuación les transcribo oficio que la Secretaría de la Defensa Nacional, dirigió a ésta de Gobernación, con fecha 15 del actual, enviándoles además con el presente la hoja de servicios que en el mismo se cita:
"Por acuerdo del ciudadano general Secretario de la Defensa Nacional, agradeceré a usted, tenga a bien disponer que por su conducto, se haga llegar a la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión, la hoja de servicios del ciudadano general brigadier Sergio Oscar Francisco Fernández Barragán (4454585), que en veinte fojas útiles se adjunta con carácter devolutivo para efectos de la fracción VII del artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos."
Reitero a ustedes en esta oportunidad las seguridades de mi atenta y distinguida consideración.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
México, Distrito Federal, a 20 de marzo de 1991.- El Secretario, Fernando Gutiérrez Barrios.»
Trámite: - Recibo, y túrnese a la honorable Cámara de Senadores.
DICTAMEN DE PRIMERA LECTURA
CONDECORACIÓN
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«Primera Comisión de Trabajo.
Honorable asamblea: La Primera Comisión que suscribe, efectuó el estudio sobre el permiso
que solicita el ciudadano general brigadier diplomado de Estado Mayor Enrique Andrade Sánchez, para que pueda aceptar y usar las condecoraciones Cruz de las Fuerzas Terrestres en su Segunda Clase y Cruz de las Fuerzas Aéreas en su Segunda Clase, que le confiere el gobierno de Venezuela.
La comisión considera cumplidos los requisitos legales necesarios para conceder el permiso solicitado y en tal virtud, de acuerdo con lo que establece la fracción III, del apartado B, del artículo 37 constitucional, se permite someter a la aprobación de la honorable asamblea, el siguiente:
PROYECTO DE DECRETO
Artículo único. Se concede permiso al ciudadano general brigadier diplomado de Estado Mayor Enrique Andrade Sánchez, para aceptar y usar las condecoraciones Cruz de las Fuerzas Terrestres en su Segunda Clase y Cruz de las Fuerzas Aéreas en su Segunda Clase, que le confiere el gobierno de Venezuela.
Sala de comisiones de la Comisión Permanente de honorable Congreso de la Unión.- México, Distrito Federal, a 5 de abril de 1991.- Diputado José Luis Lamadrid Sauza, diputado José Trinidad Lanz Cárdenas, senador Roberto Madrazo Pintado, diputado Eugenio Ortíz Walls, senador Julio Patiño Rodríguez, diputado Francisco Curi Pérez Fernández, senador Luis Martínez Fernández del Campo, diputado Alfredo Reyes Contreras, senador José de Jesús Padilla Padilla, diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala y senador Gaspar Valdés Valdés.»
Trámite: -Primera lectura.
El Presidente: - En virtud de ser ésta la última sesión ordinaria que celebra esta Comisión Permanente, se ruega a la secretaría consulte a la asamblea si se le dispensa la segunda lectura y se pone a discusión y votación de inmediato.
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez: - Por instrucciones de la Presidencia, con fundamento en el artículo 59 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General, se consulta a la asamblea en votación económica si se le dispensa la segunda lectura y se pone a discusión y votación de inmediato.
Los legisladores que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo.
Se le dispensa la segunda lectura, señor Presidente.
Está a discusión el proyecto de decreto... No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para su votación nominal en conjunto con los proyectos de decreto a discusión.
DICTÁMENES A DISCUSIÓN
RATIFICACIÓN DE GRADO MILITAR
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«Segunda Comisión de Trabajo.
Honorable asamblea: A la comisión que suscribe fue turnado, para su estudio y dictamen, el expediente con hoja de servicios que contiene el nombramiento expedido el 20 de noviembre de 1990 por el ciudadano Presidente de la República, en favor del ciudadano coronel de caballería diplomado de Estado Mayor José Luis Martínez Castillo como general brigadier diplomado de Estado Mayor, que el Ejecutivo de la Unión envió a esta Cámara de Senadores para lo dispuesto por la fracción VII del artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Del análisis de los antecedentes del interesado, esta comisión advierte:
a) Que ingresó al Ejército como cadete numerario en el heroico Colegio Militar el primero de enero de mil novecientos cincuenta y nueve, y el primero de enero de mil novecientos sesenta y dos fue ascendido a subteniente de caballería, al término satisfactorio del curso de formación correspondiente en dicho plantel;
b) A los grados sucesivos ascendió por escalafón y cuando ostentaba el de capitán segundo de caballería, al término satisfactorio del curso de mando y Estado Mayor general, el treinta y uno de agosto de mil novecientos sesenta y nueve adquirió el carácter de diplomado de Estado Mayor;
c) A los siguientes grados ascendió de acuerdo con las leyes y reglamentos vigentes en la fecha de sus ascensos;
d) Como miembro del Ejército ha prestado servicios a la nación mexicana durante treinta y dos años, un mes, veinticinco días, y
e) Se le confirieron en su oportunidad, por satisfacer los tiempos de servicios requeridos para ello, las condecoraciones de perseverancia de Cuarta, Tercera, Segunda y Primera Clases.
Del análisis del expediente personal y la hoja de servicios del nombrado general brigadier diplomado de Estado Mayor, se deduce que reúne los requisitos legales y cuenta en los méritos suficientes para merecer el grado que se le ha otorgado sujeto a ratificación.
Por lo anterior, la suscrita comisión se permite someter a la consideración de la honorable asamblea, la aprobación del siguiente
PUNTO DE ACUERDO
Único. Se ratifica el grado de general brigadier diplomado de Estado Mayor, que el Ejecutivo de la Unión expidió en favor del ciudadano José Luis Martínez Castillo.
Sala de comisiones de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión.- México, Distrito Federal, a 25 de marzo de 1991.- Senador Humberto Lugo Gil, senador Fernando Silva Nieto, diputado Francisco Galindo Musa, diputado José Antonio Gándara Terrazas, senador Ernesto Luque Feregrino, diputado José Jaime Enríquez Félix, senadora Idolina Moguel Contreras, senador José Antonio Valdivia, senador Bulmaro Andrés Pacheco Moreno y diputado Pedro Alberto Salazar Muciño.»
Está a discusión el punto de acuerdo... No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica, se pregunta si se aprueba.
Los legisladores que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo... Aprobado, señor Presidente. Comuníquese al Ejecutivo.
CONDECORACIÓN
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«Primera Comisión de Trabajo.
Honorable asamblea: La Primera Comisión que suscribe, efectuó el estudio sobre el permiso que solicita la ciudadana Teresa González López, para que pueda aceptar y usar la condecoración Medalla de Oro de Honor por Mérito, que le confiere el gobierno de Austria.
La comisión considera cumplidos los requisitos legales necesarios para conceder el permiso solicitado y en tal virtud, de acuerdo con lo que establece la fracción III, del apartado B, del artículo 37 constitucional, se permite someter a la aprobación de la honorable asamblea, el siguiente:
PROYECTO DE DECRETO
Artículo único. Se concede permiso a la ciudadana Teresa González López, para aceptar y usar la condecoración Medalla de Oro de Honor por Mérito, que le confiere el gobierno de Austria.
Sala de comisiones de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión.- México, Distrito Federal, a 26 de marzo de 1991.- Diputado José Luis Lamadrid Sauza, diputado José Trinidad Lanz Cárdenas, senador Roberto Madrazo Pintado, diputado Eugenio Ortíz Walls, senador Julio Patiño Rodríguez, diputado Francisco Curi Pérez Fernández, senador Luis Martínez Fernández del Campo, diputado Alfredo Reyes Contreras, senador José de Jesús Padilla Padilla, diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala y senador Gaspar Valdés Valdés.»
Trámite: -Segunda lectura.
Está a discusión el proyecto de decreto... No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para su votación nominal en conjunto.
NOMBRAMIENTO
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«Primera Comisión de Trabajo.
Honorable asamblea: En oficio fechado el 11 de marzo del año en curso, la Secretaría de Relaciones Exteriores a través de la de Gobernación, solicita el permiso constitucional necesario para que el ciudadano licenciado José María Antonio López Roufosse, pueda aceptar y desempeñar el cargo de Cónsul Honorario de Bélgica en Monterrey, Nuevo León.
En sesión celebrada por la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión, el 25 de marzo, se turnó a la suscrita comisión para su estudio y dictamen, el expediente relativo.
CONSIDERANDO
a) Que el peticionario acredita su nacionalidad mexicana, con la copia certificada del acta de nacimiento;
b) Que los servicios que el propio solicitante prestará al gobierno de Bélgica en Monterrey, Nuevo León, serán de carácter estrictamente consular, y
c) Que la solicitud se ajusta a lo establecido en la fracción II, del apartado B, del artículo 37 constitucional.
Por lo expuesto, esta comisión se permite someter a la consideración de la honorable asamblea, el siguiente
PROYECTO DE DECRETO
Artículo único. Se concede permiso al ciudadano licenciado José María Antonio López Roufosse, para aceptar y desempeñar el cargo de Cónsul Honorario de Bélgica en Monterrey, Nuevo León.
Sala de comisiones de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión.- México, Distrito Federal, a 27 de marzo de 1991.- Diputado José Luis Lamadrid Sauza, diputado José Trinidad Lanz Cárdenas, senador Roberto Madrazo Pintado, diputado Eugenio Ortíz Walls, senador Julio Patiño Rodríguez, diputado Francisco Curi Pérez Fernández, senador Luis Martínez Fernández del Campo, diputado Alfredo Reyes Contreras, senador José de Jesús Padilla Padilla, diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala y senador Gaspar Valdés Valdés.»
Trámite: -Segunda lectura.
Está a discusión el proyecto de decreto... No habiendo quien haga uso de la palabra, se reserva para su votación nominal en conjunto.
PRESTACIÓN DE SERVICIOS
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«Primera Comisión de trabajo.
Honorable asamblea: En oficios fechados el 1o. de marzo del año en curso la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la de Gobernación, solicitan el permiso constitucional necesario para que los ciudadanos María Solís Guerra y Héctor Eduardo Huerta Nava, puedan prestar servicios de carácter administrativo en la Embajada de Japón en México.
En sesión efectuada por la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión el 20 de marzo, se turnó a la suscrita comisión para su estudio y dictamen, el expediente relativo.
CONSIDERANDO
a) Que los peticionarios acreditan su nacionalidad mexicana con la copia certificada del acta de nacimiento;
b) Que los servicios que los interesados presentarán en la Embajada de Japón en México, serán de carácter administrativo, y
c) Que los solicitantes se ajustan a lo establecido en la fracción II, del apartado B, del artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Por lo expuesto, la comisión que suscribe, se permite someter a la consideración de la honorable asamblea, el siguiente
PROYECTO DE DECRETO
Artículo primero. Se concede permiso a la ciudadana María Solís Guerra, para prestar servicios como asesora del departamento económico, en la Embajada de Japón, en México.
Artículo segundo. Se concede permiso al ciudadano Héctor Eduardo Huerta Nava, para prestar servicios como asesor del departamento político, en la Embajada de Japón, en México.
Sala de comisiones de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión.- México, Distrito Federal, a 22 de marzo de 1991.- Diputado José Luis Lamadrid Sauza, diputado José Trinidad Lanz Cárdenas, senador Roberto Madrazo Pintado, diputado Eugenio Ortíz Walls, senador Julio Patiño Rodríguez, diputado Francisco Curi Pérez Fernández, senador Luis Martínez Fernández del Campo, diputado Alfredo Reyes Contreras, senador José de Jesús Padilla Padilla, diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala y senador Gaspar Valdés Valdés.»
Trámite: -Segunda lectura.
El Presidente: - Está a discusión el dictamen en lo general... No habiendo quien haga uso de la palabra, para los efectos del artículo 134 del Reglamento Interior del Congreso General, se pregunta a la asamblea si se va a reservar algún artículo para discutirlo en lo particular... En virtud de que no se ha reservado artículo alguno para discutirlo en lo particular, se reserva
para su votación nominal en lo general y en lo particular en un solo acto.
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«Primera Comisión de Trabajo.
Honorable asamblea: En oficio fechado el 28 de febrero de del año en curso, la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la Gobernación, solicita el permiso constitucional necesario para que las ciudadanas Alicia Rodríguez Hernández y Claudia Teresita Garza Martínez, puedan prestar servicios como secretarias en la sección de inmigración, en la Embajada de Canadá, en México.
En sesión celebrada por la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión, el 20 de marzo, se turnó a la suscrita comisión para su estudio y dictamen, el expediente relativo.
CONSIDERANDO
a) Que las peticionarias acreditan su nacionalidad mexicana con la copia certificada del acta de nacimiento;
b) Que los servicios que las interesadas prestarán en la Embajada de Canadá, en México, serán como secretarias en la sección de inmigración, y
c) Que las solicitudes se ajustan a lo establecido en la fracción II, del apartado B, del artículo 37 constitucional.
Por lo expuesto, esta comisión se permite someter a la consideración de la honorable asamblea, el siguiente
PROYECTO DE DECRETO
Artículo primero. Se concede permiso a la ciudadana Alicia Rodríguez Hernández, para prestar servicios como secretaria en la sección de inmigración, en la Embajada de Canadá, en México.
Artículo segundo. Se concede permiso a la ciudadana Claudia Teresita Garza Martínez, para prestar servicios como secretaria en la sección de inmigración, en la Embajada de Canadá, en México.
Sala de comisiones de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión.- México, Distrito Federal, a 22 de marzo de 1991. - Diputado José Luis Lamadrid Sauza, diputado José Trinidad Lanz Cárdenas, senador Roberto Madrazo Pintado, diputado Eugenio Ortíz Walls, senador Julio Patiño Rodríguez, diputado Francisco Curi Pérez Fernández, senador Luis Martínez del Campo, diputado Alfredo Reyes Contreras, senador José de Jesús Padilla Padilla, diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala y senador Gaspar Valdés Valdés.»
Trámite: -Segunda lectura.
El Presidente: - Está a discusión el dictamen en lo general... No habiendo quien haga uso de la palabra, para los efectos del artículo 134 del Reglamento Interior del Congreso General, se pregunta a la asamblea si se va a reservar algún artículo para discutirlo en lo particular... En virtud de que no se ha reservado artículo alguno para discutirlo en lo particular, se reserva para su votación nominal en lo general y en lo particular en un solo acto.
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez:
«Primera Comisión de Trabajo.
Honorable asamblea: En oficio fechado el 1o. de marzo del año en curso, la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la de Gobernación, solicita el permiso constitucional necesario para que los ciudadanos María Elena Saucedo Lugo y Gustavo Rayas Martínez, puedan prestar servicios como directora de biblioteca y asistente de información, respectivamente, en el Consulado General de los Estados Unidos de América, en Guadalajara, Jalisco.
En sesión celebrada por la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión, el 20 de marzo se turnó a la suscrita comisión para su estudio y dictamen, el expediente relativo.
CONSIDERANDO
a) Que los peticionarios acreditan su nacionalidad mexicana con la copia certificada del acta de nacimiento;
b) Que los servicios que los interesados prestarán en el Consulado General de los Estados Unidos de América, en Guadalajara, Jalisco, serán de carácter administrativo, y
c) Que la solicitud se ajusta a lo establecido en la fracción II, del apartado B, del artículo 37 constitucional.
Por lo expuesto, esta comisión se permite someter a la consideración de la honorable asamblea, el siguiente
PROYECTO DE DECRETO
Artículo primero. Se concede permiso a la ciudadana María Elena Saucedo Lugo, para prestar servicios como directora de biblioteca, en el Consulado General de los Estados Unidos de América, en Guadalajara, Jalisco.
Artículo segundo. Se concede permiso al ciudadano Gustavo Rayas Martínez, para prestar servicios como asistente de información, en el Consulado General de los Estados Unidos de América, en Guadalajara, Jalisco.
Sala de comisiones de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión.- México, Distrito Federal, a 21 de marzo de 1991.- Diputado José Luis Lamadrid Sauza, diputado José Trinidad Lanz Cárdenas, senador Roberto Madrazo Pintado, diputado Eugenio Ortíz Walls, senador Julio Patiño Rodríguez, diputado Francisco Curi Pérez Fernández, senador Luis Martínez Fernández del Campo, diputado Alfredo Reyes Contreras, senador José de Jesús Padilla Padilla, diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala y senador Gaspar Valdés Valdés.»
Trámite: -Segunda lectura.
El Presidente: - Está a discusión el dictamen en lo general... No habiendo quien haga uso de la palabra, para los efectos del artículo 134 del Reglamento Interior del Congreso General, se pregunta a la asamblea si se va a reservar algún artículo para discutirlo en lo particular... En virtud de que no se ha reservado artículo alguno para discutirlo en lo particular, proceda la secretaría a recoger la votación nominal en lo general y en lo particular de éste y los anteriores reservados, en un solo acto.
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez: - Se va a proceder a recoger la votación nominal en lo general y en lo particular de este proyecto de decreto y los anteriormente reservados en un solo acto, incluyendo el proyecto de decreto al que se le dispensó la segunda lectura.
Se ruega a la Oficialía Mayor haga los avisos a que se refiere el artículo 161 del Reglamento Interior.
(Votación.)
Señor Presidente, se emitieron 27 votos a favor por los dictámenes, excepto por el último que fue de 26 votos.
El Presidente: - Aprobados en lo general y en lo particular los proyectos de decreto.
El secretario senador Gustavo Salinas Iñiguez: - Pasan al Ejecutivo para sus efectos constitucionales.
SOBRE EL GENERAL EMILIANO ZAPATA
El Presidente: -A solicitud de diversos grupos parlamentarios, se solicitó a esta Presidencia guardar un minuto de silencio en honor del general Emiliano Zapata, en su LXXII aniversario luctuoso.
La secretaria diputada Judith Murguía Corral: -Se ruega a los presentes ponerse de pie.
(Se guarda un minuto de silencio.)
SOBRE LOS TRABAJOS DE LA COMISIÓN PERMANENTE
El Presidente: -Han solicitado el uso de la palabra los siguientes legisladores: senador Eliseo Rangel Gaspar, diputado Roberto Jaramillo Flores, diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala, diputado Alfredo Reyes Contreras, senador Roberto Robles Garnica, diputado Eugenio Ortíz Walls y diputado Humberto Roque Villanueva.
En tal virtud, se concede el uso de la palabra al senador de la República, del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, Eliseo Rangel Gaspar.
El senador Eliseo Rangel Gaspar: -Señor Presidente de la honorable Comisión Permanente; señores diputados; compañeros senadores; señoras y señores: Asistimos hoy en a la clausura de las tareas correspondientes al Primer Receso del Tercer Año de Ejercicio Constitucional de la LIV Legislatura del Congreso de la Unión.
En el ejercicio de nuestras responsabilidades realizamos un serio intento de convivencia, que prevaleció hasta en los momentos más enconados del debate y que seguro fundará realizaciones más profundas en el futuro próximo en la empresa común de perfeccionar la democracia nacional. Y es que la política que estamos obligados a realizar como cuadros superiores que somos de nuestras respectivas formaciones partidarias, tiene que caracterizarse cada vez más por el respeto que nos deben ideología y opiniones de los adversarios, a quienes no está por demás recordarlo, jamás consideraremos como enemigos a aniquilar, sino a los que portan finalmente empeños y orientaciones para coincidir en lo fundamental.
Por eso, hemos dado la bienvenida a los consensos a que hemos arribado en el curso de nuestras deliberaciones, convencidos como estamos de que transitando por los que libremente acordemos, será posible arribar a las tasas más elevadas de la democracia, en la que depositamos esfuerzos reiterados y anhelos permanentes.
Por este camino las legislaturas que pronto ocupen este recinto, encontrarán asimismo el instrumento más eficaz para hacer lo suyo en la satisfacción de los anhelos seculares del pueblo. Procediendo así, damos a la sociedad que nos observa la más viva lección de convivencia que tiene que repercutir en los modos de actuar de los grupos sociales que los partidos auspician, ya que sólo la democracia es fecunda y la dictadura resulta ser estéril.
Dimos cumplimiento entonces, con nuestro proceder responsable, a uno de los objetivos que sustanciales la existencia y razón de ser de los partidos políticos en el mundo de hoy: educar para la democracia. Por eso, saludamos con beneplácito este comportamiento de las fracciones parlamentarias, con cuyos integrantes hemos enriquecido experiencias y compartido opiniones. Estamos seguros de que es éste el camino por el cual arribaremos al estado de partidos que está exigiendo nuestro pueblo como condición indispensable para el anhelado perfeccionamiento de la nación y es que lo existe es la nación y el político que se precie de serlo y los partidos que de verdad lo sean, habrán de trabajar cerca del perfeccionamiento del Estado para que la nación se perfeccione. Subrayamos este proceder que, por otra parte, ha sido ampliamente difundido a la nación a través de los medios de comunicación que siguen son seriedad y profesionalismo nuestros trabajos, porque la República tiene que estar enterada de la madurez creciente de sus formaciones partidarias y satisfecha de que el Estado que proyecta arriba a niveles permanentes de superación; claro está que no estamos satisfechos de lo conseguido porque, por principio, sabemos que la democracia es más bien un ideal, una aspiración, un anhelo, un recuento de nuestras luchas pasadas acredita una porfía del pueblo mexicano por conquistar los ideales básicos de libertad y de igualdad en que la democracia se funda.
Por él advertiremos cómo queríamos ser libres, hemos adoptado las normas sociales que hacen posible el anhelo y que persiguiendo la igualdad nos hemos alejado del Estado y naturaleza para convivir civilizadamente en una sociedad política que, por encima de sus limitaciones y de los obstáculos que enfrenta, ha aceptado que la ley es la reina de las cosas mortales e inmortales.
Quisiéramos recordar aquí por el enorme impacto que el hecho posee, como elección política, que procede del sistema político mexicano de hoy de una revolución victoriosa que asombró al mundo no únicamente por la conmoción social en que el evento consiste sino porque al definir el nuevo orden social, la carta política que se elabora incorpora instituciones y normas pasmo del orbe, asombro de sus contemporáneos. Están ahí recogidos ideales y ensueños, expectativas y posibilidades, las aspiraciones más genuinas del pueblo, sus decisiones política fundamentales. Allí las reglas de la democracia y compiladas las cuestiones que suscitan coincidencias y acuerdos, los acuerdos en lo fundamental que son la condición sine qua non en cuya ausencia ningún proyecto es posible, ninguna forma de convivencia es viable ni tiene finalmente perspectiva alguna a la democracia que todos anhelamos fortalecer.
Quienes la formularon se propusieron señalar el mejor rumbo de México, propiciarle una era de paz donde sus instituciones se mejoren y en la cual el trabajo de los mexicanos desemboque en el viejo sueño del progreso y del bienestar. Mucho hemos avanzado en este particular y en tal virtud, mucho es lo que tenemos que defender como patrimonio social que hemos conformado con aportes sucesivos y complementarios. Nosotros, nuestra generación, no ha partido de la nada, sino que la dialéctica de sus existencia ha confirmado tesis, ratificado principios a la par que aportado criterios y contribuciones para perfeccionar la infraestructura que heredamos y para definir cuestiones que afinan la acción y aceleren el advenimiento de estadio acordes a nuestra mejor relación social.
Así, en el ámbito político, el proceso de reforma ha impulsado el abanico de opciones partidarias que conducen al país a la modernidad y ha propiciado que el derecho de actuar se convierta en la rama más dinámica de nuestro universo jurídico. El estado de derecho en que actuamos no es un mero conjunto de virtudes burguesas o pequeño burguesas para encauzar la paz sólo en el entorno de los satisfechos, se trata de un enunciado de normas orientadas a la construcción del proyecto social en el que todos estamos conscientemente interesados y donde la nación hace radicar sus expectativas de desarrollo nacional independiente y de ampliación del régimen democrático interno.
Frente a esta expectativa, actúa la sociedad políticamente organizada y el proyecto de perfeccionamiento del Estado busca como ideal superior la perfección de la sociedad donde todos somos protagonista, a partir del acuerdo de convicciones concertado con los partidos donde militamos a quienes separan diferencias de lo ideológico y en la forma de entender la realidad y proceder a su transformación, pero también es cierto que andando por caminos distintos y a veces yendo por atajos inéditos, los encuentros que la propia realidad condiciona, nos hace dar pasos adelante conjuntamente, sin que ello implique renunciar a principios ni mengua a los ideales que levantamos.
Muchos teóricos de la ciencia política de hoy, enfatizan como esencial en la democracia de los modernos, el diálogo como método universal del sistema que los griegos inventaron hace siglos, y sostienen también como inherente a él, el derecho al disenso y la perspectiva de la símplisis, donde el consenso representa el nuevo encuentro en la eterna lucha de contrarios.
La tesis es en sí misma cautivadora, y si la hemos de confrontar con la realidad, nuestras mismas experiencias nos revelan de ir más allá por las vías de experimentación.
Los partidos políticos representan sólo una porción de la colectividad nacional, pero aspirando a representar a la voluntad de la mayoría, pues la voluntad unánime sólo se da como en Rousseau en el eventual instante de constituir la sociedad política, tienen que aceptar las reglas de la democracia y actuar conforme a su mandamiento capital: acatar el dictado de la voluntad de las mayorías.
Lo ha reiterado con pasión Norberto Boggio, un grande de la ciencia política contemporánea: "Yo he tenido ocasión de decir, y no me canso de repetir, que quien no se ha dado cuenta de que por sistema democrático se entiende hoy inicialmente un conjunto de reglas procesales, de las que la principal, pero no es la única, es la regla de la mayoría, no ha entendido nada y continúa sin entender nada de la democracia".
Por eso se dice que el consenso procedimental, con arreglo al cual la democracia resuelve sus conflictos, es la aceptación del principio de la mayoría, o al menos actuar de conformidad con él, pues estar en contra, lo que realmente se hace es ir en contra de la democracia.
Pero además, el juego político de mayorías y minorías, que es dable en el ámbito de la pluralidad partidaria en que la democracia se funda, con sus controversias dialécticas, argumentos, réplicas y refutaciones, tiende, como ha sostenido Hans Kelsen, a la consecusión de transacciones que no son otra cosa que la expresión de la voluntad colectiva.
La transacción, en última instancia, consiste en posponer lo que estorba a la unión y actuar en favor de lo que contribuye a promoverla.
Los partidos políticos existen entonces para pactar diferendos, sin sacrificio de los principios, pero buscando encuentros que anticipen la conquista de los ideales.
Nadie de nosotros, ni por supuesto ningún partido político, pretende destruir a la democracia, sino antes al contrario, perfeccionarla. Actuamos así a sabiendas de que ningún interés partidista está por encima del interés supremo de la nación.
La antidemocracia hoy, sin embargo, tiene mil cabezas y recursos infinitos para paralizar o desviar las fuerzas más positivas. Por eso tenemos que ser vigilantes e ir con lealtad y probidad, que no son virtudes despreciables, al encuentro de una mejor democracia que perfile el mejor destino de nuestra nación.
Y precisamente, debemos destacarlo, solamente ahí donde las reglas son respetadas, el adversario ya no es un opositor capaz de aportar ingredientes con cuya contribución toda democracia es construida.
Nosotros ya tuvimos nuestra cuota de violencia para irrumpir a una nueva etapa de la historia. Ahora, pese a las dificultades que obstruyen la marcha y a los rezagos que padecemos, todos convenimos en que hay otra ruta que la democracia, vía pacífica para nuestro discurrir
histórico, y en esa virtud, alentar la violencia implica abrir las puertas a la antidemocracia ya sus secuelas aberrantes: la dictadura y el despotismo.
Por eso es que por este camino sólo algunos enfermos mentales, inadaptados sociales o perversos pretenden transitar.
Nosotros nos hemos pronunciado por un sistema político con autoridad que se asienta sobre la soberanía nacional, de donde emana y depende y a quien sirve, donde prevalezca una democracia abierta a la participación política y con acceso para todos en los bienes que el trabajo y la cultura producen, pero con capacidad de demandar la dirección y el sentido que la aparten de la anarquía y para que no parezca en la ingobernabilidad.
Estimulamos entonces, la pluralidad ideológica y política, pero también la vigencia del estado de derecho, que es respeto por las reglas de la participación en las cosas de la vida cívica y política de la nación, pero además ámbito propicio para que todas las potencialidades se desarrollen y surjan de si los hechos que en la práctica enlacen los sentimientos de la nación históricos con los ensueños de proeza y de bienestar que levantamos el día de hoy.
Frente a las fuerzas impetuosas de la historia, que anticipan el Siglo XXI, acudimos a tiempo a la realidad de la globalización con respuestas constructivas, pues no negamos a ser pasto de torbellino o a parecer víctimas de avances hegemónicos de las potencias.
No tenemos, ha dicho el Presidente Salinas, el encuentro con el mundo sino que lo buscamos efectivamente, actitud valiente como corresponde al mandatario de un pueblo valeroso.
Por eso las reformas a estructuras al interior del Estado que estimulan inercias y que revierten marginaciones. Queremos una nación solidaria con el desarrollo, más armónica en su crecimiento, al nivel de las expectativas despertadas al calor de tres revoluciones nacionales que enmarcan presente, pasado y porvenir.
Amantes de la paz y de la amistad con todos los pueblos de la tierra, rechazamos las asimetrías que nos condenan a la miseria y al subdesarrollo.
Postulamos que los viejos valores humanísticos que nos identifican como especie sean por principio una realidad cooperante para existir, para convivir, para progresar.
No quisiera terminar estas palabras sin antes ratificar el reconocimiento de mi fracción parlamentaria por la sensibilidad política, puesta de relieve permanentemente y por el esmero con que fueron dirigidos nuestros trabajos.
Acaso considerando que la tribuna más alta de la nación, lo es en la medida en que campea en ella la mayor libertad para la expresión libre, el licenciado Guillermo Jiménez Morales, presidente de nuestra institución, auspició sin cortapisas la libre expresión de los legisladores.
Procedió así al cobijo de la voluntad política del Presidente Salinas de Gortari que postula la existencia de un poder legislativo fuerte, fundado en la fortaleza de nuestras convicciones, para que el Estado mexicano se ubique a la altura de la dignidad del pueblo que conduce.
Inmersos en la vida de la nación, hemos llegado a un término que no es sino un principio, como en el viejo mito de Quetzalcóatl. Es el instante preciso de ir al encuentro del mejor porvenir. Muchas gracias.
El Presidente: - Tiene la palabra el diputado Roberto Jaramillo Flores, del grupo parlamentario del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional.
El diputado Roberto Jaramillo Flores: -Señor Presidente; compañeras y compañeros legisladores: La intervención de mi amigo senador Eliseo, me produjo un estado de ánimo que no traía, un poco nostálgico, como si ya nos estuviéramos despidiendo. Y creo que no podemos llegar a esta situación porque nos encontraremos en otras trincheras y en otras batallas y continuaremos discutiendo como aquí lo hemos hecho.
Pero íbamos a hacer una evaluación del trabajo de la Comisión Permanente. Yo creo que se ha hecho un esfuerzo no sólo por cumplir con nuestras responsabilidades constitucionales sino también avanzar en el perfeccionamiento de nuestras instituciones, y fundamentalmente darle eficacia, valor y responsabilidad al Poder Legislativo. Una Cámara de Diputados plural, como la que hoy contemplamos, amerita también que la Comisión Permanente revalore su funcionamiento.
Quizá sea prudente continuar examinando cómo reformar estas instituciones para hacerlas más.
ágiles, más responsables, más eficaces en el cumplimiento de sus responsabilidades constitucionales.
Nuestro trabajo, en ocasiones se desliza hacia la denuncia, nada más, y esto indudablemente es positivo, pero también cuando es reiterativo y se abusa de ello, la denuncia pierde eficacia, y por esta razón se pierde también el sentido principal, fundamental que es la de legislar, la de profundizar en los alcances y contenidos de nuestras leyes para mejorarlas, enriquecerlas en beneficio de nuestro pueblo, a favor de nuestra nación.
Se operan en el ámbito nacional e internacional cambios profundos y acelerados, de los cuales el país no puede estar al margen, y un Poder Legislativo, por supuesto que debería ser más dinámico, más activo, más profundo en sus reflexiones para contribuir verdaderamente a avanzar hacia la ampliación de la democracia en nuestro país.
Mi amigo Eliseo habló de la Revolución Mexicana. ¡Qué bueno que lo haya hecho! Hoy es un día oportuno para hablar de la Revolución Mexicana, recordando la muerte, el asesinato del general Emiliano Zapata, y finalizo estas palabras nostálgicas también, esperando que la Comisión Permanente que viene de las otras legislaturas, mejore lo que nosotros hemos hecho. Es conveniente, al hablar de la Revolución Mexicana, leer un párrafo de una carta que Zapata envió a Genaro Amezcua, y que fue publicada en mato de 1918 en el diario El Mundo de la Habana. Zapata dice así, o dijo: "Mucho ganaríamos, mucho ganaría la humanidad y la justicia si todos los pueblos de América y todas las naciones de la vieja Europa comprendiesen que la causa del México revolucionario y la causa de Rusia, son y representan la causa de la humanidad, el interés supremo de todos los pueblos oprimidos. Aquí como allá, hay grandes señores inhumanos, codiciosos y crueles, que de padres a hijos han venido explotando hasta la tortura a grandes masas de campesinos. Y aquí como allá, los hombres esclavizados, los hombres de conciencia dormida, empiezan a despertar, a sacudirse, a agitarse, a castigar; uno y otro van dirigidos contra lo que León Tolstoi llamara "El Gran Crimen", contra la infame usurpación de la tierra, que siendo propiedad de todos, como el agua y el aire, ha sido monopolizada por unos cuantos poderosos, apoyados por las fuerzas de los ejércitos y por la inequidad de las leyes. No es de extrañar, por lo mismo, que el proletariado mundial aplauda y admire a la Revolución Rusa, del mismo modo que otorgarán toda su adhesión, su simpatía y apoyo a esta gran Revolución Mexicana al darse cabal cuenta de sus fines. Muchas gracias, compañeros legisladores.
El Presidente: -Tiene la palabra el ciudadano diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala, del grupo parlamentario del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana.
El diputado Oscar Mauro Ramírez Ayala: -Señor Presidente; compañeras y compañeros legisladores: Hace unos momentos esta Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión rindió, al igual que el pueblo nos acompaña, un minuto de silencio en memoria del general Emiliano Zapata.
En el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, estamos convencidos de que a nuestros héroes, a nuestros revolucionarios, les satisface más que un minuto de silencio, el que los partidos políticos, el gobierno y la iniciativa privada se reencaucen por los caminos de la Constitución y los postulados de la Revolución, que desafortunadamente han sido abandonados.
Villa, en su momento, cuando conoció de las luchas de Zapata, añoraba conocer a Zapata; cuando ambos tuvieron la oportunidad de encontrarse en esta ciudad de México, coincidieron en que los ideales por los cuales luchaban en ese movimiento armado de 1910, era fundamentalmente para erradicar la injusticia, la opresión a que se estaban sometiendo a las grandes mayorías mexicanas.
Por ello, en este día que se celebra el LXXII aniversario de la muerte del general Emiliano Zapata, el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana reitera en esta tribuna su compromiso con los postulados originales, ortodoxos, del movimiento social de 1910; que aquí estaremos, en ésta y en todas las trincheras en que se reclame la presencia de los hijos, nietos y mexicanos que creen que en México la Revolución debe cumplirse.
Por ello, el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana enarbolará durante toda su existencia, y aun cuando deje de existir como organismo político, estos principios, porque son nuestra historia, nuestras tradiciones y nuestros compromisos para con el México de hoy y con el México del mañana.
Compañeras y compañeros legisladores: El Comité Ejecutivo Nacional del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, que preside el compañero licenciado Carlos Enrique Cantú Rosas, nos ha conferido en dos ocasiones, formar parte de la honorable Comisión Permanente del Congreso de la Unión. La primera de ellas, presidida por el Senado por conducto del senador Emilio M. González Parra y esta última por la Cámara de Diputados por medio del diputado Guillermo Jiménez Morales.
La experiencia que acumulamos en las dos ocasiones que intervenimos en la Comisión Permanente, nos permiten hacer una evaluación objetiva de ambas etapas. En la primera el debate y la consigna fue línea dura que nos obligó a sesionar en ocasiones hasta entrada la tarde y la noche, porque el nivel de concertación no estaba lo suficientemente maduro para entender el debate y la lucha que en la tribuna ha venido desencadenando la oposición.
En esta segunda oportunidad en el trabajo legislativo prevaleció el criterio del diálogo y la concertación sin que ninguna de las corrientes políticas aquí representadas claudicáramos en nuestra lucha o posición ideológica.
Por primera vez en la historia de los trabajos legislativos de la Comisión Permanente, se dieron concertaciones y se suscribieron documentos mediante los cuales, en el caso del conflicto del Golfo Pérsico, suscribimos todas las fracciones parlamentarias tres declaraciones en las que convocábamos a los parlamentos del mundo y a los países en conflicto, a encontrar los caminos de la paz por medio del diálogo.
También en esta Permanente logramos concertaciones sobre problemas sociales, acuerdos unánimes en los cuales se sobrepuso el criterio de la justicia sobre la injusticia, como en el caso de los vecinos del edificio "Atizapán" de Tlaltelolco; sobre el problema magisterial también las fracciones parlamentarias coincidimos en que la lucha de los trabajadores y empleados del Estado y del pueblo, deben ser reivindicaciones que bajo ninguna circunstancia deben anteponerse a la lucha política.
También las fracciones parlamentarias aquí representadas evidenciamos un alto sentido de responsabilidad en los problemas sociales que afrontan los mexicanos y acudimos en todo momento al llamado del pueblo de México ante ésta, la más alta tribuna de la nación.
Afortunadamente en esta Comisión Permanente el artículo 58 del Reglamento para el Gobierno Interior, que es un azote para las proposiciones de la oposición, fue esporádicamente utilizado, gracias al amplio criterio de concertación de la Presidencia y de los compañeros del Partido Revolucionario Institucional, porque ambos, todos, oposición y partido de Estado, nos comprometimos en hacer prevalecer la Constitución. Y eso fue lo que hicimos en los trabajos de esta Comisión Permanente.
En mi juicio, en estos temas no hubo vencedores ni vencidos ante los problemas de la comunidad y no se antepuso la posición ideológica o política de los partidos, dado que el compromiso que tenemos con las distintas clases sociales de nuestra nación, confirman el compromiso de nuestros partidos.
En escrito apego a lo que dispone el artículo 79 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, por mi conducto, presentó dos iniciativas de ley que fueron turnadas oportunamente, una a la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, sobre el derecho para los hombres y mujeres de la tercera edad. Y la otra, fue turnada a la Comisión de Trabajo y Previsión Social, relativa a las pensiones y jubilaciones que debe otorgar el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, a los empleados que laboran en beneficio de éste.
Nuestro partido nos ha concientizado y politizado en el compromiso que tenemos todos los parmistas, de hacer prevalecer en todo momento, el mandato constitucional y las leyes que de ella emanan. Por ello, con estricto sentido de responsabilidad, nos opusimos a las designaciones de embajadores cuando éstas atendían a fines de carácter político y no así a la política exterior que el Estado debe de desarrollar con los países del mundo.
En la última objeción, fundamentalmente y en los términos que establece el artículo 23 de la Ley Orgánica para el Servicio Exterior Mexicano, señalamos que Jesús Silva y Flores, no puede desempeñar el cargo de embajador con el nombre de Jesús Silva Herzog. La historia y el derecho, con el tiempo, nos concederán la razón porque actuamos en estricto apego a lo que disponen las leyes que emanan de la Constitución.
También tuvimos oportunidad de oponernos al retiro del ex ministro Carlos del Río, por considerar que no se debe premiar, ni mucho menos
pensionar, a quienes violan nuestra carta fundamental.
Esta tribuna de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión, fue receptora de nuestra impugnación a las modificaciones y adiciones que se pretendieron llevar a cabo en el Código Penal del estado de Chiapas para despenalizar el delito de aborto cuando existieran causas de planificación familiar o situación económica crítica de las madres solteras.
Ambas tesis nunca tendrán prioridad sobre el derecho a la vida que confiere la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
De igual manera formulamos ocho proposiciones, mismas que fueron turnadas a las comisiones correspondientes. En todas ellas recogimos el reclamo político o la demanda social. ¡Nunca el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana dio la espalda al pueblo de México en esta lucha parlamentaria!
Ante la flagrante violación a lo dispuesto por el artículo 115 constitucional, presentamos demanda de juicio político en contra del gobernador del estado de Tamaulipas, Américo Villarreal Guerra, y el juez séptimo de distrito con residencia en Reynosa, Tamaulipas; asuntos que fueron turnados a las comisiones Unidas de Gobernación y Puntos Constitucionales y Justicia, las cuales hasta le fecha no han convocado a reunión alguna, para conocer de esta demanda.
En el aspecto político, denunciamos y seguiremos denunciando la forma en que la burocracia política convertida en los profesionales electorales, han estado manipulando y seguirán manipulando la elaboración del padrón electoral 1991, el cual ha dado muestras evidentes de que no está siendo confiable y veraz. Estos trabajos preelectorales, han obligado a partidos políticos y a ciudadanos, a tomar por asalto las delegaciones del Registro Nacional de Electores, porque cientos o miles de ciudadanos están quedando al margen de la lista nominal de electores; además de que a los partidos políticos no se les ha permitido constatar la forma en que se empadronan los miembros de las fuerzas armadas y el ejército de este país, mismos que en algunas ocasiones y en elecciones locales o federales, han servido para proteger el fraude electoral, no obstante que la Constitución les prohibe participar en política.
También impugnamos las elecciones locales del estado de Yucatán y de Coahuila, recurriendo nuestros militantes oportunamente a las instancias electorales, las cuales se evidenciaron, como en su momento también se evidenció el Tribunal de lo Contencioso Electoral; no obstante las barreras legales y de consigna que se han vivido en los órganos electorales, locales, nuestro partido, el Auténtico de la Revolución Mexicana, seguirá dando la lucha por la vía de la democracia y del derecho, aunque en ocasiones nos obligaron a aceptar el reto de recurrir a la violencia.
No obstante lo anterior, la línea del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana es y seguirá siendo la lucha por los marcos que señalan las leyes y la Constitución. Sabemos que éste es el camino que nos legaron nuestros héroes nacionales, por el que transitaremos confiados en que el Estado y su partido tarde o temprano se apegarán a los principios de la Revolución y la Constitución; y cuando todos nos encontremos en este camino, el derecho y la democracia prevalecerá ante la consigna, conveniencia o abyección.
Porque quienes militamos en el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana en su nueva era, lo hacemos con pleno regocijo de nuestra más amplia libertad, sin caer en ningún momento en el libertinaje o en la indiferencia, porque el compromiso que tenemos como nietos de los revolucionarios, es el de encauzar al país por los principios de la justicia social y la no reelección, y también por el principio que demandan cientos de miles de campesinos, el de tierra y libertad.
Compañeros legisladores: A mil kilómetros de distancia de este recinto se encuentra el ingeniero Federico Ramírez Morales, hijo del general villista Jesús José Ramírez Ocón, quien transitara por todo el país a lado del general Francisco Blas Treviño, para constituir la historia pasada del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana. Allá en Torreón, Coahuila, se encuentra dando la última batalla contra la muerte, sí compañeros legisladores, me refiero a mi padre, quien me enseño a ser hombre y parmista, quién infundó en mí el amor a la patria y a nuestro héroes, quien me enseño a transitar en la política sin claudicar en mis convicciones.
Por ello, antes de acudir con mi progenitor al último adiós, quiero decirles que no salí de mi tierra a mendigar favores ni aplausos, porque el compromiso que contraje con mi padre y con mi partido es una misión de honor y no de granjerías. Muchas gracias. (Aplausos.)
El Presidente: -Tiene la palabra el diputado Alfredo Reyes Contreras, del grupo parlamentario del Partido Popular Socialista.
El diputado Alfredo Reyes Contreras: - Señor Presidente; honorable asamblea: Cuando inició sus trabajos esta Comisión Permanente, en el Medio Oriente se iniciaba también la agresión norteamericana contra el pueblo de Irak, con la finalidad, como lo declaró cínicamente George Bush, de lograr un nuevo orden mundial bajo el dominio norteamericano.
Varias de nuestras sesiones tuvieron lugar, cuando se efectuaba sobre Irak el más violento e intenso bombardeo que pueblo alguno haya sufrido jamás. Se consumaba así una brutal agresión del gobierno norteamericano, utilizando al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Los cambios que han ocurrido en el mundo en el último año, muchos de ellos dramáticos y aún de consecuencias imprevisibles, tendrán que conducir necesariamente a la conformación de un nuevo orden mundial. Pero no bajo la hegemonía norteamericana, alemana, japonesa o francesa, sino un nuevo orden donde se respete la presencia de todas las naciones, grandes y chicas; en un plano de absoluta igualdad, donde prevalezca la solución pacífica a las controversias internacionales, respetando el derecho de autodeterminación y poniendo en vigor el principio de no intervención.
Este fue el sentido y la orientación que a través de distintos pronunciamientos realizó, con gran sensibilidad, la Comisión Permanente, que está a punto de concluir sus trabajos.
Nuestra obligación consiste en continuar la lucha, para que esos principios presidan las relaciones internacionales; lo que permitirá, entonces sí, arribar a un nuevo orden mundial cuyo signo principal será la vigilancia de la paz en el mundo.
La Comisión Permanente, de la que formamos parte, fue testigo del agravamiento de los problemas económicos de México.
La política neoliberal ha profundizado la dependencia de nuestro país, a pretexto de la globalización o mundialización de la economía. Con el incremento peligroso de la inversión extranjera directa, con el mantenimiento de un alto volumen de la deuda externa y con la apertura indiscriminada de nuestras fronteras a los productos norteamericanos, estamos regresando, aunque en otro nivel, a la etapa del porfiriato, por la presencia dominante del capital extranjero.
Durante los meses en que trabajó esta Comisión Permanente, presenciamos de manera dramática que las condiciones de vida de millones de mexicanos se agravaron. Reduciéndose, aún más, el raquítico salario que apenas llega a 50 centavos dólar por hora, cuando en Estados Unidos, potencia a la que se nos quiere ligar todavía más, los trabajadores ganan 20 ó 22 veces más salario.
Como ustedes saben, han sido reiteradas las peticiones de los trabajadores y de sus organizaciones sindicales para aumentar los salarios. Sin embargo, el gobierno ha puesto oídos sordos a esta legítima demanda, todo para cumplir su compromiso de mantener en nuestro país los salarios más bajos del mundo, abatir el nivel de vida de los mexicanos, contraer el mercado interno para fomentar las expropiaciones. ¡Volvernos competitivos, aun sobre la vida y la salud de millones de compatriotas que han muerto o que han visto reducirse dramáticamente sus condiciones de vida!
Los trabajos y debates de esta Comisión Permanente se dieron en el marco de la discusión y examen limitado internamente de lo que es y representa el Tratado de Libre Comercio para México y América Latina.
Es claro que el Tratado de Libre Comercio representa un objetivo a conseguir por parte de las fuerzas políticas y económicas que tienen el interés de dominar a todos los pueblos del Continente Americano, los yanquis quieren tener con el citado tratado comercial un mercado cautivo para sus productos, frente a la competencia que le han impuesto Japón y Alemania, tanto desde el punto de vista económica como tecnológico.
Hasta la denominación del Tratado de Libre Comercio ha sido impuesta por quienes lo concibieron y lo promueven, pues, lo que realmente representará será la libertad ilimitada para los grandes monopolios de la producción y los servicios que tienen principalmente su sede en los Estados Unidos y significará sujeción y dominio sobre México y el resto de los países de América Latina.
En la discusión sobre el Tratado de Libre Comercio lamentablemente hay en América Latina quienes desempeñan el ingrato papel de promotores de los intereses imperialistas
conduciéndose como sus auxiliares oficiosos para aplicar sobre nuestros pueblos el plan de dominio, expresado claramente en la Iniciativa de las Américas de Bush.
El gobierno de México debe abandonar el papel que actualmente desempeña frente a este plan y debe retomar el camino que garantice y defienda, con hechos reales, la independencia y soberanía nacionales, porque no se vale, y menos ahora, asumir sólo una defensa retórica de los intereses del pueblo y de la nación.
La discusión que se ha dado en nuestro país sobre el Tratado de Libre Comercio en estos últimos tres meses, ha sido muy limitada, se presentó una clara oposición para que la Cámara de Diputados participara activamente en el examen de ese tratado, a pretexto de no entrar en choque con el Senado, cuyo foro no ha sido hasta hoy de la trascendencia que inicialmente se dijo.
Frente a esta situación, como ustedes recordarán, me permití en nombre del Partido Popular Socialista, fijar nuestra posición con absoluta claridad en el sentido de que debe participar la Cámara de Diputados en la discusión de dicho tratado y hoy reiteramos esa demanda, porque la representación nacional no puede quedar al margen ni en la discusión ni en la decisión final.
Además el gobierno utilizando unilateralmente muchos medios de difusión ha mantenido una intensa campaña orientada a convencer a los mexicanos sobre las supuestas bondades del Tratado de Libre Comercio, limitando los argumentos de quienes no están de acuerdo y descalificando como lo ha hecho el licenciado Salinas de Gortari, en Estados Unidos y Canadá, a los opositores del tratado.
El gobierno ha llegado a tal extremo que condiciona el bienestar de los mexicanos a la firma del Tratado de Libre Comercio, se dice que sólo habrá escuelas, caminos, agua potable, electrificación, banquetas, vivienda y alimento si se firma el tratado; si no se firma, se amenaza al pueblo, vendrá el caos y la anarquía, se trata de amedrentar a los mexicanos para que por temor no se opongan al Tratado de Libre Comercio y lo acepten.
Por otra parte, esta Comisión Permanente ha visto renacer la ofensiva clerical para que la Iglesia recupere fueros y privilegios, demanda velada bajo la exigencia de tener reconocimiento jurídico para esas instituciones religiosas, a las que la ley niega personalidad política y jurídica.
En este sentido el gobierno ha permitido y fomentado la violación a la Constitución Nacional, porque sus integrantes a pretexto de la modernización han olvidado intencionalmente el espíritu de Benito Juárez, que debiera presidir sus actos en esta materia. Es más, el gobierno ha tolerado la intervención de extranjeros como la de Prigione, tolerancia que le ha hecho contraer, frente al pueblo y frente a la historia nacional, una grave responsabilidad.
En este tema, una vez más, volvió a quedar muy claro durante los tres meses de trabajo de la Comisión Permanente, que no es el pueblo el que pide fueros ni privilegios para el clero; es el alto clero, el político, el que con espíritu de revancha exige volver al pasado, pretendiendo desempeñar el papel que por su actitud antinacional el pueblo le retiró.
Algunas personas, cediendo en los principios que han conformado la historia de México, adoptando actitudes blandengues, se agachan ante la actitud proclerical de algunos funcionarios de alto nivel del gobierno federal.
Señoras y señores legisladores: Nuestros trabajos concluyen en el momento que prácticamente se inicia el proceso electoral que culminará en parte el domingo 18 de agosto, con la elección para renovar la Cámara de Diputados y la mitad del Senado. La preparación de este proceso electoral ha tenido como el aspecto más importante, hasta hoy, la preparación del padrón electoral.
El padrón electoral siempre ha sido utilizado para impedir que la voluntad popular se exprese con plena libertad, ha sido un instrumento manipulado y manipulable por los profesionales del fraude, por los expertos en la violación a la voluntad del pueblo.
Se ha dicho que el nuevo padrón electoral, una vez que sea elaborado, no deberá ser objeto de disputas partidarias, y que su nueva elaboración es garantía de respeto a la voluntad ciudadana. Esto no es cierto.
El nuevo padrón, lo ha dicho el Partido Popular Socialista, no es garantía de que en el próximo y en los demás procesos electorales se respete la voluntad popular y los derechos de los partidos políticos. Elaborado por el Registro Federal de Electores, a los partidos políticos por mandato de nuestra legislación electoral,
sólo se les concede el carácter de miembros de la Comisión de Vigilancia; de manera que la responsabilidad en la elaboración del padrón recae sobre el órgano del Instituto Federal Electoral y no sobre los partidos, que carecen de poderes de decisión y sólo desempeñan el papel de vigilantes.
El ambiente preelectoral que vive nuestro país ha puesto sobre la mesa de las discusiones otra vez la vieja demanda de la derecha, para que nuestros procesos electorales sean vigilados por observadores. extranjeros. Demanda que hoy levantan otras fuerzas que se encuentran, en nuestra opinión, en las filas democráticas.
México, señoras y señores legisladores, no es Panamá, como tampoco es Nicaragua, países en los que de manera grosera intervinieron los llamados observadores internacionales, situación que no deben olvidar los que promueven su presencia en nuestra patria.
El Partido Popular Socialista, rechaza de la manera más enérgica la presencia de esos supuestos observadores. Exige y demandará en su oportunidad el respeto y la aplicación de la Constitución Nacional, pues los extranjeros tienen terminantemente prohibido intervenir en la vida política nacional.
En este mismo campo de la actividad electoral, las fuerzas políticas toman posiciones, es legítimo que así sea. Pero lamentablemente algunas fuerzas, a pretexto de combatir a la derecha que gobierna, pretenden aliarse con la derecha de afuera, lo que además de representar un contrasentido político se manifiesta como una actitud antihistórica, "confundir a los amigos con los enemigos y a éstos con los amigos" tiene resultados desastrosos en la actividad política y atenta contra los intereses superiores de la nación y del pueblo.
Ninguna fuerza democrática tiene justificación para difundir la falsa idea de que la derecha lucha por la democracia, porque además de confundir al pueblo se obstaculiza la legítima aspiración popular de ampliar y fortalecer la vida democrática de la nación.
Las elecciones federales serán, en muchos aspectos, decisivas para el porvenir de nuestra patria. A través de la lucha de varios partidos políticos se profundizará el enfrentamiento fundamentalmente entre dos fuerzas: las fuerzas democráticas mayoritarias, que mantienen vigentes y en alto las banderas de la Revolución Mexicana y las fuerzas de la derecha, de las que forma parte la corriente neoliberal, que a pretexto de la modernización pretenden convertir a nuestra patria en una colonia de los extranjeros. En esta batalla, señoras y señores legisladores, el pueblo mexicano y sus fuerzas democráticas, progresistas y revolucionarias, saldrán, sin duda, victoriosas. Muchas gracias . (Aplausos.)
El Presidente: -Tiene la palabra el senador de la República Roberto Robles Garnica, del grupo parlamentario de la Partido de la Revolución Democrática.
El senador Roberto Robles Garnica: - Con el permiso de la Presidencia; honorable asamblea: Al término constitucional de las labores de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, es ocasión para hacer una síntesis de las deliberaciones que tuvieron lugar en este ámbito y sacar además algunas conclusiones.
En asuntos internacionales, la fracción parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática y las de otros partidos condenaron la violencia militar norteamericana en contra de Irak, país sobre el cual cayeron bombas con un poder destructivo equivalente al de ocho bombas atómicas, como las que se lanzaron sobre Hiroshima y Nagasaki y que en su época aterraron a la humanidad.
El Partido de la Revolución Democrática denunció que la política internacional de México ya sólo era, frente al conflicto del Golfo Pérsico, un pálido reflejo de la vieja política pacifista que tanto brillo dio a nuestro país en los foros internacionales y esto, a pesar de que la sociedad civil, particularmente en la ciudad de México, hizo numerosas manifestaciones en contra de los agresores y por una paz inmediata.
Hoy, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el mismo que declaró la guerra a Irak, suplanta al tribunal de La Haya, al intervenir en una cuestión de límites entre dos naciones, Irán y Kuwait, y lo que es más preocupante, jefaturado por el gobierno de los Estados Unidos, ha nacido un nuevo poder planetario que impone a una nación vencida exigencias económicas y militares que la han regresado a la era preindustrial, según las conclusiones de enviados de las Naciones Unidas.
Ante todo esto ya está ausente, en el ámbito internacional, la voz de México, que antes se identificaba con la defensa intransigente de los más débiles y contra las injusticias que imponían los poderosos. Ya pasaron los mejores días de
la política internacional de México, habrá que esperar algunos años para que regrese por los fueros de su valor universal.
Debe registrarse, por otra parte, la polémica que desató el nombramiento del señor Jorge de la Vega Domínguez como Embajador de México ante Canadá, por su pasado político involucrado en el fraude electoral de las elecciones de 1988 que no puede olvidarse porque distorsionó el propósito de millones de votantes que tenían derecho a esperar de aquella jornada electoral, un cambio para el país de sentido democrático, que no se vio y que pospuso para mejor ocasión el advenimiento de una vida política plenamente democrática.
El Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá, junto con el viaje del licenciado Salinas de Gortari a ambos países, cuyo propósito es asegurar la firma de ese tratado, propició que las fuerzas políticas representadas en el Congreso de la Unión manifestaran su posición, porque este tratado es algo más que un conjunto de reglas para comprar y vender mercancías, es la inserción de la economía mexicana en la economía norteamericana en condiciones de una integración desfavorable para México pues hay desproporción entre el grado de desarrollo de nuestra economía comparado con la economía estadounidense, se trata de una integración asimétrica a la cual el gobierno ya apostó todo, ya no puede retroceder ni aún en el hipotético caso de que el trato no se firmara, pues la apertura comercial mexicana llegó casi al límite con un promedio arancelario del 10%.
Debe advertirse que el proceso de la negación del tratado dejó de lado conscientemente la cuestión de la deuda externa como si ya no fuera problema aun cuando la atención de su servicio siga frenando una cuantiosa salida de recursos que es un lastre para un crecimiento justo y estable. Es por ello que el Partido de la Revolución Democrática reitera una y otra vez la necesidad de nuevas renegociaciones.
El Partido de la Revolución Democrática no propone que no se pague la deuda, lo que propone es que se definan las fronteras posibles para ese pago; negociar un Tratado de Libre Comercio con el lastre de la deuda, agrava el grado de su coordinación a la economía norteamericana, de manera que la apertura comercial va a profundizar la tendencia de desigualdad económica entre ambos países, se van a consolidar las disparidades ya existentes.
La negativa a incorporar al tratado las condiciones de trabajo de nuestros connacionales en Estados Unidos, es el acatamiento a una imposición norteamericana, pero es inaceptable que se olviden las condiciones inhumanas que sufren centenas de miles de indocumentados, no se puede fincar un tratado comercial respetable sobre la base de olvidar deliberadamente, es decir, de abandonar a su suerte las condiciones de vida y de trabajo de centenas de miles que van a los Estados Unidos en busca de un salario que en su país no pudieron encontrar. Si el tratado, señores legisladores, olvida a los indocumentados, se tratará de algo indigno.
Menos mal que los golpes enseñan y los funcionarios mexicanos ya le están poniendo límites a las bondades que deben esperarse del tratado, porque hace apenas unas semanas pareciera, de una versión oficial, que la prosperidad del país se aseguraba con tal tratado. Ya empiezan a admitir que ni todo será benéfico y que lo que sea favorable no deba esperarse a corto plazo. El día llegará en el que las posiciones oficiales tendrán que acercarse a los que ahora lo impugnan, aunque para entonces una parte del daño ya estará hecho.
El otro orden de ideas debe subrayarse que ninguna repercusión efectiva ha tenido la preocupación reiteradamente sostenida en la Comisión Permanente, por el grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática y otros grupos parlamentarios, en el sentido de que el deterioro sufrido por los salarios es injustificable, desde el punto de vista económico y social y que los salarios deben entrar de inmediato a un proceso de recuperación real de su capacidad adquisitiva.
En particular se ha sostenido con insistencia en esta tribuna, que la pérdida del poder adquisitivo de los salarios mínimos, que alcanza ya una cifra mayor del 60% y que ubica a los mínimos mexicanos entre los más bajos del mundo, viola el precepto constitucional contenido en el artículo 123, en el sentido de que esos salarios mínimos deben ser remuneradores y permitir la satisfacción de las necesidades materiales, educativas y culturales. Nada más alejado en la vida de la familia obrera. El salario mínimo vigente, inferior a los 12 mil pesos, para nada alcanza.
Cuando hacemos referencia a esto, por supuesto que no nos estamos haciendo cómplices a este conflicto de intereses que hay entre el señor Fidel Velázquez y el señor Farell. Somos ajenos a eso porque tal polémica entre ambos señores
es totalmente ajena a los intereses de los trabajadores.
La anterior Comisión Permanente aprobó, por unanimidad, una recomendación para que se realizara un aumento de emergencia, que fue turnada a la Comisión de Trabajo, sólo para ser ahí congelada. La Comisión Permanente que hoy termina sus labores, retomó el tema y la preocupación, para enviar una nueva recomendación a la Comisión de Trabajo, que nuevamente fue congelada. La práctica mostró, infortunadamente, que ningún efecto práctico tuvieron las resoluciones adoptadas por la Comisión Permanente.
El proceso electoral de agosto ya está muy cerca. Las próximas elecciones no serán muy diferentes a los últimos procesos electorales. Debemos tomar en cuenta que el precedente más importante fue el de las elecciones del estado de México, las elecciones más sucias que ha habido en nuestro país en los últimos tiempos. Con este precedente no puede haber optimismo suficiente sobre la legalidad y la limpieza de las próximas elecciones.
De aquí ha surgido la idea de muchas personas, de diferente filiación política, para que haya observadores internacionales. No se trata por supuesto, esto es obvio, de que vengan extranjeros a calificar las elecciones mexicanas, tampoco se trata de que vengan a intervenir en la organización de las elecciones, tampoco se trata de que vengan a avalar los resultados electorales, son observadores, no organizadores ni garantes de las elecciones mexicanas. Es algo tan sencillo que la práctica internacional lo ha hecho común en muchas elecciones de muchos países, incluidos aquellos países, donde hubo transición de dictadura a democracia.
Pero qué polvareda se ha levantado en contra de los observadores. Ahora sí, unos por un interés y otros por otro, coinciden en que nuestro nacionalismo, nuestra madurez, son contrarios a la decisión, a la propuesta de que vengan observadores internacionales. Nadie está negando el nacionalismo de los mexicanos, nadie está negando la madurez de la oposición por buscar medios que garanticen elecciones mejores.
¿Qué harían los observadores? Eso, observar, ver, mirar, percatarse, darse cuenta y nada más. Y ¿por qué el rechazo? Si de extranjeros estamos llenos, allí está Petróleos Mexicanos con los pisos enteros llenos de extranjeros; en todas las oficinas importantes de nuestro país hay extranjeros o viendo cuestiones relacionadas con el comercio o con otros asuntos. Extranjeras son las empresas que se están trayendo para explorar, perforar y transportar petróleo mexicano.
Resulta que para muchos efectos ya no se puede evitar estar inmersos en el mundo, pero si para elecciones no, ése es un asunto que se reserva exclusivamente para nosotros, porque nadie debe meter las narices en estos procesos que son casi sagrados.
Ya se ha dicho por ahí y no sin razón, que el que tiene cola que le pisen procura esconderla tanto como pueda de los mirones. No se quiere que mirones extranjeros vengan a ver qué es lo que aquí pasa. Por supuesto que la presencia de observadores extranjeros en nada va a cambiar de manera sustancial el proceso electoral, lo que sí harían es informarles al mundo, como testigos de calidad, de lo que vieron. Y en esto que no vengan con el cuento de que se vulnera la soberanía nacional, qué frágil tenía que ser esa soberanía para que se vulnerara por tan poca cosa como es la de que unos extranjeros estén un par de semanas o un mes si acaso en el país y luego se van.
En las elecciones recientes del estado de Morelos hubo observadores canadienses, ¿y qué hicieron? Nada que dañara por supuesto la soberanía del estado de Morelos, ni interfiriera el proceso electoral de ese estado. Eso sí con los ojos cuadrados vieron los carruseles, ellos creían que eran cuento eso de que las combis pasaban de una casilla a otra con los mismos votantes repitiendo una y otra vez el hecho de votar con o sin credencial o como fuera. Ellos creían que eran exageraciones de la oposición, ahora saben que es cierto.
Pero además esto no es ninguna verdad que se va por primera vez a revelar a la opinión mundial. México es uno de los últimos países en el planeta con elecciones fraudulentas, debe recordarse a Haití, por ejemplo, que soportó durante muchos años una dictadura y que por el respeto al voto transitó de un solo golpe a la democracia. Y Haití pudo y México todavía no puede, hacer esta afirmación con cargo al gobierno, que es el que administra las elecciones porque todo el proceso electoral está normado en tal forma que todo el proceso depende del gobierno en favor de su partido. y esto es lo que no se quiere mostrar al mundo, les da pena y tiene razón.
Bien, hago todas esas precisiones, porque aquí se mencionó el asunto. Mi partido, el Partido
de la Revolución Democrática, partido nacionalista de verdad, partido que pugna por la democracia de verdad, y en su corta existencia ya ha dejado en el camino más de 80 vidas, este partido sí está en favor de que vengan observadores internacionales, con una aclaración, no norteamericanos, no estadounidenses, para que no haya confusiones y se diga que por un lado nos oponemos a muchas medidas de la política económica de los Estados Unidos y por otra parte propiciamos que elementos suyos vengan a presenciar procesos políticos mexicanos, por tanto, podrían ser de otros países pero no de Estados Unidos.
Termino diciendo, finalmente, los observadores de todas maneras van a venir, algunos partidos los van a traer. Claro que no van a tener las facilidades necesarias para que profundicen en su observación, y si acaso quedarán casi en las mismas condiciones que un corresponsal de prensa extranjera. Eso es muy poca cosa, pero en fin, así están las cosas y así serán de todas maneras esas próximas elecciones; no serán un parteaguas de la historia política moderna de México, serán unas elecciones como lo han sido la mayoría y no le va a pasar nada a este país. Ya ha resistido muchos procesos electorales poco limpios, y el país sigue existiendo; México resistirá otro proceso electoral defectuoso, no hay ningún problema por ello.
Termino diciendo que las deliberaciones en la Comisión Permanente gozaron de libertad y respeto a todos los legisladores, con independencia de filiación política y del asunto a debate, merced a un desempeño plausible de la mesa directiva, lo cierto es que, pese a todo, conforme empuja la sociedad mexicana en favor de demandas de legalidad y democracia, el debate parlamentario dejó atrás la monotonía y el monólogo oficialista, y éste no tiende a intensificarse y a enriquecerse para bien de la salud de la nación. Muchas gracias.
El Presidente: -Tiene la palabra el diputado Eugenio Ortíz Walls, del grupo parlamentario del Partido Acción Nacional.
El diputado Eugenio Ortíz Walls: Con el permiso de la presidencia; ciudadanos legisladores: La sociología nos enseña que desde los tiempos remotos, el mito ha sido parte consustancial a la vida de las comunidades humanas. Es una forma, dicen los que saben, de interpretar causas y efectos de lo que se desconoce o se ignora o también de lo que se quiere ocultar.
Hay viejos mitos que aún en nuestra época prevalecen, y mitos modernos que de tiempo en tiempo aparecen y hacen fortuna, o sirven para hacer afortunados a quienes los inventan o alientan.
Así se construye una cultura de ficción que contamina los aspectos de la amplia vida en sociedad. La historia a veces es fábula, o cuando menos alcanza niveles literarios de la leyenda. La política también se convierte en una política de ficción, en que se dice lo que no se hace, y se piensa que las cosas suceden por obra y gracia de factores extraños a la voluntad de la gente. La economía también se vuelve economía de ficción. Al proletario lo dirigen líderes millonarios, los que abanderan causas de justicia son a veces los peores perseguidores y la cuestión social se convierte en un galimatías.
Esto tiene un problema moral de fondo, el problema de la ficción y de vivir una doble identidad. Afortunadamente cada día mayor número de mexicanos tomamos conciencia de este proceso que en nada nos beneficia, y realizamos esfuerzos por modificarlos, enfrentando la realidad y buscando nuevos y distintos medios para lograr una mejor y más auténtica convivencia nacional.
La democracia, señora tan mencionada en todas partes, no hay discurso donde no se le cite cinco o seis veces, tanto como forma de gobierno, como sistema de vida, no constituye de ninguna manera una dictadura de la mayoría, sobre todo cuando la mayoría se puede prefabricar desde el poder.
Necesitamos un cambio democrático de las estructuras en México; creo que vivimos, estamos en este proceso, pero para ello necesitamos hacer un esfuerzo por no volver a los viejos mitos y cubrirlos de modernidad, porque entonces haríamos una historia también de ficción del futuro.
Necesitamos cambiar en México; estamos cambiando, y no habrá fuerza capaz de hacer que el pueblo de México cambie.
En Acción Nacional queremos que este cambio sea un cambio democrático, que sea un cambio por el camino civilizado, del diálogo, que es presupuesto de la democracia, de confrontar los puntos distintos que nos separan, y encontrar puntos de consenso que hagan posible mejorar nuestra convivencia y hacer algo en común en favor del país, considerado como nación y como estado.
El papel de los partidos políticos en este cambio, en este cambio que México requiere con urgencia es muy importante independientemente de que desde hace tiempo hay una especie de desprendimiento de la ideología partidista. La ideología en muchas ocasiones se ha convertido en una cortapiza para poder hablar entre los diferentes grupos; nos dogmatizamos y hacemos verdaderamente difícil el diálogo, y para que haya diálogo, necesitamos pensar que la verdad existe y que tenemos que buscarla juntos.
El gobierno y la oposición. El gobierno en México desde hace muchos años tiene características muy especiales, desde cómo se originan los cuerpos de autoridad, cómo se inventan también mecanismos para que la voluntad popular no pueda expresarse o sea vulnerada mediante la manipulación del proceso electoral.
La oposición, por otro lado, en un medio, que de ninguna manera es un medio generoso, me refiero a la oposición, no a algún grupo que va en el cabús del partido del gobierno, sino a la oposición, a quienes tienen una identidad y que defienden una manera de ser y un quehacer político en este país.
La oposición hace esfuerzos, digo, en terrenos inhóspitos; tenemos que luchar contra un poder constituido; tenemos que enfrentarnos a hábitos que han encallecido la vida política en este país.
Afortunadamente creo que el gobierno y los partidos de oposición y todos los mexicanos empezamos a sentir que las reglas del juego acostumbradas ya no nos sirven para esa convivencia pacífica que requiere el país.
Los diputados del grupo parlamentario del Partido Acción Nacional, integrante de esta Comisión Permanente, hemos intentado en nuestras 63 intervenciones hasta la sesión pasada, afirmar nuestros principios y nuestra posición ante problemas que inciden en los actuales momentos de la vida de México.
En el aspecto de política exterior fijamos nuestra posición sobre la guerra y sobre la paz, porque no es posible hablar de la paz a secas; de una paz estéril; una paz pura como un ideal; sino la paz a la que tienen derecho todos los seres humanos, que ha sido una búsqueda constante en todos los tiempos y en todo el espacio. Paz que debe ser fruto de la justicia, de la necesidad también, lo afirmamos, de un orden internacional justo, con respeto no solamente a principios de tipo declarativo sino de evidencia en las relaciones internacionales entre todos los países de la tierra. Hay imperialismo. Nuestro mundo siempre ha sido testigo del acoso del imperialismo. Necesitamos pensar que muchas de las consecuencias se debe precisamente a una actitud pasiva de países que no tienen esa categoría de grandes potencias. Necesitamos realizar una política internacional limpia y de cara al pueblo.
Derechos humanos fue también uno de los puntos que los diputados de Acción Nacional aquí representados, tratamos en diversas ocasiones.
En la política interior hablamos sobre respeto a la Constitución; intervenimos con nuestros puntos de vista en la designación de los embajadores; hablamos de procesos electorales.
Sobre democracia, dimos nuestros puntos de vista cómo la entendemos y cómo queremos que se enmarque en la vida pública de México.
Sobre libertad de expresión, sobre el padrón y los procesos electorales, sobre el derecho a la información y sobre el corporativismo que a veces padece el país.
En lo económico, hablamos, dimos también, fijamos posición sobre el Tratado de Libre Comercio, sobre salarios y tarifas y sobre la aplicación de créditos del exterior.
En el aspecto social subrayamos el problema del campo, como un problema humano más que como un problema de productividad. Y pensamos, y dimos un punto de vista sobre el ejido, el ejido que la realidad nos ha enseñado que debe reformarse, no para volver a aglutinarse y conformar las haciendas de antes de la Revolución. La Revolución de México se hizo por algo y para algo. El problema no es la Revolución, el problema no es la lucha del pueblo de México por el cambio de estructuras en 1910. El problema nuestro es que no hemos cumplido muchos de los postulados de la Revolución y que muchos de esos postulados se han traicionado en este país, muchas veces, por los que se ostentan como revolucionarios.
Sobre el sindicalismo también dimos nuestra aportación. Sobre los abusos de autoridad y denuncias diversas fueron motivo para que diputados del Partido Acción Nacional utilizaran esta tribuna.
Todo esto lo hicimos dentro de la realidad, la realidad de esta Comisión Permanente cuyas
facultades son exiguas. Pero foro en que se debatieron problemas nacionales y se denunciaron atropellos e injusticias.
Muchos diputados creo que deben de estar satisfechos de haber obrado y actuado en esta forma, porque el pueblo de México necesita voces y los representantes del pueblo deben contestar esa categoría en la realidad y no nada más en el discurso.
Los diputados del Partido Acción Nacional procuramos que nuestra participación en esta Comisión Permanente, sin odios y sin resentimientos, se enmarcaran dentro de la responsabilidad y seriedad políticas y del compromiso que libre y voluntariamente elegimos nosotros y nos une a nuestro partido.
Reconocemos el esfuerzo desarrollado por el Presidente y el vicepresidente y de todos los integrantes de esta Comisión Permanente, para que los trabajos de la misma se realizaran dentro de un marco de respeto mutuo.
Terminado el ejercicio de esta comisión, el último período ordinario de sesiones de la LIV Legislatura de la Cámara de Diputados y el período de sesiones de la Cámara de Senadores, será foro propicio para ventilar los problemas que a todos nos preocupan en estos momentos y a los que debemos encontrar solución pronta y adecuada, por encima de los intereses de grupo o de partido y en bien, sobre todo, de los intereses del pueblo de México. Muchas gracias.
El Presidente: -Tiene la palabra el diputado Humberto Roque Villanueva, del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional.
El diputado Humberto Roque Villanueva: - Señor Presidente; honorable asamblea: Una visión parcial del tiempo nos hace creer que la duración de esta Comisión Permanente, se ha reducido únicamente como producto de la aplicación de la reforma constitucional que le tocó poner en vigor a la IV Legislatura. Una visión más generosa del tiempo histórico, nos hace comprender que en un lapso menor al de nuestra duración en esta Permanente, el mundo vivió el nacimiento y la terminación de un conflicto bélico, que tuvo en un metafórico filo de la navaja a la paz universal.
Capricho de la tecnología o de los tiempos, el aspecto bélico del conflicto del Golfo Pérsico, va pasando de la actualidad periodística a la austera reflexión del historiador, paradoja de la política que el tiempo de los demás nos parezca adecuadamente corto, y el propio lo sintamos incómodamente largo o interesadamente breve. Quisiéramos acortar los tiempos para el control de la contaminación del medio ambiente, pero nos asusta la llamada "vía rápida" para el Tratado de Libre Comercio, término que curiosamente no guarda una relación directa con el tiempo, sino con el carácter del trámite legislativo del Congreso Norteamericano.
Desearíamos una democracia instantánea y perfecta, pero nos perdemos en discusiones anticipadas sobre lo idóneo de un padrón electoral que va en el camino correcto, pero que a veces quisiéramos retrasarlo en su integración y descalificarlo desde su gestación. Ni los procesos económicos ni los políticos pueden ser instantáneos y voluntaristas, todo requiere de un tiempo de maduración; bien, que nuestra impaciencia se canalice en garantizar que las cosas se hagan rápidamente; mal, en quejarnos que la prisa o el retraso entrañan maldad o ineficiencia.
Pero en lo inmediato y próximo, los integrantes de la Comisión Permanente hemos operado con tiempos y facultades constitucionales para desahogar los pendientes que la agenda nacional exige que se resuelvan por este cuerpo colegiado, su tratamiento puntual no ha significado que la vista y la palabra del legislador se centren en el árbol y pierdan la perspectiva del bosque.
Nuestro orden del día combinó el cumplimiento estricto de nuestras facultades constitucionales con una profunda expresión de pluralidad y crítica, si ni siquiera el tiempo nos parece igual para todo y para todos, lo más natural en un cuerpo plural como éste, es encontrar divergencias de puntos de vista sobre temas necesariamente polémicos, como el tema de la educación, la religión, la economía y la política.
Estoy convencido de que los argumentos que cada quien esgrimió en la tribuna, con el fruto de una formación doctrinaria y de una vocación política. Considero que el más formidable enemigo de una doctrina no es otra que sostenga lo contrario, sino la ausencia de motivaciones doctrinarias para combatir.
Estimo de mayor peligro la apatía y el desinterés ciudadanos, que la más encendida expresión de la pasión política.
De esta manera, me parece que el interés con el que en esta Comisión Permanente se han debatido diversos temas, asociados con la
Constitución el ejido, el aborto, el padrón electoral, la contaminación del ambiente y el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá, demuestra que somos bitácora del acontecer nacional. Y que si no en todo nos puede asistir la razón, si nos avala la honestidad intelectual con la que debatimos nuestros puntos de vista.
Por nuestra parte, creemos firmemente que el tiempo de cambios que le ha tocado compartir a esta Legislatura con el Presidente Carlos Salinas de Gortari es de un inapreciable valor estratégico. Por eso queremos que se consolide el avance político y económico.
No pensamos que existan panaceas ni para lo político ni para lo económico. Pero que la nueva legislación electoral y el padrón en formación constituyen una gran oportunidad para nuestra democracia.
En el campo económico consideramos que el posible Tratado de Libre Comercio significará una gran oportunidad para activar nuestra potencialidad económica, generar empleo y productividad, y ubicarnos estratégicamente en los tiempos de mayor competencia que le aguardan al mundo.
He tenido el privilegio de participar por segunda vez en la Comisión Permanente. En lo que voy a decir coincido con lo que han expresado otros distinguidos miembros de esta Permanente. Las dos ocasiones bajo la inteligente y segura conducción de Guillermo Jiménez Morales y la discreta pero efectiva vicepresidencia de Juan José Osorio.
Esta segunda ocasión, me permite concluir con objetividad que hemos avanzado en el camino de la racionalidad y la concertación para el uso de nuestro tiempo y la exposición de nuestras ideas.
Para un diputado siempre será una valiosa experiencia ver de cerca parte de la materia constitucional del Senado y, sobre todo, beneficiarse del trato cordial y experimentado de quienes por su trayectoria y merecimientos son senadores de la República.
El tiempo, otra vez el tiempo, nos colocará en diferentes trincheras durante el proceso electoral que se avecina. Nuestra madurez como sociedad, la legislación electoral que fue nuestra responsabilidad directa y la consistencia de los partidos políticos, serán puestos a prueba por el insobornable juez de los acontecimientos.
Pero una vez que de la bruma de la historia surja el nuevo rostro de nuestra realidad política, el tiempo, una vez más el tiempo, nos habrá de obligar a reconocer este tronco común y generoso que ha sido la LIV Legislatura. (Aplausos.)
El Presidente; -Continúe la secretaría con los asuntos del orden del día.
ORDEN DEL DÍA
La secretaria diputada Judith Murguía Corral: -Señor Presidente, se han agotado los asuntos en cartera.
Se va a dar lectura al orden del día de la próxima sesión.
«Comisión Permanente.- Primer Receso.- Tercer Año.- LIV Legislatura.
Orden del día
15 de abril de 1991.
Lectura del acta de la sesión anterior.
Informes de labores.
Designación de comisiones de cortesía.
Declaratoria de clausura.»
El Presidente (a las 13.35 horas): -Se levanta la sesión y se cita a la de clausura que tendrá lugar el próximo lunes, 15 de abril, a las 10.00 horas.