Sumario
El Presidente Informa sobre la enfermedad del diputado electo en el XVIII distrito electoral,Salvador Othón Avila Zúñiga.
Cuarta circunscripción,Manuel Baeza González; segunda circunscripción, Rodolfo ElizondoTorres; Estado de Jalisco: IV distrito, José Pedro Sánchez Ascencio; quinta circunscripción, Francisco Javier Santos Covarrubias; Estado de Jalisco: VII distrito, Francisco Andrés Bolaños Bolaños.
Oficio con el informe de la elección de la mesa directiva para el primer mes del primer periodo de sesiones ordinarias del primer año de ejercicio de la LVI Legislatura. De enterado.
Comunicación de los diputados miembros delPartido Revolucionario Institucional. De enterado.
Partido Revolucionario InstitucionalComunicación de los diputados miembros del Partido Accion Nacional. De enterado
Comunicación de los diplutados miembros delPartido de la Revolución Democrática. De enterado.
Partido de la Revolución DemocráticaComunicación de los diputados miembros delPartido del Trabajo. De enterado.
Partido del TrabajoActa de la sesión de constitución de ese cuerpo colegiado y la designación de su mesa directiva. Se toma nota.
Oficio por el que se comunica. Se toma nota.
Notifíquese a las autoridades que corresponda.
Proposición la Comisión Régimen Interno y Concertación Política, para su integración. Se aprueba. Póngase a disposición de esa comisión, la documentación relativa a la elección de Presidente de la República, para que en su momento emita el dictamen correspondiente.
Proposición de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Poiitica, relativa al nombramiento de ambos funcionarios.
Para razonar el voto, hacen uso la palabra los diputados:
María Guadalupe Cecilia Romero Castillo
José de Jesús Zambrano Grijalva
Joaquín Humberto Vela González
Del diputado Jorge Humberto Padilla Olvera, por actos que calificó de violatorios al fuero constitucional de los diputados.
Sobre el mismo tema expresan sus opiniones los diputados:
Jorge Adolfo Cejudo Díaz
Ricardo Francisco García Cervantes,para rectificar hechos.
Leonel Rangel Godoy Rangel, para rectificar hechos.
El presidente expresa su preocupación y ofrece investigar los hechos para tomar las medidas pertinentes.
Para rectificar hechos, pasa a la tribuna la diputada Leticia Calzada Gómez.
Se aprueba la proposición de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política. Comuniquese .
Comisión y protesta.
Se concede el uso de la palabra al senador Ricardo Monreal Avila, quien informa de la apertura de los trabajadores de la LVI Legislatura de ese cuerpo colegiado. De enterado y agradecimiento del Presidente.
El Presidente da lectura al que regirá las labores de análisis del VI Informe de Gobierno del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, Carlos Salinas de Gortari.
Para fundamentar las posiciones de sus grupos parlamentarios, hacen uso dé la palabra los diputados:
Alfonso Primitivo Ríos Vázquez
Francisco Curi Pérez Fernández
Salvador Beltrán del Río Madrid
María del Rosario Elena Guerra Díaz
Hacen uso de la palabra para analizar el informe de Gobierno, los diputados:
Manuel Marcué y Pardiñas, en contra.
Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, en contra.
Jorge Efraín Moreno Collado, en pro.
Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, para contestar alusiones personales.
Rodrigo Robledo Silva
Oscar Villalobos Chávez
José Narro Céspedes
El diputado Alejandro Rojas Díaz-Durán da lectura a una declaración firmada por todos los grupos parlamentarios, en relación con la iniciativa 187 del Estado de California, Estados Unidos de América.
Continúa el debate y hacen uso de la palabra los diputados:
René Arce Islas, en contra.
Roberto Rafael Campos Cifrián, en pro.
Juan Nicasio Guerrero Ochoa, para rectificar hechos.
María del Carmen Segura Rangel, en contra.
Sebastián Lerdo de Tejada Covarrubias, en pro.
José Narro Céspedes, para rectificar hechos.
Serafín Núñez Ramos, en contra.
Guillermo Héctor Zúñiga Martínez, en pro.
Carlos Navarrete Ruiz, en contra.
El diputado Fernando Antonio Lozano Gracia, denuncla hechos relaclonados con un boletín de la Coordinación General de Comunicación Social de la Camara de Diputados.
Rectifican hechos los diputados:
Ramón Sosamontes Herreramoro
Alejandro Moreno Berry
Se turna a la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política.
Continúan el debate los diputados:
Juan Salgado Brito, en pro.
Jorge Enrique Dávila y Juárez, en contra.
María de la Luz Lima Malvido, en contra.
Ezequiel Flores Rodríguez, en contra.
Victor Samuel Palma Cesar, en pro.
Ramón Sosamontes Herreramoro, en contra.
Heriberto Manuel Galindo Quiñónez, en pro.
Gaspar Eugenio Ortiz Walls, en contra.
Píndaro Urióstegui Miranda, en pro.
El diputado Marco Antonio Ignacio Rascón Córdova, califica de agresión, hechos en contra de manifestantes en el Centro Histórico.
Debaten los diputados:
Oscar Guillermo Levín Coppel
Manuel Marcué y Pardiñas
Gustavo Gabriel Llamas Monjardín, para rectificar hechos.
Luis Sánchez Aguilar
El Presidente turna las proposiciones del diputado Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, a la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política.
Punto de acuerdo firmado por los grupos parlamentarios.
De la próxima sesión. Se levanta la sesión.
ASISTENCIA
Presidencia del diputadoEl Presidente: Proceda la Secretaría a pasar lista de asistencia.
El secretario Adrián Víctor Hugo Islas Hernández: Hay una asistencia de 409 diputados, por lo tanto hay quorum.
El Presidente (a las 11.10 horas): Se abre la sesión.
ORDEN DEL DIA
La secretaria Carlota Angela Rosa Botey y Estape:
«Primer Periodo de Sesiones Ordinarias. LVI Legislatura.
Orden del día
3 de noviembre de 1994.
Lectura del acta de la sesión anterior.
Protesta de diputados electos.
Oficio de la honorable Cámara de Senadores, por el que se comunica la mesa directiva que funcionará durante el primer mes del primer periodo de sesiones ordinarias del primer año de ejercicio de la LVI Legislatura.
Comunicación de la integración de los grupos parlamentarios.
Integración de la Gran Comisión.
Integración de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política.
Proposición de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política, para integrar la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales de esta Cámara.
Proposición de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política, para el nombramiento de oficial mayor y de tesorero de la Cámara de Diputados.
Análisis del VI Informe de Gobierno. Política Interior.»
ACTA DE LA SESION ANTERIOR
La secretaria María Claudia Esqueda Llanes:
«Acta de la sesión de instalación de la Quincuagésima Sexta Legislatura de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, celebrada el día veintisiete de octubre de mil novecientos noventa y cuatro.
Preside el diputadoEn la capital de los Estados Unidos Mexicanos, siendo las once horas con nueve minutos del día veintisiete de octubre de mil novecientos noventa y cuatro, por instrucciones del Presidente de la Comisión Instaladora, la Secretaría da lectura a los artículos dieciséis y diecisiete de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos y, posteriormente, la misma Secretaría da cuenta de las atribuciones de la Comisión Instaladora establecidas en el artículo dieciséis.
Con una asistencia de cuatrocientos ochenta y seis diputados electos, el Presidente declara formalmente abierta la sesión de instalación de la Quincuagésima Sexta Legislatura de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión y se procede a la elección de la mesa directiva.
Realizados el escrutinio y cómputo, la Secretaría informa que se emitieron cuatrocientos ochenta y seis sufragios: treinta y cinco por di versas planillas, uno anulado y cuatrocientos cincuenta por la que encabeza el diputado Humberto Roque Villanueva, como presidente; los diputados Netzahualcóyotl de la Vega García, Francisco José Peniche y Bolio, Roberto Robles Garnica y Alejandro Moreno Berry, como vicepresidentes; Víctor Hugo Islas Hernández, Gerardo de Jesús Arellano Aguilar, Claudia Esqueda Llanes y Carlota Botey y Estape, como secretarios; Juan Salgado Brito, Cristian Castaño Contreras, Jesús Siller Rojas y Serafín Núñez Ramos, como prosecretarios.
El Presidente hace la declaratoria protocolaria y los diputados electos ocupan el lugar que les corresponde en el presidium.
Presidencia del diputadoEl Presidente de la Comisión Instaladora entrega los inventarios correspondientes, la documentación a la que se refieren los artículos dieciséis y diecisiete de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, que se encuentra en custodia de la Oficialía Mayor y agradece a los miembros de la Asamblea su colaboración, al mismo tiempo que declara concluidas las labores de esa comisión.
Puestos todos de pie, el Presidente declara:
"Protesto guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanan; desempeñar leal y patrióticamente el cargo de diputado a la Quincuagésima Sexta Legislatura de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, que el pueblo me ha conferido, mirando en todo por el bien y prosperidad de la Unión y si así no lo hiciere, que la nación me lo demande."
Posteriormente, el mismo Presidente toma la protesta a los diputados electos y declara:
"La Quincuagésima Sexta Legislatura de la Cá mara de Diputados del Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, se declara legalmente constituida."
Inmediatamente después, el mismo Presidente designa las comisiones que informarán al Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a la Cámara de Senadores y a la Asamblea de Representantes del Distrito Federal, la constitución formal de la Quincuagésima Sexta Legislatura de la Cámara de Diputados y que el próximo primero de noviembre de mil novecientos noventa y cuatro, a las ocho horas, se lle vará a cabo la sesión de apertura del Congreso de la Unión.
También da a conocer las comisiones de cortesía que acompañarán al Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, Carlos Salinas de Gortari, de su residencia al recinto del Congreso; para recibirlo en el acto de apertura y para acompañarlo del Palacio Legislativo a Palacio Nacional.
La Presidencia instruye a la Oficialía Mayor, para que continúe con la custodia de la documentación relativa a las elecciones de diputados federales a la Quincuagésima Sexta Legislatura y a la de Presidente de la República para el periodo mil novecientos noventa y cuatro-dos mil, recibida de la Comisión Instaladora y, a las trece horas con siete minutos, levanta la sesión de instalación, citando el primero de noviembre a sesión de Congreso General, en la que el Presidente de la República rendirá su Sexto Informe de Gobierno, a las ocho horas y a la sesión de Cámara de Diputados el día tres de noviembre de mil novecientos noventa y cuatro, a las diez horas.»
Está a discusión el acta... No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba.
Los diputados que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo...
Los diputados que estén por la negativa, sírvanse manifestarlo... Aprobada, señor Presidente.
ESTADO DE MEXICO
El Presidente:
Esta Presidencia tiene constancias suficientes acerca de que el señor diputado electo Salvador Othón Avila Zúñiga, se encuentra enfermo.
PROTESTA DE DIPUTADOS ELECTOS
presidente:
Vamos a proceder de inmediato a tomar la protesta a los diputados electos: Manuel Baeza González, Rodolfo Elizondo Torres, José Pedro Sánchez Ascencio, Francisco Javier Santos Covarrubias y Francisco Andrés Bolaños Bolaños.
Suplicamos a los diputados pasar al frente si son tan amables y le rogamos a la honorable Asamblea ponerse de pie.
Diputados electos: Manuel Baeza González, Rodolfo Elizondo Torres, José Pedro Sánchez Ascencio, Francisco Javier Santos Covarrubias y Francisco Andrés Bolaños Bolaños:
¿Protestáis guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanan y de sempeñar leal y patrióticamente el cargo de diputado a la LVI Legislatura de la Cámara de Diputados del honorable Congreso de la Unión, que el pueblo os ha conferido, mirando en todo por el bien y prosperidad de la Unión?
Los diputados electos Manuel Baeza González, Rodolfo Elizondo Torres, José Pedro Sánchez Ascencio, Francisco Javier Santos Covarrubias y Francisco Andrés Bolaños Bolaños:
Sí, protesto.
El Presidente:
Si así no lo hiciereis, que la nación os lo demande.
Continúe, señor Secretario, por favor.
CAMARA DE SENADORES
El secretario Cristian Castaño Contreras:
«Escudo Nacional. Estados Unidos Mexicanos. Cámara de Senadores. México, Distrito Federal.
Secretario de la Cámara de Diputados. Presente.
Para conocimiento de esa honorable colegisladora, tenemos el honor de comunicar a ustedes, que en junta previa celebrada en esta fecha, se eligió la mesa directiva que funcionará durante el primer mes del primer periodo de sesiones ordinarias del primer año de ejercicio de la LVI Legislatura.
Presidenta, Silvia Hernández; vicepresidentes: Héctor Terán Terán y Félix Salgado Macedonio; secretarios: María Elena Chapa Hernández, Benito Rosel Isaac, Guilebaldo Silva Cota y Guillermo del Río Ortegón; prosecretarios: Judith Murguía Corral, Lucía Carrasco Xochipa, Enrique Franco Muñoz y Crescenciano España Morales.
Reiteramos a usted las seguridades de nuestra atenta y distinguida consideración.
México, Distrito Federal, a 15 de octubre de 1994. Por los secretarios: licenciado Morelos Canseco Gómez, oficial mayor.»
De enterado.
INTEGRACION DE GRUPOS PARLAMENTARIOS
El secretario Adrián Víctor Hugo Islas Hernández:
«Presidente de la mesa directiva de la Cámara de la LVI legislatura. Presente.
Con fundamento en los artículos 70 de la Constitución Federal de la República; 31, 32, 33, 34 y demás relativos de la Ley Orgánica del Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, se hace de su conocimiento lo siguiente: Que los diputados electos a la LVI Legislatura del Congreso de la Unión, pertenecientes al Partido Revolucionario Institucional, en sesión celebrada el 26 de octubre de 1994, decidieron constituirse en el grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional.
Que en la Asamblea mencionada en el párrafo que antecede, los 296 diputados pertenecientes al Partido Revolucionario Institucional, en democrática votación, eligieron al diputado Humberto Roque Villanueva, como líder del grupo parlamentario antes referido y coordinador del mismo.
Lo anterior, se acredita con el original del acta en que se tomaron las decisiones aludidas y que, para los efectos del artículo 33 de la citada ley, se acompaña a este ocurso.
En mérito de lo expuesto, a usted, señor Presidente atentamente solicitamos que una vez examinada la documentación adjunta, emita la declaratoria correspondiente, para los efectos a que haya lugar.
Atentamente.
Democracia y Justicia Social.
México, Distrito Federal, noviembre de 1994. Por el Partido Revolucionario Institucional: diputados, Héctor Hugo Olivares Ventura, José Ramírez Gamero y Rosario Guerra Díaz.»
De enterado.
El secretario Gerardo de Jesús Arellano Aguilar:
«Señor Presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados del honorable Congreso de la Unión. Presente.
En ejercicio del derecho que nos confiere el artículo 70 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como los artículos 2o., 3o., 31, 33, 34, 35 y aplicables de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, los que suscribimos, diputados electos a la LVI Legislatura, hemos tomado la determinación de constituirnos como grupo parlamentario del Partido Acción Nacional.
De la misma forma le comunicamos para todos los efectos de ley, que los integrantes del grupo parlamentario del Partido Acción Nacional hemos decidido elegir como coordinador del grupo al diputado Fernando Antonio Lozano Gracia y como subcoordinadores a los diputados: María Guadalupe Cecilia Romero Castillo, Rodolfo Elizondo Torres, Ricardo Francisco García Cervantes, Juan Antonio García Villa e Hiram Escudero Alvarez.
Las determinaciones a que nos hemos referido, constan en el original del acta celebrada el día 25 de octubre de 1994, misma que adjuntamos al presente ocurso para los efectos del artículo 33 de la Ley Orgánica del Congreso General.
En tal virtud, le solicitamos a usted emita la declaratoria correspondiente para los efectos legales conducentes.
Ciudad de México, Distrito Federal a 1o. de no viembre de 1994. Diputados: Audomaro Alba Padilla y Ricardo Francisco García Cervantes.»
De enterado.
El secretario Serafín Núñez Ramos:
«Diputado Roque Villanueva. Presidente de la mesa directiva. Cámara de Diputados. LVI Legislatura. Presente.
Anexo a la presente el acta de constitución de la fracción parlamentaria del PRD, en la LVI Legislatura de la honorable Cámara de Diputados. La cual está fundamentada en las normas internas del PRD y en base a lo especificado a la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos.
Sin más por el momento le envío un cordial saludo, quedo de usted.
Atentamente.
México, Distrito Federal, a 3 de noviembre de 1994.
Diputado Jesús Ortega Martínez. Coordinador de la fracción del PRD.»
De enterado.
La secretaria Carlota Angela Rosa Botey y Estape:
«Diputado Humberto Roque Villanueva. Presidente de la primera mesa directiva de la LVI Legislatura de la Cámara de Diputados. Presente.
Con base en el artículo 32 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, adjunto al presente el acta constitutiva del grupo parlamentario del Partido del Trabajo y el nombramiento como coordinador del que suscribe.
Agradeciendo de antemano la atención prestada, quedo de usted.
Atentamente.
México, Distrito Federal, a 27 de octubre de 1994.----Diputado Joaquín Humberto Vela González, coordinador del grupo parlamentario del Partido del Trabajo.»
De enterado.
DECLARATORIA
El Presidente:
En virtud de que se ha cumplido con el requisito que establece el artículo 33 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, esta Presidencia declara constituidos los grupos parlamentarios de los partidos: Revolucionario Institucional, Acción Nacional, de la Revolución Democrática y del Trabajo y como sus coordinadores en su orden, a los señores diputados: Humberto Roque Villa nueva, Fernando Antonio Lozano Gracia, Jesús Ortega Martínez y Joaquín Humberto Vela González.
GRAN COMISION
La secretaria María Claudia Esqueda Llanes:
Lectura del acta de la sesión de constitución de la Gran Comisión:
«Presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados de la LVI Legislatura. Presente.
Los suscritos, diputados representantes de la fracción parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional de ésta Cámara, hacemos de su conocimiento lo siguiente: Con fundamento en lo dispuesto por los artículos 38 a 41 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, hemos integrado la Gran Comisión de la Cámara de Diputados a la LVI Legislatura del honorable Congreso de la Unión en los términos del acta que adjuntamos.
Hacemos de su conocimiento lo anterior para los efectos a que haya lugar.
Atentamente.
México, Distrito Federal, a 3 de noviembre de 1994. Diputados: Humberto Roque Villanueva, Héctor Hugo Olivares Ventura, José Ramírez Gamero y Rosario Guerra Díaz.»
«Acta de Integración de la Gran Comisión de la LVI Legislatura de la Cámara de Diputados.
En la ciudad de México, Distrito Federal, siendo las dieciocho horas del día treinta de octubre de mil novecientos noventa y cuatro, se reunieron los abajo firmantes, diputados a la LVI Legislatura de la Cámara de Diputados del ho norable Congreso de la Unión, coordinadores de las diputaciones estatales, del Distrito Federal, primeros de las listas de cada circunscripción y representantes del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, con objeto de integrar la Gran Comisión en términos de lo ordenado por el artículo 38 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos y, en virtud de que la fracción que representamos conforma una mayoría absoluta de diputados, provenientes de la totalidad de las entidades federativas, toman los siguientes acuerdos:
I. La Gran Comisión de la Cámara de Diputados de la LVI Legislatura del Congreso de la Unión, queda integrada con los diputados: Humberto Roque Villanueva, Juan José Osorio Palacios, José Natividad González Parás, Héctor Hugo Olivares Ventura, José Ramírez Gamero, Rosario Guerra Díaz, Sara Esther Muza Simón, Abelardo Carrillo Zavala, Guillermo Zúñiga Martínez, Socorro Ramírez Ortega, Héctor Humberto López Barraza, Leonel Efraín Cota Montaño, Gabriel Escalante Castillo, Alejandro Gutiérrez Gutiérrez, Ignacio Castillo Flores, Walter León Montoya, Saúl González Herrera, Oscar Levín Coppel, José Rosas Aispuro Torres, José de Jesús Padilla Padilla, Píndaro Urióstegui Miranda, Prisciliano Diego Gutiérrez Hernández, Ismael Orozco Loreto, Wilfrido Isidro Muñoz Rivera, Armando Ballinas Mayes, Juan Salgado Brito, Liberato Montenegro Villa, Dante Decanini Livas, José Antonio Hernández Fraguas, Víctor Hugo Islas Hernández, José Manuel García García, Fructuoso López Cárdenas, Heriberto Galindo Quiñones, Alfonso Molina Ruibal, Raúl Ojeda Zubieta, Antonio Sánchez Gochicoa, Joaquín Cisneros Fernández, Tuffy Gaber Arjona, Eustasquio de León Contreras, Francisco Suárez y Dávila, Julio Felipe García Castañeda, Dionisio Pérez Jácome, Dulce María Sauri Riancho, Miguel Rodríguez Ramírez, Luis Garfias Magaña, Mónica Gabriela Leñero Alvarez, Jesús Esquinca Gurusquieta, Augusto Gómez Villanueva, Ignacio Ovalle Fernández, Víctor Samuel Palma César y Luis Priego Ortiz.
II. La mesa directiva de la misma se compondrá de la siguiente manera:
Presidente: Humberto Roque Villanueva; secretarios: Juan José Osorio Palacios y José Natividad González Paras; vocales: Sara Esther Muza Simón, Abelardo Carrillo Zavala y Guillermo Zúñiga Martínez.
III. Comuníquense a la mesa directiva de la LVI Legislatura de la Cámara de Diputados del honorable Congreso de la Unión, los acuerdos anteriores para los efectos de ley.
Primera circunscripción: diputados Francisco Suárez y Dávila y Julio Felipe García Castañeda.
Segunda circunscripción: diputados Humberto Roque Villanueva y José Ramírez Gamero.
Tercera circunscripción: diputados Dionisio Pérez Jácome y Dulce María Sauri Riancho.
Cuarta circunscripción: diputados Miguel Rodríguez Ramírez y Luis Garfias Magaña.
Quinta circunscripción: diputados Jesús Esquinca Gurusquieta y Mónica Gabriela Leñero Alvarez.
Aguascalientes: Socorro Ramírez Ortega; Baja California: Humberto López Barraza; Baja California Sur: Leonel Efraín Cota Montaño; Campeche: Gabriel Escalante Castillo; Coahuila: Alejandro Gutiérrez Gutiérrez; Colima: Ignacio Castillo Flores; Chiapas: Walter León Montoya; Chihuahua: Saúl González Herrera; Distrito Federal: Oscar Levín Coppel; Durango: José Rosas Aispuro Torres; Guanajuato: José de Jesús Padilla Padilla; Guerrero: Píndaro Urióstegui Miranda; Hidalgo: Prisciliano Diego Gutiérrez Hernández; Jalisco: Ismael Orozco Lo reto; México: Wilfrido Isidro Muñoz Rivera; Michoacán: Armando Ballinas Mayes; Morelos: Juan Salgado Brito; Nayarit: Liberato Montenegro Villa; Nuevo León: Dante Decanini Livas; Oaxaca: José Antonio Hernández Fraguas; Puebla: Víctor Hugo Islas Hernández; Querétaro: José Manuel García García; Quintana Roo: Sara Esther Muza Simón; San Luis Potosí: Fructuoso López Cárdenas; Sinaloa: Heriberto Galindo Quiñónez; Sonora: Alfonso Molina Ruibal; Tabasco: Raúl Ojeda Zubieta; Tamaulipas: Antonio Sánchez Gochicoa; Tlaxcala: Joaquín Cisneros Fernández; Veracruz: Guillermo Zúñiga Martínez; Yucatán: Tuffy Gaber Arjona y Zacatecas: Eustasquio de León Contreras; invitado por el Presidente: Ignacio Ovalle Fernández.»
El Presidente: Se toma nota de la constitución y los integrantes de la Gran Comisión.
COMISION DE REGIMEN INTERNO Y CONCERTACION POLITICA
El secretario Adrián Víctor Hugo Islas Hernández:
Lectura al oficio de la constitución de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política.
«Presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados de la LVI Legislatura. Presente.
Los suscritos diputados coordinadores de los grupos parlamentarios de los partidos: Revolucionario Institucional, Acción Nacional, de la Revolución Democrática, del Trabajo y diputados designados por la Gran Comisión de esta Cámara, informamos a usted lo siguiente: Con fundamento en lo dispuesto por los artículos 39 fracción IV, 44 y 45 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, hemos constituido la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política de la Cámara de Diputados de la LVI Legislatura del honorable Congreso de la Unión.
Lo informamos a esa mesa directiva para los efectos correspondientes.
Atentamente.
México, Distrito Federal a 3 de noviembre de 1994. Diputados: Humberto Roque Villanueva, PRI; Fernando Lozano Gracia, PAN; Jesús Ortega Martínez, PRD; Joaquín H. Vela González, PT; Juan José Osorio Palacios, Héctor H. Olivares Ventura, José Ramírez Gamero y Rosario Guerra Díaz.»
«Acta constitutiva de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política.
En el Palacio Legislativo de San Lázaro, Distrito Federal, a las horas del día de noviembre de mil novecientos noventa y cuatro, reunidos los coordinadores de los grupos parlamentarios de la Cámara de Diputados, se integró la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política de conformidad con lo dispuesto por los artículos 39 fracción IV, 44 y 45 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, quedando constituida de la siguiente forma:
Por el PRI: Humberto Roque Villanueva, Juan José Osorio Palacios, Héctor Hugo Olivares Ventura, José Ramírez Gamero y Rosario Guerra Díaz; por el PAN: Fernando Lozano Gracia; por el PRD: Jesús Ortega Martínez; por el PT: Joaquín H. Vela Gutiérrez.
Diputados: Humberto Roque Villanueva, Fernando Lozano Gracia, Jesús Ortega Martínez y Joaquín Humberto Vela G.»
El Presidente:
Se toma nota de la constitución y los integrantes de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política.
De la constitución de los grupos parlamentarios que aquí se han declarado, de la Gran Comisión y de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política, notifíquese a las autoridades correspondientes.
COMISION DE GOBERNACION Y PUNTOS CONSTITUCIONALES
La secretaria María Claudia Esqueda Llanes:
Lectura a la proposición de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política para la integración de la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales.
«Cámara de Diputados de la LVI Legislatura del honorable Congreso de la Unión.Presente.
Los suscritos, integrantes de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política, con fundamento en lo dispuesto por los artículos 42, 43 y 45 fracción II, 47 y demás relativos de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, 65 y 66 del Reglamento Interno del mismo, proponemos a esa honorable Asamblea, para integrar la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales a los siguientes diputados:
Presidente: Dionisio Pérez Jácome; secretarios: Fructuoso López Cárdenas y Ricardo García Cervantes; Armando Ballinas Mayes, José Castelazo y de los Angeles, Eduardo Escobedo Miramontes, Luis Garfias Magaña, Augusto Gómez Villanueva, Ignacio González Rebolledo, Saúl González Herrera, Francisca Ana Krauss Velarde, Ernesto Luque Feregrino, Jorge Moreno Collado, Isidro Muñoz Rivera, Ignacio Ovalle Fernández, Víctor Samuel Palma César, José Ramírez Gamero, Píndaro Urióstegui Miranda, Oscar Villalobos Chávez, Antonio Lozano Gracia, Ricardo García Cervantes, Juan Antonio García Villa, Hiram Escudero Alvarez, Francisco José Peniche y Bolio, Salvador Beltrán del Río, Fernando Pérez Noriega, Jesús Ortega Martínez, Leonel Godoy Rangel, José Mauro González Luna Mendoza, Juan Guerra Ochoa y José Narro Céspedes.
Atentamente.
Palacio Legislativo, noviembre 3 de 1994. Diputados: Humberto Roque Villanueva, Fernando Lozano Gracia, Jesús Ortega Martínez, Joaquín H. Vela González, Juan José Osorio Palacios, Héctor Hugo Olivares Ventura, José Ramírez Gamero y Rosario Guerra Díaz.»
En votación económica, se pregunta si se aprueba la proposición.
Los diputados que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo...
Los diputados que estén por la negativa, sírvanse manifestarlo... Aprobada, señor Presidente.
El Presidente: Con fundamento en el artículo 20 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, póngase a disposición de la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, la documentación relativa a la elección de presidente de la República, para el efecto de que en su momento emita el dictamen correspondiente.
OFICIAL MAYOR Y TESORERO
El Presidente:
Señores diputados, en intercambio de opiniones entre la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política, se tomó conocimiento de la propuesta del Presidente de la Comisión, que ahora se presenta al pleno, para el nombramiento de oficial mayor y tesorero. Por favor, señor Secretario.
El secretario Adrián Víctor Hugo Islas Hernández:
Lectura de la proposición de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política, relativa al nombramiento de oficial mayor y tesorero.
«Cámara de Diputados de la LVI Legislatura del honorable Congreso de la Unión. Presente.
Los suscritos, integrantes de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política, con fundamento en lo dispuesto por el artículo 45, fracción IV de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, proponemos a esa honorable Asamblea, la designación de los ciudadanos Artemio Meixueiro Sigüenza e Isaac Bueno Soria, para desempeñar los cargos de oficial mayor y tesorero, respectivamente, de esta Cámara de Diputados.
Atentamente.
Noviembre 3 de 1994. Diputados: Humberto Roque Villanueva, Fernando Lozano Gracia, Jesús Ortega Martínez, Joaquín H. Vela González, Juan José Osorio Palacios, Héctor H. Olivares Ventura, José Ramírez Gamero y Rosario Guerra Díaz.»
Está a discusión la proposición...
El Presidente:
Para razonar su voto, ha solicitado el uso de la palabra la diputada María Guadalupe Cecilia Romero Castillo. Si es tan amable de pasar a la tribuna.
La diputada María Guadalupe Cecilia Romero Castillo:
Gracias, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
Recuperar la dignidad del Congreso es un reto que todos los integrantes de esta Cámara de Diputados tenemos, estemos conscientes de ello o no.
Después del inicio formal y oficial del primer periodo de sesiones ordinarias de esta LVI Legislatura, ahora iniciamos las sesiones ordinarias y para empezar se nos presenta la designación del oficial mayor y del tesorero de la cámara, como un trámite casi de rutina, pero si estamos convencidos de que recuperar la dignidad significa devolver el valor intrínseco que la cosa tiene, si concebimos a la Cámara de Diputados como el recinto donde debe expresarse el sentir de la nación a través de cada uno de nosotros en lo particular y de todos nosotros como cuerpo colegiado, es necesario, imprescindible, que revisemos cada uno de los actos que se realizan para que se apeguen a la norma y para que a través de ello contribuyan a hacer de nuestro diario ejercicio un ejercicio representativo y democrático.
¿Qué es el oficial mayor? ¿Cuáles son sus atribuciones? Estas están dispersas de manera un tanto sin orden, sin concierto, en la Ley Orgánica del Congreso y en el Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso.
El oficial mayor es el que se encarga de la administración de la cámara, el responsable de la documentación que entra y que sale, el que tiene que ver con presupuestos y con servi cios y con personal y con atenciones; el oficial mayor es el gran coordinador de la cosa doméstica, es el facilitador por excelencia de los trámites y de los requerimientos de todos y de cada uno de los integrantes de esta representación nacional.
¿Y qué decir del tesorero? La descripción de su puesto es más universal y mejor entendida que la del oficial mayor; es el que cuida el "tesoro"; es el distribuidor de las facilidades económicas para el mejor cumplimiento de nuestra responsabilidad.
Y la misión esencial de estos dos personajes que ahora estamos a punto de designar, es servir a la cámara, entendida ésta como compuesta por grupos parlamentarios, por diputados, por representaciones diversas y distintas.
El oficial mayor y el tesorero deben servir a todos los grupos parlamentarios y a todos los diputados; la atención para cada grupo debe ser de excelencia, sin preferencia ni distinción; sin atavismos ni complejos; sin cortesanías, ni mucho menos pensando en exclusivismos.
Y el oficial mayor y el tesorero deben velar porque todos los diputados y cada uno de ellos tengan las facilidades para cumplir su deber en las mejores condiciones y con el mayor ahorro; no servir a partidos ni mucho menos a líderes. Servir con equidad, con justicia, propiciar espacios físicos adecuados, personal calificado, información oportuna, atención esmerada, respuesta pronta; eliminar conceptos facciosos de privilegio; evitar favoritismos serviles; desterrar discriminaciones groseras; respetar la dignidad del chofer, del mensajero, de la taquígrafa, de la secretaria; mejorar las condiciones de trabajo del personal de la cámara, sindicalizado o no; apoyar, en suma, el trabajo de todos y de cada uno, para que todos y cada uno logremos contribuir a recuperar la dignidad del Congreso.
Señores, no nos confundamos ni contribuyamos a la confusión, la oficialía mayor y la tesorería recibirán un mandato de esta Asamblea, no de un partido ni de un líder.
Y por cierto, todavía no hay oficial mayor en esta cámara, porque en este acto se le nombrará, y resulta que hoy en la mañana, antes de empezar la sesión, se trató de impedir la entrada a este recinto a un grupo de personas que estaban en uso de su libertad de expresión, ofreciendo a la venta el periódico Reforma y, se les dijo que no podían pasar a este recinto por órdenes del oficial mayor. El oficial mayor, es una figura hasta este momento inexistente, porque esta Asamblea no lo ha nombrado y, peor aún, también se llegó a expresar que no podían entrar hasta que el líder lo decidiera.
Señores, esta Asamblea es la que designa al oficial mayor, no puede ser designado nunca por un líder ni por un grupo parlamentario en particular.
Esto no se puede permitir, estamos comenzando la LVI Legislatura y debemos comenzar bien. Hagamos las cosas bien en lo interno, respetemos los reglamentos, respetemos las normas para tener autoridad moral hacia afuera.
El grupo parlamentario de Acción Nacional hace desde aquí, una exigente exhortación a todos y especialmente al coordinador de los diputados del PRI y a los miembros de ese grupo parlamentario, para que desechemos los lastres y sepamos el trabajo y la función que cada uno debe desempeñar aquí.
Asumamos a plenitud nuestro papel y, al oficial mayor que sea nombrado y al tesorero que también sea designado por esta Asamblea, que cumplan su obligación de servir, para que todos podamos cumplir nuestra obligación de servir a México. Muchas gracias.
El Presidente:
Oportunamente solicitó la palabra el diputado José de Jesús Zambrano, para fijar su posición.
El diputado José de Jesús Zambrano Grijalva:
Muchas gracias, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
Nosotros, en el grupo parlamentario del PRD, también queremos desde un principio dejar muy claro, que consideramos absolutamente necesario inaugurar desde un principio una nueva etapa en los trabajos de esta cámara, y que sea verdaderamente nueva en el sentido de que no se puede seguir concibiendo en su manejo unilateralmente por una sola de las bancadas, en este caso la bancada mayoritaria, es decir, sin que se desarrollen decisiones colegiadas.
Hace un momento incluso, se nos informó en los términos de la Ley Orgánica del Congreso de la Unión, la integración de la Gran Comisión así denominada. Si nosotros analizamos los contenidos de los artículos correspondientes a la integración de esta Gran Comisión, nos vamos a dar cuenta de que prácticamente esta Cámara de Diputados, deposita en un solo partido el manejo de los aspectos fundamentales que corresponden a lo que debiera ser un trabajo mucho más colegiado, un trabajo verdaderamente concertado.
Es nuestro deseo, en este sentido, que encontrando los aspectos que nos permitan, sacándole por así decir, incluso la vuelta, pero asumiendo también la necesidad de modificar algunos aspectos de la normatividad que nos está rigiendo, que poniendo por delante la voluntad política de los distintos grupos parlamentarios, podamos efectivamente avanzar a lo que nosotros le llamaríamos un verdadero cogobierno de esta Cámara de Diputados.
Es decir, que todos los órganos de gobierno y administrativos, se integren y funcionen sobre la base de la concertación política y que no sea una imposición de un solo grupo parlamentario. Estamos pensando desde luego en las propuestas que se nos están haciendo, estamos pensando en el manejo de la dirección de Comunicación Social, que no sirva sólo para lavar o para manejar una imagen positiva de uno o varios diputados o de un solo grupo parlamentario.
En este sentido, nosotros efectivamente también consideramos que el oficial mayor y el tesorero de la cámara no pueden asumirse como servidores de un grupo en especial, sino del conjunto de los diputados, como tampoco tomar decisiones autoritarias que afecten el trabajo de los diputados. Aquí se hizo mención hace un momento de lo que pasó con los compañeros del periódico Reforma, que incluso a los propios diputados que bajamos a tratar de que entraran se nos impedía la salida y luego después se nos impedía la entrada al recinto parlamentario por la puerta principal y, se generó a nuestro juicio, un escándalo innecesario propiciado por personal al servicio de esta cámara, atentando contra el trabajo de uno de los medios que hoy están luchando por la libertad de prensa aquí en esta cámara, que debe ser defensora incondicional de estas libertades.
Yo creo que estas acciones que rayan en la torpeza política, no debiéramos nosotros propiciarlas desde ningún sentido.
No es pues, no se trata, desde nuestra perspectiva, de una objeción a las personas propuestas para los cargos que se nos han señalado, mucho menos oponernos a las propuestas porque provengan principalmente de un grupo parlamentario, en este caso el mayoritario, aunque vengan concertadas con los coordinadores de los demás grupos; más bien debe entenderse nuestra posición como una constructiva que hace votos, como se dijo al principio, porque empecemos a construir en esta cámara, este nuevo momento que corresponde a la pluralidad y composición de la misma como reflejo de lo que sucede en el país, para manejarnos con respeto, con civilidad, con decisiones colegiadas y que pensemos verdaderamente en que los grandes asuntos que corresponden al conjunto de los grupos parlamentarios, no tengan que asumirse de una manera unilateral y autoritaria. Muchas gracias, señores.
El Presidente:
Ha solicitado la palabra también el diputado Joaquín Humberto Vela González. Si es tan amable.
El diputado Joaquín Humberto Vela González:
Muchas gracias, señor Presidente; señoras y señores diputados:
Nos parece muy importante que en este punto del nombramiento del oficial mayor y del tesorero de la Cámara de Diputados, sentemos las bases de cuál deberá ser nuestro trabajo en el futuro; empezar bien es una buena norma para poder efectivamente dignificar el trabajo legislativo. El criterio debe ser muy elemental, los trabajos, las necesidades y requerimientos de trabajo administrativo tienen que estar al servicio del trabajo legislativo.
Lo que no podemos permitir, es que toda la estructura administrativa se monte sobre la estructura de carácter legislativo, por ello vemos con simpatía que las opiniones de los diversos partidos nos señalan la necesidad de buscar establecer un conjunto de normas que permitan que estas funciones del oficial mayor y del tesorero estén claramente normadas por la comisión que los propone y que tengan que rendir informes al pleno de la Cámara de Diputados; es decir, a diferencia de ocasiones anteriores, donde era la Gran Comisión la que proponía al oficial mayor, es ahora la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política donde están los partidos.
Debemos, por lo tanto, tener en primera instancia, que los informes de estos funcionarios tengan que ser rendidos a esa comisión y los informes generales sobre el conjunto del patrimonio del Poder Legislativo de la Cámara de Diputados, pueda tener una permanente transparencia y un manejo muy eficaz y eficiente para que el trabajo legislativo pueda llevarse a cabo en las mejores condiciones.
Sin embargo, es importante hacer un señalamiento. Yo creo que necesitamos normar lo más posible el funcionamiento de estas actividades. No debe ser de ninguna manera un ma nejo patrimonialista de los recursos de la cámara, tiene que buscarse que participen las diferentes fracciones y que puedan ser utilizados para beneficio del Poder Legislativo, pero en lo fundamental, para beneficio del pueblo.
Con respecto a lo que se señalaba, no tienen que ser atribuciones del oficial mayor decidir si entran o no grupos de la población mexicana. ¿De qué se trata? ¿De que nos aislemos y no permitamos que las expresiones de la propia ciudadanía puedan llegar a la cámara? Yo creo que ése es un asunto de carácter político que tendría que ser discutido en la propia Comisión de Régimen Interno y Concertación Política y no atribuciones de este tipo. Yo creo que si empezamos a sentar estas bases, podremos efectivamente estar tratando de encontrar mecanismos que nos permitan realizar de la mejor manera nuestro trabajo. Muchas gracias.
DENUNCIA
El Presidente:
Ha solicitado la palabra asimismo, el diputado Jorge Padilla Olvera.
El diputado Jorge Humberto Padilla Olvera:
Honorable Asamblea; señor Presidente:
Vengo aquí a exigir que no se me vuelva a impedir el acceso a ningún recinto de este Congreso. Esta mañana, por órdenes de no sé quién, tres veces se me impidió el paso. Primeramente por un destacamento de antimotines del Departamento del Distrito Federal se me impidió el paso a mí y al compañero Ricardo, diputado también ante este Congreso, con un grupo de amigos invitados nuestros a dialogar con el Congreso en pleno, con la comisión que el Congreso designara. Arbitrariamente, con escudos de no sé qué material, se nos impedía la entrada al túnel que atraviesa la avenida Congreso de la Unión. Posteriormente, después de exigir y nos identificamos plenamente como diputados ante esta sala, esperamos el tiempo prudente que fue más de lo que realmente yo estoy dispuesto a tolerar, a que recibiera órdenes ese señor, de no sé de parte de quién. No las recibió; forzamos el paso, atravesamos el túnel y nuevamente ante la entrada de este Congreso, en la reja de hierro de la puerta, nos fue impedida la entrada, después de identificarnos plenamente como diputados ante este Congreso por personal de este Congreso que está a nuestro servicio y yo respeto a ese personal y los respetamos, no los agredimos. Simple y sencillamente pedimos lo que nos corresponde.
Y otra vez se nos dijo que por órdenes de un oficial mayor, que entiendo yo que no existía en ese momento, nos fue nuevamente impedida la entrada. Gracias a los refuerzos de otros diputados que llegaron por la retaguardia de ellos, pudimos forzar la entrada a esa reja de hierro y, nuevamente en la puerta de vidrio, nos fue impedido el acceso. ¡Basta, señores! Basta que se nos violen nuestros derechos de ciudadanos, nuestros derechos constitucionales como diputados.
A usted, señor Presidente, le exijo, porque es su responsabilidad ¡velar por el fuero de los diputados y por el derecho de los ciudadanos! Gracias, señores.
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado Jorge Cejudo.
El diputado Jorge Adolfo Cejudo Díaz:
Muchas gracias, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
Yo creo que no se trata, de ninguna manera, de imponer criterios patrimoniales en este tipo de nombramientos. Los candidatos propuestos aquí tienen un claro perfil para cumplir con honestidad, con responsabilidad y eficiencia las labores inherentes a los puestos. Ambos tienen una amplia experiencia legislativa, conocen a fondo, en verdad, los trabajos de la cámara; tienen la sobrada sensibilidad para comprender y apoyar a todos los diputados sin importar la fracción parlamentaria a la que pertenecen. Serán, sin lugar a dudas, salvaguarda de la dignidad de esta soberanía.
Sobre el molesto incidente, con personal del periódico Reforma, lo único que podemos decir es: que aún no hay oficial mayor; es precisamente el tema que estamos tratando en este momento y todo se limitó a la iniciativa de un empleado menor de esta cámara.
Por supuesto que los diputados del Partido Revolucionario Institucional, somos los primeros en defender los principios de la libertad de expresión y en apoyar en sus demandas a los medios de comunicación de este país y de todo el mundo.
Sobre el incidente del diputado que me precedió en el uso de la palabra, Jorge Padilla Olvera, nuestro partido pide que se haga una investigación y que definitivamente se le dé plena satisfacción, en caso de haber sido violado su derecho.
Estamos, compañeros, iniciando los trabajos de la LVI Legislatura, ¡hagámoslo con cordura, hagámoslo con serenidad, hagámoslo con un gran espíritu de servicio!
Por lo tanto, yo siento que debe procederse a continuación, señor Presidente, a cumplir con lo establecido en el artículo 45 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos. Muchas gracias.
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado Ricardo García Cervantes, para rectificar hechos.
El diputado Ricardo Francisco García Cervantes:
Con el permiso de la Presidencia; compañeras y compañeros diputados:
Si un empleado menor tiene tal poder, ¡ qué podrán hacer de los diputados y de las diputadas los empleados mayores! Señor Presidente, es su responsabilidad salvaguardar el fuero constitucional y las garantías de las diputadas y diputados de esta legislatura.
Señor Presidente, ningún diputado, y yo primero que ellos, podremos tolerar una arbitrariedad más, sin que se asuma la responsabilidad por la Presidencia de la cámara. Ningún diputado deberá ser impedido en el acceso a este Congreso, hasta recibir instrucciones del oficial mayor. Una vez recibidas las instrucciones del oficial mayor para dejarnos pasar por el túnel custodiado, como ya se dijo aquí, por un destacamento de granaderos, se nos dijo a la entrada de la cámara, que no podíamos pasar, porque veníamos acompañados del director del periódico Reforma, el señor Alejandro Junco; el señor Héctor Moreno, subdirector; el señor Germán Dehesa, Miguel Angel Granados Chapa y no podríamos tener acceso hasta recibir instrucciones del líder.
Posteriormente, esperando pacientemente las instrucciones del líder, aclarando al personal que evitaba el ingreso a un grupo de personas, acompañados por dos diputados federales, se nos instruyó o más bien se nos informó que no podríamos entrar a la Cámara de Diputados, hasta que llegara la comisión de diputados. ¡No es éste un hecho aislado que yo pueda tolerar! ¡Un diputado no está sujeto a que llegue una comisión para introducirlo a la cámara! ¡Esta es responsabilidad del Presidente de este Congreso, de esta legislatura!, y hoy, hoy que se va a elegir a un oficial mayor, el voto de cada diputado representa el mandato de servir y facilitar los trabajos de toda la cámara. ¡No habrá instrucciones del líder, no esperaremos llegadas de comisiones; cada diputado está dotado de un fuero y debe contar con las facilidades!
¡Si es, como aquí se dijo, un empleado menor, primera enseñanza, que tengan posibilidades de identificarse para no venir a esta tribuna sin saber el nombre de quien violenta los derechos de los diputados!
¡A través de sistemas de radio y por teléfono, consultaban al líder, consultaban al oficial mayor! Bien, que en esta tribuna alguien se responsabilice hacia el futuro, con la ley y el reglamento en la mano como condiciones de operación civilizada de esta cámara.
El artículo 13 de la Ley Orgánica del Congreso, establece que: "...los recintos del Congreso y de sus cámaras son inviolables. Toda fuerza pública está impedida de tener acceso a los mismos, salvo con permiso del Presidente del Congreso". Este destacamento de granaderos tenía comunicación directa al interior de la cámara. Ahí se nos aclaró que estaban esperando instrucciones de una autoridad al interior de la cámara. Siendo fuerza pública, está en los términos de este reglamento bajo el mando del Presidente de la Cámara de Diputados.
Posteriormente, en los dos accesos ya internos del recinto de esta cámara, personal, sin identificación, obstruyeron el acceso de su servidor con las personas que he mencionado me acompañaban. Aquí, dijeron que eran órdenes del oficial mayor.
¡Señor oficial mayor que hoy será nombrado por esta cámara: el voto de los diputados de Acción Nacional representan el mandato de servir por igual a todos los miembros de esta cámara. Cuando hoy los diputados del PAN votemos a favor de la propuesta de su nombramiento, sépase que estamos dando un voto de confianza de que sabrá conducir, con imparcialidad, con apego a la ley y respetando a las señoras y señores diputados miembros de este Congreso!
Adicionalmente y no entrando al tema motivo del cual se hicieron presentes el señor Alejandro Junco y sus acompañantes, hubo una comisión de diputados de todos los grupos par lamentarios, que son cabalmente testigos del atropello del que fuimos objeto. No entro al tema de esa comisión, porque serán ellos quienes podrán dar cuenta al pleno de esta cámara sobre el tema que vinieron a tratar y los compromisos que como cámara pudiéramos asumir.
Por ahora, personalmente establezco la responsabilidad del atropello del que fui objeto en la Presidencia de esta cámara y esperaré la satisfacción que corresponde, simplemente de saber quiénes fueron, qué papel juegan, qué puestos tienen, qué capacidad de decisión tienen en esta cámara, porque si son empleados menores, no quiero estar en manos de los empleados mayores. Gracias.
El Presidente:
Para rectificar hechos, el diputado Leonel Godoy.
El diputado Leonel Godoy Rangel:
Muchas gracias, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
El punto que se está tratando en este momento en el orden del día, es un asunto de suma importancia para los futuros trabajos de esta Cámara de Diputados. A mí me parece que el nombramiento del oficial mayor y del tesorero, no es un asunto menor ni siquiera mayor, es un asunto sustancial que no puede ser medido cuantitativamente, sino sólo cualitativamente.
Efectivamente, los que hemos estado ya cumpliendo funciones de diputados, hemos sabido, hemos conocido, hemos sufrido cuál es el funcionamiento, cómo han funcionado, no nada más el oficial mayor y el tesorero, sino el aparato que se encuentra detrás de ellos y éste es el punto precisamente, esto es lo sustantivo del asunto que se está discutiendo el día de hoy.
¿Cuáles son las funciones del oficial mayor y cuáles son las funciones del tesorero? Si estamos al espíritu nuevo de la Ley Orgánica renovada, que rige el funcionamiento de esta legislatura, pareciera que efectivamente debemos de vivir tiempos mejores de consensos, de pluralidad, de tolerancia y fundamentalmente de cumplimiento estricto de la ley. Y ¿qué está ocurriendo?, ¿qué ocurrió en la comisión ésta novedosa para algunos de nosotros, de Régimen y Prácticas Parlamentarias, donde están nuestros "coordinadores"? ¿Qué ocurrió? Que se está presentando de propuesta a dos personajes cuya calidad personal no es el punto a debatir, sino fundamentalmente su funcionamiento práctico como ha ocurrido en estos días y como puede ocurrir en los próximos días si nosotros no nos oponemos a esa manera de designar y a ese tipo de personajes a quedar en esos puestos en la titularidad de esos cargos.
Efectivamente, por ejemplo, el día 1o. de noviembre, que ya estábamos nosotros en funciones, que ya es esta legislatura estuvo aquí presente el Estado Mayor Presidencial. Alguna ocasión esta Cámara de Diputados o el Congreso General de la Unión, aprobó y autorizó la presencia de esta fuerza pública, ya que expresamente está la disposición legal y constitucional de que no pueden ingresar al recinto parlamentario. ¿Alguien de ustedes participó y votó a favor o en contra de que no se permitiera el acceso de los diputados al estacionamiento de esta cámara al que todos tenemos derecho?; ¿alguien de ustedes votó a favor o en contra de la presencia de los granaderos el día de hoy aquí alrededor del recinto parlamentario? Estamos convencidos que ello no ocurrió, desgraciadamente hay una práctica inveterada, absolutamente antidemocrática, primero porque de hecho empiezan a ejercer funcionarios administrativos de esta cámara desde antes de ser nombrados, e insisto, no es un asunto en contra de ninguno de los posibles personajes que vayan a ser nombrados; son los procedimientos que se utilizan y las prácticas que no se abandonan.
Por ese motivo, yo creo que nosotros no podemos dejar pasar esta oportunidad para protestar enérgicamente en contra de esto. Sabemos cuál es el origen político de lo que estamos escuchando aquí en los corrillos, en los pasillos de esta cámara, de los que van a ser propuestos para ocupar la titularidad de la oficialía mayor y de la tesorería.
Ellos, como bien lo vino a decir un compañero, tienen experiencia legislativa pero en funciones de su partido, del Partido Revolucionario Institucional. De acuerdo al espíritu de la Ley Orgánica del Congreso, el oficial mayor y el tesorero, son de toda la Cámara de Diputados, no deben de obedecer a ningún lineamiento ideológico de ningún grupo parlamentario, deben de ser imparciales y fundamentalmente tienen que apegar su actuación estrictamente en lo que la ley disponga, en este caso la Ley Orgánica y el Reglamento del Congreso General.
¿Nos lo garantizan estas propuestas que vamos a votar en un momento más? ¿Garantizan más imparcialidad y ese cumplimiento de la ley? Es evidente que no. Ya están aquí protestando compañeros diputados por ese exceso, por esa extralimitación que va más allá de las disposiciones legales de la materia y que además sabemos que cuando nombran a los funcionarios de esos cargos respectivos, todos los directores generales, no nada más piden mejores y mayores prerrogativas que los propios diputados, sino todos responden a una sola línea política, a un solo partido político.
Yo estoy de acuerdo y es una regla parlamentaria que la mayoría decida; estoy de acuerdo con ello, pero es también... si se está hablando de nuevos tiempos y de voluntades políticas hacia el cambio, de buscar los consensos y los consensos tienen que ser con personas que garanticen esa imparcialidad y esa legalidad.
Por ello yo los invito, a todos los diputados que han subido a esta tribuna y a los que están de acuerdo con lo que estamos diciendo, que voten en contra y protestemos enérgicamente, porque esas prácticas deben de acabarse definitivamente, no nada más porque violan el espíritu de la nueva Ley Orgánica del Congreso, sino porque van en contra de las nuevas corrientes, de los nuevos vientos que soplan en este país, de hacer un cambio democrático, plural, tolerante, donde no una sola fuerza se imponga por el voto mayoritario exclusivamente. Muchas gracias.
El presidente:
Esta Presidencia lamenta profundamente el incidente... un segundo, por favor. La Presidencia lamenta el incidente que nos ha sido relatado en esta sesión; desde luego estaremos tomando las iniciativas correspondientes para llevar a cabo la investigación necesaria, se tomarán las medidas reglamentarias a que haya lugar y buscaremos desde luego todos los medios para evitar que este tipo de actos puedan repetirse en el futuro.
Esperamos, señor diputado, tener el primer informe en la siguiente sesión.
Para rectificar hechos, tiene la palabra la diputada Leticia Calzada.
La diputada María Leticia Calzada Gómez:
Gracias, señor Presidente; compañeras diputadas, compañeros diputados:
Hoy inicio mis funciones de representante de la nación, sabiendo lo que representa el Poder Legislativo y me encuentro con que compañeros diputados son atropellados en su fuero y me encuentro acompañando a un grupo de diputados a recibir a los periodistas del periódico Reforma, encabezados por su presidente, el licenciado Alejandro Junco, ejemplo de periodista que promueve el periodismo libre en nuestro país.
Me encuentro con mis compañeros diputados del Partido Acción Nacional, parados del otro lado de la reja, todo mundo impidiéndoles la entrada.
Aquí se ha hablado de la propuesta de un oficial mayor y se culpabiliza al oficial mayor yo creo que el oficial mayor ha recibido instrucciones de su jefe.
A mí me preocupa mucho, compañeros, que el oficial mayor asuma sus funciones como el empleado del líder del Congreso, me preocupa muchísimo; me preocupa muchísimo que no revise sus funciones y las asuma responsablemente e inicie antes de que lo nombremos en su cargo, una conducta de empleado de un líder. Para mí ése es el fondo que debemos discutir, ¿por qué el pretendido señor oficial mayor respondió de esa manera?, seguramente porque siguió instrucciones.
Yo quisiera compartir con ustedes esta reflexión, antes de que votemos por este cargo tan importante para nuestro trabajo, porque yo espero que el oficial mayor que esté en la cámara, apoye y facilite el trabajo de los diputados, nos apoye en la importante tarea que iniciamos hoy y no solamente que reciba instrucciones y sienta que es un empleado de un líder de este Congreso. Muchas gracias.
OFICIAL MAYOR Y TESORERO (II)
El Presidente:
Proceda la Secretaría a tomar la votación económica.
El secretario Adrián Víctor Hugo Islas Hernández:
En votación económica, se pregunta si se aprueba la proposición.
Los diputados que estén por la afirmativa, sírvanse manifestarlo levantando la mano...
Los diputados que estén por la negativa, sírvanse manifestarlo... Aprobada. Comuníquese.
El Presidente:
Se encuentran a las puertas de este recinto los ciudadanos Artemio Meixueiro Sigüenza e Isaac Bueno Soria. Se designa para que los introduzcan, a fin de que rindan la protesta de ley, a los siguientes diputados: Abelardo Carrillo Zavala, Mónica Leñero y Juan Guerra, si son tan amables.
La secretaria María Claudia Esqueda Llanes:
Se ruega a los presentes ponerse de pie.
El Presidente:
Ciudadanos Artemio Meixueiro Sigüenza, e Isaac Bueno Soria:
¿Protestáis desempeñar leal y patrióticamente el cargo que se os ha conferido y guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanan mirando en todo por el bien y prosperidad de la Unión?
Los ciudadanos Artemio Meixueiro Sigüenza e Isaac Bueno Soria:
¡Sí, protesto!
El Presidente:
Si así no lo hiciereis, que la nación os lo demande.
SENADO DE LA REPUBLICA
El Presidente:
Esta Presidencia ha sido informada de que se encuentra en las puertas de este recinto una comisión de senadores que vienen a participar de la instalación de la Cámara de Senadores. Se designa en comisión para introducirlos, a los siguientes diputados: Javier Pineda Serino, Efrén Leyva y Serafín Núñez. Se ruega a la comisión cumplir con su cometido.
Tiene la palabra el senador Ricardo Monreal Avila.
El senador Ricardo Monreal Avila:
Presidente de la Cámara de Diputados; señoras y señores diputados:
De conformidad con el artículo 64 de la Ley Orgánica, los senadores Wilebaldo Silva Cota, José Ramón Medina, Félix Salgado Macedonio, Benito Rosell Isaac y el de la voz, venimos a comunicar la apertura del primer periodo de sesiones de la Cámara de Senadores del primer año de ejercicio de esta LVI Legislatura.
Deseamos expresar a esta Cámara de Diputados, el saludo respetuoso de los integrantes del Senado de la República y del Presidente de la Gran Comisión, Fernando Ortiz Arana. Sin duda habremos de vivir ambas cámaras experiencias inéditas, habremos de compartir momentos de discusión y debate álgidos sobre posiciones y puntos de vista similares, dispares y hasta encontrados. Esta es la vida en el parlamento y en el Poder Legislativo, pero, quizá sea la actividad más rica y la más sensible en la vida de la República.
Hoy, el Senado de la República, que históricamente se había mantenido inalterable en su naturaleza jurídica y en su composición, experimenta una nueva fase, una nueva etapa y refleja una esperanza ciudadana de que la pluralidad política se fortalezca y se consolide, pero también los ciudadanos mexicanos desean se conserve su tradición política de serenidad, de sensatez, de reflexión, de prudencia en el quehacer legislativo y en la discusión política, económica y social. Firmemente creemos que así será. Debemos admitir que nos situamos todos los protagonistas políticos en la construcción de un México mejor.
Los legisladores tenemos una gran responsabilidad: diseñar un marco jurídico más justo e igualitario y exigir la observancia fiel del estado de derecho. No hacerlo así resultaría nulatorio e innecesaria nuestra presencia y nuestra obligación constitucional.
Reciban todas las diputadas y los diputados nuestros parabienes y deseos de éxito en este primer periodo de sesiones. Que sea la causa de la nación el interés supremo del Congreso de la Unión. Reiteramos nuestros respetos.
El Presidente:
La Cámara de Diputados se ha enterado de la instalación del primer periodo de sesiones ordinarias del primer año de ejercicio de la LVI Legislatura del Senado de la República. Agradecemos la visita de los señores senadores Ricardo Monreal Avila, Wilebaldo Silva Cota, Benito Rossell Isaac, Félix Salgado Macedonio y José Ramón Medina Padilla. Para todos, éxito en sus labores.
Se ruega a la comisión designada acompañar a la comisión de los señores senadores cuando deseen retirarse.
ACUERDO PARLAMENTARIO
El Presidente:
El siguiente punto del orden del día es el análisis del Vl Informe de Gobierno en sus capítulos de política interior. Para tal objeto, esta Presidencia informa que se ha llevado a cabo un acuerdo económico de las fracciones parlamentarias que componen esta Cámara de Diputados. Este acuerdo consiste: primero, en que la sesión a que se refiere el presente acuerdo en materia política interior, se verifique el día de hoy, 3 de noviembre. Para el desarrollo y exposiciones correspondientes, cada grupo parlamentario, a través de un orador, hará uso de la palabra por 15 minutos, para fijar su posición.
El orden en que intervendrán los oradores previamente designados será el siguiente: en primer lugar el grupo parlamentario del Partido del Trabajo; en segundo lugar el grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática; en tercer lugar el grupo parlamentario del Partido Acción Nacional y en cuarto lugar el grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional.
Una vez fijadas las posiciones de los grupos parlamentarios, se abrirá la lista de oradores, si los hubiera, en contra y en pro.
Se han registrado para dar cumplimiento a la primera parte del acuerdo y para fijar posiciones, por el Partido del Trabajo, el señor diputado Alfonso Primitivo Ríos Vázquez; por el Partido de la Revolución Democrática, el diputado Francisco Curi; por el Partido de Acción Nacional, el diputado Salvador Beltrán del Río y por el Partido Revolucionario Institucional, la diputada Rosario Guerra.
VI INFORME DE GOBIERNO POLITICA INTERIOR
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado Alfonso Primitivo Ríos Vázquez.
El diputado Alfonso Primitivo Ríos Vázquez:
Señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
Para determinar la validez del informe del Gobierno y su aporte efectivo al examen crítico de la realidad nacional, debe de partirse de criterios objetivos que atañen a la caracterización de la situación histórica por la que atraviesa el país.
En el caso específico del último informe del licenciado Salinas de Gortari, es necesario tener presente una consideración adicional: cuando el Presidente asumió el poder en 1988, como respuesta a la crisis política y al cuestionamiento e impugnación de amplios sectores de la sociedad, estableció el compromiso de modernizar al país para superar la crisis estructural y promover el bienestar, la seguridad y democracia del pueblo mexicano.
Al lado de ese compromiso formuló el reconocimiento de que se había agotado el modelo, tanto económico como sociopolítico que heredamos de la Revolución y las reformas de los años treinta y cuarenta y que por tanto su compromiso global era iniciar la construcción de uno nuevo que reinsertara a México en el concierto mundial de naciones.
El mérito de su administración, vista seis años después, fue haber emprendido, aunque haya sido tardíamente, esa reforma de dimensión histórica que el país requería urgentemente e incluso haber avanzado decisivamente en dicho camino.
Por las consideraciones anteriores, avalamos en el informe la defensa del cambio; sin embargo, discrepamos de la forma o modalidad que adoptó dicho cambio que a la larga fue contraproducente o ineficaz al objetivo central de brindar mayor bienestar al conjunto del pueblo mexicano.
Hoy en día, Salinas de Gortari está por entregar la administración pública habiendo fracasado en su política de recuperación del crecimiento económico a los niveles requeridos, crecimiento que es la base para distribuir equitativamente los frutos del proceso de modernización.
En materia de política interior, el balance del último año de Gobierno del licenciado Salinas de Gortari, no puede dejar de ser una evaluación de todo el sexenio. En ello nuestro deber como legisladores, es evitar los extremos, ni ciega intransigencia ni complacencia obsequiosa, más bien análisis crítico y sereno como lo exigen las delicadas circunstancias que vive el país.
La fracción parlamentaria del Partido del Trabajo, considera que los resultados de la política interior de esta administración fueron insatisfactorios y contraproducentes. De hecho la reforma democrática con la que se comprometiera el presidente Salinas al inicio de su mandato, legará a la siguiente administración dificultades de tal magnitud que constituyen una verdadera crisis de Estado: la guerra suspendida en Chiapas y sus perspectivas de solución en el corto plazo, la lucha sangrienta por el control del partido oficial y del Gobierno, que ya cobró dos víctimas entre sus altos dirigentes, la falta de credibilidad en las instituciones republicanas por parte de la ciudadanía y la necesidad de derrotar al narco poder y erradicarlo de las instituciones públicas.
Desafortunadamente para el país los hechos desmintieron al licenciado Salinas de Gortari. A un año de concluir su mandato ratificaba que su objetivo fundamental era llevar a cabo la reforma de la revolución, lo cual consistía en realizar cambios por la vía de construir consensos en lo económico, lo político y lo social, de modo que se volviera parte de la vida institucional del país. Nadie puso en duda esa necesidad, pues las condiciones del mundo actual así lo estaban exigiendo.
Lo que se puso a debate y no atendió debidamente el Gobierno, fue el sentido y la forma de decidir dichos cambios. Fue un gran equívoco el que todo se decidiera entre las élites del poder político y económico, excluyendo a la inmensa mayoría de los mexicanos. Por lo demás los resultados están a la vista, la política social fracasó.
El propósito declarado de atender a los sectores de la población más necesitados por efectos de rezagos acumulados y para atenuar las consecuencias de la modernización económica, dejó un saldo de 40 millones de mexicanos en la pobreza y la mitad de ellos en la pobreza extrema.
Eso definitivamente es inaceptable en un país en el que la bolsa de valores arrojó el rendimiento más alto del mundo, 730 millones de dólares, según declaraciones del propio presidente de la Bolsa Mexicana de Valores.
Más de 10 millones de mexicanos que constituyen las 56 etnias del país, están condenados a la miseria y la muerte prematura por desnutrición y enfermedades curables y la pobreza rural se incrementó en más del 5% a pesar del Pronasol.
En gran medida la sublevación indígena en Chiapas, encabezada por el EZLN, es consecuencia política de este Gobierno y tengamos presente la tragedia del pueblo tarahumara.
La sublevación chiapaneca y el crecimiento desmesurado del narcotráfico, pusieron en evidencia el grave estado en que se encuentran las instituciones de la seguridad nacional, al grado de que el Jefe del Ejecutivo tuvo que crear un nuevo órgano de coordinación en esta materia, aun en contra de la opinión de destacados juristas, por su carácter inconstitucional, la cual compartimos plenamente.
Además hasta donde la información disponible permite constatar, el poder del narcotráfico ha penetrado gravemente las instituciones públicas, extendiendo y profundizando los circuitos de corrupción en el país.
A ello hay que agregar el incremento sin precedentes de la delincuencia durante el sexenio que concluye. Tan sólo en el Distrito Federal, el índice promedio anual de delitos fue de 2 mil 300 por cada 100 mil habitantes. La Procuraduría General de la República registró más de 2 mil secuestros en todo el país, a los que se suman alrededor de 1 mil secuestros no denunciados y un sinnúmero de asesinatos por motivos diversos, destacando entre ellos los de varios militantes sociales y políticos de partidos de oposición, el del cardenal Posadas Ocampo y los casos que llegaron a tocar al mismo partido en el poder, el del candidato presidencial Luis Donaldo Colosio y de José Francisco Ruiz Massieu.
Por otra parte, con motivo de los diversos procesos electorales, locales y federales, que tuvieron lugar en el sexenio, el presidente Salinas de Gortari siempre sostuvo que sería el electorado quien decidiría su destino político. Se entendía que el compromiso presidencial, era no usar el poder de Estado para inducir resultados electorales y respetar cabalmente la voluntad popular; sin embargo, ¿qué fue lo que obtuvimos?: la imposición de 18 gobernadores por quienes la gente no votó, tres reformas al Cofipe, la última de ellas obligada por la insurrección en Chiapas, que no impidieron que el control de los procesos electorales siga en manos del Gobierno; una profunda iniquidad en los gastos de campañas y en el acceso a los medios de comunicación en favor del partido oficial; el uso indebido de programas gubernamentales como el Procampo y el Pronasol, con claros fines electorales y el aliento del bipartidismo desde el Gobierno.
Todo esto sin contar el uso de las estructuras caciquiles en los sindicatos y las organizaciones agrarias para inducir y forzar el voto entre los trabajadores mexicanos de la ciudad y del campo en beneficio del partido gubernamental. Contrariamente a como se sostiene en el informe que nos fue presentado por el jefe del Ejecutivo, el pacto federal y el equilibrio entre los tres poderes de la República, no sólo no se fortalecieron, sino que tuvieron un desgaste aún mayor debido a que durante este sexenio el presidencialismo cobró dimensiones extraordinarias, prácticamente no hubo asunto alguno de interés nacional en el que no estuviera presente el excesivo poder de que goza el Presidente.
En otro orden, aunque en un sistema democrático la elección de gobernantes es el aspecto fundamental, las elecciones son sólo una parte de la cultura y los procesos democráticos. Consideramos que con respecto al ejercicio pleno de las garantías individuales en nuestro país, el balance es totalmente negativo. Persistió como práctica frecuente la censura a escritores, políticos y periodistas, el férreo control de las dirigencias sindicales y agrarias sobre sus representados y la subordinación de aquellas hacia el Gobierno.
Las estructuras antidemocráticas en que sustentan estos mecanismos de control prácticamente no fueron alteradas en un sentido democrático. No habría que olvidar, sin embargo, que no hay ni puede haber democracia si se inhibe el ejercicio de las garantías individuales, sea cual sea el motivo que se aduzca para llevarlo a cabo; tampoco puede soslayarse el hecho de que los derechos ciudadanos de los habitantes del Distrito Federal de elegir a sus gobernantes sigan conculcados. En este orden, la reforma política dejó un híbidro de elección indirecta en esta entidad, mientras que en el resto del país las elecciones son directas.
Finalmente, en las instituciones encargadas de la procuración e impartición de justicia, a pesar de los cambios y las medidas tomadas por la actual administración, de las cuales no dudamos sus buenos propósitos, sigue imperando la impunidad y la corrupción al grado de que nunca será suficiente un cambio de funcionarios, sino una reestructuración a fondo de dichas instituciones, cosa que lamentablemente no hizo ni llevó a cabo este Gobierno.
Cabe preguntar de cara a todo esto. ¿Hasta dónde nos conducirá la crisis de Estado que afronta el país? ¿Es que no hay salida posible frente a una sociedad que marcha hacia un lado y un Gobierno que va hacia otro? La respuesta es que sí hay salida y nuestra posición al respecto es clara y precisa. La reforma democrática del Estado debe comprender una legislación y una práctica electorales libres de cualquier duda; la reforma profunda del Poder Judicial debe garantizar su real independencia respecto al Poder Ejecutivo y la vigencia del estado de derecho; se debe restablecer el equilibrio entre los poderes de la Unión con la dignificación del trabajo legislativo y la desaparición del excesivo poder presidencial. Igualmente, se tiene que restablecer la soberanía de las entidades federativas y los municipios, garantizándoles los recursos necesarios para su desarrollo.
Es a todas luces impostergable la separación entre el partido oficial y el Gobierno. Asimismo se tienen que otorgar plenas garantías a las organizaciones independientes y libres, de los trabajadores del campo y la ciudad.
Para lograr la reforma democrática del Estado, es indispensable la más amplia participación ciudadana. Durante estos años ha sido muy claro que innumerables sectores del país han mostrado su firme disposición en este sentido. Sin embargo, lo que realmente se ha visto, es la falta de voluntad seria y convincente por la vía de los hechos del Gobierno y del partido oficial. Este es el meollo de la grave crisis que vive el país y que nos puede desbordar a todos; no es hora de cerrazón y revanchismo; es hora de voluntad de cambio democrático de todo y para todos.
Por ello, el Partido del Trabajo convoca a todas las fuerzas políticas y sociales, a llevar a cabo cuanto antes, un gran diálogo nacional democrático que garantice al pueblo de México libertad, justicia, democracia y una vida más digna.
Muchas gracias.
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado Francisco Javier Curi, del Partido de la Revolución Democrática.
El diputado Francisco Curi Pérez Fernández:
Diputadas y diputados:
El VI Informe de Gobierno de Carlos Salinas de Gortari, cierra la última etapa de un sexenio en el que se llevaron a cabo profundas modificaciones en medio de grandes controversias nacionales.
Sin duda, desde la óptica que se quiera observar, las decisiones impulsadas por este Gobierno, han sentado bases de nuevas relaciones del Estado mexicano con la sociedad, las instituciones y su entorno internacional.
A seis años de distancia, México tiene ya una Constitución esencialmente diferente; modificada en sus partes medulares, algunos diríamos que en sus artículos más significativos y con un sentido contrapuesto a la carta que surgió del movimiento de 1910. Se han modificado el régimen de alianzas del Estado, renunciando al sentido compensatorio y arbitral del que un Gobierno debe ser garante, para procurar la defensa del débil frente al fuerte; se han modificado tanto las cosas, que la alianza del Estado posrevolucionario con los obreros y campesinos, es hoy, en la práctica, una formalidad. Podrían decirse muchas palabras en contrario, pero una ojeada a los salarios, al desempleo abierto, al ejercicio del derecho de huelga, a los créditos, a los seguros agrícolas, confirmarían claramente el rumbo que se ha seguido.
En cambio, los nuevos aliados, el nuevo pacto nacional emprendido por Salinas de Gortari, son quienes ayer representaban contrapesos políticos y económicos al Estado nacionalista y revolucionario.
Estamos ligados a un proyecto internacional que afecta y afectará cada vez más nuestras relaciones internas, políticas, económicas y sociales. Que nos someterá a grandes presiones por las responsabilidades adquiridas a las que este modelo impuesto de desarrollo nos obliga.
No sabemos aún hasta dónde habrá que revisar nuestras relaciones de producción, nuestras libertades individuales y colectivas y nuestro concepto de soberanía nacional.
Los grandes valores de la nación han sido puestos en suerte. Las reformas del Estado han reposado en la convicción del Gobierno, en que el enriquecimiento de grupos de empresarios cercanos al poder dará en su momento el jalón para una mejor distribución de la riqueza. En la tolerancia de los trabajadores y de los empleados, basada en el control corporativo con que cuenta el sistema. En la alianza con Acción Nacional, para administrar la democracia y preservar al exterior una imagen de concertación. En la proscripción de la crítica y de los críticos. Haciendo uso y abuso de los medios informativos para sepultar las opiniones que no coincidan con las que se emiten desde el poder y en el peor de los casos atentando contra la propia integridad física de los críticos.
La tecnocracia en el poder ha creado, para preservar el modelo de país, un novedoso y sofisticado sistema que apenas comenzamos a conocer, para asegurarle al partido oficial la permanencia en el poder, basado en la mercadotecnia electoral, la participación del aparato del Estado en apoyo de sus candidatos, con un programa diseñado ex professo, que distribuye por medio de una intrincada red de empleados y beneficiarios, los compromisos que el Gobierno hace a cambio de votos y por supuesto gracias al apoyo que el modelo recibe desde el exterior.
Las transformaciones realizadas son de tal calado, que trascenderán más allá del término del ejercicio de la responsabilidad de la presente administracíon.
Por esta razón y por tratarse de un informe que sintetizó el conjunto de estrategias que definieron una época, la época del salinato mexicano, el Partido de la Revolución Democrática tendrá que hacer en esta intervención, como en las subsecuentes, un análisis, un examen, del balance general de los seis años.
Nosotros entendemos que quizá por formación o por deformación se ha valorado a este país desde dos puntos de vista diferentes y, que este controvertido sexenio tendrá hoy y tendrá mañana impugnadores severos, pero también aplaudidores furibundos.
Los muy significados empresarios que podrán enfrentar con éxito la apertura del mercado y la excelencia que la competencia internacional impone, seguramente van a hablar muy bien de Salinas.
Los que amasaron grandes fortunas en la bolsa y pudieron hacerse ahora nuevamente de los bancos, lo aplaudirán.
Los que compraron grandes y pujantes empresas públicas. Los que lograron ser tratados excepcionalmente en el TLC y ampliaron sus concesiones para mantener a salvo su monopolio.
Los que apreciaron su sentido de la oportunidad, para integrarse sin mucha dilación y sin pretextos a la globalización de la economía.
¡Todos ellos seguramente tendrán mucho que agradecerle!
No me queda muy claro la impresión que tiene Salinas del otro México, al que quizá no se refirió mucho en su VI Informe ni en los anteriores. Seguramente por ello habló mucho de sus grandes logros.
No pudo ver las mantas y las cartulinas de los diputados perredistas, como probablemente no pudo ver una realidad que está viviendo el pueblo de México desde hace rato. Ese otro México que no concertó para la sesión, que no dialogó para la foto, que no se solidarizó con la solidaridad, que no alcanzó a sentir en el bolsillo o en el estómago los grandes logros del régimen; me queda también la impresión de que éstos no fueron vistos, ni el 1o. de noviembre ni ningún otro día de este sexenio, porque se convirtieron en números desde que el señor Salinas de Gortari asumió el cargo.
Quizá tenga que ver con su propio origen también esta concepción de la realidad, con su asunción al despacho de los asuntos de la Presidencia de la República, al hecho de que llega con una elección severamente cuestionada y marcada por irregularidades de tal magnitud, que sin duda cambiarían el sentido del resultado electoral de la elección presidencial.
Saber que llegó a Palacio Nacional gracias al atropello de la voluntad mayoritaria y gracias a la imposición del aparato de Estado, es un hecho que llevamos los que vivimos en 1988 y que Carlos Salinas vive también y vivirá día a día.
Por eso, resulta lógico pensar que es un motivo suficiente el no poder ver las expresiones de la pobreza y de quienes pretendemos también ser interlocutores de las demandas de los desposeídos, por eso creo que es motivo suficiente no saber nada ni de pancartas, ni de gritos.
Por esa dificultad para hacerse escuchar hay que decir la verdad, reiterarla nuevamente. No llegó Salinas al poder por el respaldo popular, por el mandato de las urnas, por consecuencia su origen debe ser registrado como el resultado de un golpe de Estado y su condición de gobernante ilegítimo debe definir en todo momento su quehacer político.
Para el PRD, cuya herencia se inscribe en lo que fue el Frente Democrático Nacional, el agravio para la República que este hecho produjo, ha marcado nuestra conducta hacia él, que se le ha dado hoy y que se le dará hasta el último día de su gestión.
Sin duda y por esas razones las características más notables del estilo de gobernar de Carlos Salinas, fueron el centralismo y el autoritarismo. No existe precedente, si se analiza con objetividad la gestión que llevó a cabo, de un Ejecutivo Federal que haya llegado a mayores extremos. No se tuvo ningún escrúpulo para intervenir en la vida interna de los estados, vulnerando por sistema el pacto federal. Nunca antes se cambió a tantos gobernadores y se impusieron decisiones ajenas a las entidades. Las más de las veces sólo para satisfacer caprichos personales o de manera de dar una salida, una solución desde arriba, que se sintiera que venía desde ahí, a problemas poselectorales provocados por su propia incapacidad y su cerrazón.
Las modificaciones del sistema fiscal han convertido a los gobernadores en simples operadores de los programas que se diseñan desde la Federación y para los cuales las participaciones, las más de las veces, están comprometidas y amarradas, muchas veces en función de resultados electorales.
Durante un buen tramo la discrecionalidad en el manejo de los recursos a cargo de la Presidencia de la República superó el ejercicio presupuestal de la Secretaría, desde secretarías completas, distorsionando con ello la aplicación de la administración pública federal. El Pronasol creció bajo el criterio político de solucionar la inconformidad poselectoral y evitar el estallido social que es el resultado lógico del ajuste económico y de la aplicación de un modelo de desarrollo profundamente injusto. Si hubiese duda en el manejo electoral que este programa ha tenido, habría que remitirse a los propios actos del Ejecutivo; recuerdo dos casos de diputados federales en la LIV Legislatura, en la que tuve el privilegio de participar, en que fueron convertidos en flamantes delegados del Pronasol para que a unos cuantos meses, más tarde fueran ungidos como candidatos a los gobiernos de sus estados respectivos. Pero si esto no fuera suficiente, para definir la línea electoral del programa, bastaría referirse al origen burocrático inmediato que tuvo el primer candidato priísta a la presidencia de la República.
El Pronasol ha sido el programa de Salinas para favorecer a los candidatos oficiales, permitiéndoles el ejercicio de amplios recursos discrecionales y hacer viables los amarres del PRI con la estructura territorial beneficiaria del programa.
Las reformas a la Constitución General de la República afectaron el cuerpo normativo medular que define el carácter de la Carta Magna. No pocos estudiosos en la materia tienen la opinión, que nosotros compartimos, de que fue tal la modificación realizada, que alteró de raíz la columna vertebral de nuestra Constitución y que aun siendo benigno en su investidura, aún considerando que su llegada al poder hubiera sido legítima, no estaría facultado para promover estos cambios y las cámaras correspondientes para aprobarlos. En todo caso tendría que haberse convocado a un nuevo constituyente para crear una nueva Constitución que modificara el régimen social de tenencia de la tierra, que impulsara un nuevo concepto en soberanía nacional más acorde con la integración de México al circuito de sus socios comerciales, que modificara sus relaciones con el estado Vaticano, que suprimiera facultades en la rectoría del Estado y lo distanciara de intervenir en la planeación nacional como fueron las líneas estratégicas que siguió el Gobierno de Carlos Salinas de Gortari.
Legisló por decreto en innumerables ocasiones el Ejecutivo, vulnerando la soberanía del Congreso, creó un clima de persecución política, canceló la posibilidad de entendimiento con quienes no fuimos seguidores de su política, depositó en manos de incondicionales interesados en la lucha por posiciones partidarias dentro del partido oficial, el órgano responsable de preparar y conducir los procesos electorales, conformó una coordinación de seguridad nacional violatoria de la Constitución, que logró centralizar y atropellar las responsabilidades que le corresponden a las instituciones del ramo, creó un órgano incondicional a su voluntad para cuidar y recomendar cambios en la conducta del Ejecutivo por él mismo representados tanto es así, que su titular por disposiciones de Carlos Salinas tiene la encomienda de ser mediador en un conflicto, lo que habla claramente de su supuesta independencia como ombudsman. En este régimen sucedieron acontecimientos y violaciones muy graves, deja Salinas un país de grandes contrastes, con mayores desigualdades que cuando inició su gestión, con una profunda deuda con la democracia, con la justicia y con la equidad, con una carga moral inmensa, con un ejército de desempleados que lo recordarán por largo tiempo, con la triste asignatura de propiciar el clima que sumió al país en la inseguridad nacional, con los cargos de investigaciones inconclusas sobre los grandes asesinatos de Posadas, de Colosio, de Ruiz Massieu, con el saldo de cientos de muertos en la lucha por la democracia, con la responsabilidad de haber sido durante su Gobierno autoritario cuando resurgió el México violento.
Concluimos una etapa que no se deberá de repetir, por el bien de la nación.
Muchos, desde la oposición, estamos comprometidos con una nueva dinámica para un México nuevo, pero nunca más el salinismo que vivimos durante esta pesadilla de seis años.
El Presidente:
Tiene la palabra, el diputado Salvador Beltrán del Río, del Partido Acción Nacional.
El diputado Salvador Beltrán del Río Madrid:
Señor Presidente; diputadas y diputados:
Deseamos manifestar, primeramente, nuestra inconformidad con el hecho de que el pasado 1o. de noviembre no nos fue entregado en tiempo y forma, el texto del VI Informe de Gobierno, en clara violación al texto constitucional.
Peor aún, fue lo relativo a los anexos del propio informe, que apenas ayer tarde, nos fueron proporcionados. Triste favor hace el Ejecutivo al respeto y trato digno que merece esta soberanía.
El artículo 69 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, señala que a la apertura de sesiones ordinarias del Primer Periodo de Congreso, asistirá el Presidente de la República y presentará un informe por escrito, en el que manifieste el estado general que guarda la administración pública del país.
Este mandato constitucional, como se advierte, implica la obligación del Titular del Ejecutivo Federal de comparecer ante esta soberanía nacional.
Por su parte, el artículo 8o. de la Ley Orgánica del Congreso General establece las modalidades sobre el desarrollo del análisis de dicho informe. En ejercicio a nuestra representación, el grupo parlamentario de Acción Nacional, integrante de esta LVI Legislatura, fija en esta oportunidad su posición en lo que se refiere al sexto y último informe del presidente Carlos Salinas de Gortari, en el capítulo relativo a política interior.
El informe, no fue lo objetivo y ponderado que se deseaba. Pese a que reconoció errores y fallas, continuó con la añeja tradición triunfalista. Un balance general del sexenio, nos indica los logros alcanzados en la modernización de la economía; sin embargo, subsisten grandes rezagos en materia social y política, ahí está el abismo, entre unos cuantos que lo tienen todo y los millones de mexicanos que viven en la miseria.
Ahí están también, las graves iniquidades y los viejos vicios, como el uso de programas sociales para fines políticos, que se repitieron una vez más en el pasado proceso electoral.
Persiste la gran dicotomía entre el México formal y el México real. Estamos por iniciar un nuevo siglo y aún persiste en nuestro país la problemática que impide el establecimiento de un auténtico estado de derecho. El actual sistema político, opera violentando el marco jurídico y persiste en estructuras al margen del derecho; el desarrollo armónico de nuestro país, depende de que gobernados y gobernantes se encuentren normados por el marco del estado de derecho.
El Gobierno de la República, se mantiene fundamentalmente en las manos de un solo hombre. El Titular del Ejecutivo, acumula poderes de manera excesiva, unos legales y otros llamados meta constitucionales, propios de un sistema autocrático; su actuación fluctúa entre la legalidad y la ilegalidad. El Ejecutivo Federal se ha impuesto sobre los poderes Legislativo y Judicial, rompiendo con ello el equilibrio que debe existir entre los mismos.
El federalismo sigue siendo aún una falacia. Hay una gran contradicción entre el texto constitucional y la realidad. Las decisiones trascendentales de la vida política, social, económica, cultural, aun de las poblaciones más pequeñas, son tomadas desde el centro.
En materia tributaria, el fisco federal tiene sumidas en la miseria a las entidades federativas y a los municipios. Las raquíticas participaciones que como generosa dádiva les otorga el centro, no alcanzan siquiera para cumplir con sus más elementales funciones.
Urge la revisión de los convenios de coordinación fiscal y en general de la estructura tributaria, a fin de garantizar la vigencia de un auténtico federalismo.
Por otra parte, los programas federales asumen funciones que en principio corresponderían a los gobiernos locales. Es el caso del Programa Nacional de Solidaridad, que ha venido subordinando toda obra importante de inversión pública y de contenido social, a la decisión del Presidente de la República, quien como el gran señor, otorga o niega los recursos.
Es inadmisible que el Ejecutivo Federal maneje, por medio del Pronasol y el Procampo, recursos en igual cuantía que los que le corresponden a todas las entidades federativas.
En materia de reforma política, no negamos algunos avances logrados en el sexenio; sin embargo, la transición democrática necesita además de cambios constitucionales y legales, de una radical transformación en las conductas y prácticas del grupo en el poder, que se niega a dejar de lado la subcultura de la simulación.
Para avanzar en la democracia, no basta con reformas legales, sino que se requiere también de una verdadera transformación política, en la que se modifiquen las estructuras y se tenga la voluntad política de instrumentar la democracia en nuestro país.
Debemos recordarle al presidente Salinas que las principales reformas electorales llevadas a cabo durante su sexenio que termina, son propuestas y viejas luchas de Acción Nacional a lo largo de su vida parlamentaria.
Reconocemos la apertura de los medios de comunicación, pero también debemos señalar que algunos de ellos han intensificado sus formas de dominio, de control y de manipulación sectaria, que afectan no sólo a la sociedad que actúa como receptora de los mismos, sino también a los intereses laborales de trabajadores de la información, que con profesionalismo pretenden y buscan cumplir con su trabajo.
Por otra parte, coincidimos con el Ejecutivo Federal respecto a la reforma política para el Distrito Federal, en la ampliación de facultades normativas y hacendarias, la atribución de facultades legislativas expresas a la Asamblea de Representantes y la creación de consejeros ciudadanos. Sin embargo, como el propio informe lo reconoce, los avances en la ampliación de la vida democrática pueden y deben mejorarse, lo que debe aplicarse al Distrito Federal, en donde el paso a seguir debe ser contundente: la elección directa de las autoridades capitalinas y la elevación a congreso local de la Asamblea de Representantes.
Reconocemos que la creación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en 1990, constituye un avance en la defensa de los mismos; sin embargo, es urgente que esta institución se independice del Ejecutivo Federal y deje de ser una mera ventanilla de quejas. La labor de la Comisión se ha pragmatizado y se concreta a salvaguardar ciertos derechos, dejando fuera la protección de otros derechos, como son los económicos, los sociales, los culturales, los civiles y los políticos.
En los hechos, al sistema sólo le interesa hacer sentir a la sociedad que se le atiende, en poner en manos de otras instancias del Ejecutivo la solución de los reclamos ciudadanos y en proteger a sus intereses políticos. No le interesa la transformación de raíz de las estructuras estatales que más atentan contra los derechos humanos. Es un hecho que son los cuerpos policiacos los que mayor número de atropellos cometen en contra de los derechos humanos más elementales.
Dentro de este marco, la protección de los derechos de las etnias, de los trabajadores, así como de las minorías, se llevan la peor parte, siguen siendo los más agraviados, los más olvidados.
La corrupción invade a la administración pública en general y contamina todo el cuerpo social. Complicidad e impunidad son elementos de una misma realidad. La criminalidad e inseguridad pública va en aumento, motivada particularmente por el grave desequilibrio socioeconómico en el que vivimos.
Consideramos que el informe fue omiso en mencionar los rezagos, las carencias y las demandas de la sociedad aún incumplidas. Este sexenio será recordado por la inseguridad, el narcotráfico, los secuestros y los muy lamentables asesinatos ocurridos.
De manera superficial aborda el Presidente el tema de procuración de justicia. Era obligado un análisis objetivo que reconociera el fracaso de su actuación en este rubro, que sirviera también de antecedente para la transformación de conductas y cambios en las políticas del próximo gobierno.
Afirma el informe que las procuradurías han hecho un esfuerzo excepcional para responder a los reclamos de la sociedad, lo que no compartimos, puesto que dichas dependencias realizaron acciones aisladas y efímeras, debido principalmente a los constantes cambios de sus titulares, motivados estos cambios no por la mejora en el cumplimiento de su función, sino por conveniencias de carácter político.
La creación de la Coordinación de Seguridad Pública de la Nación, lejos de contribuir a incrementar la cooperación entre procuradurías, abre el riesgo de obstaculizarlas y resulta innecesaria, ya que diversas leyes de aplicación, tanto federal como local atribuyen competencias a estas instituciones en su correspondiente ámbito.
Por otra parte, es cierto que la sociedad mexicana ha ejercido un constante reclamo para que en la procuración de justicia existan garantías de seguridad y al mismo tiempo protección de los derechos humanos y que debe haber compatibilidad entre ambos, pero lamentablemente la falsa dicotomía entre seguridad y derechos humanos que rechaza Salinas en su informe, ha sido auspiciada por las mismas autoridades, ya que por un lado para justificar su fracaso en el combate a la impunidad, señalan como un obstáculo a los derechos humanos y en cuanto violentan la esfera de éstos, argumentan que están actuando en el cumplimiento de la legalidad en aras de garantizar la seguridad de los gobernados.
México está viviendo momentos de violencia que se han mostrado a la sociedad como hechos trágicos e inesperados. El movimiento armado surgido en Chiapas trae consigo interrogantes que aún no tienen respuesta. Más allá del movimiento armado está el atraso, la miseria, la discriminación contra las etnias, los conflictos religiosos, la manipulación política y la injusticia, que configuran una violencia estructural que causa la desesperación de muchos, lanzándolos a un doloroso derramamiento de sangre.
Coincidimos en la necesidad de continuar en las pláticas de paz, así como de profundizar en el análisis de la situación global de la región, a fin también de aplicar las soluciones que permitan superar el problema.
Señoras y señores diputados: ahí están las tareas pendientes y la digna justicia, estado de derecho, federalismo, municipio libre, derechos humanos, seguridad pública, democracia. Desde esta tribuna, Acción Nacional exhorta a los integrantes del Poder Judicial, del Senado y a los diversos grupos parlamentarios que conforman esta Cámara de Diputados, en especial al grupo mayoritario, a que asumamos todos las funciones que nos corresponden, a fin de contribuir a la plena vigencia de nuestras instituciones. Muchas gracias.
El Presidente:
Para terminar esta ronda, se suplica la presencia en tribuna de la diputada Rosario Guerra, del Partido Revolucionario Institucional.
La diputada María del Rosario Elena Guerra Díaz:
Señor Presidente, honorable Asamblea:
Hoy iniciamos la glosa del VI Informe de Gobierno del presidente Carlos Salinas de Gortari, en el marco de nuestras facultades.
Evaluar lo logrado en este sexenio a base de esfuerzo y sacrificio, sin triunfalismos ni derrotismos, requiere de juicio sereno para reconocer avances y retos. El cambio ya se inició. Todos nosotros lo estamos protagonizando. El debate, la argumentación, la polémica, forman parte de esa nueva cultura que no puede quedar estéril y debe concretarse en acuerdos, programas y propuestas que implica la mutua aceptación y la convivencia plural.
Concordamos en que es compromiso de esta legislatura el poder dignificar el trabajo de esta Cámara, a través de contar con los elementos de trabajo que nos permitan cumplir las funciones y esto en referencia al análisis del texto del informe y sus anexos, para que podamos efectivamente racionalizar el trabajo en los tiempos adecuados y llevar a cabo este tipo de debates.
Hoy toca pues a esta LVI Legislatura continuar los cambios que México ha iniciado. Estar a la altura de una sociedad madura, crítica, plural, representar sus intereses, a veces contrapuestos, para ir definiendo el rumbo en apego a los más altos intereses de la nación, es tarea que como diputados habremos juntos de emprender.
Somos expresión del voto popular, respetamos y representamos un avance de un proceso democratizador en el cual aún debemos avanzar. La democracia se fundamenta en la competencia electoral, pero no se agota en ella. Implica la conformación de gobiernos y de proyectos políticos que, efectivamente, den viabilidad al bienestar de la sociedad.
Implica no solamente el diálogo, sino la inclusión de diversas fuerzas con proyectos comunes, con base en compromisos concretos.
Pensar en una descalificación a ultranza sería negar lo que todos los mexicanos hemos hecho en estos seis años. En este sentido yo quisiera hacer una serie de reflexiones en torno a los problemas que más nos han preocupado este año, que ha sido un año, como lo refería el presidente Salinas, difícil, un año en el cual efectivamente se han puesto a prueba muchas instituciones, entre ellas se ha puesto a prueba al Partido Revolucionario Institucional.
Nosotros tuvimos que enfrentar, junto con todo el país, los sucesos trágicos que nos motivaron a muchas reflexiones en Chiapas. Chiapas, un Estado de enorme vocación democrática, de grandes contrastes sociales, y que finalmente después del 1o. de enero, con todo lo que sucedió y tras las medidas de diálogo, la voluntad política del Ejecutivo de dar una respuesta y una salida que no implicara el derramamiento de sangre entre hermanos, nos ha sin embargo sacudido y nos ha puesto sobre la cuestión de encontrar los mecanismos mediante los cuales podamos avanzar en la atención de los grandes contrastes que caracterizan el desarrollo desigual de regiones y de grupos sociales, en un México que tiene efectivamente muchos retos por enfrentar.
Sin embargo, debemos reconocer algo a los chiapanecos: a pesar de la difícil situación en la que se encuentran, a pesar de las situaciones de excepción que se dieron en algunos casos, ellos decidieron también unirse al país en el esfuerzo de acudir a las urnas, expresar su voluntad popular y mediante el sufragio, defender la paz, abrir los espacios y dar viabilidad a las instituciones.
El mensaje de Chiapas el 21 de agosto debe de ser valorado, debe ser valorado en lo que significa por las circunstancias tan difíciles de convivencia entre nuestros compañeros.
Por lo tanto, yo quisiera tomar la propuesta de diálogo hecha aquí por el Presidente de la República para ser considerada como compromiso de la nación, de esta Cámara y de todos los que estamos empeñados en encontrar alternativas reales para transformar el problema local en beneficio de esa región.
Se ha dicho que nuestro partido ha tenido una seria responsabilidad en una cuestión que a nosotros nos ha causado un gran dolor y nos ha costado una gran indignación, que fue el asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta.
El asesinato de nuestro líder y del que era ya candidato a la presidencia de la República, nos llevó a apretar el paso, a cerrar filas. Tuvimos que remontar muchísimos problemas; tuvimos que sacar fuerza del dolor y enfrentar y remontar calumnias y rumores que denigraban a nuestro partido. Lo hicimos, logramos fortalecernos, logramos reorganizarnos, nuestro partido no se acabó y el voto nos favoreció, con todo y los problemas internos propios de una organización viva y activa.
La tesis de nuestra descomposición o la tesis de que contribuimos a una ingobernabilidad es totalmente falsa, como lo demuestra el devenir diario del pueblo de México.
Nuestro partido sigue siendo un instrumento de estabilidad y de paz social.
Estamos efectivamente convencidos de que la eventualidad del "México bronco" fue borrada por la misma sociedad.
Frente a los temores, rumores, panfletos, anónimos, que motivaron en muchas ocasiones la desconfianza de la población en torno al proceso electoral, acudieron a las urnas en una cantidad impresionante todos aquellos que hicimos el esfuerzo de la fotocredencialización, de nuestra participación.
En este sentido podemos decir que el voto logró reconocer actores políticos e institucionales. Fue el México cívico al que se refirió el presidente Salinas, el mejor acotamiento de la posibilidad de violencia.
El 21 de agosto, a pesar de las difíciles circunstancias, en Chiapas y en muchas otras regiones, el pueblo acudió a votar; contrariamente a las expectativas, ganamos la elección.
Por eso yo creo que debemos reflexionar en torno a lo que han sido las reformas que hemos enfrentado para dar al sufragio su verdadera dimensión y su vigencia.
En estos años se dieron tres adecuaciones a la legislación electoral. Estas adecuaciones han buscado retomar la misma pluralidad de los planteamientos de los partidos políticos, para conformar un sistema que efectivamente le dé transparencia, objetividad, al proceso y permita la expresión libre del sufragio.
¿Cómo negar avances si se recogen las demandas para observadores nacionales, visitantes extranjeros, la ciudadanización de los órganos electorales, el mayor acceso a los medios de comunicación, el Tribunal Electoral, con la eliminación de la autocalificación del Poder Legislativo, la recomposición del Senado? ¿Quién puede negar que se dio un proceso de credencialización con fotografía para votar y evitar suspicacias o prácticas nocivas? ¿Quién puede negar que aún la legislación tiene mucho que realizar en su propio texto, como es la modificación que ya está en vías, que el propio gobierno de la ciudad de México, en breve habremos de protagonizar? ¿Acaso la descalificación no es propiamente una autonegación de los avances que nosotros mismos encabezamos?
No se trata de regocijarnos en lo logrado, se trata de sentar un análisis objetivo de lo que hemos logrado y de lo que nos falta por lograr.
Nosotros no aceptamos la autodescalificación ni la descalificación, porque aún tenemos, como fuerza política viva y organizada, mucho que aportar en la construcción de la democracia. Tampoco vamos a practicar la descalificación.
Rechazaremos siempre la intolerancia y la provocación, por su ineficiencia y su esterilidad política. Estamos convencidos de la fuerza de la razón y estamos seguros que, si hay buena fe, en aproximaciones sucesivas se pueden concretar avances significativos.
Hoy día, seamos honestos, no hay una propuesta que pueda sustituir el sistema de partidos. Pese a sus imperfecciones y sus problemas, su resquebrajamiento puede abrir a minorías politizadas, no necesariamente vinculadas al interés nacional, el control de los procesos de Gobierno y sustituir así la voluntad popular que hoy se plasma en el sufragio.
Por estas razones nosotros estamos básicamente considerando que la descalificación también por los hechos de narcotráfico, los secuestros y los serios problemas que afectan a la sociedad, deben dimensionarse en su situación exacta.
Tenemos un problema real, el narcotráfico, como lo señalaba el Presidente de la República. Tiene su origen en un problema de consumo, pero sobre todo en la rentabilidad que lo caracteriza, un mercado mundial interactuante, que está socavando en muchas partes del mundo países enteros. Efectivamente, es un problema de Gobierno, es un problema en el que se están tratando de evitar aspectos de corrupción de servidores públicos, pero no es un problema de Gobierno exclusivamente, es un problema de la sociedad, es un problema que todos debemos enfrentar desde diversas perspectivas, por la corrupción que eso implica, para la composición social de nuestro país y en muchas de sus regiones puede y ha tenido un problema muy muy grave.
Por esta razón, en la lucha contra el narcotráfico habremos de avanzar, sí, mediante reformas, como ya lo han planteado todos los partidos y como lo señalaba el Presidente de la República, en cuestiones específicas de modernización, administración de justicia y procuración de la misma, pero sobre todo en estrategia que involucre Estado y sociedad frente a un problema común que puede socavar instituciones, que puede socavar al Estado, que puede socavar a la sociedad, que puede destruir efectivamente a las familias.
Yo quiero comentar también que dar fiabilidad a la representación social, es una de las tareas en los partidos políticos. El nuestro cuenta con una amplia base electoral y tenemos el gran compromiso de honrar esa confianza.
Constituimos pues una fuerza que no ganó solamente el proceso electoral y creo que en esto ganó más que nada el pueblo de México y que todos nosotros habremos de dar una serie de argumentos sobre el particular. Quiero simplemente subrayar, que en política económica, la prioridad al combate a la inflación no fue una prioridad económica de funcionamiento de mercado, fue ante todo, el revertir la tendencia de concentración del ingreso que favorece a los que más tienen en detrimento de las grandes mayorías. Fue un proceso para favorecer la inversión productiva frente a procesos de especulación que fueron tan brutales que estuvieron por amenazar la planta productiva del país. Hubo costos, sí, pero yo les pregunto y ustedes tienen la respuesta, ¿cuál hubiera sido el costo de instrumentar otras políticas de coyuntura, sin permanencia y que finalmente se revierten efectivamente en el bienestar social por agotarse en sí mismas?
Se ha logrado dar permanencia a la estabilidad económica, se ha logrado una recuperación de los salarios con permanencia como tendencia, evitando un mayor deterioro, de haber continuado aspectos inflacionarios de más del 200% como lo vivimos. Se dice fácil, pero controlar el mercado no es cuestión de voluntarismo político y quienes hemos vivido en este México en los últimos sexenios lo sabemos, lo sabemos porque la inflación y la cuestión de la justicia social no son problemas de decreto, ni son problemas, ni son fuerzas que podamos atacar en ese sentido; fue una política seria que logró respetabilidad en México y en el mundo, que nos está dando opciones para concretar los logros macroeconómicos en un bienestar permanente, sólido y sostenido de las familias mexicanas.
Simple y sencillamente quiero comentar que la política social ha sido fundamentalmente importante en este sexenio, porque efectivamente tutela los aspectos de la política económica en materia de los grupos más desprotegidos.
En el combate a la pobreza no sólo se requería estabilizar la economía, revertir el proceso de concentración del ingreso que tanto favoreció la inflación. De hecho, el presidente Salinas impulsó programas como los del Pronasol o como los del Procampo, entre los más conocidos. Su mecánica rompió inercias centralizadoras y permitió a los gobiernos locales de distintas filiaciones partidistas interactuar con la población y romper los círculos viciosos de la falta de oportunidades.
Indudablemente la política social del presidente Salinas instrumentada en coordinación con gobiernos locales y diversos sectores sociales, influyó en el ánimo de la población. Toda política social tiene repercusiones en el bienestar de la población, pero afirmar que esta política compra conciencias, condiciona votos, es simplemente negar la mayoría de edad a una ciudadanía que es respetable y que debe ser respetada.
Nos guste o no, el resultado de la jornada cívica del 21 de agosto, la expresión popular materializada en el sufragio, merece respeto. Se puede interpretar el voto de cualquier manera, pero el voto ahí está, ahí está la prueba innegable de la voluntad expresada por el pueblo.
Finalmente, yo concuerdo con muchos de nuestros compañeros, que habremos de tener mucho trabajo legislativo en materia de fortalecimiento del federalismo. Creo que el tema de coordinación fiscal, que es materia de Cámara, habrá de ser uno de los más interesantes en cuanto a su análisis, para evitar reproducir tendencias centralizadoras, también en el ámbito de estados y municipios.
Yo estoy convencida de que enjuiciar coyunturalmente un gobierno, sin visión de su ubicación histórica, de sus circunstancias, puede ser terreno fértil para la descalificación por la incomprensión. Disentir de enfoques para proponer y contribuir a modificar aquello que no es viable, es un matiz muy importante del proceso democrático que se refiere a la toma misma de las decisiones que a todos nos afectan.
Todo Gobierno estructura su política y en este marco, yo creo que aún podemos avanzar como uno de los tres poderes de la Unión, en muchos sentidos, si logramos hacer del disenso, la posibilidad real de lograr proyectos comunes.
Yo exhorto a mis compañeros de esta diputación, de la LVI Legislatura, a hacer un esfuerzo de concordia y de buena fe, para dignificar este poder y elevar su calidad de debate y sobre todo, de propuesta.
Rechacemos la teoría de la conspiración que descalifica al contrario y niega la viabilidad de avances en el perfeccionamiento de la democracia y de las instituciones que la materializan, como es esta Cámara.
Yo estoy clara que en medio de una de las crisis más profundas del México moderno, el país tuvo rumbo y perfiló su destino, porque tuvo un liderazgo, el del presidente Salinas; logramos remontar retos que parecían muros a nuestra viabilidad como nación, el control de la inflación para acabar con el más alto impuesto hacia las clases más desprotegidas; la renegociación de la deuda externa, la modernización y reconversión de la planta productiva, finanzas públicas sanas y orientadas cada vez más a la atención de lo prioritario en términos sociales, reformas electorales que incorporaron visiones diversas, apertura comercial en nuevos marcos de menor vulnerabilidad y mejores condiciones de acceso a los mercados mundiales una más efectiva presencia internacional de nuestro país en el nuevo entorno mundial, el fortalecimiento de nuestra soberanía en los términos de nuevos entornos mundiales, que han desaparecido a países enteros; protección de las víctimas, establecimiento de la Comisión de Derechos Humanos. Logramos la reforma fiscal, la reforma financiera, las relaciones modernas con las iglesias y una nueva base constitucional para la propiedad y la producción en el campo; la modernización educativa, los avances en el federalismo y la división de poderes en el que aún estamos empeñados y éstos son algunos, apretadamente, de los logros.
El presidente Salinas, va a merecer más polémicas y debates que los que aquí habremos de emprender; ha dejado huella, el pueblo de México dio su veredicto el 21 de agosto sobre la permanencia de esta serena conducción en medio de una de las crisis más profundas, en lo político y en lo económico.
Toca a esta legislatura actuar en consecuencia, teniendo el respeto como norma y ejemplo de que la pluralidad no es división ni de insumo que pueda socavar a la nación, sino capacidad de rescatar los puntos de confluencia en un proyecto nacional. Muchas gracias.
REGISTRO DE ORADORES
El Presidente:
En los términos del acuerdo parlamentario, se han fijado las posiciones de cada uno de los grupos parlamentarios. Se dispone en el mismo acuerdo, que se abrirá la lista de oradores, si los hubiera, en contra y en pro.
Esta Presidencia ha recibido de cada uno de los coordinadores de los grupos parlamentarios, la relación de los oradores por cada uno de los grupos parlamentarios y me voy a permitir dar lectura a los mismos.
El Partido de la Revolución Democrática, ha inscrito a los siguientes diputados: Marcué y Pardiñas, Graco Ramírez Garrido, René Arce, Carlos Navarrete, Ramón Sosamontes, Marco Rascón, Armando Quintero, Luis Sánchez Aguilar.
El Partido del Trabajo...
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
Señor Presidente: yo quiero hablar. Soy diputado y tengo derecho. No acepto que me nombre mi bancada. Quiero hablar cuando sea necesario.
El Presidente:
Tomamos nota del diputado Marcué y Pardiñas.
El diputado Raúl Gonzalo Castellanos Hernández (desde su curul):
También en contra, Raúl Castellanos.
El Presidente:
Tomamos nota de estas dos peticiones más.
El Partido del Trabajo, ha inscrito a los diputados: José Narro Céspedes, Serafín Núñez, Oscar González Yáñez.
El Partido de Acción Nacional, ha inscrito a los diputados: Rodrigo Robledo, Carmen Segura, Jorge Dávila, Patricia Garduño, Humberto Andrade, José de Jesús Preciado, Eugenio Ortiz.
El Partido Revolucionario Institucional, ha inscrito a los siguientes diputados: Jorge Moreno Collado, Oscar Villalobos, Ernesto Luque Feregrino, Roberto Campa Cifrian, Sebastián Lerdo de Tejada, Guillermo Zúñiga, María de la Luz Lima Malvido, Ramiro Javier Calvillo Ramos, Marcelo Ramírez Ramírez, Isidro Muñoz, Juan Salgado Brito, Luis Garfias Magaña, Sofía Valencia Abundis, Heriberto Galindo, Oscar Cantón Zetina, José Antonio Hernández, Samuel Palma, Fortino Figueroa, Sara Esther Muza Simón, Víctor Silvia Tejeda, Píndaro Urióstegui Miranda.
En total, en esta mesa están inscritos 41 diputados para intervenir en la glosa de este informe, en la parte que estamos analizando durante esta sesión.
Esta Presidencia hace un llamado a los diputados que van a intervenir en tribuna, que con objeto de que todos los que tienen interés en participar, los oradores inscritos o los que pudiesen venir en el transcurso de esta sesión, la súplica de esta Presidencia es que las intervenciones sean lo más directas y breves posibles. Solamente como antecedente, la Presidencia hace esta consideración. Los grupos parlamentarios, los responsables en el acuerdo, hablaron de la posibilidad de intervenciones de cinco minutos. Yo lo pongo realmente en conocimiento de los diputados, con el ruego de que las intervenciones sean lo más cortas posible.
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡Señor Presidente! ¡Le suplico a usted me ponga en primer lugar!
El Presidente:
Si les parece, para evitar realmente cualquier situación que pudiera ser enojosa, vamos a dar el orden de oradores de acuerdo con el reglamento, de acuerdo como fueron inscritos. A menos que hubiera alguna situación que el grupo parlamentario, el primer...
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡Le suplico a usted..!
El Presidente:
Permítame un segundo, señor diputado. La fracción que inscribió en primer lugar a sus oradores, fue la fracción a la que usted pertenece, señor...
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡No estoy de acuerdo con eso! ¡Soy diputado federal y tengo derecho a subir a la tribuna y le pido que me la dé en primer lugar!
El Presidente:
Yo le pregunto, para obviar esta situación, al coordinador de la fracción del Partido de la...
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡No señor! ¡No tiene por qué preguntarle! ¡Yo tengo derecho!
El secretario Gerardo de Jesús Arellano Aguilar:
Moción de orden, señor Presidente.
El Presidente:
Una moción de orden. Adelante.
El secretario Gerardo de Jesús Arellano Aguilar:
Señor Presidente: es mi obligación como diputado y como miembro de esta mesa directiva, manifestar y hacer esta moción de orden en el sentido de que el Reglamento, y la Ley Orgánica y sobre todo el Reglamento, que conoce muy bien el diputado Marcué, marcan un orden; ese orden es de acuerdo como se inscriban los diputados para poder hacer uso de la palabra. Esta Secretaría y la Presidencia no tenían conocimiento de que hubiera otras personas, pero por supuesto yo creo que debería de dársele turno, pero conforme se registraron y en todo caso no podríamos romper de que cualquier diputado en el momento que quisiera pudiera hacer uso de la palabra. ¡Hay un respeto a la Ley Orgánica y yo creo que todos tenemos la obligación de seguirlo!
El Presidente:
En esas condiciones...
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡No oí yo que ninguno de los diputados de la lista se apuntara primero que yo! ¡Y yo pido que me den la palabra en primer lugar!
¡Aquí no hay reglamentos para que mi bancada o el jefe de mi bancada le dé el derecho a tal o cual diputado!
El Presidente:
Esta Presidencia ruega a los señores diputados que para evitar malos entendidos continuemos con el orden que marca el Reglamento y la Ley Orgánica.
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡No, señor, no estoy de acuerdo..!
El Presidente:
Se inscribieron en primer lugar...
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡No, señor, cuándo..! ¡Yo quisiera saber cuándo se inscribieron!
El Presidente:
Las fracciones se inscribieron previamente a sus...
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡No, señor, va en contra de..;!
El Presidente:
Las fracciones se inscribieron previamente a sus...
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡No, señor va en contra de la..;!
El Presidente:
Yo le voy a suplicar a la Secretaría, tenga la bondad de leer los artículos correspondientes de la ley y del Reglamento.
La secretaria María Claudia Esqueda Llanes:
" Artículo 95 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos: Llegada la hora de la discusión, se leerá la iniciativa, proposición u oficio que la hubiere provocado y, después, el dictamen de la Comisión a cuyo examen se remitió el voto particular, si lo hubiere."
" Artículo 96. El Presidente formará luego una lista de los individuos que pidan la palabra en contra y otra de los que la pidan en pro, las cuales leerá íntegras antes de comenzar la discusión."
" Artículo 102. Los individuos de la Cámara, aun cuando no estén inscritos en la lista de los oradores, podrán pedir la palabra para rectificar hechos o contestar alusiones personales, cuando haya concluido el orador y sin que puedan hacer uso de la palabra más de cinco minutos."
El Presidente:
En tales condiciones, siguiendo realmente el orden que el propio Reglamento establece, tiene la palabra el diputado Graco Ramírez Garrido, del Partido de la Revolución Democrática y el diputado tendrá, en el momento que le corresponda, el orden en la tribuna.
El diputado Manuel Marcué Pardiñas (desde su curul):
¡No, señor! ¡Yo tengo derecho..!
El Presidente:
Se le hace un llamado al orden al señor diputado.
Tiene la palabra el diputado Graco Ramírez Garrido.
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
¡No, señor..!
El Presidente:
Con mucho gusto, diputado Graco.
El diputado Graco Ramírez Garrido, le cede el turno al señor diputado. Ahora sí, adelante.
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas:
¡Le suplico al señor que oscurece el sonido o que le da volumen, que respete a todos los diputados que vengan a esta tribuna! ¡Ya sé quien es el encargado de esto! Cuando no quieren oír, y tengo experiencia de esto, a algún diputado que esté en contra de alguna posición del Gobierno o del PRI, apagan el volumen para que allá atrás no se oiga.
Señores diputados: quiero recordar un hecho de carácter histórico muy importante. Desgraciadamente, señores, estamos viviendo en una época en que se nos están olvidando las luchas que nuestros antepasados dieran para que en este país hubiera libertad y hubiera democracia y que constituyera una nación en beneficio de todos los mexicanos.
Para mí, señores, es una vergüenza que casi todos los partidos, y muchas veces incluyendo a algunos de mis compañeros, hablaran al pueblo nada más para ganar el voto. No se habló de Morelos, ni de Juárez, ni de otros héroes que nos han dado patria. No se habló de ningún aspecto de la Revolución mexicana, de los que sacrificaron sus vidas por este pueblo.
Señores, recuerdo un hecho y por eso exigí que se me diera la palabra en primer lugar. A partir de la Revolución la política se concluia con asesinatos, se concluía con que asesinaban a un grupo de generales en Huitxilac, se concluía con que asesinaban a los adversarios políticos, cosa que ustedes recuerdan, si es que han leído la historia, particularmente los señores del PRI.
Cuando sucedió el asesinato del general Obregón, el Presidente en turno se vio en problemas muy serios y el jefe máximo, que así le llamaban a Plutarco Elías Calles, tuvo que ceder el poder a Emilio Portes Gil.
Voy a entrar al tema. Señores: viene después la Presidencia de Ortiz Rubio y de Abelardo Rodríguez, controlados desde Cuernavaca por el jefe máximo de la revolución, por el dictador. El dictador quiso seguir manejando la Presidencia a su antojo y a los presidentes de la República les daba órdenes y si no cedían, señores, había asesinatos y expulsiones del país y extorsión en todas las formas a lo largo y a lo ancho de nuestra patria.
Cuando se sucedió el primer plan sexenal, en que fuera candidato el general Lázaro Cárdenas, el jefe máximo quiso hacer lo mismo que había hecho con los presidentes anteriores. Lázaro Cárdenas no lo permitió. Lázaro Cárdenas quiso ser el Presidente de la República conforme a la Constitución Mexicana. ¿Y qué hizo, señores? Lázaro Cárdenas hizo respetar su investidura. ¿Y qué sucedió?, para ser breve. Explicó muchas veces al dictador que le permitiera gobernar, que le suplicaba que respetara la Constitución de la República.
Cuando ya no pudo dar más explicaciones, Lázaro Cárdenas sacó a Plutarco Elías Calles y a todo su grupo. ¡Señores, hay que reflexionar! y, Calles tuvo que salir del país al exilio, con todo su grupo y Lázaro Cárdenas expresó a sus enemigos políticos que no iba a haber asesinatos, que él era respetuoso de las vidas, y así fue. ¡Lo que quiero decir es que sentó el precedente que en este país no se debe asesinar por razones políticas!.
Señores, yo les pido a ustedes que reflexionemos. Desgraciadamente el régimen actual ha violado esas normas. Tenemos muchos asesinatos en este régimen, que no se han aclarado y que parece que no los van a aclarar. Señores: ¡contribuyamos a que en este país no se asesine por razones políticas, en bien de México y en bien de la nación y del pueblo! Es lo que yo les quería decir a ustedes. ¡Luchemos porque se aclaren los asesinatos del señor Colosio y del señor Ruiz Massieu! ¡Pidamos que se aclaren los asesinatos de casi 300 compañeros perredistas, que se aclaren los asesinatos de muchos periodistas, por el hecho de su valentía de informar lo que sucede en nuestra nación! ¡Señores, levantemos nuestra bandera, salgamos a la calle a protestar, para que no se vuelva a dar lo que está sucediendo en México, uno sale de su casa y no sabe si va a regresar, eso es lo que yo le quería decir a este Congreso, sentemos de vuelta el precedente que por razones políticas no se debe asesinar a nadie, tenemos el derecho de expresarnos, tenemos el derecho de trabajar por la democracia.
Señores, hagámoslo.
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado Graco Ramírez Garrido.
El diputado Graco Luis Ramírez Garrido Abreu:
Con su venia, señor Presidente; estimadas compañeras diputadas, compañeros diputados:
Estamos efectivamente ante una glosa no sólo de un informe más, sino del VI Informe de una administración que se distinguió desde su origen como una administración que no pudo ganar su legitimidad. Algunas compañeras y compañeros diputados, deben recordar aquella sesión declarada como permanente, el 8 de septiembre y culminó el 12 de ese mismo mes, erigida en Colegio Electoral; con sólo 256 diputados, con ningún legislador de la oposición, se desarrolló la más tormentosa, la más desordenada, la más antirreglamentaria, la más bochornosa, la más patética y la más violenta de todas las sesiones del Congreso mexicano.
Refería mi compañero diputado Ortega, el calificativo del origen del nuevo Gobierno y su Presidente como ilegítimo y seguirá siendo ilegítimo hasta el fin de los tiempos, palabras del diputado Abel Vicencio Tovar.
Carlos Salinas de Gortari reconstruyó a partir de este hecho, el poder de la Presidencia, lo que no se ganó en las urnas había que ganarlo en los hechos y aquí se explicará el porqué de la situación actual del país. La legalidad perdida en las urnas fue expresada por actos espectaculares donde el estado de derecho fue quebrantado. Hernández Galicia, La Quina, líder sindical preso hasta ahora y Eduardo Legorreta,El Bayo, empresario financiero, partícipe de los grandes fraudes del crac bursátil en esos años. Hernández Galicia, preso; El Bayo Legorreta, libre, se aplicó la ley, fue un acto espectacular y un castigo político y simple y llanamente podemos decir, ¿se acabaron los líderes corruptos en el sindicato petrolero? son tan o más corruptos los líderes del sindicato petrolero. ¿Se acabaron los Legorreta? Estamos ante el patético caso de Cabal, que está preparando quizá una importante declaración acerca de quiénes son, en su caso, parte de esta pugna que lo acusa a él también como miembro de un fraude bursátil.
El tráfico de influencias, el manejo patrimonialista del Estado, el poder discrecional del Ejecutivo Federal, fue construyendo en este país una situación política que fue acrecentando la inestabilidad del país.
En 1992, a la mitad de este sexenio, 23 de los 41 procesos electorales terminaron con violencia; 18 gobernadores tomaron posesión como interinos; cerca de la mitad de los mexicanos fueron gobernados por mandatarios designados personalmente por el Ejecutivo Federal; aberraciones como la de Michoacán, donde no ha sido posible que haya un gobernador constitucional, como en Guanajuato, o como en San Luis Potosí, o como en Chiapas, son casos patéticos de esta forma de gobernar.
Procuradores de la República: Alvarez del Castillo, señalado por mantener como gobernador y como procurador vínculos abiertos con el narcotráfico; Ignacio Morales Lechuga, la fortaleza de los comandantes judiciales; Jorge Carpizo, la imagen necesaria para la negociación con Clinton, crímenes no aclarados como el del cardenal Posadas Ocampo y paradójicamente el Chapo Guzmán, se encuentra preso por no haberse dejado matar al ser confundido el cardenal por él.
¿Quién protege, es la pregunta, a los hermanos Arellano Félix? Diego Valadez, el quehacer inútil: el caso de Colosio; Humberto Pérez Treviño, el amigo personal de Hank González y de Pichardo Pagaza.
La violencia se desató en este país. El cardenal Posadas, Norma Corona Sapién, Rodolfo Sánchez Duarte, los hermanos Quijano, Francisco Rodolfo Alfarez, 23 muertos en el penal de Tepic, 49 periodistas, 300 perredistas, Luis Donaldo Colosio, José Francisco Ruiz Massieu.
Carlos Salinas de Gortari, dijo aquí: un atentado segó la vida de Luis Donaldo Colosio, sacudiendo hasta sus cimientos la vida pública del país; su asesino, fue detenido y sometido a proceso y sentenciado a 42 años de prisión, las investigaciones no se han cerrado.
Cuarenta días después de la jornada cívica excepcional, un grupo de delincuentes, dijo Salinas, arrebató la vida de José Francisco Ruiz Massieu y señala también el clima que se ha generado a partir de la irrupción violenta en Chiapas y su antagonismo discursivo contra las instituciones, crearon circunstancias propicias para la sinrazón de los demás medios de violencia.
Salinas de Gortari pretende decirnos que los crímenes son actos de imitación extralógica o el subcomandante Marcos, es el autor intelectual. Quien tenga sentido común, reconoce que el señor Aburto, preso en Almoloya, no actuó solo. ¿Quién es el comandante de La Sota? ¿A qué instancia de la seguridad nacional obedece?
El grupo Tucán, que custodiaba o hacía vallas, trabajaba para el hipódromo de Tijuana, propiedad del señor Hank Ronne. ¿Quién manejaba en este país la seguridad nacional? ¿Dónde está? ¿Quién era? ¿Fueron delincuentes los que asesinaron a Ruiz Massieu? Un secretario técnico de una comisión de la cámara, un diputado federal, presidente de una comisión de la cámara, vinculada al secretario de Agricultura, Hank González, amigo personal del senador Hugo Andrés Araujo y del ingeniero Raúl Salinas de Gortari.
¿Quién ordenó que se hiciera buena la licencia de un diputado que anda prófugo de la justicia? ¿Quién o quiénes protegen al diputado Muñoz Rocha?.. y seguimos con la historia.
Salinas dijo que en 1994 sufrimos también otros ataques a la legalidad y a la tranquilidad, que inquietaron a grupos amplios de la població, se realizaron secuestros, entre ellos de connotados empresarios, con el propósito de obtener dinero. Mintió Salinas.
De 1989, a la fecha, más de 2 mil secuestros han sido denunciados públicamente en todo el país y aproximadamente el 60% no han sido aclarados. Miente también Salinas de Gortari, no el 80%.
Para qué decirles simplemente algunos garbanzos de a libra.
En Michoacán se produjeron 285 víctimas, 55 en Sinaloa, 63 en Oaxaca y 40 en Guerrero. En mayo de 1992, Jorge Espinosa Mireles, propietario del grupo Printaform; en mayo de 1992, Joaquín Vargas Guajardo, del grupo Multivisión; en abril de 1993, Juan Robinson Bouch; en 1994, Alfredo Harp Helú y en 1994 también Angel Lozada Moreno.
Los rescates exigidos en 1993, oscilaban entre los 30 y 50 millones de nuevos pesos; para 1994 no bajan de 75 millones de nuevos pesos. Esto demuestra la eficiencia de la política económica también de Carlos Salinas: elevó el rango de los secuestros en este país y el monto.
Salinas reconoce en el caso de Chiapas, que hubo fallas en información política, deficiencias en la respuesta social y política de las autoridades locales, pobres autoridades locales y también un cuidado excesivo durante los meses anteriores, en no emprender acciones preventivas de seguridad en el caso de Chiapas.
Volvemos a lo mismo. Quién manejaba la seguridad nacional, ¿el experimentado Gutiérrez Barrios?, ¿el arbitrario Patrocinio González Blanco? No, creo que no, un patriota de nuevo cuño, un político de los tiempos de la globalización, una importación más de Salinas de Gortari, un perverso tras bambalinas, un hombrecito igual que su jefe poderoso, un Maquiavelo moderno, estoy seguro que saben quién es... qué bien, es francés, es Córdoba Montoya, muchacho.
Córdoba Montoya, producto de la globalización y del cinismo, por lo que estoy viendo, en este país decidió, junto al Ejecutivo Federal, actos muy importantes. Salinas lo tenía a su lado, con un total irrespeto, cuando acordaba el Ejecutivo Federal con el Secretario de la Defensa Nacional.
Cuando había que tomar decisiones en esta cámara, los líderes asistían a las oficinas de Córdoba Montoya, en Los Pinos. Había dirigentes políticos, conocidos también como "las ardillas" porque no salían de ese lugar.
Córdoba Montoya fue el director, el operador, el cerebro.
Por cierto, este señor se dice doctor y no es doctor y está en Washington, con placas diplomáticas y no es diplomático. Sigue actuando con toda impunidad.
¿Quién decidió que no se enfrentara el problema de Chiapas con una propuesta social y política de fondo, para no alertar a la opinión pública norteamericana antes de la firma del TLC? ¿Quién recomendó usar el Pronasol con la manguera abierta, con los recursos económicos y trató de comprar a la dirigencia indígena y campesina de la zona?
Este señor tenía en sus manos el control de la Comisión Nacional de Seguridad Nacional. Ese señor sabía qué hacían los principales dirigentes políticos del país, los del Gobierno y los de la oposición. El primero que nadie conocía los planes de Colosio, para tomar distancia de Salinas. Como dicen por ahí algunos amigos de Colosio, Salinas tenía varios días sin contestar el teléfono, de no hablar con su candidato, porque no le gustaba el rumbo que venía tomando su campaña.
Ese señor Córdoba Montoya, sabe bien, y sabía bien, día a día, hora a hora, lo que iba a hacer Colosio en su gira. Yo estoy cierto de que se trata de un crimen de Estado y nosotros también entendemos que ante la eficiencia mostrada hoy por la mañana, muy temprano, ante la queja de diputados, por la manera en que nos han tratado los cuerpos de seguridad, ¿cómo es posible que esa eficiente seguridad haya permitido este homicidio a un candidato tan importante que estaba, desde que lo fue, protegido por las fuerzas del Estado Mayor Presidencial y Seguridad Nacional? Se trata de un crimen de Estado.
Hay que citar a Fernando del Villar, subsecretario de Gobernación en esos momentos, encargado de la seguridad nacional y gente al servicio de Córdoba Montoya; hay que citar a Córdoba Montoya, para que vayan ante el fiscal especial y rindan testimonio de lo que estaban haciendo con la seguridad nacional, a la muerte de ese candidato presidencial.
Salinas de Gortari construyó también relaciones perversas con la Iglesia, reformó el 130, sin dar plenos derechos políticos a los miembros, a los ministros; definió a las iglesias como entidades burocráticas, cuando que las iglesias son por la decisión de sus fieles; fraguó una política de alianza con Prigione a costa de la representación de la Iglesia mexicana, que en buena hora, ahora en la última conferencia episcopal le ha golpeado a Prigione en su hegemonía y ha colocado a un obispo como el obispo obeso que representará los intereses de la Iglesia mexicana y no los de Prigione, quiero decir los de Salinas.
Las reglas de juego del sistema político se rompieron y se fueron rompiendo en función de la acumulación personal de poder que hizo Carlos Salinas de Gortari. La ley dejó de aplicarse en función de las decisiones discrecionales del señor Presidente y su consejero único.
El narcotráfico, la corrupción y el reparto del sector público a los amigos del señor Presidente. ¿De dónde viene Harp Helú, de dónde viene Roberto Hernández, de dónde viene Carlos Slim? ¿No es un secreto a voces que Salinas de Gortari participa como socio de esas empresas? ¿No es un secreto a voces en el pueblo de México que Salinas es dueño de Teléfonos de México, por vía de prestanombres?
Una corrupción escandalosa con el sector público de la economía. del repartió como botín y se creó una oligarquía al servicio de este Presidente, que se pretendía acumular legitimidad en función de esas componendas también, todos empresarios de nuevo cuño.
Yo no sé, pero yo con absoluta responsabilidad, compañeros diputadas y diputados, si tengamos que ver la privatización del sector público por la vía de la Contaduría Mayor, aunque encuentro dificultades, porque esta Contaduría Mayor tiene que revisar la Cuenta Pública, pero esta cámara tiene que hacer un esfuerzo patriótico para revisar a fondo la transferencia del sector público a manos privadas, por vergüenza, por decoro, por exigencia de la opinión pública nacional, para poder limpiar, incluso los priístas interesados en hacerlo, la imagen de Carlos Salinas de Gortari ante la opinión pública nacional, que habla en todas partes de su corrupción y sus corruptelas. Por lo tanto, tenemos que plantearnos, o una comisión especial, o una investigación, porque yo no confío, con todo respeto, en esa contraloría en manos siempre de un amigo del Presidente en turno.
Tenemos que buscar entonces una salida a este problema, tenemos que romper la lógica del miedo. Aquí hay un hecho, un hecho objetivo. ¿No acaso hay una actitud vergonzante por el hecho de ser diputado ahora?, ¿no hay chistes crueles que dicen que mejor se vaya la cámara de San Lázaro a Almoloya del Río? ¿No el crimen de Ruiz Massieu nos ha desprestigiado socialmente a este cuerpo parlamentario? Por eso compañeras y compañeros, tenemos que reconocer este hecho, tenemos que reivindicar en un momento de crisis tan profunda del país, a este Poder Legislativo.
Tenemos que ir al fondo de esos crímenes. El que iba a ser su líder, señores de la mayoría, no está aquí, lo asesinaron no es cualquier cosa, lo asesinaron, y parece ser que fue otro diputado, no es cualquier cosa, amigo de Raúl Salinas, amigo de Hank, amigo de esta mafia enriquecida con el poder público, importando granos, quebrantos a la economía agrícola del país, como todo mundo sabemos. No seamos cínicos, hay que decirlo, no hay que tener miedo.
Frente a esto, tenemos que esclarecer los motivos de la muerte de José Francisco Ruiz Massieu, con el que yo tuve serias diferencias políticas, pero no puedo admitir el hecho de que un legislador sea asesinado y sea recogido esto como un simple acto más del hampa, de los delincuentes en este país. Tenemos que devolverle a la política la legalidad y la ética.
Tenemos otro reto, compañeros diputados: Chiapas. Chiapas es un reto para enfrentar pobreza y enfrentar democracia, otra asignatura pendiente de la política interna. Yo solamente quiero decirles que tenemos una gran oportunidad si la ejercemos plenamente los diputados.
Yo quiero decirles también que Salinas de Gortari dijo una gran verdad después del informe. El dijo que al PRD ni lo ve ni lo oye. Yo les pido a ustedes que en esta cámara, a diferencia de Salinas, vean al PRD, lo escuchen, porque somos una representación a pesar de los designios que Salinas nos planteó a nosotros, por derecho propio y por derecho que nos dan los mexicanos de estar aquí.
Quiero decirles, con todo respeto diputada Rosario Guerra, estoy de acuerdo con usted, vaya que dejó huella el Gobierno de Salinas, una huella negra y algún día este país se va a dignificar si Salinas de Gortari es llevado a juicio político con todos sus compinches.
Quiero pedirles a ustedes un minuto de silencio por Manuel Clouthier, el cardenal Juan José Posadas Ocampo, Luis Donaldo Colosio, José Francisco Ruiz Massieu, por los 49 periodistas, por los 299 militantes políticos del PRD, por los miembros del Ejército mexicano y los combatientes del EZLN y población civil de Chiapas; por los niños tarahumaras de Chihuahua. Señor Presidente, pido a usted ese minuto de silencio.
Señor Presidente, pido a usted ese minuto de silencio.
(Minuto de silencio.)
Señor Presidente, dejo a usted dos propuestas para que se integren las comisiones especiales que sigan las investigaciones acerca de los asesinatos de Luis Donaldo Colosio y Francisco Ruiz Massieu. Lo dejo en la Secretaría, para que en su oportunidad sea turnada.
«Presidente de la Cámara de Diputados. Presente.
Con fundamento en lo dispuesto por el artículo 58 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, presentamos a consideración de esta soberanía, el siguiente:
PUNTO DE ACUERDOUnico. La Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, acuerda conformar una comisión especial pluripartidista, que tendrá por objeto continuar con el seguimiento de la investigación que con motivo del asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta, lleva a cabo la autoridad competente; para ese efecto, esta Comisión podrá realizar las actividades de acopio de información y las entrevistas con funcionarios que requiera su cometido. La Comisión de Régimen Interno y Concertación presentará una propuesta de acuerdo parlamentario, donde se precisen los legisladores que integrarán esta comisión especial.
Salón de sesiones de la Cámara de Diputados, a 3 de noviembre de 1994. Rúbricas.»
«Presidente de la Cámara de Diputados. Presente.
Con fundamento en lo dispuesto por el artículo 58 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, presentamos a consideración de esta soberanía, el siguiente
PUNTO DE ACUERDOUnico. La Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, acuerda conformar una comisión especial pluripartidsta que tendrá por objeto continuar con el seguimiento de la investigación que con motivo del asesinato de José Francisco Ruiz Massieu, lleva a cabo la autoridad competente; para ese efecto, esta comisión podrá realizar las actividades de acopio de información y las entrevistas con funcionarios que requiera su cometido. La Comisión de Régimen Interno y Concertación presentará una propuesta de acuerdo parlamentario, donde se precisen los legisladores que integrarán esta comisión especial.
Salón de sesiones de la Cámara de Diputados, a 3 de noviembre de 1994. Rúbricas.»
El Presidente:
Gracias, señores diputados. En su oportunidad, señor diputado.
Tiene la palabra el diputado Jorge Moreno Collado, en pro.
El diputado Jorge Efraín Moreno Collado:
Señor Presidente.
La legitimidad en un régimen democrático y plural no implica de ninguna manera unanimidad. El que un grupo, demostradamente minoritario en la historia reciente de la política de nuestro país, no haya alcanzado los triunfos que caprichosamente se han querido atribuir, no implica que el Gobierno actual de Carlos Salinas de Gortari, sea un Gobierno ilegítimo.
La democracia permite compartir el poder. No estoy de acuerdo con quienes dicen, con calidad absolutista, que el poder no se comparte; la democracia exige compartir el poder, pero el Gobierno en una democracia lo ejerce con legitimidad quien detenta la mayoría y esa mayoría la tenemos los integrantes del Partido Revolucionario Institucional.
En 1988, se ganó en las urnas, en 1994, en un recorrido de seis años, se ha ganado en los hechos. Están ahí palmarios los hechos que demuestran que en nuestro país hemos avanzado, en las instituciones de la República, en la división de poderes y en el federalismo, hemos avanzado en las libertades para todos los ciudadanos y su protección, hemos avanzado en la construcción de una nueva República y el pueblo de México lo alienta y el pueblo de México lo demuestra cotidianamente.
¿Qué propósito puede guiar en el análisis y glosa del informe presidencial la repetición trillada de argumentos que el pueblo ha desautorizado en dos elecciones sucesivas, después de 1988? ¿No ha bastado para desautorizar esas imputaciones de ilegitimidad y de ilegalidad el triunfo contundente de 1991? ¿No bastó la repetición de este triunfo que ahora defenderemos con argumentos, con documentos, con legalidad, de 1994? No somos nosotros los que estamos alegando la legitimidad, es el pueblo de México el que la exige y exige el respeto a su voluntad y a lo que en las urnas él ordenó el pasado 21 de agosto.
Solamente mantener en el país un clima de incertidumbre o de zozobra puede explicar que se traigan aquí elementos de nota roja. Solamente con un interés mezquino se puede calificar la obra de Gobierno a través del señalamiento, única y exclusivamente de crímenes. El Gobierno está mucho más allá de la nota roja y del juicio penal.
En este Gobierno se ha transcurrido por un sendero que no ha realizado todo, pero que es perfectible. Que podemos llegar a metas considerablemente mejores, porque están puestas las bases de una nueva República, están puestas las bases de una nueva democracia, de un nuevo sistema de diálogo, de un nuevo sistema de concertación.
Imputaciones gratuitas e injuriosas son aquellas que hablan de crímenes de Estado, los cometidos contra Luis Donaldo Colosio o José Francisco Ruiz Massieu. Es a los priístas a quienes nos han ofendido, es a los priístas a quienes nos han mutilado de dos grandes hombres que ya transcurrían por la historia política de México. Somos los ofendidos, no somos los ofensores.
Estamos en el camino de llegar al esclarecimiento de los crímenes. Estamos en el camino de dar prueba de que podemos vivir en un estado de derecho, de que habremos de vivir a plenitud en un estado de derecho, pero eso exige, señores diputados, que pongamos las bases de la civilidad en la discusión, que enaltezcamos al Poder Legislativo; que hablemos efectivamente de que este poder debe recuperar la imagen republicana que le corresponde, pero no es, compañero Graco, con la injuria, no es la injuria la que enaltece ni prestigia a nuestra cámara y a nuestra función de diputados.
Se ha hablado también aquí de legalidad y ética, como fundamento de la acción política, yo quiero adherirme a esa magnífica idea, a ese magnífico principio, de que tengamos como fundamento de nuestro trabajo político la ética, pero que la legalidad nos guíe también, sí, pero hemos visto su apego a la legalidad el día 1o. de noviembre. Hemos visto como aquí se ha violado la ley por quienes exigen legalidad.
Para nosotros no son indiferentes las demás fracciones parlamentarias. Estamos en un ambiente de pluralidad, de diálogo y de concertación, son nuestros interlocutores naturales, tienen derecho indudable a la participación. Queremos construir con ustedes juntos una patria mejor, pero lo vamos a hacer guiados por los principios superiores de este país, en los que el Partido Revolucionario Institucional ha sido el promotor de los grandes cambios de México.
La política interior de México no es sino el apego, no es sino la vida, no es sino el funcionamiento de las instituciones básicas y fundamentales de la República, de la división de poderes y del federalismo, de las libertades humanas, civiles y públicas. Es, el enaltecimiento de la vida democrática de México. La división de poderes sería inentendible si se sustentara en la confrontación y la lucha.
Para la República democrática, la división de poderes se hace eficaz como sistema de diálogo entre gobernantes y como un régimen de colaboración en el cumplimiento de procesos constitucionales básicos y fundamentales. No es de extrañarse la continua comunicación entre el Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo; no es de extrañarse que esta comunicación implique acuerdos fundamentales, si estas instituciones se cruzan con el sistema moderno de los partidos. No es de extrañarnos pues de que pisen los espacios de los recintos del Ejecutivo los legisladores o que los miembros del Ejecutivo vengan aquí a intercambiar con nosotros puntos de vista. No le demos doble intención a esa comunicación, a ese diálogo que se da entre los poderes federales como parte de la necesaria democracia que debe existir en una República.
Por eso es que un informe, el informe presidencial sirve como vehículo de ese diálogo indispensable para calibrar los avances del país en sus diversos sectores. El propio informe dimensiona el cumplimiento del pacto político que nos une y da pauta al ejercicio del poder de control que como legislativo debemos asumir frente al Ejecutivo.
No nos debe animar ni como mayorías, no nos debe animar el triunfalismo, ni como minorías debe animar la simple oposición atrabiliaria. El diálogo nos inviste de dignidad, la colaboración nos ubica en la civilidad, el control nos conduce a la independencia. No es signo de civilidad ni de respeto que se deben entre sí los integrantes de los poderes Legislativo y Ejecutivo interpelar, vociferar, ofender, injuriar a quien acude a nuestro recinto a cumplir un deber constitucional de informar al Congreso y a la nación del estado que guarda la administración pública del país.
Este recinto legislativo es y debe ser el asiento de la racionalidad, nada más racional que la ley y el derecho, nada más civilizado que la juridicidad, nada más paradójico, por otra parte, que en la fuente misma originaria de las leyes se ofenda a la razón, se trastoque el orden ético mínimo de la política y se violen flagrantemente las normas que nos rigen y que debemos seguir mereciendo como poder investido de soberanía.
Analicemos, sí, juiciosamente, el formato de la presentación del informe presidencial, ubiquemos su calidad constitucional en el marco del republicanismo, en el contexto de los diálogos que caracterizan a la democracia; aprovechemos estas experiencias que vivimos para perfeccionar nuestro sistema, no para denostar, no para cobrar con mezquindad y oportunismo supuestas facturas, lo cual coloca a quienes así actuaron el día primero, en la condición de descorteses, pero también de inmaduros.
La fracción priísta de esta LVI Legislatura, con toda dignidad, con todo derecho y en el marco de la solidaridad partidista, ratifica y refrenda al titular del Ejecutivo, el reconocimiento por su obra y el respeto a su elevada investidura de Presidente de la República. Muchas gracias.
El diputado Graco Luis Ramírez Garrido Abreu (desde su curul):
Para alusiones personales.
El Presidente:
Para contestar alusiones personales, por cinco minutos, tiene la palabra diputado Graco.
El diputado Graco Luis Ramírez Garrido Abreu:
Estimado amigo, diputado Moreno Collado:
Yo le pido a usted respetuosamente tenga a bien romper con su visión patrimonialista. Los muertos fueron priístas, pero no son propiedad del PRI, son dirigentes políticos de este país. Hasta con eso se quieren quedar.
Segundo; no hablé de problemas de nota roja. Más respeto a sus muertos, hablé de hechos políticos, de crímenes contra dirigentes políticos y de procuradores que pasaron consecutivamente y fueron incapaces de establecer un estado de derecho y establecí como un hecho político, la concentración feroz de poder que hizo Salinas de Gortari, por encima del derecho y por encima de las reglas políticas que mantuvieron la estabilidad de ese sistema. Salinas entonces, rompió las reglas, y el crimen político hoy es un hecho político, un hecho que nos debe preocupar, para poder pararlo, para poder frenarlo de dos maneras: encontrando a los culpables, para que no haya impunidad, porque si hay impunidad, las pistolas están sueltas, las ganas están vivas, el ejemplo se puede seguir. Y tercero, si abrimos cauces democráticos y creamos reglas de convivencia política más civilizadas, frenamos también esas expresiones de intolerancia.
Entonces, amigo Moreno Collado, no use tantos adjetivos contra nosotros; nosotros somos gente igual, nos podemos equivocar o no, pero otra cuestión que le aclaro a usted como abogado, no violamos la ley, quizá, violamos el Reglamento solamente. Muchas gracias.
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado Rodrigo Robledo, del Partido Acción Nacional.
El diputado Rodrigo Robledo Silva:
Señoras y señores diputados de esta LVI Legislatura:
Yo quisiera acentuar que estamos discutiendo el tema de la glosa del informe de gobierno presidencial y el Partido Acción Nacional con su situación de responsabilidad ha desarrollado sus planteamientos con base en lo que el Presidente de la República ha venido a plantear a esta tribuna.
El hablar del federalismo en México implica una gran contradicción, señores. Por un lado tenemos nuestra Carta Magna, que es la Constitución, la cual dispone en su artículo 40 las atribuciones que corresponden al federalismo. Por otro lado tenemos una serie de leyes secundarias, las cuales presento en este momento, que se oponen a aquél, artículo 40.
Además, debemos de considerar que existe un ente llamado federación, el cual tiene de facto vida propia y en muchos aspectos no solamente está desligado de los estados o entidades federativas que han dado su origen, sino que está muy por encima de ellos y en detrimento de los mismos.
Nos encontramos que el pueblo mexicano es el que ha decidido, a través del constituyente, estableciendo una República cuya primera característica es que sea representativa, señores, es decir, que no se ejercerá de forma directa, sino de forma indirecta, a través de representantes, como el caso lo amerita, inmediatamente después de que se hace la referencia a su calidad democrática, característica que está íntimamente ligada a la anterior, señores.
El pueblo al que se gobierna, asimismo ha expresado a través de su representatividad deberes de designación por el que el propio pueblo ha dispuesto, los cuales deben ser designados por el mismo. Una característica más: expresa que dicha República debe de ser federal.
Existe un conglomerado que decide en forma y en unidad, la cual otorga a su soberanía la necesaria para que dicha unidad pueda ocuparse en asuntos de interés común.
El mismo precepto establece: y dicha República está compuesta por estados libres y soberanos en lo concerniente al régimen interior, lo cual deja la salvaguarda a la soberanía y por tanto a la autonomía de los estados en asuntos de interés común, que éstos, como la federación.
Este tema por su importancia socio-económica y su relación con el federalismo auténtico, pretendemos en la representación un reto que ha llevado a confrontar uno de los fuertes soportes de autoritarismo que padece el país: el control de los recursos económicos y los recursos naturales.
El titular del Ejecutivo ha procurado cambios en la estructura, en lo que consideramos que no existe equidad. El reto nos ha llevado a confrontar uno de los más fuertes soportes del autoritarismo que padece nuestro país. En el año de 1958 el licenciado Gómez Morín y mediante un emplazamiento del señor Luis Alvarez al licenciado Adolfo López Mateos, le señalaron lo siguiente:
"1o. El Gobierno Federal absorbe casi todo el ingreso nacional. La dependencia económica en que viven los estados y municipios los obliga a vivir suplicando el favor de una obra con donación en subsidio por parte del Gobierno Federal."
Para el año de 1958, se destinó el 85% de los recursos para la federación y sólo un 15% para los estados y municipios del país, con las variantes de grado dependientes más factores políticos que económicos en situación descrita, señores; en 1958 ha variado relativamente a un 20% en la actualidad de 1994. A la suma señalamos que han transcurrido 36 años con las mismas condiciones, entre estados y municipios.
Dentro del ramo de la administración, los recursos del Programa Nacional de Solidaridad provienen del ingreso local y han sido instrumento de propaganda política, en cuyas acciones el Gobierno central invade las facultades de estados y municipios, pervirtiendo el concepto de federalismo; principio de Gobierno subsidiario en acendrar la dependencia del paternalismo en vicios sociales.
Si bien es cierto existe en comisiones desde diciembre del año de 1992 una propuesta del Partido Acción Nacional, en el que reforma el actual sistema de coordinación fiscal para estados y municipios, el federalismo que concebimos en forma de Gobierno significa la división de la tarea; esto corresponde a una acción subsidiaria, es decir, el Gobierno debe ser responsable ante las atribuciones legales que le corresponden.
El problema ha consistido en ubicar el grado de distribución en la competencia y concurrencia de las atribuciones, para poder controlar la distribución de los recursos. En términos de legislación, pareciera que prácticamente el federalismo en cada nivel es capaz, en cuanto a sus atribuciones y obligaciones.
En la realidad, la inexistencia de la división de los poderes, en la práctica es limitada la soberanía de las identidades.
En nuestra opinión, el camino adecuado es de una colaboración real, activa y no ficticia, entre el Gobierno Federal y los gobiernos locales, para lo que debe ser desechada toda imposición de acatados acuerdos, normas y leyes que dispongan tal relación.
Durante el primer año de la actual administración federal, se plantearon reformas a la Ley de Coordinación Fiscal, mismas que fueron anunciadas en 1989 y puestas en vigor en el año de 1990, reflejando mecanismos de distribución inadecuados para las entidades.
Compañeros diputados: nuestro momento, de la LVI Legislatura y de nuestras responsabilidades de legisladores, debe de modificar la actitud del Ejecutivo Federal con relación a las entidades federativas, así como con relación a los municipios de nuestro país. Es necesario que hagamos una revisión y reconsideración de apoyar. Desde esta tribuna yo exhorto a aquellos miembros de las comisiones correspondientes, a revisar los documentos de una mejor coordinación fiscal, señor Presidente.
El Presidente:
En su turno, el diputado Oscar Villalobos Chávez.
El diputado Oscar Villalobos Chávez:
Con su permiso, señor Presidente; con permiso de los compañeros:
Quiero retomar un tema que escuchamos hace unos momentos por parte de quien acudió a esta tribuna a exponer el punto de vista de su fracción, el PRD y retomar algunas de las que seguramente fueron las alusiones personales del diputado Moreno Collado, que pretendió venir a aclarar y a razonar sobre ellas en esta tribuna.
Algo que debe quedar perfectamente claro y que lo hemos dejado claro ante la nación, es el absoluto rechazo por parte del priísmo a la violencia. Hemos presenciado en los días recientes al iniciar nuestros trabajos, actos que promueven y convocan precisamente a la violencia, a ellos hoy como siempre habremos de oponernos, dentro y fuera de este recinto. El 1o. de noviembre, en quienes hoy reclaman una nueva actitud y un nuevo comportamiento, acorde a los tiempos que vive México, sólo les conocimos actitudes que motivan y que conllevan la violencia. Dejamos pues nuestra franca manifestación de rechazo a esas actitudes; reclamamos el respeto para este órgano colegiado; rechazamos las actitudes que conllevan la violación a las leyes a las cuales somos los primeros obligados a respetar.
No es la violencia el camino para la democracia, señores, es la rectitud de ánimo, es el comportamiento conciliatorio, es el respeto a las ideas de los demás y no la pretensión de establecer las ideas propias como dogmas o como única verdad; esta actitud no es el camino para la democracia, México demanda en estos nuevos tiempos que nos toca vivir y en los que nos toca desempeñarnos como diputados, una actitud congruente que debe iniciarse con nuestro comportamiento en esta cámara.
La concepción de la democracia que ordinariamente les escuchamos, las concepciones que sobre la democracia podamos tener y en lo individual cada uno de nosotros, son y serán invariablemente parte de ese concepto que nunca, a mi juicio, logrará ser acabado.
La democracia requiere conforme avanzan los tiempos, nuevas condiciones, nuevos comportamientos, tendrá invariablemente nuevas exigencias; calificar la vida pública de este país conforme a su versión particular de democracia, indudablemente que no es el camino para la misma; la apertura, el entendimiento, el razonamiento de la verdad ajena seguramente será una actitud mejor.
Escuchamos la crítica y la escuchamos y la atendemos en lo que de razonable tiene, pero la descalificación que hemos escuchado de quienes han hecho uso de la tribuna y así se han expresado, la descalificación per se, denigra a este recinto, a este país y a quienes así la profieren.
Mucho ha avanzado México en los recientes años. Escuchamos en el informe del señor Presidente de la República, un detalle muy completo de los esfuerzos que los mexicanos hemos logrado, de lo que los mexicanos hemos construido juntos; ustedes y nosotros. Cuando yo escucho la descalificación per se, me parece estar escuchando a quien se niega a sí mismo; cuando discutimos, analizamos, glosamos un informe, requerimos una actitud abierta, una actitud razonable; no la cerrazón y no sólo el exhibicionismo aprovechando la tribuna.
Esta actitud seguramente los mexicanos la habrán de juzgar y en unos y en otros, habrá de reconocer la sociedad, los mexicanos en su conjunto y habrán, como ya se dijo aquí, de volver en una próxima contienda electoral, a ratificar su confianza y a negársela en razón de estas actitudes a quienes hoy aquí representamos a los mexicanos.
Indudablemente que la respuesta en las urnas este 21 de agosto que recién pasó, fue el veredicto de los mexicanos a la conducción de este país y fue el veredicto y la opinión de los mexicanos a lo que en este país ha venido sucediendo los últimos años.
Diputado Graco, coincidimos con usted y qué bueno que usted lo reconoce en la calidad de quienes hoy ya no se encuentran con nosotros, me refiero a Luis Donaldo Colosio y también a quien fuera nuestro secretario general del partido, del PRI, qué bueno que en ellos reconoce usted no sólo la calidad personal, sino la valía como dirigentes y como personas que tenían para esta nación. Enhorabuena, en ello definitivamente coincidimos. No es nuestro afán patrimonialista, era gente necesaria para este país, valiosa para este país, e indudablemente no sólo para nuestro partido. En ello coincidimos con usted y enhorabuena que así se los reconozca, ojalá y esta actitud implique reconocer en vida la valía permanentemente de nuestros dirigentes.
Indudablemente que como a usted, a nosotros nos preocupa y nos ocupa además de preocuparnos, la situación de violencia que vive el país; cualquiera que sea su origen, crimen político o no, estamos dispuestos a combatirlo. Los crímenes políticos a los que usted se ha referido, continúan siendo investigados, es un proceso que no ha concluido, que sigue abierto y sobre el cual somos los primeros en exigir la aplicación de la justicia; somos los primeros en exigir que las investigaciones lleguen a fondo.
Le regreso, diputado Graco, con respeto, el argumento. No sean patrimonialistas. Nosotros estamos procurando no serlo.
Con el diputado Robledo coincido, efectivamente venimos a esta tribuna a glosar el informe, las cuentas que ha rendido a la nación el señor Presidente de la República; venimos no a hacer proselitismo político, no a desviar el tema y la atención de quienes aquí concurrimos dejando de lado la glosa del informe para atender situaciones políticamente quizá convenientes para una fracción o para la otra.
Por eso coincido con el diputado Robledo en que debemos de centrar este debate.
Hice un esfuerzo particularmente especial, y lo digo con respeto para el diputado Robledo, en tratar de centrar su exposición, de ubicar su exposición y quizá seguramente por mi causa no logré puntualizar el tema que nos expuso. Quiero decirle que coincidimos los priístas en que la lucha diaria por fortalecer el federalismo, nos une y nos habrá de llevar a través de este foro legislativo, a día con día mejorar esta condición.
Efectivamente, debemos procurar fortalecer a nuestros estados y particularmente fortalecer a nuestros municipios. Efectivamente, como usted lo ha manifestado, es necesario, permanentemente, revisar los convenios fiscales, es necesario fortalecer las finanzas de los estados y de los municipios. Sin embargo, debemos también reconocer que mucho se ha avanzado en la materia, que en mucho el respeto a ese federalismo quedó evidenciado durante los años recientes, con los que concluye la administración del presidente Salinas.
Yo no coincido con usted cuando opina que el Pronasol invade facultades que están otorgadas a los estados y a los municipios; los mecanismos operativos del Pronasol, invariablemente, como requisito incluso de procedencia para la asignación y aplicación de recursos, requieren de la participación, a través de distintos mecanismos, de municipios y del Estado y en la práctica así lo vimos durante seis años, un programa que hay que mejorar, un programa que por sus eficaces resultados, debemos de buscar, desde todos nuestros ámbitos, el fortalecer, no el exclusivamente venir a criticar.
Fallas las tendría, indudablemente que sí, es tarea humana y por lo tanto invariablemente perfeccionable. Sin embargo, no coincido, puntualizo, con su opinión, al decir que invade la aplicación de estos programas, la esfera de los municipios ni del Estado.
Efectivamente, el federalismo implica la división de tareas, esta división está expresamente consignada en la ley. Atengámonos a ella y si no nos satisface, cambiemos la ley, esa norma y esa ley que, reiteramos, somos los primeros obligados en cumplir. Muchas gracias, señor Presidente.
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado José Narro Céspedes.
El diputado José Narro Céspedes:
Con su venia, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
En el balance, en la glosa del informe, nuestra opinión como Partido del Trabajo, es que fue un informe autocomplaciente, triunfalista y poco objetivo sobre el saldo social, económico y político que deja este Gobierno después de seis años.
Han transcurrido seis años desde que esta administración se hiciera cargo del Poder Ejecutivo. En esos seis años el país cambió, las promesas de campaña ahora pueden ser evaluadas a la luz de los hechos.
Nos encontramos, después de esos seis años, con un país centralista, en donde no se ha avanzado en el propósito federalista, en donde la coordinación fiscal sin el marco del pacto federal, únicamente distribuye el 19% de la renta nacional entre los estados y los municipios. No se puede hablar de descentralización cuando aspectos fundamentales de la vida nacional, como la salud, como el mismo Programa de Solidaridad y cuando gran parte de los recursos y de las políticas son normadas y dirigidas desde el centro.
Hablamos de cambios en el Poder Legislativo o en la propuesta intensa que hizo el Legislativo, en donde cerca del 80% fueron iniciativas del Poder Ejecutivo. Seguimos hablando de una concentración y de un régimen altamente presidencialista, en donde se avasalló al Poder Legislativo y al Poder Judicial, en donde nos enfrentamos a estructuras y organismos como la Comisión Nacional de Derechos Humanos, que siguen dependiendo del Ejecutivo, que siguen careciendo de autonomía y de credibilidad hacia el conjunto de la población.Si hubiera de resumirse en pocas palabras el balance de la política interna del presidente Salinas de Gortari, habría que señalar que el país entero sufre un enorme déficit democrático y en el Poder Judicial hace falta una gran reforma judicial para que realmente pueda imperar la justicia.
Terminamos el sexenio en medio de una guerra dentro de la élite del poder; contra lo que pudiera suponerse no se trata de una guerra entre modernizadores y dinosaurios, sino de una guerra entre distintas bandas de la llamada familia revolucionaria, que no distingue ideologías, sino intereses; es la disputa no entre proyecto de nación, sino por la nación como botín. Es un cruce entre poder político y negocios lo que hoy está en juego en México y lo está con un agravante mucho mayor: el narcotráfico, que ha entrado a la escena, entre la tolerancia y la complicidad de ciertas franjas del poder político y ha entrado de lleno en esta disputa también por el país.
La política nacional se ha convertido en un asunto penoso. La más audaz de las novelas negras parece un tímido cuento rosa al lado de lo que los medios masivos de comunicación reportan día con día sobre la vida política del país. Las promesas incumplidas de democratización real del país tienen su parte de culpa en todo ello. La persistencia del régimen de partido de Estado, el presidencialismo llevado a su máxima expresión y el dedazo, como rea-li-dades vivas, tienen el resto de la culpa.
Hasta ahora el dedazo como mecanismo para definir al candidato Presidencial dentro del partido oficial, ha sido un grave problema nacional. La lucha entre grupos que no respetan sus propias reglas ha terminado por crear una profunda convulsión política en el país y por cierto, quienes viven las consecuencias de ello no son solamente quienes se adscriben a dicho instituto político, sino toda la nación.
Una y otra vez la administración actual ha violentado la existencia y la normatividad de nuestras instituciones republicanas. Si bien es cierto que muchas de ellas se encontraban profundamente anquilosadas y eran ineficientes para los fines que fueron constituidas, también lo es que su supresión de facto ha profundizado la crisis de nuestra vida política.
Después de múltiples iniciativas para aclarar el asesinato de Luis Donaldo Colosio, hasta el papel fragmentado de diversas secretarías de Estado, las instituciones existentes se han erosionado y balcanizado, violentando con frecuencia el orden jurídico. Al romper las instituciones y no crear nuevas, se ha entrado al círculo perverso de iniciativas de Gobierno de facto que se ejecutan tan sólo por la lealtad de quienes ocupan el poder y no por la convicción de la justeza.
La actual administración sólo ve en la problemática que vive ese Estado, un asunto de deficiencias en los aparatos de seguridad nacional y el alejamiento de las autoridades municipales de sus gobernados. No ve que en Chiapas estalló un sistema regional de dominio atrasado e injusto; no ve en Chiapas y en la tarahumara el fracaso de la política social y económica implementada; no ve en Chiapas, el fracaso de la política judicial implementada por el actual Gobierno; no ve que en Chiapas estalló un sistema regional injusto, por ello tampoco es capaz de aceptar que en Chiapas el camino de la paz es el camino de las reformas que permitan reconstruir el Gobierno y la autoridad política sobre bases auténticamente democráticas.
En Chiapas el camino de la paz es el camino de la afectación de los intereses creados durante décadas, al amparo de la impunidad y de la injusticia.
Estamos convencidos de que la única solución posible es aquella que contemple cabalmente los intereses populares en la entidad, respetando la autonomía y la identidad de las poblaciones indígenas; por eso el Partido del Trabajo se solidariza y apoya la demanda de nuestros compañeros indígenas y campesinos chiapanecos, de nuestros compañeros del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
Estamos en la búsqueda también de una solución por las vías pacíficas y civiles, porque la paz en Chiapas es la paz para todo el país. La guerra en Chiapas sería el desgarramiento de la República.Si el Gobierno cree que la llegada de Robledo Rincón coadyuvará a la pacificación con dignidad en Chiapas, está profundamente equivocado. Es una muestra más de que sigue haciendo una lectura incorrecta de los grandes problemas nacionales.
¿Qué economía puede prosperar en un clima político como el que nuestro país ha vivido durante este año?, ¿qué capitales pueden llegar ante una élite política dividida, enfrentada y un enorme saldo social sin resolver? La respuesta es obvia: la ingobernabilidad y la confrontación no compaginan con el desarrollo y la inversión productiva. En la crisis de fin de sexenio ha aparecido con absoluta claridad la falacia que animó a la actual administración al pretender realizar una reforma económica y posponer la reforma política y la reforma judicial. La realidad ha terminado por cobrarles la factura.
Tres reformas políticas en un sexenio, resultado más de la presión popular que de la voluntad del actual Gobierno, son el indicador preciso de la precariedad y de la insuficiencia de ésta la necesidad de que hayan sido tres.
Como una flecha que nunca alcanza su blanco, así las reformas políticas efectuadas parecen colocarnos cada vez más lejanos a la democracia.
El más reciente proceso electoral demostró con absoluta claridad la falta de equidad en la contienda; el partido oficial sigue siendo juez y parte, la calidad del proceso electoral dejó mucho que desear.
La credibilidad en las elecciones sigue siendo para el pueblo mexicano un asunto pendiente.
No se puede hablar de democracia si no se construye un cuarto poder electoral en donde haya elecciones con clara equidad, con la separación del PRI-Gobierno y con proporcionalidad en ambas cámaras de la representación de los partidos, de acuerdo a la votación obtenida.
Planteamos por eso también que se regule el artículo 39 constitucional, para hacer pleno el derecho del pueblo de darse las formas de gobierno que elijamos nosotros; planteamos también que en ese artículo 39 debe de plasmarse el derecho del pueblo al plebiscito, al referendum, a la iniciativa popular; debe de plasmarse también en la Constitución el reconocimiento constitucional a las organizaciones sociales y civiles y a su derecho a participar en los diferentes aspectos sociales, políticos y económicos de nuestro país.
La necesidad de una nueva reforma que garantice efectivamente transparencia y certeza en la organización y calificación de las elecciones, que establezca instrumentos eficaces para castigar a quienes transgreden las leyes electorales, sin distinción de ninguna índole, que permita competir en condiciones de equidad y quite a los partidos políticos con registro el monopolio de la participación electoral, todo esto para México y para el pueblo mexicano sigue siendo una tarea pendiente.
Las conocidas concertaciones y los numerosos gobiernos interinos muestran el enorme costo que para el país ha tenido la falta de democracia real.
Por el bien de la República el partido oficial debió aceptar la derrota de sus candidatos y no tratar de imponerlos, pues con ello violentó el estado de derecho.
Debería saber el régimen saliente cuánto daño hizo al país y a la credibilidad en las instituciones al desvirtuar la voluntad popular.
Los relámpagos de enero en Chiapas anunciaron una tormenta política de consecuencias mayúsculas.
La salida militar pudo ser detenida, pero la paz no ha llegado aún a ese Estado y a ese rincón de México.
La situación es hoy casi tan precaria como los primeros días de conflicto; sin reforma política, sin democracia, no hay ni habrá posibilidades de un desarrollo sano y sostenido en nuestro país.
Por eso, por todo lo anteriormente dicho, la fracción parlamentaria del Partido del Trabajo, considera que es necesario realizar a la mayor brevedad posible un gran diálogo nacional, porque el pacto político, cimbrado y realizado en 1917 en esa Constitución, fue violentado, se requiere para México un nuevo acuerdo político nacional, en donde se garantice el derecho del pueblo a su desarrollo y a su bienestar, a la justicia y a la democracia.
Para ese diálogo nacional planteamos nosotros que es necesario que participen y se expresen todas las fuerzas sociales y políticas del país, con el fin de garantizar a toda la población una verdadera reforma democrática del Estado, una profunda reforma del Poder Judicial, un pacto federal y un equilibrio entre los poderes republicanos efectivos, de manera que todo esto sea el sustento de un desarrollo nacional con libertad, justicia y democracia. Muchas gracias.
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado Roberto Campa Cifrian, del Partido Revolucionario Institucional... ¿Roberto Campa no está?
DECLARACION POLITICA (II)
El Presidente:
Continuamos en el orden. Señores diputados, los cuatro coordinadores de las cuatro fracciones parlamentarias han solicitado a esta Presidencia se dé un espacio en este análisis que se está haciendo al informe presidencial, a fin de que el diputado Alejandro Rojas Díaz-Durán, dé lectura a una declaración conjunta que los cuatro coordinadores consideran que debe de ser conocida de este pleno y seguramente tendrá la solidaridad de todos ustedes.
En uso de la palabra el diputado Alejandro Rojas Díaz-Durán.
El diputado Alejandro Rojas Díaz-Durán:
Con su venia, señor Presidente:
Los miembros de las fracciones parlamentarias de la LVI Legislatura nos manifestamos enérgicamente en contra de la denominada propuesta 187, promovida por organizaciones racistas y apoyada por el gobernador del Estado de California, porque viola los derechos fundamentales del hombre, sus derechos laborales y de representación política, así como las contraprestaciones que por derecho tienen, discriminatorias de nuestros conciudadanos, que excluye a las minorías nacionales y vulnera la convivencia pacífica de los individuos.
Asimismo, nos solidarizamos con las luchas emprendidas por nuestros connacionales en los Estados Unidos de América en rechazo a la iniciativa 187 y por el respeto a los legítimos derechos que cualquier individuo posee por el simple hecho de serlo. Los mexicanos repudiamos el intento de algunos grupos con tendencias xenofóbicas y racistas, que pretenden dañar las condiciones de convivencia, solidaridad y cooperación entre los pueblos de México y de los Estados Unidos de América.
Exhortamos al Poder Ejecutivo para que continúe las gestiones diplomáticas conducentes y refuerce la actividad consular, a fin de lograr la plena protección de nuestros compatriotas en ese vecino país, tarea hoy prioritaria de la política exterior de México.
Palacio Legislativo de San Lázaro, a 3 de noviembre de 1994. Diputados José Natividad González Parás, del PRI; Ricardo García Cervantes, del PAN; Jesús Ortega, del PRD y Joaquín H. Vela G., del PT. Gracias.
VI INFORME DE GOBIERNO (II) POLITICA INTERIOR
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado René Arce.
El diputado René Arce Islas:
Señor Presidente; compañeros legisladores:
Es indudable que la reforma o modernización neoliberal del Estado mexicano se inició en el sexenio de Miguel de la Madrid. El proceso de desincorporación de empresas paraestatales y el llamado Capítulo Económico de la Constitución, así lo indica.
La justificación a este viraje sobre la intervención del Estado en la economía se sustentó en el fracaso evidente que durante los gobiernos priístas de Echeverría y López Portillo mostró el modelo económico desarrollista, la creciente ineficiencia y corrupción de las empresas estatales y paraestatales, que no cumplieron a cabalidad con las metas sociales que justificaban su existencia, el fomento a los monopolios de carácter estatal y privado con un proteccionismo que provocó una industria de baja calidad, pero con mercados cautivos y una concentración de la riqueza nacional en 300 familias privadas y una gran familia revolucionaria, así como un discurso antiimperialista en materia de inversión externa, pero justificatoria, para aceptar préstamos foráneos que provocaron el peor endeudamiento nacional y cuyo beneficio lo tuvieron funcionarios del Gobierno e industriales privados supuestamente nacionalistas.
Ello dio la justificación teórica a los neoliberales tecnócratas para llevarnos a la disyuntiva de un estado más propietario o un estado más justo. Carlos Salinas de Gortari en su I Informe de Gobierno planteó las bases de su proyecto sexenal a partir de una concepción globalizadora sobre la marcha de la economía y la política mundial. Manifestó la necesidad de tomar como estrategia de cambio la modernización del país. Afirmó que era un imperativo modificar la forma de organización de nuestro país para producir riqueza, bienestar y para distribuirla equitativamente. Señaló que la modernización sería nacionalista y popular, teniendo como prioridad la que define la historia, el interés general por encima de los intereses particulares, dar más a quienes menos tienen, fundar la unidad en el acuerdo razonado en ejercicio de la ley y la libertad.
Para lograr lo anterior, propuso a la nación tres acuerdos nacionales: ampliación de nuestra >vida democrática, recuperación económica con estabilidad de precios, mejoramiento productivo del nivel de vida de la población. Enfatizó que cumplir eficazmente estos tres acuerdos nacionales implicaba para él una reforma del Estado.
Carlos Salinas de Gortari justificó sus propuestas de modernización con los siguientes supuestos: a) La mayoría de las reformas de la revolución habían agotado sus efectos y no eran ya la garantía del nuevo desarrollo que exige el país; b) La crisis del modelo desarrollista mostró que un Estado más grande no era necesariamente un Estado más capaz, que un Estado más propietario no era más justo; más Estado significaba menos capacidad para responder a los reclamos sociales. El tamaño del Estado se extendía mientras el bienestar del pueblo se venía abajo.
El punto central en la reforma del Estado era resolver a favor del pueblo el dilema entre propiedad que atender o justicia que dispensar, entre un Estado más propietario o un Estado más justo. Finalmente planteó que en un mundo tan competitivo como el de hoy se requería impulsar grandes consorcios que pudieran enfrentar a las grandes transnacionales.
A seis años de su Gobierno, a la hora de hacer un balance en materia de su propuesta de reforma del Estado, podemos asegurar que si bien es cierto que muchas de las premisas y justificaciones teóricas tienen validez, los objetivos sólo se cumplieron de manera muy parcial y en la mayoría de los casos, quedaron como asignaturas pendientes.
De sus tres propuestas de acuerdo nacional, podríamos señalar lo siguiente: en relación a la ampliación de la vida democrática, nunca estuvo realmente entre los objetivos del régimen salinista una reforma política integral y a fondo; su prioridad fue implementar rigurosamente su proyecto de reforma económica, y para ello usó y abusó del ejercicio del poder presidencial, como jamás se había hecho en un periodo sexenal.
La imposición de gobernadores en prácticamente la mitad de los estados, el avasallamiento de los municipios con los programas de Solidaridad y Procampo, los acuerdos para reformas electorales incompletas y hasta regresivas, los cientos de asesinatos, encarcelamientos y fraudes en procesos electorales federales, estatales y municipales, así como la simulación sobre la democratización del partido de Estado y el sometimiento de los poderes Legislativo y Judicial a los mandatos presidenciales, nos indican que este compromiso quedó prácticamente incompleto.
La ciudadanización de los órganos electorales, la credencial para votar con fotografía, la inicial apertura de los medios de comunicación, la creación de los derechos humanos y el reconocimiento de la personalidad jurídica de las iglesias, fueron avances, hay que reconocerlo; pero sin duda, demasiado cortos para lo que se planteó al inicio de su sexenio como una reforma del Estado.
En cuanto a la recuperación económica con estabilidad de precios, Salinas de Gortari planteó un crecimiento gradual del producto interno bruto, hasta alcanzar un 6% anual, al finalizar su administración. Para lograrlo destacó varios objetivos que finalmente fueron los logros más importantes de su sexenio, entre otros destacan los siguientes: la renegociación de la deuda externa, reducción de la inflación a un dígito, el superávit y las finanzas públicas, el adelgazamiento del Estado en la venta de entidades del sector público, que de 618 pasaron a 257, incluyendo en ellos la banca y Teléfonos de México; la modificación mediante iniciativa de ley del artículo 27 para iniciar un proceso de reprivatización e inversión en el campo, el abrir las fronteras a la competencia externa e impulsar la firma de un TLC con Estados Unidos y Canadá, de la cual ya tenemos algunos problemas, como la ley 187; la diversificación de relaciones con países de Europa y la Cuenca del Pacífico, la autonomía del Banco de México.
Todo lo anterior, lo llevó a cabo usando el poder presidencialista autoritario y sólo cubriendo las formas en cuanto a la participación del Poder Legislativo. Sin embargo, a pesar de haber logrado los objetivos anteriores, el producto interno bruto sólo creció en promedio el 2.5%, con lo cual también fracasó en otro de sus objetivos que había previsto al inicio del sexenio.
En cuanto al mejoramiento productivo del nivel de vida de la población, Salinas de Gortari invocó en varios de sus informes presidenciales, las palabras de don José María Morelos y Pavón, en su histórico mensaje de Los Sentimientos de la Nación, de dar más a quien menos tiene y se comprometió a hacer realidad cuatro prioridades sociales en su Gobierno: erradicación de la pobreza extrema, la garantía de seguridad pública, la dotación de suficientes servicios básicos en los estados de la República.
En materia de justicia, prácticamente todo ha quedado pendiente. Indudablemente que la creación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, fue un acierto. Por supuesto que con una mayor autonomía y con mayores facultades, sería diferente. Habrá que luchar por ello.
Por otro lado, la aparición de una Coordinación de Seguridad Pública de la Nación, nos trae a la memoria aquellos cuerpos anticonstitucionales que tantos crímenes y violaciones a los derechos humanos cometieron en la guerra sucia de los años setenta, más cuando quien la encabeza no tuvo el rubor para acabar por todos los medios posibles con aquellos sindicalistas y sindicatos que se opusieron a los intereses del corporativismo sindical o a las políticas de topes salariales en los dos últimos sexenios.
La sociedad demanda una profunda reforma al aparato de justicia. La corrupción, negligencia, prepotencia, complicidad y otras lacras, es la imagen que el ciudadano común tiene de la justicia en México.
La vinculación comprobada entre jueces, militares, comandantes de las policías judiciales, magistrados, gobernadores y ex gobernadores, con los narcotraficantes, han incrementado esa desconfianza de la sociedad en las instituciones encargadas de impartir la justicia. Se requiere instrumentar una verdadera carrera judicial, donde la formación, selección y promoción del personal no esté sujeta a criterios de interés de grupos políticos o personales. Se requieren funcionarios judiciales con verdadera vocación de servicio y de alta calidad moral, bien remunerados y con todas las condiciones materiales para desempeñar sus labores.
Requerimos que el Poder Judicial sea verdaderamente autónomo. Que se reforme la Constitución para suprimir la dependencia que hoy existe del Poder Ejecutivo. Se debe avanzar en promover una cultura jurídica entre la población, utilizando los medios masivos de comunicación, para que con él, el conocimiento de sus obligaciones y derechos, el pueblo sea el mejor contralor de la impartición de justicia.
Los lamentables hechos ocurridos en este sexenio con los asesinatos de decenas de periodistas, cientos de militantes políticos, la muerte del cardenal Posadas, de Colosio, de Ruiz Massieu. Los fraudes de grupos financieros. Las ramificaciones del narcotráfico. Los secuestros que ya se cuentan por miles. El involucramiento delictivo de miembros de los tres poderes de la nación, hacen urgente esta reforma. ¡Salinas ni quiso, ni pudo hacerla en su sexenio!
Ha afirmado Salinas de Gortari en su último Informe de Gobierno, que en la política interior tres fueron las prioridades de su Gobierno: alcanzar mejor equilibrio en la división de poderes y en el federalismo. Entender las libertades ampliando su protección y avanzar en la democracia en el país.
Sin embargo, ya hemos puesto de manifiesto que dichas prioridades en el mejor de los casos sólo se cumplieron de manera muy parcial e insuficiente.
El argumento de que las reformas económicas se debieron realizar primero y posteriormente la reforma política, confirma la tesis de que al neoliberalismo le interesa mucho más el cumplimiento de expectativas macroeconómicas. Por ello la democracia y sus efectos los consideran como un estorbo para poder cumplirlos.
Los sucesos de Chiapas y los lamentables crímenes, sin duda alguna hicieron volver a la realidad los sueños primermundistas y hoy queda claro que los cambios en las estructuras económicas deben ser acompañados necesariamente de cambios en las estructuras políticas, porque si no, de lo contrario no podremos evitar la permanente inestabilidad política.
México necesita entrar a una fase en la que los actores políticos y sociales verdaderamente participen en las reformas de todas las instituciones. La simulación entre lo real y lo formal no puede seguir siendo norma de conducta. No podemos tener una Constitución que en materia económica, política y social, se le considere como una de las más avanzadas del mundo y en su aplicación, en la realidad nacional, sólo sea letra muerta.
De nada serviría que los que hoy integramos este Poder Legislativo nos planteemos realizar una reforma del Estado que en teoría resuelva los problemas de la nación y en el terreno de los hechos quede nuevamente en un acto simulado.
Es necesario, igualmente, que todos desterremos las conductas maniqueas en las que cualquier propuesta del adversario es negativa y la propia es solamente la positiva. La capacidad de diálogo y entendimiento es condición indispensable del ser parlamentario. Si avanzamos entre todos los factores en la búsqueda del consenso sobre una distribución nacional del ingreso justa y equitativa y en una reforma política que garantice el respeto pleno al sufragio, la auténtica división de poderes, el impulso al federalismo, la equidad en los medios de comunicación, entre otros acuerdos, seguramente el balance a mitad del sexenio que hagamos de la próxima administración pública y nuestro propio trabajo legislativo, será algo totalmente diferente al que hoy realizamos al término de esta gestión sexenal, en la que por desgracia, para la República y para nosotros, hubo mucho de sombra y muy poco de luz. Muchas gracias.
El Presidente:
Señores diputados:
En consideración a que han transcurrido las cuatro horas reglamentarias de esta sesión, la Presidencia, con fundamento en lo dispuesto en el artículo 28 del Reglamento Interior del Congreso General y a fin de concluir los asuntos pendientes en cartera, acuerda prorrogar el lapso correspondiente hasta la conclusión del orden del día.
En su turno, el diputado Roberto Campa.
El diputado Roberto Rafael Campa Cifrián:
Con su permiso, señor Presidente.
Señoras diputadas; señores diputados:
Un diputado del PRD llamó pesadilla al periodo del presidente Carlos Salinas. Para el PRD seguramente se trató de una auténtica y verdadera pesadilla, si no, ¿cómo llamar a seis años de fracasos?, ¿cómo llamar a seis años de equivocaciones?, ¿cómo llamar a seis años de pérdida de apoyo, de divisiones internas, de falta de coordinación, como la que los diputados advertimos aquí, cuando el partido no podría siquiera ponerse de acuerdo en quién encabezaba su lista de oradores?, ¿cómo llamar a seis años de rupturas, repito, a seis años de fracasos y de pérdida de apoyo?
Para el PRD debe haber sido una verdadera pesadilla, pero creo que lo peor estuvo cuando hubo que despertar el día 21 de agosto, porque la realidad resultó peor aun que sus pesadillas.
No aceptamos ninguna de las aseveraciones de los diputados del Partido de la Revolución Democrática, porque escuchamos un informe realista y ponderado, que destacó logros y que también reconoció insatisfacciones y rezagos, que dijo lo que se hizo pero también dijo lo que faltó. Rechazamos la visión maniquea, la visión excluyente de un partido político que por sistema lo descalifica todo. Rechazamos esta visión como la rechaza mayoritariamente el pueblo de México, como la rechazaron los mexicanos el pasado 21 de agosto. Es una visión esquizoide, mezcla de verdades a medias, de chismes, de falsedades, de alucinaciones y hasta mezcla de sueños de borracho.
Esta visión expuesta por el PRD está llena de imputaciones frívolas que si tuvieran elementos y pruebas, debieran presentarlo ante otra instancia, ante otro poder. Vienen aquí de manera irresponsable a denunciar sin tener absolutamente ninguna posibilidad de probar lo que vienen y dicen; son interpretaciones frívolas de la realidad.
Hablemos de algunos de los hechos, de los hechos que aquí se han venido a plantear. El de la violencia, por ejemplo. El hecho es que la violencia, que es el signo de los tiempos en el mundo, nos llegó, nos alcanzó. Prácticamente nadie ha estado exento de padecer esta violencia; nuestro partido, el PRI, el de la Revolución Democrática, los empresarios o los ciudadanos. La violencia es, ciertamente, el signo de los tiempos.
Pero en los hechos de violencia de este año hay todavía mucho más preguntas que respuestas y sin embargo, la oposición, y particularmente el PRD, solamente acepta una interpretación de las cosas, solamente acepta una línea de solución a estas interrogantes: la que perjudica al PRI, la que presume que es el PRI de manera orquestada, el responsable de la violencia.
Es claro que en alguno de los hechos se trató de un asunto en el que estuvo involucrado un miembro del PRI, pero de esto a plantear o a suponer que se trata de una acción orquestada, deliberada, desde el partido, hay una enorme diferencia, una diferencia que no solamente no aceptamos nosotros y que rechazamos nosotros, sino que además rechaza de manera contundente y categórica el pueblo de México. Como se dijo aquí, los ofendidos somos nosotros, quien perdió fue el PRI, el sacrificado fue nuestro partido, pero claro, esa explicación no la aceptan porque no les convence; solamente aceptan la interpretación que les beneficia a ellos, otra vez visiones maniqueas de la realidad.
Finalmente debo decir que de ninguna manera aceptamos los cuestionamientos al proceso electoral del 21 de agosto, porque con todo lo importante que sean los cambios en el marco legal, con todo lo importante que sean las garantías que se dieron para tener elecciones limpias y transparentes, con todo lo importante que sea que todos los sistemas de encuestas, conteo rápido, resultados preliminares, hayan coincidido con el resultado oficial, con todo lo importante que sea que los ciudadanos se hayan apropiado del proceso desde las casillas hasta el Consejo General, con todo lo importante que sea la reconocida confiabilidad del padrón o de instrumentos como la tinta indeleble, con todo lo importante que esto sea, lo más importante es la opinión y el veredicto del pueblo de México, eso es lo más importante, lo más importante es la evidencia de tanta gente, de millones de personas, del 77.73% de la gente que fue a votar, que sabe cómo se organizaron y se dieron las elecciones y que hoy acredita con su testimonio la limpieza en el proceso electoral, lo más importante está en la absoluta incapacidad del PRD para convencer incluso a sus propios miembros, a sus militantes y a sus dirigentes, de que hubo fraude, ahí está, creo yo, lo más importante.
Pero debo terminar diciendo que yo hago un reconocimiento, reconozco la enorme incapacidad que tiene el PRD para la autocrítica y reconozco la enorme capacidad que tiene para autoengañarse el PRD. Recordemos hoy las imágenes lastimosas de sus dirigentes, algunos aquí presentes, los días siguientes a las elecciones, imagen de frustración, imagen de fracaso, pero un partido maniqueo incapaz de la menor autocrítica sólo podía salir por la vía del autoengaño, no era posible que un partido con esas características saliera por la vía de la autocrítica y yo reconozco la fuerza de ánimo para sobreponerse a la adversidad por la única vía posible para el PRD: la vía del autoengaño, pero ojalá y la invitación de René Arce para dejar de lado posturas maniqueas fructifique, ojalá y en el trabajo de esta Cámara nuestro espíritu a favor de la nación, a favor de nuestra responsabilidad sea el que impere y podamos así resolver lo que nos divide y profundizar mucho más en las coincidencias y en lo que nos une. Muchas gracias.
El Presidente:
¿Está usted de acuerdo en una pregunta del diputado Godoy?.. Adelante.
El diputado Leonel Godoy Rangel (desde su curul):
A reserva de que algún compañero diputado de nuestro partido le dé puntual respuesta a lo que usted acaba de decir, yo le quisiera preguntar en relación a lo que aquí mucho se ha mencionado, de que ustedes son la parte ofendida por los lamentables y condenables homicidios del licenciado Luis Donaldo Colosio y el licenciado Ruiz Massieu. Yo le quisiera preguntar, no sé si usted sea abogado, pero le quiero preguntar: ¿acaso los hechos delictuosos no ofenden sólo a sus víctimas, a las víctimas de los delitos en primer lugar y después a la sociedad en su totalidad? Esa sería la pregunta que le haría y ¿cuál es la respuesta que usted tiene a esto?, para evitar esta discusión que puede ser infinita, de que ustedes son los ofendidos y que algunos reclamamos que se haga justicia.
¿Usted cree que sólo un partido político es ofendido por un hecho delictuoso o es la sociedad en su conjunto y los familiares de las víctimas? Esa sería la pregunta, señor diputado.
El diputado Roberto Rafael Campa Cifrián:
Usted que es seguramente abogado, también conoce la respuesta, En nuestro sistema jurídico la ofendida es la sociedad, por ello el ministerio público representa en los asuntos penales a la sociedad, pero ciertamente, señor diputado, ciertamente, en el contexto de la política, no en el contexto de lo jurídico, quien más perdió fue el PRI, ciertamente perdió México en ambos casos, pero sin duda, quien más perdió fue el PRI, señor diputado.
El Presidente:
Para rectificar hechos, tiene cinco minutos el diputado Juan Guerra.
El diputado Juan Nicasio Guerra Ochoa:
Muchas gracias, señor Presidente:
Bueno, como digo a todos mis compañeros legisladores, primero que nada debo una disculpa en razón de que es interés de las coordinaciones de los grupos parlamentarios recurrir en la menor medida posible a esta dinámica de estar interviniendo para hechos, pero bueno, la verdad es que el diputado Roberto Campa ya tenía fama de golpeador en la Asamblea y vino aquí realmente a confirmarlo.
Es muy difícil en verdad, de todo lo que señala, los calificativos, pues detenerse e incluso con seriedad, sin embargo algunas cosas tendremos que precisar. Nosotros no llevamos prisa y tengan la seguridad que lo vamos a discutir y muy a fondo, las elecciones pasadas del 21 de agosto. Estamos trabajando ahorita, apenas hoy se instaló la Comisión de Gobernación; tenga la plena seguridad, el diputado Roberto Campa, tenga la plena seguridad toda la bancada priísta como toda esta Cámara, que vamos a entrar y ahí habremos de discutir, ¿para qué la prisa de querer desesperarse o ver cosas que no corresponden?
Tal vez sea porque a juicio de ustedes ya lo habremos de debatir, podrán ser todo lo que sean, pero el escudo ya lo veremos, son las pasadas elecciones. Cuando no es el tema, con todo respeto, el que estamos tratando, en este caso.
Ahora, yo creo que nadie puede ignorar porque realmente es hasta de sentido común que los crímenes, en este caso, quienes han resultado asesinados, eran ciudadanos mexicanos, particularmente en el caso de Colosio y Ruiz Massieu, que militaban en el PRI, yo creo que esa idea de decir que el ofendido es el PRI, pues nadie puede negar la militancia; el problema concreto y no es nuestro, es que particularmente, en el caso de Ruiz Massieu, los responsables también apuntan hacia el PRI y eso tampoco es culpa nuestra.
O ¿acaso nosotros hemos inventado toda esta situación, hechos y circunstancias que ha presentado la Procuraduría General de la República?, o ¿acaso nosotros tenemos la culpa de que Muñoz Rocha tuviese amistad con personas como el hermano del Presidente, Raúl Salinas?, ¿que tuviese amistad con otro conjunto de priístas? Este es el hecho concreto, ¿para qué darle tantas vueltas? Puede militar en el PRI, pero hacia allá apuntan también en este caso las personas quienes resultan responsables.
Quiere hechos y quiere pruebas. Yo le voy a dar una y digo, estoy interviniendo para hechos, habremos después de debatir estas cosas con más calma. Este país en el último sexenio, en el sexenio que va, pasó, escúchese bien, a estar recibiendo anualmente, por concepto del narcotráfico, 27 mil 300 millones de dólares. No lo digo yo, si el diputado Roberto Campa tiene dudas, que solicité los informes a la PGR, es la PGR la que lo ha informado.
Este país... en este país el narcotráfico es de tal importancia, que por hoy se puede prescindir más fácil de las divisas que se obtienen por las exportaciones petroleras e incluso manufactureras, que de las divisas que se obtienen por el narcotráfico. Este es un hecho concreto. Y es un hecho concreto que a partir de estos recursos y la corrupción que los mismos generan, se ha constituido en este país, nos guste o no, una trinidad apocalíptica que es la conjunción que se da en aquellos países de narcotráfico, política y finanzas, les duele, y es natural que les duele, que se puede investigar que el compañero Graco haya señalado la pertinencia incluso, de los capitales en donde pueda estar involucrado Salinas de esos capitales súbitos, y que los, empresarios saben muy bien, y aquí hay empresarios, que no es posible formar en seis u ocho años; capitales inexplicables que han surgido en este país, y todo mundo, lo sabe cualquier ciudadano aunque no lo sepa Roberto Campa, sabe que no se puede mantener ese negocio, ese crecimiento de capitales, esta actividad del narcotráfico, si no hay complacencia, cuando menos molerancia desde el Gobierno. Estos son hechos concretos que estamos dispuestos a discutir cuando quieran, con los elementos que se quieran también. Este es el tobogán de corrupción en que ha caído este país.
Nadie puede negar, a juicio de ser muy parcial, que hay otras cosas de las que se puede hablar, yo no lo voy a negar; incluso hechos que se han considerado como meritorios para el Ejecutivo, pero tampoco vamos a aceptar nunca que sólo se nos quiera presentar una pantalla, cuando en este sistema hay que buscarle realmente las entrañas que tiene.
No necesito, diputado Roberto Campa, ningún calificativo para señalar estos hechos, éstos son elementos de sobra conocidos, este país es el principal puente de la cocaína particularmente que va hacia Estados Unidos, está ya consignado en los informes.
Habría por salud de la República, de las instituciones, que empezar a investigar sobre esto, habría que hacerlo. Tenemos una situación donde el sistema de seguridad interno lo tenemos hecho pedazos, donde no teníamos más que una policía para combatir el narcotráfico, que es la Policía Judicial Federal y cada vez más se le ve como reguladora, donde los ciudadanos estamos indefensos ante esta perdida de seguridad.
¿Es responsabilidad esto del Ejecutivo? ¿Tiene esto que ver con la situación que ocurre? No lo dije yo, son versiones también de la PGR, que señala cierta posibilidad de colusión entre la política y el narcotráfico en el asesinato de Ruiz Massieu.
Sí, tiene razón el diputado, los muertos son del PRI, pero para desgracia de ellos, los responsables también apuntan hacia allá.
El Presidente:
Tiene la palabra la diputada Carmen Segura, por favor.
La diputada María del Carmen Segura Rangel:
Señor Presidente; señoras y señores diputados:
Uno de los grandes fracasos del sexenio salinista, lo constituyó precisamente el sistema de justicia.
En cuanto a la procuración de justicia, afirma el titular del Ejecutivo que la capacidad del Estado para actuar frente a las amenazas criminales con apego a la ley, ha mejorado; que durante este año en el ámbito federal se concluyeron 44% más averiguaciones previas y se ejecutaron 94% más órdenes de aprehensión respecto al inicio de esta administración, afirmación que resulta inaceptable si la comparamos con la realidad. Hay deficiente preparación profesional de quienes tienen a su cargo la investigación y persecución de los delitos; persiste la mentalidad burocrática y corrupta que provoca lentitud en la atención al público, prepotencia y abusos tanto del ministerio público como de su auxiliar: la policía judicial; carencia de equipo moderno y de métodos adecuados para apoyar investigaciones. Esto contradice la afirmación del titular del Ejecutivo.
En cuanto a los porcentajes, debió también informar del rezago de las órdenes de aprehensión que al final de este sexenio suman más de 55 mil en el ámbito federal y más de 15 mil en el Distrito Federal y que en esta entidad el sexenio inició con un promedio diario de 488 delitos en 1988 y finaliza con un aumento a 490 en 1994, datos que de ninguna manera reflejan la capacidad de respuesta a la que alude el Presidente de la República.
En lo que se refiere al tema de impartición de justicia, es preocupante que la gestión de Carlos Salinas en relación al Poder Judicial, se haya circunscrito a incrementar en 54% las remuneraciones de jueces y magistrados y a implementar un programa especial de vivienda, a fin de elevar su nivel de vida, sobre todo cuando la misma sociedad ha demandado con especial énfasis en este sexenio una reforma integral al sistema de impartición de justicia, que permita prestar el servicio de manera pronta, expedita y humana y que al mismo tiempo garantice el respeto a la autonomía del Poder Judicial, entendida ésta no como una coraza que lo protege y aísla, sino en el sentido de independencia en su actuación y al mismo tiempo responsabilidad y colaboración con otros órganos de poder.
Dice Carlos Salinas que con el fin de elevar con dignidad su nivel de vida, se mejoran sus prestaciones y a mi juicio es cierto que tal medida contribuye de alguna forma a la dignificación del órgano, pero ni es lo único ni lo más importante. No lo entendió así el presente gobierno, quien utilizó a la Suprema Corte de Justicia de la Nación como un espacio que guarda a políticos que por su conducta ameritan, a juicio del mismo ejecutivo, un receso con la posibilidad de solicitar licencia cuando les permita regresar, lo que además de politizarlo resta seriedad, calidad moral al órgano y de ninguna manera contribuye a una correcta impartición de la justicia.
Por lo que toca al sistema de reclusión, expresa Salinas en su informe que para avanzar en las metas de rehabilitación y evitar la sobrepoblación de los reclusorios, en este mes entrarán en funcionamientos nueve de los 12 nuevos reclusorios, con capacidad para 11 mil 500 internos.
Señores diputados, no es edificando más penales como se abatirá la sobrepoblación y se avanzará en la rehabilitación. Precisamente el fracaso de la política salinista en materia penitenciaria es provocado por la falta de visión y claridad en las medidas de solución. Es urgente pues, una revisión integral del sistema penitenciario, en el que se utilice como último extremo la privación de la libertad. El combate a la de lincuencia por sus causas más que por sus efectos, la erradicación del abuso de la prisión preventiva y de la pena privativa de la libertad, establecimiento de penas alternativas y la implementación de un auténtico programa de rehabilitación, son medidas que se deben implementar como parte de un nuevo esquema que dé contenido a una legislación integral en materia penitenciaria.
El intentar reformas parciales y aisladas a la legislación vigente, no constituye una solución. Muestra de ello es que a pesar de las dos reformas implementadas en este año, una en febrero y otra en julio, los penales continúan sobrepoblados y los delincuentes sin rehabilitarse.
Compañeros, hay mucho por hacer en los sistemas de justicia y penitenciario y sin temor a equivocarme, más que en el resto de los rubros aquí analizados.
También algunos legisladores que han hecho uso de esta tribuna así lo comparten y así lo requiere la sociedad, así también lo demandan acontecimientos que se suscitaron a partir de la segunda mitad de 1993, con el asesinato del cardenal Posadas y toda la serie de acontecimientos de violencia y de peligrosa delincuencia que se suscitaron a partir de enero de 1994 y que también aquí varios de los que me antecedieron ya se encargaron de hacer una relación de los mismos.
Los integrantes de esta Cámara debemos asumir la tarea de una revisión con miras a una transformación integral en ambos sistemas.
Por último, me voy a permitir referirme a un punto del contenido de la intervención del diputado Villalobos, del Partido Revolucionario Institucional. El principio con el que coincidió el diputado Villalobos, de la necesidad de una reforma profunda, diría yo, de la coordinación fiscal, tiene como objetivo que estados y municipios cuenten con recursos para satisfacer los requerimientos ciudadanos en su respectivo ámbito, de otra forma no tendría sentido nuestra división política. Debemos tender a lograr su pleno funcionamiento con clara responsabilidad de autoridades estatales y municipales.
El Pronasol y el Procampo no sólo son una estructura de control con fines electorales, sino que en sus efectos no contribuyen al desarrollo de la propia estructura política del país, centralizando de manera injusta y arbitraria los recursos.
Es por tanto urgente y necesaria una distribución de manera responsable y eficiente, pero sobre todo con justicia y equidad. Muchas gracias por su atención.
El Presidente:
Tiene la palabra el diputado Sebastián Lerdo de Tejada.
El diputado Sebastián Lerdo de Tejada Covarrubias:
Con su permiso, señor Presidente.
Al acudir esta tarde a la más alta tribuna de la nación, y tras escuchar con atención los planteamientos que los compañeros diputados han efectuado quisiera en primer lugar subrayar nuestro acuerdo con todo lo que ha expresado aquí, en la última intervención, el diputado Roberto Campa Cifrián.
No voy a ahondar en los mismos temas que él ya abordó, pero sí quisiera precisar que algunos de los elementos que han sido comentados en esta tribuna tienen connotaciones de una gran ligereza. Un diputado del PRD, quien pidió la palabra para hechos, afirmó que es precisamente hacia el PRI hacia donde apuntan las acusaciones de estos crímenes incalificables.
Nada más ligero e irresponsable que venir a expresarlo en esta tribuna con un franco cinismo. Una cosa son los hombres y otra las instituciones y estos hombres tienen nombre y apellido, no los confundan con instituciones. Nuestro partido es un partido fortalecido por su esfuerzo, en el transcurrir del tiempo; y es un partido que quiere asumir el cambio, el cambio, con ustedes y no a pesar de ustedes. Ojalá lo hagamos juntos; ojalá compartamos coinci dencias y ojalá no profundicemos en nuestras diferencias sin sustento. Seamos más respetuosos de la más alta tribuna de la nación.
Decía el señor diputado del Partido del Trabajo que, desde su muy personal punto de vista, le parecía, el informe que el señor Presidente de la República presentó el 1o. de noviembre en este recinto, autocomplaciente. Fue, si no me equivoco, señor diputado, el primer calificativo que usted empleó al referirse al informe del presidente Salinas.
Nada más lejano de la verdad en un análisis simplista del informe. Los que estuvimos aquí, todos, vimos como con serenidad y con prudencia, el presidente Salinas apuntó lo bien hecho, pero también, y eso hay que reconocerlo, subrayó los asuntos pendientes y en los que hay que profundizar.
Autocomplaciente es un término que no es válido para el informe aquí presentado el pasado 1o. de noviembre.
Lo cierto es que cuando se acude a esta tribuna, los diferentes partidos venimos a poner en claro nuestras posiciones. Vamos dándole un sentido precisamente republicano, de profundo respeto a la vida del Congreso, a lo aquí expresado, pero analicemos también un poco más a fondo lo que aquí se diga.
Nuestra compañera diputada de Acción Nacional afirmó que en materia de justicia falta mucho. Es cierto, sí, falta mucho. Y será labor de todos nosotros que empujemos. Pero también, hay que reconocerlo, se ha avanzado para mejorar.
Usted señaló que 488 delitos se cometían al inicio del sexenio y 490 se cometen al término de éste. Sin embargo, quizá se le olvidó que hay una variable que es el incremento de la población y que, en un análisis estricto, al ver 488, delitos hace seis años y los 490 a fin del sexenio, si bien no complacen a nadie, tampoco es una cifra tan alarmante como usted lo señala. Vamos a alejarnos de prácticas estridentes en la vida parlamentaria; vamos a alejarnos de prácticas totalitarias; vamos a entrarle a fondo a los temas de la vida nacional, como ha sido el reclamo de quienes por su voto el 21 de agosto nos dan la posibilidad de acudir a este recinto con una de las más altas responsabilidades constitucionales que la vida de la República nos otorga.
Vamos a cumplir este compromiso histórico con serenidad, con prudencia, con rumbo y sobre todo, sí, con voluntad de cambio; pero, vamos a transformar la crítica en propuesta y la indolencia en participación; vamos de una vez por todas a dar el siguiente paso y no nos quedemos en la crítica estéril o en la estridencia lacerantes. Muchas gracias, señor Presidente.
El diputado José Narro Céspedes (desde su curul):
Señor Presidente, pido la palabra para hechos.
El Presidente:
Tiene la palabra, para rectificar, hechos el diputado José Narro, por cinco minutos.
El diputado José Narro Céspedes:
Con su permiso, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
Cuando nosotros decimos que fue autocomplaciente, fue fundamentalmente a partir de que se señalaron, es cierto, lo que falta por hacer, pero no se señaló el saldo de la política económica, social y judicial que se ha venido aplicando, o sea, eso es lo que no se señaló; se le dio todo el tiempo posible, todo el espacio a los logros, algunos económicos, de la reducción del déficit, el problema presupuestario, el entorno económico, pero no se señalaron los resultados y el saldo de esa política económica, también perjudicando a la pequeña y a la mediana industria mexicana. Eso es lo que nosotros señalamos, de que en el informe si lo leemos, no se pone ese señalamiento.
En los diferentes aspectos de la política interior, no se pone énfasis en los problemas que hubo en la Comisión Nacional de Derechos Humanos, el problema de la democracia, en donde no va a ser el problema del cuarto poder, sino realmente lograron órganos autónomos, que tengan credibilidad, con una mayor participación ciudadana y que estén desligados del control del partido oficial.
El grave problema del federalismo, el grave problema de la división de poderes que tenemos todavía, es la reforma política que se hizo a pautas y que no se profundizó.
Por eso nosotros con responsabilidad señalamos y en el sentir de nuestros compañeros de que hubo aciertos, pero también señalamos los errores que hubo, como Partido del Trabajo.
En esos términos planteamos que fue un informe autocomplaciente, triunfalista y poco objetivo en cuanto al saldo social, económico y político que dejó este sexenio y lo ratificamos. Es nuestra apreciación y nuestro punto de vista y sentimos que el diputado que nos antecedió fue complaciente, así como el Presidente fue autocomplaciente, fue complaciente con el informe que dio el Presidente de la República. Muchas gracias.
El Presidente:
En su turno, el diputado Serafín Núñez.
El diputado Serafín Núñez Ramos:
Señor Presidente; señoras y señores:
Al analizar el capítulo de política interior contenido en el VI informe presidencial, parece obvio concluir que en general el sexenio del presidente Carlos Salinas de Gortari, ha sido un sexenio de importantes cambios políticos que sin embargo han sido insuficientes.
Es prudente hablar de la existencia de una crisis política, una crisis política que vive este país. Las convulsiones y conflictos que lo desestabilizan sin embargo, son desde mi punto de vista señales de una sociedad en transición, de una sociedad en movimiento, que sufre las dificultades, los costos y los desafíos que genera un cambio histórico del que somos actores todos.
México vive hoy el peligro de la desestabilización y la guerra, del desgaste de las instituciones y la ingobernabilidad. Es verdad también que muchos millones de mexicanos sufren pobreza, miseria y desempleo, pero el país está en movimiento, no ha perdido viabilidad.
El régimen de Carlos Salinas de Gortari también heredó las premisas globales para el posible desarrollo de las posibilidades del crecimiento. Las oportunidades de corregir el rumbo de los cambios, de regular los ritmos y de incorporar a los excluidos, de erradicar aquello que hoy pone el riesgo pacífico del país.
La incertidumbre entonces es un rasgo propio de estos procesos signados por el cambio en que lo viejo tarda en irse y lo nuevo no acaba de establecerse. Así, todos los actores políticos de hoy coinciden en que los cambios económicos que promovió el régimen de Salinas han sido necesarios. Estos cambios rompieron el círculo vicioso del subdesarrollo, caracterizado por absurdas y excesivas regulaciones, inversión privada insuficiente, gasto público exagerado, déficit fiscales crecientes, inflación y devaluación interminable. Pero estas reformas se cumplieron, se aplicaron con una rapidez tal que generaron desconcierto, confusión e inconformidad, pues esto provocó que los niveles de consulta fueran irrisorios, además de que al interior mismo del sistema se hizo presente una notable falta de actores deliberantes capaces.
Al fin y al cabo el Gobierno enfrentó el reto de la inevitable modernización teniendo como sustento a su interior una base política arcaica, resultado de los propios arcaísmos de un sistema vetusto, incapaz en muchas ocasiones de comprender más allá de sus intereses personales o de grupo o de partido, las necesidades y las prioridades del desarrollo nacional.
A pesar de los cambios políticos llevados a cabo, ha quedado en evidencia que nuestras estructuras y prácticas políticas son aún incompatibles con las exigencias de la economía global y con el desarrollo económico en su conjunto. El proceso de cambio económico va muy avanzado y ha logrado sentar las bases para un futuro que puede ser promisorio, aunque por ahora los resultados para la mayoría de los mexicanos son menores de lo deseable y de lo que es política y socialmente necesario.
Ha habido importantes cambios en diversos rubros, pero los rezagos son espectaculares. No es que el Gobierno haya hecho mal su trabajo, sino que no hizo todo lo que tenía que hacer y, sobre todo, que lo hizo menos con el trabajo político de la persuasión y el convencimiento que recurriendo a los viejos métodos de imposición de un sistema político ya anacrónico.
Las luchas políticas de las oposiciones y la movilización de la sociedad han hecho posible que en este periodo podamos recoger los frutos maduros de nuestros esfuerzos y logros en este terreno. Ahora es posible seguir logrando nuevas conquistas aun en contra del horror que a veces nos gana de reconocer nuestros propios avances. Hoy hay un conjunto de coincidencias, de consensos y acuerdos generales sobre la reforma política. Más allá de las naturales y comprensibles diferencias y del tono a veces subido de las intervenciones, yo siento un clima propicio y una predisposición de los actores políticos a un compromiso por la democracia. Se respira una atmósfera de cambio desde el mandato de las urnas, que en agosto impuso el voto ciudadano a favor del cambio con estabilidad; de paz, con dignidad.
Entonces es la hora de encarar con voluntad política este mandato, abandonando la retórica y pasando a los hechos. Asumamos entonces públicamente como responsabilidades de todos la consumación de las siguientes reformas inmediatas e inaplazables. La necesidad de una nueva reforma política que ciudadanice efectivamente la organización y calificación de las elecciones; que cree instrumentos eficaces para castigar a los delincuentes electorales; que permita competir en condiciones de igualdad, de equidad; que quite a los partidos políticos con registro, el monopolio de la participación electoral, que establezca el referendum, que flexibilice las leyes para favorecer la formación y registro de partidos regionales y garantice el derecho de las minorías en el Congreso.
También la separación del PRI del Gobierno; que garantice igualdad de condiciones a los partidos en su participación electoral.
Es posible que muchos de estos conceptos que he enumerado tengan una significación diversa para diversos partidos. Pero lo importante es que todos hablan de estos mismos conceptos.
Frente a estas tareas urgentes, hay otras de mediano plazo, cuya cristalización no es tanto resultado de una reforma política legal, como de un prolongado proceso de cambio civilizatorio y me refiero a la necesidad de sujetar al Ejecutivo a la Constitución, a revisar las atribuciones que afectan al equilibrio de poderes; fortalecer al Legislativo con facultades de inspección y control sobre el Ejecutivo; fortalecer el Poder Judicial; replanteamiento de las condiciones operativas del pacto federal, vigencia del estado de derecho como piso de la reforma, condición de la convivencia democrática de los mexicanos.
Hemos, pues, logrado bases de una reforma política de fondo. Aprovechémoslas ahora.
Una cuestión fundamental es poner a salvo la vigencia de la ley; el negociacionismo sólo ha desgastado las instituciones, cuando lo que hoy se necesita es fortalecer las instituciones y la legalidad, acordando reglas equitativas para todos. Las concertaciones fuera de la ley son negociaciones a espaldas de las instituciones, de las leyes y de los votos.
En Chiapas, el Partido de la Revolución Democrática debe probar con apego a la ley, que su candidato ganó las elecciones.
El PRI cree que cometió dos errores que ahora están presentes: uno, probablemente el no haber aplazado las elecciones en una circunstancia de emergencia como la que vivía Chiapas en esos momentos y una vez realizadas estas elecciones, haberlas calificado con una rapidez que no valoró la gravedad de la situación excepcional que vivía ese Estado.
Chiapas sigue siendo una situación que no se puede pensar indefinidamente, es una herida sangrante en el cuerpo de la nación. Tiene que haber una solución legal, una fórmula legal que desmantele el riesgo de la guerra, buscando una solución intermedia apegada a derecho. La búsqueda de esta fórmula de solución, debiera ocupar nuestros mejores esfuerzos. Estoy cierto que los chiapanecos desde hace tiempo están haciendo también lo mismo.
No olvido que el asunto de Chiapas es muy complejo y delicado; están de por medio graves y ancestrales problemas estructurales no resueltos y siempre aplazados; pero también están en riesgo las vidas de muchos mexicanos. Persiste la amenaza de la guerra, el cerco militar, miles de desplazados, el miedo generalizado, la incertidumbre.
Por eso no es permisible la frivolidad, la irresponsabilidad en el trato de este problema tan delicado, que merece ser tratado con seriedad y mesura, pero con inaplazable urgencia.
En este mismo sentido creo que los partidos políticos representados en este Congreso tienen la obligación de precisar, de ratificar ante la nación, sus compromisos con la transición democrática y con los medios para alcanzarla. Todos podemos tener diferentes concepciones sobre la democracia.
Es verdad, como lo dijo alguien hace unos momentos. Pero el imperio del relativismo conceptual puede poner en tela de duda la naturaleza de lo que es verdaderamente democrático, a pesar de nuestras concepciones particulares.
A la democracia, pienso, se accede por medios democráticos, por medio del ejercicio de la política. Por eso la democracia no puede ser ni mero recurso táctico, ni pronunciamiento de coyuntura.
En relación a los asesinatos de Luis Donaldo Colosio y de José Francisco Ruiz Massieu, debe procederse de acuerdo a la ley, castigarse a los responsables. Exigir de las autoridades competentes continuar con las investigaciones hasta dar con los responsables, sean quienes sean y hacer caer sobre ellos el peso de la ley.
La salud de la nación lo exige. La necesidad de recuperar el respeto y la credibilidad de las instituciones, que son de todos los mexicanos, lo impone.
Creo que éstos son casos del ámbito de lo penal, aunque tengan vinculaciones y resonancias políticas. En nada ayuda al esclarecimiento de los hechos adelantar teorías y relaciones causales si no se dispone de pruebas convincentes; más bien podríamos crear un clima de sospecha generalizada y podría provocarse una atmósfera propicia a la "cacería de brujas".
Que las autoridades cumplan con su deber. Esta Cámara debe votar la conformación de una nueva comisión de seguimiento a las investigaciones de las autoridades judiciales encargadas de dar solución a este problema. Gracias.
El Presidente:
Toca el turno ahora al diputado Guillermo Zúñiga.
El diputado Guillermo Héctor Zúñiga Martínez:
Con permiso, señor Presidente; compañeros diputados:
Yo vengo de Veracruz, vengo con un grupo de compañeros diputados a esta honorable Asamblea y a mí se me invitó para que participara en política interior y yo acepté gustoso y la verdad, compañeros, es que yo no he escuchado un verdadero análisis de política interior.
Aquí se ha aprovechado la tribuna para otras cosas; fundamentalmente para calumniar y ofender de nueva cuenta al Presidente de México, a Carlos Salinas de Gortari.
Ya se va. Todavía no se fue. Bueno, le falta un mes; todavía no se va. Pero fundamentalmente es un hombre y a mí me consta, que cumplió y cumplió bien.
Y yo creo que es lamentable y a veces deleznable, el que amparado en un fuero de carácter constitucional, se venga aquí a hacer acusaciones de gran trascendencia, buscando sólo la publicidad de mañana.
Casi se ha hablado aquí de puros crímenes; lo dice el informe: nos dolió a todos y lamento mucho que Marcué Pardiñas haya venido a decir aquí "que no se permitan los crímenes políticos". Bueno, ¡no debe permitirse ningún crimen. Me gustó también lo que dijo la diputada del PAN, "que hay que buscar las causas y no los efectos".
Aquí nos hemos olvidado de las presas, 32 presas, aunque no tiene importancia; las 206 mil hectáreas de riego, no nos interesa a algunos diputados; 18 nuevas plantas hidráulicas; la incorporación de 103 mil kilómetros de líneas de transmisión; 6 mil 924 kilómetros de autopistas; más de 80 mil acciones en materia educativa; 2 mil 500 unidades médicas; más de 120 hospitales; todo eso a muchos diputados no les importa.
Nos interesa que mañana se diga en la prensa que un nuevo grupo se ha enriquecido. Nos in teresa que se acuse directamente a un Presidente patriota de lo que ha pasado en el país.
Para mí los avances económicos, políticos y sociales del presidente Carlos Salinas de Gortari, son innegables. No se puede tapar el sol con un dedo. Lo que sí pudo hacer el pueblo de México fue apagar un sol sin luz, un sol opaco el 21 de agosto, un sol que es emblema de un partido aquí presente, que alumbraba menos que un foco de cuarenta vatios.
Sirve de emblema a un grupo de diputados que el día del informe presidencial lastimaron las mejores formas republicanas, lastimaron las tradiciones democráticas que los mexicanos hemos observado durante muchos años.
Sé, como ustedes, que los partidos políticos tienen un presupuesto para la educación cívica, todos lo tienen. Ellos, se nota a leguas, no han ejercido esa partida y sería conveniente que se investigara a dónde fueron a dar esos fondos, porque también hay deshonestos y corruptos de este lado.
¡No asimilan, no aceptan las derrotas, no aceptan los fracasos!
Soy veracruzano y deje la dicción por un lado, y fíjese en el fondo...
¡Como esté, como esté!, el Presidente no les contestó por su decencia. Vino invitado aquí, ¡vino invitado aquí, a nuestra casa! y cuando se invita a alguien hay que respetarlo. Pero yo no tengo por qué no contestarle, compañero diputado.
Decía que no aceptan, para su complacencia, ni los fracasos y a mí me extraña mucho, la verdad, que una veintena de grupos ideológicos que van desde la izquierda radical hasta la aventura más truculenta, elogien servilmente, servilmente, a quienes fueron miembros del PRI y que nosotros rechazamos por soberbios, por ineficaces, por invidentes, pero ése es su problema y nosotros lo vamos a respetar.
México ha vivido seis años de trabajo para crear un régimen de libertad y democracia, sin metáforas; el presidente Salinas amplió la libertad, sin metáforas y no sé la bancada del PAN si lo admita con la reforma al 130 y al artículo 3o. constitucional, lo reconoció, amplió la libertad, se modificó la Constitución, y varios medios de comunicación así lo han reconocido porque fue respetuoso y es respetuoso de los derechos individualizados y porque impulsó las reformas que hacían falta al país para avanzar sin ataduras por la senda del progreso. El presidente de México, escúchese bien, nunca se ha comportado como un monarca, ésa es una falacia porque el presidente Salinas es en primer lugar un gran mexicano, de talento y pa triotismo inobjetables, entendiendo la palabra patriotismo por aquél en aras del español, diputado, que ama a su patria, que ama a México; él utilizó y a mí me consta, el diálogo como forma fundamental de gobernar, los que se han negado a razonar son los que gritaron el día del informe, porque quien los orienta los ha inducido hacia la neurosis colectiva, ya que siempre piensa en él, en él, después en él y México no le importa. No se puede dialogar con quienes siempre andan escondiendo una mentira entre dos verdades, no se puede dialogar con quienes practican el insulto como acción política, eso es ofensa, pero no es política.
La política, es una forma superior de pedagogía y ellos hacen pedagogía de la violencia y la verdadera política que han creado, ¿cuál es?, porque ahí es responsabilidad de todos y de todos los partidos: plantones, movilizaciones, acarreos, eso ha distorsionado la conducta del pueblo y ahora algo nuevo, porque tienen mucha imaginación, andan con la fantasía funeraria para ganar planas de publicidad en los periódicos y en los medios y esa fantasía funeraria es la muerte cívica y cultural de su propio partido.
Aclaremos otra cosa y aquí hay talentos, hay científicos, hay escritores, hay políticos, hay repetidores, el progreso de un pueblo se basa en la capacidad de cada ciudadano para crear, construir y trabajar en bien de los demás. Es totalmente injusto tratar de culpar a una sola persona, o la indiferencia y a veces por el ocio de miles de mexicanos que viven del esfuerzo de unos cuantos, porque también en México hay parásitos, hay personas que no trabajan, hay personas que viven de los demás y eso lo sabemos todos.
Es equivocado plantear los problemas de la nación haciéndolos girar en torno a un régimen. En la prosperidad y en el progreso como en la pobreza, todos los mexicanos tenemos una obligación que compartir y una responsabilidad que desahogar.
El Gobierno del presidente Salinas promovió el desarrollo, estimuló la productividad, propició un clima adecuado para que la sociedad se pudiera expresar y jamás, que yo sepa, usó la violencia para superar los problemas. En estos tiempos, han sucedido en nuestro país acontecimientos lamentables que nadie desea se repitan, pero no deben utilizarse para demeritar la obra de un gobierno solidario y auténtico que siempre buscó un México nuevo.
No, compañeros, así no hacemos patria; así no puede haber diálogo constructivo, creo que hay temas donde coincidimos todos, porque deseamos un país más grande, un país más equilibrado.
Yo he escuchado aquí tesis sobre federalismo, en donde se desea que los estados tengan más, más recursos económicos y como priísta lo veo bien y cuando aquí se dice que a los ayuntamientos hay que apoyarlos más, también lo veo muy bien.
Para qué recordar a Heriberto Jara, ese extraordinario veracruzano de Río Blanco, cuando dijo que los municipios necesitaban que se les apoyara y se les dejara en libertad, fundamentalmente la libertad económica y que no se les confundiera como niños a los que se les da el dinero y se teme que se lo gasten en charamuscas y al recordar a Jara, quiero recordar también a Benjamín Carreón. Sin libertad económica, la única libertad que existe es la de morirse de hambre. Estamos de acuerdo.
Hay que profundizar en estas reformas como Poder Legislativo. Para mí el VI Informe de Gobierno, fue autocrítico. Se reconoció que nos hace falta mucho por hacer, porque ningún Gobierno, como ningún hombre, puede resolver todos los problemas ni en seis años, ni en un siglo, ésa es una mentira.
Hay quien anduvo ofreciendo ahí aumentar al 100% los sueldos de los maestros, por ejemplo. No es que no lo merezcan, es que no alcanza el presupuesto... y esa carcajada y esa risa, se la demuestro matemáticamente... Ahorita bajo y hacemos números...
Hay que reírse si expreso aquí que las necesidades van por encima de las posibilidades pre supuestales,... ríanse, ríanse, ríanse, muchos panistas son empresarios, hay que pagarles bien y crear más empresas...
El Presidente:
Orden en la sala, por favor.
El diputado Gerardo de Jesús Arellano Aguilar (desde su curul):
Que haya moción de orden, por favor. Con respeto y no haga diálogos, diputado.
El diputado Guillermo Héctor Zúñiga Martínez:
Y condúzcase también con respeto.
El diputado Gerardo de Jesús Arellano Aguilar (desde su curul):
No me falte al respeto, diputado.
El diputado Guillermo Héctor Zúñiga Martínez:
Ni tampoco usted me lo falte a mí. Exijo me respete.
El Presidente:
Por favor, señor orador, señores diputados.
Se les hace un llamado para que se siga llevando esta discusión en los órdenes reglamentarios. Por favor. Adelante el orador.
El diputado Guillermo Héctor Zúñiga Martínez:
Todos debemos trabajar para beneficio de los mexicanos, moderar la opulencia y la indigencia como quería Morelos y algo básico, administrar con honradez los recursos públicos como lo hizo Juárez, eso es lo que debemos hacer.
Porque la ofensa no resuelve problemas, como tampoco los resuelve el sarcasmo; yo creo que los agrava. Lo ordinario acorrienta la actividad política, la ensucia y la denigra. Se tienen ya que suprimir las acciones muy frescas en las que se capitaliza los errores de los que trabajan, de los que hacen, de los que caminan, de los que avanzan, de los que guían a este país, se tienen que cancelar estas acciones que magnifican los errores para desprestigiar al contrario.
Compañeros diputados, el camino de México es anchuroso y yo creo que se pueden lograr acuerdos, pero fincados en la verdad y en el cumplimiento de la palabra.
Abandonemos la política que divide, a la política que siembra rencores, divide a las comunidades y siembra rencores en el corazón de los hombres. Evitemos la política que promueve la violencia.
¿Quién fue?, fueron muchos, mucha violencia en los medios, en los mítines, en prensa, en la radio, en la televisión. Tratemos de evitarla. Eso es lo que los priístas no queremos, que haya violencia en esta patria. Creo que las mu jeres y los niños y todos nosotros, merecemos una sociedad tranquila, en donde el hombre se desarrolle y busque su plenitud humana.
Para decirlo con palabras de Jiménez Igualada: no prendamos hogueras en el mundo, para que no se quemen los pies descalzos de los niños. Muchas gracias.
El Presidente:
Sigue en el turno de oradores, el diputado Carlos Navarrete.
El diputado Carlos Navarrete Ruiz:
Señor Presidente; compañeras diputadas y diputados de esta LVI Legislatura.
Estamos en el debate de la política interior, no de un año de un Presidente de la República, sino de seis, de un sexenio. Lástima que este debate, político por excelencia, enoje, moleste a algunos diputados, como el que acaba de hacer uso de la palabra, el diputado Guillermo Zúñiga, que lamentablemente ha confundido la tribuna de debate parlamentario como es ésta, y ha pensado que está en algún pueblo veracruzano, en donde se acostumbra prender incienso al Presidente de la República en turno.
No se espante, diputado, de estar en esta Cámara, aquí se viene a debatir, se viene a discutir los temas de la nación y se hace con pasión y se hace con razones y se hace con argumentos y venimos a defender posiciones políticas que hemos debatido durante muchos años, no para la primera plana de mañana, eso es demasiado superficial; venimos a debatir un sexenio en donde ha habido de todo y en todas las tonalidades y es bueno que algunos diputados a los que engañaron diciéndoles que venían a pasar unas vacaciones de tres años, empiecen a comprender que aquí tenemos que hacer las cosas diferentes y vamos a intentar hacerlas diferentes.
Es conveniente, compañeros diputados, que todos los miembros de los cuatro grupos parlamentarios intentemos alejarnos de un diálogo de sordos o de un debate de sordos. Es bueno que evitemos una posición en la que un grupo de diputados del PRI venga a la tribuna a de fender como puede y como se los ordenan, a como dé lugar, la figura presidencial y también los diputados de la oposición tenemos la obligación de dar razones aquí y argumentos de fondo, para no dar la impresión que venimos sólo a atacar la figura presidencial sin ton ni son y que eso lo hacemos por consigna. Intentemos todos hacer un balance objetivo, racional, de lo que ocurrió en seis años.
El tema de política interior, sin duda alguna, es el que deja más amargo sabor de boca a todos y digo a todos porque no sólo a la oposición. Muchos priístas que quizá no vengan a reconocerlo aquí, tendrán que reconocer que en las filas del PRI también hay ese amargo sabor de boca.
¿Por qué lo digo? Porque el presidencialismo que hemos sufrido estos seis años, un presidencialismo desbordado, llevado hasta los extremos por Carlos Salinas, pasó por encima de todos, pasó por encima de los poderes, de los estados de la Federación, de los partidos políticos y también de su propio partido, del PRI, al que utilizó, debilitó, sometió en muchas ocasiones y exhibió incluso en muchas ocasiones hasta el colmo del propio ridículo. Los priístas no pueden ignorar esa realidad en varias ocasiones.
Carlos Salinas, y lo decimos no ahora, lo hemos dicho desde el 1o. de diciembre de 1988 a la fecha, no fortaleció ni dignificó la figura presidencial; lo que hizo fue fortalecer su propia figura y aunque duela, porque es algo doloroso, se enriqueció y lo hizo con su círculo más cercano y lo hizo con su grupo más compacto, aquel que junto con él condujo los destinos de México durante seis años.
Pero además, hay que localizar responsabilidades. Las responsabilidades de mucho de lo ocurrido este sexenio y de mucho de lo que ocurre en el final del sexenio, no podemos eludirlas y decir que fueron producto de otras cosas, sino tenemos que señalar claramente la responsabilidad del Presidente de la República.
Ustedes saben, compañeros diputados, que el narcotráfico es un problema que todo mundo reconocemos, que está socavando al país, lo está destruyendo, está enrareciendo la vida política del país y está llegando hasta niveles insospechados y gravemente peligrosos. Todo mundo sabemos el poder del Presidente en México, todo mundo sabemos de lo que es capaz, es el hombre más informado, es el hombre que tiene en la mano lo que ocurre en todas partes del país, controla no solamente al Gobierno, sino a todo el aparato del Estado, y yo hago una pregunta compañeros del PRI, se las hago con toda franqueza: ¿podemos aceptar que el problema del narcotráfico, como lo dijo aquí alguna diputada, es sólo un problema de consumo en el mercado norteamericano? ¿Podemos aceptar que el enorme poder presidencial que hace y deshace en este país, como nos consta a todos, es ajeno a lo ocurrido en esos seis años con el narcotráfico y sus secuelas?
¿Podemos pensar que Carlos Salinas fue ajeno a lo que ocurrió y sigue ocurriendo hasta ahora? Se los pregunto para que lo analicemos juntos y también para que investiguemos juntos si queremos llegar al fondo de las raíces de este gravísimo problema.
El país no va poder enfrentar el grave problema del narcotráfico, si no localizamos que hay una política de Estado, y la ha habido durante muchos años, en donde los presidentes de la República, varios no han sido ajenos a ello.
Carlos Salinas supo cuando entró a la Presidencia de la República, de esos pactos y supo hasta dónde tocaban esos temas y supo que incluso había llegado a tales proporciones, que generales destacados del Ejército mexicano estaban involucrados en las redes del narcotráfico en nuestro país.
No lo digo, compañeros, para denigrar al Ejército, no lo digo para tratar de sacar cuentas pendientes; lo digo porque es un secreto a voces, porque esta política de Estado hizo pactos que durante mucho tiempo permitieron que el narcotráfico trabajara y operara en México sin las dificultades de ahora, pero las cosas cambiaron. Las cosas cambiaron porque al Presidente le pareció conveniente impulsar un Tratado de Libre Comercio, le pareció importante abrir las relaciones con Canadá y Estados Unidos y pienso, lo reflexiono...
El diputado Fernando Jesús Flores Gómez González (desde su curul):
Le está faltando al respeto a las fuerzas armadas. Le pido por favor corrección, señor, para las fuerzas armadas.
El diputado Carlos Navarrete Ruiz:
Diríjase al Presidente, señor diputado, con todo gusto le contesto lo que usted quiera.
El diputado Fernando Jesús Flores Gómez González (desde su curul):
Dije señor, no dije usted, señor Presidente.
El diputado Carlos Navarrete Ruiz:
Por eso contesté, porque pensé que se dirigía a mí. Eso fue todo, diputado.
El Presidente:
Por favor señor diputado, adelante.
El diputado Carlos Navarrete Ruiz:
Creo que razones de esta naturaleza tenemos que analizarlas en esta tribuna. ¿Por qué el narcotráfico está fuera de control? ¿Por qué llega a vinculársele con el asesinato político incluso?, ¿por qué estamos en la magnitud de la que estamos viviendo? Yo afirmo, y sería cuestión de discutirlo mucho y de llegar a fondo, que el problema del narcotráfico desbordado en México se debe al rompimiento de los acuerdos de los gobiernos mexicanos y que ante las nuevas condiciones que el Gobierno de los Estados Unidos pidió como parte de los acuerdos del Tratado de Libre Comercio, fue el de tratar de ir a fondo para desmantelar esta red y cuando han querido desmantelarla las consecuencias están a la vista, pero eso Carlos Salinas no lo vino a decir aquí, no lo reconoció, ni siquiera lo apuntó; lo dejó para que pueda analizarse en otra ocasión o en otro sexenio.
Pero hay otro tema que aquí ha preocupado mucho a los oradores que han hecho uso de la palabra: la intervención de Graco Ramírez, enérgica, dura. Señaló puntos muy graves de la vida política de México.
Es comprensible, yo lo entiendo, que a muchos diputados del PRI les haya molestado lo señalado hoy por la mañana, pero las preguntas, la oposición tenemos la obligación de hacerlas aquí y en todas partes. Tenemos la obligación política y la obligación moral, las preguntas están ahí. Los asesinatos no han sido esclarecidos. Los asesinatos están como una mancha en este sexenio. Los asesinatos están como una deuda pendiente de este Gobierno y nosotros tenemos la obligación de exigir que se esclarezcan, que se llegue a fondo en las responsabilidades.
Me pregunto, ¿por qué no se avanza con más rapidez y claridad en las investigaciones?, ¿por qué no se exige con más energía al Gobierno de la República que llegue a fondo? Ciertamente, compañeros del PRI, ciertamente la sociedad está ofendida por ello, pero ustedes son los más ofendidos de todos. No creo, me niego a pensar que la indignación y el coraje que ustedes mostraron frente a los féretros de Luis Donaldo Colosio y de Francisco Ruiz Massieu ya se les haya pasado. Me niego a creer que en aras de mantener carreras políticas de muchos de ustedes, estén dispuestos a callar ante las investigaciones. Me niego a creer que acepten dócilmente que haya muerto su candidato presidencial y que hayan asesinado a su secretario general y ustedes no sean capaces de exigir con más energía a quien está al frente del Gobierno mexicano, que antes de que termine este mes esclarezca las cosas y llegue a fondo en las investigaciones.
Nada ha ocurrido desde que pasaron los asesinatos. Los días pasan y los autores intelectuales no aparecen. La nación, compañeros diputados, se desgarra con la sospecha que cubre a muchos, tal vez a muchos inocentes, pero mientras no conozcamos a los responsables, a todos se les señala, algunos incluso, algunos, como dijo Graco Ramírez en la mañana con mucha claridad, optan por el retiro político, pero eso sólo incrementa las sospechas.
Yo estoy seguro, comparto la preocupación de muchos diputados de que este clima no favorece a nadie, ni al Gobierno, ni a su partido, ni tampoco a la oposición; nadie podemos alegrarnos de lo que ocurre, porque el país paga costos demasiado altos.
Pero además quiero hacer una reflexión colectiva con ustedes desde esta tribuna: el asesinato de José Francisco Ruiz Massieu, no sólo privó a esta legislatura de un político que pretendía impulsar un nuevo clima en el Poder Legislativo, también su asesinato ha visto involucrados a diversos miembros de la anterior legislatura y ha contribuido a un lamentable y grave deterioro de la Cámara de Diputados, que hoy es vista con desconfianza por la opinión pública.
El golpe fue doble, porque el asesinato cimbró al país y deterioró al Poder Legislativo. Pareciera que todo fue perfectamente calculado para dificultar la exigencia de la necesaria separación de poderes.
Hoy y hay que decirlo claramente, quien sustituyó a Ruiz Massieu: Humberto Roque Villanueva, tiene junto con sus compañeros de partido una enorme responsabilidad.
Después de un sexenio asfixiante y de un presidencialismo desbordado, la gran tarea es lograr un poder presidencial acotado, sujeto a los preceptos constitucionales, una real separación de poderes, un incremento de peso del Poder Legislativo y eso no se va a lograr si incumplimos nuestras obligaciones y por eso reflexiono junto con ustedes que es mucho lo que tenemos que superar en esta legislatura. Pero no lo haremos si hacemos como si nada hubiera pasado; no lo haremos si la bancada del PRI no asume también autocríticamente que la oposición no sólo tenemos derecho sino tenemos razón al criticar los excesos de este sexenio y que por ello es que nuestros señalamientos dicen: "...no queremos un sexenio nunca más como éste; no queremos lo desbordado de este presidencialismo; no queremos un presidente que pase por encima de todos. Queremos un sistema de partidos, incluyendo al PRI, que también tiene que jugar su papel en este sistema nuevo en México".
Pero es lamentable que algunos diputados, en aras de la defensa de su presidente, lleguen aquí a criticar y a señalar incluso cosas absurdas.
Termino señalando mi desacuerdo con lo que aquí mencionó Guillermo Zúñiga.
Dice él: "No se puede dialogar con quienes ac túan y piensan como la oposición, al contrario. En el PRD, estamos totalmente dispuestos a dialogar, con el PRI también, con el PAN, con el PT y con los poderes de la República a partir del 1o. de diciembre, para que demos por cerrado este libro de este sexenio de Salinas y podamos abrir uno nuevo en el que todos podamos asumir nuestras responsabilidades". Ojalá todos lo entendamos así. Gracias, señores diputados.
DENUNCIA
El diputado Fernando Antonio Lozano Gracia (desde su curul):
Señor Presidente, pido la palabra para hechos.
El Presidente:
Para rectificar hechos, tiene cinco minutos el diputado Fernando Lozano Gracia.
El diputado Fernando Antonio Lozano Gracia:
Gracias, señor Presidente.
Me permito hacer un paréntesis en el debate que se está llevando a cabo de la glosa del informe presidencial.
El formato que propusimos y aprobamos los coordinadores tiene como finalidad específica y directa el que en esta tribuna puedan debatirse posiciones, puedan presentarse argumentaciones, pueda, en fin, hacerse un intercambio saludable para el Poder Legislativo y para el país mismo.
En este marco en donde pretendemos pues que haya apertura, que se flexibilicen los trabajos, que no se lleven a cabo en un procedimiento acartonado que nada le dice al pueblo de México, hemos platicado también con los coordinadores, al menos lo he hecho con dos de ellos, el que la difusión de los trabajos de este pleno sea lo más objetivo posible.
Nos enteramos por un segundo corte que emite la Coordinación General de Comunicación Social de la Cámara y que pretende informar so bre el posicionamiento que los partidos hicimos en una primera ronda en esta tribuna, de cuales son las expresiones que han hecho los diputados de los diferentes grupos parlamentarios. Y empieza el párrafo diciendo así: "Durante el primer periodo de sesiones de la Cámara de Diputados, al fijar sus respectivas posiciones respecto del VI Informe de Gobierno en materia de política interior, las cuatro fracciones parlamentarias, representadas en la LVI Legislatura, coincidieron al reconocer los avances logrados en el sexenio del presidente Carlos Salinas de Gortari". Punto y aparte. Luego refiere algunos puntos de los que cada uno de los legisladores que aquí se presentaron, expresaron: Hemos manifestado pues, que el cambio que pretendemos opere en el Poder Legislativo no se va a poder llevar a cabo si éstas son las formas. Yo no sé si el PRD o el PT estén de acuerdo en esta expresión que está diciendo Comunicación Social de la cámara.
Pero si éstas son las formas, si ésta continúa siendo la inercia del trabajo, carece de sentido el debate que estamos llevando a cabo.
Por tanto, señor Presidente, yo pido que de inmediato se haga una corrección a lo que aquí se ha expresado, puntualizando lo que cada diputado expresó y sin estos encabezados que tienen una finalidad muy clara y que efectivamente desorientan.
Insisto, si el esquema de funcionamiento sigue siendo éste, carece de sentido lo que estamos haciendo aquí.
El diputado Ramón Sosamontes Herreramoro (desde su curul):
Pido la palabra, para hechos.
El Presidente:
Tiene la palabra para rectificar hechos; tiene cinco minutos el diputado Ramón Sosamontes.
El diputado Ramón Sosamontes Herreramoro:
Con su permiso, señor Presidente.
En el mismo sentido y la misma preocupación que ha manifestado nuestro compañero diputado coordinador del grupo parlamentario del PAN. Efectivamente nos enteramos de este boletín cinco que emitió la Coordinación General de Comunicación Social y comentamos en nuestro grupo del PRD que sería lamentable dejarlo pasar, no es posible empezar así.
Tenemos otra idea de la LVI Legislatura. Estos tres años que vienen no son para venir aquí a escuchar a la mayoría y que la mayoría simplemente haga uso patrimonialista, como decía nuestro compañero Ortega, de la cámara.
Nos indigna que pongan en boca nuestra el que coincidimos en reconocer los avances logrados en el sexenio de Salinas de Gortari. ¿Entonces qué estamos diciendo desde el día 1o. de noviembre aquí nosotros? ¿Qué, la opinión pública no ha escuchado realmente nuestro cuestionamiento, a fondo, del sexenio del salinato, como para que la oficina de Comunicación Social le quiera decir a la opinión pública que reconocemos avances logrados?
Pero no solamente eso, compañeros diputados; dice que nuestro compañero Francisco Kuri, dice lo que dice aquí en el boletín: sacan dos líneas de un párrafo y, claro, le ponen otras dos líneas de otro párrafo y otras dos líneas del otro párrafo de la otra página y obviamente aquí se entendería que estamos reconociendo avances en este salinato. No se vale.
Yo propongo que tengamos una reunión especial en la Comisión de Concertación, en donde junto con el director de Comunicación Social fijemos las reglas en las cuales se nos garanticen los mismos derechos y, sobre todo se le diga a la opinión pública a través de nuestra oficina, de nuestra oficina, no de una parte de la cámara, sino de nuestra oficina, se le diga lo que realmente está pasando aquí; de lo contrario, efectivamente secundaríamos la moción del compañero Lozano, de que entonces qué hacemos aquí, que hagan los boletines y listo, nos ahorramos mucho y el pueblo de México también se ahorra mucho dinero.
Yo dejo esta propuesta verbal ahora, quizá esté en la versión estenográfica, para que en la Comisión de Concertación, ahí veamos las reglas cómo va a funcionar la oficina de Comunicación Social de la LVI Legislatura; no de una parte. Muchas gracias.
El Presidente:
Para rectificar hechos, por cinco minutos, tiene la palabra el diputado Alejandro Moreno Berry.
El diputado Alejandro Moreno Berry:
Con su venia, señor Presidente; compañeros diputados:
En las últimas 24 horas hemos conocido de algunos hechos que no hablan de la concertación y el diálogo entre las fracciones parlamentarias. Anoche aproximadamente a las 21.00 horas recibimos un comunicado avisándonos que por la mañana se reuniría la directiva de esta legislatura para ponernos de acuerdo en el procedimiento de cómo se llevaría la sesión el día de hoy.
Por la mañana, durante ese desayuno se nos informaba que la Comisión de Concertación se había reunido y había dado algunos puntos como sugerencias y resulta que la Comisión de Concertación no existía, todavía no se reunía, todavía no acordaba nada. Reclamó nuestro coordinador de la fracción parlamentaria del Partido del Trabajo que no había habido tal reunión, corrigieron y nos informaron que la directiva se había reunido un día antes. Reclamamos los miembros de la directiva y no había habido tal reunión. Solamente dos fracciones parlamentarias habían acordado y a las 12.00 de la noche, según nos comentaba el diputado Jesús Ortega, él había recibido la comunicación de una invitación al desayuno.
Hoy por la mañana conocimos de los sucesos de que algunos diputados fueron objeto a la entrada del recinto parlamentario.
Hoy conocemos en este momento el boletín de prensa, de una Coordinación General de Comunicación Social de la LVI Legislatura, que no conocemos ni quién la integra. Dicen por ahí que por sus hechos los conoceréis. Eso es nada más en las primeras 24 horas de funcionamiento de esta LVI Legislatura.
Yo llamaría, a nombre de la fracción parlamentaria del Partido del Trabajo, al diputado Roque Villanueva, a una reunión con los coordinadores de las fracciones parlamentarias para evitar que esas 24 horas se nos repitan como todos los días por medio de Televisa y veamos aquí cada día acusaciones que pudieran rayar en la indecencia, que no queremos que se vuelvan a repetir en esta legislatura. No queremos tampoco que se vuelvan a entresacar renglones de las intervenciones de nuestros compañeros diputados para completar párrafos que avalen políticas equivocadas. Llamaría, pues, a la concertación de los coordinadores de las fracciones parlamentarias. Muchas gracias.
El Presidente:
Esta Presidencia, en atención a las participaciones que para rectificar hechos, han hecho tres compañeros diputados, representantes de tres grupos parlamentarios, decide ante estas denuncias que se han hecho en estas participaciones, turnar este boletín de comunicación social, que también estamos conociendo en esta Presidencia, turnarla a la Comisión de Ré gimen Interno, aprobada en el curso del día de hoy, recordando a ustedes, nuestros compañeros, que esta Comisión de Régimen Interno y Concertación Política, la integran los diputados coordinadores de cada una de los diversos grupos parlamentarios, para que analice esta situación, de ser necesario cite al responsable de esta comunicación y tome las decisiones al respecto, para evitar que esto vuelva a acontecer en el futuro.
El diputado Fernando Antonio Lozano Gracia (desde su curul):
Señor Presidente:
Solicito, por favor, que usted acuerde se haga una rectificación a esa publicación.
El Presidente:
Se turna a la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política.
Creo que tiene razón el diputado Lozano. Además de turnar este boletín, encargaremos a la propia Comisión de Régimen Interno, que se encargue de supervisar la nueva publicación.
Continuamos con el debate y está en turno el diputado Juan Salgado Brito.
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
Señor Presidente, para hechos: Yo le pido a los que mandan a los empleados que redactaron ese comunicado, y que es la Gran Comisión por parte del PRI, que eso no vuelva a suceder. Eso es gravísimo y es la forma en que el PRI siempre ha usado para someternos. Por eso mi intervención ahorita y por eso mi intervención en la mañana.
El Presidente:
Lo haremos saber así a la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política. Continuamos.
VI INFORME DE GOBIERNO (III) POLITICA INTERIOR
El Presidente: El diputado Juan Salgado en la tribuna.
El diputado Juan Salgado Brito:
Señor Presidente; honorable Asamblea:
Coincidimos con el diputado Lozano, en buscar y propugnar las mejores formas para el debate político. Venimos indiscutiblemente, animados por lograr acuerdos que conlleven a una nueva cultura parlamentaria. La mayoría estamos motivados por la mejor buena fe de que las discusiones se realicen en un amplio marco de respeto entre las fuerzas políticas. Estamos porque prevalezca la mejor disposición, la voluntad de todos, de estar y permanecer abiertos a las distintas expresiones de las fuerzas aquí representadas.
¡Enhorabuena, señor Presidente, que este asunto del boletín se turne a la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política!
Por lo demás, el análisis de la política interior debe corresponder, en rigor, a una seria reflexión de las distintas fuerzas sobre qué se ha hecho y cómo se ha hecho.
Todos los que llegamos a la Cámara de Diputados venimos de intensas campañas realizadas en nuestros distritos electorales. Trabajamos muy duro por lograr la voluntad de la ciudadanía, voluntad que se expresó y se manifestó, sin precedente, el pasado 21 de agosto.
Venimos, pues, con el ánimo de seguir aportando lo mejor de nosotros mismos en el diseño de un país diferente, de una nación nueva. País diferente y nación nueva que, indiscutiblemente, ha contribuido a formar y a alentar el Gobierno de la República encabezado por el Presidente Salinas.
Es indiscutible la voluntad para fortalecer la democracia. Ahí están las minorías en el Senado de la República. Ahí está la autonomía del IFE y los esfuerzos por ciudadanizar la organización de las elecciones. Aquí están las más variadas, las más diversas expresiones y apreciaciones sobre la política y sobre el quehacer gubernamental.
No es de ninguna manera de dudarse la voluntad del Gobierno y del Presidente para impulsar la modernización del país. Con reformas profundas en lo económico, sí, pero también en lo político y en lo social. Ahí está la expresión de todos los sectores, que todos los días se manifestaban en un amplio marco de libertades en las calles de todas las ciudades de la República.
Es, pues, no sólo apreciación de la mayoría aquí representada, sino de la inmensa mayoría del pueblo mexicano que el Gobierno y el Presidente Salinas han contribuido enormemente a la modernización del país, a la consolidación de las libertades y al perfeccionamiento de la democracia.
Lo que no se vale es que, ni aquí ni en ningún lado, con ligereza, con frivolidad y hasta con irresponsabilidad, se prejuzgue contra el Gobierno, contra el Presidente y contra los priístas.
Acontecimientos dolorosos que la nación ha vivido, han dolido profundamente y sobre todo a los priístas. Nos han agraviado, nos han lastimado, pero hemos dejado constancia de nuestra indignación, de nuestro dolor y de nuestra decisión, para exigir justicia, para que se esclarezcan los hechos. Hemos ido los priístas siempre a la vanguardia en la demanda de justicia; ése es el sentir que existe y existirá en el ánimo de todos, porque se siga adelante con las investigaciones, porque se siga adelante, a pesar de los que quieren que nos estanquemos para seguir demostrando la buena fe de las autoridades, la disposición de la mayoría para ser prudentes, para ser tolerantes, en aras de que siga prevaleciendo la pluralidad y el respeto entre las fuerzas políticas. Gracias.
El Presidente:
Es ahora el turno para el diputado Jorge Dávila.
El diputado Jorge Enrique Dávila y Juárez:
Señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
Después de esta larga jornada, que aún no termina, hemos encontrado muy diversas opiniones y formas de pensar.
Me llama la atención la postura del diputado Guillermo Zúñiga, de Veracruz, hermosa tierra, que dice que no ha escuchado nada de política interior y que empieza a hablar de avances sobre educación, salud; que yo sepa son de política exterior y corresponden al sábado su discusión y en la tribuna nos veremos también para discutir los avances o no avances de esta política.
Pero ¡oh!, gran sorpresa de mi parte, cuando me entero de que un Presidente de la República amplió mis libertades, porque en este sentido hubo Presidente de la República que me las dio y, señores, que no sea el caso del diputado Guillermo Zúñiga, yo sabía que los hombres nacemos libres; ¡yo nací libre y vine aquí a defender la libertad de México, de los mexicanos y de todos nosotros!
Nos dicen que tenemos que entender que este dador de libertades reformó el artículo 130 y el 3o. constitucional. Señores, quizá por ignorancia este hombre no sabe que ha sido el debate histórico y la lucha permanente del Partido Acción Nacional, desde los primeros cuatro diputados que llegaron a esta cámara, porque el triunfo cultural, indiscutible de esta postura es absoluto y es, reconozcámoslo también, de esa posición, machacona y a veces terca de hombres que supieron dar testimonio a través de muchos años y muchas legislaturas. No hubo un presidente que me viniera a dar libertades, como tampoco sin el reclamo permanente del pueblo hubiera habido las modifica ciones a estos artículos.
Por otro lado, el licenciado Sebastián Lerdo de Tejada, de gran responsabilidad histórica en su nombre, nos dice, iniciando su debate, diciendo la verdad de las cosas como si la tuviera él y la hubiera comprado y dice que los datos que mi compañera Carmen Segura, que vino aquí, son nuestros datos y me atrevo a presentarle aquí las estadísticas de la Procuraduría General de la República y lo dicho por el Presidente de la República son datos oficiales, en el que ciertamente hablan de 490 delitos posibles diarios en el Distrito Federal y ¿por qué posibles?, porque necesariamente también tenemos que reconocer que la falta de consistencia en muchas ocasiones de esta misma impartición de justicia, hace que los mexicanos que han sufrido los daños de atracos y demás no tengan la confianza para recurrir a las autoridades judiciales para que les den y les administren justicia.
Ahora bien, mucho se ha hablado también del tema de elecciones que también es política interior, diputado de Veracruz, en donde nos hablan de que el 77.73% de mexicanos fueron a votar y dignamente así lo hicieron, sin embargo tenemos que reconocer que los procesos electorales en México siguen adoleciendo de serios problemas de legitimidad democrática, ya que a pesar de las reformas a la ley en la que las fuerzas políticas se emplearon a fondo, sigue predominando la subcultura del fraude electoral, la manipulación y la amenaza.
Los avances jurídicos en materia electoral de los cuales hemos sido actores entusiastas, han dado como resultado un marco legal, con avances de importancia y rezagos injusticias y atropellos inocultables; hay un mejor padrón electoral y una credencial con fotografía, sin embargo, en algunas regiones fue manipulado a través de credencialización dirigida, o una sutil pero efectiva rasurada de votantes de oposición en algunos distritos, incluso se llegó el día de las elecciones con listas nominales distintas en casilla con respecto a las entregadas a los partidos políticos. Hoy existe una mejor composición en algunos organismos electorales en donde la participación de ciudadanos sin partido garantizan la imparcialidad de los mismos; en contrapartida, en muchos organismos electorales, estatales y distritales, los supuestos ciudadanos independientes resultaron ser árbitros parciales del sistema, lo que deformó la intención de los legisladores en materia electoral.
Una vez más, prevaleció el viejo y corrupto sistema político apuntalando a un partido de Estado que dispuso para su campaña de los enormes recursos que el Ejecutivo Federal puso a su disposición a través del Pronasol y del Procampo, con el único propósito inmediato y directo de inducir, coaccionar e incluso comprar con toda desfachatez y deshonestidad, votos en favor de algunos candidatos oficiales. La amenaza directa a ciudadanos insaculados como miembros de las mesas directivas de casilla, fue práctica que en algunos casos permitió al partido oficial introducir a sus incondicionales para que manejaran la elección, ya que el ciudadano amenazado, renunció y fue sustituido a última hora sin que los partidos políticos pudieran evitarlo.
Hubo distritos en que en los últimos tres días se efectuaron 460 cambios de presidentes de casilla y un total de 1 mil 200. Otros funcionarios de casilla simplemente fueron comprados para que inclinaran el proceso a favor de dicho partido, lo que revela el verdadero sentido de un sistema corrupto y corruptor. Una vez más la ley fue aplastada por un poder político que la rebasa impunemente; frente a la mayor apertura de espacios para los partidos y candidatos, el sistema implementó un operativo criminal para desinformar, mentir y calumniar, lo que generó un proceso marcado por la iniquidad y la injusticia.
A pesar de lo anterior, el pueblo de México participó en forma definitiva, hombres y mujeres se manifestaron con valentía y pacíficamente acudieron a las urnas, los avances logrados en el marco legal se enfrentaron a una realidad plagada de irregularidades.
Por lo anterior, demandamos con toda energía al Gobierno:
1o. Proceda a desvincularse, real y claramente, en todos los ordenes, del partido oficial.
2o. Que haga efectiva la prohibición legal de utilizar con propósitos partidistas y facciosos los colores de la bandera nacional.
3o. Que ponga fin al presidencialismo centralista y respete cabalmente la división de poderes, la soberanía de los estados y la autonomía de los municipios en todo el país; que ponga fin al monopolio en el Estado en materia de información y de plena vigencia a la libertad de expresión y al derecho de información consagrados en la Constitución.
Que se haga un llamado a la nación para conjuntar esfuerzos, para abatir la marginación que flagela a la gran mayoría de los mexicanos; que se abra de inmediato un diálogo nacional para reestructuración a fondo del poder público y en especial del Poder Judicial, a fin de que sea garante de la legalidad y protector de los derechos humanos; que termine con toda idea facciosa, patrimonialista, del poder, para lograr la unidad en el esfuerzo, la concordia en la justicia y el progreso en la paz.
Que se proceda a la conformación de un organismo público autónomo e independiente del poder público, que cumpla la prioritaria función de ser un contralor efectivo de éste, que audite los poderes de la Unión y que contribuya a poner fin a la perniciosa vinculación económica ilícita del PRI con el Gobierno. Muchas gracias.
El Presidente:
Toca el turno ahora a la diputada María de la Luz Lima Malvido.
La diputada María de la Luz Lima Malvido:
Diputadas, diputados; honorable Asamblea:
Yo no he venido de vacaciones a la cámara, vengo a realizar un trabajo con responsabilidad y honorabilidad, a elogiar lo que sea elogiable del sexenio del Presidente y a criticar lo que sea criticable; a defender a las instituciones de mi país y para eso me he preparado muchos años.
Nadie duda que hay una nueva dimensión cuantitativa y cualitativa en la criminalidad, esto no es una novedad. Según el informe de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en todo el mundo se vive una evolución y modernización de la criminalidad y que presencia una ola de crimen organizado. Esto responde a un proceso económico, político y social que se vive en todo el mundo.
El crimen también se moderniza, se globaliza y constituye un gran desafío para el orden público y la cooperación internacional.
Quien conoce de política criminológica, no dudaría de afirmar lo necesario y oportunas que fueron algunas de las estrategias implementadas por el presidente Carlos Salinas de Gortari en su periodo. Su esfuerzo por coordinar a todos los actores fue fundamental en este rubro, me refiero a la realización de reuniones nacionales de procuradores y servidores públicos que crearon un consenso para programas nacionales, como lo fue el Programa Nacional de Control de Drogas y La creación, con fundamento en el artículo 8o. de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal de la Coordinación de Seguridad Pública de la Nación, que no es autoridad, que no es organismo, que no posee funciones de ministerio público, teniendo como función básica la de asesorar, apoyar técnicamente y promover, no de ordenar, convenios para enfrentar a este nuevo flagelo que es el crimen organizado.
Falso es decir que las procuradurías trabajaron de manera aislada. En materia de procuración e impartición de justicia, deseo retomar el problema de los secuestros. Actividad que aumentó en los últimos años, lo que motivó el interés del presidente Carlos Salinas de Gortari, el que ordenó a la Procuraduría General de la República realizar el primer diagnóstico nacional que se hiciera en la historia de nuestro país.
Al pedir información a los procuradores estatales, nos dimos cuenta que carecían de un sistema informatizado que les permitiera dar de inmediato estas cifras para hacer el recuento nacional. Así, que el que se diga tener los datos nacionales de secuestros, mentiría.
Carecemos de metodología para evaluar cuál es la cifra negra sobre estos ilícitos. Después del recuento nacional, se instruyó a la Procuraduría General de la República para que se realizara una estrategia que consistió en diseñar la Unidad de Negociación de Secuestros, que algunos no conocieron. Esta unidad estuvo en operación varios meses en la Procuraduría, aumentando la eficacia en la investigación de los secuestros, porcentaje al que se refirió el Presidente de la República. Esta unidad debe ser preservada, para que se logre realmente una respuesta en este rubro.
Conocer los archivos de esta operación, los perfiles de los criminales y las víctimas, permitirá éxito en la estrategia para el nuevo periodo gubernamental.
También deseo hablar del Programa Intersecretarial de Crímenes en Carretera, que es un programa que, se hizo después de un diagnóstico nacional se analizó que con la aparente coincidencia de competencias entre los policías federales, estatales y de caminos, dejaban sin investigar muchos de estos hechos. Se inició operativo y mejoró la eficacia en muchas de las investigaciones.
Se investigó cómo partidos políticos secuestran una gran cantidad de camiones y los abandonan en otras entidades, so pretexto de usarlos para mítines.
Asimismo se detectaron tráfico de drogas, tráfico de armas. Estos datos sirvieron para mejorar la eficacia en la investigación criminal y ruta del crimen organizado.
También quiero referirme a un esfuerzo gubernamental que aquí no se ha mencionado, que es la especialización del ministerio público en distintos rubros, como lo fue en la atención de las víctimas de delitos sexuales. Con un esfuerzo gubernamental de apoyo a los distintos gobernadores, se asesoró técnicamente la instalación de 34 oficinas de atención a este tipo de víctimas en 14 entidades de la República. Hay que elogiar de esto lo que debe elogiarse.
Sólo en las unidades de delitos sexuales en la ciudad de México, tenemos actualmente una cifra de atención de 35 mil mujeres, muchas de éstas probablemente fueron sus hijas y sus hermanas.
También se han establecido mesas de conciliación en procuradurías estatales y en la Procuraduría General de la República, lo que ha permitido desjudicializar una serie de actividades, para poder lograr un acercamiento de las víctimas y victimarios, camino que deberemos seguir en esta gran reforma del Poder Judicial.
Si bien es cierto que requerimos un cambio integral en el programa de procuración y administración de justicia, muchos de estos programas novedosos sientan las bases para esta gran reforma.
Las reformas penales, de las que poco se ha hablado, poseen grandes virtudes que deberán ser retomadas por la Comisión de Justicia de esta cámara, para efecto de lograr esa reforma integral a la que ya se hizo mención.
Se dijo que era necesario establecer los sustitutivos a las penas de prisión. Ya se encuentran en la última reforma al Código Penal. Se establecieron 17 tipos penales que contienen como pena autónoma al trabajo en favor a la comunidad. Faltan los operativos, que prevención y readaptación social debe implemtentar para hacer real esta reforma.
Asimismo, consolidaron por primera vez a nivel constitucional, los derechos a las víctimas del delito, en el último párrafo del artículo 20 estableciéndose las bases para el nuevo servicio público hacia las víctimas.
Bien se ha dicho y se dijo en la Organización de las Naciones Unidas, en Milán, que poco se ha dedicado a las víctimas y mucho al delincuente. Así, que retomando esto, el Gobierno Federal estableció que: "En todo proceso penal las víctimas o el ofendido tendrán derecho a la asistencia jurídica...", implica una nueva apertura para establecer los derechos de las víctimas; así, tanto la ley sustantiva como la ley adjetiva, si ustedes los analizan, han empezado a dar una nueva apertura a los derechos de las víctimas.
Por lo que hace a las reformas, también el hecho de que se haya establecido atracción en casos de conveniencia de fuero federal con el fuero común, permitirá que muchos delincuentes de cuello blanco y delincuentes económicos, no queden fuera de la posibilidad de la investigación de la Procuraduría General de la República.
Se hicieron cambios notables en casos en los que servidores públicos cometen delitos para lo que se estableció, el cómo el Estado asume su compromiso para hacer el pago de la reparación del daño, sea subsidiaria o solidariamente según sea el caso.
También se establecieron normas criminalizando en forma más fuerte a los grupos que actúan en forma organizada.
En lo que hace al narcotráfico, ruego leerse las reformas de enero, ya que hay grandes avances. Una fue el separar en forma notable al narcotraficante, del adicto, el primousuario y traficante en poca escala. Se establecieron las tablas mediante las cuales se tiene que valorar la sustancia, la reincidencia y la cantidad para eliminar el arbitrio judicial, que en ocasiones permitía jugar con los mínimos y máximos, haciendo y estableciéndose grandes injusticias para causas similares.
Esta reforma penal deberá de seguirse en el nuevo periodo.
En lo que se refiere al mundo penitenciario como lo decía una de nuestras diputadas, "no construyendo más espacios se va a resolver el problema". Hubo una gran crítica gubernamental a la sobrepoblación, así que con voluntad política se comenzó a resolver la clasificación de los presos según las distintas instituciones. Para esto, se estableció el gran programa de arrendamiento inmobiliario que ha permitido y permitirá evitar la sobrepoblación.
También, con la construcción de las instituciones de alta seguridad, podremos dividir a los grandes capos y a las personas que participaron en crimen organizado y no colapsar al sistema penitenciario mexicano.
Es de reconocerse que el establecimiento de la Comisión de Derechos Humanos fue un primer paso importante del Gobierno Federal, permitiendo que el trabajo pionero de grupos no gubernamentales, se consolide y siga actuando en paralelo la Comisión Nacional de Derechos Humanos y las comisiones gubernamentales de Derechos Humanos.
Toda la tarea a realizarse no solo es responsabilidad del Ejecutivo Federal. No omitamos mencionar aquellos programas que posibilitan el rumbo y el camino hacia la democracia. Analicemos, critiquemos, pero también elogiemos lo positivo que ha tenido este sexenio. No seamos injustos. Para poder hacer un balance se pone lo positivo y lo negativo en la balanza. La historia juzgará al sexenio de Salinas de Gortari. Muchas gracias.
El Presidente:
En el turno, el diputado Ezequiel Flores Rodríguez.
El diputado Ezequiel Flores Rodríguez:
Señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
Hemos dicho que la política interior del licenciado Salinas de Gortari, ha sido insatisfactoria y contraproducente y lo hemos dicho no a la ligera, sino con toda responsabilidad. La violación sistemática a los derechos individuales y colectivos en el país por parte de las autoridades administrativas y judiciales perfiló la necesidad de crear un organismo que se encargara de conocer, investigar y procurar el respeto y el cumplimiento de tales derechos.
La creación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, según dijo el jefe del Ejecutivo, perseguía esos propósitos fundamentales. Sin embargo, la alta responsabilidad de este organismo ha quedado en la simple coadyuvancia de las tareas del ministerio público, con el agravante de que se ha abocado exclusivamente a atender los casos de la violación a los derechos humanos por parte de la autoridad en materia administrativa y en materia judicial, o sea que prácticamente todo el campo de los derechos sociales y colectivos, como los laborales, agrarios, electorales y políticos en general, han quedado fuera de lo que debería ser también su competencia.
La razón principal de ello es que todos estos derechos forman parte, en un nivel o en otro, de los derechos humanos establecidos en los acuerdos internacionales que nuestro país ha suscrito, como con la Organización Internacional del Trabajo, en el sentido del derecho que asiste a los trabajadores industriales y agrícolas, a defender sus intereses por la vía de la asociación libre y democrática.
Las estructuras corporativas que persisten en nuestro país han impedido el ejercicio pleno de estos derechos.
Hasta este momento, la actual Comisión Nacional de Derechos Humanos ha ignorado la enorme necesidad de su intervención para hacer efectivos y salvaguardar estos derechos consagrados en nuestra Carta Magna y en los tratados internacionales y lo ha ignorado por una sencilla razón, su dependencia del Ejecutivo. Es decir, no ha tenido autonomía plena para acometer su alta responsabilidad, prueba de ello es que los dos titulares que ha tenido la Comisión Nacional de Derechos Humanos han sido movidos por el presidente Salinas como piezas en el ajedrez del sistema, girándoles instrucciones y acatándolas servilmente aquellos, como si fueran sus empleados.
No hay dolo, son hechos. Consideramos que en resumidas cuentas, el Gobierno de Salinas de Gortari nos deja con una alarmante violación de los derechos humanos de primera, segunda y tercera generación, por parte de las autoridades administrativas y judiciales.
No pudo ser de otro modo, el autoritarismo y la arbitrariedad que siguen caracterizando al Gobierno, siempre conducen a ello.
En consecuencia, la fracción parlamentaria del Partido del Trabajo propone la modificación del artículo 102 en su inciso b de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, a efecto de dotar a la Comisión Nacional de Derechos Humanos de capacidad y auténtica autonomía para la salvaguarda de los derechos humanos, individuales y colectivos.
En su momento turnaremos la iniciativa correspondiente.
El Partido del Trabajo también propone que la comisión propuesta por esta cámara para investigar los asesinatos políticos recientemente acaecidos, haga extensiva su función hacia los demás asesinatos cometidos a periodistas, a militantes del Partido de la Revolución Democrática y hacia el compañero Mariano Pérez, militante del Partido del Trabajo, acaecido en el Estado de Chiapas .
Compañeros diputados: en otro orden de cosas, y como ya se dijo aquí, aprovechamos el uso de esta tribuna para manifestar que la fracción parlamentaria del Partido del Trabajo, protesta enérgicamente por el manejo parcial y tendencioso que hace la Coordinación de Comunicación Social de esta cámara, pues en su boletín del día de hoy difunde la información que ya se mencionó por anteriores compañeros, en la que se omiten las observaciones críticas de los grupos parlamentarios al VI Informe presidencial.
Exigimos que se enmiende y se corrija esta conducta de falta de seriedad y de concertación política. Muchas gracias.
El Presidente:
Toca ahora el turno al diputado Samuel Palma.
El diputado Víctor Samuel Palma César:
Con su permiso, señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
Estamos ya iniciando una nueva etapa en la vida legislativa; aquí y ahora estamos poniendo las bases de lo que será el futuro de la elación que habremos de tener las distintas fracciones legislativas.
¿Qué sentido le vamos a dar a nuestras intervenciones? ¿Qué pretendemos? ¿Vamos a optar por la búsqueda de coincidencias para ofrecer a la nación propuestas y soluciones? ¿Vamos a intentar la descalificación absoluta de las explicaciones e hipótesis que correspondan a otras organizaciones políticas? ¿Vamos a hacer eso o vamos a asumir plenamente los imperativos de la pluralidad? Una pluralidad que supone encontrar razones válidas en las opiniones de los otros; una pluralidad que supone perseverar en los puntos de encuentro y poner a prueba una y otra vez las diferencias.
No tenemos que renunciar a las divergencias, porque ellas nos enriquecen. En las visiones de todos, en su análisis, se encuentra el camino, pero el camino no está en la descalificación obcecada y visceral. De nosotros depende inaugurar la nueva etapa que todos queremos, pero para eso se requiere asumir actitudes constructivas y propositivas.
Hoy es posible avanzar, esta tribuna es una posibilidad. Hagámoslo. Para lograrlo es necesario superar la suma de agravios, las demostraciones, las insidias de cualquier tipo.
El PRI tiene su visión, sus razones, las quiere sumar a las de los demás partidos. No desistamos del debate, pero sí desistamos de la descalificación a ultranza.
Lo que puso en evidencia las elecciones de agosto pasado, es que México cuenta con verdaderas fuerzas políticas; aun los partidos que no alcanzaron los triunfos que buscaron y que hoy están aquí presentes obtuvieron respaldo social, lo que significa que tienen capacidad de movilización y de representación de intereses.
Asumamos dignamente nuestra pluralidad. Asumámosla aprovechando los grandes horizontes que ella nos ofrece.
Respecto a la justicia sobre los casos que tanto han conmocionado, quiero decir, demandamos justicia, pero no aceptamos que ello sea pretexto para botín político. La mejor guía es la del derecho y eso es lo que hemos decidido hacer los priístas, somos la parte agraviada y junto a la demanda de justicia decidimos seguir trabajando y mirar adelante.
No ha sido fácil; con el espíritu lastimado, hemos querido seguir luchando y entregarnos a una campaña; así lo hicimos. No ha sido falta de decisión para demandar justicia, lo hemos hecho y lo seguiremos haciendo, pero también hemos querido cumplir con nuestra vocación política, participar, insistir en las propuestas.
Hemos querido demandar justicia y también mirar hacia adelante. ¡Así ha respondido el PRI!
El Presidente:
Toca el turno ahora al diputado Ramón Sosamontes.
El diputado Ramón Sosamontes Herreramoro:
Con su permiso, señor Presidente.
Los imperativos de pluralidad que aquí ha señalado el diputado Palma, son los que han hecho que el PRD en esta tribuna y en su vida política diaria, esté cuestionando duramente lo que hemos vivido en este sexenio.
No es un sexenio como bien lo hemos examinado, incluso hasta por los propios compañeros diputados del PRI, no es un sexenio fácil ni cotidiano, de ésos en que había pleno apoyo a un régimen, sino ha sido de un sexenio en donde se ha visto cuestionada la misma legalidad y la misma Constitución.
No podemos ignorar, lo hemos dicho aquí varias veces, que la violencia se ha presentado desde el primer día de este régimen saliente. Una violencia que ha partido de la inoperabilidad de la justicia y seguridad pública, unida a un autoritarismo presidencial, a un corporativismo, a la corrupción e impunidad, que han propiciado que los derechos de los mexicanos y de los que viven en nuestra patria se hayan visto conculcados y a la vez, junto todo esto, debilitada la soberanía de nuestra patria.
La acción presidencial saliente demostró su decisión de no respetar la legalidad, erosionando las condiciones para satisfacer el pacto constitucional, las reformas a los artículos constitucionales como lo hemos estado repitiendo toda la mañana y la tarde, producidas desde el Ejecutivo, pervirtieron el espíritu de nuestra Carta Magna, aquella de 1917.
Frente a esta conducta, y ustedes lo han visto, incluso reseñado ahora, estuvo presente en estos seis años una lucha a veces silenciosa y otras en las calles, insistente y esperanzadora por el cambio democrático. Este conflicto entre la población de nuestro país de un lado y el autoritarismo presidencial, aliados a los que detentan el poder económico, por el otro, tiene y tuvo un lado oscuro y ominoso que nadie ignora: el de la intransigencia del grupo gobernante, empeñado en mantenerse en el ejercicio del poder, incluso 24 años más, según nos amenazó José Angel Gurría, ante los industriales japoneses.
De 1988 a la fecha, el Gobierno ejerció de manera despiadada y permanente la violencia institucionalizada, a través de políticas sociales, electorales y de justicia, que deterioraron drásticamente la calidad de vida de millones de compatriotas. En distintos momentos se reprimió a los grupos y comunidades que organizaban la defensa de sus derechos a través de diversas formas de lucha. Ejemplo de ello son y por eso protestamos duramente el lo. de noviembre, los 290 asesinatos en contra de militantes de nuestro partido. Duele eso, el que el ciudadano quiera luchar por sus derechos más elementales, como el voto y que la respuesta sea el asesinato. Le duele a un partido desde luego y yo creo que el PRI ahora lo siente en carne propia también y por eso lo señalamos.
Pero no solamente esto, también se vivió, y lo sabemos bien, la represión directa en contra de periodistas, decenas de muertos de periodistas como lo han señalado durante toda la mañana varios partidos en esta tribuna y duele desde luego que los medios de comunicación estén atados como ahora hemos visto, incluso en la mañana, la agresión que sufre el periódico Reforma.
La violencia ha aparecido también en otros sectores. Los secuestros de más de 2 mil empresarios, ganaderos, profesionistas, agricultores y menores de edad, cuyos rescates a veces logran salvar la vida y en otros no y para Ripley, el rescate de uno de ellos apareció entre las corruptelas de funcionarios de Pemex.
Los ajustes de cuentas entre bandas de narcotráfico en medio de ciudades, en centros urbanos, en su creciente vinculación con los nuevos financieros que produjo la Secretaría de Hacienda. Todo ello ha propiciado un clima permanente de inseguridad, una inseguridad que existe en nuestro país .
Decía Salinas de Gortari a principios de 1988, cuando candidato y se preguntaba en una reunión que hubo en el Instituto de Ciencias Penales, ahora desaparecido por el vaivén de procuradores que ha habido y preguntaba él: "¿Quién no ha padecido vejación en su persona, su familia o sus bienes, o conoce a alguien que ya la ha sufrido?". Y esta misma pregunta que él se hacía la podemos hacer ahorita y seguramente, incluso aquí entre todos los que estamos en este recinto, podríamos decir: yo conozco a alguien, o yo mismo he sufrido una vejación.
Esto es una realidad, por más que nos hayan querido pintar un México distinto, esto es una realidad y él decía en ese mismo discurso cuando candidato: "Actuemos ya para evitar que el mexicano de finales del Siglo XX nos reclame que tiene hambre y sed por más seguridad".
¿Y cuál es el reclamo ahora, incluso reconocido por el candidato del partido oficial, si no el de más seguridad? Es un reclamo que existe, no está pintado, no viene de otro planeta o de otra realidad distinta; es la realidad mexicana, es lo que piden los mexicanos y reclaman los mexicanos: la seguridad, la seguridad para ellos y sus familias, para sus empleos, para su voto; seguridad para que sean mexicanos con plenos derechos y se les respete como ciudadanos de nuestra patria.
El narcotráfico no es ya un asunto de películas o un asunto de novelas. Desgraciadamente estamos en la antesala de crear la narcosociedad y la narcopolítica y lo estamos viendo diario, diario, cómo aparecen las vinculaciones entre el narcotraficante y el político, el granjero, el agricultor e incluso, desgraciadamente, como en muchas partes de nuestro país, en el norte principalmente, hasta ideales son; se ha convertido en un ideal el estar trabajando bajo el narcotraficante, por la pobreza, por la política, también económica, de este sexenio.
Y no hemos podido abatir este crimen organizado, ni siquiera lo hemos podido tocar, como bien incluso lo reconoció el propio Salinas, sino ahí está ese crimen avanzando constantemente, poniendo en peligro incluso al propio Estado. No es fácil el problema y no es sencillo y reconozco que tampoco es de un partido, sino de la sociedad; pero para que la sociedad par ticipe en la lucha, tiene que haber democracia.
La falsa dicotomía entre seguridad y protección a los derechos humanos, a los cuales se refería Salinas de Gortari, yo creo que es falsa, es mentira. Podemos empezar de 1988, este régimen en donde la policía, la autoridad que supuestamente tiene que cuidar de nuestros derechos, de nuestras vidas, la que imparte justicia, esa autoridad, como ya se ha comprobado, directamente secuestró a José Ramón García, en Cuautla, Morelos y a partir de ese secuestro, se investigó por gente que sí investiga y obviamente se descubrieron más de 20 asesinatos políticos producidos por la judicial de ese Estado.
Y después podemos ver el asalto de la policía judicial al pueblo de Ceballos, en Durango y después podemos ver los abusos y asaltos a la población, que han cometido diferentes corporaciones policiacas de manera cotidiana, como la dirección de inteligencia que creó inmediatamente Salinas en este sexenio y la violación de más de 10 mujeres en el Distrito Federal, por la escolta del ahora funcionario de la Coordinación de Seguridad, de Farell: Javier Coello Trejo, y la detención y tortura de Salomón Barajas, militante del PRD, por sospechas de delitos contra la salud, sin que se le haya probado nada y por lo tanto, tuvieron que liberarlo, o el asalto y asesinato colectivo, no se les olvide, que cometieron los zorros del Distrito Federal, en el penal de Tepic, Nayarit, a principios de sexenio, o el asesinato y antes tortura de los hermanos Quijano, por órdenes del entonces jefe y funcionario de la Policía Judicial Federal, Calderoni, que ahora obviamente está preso, pero entonces protegido totalmente por las autoridades judiciales, o el asesinato de Norma Corona, en Culiacán, Sinaloa, son apenas algunos ejemplos de que con el pretexto de luchar por la justicia, se reprimió y asesinó a cientos de mexicanos.
No podemos engañarnos. Los informes presentados por diversas organizaciones no gubernamentales, de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU en 1992, en particular, o de American Watch, Amnistía Internacional, organizaciones internacionales, ahí nos señalan las faltas y abusos de la autoridad y de organizaciones no gubernamentales de nuestro país que coinciden con esto.
En respuesta se creó una Comisión Nacional de Derechos Humanos, con atribuciones pequeñas, frente a la gran violación principal que hay en México, independiente obviamente del Ejecutivo y por lo tanto restringida en sus funciones y se le puso hasta un nombre ahí extranjero de: ombusman que manejó un solo hom bre, como si fuera patrimonio propio y esa Comisión de Derechos Humanos, a punto de fenecer porque nadie le hace caso y ni siquiera ya los que trabajan bajo las órdenes del Ejecutivo, puede fenecer y quedar en el olvido, si no le damos más atribuciones y si no la hacemos depender como otras comisiones de derechos humanos de los estados, como de Baja California, por ejemplo, la hacemos depender del Poder Legislativo para que sea realmente un protector del pueblo y no simplemente un protector a gusto del Ejecutivo en turno.
Son cosas que hemos señalado, y no podemos tampoco olvidar aquí algo que es muy fuerte y real en el sistema judicial nuestro; uno de los delitos más graves y que dañan más incluso a las familias mexicanas y que es el delito de secuestro de menores. Nuestro país ocupa el quinto lugar en el tráfico de menores, después de Corea del Sur, Hong Kong, Filipinas y Singapur, según estimaciones de la Corte Internacional de La Haya.
El asalto a carreteras: aquí ya señalaban hace un momento que casi está solucionado según parece, pero había que preguntarle a los camioneros, a quienes se les asalta en un promedio de 100 veces en tan sólo un mes, de los denunciados.
El tráfico de armas, en donde parece ser que nosotros no vemos lo que el FBI nos hizo saber a través de los medios de comunicación, de 100 mil armas solamente en tres meses que pasaron por la frontera y esto nos preocuparía más por lo siguiente: porque una nota del New York Times, del 4 de marzo de este año, consigna que algunas instituciones gubernamentales han adquirido armamento de forma discreta y un funcionario público del gobierno de Nuevo León, Gustavo Alarcón, en declaración al periódico El Norte anunció la compra de equipo antimotines con valor de 15 millones de nuevos pesos, "como parte de un programa de seguridad electoral". La policía dijo está para sustentar un orden y lo vamos a hacer.
¿Lo sabrá todo esto el Congreso local, por ejemplo, de Nuevo León? ¿O la propia Secretaría de la Defensa Nacional?
Del sistema penitenciario sabemos muy bien que está quebrando, que está fracasando, a partir de que se ha mantenido la idea del autogobierno de las penitenciarías, que es simplemente darle al más fuerte, el que tiene la fuerza económica y física, el control de esto y a partir de ahí, todo lo que ya sabemos que están viviendo en los penales.
En esta administración salinista no podemos decir que la seguridad está dada. La misma preocupación que señalaba Salinas de Gortari cuando era candidato, está presente y esto es lo que hay que decir. No venir simplemente a decir aquí que ya todo está bien, porque simplemente estaríamos faltando nosotros como diputados, como representantes del pueblo.
Durante todo el día hemos discutido la política interna de este Gobierno. Los cambios que no lo fueron en reforma electoral. Tres reformas y ahora necesitamos una verdadera; tres supuestos cambios electorales para que hubiera participación y se respetara el voto. Ahora estamos, incluso, reconociendo por todos los partidos que es necesario cambiar todo.
¡El IFE se mantuvo bajo la dirección de Núñez, por un lado, y por otro, funcionando simplemente en la sala del IFE sus consejeros ciudadanos! Necesitamos ser realistas y coherentes con nuestro discurso en la pluralidad que queremos y necesitamos para México.
¡Nosotros hemos criticado fuerte aquí y lo seguiremos haciendo! ¡Pero también queremos hacerlo y lo decimos, porque tenemos la idea de que aquí podemos tener consensos importantes, de que aquí podemos sacar la gran tarea que quiere el pueblo mexicano a través del diálogo, a través de la concertación, real concertación; a través de hacer ver al pueblo mexicano que la Cámara de Diputados le es útil y no simplemente para esconder bandidos y ladrones!
¿Qué queremos? ¿Qué queremos a partir de un balance negativo de este sexenio? Y ahora y no para mañana o después. Queremos y exigimos, por ejemplo, una salida política al conflicto de Chiapas, mediante el consenso de los diversos actores y la iniciación de un proceso sustantivo de reformas.
¡Necesitamos la paz real, con dignidad en Chiapas!, ¡y es urgente! ¡Y la cámara tiene que actuar de inmediato, nombrando una comisión especial que vaya allá con plenas atribuciones, para que intervenga a favor de la paz y la dignidad, para que evitemos que la guerra sea un hecho en México. Ya es un hecho en México, más bien para que no se extienda a otras partes de la República!
¡Queremos condiciones de equidad y transparencia en los procesos electorales de ahora! ¡En Tabasco, en Veracruz, en Jalisco, en Tlaxcala, en San Luis y Guanajuato!
¡Queremos integración plural y responsabilidad compartidas en las cámaras del Congreso de la Unión, aquí en la Cámara de Diputados!
¡Y desde luego también, lo pedimos y lo exigimos, la autonomía plena de los órganos electorales a todos los niveles!
¡La culminación del proceso de la ciudadanización y creación de un cuarto poder en la Federación y en los estados y no simplemente un remedo como lo que tenemos ahorita actualmente!
¡Una revisión del sistema contencioso y jurisdiccional en materia electoral!
¡Establecimiento del juicio de amparo y eficiencia de la procuración de justicia electoral!
¡Queremos que realmente se reduzcan y que se controlen los gastos de campaña, queremos ponernos de acuerdo con el PAN, ponernos de acuerdo con el PRI, con el PT, con el resto de la sociedad, para tener nuestra agenda de la reforma democrática del Estado, fortalecer en este sentido a este Poder Legislativo; podemos hacerlo con algunas intervenciones de la mayoría, de la diputación mayoritaria, parece que no, pero en otras intervenciones parece que sí!
Vamos a ver si en el esfuerzo colectivo para ponernos de acuerdo y hacer que este Poder Legislativo sea independiente y tenga dignidad, podernos poner de acuerdo y marchar juntos.
Queremos también una reforma y cabal autonomía del Poder Judicial, que no dependa ya del Presidente en turno y que la Suprema Corte no sea simplemente un lugar a donde van los priístas que ya no quieren y luego los traen y luego los regresan; queremos que sea un lugar, un poder digno, un poder, que lo sea realmente; independencia y procuración de justicia y defensa, y desde luego, elevar el rango de la de fensa de los derechos humanos respecto al Poder Ejecutivo, incluso del Legislativo y Judicial.
Queremos consensos para la gobernabilidad democrática, por eso, exigimos y criticamos fuerte. Queremos consenso para combatir la pobreza extrema y elevar las condiciones de vida de la mayoría. Son algunos de los puntos que el PRD viene planteando, son algunas de las cuestiones en las cuales, creo, nos podemos poner de acuerdo y podemos avanzar rápidamente. Creemos que la Cámara de Diputados, ahora, puede ser la garante de que haya democracia en México. Vamos a ver cómo avanzamos, vamos a ver cómo llegamos a diciembre y a la elaboración de esta agenda democrática; vamos a ver si es posible ponernos de acuerdo todos, porque México lo necesita.
Quería simplemente, por último, señalar entre la relación que al principio dije de acciones agresivas, que me piden que lo haga y lo hago desde luego con mucho gusto, el señalamiento de aquel supuesto accidente que tuvo nuestro candidato en Chiapas, Amado Avendaño y que desde luego nadie lo cree, como nadie cree que hayan sido asesinados Ruiz Massieu y Luis Donaldo Colosio, por gente aislada y loca.
Queremos, pues, democracia, justicia y paz para México y ésa es la propuesta que el PRD les hace a todos ustedes. Muchas gracias.
El Presidente:
En el turno, el diputado Heriberto Galindo.
El diputado Heriberto Manuel Galindo Quiñónez:
Señor Presidente; compañeras y compañeros diputados:
Felicito y reconozco a los compañeros que han estado a la altura de un buen debate político exponiendo las tesis de su partido, pero para quienes han incurrido en calumnias, pido a la Asamblea: ¡basta de injurias!, ¡basta de denuestos!, ¡basta de expresar tanta amargura y frustración! ¡Seamos positivos por el bien de la República!, ¡seamos objetivos y serenos en el análisis! ¡Tengamos grandeza de espíritu para elevar la dignidad de este recinto y de la Cámara de Diputados!
Respetemos cada punto de vista, sí, claro que sí, pero expresémonos con propiedad, con respeto, con altura, con seriedad, con verdad y coadyuvemos así a la concordia y a la paz y no colaboremos a la destrucción de los valores esenciales de la política, pues es más lo positivo que lo negativo y así debemos plasmarlo.
El presidente Carlos Salinas de Gortari cumplió y cumplió bien. Su Gobierno hizo su mejor esfuerzo y por ello cuenta con el respaldo del pueblo de México. Es claro que el balance es positivo y así lo sabe el pueblo; es claro que se avanzó en todos los órdenes, aunque también es claro que no hemos podido eliminar rezagos e injusticias. Pero es evidente que México sigue su marcha, merced al esfuerzo del pueblo, pero también gracias a la conducción mayoritariamente de gobiernos emanados del Partido Revolucionario Institucional y de otros partidos que merecen nuestro respeto.
Nadie puede negarle al presidente Salinas patriotismo, inteligencia, visión, espíritu democrático y vocación transformadora por el bien de la República. Merced a su desempeño como Presidente de la República, este sexenio será recordado como el sexenio de la modernidad y la apertura económica, será recordado también como el sexenio de la solidaridad social y del pluralismo político y como el sexenio que impulsó las elecciones más limpias de nuestra historia.
¡Sí hemos tenido y tenemos dificultades en distintos campos, es cierto, tenemos dificultades, pero no hemos tenido ni tenemos crisis política, como aquí se ha dicho, si ello fuera cierto, no estaríamos aquí compañeros! Reconocemos problemas, pero tenemos y tendremos, ya lo verán, un día firme para resolverlos, lo afirmo aunque le duela a los agoreros del desorden y de la ofensa.
Compañeros diputados: quiero centrar mi comentario en la mejoría de la vida democrática de México, en la disminución de facultades del Presidente de la República y en la celebración de las elecciones más limpias de la historia. En la presente administración, hubo y hay voluntad y decisión política para modernizar y democratizar al país, hubo y hay respeto a las distintas corrientes ideológicas y políticas que coexisten en el país, hubo y hay sobre todo, una respuesta formidable de la ciudadanía y del pueblo de México a la iniciativa progresista de todos en general. La disminución de facultades del Presidente de la República, es también una manera de impulsar la democracia pues equilibra las expresiones y los poderes.
En el documento leído por el Presidente de la República y en los documentos anexos, se da cuenta del estado positivo que guarda la administración pública federal a su cargo. Haré tan sólo comentarios al respecto de las elecciones del 21 de agosto.
En el marco del clima de mayor democracia que dígase lo que se diga, vive nuestro país, de algo podrá servirnos recordar que por algo acudieron a las urnas más de 35.5 millones de compatriotas a emitir su voto y que de ellos más de 17 millones de votos fueron para el PRI, más de 9 millones de votos fueron para el PAN, más de 5.5 millones de votos fueron para el PRD y casi 1 millón de votos fueron para el PT. Quienes integramos la LVI Legislatura al Congreso de la Unión estamos aquí porque el pueblo nos eligió limpiamente y el doctor Ernesto Zedillo será Presidente de la República a partir del 1o. de diciembre próximo, porque el pueblo de México así lo quiso. Si no es así, ¿qué estamos haciendo aquí compañeros?
El 1o. de noviembre escuchamos la lectura de un documento serio, correspondamos a él con seriedad, todos, salvo alguna veintena de campeones de la notoriedad y de la derrota electoral, escuchamos con respeto, con respeto al Presidente, con respeto a nosotros mismos. Reconozcamos con honradez, el presidente Salinas logró grandes transformaciones en política interior, democratización, modernización, apertura política, ampliación de libertades y pluralismo; de ahí que las tres prioridades de Salinas de Gortari en política interior hayan sido: haber alcanzado un mejor equilibrio en la división de poderes y en el federalismo, haber extendido las libertades para todos los mexicanos, haber fomentado el avance de la democratización del país.
Los principales cambios que se dieron fueron para limitar o reducir las facultades constitucionales y legales del Presidente de la República y para mejorar el equilibrio de poderes. Se disminuyó la discrecionalidad y se cumplió, se amplió la legalidad, el Presidente dejó de ser autoridad agraria, se creó la Comisión de Competencia que es autónoma, que regula la eliminación de prácticas monopólicas y oligopólicas; se otorgó la autonomía plena al Banco de México como un paso fundamental para la salud financiera del país.
En materia electoral, dada la autonomía del IFE, el jefe del Poder Ejecutivo ya no tiene facultades en la organización de las elecciones ni en materia de lo contencioso electoral. Tampoco interviene en el nombramiento de los miembros ciudadanos del Consejo General del IFE y en relación con el D.F., hay importantes reformas que han incrementado el poder de la Asamblea de Representantes y de órganos colegiados delegacionales y el poder del propio jefe del D.F.
En cuanto al avance de la democracia, la reforma electoral que favoreció a la democracia y permitió que se dieran las elecciones que tuvimos, no es asunto de poca monta compañeros, tenemos un nuevo sistema de representación, más equilibrado y adecuado para un sistema de partidos más maduro como el que hoy tenemos.
Se suprimió la cláusula de gobernabilidad y la posibilidad de que un solo partido pueda reformar la Constitución, y ahora el Senado de la República cuenta con 32 senadores que provienen de la segunda fuerza electoral de cada Estado y del Distrito Federal.
La ciudadanización es ya un hecho en la vida electoral de México. Se introdujo la elección del jefe del Distrito Federal que entrará en vigor en 1997 y la Asamblea aumentó sus facultades, pero sobre todo, Carlos Salinas de Gortari será, sobre todo, recordado como el Presidente reformador del México de nuestros días. Carlos Salinas de Gortari será recordado como un estadista de talla internacional y lo sabe México y lo sabe el mundo.
Frente a sus virtudes como hombre y junto a sus éxitos como gobernante, las fallas, los defectos y los errores que hayan ocurrido en su administración no son de su responsabilidad personal y única.
Finalmente compañeros, hay dos aspectos de importancia fundamental para la vida política de la nación que aquí se han mencionado. Hay dos asuntos de moral pública que nos han llenado de dolor y de coraje y que los priístas no dejaremos pasar inadvertido: los asesinatos de Luis Donaldo Colosio y de José Francisco Ruiz Massieu que tanto han indignado a toda la sociedad. Deben ser plenamente esclarecidos y debe aplicarse todo el peso de la ley a los responsables intelectuales y materiales, esta es la posición de la diputación priísta. Muchas gracias.
El Presidente:
Es ahora la tribuna para el diputado Eugenio Ortiz Walls.
El diputado Gaspar Eugenio Ortiz Walls:
Con el permiso del Presidente; diputadas, diputados:
Quiero confesarles que soy afecto a los lugares comunes, por lo que tienen de cotidiano en la convivencia y por lo que tienen de rutina personal del hombre común. Es como la filosofía del pueblo, el pensamiento de la gente y también su sentimiento.
Quien vive en el pasado pierde el presente, pero quien olvida el pasado pierde el futuro. Vivir en el pasado es quedarse a llorar las nostalgias de sus propias soledades. El presente hay que vivirlo con la intensidad de nuestra propia identidad y jamás olvidar el pasado, que más que ayer es antecedente que nos recuerda la propia temporalidad aún de los presidentes de la República y también del advenimiento de los relevos y eso es México, pasado, presente y futuro .
Ese es el reto aquí y ahora para todos nosotros los integrantes de esta LVI Legislatura, ser auténticos representantes del pueblo, fieles a nuestros principios y compromisos partidarios, pero ante todo, fieles a México, que es pasado en nuestros padres, que es presente en nosotros mismos y futuro en nuestros descendientes.
Hablemos del VI Informe de Gobierno del Presidente de la República, rendido ante el Congreso de la Unión el 1o. de noviembre.
En su mensaje político, el presidente Salinas recordó que al inicio de su gobierno propuso a la nación una reforma en tres vertientes, que se plantearon como tres acuerdos fundamentales: Acuerdo para el Crecimiento Económico, Acuerdo para la Justicia y Acuerdo para el Avance de la Democracia, como supuestos de una reforma del Estado.
Compañeros de mi partido ya se han pronunciado sobre algunos aspectos del informe presidencial, en lo concerniente a política interior, tema íntimamente ligado al Acuerdo para el Avance de la Democracia. En esta oportunidad he de referirme a dos términos utilizados por el presidente Salinas, reiterativamente en su mensaje político: cambio y diálogo.
Ciertamente desde el inicio de su administración, el presidente Salinas propuso políticas de reformas que presuponen cambios, pero el cambio en política no es sólo mutación de algo a otra realidad, es además, una carga de intención para mejorar y, por lo tanto, un compromiso ético propiciatorio del bien común nacional.
Es cierto que la democracia se fundamenta en la competencia electoral, pero no se agota en ella, esto nosotros en Acción Nacional lo hemos dicho en esta forma: el voto no es todo en la democracia, pero la democracia empieza y transita con el voto, voto que se traduce como voluntad popular y que debemos respetar todos principalmente los que somos representantes del pueblo.
Claro que México requiere un cambio, pero no un cambio por el cambio y menos un simple afeite o simples afeites, lo que el pueblo de México exige es un profundo cambio y un amplio cambio democrático de las estructuras políticas, económicas y sociales. Esto no se logró en este sexenio, independientemente de que vengan a esta tribuna, con todo derecho, los miembros del partido del presidente Salinas, a ponderar el ejercicio tanto sexenal como anual. Son compañeros de partido, por lo tanto a mí realmente no me sorprende la defensa que hagan del programa y del ejercicio de la administración actual.
Pero esto no lo ha logrado el partido del Gobierno en 60 años, en 60 años de gobierno, es decir, estamos hablando de reformas y cambios democráticos y sino avanzamos ciertamente, sino sólo por voluntad del señor de Los Pinos, sino por voluntad del pueblo, por esfuerzos del pueblo, por testimonios de esta gente que es la que nos trae aquí a esta tribuna, a todos, del PRI, del PAN, del PRD y del PT.
Pero, claro que vamos a lograr el cambio y no vamos a presumir que lo haga esta legislatura. Esto lo habrá de lograr más temprano que tarde el pueblo todo de México, por la vía madura y pacífica del ejercicio de sus derechos y en virtud del cabal cumplimiento de las obligaciones de sus representantes. En la medida que cada uno de nosotros y nuestros parlamentarios sean fieles a México y a quienes nos trajeron a esta cámara, en esa medida lograremos el cambio democrático de las estructuras políticas, sociales, económicas y culturales de México.
El presidente Salinas señala en el informe que el diálogo fue medio para cambiar, pero seguramente el diálogo no fue suficiente o adecuado porque el cambio democrático no se dio en los términos que la nación lo reclama. La democracia es un sistema que institucionaliza el diálogo, pero ese diálogo debe darse entre hombres libres y civilizados, como método de búsqueda y encuentro de la verdad y para el bien de México. A este diálogo, exhorta el grupo parlamentario del Partido Acción Nacional a los miembros de la mayoría y a los demás grupos parlamentarios representados en esta cámara. Muchas gracias.
El Presidente:
Tiene la palabra, el diputado Píndaro Urióstegui.
El diputado Píndaro Urióstegui Miranda:
Señor Presidente; honorable Asamblea:
Como lo manda la Constitución, como lo establece la Ley Orgánica de este Congreso de la Unión, el pasado 1o. de noviembre el Presidente de la República acudió a este recinto a cumplir con esa disposición. No fue un entrometido. Obedecía un mandato constitucional: informar a la nación, a través de éste, su representación nacional, el estado que guarda la administración pública del país.
Es cierto que no es posible, nunca lo será, en un país que se esfuerza en ser cada vez más libre y más democrático, merced al esfuerzo y empeño y responsabilidad de todas las co rrientes políticas, que exista unanimidad. La mayoría priísta de esta Asamblea y del país en general, escucha con profundo respeto los planteamientos de las distintas corrientes de opinión pública, porque ése es el México de nuestros días y ésta es la representación nacional que se enorgullece de tener tan dignos y genuinos representantes de todas esas corrientes políticas ideológicas.
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
No es verdad.
El diputado Píndaro Urióstegui Miranda:
Por favor, señor diputado, lo hemos escuchado con respeto y lo menos que puedo exigirle para que sigamos siendo libres, que respete la palabra de sus padres.
Desde que participamos en la pasada contienda política, vimos esa contienda, no como una guerra civil entre mexicanos, no como un enfrentamiento irreconciliable e irracional de posturas, no eran empeños particulares de una lucha que nos concernía a cada uno de nosotros. Era un planteamiento de programas de partidos, eran ideologías serias de cada uno de ellos, era la oferta de distintas posturas y programas partidistas. Eso es lo que se planteó a la nación y eso es lo que todos los partidos nos empeñamos, desde un principio, en reformar para entregar a la nación el mejor escenario jurídico y de legalidad.
Que no fue perfecto, todos lo sabemos. Que es perfectible, estamos todos convencidos de ello y que es satisfactorio que aquí, en el seno de esta Asamblea, en esta ocasión, hayamos escuchado de los diversos partidos los mejores propósitos de sumar esfuerzos, de integrar empeños, de aportar ideas, sugerencias y actitudes de responsabilidad partidista, para perfeccionar electoral, política y legalmente lo que haya quedado en el camino.
Difícil será encontrar leyes perfectas ni aquí ni en ningún otro país. Con esa creencia y con esa convicción, de haber cumplido hasta donde le fue posible al presidente Salinas, con el apoyo, como lo contó, de todos los partidos en un esfuerzo de encontrar consensos y acuerdos para dar un gran empujón al avance democrático de nuestro país.
El camino es largo por recorrer. Ojalá y con la suma de todos los partidos aquí presentes podamos seguirle entregando al pueblo de México nuevas conquistas, nos señalemos nuevas metas para responderle a la confianza que esa sociedad civil nos entregó con sus votos.
Hemos analizado hoy, como lo establece la Ley Orgánica de nuestro Congreso, una de las materias de este VI Informe de Gobierno: el de política interior. Ojalá y en las sucesivas sesiones en que analicemos las siguientes materias, social, económica y de política exterior, lo hagamos con la misma responsabilidad, con el mismo empeño y con la altura de miras que no solamente nosotros nos asignemos, sino que espera de nosotros la nación entera.
Cuidar la respetabilidad de esta Asamblea es tarea de nosotros. Respetarnos a nosotros mismos para reafirmar el respeto de nuestras respectivas comunidades. Hacer más respetable esta Asamblea, porque de ello depende que sea cada vez más representativa de los anhelos y de las esperanzas del pueblo de México.
La mayoría priísta, aquí representada, da su más sólido, firme y consciente respaldo al informe que aquí presentó el Presidente de la República. Lo sentimos, con honestidad, un documento serio, sin alardes triunfalistas, sereno, reflexivo y serio, de lo logrado y de todo lo pendiente por realizar. Ese es nuestro criterio, pero éste es un México plural, como lo es esta Asamblea que tan dignamente representa a nuestro país.
Hago, a nombre de la representación priísta, nuestro más firme empeño porque estos lineamientos y estos criterios continúen prevaleciendo en los análisis de las sucesivas etapas y materias del VI Informe de Gobierno. Muchísimas gracias.
El Presidente:
Han intervenido en este análisis los siguientes oradores, que daremos a conocer en los términos del artículo 116 del Reglamento Interno: Francisco Javier Curi, Graco Ramírez Abreu, René Arce, Carlos Navarrete, Ramón Sosamontes, Manuel Marcué y Pardiñas, Serafín Núñez, José Narro Céspedes, Ezequiel Flores Rodríguez, Alfonso Primitivo Ríos Vázquez, Salvador Beltrán del Río, Rodrigo Robledo, Carmen Segura, Jorge Dávila, Eugenio Ortiz, Rosario Guerra, Jorge Moreno Collado, Oscar Villalobos, Roberto Campa, Sebastián Lerdo de Tejada, Guillermo Zúñiga, María de la Luz Lima Malvido, Juan Salgado Brito, Heriberto Galindo, Samuel Palma y Píndaro Urióstegui Miranda.
Todos ellos han participado en el análisis de la política interior del VI Informe de Gobierno, que es el tema de hoy.
Se informa a esta Presidencia que con un acuerdo parlamentario entre los grupos debidamente registrados en esta cámara, se considera y así se ha hecho saber a esta Presidencia, que está suficientemente discutido el tema. En tales condiciones, se declara agotado el análisis del VI Informe de Gobierno en el tema de política interior.
DENUNCIA
El diputado Marco Antonio Ignacio Rascón Córdova (desde su curul):
Señor Presidente pido la palabra para hacer una denuncia.
El Presidente:
Tiene la palabra, el diputado Marco Rascón, para hacer una denuncia.
El diputado Marco Antonio Ignacio Rascón Córdova:
Señor Presidente; compañeros diputados: Antes de hacer la denuncia, yo nada más quisiera decir que estaba anotado en la lista para participar en esta glosa del informe y tenía una serie de puntos y consideraciones importantes.
Quiero decir que en el momento en que Carlos Salinas aquí, desde esta tribuna afirmaba: "...optamos por el camino de la tolerancia y la democracia, por el respeto sin límite y sin precedente a la libertad de expresión y manifestación, por el reconocimiento al vigor de la crítica, por la decisión de mostrar los hechos, explicar sus causas y actuar en consecuencia sin negar su existencia o desestimar su alcance. Actuamos convencidos de que ante situaciones extremas la gobernabilidad no está en el uso de la fuerza, sino el método universal, que es la política y en el propósito fundamental de nuestro tiempo que es la democracia".
Cuando él decía estas palabras, la caballería de la fuerza pública arremetía contra una manifestación en el centro de la ciudad de México.
Este no es un hecho aislado, porque aquí este Congreso fue un Congreso rigurosamente vigilado. Desde la mañana, todos fuimos testigos que para llegar a este recinto había que traspasar fuerza pública, había que traspasar grupos de agentes, pero no era únicamente con respecto a lo que significaba el recinto legislativo, sino era todo el área central de la ciudad de México.
Yo esperaría que este recinto fuera quizá un poco mas modesto en su arquitectura, pero que fuera más objetivo, más representativo en la idea de ser y encontrar las formas y las alternativas de lo que el país está necesitando. Eso con plena independencia frente al Poder Ejecutivo.
El 1o. de noviembre pasado fue el escenario de la ruptura, el discurso de la ruptura. Y fue el discurso de la ruptura porque Carlos Salinas no se condujo con objetividad con respecto a la situación del país fundamentalmente.
Yo no coincido con la idea de que no fue un discurso triunfalista. Para qué sirve un discurso de esta naturaleza que no está señalando las tareas más importantes de los mexicanos, de las fuerzas políticas, a partir de lo que está sucediendo, sino fue personalizar lo que él consideraba los avances fundamentales del país, eso es una cuestión que le ha creado mucho daño al propio país.
¿Existe otra alternativa que no sea el escenario de la ruptura? Podemos construir una alternativa distinta que no sea el escenario de la ruptura. A lo largo de todas las exposiciones el tema de la violencia, ha sido un tema central, porque la violencia independientemente de la idea de trivializarla o de querérsela adjudicar o querer ser víctimas o victimarios sobre las causas y los orígenes de la violencia, es un tema y es un problema que preocupa a la mayoría de los mexicanos.
No se puede estar trivializando este asunto sobre la base de corporativizar la situación de la violencia. Podríamos tener la lengua más filosa, podríamos hacer el ejercicio, me estoy conteniendo, no se hagan, bueno, "no se hagan bolas", porque luego se matan. No se hicieron bolas, empezaron matándose, siguieron matándose.
El Ejecutivo, hizo una estrategia para presentar su último informe y el escenario no era sólo San Lázaro, era todo lo que estaba sucediendo en la ciudad y en el país. Mis paisanos de Chihuahua recordarán una frase que estaba en la policía judicial, para poner a todo mundo ahí, decía: "quien mal anda, mal acaba". ¿Y qué fue lo que sucedió? Aquí no se ha retomado en ningún punto y ni en ningún momento lo que fue el discurso y la oferta y la promesa de Carlos Salinas, el 1o. de diciembre de 1988, hasta lo reactual es bien distinto, se ve que lo reactual es bien distinto.
Y hoy lo que es el resultado que debería incorporarse aquí al contenido de esta glosa, evidentemente no corresponde con las expectativas y con la realidad de lo que está viviendo el pueblo de México.
Vine a hacer una denuncia y al mismo tiempo hacer una demanda y demandar un respeto. Por la prensa en menor medida y con muchísima mayor objetividad, tenemos aquí lo que han estado relatando los periódicos sobre los acontecimientos en el Centro Histórico y lo que sucedió ahí. Y a muchos les consta: diputados, periodistas que fuimos prácticamente casi los últimos de abandonar el recinto de aquí de San Lázaro y nos trasladamos a lo que era la manifestación que habían convocado nuestros compañeros y que se había iniciado desde las 8.30 horas de la mañana, desde el panteón de Dolores hasta el Zócalo.
Yo llegué alrededor de las 2.30 horas de la tarde y el jefe de granaderos, llegué por la parte de atrás de donde estaba el grupo de granaderos deteniendo a la manifestación y el jefe de granaderos me dijo: Rascón, por favor en un momento más van a poder avanzar, solamente son cinco minutos. Por favor yo le pido que usted avise a sus compañeros. Yo le pedí que me diera paso, pasé por un flanco de los granaderos, fui al sonido, avisé de esto a los compañeros, y estos cinco minutos se extendieron por una hora y media más.
Estamos hablando de cerca de las 4.30 horas de la tarde, cuando ustedes sabrán mejor cuándo fue que terminó la ceremonia ritual que se hace posterior al informe. Y el hecho que se hubiera prolongado mantuvo una situación de tensión ahí en el cruce del Eje Central y avenida Juárez. Horas antes, ya la caballería había cargado sobre la manifestación destrozando los ataúdes de cartón que se habían preparado para esa ocasión por un grupo de compañeros.
¿Se extendía demasiado la ceremonia del "besamanos"? ¿Por qué tanto tiempo si las salutaciones disminuyeron ingratamente a una tercera parte con respecto a otros años? Al llegar la orden de que se retiraran, se abrió una valla de granaderos, hizo un callejón en Madero y empezaron a volar piedras y palos de un lado. En el momento en que llegó la orden, en el momento en que llegó la orden de que se abriera paso, los granaderos se abrieron en dos flancos para hacer "una fila india" y ahí fue cuando se iniciaron... las piedras, los palos que generaron esa cuestión de los heridos.
Ellos iban preparados con cascos, escudos, todo. Se dice que nosotros agredimos. Aquí tengo una carta que voy a dar lectura: "Por los acontecimientos ocurridos el 1o. de noviembre entre granaderos y manifestantes en la avenida Juárez, Eje Central Lázaro Cárdenas y la calle Francisco I. Madero, los abajo firmantes denunciamos las agresiones de las cuales hemos sido objeto por parte del cuerpo de granaderos de la Secretaría General de Protección y Vialidad.
Los reporteros gráficos de todos los medios informativos decimos que todo lo que se diga para aclarar la golpiza que nos propinaron, no tiene ninguna justificación. Nosotros sólo cumplimos con nuestro deber de informar los acontecimientos, no intentamos ser protagonistas de nada, además existen gráficas, imágenes de compañeros en el momento que son golpeados por los granaderos".
Estos son algunos de los compañeros: Laura Lobera, El Sol de México, fractura de pierna; Rubén González, Ovaciones, golpe en la oreja y cabeza; Ricardo Cristino, Quehacer Político, descalabrado; Alberto Vargas, Quehacer Político, apedreado; Germán Canseco, Proceso, brazo lesionado; Aracelí Herrera, Proceso, piedras por la espalda; Miguel Salguero, toletazo en el estómago; René Soto, El Nacional, golpeado; Ernesto Muñoz, El Nacional, arrollado por caballo; Arturo Fuentes, golpeado; Jorge Núñez, Agencia SIPA, golpeado; Rodolfo Zepeda, Uno Mas Uno, golpeado; Miguel Castillo, Agencia MIC, golpeado; Miguel Castillo, Agencia MIC, golpeado; Hugo Jaques, Excélsior, golpeado; Francisco León, Excélsior, le robaron todo su equipo; Juan Carlos Buenrostro, de El Universal, golpeado; Gregorio Cortés, colaborador del Semanario etcétera, le quitaron el equipo la patrulla 16059; del Partido de la Revolución Democrática, Irineo Ansu Andrade, de Sacapu, Michoacán; Federico Patiño, de Vistahermosa, Michoacán; Elizabeth Ramírez del PRD, II distrito; Daniel Flores, del PRD del XXXI distrito; Margarita Sacramento, V distrito; Valentina Batres, VII distrito y Eduardo Escobedo, del PRD, V distrito.
Queremos demandar pleno respeto a las manifestaciones por una razón: porque las manifestaciones se van a continuar dando. Este 8 de noviembre, el 20 de noviembre, el 1o. de diciembre van a continuar las movilizaciones, van a continuar y el debido respeto a la libertad de expresión de todos los ciudadanos que lo deseen hacer, lo podrán y lo tienen que hacer.
Queremos decir esto porque sí vemos que en muchos de los discursos que aquí se han dicho, hay un clima de intolerancia y de provocación que generan las condiciones de provocación, para poder querer trasladar el clima de provocación y de violencia, hacia otros sectores que no sean el PRI. Esto lo hemos vivido desde hace mucho tiempo. Debemos acabar con la cultura de la ruptura, pero ésta no se acaba con simulación ni escenografía y lo que ha habido es una escenografía.
Queremos nada más decir una cuestión, para finalizar: al final del discurso del licenciado Carlos Salinas, de muchas de las cosas que ustedes han dicho, señores diputados del PRI, la frase, una frase importante que define el sexenio de Carlos Salinas, es "No veo, no oigo". "No veo, no oigo". Y eso dicho, no lo pudo haber dicho; pero al decirlo, es de que le gano la soberbia y cuando lo hizo, lo volvió política interna, lo volvió e hizo explícito lo que es la política interna y lo que fue la política interna de Carlos Salinas. La exclusión, la marginación de sectores en lo político, en lo social, en lo económico a favor de una pequeña oligarquía que hoy en esta glosa, se ha presentado lo que han sido las características de este sexenio, pero evidentemente el juicio, el juicio, las implicaciones de esto, lo vamos a estar viendo la mayoría de los mexicanos a lo largo del tiempo.
No hagamos del no veo y no oigo, la cultura de esta legislatura. Si lo convertimos en la medida de no veo y no oigo, no vamos a salir de la trampa, de la cultura, de la confrontación y de la ruptura. Planteemos nuevas alternativas y eso es lo que esperamos de ustedes, una posición distinta, no el "no veo, no oigo".
El Presidente:
Tiene la palabra, para el mismo asunto, el diputado Oscar Levín.
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas (desde su curul):
Para rectificar hechos, señor Presidente.
Yo pedí antes la palabra para rectificar hechos.
El Presidente:
Se la damos después.
El diputado Oscar G. Levín Coppel:
Con su venia, señor Presidente; honorable Cámara:
Una sola tesis fundamental. Durante estos seis años, en la Ciudad de México, nunca, nunca, fíjense bien, se reprimió a ninguna organización social de ningún tipo durante el Gobierno de Carlos Salinas de Gortari. Mucho más, diríamos y lo dicen muchos medios de comunicación y muchos intolerantes, se le acusa al Gobierno de Salinas de libertinaje, precisamente por permitir la expresión de todas esas organizaciones, muchas veces lastimando los derechos de terceros.
Quiero que lo sepan bien, compañeros de todas las fracciones. En esto puede haber muchas diferencias de criterio, pero en algo que estamos seguros los priístas es nunca, a partir de ninguna provocación, reprimiremos ningún movimiento social. Lo que queremos y lo que sostendremos en esta ciudad, es precisamente el exceso de libertad, aunque parezca pleonasmo.
¡Nunca, en ningún momento, en estos seis años hubo represión! ¡Es más, en muchos momentos, repito, muchos sectores de la sociedad han estado pidiendo precisamente la represión! ¡Con razones buenas o malas, insisto, nunca los gobiernos de la Revolución caerán en esta provocación!
Quiero aprovechar, por otro lado, que subimos para aclarar esta denuncia y compañeros decirles algo que para mí es muy importante en este momento:
Conozco a muchos de los que están aquí y a algunos hace 30, 25, 20 años. Me unen amistades muy profundas con miembros de fracciones de otros partidos que no son el mio y tengo con ellos también muchos puntos de coincidencia, tanto con perredistas, como con panistas o petistas.
Me considero una gente que lucha y que transfigura diario, y que siempre ha tratado de mantener las cosas para un mejor desarrollo en México y avance más democrático.
¡Creo, compañeros, que después de haber escuchado éste tan importante debate durante este primer día de sesiones, que tenemos a pesar de que no lo queramos reconocer grandes puntos de coincidencia!
¡Creo que estamos listos, todas las fracciones, y muchos de nosotros en el PRI estamos pensando en un nuevo trato con las oposiciones! ¡Quiero que sepan que estamos abiertos a terminar esta lucha de enconos que ha dividido a los mexicanos durante ocho años; que nos ha lacerado a todos y que no ha sido desgraciadamente más que un pleito de familia!
¡Quiero comentarles y hay que decirlo, porque es así, quiero comentarles que al final de cuentas tenemos la actitud, el respeto, los tamaños, para entendernos! ¡Requerimos un Congreso digno! ¡Requerimos alcanzar a la sociedad mexicana! ¡Es para todos claro que la sociedad avanzó más rápido que los partidos, incluido el nuestro!
¡Hoy tenemos una sociedad más plural, más avanzada, más democrática; tenemos la obligación de alcanzarla!
Quiero decirles que de parte de muchos compañeros existe esta voluntad, que transitaría diario, que transitaremos muchos de los compañeros de la fracción priísta, para lograr un nuevo trato. ¡Intentaremos encontrar ese nuevo trato, aunque muchas veces, muchas veces fíjense bien, "los duros" de ambas partes traten de impedirlo!
¡Lo importante en este momento es que transitemos a una nueva cultura política! ¡Precisamente diputado Rascón, no queremos la ruptura! ¡Porque no queremos la ruptura, queremos mantener esta condición, esta condición esencial de hombría, de bonhomía, de bien!
¡Sépanlo bien, compañeros: estamos listos para entendernos; estamos listos para un nuevo trato y estamos listos también para un nuevo pacto político! Muchas gracias.
El Presidente:
Para rectificar hechos, por cinco minutos, el diputado Marcué Pardiñas.
El diputado Manuel Marcué y Pardiñas:
Ojalá sea cierto lo que ha venido a afirmar aquí el diputado del PRI que me antecedió en la palabra, mi amigo Levín. Pero no acepto lo que vinieron a decir aquí cínicamente los anteriores miembros del PRI, que hablaron antes que Levín. No quiero decirles cosas graves a algunos diputadillos, porque van a salir llorando todos los del PRI. ¿O quieren que se los diga?
Yo le pregunto al PRI y al Gobierno: ¿Dónde estaba el equipo de campaña cuando asesinaron a ese joven que tenía un gran porvenir y que fue candidato de ustedes a la presidencia? Yo les pregunto, señores del PRI: ¿Cuál fue la actitud de ustedes? ¡Cobardes!, ¡agacharon la cabeza y no salieron a protestar por ese hecho gravísimo; no para ustedes, para el país!
¿Quieren que siga, señores?
Yo le pregunto a los señores del PRI: ¿cuál fue su protesta cuando el equipo de seguridad del Estado Mayor, que tenía la obligación de cuidar a su candidato, le pregunto a los del PRI si han protestado, porque nadie estaba cuidándolo de cualquier atentado? ¡Estaba un general y otro, no quiero decir que ayudando al crimen! ¡No vengan a esta tribuna, señores, a defender cosas indefendibles, aprendan a defender a su Gobierno y a su Presidente, no sean tontos!
El Presidente:
Para rectificar hechos, por cinco minutos, el diputado Gabriel Llama.
El diputado Gustavo Gabriel Llamas Monjardín:
Con su venia, señor Presidente; señores diputados:
Estamos aquí para defender el cumplimiento de la ley y para velar por la libertad de expresión y, sobre todo, para un ejemplo de respeto a las instituciones y a la sociedad en general.
La libertad nunca está en exceso, la libertad no sobra señor Levín Coppel, la libertad nace junto con nosotros, no la otorga absolutamente nadie. Algunos, efectivamente, están embarrados con los problemas de su familia, pero los que somos de familia decente pedimos respeto. ¡Arreglen sus problemas en su casa! No estamos en condiciones morales y de ningún tipo para provocar a la sociedad a enfrentamientos infructuosos y esto no es ninguna referencia a ningún sustantivo; a enfrentamientos con grandes costos pero con pocos o nulos beneficios para la sociedad y para esta gran República mexicana.
No aceptamos el enfrentamiento vil y la generación de confusiones a nuestro pueblo, porque México quiere paz, México quiere estabilidad, México quiere actitud responsable de sus representantes populares y de sus autoridades. Por eso, en ejercicio de nuestras atribuciones, convocamos a todas las fuerzas políticas a adoptar una conducta ejemplar a la no agresión, busquemos la paz, la armonía y el respeto; así pues la fracción del PAN manifiesta la inquietud por los sucesos del 1o. de noviembre en el que ciudadanos y representantes de la fuerza pública salieron heridos y por eso preguntamos ¿qué ganó el pueblo de México con la sangre derramada? Unos lograron salir en las ocho columnas, otros salieron golpeados.
Solicitamos pues que se investiguen a fondo los sucesos del 1o. de noviembre y se deslinden responsables y convocamos a todos los partidos políticos y a la sociedad en su conjunto a buscar la paz y el respeto y así lograremos una patria ordenada y generosa y una vida más digna para todos. Muchas gracias.
El Presidente:
Para rectificar hechos, por cinco minutos, el señor diputado Luis Sánchez Aguilar.
El diputado Luis Sánchez Aguilar:
Con su venia, señor Presidente; compañeras diputadas, compañeros diputados:
Hemos oído un sinfín de despropósitos por parte primero, del señor licenciado Carlos Salinas de Gortari, en su VI informe como encargado del Poder Ejecutivo y de la mayoría de los diputados priístas que han venido aquí a defender lo indefendible.
El señor licenciado Salinas padece esquizofrenia y astigmatismo políticos: esquizofrenia porque no vive la realidad, porque no toca piso; astigmatismo, porque su visión está deformada. El México que él y sus compinches del grupo empresarial que engalana la revista Forbes, ven un país democrático y en grado de avance superior, 90 millones de mexicanos vemos un país hundido en la postración, en la miseria y en la desesperanza y, vienen a decirnos hoy aquí los defensores a ultranza de la figura del señor Salinas, que el país tuvo rumbo, sí, nos llevó al abismo, eso dice doña Rosario Guerra, dice que fortaleció la soberanía, cuando este país pasó a formar parte de la órbita imperial norteamericana y cuando este país se va a convertir en la más grande maquiladora del planeta como consecuencia del Tratado de Libre Comercio.
Dice doña Rosario que ha dejado huella, sí, yo diría, es la huella de la muerte, miseria y hambre, las iniciales de su predecesor Miguel de la Madrid Hurtado, que lo impuso ilegítimamente en la Presidencia y le paga, por cierto como regalo de fin de sexenio, hace ocho días, una concesión bancaria, y el grupo Anáhuac.
Nos dice Heriberto Galindo, que son las elecciones más limpias de nuestra historia, que no hay crisis política. ¿Cómo se explica entonces que México esté aportando a la literatura universal, a la criminalística?, Ya no los crímenes de Estado sino los crímenes de partido.
¿Cómo nos puede venir a decir que son elecciones transparentes?, cuando múltiples organizaciones de observación electoral como la Adese y la Alianza Cívica conjuntamente han acreditado más de 12 millones de violaciones a la seguridad del sufragio y la afectación de cerca a de 70 mil casillas en cuanto al ejercicio pleno de sufragio.
¿Cómo nos pueden hablar de un clima de mayor democracia y de profundas transformaciones cuando el país hierve en una guerra civil en el sureste, cuyas llamaradas están a punto de abrazar otras entidades del territorio nacional? ¿Cómo pudo ser esto posible? Fue posible porque en 1988 los mexicanos toleramos un gigantesco fraude electoral, porque permitimos que el pequeño führer, como yo le he llamado al señor Salinas no ahora que va de salida, no ahora que recibe menos admiradores en su besamanos, ¡desde 1983! así hemos caracterizado su estilo personal de gobernar. Primero como dictador de la economía nacional en la Secretaría de Programación y Presupuesto; luego como asesor áulico del señor De la Madrid; luego como candidato presidencial. Este hombre que se comporta bajo el principio del führer prinzip como en la Alemania nazi, el principio de mando incontestado que impone obediencia y adhesión ciegas a sus dictados...
El Presidente:
Si me permite el orador por favor. Yo le voy a rogar a la Secretaría, dé lectura al artículo 102 del reglamento, recordando que el diputado pidió la palabra para rectificar hechos. Yo le ruego a la Secretaría que dé lectura al 102, por favor, señor diputado, si es tan amable.
El secretario Adrián Víctor Hugo Islas Hernández:
Artículo 102. Los individuos de la Cámara aun cuando no estén inscritos en la lista de los oradores, podrán pedir la palabra para rectificar hechos o contestar alusiones personales cuando haya concluido el orador y sin que puedan hacer uso de la palabra más de cinco minutos.
El Presidente:
Gracias, señor Secretario.
Le recuerdo... permítame, señor diputado. Quiero recordarle también, que hace unos minutos, a excitativa de los cuatro grupos parlamentarios, dimos por concluido el análisis de la política interior del VI Informe de Gobierno; yo le ruego a usted que si su participación es para hechos, se limite al tiempo y además se limite a lo que dice el artículo 102 del reglamento. Yo se lo suplico, con el objeto de que mantengamos orden en las sesiones de esta cámara.
El diputado Luis Sánchez Aguilar:
Así es señor Presidente. Estoy...
Señor Presidente, estamos rectificando los hechos, lo que aquí se ha afirmado se está distorsionando, se está desorientando al pueblo de México al establecer un marco democrático que es inexistente.
El señor Marcos Rascón vino aquí a hacer una denuncia muy grave; vino a decir que se violentan, se conculcan las garantías individuales, dio prueba de ello, la prueba está también en la radio, la televisión, en la prensa nacional e internacional y nos vienen a decir aquí a los legisladores priístas que vivimos un régimen de concepción democrática. Nosotros consideramos que el hecho preciso que hay que aclarar es que esto fue posible porque los mexicanos permitimos la imposición de un usurpador y porque un partido, el de la derecha, se hizo cómplice cuando avaló el acceso al poder del señor Salinas... bajo la tesis de la legitimación por el ejercicio, de una tesis... medieval contraria a la ética, una tesis enarbolada por los señores Diego Fernández de Cevallos y Luis H. Alvarez, ... quienes, malversaron la historia de ese partido... no me refiero a los militantes honestos del Partido Acción Nacional, muchos de ellos amigos entrañables del de la voz, pero sí denunciamos a esa dirigencia corrupta que está confesa, como el señor Alvarez, quien confesó eso ante la prensa... y además está también ratificado por las memorias del señor Camacho quien ha avalado que negociaron bajo cuerda el acceso al poder del señor Salinas... para negar el acceso al señor ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, legítimo triunfador de los comicios presidenciales en 1988.
El Presidente:
Yo le ruego... Yo le ruego al diputado, por favor... por favor...
Yo le ruego al diputado que ya suspenda su intervención... ha concluido el tiempo...
Señor diputado, Luis Sánchez Aguilar... esta Presidencia hace un requerimiento más para que se sujete a reglamento...
Yo le ruego, diputado Sánchez Aguilar que tome asiento en su curul, si es tan amable. Ha terminado el diputado Sánchez Aguilar.
El diputado Luis Sánchez Aguilar:
Si tienen pantalones espérenme afuera, si tienen cerebro suban aquí, suban aquí para que me contesten, todos juntos suban aquí en orden alfabético o si quieren en orden cronológico...
El Presidente:
Señor diputado, tome asiento y mantenga el orden en la sala.
Señores secretarios, ha terminado el turno del diputado Sánchez Aguilar.
Esta Presidencia, durante la intervención del diputado Graco Ramírez Abreu, recibió para dar trámite en su oportunidad; dos peticiones que hizo el diputado Graco. Yo le ruego a la Secretaría dé lectura a las mismas.
La secretaria María Claudia Esqueda Llanes:
"Presidente de la Cámara de Diputados. Presente.
Con fundamento en lo dispuesto por el artículo 58 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, presentamos a consideración de esta soberanía, el siguiente punto de acuerdo: Unico. La Cámara de Diputados del Congreso de la Unión acuerda conformar una comisión especial pluripartidista, que tendrá por objeto continuar con el seguimiento de la investigación que con motivo del asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta, lleva a cabo la autoridad competente.
Para ese efecto esta comisión podrá realizar las actividades de acopio de información en las entrevistas con funcionarios que requiera su cometido.
La Comisión de Régimen Interno y Concertación, presentará una propuesta de acuerdo parlamentario, donde se precisen los legisladores que integrarán esta comisión especial.
Salón de sesiones de la Cámara de Diputados, a 3 de noviembre de 1994. Rúbricas,"
El Presidente:
Adelante, Secretaria, con la siguiente.
La secretaria María Claudia Esqueda Llanes:
"Presidente de la Cámara de Diputados. Presente.
Con fundamento en lo dispuesto en el artículo 58 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, presentamos a consideración de esta soberanía el siguiente punto de acuerdo: unico. La Cámara de Diputados del Congreso de la Unión acuerda conformar una comisión especial pluripartidista, que tendrá por objeto continuar con el seguimiento de la investigación que con motivo del asesinato de José Francisco Ruiz Massieu, lleva a cabo la autoridad competente.
Para ese efecto, esta comisión podrá realizar las actividades de acopio de información y las entrevistas con funcionarios que requiera su cometido.
La Comisión de Régimen Interno y Concertación, presentará una propuesta de acuerdo parlamentario, donde se precisen los legisladores que integrarán esa comisión especial.
Salón de sesiones de la Cámara de Diputados, a 3 de noviembre de 1994. Rúbricas."
El Presidente:
Esta Presidencia dispone que se turnen a la Comisión de Régimen Interno y Concertación Parlamentaria.
LIBERTAD DE EXPRESION
El Presidente:
Asimismo... permítame, diputado. Asimismo, ha llegado a esta Presidencia un punto de acuerdo que ha sido debidamente firmado por todos los grupos parlamentarios. ¿Sí es tan amable?
La secretaria María Claudia Esqueda Llanes:
«PUNTO DE ACUERDO
Unico. Los diputados integrantes de la LVI Legislatura, nos manifestamos en favor del respeto irrestricto a la libertad de expresión. Consideramos que no hay argumento legal alguno que impida la libre circulación del periódico Reforma.
La Cámara de Diputados, por su parte, a través de la comisión plural que los atendió, se ofreció a servir de canal de advenimiento entre el periódico Reforma y la Unión de Voceadores.
Firman los integrantes de la comisión plural.»
El Presidente: Continúe la Secretaría con los asuntos en cartera.
ORDEN DEL DIA
El secretario Serafín Núñez Ramos:
Señor Presidente, se han agotado los asuntos en cartera y el análisis del VI Informe de Gobierno en el tema de política interior. Se va a dar lectura al orden del día de la próxima sesión.
«Primer Periodo de Sesiones Ordinarias. LVI Legislatura.
Orden del día
4 de noviembre de 1994.
Lectura del acta de la sesión anterior.
Comunicaciones del Congreso del Estado de Campeche.
Oficios de la Secretaría de Gobernación
Oficios de la Secretaría de: Agricultura y Recursos Hidráulicos; de Comercio y Fomento Industrial; de Comunicaciones y Transportes; de la Contraloría General de la Federación; de la Defensa Nacional; de Desarrollo Social; de Educación Pública; de Energía, Minas e Industria Paraestatal; de Gobernación; de Hacienda y Crédito Público; de Marina; de Pesca; de la Reforma Agraria; de Relaciones Exteriores; de Salud; de Trabajo y Previsión Social; de Turismo y del Departamento del Distrito Federal, con el que se remiten los informes de labores correspondientes al periodo 1993-1994.
Análisis del VI Informe de Gobierno.
Política Económica.
Y los demás asuntos con los que la Secretaría dé cuenta.»
El Presidente (a las 20.00 horas):
Se levanta la sesión y se cita para la que tendrá lugar mañana viernes, 4 de noviembre, a las 11.00 horas.