Intervenciones
Ricardo Villarreal García, Comisión de Defensa Nacional
Rubén Ignacio Moreira Valdez, Grupo de Trabajo para Conmemorar los 200 Años del Colegio Militar
Luis Cresencio Sandoval González, Secretaría de la Defensa Nacional
Javier Joaquín López Casarín, PVEM
Guillermo Octavio Huerta Ling, PAN
Marco Antonio Pérez Garibay, Morena
Marcela Guerra Castillo, Presidencia de la Mesa Directiva
Entonación del Himno del Heroico Colegio Militar
Develación de las letras de oro en el Muro de Honor y entonación del Himno Nacional
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Proceda la Secretaría a informar el cómputo de asistencia de diputadas y diputados.
La secretaria diputada Olga Luz Espinosa Morales: Señora presidenta, se tienen registrados 252 diputadas y diputados. Por lo tanto, hay quórum.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo (10:46 horas): Se abre la sesión solemne para inscribir con letras de oro en el Muro de Honor del salón de sesiones de la Cámara de Diputados la leyenda: 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar, en modalidad presencial.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Esta Presidencia da la bienvenida a miembros del Heroico Colegio Militar, autoridades e invitados especiales.
Honorable asamblea, para esta sesión solemne nos acompañará el general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional y se designa en comisión para que lo acompañen al interior de este salón de sesiones a las y los siguientes diputados: diputado Rubén Ignacio Moreira Valdez, diputado Hirepan Maya Martínez, diputado Guillermo Octavio Huerta Ling, diputado Javier Joaquín López Casarín, diputada Mary Carmen Bernal Martínez, diputado Sergio Barrera Sepúlveda, diputado Francisco Javier Huacus Esquivel y diputado Carlos Iriarte Mercado. Se pide a la comisión cumplir con su cometido.
(La comisión cumple con su cometido)
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Honorable asamblea, de conformidad con el acuerdo aprobado para celebrar esta sesión solemne, iniciamos con la intervención del presidente de la Comisión de Defensa Nacional, diputado Ricardo Villarreal García, hasta por diez minutos.
El diputado Ricardo Villarreal García: Con su permiso, presidenta.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Adelante, diputado.
El diputado Ricardo Villarreal García: Compañeras y compañeros. Es para mí un orgullo poderle dar la más cordial bienvenida a esta, la casa del pueblo de México, al general secretario general Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional, bienvenido señor secretario.
Saludo y le doy la bienvenida al general de división diplomado del Estado Mayor, Gabriel García Rincón, subsecretario de la Defensa Nacional. Al general de división diplomado del Estado Mayor José Alfredo González Rodríguez, oficial mayor de la Secretaría de la Defensa Nacional. Al general de división diplomado del Estado Mayor Jaime González Ávalos, inspector y contralor general del Ejército de la Fuerza Aérea. Al general de división diplomado del Estado Mayor Ricardo Trevilla Trejo, jefe del Estado mayor conjunto de la Defensa Nacional. Al general de división diplomado del Estado mayor David Rivera Medina, director general de Educación Militar y rector de la Universidad del Ejército y Fuerza Aérea.
Al comisario general David Córdova Campos, comandante de la Guardia Nacional. Al general de brigada diplomado del Estado Mayor Jorge Antonio Maldonado Guevara, director del Heroico Colegio Militar. Al general de división piloto aviador diplomado del Estado Mayor Aéreo Bertín Hernández Mercado, comandante de la Fuerza Aérea Mexicana. Y con mucho, mucho gusto saludo a los cadetes del Heroico Colegio Militar, bienvenidos a su casa.
Diputadas y diputados, acudimos el día de hoy 22 de noviembre de 2023, a esta sesión solemne que tiene como objetivo rendir un sentido homenaje a una de las instituciones de mayor trayectoria del Estado mexicano, el Heroico Colegio Militar. Y qué mayor honra que la inscripción en el Muro de Honor de este recinto parlamentario, sede de la representación nacional con la leyenda en letras de oro, 2023 Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar.
En el Muro de Honor del Palacio Legislativo de San Lázaro, se encuentran inscritos en letras de oro los nombres de personas, instituciones, que han destacado por su gran contribución a nuestra patria, dando la razón de ser e identidad a nuestra nación, con su dedicación, e incluso, en muchos casos, hasta con la entrega de su propia vida han velado siempre por la supervivencia y la grandeza de nuestra patria.
Muchos son los nombres y las leyendas que engalanan estos muros, que son testigos fieles de la historia de México y de nuestro actuar parlamentario, cada letra de oro nos evoca a un pasado de grandes hazañas, pero también un enorme compromiso por cada uno de quienes tenemos la alta y noble responsabilidad de representar a la nación construyendo aquí el ahora de México.
Las y los legisladores estamos aquí de manera temporal, así lo decide cada tres años el pueblo de México, es algo consustancial a nuestra democracia. Pero estas letras de oro, estos nombres, estas leyendas, aquí permanecen de forma perene, recordando a cada generación nuestros orígenes, nuestras hazañas y nuestras glorias, de modo tal, que hoy es un gran día para nuestra patria.
Hoy reconocemos la historia, la trayectoria, el legado de una institución bicentenaria y de todos quienes han pasado por sus filas. No es la primera vez que la Cámara de Diputados rinde un homenaje al Heroico Colegio Militar, como pueden observar ahí está inscrita en el Muro de Honor, la leyenda que el 9 de octubre de 1973, fuera develado en el marco de una sesión solemne como la que hoy celebramos. De igual forma, pueden observar que en estos muros también está inscrita la leyenda a los Niños Héroes de Chapultepec, develada el 13 de septiembre de 1947.
Señoras y señores, la historia del Heroico Colegio Militar, ha recorrido en paralelo con la historia de nuestro México independiente.
Si bien, el primer antecedente de una escuela militar, lo tenemos en el Reglamento para la Artillería de la Nueva España, que data de 1765, el 11 de octubre de 1823, es la fecha de referencia de la creación y puesta en marcha de los trabajos del Colegio Militar y la escuela práctica, que fueron establecidos en Veracruz, en las instalaciones de la antigua Fortaleza de San Carlos de Perote. Ahí comienza un recorrido histórico de una institución que ha visto pasar por sus filas a miles de jóvenes comprometidos con su patria y leales con una gran causa, nuestra nación.
A manera de contexto, recordar que tras la consumación de la Independencia México estaba en la encrucijada de sus propias definiciones. La fundación del Colegio Militar respondió la necesidad de que México contara con una sola institución militar al servicio de la nación, dejando atrás a los ejércitos de las fracciones que aún estaban en disputa por el poder.
Los jóvenes del Colegio Militar han sido actores principales de las más grandes hazañas bélicas de nuestro país, desde la época de la Independencia hasta nuestros días muchos han sido los episodios gloriosos en los que los jóvenes cadetes del Colegio Militar han brindado sus capacidades, talento y aún sus vidas al servicio de la patria.
Es de destacar la defensa ante la intervención norteamericana que dio el carácter de héroes a los cadetes que defendieron con su vida el Castillo de Chapultepec. Aquella gesta la seguimos recordando como uno de los episodios más importantes de la historia de nuestra patria no solo por la sangre derramada, sino por el patriotismo de quienes pelearon con absoluta gallardía y quienes perdieron la vida.
Y cómo no recordar el 9 de febrero de 1913, cuando los cadetes del Heroico Colegio Militar en un acto pleno de valor, honor y lealtad escoltaron al presidente Madero, quien montaba caballo desde el Alcázar del Castillo de Chapultepec al Palacio Nacional, en lo que se conoce como la marcha de la lealtad durante la decena trágica que apuntaba a un terrible golpe de Estado.
Ya sea en enfrentamientos internos, como la Revolución Mexicana, así como la defensa nacional ante intervenciones extranjeras, como la norteamericana, el Heroico Colegio Militar ha estado presente con la mayor valentía y dignidad defendiendo al pueblo de México.
En la actualidad, el Colegio Militar se distingue no solo por su capacidad o adiestramiento en la actividad bélica, sino también por ser una institución formadora de jóvenes en los más altos aspectos de desarrollo, como la educación profesional, la cultura, el deporte, entre otras actividades que los impulsan cada día a ser mejores en todos los aspectos de su vida y más responsables con su sector.
La educación que imparte el Colegio es de la más alta calidad, hombres y mujeres encuentran en la institución militar una gran oportunidad para desarrollar sus capacidades de manera integral y con igualdad de oportunidades. Quienes acuden a las aulas y espacios del Colegio saben que además de su formación profesional adquieren la responsabilidad y el compromiso con su patria.
Es fundamental en la educación militar actual la base que se tiene en materia de los derechos humanos y en la formación respecto al derecho internacional humanitario, aspectos indispensables en el entendimiento de lo que hoy son nuestras Fuerzas Armadas en la construcción de la paz en nuestro país.
Señoras y señores, compañeras y compañeros, la historia del Heroico Colegio Militar está conformada por millones de historias más, las de cada cadete que se ha vestido con un uniforme de la patria y ha portado con orgullo sus insignias. Los cadetes del Heroico Colegio Militar enarbolan los más altos principios y valores de la patria, como el honor, la lealtad, el patriotismo, el valor, la disciplina, la honradez y la abnegación, mostradas de forma fehaciente en su permanente encomienda al servicio de México. Que las aulas del Heroico Colegio Militar sigan forjando hombres y mujeres de severa rectitud, de firme convicción, y acendrando su patriotismo. Que el ideal del servir a la patria, a la nación, siga tan presente como hace 200 años.
Felicidades a todas y a todos los cadetes, a los licenciados en administración militar, a los subtenientes de arma y de servicio de policía militar e intendencia, a las autoridades del colegio y de la Secretaría de la Defensa Nacional, y a todos quienes hacen posible que el colegio se mantenga... y siembre como siempre un referente en la instrucción militar de México.
Enhorabuena al Heroico Colegio Militar por sus primeros 200 años de vida. Por el honor de México. Que viva el Colegio Militar. Que viva el Ejército Mexicano. Y que viva México.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Gracias. Gracias, diputado Ricardo Villarreal García.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Tiene el uso de la palabra el coordinador del Grupo de Trabajo para Conmemorar los 200 Años del Colegio Militar. El diputado Rubén Ignacio Moreira Valdez, hasta por 10 minutos.
El diputado Rubén Ignacio Moreira Valdez: Con su permiso, diputada presidenta.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Adelante, diputado Moreira.
El diputado Rubén Ignacio Moreira Valdez: Saludo con afecto al señor general Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional. Bienvenido, señor secretario. Al general de Brigada, Diplomado del Estado Mayor, José Antonio Maldonado Guevara, director de la institución que hoy honramos, Heroico Colegio Militar. A quienes acompañan al señor secretario de la Defensa y a quienes son cadetes e integrantes del cuerpo académico del Colegio Militar, felicidades por estos 200 años y bienvenidos aquí, a la Cámara de las y los Diputados.
Diputadas y diputados, compañeras y compañeros de mi partido, hace 200 años, en 1823, no solo se fundó el Heroico Colegio Militar, también se hizo la primera inscripción en el Muro de Honor de la Cámara de las y los Diputados con el nombre de nuestros héroes de la Independencia. Específicamente, un 19 de julio de 1823.
Con ese acto se inauguró una forma de honrar por esta soberanía aquí, en la sede de la representación del pueblo de México, a los personajes, instituciones y apotegmas que son parte sustancial de nuestra historia, así como nuestra génesis y evolución como nación.
Hoy, como se hizo el 9 de octubre de 1973, nos encontramos reunidos en esta sesión solemne para refrendar nuestro reconocimiento a una institución que es fundamental para el servicio y defensa de nuestro país, formadora de generaciones de mexicanas y mexicanos que han servido, sirven y seguramente seguirán sirviendo con lealtad, patriotismo a México, me refiero a nuestro Heroico Colegio Militar.
No es casualidad que con este acto las y los mexicanos le estemos rindiendo a nuestro Heroico Colegio Militar, por segunda ocasión, señor general, el máximo homenaje que se realiza en la casa de todos los mexicanos, esta Cámara, una inscripción en el Muro de Honor de este salón de sesiones, para que con su nombre nos anime a defender a México en todas nuestras decisiones.
Esta institución educativa, creada un 11 de octubre de 1823, es donde se forjó el valor de una férrea defensa del país por aquellos Niños Héroes que enfrentaron al invasor norteamericano y con su gesta salvaron el honor de México.
También de los que acompañaron al coahuilense Francisco I. Madero en la Marcha de la Lealtad. Y a Venustiano Carranza, siendo leales a sus principios en momentos difíciles de la historia nacional, porque siempre que hay un momento difícil en la historia de nuestro país está el Ejército Mexicano y está el Colegio Militar. Ustedes hoy integran nuestro Ejército y estamos ciertos de su lealtad y estamos seguros de que siempre van a acompañar a las instituciones.
Con la inscripción de estas letras de oro en el Muro de Honor 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar, hoy reafirmamos nuestra admiración, orgullo y reconocimiento a esta institución educativa, una de las más antiguas, importantes y estratégicas del país a la que mucho debemos y que por el cumplimiento de su misión es un patrimonio invaluable para la nación.
Hoy con este acto honramos también los valores con que han sido formadas las y los mexicanos que portan orgullosamente el uniforme del Ejército Mexicano. Lealtad, como valor supremo. Honor en el cumplimiento del deber. Patriotismo como símbolo de gratitud y amor por México. Valor para dar todo en defensa de la nación e institucionalidad para el orden, bienestar y seguridad de nuestro sistema republicano federal y democrático.
Estimadas egresadas y egresados del Colegio Militar, cadetes que hoy nos acompañan, compañeras y compañeros legisladores, un Estado es tan fuerte como lo son sus instituciones y el Heroico Colegio Militar, así como nuestro Ejército nacional y la Marina Armada de México son muestra de ello.
Los tiempos en México han cambiado a lo largo de los siglos y los retos que tenemos como nación también. Sin embargo, los valores, el compromiso y el juramento de lealtad a la patria de los hijos del Colegio Militar permanecen en el tiempo. Su compromiso con la defensa de la soberanía nacional, su apoyo y solidaridad con la población mexicana en situaciones de emergencia, como hoy sucede en Acapulco, así como su auxilio en tareas de seguridad son ejemplos claros de su esencia y papel estratégico que tienen para la nación. Leales al mandato de servicio que les ha otorgado el pueblo mexicano.
Hoy millones de mexicanos confían en la acción de su Ejército para proteger sus vidas, su patrimonio, la soberanía del país y la forma de gobierno que hemos venido construyendo desde nuestro surgimiento como nación. En gran medida, la estabilidad de México está depositada en sus Fuerzas Armadas y por tanto en su Heroico Colegio Militar. Así va a ser y así seguirán las cosas.
Estamos seguros de que estos 200 años son 2 siglos de lealtad, protección y seguridad para México, siempre en torno a una sola misión y una sola visión: por el honor de México. Viva el Ejército Mexicano, viva el Colegio Militar. Viva México.
Señor general, como coahuilense yo quiero agregar unas palabras para darle las gracias a las Fuerzas Armadas de nuestro país y a usted en lo particular. Hoy Coahuila disfruta de paz y tranquilidad, esta no hubiera sido posible sin una gran alianza entre el gobierno del estado hace ya casi 12 años y las Fuerzas Armadas y el pueblo de Coahuila para lograrlo. Muchas gracias, señor general. Viva México. Viva México. Viva el Ejército Mexicano. Gracias.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Gracias, diputado Rubén Ignacio Moreira Valdez.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Tiene el uso de la palabra el secretario de la Defensa Nacional, general Luis Cresencio Sandoval, hasta por diez minutos.
El secretario Luis Cresencio Sandoval González: Diputada Marcela Guerra Castillo, presidenta de la Mesa Directiva de la honorable Cámara de Diputados. Diputado Jorge Romero Herrera, presidente de la Junta de Coordinación Política de este cuerpo legislativo. Distinguidos líderes de las fracciones parlamentarias. Apreciables diputadas y diputados que integran la LXV Legislatura del Congreso de la Unión. Generales, jefes, oficiales, cadetes y personal de tropa, representantes de los medios de comunicación, a todos, muy buenos días.
Para quienes vestimos el uniforme de la república y en especial para los integrantes y graduados del Heroico Colegio Militar, es motivo de orgullo encontrarnos en este recinto legislativo. Nos enaltece este significativo evento en el que, por iniciativa de ustedes, nuestras diputadas y diputados, se inscribe en los muros de este honorable Congreso la leyenda: 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar.
Su importancia se marca en diversos puntos de convergencia que el instituto armado ha tenido con esta representación educativa de los que me permitiré mencionar algunos de ellos.
A finales de 1916, Venustiano Carranza impulsó la idea de convocar a un Congreso Constituyente para redactar una nueva Carta Magna, la que surgió el 5 de febrero de 1917, donde destacados militares que fungieron como legisladores contribuyeron con los diputados de aquella época aportando importantes ideas y propuestas que dieron a esta Constitución su carácter eminentemente social que perdura hasta nuestros días.
Primera Ley Suprema en el mundo con amplias garantías individuales y que es la guía soberana de quienes decidimos abrazar la carrera de las armas para servir decididamente al pueblo de México.
Ustedes integrantes de esta honorable Cámara de Diputados han generado a través del análisis, el diálogo y el consenso, los instrumentos jurídicos que sirven de sustento inquebrantable para la actuación del Ejército, Fuerza Aérea y Guardia Nacional en aras de la seguridad de los mexicanos y también para apoyar de manera determinante el desarrollo nacional.
Cuerpos legales que como soldados de la patria somos sumamente respetuosos al provenir de esta soberanía que representa la voz y sentir de nuestra nación y con los que actuamos a lo largo y ancho de todo el país con un solo objetivo, el bienestar de cada mexicano.
Consideramos que a ustedes y al instituto armado nos vincula un factor común, un elemento de unión que nos motiva a trabajar sin descanso cada día, un punto de encuentro que nos da esperanza para salir adelante, un sentimiento conjunto que nos identifica y por el que damos todo, México.
Con este reconocimiento que hacen al Heroico Colegio Militar, por sus 200 años de creación, coincidimos también en su grandeza que se ha forjado en los hechos a lo largo del devenir nacional con todas sus muestras de honor y de lealtad institucional.
No podemos dejar de destacar también como puntos de encuentro que en la etapa contemporánea del país distinguidos militares han sido parte de este cuerpo legislativo quienes han aportado experiencia, conocimientos y perspectivas diferentes a trabajos legislativos con los que se ha cumplido uno de los preceptos más importantes de esta Cámara, ser plural e inclusiva de todos los sectores de la vida nacional.
De esta manera queda en evidencia que la Cámara de Diputados y el instituto armado caminamos en la misma dirección, por ello es imprescindible continuar como hasta ahora, cada quien, en la esfera de su competencia, velando por el cumplimiento de los más preciados objetivos nacionales: conservar nuestra independencia, integridad y soberanía.
Y es bajo esa perspectiva que comprendemos y destacamos la relevancia de este significativo evento en el que los representantes del pueblo ratifican la confianza que nos otorga la sociedad con este homenaje a nuestro Heroico Colegio Militar, al Heroico Colegio Militar de todos los mexicanos.
Emblemático plantel que en dos siglos de historia ha evolucionado a la par de las exigencias de la nación, constituyéndose en un centro educativo moderno, incluyente y vanguardista, que a través de la enseñanza-aprendizaje promueve principios y valores como la disciplina, el honor, la lealtad y el respeto a los derechos humanos, así como la legislación vigente.
Estos factores determinantes permiten que los futuros líderes del instituto armado y ahora también de la Guardia Nacional, tengan mayores y mejores herramientas intelectuales, morales, físicas y tecnológicas para hacer frente a los escenarios complejos y cambiantes en un mundo cada vez más competitivo.
Bajo estas premisas se robustece la formación en las aulas, donde los discentes forjan su carácter y adquieren la responsabilidad y la conciencia social, pero, sobre todo, fortalecen su lealtad institucional, virtud probada por los cadetes del ayer, que con sus actos de heroísmo nos heredaron a los militares del ahora.
Apreciables integrantes de esta asamblea legislativa, quienes formamos parte del Ejército, Fuerza Aérea y Guardia Nacional agradecemos su valiosa iniciativa para hacer este significativo reconocimiento al Heroico Colegio Militar.
Hoy el nombre de este insigne e histórico plantel queda grabado en los muros de este recinto, junto con el de otros célebres personajes e instituciones que en el acontecer nacional han contribuido guiando el destino de México y de ayer y de hoy.
El contexto de esta ceremonia me brinda la oportunidad para expresarles que los integrantes de las Fuerzas Armadas de tierra y aire reconocemos el importante trabajo legislativo que realizan para respaldar e impulsar diversas iniciativas en beneficio de los mexicanos.
Desde este majestuoso recinto y agradecido de poder ocupar esta tribuna, reiteramos el firme compromiso de redoblar esfuerzos para mantener el legado histórico que por 200 años han dado prestigio al heroico Colegio Militar.
Pueden tener la certeza de que este glorioso plantel mantendrá siempre viva la llama de los valores y virtudes, para seguir forjando en sus aulas a líderes de excelencia del Instituto Armado y de la Guardia Nacional, mujeres y hombres honorables, leales e institucionales.
La gran determinación con la que los Aguiluchos siempre han respaldado a las instituciones legalmente establecidas, sus incuestionables pruebas de lealtad a la patria y la valentía para velar por el Estado de derecho, son las máximas premisas con la que los cadetes siguen manteniendo el firme, muy firme, el ideal de servir sin reservas al país, así lo demostramos durante la pandemia ocasionada por el Covid-19 y lo hacemos ahora en el estado de Guerrero, con la aplicación de los planes DN-3 y Guardia Nacional Asistencia, con los que colaboramos de manera conjunta con la sociedad y gobiernos ante los catastres provocados por el huracán Otis.
Por ello, podemos estar seguros que, con las acciones de los oficiales graduados de este plantel, el Instituto Armado continuará siendo uno de los pilares fundamentales de la estabilidad, de la democracia y de la unidad nacional. Bajo esa premisa seguiremos fortaleciendo la confianza que nos otorgan los mexicanos, guardando lealtad a las instituciones, haciendo valer en todo momento el marco normativo que nos rige, pero, sobre todo, seguiremos acompañando al pueblo de México.
Nuevamente, muchas gracias por esta deferencia en honor al heroico Colegio Militar, histórico plantel de todos los mexicanos. Muchas gracias.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Gracias, general Luis Cresencio Sandoval.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Corresponde el turno a los grupos parlamentarios, quienes harán uso de la palabra, hasta por diez minutos, en orden ascendente. Tiene el uso de la palabra el diputado Francisco Javier Huacus Esquivel, del Partido de la Revolución Democrática, hasta por diez minutos.
El diputado Francisco Javier Huacus Esquivel: Con la venia de la Presidencia. Saludo desde esta tribuna al general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional e integrantes del Estado Mayor conjunto, quienes lo acompañan en esta sesión.
Compañeras y compañeros diputados, es un honor para mí subir a esta tribuna a conmemorar el surgimiento de una institución forjadora de mujeres y hombres de guerra. Fue en San Carlos Perote, hace 200 años, donde surgió la más grande institución y educación militar de nuestro país.
Consumada la Independencia de México, el brigadier Diego García Conde presentó al nuevo gobierno su proyecto para la creación de una escuela militar con cuadros de mando preparados y disciplinados, que pudiera garantizar la independencia y soberanía de la nación ante las amenazas que venían del extranjero. Sin embargo, fue el 11 de octubre de 1823 cuando el ministro de Guerra, el general José Joaquín de Herrera expidió un decreto donde se creó el Colegio Militar y ordenó que se estableciera en la Fortaleza de San Carlos de Perote, en Veracruz. Es así como surge este plantel insignia, cuna de líderes audaces y soldados ejemplares que protegen nuestro suelo nacional y nuestras libertades.
El Heroico Colegio Militar representa una educación de vanguardia que fomenta los valores y virtudes militares de un soldado mexicano. Durante estos dos siglos se ha consolidado como una institución profesional que atesora el honor y la valentía de sus cadetes.
Templo del honor y la lealtad, el Heroico Colegio Militar ha sido el hogar de miles de mexicanos y mexicanas que tienen sentido del deber con su nación. Institucionalidad, disciplina y sentido del bien han garantizado que hombres y mujeres puedan desarrollarse plenamente en sus carreras, siendo una plataforma de impulso digna, legítima y generosa.
En el Heroico Colegio Militar se forman oficiales en infantería, caballería, artillería, arma blindada, zapadores, servicios de intendencia y policía militar, todo ellos teniendo en común la valentía de dar su vida por servir a la nación.
De ahí egresan los futuros generales que se convertirán en los altos mandos de la Defensa Nacional. El honor, valor, lealtad, patriotismo y abnegación son los pilares esenciales en la formación de mujeres y hombres que enfrentan los retos más complejos, pero con respeto y orgullo portan sus uniformes, símbolo del país que los vio nacer y al cual le brindan su amor y lealtad entrañable.
Honrar al Heroico Colegio Militar es honrar el esfuerzo y dedicación de cada uno de los cadetes, protectores de la libertad e independencia de nuestro país que se entregan a la carrera de las armas como una forma de vida que en ocasiones no es sencilla. Con gallardía forjan su destino olvidando el dolor y el cansancio para simplemente responder al clarín de la guerra.
Nuestro país atraviesa una ola de violencia que laceran la paz, pero el Heroico Colegio Militar estará ahí para brindar profesionalismo a todos los jóvenes que tengan el llamado para ser un defensor de la patria.
Ustedes brindan al pueblo mexicano la certeza de contar con cadetes, generales y oficiales, que sin titubeos respaldarán la libertad y democracia del país.
Las tareas que hoy realizan los egresados del Heroico Colegio Militar son diversas y en muchos casos, complejas. Son ellos, quienes han tenido un papel predominante en todos y cada uno de los eventos importantes en nuestro país, desde aquellos que enlutaron la historia hasta los que nos llenaron de júbilo.
Su esfuerzo no solo llena de orgullo a sus familias, también a un pueblo mexicano, porque todos somos uniformados, porque los respaldamos desde nuestras trincheras, ustedes son el orgullo de nuestra nación, arriesgan sus vidas por proteger las nuestras y es nuestro deber, responder protegiendo su bienestar y la de sus familias. Honramos a quienes han sufrido el menoscabo en su salud e incluso han fallecido en el cumplimiento de su deber, a los cuales recordaremos con orgullo.
Desde el PRD, hacemos un llamado para legislar en beneficio de cada oficial que entrega su vida y lealtad a las filas del Servicio Militar, porque es con hechos donde sentirán nuestro respaldo.
Agradecemos y reconocemos la labor y entrega de cada cadete egresado del Colegio Militar, herederos de tradiciones de nuestra soberanía y el orden constitucional, mujeres y hombres nacidos cuyo lema es: Por el Honor a México. Qué Viva México. Qué Viva México. Qué Viva el Heroico Colegio Militar. Qué Viva el Ejército Mexicano. Es cuanto, presidenta.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Gracias diputado Francisco Javier Huacus Esquivel.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Tiene ahora el uso de la palabra, hasta por diez minutos, el diputado Sergio Barrera Sepúlveda, de Movimiento Ciudadano.
El diputado Sergio Barrera Sepúlveda: Con el permiso de la presidencia.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Adelante.
El diputado Sergio Barrera Sepúlveda: General secretario, Luis Cresencio Sandoval, integrantes del Estado Mayor conjunto, integrantes del Heroico Colegio Militar y, muy en especial, a todos los cadetes que hoy nos acompañan, que están aquí presentes. Sean todas y todos bienvenidos, a la casa de todas y todos los mexicanos.
Compañeras y compañeros diputados, el Heroico Colegio Militar es una institución que ha acompañado, incluso protagonizado, una infinidad de momentos históricos de nuestro país. Su contribución a la patria es incuestionable. Su compromiso con el desarrollo educativo de miles de mujeres y hombres es de un valor incalculable para México. Su disciplina y honor han permeado a lo largo de los siglos en quienes han cruzado y habitado sus pasillos.
Por sus aulas han pasado personajes ilustres de la talla del general Felipe de Jesús Ángeles Ramírez, el general Juan de Dios Bátiz, fundador del Instituto Politécnico Nacional, Marcelino García Barragán, Jorge Negrete, exsecretarios de la Defensa Nacional, incluyendo al actual secretario.
Cómo no mencionar a los muchos niños y jóvenes héroes de Chapultepec, a todos los deportistas que han pasado por sus aulas y a muchos otros hombres y mujeres de bien que nos han enorgullecido y nos siguen enorgulleciendo.
En su origen, el 11 de octubre de 1823, esta institución estaba ubicada en el Castillo de San Carlos de Perote, Veracruz, y desde entonces ha ido cambiando de sedes hasta llegar a la actual, ubicada en San Pedro Mártir Tlalpan, en la Ciudad de México. Esta última sede está diseñada precisamente para entregar a los cadetes las mejores instalaciones y con las mejores herramientas para desarrollarse de la mejor manera posible en el proceso de formación profesional. Lo que habla del compromiso con el que actúan en la disciplina castrense.
Las y los mexicanos nos sentimos orgullos de quienes deciden formar parte de las Fuerzas Armadas, iniciando su camino en las aulas de esta institución creada por y para la defensa de nuestra nación. En ella se ofrece una educación que fomenta los valores patrióticos, la soberanía, la lealtad y el honor por encima de todo.
Estamos seguros de que el Colegio Militar es fiel a los fines para lo que fue creado, formar a una de las mejores Fuerzas Armadas de todo el mundo. Sus dos siglos de existencia han acompañado el proceso de construcción de la democracia y sus instituciones. La institución merece un alto reconocimiento como se le confiere con la inscripción en letras de oro en el muro de honor de este salón de sesiones con la leyenda: 2023, año del bicentenario del Heroico Colegio Militar.
Sin embargo, no podemos quedarnos solamente con ese reconocimiento verbal, sino que como legisladores debemos garantizar que tenga las condiciones necesarias para realizar las labores para las que están facultados. Es bien sabido que las Fuerzas Armadas y, en específico, las aulas del Heroico Colegio Militar son en muchas ocasiones un refugio para miles de jóvenes que ven dentro de sus salones un mejor futuro para ellos y para sus familias.
Nosotros, como legisladores y legisladoras, debemos darnos a la tarea de fortalecer el Sistema de Educación del Ejército y la Fuerza Aérea. Así como otros sectores educativos del país, también el Heroico Colegio Militar ha venido arrastrando el problema de la baja capacidad de captación de jóvenes que quieren ingresar a estudiar en esta área.
Por ejemplo, en el año 2015 solo lograron ingresar el 11 % de los aspirantes al Sistema de Educación Militar. Y, pese a que el Heroico Colegio Militar es el plantel con mayor capacidad, necesita aumentar su matrícula.
En la bancada naranja estamos convencidos de que la forma en la que preparan a los miles de estudiantes que todos los años egresan de sus aulas abona a la construcción del país que queremos y merecemos. Todas y todos los que pertenecen al Heroico Colegio Militar son parte de la solución a los problemas que actualmente vivimos como sociedad.
El día de hoy podemos decir que el Heroico Colegio Militar es una institución que ha sabido adaptarse a lo largo de su historia a las necesidades y retos que ha enfrentado la nación, mediante planes de estudio que dotan a los jóvenes cadetes de herramientas para afrontar los cambios sociales y políticos que ocurren en México. Estos jóvenes reciben una formación no solo técnica para las unidades a las que serán destinados, sino que también aprenden los valores ineludibles para el desarrollo de sus obligaciones para el país, como el amor a la patria y el respeto a las instituciones de México.
Es importante destacar que a partir de 2007 ingresó la primera generación de mujeres a sus aulas, abriendo de esta manera la igualdad de oportunidades a las armas de infantería, caballería, artillería, zapadores, arma blindada y servicio de policía militar.
Compañeras y compañeros diputados, les puedo asegurar, ya que he tenido el privilegio de verlo con mis propios ojos, que dentro de las gloriosas aulas del Heroico Colegio Militar se imparte una educación de la más alta calidad, con estándares internacionales y, sobre todo, poniendo al frente el esfuerzo, el honor y el respeto a las instituciones que nos dan patria. Todo esto acompañado por una gran vocación de servicio. No es casualidad que sea una de las instituciones con los mayores niveles de confianza por parte de las y los mexicanos. Su trabajo, dedicación y disciplina sin duda son loables dentro de la opinión pública.
Es por todo esto que estamos seguros de que esta institución continuará con la trascendental misión de formar mujeres y hombres por mínimo 200 años más, tal y como lo dice su lema, por el honor de México. Vibre el clarín de la guerra, resuenen las fanfarrias, redoblen los tambores una marcha triunfal y lleven a la patria a todos los confines tu nombre, sacrosanto Colegio Militar. Es cuanto. Muchas felicidades.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Gracias, diputado Sergio Barrera Sepúlveda.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Tiene ahora el uso de la palabra hasta por diez minutos la diputada Dionicia Vázquez García, del Partido del Trabajo.
La diputada Dionicia Vázquez García: General Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional, general secretario de la Defensa Nacional; Gabriel García, general de Brigada del Estado Mayor; Jorge Antonio Maldonado, director del Heroico Colegio Militar; comisario general de la Guardia Nacional, David Córdova Campos; generales, jefes de tropa, cadetes del Heroico Colegio Militar, sean bienvenidos a esta su casa. Es para nosotros un orgullo que estén entre nosotros.
Con el permiso de la Presidencia. Compañeras y compañeros legisladores, acudo a esta tribuna a nombre del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo, para intervenir en esta sesión solemne con motivo de conmemorar el bicentenario del Heroico Colegio Militar.
Al consumarse la independencia de México y después de más de una década de intensos enfrentamientos y transformaciones políticas, el 27 de septiembre de 1821 se firmaron los Tratados de Córdoba, poniendo fin a la larga etapa colonial. Sin embargo, la salida del gobierno español no marcó el final de los desafíos para la nación recién formada, México enfrentó una serie de problemas políticos, económicos y sociales.
La creación de un gobierno estable y la consolidación de la identidad nacional fueron procesos complejos que involucraron conflictos internos, luchas por el poder y la necesidad de establecer las bases de una nueva nación.
Por ello, uno de los principales antecedentes del Heroico Colegio Militar se dio en febrero de 1822, cuando el entonces emperador de México, Agustín de Iturbide, instala de manera provisional la Academia de Cadetes, ubicada en la plaza de Santo Domingo, en la Ciudad de México, integrándose con los 16 alumnos donde se impartían como parte del plan de estudios las materias de dibujo, matemáticas, cálculo infinitesimal y adiestramiento.
Sin embargo, en septiembre de 1823 un grupo de españoles que se negaban a reconocer la independencia de nuestra patria se fortaleció en el puerto de San Juan de Ulúa, por lo que el general Guadalupe Victoria tomó la decisión de proponerle al gobierno que todos los cadetes del Ejército se reunieran y partieran al Castillo de San Carlos de Perote, Veracruz para así consolidar el 11 de octubre de 1823 la creación mediante decreto del Colegio Militar, mismo que ordenaba su traslado a la Fortaleza de San Carlos de Perote, llamándose Colegio Militar de Perote, dependiente de la Comandancia General de Veracruz.
El Heroico Colegio Militar ha sido testigo y participante de diversos eventos heroicos e históricos de México, incluyendo intervenciones extranjeras y conflictos armados. Uno de los episodios más destacados en la historia del Heroico Colegio Militar es la batalla de Chapultepec, que tuvo lugar en septiembre de 1847 durante la intervención estadounidense, donde los cadetes Juan Escutia, Vicente Sánchez, Fernando Montes de Oca, Francisco Márquez, Agustín Melgar y el teniente Juan de la Barrera defendieron el Castillo de Chapultepec contra las fuerzas invasoras estadounidenses, demostrando la gran valentía y patriotismo que esta institución les dota. Aunque finalmente perdieron la batalla, su resistencia se ha convertido en un símbolo de la defensa de la soberanía mexicana.
Asimismo, en la segunda intervención francesa en México, que tuvo lugar en 1861 a 1867, donde también participaron activamente en la defensa del país. Durante el siglo XX, el Heroico Colegio Militar continuó su labor de formación de oficiales militares, adaptándose a los cambios en la sociedad y en el ámbito militar, jugando un papel crucial en diversos eventos como la Revolución Mexicana y la Guerra Cristera.
Tenemos que tener claro que el sistema educativo militar representa uno de los pilares fundamentales de la eficiencia operativa del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana y su objetivo principal es impartir educación profesional para la integración de sus cuadros e inculcarles la conciencia de servicio y amor a la patria.
Actualmente, el Heroico Colegio Militar tiene como oferta académica la licenciatura de administración militar y en seguridad pública, además de diversos cursos intensivos de formación. Además, el sistema educativo militar cuenta con diversas escuelas militares donde se imparte, por mencionar algunas carreras: medicina, odontología, enfermería, ingeniería, aviación, entre otras.
Compañeras y compañeros legisladores, debemos tener claro que a 200 años de la fundación del Heroico Colegio Militar los valores de lealtad y honor se mantienen intactos, ya que son los que mueven a las nuevas generaciones de cadetes que son conscientes del gran papel que desarrollarán en nuestra nación.
Están conscientes de que uno de sus principales deberes es el proteger la soberanía nacional y a las y a los mexicanos. Por ello me es importante reconocerles todo el esfuerzo, amor y dedicación que ponen en su día a día.
Esta institución para nosotros los mexicanos es la más confiable y en la que ponemos nuestras vidas, porque sabemos que ellos las han de defender siempre y las han defendido hasta el día de hoy.
Desde esta tribuna me permito felicitar a todas y todos los que forman parte del Heroico Colegio Militar. Sigan llenándonos de orgullo y poniendo el nombre de esta institución en lo más alto en las páginas de la historia de nuestra nación. Larga vida al Heroico Colegio Militar. Viva el Heroico Colegio Militar. Viva nuestro Ejército Mexicano. Viva México. Viva México. Viva México. Unidad nacional, todo el poder al pueblo. Es cuanto. Muchas gracias.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Gracias, diputada Dionicia Vázquez García.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Tiene ahora el uso de la palabra hasta por diez minutos, el diputado Javier Joaquín López Casarín, del Partido Verde Ecologista de México.
El diputado Javier Joaquín López Casarín: Con la venia de la Presidencia.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Adelante, diputado.
El diputado Javier Joaquín López Casarín: Destacados miembros del Ejército Mexicano. Autoridades del Heroico Colegio Militar e invitados especiales que nos honran con su presencia, sean todos bienvenidos a esta Cámara de Diputados, casa del pueblo de México.
Saludo y le doy la más cordial bienvenida al general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional. General de División Diplomado de Estado Mayor, Gabriel García Rincón, subsecretario de la Defensa Nacional. General de División Diplomado de Estado Mayor, Jaime González Ávalos, inspector y contralor general del Ejército y Fuerza Aérea. General de división del Diplomado de Estado Mayor Ricardo Trevilla Trejo, jefe del Estado Mayor conjunto de la Defensa Nacional. Comisario general David Córdova Campos, comandante de la Guardia Nacional. General de brigada Diplomado de Estado Mayor Jorge Antonio Maldonado Guevara, director del Heroico Colegio Militar y general de división piloto aviador Diplomado de Estado Mayor Aéreo, Bertín Hernández Mercado, comandante de la Fuerza Aérea Mexicana.
A los cadetes del primero al cuarto año y a la banda de música del Heroico Colegio Militar, sean todos ustedes bienvenidos.
El día de hoy nos reunimos para conmemorar el bicentenario de la creación de una institución educativa de excelencia que a lo largo de su historia ha formado un importante número de profesionales dedicados al servicio de la patria mediante el desarrollo de la carrera militar.
El Heroico Colegio Militar es una institución educativa de nivel superior cuyo objetivo es formar subtenientes de las armas y de los servicios que componen al Ejército Mexicano con sólidos valores y conocimientos teóricos y prácticos para desempeñarse con el liderazgo, compromiso y lealtad en el mando de las unidades en cumplimiento de sus funciones y deberes.
Esta institución surge por la necesidad de formar militares profesionales que contribuyeran a la consolidación de nuestro país como nación independiente tras nuestra emancipación de España, pero incluso desde antes las raíces de la formación castrense datan desde nuestro pasado prehispánico, pues en la cultura mexica la educación y la guerra se mantuvieron unidas.
En esa época había dos centros de instrucción militar: el Calmécac y el Telpochcalli. En el Calmécac se educaban a los hombres que se dedicarían a ciencia militar, principalmente a los hijos de los señores y el Telpochcalli se formaba a los guerreros, gente común del pueblo que formaría parte del grueso del ejército mexica.
Si bien es cierto, el Heroico Colegio Militar tiene sus orígenes formales en 1817 cuando el brigadier español Diego García Conde propuso al gobierno virreinal la creación de una escuela para que los cadetes recibieran una enseñanza uniforme que incluyera los conocimientos necesarios en la profesión de las armas.
Este nace de forma oficial el 11 de octubre de 1823 cuando el general José Joaquín de Herrera, ministro de guerra y marina expidió un decreto mediante el cual se creó el Colegio Militar ordenando su traslado a la fortaleza de San Carlos de Perote, dependiente de la Comandancia General de Veracruz.
A lo largo de su historia esta noble institución ha ocupado diversas sedes, entre ellas la del Castillo de Chapultepec, la de Popotla y desde hace casi 50 años, las instalaciones del Tlalpan, en la Ciudad de México. Lo cual le ha permitido transitar por momentos de coyuntura que la moldearon hasta ser la institución que hoy conocemos y de la que las y los mexicanos nos sentimos profundamente orgullosos.
Fieles a su vocación de servir y proteger a la patria, los cadetes del Heroico Colegio Militar han tenido una participación activa y crucial en hechos históricos de nuestro país, como fue la gesta de los Niños Héroes en la defensa del Castillo de Chapultepec ante la invasión estadounidense el 13 de septiembre de 1847.
Su papel en la Decena Trágica, defendiendo al presidente Francisco I. Madero, en lo que recordamos como la Marcha de la Lealtad, así como el acompañamiento al presidente Venustiano Carranza en su traslado a Veracruz, tras la rebelión contra su gobierno impulsada por el Plan de Agua Prieta.
Hablar del Heroico Colegio Militar es referirnos, sin lugar a dudas, a una institución con altos principios y valores, donde se imparten carreras que forman a mujeres y hombres al servicio de la patria.
Mexicanas y mexicanos que aman a su país, a los suyos, sobre quienes durante su carrera militar demostrarán los valores y capacidades para cumplir sus misiones, que como enumeró el general secretario Luis Cresencio Sandoval en el desfile del 103 aniversario de la Revolución Mexicana son defender la integridad, la independencia y la soberanía nacionales.
Como segunda misión, garantizar la seguridad interior. La tercera, auxiliar a la población civil en caso de necesidades públicas. Y la cuarta misión que es realizar acciones cívicas y obras sociales que tiendan al progreso del país.
Hablar del Colegio Militar es hablar de valores institucionales que se inculcan desde muchas generaciones atrás y que hoy son parte de las tradiciones del Ejército mexicano y que deben de ser una reafirmación como valores nacionales. Me refiero al honor, es el más noble estímulo del valor militar que representa el respeto hacia uno mismo.
El ejercicio de la virtud, del deber y la rectitud indican lo que debemos hacer, pero sobre todo, lo que debemos evitar. La lealtad, que es la devoción sincera, voluntaria e infalible hacia una causa y guarda una estrecha analogía con el desinterés y es fomentada por la simpatía y la sinceridad, la franqueza y sostenida por la justicia.
El patriotismo, que es el amor a la patria, a México, a sus tradiciones, a su historia y sus valores. Es el respeto a la bandera y a nuestro himno nacional. El valor, que es el ánimo que rige al soldado mexicano en todos los actos de servicio y le permite resolver y afrontar con éxito cualquier riesgo.
La abnegación, que es el cumplimiento del deber en cualquier hora, clima o terreno sin esperar recompensa alguna. Meramente la satisfacción del deber cumplido, es el sacrificio del soldado mexicano por la patria.
El Heroico Colegio Militar es una institución con cimientos y bases sólidas que ha sido capaz de adaptarse a los cambios que han tenido a lugar y a lo largo de nuestra historia, ejemplo de ello es el papel activo que en los últimos años han venido desarrollando las mujeres, lo cual incuestionablemente es un paso importante en materia de equidad de género dentro de nuestras Fuerzas Armadas. El legado de esta institución académica se refleja en el arduo trabajo, de todos los militares egresados de este colegio, que realizan a favor del interés público y el bienestar social.
Los mandos de la Guardia Nacional son egresados del Heroico Colegio Militar, destacando que esta institución se enfoca en que sus alumnos adquieran conocimientos especializados en el ámbito de la seguridad pública, en el marco del respeto de los derechos humanos.
Por estas razones, el Heroico Colegio Militar ha sido reconocido a nivel internacional por la vocación de servicio y amor a la patria, que mediante la educación que imparte inculca, en quienes pasan por sus aulas y se forman como oficiales del Ejército Mexicano, que durante su carrera militar llegarán a ser jefes y generales, ascensos meritorios por el servicio y vocación prestados al pueblo de México.
Entre los directores del Heroico Colegio Militar destacan muchos, pero quiero resaltar a Sóstenes Rocha y Felipe Ángeles, dos de los militares más notables que ha tenido nuestro país y que defendieron las causas populares, uno desde el Ejército Liberal y el otro al lado de Madero y de Villa durante la Revolución Mexicana.
Hoy, en el marco de la conmemoración del 200 aniversario de su fundación expresamos, desde esta alta tribuna, el gran orgullo que sentimos de contar con una institución fundamental para el país. Pocas instituciones del Estado mexicano han servido para ofrecerle a la patria y a nuestro pueblo hombres y mujeres formadas para servir a México y a su gente, que hayan sido cruciales en pasajes decisivos de nuestra historia y sobre quienes descansan ahora y en el futuro enfrentar los retos que aquejan a nuestra sociedad.
Desde el Partido Verde hacemos un amplio reconocimiento a esta noble institución y les extendemos una profunda y sincera felicitación a las mujeres y hombres que cursan o han concluido sus estudios en ella y que hoy desarrollan sus labores con lealtad, con valentía y con honor, pero, sobre todo, con un profundo amor por México.
Sirvan estas letras que hoy develaremos, estas letras de oro, como un reconocimiento de este Poder Legislativo, de las legisladoras y legisladores que lo integramos, como un reconocimiento profundo al Heroico Colegio Militar, a todos los militares que lo han conformado, a todos los militares que lo conforman y a todos los militares que lo conformarán. Viva el Heroico Colegio Militar. Viva nuestro Ejército Mexicano. Viva México, viva México y viva México. Es cuanto, presidenta.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Gracias, diputado Javier López Casarín.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Tiene ahora el uso de la palabra el diputado Augusto Gómez Villanueva, hasta por diez minutos, del Partido Revolucionario Institucional.
El diputado Augusto Gómez Villanueva: Con permiso, presidenta.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Adelante, diputado.
El diputado Augusto Gómez Villanueva: Es un día histórico. No solamente porque conmemoramos los 200 años de fundación del Colegio Militar, sino porque tenemos frente a nosotros a los hombres que representan la parte más delicada y sensible de nuestro país, a quienes la Constitución y la historia los ha hecho responsables de defender la soberanía nacional, de defender a las instituciones que ha creado el pueblo de México a través de tres grandes movimientos, que son los capítulos de México que ha permitido que vivamos con libertad.
Honorable secretario de la Defensa Nacional, general de División Luis Cresencio Sandoval, ya le han expresado la bienvenida y el respeto de los integrantes del Poder Legislativo y lo repetimos hoy, a nombre del Partido Revolucionario Institucional.
Al señor secretario de Marina, almirante José Rafael Ojeda Durán. Señor director del Heroico Colegio Militar, general de brigada José Antonio Maldonado Guevara. Al presidente de la Comisión de la Defensa de esta honorable Cámara de Diputados, diputado Ricardo Villarreal García. Al comandante de la Guardia Nacional, comisario general David Córdova Campos, mandos militares aquí presentes, jóvenes, cadetes del Heroico Colegio Militar de ambos sexos que nos honran con su presencia.
En este día histórico en el que conmemoramos la inscripción con letras de oro en el Muro de Honor de la Cámara de Diputados, el año 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar, me complace hablar a nombre de mi partido, el Partido Revolucionario Institucional, para expresar nuestro profundo respeto y admiración por esta institución que ha sido fundamental en la historia de México y cuyo nombre ha quedado inscrito con letras de oro en este Muro de Honor.
Es justo reconocer en la discrepancia natural de los debates que se dan en el seno de este recinto, reconocer la unanimidad de esta legislatura para aprobar la propuesta del diputado Rubén Moreira Valdez y el grupo plural del trabajo integrado, para recordar los 200 años del Heroico Colegio Militar.
Como egresado de esta prestigiosa institución, es un honor para mí estar frente a ustedes, en esta ocasión tan significativa y recordar, que en mi carácter de secretario de Reforma Agraria del presidente Luis Echeverría, me correspondió compartir la tarea con los campesinos del ejido de San Pedro Mártir, para hacer la transferencia de sus tierras y construir las actuales instalaciones del Colegio Militar, después de haber permanecido 56 años en la sede del viejo e histórico edificio de Popotla.
Hoy, en 2023... –gracias, muchas gracias–. Hoy, en 2023, vivimos, después de 200 años de dramáticas y gloriosas páginas de la historia de México, un México que nos legaron nuestros ancestros, quienes vivieron las luchas por la Independencia, las dramáticas páginas del expansionismo europeo y norteamericano y los largos años que mantuvieron a una generación dividida entre el dilema de escoger su forma de gobierno, entre la monarquía y la república, o la dictadura o la democracia.
Aunque como escuela militar comenzó a formar parte en 1765 las raíces de esta institución, se remontan a Guadalupe Victoria y a Vicente Guerrero, dos hijos del pueblo, discípulos de Hidalgo y de Morelos, y también esta Cámara ha honrado con sus nombres inscritos en el Muro de Honor con letras de oro. Quienes durante años lograron victorias y padecieron derrotas consecutivas al frente de un ejército de peones, indios, campesinos, mineros y labradores, aprendieron el arte de la guerra, pero, sobre todo, el despertar de su pasión para transformarla en alma nacional y formar a la nación mexicana.
Hace dos siglos, en 1822, surgió una de las instituciones educativas más emblemáticas y cruciales para nuestra nación, era la etapa que registra la historia, como la transición entre los intentos de que México tuviera un gobierno monárquico o bien un gobierno republicano.
Es por ello, que el brigadier, don Diego García Conde, fue nombrado el primero director general del cuerpo de ingenieros y materializó la propuesta de crear la Academia de Cadetes que se instaló en el edificio que antes ocupara el tribunal de la Santa Inquisición.
Pero fue el general Guadalupe Victoria, el primer presidente de México, en septiembre de 1823, quien combatiendo al último reducto de la guarnición española en San Juan de Ulua propuso al gobierno federal que todos los cadetes de los cuerpos del Ejército se enviasen al Castillo de San Carlos de Perote, ahí recibieran la educación militar.
Ese mismo año, el general José Joaquín Herrera, ministro de guerra y marina, expidió el decreto creando el Colegio Militar, el cual nació en un periodo en el que México era territorio de disputa, primero por el apetito del imperialismo de las hegemonías europeas y después del expansionismo norteamericano durante el periodo en que México buscaba consolidar su independencia, forjar su identidad como una nación soberana y establecer las bases de su autodeterminación.
La formación de las Fuerzas Armadas de México es un credo de valores y principios que han guiado a muchas generaciones de mexicanos, que han sabido cumplir con su deber con el sentido de disciplina, patriotismo y de amor a México.
A la primera generación le correspondió la defensa de la soberanía y el derecho a la autodeterminación. A la segunda enfrentar los excesos universales del derecho divino monárquico y la creación de la república. A la tercera defender la vida del prócer de la democracia Francisco I. Madero y el principio de no reelección. Y esa misma generación, con Venustiano Carranza, fue ejemplo de valor y lealtad, escoltando y defendiendo con su vida al hombre símbolo del constitucionalismo.
Con Venustiano Carranza, quien estableció el Colegio Militar en 1920, su bandera fue el constitucionalismo, impulsor del pacto social que nos dejó la paz y las garantías sociales e individuales del México del siglo XX hasta nuestros días, nos dejó a su vez un orden legal, garante de la vigencia del régimen republicano y democrático, del respeto a la soberanía popular, expresada en la voluntad del pueblo para decidir su forma de gobierno y escoger a sus gobernantes. Un constitucionalismo guardián de la vigencia del régimen de derecho y de nuestras leyes, del respeto a la pluralidad. Y después, transformado en el derecho de las minorías, de alternancia del poder y de formar un Ejército lejano de la tentación del poder y solidario con las cusas sociales del pueblo.
Que no se repita nunca duda alguna sobre la lealtad del Ejército Nacional Mexicano. Lealtad que ha permitido a esta generación vivir un México caracterizado por la diversidad y el pluripartidismo. Un país con un Poder Legislativo que la voz de sus parlamentarios representa las diferentes visiones de nuestra sociedad.
Venimos hoy a conmemorar 200 años de historia y de un crédito por México... de un credo por México. Porque hoy, en este bicentenario, debemos reconocer y honrar la labor de nuestras Fuerzas Armadas, formadas en el Colegio Militar, que continúan siendo guardianes de la soberanía y la seguridad nacional. Porque sus mandos han sido formados en esta institución, que es, y ha sido, y seguirá siendo siempre una fuente de inspiración, formación, de lealtad de quienes dedican sus vidas a servir a México.
El Colegio Militar tiene la fascinación de su pasado y de su historia, pero también de su presente, porque ser alumno del colegio es vibrar cada segundo de la vida al recorrer cada pasillo, sus salones, sus campos de entrenamiento, e impregnarse en la piel el drama de aquellos niños que dejaron su huella y su ejemplo para las sucesivas generaciones de mexicanos.
Los años largamente reminiscentes, de 1847, 1913 y 1920, que se conmemoran hoy, cuando leemos su nombre recordamos emocionados y con respeto el título del Heroico Colegio Militar, que le fue finalmente reconocido en 1949, en memoria de las vidas ejemplares o anónimas, cuyas sepulturas han sembrado el patriotismo en el suelo de México, y que yacen debajo de la tierra, pero convertidos en nuestra Bandera, que supieron transformarla en el símbolo de los cadetes de Chapultepec.
El Heroico Colegio Militar de México, transformado ahora en universidad militar, es un testimonio del pueblo en armas, de Emiliano Zapata, de Francisco Villa, convertido en el ejemplo de una institución formada como fruto de tres revoluciones.
Correspondió al general Plutarco Elías Calles reconstruirla, dirigida por revolucionarios ejemplares, como el general Felipe Ángeles, cuyo nombre aparece aquí en el Muro de Honor de la Cámara de Diputados; del general Joaquín Amaro y sus sucesores, a quienes correspondió asumir la dirección de esta institución, dotada de mística, de unidad, honor y lealtad a México.
Hoy, que venimos aquí a reunirnos con sus altos mandos para mostrarles nuestro respeto y nuestro reconocimiento a la entrega de sus vidas al servicio de nuestro país, queremos decir como otros mexicanos: viva México y viva el Colegio Militar.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Muchas gracias, diputado Augusto Gómez Villanueva.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Tiene ahora el uso de la palabra, hasta por diez minutos, el diputado Guillermo Octavio Huerta Ling, del Partido Acción Nacional.
El diputado Guillermo Octavio Huerta Ling: General secretario Luis Cresencio Sandoval, altos mandos que lo acompañan, alumnos, cadetes del Heroico Colegio Militar sean ustedes bienvenidos por parte de las y los diputados de la bancada del Partido Acción Nacional.
El Heroico Colegio Militar tiene su origen casi con nuestra república. Fue su primer presidente Guadalupe Victoria que funda una academia militar para la patria naciente. Con este evento inicia un largo camino en la historia nacional. Esta institución militar perduraría a la fecha participando en algunos eventos como observante y en otros como protagonista principal.
Toda institución se funda bajo una vocación, una misión. La del Colegio son la instrucción militar, la defensa e independencia de México. Así, desde 1823, sus generaciones de cadetes se forjan bajo los principios de la lealtad, el honor y el patriotismo.
Nuestra institución académica de instrucción militar ha estado en los distintos eventos que dieron forma y destino a nuestra patria, otorgándole con cada una de sus generaciones a lo largo de siglos un orgullo, un orgullo nacional. México tiene sin duda instituciones que han dado mucho. La Suprema Corte de Justicia o el Congreso a través de sus Constituyentes, el del 24 con el federalismo, el del 57 con la libertad de credos, el control constitucional y el Estado de derecho, y por supuesto, el de 1917, con los derechos sociales y el Estado democrático de derecho y con el tránsito de estos ordenamientos constitucionales estuvo nuestro Colegio Militar forjándose y velando por la patria.
Esta ceremonia, más que una celebración bicentenaria debe ser un reconocimiento a una institución, una institución que no podemos desasociar con nuestro México. El Heroico Colegio Militar es una institución consustancial a la historia de nuestra patria.
Diversos hechos que convulsionaron a sus primeros gobiernos y la falta de diálogo entre dos bandos dieron en el primer siglo guerras intestinas, cambios abruptos de gobiernos, imperios e invasiones, y sí, nuestro Colegio Militar avanzaba bajo una sola misión: la patria.
La nación fue asechada en sus albores por distintas amenazas internas, aún en las disputas entre los independentistas, el Colegio ahí estaba, instruyéndose y velando armas para la amenaza del exterior. Mientras la división persistía y el país perdiera más de la mitad de su territorio, el vecino del norte arriba a la capital. Mientras tanto, el 27 de septiembre de 1846 el Congreso emitía el Reglamento para la Escuela Militar.
En aquella época el espacio público se disputaba y entre los mexicanos había división, mientras al interior de la Escuela Militar se formaban hombres bajo una sola columna vertebral, el honor de lo que se debe hacer, la lealtad infalible por una causa, amor a la Bandera y al Himno Nacional, y sobre todo abnegación. Es decir, anteponer el servicio a los intereses particulares y solo la satisfacción del deber cumplido.
Estos valores, compañeras y compañeros, para quienes asumimos un servicio público deberían de ser como son para nuestros cadetes del Colegio, un credo, una sola carta de actuación frente a los ciudadanos.
Por el honor de México, reza el lema del Colegio, y con ello debemos mencionar las heroicas defensas a los gobiernos legítimos, la primera, la del presidente Gómez Pedraza. Ahí estuvieron los cadetes replegando a los rebeldes en el Motín de la Acordada. Desde el exterior, nuestra joven nación se defendía de tratados ruinosos que se querían imponer a cambio del reconocimiento de otros países, y ahí estaba la joven academia, formando militares en el Castillo de San Carlos, Veracruz.
Vendrían las agresiones de las grandes potencias que querían apoderarse del territorio, sus riquezas y de su soberanía, y el recién creado Colegio estaba ahí creciendo y preparando sin saber no alumnos, sino héroes. Hubo derrotas, como la de Churubusco, la de Molino del Rey, y nuestros cadetes y soldados demostraban en cada intervención los valores de la lealtad y el patriotismo.
Se perdieron grandes territorios frente al enemigo, la inexperiencia y mezquindad de alguno de nuestros gobernantes de esa época son citados en la historia, pero no como la mención de nuestros jóvenes, casi niños, que se atrincheraron en el Alcázar de Chapultepec y con su vida nos han dado uno de los pasajes más hermosos de la historia.
No hay escuela en México que no represente el patriotismo con la intervención y sacrificio de los cadetes Melgar, Montes de Oca, Márquez, de la Barrera, Escutia y Suárez. No reconocer en este pasaje el heroísmo que se envuelve en nuestro lábaro patrio es negar hecho histórico de amor a México. La defensa del Castillo de Chapultepec es, sin duda, un emblema del Colegio.
Nuestra historia demuestra que la Academia, primero, y el Colegio Después, fueron piedras cimiente de la consolidación de nuestra soberanía y de nuestra democracia.
Uno de los eventos más simbólicos se da el 9 de febrero de 1917, los cadetes del Colegio marchan junto con Madero por la legitimidad del gobierno no reeleccionista, sin saber que esa marcha de la lealtad no solo es por la patria, sino que iba a ser el inicio del largo y tortuoso camino de nuestra democracia.
Hoy, el Colegio tiene más de 3 mil cadetes hombres y 678 mujeres en sus aulas, 6 ingenierías, 5 licenciaturas son las carreras que forman junto con una instrucción militar a los jóvenes que desean estar listos para el México del siglo XXI.
El próximo año llegará un nuevo gobierno y México tiene otros retos y, por supuesto, otras amenazas, aehí está la salud pública universal que nos falta, ahí está la educación y la inteligencia artificial, así como los inevitables efectos del cambio climático y como en aquellos albores de la república y de la academia hoy nuestro país tiene nuevas amenazas.
La violencia avanza en distintas regiones de nuestro país y con ella la acechanza de sus efectos a nuestros jóvenes, también como en algunos momentos de estos 200 años, hoy hay indicios, y escúchese bien, hoy hay indicios de la instalación de un nuevo gobierno hegemónico que divida y polarice entre dos visiones, pero sin duda, sin duda con esos retos y todas esas amenazas por venir nuestra institución académica, militar estará ahí nuevamente velando por la patria, cumpliendo con su deber por el honor de México. Muchas felicidades. Muchos años más al Heroico Colegio Militar. Muchas gracias.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Muchas gracias, diputado Guillermo Octavio Huerta Ling.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Tiene ahora el uso de la palabra, hasta por diez minutos, el diputado Marco Antonio Pérez Garibay de Morena.
El diputado Marco Antonio Pérez Garibay: Con el permiso de la Presidencia.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Adelante, diputado.
El diputado Marco Antonio Pérez Garibay: Compañeras y compañeros diputados, saludo con gusto al general Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional. Al subsecretario de la Defensa Nacional, general Gabriel García Rincón. Jefe del Estado Mayor, Ricardo Trevilla Trejo. Comandante de la Guardia Nacional, David Córdova. General Bertín Hernández Mercado, comandante de la Fuerza Aérea Mexicana. Mayor Jorge Antonio Maldonado Guevara, director del Heroico Colegio Militar.
Es un honor tenerlos en la casa del pueblo. Por el honor de México. Este noble lema lleva y refleja perfectamente el espíritu del Heroico Colegio Militar, cuya creación se remonta al 11 de octubre de 1823.
Surgió como la respuesta a la necesidad de contar con un ejército organizado, con líderes capacitados y disciplinados para salvaguardar la independencia y la soberanía de la recién formada nación mexicana.
La iniciativa para fundar esta institución provino del general Diego García Conde, quien en 1817 planteó al gobierno virreinal la idea de establecer una academia para formar a los cuadros de mando del Ejército.
El acuerdo para su creación fue emitido por el general José Joaquín de Herrera, conformando así un plantel educativo militar para jóvenes cadetes provenientes de distintas áreas civiles. Inicialmente fue situado en la fortaleza de Perote, en Veracruz. De 1823 a 1828 el Colegio Militar enfrentó la resistencia conservadora que buscaba impedir la consumación de la independencia nacional.
Hoy, como hace dos siglos, la sombra de la derecha conservadora vuelve a acechar, buscando la oportunidad para someter nuevamente al pueblo a la desigualdad, a la marginación y a la corrupción. Ya nos dieron, no se preocupe y recuerda lo que dijiste...
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Sin diálogos, diputados, por favor.
El diputado Marco Antonio Pérez Garibay: Recuerda lo que dijiste.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Diputado orador, un momento. Diputados, por favor, favor de guardar el orden en esta asamblea, por favor, guarden el decoro, por favor y pido al personal que se encuentra en el pasillo central, favor de tomar sus lugares o de retirarse de este recinto. Continúe el orador.
El diputado Marco Antonio Pérez Garibay: Gracias, presidenta. No se preocupe, sé de dónde vienen y a dónde van. Después de ocupar distintas sedes y con su regreso a la Ciudad de México, el Colegio Militar alcanzó su época de oro, a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, esto gracias al apoyo que tuvo durante el porfiriato y a la ágil gestión de varios de sus directores, como el caso del gran distinguido general Rocha, quien le dio un gran impulso a la institución.
Las hijas e hijos pródigos del Colegio Militar han sido honrados con las fanfarrias de la patria por su lealtad, compromiso y amor a México. Amor en la labor de cada cadete, porque con sus acciones cotidianas ostentan con orgullo la grandeza del Heroico Colegio Militar.
Pensemos en los cadetes del Castillo de Chapultepec, quienes en la invasión norteamericana de 1847 entregaron sus vidas por defender el honor de México. Recordemos a los mejores soldados de la República, en quienes el presidente Francisco I. Madero depositó su confianza y quienes lo acompañaron en la marcha de lealtad a Palacio Nacional en 1913. Fue por estos méritos que el 20 de diciembre de 1949 se decretó que el Colegio Militar ostentara el título de Heroico.
Dentro de sus aulas se imparten los más nobles principios y valores que han enaltecido a esta institución, entre sus distinguidos egresados figuran líderes militares, como Venustiano Carranza, Manuel Ávila Camacho y Lázaro Cárdenas, quienes supieron guiar a la nación hacia el mismo destino que hoy busca la cuarta transformación, por eso la derecha corrupta ha mancillado las legítimas causas del pueblo, no comprende que el Ejército le sirve incondicionalmente a las y los mexicanos, porque sus elementos son también ciudadanas y ciudadanos, uniformados, comprometidos, para preservar la paz y la seguridad.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Un momento, diputado orador. Pido a las compañeras y compañeros diputados y diputadas en el pleno, favor de no gritar al orador desde la tribuna, perdón, desde sus curules. Y al orador le pido seguir con su discurso. Sin dirigirse en lo personal a ningún diputado, sino dirigirse, por favor, al pleno. Diputadas y diputados, vamos a escuchar al orador. Continúe el orador.
El diputado Marco Antonio Pérez Garibay: Muchas gracias, presidenta. No se preocupen, los entiendo, sé donde están y a dónde van. La inscripción en Letras de Oro con motivo de los 200 años de la fundación del Heroico Colegio Militar es un homenaje a las y los cadetes del pasado y también del presente, quienes con su vida han resguardado por generaciones el legado de libertad y paz que hoy disfrutamos.
Es nuestra admiración y respeto a una institución que ha sido la cuna de líderes comprometidos con la defensa y el servicio a México. Y es que, desde su fundación, el Heroico Colegio Militar ha desempeñado un papel institutivo, como el establecimiento de educación militar a nivel superior.
Su misión es clara y contundente, destacándose por inculcar valores sólidos y conocimientos teóricos y prácticos, dotando a sus egresados de capacidades que les permitan actuar operativa y administrativamente en el ámbito de la ciencia y el arte militar.
La visión del Heroico Colegio Militar va más allá de la mera formación académica, busca consolidar la excelencia educativa en la formación de las y los futuros oficiales del Ejército Mexicano.
Hoy seguimos reconociendo que el Heroico Colegio Militar no es solamente una institución educativa, sino también un símbolo cargando de lealtad en la historia de nuestra nación. Porque esta institución ha sido semillero de reconocidos personajes que son el testimonio de valor, lealtad y amor a México en batallas históricas.
Al conmemorar su bicentenario, imperativo reconocer los grandes esfuerzos que las hijas e hijos del Heroico Colegio Militar han dirigido hacia la seguridad y el desarrollo colectivo. Es por eso que celebramos la develación en Letras de Oro por los 200 años del plantel educativo de formación militar de mayor prestigio y tradición en la historia. El Heroico Colegio Militar ha sido protagonista de momentos trascendentales para la construcción de una nación independiente, libre y justa.
Los conocimientos de los elementos egresados de la institución han sido clave en misiones de paz y ayuda humanitaria, en momentos de crisis como el que se vive hoy en el estado de Guerrero, Guerrero, así como en misiones de paz de la ONU y operaciones humanitarias en diferentes partes del mundo.
De la misma forma destaca su adiestramiento en la lucha contra el narcotráfico y la delincuencia organizada, manteniendo la seguridad interna y perseverando la integridad del pueblo de México.
Honremos el legado de aquellos que con honor y lealtad han contribuido al engrandecimiento de nuestra patria, a los héroes y heroínas que portan con orgullo y gallardía el uniforme de cadete y símbolo de la pureza de pensamientos y la fortaleza de sus ideales.
El Heroico Colegio Militar y la cuarta transformación comparten valores y sentimientos, principios que se materializan en la formación de mujeres y hombres nacidos con la convicción de aspirar a lo más grande que un mexicano puede hacer por su país, servirle a su pueblo.
Qué viva el Colegio Militar. Qué viva México y qué viva la cuarta transformación. Y, en este momento que me encuentro con todos ustedes, les digo: México es el mejor país del mundo, les guste o no les guste. Muchas gracias, compañeras y compañeros.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Gracias diputado Marco Antonio Pérez Garibay.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Toca a esta Presidencia manifestarse en torno al bicentenario del Heroico Colegio Militar.
Honorable asamblea, la lucha de México por alcanzar su independencia y soberanía, así como la de proyectar esa lucha a través del régimen republicano y democrático de gobierno, ha corrido a la par de la historia escrita por el Heroico Colegio Militar. Así la formación y consolidación del Estado mexicano, que atravesó necesariamente por la formación y la profesionalización del Ejército.
Esta vital tarea tuvo en el concurso del Heroico Colegio Militar una de sus contribuciones más relevantes. El temple, la vocación, la disciplina y mística republicana de nuestro Ejército, en mucho emana del papel que el Heroico Colegio Militar ha sabido cumplir.
Portan los cadetes del Colegio Militar un estandarte, un estandarte reconocido por toda la sociedad y que goza el más amplio prestigio, pues sabemos que de ahí se recrea el más puro y auténtico sentido de la patria mexicana. Cierto, la patria, que entendemos como el valor y el principio más esencial de la nación, la patria como su ideología más socavada, como su anhelo más alto, como el espíritu fundante de nuestra nacionalidad y como la fuerza que ha de preservar.
La patria, que expresa la más noble aspiración por realizar los anhelos del pueblo que forjó a través de su origen indígena, que sus luchas para constituirse como nación fraguada desde la fusión, que emanaron las culturas originarias, el mestizaje, la aportación de flujos migratorios que decidieron asentarse y ser parte de su población.
Se trata de un sentimiento, de una pulsión que mueve el deseo de engrandecer a la nación con la identidad que aporta su rica historia y a sus grandes hazañas. Quien sintetiza todo eso, es la patria, sus símbolos más emblemáticos, la Bandera y el Himno Nacional, pero también se expresa a través de instituciones, aquí el marco de este bicentenario es nuestro reconocer, es el de reconocer ciertamente, que una de las más puras y auténticas con la vocación de enaltecerla es el Heroico Colegio Militar.
Por eso, recordar sus 200 años de venturosa vida, es recuperar el sentimiento que está en esta y que fue su acta de nacimiento, con ello tener esa capacidad de ser originales en cuanto al más pleno significado de esa palabra que se llama, ir al origen. Un origen que tiene su mística en la voluntad de México por ser un país, de ser una nación libre e independiente, de ser la República, de vivir en paz y en el marco de un régimen democrático que garantiza los derechos humanos, que constituye un Estado federal y que edifica un destino sobre el sustento de las libertades y de la justicia.
Hace 200 años surgió el Heroico Colegio Militar, pronto estuvo llamado a ser garante de nuestro sentido patrio. Y lo ha hecho con decoro, lo ha hecho con arrojo y los valores que lo identifican: el honor, la lealtad, el patriotismo, el valor y la abnegación, son inscripciones escritas a través de su historia.
Conmemorar sus 200 aniversarios enriquece a esta Cámara de Diputados, porque en nuestra condición de institución de la república nos recuerda el imperativo de orientar todos nuestros esfuerzos, al igual que lo hace el Heroico Colegio Militar, conforme al lema inscrito en la pared de honor, en la pared de honor de este recinto con base a lo expresado por Vicente Guerrero, la patria es primero.
Y a su vez compromete al Heroico Colegio Militar a que nunca, bajo ninguna condición, se aleje de la mística y de los valores que lo identifican, lo cual anima a nuestra fe democrática y expectativa de paz y estabilidad social. Felicidades al Heroico Colegio Militar por su aniversario 200 de existencia. Qué viva el Colegio Militar. Larga vida al Colegio Militar. Es cuanto.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Honorable asamblea, distinguidos invitados y a todas y todos los presentes, a continuación, les invito a ponerse de pie para escuchar el Himno del Heroico Colegio Militar, el cual será ejecutado con el acompañamiento de la Banda de Música del Ejército y de la Fuerza Aérea Mexicana.
(Himno del Heroico Colegio Militar)
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Honorable asamblea, procedemos al acto de develación de las letras de oro en el Muro de Honor del salón de sesiones de la Cámara de Diputados la leyenda “2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar”. Y al finalizar el acto de la develación, procederemos a entonar el Himno Nacional Mexicano.
Esta Presidencia invita, para que nos acompañen del lado derecho del presídium, al general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional; al diputado Ricardo Villarreal García, presidente de la Comisión de Defensa Nacional; al diputado Jorge Romero Herrera, presidente de la Junta de Coordinación Política; así como al general Jorge Antonio Maldonado Guevara, director del Heroico Colegio Militar; al diputado Rubén Moreira Valdez, coordinador del Grupo de Trabajo para Conmemorar los 200 Años del Colegio Militar; y a la diputada Sonia Rocha Acosta, presidenta de la Comisión de Régimen, Reglamentos y Prácticas Parlamentarias, quien... a quienes les pedimos pasar, por favor.
(Se develan las letras de oro)
(Himno Nacional)
El secretario diputado Pedro Vázquez González: Se invita a todos nuestros invitados a ocupar sus respectivos lugares.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Proceda la Secretaría a dar lectura al decreto por el que se inscriben las letras de oro en el Muro de Honor del salón de sesiones de la Cámara de Diputados la leyenda: 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar, publicado en el Diario Oficial del 4 de mayo del presente año.
El secretario diputado Pedro Vázquez González: Con su permiso, diputada presidenta.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Adelante, secretario.
El secretario diputado Pedro Vázquez González: La Cámara de Diputados, con fundamento en la fracción I, del artículo 77 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, decreta:
Inscríbase en letras de oro, en el Muro de Honor del salón de sesiones de la Cámara de Diputados la leyenda: 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar.
Artículo Único: Inscríbase en letras de oro en el Muro de Honor del salón de sesiones de la Cámara de Diputados la leyenda: 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar.
Transitorio
Primero. El presente decreto entrará en vigor el día siguiente al de su publicación en el Diario Oficial de la Federación.
Segundo. Publíquese en la Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados y en el Diario Oficial de la Federación.
Tercero. La Mesa Directiva, en conjunto con la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, definirán la fecha y el protocolo que se llevará a cabo para cumplir con lo señalado en el artículo único de este decreto.
Salón de sesiones de la Cámara de Diputados del Honorable Congreso de la Unión. Ciudad de México, a 26 de abril de 2023. Diputado Santiago Creel Miranda, presidente. Rública. Diputada María del Carmen Pinete Vargas, secretaria. Rúbrica. Es cuanto, presidenta.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Gracias, diputado secretario.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Proceda la Secretaría a dar lectura al acta de la sesión solemne.
La secretaria diputada Olga Luz Espinosa Morales: Acta de la sesión solemne, en modalidad presencial, celebrada el miércoles 22 de noviembre de 2023, para inscribir con letras de oro en el Muro de Honor del salón de sesiones de la Cámara de Diputados la leyenda: 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar.
Presidencia de la diputada Marcela Guerra Castillo. En el Palacio Legislativo de San Lázaro, en la capital de los Estados Unidos Mexicanos, sede de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, con la asistencia de 252 diputadas y diputados, a las 10 horas con 46 minutos del miércoles 22 de noviembre de 2023, la Presidencia declara abierta la sesión solemne para develar la inscripción con letras de oro en el Muro de Honor del Salón de Sesiones de la Cámara de Diputados la leyenda: 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar.
La Presidencia da la bienvenida a este salón de sesiones a miembros del Heroico Colegio Militar, autoridades e invitados especiales. Acto seguido, informa a la asamblea que se encuentra a las puertas de este salón de sesiones el general Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional, y se designa una comisión de cortesía para acompañarlo al interior de este recinto legislativo.
La Presidencia, en términos del acuerdo aprobado por el pleno para el desarrollo de la presente sesión, concede el uso de la palabra a los diputados Ricardo Villarreal García, presidente de la Comisión de Defensa Nacional, y Rubén Ignacio Moreira Valdez, coordinador del Grupo de Trabajo para Conmemorar los 200 años del Colegio Militar y al general Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional.
Posteriormente se concede el uso de la palabra a la diputada y a los diputados Francisco Javier Huacus Esquivel, del Partido de la Revolución Democrática. Sergio Barrera Sepúlveda, de Movimiento Ciudadano. Dionicia Vázquez García, del Partido del Trabajo. Javier Joaquín López Casarín, del Partido Verde Ecologista de México. Augusto Gómez Villanueva, del Partido Revolucionario Institucional. Guillermo Octavio Huerta Ling, del Partido Acción Nacional y Marco Antonio Pérez Garibay, de Morena. La Presidencia realiza moción de orden a la asamblea.
Finalmente, la Presidencia dirige a un mensaje a la asamblea con motivo de la inscripción con letras de oro en el Muro de Honor del Salón de Sesiones de la Cámara de Diputados la leyenda: 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar.
La Presidencia invita al pleno ponerse de pie para escuchar el Himno del Heroico Colegio Militar, precisando que este acto se llevará a cabo con la participación de la banda de música del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos.
Acto seguido, la Presidencia invita a participar en el acto de develación al general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional, a los diputados Ricardo Villarreal García, presidente de la Comisión de Defensa Nacional, Jorge Romero Herrera, presidente de la Junta de Coordinación Política, Rubén Moreira Valdez, coordinador del Grupo de Trabajo para Conmemorar los 200 años del Heroico Colegio Militar, al general Jorge Antonio Maldonado Guevara, director del Heroico Colegio Militar, al diputado y a la diputada Sonia Rocha Acosta, presidenta de la Comisión de Régimen, Reglamentos y Prácticas Parlamentarias. Puestos todos de pie, se entona el Himno Nacional.
Por instrucciones de la Presidencia, la Secretaría da lectura al decreto por el que se inscribe en letras de oro en el Muro de Honor del Salón de Sesiones de la Cámara de Diputados, la leyenda: 2023, Año del Bicentenario del Heroico Colegio Militar, publicado en el Diario Oficial el 4 de mayo del año en curso. Es cuanto.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Proceda la Secretaría a poner a discusión el acta.
La secretaria diputada Olga Luz Espinosa Morales: Está a discusión el acta de la sesión solemne. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Las diputadas y los diputados que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo (votación), gracias. Las diputadas y los diputados que estén por la negativa sírvanse manifestarlo (votación). Diputada presidenta, mayoría por la afirmativa.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo: Aprobada el acta de la sesión solemne. Se pide a la comisión de cortesía designada acompañar al general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional, en cuanto él decida abandonar el salón de sesiones.
La presidenta diputada Marcela Guerra Castillo (12:56 horas): Se levanta la sesión solemne y pido a las diputadas y a los diputados permanecer en sus lugares para dar inicio a la sesión ordinaria de esta fecha, en modalidad presencial. Repito, la modalidad es presencial.
---o0o---