Cámara de Diputados del Honorable Congreso de la Unión, LXII Legislatura
Versión estenográfica de la sesión solemne para conmemorar el centenario del
natalicio de José Revueltas, llevada a cabo el miércoles 19 de noviembre de 2014

Sesión solemne para conmemorar el centenario del natalicio de José Revueltas

Apertura de la sesión

Intervención de la presidenta de la Comisión de Cultura y Cinematografía

Mensaje del presidente de la Mesa Directiva

Entonación del Himno Nacional

Acta de la sesión

Clausura de la sesión


 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo: Pido a la Secretaría, haga del conocimiento de esta Presidencia el resultado del registro de asistencia de diputadas y de diputados.

La Secretaria diputada Graciela Saldaña Fraire: Se informa a la Presidencia que existen registrados previamente 256 diputadas y diputados, por lo tanto hay quórum.

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo: (10:55 horas): Se abre la sesión solemne para conmemorar el centenario del natalicio de José Revueltas.

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo: Nos acompañan en esta sesión solemne, para honrar la memoria de un gran pensador mexicano, sus familiares: el señor Juan Cristóbal Cruz Revueltas, a quien le damos la bienvenida. Muchas gracias por su presencia. También nos honra con su presencia el señor José René Cruz Revueltas, bienvenido.

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo: Tiene ahora la palabra la diputada Margarita Saldaña Hernández, presidenta de la Comisión de Cultura y Cinematografía, hasta por siete minutos para referirse a la vida y obra de José Revueltas.

La diputada Margarita Saldaña Hernández: Con su venia, señor presidente. Compañeras legisladoras y compañeros legisladores, amigos y familiares de José Revueltas, Juan Cristóbal y José René Cruz Revueltas, bienvenidos a este recinto legislativo.

El nacimiento de José Revueltas no podía tener una fecha más emblemática, 20 de noviembre de 1914, cuatro años después de iniciada la revolución mexicana. Su formación autodidacta se dio en los primeros años de la etapa constructiva del proceso revolucionario. Su obra literaria es el vivo reflejo, no sólo de su activismo político y social, sino del contexto de la época, vivido y padecido desde la primera línea.

Este homenaje del nacimiento de José Revueltas se da en el marco de los festejos del centenario de Octavio Paz y Efraín Huerta, quienes también nacieron en 1914.

José Revueltas era un político militante de izquierda. Hombre cabal, íntegro y siempre comprometido con la complejidad social del país convulsionado que lo vio nacer.

Llegó a la Ciudad de México con su familia en 1920, antes de cumplir los 6 años de edad. A los 14 años fue acusado de rebelión, sedición y motín por su participación en un mitin en el Zócalo, razón por la cual estuvo seis meses en prisión.

Se afilió a las organizaciones Socorro Rojo Internacional y al Partido Comunista Mexicano, lo que le valió ser encarcelado en las Islas Marías. En noviembre de 1968 fue detenido y encarcelado en Lecumberri por su activa participación en el movimiento estudiantil, donde permaneció hasta mayo de 1971. Estas experiencias le sirvieron para conocer en carne propia la injusticia y la intolerancia del gobierno para escuchar las voces de los jóvenes.

La experiencia carcelaria lo llevó a escribir en 1941 Los muros de agua –aludiendo a las Islas Marías– y El luto humano, obra por la que le fue otorgado el Premio Nacional de Literatura en 1943. En 1969 escribió El apando, acaso una de las obras que encierra lo que él mismo define como “Realismo dialéctico”. Novela en la que narra el tiempo que estuvo preso en el edificio que hoy ocupa el Archivo General de la Nación.

Parte de su activismo político pudo ser canalizado en sus escritos plasmados en revistas, como Taller, El combate y El popular, en los años cuarenta. También fue colaborador de los periódicos El Día, El Nacional y Excélsior, y fue editor responsable de Espartaco, órgano de difusión de la Liga Leninista Espartaco en los sesenta.

Desde muy joven, Revueltas pudo ver y plasmar en sus ensayos sobre México, Un proletariado sin cabeza. La democracia bárbara y Los jóvenes revolucionarios del 68 ocupan un lugar privilegiado en su obra literaria, más no como simples elementos discursivos o de análisis, sino como recreaciones de vivencias.

Un hecho que merece la pena resaltar en este homenaje, es el genio y aportación de los hermanos Revueltas, su legado abarcó todas las artes y dio especial sentido al nacionalismo revolucionario con Silvestre en la música, con Fermín en la pintura, con Rosaura en la actuación y con nuestro homenajeado en la literatura.

En 1944 la actividad de Revueltas adquirió un camino distinto que lo cautivó, cuando el connotado fotógrafo de cine Gabriel Figueroa lo invitó a trabajar para que adaptara un guion sobre la obra El mexicano, de Jack London. Con su mentalidad dialéctica, Revueltas consideraba que el cine representaba la dualidad de movilidad e inmovilidad.

Desde entonces, inició su actividad en el campo de la cinematografía, con una intensidad similar a la literaria. Realizó más de 50 adaptaciones cinematográficas de las cuales, se produjeron alrededor de 25.

Entre las que podemos mencionar: Que Dios me perdone, de Xavier Villaurrutia. La otra, de Ryan Jean, que recibió el Ariel en 1947 por la mejor. El apando, adaptada por él mismo y José Agustín.

Tal fue la pasión de Revueltas por el cine, que llegó a dar clases en el Instituto Cubano de Arte e Industrias Cinematográficas de Cuba, y posteriormente, en el año de 1964, el recién creado Centro Universitario de Estudios Cinematográficos, en donde compartió la cátedra con Salvador Elizondo y Manuel Álvarez Bravo, entre otros maestros.

José Revueltas fue sensible a la crítica, cuando en 1950 sus colegas comunistas calificaron de decadentes dos de sus obras. Revueltas decidió pedir a la editorial que sacara del mercado el libro Los días terrenales y pidió a la empresa productora teatral que se suspendieran las funciones de El cuadrante de la soledad, obra que se representaba de manera exitosa, dirigida por Ignacio Retes, con escenografía de Diego Rivera y la actuación de su hermana Rosaura compartiendo el escenario con Silvia Pinal.

Diversos especialistas y estudiosos de su trabajo coinciden en que José Revueltas creó y recreó una literatura. La idea de cárcel es una especie de vehículo narrativo en la que aparece como una constante gramatical y de sentido; como encierro, como falta de libertad, como símbolo, como ciudad y como sociedad. La encontramos detallada y de forma abierta en la mayor parte de su producción. Y es que su obra es tan vigente como los problemas sociales que padece este México de la segunda década del siglo XXI.

No olvidemos que estamos ante uno de los escritores mexicanos más comprometidos, no solo con el arte y la política, sino también con el propio ser humano; con su dolor y sus angustias, con los despojados, con el ignorante y con los presos. Nuestro homenaje vivió y combatió la injusticia a través de su punzante pluma.  

Hoy, en esta sesión solemne conmemoramos el centenario del natalicio de José Revueltas. Ilustre mexicano, novelista, cuentista, periodista, dramaturgo, argumentista, guionista y ensayista; quien en sus escritos y en su vida, no expresó más que la coherencia de sus ideas políticas buscando a toda costa plasmarlas en su obra creativa.

Sin duda, el mejor de los homenajes que se puede hacer desde este Congreso a José Revueltas, es invitar al mundo entero a leer y releer sus obras. El genio autodidacta de un hijo y militante de la Revolución, José Revueltas.

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo: Muchas gracias, diputada presidenta.

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo: La Cámara de Diputados del Honorable Congreso de la Unión, rinde el día de hoy un merecido homenaje a José Maximiliano Sánchez Revueltas, en el centenario de su natalicio. José Revueltas nació el 20 de noviembre de 1914, originario del estado de Durango; fue un brillante escritor de la literatura mexicana que nos heredó un gran legado cultural como ensayista, novelista y cuentista.

José Revueltas, en su momento, fue el intelectual más solidario y comprometido con su realidad; el escritor que veía en la condición humana como la materia de su literatura y al arte como una expresión que conlleva misión y sacrificio.

Desde una óptica crítica siempre supo reflejar y transmitir con sus obras y en sus obras el sentimiento de la gente, su pensamiento y sus realidades sociales que son producto de las injusticias y las desigualdades; pero más allá de sus concepciones idealistas fue un hombre muy sensible que en todo momento defendió su libertad de pensamiento y de congruencia con sus acciones.

Hoy que honramos la memoria de José Revueltas, deseamos que las generaciones presentes y futuras siempre lo recuerden como un gran escritor mexicano que dio luz y prestigio a la literatura mexicana. Las obras que Revueltas escribió en los diferentes momentos de su vida, se encuentran plasmadas en obras como Los muros de agua, El luto humano, Dios en la tierra, Los días terrenales, En algún valle de lágrimas, Los motivos de Caín, Dormida en tierra y El apando, entre muchas más.

De José Revueltas recordaremos muchas enseñanzas. Sólo como último ejemplo destaco que sus estancias en la cárcel por su protesta social dejaron una huella en su literatura. No cejó en ningún momento de su vida en protestar y en señalar lo que no estaba bien. Y ese, compañeras y compañeros, es el mensaje que hay que rescatar en el marco de este homenaje a José Revueltas. No aceptemos lo que está mal y cambiemos para ser mejores.

Hoy que la protesta social está en muchas partes del país, es tiempo de recordar que la libertad de expresión es un legítimo derecho, pero que apostarle a la violencia como forma de conducta individual o colectiva no debe, por ningún motivo, alejarse de los límites que marca el estado de derecho y las leyes.

En estos momentos difíciles para el país la sociedad mexicana requiere de referencias como las de José Revueltas. Necesitamos una sociedad más crítica pero también una sociedad más propositiva.

Porque también debemos de responder al llamado de esta sociedad que exige de sus gobernantes que ante todo hablen con la verdad para recuperar la confianza, que honren su responsabilidad y que actúen con sensatez y que dignifiquemos el servicio público, porque creo que es tiempo y es oportuno también para pensar en diseñar una nueva relación entre el poder público y los ciudadanos; que las y los mexicanos tengan la garantía de acceso a sus derechos. Pensar en asumir una posición de Estado para resolver los problemas en su conjunto.

Por todo ello también es propicio para hacer un llamado a continuar por los caminos del diálogo, del entendimiento, de los acuerdos, y que el actuar de todos los actores políticos se guíe siempre por el respeto a las diferencias para ponderar la tolerancia y nunca abandonar la paz y la armonía que se merece el pueblo de México.

Muchas gracias y reitero nuevamente nuestro reconocimiento como parte del Poder Legislativo a un gran hombre como lo fue y seguramente quedará para siempre plasmado en su obra, José Revueltas. Muchas gracias, compañeras y compañeros.

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo: Se invita ahora a los presentes a ponerse de pie para entonar el Himno Nacional.

(Himno Nacional)

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo: Muchas gracias, damos por concluida esa ceremonia, esa sesión solemne y ruego a la secretaría que dé lectura al acta de esta sesión solemne.

El Secretario diputado Fernando Bribiesca Sahagún: Acta de la sesión solemne de la Cámara de Diputados del Honorable Congreso de la Unión, celebrada el miércoles 19 de noviembre de 2014 para conmemorar el centenario del natalicio de José Revueltas.

Presidencia del diputado Silvano Aureoles Conejo.

En el Palacio Legislativo de San Lázaro, en la capital de los Estados Unidos Mexicanos, con asistencia de 256 diputadas y diputados, a las 10:55 minutos del miércoles 19 de noviembre de 2014, el Presidente declara abierta la sesión solemne para conmemorar el centenario del natalicio de José Revueltas.

La Presidencia da la bienvenida a invitados especiales a la sesión solemne. Se concede el uso de la palabra a la diputada Margarita Saldaña Hernández, Presidenta de la Comisión de Cultura y Cinematografía.

El Presidente dirige un mensaje a la asamblea.

Puestos todos de pie, se entona el himno nacional.

Está a discusión el acta. No habiendo quien haga uso de la palabra, en votación económica se pregunta si se aprueba. Las diputadas y los diputados que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo (votación); las diputadas y los diputados que estén por la negativa sírvanse manifestarlo (votación). Mayoría por la afirmativa, señor presidente.

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo: Muchas gracias, señor secretario. Aprobada el acta de la sesión solemne.

El Presidente diputado Silvano Aureoles Conejo (11:15 horas): Se levanta la sesión solemne y se solicita a las diputadas y a los diputados permanecer en sus lugares para iniciar de inmediato la sesión ordinaria. Muchas gracias.

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