Para que se inscriba con Letras de Oro en el recinto de la Cámara de Diputados el nombre de "Plutarco Elías Calles", presentada por el diputado Augusto Guerrero Castro, del grupo parlamentario del PRI
«Presentación.
La historia mexicana nos enseña que en las situaciones terriblemente comprometidas por las que la república ha atravesado. han surgido hombres a la altura de las circunstancias para enfrentarse a los enemigos permanentes de la nacionalidad.
Los antecedentes de la conducta antiliberal y contrarevolucionaria de los grupos egoístas perfectamente identificados se encuentran desde el siglo pasado, cuando enfrentaron a las Leyes de Reforma y a la Constitución de 1857; fue cuando surgió el grupo de pro hombres encabezados por Benito Juárez y los derrotó.
Los orígenes secretarios de la rebelión contra lo artículos 3, 5, 27,31,,31, 123, y 130 de la Constitución Plutarco Elías Calles, con el apoyo del pueblo sereno y sin titubear, venció a quienes deseaban el poder político de nuestro país con argumentos que traicionan incluso los principios elementales de su propia doctrina.
Obregón y Calles lucharon con decisión, para que las disposiciones constitucionales, no fueran letra muerta, porque surgieron de esa cantera inmortal que es el pueblo de México.
Vivimos tiempos difíciles, tiempos de crisis e incertidumbre y aquí está el peligro, porque siempre han sido los momentos que aprovechan los traidores para provocar incitando a la lucha a los grupos que perdieron la Revolución: este es el momento oportuno y coyuntural para enfrentar la figura estatuaria del General Estadista y Maestro a la reacción organizada, que pretende nuevamente con sus falsas doctrinas resquebrajar la unidad nacional.
No olvidemos nunca que el caracter es la virtud de los tiempos difíciles y así, con carácter y con decisión los diputados que suscribimos la iniciativa y la inmensa mayoría revolucionaria de la LIII Legislatura, estamos decididos a conseguir que el nombre de Plutarco Elías Calles sea inscrito con letras de oro en nuestro Recinto Parlamentario, esta será nuestra bandera contra los enemigos emboscados y llenos de soberbia que están provocando en diferentes partes del país con sus argumentos encubiertos y antinacionales, no queremos más tolerancias, y afirmamos para quede claro, que no se pretende elogiar a un héroe sino seguir su ejemplo y el rumbo que nos señaló.
Honorable Cámara de Diputados: En el ejercicio de la facultad que nos confiere la fracción segunda del artículo 71 de Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, los suscritos Diputados miembros de esta LIII Legislatura, sometemos a la consideración de esta H. Asamblea la iniciativa para inscribir con letras de oro en los muros de este Recinto el nombre del General Plutarco Elías Calles, basados en las siguientes consideraciones, producto del análisis sereno, imparcial y nacionalista que hemos realizado.
Para hacer justicia histórica a un hombre, es necesario juzgarlo poniendo su obra como en una balanza, lo positivo y lo negativo, sobre todo cuando se trata de analizar con criterio actual y objetivo a quien vivió en un época compleja y difícil, enardecida por las pasiones y altercados, en un país dividido por corrientes políticas múltiples y encontradas.
Algunos consideran todavía muy recientes los hechos de la Revolución Mexicana y los consideran complicados con los intereses políticos actuales donde ven con simplicidad que las heridas sociales están en proceso de cicatrización como para poder hacer un juicio imparcial y desapasionado sin interés político faccioso que permita el análisis sereno e insospechable.
Pero ya es tiempo de hacer justicia histórica a quienes con su sacrificio hicieron posible el estado moderno mexicano, haciendo a un lado la pusilanimidad de quienes temerosos argumentan que no se deben abrir viejas heridas o propiciar estériles enfrentamientos; pero nosotros que no estuvimos ni entre los partidarios mientras los enemigos del General Plutarco Elías Calles y que sentimos que cuando él murió el 19 de octubre de 1945, México estaba ya sólidamente constituido y respetado por el mundo, debemos de reconocer su obra en toda la magnitud que merece.
Nosotros nacimos lejos y a salvo de todas las contingencias de la lucha armada, disfrutamos de un país libre y democrático, de un estado moderno que como tal permite la organización y la participación de partidos políticos bien definidos, que defienden su posición ideológica y buscan el poder legítimamente amparados en los principios constitucionales de nuestra nacionalidad.
Por el camino de la duda que es el principio del pensamiento humano se analizaron los hechos que movieron a las diferentes corrientes de la Revolución, todas ellas con un finalidad indiscutible, la creación de una constitución social de un desarrollo económico y de un gobierno basado en la idiosincrasia histórica del pueblo mexicano, fue así como hombres que no coincidían en algunos aspectos, se identificaron por un profundo sentimiento patriótico y su obra está aquí y aquí están sus nombres presidiendo el debate público de la diferentes corrientes ideológicas partidistas, que en una forma o en otra, buscan seguir construyendo el México que todos deseamos más justo, más independiente, más democrático.
Así vemos en esto muros con letras de oro el nombre de Venustiano Carranza y del General Francisco Villa, el de Alvaro Obregón y el del General Emiliano Zapata, porque después de un meditado análisis se concluyó en la balanza del juicio sereno y razonado, el predominio de los hechos positivos sobre los humanos desaciertos, y legisladores conscientes consideraron prudente y oportuno inscribir sus nombres como un homenaje ciudadano a su obra, haciendo a un lado los rescoldos del radicalismo personal y estéril, de quienes ven las diferencias que entre ellos existieron como luchas irreconciliables ante la historia.
Cada uno de los próceres en su momento aportó lo más valioso de su vida política cada uno contribuyó a construir el Estado Mexicano, como ahora lo disfrutamos y lo sufrimos, a nosotros corresponde también hacer los esfuerzos y sacrificios que este momento de la historia nos reclama, tomemos a nuestros héroes como ejemplo y llevemos siempre en la mente las sentencias de ellos, el apotegma de Juárez para conseguir la paz mediante el respeto del derecho ajeno y la categórica afirmación de Vicente Guerrero que debe mover nuestras acciones y nuestras conciencias para salir adelante con el principio fundamental de que "La Patria es Primero" y aquí están inscritos en un lugar distinguido, hagamos a un lado nuestras diferencias y juntos, con unidad y patriotismo evitemos que se repitan los dolorosos hechos del pasado en que interés ajenos se aprovecharon de nuestras luchas internas para cercenar el territorio de nuestra república.
El General Plutarco Elías Calles fue profesor en la escuela de la Moneda en Hermosillo, Sonora y el ejercer el magisterio participó en la más noble tarea a que un ser humano puede dedicarse orientando a las nuevas generaciones, así vemos que, quien sabe leer y escribir y quien desarrolla las más complicadas tareas científicas y tecnológicas, está en deuda permanente con el magisterio nacional. Como maestro, Calles aprendió también a querer a la juventud de su patria y como maestro conoció las más duras penalidades de su pueblo.
Como periodista escribió en "El Siglo XX" y en la "Gesta Escolar" de 1899 a 1903, así vivió la dura y noble tarea de informar con veracidad de los hechos cotidianos de la época. por lo que con profunda convicción y conocimiento de causa preparó a los grupos revolucionarios de su localidad.
Con el grado de capitán organizó la brigada Calles, combatió contra Orozco en Nacozari: tomó las armas contra el usurpador Victoriano Huerta: por las acciones de Cananea y Naco recibió el grado de teniente coronel y fue designado por el General Obregón comandante de las fuerzas fijas del Esto, sostuvo la campaña contra Maytorena y fue ascendido a general de brigada, fue denominada por Carranza gobernador y comandante militar de su Estado. batió a los villistas que habían invadido Sonora desde Chihuahua, en Agua Prieta y San Joaquín: dictó entre otras las siguientes medidas: prohibió la fabricación, ventas y consumo de bebidas alcohólicas: reformó al Código Civil para legitimar el divorcio: formó la Comisión Agraria Mixta: decretó la formación de bibliotecas públicas y la fundación de las Escuelas Normal de Maestros y las Escuelas Cruz Gálvez para los huérfanos de la Revolución: prohibió las operaciones sin pacto de retroventa para evitar que los latifundistas siguieran despojando de sus tierras a los pueblos: creó la Dirección General de Catastro: fijó el salario mínimo: derogó las exenciones de impuestos y obligó a los dueños de haciendas y centros de trabajo a sostener escuelas primarias.
Una vez expedida las Constitución de 1917 fue elegido gobernador; en esta promulgó la nueva Constitución Política del Estado de Sonora y las Leyes Agrarias y del Trabajo.
Fue Secretario de Industria y Comercio en el Gabinete del Presidente Carranza y Secretario de Gobernación en el del Presidente Alvaro Obregón.
Fue Presidente de la República del 1o. de diciembre de 1924 al 30 de noviembre de 1928.
Durante su mandato el Presidente Calles reformó y modernizó el Ejercito: instituyó la Comisión Nacional Bancaria el 29 de diciembre de 1924: expidió la Ley General de Instituciones de Crédito el 7 de enero de 1925 creó el Banco Nacional de Crédito Agrícola.
Promulgó la Ley Orgánica del artículo 4o. constitucional en lo relativo a la libertad de trabajo y la Ley Reglamentaria del artículo 123 que declaró obligatoria la contratación colectiva y la organización de los obreros. Los empleados públicos federales y los maestros de escuelas oficiales que pugnaban por sindicarse contaron con la Ley General de Pensiones Civiles de Retiro del 17 de agosto de 1925. El 10 de diciembre de 1926 se aprobó la Ley General de Sociedades Cooperativas. El 30 de diciembre de 1926 de inauguró bajo sus auspicios el primer Congreso Nacional de Profesores del que surgió la Federación Nacional de Maestros y el Congreso Médico reunido en Monterrey aprobó ese mismo año la sindicación de los trabajadores de la medicina.
Promulgó las leyes de irrigación con aguas federales el 9 de enero de 1926 y de dotaciones y restituciones de tierras y aguas el 27 de abril de 1927. Enero de 1925 y 1928 se repartieron 3'186,296 hectáreas a 3'02,539 campesinos.
En materia de educación se fundó La Casa del Estudiante Indígena: se establecieron planteles industriales y centros culturales para obreros; las escuelas rurales llegaron a tener 3,425 maestros en 1927; se mantuvieron las misiones rurales formadas por expertos en agricultura, educación física e higiene y se estableció la dirección de educación secundaria en 1925.
En Abril de 1926 se expidió la Ley de Caminos y Puentes se construyeron las carreteras México - Puebla, México - Pachuca. y se iniciaron las de México - Acapulco y México - Laredo. se expidieron las Leyes de Comunicación Electrónica que reglamentaban los sistemas telegráfico y telefónico y la de ferrocarriles. El 20 de septiembre de 1926 se inauguró la comunicación telefónica con Estados Unidos y el 4 de Julio de 1928 se hizo la primera telefónica a Londres ruta postal aérea a Londres. La primera ruta postal aérea empezó a operar entre México, Tuxpan y Tampico en 1929 y el primero de julio del mismo año se creó el departamento de Aeronáutica Civil dependiente de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas.
Este es un breve resumen de la obra que un gobierno indiscutiblemente revolucionario realizó interpretando las necesidades de un pueblo que deseaba y exigía la reconstrucción material y moral de la república.
Pero hay una razón que todas las fracciones parlamentarias aquí representadas debemos meditar. México en 1928 vivía momentos convulsos en que el debate giraba en torno a las personas físicas y por ellas en realidad se luchaba: la simpatía que un líder o caudillo tenía era lo que inclinaba el juicio, quedando los principios políticos a un lado; carrancistas, villistas, zapatistas, obregonistas, delahuertistas, callistas, serranistas, etcétera le daban nombre a los mismos de aquella época. La desunión entre los grupos que habían hecho la Revolución Armada, era vista con beneplácito en las trincheras del obscurantismo clerical y reaccionario que como ahora se enmascaraban para actuar, argumentando la defensa de los derechos humanos que históricamente no han sabido respetar las libertades en que no han creído y el patriotismo que siempre han traicionado.
Ante este estado de cosas la Revolución Mexicana se encontraba en grave peligro pues la lucha fratricida acabó con muchos de los grandes soldados de la Revolución empeñados en destruirse unos a otros, así perdieron la vida fusilados, traicionando en emboscadas o vencidos en acciones de armas y la crisis de los valores humanos que pudieran sostener lo ganado por la Revolución hizo que los segundones pudieran estar en competencia política.
Calles el estadista. Calle el visionario se propuso al final de su mandato y a raíz de la muerte del General Obregón, organizar el Estado mexicano unificado las corrientes populares dispersas, no sólo de militares, sino también de civiles; de obreros y de campesinos que con los intelectuales revolucionarios, siguieran una línea política común, donde participaran democráticamente para obtener el poder contendiendo a través de los grupos organizados para tal efecto, aquí empieza la era de los partidos políticos como tales y terminan definitivamente en México la etapa de los caudillos, de los golpes de estado y de los cuartelazos.
A partir de entonces se conforma el Estado mexicano moderno, pues no se puede concebir la existencia real del Estado cuando dentro de él no existan los partidos políticos, donde se exponga las diferentes corrientes del pensamiento y los principios y programas para obtener el poder y no sólo sean grupos aislados de presión sobre las decisiones administrativas.
Así, México pasa de la condición histórica del país de un hombre a la de nación de instituciones y de leyes cuando el estadista Calle dijo el 1o. de septiembre de 1928: "... que todos estos hechos y todos estos factores ayuden a la consecución de estos ideales: la entrada definitiva de México al campo de las instituciones y de las leyes, y al establecimiento, para regular nuestra vida política, de reales partidos nacionales orgánicos con olvido o ignorancia de hoy en adelante, de hombres necesarios como condiciones fatal y única para la vida y para la tranquilidad del país."
Señores diputados.
Por la promulgación del nuevo Código Civil conocido como el "Código Calles" donde don Plutarco dijo: "... socializar el decreto significa extender esfera del decreto del rico al pobre, del propietario al trabajador del industrial al asalariado, del hombre a la mujer sin ninguna restricción ni exclusivismos. Pero es preciso que el derecho no constituya un privilegió o un medio de dominación de una clase sobre otra".
Por la vibrante obra legislativa de Calles, vinculada estrechamente con el cumplimiento de los principios de la Revolución Mexicana para hacer realidad y materializar los anhelos por los que se había luchado, con leyes crédito, trabajo, cultos, educación, etcétera, que al cumplirse dieron lugar a obras tangibles en ferrocarriles, carreteras, puentes, presas, canales, escuelas, y el nacimiento de instituciones básicas como el Banco de México, el Banco Nacional de Crédito Agrícola y Ejidal y a un sistema fiscal moderno que permitió la solidez de la moneda y de la economía nacional.
Por el fortalecimiento que el gobierno de Calles dio a la Reforma Agraria acelerando el reparto de tierras entre los campesinos cuando al terminar su mandato había entregado más de tres millones de hectáreas, lo que habría , de ser en forma definitiva la confirmación de la Reforma Agraria, dotando además por primera vez en México al productor agropecuario de medios económicos para los cultivos, de equipo agrícola de abonos e insecticidas y de una ley de crédito agrícola que fundió el Banco Nacional de Crédito Agrícola.
Porque Calles cimentó su gobierno principalmente en el pueblo, los obreros y campesinos: se apoyó en los líderes de unos y otros promovió por todos los medios a su alcance la organización de los trabajadores, las grandes centrales obreras cuya fuerza conocemos hoy, tuvieron su origen en los esfuerzos del régimen callista. El movimiento obrero se consolida definitivamente con Calles. No son válidos los argumentos contra el movimientos revolucionario de los trabajadores y su lealtad y alianza con los obreros de la revolución, lo importante es que el movimiento obrero y sus conquistas son indiscutibles.
Por la actitud sindicalista del general Calles se hizo del sindicato mexicano bien organizado una escuela de disciplina del civismo y de solidaridad nacionalista, que a la fecha lo sigue demostrando como soporte de la economía nacional.
Por su política hacendaria que sacó de la banca rota en que se encontraba el erario nacional, obteniendo una moratoria de varios años desvinculando la deuda de los Ferrocarriles Nacionales de México, que había incorporado a la deuda pública exterior en esas fechas, poniendo las bases del sistema fiscal mexicano.
Por la creación de la Comisión Nacional Bancaria que ha sido orgullo de las instituciones nacionales de México y que dio confianza a las clases productoras modestas del país y sobre todo por la materialización del anhelo de los constituyentes de 1917 al expedir el 25 de agosto de 1925 la Ley Constitutiva del Banco de México como Banco único de emisión con cien millones de pesos de capital inicial. Nada es fundamentalmente distinto ni se ha apartado del ideal callistas como la trayectoria del Banco de México que le dio desde ese entonces un alto prestigio al crédito nacional en el mundo y la solidez definitiva a nuestra moneda como la única en el país con poder liberatorio de pago.
Por su carácter de educador, el Maestro Calles enseñó en las escuelas y apoyó con entusiasmo los programas educativos de su gobierno, como gobernador del estado de Sonora y como Presidente de la República, estableció las escuelas centrales agrícolas y el programa de educación plural para poner en contacto la escuela con la colectividad dando nuevos y mayores impulsos a las misiones culturales, creo la escuela secundaria el 31 de diciembre de 1925 y defendió con férrea voluntad durante casi todo su gobierno los postulados del artículo lo constitucional contra los embates de la reacción enmascarada.
Como viejo maestro de la escuela Elías Calles puso énfasis y místicas revolucionaria en la tareas educativas, su gobierno apoyó la organización sindical de los maestros: Los maestros decía Calles, deben tener amplitud económica para que no se distraigan pensando con que comerán mañana.
Pero fundamentalmente porque el general Calles es forjador del México moderno, del estado mexicano indiscutible, por su apertura democrática y las diferentes corrientes políticas, por ser el iniciador de la era de los partidos políticos, por la institucionalidad de su doctrina y por su actitud patriótica de subordinación ante los acontecimientos históricos que le dieron fortaleza a la figura del Poder Ejecutivo.
Por todo ello pedimos a esta soberanía, en un acto de justicia histórica se atreve la iniciativa siguiente:
Artículo único. Que se inscriba con las letras de oro en el Recinto Parlamentario, el nombre de general Plutarco Elías Calles para que presida junto con los nombres de los demás próceres nacionales, los debates que los representantes del pueblo mexicano realizan con honor, con respeto y con patriotismo.
Queremos terminar repitiendo las palabras del maestro Francisco Martínez de la Vega: "Hay todavía en el aire persistencias pasionales en el juicio. Pero el debate sobre su balance histórico se inclina ya francamente hacia una mayor objetividad. Calles fue, en proporción muy importante, primer hombre de la revolución que pudo sentarse a gobernar. Sus antecesores tuvieron que estar más atentos al choque de las fracciones armadas y aunque Calles conoció y dominó tempestades. La fuerza de su régimen, en clara ventaja sobre sus enemigos, le permitió diseñar el México posrevolucionario y no sólo concentrarse en asegurar el triunfo armado... Sí, el tiempo nos devuelve el mucho de lo que las tormentas pasionales o interesadas se llevaron antes, lo confundieron, lo ocultaron o lo mancharon con la patina del tiempo, el bronce estatuario de Plutarco Elías Calles luce mejor al serenar las tormentas... En la perspectiva de este postrer tercio del siglo de la revolución, cuando se debaten en crisis profundas muchos de sus postulados se revisan y hasta menosprecian varias de sus realizaciones. Plutarco Elías Calles engrandece a distancia se disipan algunas de las nubes que ocultan su figura, nubes de la incomprensión o del resentimiento y su imagen de estadista se perfila mejor, libre de las calumnias de sus enemigos como de las cortesanas admiraciones que acompañan a los triunfadores."
Atentamente.
Palacio Legislativo a 19 de octubre de 1986.
Firman la iniciativa: el grupo Sonora, diputados: Luis Donaldo Colosio, Bulmaro Pacheco, Ismael Torres Díaz, Jorge Acedo Samaniego, Eleno de Anda López, José Encarnación Alfaro, Luis Orcí Gándara. Por la LIII Legislatura, el de la voz Augusto Guerrero Castro, licenciado Pastor Murguía González, Wilbert Chi Góngora, Marciano Aguilar Mendoza, Eugenio Rosales Gutiérrez, Gerardo Fernández Casanova, José Nerio Torres Ortiz, Luis Pérez Díaz, Abelardo Alaniz González, Darío Maldonado Casiano, Manuel Jiménez Guzmán, Manuel Urrutia Castro, Agustín Bernal Villanueva, Enrique Martínez Orta, Federico Granjas Ricalde, Reyes Rodolfo Zaragoza, Marco Antonio Espinoza Pablo, Jesús Siller Rojas, Humberto Cervantes Vega, Oscar Aguirre López, Federico Fernando Farina, José Bernardo Ruiz Ceballos, general Alonso Aguirre Ramos, coronel Leonel Villalobos Chávez, teniente coronel Rodolfo Linares, Mauro Rodríguez Cruz, Alberto Pérez Mariscal, Oney Cuevas Santiago, Román González Anaya, Oswaldo García Criollo, Dante Delgado Rannauro, Porfirio Camarena, Ricardo Regalado Hernández, Luis Ramírez Chávez, Agustín Villavicencio Altamirano, Guadalupe Natalia Solares, Emérico Rodríguez García, Jacinto Gómez Casillas, Fernando Abarca Fernández, Pedro Ortega Chavira, Jorge Días de León Valdivia, Miguel Angel Herrerías Alvarado, Guadalupe Ponce Tovar, Alfonso Reyes Medrano, Melquiades Morales Flores, Juan José Castro Justos, Joel Lleverino Reyes, Aurora Munguía Archundia, Oscar Llergo Heredia, Francisco Velasco Figueroa, Rodolfo Jiménez Villareal, Braulio Fernández Aguirre, Daniel Castaño de la Fuente, Gonzalo Padilla Fuentes, Félix Flores Gómez, Joaquín Contreras Cantú, Ylce Sarmiento Gómez, Francisco Gamboa Herrera, Gilberto Nieves Jenkin, Santiago Camarena Flores, José Delgado Valle, Francisco Berlín Valenzuela, Ezequiel Espinoza Mejía, María Amelia Olguín Vargas, María Emilia Farías, Mackey, general Mario Morales, Javier Pineda Serino, Amín Zarur Menez, Edmundo González Llaca, José Rubén Flores, Catalán, María Luisa Mendoza Romero, Juan Antonio Araujo Urcelay, Eliseo Rodríguez Ramírez, José de Jesús Padilla Padilla, Sergio valle Hernández, Juan Moisés Calleja, Diego Navarro, Justino Delgado Caloca, Doroteo Zapata García, Gloria Mendiola Ochoa, Jesús Alcántara Miranda, Héctor Yunes Landa, Santana Franco Lima, Rafael García Anaya, Antonio Punzo Gaona, Carlos Palafox Vázquez, Amado Mayaudón, Jaime Martínez Jasso, Jesús González Gortázar, Elba Esther Gordillo, Gerardo Gómez Castillo, Joel Ramírez Díaz, Eliseo Rangel Gaspar, Manuel Germán Prado, Blanca Esponda de Torres, Adrián Mora Aguilar, Antonio Tenorio Adame, Juan Maldonado Pereda, Píndaro Urióstegui Miranda, Homero Díaz Córdova y José Herrera.»
Turnada a la Comisión de Régimen, Reglamento y Práctica Parlamentarias.