Intervenciones
Del gobernador de Campeche Rafael Alejandro Moreno Cárdenas
Del gobernador de Michoacán Silvano Aureoles Conejo
Del gobernador de Guerrero Héctor Antonio Astudillo Flores
Del gobernador de Querétaro Francisco Domínguez Servién
Del gobernador de Colima José Ignacio Peralta Sánchez
Del gobernador de Zacatecas Alejandro Tello Cristerna
Diputada Lizbeth Mata Lozano, PAN
Del senador Pedro Haces Barba, Morena
Del senador Miguel Ángel Mancera Espinosa, PRD
Del diputado Reginaldo Sandoval Flores, PT
Del diputado Itzcóatl Tonatiuh Bravo Padilla, PMC
Del diputado Marco Antonio Adame Castillo, PAN
Del senador Dante Delgado Rannauro, PMC
De la diputada Ma. Guadalupe Almaguer Pardo, PRD
Del diputado Reginaldo Sandoval Flores, PT
Del gobernador de Zacatecas Alejandro Tello Cristerna
Del gobernador de Colima José Ignacio Peralta Sánchez
Del gobernador Francisco Domínguez Servién
Del gobernador Héctor Antonio Astudillo Flores
Del gobernador Silvano Aureoles Conejo
Del gobernador Rafael Alejandro Moreno Cárdenas
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Seguimos con el programa en esta primera mesa, Seguridad Ciudadana en los Estados.
Agradezco la presencia del presidente de la Conago, el gobernador de Campeche, Rafael Alejandro Moreno Cárdenas; del gobernador de Guerrero y vicecoordinador de la Comisión de Seguridad y Justicia de la Conago, Héctor Astudillo Flores; del gobernador de Colima, José Ignacio Peralta Sánchez; del gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servién; del gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, coordinador de la Comisión de Seguridad y Justicia de la Conago; y del gobernador de Zacatecas, Alejandro Tello Cristerna.
Vamos a darle la palabra, hasta por diez minutos, a cada uno de los gobernadores. Nos acompañan también en la mesa la diputada Lizbeth Mata Lozano, el diputado Tonatiuh Bravo Padilla y el senador Miguel Ángel Mancera. También hay un grupo de senadores y diputados que van a participar también en la discusión de esta mesa.
Bueno, empezamos dándole la palabra al presidente de la Conago y agradeciéndole nuevamente su presencia, Alejandro Moreno Cárdenas. Adelante, gobernador. Sí, tiene razón, omití eso. Muchas gracias. Efectivamente, recibimos un comunicado de Seguridad sin guerra, su propuesta es que durante la celebración de estas audiencias se siga un cuestionario que ellos proponen –me parece– de manera muy atinada.
Comentamos ahorita los integrantes de la Junta de Coordinación Política cómo procesar su solicitud. Vemos ahorita muy complicado cambiarles las reglas del juego a nuestros invitados.
Lo que hemos propuesto de metodología en estas audiencias es que todas las personas que nos visitan puedan hacerles una pregunta a los participantes en los espacios que hemos preparado y aquí también vamos a distribuir un papel para que ustedes puedan hacer sus preguntas y dárselas a los participantes.
La idea es que, pues tengamos un diálogo, no nada más que sea comunicación en un sentido, sino que haya la oportunidad, en la medida de las posibilidades de tiempo que tenemos, de atender preguntas de la ciudadanía.
Entonces, desafortunadamente, no nos podemos apegar a ese formato, pero están ustedes aquí invitados, pueden hacer preguntas como todos los demás.
También preparamos en la Junta de Coordinación Política una relatoría de cada una de las mesas y entiendo también que ustedes tienen una propuesta para que se integren algunas de sus peticiones dentro del dictamen. Eso no es una decisión mía, tendría que tomarla la propia Comisión de Puntos Constitucionales, pero bienvenidos sus documentos, opiniones y demás. Y por supuesto que se lo vamos a sugerir a la Comisión de Puntos Constitucionales para que forme parte del dictamen.
Bueno, tenemos tiempo, si no la siguiente semana, en poder invitar a víctimas. Me parece una buena observación. Yo mismo como senador, en mi espacio de discusión de Ley de Seguridad Interior, se los di a las víctimas. Gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Ahora sí, gobernador, disculpe.
El gobernador Rafael Alejandro Moreno Cárdenas: Saludo con aprecio y con afecto al diputado presidente de la Junta de Coordinación Política en la Cámara de Diputados, Mario Delgado.
Saludo a los diputados y a las diputadas, a las senadoras, a los senadores, a los gobernadores, a los especialistas que hoy nos acompañan. A miembros de organizaciones de la sociedad civil, a los medios de comunicación. Amigas y amigos todos.
Primero, quiero agradecerles a las diputadas y a los diputados este gesto de apertura para abordar un tema fundamental, como lo es el tema de la Guardia Nacional, con un alto sentido de responsabilidad con el país, pero también con una enorme responsabilidad frente a los estados que lo integramos.
Ciertamente, el problema de la inseguridad es de impacto nacional, pero no menos cierto es que cada entidad federativa tiene su propia realidad. Por ello, los alcances de lo que será la Guardia Nacional tienen que ser tan amplios como la realidad social lo exige, pero siempre circunscritos a los límites de su competencia federal.
Los gobernadores jamás renunciaremos a nuestra facultad constitucional de garantizar paz, armonía y tranquilidad a nuestros pueblos. Los gobernadores lo hemos dejado claro, tenemos una relación de respeto cordial, de colaboración y de trabajo con el titular del Poder Ejecutivo Federal, y respetamos en cuanto a sus atribuciones que tiene, que propone, para la Guardia Nacional, siempre y cuando esas atribuciones no rebasen el ámbito de su competencia, el ámbito federal.
Por ello, la seguridad pública es un tema compartido, es un tema federal, estatal y municipal, y como es normal, ningún orden de gobierno está dispuesto a renunciar a su competencia, soberanía interior y autonomía. Por eso nos pronunciamos por una labor coordinada de suma de esfuerzos, donde todos construyamos el México que necesitamos para nuestras familias que tanto lo necesitan, para las familias mexicanas. Ese México seguro que los ciudadanos merecen.
Por ello, tenemos plena confianza que los legisladores, las diputadas y los diputados como Cámara de origen; las senadoras y los senadores, los diputados todos, diputados locales, sabrán escuchar, atender las propuestas y los comentarios que aquí se realicen en estas audiencias públicas de cara a la sociedad, y que quede clara y específicamente plasmado en la Constitución las facultades de la Guardia Nacional y que no existan ambigüedades.
Bienvenida la Guardia Nacional bajo la idea de que sus criterios generales de actuación deben sincronizarse son los criterios específicos de cada estado, pues cada entidad federativa requiere estrategias acorde a su realidad. Ese traje a la medida de cada estado con estrategias generales y específicas para combatir a la delincuencia organizada solo se puede confeccionar con un trabajo conjunto entre el gobierno federal, los gobiernos estatales y los gobiernos municipales.
Para ello un buen principio es que la iniciativa para reformar diversas disposiciones de la Constitución y que conlleva a la creación de la Guardia Nacional no confunda ni traslape las facultades de cada orden de gobierno. La Constitución por esencia es la Ley Suprema de la Nación, y por tanto, es el soporte del sistema federal, por lo que toda reforma a la misma debe garantizarle a cada orden de gobierno el pleno ejercicio de su competencia.
El centralismo es parte de la historia de México y ahí debe de quedarse: en la historia. El presente y el futuro tienen que ser escenarios de fortalecimiento federalista; la seguridad pública es uno de esos grandes retos federalistas, por eso esperamos que el Constituyente Permanente integrado por el Congreso de la Unión, por todas las Legislaturas locales, proponga y tenga una reforma que disponga la creación de la Guardia Nacional bajo los más estrictos criterios de respeto a las soberanías estatales, privilegiando la coordinación, el trabajo conjunto con pleno respeto a los derechos humanos.
Asimismo, hoy consideramos propicio, como siempre lo hemos hecho, reiterar nuestro reconocimiento, nuestra gratitud a las Fuerzas Armadas, al Ejercito mexicano, a la Fuerza Aérea y a la Marina Armada de México. Todos sabemos que, en cada marino, en cada piloto y en cada soldado hay un mexicano dispuesto a dar su vida por nuestra patria. Su nacionalismo y su patriotismo están fuera de toda duda y mucho les agradecemos lo que han hecho hasta el día de hoy por nuestro país y por el compromiso que han dejado claro siempre en cada encomienda que se les ha asignado.
Por ello consideramos que la Guardia Nacional no debe ser una institución clonada de las Fuerzas Armadas ni conducir a una militarización del país. Hay que formar policías, hay que capacitar a los policías. Se lleva años, hay que tener claro los controles de confianza, los exámenes, y hay que tener claro los indicadores de cada una de las entidades federativas.
Los policías, los agentes de seguridad, encargados de proteger y cuidar a los ciudadanos no se compran en una tienda de conveniencia, se forman todos los días a lo largo de muchos años.
Les doy un ejemplo. En el estado de Campeche, en las generaciones que hacemos cada año de formación de policías estatales, participan alrededor de 500 o 600 policías y solo cumplen con los exámenes, con los controles de confianza, con los estudios que se hacen de honestidad, de compromiso, de cada una de estas personas que quieren ser policías, solo aplican de 500 o 600, 40. Necesitamos formar y fortalecer nuestras instituciones.
Si bien se propone un origen eminentemente castrense, debe acentuarse en todo momento su labor y sus tareas, que deberán correr a cargo de la autoridad civil, así como recalcar que estarán sujetas al fuero civil. Solo así, con ese carácter civil, podrá darse una adecuada participación de los gobiernos estatales en los trabajos coordinados de seguridad pública con el gobierno federal.
Asimismo, en todo momento, toda fuerza pública o de seguridad de este país, existente o por crearse, tiene que ejercer sus funciones con pleno respeto y observancia a los derechos humanos de todas las personas. Por ello el Estado mexicano tiene que transitar hacia un Estado de derechos humanos, donde las instituciones públicas y las de seguridad sean sus principales garantes.
Amigas y amigos legisladores, quiero agradecer ampliamente esta reunión de trabajo para ampliar una visión compartida de la seguridad pública en nuestro país, no como una tarea más, sino como una de los grandes y de las más grandes tareas y de los más grandes retos y desafíos que tiene nuestro país, que debemos superar para dejar claro que México es lo más importante para todos nosotros.
Quise, en respeto a su tiempo, a su paciencia, dejar para el final entregarle al diputado presidente de la Junta de Coordinación Política diversos comentarios, análisis, observancias, que de manera muy humilde, de manera muy respetuosa queremos compartir con las diputadas, con los diputados y con los legisladores federales, a diversos artículos del dictamen que se ha aprobado, haciendo hincapié principalmente en los artículos, como el artículo 21, el 89 y el séptimo transitorio, que tienen que ver con temas de soberanía, de regular las policías y de facultades de la Guardia Nacional.
Los convocaré siempre al trabajo comprometido y en equipo, y les agradezco mucho a las diputadas y a los diputados, a las senadoras y a los senadores que están aquí, ustedes son quienes tendrán la oportunidad del debate, de la discusión en el pleno y ustedes habrán de aprobar, si así lo hicieren, esta reforma constitucional. Muchísimas gracias y muy buenos días.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, gobernador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Le damos la palabra ahora al gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles.
El gobernador Silvano Aureoles Conejo: Muchas gracias, muy buenas tardes. Agradezco la invitación para acompañar en esta sesión de diálogo sobre esta iniciativa para crear la Guardia Nacional. Agradezco al diputado Mario Delgado, presidente de la Junta. A las y los señores diputadas, diputados; señores senadores, senadoras. A mis colegas gobernadores aquí presentes, al presidente de la Conago, Alejandro Moreno Cárdenas. A todas y a todos, muchas gracias por acompañarnos.
Primero quisiera, a Alejandro le faltó de consumir dos minutos, quiero usarlos yo.
Primero quisiera, antes de entrar específicamente al tema del centro del diálogo, a la discusión de la Guardia Nacional o no Guardia Nacional, para que no se quedara solamente allí el debate, sí o no, sino qué alternativas podríamos tener.
Quisiera compartirles de manera muy breve en unos minutos –si me ayudan con las imágenes del ejemplo del caso nuestro– el caso de Michoacán, compartirles el trabajo que hasta ahora llevamos realizado y qué cosas podemos rescatar en este reto tan grande que es el garantizar la seguridad pública de las y los ciudadanos, amén de que como se dice en los pasillos o en los medios, de que todos modos la Guardia Nacional va, pues vale la pena que nos podamos escuchar y que podamos compartir estas reflexiones.
Luego, ya en lo específico, como lo ha hecho el gobernador Moreno Cárdenas, poderles entregar algunas observaciones ya muy puntuales con relación al dictamen que seguramente ustedes estarán discutiendo en los próximos días.
Gracias, adelante, compañero. Gracias a todos. Saludo con gusto a mis amigos representantes de los medios de comunicación.
Entonces alguna referencia al caso de Michoacán de cómo iniciamos, cómo me tocó a mí iniciar hace tres años, la circunstancia que prevalecía en el terreno de la seguridad pública. Esta imagen ilustra incluso las condiciones en las que se encontraban las instalaciones, las condiciones en las que desarrollaban su tarea los elementos de la policía. Estamos hablando del año 2015.
La siguiente, porque va a ser rápido esto. Los factores identificados en torno a la policía del estado se desglosan ahí. Destaco la infiltración del crimen organizado, etcétera, etcétera –si ustedes puedan leer ahí en la tabla para yo no repetirlo.
La siguiente. Todavía el estado en una situación de mucha convulsión por la actividad de grupos armados de nominados autodefensas, algunos buenos, otros no, y en el mejor de los casos revueltos, porque al final del día este es uno de los grandes riesgos que se corren cuando se integran este tipo de agrupaciones o la participación de la sociedad en tareas que son exclusivas del estado, con cinco cuerpos policíacos o cuerpos de seguridad y una infraestructura muy deteriorada y, en consecuencia, de equipamiento.
La siguiente. Desde el inicio se diseñó una estrategia integral que nos ha permitido avanzar o tener algunos avances en la materia, empezando por el cuidado de lo más importante de esta delicada tarea, que es la persona, que son nuestras y nuestros policías, y el esfuerzo, contenía desde luego, o uno de los elementos importantes fue poner orden en esta dispersión de funciones en agrupaciones distintas, con perfiles diversos y también con actividades diversas.
La siguiente. Los componentes que tenía el sistema, no me detengo en ello, pero lo importante que destaco para mejorar o acompañar este esfuerzo del mejoramiento de las capacidades y el perfil de los policías, tuvimos que incrementar en promedio casi 100 por ciento los salarios, luego en un escalafón establecido, que nos ha permitido mejorarle sus percepciones, pero también acompañarlos con programas de seguridad social, vivienda, servicio médico, etcétera, etcétera. Y, desde luego establecer los mecanismos, los protocolos para la retabulación, para el escalafón y, desde luego, los protocolos de actuación.
El Estado de Fuerza era un estado muy, muy disminuido, les estoy hablando de poco más de mil policías para un estado con la superficie y las condiciones de inseguridad de Michoacán, pues notoriamente insuficientes. Lo que hemos hecho en estos casi tres años ya de que se inició la formación de la policía, pues ha sido aumentar el Estado de Fuerza y con ello mejorar la capacidad del estado, y el fortalecimiento institucional.
Hoy hemos aumentado en más del 200 por ciento el Estado de Fuerza, junto con ello, una estrategia de regionalizar la actuación de los cuerpos de seguridad, en virtud de que son condiciones distintas. Michoacán, de acuerdo a la Ley de Planeación del estado tiene 10 regiones bien definidas, en cada una hay condiciones específicas y, en consecuencia, trabajar la estrategia en base a las características de cada región, no podemos hacer lo mismo en la Tierra Caliente o en la Costa, que lo que hacemos a la capital del estado o en el Bajío, por ejemplo.
Y aprovechamos esta regionalización que está en la Ley de Planeación, y que contiene una serie de variables, desde luego la poblacional.
La siguiente. Esto nos ha llevado a la construcción de complejos administrativos y policiales en cada una de las regiones. Por un lado, estrictamente lo que tiene que ver con las fiscalías regionales o de distrito, las comandancias regionales o de distrito de la policía, y una figura de gobierno para atender el tema de servicios.
En este momento tenemos, desde luego, avances en la capital, 7 de estos concluidos y dos a punto de concluirse, y dos todavía por iniciar, particularmente en la región de Zamora y La Piedad. Ustedes van a poder ver las imágenes de, la primera imagen que les compartí, en donde está un compañero, elemento de la policía, en una condición muy precaria, a las instalaciones que tienen ahora para el desarrollo de sus actividades.
La siguiente, por favor. Junto con ello con el complejo policial, tenemos un C5 espejo en cada una de estas regiones con la misma tecnología que el C5 central, que nos permite en tiempo real y con el uso de la mejor tecnología, poder monitorear en todas las regiones y después hacer el concentrado en el centro, en el complejo central y con ello planear todas las actividades que tenemos que hacer en torno a las tareas de seguridad –la siguiente–, este que está, tenemos el otro que está funcionando y está a punto de terminarse, que trae un avance de un 80 por ciento que será cuestión de unos dos, tres meses que quede debidamente concluido y con ello cerrar la pinza –la siguiente– a través de esta red de fibra óptica de todo el territorio.
Desde luego están las regiones más apartadas del estado a través de mecanismos inalámbricos que nos permitan tener la facilidad de acceso a imagen, voz y datos para la actuación correspondiente.
Lo mismo que hemos reforzado la instalación de videocámaras, una meta de 10 mil, llevo 6 mil y tantas, esperando cumplir la meta en los próximos meses, es decir, enfocado a hacer uso de la tecnología y de la inteligencia más que la presencia propiamente de las patrullas o los elementos de la policía.
Aquí es importante destacar dos cosas que han sido también pilar importante de esto: una, reforzar el área de formación policial. Creamos la facultad de las ciencias policiales en coordinación con la Universidad Michoacana. Estamos a punto de graduar la primera generación de expertos en los temas policiales, porque una debilidad muy fuerte que tenemos es que no hay mucha formación de mandos policiales, en todos los niveles, sobre todo municipios y entidades federativas. Y el otro es que le hemos puesto especial atención a la modernización y desarrollo de capacidades de la Unidad Antisecuestros que hoy por hoy nos permite asegurar que es una de las mejores y más equipadas y más eficientes del país. Termino ahí este breve ejemplo.
Y me paso ahora al tema que nos convocan, a dar una opinión sobre el tema de la Guardia Nacional. Si a mí me dijeran de entrada, ¿qué el Ejército se haga cargo de la seguridad? No, porque la seguridad pública es tarea de los gobiernos civiles. La responsabilidad de garantizar seguridad pública es de los aparatos civiles, de los gobiernos civiles y de los cuerpos de seguridad bajo las órdenes de los civiles.
Que si el Ejército y la Marina nos han ayudado. Sí, y mucho. Yo hago mías las palabras que expresó aquí el gobernador Moreno Cárdenas, de nuestro reconocimiento al Ejército, a la Marina y la Fuerza Aérea porque han sido un pilar fundamental para recuperar la estabilidad en muchas regiones del país, y nuestro caso, Michoacán, es un ejemplo de ello, pero llevamos 12 años así y el problema no se ha resuelto.
Sí tiene que haber un marco legal que permita la actuación de las Fuerzas Armadas en estas tareas que son muy delicadas. Sí, es correcto, debo de confesar aquí públicamente que yo estuve a favor de la Ley de Seguridad Interior, porque mientras se requiera la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles haciendo tareas de seguridad pública, se requiere de un marco jurídico que regule su actuación, de eso no hay duda.
Pero, pensar que vamos a resolver el problema de seguridad pública haciendo uso del Ejército y la Marina, falso, eso no se va a resolver con el Ejército y la Marina. Porque, es más, déjenme decirles una cosa, ahora es muy grave, nosotros mexicanos tenemos un alto reconocimiento por nuestras Fuerzas Armadas. Hoy por hoy la Marina tiene una aceptación y reconocimiento de la sociedad cercana al 90 por ciento, el Ejército del 85 por ciento. Es altamente peligroso que dos de las instituciones más reconocidas y respetadas por los mexicanos las mandemos ahora a hacer tareas de seguridad pública.
¿Por qué? Porque pues es nuestro último asidero. Si mandamos al Ejército y la Marina, y el tema no se resuelve, como no se va a resolver por esa vía, entonces debiésemos tener el cuidado suficiente para no desgastar y llevar a una situación de mayor riesgo a nuestras Fuerzas Armadas, que tienen una tarea y una misión distintas.
Segundo. La tendencia en el mundo es al revés, es fortalecer los cuerpos de seguridad civiles. Casi el 80 por ciento de los países agrupados en la ONU tienen cuerpos de seguridad civiles haciendo la tarea correspondiente.
Son muy contados los ejemplos donde se ha recurrido este mecanismo de guardia civil o Guardias Nacionales, en algunos casos son modelos mixtos, pero particularmente los países más avanzados tienen cuerpos de seguridad, civiles, y bajo el mando de civiles.
Luego, hoy no debiera preocuparnos tanto ser el dilema una cosa o la otra. Creo que es perfectamente compatible caminar en pistas paralelas. Primero el reto que tenemos, señoras, señores, legisladores, es de fortalecer las policías locales. Necesitamos fortalecer las policías municipales y estatales. Y paralelamente, en virtud de que el problema es complejo, pues hacer o apoyarnos en el Ejército y la Marina, regulado, si se llama Guardia Nacional o como se llame, con una regulación específica, pero de manera temporal.
Tendría que estar establecido específicamente en la reforma, en algún transitorio, que la presencia y las tareas de la Guardia Nacional en funciones de seguridad pública son transitorias, mientras se fortalecen los cuerpos de seguridad municipal y estatal, porque de otra manera no vamos a resolver el problema.
Segundo o tercero, ya perdí el orden. Otra cosa que es fundamental, la Guardia Nacional, como todo parece indicar que se creará, debe estar regulada por el Sistema Nacional de Seguridad Pública, porque pensar en dejar literalmente la responsabilidad y el mando de este cuerpo de seguridad bajo el régimen militar, señoras y señores, es altamente riesgoso para el país y desde luego para las instituciones involucradas.
Y vaya que no me cansaré de agradecer y repetir mi reconocimiento a las Fuerzas Armadas, pero debemos tener claro: que no es su función, que no es su tarea. Y, en consecuencia, si la Guardia Nacional se integra con la policía militar, con la policía naval y con la policía federal ese cuerpo debiese pasar a un mando civil y que continúe su proceso de formación, porque –lo dijo también aquí Alejandro– formar un policía no se hace de la noche a la mañana.
Pensar que con meter a los elementos del Ejército a hacer tareas de seguridad se va a resolver el problema, no, señores, y se los digo por experiencia. Sí es de mucha ayuda. Y, si trabaja uno de manera coordinada, la cosa es diferente. Pero, dejar esa tarea exclusivamente en manos de las Fuerzas Armadas, no es lo más prudente. Excepto si es una medida temporal, con reglas muy claras y bajo el mando civil. O, si es una medida temporal, puede quedar como está ahora o como está planteado el mando, bajo las órdenes de mandos militares, pero pensar hacia el futuro en esa regla creo que no es conveniente.
Y, por último, reiterar pues toda nuestra disposición para aportar los elementos que consideramos debiese considerarse de manera muy puntual. Esta es una reflexión general, pero ya hacerlo de manera muy puntual con respecto al dictamen. Que ojalá –como lo dijo aquí el presidente Mario Delgado–, nos reciban, nos ayuden, nos reciban las observaciones y que esto ayude a tener más elementos para lo que se haga, se haga de la mejor manera.
Creo que es bueno escuchar las diversas voces en torno a este tema que se vuelve muy sensible, pero, insisto, a mí juicio el punto de partida o el centro debiese o una conclusión de esta discusión es que no choca una cosa con la otra.
Es decir, empecemos a fortalecer las policías municipales y estatales y paralelamente se trabaja en un cuerpo que dará mayor cobertura y dará mayor fortaleza, pero no pensar que esa es la alternativa de que esa es la solución. Creo que en todo caso se complementan, pero habría que cuidar lo primero: las policías municipales y estatales.
Porque si revisamos, bueno, acaba de pasar un reportaje de distintos estados de la República, hay estados donde los municipios tienen un policía o dos policías o cinco policías, cosa que no es la excepción o no somos la excepción, cuando llegué al gobierno de Michoacán, solo cinco municipios tenían policía. En esas condiciones es imposible que se pueda garantizar la seguridad de las y los ciudadanos.
Por lo demás, agradezco la invitación para compartirles estas reflexiones y lo que resulte sea para bien del país, por el bien de la ciudadanía pública, de los mexicanos. Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carillo: Gracias, gobernador.
El presidente diputado Mario Delgado Carillo: Tiene ahora la palabra el gobernador de Guerrero, Héctor Antonio Astudillo Flores.
El gobernador Héctor Antonio Astudillo Flores: Muchísimas gracias, ciudadano presidente de la Junta de Coordinación Política, diputado Delgado. Senadores, senadoras, diputadas, diputados, señoras y señores integrantes de organizaciones, compañeros gobernadores.
Lo primero que quiero es expresarles mi reconocimiento por este ejercicio me parece de lo más importante. Un tema tan delicado merece, por supuesto, escuchar muchas voces y creo que la voz de los gobernadores bien vale la pena escucharla.
Traigo un documento que me permití hacer, y que lo voy a entregar al presidente de la Junta de Coordinación Política, y haré una síntesis de este documento. Lo primero que quiero decirles es que leí la iniciativa y que yo mismo, junto con el gobernador de Campeche, presidente de la Conago, tenemos un comentario que queremos dejar muy claro en esta ocasión en relación al dictamen como está, lo haré casi al final.
Me parece que es importante buscar una alternativa, yo comparto lo que ha expresado el gobernador Aureoles, el nacimiento de la Guardia Nacional no va a resolver el problema de la inseguridad, pero algo tenemos que hacer. Dejarlo como está sería un acto verdaderamente irresponsable de todos los actores políticos de este país.
Todos los días conocemos y observamos el problema de la inseguridad no es de un estado, ya está en el país, y lo vemos todos los días en los noticieros de la televisión y del radio. A veces pega en el sureste, a veces pega en el centro y a veces pega en el norte, no hay limitación para el territorio, no hay limitación para la pluralidad, no hay limitación para los derechos humanos.
Vale la pena, entonces, señoras y señores, senadoras, senadores, diputados y diputadas, encaminar esta iniciativa hacía un dictamen que reúna las mejores condiciones para generar el nacimiento de la Guardia Nacional.
Quiero decirles a ustedes que nosotros también expresamos nuestro reconocimiento a las Fuerzas Armadas. No voy a hacer un diagnóstico de Guerrero, voy a abordar el tema precisamente del nacimiento de la Guardia Nacional.
Y yo creo que en esta ruta vale la pena reconocer que tanto la Marina como la Defensa Nacional han estado en el territorio. Lo que hay que hacer es buscar cómo darles elementos jurídicos de participación inicial.
Yo también estoy de acuerdo que no debe militarizarse el tema de la Guardia Nacional en el país, pero se tiene que empezar con ellos, y el planteamiento precisamente de la iniciativa, y seguramente lo va a regular la ley secundaria, es que se vaya cubriendo de civiles, principalmente jóvenes para integrar la Guardia Nacional.
Y yo espero que en esta convocatoria que se ha hecho y que ha recibido críticas, por el momento en que se hizo, pues esta convocatoria realmente tenga una respuesta favorable de muchos ciudadanos que quieran participar en la Guardia Nacional.
Entonces yo creo que el marco del tema de que participen los civiles, debe darse en esta propia o como consecuencia de esta propia convocatoria.
Creo que debo de decirles también que yo también defendí la Ley de Seguridad Interior. Hoy creo que el tema del nacimiento de la Guardia Nacional no solamente es una prioridad, creo que es urgente en el país, pero también hay que revisar algunos detalles.
Vale la pena que les diga yo que hay tres temas o tres leyes que seguramente va a ser importante revisar. ¿Cuáles son estas? Las leyes reglamentarias que seguramente después de la aprobación, si ustedes como Congreso lo aprueban, tendrán 90 días para estas leyes.
Ahí en esas leyes, en las leyes reglamentarias, creo que el Congreso, con todo respeto, debe ser muy puntual, independientemente de la reforma nacional.
¿Cuáles son estas leyes? Una de ellas es la Ley precisamente Orgánica de la Guardia Nacional, la Ley de Uso de la Fuerza y la Ley General del Registro de Detenciones.
Finalmente les diría que la creación de la Guardia Nacional es un elemento muy significativo del Plan Nacional de Paz y Seguridad 2018-2024. Y que yo también creo que todas estas acciones que tendrán que ver con la Guardia Nacional, hay que enfocarlas también en el marco de acciones de desarrollo social, en oportunidades para jóvenes que puedan sustituir las tentaciones de la inseguridad, y por supuesto, creo que esta creación de la Guardia Nacional es una figura novedosa que debe ser híbrida. ¿A qué me refiero? Fundamentalmente a la participación de la sociedad civil, y debe tener un componente fundamental que es el tema de la evaluación, de la evaluación y revisión, y me regreso e insisto, debemos de iniciar con la Marina, debemos de iniciar con la Defensa Nacional, pero también la Marina y la Defensa Nacional y la Policía Federal deben dejar de ir dejando poco a poco en manos de los civiles este tema.
Por eso es muy importante, señoras y señores, que la Secretaría de Seguridad sea la responsable de la operatividad de la Guardia Nacional.
Decía yo que abundaríamos en un tema que nos parece muy importante, en relación a la reforma constitucional, artículo 21, en el dictamen dice, artículo 21: La investigación de los delitos corresponde al Ministerio Público, las policías y la Guardia Nacional.
Nosotros consideramos que la investigación de los delitos no debe recaer en la Guardia Nacional. Nos parece conveniente, oportuno e importante decir que la Guardia Nacional una de las características que le debe hacer brillar, es su facultad de primer respondiente que no la tienen.
Entonces ¿qué es lo que pasa? Llegan donde hay delito y no pueden actuar. Hay una persona asesinada y no pueden más que acercarse, pero no pueden actuar. Entonces, me parece muy importante que este tema que estamos comentando lo conozcan ustedes, por parte de los gobernadores, en este caso del gobernador de Campeche y de un servido. Y les quiero también comentar que los gobernadores priistas estamos totalmente de acuerdo de impulsar el nacimiento o que ustedes puedan acordar en su momento y en las consideraciones que ustedes consideren conveniente el nacimiento de la Guardia Nacional.
Finalmente, señoras y señores, el problema de la inseguridad no es de un estado o de un grupo de municipios, es un problema nacional. El problema de México no es de ideologías, tampoco es un problema financiero, la violencia golpea todos los días, la violencia no respeta pluralidad, horario, ni región, ni territorio, no respeta derechos humanos.
Quiero finalmente agradecer mucho la oportunidad de ser escuchado en esta ocasión con este tema tan importante, les deseo a las senadoras, a los senadores, a las diputadas y a los diputados en verdad mucho éxito y mucha precisión en este tema tan importante y de tanta trascendencia para los mexicanos y las mexicanas, gusto en saludarles. Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, gobernador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Tiene ahora la palabra el gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servién.
El gobernador Francisco Domínguez Servién: Muy buenas tardes a todas y a todos. Saludo al diputado Mario Delgado Carrillo, presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados de esta LXIV Legislatura.
Asimismo, a mi compañero y amigo gobernador Alejandro Moreno Cárdenas, presidente de la Conago y gobernador de Campeche, al mismo tiempo mi compañero gobernador de Colima, al gobernador de Guerrero, al gobernador de Michoacán y al gobernador de Zacatecas.
Saludo y agradezco a las diputadas y a los diputados de esta LXIV Legislatura de este Honorable Congreso de la Unión. A las senadoras y a los senadores de la LXIV Legislatura del Senado de la Repúblicas, amigas y amigos todos, muy buenas tardes.
Agradezco esta distinción de la Junta de Coordinación Política de esta Cámara de Diputados, a su vez reconozco la valía de este proceso de Audiencias Públicas en el marco de la aprobación de reformas a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia de la Guardia Nacional.
Partamos de una coincidencia, la participación ciudadana constituye un eje esencial para la formulación de políticas públicas derivadas de acuerdos constitucionales, reconozcamos también la incidencia fundamental de la interacción de políticos y operadores institucionales técnicos. Las decisiones de los primeros no deben de pasar por alto el conocimiento especializado de estos.
¿En este ejercicio de consulta deben de ser consideradas todas voces? Sí, y debe de validarse con el conocimiento de expertos nacionales e internacionales. México exige políticas públicas de buenas intenciones rigurosas pero bien implementadas. México demanda congruencia política y técnica.
La historia de nuestro país tiene una génesis anterior a cualquiera de sus transformaciones. La primera Constitución Política, la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos de 1824, contempla la unión de estados libres y soberanos sin dependencia o subyugación a un Poder central.
La Guardia Nacional como una institución diseñada en el marco constitucional por la política de seguridad del gobierno federal, debe mantener el respeto a la soberanía de los estados, en los estados a quien nos corresponde la competencia originaria de mantener la paz y el orden público.
En la Constitución de Querétaro afirmamos el enfoque social de la seguridad que promueve el gobierno federal, en el artículo 2 de la Constitución local. Para los queretanos el derecho a la seguridad, a la protección de sus bienes y a vivir en un entorno de tranquilidad social, libertad, paz y orden público, son derechos fundamentales que están constituidos y se reconocen en favor de todas las personas.
En el país existen estados que sí estamos haciendo la tarea, las etiquetas y generalizaciones no corresponden al respeto político que se deben los iguales. Cambiemos el tono del discurso político, no todos los policías son corruptos. En Querétaro los policías ofrecen su valor y arriesgan la vida por los queretanos, por los mexicanos para generar paz, legalidad y tranquilidad.
La igualdad social a la que aspiramos los mexicanos debe garantizarse con la seguridad pública, responsabilidad de los tres niveles de gobierno. Es necesario medir lo que se hace, pero no con adjetivos, sino con herramientas y parámetros eficaces que revelen las realidades de las instituciones.
Promover la denuncia, por ejemplo, implica tener mayor conocimiento del delito. Solo es por la denuncia como se puede esperar justicia penal. Sin embargo, confundir el registro de la denuncia con la incidencia delictiva como hoy se hace, es uno de los errores más graves que se han cometido desde que se trata de medir la frecuencia delictiva en el país, desde hace ya más de 20 años.
Dejemos atrás el registro simulado de delitos, dejemos atrás los criterios políticos, promovamos la denuncia como acceso a la justicia penal. Cerrémosle la puerta, sí con todo, a la impunidad y abramos el fortalecimiento de capacidades institucionales de acuerdo a las condiciones de cada entidad, sin generalizar y sin dar tanto trato igualitario a quienes tienen condiciones diferentes.
Que se mida con herramientas, que los criterios de distribución de recursos a los estados y municipios y a la misma federación respondan a las capacidades institucionales. Por más de 20 años la fórmula población-incidencia delictiva demostró o ha demostrado que es errónea.
Ningún estado con grandes problemas de inseguridad ha mejorado sustancialmente en dos décadas, porque no hay una métrica aceptada y sobre todo legitimada por la sociedad. En cambio, los estados donde la población es menor y la incidencia delictiva controlada, los recursos son correlacionalmente restringidos.
Abramos los ojos, la fortaleza institucional es el mecanismo real que hará que la coordinación de los tres niveles de gobierno sea más eficaz y garantice la paz y la tranquilidad de todas y todos los mexicanos.
La coordinación institucional referida por el artículo 21 constitucional y el principio de división de Poderes consagrados en el artículo 49 y 116, párrafo primero, determinan que el reparto de funciones y atribuciones encomendadas a cada uno de los Poderes constituye una coordinación y colaboración para lograr un equilibrio de fuerzas de control recíproco que garantice la unidad política del Estado.
El poder es único y descansa en el pueblo, pero las funciones se distribuyen para alcanzar los fines del Estado. Y uno de los fines del Estado es proteger directamente los derechos reconocidos por la propia Constitución. Y uno de los derechos más importantes que tenemos conocidos en la Constitución es la seguridad y la tranquilidad de las mexicanas y los mexicanos.
El nacimiento del constitucionalismo progresista se dio en el estado de Querétaro y desde ese origen una estrategia tan importante, como es la construcción de la Guardia Nacional, debe sustentarse en el respeto a la soberanía de los estados, apoyando el fortalecimiento de las instituciones de seguridad.
Su presencia no debe ser generalizada y su intervención debe atender la situación particular de emergencia de cada entidad, con una intervención con objetivos claramente estipulados en el artículo 21 constitucional, atendiendo principios de razonabilidad, temporalidad y gradualidad.
Por último, el nuevo cuerpo de policía adscrito a las instancias federales de seguridad definió el proyecto de reforma con esta vocación por la seguridad pública y no por la seguridad nacional, nunca debe alejarse del actual mandato constitucional. Que se caracterice por su disciplina y por su profesionalismo, sí, pero esencialmente que se encuentre al mando de funcionarios de condición civil, como una de las garantías materiales para asegurar lo que se dice tanto en este Congreso: el respeto a los derechos humanos.
Señoras y señores, escuchemos todas las voces para enriquecer el debate y las políticas públicas de nuestro país, pero sobre todo asumamos con responsabilidad, con profesionalismo y vocación federalista los grandes retos de la sociedad mexicana. Gracias por su invitación.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Tiene ahora el uso de la palabra el gobernador de Colima, José Ignacio Peralta Sánchez.
El gobernador José Ignacio Peralta Sánchez: Muchas gracias. Muy buenas tardes. Saludo con todo respeto al presidente, el diputado Mario Delgado Carrillo, a los integrantes de la Junta de Coordinación Política, a las señoras y señores diputados, al gobernador de Campeche y presidente de la Conago, Alejandro Moreno Cárdenas, así como a los colegas gobernadores que aquí nos acompañan y a los invitados especiales.
Agradezco también la invitación a participar en este ejercicio de diálogo como gobernador del estado y con la representación del pueblo colimense.
No obstante que el diseño constitucional asigne en los mismos términos la responsabilidad de la política pública que hoy nos ocupa a los tres niveles de gobierno, se identifica una tendencia histórica confirmada por la percepción ciudadana que posiciona a los gobiernos estatales en el centro del debate.
Es por ello que, más allá de cualquier esquema de colaboración institucional, reitero un reconocimiento a la Junta de Coordinación Política por la invitación a emitir cometarios y opiniones en torno a una iniciativa que busca resolver la crisis de inseguridad en el país.
El gobierno del estado de Colima se mantendrá atento a toda iniciativa orientada al fortalecimiento del Estado de derecho y al combate de la inseguridad. Esa inseguridad que tanto lastima las expectativas de nuestra sociedad y debilita a la vida institucional de México.
Por ello, valoramos debidamente las propuestas de reformas constitucionales tendientes a la creación de la Guardia Nacional.
Al tema de seguridad no debemos regatearle nada, mucho menos intentar politizar una materia que genera dolor en las familias mexicanas.
Por ello lo quiero dejar claro, normar y definir la Guardia Nacional es un paso necesario y celebro este ejercicio parlamentario responsable que estoy seguro que concluirá con éxito.
Como es lógico también, surgen algunas interrogantes y preocupaciones que quisiéramos expresar en esta oportunidad que agradecemos anticipadamente.
Para dar orden básico a esta breve intervención voy a exponer primero algunos temas que nos transmiten coincidencia con nuestras propias valoraciones y enseguida algunas más que nos generan dudas e inquietudes para contribuir al debate.
Estamos de acuerdo en que se ha debilitado la capacidad de respuesta del Estado frente al auge delictivo. También en que se han confundido los conceptos de seguridad nacional, seguridad interior y seguridad pública como resultado de medidas que se concibieron como provisionales y que se prolongaron por años.
Coincidimos además que la delincuencia, la operación de los grupos delictivos y en consecuencia, la inseguridad pública son fenómenos originados por causas diversas, es decir, son multifactoriales por lo que las respuestas del Estado también deben serlo. No limitándose a lo estrictamente policial sino considerando elementos sociales y económicos.
Por ello, estamos de acuerdo en que se requiere una institución policial profesional, eficiente y de carácter nacional. Y por supuesto, creemos que estas delicadas tareas exigen de la participación activa de los institutos armados, es decir, del Ejército mexicano, de la Fuerza Aérea y de la Marina Armada de México.
Nos parece, de igual manera, que la iniciativa de creación de la Guardia Nacional puede ser una adecuada respuesta institucional para responder al desafío de la supremacía del Estado frente a los poderes extralegales y delincuenciales, así como a los fenómenos antisociales.
Sin embargo, también debemos considerar algunos aspectos que son dignos de reflexión. Primero, seguir incorporando el concepto preventivo dentro de las funciones de una institución de seguridad, como lo sería la Guardia Nacional. Las tareas de prevención son más complejas y exigen de una participación combinada de diversas instituciones.
Consideramos que así como existe un Sistema Nacional de Seguridad, también debe crearse un Sistema Nacional de Prevención que establezca protocolos y líneas de acción para atender la complejidad del reto que se enfrenta.
Hasta el momento la prevención no ha tenido la debida atención y apoyo como vía de solución a los problemas de seguridad.
Segundo. Otro aspecto que nos llama a la reflexión es que la Guardia Nacional poseerá dos adscripciones, en caso de ser aprobada en los términos presentados.
A la Secretaría del ramo en Seguridad correspondería la planeación, programación y ejecución de sus funciones, pero a la vez establece que dependería de la Secretaría de la Defensa Nacional en lo que respecta a la estructura jerárquica, disciplina, régimen de servicios, ascensos, prestaciones, profesionalización y capacitación. Esta dualidad en el funcionamiento de la Guardia Nacional es poco clara y puede ocasionar conflictos en sus fines y operaciones.
Una institución como esta debe gozar desde un inicio de la mayor claridad en su mando para que pueda generar los resultados deseados, sin el riesgo latente de que surjan conflictos internos que puedan debilitarla.
Tercero. Otro tema interesante es el propósito de articular la información que generan las instituciones de seguridad y sus centros de monitoreo a través de un sistema central de administración. Eso implica que toda información que generen instancias como los conocidos C4 o C5, se pondría a disposición del gobierno federal –lo cual no hay mayor discrepancia y podemos estar de acuerdo–; pero entonces resultaría justo que los estados recibieran recursos extraordinarios para impulsar estos centros de monitoreo, considerando que la información generada pasará a formar parte de un sistema central.
Y cuarto. La preocupación más evidente para nosotros con relación a este propósito de reforma constitucional, es el respeto al federalismo. Al respecto debemos recordar que nuestra nación experimenta desde el siglo XIX, pasando por todo el siglo XX, y hasta el momento, una tensión irresuelta entre fuerzas que tienen al centralismo en la toma de decisiones y otras fuerzas que tienden a la distribución federal de esas mismas decisiones.
Quisiéramos apreciar en esta iniciativa un mayor contenido federalista. Por ejemplo, nos parece riesgoso que el secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y el Consejo de Seguridad Interior –de nueva creación y aún no reglamentado–, puedan decidir mediante un diagnóstico la capacidad de las corporaciones de seguridad estatales y municipales; intervenir en ellas y dado el caso según el criterio de un segundo diagnóstico, desaparecerlas para que la federación se haga cargo de sus funciones, descontando los recursos federales correspondientes para reorientarlos.
Así se dice textualmente en el transitorio Séptimo aprobado por la Comisión de Puntos Constitucionales, y cito: “La Secretaría de Hacienda y Crédito Público, con base en el informe que remite el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, descontará del rubro de participaciones federales en el Ramo de Seguridad Pública, al gobierno de la entidad o del municipio respectivo, el monto que corresponda por la prestación del servicio de seguridad pública que realiza la federación a través del cuerpo de seguridad respectivo”. Concluye la cita.
Este enunciado puede dar lugar a numerosas controversias y se convierte en los hechos en un instrumento de intervención. En efecto, el gobierno federal que en este momento podemos identificar como un gobierno central, podrá decidir qué policías locales persisten y cuáles desaparecen, restando recursos financieros al respectivo municipio o entidad. En el mismo sentido, se resta a los gobiernos locales la facultad de reglamentar a las policías auxiliares trasladándose dicha función al propio gobierno federal.
Esta iniciativa puede ser decisiva en términos históricos, atiende la más estridente exigencia ciudadana. Es sin duda la política pública que mayores retos presenta, que debe ser constructora de bienestar social por medio de la reconstrucción también del tejido social.
No es necesario entonces que funcione como un modelo de intervención centralista en las entidades y municipios, restando facultades y reduciendo recursos indispensables para la operación de las instituciones de seguridad. La seguridad, insistamos en ello, es una función de los tres órdenes de gobierno y no solo de uno de ellos. Recordemos que la concentración de facultades y el centralismo, no necesariamente se traducen en efectividad en las políticas públicas. Recordemos también que en nuestro país históricamente el centralismo es una tendencia conservadora y el federalismo una tendencia liberal y progresista. Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, gobernador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Le corresponde el turno ahora al gobernador de Zacatecas, Alejandro Tello Cristerna.
El gobernador Alejandro Tello Cristerna: Muchas gracias. Muy buenas tardes a todos, gracias por la invitación a esta audiencia pública, señores legisladores, diputados, senadores. Diputado presidente, Mario Delgado; presidente de la Conago, gobernadores, medios, amigos todos.
Devolver la paz a las familias mexicanas es una tarea impostergable. Politizar y partidizar un tema que está lastimando profundamente a nuestro país, hoy ya no es opción. Abatir la violencia en México es una asignatura multifactorial. Hoy aquí se discute solo un elemento, hagámoslo con compromiso por el país que queremos para el hoy y para el mañana.
Ante el proyecto de decreto en materia de Guardia Nacional, permítanme opinar a nombre del Grupo de Coordinación en Seguridad del Estado de Zacatecas, lo siguiente. Sí a un nuevo modelo en materia de seguridad. Sí a la Guardia Nacional. Pero una Guardia Nacional muy clara, con una claridad de mando y con base en las discusiones internas de nuestra humilde experiencia como Grupo de Coordinación, consideramos que la opción no es el mando militar, vamos por un mando civil, por muchas razones que ya se han expresado aquí.
Pero salen muchas dudas, no solamente del dictamen, sino de todo lo que va a ser el esquema y nos preguntamos, ¿qué va a pasar con las policías municipales? ¿Dónde van a quedar? ¿Dónde va a quedar la policía de proximidad? Esa policía que quienes me antecedieron en el uso de la voz de manera muy clara lo han dicho, prácticamente ha desaparecido y, lo peor, en muchos de los casos tienen nexos con la delincuencia. Esas policías realmente las tenemos que fortalecer, porque son el ente más cercano al ciudadano.
Teniendo a la vista los requisitos de reclutamiento para la Guardia Nacional que emitió el gobierno federal, nos hacemos la pregunta si sus integrantes no se someterán a los requisitos de control y confianza para el ingreso, control y permanencia que hoy tenemos las instituciones policiacas. Ese ha sido uno de los grandes obstáculos y no con ello estoy diciendo que esté mal, pero todos para poder conformar policías robustas, nos enfrentamos a la gran problemática de que los elementos pasen los controles de confianza. Creo que es fundamental dejar eso muy claro, cómo va a aplicar.
La temporalidad debe ser muy clara, no a la perpetuidad, no a la permanencia, tiene que ser con base en las necesidades, porque es lo que hoy tenemos, tiene que ser algo pasajero.
Nos hacemos muchas preguntas ya en lo particular y cada estado tiene su propia realidad. Les presento la de Zacatecas, un estado en donde en los últimos se invirtieron muchos cientos de millones de pesos en cuarteles del Ejército, ¿qué papel van a jugar esos cuarteles, en el entendido que la Guardia Nacional es un extracto de la milicia, en donde también se conforma con la Marina, pero con policías civiles? Esos estados, como el mío, ¿podrán los cuarteles albergar a la Guardia Nacional? ¿Podrán los civiles estar haciendo uso de ellos, siendo que hoy son, obvio, de uso exclusivo del Ejército?
En términos de la última sentencia de la Corte Internacional de Derechos Humanos, la participación activa de las Fuerzas Armadas en labores de seguridad ciudadana debe contar con órganos civiles de fiscalización de sus labores. La iniciativa no lo contempla.
La iniciativa también habla de las policías auxiliares que hoy para nosotros resultan de manera muy práctica un colchón cuando nuestros elementos por alguna razón no pasan los controles de confianza. En lugar de mandarlos a la calle, en donde se pueden convertir en potenciales delincuentes lamentablemente, las policías auxiliares han jugado un papel importante, y hoy la iniciativa faculta al presidente de la República a su reglamentación en algo que consideramos se debe de valorar porque tiene a final de cuentas una aplicación muy local.
Más allá de este dictamen –sigo hablando de todo el esquema–, consideramos que es muy importante y máxime, señores diputados, ustedes que aprueban un Presupuesto, el otorgar recursos a las policías coadyuvantes porque de lo contrario, vuelvo al tema con el que inicié, las policías municipales estarían destinadas a su desaparición.
Consideramos que la investigación de los delitos le compete única y exclusivamente a las fiscalías en donde en muchos de los estados –me incluyo– hemos pasado a la autonomía de las mismas y en donde, por experiencia propia, lo comento, en varias reuniones con procuradores o fiscales de este país, tenemos que fortalecerlos presupuestalmente. A final de cuentas la delincuencia proviene en muchos casos de la impunidad. La impunidad genera precisamente ello. Las claves van a estar en las leyes secundarias. A final de cuentas ahorita estamos hablando de un marco constitucional y estamos en sus manos.
La Guardia Nacional consideramos que es muy importante, pero también que sólo es un ingrediente, que sólo es una parte, pero que tenemos que ir a los orígenes, a la casa, a la familia, a la escuela, a una gran cruzada de prevención en este país.
Finalmente yo entregaré todas las inquietudes de mi estado, del grupo de coordinación y de su servidor del articulado de esta Guardia Nacional al diputado presidente de la Junta de Coordinación Política. Por su atención muchas gracias, muy buenas tardes.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Muchas gracias, gobernador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Con su participación terminamos la exposición por parte de los gobernadores. Abro la mesa para la participación de diputados y senadores. También han llegado ya muchas preguntas de las personas que nos visitan aquí, y las estamos distribuyendo a partir de a quién han sido dirigidas. Entonces abrimos la participación de diputados y senadores para tratar de terminar a las 14:15 horas, ¿les parece?
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Adelante, diputada. Después el Senador Pedro Haces también pidió la palabra, el senador Miguel Ángel Mancera, el diputado Marco Antonio Adame, Tonatiuh Bravo y Eduardo Ramírez también. Adelante, diputada.
La diputada Lizbeth Mata Lozano: Gracias, diputado. Hacer algunas precisiones, como bien lo señaló ya nuestro coordinador del Grupo Parlamentario del PAN, en relación a este dictamen de Guardia Nacional.
Primero, celebrar que estemos generando un ejercicio de parlamento abierto. Creo que es de gran importancia no solamente para este Congreso, sino para la sociedad en general y que estas conclusiones, además de las ya expresadas por organismos de la sociedad civil, por gobernadores y las que se van a expresar en esta semana, no solamente sean escuchadas sino atendidas.
Creo que nuestra responsabilidad como Congreso es escuchar, generar una conclusión importante y que sea anexada esta gran participación de todos, dentro del dictamen de Guardia Nacional. Esa sería la mejor conclusión que podamos generar, no solamente dejando el dictamen en el estado en que se encuentra actualmente.
Segundo, creo que tenemos responsabilidad de generar legalidad y certeza. ¿Y a qué me refiero con esto? Es importante señalar, como ya se ha dicho en medios de comunicación, que la convocatoria hecha por el presidente electo, lamentablemente no genera una legalidad y una certeza, porque precisamente estamos hoy en día en la discusión y la aprobación de esta Guardia Nacional, y sí es importante dejarlo en la mesa para darle certidumbre jurídica a los ciudadanos.
En los temas ya de fondo del tema de Guardia Nacional, primero coincidimos, y me parece que todos los gobernadores coincidieron hoy en día, primero en la no militarización del país, creo que es importante señalarlo.
Segundo, en el fortalecimiento de las policías civiles, no generar un desplazamiento de ellas con esta Guardia Nacional, sino un fortalecimiento en todos los sentidos, en los salarios, en las estrategias, en sus herramientas, porque son la base principalmente para construir una seguridad pública hacia el ciudadano.
La coordinación, sin duda, con los gobernadores y los alcaldes, generarles una certeza jurídica de esta coordinación tiene que ser muy trascendental.
¿Cuál es el enfoque principal de esta Guardia Nacional? La Seguridad Pública, sin embargo, la seguridad pública es una responsabilidad de gobernadores y alcaldes. Creo que esta precisión es importante, porque si bien la Guardia Nacional tiene que tener un objetivo que en este dictamen no lo presenta, es el combate a la delincuencia organizada.
¿Cuáles son las coincidencias? La preocupación y el mayor problema del país es la inseguridad. La coincidencia por supuesto está en el combate a la delincuencia organizada, en brindar estrategias de seguridad pública asertivas, pero creo que estamos confundiendo ambas, la necesidad expresa de los gobernadores en un enfoque mayor hacia la delincuencia organizada y hoy vemos que solamente este dictamen analiza temas de seguridad pública. Me parece que sí, hay que procesarlos y anexarlos además a este dictamen.
Creo importante que dentro de este parlamento abierto generemos también una apertura los diversos grupos parlamentarios. Hay reservas ya establecidas, el Grupo Parlamentario del PAN presentamos las reservas a la Comisión de Puntos Constitucionales, ninguna de ellas fue aceptada y hablamos precisamente de la temporalidad del fortalecimiento a los policías, de la coordinación. Entonces creo que la responsabilidad cuando concluyamos este parlamento abierto es aceptar las reservas, entrar en un debate y fortalecer la Guardia Nacional señalada con esta reforma constitucional.
Como conclusión, creo que es importante dejar en claro la participación de los organismos de la sociedad civil.
En la Comisión de Puntos Constitucionales se presentaron cerca de 16 organismos académicos, la coincidencia de ellos es no a la militarización del país. Hoy en día, con la expresión de los gobernadores, nos queda claro que insisten también en que el mayor problema es la inseguridad, sin embargo, la solución no es la Guardia Nacional con un enfoque militar.
Estas son las apreciaciones del Grupo Parlamentario del PAN. Es cuanto, coordinador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, diputada. También aprovecho para informar al público en general, que la Junta de Coordinación Política dispuso que se hicieran relatorías de cada una de las participaciones de cada una de estas mesas. Gracias por su participación.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: El senador Pedro Haces Barba, no sé si anda por aquí, aquí está. Adelante, senador, hasta por tres minutos.
El senador Pedro Miguel Haces Barba: Gracias, diputado. Amigas, amigos; señores gobernadores. Senadores y diputados, amigos de los medios de comunicación.
Mi especial reconocimiento a los participantes de esta primera mesa de trabajo, con sus aportaciones y sus experiencias los gobernadores enriquecen este debate y se augura un resultado de gran altura de miras.
Todos coincidimos en que los mexicanos merecemos vivir sin miedo. La delincuencia en cualquiera de sus vertientes ha provocado que la población pierda la confianza de salir libremente a las calles, que a los ciudadanos nos pertenecen y a nuestras familias.
Los mexicanos merecemos vivir en libertad y con mejor seguridad. Los mexicanos ya no pueden esperar más. Tenemos 12 años con una crisis de inseguridad y violencia sin precedentes en nuestra historia moderna. En los dos sexenios anteriores la violencia en el país le costó la vida a más de 220 mil mexicanos, y ocasionó la desaparición de más de 30 mil personas.
Es inaceptable que vivamos en el miedo que ocasionan las consecuencias del crimen organizado. Ya no hay pretextos, es urgente construir fuentes para enfrentar el crimen y es por eso que vamos a impulsar la creación de la Guardia Nacional. Aclaro que esto no es un proyecto político de un partido, se trata de la estrategia que requiere la participación de todos.
El primero de julio la sociedad mexicana votó masivamente por un cambio, en este nuevo rumbo que significa emprender acciones decididas para mejorar la calidad de vida de los mexicanos, porque ya no es aceptable que los pueblos y ciudades de nuestro México estén en manos de los criminales. No se trata de militarizar el país, eso ya sucedió en 2006 y continuó en 2012, sacaron al Ejército de sus cuarteles y sin rumbo a definir, sin garantías constitucionales ni legales, para que los cuerpos de seguridad que valientemente enfrentaron al crimen, por eso las críticas a la Guardia llegan a destiempo.
¿Qué estarían diciendo los que hoy critican la creación de la Guardia Nacional, si el presidente López Obrador hubiese decidido retirar abruptamente a las Fuerzas Armadas de las labores de seguridad?
Hoy México necesita al Ejército y a la Marina para detener la violencia, pero la diferencia es que será dentro de un marco jurídico sólido y con una estrategia para que su esfuerzo no sea en vano. No debemos perder de vista que además de sus labores de seguridad, el presidente ha instruido un plan para afrontar la desigualdad y la pobreza reconociendo que son los dos detonantes de la violencia. El 80 por ciento de la estrategia de seguridad del gobierno se concentrará más en la prevención con un modelo económico y de desarrollo social.
Ya lo dijo, el presidente: las oportunidades para los ciudadanos sustituirán el problema de inseguridad y violencia. En este camino para crear la Guardia Nacional se han atendido los llamados de los actores involucrados para de ello, con las modificaciones que se hicieron a la iniciativa original y que se pueda mejorar aún más en estas audiencias.
Vivimos una nueva era de democracia y participación, pero con acciones decididas que hoy aquí estamos en esta mesa. Amigas y amigos, una de las críticas que se han hecho a la creación de la Guardia Nacional fue la permanencia del mando militar sobre el civil, por el riesgo de la violación a los derechos humanos de los ciudadanos.
Quiero decirle a toda la sociedad que no tiene por qué preocuparse, ya que el dictamen presentado quedó estipulado claramente que la dirección de la Guardia será únicamente los primeros cinco años. Además, se crea un mecanismo de control para estipular que dentro de los dos años y medio siguientes, el gobierno estatal o municipal que haya contado con presencia de la Guardia Nacional pero, aun así, no haya desarrollado su fuerza policial, de acuerdo a los parámetros del Sistema Nacional de Seguridad Pública, tendrá un castigo económico.
La Secretaría de Seguridad será la responsable de la planeación programación y ejecución de las funciones de la Guardia Nacional, ya que la nueva institución estará adscrita por la administración federal, pero al mismo tiempo formará parte de la Defensa Nacional en un diseño jerárquico de servicio y capacitación.
El dictamen emitido en esta Cámara de Diputados ha sido mejorado notablemente, dando respuesta a la preocupación que se basaba en el supuesto de que el Ejecutivo podría hacer mal uso de la Guardia, utilizándola para violentar garantías y los derechos humanos de la sociedad.
Sin embargo, este proyecto previene este riesgo dándole la atribución al Congreso para disolver a la Guardia Nacional por la mayoría de las dos terceras partes de los miembros presentes, respetando los derechos laborales y profesionales de sus integrantes. De esta manera, el Poder Legislativo se convierte en un sano contrapeso para el Ejército. En esta gran tarea para dar paz y seguridad a millones de mexicanos, el Ejecutivo y su gobierno ya no están solos. Muchas gracias, presidente.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Muchas gracias, senador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Tiene la palabra el senador Miguel Ángel Mancera.
El senador Miguel Ángel Mancera Espinosa: Muchas gracias. Agradezco la oportunidad. Y saludo al presidente de la Junta de Coordinación Política, a todos y cada uno de los distinguidos participantes en este importante ejercicio, que debe ser así. Un ejercicio importante de reflexión, de escucha de ideas y, por supuesto, de advertencias muy importantes de riesgos para México. Ojalá que sea así y no se trate de una simulación y que finalmente no se cambie todo lo que se está señalando, que debe cambiar y que debe modificarse.
Una premisa que ha sido reiterada es no militarización de la seguridad pública. Otra más, no vulnerar la competencia constitucional en el orden de distribución de facultades con los gobernadores y los presidentes municipales en este ejercicio de la seguridad.
Y entonces necesitamos saber qué es lo nuevo, qué es lo nuevo que se está planteando, porque en muchas de las intervenciones escucho y se reitera que la Guardia Nacional va a ser un instrumento de combate contra la delincuencia organizada, de guerra contra la delincuencia organizada. Esto me parecería que no apunta a nada nuevo.
Estamos nulificando a las policías locales, estamos dejándolas ya sin participación, reclutando a 50 mil jóvenes para incorporarlos a un frente de batalla contra la delincuencia organizada. Y la creación de la policía para México cuándo. ¿Cuándo México va a crear policía? Cuando hoy tenemos más de 600 municipios que no tienen policía.
¿Esto es nuevo? Esto de incorporar a los militares al ejercicio de la seguridad pública. Valdría la pena simplemente revisar. Desde 1999 el presidente Zedillo transfirió militares a la policía federal. Así desde esta fecha, hasta 2006, se hizo una transferencia de poco más o menos 5 mil soldados y marinos a la policía federal. A partir del 13 de diciembre ya había una convocatoria para otros 10 mil elementos del Ejército y de la Marina para incorporarlos a la policía federal.
El 22 de agosto de 2014 se incorporaron 5 mil elementos del Ejército a la gendarmería. Y qué va a pasar ahora con la gendarmería, que era un cuerpo de élite, que si hoy revisamos en Internet todavía se dice que es para combatir a la delincuencia organizada.
Nosotros creemos que se puede avanzar, que se puede llegar a un punto importante. En la propuesta el PRD reitera:
1. Mando civil,
2. Delimitación de las facultades de la Guardia Nacional,
3. Eliminación de los riesgos ya advertidos por Naciones Unidas, por el alto comisionado,
4. Un compromiso de fortalecimiento de las policías estatales, de las policías locales.
Porque les pregunto a mis compañeros gobernadores si la Guardia Nacional va a resolver los homicidios y va a resolver el robo a casa habitación, el robo al transeúnte o el robo a vehículo, que es lo que tiene los más altos índices en muchos de los lugares del país. Y no olvidemos que cuando se generó la mayor crisis fue a partir de 2006, con una salida masiva de las prisiones de más de 70 mil personas que se encontraban recluidas.
Entonces, apoyamos la propuesta, pero con las modificaciones que requiere el país a fin de no caer en los riesgos que ya han sido señalados de manera reiterada. Muchas gracias, presidente.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, senador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Senador Eduardo Ramírez. No lo veo ya. ¿Sí está? Que le cede su lugar al senador Dante Delgado, dice... no, no. Pero antes va el diputado Reginaldo... sí, no ahorita. No, estos senadores así son, qué bárbaros... próximo sábado lo esperamos. No, no. Reginaldo Sandoval, por favor.
El diputado Reginaldo Sandoval Flores: Con el permiso de los presentes.
Celebro que, en este primer diálogo, prácticamente, observamos si hay consenso en el tema de la reforma constitucional que permitiría la creación de la Guardia Nacional.
Creo que estamos en una situación verdaderamente compleja de nuestro país, y yo vengo del estado de Michoacán, viví el tema del 96, vivimos el tema de 2012 y estamos viviendo en la actualidad.
Sostengo también, que solo los que no han vivido una realidad de descomposición y donde realmente quién gana es el crimen como poder alterno a nivel del municipio. En caso nuestro llegó a nivel del estado, no sabemos si a nivel federal y no hay fuerza policiaca que pueda.
Por eso sostengo que la Guardia Nacional nos pueda dar una ruta y también sostengo que toda la estrategia que se venía implementando hasta ahora era una estrategia que venía combatiendo solo los efectos, sino las causas y está estrategia que se ha presentado va en la ruta de ambas cosas.
Nos explicaba el presidente del recurso público que va a la estrategia de seguridad, el 80 por ciento de ese presupuesto va a combatir causas y el otro 20 va combatir efectos. También sostengo que, si no hay una fuerza policiaca, disciplinada, con capacidad de fuerza y si no toma territorio no va a haber solución.
Porque si solo hacen operativos, se le da vacaciones a la delincuencia, temporales, y se retira de nuevo y vuelve, nosotros en desgracia, en Michoacán hemos perdido muchos, muchas personas, muchas vidas. Ha emigrado mucha gente.
Entro este concepto de las guardias comunitarias porque no aguantaban más, vivimos también ese fenómeno y creo que debemos de ir en la ruta de simplemente observar como concepto trasversal ver que no haya complicación con violación de derechos humanos, y salvando ese tema, creo que podremos ir en consenso hacía adelante.
En caso de nosotros como PT, vamos por la Guardia Nacional y muchas gracias por este diálogo donde se habla con franqueza, no hay problema cada quien tenemos nuestro punto de vista, opiniones, pero también tenemos responsabilidad a la hora de tomar decisiones.
Unos más, otros menos, ahora nos toca a nosotros más que la tendremos que tomar en próximos días. Muchas gracias, coordinador.
El presidente diputado Mario Delgado Carillo: Gracias, diputado.
El presidente diputado Mario Delgado Carillo: Toca el turno al diputado Tonatiuh Bravo.
El diputado Itzcóatl Tonatiuh Bravo Padilla: Gracias, presidente. Celebro el tono que está tomando este diálogo porque están fluyendo los aspectos y agradezco puntualmente todas las intervenciones de los gobernadores de las entidades federativas que escuchamos el día de hoy.
Hemos visto fluir de manera común, con diferentes grados y tonalidades el respeto al pacto federal, la coordinación y complementariedad de los diferentes cuerpos de seguridad. Agregaría yo una palabra a esa coordinación y complementariedad: La subsidiariedad, a la que de manera puntual algunos se han referido.
La coordinación entre órdenes y niveles de gobierno, resalto el mando civil frente al reconocimiento y la postura más generalizada de no militarizar la seguridad pública. Y hago énfasis respecto de algunos puntos específicos.
Número uno. ¿Se le va, efectivamente, a dar a la Guardia Nacional la facultad de persecución de los delitos, así como está propuesto en el dictamen? Es una pregunta fuerte e importante. Una propuesta importante, complementaria es si hará las veces de primer respondiente en términos del nuevo sistema de justicia penal.
El tema del fortalecimiento de las policías locales no va a ocurrir si no se toman medidas que apoyen y soporten ese fortalecimiento institucional de las policías locales.
Quisiera agregar a la intervención de uno de los gobernadores en donde él decía “hay poca claridad entre las funciones de la Secretaría de Seguridad Pública y la Sedena”. Yo agregaría: la confusión persiste en el fuero civil y en el fuero militar, porque se pretende que la Guardia Nacional en su orden, esté sujeta al fuero militar, pero en lo que toca su actuación como Guardia Nacional, se pretende que sea el fuero civil. Entonces ahí persiste esa contradicción.
Bueno, yo con todo respeto, aquí se ha mencionado que se le da al Senado la atribución de control para en un momento determinado por el voto de las dos terceras partes, cerrar o clausurar la Guardia Nacional.
Con todo respeto yo les digo, actualmente el Congreso tiene esa atribución, por dos tercios modifica la Constitución, por la mitad más uno de cada una de las Cámaras, se puede generar una ley que modifique esas condiciones.
Entonces, en mi opinión ahí hace falta entender más bien qué es el control del Poder Legislativo sobre los actos, en un momento determinado, que realice la Guardia Nacional.
Y creo que ese control debe darse a partir de informes, a partir de comisiones bicamerales que den seguimiento puntual mes con mes a la actuación y a los temas no solamente de la Guardia Nacional, sino al tema de seguridad.
Por último, un comentario: así como está redactado el dictamen, observen ustedes la siguiente contradicción. Hace un mes se creó la Secretaría de Seguridad Pública, de nueva cuenta. Con este dictamen se dice que la Policía Federal va a pasar a formar parte de la Guardia Nacional y que por cinco años va a ser dirigida por la Sedena. Entonces eso quiere decir que por cinco años vamos a tener una Secretaría de Seguridad Ciudadana única en el mundo, es decir, sin fuerza policial a su mando, por cinco años, porque ese mando lo va a tener la Sedena.
Es justamente ese argumento lo que fortalece el planteamiento de un mando civil precisamente para una Guardia Nacional. Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, diputado.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: El diputado Marco Antonio Adame.
El diputado Marco Antonio Adame Castillo: Muy buenas tardes. Muchas gracias, diputado presidente de la Junta de Coordinación Política, señores gobernadores, diputados, senadores, senadoras, diputadas, representantes de la sociedad, lo primero que quiero hacer es celebrar este encuentro que está enmarcado en el concepto de parlamento abierto, porque esta nueva forma de relación entre la sociedad y los poderes, permite o hace pensar que este ejercicio es un antídoto contra la simulación o más aún, contra la imposición, por tanto espero que las valiosas intervenciones que aquí se han hecho y las que se sucederán en los días de estas consultas públicas, influyan en el ánimo y en la voluntad política para modificar aquello que permita que la pretendida Guardia Nacional sea en contribución a la seguridad, a la justicia, a la erradicación de la violencia y no a la creación de un ente confuso, profuso y difuso en facultades, en objetivos y en alcances.
Respecto al tema de la seguridad y la justicia, es innegable que se requiere con un sentido de urgencia nacional crear instancias, revisar estrategias y gestar nuevas maneras de enfrentar este desafío.
En ese sentido, los legisladores de Acción Nacional valoramos enormemente el propósito, pero nos importa influir junto con las aportaciones de la sociedad para que esta Guardia Nacional cumpla debidamente con sus objetivos.
Nos preocupan varias cosas, personalmente, como exgobernador y como legislador puedo sentir el pulso de esta urgencia, porque se requiere ver el problema, no como una parte, sino como el diseño institucional que el país necesita.
En efecto, hace poco se ha separado la Secretaría de Seguridad de la híper Secretaría de Gobernación, eso nos parece un acierto, de hecho ha sido una propuesta original que permite dividir funciones, facultades y que apunte en dirección de tener la mayor eficacia.
Ahora bien, una Secretaría de Seguridad sin fuerza se ha dicho aquí, lo ha dicho bien el diputado Tonatiuh Bravo, es un contrasentido, por eso nos parece que debe reforzarse la idea de que la Guardia Nacional debe de ser encabezada por un mando civil. Que esta pretendida transitoriedad resulta casi innecesaria si se obedece al principio de que la Seguridad Pública corresponde a una facultad de las autoridades locales y que esta debe de estar en manos de autoridades civiles.
Por otro lado, no se concibe la creación de un nuevo órgano que ignore la necesidad de fortalecer y respetar las competencias de los órganos locales, por su propio propósito dedicados unos a los delitos del fuero común y otros a los delitos federales en donde se requiere la participación del gobierno federal de manera específica, propia, contundente y clara.
Al mismo tiempo, hay ahora una serie de confusiones no solamente en las atribuciones, sino también en el uso de los recursos, porque sería inaceptable que el soporte financiero de esta pretendida Guardia Nacional sé que la posibilidad de recursos a los órganos locales dedicados a la seguridad pública y que no sea clara por ningún lado cómo se va a garantizar que puedan contar con los medios para su fortalecimiento y su perfeccionamiento.
Por todo ello, nos parece importante dejar claro que el dictamen en sus términos no puede ser aprobado tal y como está, es necesario que todas las aportaciones que aquí estamos haciendo puedan ser consideradas para modificarlo y en su caso generar una Guardia Nacional con funciones claras, con facultades específicas y lo digo una vez más por el riesgo que implica la militarización bajo un mando civil. Muchas gracias, es cuanto.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, diputado.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: El senador Dante Delgado.
El senador Dante Delgado Rannauro: Diputado Mario Delgado, Presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, señores gobernadores, compañeras y compañeros diputados y diputadas, senadoras y senadores que participamos en este foro, representantes de diferentes organizaciones de la sociedad civil interesadas en un tema sustantivo para el país.
Puedo decir a nombre de Movimiento Ciudadano que lo expuesto por los gobernadores en términos generales, ustedes lo valoraron, se aprecia en una misma dirección; sí a una Guardia Nacional, sí al mando civil.
En el caso específico del gobernador de Querétaro, señaló el tema del que debe partir todo el debate, que es la seguridad y justicia con el marco legal, y el marco legal fue presentado por nuestro grupo parlamentario desde 2013 en esta Cámara de Diputados, y era el Código Penal único, Código de Procedimientos Penales único, Ley de Readaptación Social de Menores Infractores, y simplemente se archivó porque en ese momento quienes conducían al país y tenían mayoría parlamentaria consideraron que no era necesario abordar el tema sustantivo.
Hoy todos nos lamentamos de no tener claridad en el ejercicio del mando de los diferentes órganos de los diferentes niveles de gobierno, y lo que se está planteando aquí es particularmente grave, porque implica que la iniciativa de reforma constitucional contradice la propia Ley Orgánica de la Administración Pública que el propio Grupo Parlamentario de Morena presentó. Y esto es lo que debe de ser preocupante para todas y todos nosotros.
¿Cómo en el plazo que va del 18 de octubre, en que se aprueba la Ley Orgánica, y el 20 de noviembre, que se presenta la iniciativa que hoy estamos analizando, hay posiciones tan encontradas? Eso es lo verdaderamente dramático, que en un mes les haya cambiado la coordenada con los mismos votos del primero de julio. Eso es lo grave.
Entonces imagínense ustedes lo que podría suceder en el caso que nos demos el margen de cinco años, todo lo que puede pasar. Pero peor aún, y aquí lo dijeron gobernadores de diferentes formas, cuidando que no haya ruptura del Pacto Federal, pero se dijo: Bueno, y lo que va a seguir, las leyes reglamentarias.
Todo el debate es en torno a qué va a suceder con la Guardia Nacional. Entonces, con todo respeto, cuando se dan este tipo de cambios constitucionales se integra el paquete de iniciativas que le dan soporte, que le dan claridad al rumbo de lo que habrá de tomarse, y es lo que no está sucediendo en la iniciativa que rescata una figura constitucional que se encuentra en el artículo 30, fracción VIII, que es la Guardia Nacional.
Creo que ahí mismo se señala que tiene que ser reglamentada. Por eso es verdaderamente dramático que estemos pensando en que la Ley Orgánica de la Guardia Nacional, lo relativo a la Ley de Uso Legítimo de la Fuerza y a la Ley General del Registro de Detenidos, con todo lo que implica su operación, sea presentada a consideración del Poder Legislativo 90 días después de que se apruebe, supuestamente se apruebe la reforma constitucional.
¿Por qué no el paquete de reformas para ser analizado y discutido? Que quede claridad en el mando, en la orientación que debe darse. Porque de otra manera recuerden ustedes, aquí se dijo muy bien y lo señaló mi compañero y amigo, el diputado Tonatiuh Bravo, el Constituyente Permanente y las facultades de las dos terceras partes serán para nombramientos y para reformas constitucionales.
Fuera de eso, la mayoría mecánica que ya conforma la mayoría parlamentaria en esta Cámara de Diputados, con sus aliados, sacan cualquier ley parlamentaria. No necesitan, como lo han acreditado en las iniciativas anteriores, cambiarles ni una coma ni un punto a esas iniciativas.
Será un acto de ingenuidad brutal que las diputadas y diputados que somos de oposición votáramos a favor de una reforma constitucional sin tener aprobado el texto de las leyes reglamentarias. El quid del asunto está ahí, no en otra parte.
De que queremos que se recupere la seguridad pública, claro que lo queremos. De que el gran debate fue que había captura de los Poderes del Estado en materia de seguridad, a nivel municipal, estatal y federal por parte de la delincuencia organizada es claramente que se ha manifestado.
Tenemos que recuperar el Estado de derecho, es una condición sustantiva. Un gobernador que no garantice el Estado de derecho no es gobernador. Un gobernador que no garantice la seguridad no es un buen gobernador.
Y si por un lado se están tomando centralizaciones en las decisiones del presupuesto para el manejo de todos los tipos de programas de infraestructura, y por otra parte se están centralizando las decisiones en la Guardia Nacional, pues la verdad la pregunta sería: ¿qué sentido tendría el pacto federal? Mejor un gobierno central con jefes departamentales respondiendo a un mando único.
Creo que es muy importante prefigurar la definición del proyecto de país que queremos. Si queremos un país en el que el pacto federal con gobiernos estatales libres y soberanos, con gobiernos municipales que cumplan la respuesta a las demandas de la ciudadanía que establece la Constitución, pues debemos hacer una valoración.
Por el contrario, si queremos un Estado centralista, pues ha llegado el momento de las grandes definiciones.
Por lo que corresponde a Movimiento Ciudadano, no queremos seguir recurriendo a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que mediante acciones de inconstitucionalidad se adviertan errores sustantivos de leyes reglamentarias que no requieren ser modificadas ni con un punto ni con una coma.
Precisamente el 20 de diciembre, en que aprobaron la Ley de Ingresos, en que no se aceptó una sola observación de la oposición, lo dijimos claramente: nos veremos cuando haya reformas constitucionales.
Y se los quiero decir de verdad: a los gobernadores que quieren tener buena relación con el gobierno de la República, enhorabuena. Pero estén pensando no nada más en su mandato, sino en los mandatos que siguen. Por eso, no comprometan a sus diputados que están vinculados emocional y políticamente con él.
Ha llegado el momento de defender en el terreno de los hechos la acción federalista. Movimiento Ciudadano exige al gobierno de la República que presente oportunamente, y no en 90 días como lo dice el transitorio, las reformas legales o la creación de leyes que son necesarias para la aplicación de esta reforma.
En caso contrario, en caso de que, por ingenuidad política, por disciplina partidista o por docilidad ante el poder central, pues no habrá camino que recorrer.
Yo invito a que con alteza de miras el gobierno de la República, si quiere resolver el problema de fondo de la seguridad pública, si quiere atender, como lo ha dicho, el fortalecimiento del federalismo, envíe de inmediato esas tres iniciativas. Y si no las tiene, que de manera colegiada y escuchando a los diferentes sectores de la sociedad las elabore. Ahí está el meollo del tema sustantivo de la Guardia Nacional.
Claro que todos queremos resolver el problema de la inseguridad, pero resulta contradictorio que en unos cuantos días, en 40 días hayan cambiado de opinión. Imagínense lo que sucedería, no en 60 días sino en 5 años.
Adicionalmente a ello, la capacidad de calificar a las policías estatales y a las policías municipales, el ejercicio coercitivo para retirar recursos a los municipios está en manos centralizadas. La pregunta es: ¿qué modelo de país queremos para México? Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, senador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: La diputada Guadalupe Almaguer.
La diputada Ma. Guadalupe Almaguer Pardo: Muchas gracias, presidente Mario Delgado. Me preocupa que vengan a este micrófono un senador y un diputado del PT a decirle a los mexicanos: no tienen nada de qué preocuparse porque el Congreso de la Unión, Cámara de Diputados, hay un control legislativo. Me preocupa que se celebren y se feliciten. Me preocupa enormemente.
A quien sí tengo que reconocer es a los gobernadores, por lo menos de esta mesa, que con sus lenguajes diferentes han rechazado de fondo la Guardia Nacional. Que están preocupados por el tema de la seguridad, obviamente, como los más de 2 mil presidentes municipales y presidentas municipales que hay en este país. No hay un control legislativo.
Quién sabe de qué congreso esté hablando el diputado del PT, porque no hay un equilibrio, porque se formaron mayorías artificiales y porque se siguen conquistando más diputados para lograr más número en la bancada mayoritaria.
Hay dos caminos en esta preocupante situación de la propuesta de Andrés Manuel sobre su Guardia Nacional. Cuando todavía ni siquiera se les ocurría aquí en la Cámara, al grupo mayoritario, estos diálogos, ya estaba López Obrador citando a la reclutación, por ejemplo. Y lo dijimos en redes sociales.
Y luego, aquí en la Cámara se dice, en la Cámara de Senadores Martí Batres dice: es que estamos, por una parte, en el asunto constitucional y de las cámaras. Y por el otro, Andrés Manuel convocando a la reclutación.
Yo coincido con quien me antecedió en el uso de la palabra, la Ley, por ejemplo, de Seguridad Interior es un juego de niños comparado, y de niñas también, comparado con lo que hoy se propone de la Guardia Nacional, que es producto de una mentalidad que quiere controlar absolutamente todo en este país. No solamente el recurso sino los mandatos. Violentar el federalismo.
Deberíamos de preguntarle a cada uno de los presidentes y presidentas municipales de este país –a los que son responsables–, si están dispuestos a que ahora legalmente lleguen las Fuerzas Armadas a su municipio y los haga a un lado de su responsabilidad principal. Porque es la autoridad local más próxima –y eso son los presidentes municipales y luego siguen los gobernadores– los principales responsables de atender y desarticular el tema de la inseguridad y también del delito.
Pero Andrés Manuel lo quiere arrebatar todo y también controlar todo, y no solamente en el tema de recursos. En efecto, metieron todo en aquella súper secretaría que se armó el año pasado, y por más que uno argumentaba en la Comisión de Seguridad, la única respuesta que daban las y los legisladores del grupo mayoritario era “tenemos 30 millones de votos”, como si 30 millones de votos les dieran permiso de violentar Constitución y Derechos Humanos.
Yo creo que el tema de la Guardia Nacional no es solamente un asunto, grave de por sí, de la violación a los derechos humanos. El asunto es, y lo demostramos, una estrategia electoral de López Obrador, por eso la urgencia y por eso la prisa de querer legislar de botepronto y cambiar. Si alguien está creyendo aquí que se trata solamente de cambiar algunos artículos de la Constitución para que sea legal la Guardia Nacional, se equivoca, lo que se está cambiando es una narrativa constitucional que nos garantiza a las y los mexicanos libertad y democracia. Ese es el asunto.
Con una Guardia Nacional militarizada, que por supuesto no resuelve nada –y ahí tenemos 12 años de ejemplo de que esto no resuelve nada por sí misma–. Se quejaban y se quejan el grupo hoy mayoritario de los errores cometidos con Felipe Calderón y vuelven a hacer lo mismo, nada más que creen que ahora con el cambio de los artículos a la Constitución ya es legal y ya tengo permiso.
Ese cambio no garantiza que esto funcione ¿o qué tiene la cuarta transformación de elementos para asegurarnos a las mexicanas y los mexicanos que ahora sí va a funcionar llevar al Ejército y las Fuerzas Armadas a atender asuntos de delito común?
Y nos preguntábamos hace rato, y ya lo preguntó también y lo mencionó Tonatiuh ¿Cómo va a responder, según la formación que tienen las Fuerzas Armadas como primer respondiente, los integrantes que van de las Fuerzas Armadas que van a salir a las calles? ¿Cómo le van a hacer?
Entonces, me preocupa también que este ejercicio a la que asistieron y dejaron de atender sus respectivos despachos de gobernadores, y hayan participado aquí, vaya a ser una simulación y éste siendo una simulación. ¿Por qué? Porque así lo dicen los hechos, no ha habido en esta legislatura una sola ley, ni una sola reforma en la que el grupo mayoritario y su mayoría ficticia y artificial –sí, ficticia y artificial– haya cambiado una coma y un punto. ¿Entonces de qué estamos hablando?
Nosotras, nosotros venimos aquí a participar y a decir las cosas por su nombre. Pero prestarnos a una simulación, pues no estaría de acuerdo, mucho menos con la participación... –Cuando te toque estar aquí hablas, seas quien seas, porque desde aquí no te veo.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Diputada, le recuerdo que la sugerencia de la participación era de tres minutos, hemos sido tolerantes y ha tenido otro tono la...
La diputada Ma. Guadalupe Almaguer Pardo: –Gracias, termino, termino–. Y que se escuche –termino, presidente– y que se escuche por supuesto la participación de las y los especialistas y de las organizaciones de la sociedad civil. Gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Muchas gracias, diputada. Vamos a cerrar.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Le vamos a dar tres minutos a cada gobernador para que hagan su conclusión, en orden inverso a su participación. Pero dado el tono y la referencia directa que ha hecho la diputada Almaguer, me pide la palabra el diputado Reginaldo Sandoval. Por tres minutos, diputado, por favor, y pasaríamos a las conclusiones. –Sí, se los vamos a regalar, los tres minutos.
El diputado Reginaldo Sandoval Flores: Compañeras y compañeros, este evento que tenemos ahora es producto de una nueva realidad política, es un Parlamento abierto, y siento que la diputada llegó tarde, porque no escuchó a los gobernadores.
Dijimos con mucha precisión que celebramos este evento, porque miren, la discusión ahora está aquí, vendrá el pleno en la Cámara de Diputados, se irá al Senado, se irá a todos los estados. Hay suficiente tiempo para debatir.
La diputada dice: Pues hablan de 30 millones. Pues fueron 30 millones, no podemos decir que fueron 25, o que fueron 40, pues fueron 30. No sé cuánto sacó su partido, es lógico que hay correlación de fuerza, pero hay voluntad de discutir, porque este problema es un problema de la nación, de todos los mexicanos. Es el principal problema que reclaman los mexicanos, seguridad.
De las funciones del Estado, la principal es la seguridad de las personas y de sus bienes, y cosa que ahora no está sucediendo, porque tampoco conoce el país la diputada.
A mí me han solicitado cientos de presidentes municipales, que quieren que la federación tome la seguridad pública de su municipio, porque no tiene de otra, o que los gobernadores tomen la seguridad. Pero, bueno, si no salimos del DF, entonces no sé de dónde sea la diputada, lógico es que no conocemos. No, se trata de conocer el país y se trata de caminar con la verdad, sin hacer señalamientos ni descalificaciones.
Nosotros invitamos a un diálogo abierto. Y no es mayoría ficticia, ¿pues cómo va a ser mayoría ficticia? El voto es el que vale y se vota y punto. Somos libres, somos mayores de edad. Qué mayoría ficticia, tenemos plena libertad de tomar la decisión que nos parezca.
Ahora resulta que la minoría, que perdió, quiere imponer a la mayoría su voluntad, pues no se puede, cuando ganen lo harán y tendrán oportunidad de equivocarse. Por eso, pero no se vale decirnos cosas que no, decimos la pura verdad.
Este diálogo es parte de una nueva realidad política, es un Parlamento abierto, estamos en plena disposición de discutir, de analizar, de reflexionar y los invito a eso, a que mejoremos el tema de nuestro debate hablando con la verdad. Muchas gracias, diputado.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Vamos al cierre. Apenas se está poniendo bueno, pero ya vamos a tener que cerrar. Le pedimos tres minutos al gobernador Alejandro Tello.
El gobernador Alejandro Tello Cristerna: Muchas gracias. Muy breve, por respeto a su tiempo. Agradezco esta oportunidad de diálogo, de escucharnos. Pero también hacer un llamado que este ejercicio sea para retroalimentar, para enriquecer nuestras leyes y no simplemente para legitimar un mayoriteo.
Definitivamente todos estamos aquí de buena fe, buscando lo mejor para nuestros estados, para nuestro país en su conjunto en algo que es lo más importante el día de hoy para nosotros, que es la seguridad.
Vamos en contra del tiempo y no hay tiempo que perder. En la calle hay mucha incertidumbre de la ciudadanía pero también de las corporaciones, por eso estamos –lo repito, lo dije hace un rato– en sus manos con esta reforma constitucional, con estas leyes reglamentarias y que sea lo mejor para México. Muchísimas gracias por la oportunidad.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, gobernador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: El gobernador de Colima, José Ignacio Peralta Sánchez, por favor.
El gobernador José Ignacio Peralta Sánchez: Muchas gracias. Reiterar el agradecimiento a participar en este diálogo constructivo con vías a que se pueda debatir con mayor profundidad una iniciativa importante que viene, como ya lo he dicho, a atender un tema fundamental en la política pública. México vive en una situación sin precedentes en materia de seguridad y se vuelve fundamental este debate.
Yo quisiera hacer un agradecimiento. Me están haciendo una pregunta y quiero responderla, en función a la permanencia de la Guardia Nacional, por parte de Alberto Domínguez.
Quisiera hacer dentro de la respuesta un agradecimiento –y pido una disculpa por la omisión cuando en la intervención no lo hice– a las Fuerzas Armadas de este país. A la Secretaría de la Defensa Nacional y a la Secretaría de Marina, Armada de México.
Lo digo en mi experiencia como gobernador, vivir en un estado en el cual se ha agravado de manera significativa la situación de seguridad, que sin el apoyo de las Fuerzas Armadas en los últimos dos, tres años, la situación no estaría en las condiciones actuales. Es decir estaría peor, y la participación de las Fuerzas Armadas ha sido fundamental.
Quiero dejar claro el agradecimiento a la coordinación y la participación en los diferentes operativos y estrategias que se han llevado a cabo con las instituciones en materia de seguridad del gobierno de la República, particularmente con las instituciones armadas.
El tema de la permanencia, yo creo que tiene que ver con una definición muy clara de mecanismos institucionales que permitan hacer una evaluación adecuada. El tema que se vive actualmente en México requiere situaciones de urgencia y requiere contundencia.
La propuesta que haría yo respetuosa, para contribuir al debate, es que se puedan generar mecanismos institucionales que permitan evaluar la permanencia o la duración de este tipo de esquemas hasta que se haya superado. La situación que actualmente prevalece, insisto, es de emergencia. La situación no tiene precedentes.
Por último, quisiera nada más decir que en Colima no somos generadores de violencia. En colima lamentablemente se importa violencia y los factores generadores de violencia están en otras latitudes.
Quiero sumarme a este comentario que hizo el gobernador de Campeche, que la situación que se vive en cada entidad federativa es distinta y requiere análisis específicos, particulares y diseños de estrategia diferente, para que podamos ser mucho más efectivos en el combate con la delincuencia organizada.
Con eso concluyo mi comentario, agradeciendo de manera reiterada la invitación a participar en este diálogo parlamentario. Muchísimas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: El gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez.
El gobernador Francisco Domínguez Servién: Gracias, presidente. Nuevamente agradecer esta invitación a poder expresarnos como gobernadores constitucionales de nuestras entidades. Yo estoy seguro que habernos permitido hablar hasta por 10 minutos, nuestras palabras y nuestros escritos, no vayan a quedar al olvido a la hora de votación del dictamen.
Hemos dicho sí a la Guardia Nacional, pero con mando civil. Sí al cambio de estrategia de seguridad porque le urge al país. Veamos la gradualidad, porque lo expuse con claridad y lo sabemos todos aquí y lo podemos compartir. No es lo mismo Guerrero que Querétaro, y se tiene que plantear por entidad federativa.
Así que evidentemente hay mayoría del Partido Morena, pero también estamos seguros que están pensando en los más de 120 millones de mexicanas y mexicanos que hoy esperan, sí, resultados en seguridad en paz y en justicia. Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias gobernador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: El gobernador Héctor Astudillo, de Guerrero, por favor.
El gobernador Héctor Antonio Astudillo Flores: Muchas gracias. Pues en el año 2002, y espero no equivocarme, hubo una gran consulta para el tema del artículo 2o. de la Constitución, respecto a los derechos de los pueblos indígenas.
A mí me parece que esta consulta que está haciendo, debe seguir la misma ruta, debe nutrirse de las opiniones que se van a estar dando con ustedes, senadores, senadoras, diputados y diputadas.
Yo creo que es una circunstancia muy especial, yo ratifico mi posición, me parece que el tema de la existencia de la Guardia Nacional no solamente es una prioridad, sino es un asunto de urgencia. Hay un problema muy grave en el país.
Y no es un problema solamente de Guerrero porque por aquí me hacían una pregunta: ¿qué ha hecho para mejorar la seguridad de Guerrero? Lo contesto. Para contestar, cualquier gobernador, qué ha hecho sobre la seguridad, hay que dar números.
Hace dos años estábamos en el primer lugar de la violencia, hoy andamos en el quinto. Hay estados que lamentablemente, y no lo cito en su nombre, nos han rebasado a una velocidad increíble. Guerrero es uno de los estados que ha disminuido el 13 por ciento de 2017 al 2018, es muy poco, no es suficiente, pero ya no hemos crecido.
Les quiero también decir que a mí me parece que este ejercicio debe tener los mejores resultados, y yo abono a eso, y espero que esto por supuesto los tenga, es una excelente oportunidad, la figura es muy complicada, pero bueno, el tema de la seguridad es un asunto muy complicado.
Ahora, ¿qué otra opción hay? Sería mi pregunta. ¿Qué otra opción hay? Con una posible Guardia Nacional en una ruta de poco a poco, como lo dije en mi intervención, irle dando marco civil.
Creo que ahí está el planteamiento, insisto. Yo defendí la Ley de Seguridad Interior, y la defendí porque creí conveniente, pero no solamente lo digo, todos los gobernadores, excepto uno, que yo me sigo preguntando: qué haría en un momento de crisis. Pero todos los gobernadores en una reunión, dijimos que apoyábamos la Ley de Seguridad Interior.
Ahora, a nivel constitucional está planteado el tema de la Guardia Nacional. Yo creo que sí, con las modificaciones que procede y que debe proceder.
Me da mucho gusto saludarles. Hay una última pregunta que tengo aquí, de la maestra María. En Guerrero hay grupos que se ostentan como policías comunitarios, son grupos armados, parapetos de la delincuencia organizada que hay que enfrentarlos y que hay que procesarlos. Muchas gracias.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Gracias, gobernador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Tiene la palabra ahora el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles.
El gobernador Silvano Aureoles Conejo: Primero muchas gracias, nuevamente, presidente de la Junta; señoras diputadas, diputados; senadoras, senadores; compañeros, gobernadores, señor presidente de la Conago.
Yo quisiera antes de contestar las preguntas, dejar un par de reflexiones. Primero, vuelvo a insistir en esta soberanía, que necesitamos revisar el tema de fondo que tiene que ver con el tema hacendario. Hay que revisarlo, no es un asunto sencillo y lo digo en el mejor de los ánimos, porque la fórmula distributiva es insuficiente, o no permite atender los mandatos de manera oportuna, y cito el ejemplo de los municipios. A los municipios se les asigna recursos por dos vías para el tema de seguridad, a través del Fondo IV, Fortamun, o a través de Fortaseg.
El Fondo IV tiene amplitud de posibilidades de uso y aunque está construido, digamos, para fortalecer los temas de seguridad, se usan desde una visión de un concepto amplio de la seguridad, de tal manera que los municipios en su inmensa mayoría usan este recurso para alumbrado público, para construir calles, para hacer un camino rural, para pagar salarios, etcétera, etcétera, etcétera.
Y la cantidad que se usa para fortalecer sus capacidades institucionales, en materia de seguridad, casi siempre es una proporción menor. Habrá excepciones, pero en su inmensa mayoría eso está sucediendo. ¿Por qué? Porque no les alcanza el recurso para otros asuntos que son también igual de urgentes.
Se requiere una revisión de la fórmula, compañeras, compañeros legisladores, porque el 80/20 no nos da y habría que pensar en el futuro en una discusión amplia, profunda, quizá a través de una convención nacional hacendaria, que lo hemos venido planteando desde hace años y meses, y creo que para el gobierno que empieza es una gran oportunidad de la justicia contributiva, pero también de la justicia distributiva, porque ahí radican mucho de las dificultades estructurales que hoy por hoy tienen los municipios y una buena parte de la entidades federativas.
Luego, en el tema del debate. Yo no me voy a meter a él, solo les dejo unos tres elementos para ello en los insumos. Se nota un poco extraño, por calificarlo de alguna manera o llamarle de alguna manera, que un gobierno de izquierda esté optando por los militares para la seguridad pública, ese es el tema, pero nadie se ofenda por esa reflexión, así se siente en el ánimo de la gente. Cómo el gobierno de izquierda que llegue a gobernar decide usar al Ejército para ir a hacerle frente a la inseguridad.
Dos, el tema, los mandos. Digamos, quién se hace cargo de esa responsabilidad para no caer en el supuesto que muchos de los que están aquí –que conozco a muchas y a muchos–, se combatía desde la oposición y desde la izquierda. No al uso del Ejército en tareas, etcétera, esos discursos todavía resuenan en el ambiente y es normal.
Decía el diputado Reginaldo, y con eso termino el otro componente. Yo creo que habría que dejar, para que esto avance, de hablar de los 30 millones, porque si bien esos fueron los que hubo el primero de julio y hay muchos que ya se arrepintieron y a estas alturas quién sabe cuántos queden. Entonces, muy bien por esos 30 millones, pero a estas alturas del camino hay que ponerle otros componentes a la discusión y no la mayoría numérica.
No hagamos a otros lo que no queríamos para nosotros, Reginaldo. Pues esa es la onda, ahora es que somos mayoría y se aguantan. No. Si nada más nos invitaron para recetárnosla, pues entonces háganlo y, pues dios que los acompañe, pero si el tema es escucharlos, si el tema es escucharlos, pues entonces escúchenos bien, pero no nos ofendan. Entonces, modérense, todo pasa.
Mejor, la verdadera democracia está en incluir y escuchar las minorías, no presumir las mayorías. Entonces, eso ya lo padecimos mucho en el país, no está bien. Bueno, no todos, pero una buena parte las conozco y los conozco. Ustedes son gente buena y gente sensible, entonces no se enreden en esta dinámica que genera el poder cuando sientes que tienes todo el control del poder, porque es muy relativo.
Luego, me voy a los temas, así rapiditos. A ver, sí se requiere la participación del Ejército y la Marina en la seguridad, pues sería ingenuo decir que no, o sería falso no reconocerlo y reconocerles a nuestras Fuerzas Armadas lo que han hecho, pero hay que regularlo para evitar riesgos para el tema de derechos humanos, que es algo muy sensible, y para el riesgo de exponer a nuestros activos como sociedad mexicana. Son activos muy importantes nuestro Ejército, nuestra Marina, Armada de México y la Fuerza Aérea.
Cuidémoslos, porque en este mundo tan complejo los vamos a necesitar y los necesitamos. Entonces, hay que cuidarlos porque además es nuestro último asidero, decía hace un momento.
Luego, hay que regularlo y hay que ponerle temporalidad, compañeros. Si son cinco años, está bien. Digo, al final creo que esa le van a poner, pero lo que sea, pero sí pongámosle temporalidad.
Pero paralelamente, diputadas, diputados, ayúdenos a fortalecer las policías municipales y estatales, porque la Guardia Nacional por sí sola no va a resolver el problema. Primero porque ahorita se va a conformar por marinos y militares, que no están formados como policías. Va a requerir un proceso de acoplamiento, de aprendizaje, de muchas cosas, que lo van a aprender, peor se va a llevar un tiempo.
Necesitamos fortalecer nuestras corporaciones municipales y estatales. Y aprovecho aquí para contestar una pregunta de alguien que dice: ¿Cómo vamos a confiar en ellos si están infiltrados? No, no, pues hay que sanearlas, hay que limpiarlas. Ese es el reto. Si no, pues vamos a –Estamos calificados en el ranking internacional como un país que tiene altos niveles de corrupción. Entonces, ¿hay que desaparecerlo porque hay mucha corrupción? Pues no, hay que resolverlo, hay que sanear los cuerpos de seguridad policiaca.
El tema principal del cuidado tiene que estar en cómo formamos a nuestras policías, a nuestros cuerpos de seguridad. Y eso requiere invertirle recursos. Este año, para los recursos a la seguridad pública, se mantiene la misma cantidad del año pasado: 7 mil millones de pesos. Evidentemente es limitado. Pero, en el caso del Fortasec, que es el que va exclusivamente a los municipios, se disminuyó en un 20 por ciento, pasó de 5 mil a 4 mil, 3 mil y tantos. Entonces, apostémosle a ello.
Si en un estado como Michoacán tuviéramos las policías municipales que dice el Sistema Nacional o los estándares que dice la ONU, y más el estado de fuerza que debería tener el estado, tendríamos casi 30 mil policías. No necesitaríamos para ese propósito al Ejército, la Marina. Lo estaríamos haciendo la autoridad civil.
Pero, si me voy a la capital y de los 3 mil que necesita solo tiene 400, pues va a tener 200 por turno y luego los que no llegan o se enferman o no están aptos para la función, pues no se puede garantizar la seguridad si no tenemos con qué.
Pero no nos vayamos con el espejismo de que la Guardia Nacional va a resolver el tema de la seguridad. Si no, pues ya estaría resuelto, ya van 12 años. Bueno, lo que se requiere es, sí, un marco regulatorio para que cuidemos a nuestras Fuerzas Armadas.
Y me decía un compañero en su pregunta: ¿A todos se les subió el sueldo? Sí, porque llevamos el 80 por ciento de depuración del estado de fuerza y viene la siguiente evaluación. Y los que no pasan, se dan de baja. De tal manera que tengamos cuerpos de seguridad absolutamente saneados y certificados.
Y creo que urge que esta tarea la hagamos de manera conjunta y que la hagamos de manera muy responsable. Hay que quitarle, y por experiencia se los digo, el contenido ideológico al tema, porque si no se nos contamina y no transita. Pero, y termino mi comentario, gracias nuevamente por recibirnos, es: póngale temporalidad a la guardia civil, la participación de los militares y marinos, pónganos plazos a los gobiernos estatales y municipales para que cumplamos con los estándares de certificación y de estados de fuerza.
Ayúdennos para que los municipios usen el dinero que les llega en lo que tiene que ver con el fortalecimiento de sus capacidades institucionales y pónganle mando civil a la Guardia Nacional, sino..., todos queremos que se resuelva el tema de la seguridad y vamos a hacer, lo estamos haciendo mis compañeros gobernadores y yo con mucha seriedad, queremos ayudar porque traemos experiencias vividas, déjennos aportar, no es porque queremos que salga bien la cosa, que este ejercicio, esta nueva estrategia salga bien, la apuesta es a que salga bien, porque si nos falla otra vez ya es mucho desgaste y la sociedad está evidentemente enojada y desesperada.
Apostémosle a que nos salga bien, en consecuencia, hagámoslo bien. Muchas gracias, Mario, nuevamente, por invitarnos. Gracias a todos por escucharnos.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Muchas gracias, gobernador y espero que no te hayas sentido en un ejercicio de simulación, lo tratamos de hacer lo más libre posible, te dimos el tiempo que acordamos y hemos sido muy respetuosos en esta Cámara. Lamento si tienes esa impresión.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Cerramos con el gobernador, presidente de la Conago, Alejandro Moreno Cárdenas.
El gobernador Rafael Alejandro Moreno Cárdenas: Muy buenas tardes, muchas gracias. Muy brevemente agradecer a todas y a todos los legisladores, diputadas, diputados, senadores, senadoras que nos acompañaron, al presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, a nuestro amigo Mario Delgado.
Yo precisaría tres puntos muy rápidos. Primero, un enorme reconocimiento a las legisladoras y los legisladores, creo que hoy hemos visto, hemos vivido en este tiempo un ejercicio transparente, abierto, responsable de cara a la sociedad, en estas audiencias públicas que podemos intercambiar opiniones. Creo que con los días que van a ir pasando tendrá un mecanismo de mayor dinamismo, más diálogo.
Pero quiero reconocerlos a todos y cada uno de ustedes. Yo humildemente lo comparto tuve la oportunidad de ser dos veces diputado federal como ustedes y una vez senador de la República, aquí los gobernadores la mayoría ha sido legislador y está claro que tenemos plena confianza en ustedes.
La apertura a estas audiencias no solo es para escuchar, para atender propuestas, sino que verdaderamente en un espíritu de inclusión, de apertura, de ir perfeccionando y modificando los dictámenes, como se han hecho muchas veces en la Cámara de Diputados, puedan todas estas propuestas de los legisladores, de los gobernadores, de la sociedad civil, de las organizaciones puedan acompañarse verdaderamente en una propuesta que se pueda ver reflejada en el dictamen que al final del camino van a aprobar en el constituyente permanente.
Yo lo digo, hoy, como presidente de la Conferencias Nacional de Gobernadores, muy reconocido con todos y cada uno de ustedes, porque hay dado muestras de apertura, de sensibilidad todos los legisladores y de tener una amplia discusión en el debate parlamentario basado en el respeto, en la propuesta, para que tengamos leyes eficaces, no más leyes, sino leyes más eficaces al servicio de la sociedad.
Les compartiría que creo que algo muy importante que hay que cuidar es el tema de las funciones claras, específicas en el marco constitucional de nuestra norma de las funciones de la Guardia Nacional dejarlos con claridad, que no haya ambigüedades en la ley y sé que lo van a construir, que lo van a lograr y así lo van a realizar.
Cada estado tiene sus particularidades; como gobernador de Campeche les diría Campeche es el estado con la menor incidencia delictiva del país por cada 100 mil habitantes, pero eso no quiere decir que no necesitemos el respaldo y el apoyo de las Fuerzas Armadas, al contrario, hemos estado trabajando de manera coordinada con ellos, con las fuerzas federales, con los organismos estatales encargados de la seguridad.
Y, por eso decimos: Bienvenida, sí la Guardia Nacional, sí, pero con funciones claras, con el respeto a los órdenes de competencia de cada uno del municipio, del estado y de la federación y nosotros le apostamos porque le vaya bien al gobierno, nosotros queremos que le vaya bien al país, simple y llanamente tenemos que dejar muy claro y muy puntual las responsabilidades de cada uno de nosotros, y como gobernadores, se ha mencionado aquí por mis compañeros, nosotros no nos hacemos a un lado de nuestra responsabilidad, es nuestra facultad constitucional garantizar paz, armonía, seguridad, en cada una de nuestras entidades federativas, pero también necesitamos sumar esfuerzos, trabajar en equipo para que esto se pueda dar de manera contundente y de manera clara porque todos lo que queremos es que México esté en paz y demos buenos resultados a la sociedad.
Y yo finalmente le diría a don Carlos Magaña, que me hizo una pregunta directa en el tema de qué sucedería si no se aprobara la Guardia. Yo por mi experiencia primero le diría que yo creo que sí se va a aprobar, pero si no sucediera así, yo le diría que demos de trabajar con el gobierno federal indistintamente porque creo que el gobierno está en su derecho de organizarse.
Aquí en otros momentos, en otros tiempos se han hecho modificaciones a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal para que quien llega al gobierno, pueda organizarse, pueda implementar sus programas y sus proyectos, y pueda darle resultados.
Simple y llanamente un servidor como gobernador de Campeche, jamás escatimará ningún apoyo, jamás haremos ningún regateo al gobierno de la República para comprometernos, para cumplir con nuestras responsabilidades en que trabajemos juntos y en equipo para que México tenga paz, tenga armonía y tenga tranquilidad.
Así que muy reconocido, muy agradecido de estar en este Salón Verde que nos trae buenos recursos y entonces les dejamos que ustedes, ahí les encargamos todo para que en esta reforma lo hagan de una manera como siempre lo han hecho, inteligente y responsable con el país. Muchas gracias a todos.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: Muchas gracias, gobernador.
El presidente diputado Mario Delgado Carrillo: No me resta más que agradecerles su participación muy valiosa, la información que nos han traído. Queríamos escuchar de viva voz a quienes están en la primera línea de batalla, la experiencia que tienen todos los días en el tema de la violencia, las insuficiencias institucionales que se tienen y el destino que puede tener la Guardia Nacional.
Sin duda todas las reflexiones y aportaciones que han hecho aquí, serán consideradas en la elaboración del dictamen. Muchas gracias. Seguimos a las cuatro con la siguiente mesa.
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