Cámara de Diputados del Honorable Congreso de la Unión, LXIV Legislatura
Versión estenográfica de la mesa de trabajo "Transparencia, fiscalización y evaluación
del nuevo sistema de salud", correspondiente a las audiencias públicas sobre
el Instituto de Salud para el Bienestar, celebrada el viernes 9 de agosto de 2019

Apertura de la audiencia pública

Intervenciones

Del ciudadano Alejandro Manuel Vargas García

Del ciudadano César Cruz Santiago

Del ciudadano Luis Adrián Quiroz Castillo

De la ciudadana Janet Oropeza Eng

Del ciudadano José Antonio Centeno Reyes

Del ciudadano Cristofer Merlos Montes

De la ciudadana María Teresa Soriano Ibarra

Del ciudadano Héctor Arreola Ornelas

Dell ciudadano Luis Felipe Abreu Hernández

De la ciudadana Martha Medina Gómez

De la ciudadana Janet García González

Del ciudadano Marcos Cantero Cortés

De la ciudadana Elsa Ladrón de Guevara

Ronda de preguntas y respuestas

El ciudadano Alejandro Manuel Vargas García

De la ciudadana Elsa Ladrón de Guevara

Del ciudadano Alejandro Manuel Vargas García

Del ciudadano César Alberto Cruz Santiago

Del ciudadano Héctor Arreola Ornelas

Intervenciones finales

De la diputada Frinné Azuara Yarzábal

Del ciudadano Alejandro Manuel Vargas García

Del diputado Éctor Jaime Ramírez Barba

Del ciudadano Marcos Cantero Cortés

Clausura de los trabajos de las audiencias públicas


 
 
 
 
 
 

La maestra de ceremonias: La Comisión de Salud de la LXIV Legislatura de la Cámara de Diputados les da la más cordial bienvenida a todas y todos ustedes a la sexta mesa de trabajo de las audiencias públicas de parlamento abierto para el análisis de la iniciativa del Instituto de Salud para el Bienestar.

Esta mesa que lleva por título Transparencia, fiscalización y evaluación del nuevo sistema de salud estará encabezada por la diputada Miroslava Sánchez Galván, presidenta de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, así como por los diputados secretarios de la misma comisión: la diputada Frinné Azuara Yarzábal, el diputado Éctor Jaime Ramírez Barba y el diputado Víctor Adolfo Mojica Wences.

Destacamos la presencia de los especialistas que participarán como ponentes de esta mesa: el doctor Alejandro Vargas, director general de Planeación y Desarrollo en Salud de la Secretaría de Salud; el doctor José Gabriel Martínez González, director del programa de la maestría en Ciencias Políticas; el doctor César Cruz Santiago, director general de Valoración Científica del Consejo de Salubridad; el profesor Luis Adrián Quiroz Castillo, de Red de Acceso; Janet Oropeza Eng, de Fundar, Centro de Análisis e Investigación; el licenciado José Antonio Centeno Reyes, vicepresidente nacional de Canacintra; el licenciado Cristofer Merlos Montes, director de Afiliación y Operación del Seguro Popular en Querétaro; la maestra María Teresa Soriano Ibarra, presidenta de la Asociación Mexicana para la Prevención y Atención en Salud; el maestro Héctor Arreola Ornelas, director ejecutivo de la asociación civil Tómatelo a Pecho; el doctor Luis Felipe Abreu Hernández, consejero editorial de la Asociación Mexicana de Facultades y Escuelas de Medicina A. C.; la enfermera Marta Medina Gómez, del Instituto Mexicano del Seguro Social; la doctora Janet García González, investigadora de la Universidad Autónoma de Autónoma de Nuevo León; el doctor Marcos Cantero Cortés, titular de la Unidad de Evaluación y Control Análisis Económico; y la doctora Elsa Ladrón de Guevara Morales, directora general de Evaluación del Desempeño de la Secretaría de Salud.

Los moderadores de esta mesa serán los diputados Éctor Jaime Ramírez, la diputada Frinné Azuara, el diputado Víctor Adolfo Mojica y la diputada Miroslava Sánchez, quien queda en el uso de la voz.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Gracias. Bien, buenas tardes, compañeras y compañeros diputadas y diputados, servidores públicos, médicos, investigadores, especialistas y ciudadanos que nos acompañan. Quiero dar la bienvenida y a la vez agradecer su presencia y su entusiasta participación en estas audiencias públicas de la Comisión de Salud que se están convocando en el marco del parlamento abierto.

Vamos a dar inicio con la mesa 6, que es Transparencia, fiscalización y evaluación del nuevo sistema de salud, con el apoyo de los compañeros diputados Éctor Jaime, la diputada Frinné y el diputado Víctor Adolfo Mojica.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: La primera participación en esta mesa de trabajo, de la audiencia pública con respecto al Instituto de Salud para el Bienestar, tenemos al doctor Alejandro Vargas, quien viene de la Dirección General de Planeación y Desarrollo en Salud de la Secretaría de Salud, él es médico especialista en terapia intensiva, especialidad en Gerencia de Servicios de Salud, maestría en Administración Pública y maestría en Administración de Hospitales y Salud Pública. Lo dejo con la palabra, doctor Alejandro Vargas.

El ciudadano Alejandro Manuel Vargas García: Buenas tardes. Antes que nada, agradecer mucho la invitación a este importante evento. Dado que tenemos el tiempo limitado, entiendo, son 8 minutos, correcto, trataré de apegarme estrictamente, ah, tenemos el tiempo allá.

Una de las consideraciones que desde el punto de vista de la planeación y del diagnóstico que se ha establecido en la presente administración y que quisiéramos resaltar en relación con el Seguro Popular y la propuesta de reforma de ley que está planteando la Cámara de Diputados, tiene que ver con un sistema que ustedes ya seguramente, ampliamente comentaron y no me voy a detener entre las bondades o no.

Solo tocar un tema que en lo particular, desde la planeación me preocupa mucho, que tiene que ver con que se perdió la rectoría de la Secretaría de Salud en los últimos años.

¿Por qué se dio este fenómeno, desde nuestro análisis? Es que el Seguro Popular se creó como un sistema de financiamiento al ser el ente rector del financiamiento, fundamentalmente la mayor parte de los recursos y crear un representen la entidad federativa se convertía, en paralelo, en un mecanismo rector.

De tal manera que este mecanismo rector, a partir de lo que era el representante de... en los estados, normalmente nombrado por el gobernador, tenía una especie de autonomía financiera en el manejo discrecional de los recursos más ligados a un esquema de financiamiento que ligado a la prestación de servicios en sí mismo.

Y la Secretaría de Salud, al momento de la descentralización, se genera como un organismo público descentralizado y como un organismo público descentralizado, y como OPD empieza a operar la responsabilidad de los servicios de salud. En ese momento queda sin una articulación la Secretaría de Salud federal y es así que las leyes locales de Salud de las entidades federativas lo que hacen es nombrar o hacer un cambio en su propia ley y nombrar secretario de Salud estatal y director general del OPD con la doble función.

En algunas entidades o la mayoría la ocupan la misma persona y entonces tenemos una gran división, una que es el ente supuestamente articulador a la rectoría de la Secretaría de Salud, que es responsable de dos grandes aristas en la prestación. Una es la salud pública, con todo lo que esto conlleva, y otra es la parte donde tiene que ver con la prestación de los servicios. Y tiene que tomar acuerdo con la otra parte, que es la financiadora, para tener el resultado de poder garantizar los insumos.

Debe reconocerse que en muchos de los casos esto ha sido exitoso, ha sido reconocido, particularmente en el ámbito de los gastos catastróficos, Siglo XXI, etcétera. Hay evidencia clara, pero también el costo que esto tuvo, en términos del aparato administrativo y de la desvinculación de la rectoría, creo que fue uno de los temas que no se han podido medir con precisión.

Ahora bien, en términos de la transparencia, creo que la reforma de la ley no emite en ningún momento un artículo que diga que desaparecen los órganos fiscalizadores. Ese es un sistema donde la Auditoría Superior de la Federación, los organismos internos de control seguirán siendo los rectores en la determinación del flujo del dinero y la utilización del mismo. Creo que en este punto no hay duda.

El segundo punto que creo que sí hay que destacar mucho en la propuesta de la ley es que se le debe devolver a la Secretaría de Salud federal la rectoría.

Voy a poner un ejemplo, que este es parte de mis responsabilidades, que tiene que ver, por ejemplo, con la obra. Hay un plan maestro de infraestructura perfectamente regulado, con reglas muy claras; sin embargo, muchas de las obras que tenemos detenidas en este momento obedece, entre otras cosas, a que las entidades federativas asumieron el riesgo de construir unidades sin la autorización del nivel federal, sin tener autorizada la totalidad de los recursos. O bien, que el momento en que es autorizado por la secretaria, en el plan maestro de infraestructura modifican el proyecto ejecutivo y al regreso nos vienen con la idea de que cuesta más.

Resultado de ello, en términos generales, cerca de 270 obras –más menos, esto ha cambiado– que están detenidas la mitad de ellas sin un registro del plan maestro de infraestructura.

Hay obras que incluso han sido modificadas y no pueden ser terminadas porque no hicieron las adecuaciones pertinentes. Y peor aún, hay obras terminadas y equipadas pero que, al no contar con los recursos humanos contratados están detenidas. Esto no me traduce más que claramente que en algún momento se perdió la rectoría de la Secretaría de Salud federal. Era claro el elemento de que el hecho de tener el permiso se debería enganchar los recursos, la gestión de los mismos, la autorización de la plantilla, todo desde el inicio para que los hospitales a la hora de ser entregados arrancaran de inmediato.

Pongo un ejemplo exitoso de esto, el caso que acabo de visitar en la ciudad de León. Arranca el Hospital General de León, que perfectamente terminó en tiempo, en forma, pero es una transferencia y substitución de un hospital, contaba con los recursos humanos y contaba con permiso de infraestructura, creo que esto es algo que es fundamental.

En resumen, sí creo que la ley, independientemente del lado en el que estamos, debe permitir la recuperación de la rectoría de la Secretaría de Salud federal en los temas de prestación de servicios y financiamiento. Esto es muy importante porque debe tener un reflejo real de que los recursos deben de llegar directamente de la Secretaría de Salud federal a la secretarías de las entidades federativas y tener una línea clave y un objetivo dentro de la planeación de qué y para qué se requieren los recursos en materia de prestación de servicios y de salud pública, que es la razón de ser de la propia Secretaría, y los órganos fiscalizadores, por supuesto, tienen el mismo papel que están jugando hasta ahorita, donde por supuesto podrán y deberán asimismo.

El otro punto que creo que, para finalizar el tema, es que el tema es que queda de acuerdo a la reforma de la ley, lo relevante, insisto, es que se recupere la rectoría a unir y establecer las políticas en materia de salud durante la publicación del plan sectorial de salud, le devuelve la responsabilidad al financiamiento y la rendición de cuentas ante los organismos fiscalizadores. Es todo lo que tengo que comentar.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Gracias, doctor Alejandro Vargas. Tenía muy, muy cronometrado el tiempo ¿verdad?

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Enseguida le vamos a dar la palabra al doctor César Cruz Santiago. Él viene de la secretaría técnica de la Comisión para el Análisis, Evaluación, Registro y Seguimiento de las Enfermedades Raras. Es médico cirujano por la UNAM. Especialista en cirugía general del Hospital de Especialidades Centro Médico Nacional Siglo XXI del IMSS. Especialista en cirugía de colon y recto del Hospital Adolfo López Mateos del ISSSTE. Es maestro en ciencias médicas por la UNAM y doctor en ciencias por el Miller School of Medicine, de la Universidad de Miami, Florida. Médico cirujano con más de 20 años de experiencia en la atención médica, laborando en instituciones públicas y privadas. Dejamos con el uso de la voz al doctor César Cruz Santiago. Adelante.

El ciudadano César Cruz Santiago: Muchas gracias. Con su permiso, presidenta, muchas gracias, es un verdadero honor estar aquí con ustedes, muy distinguidos diputados integrantes de la Comisión de Salud, funcionarios y ponentes, señoras y señores, amigos todos.

Es un gran privilegio el participar en esta sesión de Parlamento abierto y compartir con ustedes algunas reflexiones referentes a este tema importante de transparencia, fiscalización y evaluación.

Algunas reflexiones en los siguientes 7.34, 33, 32 minutos que me quedan, trataremos de ser puntuales.

Los procesos de medición de constituyen como una actividad fundamental de cualquier objetivo humano que se pretenda alcanzar. Voy a permitirme parafrasear a uno de los padres del método científico, Galileo Galilei, que decía en uno de sus postulados: “Hay que medir lo que sea medible y hacer medible lo que no lo sea”.

Es bien conocido el hecho de que las actividades que no se pueden medir no se pueden controlar. Si no se pueden controlar, no se pueden gestionar y, por lo tanto, si no se pueden gestionar, no se pueden mejorar.

En la actividad médica se debe realizar siempre un análisis sistemático, no solo de las políticas y los lineamientos, sino también de la actividad médica per se, incluyendo los procedimientos diagnósticos, las decisiones terapéuticas, la evaluación en el uso de recursos y los resultados obtenidos, de manera que se alcancen los desenlaces clínicos adecuados y se logren los impactos positivos en la calidad de vida de los pacientes.

Tengo la fortuna actualmente de estar representando al Consejo de Salubridad General, que ha sido múltiplemente citado en este Parlamento, inmediatamente diremos que es un órgano colegiado cuya existencia se encuentra consagrado y fundamentado en el artículo 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y sus atribuciones se encuentran perfectamente establecidas en el artículo 17 de la Ley General de Salud. Funciona como un órgano colegiado que puede articular diversas dependencias y facilita por eso la toma de decisiones en salud.

Entre sus diversas atribuciones se encuentran dos, que voy a destacar en este momento. El primero es el garantizar la excelencia de la atención médica a través de la certificación de los establecimientos de atención médica y, el segundo, el de que se cuente con los mejores insumos como herramienta de la atención, a través del actualmente denominado como Compendio Nacional de Insumos para la Salud y anteriormente conocido como Cuadro Básico y Catálogo de Insumos.

No voy a ahondar mucho en el proceso de la certificación y acreditación, ya que este fue un objeto de las mesas anteriores. Simplemente quiero enfatizar lo siguiente.

El cumplimiento estricto de los protocolos, guías y normas para la atención médica son un proceso que contribuye sustancialmente a la seguridad de los pacientes y a la posibilidad de alcanzar los resultados adecuados. La certificación no es solo para las actividades de segundo, tercer nivel, sino se debe también ahondar en el primer nivel de atención y tenemos que ahondarla también en los lugares donde se lleva a cabo la atención de las necesidades de la población.

Es por ello que el Consejo de Salubridad General ha empezado a realizar un esfuerzo para realizar la certificación de los médicos que brindan atención adyacente a las farmacias, que desempeñan un punto muy importante en la atención de necesidades primarias de la población.

Esto es muy importante para que estos médicos también cumplan con los estándares y los niveles básicos y los niveles de calidad que la población demanda y la eficiencia es mandatoria en estos puntos.

El contar con los adecuados insumos para la salud se constituye como una herramienta fundamental para la seguridad y la eficacia. En el Estado mexicano estos insumos para la salud se encuentran contenidos en el anteriormente denominado como Cuadro Básico y Catálogo de Insumos para la Salud.

Este Cuadro Básico no es un solo tomo, no es un solo libro, sino son nueve compendios que se darán origen y que cada uno de ellos corresponde a un grupo terapéutico determinado.

En la actualidad el Cuadro Básico y Catálogo contiene alrededor de 14 mil 549 claves que representan 2 mil 996 insumos para la salud. De la totalidad de estos, solo mil 865 corresponden a medicamentos, la mayoría de las claves están distribuidas en los otros tomos, como son el tomo de Material de Curación, tomo de Auxiliares de Diagnóstico, de Instrumental y Equipo Médico, de Medicamentos Herbolarios, de Medicamentos Homeopáticos y de Medicamentos para el Apoyo en la Nutrición.

Esos mecanismos de medición del impacto de estos insumos se pueden dar fundamentalmente a través de dos puntos básicos. Primero, en medir la idoneidad en la prescripción.

De nada sirve contar con un insumo adecuado si no contamos con los mecanismos para controlar que este insumo llegue a la persona que lo necesita, en el tiempo que lo necesita.

Si no se lleva a cabo este control en la prescripción, los insumos podrán estar, pero se podrán utilizar en puntos o en momentos en los que no deben utilizarse.

Cada insumo tiene una prescripción precisa, prescripción que ha sido valorada y establecida de acuerdo a los criterios y la mejor evidencia científica disponible. Esta prescripción debe ser conocida por el médico y por quien esté en contacto con este insumo. Si no se tiene esta prescripción y este control, el insumo puede ser utilizado en diversas situaciones y en diversos puntos donde no va a tener la efectividad adecuada.

Y el segundo punto es quizás un punto toral e importante, que es el más importante en la medición, que es el aspecto de la farmacovigilancia y tecnovigilancia. El Consejo de Salubridad General ha establecido junto con la Cofepris, que es la autoridad responsable de esta actividad, una serie de mesas de trabajo con la finalidad de reorientar la política de farmacovigilancia y tecnovigilancia, de manera que cumpla con los objetivos adecuados y que tenga una dirección hacia el paciente.

Esto es muy importante porque reorienta la política en dos grandes vertientes: en la consecución y el contar con un sistema de información adecuado de farmacovigilancia y, número dos, en incidir de manera positiva en el punto donde debe generase la farmacovigilancia, esto es el punto donde se genera la atención médica, donde está el médico, donde está la enfermera, donde está el equipo de salud utilizando el equipo. Ahí es donde se va a generar el proceso de farmacovigilancia de manera más intensiva, y debe contar un sólido sistema de información que lo soporte.

Muy bien. Todos estos puntos son elementos que nos llevan a una profunda reflexión respecto a la iniciativa que el día de hoy nos convoca. Esta iniciativa nos permite hacer un alto en el camino para saber cómo ha venido transcurriendo el sistema de salud y por dónde queremos que siga llevando a cabo sus trabajos. Permite, entonces, la reorientación histórica de este sistema hacia los pacientes, hacia las necesidades de cada uno de ellos. El artículo cuarto constitucional nos enmarca la meta, nos enmarca dónde debemos llegar.

Ha sido una grata experiencia, pues, el haber podido escuchar en estos días diferentes posturas, reflexiones e ideas que, estoy seguro, fortalecerán la iniciativa original y permitirán un análisis profundo y el establecimiento entonces de los lineamientos que permitan alcanzar la institución que todos queremos y que la sociedad mexicana nos demanda.

El derecho a la salud es pues un derecho fundamental, un derecho que todos tenemos y hacia donde todos debemos encaminar nuestros esfuerzos. Porque contribuyendo a la salud contribuiremos a hacer posible la igualdad, la equidad y la justicia social, que son anhelos de toda la población mexicana a lo largo del tiempo. Muchas gracias.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Gracias, doctor César Cruz.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: A continuación, voy a pasar la palabra al diputado Víctor Alonso Mojica Wences para continuar con la coordinación de las ponencias.

El moderador diputado Víctor Adolfo Mojica Wences: Gracias, presidenta. Siguiendo con los ponentes me toca a bien presentar al profesor Luis Adrián Quiroz Castillo, cofundador de la Asociación Civil, Red de Acceso.

Luis Adrián Quiroz Castillo es profesor de educación física, egresado de Instituto de Cultura Física de la ex Unión República Socialista y Soviéticas, es coordinador general de derechohabientes, viviendo con VIH, DVVIMSS de salud, de hechos y Sisex, Asociación Civil. Cofundador de la Red de Acceso Vocal del Consejo Nacional de VIH Sida, Senasida.

Ha participado en las reuniones de alto nivel sobre VIH, como parte de la delegación mexicana, de 2006 a 2008, el 2011 y 2016, durante 2013, fue invitado con la Internacional Patiens Allianz en el Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud.

Fue delegado en representación de pacientes en la Conferencia Mundial de Salud, 2009 y ha participado en diferentes conferencias internacionales. Tiene el uso de la voz por 8 minutos el profesor Luis Adrián Quiroz Castillo.

El ciudadano Luis Adrián Quiroz Castillo: Buenas tardes a todos y a todas. En efecto, soy Luis Adrián Quiroz Castillo, soy una persona que vive con VIH, que fui curado de Hepatitis C, que hoy en día vivo con dos... que es daño renal ocasionado por la ingesta de medicamentos por más de 15 años y por hipertensión.

El tratar de hablar a nombre de todos los pacientes sería extremadamente oneroso. Habló por mí y por muchos que identifican con estos procesos que hoy en día queremos entablar en ese sistema de salud. El garantizar, realmente, el derecho a la salud.

Voy a hacer referencia a la doctora Christina Laurell, que hace un momento puso en el escenario el tema de la no discriminación. Ella por motivos de origen de étnico. En ese contexto, hoy en día, en este país se discrimina al 100 por ciento a todas las personas que no están afiliados a ningún tipo de Seguridad Socia, ya que se tienen diferentes niveles de atención.

Es inadmisible que el Estado mexicano a sabiendas de ese proceso se discrimine y se siga discriminando hasta el día de hoy porque no contamos con una cartera de servicios igualitarias para todas las personas independientemente de lo que seamos.

Nos preocupa y nos ocupa que hoy en día en el Instituto Nacional del Bienestar no se contemplan muchas de esas participaciones. Nos preocupa que la salud centrada en el paciente hoy en día no está haciendo una realidad en México.

Nos preocupa que todo mundo habla que tenemos que centrar y que tenemos que luchar por los pacientes, por las personas que vivimos con diversas enfermedades, pero pocas veces estamos invitados a estas mesas de diálogo con voz y con voto, pocas veces estamos incluidos en la toma de decisiones, salvo desde el VIH.

En VIH, desde hace más de 25 años nos atrevimos a cambiar este proceso, por qué, porque hicimos que la voz de los usuarios fuera el centro de todo este proceso. A través de la Declaración de Paris de 1996 es que el Estado mexicano ratifica este proceso y centra la mayor participación de las personas afectadas en la política pública.

Y hoy en día no puede ser que no se discuta una política de VIH sin la participación activa de las personas que vivimos con VIH en la participación efectiva, en la toma de decisiones sobre nuestras guías de práctica clínica, sobre cómo se va a implementar el presupuesto.

Me preocupa que esta acción es también discriminatoria para los otros procesos y las otras enfermedades. No es posible que la participación activa de las personas que viven con diferentes patologías en el país hoy en día está literalmente invisibilizada. No puede ser posible que estemos hablando de mejorar el sistema de salud sin la voz de todas las personas que estamos hoy día afectadas por este proceso.

Nos preocupa que en este tema, en el caso de VIH, tuvimos una crisis muy compleja al inicio de este sexenio. Y fue un problema en cómo se estaba haciendo la compra de medicamentos. Sin duda celebramos, de verdad, celebramos, profundamente el combate a la corrupción que se está haciendo en este momento. Lo que sí nos preocupa es la manera en cómo se está haciendo la compra de los insumos para la salud.

Nos preocupa cómo se está haciendo la distribución de estos fármacos. Nos preocupa que hoy en día se estén haciendo cambios sistemáticos en el tratamiento de las personas que vivimos con VIH y se atienden todavía en los CAPASITS, porque se descontó 3 pesos de la última oferta que hizo el anterior ganador en eso que le llamó el paradigma de VIH.

Nos preocupa que, después de dos meses de habernos cambiado de tratamiento, hoy los están volviendo a cambiar por cuestiones económicas y no apegadas, ojo, a condiciones clínicas basados en ciencia. Se están cambiando y están haciendo su dichoso tratamiento para dar el más barato que se pudo comprar.

Y no estamos siendo transparentes, no se está garantizando en ningún momento el consentimiento informado para garantizar que las personas puedan decidir si sí o no acceden a estos cambios terapéuticos.

Nos preocupa de verdad que se esté tomando el ejemplo de VIH como un modelo ya garantizado, una compra maravillosa cuando tenemos. Y lo que no se ha dicho es que el ahorro de esta compara se centró literalmente en un medicamento que no ha sido probado en personas viviendo de VIH que es el succinto de tenofovir disoproxil,

Nos preocupa porque le hemos solicitado audiencia al titular de COFEPRIS y literalmente ha hecho caso omiso, nos preocupa porque también como afectados de este proceso no hemos sido recibidos por el Consejo de Salubridad General, tuvimos que demandarlos para ganta izar y ni así fuimos escuchados.

Nos preocupa porque hoy en día no nos negamos a la utilización de este fármaco lo que nos preocupa es que no está y no hay evidencia suficiente para que nos demuestren que es efectivo a las personas que vivimos con VIH, se hizo en personas sanas, no en personas con VIH.

Y si este es el marco referencial de lo que se va a hacer en la compra de medicamentos, nos preocupa y nos ocupa que en otros tenores para las personas que viven con diversos tipos de cáncer, con enfermedades de baja prevalencia, las personas que vive con enfermedades autoinmunes y muchas otras más, estén dentro de este contexto; de que estemos metiendo alternativas farmacéuticas o medicamentos que no se han comprobado su calidad en personas afectadas por el padecimiento y sobre todo en aquellos padecimientos que son de muy alta especialidad.

Nos preocupa también porque al inicio del sexenio el presidente de la república, menciono que se va a quitar todos los apoyos a las organizaciones de la sociedad civil, en ese contacto; déjenme decirles, que en materia de VIH existían un recurso que desde la Sociedad Civil impulsamos para garantizar que existieran proyecto específicos para hacer diferentes acciones implementadas desde el diagnóstico, la atención y evitar el estigma y discriminación de las personas afectad.

Hoy en día, en el país se ha dejado de diagnosticar a más de 2,500 personas que no sabemos cómo están porque ese apoyo no ha llegado, nos preocupa porque el estado no está llegando donde están los usuarios de drogas inyectables, los hombres y las mujeres tras, los hombres y las mujeres tras trabajadores sexuales que son los afectados de la epidemia.

Las personas privadas de la libertad, el estado no está garantizando esas pruebas de diagnóstico ¿Quiénes llegaban ahí? Las organizaciones de la Sociedad Civil ¿Quiénes llegaban para combatir el estigma y la discriminación en todos los rubros de este proceso? Las Organizaciones de la Sociedad Civil.

Gracias al oficio del señor presidente, hoy en día hemos dejamos de hacer cosas sustanciales para garantizar la atención de las personas que vivimos con VIH, nos preocupa que hoy en día, el Consejo de Salubridad General tenga un espacio para que los pacientes podamos estar representados ahí.

Curiosamente, en este espacio hablando de transparencia, no tenemos ni voz ni voto. Solamente somos figuras de papel, cuando el artículo 33 de esta Constitución nos permite participar activamente en la planeación democrática de este proceso.

De una vez le advierto al doctor César Cruz que le haga llegar al titular del Consejo de Salubridad General que voy a solicitar poder participar en el Consejo de Salubridad General y, de entrada también, ampararme ante este proceso porque no puede ser posible, de verdad, que no tengamos voz y voto cuando nosotros pagamos también como ciudadanos de este país el derecho a la salud. No puede ser posible.

Nos preocupa también que hoy en día en el modelo del Insabi no está garantizado por ningún lado el tema de la rendición de cuentas.

Hace unos momentos volvimos a revisar la ley y en ningún lado aparece el tema de cómo vamos a hacer la coparticipación desde las personas afectadas y sobre todo la rendición de cuentas.

Hoy en día a nadie le queda claro cómo se van a implementar las acciones de salud para las personas que van a estar afiliadas al Insabi. ¿Se van a acreditar los hospitales de nueva cuenta? ¿Cómo va a ser este proceso?

Estamos hablando que ya se ganó un precio referencial para las personas que viven con hepatitis C, pero seguimos teniendo nueve centros acreditados en todo el país para atender a todas las personas que puedan vivir con hepatitis C y que puedan acceder a la cura.

Hoy en día no sabemos cómo va a ser este proceso. Nos preocupa porque sí estamos presumiendo el gran ahorro, pero no estamos diciendo cómo se va a ejecutar la cura de la hepatitis C.

¿Cuánto tiempo va a tomar estos procesos? ¿Qué pasará cuando una persona adquiera seguridad social? Les cuento: en VIH a través de la lucha que hemos hecho, una persona migra del Seguro Popular, cuando adquiere seguridad social, al IMSS y se le garantiza su tratamiento al 100 por ciento. Hoy en día, esta acción, para cualquier enfermedad que esté cubierta por el Seguro Popular, es inviable. Si una persona que vive con algún tipo de cáncer, si una persona que vive con alguna de las enfermedades de baja prevalencia se atreve a tener un trabajo, se atreve a tener seguridad social, hoy en día no está garantizada su atención médica porque el propio Estado discrimina a estas personas porque el tratamiento no sigue a la persona, se corta en ese momento la atención, lo cual la dejan a la deriva de todo o cualquier proceso de atención clínica.

¿Cómo va a ser la incorporación de las personas de baja prevalencia? Ojo: no son 10, son más de 500 enfermedades de baja prevalencia que hoy en día no están atendidas por el Estado mexicano. Nos preocupa y nos ocupa.

Si una persona requiere hoy en día una interconsulta o no existe un hospital acreditado, nadie le cubre el proceso del traslado a la atención médica donde sí se puede atender. ¿En el Insabi se está contemplando este proceso? En la ley no está. Nos preocupa y yo sé que van a decir “éste no es un muro de las lamentaciones” y queremos pasar a las propuestas.

Desde la red de acceso, desde hace 6 años, nos comprometimos a vigilar los procesos de cómo se están haciendo recortes presupuestales.

Metimos dos iniciativas de modificación a la ley en esta materia y algo también muy simple: tenemos tres impuestos especiales de los IEPS que están dedicados a la salud. Que hoy en día, ninguno de estos tres impuestos se utilizan para financiar a la salud. No puede ser posible que esté el impuesto al tabaco, a bebidas azucaradas y al alcohol sin usarse para la salud.

En el sexenio pasado tuvimos reunión con la secretaria de Hacienda y nos dijo algo muy simple: nunca se ha destinado un solo centavo a la salud.

Si hoy en día estamos hablando de cómo se va a financiar la salud, lo que sí les exijo a los diputados y sí es exigencia, que empecemos a legislar en materia y se destine el 100 por ciento o empecemos a negociar, de cada peso cuánto se va a destinar a la salud de esos tres impuestos, porque es una gran bolsa de salud.

Nos preocupa para poder garantizar realmente el efectivo derecho a la salud. Es indispensable la presentación efectiva de las personas que padecemos diversas enfermedades, en todo el proceso de planificación y ejecución del Insabi.

Participar activamente en la vigilancia, en la entrega oportuna de medicamentos, la fiscalización de recurso público, la participación activa y la elaboración de las guías de práctica Clina, sí representadas por los usuarios de los servicios.

Contar con un programa real de farmacovigilancia. Yo sigo escuchando, desde el inicio de este sexenio que estamos implementando un programa... tenemos una plataforma inservible, donde nadie puede implementar hoy en día una queja por farmacovigilancia porque se puede tardar uno hasta seis horas en poder entenderle a un sistema que no sirve.

¿Qué estamos haciendo en estos meses que ya lleva este sexenio para garantizar cualquier posible efecto adverso en farmacovigilancia?

Finalmente, poner en el centro en todos los procesos a las personas. Garantizar la cobertura al 100 por ciento. Así como pagamos los mismos impuestos, queremos el mismo derecho a la salud, que sea igualitario y sin ningún tipo de restricción. Muchas gracias.

Ah, perdón, y se me olvidaba, le solicitamos amablemente a la diputada Miroslava, incluirnos en estas mesas de análisis de la ley del Insabi, porque las personas que estamos afectadas, las diferentes organizaciones que pertenecemos a la red de acceso, las organizaciones que no pertenecen a la red de acceso tenemos que estar también ahí, en la planeación de este proceso de esta nueva ley del Insabi.

Porque vamos a ser los principales afectados y ya no podemos permitir no estar en este tipo de discusiones. Es indispensable estar. Muchas gracias.

El moderador diputado Víctor Adolfo Mojica Wences: Gracias, don Adrián Castillo por dar a conocer las preocupaciones que tiene todo un grupo grande de personas que viven con enfermedades no muy frecuentes. Hoy tiene usted aquí un lugar en el que se escuchó, en el cual nuestras preocupaciones van a ser nuestras ocupaciones también. Gracias.

El moderador diputado Víctor Adolfo Mojica Wences: Sigue en nuestra lista la licenciada Janet Oropeza Eng, de Fundar. Ella es licenciada en política y administración pública por el Colegio de México y maestra en ciencias políticas por la Universidad de Waterloo, Canadá.

Trabaja temas de contraloría social, participación ciudadana, rendición de cuentas, combate a la corrupción y fortalecimiento de capacidades. Antes de Fundar trabajó en distintas agencias internacionales y nacionales y en consultoras en temas de fortalecimiento institucional, políticas públicas y participación ciudadana.

En Fundar es investigadora del programa de rendición de cuentas y combate a la corrupción y es responsable desde 2015 de las actividades de la plataforma de conocimiento del GTSA. Dentro de Fundar se ha desempeñado como coordinadora del proyecto ELLA, Fase 1, de 2011 a 2014, y coordinadora del área de vinculación y gestión del conocimiento, de 2013 a 2016. Tiene usted ocho minutos, licenciada Janet Oropeza.

La ciudadana Janet Oropeza Eng: Muchas gracias. Agradecemos la invitación a participar en estas mesas de Parlamento abierto y esperamos que en el espíritu del Parlamento las opiniones propuestas y preocupaciones aquí vertidas enriquezcan la iniciativa de ley y sean tomadas en cuenta en el dictamen que emita esta comisión.

Fundar, centro de análisis e investigación es una organización de la sociedad civil que trabaja para avanzar hacia una democracia sustantiva y la garantía de derechos humanos, incluido el derecho a la salud.

Uno de los enfoques de nuestro trabajo es la promoción de la transparencia, rendición de cuentas y el combate a la corrupción. Desde el inicio del Seguro Popular monitoreamos el gasto destinado a la salud materna y reproductiva y a los medicamentos. Entonces, los comentarios que hacemos los hacemos a la luz de la experiencia que hemos tenido monitoreando el Seguro Popular.

Primero, quisiéramos señalar que a la luz de nuestro trabajo por más de una década coincidimos en el diagnóstico planteado en la iniciativa de ley, respecto a que es necesario un aseguramiento universal, pues el Seguro Popular es un esquema limitado que no cubre todos los padecimientos, que no garantizaba el acceso a la salud para las personas.

También coincidimos en que los últimos años, y particularmente en el sexenio pasado, hubo problemas de irregularidades y desvíos en las entidades federativas de los recursos del Seguro Popular, que fueron ampliamente documentados por la Auditoría Superior de la Federación, sobresalen los casos de Veracruz, Oaxaca y Michoacán.

Entonces para dimensionar la magnitud de esto, de 2011 a 2016, en Veracruz la Auditoría Superior de la Federación detectó probables irregularidades por más de 10 mil millones de pesos del Seguro Popular, entonces coincidimos en que había muchos problemas, irregularidades alrededor del gasto, como lo dice la iniciativa y que el Seguro Popular era un esquema muy limitado.

Y a la luz de esto nos permitimos plantear las siguientes recomendaciones o dudas sobre la iniciativa de ley propuesta. Entonces, en primer lugar, bueno vemos que es importante que se tomen lecciones aprendidas sobre lo que no funcionó en términos de fiscalización y control del Seguro Popular para este nuevo esquema de salud.

Observamos que la iniciativa centraliza funciones de provisión en el nivel federal, lo que se platicaba de la rectoría, sin embargo, la centralización per se lo hacen ver un mayor control o disuasión de la corrupción.

La centralización por sí sola no va a resolver los problemas de corrupción o de rendición de cuentas que había, por lo cual es importante que desde el inicio en la iniciativa de ley piense y establezca un esquema fuerte de rendición de cuentas, transparencia, control y fiscalización de los recursos públicos en áreas de riesgo como las contrataciones, compras, integración de padrones de derechohabientes, de manera que se prevengan y atiendan los posibles actos de corrupción e irregularidades.

Consideramos que esta iniciativa de ley y la creación del Instituto de Salud para el Bienestar es una oportunidad para volver a pensar estos mecanismos de transparencia y rendición de cuentas y no repetir errores pasados, todos los desvíos e irregularidades.

También consideramos que parte de la construcción de este marco implica tener criterios claros en distintas áreas. Primero para la asignación presupuestaria y para la elaboración de los diagnósticos de los que va a partir este nuevo esquema de salud.

Por ejemplo, hay que establecer criterios claros mediante los cuales se asignará el presupuesto al nuevo sistema. Anteriormente, bueno la Ley General de Salud que está ahorita vigente, planteaba el mecanismo y porcentajes de financiamiento del sistema de protección social en salud, de acuerdo al número de afiliados.

Y aunque vemos de forma muy positiva que la iniciativa planteada establece que la asignación va a ser progresiva, nos parece que no son suficientemente claros los criterios de asignación presupuestaria para las entidades federativas, lo cual es muy importante porque en el país persisten amplias desigualdades en términos de salud.

Entonces necesitamos saber cómo se van a asignar los recursos de manera que cumplan con la función redistributiva de reducir las desigualdades. Y también para elaborar estos criterios se necesitan diagnósticos precisos, epidemiológicos y también sobre el estado que guarda la infraestructura y el equipo médico en cada estado, como también aquí se platicó.

Y consideramos que la ley no es clara en cuanto al nuevo mecanismo para construir estos diagnósticos. Por ejemplo: la ley ya no menciona las jurisdicciones sanitarias que dentro del Seguro Popular eran quienes detectaban las necesidades de salud pública en el ámbito municipal y con los que se construían los diagnósticos estatales y el nacional.

Entonces, consideramos que es importante que se conozca cuál va a ser la metodología para estos nuevos diagnósticos.

Otra cosa que nos parece importante destacar es no bajar con esta nueva iniciativa de ley, no bajar los estándares que ya existían. El artículo 77 Bis 15 de la iniciativa desaparece el Anexo del Seguro Popular, mediante el cual se transparentaba el gasto y partidas destinadas a entidades federativas para los servicios de salud y que permitía el seguimiento de los recursos y su cumplimiento en función de indicadores.

Era un anexo que servía mucho a organizaciones de la sociedad civil que queríamos dar seguimiento al gasto en distintos programas, como les comentaba, de salud materna.

La iniciativa al desaparecer el anexo debe especificar el nuevo mecanismo para la transferencia de los recursos del Ramo 12 para las entidades federativas, además de establecer que los convenios de coordinación que firmen las entidades federativas con la federación incluyan indicadores, montos de recursos y partidas presupuestarias.

Entonces, nos parece importante que el nuevo instrumento que se utilice para esta transferencia no baje el estándar de seguimiento y la transparencia de los recursos que existía anteriormente.

O sea, que no vayamos en un retroceso, ahora que se va, digamos, a crear un nuevo mecanismo de transparencia presupuestaria.

Respecto a controles y contrapesos, como ya se mencionó aquí también, es importante que las instituciones de control que siguen teniendo facultades, la Auditoría Superior, la Secretaría de la Función Pública, realmente cumplan con un verdadero rol de contrapeso, porque pues ya estamos digamos yendo hacia una centralización en la federación.

Una propuesta podría ser que se establezca en la ley la obligación del titular de la Secretaría de Salud o del Instituto de Salud para el Bienestar, de rendir un informe semestral a la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados sobre el cumplimiento de la prestación gratuita de servicios de salud y medicamentos asociados.

Es decir, una propuesta podría ser que esta Cámara funja como ese contrapeso, al ser una representación de los ciudadanos mediante el voto.

Otro punto que nos gustaría, digamos, mencionar es un área de riesgo para la rendición de cuentas que observamos en la iniciativa. La iniciativa modifica el Fondo de Gastos Catastróficos y sus fines, creando el Fondo para la Atención de la Salud y Medicamentos Gratuitos, para el cual establece tres fines y señala que se crearán reglas de operación.

Dado que el fondo es un fideicomiso y una figura legal que puede ser proclive a la opacidad, además de que sabemos que tiene muchísimos recursos, es importante que la iniciativa establezca que las reglas de operación, bueno, cumplirán con las obligaciones de transparencia y rendición de cuentas, apegadas a los máximos estándares.

Finalmente, consideramos que ni los artículos de la iniciativa ni los transitorios son claros respecto a si el Fondo de Gastos Catastróficos se extinguirá o si solo se modificará.

Si el Fondo entra en un proceso de extinción es importante hacerlo respetando las disposiciones de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, que establece el procedimiento legal de extinción de los fideicomisos.

Si el Fondo más bien se transformará y sus fines van a cambiar, es importante que haya reglas precisas en los artículos transitorios de la iniciativa, para saber cuál será el proceso de transición de este Fondo para evitar sobre todo la discrecionalidad en este proceso de transición.

Finalmente, justo respecto al proceso de transición. Se propone que la iniciativa entre en vigor al día siguiente de su publicación y se da un plazo de solo 180 días para expedir los reglamentos. Consideramos que dada la envergadura de la iniciativa y que el sistema de protección social en salud se encuentra operando actualmente, convendría establecer un periodo más largo de transición y un plan que dé certeza respecto a cómo se hará la transición del sistema de protección social en salud para dar paso en este nuevo esquema.

Es decir, que se establezcan como los pasos que va a seguir y las fechas, y al mismo tiempo nos parece importante establecer en los transitorios que la transición no afectará la continuidad de los tratamientos y atención para afiliados actuales del Seguro Popular, para evitar afectaciones a la salud y a los tratamientos que ya tienen en curso. Muchas gracias.

El moderador diputado Víctor Adolfo Mojica Wences: Muchas gracias, licenciada Janet Oropeza, por su intervención.

El moderador diputado Víctor Adolfo Mojica Wences: Vamos a solicitar al licenciado José Antonio Centeno Reyes, vicepresidente nacional de Sectores y Ramas Industriales de Canacintra. Él es licenciado en derecho por la Universidad La Salle, director general de Biomédica Mexicana, S.A de C.V, y miembro propietario del Comité de Testigos Sociales, en la Secretaría de la Función Pública. Tiene usted el uso de la voz por ocho minutos.

El ciudadano José Antonio Centeno Reyes: Muchas gracias. Buenas tardes a todos. En nombre de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación agradezco a la Comisión, y en particular al diputado Ramírez Barba, la invitación a participar en este evento.

Celebramos la realización de este ejercicio de parlamento abierto, que además de brindar voz a los ciudadanos nos permite intercambiar opiniones y encontrar soluciones democráticas y benéficas para los mexicanos.

Toda persona tiene derecho a la protección de la salud, señala nuestro artículo 4o de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. A la luz de este mandato constitucional debemos reconocer que como país hemos fracasado históricamente en garantizar este derecho a todas las personas.

Si bien se han tenido avances en algunas áreas, estamos lejos de alcanzar la universalidad. Es por eso que el nuevo sistema de salud debe garantizar el cumplimiento efectivo de este derecho, por lo que se impone instrumentar diversas acciones, entre ellas una serie de reformas legales, implementación de políticas públicas de mayor alcance, optimizar las estrategias financieras, mejorar los procesos educativos y un largo etcétera.

Vemos, sin embargo, que existen dos puntos estratégicos. El primero poner a la persona en el centro de todas las decisiones. El segundo, planear con una visión de largo plazo, no más política instantánea. En este gran reto es indispensable que todos los mexicanos sumemos esfuerzos, acciones y voluntades desde cada uno de nuestros sectores; buscar los puntos de confluencia y dialogar en las discrepancias, siempre en el marco del respeto, para evitar desconfianza y encontrar las mejores soluciones.

En el rubro de transparencia, fiscalización y evaluación que nos ocupa, en este nuevo sistema de salud consideramos que no debe limitarse exclusivamente a la supervisión del gasto presupuestal, sino a los resultados obtenidos. Debemos comenzar a fiscalizar y evaluar el uso de los recursos no sólo por el nivel de cumplimiento legal de los mismos, sino también por el nivel de satisfacción en el objetivo del gasto. La protección de la salud en sus distintas etapas de prevención y atención debe ser el objetivo a fiscalizar.

Por ejemplo, la fiscalización y evaluación en las compras de insumos para la salud. Esta fiscalización debe ir más allá de verificar si se ajustó o no el procedimiento de compra a la Ley de Adquisiciones. Debemos poder evaluar la eficacia de los bienes adquiridos. De nada sirve comprar insumos importados muy baratos si al mismo tiempo se pone en riesgo al paciente debido a la falta de eficacia o seguridad de los insumos. O el incumplimiento al momento de realizar las entregas de los bienes por parte de proveedores oportunistas o improvisados. No hay insumo más caro que el que no se encuentra en el almacén de un quirófano cuando se necesita. La salud de los mexicanos debe garantizarse por encima de cualquier otra circunstancia. Cuando las políticas públicas en salud fallan, la gente muere.

Fiscalizar y evaluar los recursos destinados a las instituciones a partir del cumplimiento de sus indicadores en los objetivos, orientados a proteger la salud de todas las personas. Evaluar el cumplimiento de los aspectos de accesibilidad, aceptabilidad, calidad y oportunidad de los servicios prestados.

Proponemos instrumentar medidas de evaluación enfocadas en el nivel de satisfacción de los usuarios de las distintas instituciones, relacionadas con la protección a la salud. Por ejemplo, pacientes y familiares tratándose de clínicas y hospitales; empresas que someten trámites en Cofepris, etcétera.

El nuevo sistema de salud debe enfocar sus esfuerzos en la atención primaria y oportuna de la salud, que es precisamente en donde menos se ha puesto atención y en muchos casos se encuentran en abandono.

En México, tenemos excelentes hospitales de tercer nivel, con los mejores equipos, recursos humanos y materiales, sin embargo, muchos de los pacientes ahí atendidos no debería necesitar ese nivel de intervención si se brindará una efectiva prevención y, en su caso, atención oportuna en las instituciones de primer nivel.

Todos conocemos los casos de estudiantes de medicina que en el cumplimiento de su servicio social quedan al frente de un Centro de Salud, que en el cumplimiento de su servicio social quedan al frente de un Centro de Salud, en una pequeña y apartada población en donde sin contar con los insumos y con el personal suficiente, se les envía a dar atención primaria a los pacientes.

Su limitada experiencia y la falta de preparación pueden ser factores de riesgo más que de beneficio. Los industriales de Canacintra nos sumanos con México, en el compromiso de tener un mejor sistema de salud, nos comprometemos a mantener un diálogo abierto con todos los involucrados, a cuidar que nuestros centros de trabajo se mantenga las condiciones adecuadas que permitan proteger la salud de nuestros colaboradores, a que los insumos para la salud fabricados por la industria nacional cumplan con los más altos estándares de calidad. A contribuir al presupuesto en salud, mediante el pago oportuno de los tributos que nos corresponden. Muchas gracias por su atención.

El moderador diputado Víctor Adolfo Mojica Wences: Muchas gracias, licenciado José Antonio Centeno Reyes.

El moderador diputado Víctor Adolfo Mojica Wences: Es ahora turno del licenciado Cristofer Merlos Montes, director de afiliación y operación del Seguro Popular en Querétaro, él es licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública, por la Universidad Autónoma de Querétaro, director en Secretaría de Desarrollo Social, del gobierno del estado de Querétaro. Tiene usted ocho minutos.

El ciudadano Cristofer Merlos Montes: Muchísimas gracias. Con su permiso, presidenta, integrantes de la Comisión de Salud, de esta Cámara de Diputados.

Bueno, les quiero platicar un poquito sobre unos antecedentes y con esto la reflexión sobre ello, sobre este cambio que va a dar precisamente el Sistema de Salud en México. El sistema mexicano de salud ha transitado por 70 años, desde que a la entonces Secretaría de Salud y Asistencia, se le une en la primera gran reforma de salud, el Instituto Mexicano del Seguro Social y hacía a los años 60, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado.

Esta reforma se estableció con la convicción de que toda la población económicamente activa sería eventualmente asalariada y, por tanto, se afiliaría a estas instituciones de seguridad social. Sin embargo, como sabemos, algo pasó. Alrededor del 60 por ciento de la población económicamente activa no era asalariada y, por lo tanto, carecería de seguridad social. Así se inició la fragmentación del sistema de salud con la población, por un lado, con seguridad social y, por el otro lado, la población llamada población abierta.

Esto generó la falta de acceso a más de la mitad de la población a los servicios de salud, observándose cada vez un incremento mayor de inversión pública de los recursos públicos en los Institutos Nacionales de Seguridad Social y cada vez menos en atender la salud de la población abierta.

Nace, entonces, hacia 1960-1970, un primer concepto de desigualdad para los millones de mexicanos que no gozaban de los alcances de la seguridad social. Esto, sin duda, descontextualizó el artículo 4o. de nuestra Carta Magna, salud para todos.

La Organización Mundial de la Salud expuso que el principal problema del sistema mexicano era la injusticia y la inequidad en la contribución financiera. Hacia 1984 se realiza la segunda reforma de salud, que tuvo como principal protagonista la descentralización de los servicios de salud.

Nace la Ley General de Salud y las leyes estatales en la materia con el objetivo de mejorar las capacidades de los gobiernos locales y sus políticas de salud, lo que fue generando un desequilibrio en la distribución. Los estados que más tenían recursos invertían más que los que menos recursos tenían.

Nuestro modelo de salud comenzó a observar los nuevos retos que hasta la fecha estamos enfrentando con la transición demográfica y, sobre todo, epidemiológica. Son un paradigma, entonces, obsoleto que ha favorecido la atención curativa y especializada, y que no ha sabido adaptarse a la creciente prevalencia de enfermedades crónicas no transmisibles, como la diabetes, el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y los padecimientos mentales, de las enfermedades transmisibles pues ya no hablamos.

Así llegamos a la tercera reforma en salud, con el nacimiento del Sistema de Protección Social en Salud, como lo conocemos Seguro Popular, estableciendo las bases legales constitucionales con un concepto de justicia y equidad en la contribución financiera para limitar el gasto de bolsillo y el gasto catastrófico de cada mexicano sin seguridad social, siendo el primer paso en respuesta del Estado mexicano a la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico de combatir la fragmentación del Sistema Nacional de Salud y en el rezago de los principales indicadores de salud.

Con esta tercera reforma, México aporto a niveles internacionales elementos innovadores contra una deuda histórica que se tuvo en el país, la población menos favorecida y población sin seguridad social. En los últimos 16 años, México ha hecho importantes progresos para deducir su inmenso rezago en salud pública, el gobierno dedica 3 veces más presupuesto a este rubro que hace 12 años, mientras que el seguro popular ha creado o concebido hace 16 años da cobertura o ha dado cobertura alrededor de 55 millones de mexicanos mediante los sistemas de salud estatales.

Ha logrado hoy que 93 de cada 100 mexicanos tenga algún tipo de cobertura, gracias sin duda a muchos mecanismos de control emanados de la Comisión, con el único objetico de dar transparencia y de combatir esos casos de corrupción en las entidades federativas que mencionaba la licencia Janet.

Una de las razones de crear en 2013 el Seguro Popular fueron los 4 millones de familias que año con año caían en ruina por gastos catastróficos en salud, en este momento ningún afiliado al Seguro Popular droga ni un solo peso en enfermedades que están dentro del Catálogo de Fondos Protección de Gastos Catastróficos. Ejemplo de esto es Querétaro; el estado donde yo radico, del año 2009 al 2018 en el estado se atendieron un total de 18,920 casos de patologías de alto costo, integradas en la Cartera de Fondos de Protección contra Gastos Catastróficos con un monto recuperado de casi 835 millones de pesos; sin que ningún afiliado atendido de estos 18,920 casos, realizara un gasto de bolsillo.

El Seguro Popular ha logrado una cobertura universal de afiliación de la población abierta sin seguridad, pero falta poco para alcanzar la cobertura médica universal, que son dos temas distintos. Requerimos el incremento en número de intervenciones atendida en dar más dinero para revisarlas, lograríamos las dos vertientes de la cobertura universal; según lo estipula la Organización Mundial de la Salud.

Hace algún tiempo se estableció, se pensó por parte de la Secretaria de Salud Federal, enviar una iniciativa al Congreso pata dar un paso en esta universalización, la reforma incluía la facultad de que el Seguro Popular acreditara más unidades médicas para fortalecer la infraestructura y por ende, la cobertura de todos los afiliados sin seguridad social, mediante la participación de carteras y fondos del sistema.

Con el esquema de tabuladores de pago por servicios, un beneficio adicional de la portabilidad es la opción para que las instituciones se especialicen en el tratamiento de ciertas enfermedades y recibir, con ello, apoyo adicional o recursos adicionales para la capacitación y equipamiento.

En la actualidad, este caso tiene su ejemplo en los institutos y los hospitales de tercero y cuarto nivel de atención que accesan a este recurso mediante el sistema de referencia donde ya participan también todos los servicios estatales de salud de toda la república. Se ha logrado el acceso a estos niveles de atención de los afiliados del Seguro Popular.

Expertos coinciden en que es necesario que el gobierno mexicano, que en 17 años ha aumentado el presupuesto para la salud en 1.1 puntos porcentuales del PIB, cambie el enfoque y destine cuando menos el equivalente al 7 por ciento del producto interno bruto. No podremos hablar nunca de cobertura universal de salud mientras no se le asignen más recursos a este rubro.

Bueno, nada más quiero finalizar comentando que se ha hablado aquí mucho que la salud es un derecho fundamental, del cual nadie debe carecer y es obligación del Estado mexicano garantizarlo y hacerlo como una política seria y profundamente estudiada. Agradezco mucho por este foro. Es todo.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Le vamos a dar la palabra en seguida al diputado Éctor Jaime Ramírez Barba, quien estará coordinando las siguientes ponencias.

El moderador diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Tengo el placer de presentarles a quienes nos reciben a través del Canal del Congreso a la maestra María Teresa Soriano Ibarra. Es abogada por la Universidad Marista, maestra en Derecho Administrativo y de Regulación por el ITAM. Realizó un diplomado en temas de la industria farmacéutica en la Escuela Libre de Derecho y otro en Derecho procesal constitucional impartido por la Suprema Corte de Justicia.

En el sector público ha ocupado posiciones en diversas dependencias como la Procuraduría Federal de Presupuestos y Responsabilidades Hacendarias Protección al Medio Ambiente, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, la Secretaría de la Reforma Agraria y el Registro Agrario Nacional. Actualmente es presidenta de una asociación para la prevención y atención de la salud, la cual, de lo que hemos escuchado aquí, se necesita bastante en este país con una sobrecarga de la enfermedad en crónico degenerativas.

Le concedo el uso de la voz hasta por ocho minutos a María Teresa Soriano Ibarra, señalándole al auditorio que los temas que estamos tratando aquí es en la reforma a la iniciativa de Mario Delgado a la Ley General de Salud. El tema es transparencia, fiscalización y evaluación del nuevo sistema de salud. Adelante, María Teresa, por favor.

La ciudadana María Teresa Soriano Ibarra: Muchas gracias. Muy buenas tardes tengan todos y todas ustedes. En verdad es un día especial. Es un honor ser parte de este ejercicio de parlamento abierto, desde la Asociación Mexicana para la Prevención y Atención de Salud hemos sido partícipes de la apertura de esta legislatura para recibir a la sociedad civil, hecho que agradecemos.

Y aprovecho la oportunidad para hacer hincapié en un tema de gran importancia para el sector salud, el cual es: Las infecciones asociadas a la atención a la salud.

Las infecciones asociadas a la atención a la salud son aquellas contraídas por un paciente durante su tratamiento en un hospital, que no tenía al momento de su ingreso y que no está incubando tampoco en ese momento.  Es decir, son aquellas enfermedades que un paciente puede contraer dentro de un hospital.

Las personas más expuestas a contraer este tipo de enfermedades, obviamente son los pacientes, incluyendo a los recién nacidos y a los adultos mayores.

Sin embargo, todas las personas que se encuentran en un hospital pueden ser adquirientes de ellas, por ejemplo: camilleros, médicos, residentes, personal de mantenimiento y demás.

Y bueno, las consecuencias obvias son para los pacientes, pues más días de hospitalización, dejar de recibir ingresos por falta a sus actividades laborales, entre otras.

Y, por supuesto, para el sector público, para el sector salud también trae aparejados unos gastos muy cuantiosos, pues son gastos en antibióticos, tratamientos médicos, estudios, pruebas de laboratorio, pero orientado a la mejora de los pacientes.

No existe en México, yo me atrevería a pensar que en el mundo no existe un hospital que no tenga casos de infecciones asociadas a la atención a la salud, también conocidas como infecciones nosocomiales.

Sin embargo, estas enfermedades son prevenibles y el llamado que hago, aquí, aprovechando este espacio, es para que dentro de esta reflexión del sistema de salud se ponga especial atención a la prevención de estos casos que sin duda alguna tienen una repercusión muy importante en los recursos destinados para el sector.

En este sentido, es deseable que el Instituto de Salud para el Bienestar tenga entre sus objetivos realizar acciones orientadas a prevenir las infecciones nosocomiales.

Para dimensionar este tema, me permito hacer alusión a tres aspectos fundamentales: el primero de ellos es el número de casos, de cuántos casos estamos hablando en nuestro país.

La cuantificación de estos casos se hace a través de la Red hospitalaria de vigilancia epidemiológica, dependiente de la Secretaría de Salud, por medio de la Dirección General de Epidemiología.

Por citar un ejemplo, en el año 2015 solamente el 8.7 por ciento de los hospitales en México hacía reportes frecuentes sobre estos casos a la Red. Y cabe mencionar que también hay un aspecto en el cual pues no todos los casos se reportan.

Entonces podríamos hablar, por ejemplo, de que, en el año 2015, solamente de los hospitales que reportan a la red, se presentaron 61 mil 988 casos, de los cuales 3 mil 629 fueron defunciones.

Ahora, el costo de cada uno de los episodios de infecciones nosocomiales también es altísimo. Es difícil cuantificarlo porque depende del tipo de enfermedad, los días de hospitalización, el tipo de antibiótico que se les suministre.

Sin embargo, hay un estudio elaborado por el Centro de Estudios de Finanzas Públicas de esta Cámara de Diputados, de este año, que nos arroja una cantidad de 187 mil 362 pesos por cada uno de estos episodios.

Ahora bien, ¿qué presupuesto tenemos para atender estos temas? Nos llevamos la sorpresa de que no hay un presupuesto, como tal, para su atención y que tampoco hay un presupuesto, como tal, para prevenirlo.

Investigando un poco más podemos ver que algunos recursos del Ramo 12, especialmente el rubro de vigilancia epidemiológica destina ciertas cantidades, sin saber exactamente cuáles, para la atención de estos casos.

Entonces, en este ejercicio de transparencia y en este sistema, que es perfectible, podemos tener una sugerencia muy particular, que es que se cuantifiquen de forma adecuada el número de infecciones asociadas a la atención de la salud en nuestro país. Que se destine un presupuesto específico para la atención de la salud en nuestro país. Que se destine un presupuesto específico para su prevención y atención, y que se evalúen los resultados de los programas implementados y el destino de los recursos destinados para ello.

En consecuencia, los puntos que considero perfectibles y a los cuales dirijo mi muy respetuosa petición en este ejercicio de análisis y reflexión, dada su relevancia, estimo necesario que las infecciones asociadas a la atención a la salud deben ser incluidas en el artículo 3o. de la Ley General de Salud. así, la prevención de infecciones asociadas a la atención a la salud deberá ser parte del Consejo de Salubridad General, lo cual permitirá con información precisa sobre el número de casos, mejorar la capacidad de respuesta, diseñar planes y programas, dar seguimiento a ellos, medir los resultados y destinar un presupuesto adecuado para ellos.

Finalmente, reitero la importancia de la implementación de acciones concretas por parte del Insabi para tener un registro de estas infecciones y transparentar el uso de los recursos públicos que se destinen para su prevención. Muchas gracias.

El moderador diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Muchas gracias. Extraordinaria ponencia. Muy agradecidos.

El moderador diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Le cedemos el uso de la voz ahora al maestro Héctor Arreola Ornelas. Él es director ejecutivo de Tómatelo a Pecho, Asociación Civil. El cáncer de mama también mata a los hombres, presidenta. El 2 por ciento. Los hombres pueden morir de cáncer de mama también.

Él además funge como coordinador del Observatorio de la Salud, es una iniciativa para América y El Caribe, operado conjuntamente entre el Instituto Carlos Slim de la Salud y Funsalud. Además, es coordinador de investigaciones económicas e investigador del Consejo Promotor de Competitividad y Salud en la Fundación Mexicana para la Salud. Licenciado en economía por el Tecnológico Autónomo de México. Maestro en economía de la salud por el Centro de Investigación y Docencia Económicas y el Instituto Nacional de Salud Pública.

Ha desarrollado diversos cargos en el IMSS, el Instituto Nacional de Salud Pública y en el Centro de Investigación y Docencia Económicas. Es autor de más de 28 documentos de investigación y 10 capítulos en libros. Tienes hasta ocho minutos, don Héctor, para hacer uso de la voz. Bienvenido.

El ciudadano Héctor Arreola Ornelas: Gracias. Buenas tardes a todos. Gracias a la Comisión de Salud, especialmente al diputado Éctor Jaime Ramírez Barba por su invitación a esta sesión.

Quiero iniciar mi participación, un poco reflexionando sobre lo que es el sistema de protección social en salud. Si bien no fue la panacea, es cierto que cumplió sus objetivos para los cuales fue diseñado. Esta lógica financiera por la cual surge el sistema de protección social en salud y su brazo operativo, el Seguro Popular, cumplió bien a bien con lo que se le pedía y más allá, creo que los datos y la evidencia científica está ahí, hay más de 300 artículos de diferentes investigadores de todas partes del mundo evaluando el programa y los resultados están ahí, si no los ven, pues les sugiero qué hacer, buscar en Google, si no les alcanza para tener la opción de conseguirlos, porque pues también nos recortaron el presupuesto en investigación, pues hay que acercarnos a las universidades porque los documentos y la evidencia está a la mano.

Base de esta evidencia es que los gastos catastróficos y empobrecedores en el país pasaron de un número más o menos de 2.9 por ciento de hogares en el país en 2004, cuando arranca el sistema de protección social en salud, baja a 1.9, parece que es muy poco lo que hacemos, pero es un punto porcentual y ese punto porcentual implicó pasar de los cerca de 4 millones de hogares que nos mencionaron en una de las ponencias, a menos de 3 millones de hogares ¿sí?

Entonces, ¿qué estamos discutiendo? Bueno, lo dejo un poco para la reflexión y tomo ya un poco la postura de esta mesa. En cuanto a lo que se refiere a la transparencia, supervisión, control y fiscalización de los recursos del nuevo sistema de salud, tuve a leer detenidamente lo que nos estaban proponiendo y creo que mucho de lo que estamos criticando a este sistema que estamos tratando de eliminar, desafortunadamente en la sección de transparencia, supervisión, control y fiscalización de los recursos no se modifica, ¿sí?

La parte que le criticamos al sistema de protección social en salud es el tema de la fiscalización, que bien por ahí hay alguien que debió mencionar, si, el Fundar. Sí, y no tenemos nada nuevo sobre fiscalización en esta iniciativa de ley, así es.

Creo que entonces no estamos combatiendo lo que estamos diciendo.

Me arranco con los puntos y las cosas que estoy encontrando. La propuesta de ley en este tenor señala: La iniciativa mantiene la obligación del gobierno federal de transferir la parte proporcional actual del Ramo 12 a las entidades federativas. También se refuerza la regulación de la Secretaría de Salud, al autorizarle a transferir a las mismas bienes y servicios como parte de los recursos destinados a cada una de ellas. Asimismo propone fortalecer las facultades de la Secretaría de Salud para vigilar, fiscalizar el uso transparente y eficiente de los recursos transferidos e introduce la evaluación sistemática del cumplimiento de la nueva política en los aspectos de accesibilidad, calidad, oportunidad e integralidad de los servicios prestados.

Cabe señalar que la Secretaría de Salud no tiene esas funciones. Es decir, no es un agente fiscalizador, y estamos diciendo que lo tiene que hacer.

Entonces, ya me imagino a la Secretaría de Salud desatendiendo sus actividades, su quehacer, pensando en las monodosis, pensando en que tiene que tener los medicamentos en los institutos nacionales de salud, y lo va a distraer, se va a distraer de eso porque ahora va a ser fiscalizador.

Me resulta muy congruente, porque creemos, o esa era la parte que le estamos poniendo al defecto, ¿sí? Al niño defectuoso que teníamos le estamos diciendo te lo vamos a seguir manteniendo defectuoso, vamos a construir uno nuevo, alineamos este, pero le vamos a mantener más defectos.

Asimismo se establece la posibilidad de que las entidades federativas celebren acuerdos de coordinación con la federación, a fin de que esta última a través de la Secretaría de Salud, con auxilio de las entidades agrupadas en su sector coordinado preste los servicios médicos que originalmente corresponde brindar a las autoridades de las entidades federativas con los recursos de las mismas.

Lo anterior me parece que suena muy bien, de verdad es que es muy bonito, pero me preocupa que llevamos siete meses, ocho meses. Ya el gobierno federal celebró algunos convenios con algunas entidades federativas y les pasa lo que nos señalaba el profesor Luis, seguimos viendo un aumento en el número de pacientes que no reciben su tratamiento y regresan a sus casas sin los medicamentos que requieren. En el peor de los casos ellos mismos tienen que pagarlos.

Regreso a los comentarios sobre la iniciativa de ley. El primer comentario a la propuesta de ley surge de derogar la fracción II Bis del artículo 2, que establece a la protección social en salud como materia de salubridad general. Con ello se entiende que estamos derogando  un derecho social y... a la responsabilidad del sistema de salud de eliminar responsabilidad de proteger financieramente a la población al ofrecerle un seguro de salud pública voluntario.

Perdón, pero la Organización Mundial de la Salud en su definición de cobertura universal incluye la protección social y la estamos quitando. Pero además es contradictorio porque después regresamos a la definición de protección en salud y agregamos el término social, porque debe de estar fijada en cuanto a los determinantes sociales. Entonces creo que es un problema.

En el mismo tenor, puedo decir que el Estado debe cumplir con dos funciones esenciales: la promoción y la protección. La promoción incluye las actividades de fomento a la investigación, a la innovación y los estímulos e incentivos y el impulso al desarrollo de las capacidades humanas, mientras que la protección comprende diversos ámbitos, tales cual como la protección de la seguridad nacional, la protección física de las personas, la protección civil ante desastres, la protección jurídica y la protección social en salud.

La protección social comprende tres rubros: la asistencia social, que se refiere a los esfuerzos para promover capacidades y oportunidades de los sectores más vulnerables a fin de superar la pobreza y las complejas situaciones de exclusión social como las que propician las adicciones y el tráfico de personas.

La previsión social se refiere al ahorro y a la inversión necesarios para cubrir los riesgos económicos asociados al desempleo, la vejez y la discapacidad, y la protección social en salud incluye la protección contra riesgos sanitarios, la protección de la calidad de la atención, y la protección financiera está implícita, y lo estamos quitando.

Insisto, tenemos como que quisimos hacer el traje utilizando la misma estructura, la misma tela y el mismo maniquí, solamente le cambiamos de nombre. Quitamos todo lo que decía “Sistema de Protección Social en Salud y Seguro Popular”, y le pusimos “Sistema de Prestación de Servicios de Salud y Medicamentos Gratuitos”, más un brazo de operación que ahora será... antes era Seguro Popular, ahora le llamamos Instituto de Salud para el Bienestar.

Cámbienle de nombre, pónganle el apellido que ustedes quieran. Yo les comento, en esta lógica estamos perdiendo muchas cosas. Y una de ellas es que estamos incrementando la discriminación, porque estamos permitiendo pasar en algo que habíamos evitado, que es tener ciudadanos de primera y de segunda. Estamos regresando a tener ciudadanos, con esta nueva ley, con esta nueva iniciativa, a tener ciudadanos de primera y de segunda.

Por qué. Porque la lógica financiera del Sistema de Protección Social en Salud decía que no importaba si eras asalariado o no, y no estoy hablando de formalidad e informalidad, estoy hablando de ser asalariado o no.

Y al no ser asalariado se te trataba como se trata a los beneficiarios de la seguridad social. El Estado aporta una cuota solidaria, las entidades federativas aportaban otra y tú, como paciente, como derechohabiente de este sistema, podías o no aportar dependiendo de la capacidad de pago. ¿Sí? Lo estamos eliminando. Estamos derogando muchas cosas que teníamos buenas. Yo no estoy diciendo que no vaya a funcionar. Estoy diciendo que revisemos lo que estamos haciendo, cómo lo estamos haciendo y qué queremos.

Para cerrar. Tengo una hija que gracias a este Sistema de Protección Social en Salud hoy tiene siete años. Mi primera esposa desafortunadamente murió por el tema de cáncer de mama. Murió antes de que existiera este sistema que hoy estamos tirando. Por la no disponibilidad de ciertos tratamientos que el Seguro Popular nos está dando a través del fondo. No sabemos qué vaya a pasar con este fondo. Lo que sí sabemos es que estamos dando pasos hacia atrás y pasos ciegos. Gracias.

El moderador diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Muchísimas gracias, sobre todo por el testimonio final. Quédate cierto que va a ser bien recibido por las y los legisladores. Y estamos al pendiente. Trae tu presentación para que la podamos poner en el portal, de favor. Muchas gracias.

El moderador diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Me toca el turno de presentar a un colega docente, amigo de más de 28 años de aventuras universitarias. Y me refiero a Luis Felipe Abreu Hernández, consejero editorial de la Asociación de Facultades y Escuelas de Medicina, la AMFEM; médico cirujano por la Escuela Medicina de la UNAM; maestro de enseñanza por la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Es profesor titular B de tiempo completo definitivo de la UNAM.

Es organizador y coordinador del Programa de Maestría y Doctorado en Ciencias Médicas, Odontológicas y de Salud, en la UNAM. Es un experto reconocido por todos nosotros y a nivel internacional en temas de educación médica y educación superior. Luis Felipe, muchas gracias por tu presencia, por tu generosidad, tienes ocho minutos.

El ciudadano Luis Felipe Abreu Hernández: Muchas gracias. Agradecemos la oportunidad de participar en este ejercicio de parlamento abierto. La... ha manifestado su disposición a colaborar y apoyar la trasformación del sector salud.

En nuestra reuniones nacionales y en nuestras publicaciones hemos venido impulsando nuevos conceptos para generar un cambio de fondo, el cual al igual que se han agotado los modelos económicos o de la educación, el modelo sobre el cual se ha fundado la salud muestra rendimientos de crecientes y demanda un cambio de foto, de persistir inicialmente en el modelo actual, se presentaran gastos catastróficos para el país, derivados de la epidemia de enfermedades crónicas como: Diabetes, insuficiencia renal, infarto agudo del miocardio, cáncer, enfisema pulmonar o suscriba crónica y enfermedades cerebro vasculares, entre otras.

Se hace necesario un cambio de fondo.

Seis tesis. Primera tesis. El actual modelo en salud fue creado para una población joven, la división de trabajo era muy sencilla; si los problemas son simples, se resuelven en atención primaria, centros de salud, si los problemas son complejos se transfieren al hospital.

Cuando éramos un país de jóvenes este diseño funcionaba bien porque solo una minoría era turnada a los hospitales. El envejecimiento de la población ha provocado la comorbilidad, la confluencia de varias enfermedades en un solo paciente con lo cual aparecen metas competidas en el tratamiento y surge el paciente complejo en cual es remitido crecientemente a los hospitales que concentran recursos, capacidad resolutiva y saber, los costos de la atención se disparan y la visión lineal conduce a que la mayor parte de los recursos y personal médico se concentren en los hospitales, este esquema es insostenible.

Podemos afirmar que el sistema de salud está de cabeza, en la actualidad requerimos que la atención primaria en Centros de Salud, también sean capaces de contender problemas complejos. En consecuencia, se les debe dotar de conocimientos y tecnología. En otros países la quimioterapia se realice en atención primaria.

La mayoría de los problemas deben atenderse de manera ambulatoria con mucho menor costo y riesgos; debemos acompañar a la población desde el nacimiento hasta los cuidados paliativos a final de la vida.

La nueva atención primaria implica el desarrollo de tecnología e investigación y conocimiento avanzado, debe utilizar sensores, inteligencia artificial y utilizar los teléfonos inteligentes para monitorizar las variables biológicas o la salud mental factores ambientales.

Esto permitiría generar tecnología propia e incubar empresas, la divisa es conocimiento avanzada y bajo costo. El desarrollo tecnológico está por detrás de las necesidades de salud, pues las grandes empresas internacionales se han concentrado en promover grandes equipos centralizados y no en atención en el seno de las comunidades, por lo que se abre una la ventana de oportunidad para el desarrollo de tecnología nacional.

Tesis segunda. El enfoque predominante considera que la salud es algo que se proporciona a la población, porque inadvertidamente favorece el enfoque curativo basado en la entrega de medicamentos.

La salud no es algo que se le da a la población, sino algo que se construye entre las comunidades y el sistema de salud. Es similar a la educación que demanda la participación de los estudiantes como entes activos y dinámicos.

Se debe favorecer la organización de las comunidades y la construcción de alianzas con la población, a fin de contender con problemas como la obesidad la modificación de la dieta, la activación física y el control de problemas ambientales o de brotes epidémicos. Las alianzas implican compromisos mutuos y cumplir metas, y asignar recursos del sistema de salud a las comunidades sin que esto implique relevar al Estado de la responsabilidad central en este proceso.

Favorecer la salud implica fortalecer la respuesta social para prevenir o atajar la enfermedad. El cuidado de los ancianos, de los niños pequeños, de los enfermos terminales desgasta a las familias y les impide incorporase a las actividades productivas afectando predominantemente a las mujeres.

Debemos favorecer la integración de redes de apoyo y acciones cooperativas para mejorar la salud y reducir el impacto de la enfermedad. La colaboración, como unidad del sistema de salud, implica también una evaluación cruzada entre ambos: el sistema de salud enriquece la acción comunitaria y las comunidades deben supervisar y evaluar al sistema de salud.

Tesis tercera. Tradicionalmente el sistema de salud solo responde de manera reactiva cuando aparecen datos clínicos de una alteración. La salud y la enfermedad no son polos opuestos, sino producto de la interacción de la biología del individuo con su entorno familiar, social y factores ambientales.

El entorno reta continuamente a la biología y a la psicología de los individuos, lo cual produce en algunas personas malas adaptaciones que con el tiempo se manifiestan en signos y síntomas clínicos.

Preservar la salud y favorecer el envejecimiento saludable implica analizar y atender in situ las complejas interacciones entre genes, células, tejidos, aparatos y sistemas, individuos, familias, comunidades y su entorno para generar acciones tempranas que los acompañen durante toda su vida y eviten la enfermedad.

Tesis cuarta. La salud no corresponde únicamente al sistema de salud, sino que implica la coordinación intersectorial. Por ejemplo, la educación es fundamental dirigida no solo a los niños y jóvenes, sino también a los adultos. La escuela debe considerarse un centro de desarrollo del conocimiento, la cultura y la técnica en las comunidades.

Las poblaciones más vulnerables no solo requieren recursos económicos y medicamentos, sino deben ser enseñadas a utilizarlos y manejarlos para su mejor provecho. Y debemos comprometernos con el desarrollo de su capacidad cultural.

Tesis Quinta: las personas acuden al Sistema de Salud cuando enferman en busca de alivio pero siempre llegan tarde, es preciso revertir este enfoque, el sistema de salud debe acudir a donde están las personas aparentemente sanas y estar presente en centro de trabajo, escuelas, hogares, centros de diversión, centros comerciales y sistemas de transportes.

La salud debe estar interconectada con la vida cotidiana y la población debe de ser educada, albertita y movilizada para reducir conductas de riesgos, prevenir enfermedad y evitar complicaciones.

Tesis Sexta: el sistema de salud debe de ser diseñado como una organización que aprende para innovar y evolucionar contusamente a la par que cambian los retos a la salud y evolución al conocimiento biomédico. En todos los niveles de sistema de salud, debe desarrollarse investigación, docencia y servicio; pero como no solo se trata de una realidad científico-técnica, sino que es preciso contemplar los determinantes sociales de la salud y combatir la exclusión social.

Ello implica tener muy claros la misión social y los aspectos éticos en todos los niveles del sistema y por supuesto evaluarlos. A manera de conclusión, la ley debe poseer una visión estratégicas de los cambios a desarrollar e incluirlos en su exposición de motivos y además debe establecer algunas normas elementales para darle un nuevo rumbo al sistema de salud.

La redacción actual no es clara, pues al centrarse en la prestación de servicios de salud y medicamentos asociados, pareciera restringirse a la consulta médica y a la entrega de medicamentos gratuitos, lo cual no refleja adecuadamente el concepto de salud para el bienestar.

La transparencia debe abarcar tato la planeación, cuanto la ejecución y los resultados, la fiscalización debe atender a la triada legalidad, eficiencia y economía, necesita ser supervisada por los organismos de control supervisada por la ley y además debe incluir el compromiso de utilizar mejor conocimiento disponible, favoreciendo que los desistores actúen en conformidad con la lex artis y eviten la mala praxis. La participación de La Organización Mundial de la Salud y La Oficina Sanitaria Panamericana podrían enriquecer este proceso.

Respecto a la evaluación, es correcto postular un proceso de autoevaluación realizado a todos los niveles del sistema de salud, si el sistema de salud se evalúa a sí mismo, impulsara su capacidad de mejorar pero a la evaluación interna debemos añadirle la evaluación externa; tanto por la población como por organismos independientes de expertos para evitar que el sistema acate como juez y parte.

Finalmente, La Asociación Mexicana de Facultades y Escuelas de Medicina ha promovido; desde tiempo atrás, el desarrollo de un gran dialogo por la salud del país que implique la construcción de sinergias entre academia, el gobierno federal, los gobiernos estatales, las asociaciones de pacientes y comunidades, el sector productivo y de servicios, los partidos políticos.

La salud es lo suficientemente relevante como para promover una gran alianza nacional, favorecer la participación de las facultades y escuelas implicaría promover el uso de conocimiento avanzado, lo cual incrementaría las probabilidades de éxito y favorecería la verdadera transformación del país. Estamos listos a sumarnos. Gracias.

El moderador diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Agradecemos mucho al señor académico y le regreso el uso del micrófono a nuestra presidenta, la diputada Miroslava.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Gracias, diputado Éctor Jaime Ramírez Barba. A continuación, le vamos a dar el uso de la palabra a la diputada Frinné Azuara Yarzábal para continuar con las ponencias.

La moderadora diputada Frinné Azuara Yarzábal: Gracias, presidenta. Nos entusiasma en esta audiencia pública escuchar la voz de nuestras enfermeras. Por eso tengo el gusto y el honor de presentar ante ustedes a la licenciada en enfermería, Martha Medina Gómez, trabajadora del IMSS con 28 años de antigüedad. Ha laborado en el Hospital General de Zona Número 58 Las Margaritas, Naucalpan, Estado de México; en el Hospital General de Zona y Gineco-Pediatría Número 60 Tlalnepantla de Baz, en donde se desempeñó como enfermera quirúrgica durante 10 años; en el Hospital General Regional Número 196 Fidel Velázquez, del Estado de México; y en la Unidad de Medicina Familiar Número 93 del Estado de México. Ha sido fundadora y miembro de Mondess, Movimiento Nacional en la Defensa de la Seguridad Social, y fundadora y miembro del Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores del Seguro Social. En uso de la voz, la licenciada en Enfermería, Martha Medina Gómez. Bienvenida y muchas gracias.

La ciudadana Martha Medina Gómez: Ciudadanos diputados de la LXIV Legislatura, muchas gracias. Respetables y distinguidos investigadores y estudiosos en materia de salud y de seguridad social:

Mi nombre es Martha Medina Gómez. Soy enfermera del Instituto Mexicano del Seguro Social con 28 años de antigüedad y les agradezco la oportunidad que me dan para exponer el punto de vista de los trabajadores, los expertos en el área operativa de la salud y a quienes siempre se nos había excluido de externar lo que cotidianamente vivimos durante nuestra larga vida laboral en la atención directa a los pacientes o derechohabientes.

La salud no es sólo la ausencia de la enfermedad: es la homeóstasis, es decir, el equilibrio biopsicosocial del individuo, de tal forma que todos hemos contribuido a la deshumanización de todo lo relacionado a la salud, al ver a los pacientes enfermos como simples números y estadísticas y sus padecimientos o enfermedades y complicaciones propias del mismo proceso de la vida como una carga, como un lastre, como un gasto, hasta llegar al colmo de cuantificarlos como gastos catastróficos, así les dicen.

La insolencia al individuo llega a tal grado de decir si su enfermedad o padecimiento entra en los gastos catastróficos o no. Si es un cáncer cervicouterino es tratable, porque está dentro del catálogo de gastos catastróficos.

Pero si es un cáncer de ovario, ya no entra en esos casos de gastos catastróficos. Es decir, unos centímetros arriba o abajo determinan si el paciente puede ser o no tratado de acuerdo a esas inhumanas y absurdas políticas de salud. Esto es solo un ejemplo.

Hace una semana se realizó, en este honorable Congreso de la Unión, un foro en materia de salud mental de nuestra sociedad contemporánea, con la participación de expertos psiquiatras, compañeros nuestros del sector público de salud, exponiéndonos un panorama verdaderamente aterrador, ocasionado por la descomposición y ruptura del tejido social.

Un panorama donde la cantidad de suicidios en niños y jóvenes es verdaderamente alarmante. Donde los suicidios de los estudiantes de medicina, internos y residentes, es igual de alarmante.

Los médicos psiquiatras están más que rebasados, 4 mil 393, es decir, 3.68 por cada 100 mil habitantes.

Por ello, se debe de empoderar la psiquiatría en el marco de la salud mental. Solo el 2 por ciento de estudiantes de medicina elige esa especialidad, donde no hay una sola política de salud mental pública, salud ocupacional y/o preventiva de un problema que nos está estallando en las manos ya y no hemos podido o querido reconocer, a pesar de estarlo viviendo cotidianamente.

Solicito como derecho de réplica refutar los comentarios vertidos por los representantes del Seguro Popular, a quienes escuché con mucha atención. Para mí, inválidos, impropios y fuera de toda justa dimensión.

Como es sabido, el gobierno federal creó en 1974 el Programa de Servicios Médicos a núcleos de la población sin capacidad contributiva, extrema pobreza y profunda marginación. Antecedente inmediato del IMSS Coplamar, que a partir de 1979, administrado por el instituto, permitió extender los servicios de solidaridad social a todo el país.

Se implantó un modelo de atención integral a la salud, cuyo marco teórico establece que es responsabilidad personal de las unidades médicas del programa y las comunidades, su cuidado de manera conjunta.

Desapareció por decreto en 1983, cuando el IMSS se hace cargo de la administración del programa cuyo financiamiento siguió compartido con el gobierno federal en proporciones de 60 y 40 por ciento.

El Seguro Popular, coincido con el doctor Jorge Alcocer Varela, al comparar al Seguro Popular como el caballo de Troya, para beneficiar el capital privado con el sector público de salud. Y bajo esa misma comparación a Funsalud desde 1982, quien abrió las puertas a la privatización de la salud. Una nueva forma de hacer negocios con la salud. Textualmente declaración de la ciudadana Mercedes Juan López, entonces secretaria de Salud 2012-2016. Es decir, recursos públicos, beneficios privados.

El sistema de protección social en salud comúnmente identificado como Seguro Popular, llega en el año 2000. Se enmarca en él la Estrategia Nacional de Salud, del Programa Nacional de Salud 2001-2006, con una intrincada red de tecnicismos, conceptos y justificación de gastos de financiamiento, todos ellos del erario federal, sin infraestructura, personal y con un arbitrario diseño de catálogos.

1. Atención universal de servicios de salud, cauces.

2. Un conjunto básico de intervenciones de primero y segundo nivel.

3. El fondo de protección contra gastos catastróficos.

4. Un paquete de atención de tercer nivel de alto costo.

5. El seguro médico siglo XXI, antes llamado Seguro médico para una nueva generación, que se otorga a los niños de entre 0 a 5 años de edad, es decir, toda una inconsistencia arbitrariedad y despilfarro de una verdadera rendición de cuentas del financiamiento. 

Eso es en resumen el sistema de protección social en salud, el Seguro Popular.

Nosotros como trabajadores tenemos propuestas y tenemos que hacerlas valer, porque nuestra responsabilidad como profesionales de la salud es el compromiso con el pueblo de México. La bioética como motor principal en la medicina preventiva y control oportuno de enfermedades crónico-degenerativas, bajo una estricta profesional –termino– aplicación del concepto de la bioética que es la responsabilidad moral y legal de los prestadores de salud y de los pacientes. Muchas gracias.

La moderadora diputada Frinné Azuara Yarzábal: Gracias. Gracias maestra por su participación.

La moderadora diputada Frinné Azuara Yarzábal: Le cedemos el uso de la palabra a la doctora Janet García. Investigadora docente en la Universidad Autónoma de Nuevo León. Se ha desempeñado como coordinadora de investigación, investigadora de prevención de sobrepeso y obesidad infantil. Investigadora en ciencias médicas en el Instituto Nacional de Salud Pública y coordinadora académica de ciencias de la salud en la Universidad Veracruzana. Bienvenida, doctora Janet García. Le cedemos el uso de la voz.

La ciudadana Janet García González: Muchas gracias. Buenas tardes a todos y a todas. Es un gran honor estar con ustedes. Primero porque mandé tres ponencias, tres propuestas de política pública hacia mi área de expertiz que es la prevención, promoción de la salud, desde la comunicación en salud.

Orgullosamente jalapeña, vengo de mi alma mater, la Universidad Veracruzana. Tengo aquí mis profesores, algunos.

Tengo 25 años tratando este tema. Soy líder a nivel América Latina de comunicación y salud en investigación, y en México soy también la líder del grupo de comunicación y salud. He trabajado en la OPS evaluando proyectos y programas de política pública para la prevención en salud. Y ahora es un gran honor, es un gran día.

Primero, mandé tres, les había comentado, el primero tiene que ver con un modelo de promoción de la salud. ¿Sabían ustedes que existió un modelo que duró 10 años en nuestro país? 10 años, ¿cómo es posible?

El otro, otra propuesta es sobre innovación, nuevas tecnologías en innovación en salud, y tiene que ver con el área de salud hacia la parte de prevención, y esta que fue aceptada en esta mesa, en la mesa de Transparencia, fiscalización y evaluación del nuevo sistema de salud, va dirigido obviamente a la parte de evaluación de promoción de la salud y participación comunitaria. Ese es mi gran tema.

Planteamiento. Hablar de promoción de la salud, y ya lo hemos oído de varios ponentes y en las políticas públicas, y creo que ahí vamos a estar todos de acuerdo, es prioritario. Lo hemos visto, lo han defendido, lo han dicho.

Hablar de promoción de la salud es hablar de un proceso complejo en el cual se interaccionan estrategias y acciones vinculadas a los estilos de vida, cambios de comportamiento y política pública.

Órale, ¿cómo le vamos a hacer para evaluarlo? ¿Saben ustedes cómo se evalúa promoción de la salud? ¿Alguien alguna idea?

Siempre pregunto sobre todo a los operativos. Número de carteles, ¿qué más? Difusión en medios. Estamos claros que la información no cambia comportamientos, está clarísimo, necesitamos otro tipo de estrategias, sentidos y significados compartidos, y por ello es muy importante la participación comunitaria.

Es importante delimitar los diferentes tipos de evaluación. Algunos de estos son los vinculados con el funcionamiento de la promoción de la salud y participación ciudadana.

Por ejemplo, la parte de la evaluación de resultados, que tiene que ver con esa participación, ¿cuál es el impacto final? Hemos visto que nuestras tasas no bajan, seguimos siendo los primeros casi en todo.

El comprender el cómo y por qué está funcionando a través de este proceso de evaluación, tiene que ver con una evaluación de proceso, tiene que ver con una evaluación de impacto en el cual tenemos que ver qué está pasando con la evidencia, y sobre todo determinación de política pública. ¿Esa evaluación de impacto, cambia nuestras políticas públicas?

Por otra parte, para el logro de las funciones de promoción de la salud son importantes los procesos de evaluación, generando indicadores acordes con los atributos y objetivos de cada uno de ellos desde las políticas nacionales e internacionales.

Para promoción de la salud con base en un marco comunitario, la evaluación supone tomar en cuenta aspectos relacionados con impacto y resultados. Para esto es preciso valorar el contexto y aplicabilidad de la intervención de otros escenarios, no solamente lo que estamos difundiendo ni informando. Tenemos que dar a conocer otras cosas, así como conocer el impacto que ha tenido la intervención sobre las personas hacia las que se dirigió y a los profesionales que desempeñan.

Tenemos expertos, ¿o no, mi querida enfermera? Estos permitirán comprender los mecanismos por los cuales han funcionado o no la intervención, participación, que es lo que ahora celebro enormemente esta audiencia pública donde estamos participando todos.

Es importante no solamente establecer evidencia de aquello que funciona en la aplicación, que es algo en lo que nos hemos topado muchas veces.

En la OPS, una de las primeras cosas que decían: evidencia, cuáles son las buenas prácticas. Sí hay buenas prácticas, pero dónde están, dónde está la evidencia y los que tienen la evidencia son los que ponen a escribir. No digo más, sino también comprender cómo y por qué han funcionado, de tal manera que el éxito se pueda replicar. Tenemos que replicar casos que sí existen.

La evaluación del impacto en salud ha mostrado su utilidad para que se considere la salud en las intervenciones no sanitarias, y ahí vamos con lo primero, donde una combinación de procedimientos, métodos y herramientas mediante la cual una política, un programa o un proyecto pueden ser evaluados en relación con sus efectos sobre la salud de la población y distribución de tales efectos sobre la misma.

Es decir, la evaluación de impacto de la salud se ha definido como la estimación de los efectos hacia una actuación específica de la salud de la salud. Tenemos claro que no logramos superar esta parte.

La base de la evidencia de la promoción de la salud debería estar constituida por datos provenientes de diversas fuentes, no números. No tenemos números, no números, no más, debemos combinar, tenemos que tomar otras evidencias que tengan importancia práctica y que sirva de orientación para crear condiciones que conduzcan al éxito de una intervención.

Propuesta. Y ahí viene. Una recomendación general de los fundamentos desde la promoción de la salud abogaría por metodologías simplificadas que permitan hasta donde sea posible la participación de comunidades y de quienes hagan parte del proceso. Esta práctica constituiría por sí misma un espacio de empoderamiento de las comunidades. Hacerlo desde las propias comunidades.

Por eso es muy importante cómo hacerlo. O sea, sabemos qué tenemos que hacer, pero no sabemos el cómo. Es muy interesante escuchar a muchos promotores que dicen “es que estoy haciendo, estoy persuadiendo”. La teoría de la persuasión. Y nosotros como científicos sabemos claramente que no es tan sencilla.

La generación de indicadores de prevención y participación comunitaria deben ser generados e integrados en el nuevo sistema de salud. Debe ser inherente que esté esta parte en todo el proceso de evaluación. Es necesario generar un sistema de evaluación de indicadores de promoción de la salud a partir del almacenamiento, análisis, evaluación y política de sistematización de información. El último modelo no tenía la parte de evaluación del sistema, que es interesante ver qué pasó ahí.

La relevancia de contar con dicha plataforma de indicadores radica en la necesidad de disponer de la información sobre la efectividad y rentabilidad social de intervenciones en promoción de la salud, reconocida en diversos discursos y por varios autores. Y cada día crece la demanda para que se hagan más decisiones informadas como producto de estudios de efectividad, relevancia y utilidad de políticas y programas.

Es muy importante, y con eso finalizo, que tengamos en cuenta... Yo hablo como científica, necesito evidencia. Pero también lo hago como analista de política pública. Necesitamos evidencia, pero una evidencia adecuada con reglas adecuadas, pero sobre todo indicadores adecuados. Muchas gracias por su atención.

La moderadora diputada Frinné Azuara Yarzábal: Muchísimas gracias, doctora, por su participación.

La moderadora diputada Frinné Azuara Yarzábal: Cedemos el uso de la voz al doctor Marcos Cantero Cortés. El doctor Cantero obtuvo la maestría y el doctorado en ciencias administrativas, con especialización en institucionalización, de la Escuela de Graduados en Administración y Dirección de Empresas del Tecnológico de Monterrey, campus Ciudad de México. Fue coordinador de asesores del secretario de Salud federal. Fue profesor investigador en el Centro de Investigación y Docencia Económicas, teniendo a su cargo estudios para el diseño, implementación y evaluación de políticas públicas.

Actualmente el doctor Marcos Cantero Cortés, es titular de la Unidad de Análisis Económico de la Secretaría de Salud, bienvenido doctor, le cedemos el uso de la voz.

El ciudadano Marcos Cantero Cortés: Muchísimas gracias, presidenta de la Comisión de Salud, diputada Miroslava Sánchez Galván, con su permiso. Señoras diputadas, diputados, funcionarios, académicos e invitados.

Agradezco la oportunidad de participar en este foro y felicito al Legislativo, por este ejercicio de participación democrática, al mismo tiempo me da gusto escuchar, en esta mesa, así como en las anteriores, se han vertido propuestas muy válidas para la mejora del Sistema Nacional de Salud.

Algunas discrepancias, pero todas enfocadas con el mismo objetivo, la evaluación de una política pública de un programa o de una norma no es cosa sencilla. Una mala evaluación puede tener como consecuencia una mala toma de decisiones. Tomaré un minuto para ejemplificar esto.

Durante la Segunda Guerra Mundial, los científicos e ingenieros dedicados a mejorar los aviones de guerra, con el objetivo de reforzar la resistencia, realizar un análisis estadístico de los impactos de bala, con los que regresaban todos los aviones después de cada batalla, los hallazgos, estadísticamente significativos, mostraron que la mayoría de los impactos se daban en el área donde se encuentra el piloto. Por lo que se decidió reforzar esa área.

Sin embargo, la tasa de aviones caídos no disminuyó, en su momento, a nadie se le ocurrió que la medición no era correcta, la muestra fue mal planteada, se realizó en las mediciones en los aviones que habían realizado a salvo, no es lo que habían sido derribados y habían recibido impactos de bala en la zona del motor. Por lo tanto, la decisión fue equivocada.

Lo mismo nos puede suceder con la evaluación de políticas públicas, podríamos estar evaluando de manera positiva las políticas de implementación del sistema actual de salud aun cuando no necesariamente esta evaluación refleja el fondo del problema.

La transformación del Sistema Nacional de Salud, busca lograr la accesibilidad y la cobertura efectiva a toda la población. Con la integración, articulación de todos sus componentes. Para ello, se quiere migrar de un enfoque en el financiamiento como lo hace el Sistema Nacional de Protección Social en Salud, aun sistema de integración de servicios como se propone que sea el Insabi, de acuerdo a la iniciativa de ley presentada.

La iniciativa sustituye y simplifica el modelo de financiamiento y de administración de servicios de salud de la población carente de seguridad social al proponer una nueva estructura de organización más ágil, sencilla con mecanismos de control efectivos. Esto es lograr que la población que tenga acceso efectivo a servicios de calidad.

Una particularidad rescatada es la ampliación de catálogos, pasado un cuadro básico en un compendio de medicamentos, lo que implica que los servicios públicos deberían brindar atención médica integral contando con un arsenal de medicamentos que permita la atención efectiva gratuita.

Con la creación del Insabi se busca fortalecer y priorizar la atención de la población, comenzando por los más vulnerables, con un enfoque preventivo de la salud, lo que implicaría en el largo plazo tener una población con mejores indicadores de salud.

Sin duda, el sistema de salud ha tenido grandes avances. El Seguro Popular ha contribuido en cierta medida a ello. Sin embargo, el principal indicador de esta política ha sido el número de afiliados, un indicador de cobertura. Pero, al compararnos con los países de la OCDE, destacan algunos contrastes:

Ya se ha dicho en estas mesas, México, junto con Letonia, es el país con mayor gasto de bolsillo como proporción del gasto en salud, 41 por ciento versus un promedio de 20 por ciento en el reto de los países, cuando la promesa del Seguro Popular era reducir a la mitad el gasto, es decir, a niveles del 20 por ciento.

La literatura intencional indica que para que un sistema de salud se considere de carácter preponderantemente público debe financiarse con al menos el 70 por ciento de presupuesto público, no lo tenemos hoy en México así.

Esto es preocupante, considerando que México es un país de ingreso medio alto. Más aún, al compararnos con países de América Latina, este gasto de bolsillo de 41 por ciento se contrapone con un promedio general de 28.6 por ciento en la región, 98. 6 muertes por diabetes mellitus frente a un promedio regional de 45.4 por cada 100 mil habitantes, 83.2 muertes por enfermedades isquémicas frente a un promedio regional de 63.8 por cada 100 mil, 462 muertes por enfermedades no transmisibles frente a un promedio de 449 por cada 100 mil habitantes en la región.

Sin embargo, el Sistema Nacional de Protección en Salud Social ha reportado año con año una evaluación positiva durante el tiempo que ha funcionado, se ha incrementado de manera constante la cobertura, el número de afiliados y el fondo contra gastos catastróficos; la pregunta es ¿Qué queremos medir? ¿Qué debemos medir?

Es relevante que dentro la transformación del sistema de salud exista un plan de sistema de evaluación sólido, objetico y veras para determinar el acceso efectivo, queremos medir en el financiamiento, entonces se debe verificar el destino final del uso de recursos y no solo como se diluye la cápita dentro de un sistema de salud.

Queremos medir el acceso efectivo sin inventar el hilo negro, se proponen tres tipos de indicadores que pueden se relevantes en términos de la medición y que ya se ha mencionado en esta mesa: accesibilidad física, acceso oportuno, diagnósticos oportunos.

El primero de ellos, la accesibilidad física: entendiendo a estos como la cercanía  distancia que existe entre la comunidad o calidad de una clínica de salud u hospital general, establecer el número de médicos de determinada población pero a nivel localidad, no a nivel nacional.

Si en lugar de medir a nivel nacional o estatal el número de camas emplazables por cada 100 mil habitantes, utilizáramos una medida denominada Índice de Gini; para medir la dispersión geográfica de los servicios de salud por localidad.

Igualmente es importante mejorar los indicadores que miden el acceso oportuno, esto es, que los usuarios que existen a una unidad de salud se les garantice tanto la atención médica, como los insumos o diagnósticos requeridos y sus tratamientos, reducir tiempos de espera tanto en consulta de atención primaria como la referencia a los especialistas.

Esto último a través del funcionamiento y seguimiento adecuado del sistema de redes articuladas que se proponen, dado que el nuevo sistema de salud se enfocara en la prevención y no solo de manera reactiva en la cura de la enfermedad, es necesario evaluar el acceso a diagnósticos oportunos, ya que actualmente existen encuestas que se realizan a usuarios de los servicios de salud, mas no se cuenta con un sistema de indicadores que permita medir de manera periódica la mejora en los tiempos para recibir el servicio.

El principal reto y el indicador más relevante para medir el éxito de la transformación del sistema es analizar la gratuidad bajo la óptica del gasto de bolsillo en salud, particularmente enfocándose en el gasto de bolsillo de los deciles más bajos, municipios y localidades con mayor rezago, cambios en el consumo de estudios de diagnóstico para la salud, número de consultas en farmacias adyacentes, ya que estos últimos podrían estarse atendiendo malestares episódicos que no conllevan a un diagnóstico veraz.

Debemos ampliar la visión en términos de la evaluación y considerar los impactos de bala en el motor, evaluar la tasa de aviones derribados y no sólo el área de impacto de las balas. Evaluemos el acceso efectivo a los servicios de salud de toda la población. Muchísimas gracias.

La moderadora diputada Frinné Azuara Yarzábal: Muchísimas gracias, doctor Marcos Cantero. Con esto termina mi participación, señora presidenta. Le cedo el uso de la voz.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Gracias, diputada Frinné. Vamos a finalizar con la mesa número 6 de Transparencia, fiscalización y evaluación del nuevo sistema de salud y en este caso le vamos a ceder el uso de la voz a la doctora Elsa Ladrón de Guevara, directora general de Evaluación del Desempeño en la Secretaría de Salud. Ella es médico cirujano con estudios en desarrollo regional y finanzas públicas, cofundadora del Instituto de Salud Pública. Fue directora del Instituto de Salud Pública; académica en áreas de políticas, programas y servicios de salud; asesora en el Congreso de Veracruz. Le cedo la palabra, doctora Elsa Ladrón de Guevara.

La ciudadana Elsa Ladrón de Guevara: Muchas gracias, diputada presidenta, y muchas gracias a los señores y señoras diputadas que nos acompañan esta tarde, casi noche, por haber realizado este parlamento abierto y por darnos la oportunidad de participar en él, no sólo a nosotros como funcionarios del sector salud, sino a la gran variedad de participantes que hay esta tarde en esta mesa. Me da mucho gusto participar con las organizaciones de la sociedad civil, con los representantes de algunos grupos poblacionales con enfermedades en particular y con algunas otras personas que hemos conocido a través de mis canas, diría yo, porque creo que soy la más vieja de esta mesa.

Bueno, lo primero que quiero comenzar a decir es que después de este agradecimiento va mi queja, y mi queja es porque hoy han pegado a la transparencia y la fiscalización, que son herramientas fundamentales para que funcionen nuestros servicios de salud, con el tema de evaluación.

¿Y por qué mi queja? Porque cuando pegan, nos va a costar mucho trabajo quitar esa fijación que tienen los diferentes entes que son evaluables, de que somos también un ente fiscalizador.

La evaluación no es eso. La evaluación es parte del proceso de planeación y es una parte del proceso de planeación que está desde el inicio, cuando se evalúa precisamente la congruencia de la política pública con la problemática que se tiene que atender hasta el final, cuando estamos evaluando, precisamente el resultado y los impactos que se tienen con los accidentes, simplemente.

Obviamente, pasando por el Internet y aquí tiene que ver con la evaluación de la eficacia, la eficiencia, la calidad y la equidad. Yo sí quisiera que en otra ocasión que hagan este parlamento abierto, lo apoyen más con la planeación y menos con la fiscalización.

Perdón por el abuso del micrófono, pero estoy abusando de él porque precisamente queremos incorporar, invitar y hacer que participen en los procesos de evaluación a todas las instancias que conformamos el Sistema Nacional de Salud.

Hoy en día nuestras baterías están orientadas más a los programas de la Secretaría de Salud y del DIF, pero poco hemos incidido en la participación en estos procesos de evaluación, de las otras instancias que conforman el Sistema Nacional de Salud.

Hemos comenzado a trabajar con ellos y esperamos que en breve tiempo, las estrategias que estamos implementando nos den frutos para tener evaluaciones mucho más amplias que nos den cuenta clara tanto de los impactos que tenemos en las condiciones de salud, como de los impactos que logremos en mejoramiento de los programas y de los servicios de salud, que finalmente es lo que busca nuestro señor presidente, que el derecho constitucional a la salud sea una realidad y que sea precisamente el Estado el garante de este derecho humano.

Por eso, él ha instaurado como política la atención a la salud y los medicamentos gratuitos como programa fundamental, sin que esto quiera decir que se va a enfocar exclusivamente en la atención médica o en la provisión de medicamentos, y eso es lo que voy a tratar de explicar en este momento.

En este cambio de visión que queremos hacer nosotros queremos incorporar no solamente los procesos de evaluación externa a los programas sin servicios de salud, sino que se comiencen a incorporar también procesos de autoevaluación.

Hemos hecho un recorrido por lo que está sucediendo en parte del país y lo que encontramos es que no hay procesos de autoevaluación y para nosotros esto es importantísimo, porque vemos la evaluación y la autoevaluación como los mecanismos mediante los cuales podemos tener la certeza de que nuestras políticas, nuestros programas y nuestras acciones realmente están contribuyendo con los objetivos y los propósitos para los que fueron postulados.

Entonces, es importante que esa cultura hacia la evaluación la hagamos mucho más difundida en todas las instituciones, y yo diría públicas y privadas. Y aquí tenemos al representante de la Canacintra. Es importante que ellos también en su participación estén presentes en estos procesos de autoevaluación y de valuación.

Nosotros, como instancia evaluadora de la Secretaría de Salud rendimos cuentas a la oficina de Evaluación de la Secretaría de Hacienda, cuyo interés fundamental es la evaluación de los sistemas financieros. Pero también rendimos cuentas al Coneval, cuyo propósito fundamental es evaluar precisamente cómo avanzamos en términos de la vulnerabilidad o de las limitaciones que tiene nuestra población precisamente en el campo de la salud. Coneval evalúa todo, pero a nosotros nos toca la parte que corresponde a salud.

Con estos propósitos y desde el inicio de este periodo hemos empezado por realizar una evaluación diagnostica para ver si este programa de servicios médicos y medicamentos gratuitos realmente correspondía a las necesidades que plantea la población.

Partimos de algunos indicadores que seguramente ustedes leen diariamente en la prensa, como que los hospitales están saturados y no tienen camas disponibles. Como que el diferimiento en la atención rebasa de tres a seis meses en muchas disciplinas porque no hay disponibilidad tampoco de personalidad sanitario; como que se siguen muriendo las mujeres durante sus procesos de embarazo, parto y puerperio, como que las tasas de mortalidad infantil siguen siendo elevadas en nuestro país.

Entonces, todas esas notas que aparecen en la prensa y que aparecen en la televisión son nuestros indicadores para iniciar un proceso de evaluación diagnóstica en las ocho entidades del sur del país que han sido señaladas como prioritarias precisamente porque ahí se concentran la mayor proporción de las personas con vulnerabilidad social.

Y quiero decirles rápidamente, que lo que hemos encontrado, este diagnóstico lo hicimos a través de dos estrategias, un censo estratégico que levantaron los propios directivos de las unidades de salud de estos ocho estados y una visita de campo que nos permitió visitar diferentes unidades de salud de primero y segundo nivel de atención, las jurisdicciones sanitarias de la secretaría de Salud, incluso entablar pláticas con los gobernadores de los estados que hemos visitado.

¿Qué encontramos? Rápidamente porque el tiempo se me acaba. Encontramos muchas unidades que no tienen ni siquiera los servicios básicos, me refiero a agua, energía eléctrica, drenaje, a algunos les falta uno, a otros les faltan dos y algunos les faltan tres; 42 unidades no cuentan con ninguno de los tres servicios básicos. Cómo podemos dar servicios de calidad en esas circunstancias.

Pero no es el único problema, muchas de las unidades de salud no cuentan con médicos, no cuentan con enfermera o no cuentan con ninguno de los dos y eso también nos habla de una limitación en muchos servicios para poder hacer el derecho a la salud una realidad.

¿Qué otra cosa encontramos? Encontramos que por lo menos el 20 por ciento de las unidades de salud se encuentran deterioradas físicamente, ya sea por falta de mantenimiento durante largos periodos de tiempo o bien por catástrofes naturales y están ahí así desde hace mucho tiempo intentando servir a la población de estas entidades.

Encontramos variaciones en los abastos de medicamento que iban del 24 al 46 por ciento, es decir, de todo el cuadro básico que se venía manejando solamente tenían el 24 o 46 por ciento. Obviamente, aquellos pacientes crónicos que necesitan tratamiento permanente, pues no están siendo atendidos.

Si ustedes analizan las estadísticas de demanda de atención observarán que en casi todas las instituciones la demanda de servicios de atención está disminuyendo precisamente porque no se cuentan con todas las condiciones idóneas para dar un servicio de calidad. Tenemos la información de 3 mil 892 unidades y los datos precisos de estos indicadores que les acabo de mencionar.

Otros elementos que obtuvimos en las entrevistas con los diferentes funcionarios en las visitas que realizamos, es que la mayoría de las entidades tienen problemas financieros, algunos atribuidos a que se ha hecho uso indiscriminado de los recursos en las administraciones anteriores, otros porque consideran que los recursos financieros que reciben son insuficientes, y otros porque realmente para ellos resulta sumamente complejo el tener que administrar múltiples recursos financieros que reciben por las diferentes partidas, que son otorgadas a estas instituciones. Reciben el Ramo 12, pero también gastos catastróficos, también apoyos para estimular la contratación de personal en las regiones difíciles.

Muchas de las unidades están siendo abandonadas por los riesgos que se derivan de la inestabilidad social que existe en el país.

Con esos elementos y muy rápidamente, me permito comentarles que hemos realizado como resultado de ese diagnóstico primero la verificación de que la política es la adecuada. Pero también un proceso de planeación que implica un cambio en el modelo de atención orientado hacia la atención primaria de la salud, que no el primer nivel de atención, es una atención integral en función de las necesidades que requiera cada uno de los pacientes.

El plan también contempla el desarrollo de una modificación orgánica a nivel de las entidades federativas, porque las jurisdicciones sanitarias, que hace un rato comentaban que no se mencionan, creo que ya tienen que ser modificadas precisamente por los cambios que ha sufrido nuestro panorama epidemiológico y nuestro panorama demográfico.

Tenemos la propuesta de cambio y esperamos afinarla con la participación de los prestadores de servicio de salud de las entidades federativas.

Por último, nuestra Subsecretaría de Integración y Desarrollo del Sector Salud, ha conseguido recursos para comenzar a minimizar los grandes problemas que están presentando nuestros servicios de salud.

Estos recursos que se están operando a través de la dirección de mi compañero, van a ser evaluados precisamente en varias dimensiones. Queremos conocer cuál es el impacto que estos recursos tienen en la provisión de recursos humanos, en la provisión de medicamentos. Ya se habló aquí de que hay una compra consolidada de medicamentos, pero que no sabemos todavía qué efectos tiene y estos recursos también van a apoyar el abasto de medicamentos y en la operación del IMSS Bienestar, que también ha sido beneficiado con estos recursos. Por lo tanto, nuestros procesos de evaluación se están orientando a ver desde este mismo ciclo cuál es el impacto que ellos tienen.

Todas estas acciones que estamos realizando en términos de diagnóstico y en términos de propuesta organizativa y de modelo de atención no es para que la Subsecretaría lo opere, quien lo va a operar es precisamente el Instituto de Salud para el Bienestar. Entonces no es un trabajo, es simplemente y sencillamente de rectoría y de evaluación, y yo en lo personal no creo que la modificación a la Ley General de Salud tenga que llevar instancias de transparencia o de fiscalización, dado que ya están establecidos en otras legislaciones y lo que tenemos que esperar es que simple y sencillamente se cumpla. Ya abusé mucho de la palabra, muchas gracias por su atención.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Bien, pues muchas gracias, doctora Elsa Ladrón de Guevara por toda la información y toda la ponencia que estuvo interesante, y va a ser de mucha utilidad. Así que les vamos a pedir no nada más la doctora Elsa, sino a todos los ponentes, que nos hagan favor de hacernos llegar sus documentos porque vamos a seguir trabajando los diputados en toda esta iniciativa, y queremos robustecer con la información que se ha vertido durante estos tres días.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Vamos a pasar a la parte de preguntas y respuestas. Les comento ahorita, Armando Castro Baurón pregunta. La transparencia, la fiscalización y evaluación de este sistema de salud es muy importante, pero cuando la ley señala que los lineamientos seguirán igual que en el actual sistema creo que pasará  a segundo término, lo que se necesita es modificar la atención.  ¿Cómo impulsar el cambio?  Es para la presidencia de la comisión.

Yo lo que pienso es que dentro del trabajo que se va a hacer en el marco de la iniciativa, efectivamente hay que separar lo de la transparencia, separar lo de la fiscalización y separar lo de la evaluación, tienen que ser tres.

Por motivos de tiempos las mesas se conjuntaron, pero a la hora de ejecutar las ideas y la ley tiene que irse por separado cada una de las cosas. Y efectivamente, hay que ser muy cuidadosos de no cometer los mismos errores, eso es importante. Y ser muy precisos en cómo evitar los actos de corrupción que pudiera haber. Y creo que una de las cosas importantes es la centralización de la salud en este caso, eso puede eficientar en ese sentido.

Y llamar o solicitar a la Auditoría Superior... de fiscalización, para que estén al pendiente también. Y en la evaluación debe ser parte de la planeación de cómo se va a armar el proyecto de Insabi, del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar, porque la evaluación es una parte de un proceso, no es una sola cosa. Entonces se tendrá que ver puntualmente y a detalle cada aspecto. Y bueno, lo vamos a seguir trabajando en la comisión hasta donde se pueda. Y lo que pueda ir en la ley y en el decreto, y lo que no tendrá que irse a los reglamentos y la normatividad. Pero no hay que dejar cabos sueltos, eso sí nos queda claro.

Bueno. Jacqueline Maza dice que por qué el derecho a la salud ya no se medirá por el número de personas afiliadas a los servicios. Cómo se medirá ahora. Independientemente de que ya no va a ser... Inicialmente yo recuerdo que se daba por familias, luego por persona, o per cápita. Creo que más allá de ver cuánta población está hoy por hoy sin servicio médico o sin atención de salud, y si sabe así en cifras generales que son 20 millones los que no tienen acceso a absolutamente a ningún servicio médico: ni Seguro Social, ni el ISSSTE, ni el instrumento del Seguro Popular. Efectivamente son cantidades en general, pues, están en general.

Creo que le tenemos que apostar a que haya un registro muy puntual y no nada más de los ciudadanos que acuden a consulta o a atención médica de primer nivel, o de segundo o de tercer nivel. Y a que haya un registro de enfermedades, porque también existe un subregistro de enfermedades en cada uno de los niveles, y eso nos dificulta tener el diagnóstico de precisión en este país respeto a la salud. Eso, por un lado.

Por otro, creo que también habría que considerar la posibilidad de registrar las fracciones de promoción de la salud, de educación en salud, como parte de proceso de una asegurarse que este instituto realmente cumpla con su función de atender y atender bien a la ciudadanía. Eso creo que es importante.

Teniente García Moreno, dice: ¿Qué mecanismo han previsto en el Insabi para incluir el derecho a la salud de personas LGBTI, queremos ser incluidos en la mesa? Creo que el día de hoy escuchamos puntualmente y muy atentamente la participación del compañero Quiroz.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: El doctor.

La ciudadana : Y Florentino, igual maestro.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: El maestro Quiroz. Bueno, lo escuche muy atentamente, creo que es muy importante lo que comentó en las mesas de trabajo seguramente vamos a tomar puntualmente las opiniones vertidas el día de hoy en el parlamento abierto lo que sí puedo yo comentar con mucho compromiso, con mucha responsabilidad, es que la idea de que exista este Instituto Nacional de Salud, el bienestar, deberá incluir a los más vulnerables, deberá incluir por supuesto, no nada más a las personas con LGTBI, sino a todos y a todas. Y hay que asegurarnos de que eso ocurra. ¿Verdad?

Gracias por dejar el teléfono. Nos comunicamos. Esas eran las preguntas que venían muy específicamente para mí. A continuación, le voy a dar el uso de la voz a los compañeros diputados que tienen en su haber, algunas preguntas. El diputado Arturo Hernández, vamos a iniciar con la regla de preguntas.

El moderador diputado Arturo Roberto Hernández Tapia: Gracias, presidenta. Dos preguntas dirigidas al doctor Alejandro Vargas...

La primera, Frida Romero pregunta, ¿cuáles son los mecanismos contemplados para convertir la corrupción y la malversación de recursos en el nuevo Instituto de Salud para el bienestar? Y la siguiente pregunta la plantea Miguel Ángel Ramírez.

¿Cómo evitar casos de corrupción como los que hubo en el Seguro Popular en casos en los que las entidades federativas no establezcan convenios con las autoridades federales?

El ciudadano Alejandro Manuel Vargas García: Creo que éste es el tema más complejo que puede haber, porque hay que ver que como se está planteando una u otra de las... vamos, la propia reforma del instituto tiene que conformar un sistema de distribución de recursos perfecto. Si va a ser, debe ser por el ramo 12, por ejemplo, pero es de distribución de recursos a cada una de las entidades federativas.

Creo que no podemos hacer un distingo en este momento, no debemos hacer un distingo entre quienes firmen un convenio o no. La Secretaría de Salud federal es responsable de las acciones de salud y de financiamiento de la totalidad de la población de los mexicanos, por ende de todas las entidades federativas, ajeno en este momento a un asunto de vinculación, a un convenio de firma, ¿no?, que creo que debe quedar claro este punto.

El problema de la corrupción se da mucho cuando en los procesos en cada una de las entidades donde participen licitaciones, por ejemplo, en compras de medicamentos, de supervisión de servicios, subcontratación y arrendamiento de equipamiento médico, mantenimiento, etcétera, se dejan no exactamente en manos de gente que conoce del tema.

Y quiero poner un ejemplo: muchas de las partes de obra van destinadas y las ejerce las Secretarías de Finanzas y las Secretarías de Obras Públicas de las entidades federativas, sin tomar en cuenta una serie de lineamientos, y hemos encontrado ahí graves problemas de corrupción.

En la medida en que dispersamos la posibilidad que varios entes participen en los procesos financieros es en la media en la que aumentamos el riesgo. Estoy claro de que –el ejemplo que tenemos ahorita– las compras centralizadas deberán mejorar, deberán eliminarse muy bien los procesos y procedimientos.

Creo que lo que debe suceder es que en los procesos de licitación se mantenga un esquema donde la participación del sector privado, en este caso, que son los que van a dar los recursos, tomen consciencia de la necesidad de establecer un mecanismo de queja a un ente, cualquiera que éste se designe, donde permita transparentar.

Acabo de estar en una reunión donde se analiza un producto que no ha generado, es una empresa mexicana que no ha podido generar porque lo que le pidieron entrando entrando fue recursos en la licitación. Y esto no llegó a la queja.

Creo que aquí hay que conformar una estructura externa incluso de la propia Secretaría, donde se vuelva un común denominador el elevar la queja de cualquier tema de corrupción y llevarlo de inmediato a los órganos fiscalizadores. Es la única manera en que veo que en este momento podríamos avanzar en ese sentido.

El moderador diputado Arturo Roberto Hernández Tapia: Gracias doctor Vargas por sus respuestas, sin lugar a dudas que también los nuevos funcionarios del Insaven habrá de seguir el ejemplo del presidente, el ejemplo de austeridad y de honestidad en el manejo de esta nueva institución.

Hable también de los mecanismos que ha establecido la Secretaria de la Función Publica, acaba de publicar un esquema de denuncia ciudadana, alertadores, me parece se llama, entre el cual la propia ciudadanía debe hacer el espacio para hacer estas denuncias. Serían las preguntas que me tocaron presentar.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Bien señor diputado Arturo Hernández, en seguida le vamos a dar el uso de la voz al diputado Éctor Jaime para continuar con las preguntas, enseguida.

El secretario diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Muchas gracias, ¿Cómo realizara el Insaven la fiscalización de cada una de las entidades federativas? ¿Será que tendrá que ocupar la estructura y recursos humanos de los regímenes estatales?

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Pregunta abierta. ¿Nos podría repetir la pregunta?

El moderador diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Con todo gusto ¿Cómo realizara el INSAVEN la fiscalización de cada una de las entidades federativas? ¿Será que tendrá que ocupar la estructura y recursos humanos de los regímenes estatales?

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Yo creo que me invita a lo mejor a contestar un poquito más preciso la doctora o el doctor.

La ciudadana Elsa Ladrón de Guevara: Bueno el Insaven en realidad no va a tener funciones de fiscalización porque si le asumimos las funciones de fiscalización, pues va a duplicar las acciones que ya tienen los fiscalizadores; así es. Entonces dejémosle esa tarea a quien ya la tiene asignada.

El secretario diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: ¿Amplio la respuesta? Asumiendo que se forma el instituto como está planteado, van a concurrir en el punto final recursos estatales y recursos federales. En inversiones donde concurren recursos federales y recursos estatales, la ley marca que lo hace la Autoridad Superior de la Federación y solamente lo hace por convenios con los estados.

Y son los estatales, ya sea en la salida de oficio publica de cada uno de los estados es la manera. Es cuento presidenta.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Bien ¿es la única pregunta? Continuamos.

El secretario diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Alexis Romero Padilla, La Federación de Hemofilia quiero realmente felicitarlos porque se lo han pasado aquí los tres días. Buenas tardes a todos. Por aquí, por acá estaba también. Dice: ¿Es posible que se incluya un organigrama integral del nuevo sistema de salud con el fin de saber de qué manera se llevará a cabo sus tareas? Comentario: dicen “generales”. De igual manera, una atención a la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública, ¿será una idea adecuada establecer una unidad de transparencia, misma que reciba solicitud de información y un comité de transparencia que ejecute el cumplimiento de las solicitudes y aplique los derechos arco de los escritos cuando así sean requeridos?

La ciudadana Elsa Ladrón de Guevara: Desde luego que hay instancias que ya están normadas y una de ellas es precisamente la Unidad de Transparencia. Hasta el Congreso la tiene, ¿o no? Sí. Bueno. Entonces esa unidad de transparencia tendrá que estar también en el Insabi para atender las solicitudes de todos los ciudadanos porque al usufructuar recursos públicos, estamos obligados a rendir la cuenta a todo el ciudadano que así lo requiera.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Bien, si no hay alguna otra intervención con esta pregunta, continuamos con la ronda de preguntas y respuestas con la diputada Frinné Azuara.

La moderadora diputada Frinné Azuara Yarzábal: Gracias, presidenta. Para el doctor Alejandro Vargas. Dentro de la iniciativa de la ley para la creación del Insabi, ¿está prevista la revisión estricta y actualización del escalafón catálogo institucional de puestos y esquemas de remuneraciones que hasta hoy rige plagado de inconsistencias a todos los trabajadores de los servicios de salud que, dicho sea de paso, serán los primeros incorporados por correspondencia y antigüedad como la plantilla base y arranque para el nuevo Instituto de Salud para el Bienestar? Uno.

Dos. ¿Quién... número cercano a los 6 mil con nivel de licenciatura o posgrado que, con antigüedad de 15 a 20 hasta 30 años ostentan códigos operativos y percepciones correspondientes al de auxiliares o técnicos o códigos distintos al perfil de puesto que realmente desempeña? ¿Qué pasará?

El ciudadano Alejandro Manuel Vargas García: Sí. Yo quisiera contestar. Creo que no es una función del Insabi... Si lo vemos como un instituto, tiene como función fundamental el de garantizar el acceso a los servicios y la prestación de los servicios, creo que queda en la parte de la rectoría de la propia Secretaría de Salud. En las negociaciones que tiene que ver, sobre todo, las reformas laborales que se han tenido que dar en lo sucesivo el de poder hacer los replanteamientos porque estamos de acuerdo que hay una serie de inconsistencias que se han venido pasando de ya de muchos años acá donde los tabuladores, donde si los sindicatos han... no se han acatado bien en apego y hay muchas quejas y demandas también, es que no quiero hablar mal de los sindicatos, pero hay una serie de evidencias, también, donde en las entidades hay una serie de... por llamarla de alguna manera, desvíos, favoritismos hacia otras personas y no se respeta en estricto el escalafón.

Debe ser motivo de una revisión a fondo de la propia Secretaría de Salud con los propios sindicatos y la ley y la Secretaría del Trabajo porque sí creemos que debe haber una reforma de fondo.

Y en este sentido, los mismos esquemas de contratación, particularmente deben de vigilar algunas otras acciones que serán propuestas en su momento a la propia Secretaría del Trabajo, porque hay un efecto que hay que reconocer en la realidad, al conocer el comportamiento de algunos, digo algunos de los trabajadores, también ha habido una complacencia por parte de los sindicatos y las autoridades, donde tenemos evidencia de trabajadores que no acuden a trabajar, que no cumplen con su deber y su motivo de contratación y que son recursos humanos que se están desperdiciando, en términos reales.

Lo que sí creo yo y hoy vengo de un hospital del estado de México, donde con mucho gusto lo reflejo, vi algo que no había visto en un hospital general de 144 camas, donde la medicina tradicional se mezcla junto con la medicina actual, donde tienen herbolaria, donde tienen acupuntura, donde tienen esquemas de gerontología. Otro hospital que no recuerdo el nombre ahorita. Nicolás...

Y en esto, el planteamiento que me hicieron algunas de las gentes que están liderando los proyectos, me decían, ¿y cómo nos incorporamos nosotros a estos esquemas si no existen plazas para medicina herbolaria, por decir algo, si no existen plazas para acupuntura? ¿Sí me explico? Tiene que ver toda una reflexión y cambios de paradigmas en donde todo cabe dentro del sistema de salud. No tenemos por qué excluir ningún tipo tradicional de medicina, aun en los hospitales grandes, pero implica también un análisis y una reforma de lo que estamos planteando ahorita en materia de contratos.

Nada más para terminar, no creo que sea tema del Insabi y del manejo de los recursos humanos, tabuladores y de los esquemas de... plazas.

La moderadora diputada Frinné Azuara Yarzábal: Muchísimas gracias, doctor, por sus respuestas. Juan Carlos Flores, ¿cómo replantearía esta ley la atención a las enfermedades raras o poco frecuentes? Pues muchas de ellas son muy costosas y el número de pacientes no haría posible establecer estos costos reducidos por la naturaleza misma de este tipo de enfermedades.

Quiero reiterar la necesidad imperiosa de incrementar el PIF en materia de salud, del 3 al 8 por ciento, al menos al 6. Se busca financiamiento cuando está la necesidad de incrementar los presupuestos en los rubros de salud, investigación y educación. De otro modo, de poco o nada habrá servido votar por un gobierno pobrecista de izquierda. Es una pregunta abierta. Supongo que es cómo se van a atender estos padecimientos que son muy costosos, son enfermedades raras, poco frecuentes.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Yo ahorita veía que, a reserva de que ellos complementen, pero entiendo que esta iniciativa y esta creación del Instituto Nacional de Salud y Bienestar precisamente lo que intenta es que no exista la discriminación de enfermedades baratas o caras.

Independientemente de cualquier motivo por el que alguien se enferma debe ser atendido y si es barato o caro ya será el Estado quien tenga que determinar de dónde y cómo le hace. Nada más, pues es la diferencia. Si no, seguiríamos con la otra opción. Eso es lo que yo considero, que la salud es para todas y todos, no para unos y otros no.

Entonces, esas fueron las preguntas que se hicieron el día de hoy. Si no hay ninguna otra intervención. Ah, ahí hay otras preguntas. El diputado Víctor Mojica Wences.

El secretario diputado Víctor Adolfo Mojica Wences: Sí, Montserrat Ayala se dirige al doctor César Cruz Santiago para hacerle dos preguntas. La primera, ¿cuál es el porvenir del registro de enfermedades de baja incidencia en este nuevo esquema de salud que se está planteando? ¿Se tiene pensado ampliarlo?

La segunda pregunta dice: ¿con base en qué reglas se está evaluando la calidad de los medicamentos en el nuevo compendio?

El ciudadano César Alberto Cruz Santiago: Muchas gracias por las preguntas. La Comisión para el Análisis, Evaluación, Registro y Seguimiento de las Enfermedades Raras es una comisión interinstitucional donde confluyen las diversas instituciones que forman parte del sector salud: el IMSS, el ISSSTE, Sedena, Semar, Pemex, etcétera.

También están los institutos de salud, pero también confían en organizaciones académicas como la UNAM, el Instituto Politécnico Nacional, e incluso la Comisión Nacional de Bioética.

Esta comisión fue creada, sus reglas de operación son públicas, están en la página del Consejo publicadas en el Diario Oficial de la Federación. Esta comisión va a seguir trabajando conforme ha venido trabajando en los últimos tiempos, la iniciativa no tiene cambios o no prevé cambios en la operatividad de esta comisión.

Esta comisión va a seguir laborando, va a seguir estableciendo los pendientes que nos dejaron en la administración anterior para tratar de salir abantes en este tipo de situaciones, como ya se dijo y como bien lo dijo la presidenta de la comisión, la idea no es una idea discriminatoria, sino al contrario, que no haya mexicanos de primera, segunda y tercera, sino todos tienen derecho a la salud y nosotros tenemos que ver las formas en como esto se puede hacer posible.

En un entorno de presupuesto limitado siempre habrá más necesidades que recursos, pero precisamente la labor de los funcionarios, de quienes se encargan de este, quienes nos encargamos de esto, es ver cómo se puede hacer posible para que se atienda a la mayor cantidad de mexicanos como deben ser atendidos y de acuerdo a las circunstancias y de acuerdo a las opciones que se tienen previstas. Esto es lo que yo tendría que contestar al respecto.

Y con respecto al compendio nacional de insumos para la salud, es muy importante también aclarar lo siguiente. En el Reglamento de la Comisión Interinstitucional de Cuadros Básicos existen reglas claras para la evaluación, inclusión y exclusión de insumos, estas reglas entonces van a ser retomadas, se hizo por parte del Consejo un análisis, una mesa de mejora regulatoria, para tratar de observar qué reglas debían modificarse y cuáles debían preservarse.

Un aspecto importante puede resumirlo de la siguiente manera: se toma en cuenta, como ya se tomaba en cuenta, el análisis científico. Esto es la efectividad, eficacia y seguridad de la tecnología a evaluar que puede ser un medicamento, que puede ser un auxiliar de diagnóstico o un dispositivo médico. Una vez que se considera seguro, eficaz y con estudios clínicos que soporten y que se deban de dar, entonces se lleva a cabo una evaluación donde nosotros tengamos una relación fármaco-económica y de impacto presupuestal para saber entonces cómo es que se puede pagar esta tecnología.

Pero lo primero que tiene que demostrar es que la tecnología es segura y eficaz para poder emplearse y una vez que se ha demostrado de manera fehaciente esto, entonces se pasa a la parte en la que se busca cómo se va a pagar en un sistema público de atención. Y esto es exactamente lo que esta predominando en la integración del compendio nacional de insumos para la salud.

El moderador diputado Víctor Adolfo Mojica Wences: Gracias, doctor, por su respuesta. Esperemos que haya sido de satisfacción para Monserrat Ayala.

También José Eduardo Suárez, el inicio en esta ocasión al licenciado Héctor Arreola Ornelas, para preguntarle o para comentarle que en el 2016 la Auditoría Superior de la Federación detectó una desviación de recursos estimado en 6 mil millones de pesos. Dice: tengo más de 10 años como médico especialista en un hospital que atiende a pacientes del Seguro Popular y es muy lamentable ver morir a pacientes por falta de recursos humanos, materiales, etcétera.

Usted, como integrante de Funsalud, ¿qué presupuestos han planteado para hacer más perfectible el Seguro Popular, si antes lo omitieron? Ahora están en la oportunidad de realizarlo... Perdón.

El ciudadano Héctor Arreola Ornelas: Bien, como comenté, como inicié mi participación, la verdad es que el Seguro Popular no fue la panacea, cumplió con los objetivos para los cuales fue diseñado, es perfectible, sí.

Esto de los hallazgos por parte de la Auditoría federal implica que tenemos un problema de fiscalización que teníamos que haber combatido y creo que justo ahí es la llaga, donde está una parte del problema del programa.

Ahora, mi punto es, esta mesa es justamente sobre ese tema, fiscalización, evaluación, y esto que mencionaba muy bien la doctora, separemos entre lo que es fiscalización, lo que es transparencia y lo que es evaluación del desempeño. En cuanto a evaluación del desempeño, que no está en la iniciativa de ley, creo que el programa tuvo resultados y mencioné uno, pero hay varios, cáncer de mama, sí.

En cuanto a fiscalización falló. Sin embargo, la iniciativa de ley no hace nada nuevo para corregir este error.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Bien, creo que sí, ahora sí las preguntas están agotadas. Si no hay nadie más que haga o quiera hacer uso de la voz. De los diputados, ¿algún comentario breve? La diputada Frinné.

La diputada Frinné Azuara Yarzábal: Breve. Tengo una pregunta para el doctor Vargas y quiero compartir algunas reflexiones, ya que es la última mesa.

Quiero decir que el Seguro Popular no fue creado para que fuera un sistema corrupto. La corrupción en el Seguro Popular no era, no formaba parte del modelo, lo hicieron quienes lo manejaron, y no todos; algunos.

El Seguro Popular nació para poder hacer efectivo el derecho a la salud, nació para poder generar una mayor cobertura de servicios de salud, para generar universalidad de los servicios de salud.

El Seguro Popular fue una aportación también como lo es hoy este nuevo modelo, de grandes mexicanos, de grandes servidores públicos, y no solo hablo de los de la cabeza, hablo también de las enfermeras, de los médicos, de los afiliadores, de todo el sistema de protección social en salud.

Cuando se investigó acerca de por qué tenía que existir el Fondo de Gastos Catastróficos, una de las grandes investigaciones que arrojó uno de los mejores resultados, fue observar que la población mexicana invertía muchísimo dinero de gastos de bolsillo, que la inversión pública en salud estaba siendo mayormente sostenida por el gasto de bolsillo de los mexicanos, la cual hoy empieza también a manifestarse de manera muy, muy cruenta.

En ese momento, cuando se evalúa que había también gastos por padecimientos de muy alta complejidad en su atención y de muy alto costo, se observó que había familias que gastaban más del 30 por ciento de sus ingresos en salud. Gastaban más en salud que en muchísimo más otras de las cosas, como era alimentación y educación, y a eso se le llamó que la familia ponía en riesgo su patrimonio y su capital, amén de la vida del familiar que en ese momento tenía el problema de padecer uno de estos padecimientos.

Más del 30 por ciento de sus gastos estaban ya expuestos, y por eso cuando se hace la estructura financiera del Seguro Popular se destina un 8 por ciento única y exclusivamente para poder atender este tipo de padecimientos. Celebro que hoy en esta iniciativa está contemplado ese 8 por ciento.

Lo único que hoy preguntamos es: ¿va a tener sostenibilidad en el tiempo? Porque a través de una cápita de cada uno de los afiliados, obvio, se tomaba el 11 por ciento: el 8 para gastos catastróficos; el 2 para gastos de previsión presupuestal, que era la infraestructura; y 1 por ciento para la solidaridad de las comunidades.

Celebramos también cuando nació el Seguro Médico Siglo XXI. Porque se definía, no es que fuera un invento importante y que innovaba. No. Era la definición de una cápita para poder lograr la atención médica de muchos niños que morían, teníamos una alta tasa de mortalidad infantil. Durante estos años uno de los objetivos y de los resultados más importantes que se obtuvieron con el Seguro Médico Siglo XXI fue la reducción de la mortalidad infantil. Reconocida ampliamente por la Organización Mundial de la Salud, la OMS.

Quiero hacer un comentario. El Seguro Médico Siglo XXI vino a responder de manera muy importante. Lástima que ya no está aquí Irma Juan Carlos, nuestra presidenta de la Comisión de Pueblos Indígenas. La mayor parte de los hospitales rurales del IMSS, hoy Bienestar antes IMSS Prospera, se encuentran en las comunidades indígenas, en las comunidades rurales.

Cómo nos íbamos a imaginar, cuándo, que un neonatólogo podía llegar a uno de esos hospitales. Gracias al Seguro Médico Siglo XXI estos médicos neonatólogos llegaron a atender a estos pueblos y comunidades indígenas y lograron salvar a miles, cientos de miles de niños indígenas, gracias a los recursos del Seguro Médico Siglo XXI. Hoy celebramos que siga vigente en esta iniciativa el Seguro Médico Siglo XXI. Lo que no sabemos es cómo va a ser manejado.

Quiero comentar también que a través del Seguro Popular podía el afiliado llevar su cápita a cualquier parte de la república: la portabilidad. Este esquema era un esquema que podía brindarle la oportunidad de que los servicios fueran accesibles y oportuna su atención médica, porque llevaba el dinero, seguía a la persona. Eso es muy importante, y hoy no es que queramos nosotros seguir planteando que se tome en cuenta a la iniciativa privada, pero creo que no podemos soslayar que la iniciativa tiene privada 3 mil hospitales en este país y hay un esquema de compensación económica que se llama pago por evento. Que lo hizo muy bien del Seguro Popular y hay que reconocer las cosas que se hicieron bien.

¿Qué significaba? Qué muchísimos de nuestra infraestructura en salud, del gobierno federal o de los gobiernos estatales no contaban en todas las localidades y en todos los municipios con infraestructura poder hacer efectivo ese derecho con oportunidad, para poder salvar vidas.

Este esquema de pago por evento se amplió e incluso a la iniciativa privada no para hacernos ricos, sino para aprovechar y no tener que construir la federación con muchísimo más gasto, infraestructura en salud. Si no aprovecharla con la que ya cuenta el país.

Insisto, los modelos no son los corruptos, los corruptos son quienes lo manejan. Yo celebró este nuevo modelo, celebró que hoy viremos hacía lo que es, de nueva cuenta, como un modelo que yo comenté en la mesa de la mañana, la atención primaria a la salud, desde hace 35 años. Iniciamos con este modelo de atención en el Estado de México, encabezado por Gustavo Baz, en aquella época y fue un modelo reconocido no solo en México, sino en toda la América Latina.

Por último, quiero nada más hacerle una pregunta, si me permite doctor Vargas, es una de nuestras preocupaciones como secretarios técnicos de la Comisión de Salud y que hemos estado esta iniciativa.

De por sí, nuestro sistema de salud es un esquema segmentado, efectivamente. Pero qué va a pasar con la rectoría cuando haya algún estado que no firme este acuerdo, este acuerdo de coordinación.

Si algún estado decide no participar porque acabo de escuchar algo que me llama la atención, presenta el REPS de Querétaro, en Querétaro los resultados en salud han sido muy efectivos, muy eficientes. No sé, yo supongo que Querétaro valorará que su modelo siga prevaleciendo. Si ha dado tantos, tan buenos resultados.

En México, gracias a este modelo, supongo y también indicadores Querétaro de la disminución de la mortalidad de la muerte materna, de la mortalidad infantil, México llegó a tener la mejor cobertura en vacunación de los países del OCDE.

Supongo que Querétaro, al dar estos indicadores, también los está respaldando. Entonces, doctor, me queda la inquietud: al estar nosotros abriendo esta puerta, ¿no vamos a generar también el riesgo de que se siga perdiendo la rectoría? Porque vamos a segmentar más ya no nada más con instituciones de seguridad social y la no seguridad social, sino ahora la segmentación de estados que sí y que no tienen, se adhirieron al convenio. Gracias, doctor, por sus respuestas.

El ciudadano Alejandro Manuel Vargas García: Rápidamente quisiera comentar, no está en el enfoque –y lo comenté hace un momento– en la Secretaría de Salud federal dividir al país en este momento entre estados que firman y no firman algo. Quisiera que quedáramos claros.

La reforma a la propuesta de la ley es para todo el país, tiene que verse claramente cómo vamos a ir principalmente desde la planeación y el análisis muy cuidadoso de cada una de las acciones en conjunto con la Cámara de Diputados, quienes tendrán que aprobar, y ser también muy cuidadosos, entiendo, en cuidar cada uno de los puntos que no vuelvan vulnerables sobre todo a la gente más desprotegida. Creo que éste es un principio que debemos respetar.

Sí quiero enfatizar algo que usted comentó, señora diputada. Creo que no se vale decir que todo el Seguro Popular es un fracaso, eh. Digo, si somos analíticos y somos con apego científico y de la medición de lo que hemos analizado, hay éxitos, como en salud pública se ven muchos éxitos, y también hemos abandonado esas políticas. Y tenemos ahorita un problema de sarampión, por decir algo, ¿no?

Creo que hay un punto donde coincido totalmente que hay actos de corrupción que dependieron de las personas que operaban los recursos. Nadie diseña un programa pensando en que se va. Creo que el modelo. Tengo un momento, cuando se planteó, donde era fundamental y necesario avanzar hacia ese sentido.

Creo que, el modelo, llegó un momento en que lo que pasa es que ahorita ya se atoró, ya no dio más. Y ahí tenemos algunas cifras que revelan cómo buscamos como mexicanos, como responsables de la salud, junto con la Cámara de Diputados, un modelo que vaya a avanzar más con la pretensión de mejorar los nudos que alcanzó los del Seguro Popular, en esquemas que busquemos ir hacia adelante en beneficio del país.

Creo que esto no es una lucha entre que si el Seguro Popular era bueno o malo, o el modelo es bueno o malo. Creo que es un asunto que, como país y como mexicanos, debemos en conjunto ver hacia dónde podemos avanzar hacia nuevas prácticas y nuevas alternativas a la luz de la evidencia nacional e internacional que pueda darnos mejores resultados,

Me queda claro, no hay ningún modelo; en este momento, que sea el ideal, sino tiene un diagnostico muy claro, un financiamiento que lo respalde y gente que lo opere; porque finalmente el mejor planteamiento, si no va acompañado de financiamiento, no va a operar; pero pregunta ¿un financiamiento ahorita de subir 4 puntos porcentuales del PIB y subirlo de 6 a 9; que sería el ideal, en un año nos daría garantía de que logramos éxito en lo que estamos planteando?

Les aseguro en decirlo que o, pero tampoco sabríamos como manejar el exceso de recursos que de pronto llegan y haríamos un mal uso de los recursos. Por eso la parte de lo que estamos decidiendo en este momento, en conjunto La Secretaria de Salud, La Cámara de Diputados y el Sector Privado es llegar a un nuevo modelo, a un enfoque en donde en conjunto podremos avanzar gradualmente para lograr alcanzar los principios que está marcando nuestra Constitución. Eso sería lo que tendría que comentar.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Gracias, continuamos con el uso de la voz para el diputado Éctor Jaime.

El diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Mi participación, presidenta y pedirle su venia para hacer una pregunta y luego ya hacer; cuando usted me lo indique, un posicionamiento en mi partido. 

Realmente me sorprendió el doctor Marcos Cantero; cuando nos trae un ejemplo aquí que se conoce en las ciencias biológicas como método de concordancia haciendo referencia como una bala, no marca hacia dónde vamos con el ejemplo que el dio y si puede ser sino el camino.

Yo recuerdo que enseñaba a mis alumnos de preparatoria y de secundaria, cuando alguien toma coco-cola con vodka tiene sentimientos como de que se emborracha y si toma tequila con coca, pasa lo mismo y si toma ron con coca, le pasa lo mismo; entonces, la coca es la que emborracha.

Ese fue el ejemplo que nos dio el doctor Marcos Cantero y para su nivel de doctorado yo tengo algunas dudas porque hablo con tantas generalidades que bien decía Benjamin Disraeli y mi famoso parlamentario inglés, que había las mentiras, las mentirotas y la estadística, más cuando esta es sesgada.

Y lo que nos estuvo comentando a lo largo de varios párrafos, yo le quisiera preguntar puntualmente en el caso de acceso efectivo. Ninguno de esos indicadores que el marco tiene que ver con el acceso efectivo a la salud, eso que el menciono; vamos a medir por isócronos, por isómeras y le faltó decir además por el tiempo de traslado, por el medio de transporte habitual porque yo no sé cuántas comunidades conozca, pero hay comunidades que para llegar se tarda un ratito.

De hecho, si lee él mismo el informe del Seguro Popular que se presentó aquí el 1 de agosto, se va a dar cuenta que el Seguro Popular cubre más de 17 millones en personas rurales y cubre casi el 70 por ciento de localidades de este país. Y está hasta estatificado. Algunas páginas no están actualizadas, por ejemplo, la página de evaluación y desempeño, la última actualización fue del 2016.

Entonces es complicado cuando uno trata de ver con qué elementos va uno a tomar consideraciones deben hacerlos. “Es que vamos a hacer planes, vamos a hacer programas...” Digo, el equipo de transición se estableció el 3 de julio. Ya pasó un año. Tomaron posesión el 1 de diciembre, ya pasó, y seguimos pensando en que vamos y vamos, pero no hay documentos formales para tomar evaluación.

Yo, por ejemplo, le diría a don Alejandro Vargas: ¿Cuándo perdió el papel la rectoría?, ¿en qué artículo de la ley perdió la rectoría? Que no la ejerza es otra cosa, porque para que este Congreso aprobara una obra –y nos pasó el año pasado– se ocupaba que tuviera el registro ante Hacienda y con la validez... ¿cómo que se perdió la rectoría? Ahora ya no sabemos que hubo 260 hospitales que se hicieron sin rectoría. ¿Pues de dónde salió el recurso? Pues salió de Hacienda, autorizado por este Congreso dado que tenía los requisitos que se requerían.

Yo le pedí al secretario por escrito que nos dijera cuántos hospitales había y me contestó una cifra diferente a la que se ha dado.

Aquí mismo, don Alejandro nos decía que para un organismo desconcentrado, descentralizado con patrimonio propio, no tiene... con sus plazas, pues por supuesto: es la naturaleza misma de una paraestatal, tiene que ver con sus plazas y con el sindicato. De ahí que este tejido, para poder ayudar si esta iniciativa del presidente López Obrador camine para adelante, que tenemos que trabajar de manera más fina.

Marcos, de manera puntual ¿usted me puede decir de dónde saca usted que el gasto de bolsillo solamente es de la población no asegurada? Dígame usted cuánto es el gasto de bolsillo de la población del IMSS. Dígame usted cuál es el gasto de bolsillo de la población del ISSSTE. Dígame usted el gasto de bolsillo de la población de las Fuerzas Armadas y, por último, si fuera usted tan generoso en decirme, dígame usted el impacto que ha tenido el Seguro Popular según el reporte que presentó aquí el gobierno emanado de Morena, para que luego no me digan que tenemos otros datos, dígame el impacto de esos 94 mil personas que con cáncer de mama, con cáncer cervicouterino, con unidades de cuidados intensivos, con tratamientos... le pudo haber cambiado la vida.

Hay veces que el producto interno bruto no se mide en la calidad de vida de las personas y por eso parte del gran debate es si este fondo debe de darse quitándole la rectoría al Consejo de Salubridad General o tenemos que atender de manera directa. No se confundan. Que hubo un gasto de bolsillo sí. Que la Encuesta de Ingreso y Gasto de los Hogares también. Y fue casi similar, a menos que me vaya a refutar don Marcos, creo que es similar, de hecho, en el caso de Pemex fue la menor, pero Pemex tiene casi 4 a 1 de inversión sobre personas. Es cuanto.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Parece que fue pregunta y posicionamiento.

El ciudadano Marcos Cantero Cortés: Diputados, diputado Éctor Jaime, creo que tiene usted razón, hay mentiras, mentirotas y estadística, es el posicionamiento también.

La postura que plantea es pongamos el enfoque donde podemos medir en las variables de un conjunto de indicadores que nos permitan precisamente observar más allá de puros indicadores de proceso, también mediciones, indicadores de resultado.

No digamos que el Seguro Popular ha tenido grandes avances. Creo que en las mesas se ha reconocido y han sido posiciones que se han reiterado a lo largo de estos tres días.

Y la propuesta es, tengamos un sistema que enfoque en resultados no solo en la operación. No nos enfoquemos en decir que el Seguro Popular fue exitoso porque estuvo incrementando el número de afiliados y porque el fondo de gastos catastróficos se vino incrementando a lo largo de los años.

Digamos que el Seguro Popular fue exitoso porque hay indicadores que se han mejorado, indicadores de salud, indicadores de resultados. Hay otros indicadores que pueden aun mejorarse. Enfoquémonos en resultados.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: La verdad es que no es conveniente hacer mucho diálogo. Yo sugeriría nada más, como una propuesta. Bueno.

El secretario diputado Éctor Jaime Ramírez Barba: Entonces quisiera puntualizar entonces que no hay la desagregación por institución de salud.

Y segundo, si es por resultados, nomás que me diga en que parte de la iniciativa viene que va a evaluar por resultados, cuando el capítulo de... se propone que sea derogado. Es cuanto.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Ya vamos a dejar ahí el punto. Ya algunos quieren salir a tomar un café, pero ahorita lo concluimos. Y si va a hacer todavía alguna... Ah, bueno.

El ciudadano: Oye, es una audiencia pública. Escuchar lo que vienen a decir los compañeros, los ciudadanos.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: A ver, la verdad es que han sido tres días intensos, de mucho trabajo, de muchas cosas, de mucho conocimiento, de mucha información.

La presidenta diputada Miroslava Sánchez Galván: Yo nada más voy a clausurar. Sí, es importante para nosotros avanzar en esto.

Bien. Entonces, hemos llegado a la conclusión de audiencias públicas del Parlamento abierto convocado por la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, en el marco del estudio y análisis de la iniciativa con proyecto de decreto por el que se reforma la Ley General de Salud, la Ley de Coordinación Fiscal y la Ley de los Institutos Nacionales de Salud en materia de acceso a los servicios de salud y medicamentos asociados para las personas que no poseen seguridad social, presentada por el diputado Mario Delgado Carrillo.

Sin duda alguna, los diputados que integramos la Comisión de Salud podemos estar satisfechos por haber tenido la oportunidad de escuchar tantas como diferentes voces y opiniones en torno a esta importante propuesta de reformas que sin duda alguna nos han proporcionado importantes elementos para iniciar el proceso de elaboración del dictamen correspondiente.

Agradecemos la participación entusiasta y comprometida de todos los que nos han acompañado en esta tribuna durante los últimos tres días: funcionarios, investigadores, académicos, empresarios e integrantes de organizaciones de la sociedad civil.

Estén todos ustedes seguros de que los diputados que conformamos la Comisión de Salud haremos buen uso de toda la información que han tenido a bien proporcionarnos. Ahora toca una intensa labor de construcción, de consensos para que las diferentes opiniones que han sido vertidas se materialicen en una reforma legal que cumpla tan altas expectativas y sean los cimientos que se necesitan para transformar las instituciones de salud y garantizar un derecho fundamental a la población que por diferentes motivos no tiene acceso a la seguridad social.

Sin más que agregar, pido a todos los asistentes que nos pongamos de pie. Y siendo las 18 horas con 23 minutos del viernes 9 de agosto del año 2019, declaro clausurados los trabajos de las audiencias públicas de Parlamento abierto, análisis de la iniciativa del Instituto de Salud para el Bienestar. Muchísimas gracias a todos.

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